PREGUNTAS DE CIVIL 17-29: Adriana Valladolid García 17. El Derecho transitorio: concepto; grados de retroactividad; planteamientos del Tribunal Supremo y del Constitucional. Concepto: el Derecho transitorio es el conjunto de normas que atienden a la finalidad de solventar los problemas originados por la sucesión de las leyes en el tiempo.Resuelve el tipo de eficacia que habrá de darse a la nueva ley en relación con la precedente que derioga,la solución es si la nueva norma tiene carácter retroactico o irretroactivo. Grado mínimo: La eficacia de la nueva ley sólo afecta a las situaciones jurídicas que se produzcan a partir de la entrada en vigor de la norma. Grado medio: cuando la eficacia de una ley trasciende a los efectos de las mismas que no se hubieran consumado. Grado máximo: cuando la nueva ley trascienda a los efectos que,derivados de las situaciones jurídicas surgidas al amparo de la norma derogada,ya se hubieran consumado. El Tribunal Supremo: opta por un criterio amplio de la irretroactividad de forma que cuando se trata de aplicar la citada regla general entiende que la nueva ley sólo afecta a los actos que se producen con posterioridad a su entrada en vigor, así que la norma derogante no afectará ni a las situaciones jurídicas creadas al amparo de la norma precedente ni a los efectos derivados de las mismas.Supone la aceptación de la teoría del “hecho jurídico cumplido”. El Tribunal Constitucional: cuando aplica los preceptos de la Constitución, entiende que la irretroactividad de una norma únicamente conlleva la no incidencia de la ley en las situaciones de hecho producidas con anterioridad a la propia ley, por tanto no excluye que la nueva ley deje de afectar a los efectos pendientes,futuros,condicionados, así como a las expectativas que obedecieran a la norma derogada. El criterio del TC obedece a la teoría del “efecto inmediato”, que distingue entre efectos retroactivos y efectos inmediatos. 18. El deber de observar las normas jurídicas: La ignorancia de las leyes y el error de derecho. Art. 6.1. del Cc: “ la ignorancia de las leyes no excusa de su cumplimiento”.No cabe eludir el mandato que cada norma contiene alegando desconocimiento o conocimiento equivocado de la misma.Son normas imperativas o disositivas. La inexcusabilidad de la ignorancia no obedece a un supuesto deber que incumbiría a los ciudadanos de conocer las normas escritas,deber que sería de imposible cumplimiento y solo afecta a los jueces y magistrados en relación con las leyes escritas. En la actualidad el fundamento de cumplir las normas,aunque medie desconocimiento o conocimiento equivocado de los destinatarios, radica en el principio de legalidad ( art. 9.3 CE).Las leyes deben de observarse con independencia que se las conozca del modo correcto o equivocado por el destinatario. El conocimiento equivocado sobre la vigencia,existencia,significado o efectos de una norma es la causa de actos,declaraciones u omisiones por parte de los particulares o del modo en que han sido llevado a cabo dichos actos. La relevancia de estos actos u omisiones obedecen a un error de derecho que según el art. 6.1. Del Cc :”el error de derecho producirá aquellos efectos que las leyes determinen.”Mediante la norma transcrita se trata de posibilitar que puedan asignarse consecuencias en los actos u omisiones que trajeran error de derecho. Consecuencias al error de derecho: determina la exclusión o atenuación de la sanción que la norma prevé para determinadas infracciones, o se ocasionará la ineficacia de los actos o negocios que se hubieran otorgado mediando error de derecho. 19. La exclusión voluntaria de la ley aplicable. Es el art. 6.2 del Cc. Cuya finalidad consiste en permitir para ciertos casos el juego de la autonomía de la voluntad a efectos de determinar las normas por las que los sujetos quieren regular sus intereses.Ha de suponer la exclusión de la ley referible al supuesto en cuestión, de forma que si no media la voluntad excluyente dicha norma habrá de ser observada. El Cc determina el ámbito limitado en el que podrá jugar la autonomía de la voluntad a efectos de relegar la ley aplicable.Dicho art. Exige que no contraríen “el interés u orden público ni perjudiquen a terceros”.La doctrina mayoritaria entiende que dichos requitsitos se relacionan con la distinción entre normas imperativas y dispositivas.Se permite la exclusión de la ley cuando tenga carácter dispositivo(no perjudique a terceros),estando prohibida la exclusión que recae sobre normas imperativas(el interés u orden público). La renuncia a los derechos reconocidos en las leyes supone una declaración unilateral de voluntad por medio de la cual el titular de un derecho hace dejación del mismo sin transmitirlo. El TS exige que la declaración de voluntad por medio de la cual se renuncia a un derecho sea “personal,clara,terminante e inequívoca” admite la renuncia expresa, también la tácita por medio de actos concluyentes,claros e inequívocos,excluyendo la renuncia tácita cuando se impone “expresa” o “expresamente”.Hay leyes que exigen la renuncia en documentos públicos. 20. Los actos contrarios a las normas jurídicas: la sanción de nulidad. Toda norma conlleva el deber jurídico de cimplirla,puede ocurrir que el destinatario no observe el mandato legal impuesto.La consecuencia es la sanción que puede ser aplicada mediante coacción,la norma es coercible. Sanciones:la pena,la ejecución forzosa,la satisfacción por equivalente o la invalidez. El Título preliminar del Cc impone la nulidad (absoluta o de pleno derecho) como sanción de carácter general.Art. 6.3 Cc:” los actos contrarios a las normas imperativas y a las prohibitvas son nulos de pleno derecho,salvo que en ellas se establezca un efecto distinto para el caso de contravención”. Además las leyes recogen la misma sanción (nulidad absoluta o de pleno derecho) que el art. 6.3 del Cc cuya norma se caracteriza porque impone la nulidad como consecuencia de índole general,será la sanción que habrá de aplicarse cuando concurran los presupuestos que el propio artículo prevé. Para que sea aplicable la nulidad de pleno derecho, se requiere algún acto jurídico y que fuera contrario a una norma imperativa o prohibitiva. La citada normasolo prescribe la sanción de nulidad para los casos en que el precepto infringido no imponga una sanción diferente para el caso de su contravención, opera ipso iure, no precisa ser declarada judicialmente,ni exige la previa impugnación de la declaración. Tal nulidad es definitiva;no es posible la confirmación,convalidación o sanación del acto nulo; y la acción no prescribe ni caduca.El acto jurídico contrario a una norma imperativa no ocasionará los efectos que de ser válido estaba llamado a producir. La nulidad absoluta conllevará la reposición de la situación existente con anterioridad al acto nulo.Tendrá lugar en los casos en que dicha situación se hubiera modificado en virtud del acto realizado en contra de una norma imperativa. En la práctica jurisprudencial la nulidad total de los actos jurídicos llevados a cabo en contra de normas imperativas,se ve desplazada por el empleo de la categoría de la nulidad parcial,con fundamento al principio de conservación de los negocios jurídicos se trata de sancionar la parte del negocio que contraviene la norma imperativa sin que trasciendan las consecuencias de la invalidez al resto del negocio que se considera válido. 21. Los actos en fraude de ley. Art. 6.4 Cc:” los actos realizados al amparo del texto de una norma que persigan un resultado prohibido por el ordenamiento jurídico, o contrario a él,se consideran ejecutados en fraude de ley y no impedirán la debida aplicación de la norma que se hubiere tratado de eludir”. La interdicción tiene como presupuesto la consideración del ordenamiento jurídico como un todo y la interrelación entre las normas que lo integran.Se trata de salvar la eficacia de una norma frente a los actos que la vulneran al abocar a un resultado contrario al ordenamiento jurídico. Requisitos para calificar actos como fraude de ley: 1) ha de tratarse de actos que gozan de una apariencia de legalidad al llevarse a cabo al amparo de una norma (norma de cobertura); 2) a través de la realización de tales actos se vulnera la finalidad práctica de cierta norma imperativa o prohibitiva (norma eludible o soslayable) llegándose a un resultado prohibido por el ordenamiento jurídico. Relacionado con los requisitos se suscita el problema de que si para que pueda ser apreciado se precisa o no que el que lleva a cabo tales actos tenga intención de burlar la ley. El TS considera que “no es necesaria la intención o propósito defraudatorio porque lo que se sanciona en el fraude de ley no es la mala fe o la intención maliciosa de la gente,sino el acto de incumplimiento de las leyes,de donde resulta la no necesidad de su prueba”. El TS invoca la teoría objetiva para poder apreciar en el caso concreto la existencia de fraude a pesar de que no hubiera sido probado.Lo que ocurre en la práctica judicial no es tanto la apreciación de supuestos de fraude al margen de la intención fraudulenta,como la apreciación del ánimo de defraudar. Las consecuencias derivadas de los actos en fraude de ley: derecho a ejercitar el retracto,obligación de prestar el servicio militar o derecho de los legitimarios a percibir lo que conforme a las leyes corresponda. Puede ser que el acto llevado a cabo sea contrario a una norma imperativa,si sucede el acto será nulo salvo que la norma infringida hubiera previsto un efecto distinto para el caso de contravención. 22. Concepto jurídico de persona. Persona es sinónimo de ser humano,la persona es sujeto de derechos y del derecho.Se produce una identificación que no es completa.Junto al ser humano el derecho conoce otros sujetos: organizaciones sociales (asociaciones,sociedades etc),reciben la consideración jurídica de personas.Se distingue entre persona física (ser humano) y las personas jurídicas (sujetos de derechos distintos del ser humano). Desde el punto de vista jurídico-formal persona equivale a sujeto de derechos compartiendo esa condición jurídica tanto el ser humano (persona física) como organizaciones sociales (personas jurídicas),comparten únicamente su común condición de sujetos de derecho y de protagonistas de la vida jurídica. De las personas físicas puede decirse que el derecho existe por y para ellas y gozan de una dignidad inherente a su naturaleza humana. 23. Capacidad jurídica y capacidad de obrar. Capacidad jurídica: la aptitud genérica para ser titular de derechos y obligaciones es la llamada capacidad jurídica.La titularidad es la tenencia efectiva de un derecho u obligación que pertenece a un sujeto de derechos, que puede ser sujeto activo o pasivo. Todo ser humano nacido por el hecho de serlo goza de capacidad jurídica.Es igual para todos,aparece como plasmación del principio de igualdad. La capacidad jurídica no es disponible por un acto de autonomía de la voluntad (nadie podría venderse como esclavo). Capacidad de obrar: posibilidad de desarrollar una actuación valida y eficaz desde el punto de vista jurídico. Está estrechamente relacionada con la capacidad natural de conocer y querer, la aptitud natural para atender por sí mismo al cuidado de su persona y bienes. La correspondencia entre la capacidad natural y la de obrar obligaría a comprobar caso por caso la capacidad natural de las personas,para determinar su capacidad de autogobierno lo que es impracticable porque paralizaría la vida jurídica. Por estas consideraciones,nuestro Derecho establece una capacidad general de obrar vinculándola a la concurrencia de circunstancias objetivas y fácilmente comprobables:la mayoría de edad y la ausencia de incapacitación judicial. Existen situaciones de capacidad limitada o incompleta que reconocen a un sujeto la capacidad de obrar por sí mismo,pero no por sí solo: el menor emancipado o el incapacitado sometido a curatela. El Derecho, mediante el establecimiento de instituciones, completa o sustituye esta capacidad limitada o incompleta. 24. El nacimiento: requisitos legales para adquirir personalidad jurídica a efectos civiles. El art. 30 establece dos requisitos para dar plena eficacia jurídica al nacimiento: la figura humana y la viabilidad legal representada por el plazo de 24 horas de vida.Este plazo es el criterio elegido para decidir acerca de la vitalidad natural o médicobiológica. 25. El concebido todavía no nacido: el art. 29 del C.c. Art. 29 Cc:”el nacimiento determina la personalidad,pero el concebido se tiene por nacido para todos los efectos que le sean favorables,siempre que nazca con las condiciones que expresa el artículo siguiente”;1)el concebido carece de personalidad jurídica (no se adquiere en plenitud hasta el nacimiento),2) su existencia no es indiferente para el Derecho,que le atribuye consecuencias jurídicas importantes, en beneficio del propio concebido. 26. Caso especial del concepturus. Se establecen mecanismos para reservar derechos a favor de quienes no están aun concebidos.Institución indirecta de heredero, donaciones con cláusula de reversión, el contrato en favor de tercero; pero no hay idea de protección a la persona sino testamento 27. La muerte de las personas: efectos jurídicos. Prueba del fallecimiento. -Efectos jurídicos: A) Planteamiento general: con el fallecimiento de la persona física, desaparece la persona en cuanto tal; se extinguen los derechos y relaciones personalísimos o vitalicios que le competían; y se abre la sucesión en los restantes, transformándose el patrimonio en herencia y el cuerpo de la persona en una cosa: el cadáver. B) Régimen jurídico del cadáver: con la muerte el cuerpo de la persona se transforma en cadáver,considerado cosa, pero sujeta a un régimen jurídico que impide su asimilación con cualquier otra cosa.Hay que tener en cuenta: 1. En el cadáver se respeta la dignidad del ser humano fallecido; 2. La existencia de una voluntad conocida del propio difunto acerca del destino de su cuerpo tras su fallecimiento (inhumación o incineración, lugar de la sepultura, utilización de sus órganos para trasplantes…) atendida en términos generales; 3. Respetar a la pietas familiar aludiendo a los legítimos derechos y sentimientos de los familiares del fallecido, a quién les corresponde el cuidado del cadáver. C) La protección de la personalidad pretérita: La muerte extingue la personalidad que proyecta eficazmente su relevancia jurídica más allá del límite temporal de su existencia, ocurre en dos ámbitos:1. La operancia de la voluntad del fallecido en cuanto al destino de su cuerpo y de su patrimonio; 2. La protección de determinados derechos ligados a su esfera más personal (honor,intimidad,propia imagen etc). -Prueba del fallecimiento: La prueba oficial es la inscripción de la defunción en el registro Civil.En la inscripción deben constatar las menciones de identidad del fallecido, como la hora,fecha y lugar del fallecimiento. Con carácter excepcional se prevé la posibilidad de inscribir la defunción cuando el cadáver ha desaparecido, o ya ha sido enterrado antes de la inscripción: “ será necesaria sentencia firme, expediente gubernativo u orden de la autoridad judicial que instruya las diligencias seguidas por muerte violenta,que afirmen sin duda el fallecimiento”. 28. Premoriencia y conmoriencia. A) Planteamiento y antecedentes: dos personas implicadas en una atribución de derechos han fallecido, y no es posible probar cuál de ellas falleció primero, o si fallecieron simultáneamente. Surge entonces el problema de determinar si se ha producido transmisión de derechos entre ellas, y en este caso en favor de cuál de las dos. El Cc en su artículo 33 adopta el criterio de simultaneidad: “si se duda, entre dos o más personas llamadas a sucederse, quién de ellas ha muerto primero, el que sostenga la muerte anterior de una o de otra, debe probarla; a falta de prueba, se presumen muertas al mismo tiempo y no tiene lugar la transmisión de derechos de uno a otro”. B) Requisitos y ámbito de aplicación: para la aplicación del art. 33 hay que señalar requisitos: 1) el fallecimiento de dos o más personas la duda no recae sobre si han fallecido sino sobre el orden cronológico de los fallecimientos.2) que exista un estado de duda acerca de cuál ha sido el orden cronológico de los fallecimientos.3) la existencia de dos o más personas llamadas a sucederse,la doctrina ha llevado a cabo una interpretación extensiva concluyendo que el ámbito de aplicación del precepto “ se extiende a todo caso de duda sobre la relación de supervivencia entre dos personas fallecidas”.No solo en el ámbito de la sucesión mortis causa. C) Efectos: acreditado el estado de duda acerca de cuál de los fallecidos murió primero,”se presumen muertas al mismo tiempo y no tiene lugar la transmisión de derechos de uno a otro”(art.33 Cc). 29. Los derechos de la personalidad: concepto y determinación. A) Concepto: Tradicionalmente, la protección jurídica del ser humano se ha realizado a través del Derecho penal y del Derecho constitucional. La protección ofrecida desde estos dos ámbitos resulta insuficiente frente a agresiones no suficientemente graves como para provocar la respuesta penal, o procedentes de sujetos respecto a los cuales la respuesta constitucional no es efectiva. Ello, unido al creciente personalismo que ha caracterizado la evolución del Derecho civil, ha desembocado en la incorporación del Derecho civil a la defensa inmediata del ser humano, en su ámbito más personal, a través de la moderna categoría de los llamados Derechos de la personalidad. Estos derechos pueden definirse como derechos subjetivos derivados de la naturaleza humana, y de la dignidad inherente a la persona, dirigidos a proteger la esfera más personal del ser humano, tanto en su vertiente física (derechos a la vida y a la integridad física), como espiritual (derechos al honor, a la intimidad y a la imagen). B) Determinación: Los autores consideran como derechos de la personalidad los derechos a la vida, a la integridad física, al honor, a la intimidad, a la imagen y a la identidad (nombre).Esta enumeración ofrece un concepto estricto que considera derechos de la personalidad aquellos que se distinguen a proteger la integridad personal del ser humano,tanto en su vertiente física como espiritual.