DESCUBRIMOS CHIMENEAS MAGICAS A Un viaje en globo para ascender por encima de las nubes y ver amanecer por segunda vez el mismo día. Capadocia te ofrece paisajes inolvidables para contemplarlos desde el cielo o descender a los infiernos y descubrir el secreto de sus habitantes, que crearon gigantescas ciudades subterráneas para esconderse de los invasores. Querrás conquistar estas tierras, que se graban en la memoria como una postal. Texto: Bernardo Fuertes. Fotos: Alex del Río. El paisaje de las ‘chimeneas mágicas’ se crea por la erosión de la capa más dura, de basalto, que cubre el tronco de roca más blanda, la toba. La creencia popular dice que son las chimeneas de las casas de las hadas que viven bajo tierra. DESCUBRIMOS Terraza en el hotel Ahbap Konagi frente a la fortaleza de Uchisar excavada en la roca. Una de las más espectaculares de la región. D Frescos de la Iglesia de la Hebilla, en el museo al aire libre de Göreme. El conjunto de monasterio e iglesias dentro de las montañas es Patrimonio de la Humanidad. ejamos Estambul con tristeza en el corazón y una lluvia torrencial para aterrizar en el aeropuerto de Kayseri. La ciudad principal de Capadocia. Desde allí un coche nos trasladó a Nevsehir. Por el camino, ansiosos por contemplar las extrañas formaciones rocosas que han hecho famosa a la Capadocia en el mundo entero, nos detenemos en medio del camino, en Pasabag. A unos 10 kilómetros, una figura imponente domina el horizonte. Es el monte Erciyes, el gran volcán adornado con un tocado de nieve en su cumbre. Es el padre de todo el paisaje que alimenta el turismo que acude a la zona. De su cráter brotó, hace unos 30 millones de años, la lava que se endureció sobre la toba, un tipo de roca muy blanda y fácilmente erosionable. El tiempo, el agua, el viento y unos cambios de temperatura extremos se pusieron a modelar el perfil de Capadocia consiguiendo unos paisajes de una belleza única que sólo se pueden contemplar en absoluto silencio. En medio de aquella naturaleza megalítica, intentando disfrutar de su magnificencia y escuchando cómo los elementos erosionan la roca, un ruido familiar interrumpe la labor del tiempo. El tubo de escape de una Honda Africa Twin se detiene a pocos metros de mí. Es una de esas motos diseñadas para recorrer el planeta. Va cargada en exceso, resulta gigantesca, y de ella se baja un japonés tamaño japonés. Massa está decidido a dar la vuelta al mundo. Comenzó hace ya cuatro meses. Se lo toma con calma, por eso se permite el lujo de parar durante unos instantes a contemplar la belleza del paisaje con el volcán de fondo. Allí mismo pude disfrutar por primera vez (después se convierten en omnipresentes) de la visión de las ‘Chimeneas mágicas’. Esas formaciones rocosas con un gorro puntiagudo de color más oscuro. La roca blanda, llamada toba, es erosianada por el viento, el agua y por la mano del hombre que construye en su interior La leyenda popular dice que son las chimeneas de las casas en las que habitan las hadas del mundo profundo. Quienes sí vivían en las profundidades fueron los habitantes de la zona. Se pueden localizar unas 30 ciudades subterráneas. La piedra relativamente blanda de la región, la toba, permite que se pueda excavar con facilidad y construir gigantescas poblaciones subterráneas. En la que nosotros conocimos de Kaymakli llegaron a vivir 3.000 personas entre los siglos VI y IX de nuestra era. Estas ciudades no eran el lugar permanente de residencia, se utilizaban sólo durante los asedios a los que se veían sometidos en la región por ser la prin- sa Más información sobre Capadocia y Turquía: Pasión Turca/Oficina de Turismo de Turquía www.turismodeturquia.com DESCUBRIMOS Globos sobre Capadocia. En la otra página, abajo, calentando el aire del globo y, debajo, ceremonia de los Derviches. Massa, un joven japonés que recorre el mundo en su moto y paró a tomar aliento. A la izquierda, iglesia del Parque de Göreme. cipal zona de tránsito entre continentes. Cuando se daba la voz de alarma todos los habitantes, con sus animales y provisiones, se ocultaban en las ciudades subterráneas, que apenas dejan ver desde el exterior algunas pequeñas señales de su presencia. Dentro existe una compleja red de laberintos y distintos niveles de profundidad (hasta ocho niveles se han encontrado en la ciudad de Derinkuyu con casi 60 metros bajo el suelo). Gigantescas puertas circulares de piedra de varias toneladas se empleaban para impedir el paso. Amplias salas hacían el papel de iglesias y enormes pozos verticales de ventilación permitían la vida bajo tierra, algo muy necesario porque los asedios se podían prolongar durante varias semanas o meses. La excesiva afluencia de turistas en la ciudad subterránea de Derinkuyu puede dar una idea de las multitudes que se aglutinaban en estas cuevas y de cuál era la sensación al respirar un aire sobrecargado y con mucha humedad. Sin embargo en la ciudad de Kaymakli todavía es posible recorrer los túneles sin miedo a aglomeraciones y disfrutar de las amplias estancias percibiendo la utilidad de cada uno de los huecos excavados en la roca (no disponían de un correcto sistema de alcantarillado). El alojamiento en la actualidad ha ganado en encanto pero muchos de los hoteles tienen sus habitaciones excavadas en la roca de toba. Nos alojamos en uno de los de mayor presencia, el Yunak Evleri, en Ürgüp. Esta pequeña localidad tiene algunas de las más renombradas bodegas de la región. El vino de Capadocia tiene fama desde el siglo IV. No se debe dejar escapar la ocasión de probar los blancos. En Ürgüp, además de las bodegas de vino Turasan (pide un Emir, con uva de la zona), te tropezarás con el monumento que el alcalde erigió en honor de Asmali Konak. ¿Algún héroe del estado turco? No, es una teleserie que tuvo un tremendo éxito cinco años atrás, la importancia de las figuras televisivas es muy grande en Turquía. Me voy a dormir con el recuerdo de la teleserie y con una cierta inquietud. Mi habitación es una antigua cueva con un extraordinario encanto y ciertos tintes eclesiales que no reconfortan mi espí- DESCUBRIMOS ALGUNAS DIRECCIONES DÓNDE DORMIR > Yunak Evleri Yunak Mahallesi,50400. Urgup, Nevsehir. Tel. + 90 384 341 69 20. yunak.com. HD: 120€. Dispone de 30 habitaciones en cuevas excavadas en la roca. Hotel con mucho encanto y precios ajustados. Lo mejor los atardeceres sentado con un café en la terraza de la habitación y los desayunos. Lo más inquietante, el no poder olvidar que algunas de esas cuevas estuvieron habitadas desde hace siglos. >Serinn House Esbelli Sokak,36 Ürgüp.Tel. + 90 384 341 60 76. HD 115€. Un hotel también excavado entre las rocas, muy próximo al Yunak Evleri. Lo más destacable es el diseño de cada una de las estancias y de las zonas comunes. Eren Serpen, la dueña, se ha encargado de la decoración. Además hace una muy buena tortilla de patata. Recuerdo de su estancia en España. “Me instalé aquí después de haber recorrido el mundo y darme cuenta de que en Capadocia se encuentra lo mejor”, dice con seguridad. DÓNDE COMER >Ziggy’s Yunak mah.Tevfikfikret cad, 24 Ürgüp, Nevsehir. Tel. +90 384 3417107. ziggycafe.com El menú de Meze Turco son 15€. CÓMO LLEGAR >Turkish Airlines Tel: 902 255 260. thy.com >Guía: Ilker Atay. apsara2000@yahoo. com. Tel: +90 5326 119 531. calienta el aire. Cada llamarada ilumina la noche que se va y el globo comienza a erguirse, 50 metros, como un gran edificio liviano. Trepamos a la cesta y el gigante ruge de nuevo para elevarse no todo lo despacio que uno desearía. Casi una treintena de globos iluminados ascienden por estos cielos generando una estampa de paz inolvidable. Todo sucede en apenas diez minutos. A unos 200 metros de altura el sol irrumpe en un amanecer casi perfecto. Mike, el piloto del globo, vuelve a accionar el quemador y el globo asciende más rápidamente. La tierra se hace literalmente más pequeña, comienza un frío espantoso (no olvides llevar abrigo en cualquier época) y el horizonte se curva perezoso. El aire se llena de humedad. No. ¡Estamos atravesando las nubes! No se ve nada, el miedo se mezcla con la excitación y seguimos subiendo. Conseguimos sobrepasar las nubes y se produce el milagro: ¡Vuelve a amanecer! El sol sale de nuevo. Antes y después hubo muchas otras experiencias en Capadocia, pero nada tan intenso como esta ascensión a los cielos turcos. Por la tarde estuvimos hablando con los Derviches que intentaron convencerme de que su baile no era un espectáculo para turistas y de que detrás de toda aquella puesta en escena había toda una En pocos lugares tendrás la posibilidad de dormir en cuevas de hace 1.000 años pero con todos las comodidades y lujos Una de las suites del Yunak Evleri. Arriba, la piscina del Tourist Hotel Göreme. Mapa: Salvador Prior ritu. Duermo intranquilo. Lo achaco a ese desasosiego inmaterial pero quizá la causa sea mucho más mundana. Al día siguiente volaremos en globo. A las cinco de la mañana ya no puedo dejar de dar vueltas en la cama. Me levanto y me preparo un café rápido para tomarlo en la amplia terraza de la habitación. Con la montaña y mi cueva a la espalda y el valle dominándolo todo al frente. Desde una de las mezquitas próximas se escucha la voz del almuédano que llama a la primera oración del día. Las estrellas, que en esta parte del mundo brillan como en ninguna otra, bendicen la letanía, que apenas dura cinco minutos. Dicen que te acabas acostumbrando y ya no te despierta. La luna, en cuarto menguante, apenas se resiste. Los animales aúllan acompañando el final de la oración. Entre las rocas de la pared, el sonido de un despertador anuncia el comienzo de la jornada. ¡Vamos a volar! Es sin duda la experiencia más interesante y lo que justifica por sí mismo el viaje hasta esta remota región del mundo. Aseguran que no hay ningún tipo de peligro, llevan muchos años haciéndolo. Es necesario despegar a primera hora de la mañana. Tras unas breves instrucciones de seguridad comienza el inflado del globo. Pausado, rompiendo el silencio del valle con el estruendo del quemador que El hotel Yunak Evleri, en Ürgüp.Todas sus habitaciones forman parte de la pared de la montaña. experiencia religiosa de íntima comunión con la tierra y el firmamento y un cierto éxtasis que se alcanza cuando pasan mucho tiempo girando sobre sí mismos en perfecta coreografía. Resulta estéticamente impresionante y puede llegar a afectar a espíritus más sensibles por los cánticos, los giros y la iluminación... Para sobreponer al cuerpo de este desequilibrio con el espíritu, Ilker, nuestro guía, nos llevó hasta Ziggy’s, uno de los mejores restaurantes de Capadocia. Está en Ürgüp, muy céntrico (es un lugar pequeño en el que todo está cerca). Ziggy´s es íntimo, acogedor, con apenas ocho mesas y una chimenea cálida en las noches frías. Perfecto para descubrir otro de los grandes vinos de la zona, el Kocabag, servido con los mezes, los aperitivos de verduras, y una suave música de jazz de fondo. Los anfitriones, Nuray y Selim, son una pareja cordial que se ha retirado del ajetreo de Estambul. La comida tradicional lleva una presentación ornamental de figuras talladas en frutas con virtuosismo resulta sorprendente. Cuando la temperatura lo permite, se organizan pequeños conciertos de jazz y música clásica en la terraza del local. Para finalizar la visita acudimos, más por convicción que por necesidad, a darnos un masaje a un hamán en la localidad de Avanos, en el Alaaddin Turkish Bath. Allí, después de mucha espuma y gratificantes refriegas por todo el cuerpo, conversé con uno de los masajistas, que presumía orgulloso de que por sus manos han pasado más de 20.000 mujeres. Resultaba algo exagerado y la afirmación perdía toda credibilidad cuando, celoso, se acercó su jefe para aseverar que por las suyas habían sido casi 30.000 y que, entre todas las nacionalidades, las más bellas son las venezolanas. Son conversaciones de hamán: fútbol y mujeres, en todas partes somos iguales. sa Uno de los lugares más interesantes para comer es Ziggy’s, en Ürgüp. Nuray y Selim, los anfitriones, cuidan el detalle.