Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba COMISION DE ACTUACION PROFESIONAL EN PROCESOS CONCURSALES . . SUBCOMISION DE JURISPRUDENCIA RECOPILACION DE FALLOS N° 106 Integrantes de la subcomisión: Presidente: Bengoechea Elba [email protected] Secretaria: Ramirez Isabel [email protected] Villoldo Juan Marcelo Del Castillo Elba Iannaconne Silvia Corrado Florencia Germann Maria -JULIO 2012 – 1 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba INDICE I. FIDEICOMISOS y BIENES FIDEICOMITIDOS A. Pedidos de Quiebra - Rechazos 1. FIDEICOMISO SOUTH LINK LOGISTICS I S/ PEDIDO DE QUIEBRA (PROMOVIDO POR EMBAL SYSTEM SRL). 3/04/09 Cámara Comercial: A. 2. FIDEICOMISO SOUTH LINK LOGISTICS I S/ PEDIDO DE QUIEBRA (DESARROLLO PILAR S.A.) Juzgado Nº 10 - Secretaría Nº 20 B. Fideicomiso Instrumento de pago de la Concursada Competencia del Juez Concursal 1. OBRA SOCIAL BANCARIA ARGENTINA S/ CONCURSO PREVENTIVO S/INCIDENTE DE APELACION ART. 250 CPR. 27/05/11 Cámara Comercial: D. 2. OBRA SOCIAL BANCARIA ARGENTINA S/ CONCURSO PREVENTIVO S/INCIDENTE DE APELACION CPR 250. 20/05/10 Cámara Comercial: D. II. FACULTADES DEL JUEZ CONCURSAL – REGLAS PROCESALES A. Inapelabilidad. DENEGATORIA Prórroga del período de exclusividad 1. LINDBERG ARGENTINA SA S/CONCURSO PREVENTIVO S/QUEJA Sala D 11-04-2012 B. Frente a un caso no contemplado, el juez debe resolverlo mediante la aplicación analógica de las normas concebidas para los que sí lo han sido. 1. DÍAZ Y QUIRINI SA S/CONCURSO PREVENTIVO. INCIDENTE DE REVISIÓN (promovido por Quirini, Augusto) – Sala C - 31-05-2012 C. Protección de los acreedores. Propuesta abusiva. 1. TALLERES REUNIDOS ÍTALO ARGENTINO SA S/CONCURSO PREVENTIVO - CÁM. NAC. COM. - SALA F - 24/04/2012 ****************** 2 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba A. PEDIDOS DE QUIEBRA a FIDEICOMISOS. no da lugar a la declaración de quiebra del fideicomiso, sino que tal como lo prevé su régimen regulatorio debería procederse a su liquidación. Cámara Comercial: A. FIDEICOMISO SOUTH LINK LOGISTICS DE QUIEBRA (PROMOVIDO POR EMBAL SYSTEM SRL). 3/04/09 I S/ PEDIDO CONCURSOS: PEDIDO DE QUIEBRA. RESOLUCION DEL JUEZ. RECHAZO. PROCEDENCIA. PATRIMONIO FIDEICOMITIDO. 18.4.2. 1. Procede confirmar la resolución que rechazó un pedido de quiebra con sustento en que la Ley 24522 y sus modificatorias no darían lugar a su formulación con base en obligaciones nacidas de un fideicomiso. La voluntad del legislador ha sido, sin duda, excluir de los sujetos pasibles de ser declarados en quiebra el patrimonio separado conformado por los bienes fideicomitidos. Así las cosas, como consecuencia de la mentada separación patrimonial, los bienes del fiduciario no responden por las obligaciones contraídas en ejecución del fideicomiso, sino que las mismas son satisfechas con los bienes fideicomitidos - art.16, Ley 24441-. Del contexto normativo que rige la especie y, aún cuando -como en el caso- la recurrente alude a su condición de acreedor del fideicomiso, resulta de menester señalar que sin perjuicio de la responsabilidad que eventualmente pudiera caberle al fiduciario (arts. 6° y 7°, LF), de la inoponibilidad y, en su caso, de la anulación de los actos, v.gr., gravámenes realizados en violación de lo normado por el art. 17, LF - arg. art. 2670 in fine, Cód. Civil-, es determinante en la cuestión de que aquí se trata que la insuficiencia de los bienes fideicomitidos para atender tales obligaciones no da lugar a la declaración de quiebra del fideicomiso, sino que tal como lo prevé su régimen regulatorio debería procederse a su liquidación (cfr. arg. Fernandez - Gómez Leo " Tratado Teórico Práctico de Derecho Comercial", T. IV, pág. 228 y ss). 2. Sentado ello y, más allá de opiniones doctrinarias que propician la posibilidad del concursamiento preventivo del patrimonio fideicomitido (GamesEsparza, Fideicomiso y concursos, págs. 139/141), lo cierto es que no puede soslayarse que la ley específica que regula esta materia establece con absoluta claridad que el patrimonio fideicomitido no se halla sujeto al régimen de la Ley Concursal, siendo insusceptible de falencia, se trate de un fideicomiso común o financiero. Míguez - Kölliker Frers. FLS9 Ley Ley Ley Ley 24441: 24441: 24441: 24441: 16. 6. 7. 17.Código Civil: 2670. los artículos 14 y 15 de la ley 24.441, en tanto en el primero de ellos se dispone que "...los bienes fideicomitidos constituyen un patrimonio separado del patrimonio del fiduciario y del fiduciante...", mientras que en el segundo se estatuye que "...los bienes fideicomitidos quedarán exentos de la acción singular y colectiva de los acreedores del fiduciario. Tampoco podrán agredir los bienes fideicomitidos los acreedores del fiduciante la ley 24.441: 16, haciendo referencia al fideicomiso común, establece que "Los bienes del fiduciario no responderán por las obligaciones contraídas en la ejecución del fideicomiso, 3 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba las que sólo serán satisfechas con los bienes fideicomitidos. La insuficiencia de los bienes fideicomitidos para atender a estas obligaciones, no dará lugar a la declaración de su quiebra. En tal supuesto y a falta de otros recursos previstos por el fiduciante o el beneficiario según previsiones contractuales, procederá a su liquidación, la que estará a cargo del fiduciario, quien deberá enajenar los bienes que lo integren y entregará el producido a los acreedores conforme al orden de privilegios previsto para la quiebra; si se tratare de fideicomiso financiero regirán en lo pertinente las normas del artículo 24". En relación al fideicomiso financiero, esa misma ley dispone, para el caso de insuficiencia del patrimonio fideicomitido y salvo estipulación contractual, la citación por el fiduciario a una asamblea de tenedores de títulos de deuda mediante edictos, a fin de que en ella se resuelva sobre las normas de administración y, en su caso, liquidación del patrimonio (ley 24.441:23). RECHAZA PEDIDO DE QUIEBRA PODER JUDICIAL DE LA NACION 090895 - FIDEICOMISO SOUTH LINK LOGISTICS I S/ PEDIDO DE QUIEBRA (DESARROLLO PILAR S.A.) Juzgado Nº 10 - Secretaría Nº 20. EC. Buenos Aires, 24 de noviembre de 2009.1. Desarrollo Pilar S.A. solicitó se decrete la quiebra del Fideicomiso South Link Logistics I, por cuanto sostuvo que el mismo se encontraría en estado de cesación de pagos. 2.1. La ley 24.522: 2 identifica aquellas personas que pueden ser declaradas en concurso e indica, asimismo, que las personas reguladas por las leyes 20.091, 20.321 y 24.241, como así también las excluídas por leyes especiales, no son susceptibles de tal declaración. Por su parte, la ley 24.441: 16, haciendo referencia al fideicomiso común, establece que "Los bienes del fiduciario no responderán por las obligaciones contraídas en la ejecución del fideicomiso, las que sólo serán satisfechas con los bienes fideicomitidos. La insuficiencia de los bienes fideicomitidos para atender a estas obligaciones, no dará lugar a la declaración de su quiebra. En tal supuesto y a falta de otros recursos previstos por el fiduciante o el beneficiario según previsiones contractuales, procederá a su liquidación, la que estará a cargo del fiduciario, quien deberá enajenar los bienes que lo integren y entregará el producido a los acreedores conforme al orden de privilegios previsto para la quiebra; si se tratare de fideicomiso financiero regirán en lo pertinente las normas del artículo 24". En relación al fideicomiso financiero, esa misma ley dispone, para el caso de insuficiencia del patrimonio fideicomitido y salvo estipulación contractual, la citación por el fiduciario a una asamblea de tenedores de títulos de deuda mediante edictos, a fin de que en ella se resuelva sobre las normas de administración y, en su caso, liquidación del patrimonio (ley 24.441:23). Tales soluciones, como bien señala autorizada doctrina, son el correlato de lo dispuesto por los artículos 14 y 15 de la ley 24.441, en tanto en el primero de ellos se dispone que "...los bienes fideicomitidos constituyen un patrimonio separado del patrimonio del fiduciario y del fiduciante...", mientras que en el segundo se estatuye que "...los bienes fideicomitidos quedarán exentos de la acción singular y colectiva de los acreedores del fiduciario. Tampoco podrán agredir los bienes fideicomitidos los acreedores del fiduciante..." (conf. Heredia, "Tratado Exegético de Derecho Concursal", T. 1, pág. 257, Editorial Ábaco de Rodolfo Depalma, Buenos Aires, 2000). 2.2. En esa inteligencia, puede concluirse en el sentido de que para los casos como el presente, la ley 24.441 ofrece soluciones específicas que, en principio, no dan lugar a la aplicación de las concursales previstas por la ley 24.522. "Es evidente que el legislador buscó que el fideicomiso, especialmente destinado a las transacciones comerciales, se alejara de la rigidez y lentitud que caracteriza los concursos preventivos y las quiebras, debido a los avatares y contingencias traumáticas de esa clase de procesos" (Lizoprawski-Kiper, "Tratado de Fideicomiso", pág. 432, Editorial Lexis Nexis Depalma, Buenos Aires, 2003). Y si bien algunos autores sostienen la hipótesis del concurso del patrimonio fideicomitido (Games-Esparza, "Fideicomiso y concursos", pág. 36, Depalma, 1997), lo cierto es que, tal como sostienen otros doctrinarios, nada permitiría inferir tal conclusión (Lisoprawski-Kiper, op. cit., pág. 437; Heredia, op. cit., pág. 257). Máxime cuando la ley 24.522, pudiendo incorporar al fideicomiso al régimen de la falencia, no lo hizo; lo cual no es un dato menor, en tanto la mencionada ley y sus modificatorias son posteriores a la normativa del fideicomiso. 4 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba 2.3. Agrégase por último que la tesis aquí expuesta ha sido conformada por el Superior (CNCom, A, 03/04/2009, "FIdeicomiso South Link Logistics I s/ pedido de quiebra promovido por Embal System SRL") 3. Por lo antes expuesto: (a) Recházase liminarmente el presente pedido de quiebra iniciado por Desarrollo Pilar S.A. contra el Fideicomiso South Link Logistics I ; (b) Firme, comuníquese a la Excma. Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial, a cuyo fin líbrese oficio por secretaría (c) Notifíquese por Secretaría, regítrese y, oportunamente, no exiestiendo sellado pendiente, archívese. HECTOR OSVALDO CHOMER Juez B. COMPETENCIA DEL JUEZ CONCURSAL Ineficacia de pagos realizados por el Fideicomiso de acreencias preconcursales de la fiduciante. CONCURSOS: PRINCIPIOS GENERALES. JUEZ COMPETENTE. PAGO. INEFICACIA. RESTITUCION. JUEZ DE CONCURSO. 2.4. Si en oportunidad de disponerse la apertura del proceso concursal de una obra social se ordenó, con carácter cautelar, la suspensión de aquellos pagos que en un fideicomiso debía realizar el fiduciario referidos a obligaciones de fecha anterior a la presentación en concurso, y posteriormente, frente a la denuncia formulada por la sindicatura en cuanto a que, en violación a la medida cautelar dispuesta, diversos acreedores habían sido parcialmente desinteresados, y el Tribunal declaró ineficaces en los términos de la LCQ: 17, esos pagos; resulta aconsejable que, por razones de conexidad y de economía procesal, el reintegro de esos fondos se efectué en esta órbita concursal, pudiendo el juez del concurso adoptar las medidas procesales que estime permitentes (p. ej., disponer la formación de incidente de restitución en los términos de la LCQ: 280 con intervención de las partes y la sindicatura controlante), lo cual le permitirá tener un íntegro panorama y un cabal conocimiento de lo acontecido con los fondos indebidamente percibidos por diversos acreedores de causa o de título anterior a la presentación en concurso. ..OEXP: Heredia - Vassallo. OBRA SOCIAL BANCARIA ARGENTINA S/ INCIDENTE DE APELACION ART. 250 CPR. 27/05/11 CONCURSO PREVENTIVO S/ Cámara Comercial: D. Ley 24522: 17. Ley 24522: 280. CONCURSOS: EFECTOS DE LA APERTURA. GENERALIDADES. MEDIDAS CAUTELARES. SUSPENSION DE PAGOS. FIDEICOMISO. DESTINO. OBLIGACIONES ANTERIORES. fideicomiso PROCEDENCIA. como instrumento para el pago 4.1. Cabe confirmar la resolución que dispuso con carácter cautelar que el denominado "Fideicomiso Solidaridad" -creado, en el marco del contrato de fideicomiso celebrado entre la obra social concursada (fiduciante) y la entidad fiduciaria, con la totalidad de los fondos mensualmente recaudados por la AFIP y la 5 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba ANSES y concepto que de le corresponden percibir a aportes y contribuciones. tal obra social en efectuados por sus afiliados activos y pasivos y sus empleadores, respectivamente, conforme lo establecido por las leyes 23660, 23661 y el decreto n° 92/95 del PEN-, suspenda el pago de los créditos individualizados en aquellas órdenes de pago que fueran emitidas por obligaciones anteriores a la fecha de presentación en concurso de la citada obra social fiduciante, hasta tanto los titulares de tales créditos se presenten a verificar sus acreencias y se dicte la resolución de verificación prevista por la LCQ: 36; toda vez que. 1. Una vez que un sujeto se concursa preventivamente, todos los flujos de fondos con los que pudiera contar, solamente pueden ser aplicados a dos destinos: 1) al pago íntegro de las deudas posconcursales y a cubrir los gastos operativos que supone la continuación empresaria, para lo cual el deudor concursado no sufre restricción alguna; 2) al pago de las deudas preconcursales en el tiempo y con los límites que resulten de la propuesta de acuerdo preventivo que reciba homologación, encontrándose vedado el concursado para realizar pagos distintos o más amplios, ya que ello importaría alterar la situación de los acreedores por causa o título anterior a la presentación, siendo tales pagos ineficaces (Ley 24522: 16, parte 1º, y 17). 2. Por tanto, el pago de los créditos que pudieran corresponder a proveedores y/o acreedores de causa o título anterior a la presentación de la obra social en concurso preventivo, no podría tener lugar sin violar el régimen imperativo y de orden público del derecho concursal; sin que la existencia del fideicomiso como instrumento para el pago pueda representar una excepción, pues se trata de impedir que la deudora concursada disponga del flujo de fondos futuros para atender el pago de tales deudas preconcursales a través de dicho instrumento por ella creado. 3. Además, la cautela no incide en el patrimonio fideicomitido -que se mantiene separado del patrimonio de la obra social fiduciante y al margen de la agresión de los acreedores de esta, salvo fraude (Ley 24441: 15)- sino que actúa sobre la disponibilidad de los fondos futuros que, solo una vez que se depositan en la Cuenta Fiduciaria, pasan formalmente a integrar dicho patrimonio de titularidad del fiduciario. 4. Así, la suspensión de los pagos de deudas preconcursales ordenada en la instancia anterior tiene, precisamente, ese especial efecto jurídico, y es por ello mismo, o sea, porque los acreedores concursales no tienen derecho sobre el patrimonio fideicomitido, sino sobre la indicada disponibilidad de fondos futuros (que integra el patrimonio de la cesante), que deben verificar sus créditos tal como lo resolvió la juez "a quo". Dieuzeide - Heredia - Vassallo. 6342/10 OBRA SOCIAL BANCARIA ARGENTINA INCIDENTE DE APELACION CPR 250. 20/05/10 S/ Cámara Comercial: D. Ley 23660. Ley 23661. Decreto 92/95. Ley 24522: 36. Ley 24522: 16. Ley 24522: 17. Ley 24441: 15. 6 CONCURSO PREVENTIVO S/ Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba FACULTADES DEL JUEZ A. REGLAS PROCESALES APLICABLES. PRÓRROGA DEL PERÍODO DE EXCLUSIVIDAD INAPELABILIDAD. DENEGATORIA Es inapelable la decisión que desestima la prórroga del período de exclusividad, en virtud de lo dispuesto por el inciso 3) del artículo 273 de la ley de concursos y quiebras. LINDBERG ARGENTINA SA S/CONCURSO PREVENTIVO S/QUEJA - CÁM. NAC. COM. - SALA D - 11/04/2012 Buenos Aires, 11 de abril de 2012 1. La concursada recurre en queja por la denegatoria de la apelación subsidiaria que dedujo en el apartado III de fs. 14 vta., que el juez resolvió con apoyo en lo dispuesto por la LCQ 273:3° (v. fs. 16 vta.). 2. La LCQ 273:3° tiene por finalidad impedir que la celeridad y agilidad de los trámites del proceso universal puedan ser perturbados por apelaciones que dilatan el desarrollo normal de la causa. Por ello, la revisión de grado es de carácter restrictivo y excepcional. Dicha regla es de aplicación en relación a decisiones que abarcan el trámite regular del concurso dictadas en el marco del procedimiento universal, y es típica en esta materia. Teniendo como base esta premisa, conclúyese que la decisión que desestima la prórroga del período de exclusividad resulta inapelable en virtud de lo dispuesto por la normativa precitada (esta Sala, 28.9.06, "Dorato, Ernesto Arturo s/ concurso preventivo"; íd., 22.8.03, "Calera Buenos Aires S.A. s/ concurso preventivo"; Sala A, 15.3.01, "Urawa S.A. s/ concurso preventivo"; Sala B, 27.8.01, "Levy, Rubén Elías s/ concurso preventivo"; íd., 21.6.00, "Corporación Uno S.A. s/ concurso preventivo"; íd., 27.9.00, "Flornu S.A.", entre otros); sin que las presentes actuaciones cuenten con elemento, constancia o información alguna que demuestren que el sub lite configura un supuesto de excepción pasible de una solución distinta. 3. En razón de lo expuesto SE RESUELVE: Rechazar el recurso de queja de fs. 18/24. Remitir este cuadernillo a la anterior instancia para ser agregado a sus antecedentes. Es copia fiel de fs. 26. Gerardo G. Vassallo Juan José Dieuzeide Pablo D. Heredia Fernando M. Pennacca Secretario de Cámara 7 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba B. DÍAZ Y QUIRINI SA S/CONCURSO PREVENTIVO. INCIDENTE DE REVISIÓN (PROMOVIDO POR QUIRINI, AUGUSTO) - CÁM. NAC. COM. - SALA C - 31/05/2012 . De lo dispuesto en el artículo 159 de la ley de concursos y quiebras (LCQ) resulta que, frente a un caso no contemplado, el juez debe resolverlo mediante la aplicación analógica de las normas concebidas para los que sí lo han sido. En la especie, no se halla específicamente previsto el supuesto del socio que presta dinero a la sociedad en las condiciones más arriba descriptas. Pero sí se halla prevista la situación de los socios que hicieron sus aportes a una sociedad accidental o en participación, supuesto en el cual, producida la quiebra del socio gestor, la sociedad se disuelve, con la consecuencia de que esos aportantes -por definición, ocultos- solo pueden cobrar en la aludida quiebra después de que hayan sido cancelados todos los restantes créditos. Así resulta de lo dispuesto en el artículo 151 de la ley de concursos y quiebras, norma de la que se desprende el principio -que es tal (es decir, un principio) dada la extensión que corresponde otorgarle a la luz del citado art. 159- según el cual, quienes financian ocultamente un emprendimiento empresario que fracasa deben ser colocados -en el orden de cobro- después de los acreedores verificados. Buenos Aires, 31 de mayo de 2012 Y VISTOS: I. Viene apelada la sentencia de fs. 192/196 por medio de la cual el señor juez de la anterior instancia rechazó el recurso de revisión instado por el Sr. Quirini contra la sentencia del art. 36 L.C.Q, que había declarado inadmisible su crédito. II. Apeló el incidentista a fs. 197 y sostuvo su recurso con el escrito de fs. 228/235, el que fue contestado por la concursada a fs. 238/239, y por la sindicatura a fs. 243/246. III. 1. De modo preliminar, cabe señalar que, sin perjuicio de las medidas para mejor proveer que pudieran ser dispuestas por el Tribunal, lo cierto es que, cuando el recurso de apelación es concedido en relación como en el caso, no resulta procedente ni la apertura a prueba ni la incorporación de nuevos documentos (arg. art. 275 del código procesal), razón por la cual se desestima la posibilidad de agregar en este estado los instrumentos pretendidos por la recurrente. III. 2. Sobre el fondo de la cuestión, la Sala comparte el criterio del primer sentenciante en cuanto a que el allanamiento formulado por la concursada, no es dirimente en supuestos como el de la especie. Esto es así por cuanto, en el ámbito concursal, ninguna de las opiniones vertidas en el curso del procedimiento es -al menos en principio-, vinculante para el juez. En lo que aquí interesa, la conformación del pasivo concurrente es cuestión que la ley ha confiado al magistrado, otorgándole al efecto facultades inquisitoriales que se reflejan en su posibilidad de decidir con independencia de la posición de las partes, todo lo cual se justifica por la necesidad de proveer a la adecuada custodia de la pluralidad y diversidad de intereses que en el concurso convergen. Las ataduras propias del principio dispositivo dejan paso, entonces, a la aplicación de otras reglas en función de las cuales el magistrado puede rechazar la verificación de un crédito o un privilegio no impugnado, e incluso expresamente reconocido por el deudor. No obstante, si ese es el principio, de ello no se deriva que tal reconocimiento carezca en todos los casos de absoluta aptitud probatoria: no la tiene al modo vinculante que sí posee en los procesos individuales, pero podría tenerla en el concurso si, en función de las circunstancias, dicho reconocimiento del crédito por parte del deudor se hallara corroborado por otros elementos idóneos para acreditar la efectiva existencia de la acreencia en cuestión. Esto es lo que debe entenderse sucedido en el caso. Aquí no sólo la deudora reconoció el crédito de que se trata, sino que el apelante acreditó haber hecho la entrega efectiva del dinero que se alegó prestado a la concursada, lo cual habilita a tener por perfeccionado el contrato respectivo a la luz de lo dispuesto en el art. 2242 del Código Civil. Esa prueba surge del informe proporcionado por el Banco Credicoop Ltdo. a fs. 163, del que resulta que dicho dinero fue efectivamente transferido desde la cuenta del apelante a la de la concursada en los mismos términos, fechas y montos invocados en el escrito inaugural (v fs. 163 y fs. 46/vta pto III). La circunstancia -señalada en la sentencia de grado- de que el ingreso de los fondos en la sociedad no haya podido ser constatado contablemente y se desconozca cuál fue su destino, no es 8 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba elemento suficiente para decidir en sentido diverso al adelantado, dado el específico contexto que atraviesa este concurso. Adviértase, en tal sentido, que la propuesta concordataria se encuentra homologada desde el año 2008, hallándose en su etapa de cumplimiento (según datos obtenidos mediante consulta informática realizada por Secretaría de la Sala), extremo que habilita al Tribunal a considerar diluida la posibilidad de que el crédito del apelante sea ficticio o destinado a constituir falsas mayorías. Tal crédito, por ende, ha de ser admitido con excepción del importe de $ 9.547 que, reconocido por la deudora en el instrumento copiado a fs. 39, habría tenido por causa un pago realizado por el incidentista en el marco de cierto convenio de refinanciación que la concursada habría celebrado con el Banco de la Ciudad de Buenos Aires. Así ha de procederse en este punto pues de los elementos agregados a fs. 78/80 no se infiere que esa suma haya sido efectivamente prestada por el recurrente, de manera tal que el solo reconocimiento de esa deuda por la concursada, resulta insuficiente a los fines pretendidos. III. 3. Así las cosas, corresponde que la Sala se expida en cuanto a la graduación del crédito admitido. Está fuera de cuestión que el prestamista de cuyo crédito se trata es socio de la concursada. Y también lo está que su parte efectuó el desembolso respectivo cuando la sociedad se hallaba ya en estado de insolvencia y él lo sabía. El propio recurrente reconoció haber prestado ese dinero a dicha sociedad cuando ella se encontraba ya endeudada y descapitalizada, por lo que "...sintió que debía auxiliar a la firma de acuerdo a [sus] posibilidades económicas, lo cual es lógico teniendo en cuenta que la concursada es una típica sociedad familiar..." (sic). Pues bien: cualquiera que sea el alcance que se otorgue -y aún cuando se la niegue- a la obligación de los accionistas de dotar a la sociedad que integran de un capital suficiente para cumplir su objeto, parece claro que el socio que, sabiendo que el ente se halla insolvente, se aviene a prestarle dinero en vez de arbitrar los mecanismos para capitalizarlo, no puede quedar en el concurso de la sociedad, en igualdad de condiciones con los demás acreedores. Cuando se verifica -como debe entenderse ocurrido en el caso a la luz del mismo reconocimiento del interesado- un supuesto de infracapitalización formal de la sociedad del que se desprende que, pese a haber perdido su capital de riesgo, la sociedad siguió operando en plaza gracias a los fondos entregados, no a título de aporte, sino en calidad de préstamo por los socios, éstos no pueden aspirar en dicho concurso a disputar derechos a los referidos acreedores. Es decir: si la sociedad ha perdido su capital de riesgo debe ser disuelta (art. 94 inc. 5 LS) o capitalizada (art. 206, misma ley). Con esta aclaración, que no es sino una reiteración: si, sabiendo que el ente se encuentra en tales condiciones, el socio decide prestarle en lugar de aportar a título de capital, tal decisión no podrá, sobrevenido el concurso, servir de mecanismo para frustrar la función de garantía que a la noción de capital resulta inherente. Lo contrario importaría tanto como admitir la posibilidad de trasladar el riesgo comercial propio a terceros, lo cual es inadmisible y justifica que los créditos así nacidos, sólo puedan ser admitidos con el carácter de subordinados. Esa solución -admitida en otros lugares del mundo por la vía de la recalificación de los llamados “préstamos sustitutivos de capital” (ver Manóvil Rafael Mariano, Responsabilidad de los socios por insuficiencia de capital propio [El modelo alemán], en Revista del Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, T. 63, N° 2, XII, 2003) debe entenderse también admitida en nuestro derecho. Así resulta, por lo pronto, de una interpretación sistemática de la ley societaria y sus postulados; ley que, por un lado, instituye la noción de capital social con el sentido y objeto de servir a la protección de los acreedores sociales impidiendo la traslación a éstos de un indebido riesgo (al punto de que supedita la misma existencia de la sociedad a la subsistencia de su capital -rectius: recursos propios; art. 94 inc. 5 LS-); y, por el otro, coloca a los socios en una emblemática situación de subordinación, como se desprende del hecho de que éstos sólo podrán aspirar a obtener el retorno de sus aportes una vez cubierta la totalidad de los créditos que pesan sobre la sociedad (art. 109 LS). Y a igual solución se arriba en el marco de la misma ley concursal. En efecto: de lo dispuesto en el artículo 159 LCQ resulta que, frente a un caso no contemplado, el juez debe resolverlo mediante la aplicación analógica de las normas concebidas para los que sí lo han sido. En la especie, no se halla específicamente previsto el supuesto del socio que presta dinero a la sociedad en las condiciones más arriba descriptas. Pero sí se halla prevista la situación de los socios que hicieron sus aportes a una sociedad accidental o en participación, supuesto en el cual, producida la quiebra del socio gestor, la sociedad se disuelve, con la consecuencia de que esos aportantes -por definición ocultos- sólo pueden cobrar en la aludida quiebra después de que hayan sido cancelados todos los restantes créditos. Así resulta de lo dispuesto en el art. 151 L.C.Q, norma de la que se desprende el principio -que es tal (es decir: un principio) dada la extensión que corresponde otorgarle a la luz del citado art. 159según el cual quienes financian ocultamente un emprendimiento empresario que fracasa, deben ser colocados -en el orden de cobro- después que los acreedores verificados. En tal marco, y dado que el citado artículo 151, al igual que las demás normas previstas en la sección que él integra, sólo marca un estándar o pauta a cuya luz deben ser resueltos los casos que 9 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba no hayan sido objeto de una regulación particular (art. 159), forzoso es concluir que aquél será aplicable cada vez que corresponda determinar el tratamiento a asignar a créditos que, por la función económica que han cumplido, deban ser equiparados al capital. Ello es lo que ha ocurrido en el caso, lo cual conduce a la Sala a admitir el crédito insinuado como subordinado en los términos de la referida norma. III. 4. Finalmente, y respecto de los intereses, serán admitidos los pretendidos por el recurrente en la medida que la tasa pactada (12% anual por todo concepto), no supera la pacíficamente aceptada por este fuero, y con la limitación del art. 19 L.C.Q. IV. Por todo ello SE RESUELVE: a) hacer lugar al recurso de apelación interpuesto y dejar sin efecto la sentencia recurrida; b) Declarar verificado en el concurso preventivo de Díaz Quirini S.A un crédito en favor de Quirini Augusto N., por la suma de $ 192.800, con más los intereses respectivos que deberán ser calculados de acuerdo a la pautas señaladas precedentemente, con carácter subordinado. Las costas de ambas instancias se imponen en el orden causado, atento a las particularidades que exhibe la cuestión debatida. Devuélvase al Juzgado de primera instancia, encomendándose al Sr. Juez de grado que tenga a bien disponer las comunicaciones del caso. Eduardo R. Machin Juan R. Garibotto Julia Villanueva Ante mí: Rafael F. Bruno Es copia del original que corre a fs. 254/256 de los autos de la materia. 10 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba C. TALLERES REUNIDOS ÍTALO ARGENTINO SA S/CONCURSO PREVENTIVO - CÁM. NAC. COM. - SALA F - 24/04/2012 ACUERDO PREVENTIVO. HOMOLOGACIÓN. FACULTADES DEL JUEZ. PROTECCIÓN DE LOS ACREEDORES PROPUESTA ABUSIVA El artículo 52, inciso 4), de la ley de concursos y quiebras se halla orientado a la protección de los acreedores, quienes ya han sido reconocidos como tales y, principalmente, aquellos cuyos créditos se hallan pendientes de incorporación y, más aún, a los que todavía no se han insinuado. Si se tiene en cuenta, entonces, el universo de posibles afectados, cobra sentido la calificación de la actividad jurisdiccional examinada como tutelar preventiva. También adquiere significado la aseveración hecha con relación a que el abuso debe consistir en la producción de algún perjuicio a los acreedores, intencionalmente, con el propósito de infligirles un detrimento patrimonial y su contrapartida, el beneficio consiguiente para el deudor concursado. , adquiere especial relevancia la lectura del memorial de agravios donde se advierte de parte de la deudora una actitud que puede considerarse desdeñosa cuanto menos con respecto a sus acreedores al sostener allí que el escaso pago ofrecido compensa las ganancias que tuvieron en otra época. Esa posición refuerza aún más la abusividad de su propuesta, en tanto parece proponerse una suerte de medio extintivo del pasivo que carece de asidero legal. DISIDENCIA Dra.Tevez : la composición accionaria . Cesión de acciones después del per. Exclusividad. Talleres Reunidos Ítalo Argentino SA s/concurso preventivo Sala F Buenos Aires, 24 de abril de 2012 Y VISTOS: 1.a. Fueron elevados estos autos con motivo de la apelación que interpusiera la concursada respecto de la resolución obrante a fs. 1952/1958 mediante la cual la Sra. Juez de Grado no hizo lugar a la homologación de la propuesta de acuerdo formulada por la deudora, disponiendo hasta tanto quedare firme esa decisión, adoptar como medida para preservar el patrimonio concursal, la intervención de la sociedad en grado de coadministración. El memorial de fs. 1971/1975 fue contestado por la sindicatura a fs. 1986. La Sra. Fiscal de Cámara emitió dictamen a fs. 1995/1997. b. Con motivo de la presentación conjunta por parte de la Unión Obrera Metalúrgica de la República Argentina y la concursada -v.fs. 1998/201- se celebró la audiencia que da cuenta el acta de fs. 2016. Consecuencia de lo que en ese acto expusieran los comparecientes, es que fueron agregados los antecedentes de fs. 2019/2024 y en cuyo mérito, opinó nuevamente la Sra. Fiscal General -v. fs. 2034/2036-. 2. En el contexto descripto, esta Sala habrá de pronunciarse respecto del recurso de apelación que motivó la remisión de las actuaciones a esta Sala, sin dejar de conocer, claro está, los hechos que se invocaron a posteriori. Los agravios de la deudora radican en que: i) la Magistrada debió haber cuestionado la propuesta por abusiva al momento de tomar conocimiento de la misma o cuando concedió la prórroga para obtener las conformidades y no en esta instancia; ii) fue votada favorablemente por el 75% de los acreedores y que respecto de los fiscales, la deudora se adhiere a los planes propuestos por cada uno de los organismos; a partir de ello refiere que la supuesta licuación forzosa sólo alcanzaría al 25% restante de los acreedores; iii) no hay sacrificio por parte de los proveedores pues éstos durante años, merced al alza incontenible de las materias primas y de los bienes intermedios, obtuvieron pingües ganancias aprovisionando a la concursada; en razón de ello ese sacrificio debe ser visto desde una dinámica en la cual aquellos atesoraron una importante ganancia a lo largo del tiempo, la cual unida a la que se encuentra encerrada dentro de la venta que no se les canceló por la presentación en concurso, impide que pueda considerarse, en rigor, que harán sacrificio alguno. 3.a. Es preciso recordar que el juez es hoy parte fundamental en el proceso concursal; no resulta un mero controlador de su corrección formal ya que tiene facultades para evaluar la pertinencia del acuerdo no sólo sobre la base de su conveniencia económica -respecto de la cual los acreedores son, en principio, los mejores árbitros- sino, fundamentalmente, que la propuesta no constituya un abuso a los acreedores que no vean otra forma de procurarse, cuanto menos, un magro dividendo (Sala D, 16.12.86, “Ediciones Mercurio (sociedad de hecho) s/ quiebra”). En esta dirección se orientó la decisión dictada por la colega Sala C en el caso “Línea Vanguard SA” de fecha 4.9.01. En dichas actuaciones, en concordancia con el dictamen de la Sra. Fiscal General, se descartó la interpretación formulada con base en el espíritu de la legislación entonces vigente, según la cual los acreedores serían los únicos que estarían en situación de decidir sobre lo 11 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba que mejor se ajusta a su propio interés o conveniencia sin que los jueces se encuentren habilitados para juzgar sobre esa decisión. Así pues, los magistrados siempre se encuentran facultados -y aún constreñidos- a valorar los principios que informan el orden jurídico en su integridad, porque la legislación concursal no es una isla o un compartimiento estanco, circunstancia que conduce a que deba siempre prevalecer el interés general del comercio, del crédito y de la comunidad en general por sobre el individual de los acreedores o del propio deudor. Síguese de lo expuesto que, no obstante lo que pareciera resultar del texto actual del art. 52 LCQ, el juez no se encuentra obligado, en todos los casos y en forma absoluta e irrestricta, a dictar sentencia homologatoria del acuerdo votado formalmente por las mayorías legales. Ello así toda vez que el magistrado conserva siempre la potestad de realizar un control que trascienda la mera legalidad formal en todos aquellos supuestos en los que el acuerdo pudiera afectar el interés público, atendiendo al ordenamiento jurídico en su totalidad (considerando 5º y sus citas del precedente citado). El texto del art. 52, apartado 4 LCQ, según el criterio de la ley 25.589, impone al juez la obligación de no homologar en ningún caso una propuesta abusiva o en fraude a la ley. En rigor, como advirtió en su momento la mayoría de la doctrina nacional, el juez nunca perdió sus facultades homologatorias desde la ley 11.719 hasta el régimen actual: por ello, no debe homologar el acuerdo cuando se trata de la consumación de un fraude (Julio César Rivera - Daniel Roque Vitolo, Comentario al proyecto de la ley de concursos y quiebras, p. 48; Adolfo A. N. Rouillon; Régimen de Concursos y Quiebras ley 24.522, p. 128; Mauricio Boretto, Las facultades legales del juez concursal con respecto a la homologación de la propuesta de acuerdo preventivo de quita y espera, E.D. 197-210; Héctor Alegría, Nueva reforma a la Ley de Concursos y Quiebras (Ley 25.589), L.L. sup. especial Reformas a la Ley de Concursos (25.589), junio 2002, p. 8; Ricardo S. Prono y Mariano R.Prono, La novísima legislación de Concursos y Quiebras. Algunas consideraciones sobre la Ley n° 25.589, rev. cit., p. 28; Ignacio A. Escuti (h), Los poderes del juez concursal en la ley 24.522, E.D. T. 164-1137; Pablo D. Heredia, Tratado de Derecho Concursal, Ed. Abaco, Año 2000, t. 2 p. 210). En esa línea, varios autores destacaron que aún bajo el régimen originario de la ley 24.522 no era tolerable el abuso del derecho ni el fraude, por lo que el magistrado debía abstenerse de homologar el acuerdo obtenido si el mismo violaba los estándares de los arts. 953 y 1071 del cód. civ. y normas concordantes (Fassi- Gebhardt, Concursos y Quiebras, 6ta. Ed., Astrea, Buenos Aires, 1997, p. 173; García Martínez, Roberto, La homologación del acuerdo preventivo en la nueva ley de concursos, ED 164- 1250; Grispo, Jorge D., "Homologación del concordato y facultades del magistrado", ED 197-761; Lorente, Javier, Ley de concursos y quiebras, Gowa, Buenos Aires, 2000 p. 558; Mosso, Guillermo El juez concursal ante la homologación del acuerdo preventivo ED 176969; Monti, José L., El concordato como negocio jurídico. Sobre la homologación del acuerdo y las atribuciones del juez del concurso, LL 2000-F-1089, entre muchos otros). Estas facultades del juez fueron también reivindicadas por la jurisprudencia al rechazar en no pocos casos la homologación de acuerdos abusivos (Com. D, 19.12.95, "Banco Extrader SA s/quiebra", L.L.1997-E-247; Com. C, 27-10-95, "La Naviera Línea Arg. de Navegación Marítima y Fluvial s/Quiebra" BJCNCom. N° 5 año 1995; Com. B, 3.9.96, "Coviello, Francisca M. s/Quiebra", Rev. de Derecho Privado y Comunitario n° 13, secció n jurisprudencia, Concursos, pág. 411; Com. A, 9.4.97, "Btesh, José David s/Quiebra", E.D. 175-172; Tercer Juzgado de Procesos Concursales y Registros, Mendoza, 25.9.98, "Frannino Industrias Metalúrgicas SAACIF, p/ Conc, prev.", Rev. de Derecho Privado y Comunitario n° 20, sección jurisp rudencia, Concursos, p. 385; Primer Juzgado de Procesos Concursales, 22/5/97; "Martín S.A. Pedro y José", con nota de Ariel A. Dasso, La primera homologación de un cramdown, JA 1997-IV-162.; Tercer Juzgado de Procesos Concursales y Registro de Mendoza, 22.3.02, "Pedro López e Hijos S.A. p/concurso preventivo", expte. N° 5759, Rev. de Derecho Privado y Comunitario", 2002-1 Emergencia y Pesificación, p. 700; Com. B, 30-401, "Invermar SA s/concurso preventivo", Rev. de Derecho Privado y Comunitario n° 2001-3, sección jurisprudencia, área Concursos, p. 654). Por lo demás, y como es sabido, la reforma de la ley 25.589 hizo explícitas aquéllas facultades, disponiendo en el art. 52 inc. 4 de la ley 24.522 que "En ningún caso el juez homologará una propuesta abusiva o en fraude a la ley" (.Julio César Rivera, Instituciones de Derecho Concursal, T°. I, p. 478; Roberto García Martínez, La homologación del acuerdo preventivo en la nueva ley de concursos, E.D. T. 164-1249; Pablo C. Barbieri, Las facultades judiciales ante la homologación del acuerdo preventivo. Implicancias de la Ley 25.589, L.L. sup. especial Reformas a la Ley de Concursos (25.589), junio 2002, p. 41) Procede, así, ingresar en el análisis de la propuesta efectuando un control que trascienda la mera legalidad formal, pues ello viene impuesto por los principios que fluyen de los arts. 953 y 1071 del cód. civil y del hecho de que la ley concursal no es un compartimento estanco separado del resto del ordenamiento jurídico (Juzgado Comercial n° 13, 14.9.2005, "Micro Ómnibus Norte S.A. MONSA- s/acuerdo preventivo extrajudicial" -firme-). La solución contraria, por lo demás, importaría renunciar al cumplimiento de deberes propios de la función jurisdiccional. Como ha sido dicho, le cabe siempre al Poder Judicial decidir si la solución consensuada a que se arribara con las conformidades de la mayoría, lo es sin los vicios descalificantes establecidos por criterios éticos y de equidad (Porcelli, Luis A., "No homologación del acuerdo preventivo. Propuesta abusiva o en fraude a la ley", L.L. 2002-D Sec. Doctrina, p. 979); y que tal atribución legal debe ser ejercida sea a instancia de parte o aún de oficio (Rubín, Miguel 12 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba Eduardo, Las nuevas atribuciones del juez del concurso respecto del acuerdo preventivo según la ley 25.589. Un hito en la evolución del Derecho Concursal Argentino, E.D. 198-964). De allí que procede, en síntesis, en uso de las facultades legales que ostenta el juez al momento de decidir sobre la homologación, juzgar la presencia o ausencia de "...todos los elementos que hacen a la corrección procedimental y la concreción de los valores superiores del ordenamiento jurídico..." (Alegría, Héctor: "Facultades del juez e interpretación de las normas sobre acuerdo preventivo extrajudicial", Suplemento especial de la revista jurídica argentina La Ley noviembre 2004, p. 61). La terminología que emplea el art. 52:4 de la LCQ, a la larga, constituye un estándar cuya valoración deberá realizarse en el caso concreto (Junyent Bas, Francisco y Molina Sandoval Carlos “El informe general del síndico y las nuevas facultades homologatorias del juez concursal. Reflexiones en torno a las modificaciones introducidas por la ley 25589”, ED 198:676) Y esa facultad conduce a estimar la relatividad de la imposición de homologación que prevén los incisos 1. y 2. a). del art. 52 LCQ que deberán pasar, a criterio del juez, por el tamiz que contempla el inciso 4º. Al emitir pronunciamiento sobre la homologación del acuerdo, en todos los casos y aún en ausencia de cuestionamiento sobre el particular, el juez se encuentra constreñido a evaluar si la propuesta conlleva abuso o fraude, situación frente a la que deberá denegar la homologación. La noción de ejercicio antifuncional (o disfuncional) de los derechos ha sido objeto de profundos estudios de la doctrina nacional y, a partir de esa elaboración, fecundamente aplicada por los tribunales de todas las instancias. Truffat ha ofrecido, a partir del pensamiento de Alfredo Orgaz, una definición del abuso del derecho, comprensiva de los perfiles que han sido asignados al instituto: existencia y ejercicio de una conducta permitida dentro del derecho positivo en virtud de una expresa disposición legal que contraría los fines de la norma o las reglas de la moral, la buena fe o las buenas costumbres (E. Daniel Truffat, “Algunas pautas para el empleo de la facultad de no homologar un concordato presuntamente abusivo (LC:52, inc 4)”, ED 198:762.). Conforme el criterio aludido el ejercicio antifuncional que configura el abuso puede presentarse tanto frente a la licuación de los pasivos concursales, como en caso de carencia de adecuada proporción entre la solución preventiva que la ley dispensa al insolvente y el sacrificio patrimonial que este ofrece (e impone) a sus acreedores. Y aunque conceptualmente puede distinguirse entre ambos institutos, parece que en algún punto el abuso y el fraude a la ley se confunden, se vinculan tan estrechamente que no es posible escindirlos. Esta afirmación, quedará aclarada seguidamente. Los precedentes jurisprudenciales y las opiniones de la doctrina resultan contestes en punto a que la consideración de una propuesta como fraudulenta o abusiva es cuestión que debe apreciarse con arreglo a las circunstancias de cada caso y, particularmente, atendiendo a las distintas órbitas de intereses comprometidos. Queda claro que esa apreciación debe tener, por lo tanto, un contenido concreto. En otros términos: que alguno o algunos sujetos deben resultar merecedores de la protección que la ley dispensa, en tanto se hallen expuestos a experimentar daños generados por el obrar abusivo o fraudulento de su deudor concursado. No es posible admitir, en esa dirección, la mera alegación de ejercicio abusivo de un derecho o configuración de fraude sin un perjuicio cierto o potencial, pues la actividad jurisdiccional cumple en esta materia también una función correctiva del desvío en forma preventiva. Corresponde al juez anticipar los efectos perjudiciales del fraude o abuso, sea actuando oficiosamente o a requerimiento de cualquiera de los legitimados por el art. 50 LCQ, sin desconocer la facultad que asiste al Ministerio Público (art. 276 LCQ). Pues bien: el art. 52:4º se halla orientado a la protección de los acreedores, quienes ya han sido reconocidos como tales y, principalmente, aquellos cuyos créditos se hallan pendientes de incorporación y, más aún, los que todavía no se han insinuado. Si se tiene en cuenta entonces el universo de posibles afectados, cobra sentido la calificación de la actividad jurisdiccional que venimos examinando como tutelar preventiva. Y también adquiere significado la aseveración hecha con relación a que el abuso debe consistir en la producción de algún perjuicio a los acreedores, intencionalmente, con el propósito de infligirles un detrimento patrimonial y su contrapartida, el beneficio consiguiente para el deudor concursado. En este punto, estímase necesario hacer un paréntesis en las consideraciones generales. En efecto, en relación con lo expuesto, adquiere especial relevancia la lectura del memorial de agravios donde se advierte de parte de la deudora una actitud que puede considerarse desdeñosa cuanto menos con respecto a sus acreedores al sostener allí que el escaso pago ofrecido compensa las ganancias que tuvieron en otra época. Esa posición refuerza aún más la abusividad de su propuesta, en tanto parece proponerse una suerte de medio extintivo del pasivo que carece de asidero legal. Retomando el análisis de la cuestión, señálase que en oportunidad de requerirse la homologación de la propuesta de acuerdo que ha logrado las mayorías legales el juez tiene básicamente dos posibilidades: disponer la homologación o rechazarla, con fundamento en lo dispuesto por el art. 52:4º LCQ. No obstante, se ha recurrido también a otra solución que en algunos supuestos se revela como más práctica: la denominada tercera vía. En esta situación el juez puede: (i) reformular la propuesta por aplicación analógica, según el caso, de la disposición del art. 52:2º b) del ordenamiento concursal, o (ii) fijar un plazo para que esa reformulación sea hecha por la concursada fijando un contenido que estime mínimamente aceptable para superar la calificación de abusiva que juzgó con anterioridad. 13 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba 3.b. En el sub lite no obstante las conformidades acompañadas y la propuesta formulada por UOMRA y OSUOMRA -acompañada de la aquiescencia de la concursada-, estima esta Sala que no cabe conferir esa tercera opción. Es que los términos en que sido concebida no encuentran respaldo jurídico; ello más allá de que penden de clarificar cuestiones de variada índole, las que por otro lado exceden el conocimiento de esta Sala en esta instancia. Así enfocada la cuestión, señálase a la deudora que la propuesta dirigida a los acreedores quirografarios, si bien aceptada por el 62,07% de los acreedores y el 82,63% del capital computando a la UOMRA y OSUOMRA en razón de las conformidades traídas a esta Sala (fs. 1998/2001)-, y que consiste en abonar los créditos verificados con una quita del 60%, en el plazo de cinco años a contar desde el vencimiento del plazo de espera de cuatro (4) años y en diez (10) cuotas semestrales; con interes a la Tasa Libor incrementada en 0,5% anual es inadmisible . Tal decisión, reitérase no implica desatender los intereses de los trabajadores, que es a favor de quienes estarían dirigidas las presentaciones referidas en el punto 1.b. de esta resolución. En efecto, más allá que la forma de participación de aquellos a través de la constitución de una sociedad anónima no encuentra respaldo legislativo en la ley de la materia, lo aquí decidido permite la apertura del proceso de cramdown, y en tal sentido la Ley 24.522, con la modificación introducida por la reforma de la Ley 26.684, en los arts. 48 y 48 bis faculta a los trabajadores, a través de la "cooperativas de trabajo", aún en formación, a participar de dicho proceso en las condiciones que allí se establece. Consecuentemente y a modo de síntesis, evaluadas las circunstancias del caso y meritando el análisis efectuado por la Sra. Fiscal ante esta Cámara a fs. 1995/1997 cabe concluir que la propuesta ofrecida vulnera el orden público económico, porque daña la protección del crédito. Y la homologación del acuerdo que implica desvirtuar la eficacia de los medios compulsivos con que cuentan los acreedores para hacer valer sus derechos, va más allá de su particular interés, para convertirse en una cuestión que afecta al interés general (véanse también, los fundamentos del dictamen de fs. 2034/6, en lo pertinente). 4. En base a ello, SE RESUELVE: 1. (i) desestimar el recurso de apelación interpuesto y (ii) confirmar la resolución adoptada en la anterior instancia en todo cuanto fuera motivo de agravio. 2. Encomendar a la Sra. Juez de Grado disponga conforme a derecho -LCQ: 48 y 48 bisadoptando además las medidas que estime necesarias en orden a los antecedentes acompañados en autos. Notifíquese, a la Sra. Fiscal General en su despacho y devuélvase a la anterior instancia. Alejandra N. Tevez (en disidencia) Juan Manuel Ojea Quintana Rafael F. Barreiro Ante mí: Silvina D. M. Vanoli Es copia del original que corre a fs. 2037/2041 de los autos de la materia. Silvina D.M. Vanoli Prosecretaria de Cámara Disidencia de la Doctora Alejandra N. Tevez 1. Resulta prematuro, en el presente estadio procedimental, pronunciarse respecto del recurso de apelación que motivó la remisión de las actuaciones a esta Sala. De allí que no procede expedirse ahora en torno de la abusividad de la propuesta concordataria, ni disponer la apertura del procedimiento previsto en los arts. 48 y 48 bis de la LCQ, como postulan mis distinguidos colegas. Ello así, en la medida en que no se ha adoptado ninguna decisión en torno de la validez o invalidez de la transferencia de acciones de la concursada, denunciada tras la elevación del expediente a este Tribunal (v. fs. 2009/11). Lo que corresponde es, en mi parecer -y sin que ello implique en modo alguno desatender los intereses de los trabajadores, a favor de quienes se habría efectuado aquélla presentación-, disponer la devolución de los autos a primera instancia a efectos de que la 'a quo' dicte resolución sobre la pretendida venta; lo que posibilitará, luego, que este Tribunal se aboque a la solución integral del caso. 2. Estimo apropiado efectuar una breve reseña de lo aquí acontecido e introducir algunas consideraciones que juzgo dirimentes para concluir del modo anticipado. 14 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba Veamos. a. Tras examinar la propuesta de acuerdo preventivo, la juez de grado dispuso: (i) no homologarla, por considerarla abusiva; ii) diferir la apertura del mecanismo previsto en el art. 48 de la LCQ para el momento en que se encontrase firme o ejecutoriada su decisión; y iii) decretar la intervención de la sociedad concursada en grado de coadministración. En la misma resolución, que obra en fs. 1952/8, dejó en claro que la concursada no podría realizar ningún acto sin contar con la previa conformidad del coadministrador (a la sazón, la sindicatura; v. fs. 1957), medida que fue inscripta en la Inspección General de Justicia según se desprende de fs. 1967/68. b. Posteriormente, la Unión Obrera Metalúrgica - a través de Marcelo Urban- denunció la administración de la empresa a cargo de los trabajadores y solicitó la aprobación de la propuesta concordataria para posibilitar la continuación de la explotación (v. fs. 1991/93) c. Encontrándose ya los autos en esta Alzada a efectos de resolver el recurso interpuesto por la concursada contra la decisión de no homologación de la propuesta, se presentaron a fs. 2009/11 aquel sindicato y la concursada señalando: i) que “hemos superado y zanjado toda diferencia y vicisitudes o circunstancias atinentes al personal y a la organización gremial pues las acciones de la sociedad concursada han sido transferidas en su totalidad a los trabajadores, quienes actualmente administran y llevan adelante su gerenciamiento” (sic.;v. fs. 2009 vta; y ii) requiriendo “la homologación del concurso, toda vez que la propuesta presentada es la única posible para que pueda ser pagada por los trabajadores” (sic.; v. fs. 2011). d. La concursada acompañó, a fs. 2019/20 y fs. 2021/23 y en cumplimiento del compromiso asumido en la audiencia celebrada en este Tribunal (v.fs. 2012 y 2016), los antecedentes documentales relativos a los acuerdos denunciados. Así: i) A fs. 2021/3 corre el contrato de cesión de acciones cuyo objeto fue la venta del paquete accionario de Talleres Reunidos Italo Argentino S.A. -en adelante, TRIA S.A.-. El acto aparece celebrado entre: a) Elizabeth Cristina Vasmulaky y Graciela Beatriz Ojeda -en su carácter de vendedoras de las acciones de TRIA S.A.-; y b) Talleres Recuperados Industria Argentina S.A. en formación y Néstor Horacio Acuña -señalo que este último denunció que actuaba por sí y en representación de los trabajadores ocupantes de la empresa recuperada-, en su carácter de compradores. De acuerdo con esta denuncia de venta, “Talleres Recuperados Industria Argentina S.A. (en formación)”, habría adquirido el 95 % de las acciones que componen TRIA S.A. y Néstor Horacio Acuña el 5% restante, por un precio de pesos novecientos ($900). ii) A fs. 2019/20 luce agregado contrato de comodato suscripto entre: a) Thrace Group S.A., en su carácter de titular del inmueble asiento de la planta fabril de la concursada; y b) “Carlos Humberto Cisneros…en su carácter de presidente de la empresa Talleres Recuperados Italo Argentino S.A. (en formación) y Néstor Horacio Acuña…. por sí y en representación de los obreros de la empresa recuperada, que también firman de conformidad…”. Adviértase que tal instrumento, datado el 08.08.11, aparece también suscripto por la concursada, quien reconoció que el comodatario resultaba continuador de la actividad desarrollada por TRIA S.A.; y que la dación del inmueble de propiedad de Thrace Group SA en comodato lo era con destino específico al uso de la planta fabril. 3. En tales condiciones, en el análisis que compete realizar a esta Sala cobra particular relevancia la mutación del contexto fáctico del caso tras la interposición del recurso de apelación. Obsérvese que: i) la venta del paquete accionario de TRIA S.A. aparece efectuada fuera del período de exclusividad y en el interregno temporal en el que pendía de resolver respecto de la abusividad de la propuesta; y ii) TRIA S.A. ha convalidado el comodato efectuado sobre el inmueble asiento de la planta fabril, siendo que no se conoce si tuvo en ello participación alguna el coadministrador designado. Repárese que el presunto traspaso de las acciones de la convocataria se operó, reitero, cuando el expediente se encontraba ya en este Tribunal a efectos de decidir sobre la apelación incoada; y que el hecho de disponer ahora el inicio del cramdown implicará la apertura de un procedimiento cuyo objeto es, precisamente, la adquisición de la totalidad de un paquete accionario cuya titularidad no aparece definida. 4. Señalo, a mayor abundamiento, que el complejo panorama exhibido en el expediente se evidencia a través del contenido del informe general que presentara la sindicatura en su momento. En efecto, en fs. 1616/36 señaló aquella que, en caso de decretarse la quiebra, la transferencia del inmueble fabril sito en La Matanza que realizó TRIA S.A. a favor de Thrace Group S.A. el 30.04.03 en pago de una deuda contraída con anterioridad, sería atacable por vía de la acción de simulación y, subsidiariamente, por la acción revocatoria o pauliana (v.fs. 1632 vta.). Y añadió, en punto al negocio jurídico en cuestión y en lo que aquí interesa destacar, lo siguiente: i) existen préstamos del exterior recibidos en el año 2002, ii) en los libros diarios e inventarios y balances, no se menciona el nombre del acreedor, iii) no existe comprobante de la debida transferencia internacional, iv) de las registraciones contables surge que fueron retirados por Mauricio Bosi, presidente de la concursada, v) no fueron afectados al giro económico de la empresa, vi) Thrace Group S.A. es una sociedad “off shore” que aparece otorgando un préstamo a la concursada sin garantía, vii) luego de la transferencia TRIA S.A. siguió ocupando el inmueble y lo hace en la actualidad, viii) no hay pago de alquiler por ese concepto, ni se tuvo acceso a otra documentación que justifique la ocupación del inmueble, ix) Mauricio Bosi es socio y presidente del directorio de Thrace Group S.A., x) esta sociedad y la concursada tienen el mismo domicilio , xi) el monto de la deuda cancelada a través de la transmisión del inmueble asciende a pesos setecientos veintinueve 15 Procesos Concursales - Subcomisión Jurisprudencia - cpcecaba mil ciento veinticinco ($729.125), cuando su valor estimado oscilaría entre U$S 800.000 y US$ 1.200.000 (v. fs. 1634 vta.). 5. En tales condiciones, y oída la Sra. Fiscal de Cámara, procede: a) diferir el conocimiento del recurso interpuesto por la concursada respecto de la resolución obrante a fs. 1952/8; y b) disponer la devolución de los autos a primera instancia a efectos de que la 'a quo' se pronuncie sobre la venta del paquete accionario denunciada en fs. 2009/11; extremo que posibilitará, luego, que este Tribunal se avoque a la solución del caso. Encomiéndasele, a tal fin, su oportuna elevación. Alejandra N. Tevez Ante mí: Silvina D. M. Vanoli Es copia del original que corre a fs. 2041/2042vta de los autos de la materia. Silvina D. M. Vanoli Prosecretaria de Cámara 16