St. La Sa lle, tea ch er fo r ch ine se p eo p le (an ó n im o ).

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horizonte
St. La Salle, teacher for chinese people (anónimo).
Índice
Presentación........................................................................................................................................... 5
Opinamos
Reflexiones navideñas para la cuesta de enero. Hno. Andrés Corcuera .................................................. 9
Mi experiencia en la revisión de la Regla. Hno. Antonio Botana ...........................................................10
Para que nuestra escuela siga siendo lasaliana. Hno. Luis Miguel Fernández .......................................13
Esperanza o desesperanza. Hno. Jesús Gil .............................................................................................16
Asamblea Internacional de Hermanos jóvenes. Hno. José Andrés Sánchez ..........................................18
Encuentro de Hermanos de 59-65 años. Hno. Luis Martínez.................................................................21
Loores al Hno. Valeriano Benildo. Hno. Mariano Valdizán ....................................................................23
Fray Roberto de la Iglesia Pérez, el Abad de La Salle. Hno. Pedro Ozalla ..............................................25
Los profesores de la educación del sentimiento religioso en los peques.
Hno. Luis Miguel Fernández ...................................................................................................................28
Un lasaliano en el DOMUND 2013. Hno. Mariano Valdizán ..................................................................31
Más que un profesional: un educador. Hno. Jesús Gil ...........................................................................32
¡Felicidades, Bernardo! Conchita Villar ..................................................................................................34
La Virgen del Buen Consejo, fedataria. Hno. Melchor Peirotén .............................................................36
Marco de pastoral
Algunas claves de reflexión en torno al nuevo Marco de Pastoral . Hno. Jorge Medina .......................41
Una pastoral del “qué soy” en la experiencia de que todos juntos andamos y somos.
Hno. José Miguel Fdez. Arizmendi ..........................................................................................................44
Para seguir pensando. Hno. Luis Miguel Sanz .......................................................................................46
Seamos positivos y reconozcamos alguna de nuestras especialidades, que no viene mal.
Hno. Rafa Palomera ...............................................................................................................................48
¿Nos ponemos manos a la obra? Hno. Jorge A. Sierra...........................................................................51
Una perla del collar. Hno. José Carlos G. Moreno ..................................................................................53
Verano activo
Un verano pastoral. Nano Pardo ............................................................................................................57
Entre gente pequeña. De Loja a Girón y viceversa. Hno. Roberto Hierro ..............................................59
Un lugar donde las paredes hablan. Hno. Fernando González ..............................................................61
Burkina Fasso: con los brazos abiertos. Mateo Ruiz. .............................................................................63
¡Gracias desde la India! ..........................................................................................................................65
Carta-testimonio del grupo de voluntarios de PROYDE en Nicaragua .....................................68
horizonte
3
África me habita. Hno. Luis Rebolledo ...................................................................................... 73
Voluntariado en la Escuela La Salle de Kirenge, Ruanda .......................................................... 74
Campo de trabajo INSO-Girón 2013. Hno. Roberto Hierro .................................................................... 76
“Vacaciones en Roma”… o “#RomaExperience2”. Hno. Javier Abad..................................................... 78
Nuestro postulantado
Desde el postulantado de ARLEP. Hno. Esteban de Vega ...................................................................... 85
Una llamada a la nona. Fidel Ernesto Echeverría ................................................................................... 87
Mi experiencia en la animación de grupos cristianos. Joel Figueiras ................................................... 88
Vida en comunidad
Crónica de Bujedo. Hno. Francisco Tudanca .......................................................................................... 91
Burgos: fechas para recordar. Hno. Jesús Gil ......................................................................................... 93
Rinconete y Cortadillo (Residencia La Salle de Burgos). Hno. Pedro Ozalla .......................................... 95
Noticias de La Felguera. Hno. Manuel Gutiérrez ................................................................................... 97
Ferrol, una comunidad ilusionada y animadora. Hno. Pablo Castrillo ................................................... 99
Desde Gijón. Hno. Ricardo Castrillo ..................................................................................................... 101
La comunidad de Santander os cuenta. Hno. José Carlos García ........................................................ 103
La Salle de Santiago, un trimestre insólito. Hno. Santos Martínez ...................................................... 105
Comunidad Pastoral de Santiago. Hno. Rafael Muñoz ........................................................................ 107
Un año histórico para la comunidad de La Santa Espina. Hno. Alberto García Arteaga ..................... 108
Residencia La Salle – Arcas Reales. Hno. Pedro Méndez...................................................................... 111
Comunidad Pastoral La Salle Girón. Hno. Roberto Hierro.................................................................... 113
Nuestra Señora de Lourdes. Hno. Juan González ................................................................................ 115
75 años a la vista. La Salle Valladolid. Hno. Pedro Río ........................................................................ 117
Antiguos Alumnos
A modo de crónica. Hno. Javier Abad .................................................................................................. 121
Apertura del Encuentro. Hno. José Miguel Jiménez ............................................................................ 123
Decálogo para una vida. Hno. Javier Abad........................................................................................... 125
Clausura del Encuentro. Hno. Jesús Miguel Zamora............................................................................ 129
Nuestros mártires
Beatificación de 74 Hermanos. Hno. Justino Fernández ...................................................................... 135
Mártires de España. Hno. Melchor Peirotén ........................................................................................ 137
Repiques de beatificación. Hno. Mariano Valdizán ............................................................................. 139
Nos esperan
Hno. Ignacio Sanjuán (1923-2014). Hno. Andrés Corcuera .................................................................. 145
4
horizonte
NÚMERO
REVISTA DEL SECTOR
DE VALLADOLID
Año 2014
Presentación
S
i has dado ya un vistazo al
índice, amable lector, habrás
notado que hay más secciones
que otras veces (también más
páginas). Abarca una variedad de temas, quizá mayor que en otros números.
Hay secciones que no pueden faltar:
primero, “Opinamos”, donde se recogen ideas, pensamientos, sugerencias,
reseñas, recuerdos… sobre los temas
más variados, pero con especial recurso a los más “nuestros”: la educación,
la comunidad…
Tampoco puede faltar la vida de
nuestras comunidades durante estos
últimos meses. ¡Lástima que sigan sin
estar todas! Hay mucha vida, mucha
riqueza encerrada en esas páginas.
horizonte
© Hermanos de las Escuelas
Cristianas
Distrito ARLEP –
Sector Valladolid
Edición: Secretaría sectorial.
Maquetación: Hno. Jorge Sierra.
Depósito legal: VA55-2011
Imprime: Reprografía Mata—
Valladolid
N.º 2— Agosto 2011
horizonte
Al ser una revista semestral, en
números alternos aparece la referencia
a las múltiples actividades veraniegas:
Voluntariado en otros países, campos
de trabajo, colonias, campamentos,
encuentros… y muchas más formas de
ser útiles a los chavales, “propios” o
ajenos…
Querido lector: si no dispones de
tiempo para hojear toda la revista, no
dejes de leer esta sección: rezuma vida,
entusiasmo, compromiso. Aquí no hay
teorías; solo vivencias. Nada del “habriaqueísmo” que criticaba el papa
Francisco. No se habla de lo que “habría que” hacer, sino de lo que ya se ha
hecho. Y escrito con emoción, con
alegría, sin darlo importancia… Pero
¡cuánto trabajo hay dentro!, ¡cuánta
entrega!, ¡cuánta generosidad!
Y permíteme que te recomiende
también el grupito de artículos sobre el
Documento marco de evangelización
del Distrito. Un puñado de reflexiones
sobre las que vale la pena volver. Están
hechas por Hermanos que están al pie
del cañón. Y se nota. Ilusión, utopía y
“pies sobre la tierra” a partes iguales.
Nos presentan un documento mejorable, pero útil. Que no critica nada de lo
hecho hasta ahora, pero que invita a
seguir avanzando, a adaptarse a situaciones cambiantes por momentos.
¡Ah! ¿Y sabías que tenemos un
postulantado? Son solo tres articulitos
que podían haberse integrado dentro de
“Vida en comunidad”, pero que hemos
preferido dejarlos aparte, precisamente
para destacarlos, para que nos fijemos
en esta realidad que nos toca tan de
cerca y que, con eso de que está en
Madrid… podemos olvidarnos de ella.
Finalmente, dos acontecimientos
ocurridos en estos meses merecen
nuestra atención: por un lado, la
Asamblea de Asociaciones de Antiguos Alumnos, siempre importante,
pero más cercana esta vez por haberse
realizado en el Colegio de Lourdes; y
la beatificación de nuestros mártires,
por otro. Como dice uno de los artículos: mucho se ha escrito sobre este
tema… pero siempre queda algo interesante que decir o que comentar. A
vuestra disposición está.

5
Opinamos
horizonte
Opinamos
Opinamos
Reflexiones navideñas para la
cuesta de enero
Hno. Andrés Corcuera
S
eguro que cuando leas esta reflexión estamos
ya viviendo la cuesta de enero, o la de febrero… Es igual, vale para cualquier mes del
2014. Lo que escribo tiene su inspiración en un día
de las navidades, en concreto, el día
de la Sagrada Familia. Después de
una noche un tanto desvelada acompañando a mi madre, vino un amanecer más tranquilo que me pedía interiorización y oración y, ayudado
por el iPad, me encontré con dos
textos que fueron un auténtico regalo
que quiero compartir con vosotros:
El primero fue un escrito de Dolo
res Aleixandre titulado “Tís ti are”.
El título ya me sorprendió y me mantuvo en suspense hasta que llegué a
leer una traducción literal del griego,
que me despistó todavía más: “quién
cogía qué”. Pero fui leyendo y encontrando un poco de luz. Este
“quién cogía qué” sería la traducción
en bruto de lo que dice Marcos al
contar que los soldados echaron a
suertes las vestiduras de Jesús. “Que
cada cual coja lo que quiera o pille
lo que pueda…”, diríamos hoy. ¿Por
qué Dolores nos habla del reparto de
las vestiduras de Jesús, en el contexto de la pasión y muerte, cuando en
su escrito habla de la Navidad y del
Niño que nace? Pues, como en las
adivinanzas, la respuesta más adelante. De momento, vayamos al segundo texto que me
sirvió para orar esa fría mañana del 29 de diciembre.
horizonte
Después de la lectura y reflexión del escrito de
Dolores fui a orar con el Salterio, y encontré la segunda sorpresa en el himno de las laudes para la fiesta de la Sagrada Familia:
Mirad qué aposentadores
tuvo la divina cámara:
verdín por tapicerías
y, por cortinajes, zarzas.
Pobre, desnudo, sin fuego,
quien fuegos nos abasta,
está aquí el Niño. Un pesebre
de humildes bestias por cama.
Ved, puro Amor, que sois fuego
y estáis sobre un haz de pajas.
La Virgen, llanto en los ojos:
a incendio tal, tales aguas.
José, que goza y que gime
agridulces de naranja,
riéndose, ya ha quedado
dormido bajo su capa.
¡Qué belleza y profundidad la de
este himno! En ocasiones tenemos
que acudir a la poesía para expresar
lo que con la prosa tenemos dificultad y, en este caso, la liturgia de las
horas se sirve del bello poema del
poeta sevillano José Luis Laffón.
Belén y la muerte en cruz aparecieron delante de mí inesperadamente y me sorprendieron. A ese
niño que se quedó fuera de la posada en plan “indignadito”, no supieron aceptarlo en el portal de Belén.
Le aguardaban como fuerte, como guerrero vencedor
9
Opinamos
de batallas; le esperaban en ricos palacios de oro y
marfil. Y sin embargo, rompiendo moldes, aparece en
nuestra sociedad como pobre entre los pobres. Parece
que la página del texto del nacimiento de Jesús está
distante de su página final en la cruz y el reparto de la
túnica. Pero no, el inicio de la vida de Jesús ya está
“anticipando tendencia” de cómo va a ser la trayectoria y el final. Ya desde el principio, este niño y luego
el Jesús de la vida pública usarán poco los verbos
obtener, poseer, controlar, emplear, disponer de…
También emplearán poco los posesivos: mi, me,
conmigo, para mí… En la “pasarela Belén” han desfilado, un año más, unos personajes peculiares con aire
de vivir ajenos al tema de los posesivos e incapacitados para decir: mi posada, mi establo, mi pesebre, mi
paja, mis pañales, mis ángeles, mis pastores… Después de lo vivido estos días, me da reparo decir “mi
Jesús” al que es de todos: extranjeros, inmigrantes,
gente sencilla, los que “saben” o tienen meno… Sí,
Él pasó por la tierra, según el evangelista Marcos,
dispuesto a “que cada cual coja lo que quiera o pille
lo que pueda de su túnica y de Él”. ¿Qué derecho
tenemos a apropiarnos de Él? Y, sobre todo, “a pontificar en su nombre”. Sí que tenemos derecho a tratar
de vivir como Él, sin posesivos que acompañen nuestra vida diaria.
A los dos textos añado una película. Cuando estaba terminando de escribir esta reflexión, me invitaron
a ver una película titulada El médico basada en una
gran novela del mismo título, un best seller escrito
por el estadounidense Noah Gordon. Dicen que con
un buen guion suele realizarse una buena película. En
este caso, así ha ocurrido. Los diálogos del personaje
principal me hicieron recordar estas reflexiones navideñas. Cuando Rob Cole, cristiano londinense, abandona su tierra y recorre miles de kilómetros para estudiar medicina con el mejor de los maestros de la
época, que vivía en la ciudad persa de Ishafan, poblada por judíos y musulmanes, dice esta frase que se
me quedó grabada: “Te pido que me perdones (se
dirige a Dios) por renegar de mi fe (en realidad la
ocultó temporalmente) y mancharme de “pecado”
para servir a tu creación y gloria”. Y sin duda que
sirvió a “su creación y gloria” haciendo avanzar la
medicina (estamos en el siglo XI) y la contribución
para eliminar la peste aunque se jugase la vida con
los fundamentalistas de las religiones del lugar.
Este médico de la novela de Gordon aporta un aire
nuevo a sus contemporáneos, rompiendo moldes, con
la intención de servir yendo a las periferias de las que
habla el papa Francisco diez siglos más tarde. Como
les dije a los Hermanos en la homilía del día de Navidad en el colegio Ntra. Sra. de Lourdes, citando la
Carta pastoral del Hno. Álvaro: “La elección del Papa Francisco está trayendo un aire nuevo y una invitación a ir a las periferias, no solo geográficas sino
también existenciales de nuestras gentes… a preferir
mil veces una Iglesia accidentada que una Iglesia
enferma de encierro y autorreferencialidad… Es un
momento hermoso el que nos ha tocado vivir”.
La teóloga Dolores Aleixandre, el evangelista
Marcos, el poeta José Luis Laffón, el médico Rob
Cole, el Hno. Álvaro y el papa Francisco son personas que me han ayudado a descubrir al Dios que se ha
hecho hombre en esta Navidad. Creo que todos respiran el mismo “aire fresco y nuevo” y nos hacen una
clara invitación para el 2014: que nos fijemos en
Aquel cuya túnica echaron a suertes y volvió a estar
tan desnudo como en el pesebre. Se nos anuncia una
gran alegría: nos ha caído en suerte un Niño. Que
cada uno coja de él lo que quiera. Y que siga haciendo lo mismo que él hizo, en memoria suya. El reto es
personal, comunitario e institucional.

10
horizonte
Opinamos
Mi experiencia en la revisión
de la Regla
“A
gridulce”, podría ser un calificativo
que empezara a describir lo que ha
sido mi experiencia en la revisión de la
Regla. El grupo de Hermanos que estuvimos implicados, con nuestras diferencias de edad, cultura, mentalidad… éramos conscientes de que lo que teníamos
entre manos no consistía simplemente en un documento teórico o la descripción de algo externo, sino
que comprometía nuestra propia identidad, aquello
que profesábamos ser. La aportación que cada uno
hacía a la reflexión común no era solo de ideas,
sino que llevaba algo de la esencia de sí mismo, o
al menos, la expresión de esa esencia. Mirado así, a la
distancia, se comprende que algunas discusiones
fueran más calurosas que lo que se podría esperar de
una simple precisión de conceptos o de una adaptación del lenguaje, y que en más de un caso la opinión
contraria se percibiera como un ataque a la propia
identidad, o como un intento de cambiar la naturaleza
de la vida religiosa del Hermano.
En el trasfondo de nuestro discurso estaba la teología que cada uno tenía aprendida, tantos tópicos
incuestionados que forman parte inevitable de nuestro razonamiento, la eclesiología en la que situamos
nuestra vida religiosa… Y si a estas diferencias añadimos las distintas resonancias que en cada uno provocaban términos aparentemente unívocos, como
consagración, comunidad, fraternidad, misión… se
puede entender que los “ataques” de frustración por
la dificultad de entenderse nos han acompañado (a
mí, al menos) todo el camino. Ha sido, pues, una
buena ascesis el ejercicio de escuchar al otro, a los
horizonte
Hno. Antonio Botana
otros, e intentar comprender lo que querían decir,
más allá de lo que aparentemente decían.
He aludido a la eclesiología como el marco en el
que se sitúa nuestra vida religiosa y donde están las
claves de nuestro encuentro o desencuentro a la hora
de expresar y acordar nuestra identidad como Hermanos. Creo que ha sido uno de los quebraderos de
cabeza más frecuentes para mí en estos ámbitos interculturales de diálogo como el grupo de revisión de
la Regla, entre otros. Según sea una u otra eclesiología, nuestra vida religiosa se sitúa “al lado de”, “en
función de”, o bien “por encima de”, “separados
de”… Y cambia todo. Nuestra identidad ya no es la
misma.
La eclesiología “de comunión” o “del Pueblo de
Dios”, que es la del Vaticano II, provoca enseguida el
rechazo de algunos que… prefieren otras eclesiologías en las que se sienten más cómodos. Y cuando en
el borrador de la Regla salen alusiones a los seglares
con los que compartimos la misión o que participan
en el carisma lasaliano, les entra una especie de sarpullido: “¡La Regla es para los Hermanos! ¡No hay
por qué nombrar en ella a los seglares!”. ¿Para qué
Hermanos es esa Regla? ¿Para unos que viven en un
monasterio o convento de clausura? ¿Cómo hablar de
la identidad del Hermano sin referirse a los seglares
lasalianos, que tienen hoy un papel fundamental, se
quiera o no, en la identidad del Hermano, y con los
que este ha de discernir día a día cómo vivir hoy el
carisma lasaliano para el servicio de la misión que,
juntos, comparten?
Me referiré a otro tema que ha estado permanentemente presente en los trabajos de la comisión, como
no podía ser de otro modo pues teníamos el encargo
de los dos últimos Capítulos Generales de incorporarlo a la Regla en el puesto que carismáticamente le
corresponde, como eje referencial de nuestra identidad. Se trata, evidentemente de nuestra Asociación
para el servicio educativo de los pobres. ¿Cómo se ha
producido esa incorporación? Podemos verla en tres
perspectivas o niveles:
En el acontecimiento fundacional: La Regla se
refiere a él de diversas formas, especialmente a través
11
Opinamos
de la persona del Fundador. Y es en él y desde él
cómo este modo de actuar, “juntos y por asociación”,
se hace experiencia y dinamismo en nuestro Instituto.
Los estudios de los Hnos. Michel Sauvage y Miguel Campos han puesto de manifiesto en el itinerario
evangélico de san Juan Bautista de La Salle la asociación como una característica esencial de su proceso de conversión personal y del proceso de fundación
del Instituto. Esta característica que marca carismáticamente a nuestro fundador, el borrador de la Regla
la hace notar, por ejemplo, con frases como estas:
“San Juan Bautista de La Salle y los primeros Hermanos…”. Las críticas a este borrador recogen no
pocas protestas de Hermanos que sienten que así se
rebaja la importancia y el mérito del Fundador, que
fue él quien tuvo la intuición y que los Hermanos
solo le seguían más o menos fielmente… Decididamente, no. Creo que esas expresiones en que se incluyen al Fundador y a los Hermanos son más justas,
más respetuosas de la historia real y reflejan mejor el
carisma fundacional lasaliano que aquellas otras en
que aparece Juan Bautista de La Salle actuando y
decidiendo en solitario. Basta pensar en acontecimientos como los que llevaron a La Salle a desprenderse de sus bienes, o los actos asociativos de consagración de 1691 y 1694, y en especial la carta de los
Hermanos en 1714, por no citar más que aquellos
muy significativos, pero hay otros muchos en los que
podemos ver que Juan Bautista no funda “sobre” los
Hermanos, sino con ellos, en asociación.
En la descripción de la identidad del Hermano:
Las tres dimensiones a las que solemos referirnos
desde la Declaración (1967) para hablar de la identidad del Hermano, misión, consagración y vida comunitaria, resultan profundamente marcadas por la
12
asociación. Esto es difícil asumirlo cuando se depende de una concepción estereotipada de la vida religiosa, o de una formulación canónica de la consagración. Por eso algunos tienden a ver como una pérdida
de la identidad religiosa esta recuperación de la identidad carismática del Hermano centrada en la asociación. La resistencia estaba servida. No ha sido fácil el
avance en esta línea y no siempre se ha llegado a
donde nos hubiera gustado, a mí y a otros miembros
de la comisión. Pero sí creo que el borrador actual
recoge mucho más claramente que la Regla de 1987
esta característica central de la identidad peculiar del
Hermano.
En su proyección sobre la Iglesia-Comunión en
que el Hermano ha de vivir hoy su identidad. La asociación adquiere otras dimensiones en el contexto de
la misión compartida con otras identidades, y cuando
la participación del carisma fundacional lasaliano
está dando lugar a la Familia Lasaliana. Las consecuencias se proyectan en las relaciones, en la corresponsabilidad, en un nuevo estilo de comunidad, en la
manera de vivir la fraternidad de los Hermanos en el
interior y “hacia” los otros lasalianos, en las nuevas
comunidades lasalianas que están surgiendo. Pero ya
me he referido antes a las dificultades de entendimiento a causa de la distinta eclesiología en que situamos la identidad del Hermano. En este caso las
dificultades se acrecientan con las alergias y recelos
existentes hacia los seglares. Por eso ha sido penoso
avanzar en esta última perspectiva, y personalmente
creo que es lo que nos ha quedado más flojo, casi
como intentos aislados que se manifiestan en un lugar
u otro de la Regla, pero no llegan a darle el tono general. El capítulo 10, último también que hemos
redactado en la Comisión, es el que resulta más
impregnado de esta nueva perspectiva. Habría que
empezar a leer la Regla por este capítulo 10, y con
esas claves contextuales que aporta, ver a su luz el
resto de la Regla.
Y al final, ¿ha merecido la pena el esfuerzo que ha
dado como fruto el borrador actual de la Regla? Sin
duda que sí. Pero solo pensar que durante el Capítulo
General volverán a repetirse, a mayor escala, las luchas dialécticas tenidas en la Comisión, me produce
escalofríos.

horizonte
Opinamos
Para que nuestra escuela siga
siendo lasaliana
Hno. Luis Miguel Fernández
“Debemos tener conciencia de que la vocación
lasaliana es plural y de que, como Hermanos estamos llamados a trabajar codo con codo y a ser
compañeros espirituales de cuantos, junto a nosotros, comparten nuestro carisma y son discípulos
de Jesús y continuadores de su misión apostólica”
(Se llamarán Hermanos, n. 6).
“¿Cuál es la diferencia entre los que se ocupan
en una misma labor, de los que la ejercitan como
‘situación ministerial’ y los que la realizan como
simple empleo? La principal diferencia no consiste en hacer cosas nuevas, sino que las mismas cosas se viven de un modo diferente. La diferencia
se produce cuando intervienen la fe y la esperanza: la fe en la presencia de Dios en esta situación
(‘lugar teológico’) y la esperanza de que el Reino
de Dios pueda hacerse más visible en esta situación”. (Antonio Botana, El relato de la espiritualidad lasaliana, pág. 81).
E
scribo en sintonía con una preocupación generalizada: que sean comunidades educativas
lasalianas, sea cual sea la presencia de los
Hermanos, quienes continúen haciendo una escuela
cristiana seria: con conciencia y preocupación de servicio a la misión educativa y evangelizadora de la
Iglesia, sobre todo con los más necesitados.
Escribo desde recuerdos. Y desde la lectura de los
documentos que están viniéndonos en los últimos
tiempos. Son muchas las voces que hablan, piden,
buscan, que los actores de la escuela lasaliana de hoy
construyan, de verdad, una escuela de carisma lasaliano. Actores, en su mayoría seglares, que, para conseguir ese objetivo, necesitarán identificarse con el
espíritu de La Salle; y, para ello, conocer, sentir y
amar el carisma de la educación cristiana.
Protagonistas de la Misión
Somos muchos los empeñados en esta tarea.
horizonte
Los Hermanos, como opción fundamental de vida;
lo llevamos en la sangre; hemos bebido cada día de
nuestra vida la espiritualidad lasaliana; es lo nuestro.
Los actores no Hermanos seguramente han recibido también unas pinceladas del sentido de la misión. Muchas veces, esta iniciación se queda en un
barniz, insuficiente y “aguado”. Este barniz lo han
recibido en unas sesiones de formación dadas de
oficio (profesores nuevos), generalmente incentivadas por el gran interés del neófito por su nuevo status. Otras veces, la formación ha sido más consistente
y ha supuesto mayor voluntariedad (CELAS); esta
formación llega a un tanto por ciento reducido, pero
es ya una semilla que germina. O ha surgido la oportunidad de participar en grupos de formación más
serios (CEL, CIL); muy poquitos, por desgracia. Lo
más frecuente es que nos hayamos quedado en un
toque de atención, un atisbar de horizontes, que, si
fue fervoroso, ha dejado poso y apetito abierto; si no,
puede quedarse en simple constancia de currículo.
Con esta preparación, es comprensible que el peso
del trabajo cotidiano para salir airoso en el empeño
educativo y de enseñanza haga con que la mayor
parte de nuestros colaboradores viva en la escuela
lasaliana como en una profesión que exige conseguir
juntos unos buenos resultados: enseñar bien, cumplir
bien. Es un trabajo serio; y responde a uno de los
propósitos básicos lasalianos: que la escuela funcione
bien.
Pero esto ¿Es vivir el espíritu lasaliano? ¿Es el carisma? ¿Es la razón de ser, lo propio, de la escuela
cristiana de La Salle? ¿Con esos mimbres tan tiernos
13
Opinamos
puede llegarse a la artesanía del cesto lasaliano, de
una proyección especial sobre los pobres, sobre los
más necesitados, los que viven más problemas? ¿La
de una escuela donde se aprende a vivir bien, abierto
el corazón a la solidaridad, la paz y la justicia? ¿En
que se instruye en los misterios de la fe y en el amor
del Padre Dios; que pone a Jesús en el centro de la
vida y de los corazones? ¿Donde el educador reconoce su profesión como vocación y su trabajo como
ministerio encomendado por la Iglesia de Dios? ¿Una
escuela que es y testimonia una comunidad educativa
cristiana? Porque todo esto es el “quid” de la cuestión. ¿O no?
Hay que...
Transmitir el espíritu lasaliano no debe de ser fácil. Tampoco debería de ser difícil. A veces, tenemos
la suerte, la Providencia, de encontrar quienes se
entusiasman por este ideal educativo y misionero. No
suele ser fruto de generación espontánea. Estas personas son tierras abonadas por unos u otros procesos
de pastoral que han sembrado el espíritu del cristianismo en sus vidas. Y creo que no son muchos. Temo
que son, relativamente y con frecuencia absolutamente, muy pocos. Y fácilmente asimilables por el grupo
de los menos entusiastas o motivados.
Suponemos la buena fe general. Pero sabemos de
carencias de formación, por diversos factores, de los
que pueden formar parte la propia historia personal y
familiar y el ambiente secular en que nos movemos.
Por eso, habría que contar con esa buena fe inicial y
explotarla en el reto y la exigencia de un camino
profesional que se hace, a la vez, camino vocacional.
La misión necesita fuerzas para alcanzar los mínimos necesarios; y, más, para avanzar hacia el ideal.
Necesitamos que se dé en todos una apertura básica a
lo lasaliano: vocabulario, objetivos y prioridades
claras, valores, estilo, metodologías de base, espíritu
de fe y de celo... Esto hay que prepararlo; no nace por
14
generación espontánea. Hay que despertar ideas, ideales e inquietudes. Recordar (u ofrecer) vocabulario
lasaliano; claves de acción; puntos de referencia; itinerarios de vida, sentido de la educación cristiana…
¿Cómo?...
Y ¿cómo despertar, abrir, recordar? Nuestros documentos capitulares y los de las Asambleas de la
Misión insisten en la formación. Los nuevos lasalianos, los colaboradores, los que comparten la misión
lasaliana, deben abrir los ojos y el corazón al entendimiento y al gusto del ministerio lasaliano. ¿Quién
marcará el camino y los ritmos?
Lo normal, diríamos, corresponde a las direcciones de los centros. Pero, evidentemente, no siempre
es fácil para el director. Debe estar mentalizado, muy
mentalizado; y formado; que pueda elaborar un plan;
que acierte a incluirlo en el currículo de las actividades del año, que no se sienta superado por las circunstancias… Las dificultades son serias: urgencias
que siempre existen; cuestiones de más inmediatez o
más prácticas; suavizar los horarios… Consecuencia:
no se encuentra tiempo; no hay, no se desarrolla, un
plan serio de formación. Incluso contando con su
buena disposición, la dirección necesita apoyos, tanto
del orden de los contenidos como de exigencia de
acciones y ritmos de formación. ¿No nos acordamos
que también nosotros, cuando los Hermanos éramos
los directores, muchas veces nos sentíamos superados
por las dificultades y dejábamos este aspecto para
tiempos mejores?
Los directores necesitan ser apoyados desde más
arriba. Se les tiene que trazar planes; dar materiales
bien hechos; dictar frecuencias. Determinar los responsables (dirección) y corresponsables. Y comprobar (animar, exigir) que las acciones formativas se
realicen. Me parece una opción institucional importante. La experiencia confirma esta necesidad; bien
sabemos de la dificultad que se vive en la realidad
diaria.
¿Los Hermanos, como La Salle, formadores de
una nueva generación de maestros?
Más preguntas: ¿No será esta de la formación a
los laicos, una de las tareas importantes de los Hermanos, en la que emplear, ahora, energías y tiempos?
Nuestro fundador empeñó su vida, su experiencia de
horizonte
Opinamos
fe y su saber en formar la comunidad naciente de
Hermanos. La realidad actual, de Hermanos y laicos,
parece reproducir el mismo reto que vivió la primera
comunidad. En la crisis de 1691, cuando “todo se
balanceaba”, La Salle no vio un desastre, sino “una
oportunidad de crear algo nuevo a partir de lo vivido” (Circ. 466, pág. 19). Cuando a nosotros nos parece que las fuerzas se diluyen, el ejemplo del Fundador y sus compañeros de voto Heroico nos están
sugiriendo muchas cosas. Como a él, una fundamental: la formación. ¿Quién la va a ofrecer? No queda
otra respuesta que nosotros, los Hermanos, los que
hemos recibido el depósito del carisma, por vocación
y por experiencia de vida. Compromiso serio y urgente. Oportunidad de “crear algo nuevo a partir de
lo antiguo”. Ayudados, sí, por los que han hecho
opción de formarse lasalianamente, pero sin descargar en ellos toda esta misión comunitaria. Ser nosotros, “para y con los laicos, ‘corazón, memoria y
garantía del carisma lasaliano’”. A lo mejor es este
un campo de nuestra formación permanente; para
poder compartir el sentido de nuestra vocación lasaliana. En la página 20 de la circula 466, se formula:
“¿cuál es nuestro papel en la misión?” Esto puede
ser un apunte para responder; no único, pero sí uno.
Planes…
Y planes. Planes de formación que deben llegar a
todo el cuerpo profesoral (¿también al auxiliar?) con
unos contenidos programados y con un calendario ad
hoc, cuya realización se exija y evalúe.
Por ejemplo:
1. Para todos.
- Me parece necesaria una programación institucional (Distrito, Sector, red) que prevea el desarrollo de determinados momentos o sesiones de formación: un mínimo anual (dos o tres por trimestre…).
Con un desarrollo eminentemente activo, superando
los discursos, que hacen sentir repetitivos los contenidos; buscando la reflexión activa del claustro sobre
la aplicación del contenido de formación a su misión
y a su vida. Con tiempo razonable y suficiente. Y con
el complemento de un “algo” que propicie la convivencia entre todos (¿un pequeño lunch?).
- Una de estas sesiones (¿trimestral?) podría
ser zonal, con participación de centros cercanos, animada por personas más preparadas; en una mañana
de sábado, por ejemplo, con duración de la mañana
horizonte
entera y ¿terminada en un lunch o una comida fraterna (los costes de una comida serán menores que viajes más largos)?
2. Oferta un poco más profunda y voluntaria,
procurada para el mayor número posible:
- Un aumento de participación en CELAS sectorial, con opción de varios niveles, para no quedar
con el currículo terminado en un nivel primero.
- Atención a la participación en CEL y CIL.
3. Uso de los medios informáticos (ejemplos hay,
v. gr., en Australia) y Programas de formación “en la
red”.
Para estos programas de formación voluntaria (2 y
3) hay que inventar algún tipo de incentivo, de tipo
afectivo, institucional, de créditos programados.
En síntesis
Creo que tenemos que buscar ser coherentes y salir al encuentro de las dificultades de apreciación y
conocimiento por parte de nuestros profesores sobre
qué es lo que supone ser educador lasaliano, qué es
compartir la misión, cuál es el significado del compromiso de asociación con La Salle en la misión de la
Iglesia, por la escuela cristiana. Y hay que ayudar a
los responsables. Sabemos las dificultades que supone el ejercicio de la dirección; las crisis y recortes
agudizan esta sensación. Algunos directores menos
preparados o con menor buen ambiente en su claustro
pueden tener serias dificultades para poner un programa formativo exigente como salido de ellos mismos. Y en el caso de directores seglares el escollo
puede ser mayor.
Estas razones piden a los animadores del Distrito
o del Sector marcar metas, y trazar caminos para
alcanzarlas. Para que la primera y segunda generaciones de profesores entiendan y pongan en práctica
la escuela lasaliana. Y para crear una inercia que
continúe de aquí en adelante, si es posible. Insisto en
el tema. Pido perdón por ello y espero que mi reflexión no sea solo una auto justificación de las limitaciones, incoherencias o dificultades que se me quedaron en el tintero de la buena voluntad cuando me
tocaron responsabilidades en el cotidiano del compromiso misionero lasaliano. Me gustaría, mejor, que
fuera fruto de sentirme activamente asociado a esta
nuestra misión desde mi momento de retiro jubilar.
15
Opinamos
Esperanza o desesperanza
Hno. Jesús Gil
L
o estamos viendo venirse abajo al estallar la
crisis financiera en la reciente crisis que padecemos y que pone de manifiesto un desarrollo insostenible que explota a millones de hombres; expolia la naturaleza en aras de un bienestar
ilimitado para unos pocos, mientras los dos tercios de
la población mundial sufren pobreza escandalosa:
hambre, enfermedades, explotación y paro.
Razón para desesperar, porque los pobres son cada vez más pobres y el abismo entre ricos y pobres es
cada vez más un abismo infranqueable, porque no se
vislumbra voluntad firme de mercado, economía,
política… para remediarlo.
Qué esperar. Estos sucesivos derrumbamientos
de esperanza de ayer, ¿no serán una magnífica oportunidad para que la verdadera esperanza pueda arraigar y crecer? Aquí hay una llamada a la esperanza.
Una esperanza que pone su hoy y su mañana en el
Señor de la Historia y que nos hace exclamar: nosotros esperamos contra toda esperanza. Dichoso aquel
que ha puesto su confianza en el Señor. Tampoco
debemos depositar nuestra esperanza de futuro en
instituciones, gobiernos, partidos, sistemas económicos… No podemos poner nuestra esperanza en nosotros mismos porque el ser humano es limitado y frágil, y claudica fácilmente.
Esperanza cristiana. ¿Y qué esperamos? ¿Cuál
es el objeto de la esperanza cristiana? ¿Qué horizonte
alumbra nuestros afanes y proyectos? El objeto de la
esperanza cristiana no es otro que la venida del Reino
de Dios a nosotros, a nuestro mundo; el reinado de
Dios entre nosotros: Venga a nosotros tu Reino.
La esperanza cristiana se encarna en la realidad
del aquí y del ahora; se acredita con obras de bien
16
que transforman la realidad de este mundo, en imitación de Jesús: el Señor que pasó por el mundo haciendo el bien con la fuerza del Espíritu. La esperanza es germen que transforma la realidad presente y la
orienta a la plenitud.
Hacen falta hoy gestos humanos que hagan posible que el mundo cambie. Hacen falta gestos que
promuevan la vida y la dignidad de todo ser humano,
especialmente de los pobres y marginados; gestos
que promuevan y contagien los valores del evangelio
a las presentes y futuras generaciones.
Una historia de esperanzas. Una historia que tuvo su origen en el don de gracia de nuestro Fundador.
Él arriesgó su vida por el evangelio, confiando en la
Providencia, emprendiendo misiones y tareas para
servir a los pobres y necesitados de la sociedad de su
tiempo, en el campo de la educación, de la acción
social, de la formación y de la evangelización. En qué
seguridades se asían para superar el cansancio diario,
la torpe marcha hacia delante de los pobres que habían elegido como compañeros de ruta.
Herederos somos no solo de lo que fueron aquellos que estuvieron delante de nosotros. De ellos
hemos recibido también lo que desearon y no se
cumplió. Suyas son y hasta nosotros llegan las posibilidades que el tiempo dejó como tarea a realizar en
otras épocas. Lo mejor de nosotros no ha pasado,
está por venir. La historia de la vida siempre está
abierta al futuro; la historia personal de cada uno de
nosotros siempre está abierta, llena de posibilidades.
Escenario para la esperanza. Hoy nos encontramos en el nuevo escenario de un mundo globalizado muy moderno pero poco humano. Este mundo nos
está pidiendo esperar de otra manera. La crisis presente que estamos padeciendo, y de la que no se ve el
final de la salida, no es solo capitalista y financiera,
es crisis de toda una concepción del mundo, de la
historia y del hombre basada en la idolatría del dinero, la técnica y la explotación del hombre por el
hombre. Adictos al marketing pero que silenciamos
nuestras hondas aspiraciones como seres humanos,
tales como la dignidad, la gratuidad, el dominio de sí,
el respeto a los demás… valores que reposan en la
honda confianza que se tiene en la vida. Este contexto es muy diferente del que predominaba hace tan
solo tres o cuatro décadas.
horizonte
Opinamos
creemos, esperamos y estamos dispuestos a llevar a la
vida.
La hospitalidad. Nuestro mundo plural en culturas, éticas, religiones, políticas… pide potenciar el
diálogo social, ecuménico, intercultural, etc. Con la
clara conciencia de que no superará las crisis que
padece si no es dialogando y colaborando todos con
todos acogiendo lo diferente que nos complementa.
Esperanza y fe. Una fe a la que la esperanza empuja hacia un mundo mejor posible: ya es hora de
dejar de plantar calabazas, es decir, plantar a corto
plazo. Plantemos palmeras aunque los que las plantan
jamás lleguen a comer los dátiles. Tenemos que vivir
amando lo que nunca llegaremos a ver. Este amor
disciplinado y tenaz es el que ha proporcionado a los
profetas, a los revolucionarios, el coraje y la valentía
de morir por el futuro que ya vislumbraban.
Apertura para encaminarnos hacia la fuente del
propio carisma y beber de su agua cristalina como
nutriente de nuestra vocación y elección primera.
Una búsqueda nacida de la esperanza es la que nos
pondrá en camino. Que para encontrar la fuente, solo
la sed nos alumbra. Porque buscamos aquello que nos
apasiona: una vida más evangélica, una misión más
revitalizada y fecunda que alumbre esperanza en
nuestros hermanos más necesitados.
La esperanza camina entre sus hermanos ligeros
de equipaje. Así, sin el lastre que bloquea y atrinchera en seguridades, sin razones que justifiquen la dejadez, la pereza y los cansancios; sin tristezas que, poco
a poco, minan la motivación y enfrían la esperanza.
Los desafíos que hoy experimentamos nos piden
cambio de mentalidad y amplitud de miras. La mayor
tentación que tenemos hoy consiste en recortar las alas
fuertes y vigorosas de nuestro carisma para quedarnos
en lo ya conquistado. Sumarnos al triste cortijo de
personas de miras estrechas, pasivas y con mentalidad
negativa. Pensar con amplitud, con grandeza de alma
se hace imprescindible para acometer cualquier empresa. Quien piensa con amplitud y sueña, está disponible para actuar. Sabe que el más largo de los viajes
comienza con un paso. Y está dispuesto a darlo con
generosidad. Vencemos el egoísmo de quien espera
que los demás actúen sin apostar lo mejor de sí mismo.
El diálogo no solo es un ejercicio ético sino un
modo de estar en la vida que supone el reconocimiento, el respeto y la estima del otro en toda su identidad
y dignidad; la apertura al otro y a lo diferente. Supone acogida del misterio personal que es el otro, búsqueda de la verdad y lo verdadero que implica reconocer los propios límites.
No lo sabemos todo, no poseemos toda la verdad,
necesitamos la complementariedad de los otros. Nos
lo recuerda bellamente el poeta: Mi verdad no. Tu
verdad, tampoco. Vamos juntos a buscarla y él mismo añade para dialogar, preguntar primero, después…escuchar.
Encuentro. En este mundo globalizado han entrado en crisis las relaciones humanas. Nunca tan
intercomunicados y nunca tan solos. Nos relacionamos de manera ocasional y funcional, sin que se dé el
encuentro. La relación de encuentro es gratuita no es
funcional. Nos acercamos a la persona como a tierra
extraña con el respeto profundo, sin ánimo de posesión ni manipulación.
Cuando esta relación se da entre dos personas,
ambas quedan transformas. Después de una experiencia de encuentro, la otra persona formará parte de
nuestro mundo interior. Nuestro corazón se irá llenando de nombres, de rostros que harán más gozosa
nuestra vida y más satisfactoria nuestra misión. Hasta
el punto de poder decir: En realidad a mí me han ido
haciendo las personas que me han amado y las que yo
he decidido amar,
Nuestra vida está llamada a estar en medio de este
mundo, difícil para las relaciones, como foco de esperanza que suscita relaciones de encuentro, de reconocimiento al otro, a los otros como don que nos
enriquece y posibilita mayores logros de bien y de
progreso.

La generosidad siempre va acompañada de entusiasmo. Quizá convenga decir solo lo que de veras
horizonte
17
Opinamos
Asamblea Internacional de
Hermanos jóvenes
Dasmariñas (Filipinas), 29 de julio a 7 de agosto de 2013
Hno. José Andrés Sánchez
“…He venido para que tengan vida, y la tengan
en abundancia”
(Jn 10,10)
E
l último Capítulo General contó con la presencia de 13 Hermanos jóvenes que pudieron
participar plenamente en el desarrollo del
mismo. Una de las dos “líneas de acción” que este
grupo de Hermanos propuso al Capítulo y que fue
aprobada, dice: “(…) que un año antes del próximo
Capítulo General haya una reunión internacional de
representantes de Hermanos jóvenes de las diversas
Regiones con el fin de expresar nuestras esperanzas
y sueños en relación con los años venideros” (Circular 455).
El 44.º Capítulo General marcaba el estilo del encuentro y sus objetivos. Una comisión formada por
cinco Hermanos, representando a cada una de las
Regiones del Instituto, estuvimos preparando esta
asamblea durante dos años. Los resultados de la
misma han sido publicados en el Intercom n.º 143
(octubre 2013) y en la web iyba.lasalle.org/es. El
desarrollo de la asamblea, los horarios, las actividades,
los participantes, los ponentes y un buen número de
imágenes pueden verse en el sitio web. Ahorro al lector esas descripciones pues mi intención es trasmitir
algunas de mis impresiones como participante externo,
pues los miembros de la comisión preparatoria no
formábamos parte de los delegados.
Contar con los jóvenes
Se dice habitualmente que los jóvenes son el futuro. Cierto, pero son también el presente. Por eso un
Instituto con una media de edad alta, no puede no oír
a los jóvenes. En todo el tiempo de la preparación de
esta asamblea hemos percibido el interés y las expectativas puestas por el Consejo Genera y en especial
por el Hno. Superior General por escuchar a los jóvenes. Los Hermanos jóvenes han asumido este reto
con valentía y responsabilidad. Saben que el Instituto
será lo que los lasalianos quieran y en medio de ellos
los Hermanos juegan un papel fundamental.
18
Abiertos a lo diferente
Algo que no dejó de maravillarme en todo momento fue la constatación de la diversidad antropológica y teológica sobre la que luego se asienta el “carisma lasaliano”. Ciertamente pensamos que es monolítico, más o menos definido, con unas características claras. Ese carisma debe ser asumido por la persona individual que opta por ser “Hermano de La
Salle”, en nuestro caso. Pues bien, la persona individual no es un constructo abstracto. Es su historia, su
trayectoria, su cultura, su concepción antropológica,
su teología (visión de Dios). Y aquí están las diferencias. Sobre bases diversas el “carisma lasaliano”
adopta rostros diversos. Por poner un ejemplo: la
obediencia no se entiende igual en India (donde todavía el sistema de castas está determinando las relaciones comunitarias) que en España, aunque ambos
leamos la misma Regla y los mismos documentos del
Instituto. Y ni qué decir de la consagración, de la
participación de los seglares en la misión y en la vida
del Instituto o de la vida comunitaria.
La comisión preparatoria organizó el trabajo por
bloques temáticos (vida comunitaria, misión, consagración, pastoral vocacional…). Desde el primer
momento nos dimos cuenta de la diversidad tan grande que existía entre nosotros. Cada día dedicábamos
las sesiones de la mañana a escucharnos. La pluralidad era tal que resultaba difícil llegar a propuestas
horizonte
Opinamos
únicas, concretas y válidas para todas las Regiones
del Instituto. Lo cierto es, y esto me llamó mucho la
atención, que esta pluralidad, lejos de llevarnos a
discusiones bizantinas o a querer imponer unas visiones sobre otras, nos llevó a admirarnos y descubrir el
multiforme rostro del carisma lasaliano. Las propuestas fueron secundarias, si bien es cierto que el último
día, a través de un discernimiento, se llegó a una
“declaración de compromiso”.
Había un interés muy grande por hablar de la vocación del Hermano. En diferentes partes del Instituto
el fuerte descenso del número de Hermanos ha traído
consigo un cierto desánimo en muchos de nosotros.
La Asamblea quiso decir muy fuerte y muy claro que
la vocación de Hermano sigue siendo un don de Dios
al mundo y a la Iglesia, que sigue dando sentido a la
vida del que asume el riesgo y que sigue siendo una
opción esperanzadora para proponer a nuestros jóvenes. La Asamblea fue precisamente eso: disfrutar y
compartir la vocación de Hermanos. A ello nos ayudaron mucho los jóvenes lasalianos y colaboradores
filipinos, orgullosos de formar parte de la familia
lasaliana y de acoger a tantos Hermanos jóvenes.
Cultura del acompañamiento
Ya hablando de la vida concreta de los Hermanos,
hubo una insistencia unánime en avanzar hacia una
cultura del acompañamiento. Somos conscientes de
las reticencias que provocan algunos términos ligados
a este concepto por su vivencia pasada. Hoy no se
puede entender la vocación del Hermano como algo
estático, por la que se opta de una vez para siempre y
de manera inamovible. Ser Hermano hoy es vivir en
un continuo proceso de crecimiento y de cambio que
requiere reafirmar la vocación en los momentos cambiantes de la vida. Por eso debemos crear esta cultura
del acompañamiento desde los mismos procesos de
formación inicial.
El nuevo rostro del Instituto
Un Instituto plural
La fuerza del Evangelio y la encarnación del
mismo en el estilo lasaliano es el núcleo de la identidad común entre los Hermanos jóvenes. A partir de
esta opción se despliega un enorme mosaico de realidades que lo encarnan. El Instituto que tenemos hoy
refleja la pluralidad del mundo y la pasión por la
educación desde el Evangelio. Hay un interés muy
grande entre los Hermanos jóvenes por abrir más
nuestras realidades concretas a lo global, aprovechar
más la internacionalidad de nuestro Instituto. El
mundo es cada vez más pequeño y estamos llamados
a “movernos” con soltura por esta aldea global.
La vocación de Hermano: signo de esperanza
horizonte
Quizás la ponencia que más impactó y provocó
fue la de la Dra. Carmelita Quebengco, no tanto por
venir de ella (que también), cuanto por los datos que
arrojó. Hoy, en el Instituto, participan en la misión un
97,3% de seglares y un 1,3% de Hermanos (de los
seglares, el 51% son mujeres). Con estos datos, no se
puede cerrar los ojos a la integración de los seglares
en la vida del Instituto. La misión está en sus manos,
al menos numéricamente.
El sentir común fue que hay que seguir avanzado.
La asociación, o como se quiere o pueda llamar en
cada país, es un “viaje dinámico” no un estatus que se
adquiere. Los Hermanos no podemos ser meros espectadores, formamos parte de ese viaje. Cada uno
sabrá los “fantasmas” que deba vencer: ser más que
el seglar, miedo a no saber quién o qué soy… Y aquí
las visiones de la antropología, la vida religiosa y la
eclesiología juegan un papel clave, como decía más
arriba. Lo cierto es que se habló sin tapujos, incluso
de la posibilidad de una desaparición del Instituto.
19
Opinamos
Los jóvenes somos conscientes de este posible escenario.
Vida espiritual humana
Esta fue una expresión en la que insistió el Hno.
Álvaro. A él se le encargó la animación del día dedicado a la “consagración y vida espiritual”. Insistió
con un tono decisivo en una “vida espiritual humana”. Y para ello debemos avanzar en el estudio de
nuestra “espiritualidad integradora” de la que ha hablado en cartas pastorales o en la circular Se llamarán
Hermanos. En lo referente a nuestras relaciones con
los seglares tuvo palabras duras: “a veces somos muy
clericales con los seglares”, no tenemos que tener
miedo a ser “los más pequeños”, también en la misión.
Diálogo con un “padre”
La presencia del Hno. Álvaro, discreta y afable,
como siempre, fue muy importante en todo el encuentro. La comisión preparatoria quiso buscar un
momento para un diálogo fraterno, sin papeles por
medio, de los Hermanos jóvenes con el Superior. Su
visión del Instituto y sus casi 20 años en el gobierno
le hacen un padre y maestro privilegiado para los
jóvenes. El Hno. Álvaro aceptó un encuentro con
toda la asamblea, sin temas acordados, donde los
Hermanos jóvenes le fueron formulando sus inquietudes y dudas. Creo que el Hno. Álvaro estaba tranquilo, disfrutando del momento, sin miedo a que sus
palabras se malinterpretaran. Analizando el presente,
nos dijo: “Estamos terminando un momento de consolidación y vamos a vivir un momento profético. No
basta con mantener lo que tenemos; lo más importante es responder a las necesidades de los jóvenes
con más dificultades. Mi sueño es que estemos al
inicio de una etapa en que, asegurando la continuidad, podamos ser más creativos. No olvidéis, Hermanos, que nacimos para los pobres”.
Quizá la Asamblea no ha terminado con grandes
documentos o propuestas. Los que esperaban profundas revoluciones de los jóvenes se habrán sentido un
poco defraudados. El cambio vendrá desde abajo y
desde dentro, con el compromiso de cada uno de
nosotros y su responsabilidad por vivir con plenitud
su vocación. En este sueño, no estamos solo. Formamos parte de una gran familia a la que Dios sigue
confiando el cuidado de los niños y jóvenes más pobres.

Los delegados de la RELEM. De izquierda a derecha, HH. Vicentiu (Rumanía), José Andrés (ARLEP), Vicent (Francia),
Arsenio (ARLEP), Salvatore (Italia) y Jean-Claude (Próximo Oriente).
20
horizonte
Opinamos
Encuentro de Hermanos
de 59-65 años
Hno. Luis Martínez
L
os días 1 y 2 de noviembre se celebró en
Aravaca, el encuentro distrital de los Hermanos de 59 a 65 años. En el Distrito hay en
torno a 105 Hermanos en esta franja de edad, de los
cuales un número significativo está fuera del territorio distrital en misiones u otras tareas de servicio.
Allí nos juntamos 64 Hermanos, entre ellos los Visitadores Auxiliares de los Sectores.
En el Sector de Valladolid somos veintiún Hermanos y, de ellos, estuvimos ocho, contando a los
dos Visitadores que pertenecen al Sector. De lo que
allí hicimos y vivimos comento algún aspecto:
La organización, el lugar y las fechas. Fue un
acierto por parte del Equipo de Animación Distrital,
la convocatoria, la organización y el lugar escogidos
para la celebración y el desarrollo de este encuentro.
La organización fue muy sencilla y a la vez cuidada. Consistió en diferentes reuniones de grupos pequeños aleatorios, donde pudimos compartir: nuestro proceso vital y vocacional, nuestra realidad actual religiosa y comunitaria, cómo vemos el futuro y cómo afrontar lo nuevo con garantías. Hubo también puestas en
común, donde pudimos escuchar y dialogar las aportaciones de los diferentes grupos pequeños.
Las oraciones y celebraciones eucarísticas estuvieron cuidadas y bien animadas, y posibilitaron
tiempos de silencio, de interiorización y de compartir.
Los momentos de sobremesa, descanso y convivencia dieron el tono de fraternidad que se fue viviendo a lo largo de todo el encuentro, facilitado por
el lugar y por las atenciones y detalles de los Hermanos del Sector de Madrid, a quienes desde aquí quiero agradecer su acogida y hermandad.
Hay un potencial fuerte, tanto por el número como
por la calidad humana y religiosa de los Hermanos de
estas edades en el Distrito. Juntándonos, pudimos
darnos cuenta y disfrutar de esta realidad. Las experiencias vitales y religiosas, probadas en diferentes
tareas: educativo-pastorales, misioneras, cargos (o
cargas) directivas, animadores de comunidad… que
estos Hermanos tienen a sus espaldas, certifican sus
valías.
A través de sus palabras te das cuenta de que están
viviendo esta etapa de su vida con una gran serenidad, realismo, pasión y disfrute, no exentos de una
gran actividad y responsabilidad en su ser y quehacer
diarios como Hermanos.
Estos Hermanos son personas unificadas, que están viviendo a tope la misión y la vocación con una
gran sensibilidad religiosa y comunitaria que visibilizan la identidad del Hermano hoy, de la cual se sienten orgullosos y felices.
El ambiente de fraternidad sería otro de los aspectos a señalar. Había muchos Hermanos que no se
conocían, otros que no nos habíamos visto hacía mucho tiempo. Desde el comienzo, con la llegada y
comida aparecieron los saludos, abrazos, recuerdos,
horizonte
21
Opinamos
anécdotas que hablan de fraternidad. Las bromas y
sonrisas eran algunos de los ingredientes de este ambiente que allí fuimos creando. No se notaban diferencias de sectores a la hora de hablar y de hablar con
la vida en las manos en las diferentes reuniones de
grupos pequeños o en las puestas en común y en las
diferentes celebraciones.
En el compartir, también aparecían la dureza de la
vida y los problemas en los diferentes itinerarios
personales de los Hermanos. También las búsquedas,
oscuridades, dudas y certidumbres que han vivido y
vivimos los Hermanos que por allí estábamos. Todo
ello invitaba a una reflexión y revisión profundas a la
vez que al disfrute y a la admiración por los Hermanos que allí compartían su ser y hacer.
Algunos retos que allí se plantearon:
 Estos encuentros merecen la pena porque revitalizan y nos hacen disfrutar y sentirnos Hermanos unos de otros y hacer Distrito.
 Estos encuentros se deben proponer con este o
parecido formato y estilo a Hermanos en las
22
mismas franjas de edad o mezcladas, con el fin
de vernos, contrastar nuestro vivir y animarnos
en nuestra vida y misión de Hermanos. La distancia máxima de convocatoria sería cada dos
años.
 Es importante y necesaria la restructuración y
actualización de la comunidades con criterios
de Distrito, de manera que permitan seguir viviendo la vida de Hermano de manera activa,
actualizada y unificada.
 Es necesario ir preparando bien la etapa de la
jubilación (prejubilación-transiciones), para
vivirla con la ilusión y disfrute que se han vivido las etapas vitales anteriores.
 Hacer una llamada provocativa a los Hermanos
provinciales, Consejo y Capítulo Distritales,
para que creen y/o estimulen los cauces y estructuras que ayuden y alienten a vivir de una
manera proactiva esta etapa de jubilación.

horizonte
Opinamos
Loores al Hno. Valeriano Benildo
Hno. Mariano Valdizán
E
l Hno. Valeriano, que había sido objeto de la
curación de gravísima enfermedad (1933) en
uno de los milagros aprobados para la beatificación del Hno. Benildo, estaba, por ello, como
predestinado para encargarse de los trabajos previos
destinados a lograr la beatificación de los Hermanos
Mártires de Turón, asesinados durante la marxista
Revolución de Octubre de 1934, y hoy ya canonizados. Realizó su cometido a la perfección como Vicepostulador de la Causa de Beatificación correspondiente, desde octubre de 1944, en la conmemoración
del 10.° aniversario del martirio. Con la experiencia
adquirida, continuó la misma actividad con las nuevas Causas de nuestro Distrito de Madrid, derivadas
de la persecución religiosa durante la posterior guerra; Causas estas que acaban de finalizar todas ellas
en la reciente magna Beatificación de este Año de la
Fe, el 13 del pasado octubre en Tarragona. Por ello,
es este el momento más oportuno para recordar al
Hno. Valeriano con el más sincero agradecimiento
por parte de todo el Instituto, y especialmente del
Instituto español.
Pero existe además otro importante motivo para
recordar al Hno. Valeriano en estos momentos: El
pasado día 19 de octubre, el pueblo conquense de
Tarancón, su pueblo natal, ha dedicado una calle en
su honor y en su recuerdo, como distinguido escritor
y poeta. Recordemos que, además de otros muchos
escritos, fue el autor de gran parte –es el autor con
mayor representación en esta obra– de las composiciones poéticas de la importante publicación de Cánticos Sagrados (1ª edición, 1913). En ella también
intervino literariamente el santo Hno. Miguel, quien
además llevaba la dirección de la publicación; por lo
que este permaneció unos días en Bujedo, residencia
del Hno. Valeriano, para allí encontrarse y tratar juntos del asunto. Precisamente se ha elegido esa fecha
para honrar al Hno. Valeriano, como manera de celebrar también, a la vez, el centenario de aquella apreciada obra. La organización del acto se debió principalmente a la “Asociación de Amigos del Hermano
Valeriano”.
En Jerez de la Frontera, donde, entre otras actividades, fue fundador (en el año 1919) y primer director
horizonte
de la escuela de "El Buen Pastor", el Hno. Valeriano
dejó tan buen nombre, que la ciudad le otorgó en
vida, en 1945, el título de "Hijo Adoptivo" y le dedicó una calle el pasado año 2012. Por eso el Ayuntamiento de Jerez ha querido estar presente en el acto
de Tarancón con su concejala de Cultura. El mencionado día, en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, se
celebró un solemne acto académico en honor del
Hno. Valeriano, con varias y acertadas intervenciones
que presentaron las diversas facetas del homenajeado.
Concluyó el acto con las intervenciones del Hno.
Visitador Auxiliar de Madrid, de la concejala de Jerez y de la alcaldesa de Tarancón.
Pero el máximo homenaje para su obra poéticoreligiosa, la ha recibido el Hno. Valeriano, oficialmente, litúrgicamente, de la Iglesia. En el actual
Diurnal de la Liturgia de las Horas, publicado para
España en el año 1982, uno de los himnos litúrgicos
de Mártires es del Hno. Valeriano; había aparecido
publicado 70 años antes en el mencionado Cánticos
23
Opinamos
Sagrados. En esta publicación, tiene nuestro autor un
himno "A Todos los Santos" (música del gran maestro
Busca de Sagastizábal), con cuatro estrofas, dedicadas
cada una de ellas a un grupo de bienaventurados (ángeles, apóstoles, mártires, vírgenes). Pues bien, en
este himno del Diurnal figuran dos de las estrofas de
aquel himno originario: la de los Mártires y la de los
Ángeles; pero en esta última se ha introducido una
levísima modificación, de sola una palabra: se ha
cambiado el término "príncipes" (originario del texto
primitivo y relativo a los ángeles) por la palabra "mártires"; y así la estrofa queda referida también a los
Mártires; de esta forma, las dos estrofas tienen contenido y destino martirial, y forman este nuevo himno
litúrgico del oficio de Vísperas:
Espíritus sublimes, ioh mártires gloriosos!,
felices moradores de la inmortal Sión,
rogad por los que luchan en las batallas recias,
que alcancen la victoria y eterno galardón.
24
¡Oh mártires gloriosos de rojas vestiduras,
que brillan con eternos fulgores ante Dios!
Con vuestro riego crezca de Cristo la semilla,
y el campo de las mieses se cubra ya en sazón.
Este es, a no dudarlo, el principal reconocimiento,
callado, pero importantísimo reconocimiento y homenaje que el Hno. Valeriano ha recibido como poeta y
como autor de un poemario religioso: el ser autor de
una composición poética que la Iglesia, en su liturgia
oficial, ha convertido en "himno litúrgico”. Y seguro
que, en el paraíso, el Hno. Valeriano ha agradecido
los homenajes de su Tarancón y de su Jerez. Pero
este otro es un homenaje eterno; es el homenaje
litúrgico, oficial, de la Iglesia.

horizonte
Opinamos
Fray Roberto de la Iglesia Pérez,
el Abad de La Salle
Hno. Pedro Ozalla
E
n los números anteriores, todos los entrevistados nos han expuesto diversas dimensiones
de la vida lasaliana. Ahora, Fray Roberto,
Abad del Monasterio Cisterciense de San Pedro de
Cardeña, presenta otra forma de vivir la vida consagrada: la vida monástica-contemplativa.
- Roberto, muchos Hermanos conocemos a tu familia. Seguro que nos alegramos más si dices
que tus padres siguen muy bien… Y ¿cómo influyeron en tu vocación?
Efectivamente, mis padres
están bien. Sus edades ya van
siendo elevadas: 88 mi padre, 80
mi madre, pero, salvo algún
achaquillo, están sanos.
En casa, evidentemente,
aprendimos la vida de fe y también a vivir austeramente: un
sueldo de un maestro de escuela
privada con cinco hijos no da
para mucho. Todo ello influyó
en mí, sin duda.
- Pronto te escolarizaron.
¿Cómo viviste la vida colegial?
Comencé el colegio, párvulos
entonces, en Saldaña, con las Hijas de la Caridad,
donde estuve dos años. Aún me acuerdo con mucho
cariño de las hermanas que tuve como profesoras.
Después pasé al colegio La Salle de Burgos y ahí
estuve hasta que acabé COU. Tantos años y durante
esas edades, indudablemente dejan una huella imborrable. A muchos Hermanos, profesores, los recuerdo
aún con agradecimiento (no digo nombres para no
olvidarme de ninguno). Pero lo más intenso fue la
relación con los compañeros de clase y con el grupo
de amigos que tenía. Fueron unos años intensos en
todos los sentidos.
- Entonces, ¿aceptas el título: “Fray Roberto de
la Iglesia Pérez, el Abad de Salle”? Justifícalo
brevemente, por favor.
horizonte
Me da cierto rubor este calificativo. Cierto que
debo mucho al carisma lasaliano y ahí me formé durante la infancia y adolescencia, pero ser abad de una
comunidad, aunque sea la del monasterio de San
Pedro de Cardeña, es algo sencillo, sin más relevancia que un superior de otra comunidad religiosa cualquiera. San Benito dice en su Regla, que nosotros
seguimos, que el abad debe servir más que presidir y
así tratamos de ser hoy en día. Lo nuestro es un servicio temporal y mientras la comunidad quiera.
Sigue tu vida universitaria y profesional, ¿de qué forma?
Después de salir del colegio y
de aprobar la selectividad, me
puse a estudiar la diplomatura de
enfermería. Me gustaba el contacto con la gente y el mundo de
la sanidad y como no quería enrolarme en la carrera de medicina, pues me parecía muy larga y
además había que salir de Burgos, me decidí por enfermería.
También varias de mis hermanas
eran ya enfermeras y quizá me
“contagiaron”.
Los años de universidad fueron muy buenos para mí. Aprendías mucho y lo que
te gustaba, y las prácticas hospitalarias (la carrera de
enfermería tenía y tiene el 50% de los créditos como
“practicum”) fueron el descubrimiento de un mundo
totalmente nuevo. La relación con los compañeros
también te marca y aún hoy, después de más de 20
años de diplomarnos, seguimos siendo amigos.
Acabamos la carrera en junio de 1992 y ese mismo mes ya me ofrecieron trabajo en la UVI del hospital de Burgos (¡eran otros tiempos, esos!) pero lo
rechacé porque quería hacer otras cosas antes de enrolarme en el mundo laboral. Trabajé después en
centros de salud rurales y también en una unidad de
agudos de psiquiatría donde aprendí muchísimo sobre
25
Opinamos
las enfermedades mentales. El mundo de la psiquiatría me enganchó y aún hoy sigo estudiando, cuando
puedo, estos temas.
- Según tus circunstancias familiares, colegiales y
profesionales, podría esperarse una vocación
consagrada en la vida activa. ¿Por qué preferiste la vida monástica?
relación esponsal; con el báculo, su relación con Cristo Pastor, y con la mitra su relación a Cristo Cabeza.
Todos estos signos son, eso, signos, y como tales si
no cumplen su función en el día de hoy no sirven.
Muchos abades ya no los llevan e incluso suprimen
algunos en la ceremonia de bendición.
La vocación no la escogemos nosotros, nos viene
dada. En realidad la vida contemplativa y monástica
en mi caso fue como el desenlace final de un descubrimiento: la oración y la vida interior. Las descubrí
gracias a los ejercicios ignacianos y esto me supuso
un choque tan fuerte en mi vida que dije: “Yo quiero
vivir así por el resto de mis días”. Y diría también
que no me he arrepentido nunca de esta vocación que
me ha sido dada. Lo único que siento es que mi respuesta no siempre ha sido generosa.
- Roberto, nacido en 1969, monje desde 1993, te
licencias en Teología, pero te ordenas de sacerdote tarde, en 2010. ¿Esa opción fue iniciativa
personal, invitación de la comunidad o empujón
de alguna autoridad superior porque ya veía en
ti un próximo abad?
En nuestra orden, la ordenación sacerdotal no es
la culminación de una vocación, pues la vida monástica es en sí misma su propia culminación. Nosotros
nos ordenamos cuando se da la conjunción de tres
voluntades: la del monje que siente en sí esa vocación, la del P. Abad que discierne con el interesado
que así es, y la de la comunidad que de alguna manera da su aprobación. Como no tenemos labores apostólicas, la ordenación de un monje depende sobre
todo de las necesidades comunitarias.
- El día de la “Bendición Abacial”, 20.07.13, el
señor obispo te entregó la Regla, el anillo, el
báculo y la mitra. En las tres primeras entregas
acompaña al “Recibe la regla…” el “para
que…”, pero cuando te impone la mitra, no dice
para que… ¿Por qué será?
Sí, es cierto, la mitra se impone en silencio. De
todas formas, los objetos que se entregan al nuevo
abad quieren representar la misión que tiene y por la
que se ora durante la ceremonia: con la entrega de la
Regla se le quiere hacer ver su relación con Cristo,
Maestro y Siervo, porque el abad es el primero que
debe seguir la Regla como maestra de vida; con el
anillo, su relación con Cristo Esposo de la Iglesia,
porque el abad pasa a tener con su comunidad una
26
- La Regla de san Benito dice que el abad desempeñará el ministerio de guiar la comunidad como padre, pastor, médico, maestro y administrador. De esas cinco modalidades de gobernar,
escoge tu preferida y, por favor, dinos por qué.
De las características que me propones la que más
me gusta es la de padre. Eso es lo que significa la
palabra “abad”. Y uno va aprendiendo a ser padre
cada día a imagen de Dios, volviéndose más paternal
en la medida de lo posible. Pero también hay que ser
médico, maestro, administrador…Es compleja la
labor abacial y, además, está la representación del
monasterio.
- Carecemos de vocaciones. Quizá sea un indicador de lo poco que aprecia la sociedad actual la
vida consagrada. Quizá la vida monástica sea
todavía más incomprendida. ¿Qué sentido tiene
vuestra vida monástica en el siglo XXI? ¿Para
qué sirve?
La vida monástica responde a un anhelo profundo
del ser humano de todos los tiempos y religiones.
Panikkar dijo una vez que todo hombre tiene en sí un
“arquetipo monástico”, nosotros lo desarrollamos
conscientemente. No se trata de comprenderla sino de
vivirla, porque nos supera a nosotros mismos. Yo
comparo la vida monástica con la escena de la mujer
que derrama sobre Jesús un frasco de perfume carísimo. Los discípulos sólo lo ven como un dispendio,
mientras que Jesús lo ve como una muestra de amor y
así lo acepta.
horizonte
Opinamos
- En el 2011, animaste el retiro de Adviento organizado por CONFER-BURGOS. Nos agradó.
Manifestaste estar actualizado en espiritualidad,
teología… ¿Qué formación inicial recibe un
monje cisterciense y cómo tenéis organizada la
formación permanente?
Nuestra formación inicial la organizamos entre
todos los monasterio de nuestra orden en España; de
esta forma todos nuestros estudiantes estudian juntos
según un sistema, diríamos, semipresencial. Es una
forma de compaginar vida monástica y formación
que nosotros consideramos muy necesaria. A la formación permanente también la damos importancia y
dedicamos a ella una parte de la jornada durante toda
nuestra vida. Además los monasterios siempre tienen
una buena biblioteca y suelen organizar cursos de
formación permanente para las comunidades.
- En una ocasión dijiste que en estos momentos
tenemos hermanos de muchos quilates espirituales culturales y humanos. Quizá uno sea el artista fray David Leal Raga. Pues dinos: ¿qué quilates posee o produce tu monasterio? ¿Qué elementos artísticos, culturales… conserva?
Sí, lo más importante del monasterio son los hermanos que forman la comunidad y dan vida a estas
piedras milenarias. Todos en su tarea son verdaderos
artistas y algunos sobresalen en algún campo: la producción artística, la investigación histórica, la música, la acogida y el discernimiento, la artes culinarias…
Además de esto, nuestro monasterio hoy en día
(después del desastroso siglo XIX), solo alberga como valor la historia que tiene asociada y que hunde
sus raíces en el origen mismo de Castilla.
- ¿Cómo combináis en estos tiempos el ora et labora? ¿Incluís en esa renovación las nuevas
tecnologías?
Nuestro día está muy estructurado entre el “ora” y
el “labora”, aunque después cada hermano, según su
trabajo, personaliza esta organización. Y sí, las nuevas tecnologías están presentes en el monasterio.
Tenemos una página web hecha por un hermano de
aquí (www.cardena.org) y los monjes que quieren,
tienen acceso a internet algún tiempo al día.
horizonte
- El día de puertas abiertas, visitamos la bodega
monacal. Tú la explicaste muy bien a los números grupos. Cuéntanos algo de la única bodega
monacal románica…
Nuestra bodega es del siglo XI; arquitectónicamente, lo más antiguo que nos queda del monasterio junto
con la parte baja de la Torre del Cid. Hoy por hoy, es
la única bodega en España gestionada por monjes.
Nuestro medio principal de vida es la crianza, en esta
bodega, de vino tinto que después comercializamos.
- El 1.05.1942, una comunidad de la Trapa de
Dueñas fundó vuestro monasterio cisterciense.
En 1967, un violento incendio destruyó las tres
cuartas partes del monasterio. ¿De dónde proceden los recursos para restaurar las ruinas iniciales, las siguientes y la conservación actual
del gran monasterio?
Todo ha sido un cúmulo de sucesos en los que no
dejamos de ver la mano de la Providencia. Exactamente, el monasterio era una ruina cuando vinieron
aquí los monjes en el año 1942. Al poco se quemó y
pensaron abandonarlo para ir a otra parte, pero les
ayudaron a la reconstrucción sobre todo el ejército y
las instituciones, no sin muchos paseos del abad de
entonces y el trabajo de albañilería de los mismos
monjes. Hoy está todo reconstruido y lo que más
gastos nos genera es el mantenimiento del edificio,
que se logra gracias al trabajo de la comunidad y a
alguna ayuda esporádica de la Administración.
- Los Hermanos de La Salle nos alegraremos mucho conociendo noticias de Fray Dalmacio,
nuestro Hno. Cipriano Ortiz. Por favor, cuéntanos algo de su vida y milagros…
El P. Dalmacio está muy bien con sus 85 años.
Hoy por hoy es el más anciano de la comunidad.
Participa en la vida de comunidad plenamente y nos
da a los jóvenes “cien vueltas” en vitalidad. Se dedica
sobre todo a la biblioteca, a investigar y escribir sobre historia cisterciense, y atiende alguna vez a los
turistas que se presentan en el monasterio.
- Roberto, el abad joven, elegido por seis años,
GRACIAS y abrazos para que repartas entre tus
17 monjes, de 23 a 85 años.

27
Opinamos
Los profesores de la educación del
sentimiento religioso en los peques
Hno. Luis Miguel Fernández
“Estando los padres todo el día ocupados… no
pueden darles una educación honrada y cristiana” (RC 1,4).
V
engo, de nuevo, de los mismos presupuestos
de nuestros documentos y la insistencia de
formación para un aspecto fundamental de
nuestro ministerio: la educación del sentimiento religioso en la infancia. Lo compartimos casi al 100%
con colaboradores seglares, mayoritariamente profesorado femenino. Estas consideraciones los tienen
como objeto cordial.
Objetivo 1. Contar con educadores que se saben
lasalianos, que conocen (y siguen profundizando, vía
formación permanente) el lenguaje y los valores lasalianos; que se sienten claramente, descaradamente,
acuciados a vivir el carisma lasaliano. Crear un ambiente educativo, que se vive en comunidad educativa, inspirado en el espíritu del cristianismo. En este
ambiente, ofrecer a los alumnos el conocimiento del
misterio de la salvación y una sensibilidad para responder a la vida, don de Dios, como personas libres,
coherentes y solidarias, iluminadas por la luz de Jesús y de su Evangelio.
Objetivo 2. Plantearnos cómo poner gestosacciones, planes, que salgan al paso de la marea del
espíritu secularizante del ambiente, y ayudar a descubrir a Jesús, amarlo y seguir sus huellas. Cómo
poner en los corazones de los niños (también, por
supuesto, en los nuestros) la ilusión o ideal de construir con nuestras vidas un mundo que sea mejor de
como lo encontramos y más según el corazón de
Dios. Dar valor y campo a la recomendación de La
Salle: “Procurad que vuestros alumnos amen mucho a Jesús, su único y buen maestro, que piensen a
menudo en Jesús, que no respiren sino por Jesús”.
Es una utopía. Desentona con el ambiente secularizado. El secularismo quiere que estas cosas queden
para el mundo de las conciencias particulares. Nosotros ¿nos rendimos a este espíritu? No. “Seamos realistas; defendamos la utopía”. Para La Salle, la lacra
o dificultad venía de que los padres no se ocupaban
de sus hijos; ni sabían, ni tenían tiempo para enseñarles a vivir bien e instruirlos en los misterios; “con
28
este fin se han instituido las escuelas cristianas”.
Pues parece que hoy muchas familias tienen características semejantes, que no se cultiva la fe, que “no se
lleva” el testimoniar y enseñar la fe; y que puede llegar
a acabarse el comodín de las abuelas catequistas.
Hace años, cuando trabajábamos un equipo de
Hermanos como profesores de Pedagogía y Prácticas
Catequísticas en el Instituto de Teología Lumen Gentium, en Oviedo, se me quedó grabada una afirmación
que escribía en su Manual de Pedagogía Catequística
un autor de los más relevantes del momento, J. Colomb: la trascendencia de la educación del sentimiento
religioso en las edades infantiles de la vida, cuando el
niño aún vive un momento en que lo vital y afectivo
tienen una relevancia especial; luego, se abrirá al pensamiento lógico y a lo racional y abstracto.
En la edad infantil, son los hechos de experiencia,
vividos en la serenidad de la infancia, los que crean
actitudes y sensibilidades de cara a la vida, que, más
adelante, será difícil encuentren caldo de cultivo para
su crecimiento. Es la razón por la que la educación
que recibimos nosotros en nuestras casas, de pequeños, sigue aún siendo raíz de muchas de nuestras
actitudes religiosas y humanas. Creo recordar que,
según el autor, las edades de infantil y los primeros
años de la primaria, los 4/5 años hasta los 7/8, son
momento privilegiado para la formación del sentimiento y la apertura afectiva de la persona. Por ello,
las experiencias que educan estos aspectos de la
horizonte
Opinamos
personalidad habría que cuidarlas mucho en estos
momentos. Concluía Colomb en la importancia de
proporcionar experiencias religiosas y de vivirlas con
sentido, so pena de que queden lagunas en la formación de la persona que serán difíciles de retomar.
Esto me hace pensar en nuestras/os educadores
del período infantil y de los primeros años de la primaria. Si es verdad que muchos niños no encuentran
ahora en sus mamás/papás las/los catequistas o testigos de fe que les inicien, quedarán a un nivel de educación religiosa semejante al de los alumnos que
encontraban los primeros Hermanos: faltos de la experiencia gozosa de sentirse hijos de Dios; de sentirse
criaturas amadas tiernamente, cuidadas con solicitud,
por un Padre-Madre que está siempre con, en, nosotros; que en Él vivimos, nos movemos y somos; que
nos cuida como a la pupila de los ojos, nos cobija a la
sombra de sus alas, nos tiene dibujados en la palma
de la mano; que disfruta con nuestras alegrías y siente
como propios nuestros dolores; que nos hace el regalo de una Madre llena también de ternura.
Si es verdad que estas experiencias tienen un
campo especial para echar raíces en la edad infantil;
si es verdad que estos sentires no se cultivan en muchos hogares; y si Dios continúa confiándonoslos
para que vengan al conocimiento de la verdad de
Dios, deberemos tomar muy a pechos el propiciar
estos valores desde la escuela cristiana.
Y ¿en qué manos tenemos a nuestros niños? En
las atentas y solícitas de nuestras/os profesoras/es de
infantil y primaria. Atentas y competentes para ofrecer las bases y destrezas, comportamientos y actitudes que permitirán la maduración de las vidas jóvenes que tienen encomendadas.
Sobre ellas descargamos la responsabilidad de
despertar el sentimiento religioso y las actitudes y
valores humanos y cristianos. Revelar a los niños la
experiencia de los valores y virtudes evangélicas.
Descubrir a los ojos y a las mentes infantiles la buena
noticia de un Dios que es Amor, misericordia, perdón, ternura.
Muchas profesoras son buenas. Puede que lo hagan bien. Temo que, desde alguna experiencia y desde el influjo cultural secularizador tan fuerte, se nos
pueda escapar este servicio o se realice de modo rutinario en muchas ocasiones. El asunto es importante.
Y me hago algunas preguntas, pensando en estas/os
profesores de pequeños:
¿Tenemos cuidada la formación de nuestros profesores de estas edades para facilitarles el enfoque
religioso y la educación de la fe de los pequeños?
¿Suficientemente?
¿Consideramos necesaria la constante actualización teológico-catequística de estas personas?
¿Damos oportunidades y materiales para que profundicen el evangelio y trabajen en esta educación
religiosa fundamental?
¿Tenemos unas pautas, programas u orientaciones
claras y decididas para uso de estas nuestras educadoras de la fe?
¿Qué valoración se hace del programa de educación y celebración de los símbolos, del matrimonio
Lagarde u otro semejante? ¿Se sigue usando?
Otras sugerencias conclusivas:
- Tener clara una evaluación de este aspecto es
fundamental en la educación cristiana de
nuestros alumnos.
horizonte
29
Opinamos
- Hacer comprobación de estos programas, su
coordinación, análisis de las metodologías
activas y experienciales.
- Plan de acompañamiento sobre estos quehaceres y las actitudes de las educadoras.
- Plan de formación de agentes educadores.
- Promoción cristiana, conceptual, vivencial
(en respeto) y comunitaria, de estos grupos
de profesores.
- Vista la atención que este tema pide, la reflexión, atención y seguimiento de la formación
del profesorado y el seguimiento de la realización de la programación llaman a ser animadas desde alguna coordinación sectorial.
De hecho, en tiempos pasados, cuando los
profesores éramos mayoritariamente Hermanos, había momentos fuertes de formación
para motivarnos, profundizar nuestra preparación y facilitar la realización de nuestra misión de educadores de la fe. No debe ser menor la necesidad de apoyo de los actuales, en
la práctica todos laicos.
30
Estas consideraciones quieren ser de ánimo para
los que toman el pensar y planificar el tema de formación de nuestros educadores. Es una pequeña reflexión de alguien que no lo supo hacer muy bien,
pero cree, está seguro, que otros sí pueden hacerlo. El
que escribe se siente identificado con las peticiones y
proclamaciones de la importancia de la formación de
nuestra gente, que nos vienen de Capítulos y Asambleas de Misión. Reconoce las dificultades que existen. Pero, mirando a programas institucionales exigentes de otras instituciones, considera que hay que
seguir manifestando cordialmente a nuestros profesores que ser educador lasaliano es un privilegio; pero
es exigente, hay que ganarlo, hay que crecer constantemente en el conocimiento y vivencia del carisma de
La Salle. Ello es garantía de fidelidad al ser de colegio y, en consecuencia, garantía de un trabajo que
llene su vida de sentido.
Conseguir metas progresivas en el campo de la
formación: nuestro reto y responsabilidad.

horizonte
Opinamos
Un lasaliano en el DOMUND 2013
Hno. Mariano Valdizán
El diario madrileño LA RAZÓN publicó el pasado
día 20 de octubre, domingo, día del Domund, este
artículo de la distinguida periodista Cristina López Schlichting; artículo que merece la pena de
que llegue a quienes, entre nosotros, no lo hayan
conocido, y vale la pena también de que quede
archivado en esta nuestra revista. Como vale la
pena recordar una vez más a nuestro llorado
Hermano misionero.
N
os conocimos por teléfono en los 90:
–Brrrrr, bip, brrrrrm bip, bip, bip.
¿Oigaaaa? ¿Está Ignacio García? Con
mucha dificultad había localizado el centro de formación profesional que los Hermanos de La
Salle tienen en Niamé. –Hola, mire, me gustaría ir a
Níger para hacer un reportaje, ¿lleva usted mucho por
ahí?
–Bueno... unos 30 años.
–Yo querría ir al norte, hacia territorio tuareg, ¿es
peligroso?
–¡No, no! Se sube con convoyes militares, ¡pero
la vida no peligra! Como mucho, te quitan el jeep.
–Ya. El jeep. ¿Y el clima?
–Ahora es muy bueno.
–¿Qué temperatura?
– 45 o 46 grados.
Empecé a sudar sin pisar Níger. Nunca llegué a
hacer aquel trabajo, pero asombrada por el optimismo
imbatible de aquel burgalés, comí con él cuando visitó España. Setas, creo recordar. Su voz se convirtió
en un hombre de metro setenta, 55 años, muy delgado, sencillo y alegre. Había sido monaguillo en su
pueblo (Pedrosa del Río Úrbel), el menor de nueve
hermanos. Cuando tenía 13 años, un religioso de La
Salle habló en la escuela y pidió vocaciones. Él levantó la mano. "No sé por qué lo hice. Es un misterio. Luego, con el tiempo, fui desbrozando la llamada
(desbrozando, dijo, qué bonita palabra) y eligiéndola
día a día, porque esto es día a día, ¿sabe? Como el
matrimonio". Tenía una forma natural y campesina
de exponer las cosas.
horizonte
Ocho años más tarde un teletipo me golpeó el alma: "Asesinado a machetazos un misionero burgalés
en Burkina Faso". La agencia precisaba que el cuerpo
estaba desfigurado y el cráneo, destruido. No quería
creerlo y, además, no era el mismo país. Comprobé
los datos: Ignacio García Alonso, trasladado de Níger
a Burkina, encargado de un plan de formación agrícola y rural para jóvenes.
Me vinieron a la memoria las palabras que me había dicho: "Yo estoy donde Cristo me pide que esté.
Con sus fuerzas, claro, porque si no me resultaría
imposible". Le había preguntado por qué no regresaba a casa: "Sigo una llamada –me contestó–, no una
idea ni un código moral. Cristo es una persona viva y
mantengo una relación con Él. Es mi respuesta personal a una llamada personal. Y no la cambiaría por
nada". Le habían pedido dar la vida por los africanos
y la había dado, menudos son estos de Burgos. Los
restos de Ignacio reposan en un cementerio de los
Hermanos de las Escuelas Cristianas en África, pero
él no está ahí. Seguimos siendo amigos. Hoy podemos ayudar a los más de 13.000 misioneros españoles que se reparten por 130 países del mundo. Es el
Domund.

31
Opinamos
Más que un profesional: un educador
Hno. Jesús Gil
I
nnovación educativa. Se han introducido proyectos, metodologías y programas de innovación,
se promueve la participación, el trabajo en grupos y cooperativo, la creatividad y la iniciativa del
alumno. Se insiste menos en la memorización y la
educación es más práctica y personalizada. El modelo
de programación ha mejorado. Se dedica más tiempo
a evaluar. “La pastoral se ha adaptado a los nuevos
jóvenes”. Se ha mejorado mucho la enseñanza de
idiomas, las nuevas tecnologías, las relaciones internacionales, los intercambios educativos.
Organización. Han mejorado la calidad del profesorado y la organización y gestión de los centros.
Los procesos de calidad contribuyen al reparto de
responsabilidades. La labor docente se concibe como
trabajo en equipo, incrementándose la colaboración y
coordinación del profesorado. Ha mejorado la relación con el equipo pedagógico, la participación en la
gestión y los planes del centro, la oportunidad de
expresar las propias opiniones y el sentimiento de ser
escuchado.
Relaciones. La relación entre alumnos, padres y
profesores es más cercana y personalizada; también
lo es relación profesor-alumno. Ha mejorado el respeto y la atención personal al alumno y el trato igualatorio a todos. La implicación y participación de los
padres es mayor.
Atención a la diversidad. Hay más tolerancia,
respeto y atención a la diversidad. Ha mejorado la
integración y la ayuda a los integrantes. Se nota una
gran mejoría en la ayuda a los chicos con más dificultades. El profesorado está más implicado con los
alumnos con necesidades y se les atiende mejor.
32
Concepto de educación. El concepto de educación
integral promueve un estilo educativo centrado en la
persona. Además del desarrollo intelectual, se trabajan
otras dimensiones personales y sociales. Se tiene la
perspectiva de participar en un proyecto común.
Función social. La educación llega a más sectores
de la población y el alumnado cuenta con más posibilidades. Hay una mayor valoración de la “formación
profesional”, mayor apertura al pueblo, mayor diversificación de ofertas educativas extraescolares. “el
educador debe ser un mediador, no un mero transmisor de conocimientos”.
Autoridad docente. La profesión y la imagen social del maestro están desprestigiadas: desautorización, pérdida de autoridad, falta de respeto por parte
de los alumnos y de padres, falta de reconocimiento
social a su labor. A la falta de orden, disciplina y
respeto hay que añadir la contemplación excesiva que
hay que tener con algunos padres y alumnos y la
censura y la crítica constante de algunas familias. El
educador merece un mayor reconocimiento por parte
de las instituciones de la sociedad.
Alumnado. La actitud del alumnado deja que
desear: desmotivación, falta de responsabilidad, de
atención, esfuerzo y espíritu de trabajo; “lo quieren
todo muy fácil”: Hay mucha superficialidad, infantilismo, dificultad para el trabajo individual y falta de
interés por aprender. Fallan el respeto entre los alumnos y el respeto al profesor. Los alumnos exigen derechos y piensan poco en los deberes. La participación
de los adolescentes en la vida del centro es escasa.
Familias. En algunas familias existe dejación y en
otras proteccionismo excesivo hacia los hijos. Otras
muestran desinterés, falta de colaboración y participación. En otros casos, la actitud de los padres con el
profesor deja bastante que desear. Cada vez hay más
familias desestructuradas. Muchas viven situaciones
que influyen negativamente en los hijos. Otras delegan sus responsabilidades en la escuela, cuando esta
necesita su apoyo y participación. Se han perdido
valores porque no se enseñan en la familia. Las familias deben inculcar en sus hijos la filosofía del saber
hacer y estar, del respeto y el esfuerzo continuado.
horizonte
Opinamos
Enseñanza y aprendizaje. Existe una gran dispersión de objetivos y contenidos curriculares; se
quiere abarcar demasiado. Los contenidos de los
libros de texto son pobres. El nivel académico deja
que desear; existe un bajo nivel académico y hay
poca exigencia; la enseñanza no es muy eficaz y se
abandonan métodos más antiguos que funcionaban,
por otros más innovadores. “La educación cristiana
se ha debilitado”.
Organización. Falta de continuidad entre las distintas etapas educativas. Se precisa una adecuada
coordinación. Hace falta más trabajo en equipo y el
profesorado cuenta con poco tiempo para ello. “Hay
muchas reuniones sin utilidad”, con la consiguiente
pérdida de horas de clase. Son numerosos los frentes
a los que debe atender el profesor. Falta tiempo para
hablar personalmente con los alumnos. Se ha producido relajación en las normas que guardan relación
entre el profesorado y los alumnos. Ahora todo vale.
Y la cosa no va así.
Administración. Necesitamos un pacto escolar
estable, unidad y coherencia en las políticas educativas y respaldo administrativo al profesional. Debe
invertirse más en educación y asignar más recursos,
autoridad y autonomía en los centros, dotándolos de
medios humanos, técnicos y económicos. El profesorado tiene demasiada carga lectiva. Hay excesivos
contenidos. No se puede llegar a todo; prioricemos:
menos objetivos y más calidad. Menos exigencias
burocráticas. La Administración no consulta ni escucha a los educadores. Hay que plantearse la edad de
jubilación del profesorado. La participación de los
padres, su relación con el profesor y el seguimiento
de los hijos pueden mejorar.
Imagen docente. Hay que recuperar la figura del
profesorado, rescatar la autoridad del docente, el
respeto y el reconocimiento social. La revalorización
de la profesión docente pasa por la autoridad del profesor ante los alumnos y ante algunos padres, con
apoyo de la dirección.
Implicación de las familias. Se necesita más implicación, apoyo y seguimiento por parte de las familias y más labor compartida con la escuela. Es preciso
unir esfuerzos y criterios educativos de padres y profesores: Hay que acercar a las familias al colegio; la
relación familia-escuela debe mejorar. Hay familias
que sobreprotegen a sus hijos; otras, por el contrario,
deben dedicarse más a ellos. Las familias deben in-
horizonte
culcar a los hijos respeto, esfuerzo, saber hacer y
estar.
Educación y metodología. Es necesario emprender cambios metodológicos, en el modelo de enseñanza, a nuestra manera de pensar, trabajar y evaluar.
Hay que creer en la enseñanza, fortalecer los nuevos
proyectos, individualizar conocimientos, despertar
curiosidad, enseñar a pensar y considerar el trabajo y
el esfuerzo. Debe dedicarse más tiempo al desarrollo
de habilidades no estrictamente cognitivas.
Actitud del alumnado. Existe una actitud de menosprecio a la cultura del esfuerzo, poca motivación y
espíritu de trabajo, escaso autocontrol y fuerza de
voluntad. Muchos alumnos deben mejorar su disposición para lograr metas o conseguir cosas. También
debe mejorar su capacidad para razonar y entender.
Hay que encontrar claves motivadoras para los alumnos, lograr que valoren la educación, buscar salidas
para los desmotivados. “Faltan valores esenciales
como el respeto y la disciplina”.
Rendimiento escolar. Es preciso poner remedio
al fracaso escolar, lograr que los alumnos con dificultades saboreen el éxito y confíen en su potencial. Se
necesitan ayudas para los alumnos con problemas de
aprendizaje; orientación y soluciones para los que
fracasan antes de terminar la ESO. El nivel académico es bajo; “muchos alumnos saben poco y pocos
alumnos saben mucho”. Hay que aprender más y
mejor.
Alumnos con necesidades. Es preciso responder
adecuadamente a los alumnos con necesidades educativas. Hay que atender a los diferentes niveles. Se
necesitan más recursos para dar respuesta adecuada a
la diversidad. Necesitamos conocimientos sobre los
trastornos de conducta y aprendizaje; conocer mejor
los chavales.
Función de la escuela. La escuela debe dedicarse
a la educación, no a responder a otro tipo de intereses. Tenemos que reinventar la escuela, revisar el
estilo de persona que queremos educar, recuperar los
valores, educar personas con valores, impartir buena
educación. La escuela debe anticiparse a las nuevas
realidades sociales. Hay que cubrir ámbitos extraescolares: deportes, tiempo libre…; realizar ofertas
diversas: convivencias, compartir su tiempo… que
les lleven a cuestionarse y preguntarse, a compromisos personales; ofrecerles momentos en los que puedan encontrarse con personas de referencia.

33
Opinamos
¡Felicidades, Bernardo!
Conchita Villar
El día que hubiese sido el cumpleaños del Hno. Bernardo Villar, su hermana Conchita estuvo en Bujedo,
comió con la comunidad y, al final, leyó este texto que
nos ha autorizado a publicar.
S
é que mi felicitación te llegará ese día tan señalado en nuestras vidas, 14 de octubre. Desde
aquí, tu casa (y desde ahora la mía, ya que tan
amablemente el Hno. Luis Miguel me la ha ofrecido),
te deseo toda clase de bendiciones y felicidad.
¡Ya llegaste a los 75! Como te gustaba mencionar:
“voy a por los 75” y poco te faltó. ¡Muchas felicidades!
En junio quise mandarte un correo electrónico a
raíz de los correos que te enviaban en la página web
cuando nos diste el adiós final. Entonces no pude
escribir nada, porque no hubiera acertado con las
letras y palabras.
Nos dejaste con el corazón roto, hecho trizas, incapaz de reaccionar; solo entendía de amargura, tristeza, dolor, angustia…
¡Eran tantos los sentimientos que se agolpaban!
Supe del silencio, el vacío, de tristes recuerdos
que venían y se iban para de nuevo aparecer; imágenes que vuelan y que quedan fijas una y otra vez: no
quieren irse y hacen que las lágrimas broten silenciosamente.
Para aliviar mi pena me refugio pensando que ya
estás gozando de la Vida Plena (con mayúscula) al
lado de Cristo Jesús vivo y resucitado y de la Virgen
María, tu compañera inseparable.
Con papá fue todo muy rápido; con mamá, a sus
88 años, lo esperábamos. Lo tuyo fue impacto total.
¿Cómo podía sucederte esto a ti, cuando tu aspecto era inmejorable? Y es que “para morir solo hace
falta estar vivo”, como diría un andaluz.
Prefiero quedarme con la cara amable de la muerte y pensar que con ella hallaste a Dios, pues, como
dice san Agustín, “la muerte es la compañera del
amor, la que a abre la puerta nos permite llegar a
Aquel que amamos”.
Hallaste a Dios a quien estuviste buscando durante esta vida pasajera, esta breve vida. Se terminó la
carrera aquí abajo, para empezar esa otra carrera que
es la vida eterna. Qué suerte el pensar que nuestro
destino es vivir para siempre con Dios, nuestro padre
del Cielo. Tenemos toda una eternidad para poseerlo;
caminamos con Él por otras veredas.
Este 14 de octubre te veo sentado a su mesa celestial, celebrando tu onomástica por todo lo grande,
porque en ese lugar todo debe de ser espectacular, y
por mucho que queramos, no podemos hacernos ni la
más mínima idea de lo que Dios nos tiene preparado.
¿Te acuerdas de aquel 14, de aquel año que sin
ponernos de acuerdo nos encontramos en París e
hiciste de ángel y guía?
Bernardo y Conchita
34
horizonte
Opinamos
Y ahora, desde lo más íntimo del corazón te doy
las gracias por todo el tiempo compartido y por el
ejemplo que nos has dado.
por un deseo, seguro que responderías: “que me recuerden como alguien que pasó por sus vidas haciendo el bien a pesar de los tropezones”.
Gracias por tu inteligencia lúcida y despierta.
Gracias por tu nobleza y la percepción acertada
que tenías de la realidad.
Gracias por tu humildad y sencillez.
Gracias por ser mi hermano en quien siempre
confié.
Gracias porque, cuando venías a casa, siempre
aparecías con algún detalle.
Gracias por tu cariño y amistad.
Gracias por tu carácter decidido y fuerte.
Bernardo, me despido con un ¡hasta luego!, sí:
¡hasta el cielo! pues la vida es muy corta y cuando
nos damos cuenta ya se ha ido. ¿A que es así, Bernardo?
Como los libros han sido tu gran pasión, y cuanto
más antiguos más los valorabas, te mando estos dos
por medio de tu amigo y compañero Carlos Cantalapiedra para que estén con los demás.
Nunca te olvidaremos. Permanecerás en nuestro
recuerdo con la esperanza de un futuro reencuentro.
Descansa en paz y sigue intercediendo por todos
nosotros, familiares, amigos y menos amigos, y sobre
todo por la Congregación que tanto amaste y tan maravillosamente serviste, para que los puestos que van
quedando vacíos pronto sean ocupados por nueva
savia.
Tu hermana que mucho te quiere,
Conchita 
Si al apagar las velas, o sin apagarlas (no sé cómo
será la celebración de tu cumpleaños) te preguntasen
horizonte
35
Opinamos
La Virgen del Buen Consejo,
fedataria
Hno. Melchor Peirotén
A
cabo de volver de Bujedo. Son ya tres veces
o cuatro las que he podido acudir a otros
tantos funerales por Hermanos difuntos. Mis
dificultades para asistir se ven superadas por la caridad comunitaria que acepta mi deseo de asistir al
funeral y la disposición incondicional del Hermano
que está dispuesto a compensar mis deficiencias cargando con la silla en mis movimientos por Bujedo.
¡Gracias!
Asistir a un funeral en Bujedo es, además de un
acto de caridad, una gozada. Sentir que un Hermano
nuestro ha sido acogido por el Padre nos llena de paz,
tras una carrera de fondo con muchos años de perseverancia. En Bujedo, con motivo de estos eventos
luctuosos familiares, solemos acompañar al Hermano
difunto un grupo nutrido de Hermanos con los familiares, más bien pocos, y que pertenecen a la segunda,
tercera o… generación, pero que han mantenido un
contacto frecuente con el Hermano familiar, ya fallecido.
Entramos en la iglesia del Monasterio. Allí, corpore insepulto, nos encontramos con nuestro Hermano al que vamos a encomendar al Señor en una
liturgia sencilla, pero solemne, a veces concelebrada
por varios ministros, liturgia a la que da realce el
acompañamiento del magnífico órgano pulsado por
manos ágiles del organista de turno.
Otros especialistas han pergeñado el desarrollo de
la ceremonia litúrgica, del que cada asistente dispone
de un ejemplar. Ya todo dispuesto, empieza la celebración.
Inicio
El celebrante comienza asperjando el cadáver
mientras la Asamblea entona un motete ad hoc, que
todos cantan a pleno pulmón. Este asperges se hace
en recuerdo del Bautismo.
Dos señoras (parientes del difunto, a ser posible)
extienden una sábana blanca sobre el féretro y, sobre
ella, el director de la comunidad coloca la Biblia. La
Asamblea acompaña el sacramental y entona una
antífona.
Finalmente, se procede a encender el Cirio Pascual, símbolo de la resurrección. La Asamblea
acompaña con otro motete las melodías del órgano.
Así se concluye este preámbulo de preparación a la
Eucaristía.
Eucaristía
Sin interrupción, el organista lanza la melodía del
¡Señor, ten piedad!, coreado por la Asamblea, como
lo hará en todas las partes musicadas de la Eucaristía.
A todo el cuerpo de la Misa se lo reviste de una solemnidad especial tanto en el rezo como en el canto.
Un tiempo especial se reserva para la intervención
del Hno. Visitador Auxiliar, que es quien pronuncia
la homilía, en la que, comenta la Palabra escuchada,
preludio de un recorrido vital histórico del apostolado
del Hermano difunto, muy meditado y que todos
seguimos con pasión.
Durante toda la Eucaristía, la Virgen del Buen
Consejo, en postura sedente sobre su trono, en el que
36
horizonte
Opinamos
está desde las Bodas de Oro de la presencia de los
Hermanos en el monasterio, el año 1942, es la que
puede testificar con autoridad la realidad de cuanto
significa cada uno de los Hermanos a medida que el
Señor nos va llamando Es nuestra fedataria. La Virgen del Buen Consejo tiene a su Hijo en brazos y este
abraza con sendos brazos el cuello de su Madre en
una posición maternal idílica.
Camino del cementerio
Concluida la Eucaristía, se inicia la procesión al
cementerio por la Avenida de los Mártires, cubierta
de vegetación y de cascadas, cuyo eco se ve apagado
con las estrofas cantadas del ¡Bendito sea el Señor,
Dios de Israel! que cubren todo el recorrido hasta el
nicho abierto en el que va a descansar el cuerpo del
Hermano fallecido.
Desde la sepultura del Hno. Bernardo Villar se
han iniciado los enterramientos en el pabellón de la
derecha según se entra al cementerio, previa la recogida de los restos mortuorios anteriores, que quedan
colocados al fondo del nicho, en vez de ser recogerlos en el osario del pabellón de la izquierda con los
restos de la recogida anterior.
En el cementerio concluye la ceremonia del funeral con la canción de despedida: Despidamos todos
juntos al Hermano…
¡Que el Señor acoja en su seno a nuestro Hermano
difunto! ¡Descanse en paz!

horizonte
37
Marco
pastoral
horizonte
Marco pastoral
Marco pastoral
Algunas claves de reflexión en torno
al nuevo Marco Pastoral
Hno. Jorge Medina
E
ste documento es el resultado de un proceso
profundo y continuado de reflexión conjunta
entre los coordinadores de pastoral de todos
los sectores. Responde, por tanto, a los interrogantes
y las necesidades que se observan en el mundo de la
evangelización desde hace tiempo.
En primer lugar, me gusta que en sus primeros párrafos deje claro que un modelo de pastoral cristiano
ante todo debe proponer la fe. Puede parecer evidente, pero conviene decirlo. Corremos el peligro de
pensar que, ante la dificultad de hacer propuestas
concretas, nos tengamos que conformar con “entretener” a las nuevas generaciones. Pero ese no es nuestro objetivo. Seguimos apostando por la propuesta de
la fe, aunque las formas y los métodos para hacerlo,
en este momento, partan mucho más de las necesidades de cada persona, aunque no nos lo podamos plantear como adoctrinamiento y aunque siempre haya
que recorrer caminos previos antes de hacerlo.
Seamos realistas: vivimos en una época de “fe débil”. No sé si alguna vez no lo fue, cuando el mismo
Jesús deja claro que la fe de los discípulos era muy
pequeña. Pero lo cierto es que no estamos en épocas
de convicciones fuertes; por lo tanto, la convicción de
la fe tampoco es fuerte. Pero ese no es el verdadero
problema. En este sentido, me parece esclarecedora
esta cita:
Una fe no atenuada por la duda puede convertirse
en peligrosa moralmente. Afortunadamente, él
también nos enseña que lo contrario de la fe ciega
no es la increencia sino una forma diferente de
creer, que abraza la incertidumbre y nos permite
respetar a otros, a los que no entendemos1.
El verdadero problema, tal y como ya nos decía
san Pablo, es que la fe deje de proponerse. Y el documento aboga por continuar con la propuesta. Ahora
bien, a lo largo de sus páginas el documento insiste
en que el camino para hacerlo es el de la experiencia.
Y da una gran importancia a la experiencia, tanto que
en algún momento me recordaba las propuestas de
hace décadas, cuando estaba en boga la “catequesis
de la experiencia”. No puede ser de otro modo. Si no
hay experiencia, no hay vida. Si solo hay razonamiento, pero no se llega a tocar el corazón, y no se
llega a palpar, hoy, en un mundo tan afectivo, es como si no hubiera nada. Con estas palabras tan escuetas, pero tan certeras, nos lo recuerda Eduardo
Punset, aunque cuando lo hace no habla precisamente
de la fe: “Sin emoción no hay proyecto que valga”2.
La fe hay que proponerla como “experiencia de
algo”, dice el documento. De hecho, ¿se puede hablar
de fe cuando no hay experiencia? Lo interesante es
saber cómo se suscita esa experiencia. Exige, de entrada, ir a cada persona, respetar profundamente la
diversidad, “el ritmo personal de cada uno”, tal y
como dice el documento. Exige flexibilidad, nada de
estructuras fijas, que podrían resultar más fáciles,
aparentemente más efectivas, pero, a la larga, mucho
menos fecundas.
Hay experiencia cuando “ocurre” algo en la vida de
la persona. Si no se toca el corazón, no hay nada, no se
convierte en algo significativo para el individuo. Tiene
1
De Jacques DERRIDA, citado por el Hno. Álvaro R. Echeverría, Superior General de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, en su Carta
Pastoral de 2009.
2
Eduardo PUNSET, El viaje a la felicidad, Destino, S.A., Barcelona
2005, p. 62.
horizonte
41
Marco pastoral
que ser algo afectivo, para comprobar, una expresión
que ya utilicé, que lo más efectivo es lo más afectivo.
Y sin afectividad difícilmente puede haber fe. Garrido, que sabe mucho de este tema, y que recientemente está impartiendo unos cursos sobre los pasos previos para el despertar de la fe, de los cuales no ha
publicado aún nada, decía ya hace años:
A mi juicio, todo modelo de espiritualidad […]
tiene como eje vertebrador el amor. Allí donde
una espiritualidad no cultiva prioritariamente la
afectividad, es decir, la relación con Dios, no cabe fe, esperanza y amor; por lo tanto, no cabe misión. Justamente, porque la espiritualidad cristiana no consiste ni en oración, ni en acción, ni en
pasión. Dicho de otra manera, así como sin amor
no sirve de nada tener fe para trasladar montañas, sin amor tampoco sirve de nada entregar todo lo que tengo a los pobres o el sacrificio de la
propia vida (1 Cor 13)3.
Sirvan de ejemplo estas palabras de Salustio de
hace un par de milenios: “Los jóvenes de hoy no
son como los de otras épocas; aquellos eran respetuosos con sus mayores, generosos y honrados,
pero los contemporáneos están invadidos por la
disolución, son de ánimo blando, resbaladizo, fáciles de prender en los engaños… amancebados,
jugadores y despilfarradores”4.
Pues el mismo modo que lo decía Salustio hace
dos mil años, muchos lo siguen diciendo actualmente, y se dirá y se ha dicho en cada época histórica. Sin
embargo, el documento aboga por la aceptación incondicional, incluso por el “sano protagonismo” del
joven, sin el cual es imposible posibilitar la experiencia de la que he hablado y llegar a la evangelización.
Cuando el joven se ve acogido y no juzgado, es
cuando puede aceptar que se le digan las cosas, y se
muestra más proclive a iniciar procesos, a escuchar y,
si es necesario, a cambiar.
Fe, amor, espiritualidad, afectividad… son hebras profundamente entrelazadas, pero hebras
que requieren de la experiencia
vital. Y en ese sentido, me encanta la expresión del documento en la que dice que la escuela
es “la casa de la experiencia”.
Supone un cambio muy fuerte a
lo que la escuela ha sido habitualmente: “la casa del razonamiento”. No, ahora los parámetros pastorales –y educativos– van mucho más por la
cercanía, la acogida, la relación, la experiencia en
definitiva.
Me gusta también del documento la visión tan positiva que tiene del joven. No es que los autores del
documento se engañen y se pongan una venda en los
ojos para rodear al joven de virtudes que este no tiene, pretendiendo caer en el extremo contrario, en el
mismo extremo en el que con frecuencia caen las
grandes marcas que erigen al joven como el paradigma del hombre contemporáneo. No va por ahí. Más
bien, se intenta descubrir que al joven hay que aceptarlo como es, no juzgarlo de entrada. Lo más fácil es
el juicio gratuito, del cual la historia está llena de
múltiples ejemplos. Así lo dice José Luis Moral:
Esteban de Vega, en la conclusión
de una tesis que dedicó al estudio del
individualismo, dice lo siguiente
acerca de la aceptación del joven:
Es importantísimo llegar a cada
persona […]; y es necesario llegar a
ella “tal y como es”, no “tal y como
desearíamos que fuera”. Partir de su
propia realidad. Es imprescindible
acoger la realidad y no permitir que
nuestro amor al ideal nos impida
amar lo que es tal como es: la realidad del alumno
que no es tan responsable como nos gustaría, que
no tiene una escala de valores como la desearíamos, que falla, que nos da problemas… Acoger su
realidad significa manifestarle siempre que confiamos en él, que estamos convencidos de que puede crecer. Nuestra confianza le da alas para volar.
Cuando le estamos comunicando que no creemos
en él, cuando nos hacemos indiferentes a lo que
haga, porque ya nos da lo mismo, cuando expresamos, verbal o no verbalmente, que ya no esperamos nada de él, le estamos impidiendo crecer5.
Y si nos referimos expresamente al tema de la
transmisión de la fe, hay que reconocer que esta no
llega por adoctrinamientos iniciales, sino por la acogida afectuosa que despierta la empatía. Y desde ahí,
4
José Luis MORAL, ¿Jóvenes sin fe?, PPC, Madrid 2007, p. 81.
Esteban de VEGA, tesis doctoral El individualismo, ¿Paradigma del
hombre contemporáneo? Universidad Nacional de Educación a Distancia, Facultad de Filosofía, Madrid 2012, pp.359-360. Obra no publicada.
5
3
Javier GARRIDO, Afectividad y seguimiento de Jesús, Frontera Hegian,
Vitoria 2000, pp. 67-68.
42
horizonte
Marco pastoral
comprobamos, tal y como dice el documento, que la
fe surge más por contagio que por transmisión verbal.
Los tiempos actuales presentan claras dificultades
para lograr este contagio de la fe. No es culpa del
joven, no; pero lo cierto es que la formación de una
identidad cristiana en la sociedad moderna, en relación con los jóvenes, se ve obstaculizada, según José
Luis Moral, por perfiles problemáticos como estos:
- La secularización y laicización.
- La complejidad y fragmentación.
- El pluralismo.
- La “lógica” capitalista y consumista6.
El desafío es grande, por tanto. Pero me gusta el
tono optimista, no exento de realismo, del documento. Frente a estas dificultades, el agente de pastoral
debe vivir, de acuerdo al documento, un proceso de
formación y actualización continua, que nos ponga a
tono con el mundo juvenil. No hablamos solo de
formación teológica, psicológica, pedagógica, que
por supuesto son imprescindibles, sino también de
formación en el campo de la música, el cine, las series de televisión… todo aquello que nos permita
entrar en contacto con los jóvenes. Esto lo tienen
fácil los animadores más jóvenes, y no tanto los más
mayores. Ahora bien, esto no significa que los adultos no tengan posibilidad de evangelizar. A veces
corremos el peligro de pensar que solo quien “coleguee” con los jóvenes es digno de ellos y puede decirles una palabra con sentido. Mi propia experiencia
me dice que cuando se crea un clima de afecto y los
jóvenes perciben en el adulto autenticidad, le acogen,
le buscan, y le confieren autoridad moral. Su palabra
tiene sentido.
Me gusta también la llamada a la gratuidad que hace el documento. Es la gratuidad propia del que vive
con pasión su vocación y no busca rentabilidad rápida
en lo que hace. El documento se expresa así cuando
habla de cómo muchas experiencias que se proponen
al joven son válidas en sí mismas y no solo como recursos útiles para conseguir otra cosa. El tiempo que
se dedica al joven, y las experiencias de encuentro, de
celebración, de voluntariado, de amistad, son válidas
en sí mismas. Persiguen, cuando es posible, la propuesta de la fe, tal y como dije al comienzo de mi
comentario. Pero si no llegan a lograrlo, no es que
sean experiencias inútiles. Y esto no pretende ser solo
6
Cfr. José Luis MORAL, ¿Jóvenes sin fe?, PPC, Madrid 2007, pp. 87-88.
horizonte
un pobre consuelo para el pastoralista, sino recordarle
que el evangelizador, lo mismo que el educador,
siembra, y la siembra es buena por sí misma; pero los
frutos ya no dependen solo de él.
Voy terminando mi comentario y no puedo dejar
de decir algunas palabras en torno al modelo relacional que el documento propone. Ya vimos al hablar
del grupo cristiano que el grupo, que se proponía al
principio como instrumento, pronto perdía ese estatus
para convertirse en sí mismo en contenido. Y creo
que es muy cierto. Amplío el tema del grupo a algo
más global, que es la propia relación, para decir que
la relación es lo que evangeliza7. Pero, además, la
relación es imprescindible para que se produzca el
fenómeno básico de la socialización, es decir, que la
persona llegue a ser ella misma, lo cual implica que
se sienta identificado con otros, perteneciente a un
colectivo, que aprenda a reconocerse y a diferenciarse en lo que los demás le van diciendo de sí mismo…8. La relación es, por tanto, imprescindible. Y
hay que potenciarla, a pesar de las fuertes tentaciones
a vivir de un modo individualista que hoy nos rodean.
Finalmente, unas palabras sobre los cuatro núcleos temáticos que se abordan en el documento:
Dios, Iglesia, Mundo y Yo. Me parece fundamental
la educación en cada uno de ellos, pero si hay uno
que hoy considero especialmente difícil es el de la
Iglesia. Constato que los pastoralistas tenemos muy
difícil, por múltiples motivos, llegar a educar a los
jóvenes en el sentido de la eclesialidad. En este sentido, J. Garrido considera que es muy importante hacerlo, pues sin vivir la eclesialidad no hay auténtica
evangelización; pero también dice que no es algo que
deba preocupar en exceso, sino que vendrá mucho
más tarde, cuando la persona haya conseguido integrar dimensiones más básicas de su vida de fe y de su
desarrollo personal9. Y mi experiencia me dice algo
parecido.

7
Así de claro se lo he oído decir al H. Pedro Gil Larrañaga en alguna de
sus conferencias; y estoy de acuerdo.
8
Cfr. Marcel LÉGAUT, El hombre en busca de su humanidad, Edita
Asociación Marcel Légaut, Madrid 2001.
9
Cfr. Javier GARRIDO, Evangelización y espiritualidad, Sal Terrae,
Santander 2009.
43
Marco pastoral
Una pastoral del “qué soy” en la
experiencia de que todos juntos
andamos y somos
Hno. José Miguel Fernández Arizmendi
S
entarse y leer con calma el Documento
marco de evangelización supone acercarse
a algo que contiene mucha más vida de lo
que parecen expresar sus apenas diez páginas, a una gran riqueza que plasmamos
como posibilidad, pero también como vida que ya
está.
Supone una respuesta a la realidad
que vivimos, que no es nueva en sí, sino
como decía Lyotard, es una «reescritura
de determinadas características» que de lo
que ya se vivió. Y es que el propio Mardones, hablando del paradigma actual, nos da
pistas para entender que, por analogía, nuestra Pastoral (tan planteada, tan integrada,
con toda su unidad…) terminaría por
saltar hecha pedazos, para generar una
nueva visión, con una lógica propia.
Las tecnologías de la información han
acelerado nuestro sistema, el tiempo del que
hablamos es distinto, y en ello coinciden
muchos autores. La historia ha cambiado, y
no solo la historia sino también la manera
de leer nuestro tiempo. Una situación de
crisis, más allá de la económica, pero que
en su propio significado nos habla de
oportunidades, incluso como afirma João
Duque, de “reconstruir la identidad cristiana”… ¿Y por qué, tal vez, no repensarse
también uno mismo como tal?
Por eso, es realmente un acierto que el
documento comience diciendo que «los
destinatarios de la misión son todas y cada una
de las personas que componen nuestras comunidades educativas». Un punto fundamental que me hace agente y sujeto de
este marco pastoral, que me está diciendo
que, en la medida en que no esté en proceso, que no
me trabaje (como cristiano, como persona,…) poco
tendré que aportar.
44
Sin lugar a dudas, otro de los elementos clave es
que una de las palabras que más se repite es “experiencia”, no como consumo, sino como un recentrarse
en la persona (y la consiguiente “personalización”),
ante la cual están a su servicio las estructuras, los
medios y las formas que tenemos de “hacer” Pastoral.
Realmente, el “modelo de la mariposa”, con todo lo
borroso que tantas líneas y colores puedan suponer,
habla de ese dinamismo vital, de esa
fuerza comparable al modo en que en la
actualidad desenvolvemos las ideas y la
vida, no de una manera lineal, sino puesta a
friccionar hasta el punto en que saltan las
chispas, como sugiere Bautista, del que se
pueden entresacar pensamientos en el documento.
El objetivo, o como dice el propio texto,
el «gran desafío de la Pastoral consiste en
la capacidad de ofrecer la experiencia de
sentido y de encuentro». Porque en nuestros
días, el sentido no se da por supuesto, como
podemos afirmar retomando a Duque. De
hecho, tiene plena vigencia el grito de Ricoeur en ese «Yo soy, pero lo que soy yo, ¿lo
soy yo? He aquí lo que ya no sé. En otras
palabras, (…) aquello que soy es tan problemático como es apodíctico que soy».
Surge entonces la necesidad de encarnar
la fe, no como un corpus doctrinal o transmisivo, sino como algo que baja a la propia
persona del destinatario (y del agente), «al
encuentro con uno mismo y con los demás»,
como dice el documento. Algo que requiere de un lenguaje, por tanto, ya que «la
experiencia de fe debe presentarse con
gestos, signos y símbolos significativos
para el joven». No estamos muy lejanos al
llamamiento que Evangelii Nuntiandi ya nos hacía al
decir que «la evangelización pierde mucho de su
fuerza y de su eficacia, si no toma en consideración
al pueblo concreto al que se dirige, si no utiliza su
horizonte
Marco pastoral
"lengua", sus signos y símbolos, si no responde a las
cuestiones que plantea, no llega a su vida concreta».
¿Qué mejor maestro podemos encontrar que en
Jesús, que adaptó su propia experiencia y usó las
parábolas como manera de anunciar el Reino y
transmitirnos que somos hijos de Dios (Mc 4, 33)? El
encuentro que en ella se mostraba entre Jesús y quienes escuchaban hablaba también del encuentro JesúsAbba (Mt 11, 27).
Por eso, es tan acertado que la experiencia del encuentro se convierta en este documento en un ámbito
preferencial para «hacer camino vital al lado de cada
persona». Con esto, volviendo a Pablo VI, el plano
relacional «conserva toda su validez e importancia
esa otra transmisión de persona a persona». Surge y
deja un espacio para el acompañamiento (un elemento importante y que Güenther presentó en la reunión
de Directores de Comunidad, aludiendo también a
Lola Arrieta y al propio papa Francisco en su nueva
exhortación Evangelii Gaudium) como una manera de
concretar un «modelo relacional donde se ofrezcan
modelos de referencia e identificación que ayuden a
interpretar las experiencias vividas y que ayuden a los
destinatarios a poner nombre a lo que va fluyendo por
su interior», como podemos leer.
Evangelio y nos hablan constantemente de evangelizar, que lo dejan intuir y que subyace a todo, sino en
la propia manera de redactarlo que corre el riesgo de
caer más en lo reflexivo, en el plano del pensamiento sobre la pedagogía y la catequesis, en hablar de la
fe recurriendo poco a los términos “Jesús” o a su
Palabra, que al fin de cuentas es elemento que ha de
dinamizarnos. Y que me hace pensar también a mí
en qué medida me fundamento en ella a la hora de
crecer, vivir y compartir lo que soy como persona y
cristiano.
A modo de conclusión, podemos terminar pensando en que este documento está en la perfecta clave de
nuestra dimensión de lasalianos, con una escuela como
campo de acción donde todos cabemos, donde se nos
invita más al «ser que al hacer», y donde cada uno
tiene posibilidad de «sentirse “enredado”» y de “enredar” a los otros. No cabe duda entonces de que nuestro
carisma, la escuela y la misión lasaliana es «de grandísima necesidad» (RC 14). Y particularmente lo siento
como invitación y llamada, en una apuesta que me
hace agente y destinatario de una manera de ser y estar. Un gran trabajo que parte de la vida y se dirige a lo
que ha de ser vida.

¿Qué puede faltar en el documento? Tal vez no
es tanto en las líneas en sí, que están preñadas de
horizonte
45
Marco pastoral
Para seguir pensando.
Algunos ecos al Documento Marco de
Evangelización ARLEP
Hno. Luis Miguel Sanz
omo la sana insistencia del coordinador
de la revista no tiene límites, en ocasiones logra convencernos y nos ponemos a
las teclas. Lo que ocurre es que opinar
sobre este tema… después de las diversas
presentaciones a diferentes niveles… puede sonar a
repetido y pretencioso. Solo nos salva aquello de que
son temas siempre abiertos…. y que uno recoge lo
que se ha reflexionado en algunos espacios y con
otros. Vamos a ello, intentando no hacer otro documento sobre el documento (que nos conocemos).
C
Vamos con diez alabanzas:
No es cuestión de jabón sino
de realismo: merece la pena valorar lo que tiene de positivo, aunque no sea uno exhaustivo ni me
extienda mucho en ello, pero hay
que reconocerlo. Creo que llego a
diez toques de agradecimiento:
Es un documento consensuado, fruto del trabajo de los diversos sectores y comisiones (1); se
ha redactado y se ha recibido con
una posición constructiva (2);
intuyo que nos hemos puesto en
una actitud de receptividad, de
tanteo del tanteo, de punto de
partida para el debate (3); creo también que el hecho
de reformular el pensamiento nos ha hecho recapacitar y caer en la cuenta de que estamos en tiempos de
búsqueda (4). Si tuviésemos que poner un rotulador
fosforito, marcaríamos cosas como destacar el giro
que supone personalizar la vida y la fe (5), resaltar el
tema del acompañamiento (6), volver el péndulo
hacia la catequesis de la experiencia (7), conectar con
las claves de la interioridad (8), repensar los caminos
de la fe y su pedagogía (9), y hacer un esfuerzo de
presentación a todos los sectores implicados (10).
Gracias a los que lo han liderado y nos lo proponen.
Seguro que tú mismo alargarías este capítulo de
aciertos y agradecimientos.
46
Estrujando un poco el tema: cuatro apuntes:
Creo que una de las claves de lo que está ocurriendo es que ha cambiado el destinatario mayoritario. Es evidente, pero es bueno caer en la cuenta de
que en buena parte nos ha hecho reaccionar, principalmente en el terreno de la metodología: ha sido una
opción arriesgada que nos ha hecho despertar, pero
hace algún tiempo que ya estamos con la pregunta del
“hacia dónde vamos con ello”: lo que en otras ocasiones hemos llamado el “marco”, el “proyecto”, la
cancha de juego. Es importante y es uno de los temas
del título: “para seguir pensando”.
Este párrafo a lo mejor es el
mismo que el anterior, pero por lo
menos hay que resaltarlo. Por
destacar la mirada al tipo medio de
la acción educativa / pastoral que
tenemos delante (nivel básico de
“convocatoria evangelizadora”),
quizá se nos despista el trabajo de
la maduración particularmente
cristiana (“iniciación sistemática”):
igual es lo contrario de lo que se
criticaba no hace tanto (dedicación
muy particular a unos, olvidando el
resto del rebaño). De nuevo se nos
va la pregunta hacia dónde vamos o
queremos llegar y hay algunos por ahí que dicen haber encontrado claves para hacerlo / simultanearlo /
especificarlo. ¿Nosotros?
Otro matiz más: hay un dicho que me parece que
acaba diciendo “que se nos va el niño con el cambio
de la mantilla”. Por resaltar el cambio, el péndulo
quizá dé la sensación de pendulazo, con el riesgo de
perder uno de los elementos de contraste: mira a ver a
qué te suena “de la trasmisión al contagio”, “de la
estructura a la persona” o lo de la caricatura en los
corrillos pastorales de “círculos y mariposas”. Como
si el contagio no sugiere pasar el testigo, como si las
personas no vivieran recorridos compartibles, o como
si las experiencias no tuviesen de siempre niveles de
horizonte
Marco pastoral
lectura. ¿Por resaltar el cambio no perdemos algo
por el camino? ¿Postura conservadora? No lo creo.
preparó el borrador un religioso y además hispanoamericano).
Y cuarta vuelta de rosca: creo que el enfoque “actual” tiene algunas claves para conectar con el hecho
religioso de la persona, quizá más vinculado al mundo interior y sensible, que no será mal apoyo: démoslo por bueno aunque igual es ampliable; contemos
con las edades y los contextos. Pero con frecuencia
nos preguntamos si “de lo religioso se pasa con normalidad a lo cristiano”. Para lo primero, hablaríamos
de “descubrimiento” de lo espiritual; para lo segundo
–lo cristiano–, a mí me suena a “opción”, y no podemos olvidar la finalidad de nuestro objetivo “evangelizador” y no solo “religiosador” (como siempre,
liando las palabras: perdón). Sé que hay una teología
detrás, pero me hace pensar. ¿A ti también?
Y la otra cita, para seguir dándole, es del Directorio General de la Catequesis (¡otro joooo! De 1997,
actualización del de 1971, manteniendo las claves
principales). El número –entre otros, claro– es el 49.
Habla del proceso evangelizador y sus etapas o momentos esenciales: no sonará a nuevo, pero igual sí
nos ayuda a colocar piezas y sentidos. El número
anterior (48), nos conectaría de nuevo con eso de…
la evangelización.
Y ya… dos referencias, por si valen:
Mira de nuevo el título: es… “evangelización”, que
acaba de salir otra vez con lo de los palabros. Pregunta
para el examen: ¿Qué es evangelización? ¿Qué se
deduce del texto? Según diseñemos el coche, así planificaremos las piezas. Párate a pensarlo, e incluso igual
te pica el gusanillo de volver a leer el texto y dar con
ello. A mí me sigue gustando Evangelii Nuntiandi
(¡jóooo!, Pablo VI, 1975. N.º 24. Curiosamente,
horizonte
Y este asunto se acabó en un suspiro:
Estos parrafillos son una invitación a continuar en
la brecha. Alguien dijo acertadamente que si es un
elemento configurador, tiene que cambiar hasta la
pedagogía (sobra el “hasta”). Si estiramos este argumento, afecta, pues, a la labor educativa del cada día
en una obra La Salle, pero añadamos: tendrá que
afectar a los agentes, y no me refiero sólo a los cursillos. Algo me dice que también, junto y con otros
agentes, igual tenemos que reajustar nuestro perfil de
hermanos en clave educativo-pastoral, “en estos
tiempos de restructuración ‒evangelizadora‒”. Amén.

47
Marco pastoral
Seamos positivos y reconozcamos
alguna de nuestras especialidades,
que no viene mal
Hno. Rafa Palomera
icen los psicólogos que es necesario
reconocerse a uno mismo en las cosas
que mejor se le dan (y, por supuesto, en
aquellas en las que puede ser mediocre
o del montón). Tal vez algunas personas
me acusen de temerario al pronunciar la siguiente
afirmación, pero creo que es necesario que nos reconozcamos, desde la tradición, la historia pasada y el
análisis del presente, especialistas y “buenos” en
algo: en acompañar, entendido como una dimensión
plenamente PASTORAL, con todas sus letras y todas
ellas mayúsculas.
D
Si tuviéramos un departamento de márketing,
mercadotecnia, comunicación, promoción o como
queramos bautizarlo (que, dicho de rondón, tal vez no
estaría mal planteárselo, pero esto sería para otra
disertación), que estudiara nuestra realidad de cara a
desarrollar una estrategia de imagen corporativa, tal
vez nos sugiriera situar en nuestras fachadas, debajo
de nuestros logos con estrella, el lema te acompañamos.
hasta la fecha) ha pasado, pasa y esperemos, creo, que
siga pasando por una fuerte vocación evangelizadora,
catequética y de propuesta de fe.
Si analizamos el tiempo a lo que nos dedicamos
en el día a día, las miles de horas que todos sumamos
al cabo de una semana, de un mes o, no digamos, de
un curso, muchas de ellas las depositaríamos en un
platillo bajo la denominación actividades pastorales,
sin entrar, por supuesto, en conflicto ni caer en detrimento de la actividad educativa, la meramente pedagógica, la organizativa (porque las fronteras nunca
van a ser rígidas sino que, afortunadamente, son claramente permeables).
Así que estaría claro que debiéramos creernos, sí,
creérnoslo y elogiarnos unos a otros, destacarlo y, por
supuesto, promocionarnos en aquello que somos
buenos, extraordinarios, de los mejores. Nuestro
“producto” (que me perdonen los más incrédulos y
que no se enfade nadie conmigo), uno de nuestros
enganches puede ser la gran oferta pastoral que podemos presentar en el “mercado”.
Después de esta aventurada idea, que puede provocar que alguno se me estrese pensando en complicaciones (o futilidades), voy a intentar poner orden a
esta presentación (y desarrollar el nudo de la cuestión).
Tal vez alguno quiera convenir conmigo en que la
tradición histórica de nuestra institución (singularmente desde los últimos treinta años, cuando se le asigna
un espacio relevante al concepto pastoral que dio
forma a muchas acciones que ya se realizaban con
anterioridad y que ha unificado muchas propuestas
48
Claro, por supuesto que, si pensamos con los pies
en la tierra, vemos que muchas familias no nos van a
buscar a nosotros para depositar su confianza en la
labor educativa pensando especialmente en esta propuesta como primer motivo (y, tal vez, tampoco como cuarto). Pero a nosotros, a los de casa, educadores, Asociados, Hermanos, sí que nos puede dar que
pensar. Y mucho.
Porque darse cuenta de aquello que se nos da bien,
de ver qué es lo que nos diferencia (no por verlo con
ansia de competición sino como una especialidad,
horizonte
Marco pastoral
algo que fuimos cogiendo con gusto y en lo que hemos ido profundizando), nos vocaciona y nos destaca, nos puede dar pie a cultivarlo, cuidarlo, mejorarlo, desarrollarlo y distinguirlo como una auténtica
seña de identidad (y vuelvo a permitirme hablar en
clave institucional y, por supuesto, individual).
Ojalá, claro está, fuera siempre así y nos reconociéramos todos como agentes inspiradores en el campo pastoral. Porque, en algunas recientes reuniones o
en otras más lejanas, no deja siempre de decirse, recordarse y reconocerse que un objetivo así nos obliga
a reciclar y atender esa dimensión. ¡Ojo! No solo a
nivel institucional o de centro… también a nivel personal, individual. En un escalafón hondo, interno,
profundo.
A raíz de la presentación por claustros y comunidades del Plan de Pastoral del Distrito nos han podido surgir preguntas, inquietudes (ojalá) y esperanzas
y luces. Y esperemos que, además, en los diversos
diálogos ocasionales y premeditados se hayan compartido muchas y buenas intuiciones.
Y por ahí voy a morder el anzuelo y quiero compartir este aliciente. Solemos utilizar, en estos tiempos, la expresión “nos encontramos en época de cambio”. Y la crisis, además, también ha llegado a los
espacios (despachos, departamentos, locales) de Pastoral. No solo porque detectemos una cierta crisis de fe
(discutible y suficiente para redactar otro opúsculo
diferente) sino porque vemos necesaria la renovación
de lenguajes, la adaptación de símbolos o, incluso, en
algunos casos, desandar algo de lo andado, porque
nadie nos sigue y hay que salir, de nuevo, a buscar a
nuestros destinatarios.
Y esta es una de las claves a las que estaba
deseando llegar. Y, me temo, refocilarme en ella, No
soy nada novedoso ni merezco ninguna piruleta de
regalo por sentir, optar y haber experimentado la
impresión y necesidad de cómo mucha de nuestra
labor inspiradora pasa, apunta, empieza –casi– por las
salas de profesores, por muchos de nuestros agentes y
educadores.
Fruto de alguna que otra oportunidad reciente, uno
va apreciando cómo una buena parte de nuestra (mi)
labor tiene como fundamento hacer una parte del
camino diario con otros educadores, cumplir con ese
hipotético eslogan del acompañar que citábamos al
principio. Por supuesto que ya no estoy únicamente
hablando de un acompañar como hermano mayor de
nuestros alumnos; tampoco pretendo erigirme en
horizonte
maestro espiritual eminentemente dignificado que
acompaña tiernamente a los discípulos y a los discípulos de los discípulos. No, por supuesto que no. Si
todos vamos haciendo nuestro camino, el de cada
mañana, el de cada día, en nuestro proceso de fe, de
enriquecimiento personal, de descubrir, incluso,
nuestra propia vocación y nuestro ser agentes y educadores en la fe, también podemos nacer a esa vocación de autoacompañamiento de aquellos con quienes
realizamos largas caminatas cada día de la semana y
recorremos etapas y metafóricos kilómetros por cada
uno de nuestros lugares de vida y misión.
Y, por supuesto, que a esta acción, a esta misión, a
este envío a hacer compañía y ser compañeros, a
acompañar con y descubrir juntos, le podemos y debemos llamar pastoral vocacional. Otra meta volante
de este conjunto de pinceladas escritas.
Muchas horas del día de ese hipotético programa
de renovación de la imagen institucional se utilizarían
en generar y, realmente, compartir impactos vocacionales. No sé si alguno más de los que vayan a leer este
pequeño artículo convendrá conmigo (o rechazará mi
postura) en cómo, en ocasiones, se intuye un amplio
campo de labranza por delante: el de la vocación, la
propia y la del compañero. Sí, me estoy refiriendo a
caminar juntos y de la mano por los derroteros de
afianzar la vocación de cada uno y la del amigo en este
viaje, el educador con el que transitas. Es decir, también somos agentes y enviados a asistir (atención,
matizando muy claramente en las acepciones de
acompañar, servir, atender, favorecer o cuidar, no
únicamente de hacerse presente) al parto de la vocación (tampoco tengo reparo en incorporar el siguiente
calificativo) lasaliana, educadora, de agente pastoral
de nuestro compañero de mesa (e, insisto, en la propia).
No siempre estar al cuidado de los chavales, no
digo nada nuevo, significa que uno ya haya despertado a la vocación del educador. Por experiencias personales, por olfato educativo, por tradición familiar,
por entorno o por habilidades personales, todos tenemos etapas por recorrer en esta bella labor de educar, de acompañar, de ‘pastorear’. Y, por tanto, todos
nos vamos necesitando de los otros para transmitirnos, contagiarnos o descubrir juntos recónditos e
insospechados lugares inusuales e inéditos para nuestras almas, para nuestras vocaciones y que, una vez
descubiertos y quedarnos absortos ante ellos, querremos compartir con los que nos encontramos cuando,
corriendo, volvamos gritando con gestos y acciones
49
Marco pastoral
por pasillos, aulas y (me repito) salas de profesores,
para contar lo que hemos descubierto. Ojalá sea
siempre así de real esta metáfora.
En el noviciado, tiempo de barbecho, abonado y
fecundización, se despertó el sentido de admiración
hacia el concepto y significado del estar lasaliano.
Hoy, algo de tiempo después, fuera de esa juventud
que insisto en repetir al que me quiere oír, se podría
reconocer la amalgama que forma aquel concepto con
el de ser acompañante. Es todo un universo que, hasta
donde llega la experiencia personal, plenifica, da
sentido e, incluso, estructura y perfuma la vocación y
la relación con Dios y la comprensión del mensaje
del envío.
De forma que gastar tiempo con menores y mayores, con algún que otro joven y adolescente y, también, con los adultos que viajan en el mismo tren, es
parte (para mí) de la concreción real de ese plan y del
modelo de la mariposa que me dejó boquiabierto la
primera vez que lo vi por cómo cuadraba en él algunas de estas perspectivas que he escrito. Es, escribía
hace años en algunas de esas cartas de renovación de
votos que algunos tienen la obligación –o desgracia–
de tener que leer, el pasar tiempo con los chavales
comiéndose el bocadillo en el paseo del río de Bujedo
y es tomarse cafés con los profesores. Es hacer vínculo afectivo con unos y otros, es darse cuenta de lo que
nos une, es dar valor al otro y al Otro (esto no es mío)
y es ser canal de llegada y oferente de propuestas o
reconocedor de posibilidades allá cuando surge la
oportunidad. Por supuesto, que muchas veces buscaremos aumentar esas posibles oportunidades aumentando el número de encuentros. En teoría química,
aumentando el número de choques crecerá la energía
de la reacción y subiremos la temperatura interior. O
algo así.
50
Traduciéndolo un poco más al lenguaje de este nivel terrenal: muchas de esas oportunidades y acciones
que vamos animando, apoyando, acompañando, inspirando (o promocionando desde segunda línea a los
agentes que trabajan a pie de trinchera) esas acciones
que ahora diseñamos en el paraguas que abarca todo
y que denominamos Salle Joven vamos a seguir favoreciendo esas experiencias pastorales, de crecimiento
en fe, de descubrimiento y propuesta… y de Encuentro con mayúscula.
Recientemente, en alguna reunión, se hablaba, incluso, del papel facilitador de experiencias, del que va
invitando a hacer recorrido a otros y ofreciéndose como compañero; es, por supuesto, dar valor al interlocutor y reflexionar juntos por qué sendas caminar y
qué experiencias elegir. Es… estar ahí para lo que
pueda surgir, no sólo para cuándo te llamen… porque… ¿alguien tiene los horarios de paso del Espíritu?
Claro, cierto y voy terminando. Esta vocación de
acompañar (algunos también pueden denominarla,
positivamente, de perder el tiempo con alguien, casi
como unos enamorados no miran el reloj mientras
pasean) no siempre es fácil entre whatsapp, chismes,
prisas, horarios, tensiones, lo urgente, inmediato,
gestiones, papeles, reuniones, obligaciones, quehaceres y tantos otros peros… y como estamos vendiendo
un “producto”, no me voy a meter con los defectos,
para que no se nos desanimen los agentes pastorales
del departamento comercial. No por ahora…
Por lo tanto, por cada agente de pastoral nuevo
que traigas a este club, rememorando alguna que otra
asociación de lectores, habrá mayor vida interior para
los dos… ¿no te engancha la propuesta?

horizonte
Marco pastoral
¿Nos ponemos manos a la obra?
Qué puedo hacer yo en la “nueva” pastoral
Hno. Jorge A. Sierra
lo largo del primer trimestre de este
curso hemos tenido la suerte de que nos
presenten el “nuevo” Documento marco
de evangelización de La Salle – ARLEP
en los claustros o encuentros de zona.
Creo que ha sido un acierto, porque en esto de la
pastoral, entendida como el conjunto de acciones y
dinamismos para construir el Reino de Dios, estamos
todos implicados. Y con “todos” me refiero a todos
los lasalianos, desde los Hermanos más veteranos
hasta el último educador de nuestro colegio. En este
artículo tengo el atrevimiento de proponer algunas de
las ideas que me surgen para “ponernos manos a la
obra” cuanto antes en esto de la pastoral, ya que no
podemos perder más el tiempo (y, por ende, personas). Fijaos también que digo que es “nueva” entre
comillas, porque la pastoral que emana del evangelio
es siempre antigua y novedosa: lo único que necesitamos es seguir descubriendo cómo podemos vivir
con los jóvenes el mensaje de Jesús en su cultura y
lenguaje, que será lo que habrá que adaptar incesantemente.
A
Quizás lo primero que podríamos recordar del
“marco” es que es precisamente eso: apenas unas
líneas‒fuerza imprescindibles e imperfectas, pero
útiles para avanzar. Es decir, es un “recuadro” que no
marca límites, sino acentos y subrayados, que hay
que rellenar. Además, no surge de la nada: todos los
agentes de pastoral, en todos los ámbitos, andamos
rompiéndonos la cabeza intentando llegar a los jóvenes y proponerles el tesoro que hemos descubierto, la
horizonte
aventura de Jesús de Nazaret. Así que, ¿primera tarea? Conocer esas líneas de pastoral para el futuro y
el presente y hacerlas propias, sin prejuicios ni recelos, sin pensar que todo lo hecho antes no ha servido
para nada.
En el Documento marco se repite en muchas ocasiones la clave del acompañamiento. Seguro que
algún lector acaba de pensar: ¡otra vez con lo mismo!
O, incluso, ¡estos jóvenes! Sin duda, hay muchos
malos entendidos con este término, que a no pocos
les suena a las temidas advertencias de defectos o
entrevistas con tal director, con el miedo a tener que
hacer las maletas. Pues nada de eso. Del acompañamiento personal, que algunos hemos descubierto
como un valor fundamental, se puede hablar largo y
tendido; pero en pastoral con jóvenes, personalmente
traduzco acompañamiento como estar. Sí, pastoral de
la presencia, del patio, del pasillo, del hacerte el encontradizo para poder tener una palabra amable, de
gastar una broma al chaval que en clase es un cafre,
de ganarte una sana autoridad moral como adulto
porque “siempre estás ahí” o de conseguir que se
confíe a ti, porque eres digno de confianza y no buscas más que ayudar, sin creerte el salvador de nadie.
Claro que, para ello, valga la redundancia, hay
que estar. Los animadores de grupos o de SalleJoven
con frecuencia nos las vemos y nos las deseamos para
llevar a cabo decenas de actividades, y nos vendría
genial que otros compañeros de camino, también el
Hermano jubilado y jubiloso de la comunidad, fuera a
tal salida, estuviera con los chavales y educadores en
el bus, hiciera de apoyo mientras se prepara un desayuno o una velada… Vamos, cosas muy sencillas que
sólo implican salir de los muros de la falsa seguridad
de las casas y, sin más objetivo, sin “preocupaciones”, estar. Seguro que los Hermanos que tan amablemente nos hacen el servicio en las colonias de
Bujedo de repartir y cuidar los juegos mientras los
animadores preparamos la tarde, podrían hablar mucho más de este estar… Y los propios chavales, sin
duda.
¿Nos parece muy difícil la segunda tarea? Seguro
que no. Pues bien, la tercera va en consonancia.
51
Marco pastoral
Hemos tenido el acierto de apostar, firmemente y
como institución, por educar la interioridad, con el
famoso proyecto HARA, que excede ampliamente
cualquier discurso. Mi experiencia es que es algo
difícil de explicar (como la experiencia de Dios), de
vivencia eminentemente personal y, a la vez, grupal
(vaya, como la experiencia de Dios) y que exige,
frente al “eso son paparruchas y moderneces… me
voy a poner yo a respirar a mis años” un simple “pues
ven y verás” (adivina: como la experiencia de Dios).
Seguro que en mi colegio o comunidad he tenido o
tengo la oportunidad de asomarme a esto del HARA.
Y si no, aprovecha que en cada lugar hay gente formada y no lo dudes… Porque, en mi opinión, en este
ámbito es especialmente importante la figura del
lasaliano como creyente.
Y esto es a causa de que, aunque HARA se parezca a la experiencia de Dios, no es, necesariamente,
una experiencia de fe. Aunque en el Documento marco no se dice expresamente, me parece leer entre
52
líneas que falta, en nuestros procesos experienciales,
posibilitar el “salto” a la opción de fe desde la plataforma en que cada uno tenga una experiencia significativa. ¿Cuántos de los que hemos tenido la suerte
de estar en proyectos misioneros de veranos hemos
contemplado un cambio profundo en nosotros mismos y nuestros compañeros, como consecuencia de la
cercanía con el Tercer Mundo? ¿Cuántos hemos disfrutado al ver cómo esa experiencia abre a las personas a una presencia de Dios mucho más real y coherente? Pues ahora imagínate que la experiencia que
sirve de trampolín para el salto es plenamente interior
y de “en mí y más allá de mí”… ¿Se quedará en un
simple buen recuerdo porque nadie ha acompañado a
la persona y le ha ayudado a traducir el “más interior
de mí mismo” por “Dios”? Aquí podemos echar una
mano todos los que nos hemos cautivado por la alegría de la fe y, encima, salir enriquecidos.
Con tres tareas quizás sea suficiente por ahora.
Porque el resto, los “gestos y testimonio”, el “modelo
relacional”, la “confianza básica” y las sanas flexibilidad y tolerancia de las que habla el Documento
marco se pueden dar por añadidura al, permitidme ser
pesado, estar. Yo me lo tomo como una gran responsabilidad: el Evangelio no puede llegar hasta mí y
dejarlo morir. Ojalá en esta tarea estemos juntos muchos Hermanos con su presencia silenciosa pero significativa, muchos lasalianos en torno a una mesa de
trabajo y todos los que hacemos familia La Salle
transformando, poco a poco, la escuela en “casa de la
experiencia… de Dios”.

horizonte
Marco pastoral
Una perla del collar
Hno. José Carlos G. Moreno
erminamos el curso 2012/13 en el Colegio
La Salle de Valladolid con una Eucaristía
para dar gracias a Dios por cuantos beneficios hemos recibido a lo largo del año.
Los profesores que prepararon la Celebración, coordinados por Carlos Castro y Arancha, tuvieron la buena idea de hacernos pensar en la perla
encontrada, recibida, durante el curso. Para simbolizarlo nos repartieron unas pelotitas blancas de corcho
sintético que en cierto momento fuimos atravesando
con un hilo que unía todas formando el gran collar
constituido por el Claustro.
T
Esta experiencia me hizo pensar en la cantidad de
perlas que recibimos, que nos regalan, aunque en
ocasiones pasen desapercibidas para nosotros. Es
aquello que nos cuenta el biógrafo de Juan Bautista
de La Salle: “casi sin percibirlo el Señor me fue conduciendo de compromiso en compromiso”.
Así veo yo, desde la perspectiva de hoy, enero de
2014, la Pastoral en el Sector y ahora Distrito, como
una perla de gran valor, que ha ido creciendo y acomodándose a las necesidades y demandas.
quizás es algo propio de la condición humana que no
podamos en ocasiones correr más: lo importante es
no perder el ritmo.
En un principio se comenzó con una Pastoral General, base para que se pudiera dar una Pastoral Vocacional, ya que entonces ambos aspectos funcionaban divergentemente. El primer paso significativo, a
mi parecer, fue el introducir la pastoral vocacional
dentro del esquema de la pastoral general, algo que
parece simple pero que no fue tan sencillo porque las
mentalidades aún no estaban preparadas.
Un segundo momento fue el hacer que el Equipo
de Pastoral y los responsables más directos del campo pedagógico constituyeran un solo Equipo, aunque
los campos aún no se fundieran. Ha sido posterior la
creación de un Equipo Animador del Distrito y más
tarde del Sector, que atendía la acción educativapastoral o pastoral-educativa. Algo que vislumbrábamos y que ahora se ha puesto en práctica con criterios mucho más integradores y unificadores, superando dicotomías. Las estructuras de “campos”, de
“círculos” quedan superadas para hablar de EVANGELIZACIÓN. Lo cual no significa que el esquema de
Coudreau fuera malo, o que hablar de la Etapa Misionera no haya tenido o tenga su sentido.
El nuevo Plan de Pastoral, “documento marco de
evangelización”, a mi parecer, logra la unificación
deseada y se centra de una manera nueva en la persona como sujeto social que vive con otros compañeros
de camino. Solo desde la vivencia puede hacerse
presente la realidad del Reino ya aquí, que es el fin al
que estamos llamados. Quizás nos ha sobrado racionalidad y faltado experiencia, vivencia.
Comenzamos con unas líneas nuevas, centradas
en el “proceso catecumenal”, a principios de los 80.
Han pasado 33 años, con lo que eso significa, en un
mundo tan cambiante, de velocidades supersónicas,
de galaxias infinitas… y la Pastoral ha seguido dando
pasos, en ocasiones más lentos que la vida misma;
horizonte
Estoy de acuerdo en afirmar que: “El gran desafío
de la Pastoral consiste en la capacidad de ofrecer la
experiencia de sentido y de encuentro. El reto está en
proponerla como método, camino para llegar a un
fin”. El Hno. Antonio Botana insistía mucho en algo
que a mí siempre me ha parecido muy importante:
“el método, en este caso, es ya contenido”.
Es claro que en la Pastoral actual los gestos y el
testimonio tienen que primar sobre el discurso y la
palabra; algo vislumbraba ya Pablo VI en la Evangelii nuntiandi cuando nos decía que se tenía necesidad
de testigos, más que de elocuencias.
53
Marco pastoral
Otro elemento que veo interesante e importante en
este “marco de evangelización”, es la preocupación
por educar en el silencio, la escucha. El Proyecto
HARA me parece, a este respecto, que es un “instrumento” adecuado a la par que eficaz para ayudar a
encontrarse con uno mismo y desde ahí toparse con
los demás y lo trascendente. Desde los estudios de
teología, Tillich me cautivo con su “A Dios se le
encuentra en el fondo de uno mismo”.
El contar con que “la experiencia de las personas
se encuadra en determinados ejes culturales y personales”, me parece también un acierto. Lo que supone
un lenguaje apropiado. La pastoral siempre ha tenido
el problema de adaptación de los lenguajes para que
haya comunicación comprensiva y real, que en este
caso, se indica, debe partir desde los jóvenes. “El
lenguaje debe ser comprensible por los jóvenes; y
por otra parte, un tipo de aprendizaje cuyos protagonistas sean las personas que aprenden”.
Por fin señalo que me parece significativo y de
gran acierto hablar del “acompañamiento” y tratar el
tema con la importancia que merece.
finalmente, como personas que cautivan por su sencillez y bondad, creo que podemos añadir el Plan Pastoral del ARLEP o, dicho de manera más adecuada,
el Documento marco de evangelización. La Salle –
ARLEP.
Termino con unas frases del apartado: “A modo
de conclusión”. “El destinatario de nuestras obras
educativas necesita sentirse `enredado´ por una serie
de experiencias vitales que le conduzcan a una interconexión de sentido, y le permitan unificar vitalmente
su proceso de maduración personal”. Creo que no
partimos de cero: solo hay que recorrer los pasillos de
nuestros centros para percibir que estamos en ello. A
los “agoreros” de los que habla el Hno. Jesús Miguel
en su última circular, les digo que el collar tiene unas
perlas preciosas; solo hay que acercarse a ellas y
saber apreciarlas.
A los relatores y redactores de este documento
marco de evangelización, mi felicitación. A mi parecer es, quizás, el documento más logrado que ha salido de nuestro entorno. Estamos de enhorabuena.

Además de perlas como el Papa Francisco, como
algunas comunidades que rebosan fraternidad y,
54
horizonte
Verano
activo
horizonte
Reflexión
Un verano pastoral
Nano Pardo
U
n mes de julio más se dieron cita en
Bujedo un gran número de chicos y
chicas que venían a disfrutar de unos
días de encuentro, alegría, fiesta, oración y celebración. Y un montón de
cosas más.
Del 5 al 14 de julio celebramos la colonia de sexto
de Primaria. “Los piratas” vuelve a ser un buen
reclamo para convocar a más de 140 chicos y chicas
de todo nuestro Sector a vivir unos días en los que
vamos descubriendo cómo en la tripulación pirata los
valores de la cercanía, el esfuerzo, la gratuidad y la
fraternidad, y de vez en cuando mirar al horizonte y
contemplar el regalo de la serenidad que Dios nos
ofrece, son indispensables para una buena travesía.
Este año tocó comandar esta tripulación a los Hnos.
Josemi Fernández Arizmendi y Germán Bolado. Estos dos capitanes supieron llevar a buen puerto a esta
singladura, coordinando y animando a unos aprendices de tripulantes que fueron 28 animadores, la mayoría muy jóvenes, que supieron estar a la altura de
las circunstancias, aunque en algún momento debido
al cansancio de la marcha de los días, hizo que los
comandantes en jefe, les tuvieran que animar y recordar sutilmente sus funciones en la nave.
Del 14 al 23 de julio llegaron a Bujedo otro grupo
de chicos y chicas de primero de la ESO, dispuestos
a vivir una gran aventura. La Gran Aventura del Señor de Los Anillos. Bujedo se convierte en esas fechas en “La Comarca” y allí los 140 aventureros y
aventureras viven en la “Tierra Media”. El Hno. Jorge Sierra y Fito Hernández, acompañados de otros 26
animadores, en este caso un poco más avezados, están siempre dispuestos a poner a estos jovenzuelos en
situaciones apasionantes para disfrutar de estos días e
ir desafiando las distintas situaciones que la aventura
les depara.
En esas mismas fechas se celebró, simultáneamente a la colonia de 1.º de la ESO, el campamento
con los chicos y chicas de segundo de la ESO. Este
año había algo especial, el número de personas que
habían solicitado acudir: 91. Todo un reto para el
grupo de 10 animadores y animadoras, en este caso
capitaneados por Esteban Rodríguez y el Hno. Rafa
Palomera. Después de la experiencia vivida, podemos
decir que el reto fue superado de manera muy satisfactoria. Los muchachos disfrutaron de los días y
pudieron vivir la Ciudad de la Utopía como una auténtica experiencia de construcción de su propia ciudad en el campamento. Hay que resaltar en esta
horizonte
57
Verano activo
ocasión alguna anécdota que, gracias a Dios, no causó ninguna desgracia y que por eso, será recordada
como experiencia. El día que las más de 100 personas
se desplazaban de Bujedo a Fontecha, donde se celebra el campamento, una fuerte tormenta fue compañera de viaje. Cerca de Ayuelas cayó en el pueblo un
rayo a escasos metros de donde se encontraban todos.
El susto y el olor a quemado no se borrarán de las
memorias de estos chicos y chicas y, sobre todo, de
los coordinadores y animadores del campamento.
Pero así quedó. Solo en un susto.
También en Bujedo se dieron cita los chicos de
tercero de la ESO y de cuarto de la ESO con sus
respectivos encuentros del Caballero de la Armadura
Oxidada y el Grupo respectivamente. Grandes adolescentes que supieron encontrarse, celebrar, y reflexionar sobre su vida y sobre la experiencia que están
viviendo de grupo cristiano. Los que tuvimos la suerte de coordinar estos dos encuentros les agradecemos
su vidas como la de un buen grupo de animadores
que a lo largo del curso acompañan sus caminos y
que en verano quieren seguir haciéndose presente en
Bujedo para seguir sintiéndose cercanos y compañeros de viaje.
Y no podemos terminar esta crónica de lo que fue
la actividad pastoral en el mes de julio pasado, sin
hacer referencia al segundo encuentro que celebramos en Roma con los chicos y chicas de primero de
Bachillerato y a los campos de trabajo celebrados
con los grupos de segundo de bachillerato y universitarios.
Romaexperience2 como así quiere llamarse el encuentro que Diego Fernández Requejo y el Hno. Juan
González Castromil coordinan desde el curso pasado,
supuso toda una experiencia para los 50 chicos y
chicas que se dieron cita en la Ciudad Eterna. En esta
ocasión, como el año anterior, estuvieron hospedados
(polideportivo, suelo, saco y esterilla) en el colegio
San Pío IX que gentilmente nos ofrece todas las facilidades para poder prever la infraestructura logística
para este encuentro. Roma ofreció la posibilidad, con
sus monumentos y con su rica historia, de hacer un
recorrido también histórico por todas las experiencias
vitales que se van desarrollando en lo cotidiano de la
vida de estos jóvenes. La experiencia de fe también
es contrastada y vivida en estos días de encuentro.
Los campos de trabajo celebrados en el barrio
Girón, coordinado por el Hno. Roberto Hierro, donde
vivieron en la comunidad pastoral jóvenes de La
Salle Valladolid, Palencia, Gijón y Lourdes; El campo de trabajo celebrado en Basida donde grupos de
Palencia y Santiago pudieron compartir unos días y
hacer visible el Reino y la fraternidad cristiana con
aquella comunidad tan acogedora de Aranjuez; el
campo de trabajo en la casa de acogida de Cáritas en
Villagarcía de Arosa, donde grupos de Santiago fueron conscientes de la realidad del mundo que nos
rodea, y toda la realidad pastoral que se celebra también en Portugal durante los meses de verano, pueden
poner fin a esta crónica llena de vida y experiencia
que un año más el sector de Valladolid ofrece en
verano a los que habitualmente participan de nuestras
ofertas evangelizadora en nuestras obras educativas.

58
horizonte
Verano activo
Entre gente pequeña.
De Loja a Girón y viceversa
Hno. Roberto Hierro
O
s cuento la experiencia de este verano en
dos sitios muy distintos, pero que tiene mucho en común. En esta época de las redes
sociales, pudiera decir que algo tienen en común y
ojalá nos invitara a todos a seguir descubriendo qué
es lo que nos une: “impresionados por la situación
de los hijos de los artesanos y de los pobres”.
Tuve la oportunidad este verano de pasar 15 días
en el Hogar de San Ramón y San Félix en la localidad de Loja (Granada), un recurso para niños y jóvenes en situación de exclusión y tutelados por la Junta
de Andalucía, en este caso. En él conviven niños y
jóvenes desde 5 años hasta 17. Muchas son las causas
que les llevan a estar ahí. La mayoría de ellas no
tienen que ver solo con los niños sino con sus familias, por falta de recursos o problemas; o, en otros
casos, porque son menores inmigrantes cuya tutela
pertenece a los poderes públicos hasta que cumplan
la mayoría de edad.
Mucha diversidad de años, de problemática, de
cultura, de razones... pero una misma familia. Creo
esa es la palabra que mejor define el Hogar, ya que
todos los que allí viven se ayudan a vivir como personas y aprenden unos de otros a ser mejores.
Mi vivencia allí fue emocionalmente muy intensa.
En primer lugar, te sientes como uno más de la familia, con la responsabilidad de educar, porque es el
horizonte
papel que te toca, pero con la suerte de poder compartir el día a día y las 24 horas con los niños y jóvenes del Hogar. Hacer muchas veces de padre y madre, de compañero, de amigo, de educador, no es
nada fácil, pero los chavales lo demandan constantemente. El ritmo de verano era algo más sosegado,
aunque teníamos nuestras dos horas diarias de trabajo
y apoyo escolar, en las que había que ingeniárselas
para motivar a los chicos y hacerles responsables de
sus trabajos. Pero el día a día te presenta muchas
situaciones en las que tienes que estar dispuesto a
dejarte moldear. Eran los momentos de juego en la
piscina, en el comedor, con la play, en el patio, donde
ibas conociendo más a los chicos y te ibas haciendo a
su momento, porque cada uno tiene su momento que
hay que saber entender y respetar. Se trata de crear
vínculo, una actitud esencial para todo aquel que
quiere luego educar con algo más que los simples
límites o roles. El educador-acompañante tiene que
tener mucho de esto, de padre y madre a la vez, de
poner límites y de saber llegar a cada uno, de estar a
las duras y a las maduras, de compartir lo bueno y
alegrarse y de ser capaz de acompañar el duelo y la
falta de sentido…
Todo ello en medio de situaciones muy difíciles,
cuando ves lo que hay detrás de cada uno de estos
chavales. Han vivido en su corta edad situaciones tan
duras que muchas veces parece un milagro que sigan
adelante, pero ahí están dispuestos a avanzar con su
59
Verano activo
vida, y nosotros con la responsabilidad de saber tocar
el cable que les hará volver de nuevo a funcionar.
Maravillosa y delicada tarea.
Así transcurrieron mis días. Entre despertar a los
chicos, acompañarlos en sus estudios, disfrutando
con ellos de los ratos de ocio, compartiendo con los
educadores, siendo en todo momento un “hermano”,
en las comidas, en el ocio, en el estudio, a la hora de
acostarlos (momento entrañable sobre todo con los
pequeños), dialogando en comunidad, descansando y
programando juntos, estando al servicio de, disfrutando de esta vocación de ser educadores a tiempo
completo, compartiendo los sueños con otros y haciendo realidad lo que dice La Salle: “Somos pobres
hermanos, poco conocidos. Sólo los pobres vienen a
buscarnos”. Ellos, los chicos, vienen a nosotros muchas veces obligados, pero esperan de mí algo más
que les pueda devolver la ilusión y la lucha por vivir.
Así que fue una suerte poder hacer de educador de
calle por unos días, recorriendo algunas de las casas
de nuestros chicos para invitarles a participar en algunas actividades de ocio que habíamos preparado
para ellos. Allí se nos iban sumando otros chavales
del barrio, que se animaban a participar. Algo se me
parecía a mí a eso de la parábola de salir a los caminos e invitar a todos los que quieran venir a la fiesta.
Un poco de evangelio es lo que estábamos viviendo y
haciendo realidad.
Si bien es verdad que no todas las actividades nos
salieron como esperábamos, fueron momentos de gran
alegría el ver cómo los jóvenes del barrio compartían
con los voluntarios de tú a tú, se esfumaban los prejuicios y nos íbamos convirtiendo en una familia por
unos días. Muestra de ello fue que alguno de nuestros
chicos gitanos se quedó a compartir con nosotros la
oración y la cena, participando como uno más. De
nuevo, lo del Reino, el banquete de bodas donde habrá
sitio para todos y nadie quedará excluido.
Para todos los que compartimos esos días, fueron
momentos muy vivenciales y profundos. Ver cómo
otros jóvenes salen de su casa y se abren a otra realidad tan distinta, y se interrogan y se ponen en el lugar
de los otros y se quejan por tanta injusticia real y falta
de oportunidades. Y experimentar cómo otros niños y
jóvenes que otras veces llamamos excluidos, salen de
su rol y se ponen a participar como uno más y nos
enseñan lo bueno que hay en su corazón, y nos sorprenden con la naturalidad y amistad que desprenden
con otros.
Y cuando me quise dar cuenta, se me habían pasado los días y me tocaba regresar a mi realidad cotidiana, a Girón, dónde me esperaban también otros
niños y jóvenes. En este caso, con un grupo de jóvenes voluntarios de nuestros coles, nos pusimos manos
a la obra para hacer de estos días unos días significativos para estos chicos que no tienen la suerte de salir
de vacaciones ni de disfrutar de otras cosas.
60
En fin, un verano lleno de experiencias entre los
jóvenes, un verano lleno de redes y conexiones y,
sobre todo, un verano al servicio de aquellos que más
dificultades tienen, pero que te enseñan que la vida es
para compartirla y para arriesgarte a vivirla en profundidad, en el encuentro y en el compartir. Gracias a
todos ellos por llenar de sentido mi ser educador y
Hermano.

horizonte
Verano activo
Un lugar donde las paredes hablan
Hno. Fernando González
V
oy a narrar un viaje del centro a la periferia.
De Europa a América, del barrio de Guadalupe al barrio San Agustín, del colegio La
Salle Jobson a la Casa de los Jóvenes Pablo Aguilar.
Físicamente pueden ser horas de vuelo o tiempos
largos de colectivo, pero mentalmente y espiritualmente supone desubicarse y resituarse mucho más
allá de lo que uno había pensado.
Llegamos con nuestras mochilas cargadas de ilusión, de ganas de colaborar, pero también de miedos
y prejuicios, para quedarnos durante un mes compartiendo la vida con la gente del barrio. Siempre acompañados y guiados por personas que llevan tiempo
luchando junto a los protagonistas de esta historia:
niños, jóvenes y mujeres del barrio.
Cada día nos acercábamos allá para echar una
mano en distintos “oficios” de cara a mejorar la realidad física de ese espacio y apoyar las realizaciones de
autopromoción de los habitantes de la casa. Diez
jóvenes españoles acompañados por dos educadores
hemos podido suscitarles autoestima y autovaloración sobre el proyecto que llevan entre manos. Tan
importante como las pequeñas acciones de carpintería, pintura o fabricación de juguetes didácticos que
hemos realizado, ha sido la convivencia diaria con los
niños y los adultos de la casa. Por eso la colaboración
en la copa de leche o el comedor de los sábados, así
como la ayuda en el emprendimiento de las mujeres
(en realidad hemos sido aprendices), han favorecido
la creación de vínculos de amistad que han puesto en
marcha una transformación interior en cada uno de
nosotros.
Acogida porque el grupo de personas que gestiona
la casa mantiene la puerta siempre abierta y uno sabe
que, al acercarse allá, va a encontrarse con Eduardo,
con Francisco o con algún otro rostro amable que te
mira esperando que te sientas como en tu casa y tomes la iniciativa que consideres oportuna. Los jóvenes voluntarios del colegio La Salle Jobson saben
bien que esto es así y que pueden acercarse cuando
quieran a hacer talleres con los niños, acompañados
por Luciano, Bruno, Agostina u otros monitores.
Quiero subrayar tres palabras que resumen lo que
hemos vivido durante este tiempo en la Casa de los
Jóvenes: presencia, acogida y acompañamiento.
Acompañamiento porque Isabel, Orlando y Ledis,
como educadores, tienen experiencia en saber situarse al lado del que está en proceso de crecimiento
personal. En este sentido hemos visto cómo el acompañamiento es mutuo con el grupo de madres: codo
con codo junto a Marisa, Marta, Sara, Hilda y otras,
van creando un espacio de trabajo y reflexión que
mira al futuro. Soy testigo de cómo, entre todos, se
van venciendo dificultades para salir adelante y se
van dando oportunidades que antes la vida no proporcionó a estas mujeres. Soy testigo de cómo se
acompaña a los niños de manera más o menos formal
o estructurada, pero siempre gastando tiempo con
ellos para hacerles felices y abriles horizontes de
futuro en un contexto donde la escuela y la sociedad
no salvaguardan sus derechos.
Presencia porque Cristian hace realidad lo que él
mismo dice: “La gente viene al barrio, pero no se
queda. Es necesario estar siempre esperando a que
los jóvenes se acerquen y encuentren con quién charlar de sus cosas tomando un mate”. Soy testigo de
esa presencia constante que acoge y no juzga, que da
una oportunidad a cada joven que se acerca con todo
el peso de su realidad, porque “la fe ha de servir a la
vida y a las personas”.
Mientras los jóvenes españoles hacían suyo este
espacio comunitario, como adulto no perdí nunca la
oportunidad de escuchar a los agentes implicados en
la promoción del barrio y de hacer con ellos un análisis crítico de la realidad. Recuerdo las largas conversaciones con Orlando sobre la situación de Argentina
y de la Pampa, a distintos niveles (político, económico, social, medioambiental). Recuerdo las charlas con
Julián en las que comencé a comprender otra lógica
horizonte
61
Verano activo
en la promoción de los más desfavorecidos de la sociedad. Una lógica que no tiene que ver con mi sentido de la eficacia y que parte de un contexto estructuralmente empobrecido y de situar al pobre, como
protagonista, en el centro del discernimiento y de la
toma de decisiones en favor de su liberación.
A medida que el tiempo pasaba, mi mochila personal se iba aligerando. Fui descargando pesos que
llevaba de España y caminando al compás de mis
nuevos amigos. A otro ritmo, pero con más sentido.
La mochila se fue llenando de otros pesos, de otras
vidas, de otras cosmovisiones. No puedo renunciar a
mi condición de educador cristiano y a mirar la realidad desde esa perspectiva, pero he de reconocer que
en mí se han ampliado horizontes y he podido profundizar en la misión a que somos enviados cotidianamente en el lugar donde estemos. La síntesis vital
de esta experiencia, la brújula para este camino, tiene
estas claves lasalianas que he encontrado durante este
mes: “desde la fe, en fraternidad, para el servicio
educativo de los pobres”.
Y es que hemos podido compartir proyectos y trabajo con un equipo de personas muy unido, que
atienden a distintas necesidades con una implicación
personal admirable. A través de ellos hemos comprendido lo que significa este espacio de contención
para los niños y jóvenes del barrio: un lugar alternativo que les brinda una oportunidad de ser protagonistas de su proceso de crecimiento personal y de crear
estructuras que realmente sirvan de modelo de promoción y convivencia.
En la Casa de los Jóvenes confluyen diversos intereses por la presencia de personas de distinta edad y
género, pero son armonizados gracias al continuo
diálogo entre quienes lideran estos proyectos. Como
dicen los estudiantes voluntarios de España: “es un
pequeño lugar que nos hace grandes”. Yo digo que es
un trocito del Reino de Dios.
62
Un lugar donde las paredes hablan. Hay un dicho
que utilizamos para cuestionar lo sucedido en algún
lugar concreto: “Si las paredes hablaran...”. Pues bien,
en este caso las paredes hablan, y dicen muy bien, yo
diría que bendicen, lo que sucede cotidianamente en la
sala de los jóvenes. De primeras ya es agradable relacionarte con la gente rodeado de una obra de arte mural. Pero con el tiempo, el significado que cobra esa
gran mujer tejiendo lazos entre dos realidades, entre
dos mundos separados más por la injusticia que por la
distancia, llega a tocarte el corazón. Sí, las paredes
hablan con trazos seguros, con colores alegres, con la
intención de abrir una puerta a la esperanza.
Una de nuestras tareas como grupo de voluntarios
consistía en retocar, restaurar alguna parte deteriorada del mural y darle un barniz que asegure su continuidad en el tiempo. Sencilla y profunda tarea a la
vez. Nuestras manos han tocado la pobreza y nos
hemos dejado tocar por ella. Nuestros ojos han contemplado el sufrimiento y nos hemos dejado mirar
por él. Me atrevo a decir que ese mural más que mirarlo, te mira. Como un icono moderno que te interpela si te acercas a él. La huella que esta experiencia
ha dejado en nosotros es profunda. Gracias a la inquietud de algunos educadores de Santa Fe y de Valladolid, los jóvenes se han encontrado con otros
niños y jóvenes con los que han creado una red de
relaciones que no te deja indiferente y que te exige
seguir luchando por la transformación personal y
colectiva.
Hemos llegado al final de este viaje, y lo que más
cuesta es la despedida. Si nos duele la injusticia,
también nos duele separarnos de aquellos con quienes
nos hemos sentido familia durante treinta días. Puede
parecer poco o mucho tiempo, pero la verdad es que
el cariño compartido hace que esos días se prolonguen largamente. Los que hemos vuelto a España, a
nuestra ciudad, somos los mismos pero no lo mismo.
De hecho, aunque nos despedimos en Santa Fe con
llanto, nuestra vinculación permanece a través de las
redes sociales y de las organizaciones en las que seguimos implicados tratando de mantener vivo el tejido de la solidaridad.
Gracias a todos/as y cada uno/a de quienes nos
habéis acogido y acompañado en este intenso viaje
del centro a la periferia, porque juntos hemos aprendido a salir de nosotros mismos para encontrarnos
con el otro. Seguís estando presentes en nuestra vida.
…………………………………………………….
horizonte
Verano activo
Burkina Faso:
con los brazos abiertos
Mateo Ruiz (Asturias)
E
ste verano he disfrutado de la oportunidad de
participar en un proyecto de voluntariado de
PROYDE en Burkina Faso, junto con el
Hermano Luis Rebolledo y Miguel Caneiro.
Allá por el mes de julio y en medio de las interminables colas de embarque del aeropuerto, comenzaba nuestra experiencia. No recuerdo muy bien nada
del vuelo: simplemente la expectativa de qué me iba
a encontrar al bajar de aquel avión. Mi primer contacto con África del Oeste fue una oleada de aire abrasador y de extraño aroma que se coló en el avión al
abrir la compuerta, cual promesa de los nuevos horizontes que aguardaban al otro lado.
Durante las siguientes seis semanas disfrutamos
de un país de contraste y de la hospitalidad de unas
gentes que comparten todo lo poco que tienen.
Los primeros días de nuestra estancia convivimos
con la comunidad de Hermanos de Ouagadougou,
capital del país, y comenzamos a apreciar las enormes desigualdades presentes en aquella sociedad, la
riqueza desmesurada de unos poco y la pobreza generalizada de muchos. Sin embargo, ante esta situación
los burkinabeses lucían su mejor arma, aquella que
no cuesta nada y que alegra los corazones de quienes
les rodean: su sonrisa. Nunca dejaré de sorprenderme
ante su capacidad de disfrutar de las pequeñas cosas
que rodean su día a día y de ser felices con lo que la
vida les ofrece. En Europa nos pasamos la vida persiguiendo espejismos que proyecta nuestra ambición;
en África la gente, simplemente, VIVE.
El resto de nuestra estancia y el proyecto tuvieron
lugar en el colegio Pierre Koula de Diebougou, pequeña localidad al suroeste de la capital. Allí, entre la
humildad y la camaradería, llevamos a cabo la renovación de la cocina y los comedores del centro. De
dicha experiencia me quedo con las relaciones que
establecimos con los compañeros de trabajo, sin importar de qué color fuese nuestra piel o qué idioma
hablásemos, y sobre todo me quedo con las tardes de
actividades con los niños, la pura inocencia de la
infancia, las ganas de jugar, su capacidad de disfrutar
hasta del último detalle del más simple de los juegos,
horizonte
sus incendiarias carcajadas, sus alocadas carreras, su
felicidad desatada.
CLIMA y Bérégadougou fueron nuestro pequeño
oasis en el camino. Durante una semana pudimos
dejar de lado la albañilería y convivir con la comunidad de familias que allí recibe formación, principalmente agrícola, pero también humana. En aquel lugar
descubrimos que Burkina además de la belleza de sus
gentes también puede presumir de zonas con exuberante naturaleza.
La acogida con la que nos encontramos en todos
los lugares logró que, poco a poco, nos deshiciésemos de la burbuja protectora que día a día levantamos
a nuestro alrededor y que solo permitimos traspasar a
nuestra familia y a nuestros amigos más cercanos. En
África no entienden de burbujas, en África entienden
de abrazos.
63
Verano activo
En África descubrí otra extensión de la realidad
lasaliana: los sueños, deseos, ilusiones, proyectos…
de Hermanos que van encontrando su realidad y haciéndole frente, Hermanos como Salvador Ajanguiz,
hasta este momento, con sus 73 años, en el colegio de
Bandenya que él impulsó y ha visto pasar de deseo,
sueño… a un proyecto en vías de finalizar en su obra
civil. El Hermano Juan, dando pasos por ese deseo de
recoger casi 100 niños y niñas de las calles de Ouagadougou en un hogar digno que haga realidad el
sueño de La Salle: servicio educativo a los más desfavorecidos.
Dos ejemplos de Hermanos que ven en la noche
las mismas estrellas, la misma luna que nosotros, y
en el día el mismo sol y cielo que desde aquí, y nos
dicen que el espacio no es distancia; la distancia es la
ausencia de sueños, deseos, ilusiones, proyectos… La
distancia es ausencia de lucha por encontrar el sapo al
que pueda besar y se haga príncipe, la cenicienta con
apariencia de desheredada e indigente criada que
busco, la lámpara mágica que pueda frotar…
Tampoco puedo obviar el hecho de que, por diversos lugares del país, la mano de las empresas occidentales realiza su detestable trabajo de expolio y
destrucción. Industrias europeas y canadienses extraen hasta el último gramo de cualquier mineral
medianamente interesante que puedan encontrar, y
ofrecen al país mínimas compensaciones que, evidentemente, la mayoría de la población no llega a disfrutar, y desplazan pueblos enteros de aquí para allá. Me
64
gustaría que fuésemos más conscientes del precio que
otros deben pagar para que nosotros disfrutemos de
las comodidades que el día a día nos ofrece.
Cuatro meses después, mi corazón y mi mente extrañan África. Atrás quedan Ouagadougou, Diebougou, Bobo Dioulasso, Gaoua, Toussiana, Banfora,
Bérégadougou, Deodougou, Nouna, Kongoussi y
tantos otros horizontes que se abrían ante mis asombrados ojos europeos.
Distantes asoman centenares de sonrisas, sonrisas
puras, sonrisas sinceras, sonrisas como carta de presentación. En el momento en el fui capaz de eliminar
mis barreras, de abrir mis brazos, de aceptar lo que
me ofrecían, encontré que me sentía como en casa, y
esa sensación fuera de mi hogar, fuera de mi tierrina
querida, nunca la tuve y precisamente la fui a encontrar en un país en el que destacaba sobremanera como
extranjero y donde nunca me hicieron sentir como tal.
En África encontré un sentido muy tangible al lema de PROYDE, conocí a mucha gente pequeña
como la que trabajamos también desde España, repartida por muchos lugares pequeños, hace cada día
muchas cosas pequeñas, que logran que el mundo sea
un lugar mejor.
En África descubrí que lo que realmente importa,
nunca salta a la vista. En África dejé hermanos para
toda la vida. En África me sentí querido. Con África
me siento en deuda. En África aprendí a vivir.

horizonte
Verano activo
¡Gracias desde la India!
Emilio Fernández (Managua, Palencia), Adrián Salgado (Asturias), Silvia Díez (Valladolid) y Hno. Jorge Sierra
U
n proyecto de verano empieza muchos meses antes, con una intensa preparación que,
en nuestro caso, nos hizo vivir expectantes
esperando la fecha en la que, afortunadamente, íbamos a poder participar a través de PROYDE en una
experiencia misionera en el llamado tercer mundo.
En concreto nuestros pasos se dirigieron a Boys’
Town (cerca de Madurai, al sur de la India).
Llegado el día, comenzamos nuestra "aventura" en
la India quizás de la forma más intensa que se puede
imaginar: aterrizando en Calcuta. Lo siguiente fue
abrir los ojos, pues no se nos ocurre otra cosa que sumergirnos en el tráfico de la ciudad en dos taxis. A
velocidad de vértigo, recorrimos el trayecto entre
obras de Madre Teresa, ricksaws, vehículos de toda
clase y miles de personas de todas las edades saltando
entre los coches. La casa de las religiosas donde nos
hospedamos está muy cerca de algunos mercados, así
que, con los ojos como platos, visitamos las zonas de
telas, de bebidas, de recuerdos y de carnes, impresionados por ver los animales, incluyendo cientos de
enormes cuervos, entre los productos y las personas de
toda clase. Nuestra estancia en Calcuta nos permite
conocer, de primera mano y bien acompañados, la
labor de Madre Teresa y las Misioneras de la Caridad.
esta realidad con ilusión, deseando ver, tocar y sentir,
y acercarnos, en unos días, a Madurai y Boys’ Town.
Durante nuestra estancia en Calcuta pudimos ver
varias obras de Madre Teresa, como la Leprosería de
Tithaghar, donde los internos tejen telas de saris y
otras prendas típicas en la India, siendo el único lugar
donde se componen los conocidos saris-hábitos de las
Hermanas de la Madre Teresa. Todo el centro es
autogestionado por los propios internos. También
vimos los quirófanos, las salas de visitas médicas, las
zonas donde curan las úlceras, la escuela para los
niños, las huertas... La lepra sigue existiendo, y sigue
siendo una lacra social y sanitaria en la India, a la que
sólo atienden, desde su fe, unos pocos locos necesarios.
Parecía que había pasado mucho tiempo, pero
apenas llevábamos unas horas en la India. Es tal la
intensidad de imágenes, olores y sonidos (especialmente los cientos de cláxones), que cada minuto pasado parece una hora. Un buen comienzo para asumir
horizonte
En nuestras conversaciones coincidimos en cuánto
llama la atención ver tantas personas, en todos los
sitios, tan diferentes, tan coloridas y tan acostumbradas al ruido y la combinación de olores y sabores.
Alguien dijo que el gran valor de la India son las
personas; y, cada hora que pasa, confirmamos que
tenía razón.
65
Verano activo
unas horas de trabajo por la mañana, y a la tarde llega
el deporte con los muchachos, para después proponerles nosotros nuestros talleres. Para ello todo es
válido, así que cualquier cosa une. Lo que para nosotros no es nada importante, para ellos es un mundo.
Ellos vienen a recibirnos y nos llevan a cada uno de
sus cotagges para compartir también sus juegos.
Toca despedirse de Calcuta y volar a Madurai,
con varias escalas, allí nos recibieron en el aeropuerto
los Hermanos Joseph y Brinesh, con los que descubrimos que el tráfico de las zonas rurales del sur no
era como el de Calcuta, aunque siga siendo terrible.
Nos esperaba una agradable cena india, comida a la
que nos estamos acostumbrando rápidamente, eso sí,
sin salsas picantes. Los chicos ya estaban durmiendo,
por lo que aprovechamos para acomodarnos y descansar.
Realmente se nos hace tan difícil explicar lo que
vivimos, que las palabras parecen pobres frente a
nuestras sensaciones. El capellán, el padre Lucas,
redentorista, nos decía en el día de la fiesta de su
Fundador que lo específico de nuestra labor como
voluntarios es dar y recibir de los más pobres. Desde
luego, quisimos dar un poquito de nosotros mismos,
pero recibimos cien veces más.
La hospitalidad de la India es fantástica. Se sienten honrados de nuestra presencia, y nosotros muy
agradecidos por sus atenciones. Con gran respeto nos
han enseñado el trabajo que les vamos a ayudar a
hacer, en la Saint Benildus House, comenzando por
la pintura.
Seguro que os imagináis por qué en todas las fotos
estamos los cuatro con una sonrisa en la cara, que no
se nos ha quitado desde que llegamos: muchachos,
Hermanos y personal están siempre sonriendo, felices
de acogernos. Y, nosotros, felices de asomarnos a su
realidad desde el compromiso con esta gran y humana ONGD que es PROYDE.
Uno de los objetivos de los proyectos de verano es
conocer la realidad del país que nos acoge, sobre todo
en lo que respecta a la educación y la solidaridad.
Uno de los fines de semana nos acercamos a un lugar
paradigmático de la geografía india: el Cabo Comorín, la punta del subcontinente, donde se juntan tres
mares. A pesar de que no acompañó el tiempo y nos
mojamos de lo lindo, pudimos disfrutar de una agradable visita al centro de meditación del Sri Vivekananda y al último lugar de reposo de parte de las cenizas de Gandhi.
La lluvia sirvió como excusa para seguir experimentando la hospitalidad de las gentes de este país.
Con unas pocas palabras, rápidamente fuimos acogidos bajo techo por un amigo de los Hermanos de La
Salle, que incluso nos invitó a una reunión social en
torno al proyecto solidario del Club Rotario de la
zona.
En Boys’ Town descubrimos la esencia y los principios de nuestro Fundador en el rostro de los niños
que allí estudian, así como en la dedicación e implicación de los Hermanos. La jornada discurre con
66
El lunes 5 de agosto teníamos cita en Tuticorín
con la fiesta de Nuestra Señora de las Nieves, patrona
de la ciudad: una impresionante y multitudinaria manifestación de religiosidad popular, que nos ha dejado
horizonte
Verano activo
aquí, una familia conocida por su cercanía y fraternidad desde tantos lugares ya no tan lejanos.
La despedida fue tan especial que cuesta describirla. Fuimos agasajados con nuevos bailes y numerosos regalos típicos: sombreros de marajás, sedas,
colgantes de sándalo y un cuenco con forma de flor
de loto, símbolo de bendición y honor para el pueblo
indio.
boquiabiertos, y cuyo momento central, la procesión
del paso de la Virgen, discurre justo por delante de una
obra que conocen muy bien los voluntarios de PROYDE de otros años: el colegio La Salle de Tuticorín,
donde no pocos ladrillos han sido colocados por lasalianos españoles a lo largo de muchos veranos.
El siguiente sábado pudimos visitar Boys' Village,
un centro en el que los Hermanos ofrecen alojamiento, manutención y formación a niños hasta los 14
años, todos ellos huérfanos o de familias desestructuradas, en muchas ocasiones rechazados por sus familiares Sin embargo, viven felices en un nuevo hogar
donde se sienten queridos y seguros. Una vez terminada esta formación, se les orienta a seguir estudiando, bien en un centro de formación profesional, como
es Boys' Town, o bien los estudios superiores en el
colegio La Salle de Tuticorín.
También pudimos visitar RTU (Reaching the Unreached, "Llegando a los que nadie llega"), donde un
Hermano galés, James Kimpton, comenzó su trabajo
en el año 1974. Su labor consiste en atender a un
numerosísimo grupo de niños y niñas, algunos enfermos o portadores de VIH, que viven hasta los 14
años en pequeñas casas, en grupos de ocho, junto a
una mujer que hace las funciones de madre. A partir
de allí se les reúne en "Hostels" más grandes para
continuar sus estudios o capacitación profesional.
Muchas historias se entrelazan en cada una de las
realidades a las que nos acercamos. Historias que
empiezan trágicamente y que, gracias a la solidaridad
de muchas personas, encuentran un camino de dignidad y oportunidades. Nosotros somos solo una pequeñísima parte en todo este engranaje, pero nos
sentimos orgullosos de ser la "cara" de PROYDE
horizonte
Una parte de nuestros corazones sigue hibernando
en India, pero aprovechamos las últimas horas en
Madurai para revisar nuestro trabajo con la comunidad de Hermanos que nos acogía y valorar toda la
experiencia, sobre todo de cara a próximos proyectos
de voluntariado desde PROYDE. La palabra que más
se repetía fue gracias, sobre todo porque el trabajo ha
resultado finalmente una excusa para acercarnos a la
realidad de la India, para encontrarnos con muchas
personas increíbles y para caminar un paso más en el
compromiso solidario que nos facilita PROYDE. A
todas las personas que lo han hecho posible, en India
y en España, GRACIAS de todo corazón.

67
Verano activo
Carta-testimonio del grupo de
voluntarios de PROYDE en Nicaragua
Hno. Tirso Verdugo, Hno. Rufino Arconada, Raúl y Cristina (Burgos)
E
l equipo de voluntarios de PROYDE formado
por Cristina, Tirso, Rufino y Raúl, después de
un largo día de viaje con escala en Miami
llegábamos, por la noche del día 2 de julio, al colegio
La Salle de Managua. En el aeropuerto nos estaban
esperando los Hermanos Francisco y Marcelo.
Calor, color, sonidos y... ¡mucha vida!
La primera sensación ya nos la habían desvelado
hace tiempo: "nada más salir del avión sentiréis una
fuerte caricia de calor" y... así fue. Un calor físico,
pegadizo, húmedo... que no se desprende de ti aunque
te duches o aunque llueva, aunque estés a ras de un
lago o en lo alto de un volcán... Ese calor se nos presentó como fiel compañero de esta experiencia.
La segunda sensación fue la que trasmite el color:
los colores de las débiles lucecitas blancas que veíamos desde el avión, o los colores luminosos de los
adornos ¿navideños? de las calles de la antigua Managua que se encienden para animar por la noche las
abandonadas ruinas de lo que fue el origen de la ciudad, o los vivos colores de la naturaleza en mil tonalidades de ese fértil verde que comparte espacio con
el azul de los lagos o del inmenso cielo.
Tercera sensación, los sonidos... el bullicio de la ciudad por el movimiento de la gente, vehículos que con
sus distintos tipos de pitidos indican que te adelantan
o que te ceden el paso o todo lo contrario... junto con
el sonido de la música en los puestos ambulantes de
las calles, o de la propaganda política, o de un grupo
de jóvenes que simplemente están disfrutando del
momento... todo ello parece una continua feria. Incluso por la noche los sonidos no cesan: insectos, pájaros y otros animales cogen el relevo y no
68
paran hasta el amanecer, sobre las 5:00, momento en
el que suben aún más el volumen para indicar que un
nuevo día comienza. Y en esa época del año, los sonidos que cada vez tienen más protagonismo son los
de la lluvia o el chaparrón o el bocajarro de agua que
cae si ningún tipo de aviso y que puede ser acompañado por una batería de truenos y relámpagos.
Todas estas primeras sensaciones no hicieron nada
más que prepararnos a la sensación que aún solo habíamos empezado a palpar... la sensación de vida.
¡De mucha vida! Ya en la primera noche, cuando nos
recibieron Manuel, Moisés, Thomas, Víctor, Leopoldo, que junto con Marcelo y Francisco forman la
comunidad de Hermanos en la que estábamos viviendo esos primeros días, pudimos sentir esa vida en sus
saludos y rostros.
Vida que se nos hizo completamente patente entre
los más de 1.600 alumnos, que junto a 80 profesores
y 30 personas más conforman el Instituto Pedagógico
La Salle de Managua. Durante este curso estaban
celebrando su centenario. Y ya fue una explosión de
vida, cuando pudimos asistir a un acto en agradecimiento a los Hermanos de La Salle en Nicaragua por
la labor de coordinación y animación de la Pastoral
Educativa del Vicariato Apostólico de Bluefields
durante los últimos 14 años. Este agradecimiento,
que hicieron los propios maestros coordinadores de
las distintas zonas en presencia del Obispo Auxiliar
del Vicariato Monseñor David, estuvo personalizado
en el Hno. Francisco Gutiérrez. Al acto asistió la
horizonte
Verano activo
comunidad de Hermanos y nosotros fuimos testigos
de la mucha vida que la comunidad ha dado y está
dando a su alrededor.
Conocimos a los cuatro miembros del Equipo de
Coordinación del Vicariato de Managua y a los 34
técnicos que forman cada uno de los nueve Equipos
de Coordinación Educativa que se encargan de animar a más de 600 profesores repartidos por 378 escuelas. Este Vicariato ocupa unos 55.000 kilómetros
cuadrados, más de la mitad del territorio total de Nicaragua, educa en sus escuelas rurales a 15.000
alumnos. Por ellos estábamos allí. PROYDE lleva
más de nueve años colaborando en su formación.
Compartimos una mañana con ellos trabajando la
mediación como modelo de resolución de conflictos
entre iguales en el ámbito escolar. Les ofrecimos una
motivación y explicación del tema junto con ejemplos prácticos y un posible sistema de intervención,
así como de numerosos recursos para la formación de
los futuros mediadores, y apoyos para el seguimiento
del proceso mediador en la escuela. Un tema que les
intereso mucho, y que fue rápidamente demandado
para seguir trabajándolo a nuestro paso por las coordinaciones, ya que es uno de los problemas a los que
se enfrentan día a día en las escuelas.
Durante la tarde pasamos una jornada de convivencia en la ciudad de Granada con el equipo del
secretariado de la pastoral educativa del Vicariato:
Hno. Francisco, Belisario y María.
Estuvimos un día más por allá conociendo la obra
de los Hermanos de La Salle en la ciudad de León y
al día siguiente salíamos hacia las escuelas rurales de
tres coordinaciones del Vicariato: Waslala, Siuna y
Mulukuku.
Hasta hicimos un programa mañanero en Radio
Waslala...
Las dos siguientes semanas estuvimos residiendo
en la ciudad de Waslala, a 150 Km de la capital, Managua. Hospedados en la casa cural, lo que nosotros
conocemos como la casa parroquial. En una gran
parcela estaba la iglesia, la vivienda del sacerdote y
zonas muy amplias de jardines con mucha vegetación. En este tiempo todo era muy verde, pues era la
época del invierno con lluvias muy frecuentes. La
temperatura no bajó de los 23 grados. Convivimos
con el párroco, un sacerdote capuchino y nicaragüense, el Padre Carlos.
Esos días, en Nicaragua tenían una semana de vacaciones, así que estuvimos ayudando a la parroquia.
Limpiando los jardines, visitando algunas instituciones de la ciudad como el asilo de ancianos y la casa
materna, donde van las mujeres que están embarazadas, un mes antes de dar a luz.
También estuvimos ayudando a la Cofradía del
Divino Niño, que celebró su fiesta el día 19 de julio y
estaba preparando una serie de adornos. Realizamos
unos cuantos metros de guirnaldas. Colaboramos con
los niños de la Infancia Misionera, con los jóvenes de
la Pastoral y con las madres. Fueron momentos amenos y entretenidos.
Por las mañanitas, a las 6 de la mañana realizábamos un programa de radio en Radio Waslala. Lo escucha mucha gente en toda esa región, es una manera
que tiene la Iglesia Católica de evangelizar, de llegar a
las comunidades campesinas, una manera de dar avisos o noticias. Nosotros fuimos cada día, de dos en
dos, acompañando al Padre Carlos y hemos hablado
de: nuestra ONGD PROYDE, educación y valores, san
Juan Bautista de La Salle… Fue una experiencia muy
interesante.
horizonte
69
Verano activo
También visitamos unas casas de campo y vimos
el duro trabajo de los campesinos. Conocimos cómo
son las plantaciones de cacao, los cafetales, las plantaciones de yuca y también las plantaciones de arroz.
Estuvimos de gira, las escuelas rurales
Pasado ya el ecuador de la experiencia, éramos
cada vez más conscientes de que durante el encuentro
directo en las escuelas rurales era realmente cuando
estábamos verdaderamente conociendo la realidad.
Fue una aventura nueva cada vez que nos dirigíamos en gira a una de esas escuelas perdidas en la
geografía de Nicaragua. Nos dividíamos en dos parejas, una: Tirso y Cristina, y otra: Rufino y Raúl; de
esta manera visitamos más escuelas.
A ellas llegamos a través de una carretera (realmente era un camino de tierra) en bus o incluso en
camiones. En varias ocasiones tuvimos que pararnos,
bajar y esperar durante una hora hasta que el bus era
capaz de despegarse del lodo y subir una cuesta.
Después de esto, nos quedaba un largo trecho por
senderos entre vegetación y plantaciones. Algunas
veces, el sendero cruzaba el río (sin puente) y otras,
era el mismo cauce de un arroyo que al llover se cubría de agua. Esos tramos los hacíamos a pie o en
“bestia” (caballo, mula, macho…) que nos prestaban
los propios campesinos y padres de alumnos de la
escuela a la que íbamos a visitar. Ellos mismos nos
hacían de guías. Es tremendo ver la soltura con las
que estas personas pueden caminar entre estos lodazales mientras que tú eres incapaz de moverte sin
saber hacía donde caminar para no embarrarte más o
quedarte literalmente pegado. Hemos de confesaros
que hay momentos en que pasamos algo de miedo
ante estas situaciones, pero también os garantizamos
que hemos estado en muy buenas manos y que los
70
niños deseaban que llegáramos a sus escuelas, y eso
era lo más importante.
Nada más llegar, los niños y niñas nos recibían
con canticos y aplausos. Como cada mañana, comenzaba la jornada cantado el himno de Nicaragua y el
de la Pastoral Educativa. Sus profesores nos presentaban, y comenzábamos con nuestras actividades.
Dependiendo del número de alumnos (entre 20 y 60)
les dividíamos en dos grupos. Realizábamos con
papel unos molinos de viento y les enseñábamos
muchas canciones y juegos. Y en ocasiones hasta
aparecía un payaso que hacía reír a muchos y llorar a
alguno ante lo desconocido. El material necesario
(folios, tijeras, pinturas…) lo llevábamos nosotros y
tenían que compartirlo. Para ellos todo era novedad,
al principio se mos-traban tímidos y nerviosos, pero a
lo largo de la jornada iban siendo más espontáneos y
alegres.
Las materias se imparten desde las 8:00 hasta las
12:00. Durante el receso (su recreo) de 10:00 a 10:15,
los alumnos comen una ración de arroz con frijoles
(alimentos donados por un Programa de Alimentación Mundial) y en ocasiones una tortilla (tortita de
harina de maíz) o plátano frito que aportan las propias familias. Todo es cocinado por las madres de los
alumnos; ellas se organizan por turnos durante el
curso escolar. La escuela consta de tres edificios pequeños de una planta: la casa del maestro, la cocina y
la propia escuela (con una, dos o tres aulas). Todos
estos edificios tienen las paredes de madera y el tejado de cinc, el suelo es tierra pisada o cemento; aquellas escuelas que han recibido una subvención internacional han podido construir aulas de hormigón. El
mobiliario en las escuelas es muy sencillo, los alumnos utilizan sillas con brazo; todas son diferentes ya
que antiguamente las daba el estado, pero actualmente no; de modo que cada familia que matricula a su
hijo tiene que aportar la silla de madera hecha a
mano.
horizonte
Verano activo
- la migración interior del país en busca de nuevas
tierras para cultivar, que hace muy difícil la escolarización;
- las inclemencias meteorológicas: lluvias y consecuentes crecidas de los ríos que hacen muy peligrosa la asistencia de los alumnos que tienen que recorrer diariamente grandes distancias por el tipo de
poblamiento disperso en la montaña;
- la violencia interfamiliar consecuencia de una
sociedad en conflicto por el machismo tradicional
agravado por las secuelas de la guerra, y
La última media hora la dedicábamos a reunirnos
con los padres y poder compartir con ellos inquietudes, valorar su implicación y potenciarla, hablar de la
educación, la alimentación y el futuro de sus hijos. A
continuación, comíamos junto al técnico de la Pastoral Educativa que siempre nos acompañaba, un almuerzo preparado por las madres.
El viaje de vuelta a la ciudad nos sirve para recordar la experiencia vivida, trayendo a nuestra mente
los rostros de los niños y niñas que hemos conocido.
También sentimos cierta impotencia por el poco
tiempo que pasamos con ellos y las necesidades que
hemos observado. Ante todo, valoramos la labor que
está realizando la Iglesia, fomentando la educación
de estos alumnos, gestionando los recursos necesarios y formando integralmente a los maestros.
Talleres de formación a maestros: ¿construir o
plantar?
Justamente, uno de los puntos fuertes del proyecto
de cooperación de PROYDE que este verano estamos
desarrollando ha sido la formación de los equipos
técnicos y de buena parte del profesora-do. Una Pastoral que desarrolla su misión desde 1985, atendiendo
las 378 escuelas de Educación Primaria multigrado
en las nueve parroquias y coordinaciones: Waslala,
Siuna, Mulukukú, Ubú Norte, El Ayote, Muelle de
los Bueyes, Rama, Nueva Guinea y Los Ríos de
Bluefields. En ellas se educa a 15.000 niños y niñas.
- los raptos de las niñas de 12 a 15 años por varones para establecer una relación sentimental, lo que
hace que un importante número del alumnado femenino no termine de forma adecuada su escolarización.
En las tres parroquias y coordinaciones que visitamos realizamos un curso de capacitación para estos
profesores. En Waslala con 89 maestros durante un
día y una tarde, en Siuna con 80 en dos días y en
Mulukukú con 44 en un día y una mañana. En todos
ellos tratamos los siguientes temas:
- Educación en la interioridad, con una relajación
y visualización.
- Características del maestro cristiano, con una
charla motivadora sobre la importancia del educador
vocacionado.
- El tema estrella: la mediación, desarrollándola y
ejercitando casos concretos en pequeños grupos de
profesores.
- Una serie de talleres más prácticos sobre: recursos
matemáticos, animación lectoescritora, manualidades
y dibujo, e iniciación al aprendizaje cooperativo.
- Y varias sesiones de: juegos de interior y exterior,
canciones, y… la actuación del payaso Juan Paco Pedro de la Mar como un ejemplo de las posibilidades
que tiene el juego teatral y humorístico del clown en el
aprendizaje de los niños.
En nuestros diálogos con los profesores conocimos algunas de las dificultades a las que ellos tienen
que dar respuesta:
- el absentismo escolar por el trabajo infantil durante el tiempo de la cosecha;
horizonte
71
Verano activo
cotidiano, por vuestro testimonio de fraternidad y
acogida. Habéis sido nuestra familia en este tiempo.
A todos los profesores del Vicariato que junto con
los padres y madres de los alumnos, nos habéis dado
un testimonio de dedicación y esfuerzo continuo en
favor de la educación que no olvidaremos.
Fue una experiencia realmente gratificante el haber podido compartir con más de 230 profesores
nuestras vivencias como educadores. Sintiéndonos
participantes de una gran “masa forestal” que es la
Educación. Haciendo realidad este cuento que hemos
recitado en cada encuentro:
“Cada persona, en su existencia, puede tener dos
actitudes: construir o plantar. Los constructores pueden demorar años en sus tareas, pero un día terminan
aquello que estaban haciendo. Entonces se paran, y
quedan limitados por sus propias paredes. La vida
pierde el sentido cuando la construcción acaba. Pero
existen los que plantan. Estos, a veces sufren con las
tempestades, las estaciones, y raramente descansan.
Pero al contrario que un edificio, el jardín jamás para
de crecer. Y, al mismo tiempo que exige la atención
del jardinero, también permite que, para él, la vida
sea una gran aventura”.
A todos los niños, niñas y jóvenes, de las escuelas
rurales y parroquias que nos habéis permitido entrar
en vuestra vida y nos habéis regalado vuestra atención, alegría, confianza, sueños… Muchas gracias
por compartir con nosotros ese tiempo. Ha sido el
mayor descubrimiento. Sois testimonio de esperanza,
fuerza y felicidad.
Al Vicariato Apostólico de Bluefields. A todas las
personas de fe y buena voluntad que estáis dedicados
de por vida a ello: religiosos y religiosas que, junto
con los sacerdotes y delegados de la Palabra, compartís muchos kilómetros a vuestras espaldas y siempre
nos habéis recibido con una gran sonrisa en vuestro
rostro, reflejo de un sencillo y entregado corazón.
Sois verdadero testimonio de una Iglesia viva en
Misión permanente. Iglesia pobre y solidaria junto a
las personas de las comunidades. Gracias por mostrarnos que aquí la Iglesia es fiel reflejo del proyecto
de Jesús.
Del otro lado del mundo, al sur del lago Managua
y a unas cuadras del Masaya.
Cuando estábamos haciendo las maletas para volver al otro lado del mundo, como nos decían por allá,
éramos conscientes de que nuestro equipaje iba a ir
lleno, pero, no de cosas sino de recuerdos: personas,
miradas, sonrisas, experiencias… todas ellas situaciones vividas durante esos días gracias a PROYDE.
Durante esos 45 días hemos intentado colaborar
con todo nuestro empeño en hacer realidad el lema de
nuestra ONGD “mucha gente pequeña haciendo muchas cosas pequeñas en muchos lugares pequeños
pueden cambiar el mundo”.
Solamente nos queda decir: ¡gracias! Gracias a
todas esas personas pequeñas pero de gran corazón
con las que nos hemos ido encontrando esos días:
A la Coordinación de la Pastoral Educativa, alma
mater de este proyecto, que junto a los Equipos Técnicos que hemos visitado, os habéis preocupado por
nuestro bienestar. Respondiendo siempre a nuestras
peticiones y necesidades. Muchas gracias por vuestra
escucha, atención y desvelos. Habéis sido testimonio
de generosa entrega y compromiso.
El 13 de agosto terminábamos de hacer nuestro
equipaje y no queríamos dejar de llevarnos esas sensaciones que teníamos los primeros días: calor, color,
sonidos y sobre todo… ¡mucha vida!

A los que nos acogieron y cuidaron con mucha
dedicación, preocupación y cercanía en todo momento. Muchas gracias por vuestro compartir sencillo y
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horizonte
Verano activo
África me habita
Hno. Luis Rebolledo
Deseaba llegar cuanto antes
por ver si mi realidad seguía estando.
Acariciaba prolongar el retorno
por contemplar que mi presencia
amasaba un futuro de sazón.
en suspiro de lágrima, en susurro de labios,
en corazones alcanzados, en manos asidas,
en roce ausente, abrazo olvidado
y saludo de espacios
en compás musical de cuatro tiempos.
Leo brotes de primavera,
en aparente fibra dormida.
Laten jadeos de espera anhelada
en voluntad de natural gravidez.
Deseaba llegar cuanto antes
por abrir mi maleta y mimar en raíz estrenada
la ofrenda de amor suspirado
con mi flirteada África de rostro velado
en voluntad de amor de primavera.
Deseaba llegar cuanto antes
por abrir mi maleta y libar,
con libre y callada mudez,
el África que, vaciado en mi ser,
habitaba protegido, al amparo
de una noche de luna y amor.
Deseaba llegar cuanto antes
abrir mi maleta e impregnarme,
por instantes y de nuevo,
del vaho sin tiempo de África.
África apasiona.
Lleva África el considerar
que tú te prendes de su hechizo
y ella se embelesa en tu seducción
Deseaba llegar cuanto antes
por abrir mi maleta:
tomar la ropa coqueteada por África
y besar el placer de su deseo amado,
horizonte
Deseaba llegar cuanto antes…
Abrí mi maleta…
África, mi pretendida, me habita.
Raúl, también estaba allí.
Santiago de Compostela, 2013

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Verano activo
Voluntariado en la Escuela La Salle
de Kirenge, Ruanda
(Una auténtica UNIVERSIDAD para los más pobres de entre los pobres)
José Manuel Merino, Ólga Muñoz y Óscar Pérez (Los Corrales de Buelna)
A
lo largo de tres semanas entre julio y agosto, tres lasalianos de Los Corrales de Buelna
hemos llevado a cabo un proyecto solidario,
organizado por PROYDE, en la Escuela La Salle de
Kirenge, Ruanda.
El equipo, formado por José Manuel Merino (Jefe
de Estudios de Ed. Infantil y Primaria y profesor de
lengua inglesa), Olga Muñoz (profesora de lengua
inglesa) y Óscar Pérez (antiguo alumno del centro La
Salle de Los Corrales de Buelna y responsable informático de AMICA www.amica.es) ha desarrollado
dos proyectos educativos.
El primero de ellos, un curso de aprendizaje y perfeccionamiento de lengua inglesa a los profesores de
la escuela, impartido por Olga y José Manuel por las
mañanas. De acuerdo a su nivel de competencia en
inglés, formamos dos grupos, que cada día, en el
período final, uníamos para enseñarles canciones y
danzas, metodología que les facilitará su labor como
profesores de inglés. Las tardes las dedicábamos a los
niños que, aunque estaban de vacaciones, seguían
acudiendo a la escuela, su casa. Con ellos trabajamos
también las canciones y las danzas y ¡cómo disfrutaban! El segundo proyecto, preparar la sala de Informática de la escuela, lo llevó a cabo Óscar: 16 equipos nuevos quedaron instalados en red con todo el
software apropiado; sin duda alguna, la primera sala
de informática en muchos kilómetros a la redonda y
el primer ordenador que muchas personas iban a utilizar.
La experiencia ha sido maravillosa. La Escuela La
Salle de Kirenge (Ruanda) es el más puro reflejo de
aquello que La Salle quiere ser en el mundo y en
nuestra sociedad: La Salle en Kirenge educa a niños
pobres para que puedan mejorar su sociedad, acoge a
todos (independientemente de su religión, raza…) y,
sobre todo, es una escuela con una gran calidad humana y cristiana. El Hermano Aniceto Ramírez, el
director mexicano de la escuela, es el gran creador de
esta “universidad de la colina de Kirenge”; él es el
alma mater del trabajo educativo que allí se desarrolla y es, también, el hombre incansable que busca y
busca proyectos y subvenciones para mejorar la calidad educativa y asistencial de la escuela (todos los
alumnos de la escuela, más de trescientos, comen
diariamente en la escuela gratuitamente). El Hermano
Aniceto es el educador lasaliano que piensa todos los
días en cómo hacer para que los niños de Kirenge “se
salven”, sean felices, desde la plataforma de la Escuela La Salle, un referente en las colinas de Kirenge,
la casa de todos los que han entrado alguna vez en
contacto con la escuela.
Los tres constatamos que la experiencia ha sido
maravillosa. África enamora, y esto no es un dicho. No
sabemos si hemos enseñado mucho o si se ha hecho
mucho bien, no se sabe si habrán aprendido algo de
nosotros o si hemos sido muy eficaces. Lo que sí atestiguamos es que en África se aprende, que las gentes
africanas son sabias y, por lo tanto, tienen mucho que
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horizonte
Verano activo
aportar; sus enseñanzas vitales son fuertes bofetadas
para nuestras personas y nuestro estilo de vida. Nos
hemos encontrado con gente feliz, con gente generosa,
con gente que nos ha acogido, con gente que se ha
sentido muy orgullosa de invitarnos a compartir unas
galletas en su casa, muchas veces lo único que tenían
para ellos. Nos hemos encontrado con gente que vive
el presente, que no pierde tiempo en pensar qué tiene
que hacer mañana, gente que simplemente disfruta el
momento y lo considera un auténtico regalo. Nosotros
hemos aprendido que uno puede ser muy feliz comiendo siempre las mismas alubias, careciendo de
señal de Internet o bien duchándose con un caldero de
agua todas las mañanas.
Es precioso ver cómo desde unas sencillas escuelas, desde el mundo educativo, el cambio es posible:
las personas crecen, las sociedades se hacen más
dignas, las personas se conocen mejor a sí mismas, y,
lo más importante, el espíritu crítico ayuda a ser libre
y la libertad nos aproxima a la felicidad. Esto es lo
que hacen en África las Escuelas de La Salle.
Muchos nos han preguntado cuáles son nuestros
sentimientos ahora, cuáles eran nuestras motivaciones antes de partir… Nuestros sentimientos son claros, pero están encontrados. Por un lado, sentimos
lástima de aquella gente: muchos pasan una terrible
necesidad, durante la estación seca apenas tienen
agua ni para lavarse, muchos sólo comen una vez al
horizonte
día un plato, y es en la escuela…; sin embargo, hemos visto que la gente es feliz, volvemos valorando
muchísimo más todo lo que tenemos: el agua, la electricidad, la casa, la ropa, la comida, la salud… cosas
normalitas para nosotros, que pasan todos los días de
forma casi imperceptible delante de nosotros pero
que, una vez que hemos comprobado que el disfrutarlas es un lujo para millones de personas, hace que las
valoremos más, que las veamos y sintamos como
algo al alcance de unos privilegiados. Sí, una vez de
vuelta, nos sentimos unos mimados y unos privilegiados. En cuanto a nuestras motivaciones originales… el deseo de enseñar se transforma rápidamente
en deseo de formar parte de aquello, de ser uno más,
de ser “parte de su paisaje”, de aportar, como los
demás, lo que uno mejor sabe y compartirlo con los
que ya llamas “los tuyos”.
No tenemos ningún mérito, somos voluntarios,
como tal nos costeamos todo, y vamos con el apoyo
de una ONG, PROYDE, con gran experiencia en el
mundo de los proyectos solidarios de verano. Somos
uno de los eslabones de la solidaridad, es quizás el
último eslabón, pero cerca de nosotros ha habido
muchas personas que han trabajado mucho para conseguir ciertas sumas económicas que han hecho posible algunos de los proyectos que hemos visto que se
desarrollan en las escuelas. Nos gusta la aventura,
nos gustan las lenguas, nos gusta conocer otras culturas pero, sobre todo, disfrutamos intentando hacer
felices a otros, intentando ver a Dios en la sonrisa que
todos los niños nos regalaban sin cesar desde el amanecer hasta la puesta del sol. Y ver esto, ser testigo de
tal agradecimiento, sentir a Dios pulular por entre
aquellas gentes, es algo que no tiene precio. Será una
experiencia imborrable en nuestras vidas, vitalmente
una referencia importante.
Podéis leer las crónicas de estas tres semanas en el
siguiente blog: www.jmamerino.blogspot.com, o bien
en la página web de la Delegación Noroeste de
PROYDE, www.miraralsur.net
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Verano activo
Campo de trabajo INSO-Girón 2013
Hno. Roberto Hierro
D
el 17 al 26 de Julio, 12 chicos/as de 2.º de
bachillerato y universidad compartieron
parte de su verano en la Comunidad Pastoral del barrio Girón de Valladolid, dispuestos a gastar
su tiempo en acercarse a las realidades de exclusión
social de la ciudad. Entre el texto encontraréis algunos de los testimonios que ellos mismos han escrito.
La propuesta se hizo a posibles voluntarios a través
de los Colegios La Salle, como parte de las experiencias pastorales de verano. La respuesta fue amplia, ya
que varios de los “grupos cristianos” del sector se
mostraron interesados en ella, además de otros alumnos que habían tenido experiencias de voluntariado
durante el curso.
Finalmente recibimos a 12 jóvenes, 11 de 4 Grupos pre-universitarios: Gijón (Luis, Adrián, Cris y
Nico), Burgos (Claudia y Silvia), Palencia (Elisa,
Adrián y Pablo) y Valladolid (Kike y Andrés), a los
que se sumó Pilar, alumna de La Salle Valladolid. No
vinieron solos, 4 animadores de “gran talla” los
acompañaron y fueron decisivos para que toda esa
mezcla funcionara, David, Natalia, el Hno. Luis y
Marta supieron acertadamente “estar” y “acompañar”
en cada una de las experiencias.
Y ahora viene lo importante, toda esta variedad de
procedencias fue una gran riqueza, que se vio aumentada por el deseo de todos de ir más allá de nuestras
fronteras, de acoger aún a mayor “variedad” de personas, personas gitanas, inmigrantes, personas sin hogar,
personas sin familia o sin recursos económicos…
“El campo de trabajo me ha abierto los ojos”
Lo primero fue formar la “familia nuclear”, dedicamos el primer día a conocernos entre los que íbamos a compartir la casa durante esos 10 días, conocimos un poco de cada uno, creamos confianza entre
nosotros, y tratamos de enterarnos de lo qué íbamos a
hacer durante la siguiente semana. Nuestra tarea era
acercarnos a los que parece que cuentan menos en
nuestras ciudades, acercarnos a los que se sienten
lejos a pesar de estar a unos metros de nosotros. En
esta familia queremos incluir a los hermanos que nos
acogieron en su casa y a la Comunidad parroquial
(Roberto, José Luis, Rosa, Josemi, Laura, María y
Carlos…), que se hicieron presentes y nos hicieron
partícipes de su vida diaria, algunos incluso compartiendo su casa, su piscina… gracias a todos.
El segundo paso fue conocer a la “familia extensa”, a nuestros “primos” del barrio. A partir del segundo día pasamos las tardes compartiendo actividades de ocio y deportivas con chavales, en su mayoría
de etnia gitana, un grupo de 7 chavales adolescentes
y otro grupo de 10 niños a partir de 6 años.
“Me ha enseñado que la belleza está en lo diferente”
Y desde entonces comenzó el juego de romper prejuicios, de salir más allá de nosotros mismos, de acercarse al otro y de compartir todo eso en grupo. Cada
día pudimos acercarnos a una realidad social: Red
Íncola (Fundación de ayuda a personas inmigrantes)
nos invitó a participar de su Campamento Urbano con
niños cuyas madres tratan de encontrar trabajo, y además a compartir una noche con los voluntarios de “Café Solidario” en el que pudimos acercarnos a personas
76
horizonte
Verano activo
sin hogar, escucharlos y dejarnos tocar por su sencilla
realidad.
parte de este campo de trabajo tenía que ver con
compartir en grupo y con compartir desde la fe.
Cada mañana dedicamos un rato de oración para
prepararnos para el día, para encontrar su sentido
desde el Evangelio, aunque a algunos nos costaba por
las horas, cada vez cobraba más sentido ese momento, y más aún un segundo tiempo por las tardes, en el
que tratábamos de compartir lo que llevábamos por
dentro, lo que nos decía la vida de las personas con
las que nos encontrábamos, y lo que nos decía también la VIDA, con mayúsculas, a cada uno.
“Mi experiencia me ha abierto los ojos a una realidad dura e injusta, pero también me ha enseñado que
hay muchas personas que trabajan por hacer del
mundo un sitio mejor.”
Colaboró con nosotros también Cáritas, permitiéndonos tomar un café con las educadoras y las
chicas de la Casa de acogida de madres jóvenes; en el
Hogar de las Hijas de la Caridad, las hermanas compartieron con nosotros su experiencia de acogida a
niños que temporalmente carecen de una familia; y la
Red de Consumo “La patata” nos ayudó a ver cómo
nuestra forma de consumir tiene mucho que ver con
la creación de un mundo más justo.
“Te das cuenta de que no hace falta hacer gran cosa
para que una persona con unas condiciones de vida
diferentes te regale una sonrisa”
Compartir en grupo y compartir desde la fe, era
especialmente visible en esas celebraciones, pero, si
sabíamos verlo bien, toda la convivencia fue compartir y compartir como Jesús lo hacía: las comidas que
cada uno hacíamos como buenamente podíamos, las
tareas de casa que algunos aprendieron a hacer casi
por primera vez, las discusiones de familia, las bromas y los chistes, unos más malos que otros, las entrevistas personales oficiales y las no oficiales, los
paseos por el barrio, los ratos con los chavales…
“Se les coge un montón de cariño a los chavales de
allí, compañeros y monitores”
“Me ha enseñado a ser más abierta y sensible con
los demás, independientemente de su situación”.
Y poco a poco, nos vimos metidos en un lío. En
ese que te hace darte cuenta de que no estás sólo, de
que existe gente muy cerca que se siente lejos, de que
a veces también nosotros nos sentimos lejos, y que no
podemos conformarnos con que ese sistema injusto
continúe. A medida que pasaban los días el lío se
hacía más incómodo, pero había un lugar donde deshacerlo, donde encontrar la alternativa, por eso gran
horizonte
Y a medida que iban pasando los días, a través de
algunas reuniones, tratamos de darnos cuenta de que
este estilo de vida no es sólo para unos días, que nuestra vida y nuestras decisiones diarias quedan marcadas
después de vivirlo, porque lo importante es lo que cada
uno se lleva a sus lugares de origen.
“Son 10 días que no cambiaría por nada del mundo”
Gracias a todos los voluntarios, animadores, chavales, a cada una de las personas que nos acogió en
su casa y en su realidad. Ojalá el encuentro y la inclusión continúen en cada uno de vuestros caminos.
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Verano activo
“Vacaciones en Roma” o...
“#RomaExperience2”
Hno. Javier Abad
C
uando al regreso de las vacaciones los compañeros y amigos me preguntaron dónde
había estado durante el verano, les dije que
en esta ocasión había cambiado Bujedo por Roma
durante una semana, ante lo cual la exclamación de
todos ellos ‒absolutamente todos‒ fue la misma: “Jo,
por Roma, ¡qué bien! ¡Así ya se puede! Una semanita
de vacaciones…” Y así habría sido si nos hubiésemos
dedicado a hacer lo que sucede en la famosa película
de Willy Wilder de los años 50 con la que comienza
este artículo: pasear y divertirnos, conociendo todos
los recovecos de la Ciudad Eterna...
Pero nosotros no éramos Audrey Hepburn ni Gregory Peck. Más bien fuimos 40 chicos y chicas de 1.º
de Bachillerato de varios de los centros del Sector, y
seis animadores que intentamos acompañarles en la
experiencia, que nos dedicamos a recorrer la ciudad
con algo más que una finalidad turística: la de conocernos a nosotros mismos.
¡Hombre!, es cierto que seguramente Roma tiene
más atractivos que Bujedo, sobre todo para todos
esos chicos de los Grupos Cristianos que llevan yendo a Bujedo en verano durante cinco años seguidos,
desde 6.º de Primaria. Pero lo cierto es que, aunque
haya cambiado la forma y el lugar del encuentro, el
objetivo de pasar seis días juntos en verano sigue
siendo el mismo que cuando realizábamos el encuentro del desierto que muchos habéis conocido: ayudar
al joven a entrar en su interior para que comience un
proceso de interiorización y maduración en su fe. No
sé si lo habremos conseguido...
El del verano de 2013 ha sido la segunda edición
del encuentro. La gran ventaja con respecto al primero fue realizar el viaje en avión, en vez de viajar hasta
Roma en autobús, lo que permitió estar más descansados y ganar un día entero, pero se perdió la cercanía y relación que producen cuarenta horas en carretera. Lo uno por lo otro... El “centro logístico”, en el
que nos alojamos y realizamos las comidas, fue el
colegio lasaliano Pío IX, en plena colina del Aventino y muy cerca de todos los lugares interesantes...
Otra característica, muy acorde con el tipo de jóvenes que participan (adolescentes de 16-17 años), es
que el encuentro se comienza a preparar tiempo antes, con una “estrategia de comunicación” centrada
en las redes sociales... Partiendo de una cuenta de
Twitter (@romaexperience2) se les invita a que, ya
desde antes de partir, vayan compartiendo sus expectativas, deseos y comentarios, lo cual favorece que se
78
horizonte
Verano activo
conozcan previamente, vayan “haciendo grupo” y se
creen vínculos a pesar de la distancia.
“Cuando me dijeron que tenia que escribir
sobre lo mejor de #RomaExperience pensé en
muchas cosas: un lugar maravilloso para
pasar la semana, gente genial con quien
compartir esos días o la oportunidad de
conocer otro país y una cultura diferente
fueron las primeras que se me pasaron por la
cabeza...
Sin embargo, reflexionando un poco más, me
di cuenta de que lo que más me gustó fue el
ambiente que se respira en estos encuentros.
Todo el mundo es un poco más simpático, más
abierto o más generoso. Y es normal, ya que
tenemos la oportunidad de reflexionar acerca
de todas esas cosas en las que no nos
paramos a pensar en nuestro día a día:
nuestro pasado, nuestras convicciones, las
elecciones que hacemos...
Tanto pensar, al final acaba dando fruto y
todo el mundo pone de su parte para lograr
tener un encuentro tan bonito como el de este
año, que fue sin duda inolvidable”.
David Calvo Rodríguez
Yendo a cosas más concretas, la estructura de
#RomaExperience es sencilla, pues se divide en los
días que dura el encuentro:
 El primero, además de viajar, se dedica a
situarse, conocer el entorno, habituarse a las
expresiones italianas... y a cuestionarse “¿qué
hago aquí?”, mediante la “Alegoría del
carruaje”.
 El segundo día se titula “Excavando mi
historia”, y pretende que cada uno se adentre
en el interior de su vida y descubra aquello que
le da hondura y consistencia, visitando para
ello monumentos como el Circo Massimo, la
basílica de San Clemente, el foro de Trajano o
el Panteón.
 La tercera jornada, partiendo de una visita a las
catacumbas de San Calixto, se trabajan los
deseos profundos que cada uno tiene para su
vida, y se analizan las cadenas que nos
aprisionan, a partir la visita a San Pablo
Extramuros o de un “safari fotográfico” por las
tiendas de la Via del Corso, y terminando en la
Iglesia del Gesú para ver la “exaltación de san
Ignacio”: “no hay nada que no sea sorprendente”.
 Aprovechando que Roma es el centro de la
cristiandad, el cuarto día se trabaja acerca de la
“Iglesia, ¿poderosa o servidora?”, visitando
por la mañana la Basílica de San Pedro y el
Vaticano, y recibiendo por la tarde el
testimonio de algunos miembros de la Comunidad de Sant Egidio, que nos muestran la
imagen de un dios encarnado en los
necesitados.
“Mi experiencia en Roma ha sido algo
totalmente diferente a lo realizado antes y me
ha gustado mucho. Ha sido un viaje cultural,
pero más enfocado a nuestro interior; hemos
experimentado un viaje por toda nuestra vida
desde dentro: en cada sitio que visitábamos,
cada actividad que realizábamos, la agenda
por la cual nos guiábamos... estaba todo enfocado a enseñarnos algo y a hacernos
reflexionar sobre una u otra cosa. Eso es de
mucha ayuda y más en esta etapa de la vida
en la que estamos tomando decisiones importantes y necesitamos esos momentos para
reflexionar. Y mejor si se puede con gente de
tu edad que pueda ayudarte con algunos
problemas o con quien tu puedas compartir
tus pensamientos”.
Manuela Ruiz Llorente
horizonte
79
Verano activo
y que por desgracia muchas veces las
descuidamos por otras cosas de menor
importancia. He descubierto que es posible
cambiar el mundo, por difícil que parezca, y
que se cambia poquito a poquito y persona a
persona. Y somos nosotros los que tenemos
que empezar a hacer que las cosas sean
mejores. Que el amor, no solo de pareja, es
imprescindible y que es lo que de verdad
mueve el mundo.
 Otro día se dedica a “La Salle en Roma, La Salle
en el mundo”, lo que permite a los jóvenes
acercarse a la figura del Fundador ‒visitando y
orando en su santuario en la Casa Generalicia‒ y
al mundo lasaliano, cono-ciendo ‒de mano de
nuestro amigo Toli‒ la universalidad del Instituto
y de la misión lasaliana.
 La sexta jornada, más relajada, se organiza en
torno a una dinámica de Emaús, en la que los
muchachos tienen la oportunidad de compartir lo
vivido hasta el momento, interrogarse mutuamente sobre sus expectativas y dificultades y
comprobar que tienen muchos puntos en común.
 El séptimo día, titulado “el sentido de elegir” está
centrado en que los participantes reflexionen en
torno a su propia vocación en el mundo y en la
Iglesia, a partir de dinámicas tan variadas como la
con-templación de “La vocación de San Mateo”,
de Caravaggio, o de la labor de los artistas
concentrados en torno a la Piazza Navona. Porque
“si no vives tus sueños, vivirás los de otros...”
En el tema de Dios, he descubierto que ‒aunque no estoy segura de que exista‒ lo que
tengo que hacer es ayudar, ayudar y ayudar a
los demás.
Y como grupo cristiano, creo que lo que
hemos descubierto es que nunca es tarde para
empezar a hacer bien las cosas, y que
poniendo todos de nuestra parte las cosas
pueden salir genial este curso”.
María Paredes Sánchez
 La responsabilidad mostrada en todo momento, lo
que facilitó la organización de un encuentro tan
complicado en el extranjero; esto se reflejó en
cosas como la puntualidad, el saber estar, el no
tener que llamar a nadie la atención, o el ¡aprender
a montarnos en el metro todos a la vez!
 La personalización de las distintas dinámicas,
facilitada por la entrega de una agenda a cada uno
que sirve ‒a modo de diario‒ para escribir lo
reflexionado y lo descubierto en cada una de las
jornadas.
 Por último, el día de regreso sirve ‒de manera
tranquila‒ para hacer síntesis del encuentro y
plantear el futuro: “Y ahora..., ¿qué?” Es la
jornada en la que las piezas terminan de encajar y
se inicia el post-encuentro: seguir dando vueltas a
lo vivido para plantearse el futuro de otro modo.
Para los que hemos tenido la suerte de participar
como animadores, #RomaExperience2 ha sido una
verdadera gracia, pues nos ha permitido para acompañar a estos jóvenes en el proceso de crecimiento
personal. Además, creemos que se han cubierto con
creces los objetivos planteados. Además, personalmente destacaría como positivos los siguientes aspectos de los muchachos:
“Personalmente #RomaExperience me ha
supuesto darme cuenta de lo feliz que soy a
día de hoy: descubrir una vez más que lo que
de verdad vale en esta vida son las personas,
80
 El sentido de eclesialidad mostrado en momentos
como la visita al Vaticano (donde participamos en
la eucaristía dominical y en el ángelus con el
nuevo Papa), o en las oraciones y celebraciones
horizonte
Verano activo
del propio encuentro, vividas desde la religiosidad
propia de estos jóvenes.
 Particularmente, me acuerdo ahora de un ejercicio
realizado en la Basílica de San Pedro, rodeados de
multitud de gente ante la Piedad de Miguel Ángel,
en el que cada uno se interrogó sobre “¿qué o
quién me sostiene a mí?”
 La alegría y la satisfacción de los muchachos,
expresadas en muchos de los tuits, en las puestas
en común, en las reuniones de grupo pequeño...
“Aunque el encuentro estuvo bastante bien
organizado y nos lo pasamos muy bien, un
“pequeño detalle” que puede mejorarse para
que los siguientes que vayan tengan un
encuentro perfecto es lo de dormir en el
suelo... El hecho de que, tras un largo día
recorriendo las calles de Roma, volviéramos
al gimnasio y tuviésemos que dormir siete
días apiñados en el duro suelo, no resultaba
gratificante. Y como no descansábamos lo
suficiente, al día siguiente nos despertábamos
apenas sin fuerzas. Muchos de nosotros
acabábamos de terminar el Camino de Santiago con el colegio, en el que también
dormimos en el suelo, por lo que el conjunto
de todo no ayudó a conciliar nuestro sueño
apropiadamente. Si el proporcionarnos camas
no es una opción posible, al menos tener
colchonetas para todos sería de gran ayuda.
A pesar de esto, lo pasamos estupendamente,
y vivimos una experiencia muy buena. Yo
volvería a repetir encantada :-)”
Isabel Junquera Godoy
Por otro lado, hay que resaltar también que no todo ha sido fácil, y que no han sido unas “vacaciones
en Roma”, como se sugería en el título, pues también
hubo incomodidades, que se resolvieron de la mejor
manera posible y con alegría. Principalmente se puede decir que es un encuentro muy cansado, en el que
se está caminando por la ciudad prácticamente todo
el día, bajo el sol y el calor romano del mes de julio,
y que las condiciones de alojamiento (en la “palestra”
o gimnasio del colegio), durmiendo en saco de dormir y compartiendo unos pocos baños y duchas, no
son las más idóneas para el descanso... Peor lo llevaron algunas de las chicas, por la limitación aérea en el
peso del equipaje... Menos mal que las comidas italianas, con abundancia de pasta y de pizza, o el tener
la oportunidad de realizar diversas compras en una
capital europea, mitigaron ampliamente todos estos
inconvenientes.
Ha sido, pues, una experiencia de las que vale la
pena vivir ‒tal y como expresan los testimonios de
algunos de los chicos y chicas de Valladolid que asistieron y que se muestran a lo largo de este artículo‒ y
que esperamos se siga repitiendo, para que otros muchos tengan la oportunidad de vivirla en el futuro.
¡#RomaExperience3 ha comenzado!
………..
horizonte
81
Nuestro
postulantado
horizonte
Antiguos Alumnos
Nuestro postulantado
Desde el postulantado ARLEP
Hno. Esteban de Vega
V
oy a dedicar este breve artículo a dar a conocer la realidad del postulantado que tenemos en este momento en la ARLEP. El
hecho de que se encuentre ubicado en otro Sector,
cuando durante bastantes años estuvo en Valladolid,
puede dar lugar a que se desconozca la realidad con
que contamos, a pesar de saber que a todos los Hermanos y lasalianos en general les gusta sentirse informados. Muchos ya conocen la realidad, pero no
vendrá mal recordarlo para quienes lo desconozcan.
El postulantado se encuentra ubicado en el barrio
de Ciudad Lineal, en Madrid, concretamente en Arévalo Lara, 1, en la misma casa que, durante siete
años, fue noviciado. Al iniciar el curso pasado, cuando contábamos con un grupo de tres postulantes, se
vio conveniente que la casa del noviciado fuera temporalmente postulantado, puesto que no había ningún
novicio. Por eso, en este momento es postulantado,
en previsión de que el año que viene, cuando los postulantes sean novicios, vuelva a ser noviciado.
Los postulantes con los que contamos son los siguientes:
- Fidel Echeverría, de nacionalidad venezolana y
española. Tiene 41 años y consiguió la nacionalidad española hace apenas mes y medio. Es médico pediatra y cardiólogo.
- Joel Figueiras, portugués, de 23 años. Inició los
estudios de magisterio en Portugal.
- Filipe Araujo, también portugués y de 23 años.
En Portugal inició los estudios de trabajo social.
Estos dos últimos son antiguos alumnos del Centro La Salle de Barcelos, mientras que Fidel no es
antiguo alumno, pero sí tuvo una fuerte relación con
La Salle de Venezuela, en actividades pastorales y
recreativas de los jóvenes. En este momento, los tres
horizonte
estudian teología en Comillas: Filipe y Joel haciendo
el bienio inicial de Filosofía y Fidel haciendo un curso adaptado de teología para licenciados.
Los formadores somos:
- Hno. Javier Gil, procedente del Sector ValenciaPalma, y actualmente estudiante del segundo curso del bienio de teología y catequesis del Instituto
San Pío X. Sustituyó a partir del mes de septiembre al Hno. Jorge Medina, que había formado parte de esta comunidad durante dos años y que fue
trasladado a la comunidad de Santander. El Hno.
Javier, previsiblemente, estará con nosotros hasta
que termine este curso y vuelva a su sector.
- Hno. Santos Maza, procedente del Sector de Madrid, que se incorporó a la comunidad hace tres
años, proveniente de la comunidad La Salle Institución de Madrid. Es un Hermano jubilado que
dedica gran parte de su tiempo a atender la comunidad.
- Un servidor, como director del postulantado. Este
es mi séptimo año en esta comunidad. Actualmente comparto las tareas de dirección del postulantado con la docencia en el Colegio La Salle‒Institución y en el Centro Superior de Ciencias
85
Nuestro postulantado
Catequéticas San Pío X. Estas tareas las puedo
realizar en este momento porque los postulantes
estudian fuera. Cuando la casa es noviciado, mi
tarea de cara al exterior se ve muy reducida, ya
que mi misión prioritaria es atender a los novicios.
En torno a la Inmaculada, nuestra patrona, hemos
tenido un encuentro muy interesante, pues recibimos
en nuestra casa a otros tres postulantes. Uno de ellos,
Mateusz, polaco de 27 años, pasó con nosotros 10
días. Vino a nuestra casa porque lo más probable es
que el año que viene se una a nuestro noviciado, por
eso es conveniente que se acerque a estudiar intensivamente el español. Y lo ha hecho realmente con
mucha intensidad, ayudado por el Hno. Santos. Lo
más probable es que en el mes de marzo vuelva a
pasar con nosotros otro período semejante.
Los otros dos postulantes que nos acompañaron
eran españoles: Sebastià, del Sector de ValenciaPalma, de 41 años, y Álvaro, del Sector de Madrid,
que tiene 18 años. El primero hace el postulantado en
una comunidad de Mallorca y el segundo en otra de
Tenerife. Son postulantes, sí, pero actualmente hacen
un primer período de postulantado en comunidad,
cerca de sus familias, y continuando con sus estudios
civiles. Su segundo período de postulantado, que será
el próximo año, lo harán ya juntos, como actualmente
lo hacen Fidel, Filipe y Joel, aunque aún no se sabe
dónde. Nuestro nuevo plan de formación, un plan que
se encuentra sometido a los vaivenes propios de cada
momento, pues la realidad numérica se impone, habla
de estos dos períodos bien diferenciados: uno en comunidad “de misión”, acompañado por un Hermano,
86
y otro en un postulantado propiamente, aunque el
lugar donde se ubique pueda ser una comunidad con
una misión propia y no solamente como casa de formación. Estos dos postulantes, por lo tanto, realizan
el primer período, del mismo modo que Filipe y Joel,
los dos postulantes portugueses, hicieron su primer
período, en este caso de dos años, en la comunidad de
Braga.
Ya he dicho que el plan de formación se encuentra
constantemente obligado a diversos cambios, y es
inevitable que así sea. Que ahora el noviciado sea
postulantado es, por ejemplo, uno de esos cambios.
Que para el año que viene haya que pensar en una
nueva comunidad que sea postulantado, para acoger a
los dos nuevos jóvenes, es otro ejemplo. Que el próximo año un postulante vaya a tener 42 años y otro
19, también es algo a tener en cuenta… La realidad
es así: cada vez gente de mayor edad, de experiencias
vitales, formativas y de fe más variadas, con recorridos completamente diferentes…
Lo más importante es que, a pesar de las dificultades, y a pesar de que sean pocos, seguimos contando
con vocaciones, con personas que siguen descubriendo que el seguimiento de Jesús como Hermanos de
La Salle puede ser lo suyo, que siguen pidiendo ayuda para discernir… Esa es una gran gracia que el
Señor nos concede, que debemos atender y cuidar del
mejor modo posible, aunque ese mejor modo nos
obligue, en cada momento, a dar respuestas que no
nos valgan para mucho tiempo. Estar un poco a la
intemperie forma parte de la condición del cristiano.
También de las casas de formación.

horizonte
Nuestro postulantado
Una llamada a la nona
Fidel Ernesto Echeverría, postulante
L
a hora de la nona, hora donde Jesús entregó su vida al Padre en la Cruz, hora de
sufrimiento, pero también de inicio de lo
que marca nuestra creencia, de vencer la
muerte, de vencer el odio. No es a primera
hora, es una hora que ya sobrepaso el meridiano del
día, pero cercano a éste. Así veo yo la llamada de las
vocaciones tardías.
El otro día veía con agrado la noticia de un médico, Pablo Augusto Meloni Navarro, que logró todo lo
que se había propuesto en su vida profesional y llegó
a uno de los más altos cargos en la Organización
Mundial de la Salud. Sin embargo, Dios lo llamaba a
algo diferente y a sus 56 años ha sido ordenado sacerdote en la Arquidiócesis de Lima. Se trata de un
hombre con experiencia de vida, que, visto desde una
mentalidad puramente humana, podría parecer un
loco por dejarlo todo para seguir un ideal, un sueño, a
un hombre que, siendo Dios, se encarnó en un pequeño e indefenso niño. Este médico-sacerdote en
este momento se está enfrentando a la incomprensión
de sus amigos, de sus compañeros de trabajo, de su
gente, y sólo por seguir el evangelio de una forma
radical; pero a este rechazo hay que asociarle los
obstáculos que se le ponen dentro de la misma Iglesia, que cataloga a estos hombres y mujeres de “vocación tardía”, con opiniones muy duras. Parecería
que todos los que dieron una respuesta tardía son, al
final, unos usurpadores de la vocación real, de la
vocación verdadera que solo se puede experimentar
cuando se es joven.
Excusas como la falta de flexibilidad, de hábitos
no “tan sanos”, de una vida no bien fiable o corroborable, de una falsa entrega que solo busca propias
seguridades, hacen que la lucha de las vocaciones
tardías no solo se produzca en el exterior de la Iglesia, sino también en su interior. Se puede llegar a ser
tan duros e injustos que, si no se tuviera bien cimentada la base de lo que se quiere, que no es más que
seguir a Aquel que da vida, y vida en abundancia,
estas vocaciones no serían posibles.
Parecería entonces que la llamada de Dios tiene
un límite en edad, que sólo puede tener como destinatarios a los jóvenes, y se pone hasta un límite real de
un máximo de 30 años e incluso, en muchos de los
casos, menores de 27 años. Parecería ciertamente que
el resto de personas, una vez pasado este límite, no
pueden ni siquiera pensar en ser miembros de una
congregación religiosa. Por encima de esa edad, las
personas con este sentimiento deberían redireccionar
su vida y su pensamiento, porque eso de la llamada
de Dios solo puede ser cierto cuando se es más joven.
Frente a este escenario no escrito, pero sí vivido,
están los planteamientos que voy a comentar: 1. Somos simples humanos ante la grandeza de Dios, y sus
pensamientos son siempre superiores a los nuestros;
no podemos poner límites a su elección y su llamada.
2. La edad trae consigo dificultades para transformar
la personalidad, moldes poco flexibles; pero también
trae consigo un bagaje de vivencias que no habrían
sido posibles si se hubiera tomado una decisión muy
precoz. 3. Al contar con este bagaje de vida, esta
mochila donde se recoge nuestro propio ser, lo que
somos y sentimos, lo que hemos hecho y vivido, podemos comprender mucho mejor los fallos, caídas y
escollos de otras personas, ya que nuestra propia
experiencia nos permite comprender la experiencia
de los demás.
Hay tanto que decir sobre este tema quedaría pendiente un segundo artículo mucho más documentado,
pero lo que sí tengo muy claro para resumir, es que: no
existen vocaciones tardías, sino respuestas tardías.

horizonte
87
Nuestro postulantado
Mi experiencia en la animación
de grupos cristianos
Joel Figueiras, postulante
«Gratis habéis recibido, dad gratis» (Mt 10,8).
sí empieza mi texto. Creo que no hay
expresión que defina mejor el sentimiento que tengo cuando estoy con los
chavales en los grupos cristianos. Es la
expresión bíblica que me gusta utilizar
para resumir lo que es, para mí, ser animador.
A
Después de siete años en grupos siento que es mi
obligación transmitir lo que me fue ofrecido. He tenido la suerte de tener animadores muy buenos que me
acompañaron a lo largo de los años y con los cuales
mantengo contacto. Es la prueba de que el grupo
cristiano es algo más que un simple grupo que se
reúne un viernes por la tarde. Aunque me sienta en
deuda con todas las personas que me ayudaron a crecer, sé que puedo responder a esa deuda ofreciendo lo
que me a mí me fue ofrecido gratuitamente: el ejemplo de una persona que sigue a Jesús.
Más que una persona que prepara una dinámica o
intenta mantener el silencio, el animador es alguien
que da testimonio de su fe.
Un animador es alguien que transmite el tesoro
más grande que tiene y que le fue ofrecido: su fe. Y,
según mi punto de vista, eso no tiene precio. Por eso
tiene que ser ofrecido gratis. Como se nos ofrece el
evangelio, el amor, el cariño, los amigos, una comunidad... Porque son cosas que no tienen precio y nadie puede pagar.
Después de tanta explicación, sé que aún no llego
a ser este animador, pero me motiva sentir que puedo
serlo. Me motiva que, a cada reunión, me sienta más
cercano a los chavales. Me motiva que, de un modo o
de otro, Jesús se haga presente en nuestras reuniones
de grupo. En fin, me motivan muchas cosas. La que
más me motiva es saber que ahora me toca a mí ofrecer lo que antes me dieron. Y hacerlo como no puede
ser de otro modo: gratis.

88
horizonte
Verano
activo
horizonte
Reflexión
Un verano pastoral
Nano Pardo
U
n mes de julio más se dieron cita en
Bujedo un gran número de chicos y
chicas que venían a disfrutar de unos
días de encuentro, alegría, fiesta, oración y celebración. Y un montón de
cosas más.
Del 5 al 14 de julio celebramos la colonia de sexto
de Primaria. “Los piratas” vuelve a ser un buen
reclamo para convocar a más de 140 chicos y chicas
de todo nuestro Sector a vivir unos días en los que
vamos descubriendo cómo en la tripulación pirata los
valores de la cercanía, el esfuerzo, la gratuidad y la
fraternidad, y de vez en cuando mirar al horizonte y
contemplar el regalo de la serenidad que Dios nos
ofrece, son indispensables para una buena travesía.
Este año tocó comandar esta tripulación a los Hnos.
Josemi Fernández Arizmendi y Germán Bolado. Estos dos capitanes supieron llevar a buen puerto a esta
singladura, coordinando y animando a unos aprendices de tripulantes que fueron 28 animadores, la mayoría muy jóvenes, que supieron estar a la altura de
las circunstancias, aunque en algún momento debido
al cansancio de la marcha de los días, hizo que los
comandantes en jefe, les tuvieran que animar y recordar sutilmente sus funciones en la nave.
Del 14 al 23 de julio llegaron a Bujedo otro grupo
de chicos y chicas de primero de la ESO, dispuestos
a vivir una gran aventura. La Gran Aventura del Señor de Los Anillos. Bujedo se convierte en esas fechas en “La Comarca” y allí los 140 aventureros y
aventureras viven en la “Tierra Media”. El Hno. Jorge Sierra y Fito Hernández, acompañados de otros 26
animadores, en este caso un poco más avezados, están siempre dispuestos a poner a estos jovenzuelos en
situaciones apasionantes para disfrutar de estos días e
ir desafiando las distintas situaciones que la aventura
les depara.
En esas mismas fechas se celebró, simultáneamente a la colonia de 1.º de la ESO, el campamento
con los chicos y chicas de segundo de la ESO. Este
año había algo especial, el número de personas que
habían solicitado acudir: 91. Todo un reto para el
grupo de 10 animadores y animadoras, en este caso
capitaneados por Esteban Rodríguez y el Hno. Rafa
Palomera. Después de la experiencia vivida, podemos
decir que el reto fue superado de manera muy satisfactoria. Los muchachos disfrutaron de los días y
pudieron vivir la Ciudad de la Utopía como una auténtica experiencia de construcción de su propia ciudad en el campamento. Hay que resaltar en esta
horizonte
57
Verano activo
ocasión alguna anécdota que, gracias a Dios, no causó ninguna desgracia y que por eso, será recordada
como experiencia. El día que las más de 100 personas
se desplazaban de Bujedo a Fontecha, donde se celebra el campamento, una fuerte tormenta fue compañera de viaje. Cerca de Ayuelas cayó en el pueblo un
rayo a escasos metros de donde se encontraban todos.
El susto y el olor a quemado no se borrarán de las
memorias de estos chicos y chicas y, sobre todo, de
los coordinadores y animadores del campamento.
Pero así quedó. Solo en un susto.
También en Bujedo se dieron cita los chicos de
tercero de la ESO y de cuarto de la ESO con sus
respectivos encuentros del Caballero de la Armadura
Oxidada y el Grupo respectivamente. Grandes adolescentes que supieron encontrarse, celebrar, y reflexionar sobre su vida y sobre la experiencia que están
viviendo de grupo cristiano. Los que tuvimos la suerte de coordinar estos dos encuentros les agradecemos
su vidas como la de un buen grupo de animadores
que a lo largo del curso acompañan sus caminos y
que en verano quieren seguir haciéndose presente en
Bujedo para seguir sintiéndose cercanos y compañeros de viaje.
Y no podemos terminar esta crónica de lo que fue
la actividad pastoral en el mes de julio pasado, sin
hacer referencia al segundo encuentro que celebramos en Roma con los chicos y chicas de primero de
Bachillerato y a los campos de trabajo celebrados
con los grupos de segundo de bachillerato y universitarios.
Romaexperience2 como así quiere llamarse el encuentro que Diego Fernández Requejo y el Hno. Juan
González Castromil coordinan desde el curso pasado,
supuso toda una experiencia para los 50 chicos y
chicas que se dieron cita en la Ciudad Eterna. En esta
ocasión, como el año anterior, estuvieron hospedados
(polideportivo, suelo, saco y esterilla) en el colegio
San Pío IX que gentilmente nos ofrece todas las facilidades para poder prever la infraestructura logística
para este encuentro. Roma ofreció la posibilidad, con
sus monumentos y con su rica historia, de hacer un
recorrido también histórico por todas las experiencias
vitales que se van desarrollando en lo cotidiano de la
vida de estos jóvenes. La experiencia de fe también
es contrastada y vivida en estos días de encuentro.
Los campos de trabajo celebrados en el barrio
Girón, coordinado por el Hno. Roberto Hierro, donde
vivieron en la comunidad pastoral jóvenes de La
Salle Valladolid, Palencia, Gijón y Lourdes; El campo de trabajo celebrado en Basida donde grupos de
Palencia y Santiago pudieron compartir unos días y
hacer visible el Reino y la fraternidad cristiana con
aquella comunidad tan acogedora de Aranjuez; el
campo de trabajo en la casa de acogida de Cáritas en
Villagarcía de Arosa, donde grupos de Santiago fueron conscientes de la realidad del mundo que nos
rodea, y toda la realidad pastoral que se celebra también en Portugal durante los meses de verano, pueden
poner fin a esta crónica llena de vida y experiencia
que un año más el sector de Valladolid ofrece en
verano a los que habitualmente participan de nuestras
ofertas evangelizadora en nuestras obras educativas.

58
horizonte
Verano activo
Entre gente pequeña.
De Loja a Girón y viceversa
Hno. Roberto Hierro
O
s cuento la experiencia de este verano en
dos sitios muy distintos, pero que tiene mucho en común. En esta época de las redes
sociales, pudiera decir que algo tienen en común y
ojalá nos invitara a todos a seguir descubriendo qué
es lo que nos une: “impresionados por la situación
de los hijos de los artesanos y de los pobres”.
Tuve la oportunidad este verano de pasar 15 días
en el Hogar de San Ramón y San Félix en la localidad de Loja (Granada), un recurso para niños y jóvenes en situación de exclusión y tutelados por la Junta
de Andalucía, en este caso. En él conviven niños y
jóvenes desde 5 años hasta 17. Muchas son las causas
que les llevan a estar ahí. La mayoría de ellas no
tienen que ver solo con los niños sino con sus familias, por falta de recursos o problemas; o, en otros
casos, porque son menores inmigrantes cuya tutela
pertenece a los poderes públicos hasta que cumplan
la mayoría de edad.
Mucha diversidad de años, de problemática, de
cultura, de razones... pero una misma familia. Creo
esa es la palabra que mejor define el Hogar, ya que
todos los que allí viven se ayudan a vivir como personas y aprenden unos de otros a ser mejores.
Mi vivencia allí fue emocionalmente muy intensa.
En primer lugar, te sientes como uno más de la familia, con la responsabilidad de educar, porque es el
horizonte
papel que te toca, pero con la suerte de poder compartir el día a día y las 24 horas con los niños y jóvenes del Hogar. Hacer muchas veces de padre y madre, de compañero, de amigo, de educador, no es
nada fácil, pero los chavales lo demandan constantemente. El ritmo de verano era algo más sosegado,
aunque teníamos nuestras dos horas diarias de trabajo
y apoyo escolar, en las que había que ingeniárselas
para motivar a los chicos y hacerles responsables de
sus trabajos. Pero el día a día te presenta muchas
situaciones en las que tienes que estar dispuesto a
dejarte moldear. Eran los momentos de juego en la
piscina, en el comedor, con la play, en el patio, donde
ibas conociendo más a los chicos y te ibas haciendo a
su momento, porque cada uno tiene su momento que
hay que saber entender y respetar. Se trata de crear
vínculo, una actitud esencial para todo aquel que
quiere luego educar con algo más que los simples
límites o roles. El educador-acompañante tiene que
tener mucho de esto, de padre y madre a la vez, de
poner límites y de saber llegar a cada uno, de estar a
las duras y a las maduras, de compartir lo bueno y
alegrarse y de ser capaz de acompañar el duelo y la
falta de sentido…
Todo ello en medio de situaciones muy difíciles,
cuando ves lo que hay detrás de cada uno de estos
chavales. Han vivido en su corta edad situaciones tan
duras que muchas veces parece un milagro que sigan
adelante, pero ahí están dispuestos a avanzar con su
59
Verano activo
vida, y nosotros con la responsabilidad de saber tocar
el cable que les hará volver de nuevo a funcionar.
Maravillosa y delicada tarea.
Así transcurrieron mis días. Entre despertar a los
chicos, acompañarlos en sus estudios, disfrutando
con ellos de los ratos de ocio, compartiendo con los
educadores, siendo en todo momento un “hermano”,
en las comidas, en el ocio, en el estudio, a la hora de
acostarlos (momento entrañable sobre todo con los
pequeños), dialogando en comunidad, descansando y
programando juntos, estando al servicio de, disfrutando de esta vocación de ser educadores a tiempo
completo, compartiendo los sueños con otros y haciendo realidad lo que dice La Salle: “Somos pobres
hermanos, poco conocidos. Sólo los pobres vienen a
buscarnos”. Ellos, los chicos, vienen a nosotros muchas veces obligados, pero esperan de mí algo más
que les pueda devolver la ilusión y la lucha por vivir.
Así que fue una suerte poder hacer de educador de
calle por unos días, recorriendo algunas de las casas
de nuestros chicos para invitarles a participar en algunas actividades de ocio que habíamos preparado
para ellos. Allí se nos iban sumando otros chavales
del barrio, que se animaban a participar. Algo se me
parecía a mí a eso de la parábola de salir a los caminos e invitar a todos los que quieran venir a la fiesta.
Un poco de evangelio es lo que estábamos viviendo y
haciendo realidad.
Si bien es verdad que no todas las actividades nos
salieron como esperábamos, fueron momentos de gran
alegría el ver cómo los jóvenes del barrio compartían
con los voluntarios de tú a tú, se esfumaban los prejuicios y nos íbamos convirtiendo en una familia por
unos días. Muestra de ello fue que alguno de nuestros
chicos gitanos se quedó a compartir con nosotros la
oración y la cena, participando como uno más. De
nuevo, lo del Reino, el banquete de bodas donde habrá
sitio para todos y nadie quedará excluido.
Para todos los que compartimos esos días, fueron
momentos muy vivenciales y profundos. Ver cómo
otros jóvenes salen de su casa y se abren a otra realidad tan distinta, y se interrogan y se ponen en el lugar
de los otros y se quejan por tanta injusticia real y falta
de oportunidades. Y experimentar cómo otros niños y
jóvenes que otras veces llamamos excluidos, salen de
su rol y se ponen a participar como uno más y nos
enseñan lo bueno que hay en su corazón, y nos sorprenden con la naturalidad y amistad que desprenden
con otros.
Y cuando me quise dar cuenta, se me habían pasado los días y me tocaba regresar a mi realidad cotidiana, a Girón, dónde me esperaban también otros
niños y jóvenes. En este caso, con un grupo de jóvenes voluntarios de nuestros coles, nos pusimos manos
a la obra para hacer de estos días unos días significativos para estos chicos que no tienen la suerte de salir
de vacaciones ni de disfrutar de otras cosas.
60
En fin, un verano lleno de experiencias entre los
jóvenes, un verano lleno de redes y conexiones y,
sobre todo, un verano al servicio de aquellos que más
dificultades tienen, pero que te enseñan que la vida es
para compartirla y para arriesgarte a vivirla en profundidad, en el encuentro y en el compartir. Gracias a
todos ellos por llenar de sentido mi ser educador y
Hermano.

horizonte
Verano activo
Un lugar donde las paredes hablan
Hno. Fernando González
V
oy a narrar un viaje del centro a la periferia.
De Europa a América, del barrio de Guadalupe al barrio San Agustín, del colegio La
Salle Jobson a la Casa de los Jóvenes Pablo Aguilar.
Físicamente pueden ser horas de vuelo o tiempos
largos de colectivo, pero mentalmente y espiritualmente supone desubicarse y resituarse mucho más
allá de lo que uno había pensado.
Llegamos con nuestras mochilas cargadas de ilusión, de ganas de colaborar, pero también de miedos
y prejuicios, para quedarnos durante un mes compartiendo la vida con la gente del barrio. Siempre acompañados y guiados por personas que llevan tiempo
luchando junto a los protagonistas de esta historia:
niños, jóvenes y mujeres del barrio.
Cada día nos acercábamos allá para echar una
mano en distintos “oficios” de cara a mejorar la realidad física de ese espacio y apoyar las realizaciones de
autopromoción de los habitantes de la casa. Diez
jóvenes españoles acompañados por dos educadores
hemos podido suscitarles autoestima y autovaloración sobre el proyecto que llevan entre manos. Tan
importante como las pequeñas acciones de carpintería, pintura o fabricación de juguetes didácticos que
hemos realizado, ha sido la convivencia diaria con los
niños y los adultos de la casa. Por eso la colaboración
en la copa de leche o el comedor de los sábados, así
como la ayuda en el emprendimiento de las mujeres
(en realidad hemos sido aprendices), han favorecido
la creación de vínculos de amistad que han puesto en
marcha una transformación interior en cada uno de
nosotros.
Acogida porque el grupo de personas que gestiona
la casa mantiene la puerta siempre abierta y uno sabe
que, al acercarse allá, va a encontrarse con Eduardo,
con Francisco o con algún otro rostro amable que te
mira esperando que te sientas como en tu casa y tomes la iniciativa que consideres oportuna. Los jóvenes voluntarios del colegio La Salle Jobson saben
bien que esto es así y que pueden acercarse cuando
quieran a hacer talleres con los niños, acompañados
por Luciano, Bruno, Agostina u otros monitores.
Quiero subrayar tres palabras que resumen lo que
hemos vivido durante este tiempo en la Casa de los
Jóvenes: presencia, acogida y acompañamiento.
Acompañamiento porque Isabel, Orlando y Ledis,
como educadores, tienen experiencia en saber situarse al lado del que está en proceso de crecimiento
personal. En este sentido hemos visto cómo el acompañamiento es mutuo con el grupo de madres: codo
con codo junto a Marisa, Marta, Sara, Hilda y otras,
van creando un espacio de trabajo y reflexión que
mira al futuro. Soy testigo de cómo, entre todos, se
van venciendo dificultades para salir adelante y se
van dando oportunidades que antes la vida no proporcionó a estas mujeres. Soy testigo de cómo se
acompaña a los niños de manera más o menos formal
o estructurada, pero siempre gastando tiempo con
ellos para hacerles felices y abriles horizontes de
futuro en un contexto donde la escuela y la sociedad
no salvaguardan sus derechos.
Presencia porque Cristian hace realidad lo que él
mismo dice: “La gente viene al barrio, pero no se
queda. Es necesario estar siempre esperando a que
los jóvenes se acerquen y encuentren con quién charlar de sus cosas tomando un mate”. Soy testigo de
esa presencia constante que acoge y no juzga, que da
una oportunidad a cada joven que se acerca con todo
el peso de su realidad, porque “la fe ha de servir a la
vida y a las personas”.
Mientras los jóvenes españoles hacían suyo este
espacio comunitario, como adulto no perdí nunca la
oportunidad de escuchar a los agentes implicados en
la promoción del barrio y de hacer con ellos un análisis crítico de la realidad. Recuerdo las largas conversaciones con Orlando sobre la situación de Argentina
y de la Pampa, a distintos niveles (político, económico, social, medioambiental). Recuerdo las charlas con
Julián en las que comencé a comprender otra lógica
horizonte
61
Verano activo
en la promoción de los más desfavorecidos de la sociedad. Una lógica que no tiene que ver con mi sentido de la eficacia y que parte de un contexto estructuralmente empobrecido y de situar al pobre, como
protagonista, en el centro del discernimiento y de la
toma de decisiones en favor de su liberación.
A medida que el tiempo pasaba, mi mochila personal se iba aligerando. Fui descargando pesos que
llevaba de España y caminando al compás de mis
nuevos amigos. A otro ritmo, pero con más sentido.
La mochila se fue llenando de otros pesos, de otras
vidas, de otras cosmovisiones. No puedo renunciar a
mi condición de educador cristiano y a mirar la realidad desde esa perspectiva, pero he de reconocer que
en mí se han ampliado horizontes y he podido profundizar en la misión a que somos enviados cotidianamente en el lugar donde estemos. La síntesis vital
de esta experiencia, la brújula para este camino, tiene
estas claves lasalianas que he encontrado durante este
mes: “desde la fe, en fraternidad, para el servicio
educativo de los pobres”.
Y es que hemos podido compartir proyectos y trabajo con un equipo de personas muy unido, que
atienden a distintas necesidades con una implicación
personal admirable. A través de ellos hemos comprendido lo que significa este espacio de contención
para los niños y jóvenes del barrio: un lugar alternativo que les brinda una oportunidad de ser protagonistas de su proceso de crecimiento personal y de crear
estructuras que realmente sirvan de modelo de promoción y convivencia.
En la Casa de los Jóvenes confluyen diversos intereses por la presencia de personas de distinta edad y
género, pero son armonizados gracias al continuo
diálogo entre quienes lideran estos proyectos. Como
dicen los estudiantes voluntarios de España: “es un
pequeño lugar que nos hace grandes”. Yo digo que es
un trocito del Reino de Dios.
62
Un lugar donde las paredes hablan. Hay un dicho
que utilizamos para cuestionar lo sucedido en algún
lugar concreto: “Si las paredes hablaran...”. Pues bien,
en este caso las paredes hablan, y dicen muy bien, yo
diría que bendicen, lo que sucede cotidianamente en la
sala de los jóvenes. De primeras ya es agradable relacionarte con la gente rodeado de una obra de arte mural. Pero con el tiempo, el significado que cobra esa
gran mujer tejiendo lazos entre dos realidades, entre
dos mundos separados más por la injusticia que por la
distancia, llega a tocarte el corazón. Sí, las paredes
hablan con trazos seguros, con colores alegres, con la
intención de abrir una puerta a la esperanza.
Una de nuestras tareas como grupo de voluntarios
consistía en retocar, restaurar alguna parte deteriorada del mural y darle un barniz que asegure su continuidad en el tiempo. Sencilla y profunda tarea a la
vez. Nuestras manos han tocado la pobreza y nos
hemos dejado tocar por ella. Nuestros ojos han contemplado el sufrimiento y nos hemos dejado mirar
por él. Me atrevo a decir que ese mural más que mirarlo, te mira. Como un icono moderno que te interpela si te acercas a él. La huella que esta experiencia
ha dejado en nosotros es profunda. Gracias a la inquietud de algunos educadores de Santa Fe y de Valladolid, los jóvenes se han encontrado con otros
niños y jóvenes con los que han creado una red de
relaciones que no te deja indiferente y que te exige
seguir luchando por la transformación personal y
colectiva.
Hemos llegado al final de este viaje, y lo que más
cuesta es la despedida. Si nos duele la injusticia,
también nos duele separarnos de aquellos con quienes
nos hemos sentido familia durante treinta días. Puede
parecer poco o mucho tiempo, pero la verdad es que
el cariño compartido hace que esos días se prolonguen largamente. Los que hemos vuelto a España, a
nuestra ciudad, somos los mismos pero no lo mismo.
De hecho, aunque nos despedimos en Santa Fe con
llanto, nuestra vinculación permanece a través de las
redes sociales y de las organizaciones en las que seguimos implicados tratando de mantener vivo el tejido de la solidaridad.
Gracias a todos/as y cada uno/a de quienes nos
habéis acogido y acompañado en este intenso viaje
del centro a la periferia, porque juntos hemos aprendido a salir de nosotros mismos para encontrarnos
con el otro. Seguís estando presentes en nuestra vida.
…………………………………………………….
horizonte
Verano activo
Burkina Faso:
con los brazos abiertos
Mateo Ruiz (Asturias)
E
ste verano he disfrutado de la oportunidad de
participar en un proyecto de voluntariado de
PROYDE en Burkina Faso, junto con el
Hermano Luis Rebolledo y Miguel Caneiro.
Allá por el mes de julio y en medio de las interminables colas de embarque del aeropuerto, comenzaba nuestra experiencia. No recuerdo muy bien nada
del vuelo: simplemente la expectativa de qué me iba
a encontrar al bajar de aquel avión. Mi primer contacto con África del Oeste fue una oleada de aire abrasador y de extraño aroma que se coló en el avión al
abrir la compuerta, cual promesa de los nuevos horizontes que aguardaban al otro lado.
Durante las siguientes seis semanas disfrutamos
de un país de contraste y de la hospitalidad de unas
gentes que comparten todo lo poco que tienen.
Los primeros días de nuestra estancia convivimos
con la comunidad de Hermanos de Ouagadougou,
capital del país, y comenzamos a apreciar las enormes desigualdades presentes en aquella sociedad, la
riqueza desmesurada de unos poco y la pobreza generalizada de muchos. Sin embargo, ante esta situación
los burkinabeses lucían su mejor arma, aquella que
no cuesta nada y que alegra los corazones de quienes
les rodean: su sonrisa. Nunca dejaré de sorprenderme
ante su capacidad de disfrutar de las pequeñas cosas
que rodean su día a día y de ser felices con lo que la
vida les ofrece. En Europa nos pasamos la vida persiguiendo espejismos que proyecta nuestra ambición;
en África la gente, simplemente, VIVE.
El resto de nuestra estancia y el proyecto tuvieron
lugar en el colegio Pierre Koula de Diebougou, pequeña localidad al suroeste de la capital. Allí, entre la
humildad y la camaradería, llevamos a cabo la renovación de la cocina y los comedores del centro. De
dicha experiencia me quedo con las relaciones que
establecimos con los compañeros de trabajo, sin importar de qué color fuese nuestra piel o qué idioma
hablásemos, y sobre todo me quedo con las tardes de
actividades con los niños, la pura inocencia de la
infancia, las ganas de jugar, su capacidad de disfrutar
hasta del último detalle del más simple de los juegos,
horizonte
sus incendiarias carcajadas, sus alocadas carreras, su
felicidad desatada.
CLIMA y Bérégadougou fueron nuestro pequeño
oasis en el camino. Durante una semana pudimos
dejar de lado la albañilería y convivir con la comunidad de familias que allí recibe formación, principalmente agrícola, pero también humana. En aquel lugar
descubrimos que Burkina además de la belleza de sus
gentes también puede presumir de zonas con exuberante naturaleza.
La acogida con la que nos encontramos en todos
los lugares logró que, poco a poco, nos deshiciésemos de la burbuja protectora que día a día levantamos
a nuestro alrededor y que solo permitimos traspasar a
nuestra familia y a nuestros amigos más cercanos. En
África no entienden de burbujas, en África entienden
de abrazos.
63
Verano activo
En África descubrí otra extensión de la realidad
lasaliana: los sueños, deseos, ilusiones, proyectos…
de Hermanos que van encontrando su realidad y haciéndole frente, Hermanos como Salvador Ajanguiz,
hasta este momento, con sus 73 años, en el colegio de
Bandenya que él impulsó y ha visto pasar de deseo,
sueño… a un proyecto en vías de finalizar en su obra
civil. El Hermano Juan, dando pasos por ese deseo de
recoger casi 100 niños y niñas de las calles de Ouagadougou en un hogar digno que haga realidad el
sueño de La Salle: servicio educativo a los más desfavorecidos.
Dos ejemplos de Hermanos que ven en la noche
las mismas estrellas, la misma luna que nosotros, y
en el día el mismo sol y cielo que desde aquí, y nos
dicen que el espacio no es distancia; la distancia es la
ausencia de sueños, deseos, ilusiones, proyectos… La
distancia es ausencia de lucha por encontrar el sapo al
que pueda besar y se haga príncipe, la cenicienta con
apariencia de desheredada e indigente criada que
busco, la lámpara mágica que pueda frotar…
Tampoco puedo obviar el hecho de que, por diversos lugares del país, la mano de las empresas occidentales realiza su detestable trabajo de expolio y
destrucción. Industrias europeas y canadienses extraen hasta el último gramo de cualquier mineral
medianamente interesante que puedan encontrar, y
ofrecen al país mínimas compensaciones que, evidentemente, la mayoría de la población no llega a disfrutar, y desplazan pueblos enteros de aquí para allá. Me
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gustaría que fuésemos más conscientes del precio que
otros deben pagar para que nosotros disfrutemos de
las comodidades que el día a día nos ofrece.
Cuatro meses después, mi corazón y mi mente extrañan África. Atrás quedan Ouagadougou, Diebougou, Bobo Dioulasso, Gaoua, Toussiana, Banfora,
Bérégadougou, Deodougou, Nouna, Kongoussi y
tantos otros horizontes que se abrían ante mis asombrados ojos europeos.
Distantes asoman centenares de sonrisas, sonrisas
puras, sonrisas sinceras, sonrisas como carta de presentación. En el momento en el fui capaz de eliminar
mis barreras, de abrir mis brazos, de aceptar lo que
me ofrecían, encontré que me sentía como en casa, y
esa sensación fuera de mi hogar, fuera de mi tierrina
querida, nunca la tuve y precisamente la fui a encontrar en un país en el que destacaba sobremanera como
extranjero y donde nunca me hicieron sentir como tal.
En África encontré un sentido muy tangible al lema de PROYDE, conocí a mucha gente pequeña
como la que trabajamos también desde España, repartida por muchos lugares pequeños, hace cada día
muchas cosas pequeñas, que logran que el mundo sea
un lugar mejor.
En África descubrí que lo que realmente importa,
nunca salta a la vista. En África dejé hermanos para
toda la vida. En África me sentí querido. Con África
me siento en deuda. En África aprendí a vivir.

horizonte
Verano activo
¡Gracias desde la India!
Emilio Fernández (Managua, Palencia), Adrián Salgado (Asturias), Silvia Díez (Valladolid) y Hno. Jorge Sierra
U
n proyecto de verano empieza muchos meses antes, con una intensa preparación que,
en nuestro caso, nos hizo vivir expectantes
esperando la fecha en la que, afortunadamente, íbamos a poder participar a través de PROYDE en una
experiencia misionera en el llamado tercer mundo.
En concreto nuestros pasos se dirigieron a Boys’
Town (cerca de Madurai, al sur de la India).
Llegado el día, comenzamos nuestra "aventura" en
la India quizás de la forma más intensa que se puede
imaginar: aterrizando en Calcuta. Lo siguiente fue
abrir los ojos, pues no se nos ocurre otra cosa que sumergirnos en el tráfico de la ciudad en dos taxis. A
velocidad de vértigo, recorrimos el trayecto entre
obras de Madre Teresa, ricksaws, vehículos de toda
clase y miles de personas de todas las edades saltando
entre los coches. La casa de las religiosas donde nos
hospedamos está muy cerca de algunos mercados, así
que, con los ojos como platos, visitamos las zonas de
telas, de bebidas, de recuerdos y de carnes, impresionados por ver los animales, incluyendo cientos de
enormes cuervos, entre los productos y las personas de
toda clase. Nuestra estancia en Calcuta nos permite
conocer, de primera mano y bien acompañados, la
labor de Madre Teresa y las Misioneras de la Caridad.
esta realidad con ilusión, deseando ver, tocar y sentir,
y acercarnos, en unos días, a Madurai y Boys’ Town.
Durante nuestra estancia en Calcuta pudimos ver
varias obras de Madre Teresa, como la Leprosería de
Tithaghar, donde los internos tejen telas de saris y
otras prendas típicas en la India, siendo el único lugar
donde se componen los conocidos saris-hábitos de las
Hermanas de la Madre Teresa. Todo el centro es
autogestionado por los propios internos. También
vimos los quirófanos, las salas de visitas médicas, las
zonas donde curan las úlceras, la escuela para los
niños, las huertas... La lepra sigue existiendo, y sigue
siendo una lacra social y sanitaria en la India, a la que
sólo atienden, desde su fe, unos pocos locos necesarios.
Parecía que había pasado mucho tiempo, pero
apenas llevábamos unas horas en la India. Es tal la
intensidad de imágenes, olores y sonidos (especialmente los cientos de cláxones), que cada minuto pasado parece una hora. Un buen comienzo para asumir
horizonte
En nuestras conversaciones coincidimos en cuánto
llama la atención ver tantas personas, en todos los
sitios, tan diferentes, tan coloridas y tan acostumbradas al ruido y la combinación de olores y sabores.
Alguien dijo que el gran valor de la India son las
personas; y, cada hora que pasa, confirmamos que
tenía razón.
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Verano activo
unas horas de trabajo por la mañana, y a la tarde llega
el deporte con los muchachos, para después proponerles nosotros nuestros talleres. Para ello todo es
válido, así que cualquier cosa une. Lo que para nosotros no es nada importante, para ellos es un mundo.
Ellos vienen a recibirnos y nos llevan a cada uno de
sus cotagges para compartir también sus juegos.
Toca despedirse de Calcuta y volar a Madurai,
con varias escalas, allí nos recibieron en el aeropuerto
los Hermanos Joseph y Brinesh, con los que descubrimos que el tráfico de las zonas rurales del sur no
era como el de Calcuta, aunque siga siendo terrible.
Nos esperaba una agradable cena india, comida a la
que nos estamos acostumbrando rápidamente, eso sí,
sin salsas picantes. Los chicos ya estaban durmiendo,
por lo que aprovechamos para acomodarnos y descansar.
Realmente se nos hace tan difícil explicar lo que
vivimos, que las palabras parecen pobres frente a
nuestras sensaciones. El capellán, el padre Lucas,
redentorista, nos decía en el día de la fiesta de su
Fundador que lo específico de nuestra labor como
voluntarios es dar y recibir de los más pobres. Desde
luego, quisimos dar un poquito de nosotros mismos,
pero recibimos cien veces más.
La hospitalidad de la India es fantástica. Se sienten honrados de nuestra presencia, y nosotros muy
agradecidos por sus atenciones. Con gran respeto nos
han enseñado el trabajo que les vamos a ayudar a
hacer, en la Saint Benildus House, comenzando por
la pintura.
Seguro que os imagináis por qué en todas las fotos
estamos los cuatro con una sonrisa en la cara, que no
se nos ha quitado desde que llegamos: muchachos,
Hermanos y personal están siempre sonriendo, felices
de acogernos. Y, nosotros, felices de asomarnos a su
realidad desde el compromiso con esta gran y humana ONGD que es PROYDE.
Uno de los objetivos de los proyectos de verano es
conocer la realidad del país que nos acoge, sobre todo
en lo que respecta a la educación y la solidaridad.
Uno de los fines de semana nos acercamos a un lugar
paradigmático de la geografía india: el Cabo Comorín, la punta del subcontinente, donde se juntan tres
mares. A pesar de que no acompañó el tiempo y nos
mojamos de lo lindo, pudimos disfrutar de una agradable visita al centro de meditación del Sri Vivekananda y al último lugar de reposo de parte de las cenizas de Gandhi.
La lluvia sirvió como excusa para seguir experimentando la hospitalidad de las gentes de este país.
Con unas pocas palabras, rápidamente fuimos acogidos bajo techo por un amigo de los Hermanos de La
Salle, que incluso nos invitó a una reunión social en
torno al proyecto solidario del Club Rotario de la
zona.
En Boys’ Town descubrimos la esencia y los principios de nuestro Fundador en el rostro de los niños
que allí estudian, así como en la dedicación e implicación de los Hermanos. La jornada discurre con
66
El lunes 5 de agosto teníamos cita en Tuticorín
con la fiesta de Nuestra Señora de las Nieves, patrona
de la ciudad: una impresionante y multitudinaria manifestación de religiosidad popular, que nos ha dejado
horizonte
Verano activo
aquí, una familia conocida por su cercanía y fraternidad desde tantos lugares ya no tan lejanos.
La despedida fue tan especial que cuesta describirla. Fuimos agasajados con nuevos bailes y numerosos regalos típicos: sombreros de marajás, sedas,
colgantes de sándalo y un cuenco con forma de flor
de loto, símbolo de bendición y honor para el pueblo
indio.
boquiabiertos, y cuyo momento central, la procesión
del paso de la Virgen, discurre justo por delante de una
obra que conocen muy bien los voluntarios de PROYDE de otros años: el colegio La Salle de Tuticorín,
donde no pocos ladrillos han sido colocados por lasalianos españoles a lo largo de muchos veranos.
El siguiente sábado pudimos visitar Boys' Village,
un centro en el que los Hermanos ofrecen alojamiento, manutención y formación a niños hasta los 14
años, todos ellos huérfanos o de familias desestructuradas, en muchas ocasiones rechazados por sus familiares Sin embargo, viven felices en un nuevo hogar
donde se sienten queridos y seguros. Una vez terminada esta formación, se les orienta a seguir estudiando, bien en un centro de formación profesional, como
es Boys' Town, o bien los estudios superiores en el
colegio La Salle de Tuticorín.
También pudimos visitar RTU (Reaching the Unreached, "Llegando a los que nadie llega"), donde un
Hermano galés, James Kimpton, comenzó su trabajo
en el año 1974. Su labor consiste en atender a un
numerosísimo grupo de niños y niñas, algunos enfermos o portadores de VIH, que viven hasta los 14
años en pequeñas casas, en grupos de ocho, junto a
una mujer que hace las funciones de madre. A partir
de allí se les reúne en "Hostels" más grandes para
continuar sus estudios o capacitación profesional.
Muchas historias se entrelazan en cada una de las
realidades a las que nos acercamos. Historias que
empiezan trágicamente y que, gracias a la solidaridad
de muchas personas, encuentran un camino de dignidad y oportunidades. Nosotros somos solo una pequeñísima parte en todo este engranaje, pero nos
sentimos orgullosos de ser la "cara" de PROYDE
horizonte
Una parte de nuestros corazones sigue hibernando
en India, pero aprovechamos las últimas horas en
Madurai para revisar nuestro trabajo con la comunidad de Hermanos que nos acogía y valorar toda la
experiencia, sobre todo de cara a próximos proyectos
de voluntariado desde PROYDE. La palabra que más
se repetía fue gracias, sobre todo porque el trabajo ha
resultado finalmente una excusa para acercarnos a la
realidad de la India, para encontrarnos con muchas
personas increíbles y para caminar un paso más en el
compromiso solidario que nos facilita PROYDE. A
todas las personas que lo han hecho posible, en India
y en España, GRACIAS de todo corazón.

67
Verano activo
Carta-testimonio del grupo de
voluntarios de PROYDE en Nicaragua
Hno. Tirso Verdugo, Hno. Rufino Arconada, Raúl y Cristina (Burgos)
E
l equipo de voluntarios de PROYDE formado
por Cristina, Tirso, Rufino y Raúl, después de
un largo día de viaje con escala en Miami
llegábamos, por la noche del día 2 de julio, al colegio
La Salle de Managua. En el aeropuerto nos estaban
esperando los Hermanos Francisco y Marcelo.
Calor, color, sonidos y... ¡mucha vida!
La primera sensación ya nos la habían desvelado
hace tiempo: "nada más salir del avión sentiréis una
fuerte caricia de calor" y... así fue. Un calor físico,
pegadizo, húmedo... que no se desprende de ti aunque
te duches o aunque llueva, aunque estés a ras de un
lago o en lo alto de un volcán... Ese calor se nos presentó como fiel compañero de esta experiencia.
La segunda sensación fue la que trasmite el color:
los colores de las débiles lucecitas blancas que veíamos desde el avión, o los colores luminosos de los
adornos ¿navideños? de las calles de la antigua Managua que se encienden para animar por la noche las
abandonadas ruinas de lo que fue el origen de la ciudad, o los vivos colores de la naturaleza en mil tonalidades de ese fértil verde que comparte espacio con
el azul de los lagos o del inmenso cielo.
Tercera sensación, los sonidos... el bullicio de la ciudad por el movimiento de la gente, vehículos que con
sus distintos tipos de pitidos indican que te adelantan
o que te ceden el paso o todo lo contrario... junto con
el sonido de la música en los puestos ambulantes de
las calles, o de la propaganda política, o de un grupo
de jóvenes que simplemente están disfrutando del
momento... todo ello parece una continua feria. Incluso por la noche los sonidos no cesan: insectos, pájaros y otros animales cogen el relevo y no
68
paran hasta el amanecer, sobre las 5:00, momento en
el que suben aún más el volumen para indicar que un
nuevo día comienza. Y en esa época del año, los sonidos que cada vez tienen más protagonismo son los
de la lluvia o el chaparrón o el bocajarro de agua que
cae si ningún tipo de aviso y que puede ser acompañado por una batería de truenos y relámpagos.
Todas estas primeras sensaciones no hicieron nada
más que prepararnos a la sensación que aún solo habíamos empezado a palpar... la sensación de vida.
¡De mucha vida! Ya en la primera noche, cuando nos
recibieron Manuel, Moisés, Thomas, Víctor, Leopoldo, que junto con Marcelo y Francisco forman la
comunidad de Hermanos en la que estábamos viviendo esos primeros días, pudimos sentir esa vida en sus
saludos y rostros.
Vida que se nos hizo completamente patente entre
los más de 1.600 alumnos, que junto a 80 profesores
y 30 personas más conforman el Instituto Pedagógico
La Salle de Managua. Durante este curso estaban
celebrando su centenario. Y ya fue una explosión de
vida, cuando pudimos asistir a un acto en agradecimiento a los Hermanos de La Salle en Nicaragua por
la labor de coordinación y animación de la Pastoral
Educativa del Vicariato Apostólico de Bluefields
durante los últimos 14 años. Este agradecimiento,
que hicieron los propios maestros coordinadores de
las distintas zonas en presencia del Obispo Auxiliar
del Vicariato Monseñor David, estuvo personalizado
en el Hno. Francisco Gutiérrez. Al acto asistió la
horizonte
Verano activo
comunidad de Hermanos y nosotros fuimos testigos
de la mucha vida que la comunidad ha dado y está
dando a su alrededor.
Conocimos a los cuatro miembros del Equipo de
Coordinación del Vicariato de Managua y a los 34
técnicos que forman cada uno de los nueve Equipos
de Coordinación Educativa que se encargan de animar a más de 600 profesores repartidos por 378 escuelas. Este Vicariato ocupa unos 55.000 kilómetros
cuadrados, más de la mitad del territorio total de Nicaragua, educa en sus escuelas rurales a 15.000
alumnos. Por ellos estábamos allí. PROYDE lleva
más de nueve años colaborando en su formación.
Compartimos una mañana con ellos trabajando la
mediación como modelo de resolución de conflictos
entre iguales en el ámbito escolar. Les ofrecimos una
motivación y explicación del tema junto con ejemplos prácticos y un posible sistema de intervención,
así como de numerosos recursos para la formación de
los futuros mediadores, y apoyos para el seguimiento
del proceso mediador en la escuela. Un tema que les
intereso mucho, y que fue rápidamente demandado
para seguir trabajándolo a nuestro paso por las coordinaciones, ya que es uno de los problemas a los que
se enfrentan día a día en las escuelas.
Durante la tarde pasamos una jornada de convivencia en la ciudad de Granada con el equipo del
secretariado de la pastoral educativa del Vicariato:
Hno. Francisco, Belisario y María.
Estuvimos un día más por allá conociendo la obra
de los Hermanos de La Salle en la ciudad de León y
al día siguiente salíamos hacia las escuelas rurales de
tres coordinaciones del Vicariato: Waslala, Siuna y
Mulukuku.
Hasta hicimos un programa mañanero en Radio
Waslala...
Las dos siguientes semanas estuvimos residiendo
en la ciudad de Waslala, a 150 Km de la capital, Managua. Hospedados en la casa cural, lo que nosotros
conocemos como la casa parroquial. En una gran
parcela estaba la iglesia, la vivienda del sacerdote y
zonas muy amplias de jardines con mucha vegetación. En este tiempo todo era muy verde, pues era la
época del invierno con lluvias muy frecuentes. La
temperatura no bajó de los 23 grados. Convivimos
con el párroco, un sacerdote capuchino y nicaragüense, el Padre Carlos.
Esos días, en Nicaragua tenían una semana de vacaciones, así que estuvimos ayudando a la parroquia.
Limpiando los jardines, visitando algunas instituciones de la ciudad como el asilo de ancianos y la casa
materna, donde van las mujeres que están embarazadas, un mes antes de dar a luz.
También estuvimos ayudando a la Cofradía del
Divino Niño, que celebró su fiesta el día 19 de julio y
estaba preparando una serie de adornos. Realizamos
unos cuantos metros de guirnaldas. Colaboramos con
los niños de la Infancia Misionera, con los jóvenes de
la Pastoral y con las madres. Fueron momentos amenos y entretenidos.
Por las mañanitas, a las 6 de la mañana realizábamos un programa de radio en Radio Waslala. Lo escucha mucha gente en toda esa región, es una manera
que tiene la Iglesia Católica de evangelizar, de llegar a
las comunidades campesinas, una manera de dar avisos o noticias. Nosotros fuimos cada día, de dos en
dos, acompañando al Padre Carlos y hemos hablado
de: nuestra ONGD PROYDE, educación y valores, san
Juan Bautista de La Salle… Fue una experiencia muy
interesante.
horizonte
69
Verano activo
También visitamos unas casas de campo y vimos
el duro trabajo de los campesinos. Conocimos cómo
son las plantaciones de cacao, los cafetales, las plantaciones de yuca y también las plantaciones de arroz.
Estuvimos de gira, las escuelas rurales
Pasado ya el ecuador de la experiencia, éramos
cada vez más conscientes de que durante el encuentro
directo en las escuelas rurales era realmente cuando
estábamos verdaderamente conociendo la realidad.
Fue una aventura nueva cada vez que nos dirigíamos en gira a una de esas escuelas perdidas en la
geografía de Nicaragua. Nos dividíamos en dos parejas, una: Tirso y Cristina, y otra: Rufino y Raúl; de
esta manera visitamos más escuelas.
A ellas llegamos a través de una carretera (realmente era un camino de tierra) en bus o incluso en
camiones. En varias ocasiones tuvimos que pararnos,
bajar y esperar durante una hora hasta que el bus era
capaz de despegarse del lodo y subir una cuesta.
Después de esto, nos quedaba un largo trecho por
senderos entre vegetación y plantaciones. Algunas
veces, el sendero cruzaba el río (sin puente) y otras,
era el mismo cauce de un arroyo que al llover se cubría de agua. Esos tramos los hacíamos a pie o en
“bestia” (caballo, mula, macho…) que nos prestaban
los propios campesinos y padres de alumnos de la
escuela a la que íbamos a visitar. Ellos mismos nos
hacían de guías. Es tremendo ver la soltura con las
que estas personas pueden caminar entre estos lodazales mientras que tú eres incapaz de moverte sin
saber hacía donde caminar para no embarrarte más o
quedarte literalmente pegado. Hemos de confesaros
que hay momentos en que pasamos algo de miedo
ante estas situaciones, pero también os garantizamos
que hemos estado en muy buenas manos y que los
70
niños deseaban que llegáramos a sus escuelas, y eso
era lo más importante.
Nada más llegar, los niños y niñas nos recibían
con canticos y aplausos. Como cada mañana, comenzaba la jornada cantado el himno de Nicaragua y el
de la Pastoral Educativa. Sus profesores nos presentaban, y comenzábamos con nuestras actividades.
Dependiendo del número de alumnos (entre 20 y 60)
les dividíamos en dos grupos. Realizábamos con
papel unos molinos de viento y les enseñábamos
muchas canciones y juegos. Y en ocasiones hasta
aparecía un payaso que hacía reír a muchos y llorar a
alguno ante lo desconocido. El material necesario
(folios, tijeras, pinturas…) lo llevábamos nosotros y
tenían que compartirlo. Para ellos todo era novedad,
al principio se mos-traban tímidos y nerviosos, pero a
lo largo de la jornada iban siendo más espontáneos y
alegres.
Las materias se imparten desde las 8:00 hasta las
12:00. Durante el receso (su recreo) de 10:00 a 10:15,
los alumnos comen una ración de arroz con frijoles
(alimentos donados por un Programa de Alimentación Mundial) y en ocasiones una tortilla (tortita de
harina de maíz) o plátano frito que aportan las propias familias. Todo es cocinado por las madres de los
alumnos; ellas se organizan por turnos durante el
curso escolar. La escuela consta de tres edificios pequeños de una planta: la casa del maestro, la cocina y
la propia escuela (con una, dos o tres aulas). Todos
estos edificios tienen las paredes de madera y el tejado de cinc, el suelo es tierra pisada o cemento; aquellas escuelas que han recibido una subvención internacional han podido construir aulas de hormigón. El
mobiliario en las escuelas es muy sencillo, los alumnos utilizan sillas con brazo; todas son diferentes ya
que antiguamente las daba el estado, pero actualmente no; de modo que cada familia que matricula a su
hijo tiene que aportar la silla de madera hecha a
mano.
horizonte
Verano activo
- la migración interior del país en busca de nuevas
tierras para cultivar, que hace muy difícil la escolarización;
- las inclemencias meteorológicas: lluvias y consecuentes crecidas de los ríos que hacen muy peligrosa la asistencia de los alumnos que tienen que recorrer diariamente grandes distancias por el tipo de
poblamiento disperso en la montaña;
- la violencia interfamiliar consecuencia de una
sociedad en conflicto por el machismo tradicional
agravado por las secuelas de la guerra, y
La última media hora la dedicábamos a reunirnos
con los padres y poder compartir con ellos inquietudes, valorar su implicación y potenciarla, hablar de la
educación, la alimentación y el futuro de sus hijos. A
continuación, comíamos junto al técnico de la Pastoral Educativa que siempre nos acompañaba, un almuerzo preparado por las madres.
El viaje de vuelta a la ciudad nos sirve para recordar la experiencia vivida, trayendo a nuestra mente
los rostros de los niños y niñas que hemos conocido.
También sentimos cierta impotencia por el poco
tiempo que pasamos con ellos y las necesidades que
hemos observado. Ante todo, valoramos la labor que
está realizando la Iglesia, fomentando la educación
de estos alumnos, gestionando los recursos necesarios y formando integralmente a los maestros.
Talleres de formación a maestros: ¿construir o
plantar?
Justamente, uno de los puntos fuertes del proyecto
de cooperación de PROYDE que este verano estamos
desarrollando ha sido la formación de los equipos
técnicos y de buena parte del profesora-do. Una Pastoral que desarrolla su misión desde 1985, atendiendo
las 378 escuelas de Educación Primaria multigrado
en las nueve parroquias y coordinaciones: Waslala,
Siuna, Mulukukú, Ubú Norte, El Ayote, Muelle de
los Bueyes, Rama, Nueva Guinea y Los Ríos de
Bluefields. En ellas se educa a 15.000 niños y niñas.
- los raptos de las niñas de 12 a 15 años por varones para establecer una relación sentimental, lo que
hace que un importante número del alumnado femenino no termine de forma adecuada su escolarización.
En las tres parroquias y coordinaciones que visitamos realizamos un curso de capacitación para estos
profesores. En Waslala con 89 maestros durante un
día y una tarde, en Siuna con 80 en dos días y en
Mulukukú con 44 en un día y una mañana. En todos
ellos tratamos los siguientes temas:
- Educación en la interioridad, con una relajación
y visualización.
- Características del maestro cristiano, con una
charla motivadora sobre la importancia del educador
vocacionado.
- El tema estrella: la mediación, desarrollándola y
ejercitando casos concretos en pequeños grupos de
profesores.
- Una serie de talleres más prácticos sobre: recursos
matemáticos, animación lectoescritora, manualidades
y dibujo, e iniciación al aprendizaje cooperativo.
- Y varias sesiones de: juegos de interior y exterior,
canciones, y… la actuación del payaso Juan Paco Pedro de la Mar como un ejemplo de las posibilidades
que tiene el juego teatral y humorístico del clown en el
aprendizaje de los niños.
En nuestros diálogos con los profesores conocimos algunas de las dificultades a las que ellos tienen
que dar respuesta:
- el absentismo escolar por el trabajo infantil durante el tiempo de la cosecha;
horizonte
71
Verano activo
cotidiano, por vuestro testimonio de fraternidad y
acogida. Habéis sido nuestra familia en este tiempo.
A todos los profesores del Vicariato que junto con
los padres y madres de los alumnos, nos habéis dado
un testimonio de dedicación y esfuerzo continuo en
favor de la educación que no olvidaremos.
Fue una experiencia realmente gratificante el haber podido compartir con más de 230 profesores
nuestras vivencias como educadores. Sintiéndonos
participantes de una gran “masa forestal” que es la
Educación. Haciendo realidad este cuento que hemos
recitado en cada encuentro:
“Cada persona, en su existencia, puede tener dos
actitudes: construir o plantar. Los constructores pueden demorar años en sus tareas, pero un día terminan
aquello que estaban haciendo. Entonces se paran, y
quedan limitados por sus propias paredes. La vida
pierde el sentido cuando la construcción acaba. Pero
existen los que plantan. Estos, a veces sufren con las
tempestades, las estaciones, y raramente descansan.
Pero al contrario que un edificio, el jardín jamás para
de crecer. Y, al mismo tiempo que exige la atención
del jardinero, también permite que, para él, la vida
sea una gran aventura”.
A todos los niños, niñas y jóvenes, de las escuelas
rurales y parroquias que nos habéis permitido entrar
en vuestra vida y nos habéis regalado vuestra atención, alegría, confianza, sueños… Muchas gracias
por compartir con nosotros ese tiempo. Ha sido el
mayor descubrimiento. Sois testimonio de esperanza,
fuerza y felicidad.
Al Vicariato Apostólico de Bluefields. A todas las
personas de fe y buena voluntad que estáis dedicados
de por vida a ello: religiosos y religiosas que, junto
con los sacerdotes y delegados de la Palabra, compartís muchos kilómetros a vuestras espaldas y siempre
nos habéis recibido con una gran sonrisa en vuestro
rostro, reflejo de un sencillo y entregado corazón.
Sois verdadero testimonio de una Iglesia viva en
Misión permanente. Iglesia pobre y solidaria junto a
las personas de las comunidades. Gracias por mostrarnos que aquí la Iglesia es fiel reflejo del proyecto
de Jesús.
Del otro lado del mundo, al sur del lago Managua
y a unas cuadras del Masaya.
Cuando estábamos haciendo las maletas para volver al otro lado del mundo, como nos decían por allá,
éramos conscientes de que nuestro equipaje iba a ir
lleno, pero, no de cosas sino de recuerdos: personas,
miradas, sonrisas, experiencias… todas ellas situaciones vividas durante esos días gracias a PROYDE.
Durante esos 45 días hemos intentado colaborar
con todo nuestro empeño en hacer realidad el lema de
nuestra ONGD “mucha gente pequeña haciendo muchas cosas pequeñas en muchos lugares pequeños
pueden cambiar el mundo”.
Solamente nos queda decir: ¡gracias! Gracias a
todas esas personas pequeñas pero de gran corazón
con las que nos hemos ido encontrando esos días:
A la Coordinación de la Pastoral Educativa, alma
mater de este proyecto, que junto a los Equipos Técnicos que hemos visitado, os habéis preocupado por
nuestro bienestar. Respondiendo siempre a nuestras
peticiones y necesidades. Muchas gracias por vuestra
escucha, atención y desvelos. Habéis sido testimonio
de generosa entrega y compromiso.
El 13 de agosto terminábamos de hacer nuestro
equipaje y no queríamos dejar de llevarnos esas sensaciones que teníamos los primeros días: calor, color,
sonidos y sobre todo… ¡mucha vida!

A los que nos acogieron y cuidaron con mucha
dedicación, preocupación y cercanía en todo momento. Muchas gracias por vuestro compartir sencillo y
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horizonte
Verano activo
África me habita
Hno. Luis Rebolledo
Deseaba llegar cuanto antes
por ver si mi realidad seguía estando.
Acariciaba prolongar el retorno
por contemplar que mi presencia
amasaba un futuro de sazón.
en suspiro de lágrima, en susurro de labios,
en corazones alcanzados, en manos asidas,
en roce ausente, abrazo olvidado
y saludo de espacios
en compás musical de cuatro tiempos.
Leo brotes de primavera,
en aparente fibra dormida.
Laten jadeos de espera anhelada
en voluntad de natural gravidez.
Deseaba llegar cuanto antes
por abrir mi maleta y mimar en raíz estrenada
la ofrenda de amor suspirado
con mi flirteada África de rostro velado
en voluntad de amor de primavera.
Deseaba llegar cuanto antes
por abrir mi maleta y libar,
con libre y callada mudez,
el África que, vaciado en mi ser,
habitaba protegido, al amparo
de una noche de luna y amor.
Deseaba llegar cuanto antes
abrir mi maleta e impregnarme,
por instantes y de nuevo,
del vaho sin tiempo de África.
África apasiona.
Lleva África el considerar
que tú te prendes de su hechizo
y ella se embelesa en tu seducción
Deseaba llegar cuanto antes
por abrir mi maleta:
tomar la ropa coqueteada por África
y besar el placer de su deseo amado,
horizonte
Deseaba llegar cuanto antes…
Abrí mi maleta…
África, mi pretendida, me habita.
Raúl, también estaba allí.
Santiago de Compostela, 2013

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Verano activo
Voluntariado en la Escuela La Salle
de Kirenge, Ruanda
(Una auténtica UNIVERSIDAD para los más pobres de entre los pobres)
José Manuel Merino, Ólga Muñoz y Óscar Pérez (Los Corrales de Buelna)
A
lo largo de tres semanas entre julio y agosto, tres lasalianos de Los Corrales de Buelna
hemos llevado a cabo un proyecto solidario,
organizado por PROYDE, en la Escuela La Salle de
Kirenge, Ruanda.
El equipo, formado por José Manuel Merino (Jefe
de Estudios de Ed. Infantil y Primaria y profesor de
lengua inglesa), Olga Muñoz (profesora de lengua
inglesa) y Óscar Pérez (antiguo alumno del centro La
Salle de Los Corrales de Buelna y responsable informático de AMICA www.amica.es) ha desarrollado
dos proyectos educativos.
El primero de ellos, un curso de aprendizaje y perfeccionamiento de lengua inglesa a los profesores de
la escuela, impartido por Olga y José Manuel por las
mañanas. De acuerdo a su nivel de competencia en
inglés, formamos dos grupos, que cada día, en el
período final, uníamos para enseñarles canciones y
danzas, metodología que les facilitará su labor como
profesores de inglés. Las tardes las dedicábamos a los
niños que, aunque estaban de vacaciones, seguían
acudiendo a la escuela, su casa. Con ellos trabajamos
también las canciones y las danzas y ¡cómo disfrutaban! El segundo proyecto, preparar la sala de Informática de la escuela, lo llevó a cabo Óscar: 16 equipos nuevos quedaron instalados en red con todo el
software apropiado; sin duda alguna, la primera sala
de informática en muchos kilómetros a la redonda y
el primer ordenador que muchas personas iban a utilizar.
La experiencia ha sido maravillosa. La Escuela La
Salle de Kirenge (Ruanda) es el más puro reflejo de
aquello que La Salle quiere ser en el mundo y en
nuestra sociedad: La Salle en Kirenge educa a niños
pobres para que puedan mejorar su sociedad, acoge a
todos (independientemente de su religión, raza…) y,
sobre todo, es una escuela con una gran calidad humana y cristiana. El Hermano Aniceto Ramírez, el
director mexicano de la escuela, es el gran creador de
esta “universidad de la colina de Kirenge”; él es el
alma mater del trabajo educativo que allí se desarrolla y es, también, el hombre incansable que busca y
busca proyectos y subvenciones para mejorar la calidad educativa y asistencial de la escuela (todos los
alumnos de la escuela, más de trescientos, comen
diariamente en la escuela gratuitamente). El Hermano
Aniceto es el educador lasaliano que piensa todos los
días en cómo hacer para que los niños de Kirenge “se
salven”, sean felices, desde la plataforma de la Escuela La Salle, un referente en las colinas de Kirenge,
la casa de todos los que han entrado alguna vez en
contacto con la escuela.
Los tres constatamos que la experiencia ha sido
maravillosa. África enamora, y esto no es un dicho. No
sabemos si hemos enseñado mucho o si se ha hecho
mucho bien, no se sabe si habrán aprendido algo de
nosotros o si hemos sido muy eficaces. Lo que sí atestiguamos es que en África se aprende, que las gentes
africanas son sabias y, por lo tanto, tienen mucho que
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horizonte
Verano activo
aportar; sus enseñanzas vitales son fuertes bofetadas
para nuestras personas y nuestro estilo de vida. Nos
hemos encontrado con gente feliz, con gente generosa,
con gente que nos ha acogido, con gente que se ha
sentido muy orgullosa de invitarnos a compartir unas
galletas en su casa, muchas veces lo único que tenían
para ellos. Nos hemos encontrado con gente que vive
el presente, que no pierde tiempo en pensar qué tiene
que hacer mañana, gente que simplemente disfruta el
momento y lo considera un auténtico regalo. Nosotros
hemos aprendido que uno puede ser muy feliz comiendo siempre las mismas alubias, careciendo de
señal de Internet o bien duchándose con un caldero de
agua todas las mañanas.
Es precioso ver cómo desde unas sencillas escuelas, desde el mundo educativo, el cambio es posible:
las personas crecen, las sociedades se hacen más
dignas, las personas se conocen mejor a sí mismas, y,
lo más importante, el espíritu crítico ayuda a ser libre
y la libertad nos aproxima a la felicidad. Esto es lo
que hacen en África las Escuelas de La Salle.
Muchos nos han preguntado cuáles son nuestros
sentimientos ahora, cuáles eran nuestras motivaciones antes de partir… Nuestros sentimientos son claros, pero están encontrados. Por un lado, sentimos
lástima de aquella gente: muchos pasan una terrible
necesidad, durante la estación seca apenas tienen
agua ni para lavarse, muchos sólo comen una vez al
horizonte
día un plato, y es en la escuela…; sin embargo, hemos visto que la gente es feliz, volvemos valorando
muchísimo más todo lo que tenemos: el agua, la electricidad, la casa, la ropa, la comida, la salud… cosas
normalitas para nosotros, que pasan todos los días de
forma casi imperceptible delante de nosotros pero
que, una vez que hemos comprobado que el disfrutarlas es un lujo para millones de personas, hace que las
valoremos más, que las veamos y sintamos como
algo al alcance de unos privilegiados. Sí, una vez de
vuelta, nos sentimos unos mimados y unos privilegiados. En cuanto a nuestras motivaciones originales… el deseo de enseñar se transforma rápidamente
en deseo de formar parte de aquello, de ser uno más,
de ser “parte de su paisaje”, de aportar, como los
demás, lo que uno mejor sabe y compartirlo con los
que ya llamas “los tuyos”.
No tenemos ningún mérito, somos voluntarios,
como tal nos costeamos todo, y vamos con el apoyo
de una ONG, PROYDE, con gran experiencia en el
mundo de los proyectos solidarios de verano. Somos
uno de los eslabones de la solidaridad, es quizás el
último eslabón, pero cerca de nosotros ha habido
muchas personas que han trabajado mucho para conseguir ciertas sumas económicas que han hecho posible algunos de los proyectos que hemos visto que se
desarrollan en las escuelas. Nos gusta la aventura,
nos gustan las lenguas, nos gusta conocer otras culturas pero, sobre todo, disfrutamos intentando hacer
felices a otros, intentando ver a Dios en la sonrisa que
todos los niños nos regalaban sin cesar desde el amanecer hasta la puesta del sol. Y ver esto, ser testigo de
tal agradecimiento, sentir a Dios pulular por entre
aquellas gentes, es algo que no tiene precio. Será una
experiencia imborrable en nuestras vidas, vitalmente
una referencia importante.
Podéis leer las crónicas de estas tres semanas en el
siguiente blog: www.jmamerino.blogspot.com, o bien
en la página web de la Delegación Noroeste de
PROYDE, www.miraralsur.net
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Verano activo
Campo de trabajo INSO-Girón 2013
Hno. Roberto Hierro
D
el 17 al 26 de Julio, 12 chicos/as de 2.º de
bachillerato y universidad compartieron
parte de su verano en la Comunidad Pastoral del barrio Girón de Valladolid, dispuestos a gastar
su tiempo en acercarse a las realidades de exclusión
social de la ciudad. Entre el texto encontraréis algunos de los testimonios que ellos mismos han escrito.
La propuesta se hizo a posibles voluntarios a través
de los Colegios La Salle, como parte de las experiencias pastorales de verano. La respuesta fue amplia, ya
que varios de los “grupos cristianos” del sector se
mostraron interesados en ella, además de otros alumnos que habían tenido experiencias de voluntariado
durante el curso.
Finalmente recibimos a 12 jóvenes, 11 de 4 Grupos pre-universitarios: Gijón (Luis, Adrián, Cris y
Nico), Burgos (Claudia y Silvia), Palencia (Elisa,
Adrián y Pablo) y Valladolid (Kike y Andrés), a los
que se sumó Pilar, alumna de La Salle Valladolid. No
vinieron solos, 4 animadores de “gran talla” los
acompañaron y fueron decisivos para que toda esa
mezcla funcionara, David, Natalia, el Hno. Luis y
Marta supieron acertadamente “estar” y “acompañar”
en cada una de las experiencias.
Y ahora viene lo importante, toda esta variedad de
procedencias fue una gran riqueza, que se vio aumentada por el deseo de todos de ir más allá de nuestras
fronteras, de acoger aún a mayor “variedad” de personas, personas gitanas, inmigrantes, personas sin hogar,
personas sin familia o sin recursos económicos…
“El campo de trabajo me ha abierto los ojos”
Lo primero fue formar la “familia nuclear”, dedicamos el primer día a conocernos entre los que íbamos a compartir la casa durante esos 10 días, conocimos un poco de cada uno, creamos confianza entre
nosotros, y tratamos de enterarnos de lo qué íbamos a
hacer durante la siguiente semana. Nuestra tarea era
acercarnos a los que parece que cuentan menos en
nuestras ciudades, acercarnos a los que se sienten
lejos a pesar de estar a unos metros de nosotros. En
esta familia queremos incluir a los hermanos que nos
acogieron en su casa y a la Comunidad parroquial
(Roberto, José Luis, Rosa, Josemi, Laura, María y
Carlos…), que se hicieron presentes y nos hicieron
partícipes de su vida diaria, algunos incluso compartiendo su casa, su piscina… gracias a todos.
El segundo paso fue conocer a la “familia extensa”, a nuestros “primos” del barrio. A partir del segundo día pasamos las tardes compartiendo actividades de ocio y deportivas con chavales, en su mayoría
de etnia gitana, un grupo de 7 chavales adolescentes
y otro grupo de 10 niños a partir de 6 años.
“Me ha enseñado que la belleza está en lo diferente”
Y desde entonces comenzó el juego de romper prejuicios, de salir más allá de nosotros mismos, de acercarse al otro y de compartir todo eso en grupo. Cada
día pudimos acercarnos a una realidad social: Red
Íncola (Fundación de ayuda a personas inmigrantes)
nos invitó a participar de su Campamento Urbano con
niños cuyas madres tratan de encontrar trabajo, y además a compartir una noche con los voluntarios de “Café Solidario” en el que pudimos acercarnos a personas
76
horizonte
Verano activo
sin hogar, escucharlos y dejarnos tocar por su sencilla
realidad.
parte de este campo de trabajo tenía que ver con
compartir en grupo y con compartir desde la fe.
Cada mañana dedicamos un rato de oración para
prepararnos para el día, para encontrar su sentido
desde el Evangelio, aunque a algunos nos costaba por
las horas, cada vez cobraba más sentido ese momento, y más aún un segundo tiempo por las tardes, en el
que tratábamos de compartir lo que llevábamos por
dentro, lo que nos decía la vida de las personas con
las que nos encontrábamos, y lo que nos decía también la VIDA, con mayúsculas, a cada uno.
“Mi experiencia me ha abierto los ojos a una realidad dura e injusta, pero también me ha enseñado que
hay muchas personas que trabajan por hacer del
mundo un sitio mejor.”
Colaboró con nosotros también Cáritas, permitiéndonos tomar un café con las educadoras y las
chicas de la Casa de acogida de madres jóvenes; en el
Hogar de las Hijas de la Caridad, las hermanas compartieron con nosotros su experiencia de acogida a
niños que temporalmente carecen de una familia; y la
Red de Consumo “La patata” nos ayudó a ver cómo
nuestra forma de consumir tiene mucho que ver con
la creación de un mundo más justo.
“Te das cuenta de que no hace falta hacer gran cosa
para que una persona con unas condiciones de vida
diferentes te regale una sonrisa”
Compartir en grupo y compartir desde la fe, era
especialmente visible en esas celebraciones, pero, si
sabíamos verlo bien, toda la convivencia fue compartir y compartir como Jesús lo hacía: las comidas que
cada uno hacíamos como buenamente podíamos, las
tareas de casa que algunos aprendieron a hacer casi
por primera vez, las discusiones de familia, las bromas y los chistes, unos más malos que otros, las entrevistas personales oficiales y las no oficiales, los
paseos por el barrio, los ratos con los chavales…
“Se les coge un montón de cariño a los chavales de
allí, compañeros y monitores”
“Me ha enseñado a ser más abierta y sensible con
los demás, independientemente de su situación”.
Y poco a poco, nos vimos metidos en un lío. En
ese que te hace darte cuenta de que no estás sólo, de
que existe gente muy cerca que se siente lejos, de que
a veces también nosotros nos sentimos lejos, y que no
podemos conformarnos con que ese sistema injusto
continúe. A medida que pasaban los días el lío se
hacía más incómodo, pero había un lugar donde deshacerlo, donde encontrar la alternativa, por eso gran
horizonte
Y a medida que iban pasando los días, a través de
algunas reuniones, tratamos de darnos cuenta de que
este estilo de vida no es sólo para unos días, que nuestra vida y nuestras decisiones diarias quedan marcadas
después de vivirlo, porque lo importante es lo que cada
uno se lleva a sus lugares de origen.
“Son 10 días que no cambiaría por nada del mundo”
Gracias a todos los voluntarios, animadores, chavales, a cada una de las personas que nos acogió en
su casa y en su realidad. Ojalá el encuentro y la inclusión continúen en cada uno de vuestros caminos.
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Verano activo
“Vacaciones en Roma” o...
“#RomaExperience2”
Hno. Javier Abad
C
uando al regreso de las vacaciones los compañeros y amigos me preguntaron dónde
había estado durante el verano, les dije que
en esta ocasión había cambiado Bujedo por Roma
durante una semana, ante lo cual la exclamación de
todos ellos ‒absolutamente todos‒ fue la misma: “Jo,
por Roma, ¡qué bien! ¡Así ya se puede! Una semanita
de vacaciones…” Y así habría sido si nos hubiésemos
dedicado a hacer lo que sucede en la famosa película
de Willy Wilder de los años 50 con la que comienza
este artículo: pasear y divertirnos, conociendo todos
los recovecos de la Ciudad Eterna...
Pero nosotros no éramos Audrey Hepburn ni Gregory Peck. Más bien fuimos 40 chicos y chicas de 1.º
de Bachillerato de varios de los centros del Sector, y
seis animadores que intentamos acompañarles en la
experiencia, que nos dedicamos a recorrer la ciudad
con algo más que una finalidad turística: la de conocernos a nosotros mismos.
¡Hombre!, es cierto que seguramente Roma tiene
más atractivos que Bujedo, sobre todo para todos
esos chicos de los Grupos Cristianos que llevan yendo a Bujedo en verano durante cinco años seguidos,
desde 6.º de Primaria. Pero lo cierto es que, aunque
haya cambiado la forma y el lugar del encuentro, el
objetivo de pasar seis días juntos en verano sigue
siendo el mismo que cuando realizábamos el encuentro del desierto que muchos habéis conocido: ayudar
al joven a entrar en su interior para que comience un
proceso de interiorización y maduración en su fe. No
sé si lo habremos conseguido...
El del verano de 2013 ha sido la segunda edición
del encuentro. La gran ventaja con respecto al primero fue realizar el viaje en avión, en vez de viajar hasta
Roma en autobús, lo que permitió estar más descansados y ganar un día entero, pero se perdió la cercanía y relación que producen cuarenta horas en carretera. Lo uno por lo otro... El “centro logístico”, en el
que nos alojamos y realizamos las comidas, fue el
colegio lasaliano Pío IX, en plena colina del Aventino y muy cerca de todos los lugares interesantes...
Otra característica, muy acorde con el tipo de jóvenes que participan (adolescentes de 16-17 años), es
que el encuentro se comienza a preparar tiempo antes, con una “estrategia de comunicación” centrada
en las redes sociales... Partiendo de una cuenta de
Twitter (@romaexperience2) se les invita a que, ya
desde antes de partir, vayan compartiendo sus expectativas, deseos y comentarios, lo cual favorece que se
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horizonte
Verano activo
conozcan previamente, vayan “haciendo grupo” y se
creen vínculos a pesar de la distancia.
“Cuando me dijeron que tenia que escribir
sobre lo mejor de #RomaExperience pensé en
muchas cosas: un lugar maravilloso para
pasar la semana, gente genial con quien
compartir esos días o la oportunidad de
conocer otro país y una cultura diferente
fueron las primeras que se me pasaron por la
cabeza...
Sin embargo, reflexionando un poco más, me
di cuenta de que lo que más me gustó fue el
ambiente que se respira en estos encuentros.
Todo el mundo es un poco más simpático, más
abierto o más generoso. Y es normal, ya que
tenemos la oportunidad de reflexionar acerca
de todas esas cosas en las que no nos
paramos a pensar en nuestro día a día:
nuestro pasado, nuestras convicciones, las
elecciones que hacemos...
Tanto pensar, al final acaba dando fruto y
todo el mundo pone de su parte para lograr
tener un encuentro tan bonito como el de este
año, que fue sin duda inolvidable”.
David Calvo Rodríguez
Yendo a cosas más concretas, la estructura de
#RomaExperience es sencilla, pues se divide en los
días que dura el encuentro:
 El primero, además de viajar, se dedica a
situarse, conocer el entorno, habituarse a las
expresiones italianas... y a cuestionarse “¿qué
hago aquí?”, mediante la “Alegoría del
carruaje”.
 El segundo día se titula “Excavando mi
historia”, y pretende que cada uno se adentre
en el interior de su vida y descubra aquello que
le da hondura y consistencia, visitando para
ello monumentos como el Circo Massimo, la
basílica de San Clemente, el foro de Trajano o
el Panteón.
 La tercera jornada, partiendo de una visita a las
catacumbas de San Calixto, se trabajan los
deseos profundos que cada uno tiene para su
vida, y se analizan las cadenas que nos
aprisionan, a partir la visita a San Pablo
Extramuros o de un “safari fotográfico” por las
tiendas de la Via del Corso, y terminando en la
Iglesia del Gesú para ver la “exaltación de san
Ignacio”: “no hay nada que no sea sorprendente”.
 Aprovechando que Roma es el centro de la
cristiandad, el cuarto día se trabaja acerca de la
“Iglesia, ¿poderosa o servidora?”, visitando
por la mañana la Basílica de San Pedro y el
Vaticano, y recibiendo por la tarde el
testimonio de algunos miembros de la Comunidad de Sant Egidio, que nos muestran la
imagen de un dios encarnado en los
necesitados.
“Mi experiencia en Roma ha sido algo
totalmente diferente a lo realizado antes y me
ha gustado mucho. Ha sido un viaje cultural,
pero más enfocado a nuestro interior; hemos
experimentado un viaje por toda nuestra vida
desde dentro: en cada sitio que visitábamos,
cada actividad que realizábamos, la agenda
por la cual nos guiábamos... estaba todo enfocado a enseñarnos algo y a hacernos
reflexionar sobre una u otra cosa. Eso es de
mucha ayuda y más en esta etapa de la vida
en la que estamos tomando decisiones importantes y necesitamos esos momentos para
reflexionar. Y mejor si se puede con gente de
tu edad que pueda ayudarte con algunos
problemas o con quien tu puedas compartir
tus pensamientos”.
Manuela Ruiz Llorente
horizonte
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Verano activo
y que por desgracia muchas veces las
descuidamos por otras cosas de menor
importancia. He descubierto que es posible
cambiar el mundo, por difícil que parezca, y
que se cambia poquito a poquito y persona a
persona. Y somos nosotros los que tenemos
que empezar a hacer que las cosas sean
mejores. Que el amor, no solo de pareja, es
imprescindible y que es lo que de verdad
mueve el mundo.
 Otro día se dedica a “La Salle en Roma, La Salle
en el mundo”, lo que permite a los jóvenes
acercarse a la figura del Fundador ‒visitando y
orando en su santuario en la Casa Generalicia‒ y
al mundo lasaliano, cono-ciendo ‒de mano de
nuestro amigo Toli‒ la universalidad del Instituto
y de la misión lasaliana.
 La sexta jornada, más relajada, se organiza en
torno a una dinámica de Emaús, en la que los
muchachos tienen la oportunidad de compartir lo
vivido hasta el momento, interrogarse mutuamente sobre sus expectativas y dificultades y
comprobar que tienen muchos puntos en común.
 El séptimo día, titulado “el sentido de elegir” está
centrado en que los participantes reflexionen en
torno a su propia vocación en el mundo y en la
Iglesia, a partir de dinámicas tan variadas como la
con-templación de “La vocación de San Mateo”,
de Caravaggio, o de la labor de los artistas
concentrados en torno a la Piazza Navona. Porque
“si no vives tus sueños, vivirás los de otros...”
En el tema de Dios, he descubierto que ‒aunque no estoy segura de que exista‒ lo que
tengo que hacer es ayudar, ayudar y ayudar a
los demás.
Y como grupo cristiano, creo que lo que
hemos descubierto es que nunca es tarde para
empezar a hacer bien las cosas, y que
poniendo todos de nuestra parte las cosas
pueden salir genial este curso”.
María Paredes Sánchez
 La responsabilidad mostrada en todo momento, lo
que facilitó la organización de un encuentro tan
complicado en el extranjero; esto se reflejó en
cosas como la puntualidad, el saber estar, el no
tener que llamar a nadie la atención, o el ¡aprender
a montarnos en el metro todos a la vez!
 La personalización de las distintas dinámicas,
facilitada por la entrega de una agenda a cada uno
que sirve ‒a modo de diario‒ para escribir lo
reflexionado y lo descubierto en cada una de las
jornadas.
 Por último, el día de regreso sirve ‒de manera
tranquila‒ para hacer síntesis del encuentro y
plantear el futuro: “Y ahora..., ¿qué?” Es la
jornada en la que las piezas terminan de encajar y
se inicia el post-encuentro: seguir dando vueltas a
lo vivido para plantearse el futuro de otro modo.
Para los que hemos tenido la suerte de participar
como animadores, #RomaExperience2 ha sido una
verdadera gracia, pues nos ha permitido para acompañar a estos jóvenes en el proceso de crecimiento
personal. Además, creemos que se han cubierto con
creces los objetivos planteados. Además, personalmente destacaría como positivos los siguientes aspectos de los muchachos:
“Personalmente #RomaExperience me ha
supuesto darme cuenta de lo feliz que soy a
día de hoy: descubrir una vez más que lo que
de verdad vale en esta vida son las personas,
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 El sentido de eclesialidad mostrado en momentos
como la visita al Vaticano (donde participamos en
la eucaristía dominical y en el ángelus con el
nuevo Papa), o en las oraciones y celebraciones
horizonte
Verano activo
del propio encuentro, vividas desde la religiosidad
propia de estos jóvenes.
 Particularmente, me acuerdo ahora de un ejercicio
realizado en la Basílica de San Pedro, rodeados de
multitud de gente ante la Piedad de Miguel Ángel,
en el que cada uno se interrogó sobre “¿qué o
quién me sostiene a mí?”
 La alegría y la satisfacción de los muchachos,
expresadas en muchos de los tuits, en las puestas
en común, en las reuniones de grupo pequeño...
“Aunque el encuentro estuvo bastante bien
organizado y nos lo pasamos muy bien, un
“pequeño detalle” que puede mejorarse para
que los siguientes que vayan tengan un
encuentro perfecto es lo de dormir en el
suelo... El hecho de que, tras un largo día
recorriendo las calles de Roma, volviéramos
al gimnasio y tuviésemos que dormir siete
días apiñados en el duro suelo, no resultaba
gratificante. Y como no descansábamos lo
suficiente, al día siguiente nos despertábamos
apenas sin fuerzas. Muchos de nosotros
acabábamos de terminar el Camino de Santiago con el colegio, en el que también
dormimos en el suelo, por lo que el conjunto
de todo no ayudó a conciliar nuestro sueño
apropiadamente. Si el proporcionarnos camas
no es una opción posible, al menos tener
colchonetas para todos sería de gran ayuda.
A pesar de esto, lo pasamos estupendamente,
y vivimos una experiencia muy buena. Yo
volvería a repetir encantada :-)”
Isabel Junquera Godoy
Por otro lado, hay que resaltar también que no todo ha sido fácil, y que no han sido unas “vacaciones
en Roma”, como se sugería en el título, pues también
hubo incomodidades, que se resolvieron de la mejor
manera posible y con alegría. Principalmente se puede decir que es un encuentro muy cansado, en el que
se está caminando por la ciudad prácticamente todo
el día, bajo el sol y el calor romano del mes de julio,
y que las condiciones de alojamiento (en la “palestra”
o gimnasio del colegio), durmiendo en saco de dormir y compartiendo unos pocos baños y duchas, no
son las más idóneas para el descanso... Peor lo llevaron algunas de las chicas, por la limitación aérea en el
peso del equipaje... Menos mal que las comidas italianas, con abundancia de pasta y de pizza, o el tener
la oportunidad de realizar diversas compras en una
capital europea, mitigaron ampliamente todos estos
inconvenientes.
Ha sido, pues, una experiencia de las que vale la
pena vivir ‒tal y como expresan los testimonios de
algunos de los chicos y chicas de Valladolid que asistieron y que se muestran a lo largo de este artículo‒ y
que esperamos se siga repitiendo, para que otros muchos tengan la oportunidad de vivirla en el futuro.
¡#RomaExperience3 ha comenzado!
………..
horizonte
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horizonte
St. La Salle, teacher for chinese people (anónimo).
Nuestro
postulantado
Comunidades
en marcha
horizonte
Antiguos Alumnos
Nuestro postulantado
Desde el postulantado ARLEP
Hno. Esteban de Vega
V
oy a dedicar este breve artículo a dar a conocer la realidad del postulantado que tenemos en este momento en la ARLEP. El
hecho de que se encuentre ubicado en otro Sector,
cuando durante bastantes años estuvo en Valladolid,
puede dar lugar a que se desconozca la realidad con
que contamos, a pesar de saber que a todos los Hermanos y lasalianos en general les gusta sentirse informados. Muchos ya conocen la realidad, pero no
vendrá mal recordarlo para quienes lo desconozcan.
El postulantado se encuentra ubicado en el barrio
de Ciudad Lineal, en Madrid, concretamente en Arévalo Lara, 1, en la misma casa que, durante siete
años, fue noviciado. Al iniciar el curso pasado, cuando contábamos con un grupo de tres postulantes, se
vio conveniente que la casa del noviciado fuera temporalmente postulantado, puesto que no había ningún
novicio. Por eso, en este momento es postulantado,
en previsión de que el año que viene, cuando los postulantes sean novicios, vuelva a ser noviciado.
Los postulantes con los que contamos son los siguientes:
- Fidel Echeverría, de nacionalidad venezolana y
española. Tiene 41 años y consiguió la nacionalidad española hace apenas mes y medio. Es médico pediatra y cardiólogo.
- Joel Figueiras, portugués, de 23 años. Inició los
estudios de magisterio en Portugal.
- Filipe Araujo, también portugués y de 23 años.
En Portugal inició los estudios de trabajo social.
Estos dos últimos son antiguos alumnos del Centro La Salle de Barcelos, mientras que Fidel no es
antiguo alumno, pero sí tuvo una fuerte relación con
La Salle de Venezuela, en actividades pastorales y
recreativas de los jóvenes. En este momento, los tres
horizonte
estudian teología en Comillas: Filipe y Joel haciendo
el bienio inicial de Filosofía y Fidel haciendo un curso adaptado de teología para licenciados.
Los formadores somos:
- Hno. Javier Gil, procedente del Sector ValenciaPalma, y actualmente estudiante del segundo curso del bienio de teología y catequesis del Instituto
San Pío X. Sustituyó a partir del mes de septiembre al Hno. Jorge Medina, que había formado parte de esta comunidad durante dos años y que fue
trasladado a la comunidad de Santander. El Hno.
Javier, previsiblemente, estará con nosotros hasta
que termine este curso y vuelva a su sector.
- Hno. Santos Maza, procedente del Sector de Madrid, que se incorporó a la comunidad hace tres
años, proveniente de la comunidad La Salle Institución de Madrid. Es un Hermano jubilado que
dedica gran parte de su tiempo a atender la comunidad.
- Un servidor, como director del postulantado. Este
es mi séptimo año en esta comunidad. Actualmente comparto las tareas de dirección del postulantado con la docencia en el Colegio La Salle‒Institución y en el Centro Superior de Ciencias
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Nuestro postulantado
Catequéticas San Pío X. Estas tareas las puedo
realizar en este momento porque los postulantes
estudian fuera. Cuando la casa es noviciado, mi
tarea de cara al exterior se ve muy reducida, ya
que mi misión prioritaria es atender a los novicios.
En torno a la Inmaculada, nuestra patrona, hemos
tenido un encuentro muy interesante, pues recibimos
en nuestra casa a otros tres postulantes. Uno de ellos,
Mateusz, polaco de 27 años, pasó con nosotros 10
días. Vino a nuestra casa porque lo más probable es
que el año que viene se una a nuestro noviciado, por
eso es conveniente que se acerque a estudiar intensivamente el español. Y lo ha hecho realmente con
mucha intensidad, ayudado por el Hno. Santos. Lo
más probable es que en el mes de marzo vuelva a
pasar con nosotros otro período semejante.
Los otros dos postulantes que nos acompañaron
eran españoles: Sebastià, del Sector de ValenciaPalma, de 41 años, y Álvaro, del Sector de Madrid,
que tiene 18 años. El primero hace el postulantado en
una comunidad de Mallorca y el segundo en otra de
Tenerife. Son postulantes, sí, pero actualmente hacen
un primer período de postulantado en comunidad,
cerca de sus familias, y continuando con sus estudios
civiles. Su segundo período de postulantado, que será
el próximo año, lo harán ya juntos, como actualmente
lo hacen Fidel, Filipe y Joel, aunque aún no se sabe
dónde. Nuestro nuevo plan de formación, un plan que
se encuentra sometido a los vaivenes propios de cada
momento, pues la realidad numérica se impone, habla
de estos dos períodos bien diferenciados: uno en comunidad “de misión”, acompañado por un Hermano,
86
y otro en un postulantado propiamente, aunque el
lugar donde se ubique pueda ser una comunidad con
una misión propia y no solamente como casa de formación. Estos dos postulantes, por lo tanto, realizan
el primer período, del mismo modo que Filipe y Joel,
los dos postulantes portugueses, hicieron su primer
período, en este caso de dos años, en la comunidad de
Braga.
Ya he dicho que el plan de formación se encuentra
constantemente obligado a diversos cambios, y es
inevitable que así sea. Que ahora el noviciado sea
postulantado es, por ejemplo, uno de esos cambios.
Que para el año que viene haya que pensar en una
nueva comunidad que sea postulantado, para acoger a
los dos nuevos jóvenes, es otro ejemplo. Que el próximo año un postulante vaya a tener 42 años y otro
19, también es algo a tener en cuenta… La realidad
es así: cada vez gente de mayor edad, de experiencias
vitales, formativas y de fe más variadas, con recorridos completamente diferentes…
Lo más importante es que, a pesar de las dificultades, y a pesar de que sean pocos, seguimos contando
con vocaciones, con personas que siguen descubriendo que el seguimiento de Jesús como Hermanos de
La Salle puede ser lo suyo, que siguen pidiendo ayuda para discernir… Esa es una gran gracia que el
Señor nos concede, que debemos atender y cuidar del
mejor modo posible, aunque ese mejor modo nos
obligue, en cada momento, a dar respuestas que no
nos valgan para mucho tiempo. Estar un poco a la
intemperie forma parte de la condición del cristiano.
También de las casas de formación.

horizonte
Nuestro postulantado
Una llamada a la nona
Fidel Ernesto Echeverría, postulante
L
a hora de la nona, hora donde Jesús entregó su vida al Padre en la Cruz, hora de
sufrimiento, pero también de inicio de lo
que marca nuestra creencia, de vencer la
muerte, de vencer el odio. No es a primera
hora, es una hora que ya sobrepaso el meridiano del
día, pero cercano a éste. Así veo yo la llamada de las
vocaciones tardías.
El otro día veía con agrado la noticia de un médico, Pablo Augusto Meloni Navarro, que logró todo lo
que se había propuesto en su vida profesional y llegó
a uno de los más altos cargos en la Organización
Mundial de la Salud. Sin embargo, Dios lo llamaba a
algo diferente y a sus 56 años ha sido ordenado sacerdote en la Arquidiócesis de Lima. Se trata de un
hombre con experiencia de vida, que, visto desde una
mentalidad puramente humana, podría parecer un
loco por dejarlo todo para seguir un ideal, un sueño, a
un hombre que, siendo Dios, se encarnó en un pequeño e indefenso niño. Este médico-sacerdote en
este momento se está enfrentando a la incomprensión
de sus amigos, de sus compañeros de trabajo, de su
gente, y sólo por seguir el evangelio de una forma
radical; pero a este rechazo hay que asociarle los
obstáculos que se le ponen dentro de la misma Iglesia, que cataloga a estos hombres y mujeres de “vocación tardía”, con opiniones muy duras. Parecería
que todos los que dieron una respuesta tardía son, al
final, unos usurpadores de la vocación real, de la
vocación verdadera que solo se puede experimentar
cuando se es joven.
Excusas como la falta de flexibilidad, de hábitos
no “tan sanos”, de una vida no bien fiable o corroborable, de una falsa entrega que solo busca propias
seguridades, hacen que la lucha de las vocaciones
tardías no solo se produzca en el exterior de la Iglesia, sino también en su interior. Se puede llegar a ser
tan duros e injustos que, si no se tuviera bien cimentada la base de lo que se quiere, que no es más que
seguir a Aquel que da vida, y vida en abundancia,
estas vocaciones no serían posibles.
Parecería entonces que la llamada de Dios tiene
un límite en edad, que sólo puede tener como destinatarios a los jóvenes, y se pone hasta un límite real de
un máximo de 30 años e incluso, en muchos de los
casos, menores de 27 años. Parecería ciertamente que
el resto de personas, una vez pasado este límite, no
pueden ni siquiera pensar en ser miembros de una
congregación religiosa. Por encima de esa edad, las
personas con este sentimiento deberían redireccionar
su vida y su pensamiento, porque eso de la llamada
de Dios solo puede ser cierto cuando se es más joven.
Frente a este escenario no escrito, pero sí vivido,
están los planteamientos que voy a comentar: 1. Somos simples humanos ante la grandeza de Dios, y sus
pensamientos son siempre superiores a los nuestros;
no podemos poner límites a su elección y su llamada.
2. La edad trae consigo dificultades para transformar
la personalidad, moldes poco flexibles; pero también
trae consigo un bagaje de vivencias que no habrían
sido posibles si se hubiera tomado una decisión muy
precoz. 3. Al contar con este bagaje de vida, esta
mochila donde se recoge nuestro propio ser, lo que
somos y sentimos, lo que hemos hecho y vivido, podemos comprender mucho mejor los fallos, caídas y
escollos de otras personas, ya que nuestra propia
experiencia nos permite comprender la experiencia
de los demás.
Hay tanto que decir sobre este tema quedaría pendiente un segundo artículo mucho más documentado,
pero lo que sí tengo muy claro para resumir, es que: no
existen vocaciones tardías, sino respuestas tardías.
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horizonte
87
Nuestro postulantado
Mi experiencia en la animación
de grupos cristianos
Joel Figueiras, postulante
«Gratis habéis recibido, dad gratis» (Mt 10,8).
sí empieza mi texto. Creo que no hay
expresión que defina mejor el sentimiento que tengo cuando estoy con los
chavales en los grupos cristianos. Es la
expresión bíblica que me gusta utilizar
para resumir lo que es, para mí, ser animador.
A
Después de siete años en grupos siento que es mi
obligación transmitir lo que me fue ofrecido. He tenido la suerte de tener animadores muy buenos que me
acompañaron a lo largo de los años y con los cuales
mantengo contacto. Es la prueba de que el grupo
cristiano es algo más que un simple grupo que se
reúne un viernes por la tarde. Aunque me sienta en
deuda con todas las personas que me ayudaron a crecer, sé que puedo responder a esa deuda ofreciendo lo
que me a mí me fue ofrecido gratuitamente: el ejemplo de una persona que sigue a Jesús.
Más que una persona que prepara una dinámica o
intenta mantener el silencio, el animador es alguien
que da testimonio de su fe.
Un animador es alguien que transmite el tesoro
más grande que tiene y que le fue ofrecido: su fe. Y,
según mi punto de vista, eso no tiene precio. Por eso
tiene que ser ofrecido gratis. Como se nos ofrece el
evangelio, el amor, el cariño, los amigos, una comunidad... Porque son cosas que no tienen precio y nadie puede pagar.
Después de tanta explicación, sé que aún no llego
a ser este animador, pero me motiva sentir que puedo
serlo. Me motiva que, a cada reunión, me sienta más
cercano a los chavales. Me motiva que, de un modo o
de otro, Jesús se haga presente en nuestras reuniones
de grupo. En fin, me motivan muchas cosas. La que
más me motiva es saber que ahora me toca a mí ofrecer lo que antes me dieron. Y hacerlo como no puede
ser de otro modo: gratis.
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horizonte
Comunidades
en marcha
horizonte
Reflexión
Crónica de Bujedo
Hno. Francisco Tudanca
E
s obligado comenzar esta crónica con el Día anual
del Sector, 15 de agosto. Presididos por el Hno.
Jesús Miguel Zamora, Visitador del Distrito, el
Equipo de Animación del Sector presenta las directrices
fundamentales que configuran las líneas básicas del nuevo
curso, y que se publicarán en el folleto Plan del Curso
2013-14.
Tradicionalmente, en esta fecha se celebran ciertos
aniversarios grupales, en este caso, las Bodas de Oro de la
Profesión Perpetua de la promoción de 1963, cuyo representante hizo gala de sus dotes literarias, poetizando sus
"currículos" vitales; emitieron sus votos temporales tres
Hermanos jóvenes, y la comunidad cristiana “Maravilha”
de Barcelos y Braga (Portugal) se asoció a la Institución
La Salle, mediante su correspondiente compromiso.
En este período vacacional, van integrándose a la comunidad los distintos Hermanos que han pasado unos días
con sus familiares, y van llegando los nuevos componentes
de la misma: Hnos. José Luis Silos, Isidoro Arnaiz y Francisco Tudanca.
El día 30 de este mes sobreviene el cambio de capellán.
Se despide D. Julián Palencia, después de cuatro años de
servicio religioso a la comunidad, a quien se agradece su
gran disponibilidad y su simpatía característica. Para remplazarle nos llega desde Aranda de Duero D. León Carreras. Bienvenido sea.
En septiembre, la comunidad se reúne, en varias jornadas de trabajo –la vida aquí no corre prisa–, para planificar el curso, tratando de perfilar el Proyecto Comunitario,
cuyas líneas de fuerza nos faciliten los distintos servicios,
la convivencia fraternal y la vivencia religiosa de unos
Hermanos mayores. Se podrían destacar estas facetas propias nuestras: la atención especial a los Hermanos más
delicados de salud; la oración a lo largo del mes por cada
una de las casas del Sector, que se hará llegar hasta el
hermanamiento, en su caso; la acogida familiar a todos los
que nos visitan, propios o extraños; y la búsqueda de personas que nos pongan al día sobre experiencias pastorales
nuevas: proyecto Hara, nueva Pastoral juvenil, Familia
lasaliana.
Ocasionalmente, los responsables más directos de los
Hermanos más delicados del grupo acudieron a Valladolid
–Residencia Marista– para perfeccionar su labor asistencial, con las excelentes orientaciones de un experto en la
materia, el P. José Carlos Bermejo, quien de paso planteó
además la posibilidad de residencias de religiosos/as mayores, bajo el cuidado de las Congregaciones camilas.
Un acontecimiento especial fue el sepelio, en este cementerio, del Hno. Honorio Belza, ex Visitador de Centroamérica, fallecido en Madrid. Asistió, como amigo y
compañero de Distrito, el Hno. Álvaro Rodríguez, Superior General.
En plano comunitario, es digno de señalar las salidas
de los martes por la tarde, iniciadas en julio y protagonizadas por algunos Hermanos voluntarios hacia distintos
lugares turísticos, llámese Angosto, La Virgen del Valle, el
santuario de la Virgen de Oca, San Pedro de Cardeña y las
Edades del Hombre en Arévalo.
Metidos en el mes de octubre, podemos destacar algunos acontecimientos singulares: El retiro espiritual de los
Hnos. Visitadores, y de los miembros del Equipo de Animación del Distrito, que escogieron la soledad de Bujedo
para vacar a Dios en un ambiente monacal; la fiesta de los
Mártires de Turón, con la inauguración de un artístico arco
con vidriera, made in Jorge Rodríguez, en la Avenida de
esos mártires; y la inauguración de un Museo de Mariposas, en número de 3.500, donado por el Hno. Pantaleón
horizonte
91
Comunidades en marcha
Palacios, y fruto de su rica colección de unos 16.000 ejemplares, cuyo depósito queda en Bujedo.
Y en noviembre, nuevamente los responsables de las
tres residencias del Sector asistieron, en La Salle-enea de
Irún, a un encuentro de los Hermanos y enfermeras de
todas las Residencias del Distrito ARLEP. Las sesiones
fueron orientadas por M.ª Pilar Núñez-Cubero, religiosa de
la Compañía de María y doctora en Medicina, que trató
estos temas: "El arte de cuidar", "Cuidar al cuidador" y
"Acompañar el final de la vida". Por sus amplios conocimientos de la materia y su larga experiencia satisfizo las
expectativas creadas. Como complemento de tipo práctico
se tuvo la ocasión de visitar la amplia Residencia de Mayores de los padres jesuitas de Loyola.
De vuelta, tres Hermanos del Sector asistieron asimismo,
en Salamanca, a un Curso formativo de una jornada sobre el
Alzheimer, dado por la Fundación "Summa Humanitate",
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entidad sin ánimo de lucro creada por un grupo de laicos
católicos para servir a la Iglesia, con carácter gratuito. La
intervención de la ponente fue magnífica, tanto en el orden
teórico como práctico.
Como se indicó anteriormente, con el fin de no perder
nuestra sensibilidad apostólica, se invitó a Nano e Iñaki,
del Equipo de Animación del Sector, para que nos hablasen de la nueva línea pastoral y del Proyecto Hara. Pues
bien, atendieron con gusto nuestra demanda, y nos deleitaron con su excelente exposición.
Finalmente, como miembros de la Iglesia Diocesana, se
ha procurado conectar estos meses con las parroquias y
casas religiosas del Arciprestazgo de Miranda. Fruto de
ello fue nuestra presencia en un día de la Novena a la Virgen de Altamira, patrona de Miranda, y un encuentro aquí
con los Redentoristas de El Espino.
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horizonte
Comunidades en marcha
Burgos: fechas para recordar
Hno. Jesús Gil
P
asados los días del estío, nos encontramos de
nuevo. Casi todos somos los mismos de años
anteriores en la comunidad, por eso que nos es
fácil el encontrarnos otra vez unidos y reunidos para
pensar en nuestro proyecto comunitario. A ver si este
año lo realizamos, más bien lo damos entrada, y lo
elaboramos como arma que nos pueda ayudar para
nuestro hacer ordinario. Y que sea para bien y provecho de todos.
Dejamos atrás el día de reunión, de cara a dar comienzo a la labor que debe ser la entraña que nos
mantendrá, un año más, para seguir construyendo
comunidad de La Salle. Este es el día que precede a
nuestra reunión oficial para revisar y poner al día la
forma de seguir funcionando en todos los ámbitos de
nuestra vida: espiritual, social y humana. Aquí vamos
a dejar plasmado todo nuestro interés y saber hacer.
Vamos a pensar bien las cosas para así saber a qué y
cuándo nos comprometemos y vamos dando la cara a
nuestro diario vivir.
Puesta a punto de los proyectos personales y proyecto comunitario (31 de agosto)
Nuestras reuniones de retiro, desierto, revisión de
proyectos y otros acontecimientos las solemos tener
en nuestro monasterio de Bujedo. En esa casa, que es
la nuestra, celebramos un día de intensas reuniones
para poner al día nuestros proyectos de vida para el
curso que en breve va dar entrada.
Empezamos la reunión con una larga y prolongada oración, seguida de una hora de silencio y reflexión para poner al día nuestro proyecto personal. A
continuación dimos entrada a la primera reunión de
revisión del proyecto comunitario. Con participación
de la comunidad en pleno empezamos a poner a punto nuestros intereses para el presente curso.
Fue característica la participación de todos en la
creación de un nuevo proyecto para los días que vienen apretando y empujando. Un día bien empleado en
el trabajo común. El interés en la jornada quedó como muestra del trabajo personal y común realizado
en el día. Y hasta lo pasamos bien. La mutua compañía que nos brindamos resultó muy agradable. Entre
todos creamos un nuevo proyecto que resultó del
agrado de todos. Los escasos tiempos libres supimos
horizonte
emplearlos en visita fraterna a los Hermanos de la
casa. Hacia las seis de la tarde terminamos nuestros
trabajos. La hora que nos restaba supimos darla buen
empleo haciendo un recorrido por la huerta. Este fue
el día dedicado a los proyectos, tanto personal como
comunitario. Y a las siete emprendimos viaje de regreso. Así terminamos el día y el mes de agosto.
Encuentro de zona (26 de octubre)
Dimos entrada al día con buena niebla y mucha
alegría por vernos con los Hermanos y asociados.
Empezamos la reunión con una oración muy moderna
y excelentemente preparada y dirigida por el mismo
conferenciante, Nacho Aguilar, que fue el responsable de toda la labor matinal. Una manera un tanto
diferente de rezar con niños, adolescentes y jóvenes.
La participación de los asistentes fue magnífica. Todos muy atentos y manteniendo la responsabilidad en
pro de la pastoral para el futuro.
Nos presentó un documento con mucho contenido
sobre la actual y futura evangelización en la escuela.
Hay mucho de novedoso en todo lo que el conferenciante nos dijo en su exposición. En la nueva catequesis se supone que todos los asistentes ya tienen
dentro de sí el germen de la fe. El modelo pedagógico
debería definirse más por el contagio que por la
transmisión de conceptos. La relación interpersonal,
de los valores, conceptos y estilo de vida deben
transmitirse desde el testimonio personal; es el ejemplo el que debe mandar en la buena comunicación.
El que habla desde la experiencia transmite los valores reales por contagio y desde la verdad vivida
desde la fe. La experiencia de la fe se comunica de un
93
Comunidades en marcha
modo privilegiado en el grupo de personas que toman
parte en cada sesión de la evangelización porque la
comunicación es meta, camino y método. La experiencia se comunica y se comparte. Animemos con
metodología los procesos pedagógicos y didácticos
que ofrecemos desde la escuela. Debe abundar la
metodología experiencial. La gran oferta a los adolescentes y jóvenes de hoy debe ir bien repleta de
experiencias significativas.
Experiencias que nos remiten a nuestros saberes y
emociones, a nuestra manera de hacer y comportarnos en el entorno en que vivimos. Es fundamental la
relación y el acompañamiento. En este método pastoral es esencial acompañar y sentirnos acompañados
por los demás. Debemos recorrer itinerarios distintos
y flexibles; hoy día la vivencia es desde el presente.
Los jóvenes no tienen convicciones muy duraderas;
tenemos que mantenérselas mediante nuestro acompañamiento. Es necesaria una mayor tolerancia a las
pequeñas frustraciones y par ello hay que tratar de
educar acompañando en el recorrido diario. Hay que
tener muy presente que el buen acompañante es aquel
que no pide resultados inmediatos sino tan solo que
actúa lo mejor que sabe y puede.
Antes de terminar la mañana, reservamos un
tiempo para celebrar la Eucaristía en la capilla grande
del colegio. Fue una celebración austera, pero dignamente participada.
La tarde la gastamos visitando las Edades del
Hombre en Arévalo. Exposición que tuvo lugar en
tres diferentes iglesias de la localidad. Nos gustó
porque nos hizo revivir otros tiempos y recordar mucho de lo ya estudiado y compartido en otras muchas
ocasiones.
Y desde esta vivencia nos trasladamos a Burgos
satisfechos y contentos por el gran día que tuvimos
en Valladolid y Arévalo. Llegamos a la comunidad
justamente para cenar y poder compartir, en la sobremesa, todo lo bien vivido en el día.
Retiro en Bujedo (23 de noviembre)
Allí nos reunimos las tres comunidades de la provincia de Burgos: comunidades de Bujedo, Cortes y
colegio de Burgos. Todo el día estuvo en torno al
“Voto Heroico” de 1691. Aquel año existía una gran
crisis religiosa e institucional. Entonces supieron salir
de la mala situación; hoy, estos años que nos preceden y siguen a la fecha presente, también son de
prueba y duros de llevar, pero tengamos mucha fe y
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gran dosis de esperanza, que siempre que ha llovido,
ha escampado; y Dios nos sabe ir guiando y acompañando en nuestro resignado vivir.
Dimos entrada al día de retiro con una oración
larga y bien preparada; siguió un rato de descanso y
puesta en pantalla del mensaje del Hno. Visitador de
la ARLEP. A la una y cuarto tuvimos la celebración:
“Eucaristía del voto heroico”; estaba bien preparada y
estupendamente llevada a cabo. Esta celebración nos
duró tres cuartos de hora. A continuación tuvimos la
comida de franca y alegre hermandad. Las primeras
horas de la tarde fueron dedicadas a dar un paseo por
los alrededores del monasterio. El día no se prestaba
para largas estancias al aire libre; solo los más atrevidos desafiaron al tiempo invernal y se mantuvieron
en el paseo de la tarde.
Pasadas las cinco y media emprendimos viaje de
regreso a casa. Contentos de haber pasado un día,
este buen grupo de hermanos, recordando muchas
cosas de nuestra vida en este monasterio. Todos quedamos muy satisfechos de esta jornada allí pasada y
alegremente celebrada.
Convivencia con los Hermanos del monasterio (21
de diciembre)
En este día fresco, como es ya costumbre en esta
época del año, nos aproximamos al monasterio para
tener un día de retiro, ambientado con la revisión de
los proyectos personales. La mayor parte de la comunidad fuimos exponiendo nuestra revisión. No nos
olvidemos que esta puesta en común es totalmente
voluntaria.
Dimos entrada al día con una prolongada oración;
bien preparada y magníficamente realizada. Fue seguida de un prolongado tiempo de reflexión y pensamiento sobre la marcha del presente curso. Hacia el
final de la mañana tuvimos la exposición de todo lo
que habíamos reflexionado sobre la marcha de nuestros proyectos personales.
Terminada esta sesión, tuvimos un breve descanso; y a eso de las dos nos reunimos en el comedor
para compartir con la comunidad del monasterio la
fraterna comida bien preparada y mejor compartida
con todos los moradores de la casa. Este día lo aprovechamos para desear felices días y fiestas a todos los
moradores. La paz y deseos de felicidad y bien fueron abundantes en estas fechas. Que el Señor siga
siendo bueno y generoso con nosotros.

horizonte
Comunidades en marcha
Rinconete y Cortadillo
(Residencia La Salle de Burgos)
Hno. Pedro Ozalla
Norma de los informativos: Lo último es lo
primero. Y lo vamos a cumplir ahora.
H
istoria del Instituto: 13.12.13. Convoca el Hno.
Ángel. Acude la comunidad como un solo coro
de ángeles. Presenta el vídeo “Fábrica de ladrillos. Requena. Perú”. Realización y efectos especiales de
Ángel y Jorge Rodríguez. Ofrece la innovación que supone
esa tecnología para transformar la ciudad de Requena. En
poco tiempo ha triplicado el número de habitantes, ha
mejorado intensamente la calidad de los indígenas y su
eficacia educativa es apreciada por los vecinos y autoridades. Ya es casi autogestionada. Los alumnos y exalumnos
son los protagonistas de la fabricación.
Y dice que copie esto del discurso: “Catequista es una
vocación: “ser catequista”, esta es la vocación, no trabajar como catequista. ¡Cuidado!, no he dicho “hacer” de
catequista, sino “serlo”, porque incluye la vida. Se guía al
encuentro de Jesús con las palabras y con la vida, con el
testimonio”. (…). ¿Cómo están ustedes en la presencia del
Señor?... Pero ¿te dejas mirar por el Señor? Dejarse mirar por el Señor. Él nos mira y esta es una manera de
rezar… Es un poco aburrido, me duermo… ¡Duérmete,
duérmete! De todas formas, Él te mirará, igualmente te
mirará”.
A las 13.30 se unió el coro parroquial. Somos 24. Y
comida-paellada preparada por catequistas. ¡Hasta las
17.30! A esa hora comienza el coro su ensayo semanal,
hasta las 19 horas. ¡Impresionante convivencia! Y ¡era de
laicos!
Don F. Javier Peña Pérez, Catedrático de Universidad, pronuncia su discurso: CASTILLA MEDIEVAL: PERFILES MÍTICOS. 22.11.2013. Ingresa como Académico Numerario en la Real Academia Burgense de Historia y Bellas Artes - Institución Fernán González. Sesión solemne.
Público selecto. Trajes de gala. Un hermano del Académico, JLPP-FSC, lució ropa de rojo-cardenal. No era fácil
distinguir si se trataba de una sudadera deportiva o de un
disfraz circense. Pero brilló y deslumbró. Pero, si lo dice
El Quijote: “Los trajes se han de acomodar con el oficio o
dignidad que se profesa” (II.42).
Es catequista. Un Hermano me pasa esta chuleta: El
párroco me invita a ejercer de catequista. Somos catorce.
La primera reunión duró de 5.30 a 22.15: organización
más merendola. Y MB.
23.11.13. Clausura del Año de la Fe. De 11 a 16.30:
Encuentro de catequistas de la Diócesis. Casi 400. 17.00
horas. Eucaristía. La catedral seguía congelada. La celebramos en la iglesia del Carmen. Presidió el señor arzobispo, el abad de San Pedro de Cardeña, más de 100
sacerdotes y el pueblo del Señor. Ocupamos nave, galerías y palcos. Y MMBB. El mismo día, la Iglesia de La
Salle de Burgos, en la capilla de su monasterio de Bujedo, celebró su acontecimiento singular.
30.11.13. Reunión parroquial de catequistas. Tema:
“Discurso del Santo Padre Francisco a los participantes
en el Congreso Internacional sobre la catequesis”. Y dice
el de la chuleta que se decía así mismo: Esto lo acabamos
en unos minutos. Pues dice que estuvieron de 11 a 13.30.
horizonte
95
Comunidades en marcha
El discurso tiene seis capítulos, pero el orador presentó
sobre todo, el sexto: La “Reconquista”: El mito de la nación española”. Atención, historiadores de anales y cronicones. Copio parte de la conclusión: “Sería deseable que los
medievalistas desistiéramos de utilizar un vocablo que no
tiene nada que ver con la realidad histórica presuntamente
afectada por él. (…) Es hora de que le confinemos al lugar
que le corresponde: al rincón de los fósiles culturales, donde duermen los mitos gastados el sueño de sus mejores –o
más inquietantes– recuerdos”.
Al final, la Academia regala el discurso al público asistente. Un libro de 218 páginas. En él está también la respuesta de otro Académico. En doce páginas nos ofrece los
méritos del Dr. Peña Pérez, como docente, investigador,
gestor de la Universidad… El curso pasado fue renovado
en su cargo de Defensor de la Comunidad Universitaria de
Burgos, con categoría de vicerrector. Y había varios candidatos…
una casa inacabada de 230 m2. Los dueños la empezaron
hace siete años. Ahora el marido sigue en paro, la mujer,
con cáncer. Volvemos al colegio. Después de cenar, dicen:
ahora una oración breve: Y duró 45 sabrosos minutos. Y
¡cómo participaban!
El Hno. Joaquín, desde 1979, sigue con la “Colonia de
Maximinos”. Este verano, 130 niños, de cinco a catorce
años, del barrio Maximinos de Braga; 30 monitores, cuatro
jefes-directivos.
Los dos residentes estivales de la Quinta do Galo seguíamos hablando:
-Pero eso de que Paula, asociada, asista a las reuniones
de la comunidad es muy atrevido y comprometido.
-Si la comunidad no fuera lo que es, Paula no sería lo
que es, ni el día 15 de agosto, otros ocho jóvenes hubieran
hecho en Bujedo, el compromiso de asociados. Proceden
del grupo adolescente Sacristía y ahora son la comunidad
Maravilha porque un animador les repetía: pero ¡qué grupo! ¡Qué maravilha!, Pero, ¡qué ilusión! ¡qué maravilha!...
Por su dedicación lasaliana y evangelizadora, funciona
la pastoral del Colegio, hasta en vacaciones estivales.
El cariño que los Hermanos reciben en Barcelinhos se
lee hasta en las piedras y en las placas: “Homenagem ao
Irmão Martinho Corral. Con Amizade e Gratidão. Dos
Amigos de La Salle-Ano 60. 26/07/2008”. “Rua Irmâo
Martinho Corral Alcalde”.
De Sacristía a Maravilla. Y el mismo Hermano me pasa otra chuleta. Dice: Me invitó la comunidad de Barcelos.
Quedaba un Hermano solo en la Quinta do Galo. Todo fue
agradables sorpresas. Leo la distribución de actividades del
verano: Todos los Hermanos y Paula ocupados en campamentos, colonias, campos de trabajo, retiros… El primer
día me invitan a un campo de trabajo. Organizado por
“Habitat for Humanity”. Es una organización internacional, no gubernamental, fundada en USA. Convoca a la
gente para construir viviendas, comunidades y esperanza… Nos dirigimos a un pueblo cercano. Con el responsable de la organización, somos doce universitarios. A este
grupo han pertenecido los dos postulantes de nuestro Sector. Sigue la tarea de los días anteriores: revocar, pintar…
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Rinconete y Cortadillo. 10.07.2013. El Hno. Antonio
Rodríguez permaneció en nuestra comunidad una larga
temporada. Le favorecía la recuperación de la operación de
cadera. Antes de comenzar la dispersión estival de la comunidad, nos invitó a una merienda-cena. La celebramos
en la “Plaza de la huerta”. Pero durante la convivencia
cortamos y recortamos… Por eso, propuso un inspirado
que a este rincón le cae muy bien el nombre de “Rinconete
y Cortadillo”, y otro, ya iluminado comensal, dijo: pues a
la caseta, llámese como dice el texto bíblico: “La tienda
del encuentro”. Pues gracias, Antonio. En la próxima,
invita “Rinconete y Cortadillo”.
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horizonte
Comunidades en marcha
Noticias de La Felguera
Hno. Manuel Gutiérrez
S
upongo que, como sucede en otras comunidades, hay más encargos que encargados… Pues
bien, en el reparto, a mí se me encargó de la
crónica y en ello estamos.
Para empezar, hay que recordar que la comunidad
pasó de cinco a cuatro Hermanos, ya que Sinesio,
Laure y Francisco Tudanca tenían otro destino; Florencio y Francisco, este procedente de las Américas,
completaron esta comunidad que casi fue una refundación.
Al regreso de Ángel de Santander, tras el curso
de cooperativo, ya estábamos los cuatro, por eso nos
tomamos un “culete” de sidra para celebrarlo. Luego,
en Lastres, hicimos el proyecto personal, el comunitario y el de las comunidades de Asturias, porque
aquí lo hacemos así. Por la noche no faltó el tradicional “pincheo” de bienvenida.
A los pocos días, el 7 de octubre, acompañamos a
Francisco Coto, nuestro Director, en el tanatorio de
Sama ya que su madre, Dña. Marina, nos dejaba a los
86 años. Allí nos encontramos, entre otros, a Eladio y
Paco Mateo.
En los primeros días de setiembre, Florencio toma
posesión de las herramientas de las huerta y el resto
nos metemos en la preparación del curso; lo demás,
ya os lo imagináis por vuestras propias experiencias.
Este año no pudimos asistir, el 9 de octubre, a la
Misa en honor de los Hermanos Mártires de Turón
que se celebra en la Cuadriella, ya que el templo
parroquial está en reparación.
A comienzos de octubre tuvimos un encuentro
con la comunidad de Santander. Por aquello de: “Sal
de tu tierra”, nosotros llevamos “sal” de Asturias, y
ellos nos aportaron “sal” del Cantábrico… Pues, eso,
que pasamos un día muy agradable de convivencia,
gracias, hay que decirlo, a los buenos oficios de José
Carlos. Al regreso pasamos por la casa de Francisco,
en Lombera, a saludar a Eduardo y Manolita, sus
padres, que gozan de buena salud.
Por la Fiesta del Pilar se presentaron aquí los de
Salle-Joven procedentes de Galicia. Todo Langreo se
llenó de la alegría de aquella “Mareona Lasaliana”,
unos 300, creo. Los Hermanos nos multiplicamos
para ayudarles a que se sintieran bien; lo demás está
en las crónicas, hasta de la prensa local.
Cristina, nuestra cocinera, se puso enferma y, por
desgracia tardará en reponerse, razón por la que nos
han mandado a Chari, ya conocida del verano para
que nos cocine; y, ayudada por el Hno. Florencio, ha
conseguido dar mucha alegría a nuestra mesa; pero
hay que privarse, lo digo sobre todo por mi…
Este otoño ha llovido poco en la primera parte,
por lo que las setas estaban escondidas, pero alguna
fue sorprendida y pasó a “guarnicionar” nuestros
platos.
El 22 de octubre asistieron a nuestra reunión comunitaria los miembros del Equipo Directivo del
centro. Saludamos especialmente a Jesús Busto, que
se estrenaba como Jefe de estudios de ESO. La
reunión fue informativa y los Hermanos aportamos
nuestros puntos de vista, para satisfacción de todos.
horizonte
97
Comunidades en marcha
podido adelantar la cena media hora, y nos va mejor. Aprovecho para deciros que este curso tenemos
la novedad de la Eucaristía comunitaria, los jueves a
las 7:30, gracias a que Luis, el páter, comienza sus
clases en el colegio a las 8:15h.
Un año más celebramos la fiesta de la Inmaculada
con los antiguos alumnos: Misa y mesa. Los Hermanos secundamos como siempre la invitación con
agrado y animamos la eucaristía que tradicionalmente
se tiene, en la que recordamos a Manuel Láiz fallecido recientemente.
Ni la huelga, ni la despedida de Manolo Escobar
impidieron la entrega de los premios Príncipe de
Asturias; nosotros teníamos programado un encuentro en Celorio ese sábado 26 de octubre, y tuvimos
como animador a Eladio, que nos presentó lo que ya
sabéis sobre la nueva visión de la Pastoral. Algunos
tenemos en memoria la oración de ese día que nos
animó Rafa Palomera, pero que prepararon en el
Equipo, hay que decirlo.
Por los Santos nos convocaron en Madrid a los
Hermanos de entre 59 y 65, lo sabéis: Por mi parte,
solo quiero decir que asistimos Ángel y yo en Aravaca y que nos sumamos a la opinión mayoritaria sobre
el buen ambiente de comunicación, el ánimo y hasta
optimismo de los Hermanos. Naturalmente, somos de
los que piensan que debe repetirse.
El día de la Almudena es mi cumple y este año se
celebró de forma especial porque era sábado y era el
día fijado para que José Andrés viniera a darnos unas
sesiones de formación a los Hermanos de Asturias:
Se hizo en Ujo, como ya hicimos el curso pasado con
Carmelo. José Andrés eligió como temática el Evangelio de Marcos y nos hizo pasar una mañana muy
grata comentando cosas nuevas que él dejó caer con
toda naturalidad. Esperamos otra visita en este trimestre.
El 17 de octubre tuvimos en Ujo una reunión con el
Hno. Andrés, Visitador. Se trataba de un primer contacto y reflexión sobre el futuro de la distribución de
las comunidades en Asturias. Yo tengo la impresión de
que fue el comienzo de un proceso que, por ahora, no
está cerrado, habrá que seguir “dándolo vueltas” hasta
el momento en que se tome la decisión; mientras tanto:
paz, ciencia y armonía: ¿Tamos?
Por fin comenzó la temporada de lluvias pero no
sabemos cuándo terminará… Nosotros nos tapamos
bien y todas las tardes bajamos a la Parroquia a la
Misa de las 19:30. Gracias a este horario hemos
98
Como este año el puente de la Inmaculada ha sido
largo, ha habido tiempo para hacer una salida comunitaria: El Hno. Director nos propuso una ruta que
terminaba en L’Angliru, y allá subimos a pisar la
nieve, el caso es que no pudimos pasar de la cueña
les Cabres, porque el hielo lo impedía y preferimos
dejarlo para el verano, después que pasen los de la
Vuelta, ¡que ya tienen valor!… Comimos abajo, en el
valle, cerca de Morcín; pedimos el menú de día, pero
imaginaos cómo son estas cosas. No se nos pasó visitar la casa natal del Hno. Ángel en la Grandiella.
Un año más, los Hermanos celebramos adelantadamente la Navidad con la Escuela de Padres; los
niños dieron, como siempre, la nota con su participación y el entusiasmo, cantando en la celebración. La
comida compartida resultó ser un momento privilegiado de intercambio y creación de lazos. Les damos
desde aquí las gracias a los padres.
El 23 de diciembre celebramos en la comunidad la
comida de confraternización con los directores de La
Felguera y Ciaño. Nos juntamos 13 personas que
pasamos un buen rato compartiendo las experiencias
del trimestre. Las tres niñas, hijas de Fito, no se aburrieron en absoluto y demostraron sus habilidades en
los teclados que Ángel puso a su disposición.
¿Me pasé ya?... Pues corta por donde veas, pero
no me quites lo de encuentros intercomunitarios,
sobre todo, porque gracias a este espíritu que siempre
tuvimos en las Comunidades de Asturias, se ha celebrado la Nochebuena en Ujo y la Navidad en la Felguera con gran paz, armonía y buen gusto y tengo
que citar de nuevo a Florencio, aunque sé que no le
gusta, porque a nosotros sí nos gustan sus platos,
dulces y licores (los que conducen, absténganse…).
Esperamos que los Hermanos de Gijón nos superen el
día 6 y que esto no les suponga preocupación, lo digo
por Pablo… Bueno, corto y cuelgo.

horizonte
Comunidades en marcha
Ferrol, una comunidad
ilusionada y animadora
Hno. Pablo Castrillo
C
on este título quiero resaltar un aspecto significativo de nuestra comunidad de Ferrol.
Además de su notable participación en la
Pastoral parroquial, también está embarcada en misiones socio-educativas de promoción social. Queremos compartir dos de ellas: Taller de promoción
gitana. Centro de día O´Mencer.
Taller de promoción gitana
Es una obra ubicada en un local de la parroquia.
Aunque de alguna manera depende de la misma y de
Cáritas, funciona con total autonomía.
Se benefician de su labor 32 personas gitanas
adultas, cuatro de ellas varones. Simultáneamente se
atiende a los niños de sus familias. Una docena de
voluntarios desarrollamos distintos aspectos de promoción y educación.
Se cuida mucho de que la relación entre todos los
participantes sea buena: respeto, igualdad, cercanía,
confianza… y se está logrando.
Las actividades, que se desarrollan durante tres
tardes de cada semana, se agrupan en:




Alimentación: enseñar a cocinar, higiene y
limpieza, comidas sanas.
Costura y bordado
Alfabetización y cultura
Apoyo escolar para los niños y ayuda en la realización de tareas.
La labor de nuestra comunidad se enmarca en el
aspecto de alfabetización, cultural y de ayuda a los
niños.
El Hno. Pablo ayuda a aprender a leer y escribir a
algunos que quieran sacar el permiso de conducir. El
Hno. Basilio atiende a los niños en su trabajo escolar,
además de hacer un valioso e imprescindible trabajo
de secretaría en Cáritas parroquial.
Notamos que nuestra presencia es significativa. El
trabajo es apreciado tanto por el equipo animador
como por los beneficiados; expresan con agradecimiento este aprecio.
Estamos satisfechos por la oportunidad que nos
dan de compartir gratuitamente lo que gratis hemos
recibido. Tenemos la posibilidad de acercarnos y
conocer a un grupo humano, los gitanos, con frecuencia lejano y aun objeto de prejuicios y discriminación.
Centro de día O’Mencer
Obra al servicio de la mujer víctima de todo tipo
de maltrato o discriminación: prostitución, emigración, maltrato de género… La labor que realizan las
Hermanas Oblatas es extraordinaria y abarca muchos
campos:




Formación humana básica: Idioma (léase lengua española), certificado de competencias básicas.
Cursos varios de formación de: Asistencias a
personas mayores, cocina, peluquería… según
necesidades y posibilidades
Ayuda a buscar trabajo. Asesoramiento jurídico. Acompañamiento al médico. etc.
Asistencia humana y psicológica.
Todo ello en un clima de diálogo, cercano y de
acompañamiento.
Esta labor la llevan adelante las Hermanas Oblatas, tres trabajadores sociales y media docena de voluntarios. Estiman agradecen la labor. Es un trabajo
gratificante.
horizonte
99
Comunidades en marcha
Nuestro apoyo comunitario se realiza en el ámbito
de la formación humana básica. El Hno. Pablo, a lo
largo de dos tardes semanales, enseña a leer y escribir
a tres emigrantes: tailandesa, senegalesa y brasileña.
En esos mismos días atiende a otro grupo de diez
señoras, de las que ocho son emigrantes, en el área de
Matemáticas, para obtener el diploma de “Competencias básicas”, imprescindible para seguir otros cursos
y obtener trabajo.
Y mucho más
Este verano fue pródigo en trabajo para el Hno.
Jorge. Apenas terminado el curso, campamento con
los chicos; la terminación del mismo se solapa con la
salida para realizar el proyecto de verano en la India
con PROYDE.
Compartimos la misión mediante las crónicas e
intercambio de correos. Nos alegramos de que volviese feliz y contento de su experiencia, aunque cansado. Los Hermanos de la comunidad nos vemos
enriquecidos y seguimos beneficiándonos de esta
vivencia significativa.
En este curso, estamos viviendo y acompañando
con interés e ilusión al Hno. Jorge en la preparación a
su consagración definitiva, en agosto. Lo vive con
tanto entusiasmo e ilusión que nos lo ha contagiado.
Por supuesto que lo hemos tenido en cuenta en la
elaboración del Proyecto Comunitario, programación
de reuniones comunitarias…
Ya tuvimos un encuentro con Hno. Andrés Corcuera y la comunidad de Ujo, donde se encuentra el
Hno. Rafa Palomera que también se prepara para este
acontecimiento singular. Fue un día agradable y fecundo por la convivencia, reflexión sobre el sentido
de la consagración. Estén previstas otras dos, con la
misma finalidad. La próxima será en Ujo, en los días
del carnaval.
Con el mes de septiembre llegó un comienzo especial para nuestro centro. Tuvo lugar el cambio de
director del mismo y, con él, la reestructuración del
equipo directivo. D. Daniel Yáñez, antiguo alumno
del colegio, que lleva más de 15 años de Profesor,
sustituyó a D. Manuel J. Castro, que llevaba ya ocho
años al frente del centro. Le agradecemos su entrega
y servicios y su buen hacer. La comunidad ofrece al
nuevo director su acompañamiento y apoyo incondicional.
A finales del mes de octubre hicimos una salida
comunitaria para visitar la exposición de “Las Edades
del Hombre”, en Arévalo. Nos acompañó y explicó
Rubén Fernández, antiguo compañero del Hno. Jorge
en el Colegio La Salle de Palencia, que es guía oficial
de la exposición. Aprovechamos para convivir y
compartir con los Hermanos de la comunidad de la
Avda. del Valle de Madrid; con ellos pasamos un día.
Nos acogieron cordialmente. Para todos ellos nuestro
recuerdo y agradecimiento. Comenzamos a practicar
el “Sal de tu tierra” y a disfrutar del arte magníficamente explicado.
En el mes de noviembre celebramos una Semana
Vocacional con un toque especial. En el centro del
colegio se colocó un original “Álbum fotos” de itinerarios vitales de todos los Hermanos y muchos profesores, para mostrar a los niños los pasos de nuestra
vocación de educadores y religiosos.
Diciembre ha estado marcado por la Campaña de
Navidad, con la tradicional recogida de alimentos:
1.043 kg que se repartieron en Cáritas, Cocina Económica, O’Mencer y O Refuxio, una gran muestra de
solidaridad de las familias, con mucha implicación de
los chicos y chicas de SalleJoven, a los que se da la
responsabilidad de llevar el programa adelante.
Hasta la próxima.

100
horizonte
Comunidades en marcha
Desde Gijón
Hno. Ricardo Castrillo
E
l verano lo pasamos cada uno en distintos
lugares y actividades, aunque los Hnos. Pepe,
Luis y Pablo estuvieron la mayor parte del
tiempo en Gijón, llevando una vida casi monacal;
oración matinal sin prisas, paseo y baño reconfortante
en la playa de san Lorenzo, preparación de las comida a cargo del architriclino mayor, Hno. Pablo…
El Hno. Luis coordinó en Valladolid un campo de
trabajo; a los cuatro jóvenes de Gijón, se unieron
otros de Burgos, Palencia, del barrio de Girón…
El Hno. Ricardo aprovechó, como en años anteriores, para “veranear” en Bujedo. Allí el Hno. Carlos
Cantalapiedra le ofreció restaurar unas cuantas imágenes, estatuas, o lo que necesitara “arreglar”…
Y, como la comunidad conventual organizó varias
salidas semanales, pudo visitar, varias veces bajo una
lluvia tenaz y abundante, la bonita iglesia de Monasterio de Rodilla (menos mal que al principio tuvimos
un sol espléndido), el santuario de Nuestra Señora del
Angosto (la niebla y el frío estropearon una tarde que
aparecía, al principio, soleada y calurosa, hasta que
llegamos a Monte Santiago y tuvimos que regresar)…
Ya en Burgos, y con los Hermanos de la Residencia de Cortes, fue al monasterio de san Pedro de
Cardeña con ocasión de la entronización del Abad,
antiguo alumno del Colegio La Salle de la capital; y
saludar a su padre (antiguo profesor del mismo colegio), al P. Dalmacio Ortiz…
Dentro del verano, a primeros de agosto, los Hermanos del Equipo de Animación, nos honraron con
su presencia unos días. Aparte de sus salidas turísticas, que hicieron por distintos puntos de la comarca,
pasamos todos juntos un par de jornadas en compañía
del Director del centro, en su “Llagar de Calo” y en
la Quinta del Infanzón, pues, como decía el Hno.
Andrés, las amistades no se pueden descuidar…
Pero el gran acontecimiento celebrativo en comunidad, fue la fiesta de las Bodas de Oro del Hno. Pablo. Habíamos previsto en el P.C. hacer una salida en
verano, y habíamos escogido Bujedo y La Rioja, así
que todo convergió en ese centro de interés para ambientarnos y celebrarlo debidamente. Fue un día lleno
de acción de gracias, felicitaciones, emoción y fervor:
la presentación que hizo el Hno. Pablo de sus compañeros, la ceremonia eucarística, la comida con sus
familiares, la entrega de recuerdos…
También en agosto, el Hno. Ricardo se reunió en
convivencia con algunos de sus antiguos catequistas
de S. Pedro, de Gijón; a la comida se unieron sus
hijos…
En los días 13, 14 y 15 de septiembre, el Hno. Pablo se reunió en Bujedo con un grupo de “fundadores” de Barcelos y Leiría. Era el tercer encuentro que
realizaban. En años anteriores se habían reunido en
horizonte
101
Comunidades en marcha
Barcelos-Braga y dos pueblos de Palencia, lugar del
nacimiento de algunos compañeros.
"Hacia la medianoche del día cuatro de setiembre
de 1952 entrábamos en Barcelos para fundar el aspirantado portugués. Allí quedó encendida una amistad que el paso de los años no ha podido apagar.
Después, cada uno siguió su rumbo hasta que decidimos juntarnos para recordar y revivir aquellos
años de formación y carencias propias de fundaciones en países de limitados recursos"...
En esos días visitamos algunas zonas de la Rioja,
nuestra casa de San Asensio y recorrimos las estancias de Bujedo juntando el ayer y el hoy.
No faltaron momentos largos de comunicación
donde la vida de todos parece formar una familia real
que se abraza y se acerca con intensidad difícil de
entender. LA AMISTAD VIVE PARA SIEMPRE".
Por supuesto que hemos celebrado comunitariamente los cumpleaños de Rafa, Guti y Ricardo como
se lo merecen
En este mes de diciembre el Hno. Pablo fue operado, en el Hospital de Jove, de una hernia inguinal.
Todo salió bien, pues al día siguiente de la intervención le dieron el alta; tuvimos ocasión de pasar ratos
de charla con él y con los muy agradables familiares
del compañero de habitación.
Hace unas semanas empezó a funcionar el nuevo
aparcamiento subterráneo que han construido al lado
del colegio, detrás de la antigua fábrica de Tabacos.
Incluso por fuera ha quedado muy bonito, especialmente un parque para niños, encima del parking. Se
une al Cerro con espaciosas escalinatas y da a nuestro
centro una nueva perspectiva.
Desde el día 4, como en la mayor parte de las calles y comercios de las ciudades, se vive ya un ambiente casi navideño…
Con la preparación del comienzo de curso empezaron las reuniones con los profesores, la comida
inaugural (también en el Llagar de Calo)…
Todos los Hermanos que estamos en Asturias celebramos la convivencia inaugural para elaborar los
proyectos comunitarios y con vistas a los encuentros
de las distintas comunidades. Fue en Lastres.
Y a nivel de Zona nos juntamos con los Hermanos
de Cantabria en Celorio, con la animación del Hno.
Eladio, que presentó el lema de este año: “Somos
armonía de colores”. Fue del agrado de todos. La
“oración” antes de las charlas, la preparó el Hno.
Rafa, con su habitual creatividad.
El día 14, sábado, celebramos el DIVO, el Día Internacional del Voluntariado. Las Hermanas de la
Asunción y otros grupos de voluntariado prepararon
una función en la que se premiaron a unas cuantas
personas por su solidaridad. Nos encantó la Magia
Potagia de Juan Tamariz que, con un cuento y una
“parábola”, nos puso en evidencia la solidaridad y el
valor del voluntariado con gran creatividad. Al final
un coro de más de 50 niños de la Asunción nos cantó
un villancico y nos puso “estrellitas de navidad”.
Para dentro de unos días tendremos la tradicional
comida con los profesores, el amigo invisible, el intercambio de regalos, la operación kilo, las fiestas
navideñas y de año nuevo. ¡Ojalá nos traiga 2014
todo lo bueno que deseamos!
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102
horizonte
Comunidades en marcha
La comunidad de Santander
os cuenta
Hno. José Carlos García
C
omunidad cántabra que acoge este curso a
Hermanos de las anteriores comunidades de
Santander y Los Corrales, y dos venidos de
Madrid y Valladolid. El día 6 de septiembre se reúne
la comunidad en Los Corrales de Buelna para confeccionar el Proyecto Comunitario y emprender el
nuevo camino. Nos concienciamos de ser una comunidad que anima dos obras educativas: una en Los
Corrales, Centro de S. Juan Bautista y otra en Santander, Colegio La Salle. Después de una intensa
jornada de reflexión y planificación, pasamos la tarde
por el entorno de Ucieda, disfrutando de una vegetación y tiempo espléndidos.
El trimestre ha sido intenso y con ritmo rápido. Ha
transcurrido con gran número de acciones que se
conectaban unas con otras, casi sin interrupción.
Comienzan los preparativos del curso: reuniones,
equipamientos, listados… etc. Los viajes de ida y
vuelta de los tres Hermanos que animan la acción
pedagógico-pastoral en Los Corrales. Son días de
trabajo intenso pero todo termina estando preparado
para comenzar las clases. Los dos centros educativos
con una matrícula casi al pleno. Los Ciclos Formativos con aumento de alumnos, el Bachillerato manteniendo el tipo, y eso que en estos lares los centros
siguen una línea de descenso en matriculación de
alumnos. Los dos claustros de los centros se unen
para realizar una visita a Guetarea del País Vasco que
resulta muy enriquecedora para todos, por lo que se
visitó y la convivencia que reinó.
En este mes de septiembre celebramos los cumpleaños de Hermanos cuya fecha cae en verano, así
como la despedida de los Hermanos que han sido
trasladados: Pedro Río y Mariano Alonso. Nos hacemos presentes en el funeral del padre de la profesora
Pilar Rozas y nos visita el Equipo de Misión.
En el mes de octubre, siguiendo las propuestas del
Distrito, el sábado 5 tuvimos una jornada de oración,
reflexión y convivencia con los Hermanos de las
comunidades de Palencia y la Felguera, que resultó
muy satisfactoria para todos. En este mes se celebran
intercambios de alumnos franceses e ingleses en los
dos centros.
El día 11 por la tarde la comunidad sale para Valladolid con el fin de acudir a “Las Edades del hombre” en Arévalo y, al día siguiente, a la villa de Madrigal de las Altas Torres.
En este mes de octubre los grupos cristianos de La
Salle y Audecor de Los Corrales inician el curso, así
como el Voluntariado al que están apuntados medio
centenar de alumnos de Bachillerato. Se tienen en
ambos centros las reuniones con los padres de los
alumnos que acuden casi en su totalidad. Y asistimos
al Encuentro de Zona en Celorio (Asturias) donde el
Hno. Eladio animó la jornada en la que, además de la
puesta a punto sobre el “Plan de Pastoral”, convivimos
con los Hermanos de Asturias. Del 27 al 30 el Hno.
Andrés Corcuera, Visitador Auxiliar, permanece con
horizonte
103
Comunidades en marcha
nosotros realizando la visita y compartiendo lo que es
la nueva experiencia comunitaria.
Al comienzo del mes de noviembre, el Hno. Saturnino asiste en Madrid a la reunión de Hermanos de
edades comprendidas entre 59 y 65 años, de la que
destaca el buen ambiente, el compartir los temas y
experiencias y la gran participación de Hermanos. El
día 9, los Hnos. Oscar y José Carlos visitan a D. Vicente Jiménez, Obispo de Santander. El día 14 los
asociados: Pili y Teo, comparten con la comunidad
su andadura, la Eucaristía y la cena. Con ellos se
establece un plan para el trimestre. El día 21 celebramos el acontecimiento del “Voto heroico”, significando su sentido de fidelidad.
Los alumnos en estos meses realizan algunas salidas culturales. Los del S Juan Bautista de Los Corrales, de Ed. Infantil visitan el “Centro Entorno”, donde
se informan de la importancia que tiene el reciclaje, y
en otra ocasión visitan la Neocueva de Altamira para
ponerse en contacto con la Prehistoria. Otros alumnos
visitan la biblioteca: “Guillermo Arce”. Los de Ciclos
de F.P. por su parte visitan las factorías de “Cisterna
Cobo” y NISSAN. En otra ocasión han visitado Vitoria, Burgos y Madrid (Matelec). Con alumnos de La
Salle de Santander visitan el PIN de Bilbao.
Comenzamos el Adviento con una Vigilia celebrada en Santander, a la que acuden muchos alumnos
de ambos centros.
En diciembre, el día 7 devolvimos la visita a los
Hermanos de Palencia, con quienes compartimos la
oración y la comida; por la tarde visitamos el centro
de Managua. El día 8 los antiguos alumnos de Los
Corrales celebran su fiesta con una Eucaristía, la
asamblea anual y un aperitivo con gran concurrencia
de asistentes. El día 11 la comunidad comparte la
Eucaristía con un grupo de antiguos alumnos del
colegio de Santander. En esos primeros días de diciembre nos visitan, invitados por el Club de Judo La
Salle, un grupo de alumnos lasalianos de Japón que
hacen judo. A partir del día 16, ambos centros celebran los “Festivales de Navidad” con gran éxito por
la ejecución y la cantidad de padres que han asistido.
De igual manera se pone en acción la “Campaña de
Navidad” con la recogida de alimentos y su reparto
entre instituciones y familias necesitadas.
Los dos claustros de profesores tienen una jornada
de evaluación del trimestre, que se realiza con gran
imaginación y creatividad. El claustro de La Salle de
Santander celebra el día 13 una cena fraterna, y el día
20, en Las Caldas, se reúne para comer el de S. Juan
Bautista de Los Corrales.
Los alumnos de La Salle de Santander de Ed. Infantil han visitado Mercasantander; los de Ed. Primaria la Calzada romana (5.º y 6.º) y la Coordinadora de
minusválidos de Cantabria (COCENCE); los de 1.º,
2.º y 3.º, el Teatro CASYC, y los de 4.º, la Feria del
Golf. Los de la ESO han estado en el Planetario y el
Albergue de Corconte (1.º), San Sebastián (3.º),
Oviedo (4.º) y visitaron el “Punto blanco” de Maliaño. Los de Bachillerato visitaron Burgos (1.º) y Bilbao (2.º)…
104
El día 21, en Los Corrales, la comunidad evalúa el
trimestre, que arroja un saldo muy positivo, y celebra
el cumpleaños del Hno. Jorge Medina; por la tarde
damos una vuelta por Santillana del Mar. Después de
celebrar festivamente la Navidad, los Hermanos salimos para pasar unos días con la familia.

horizonte
Comunidades en marcha
La Salle de Santiago,
un trimestre insólito
Hno. Santos Martínez
E
sto no es una crónica, es comentario parcial o
imparcial para los que conocéis algo de La
Salle de Santiago. Comunidad variopinta:
aunque el pintor bueno, por ahora “no pinta”, porque
le entretiene la Recepción de La Inmaculada, o porque con los recortes están muy caros los óleos. Se
traen pintores para la exposición colegial de las fiestas de La Salle, pero vienen de sitios físicamente
apartados del centro colegial, quizás algunos moralmente un tanto allegados. Algo pasa.
Menos mal que la cultura histórica ha aumentado
entre nosotros porque hay quien nos refresca datos y
anécdotas de las que figuran en los libros de Historia.
Quizás, con tanto correo electrónico, nos conformamos con ver fotos y powers, y no nos queda tiempo
para la lectura sobre el físico del papel.
Ya van comentados lacónicamente dos aspectos:
historia y arte pictórico. Pero ahora sí, la música vocal está en alza: cuatro “cuasi coralistas profesionales”, además de apoyar y sostener la Coral La Salle,
hacen valer sus dotes en los “himnos cantados” y
bien medidos, empastados y saboreados a través ya
del Juntos, o del Cantigas o los de fichas de carpeta
pequeña, por comparar con la carpeta grande que se
usa más los viernes para nuestra oración comunitaria
cantada y salmodiada, que así es más oración según
el dicho de San Agustín: Cantar la oración es doble
oración.
horizonte
Por supuesto que el nombre de La Salle de Santiago a través de su coral ha sido llevado fuera de las
fronteras de la comunidad a lugares varios dentro de
la ciudad y a sitios como Ponferrada, Orense, La
Coruña o Vigo en solo este trimestre. Recientemente
abrimos brecha en el Concierto Navideño Solidario a
beneficio del Albergue Juan XXIII de los franciscanos, de Santiago, en la misma iglesia monumental de
San Francisco; las aportaciones económicas de los
asistentes llegaron a alcanzar los 2.000 euros. Las
corales fuimos 16 “mancomunadas” por una causa
benéfico-solidaria, que totalizó 500 coralistas distribuidos en tres conciertos vespertinos a las 8 de las
invernales tardes-noches del viernes 20, sábado 21 y
domingo 22 de diciembre. Sonaron villancicos hispano-americanos, cantigas de berce, clásicos y de
folclore. Muy acompañados con los aplausos del
público.
También la comunidad proyecta, a través de algunos de sus componentes, sus dotes de jardinería en el
acceso de los profesores a sus aulas respectivas a
través de la galería luminosa y cálida, con deslumbrantes colores naturales y aromas perfumados, por la
gran variedad de plantas y flores que oxigenan ampliamente los pulmones, recrean la vista y el olfato, y
llevan un mensaje de alegría y paz para transmitir a
los alumnos.
Son varias las parroquias y muchos feligreses que
saben que existe la Comunidad de La Salle de Santiago al igual que el colegio, pues tanto Hermanos
como algunos esporádicos alumnos llevan su presencia física y moral para animar en diversas eucaristías
dominicales. Solamente faltan voces blancas formadas como antiguamente, aunque sea extraescolarmente, y que hace verídico el dicho sentencioso inglés
de… “Colegio donde los niños no cantan es como un
jardín sin flores”, (sí chillan y berrean en los recreos
y ensordecen los oídos cuando el aire de la flauta que
llevan a la clase de música obligatoria como asignatura, se les escapa por los agujeros más supersónicos). No obstante, que sepan que los llamados “Ángeles de Compostela”, muy novedosa escolanía de la
105
Comunidades en marcha
gran catedral de Santiago, tiene entre sus componentes cuatro alumnos de La Salle de Santiago: Laus
Deo. Pero las parroquias necesitan voces angelicales
que ayuden a los mayorcitos y “carrozas” a que canten, y eso no lo logramos. Es que los tiempos “han
cambiado”, ¿sabe usted? Aunque sigue habiendo
niños cronológicamente como siempre. Tiene que
haber una “guerra como en Siria” para que los niños
lloren dulcemente la crueldad de los poderosos en
conflictos bélicos, al internet me remito los que pudisteis oír el canto de niños sirios.
Cuando hay que poner en evidencia de que CONFER no es solo gestión religiosa femenina, la Comunidad La Salle de Santiago se hace conocer como la
“bendita entre todas la mujeres”; y no solo como
auditora, también como gestora y con cargas de trabajo activo para animar a participar en dicho organismo a los religiosos, aunque sean misioneros o de
apostolado juvenil.
Lo que da de sí una comunidad: hogar de confraternización y de proyección pastoral. Es bueno ser
utópicos. Ya vendrán tiempos mejores. Viva el optimismo. Y para no cansaros, pues esto se sale de la
clásica crónica trimestral, termino para que me respondáis: Viva Jesús en nuestros corazones.

106
horizonte
Comunidades en marcha
Comunidad Pastoral de Santiago
Hno. Rafael Muñoz
E
l verano del año 2013 tuvo variedad de experiencias para la formación y la proyección
evangelizadora: desde el verano en Burkina
Fasso del Hno. Luis Rebolledo a las actividades pastorales en Bujedo, en Villagarcía de Arousa y en
Santiago.
También practicamos la hospitalidad en el mes de
julio: acogimos a las religiosas del consejo general de
la congregación de Nuestra Señora de la Inmaculada
Concepción de Castres y nos visitaron familiares del
Hno. Luismi.
Tras los días de Bujedo a mediados de agosto, pudimos disfrutar cuatro días de la hospitalidad de la
nueva comunidad de Santander. Allí visitamos personas y comunidades conocidas de las tierras cántabras y admiramos algunas de las múltiples bellezas
naturales de la “modesta región” que acompaña su
nombre, en campaña publicitaria, con el adjetivo de
“Infinita”.
Los monasterios de Armenteira, en dos ocasiones,
y de Trasmañó han sido testigos de nuestros momentos de retiro y de encuentros comunitarios; allí hicimos
el proyecto comunitario y reflexionamos y compartimos sobre el documentos Se llamarán Hermanos.
Disfrutamos también de la acogida de las comunidades, de sus momentos de oración y del bello paisaje de
la “senda da pedra e da auga”.
Hemos continuado nuestra labor educativa y
evangelizadora en los colegios La Salle y La Inmaculada: servicios de animación pastoral y pedagógica,
grupos cristianos, animación misionera, trabajo con
los animadores.
El fin de semana del 27 -29 de septiembre nos encargaron de las sesiones de formación de los animadores nuevos del Sector que están realizando sus
encuentros de formación. Combinamos las sesiones
de diálogo, de convivencia, de cine, de reflexión… en
La Gafa y la visita a otras experiencias evangelizadoras en Santiago.
También participamos en la convivenciaencuentro de grupos cristianos‒SalleJoven de Asturias y Galicia que tuvo lugar en Langreo a mediados
de octubre.
horizonte
Las nuevas tecnologías nos han permitido participar en el “observatorio de la vida consagrada” en
varios momentos del trimestre.
El 3 de noviembre visitamos la obra que las Religiosas Hospitalarias tienen en Betanzos. Pudimos
apreciar el servicio de calidad que prestan a personas
con discapacidad, su cordial acogida… y el mosaico
de la resurrección de Lázaro, de Marko Rupnik, que
tienen en su capilla.
En estas fechas navideñas hemos visitado algunos
belenes en Santiago, en Valga y la triple exposición
con temática belenística con ocasión del “año franciscano” que recuerda el octavo centenario de la peregrinación del santo italiano a la Ciudad del Apóstol.
Tradición peregrina que estáis invitados a continuar; si os animáis, sabed que nos alegrará poder
saludaros y acogeros. Como lo acabamos de hacer
con un Hermano brasileño que lleva varios años en
Mozambique; realizó varias etapas del Camino de
Santiago portugués junto con tres personas voluntarias de Sopro. Fue una alegría compartir con ellos la
comida el pasado 23 de diciembre.
También en Navidad hemos compartido momentos de convivencia con los Hermanos de las otras
comunidades de Galicia.
Y continuamos la misión de “construir la comunidad”: en el día a día cotidiano y en los momentos
más intensos de oración, de ocio, de formación… 
107
Comunidades en marcha
Un año histórico para la comunidad
de La Santa Espina
2013: 125 años de la llegada de los Hermanos
Hno. Alberto García Arteaga
A
ntes que nada, hay que señalar que el 8 de
diciembre la comunidad celebró de manera
sencilla pero alegre y gozosa, juntamente
con algunos Hermanos que han pasado por este centro, el 125 aniversario de la presencia de los Hermanos de las Escuelas Cristianas en este monasterio.
Fue el 8 de diciembre de 1888 cuando el Hno. Voel,
director y el Hno. Jules, subdirector, iniciaron de la
Escuela de Primaria y Asilo con la presencia de los
35 alumnos matriculados y de sus padres. Asistieron
a la misa y al almuerzo con que la Excma. Sra. Marquesa les obsequió. Comenzaba así la escuela tan
deseada no solo por ella sino también por los habitantes de la comarca y por las autoridades
Los Hermanos que formamos la comunidad llevamos cuatro años juntos, como mínimo. Los más
veteranos llevan ya 26 años. Como os podéis imaginar se conocen al dedillo. Juntos tratamos de vivir en
sencillez en este entorno maravilloso que son los
montes Torozos y este enclave tan especial del monasterio cisterciense de La Santa Espina.
Paseo a Ampudia. Estamos en la torre de la “Giralda de
Castilla”, acompañados de M.ª del Mar, sobrina de Panta.
Al fondo, el castillo.
Aunque somos muy caseros, nos gusta participar
en los eventos distritales y fallamos pocas veces a las
llamadas de formación, de renovación y .de compartir, que se nos hacen desde el Sector o el Distrito.
108
Encuentros de Zona, foros y reuniones de familia
lasaliana son cosa nuestra. El Hno. Saturnino ha asistido al curso de formación para la tercera edad
(CELTE) en Cambrils, Tarragona, durante los meses
de marzo, abril y mayo, y nos ha tenido informados
en todo momento. Además, al volver, muy contento,
compartió con nosotros toda la riqueza que había
atesorado en esos meses. No nos gusta dejar solo el
nido y siempre queda alguien en casa para atender al
turismo o las visitas, o para animar las liturgias de la
parroquia en Semana Santa.
También los viernes por la tarde salimos a visitar
lugares de interés de nuestros alrededores: el día 25
de octubre visitamos Las Edades del Hombre, que se
han expuesto en la ciudad de Arévalo. Pero también
nos gusta acercarnos a Ampudia, Wamba, las fuentes
del Bajoz, recorriendo pocos kilómetros en coche y
paseando después por el entorno.
Como en años anteriores nuestra relación con la
comunidad de carmelitas de Villagarcía ha sido excelente. Hemos tenido varios encuentros con ellas y
siempre nos agasajan con algún dulce y unas conversaciones espirituales y de todo tipo. Nosotros les
llevamos miel y otros productos (plantas aromáticas
y medicinales) de la naturaleza que nos rodea.
horizonte
Comunidades en marcha
la Navidad. Pasamos un día muy agradable en su
compañía y esperamos devolverles la visita el día de
Reyes. Como todos los años, los colegios Ntra. Sra.
de Lourdes y La Salle, ambos de Valladolid, celebraron el día de convivencia de toda la comunidad educativa, en el monasterio y sus alrededores: marcha de
Proyde, juegos, comida campera…
Navidad anticipada con la comunidad de Palencia.
Hemos recibido numerosas visitas de distintas
comunidades y Hermanos a lo largo del año:
A principios del año 2013 pasó con nosotros unos
días el Hno. Vicente Bartolomé, antiguo director de
esta comunidad y del internado y actualmente director de la escuela de Tami, en Togo, a la que ayudamos especialmente. Más de una docena de Hermanos
de la Residencia de Arcas Reales de Valladolid compartieron con nosotros la tarde, la eucaristía y la cena.
La comunidad de Ntra. Sra. de Lourdes también nos
acompaña el día que hace su P.C. El 5 de julio tenemos la satisfacción y la alegría de recibir a una buena
parte de la comunidad de monjes Cistercienses de la
Estricta Observancia de San Pedro de Cardeña, cerca
de la ciudad de Burgos. Al frente venía su nuevo
abad, antiguo alumno del Colegio La Salle. Recorrimos los claustros y la iglesia con toda clase de explicaciones, cantamos con ellos las Vísperas, visitamos
la exposición de mariposas y tomamos luego un café.
Manifestándonos su agradecimiento y satisfacción,
emprendieron el viaje de regreso.
Durante el mes de setiembre el P. Vicente Palacios, franciscano, hermano del Hno. Panta, comparte
nuestra vida durante unas semanas. Lleva toda su
vida de misionero en Perú. Es uno de los preferidos
de nuestra ayuda a las necesidades del tercer mundo;
se muestra muy agradecido por ello. El 28 de septiembre tuvimos un día de encuentro-oraciónconvivencia de todas las comunidades de Hermanos
de Valladolid. Aunque el día estuvo lluvioso y algo
ventoso, resultó del agrado de la mayoría. Deseamos
que se repita. La comunidad de profesores de Aravaca organizó su retiro de Adviento en este monasterio
y su entorno, remanso de paz para sus mentes y corazones. La comunidad de Palencia nos visitó el día 23
de diciembre para celebrar juntos y anticipadamente
horizonte
Como sabéis, animamos esta obra educativa en
unión con otros profesores, unos contratados por La
Salle y otros por la Junta de Castilla y León. La mayoría de los alumnos (111 de los 142) están internos
de lunes a viernes. Los profesores contratados por La
Salle (7) ayudan al Hno. Alberto, director del internado.
En los primeros días de curso, en septiembre, se
suele tener una salida-excursión de convivencia. Este
curso se fue al paraje denominado “el Cañón del río
Lobos” en la provincia de Soria
Junto a los cursos reglados (PCPI, Ciclos formativos de “Producción Agropecuaria”, “Forestales” y
“Aceites y Vinos”), se han tenido muchos cursillos,
actividades y charlas formativas complementarias a
lo largo de año. Enumeramos algunos:



Curso básico de Incendios (15 horas), celebrado en mayo y destinado a los alumnos de 1.º de
Trabajos Forestales.
Curso de Guardería de Campo (60 horas), en
junio, para todos aquellos alumnos de la consejería de Agricultura y Ganadería que han terminado un ciclo forestal.
Curso de esquileo (30 horas), celebrado en
abril, destinado a los alumnos de 1.º de Producción Agropecuaria. Se realiza con las ovejas del centro: unas 400 churras.
Paseo a Wamba. D. José Luis nos explica la iglesia y el
osario.
109
Comunidades en marcha
una educación en valores, se cuida la reflexión de la
mañana, la animación de las tutorías así como el diálogo y cercanía a los muchachos.
Hay tres grupos de reflexión para potenciar la
formación humana, social y cristiana de los alumnos
fuera del horario escolar, y otros de formación artística, digital y deportiva. Los grupos se reúnen una vez
a la semana o quincenalmente. Estos grupos son:
grupo de crecimiento personal; grupo de jóvenes
solidarios; grupo de confirmación; grupo de pintura,
grupo de aula virtual-etiquetas.
Paseo al Cañón de Río Lobos y Castillo de Ucero.
También se realizan muchas actividades extraescolares y complementarias. Dentro de este apartado
cabe destacar numerosas visitas a viveros forestales,
bodegas y almazaras, ferias y exposiciones, museos..., así como participación en jornadas y demostraciones de casas de maquinaria agrícola. Todas
relacionadas con cada uno de los diferentes cursos
del centro.
Los Hermanos Saturnino y Pantaleón atienden al
buen funcionamiento de la biblioteca de la escuela
para que los alumnos puedan estudiar en silencio y
pedir los libros que necesitan para sus estudios.
El Hno. José María realiza labores de apoyo escolar a los alumnos del PCPI con más dificultades académicas.
Dadas las características del alumnado y de la escuela, se hace muy difícil realizar una tarea pastoral
explícita. La actuación de la comunidad y de los profesores por ella contratados, se centra en llevar a cabo
El día 6 de noviembre, día del Bto. Isidoro Primo,
toda la escuela recuerda con alegría que este Hermano (Hno. Edmigio) fue alumno en este centro. Este
año tuvimos la suerte de recordar junto con él, a otro
antiguo alumno beatificado el 13 de octubre en Tarragona. Se trata del Hno. Juan Pablo (Gregorio Álvarez) alumno de la Santa Espina del año 1911 al
1918. Se celebra una Eucaristía por la mañana y una
serie de actividades festivas y de competición por la
tarde. El día termina con una chocolatada. Quizás el
próximo año hagamos recuerdo también de un tercer
mártir que pasó un año en esta escuela, en este caso
como profesor: el Hermano Agustín María (Eugenio
García Trivaldos).
El 4 de junio en la iglesia parroquial, que es la del
monasterio, tuvo lugar la ceremonia de confirmación
de ocho alumnos del CIFP La Santa Espina que formaban parte del grupo de confirmación antes mencionado, presidida por D. Ricardo Blázquez, arzobispo de la diócesis de Valladolid.

El grupo de confirmación de este año
110
horizonte
Comunidades en marcha
Residencia La Salle - Arcas Reales
Hno. Pedro Méndez
“Queda prohibido no sentir
que sin ti este mundo no sería igual”
C
omo pórtico de las vivencias de estos veteranos de Arcas Reales, cito unos versos atribuidos a Neruda, que circulan por la red:
“Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo, /
tener miedo a la vida y a sus compromisos, / no vivir
cada día como si fuera un último suspiro”.
Empiezo felicitando a los dos Hermanos que se
han incorporado recientemente a la comunidad. Son
los Hermanos Miguel Ramos, a quien agradecemos
su disponibilidad al responsabilizarse de la animación
comunitaria, y Jesús Puente, venido de Shemá con
severos problemas de espalda, ya superados. A tales
personas convenía una celebración extraordinaria. La
tuvimos a mediados de septiembre. La comida en la
barbacoa, preparada en la brasa, distendida, fue el
marco ideal para expresar a los dos Hermanos nuestro cariño y acogida.
Varias salidas comunitarias han servido para romper el ritmo del día a día. Por Santa Mónica, ocho
Hermanos de la comunidad más dos foráneos, los
Hnos. David Cachazo y Ramón Lomillo, nos zambullimos en el ambiente de Marcilla de Campos, gracias
a la invitación, un año más, de D. Javier Ruiz y de su
hermano, el Hno. César. Es este un pueblo enmarcado en la Tierra de Campos, prototipo de austeridad,
nobleza y sentido sagrado del terruño. Aprovechamos
la mañana para deambular por este coqueto pueblo,
con genes vacceos. Paseamos por la calle Cantarranas
horizonte
y admiramos la casa solariega de la otrora terrateniente del pueblo. Después de visitar a una bodega
antigua, con su prensa, lagar y utensilios de época,
comimos en la bodega familiar de Javier y César, en
franca hermandad los Hermanos de Bujedo y Arcas
con los anfitriones. Luego visitamos la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Un antiguo
aspirante de Bujedo y hoy teniente alcalde del pueblo, Sr. Estébanez, nos explicó la historia y características del templo.
También visitamos una casa primorosamente
amueblada con el ajuar antiguo típico de la región. El
desván nos sorprendió con un pequeño museo con
objetos de época: allí estaba la popular fanega, el
celemín y diversos aperos, así como haldas y tocados,
hachones, areles, trébedes, candiles, quinqués, etc. En
el Ayuntamiento, el Hno. Rufino Arconada (también
hijo de Marcilla) proyectó un video grabado con motivo de la vista reciente al pueblo de la Virgen Panadera, talla anónima de siglo XIII. Pudimos constatar
el fervor y la devoción del pueblo hacia su patrona.
No podíamos faltar a Las Edades del Hombre en
Arévalo y admirar su arquitectura mudéjar. Isabel I
de Castilla, que vivió su juventud en esta villa, decía
cariñosamente “la mi villa de Arévalo”. Aquí nació
Fray Juan Gil, mercedario que liberó a Miguel de
Cervantes de la prisión de Argel. También San Ignacio de Loyola pasó su adolescencia en esta villa.
Un guía, antiguo alumno del Hno. Zuga en Palencia, que fue quien le metió el “gusanillo” del arte, nos
explicó con todo detalle las obras más significativas
de la exposición. Por la tarde, en Madrigal de las
111
Comunidades en marcha
Altas Torres visitamos el palacio de las Huelgas,
donde nació la reina Isabel I de Castilla, y la iglesia
de San Nicolás, con un artesonado precioso.
completamos la mañana con otra exposición de grabados de Rembrandt en la antigua iglesia de la Pasión.
En la primera quincena de noviembre participamos en la eucaristía celebrada en el colegio de Lourdes, presidida por el señor arzobispo, en honor de los
mártires vallisoletanos de la Guerra Civil, recientemente beatificados: tres Hermanos de La Salle y dos
del Corazón de María. Como complemento, también
asistimos otro día en Bolaños de Campos a otra eucaristía, igualmente presidida por D. Ricardo Blázquez,
en honor del beato Hno. Juan Pablo, Gregorio Álvarez Fernández, hijo del pueblo, fusilado en San Fernando del Jarama. Los paisanos del pueblo estaban
orgullosos con su beato.
En el último fin de semana de septiembre, en un
día lluvioso, una representación de la comunidad
participó en el encuentro íntercomunitario de los
Hermanos de Valladolid en La Santa Espina. Con el
lema “Sabiendo que Dios me ama, comparto su sabiduría y aprendo a amar como Él me ama, construyendo fraternidad y Reino”. Su finalidad era compartir la vida y los Proyectos Comunitarios al comienzo
del nuevo curso. Después de la oración compartida y
un breve descanso, nos dividimos en dos grupos. He
aquí algunos temas que fueron apareciendo: La presencia de Dios en la espiritualidad lasaliana. La cercanía y disponibilidad ante los demás en nuestros
Proyectos Comunitarios, La necesidad de construir la
comunidad entre todos. Un Hermano dijo que tiene
por norma que todos los que se acerquen a él se sientan acogidos. Otro nos informó de sus andanzas veraniegas con chicos problemáticos y con gitanos sin
trabajo. También se aludió al apostolado veraniego
allende los mares. Con la eucaristía y la comida fraterna acabamos el encuentro.
También visitamos en Lourdes la exposición del
pintor abulense Luciano Díaz-Castilla. Admiramos
en sus cuadros la luz jugando con las formas, los
árboles estilizados con mágicas pinceladas en el atardecer melancólico del otoño. Su naturaleza aparece
habitada por caballos, cabras e imágenes fugaces de
hombres. Tampoco faltan dos Cristos trágicos levemente esbozados.
Ya entrado en diciembre, visitamos en la catedral
la exposición resumen de Las Edades del Hombre y
112
Como veteranos, reseño esquemáticamente el parte de la enfermería. A las operaciones de cataratas a
los Hnos. Silvano Maeso y Francisco Iglesia, hay que
añadir la hospitalización por unos días del Hno. Isaac
Asenjo, por unos problemas intestinales y un lumbago reincidente. El Hno. Emilio hubo de ingresar a
finales de noviembre en Benito Menni por la depresión. Antes de Navidad ha vuelto a la comunidad
notablemente recuperado.
Después de dos años de ausencia del tradicional
Nacimiento artístico, felizmente este año los Hnos.
Avelino y Eduardo están trabajando afanosamente en
su montaje. A juzgar por el trabajo, el detallismo y el
mimo con que lo preparan, va a resultar maravilloso.
El sábado, 14 de diciembre, la comunidad de asociados de Shemá se preparó para el próximo nacimiento del Niño Dios con un retiro en nuestra casa;
dos Hermanos de la comunidad les acompañaron. Por
la noche hubo un encuentro de Ex-Hermanos con sus
señoras, en total 54. Asistieron a nuestra eucaristía y,
para recordar viejos tiempos, cantamos al final el
“Conjuro a María Inmaculada”. Y durante la cena nos
cantaron unos villancicos.
Acabo deseando a todos en el nuevo año 2014 que
trabajen por tender PUENTES en lugar de MUROS,
y no olviden estos consejos del poeta del prólogo:
“Queda prohibido no buscar tu felicidad, / no vivir tu
vida con una actitud positiva, / no pensar en que
podemos ser mejores, / no sentir que sin ti este mundo no sería igual”.

horizonte
Comunidades en marcha
Comunidad Pastoral La Salle Girón
Hno. Roberto Hierro
H
ola, de nuevo, a todos. Quizás os preguntaréis ¿y qué hacen nuestros Hermanos de
Girón? Pues sí aunque últimamente las tareas nos impidan comunicarnos más, seguimos caminando y descubriendo nuevas cosas.
Nos remitimos, pues, al final del curso pasado,
que lejos de ser una cita con las urgencias, evaluaciones y prisas, fue también un momento para seguir
estando presentes y relacionándonos con cantidad de
personas que pasan por nuestra casa. Varios grupos
estuvieron en distintos momentos en nuestra casa de
convivencia: los jóvenes de Salle Joven celebraron su
segundo fin de semana de estudio y convivencia para
preparar los exámenes de junio; los voluntarios tuvimos nuestra evaluación del curso y correspondiente
celebración; cerramos el curso con la gente del Foro
Pastoral con una parrillada en nuestro jardín y una
tertulia pastoral muy interesante; la comunidad parroquial celebró lo vivido juntos y nos enviamos unos
a otros a distintos lugares donde íbamos a pasar el
verano; los chicos y jóvenes se despidieron realizando alguna actividad especial… Es decir, que no paramos de encuentros, despedidas y reencuentros…
Pero el comienzo del verano no iba a suponer un
parón en este sentido. Casi no habíamos terminado el
curso y ya estábamos preparando algunas actividades
de verano. Concretamente, a nuestro hermano Fernando le tocó poner todo a punto para vivir la experiencia de Gente Pequeña de PROYDE con su grupo
de 2.º de Bachillerato, que pasaron un mes como
voluntarios-cooperantes en un barrio de Santa Fe
(Argentina). Entre mate y mate tuvieron tiempo para
todo: charlar, descubrir la realidad, compartir con la
gente más humilde, descubrir otro mundo y otra cultura, unirse en la lucha por un mundo más justo y
solidario... Una experiencia llena de momentos inolvidables y de retos para seguir construyendo.
Y por aquí, por el barrio, tampoco nos quedamos
parados. Con la colaboración de otros profesores y
voluntarios, nos dispusimos a preparar nuestro segundo campo de trabajo con los jóvenes y niños con
los que trabajamos durante el año. Este año contamos
con la participación de doce jóvenes venidos de distintos lugares (Palencia, Burgos, Valladolid, Gijón) y
horizonte
con sus respectivos animadores, que nos ayudaron y
pusieron todo lo mejor de sí (gracias a Natalia, David
Cordovilla, Marta y el Hno. Luis de los Ríos).
Una vez más confirmamos que cuando nos acercamos a entrar en contacto con la realidad y nos dejamos de prejuicios y de miedos, todos salimos ganando. El campo de trabajo tenía como objetivo conocer la realidad de los jóvenes y niños del barrio que
presentan más dificultades, algunos de ellos de etnia
gitana, y otras realidades de exclusión social de la
ciudad (como la realidad de los niños inmigrantes, las
personas sin hogar, algún centro de acogida de menores, casa de acogida de mujeres sin recursos, etc.).
Todo ello nos sirvió para que cada uno nos planteáramos en nuestro día a día con qué ojos miramos a
los demás, descubrir lo positivo que hay también en
los otros aunque sean distintos a mí y cómo puedo
hacer con mi tiempo y mi futuro para que existan
menos distancias entre algunos jóvenes y otros, porque todos deberían tener las mismas oportunidades…
Para todos los que tuvimos la suerte de compartir
estos días, las 24 horas, poniendo todo lo mejor de
cada uno para que las cosas saliesen bien, riendo y
trabajando juntos, compartiendo y saliendo al encuentro del otro, fue una experiencia de verdadero
evangelio, donde se vive in situ que, al compartir, se
derrumban barreras inimaginables; que en los otros y
en los que menos tienen se descubren signos de vida,
y que es posible hacer algo para que nuestro mundo
siga resucitando de esperanza.
La casa se nos llenó en esos días de sacos, sillas,
sartenes, alimentos, mesas, un poco más desordenada
que otras veces… pero también se llenó de alegría,
113
Comunidades en marcha
amistad, encuentro, reflexión, entrevistas, invitaciones,
llamadas. La despedida, como todas, también costó un
poco; pero es señal de haber sido una experiencia que
guardaremos en el corazón y en la memoria.
Sí, aunque no lo parezca, también tuvimos tiempo
para descansar, para acompañar a nuestras familias
unos días, para descansar junto con otros hermanos
en La Gafa, para hacer algún retiro de silencio y para
disfrutar de algunos días de descanso y convivencia
en la zona de los Pirineos. Gracias a la comunidad de
Guayente, que nos acogió casi en su último acto de
servicio, pero con los que pudimos compartir su labor
pastoral tan bonita y detallista con la gente del lugar
y también contemplar los hermosos paisajes que les
rodean.
Y así comenzamos de nuevo el curso, con las pilas
cargadas y las ilusiones renovadas para seguir haciendo realidad lo que luego se pone en los papeles:
ser comunidad de misión, abierta y atenta a la realidad, y siempre dispuesta a implicarse.
Andamos más o menos en las mismas tareas, pero
siempre pensando cómo podemos llegar mejor a
nuestros jóvenes y a los agentes con los que compartimos el día a día. Por eso nos juntamos al principio
de curso con todos los agentes de pastoral que tienen
ciertas implicaciones en los colegios, para diseñar
campos de acción común y apoyarnos mutuamente en
muchas de las actividades o proyectos que se llevan a
cabo.
Comenzamos también nuestra labor con los niños
y jóvenes del barrio, invitando a nuevos voluntarios a
echarnos una mano en la limpieza y pintura de los
locales; poniendo todo en marcha y dando nuevo
colorido para seguir apoyando a estos jóvenes y niños
en su día a día, acompañándoles en sus dificultades
escolares y en sus planteamientos de futuro. Aunque
algunos ya han dejado el sistema escolar, es para
nosotros una suerte y un reto que sigan viniendo a
pedirnos ayuda, para que los acompañemos a una
entrevista de trabajo, para que les ayudemos a sacar
el carnet de conducir o para reforzar su nivel de lectura.
Este año, la comunidad se ha enriquecido con la
preparación de varios encuentros de formación del
Sector: en primer lugar con los animadores de grupos
y en segundo lugar con los profesores nuevos. Han
sido varios encuentros de formación teológica, cristológica y vivencial, a raíz de nuestro ser educadores,
animadores y acompañantes de otros en su proceso, y
ha sido un buen momento para dar a conocer cómo
vivimos en Girón, qué nos preocupa y qué realidades
nos tocan el día a día. Abrimos nuestra casa y salimos hacia fuera y el resultado fue muy positivo para
ambas partes.
Y así se ha ido ocupando este primer trimestre. De
presencias, encuentros, acompañamientos, en medio
de los cuales también ha habido tiempo para el ocio y
el descanso comunitario y para reponer fuerzas, como
viene siendo habitual, dedicando un par de fines de
semana al retiro y oración con nuestras hermanas
dominicas de Alba de Tormes y en el Monasterio de
Huerta (Soria).
Esperamos disfrutar de estos días de descanso para
retomar fuerzas y comenzar con ilusión el nuevo tiempo que nos espera. Un saludo.

114
horizonte
Comunidades en marcha
Nuestra Señora de Lourdes
Crónica del segundo semestre de 2013
Hno. Juan González
T
erminábamos la crónica anterior con estas
palabras: “Y damos por cerrado este primer
semestre con el Día de la Familia, celebrado
en la Santa Espina y coincidiendo con la Marcha
PROYDE. Con un día estupendo, tuvimos la Misa en
uno de los patios claustrales y, después, disfrutamos
de una comida campestre amenizada con “hinchables” y otras atracciones para los más pequeños”.
Las vacaciones de verano y el segundo semestre
del año han pasado con la rapidez que atribuimos al
tiempo que, más que pasar, huye (tempus fugit). Y
aquí estamos, de nuevo, intentando rememorar hechos, anécdotas… que han ido conformando la pequeña historia de la Comunidad de “el Lourdes”.
JULIO nos trajo sus novedades. El día 2 partía para Nicaragua el Hno. Rufino Arconada, para colaborar como voluntario de PROYDE en la obra que llevan
allí los Hermanos, juntamente con la Diócesis, de
promoción de la pastoral y del profesorado rural.
Regresaba el 13 de agosto, cansado, pero satisfecho
por la labor realizada.
El 11 salían para Argentina el Hno. Fernando
González y la profesora Ángela Mozo con un grupo
de alumnos y alumnas de 2.º de Bachillerato para
realizar una experiencia de voluntariado (PROYDE) en
Santa Fe, con los más necesitados. Ellos mismos se
han costeado su viaje por medio de distintas campañas a lo largo del curso. El 11 de agosto estaban de
vuelta, cansados y enriquecidos por la experiencia
vivida.
Del 22 al 26 acogemos en la comunidad al abad
cisterciense Dom Pierre André, que está en Valladolid
para asistir a un curso de español en la Universidad. Es
abad del monasterio de Santa María del Desierto, cerca de Toulouse, del que dependen los monasterios de
Dueñas, Cóbreces y San Pedro de Cardeña. Es una
petición que nos hizo el Abad de Dueñas y que atendimos con sumo gusto. La estancia en España estaba,
también, motivada por la consagración del nuevo
Abad de Cardeña, Dom Roberto de la Iglesia Pérez,
antiguo alumno de Burgos.
horizonte
AGOSTO fue el mes que la comunidad había elegido para realizar una salida comunitaria. Haciendo
centro de operaciones en Braga, y con el asesoramiento de los Hermanos de dicha comunidad, cinco
Hermanos visitaron aquellas tierras portuguesas entre
los días 17 y 22. ¡Gracias, Hermanos de Braga, por
vuestra fraterna acogida!
El 18, algunos de los que se quedaron asistieron
en Burgos al entierro de D. Toribio, hermano del
Hno. Carmelo Bueno, que estos últimos cursos colabora en nuestra formación permanente.
Y cerramos agosto con la incorporación a la comunidad del Hno. Fortunato Berciano, el 24, y el
traslado del Hno. José María Amigo a la Residencia
La Salle (Cortes), de Burgos, el día 25. Desde el día
26, esto ya huele a curso escolar. Comienzan las Jornadas de Planificación del curso 2013-2014.
SEPTIEMBRE contempló la llegada escalonada del
alumnado a las aulas. El 8 se reunía la comunidad, un
año más, en La Santa Espina para elaborar el Proyecto Comunitario. Fue un día intenso de trabajo comunitario y de convivencia con los Hermanos de aquella
comunidad, que siempre se esmeran en hacernos la
estancia agradable por su acogida fraterna. Dicen las
malas lenguas que alguno ayuna el día anterior para
festejar como se merecen las setas que nos sirven en
la comida (desde luego, las festejamos todos).
La tarde del día 17 ha quedado en nuestro recuerdo como algo especial. Visitamos Las Edades del
115
Comunidades en marcha
Hombre en Arévalo. Hizo de guía Rubén Fernández,
antiguo alumno de Palencia y de alguno de los Hermanos que estábamos allí. Estuvo magistral (Zuga,
nada cae en saco roto). Después nos trasladamos a
Madrigal de las Altas Torres, para visitar el Monasterio de Nuestra Señora de Gracia, de las agustinas,
antiguo palacio real de Juan II de Castilla, donde
nació Isabel la Católica el 22 de abril de 1451. Todo
impresionante, pero no tengo calificativos para el
silencio y la paz que se respiraban en aquel monumental claustro isabelino. Cerramos la tarde con una
amena cena en Tordesillas que, además, estaba en
fiestas.
El 28 nos reuníamos, de nuevo, en La Santa Espina. Estábamos convocados los Hermanos de las comunidades de Valladolid para pasar una jornada de
retiro compartiendo los Proyectos Comunitarios.
Aunque el día estuvo un poco inclemente, la calidez
fraterna hizo que no lo notáramos. Además, la gran
acogida por parte de los Hermanos de la comunidad y
su desvelo, contribuyeron a que fuera una jornada
entrañable. ¡Qué categoría la de los Hermanos Alberto, Pantaleón, José María y Saturnino!
Valladolid, D. Ricardo Blázquez, se conmemoró con
una Eucaristía a los cinco mártires de la diócesis, tres
Hermanos de La Salle (Evencio, Gregorio y Teodoro,
antiguo alumno del Colegio) y dos claretianos (Melecio y Otilio).
El día 18, de ocho a nueve de la noche, tuvimos,
un año más, la reunión de la comunidad con el equipo
directivo del centro. Esta reunión tiene por finalidad
el mostrar nuestro interés y apoyo a su difícil tarea,
además de que la comunidad, con bastantes Hermanos jubilados, no pierda la comba de la dimensión
pedagógica del centro, que no la pierde pues no hay
ningún Hermano que no tenga su tarea en el centro,
sea cual sea su edad. Y, como todos los años, se amplió la reunión cenando todos juntos.
Y llegamos a DICIEMBRE. Del 11 al 20 se alojan
en la comunidad, un año más, Mercedes, Marie Laure
y Marie Jeans, profesoras del Colegio La Salle de
Burdeos, que acompañan a una treintena de alumnos
y alumnas que participan en el intercambio colegial
entre los dos centros. Son de resaltar las tablas de
quesos con que nos obsequian. El 16 toca la reunión
con el equipo de pastoral colegial. Tiene la misma
finalidad de apoyo por parte de la comunidad y de
información por su parte que señalábamos para la
reunión con el ED. También cenamos juntos.
Antes de concluir esta crónica, quiero reseñar lo
siguiente: desde octubre, nos acompaña, determinados días, Antonio Domínguez. Es un joven que está
en proceso de discernimiento vocacional. Es licenciado en Historia del Arte y procede de los grupos de
profundización cristiana de nuestra parroquia de la
Sagrada Familia. Participa en nuestra Eucaristía y,
después, comparte la cena con la comunidad.
El 26 de OCTUBRE tuvimos en el centro el Encuentro de Zona. El Hno. Nacho Aguilar, del EAD,
nos presentó el Documento marco de evangelización
de La Salle ARLEP. A los Hermanos de la comunidad no nos resultaba desconocido pues nos lo había
presentado, al inicio del curso, el Equipo de Pastoral
del centro. Llover sobre mojado puede ser, también,
bueno.
El 6 de NOVIEMBRE fue el día elegido por la diócesis de Valladolid para celebrar la reciente beatificación en Tarragona de los Mártires de España. En la
capilla del colegio y presidida por el arzobispo de
116
El 20 empezaron las vacaciones de Navidad. Al
atardecer compartimos Misa y mesa con el resto de la
comunidad educativa. El 21 pasamos la mañana en
Arcas Reales, de retiro comunitario, y a medio día
adelantábamos la comida navideña con aquellos venerables Hermanos.
El cierre oficial, el día 25. Las comunidades de
Castilla y León (menos Bujedo y Burgos) celebramos
la Navidad compartiendo la Eucaristía y el ágape
fraterno. Al cronista, que no lleva muchos años en
esta comunidad, siempre le llamó la atención el detalle del “sorbete”. ¿Desde cuándo se sirve? Me han
ilustrado que es una aportación al menú, desde 2001,
debida al Hno. Isidro Arce, que tenía “vara alta”,
pues era el administrador del centro. Que conste. 
horizonte
Comunidades en marcha
75 años a la vista
La Salle Valladolid
Hno. Pedro Río
A
finales del mes de agosto, el día 24, quedó
constituida la comunidad de Hermanos del
Colegio La Salle – Hispano de Valladolid.
A los Hnos. Marcos Alonso, Pedro Chico y Juan
Antonio Martínez, se unieron los Hnos. Mariano
Alonso y Pedro Río, ambos oriundos de Los Corrales
de Buelna. A José Carlos Moreno la obediencia le
destinó al Colegio La Salle de Santander.
desconoce o no respondiendo cuando lo indagan
sobre algo que sabe.
Evitemos la muerte en suaves cuotas, recordando
siempre que estar vivo exige un esfuerzo mucho mayor que el simple hecho de respirar.
Solamente la ardiente paciencia hará que conquistemos una espléndida felicidad.
Así había comenzado la presente crónica.
El resultado final, como “las novelas por entregas” de Manuel Fernández y González, se iría completando con retales del tiempo. Es más, hasta tenía
ya un esquema borrador de la crónica de la comunidad, y ¡lo que son las cosas!, me vino un recuerdo de
Pablo Neruda. Conecté el ordenador con el “erudito”
Google y le insinué: “Pablo Neruda y la crónica…”
Me puse a recordarlo, a leerlo y releerlo. Pienso,
reflexiono y me pregunto ¿Vale la pena lo que vas a
escribir, precisamente en los albores de la celebración
de los 75 años del colegio y de la comunidad La Salle‒Hispano?
Me hago eco de algunas frases:

Te dejo con lo que me ofreció:
Muere lentamente quien se transforma en esclavo
del hábito, repitiendo todos los días los mismos trayectos, quien no cambia de marca, no arriesga vestir
un color nuevo y no le habla a quien no conoce.

Muere lentamente quien hace de la televisión un
gurú.
Muere lentamente quien evita una pasión, quien
prefiere el negro sobre blanco y los puntos sobres las
"íes" a un remolino de emociones, justamente las que
rescatan el brillo de los ojos, sonrisas de los bostezos, corazones a los tropiezos y sentimientos.
Muere lentamente quien no voltea la mesa cuando está infeliz en el trabajo, quien no arriesga lo
cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño,
quien no se permite por lo menos una vez en la vida,
huir de los consejos sensatos.

Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito, repitiendo todos los días los
mismos trayectos, quien no cambia de marca,
no arriesga vestir un color nuevo y no le habla
a quien no conoce.
Quien no arriesga lo cierto por lo incierto para
ir detrás de un sueño, quien no se permite por
lo menos una vez en la vida, huir de consejos
sensatos.
Evitemos la muerte en suaves cuotas, recordando siempre que estar vivo exige un esfuerzo mucho mayor que el simple hecho de respirar. (Y todo esto lo tengo que decir con mis recién estrenados sesenta y seis diciembres bárbaros).
Estoy contigo, Pablo. Si una crónica es repetir los
trayectos de todos los días ¿eso es signo de vida?
Muere lentamente quien no viaja, quien no lee,
no escucha música, quien no encuentra gracia en sí
mismo.
Estar vivo exige un esfuerzo mucho mayor que el
simple hecho de respirar. Voy a tratar de arriesgar,
dejando lo cierto, lo seguro, lo de siempre, el candileta por lo incierto de la utopía del sueño huyendo de
los campos sensatos.
Muere lentamente quien pasa los días quejándose
de su mala suerte o de la lluvia incesante.
Allá voy. Me lanzo desde lo alto del trampolín
con el riesgo de darme una panzada.
Muere lentamente quien abandona un proyecto
antes de iniciarlo, no preguntando de un asunto que
Queridos Hermanos de la Comunidad, del Sector,
del Distrito y del Instituto:
horizonte
117
Comunidades en marcha










¿Qué hacemos cinco Hermanos en una comunidad como la nuestra?
¿Qué futuro tenemos cinco Hermanos en una
comunidad y otros pocos más en otra a veinte
minutos de paseo?
¿Qué sentido tiene ocupar cuatro plantas de todo un señor edificio para cinco personas?
Si pensamos en un futuro inmediato ¿no sería
mejor adelantarse a lo que no tiene más remedio?
¿En qué medida podemos ser una comunidad
más próxima y abierta a la comunidad educativa?
¿Cómo tener una presencia más dinámica y
participativa en el entorno en el que estamos?
¿Cómo no morir lentamente si abandonamos
un proyecto antes de iniciarlo y no preguntando aquello que no sabemos?
Celebrar los 75 años del centro y de la comunidad, ¿supone para nosotros una cuota de júbilo, o por el contrario el fin de una meta para
ponernos en manos de la seguridad social?
75 años ¡Casi nada! ¿Cuántos Hermanos han
pasado por la comunidad? Todos ellos nos hablan de esfuerzo, tesón, constancia, sufrimiento, austeridad, superación, fidelidad, testimonio. Todo eso lo hemos heredado en esta efeméride de los 75 años. ¿Cuál será nuestra herencia para el futuro? ¿Nos apuntamos a la carrera de relevos sin que se nos caiga el testigo?
¿Soñamos de cara al futuro?
Que lo que reciban de nosotros los que celebren el
centenario puedan recordarnos porque supimos retirarnos a tiempo y con buenos modales.
118
Que los Hermanos seguimos siendo una referencia
para toda la comunidad educativa.
Que supimos formar y orientar en la misión compartida.
Que nuestra crítica y análisis de la realidad educativa, fue siempre positiva y constructiva.
Que la Institución siguió apoyando y creyendo en
el equipo de profesores del centro.
Que el personal del colegio, los seglares, contaron
con un equipo de asociados que supieron seguir ofreciendo ilusión y ganas por la misión educativa como
nueva evangelización.
Que todos olvidamos los ajos y cebollas de Egipto, asumiendo las nuevas realidades que nos ofrece el
día a día.
Celebrar 75 años en estas calendas equivale a siglos de historia en el pasado. Aprendamos del pasado, que para eso somos profesores y educadores. En
el pasado existieron los grandes mastodontes que hoy
podemos visualizar gracias a “los parques jurásicos”.
Eran tan enormes y fantásticos que no fueron capaces
de adaptarse al medio cambiante que les tocó vivir, a
pesar de su grandeza, o precisamente, por su grandeza. Hoy sabemos cosas de ellos, cada vez más. Hasta
el ADN por medio de un fémur hallado en Atapuerca.
Bueno, ¿a qué viene este último párrafo? Tú dirás, no
lo voy a poner yo todo.
Y ahora sí, a modo de despedida y por aquello del
eco que en su día tuvo, quiero decir que todo esto es
algo más que dos sacos de cemento.

horizonte
Antiguos
alumnos
horizonte
Antiguos Alumnos
Antiguos Alumnos
VI Encuentro de Antiguos Alumnos del Distrito ARLEP
A modo de crónica...
Hno. Javier Abad
A
principios de octubre, entre los días 4 y 6,
el Colegio “Ntra. Sra. de Lourdes” acogió el
VI Encuentro de Asociaciones de Antiguos
Alumnos de La Salle de España y Portugal, convocado por el Consejo Coordinador de Asociaciones de
Antiguos Alumnos y organizado por la Asociación
del Colegio de Lourdes bajo el lema “Para que tu
voz se oiga. Lasalianos en la sociedad”. Los objetivos eran facilitar el encuentro, compartir experiencias
y reafirmar en un clima de fraternidad el compromiso
de quienes han pasado por los centros lasalianos. Para
ello estaban citados representantes de las 41 Asociaciones de ex-alumnos censadas en el Distrito, que
desarrollan un amplio abanico de actividades, desde
la fe, la fraternidad y el servicio.
Este tipo de encuentros no tienen una periodicidad
fija, y se celebran cada vez en un Sector. Hasta el
momento se han celebrado cinco: en Madrid (Colegio
“Maravillas”, 1999), Tarragona (Colegio “La Salle”,
2001), Sevilla (Dos Hermanas, 2004), Valencia (Liria, 2006) y de nuevo Madrid, en 2010 (Centro “La
Salle” Arlep).
Tras la bienvenida a los participantes, el viernes
por la tarde, la jornada del sábado comenzó –como
buenos lasalianos– con la oración de la mañana,
preparada por la Asociación de Paterna, para dar
paso a la inauguración oficial del encuentro, en la
que intervinieron el Presidente de la Asociación
anfitriona, D. Ángel M.ª de Pablos; el Delegado de
Formación y Asociación del Sector, Hno. José Miguel Jiménez; el asesor del Consejo, Hno. José María Pons, y el Presidente del Consejo Coordinador,
D. José Ramón Batiste. Todos ellos animaron a que
las tareas del encuentro fueran provechosas para los
asistentes.
horizonte
A continuación el director del Colegio “Ntra. Sra.
de Lourdes”, Hno. Javier Abad, desarrolló la ponencia-marco bajo el título “Lasalianos en la sociedad”,
que dio pie al posterior trabajo por grupos. En ella se
plantearon 1) algunos rasgos de la sociedad de hoy;
2) diversas llamadas desde el mundo lasaliano; y 3) el
“Decálogo para una vida” válido para cualquier antiguo alumno.
Por la tarde todos los participantes tuvieron la
oportunidad de realizar una visita guiada por la ciudad, facilitada por el Ayuntamiento de Valladolid,
que incluyó la “Ruta del hereje” y un paseo en el bus
turístico. Hasta la climatología se alió por esos días
para ofrecer a los participantes un tiempo soleado y
otoñal.
Hubo también un tiempo para la presentación de
nuevas Asociaciones (como la que se está creando en
Antequera, o la del Colegio Lourdes), así como la
exposición de diversas experiencias a cargo de D. José
Luis Llácer (sobre la UMAEL), D. Ángel Gudiña
(Asociaciones de Antiguos Alumnos de Don Bosco) y
D. José Antonio Cecilia (en torno a la OMAEC).
121
Antiguos Alumnos
León de la Riva (también antiguo alumno), y los
Hermanos Visitadores Andrés Corcuera y Jesús Miguel Zamora, quien lanzó un mensaje final a los antiguos alumnos.
Todas estas participaciones y presentaciones están
disponibles para todos en la web del Consejo Coordinador: www.lasalle.es/aaa/encuentrosARLEP.htm.
Los trabajos del domingo comenzaron a las 9,30
h. con la Eucaristía presidida por el antiguo alumno y
Vicario de la diócesis, D. Luis Argüello, a la que se
unieron los Hermanos de la comunidad. A continuación hubo dos exposiciones más: una sobre la experiencia de Antequera de relaciones entre empresas y
ONG (presentada por D. Fernando del Pino), y otra
sobre la banca ética “Fiare” (a cargo de D. Leandro
Velasco, profesor de La Salle-Valladolid), para dar
paso posteriormente a la Asamblea General del Consejo Coordinador correspondiente a 2012.
El congreso finalizó a las 13 h. con el acto de
clausura en el que participaron, además de D. José
Ramón Batiste, el alcalde de Valladolid, D. Javier
122
Desde aquí agradecemos también a los miembros
de la Junta Directiva de la Asociación de Antiguos
Alumnos del Colegio Lourdes su colaboración desinteresada en el desarrollo del encuentro, puesto que sin
su disponibilidad y ayuda no hubiese sido posible.
Por último, hubiéramos deseado una mayor participación de representantes de muchas de las asociaciones de antiguos alumnos existentes, principalmente del Sector de Valladolid, pues como bien sabemos
la riqueza de este tipo de encuentros viene dada por
las relaciones que se establecen entre los asistentes.
Aun así, estamos seguros de que este encuentro ha
servido para que muchos exalumnos sigan poniendo
en práctica el lema "Entramos en La Salle para
aprender, salimos al mundo para servir" y les oriente
en su tarea de continuar y vivir el carisma lasaliano
después de la etapa colegial.

horizonte
Antiguos Alumnos
Apertura del Encuentro
Hno. José Miguel Jiménez
R
eciban un cordial saludo de parte del
Hno. Visitador Provincial del Distrito
ARLEP y del Hno. Visitador Auxiliar del
Sector de Valladolid que les acoge, en
nombre de los cuales hoy les dirijo estas
palabras de apertura.
A decir verdad, cuando me encomendaron esta
hermosa tarea, vacilé un tanto por no saber muy bien
cómo afrontar este momento. De inmediato, sin embargo, remitió tal sensación para dejar paso a otra de
sentirme en familia y por lo tanto muy a gusto…
Familia, sí… Permítanme ponerme las pantuflas metafóricas de andar por casa y remitirme, desde ahí, a
mi pequeña experiencia:
Verán, hace apenas unos meses, en este mismo
colegio y en esta misma sala en la que nos encontramos, tuve la suerte de celebrar, junto con mi promoción de compañeros, los 25 años de nuestra graduación y fin de estudios en este centro lasaliano. En él
pasé toda mi escolaridad de los 6 a los 18 años. Fue
un precioso momento de reencuentro, no exento de
emotividad. Muchas vivencias, muchos aprendizajes
se alzaron sobre nuestras cabezas y llenaron nuestro
corazón. Comprendan que, además, en mi caso, se
alza la preciosa vivencia de un itinerario vocacional
que me permite hablarles hoy, no solo como compañero, sino como Hermano de la Salle.
Pues bien, en aquel encuentro, al amparo de la
Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio –a la
que también tengo el placer de pertenecer–, pudimos
darnos cuenta de algo maravilloso: todos los presentes, distribuidos por muchos lugares de España
además de por diversos países, tuvimos la estupenda
sensación de compartir no solo anécdotas, sino un
modo de ser y estar en el mundo semejante, muy
semejante... Alguno se atrevió a decir que parecía
que estábamos cortados por el mismo patrón… El
mismo patrón… Comentando nos pareció, y no era
una ilusión, que todos habíamos triunfado en la vida. Permítanme que me explique: No se trata de que
hayamos alcanzado puestos, profesiones u otros
elementos de prestigio y reconocimiento social. No.
En realidad la pluralidad de profesiones, de lugares
sociales, de… era patente. Cuando hablábamos de
horizonte
triunfar, hablábamos de otra cosa: ser y estar en el
mundo de un modo determinado, con un sentido
hondo, con un… Les aseguro que no invento nada.
No son mis sensaciones ni mis sentimientos. Son
palabras que explicitamos en tranquila conversación
a lo largo del día, hasta el “bandarra” aquel que tanto
hacía desesperar a los profesores entre nuestras risas
adolescentes…
Cortados por el mismo patrón… Sospecho que a
ustedes, al escucharme, les resulta cercano y hasta
familiar lo que les transmito. Mi experiencia lasaliana
en diversos centros, el ir y venir de encuentros,
reuniones y demás, me hacen sospechar que no es
solo la experiencia de una promoción de compañeros
de un concreto colegio de La Salle, sino que es una
experiencia y sensación mucho más universal y que
nos une en lo profundo como miembros de una misma familia, la gran familia La Salle. Decididamente
estamos benditamente cortados por un mismo patrón… Decididamente aquellos Hermanos y profesores fueron forjando con un gran acierto lo que hoy
somos, lo que hoy compartimos, lo que hoy nos
compromete…
Porque La Salle, el patrón que compartimos en la
inmensa diversidad, nos lleva a todo ello. Seguro que
más de uno de ustedes lleva en su solapa esta insignia, la de los antiguos alumnos de colegios La Salle,
insignia que se basa en el mismo escudo de armas de
la familia La Salle de nuestro santo Fundador. ¿Recuerdan lo que hay en él?
En la parte central en el que aparecen tres CABRIOS. Un cabrio es una madera robusta que anti123
Antiguos Alumnos
guamente se usaba como viga. En heráldica los cabrios son una de las piezas de ennoblecimiento más
antiguas y consideradas en un blasón. Se concedía a
los caballeros que habían conseguido tomar una plaza
fuerte. Ahora bien, este caballero resultó herido en
alguna batalla y por eso, desde entonces, en el escudo
encontramos los cabrios rotos pero, curiosamente, no
separados... Son un signo evidente de la unidad que
ha de reinar en nuestra familia y entre todos los hombres. Nunca nos faltarán problemas y dificultades. En
esos momentos hay que ser capaz de salvar la unión
por encima de todo.
Los cabrios se sitúan sobre EL FONDO RASO AZUL,
un azul que nos habla del mar y del cielo, es símbolo
de alegría, limpieza y diafanidad.
Los alumnos y antiguos alumnos de
los centros La Salle deben entender
de limpieza de miras, rectitud de
intenciones y claridad de ideales.
Escrito en ambos lados del escudo encontramos la leyenda: "Indivisa manent" (Permanecen unidos). A nosotros, lasalianos, nos
recuerda que en nuestra vida nunca
nos faltarán problemas, pero que en
estos momentos es importante
mantener la unidad por encima de
todo. LOS LASALIANOS PERMANECEN UNIDOS. La
idea fundamental de nuestra insignia queda ahora
reforzada y clarificada.
La ESTRELLA, en la parte superior del escudo, no
existía en el escudo original de la familia. Fue añadida posteriormente. La estrella es el signo de la FE. La
estrella polar nos guía y orienta en la noche. La estrella guió a los magos al Portal. En nuestros momentos
difíciles, recordemos que las estrellas están ahí, indicándonos el norte. Que las lágrimas no nos molesten
para contemplarlas. La estrella fue símbolo también
para La Salle, que es quien nos guía y quien da sentido a nuestras vidas. Es la estrella de la fe del Instituto
de La Salle. Es la estrella Polar, el Norte. Indica una
dirección a seguir. No llegaremos a ningún lugar sin
fe en la vida, sin fe en nosotros mismos y sin fe en
Dios, que nos regala cada día esa misma vida y nos
compromete con ella.
Y por último la palabra SALLA o SALLE. Una palabra que nos une a 6.500 Hermanos, 80.000 educadores y casi un millón de alumnos, y un incontable
124
número de antiguos alumnos, extendidos por los cinco continentes. Una gran familia: la familia de “LA
SALLE”.
Ya lo ven, nuestra insignia nos habla de lo que
somos, de quiénes y cómo somos. Cortados por el
mismo patrón…
Hombres y mujeres de profunda interioridad, de fe
sencilla y arraigada en lo hondo, de mirada limpia
hacia los demás y nuestra realidad. Hombres y mujeres de consenso, de familia, generadores de unidad.
Hombres y mujeres comprometidos por un mundo
mejor para todos, más justo y humano. Hombres y
mujeres de profundos valores que hunden su raíz en
el Evangelio… Casi nada. ¿No creen?
Definitivamente, aquellos Hermanos
y profesores dejaron una maravillosa
impronta en nuestro interior. Impronta
que nos une y refuerza. Por eso estamos
hoy aquí. Por eso comenzamos a vivir
este VI Encuentro de Antiguos Alumnos La Salle que me toca abrir. Por eso
el lema elegido para el mismo: “Para
que tu voz se oiga, lasalianos en sociedad”. Nuestro encuentro no es una
reunión de tintes sentimentales, es una
reunión de vida y para la vida. Un encuentro de afinidades que se refuerzan para generar
vida y compromiso alrededor, siempre con base y en
torno a La Salle, estemos donde estemos cada uno.
Porque estamos cortados por un mismo patrón y eso
no puede ni debe dejarnos indiferentes.
Amigos, vivamos con intensidad este encuentro,
aprovechemos la oportunidad que nos ofrece y disfrutemos juntos como antiguos alumnos, como lasalianos. Seguro que reavivará fuentes interiores profundas dentro de nosotros que nos darán vida y harán
que demos vida a nuestro alrededor.
Agradezco a la comisión preparatoria de este encuentro sus esfuerzos y buen hacer, al colegio que
nos acoge por abrir sus puertas y la Asociación de
Antiguos Alumnos de este colegio, que se ha implicado en todo. Y a todos ustedes, muchas gracias por
su paciencia y escucha respetuosa: Sin duda se nota
que son alumnos de La Salle.

horizonte
Antiguos Alumnos
Decálogo para una vida
Última parte de la ponencia presentada en el VI Encuentro de Antiguos Alumnos.
Hno. Javier Abad
L
a última parte de esta ponencia la he titulado “Decálogo para una vida”, y he de
reconocer que lo que ahora les voy a presentar no es nuevo, pues lo escribí hace
cinco meses para las palabras de despedida de los alumnos finalistas de este colegio, en el mes
de mayo. Cuando me planteé qué es lo que les diría a
los alumnos que terminaban el Bachillerato en este
centro, después de 2, 6, 12 o hasta 15 años de escolarización entre estas paredes, se me ocurrieron una
serie de consejos que, bien mirados, pueden servirnos
a todos.
Desde ahí les pido comprensión si alguno de ustedes, desde la diferencia de edad, no se siente del todo
identificado con algunas de las cosas que voy a decir,
pero es que están pensadas para esos jóvenes que,
recién estrenada su juventud a los 17 o 18 años, se
están planteando cómo situarse en la sociedad, haciendo visible el estilo lasaliano, que es de lo que
estamos hablando en esta mañana. Las he formulado
a modo de “decálogo” y van en orden decreciente,
como si fuera una “cuenta atrás”. Dicen así:
10º.- Mantén la ilusión por aprender, esa que te ha
llevado hasta el punto en donde estás, y que te ha
servido para crecer como persona.
A lo largo de los numerosos años que un alumno
permanece en nuestra escuela comienza un proceso
de formación que no termina cuando la abandona. En
la mayoría de los casos prosiguen otro tipo de educación superior. Me atrevo a decir que en ese momento
posee un conjunto de conocimientos, de herramientas, de instrumentos que le servirán para entender y
conocer el mundo que le rodea: desde el lenguaje
matemático al lenguaje literario, de la expresión en
distintas lenguas a la evolución del pensamiento occidental, de la investigación científica al estudio de la
sensibilidad artística, o desde el acercamiento a nuestro pasado como país a la compleja realidad económica actual.
Yo le recomendaría que no estudie solamente para
aprobar, sino para aprender... Pero eso es fácil de decir
y complicado de poner en práctica... Debe trabajar por
horizonte
ampliar eso que algunos autores llaman “zona de
aprendizaje”, que supone salir de lo conocido, de la
“zona de confort”, y ampliar la visión del mundo.
Ellos han comenzado a hacerlo no solamente con los
libros, sino con otras oportunidades que se les han
puesto en la mano: salidas culturales, intercambios,
experiencias... y deben proseguirlo en el futuro. Y
todo ello sin olvidar que deben fomentar sus habilidades sociales: aquellas que les permiten gestionar
las relaciones, los sentimientos, los conflictos y el
trabajo en grupo.
9º.- Reconoce y recuerda a todos los que te han
acompañado hasta ahora
Tengo la certeza de que, si al cualquiera de ustedes
les pregunto por la característica que más recuerden de
su estancia en el colegio, la mayoría me responderían
que fue el tipo de relaciones que se establecían entre
compañeros y con los maestros y Hermanos. Es decir,
la cercanía. Y es que durante el tiempo que un alumno
está entre nuestras aulas dispone de un montón de
personas adultas que acompañan su proceso de crecimiento en esos momentos. En primer lugar los padres
y profesores, pero también entrenadores, catequistas,
animadores, tutores... Eso es una gran suerte.
También sabe que muchas de esas personas, seguirán disponibles para cuanto necesiten, a pesar de
no estar tan cerca del colegio. Y eso aun sabiendo
que quizás no siempre hayamos sabido acertar, o
puede que nos hayamos equivocado. Pero saben que
todo lo hacemos para ayudarles a crecer.
125
Antiguos Alumnos
Pienso que los antiguos alumnos debemos ser
agradecidos con todas esas personas, guardando en el
corazón un pequeño rincón para recordar a la maestra
que nos enseñó a leer, al entrenador que nos ayudó a
encestar, al catequista que nos preparó para la comunión o al profesor que escuchó nuestros secretos de
adolescente. Ellos también nos llevan en su corazón y
agradecen que sigamos en contacto con ellos, que los
visitemos y recordemos de vez en cuando.
8º.- Trabaja por hacer del mundo un lugar más
habitable
Estado han hecho un gran esfuerzo económico para
pagar esa formación. De ahí que tengan que aprovechar el tiempo y no caer en la tentación de perder el
tiempo del que disponen.
Y lo mismo cabe decir con el uso de Internet o los
medios informáticos... Deben ir pasando ya los tiempos en los que utilicen el ordenador para jugar, o las
redes sociales para poner cotilleos o fotos. Debemos
ser críticos con los medios de comunicación y no
dejarnos arrastrar por la masa; tener criterios propios
y utilizarlos de manera conveniente.
En el colegio nos enseñaron a ser educados con
los demás, a cuidar los gestos, a tener detalles con los
otros. Lo pudimos aprender en el comedor, en el internado, en los pasillos, en el patio o en el salón de
actos. Hoy consideramos que son cosas importantes y
que demuestran la calidad de las personas. No debemos perderlo. Debemos intentar hacer la vida más
agradable a quienes nos rodean y hacer así del mundo
un lugar más habitable.
Y de todas esas actitudes, quiero especialmente
destacar una: la alegría. Yo no me había dado cuenta,
pero hace poco alguien me dijo que “vuestros alumnos están siempre contentos”. He comenzado a fijarme, y es cierto. Es fácil observarlo cuando uno se
cruza con cualquier alumno o alumna. Siempre sonríen. En caso de duda, siempre sonríen. En la mayoría
de las fotos colegiales aparecen sonriendo. Pues eso:
no podemos perder la alegría. Esa alegría vital es la
que nos permite seguir caminando con la esperanza
de mejorar las cosas a pesar de las dificultades que la
vida nos va presentando.
En el fondo se trata de hacer vida ese eslogan de
nuestras asociaciones de exalumnos: “Entramos en
La Salle para aprender... Salimos al mundo para
servir”.
7º.- Haz un uso responsable de los medios que
tienes a tu disposición, a tu alcance
Alguien ha dicho que los jóvenes que acceden en
estos últimos años a la Universidad pertenecen a la
generación de españoles mejor preparados de la Historia. Probablemente sea cierto, pues han tenido a su
disposición medios informáticos, económicos, educativos... que muchas otras personas no tuvieron. Tener
acceso a la cultura supone no solo una suerte, sino
también una responsabilidad, de la que un alumno
lasaliano debe ser consciente. Los padres y el propio
126
6º.- Opta, en tu vida, por mantener actitudes de
cooperación, en vez de otras competitivas
La sociedad a la que un joven se incorpora después de estar en un centro lasaliano exige lo mejor de
cada uno. Pero esos esfuerzos se pueden orientar de
diversas maneras. En un mundo tan agresivo como el
que vivimos debemos ser competentes, pero no competitivos. Ambas palabras tienen la misma etimología, pero sus resultados son muy distintos. Es necesario ser competentes en el trabajo, y eso es bueno y es
necesario. En cambio, la competitividad supone una
lucha sin cuartel por imponerse al otro al precio que
sea, para colocarse el primero, por encima del otro.
Es verdad que para ello tendrán que esforzarse, pero
hay que buscar más la ayuda y la cooperación que el
enfrentamiento. Es lo que se cantaba en aquel famoso
musical titulado “El diluvio que viene”: «Una hormiguita sola es imposible, pero espera porque sabe ya
que, igual que muchas gotas forman mares, muchas
hormigas llegan a formar una gran comunidad...
Mas si ella sola afronta la fatiga, entonces sí que
solo es una hormiga. Mas dos hormigas hacen dos
hormigas, ¡un ejemplo de solidaridad!».
horizonte
Antiguos Alumnos
5º.- Ten presentes a los más débiles de la sociedad
y del mundo
ser y actuar. Es necesario tenerlos en cuenta a la hora
de hacer nuevas opciones de vida.
Otra de las insistencias que más veces hacemos en
nuestros centros es la de la solidaridad. Alguno, incluso la ha comenzado a poner en práctica no solamente en campañas o días especiales, sino con su
compromiso semanal en el voluntariado, o lo va a
hacer en el futuro con algún proyecto misionero, o
colaborando con nuestra ONGD PROYDE, o celebrando el día de la paz o el de los derechos del niño.
Quiero traer aquí, como ejemplo de firmeza en estos valores, el testimonio de un antiguo alumno lasaliano que dentro de una semana va a ser considerado
por la Iglesia universal como “bienaventurado”, en la
celebración que tendrá lugar en Tarragona, junto a
otros 73 Hermanos de La Salle. En concreto, el Hno.
Mariano Pablo (cuyo nombre civil era Teodoro Pérez), nacido en Valladolid en 1913 y alumno de este
Colegio Lourdes antes de marchar a la casa de formación de Bujedo, y que dio su vida en Griñón en
plena juventud, a los 23 años de edad. Hoy puede ser
para nosotros el ejemplo real de alguien que se mantuvo firme en la dificultad y fue fiel a sus compromisos hasta dar la vida.
Es necesario que, cuando los alumnos finalistas
comienzan la etapa que les llevará a la vida adulta,
integren todo esto en su personalidad, de modo que
deje de ser algo anecdótico o accesorio. En estos momentos de crisis económica y de valores, más que
nunca es decisivo que los antiguos alumnos seamos
solidarios y comprometidos. Y no vale con decir que
no se puede hacer nada... Hay que comenzar mejorando lo que esté a nuestro alcance allí donde la vida nos
ha situado, pues hay mucho qué hacer; un poco cada
día, un poco cada uno. Simplemente, ocupándonos de
lo que ocurre en nuestro “metro y medio” ya conseguiremos mucho. Nada de lo que ocurra a nuestro alrededor ha de sernos ajeno. Hay muchas personas que lo
pasan mal y nosotros podemos hacer algo por ellas.
4º.- Permanece firme en el sistema de valores que
has ido adquiriendo
Desde aquí es importante también que seamos
personas íntegras, de palabra, legales. Para conseguir
lo que pretendemos no vale cualquier camino. La
base del triunfo no está en lo fácil, lo aparente o lo
que apetece, sino en el esfuerzo, la constancia y el
trabajo duro. La vida es más una carrera de fondo que
un sprint de velocidad. Nadie regala nada y cada uno
se lo tiene que ganar. Como bien dijo Winston Churchill, en uno de sus pensamientos, “el éxito es aprender a ir de fracaso en fracaso sin desesperarse”.
Para ello se necesita tener un firme sistema de valores, que nos haga permanecer en nuestro sitio cuando sople la tormenta. En cada una de nuestras escuelas intentaron educarnos en una serie de valores como
la responsabilidad, la creatividad, la convivencia, la
interioridad, la trascendencia y la justicia, que son los
que componen la propuesta educativa lasaliana. A
todos ellos luego se añadían los valores recibidos en
la familia, conformando así una manera concreta de
horizonte
3º.- Siéntete orgulloso de ser lasaliano.
Otra de las percepciones que tengo, desde la experiencia de los diferentes centros por los que he pasado, es que la mayoría de nuestros alumnos y exalumnos tienen un alto sentido de pertenencia a La Salle.
Porque entre nuestras aulas hay algo que no sabemos
explicar, por el todos los que han pasado por ellas se
sienten especiales. No sé si será un estilo propio, una
manera de ser, unos valores adquiridos o qué, pero
esa viene a ser la realidad. Es lo que expresan muchos de ellos cuando les imponemos la insignia de
antiguo alumno y conocen lo que significa la leyenda
que la acompaña...
El Hno. Superior General, Álvaro Rodríguez, en
una charla que dio por diversos países hace cuatro
años decía: «Como Instituto internacional y como
Familia Lasaliana estamos llamados a no encerrarnos en nuestro pequeño horizonte sino a sentirnos
parte de un organismo que nos abre el corazón a las
dimensiones del mundo. La Regla de los Hermanos
nos presenta sin ambages este objetivo que trasciende todo tipo de fronteras, sean estas de tiempo o de
espacio: “Este Instituto, atento sobre todo a las necesidades educativas de los pobres que aspiran a
tener conciencia de su dignidad de hombres y de
hijos de Dios e intentan que se la reconozcan, crea,
renueva y diversifica sus obras, según las necesidades del Reino de Dios” (Regla,.11). Este es el reto
que hoy tenemos todos, reto que da sentido a nuestra
127
Antiguos Alumnos
misión y que estimula nuestra creatividad desde el
evangelio de Jesús»1
Y eso porque el lema “Indivisa manent” remite a
algo más lejano que a la propia realidad local. Desde
el momento en que a un finalista se le impone nuestra
insignia, toma conciencia de pertenecer a un conjunto
de más de un millón de personas en todo el mundo
que se han formado en los valores de la fe, la fraternidad y el servicio. Esas palabras del “permanecen
unidos” significan estar unidos por unos vínculos
invisibles con otras muchas personas, que reconocen
a Juan Bautista de La Salle como su fundador e inspirador. Y eso es un gran orgullo.
lo de actuar, de recorrer el camino de la vida, que le
distingue de los demás por su saber compartir, su
sencillez, su capacidad de servicio y capacidad transformadora para contribuir a crear un mundo más
bello, más justo, más fraterno, contribuye a hacer
presente el Reino de Dios ya y aquí. Hoy más que
nunca se hace necesario que quienes conocemos a
Jesús seamos capaces de dar razones de nuestra fe y
dar testimonio de los valores del Evangelio.
Me gustan mucho unas palabras que el Papa Francisco dirigió hace unos meses a los jóvenes. Decía:
«empeñaos en vuestro deber cotidiano, en el estudio,
en el trabajo, en las relaciones de amistad, en la
ayuda a los demás; vuestro porvenir depende también de cómo sepáis vivir estos años preciosos de la
vida. No tengáis miedo del compromiso, del sacrificio. No miréis con miedo al futuro, mantened viva la
esperanza: siempre una luz en el horizonte»2. Todo
un proyecto de vida.
1º.- Y por último, sé feliz.
2º.- Valora la educación cristiana que has recibido.
Tampoco podemos olvidar que nuestros centros
son de inspiración cristiana. El Fundador nos creó
“Hermanos de las Escuelas Cristianas”. Creo que en
ellos los que somos antiguos alumnos hemos recibido
una formación cristiana, desde la libertad, en la que
nos fueron presentando la figura y los valores de
Jesús de Nazaret, a través de celebraciones, eucaristías, reflexiones de la mañana, las clases de religión...
O las estructuras que hubiera en cada época: Cruzada
Eucarística, Congregaciones del Niño Jesús o de San
Juan Bautista de La Salle, Proceso catecumenal, Grupos de Scouts, de tiempo libre...
Todo eso, aunque no siempre seamos conscientes,
es importante. No lo dejemos a un lado. Debemos
seguir buscando en nuestro propio interior y ser capaces de vivir como creyentes. Porque el creyente
vive la vida con un sentido nuevo y eso le da un esti1
128
Hno. Álvaro Rodríguez Echeverría: Charla “Mirando hacia
el futuro”, 2009. Se puede consultar en la revista argentina
Radar: http://www.ilasalle.com.ar/Documentos/Descargardocumento.html?gid=11
Una pregunta que yo formulo con mucha frecuencia a los chicos y chicas del Colegio con los que me
relaciono es si son felices. La respuesta, en la mayoría de los casos, y después de la confusión que les
crea una pregunta aparentemente tan nimia pero con
tanta carga de profundidad, es que sí, que lo son. No
suelo profundizar mucho más, pero si ellos lo dicen,
es que será así...
Está claro que hemos nacido a la vida para ser felices y disfrutar. Pero con una felicidad auténtica, que
vaya a lo profundo. No vale la pena quedarse en lo
superficial, simplemente con pasarlo bien, o con acaparar objetos y pertenencias. La vida es demasiado
bella como para malgastarla en esas minucias. Precisamente el otro día encontré en Facebook una foto
que me llamó la atención por lo que significa: que la
felicidad profunda nace del interior, no viene de fuera. Y para ello nos ponen un ejemplo muy claro: “si
un huevo se rompe desde fuera, la vida termina. Si se
rompe desde dentro, la vida comienza. Las grandes
cosas comienzan desde el interior”.

2
En www.zenit.org/es/articles/francisco-hablo-del-mundodel-trabajo-la-contemplacion-de-jesus-y-el-mes-de-maria.
Audiencia general del 1 de mayo de 2013.
horizonte
Antiguos Alumnos
Clausura del Encuentro
Hno. Jesús Miguel Zamora
E
stimados Hermanos y amigos:
1.- HAN SIDO DÍAS CON ESPÍRITU…
Hace un tiempo, cuando se convocó el Encuentro,
pocos dudábamos de que fueran a ser unos días llenos de ese espíritu lasaliano que denota que el paso
por un centro La Salle no ha sido
en vano. Vuestra participación y
dinamismo a la hora de ser parte
activa en el encuentro, así como
el interés por el desarrollo de las
sesiones, han hecho más vivo y
dinámico este VI Encuentro.
Especial mención, por su esfuerzo
en la preparación y el cuidado en
todos los detalles, para el Consejo
Coordinador de Antiguos Alumnos con su Hermano asesor al
frente (Hno. Josep María Pons),
por todo el trabajo callado y constante para que este encuentro respondiera a las expectativas de
todos. ¡Gracias de verdad!
Ser exalumno de La Salle es
un derecho de todos aquellos que
han pasado por las aulas de un
centro La Salle. Pero este derecho
no garantiza que el futuro se viva con el espíritu que
le debe ser propio a un antiguo alumno. Hoy no basta
con tener un título, colocarse una medalla, portar una
insignia o llevar una prenda de ropa con el escudo del
colegio de mis amores.
Vosotros, al organizar este encuentro, lo habéis
entendido bien y queréis que ese derecho se convierta
en deber; pero no como una imposición, sino como el
paso lógico del disfrute de una experiencia que os ha
llenado en la vida al pasar por las aulas de un colegio
La Salle. Habéis querido ir más allá en este encuentro
(y no solo en este momento, sino en lo que el encuentro significa). Bueno… ir más allá y más al fondo de
las cosas.
horizonte
A) “Para que tu voz se oiga…”
Empecemos por unas palabras de Eduardo Galeano:
“Magda recorta Palabras de los diarios, palabras
de todos los tamaños, y las guarda en cajas. En caja
roja guarda las palabras furiosas. En caja verde, las
palabras amantes. En caja azul, las neutrales. En
caja amarilla, las tristes. Y en caja
transparente guarda las palabras
que tienen magia. A veces, ella abre
las cajas y las pone boca abajo sobre la mesa, para que las palabras
se mezclen como quieran. Entonces,
las palabras le cuentan lo que ocurre y le anuncian lo que ocurrirá”.
La primera parte del lema del encuentro, da pie a comentar algunas
cosas que me parecen importantes.
• Habéis querido ser positivos y
no dejar que las cosas, sobre todo
las palabras, duerman el sueño de
los justos. A veces uno tiene la sensación de que la voz de los antiguos
alumnos de La Salle se apaga por
falta de coraje, de compromiso o de
vitalidad. Y no queréis que esta vez,
a partir de esta Asamblea, sea así.
¡Enhorabuena!
• Muchos de vosotros –y otras muchas personas a
quienes representáis– han pasado varios años (algunos, hasta 16 o más) en un colegio La Salle. Habéis
oído muchas cosas, habéis rumiado muchas palabras,
os han llegado frases hechas y, otras, que habéis
construido vosotros… En cualquier caso, no ha sido
en vano, porque vuestros oídos estaban prestos para
la escucha, más allá de anécdotas o frases curiosas o
“pequeños motes” con los que “cariñosamente” conocíamos a nuestros profesores.
• Pero las palabras que nos llegan, mueren si no se
les da cabida en la cabeza, pasan al corazón y salen
por nuestra boca expresadas de forma nueva. Y ahí
estáis vosotros, haciendo vida esas palabras escuchadas de vuestros educadores en su tiempo, y hoy de
otros, (amigos, compañeros de trabajo o de asociación,
129
Antiguos Alumnos
familiares, Hermanos de La Salle, sociedad…) que, en
estos momentos, deben seguir el mismo camino: escuchadas con oídos abiertos, reelaboradas y meditadas en
la cabeza, amasadas con cariño en el corazón y expresadas de nuevo con palabras diferentes o parecidas…
¡pero las vuestras!
• Porque hay palabras que matan y otras que dan
vida. Hay palabras que sugieren y otras que imponen.
Hay palabras que alivian y otras que denigran y desconciertan. Hay palabras que construyen y otras que
destruyen. Hay otras palabras que sanan y algunas
que perjudican y hieren.
Por eso, ¿qué palabras hemos escuchado estos
días que dan impulso, construyen y generan vida,
sostienen en la duda o afianzan nuestro paso? Porque
esas no se pueden olvidar nunca.
¿Qué palabras jalonan nuestro vivir cotidiano?
¿De duda, de fracaso, de remordimiento u ofensa? O
bien, ¿palabras de ánimo, de consuelo, de fraternidad,
de servicio, de construir nuestra vida ayudando a dar
vida a otros?
• Porque las palabras lasalianas que hoy debemos
pronunciar y hacer llegar a otros suenan a compromiso, que es poner la propia vida en juego, tratando de
dar la vida por los valores que uno cree, arrimando el
hombro cuando se necesita y prestando su persona
para colaborar en lo necesario. El compromiso se
juega en la propia vida, olvidándose de sí mismo,
buscando el bien de los otros. No, no es compromiso
“hacer lo que hay que hacer”, como decimos a veces,
“por compromiso”. Si se vive así, es una carga que
no libera.
• Suenan a compromiso cristiano y marcan una línea clave, pues lo que hay que poner en juego son
valores de Evangelio. Acaso, coloreados por el buen
barniz que le da lo lasaliano, pero vividos en profundidad y coherencia. Entonces, sí, comprometidos,
porque es importante y profundo en nuestra vida.
¡Tiene sentido vivir así!
• Y teñidas de un hondo sentido lasaliano. Nos
suena –¿verdad?– eso de “…De compromiso en
compromiso”, “…Sois ministros del evangelio”,
“…Sois la carta escrita por Dios en el corazón de
vuestros alumnos” que se vive desde un hondo espíritu de fe, que se manifiesta en celo por ayudar a descubrir a otros una vida con sentido. O eso otro de
“entramos para aprender, salimos para servir”. Y
muchas otras que recordáis ahora.
130
• Por eso, nuestro esfuerzo estará en conocer más y
mejor las palabras de Juan Bautista de La Salle, ¡para
que tu voz se oiga!; en asimilar mejor lo que el Instituto va diciendo para no estar al margen de la vida lasaliana ¡para que tu voz se oiga!, en darle más vida a
cada una de nuestras asociaciones, sin miedo al qué
dirán ¡para que tu voz se oiga!, en trabajar más codo
con codo, juntos, con Hermanos, educadores, otros
asociados y otras asociaciones en provecho de los
alumnos de los centros y en beneficio de todos aquellos a quienes servimos
B) Presencia viva en la sociedad
Pero somos hijos de un mundo, de una sociedad,
de unos ambientes y lugares concretos. Por eso, nuestra voz debe hacerse presencia viva en la sociedad
que habitamos.
• Acaso hoy gran parte de la gente se retira a sus
cuarteles de invierno con el fin de no sentirse molestada, importunada, urgida por otras preocupaciones
que desgastan. Y, ante ello, nos refugiamos en nuestras trincheras porque tenemos miedo, estamos cansados o no nos importa mucho lo que se ventila en
cada ocasión. ¡Y hay algunas que sí deben importarnos!
• La educación que hemos recibido nos ha insistido en aprovecharla para “ser buenos cristianos y buenos ciudadanos”. “Ciertamente, nos dice el Hno.
Álvaro, cuando ustedes ingresaron en una escuela
lasallista entraron para aprender. Parece obvio. Sin
embargo, la pregunta obligatoria que se plantea es
¿para aprender qué? Para servir”.
• Por eso, nuestra presencia y nuestra voz en la
sociedad no pueden quedarse al margen, como si los
problemas de nuestros contemporáneos estuvieran
en otra onda diferente a la nuestra. Somos hombres
y mujeres de este mundo y todo lo que pasa en él
nos interesa. Sobre todo, aquello que tiene que ver
con la dignidad de las personas, con los sufrimientos
de las personas y con los que conculcan los derechos de las personas, especialmente de los niños.
Ahí, nuestra palabra y nuestra presencia son claves.
• Es de alabar el esfuerzo que hacéis en muchos
sitios para que la Asociación sea una voz, una presencia, tenga palabra y ofrezca formas concretas de
apoyar iniciativas solidarias (PROYDE y las diversas
ONGD del Distrito), contribuir al compromiso evangelizador de los asociados y de los que se acercan a la
horizonte
Antiguos Alumnos
misma, ofrecer cauces de sana distensión y esparcimiento, así como de ayuda al colegio lasaliano de la
zona. ¡Gracias por todo ello!
• Es bonito ver, en este sentido, que las Asociaciones de Exalumnos han surgido en muchos lugares:
cada una con una manera peculiar de hacer, con sus
iniciativas y su vida propia. Pero no unas al margen
de las otras, pues es importante y decisivo para la
subsistencia de todas, el esfuerzo conjunto como
clave del éxito de cara al futuro.
• Hay que seguir potenciando el trabajo conjunto,
compartido, establecer cauces de colaboración mutua
en proyectos comunes que respalden iniciativas de
todo tipo: solidarias, educativas, formativas, etc.
Estamos en un buen momento, aunque no hay que
negar que el carácter asociativo no está muy en boga
hoy en día y no ayuda mucho; todo lo contrario. Pero,
justamente por esto, los lasalianos tenemos el ineludible compromiso y el mayor empeño en hacer realidad lo que creemos: unidos, podemos ir construyendo
futuro. No nos suena muy lejos eso de “juntos y por
asociación”. Acaso sea, pues, el momento oportuno
cuando todo indica que el viento viene en contra y no
a favor de velas.
Ya no estamos en tiempo de francotiradores. El
hecho de ser nuevo Distrito ARLEP, va marcando
una forma diferente de obrar: juntos, donde unos y
otros construimos futuro. Por eso, hoy más que nunca, nuestro trabajo no puede fraguarse en el crisol del
individualismo o del que camina por libre.
El Hno. Álvaro, nos recordaba hace unos años en
el IV Congreso de la UMAEL (2008):
Hoy en muchos países la educación en general vive una crisis profunda y un poco en todas partes
aparecen fenómenos inquietantes de violencia juvenil
en el interior de muchos centros. Como escuelas
lasallistas no podemos caer en la trampa de dirigir
la educación exclusivamente con criterios de mercado. Nuestros criterios se deben fundamentar, sobre
todo, en el Evangelio y en sus valores como el amor,
la entrega, el perdón, la fraternidad y el servicio…
Y en el preámbulo del apartado dedicado a la
Evangelización y Pastoral, de la II Asamblea Internacional de la Misión Educativa Lasaliana (AIMEL,
mayo, 2013) se nos recuerda:
Nosotros, los lasallistas, reconocemos que vivimos
hoy en un mundo que está en busca de sentido, fe y
espiritualidad. Esta búsqueda sucede en contextos y
horizonte
sociedades que, cada día más, se vuelven diversas y
divididas por barreras culturales, económicas, religiosas, políticas, tecnológicas y, también, a causa de
diferencias lingüísticas. En estos ambientes, las personas, especialmente los pobres y aquellos que son
desplazados por razones económicas y políticas, se
vuelven vulnerables. Además, reconocemos que la
evangelización –llevar la buena noticia y los valores
del evangelio de Jesucristo a todos los pueblos– es
humanizante, acogedora, dialógica (cfr. IA06, 2.1.2, p.
35), se realiza por medio de las palabras y el testimonio, y se dirige a la totalidad de la persona. Esto lo
hacemos inspirados por la Doctrina Social de la Iglesia, la Declaración de la ONU sobre los Derechos del
Niño, así como también prestando atención a otros
grandes movimientos, por ejemplo, el medio ambiente,
los derechos de las mujeres, etc.
Y fruto de ese compromiso como educadores lasalianos del mundo, proponen este tercer desafío en el
ámbito de la comunidad educativa:
Constatamos la necesidad de asegurar la vitalidad y la sostenibilidad de la Misión Lasaliana, mediante la creatividad y la corresponsabilidad entre
los diversos integrantes de la Familia Lasaliana.
Y, en esto, no vale cualquier cosa. Justamente en
estos tiempos de crisis, puede ser que las rebajas
predominen por doquier y se hagan ofertas que se
presentan a la baja, pero que no tienen garra ni, mucho menos, convencen. Por eso, en estos tiempos,
nuestra oferta es una Asociación Lasaliana de Antiguos Alumnos comprometidos y unidos, más que
nunca, en ofrecer los valores que han caracterizado a
la educación lasaliana que habéis recibido.
Los recuerdo yo ahora, aunque parezcan enunciados de diferente forma: fe, fraternidad, cercanía, servicio, oferta cristiana de valores, capacidad de iniciativa,
fomento del deporte y de la cultura, sentido trascendente de la vida, formación profunda y seria. Empeñarse en esta ardua tarea, corresponde a las asociaciones hacerla realidad.
2.- ¿QUÉ TENEMOS QUE SEGUIR IMPULSANDO?
Podría pensarse que es poco lo que hacemos y que
es importante hacer más, mucho más. Pero no, no
creo que se trate de hacer más, si con ello acallamos
nuestra conciencia o nos sentimos más tranquilos.
Solo se tratará de hacer más, si con ello dotamos a
nuestras asociaciones de vida y dinamismo mayor.
131
Antiguos Alumnos
Pues la calidad de una asociación no se mide por el
número de actividades (que está bien tener muchas y
buenas), ni por la majestuosidad de sus instalaciones
(si las tenemos, mejor), o por los contactos que tiene
(que no están nada mal, si ello potencia nuestra asociación).
La calidad de una asociación se mide por las personas que la componen, cuando estas se ponen al
servicio de los objetivos comunes, atrayentes, ambiciosos, dinámicos. Solo cuando desde las juntas directivas de las asociaciones pensamos en los otros y
en el servicio a hacer, encontramos sentido al tiempo
dedicado y a los esfuerzos gastados. Solo así, merecerá la pena disfrutar como asociados de organizaciones lasalianas como las nuestras.
Por eso, de cara a un trabajo futuro, no hay que
bajar la guardia en estos temas:
1.- Asentar Juntas Directivas fuertes, dinámicas,
serviciales que no se cansen de insistir en llevar adelante los objetivos de la Asociación y que sepan
orientar a sus asociados y catapultar los dinamismos
propios de la Asociación a cotas de mayor compromiso cristiano y Lasaliano.
2.- Incrementar los lazos de unión entre unas y
otras asociaciones. Vivimos todavía con demasiados
capillismos, intentando salvarnos solos, cuando en
realidad nacimos “juntos y por asociación”. A veces
nos cuesta dejar de lado nuestro poder, nuestras iniciativas para poder compartirlas con otros y enriquecernos mutuamente (por favor: ¡que circule la información y las iniciativas!). Bienvenidos sean los proyectos
conjuntos al servicio de los propios asociados y de la
gente necesitada. Podemos ser pioneros en el arte de la
colaboración pues “ya sabéis cómo nacimos”.
3.- Hacer de las Asociaciones, espacios de crecimiento humano, solidario, fraterno y lasaliano entre
los asociados. Y ser capaces de ofrecer, con espíritu
renovado, espacios para disfrute, el crecimiento y la
formación lasalianas, el trabajo en pos de los valores
cristianos, la potenciación de los recursos a los jóvenes y los niños de los centros de La Salle de los que
venís.
4.- Ir profundizando y abriéndose cada vez más al
conocimiento, aprecio y descubrimiento de la persona
de Juan Bautista de La Salle, a través de múltiples
iniciativas de tipo local (la peli de La Salle hoy queda
ya muy obsoleta) o supralocal. Adentrase en la lectura
132
de libros lasalianos, participar con otros en programas
de formación, darle consistencia a nuestro crecer como
lasalianos de manera real.
5.- Hacer de nuestras Asociaciones espacios ricos
donde se viva y manifiesta la solidaridad con los más
necesitados (enhorabuena por esas iniciativas solidarias de unos y otros que denotan que nuestro quehacer
no es solo de palabra), el voluntariado en la propia
ciudad o fuera de ella, el servicio a otras instancias
públicas o particulares, a la causa de los empobrecidos
(y no olvidar la formación en este campo).
Termino.
Los Hermanos de La Salle han sido iniciadores de
estos procesos lasalianos. Y os estamos muy agradecidos (los Hermanos) por el recuerdo emocionado de
todos vosotros (exalumnos) hacia los Hermanos que
os han precedido en el camino de la iniciativa.
Después, Hermanos y seglares de los centros, como educadores, han ofrecido lo mejor de sus vidas en
un trabajo educativo que es de agradecer. Ahora,
muchos de vosotros, pedís Hermanos para continuar
la labor iniciada y todos nos lamentamos de que no
hay Hermanos que puedan animar esta tarea. Pues, en
estos tiempos, toca por vuestra parte, seguir sugiriendo a jóvenes que se comprometan en el servicio lasaliano como Hermanos. Compartir la misión desde el
campo de las Asociaciones de Antiguos Alumnos
sigue necesitando personas comprometidas, hombres
consagrados que puedan, también, acompañar vuestros procesos. Es el esfuerzo que todos tenemos que
hacer.
Queda mucho por hacer, pero estamos en buena
línea. A la Directiva, gracias por su esfuerzo. Y a
todos, que no cejemos en el empeño de seguir haciendo futuro. “Somos armonía de colores” no es un
eslogan para el que tenemos al lado. Es para cada uno
de nosotros. ¡Y lo vamos a hacer realidad!, porque
estamos convencidos de ello.
Que hayan sido unos días felices y envidiables
para todos.
¡Feliz regreso a vuestros hogares!

horizonte
Nuestros
mártires
horizonte
Nuestros mártires
Antiguos Alumnos
Beatificación de 74 Hermanos de
La Salle (13 de octubre de 2013)
Hno. Justino Fernández Merayo
E
l domingo, día 13 de octubre de 2013, fue
una fecha histórica y día memorable no solo
para la Iglesia Católica sino también, y de
manera particular, para la Iglesia española, y más
particularmente para el Instituto de los Hermanos de
las Escuelas Cristianas.
Algunos Hermanos tuvimos la suerte de asistir a
la celebración de la eucaristía y ceremonia de beatificación en Tarragona de 74 Hermanos de La Salle. En
mi caso, gracias a la benevolencia de otros Hermanos de la comunidad a quienes previamente se les
había brindado esa oportunidad.
A estas alturas ya sabemos casi todo sobre el
magno acontecimiento. Pues no en vano
en su día seguimos la prensa informativa que, a distintos niveles, nos fue
suministrando la noticia.
En el contexto informativo
lasaliano teníamos abundantes
referencias y ya el Hno. Rodolfo Meoli, postulador general,
nos lo venía anunciando periódicamente. Y más recientemente nos
los recordaba el Hno. Álvaro
Rodríguez, superior general,
poco antes del acontecimiento, en
su “Carta con motivo de la Beatificación de 74 Hermanos de las Escuelas Cristianas”.
No obstante, aunque hayamos leído distintas informaciones al respecto en las páginas Web de La
Salle o en soporte de papel como, por ejemplo, en el
libro publicado por el Distrito ARLEP, editado en
Gráficas Villena, Hermanos de La Salle, Firmes y
Valientes Testigos de la FE o en el artículo del boletín ARLEP, n.º 264, pág. 11, Profetas de la Esperanza,
horizonte
no consideremos prolijo que en la revista Horizonte de
nuestro Sector se expresen algunas reflexiones.
1. Libertad, independencia y trascendencia de la
Iglesia
El cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, presidió en
nombre del Papa la beatificación de 522 mártires de
la fe. “No eran combatientes, ni tenían armas, ni
eran provocadores”... Eran hombres libres, simplemente testigos de su fe. Dieron su vida por Cristo. Y
con esa misma libertad de actuación, la Iglesia, que
es trascendente y presenta a los hombres la trascendencia, los eleva a los altares como testimonio, porque tiene poder para ello y así lo juzga oportuno, por encima de consideraciones de
tipo político. Así lo entendieron Juan
Pablo II, Benedicto XVI y Francisco.
Este último, líder de la libertad de
los hijos de Dios.
2. La mejor y más grande celebración en el año de la fe
El marco de la celebración en la
explanada, delante de la fachada del
comedor de la antigua Universidad Laboral de Tarragona, fue magnífico exponente
sin duda, para la mayor asamblea de fe al aire libre en
el "Año de la fe" en España. En un día apaciblemente
mediterráneo y tibiamente soleado, el Espíritu de
Dios se hacía presente como en un pentecostés otoñal
sobre la multitud de más de 20.000 participantes, que
contagiaban su fe y rezaban con fervor. Particularmente en algunos momentos, como en el credo, consagración, recepción de la comunión... Daba la sensación de que cada cual se identificaba “con los suyos”
cuando, con sumo respeto, se oían los nombres de
135
Nuestros mártires
cada uno de los mártires de las "33 Causas", que eran
proclamados beatos, uno a uno, en voz alta.
En este contexto de la Beatificación en el Año de
la fe, el mensaje de la Conferencia Episcopal Española resaltaba con énfasis la figura del beato papa Juan
Pablo II, que destacó en su animación pastoral la
importancia de la Iglesia mártir… “Al terminar el
segundo milenio, la Iglesia ha vuelto a ser de nuevo
Iglesia de mártires”.
3. La Iglesia y La Salle, gran familia cristiana de
nuevos intercesores
Los Hermanos nos trasladamos en autobús desde
la Casa San José-La Salle de Cambrils, donde nos
hospedamos, al campus de la antigua Universidad
Laboral de Tarragona, lugar del encuentro para la
celebración.
Nuestro distintivo, aparte de algún Hermano que
vestía de hábito, era una visera verde con el logotipo
convenido para la beatificación y con nuestro logotipo propio, de modo que éramos identificables dentro
de la macroconcentración. El desplazamiento a pie
desde el autobús hacia el escenario de la beatificación
era festivo y alegre como el de una gran familia que
va deprisa, ilusionada, a la misa de fiesta. Qué magnífico ambiente de orden, paz, serenidad y fraternidad. Sin haberse visto nunca, todos se saludaban con
amplia sonrisa y amabilidad.
La gran familia cristiana allí congregada, integrada por familias más pequeñas, era un reflejo de la
familia del más allá, de la gran familia de los mártires, intercesores principales en el Cuerpo místico de
136
Cristo, según las enseñanzas del Concilio, que también nos recuerda el mensaje de la Conferencia Episcopal antes mencionado.
Los moradores actuales de nuestras antiguas casas
de formación y centros de solera lasaliana en los que
vivieron algunos de nuestros Hermanos mártires, tal
vez perciban aún la resonancia de su santidad...
Tenemos un gran motivo de alegría. Nuestra familia lasaliana de intercesores celestiales se ha aumentado considerablemente con estos 74 hermanos mártires,
que refuerzan a los otros 58 beatificados en Roma el
28 de octubre de 2007, y a los anteriormente beatificados: mártires de Almería y Valencia, de los Pontones y beato Salomón… además de los ya canonizados.
4. Experiencia de fraternidad y convivencia lasaliana distrital
La convivencia del Distrito ARLEP revistió carácter especial durante la comida fraterna y en el Acto
Institucional Lasaliano de Acción de Gracias que
tuvieron lugar en el Colegio La Salle de Tarragona,
con la intervención del Hno. Superior General y Visitadores auxiliares de Cataluña y Madrid.
Conviene resaltar que tanto la acogida del Director
de la casa de Cambrils, Hno. Santi Mateo, del Hno.
Visitador y de os demás Hermanos del sector de Cataluña, fue extraordinaria. Y la convivencia mutua entre
todos los hermanos del Distrito ARLEP que nos congregamos, una gran muestra de fraternidad lasaliana en
todos los sentidos.

horizonte
Nuestros mártires
Mártires de España
Hno. Melchor Peirotén
E
stamos viviendo una primavera de reconocimiento eclesial de cientos de mártires
que derramaron su sangre por Cristo en
fechas dignas de conservar en la memoria
aunque solo sea para tributar un homenaje
a estos héroes. También a nuestros distritos españoles, esta vez centrados en los de Cataluña y Madrid,
los sorprendió la barbarie. Nosotros, que hemos vivido intensamente la ceremonia solemne de Tarragona,
debemos conservar el recuerdo de estos mártires que
son todo un ejemplo de heroicidad y de fidelidad
cruenta a Dios.
Aunque yo no sea el más indicado para hacer una
reseña en nuestros programas de divulgación, sí me
parece importante que en nuestros documentos quede
recogida la noticia ad perpetuam rei memoriam.
España se vio sembrada de luminarias martiriales
durante el trienio de los años 1936-1939 cuando las
“hordas marxistas” desatadas practicaron acometidas
sangrientas por toda España.
Ha sido la tercera gran Beatificación, más numerosa que las dos anteriores ya que fueron beatificados
522 mártires. Por lo que respecta a nuestro Instituto,
dividimos o consideramos dos espacios: Barcelona y
Madrid. Hubo 39 mártires en el primero y 35 Hermanos y dos seglares en el segundo.
1.- Grupo de Cataluña
Los beatos lasalianos de BARCELONA pertenecen o son oriundos de las provincias de Gerona (7),
Tarragona (3), Castellón (6), Valencia (1), Lérida (2),
Teruel (7), Zaragoza (2), Burgos (6), León (1), Logroño (1) y Palencia (1).
Cumplieron su formación completa o parcial en
centros distantes unos de otros pues la casa de Cambrils no se construyó como está hoy hasta finales de
la década de los años 20. Hay que tener en cuenta que
estos Hermanos nacieron con el Instituto en España o
antes, y los Hermanos Visitadores Lange en Cataluña
y Justino en Madrid hacían malabarismos para la
implantación del Instituto en España y araban con los
“bueyes” que tenían, de primera, de segunda o de…
clase. Pero la obra, bendecida por Dios, produjo opimos frutos. Estas casas de formación, en el Distrito
de Cataluña, tuvieron diversa ubicación, y en ellas la
horizonte
verificaban total o parcialmente. De estas, muchas
ya no existen. La primera y la de más solera fue
Bujedo, en donde realizaron su formación total o
solo en el escolasticado 25 Hermanos. Otras casas
prestaban este servicio total o parcial en la zona de
Levante o en Francia y Bélgica. Así funcionaron
estos centros de formación en Gerona-FortianelFortià (13), Cambrils - S. José o Sdo. Corazón (30),
Les (1), Hostalets de Llers (2). Monreal del Campo
(2), Benicarló (2), Fonseranes-Francia (2), LembecLez-Hal (2), Betange-Sur-Mes (1). Hubo dos Hermanos de Gerona y uno de Zaragoza que no tuvieron escolasticado. La casa nueva de Cambrils se
inauguró unos años antes de la “revuelta”.
¿Cuántas de estas casas subsisten hoy? Las capitales catalanas contienen hoy los principales centros,
que son punteros en avances pedagógicos. Me llama
la atención de que, en esta panorámica, no haya ninguna obra en BARCELONA- capital. Los Hermanos
se volcaron en los pueblos y en ellos fundaron los
centros.
137
Nuestros mártires
(13), Palencia (6), Bilbao, Gerona, Huesca, Valladolid (2) y Portugal, San Sebastián, Salamanca, Cuenca,
Pamplona y Murcia (1).
Hubo un empleado de Griñón y el capellán que
también tuvieron la dicha del martirio como los Hermanos. Fue tremendamente atroz el martirio de los
Hermanos de Griñón. Fueron a buscar a dos que se
habían escondido cuando observaron que faltaban en
el grupo y los sacaron de mala manera hasta el patio
en donde estaba el grupo y, en presencia de los novicios menores, consumaron los asesinatos. Después,
arrojaron a todos a la fosa común.
Hubo un mártir, el Hermano Benjamín León, que
tuvo tres tomas de hábito: la primera en Cambrils, y
las otras dos en Griñón, después de dos salidas y dos
reingresos. Otro, el Hno. Maximino Serrano, que
salió y volvió a ingresar, tuvo dos tomas de hábito,
esta vez las dos en Bujedo.
2.- Distrito de Madrid
A partir de la Escuela del Sagrado Corazón, fundada con la poderosa ayuda de D.ª Ernestina y el
Hno. Justino María, el Instituto comenzó a tomar un
esplendor notable en toda España.
Hay presencia de múltiples provincias españolas
con candidatos a miembros del Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, a saber: Burgos
138
Tanto en Cataluña como en el resto de España se
confirmó lo que afirmaba Tertuliano: "la sangre de
los mártires es semilla de cristianos”: a partir de
este momento, hubo una eclosión de vocaciones para
Hermano de las Escuelas Cristianas que propiciaron
el resurgir de los Distritos hasta siete, con obras muy
florecientes en cada uno hasta el punto de que todos
tienen centros relevantes y, hasta en los más pequeños, las escuelas, se aplican las más avanzadas teorías
de la pedagogía.
Con nuestro poeta Orizana, podemos entonar:
¡Palmas al viento con nimbos de gloria. El triunfo
de los mártires cantad, cantad!

horizonte
Nuestros mártires
Repiques de beatificación
Hno. Mariano Valdizán
1.- Beato P. Manila, mártir
Padre Manila, capuchino. A quienes conocen la
historia de nuestra casa de Bujedo, ese nombre les
resulta simpático y agradable como un alegre tintineo
de campanas. Así me resultó siempre a mí. Tanto,
que varias veces intenté buscar datos concretos sobre
él, sin resultado.
¿Quién era el P. Manila? Era un religioso capuchino, que debía de tener una amistad especial con
nuestra casa de Bujedo, amistad que no he logrado
aclarar. Él fue quien "regaló" a nuestra monasterial
iglesia una campana, que es la primera de las dos que
tiene la torre, la más cercana a la fachada principal.
Su colocación tuvo lugar el día 30 de septiembre de
1929, lo que fue todo un acontecimiento en la casa.
Pero recientemente, con ocasión de la cercana y
grandiosa beatificación de este Año de la Fe, en Tarragona, encontré, al fin, entre los numerosos nuevos
beatos, el nombre del P. Manila, que también había
muerto violentamente al comienzo de la nuestra reciente contienda civil. Luz de mediodía para mí, que
buscaba hacía tiempo. El P. Manila es uno de los
nuevos mártires de Cristo.
En la vida religiosa tenía el nombre de P. José
María de Manila; lo que, según la norma de la orden capuchina, significa que era natural de Manila.
Y, claro, ya era cuestión de seguir investigando nuevos datos sobre él. Efectivamente, el P. Manila, que
en el siglo se llamaba Eugenio Saz-Orozco Montera, había nacido en la capital filipina el 7 de septiembre de 1880, cuando aquel archipiélago era todavía
territorio español. Su padre, Eugenio Saz-Orozco y
de la Hoz, era rico propietario y había ocupado importantes puestos, como el de director del Banco de
las Islas Filipinas, y posteriormente nada menos que
el de alcalde de la capital de Filipinas, cargo que
ocupaba en el momento de la independencia del archipiélago; es decir, que fue el último alcalde de Manila en la época española. Estaba condecorado como
Caballero de la Gran Cruz de Isabel la Católica, una
de las mayores condecoraciones españolas.
En 1936, al comienzo del conflicto bélico en España, el Padre Manila pereció fusilado, con un gran conjunto de reos, en el Cuartel de la Montaña, de Madrid,
el día 17 de agosto de 1936, al mes justo del comienzo
horizonte
P. José María de Manila
de la contienda. El P. Manila conservaba gran afecto
a su tierra nativa y, celoso sacerdote, siempre acarició
la esperanza de volver a ella en el ejercicio de su
apostolado sacerdotal, lo que no llegó a suceder.
Ahora se me aclaran dos cosas que siempre me
habían producido curiosidad. La primera, cómo un
franciscano capuchino, pobre por definición, había
podido regalar a Bujedo un gran campana, objeto
siempre de alto precio, también por definición. Y
pensaba en la posibilidad de que fuera de una familia
económicamente pudiente, que pudiera haberle asistido en ese caso, lo que quizá pueda quedar confirmado por lo ya indicado. La otra curiosidad que se
me presentaba era el por qué a la campana se la bautizó con el nombre de Josefina. La respuesta ahora
resulta clarísima: el generoso donante se llamaba
José, José María, en su nombre de religión. Me alegro de la beatificación de nuestro amistoso donante.
Bien merece el P. Manila que su Josefina voltee solemne y alegre, y cante jubilosa en su glorificación
por la Iglesia.
Fijémonos en que, desde la expulsión de los monjes premonstratenses de este monasterio, un siglo
antes, la torre de esta iglesia había estado desposeída
de campanas; seguro que las últimas habían sido
objeto de rapiña por los aprovechados, que nunca
faltan; como también lo fue –es hecho documentado–
139
Nuestros mártires
el majestuoso retablo mayor de la iglesia, importante
obra artística.
Así, en los treinta primeros años de la presencia
lasaliana en Bujedo, no debió de estar la comunidad
en fáciles condiciones para pensar en la reposición de
aquella pieza fundamental en la torre de la iglesia,
por su alto coste. Pero, ante el solemne y armonioso
repiqueteo de la campana Josefina, la comunidad
bujetense se sintió altamente impelida y rápidamente
obligada a dar a la capuchina campana otra compañera en sus gozosos y regocijados vuelos festivos; la
nueva campana ocupó el segundo vano de la torre. Y,
ante la curiosa expectación general de toda la casa,
comenzó a voltear jubilosa el día de Reyes de 1930,
tres meses después que la Josefina. Si el generoso
capuchino nos regaló una hermosa campana, no quisieron ser menos los más ricos y no menos generosos
Reyes Magos. La nueva campana recibió el nombre
de Santa María del Buen Consejo, en honor de la
titular de la iglesia y celestial patrona de la casa. Ambas campanas procedían de la fundición de Ángel
Perea, de Miranda.
La campana "Josefina"
Al celebrarse esta magna reciente beatificación, la
Iglesia filipina ha considerado como suyo a este nuevo Beato; de hecho, también las publicaciones de
nuestro ambiente han señalado que, entre los nuevos
beatos, había seis extranjeros, por los lugares de su
nacimiento, y entre ellos un filipino. Naturalmente
que este es un caso muy especial entre todos ellos.
140
Pues es claro que este mártir de que tratamos, legalmente era español, nacido en suelo entonces español,
de familia española, y familia distinguida, que abandonó el archipiélago en las especialísimas circunstancias históricas señaladas, a causa de la independencia
filipina; él contaba entonces 18 años. Pero no es para
tener celos por nuestra parte por esta cuestión: allí
nació nuestro héroe y me parece extraordinariamente
bien que la Iglesia filipina lo considere y honre como
suyo. Los santos son de toda la Iglesia, los santos son
de Dios. Así, además, será este un elemento más a
añadir a la innegable obra misionera de España en
Filipinas. España sembró allí la Iglesia durante cuatro
siglos; y, un siglo largo después de la independencia
de Filipinas, España sigue enriqueciéndola. Así, el
beato hispano-filipino logra ver cumplido el sueño de
contribuir a cristianizar a su tierra natal, a su patria
chica, lo que en vida no había logrado.
2.- Beato Hno. Virginio Pedro, mártir
Vicente López López, natural del burebano pueblo de Miraveche, es uno de los nuevos beatos elevados a los altares en la reciente y grandiosa ceremonia
de beatificación del 13 de octubre en Tarragona. Al
comenzar nuestro último conflicto bélico el 18 de
julio de 1936, estaba destinado en la escuela madrileña de Santa Susana. Ante las turbulentas circunstancias que se estaban dando en la capital, al tercer día
de ellas los Hermanos de la comunidad decidieron
buscar lugares de refugio. Él encontró acogida con
mil amores en casa de un antiguo alumno suyo de
hacía ya un cuarto de siglo, pero que le conservaba
gran afecto y que se le ofreció generosa y gentilmente. Fue a su casa para dejar allí en previsión alguna
ropa. Mas, apenas llegado, quiso volver a la escuela
para asegurarse de que el Santísimo era retirado del
sagrario en evitación de profanaciones (previsión que
efectivamente ya se había realizado).
Así que, contra el parecer de sus generosos anfitriones, que le disuadían de ello, volvió sobre sus
pasos. Acababa de llegar a la acera de la fachada del
gran edificio escolar (que en aquel momento estaba
siendo asaltado por los milicianos), en la esquina de la
calle Bocángel con la del Marqués de Mondéjar. Por
allí se encontraba un grupito de alumnos de la escuela; uno de ellos, se percató de la aparición del Hermano y, extrañado de ello, se lo dijo a los demás.
horizonte
Nuestros mártires
Todos ellos contemplaron en la televisión la larga
ceremonia, atentos, felices, emocionados, con la satisfacción reflejada en los rostros. Al terminar la prologada retransmisión, el esposo, que cree entrever
visos de desilusión en la cara de su suegra, le pregunta: -¿Qué le ha parecido? -¡Pero si no se le ha visto,
ni le han nombrado!
Normal. Naturalísimo. Perfectamente explicable.
No hace falta ser experto psicólogo para entenderlo.
¡Tantos años de ansiosa e ilusionada espera! El matrimonio, comprensivo, procura aclararle la cuestión.
¡Eran tantos años de común añoranza! Pasadas aquellas primeras sensaciones de insatisfacción, Maura se
da cuenta de que su larga esperanza se ha cumplido.
Maura ahora sabe satisfecha que ya puede rezar a su
hermano Ramiro como se reza a los santos.
Hno. Virginio Pedro
Lo oyeron unos milicianos que pasaban por allí, y,
como una exhalación, inmediatamente se dirigieron al
Hermano, le apresaron, lo condujeron a un cercano
descampado, a cuatro pasos, detrás de la vecina cárcel
de mujeres; y allí le asesinaron a tiros. Todo ello en
brevísimo tiempo. Era el 20 de julio de 1936, tercer
día de horror en la capital. Sus restos martiriales descansan en el Valle de los Caídos desde el 8 de noviembre de 1967: en la cripta izquierda, piso 2, columbario 7080.
Mártir, por religioso, por religioso educador. Mártir de la Eucaristía: como Tarsicio, otro Tarsicio más.
3.- Beato Hno. Vidal Ernesto, mártir
Palentino. Mártir en Madrid. Su hermana Maura
vive en un pueblo vallisoletano con su hija y con el
esposo de esta; con ellos vive también la madre del
marido, de 100 años cumplidos de edad; ella está a
punto de cumplirlos también.
Maura desde que se conoció el triste desenlace de
su hermano Ramiro (Hno. Vidal Ernesto), lleva toda
la vida esperando, anhelando, rogando a Dios la glorificación del hermano asesinado, que ella ha tenido
siempre por mártir. Y lo mismo ocurre en toda la casa
y en toda la familia. Al matrimonio le hubiera gustado enormemente asistir en Tarragona a la esperada y
grandiosa ceremonia de beatificación, pero era evidente que ni podían pensar en ello, que su puesto
estaba en casa.
horizonte
Hno. Vidal Ernesto
4.- Beato Juan Huguet Cardona, mártir, exalumno
Menorquín, a los 5 años de edad, en 1917, ingresó en nuestro colegio de Alaior, donde permanecería
durante siete cursos con toda ejemplaridad y todo
aprovechamiento, hasta su ingreso a los 12 años en
el seminario. Siempre continuó muy unido al colegio, donde había hecho la comunión a los 9 años, y
del que conservaba el mejor recuerdo. Se ordenó de
sacerdote con 23 años y, a los 33 días de su primera
misa, murió violentamente asesinado el día 23 de
julio de 1936. Acaba de ser beatificado el 13 de
octubre, en Tarragona.
141
Nuestros mártires
Un simple suboficial del ejército, el brigada Pedro
Marqués, se había hecho cargo del gobierno militar
de la isla de Menorca, una vez anulados todos los
jefes superiores. Mosén Huguet y otro sacerdote fueron conducidos al ayuntamiento por gente armada,
por orden del nuevo jefe miliar. Al llegar, el brigada
les ordena desprenderse de las sotanas; se apodera del
rosario de Juan, lo toma despectivamente y, con él en
su mano izquierda, se lo coloca, colgando, delante de
la cara, le apunta con la pistola y le dice: "Escupe
ahí, escupe ahí, que, si no, te mato". Juan negó con la
cabeza, miró hacia arriba, extendió los brazos en
cruz, y con voz fuerte y segura exclamó: ¡Viva Cristo
Rey! En el acto, el nuevo jefe militar le descerrajó
dos disparos en la cabeza. Es testimonio directo del
otro sacerdote, también detenido, D. Jaime Mascaró.
Era el 23 de julio, a los 6 días de comenzar la contienda civil. El cadáver recibió sepultura dos días
después, el día de Santiago, Patrón de España.
muerte. Se le ofreció asistencia espiritual, que él
aceptó gustoso porque sentía muy profundamente su
necesidad. Conocemos el testimonio inestimable del
sacerdote que lo atendió en momentos tan decisivos,
Don Guillermo Coll Pelegrí: "El brigada Pedro
Marqués Barber, después de haber escuchado la
sentencia de muerte, no se recataba de decir que
merecía la muerte por el crimen que había cometido
matando a aquel sacerdote; añadiendo que hubiera
podido escapar a la justicia, huyendo al extranjero,
pero que no lo había querido hacer por sentir la
necesidad de expiar con su muerte el crimen perpetrado, y que el remordimiento de este crimen le había acompañado desde el momento que lo cometió
hasta aquellos sus últimos momentos. Al ofrecerle el
juez, en mi presencia, la ayuda de un sacerdote, el
mismo Marqués se adelantó manifestando su satisfacción por poder recibir los auxilios espirituales;
prestados éstos, pidió un espacio de tiempo para
escribir a sus familiares, lo que hizo con pulso firme
y serenidad admirables. Después oyó la Santa Misa,
en la cual comulgó devotamente, y, terminado el
Santo Sacrificio, al quitarme los ornamentos sagrados, se adelantó hacia el altar, me abrazó efusivamente, mientras decía a los circunstantes: Abrazo a
este sacerdote como un acto de reparación por el
crimen que cometí matando a aquel otro sacerdote.
Después marchó serenamente hasta el último momento".
En las cartas escritas por Pedro Marqués a su esposa e hijos les exponía su arrepentimiento y pedía
perdón por sus pasados errores, a la vez que les daba
muy buenos consejos, indicándoles que fueran buenos cristianos y tuvieran devoción a la Virgen María.
Parece que él de pequeño había recibido educación
religiosa, que luego desgraciadamente había echado
en olvido.
Juan Huguet Cardona
La sangre de los mártires nunca es inútil. La sangre martirial siempre es fecunda. Lo que en este caso
se manifestó de forma pronta y elocuente. Al asesino
no le abandonó en adelante el pesar de su alevoso
crimen; así lo manifestó repetidamente a personas
cercanas, que más tarde lo atestiguaron. Terminada
la lucha armada, aquel jefe militar de la isla fue sometido a juicio militar, por aquel crimen y por toda
su actuación durante la guerra. Fue condenado a
142
¡Sangre de mártir! Por algo el anciano obispo,
Don Juan Torres, al conocer lo ocurrido al más joven
de sus sacerdotes, le consideró como claro mártir y,
lleno de emoción, envió a decir a los padres de Juan
"que guardaran, sin lavarla, toda la ropa empapada
de sangre, ya que ésta había sido derramada por la
fe de Cristo". Se repite la escena de Saulo y Esteban.
Y la del buen ladrón. Seguro que el mártir Juan Huguet Carmona esperaba a Pedro Marqués Barber a la
misma puerta del cielo para abrazarle e introducirle
en el paraíso del buen ladrón, en el cielo indescriptible de Pablo.

horizonte
Nos
esperan
horizonte
Nos esperan
Nos esperan
Ignacio Sanjuán (1923-2014)
Hno. Andrés Corcuera
Homilía en el funeral (11 de enero de 2014)
E
stimados celebrantes, María y Ana-Gloria,
hermanas del Hno. Ignacio, sobrinos, familiares, Hermanos y amigos todos:
Se nos ha ido el Hno. Ignacio. Finalmente su cansado organismo no ha resistido más y le ha permitido
ir a gozar del Reino. Le faltaba menos de un mes para
cumplir los 91 y conservaba su jovialidad y buen
humor haciendo vida normal, con algunos achaques
propios de la edad.
El camino de la vida que va
transcurriendo de manera inexorable, nos ha indicado que, en el
caso del Hno. Ignacio, ya se
había hecho un esfuerzo considerable y era momento del descanso. Un camino de 90 años,
recorrido con energía y buen
humor, y con un poco más tranquilidad y sosiego al final, en
los últimos años en la comunidad de la Residencia de Bujedo.
Seguro que los cuidados de los
Hermanos y de las auxiliares de
enfermería han ayudado a ello.
Ignacio, nuestro hermano, se
resistía a darle una palabra de ánimo a la muerte.
Disfrutó de una salud aceptable hasta el final, pero su
energía no pudo con la última caída y el deterioro
progresivo de su cerebro. Pero sí estamos seguros de
que fue cumpliendo el camino que Dios le señaló
como cristiano, allá por 1923 y que refrendó más
tarde como Hermano de La Salle.
Hoy son enormemente enriquecedoras y nos llenan de consuelo las palabras de la primera lectura que
hemos proclamado: “Hemos sido sepultados, con
Cristo, en la muerte… para ser renacidos con Él a
horizonte
una vida nueva” (Rom 6, 4.7). Es un viejo tributo el
que tenemos que pagar por nuestra condición limitada: dejar que nuestro cuerpo desaparezca, gastado por
el trabajo y la entrega para resucitar a una vida gozosa porque “… si hemos muerto con Cristo, también
viviremos con Él” (Rom 6, 8).
Es cierto que una larga vida, al servicio del Evangelio se va preparando desde su inicio. Por eso, sus
padres, Leonardo y Teodora se alegraron mucho, sin
duda, cuando Ignacio nace, en el pueblo de Alcocero de Mola, en Burgos,
el 1 de febrero de 1923. Pronto, a los
14 años, Bujedo será su casa de formación durante cinco años, durante
los cuales va madurando sus opciones
hasta hacer su primera profesión,
aquí, en esta casa, el 8 de septiembre
de 1940.
En el año 1941 es destinado a su
primera comunidad en Mieres (Asturias), en la que inicia su misión apostólica. Luego, se suceden diferentes
comunidades y servicios: La Felguera, Ntra. Sra. de Lourdes, Burgos,
Escolasticado de Bujedo. En 1956 va
a la comunidad de Huarte para realizar los estudios
de perito agrícola que termina en 1960. Posteriormente estará nuevamente en el Escolasticado de Bujedo y Mieres; en la Sagrada Familia de Bujedo y en
Burgos. En 1969 va como subdirector al centro Gandásegui de Valladolid. Posteriormente estará en Ujo,
Ntra. Sra. de Lourdes, Ujo nuevamente, Los Corrales
de Buelna, La Santa Espina y La Inmaculada de Santiago. En 1992 viene a esta casa de Bujedo en la que
pasará 22 años, los 10 primeros en la comunidad
administrativa realizando distintos servicios, y los
últimos 12 en la comunidad de la Residencia.
145
Nos esperan
He hablado, Ignacio, con algunos Hermanos que
te acompañaron en las comunidades y me han dicho
cosas de ti que ya conoces. Un Hermano me dice que
en momentos de dificultad personal le demostraste
“humanidad, cariño, saber estar a su lado, cercanía…
Eras poco dado a echarle “agua bendita a la vida”
pero siempre estabas ahí aportando tu sentido común
y humanidad.
Me dicen que te gustaba caminar por los campos
cántabros en Los Corrales de Buelna y por los montes de La Santa Espina o los paseos en Bujedo con
Eliseo, Antonio Jimeno, o Victorino, entre otros. Te
ven como gran conversador; sabías narrar con una
maestría inigualable. Por eso salir de paseo contigo
era garantía de una conversación amena salpicada de
un montón de anécdotas de tu infancia, de tu pueblo,
de tus años de Hermano, de la clase, de la comunidad…
Otros me dicen que la obediencia te orientó a estudiar agricultura, pero tu verdadera pasión era la
historia. Te convertiste en un agrónomo humanista
dice otro Hermano. Y te gustaba hablar de tu pueblo,
Alcocero de Mola, y recordabas con gusto asuntos
referidos a los cultivos, clases de tierras, huertas y
arboledas, pájaros, telares, hornos para hacer el pan,
el molino, las fiestas, tu familia, a la que tanto has
querido… Todo lo recordabas con una memoria fidelísima y lo contabas con una gracia particular. Aunque no solo hablabas de la naturaleza, también la
trabajabas. Los manzanos y otros frutales de la huerta
de Bujedo tienen que ver contigo y tu querido compañero Antonio Jimeno.
Tuviste también pasión por la lectura. Esa fue una
de tus grandes aficiones: citabas los clásicos de la
literatura española con bastante normalidad y eras
asiduo lector de escritores espirituales como san
Agustín o santa Teresa.
El arte también te apasionó: la estancia en Santiago te ayudó a conocer la ciudad y penetrar en su alma. La ciudad no tenía secretos para ti. Algunos recuerdan con agrado tus explicaciones en la catedral
compostelana o en Bujedo cuando enseñabas el monasterio y otros lugares que recordabas con agrado.
146
Una vida larga y fecunda la de nuestro Hermano y
jalonada de servicio. El Hno. Ignacio trataba de hacer
realidad el Evangelio de hoy: “No perdáis la calma:
creed en Dios y creed también en mi” (Jn 14, 12).
Con frecuencia, la vida nos conduce por derroteros
donde la prisa o la falta de sosiego anulan nuestra
capacidad de estar con las personas, o nos roban
tiempo para la acogida o la escucha del que necesita
una palabra de ánimo y aliento. Jesús nos anima a no
perder la calma y vivir con sosiego, porque el Evangelio se saborea en la tranquila meditación o en esa
oración serena de cada día que renueva el ánimo.
Ignacio, disfruta ahora de las aulas, de los jardines
y de los frutales del cielo. Tienen entrada gratuita
para todos los que han sabido hacer de su vida una
búsqueda de la verdad que da la auténtica sabiduría:
la de una vida puesta al servicio de los demás.
Ahora te devolvemos un ¡gracias! generoso y te
pedimos, confiados en ti, que, desde ese lugar privilegiado donde se vislumbran nuestros afanes, sigas
inspirando en el corazón de los que te recordamos, el
esfuerzo por el trabajo bien hecho, el deseo de buscar
la verdad y perseguir la cultura como buenos educadores y, sobre todo, una confianza ilimitada en Dios.
Y termino con las palabras que el Hno. Ignacio
me repetía al inicio de cada entrevista que tuve con él
en mis visitas a la comunidad de Bujedo: “Estoy
bien, pero que muy requetebién. Dios me trata muy
bien. Me siento mimado. No me esperaba disfrutar
tanto de la vejez como lo estoy haciendo en estos
últimos años de mi vida. Estoy bien con los Hermanos y con todas las personas que nos ayudan en la
residencia y disfruto mucho de la oración y de la
contemplación de la naturaleza que nos rodea”. Pues
sigue disfrutando con todos los Hermanos, amigos y
familiares que te han precedido en los jardines y paseos del cielo.
Ignacio, hermano, descansa feliz en las manos del
Padre.

horizonte
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