Núm. 1.A, Febrero 2015 Safari Safari Africa Naturaleza, fotografía y viajes La Gran Migración del Serengueti Ngorongoro Crater Lodge El Rinoceronte Blanco Los Karo 1 Editorial Sumario Africa 4 Noticias 6 Memorias de África La Gran Migración del Serengueti. Vida y muerte en la sabana africana. E Texto y fotografías: Román Hereter 20 Lodge’s Ngorongoro Crater Lodge. 26 Vida Salvaje El Rinoceronte Blanco 30 Tendet Camp Olonana Sanctuary. 34 Grupos humanos Los Karo. 42 Resort’s Maritim Hotel Mauritius. 48 Out of Africa Las Islas Galápagos. 56 Vida Salvaje Orangutanes de Borneo 60 Mundos de hielo Groenlandia. 80 82 84 86 Cráter de Ngorongoro, Tanzania Masai Mara, Kenia Delta del río Omo, Etiopía Isla Mauricio World El “renacimiento” del mundo. Texto y fotografías: Laura Pascual Glaciares inmensos y poblaciones diminutas. Texto y fotografías: Richard MacKinley Fotografía y video Moda y complementos Libros recomendados Caleidoscopio El doctor Livingstone.... supongo 2 8 l dominio de la naturaleza por encima de todo. La insignificancia del hombre ante unos escenarios grandiosos. La evolución a un ritmo pausado. Esto es África. El gran continente de desiertos y selvas, de pequeños poblados y ciudades que no quieren perder el tren del siglo XXI. Rutas todavía inexploradas, altas montañas coronadas por nieves eternas, cálidas llanuras repletas de animales, costas suaves bañadas por las templadas aguas del Índico. La “llamada de África” actúa como un imán entre las gentes que realizan un safari fotográfico por primera vez y sienten las emociones que supone contemplar la vida salvaje en plena libertad. Alojados bien en lodges, perfectamente integrados en el entorno, en campamentos de tiendas de lujo con todo el sabor colonial o en campamentos móviles, podemos sentir palpitar junto a los poros de la piel, toda la grandeza de África. Y bajo el cielo estrellado, lejos de la contaminación lumínica, comentar alrededor de un fuego los instantes más placenteros del día. Porque en África, todavía es posible la aventura. Pero safari en lengua swahili significa “viaje”,por lo que en esta revista que acaba de nacer, también extenderemos nuestros horizontes hacia otros continentes. Las Islas Galápagos y Groenlandia, completarán la segunda parte que aparecerá en abril, de esta primera cuyo reportaje central es la Gran Migración del Serengueti. Esperamos que les gusten y que podamos compartir la gran atracción de la vida salvaje en plena libertad. Román Hereter Edita: RHC&T, SL C/ Berenguer Bertrán, n. 13, 08790, Gelida, Barcelona www.romanhereter.com [email protected] Director: Román Hereter Diseño gráfico y Maquetación: Berta Antón de Vez Febrero 2015 Distribución: Multienvío a empresas del sector turístico, del sector de la fotografía, asociaciones fotográficas, asociaciones de amigos de los animales, clubs de viajeros de España y América Latina, y a todas las personas que nos lo han solicitado individualmente. www.revistasafari.blogspot.com.es 3 Noticias News La feria turística Indaba se celebrará del 9 al 11 de mayo en Durban Indaba constituye uno de los mayores eventos turísticos profesionales de África y atrae a visitantes profesionales y medios de comunicación de múltiples países del mundo. Recientemente se ha anunciado que será una feria de tres días, en la línea de las últimas las tendencias mundiales, respetando los horarios ocupados de los compradores y expositores. África está disfrutando de un crecimiento del turismo receptor al alza de un siete por ciento anual. Indaba 2015 tendrá lugar en el Centro Internacional de Convenciones de Durban del 9 al 11 de mayo. Censo de animales salvajes por satélite Conocer el tamaño de las poblaciones de animales silvestres es de vital importancia para su gestión y conservación. Los métodos tradicionales, tales como el censo sobre el terreno o la fotografía aérea, a menudo molestan a los animales, además de ser un trabajo intensivo y caro. Contar animales utilizando imágenes de satélite parece ser una alternativa lógica, pero no es tan simple. Esto es en parte debido a que las nubes y la vegetación pueden ocultar los animales. Determinar qué píxeles en una imagen son en realidad animales también puede ser un asunto complicado. A pesar de estas dificultades, investigadores de la Universidad de Twente (Holanda) lo han demostrado en la sabana abierta del parque nacional de Masai Mara en Kenia. Los resultados de su investigación han sido publicados en PLoS ONE. Gracias a imágenes de satélite con una resolución muy alta, ahora es posible llevar a cabo un recuento bastante preciso de las poblaciones de animales. Delta del Okavango, Patrimonio de la Humanidad El delta del río Okavango se ha convertido en el lugar número 1.000 de la Lista del Patrimonio Mundial. El primero fue Islas Galápagos (Ecuador), en 1978. El delta del Okavango se sitúa al noroeste de Botswana y está formado por una planicie de pantanos permanentes y praderas que se inundan de manera estacional. Se trata de un complejo de zonas húmedas prácticamente intacto. Es uno de los pocos sistemas de deltas interiores del mundo que carece de desembocadura al mar. Una de las características excepcionales del delta del Okavango estriba en que las crecidas anuales 4 tienen lugar durante la estación seca, propiciando que sus especies vegetales y animales hayan sincronizado su ritmo biológico con las inundaciones y lluvias anuales. Estudio sobre la aceleración del guepardo El guepardo es el animal terrestre más rápido del mundo. Capaz de alcanzar los 29 metros por segundo, muy por encima de los caballos (19), los galgos (18) y, por supuesto, los seres humanos (12,35 record mundial de 100 metros lisos). Durante mucho tiempo se ha concluido que dicha velocidad permite al felino ser un cazador implacable, pero una investigación del Royal Veterinary College de Londres publicada en la revista Nature ha demostrado que su estrategia se basa en una impresionante capacidad de aceleración y la posibilidad de cambiar de dirección en un instante. No importa que la víctima huya desesperada a derecha e izquierda, el guepardo reaccionará con una potencia descomunal. El equipo, dirigido por el investigador Alan Wilson, ha estado estudiando durante 17 meses 367 carreras, la mayoría en pleno ejercicio de caza, de cinco ejemplares en su hábitat natural en Bostwana, utilizando un nuevo collar de seguimiento diseñado por ellos mismos que combina un GPS con precisa tecnología para medir la dinámica locomotora del guepardo. Los depredadores capturan sobre todo impalas, que componen la mayor parte de su dieta y las carreras partían desde la más absoluta quietud o desde movimientos lentos, cuando el animal estaba ya al acecho, y recorrían una media de 173 metros, aunque algunas superaban los 500. La impresionante capacidad de maniobra, la mayor de un mamífero terrestre, duplica la de los caballos de polo y supera la de los galgos en el inicio de una carrera. Los investigadores creen que está relacionada con la estructura del esqueleto y los músculos del felino, además de con sus garras no retráctiles que garantizan un agarre considerable, mejor que el de cualquier neumático. De todos modos los guepardos no siempre tuvieron éxito ya que sólo terminaron con el estómago lleno en una de cada cuatro intentonas. Los gorilas adolescentes saben desmontar trampas La Fundación Dian Fossey ha publicado dos fotografías en las que se puede ver a dos gorilas jóvenes desmontando unas trampas de furtivos. Se sabía que algunos de los adultos de mayor edad, a los que se denomina espaldas plateadas, eran capaces de desmontar estas trampas, pero no se tenían pruebas fotográficas. A pesar de que estas trampas suponen un importante peligro para los gorilas en esta región, ellos no son el objetivo de los cazadores furtivos. Las trampas están diseñadas para capturar antílopes y animales similares. Incluso cuando capturan simios de pequeño tamaño, que podrían transportar y tratar de vender, los dejan morir atrapados. Los gorilas de montaña, Gorilla beringei beringei, están en una situación de serio peligro de extinción. Su situación se califica como “en peligro crítico”, que supone el mayor nivel de amenaza que puede tener una especie que viva en libertad. 5 La Gran Migración del Serengueti Memorias de África Vida y muerte en la sabana africana C ada año, la migración del Serengueti constituye uno de los mayores espectáculos de la naturaleza, cuando ñus y cebras se desplazan en busca de pastos a través de 40.000 kilómetros cuadrados de terreno situados en el norte de Tanzania y el sur de Kenia en lo que constituye el mayor ecosistema migratorio de África. Los felinos siguen a los ungulados para asegurarse la caza mientras los cocodrilos esperan el cruce de los ríos. 6 7 E n Tanzania, la ruta principal desde el Ngorongoro hasta el enclave de Seronera, en el corazón del Serengueti, discurre por una carretera de gravilla a través de la llanura, con algun kopje, o pequeña elevación cubierta con grandes bloques de granito que sostiene algun que otro árbol. Representan buenos lugares para observar todo el entorno, que ocupa una extensión de 14.763 kilómetros cuadrados y limita con Masai Mara en la vecina Kenia. Uno de los mejores momentos para visitar el Serengueti es a finales de mayo, cuando finaliza la época de lluvias y durante los meses de junio y julio, cuando cebras y ñus se dirigen hacia el norte en zigzag comiendo cuantos pastos encuentran y atrayendo a la mayoría de predadores que viven en esta época el periodo de caza mas fácil de todo el año. El dominio de los leones, la velocidad de los guepardos o la belleza del leopardo que suele descansar protegido en las ramas de los árboles, hace las delicias de los amantes de la vida salvaje. Las extensas llanuras del Serengueti... Constituyen un territorio virgen de unos 30.000 km cuadrados que abarca parte de Tanzania y Kenia 8 9 El ñu tiene un aspecto desgarbado que recuerda a un extraño cruce entre vaquilla y antílope, con crines largas y desgreñadas y cola empenechada de caballo; posee largas barbas que cuelgan a lo largo de todo el cuello desde el mentón hasta el pecho, y patas muy largas de pezuñas afiladas. A pesar de su apariencia, es uno de los herbívoros que mejor prospera en África y forma los rebaños más numerosos de la Tierra. En el Parque Nacional de Serengueti, en Tanzania, más de un millón de estos ejemplares migran con los cambios de estaciones en busca de hierba fresca. Su evidente parecido con el ganado vacuno le da su nombre inglés de "wildebeest", que podría traducirse por "Ganado salvaje". Mientras que el nombre español de "Ñu" es onomatopéyico, al reproducir el sonido de los mugidos del animal.Las hembras alumbran al 10 principio de la estación de las lluvias y las crías pueden correr a los pocos minutos de nacer. Los ñues son antílopes sociales; se reúnen en grupos familiares de hembras con sus crías y jóvenes, mientras que los machos adultos se reúnen en grupos aparte. No obstante, esos pequeños grupos tienden a asociarse entre si y con los de otras especies de ungulados de la sabana, como las cebras, de forma que se producen grandes aglomeraciones de individuos. En contra de lo que pueda parecer, no se produce rivalidad por la comida entre las diferentes especies, ya que las cebras prefieren las hierbas altas y fibrosas. Los ñues además, se aprovechan del olfato de las cebras para descubrir a los predadores. Durante la época de celo, que coincide con la época de las grandes migraciones, los machos adul- tos mantienen parcelas de terreno en donde intentan mantener a un grupo de hembras con las que aparearse. Esto les obliga a estar en constante movimiento para poder reunirlas y agruparlas, y al mismo tiempo defenderlas de otros machos que buscan un harem del que apropiarse. El constante trasiego de individuos ayuda a evitar la consanguinidad y a seleccionar a los ejemplares más fuertes y resistentes para la reproducción. El ñu azul es presa de muchos carnívoros. Licaones, hienas, los guepardos machos, leopardos, leones y los cocodrilos suelen ser los depredadores más comunes de los ñues, y de sus crías muchos más chacales, servales, guepardos, etc. Tanto machos como hembras están armados con peligrosos cuernos ganchudos, pero no suelen emplearlos para defenderse, prefiriendo la huida a la carrera para escapar de sus cazadores. Los búfalos... Dentro de los “cinco grandes”, son animales herviíboros que pueden provocar estampidas. Macho enfermo y embarrado 11 Dudas ante pasar el río L Licaones, hienas, guepardos machos, leopardos, leones y cocodrilos, suelen ser los depredadores de los ñues 12 os cocodrilos suelen atacar en la migración de los ñues. Para poder migrar deben cruzar frecuentemente ríos habitados por cocodrilos del Nilo. Muy pocos ñues mueren por ataques directos de los cocodrilos; la gran mayoría de las muertes se producen al cruzar los ríos, debido al apelotonamiento de los ñues por los lugares donde no pueden pasar, y mueren agotados, aplastados ó empujados, o bien llevados por las corrientes, pues sus largas patas no son aptas para baldear cursos de agua. Los ñues son conscientes de que al cruzar los grandes ríos africanos es cuando más en peligro se encuentran, y llegan incluso a esperar días congregándose alrededor de las ori- lla antes de que uno de ellos se decida por fin a cruzar. Cuando eso ocurre, el resto de los ñues se abalanza detrás de sus congéneres produciéndose las peligrosas aglomeraciones que provocan la muerte de muchos de ellos. Otras especies de ungulados que migran junto a ellos, como pasa con las cebras, también hacen lo mismo pero no se producen tantas bajas entre ellos. El estruendo producido por un millón de pezuñas hace retumbar el suelo. Una enorme masa de animales jadeantes avanza precipitadamente, levantando una roja polvareda. Esta manada de mamíferos de largas y delgadas patas galopa por un ondulado paisaje de valles y colinas, cruzando extensas praderas y vadeando ríos y arroyos. Avanza como una gran ola y deja a su paso inmensas franjas de hierba pisoteada. Esta ruidosa estampida constituye uno de los mayores espectáculos naturales de la Tierra: la gran migración de los ñus. El suelo de las extensas llanuras del Serengueti está cubierto por una fértil capa de tierra volcánica, que crea las condiciones ideales para que crezcan abundantes pastos. Además, cuenta con bosques de acacias y sabanas pobladas de árboles espinosos que proporcionan follaje a los elefantes. Manadas de jirafas recorren con elegancia la sabana, dando largas y lentas zancadas. En el Serengueti abundan los leones, que holgazanean a la sombra de los árboles y los arbustos en las horas de más calor mientras esperan a que la tarde refresque para salir de caza. 13 Domino de guepardos E l guepardo encuentra en estas praderas el entorno perfecto para sus carreras. Su esbelto cuerpo se difumina mientras, veloz como el rayo, persigue a sus presas por las planicies. En verdad, es un espectáculo deslumbrante contemplar el ecosistema del Serengueti, un auténtico paraíso para la fauna. Pero son las inmensas manadas de ñus las que protagonizan una de las mayores maravillas del mundo animal. Los ñus emigran en grandes grupos a través del Serengueti. Las lluvias son la principal razón por la que se desplazan. Estas precipitaciones se rigen por patrones climáticos cíclicos, de tal forma que a lo largo del año siempre está lloviendo en algún lugar de las extensas llanuras. Los ñus necesitan beber todos los días y requieren un suministro constante de pasto para alimentarse. Mientras haya alimento y agua disponibles, permanecen en el lugar. Pero a medida que avanza la estación seca, la hierba se marchita y las fuentes de agua se evaporan. Los rebaños de ñus no pueden quedarse a esperar a que lleguen las lluvias: deben ir en su busca. Dondequiera que llueva, enseguida se transforman las secas planicies. En unos cuantos días, los brotes verdes se abren camino hacia la superficie, y se produce un repentino y abundante crecimiento de hierba. Estas tiernas briznas rebosan de 14 nutrientes y humedad: una poderosa atracción para los ñus. Estos animales poseen la habilidad de detectar las precipitaciones, aun a grandes distancias. No se sabe a ciencia cierta cómo perciben que está lloviendo en otra región del Se rengueti: si es porque ven las abultadas y elevadas nubes a lo lejos o por el olor a humedad en el aire seco. En cualquier caso, las manadas deben emigrar para sobrevivir. ¡Y vaya si lo hacen! Durante miles de años, el ser humano apenas estorbó la migración de los ñus. Sin embargo, en la actualidad, el hombre constituye su mayor amenaza. En décadas recientes, los gobiernos de Tanzania y Kenia se han esforzado por proteger a la fauna de las llanuras del Serengueti. La migración es un fenómeno relativamente reciente. Antes de la década de los 60, las marchas estacionales fueron observadas por el Dr. Bernhard Grzimek, quien fue el pri- 15 Gran presencia de leones solitarios y familias enteras 16 mero en describir un patrón definido en los movimientos migratorios. La población de ñúes se disparó en los 60 y 70, desde unos 250.000 a los actuales 1,5 millones, convirtiendo la migración en un fenómeno masivo que ocuparía un puesto de honor en una lista de las maravillas naturales del mundo. Mientras, el nativo pueblo Maasai continúa criando su ganado en competición directa con lo que llaman “el ganado salvaje”, al que consideran una calamidad, ya que transmite enfermedades a sus animales y envenena las aguas con sus placentas. Durante la estación húmeda, el Serengueti es un lugar agradable para vivir. La hierba abunda en las llanuras meridionales y en el área de con- servación de Ngorongoro, donde los animales encuentran un refugio para pastar y parir a sus terneros. Desde finales de enero hasta mediados de marzo, a lo largo de un periodo de seis semanas, 400.000 ñúes ven su primera luz. Muchos no tendrán ocasión de cumplir su destino de caminantes, ya que serán apresados por hienas y chacales poco después de nacer. Los supervivientes disponen del tiempo justo para fortalecer sus patas: la marcha comienza en abril. Para entonces, las lluvias han terminado en el sur del Serengeti y las planicies están secas. Los grandes rebaños se reúnen y afrontan la larga caminata hacia el norte y el oeste. Leones al acecho L a solemne procesión no viajará sola: una pléyade de carnívoros seguirá de cerca, principalmente hienas y leones, mientras los escuadrones de buitres sobrevuelan el desfile. Miles de animales débiles o enfermos terminarán devorados durante la marcha, y sólo uno de cada tres terneros verá de nuevo el Serengueti. A finales de mayo, los rebaños han abandonado el Corredor Oeste para tomar las llanuras, sotos y arboledas del norte del Serengueti, donde agotan las praderas olisqueando las lluvias que caen más al norte, al otro lado de la frontera humana, en Masai Mara. Los pastos frescos, tiernos y ricos en sales minerales son el cebo irresistible para el ganado salvaje, que finalmente invade la re- 17 serva kenyata entre finales de junio y principios de julio. Las tropas procedentes del sur se encuentran aquí con otro contingente migratorio: los rebaños de ñúes residentes en la región de Masai Mara. Estos animales, que suman 100.000, habitan las colinas y llanuras de Loita, al nordeste, hasta que la estación seca trae los días duros y es tiempo de buscar las verdes riberas del Mara. A lo largo del mes de julio, los rebaños cruzan el Sand River, el río de arena, un afluente seco del Mara que a grandes rasgos sigue la línea fronteriza entre Kenya y Tanzania. El desfile ocupa entonces el sector oriental de Masai Mara, en el área del Keekorok Lodge. El cruce del río Mara L a marcha continúa hacia el oeste, conduciendo a los rebaños al mayor reto de su expedición: cruzar el río Mara y frecuentemente su afluente, el Talek. Para entonces, las lluvias en la cordillera del Mau, donde nace el Mara, han alimentado el cauce que en esta época es abundante. Las empinadas riberas están pobladas por cocodrilos que toman el sol inmóviles, esperando su banquete anual. Los rebaños se reúnen en los puntos apropiados y vagan excitados, sus gruñidos elevándose en el aire. Eventualmente, un ejemplar asume el mando y se aproxima al borde, oteando la orilla opuesta para analizar 18 la presencia de una posible amenaza al otro lado. Cuando finalmente se sumerge en la corriente, esto parece remolcar al resto de la manada. Más animales le siguen en fila india a través del río, mientras los rezagados se lanzan hacia la corriente hasta que la retaguardia empuja a las tropas a una frenética carrera que termina con algunos animales pisoteados hasta morir, tumbados de lado sobre el lecho del río. Desde julio hasta octubre, la imagen de los rebaños surcando las llanuras es una de las más hermosas que el visitante puede contemplar en Masai Mara. Las grandes manadas pueblan las praderas mientras recorremos las carreteras y pistas de la reserva, y cualquier atalaya ofrece el magnífico espectáculo de las largas columnas de animales cortando el paisaje en distintas direcciones. 19 Ngorongoro Crater S Lodge LODGE’S u distribución recuerda la de un tradicional pueblo africano de Tanzania, pero con los lujos y la sofisticación occidentales. Lo constituyen tres pequeños pueblos con 10 cabañas privadas en las que tanto los muros como las camas son de menga y los suelos son de parqué de mokoro. Además de las casitas privadas, el lodge cuenta con una construcción independiente donde se sirven las comidas y que actúa como punto de encuentro para la conversación, la lectura o los juegos de mesa. Construido bajo la influencia de la elegancia italiana pero con el capital y espíritu de la Conservation Corporation Africa, hizo falta un año y 450 trabajadores tanzanos para dar por finalizado el proyecto. La influencia de la isla vecina de Zanzíbar, donde la artesanía india se entremezcla con la de influencia árabe, es evidente tanto en la decoración como en las piezas de mobiliario, con sillas y mesas de menga. Propias de la artesanía local son las lámparas con hilos de cuero trenzados por los masais. La inspira- ción inglesa y oriental queda patente en las bañeras y jarrones de Médicis. El refinamiento del servicio del Ngorongoro Crater Lodge contrasta con lo salvaje y primitivo del entorno. La elaboración de las comidas corre a cargo del cheff, que fusiona productos locales como los plátanos, cebollas, judías verdes, nueces, arroz y ensaladas, con las últimas tendencias culinarias europeas. Ngorongoro Crater Lodge está situado en lo alto de un inmenso parque natural a 2.286 metros de altitud, entre las montañas del Kilimanjaro y el volcán Ngorongoro. 20 21 Inmensidad del cráter E l lodge representa el lugar idóneo como base de operaciones para descender al interior del cráter, donde cabría entera la ciudad de París. Se trata de un inmenso cráter volcánico de 20 kilómetros de diámetro formado por paredes de 600 metros de altura. Se originó hace dos millones y medio de años, lo que en términos geológicos resulta más bien poco. Pudo haber rivalizado con el Kilimanjaro en altura, pero sus chimeneas se llenaron de roca sólida y la lava se fue extendiendo por otras zonas. A medida que dicha lava se iba depositando, se desarrollaron grietas circulares y el cono se hundió hacia dentro para dar lugar a la gran caldera. Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1978, a sido comparado con el Arca de Noé o el Jardín del Edén. Cuando, procedente del Lago Manyara se asciende por su ladera exterior, la temperatura va descendiendo y la vegetación se hace cada vez más exuberante. La niebla acaricia las copas de los árboles y los sonidos de los primates rompen el silencio reinante. Cuando se alcanza el perímetro superior, cuyo borde varía entre los 3.000 y 4.000 metros de altura sobre el nivel del mar, uno se encuentra ante una de las grandes maravillas del planeta. El lago Magadi se extiende en el interior del cráter y a su alrededor manadas de búfalos y ñus pastan a sus anchas en este pequeño mundo aislado y relativamente poco afectado por la presión humana. Desde lo alto hay que emplear prismáticos para ver las manadas. 22 En el interior del cráter cabría entera la ciudad de París Descenso y fauna E l viajero que llega por primera vez al borde del cráter, todavía no es consciente de lo que hay en el interior de la gran caldera, ni de que son necesarios 45 minutos en todo terreno para descender hasta ella. Ni que posiblemente al día siguiente recorrerá intensamente sus senderos para observar los leones y leopardos que representan los grandes predadores del habitat y los rinocerontes, que conjuntamente con estos últimos, resultan los animales más difíciles de avistar. Porque flamencos, cebras, elefantes, impalas, hipopótamos, gacelas y otros muchos, se sucederán frecuentemente en este escenario único del que generalmente nunca salen. Un Arca de Noé aislada que nos da la justa medida de 23 El cráter del Ngorongoro es un paraíso para los amantes de los animales cómo debía ser el continente africano antes de la presión humana. Quizás algo muy parecido al paraíso, donde la única ley que rige es la de la perpetuación de las especies. El conocido ecologista Bernhard Grizimek, uno de los más decididos pioneros en la defensa de la causa de la vida salvaje en Africa oriental, mani- festó que el cráter era el zoo más grande del mundo y un gigantesco anfiteatro natural acondicionado perfectamente para poder observar los movimientos de grandes manadas y para estudiar especies tan esquivas como el rinoceronte y el antílope klipspringer, uno de los animales que mejor trepan por las rocas. Dos tercios del cráter están cubiertos de hierba corta de sabana, constituyendo un magnífico campo de pastos para las cebras, los rinocerontes negros y los ñúes de la región. En el cráter hay también bosques de acacias, cuyas flores, apretadamente arracimadas, atraen a babuinos y elefantes. Los flamencos y otras aves acuáticas frecuentan a su vez el alcalino lago situado en el centro del cráter y en las marismas de Munge y de Gorgor viven numerosas colonias de hipopótamos. Finalmente, aunque el cráter del Ngorongoro no resulta el hábitat más propicio para el león, en la relativamente reducida población de estos animales que hay en el lugar figura un grupo de magníficos machos de hermosa y excepcional melena negra. Bernhard Grizimerk: “el cráter es el zoo más grande del mundo” 24 25 J Rinoceronte blanco unto con los elefantes y los hipopótamos, los rinocerontes representan una forma de vida que en tiempos pasados fue mucho más abundante: la de los herbívoros gigantes. El nombre de rinoceronte viene derivado de los típicos cuernos de los que dispone en el hocico, no teniendo un núcleo óseo como la de los cuernos de los bovinos, ovinos y antílopes, sino que consiste en una mera agregación de fibra y queratinas situadas en una zona endurecida del cráneo. El cuerno no es de hueso Se apoyan en unas patas cortas y robustas para soportar el enorme peso de sus cuerpos. Los tres dedos de cada pie dan a sus huellas el característico aspecto de As de trébol Acusada joroba 26 El rinoceronte blanco dispone en la nuca de una acusada joroba que contiene el ligamento para soportar el peso de su cabeza, con un cráneo alargado y labios anchos para pastar las hierbas que prefiere: las cortas. Los rinocerontes tienen una visión deficiente y son incapaces de descubrir a una persona inmóvil a más de treinta metros de distancia. Sus ojos están situados a cada lado de la cabeza, por lo que para ver frontalmente, miran primero con un ojo y después con el otro. Por el contrario su oído es fino, con orejas que se mueven para captar los más Ojos en los laterales Tienen una visión deficiente Cuando quieren ver frontalmente, mirany primero con un ojo después con el otro 27 El olfato es el sentido en el que más cofían. El volumen de sus confuctos olfativos es superior al de su cerebro leves sonidos. Sin embargo, es el olfato en lo que más confían. El volumen de los conductos olfativos en el hocico supera el del cerebro. El animal es manso e inofensivo por naturaleza y se asusta con facilidad a pesar de su gran corpulencia. Todos los rinocerontes son herbívoros precisando una gran ingestión diaria de alimentos para sustentar su enorme volumen. Pueden tolerar contenidos relativamente altos de fibra en su dieta, pero prefieren plantas más nutritivas cuando las hay disponibles. Beben casi a diario, aunque en África pueden sobrevivir hasta cuatro o cinco días sin visitar ríos o estanques. Acostumbran a revolcarse hasta envolverse en una capa de barro, que sirve básicamente para protegerlos contra las picaduras de las moscas, ya que a pesar del grosor de su piel, los vasos sanguíneos se encuentran inmediatamente debajo de la delgada capa exterior. Mantienen densidades locales por encima de los 5 animales por kilómetro cuadrado. Las crías nacen muy pequeñas, con unos 65 kilos, sólo el cuatro por ciento del peso de la madre. Los machos alcanzan la capacidad de procrear tras los siete años, pero generalmente lo hacen a los diez cuando pueden reivindicar sus primeros territorios. El mayor número de nacimientos se sitúa entre el fin de la estación lluviosa y mediados Todos los rinocerontes son herbívoros 28 de la estación seca. El rinoceronte suele ser solitario, aunque hay asociación entre la madre y su cría menor, que concluye con el nacimiento de la siguiente. A veces los animales inmaduros pueden formar grupos más numerosos, hasta de siete individuos. En ocasiones las hembras se prodigan en contactos amistosos frotándose las narices. Con la llegada de las armas de fuego a África, el rinoceronte blanco se encontró al borde de la extinción a fines del siglo XIX, debido al incremento del valor atribuido a su cuerno, utilizado como afrodisíaco en algunos lugares del norte de la India y sobre todo en China y otros países vecinos del Extremo Oriente, aunque los éxitos que se le atribuyen son, probablemente, única y exclusivamente de índole psicológica. Así mismo, el hecho de que sus cuernos sean utilizados para hacer los mangos de las “jambias”, o dagas llevadas por los yemenitas del norte como símbolo de su rango, es también responsable de su caza furtiva. En los últimos años se han reintroducido con éxito ejemplares de rinocerontes blancos en diversos parques nacionales aumentando su población. Con la llegada de las armas de fuego a África, el rinoveronte blanco se encontró al borde de la extinción a finales del siglo XIX debido al alto valor de su cuerno La capa de barro protege de las mo les scas 29 Sanctuary Olonana TENDET CAMP Sanctuary Olonana es un campamento de catorce tiendas de campaña de lujo situado en un tramo privado del río Mara, en el corazón de la más famosa reserva de Kenia: Masai Mara. 30 C onstruido a orillas del río Mara, las catorce tiendas son muy cómodas y espaciosas, con suelos de parquet, camas con dosel y terrazas privadas con vistas al río, lo que constituye un lugar perfecto donde los huéspedes pueden relajarse y contemplar como los hipopótamos se revuelcan en el agua. También hay dos suites de “luna de miel”, cada una con duchas al aire libre. Este pequeño, lujoso y exclusivo campamento fue construido de forma sostenible, por lo que ha sido galardonado con el premio de oro por parte del Ecoturismo Kenia, que se otorga a los que muestran innovaciones respetuosas con el medio ambiente, respetan a las personas y culturas locales y promueven la buena gobernanza ambiental. Un lugar de ensueño donde se pueden realizar “game drives”, visitas culturales, cenas en plena sabana, vuelos panorámicos y paseos en globo. Durante la anual migración de ñus, parte de la acción sucede a las puertas del campamento. Posee espaciosas áreas comunes, biblioteca, piscina y la posibilidad de realizar un tratamiento muy especial mediante la experiencia de los remedios tradicionales africanos junto a terapias marinas francesas en el mini- spa. El campamento también cuenta con una pequeña tienda de regalos. Su jefe de cocina Big John ofrece, entre sus platos, favoritos la ensalada orgánica con verduras recién recogidas directamente del huerto. Desde la puerta del campamenro se puede apreciar la migración de los ñus 31 Puestas del sol medida que el safari de la tarde llega a su fin, es el momento para disfrutar de la puesta de sol en un punto elegido especialmente con vistas a las llanuras de Mara, donde se sirven bebidas mientras se disfruta de la belleza del ocaso del día viendo el cambio de colores de las llanuras salpicadas de acacias y como se transforma el mundo en cuestión de minutos, disfrutando de la calidez del fuego, y comentando las experiencias del día con la espectacular puesta de sol en el horizonte. A elegante en medio de la sabana africana. A medida que el sol desaparece el fuego ilumina el entorno, mientras la mesa luce sofisticada y elegante como en los mejores restaurantes con arreglos de flores silvestres que adornan los almidonados manteles. Las velas parpadean en la oscuridad, arrojando luces doradas sobre el mantel mientras los agradables y sonrientes camareros sirven una deliciosa cena. Posteriormente, lo mejor es retirarse a la calidez de la hoguera donde se sirven brandies y licores a medida que se absorbe la paz y la belleza de una noche africana. Ágapes en la sabana Conexiones en avioneta E s posible tomar un desayuno de picnic o almorzar en plena sabana, pero también resulta espectacular disfrutar durante el atardecer de una cena al aire libre, lo que se suele denominar “bush dinner”. Un lugar privado y aislado se prepara para una cena 32 Si se viaja por carretera, el campamento está, pasando por el Valle del Rift, a aproximadamente seis horas desde Nairobi. H ay conexiones diarias con el aeropuerto Wilson de Nairobi en vuelos de 45 minutos de duración. También hay un vuelo programado de Samburu a Mara y vuelos regulares a la costa, además de la posibilidad de efectuar vuelos charter privados. 33 Los Karo de Etiopía GRUPOS HUMANOS L a riqueza del planeta reside en su variedad étnica. Formas distintas de entender la vida. Maneras de pensar diferentes. Algunas sociedades pretenden imponer sus pautas de conducta mientras otras están en franca recesión, rozando la aniquilación. Pero a pesar de la occidentalización galopante, a pesar del bombardeo constante por medio de los medios de comunicación, hay múltiples grupos humanos que viven aferrados a sus propias tradiciones. Algunos por convicción, otros por desconocimiento, unos cuantos por la lejanía o por no representar mercados apetecibles para las multinacionales del consumo. Existen algunas tribus que todavía mantienen su forma de vida ancestral. Sin duda cuesta mucho llegar a ellas, por lo que el turismo todavía no las ha desvirtuado. En la selva amázonica, en la selva ecuatorial africana, en el sur de Etiopía, en el norte de Kenia, en el corazón de Borneo, en las tierras altas de Papúa-Nueva Guinea. Es la prehistoria en el siglo XXI. 34 35 Tres poblados en franca recesión en el sur de Etiopía A 36 lgunos lingüistas consideran a la lengua karo como un dialecto de la lengua de sus vecinos, los Hamer. Según su tradición oral, provienen de la región montañosa residencia de los Hamer, de donde salieron en tiempos de una gran sequía, en busca de pastos para su ganado que moría de hambre. Así llegaron hasta las orillas del río Omo donde se establecieron. Pero más tarde, la abundancia de la mosca tse-tse en la región, acabó con sus rebaños viéndose obligados a dedicarse a la agricultura para subsistir. La voracidad de las abundantes termitas existentes en la región, suele obligar a los Karo a reconstruir constantemente sus viviendas, hasta varias veces al año. 37 L 38 as autoridades gubernamentales llevan tiempo intentando erradicar la costumbre del abandono de los recién nacidos antes del matrimonio o la de aquellos niños y niñas con defectos en su crecimiento, abandonados por considerar que traerán la desgracia a la comunidad. Esta es sin duda una de las causas de su reducido número, circunscrito a solo tres aldeas. Dan un gran importancia a la ornamentación corporal. 39 40 41 Maritim Hotel Mauritius RESORT’S O Isla Mauricio ofrece playas de arenas blancas, aguas límpidas y transparentes, bosques de palmeras extendidos por el litoral donde se encuentra el Maritim Hotel Mauritius, un lujoso resort de playa enmarcado por 25 hectáreas de verde jardín tropical y flanqueado por el Océano Índico. 42 riginalmente abierto en diciembre de 1990 y renovado en 2009, el Maritim Hotel Mauritius tiene vistas a la encantadora “Tortuga Bay” y presenta una mezcla perfecta de la arquitectura tropical y colonial que ofrece un magnífico marco para unas vacaciones sofisticadas y a la vez relajantes, gracias a la multitud de instalaciones deportivas y de ocio disponibles. La buena gastronomía, su ubicación y entorno, y la flexibilidad para satisfacer las necesidades de los huéspedes, son bien valorados por los clientes que se alojan en algunas de las 215 habitaciones que van desde 34 hasta 160 metros cuadrados de tamaño, incluyendo 18 suites de entre 80 y 160 metros cuadrados. Entre ellas destaca la suite de “luna de miel” con una terraza de 50 metros cuadrados y su propio jacuzzi. Opciones gastronómicas E l restaurante a la carta Château Mon Désir está integrado dentro de un antiguo escondite de pira- tas conocido como las ruinas de Balaclava con impresionantes vistas sobre el río Citron y Turtle Bay. La arquitectura colonial del restaurante y el diseño de sus interiores es un homenaje al pasado de la isla donde los comensales se trasladan a la época de los barones del azúcar europeos y sus casas solariegas. Situado justo en la playa, el Beach 43 Restaurant La Marée prepara aperitivos y comidas deliciosas, siendo un lugar ideal para una cena romántica mientras se contempla la puesta del sol. 3500 metros cuadrados de Spa E l Tropical Flower Spa ofrece un oasis de bienestar con una superficie de 3.500 metros cuadrados, acompañados del chapoteo de las cascadas y el canto de los pájaros tropicales que constituyen el telón de fondo de los tratamientos terapéuticos y aplicaciones cosméticas. Todas las preparaciones de masajes, cremas y máscaras se realizan con flores tropicales, plantas y aceites naturales de la región que se mezclan de acuerdo con los resultados del análisis de la piel. La instalación cuenta con un total de 12 estaciones de tratamiento distribuidas en seis cabinas individuales, dos cabinas dobles y dos suites nupciales. Además , hay un pabellón de yoga , pilates y masajes secos , una peluquería , una zona de tranquilidad detrás de la cascada, un jacuzzi, 44 una sauna, un baño turco y un baño de pies Kneipp. Deportes por doquier L os huéspedes disponen así mismo de un centro de fitness, 3 pistas de tenis con iluminación, un campo de golf de 9 hoyos en el propio hotel, y pueden practicar esquí acuático, vela, windsurf, tiro al arco y múltiples deportes más, además de realizar recorridos en barcas con fondo de cristal. La escuela de buceo en el Maritim Hotel Mauritius es atendida por profesionales cualificados y enseña a los huéspedes y no huéspedes de lo que se necesita para un buceo seguro. El hotel tiene así mismo su propio centro ecuestre con 12 caballos y ponis, una pequeña granja de animales, así como tortugas gigantes. Practicar snorkeling frente a la playa del mismo hotel y realizar un recorrido en helicóptero para disfrutar de los paisajes de la isla, son actividades altamente recomendables. 45 Paisajes y gentes M auricio reúne todos los requisitos y ha sabido controlar su oferta hotelera, ofreciendo un producto de calidad que satisface a los visitantes que recibe. Unos clientes que disfrutan del confort y que disponen de todo tipo de actividades para evitar el aburrimiento. Diversidad de deportes náuticos, espectáculos nocturnos y juegos de animación, se ofrecen diariamente en la mayoría de los hoteles isle- 46 ños, sin representar un gasto adicional para sus huéspedes. La isla tiene impresionantes paisajes, una población multiétnica, multicultural y multireligiosa, amable y de fácil conversación, lugares sorprendentes y caminos sugestivos. Criollos del continente africano, indios, chinos y también europeos configuran, conjuntamente con el lógico mestizaje, el perfil humano isleño. Animistas, budistas, cristianos, hinduistas y musulmanes se respetan mutuamente sin abandonar los preceptos de sus respectivas creencias. En total, un millón y medio de personas conforman un pequeño mundo donde conviven diversas etnias y religiones en admirable tolerancia. Ninguna comunidad pretende obtener la hegemonía, probablemente porque ninguna tiene el derecho de reclamarla. La isla Mauricio en general y el Matitim Hotel Mauritius en particular constituyen una magnífica opción después de varios días de safari. 47 Próxima aparición Abril 2015 48