La marihuana La marihuana es una mezcla verde o gris de flores secas cortadas en trocitos de la planta Cannabis Sativa. Se fuma como un cigarrillo llamado "porro" o utilizando pipa. Los usuarios también mezclan la marihuana con alimentos o la usan para hacer té. Los científicos han descubierto que las sensaciones positivas o negativas experimentas por un individuo después de fumar marihuana están directamente relacionas con la genética. Los factores ambientales tales como la disponibilidad de la marihuana, las expectativas sobre su efecto, la influencia de amistades y contactos sociales y otros factores son diferentes hasta para los gemelos idénticos. Sin embargo también se descubrió que el ambiente familiar de no tiene ninguna influencia determinante sobre los efectos de la marihuana antes de los 18 años de edad. Potencial adictivo: Una droga es adictiva cuando causa un deseo de búsqueda y consumo compulsivo e incontrolado a pesar de los efectos adversos sociales y sobre su salud. La marihuana cumple estos requisitos. Anualmente, más de 120.000 personas buscan tratamiento para su adicción primaria a la marihuana. Además, estudios hechos en animales indican que la marihuana puede causar dependencia física, y algunas personas han declarado tener síntomas asociados con la abstinencia. Los efectos de la marihuana, del hachís (y de todas las drogas, tanto legales como ilegales) dependen de la interrelación de diferentes factores: las características de la sustancia y la forma en que la consumas tus características personales: personalidad, peso, edad, estado de salud y de ánimo, así como tu experiencia pasada como consumidor de la droga en cuestión las circunstancias en las cuales consumís la droga: (compañía, lugar, legalidad) Podes encontrar mayor información en el “Modelo Interactivo” Básicamente la marihuana produce los siguientes efectos: En el plano fisiológico: aumento del apetito, sequedad de boca, enrojecimiento de la conjuntiva de los ojos, brillantez de la córnea, taquicardia, sudoración, analgesia moderada, somnolencia, y dificultades en la coordinación motora. En el plano psicológico: sensación de euforia, relajación, desinhibición, cambios sensoriales y perceptivos, pérdida de concentración y disminución de la coordinación. En altas dosis puede provocar alucinaciones (este es el efecto que hace que algunos autores consideren a la marihuana como un alucinógeno menor). Cuando se consume fumada, el humo es rápidamente absorbido por los pulmones y llega al cerebro en un corto período de tiempo, por lo cual sus efectos comienzan a notarse a los pocos minutos de su consumo, alcanzando su pico máximo al cabo de unos treinta minutos y prolongándose por dos o tres horas. Cuando es ingerida por vía oral, los efectos demoran más en aparecer y pueden llegar a durar entre tres y cuatro horas. En cuanto a su potencial adictivo, es decir, en cuanto a su capacidad para generar dependencia, el cannabis no parece dar lugar a dependencia física, aunque se ha descrito cierta reacción de abstinencia en usuarios crónicos al interrumpir su consumo, caracterizada por ansiedad, irritabilidad, pérdida de apetito, temblores e insomnio. Por otra parte, puede conducir a cierta dependencia psicológica, entendiendo por tal la dificultad para experimentar determinadas sensaciones y hacer frente a ciertas exigencias cotidianas si no se está bajo los efectos de la sustancia. ¿Qué riesgos puede tener el consumo de marihuana?: Los principales riesgos del cannabis están asociados a los efectos perjudiciales que podrían llegar a generar en el sistema respiratorio cuando es fumada. El humo de la marihuana puede llegar a producir bronquitis crónica, enfisema pulmonar y cáncer de pulmón. Debemos de tener en cuenta además que para experimentar al máximo los efectos de esta sustancia los consumidores inhalan profundamente el humo, lo retienen al máximo en los pulmones y no usan filtro. Por otra parte, el consumo asociado de tabaco puede incrementar las probabilidades de que se de alguna disfunción de este tipo en el sistema respiratorio. En cuanto al sistema circulatorio, el consumo de cannabis provoca de manera casi inmediata taquicardia, por lo cual las personas que padecen insuficiencia cardíaca o hipertensión (presión arterial alta) podrían ver empeorados sus síntomas. Por otra parte, la acumulación de THC en el cerebro puede provocar alguno de estos efectos: Puede entorpecer la memoria, sobre todo, la memoria a corto plazo, lo cual dificulta la retención de los sucesos que se han vivido bajo los efectos de la sustancia. Puede alterar la capacidad de concentración ¿Si eres mujer y estás embarazada?: Hay algunas discrepancias acerca de los efectos que fumar marihuana puede causarte y causarle a tu bebé durante el embarazo. Estas discrepancias se dan porque a menudo, las mujeres embarazadas que fuman marihuana, usan también otras drogas como tabaco y alcohol. De esta forma resulta difícil identificar con exactitud qué es lo que causa la marihuana y qué es lo que causan las otras drogas, los efectos se mezclan y resulta difícil distinguir cuáles son provocados por una sustancia y cuáles por otra. A pesar de que no se sabe con exactitud qué efectos puede causar el fumar marihuana a tu bebé, lo que sí sabemos es que si fumas marihuana durante el embarazo: Tu bebé podría tener menos oxígeno que el que necesita para desarrollarse Podrías tener un parto prematuro El fumar marihuana con regularidad podría impedir que te des cuenta de que estás embarazada, porque puede ocultar algunos signos de embarazo como las náuseas. Y si no te das cuenta de que estás embarazada y seguís fumando, hay más posibilidades de que tu bebé salga perjudicado. Ahora bien, si vos no fumás pero te fuman al lado, al igual que con el cigarrillo, el humo de la marihuana puede afectarte y afectar a tu bebé, por lo que es mejor que te mantengas alejada de la corriente de humo cuando hay alguien fumando. Efectos psicológicos y fisiológicos: No son fáciles de describir, ya que en sí, la intoxicación con Cannabis tiene diferentes síntomas y son de carácter impredecible. Cada individuo tiene una experiencia diferente en cada ocasión que la utiliza. Tomando esto en consideración, sólo es posible mencionar algunos aspectos generales que aparecen como constantes en varias investigaciones científicas: El primero de ellos es el aumento en la agudeza visual, táctil, gustativa y sobre todo auditiva. De hechos son bastantes los músicos que suelen usarla con el propósito de escuchar o componer música. Referente a la concepción distorsionada del tiempo, tenemos que esta es una de las pocas variables en las que coinciden unánimemente todos los estudios. Diversas personas entrevistadas comentan que los intervalos de tiempo parecen subjetivamente elásticos, es decir, que los minutos parecen horas y los segundos minutos, el tiempo parece discurrir más lentamente. Según acota Grinspoon (20), esto se relaciona probablemente con la rápida sucesión de ideas e impresiones que cruzan el campo de la conciencia. En forma semejante, la parálisis de la función de la memoria inmediata destruye el sentido de continuidad que a su vez está íntimamente relacionado con el sentido del transcurso del tiempo. En dosis bajas suele experimentarse además de los efectos antes mencionados, un descenso considerable en el nivel de atención y una sensación de conciencia personal más marcada. En dosis medias los cambios son más visibles, mientras que en dosis altas pueden producirse ilusiones visuales, lasitud y somnolencia que culminan en un sueño profundo.