Reporte de la Secretaría General de Naciones Unidas Sostenibilidad Corporativa y la Agenda de Desarrollo de Naciones Unidas Post-2015 Perspectivas de los participantes del Pacto Mundial de Naciones Unidas sobre las prioridades globales y cómo comprometer a las empresas hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible Presentado por Pacto Mundial de Naciones Unidas 17 Junio de 2013 El Pacto Mundial de Naciones Unidas es la iniciativa de responsabilidad corporativa más grande del mundo con más de 7,500 empresas firmantes en más de 140 países, y 101 Redes Locales. Las empresas participantes – quienes trabajan con una variedad de partes interesadas no empresariales – se comprometen a alinear sus operaciones y estrategias con los diez Principios -basados en documentos universalmente aceptados- sobre las áreas de derechos humanos, estándares laborales, medio ambiente y anticorrupción. Asimismo, las empresas se comprometen a tomar acciones para apoyar los objetivos más amplios de Naciones Unidas tales como los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Lanzado en el año 2000, la misión del Pacto Mundial de Naciones Unidas es promover la práctica de la sostenibilidad corporati va globalmente, reconociendo que las acciones empresariales responsables pueden sustentar economías con valores esenciales para un crecimiento más sostenible e inclusivo. Mayor información: www.unglobalcompact.org Resumen del informe Según la mirada de los gobiernos y Naciones Unidas hacia el 2015, y la fecha límite de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, el Pacto Mundial de Naciones Unidas ha sido invitado para aportar las perspectivas de las empresas e inversionistas así como las acciones para la agenda global de desarrollo Post-2015. La era post-2015 ofrece una oportunidad histórica de ampliar y alinear los esfuerzos de las empresas con el fin de contribuir a las prioridades de Naciones Unidas, en niveles sin precedentes. Miles de empresas comprometidas con la responsabilidad y la sostenibilidad ofrecieron sus puntos de vista en una serie de consultas, encuestas y discusiones focalizadas globales, realizadas durante el año pasado. Se espera que estas aportaciones empresariales ayuden al organismo mundial en sus deliberaciones sobre una agenda para dar seguimiento al éxito y retos actuales de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) - especialmente en lo que se refiere al papel del sector privado para contribuir al logro de los objetivos mundiales. Las empresas consultadas por el Pacto Mundial de Naciones Unidas se encuentran estimuladas por la prospectiva de un conjunto de prioridades globales, recientemente articulado, y por el interés en los puntos de vista del sector privado, mostrado por los Estados Miembros y el Secretario General de Naciones Unidas. Este reporte contiene las perspectivas y recomendaciones empresariales en tres áreas: 1. Determinando la importancia de una agenda post-2015, incluyendo los objetivos y metas de desarrollo sostenible recomendados, categorizadas en torno a los siguientes temas: El pico de la pobreza: El fin de la pobreza extrema y el fuerte inicio de una extensa prosperidad para la mayoría de las personas del mundo, son ahora factibles. Las características de esta campaña deben ser: el crecimiento económico inclusivo y más equitativo, más y mejores trabajos, y el acceso al crédito y oportunidades de emprendimiento, especialmente entre los pobres. Necesidades y capacidades humanas: El avance y desafíos no alcanzados en las áreas centrales de los ODM, educación, salud y avance de la situación de las mujeres y niñas, necesitan continuar más allá del 2015, todas relacionadas de manera conjunta con la pobreza y su erradicación. La triada de recursos: La triada de recursos de agua y saneamiento, energía y clima, y agricultura y alimentación, reúnen los tres pilares de desarrollo sostenible. Cada uno cumple con necesidades humanas, tiene la capacidad de potenciar el crecimiento sostenible económico y está directamente relacionado con el cambio climático. Entorno favorable: La buena gobernanza y el respeto por los derechos humanos, los ajustes de paz y estabilidad, y una infraestructura digital y física más moderna y más verde, son factores favorables lo suficientemente importantes para ser elevados a los objetivos mundiales. 2. Perfilando el cómo comprometer a las empresas e inversionistas hacia los objetivos de desarrollo sostenible, incluyendo: Movimiento de sostenibilidad corporativa global, basado en principios universales y medidas de rendición de cuentas Compromisos corporativos responsable alineados con los objetivos de desarrollo global Plataformas de asuntos globales Iniciativas del sector industrial Mecanismos de implementación y redes que faciliten las alianzas y acciones colectivas Las redes de sostenibilidad dirigidas por empresas a nivel nacional Iniciativas sobre financiamiento privado 3. Recomendando las formas en que los gobiernos pueden promover mercados inclusivos y sostenibles, incluyendo la cooperación y el comercio multilateral, los incentivos de precios, la consecución y la transparencia, el financiamiento de mercados inclusivos, las empresas de propiedad estatal, y el fomento y apoyo a las prácticas empresariales responsables. I. INTRODUCCIÓN A medida que se acerca la fecha límite para los Objetivos de Desarrollo del Milenio 2015, los gobiernos y Naciones Unidas trabajan para establecer prioridades globales para el período post-2015. La era post-2015 presenta una oportunidad histórica para que la comunidad internacional de negocios contribuya con la consecución de la sostenibilidad global y de los objetivos de desarrollo. Siendo el Pacto Mundial de Naciones Unidas, la iniciativa de responsabilidad corporativa más grande del mundo, se le solicitó evaluar y reportar sobre las opiniones de los líderes empresariales en relación con las prioridades globales de sostenibilidad, y específicamente, sobre cómo pueden contribuir las empresas a la promoción y el logro de estos objetivos en un contexto post-2015. Después de una serie de consultas, encuestas y discusiones focalizadas globales, realizadas durante el último año, con miles de empresas e inversionistas, es evidente que las empresas comprometidas con la responsabilidad y la sostenibilidad se encuentran estimuladas por la prospectiva de un conjunto de prioridades globales, recientemente articulado– y el cual incluye objetivos y metas claras-, y por el interés en los puntos de vista y capacidades del sector privado, mostrado por los Estados Miembros y el Secretario General de Naciones Unidas. La agenda post-2015 de Naciones Unidas presenta la oportunidad de cambiar hacia un nuevo paradigma en el pensamiento del desarrollo, reconociendo plenamente el papel central de las empresas. Empresas y desarrollo Hoy en día, el crecimiento económico se deriva en gran medida de la actividad empresarial, con flujos financieros privados en movimiento por todo el mundo, ahora muy por encima de las ayudas o subvenciones oficiales. Las empresas han establecido el ritmo acelerando la productividad del esfuerzo humano, derrotando a la enfermedad, comunicando y calculando, y extrayendo más nutrientes del suelo, por ejemplo. Hoy, existen soluciones transformadoras por negocios con la capacidad de tener profundos impactos en áreas como la energía y el clima, el agua, la agricultura y la alimentación, la corrupción y la igualdad de género. La empresa se está moviendo también, cada vez más. en espacios de nueva oportunidad e innovadores que impulsan el éxito empresarial e inversionista, al tiempo que generan valor para la sociedad, como la ayudar a las personas para salir de la pobreza a través de la empresa social o el desarrollo de productos y procesos ecológicos. Las empresas cuentan con una motivación incorporada para ver el desarrollo exitoso. En pocas palabras, la empresa se desempeña mejor cuando el mundo está mejor, y está, literalmente en pérdida, en un entorno de enfermedades, conflictos, daño al medio ambiente, analfabetismo, abuso de los derechos humanos, prácticas arbitrarias del gobierno y empobrecimiento. Surgida en el siglo XXI, y reconocida implícitamente en la Declaración del Milenio del año 2000, es la convergencia histórica entre la incorporación de las dimensiones sociales y ambientales en los modelos empresariales y el pensamiento empresarial de los gobiernos sobre el desarrollo y las instituciones multilaterales. Las empresas comprometidas están tomando parte en la agenda global de desarrollo a través de sus modelos y prácticas empresariales, y más gobiernos promueven ya la sostenibilidad corporativa como una solución complementaria. La sostenibilidad corporativa - definida como la entrega de valor de una empresa en términos económicos, sociales, ambientales y éticos a largo plazo- se está convirtiendo en un concepto dominante a nivel mundial, incluyendo nuevas e inesperadas caminos, en las economías emergentes, en desarrollo y post-centralizada. Es desde estos países que el Pacto Mundial de Naciones Unidas, hoy llega a casi la mitad de sus participantes, y donde gran parte del crecimiento, en más de 100 Redes Locales de la iniciativa, está ocurriendo. Las empresas que integran la sostenibilidad en sus operaciones se encuentran en posiciones de fortalecimiento a largo plazo: oportunidades para la gestión de riesgos, nuevos mercados, e innovación de productos y servicios. La confianza y lealtad del consumidor se fortalecen. Las empresas también tienen responsabilidades. Son cada vez más conscientes de que necesitan ganar y mantener una licencia social para operar, así como una legal. Las empresas enfrentan crecientes expectativas de las partes interesadas para gestionar sus impactos sociales, incluidos los derechos humanos, los estándares laborales, el medio ambiente y la corrupción. La sostenibilidad corporativa, por lo tanto, implica tanto el respeto de los principios universales en estas áreas, así como el apoyo pro-activo a una agenda de sostenibilidad. Como reflejo del crecimiento de la sostenibilidad corporativa son la inversión responsable y los movimientos financieros sostenibles, por lo que un número creciente de inversionistas institucionales de largo plazo están adoptando principios de sostenibilidad -con los medios para liberar los billones de dólares de inversión que se requieren para la innovación, la infraestructura y la prestación de servicios para satisfacer las necesidades humanas. Las empresas y los Objetivos de Desarrollo del Milenio Para las empresas comprometidas tanto en el norte como en el sur, los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) han servido como un recurso útil para el establecimiento de sus propios principios, prioridades y objetivos. Incluso sin un rol de apoyo identificado en la Declaración del Milenio original o en los MDG blueprints, los negocios han tenido influencia en muchos de los éxitos principales de los ODM, incluyendo: la reducción de la pobreza extrema en la población mundial, la detención de enfermedades como el VIH / SIDA y la malaria; la conexión y empoderamiento de las personas en todo el mundo a través de la telefonía móvil y el aumento de las capacidades digitales, contribuyendo al surgimiento de África como una fuerza global competitiva con economías diversificadas, y la promoción de fuentes de energía modernas, como la energía solar y eólica. Como marco mundialmente reconocido, los ODM, también facilitan la acción colectiva de las empresas en temas como la gestión del agua y el empoderamiento de la mujer, así como el desarrollo de alianzas involucrando a los gobiernos y las organizaciones no gubernamentales (ONGs). Los ODM también han ayudado a las empresas en competencia, para actuar sobre intereses comunes, y a diversos actores como el gobierno, las ONGs y las empresas para hablar un lenguaje común. Un programa mundial de Naciones Unidas para el seguimiento de los logros y experiencias de los ODM es entonces visto como una oportunidad histórica. Las empresas tienen un papel central que desempeñar. Así como que los gobiernos trabajan hacia una agenda post-2015 que puede incluir metas y objetivos claros, el Pacto Mundial de la ONU insta a que la agenda se diseñe con la participación empresarial en mente – permitiendo la máxima alineación con las estrategias corporativas y las asociaciones de múltiples partes interesadas que puedan contribuir al logro de las prioridades globales de sostenibilidad, a niveles sin precedentes. Consultas con las empresas en la Agenda Post-2015 Las perspectivas sobre la agenda post-2015, presentadas en este reporte están basadas en una serie de consultas con las empresas: De enero a abril de 2013, las Redes Locales de los países, realizaron 43 consultas sobre la agenda post-2015 en las 5 regiones principales. Respondieron más de 500 participantes corporativos. Las consultas se llevaron a cabo en los siguientes países: o América: Brasil, Colombia, Paraguay o Asia/Australia: Australia, Bangladesh, China, India, Indonesia, Japón, Pakistán, Singapur, Corea del Sur, Sri Lanka, Vietnam o Europa: Bielorrusia, Bulgaria, Grecia, Alemania, Macedonia, Holanda, la Red Nórdica, España, Suiza, Turquía, Reino Unido o Medio Oriente/África del Norte: Egipto, Estados del Golfo, Iraq, Siria o África Subsahariana: Kenia, Uganda, Zambia Una serie de discusiones muy concretas dentro del Global Compact LEAD – la plataforma de liderazgo del Pacto Mundial de la ONU integrado por 56 corporaciones multinacionales altamente comprometidas e involucradas– se han realizado desde la Cumbre Río+20 de 2012 y el Foro de Sostenibilidad Corporativa organizado por el Pacto Mundial organizado por la ONU. En marzo de 2013, las empresas participantes en las plataformas temáticas del Pacto Mundial de la ONU sobre agua y corrupción dedicaron sus reuniones anuales a la discusión de su relación con la agenda post-2015. Más de 250 participantes asistieron a las reuniones. Además, se realizaron dos webinars con los firmantes de los Principios para la Inversión Responsable apoyados por la ONU. El reporte también contiene las opiniones de 1,712 empresas, de más de 100 países en la más reciente Encuesta Anual de Implementación del Pacto Mundial de Naciones Unidas, realizada de noviembre a diciembre de 2012. II. DETERMINANDO LA IMPORTANCIA DE UNA AGENDA POST-2015 Miles de empresas participantes del Pacto Mundial de la ONU fueron encuestadas y consultadas sobre las prioridades mundiales de desarrollo que consideran fundamentales para cualquier agenda de desarrollo futura – la cual se basa en los ODM y el sistema de los ODM. Una muy amplia conclusión es que, por sus éxitos destacados, los ODM minimizan los factores económicos que impulsan los esfuerzos en el logro del bienestar social, mientras subsumen un conjunto importante de desafíos ambientales y de necesidades humanas bajo el objetivo ODM 7. Una agenda post-2015, por lo tanto, debe terminar el trabajo de los ODM en las áreas sociales prioritarias de la salud, el empoderamiento de las mujeres y la educación, mientras se amplían los objetivos ambientales y se dispone un nuevo énfasis para un entorno favorable. A continuación se muestra una visualización de las recomendaciones de las empresas sobre la priorización temática, organizada en cuatro áreas generales: el pico de la pobreza, necesidades y capacidades humanas, la triada de recursos; entorno favorable. En la punta está la visión general de alejarse de la pobreza y hacia un nivel de prosperidad global. El siguiente nivel se dirige a los factores sociales y de necesidades humanas que también están estrechamente relacionados con la pobreza y su erradicación. Los cuatro juntos incorporan el corazón del programa actual de los ODM. La tríada de recursos se expande sobre el ODM 7, que incluye las áreas de recursos que están altamente conectadas, satisfacen las necesidades humanas primarias -y todas están integralmente vinculadas a las causas y efectos del cambio climático. En la base de la pirámide, los temas incluyen una gama más amplia de factores favorables que establecen las bases para la acción exitosa en los niveles superiores; por el contrario, sin una base sólida, toda la estructura se derrumbará. A. El pico de la pobreza El punto de partida de una nueva agenda de desarrollo debe ser una continuación de la idea principal de la dirección de los ODM, y uno de sus logros principales: un ataque concentrado en la pobreza. La condición de pobreza se superpone con otras necesidades sociales y su existencia en forma extrema es una afrenta a la dignidad humana. Sobre el aspecto económico, la pobreza representa un obstáculo importante a los beneficios que los mercados y la iniciativa empresarial pueden ofrecer. El esfuerzo dependerá de un crecimiento económico basado en la equidad y la inclusión. Este imperativo económico es también uno que está siendo adoptado y actuado por los Países Menos Adelantados (PMA) y la Unión Africana, donde están dando prioridad a una mayor inversión, a la mejora de las capacidades humanas, a más y mejor infraestructura y a la movilización de ayuda para el desarrollo, para el desarrollo del sector privado. En el centro del crecimiento inclusivo está la creación de más empleos, pero de calidad y respetando las normas internacionales del trabajo -teniendo en cuenta que el 20% de las personas empleadas en el mundo viven en un nivel por debajo de 1.25 dólares al día. Es necesaria la protección social para los desempleados y la formación de habilidades que llegue a las mujeres y a los grupos vulnerables o marginados. La nueva agenda también debe abordar las oportunidades para el emprendimiento, especialmente para mujeres y jóvenes. La reducción de las barreras para establecer o formalizar una empresa es un primer paso. La situación de medio billón de pequeños agricultores en el mundo –cerca de la mitad siendo mujeres- debe ser considerada como parte de este proceso. También se requiere abordar las oportunidades para la mayoría de los trabajadores en muchos de los países pobres y en desarrollo, quienes están involucrados con el sector informal. El avance de las microfinanzas necesita continuar con una gama más amplia de instrumentos en niveles de mini y medio. Las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) en África, por ejemplo, identifican la falta de financiamiento como una desventaja primaria. Una intermediación financiera amplia también puede ser un medio estratégico para incluir a las mujeres y grupos marginados. El sello distintivo de la agenda post-2015 sobre la pobreza no es sólo la identificación de la necesidad, sino de los medios explícitos para reforzar la capacidad social y construir fuerza entre los pobres. Un factor crucial pero frecuentemente pasado por alto es el indicador de los ODM relacionados con la productividad del trabajo. Con niveles de productividad del mundo en desarrollo, de sólo una quinta parte de la de los países desarrollados, ésta debe ser una prioridad para aumentar significativamente la productividad en estas naciones para alcanzar mejores niveles de vida y un desarrollo económico que, a su vez, puede ofrecer al mundo desarrollado, la expansión de mercado que tanto necesita. Un gran aumento de la productividad, si sucede, dependerá de los éxitos en otras áreas de la agenda post-2015 - la plena integración de la mujer en la fuerza de trabajo y posiciones de liderazgo, trabajadores más sanos y mejor educados; una ciudadanía confiada en el respeto de sus derechos, una mayor propagación de la revolución digital y una infraestructura más fuerte y más verde, un buen gobierno y la abolición de los costos de transacción adicionales impuestos por la corrupción, una relación de apoyo entre economía y medio ambiente, y la paz y la estabilidad. La prospectiva es de un mundo que predica no sólo de la ausencia de las formas más extremas de pobreza, sino de una norma general de prosperidad generalizada. B. Necesidades y capacidades humanas El apoyo para satisfacer las necesidades humanas y construir capacidades sigue contando con un amplio apoyo público y político. Tres áreas que han ocupado un lugar destacado en la campaña de los ODM y serán fundamentales para cumplir con una agenda post-2015 son: la educación, la salud y los avances en la situación de las mujeres y las niñas. i) Educación Los líderes empresariales están convencidos de que la agenda post-2015 requiere abordar firmemente la educación. Es un camino hacia empleos mejor remunerados y más productivos, sin los cuales una economía no puede crecer y la gente no prospera. Mientras continúa el impulso para extender la escolarización primaria, se debe dar atención en los resultados -no se trata únicamente de llevar a los niños a un edificio de una habitación, sino proporcionar profesores, planes de estudio y materiales incluyendo, de ser posible, computadoras y acceso a Internet –prepararlos para su futuro como ciudadanos, trabajadores y empresarios. Como parte de la preparación para el futuro, el desarrollo sostenible también se debe incorporar en los programas de todos los niveles. Además de ser la principal prioridad de desarrollo más urgente, en la Encuesta Anual de Implementación del Pacto Mundial de Naciones Unidas 2012, la educación es también un área en la que los empresarios sienten que pueden hacer la diferencia. Desde la perspectiva empresarial, el aprendizaje se lleva a cabo a nivel del lugar de trabajo y de gestión, así como en las instituciones educativas. Además, existe la posibilidad de una mejor coordinación entre los empleadores y la educación, por lo que los egresados están preparados para ocupar empleos, con una recompensa en tasas más bajas de desempleo y una mayor productividad. ii) Empoderamiento de la mujer e igualdad de género El empoderamiento de mujeres y niñas es uno de los principales motores del desarrollo. La incorporación plena de las capacidades de las mujeres en las fuerzas laborales sumaría puntos porcentuales a la mayoría de las tasas de crecimiento nacionales -dos dígitos en algunos casos. La igualdad de género, un derecho humano básico, produce el dividendo doble de beneficiar a las mujeres y los niños, y ser un pivote para la salud y el desarrollo social de familias, comunidades y naciones. La promoción del conocimiento, la educación y la construcción de habilidades para mujeres y niñas debe ser una parte clave de la agenda post-2015, junto con el soporte para las mujeres emprendedoras y las empresas-propiedad de mujeres. Se requiere hacer énfasis en el derecho al acceso y la propiedad de activos productivos. Las perspectivas de empleo para las mujeres fuera del sector doméstico o informal requieren ser mejoradas. Un área clave que se debe abordar, junto con el empoderamiento y la educación, es la discriminación en la contratación y el pago. Las Redes Locales del Pacto Mundial en países en los que los roles de género sean estrechos o restringidos muestran que el lugar de trabajo puede ser un medio de liberación para muchas mujeres. Es un lugar donde se confía en sus capacidades y se pueden utilizar -ayudando a impugnar estereotipos. Un obstáculo importante para el empoderamiento y el bienestar es la violencia contra mujeres y niñas. Esta práctica, y las actitudes que aceptan este tipo de violencia, pueden combatirse dentro y fuera del lugar de trabajo. iii) Salud La salud es uno de los principales determinante del éxito y la productividad de la fuerza de trabajo, y una industria importante en sí misma, incluidas las empresas farmacéuticas, de servicios, las clínicas y las asociaciones profesionales. Las empresas de cuidados médicos y farmacéuticas multinacionales, en acción con otras instituciones y grupos de interés, se encuentran en posición para avanzar en la integración de la investigación, facilidades para la producción, mayores instituciones de salud y consultorios locales -ayudando a responder a los desafíos mundiales. Las empresas están involucradas comercialmente y a través de asociaciones de Naciones Unidas, con la prestación de servicios básicos de salud y micronutrientes para madres y niños en los primeros mil días de vida (desde la concepción hasta el segundo cumpleaños) – un determinante crucial para el bienestar personal y social en futuros años. Las discusiones de las empresas participantes en el grupo del Global Compact LEAD apuntan hacia una orientación organizada en torno a un sistema global, bien fundamentado y ágil, que pueda responder a las necesidades que surgen, guiados por una ética centrada en la persona. Construido sobre el éxito de los ODM para abordar los desafíos claves de salud, la agenda post-2015 debe hacer frente a un conjunto más amplio de las enfermedades transmisibles y no transmisibles. C. La triada de recursos Los líderes empresariales reconocen que la agenda de la sostenibilidad requiere tener aspiraciones globales como el cambio climático, el clima volátil, las crisis relacionadas con la disponibilidad de agua y alimentos, y la limitación de los recursos minerales y la biodiversidad, todos tienen implicaciones planetarias. Tres áreas que vienen a un primer plano en las discusiones empresariales son el agua/saneamiento, energía y agricultura/alimentación. Cada uno trata una necesidad primaria humana, proporciona recursos esenciales para las economías, especialmente en el mundo en desarrollo, y se superpone con los otros en términos de gestión y de impacto. Todos están íntegramente vinculados a las causas y efectos del cambio climático. Estas tres áreas están interconectadas, una aproximación "de nexo" será necesaria, además de un trato a cada tema de forma independiente. i) Agricultura y alimentación Una línea directa para erradicar la pobreza en todo el mundo es la mejora de la agricultura y la situación de los pequeños agricultores. Los agronegocios tienen un papel importante que desempeñar en la renovación de los sistemas agrícolas y prácticas de gestión agrícola, aumentando los rendimientos y promoviendo el desarrollo rural. La mejora del sector agrícola es altamente susceptible a la tecnología, la inversión y la mejora de la infraestructura pública. Las empresas se están involucrando en los sistemas de alimentación que se extienden desde la producción hasta la distribución y el consumo. Muchas agroindustrias y cadenas de tiendas están integrando a los pequeños agricultores, incluidas las mujeres y los grupos marginados, en estas cadenas de alimentos, ayudándoles a conectarse con los mercados. La brecha que a veces existe entre las multinacionales alimenticias y las empresas agrícolas y los agricultores locales en los países en desarrollo también debe ser abordada. Tales esfuerzos pueden dar rienda suelta a una mayor productividad y construir una fuerte base agrícola, así como a promover la justicia social. En un nivel fundamental, las empresas que procesan, distribuyen y venden productos alimenticios están encargadas de no hacer daño al garantizar la seguridad de sus productos. Cada vez más, se enfrentan al reto de mejorar el valor nutricional y ayudar a los consumidores de todo el mundo a evitar problemas asociados a la obesidad, diabetes y enfermedades crónicas. Los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos de la ONU asignan la responsabilidad de identificar y abordar la forma en la que las actividades, tales como el uso del suelo, la contaminación y el tratamiento del agua, impactan a las comunidades, incluidos los derechos a la alimentación y a la salud. En lo que respecta al medio ambiente, hay un gran potencial de crecimiento para el aumento en escala y la mejora de la tecnología para reducir el impacto ambiental de la agricultura. Por ejemplo, el riego por goteo mejora los rendimientos, conserva el agua y ayuda en la adaptación a los retos del cambio climático. Un mejor transporte y técnicas de almacenamiento e infraestructura, reducirán el desperdicio de alimentos frescos. La eficiencia y gestión sostenible de recursos naturales también necesitan extenderse a la actividad forestal y a la protección contra la deforestación, los océanos y la pesca, y otras reservas del ecosistema. ii) Agua y saneamiento Mientras que la meta de los ODM sobre el acceso al agua se ha cumplido antes de lo previsto, a menos que se tomen medidas adicionales, se prevé que dos tercios de la humanidad vivirán en regiones con escasez de agua o estrés hídrico para 2030 –debido a factores como el crecimiento demográfico, la urbanización y el cambio climático. Además, poco más de la mitad de la población mundial en desarrollo tuvo acceso individual a instalaciones mejoradas de saneamiento a partir de 2010. El desperdicio tratado en aguas subterráneas, compromete el suministro de agua, trayendo enfermedades y tierras de cultivo contaminadas. A nivel mundial, la capacidad de mantener el suministro adecuado para la agricultura, la industria, y las ciudades y los asentamientos humanos, está en riesgo junto con la vida natural que habita en arroyos, ríos, humedales y lagos. Como el mayor usuario de agua, el primer imperativo para la industria y la agricultura es detener las prácticas destructivas, tales como no tratar las descargas de agua o el uso excesivo para consumo en la fabricación o en las prácticas agrícolas. La adopción del nuevo concepto holístico de la gestión corporativa del agua será, entonces, fundamental en la nueva era. En las zonas donde las personas no están conectadas a la infraestructura del sistema de agua, esta necesidad de vida se convierte en un costo fijo, tal como los alimentos y la energía. Las industrias de servicios públicos y las asociaciones público-privadas han ampliado la distribución de agua, pero se necesita un mayor progreso para satisfacer la demanda y erradicar la alternativa de las mujeres y niños que llevan el agua de fuentes lejanas. Junto con viajes a las instalaciones sanitarias primitivas, estas prácticas reducen las posibilidades de una educación o trabajo, y son peligrosos para la integridad física. iii) Energía y clima La comprensión de los factores de riesgo por las cantidades finitas de recursos energéticos tradicionales y el cambio climático, la energía limpia conseguida a través de medidas de eficiencia y nuevas fuentes, deben ser parte de un mundo post-2015. Los combustibles fósiles actualmente son tomados en cuenta para la gran mayoría de la mezcla de energía primaria en el mundo. Las fuentes basadas en carbono no sólo son finitas, sino que también contribuyen con la mayoría de los aumentos anuales en las emisiones globales de carbono, que es un importante motor de cambio climático. El desafío de encontrar nuevas fuentes como reemplazo se suma a la necesidad de tener fuentes de energía asequibles para los 1.3 billones de personas que carecen de acceso a esta necesidad de la vida moderna, así como para la industria del mundo en desarrollo. El acceso a la energía moderna es esencial para el suministro de agua potable, el saneamiento y la atención sanitaria, la iluminación confiable y eficiente, la calefacción, la cocina, la industria, el transporte y las telecomunicaciones. Las preocupaciones de que el logro de acceso a la energía moderna para todos, podría ampliar excesivamente los desafíos de la seguridad energética o el cambio climático, no están bien fundadas. Ya que la participación de los pobres en el consumo mundial existe en un grado tan limitado, el acceso a la energía para todos sólo afectaría la demanda global de energía en un estimado de 1%en 2030, y las emisiones de CO2 en un 0.6 por ciento. A pesar de que se hacen esfuerzos para extender las redes de energía tradicionales a los que están desconectados, la innovación empresarial está dando lugar a soluciones alternativas. Así como la capacidad tecnológica y el bajo costo de la telefonía móvil se aceleró donde la gente estaba esperando teléfonos fijos, también se han desarrollado nuevas formas de fuentes de energía locales independientes, y se han comercializado utilizando los elementos del sol, el agua, el viento y el calor de la superficie del planeta. Como parte de la agenda de desarrollo post-2015, estos esfuerzos deben ser apoyados y elevados. D. Entorno favorable Las empresas pueden llevar a cabo sus funciones y contribuir a la sociedad de mejor manera, en condiciones favorables las cuales incluyen que incluyen un campo de nivel de juego, el estado de derecho, la infraestructura confiable y un entorno social y político estable. Además, los ambientes que apoyan las prácticas empresariales responsables y sostenibles son esenciales. Las empresas pueden ayudar en la creación de un entorno apropiado y favorable para la sostenibilidad, sin embargo, una clara distinción se debe mantener entre las capacidades y responsabilidades de los sectores público y privado. i) Paz y estabilidad Los países con problemas económicos y sociales graves tienden a ser aquellos que están cayendo en, están inmersos en, o saliendo de una guerra o un conflicto grave. Los gobiernos y la comunidad internacional tienen la responsabilidad primaria en el área de paz y estabilidad, sin embargo, las empresas también tiene un papel fundamental que desempeñar. Las decisiones de una empresa sobre inversión y empleo, las relaciones con las comunidades locales, la protección para los entornos locales, y los dispositivos de seguridad pueden ayudar a un país a superar conflictos o a exacerbar las tensiones que alimentan la violencia en primer lugar. Las empresas pueden desempeñar un papel de apoyo a través de prácticas responsables que reúnen y tratan a las personas de igual manera, independientemente de su credo religioso y étnico, o ya sea como empleados, consumidores, clientes o proveedores. Las empresas también están llamadas a cumplir con las normas y convenciones pertinentes que protegen la seguridad civil, así como las relativas a la delincuencia organizada transnacional y las transferencias de dinero ilícito. Es esencial para las empresas llevar a cabo la debida diligencia para identificar y abordar los efectos negativos que sus operaciones puedan tener en materia de derechos humanos. ii) Infraestructura y tecnología La infraestructura mundial de computadoras, sistemas digitales y de Internet que se ha puesto en funcionamiento está multiplicando la productividad y juegan un papel central en las economías. Las innovaciones como la telefonía móvil inteligente están abriendo caminos para salir de la pobreza, y la conectividad generalizada está acelerando nuevas formas de organización colaborativa, de abajo hacia arriba. En los próximos 15 años, estas innovaciones deben ser desplegadas para alcanzar y beneficiar a todos. La infraestructura en transporte, instalaciones de energía y las redes de energía y agua, por el contrario, han sido desplazadas de las prioridades de muchos presupuestos en los últimos años. Éstos son fundamentales para las naciones pobres en cuanto a la construcción de capacidad productiva, así como para los países altamente desarrollados frenados por la infraestructura que se realiza y no se construye con especificaciones "verdes". El potencial de crecimiento en infraestructura digital y física es enorme, y las empresas confiarán en ambas áreas. La escala de la infraestructura física que tendrá que ser construida o reemplazada en las próximas décadas es asombrosa. Se necesitan empresas e instituciones de inversión para diseñar tecnologías verdes, facilitar las asociaciones público-privadas y movilizar financiamiento a largo plazo dirigido a los criterios de sostenibilidad. iii) Buen gobierno y derechos humanos Desde el punto de vista empresarial, los requisitos de gobernabilidad incluyen el estado de derecho, un ambiente político propicio para el desarrollo económico, la regulación inteligente con un mínimo de burocracia, y la transparencia. El respeto de los derechos humanos figura entre estas cualidades. Mientras se mantiene la igualdad de condiciones para las empresas, los gobiernos también pueden elevar el nivel del campo, mediante el mantenimiento de las normas ecuánimes que sancionan la acción corrosiva social de las empresas y recompensa la sostenibilidad corporativa basada en principios universales. El soborno y la corrupción ejercen un efecto corrosivo en la sociedad, ponen a las clases media y pobre en una situación de desventaja e imponen costos de transacción adicionales que agotan la competitividad y la productividad. Debido a la mecánica de la corrupción, el único enfoque viable es el involucramiento de las empresas en números con las agencias estatales y los organismos de control de la sociedad civil, en pactos colectivos para minimizar o eliminar su práctica, al tiempo de mejorar la transparencia empresarial y del gobierno. Dado todo lo que está en juego, la lucha contra la corrupción debe ser un componente central de la agenda post-2015. La transparencia en todas las ofertas y transacciones de contratación pública debe ser una condición subyacente. III. HACIA EL ESTABLECIMIENTO DE OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE GLOBALES Como parte de una serie continua de debates sobre las perspectivas de una agenda de desarrollo de Naciones Unidas post-2015, los representantes de las 56 empresas Global Compact LEAD han propuesto una serie de objetivos en todo el mundo para extender y ampliar los ODM. Este interés se originó en una reunión plenaria de más de 3.000 líderes empresariales en el Foro de Sostenibilidad Corporativa en junio de 2012 en Río de Janeiro, que decidió por abrumadora mayoría, a favor de contribuir al diseño e implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible propuestas citadas en el resultado de la conferencia intergubernamental Rio +20, El futuro que queremos. Un conjunto de objetivos de desarrollo sostenible es visto como una ayuda para las empresas a fin de alinear sus estrategias y mejorar la colaboración entre las mismas y con otros sectores. Negocios encuestados destacan que el establecimiento de objetivos dinámicos no es una razón para el cambio de los principios subyacentes. Existe una relación sinérgica entre los dos. Los diez principios del Pacto Mundial en materia de derechos humanos, estándares laborales, medio ambiente y anticorrupción establecen estándares mínimos que las empresas están llamadas a respetar. Estos mismos principios proporcionan la motivación y la base para avanzar en los objetivos de desarrollo sostenible. Dado el fuerte apoyo a la idea de los objetivos de desarrollo sostenible que surgen de las consultas entre las empresas, un equipo de trabajo del Global Compact LEAD ideó un prototipo para los objetivos y metas post2015, que se presentan en las dos páginas siguientes. Como guía, el equipo de trabajo del Global Compact LEAD desarrolló criterios para la fijación de objetivos y metas: o Enfoque global, y no predeterminar una dualidad Norte-Sur; o Tener en cuenta las diferencias en el nivel de desarrollo de los diferentes países o regiones, lo cual le permite ser alcanzable, y provee ambición; o Limitados en el número; o Claros en tema y concepto; o Elegidos en consideración tanto del valor intrínseco y del efecto multiplicador; o Equilibrados en cuanto a los pilares sociales, económicos y ambientales del desarrollo sostenible; o Objetivos "SMART": específicos, medibles, alcanzables, realistas y de duración determinada. Si no se indican en términos cuantitativos, los objetivos requieren ser susceptibles de medición en su progreso a través de indicadores estadísticos, y o Objetivos establecidos para un período de 15 años a partir de 2015, con puntos de verificación cada cinco años, y como punto de referencia para 2010. Objetivo 1: Erradicación de la pobreza e incrementar la prosperidad, vía el crecimiento económico inlcusivo, las metas objetivos incluyen: Eliminación de la pobreza extrema (1.25 dólares al día por habitante, en dólares reales del 2005). Creación de empleos a través del trabajo decente suficiente para mantener el desempleo por debajo del 5%, en particular las mujeres como grupo, y por debajo del 10% para los jóvenes. Eliminación del trabajo infantil. Garantía del pleno acceso al financiamiento privado, incluyendo ahorros básicos, préstamos y productos de capital de crecimiento, en condiciones equitativas términos incluyendo a las mujeres y los grupos marginados. Reducción en 30% el coeficiente de Gini de cada país. Objetivo 2: Educación de calidad para todos, las metas son: Cada niño termina la educación primaria con alfabetización y la aritmética básicas, en escuelas con divisiones de grado, libros, luz, alimentación y saneamiento. Todas las escuelas secundarias facilitan las habilidades en computación, y un 50% de disponibilidad de servicios digitales entre escuelas primarias sin ellas. Incremento del porcentaje de adultos jóvenes con habilidades necesarias para trabajar. Logro de la paridad en la matrícula y oportunidades educativas de los niveles primario, secundario y terciario, para las niñas y las mujeres. Los planes de estudio de la enseñanza primaria y demás niveles incluyen conceptos de desarrollo sostenible, especialmente las escuelas de negocios. Objetivo 3: Logro del empoderamiento de mujeres y niñas, las metas incluyen: Aumento de la proporción de puestos de liderazgo ocupados por mujeres en los sectores público y privado, al 40% o más. Igualdad en la remuneración por el mismo trabajo, universalmente reconocida y ejecutada. Acceso pleno e igualitario de la mujer a la propiedad, la propiedad derechos y títulos de propiedad. Reducción de los índices de actos violentos cometidos contra las mujeres y las niñas en por lo menos el 50%. Objetivo 4: Cobertura sanitaria universal, las metas son: Acceso asequible a tratamientos de la calidad (que cumpla con las necesidades del paciente) y atención para todos, o al 80% donde dicho acceso era menos de la mitad en 2010. Seguimiento a la reducción del alcance de la tuberculosis, la malaria y el VIH/SIDA, y contener la propagación de nuevas cepas farmacorresistentes. Fin al aumento de las enfermedades no transmisibles. Servicios de salud reproductiva universales, incluidos los el acceso a métodos anticonceptivos y atención calificada para el nacimiento. Reducción de la tasa de mortalidad materna por lo menos en ¾. Reducción la tasa de mortalidad de menores de cinco años por lo menos ⅔. Objetivo 5: Buena nutrición para todos a través de sistemas de alimentación y agricultura sostenibles, las metas incluyen: Erradicación del hambre de calorías deficientes y el alto incremento de las tasas de obesidad y de desnutrición. Eliminación del retraso del crecimiento de los niños menores de dos años de edad a través de micro-nutrientes adecuados. Duplicar la productividad de la agricultura de los países menos adelantados. Detención y reversión a los aumentos anuales de emisiones de gases invernadero y la deforestación resultante de la agricultura y la ganadería, para el año 2020. Reducción del porcentaje de peces marinos sobreexplotados en un 20%. Reducción de la cantidad de alimentos perdidos por mal almacenamiento y de desperdicios en ⅓. Objetivo 6: Agua y saneamiento para todos, las metas son: Acceso universal al agua potable asequible. Acceso universal a servicios básicos de saneamiento para el año 2020 y mejora del servicio de saneamiento para el año 2030. Uso de agua fresca para en consonancia con la oferta. Garantizar el pleno establecimiento y aplicación de normas nacionales de efluentes hídricos. Objetivo 7: Energía sostenible para todos, los objetivos son: Acceso universal a servicios energéticos modernos. Duplicar la tasa global de mejora en la eficiencia de la producción, distribución y el consumo de energía. Duplicar la participación de las fuentes renovables de la mezcla energética. Reducir en al menos el 50% la concentración se partículas en el aire de las ciudades, no excluir logro de los objetivos regionales más estrictos. Objetivo 8: Construcción de sociedades pacíficas y estables, las metas incluyen: Mejorar el acceso a la justicia, los servicios y las oportunidades económicas, por parte de los diversos grupos étnicos, religiosos y grupos sociales. Mejorar los mecanismos de mediación, resolución de conflictos y diálogo para prevenir y resolver los conflictos, y construir la paz Reducir la incidencia de muertes violentas por cada 100,000 en al menos 20%. Prevenir, combatir y reducir el comercio ilícito de armas pequeñas, armas ligeras y municiones. Reducir el alcance y la magnitud de la delincuencia organizada, especialmente a través de las disposiciones de la Convención contra la Delincuencia Organizada Transnacional de Naciones Unidas. Objetivo 9: Modernización de la infraestructura y la tecnología, las metas incluyen: Implementación de inversión suficiente para cumplir con los requisitos de sistemas de transporte, energía y agua "verdes" en la mundo en desarrollo, y para actualizar o sustituir infraestructura antigua en el mundo desarrollado. Acceso universal y asequible a Internet y a tecnología informática. Uso eficaz del e-gobierno a nivel nacional y provincial del Estado en todos los países, para incrementar capacidad de gestión y de transparencia. Duplicar la proporción de la población con acceso asequible y fácil a los sistemas de transporte público. Aumento de la I + D en los sectores público y privado. Reducción de las emisiones de carbono procedentes de la construcción y operación de edificios. Objetivo 10: Buen gobierno y realización de los derechos humanos, las metas son: Aumento de la conciencia y la aplicación de todas las convenciones e instrumentos de derechos los humanos de la ONU entre todas las personas y en todos los niveles de gobierno. Logro de procesos de adquisición competitiva y transparente a través de la publicación de todo los casos de adquisiciones del gobierno. Desarrollo de un sistema de comercio internacional y financiero aún más abierto, basado en normas y no discriminatorio. Establecimiento de un clima de apoyo a las empresas y la inversión en el país y el extranjero, incluyendo incentivos en favor de la sostenibilidad. IV. INVOLUCRANDO A LOS NEGOCIOS PARA ALCANZAR LOS OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE. La entrega de un futuro mejor para de todos requiere la acción de todos -gobiernos, empresas, ciudadanos, consumidores, trabajadores, inversores y educadores. Sin lugar a dudas, el sector privado tiene un papel central que desempeñar. Como principal fuente mundial de la actividad económica, el negocio está en el corazón de prácticamente cualquier mejora generalizada en los niveles de vida. Sin embargo, esto no va a pasar a través de los negocios de siempre. La inversión y la actividad de negocios requiere ser sostenible -la entrega de valor no sólo económicamente, sino también en términos sociales, ambientales y éticos. Una dinámica prometedora está surgiendo conforme más y más empresas en todo el mundo están haciendo de la sostenibilidad una parte integral de las estrategias de negocio y operaciones - ya no viéndolo sólo como una actividad filantrópica o de marketing. Los líderes empresariales entienden cada vez más la forma en la que la sostenibilidad afecta al inicio y están buscando más allá del negocio tradicional y los factores financieros. Los disturbios del mercado y civiles, las privaciones sociales o la destrucción ecológica que ocurren cerca o lejos, pueden tener impactos significativos a través de la cadena de valor, los flujos de capital, la opinión pública o la productividad de los empleados. Las oportunidades para desarrollar nuevos productos, servicios y modelos de negocio que ayuden a resolver los desafíos globales también son claros - especialmente aquellos relacionados con el crecimiento verde y los esfuerzos en la "base de la pirámide". Como resultado, existe un enorme potencial para el sector privado para contribuir con el avance del desarrollo sostenible a gran escala, en línea con la agenda post-2015. Hay dos maneras fundamentales por los que las empresas contribuyen al desarrollo sostenible. Una de ellas es mediante la defensa del respeto a los principios universales de sostenibilidad en sus operaciones, por lo que se aseguran de no hacer daño. La otra es a través de la adopción de medidas de apoyo a los avances en materia de desarrollo sostenible, tales como nuevos productos, servicios y modelos de negocio. En cuanto al principio de "no hacer daño", muchas violaciones aún se producen a diario en todo el mundo y hay un largo camino por recorrer. El Pacto Mundial de la ONU sostiene que el cumplimiento de la regulación legal y financiera y de los principios universales en las áreas de derechos humanos, estándares laborales, medio ambiente y anticorrupción es el fundamento de la responsabilidad corporativa. El progreso significativo está en marcha, con más de 7,500 empresas explícitamente comprometidas con los principios de Naciones Unidas a través del Pacto Mundial. Las empresas en posiciones de liderazgo, sin embargo, entienden que sus números son limitados y que la sostenibilidad corporativa requiere permear el mundo corporativo de manera más amplia y profunda para que las empresas se den cuenta de su gran potencial para contribuir al desarrollo sostenible. Los inversionistas también tienen un papel crítico que desempeñar en lo que respecta al avance de los principios de inversión responsable y las finanzas sostenibles - los cuales pueden representar la contribución del sector financiero al desarrollo sostenible global. El aprovechamiento global del negocio como una fuerza para el desarrollo sostenible representa una de las mayores oportunidades en la era posterior a 2015 - y una necesidad para un nuevo conjunto de objetivos de desarrollo a implementar. Este esfuerzo requerirá un marco de involucramiento robusto del sector empresarial que pueda ampliar la participación de las empresas, profundizar los compromisos sobre cuestiones centrales, actualizar las asociaciones y la acción colectiva, fortalecer la capacidad para apoyar la aplicación de negocios a nivel nacional y local, y aprovechar el potencial del financiamiento e inversión privada. Sobre la base de más de diez años de experiencia en la movilización de negocios a nivel mundial en torno a los valores y principios de Naciones Unidas - y sobre la base de las experiencias de otras iniciativas de sostenibilidad corporativa y redes ya existentes - el Pacto Mundial de Naciones Unidas recomienda las siguientes áreas que pueden involucrar más efectivamente al negocio hacia la agenda de desarrollo post-2015: 1. Movimiento de sostenibilidad corporativa global, basada en principios universales y medidas de rendición de cuentas La sostenibilidad corporativa es un movimiento en rápido crecimiento. Los miles de ejecutivos que participan en el Pacto Mundial de Naciones Unidas cada año renuevan su compromiso. Sumando un millar de nuevas empresas cada año, un punto de inflexión está a la vista -con el potencial para transformar los mercados desde dentro y hacer la producción, el consumo y la asignación de capital más incluyente y sostenible. Pero el ritmo debe ser alcanzado. Las iniciativas de sostenibilidad corporativa globales y locales necesitan apoyo en sus esfuerzos para movilizar a más empresas y orquestar soluciones de negocio. Para las organizaciones involucradas, es necesario dar mayor prioridad para mejorar la coordinación y la colaboración, y para asegurar la alineación en torno a un conjunto de principios básicos para la participación del sector empresarial. La intervención del sector empresarial tiene que basarse en principios universalmente reconocidos, como los del Pacto Mundial de Naciones Unidas. No debe haber compensaciones; la acción constructiva en un tema no compensa la acción perjudicial en otro. Las empresas requieren, sobre todo, rendir cuentas a las partes interesadas para tomar medidas de sostenibilidad corporativa. Lo anterior se organiza mejor a través de la divulgación anual guiada por iniciativas de informes de sostenibilidad y estándares sólidos, incluyendo el marco proporcionado por la Global Reporting Initiative (GRI). 2. Compromisos corporativos Responsables alineados con los objetivos de desarrollo globales El establecimiento de una agenda post-2015 con un conjunto de objetivos de desarrollo sostenible sería una oportunidad única para incrementar significativamente la población mundial de empresas que establezcan sus propios objetivos específicos, cuantitativos y de duración determinada alineados con uno o más de dichos objetivos. En la actualidad, mientras que las empresas utilizan la fijación de objetivos como una herramienta eficaz para impulsar la motivación y el rendimiento en áreas como la producción y las ventas, sólo una minoría de las empresas más comprometidas y avanzadas aplica la misma práctica a los compromisos de sostenibilidad. Este establecimiento de objetivos le ayudará a traducir la aplicación de los objetivos de desarrollo sostenible en prioridades del negocio a largo plazo, sujeto a la aprobación de la gerencia y supervisión. Esto, a su vez, allana el camino para la integración de los objetivos en las evaluaciones de desempeño y en la remuneración basada en el desempeño para los ejecutivos y empleados. Para fomentar la participación, las estructuras deben estar en su lugar para proporcionar visibilidad y reconocimiento a las empresas que hacen compromisos con dichos objetivos. Basándose en el modelo utilizado con éxito para el Foro de Sostenibilidad Corporativa Rio+20, una serie de organizaciones puede ayudar a movilizar y validar los compromisos corporativos. Una única plataforma web global, anclada a Naciones Unidas, sería la sede ideal de una base de datos de todos los compromisos. Dos elementos deben estar en su lugar. Un marco de medición global para ayudar a las empresas a determinar objetivos mensurables e identificar indicadores de desempeño. Y un requisito para que las empresas listadas en la plataforma de Naciones Unidas actualicen a sus grupos de interés sobre los progresos relacionados con su compromiso. Más allá del impacto inmediato en la medición y la rendición de cuentas, estos elementos podrían facilitar el seguimiento de los progresos realizados por las empresas en general y permitir la evaluación dentro de industrias y sectores individuales. 3. Plataformas temáticas globales Una de las tendencias más importantes y prometedoras ha sido el desarrollo de plataformas globales orientadas a negocios e iniciativas alineadas con desafíos específicos de sostenibilidad. El impulso detrás de la creación y la difusión de plataformas temáticas es la constatación de que una organización empresarial que actúa unilateralmente sólo puede producir efectos positivos -en un desafío global determinado- tan relevantes como sean estos esfuerzos individuales. Este fenómeno refleja el arco evolutivo del movimiento moderno de la sostenibilidad corporativa - del aprendizaje e implementación individual de la organización a una acción más amplia basada en las nociones de colaboración y escala. Un enfoque singular de muchas de las plataformas globales temáticas es el deseo de la empresa de profundizar en la acción y la resolución de problemas en torno a un tema en particular mediante el establecimiento de estándares y normas mínimas, definiendo las mejores prácticas y facilitando el aprendizaje y el intercambio entre las empresas participantes. Los últimos años han visto una proliferación de plataformas de negocios globales alineados a una serie de cuestiones de sostenibilidad -incluyendo el cambio climático, el empoderamiento de las mujeres, las pandemias, el agua, la lucha contra la corrupción y la inversión. Estas plataformas están siendo desarrollados y dirigidos por una diversa gama de organizaciones e iniciativas, y puede variar ampliamente en función de los objetivos, la estructura de gobierno, la composición de los participantes, la responsabilidad y el modus operandi. Lo que comparten es el deseo de motivar a un gran número de organizaciones empresariales para actuar en conjunto a fin de lograr una misión compartida y objetivos relacionados. Para asegurar la integridad y la inclusión de estas plataformas, idealmente deben ser dirigidas por la empresa, pero con una composición de múltiples partes interesadas, basada en principios y en cumplimiento de medidas de rendición de cuentas públicas. Ejemplos de este tipo de plataformas temáticas de Naciones Unidas son: Cuidando el clima, Energía sostenible para todos, Mandato del agua para los CEO y los Principios para el empoderamiento de la mujer; el Consejo Empresarial Mundial para la Iniciativa de Electricidad Global de Desarrollo Sostenible; la Iniciativa Contra la Corrupción del Foro Económico Mundial; la GBC Salud, los Principios para la Educación Responsable y la Iniciativa Financiera del el PNUMA, los Principios para la Inversión Responsable de Naciones Unidas, y los Principios de Ecuador de la Corporación Financiera Internacional. El programa de desarrollo post-2015 representa una oportunidad para implicar más plataformas temáticas dirigidas por negocios- en la entrega de soluciones mundiales, así como fomentar la creación de nuevas iniciativas, mientras se buscan caminos para que diferentes iniciativas coordinen el aprendizaje y actividades con un mayor impacto. 4. Iniciativas sectoriales de la industria El surgimiento de plataformas conjuntas está intensificando el trabajo del negocio en sectores e industrias específicas. Industrias específicas pueden rendir cuentas por una actividad económica significativa con impactos ambientales y sociales asociados - especialmente cuando las cadenas de suministro son factores. En los últimos años, muchos grupos industriales han comenzado a evaluar y cuantificar estos impactos agregados, al tiempo que desarrollan estrategias, directrices y objetivos para que sus miembros los adopten a fin de minimizar los impactos negativos y maximizar las contribuciones positivas. Estratégicamente, el establecimiento de estándares mínimos para un sector ayuda a nivelar el campo de juego entre las empresas, que a menudo son competidores en el mercado, y reduce la carga de los líderes que soportan el peso de los costos. Además, desde un punto de vista reputacional, líderes dentro de una industria determinada tienen el interés de asegurar que los compañeros bajo rendimiento no empañen la imagen de todo el sector. Otro factor clave que impulsa el crecimiento de las iniciativas del sector es el entendimiento de que diferentes industrias pueden hacer frente a muy diversos retos de la sostenibilidad. Ejemplos de las iniciativas sectoriales: Cuidado Responsable (productos químicos); Iniciativa Minera Global, Iniciativa Ciudadana de la Industria Electrónica, Asociación para el Trabajo Justo (ropa y textiles), Iniciativa de Transparencia de Industrias Extractivas y el Consejo Global de Turismo Sostenible. En relación a la agenda post-2015, estas y otras iniciativas del sector pueden desempeñar un papel importante en difundir soluciones de sostenibilidad. A través de sus actividades directas, así como su frecuentemente extensa cadena de suministro global, tales grupos industriales pueden comenzar a conectar con más fuerza sus estrategias, estándares y objetivos a los objetivos de desarrollo más amplios – asegurando que juegan una parte integral de los esfuerzos internacionales para lograr el desarrollo sostenible mundial. 5. Mecanismos de aplicación y redes que facilitan las alianzas y la acción colectiva Los negocios comprometidos cada vez son más conscientes de que, para aprovechar todo su potencial, es imprescindible que las empresas se unan para enfrentar colectivamente los retos críticos y las crisis. Estos esfuerzos de acción colectiva pueden ofrecer importantes efectos multiplicadores - con resultados más amplios y sostenibles, más allá de lo que una sola organización puede lograr por sí sola. Una serie de organizaciones y redes están empezando a desarrollar mecanismos y otros modus operandi para facilitar los esfuerzos de implementación e impulsar nuevas soluciones e innovaciones. Un ejemplo de ello es el Partnership Hub del Pacto Mundial, que se presentará en la Cumbre de Líderes del Pacto Mundial de Naciones Unidas en septiembre de 2013. Impulsar el desarrollo del hub es el reconocimiento de que un segmento importante y creciente de la comunidad empresarial nunca ha estado más preparado para actuar y contribuir a la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible amplios. Además, existe la voluntad de los gobiernos, la sociedad civil y otras partes interesadas para participar con la comunidad empresarial, especialmente cuando se basa en los compromisos con los principios universales. La utilización de la tecnología digital y el análisis basado en mapas, el hub será una plataforma en línea que une a las partes en torno a proyectos y soluciones específicas en temas como agua y saneamiento, cambio climático, anticorrupción y el concepto de empresa social. El objetivo es lograr resultados positivos que se pueden escalar rápidamente. Las "incubadoras de empresas sostenibles" se enfocan en el fortalecimiento de emprendedores y empresas start-up con misiones de la sostenibilidad, y están apareciendo en los países desarrollados y en desarrollo. Otros mecanismos de entrega incluyen nueva generación, las coaliciones de redes centradas en la acción, espacios de colaboración y "puertas" e intercambios. La alianza de acción para el crecimiento del Foro Económico Mundial, por ejemplo, fue concebida para desbloquear las inversiones privadas en relación con el cambio climático. Un segundo ejemplo es Engagement Clearinghouse de los Principios para la Inversión Responsable apoyados por Naciones Unidas, una herramienta en línea diseñada para unir a los inversionistas, con respecto a la incorporación y aplicación de las consideraciones ambientales y sociales. Otra área prometedora es el desarrollo de "puertas" - intercambios de mercado para bienes y servicios, recursos de construcción de capacidad y financiamiento. El South-South Gate del Programa de Desarrollo de Naciones Unidas sirve, entre otros fines, como una plataforma para el intercambio de bienes, tecnología y recursos financieros entre las pequeñas y medianas empresas de las economías en desarrollo. Las asociaciones de negocios de Naciones Unidas son de particular importancia, ya que cada vez más entidades de Naciones Unidas fortalecen su capacidad estratégica y operativa para involucrar a la comunidad de negocios. Será importante construir sobre las experiencias de business.un.org y mecanismos de facilitación de alianzas para fortalecer las asociaciones de negocios de Naciones Unidas que van más allá de un enfoque de proyecto ad-hoc para abordar cuestiones sistémicas y producir resultados sostenibles. 6. Redes de sostenibilidad dirigidas por negocios a nivel nacional A través de estructuras tales como las Redes Locales del Pacto Mundial, las organizaciones empresariales y otros grupos de interés ya están trabajando para promover y poner en práctica los principios de sostenibilidad a nivel local. Incluidas entre los participantes de las redes están las empresas nacionales y las filiales de empresas extranjeras -un medio importante para romper las divisiones o los conflictos de intereses percibidos entre las empresas nacionales y multinacionales. Un número creciente de redes del Pacto Mundial tiene la capacidad total para convocar, organizar e implementar soluciones masivas dirigidas por negocios, ante grandes retos de la sostenibilidad. Cerca de 50 redes nacionales ya llevan a cabo proyectos e iniciativas en áreas tales como el acceso al agua, el cambio climático, el empoderamiento de la mujer, la lucha contra la corrupción y negocios para la paz. Estas redes pueden ser fuertes facilitadores de la colaboración y la acción colectiva, ya que la gran mayoría de las asociaciones juegan a nivel nacional o local. Este tipo de trabajo requiere personal dedicado y entrenado, y las redes nacionales de negocio requerirán recursos para facilitar las alianzas, conducir diálogos y dar autoridad a iniciativas para alcanzar los objetivos nacionales. Además, existe la posibilidad de vincular dichas redes al creciente número de departamentos del gobierno y de ministerios encargados de los asuntos de sostenibilidad corporativa. Se espera que los Estados Miembros de Naciones Unidas desarrollen los objetivos y las metas nacionales relacionados para la era post-2015. Las estrategias nacionales deben ser desarrolladas con la mirada puesta en la participación activa de la comunidad empresarial y el cuidado y el aprovechamiento de los movimientos nacionales de sostenibilidad que pueden ayudar en la realización de los objetivos de desarrollo sostenible, en los próximos años y décadas. 7. Iniciativas sobre el financiamiento privado Un corolario y movimiento complementario para abordar la sostenibilidad está en marcha dentro de los campos de las finanzas y la inversión privada. Los inversionistas institucionales y minoristas, proveedores de financiamiento a la banca y proyectos, las empresas aseguradoras y las fundaciones y organizaciones filantrópicas apoyan la sostenibilidad a través de un número de capacitadores del mercado. Estos incluyen la incorporación, por mandato de la bolsa de valores, de normas y prácticas de sostenibilidad en la información de mercado, plataformas de emisión de inversión, "puertas" de construcción de capacidad, y creación de hubs para construir infraestructura de mercado y avanzar en la inversión de impacto. Subsectores clave de la industria financiera clave son la incorporación de información ambiental, social y asuntos generales de desarrollo. La adopción de términos como "inversión responsable", "finanzas sostenibles" y la "inversión de impacto", estas iniciativas comparten un entendimiento de que los desafíos de sostenibilidad globales y locales pueden representar un riesgo importante inversión si no se gestionan adecuadamente. La inversión de impacto es un movimiento en rápido crecimiento con un alto potencial de alza. Resultados sorprendentes y reacciones en cadena sociales y económicas imprevistas tienen lugar cuando los fondos se aplican a un fin social o medioambiental, y las técnicas de gestión empresarial se utilizan para asegurar la eficacia de los resultados y la durabilidad financiera a largo plazo en términos de punto de equilibrio o de obtener una ganancia. Existen oportunidades en el mercado de inversión, tanto en términos de la gestión eficiente de los riesgos y el desarrollo de productos de inversión relacionados e innovaciones tales como: fondos especializados de sostenibilidad (por ejemplo, la tecnología limpia), bonos de impacto, seguros climáticos y de cultivos, y los programas de micro-finanzas y micro-seguros. Por lo tanto, estos movimientos de los inversores en rápida evolución buscan generar y asegurar retornos financieros a largo plazo, al tiempo que contribuyen a las soluciones de sostenibilidad. Tres ejemplos incluyen: o Los Principios para la Inversión Responsable apoyados por la ONU, una coalición de carteras de inversión de gestores y propietarios de activos que representan a más de USD $30 billones de capital. o Los Principios de Ecuador, una coalición de instituciones bancarias y financieras análogas que incorporan riesgos ambientales y sociales en las operaciones de financiación de proyectos, que cubren más del 70% de toda la deuda internacional de financiación de proyectos en los mercados emergentes o Los Principios para la Inversión Social, un conjunto de directrices para fomentar la inversión social por parte de fundaciones y otras organizaciones que ayudan a las comunidades a satisfacer sus necesidades de desarrollo de manera sostenible. Con respecto al área de fundaciones y filantropía -principales proveedores de capital y la financiación en gran parte en forma de subvenciones y donaciones -se estima que decenas de miles de millones de dólares se dirigen cada año para apoyar proyectos de desarrollo sostenible, especialmente en el ámbito local -en áreas como la salud, la vivienda, la educación, el emprendimiento, y el acceso al agua y la energía. Cada vez más, estos esfuerzos están midiendo el impacto, en términos financieros, así como sociales y ambientales. Por último, y lo más importante, la inversión extranjera directa (IED) de fuentes empresariales alcanzó los $ 1,6 billones en 2012, y está cerca de recuperar el máximo de 2007, de $ 2 billones. Según la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), el 45% de estos fondos ahora emana de los países en desarrollo y el 6% son de países en transición, de economías centralizadas – IED conjunta del mundo desarrollado. La UNCTAD reporta que, si bien las filiales extranjeras de las empresas transnacionales emplean alrededor de 70 millones de trabajadores y generaron USD $ 28 billones en ventas y $ 7 billones en valor agregado en 2011, muchas de estas empresas están sentadas en grandes cantidades de capital acumulado. Este excedente de efectivo podría alimentar un futuro aumento de la IED. Si bien muchos países están tomando en cuenta el impacto de la sostenibilidad al evaluar las inversiones propuestas, las empresas y otros inversionistas están valorando las cualidades de sostenibilidad, tales como la estabilidad social y del medio ambiente, la infraestructura y la gobernanza global al tomar decisiones. La una vez temida "carrera hacia el fondo" tiene potencial para convertirse en una carrera a la cima. Las finanzas sostenibilidad privadas tienen un enorme potencial para contribuir a los más amplios esfuerzos de implementación en el futuro Post 2015 – trayendo consigo el muy necesitado capital para los retos más urgentes del mundo. V. EL PAPEL DE LOS GOBIERNOS EN EL LOGRO DE MERCADOS MÁS SOSTENIBLES E INCLUYENTES Todo el potencial de las empresas para promover el desarrollo sostenible sólo se cumple cuando los marcos políticos de apoyo están en su lugar. Por el contrario, la violencia y la gobernabilidad débil o fallida son los principales obstáculos la escalada de las naciones sobre la curva de desarrollo. Los gobiernos están llamados a tomar todas las medidas para respetar, proteger y cumplir los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas, y para superar la violencia y establecer condiciones de paz y estabilidad, necesarias para que el sector privado genere beneficios económicos y sociales relacionados integrales para un amplio desarrollo sostenible. Como la sostenibilidad corporativa busca transformar los mercados desde dentro, los gobiernos también tienen un papel clave que desempeñar en la realización de los mercados más inclusivos y sostenibles. Las principales recomendaciones son: o La cooperación y comercio multilateral La agenda post-2015 puede proporcionar el impulso para fortalecer la cooperación internacional sobre los desafíos globales. Los gobiernos deben renovar el compromiso con los principios de cooperación multilateral - avanzar en la convicción de que la paz y la prosperidad sólo pueden construirse sobre los cimientos de la interdependencia y la cooperación. En estas condiciones, el comercio, la inversión y el emprendimiento crearán y distribuirán la riqueza, la inclusión y la equidad social. La interdependencia del mercado acerca a la gente y las naciones, y ofrecen la mejor oportunidad para los movimientos de capitales y para difundir rápidamente la tecnología y las soluciones tecnológicas. Los gobiernos deben seguir la tendencia hacia menores tasas arancelarias y las preferencias para los países menos desarrollados, además de actuar en otros tipos de barreras que sirven como obstáculos al comercio. En lugar de destacar las normas que actúan como barreras para los países que intentan negociar su salida de la pobreza, debe haber restricciones, obligaciones y aranceles disminuidos sobre los bienes y servicios ecológicos. o Incentivos de precios Uno de los desafíos clave de la sostenibilidad que está avanza es la adopción de estructuras de regulación y de incentivos inteligentes para que los costos y beneficios ambientales se reflejan con mayor detalle en los precios, así como para ofrecer mayores incentivos para luchar por la creación de valor a largo plazo sobre la maximización del beneficio a corto plazo. Por ejemplo, los gobiernos deben establecer un precio estable del carbono a través de medidas coordinadas a nivel internacional. El precio de los combustibles fósiles debe reflejar e incorporar el costo de las externalidades como la contaminación, el deterioro de la salud humana y el impacto en cambio climático, a través de sistemas como un impuesto sobre el carbono o un sistema cap-and-trade. Es necesaria una serie de incentivos para que las empresas tomen caminos de alta sostenibilidad, tales como beneficios fiscales y de contratación, y regulaciones de zonificación. El término de subsidios a los productores de combustibles fósiles y una reorientación de los subsidios hacia la energía limpia y renovable debe ser una prioridad. Esto se puede lograr a través de actividades tales como garantías de préstamos y soluciones de I+D bajas en carbono o sin carbono. Lo mejor sería eliminar los subsidios al consumo de combustibles fósiles, pero con el cuidado de llevar a cabo la educación pública para explicar la razón de ser y con la institución de instituir beneficios específicos, tales como cupones o apoyo a los ingresos para los pobres. Del mismo modo, es necesario establecer un sistema de fijación de precios justos por el agua a nivel local o nacional, con el fin de fomentar la eficiencia y la conservación. Los gobiernos tienen el mejor medio para establecer mecanismos niveles de precios equitativos y aceptados, y para garantizar que el precio no sea un obstáculo para el acceso al agua potable fresca y segura-en consonancia con el derecho humano al agua establecido. En muchos países, el agua totalmente subvencionada significa agua gratuita para los ricos, con los pobres a menudo pagando precios excesivos por agua de dudosa calidad. Los gobiernos de los países desarrollados deben eliminar los subsidios a los productores para la agricultura. Estas subvenciones no permiten que los agricultores de los países más pobres que tengan una oportunidad justa de competir a nivel nacional y global, drenan los presupuestos nacionales de los países receptores y distorsionan negativamente a los mercados. De forma complementaria, la distribución de la ayuda alimentaria debe, en la medida de lo posible, realizarse a través de compras a los agricultores locales, y no por el dumping de excedentes agrícolas de los países donantes. La discusión pública muy detallada sobre los subsidios y precios de carbono, y de otros ámbitos mencionados arriba, indica que estas medidas ya están en el juego como un medio para canalizar el comportamiento empresarial y la promoción de los resultados acordados. Estas prácticas se pueden aplicar a sectores fuera del nexo agua-energía-alimentos. o Adquisición y transparencia Los gobiernos pueden desempeñar un papel proactivo mediante las adquisiciones como un medio de apalancamiento para la sostenibilidad corporativa. Los criterios pueden ser escritos en las ofertas que requieren acciones de sostenibilidad y se pueden establecer mínimos que incluyen la consideración de ofertas que provengan únicamente de empresas comprometidas públicamente y con antelación, a los principios universales de sostenibilidad. Si los gobiernos publican en sus sitios web las ofertas de compra y todas las transacciones económicas públicas y privadas significativas, se reduciría drásticamente el alcance de la corrupción y se construiría la confianza pública. En un desarrollo prometedor, el grupo de trabajo de lucha contra la corrupción del Pacto Mundial lanzó recientemente un llamado mundial para que las empresas que se niegan a participar, y para urgir a los gobiernos a transparentar toda la contratación pública. Dentro del proceso de selección, las normas de sostenibilidad y certificaciones deben ser utilizadas activamente como criterios. Si estos criterios se desarrollan en un nivel lo suficientemente preciso y creíble, se pueden aplicar condiciones más favorables para los contratistas y proveedores que demuestran liderazgo en sostenibilidad. o Financiamiento para mercados inclusivos Hay mucho qué los gobiernos pueden hacer en el plano multilateral para promover la sostenibilidad corporativa, incluyendo: o Los nuevos fondos mundiales dedicados a la solución de los problemas globales y sobre la base de contribuciones públicas y privadas; o o La ayuda al desarrollo que se ha diseñado para apalancar la sostenibilidad corporativa y soluciones dirigidas por negocios, y Los sistemas de garantía revitalizados para inversiones a largo plazo, especialmente en los sistemas de infraestructura de los países en desarrollo que pagan a lo largo de décadas. Los gobiernos también deben alentar a las bolsas de valores y sus reguladores para promover la inversión responsable y la sostenibilidad corporativa. Se puede avanzar en el concepto de política de gobierno e inversión medioambiental-social, por ejemplo, exigiendo que todos los fondos de inversión públicos y privados -incluidos los fondos soberanos- que incluyan esas políticas en sus criterios de gestión del riesgo y que incluyan estas consideraciones en sus operaciones. o Las empresas de propiedad estatal Grandes porcentajes de negocio - incluyendo mercados en desarrollo y desarrollados- se llevan a cabo por las empresas estatales o por aquellas en los que el gobierno tiene una posición mayoritaria. En total, se estima que el monto de capital en las empresas de propiedad estatal y los fondos en poder del Estado supera los $ 20 billones. Las empresas de propiedad del Estado, en virtud de su propiedad y todo lo que implica, tienen responsabilidades y oportunidades para tomar medidas más allá de la simple evasión del daño. Con resultados positivos públicos escritos en sus estatutos, la empresa estatal debe ser líder en sostenibilidad corporativa, en particular con respecto a la gobernanza, la transparencia y la rendición de cuentas. El objetivo de favorecer a determinados sectores para guiar estratégicamente o elevar las economías nacionales u obtener mercados en el extranjero, se deben complementar, no interponerse en el camino de este principio. Principios similares deben aplicarse a los fondos soberanos de riqueza, los cuales se estima que mantienen USD$ 5 billones en total, de activos en todo el mundo y otros fondos públicos, como los de pensiones, bancos de desarrollo y las reservas oficiales de divisas. o Alentar y apoyar a los negocios responsables Los gobiernos, como un complemento de la regulación, reconocen cada vez más, que las prácticas corporativas de sostenibilidad voluntarias - definidas como una entrega de valor a largo plazo en términos económicos, sociales, ambientales y éticos por parte de una empresa- son una contribución fundamental al bien común. Se pide a los gobiernos apoyar la participación del sector privado en las iniciativas voluntarias que promuevan valores universales, como el Pacto Mundial de Naciones Unidas, a través de acciones que incluyen la sensibilización, el desarrollo de herramientas e incentivos y financiamiento. Además, los gobiernos deben pedir a las empresas mejorar su rendición de cuentas y la transparencia, mediante la divulgación pública las prácticas de sostenibilidad - sobre todo en forma integrada ya que ser reconoce el capital financiero, natural y social– y a través de marcos como la Global Reporting Initiative (GRI).