Urge que el Legislativo evite crisis económica por la reforma fiscal 18 -Septiembre- 2013 Amigos de Coparmex, Por otra parte, el sector patronal del país hace un llamado a los diputados y senadores de la LXII Legislatura para que escuchen al sector productivo y modifiquen la iniciativa de reforma fiscal enviada por el Ejecutivo, toda vez que su diseño significa un riesgo latente de retroceso económico y social para México. Los empresarios consideramos que los términos de la actual iniciativa en materia de Reforma Fiscal: Reinstauran una estructura centralista en el gasto público; Elevan las tasas impositivas a los contribuyentes cautivos y no buscan abatir la informalidad; Introducen por otro lado graves distorsiones al proceso económico al modificar las reglas impositivas de las empresas, lo que podría afectar sus operaciones e incluso condicionar los efectos positivos de otras reformas, especialmente la Reforma Energética. No sería válido pretender cumplir compromisos de corte popular a costa del aparato productivo, induciendo una política fiscal basada en el incremento del gasto público y el endeudamiento gubernamental, para financiar programas sin sustento financiero. Lo más preocupante de esta iniciativa es que no se corresponde con un plan ambicioso de austeridad gubernamental, de transparencia o de rendición de cuentas a la ciudadanía. Hay que decirlo: no queda claro el rumbo económico que se persigue, especialmente al existir señales contradictorias en cuatro temas fundamentales para México: 1.- Se habla de promover la formalidad en el empleo, pero se impulsan medidas que encarecen la generación de empleo formal, al buscar cambios en la ley del IMSS para (encarecer) elevar las cuotas patronales, limitar y en algunos casos restringir la deducibilidad de prestaciones sociales y crear un seguro de desempleo que deberán fondear las empresas y que impactará necesariamente los recursos de las subcuentas de vivienda de los trabajadores. La deducción parcial de prestaciones de previsión social y demás prestaciones que considera la Ley Federal del Trabajo, tendrá como consecuencia que aumente la tasa efectiva del Impuesto Sobre la Renta entre 3 y 5 puntos. En materia de seguridad social, la iniciativa propone reestructurar el pago de cuotas patronales para trabajadores con un salario mínimo, a costa de los trabajadores que ganen más de 6,800 pesos al mes. Eliminar barreras a la formalidad está bien, lo que no está bien es hacerlo a costa de un incremento en las cuotas de la clase media, en algunos casos de hasta un 20 por ciento de incremento en sus cuotas patronales del Seguro Social, va en contra de la productividad y siguen siendo los mismos los cautivos los que paguen por otros. Este apartado de la iniciativa va en contra de los esquemas de Productividad que nos hemos propuesto trabajadores y empresarios, en los que hemos acordado programas de eficiencia, metas de productividad y puntualidad, a cambio de bonos de compensación para la labor de los trabajadores en favor del progreso de la empresa. Es una contradicción con el discurso y orientación del gobierno poniendo como eje central a la Productividad. En suma, es una propuesta que pareciera que en lugar de promover el empleo, busca “asegurar el desempleo” y que no permitirá revertir el problema estructural de tener 16.3 millones de trabajadores permanentes y eventuales cotizando en el Seguro Social, al tiempo que 28 millones de mexicanos trabajan sin prestaciones, sin salario o en la informalidad. El pacto social entre gobierno y empresarios de 1972, cuando se formó el Infonavit, consistió en definir la aportación del 5% para el pago de vivienda de los trabajadores. Si hoy el gobierno nos dice que ya no es necesario, no creemos entonces que debamos seguir pagándolo, en lugar de que se desvíen estos recursos para otra cosa diferente a la de su origen: la vivienda de nuestros trabajadores. 2. En segundo término se dice que la iniciativa hacendaria aumentara la competitividad para el país pero en los hechos ésta la competitividad se inhibe con medidas que atentan contra la empresa formal como la propuesta de homologar al resto del país la tasa de IVA en frontera norte donde las empresas y toda la estructura productiva es una de las más afectadas por la desaceleración de la economía norteamericana. En los estados fronterizos de la unión americana la tasa de impuestos al consumo es aproximadamente del 8%, por ello, si se lleva la mexicana al 16%, dejará a nuestras empresas en total desventaja en relación con las ciudades vecinas de los Estados Unidos. Esa medida provocará una reducción de la capacidad de consumo; retiro y desaliento de inversiones y apertura de empresas; generará desempleo, contribuirá al incremento del contrabando, piratería y corrupción en aduanas y será un detonador de la economía informal, entre otros efectos adversos. Tampoco habrá impacto positivo en la competitividad si se aumenta la carga tributaria a las empresas que pagan impuestos, desalentando la creación de más empleos formales; si se aprueban medidas como la eliminación del régimen de consolidación fiscal, limitando el plazo para el pago de ISR; la desaparición del régimen simplificado. La estructura que se propone implicaría para algunas empresas: un 30% de ISR a nivel corporativo, más un 10% al momento del pago de dividendos, más el impacto en el ISR de la no deducción total de prestaciones laborales, más el pago de PTU, con lo que alcanzaría una afectación cercana al 50%. Definitivamente no hay empresa que resista esto. 3.-Se toma como ejemplo al exterior selectivamente, argumentando que México es el único país de la OCDE sin seguro de desempleo. Esa es una información incompleta. Se omite que somos el país con más altas indemnizaciones de la propia OCDE y el cuarto país con mayores indemnizaciones por despido en todo el mundo. Si el Seguro de Desempleo se aprueba sin corregir los costos de indemnización, estaríamos generando que las empresas mexicanas enfrentaran un doble costo que ningún otro país tiene para la creación de empleos formales. Fuente: Coparmex, con datos del banco mundial. 2012 4.- En la práctica pareciera existir una contradicción con las reformas Energética y Educativa, que establecen una sólida plataforma para el crecimiento, con una estrategia Económica que lo desalienta. De hecho los beneficios de la Reforma Energética, pueden condicionarse por las distorsiones que introduce una reforma recaudatoria dirigida a los mismos de siempre, a la clase media y a las empresas formales que somos los que pagamos impuestos. El paquete del presupuesto presentado incluye cerca de 500 mil millones de pesos adicionales a lo gastado el año pasado, la mitad de ellos financiados con deuda pública nueva y el resto a cargo de las empresas y las clases medias, quienes tendrían que cargar con una recaudación adicional por 240 mil millones de pesos equivalentes al 1.4% del PIB, prevista para el próximo año. Es importante saber cómo se van a gastar y cómo abona ese aumento del gasto público a construir el país que todos queremos. Es válido reiterar la pregunta ¿cuál es el rumbo de política económica que inspiró a esta reforma? El sector empresarial no quiere que se repitan experiencias que hoy viven otros países como Grecia y España, ni mucho menos las que México ha sufrido en el pasado. Hacemos un llamado a los legisladores a escuchar las observaciones del sector empresarial sobre la iniciativa de reforma hacendaria, con el ánimo de superar nuestros rezagos, con un diálogo de altura, para lograr tasas de crecimiento sostenido del 6 por ciento. Hay que recordar que nuestra meta es de 1.2 millones de empleos por año que es lo que México requiere para disminuir las diferencias. Estamos a tiempo de evitar un deterioro de la confianza en México de los inversionistas en los mercados internacionales. NO es válida una política de endeudamiento sin el respaldo de un crecimiento sostenido. Estamos a tiempo de evitar lo que bien podría llamarse ahora el error de septiembre, de los legisladores depende. La SHCP ofreció mesas de diálogo y colaboración para analizar las afectaciones que esta Reforma Fiscal puede tener en el desarrollo de las empresas y sobre todo, en el proceso de generación de empleo. Nosotros les tomamos la palabra y asumimos la responsabilidad de trabajar junto con ellos, con el Gobierno y legisladores, para realizar los ajustes necesarios a esta iniciativa. En este mes de la Patria, recordemos que ésta se construye todos los días desde cada una de nuestras responsabilidades en nuestro trabajo cotidiano; hagámosla crecer nuestra patria con nuestro trabajo comprometido. A todos les deseo un buen inicio de semana y éxito en todos sus proyectos. Act. Juan Pablo Castañón Castañón Presidente Nacional Coparmex twitter:@jpcastanon