03AteUrg7389into00 9/10/08 14:54 Página 1 Atención urgente Tratamiento de las intoxicaciones más frecuentes en atención primaria Magdalena Canals Aracil Médico de Familia. Centro de Salud Las Calesas. Madrid. España. Actuación inmediata La intoxicación se define como la presencia de síntomas y signos nocivos relacionados con la exposición a distintas sustancias, de forma intencional o accidental. La mayoría de las intoxicaciones son accidentales y generalmente están producidas por una única sustancia, sobre todo alcohol (50%) o fármacos. Los psicofármacos (benzodiacepinas, antidepresivos) son los más habituales. Las drogas de abuso (cocaína y opioides, etc.) también son responsables de numerosas intoxicaciones. Diagnóstico Se basa fundamentalmente en la anamnesis. Debemos preguntar por el tipo de sustancia, el momento de la ingestión, la vía y la cantidad ingerida y los antecedentes del paciente. Si hay dudas sobre las características del producto se puede consultar con el Instituto Nacional de Toxicología (teléfono 915620420; http://www.mju.es/toxicologia/). La exploración física puede ayudarnos a sospechar el tóxico ingerido, pues se distinguen distintos síndromes clínicos causados por diferentes tóxicos (tabla I). Se debe valorar siempre el nivel de conciencia (escala de Glasgow) y la estabilidad hemodinámica (presión arterial, frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria y permeabilidad de la vía aérea). En función de los hallazgos pueden solicitarse pruebas complementarias, que nunca deben demorar el inicio del tratamiento: – Analítica: hemograma, coagulación, bioquímica (transaminasas, función renal, perfil cardíaco o muscular en función del tóxico involucrado). – Gasometría arterial basal y/o oximetría de pulso. – Electrocardiograma. – Radiología de tórax. 88 JANO 17-23 DE OCTUBRE DE 2008. N.º 1.711 • www.jano.es – Análisis toxicológico de sangre y orina, y si se realiza lavado gástrico, debe incluirse el contenido. Las pruebas de detección rápida de los tóxicos más habituales pueden tardar hasta 6 h, por lo que no se debe esperar a tenerlos disponibles para iniciar el tratamiento. Tratamiento En la figura 1 se describe un algoritmo de manejo extrahospitalario de las intoxicaciones. Se basa en la secuencia ABCDE para prevenir la parada cardíaca mientras se produce la eliminación del tóxico. Medidas de soporte vital – Control de la vía aérea y respiración: apertura y permeabilidad de la vía aérea mediante cánula orofaríngea (Guedel). Si no hay respiración espontánea debe realizarse ventilación instrumental con la mayor concentración de oxígeno posible. Intubar si la puntuación en la escala de Glasgow es inferior a 8, hay parada respiratoria, necesidad de grandes suplementos de oxígeno (intoxicación por CO2) y en casos de lavado gástrico en pacientes con disminución del nivel de conciencia o ausencia de reflejo de vómito. – Asegurar la circulación: la hipotensión suele responder al aporte de fluidos, y sólo ocasionalmente precisa fármacos inotrópicos. – Valorar el nivel de conciencia. En caso de depresión del sistema nervioso central (SNC), si desconocemos el origen de la intoxicación, se administra un cóctel de tiamina (100 mg en bolo intravenoso [i.v.]), naloxona (0,4 mg i.v. y repetir cada 2-3 min hasta conseguir respuesta o máximo de 10 mg) y suero glucosado al 50%. – Si se produce una parada cardiorrespiratoria, se debe realizar soporte vital básico y avanzado. Prevención de la absorción del tóxico Varían en función de la vía de administración del tóxico: Vía ocular Lavados con agua o suero fisiológico (20 min mínimo) oculares. Inhalación Administrar oxígeno en concentraciones elevadas (Ventimask al 50-90%). 03AteUrg7389into00 9/10/08 14:54 Página 2 Atención urgente Tabla I. Tratamiento de las intoxicaciones más frecuentes en atención primaria M. Canals Aracil Síndromes causados por tóxicos Síndrome Causa Pulso/TA Conciencia Pupilas Temperatura Otras Adrenérgico Anfetaminas Cocaína Teofilina Simpaticomiméticos Broncodilatadores IMAO ++/++ Agitación Psicosis Dilatadas Baja Diaforesis IAM Hemorragia cerebral Arritmias Colinérgico Fosfatos orgánicos Fisostigmina Insecticidas-carbamato Organofosforados -/- Agitación Confusión Inconsciencia Contraídas Diaforesis Hipersalivación Hipersecreción bronquial Asma Incontinencia urinaria Convulsiones Anticolinérgico Antidepresivos tricíclicos Antihistamínicos Antiparkinsonianos Fenotiacinas Ciclobenzaprina Plantas/setas ++/++ Agitación Confusión Dilatadas Elevada Sequedad de piel y mucosas Retención urinaria Fiebre Opioide Heroína Opio Analgésicos Antidiarreicos Antiespasmódicos gastrointestinales Sin efecto Similar a la intoxicación etílica Inconsciencia Muy contraídas Serotoninérgico Antidepresivos Meclobamida Selegilina Triptanos Tramadol Dextrometorfano Anfetaminas Cocaína Sedante Alcohol Barbitúricos Benzodiacepinas Bromuro Hidrocarburos Anticonvulsivantes Agitación Confusión Inconsciencia Sin efecto o -/- Fallo respiratorio Fiebre Mioclonias Temblor Diarrea Rigidez muscular Similar a la intoxicación etílica Confusión Inconsciencia TA: tensión arterial; IAM: infarto agudo de miocardio; IMAO: inhibidores de la monoaminooxidasa. Dérmica Retirar la ropa y enjuagar la piel con agua, luego jabón y agua durante 30 min. Gástrica Es la más habitual. Se dispone básicamente de tres posibilidades, aunque actualmente el carbón activado es el agente de primera elección en la mayor parte de las situaciones. – Inducción del vómito con jarabe de ipecacuana: está indicado en el domicilio del paciente, en caso de intoxicaciones leves, y si se administra inmediatamente después de la ingestión. La dosis es de 30 ml vía oral en adultos y 15 ml en niños hasta 12 años. Se puede repetir a los 20 min. Puede retrasar la acción del carbón activado o de antídotos administrados por vía oral. Está contraindicado en las intoxicaciones por agentes corrosivos, derivados del petróleo, antieméticos y en la alteración del nivel de conciencia o riesgo de crisis convulsivas. – Carbón activado: puede usarse antes y después del lavado gástrico, pero habitualmente será el único que se utilice. La efectividad disminuye hasta el 36% si se administra a los 60 min de la ingesta del tóxico. La dosis es de 1-2 g/kg diluidos en 8 ml de diluyente (sorbitol o zumo) por cada gramo. Se debe asociar protección de la vía aérea para evitar aspiraciones en pacientes con alteración del nivel de conciencia o si aparecen convulsiones. Está contraindicado en las intoxicaciones por agentes corrosivos. No es útil en intoxicaciones por alcoholes, hidrocarburados, organofosforados, carbamatos, ácidos, potasio, diclorodifeniltricloroetano (DDT), álcalis, hierro y litio. – Lavado gástrico: de elección en las intoxicaciones graves, potencialmente mortales y si se realiza en un plazo máximo de 60 min tras la ingestión. En caso de antidepresivos tricíclicos, opiodes y salicilatos puede efectuarse hasta 12 h después. Se realiza con una sonda naso u orogástrica aspirando el contenido y lavando con suero fisiológico, máximo 3 l. Siempre se debe observar la existencia de restos del tóxico. Está contraindicado si hay deterioro del nivel de conciencia o pacientes agresivos si antes no se intuba, ingestión de cáusticos y de hidrocarburos, en las intoxicaciones etílicas agudas, si existen alteraciones anatómicas o ante riesgo de hemorragias o perforaciones gástricas. – Lavado intestinal: intoxicaciones graves por sustancias no absorbibles por carbón activado y en caso de eliminación de paquetes de droga, cuerpos extraños o fármacos con cubierta entérica. Eliminación del tóxico Consiste en favorecer la eliminación del tóxico bien por vía renal o por métodos extracorpóreos. JANO 17-23 DE OCTUBRE DE 2008. N.º 1.711 • www.jano.es 89 03AteUrg7389into00 9/10/08 14:54 Página 3 Atención urgente Figura 1. Tratamiento de las intoxicaciones más frecuentes en atención primaria M. Canals Aracil Manejo extrahospitalario de las intoxicaciones. Sospecha intoxicación toxicólogica: 915620420 Paciente estable Paciente inestable Medidas de emergencia: Control vía aérea Ventilación con O2 (50%)/IOT si es necesario Control de TA/FC/FR y T.ª Canalizar vía venosa periférica con SF/SG 5% Si PCR: soporte vital (protocolo específico) Si convulsiones o coma: Naloxona 1 amp. i.v./5 min Tiamina (Benerva) 1 amp i.v./i.m. Glucosa hipertónica (Glucosmon) 2 amp. i.v. Evaluación clínica general: Anamnesis: a pacientes/testigos. Preguntar por nombre del tóxico y cantidad administrada, tiempo transcurrido, vía de entrada y antecedentes personales relacionados con patología psiquiátrica o intoxicaciones previas. Exploración física: Valoración del ABC Valoración neurológica (escala de Glasgow) Exploración general: inspección general del paciente, auscultación cardiorrespiratoria, abdominal y de extremidades) Exploraciones complementarias: Glucemia capilar Monitorización cardíaca y pulsioximetría ECG Si es necesario, recoger muestra de contenido gástrico y orina para análisis posterior Disminuir la absorción del tóxico 1. Vía inhalatoria: aislar de atmósfera tóxica y oxígeno en Ventimask al 50% 2. Vía ocular: lavado 15-30 min 3. Vía cutánea: retirar ropas y lavado de piel 4. Vía digestiva: – Provocar el vómito: jarabe ipecacauna – Aspiración lavado orogástrico mediante SNG gruesa aspirando contenido gástrico antes del lavado – Carbón activado: 50 g diluidos en 300 ml de agua. Repetir cada 3 horas durante las primeras 24 h si es preciso. Pinzar SNG (véase texto indicaciones/contraindicaciones) Al terminar, asistencia cumplimentar el parte judicial Administrar antídotos específicos (véase texto) Traslado al hospital Si el paciente está inestable, en unidad medicalizada Si el paciente está estable, en ambulancia convencional con apoyo sanitario Tomado de: García Morlesín JM, Canals Aracil M, Ruiz Jarillo JM. Intoxicaciones agudas. En: Manual de Urgencias y Emergencias, 1a ed. Cordero Torres JA, Hormeño Bermejo R y GUAC-semFYC, editores. Barcelona: semFYC ediciones; 2008 (en prensa). – Diuresis forzada: se pretende obtener una diuresis de 500 ml/h utilizando una sobrecarga de volumen. Está indicada en intoxicaciones graves por barbitúricos, salicilatos, flúor, etc. – Eliminación extracorpórea: se utiliza en caso de deterioro clínico tras administrar tratamiento intensivo, niveles de tóxico en sangre potencialmente mortales, eliminación del tóxico dificultada por insuficiencia hepática o renal. – Hemodiálisis: útil en las intoxicaciones por teofilina, fenobarbital, fenitoína y carbamacepina. – Diálisis peritoneal: al igual que la anterior resulta útil en intoxicaciones por tóxicos hidrosolubles de bajo peso molecular. – Hemoperfusión: consiste en poner en contacto la sangre con una sustancia adsorbente (carbón activado, resinas, etc.). 90 JANO 17-23 DE OCTUBRE DE 2008. N.º 1.711 • www.jano.es Administración de antídotos Son sustancias que contrarrestan los efectos de los tóxicos, por neutralización o bien antagonizando sus efectos fisiológicos (tabla II). Para poder administrarlos es imprescindible tener seguridad del tóxico responsable. Criterios de derivación Se debe derivar al paciente al hospital si: – Hay afectación de las funciones vitales (nivel de conciencia, presión arterial, pulso, etc.), tras la estabilización del paciente y siempre en ambulancia medicalizada. 03AteUrg7389into00 9/10/08 14:54 Página 4 Atención urgente Tabla II. Tratamiento de las intoxicaciones más frecuentes en atención primaria M. Canals Aracil Antídotos Tóxico Antídoto Posología (adulto) Anticolinérgicos Sulfato de fisostigmina 0.5-2 mg i.v. durante 2 minutos cada 30-60 minutos cuando sea necesario Anticolinesterásicos Sulfato de atropina 1-5 mg i.v. (i.m. o s.c.) cada 15 minutos cuando sea necesario Benzodiacepinas Cianuro Digoxina Cloruro de pradiloxima 1 g i.v. (oral) durante 15-30 minutos cada 8-12 horas x 3 dosis cuando sea necesario Flumacenilo 0.2 mg i.v., repetir a dosis de 0,3 mg a los 30 seg y posteriormente 0,5 mg cada 30 se. has máximo de 3 mg Nitrito amilo Perlas inhaladas durante 15-30 seg cada minuto Seguido de nitrito sódico 300 mg (10 ml de solución al 3%) i.v. durante 3 minutos, repitiendo la dosis a las 2 horas si se precisa Seguido de tiosulfato sódico 12.5 g (50 ml de solución al 25%) i.v. durante 10 minutos, repitiendo a mitad de dosis a las 2 horas si se precisa Antidigoxina Fragmentos Fab Etilenglicol Etanol 1 g/kg diluidos en 500 ml de suero glucosado al 50% en 30 min Fomepizol 15 mg/kg i.v. seguido de bolos de 10 mg/kg cada 12 horas hasta que los niveles de etilenglicol sean menores a 20 mg/dl Hierro Mesilato de deferoxamina 1 g i.m. (vía i.v. a velocidad de < de 15 mg/7kg/7h en caso de hipotensión) cada 8 horas Isoniacida (INH) Piridoxina Cantidad equivalente a la ingestión estimada de INH hasta 5 g durante 30-60 min; resto en perfusión i.v. durante 1-2 horas Metahemoglobinemia Azul de metileno 1-2 mg/kg (0,1-0,2 ml 7kg en solución al 1%) i.v. durante 5 min. , repetido a la hora si se precisa Metanol Etanol Véase etilenglicol Monóxido carbono Oxígeno 100%, hiperbárico Opioides Naloxona 0,4-2 mg i.v. (i.m., intratraqueal, s.c.) cuando sea necesario Paracetamol N-Acetilcisteína 140 mg/kg v.o. seguido de 700g/kg cada 4 horas x 17 dosis v.o.: vía oral; i.v.: intravenosa; i.m.: intramuscular; s.c.: subcutánea. – Necesidad de observación prolongada, bien por la dosis ingerida, bien por ser sustancias de vida media larga. – Antídotos no disponibles en el centro de salud. – Ingestión voluntaria para valoración por psiquiatría, aun cuando la dosis haya sido mínima. Si el caso se maneja en el centro de salud, se recomienda que el paciente esté en observación al menos 4 h antes de dar el alta, incluso en casos aparentemente banales. J A tener en cuenta • Olvidar las medidas de soporte vital antes de proceder a otras consideraciones. • Realizar lavado gástrico sobrepasado el tiempo recomendado tras la ingestión del tóxico. • No derivar intoxicaciones leves pero voluntarias (se precisa siempre una valoración psiquiátrica). • No mantener al paciente en observación al menos 4 h antes de dar el alta, incluso en casos aparentemente banales. • Es fundamental una anamnesis detallada en todo paciente que ha presentado una intoxicación. • El análisis toxicológico de las muestras no debe retrasar el inicio de las medidas terapéuticas. • La base del tratamiento es la aplicación de las medidas de prevención de la parada cardiorrespiratoria (ABCDE). • La administración de carbón activado suele ser el único método de prevención de la absorción del tóxico necesaria, reservando el lavado gástrico para situaciones graves y potencialmente mortales. Errores más habituales • No realizar una anamnesis detallada al paciente y/o familiares. Bibliografía recomendada Canals Aracil M, Collada de la Fuente E. Intoxicaciones agudas. Tratamiento y antídotos. AMF 2007;3:271-19. Canals Aracil M, Valiente Millán ML, Márquez Mezquita P. Manejo de las Intoxicaciones más frecuentes en Atención Primaria. El Médico. Enero 2004. p. 25-52. García Morlesín JM, Canals Aracil M, Ruiz Jarillo JM. Intoxicaciones agudas. En: Cordero Torres JA, Hormeño Bermejo R y GUACsemFYC, editores. Manual de Urgencias y Emergencias. 1.a ed. Barcelona: semFYC Ediciones; 2008 (en prensa). Mokhlesi B, Leikin JB, Murray P, Corbridge TC. Adult toxicology in critical care: Part I: general approach to the intoxicated patient. Chest. 2003;123: 577-92. Pérez Vela JJ. Resucitación en situaciones especiales. En: Perales Rodríguez de Viguri N, López Mesa J, Ruano Marco M, editores. Manual de Soporte Vital Avanzado. 4.a edición. Barcelona: Elsevier Doyma; 2007. p. 239-59. 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