análisis crítico de la inserción femenina en los

Anuncio
La presente tesis titulada “Análisis crítico de la inserción femenina en
los movimientos sociales contemporáneos”, fue realizada por el C. Juan
Manuel Rivera Ramírez bajo la dirección del Dr. Hiram Ricardo Núñez
Gutiérrez.
Ha sido revisada y aprobada por los miembros del jurado
examinador, como requisito parcial para obtener el título de:
INGENIERO AGRÓNOMO ESPECIALISTA EN
SOCIOLOGÍA RURAL
JURADO EXAMINADOR
Agradecimientos
A esa fuerza que muchos llaman “Dios” y de la que otros tantos reniegan pero que
para mí da orden y sentido al caos de este universo.
A la Universidad Autónoma Chapingo (UACh) por darme la oportunidad de
realizarme profesionalmente, pero ante todo por hacerme ver de forma
diferente la realidad que como seres humanos nos ha tocado padecer. Por
siete mágicos años en los que experimente alegrías, tristezas, odio, enojo, me
ilusione y mantuve la esperanza de llegar con humildad a este momento.
Del modo más sincero agradezco al personal del Departamento de Sociología Rural.
Al Dr. Hirám Núñez Gutiérrez por sus comentarios, su paciencia y el
tiempo que dedico a la realización de este proyecto. A la MC. Ana María
López Rodríguez por su gran apoyo e incondicional amistad, pero porque
personalmente para mí es un ejemplo de lucha.
A mi comité de tesis, a la Profesora Patricia Muñoz Sánchez, al Lic. Carlos
Ferra y la MC. Elvira Mazcorro por sus atinados comentarios y su ayuda
para concluir este trabajo de la mejor manera.
Al Dr. José Alfredo Castellanos por motivarnos a seguir, por compartir con nosotros
grandes experiencias durante los viajes, pero sobre todo por convertirse obligadamente
en nuestro amigo.
A todos mis profesores por dejar en mí una huella imborrable de su
apreciado conocimiento.
A mis ex compañeros y compañeras de grupo por los buenos y malos momentos en los
que nos dimos cuenta hasta donde llegaba nuestra capacidad de soportarnos.
En particular a Nataly Gutiérrez y Manola Jimeno por ser mis inseparables
compañeras y mis eternos “amigos”…
A mis amigos fitotecnistas, en especial a Daniel Flores “el wero” por
haberme soportado durante tanto tiempo, pero sobre todo por hacerme creer
de nuevo en mí cuando la situación se tornaba difícil y pensaba en
abandonar mis sueños.
A mi entrañable amigo Diego Enrique Flores, por estar ahí siempre,
cuando todos se habían marchado…
A la familia Huerta Arias, al Señor Alejandro y la Señora María
Luisa, a Rodrigo e Inés por tantos buenos momentos que me han
regalado. Gracias por esas tardes de domingo en las que me hicieron
sentir que me encontraba en familia. De corazón gracias por tanto
y por todo.
Finalmente, a mi novia Sonia Herrera Monroy por regresar a mi
vida en el momento justo. A ella que me ha ayudado a tener
todavía el valor de llenarme de miedo, de querer, de arriesgar, de
escuchar y, por suerte de no dejar de creer. ¡Un deseo escondido en
el corazón de la vida…somos nosotros!
Gracias!
Dedicatoria
A las Mujeres de Atenco por su ejemplo de lucha…Por compartir
conmigo sus comentarios, motivaciones y experiencias a lo largo de
este tiempo… A las mujeres y hombres que día a día luchan desde
sus trincheras por un mundo más humano y más justo!!!
A quién me está ayudando a crear, inventar, diseñar, a colorear mi
afortunado presente.
A quién estaba ahí y merece siempre mi reconocimiento por
apoyarme y haberme dejado llegar hasta aquí.
A las personas que quiero y que saben quererme a pesar de
que mi vida requiera muy a menudo de su sacrificio y
su inmensa paciencia.
A mi familia, única certeza, única razón, único amor y único
dolor fuerte cuando no está conmigo.
A mi madre Griselda Ramírez Soto por ser esa mujer incansable que
da todo por mí y me hace volar lejos. Por ser mi entrañable
consejera y el tesoro más grande que tengo. Te amo mamá!
A mi padre Adolfo Rivera Jiménez por enseñarme que la verdadera
filosofía no es esa sarta de corrientes ideológicas y teorías que te
enseñan en el aula. Por hacerme entender que la verdadera filosofía
se encuentra en las experiencias que te da la vida.
Papá, para mí siempre serás el filosofo más grande que a diario
influye en mis pensamientos!
A mi hermana Itzel y mi hermano Eduardo por ser las estrellas más
brillantes en mi universo, mi mundo y mi todo. Porque a pesar de
las dificultades siempre voy a estar a su lado!
A quién me ha preguntado lo que ya me esperaba.
A quién sabe hacerlo así, de ese modo, precisamente.
A quién desaparece, pero regresa.
A ustedes que están siempre…
A voi che ci siete sempre…
RESUMEN
El principal objetivo de esta investigación es describir el papel de la mujer en el
movimiento social por la defensa de la tierra suscitado en el municipio de San
Salvador Atenco durante los años 2001-2002, la represión y activismo social
que desarrollaron las mujeres integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de
la Tierra (FPDT) del año 2006 a la fecha, así como las motivaciones que las
incitaron a participar en el movimiento, los roles y actividades que vinculan a
las mujeres que integran o comparten ideología, la lucha social y las visiones
que tienen respecto a la inserción y participación femenina en los movimientos
sociales.
Desde el surgimiento del FPDT, la participación de las mujeres ha sido
determinante, puesto que no se han relegado a las actividades y roles que la
sociedad les ha asignado, sino que las encontramos en las marchas, plantones,
mítines, dialogando con funcionarios públicos, tomando decisiones importantes
y otras tantas acciones combinando el activismo con las labores domésticas.
Palabras clave: Atenco, FPDT, movimiento social, represión, participación,
activismo.
ABSTRACT
The main objective of this research is to describe the role of women in the social
movement for the defense of the land raised in the town of San Salvador Atenco
during 2001-2002, repression and social activism women who developed
members of the Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) of the 2006
to date, and the reasons that prompted to participate in the movement, the
roles and activities that link women serving or share social struggle, ideology
and visions with respect to the inclusion and participation of women in social
movements.
Since the rise of FPDT, women’s participation has been crucial since not been
relegated to the activities and roles that society has assigned them but find
them in the marches, sit-ins, rallies, talking with public officials, taking and
many other important decisions combining activism with the housework.
Key words: Atenco, FPDT, social movement, repression, participation,
activism.
INDICE DE CONTENIDO
1.- Introducción
2.- Antecedentes
3.- Objetivos y propósitos
4.- Planteamiento y definición del problema
5.- Preguntas guías de la investigación
6.- Hipótesis
7.- Justificación
8.- Delimitaciones del estudio
8.1 Delimitación geográfica
8.1.1 Toponimia
8.1.2 Localización
8.1.3 Localidades que forman el municipio de Atenco,
por categorías políticas y administrativas
8.1.4 Extensión
8.1.5 Orografía
8.1.6 Hidrografía
8.1.7 Clima
8.1.8 Flora
8.1.9 Fauna
8.1.10 Características y uso del suelo
8.2 Delimitación espacial
8.3 Delimitación temporal
8.4 Delimitación teórica
9.- Metodología
9.1 Respecto al método
9.2 Técnicas de investigación
9.2.1 El análisis de contenido
9.2.2 La entrevista
9.2.3 La observación participante
Página
1
4
16
17
18
19
20
20
20
20
21
22
23
23
23
24
24
25
26
28
28
28
30
30
31
31
32
32
Capítulo I. La mujer como ente social en la historia de México
I.1 La mujer como ente social en la historia de México
I.2 La mujer en la época prehispánica
I.3 Época virreinal
I.4 El México independiente
I.5 El Porfirismo
I.6 La Revolución
I.7 Los años veinte
I.8 La etapa de la posguerra
I.9 Las décadas de los años treinta y cuarenta
I.10 Consideraciones sobre la participación de la mujer
en México
I.11 Perspectivas de la mujer en México (2005-2011)
Capítulo II. La mujer rural en México
II.1 La mujer rural en México
II. 2 Ámbito rural: revisión conceptual
II.2.1 Rural y Urbano
II.2.2 Esbozo histórico
II.2.3 Lo rural y la actividad económica
II.2.4 Consideraciones sobre el campesinado
y su asociación al medio rural
II.3 Análisis teórico de la situación de la mujer rural en México
II.3.1 El acceso de la mujer a la tierra
II.3.1.1 Limitaciones jurídicas
II.3.1.2 Limitaciones culturales
II.3.1.3 Limitaciones institucionales
II.3.2 Formas de acceso a la tierra
II.3.2.1 Por la vía de la propiedad privada
II.3.2.2 Por la vía del reparto agrario
II.3.3 El acceso a la tierra después del reparto agrario
II.3.3.1 El acceso por la vía contractual
II.3.3.2 El acceso vía constitución de ejidos
II.3.3.3 El acceso vía sucesión agraria
II.3.3.4 El acceso vía reconocimiento
de derechos por la asamblea ejidal
II.3.3.5 El acceso mediante la prescripción
adquisitiva parcelaria
33
34
35
37
40
43
47
51
52
54
56
67
69
70
73
74
79
86
87
92
95
95
96
96
97
97
98
99
100
100
100
101
102
Capítulo III. Las mujeres de Atenco
III.1 Mujeres y Movimiento Social:
El caso de San Salvador Atenco
III.1.1 A manera de presentación
III.1.2 Caracterización de los movimientos sociales desde
Las perspectivas de la Sociología y la Psicología Social
III.1.3 Tipos de comportamiento colectivo
III.1.4 Concepto y tipos de movimiento social
III.1.5 El movimiento social como resultado de un conflicto
III.1.6 Tipos de movimientos sociales
III.2 San Salvador Atenco: El movimiento
III.2.1 Caracterización del Frente de Pueblos en Defensa
de la Tierra (FPDT) como movimiento social
III.2.2 Surgimiento del FPDT
III.2.3 Cronología del levantamiento de los años 2001-2002
III.2.4 Análisis de la actuación social
a lo largo del movimiento
III.2.5 La acción de las mujeres en contra
de la construcción del aeropuerto
III.3 Las flores de Atenco (3 y 4 de mayo de 2006)
III.3.1 Violencia en contra de las mujeres
III.3.2 Percepciones en torno a la agresión
y violencia vivida por las mujeres en el caso Atenco
III.3.3 Violencia sexual y de género en contra de las
Mujeres de Atenco
III.3.4 Percepciones psicosociales
10.- Conclusiones
10.1 Reflexiones en torno al pensar y actuar
de las mujeres del FPDT
10.2 Reflexiones generales
11.- Anexos
11.1 Modelo guía de la entrevista semiestructurada aplicada
a las mujeres integrantes del FPDT
11.2 Entrevistas a profundidad completas
12.- Fuentes consultadas
103
104
104
107
108
109
110
110
112
115
116
118
127
128
130
136
151
153
158
163
164
169
174
175
181
229
1.- Introducción
Si se pretende ubicar a la mujer mexicana dentro de la historia nacional
encontramos un vacío o ausencia de ella en las fuentes oficiales, cuestión que
no corresponde a su falta de participación en los acontecimientos que
construyeron nuestra historia como sociedad.
Toda la historia mexicana, su construcción y elaboración está íntimamente
ligada al hombre. A través de la historia, la mujer ha participado activamente
en la construcción de la sociedad contemporánea, no obstante la historia la
niega como ente social y activo y sólo en la visión colectiva es donde adquiere
reconocimiento.
El hecho de que la mujer sea una pieza fundamental de la sociedad implica que
es parte de las situaciones que se dan en ésta, así como su participación en los
sucesos que se generan, que pertenece a alguna de las clases que la componen,
y que no se debe excluir su situación de género.
Cuando se reconoce su
participación en la edificación de la historia, la mayoría de las veces la
encontramos como un ente colectivo y sin ninguna atribución particular que
caracterice algún hecho o a sí mismas, como sí se les atribuye, más allá de la
mitificación a diversos personajes masculinos como: Miguel Hidalgo, Benito
Juárez, Francisco Villa, Emiliano Zapata, entre otros.
Por lo anterior, la participación de la mujer en el ámbito político y en los
movimientos sociales contemporáneos, es uno de los puntos de interés de la
presente investigación, puesto que frecuentemente se le ha asignado el estatus
de madre, esposa e hija, alienada al hombre y sólo reconocida en lo colectivo y
mediante un hecho que le de peso a esa colectividad, aunado a que en el
imaginario social, en muchas ocasiones se concibe a la mujer como un ser
privado o pilar de la familia.
1
En nuestro país, hasta hace poco tiempo, se le ha dado un reconocimiento a la
participación de las mujeres en los ámbitos político, económico y social, pero el
papel que las mujeres tienen dentro de los movimientos sociales no se ve con
claridad ya que no se encuentra en el ente de lo público, por lo anterior nos
tenemos que remitir a buscar un movimiento social en el que se dé la
posibilidad de reconocer el papel que las mujeres han tenido dentro del
activismo nacional. Ya que “(…) núcleos significativos de mujeres han
desarrollado multitud de experiencias y formas alternativas de participación,
construido demandas y organizaciones propias y aun enarbolado proyectos
societales que competen al conjunto de la vida social.” (Tuñón, 1997)
De lo anterior surge el objetivo general que nos hemos planteado, el cual
consiste en describir y analizar el papel de la mujer en el movimiento social de
San Salvador Atenco, de la misma manera determinar los roles que
desempeñaban y actualmente asumen dentro de
su núcleo familiar, el
ambiente comunitario y analizar las percepciones que tienen en cuanto al papel
que la mujer debe desempeñar en la sociedad mexicana actual.
En nuestro primer apartado explicamos de manera detallada el problema que
se investigó, los objetivos y preguntas que guiaron la investigación en sus fases
de campo y gabinete, así como el enfoque metodológico, las técnicas de
investigación y las disciplinas sociales de las cuales nos apoyamos para reforzar
el contenido teórico del trabajo.
Es necesario aclarar que se retomaron
conceptos propios de la Sociología general, la Ciencia Política y la Psicología
Social y que si en determinado momento hablamos de género o tomamos
conceptos de la teoría de género fue para aclarar y explicar de manera más
precisa la participación de las mujeres en el ámbito social pero que en ningún
momento se pretendió hacer un análisis con perspectiva de género.
2
El primer capítulo como tal, se hace un recorrido histórico de la situación de las
mujeres en nuestro país desde la época prehispánica hasta la época actual. La
importancia de este recorrido reside en el hecho de que si no se comprenden las
desigualdades y falta de oportunidades que han padecido a causa de las
políticas masculinas sería, imposible lograr un cambio futuro que propugne la
equidad en todos los ámbitos de la sociedad actual.
Nuestro segundo capítulo gira en torno a las mujeres rurales. La mayoría de
las investigaciones hechas en relación al tema agrario, manejan a los sujetos de
manera general sin hacer una distinción entre hombres y mujeres. En esta
dirección, primero que nada cuestionamos las teorías y propuestas que tratan
de definir lo que es “rural” para concluir con un análisis sobre la situación de
las mujeres que mantienen un vínculo con el medio rural: trátese de
campesinas, jornaleras agrícolas o que mantengan un vínculo cultural o
ideológico con la cuestión agraria.
Dado que el movimiento social que analizamos surgió en pro de la defensa de la
tierra, nuestro segundo capítulo funge como antecedente directo de nuestro
tercer apartado en el que describimos el surgimiento del Frente de Pueblos en
Defensa de la Tierra (FPDT) como ejemplo y caso especifico de un movimiento
social contemporáneo en el que se han visto insertas las mujeres para impedir
la expropiación de sus ejidos en los años 2001-2002. Posteriormente definimos
desde las perspectivas de la Sociología y la Psicología Social qué es un
movimiento social y englobamos el movimiento de San Salvador Atenco en esta
definición. Finalmente, las vivencias diarias, los testimonios escritos y las
entrevistas a profundidad cimentaron este apartado el cual concluimos con
nuestras percepciones y perspectivas de la participación de la mujer en el
movimiento de Atenco a lo largo de más de una década.
3
2.- Antecedentes
Después de hacer un recorrido en las investigaciones académicas sobresalientes
relacionadas con el tema y tener esquematizados los puntos de interés en
relación a la participación de las mujeres en los movimientos sociales, es
momento de citar de manera enunciativa pero no limitativa algunos trabajos y
propuestas que antecedieron al tema de investigación.
1.- Carrillo Franco B.E. (2010) “El Frente de Pueblos en Defensa de la
Tierra (FPDT) y la violencia de Género” Tesis de maestría. Colegio de
Postgraduados (CP) Montecillo, México.
Esta investigación tiene como objetivo general el analizar el impacto de la
represión estatal en las mujeres del FPDT y en su participación y resistencia
en el movimiento después de la violencia de género vivida los días tres y cuatro
de mayo de 2006 y como objetivos particulares analizar cómo han participado
las mujeres en el FPDT; analizar de qué manera vivieron la represión estatal el
tres y cuatro de mayo de 2006 las mujeres del FPDT; conocer cómo han vivido
la judicialización del FPDT las mujeres pertenecientes a éste; conocer de qué
manera resisten las mujeres del FPDT después de la represión estatal del tres
y cuatro de mayo de 2006; analizar de qué manera ha influido la participación
de las mujeres en las relaciones de género al interior de sus familias.
El enfoque utilizado en la investigación fue etnográfico de corte cualitativo,
llegándose a concluir que en el marco de la criminalización de la protesta social
como política de Estado, el movimiento del Frente de Pueblos en Defensa de la
Tierra (FPDT) ha sufrido todas las fases de dicha política de Estado, pero ha
vivido de manera más álgida las dos últimas que son la represión y la
judicialización.
A la vez, la lucha en este movimiento ha sido conjunta con los hombres, ellos
4
han vivido la represión estatal de manera contundente, las mujeres fueron
diferenciadamente violentadas, debido a que desde que inició el movimiento
ellas han participado de manera permanente en todas las actividades que ha
requerido el FPDT, además de que se han “atrevido” a discutir los asuntos de
poder en el “espacio público” – lugar que se les ha negado históricamente-,
también sufrieron la agresión estatal porque vivimos en un estado patriarcal el
cual es caldo de cultivo para la violencia de género.
Ellas fueron castigadas por participar en el FPDT.
Nunca dudaron en
involucrarse en la lucha cuando supieron que les quitarían sus tierras y con
ello sus tradiciones y costumbres, es decir, llevaron al terreno de lo público su
vida privada, tampoco titubearon en insertarse en la lucha por lograr la
libertad de sus familiares y compañeros.
Se han involucrado
en un acto
solidario conscientes de la autenticidad de su lucha, esas también son las
razones que las hicieron tomar parte en el movimiento.
Por nuestra parte podríamos decir que la importancia del estudio referido
reside en el hecho de ser la más reciente investigación que aborda el tema
dejando de lado acepciones masculinas y postulados teóricos que pretenden
mostrar la participación femenina como algo inmanente o codependiente de lo
masculino.
Finalmente, su análisis sólo abarca el activismo femenino durante el
movimiento; porque brevemente esboza las actividades que desarrollaban antes
y concluye con la participación que las mujeres integrantes del FPDT venían
desarrollando mientras que los integrantes varones se encontraban presos.
5
2.- Moreno Sánchez E. (2010) “El aeropuerto y el movimiento social de
Atenco”. En: Revista de Ciencias Sociales Convergencia. N° 52. Centro
Universitario de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM)
Texcoco. México.
Dicho artículo se plantea como único objetivo el contribuir a la mejor
comprensión del movimiento que se desarrolló antes y después del decreto de
expropiación en el territorio de Atenco y que finalmente no se llevó a cabo por
la cancelación del proyecto del aeropuerto en la región Texcoco, la cual incluye
al municipio de San Salvador Atenco.
El enfoque de la investigación es cualitativo de los tipos descriptivo y reflexivo,
puesto que retoma las diferentes corrientes teóricas de la Sociología para
analizar los acontecimientos y actores sociales inmersos en el movimiento.
Concluyendo que los movimientos sociales como el sucedido en Atenco siguen
vigentes, y las tesis dialécticas en las Ciencias Sociales proporcionan nuevos
elementos de análisis sociopolítico, que entrelazan con los conceptos y teorías
de la modernidad, democracia e igualdad social; es decir, en tanto procesos
sociales, los movimientos sociales como el de los “machetes” pone en
cuestionamiento la racionalidad convencional de democracia e igualdad.
6
3.- Almeyra Guillermo. (2008) “Los vaivenes de los movimientos sociales
en México.” En: revista Debates. Año IX. N° 24 – Octubre. México.
Este artículo tiene como objetivo general plantear el papel movilizador en
México del movimiento indígena y de sus experiencias de poder local y de
autonomía, a pesar de sus límites, así como de la lucha popular por los derechos
democráticos y los recursos naturales. Como objetivos específicos manifiestan
el destacar la recuperación del movimiento sindical y del campesino, que
comienzan a unirse con el movimiento cívico en torno a un proyecto alternativo
de país.
El enfoque del trabajo fue cualitativo de corte reflexivo teórico, puesto que
describe de manera detallada los más recientes movimientos sociales
suscitados en México y posteriormente hace una reflexión en torno a estos
sucesos.
Finalmente, a manera de conclusión general se enuncia que: “el aparente
reflujo de los movimientos sociales esconde en realidad un proceso más
complejo, ya que las luchas sociales son como ríos cársticos, que a veces dejan
la superficie y parecen hundirse en la arena para aparecer kilómetros más
abajo, reforzados por otras corrientes y por las aguas subterráneas, y, proseguir
su camino hacia el mar. Sólo en la visión anárquica, los trabajadores, obreros o
campesinos pueden están constantemente movilizados y en la calle.
En
particular cuando carecen de dirección política de sentido y perspectivas a sus
luchas”.
7
4.- Arámbula Reyes. A. (2008) “Participación política de la Mujer en
América Latina”. Cámara de Diputados LX Legislatura. México.
Esta investigación propone como objetivo general dar a conocer los
antecedentes legislativos, que impiden el crecimiento de la participación
política de la mujer. Consecuentemente los objetivos particulares se expresan
textualmente: Hace un análisis comparativo del número de legisladores de
ambos sexos que integran la LX legislatura; hace mención de los artículos
constitucionales y de la legislación secundaria que se refiera a la igualdad de
derechos de hombres y mujeres; hace un estudio de Derecho comparado de.
Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá,
Paraguay, Perú, México, República Dominicana y Venezuela.
El enfoque utilizado en esta investigación es mixto, en otras palabras,
cuantitativamente de campo y cualitativo de corte comparativo. Cuantitativo,
porque en base a estadísticas y encuestas se hacen inferencias respecto a
indicadores sobre el número de diputados y diputadas por partido político,
insertos en la LX legislatura. Cualitativo de tipo comparativo ya que analiza,
advierte semejanzas, diferencias e incongruencias respecto a los marcos
jurídicos internacionales de los países a los que hace referencia.
También
compara, entre otras cosas la Ley general para la igualdad entre mujeres y
hombres y la Ley general para prevenir y eliminar la discriminación.
8
Llega a las siguientes conclusiones: Perú y México en sus respectivas
constituciones manejan la igualdad ante la ley del hombre y la mujer; la
Constitución de Argentina, Colombia y Guatemala hablan en sus respectivos
artículos sobre la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres; la
Constitución de Panamá menciona que son panameños todos, sin distinción de
sexo, es relevante mencionar que hay un artículo en esta última que
expresamente menciona que no es lícita la formación de partidos que tengan
por base el sexo y que los servidores públicos serán panameños sin distinción
del sexo.
Lo destacable de este trabajo, es el extenso análisis comparativo que se
manifiesta en las conclusiones que hacen referencia a los países enunciados.
5.- Pineda Torres J.R. (2008) “Atenco: Ideología de un pueblo” Tesis de
Licenciatura en Sociología Rural. Universidad Autónoma Chapingo. (UACh).
México.
La investigación tiene como objetivo general determinar la existencia de rasgos
ideológico – políticos y de identidad cultural, como expresión del movimiento de
resistencia de los pobladores de San Salvador Atenco, ante los sucesos de 2001 2002 y, como objetivos particulares, determinar factores sociales que hayan
afectado el comportamiento y la ideología de los pobladores de San Salvador
Atenco y precisar los aspectos económicos que determinaron la lucha por la
tierra y sus implicaciones ideológicas.
9
El enfoque de esta investigación fue cualitativo de corte descriptivo,
concluyendo que la tierra fue el principal motivo de la sublevación de 2001 –
2002 y la poca disposición al diálogo por parte del gobierno hacía los afectados
provocó la lucha por la defensa de los ejidos; a la par, las prácticas ideológicas
discursivas como lo fueron las manifestaciones y los discursos corresponden con
la percepción de los participantes directos e indirectos en el movimiento, al
contrario de la realidad económica del pueblo.
Reiterando una vez más la
importancia que tuvo la ideología de los individuos en el movimiento en defensa
de la tierra.
A pesar de la sencillez de la investigación, lo valioso de este trabajo es la
detallada descripción de los acontecimientos suscitados durante los años 2001 –
2002 y tal cual plantea en sus hipótesis, la demostración de que a pesar de que
las condiciones económicas de la comunidad han cambiado, y la agricultura ha
dejado de ser la principal actividad económica de la comunidad, sigue
persistiendo la ideología campesina entre los pueblos que forman parte del
FPDT.
En la contraparte, también muestra que no hay correspondencia entre la
ideología con muchos rasgos campesinos, y su base material económica.
10
6.- Fernández Moreno S.Y. (2007) “La mujer en los movimientos sociales y
en los movimientos feministas de América Latina”. En: revista Papeles de
Población. N° 13. Enero – marzo. Universidad Autónoma del Estado de México
(UAEM) Toluca. México.
El artículo tiene como objetivo general reflexionar en torno a los movimientos
sociales en Latinoamérica y la participación de las mujeres.
Del cual, se
desprenden como objetivos particulares el describir los movimientos sociales en
América Latina en los que la mujer ha jugado un papel importante, y el
segundo, describir el movimiento feminista en Latinoamérica.
El enfoque del trabajo fue cualitativo de los tipos descriptivo y reflexivo, puesto
que su crítica gira en torno a temas como: el dilema político del movimiento
feminista en América Latina; la vía política de los movimientos sociales en
donde participan mujeres y del movimiento feminista.
La autora llega a las conclusiones de que: a pesar de los avances persisten los
problemas, la representación política de las mujeres, importante indicador de
poder, no ha mejorado sustancialmente; aunque hoy día las mujeres tengan
menos hijos, si no hay una modificación de los roles tradicionales, de la
organización de la esfera pública y de la esfera privada en la práctica cotidiana,
cualquier norma, código o ley, carecerá de sentido; finalmente, el apoyo de las
mujeres a la democracia dependerá de la calidad de vida política que
establezcan los regímenes democráticos de nuestros países, así como el apoyo
que estos le brinden a los temas de las mujeres.
11
7.- Camacho Guzmán D.G. (2006) “La historia como arma de lucha:
Atenco arma su historia” Tesis de maestría. Universidad Autónoma
Metropolitana. (UAM) Xochimilco. México.
Este trabajo se plantea como objetivo general analizar y comprender la
constitución del actor social, por lo que sus objetivos específicos se enuncian
como: definir al sujeto social, al movimiento social y el grupo social tomando
como punto de referencia la historia de la comunidad de San Salvador Atenco.
El enfoque de esta investigación fue cimentado básicamente en el método
histórico – crítico, llegándose a las conclusiones de que para el movimiento de
San Salvador Atenco la tierra es el centro de toda su acción en un enfoque que
permite el estudio de la territorialidad y su vínculo cultural como entramado de
relaciones sociales. Manifiesta a la cultura como una expresión de su esencia,
los mitos como justificación de su existencia, a la vez, los elementos
estructurados y estructurantes de su identidad que fueron capaces de
fortalecerse y que en el momento que se manifiesta la necesidad fueron
invocados para la acción social, que se tradujo en la defensa de la tierra.
En ningún apartado se hace mención a las labores políticas y sociales
desarrolladas en la comunidad sino que más bien se pretende mostrar que de
los elementos de la cultura, así como de la identidad colectiva, interpretados a
través de la cosmovisión que se tiene de la propia historia y del entorno, surgió
la necesidad de defender la tierra ante los decretos expropiatorios que
afectaban propiedades ejidales en el año 2001.
12
8.- Kuri Pineda E.E. (2006) “Claves para decodificar un actor colectivo: el
caso del movimiento de San Salvador Atenco”. En: revista Argumentos.
UAM Xochimilco. N° 52 Mayo – agosto. México.
Este artículo textualmente manifiesta como objetivo general dilucidar qué
factores condicionaron la constitución del sujeto atenquense.
El enfoque de trabajo fue cualitativo de corte reflexivo teórico, puesto que los
acontecimientos ocurridos en San Salvador Atenco fueron interpretados bajo la
concepción historiográfica de los estudios de la subalternidad (Subaltern
Studies).
Las principales conclusiones a las que se llega son: Los factores identitarios, la
alianza con otros actores sociopolíticos, así como la solidaridad intra e
intercomunitaria, junto con la limitada visión política del gobierno hicieron
posible que uno de los proyectos más ambiciosos del sexenio foxista fuese
cancelado: La Consigna Atenco no se vende fue leída “no como una noción donde
la tierra representaba el arraigo material y simbólico de los pueblos, la fuente de
seguridad ontológica” para numerosos ejidatarios y residentes, sino como un
desafío colectivo que conculcó la ley y puso en jaque la gobernabilidad del nuevo
régimen.
Lo importante de este artículo es que proporciona un análisis teórico profundo
y un enfoque sencillo aplicable a cualquier actor social desde las perspectivas
colectiva e individual. Por otro lado, asevera que Atenco no está lejos de otras
modalidades colectivas de resistencia frente a los procesos de modernización y
liberalización, sin que ello signifique el prescindir de la especificidad
sociohistórica que marca a cada sujeto colectivo en términos de su visión del
mundo y sus prácticas sociales.
13
9.- Organización Mundial contra la Tortura (OMCT). (2006) “Violencia de
Estado contra Mujeres en México. El Caso San Salvador Atenco”.
Informe alternativo al CAT. 37° período de sesiones. México, D.F.
El documento es un informe presentado de forma conjunta ante el Comité
contra la Tortura (CAT) de las Naciones Unidas, por parte del Comité de
América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer
(CLADEM) y la Organización Mundial contra la Tortura (OMCT).
En el informe se documenta el tipo de violaciones a los derechos humanos
cometidos en contra de mujeres en el mes de mayo de 2006 en el pueblo de San
Salvador Atenco, Estado de México, por parte de agentes del Estado mexicano.
Cabe resaltar que no es una investigación académica por lo tanto no se
enuncian objetivos, técnicas ni métodos de investigación.
La finalidad del
documento fue poner a consideración del CAT el tipo de violencia que fue
aplicada contra las mujeres de manera sistemática durante los operativos
policíacos, problema que fue poco visibilizado y poco abordado por el Estado
mexicano.
En específico se documentó la violencia de agentes del Estado perpetrada
contra las mujeres detenidas ilegalmente, y que fueron víctimas de violencia
física, psicológica, verbal y violencia sexual como método de tortura en el
pueblo de San Salvador Atenco, durante un conflicto político entre movimientos
sociales y agentes del Estado.
De igual forma, se analizaron las limitantes del marco normativo existentes
para la denuncia de abusos que prevalecen en el Estado mexicano, las cuales
crean un escenario permisivo para este tipo de violencia.
14
La importancia de este documento, reside en el hecho de que pone de
manifiesto varios de los testimonios de las mujeres que fueron víctimas de
diversas formas de violencia. La limitante de este informe recae en que sólo los
expresa de manera tal cual fueron expresados los testimonios, pero se deja la
posibilidad de ser el principio de futuras investigaciones relacionadas con el
mismo.
15
3.- Objetivos y propósitos
En el contexto social en el cual nos encontramos, los movimientos sociales que
se niegan a ser absorbidos por el Estado son reprimidos y brutalmente
aplastados por las políticas estatales y federales en México. Este ha sido el
caso del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) de San Salvador
Atenco.
Por lo que nuestro objetivo general pretendió describir el papel de la mujer
en el movimiento de San Salvador Atenco para determinar los roles que las
mujeres desempeñaban y que actualmente asumen, para en base a esto
elaborar una prospectiva de la participación femenina en futuros movimientos.
A partir de éste se desprenden nuestros objetivos particulares que buscaron:

Analizar la manera en que participaban las mujeres antes y después de
los acontecimientos suscitados en 2001 – 2002 y 2006;

Conocer cuáles fueron las motivaciones que las incitaron a participar en
el movimiento;

Describir los roles y actividades que actualmente vinculan a las mujeres
que integran o comparten ideología con el FPDT y por último,

Conocer cuáles son sus visiones respecto a la participación femenina en
el movimiento social.
16
4.- Planteamiento y definición del problema
El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra surgió el 22 de octubre del año
2001 en respuesta a los decretos expropiatorios que afectarían una superficie
de 5 390.760 hectáreas de tierras, pertenecientes a 4 375 campesinos.
Tal
expropiación sería para la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de
la Ciudad de México (NAICM).
De las tierras expropiadas, 63.3%
correspondían al municipio de Atenco, 27.8% a Texcoco y 5.55 a Chimalhuacán.
(Pineda, 2008)
Es pertinente mencionar que antes de que se anularan los decretos
expropiatorios, el gobierno reprimió en diversas ocasiones al FPDT, pero los
hechos de violencia más destacados ocurrieron los días 3 y 4 de mayo de 2006.
Hasta aquí es importante resaltar el hecho de que las mujeres que se
adhirieron al movimiento fueron golpeadas, sufrieron tortura al padecer
agresiones y violaciones sexuales.
Las mujeres al ser vistas como la parte
vulnerable del FPDT fueron usadas como botín para romper los lazos sociales
que imperan en este movimiento.
Las mujeres que se involucran en la acción colectiva lo hacen por diversos
motivos. Entre ellos destacan el pertenecer a familias con un fuerte arraigo de
lucha y reivindicación social; por la religión e ideología que profesan o movidas
por su condición de clase o situación concreta.
A las mujeres las reprimieron no como un suceso que se dio por separado, sino
en un contexto especifico por parte del gobierno que pretendía desintegrar el
movimiento social del FPDT.
Más de cuatro años después, en julio de 2010, los principales integrantes
varones del FPDT fueron puestos en libertad al no contar con las pruebas
fehacientes que demostraran su culpabilidad, por lo que de nueva cuenta se
reintegraron a las actividades políticas y sociales que el movimiento demanda.
17
Durante este período la actividad femenina y los entes individuales se hicieron
notar en las actividades políticas y sociales, en los ámbitos nacional e
internacional a través de: conferencias, manifestaciones, mítines, marchas,
asistencia
y
participación
en
eventos
internacionales,
reivindicaciones
ideológicas, además de la carga doméstica y el cuidado de los hijos.
5.- Preguntas guías de la investigación
Por lo ya descrito, nuestro problema se planteó a partir de las siguientes
interrogantes:
1.- ¿Cuál era el papel de las mujeres dentro del FPDT, antes de 2001 – 2002 y
2006?
2.- ¿Cómo se modificaron los roles de las mujeres a raíz de los acontecimientos
ocurridos los años anteriormente mencionados?
3.- ¿Qué motivó a las mujeres a insertarse en las actividades políticas,
económicas y sociales del movimiento?
4.- ¿Qué roles asumen actualmente las mujeres en el FPDT?
18
6.- Hipótesis
a) La participación de las mujeres en las actividades política, social y
reivindicativa en el FPDT era casi nula, pero ha aumentado a raíz de los
acontecimientos del mes de mayo de 2006 y la aprehensión política de
varios de sus integrantes varones.
b) La violencia por parte del Estado hacia el FPDT es vista por las mujeres
que lo integran como un intento por desintegrar y nulificar a los grupos y
movimientos sociales opositores al sistema.
c) Las principales motivaciones que incitaron a las mujeres a adherirse al
movimiento fueron sus deseos de reivindicar la defensa de sus tierras.
d) Una vez que los integrantes masculinos del FPDT fueron liberados, los
roles fueron repartidos y aunque a la mujer se le sigue vinculando con
las actividades domésticas, hubo un cambio de conciencia con respecto a
su mayor participación en el movimiento.
19
7.- Justificación
La relevancia de este trabajo reside en el hecho de que las investigaciones
realizadas hasta 2010 sólo abordan aspectos generales en cuanto a formas de
organización, describen los acontecimientos de 2001 y 2006 sin hacer una
crítica reflexiva o relacionándolos con los hechos políticos y sociales externos.
Además, las concepciones relacionadas con lo masculino y femenino, han sido
de gran utilidad en diversas sociedades para explicar la participación social de
las mujeres; pero son pocos los análisis y reflexiones que han abordado con
rigor, y en toda su amplitud y profundidad, esta temática crucial, desde el
enfoque de las relaciones de género; y cuando sí ha habido una aproximación,
ha
sido
desde
la
perspectiva
del
señalamiento
negativo
(alienación,
incomprensión y enfrentamiento). Por esto, se pretende conocer si el rol de las
mujeres se ha transformado a partir del movimiento.
8.- Delimitaciones del estudio
8.1 Delimitación geográfica: El pueblo de San Salvador Atenco resultó ser el
más representativo para llevar a cabo la investigación, dado el grado de
identidad colectiva y sentido de pertenencia que tiene la población para con el
FPDT.
Este pueblo es la cabecera del municipio de Atenco, ubicado en el
Estado de México.
8.1.1 Toponimia
La palabra Atenco, proviene del náhuatl y está compuesta de dos sustantivos y
un sufijo o desinencia locativa. Atl “agua”; entli “crilla” y co desinencia locativa,
G “en”. La palabra atl “orilla”, pierde también su terminación “tli” para unirse
con la desinencia “co”, quedando Atenco.
20
El significado de Atenco es: “en la orilla del agua o lugar de la orilla del agua”.
Fonológicamente: Atenko; A = a larga o prolongada.
La enciclopedia de los municipios de México en la parte correspondiente al
Estado de México proporciona la siguiente información con respecto a las
características físicas y demográficas del municipio de Atenco.
8.1.2 Localización
El municipio de Atenco está ubicado al oriente del estado de México.
Su
localización geográfica está entre los 19° 29‟ 20” y 19° 36‟ 34” de latitud norte y
98° 53‟ 38” y 99° 00‟ 47” de longitud oeste, a una altura de 2 250 metros sobre el
nivel del mar. Limita al norte con Acolman y Tezoyuca, al sur con Texcoco, al
este con Chiautla y Chiconcuac y al oeste con Ecatepec.
Imagen 1. Ubicación del municipio de San Salvador Atenco. Fuente: http://www.edomexico.gob.mx.
Consultado 9 de agosto de 2012.
21
8.1.3 Localidades que forman el Municipio de Atenco, por categorías
política y administrativa.
Nombre de la
Localidad
San Cristóbal
Nexquipáyac
Chileleco Colonia (las
Salinas)
Las Moras
Ejido de Nexquipáyac
San Francisco
Acuxcómac
Ex Hacienda La
Grande
Col. Santa Gertrudis
San Salvador Atenco
Col. Francisco I.
Madero
Col. Guadalupe
Victoria
Col. La Pastoria
Ejido de San Salvador
Santa Isabel Ixtapan
Col. Nezahualcóyotl
Nueva Santa Rosa
Zapotlán
Categoría
Política
Administrativa
Pueblo
Delegación
Caserío
Delegación
Caserío
Pueblo
Delegación
Ejido
Delegación y ejido
Colonia
Villa
Subdelegación
Cabecera Municipal
Delegación
Caserío
Delegación
Pueblo
Pueblo
Ejido
Ejido
Delegación y ejido
Delegación
Delegación
Delegación y ejido
Tabla 1. Localidades que forman el Municipio de Atenco, por categorías política y administrativa
Fuente: Rosas Vargas. (2002)
En el cuadro anterior, podemos notar que existen 16 localidades, seis ejidos y
una cabecera municipal.
Además de que en el municipio existe una ex
Hacienda.
22
8.1.4 Extensión
La superficie comprende 94.67 Km2.
8.1.5 Orografía
El territorio del municipio se encuentra ubicado en el oriente de la cuenca
lacustre, que está situado en el Eje Neovolcánico que cruza la República
Mexicana, en este territorio existen dos pequeñas elevaciones ubicadas en el
sureste y los estudios realizados por el Instituto de Geofísica de la UNAM,
demostraron la presencia de un volcán enterrado que aflora en las
prominencias de esas pequeñas elevaciones que conocemos como Huatepec y
Tepetzingo, cuyas emisiones más profundas de lava y material piroclástico
(mezcla de agua, cenizas, gases y abundantes masas sólidas) llegaron hasta el
cerro de Chimalhuacán y son las que formaron parte del subsuelo del ex-lago de
Texcoco.
8.1.6 Hidrografía
Los ríos que desembocan en el municipio son: San Juan, que nace en
Teotihuacán, cruza los municipios de Acolman y Tezoyuca y llega a
Nexquipayac, formando una delta en el occidente de Atenco; otro río que
desemboca en nuestro territorio es el Xalapango que nace en San Miguel
Tlaixpan y San Juan Tezontla, cruza Chiautla y antes de desembocar en el
suroeste de Atenco se junta con el Coxcacoaco.
Finalmente otro río que llega a la comunidad es el Papalotla que nace en San
Lucas Tepango, Teotihuacán, pasa por los pueblos de San Mateo Chipiltepec
del municipio de Acolman; Jolalpan del municipio de Tepetlaoxtoc, Atenguillo y
Tepetitlán de Chiautla y a la altura de Papalotla se junta con el río Hondo y
antes de desembocar en Atenco a la altura de Acuezcomac nace una división
que da lugar al río San Bartolo.
23
8.1.7 Clima
El clima de Atenco que ha registrado el Servicio Meteorológico Nacional de
1951 a 1980 es semiseco con una temperatura promedio de 15.1°C y una
máxima extrema de 33.5°C y una mínima de 11.0°C.
La precipitación pluvial máxima durante esos 28 años fue de 256.2 milímetros,
en el mes de agosto y la mínima fue de 2 milímetros, en el mes de febrero.
8.1.8 Flora
Es abundante, parte de ella es nativa, ha tenido y tiene usos medicinales, para
alimentación y/o para ornato y se conserva gracias a la herencia de padres a
hijos, entre la flora más representativa tenemos la siguiente: maíz (tlaolli),
maguey (metl), tuna (nochtli), nopal (nopalli), zapote blanco (iztactzapotl), frijol
(etl), calabaza (ayohtli), quelite (quilitl), cempasúchil (cempoalxochitl), chayote
(chiayotli), chilacayote (chilacoyotl), noche buena (cuetlaxochitl), ejote (exotl),
xoconoxtle (xoconochtli), tomate (tomatl), epazote (epazotl), chile (chilli diversas
variedades)
jaltomate
(xaltomatl),
jitomate
(xictomatl),
verdolaga
(quilcuahuitl), girasol (xochitonatl)
También es necesario llamar la atención que la flora nativa tanto de tierra
firme como lacustre está por extinguirse ya sea por abandono del cultivo, por la
desecación del lago o por la disminución del agua en los ríos y de los mantos
acuíferos; entre la flora que está por extinguirse se encuentra el tule, el carrizo,
el chichicastle, el lirio acuático, el huizache, el ahuehuete, el tejocote, el capulín
y el órgano.
24
Es importante señalar que en el territorio municipal existe flora originaria del
Perú, como es el pirúl, también hay flora de otros climas que ha sido adaptada
por los habitantes de Atenco más como ornato y de consumo familiar que para
la producción masiva; entre ellas tenemos: limón, naranja, uva, aguacate,
ciruela, limón real y lechuga. Otro tipo de flora que existe en el municipio y que
fue introducida por los españoles es la siguiente: higo, cebada, avena, alfalfa,
haba, bugambilia, eucalipto, fresno, sauce, granada, pera, etcétera.
8.1.9 Fauna
La fauna del municipio, lo mismo que la flora, es abundante y diversa. La
fauna endémica (nativa u original) prácticamente ha desaparecido, mientras
que la “introducida” por los españoles, durante la conquista es la que
predomina actualmente.
En el municipio están representados cuatro grupos de vertebrados, entre los
anfibios se encuentran: lo sapos, ranas y ajolotes; por otro lado entre los
reptiles se encuentran: la culebra de agua, las lagartijas y la serpiente
comúnmente llamada cincuate que es endémica del país y que actualmente está
en peligro de extinción. Las aves, son las que más representantes tienen, tanto
domésticas como silvestres; entre las primeras están: las gallinas, gansos,
guajolotes, gallos, pichón, paloma, patos y entre las silvestres: a los zopilotes,
tórtola, cenzontle, calandria, golondrinas, colibríes, cuervos, garzas, lechuzas,
pato silvestre (migratorio), el chichicuilote que es endémico y se encuentra en
peligro de extinción al igual que el águila.
Los mamíferos son también muy diversos, entre los domésticos tenemos a los
rumiantes como la vaca y el buey; los equinos están representados con los
burros y caballos, también existen en abundancia cerdos, perros, gatos, chivos,
borregos y conejos; entre los mamíferos silvestres hay ratones, tuzas y
tlacuaches. Finalmente, los que se encuentran en serio peligro de extinción son
los coyotes y los conejos.
25
El
grupo
de
invertebrados
es
mucho
más
abundante,
representado
principalmente por cathropdos como las mariposas, chapulines (endémico en
algunas especies), hormigas rojas y negras, cucarachas, alacranes, arañas
(diversas variedades) catarinas (en peligro de extinción), caracoles de tierra,
ciempiés y palomilla de maíz.
8.1.10 Características y uso del suelo
La mayor parte del municipio (toda la parte sur y occidental) se encuentra
cubierta por suelos Zolanchak de diferentes subunidades, predominando los
suelos Zolanchak Gleyco (del ruso sol: sal) y (Grey: pantano) esto es, son suelos
salinos, propensos a acumular el salitre y se caracterizan además por tener un
alto contenido de sales y su vegetación está formada por pastizales o por
algunas plantas que toleran el exceso de sal; también en el municipio existen
suelos vertisoles (del latín yerto - volterar) suelo que se revuelve.
Se caracterizan por las grietas anchas y profundas que aparecen en ellos en la
época de la sequía, son suelos pegajosos cuando están húmedos y muy duros,
cuando están secos, son salinos. El tipo vertisol pélico es el que cubre
Acuexcomac y Atenco, donde se practica la agricultura de temporal.
Otro tipo de suelo que se localiza en el municipio es el cambiasol eutrico (del
latín cambiare-cambiar) y (del griego en eutrico) se caracterizan por presentar
en el subsuelo una capa que parece más suelo de roca ya que en ella se forman
terrones, además pueden presentar acumulaciones de algunos materiales como
arcilla, carbonato de calcio, fierro, manganeso, etc., pero sin que sea una
acumulación muy abundante, estos suelos los encontraremos asociados en el
suelo feozem (del griego Phaeo - pardo y del zuro semija - tierra) tierra parda,
en los poblados de Nexquipayac y Santa Isabel Iztapan y son utilizadas en la
agricultura de temporal.
26
Los usos de la tierra están distribuidos de la siguiente manera:
USO
SUPERFICIE
PORCENTAJE
Agrícola
3,968.82 has.
38.50 %
Pecuaria
136.54 has.
1.32%
Forestal
4.85 has.
0.05%
Salitrosa
2,560.00 has.
24.84%
Urbana
3,259.00 has.
31.62%
Usos
378.79 has.
3.67%
diversos*
*Represas, caminos,
entre otros.
Tabla 2. Usos de la tierra en el municipio de Atenco. Fuente: Elaboración propia en base a los datos.
Las actividades agrícolas son básicas para el sustento familiar, ya que un buen
porcentaje de los habitantes de cada una de las localidades son ejidatarios y
poseen tierra para el cultivo. En un buen porcentaje de casas se tiene un
pequeño huerto familiar, si bien no es de gran relevancia si da algunos
productos que contribuyen a la alimentación familiar.
De acuerdo a la información del Plan de Desarrollo Municipal (1997) la
superficie de tierras agrícolas es de 3,968.82 hectáreas, esto equivale a un
porcentaje de 38.50%.
En el caso de las actividades pecuarias la actividad es menor, se localizan en
poblaciones como Ixtapan y Nexquipayac y en mucho menor medida en Atenco,
Acuexcomac y Zopotlán; el número de hectáreas dedicadas a esta actividad es
de 136.54 hectáreas, esto es, el 1.32%.
27
8.2 Delimitación espacial: En las marchas, asambleas, foros, conferencias,
mítines, festividades religiosas y eventos políticos y/o culturales para entender
la forma en que actúan las mujeres del FPDT; en los propios hogares de las
mujeres para conocer las actividades que realizan; en los lugares públicos
(asamblea ejidal, auditorio municipal, plazas públicas) donde es notoria su
intervención.
8.3 Delimitación temporal: El trabajo de campo comprendió del mes de
febrero de 2011 a julio de 2012.
8.4 Delimitación teórica: Los estudios de las Ciencias Sociales deben
analizar la historia de los movimientos sociales, no sólo desde la visión
anecdótica o cronológica, mucho menos con la intención de recabar cientos de
datos e información que a fin de cuentas resulta irrelevante. Lo esencial, más
bien consiste en ubicarse en el campo de estudio de las relaciones humanas. La
historia se construye de sujetos con actitudes, personalidades y mentalidades
diferentes que nutren y forjan las características de un pueblo.
Por lo que asimilar los procesos micro sociales e individuales, justifican la
realización de estudios sobre la participación femenina en el ambiente socio
político contemporáneo desde una perspectiva interdisciplinaria.
Por lo anterior, dado que la investigación fue conducida en los ambientes
naturales de las personas, las variables inmediatas no fueron controladas ni
manipuladas, nuestro objeto de estudio fue analizado a partir de conceptos
tomados
de
la
Psicología
Social
como
“motivaciones”,
“emociones”,
“percepciones”, pasando por otros tomados de la Sociología tales como
“vivencias”, “relaciones”, “confrontación” y “condición de género”, por otro lado
finalizamos con cuestiones propias de la Ciencia Política como “activismo” y
“participación política”.
28
Apoyados por las diferentes corrientes que estudian a las mujeres y su
participación en los movimientos sociales fue de utilidad para la correcta
ubicación de nuestro objeto de estudio.
Delimitación teórica de la investigación
Psicología
Social
Investigación
ETNOGRAFICA
Sociología
De corte
CUALITATIVO
Ciencia
Política
Fig 1. Delimitación teórica de la investigación. Fuente: Elaboración propia.
29
9.- Metodología
9.1 Respecto al método. Dado que se trabajó con grupos humanos, el enfoque
de la investigación fue etnográfico de corte cualitativo y de tipo descriptivo,
puesto que en la mayoría de los casos este tipo de enfoque construye su objeto
de estudio y en nuestro caso retomamos la experiencia principalmente de las
integrantes del FPDT de San Salvador Atenco, porque “Las respectivas
comunidades organizadas – especialmente el pueblo de San Salvador Atenco,
núcleo de la movilización en contra de la terminal aérea- fueron no sólo el
espacio físico, sino también el anclaje simbólico de la resistencia colectiva” (E.
Kuri, 2006)
El rigor del proceso de investigación cualitativa se concibe, en parte, a partir de
la revisión documental, porque es el primer acercamiento a la realidad
concreta.
Por esto, fue necesaria la minuciosa revisión de toda la
documentación existente que estaba a nuestro alcance, ya que posteriormente
fue constatado lo expuesto con una observación preliminar de dicha realidad.
Debido a que nuestro objeto de investigación fue un acontecimiento
relativamente reciente y que gradualmente adquiere mayor relevancia, el
principal método de investigación fue el histórico critico y/o hermenéutico
crítico ya que en muchas ocasiones los documentos hemerográficos disponibles
y la información televisiva distorsionan los acontecimientos u omiten lo que
realmente sucedió y por ende, pretendimos revelar la realidad del mito.
30
Por su parte el método hermenéutico crítico posibilitó la comprensión e
interpretación común de la realidad por parte de quienes estaban involucrados
en ella, a través de la identificación, la discusión, el diálogo argumentado y la
confrontación de las distintas posiciones, experiencias y conocimientos
suscitados en el movimiento social. Teniendo presente que el hermenéutico
crítico es un método interpretativo, que busca establecer un nexo comunicativo
entre un texto y un intérprete, que tiene como finalidad ajustar los elementos
de juicio para que una persona o colectivo llegue a una traducción y
comprensión común de un texto, o en nuestro caso de una realidad
determinada.
9.2 Técnicas de Investigación
El trabajo de campo fue apoyado por técnicas de investigación tomadas de la
etnografía, mismas que fueron combinadas con algunas otras herramientas
como se menciona a continuación.
9.2.1 El Análisis de Contenido. Es una forma particular de investigación de
documentos, con la que se pretende analizar las ideas expresadas en un escrito,
siendo el significado de las palabras o frases lo que intenta interpretarse. Se
ubica en el ámbito de la investigación descriptiva y pretende descubrir los
componentes de un fenómeno determinado, extrayéndolo de su contenido. Es la
técnica más elaborada y la que goza de más prestigio científico.
31
9.2.2 La entrevista. Formulación de preguntas que permitió compilar datos
sobre un aspecto concreto, así como la opinión de los entrevistados.
Generalmente la entrevista se define como un diálogo o un proceso de
comunicación, pues se basa en una relación interpersonal, programada, no en
un encuentro casual.
Las entrevistas son clasificadas, según el grado de
formalidad (entrevistas formales e informales) y
por el
número de
entrevistados (individuales, en grupo, de grupo y con grupos).
Los tipos de entrevistas utilizadas en esta investigación son:

Semi estructurada: guión previo pero abierto, no se enseña al
entrevistado.

Cerrada: son preguntas que dan margen a respuestas que no están
contempladas en la investigación, pero que de ninguna manera
manipulan las respuestas.

A profundidad: es de tipo personal (individual, cara a cara) no
estructurada, es directa, descubre motivaciones, creencias, actividades y
sentimientos ocultos sobre un tema.
9.2.3 La observación participante. Consiste en compartir actividades en
mítines, marchas, asambleas, conferencias, foros y eventos culturales para
comprender la manera en que actúan y se desenvuelven las mujeres del FPDT.
Su objetivo es la obtención de datos acerca de la conducta a través de un
contacto directo. La observación participante admite una amplia variedad de
actividades, que van desde convertirse en un miembro auténtico del grupo que
va a estudiar, hasta observar y entrevistar a sus componentes de una forma
más o menos informal, como persona extraña al grupo.
32
CAPITULO I
LA MUJER COMO ENTE SOCIAL EN LA
HISTORIA DE MÉXICO
33
I.1 LA MUJER COMO ENTE SOCIAL EN LA HISTORIA DE MÉXICO
La historia dentro del positivismo se centró en el estudio de los grandes
personajes hombres, de las memorables batallas, de los acontecimientos dignos
de recordar, aferrándose únicamente a la transcripción de las fuentes históricas
escritas.
No obstante, niños, ancianos, emigrantes, indígenas y mujeres
quedaron fuera de la historia.
Por esto, en la nueva historia, existen vínculos con la Antropología, ya que
interesa explicar y analizar el comportamiento de los actores sociales, sus
normas, convicciones, participación o roles, así como su relación con la
estructura social de una época y lugar determinados.
En esta dirección, se eligen y analizan, en las diferentes investigaciones,
sujetos para encontrar su visión de los acontecimientos históricos, así como su
participación en los diferentes escenarios y momentos históricos.
Por todo lo anterior, cuando hablamos de historia universal o de México,
imaginamos que las mujeres no intervinieron en los campos de batalla,
revoluciones, adelantos o desaciertos que ha tenido de manera general la
humanidad. Lo anterior debido al fuerte arraigo que se tiene para con los
personajes hombres.
Sin embargo, la historia de la mujer en México juega un papel destacado desde
tiempos prehispánicos hasta la época contemporánea, tanto en los ámbitos,
político, social, económico, cultural y educativo, los cuales son resultado de un
arduo y penoso transitar en el que era vista a través de los ojos del hombre.
34
Es común en nuestro país que a las mujeres se les conmemore y reconozca sólo
en el discurso, al margen de la realidad que nuestro país atraviesa.
Esto
porque cuando la ideología dominante es también la de la clase dominante, se
genera una falsa conciencia colectiva respecto al tema de la mujer como ente
activo dentro de la realidad social. Por lo anterior el objetivo del presente
capítulo es hacer una breve descripción histórica en la que se mencione la
participación de las mujeres en los diferentes ámbitos de la sociedad, ya que sin
un antecedente como éste sería imposible comprender a cabalidad la actual
realidad a la que se enfrentan.
I.2 La mujer en la época prehispánica
México-Tenochtitlán (en náhuatl: “Lugar de pencas de nopal”) fue la capital del
Imperio Mexica. La fundación de la ciudad es un hecho cuya historia se mezcla
con la leyenda. La mayoría de las fuentes cita como fecha de fundación de la
ciudad el 18 de julio de 1325, con base en la información proporcionada por los
mexicas y que se encuentra registrada en varios documentos.
La cultura mexica era arraigadamente religiosa puesto que cada uno de sus
dioses regía un aspecto de la vida de los hombres.
A pesar de que sus
principales divinidades eran masculinas, existía deidad central del género
femenino: la representación de la madre tierra mediante la diosa Coatlicue.1
____________________________
1
Coatlicue es una divinidad mexica.
Su nombre significa en náhuatl “La de la falda de
serpientes”. También recibía los nombres de Tonantzin y madre de los dioses. Era representada
como una mujer usando una falda de serpientes y un collar de corazones que fueron arrancados
de las víctimas de los sacrificios. Tenía garras afiladas en las manos y los pies. Coatlicue era
una diosa madre para los mexicas. Su esposo era Mixcóatl, la serpiente de las nubes y dios de
la persecución. Como virgen alumbró a Quetzalcóatl y Xólotl.
35
Su sociedad giraba en torno a la división sexual del trabajo, incluso la realidad
natural era concebida en ámbitos masculino y femenino como opuestos y
complementarios respectivamente. La mujer dependía del padre o del marido,
aunque ocupaba un lugar preciso en la producción de acuerdo con la división
del trabajo la cual le asignaba las labores domésticas. (Tuñón, 1987; 23-26)
Según lo expuesto por Valera (1996) la sociedad azteca puede ser vista como
una unidad de producción económica fundada en una división sexual del
trabajo, que cumplía con las funciones de: realizar en su vientre la
reproducción
biológica,
mantener
y
perpetuar
la
fuerza
de
trabajo
conservándola siempre en óptimas condiciones y socializar a los infantes que
serían los futuros proveedores de la fuerza de trabajo.
Mención aparte merece el hecho de que las niñas eran educadas por sus madres
en las labores domésticas y la religión de acuerdo a su clase social, pero
generalmente debían de permanecer castas, ser discretas, atentas y atenerse a
los deseos de terceros.
Sahagún (1988) escribe:
“…cuando hablares, no te apresurarás en hablar; no con desasosiego, sino poco
a poco y asiosegadamente. Cuando hablares, no alzarás la voz no hablarás
muy bajo, sino con un mediano sonido. No adelgazarás mucho tu voz cuando
hablares o cuando saludares, ni hablarás por las narices, sino que tu palabra
sea honesta y de buen sonido, y la voz mediana. No seas curiosa en tus
palabras.”
Además las niñas aprendían a honrar a las ancianas y a sus mayores. Los
cronistas cuentan que si las niñas encontraban en su propia casa a algún
adulto y no le saludaban, éste podía quejarse con su madre o con su nana y
podían recibir una reprimenda y un castigo.
36
La existencia de la mujer era condicionada en todas las áreas de su conducta y
apariencia. Su condición de mujer azteca era de sometimiento y subordinación
respecto a la de los hombres; la anterior tesis se basa en el hecho de que las
mujeres fueron sistemáticamente excluidas de todas
las actividades que
implicaran riqueza, poder y prestigio: el sacerdocio, el comercio, la guerra y la
cacería.
El imperio azteca fue opresivo para las mujeres, servir y obedecer era su tarea
principal, cuestiones que se expresaron en la intensiva explotación económica y
opresión sexual a las que eran sometidas.
La dominación del hombre se
manifestó en todos los terrenos, ya que se encontraba fuertemente cimentada
por una ideología patriarcal que legitimaba mediante un sistema de juicios que
desvalorizaban a la mujer.
I.3 Época virreinal
Hernán Cortés conquistó Tenochtitlán en 1521. Durante los primeros años del
dominio español las luchas internas por el poder fueron sangrientas, en 1534,
con la creación de virreinato se moderaron ligeramente los conflictos y se
propiciaron las condiciones para transformar el territorio mesoamericano en la
Nueva España, integrándola al sistema económico mundial, del que
posteriormente pasó a formar parte como abastecedor de materias primas
vegetales y minerales. (Tuñón, 1987; 43-45)
La jerarquía social estaba basada de acuerdo al color de la piel que, junto con
el nombre y rango de los individuos determinaban su posición social. El papel
de la mujer fue básico, por lo que la Corona estableció desde 1538 colegios para
niñas indígenas con la única intención de que ellas adoptaran la fe católica y
transmitieran a los suyos los preceptos del cristianismo. (Ibídem; 45-46)
37
De acuerdo a la legislación vigente en aquellos tiempos, la española casada
tenía en el matrimonio la categoría de menor de edad, podía heredar
propiedades, títulos y negocios, pero sus facultades jurídicas quedaban
subsumidas a la administración de los bienes por parte de su marido, porque
antes del matrimonio ellas dependían del padre o tutor.
Sólo la viudez
permitía el ejercicio completo de la personalidad jurídica femenina, pues
entonces tenían el derecho de la patria potestad sobre sus hijos y la rienda de
sus negocios. “La concubina india fue tratada como un animal doméstico y como
él desechada al llegar al punto de la inutilidad. En cuanto a los bastardos
nacidos de ella, eran criados como siervos de la casa grande.” (Castellanos, en
Tuñón; 1987: 59)
Los sectores de la clase social elevada se organizaban en el concepto de familia
extensa, conformada por el matrimonio y parientes de distinto grado, que
adquiría la consideración de única unidad productiva donde se consideraba
económicamente necesarios los trabajos de mujer y hombre por igual.
El concepto de afecto materno no existía como tal ya que prevalecía una escasa
vinculación sentimental de la madre con sus hijos, además de las altas tasas de
mortalidad infantil. La familia nuclear sólo sería dominante hasta el siglo
XVIII, constituida sólo por los padres e hijos, en la que se empiezan a
diferenciar tareas, asignando a los hombres a ganar un salario en el exterior y
a las mujeres las tareas del hogar, emergiendo por tanto el concepto de „amor
materno‟ que haría de la vida familiar y doméstica el lugar asignado para las
mujeres.
La ineficiente educación que se impartía a las niñas se recibía en casa ya que la
otra forma de acceder a la educación media era en los conventos y escuelas
públicas que iniciaron labores en 1755.
38
La educación femenina variaba según el sector social, pero eran comunes los
principios religiosos y morales que regían el comportamiento en las familias.
Se pensaba que la mujer española encargada del hogar no necesitaba mayores
conocimientos: su función se reducía a la reproducción biológica y las
actividades domésticas.
El trabajo de la mujer en este medio las obligaba a insertarse en la producción
dentro de un plan familiar en las minas, limpiando y clasificando minerales o
como empleadas domésticas, vendedoras de alimentos o empleadas en
pequeños comercios españoles.
Por este medio, la industria de la plata se vio directamente beneficiada de la
explotación de trabajo de las mujeres indígenas, aprovechando el subsidio que
constituía el respaldo de la organización comunitaria de los indígenas.
De acuerdo a las Leyes de Indias (1680), las mujeres no debían realizar
trabajos pesados o rudos en las minas. El trabajo a domicilio también era
regulado, puesto que mujeres y niños debían recibir un salario estipulado
legalmente y trabajar siempre de acuerdo a su voluntad.
A menudo las
mujeres se contrataban como costureras, hiladoras o tejedoras. (Tuñón; 1987:
66)
En 1778 participaban en manifestaciones públicas: las cigarreras de la ciudad
de México, abandonaron sus labores y en tumulto se dirigieron al Palacio para
protestar ante el virrey por el aumento de la jornada de trabajo sin el
correspondiente aumento del salario. Finalmente, las autoridades prohibieron
el cumplimiento de las nuevas disposiciones de las empresas, dada la simpatía
popular que se sumó a la manifestación a su paso por las calles. (Zendejas;
1993: 401)
39
I.4 El México Independiente
Con el estallido de la guerra de Independencia, algunas mujeres salieron de sus
papeles tradicionales y algunas otras dieron a sus papeles tradicionales un
significado político.
Aunque sólo son conocidas las hazañas de unas pocas
heroínas son muchas las mujeres que en silencio, participaron en la lucha tanto
en la parte insurgente como en la realista de una manera esencial para
alcanzar los objetivos de ambas partes.
En los primeros años de vida independiente la mujer trabajaba en el campo, en
servicios urbanos o como sirvienta.
La distribución porcentual se ha calculado de la siguiente manera:

65.4% de ellas se ocupaban como sirvientas;

2.18% en la industria artesanal (cigarreras, costureras, hilanderas,
tejedoras, entre otras);

10.03% en servicios de alimentación (bodegueras, atoleras, tortilleras,
molenderas) y el resto en diversas actividades.
Por su parte las mujeres de alcurnia atendían sus hogares y daban lecciones
del catecismo cristiano. En el ámbito político la participación femenina era
escasa pero no faltaron las heroínas que destacaron durante la independencia:
Josefa Ortiz de Domínguez y Leona Vicario. La primera esposa del corregidor
de Querétaro, apoyó a los insurgentes y la segunda tuvo una activa
participación en la lucha. A la par, hubo mujeres anónimas o poco reconocidas.
Durante las intervenciones norteamericana y francesa, respectivamente, las
mujeres enfrentaron a los invasores defendiendo la causa, algunas actuaron en
resistencia como correos, enfermeras o espías. Otras realizaron actos heroicos
disparando cañones o participando en el campo de batalla.
40
Melchor Ocampo (1814-1851) un destacado abogado, científico y político liberal
mexicano participó en la redacción de varias Leyes Civiles que posteriormente
darían sentido a las reformas constitucionales de 1857, con la finalidad de
independizar los negocios civiles y políticos con respecto de los eclesiásticos.
El 23 de julio de 1859 el entonces presidente interino Benito Juárez expidió en
el Puerto de Veracruz, la “Ley de Matrimonio Civil” que contiene 31 artículos.
En el artículo 15° a manera de formalización ceremonial del matrimonio se
incluyó la famosa epístola atribuida a Melchor Ocampo, la cual textualmente se
cita a continuación:
“...Que éste es el único medio moral de fundar la familia, de conservar la especie
y de suplir las imperfecciones del individuo que no puede bastarse a sí mismo
para llegar a la perfección del género humano. Que éste no existe en la persona
sola sino en la dualidad conyugal. Que los casados deben ser y serán sagrados
el uno para el otro, aún más de lo que es cada uno para sí. Que el hombre cuyas
dotes sexuales son principalmente el valor y la fuerza, debe dar, y dará a la
mujer, protección, alimento y dirección, tratándola siempre como a la parte más
delicada, sensible y fina de sí mismo, y con la magnanimidad y benevolencia
generosa que el fuerte debe al débil, esencialmente cuando éste débil se entrega a
él, y cuando por la sociedad se le ha confiado. Que la mujer, cuyas principales
dotes son la abnegación, la belleza, la compasión, la perspicacia y la ternura,
debe dar y dará al marido obediencia, agrado, asistencia, consuelo y consejo,
tratándolo siempre con la veneración que se debe a la persona que nos apoya y
defiende, y con la delicadeza de quien no quiere exasperar la parte brusca,
irritable y dura de sí mismo. Que el uno y el otro se deben y tendrán respeto,
deferencia, fidelidad, confianza y ternura, y ambos procurarán que lo que el uno
se esperaba del otro al unirse con él, no vaya a desmentirse con la unión. Que
ambos deben prudenciar y atenuar sus faltas.
41
Que nunca se dirán injurias, porque las injurias entre los casados, deshonran al
que las vierte, y prueban su falta de tino o de cordura en la elección, ni mucho
menos se maltratarán de obra, porque es villano y cobarde abusar de la fuerza.
Que ambos deben prepararse con el estudio y amistosa y mutua corrección de
sus defectos, a la suprema magistratura de padres de familia, para que cuando
lleguen a serlo, sus hijos encuentren en ellos buen ejemplo y una conducta digna
de servirles de modelo. Que la doctrina que inspiren a estos tiernos y amados
lazos de su afecto, hará su suerte próspera o adversa; y la felicidad ó desventura
de los hijos será la recompensa ó el castigo, la ventura ó la desdicha de los
padres. Que la sociedad bendice, considera y alaba a los buenos padres, por el
gran bien que le hacen dándoles buenos y cumplidos ciudadanos; y la misma,
censura y desprecia debidamente a los que, por abandono, por mal entendido
cariño, ó por su mal ejemplo, corrompen el depósito sagrado que la naturaleza
les confió, concediéndoles tales hijos. Y por último, que cuando la sociedad ve
que tales personas no merecían ser elevadas a la dignidad de padres, sino que
sólo debían haber vivido sujetas a tutela, como incapaces de conducirse
dignamente, se duele de haber consagrado con su autoridad la unión de un
hombre y una mujer que no han sabido ser libres y dirigirse por sí mismos hacia
el bien.”
Es evidente que hasta para los grupos liberales de la época, la mujer debía
permanecer relegada o alienada a la de los hombres, dado que resaltaba los
dotes sexuales y la masculinidad de los varones y la dependencia y abnegación
que las mujeres casadas debían de guardar hacia la figura de sus esposos.
42
I.5 El Porfirismo
Porfirio Díaz intentó tomar el poder por vez primera en 1871. En dicho año se
levantó en contra del gobierno de Benito Juárez utilizando como bandera
política el Plan de la Noria. En 1876, lanzó el Plan de Tuxtepec desconociendo
el gobierno al gobierno de Sebastián Lerdo de Tejada al que derrotó
militarmente tomando la presidencia de manera provisional. Las elecciones
celebradas a finales del mismo año, dieron a Díaz el triunfo legal para el
período de gobierno que terminaría en 1880.
El lema que utilizó para luchar por sus ambiciones políticas fue el de: „Sufragio
efectivo, no reelección y gobierno constitucional‟. Como no era conveniente su
continuación en el poder por su bandera antireeleccionista permitió que
Manuel González ocupara la presidencia para el cuatrienio 1880 – 1884. En
este último año, Díaz resumió el Poder Ejecutivo para no abandonarlo hasta el
año 1911 en que fue expulsado del poder y del país por la rebelión maderista.
Con el porfiriato el país dedicó sus años de ansiada paz para crecer. No se trató
de un proyecto de nación, sino de la posibilidad de poner en práctica las
tendencias liberales que desde finales del siglo XVIII habían despuntado en el
horizonte y que la Reforma había hecho posibles. El proceso fue gradual y se
concretó en los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX. Se recibieron
capitales extranjeros y Francia fue considerada la meta de la cultura y las
artes. Pero poco a poco aparecieron las fábricas y comercios, creciendo la red
ferroviaria a la vez que el sistema financiero se desarrolló de forma notable.
43
“Las inversiones extranjeras dinamizaron el crecimiento de la economía,
permitiendo el surgimiento y desarrollo de una burguesía nacional subordinada
a los intereses imperialistas, sería pues, una clase dominante en el interior,
pero dominada en el exterior. En 1896 Díaz eliminó finalmente las alcabalas
(impuestos) que cobraban las entidades federativas por el paso de mercancías
por sus respectivos territorios; la desaparición de las alcabalas facilitó el libre
comercio y abarató las mercancías.” (Brom; 1990)
Las mujeres que vivieron es este período padecieron las ya tradicionales
contradicciones que a continuación citaremos:
Los discursos en la escuela, la Iglesia y el Estado definieron a las mujeres por
el sexo y por su papel en la reproducción; pero las mismas instituciones les
impidieron, por el pudor (que según sus palabras, debía ser el mayor accesorio
femenino), su conocimiento del tema.
Las mujeres fueron consideradas inferiores debido a un supuesto límite
impuesto por la biología a su raciocinio, pero se consideró que su escasa
ambición, su capacidad afectiva y su tendencia a cumplir labores de servicio les
daban superioridad moral.
A pesar de este predominio del ámbito privado del hogar, el sistema económico
obligó a un amplio sector a incorporarse al trabajo productivo en el mundo
público. “En 1910, más del 80% de la población vivía o dependía de la
producción agropecuaria.
En los años 1907 y 1909, las sequías echaron a
perder las cosechas de trigo, maíz y frijol; los alimentos subieron de precio y el
hambre recorrió los campos del país.
Los empresarios (nacionales y
extranjeros) estaban felices con la administración porfirista; para ellos, Díaz
era el gobernante más sabio, el más moderno y el más benéfico sobre la faz de
la tierra” (Íbidem; 1990)
44
El Código Civil de 1907 que regía el Distrito Federal y los Territorios de Baja
California expresaba que la mujer quedaba supeditada al marido, que éste
administre sus bienes y que no podía trabajar sin su permiso. Las mujeres, que
idealmente debían guardarse en casa, ampliaron su nivel de participación en el
ámbito público, pues así convenía al nuevo sistema „orden y progreso‟; mientras
que las que pertenecían a los sectores populares se incorporaban a las fábricas
(textiles y tabacaleras), las de clase media se educaban y las mujeres rurales se
dedicaban exclusivamente al cuidado de los hijos y participaban en la economía
campesina.
Durante el siglo XIX la mayor parte de las mujeres que trabajaban lo hacían
como sirvientas, costureras y obreras, pero durante el porfiriato aparecieron las
empleadas de comercio, las secretarias y taquígrafas. Para 1885 trabajan en el
país 183, 293 mujeres, lo que representaba el 26.5% del total de la población
económicamente activa PEA.
Para la última década del siglo XIX dicha cifra aumentó hasta 210, 566 y había
más asalariadas que empleadas en el servicio doméstico. El censo realizado en
1900 muestra que la población ascendía a 13, 607, 259 habitantes, de los que
210, 556 mujeres que laboraban en las fábricas y 188 061 en el servicio
doméstico.
Poco a poco las mujeres encontraron escuelas para su capacitación profesional:
en 1890 la Normal para señoritas que formaba al personal docente; en 1892, la
Escuela de Artes y Oficios que a finales de siglo tenía poco más de mil
integrantes; en 1903 la Escuela Mercantil Miguel Lerdo de Tejada. Entre 1886
y 1889 se graduaron las primeras abogadas, dentista y cirujana.
45
“Las materias estaban en consonancia con los empleos requeridos: telegrafía,
mecanografía, teneduría de libros, farmacia elemental, costura, y las primeras
de ellas, relacionadas con la palabra, abrían posibilidades para que las mujeres
pudieran luego realizar otro tipo de actividades, como el periodismo, una de las
que cobró mayor auge entre ellas.” (Lau; 2009: 5)
Las mujeres de clase media y las obreras aumentaban su presencia en el
mundo público y se preocupaban más por las organizaciones y movimientos
sociales y su participación en ellos. Las docentes fueron las principales
protagonistas de esta lucha, y que su desempeño laboral les advertía de la
manifiesta desigualdad entre hombres y mujeres, convirtiéndose de esta
manera en pioneras de la „causa feminista‟ en busca del cambio.
“En los estratos inferiores la carencia de educación y de oportunidades
empujaban a las mujeres (76.4% eran analfabetas) a trabajar por salarios
miserables o a dedicarse, en algunos casos, a la prostitución.” (Lau; 2009: 6)
En el Primer Congreso Obrero, celebrado en 1876, se planteó la necesidad de
luchar por la dignificación del género femenino, en gran medida a causa de la
preocupación por la doble jornada y el consecuente descuido de la clase
proletaria. No obstante, se negó la representatividad de la delegación femenina
con base en el criterio de que por ley, la mujer carecía de personalidad jurídica.
De acuerdo con la idea liberal de la prensa como propulsora de los cambios
sociales, se publicaron revistas para mujeres tales como el Álbum de la Mujer,
periódico redactado por señoras. En sus textos se expresó la aspiración de
obtener el reconocimiento social para las mujeres y se insistió en la necesidad
de su educación, de una instrucción laica que les permitiera ejercer sus
funciones sociales con mayor eficacia y fortalecimiento de su autoestima
femenina. (Tuñón; 1987: 123-135)
46
“Además, amparadas con publicaciones de revista, surgieron sociedades
feministas de ayuda y asistencia a mujeres pobres y desamparadas, grupos de
mujeres que luchaban por el derecho al sufragio y clubes femeninos que
combatirían la dictadura.” (Lau; 2009: 7)
I.6 La Revolución
El Plan de San Luis Potosí que utilizó Madero para levantarse en armas contra
la dictadura porfirista, fue eminentemente de tipo político, declaraba nulas las
elecciones presidenciales, desconocía al gobierno de Díaz y declaraba vigente el
principio de la no reelección. El artículo tercero del Plan, reconocía el despojo
de tierras a los pueblos declarando que era justa la restitución de las mismas a
sus legítimos propietarios, los cuales tenían derecho a una indemnización por
los daños ocasionados. La promesa implícita en este artículo, fue la verdadera
causa que motivó a los campesinos a sumarse a la rebelión maderista,
A
principios de 1911, los combates se fueron generalizando en distintas regiones
del país, ubicándose los principales enfrentamientos en las zonas norteñas.
“La Revolución fue un proceso político y social que alteró actitudes, costumbres
y hábitos, es decir relaciones entre los géneros, estas relaciones entre hombres
y mujeres, se afectaron al ser un reflejo de orden social en su conjunto.”
(Valera; 1996: 12-13)
La Revolución Mexicana abrió un espacio para que la mujer participara en los
distintos renglones del quehacer nacional. Entre las feministas la demanda
por el voto no se hizo esperar desde mayo de 1911, cuando exigieron este
derecho al presidente provisional León de la Barra, con el argumento de que la
Constitución vigente (1857) no excluía de modo explicito al sector femenino del
sufragio. (Tuñón; 1987: 156)
47
Entre los años 1908 – 1910 cientos de mujeres en los medios rural y urbano se
afiliaron a los partidos y organizaciones que trataron de derrocar al gobierno,
acertadamente Carmen Serdán es la heroína de los acontecimientos de Puebla
que marcaron el estallido de la Revolución. Por otro lado, en 1913, Dolores
Jiménez y Muro, junto con escritoras, obreras y profesionales, fundó la
asociación femenil “Hijas de Cuauhtémoc”, para enfrentarse a Victoriano
Huerta. “La conspiración conocida como Pacto de la Embajada culminó con el
apresamiento de Madero y Pino Suárez y su posterior asesinato. La presidencia
fue ocupada por Huerta utilizando una serie de triquiñuelas maquiavélicas y
legaloides (…) Con su gobierno, se intentó restaurar el orden social y los
privilegios de clases existentes en el antiguo régimen porfirista con el apoyo del
ejército.” (Brom; 1990)
“El trabajo que efectuaron las mujeres en la etapa maderista y sus experiencias
acumuladas en el proceso transformaron sus vidas personales. Su compromiso
con el constitucionalismo adquirió una relevancia inusitada: los clubes se
reorganizaron y surgieron nuevos, en tanto que el despliegue de actividades se
incrementó. Así, la participación política de las mujeres en esta etapa las colocó
en el rango de revolucionarias.” (Lau; 2009: 18)
En ese mismo año en las diferentes entidades, las mujeres formaron batallones
mixtos y, con las armas en las manos, combatieron por los principios de la
Revolución conquistando grados en los ejércitos al lado de Emiliano Zapata,
Francisco Villa, Venustiano Carranza, Álvaro Obregón y Felipe Ángeles. En
dicho año la obrera tipógrafa María Hernández Zarco imprimió el discurso de
Belisario Domínguez, en el que denunciaba la traición de Huerta; este
documento sirvió de bandera a los revolucionarios.
48
“El patrón familiar traspasó entonces los estrechos marcos del hogar. Las
esposas, hermanas y compañeras de los inconformes, además de resguardar el
ámbito doméstico, cuidar a los hijos y reconfortar a esos hombres al ser
perseguidos o encarcelados, los reemplazaban en las tareas de promoción
revolucionaria cuando así se requería.” (Lau; 2009:11)
En 1916 el general Salvador Alvarado, entonces gobernador del Estado de
Yucatán, expidió leyes que regulaban el trabajo, la educación y un código civil
en que la mujer era considerada en igualdad con el varón en las cuestiones
generales, en lo particular se consignaban sus prestaciones como madre, pero lo
más destacado de esta promulgación fueron los primeros derechos políticos
femeninos.
Durante el mes de septiembre de 1916, Carranza lanzó la convocatoria para
integrar un Congreso Constituyente que elaboraría una nueva Carta Magna.
Una vez realizadas las elecciones, los diputados electos se reunieron en la
ciudad de Querétaro iniciándose las deliberaciones en el mes de diciembre.
Durante el transcurso de los trabajos se notó claramente, la existencia de dos
corrientes divergentes.
Por un lado, estaban los diputados moderados
conocidos también como renovadores, fieles a la línea ideológica y política
trazada por Carranza. Esta corriente sólo quería realizar cambios superficiales
a la Constitución de 1857. La otra corriente estaba integrada por diputados
radicales que deseaba un documento con un articulado de tipo social avanzado.
“Gracias a estos últimos, en 1917 se promulga la nueva Constitución Política de
la República, que recoge las demandas populares, concede al hombre y a la
mujer en las garantías individuales los mismos derechos. En el Artículo 123,
que consagran las garantías sociales, por primera vez en el mundo se reconoce
la igualdad y los derechos específicos de la mujer”. (Zendejas; 1993: 404-406)
49
“Por lo tanto, la Revolución incorporó a las mujeres al mundo de lo público,
aunque sólo mediante la brutal experiencia de una guerra civil. Participaron
como correos, espías, empleadas, transportistas de armas y municiones,
secretarias, periodistas, enfermeras; roles en los que debían tomar difíciles
decisiones”. (Tuñón; 1987: 151)
En este contexto surge Hermilia Galindo en 1918 quien solicitó al Congreso
Constituyente de 1917 el reconocimiento de los derechos políticos de las
mujeres. De no ser por las propuestas presentadas al congreso por Hermilia
Galindo y por el general Silvestre González en Querétaro, no se hubiera
discutido el sufragio femenino, ya que el proyecto constitucional presentado por
Venustiano Carranza no proponía la incorporación en la Constitución del
reconocimiento a la igualdad política de hombres y mujeres.
Fue tan poca la importancia que le dieron al asunto de los derechos políticos de
las mujeres que fue turnada a la Comisión de Puntos Constitucionales. La
denegación del sufragio femenino y de la igualdad ciudadana para las mujeres
se justificó, esencialmente, por dos líneas argumentativas: se reconoció la
existencia de algunas mujeres capacitadas para ejercer la ciudadanía, sin
embargo, desde el punto de vista de la comisión constituyente, su
excepcionalidad no justificaba el reconocimiento de derechos políticos a todas
las mujeres.
“Llegaron a afirmar que una feminista intelectual tendría niños débiles y que
su capacidad reproductora disminuía por el esfuerzo mental exagerado;
también, que al solicitar igualdad para las mujeres y hombres en las normas
morales, en realidad lo que querían eran licencias de tipo sexual. A pesar de
todas estas críticas, el feminismo comenzó a incorporarse poco a poco a la vida
de nuestro país.” (Lau; 2009: 27)
50
Otro de los motivos por los cuales la comisión constitucional negó el sufragio
femenino, fue la suposición de si las mujeres adquirían derechos políticos, los
emplearían para apoyar a las fuerzas conservadoras y a los intereses del clero y
esto representaría un elemento que debilitaría al liberalismo.
Bajo esta
directriz, el único vínculo posible que las mujeres podrían tener con la actividad
política era a través de sus maridos, padres o hermanos ya que las mujeres no
tenían una personalidad propia en el mundo de lo público; ellas seguían
existiendo sólo en la familia.
I.7 Los años Veinte
En la década de los veinte, algunos gobiernos estatales dictaron reformas de
corta duración que en forma parcial otorgaron reconocimiento legal a los
derechos políticos de las mujeres. De esta manera ocurrió en Yucatán entre
1922 y 1924, con el gobierno de Felipe Carrillo Puerto, cuando se reconoció el
derecho de las mujeres a participar en las elecciones municipales y estatales.
Casi en los mismos años, en el estado de San Luis Potosí, a instancias de Rafael
Nieto, se aprobó una ley que permitía a las mujeres que supieran leer y
escribir, participar en los procesos electorales municipales de 1924 y en los
estatales de 1925. Sin embargo, dicho permiso estuvo vigente por sólo un año.
Por su parte, en el estado de Chiapas, en 1925 también se reconoció el derecho
de las mujeres a participar en las elecciones municipales y estatales.
En 1928 el entonces presidente Plutarco Elías Calles modificó la ley de las
Relaciones Familiares para incrementar el nivel de igualdad civil, con el Código
Civil.
Las mujeres avanzaron en algunos de sus derechos y capacidades
legales, se reconocieron como legítimos los hijos nacidos de las relaciones fuera
del matrimonio, pero aun así no consiguieron el derecho al sufragio por lo que
siguieron requiriendo del permiso del marido para trabajar.
51
Aparentemente como una respuesta a las ideas emancipadoras que se
promovían en el sureste, con el ansia de conjurarlas, el periódico Excélsior
impulsó desde 1922 la celebración del día de las madres, asunto que habría de
contar con el apoyo de los comerciantes y convertirse en una de las fechas más
celebradas por la sociedad mexicana.
Cultural e ideológicamente los años veinte estuvieron saturados de novedades:
las faldas cortas, la ropa suelta y el cabello, contra los largos caireles o trenzas,
los corsés que ajustaban la figura y los gigantescos sombreros: la moda abría
paso a la comodidad. Las mujeres dedicadas al hogar mantenían sus casas
limpias y las intelectuales de izquierda participaban en los medios artístico y
político:
pintoras,
muralistas,
escritoras
y
críticas
cuestionaban
los
convencionalismos con la pluma, el pincel o el discurso retórico. Mexicanas
como Antonieta Rivas Mercado, Frida Kahlo o Guadalupe Marín significaban
una renovación y una expectativa de la vida que, sin embargo, era desconocida
por la mayoría de la población.
I.8 La etapa de la posguerra
En este apartado es pertinente aclarar que lo que a continuación
mencionaremos se refiere a procesos sociales que acontecieron sobre todo en
Europa y los Estados Unidos, pero que repercutieron contundentemente en la
manera de observar la realidad por parte de las mujeres y la sociedad mexicana
en general.
La gran cantidad de hombres movilizados durante la Primera Guerra Mundial
(1914-1918), las pérdidas humanas y el regreso de gran cantidad de inválidos,
obligaron a incorporarse a la mujer en el mercado laboral, incluso en las tareas
más pesadas, antes desarrolladas únicamente por los hombres.
52
Ante la realidad consumada de la igualdad y a través de una lucha
permanente, las mujeres comenzaron a obtener el voto. Señalaban que si eran
iguales para trabajar y luchar, deberían serlo para votar.
Con la Primera Guerra Mundial se operaron cambios radicales en el mundo,
uno de esos cambios fue en la mano de obra femenina que creció con la
demanda de trabajadores para la industria bélica.
Con este precedente la
mujer demostró la alta calidad de su mano de obra, y al terminar este conflicto
se negó a dejar de participar en el aparato productivo cuyo sitio era reclamado
por los hombres que regresaban de la guerra. (Tuñón; 1987: 165)
Después de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), el mundo occidental
experimentó un creciente desarrollo de la clase media y un descenso de la
natalidad. El trabajo de las mujeres, pese a la creencia generalizada acerca de
su condición, se mantuvo estable. Aproximadamente un tercio de las mujeres
en edad laboral se dividieron en dos tendencias contrarias: mujeres de la clase
media que valoraban cada vez más su actividad laboral y mujeres de estratos
inferiores que se liberaron de la necesidad de trabajar al elevarse sus niveles de
vida.
53
I.9 Las décadas de los años Treinta y Cuarenta
La educación femenina se había beneficiado en cuanto al nivel de información
general, pero todavía quedaba lejos la posibilidad de adquirir un mejor
conocimiento del cuerpo y la sexualidad. La falta de acceso a la información
seguía siendo un impedimento para el desarrollo de las mujeres, para la toma
de conciencia de sus propias capacidades y un obstáculo para el reconocimiento
de los propios derechos. “Este fue el ambiente que imperó durante el sexenio
presidencial del general Lázaro Cárdenas del Río (1934 – 1940), un periodo que
habría de impulsar un importante giro en la política nacional con el fomento de
las organizaciones populares y el fortalecimiento del Estado”. (Tuñón; 1987:
169).
Durante los años cuarenta México aceleró su crecimiento económico, fortaleció
su industria y crecieron las clases medias y las ciudades, si bien a expensas del
campo y de una creciente dependencia respecto a los países ricos, los que
también dinamizaron sus economías. Las mujeres ganaron mayor presencia en
la producción, pero en los empleos peor retribuidos. El cine norteamericano de
esa época transmitía también una nueva moral y otros hábitos de vida, el
prototipo de la belleza regordeta tímida, y pasiva, dio paso a la figura estilizada
que anunciaba la práctica de dietas, ejercicios y obsesión por el sobrepeso. La
mujer aparecía más integrada a la sociedad pero igualmente enajenada por un
“deber” más allá de sus propias elecciones y de sus posibles destinos. Lograr su
integración cabal a la sociedad con el pleno reconocimiento de sus derechos
cívicos como mujer.
54
En 1947 Miguel Alemán permitió un primer ensayo del voto femenino para los
comicios municipales y así preparó el terreno para recibir el sufragio femenino
que finalmente oficializaría Adolfo Ruiz Cortines en 1953.2 El Estado otorgó
este derecho de acuerdo con una línea de crecimiento capitalista que requería
la igualdad legal de los individuos, además, las naciones más desarrolladas ya
lo habían incluido entre sus normas fundamentales. “El voto permitió a la
mujer ejercer su capacidad legal, pero se insistía en que debía asumirlo con
sumo cuidado para no perder su feminidad y no olvidar su papel tradicional de
esposa y madre”. (Tuñón; 1987: 173)
____________________________
2
Al grito de “¡Que lo repita! ¡Que lo repita!”, más de 20 mil mujeres reunidas en el Parque 18
de marzo de la Ciudad de México el 6 de abril de 1952, demandaron el compromiso al candidato
presidencial Adolfo Ruiz Cortines para que cumpliera con su promesa de plasmar en la
Constitución el derecho de las mujeres mexicanas a votar y ser electas en puestos de elección
popular.
Ruiz Cortines repitió su compromiso y un año después, el 17 de octubre de 1953, ya siendo
presidente cumplió su palabra y promulgó las reformas constitucionales que otorgaron el voto a
las mujeres en el ámbito federal. De esta manera se cumplía un sueño y se comenzaba una
ardua lucha por la ciudadanía plena de las mexicanas.
Sin embargo, el reconocimiento de las mexicanas al voto no fue un regalo ni una concesión, sino
el resultado de movimientos universales y locales a favor de la equidad de género en el ámbito
político.
55
I.10 Consideraciones sobre la participación de la Mujer en México
La participación de las mujeres en los ámbitos social, político y económico del
país con los mismos derechos y obligaciones que los hombres, fue uno de los
propósitos centrales de la lucha feminista mexicana de la primera mitad del
siglo XX. Actualmente cuando la democracia ciudadana se ha convertido en el
asunto central del debate político en México, la historia de la lucha por el
ejercicio igualitario de la ciudadanía de hombres y mujeres adquiere una nueva
relevancia.
En México se puede identificar en primera instancia la labor de algunas
profesoras de primaria de Mérida en 1870, encabezadas por la poeta y maestra
Rita Cetina Gutiérrez, fundaron una de las primeras sociedades feministas del
país. El grupo se denominó “La Siempreviva”, publicó un periódico y estableció
una escuela secundaria, que posteriormente se fusionó con el Instituto
Literario de Niñas, del gobierno.
En Mérida había de igual manera varias profesoras distinguidas en la Escuela
de Jurisprudencia, y después en la Escuela de Medicina, que estaban a favor de
la causa del feminismo en Yucatán. Entre 1910 y 1915, varias estudiantes de
la Escuela de Derecho presentaron tesis sobre el tema del divorcio y de los
derechos de las mujeres, lo que resulta algo relevante en comparación con el
reducido tamaño de la escuela.
La demanda por igualdad ciudadana para las mujeres tuvo sus primeras
expresiones a partir de la Revolución Mexicana. El movimiento iniciado por
Francisco I. Madero en su lucha contra el reeleccionismo del régimen de
Porfirio Díaz y por el sufragio efectivo abrió espacios políticos para que las
mujeres demandaran, para ellas, el derecho al sufragio.
56
Se formaron organizaciones de mujeres maderistas tales como las “Hijas de
Cuauhtémoc” y las “Amigas del Pueblo” que en diversos momentos, exigieron el
sufragio femenino.
En septiembre de 1910, las “Hijas de Cuauhtémoc”,
presididas por Dolores Jiménez y Muro, exigieron la renuncia de Porfirio Díaz.
En un manifiesto afirmaban que ya era tiempo de que las mujeres reconocieran
que sus derechos y obligaciones iban más allá del hogar.
En 1920, el Dr. Eduardo Ursáiz, rector de la Universidad de Yucatán y autor de
Eugenia, una novela pro feminista, dio las primeras conferencias sobre el
control de la natalidad a los estudiantes de Medicina de Mérida.
También en Yucatán el general Salvador Alvarado defendió el feminismo, dio
empleos a las mujeres en la administración pública, mejoró las condiciones de
trabajo de las sirvientas domésticas, destinó grandes cantidades de dinero a la
educación vocacional de las mujeres y reformó el Código Civil para conceder a
las mujeres solteras los mismos derechos que tienen los hombres para
abandonar la casa paterna al cumplir los 21 años si así lo desean. Motivó a las
mujeres a que tomaran parte activa en los negocios públicos al convocar en
Mérida los dos primeros congresos feministas en la historia de México en enero
y noviembre de 1916.
“Mediante otras resoluciones, se dieron mayores
oportunidades educativas y vocaciones a las mujeres, y la mayoría votó que en
el futuro las mujeres deberían ser alentadas para que participaran en la
política, primero a nivel municipal, y posteriormente a niveles estatal y
nacional”. (Rocha; 1991: 256-258)
57
Hermila Galindo, Elvia Carrillo Puerto en 1926, y Refugio García en 1931,
fueron las mujeres que lucharon en las contiendas políticas para obtener
puestos de elección popular y así hacer valer los derechos de las mujeres.
Hermila estaba comprometida con el nacionalismo liberal del movimiento
constitucionalista, Elvia luchó por principios socialistas, y Refugio, militante
comunista, defendió reformas sociales y políticas de orientación nacionalista
popular.
Al hacerlo ellas expresaron su deseo de equidad política y se
afirmaron como personas y sujetos políticos. Con ello afirmaron también la
presencia social de las demás mujeres.
Con la proclamación del Plan de San Luis, el 20 de noviembre de 1910, las
agitadoras políticas maderistas, con mayor fuerza, demandaron para sí los
derechos que el movimiento exigía para el pueblo, en mayo de 1911, más de mil
mujeres firmaron una petición pidiendo sufragio. En junio de ese mismo año,
cuando Porfirio Díaz ya había presentado su renuncia y se encaminaba al
exilio, las “Amigas del Pueblo” solicitaron el derecho al voto al gobierno interino
de Francisco León Ibarra, señalaban en su petición, que de acuerdo con la
Constitución de 1857, las mujeres tenían el mismo derecho que los hombres a
votar, sin embargo, tal petición no fue concedida.
Posteriormente, el proyecto feminista de Hermila Galindo, fue retomando la
igualdad de los derechos ciudadanos para hombres y mujeres, aspirando a
lograr una igualdad educativa, social, laboral y sexual, entre hombres y
mujeres.
58
El proyecto presentado por Hermila Galindo a favor del derecho al sufragio de
las mujeres al Congreso Constituyente fue denegado, aduciendo las razones
siguientes:

“La diferencia de los sexos determina la diferencia en la aplicación de las
actividades;

En el estado en que se encuentra nuestra sociedad, la actividad de la
mujer no ha salido del círculo del hogar doméstico, ni sus intereses se
han desvinculado de los miembros masculinos de la familia;

No ha llegado entre nosotros a romperse la unidad de la familia, como
llega a suceder con el avance de la civilización;

Las mujeres no sienten pues, la necesidad de participar en los asuntos
públicos, como lo demuestra la falta en todo movimiento colectivo en ese
sentido;

Los derechos políticos no se fundan en la naturaleza del ser humano,
sino en las funciones que debe ejercer para que se mantenga la
coexistencia de los derechos naturales de todos;

En las condiciones en que se encuentra la sociedad mexicana no se
advierte la necesidad de conceder el voto a las mujeres”. (Rocha; 1991:
266)
En 1918, Hermila Galindo decidió participar en las elecciones, contendió como
candidata diputada por el 5° distrito electoral de la Ciudad de México, fue ésta
la primera vez que, en México, una mujer participó por un cargo de elección
popular. Al parecer Hermila Galindo obtuvo la mayoría de los votos en las
urnas; pero no llegó a ocupar un lugar en la Cámara de Diputados debido a que
el Colegio Electoral se negó rotundamente a reconocer de manera abierta su
triunfo.
No obstante, se podría decir que con la candidatura de Hermila
Galindo en 1918, se inició una nueva etapa para el sufragio efectivo.
59
Elvia Carrillo Puerto logró ganar la candidatura para ocupar el puesto de
diputada por el congreso estatal por Yucatán, ya que su hermano Felipe
reconoció el derecho de las mujeres a participar en las elecciones entre 1922 y
1924.
Sin embargo, los grupos conservadores asesinaron a Felipe Carrillo
Puerto y Elvia tuvo que abandonar el cargo y se fue a San Luis Potosí donde se
reconocían los derechos políticos de las mujeres letradas y ella aprovechó para
contender en las elecciones de 1925.
Elvia Carrillo ganó las elecciones con votos de hombres y mujeres potosinos, su
triunfo fue reconocido por las autoridades del estado, pero ella tampoco
consiguió el reconocimiento electoral de su triunfo por parte del Congreso
Electoral de la Cámara de Diputados.
Sin opciones legales que la apoyaran Elvia se vio obligada a abandonar sus
actividades, para obtener el reconocimiento de su triunfo y dirigió sus
esfuerzos, a fortalecer la movilización a favor de la igualdad política. Al año
siguiente, en 1926, presentó al Congreso de la Unión una nueva petición de
reforma al Artículo 34 constitucional avalado por miles de firmas de mujeres.
En la década siguiente, el movimiento feminista adquirió nuevos aires y
fortaleció su organización con la fundación en 1935 del Frente Único Pro
Derechos de la Mujer (FUPDM), que llegó a aglutinar a más de cincuenta mil
mujeres pertenecientes a cerca de ochocientas organizaciones del país y en
forma paralela a la formación del FUPDM, el Partido Nacional Revolucionario
(PNR) fue abriendo espacios a la participación política de las mujeres. Así en
1935, el PNR invitó a Margarita Robles de Mendoza, una reconocida feminista,
a organizar comités femeniles dentro del partido.
60
En febrero de 1937, el Frente Único Pro Derechos de la Mujer postuló a dos
militantes como precandidatas a diputadas en los plebiscitos internos del PNR
Refugio García, maestra rural, militante comunista y secretaria general del
FUPDM contendió en el distrito electoral de Uruapan Michoacán.
Por su
parte, Soledad Orozco, viuda y con seis hijos, contendió por el distrito de León,
en Guanajuato, ambas candidatas obtuvieron mayoría de votos en sus
respectivas demarcaciones, pero el PNR se negó a reconocer sus triunfos.
En ese mismo año, cuando se abrió el período de sesiones de la Cámara de
Diputados el Presidente Lázaro Cárdenas presentó al Congreso de la Unión
una iniciativa de ley para reformar los artículos 34 y 35 constitucionales y así
dar reconocimiento a los derechos ciudadanos de las mujeres. La reforma fue
aprobada por ambas Cámaras y por las Legislaturas Locales pero, incurriendo
en irregularidades, no se concluyó su declaratoria formal al no ser publicada
ésta en el Diario Oficial.
“Por lo tanto, la reforma no se incorporó al texto constitucional, y por lo mismo
no llegó a tener efectividad.
Por encima de la injusticia que significaba
mantener las mujeres sin derechos ciudadanos, imperó el temor de que al
obtener la igualdad política emplearían su voto para apoyar a las fuerzas
conservadoras.
Esta situación asestó un duro golpe para el movimiento
feminista”. (Cano; 1991: 283-284)
El gobierno de Ávila Camacho tuvo como consecuencia un debilitamiento del
movimiento ya que pertenecía a las fuerzas conservadoras, que se oponían a la
igualdad de derechos de las mujeres. El FUPDM pasó a ser, durante la guerra,
el comité coordinador de la Mujer para la Defensa de la Patria, y al término del
conflicto se convirtió en Bloque Nacional de Mujeres, instancia cada vez más
dependiente de la política oficial.
61
Más tarde, en 1947, durante el gobierno de Miguel Alemán, se otorgó el
permiso para el voto femenino para los comicios municipales.
En 1952 la
alianza de Mujeres de México, que era presidida por Amalia Caballero de
Castillo Ledón, se manifestó a favor del voto femenino que finalmente fue
otorgado por Ruiz Cortines en 1953, siendo publicado en el Diario Oficial de la
Nación en octubre de ese mismo año.
A partir de 1968, como parte del movimiento estudiantil se plantearon una
serie de demandas que sólo habrían de conformarse hasta la década de los
setentas, periodo en el que se hizo evidente la influencia de las feministas
estadounidenses y europeas.
“A este movimiento se adhirieron mujeres de
clase media, universitarias y de izquierda, se propuso además una relación con
grupos obreros y campesinos, aunque con poco éxito”. (Tuñon; 1987: 184)
Los avances de la ciencia médica y la aparición de la píldora anticonceptiva en
la década de los 70‟s liberaron a las mujeres de las tareas asignadas por la
cultura masculina. La maternidad y la obediencia fueron temas de debate y
objetos de cuestionamiento.
Podría decirse que esta década representó el resurgimiento de la lucha de las
mujeres mexicanas por lograr la igualdad real con los hombres; lucha que se
había estancado con la obtención del voto en 1953. Este resurgimiento del
feminismo en México se produjo en un momento de “apertura democrática” que
el gobierno de Luis Echeverría impulsó para tratar de canalizar el descontento
generalizado en el período ejecutivo anterior.
62
Las feministas de Estados Unidos realizaron una manifestación, la cual
impactó a algunas intelectuales mexicanas, que tomaron la decisión de
organizarse. A raíz de esta manifestación Martha Acevedo publicó un artículo
en la revista Siempre que se convirtió en la chispa de muchas inquietudes al
referirse a las demandas que en esas fechas exigían las mujeres de San
Francisco, California, que conmemoraban un aniversario más de los derechos
políticos de las mujeres estadounidenses.
Entonces, en México empezaron a discutirse temas como la doble jornada de
trabajo, la subordinación laboral, la despenalización del aborto y su práctica
libre, así como la violencia contra las mujeres y la violación. Mujeres en Acción
Solidaria (MAS), fue uno de los primeros grupos que convocó a la primera
manifestación de mujeres el 10 de mayo de 1971 en el Monumento a la Madre,
este grupo además de discutir las demandas, llevó a cabo una serie de
conferencias, elaboró publicaciones y apoyó algunas huelgas.
En 1972 el coloquio “Imagen y Realidad de la Mujer en México”, ventiló las
interrogantes que ya inquietaban a muchas feministas.
A partir de dicho
momento las organizaciones surgieron por todos lados.
Eleanor Roosevelt, delegada estadounidense efectuó en México el año
Internacional de la Mujer, en 1975, siendo un evento que salió de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU) para asumir amplias proporciones
a nivel mundial. A la vez, entraron en vigor las modificaciones al artículo 4° de
la Constitución Mexicana que señalan:
“el varón y la mujer son iguales ante la ley, ésta protegerá la organización y el
desarrollo de la familia. Toda persona tiene derecho a decidir de manera libre,
responsable e informada sobre el número de hijos que desea tener.”
63
A fines de 1975 las Naciones Unidas proclamaron el período de 1976 – 1985
como el “Decenio de las Naciones Unidas por la Mujer: igualdad, desarrollo y
paz”. La ONU se comprometió a procurar la aplicación de las resoluciones con
el fin de acabar con la marginación y desigualdad femenina, ya sea con la
expedición de ordenamientos jurídicos o con el apoyo a las acciones del
movimiento femenil en sus respectivos países.
Las huelgas y movilizaciones de la clase trabajadora durante el período de
1980-1981 fueron un último intento por tratar de recuperar un poder
adquisitivo y mejorar las condiciones de vida; no obstante, la política del
gobierno fue determinante y condujo al país a una profunda crisis económica
que trajo como consecuencias un mayor endeudamiento y una debilidad política
para la nación.
A principios de la década de los ochenta puede notarse una recomposición del
movimiento feminista y el trabajo de mujeres, donde algunos grupos tuvieron
una destacada participación política y una capacidad de convocatoria
sobresaliente.
En esa misma década sale a relucir la activista María del Rosario Ibarra de la
Garza, mejor conocida como Rosario Ibarra de Piedra quien desde 1973 había
comenzado su actividad política, cuando su hijo Jesús Piedra Ibarra había sido
acusado de pertenecer a un grupo armado de orientación comunista, la Liga
Comunista 23 de Septiembre. Jesús Piedra desapareció en 1974 cuando fue
detenido por las autoridades.
A partir de ese momento, Rosario Ibarra
comenzó una ardua trayectoria demandando información acerca del paradero
de su hijo.
64
Lo destacable de su persona aunado a todo lo anterior fue el hecho de que en
1982 fue candidata a la Presidencia de la República por el Partido
Revolucionario de los Trabajadores (PRT). Siendo diputada por ese partido
para 1988 nuevamente alcanzó la candidatura a la presidencia de la república.
Después de ser declarado vencedor Carlos Salinas de Gortari, Ibarra se unió a
los reclamos de fraude electoral.
Por otro lado, en 1983 se organizó el Primer Encuentro de Mujeres del
Movimiento Urbano Popular, donde se debatió la entrada del movimiento
feminista al terreno de los sectores populares. Cinco años después, junto a las
reivindicaciones económicas y sociales aparecieron las demandas ciudadanas:
democracia, justicia y respeto a los resultados electorales. Mujeres en Lucha
por la Democracia aglutinó a diferentes grupos y organizaciones.
En gran
medida, la conciencia democrática surgió a raíz de la elección presidencial de
1988, en la cual las mujeres representaron el 56% de los votantes cuyos
resultados fueron muy cuestionados.
Durante el sexenio de Ernesto Zedillo se promovió el Programa Nacional de la
Mujer (1995-2000) a través de la Secretaría de Gobernación y con la
participación de otras dependencias e instituciones. Dicho programa fue fruto
de un amplio trabajo de consulta a nivel nacional y acogió los puntos de vista
de las mujeres contenidos en varios puntos temáticos que se emitieron en
México con vistas a la participación en la IV Conferencia mundial, efectuada en
Pekín en 1995. El tema central fuel el hecho que afecta a las mujeres de todo el
mundo al verse relegadas a una condición discriminatoria por la mera razón de
su género.
65
El Gobierno del D.F. emitió en el Reglamento Interior de la Administración
Pública del Distrito Federal el Artículo 129, con el cual se creó el Instituto de la
Mujer del Distrito Federal (Inmujer) como órgano descentralizado de la
Secretaría de Gobierno, el 11 de agosto de 1999. En enero de 2001 se ratifica
formalmente en el Artículo 201 del reglamento citado y publicado en la Gaceta
Oficial del Distrito Federal.
Ya en los albores del siglo XXI, en las elecciones del año 2000, el candidato
ganador resultó ser Vicente Fox Quesada, siendo el primer presidente que
gobernó México después de la Revolución Mexicana de un partido diferente al
Partido de la Revolución Institucional (PRI). Representó por ello el arribo de la
derecha a la administración pública federal y su ascenso en una proporción
importante en el poder legislativo y los gobiernos estatal y municipal,
respectivamente.
Durante su mandato la problemática de las mujeres se
agudizó, sobre todo en el mercado de trabajo, es decir, falta de opciones y
oportunidades de empleo, trabajos mal pagados, pocas posibilidades de acceso a
la seguridad social, a prestaciones, inestabilidad laboral y salarial, es decir,
empleos inestables.
En las entidades federativas y en los municipios donde gobernó el Partido
Acción Nacional (PAN), se adquirieron actitudes que los acercaron más a las
características de un fundamentalismo religioso. En Querétaro, por ejemplo, el
congreso local panista aprobó en el año 2000 un código penal que castigaba con
prisión a las mujeres que abortaban, aunque el embarazo fuera la consecuencia
de una violación. De esta forma, la mujer es agredida dos veces: una por el
hombre que la violó y la segunda por las leyes estatales reaccionarias.
66
I.11 Perspectivas de la Mujer en México (2005 – 2012)
El papel desempeñado por la mujer mexicana en la sociedad se ha modificado
drásticamente en los últimos años. Las transformaciones políticas, económicas
y sociales que han ocurrido en el mundo están generando cambios radicales en
la conformación de la familia y en el papel que el hombre y la mujer
desempeñan en ella y en la sociedad en general.
Estos cambios no se han dado en forma generalizada, sin embargo, las
recurrentes crisis económicas han ido minando la estructura familiar y
dañando seriamente el tejido social.
Tengamos en cuenta que en la
distribución de papeles en nuestra sociedad el responsable de satisfacer las
necesidades económicas de la familia es el hombre, las consecuencias de esta
realidad salen a relucir: muchos varones en México se están quedando
imposibilitados de cumplir con el papel que la sociedad les tiene asignado
dentro de la familia, por no contar con empleo o porque el salario que perciben
les es insuficiente.
En las familias donde el padre está desempleado o su salario es insuficiente
para satisfacer las necesidades familiares, la mujer se ha incorporado al
mercado de trabajo para completar el ingreso familiar, y lo mismo sucede con
los hijos ya que actualmente, para que una familia subsista, necesitan trabajar
mínimo tres de sus integrantes.
67
Las mujeres están desempeñando en la sociedad papeles que no tenían
asignados en el esquema tradicional y
esto quedó plasmado al menos
cuantitativamente en las estadísticas del INEGI en el año 2010:

Una de cada tres familias está encabezada por una mujer sola.

La tercera parte de la población económicamente activa son mujeres.

En uno de cada tres hogares conformados por padre, madre e hijos, la
mujer contribuye al ingreso.

En uno de cada cinco hogares el ingreso principal de la familia lo aporta
la mujer.

En uno de cada diez hogares la mujer es la única proveedora de ingresos
económicos.
Por su parte, en el marco normativo de México, hay códigos que respondiendo a
la realidad de la época, ahora se convierten en instrumentos que producen
inequidad o discriminación respecto a las mujeres.
Los códigos de algunos
estados mencionan que la atención del hogar y el cuidado de los hijos es
responsabilidad sólo de la mujer. En otros, se señala que para que la mujer
pueda trabajar fuera del hogar deberá presentar la autorización de su marido.
También en instituciones públicas y privadas se exige el certificado de no
embarazo para contratar o conservar el empleo. Todo esto, sin mencionar la
violencia que han vivido al mismo tiempo que participan más en el mercado de
trabajo.
68
CAPITULO II
LA MUJER RURAL EN MÉXICO
69
II.1 LA MUJER RURAL EN MÉXICO
Según datos de la FAO (2009) en América Latina existen alrededor de 60
millones de mujeres rurales que diariamente trabajan más de 12 horas para
asegurar la subsistencia de sus familias. Por otro lado, las estadísticas indican
que ellas aportan alrededor del 48% del ingreso familiar en la región.
Son numerosas y variadas las actividades que las mujeres de las economías
campesinas llevan a cabo durante una jornada de trabajo.
Aunque en las
sociedades contemporáneas aún persiste solamente su función en la esfera
reproductiva, es importante el papel que llevan a cabo en la producción
agropecuaria y en la seguridad alimentaria.
Entre otras cosas, las mujeres se encargan del cuidado de la huerta y de los
animales,
siembran,
cosechan,
procesan
alimentos,
comercializan
la
producción, cocinan, cuidan y educan a los hijos, A su vez, pasan a formar
parte de la fuerza de trabajo asalariada temporal o permanente en la
agricultura comercial o participan como artesanas y comerciantes en el sector
informal.
Es evidente que la mayoría de las investigaciones realizadas en torno al tema
agrario, han sido llevadas a cabo en términos globales, en otras palabras, se ha
manejado la cuestión agraria como un concepto general en el que no se
diferencia a hombres y mujeres. Por ende, la presencia de la mujer rural, por
simple que parezca, ha sido relegada y olvidada.
En relación a la inserción de la mujer en los movimientos sociales rurales son
escasos o casi nulos los estudios que se han realizado, pero no se puede omitir
la incorporación femenina a éstos.
70
En términos generales, es claro que cuando las mujeres participan en los
movimientos sociales, son pocas las veces que enarbolan demandas propias, lo
que trae como consecuencia directa que las luchas que posteriormente
emprenden las mujeres continúen bajo las mismas condiciones.
Varios autores han mencionado que las mujeres participan poco en los inicios
de los movimientos y su presencia se hace más evidente cuando éstos se
desarrollan o cuando atraviesan por una etapa de defensa u oposición en contra
de las represiones que padecen como consecuencia de su situación social. Sin
embargo, las causas por las que las mujeres se movilizan son las mismas que
mueven a los campesinos: luchan por las tierras, mejores precios de garantía y
por el cese de la represión en el campo. Lo destacable es que la mujer participa
en acciones que rebasan el ámbito doméstico y se insertan en la esfera de la
participación pública.
La participación política de la mujer en los movimientos sociales, es una
realidad menospreciada y negada, en principio, por la desvalorización social
que se tiene de la mujer, asunto que adquiere un estatus particular en el medio
rural, puesto que las actividades que realiza no son consideradas como
“políticas”, aunque es un hecho insoslayable el que su trabajo apoya y refuerza
el movimiento campesino en el que participan.
Históricamente las actividades realizadas por las mujeres se han catalogado
como de “apoyo” o sin trascendencia. Por esa razón, su participación se ha
quedado en el anonimato en las investigaciones que han dado cuenta de las
luchas campesinas.
71
Por otro lado, la acentuada represión política que en las últimas décadas han
sufrido los habitantes del medio rural, provoca la respuesta pública y la
organización de las mujeres para exigir sus demandas. En esta dirección su
movilización es en su carácter de madre, hermana y esposa de los hombres
reprimidos, por tanto su condición sumisa se transforma en impulso de lucha
que va del ámbito de lo privado al de lo público.
72
II.2 Ámbito rural: revisión conceptual
El análisis de las características económicas, políticas y sociales de las mujeres
rurales exige definir el ámbito de estudio al que se hará referencia, es decir, lo
que se entenderá por rural.
Los diversos enfoques utilizados para estudiar lo rural han dado como
resultado un conjunto de estudios sobre el campo y sus residentes y ha llevado
a la vez a diferentes conceptualizaciones. Por una parte, tenemos los enfoques
teóricos que han pretendido proporcionar un modelo general que trate de
expresar y conjuntar aquellos elementos que le son comunes a las sociedades
rurales, fijando aquellas características que se encuentran en diferentes
tiempos y espacios geográficos.
Por otra parte se tienen los criterios de
clasificación, cuya base es meramente cuantitativa y se reduce a términos
numéricos, los cuales la mayoría de las veces no expresan la complejidad de
relaciones que encierra el ámbito rural.
Con el único propósito de sustentar el criterio y aplicación del término que se
utiliza en esta investigación para el análisis del perfil de la mujer rural, a
continuación se cuestionan y analizan de manera breve varios de los enfoques y
propuestas teóricas que han sido utilizados en diversos estudios para definir lo
rural.
1) Definiciones por negación. Son aquellas en las que, de una u otra forma,
el espacio rural es conceptualizado como aquél que no está incluido en el
concepto de lo urbano. Por tanto, en este tipo de definiciones se concibe
lo rural, no por sus cualidades intrínsecas, de las cuales se presume que
carece, sino como negación de las características de lo urbano. En este
caso, la definición del ámbito rural recae sobre los investigadores de lo
urbano.
73
2) Definiciones, en las que se trata de de caracterizar el espacio rural por
sus funciones interiores, las que, sobre todo, están asociadas con las
modalidades de empleo del suelo, y en ocasiones con la estructura y
composición de la población.
II.2.1 Rural y Urbano
En los países desarrollados, enfocados a la agricultura tecnificada 3, la
categorización de los medios rural y urbano dependen únicamente de
delimitaciones poco convencionales, basadas en el tamaño de las entidades o
mejor dicho, en la población que aún subsiste de las actividades agrarias como
eje económico primario. Los sectores rural y urbano solamente tienen un peso
significativo cuando se ponen en marcha los elevados costos y se obtiene la
máxima plusvalía que, en el plano urbano se derivan de la delimitación del
terreno urbano o apto para urbanizar.
Uno de los motores del modo de
producción actual es principalmente la producción y reproducción de las
grandes urbes: las ciudades son la expresión de las relaciones humanas en los
campos económico, comercial y artesanal, puesto que es aquí de donde surge el
conflicto que se desarrolla en torno a la frontera física entre lo rural y lo
urbano.
____________________________
3
Por agricultura tecnificada nos referimos a las regiones donde la producción agropecuaria se
encuentra altamente mecanizada, se proveen de semillas, fertilizantes y otros insumos
catalogados como de la más alta calidad.
En otras palabras y como su nombre lo dice se
utilizan las técnicas y herramientas más eficientes para lograr sacar el máximo provecho de
una determinada superficie de cultivo.
74
Sin embargo, la esencia del capitalismo y el prolongado avance mercantil han
llegado hasta los espacios rurales más alejados haciendo difícil percibir las
diferencias en hábitos, actitudes y valores, y más aún en lo que se refiere a las
estructuras y relaciones de producción.
Podrían decir que vivimos en un
complejo conglomerado social en el que la cultura dominante se impone sobre
los grupos vulnerables cumpliendo la misma función que las áreas verdes en la
ciudad industrializada.
La discusión acerca de una nueva conceptualización del escenario rural se
encuentra en pleno auge y en los últimos años ha generado una amplia
bibliografía. Por esto, se debe ser congruente con el marco referencial y los
elementos que se incluyen en el momento de abordar una investigación social
de este tipo en la que se resalta el papel de la mujer rural.
Más que una preocupación filosófica sobre el sentido y los fundamentos que dan
un carácter propio al ámbito rural, es preciso caracterizar el espacio rural con
sus manifestaciones agrarias y no agrarias y poder así inferir en su
problemática, oportunidades y limitaciones.
Además de mencionar las
premisas para conceptualizar la ruralidad desde el momento histórico que
vivimos.
Si nos introducimos en la conceptualización tradicional de lo rural, podríamos
enmarcarlo como el ambiente con baja densidad de población y con una
actividad económica diversa, pero a la vez codependiente de la influencia
directa de las zonas metropolitanas. Hoy en día, a raíz de todos los cambios
que el sistema económico capitalista impone, sabemos que este medio es algo ya
no opuesto a la urbano ni exclusivamente vinculado al uso y tenencia de la
tierra, la producción agropecuaria y el lugar de trabajo de las familias
campesinas y más bien es un ambiente social y económico que comprende un
conjunto de actividades diversas: agricultura, artesanías, pequeñas y medianas
empresas, comercio y servicios.
75
Germani (1962), uno de los sociólogos más destacados de América Latina,
dedicó un importante espacio de su obra para señalar las variables que
diferencian la sociedad tradicional y la sociedad industrial sobre una dicotomía
tipológica.
En base a lo anterior las principales características de lo rural desde la
perspectiva tradicional se resumen de la siguiente manera:
1) La población rural se dedica casi de manera exclusiva a las actividades
agrícolas, pecuarias y forestales.
2) Las actividades agrícolas se rigen por ciclos naturales sin la mayor
capacidad para la intervención humana.
3) Dichas nociones de regulación de las actividades a través de ciclos
naturales genera en los pobladores rurales una noción del tiempo y de su
uso que contribuye a la constitución de una cultura específica.
4) Los habitantes de las zonas rurales se encuentran dispersos en
territorios de baja densidad de población.
5) La dispersión, el relativo aislamiento y otros factores, impiden a dichas
poblaciones acceder a bienes y servicios que les proporcionen mayores
satisfacciones, y por lo mismo los avances de la cultura (altos índices de
analfabetismo y pésimas condiciones educativas).
6) Hay fuertes flujos migratorios del campo a las ciudades, debido
principalmente a la subvaloración de lo rural y la sobrevaloración del
medio urbano.
76
Cincuenta años después de que Gino Germani expusiera los anteriores
postulados en necesario cuestionarlos y replantearlos.
1) Hoy día denominamos población rural a los grupos humanos que
mantienen una relación ideológica, cultural o económica con la tierra y a
las actividades vinculadas a ella, sin embargo el ingreso familiar es
complementado con actividades que nada tienen que ver con el sector
rural.
2) Muchos grupos campesinos aún siguen dando vigencia a sus tradiciones
y perpetúan las creencias en los ciclos naturales y su relación con las
fechas y procesos de la producción agrícola, pero a la par, se han dejado
seducir por los adelantos de la ciencia agronómica y las importaciones
tecnológicas que hacen más eficiente y de mejor calidad la producción,
aunque ciertamente sólo ciertos grupos tienen acceso a éstos.
3) Los campesinos del siglo XXI han adoptado el modelo de la pequeña
empresa capitalista para poder competir en el mercado, por ende, han
emigrado y se concentran en poblaciones en las que el crecimiento
demográfico es evidente.
4) Actualmente en el sector rural podemos encontrar el acceso a la
educación básica, bienes y servicios públicos. No obstante, otra es la
cuestión de la desigualdad, calidad educativa y poder adquisitivo de los
pobladores.
5) Si bien es cierto que aún son muchos los flujos migratorios del campo a
la ciudad, es necesario aclarar que éstos se dan sobre todo por parte de
las generaciones jóvenes que se niegan a permanecer en sus sitios de
origen con la intención de acceder a una mejor calidad de vida.
77
“La comunidad rural es una forma de comunidad orgánica, y no se reduce a una
solidaridad mecánica de elementos individuales.
intercambio
de
mercancías,
el
dinero,
la
Allí donde triunfan el
economía
monetaria
y
el
individualismo la comunidad se disuelve, es reemplazada por la exterioridad
recíproca de los individuos y el „libre‟ contrato de trabajo.” (Lefebvre, 1973)
Es decir, se relaciona bajo condiciones técnicas y sociales pero no es una fuerza
de trabajo productiva en sí, ya que aquí recaen los supuestos que hacen más
evidente el desarrollo basado en la diferenciación social.
En síntesis, las características diferenciales de los medios rural y urbano,
muestran al menos las siguientes distinciones:
1) Ocupacionales
2) Ambientales
3) En cuanto al tamaño de las comunidades
4) En la densidad de su población
5) En la homogeneidad y heterogeneidad de su población
6) En la estructura social
7) En la movilidad social
8) En la dirección de sus migrantes
9) En los sistemas de integración social
10) En las oportunidades de acceso a la cultura dominante
78
A pesar de las dificultades existentes para definirlo y a los fines de este trabajo,
el espacio rural puede ser entendido sobre todo, como un ámbito social que
funciona como hábitat, lugar de residencia o asentamiento humano y como un
marco de referencia para la acción social, dentro de la que hay que incluir las
relaciones económico-productivas características de cada contexto socioespacial específico. En tanto que marco de referencia de la acción social, el
espacio rural constituye el ámbito existencial de una peculiar forma de vida
asociada a unos valores y concepciones del mundo específicas, en otras
palabras, a una identidad colectiva.
II.2.2 Esbozo histórico
En principio, el hombre primitivo viajaba de un lugar a otro en busca de
alimento, pero en cuanto desarrolla la agricultura pasa de un estilo de vida
nómada a uno sedentario.
Con la sedentarización de los primeros grupos
humanos se lleva a cabo la estratificación de su primitiva sociedad; surge la
división del trabajo.
Mientras el hombre se dedicaba a cazar, la mujer se
encargaba del cuidado de los hijos y de la importante labor de proveer de
alimento a la familia, por lo anterior, varios historiadores sostienen la teoría de
que la mujer inventó la agricultura.
“Con la división del trabajo, que lleva implícitas todas estas contradicciones y
que descansa, a su vez, sobre la división natural del trabajo en el seno de la
familia y en la división de la sociedad en diversas familias opuestas, se da, al
mismo tiempo, la distribución y, concretamente, la distribución desigual, tanto
cuantitativa como cualitativamente, del trabajo y de su producto.” (Marx y
Engels; 1973: 31). Es decir, el interés individual se concretaba a la familia y
posteriormente al de la comunidad.
79
En la época que florecieron las culturas clásicas y durante la Edad Media, la
agricultura era una de las actividades productivas sustento de toda la
población. No existía una diferenciación conceptual entre sociedades rural y
urbana porque simplemente esta última era un pequeño núcleo en parte
dependiente del sector rural y las primeras formas de urbanización no eran
vistas como tal.
Lo rural se empieza a tratar como un concepto independiente a partir del
surgimiento del modelo industrial en las sociedades europeas.
El concepto
mismo de desarrollo se asociaba a la noción de progreso con una dirección de
cambios que iban de lo rural hacia lo urbano, de la agricultura a la industria,
de lo tradicional a lo moderno, del subdesarrollo a la prosperidad. De tal forma
que, bajo dicho juicio, el proceso de transformación estructural acarreó el
crecimiento de los sectores industriales y la urbanización de la vida moderna.
Por consiguiente, se desvalorizó lo rural y pasó a ocupar un papel relegado en el
desarrollo.
“La separación entre la ciudad y el campo puede concebirse también como la
separación entre el capital y la propiedad sobre la tierra, como el comienzo de
una existencia y de un desarrollo del capital independientes de la propiedad
territorial, es decir, de una propiedad basada solamente en el trabajo y en el
intercambio.” (Marx y Engels; 1973: 50-51)
Un claro ejemplo de estos cambios lo tenemos en Inglaterra, donde la invención
y aplicación de las máquinas a gran escala tuvo varias consecuencias: se
incrementó en alto grado el rendimiento del trabajo y se redujeron los costos de
producción, lo que reportó un crecimiento de las riquezas nacionales.
80
La artesanía y la manufactura ya no pudieron competir con la gran fábrica
capitalista, por lo que paulatinamente empezaron a extinguirse. La producción
mercantil, empezó en el período de disolución del régimen de la comunidad
primitiva y se mantuvo durante los modos esclavista y feudal de producción,
pero el tipo que predominaba era la economía natural.4
Con el desarrollo del capitalismo se asestó un golpe demoledor a la economía
natural.
producción
Bajo el capitalismo, todo adquiere la forma de mercancía, la
mercantil
adquiere
un
significado
universal
y
se
vuelve
predominante.
Los representantes más característicos de la producción mercantil simple son
los pequeños campesinos y los artesanos. La producción mercantil asienta sus
cimientos en el trabajo personal, es decir, ellos mismos laboran sin explotar el
trabajo ajeno.
No obstante, la producción mercantil simple es inestable, puesto que entre los
campesinos y artesanos ocurre un dinámico proceso de diferenciación: unos que
son minoría se enriquecen y un grupo mayoritario se arruina.
En estas
condiciones, dicho proceso conduce al surgimiento de las clases burguesa y
proletaria en la ciudad y el campo.
En síntesis, la industria ocupa una
situación dominante, ya que con los cambios en las formas de producción, de lo
agrícola a lo industrial, se intensificó el dominio económico de la ciudad sobre el
campo.
____________________________
4
En este tipo de economía, la sociedad constaba de un sinfín de unidades económicas
homogéneas, y cada una de ellas realizaba todos los trabajos, comenzando por la previsión de
las diversas clases de materias primas y finalizando con el acabado de los artículos para el
propio consumo. Dicha economía, en que únicamente se destinaban al cambio de los excedentes
de productos, dominó hasta la aparición del capitalismo.
81
“La oposición entre el campo y la ciudad comienza con el tránsito de la barbarie
a la civilización, del régimen tribal al Estado, de la localidad a la nación y se
mantiene a lo largo de toda la historia de la civilización hasta llegar a nuestros
días.” (Marx y Engels; 1973: 50)
La mayoría de los países surgieron del medio rural pero han evolucionado de
diversas maneras. Sólo por citar, en México el modelo neoliberal implantado
explota de manera irracional los recursos naturales al punto de deteriorar
gravemente el medio biótico con el que se halla ligado. Esto se debe, en parte, a
que el medio propicia la madurez de la relación y se dan las transformaciones
que mantienen dicho fenómeno.
Con la innovación industrial, surgieron
contradicciones y lo rural se volvió un sector aparte que depende en su
totalidad del inmenso conjunto urbano, el cual es dueño de los medios y formas
de producción más relevantes e intensivas.
Si bien, la agricultura sigue siendo la actividad económica dominante en el
medio rural, ya no es la única actividad generadora de ingresos para las
personas del campo, puesto que las exigencias que el capitalismo impone a los
campesinos les obliga a verse en la necesidad de realizar múltiples actividades
para subsistir económicamente. De lo anterior, no podríamos considerar como
procesos de urbanización a varios de los cambios recientes que afectan al medio
rural (Reforma Agraria, Tratado de Libre Comercio con América del Norte,
movimientos sociales campesinos, entre otros), los cuales implican la
combinación de elementos considerados como urbanos que coexisten o se
recrean con factores naturales y de la tradición comunitaria.
Esta valorización de los términos “descampesinización” y “urbanización” no
siempre ha sido explícita, pero desde luego ha estado latente; no obstante, el
error que se comete al abordar el tema es tratarlo meramente desde la
perspectiva técnica sin hacer mención a su profundidad epistemológica.
82
El proceso de urbanización dejó de ser hace mucho tiempo un mero proceso
cuantitativo, para pasar a ser un proceso de carácter cualitativo porque ya no
debe verse en términos de acumulación exclusivamente, sino en cuanto a
extensión de la cultura, de modos de vida y de la interacción del individuo con
la sociedad. Mejor dicho, lo rural ya no está únicamente en el campo y lo
urbano ya no está únicamente en las ciudades. Sosteniendo la anterior tesis,
en realidad nos encontramos con la apreciación de Marx en el Manifiesto del
Partido Comunista de que “se ha sometido el campo a la ciudad”, por ello, qué
sentido tiene hablar de lo rural y lo urbano como categorías independientes,
quizá únicamente y de manera convencional para su estudio, pero sin
desvincularse de este nivel.
Realmente lo rural y el aspecto de la producción agropecuaria son dos conjuntos
que comparten características. No obstante, para los centros urbanos que son
mayoría, lo rural es exclusivamente la producción que se obtiene de él. En
varios países desarrollados, la anterior vinculación tiende a desaparecer ya que
desde cualquier vivienda se puede tener acceso a todos los servicios que el
ámbito urbano ofrece.
Con esto se puede inferir que la urbanización es uno de los procesos más
significativos del moderno desarrollo capitalista, su importancia respecto a la
producción, el incesante avance de las metrópolis y la inevitable incorporación
de las comunidades rurales son prueba de esto. De esta forma, la ruralidad
trasciende lo agropecuario y mantiene fuertes nexos de intercambio no sólo de
alimentos, sino también de gran cantidad de bienes y servicios, entre los cuales
destacan la oferta y preservación de recursos naturales (relación hombrenaturaleza), los espacios para la recreación, el descanso y las diversas
expresiones de la cultura.
83
La producción rural de bienes y servicios en este nuevo contexto requiere de
una fuerte interacción con las ciudades, ya que éstas siguen siendo el principal
destino de lo que produce el campo, puesto que es en las modernas ciudades
donde radica la mayor parte de los consumidores de esta distribución.
Son constantes las interacciones con las urbes que acaban por redefinir la
cotidianidad de la población rural, ya que el sistema capitalista tiene por
objetivo el ir más allá de las ciudades y emprender negocios que generen
ganancias lo cual perturba y trastoca su identidad. “En los países capitalistas,
prescindiendo de grados de desarrollo, la propiedad y explotación de tipo
capitalista tienden a subordinarse las otras formas de explotación y propiedad.
Lo cual da a esta proposición valor y alcance de ley objetiva.” (Lefebvre; 1973:
81)
La tesis de Lefebvre, en su sentido implícito nos indica que lo urbano va
creando situaciones y actividades que le son características.
Sin embargo,
muchos espacios rurales resisten para conservar sus mecanismos de
reproducción económica, social, política y cultural. Oposición que en repetidas
ocasiones únicamente retrasa la subordinación de lo rural a lo urbano, sin
percibir que el entorno físico se encuentra ya transformado y muestra
características que le son propias.
84
En el caso particular de nuestro país, el modelo neoliberal implantado a
principios de la década de los 80‟s en nada ha ayudado al campo, ya que este
modelo impulsa la explotación desmedida del medio a través de mecanismos
dañinos y poco convencionales, dejando de lado la equidad, sustentabilidad y el
desarrollo de los grupos sociales rurales, es decir, es mucho lo que se lleva y
poco lo que deja.
En su núcleo lleva implícito el objetivo de impulsar el
crecimiento de las ciudades y por lo tanto las necesidades alimentarias,
servicios ambientales y de recreación, razón por la que el espacio físico se tiene
que adaptar a los modos de producción, costumbres, formas de vida e ideología
de la cultura dominante.
Por esto, se plantea la formación de una ética que esté acorde con el principio
de la preservación de la naturaleza y el respeto a los formas de vida de los
diversos grupos humanos. Así, el desarrollo rural requiere de alternativas para
la conservación y restauración del ambiente y los recursos naturales, ambos
ampliamente presentes en el medio rural y principal base para el desarrollo
agrícola.
Todas las anteriores categorías se opacan mutuamente, ya sea tratando de
enfrentar desde las perspectivas sociológica o histórica el difícil problema que
acarrean los sectores rural y urbano.
En lugar de tratarse de categorías
separadas, pareciera que una comunidad, en vez de ser meramente o rural o
urbana, mantiene más características urbanas o más características rurales
que otra. Las diferencias en cuanto a tamaño, densidad de población y su
ocupación, constituyen parámetros inadecuados para distinguir entre los
centros rurales y urbanos.
El seleccionar una base única de clasificación inevitablemente nos conducirá a
muchas contradicciones, inconsistencias y a plantear hipótesis erróneas, sin
mencionar las conclusiones y predicciones equívocas.
85
II.2.3 Lo rural y la actividad económica
Otra perspectiva utilizada para definir lo rural es la que hace referencia al tipo
de actividades económicas y al trabajo realizado por la población, el cual
generalmente está asociado con la organización social del lugar de residencia.
Desde este enfoque, la diferencia más visible en el ámbito rural en relación a
otros, es en realidad una manifestación física
de las diversas actividades
económicas, las cuales se describen clasificando a los trabajadores según la
producción o servicio del establecimiento donde laboran o de acuerdo al tipo de
actividades que cada persona realiza.
Según lo expuesto por la Procuraduría Agraria (2002) las categorías de las
actividades económicas se pueden clasificar en tres sectores:
1) Primario: comprende la agricultura, ganadería, silvicultura, caza y
pesca.
2) Secundario: abarca la producción de bienes manufacturados, así como la
extracción y refinación de petróleo, la industria de la transformación,
construcción y la generación de electricidad y agua.
3) Terciario: incluye la prestación de servicios, el comercio, el transporte,
las comunicaciones y la administración pública.
En relación con la ocupación, está el criterio de las funciones o tareas que
desempeñan las personas en el proceso productivo de la unidad donde laboran,
cuestión que deja fuera de consideración diversos factores y que para nuestro
caso resulta insuficiente al manejar solamente criterios rígidos y demasiado
arbitrarios.
86
II.2.4 Consideraciones sobre el campesinado y su asociación al medio
rural
Existen otros enfoques teóricos cuyo interés está en definir al productor o
productores característicos del medio rural. En dicha dirección, los estudios
existentes han centrado su atención a los campesinos, a quienes se les señala
como los principales protagonistas del medio rural.
Entre los conceptos más frecuentes referentes a la economía campesina
encontramos los que ofrece la Comisión Económica para América Latina
(CEPAL).
Este organismo lo confirma como el sector de la actividad
agropecuaria en donde los procesos de producción son realizados por unidades
económicas de tipo familiar, con el que se pretende perpetuar ciclo tras ciclo la
reproducción de las condiciones de vida y de trabajos individual y colectivo,
respectivamente.
Para lograr tal cometido, es necesario mantener las
necesidades básicas de la familia, es decir, los medios de producción y otras
variables que pudiesen inferir o no en el proceso de producción.
Las características productivas logradas por la unidad económica campesina le
dan ciertas peculiaridades que la hacen distinta de la agricultura empresarial,
por eso, la producción campesina es única y ajena a otro tipo de agriculturas, en
este caso ajena a la agricultura capitalista.
Según lo expuesto por Chayanov (1974), los productos del trabajo campesino
son dos, uno es el producto bruto o en otras palabras, es el total de los ingresos
que la familia campesina puede lograr durante todo un año de trabajo,
considerando el fruto de la agricultura, así como cualquier actividad que
involucre el uso de la fuerza de trabajo, como las actividades artesanales y
comerciales.
87
El otro es el producto neto que es el sobrante del producto bruto. Después de
cubrir todos los gastos generales relacionados con el movimiento del capital se
obtiene el producto neto, es la remuneración del trabajo de un año de labores
que van desde agrícolas hasta artesanales.
En resumen, esto se podría
considerar el ingreso de la economía campesina.
La productividad del trabajo campesino se mide a través de necesidades de
consumo que requiere la unidad campesina; a mayor número de necesidades de
la unidad campesina, será mayor el grado de auto explotación del trabajador
agrícola.
Cuando la actividad agrícola resulta insuficiente para la
reproducción económica de la familia campesina, ésta se ve obligada a recurrir
a diversas actividades no precisamente relacionadas con la producción
agropecuaria, comercial o artesanal. En esta línea, el arraigo a la tierra ya no
resulta suficiente para sostener el consumo de la unidad.
El hecho de que el campesino tenga que dedicarse a diversas actividades no
agrícolas es el resultado directo de las condiciones socio económicas que el
mercado capitalista propicia que se desarrollen en torno a la productividad
campesina, puesto que la relación de los ingresos de la familia en relación con
sus miembros, no favorece una economía estable y por esto la expulsión de
fuerza de trabajo de manera temporal es frecuente en la reproducción de la
unidad campesina.
88
Por otro lado, cabe aclarar que la producción campesina forzosamente debe
tener insumos para su producción y éstos deben ser adquiridos en el mercado.
El campesino entra al mercado de forma distinta a la de los productores
agrícolas integrados en el comercio. Ejemplo de lo anterior, es la manera en
que el campesino maneja la producción para entrar en el mercado, ya que como
no tiene determinada la cantidad exacta de la producción que destinará para su
autoconsumo o para los mercados locales, se limita a sacar pequeñas
cantidades para ir satisfaciendo sus necesidades temporales.
Las diferencias más sobresalientes entre la agricultura empresarial y la
campesina radican en conceptos como ganancia, salario, renta de la tierra y
fuerza de trabajo, entre otros.
Por decir, en el caso de la agricultura
empresarial los dueños de los medios de producción no se involucran de manera
directa con el ciclo productivo.
De manera contraria, en la producción
campesina, los individuos que la manejan tienen una relación directa con la
producción.
También, la familia campesina deja una parte del producto para el
autoconsumo, sin embargo, para la producción capitalista el autoconsumo tiene
poca relevancia, puesto que lo único que cuenta es que su producto tenga
aceptación y altas ventas en el mercado.
A medida que las necesidades básicas de la familia campesina aumentan y ya
no pueden satisfacerlas únicamente con su producción agrícola, sus miembros
entrarán al mercado vendiéndose como fuerza de trabajo, serán la mano de
obra requerida por el capitalista y cuanto más se vean involucrados en el ciclo
productivo capitalista más irán dependiendo del salario y del trabajo, por lo que
algunos teóricos sostienen que dejarán de ser campesinos para convertirse en
proletarios.
89
Organismos como la FAO y la CEPAL, advierten sobre la pluriactividad del
campesino y denotan a partir de esto una Nueva Ruralidad, que concibe a las
unidades de producción campesinas ya no como entidades dedicadas
únicamente a la actividad agropecuaria, por serle insuficiente para el
autoabastecimiento; no obstante, es a partir de esto que se concibe la base para
la formulación de políticas enfocadas al desarrollo rural, humano y cuestiones
relacionadas con la seguridad alimentaria y la revaloración de los espacios
rurales.
No obstante, tanto los argumentos de la FAO como los de la CEPAL no son lo
suficientemente sólidos y resultan paradójicos, ya que relegan al medio rural y
por lo tanto, sin espacios rurales o sin actividad agropecuaria, instituciones
enfocadas al estudio del espacio rural y las relaciones humanas que ahí se
desarrollan ya no tendrían sentido alguno.
Por su parte, Armando Bartra (1979) señala que “los campesinos son una
enorme masa de pequeños productores explotados y semi-arruinados con
tierras casi exclusivamente de temporal y con escasos medios de producción.
Este sector produce bienes de consumo popular que vende a bajos precios para
beneficio de la industria y que abastece a las compañías agroindustriales y
agrocomerciales a cambio de un ingreso de subsistencia. Cumple también la
función de regular el abastecimiento de fuerza de trabajo para el resto de la
economía.
En este aspecto, proporciona obreros suficientes a la industria
urbana y los trabajadores permanentes temporales necesarios para la
agricultura capitalista, pero sobre todo retiene y garantiza la subsistencia de
los jornaleros que la agricultura capitalista sólo necesita cíclicamente”.
90
Señala, además, “que el sector agrario se caracteriza por la existencia de un
sector minoritario de agricultores capitalistas con la enorme mayoría de tierras
de riego, la mayor parte de los medios de producción agrícola y un
abastecimiento permanente de mano de obra barata y temporal. Este sector
produce para la exportación o para el mercado interno con ventajas de costos.
Junto a ellos hay un sector de capitalistas agrocomerciales y agroindustriales
que controlan miles de pequeños agricultores refaccionando, comprando y
procesando su producción.” (Bartra; 1979)
En suma, concluiríamos este apartado mencionando que a pesar de lo expuesto
la producción campesina como tal aún persiste y está constituida por unidades
domésticas individuales, relaciones productivas y económicas de naturaleza
muy diversa.
91
II.3 Análisis teórico de la situación de la Mujer Rural en México
¿Quién es esa mujer?, ¿De quién estamos hablando?, ¿es aquella que por la
mañana alista a sus hijos para enviarlos a la escuela?, ¿es la que muy de
madrugada prepara el almuerzo para su marido campesino o jornalero
agrícola? o ¿es aquella que está preparando tortillas y atole para vender, que
camina varios kilómetros para acarrear agua, que recoge leña, que lava y
remienda la ropa, que cuida a los hijos, que trabaja en la parcela, que está
encinta o lactando y que finalmente después de arropar a todos sus hijos aún le
queda tiempo para satisfacer sexualmente a su esposo?
El tratar de hacer un acercamiento, al menos en el plano teórico, de la
problemática de las mujeres rurales en México, obligatoriamente nos lleva a la
interrogante de las condiciones específicas bajo las que se presenta, en primera
instancia, su función reproductiva, alternada con los trabajos agrícolas y las
múltiples actividades de diferente tipo que diariamente llevan a cabo.
No obstante, por reproducción se pueden precisar las siguientes cosas:
1) La reproducción biológica de los seres humanos que a pesar de que
también corresponde al hombre, se consuma por la mujer a través de la
gestación, parto y lactancia.
2) La reproducción de la fuerza de trabajo realizada mediante el trabajo
doméstico que permite a los miembros de la familia reponer el desgaste
físico – intelectual que ocurre cuando se integran en un proceso
productivo.
3) La reproducción socio – cultural que la mujer ejerce a través de la
enseñanza de los valores y patrones de conducta a sus descendientes.
92
La función reproductiva de la mujer es biológicamente determinada y lleva a
que ella misma procure el cuidado de los hijos hasta la edad adulta, en este
sentido es una forma obligada de cumplir con su papel social. En una sociedad
como la nuestra, el control socio-político sobre su sexualidad es absoluto, ya que
tiene por objeto asegurar la descendencia por la línea paterna.
A través de las tareas domésticas, la mujer asume esa función como algo propio
y natural que la mantiene alejada de las oportunidades de educación y
preparación que en un determinado momento se convierte en una limitante que
la obliga a emplearse con una percepción salarial inferior.
Un notable porcentaje de las mujeres pasan toda su vida realizando actividades
que ayudan a recuperar el desgaste físico e intelectual de quienes trabajan
fuera del hogar para percibir un ingreso, a la vez que alimentan y cuidan a los
hijos que representan el abasto de valor y la fuerza de trabajo futura.
En cuanto a la función socio – cultural, la mujer es la primera encargada de
inculcar al individuo los valores impuestos por la sociedad. Como menciona
Schumukler, B. (1982) uno de los valores mayormente difundidos es aquel en
que la mujer ha de tener un ideal de „postergación‟ de sí misma en función de
otro; en otras palabras, la típica conceptualización de la mujer abnegada y
dispuesta al sacrificio.
Los vastos estudios que hacen referencia a la familia, indican que encontramos
un patrón de relaciones donde las mujeres ocupan un papel subordinado. La
función económica del matrimonio se explica en función de que el marido
provee, a través de su participación en el sector productivo el sustento
necesario para mantener a la familia; en cambio la esposa ha de desempeñar
las labores domésticas.
93
Por lo anterior, el trabajo doméstico se encuentra subvalorado puesto que no
participa en el proceso productivo y no genera valor de cambio, de esta manera
la mujer ocupa un nivel por debajo de quienes sí producen en tal forma.
Aunado a lo anterior, cuando la mujer se incorpora al trabajo asalariado, carga
las desventajas propias de su condición de género; su ingreso económico se
considera complementario al ingreso familiar, su bajo nivel educativo y el
fuerte arraigo cultural a su función biológico-reproductiva, conlleva a que sus
contratistas se nieguen a costear mayores gastos, le asignen bajos salarios, le
hagan trabajar bajo condiciones inseguras, y en la mayoría de los casos no
cuente con servicios sociales o laborales.
En el medio rural el trabajo doméstico tiene los mismos fines que en los centros
urbanos. Cuando el núcleo familiar rural aún preserva la condición de unidad
de producción y de consumo, la mujer amplía su actividad a la producción
agrícola mediante huertos familiares, la producción pecuaria, criando animales
domésticos y el trabajo artesanal para la venta, cuestiones que a final de
cuentas permiten a las familias bajar el valor de su producción y emplearse
como mano de obra.
94
II.3.1 El acceso de la mujer a la tierra
Generalmente se ha tomado a la familia como referencia de la unidad
productiva y al jefe del hogar como beneficiario de las medidas y estrategias
para con el medio rural.
No obstante, los prejuicios y estereotipos aún
existentes en cuestión de género solamente resaltan el papel reproductivo de la
mujer y su capacidad productora es desconocida o subvalorada.
Actualmente las principales limitaciones que impiden a la mujer acceder
completamente a la tierra son del tipo jurídico, cultural e institucional, las
cuales describiremos brevemente a continuación.
II.3.1.1 Limitaciones jurídicas
Se refieren a los programas políticos y leyes asociadas directa e indirectamente
con la redistribución de tierras en la zona o región de que se trate y que han
excluido explícita o implícitamente a la mujer, o al menos no se han preocupado
por garantizarle su pleno acceso a los recursos.
El derecho a la propiedad está determinado por las normas relativas a la
capacidad civil del individuo. En lo que se refiere específicamente al acceso a la
tierra, si la mujer rural carece de la capacidad civil necesaria, no tiene la
posibilidad de realizar acciones de compraventa ni tampoco de solicitar
créditos. Tampoco la Ley Agraria ni el Código Civil reconocen plenamente y sin
condiciones el derecho de la mujer casada o que convive en unión libre el
derecho a heredar la tierra, en caso de muerte o de abandono del marido o
cónyuge.
Si bien es cierto que las reformas jurídicas son necesarias para garantizar la
igualdad de derechos entre hombres y mujeres, aún resultan deficientes para
facilitar el acceso pleno de la mujer a la tierra.
95
II.3.1.2 Limitaciones culturales
Las
especificidades
históricas,
culturales,
jurídicas
y
socioeconómicas
particulares de cada región perpetúan prácticas patriarcales que someten a las
mujeres. Con frecuencia costumbres, tradiciones y actitudes fuertemente
arraigadas
en
las
sociedades
influyen
en
las
leyes
e
instituciones,
determinando que no se reconozca el papel de las mujeres como productoras
más allá de la actividad doméstica e impidiendo que ellas accedan a la tierra y
a todos los servicios asociados (crédito, capacitación y asistencia técnica).
II.3.1.3 Limitaciones institucionales
La carencia de programas, leyes y acciones gubernamentales con perspectiva
de género, la relativa ausencia de funcionarios del sector agropecuario
sensibles a dicha mirada y los pocos datos fidedignos que reflejen la verdadera
contribución de las mujeres a la producción agropecuaria, son algunos de los
impedimentos institucionales que obstaculizan el acceso de la mujer a la tierra.
Dichas limitaciones hacen que los encargados de diseñar y poner en marcha las
estrategias de desarrollo, no formulen políticas y programas que aseguren una
participación igualitaria entre hombres y mujeres en el proceso de producción y
en el acceso a los recursos productivos.
96
II.3.2 Formas de acceso a la tierra
Tomando como punto de referencia la vigencia del Estado que nace con la
Constitución Política de 1917, el acceso a la tierra se ha determinado por
diversas vías.
La génesis de este proceso inició con la conquista de
Mesoamérica por parte de la corona española, que constituyó formas de
titularidad de la tierra para los conquistadores; de esta forma, se dieron
encomiendas, se concedieron mercedes reales otorgando caballerías, peonías,
hasta llegar a la hacienda y los grandes latifundios.
La concentración de tierras impulsó los postulados revolucionarios, dando paso
al reclamo de la tierra en la lucha armada de 1910, que finalmente dio lugar a
la redistribución de la tierra o reforma agraria. A la par del reparto agrario
que constituyó a los ejidos, restituyó en parte a las comunidades y sobre todo
perpetuó el régimen de la propiedad privada plena o pequeña propiedad, en
una coexistencia llena de impedimentos y posiciones enfrentadas.
A continuación describiremos de manera sistematizada las formas de acceso a
la tierra en México.
II.3.2.1 Por la vía de la propiedad privada
La propiedad privada, está prevista en el Artículo 27 Constitucional y se
constituye a partir de la propiedad originaria de la Nación, la cual ha tenido y
tiene el derecho de transmitir el dominio de tierras comprendidas dentro del
territorio nacional a favor de particulares.
Dicho régimen se conforma con los elementos establecidos por el Derecho Civil,
consistentes en los derechos de uso, usufructo y disposición, en otras palabras,
con la más amplia capacidad para su aprovechamiento y transmisión, sólo con
las limitaciones previstas en la ley.
97
II.3.2.2 Por la vía del reparto agrario
Denominada como propiedad social, este régimen también se conforma a partir
del Artículo 27 de la Constitución Política; producto del proceso de reforma
agraria, constituyendo los ejidos y comunidades agrarias, mediante la
afectación de la propiedad privada ociosa y de los excedentes a los límites de su
extensión determinadas por la ley.
Bajo esta modalidad, la propiedad pertenece a los núcleos agrarios, los que
tienen personalidad jurídica y patrimonio propios; internamente se dividen en
tierras de asentamiento humano, tierras parceladas y tierras de uso común.
Si bien es necesario mencionar que el reparto de la tierra nace como una
obligación del Estado para con los núcleos de población carentes y solicitantes
de ellas, a costa de la propiedad privada ya constituida y en algún momento, de
las tierras propiedad de la Nación. Inicia con la primera Ley Agraria del país,
el 6 de enero de 1915 y concluye con la reforma al Artículo 27 de la
Constitución Política en 1992, en que se determina la conclusión del reparto de
tierras y se inaugura una nueva etapa de la cuestión agraria en nuestro país.
En la Ley Federal de Reforma Agraria, anterior a la actual Ley Agraria, se
establecía que tenían capacidad para obtener tierras los campesinos, hombres y
mujeres, que reunieran ciertos requisitos (artículo 200), de lo que se infiere que
al menos en esta etapa, la mujer tenía una condición semejante a la de los
hombres en la posibilidad de acceder a la dotación de tierras.
98
La misma legislación estableció la constitución de la Unidad Agrícola
Industrial para la Mujer (UAIM), unidades de dotación que cada ejido debía
destinar al establecimiento de una granja agropecuaria y de industrias rurales
explotada colectivamente por las mujeres del núcleo agrario que no fuesen
ejidatarias (artículo 105), como una vía para la canalización del trabajo femenil
en el núcleo.
II.3.3 El acceso a la tierra después del reparto agrario
Una vez concluido el proceso legal de reparto de la tierra, la propiedad social se
conformó por 29, 942 núcleos agrarios, de los cuales aproximadamente 27 mil
son ejidos y 2 mil comunidades, integrando 3.5 millones de ejidatarios y
comuneros. La superficie que la conforma es de 103.5 millones de hectáreas, lo
que comprende el 52% del territorio nacional.
El 38% del territorio es pequeña propiedad, con aproximadamente 1.6 millones
de titulares; el restante 10% lo constituyen los cuerpos de agua, las zonas
federales, vías de comunicación y asentamientos humanos.
Culminado el reparto agrario, finalizó el acceso a la tierra por la vía de la
acción del Estado, a través de la dotación, restitución, reconocimiento y
titulación de tierras; por lo que la obligación del gobierno, los procedimientos
legales y las instituciones encargadas del cumplimiento de dicho mandato
quedaron liquidadas.
Por ende, sólo existe la posibilidad de poseer tierras rurales a través de cinco
vías específicas: la vía contractual, entre personas, sujetas a las características
y modalidades que la Ley Agraria determina; por la constitución voluntaria de
ejidos; y mediante la sucesión que en la materia se ha previsto sobre los bienes
y derechos de orden agrario.
99
II.3.3.1 El acceso por la vía contractual
La ley establece el derecho de los sujetos agrarios a enajenar y celebrar
cualquier tipo de operación contractual sobre sus derechos de uso y usufructo
parcelario y de la parte proporcional de las tierras de uso común; la mujer rural
tiene expeditas las formas contractuales para acceder a la tierra de propiedad
social.
En las operaciones contractuales que permite la ley, podemos señalar la
compra-venta de derechos parcelarios, el arrendamiento, la aparcería,
mediería, pastoreo, comodato, fideicomiso, asociación en participación, entre
otros.
II.3.3.2 El acceso vía constitución de ejidos
Después de 1992 es posible la constitución de propiedad social en la figura de
los ejidos. Por lo que la aportación de tierras por al menos veinte individuos,
hombres o mujeres, mediante escritura pública y con proyecto de reglamento
interno, permite la conformación de una sociedad de personas, como lo es el
ejido, con patrimonio y personalidad jurídica propia, el que deberá ser inscrito
en el Registro Agrario Nacional.
II.3.3.3 El acceso vía sucesión agraria
En materia agraria existe un régimen especial en el tema de la sucesión de
bienes o derechos (artículo 17); los sujetos agrarios tienen derecho a designar
quien deba sucederlos en sus bienes sujetos a esta modalidad de la propiedad,
para lo que pueden elaborar una lista que tendrá que depositarse ante el
Registro Agrario Nacional, o hacer la designación ante Notario Público, a
ambos documentos se les conoce como testamento agrario.
100
Si por algún motivo no se otorga el testamento agrario o lista de sucesión, la
legislación establece un orden legal de sucesión, la restricción que establece la
ley es la sucesión de un solo individuo, puesto que existe el principio de
individualidad de las parcelas.
Hay que tener presente que tanto en la sucesión legítima como en la legal no
existen limitantes para que se incluyan a las mujeres, por lo que constituye
una de las principales fuentes de acceso de ellas a la tierra, dado que un gran
porcentaje de los titulares señalan en primer término a sus cónyuges.
II.3.3.4 El acceso vía reconocimiento de derechos por la Asamblea
ejidal o comunal
La Asamblea General de los ejidos y comunidades agrarias es la máxima
autoridad interna que cuenta con la posibilidad de reconocer derechos sobre la
tierra a hombres y mujeres, en los términos del artículo 23, fracciones II y VIII,
de la Ley Agraria.
Como forma de acceso a la tierra, la mujer campesina tiene la posibilidad de ser
reconocida como ejidataria o comunera por la asamblea del núcleo agrario, con
todas las prerrogativas legales que ello implica; adicionalmente también puede
acceder a la tierra bajo la figura de posesionaria acorde a los procedimientos
que la Ley prevé.
101
II.3.3.5 El acceso mediante la prescripción adquisitiva parcelaria
Como vía de acceso de la mujer campesina a la tierra tenemos la de carácter
jurisdiccional, a través del juicio agrario que plantea la prescripción adquisitiva
de unidades parcelarias, autorizada por el artículo 48 de la Ley Agraria. El
derecho que puede asistir a la mujer deriva de la posesión de parcelas en un
plazo de cinco años cuando esa posesión sea de buena fe o diez años cuando sea
de mala fe; en todo caso, será el Tribunal Unitario Agrario de la adscripción el
que deberá de emitir la sentencia que constituirá el reconocimiento de
titularidad.
102
CAPITULO III
LAS MUJERES DE ATENCO
“El agravio contra nuestras mujeres no se olvida y eso se lava con organización, con conciencia; no va a
quedar impune y no apostamos a pedir justicia
a esos malos gobiernos.
Necesariamente esa justicia va a venir del pueblo, es nuestra.
Tenemos seis años de resistir pero no de resignarnos;
seis años de aguantar pero no de conformarnos”
(Ingnacio del Valle, jueves 3 de mayo de 2012)
103
III.1 MUJERES Y MOVIMIENTO SOCIAL
EL CASO DE SAN SALVADOR ATENCO
III.1.1 A manera de presentación
Durante las últimas décadas, en todo el mundo pero en particular en
Latinoamérica, en el período de implantación del modelo neoliberal y las
subsecuentes aplicaciones de los “planes estructurales de ajuste”5, se han
suscitado importantes movimientos de resistencia en contra de dichas políticas,
protagonizados principalmente por sujetos sociales que confluyen en la
formación de novedosos, diversos y numerosos movimientos sociales.
__________________________
5
"Un programa de ajuste estructural es la condición impuesta sobre un país por el Fondo Monetario Internacional
(FMI) y/o el Banco Mundial para otorgarle respaldo financiero destinado a afrontar un grave problema de pagos
internacionales. Se trata de una receta única y de pretendida validez universal que se aplica con independencia de la
situación particular de cada país." (Pitxe Zabalo: 2012)
Según Joseph Stiglitz, ganador del Premio Nobel en economía y ex vicepresidente del Banco Mundial, los PAE tienen
cuatro pasos:
1)
La privatización: el gobierno vende empresas e instituciones públicas a inversionistas privados.
2)
Liberalización de los mercados de capital: se reducen los controles sobre la entrada y salida de dinero del país.
Para atraer inversionistas al país, se aumentan mucho las tasas de interés.
3)
La introducción de precios de mercado. Esto simplemente quiere decir que el gobierno deja que suban los precios
de los alimentos básicos, el agua, y la energía. Comúnmente provoca gran sufrimiento en la población, sobre
todo en las mujeres, los niños, y los ancianos.
4)
El comercio libre, que significa la eliminación de las barreras (impuestos y aranceles) a los productos
extranjeros que protegen a productores e industrias locales.
104
Nuevos sujetos sociales han participado de diferentes maneras en revueltas
populares, ocurridas espontáneamente o impulsadas por movimientos sociales
que lograron articularse entre sí. Estos procesos estimularon el debate entre
los nuevos y viejos actores sociales sobre la posibilidad de cambiar la realidad
que se vive, sobre el sentido y el alcance de tales cambios y acerca de quiénes
serían las personas que lo llevarían a cabo.
La presencia de las mujeres en los movimientos sociales parece, en términos
generales escasa y marginal, excepto en las reivindicaciones explícitamente
feministas. Si bien es cierto que tienen que vencer más obstáculos que los
hombres, el problema en cuestión no es la baja presencia de las mujeres en los
movimientos sociales sino que la forma en que estamos analizando e
interpretando los movimientos sociales emergentes suele dejar de lado los
aportes de las mujeres.
En los movimientos no feministas, al no haber una atención específica a la
reproducción de las desigualdades de género, frecuentemente no se visibilizan
las diferencias de poder internas y las formas de participación excluyentes.
Pero, a la vez, el hecho de que éste no sea un movimiento feminista y dada la
situación actual, es importante recalcar que buena parte del feminismo
organizado contemporáneo se nutre de mujeres con un nivel educativo medio o
alto y se basan en una cultura política y una ideología muy determinadas.
Lo anterior frecuentemente tiene poca o ninguna relación con la vida cotidiana
y las percepciones de la mayoría de las mujeres que por lo general están
apartadas de la ideología y cultura política dominantes.
105
Por todo ello, las movilizaciones no feministas, especialmente las que se
conectan con los roles y responsabilidades tradicionales de las mujeres, son con
frecuencia casos interesantes donde confluyen formas muy variadas de
entender la participación y donde muchas mujeres actúan políticamente sin
una experiencia previa de socialización, lo cual tiene el potencial de
transformar profundamente tanto los movimientos en que se insertan como los
propios roles de género y las formas de participación pública de las mujeres.
En el caso de México, el contexto en el que nacen los actuales conflictos sociales
no es nada esperanzador. La decadencia económica que sufren los Estados
Unidos, ha provocado una crisis económica que ha afectado gravemente a
nuestro país debido a la gran dependencia que se tiene con dicha nación. Desde
finales de 2006, se han perdido muchos empleos, se han generalizado los
despidos masivos y a pesar de que en fechas recientes el gobierno panista ha
declarado que la peor etapa de la crisis ya pasó, lo cierto es que las supuestas
mejorías simplemente no existen.
Las leyes anti migrantes que afectan principalmente a los mexicanos y las
insuficientes remesas que envían los emigrantes, son paliativos que propician
el retorno de personas a territorio nacional por falta de empleos. Esta situación
pone en desventaja a los grupos más vulnerables ante los intereses del capital
privado.
El nacimiento de los movimientos sociales no responde exclusivamente a
cuestiones sociales o económicas. La propuesta de muchos subgrupos es la auto
gobernabilidad y el total respeto por sus costumbres, tradiciones y formas de
vida comunitarias.
106
III.1.2 Caracterización de los movimientos sociales contemporáneos
desde las perspectivas de la Sociología y la Psicología Social
En un sentido amplio, puede decirse que el campo del comportamiento colectivo
comprende tanto formas emergentes, emocionales y efímeras como formas de
comportamiento planeado, duradero y organizado que se encuentran en los
movimientos sociales.
El comportamiento colectivo se puede caracterizar como una forma social y
extra institucional. Para poner en claro lo anterior, debemos de precisar lo
siguiente:

El término emergente hace referencia a la “conducta espontánea y a
menudo sujeta a normas creadas por los propios participantes”.
La
espontaneidad se refiere a la acción “no planeada e improvisada” y a su
carácter “informal”.

El vocablo extra institucional, o no institucional, significa que las
normas que se desarrollan no se derivan de la cultura establecida e
incluso pueden ser opuestas a la de ésta, quedando poco definidos estos
estatus de los participantes y sus roles.
Las normas desarrolladas
emergen de la propia situación en que se produce el comportamiento
colectivo.}
Turner y Killian (1987) definen el comportamiento colectivo como “aquellas
formas del comportamiento social en las que las convenciones habituales dejan
de guiar la acción social y las personas trascienden colectivamente, pasan por
alto o subvierten las pautas y estructuras e instituciones establecidas” y
añaden que “el comportamiento colectivo tiene lugar bajo el dominio de las
normas emergentes”.
107
III.1.3 Tipos de comportamiento colectivo
La tipología parte del concepto de colectividad, o grupo en el que se produce el
comportamiento colectivo, y de los tipos en que ésta se presenta: congregada y
dispersa.
Se utiliza el término multitud como sinónimo de colectividad
congregada, mientras el término masa se emplea como equivalente de
colectividad dispersa.
La multitud y la masa constituyen los escenarios
sociales donde se desarrollan las formas elementales del comportamiento
colectivo.
Por otro lado, el movimiento social constituye una forma más compleja de
comportamiento colectivo.

Colectividad. Se refiere a un grupo relativamente desorganizado en el
que no existen procedimientos formales, o previamente definidos, para
seleccionar e identificar a sus miembros, para definir objetivos, para
escoger a los líderes y para tomar decisiones. (Turner y Killian: 1987: 34). La colectividad está orientada hacia un objeto de atención y posee
alguna creencia u objetivo compartido, pero su acción no está dirigida
por normas formalizadas que prescribe la cultura dominante, sino que
más bien se halla guiada por normas emergentes.

Multitud. Es una colectividad cuyos miembros “se hallan en presencia
mutua, inmediata y cara a cara” (Lofland: 1981; 416). El hecho de que
los miembros de la multitud se encuentren juntos implica algún objeto
de atención o propósito común, como puede ser el presenciar una disputa
o expresar una protesta delante de un edificio público.

Masa. Es una colectividad de personas que “atienden a un objeto común,
pero que no se encuentran mutuamente en proximidad física e
inmediata” (Lofland: 1981; 416).
Ejemplos de colectividad dispersas
podemos hallarlos en ciertas modas pasajeras fomentadas por los medios
de comunicación o ciertas obsesiones colectivas.
108
III.1.4 Concepto y tipos de movimiento social
Un movimiento social puede definirse como “colectividad que actúa con cierta
continuidad para promover o resistir un cambio en la sociedad o grupo de la
que forma parte” (Turner y Killian : 1987 ; 223). En esta definición se hallan
tres elementos distintivos del movimiento social:
1) Es una colectividad, es decir, un grupo que en su surgimiento se
encuentra relativamente desorganizado en el que existe interacción, en
gran parte informal, y sentido de unidad, que posibilita una acción
común y colectiva, no institucional. (Ibídem; 7).
2) Actúa de continuidad, es decir, no limita su actividad a algún episodio
concreto, sino que desarrolla una historia; ello implica cierto grado de
organización, estrategia, compromiso y similares, a la vez que posibilita
una
continuidad
de
la
identidad
grupal,
aunque
cambien
los
componentes del movimiento y permite el desarrollo de creencias y
valores compartidos, de una ideología.
3) Tiene como objetivo el cambio social, o bien la resistencia a él, no sirve
por tanto a intereses exclusivamente personales; aun en el caso de que el
movimiento social tenga un carácter religioso de auto transformación,
existe un objetivo más amplio de transformación de la sociedad. (Ibídem;
225).
El cambio puede buscarse en el grupo o en la sociedad, pero
también, en el orden mundial.
Para complementar la anterior caracterización podríamos decir que los
movimientos sociales son redes de grupos e individuos que forman una
identidad colectiva, poseen cierta organización, desarrollan una acción extra
institucional y surgen del conflicto con sus oponentes.
109
III.1.5 El movimiento social como resultado de un conflicto
El movimiento social es expresión de un conflicto con el orden establecido, un
desafío que se traduce en una lucha por conseguir cambios en dicho orden.
Desde la perspectiva del conflicto se ha señalado que los movimientos sociales
emergen de una lucha por los recursos sociales entre los grupos excluidos
políticamente y los que dominan en el contexto político.
Más en concreto, Touraine (1978) precisa que todo movimiento social se
construye en función de tres principios:
1) Principio de identidad, que se refiera a los que se autodefinen como
participantes en un movimiento.
2) Principio de oposición, que especifica quién es el principal adversario
contra el que lucha el movimiento.
3) Principio de totalidad, que se refiere a la visión del mundo u objetivo
que trata de imponer.
III.1.6 Tipos de movimientos sociales
El criterio más significativo es el de atender al cambio propuesto por el
movimiento en tanto que es su objetivo fundamental.
Para esclarecer la clasificación de los movimientos sociales nos enfocaremos en
dos aspectos relevantes: el grado de cambio buscado, parcial o total, y el tipo de
cambio, según que afecte al individuo o a la estructura social. De esta manera,
aparecen cuatro tipos de movimiento social:
1.- Los movimientos alternativos pretenden afrontar ciertas limitantes o
carencias del individuo, como el bajo nivel de interés por sí mismo, el estrés, el
aislamiento o la insatisfacción con la sociedad en general.
110
2.- Los movimientos salvadores, pretenden un cambio profundo y total que se
inicia con la conversión al movimiento y se prolonga en una fuerte dependencia
del individuo hacia él, a costa de su autonomía personal.
3.- Los movimientos reformadores se proponen una serie de reformas
específicas en el orden social vigente, como el sistema pacifista, un tipo de
movimiento ecologista, el de derechos humanos y un tipo de movimiento
feminista.
4.- Los movimientos revolucionarios o transformadores intentan un cambio
radical que de paso a un orden diferente. Este tipo de movimiento es de
particular interés para nuestro análisis, puesto que el movimiento suscitado en
Atenco se encuadra en esta descripción.
111
III.2 San Salvador Atenco: El movimiento
Atenco tuvo su origen durante la época precolombina, puesto que varios grupos
Chichimecas llegaron a la zona lacustre del Valle de México, asentándose en
una de las riberas del lago de Texcoco.
Al encontrarse con una tierra
deshabitada, los Chichimecas optaron por establecerse puesto que era un lugar
propicio para ello, además ya habían sufrido anteriormente los embates de
guerrillas con otros grupos. Posteriormente los Acolhuas de Texcoco buscaron
entablar una alianza con los Chichimecas, quienes la aceptaron y de esta
manera consolidaron una de las sociedades más importantes de la zona: la
Acolhua-Chichimeca.
Durante el período posterior a la Revolución Mexicana, se reclamaron por la vía
legal la devolución de las tierras, cuestión que fue atendida por el gobierno
llevándose a cabo un reparto de tierras que hasta entonces habían estado en
manos de dos grandes haciendas. Los hacendados no quisieron entregar las
tierras de forma inmediata por lo que la indignación entre los habitantes de
Atenco se hizo presente, quienes reclamaron sus intereses y el cumplimiento de
las autoridades, de esta forma es aquí donde encontramos el antecedente
directo de la ideología zapatista porque aún hoy día sus moradores simpatizan
con el lema “tierra y libertad”.
Durante los años 2001 y 2002 y con la expansión de la marcha urbana en
territorios semi rurales o aptos para urbanizar, el municipio de Atenco y
algunos pueblos circunvecinos se sublevaron en contra del gobierno federal, por
la decisión de éste de expropiar sus tierras e indemnizarlos para construir el
nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México en un área del ex lago
de Texcoco, afectando a los pobladores del municipio de Atenco, expropiándoles
casi todos sus ejidos y gran parte de la propiedad privada donde habitan las
personas.
112
A juicio de los pobladores, el detonante de la indignación fue el miserable precio
de 7.20$ por cada metro cuadrado para indemnizar a los poseedores de los
terrenos perjudicados que no contasen con riego y de 25$ por los que sí
contaban con sistemas de riego; junto a lo anterior, cabe resaltar el poco interés
del gobierno foxista por llevar a cabo una negociación que culminara en buenos
términos.
“Se armaron de sus herramientas de trabajo, los machetes (que se convertirían
desde ese día y hasta hoy en uno de los símbolos más destacados de su lucha), y
bloquearon la carretera Texcoco-Lechería anunciando que defenderían sus
tierras al grito de ¡Zapata vive, la lucha sigue!” (Grajales; 2010: 78)
Sin embargo, el gobierno no se quedaría con los brazos cruzados y su respuesta
fue la misma que ha aplicado contra otros movimientos sociales de oposición:
uso métodos brutalmente represivos para aplacar el descontento generalizado.
Catalogó a los manifestantes de macheteros violentos que jamás se prestarían
al diálogo. Al igual que varios implementos usados para las labores agrícolas,
el machete era usado como estandarte campesino, pero al verse sufrir
interminables ataques gubernamentales, se empezaron a utilizar como armas
de autodefensa y para preservar la tierra heredada por sus antepasados, ahora
amenazada por el Estado para favorecer intereses particulares.
A lo largo de una década (2001-2011), el movimiento de Atenco en defensa de la
tierra ha evolucionado y dado giros completamente drásticos en cuanto a
formas de lucha, luego que el gobierno preparó una emboscada en la que
detuvieron, torturaron y golpearon de una forma bestial a varios de los
dirigentes campesinos.
113
Como consecuencia, las personas llenas de ira por tales hechos incendiaron
patrullas federales en las entradas de Atenco y Acuexcomac, evitando el paso a
toda persona y vehículos de transporte, reteniendo a diversos funcionarios
estatales y federales como una manera de manifestar el descontento antes las
injusticias por parte de la acción del gobierno.
Sólo así, el gobierno foxista decidió prestar atención al conflicto y entablar el
diálogo con los pobladores de Atenco, cediendo ante las demandas de poner en
libertad a los detenidos y de anular el decreto expropiatorio.
Por su parte, los pobladores de Atenco en “estas batallas aprendieron el sentido
de la solidaridad y la habilidad para decidir de manera democrática, pero
fundamentalmente fraguaron una identidad colectiva basada en la voluntad
común de defender un espacio propio, un territorio, un lugar que han intentado
arrebatarles en más de una ocasión y de diferentes modos.” (Grajales; 2010: 81)
La ideología predominante en este movimiento anti sistémico y que aún en
parte perdura, contiene en esencia rasgos campesinos, persisten lazos
comunitarios que son parte importante del desarrollo del medio rural, y según
la caracterización psico social de los movimientos sociales persisten fuertes
relaciones interpersonales que hacen inquebrantables los ideales que persiguen
un cambio radical. En este sentido, dicho cambio está relacionado con la
preservación de la identidad, la defensa del territorio, las costumbres,
tradiciones y formas de vida antes los embates de la creciente sociedad
globalizada por el capitalismo.
114
III.2.1 Caracterización del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra
(FPDT) y su activismo como movimiento social
Hay diversos análisis que prestan particular atención a los movimientos
sociales, ubicándolos en viejos o nuevos movimientos. Dependiendo del tipo de
lucha que emprenda el grupo, así es el tipo de lucha social, porque como ya se
mencionó si se trata de la lucha de las clases obrera o campesina, entonces
estamos hablando de viejos movimientos, pero si se persiguen fines como la
equidad entre mujer y hombre, el respeto y preservación del ambiente,
entonces acertadamente podríamos referirnos a nuevos movimientos porque su
principal característica es la reivindicación.
No obstante, los dilemas que la teoría social presenta acerca de sí son nuevos o
viejos movimientos nos indican que las actividades del FPDT se podrían incluir
en cualquiera de los dos tipos, porque la lucha de este movimiento es clasista
ya que emergió como un movimiento en pro de la defensa de la tierra, pero
también ha adoptado otros ideales como el respeto a los derechos humanos,
solidaridad con los trabajadores, otras organizaciones y a las manifestaciones
de inconformidad mostrando un lado reivindicativo.
Lo que de manera inequívoca se podría afirmar es que el FPDT forma parte de
los movimientos anti sistémicos que han surgido después del fracaso del modelo
neoliberal, respecto a los ámbitos económico, social y cultural que no satisface
las necesidades sociales de ver de otra forma al mundo.
115
III.2.2 Surgimiento del FPDT
El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra tiene sus antecedentes el 22 de
octubre del año 2001 en respuesta a los decretos expropiatorios que afectarían
a una superficie de 5 390.760 hectáreas de tierras y 171 viviendas de 4 375
campesinos. Tal expropiación sería para la construcción del Nuevo Aeropuerto
Internacional de la Ciudad de México (NAICM). De las tierras expropiadas
63.6% correspondían al municipio de Atenco, 27.8% a Texcoco y 5.5% a
Chimalhuacán.
En principio, las propuestas para la construcción de la Terminal aérea del
Distrito Federal fueron dos: por un lado se consideraba al estado de Hidalgo y
otro en el estado de México; por ello se realizaron análisis aeronáuticos,
arquitectónicos y ambientalistas en Tizayuca y Texcoco.
Los argumentos expuestos para que la construcción de la nueva terminal aérea
recayera en Texcoco, fueron la cercanía que tiene la Ciudad de México con el
municipio, puesto que se encuentra a 26 Km; mientras que Tizayuca se ubica a
73 Km.
A pesar de esto, los estudios apuntaban que las condiciones del suelo no eran
viables para la construcción del nuevo aeropuerto, además de los daños
ecológicos que se provocarían, porque el ex vaso del Texcoco sería devastado.
Con estas desventajas, el gobierno federal ignoro las evidentes repercusiones y
continuó con su plan de establecer la sede del aeropuerto en terrenos de
Texcoco y Atenco.
116
La construcción del NAICM formaba parte de otros proyectos más grandes
como el Plan Puebla Panamá (PPP), Área de Libre Comercio de las Américas
(ALCA) y según los analistas este aeropuerto representaría el proyecto más
significativo del gobierno de Vicente Fox, además de que se invertirían
capitales de grandes empresas transnacionales y de los empresarios agrupados
en el grupo político llamado de Atlacomulco.
117
III.2.3 Cronología del levantamiento de los años 2001-2002
El gobierno federal realizó gestiones sólo con los gobiernos de las respectivas
sedes, restando importancia a los habitantes de las zonas afectadas, lo que
constituyó su mayor desacierto.
“El 8 de octubre de 2001, nuestros padres campesinos van al campo y
encuentran maquinaria trabajando y se retiene esa maquinaria y empieza más
movilización y más inquietud; muchos, la mayoría de nosotros jamás habíamos
pertenecido a ningún movimientos social, ni de lucha, ni de nada.”(Martha
Pérez; entrevista colectiva 3 de junio de 2009: pág16)
La información que se daba a los pobladores era imprecisa e incierta, por eso
las movilizaciones en principio surgieron en base a rumores en los que se
difundía la decisión gubernamental de expropiar los ejidos atenquenses. El día
8 de octubre de 2001, y aún sin haberse publicado el decreto, surgió la
necesidad de los ejidatarios de pedir información a las autoridades, iniciando
las protestas en la presidencia municipal de Atenco.
Sólo después de esta
movilización se dio a conocer el decreto de manera oficial.
La imposición causó grave indignación, por lo que los afectados marcharon
nuevamente, no obstante, esta vez ni siquiera fueron recibidos, únicamente
recibieron represión en vez de dialogar.
Finalmente, el 22 de octubre del
mismo año se publicó el decreto expropiatorio.
“El 22 de octubre aparecen unos desplegados enormes en cada delegación de
los cinco pueblos del municipio que decían que por decreto presidencial las
siguientes tierras de tales ejidatarios eran expropiadas y pasaban a ser del
gobierno para la construcción del nuevo aeropuerto…” (Martha Pérez; Ibídem)
118
Posteriormente, el gobierno del Distrito Federal se mostró más abierto y el
entonces jede de gobierno Andrés Manuel López Obrador, se manifestó a favor
de los habitantes del municipio de Atenco, exponiendo su desacuerdo con la
construcción del aeropuerto por las fuertes repercusiones que traería para la
ciudad.
“Al solidarizarse con la lucha de los habitantes de este lugar contra la
construcción del aeropuerto alterno para la ciudad de México, Andrés Manuel
López Obrador afirmó que pugnará por la amnistía para las personas que aún
están presas por oponerse a este proyecto, y acusó a los gobiernos priístas y
panistas que se aprovechan de los campesinos para hacer negocios.
“¿Ustedes creen que realmente les interesaba ampliar el aeropuerto de la ciudad
de México?” No, buscaban impulsar proyectos de urbanización alrededor de la
obra y cerrar la terminal para, “en las 600 hectáreas donde se asienta, hacer un
desarrollo urbanístico como Santa Fe”, expresó. Detrás de todo, aseveró, estaba
Vicente Fox.
Una vez que expresó su reconocimiento a Atenco por la lucha emprendida,
conminó a la población a mantenerse unida hasta lograr que todos los
procesados queden libres. “No conformarse con que saldrán los que tienen
derecho a fianza y otros estarán condenados de por vida, porque eso es
inhumano, injusto… eso es de regímenes autoritarios”, subrayó. (Periódico La
Jornada, 22 de febrero de 2008)
Una vez que expresó su reconocimiento a Atenco por la lucha emprendida,
conminó a la población a mantenerse unida hasta lograr que todos los
procesados queden libres. “No conformarse con que saldrán los que tienen
derecho a fianza y otros estarán condenados de por vida, porque eso es
inhumano, injusto… eso es de regímenes autoritarios”, subrayó. (Periódico La
Jornada, 22 de febrero de 2008)
“Algunos decían: „Bueno, pues vamos a recurrir a la movilización social‟,
muchos de nosotros no sabíamos que significaba eso; empezamos a difundir con
carteles, con volantes, a contrarrestar a los medios de comunicación con
nuestra voz”. (Martha Pérez; entrevista colectiva 3 de junio de 2009: pág. 19)
119
A las crecientes manifestaciones del FPDT se sumaron diversas organizaciones,
entre ellas el Frente Popular del Valle de México (FPVM) y el grupo de los
Habitantes Unidos de San Salvador Atenco (HAUSSA).
Así, cuando fue
emitido de manera oficial el decreto de expropiación, todos se integraron en un
solo movimiento.
El FPDT jugó un papel determinante en la lucha: organizaba la defensa,
brindaba información al público en general, conjuntaba brigadas para
perpetuar la seguridad de las comunidades, entre otras acciones que eran
realizadas conjuntamente tanto por hombres como por mujeres.
En este
ambiente, la organización que se efectuó fue la participación directa de los
pobladores, quienes siempre tomaban las decisiones y si bien, toda forma de
solidaridad que viniese del exterior en apoyo al movimiento era bien recibida,
por su parte, las formas de lucha eran como se decía en el interior del grupo.
“Aquí no había lideres, todos éramos lideres, o no éramos lideres”.
Los apoyos al Frente vinieron de muchos lugares, esencialmente de
organizaciones civiles nacionales y extranjeras, sindicatos de maestros, obreros,
universidades públicas y de diversos grupos de la población civil. Al momento,
y como artimaña federal, el gobierno invisibilizó al FPDT desde su nacimiento.
Los funcionarios declaraban a la prensa que la población estaba de acuerdo y
que sólo un pequeño grupo de 30 ó 200 personas de la comunidad de San
Salvador Atenco eran las que se movilizaban en desacuerdo con la construcción
del NAICM, lo cual significó un agravio para el movimiento.
Así, en octubre de 2001, con el bloqueo de la carretera que comunicaba a la
ciudad de México con Texcoco, se llevó a cabo la primera protesta social
liderada por estos grupos.
El 26 de noviembre el movimiento clausuró las
oficinas de la Procuraduría Agraria en Texcoco, buscando poner fin al decreto
que originó las inconformidades.
120
El 28 de noviembre se realizó una de las marchas más numerosas del
movimiento, en la que se registraron más de cinco mil personas encaminadas al
Ángel de la Independencia de la Ciudad de México, donde se encontrarían con
organizaciones no gubernamentales, sindicatos y la sociedad civil que
simpatizaba con el movimiento para continuar la protesta. (Velázquez; 2004:
29)
Entre noviembre y diciembre de 2001 la situación parecía tornarse positiva
pues se habían obtenido amparos para detener la expropiación ejidal, pero la
más importante razón esgrimida contra los ejidatarios fue pasarse por alto el
Artículo 27 Constitucional, pues a pesar de haberse modificado las formas de
tenencia del ejido en 1991, el gobierno federal no contaba con los argumentos
sólidamente validos para expropiar las tierras.
La ineptitud de los gobiernos federal y estatal, ocasionaron demasiada
desconfianza
entre los
habitantes
de
Atenco,
que
colocaron
retenes,
principalmente en Atenco, Nexquipayac y Acuexcomac para restringir el acceso
a los extraños, fuerzas policiacas y a la maquinaria con que se iban a iniciar las
obras de construcción.
Con la anterior situación, el FPDT tomó la iniciativa para llegar a un acuerdo
por la vía legal y el 27 de febrero hizo una invitación al presidente Vicente Fox
para llevar a cabo un debate abierto en el Auditorio Nacional para el día 2 de
marzo de 2002. Sin embargo, y a pesar de que los voceros presidenciales se
mostraron con la intención de entablar el diálogo, no aceptaron la proposición,
mucho menos el lugar y el día, ahondando cada vez más las diferencias entre
ambas partes.
121
El gobierno federal había contratado a la empresa Sistemas Avanzados y
Proyectos (SAP), para la realización de los trabajos topográficos y cartográficos
en los ejidos de Atenco. Pronto fueron descubiertas las personas encargadas de
hacer tales estudios, por lo que los habitantes del municipio decidieron retener
a los empleados para que explicaran la actividad que estaban realizando.
Dicho análisis comprendía los trazos de carreteras para conectar el aeropuerto
con los estados vecinos, además se contemplaba la construcción de tres pistas
de aterrizaje y despegue. Finalmente y después de una asamblea efectuada el
1° de junio decidieron dejar en libertad a los empleados de la empresa.
Diez días después, el movimiento del FPDT dio un giro importante, puesto que
el entonces gobernador Arturo Montiel Rojas hizo acto de presencia en el
municipio de Acolman.
Los habitantes de Atenco se movilizaron para
protestar, pero kilómetros antes de llegar a su destino se encontraron con un
camión del tipo torton puesto intencionalmente por la policía estatal para
obstruir el paso. Los manifestantes arrojaron el camión hacia los canales
laterales de la carretera, pero unos metros adelante fueron agredidos por
granaderos, policías y agentes vestidos como civiles. Hubo varios detenidos
entre ellos Adán Espinoza e Ignacio del Valle.
Pronto llegó la noticia al municipio de Atenco, los habitantes coléricos y
enardecidos se reunieron en el centro del pueblo, se armaron con piedras, palos,
machetes y bombas caseras, destrozaron y quemaron tres patrullas en el
pueblo de Acuexcomac, cerraron cuatro accesos de la carretera TexcocoLechería y retuvieron a cinco policías.
Luego, los ejidatarios se dirigieron a la Subprocuraduría de Justicia de Texcoco
para manifestarse en contra de la captura de sus compañeros, pero al no tener
una respuesta satisfactoria, tomaron como rehenes a personas que ocupaban
cargos importantes.
122
Con la retención de estos funcionarios, el pueblo de Atenco pretendía negociar
la libertad de sus compañeros detenidos, bajo amenaza de que si el gobierno
federal no daba una pronto solución al problema lincharían públicamente a las
personas detenidas; además de que harían explotar varias pipas que ya se
encontraban distribuidas en zonas estratégicas de Atenco y Acuexcomac.
Después de la retención de estos sujetos y a pesar de las amenazas, la
Procuraduría General de Justicia del Estado de México, imputó cargos en
contra de Ignacio del Valle, Adán Espinoza y otros siete detenidos, a quienes se
adjudicaron los delitos de privación ilegal de la libertad, robo con violencia y
daños patrimoniales.
El secretario general de gobierno, declaró que no haría ninguna negociación con
un “grupo guerrillero”, por lo que la atención de los medios de comunicación y
la opinión pública se volcó sobre el movimiento, dándosele una mayor difusión,
lo que se tradujo en una mayor simpatía con su lucha, tanto a nivel nacional
como internacional.
Por su parte, Arturo Montiel se lavó las manos y declaró su profundo respeto a
los derechos de las personas afectadas; sin embargo, el régimen no respetó esos
derechos que decía proteger. Indignados por la respuesta, los ejidatarios
desconocieron su mandato y su incapacidad para negociar con el gobierno
federal y resolver el conflicto, planteando por su parte una mesa de diálogo en
la que se proponía como moderadores al Obispo Samuel Ruíz, al general
Francisco Gallardo y a Rosario Ibarra.
123
En una asamblea general los pobladores de Atenco optaron por entregar a cinco
funcionarios de los que mantenían como rehenes a cambio de 12 integrantes del
movimiento que se encontraban recluidos. Posteriormente intercambiarían al
subprocurador José Andrés Mendiola y al jefe de averiguaciones previas
Guillermo Fragoso por los dirigentes Ignacio del Valle y Adán Espinoza.
A la vez, se exigió que el gobierno federal retirara las fuerzas policías y las del
ejército mexicano que se encontraban a unos cuantos kilómetros de Atenco,
pues de no hacerlo aumentaba la posibilidad de provocar una serie de
enfrentamientos con consecuencias devastadoras.
El 13 de julio Vicente Fox se reunió con su gabinete para atender lo referente a
la inconformidad por la construcción del nuevo aeropuerto, los temas relevantes
que trataron fueron cuatro:
1) Construcción de infraestructura para fomentar el desarrollo regional.
2) La entrega de terrenos en otros lugares a los ejidatarios que resultaran
afectados por la expropiación.
3) Reubicación de las personas afectadas en sus viviendas.
4) Tratar el precio de las tierras.
Los dos días siguientes las autoridades aceptaron los términos que en principio
habían propuesto los ejidatarios de Atenco, dejando en libertad a ocho de los
doce detenidos. Luego fueron entregados los miembros restantes, entre los que
se encontraban Ignacio del Valle y Adán Espinoza. De igual forma, por parte
del FPDT, se entregaron el primer día a 8 de los funcionarios públicos y
posteriormente a los 4 funcionarios restantes.
124
El 16 de julio el FPDT se dirigió a Los Pinos con la firme intención de resolver
el conflicto que se había suscitado en torno a la construcción del nuevo
aeropuerto. Pero hasta aquí, lo único que quedaba claro era que no habría
ninguna negociación en lo referente al decreto de expropiación y la única
alternativa sería la derogación del decreto.
Días después de la manifestación una comisión de campesinos fue recibida en
la residencia de Los Pinos.
No obstante, la posición del gobierno federal
pretendía aislar y separar a los ejidatarios en pequeños subgrupos agrarios, de
manera que el diálogo jamás se propició de manera abierta, causando la
inconformidad del FPDT.
Francisco Curi, en ese entonces coordinador para el desarrollo y la atención en
torno al proyecto del nuevo aeropuerto, había sido designado para plantear a
los ejidatarios los ofrecimientos para los afectados por lo que se comprometió a
entregar la nueva propuesta a los integrantes del Frente. Dicha propuesta
incluía los pasos a seguir para la resolución del problema pero ya había planes
de un enlace con el Comisariado Ejidal y un reducido grupo de ejidatarios para
iniciar pláticas con la Secretaría de Gobernación.
El 24 de julio, falleció José Enrique Espinoza, campesino y miembro activo del
movimiento, como consecuencia de la golpiza que le fue propiciada por parte de
agentes federales en el municipio de Acolman. La muerte del ejidatario agudizó
el descontento del FPDT, puesto que ese mismo día se había efectuado una
reunión en el Archivo General de la Nación (AGN), empeorando las
negociaciones y generándose un descontento en todos los campesinos.
125
El día 1° de agosto de 2002, la presidencia de la República dio a conocer la
decisión que ponía fin al decreto expropiatorio, con aseveraciones que daban
prioridad a los pueblos que se verían afectados. También planteó la ampliación
del aeropuerto del Distrito Federal en otras entidades, sin especificar cuáles,
aunado a la importancia de conciliar los intereses del gobierno con los del
pueblo.
Finalmente, el 6 de agosto del mismo año, el Diario Oficial de la
Federación publicaba la derogación del decreto expropiatorio que ponía fin a la
expropiación de los ejidos de Texcoco.
Tal derogación, y según los criterios gubernamentales, se sustentaba en la
importancia de mantener la paz social, en preservar el orden, en vincular al
pueblo con el gobierno y en sostener la falacia de una democracia participativa.
Los pobladores de Atenco en “estas batallas aprendieron el sentido de la
solidaridad y la habilidad para decidir de manera democrática, pero
fundamentalmente fraguaron una identidad colectiva basada en la voluntad
común de defender un espacio propio, un territorio, un lugar que han intentado
arrebatarles en más de una ocasión y de diferentes modos.” (Grajales, V.S. y
Robles, R.M . 2010. pág. 81)
126
III.2.4 Análisis de la actuación social a lo largo del movimiento
Después que el FPDT intentara por vías legales como la denuncia pública, las
marchas y mítines hacer notar la arbitrariedad que representaba el proyecto
del aeropuerto, no consiguió hacer valer su voz. A pesar de que el conjunto de
acciones fueran institucionales el gobierno respondía con la represión, por ello
se abrió la brecha hacia la confrontación.
Por eso, y ante la respuesta violenta desplegada por el gobierno, el movimiento
se vio en la necesidad de cambiar sus formas de acción a formas de lucha
consideradas ilegales, tales como la toma de instalaciones gubernamentales,
retención física de funcionarios públicos, confrontación física y bloqueos
carreteros.
Una de las represiones más crueles que experimentó el movimiento fue la del
11 de julio de 2002 ya que la confrontación fue abierta y el conflicto se tornó
más intenso. En dicha etapa la amenaza latente era la entrada de la Policía
Federal Preventiva (PFP) y del Ejército Mexicano. Ante estas amenazas, el
actor social reaccionó con la autodefensa, con lo que se notó una radicalización
total en las medidas adoptadas. El resultado de esta actitud fue la negociación
y disposición de las partes involucradas para dar una solución al conflicto. En
este momento el FPDT adquirió legitimidad ante los medios de comunicación y
la sociedad en general, además de verse fortalecido y adquirir una mejor
constitución como movimiento social anti sistémico.
127
En la fase terminal de cualquier conflicto pueden ocurrir dos cosas, una que
desaparezca el conflicto si existe una solución equitativa, justa, satisfactoria y
pacífica para los polos involucrados. En el caso del FPDT sucedió la otra, pues
a raíz de la crisis hubo diez personas procesadas por los sucesos del 11 de julio,
350 averiguaciones previas y varias órdenes de aprehensión y otras tantas por
ejecutar.
En síntesis, en esta primera etapa el movimiento de Atenco se
presentó y actuó como un poder paralelo al Ayuntamiento priísta, en otras
palabras, nos pudimos encontrar ante una dualidad de poder, la que al menos
para el caso del Frente, se constituyó como un contrapoder de los gobiernos
federal y estatal.
III.2.5 La acción de las mujeres en contra de la construcción del
aeropuerto
La participación de las mujeres en contra de la construcción del aeropuerto no
se hizo esperar. En principio las labores estaban principalmente lideradas por
los hombres y posteriormente ellas se adherían a las actividades con la única
finalidad de apoyarlos.
“Yo siento que en la etapa de la defensa de la tierra había muchas mujeres que
participamos pero no de una forma tan activa (…), por lo regular eran los
compañeros que salían siempre a organizar la marcha, a organizar el mitin, a
organizar la asamblea; una, de igual manera, apoyaba en la casa; había que
atender en mi caso a mis hijos, sobre todo al menor (…)” (María Trinidad
Ramírez; entrevista colectiva 3 de junio de 2009: pág. 28)
Las mujeres de Atenco y de las comunidades afectadas por el decreto
expropiatorio eran en su mayoría amas de casa, esposas e hijas dedicadas por
completo a las labores domésticas y una minoría insertas en un trabajo
remunerado. Por ende, en principio su participación se reducía meramente a
apoyar a sus parejas, puesto que resultaba una tarea sumamente difícil
combinar el activismo social con los quehaceres domésticos.
128
“Entonces, la participación de la mujer no era, al menos no de todas, no al
menos la mía tampoco, tan activa en el movimiento de la defensa de la tierra.
Tenías obligaciones, tenías que trabajar para comer, para solventar los gastos
de los hijos y demás, pero sí acompañábamos. Yo decía: „donde sea necesario
hacer fuerza, yo me sumo‟, hay que ir a la marcha, hay que ir al mitin, hay que
ir a lo mejor a la universidad , porque aquí se hicieron brigadas informativas,
veníamos aquí a informar, íbamos a una prepa, íbamos a una vocacional, a
donde sea, al fin del mundo teníamos que llegar para decir: „compañeros esta es
nuestra palabra, esto estamos viviendo, pretenden arrebatarnos nuestras
tierras por medio de este proyecto‟. (María Trinidad Ramírez; entrevista
colectiva 3 de junio de 2009: pág.28)
Conforme se desarrolló el movimiento y tal como ellas mismas lo expresan,
combinaron sus actividades cotidianas con el activismo que los varones habían
iniciado ya que podemos encontrar en ellas un fuerte apego ideológico hacia la
tierra.
“Hemos encontrado que en la lucha social te encuentras cada vez más contigo
mismo, que cada vez te vuelves más humano, cada vez te das más cuenta de
cómo vivías antes, estábamos como dormidos ante una realidad, porque algo
estaba pasando en el mundo, escuchábamos en las noticias la palabra
neoliberalismo, globalización, tratados de libre comercio, todo eso nos era muy
ajeno.” (Martha Pérez; entrevista colectiva 3 de junio de 2009: pág.47)
129
III.3 Las Flores de Atenco (3 y 4 de mayo de 2006)
Cuatro años después, en 2006, hubo un nuevo acto de represión sobre los
habitantes de la comunidad de San Salvador Atenco. Vendedores ambulantes
de flores de varias comunidades del municipio de Texcoco que se encontraban
establecidos en la vía pública buscaban el permiso de las autoridades para
continuar con sus actividades comerciales, siempre apoyados por el FPDT. Los
días 3 y 4 de mayo se llevó a cabo un operativo policiaco en las afueras del
mercado municipal para impedir la instalación de los vendedores.
Dicho
operativo dio como resultado uno de los más crueles enfrentamientos entre la
Sociedad Civil y fuerzas policiacas durante el último año del sexenio de Vicente
Fox.
Con este operativo de las fuerzas del orden se buscó la ocasión y el pretexto
para reprimir al movimiento por diversas razones entre las que destacan:
1) Haber detenido la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la
Ciudad de México en los años 2001 y 2002.
2) El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra se había convertido en un
gran ejemplo nacional e internacional en cuanto a movimientos de
resistencia.
3) El FPDT era un intermediario gestor de las necesidades comunitarias.
130
Tal y como lo expresan las mujeres del FPDT “… comenzamos a hacer vínculos:
con los universitarios cuando había que luchar por la educación, con los
obreros, con los indígenas, con los colonos, con todos: vivienda, empleo,
educación, salud, eran tantas banderas por las que se tenía que seguir
luchando, que no sólo era tu espacio, por tu pueblo, por la defensa de la tierra
de Atenco, sino que había otras cosas”. (María Trinidad Ramírez; entrevista
colectiva 3 de junio de 2009: pág.32)
4) Frenar la protesta social.
El tres de mayo, los integrantes del FPDT asistieron a las siete de la mañana al
centro de Texcoco acompañando a los floricultores para comprobar que se
instalaran sus puestos en base a lo pactado con las autoridades municipales
días antes.
Pero sin respetar ese acuerdo, ya se encontraban en ese sitio
fuerzas policiacas municipales y estatales quienes a punta de golpes les
impidieron poner sus puestos.
“Únicamente querían vender de 5 a 11 de la mañana, después de las 11 se
retiraban a sus casas ¿Era mucho pedir que les dieran permiso? No, pero ni
siquiera fue por eso, ese fue el pretexto, las flores”. (María Trinidad Ramírez;
entrevista colectiva 3 de junio de 2009: pág.34)
131
Inmediatamente los policías iniciaron el enfrentamiento en contra de los
floristas e integrantes del FPDT.
En unos segundos ya estaban acorralados,
por lo que se refugiaron en una bodega de los floristas, aproximadamente hasta
las cuatro o cinco de la tarde, momento en el que las fuerzas policiacas entraron
al lugar y los sacaron violentamente. Cabe hacer notar que desde ese momento
y hasta su traslado al penal del Altiplano fueron víctimas de incesantes
vejaciones y violaciones a sus derechos como seres humanos.
En otras
palabras, la violencia fue total, un claro mensaje de escarmiento.
Cuando se enteraron de que tenían cercado a sus compañeros en Texcoco,
comenzaron los bloqueos carreteros en Atenco para presionar a las autoridades
y llegar a un arreglo, pero la respuesta de las autoridades fue enviar un gran
número de efectivos. A causa de este despliegue policiaco y como consecuencia
de la brutalidad ejercida por los agentes, resultó muerto el niño Javier Cortez.
Sin embargo, y como parte de la represión, los medios televisivos aseveraban
que había muerto producto de una bomba casera que hicieron explotar los
manifestantes de Atenco. Por ello, cuando los miembros del FPDT se enteraron
del deceso del menor, se caldearon más los ánimos.
Una de las principales finalidades de la represión es que no aparezca tal cual es
y para lograr esto el gobierno se valió de los principales medios masivos de
comunicación (Televisa, TV Azteca, entre otros) desprestigiando la lucha del
Frente, tachando a sus miembros de gente salvaje que ponía en peligro la
seguridad pública.
132
Los pobladores de Atenco creían que la policía entraría a la comunidad al caer
la noche, por lo que se concentraron en los diferentes puestos de defensa que se
habían instalado. Más tarde llegaron organizaciones políticas, estudiantes de
las principales universidades públicas de la zona y del Distrito Federal,
colectivos y sindicatos para solidarizarse con la causa. Aproximadamente a las
cinco de la mañana se escuchó el estruendo de los cohetes, siendo esta la señal
que anunciaba la inminente entrada de los granaderos.
“Dijimos: „¿Qué vamos a hacer?‟, le dije a un compañero: „toquen las campanas y
no dejen de tocarlas, tóquenlas, creo que estamos en un momento de guerra,
vamos a entrar en un momento de guerra, toquen las campanas y resistan”.
(María Trinidad Ramírez; entrevista colectiva 3 de junio de 2009: pág.36)
Los policías llegaron a la carretera y quitaron las barricadas. Desde las cinco
de la mañana y hasta las seis y media se mantuvieron en resistencia, pero
finalmente las fuerzas policiales lograron entrar al poblado. Sin embargo, ya
había
mucha
gente
detenida,
amedrentada
y
golpeada.
Fueron aproximadamente 5000 elementos policiacos que a su paso golpeaban
con sus escudos y sus pies contra el pavimento, a la par que hacían detonar
armas de fuego generando un ruido ensordecedor. La gente en el centro corría
para todos lados buscando en donde refugiarse ante la inevitable amenaza de
ser aprehendido.
En su primera etapa, la operación policiaca en Atenco consistió en detener a las
personas que se encontraban en la calle, sin importarles que tuvieran que ver o
no con los acontecimientos. Posteriormente allanaron los domicilios que tenían
ya previamente señalados, sin la orden judicial correspondiente y detener a las
personas que encontraran en su interior. Forzaron y tiraron las puertas de los
hogares, sacaron a la gente con violencia y destrozaron lo que hallaron en su
camino llevándose los objetos de valor.
133
Las personas que aún se encontraban en el interior de sus domicilios no podían
creer lo que estaba pasando. Sabían que si salían serían golpeadas y detenidas,
pues alcanzaban a ver la forma en que eran sometidas y golpeadas otras
personas, lo que les producía impotencia, rabia y desesperación por no poder
hacer nada para impedirlo. Hasta ese momento, el objetivo con el que se hacía
presente la represión era claro: difundir miedo a la sociedad en general y así
paralizarla e impedir su participación en las actividades políticas.
Durante su traslado al penal, las personas aprehendidas fueron golpeadas y
torturadas tanto física como psicológicamente. Les levantaban la playera para
cubrirles la cabeza y de esta forma no pudieran ver nada de lo que sucedía.
Aventaban a las personas a la camioneta con el rostro hacia abajo, las apilaban
unas sobre las otras, propinándoles fuertes golpes si intentaban moverse. El
trayecto al penal de Toluca dura aproximadamente dos horas, no obstante los
días tres y cuatro de mayo fue de seis horas en las que los detenidos vivieron
toda clase de humillaciones.
Quienes fueron detenidos inmediatamente y a pesar de las heridas, no fueron
revisados por ningún médico, ni se les dijeron sus derechos, ni el motivo de su
detención y mucho menos fueron presentados ante el Ministerio Público.
La represión dejó un ambiente de incertidumbre, de rabia, pero sobre todo de
miedo. En el centro del municipio de Atenco y en las comunidades vecinas no
se veía gente, únicamente se observaban zapatos de todo tipo tirados, charcos
de sangre y el ambiente olía a gas lacrimógeno.
El saldo total de esos dos días de violencia fue de 2 hombres asesinados, 217
personas detenidas, de ellas 47 eran mujeres, de las cuales 27 sufrieron
violación y abusos sexuales, y alrededor de 30 domicilios allanados sin la orden
judicial correspondiente.
134
A varios años de lo ocurrido nadie se ha responsabilizado por los actos de
violencia y represión en los que hay un sinfín de ejemplos que muestran que el
poder del Estado se pasó por alto los Derechos Humanos.
Tampoco se ha
actuado en contra de las autores intelectuales, es decir las autoridades
gubernamentales que ordenaron la represión en contra de los atenquenses,
tampoco se ha detenido a ninguno de los policías que rebasaron sus
atribuciones al hacer uso excesivo de la violencia.
Con los actos represivos de los días tres y cuatro de mayo de 2006 el Estado
envió el mensaje de que nada ni nadie puede modificar el orden social
establecido, ni la hegemonía dictada por las clases en el poder.
En otras
palabras, aquí se cumple lo que Karl Marx enunció en el Manifiesto del Partido
Comunista: lo único que puede derrocar a las clases en el poder es la unión de
las clases oprimidas y la revolución proletaria que acabe su dominio.
Grajales y Robles (2010) sintetizan así esta jornada: “Más de 200 personas,
entre las cuales había nueve menores de edad y cinco extranjeros, fueron
detenidas el 4 de mayo con extrema violencia, golpeados con furia, con saña.
La cantidad de elementos policiacos, que era totalmente desproporcionada en
relación con el número de pobladores y simpatizantes involucrados en el
conflicto el día anterior, hizo posible que por cada detenido hubiera por lo
menos veinte policías. Hombres, mujeres, ancianos y menores de edad fueron
golpeados por igual.
Los detenidos, la mayoría bañados en sangre, fueron
apilados en camionetas que los condujeron a las afueras del pueblo, donde
nuevamente fueron bajados y golpeados. Después los subieron a los camiones
de la policía, amontonados unos sobre otros.
Las mujeres, además, fueron
agredidas sexualmente: fueron tocadas, pellizcadas, manoseadas y violadas.”
135
III.3.1 Violencia en contra de las Mujeres
A continuación anexamos de manera textual los testimonios de varias de las
mujeres que fueron detenidas y sufrieron toda clase de vejaciones durante los
sucesos de los días 3 y 4 de mayo de 2006, cabe aclarar que el documento
original es propiedad del FPDT, sin embargo conté con su previa autorización
para exponer y posteriormente analizar algunos de los testimonios.
1.- Ana Lilia Mancilla Segura
Edad: 28 años
Ocupación: Comerciante en Texcoco
Detención: En Texcoco el 3 de mayo de 2006 a las 16:30 según relata,
maltrataron a sus familiares en su domicilio por una hora, Detenida por un
grupo de la policía estatal, sin orden de aprehensión.
El día 3 de mayo del 2006 siendo las 7:30 am, cuando los municipales estaban
golpeando brutalmente a hombres y mujeres, nos acorralaron, yo entro a mi
casa cuando los granaderos estaban cerrando toda la calle, ya nadie pudo
pasar, ahí estuve varias horas, cuando entraron a la casa sin permiso, policías
estatales y granaderos allanaron la casa golpeando sin piedad a todas las
personas, a mí y a mi familia la golpearon, la torturaron.
Al salir del cuarto donde estábamos, policías me golpearon, me descalabraron e
hicieron una valla de ambos lados y al ir hacia el carro de la policía estatal iban
golpeando sin piedad, al subir me manosearon todo mi cuerpo, yo con las manos
en la nunca sin poderme defender, me sentaron y no podía voltear porque si lo
hacíamos nos daban un toletazo; en el transcurso del camino se escuchaban
gritos de mujeres diciendo: ya déjame por favor, ya suéltenme y llegaba un
aroma muy raro, se estaban drogando y eso les daba más valor, a una le
hicieron sexo oral, al llegar al penal todavía nos golpearon, a mí me agarraron
de los cabellos fuertemente y con brutalidad.
136
2.- Gabriela Téllez Venegas
Edad: 18 años
Ocupación: Ama de casa y trabajadora
Detención: El 3 de mayo de 2006 por policía estatal y granaderos sin orden de
aprehensión.
Venía de mi trabajo sobre la calle Manuel González, cuando vi el camión donde
llevaban a los señores y señoras y me quedé parada, ahí me vieron los policías y
me dijo uno: ¿qué me ves?, y dijo otro: súbela por pendeja.
Me empezaron a pegar y preguntar dirección, edad, nombre; y tres de ellos me
apartaron porque me querían seguir pegando con patadas y toletazos, me
empezó a agarrar la cara uno de ellos y me metía los dedos en la boca y en la
vagina y me obligó a hacerle sexo oral, me echó su esperma en mi suéter blanco
y vino otro policía y lo mismo, me agarró mis pechos y dijo: está bien buena y
está amamantando, ¿verdad? puta perra, me sacaron una foto con los ojos
cerrados. Después me obligó a hacerle sexo oral, me echó su esperma en la
boca y lo escupí en mi suéter, vino un tercero y me hizo lo mismo y me los echó
en mi suéter; y me dijo que si quería que me ayudara, tenía que ser su puta por
un año e irme a vivir a donde él quisiera, me quitaron mi suéter y no me lo
quisieron dar, llegó un cuarto policía, me manoseó en la vagina y los pechos y
quería que le hiciera sexo oral y llegó otro y le dijo: ya no, guey, porque ya
llegamos; y me empezaron a limpiar el pantalón y las manos y me dieron un
cigarro a fumar, pero yo no fumo ni tomo. Y me bajaron con los ojos cerrados
en el penal de Santiaguito, Almoloya.
137
3.- Micaela Morales Galván
Edad: 50 años
Ocupación: empleada doméstica.
Detención: El 3 de mayo de 2006, a las 4 de la tarde en Texcoco, por la PFP, sin
orden de aprehensión y allanamiento sin orden de cateo.
Me dirigía al trabajo en la calle Manuel González, cuando llegué frente al
mercado Belisario Domínguez, me di cuenta que estaban golpeando a los
comerciantes, me di vuelta por la terminal de los autobuses Texcoco-México,
para llegar a mi trabajo, la puerta de mi trabajo estaba cerrada, ya no pude
entrar y no pude salir de la calle porque estaba cercada de ambos lados,
estuvimos esperando que se retiraran y no se fueron hasta que nos sacaron en
la tarde con gases, a golpes, amenazas y con agresiones de todo tipo, insultos
hasta llegar al penal.
138
4.- Bárbara Italia Méndez Moreno
Edad: 27 años
Ocupación: Estudiante, empleada y voluntaria en la Fundación Vida Nueva de
México A.C.
Detención: 8:40 am en domicilio particular de San Salvador Atenco por
Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Policía Federal Preventiva (PFP) y
Policía Estatal del Estado de México (PEEM), sin orden de aprehensión y sin
orden de cateo.
Fui detenida en una casa particular en San Salvador Atenco, allanado por la
Policía Federal Preventiva, me despojaron de todas mis pertenencias y dinero,
me obligaron a hincarme frente a la pared con las manos en la nuca, golpeaban
mi cabeza con el tolete, me levantaron y frente a una cámara me cuestionaron
sobre mi filiación política, mi dirección, mi nombre y el nombre de mis
familiares directos.
Posteriormente fui sacada del domicilio y sentada en la banqueta, había mucha
gente más alrededor mío, yo tenía cubierta la cabeza y cara con mi suéter, me
golpearon en repetidas ocasiones en la cabeza con toletes y patadas en los
glúteos y espalda, me provocaron una herida en la cabeza de seis centímetros.
139
Instantes después me hicieron caminar por dos hileras de policías que
escoltaban el autobús en el cual nos trasladarían, me subieron a golpes al
autobús y adentro había una gran cantidad de personas esposadas y con la
cabeza cubierta, apilados unos sobre otros, me colocaron encima de la pila y
después me arrastraron hacia el asiento trasero, ahí un policía metió su mano
dentro de mi blusa y desagarro mi brassier, enseguida metió su mano dentro
del pantalón y desgarró mi calzón.
Yo me encontraba boca abajo, con el rostro cubierto, bajaron mi pantalón hasta
los tobillos y mi blusa hasta la cabeza, golpearon con fuerza mis glúteos,
gritándome que me violarían y matarían, después un policía me gritó que le
dijera “vaquero” y golpeó con más violencia mis glúteos, pero ahora con su
tolete, solo paró hasta que escuchó lo que pedía. Enseguida me penetró con sus
dedos la vagina y apretó con fuerza mis senos, después pellizcó con mucha
violencia mis pezones, invitó a otro policía a hacer lo mismo mientras seguían
golpeándome, después invitaron a una tercera persona a la cual llamaron jefe,
este último me penetró con un objeto y amenazaron con violarme, me pusieron
a la altura del pene de uno de ellos y él se restregó en mis glúteos mientras los
otros dos policías lo animaban a penetrarme con su pene, pero no lo hicieron,
me golpearon en los senos en repetidas ocasiones y golpearon mi estómago
mientras besaban mi boca, como yo me resistía, los golpes eran para que yo
abriera la boca y el policía pudiera meter su lengua en mi boca.
Viajé todo el trayecto desnuda encima de dos personas más y sobre mi espalda
y cabeza viajó un policía sentado. Hasta que llegamos al penal me permitieron
vestirme y fui bajada del camión.
140
5.-Emperatriz Flores Rosas
Edad: 20 años
Ocupación: Estudiante
Detención: Entre 8:00 y 8:30 de la mañana del 4 de mayo de 2006 en San
Salvador Atenco por la PFP y Estatal sin orden de aprehensión, sin orden de
cateo y abusada sexualmente.
El día 4 de mayo, me encontraba en mi casa ubicada entre Hidalgo y Florida,
en San Salvador Atenco, ya que estaba con mi mamá Rosa María Grimaldo y
mi hermano Jordán en donde yo y mi mamá estábamos viendo la televisión en
el cuarto de arriba, en donde como a las 8:00 u 8:30 am, escuchamos como
rompieron los vidrios y entraron a mi casa la Policía Federal y Estatal con
amenaza de muerte a mi mamá y armados con toletes.
En donde me golpearon en cabeza y cuerpo y destruyeron objetos
pertenecientes a cuanto pasaba por su camino; me desalojaron de mi casa, en
donde me torturaron de manera psicológica y física y me manosearon mi cuerpo
y senos, haciéndome robo de celular, anillos, reloj, gargantillas y dinero. Y
donde en el trascurso me vinieron golpeando en cabeza, en donde, no pude ver
quien fuera, porque me traían con la cabeza agachada y ojos tapados; uno de
ellos me dio una patada, logrando lesionar el tobillo del mismo pie con
esguince.
141
6.-Leticia Ramírez Pacheco
Edad: 22 años
Ocupación: Empleada de un hotel
Detención: Detenida el 4 de mayo, aproximadamente a las 8:00 am en la calle,
afuera de un hotel en San Salvador Atenco, por la PFP y la Policía estatal.
La mañana del 4 de mayo del 2006, salíamos de un hotel cuatro personas,
cuando nos percatamos de que ya se había detenido el ataque de los granaderos
contra los habitantes de San Salvador Atenco y personas ajenas al lugar.
Estando en la calle nos abordaron un grupo de granaderos a preguntarnos de
dónde éramos y qué hacíamos ahí, no se nos permitió contestar e
inmediatamente nos agreden verbalmente y nos empiezan a empujar.
Entre esas personas iba una extranjera de origen alemán, fotógrafa, se nos
sube a una patrulla estatal a Samantha, la alemana y a mí, de las otras dos
personas no percaté dónde las subieron. A Samantha y a mí nos suben encima
de otras personas ensangrentadas, malheridas y aun así nos golpean en la
cabeza, jalones de cabello.
A mí, subiéndome a la camioneta, un granadero me insultaba, me decía puta e
introdujo su mano en mi pantalón para romperme el calzón y tocarme las
nalgas, en ese mismo instante me alza mi sudadera y me rompe el brassier con
toda saña para apretarme los senos y pezones, todo el tiempo en esa patrulla
era con miedo, golpes en mi cabeza, espalda, me jalaban del cabello y me
torturaban psicológicamente con la cabeza hacia abajo para no mirarles la cara.
142
Al bajarnos de la patrulla para trasladarnos al camión, fue con la misma
salvajez y como no podíamos bajarnos por los golpes, porque íbamos aplastados,
nos bajaban ellos doblándonos los brazos y empujándonos, golpeándonos con
puños y macanas, ahí me golpea en la mejilla. Al subirme un granadero me
agarra por detrás y mete su asquerosa mano por mi pantalón para tocarme la
vagina y tocarme con sus dedos, nos suben y de nuevo encima de personas
desangrándose. Nuevamente amenazas de muerte y golpes al que levantara la
cabeza o se quejara o moviera y si traían heridas ahí te golpeaban con más
saña.
Las mujeres uniformadas, granaderas, se ensañaban con nosotras y ellas, más
nos insultaban y golpeaban. Tardamos como cuatro horas en ese camión en la
misma posición, con la cabeza agachada, espalda encorvada en los asientos.
Al llegar aquí hicieron que pusiéramos las manos en la nuca y con la cara
cubierta con nuestras ropas. Al bajar nos empujan y nos agarran con los brazos
doblados por ellos mismos y la cabeza hacia abajo, sentimos más miedo,
preguntan nuestros nombres, nos insultan, pasamos a revisión las mujeres y
hombres.
La mujer que me revisa hace que me quite la ropa y le de mis
pertenencias, diciéndome que esas cosas se irían a la basura.
143
7.- Magdalena García Durán
Edad: 48 años
Ocupación: Comerciante
Detención: En Atenco el 4 de mayo de 2006 entre las 6:30 y 7:00 am por la
SSPF, Policía Estatal y Policía Municipal.
Al llegar a la camioneta lo primero que hizo el granadero me jaló las cadenas
con fuerza, se dio la vuelta y otro me bajó, agachándome la cabeza,
cubriéndomela con un gabán y los otros granaderos me daban patadas,
caminamos una gran distancia, llegamos a una camioneta pick up y me
arrojaron como costal sobre los demás que venían, no caí bien por lo que me
dieron de toletazos, sentía que me ahogaba por que nos encimaban a mucha
gente que subían y pesaban mucho.
La camioneta se tardó un buen rato ahí y después arrancó hacia un camión, al
llegar al camión nuevamente me sometieron con la cabeza agachada para
subirme al camión, me gritaban, me insultaban, me apresuraban, querían que
caminara encima de los que ya estaban encimados pero como no podía hacerlos,
dos granaderos me empezaron a jalar mis trenzas, me empezaban a preguntar
mi edad y me insultaron diciéndome que ya estaba “pinche vieja para andar en
este desmadre”, que me iban a matar como perro y me amenazaban con
cortarme la cabeza, muchas veces me repitieron eso, me arrastraban de mis
trenzas encima de toda la gente hasta llevarme hasta la puerta trasera del
camión.
Me di cuenta que había muchos heridos y ensangrentados pero
terrible pidiendo que se quitaran gente de encima porque sentían que se iban a
morir.
144
Ya cuando llegamos al penal me bajaron con la cabeza agachada, porque los
medios estaban presentes y no querían que se les vieran las caras. Al entrar al
penal me empezaron a cuestionar, me quitaron mi celular y lo tiraron a la
basura.
8.- María Luisa López Morán
Edad: 39 años
Ocupación: Empleada
Detención: Originaria de San Salvador Atenco y detenida en Acuexcomac por la
PFP y Estatal.
El día 4 de mayo del año en curso, saliendo de mi domicilio dirigiéndome a casa
de un familiar en la calle Puebla del poblado de San Francisco Acuexcomac, me
agarraron unos granaderos, golpeándome en la cabeza, agachándomela ya
ensangrentada; me hace correr entre los camiones y a cierta distancia me
entrega con otras mujeres, no sé de qué agrupación, me continúan pegando y
haciéndome correr.
Al llegar a un camión me tira al suelo y sigue
golpeándome, me quitan reloj y celular. Después de un rato me bajan y me
pasan a una camioneta, en la cual soy brutalmente golpeada en las nalgas, yo
al querer cubrírmelas con las manos, también me las golpearon y me decían
que las quitara golpeándomelas. Después de un rato, me volvieron a bajar,
subiéndome a otro camión, me echaron al asiento de hasta atrás, junto con otra
mujer, ahí seguía ensangrentada y me dijeron que me pusiera la sudadera
como toalla.
145
9.- Mariana Selvas Gómez
Edad: 22 años
Ocupación: estudiante
Detención: Detenida el 4 de mayo de 2006 entre 7:30 y 8:30 am, por la SSPF, la
Estatal y la Municipal, sin orden de aprehensión.
El día 4 de mayo del año 2006 fui detenida en la mañana, yo acudía a San
Salvador Atenco para asistir a mi padre Guillermo Selvas Pineda, médico de
profesión; para atender a un paciente.
En nuestro momento de la detención fui sometida por aproximadamente 50
granaderos, los cuales me pegaron a la pared, pusieron mis manos en la nuca,
mientras me golpeaban e insultaban entre todos.
Me tiraron al piso e
igualmente me golpearon, con patadas, con puñetazos, con los toletes y las
macanas, me jalaban el cabello, me pisotearon, después me levantaron y entre
empujones y golpes me subieron boca abajo en una camioneta de la policía, yo
quedé hasta abajo, subieron a muchas personas encima de mí, a las cuales
también sometieron, golpearon e insultaron. Como yo iba hasta debajo de todos
en el trayecto se me durmió el cuerpo, al llegar al camión nos bajaron de la
camioneta con golpes. A mí me bajaron arrastrando porque no me podía mover.
Al subirme al camión me di cuenta que adentro de este estaban golpeando a
todos, a mi entre golpes, insultos y empujones me comenzaron a manosear;
primero los glúteos, luego a frotarme encima del pantalón, después empezaron
a preguntar mis datos personales mientras me tocaban mis senos, primero
encima de la ropa y luego metiendo sus manos de manera tosca por debajo
rompiéndome el brassier y causándome gran irritación en los pezones por
pellizcos y jalones.
146
Intentaron quitarme el pantalón pero los golpes de los otros policías no lo
permitieron. Durante el transcurso hubo amenazas de muerte, decían que nos
iban a desaparecer y que si sobrevivíamos íbamos a parar 80 años encerrados.
No podíamos movernos, si nos movíamos nos golpeaban con saña, una mujer
policía se fue parada en mi espalda, se escuchaba cómo abusaban de otras
mujeres en mi camión especialmente a una alemana.
Se escuchaba como si estuvieran viendo una película pornográfica, así como
insinuaciones de que se iban drogando.
El camino fue muy cansado, no
podíamos movernos, íbamos aterrados, al llegar al penal nos fueron parando a
cada uno con golpes e insultos, hicieron que nos cubriéramos el rostro con la
playera, al entrar al penal fue el mismo trato, golpes, insultos. Dábamos cinco
pasos y nos volvían a pegar a la pared con la cabeza agachada y nos volvían a
golpear.
Dentro del penal no recibimos atención médica necesaria. Nos han
querido amenazar si no acatamos las reglas del penal, hemos pedido hacer las
denuncias, pero no nos han hecho caso.
147
10.- Norma Aidé Jiménez Osorio
Edad: 23 años
Ocupación: Estudiante
Detención: Detenida el 4 de mayo en las afueras de Atenco por la PFP y la
Estatal.
Fui detenida el 4 de mayo del 2006, en las afueras de San Salvador Atenco por
la policía federal preventiva, me golpearon con un escudo para tirarme, y ya en
el piso dos policías me golpearon con tolete y puño, después me pusieron de pie
y me hicieron correr aunque yo les expresaba que de los golpes recibidos, se me
había dormido la pierna derecha, me seguían golpeando y se les unió un tercero
que me golpeaba en la espalda con el puño, los otros dos me golpeaban con los
toletes, los tres me decían que iban a violarme y a matarme, me hacían
preguntas y me golpeaban, amenazaban con desaparecerme y me tocaban mis
genitales.
Me subieron en un camión, en el cual me acostaron en el piso de este
indicándome no moverme, y no hablar, tenía la cabeza cubierta con mi propio
suéter desde el momento en que me detuvieron y allí me volvieron a acomodar,
seguían amenazándome con violarme y matarme, hasta que a golpes y patadas
me bajaron de ese camión para subirme en la parte de atrás de una camioneta
donde un sujeto me golpeaba las nalgas sin parar con un tolete, mientras yo
seguía con la cabeza cubierta y boca abajo; cuando ya no pude soportar los
golpes en mis nalgas traté de cubrirme con mis manos y también me las
golpearon hasta que las quité, después introdujo su mano por debajo de mi ropa
interior y me apretó fuertemente las nalgas, incluso introduciendo sus dedos en
mi ano.
148
Después con amenazas de muerte y patadas me bajaron de esa camioneta para
subirme en un autobús, en el cual me obligaron a sentarme en el último asiento
donde me descubrieron solamente la boca y empezaron a morderme los labios y
meterme su lengua en la boca, al menos cuatro sujetos apretaron mis senos y
pellizcaron mis pezones, al menos tres sujetos introdujeron sus dedos muchas
veces en mi vagina, mientras me insultaban y golpeaban.
De repente
empiezan a subir a muchos compañeros y compañeras y yo oía como violaban y
golpeaban a todos; nos torturan todo el camino hasta llegar a este penal, donde
tengo mucho dolor en las manos, la cadera, el brazo derecho, el vientre y las
piernas y no se me da atención médica.
11.- Patricia Torres Linares
Edad: 23 años
Ocupación: Estudiante
Detención: El 4 de mayo del 2006 a las 8:00 am por la PFP y la Municipal.
El día 3 de mayo me dirigía a San Salvador Atenco, después de enterarme de
los actos violentos que se habían presentado en la tarde, en el mismo pueblo;
por la noche la gente estaba desorientada, pero se percibía que no ocurrían
otros actos de violencia, el día 4 de mayo en la madrugada sonaron las
campanas, era falsa alarma de que en Atenco entrarían las fuerzas de la
policía.
A las seis de la mañana empezaron los actos violentos, San Salvador Atenco era
sitiado, había gases lacrimógenos que te hacían vomitar, la gente estaba
desarmada, frente al gran armamento de los granaderos.
Empezaron a
replegar a la gente hasta el centro de la plaza, cuando suena el aviso de ataque
la gente en la plaza corrió. Corrí a refugiarme en una casa, en la cual parecía
que todo estaba seguro, cuando al pasar cuarenta minutos, gritando, entraron
hombres uniformados, gritando que nos pusiéramos contra la pared, con las
manos en alto, sin verlos.
149
Empezó un interrogatorio que iba seguido de amenazas y golpes. Nos grababan
y nos tomaban fotografías, a los que nos parecía, eran más golpes. A los que
traían tatuajes se les amenazaba que se los iban a quitar con navajas. Los
golpes siguieron, me golpeaban cada vez que me preguntaban datos generales.
Después se escucharon órdenes de sacarnos por la parte trasera que había sido
tapada con plásticos blancos, nos sacaron de cinco en cinco, con la cabeza abajo,
yo iba con la ropa interior en la parte superior de mi cuerpo.
Nos dieron
órdenes de sentarnos en la banqueta, en donde no podíamos ver a nuestros
agresores ni por error, porque eran seguros golpes.
Nos despojaron de todo y los golpes continuaban, nos subieron a mí y a la gente
que se encontraba ahí a un autobús, a la hora de subirme me estrellaron en la
parte posterior del autobús, me agarraron con una mano atrás y de los pechos,
los cuales posteriormente me di cuenta que estaban morados, al subirme al
autobús los granaderos me tuvieron a su alcance, me seguían golpeando.
Cuando estaba arriba me di cuenta de que había más gente tirada en el pasillo,
uno sobre otro, peor que animales, me encimaron y los golpes continuaron, las
órdenes cambiaron nos dijeron que nos colocáramos abajo de los asientos,
cerraron las ventanas para que los medios no se percataran que ahí estábamos.
El viaje duro más de cinco horas; al llegar a un lugar desconocido, nos bajaron,
las amenazas seguían al igual que los golpes.
Me tocaron los pechos e
introdujeron sus dedos en mi vagina, con risas y amenazas me gritaban que me
iban a violar y que iban a matarme al igual que a mi familia porque ya tenían
mis datos y entonces ya sería más fácil localizarlos. Después de ingresar a un
parque me enteré que estaba en Almoloya.
150
III.3.2 Percepciones en torno a la agresión y violencia vivida por las
mujeres en el caso Atenco
“La agresión se considera una conducta o tendencia hostil o destructiva”
(Morales y Mora, 1994: Morales y Arias, 1999). Por ende, el análisis de la
relación entre violencia y género debe tomar en cuenta dos aspectos distintos.
Por un lado, las diferencias de género en cuanto a la ejecución de actos
agresivos y violentos, y las diferencias de género por lo que se refiere a la
violencia hacia las mujeres.
La violencia es el producto de diversas fuerzas que interactúan y que una de
ellas es el componente cultural que puede servir para mantener, justificar y
explicar los actos de violencia. En lo que se refiere a la violencia hacia las
mujeres, al menos en el caso de México es un mecanismo de dominación y poder
resultado del dominio patriarcal en la cultura, política y sociedad.
Las experiencias anteriormente citadas, muestran claramente que en el caso de
San Salvador Atenco encontramos actos de violencia sexual como manoseos
constantes, vejaciones, uso de lenguaje sexualmente ofensivo y violaciones. A
la vez, dentro de la tortura también encontramos incesantes amenazas de
muerte y violación sexual hacia ellas mismas y sus familiares.
En otras palabras, la tortura sexualizada hacia las mujeres integrantes o
simpatizantes de los movimientos sociales representa un acto motivado por la
actividad política cuya única finalidad es agredir y causar daños físicos y
psicológicos en las víctimas para de esta forma castigar determinadas
conductas que a su juicio quebrantan el orden social establecido.
151
Las mujeres fueron víctimas de todas las formas de violación de los derechos
humanos cometidos durante el enfrentamiento armado, pero además sufrieron
formas específicas de violencia de género. En el caso de las mujeres de Atenco
se sumó la violencia armada, la violencia de género y la violencia sexual.
Por su parte, la violación sexual fue una práctica sistemática realizada por
agentes del Estado como una estrategia de momento, llegando a constituirse en
una verdadera arma de terror, en grave vulneración de los derechos humanos y
del derecho internacional humanitario.
Las víctimas directas fueron
principalmente mujeres adultas y jóvenes, pero también fueron ultrajados
sexualmente varios hombres. Las violaciones sexuales causaron sufrimientos y
secuelas profundas tanto en las víctimas directas como en sus familiares,
parejas y comunidad.
La tortura sexual perpetrada a lo largo de seis horas durante el traslado en
camión pusieron a las víctimas en un total estado de vulnerabilidad. Durante y
después de la tortura, una mujer pasa por sentimientos de temor, pánico,
ansiedad y dolor físico. Lo último que desearía es que un médico legista de la
prisión revise sus genitales, la toque y la lastime.
Durante siglos los códigos de guerra y de control policíaco siguen reglas muy
especificas: no importa que ya se halla sometido el movimiento, la prueba de
que el movimiento ha sido controlado es el apoderamiento del cuerpo de las
mujeres, y más cuando ellas son defensoras o activistas de las causas de un
determinado movimiento, es decir, cuando se cuestionan los mecanismos
gubernamentales.
152
III.3.3 Violencia sexual y de género en contra de las mujeres de Atenco
Como ya se mencionó a lo largo del primer capítulo, las mujeres comenzaron a
pensar los asuntos relacionados con la violencia que la guerra provoca, no
obstante, hoy día es más reciente el gran acervo bibliográfico y los debates
teóricos que en torno a dicho tema giran y en donde son frecuentes los términos
retomados de la teoría de género.
Actualmente, la noción de “género” ocupa un lugar privilegiado en las
investigaciones académicas, el discurso político e inclusive en la vida
institucional.
Sin embargo, los significados de género suelen ser diversos,
múltiples y en ocasiones contradictorios.
“Género es el conjunto de ideas, representaciones, prácticas y prescripciones
sociales que una cultura desarrolla a partir del reconocimiento de la diferencia
anatómica entre los sexos.
El género es la constatación cultural de la
diferencia sexual, y simboliza lo que es “propio” de los hombres (lo masculino) y
lo que es “propio” de las mujeres (lo femenino); pero además de ser un mandato
cultural también implica procesos psíquicos; y toda esa complejidad se arma
como un conjunto de creencias y prácticas que jerarquizan y discriminan a los
seres humanos”
Por su parte, se suele pensar que la violencia de género y la violencia sexual
son el mismo tipo de violencia y que están relacionadas solamente con la
condición de ser mujer. No obstante, es necesario aclarar que son tipos de
violencia diferentes y que cualquier ser humano puede ser víctima de este tipo
de manifestaciones.
153
La expresión violencia de género se traduce del inglés gender violence. En el
ámbito internacional se entiende como “Todo acto de violencia basado en la
pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño
o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas
de tales actos o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la
vida pública o privada” (ONU, 1995).
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la violencia sexual es “todo
acto sexual, la tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o
insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar
de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por
otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en
cualquier ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo” (OMS, 2003).
En situaciones de conflicto armado, las violaciones sexuales son empleadas
como estrategia para ejercer terror o como represalia política; la sexualidad,
sobre todo la femenina se convierte en un espacio simbólico de lucha entre los
actores involucrados.
En este sentido, los delitos sexuales en contra de las mujeres detenidas en San
Salvador Atenco, no son hechos aislados. En cualquier tipo de movimiento
social siempre encontraremos impunidad, injusticia y las víctimas más
vulnerables casi siempre son niños, niñas, y mujeres. A lo largo de la historia
los militares y jefes policiacos han utilizado la violación para intimidar y crear
un ambiente de miedo e incertidumbre en la población civil.
154
Durante lo que va del siglo XXI los enfrentamientos violentos se han vuelto
mucho más frecuentes entre los grupos civiles y la fuerza pública.
Es
preocupante la manera en que nos estamos acostumbrando a mirar un sinfín de
actos de brutalidad como ya algo común en los medios de comunicación. Las
violaciones por parte de los cuerpos policiacos hacia las mujeres detenidas en
San Salvador Atenco son un muestra de que dicho acto es utilizado como una
herramienta para imponer el dominio de un grupo sobre otro en conflictos
armados y violentos.
Por ende, la violación al ser utilizada como arma de
guerra, se aplica para una serie de fines, incluyendo la intimidación,
humillación y terror político con la finalidad de obtener información o para
recompensar a los soldados o en nuestro caso, equipos policiacos.
Es evidente que la violencia contra las mujeres durante los conflictos armados
se sustenta en el concepto tradicional de la mujer como propiedad, y a menudo
como objeto sexual. Según los estudios de la Antropología, a la mujer se le
atribuye el papel de la transmisora de la cultura y los símbolos que dan
identidad a una comunidad. De esta manera la violencia ejercida contra la
mujer se interpreta como un ataque contra los valores de una sociedad, y por lo
tanto se le considera un mecanismo de guerra poderoso.
En síntesis, durante los conflictos sociales armados se considera a las mujeres
como objetos sexuales, como supuestos emblemas de la identidad nacional y
como integrantes femeninos de grupos religiosos, raciales, étnicos o nacionales.
Poco después de los hechos ocurridos en San Salvador Atenco, la sociedad civil
se ha manifestado en contra de la violencia sexual perpetrada en contra de las
mujeres detenidas. Es preciso hacer notar que la violencia de género no solo la
vivieron las mujeres detenidas en San Salvador Atenco. Día a día las mujeres
viven y crecen con el temor de ser violentadas, aprenden que deben de usar
cierto tipo de ropa según el lugar y la hora, y a no andar solas por lugares poco
transitados.
155
Es innegable que en cualquier conflicto armado las víctimas más vulnerables
son las mujeres y niñas que padecen toda clase de vejaciones y abusos sexuales
por las fuerzas de seguridad y grupos opositores. Y a partir de los testimonios
de las mujeres violentadas en San Salvador Atenco podríamos decir que el
gobierno mexicano creó un fuerte antecedente para promover y perpetuar en la
represión social los actos de violencia de género en contra de las mujeres,
quedando demostrado una vez más que la justicia y la equidad son sólo
promesas de campaña política.
Tanto la violencia sexual como la violencia de género sin importar sexo, edad,
religión u origen étnico aumentan sobre todo en situaciones de conflicto. Pero
debido al poco conocimiento sobre el tema, el desarrollo de mecanismos para la
prevención y eliminación de estas conductas es aún precario, específicamente
en el caso de México donde aún se desconoce la gravedad de estos actos.
La violencia hacia las mujeres detenidas en Atenco victimizó a la población
civil en general, tanto por las consecuencias directas e indirectas de los
enfrentamientos, así como por la relevancia de algunas conductas violentas
dirigidas a denigrar la integridad humana, provocar desplazamientos en masa,
romper vínculos entre las comunidades, generar temor y fortalecerse a ellos
mismos.
Para finalizar este apartado, sólo puedo concluir diciendo que existe un vacío
conceptual y metodológico, que enmarca el entendimiento de la violencia sexual
y de género en México, lo cual quedo demostrado con la impunidad y falta de un
marco jurídico que hiciera justicia a las mujeres ultrajadas en 2006.
156
En nuestro país aún se desconoce el alcance, la magnitud y la distribución de la
violencia sexual y de género y como consecuencia no hay respuestas por parte
del Estado para prevenir y solucionar este fenómeno, al igual que tampoco para
brindar asistencia a las víctimas que padecieron este tipo de violencias.
157
III.3.4 Perspectivas psicosociales
Durante el período en el que los hombres y mujeres integrantes del FPDT se
encontraron presos vivieron experiencias de reestructuración personal y
colectiva. En su condición de presos atravesaron por procesos de represión
física y psicológica tanto en el momento que fueron detenidos, así como en su
estancia en la cárcel, a partir de dichas condiciones tuvieron que irse acoplando
a su entorno, a generar nuevas redes sociales y a crear mecanismos psíquicos
que les permitieran mantener el equilibrio para resistir a las contradicciones
psíquicas y sociales.
Por su parte, la familia y el Frente también padecieron un proceso de
reconstrucción ya que la comunicación con el preso implicaba un riesgo
necesario de correr con el objetivo de seguir organizados y continuar luchando
no sólo por los primeros ideales que motivaron la lucha sino por la libertad de
los entonces presos. En ambas circunstancias, se generó miedo, angustia y
contradicciones que exigieron la toma de decisiones importantes en los ámbitos
individual y social. En resumen, el preso político debe de enfrentar la pérdida
de la libertad, la familia y su estilo de vida, con la incertidumbre de
recuperarlas o no en determinado tiempo.
Desde nuestra perspectiva, los presos y perseguidos políticos enfrentan un
estado psicológico difícil: con síntomas de ansiedad, miedo, depresión,
trastornos psicosomáticos e incertidumbre donde lo único deseado es la
recuperación de la estabilidad emocional, para seguir luchando por un proceso
judicial justo, iniciar una nueva vida y resignificar los ideales por los que
iniciaron la lucha.
158
Por cuestiones meramente conceptuales y para precisar el miedo generalizado
vivido por la comunidad de San Salvador Atenco retomaremos lo expuesto por
Baró (1990).
Hay dos tipos básicos de miedo, que pueden ejemplificarse a partir de las
experiencias infantiles:
1) La “pieza oscura” o miedo a lo desconocido, incertidumbre respecto a
algún mal que se sabe existe, pero del que se desconoce su naturaleza.
Se percibe que el daño o golpe es inminente, pero se ignora de dónde y
cómo vendrá.
2) El “perro muerde”, miedo causado por la certeza de la amenaza; se sabe,
por memoria o anticipación del mal que se va a sufrir y esa experiencia,
cuyas dimensiones dañinas se conocen perfectamente es a la que se tiene
miedo.
Por su parte, cuando se trata de movimientos políticos o sociales, es necesario
distinguir el miedo de los vencidos y el miedo de los vencedores.
1) El miedo de los vencidos está caracterizado por los sentimientos de
derrota o percepción del poder avasallador del enemigo, fracaso propio o
pérdida de la oportunidad de realización personal y colectiva.
Se
combina el terror ante la represión sufrida con el miedo a lo que vendrá,
a la nueva situación creada portadora de amenazas que se desconocen.
2) El miedo de los vencedores está hecho del trauma vivido antes de la
victoria, del presentimiento de que la máquina represiva contra los
vencidos puede transformarse en un ente incontrolable de sensación de
que toda victoria es efímera y la objeción o revancha de los vencidos.
159
La fase reactiva que normalmente tiende a coincidir con el período
inmediatamente posterior a la instalación del miedo generalizado, se
caracteriza por el intento de desactivación y desmantelamiento de los cimientos
o ideales que persigue determinado movimiento principalmente a través de la
represión.
Éste es el momento en el que el miedo parece haberse apoderado de la sociedad
entera. Es un miedo generalizado, propio de situaciones límite. Y este clima de
miedo es estimulado y agudizado por la propaganda oficial de los medios de
comunicación, que activa el miedo de los vencedores mostrando que tan cerca
estuvo la catástrofe para ellos, el de los vencidos mostrando los éxitos de la
represión, y el de la sociedad entera denunciando la presencia de un enemigo
oculto no eliminado aún y llamándola a colaborar en su destrucción.
El miedo de los vencidos siempre será uno primario, existencial; terror a la
muerte, a la pérdida de la integridad física, a la desaparición, a la tortura, a la
separación de todo un tejido de significaciones intelectuales y afectivas, al
destierro, a un mundo de oscuridad. Por su parte, el miedo de los vencedores es
el residuo de miedos anteriores vividos durante la crisis que culminó con el
golpe, la sobrevivencia de un trauma o de la sensación de amenaza a la
seguridad.
160
La represión en contra del movimiento social de San Salvador Atenco se trata
de un problema de índole meramente social, de una comunidad sometida a un
estado de represión psicológica general que se ha dado de distintas formas a
través de amenazas directas y la difusión de los medios de comunicación
masiva.
En sus distintas manifestaciones, la represión psicológica genera
sometimiento y pasividad en diversos sectores de la población, quienes de
manera individual o colectiva se resignan a la pérdida de sus derechos y
expectativas de vida, pues en sus estructuras emocionales individuales y en las
interrelaciones sociales subsiste el permanente estado de amenaza, el temor a
ser nuevamente víctimas de la agresión y la desesperanza.
El estado de represión genera un clima de tensión y miedo en el que el
principal objetivo es alienar la voluntad de los otros, en otras palabras, el
objetivo es destruir una parte fundamental de las personas, la identidad
individual y comunitaria, los valores y los vínculos colectivos que dan sentido a
la lucha social y a la existencia de la misma.
En este sentido el Estado Mexicano debiera de atender las últimas
recomendaciones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU de reconocer la
labor de los defensores y defensoras de derechos humanos; detener el alto grado
de impunidad, garantizar que los crímenes sean realmente investigados y
sancionados, así como establecer medidas estructurales para hacer frente a la
violencia y violación de los derechos humanos.
A su vez, aceptar la recomendación del Consejo de Derechos Humanos,
rechazada por el Estado Mexicano, para que los agentes judiciales que cometan
violaciones a los derechos humanos sean juzgados por autoridades civiles como
una medida para evitar la impunidad en la que suelen quedar estos casos.
161
Finalmente, que las autoridades y los propios movimientos sociales reconozcan
y consideren los riesgos que afrontan las mujeres activistas y luchadoras
sociales, a fin de garantizar, reconocer y valorar su importante participación en
todos los ámbitos en los que se desarrollan.
162
10.- CONCLUSIONES
163
10.1 Reflexiones en torno al pensar y actuar de las Mujeres del FPDT
Hasta antes de las movilizaciones que se desarrollaron durante los años 20012002 la vida de la mayoría de las mujeres que simpatizaban con las causas se
relacionaba directamente con las actividades propias del hogar, el cuidado de
los hijos y las atenciones para con su cónyuge.
Los hombres eran en su
totalidad los encargados de tomar las decisiones políticas y económicas en la
comunidad, así como las cuestiones relacionadas con la tierra. No obstante,
algunas mujeres ya se encontraban insertas en el ámbito laboral pero nunca
habían pertenecido a algún movimiento en el que tuviesen que haberse
enfrentado directamente con el poder gubernamental.
Las mujeres se vieron en la necesidad de adentrarse en la lucha social debido a
las circunstancias, ya que les iban a expropiar las tierras y con éstas su apego y
grado de identidad colectiva.
Una vez que se hizo oficial el decreto
expropiatorio las mujeres y hombres se reunían en el centro de la comunidad
para discutir las medidas que llevarían a cabo ante tal situación. Esta fue la
primera forma visible en que las mujeres se hicieron presentes, en estas
reuniones fueron ellas las que debatieron y se confrontaron directamente con
los hombres.
Según lo relatado por ellas mismas, algunas se insertaron en la lucha al lado de
sus maridos, hermanos, padres u otros familiares.
Después de los actos
represivos de 2006 fueron las mujeres quienes tomaron las riendas de la lucha,
aun sabiendo que las reacciones represivas del Estado podrían ser peores y
sobrepasar la violencia física, psicológica y sexual que ya habían vivido, ser
desaparecidas o simplemente invisibilizar su lucha ante la sociedad, sin
embargo, se negaban a cambiar su modo de vida y se mantuvieron constantes
en el movimiento.
164
En este sentido, encontramos dos principales motivaciones que llevaron a las
mujeres a verse inmersas en el movimiento. Por un lado, algunas mujeres se
insertaron a la lucha porque se negaban a desprenderse de la cotidianeidad de
sus vidas, ideológicamente sentían la necesidad de defender su tierra, “su modo
de vida”. A otras las motivó la necesidad de luchar y exigir la libertad de sus
esposos, familiares y amigos.
A más de una década de que el FPDT se formó, las mujeres han simpatizado,
pertenecido y participado activamente en colectivos, organizaciones solidarias y
además han asistido a un innumerable conjunto de eventos tanto a nivel
nacional como internacional en los que han pregonado y demandado las causas
de su lucha.
Otras siguen en el ámbito laboral percibiendo un salario,
combinando las actividades domésticas con la lucha social, siguen asistiendo a
mítines, plantones y marchas en las que a la par de los varones discuten temas
relacionados con la salud, la educación, las políticas gubernamentales y sobre
todo la herencia cultural que para ellos significa la tierra. En síntesis, hoy día
hacen valer su voz en todos los ámbitos.
A las mujeres del Frente las pudimos encontrar en las manifestaciones
gritando su lema “la tierra no se vende, se ama y se defiende”, con el machete
en alto en señal de su amor al trabajo y el fervor que tienen hacia el campo. Su
participación fue indiscutiblemente un elemento vital porque sin importar su
condición social, económica o las adversidades, las mujeres fueron las primeras
en tomar las riendas del movimiento después de los actos de represión por
parte del Estado Mexicano.
165
Algunas mujeres más renuentes a la lucha social se vieron en la necesidad de
incorporarse al movimiento debido a las situaciones de violencia vividas y a que
sus compañeros hombres eran perseguidos políticos o se encontraban presos.
Después de darse cuenta que a través de las vías consideradas como legales no
obtenían una respuesta favorable por parte de las autoridades locales y el
gobierno federal, conjugaron sus roles de amas de casa, madres y esposas con el
activismo político.
También hay mujeres que han adquirido el carácter de dirigentes y su
presencia y relevancia dentro del FPDT ha sido más notable y constante. Junto
a sus compañeros toman las decisiones, organizan eventos y mantienen un
contacto directo con otras organizaciones sociales. A su vez, encontramos a las
que asisten a marchas, foros, mítines, plantones y que preparan grandes
cantidades de comida para compartir con sus compañeros, organizaciones y
grupos que se solidarizan con sus causas. Es necesario aclarar que las mujeres
que participan en la cocina no se relegan sólo a este ámbito, también toman
decisiones, exponen sus puntos de vista y exigen entablar el diálogo directo con
el gobierno cada vez que es necesario.
A pesar de que las actividades agrícolas en la región ya no son la principal
fuente de ingresos, la defensa de la tierra por la cual se adhirieron al
movimiento se explica a partir del fuerte apego ideológico que los habitantes de
la zona tienen con la tierra. Aquí ya no se trata de una cuestión meramente
económica, sino que nos encontramos con un grupo de personas que siguen
dando vigencia a sus tradiciones, buscan la equidad y sustentan una
cosmovisión en la herencia cultural que data desde tiempos prehispánicos.
166
Ellas fueron las que decidieron dónde, cuándo y en qué participar. Una vez que
salieron de sus hogares, trabajos o ámbitos de desenvolvimiento, las pudimos
encontrar en las barricadas bloqueando la carretera, ante el micrófono
exigiendo una respuesta favorable por parte del gobierno, empapando sus
pañuelos con agua para no percibir los olores de los gases lacrimógenos que en
las batallas cuerpo a cuerpo los granaderos utilizaban, preparando bombas
caseras o simplemente animando a sus compañeros para continuar dando
batalla.
Si bien, es cierto que en el núcleo de varias familias de las mujeres ya había
cierta equidad a la hora de repartir los roles de género, en otros tantos hogares
se tuvieron que replantear dichas relaciones como resultado de la inserción de
las mujeres en el movimiento. Cada una de las mujeres tiene experiencias
propias y muy particulares en relación a la percepción de su participación en el
movimiento ya que para algunas las actividades domésticas que eran el centro
de sus vidas dejaron de serlo después de la experiencia que adquirieron en las
movilizaciones.
También es cierto que aún persiste el machismo, tanto en hombres y mujeres
que perpetúan estereotipos propios de su condición de género, pero en general
las mujeres y hombres del Frente hoy día lucha por una verdadera equidad en
todos los ámbitos de la sociedad.
Varias mujeres mencionan que nunca hubiesen imaginado hablar ante el
público y sobre todo entablar conversaciones serias con reporteros, periodistas,
artistas y activistas políticos. Hoy día es notoria su fortaleza, su capacidad de
discutir y tomar decisiones, a ser más asertivas, a levantar la voz cuando se
percatan de las injusticias, pero sobre todo a empoderarse de ellas mismas y
pensar seriamente qué es lo que quieren como mujeres y como personas, pero
sobre todo qué rumbo darle a sus vidas.
167
Que no nos asombre si en determinado momento encontramos a las mujeres del
Frente escondidas en una cocina preparando alimentos o escuchando
pacientemente las demandas de los dirigentes varones, esto no significa que
está alineadas a ellos por ser mujeres, esto quiere decir que para ellas es igual
de valioso el trabajo doméstico, el trabajo remunerado, la lucha social y la lucha
por ellas mismas.
Y sobre todo que estarán presentes y preparadas para
ocupar su lugar en las luchas que se presenten.
Cabe destacar que al inicio del movimiento la equidad de género, la igualdad de
condiciones entre mujeres y hombres a nivel nacional, el reconocimiento de la
participación de las mujeres en los movimientos sociales y la reivindicación de
sus derechos no eran sus principales demandas, éstas nos hacen ver que
posiblemente sus futuras luchas adquieran tintes característicos de los
movimientos feministas.
168
10.2 Reflexiones Generales
1.- La defensa de la tierra se articula directamente con la búsqueda de la
emancipación humana del capital, y exige volver a pensar la transformación
social como un proceso complejo y radical de la sociedad en los ámbitos,
económico, social, político, ético y cultural.
De ahí la necesidad de
replantearnos el análisis de los movimientos sociales teniendo en cuenta las
relaciones de equidad de género en la construcción de nuevas alternativas.
2.- Es importante incorporar la noción y visión de género como un elemento
constitutivo del pensamiento y las prácticas cuestionadoras de las sociedades
actuales, y de los procesos de construcción de las nuevas. Lo anterior permitirá
hacer notorias y modificar las relaciones sociales desiguales establecidas entre
hombres y mujeres, germen de la producción y perpetuación de otras tantas
discriminaciones como color de piel, discapacidades físicas, origen étnico,
cultura, concepto de belleza, identidad sexual, entre otros.
Si bien esto forma parte de los deseos de las mujeres feministas y de los
hombres conscientes que van entendiendo que la humanidad es una sola y que,
por ende, los modos sociales en que se articula están interconectados entre sí
pero a la vez son interdependientes y por lo tanto no habrá una mejor sociedad
si se mantienen los estereotipos y prejuicios característicos de cada cultura.
3.- Los movimientos sociales, sus actores y organizaciones son construcciones
sociales de compleja y difícil creación. La principal interrogante de las ciencias
sociales en relación a ellos, gira en torno a las condiciones de la posibilidad
positiva para que tal cosa ocurra. No se trata de conocer a los movimientos
sociales como si se tratase de una entidad empírica, sino de analizar hasta qué
punto lograron formarse como tales.
169
Es pertinente crear nuevos referentes teóricos, nuevas visiones del mundo y de
la sociedad que ayuden a superar la fragmentación del pensamiento y a
reflexionar sobre los procesos de emancipación social y los modos de producir
subjetividades acordes con los nuevos retos.
4.- Con todos los referentes teóricos y metodológicos expuestos a lo largo del
trabajo, se podría afirmar que los movimientos sociales que se han desarrollado
en el marco de la globalización han respondido en gran medida al incremento
de las desigualdades sociales en todos los ámbitos. En términos culturales,
estos movimientos están compuestos de identidades diversas: indígenas,
género, campesinos o trabajadores.
En el caso del movimiento de San Salvador Atenco este pretende recuperar los
vínculos básicos con la tierra y la comunidad, creando lazos con la sociedad
nacional e internacional, haciendo uso de los instrumentos propios de la
globalización como son prensa escrita, internet, medios de comunicación
masiva, entre otros, pero tratando de no perder su identidad.
Comprender la aparición y desarrollo de los movimientos sociales y la
particular participación de las mujeres en ellos, requiere del estudio de la
interrelación de éstos con el entorno local o comunitario, lo nacional y el
momento que se viva a nivel mundial.
170
5.- El movimiento de San Salvador Atenco y, particularmente el abuso a los
derechos humanos de los pobladores del lugar que se vieron involucrados y a
los seguidores, atrajeron la atención nacional e internacional, la que ya
comenzaba a poner en tela de juicio la capacidad de la administración
presidencial para fomentar el desarrollo y mantener el orden a nivel nacional.
La violencia ejercida por las autoridades locales y federales contra los
manifestantes del movimiento hizo notoria la represión gubernamental en
contra de las corrientes alternas a la impuesta por el aparato gubernamental
del Estado mexicano.
Ante tal situación, varias instituciones internacionales, en particular
organizaciones no gubernamentales, manifestaron su apoyo a todos aquellos
que sufrieron la represión por parte de las autoridades involucradas en dicho
conflicto; a la vez, demandando represalias contra los autores intelectuales y
ejecutores de los hechos de violencia en contra de los habitantes de San
Salvador Atenco.
Con sus acciones, las mujeres de Atenco han recibido el reconocimiento
internacional por parte de organizaciones de la sociedad civil defensoras de los
derechos humanos.
Según los propios datos del FPDT, más de 110
organizaciones, entre las que destacan colectivos, redes y movimientos sociales
de 17 estados y de otras 6 naciones, han reconocido la lucha de las mujeres de
Atenco.
La participación de organizaciones de la sociedad civil de otras naciones, se
logró en gran parte gracias al impacto de la difusión y cobertura que realizaron
los diversos medios de comunicación nacionales y extranjeros de las
movilizaciones y marchas a favor del respeto de los derechos humanos de las
víctimas de la represión y del movimiento.
171
6.- El movimiento de San Salvador Atenco fue una respuesta inmediata de los
pobladores ante la amenaza de perder sus tierras. Además, la construcción del
aeropuerto traería consigo cambios en la estructura económica de la región y en
las formas de vida tradicionales y arraigadas de los pobladores de la zona.
El aeropuerto era sólo el inicio de un complejo plan de modernización que
traería consigo inversionistas extranjeros, empresas comerciales al servicio del
capital que sólo pondrían en riesgo el incipiente desarrollo económico de las
regiones más marginadas.
Por su parte, la lenta reacción estatal ante el movimiento de Atenco provocó
aún más el descontento en los habitantes del lugar, calentando más los ánimos,
lo que llevó a hacer uso de la fuerza para la supresión del levantamiento. El
argumento utilizado para justificar las violentas acciones emprendidas por los
cuerpos policíacos se presentó como la necesidad de evitar revueltas que
pusieran en riesgo el orden establecido.
Se pretendía defender en Atenco el orden que va acorde con las políticas
neoliberales que da preferencia a empresarios e inversiones transnacionales
sobre el beneficio de la sociedad, su desempeño económico y su calidad de vida,
así como la relación que mantienen con la tierra a la que se han arraigado
durante cientos de años.
Finalmente y dejando varias interrogantes pendientes, se podría concluir
diciendo que resulta innegable la importancia de los movimientos campesinos
que luchan en contra del modelo neoliberal, los cuales a lo largo de la historia
han ido consolidando sus características propias, lo que permite identificar sus
demandas y necesidades a simple vista.
172
En síntesis, puedo resumir el movimiento de San Salvador Atenco en las
siguientes tesis:
a) A pesar de las imposiciones neoliberales, sus habitantes mantienen su
condición de campesinos, quienes siguen utilizando los mismos
instrumentos rudimentarios para cultivar sus cosechas.
b) A más de una década de haber figurado en la vida pública nacional e
internacional, representan un desafío para el Estado mexicano tirano y
represor, pues no dudarán en demostrar su coraje y determinación
colectiva al enfrentarse a éste incluso haciendo uso de la violencia en
caso de ser necesario.
c) Son hombres y mujeres trabajadoras con un fuerte apego ideológico y
cultural a la tierra y que ante los hostigamientos y falta de alternativas
para desarrollarse no dudan en enfrentarse cara a cara contra el
gobierno.
Con todo esto queda expuesto el alto grado de descontento social de las clases
campesinas del país ante las medidas y proyectos de desarrollo emprendidos
por el Estado, los cuales en general han perdido su carácter social y de
bienestar nacional, enfocándose al enriquecimiento de las élites económicas y
políticas tanto nacionales como extranjeras.
173
11.- ANEXOS
174
11.1 MODELO GUIA DE LA ENTREVISTA SEMI ESTRUCTURADA
APLICADA A LAS MUJERES INTEGRANTES DEL FPDT
I.-INFORMACIÓN GENERAL
Fecha:___________________________________________________________________
Hora de inicio:_______________
Hora de término:_____________
Nombre de la
localidad:____________________________________________________________
Nombre del
municipio:_____________________________________________________________
Nombre del
Estado:_______________________________________________________________
II.-INFORMACIÓN REFERENTE A EL (LA) ENTREVISTADO (A) Y A
SU FAMILIA
1.- Sexo Hombre____
Mujer____
2.-¿Cuántos años tiene usted?______
3.- Escolaridad
a) ¿Sabe leer?
SI
NO
b) ¿Sabe escribir?
SI
NO
* Si contesto que NO en alguna de las anteriores cuestiones pasar a la pregunta 4
175
c) ¿Hasta qué año estuvo en la escuela?
Primaria
1°
2°
Secundaria
3°
1°
4°
2°
5°
3°
6°
Otros
No informó
4.- ¿En dónde nació?
Localidad:________________________________________________________________
Municipio:_______________________________________________________________
Estado:__________________________________________________________________
5.- ¿Cuántos años tiene residiendo en el pueblo o comunidad?
6.- ¿Cuál es su ocupación principal?
176
7.- ¿Cuál es el tamaño de su familia?
8.-¿Cuál es el número de personas que viven bajo el mismo techo y cuál es su
parentesco con ellos?
II.-TENENCIA DE LA TIERRA
9.- ¿Es usted ejidatario (a) o pequeño (a) propietario (a)?
10.- ¿Desde qué año es ejidatario (a) o pequeño (a) propietario (a)?
11.- ¿Cuál es la forma en que obtuvo la tierra: por derecho de sucesión de parte
de quién?
12.- ¿Cuál es la superficie de su parcela?
13.- ¿Cuáles son sus características?
Riego
Temporal
Productiva
Baja
productividad
14.- ¿Cuál es su ubicación con respecto al pueblo?
15.- ¿Cuáles son los cultivos principales y cuál es su rendimiento?
16.- ¿Cuál es su ubicación en relación con el proyecto de construcción del
aeropuerto?
177
17.- ¿Qué le motiva a defender la tierra?
III.-PARTICIPACIÓN EN LAS MOVILIZACIONES
18.- ¿Participó en el movimiento en defensa de la tierra en 2001-2002?
19.- ¿En qué momento se integró al movimiento?
20.- ¿En qué actividades participó durante el movimiento?
21.- ¿Participó en el movimiento que inicio el Frente de Pueblos en Defensa de
la Tierra (FPDT) en 2006?
22.- ¿Qué le motivó a participar en las movilizaciones?
23.- ¿En algún momento pensó que por el hecho de ser mujer, estaría más
expuesta a situaciones de riesgo?
IV.- INSERCIÓN FEMENINA AL MOVIMIENTO
24.- ¿Cómo considera que fue su participación en el movimiento?
25.- ¿Qué tipo de actividades desempeñaba?
26.- ¿Cómo era su vida antes de los acontecimientos de 2001-2002 y 2006?
178
27.- ¿Cómo se modificó su vida a raíz de los hechos ocurridos en dichos años?
28.- ¿Cuál fue su reacción al saber que los varios de los integrantes y
principales líderes del movimiento fueron liberados en julio de 2010?
29.- ¿Cree usted que a raíz de los acontecimientos suscitados en la comunidad
la actividad de la mujer en los ámbitos social, político y económico ha
aumentado?
30.-¿En qué aspectos considera que se modificó su vida la lucha del FPDT?
31.- ¿Antes de tales acontecimientos, pertenecía a algún partido político, o
simpatizaba con él?, ¿Con qué partido?
32.- ¿Qué opinión tenía acerca del gobierno antes de las movilizaciones?
Federal:
Estatal:
Municipal:
179
33.- ¿Considera que su participación en las movilizaciones le hizo cambiar su
opinión en relación con el gobierno?
34.- ¿Participa hoy día en algún movimiento o simpatiza con alguna causa
social?
35.- ¿Si se suscitara otro movimiento similar, usted consideraría nuevamente
adherirse a la lucha?
36.- ¿Cómo mujer, que le ha traído su participación en las movilizaciones
sociales?
37.- ¿Cuál considera que debe ser el papel de la mujer en la sociedad mexicana
actual?
180
11.2 ENTREVISTAS A PROFUNDIDAD
COMPLETAS
181
ENTREVISTA A ANA MARÍA ROBLES YAÑEZ
Fecha de la entrevista: 21 de marzo de 2012
Hora de inicio: 13:16 Pm
Hora de término: 14:44 Pm
Nombre completo: Ana María Robles Yáñez
Edad: 45 años
Escolaridad: Carrera Técnica en enfermería
Ocupación principal: Enfermera y ama de casa
Localidad: San Salvador Atenco
Lugar de nacimiento: Sal Salvador Atenco
Composición de la familia: Un hijo, una hija, cónyuge y ella
¿Es usted ejidataria o pequeña propietaria?
No
Participó en las movilizaciones en defensa de la tierra en los años 2001
y 2002?
Sí
¿En qué momento se integró al movimiento?
Fue en el 2001, después de saber que habían expropiado los terrenos de San
Salvador Atenco, los ejidos y al escuchar comentarios de que iban a hacer
carreteras sobre el pueblo e iba a desaparecer una parte del pueblo, una gran
parte del pueblo.
El hecho de que expropiaran de pronto sin tomarnos en
cuenta y simplemente por el Diario Oficial nos enteramos de que ya estaban
expropiados los terrenos de San Salvador Atenco.
182
El hecho de ver la preocupación de mi hermano el menor y de mi padre que él si
es ejidatario, él es campesino y mi hermano en el lugar donde vive en la
comunidad de Acuexcomac que es municipio de Atenco y estaba expropiado el
terreno de donde es su casa.
Entonces el escuchar eso era como muy
preocupante para ellos y para mí, entonces eso me llevo pues a comentar con mi
familia, con mis hermanos que debíamos de participar en esas reuniones que
estaban habiendo de parte del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra
(FPDT).
Pues yo pensaba en ese momento que a lo mejor no lográbamos ganarle la
batalla al gobierno, pero que por lo menos escuchar nuestra inconformidad
porque nosotros somos gente originaria de San Salvador Atenco y pues por lo
que yo me entero después es que desde que existió Nezahualcóyotl habitó en
estas tierras, él la defendió con sus guerreros y después Zapata con sus
revolucionarios.
Al paso del tiempo, dentro de la lucha social yo fui aprendiendo eso que nunca
aprendí en la escuela, se me hacía muy aburrida la historia pero al vivir esta
parte el ir conociendo precisamente con estudiantes de Chapingo el hecho de
participar en un examen profesional de una chica que se llama Rocío el cómo
nosotros de otra manera pero estábamos dando una tercera batalla por los
ejidos de Sal Salvador Atenco en defensa de la tierra, somos pueblos
originarios, milenarios y hay mucha riqueza en cuanto a tradiciones, a cuanto a
costumbres. Yo veo a mi pueblo como a una gran familia, donde todos nos
conocemos, nos apoyamos, como se dice aquí en el pueblo “en las buenas y en
las malas”
183
Todo eso me llevo a participar en la defensa, a desprenderme un poco de mi
familia de una forma que yo tenía tan diferente de vivir, como que yo me había
desprendido de mi pueblo y me dedicaba más pues a trabajar, a mi casa y como
que más individualista me había vuelto.
Con todo esto, con estas
movilizaciones hice conciencia, esta reflexión que de alguna manera me invita a
hacer el FPDT es como regresar a mi pueblo, rescatar muchas cosas, e incluso
tener una mejor comunicación con mi padre, el hecho de ver esa compasión tan
grande que yo no alcanzaba a visualizar, el como él está tan apegado a la tierra
y una frase que él siempre me ha dicho: “la tierra no es de nosotros, nosotros
somos de la tierra”, y yo no alcanzaba ni siquiera a comprender eso y hasta que
un día me siento con él y le pregunto, - oye papá ¿por qué dices que nosotros
somos de la tierra? Y él me dice: pues porque mira, cuando estamos en el
vientre de nuestra madre ella se alimenta de los alimentos que vienen de la
tierra, es lo mejor, lo más natural, lo más nutritivo. Se alimentan de ahí y
cuando nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos todo ese lapso nos
alimentamos de la tierra y después de ahí cuando morimos a la tierra vamos a
dar y en polvo nos convertimos, nos compactamos con ella, regresamos a ella.
Y yo dije oh mi padre es muy sabio y yo no lograba entender todo eso, eso que
decían nuestros viejos, aunque algunos ya murieron, tantas enseñanzas que
nos dejaron y esto fue lo que me hizo reflexionar y apoyar esta lucha social.
184
¿En qué actividades participó durante el movimiento?
En muchas, desde participar en movilizaciones, en la organización, en foros,
apoyando a la cocina, en administrativa, en reuniones para tomar decisiones de
organización, en recabar fondos económicos para dar continuidad a la lucha
social porque es muy importante tener que comer, transportarse que era lo
elemental y en algunos casos atender a compañeros que se enfermaban o que
tenían a alguna necesidad porque hay quienes dejaron hasta el trabajo por
estar allí en la lucha social y entonces era apoyarnos hasta en la economía a
algunas personas.
¿Qué tipo de actividades le gustaba a usted más desempeñar?
Más de organización, y al principio me daba así como que cierto temor hablar
ante un micrófono porque yo no tenía esa habilidad.
Ahora tengo esa
habilidad, no al 100 pero si me es más fácil dirigirme a una cantidad de
público. Y es más en la organización, eso es lo que más me gustaba, realmente
en la cocina nunca me ha gustado estar, pero bueno no hay de otra más que
entrarle también.
Y participar en foros, realmente el hecho de ir, de que yo hubiera tomado el
micrófono o ciertas iniciativas y decisiones me causaban miedo más que nada y
siempre tenía inseguridad pero cada vez menos.
185
Porque yo recuerdo que cuando llegaba a la plaza principal y había reuniones y
de pronto había estudiantes o trabajadores que nos visitaban de otras
universidades o grupos sociales, o trabajadores, telefonistas, maestros, equis.
Entonces ellos venían así como para informarse de que se trataba nuestra
lucha y porque lo estábamos haciendo y yo me acuerdo que llegaba y ya estaban
las reuniones, con un sonido al micrófono instalado y de pronto el compañero
Ignacio del Valle estaba allí hablando y de pronto llegábamos y me decía – ten
vas a hablar, y yo le decía ¿pero qué hablo? ¿Qué digo? ¿De qué se trata? Y me
decía – es tan fácil como decir cómo te llamas, de donde eres y porqué estas
aquí y qué vamos a hacer.
Y así, hasta la voz me temblaba, las manos me sudaban, el ponerme frente a un
micrófono pero era la necesidad que nos hizo expresar precisamente quienes
somos, qué hacemos, porque estamos aquí y hacia dónde íbamos. Así como que
debíamos de ir teniendo claro y así fue como yo aprendí un poco y luego me
tocaba que cuando íbamos a las marchas al Distrito o en algunos momentos a
Toluca ir al voceo, expresar igual al micrófono quiénes éramos, por qué
estábamos ahí, que estábamos haciendo y defender de esa forma nuestras
tierras, nuestro pueblo, nuestros pueblos.
¿Cuáles fueron sus vivencias al enterarse de que el gobierno de
Vicente Fox anulaba el decreto expropiatorio?
Yo me enteré estando aquí en la casa por medio de la televisión,
interrumpieron un programa donde decían: en este momento fue cancelada la
expropiación de San Salvador Atenco, y entonces mi hijo que estaba aquí en la
sala viendo la televisión y me dice – mira mamá lo que están pasando. Y lo
estaban repitiendo, pero yo lo veía y no lo creía porque ya teníamos como de 8 a
10 meses, no me acuerdo muy bien, en esta batalla digamos de las
movilizaciones y todas las actividades que hacíamos, los mítines y lo foros.
186
Entonces se me hizo como que increíble, hemos pasado por tantas cosas, la
muerte de un compañero que fue muy triste, la detención de algunos
compañeros que fueron torturados, compañeros y compañeras, entonces
después de todo eso que habíamos vivido dentro de las movilizaciones, que en
algún momento dado el gobierno nos mandó a que nos obstruyeran el paso y
hubo granaderos, hubo golpes, hubo compañeros heridos, entonces como que yo
no alcanzaba a asimilar todo eso pero bueno seguimos adelante con todas
nuestras actividades y una gran enseñanza que nos dejó el compañero José
Enrique Espinoza Juárez que dijo: “hasta con nuestra vida vamos a defender
las tierras” y así lo decía mucha gente. A mí me daba pavor escuchar eso, pero
cuando vi que lo cumplió, porque estuvo hasta el final después de una
detención y que no fue atendido correctamente fue golpeado, torturado física y
psicológicamente y a fin de cuentas murió.
Entonces nos dio más coraje y si él lo defendió con la vida, nosotros debíamos
de darle continuidad, eso es lo que nos hizo continuar con la lucha social y
cuando me enteré a unos días más de la muerte de la muerte del compañero,
que ya se había derogado el decreto expropiatorio, lo veía por televisión y no lo
creía pero me dijo mi hijo - ¡mamá si es cierto!, vamos al centro de Atenco para
ver qué se va a hacer. La gente estaba bailando, con llanto en los ojos, de gusto
de que ya habíamos logrado derogar ese decreto expropiatorio. Y era increíble
pero era en la noche y nos fuimos a gritarlo por las calles, informando a la
gente que habíamos logrado derogar ese decreto expropiatorio.
187
¿Qué es lo que a usted la motivó a defender la tierra?
El hecho de que fuéramos a ser desplazados del pueblo de San Salvador Atenco
y de que somos pueblos originarios y tener toda una historia, y como dice mi
papá: el ir aprendiendo que nosotros somos de la tierra y que debemos
defenderla y de que otras personas en su momento como Nezahualcóyotl y sus
guerreros, Zapata y sus revolucionarios lucharon por todo esto y pues como que
yo sentía un deber porque ciertas personas han muerto por defender este
pedazo de patria pues nosotros debemos hacerlo también.
¿Usted volvió a participar nuevamente en las movilizaciones que
inició el FPDT durante 2006?
De hecho nunca dejé de participar, últimamente me he alejado un poco pero mi
participación sigue siendo de alguna manera.
Después de 2001, le di continuidad porque yo pienso que no sólo fue una lucha
del FPDT sino por solidaridad a nivel nacional de México e internacional
porque tuvimos contacto con otros países como es Brasil, Francia, España,
Canadá, entre otros.
Llegaron gentes de otros países a solidarizarse con
nosotros, entonces todo eso nos motivó a seguir adelante y después que
derogamos el decreto expropiatorio dimos continuidad ya que nos dimos cuenta
que en otros Estados igual se daban expropiaciones o se daban otro tipo de
problemas de imposiciones de los gobiernos tanto estatales como federales.
Entonces eso nos motivó ya que eso fue lo que aprendimos. Que solo la unión
hace la fuerza y que la unión de luchas sociales en diferentes Estados ya que en
el 2001 – 2002 en otros Estados estaban también haciendo movilizaciones, vino
mucha gente a solidarizarse con nosotros eso nos enseñó que debíamos de
solidarizarnos con otras luchas por razones justas y entonces salíamos a otros
Estados a apoyar a diferentes luchas y eso fue después de la derogación del
decreto expropiatorio y fue como íbamos creciendo como organización.
188
Una de las últimas cosas que pasó antes de las detenciones de 2006, el hecho de
que haya llegado Marcos y una comisión del EZLN a San Salvador Atenco como
que eran dos fuerzas de la lucha social a nivel nacional y eso no le convino al
gobierno el que nosotros nos estuviéramos articulando a nivel nacional para
protestar en contra de las inconformidades que teníamos y fue uno de esos
motivos de que yo pienso que el gobierno así lo hizo para frenar esa articulación
que estábamos haciendo y por eso fue el hecho de las detenciones que hubo en
el 2006, entonces ahí seguíamos participando y así fue como hasta hace año y
medio que fueron liberados los compañeros pero sí hemos seguido participando.
¿Cómo vivió los acontecimientos de mayo de 2006?
Continuamos articulándonos con las luchas sociales, eso fue en abril de 2006
cuando Marcos y el EZLN llegaron a San Salvador Atenco, pero al gobierno ya
no les convino esto que estábamos haciendo y fue una de las razones por las
cuales mando la represión el día 3 y 4 de mayo de 2006.
Yo estaba en la casa, pues aquí en Atenco se acostumbra venerar el día 3 de
mayo a la Santa Cruz, entonces lo que hacemos regularmente es vestir la cruz,
cada casa regularmente tiene un padrino y se llama padrino de la cruz. Traen
una cruz adornada con flores de papel o de tela, entonces yo había quedado con
mi mamá de llevarle las flores para la cruz. Cuando yo iba para Atenco porque
yo vivo en la orilla, iba para la casa de mi mamá, me entero de que los
compañeros floristas en Texcoco estaban pidiendo apoyo porque iban a ser
desalojados un grupo de personas de los pueblos de la parte de arriba de
Texcoco, algunos de ellos tienen invernaderos y bajan a vender sus flores aquí a
Texcoco frente a un mercado, iban a ser desalojados y pues podemos pensar
¿cuánto pueden ganar unas personas vendiendo flores en la banqueta? Porque
ni siquiera es un local y de esa banqueta querían desalojarlos.
189
Pidieron apoyo porque el gobierno parece que iba a hacer un Wal-Mart en ese
lugar, en ese mercado que se llama Belisario Domínguez y un grupo de
compañeros y compañeras fue a Texcoco a apoyarlos y nos enteramos de que
hubo una represión del gobierno estatal y federal y hubo algunas detenciones
de compañeras y compañeros.
Entonces, lo que hicimos fue bloquear la carretera Texcoco-Lechería como
protesta de la inconformidad que se tenía.
El hecho de que hubiera
compañeros floristas y compañeras y compañeros del FPDT detenidos.
Bloqueamos la carretera, de ahí el gobierno mandó más granaderos para
reprimirnos y en ese momento ya eran como la 1 ó 2 Pm. Salieron muchos
estudiantes de la preparatoria, secundaria y se sumaron a ese bloqueo de
carreteras que teníamos y dentro de esa represión que hubo los granaderos
traían armas de fuego y mataron a un jovencito de 13 ó 14 años no recuerdo
exactamente. Y sólo porque estaba allí y dijo que un policía estaba escondido y
ese policía lo mató con arma de fuego.
Entonces ahí seguíamos en protesta bloqueando la carretera con varios retenes
desde la Pastoría que es una comunidad del municipio de Atenco hasta el
pueblo de Acuexcomac. En protesta también, retuvimos a algunos policías y en
ese momento se les dio atención médica por igual, tanto a retenidos como a
gente de San Salvador Atenco.
190
Después de eso, al amanecer del día 4 de mayo hubo una represión más grande
que a mi parecer fue el ejército disfrazado de policía estatal y policía federal.
Dentro de esas detenciones que hicieron en total entre el 3 y 4 de mayo fueron
207 personas entre ellos algunos menores como 20 y se los llevaron a un centro
de
readaptación
para
menores,
fueron
torturados,
algunos
violados
sexualmente, y yo fui detenía como a las 7 am ahí en Atenco porque entró el
ejército y nos detuvo a toda persona que encontró a su paso y desde las 7 am
hasta como a las 2 pm que nos llevaron al Centro de Readaptación Social de
Santiaguito que está en Toluca.
En ese transcurso, cuando llegamos allá yo me enteré que a mí me golpearon
mucho, me amenazaron con violarme sexualmente, afortunadamente no fue
así. No sé en qué momento, pero fue mucho tiempo, nos traían con las manos
hacia atrás en el cuello, agachada, no me permitían ni levantar la cabeza y ni
que intentara levantar la mirada porque me golpeaban y fue tanto el hecho de
que me golpearon en la parte de la cintura, en la parte de atrás de la columna
que llego un momento en el que yo ya no sentía los golpes. Me jalaron los
cabellos, me arrastraron, me quitaron los zapatos, me quitaron mis
pertenencias personales que traía en ese momento y me subieron a una
camioneta, me aventaron, amenazaron reiteradamente con violarme y me
pusieron un tolete supongo yo encima del pantalón en la parte de atrás y
enseguida llegaron con más personas detenidas, un policía le dijo al otro - ¿A
dónde vamos a poner a los demás? Y el otro dijo: pues encimados. A mí me tocó
estar hasta la parte de abajo, llevaba yo mis lentes en la mano, entonces se
rompieron, encimaron a no sé cuantas gente, una tras otra en esa camioneta.
191
Corría sangre, había quejidos, llanto, gritos, yo no podía ni moverme,
realmente no estuve mucho tiempo ahí en esa camioneta porque si hubiera
estado unos minutos más yo hubiera muerto asfixiada, no podía ni respirar por
toda la gente que traía encima, no sé ni cuantas personas serian pero era
mucho el peso y yo decía –que rápido nos trasladen a otro lugar porque si no yo
me voy a morir aquí asfixiada.
Nos subieron después a un camión, yo iba hincada, me obligaron a hincarme en
el piso y con las manos encima del asiento y la cabeza pegada al asiento, en
todo momento así, sin hablar, sin levantar la mirada, la cabeza, hubo una
policía que, al lado mío iba una chica que los cabellos le cubrían la cara, ella iba
temblando mucho, yo le alcance a tomar la mano y me decía que tenía mucho
miedo, yo le decía –mientras haya vida hay esperanza y tratemos de cuidar
nuestra vida, no estamos solas y nos vamos a acompañar hasta donde nos sea
posible.
Posteriormente hubo una policía que se paró en mi cuello y en el de la
compañera y de una manera muy humillante nos dijo que éramos unas perras,
desgraciadas, y otras cosas peores. A mí me levantó la cabeza de los cabellos y
me preguntó que si tenía hijos, le dije que sí y me dijo que para andar en este
desmadre era necesario no tener hijos que por eso ella no los tenía. En fin, nos
humillaron demasiado y llegamos al Penal de Santiaguito como a las 2 pm más
o menos y ahí nos bajaron, nos metieron a un cuarto, y afortunadamente allí en
ese lugar ya no fui golpeada, yo ya había sido golpeada bastante, pero a las
demás compañeras y compañeros los golpearon mucho, hubo quienes fueron
violados sexualmente en ese transcurso de la detención hasta el Penal, yo lo
supe hasta llegar al Penal cuando nos sentaron en un comedor grande y estaba
yo frente a varias mujeres, yo pensé que a quienes iba a encontrar ahí ya
viéndonos de frente era a más gente de Atenco y resulta que en su mayoría las
que estaban allí con nosotras mujeres eran universitarias, eran mujeres
192
trabajadoras del IMSS, algunas amas de casa y la mayoría eran estudiantes
universitarias.
Y nos empezaron a contar allí de qué manera habían sido violadas sexualmente
con objetos, las obligaron a hacer sexo oral, hubo desgarres vaginales, iban
sangrando las compañeras, yo en ese momento que nos comentaban todo eso
era como para volverse loca porque el escuchar tal magnitud de represión. Los
policías olían a que iban drogados, yo pienso que sólo una persona drogada es
capaz de hacer todo eso, y olían muy feo a tiner no sé cosas así, pero muy feo los
granaderos.
Y de esa manera yo me enteré al llegar ahí de que habían sido violadas las
compañeras y ya después nos metieron al área entre que nos querían obligar a
que declaráramos al Ministerio Público ahí dentro del Penal, no nos
permitieron
hacer
ninguna
llamada
telefónica,
estábamos
aisladas
completamente, afortunadamente entre nosotras había también un compañero
que se llama Damián Camacho y él es abogado y él también había sido
detenido, estábamos en el mismo comedor que era muy grande y yo logré
escaparme del grupo de mujeres para ver a Damián, para ver como se iba a
manejar eso legalmente puesto que yo nunca había estado detenida y no sabía
ni qué hacer. Damián me dijo que nos podíamos abstener de declarar, que no
podían obligarnos a declarar hasta que tuviéramos un abogado de nuestra
confianza puesto que hay un artículo que dice eso.
Una policía se dio cuenta de que yo estaba platicando con Damián y fue a
decirme que yo no podía estar allí, pero lo menos ya teníamos una base para
saber qué hacer en ese momento y así fue nos quisieron obligar a declarar, nos
tomaron fotografías, fichándonos, como cuando uno ve en la televisión las
fotografías de las personas que detienen y nos tomaron huellas digitales.
193
Nos acusaban de secuestro equiparado, delincuencia organizada y ataques a las
vías de comunicación. Eran tres delitos para todos y todas, y después de eso
nos llevaron a los dormitorios donde estaban las demás presas comunes.
Entonces, como a mí me habían quitado los zapatos, nos hicieron caminar por
un patio donde había pasto mojado, porque estaba lloviendo un poco y teníamos
que cruzar allí para llegar al Ministerio Público, yo tenía mucho frío y me las
ingenié para agarrarme unos pedazos de plástico y amarrármelos en los pies
para no sentir directamente el agua del pasto que había y estábamos
temblando, estábamos entre el miedo y el frío.
Después una policía me dijo que por qué temblaba tanto, y le dije que tenía frio
y a mí se me ocurrió preguntarle que si nos iban a dar una cobija y me contestó
muy mal, muy grosera y me dijo que cuidado con lo que hiciéramos, una
amenaza, que si nosotros no nos comportábamos dentro del ese Penal las
presas comunes nos iban a golpear.
Y a mí me daba mucho miedo eso, afortunadamente no fue así, cuando
llegamos al dormitorio estaban ahí las compañeras que habían sido detenidas
el 3 de mayo en Texcoco, nos recibieron pues muy bien, nos hicieron un espacio
para dormir y al día siguiente las presas comunes se preguntaban por qué de
tal manera llegamos, sangradas, golpeadas ahí, a ese penal y demás.
Entonces nosotros les explicamos que no habíamos cometido ningún delito,
nada más que defender nuestros derechos y ellas nos preguntaban que por qué
no nos bañábamos, y les decíamos que porque no teníamos nada. Hicieron un
centro de acopio ellas y recaudaron ropa, fue algo increíble todo lo que nos
pasaba y bajo todo eso que estábamos pasando hubo varias compañeras que
aunque no les tocaba tener su menstruación estaban sangrando, tanto las
compañeras que habían sido violadas como las que no, entonces era un
194
sangradero tremendo ahí y las compañeras, las presas comunes, hicieron un
centro de acopio hasta de toallas sanitarias, pasando por ropa interior, por
jabón y nos apoyaron mucho para que nosotras pudiéramos asearnos y nos
alentaban, pero ellas querían saber más de nosotras.
compartir, un aprender.
Entonces fue un
Yo aprendí también que toda persona tenemos el
mismo valor, que el valor no te lo da la economía, que el valor te lo da lo que te
toca vivir.
Por ejemplo, yo pensaba antes que las mujeres o personas que están detenidas
en un penal son de lo peor, son delincuentes realmente. Cuando no es así.
Cuando hay personas en penales detenidas no teniendo delitos, sino que se los
imponen. Otras personas por casualidad, me tocó ver allí a una enfermera que
prestaba sus servicios en un centro donde reclutan gente para trabajar,
entonces a ella le llaman para ir a atender a un enfermo en un domicilio y ella
va y resulta que eran unos secuestradores que tenían a una persona y esos
secuestradores obligan a esa enfermera a atender a su secuestrado. En eso
llega un operativo y no nada más detienen a los secuestradores sino que a la
enfermera también. Y entonces por eso está ahí ella, y en fin muchas cosas así
de injustas.
Y a mí me sorprendió muchísimo, de verás, la solidaridad, el humanismo que
tienen ahí dentro. Que no es como en general se dice, realmente son seres
humanos que por “X” razón han llegado ahí y parte del hecho de que estén ahí
mucha gente es la necesidad, sobre todo la necesidad de comer, algo que es tan
grande, que la gente llega a robar por eso y yo creo que en la actualidad, en el
momento que estamos viviendo no es para menos, el hecho de tener hijos y no
tener que darles de comer es lo que la pobreza lleva a hacer dentro de la
desesperación de la necesidad de tener algo que comer. Eso es hasta donde se
puede llegar con la falta de educación, falta de salud, falta de economía, a mí
me creó una gran impotencia, estar en ese lugar y saber de algunas historias y
195
yo lo resumo en eso, que el hecho de la falta de economía lleva a la gente a
cometer delitos que a veces no son grandes, pero que los gobiernos manejan a
su manera las leyes y hay por eso tantas arbitrariedades, pero es un aprender
de una forma diferente.
Yo creo que con todo esto a mí me llevo a aprender, a valorar más la vida, a ser
un poco más tolerante, a comprender más cosas, a improvisar otras tantas y a
valorar más, primero mi vida, a vivir y disfrutar de una manera diferente y
después a tratar de sobrellevar a la demás gente, además me doy cuenta que
cada uno tiene una historia y de acuerdo a eso se tiene una actitud frente a la
vida.
El ver a todas esas mujeres, presas comunes y de qué manera nos apoyaron
cuando uno tiene la idea de que en esos lugares la gente es de lo peor,
delincuente y violenta. Probablemente sí hay sus excepciones, pero en general
yo deduzco eso que la pobreza da motivo para hacer muchas cosas de este tipo,
pero a fin de cuentas son seres humanos y tenemos todos el mismo valor.
¿Cómo fue su liberación? ¿Cuáles fueron las opiniones de su familia?
No fue difícil, pero en mi generó muchos cambios y en mi familia también. Mi
hija estaba pequeña tenía como 12 años, mi hijo tenía 16 más o menos. A mi
hija le generó mucho miedo e impotencia, la tuvieron que trasladar a otro lugar
por su seguridad. Mi hijo estaba invadido de impotencia y de coraje por lo que
había sucedido puesto que él me acompañaba en todas las actividades, o en su
mayoría, que realizábamos como FPDT.
196
Mi esposo nunca ha coincidido con las ideas en la lucha social, sin embargo, ha
tenido la paciencia suficiente y creo que por eso aún seguimos juntos , pero el
regreso después de haber estado 15 días en un Penal, yo venía con más
impotencia, con mucha rabia, de saber cómo fueron torturadas las demás
compañeras, de que hubo personas que fuimos puestas en libertad pero bajo
fianza la cual pagó el gobierno del Estado de México y cómo en los diferentes
medios de comunicación se difundió algo diferente diciendo que éramos muy
violentos y que tratamos muy mal a los policías.
Pues aprendí más de los medios de comunicación, cómo deforman la realidad de
los hechos porque jamás dijeron que éramos personas de algunos pueblos que
estábamos defendiendo nuestros derechos y que pues un gran delito para los
gobiernos fue haber protestado, haber derogado ese decreto expropiatorio de los
ejidos de San Salvador Atenco y otros pueblos. Y además, el hecho de sumarnos
a otras luchas sociales, de solidarizarnos, para el gobierno fue como los mayores
delitos y entonces por eso fue esa represión pero jamás lo dijeron así ante los
medios de comunicación, lo deforman a tal grado de que nunca difundieron en
la televisión realmente como fueron esas violaciones sexuales a las compañeras.
También hubo compañeros sexualmente violados aunque ellos nunca lo
denunciaron, pero sí los hubo porque hay compañeras que les toco ver eso, pero
como que los hombres no tienen el valor de decirlo o no sé, yo quiero verlo así
dentro del hecho de ser hombres cómo van a decir eso. Imagina, si una mujer
ante la sociedad, qué concepto tiene la gente cuando es violada y es mal
manejado eso, imagina de un hombre, qué se va a decir.
197
Entonces, todo eso fue algo que jamás se escuchó por radio y televisión que se
dijera la verdad, más sin embargo difundieron cómo un compañero golpeó a un
granadero, pasaron varias imágenes, varios días de cómo el compañero
golpeaba a ese granadero, siendo que lo único que hacía era defenderse.
Entonces, todo eso, no nada más a mí, a mi papá también, sino que muchas
personas aprendimos que realmente, pues cuántas mentiras, como nos
manipulaban los medios de comunicación, tanto en la radio y la televisión,
simplemente cuando dicen ya estamos combatiendo la pobreza o ya hay vales
para medicamente, ya hay esto o “X”.
Con respecto a las votaciones para
cambio de presidente a nivel municipal, estatal y federal es un engaño más,
porque a final de cuentas nosotros no elegimos a nuestras autoridades, es pura
farsa del gobierno ya que ya está destinado quienes van a ser nuestros
gobernantes , entonces ya nada más es como un engaño para que la gente diga
que sí se le toma en cuenta, en fin, eso y tantas cosas que aprendí y en base a
ello me doy cuenta que desde ahí somos manipulados por la televisión, que
todavía somos engañados.
Y regresé con mucha impotencia, con mucha rabia y con las ganas de dar
continuidad a la lucha social, la idea de que nuestros compañeros que se
encontraban aún presos y compañeras presas, que los sentenciaron a Ignacio
del Valle como a Héctor Galindo y a Felipe Álvarez que estaban ellos en un
Penal de alta seguridad del Altiplano en Toluca, los sentenciaron a más de 100
años por los mismos hechos, de los mismos delitos que teníamos nosotros
entonces era ya dar continuidad a la lucha por la libertad de los presos
políticos.
198
Desde el Penal yo pensaba que el hecho de estar detenida como que mi esposo
iba a pensar en separarse de mí ya que él no coincidía con mis ideas de la lucha
social y el hecho de estar yo detenida pues no sabía exactamente qué actitud él
iba a tomar . Desde el Penal yo le envíe una carta diciéndole que cuidara a mis
hijos y que cuando yo regresara me haría cargo de ellos, que si quería que nos
separáramos, pero que los cuidara en el tiempo que yo estuviera detenida.
Cuando yo regreso a casa, yo traía una gran impotencia sobre todo estar en esa
situación me creo mucha rabia y desde el aspecto sexual el cómo los hombres
piensan que pueden utilizar a una mujer o torturarla y de esa manera callarla,
eso me creaba mucha impotencia. Yo leí unas páginas de un libro que se llama
Mujeres de Maíz y en ese libro decía que este tipo de estrategias para torturar a
las mujeres se utilizan desde hace más de 500 años y de esa manera las
torturan física, sexual y psicológicamente y de esa manera sienten que las
mujeres reciben un gran agravio y humillación y entonces de esa manera las
callan. Cuando yo leí eso se me revolvieron tantas ideas en la cabeza y que yo
decía, bueno en general como mujeres quieren mantenernos calladas, como que
la mujer no debe tener derecho a protestar, a exigir sobre la vida misma ya que
no cuenta.
A pesar de que se dice que hay equidad, no hay una equidad completa,
simplemente nos damos cuenta quiénes son nuestros gobernantes. Ya que no
hay equidad en sueldos, en los trabajos y como que las ideas tan anticuadas de
que la mujer sólo sirve para los quehaceres, la casa y tener hijos.
199
Todas esas ideas se me revolvieron y me hicieron pensar que a lo mejor mi
esposo se quería separar de mí, el hecho del qué va a decir la gente, que su
esposa estuvo detenida y a lo mejor violada sexualmente. Yo regresé a la casa
y me acuerdo que al otro día le dije a mi esposo –mira, me vale lo que diga la
gente, tanto tu familia como la mía, el hecho de que venga aquí a esta casa
gente a solidarizarse no precisamente económicamente, sino, pues, desde una
forma moral más que nada, darnos un apoyo moral, bienvenida a esta casa, y
quien venga a tratar de señalarme por la manera que sea, a la chingada con
esa gente, sea tu familia o sea mi familia, quién sea. Bienvenida sea la gente
que tenga un apoyo moral hacia nosotros y quien vaya a juzgarme pues los voy
a mandar lejos, trátese de quien se trate, entonces de una vez te estoy diciendo.
Y otra cosa, si vamos a tener problemas por el hecho de que yo haya estado
detenida por lo que dice la gente, pues es lo que menos me importa, pero si va a
ser eso, que de una vez sea.
Él me dijo, ¿por qué venía a la defensiva? Le digo, a lo mejor porque traigo el
coraje por todo lo que me pasó de manera injusta, pero que lo pensara él bien,
si quería separarse en ese momento que yo podía seguir sola con mis hijos y no
me importaba lo que la gente o los medios de comunicación dijeran. Él me dijo
que no iba a ser así que realmente estaba conmigo porque me quería y que
íbamos a seguir juntos, que al contrario, que me iba a apoyar y que iba a tener
que ir a audiencias porque salí bajo fianza y teníamos que ir a ciertas
audiencias con un proceso legal y no sabía yo que tiempo iba a durar eso. Él
me dijo que no importaba, que él me iba a seguir apoyando, que íbamos a
seguir juntos y tratando de mejorar.
200
A mi hija al otro día la fuimos a traer a casa de familiares en la que estaba,
platiqué con ellos, mi hija estaba muy mal emocionalmente, se quejaba por las
noches, no podía dormir, yo tampoco, tenía mucho miedo, porque se me hacía
que en cualquier momento iban a venir por mí nuevamente los granaderos y
que yo me escondía en cualquier parte. Tardé como un año para recuperarme,
hasta hace poco yo estuve en tratamiento psicológico porque el impacto fue muy
fuerte y yo lo veo en general como una gran enseñanza para mi familia, como
que hemos aprendido a defender nuestros derechos y que aquí en este hogar, en
esta familia sí debe de haber equidad y la debemos formar desde nuestros
hogares, pero no nada más decirlo, sino llevarla a la práctica, en la vida diaria.
¿Cuál fue su reacción al enterarse de que varios de los integrantes del
FPDT fueron liberados?
Desde el 2006 hasta el 2010 yo estuve participando en todo lo que me era
posible para exigir la libertad de los presos políticos y como que eso no me
permitió darme un espacio para atender mi estado emocional en el que yo salí
del penal. Me enfoque más a la lucha social y tenía que trabajar, atender a mis
hijos también, atender la casa, combinar todo eso no fue muy sencillo pero sin
embargo, lo sentía como un deber, como compañera de lucha social.
Cuando llegamos ya al 2010, cuando fueron liberados entre ellos dos sobrinos
que estaban en el penal del Molino de Flores me creó nuevamente más
impotencia el ver en que condiciones regresaron ellos, el ver al compañero
Ignacio del Valle muy decaído físicamente, con las pupilas muy dilatadas, con
una palidez tremenda, muy delgado, con un lento hablar no como él
acostumbraba. Días después yo me acerqué a él y le pregunté que si a él lo
drogaban dentro del penal y él me decía que sí, así me lo dijo: me apendejaban
con los alimento, pero a mí me llamó la atención el hecho de que él trajera las
pupilas muy dilatadas.
201
Todo eso, después de cuatro años ver a los compañeros que estuvieron en los
penales fue como un retroceder mentalmente y recordar todo lo que habíamos
pasado, el recordar el cómo las compañeras relataban cómo habían sido
violadas sexualmente, todo el sentir de nuestra gente, el ver lágrimas, el ver
impotencia, el ver cómo los familiares de los compañeros y compañeras que
estaban detenidos en los penales tenían que ir a visitarlos, tenían que dejar
trabajo, dejar a su demás familia para ir a visitar a los presos con esa situación
económica, tratamos de apoyarlos económicamente y de hacer esa difusión de
que teníamos compañeros presos.
Para mí fue un retroceder, decaí mentalmente, en una semana no puede acudir
al trabajo, sentía yo un nudo en la garganta, me daba por llorar mucho sobre
tanta impotencia que no cabía en mí y entonces me vi en la necesidad de tener
un tratamiento psicológico.
Efectivamente, todos estos hechos marcaron nuestras vidas y fue diferente, me
tocó ver el caso de mi sobrino que estuvo detenido en el Penal del Molino de las
Flores de Texcoco, cuando él salió después de cuatro años y medio de estar en el
Penal se encontró con que su esposa ya no quiso saber nada de él, en el penal
ya no lo visitaba y perdió a su familia.
También el caso de una compañera que al regresar a su casa, en vez de
encontrar todo el apoyo emocional, ella se encontró con que su esposo le dijo
que era una puta y que ya no la quería en su casa y resulta que la casa era de
ella. El chiste es que ella se lleno de indignación y termino corriendo al esposo
y le dijo que jamás quería volverlo a ver.
202
De igual manera, el caso de una compañera en ese entonces estudiantes
universitaria que venía de La Paz, Baja California Sur y cuando ella habla por
teléfono con sus papás de que estaba detenida y les explica las razones, el papá
en vez de que se trasladara para acá o a la mejor le dijera a su esposa ve a ver a
tu hija a ver qué le pasa, resulta que se molesta mucho, pero para esto la
compañera cuenta que su mamá era una mujer muy sometida al esposo y ella
lo permitía, pero cuando la mamá se entera que su hija está detenida, ni lo
piensa, se traslada al D.F. para investigar por qué está detenida su hija y hasta
que logra entrevistarse con ella y esto le hace abrir los ojos y separarse de su
padre. Por eso creo que fue un aprender, un visualizar de forma diferente la
vida. Para muchas mujeres hubo como que una liberación más todavía.
¿Cree que la participación de las mujeres ha aumentado?
Yo creo que sí, anteriormente era, pero ahora es más. Me acuerdo que mi
esposo me decía: si antes eras tremenda, ahora eres peor. Yo siento que se
generó un cambio en la comunidad, anteriormente en las cuadrillas de
sembradores de Atenco muy pocas mujeres participaban pero como que a raíz
de allí la mujer pensó de manera diferente y ahora hay cuadrillas de mujeres,
de ese grupo que anteriormente era de puros hombres ahora hay de mujeres.
¿Antes de los acontecimientos usted militaba o simpatizaba con algún
partido político?
No, nunca.
203
Antes de las movilizaciones, ¿Qué opiniones tenía del gobierno a nivel
federal, estatal y municipal?
Me era muy indiferente, yo siempre he tenido bien claro que lo que tengo es por
lo que he trabajado. Ahora que vivo con mi esposo, realmente es por el esfuerzo
de los dos, porque de los gobiernos realmente no tenemos nada. Más que en
temporadas de campaña que hay personas que se dejan engañar por una
pequeña despensa, por un artículo de plástico o por cualquier pequeñez y
cuando realmente los diputados, senadores y el presidente se llevan mucho de
nuestros impuestos, viven de nosotros y aún así se dan el lujo de decirnos
plebe, que somos muertos de hambre, pobres, la prole, etc.
Pero ni vergüenza tienen, ni siquiera se ponen a pensar por todo el trabajo que
hacemos nosotros, por todos esos impuestos que pagamos y de qué manera
viven. Yo siempre he tenido muy en claro eso y por lo mismo antes me era muy
indiferente y ahora me da coraje, pero trato de no pensar más en eso.
¿A usted, como mujer qué cambios le ha traído la lucha social?
Yo creo que se han dado muchos cambios, pero en general algo que sí me queda
claro y que aprendí del compañero Ignacio del Valle, es que el cambio social es
un proceso muy largo en el cual nos toca participar.
Yo digo, si nos uniéramos realmente, porque somos más pobres que ricos,
lograríamos mejorar nuestro país, pero desafortunadamente no hay esa
conciencia, entonces es un proceso de cambio que se va a dar a través de los
años y que lo que me toca hacer lo estoy haciendo.
204
Aunque aún me encuentro con mujeres que tienen la idea de que deben pedirle
permiso al esposo para salir a la calle y yo me preguntó ¿cómo es posible que
exista esto todavía? Se habla mucho de la liberación, pero la realidad que aún
hay muchas mujeres que piden permiso al hombre para todo, entonces es con
las que nos toca hacer algunas actividades cuando nos es posible porque
persisten las mujeres que se niegan a realizar un cambio.
Hasta ahora me doy cuenta que aquí en Atenco ha habido avance pero falta
mucho todavía y que las mujeres piensas que nuestro deber es mantener
contento al esposo, mantener limpia la casa, que los hijos estén bien y muchas
veces no se dan un espacio para ellas ni en su arreglo personal, desde ahí como
son cosas tan sencillas. Y yo me he cuestionado muchas veces ¿qué hay que
hacer con esto?
Finalmente yo creo que debiera haber una verdadera equidad entre la mujer y
el hombre en la sociedad mexicana, pero lamentablemente existe todavía el
machismo y lo vemos en la actualidad, simplemente con Peña Nieto que aspira
a ser nuestro presidente de la República Mexicana, de qué manera se expresa
de las mujeres, por lo que nos damos cuenta desde ahí cómo predomina el
machismo. Es denigrante ver a mujeres humilladas y degradadas, y lo que es
peor, que se siga permitiendo.
Nos está tocando vivir una época diferente porque si hablamos de mi mamá, de
mi abuelita, pues estaban en otra forma de vida, creo que sí hemos avanzado
pero nos falta mucho todavía pero es como que irnos jalando unas con otras,
impulsarnos desde donde podamos. A mí me saca de quicio que haya mujeres
que no permitan ser apoyadas.
205
¿Usted se volvería a adherir a la lucha social?
Sí, incluso no he dejado de participar totalmente en el FPDT, me considero
integrante, nada más que ahorita he retomado algunos proyectos personales
que tenía yo y que dejé por estar participando y no lo lamento, porque hubo
grandes logros y uno de los logros fue derogar el decreto expropiatorio y otro
gran logro el tener la libertad de los presos políticos.
Yo creo que logramos nuestro objetivo a pesar de todo lo que pasamos, me
siento muy satisfecha a nivel personal, sigo participando aunque ya no tan
constante porque el gobierno no ha quitado el dedo del renglón, sigue latente el
hecho de hacer el aeropuerto, lo han tratado de imponer de otras formas, pero
aquí estaremos para dar lucha.
¿Cómo era el trato de los hombres hacia ustedes en la lucha?
Había de todo, en su mayoría son machistas, a nivel nacional predomina el
machismo pero también de cómo lo permitamos las mujeres.
Me tocó ver cómo los hombres se molestaban porque nosotras tomábamos
decisiones que tenían que ser respetadas y que ellos no querían acatar. Sin
embargo, lo hacían porque nosotras les debatíamos y justificábamos nuestras
razones, entonces no les quedaba de otra más que aceptarlo.
¿La percepción de ellos hacia ustedes se ha logrado cambiar?
Sí bastante, decía un compañero: hay compañeras que se tienen que cuadrar,
pero hay compañeras ante quienes me cuadro y contigo me cuadro.
Ahora en el FPDT los hombres nos dan a las mujeres el valor que tenemos,
porque lo han llegado a decir ellos mismo: ¡Aguas con las mujeres que tenemos
en el FPDT, porque no son de las que se callan, ni admiten ni se dejan!
A partir de 2006 las mujeres somos las que nos hemos movilizado y participado.
A final de cuentas eso se ha notado y ha sido reconocido, ya tenemos los mismos
derechos a opinar y a ser tomadas en cuenta.
206
ENTREVISTA A MARISELA PACHECO
Fecha de la entrevista: 30 de mayo de 2012
Hora de inicio: 10:16 am
Hora de término: 11:43 am
Nombre: Marisela Pacheco
Edad: 40 años
Escolaridad: Carrera Técnica de auxiliar educadora
Ocupación principal: Ama de casa y negocio familiar en videograbaciones
Localidad: San Salvador Atenco
Lugar de nacimiento: Sal Salvador Atenco
Composición de la familia: Un hijo, una hija, cónyuge y ella
¿Es usted ejidataria o pequeña propietaria?
Más bien yo diría que soy posesionaria.
¿En qué consiste su posesión?
Media hectárea.
¿Cuál fue la forma por medio de la cual obtuvo la tierra?
Fue en el último reparto que hubo en 1994.
¿Cuáles son las características de su tierra?
Digamos que está en el reparto pero aún así no le damos un uso definido.
207
¿Cuál es su ubicación con respecto a la comunidad?
Está casi en los límites del ejido como a 4 Km de la comunidad.
¿Cuál era su ubicación en relación con el proyecto del aeropuerto?
Estaba dentro del proyecto.
¿Qué fue lo que a usted la motivo a defender la tierra?
Fue cuando vimos los mapas, el ver que en realidad no sólo era una parte la
que expropiaban sino más bien se llevaban todo y el perder tanto desde nuestra
casa, el ejido en el que estamos y, pues, nuestra forma de vida. Esos fueron los
principales motivos.
¿Usted participó en los movimientos en defensa de la tierra en los años
2001-2002?
Sí, de hecho desde el 23 de octubre de 2001 comenzamos a ir, a informarnos de
todo.
¿En qué actividades participó a lo largo del movimiento?
En todas las que hubiera que participar, en ir a las marchar, participar en las
reuniones que eran públicas, prácticamente estábamos siempre al pendiente de
lo que había que hacer, creo que eso pasó con todo el pueblo, fue algo muy
radical, un cambio de vida en esos momentos muy brusco. Entonces, quienes
estábamos conscientes de esa pérdida y ese intento de exterminio, pues nos
unimos en las actividades que hubiera qué hacer.
208
Tal vez eso de hablar en micrófono muchos compañeros lo hicieron, pero creo
que eso de estar en la cocina es un tanto ambiguo pues hubimos compañeras
que estábamos en la organización, en todo, donde hubiera que trabajar pues
trabajábamos. Yo no podría decir que estuve en la cocina porque en realidad
no, a menos que fuera muy necesario. Igual si había necesidad de hablar pues
hablaba, pero era más bien donde hacía falta apoyo.
¿Usted participó en el movimiento que inició el FPDT en 2006?
Sí, ese día estaba en mi casa. En realidad la represión nos alcanzó aquí en la
casa pues nosotros ese día estábamos ayudando en las labores de hacer una
comida para los padrinos del pozo de riego que está aquí al lado. Mi papá era el
encargado, pues, de la vigilancia del pozo y todo eso, estábamos en la
administración.
Pues nosotros le ayudábamos ese día a organizar la comida porque llegaba el
padrino, ya que era el día de la Santa Cruz. Entonces el día 3 solamente
supimos, escuchamos todo eso, pero al menos de mi parte no acudí ese día al
centro, lo que vi fue algo que pasaron en la tele porque nos encontrábamos
preparando la comida y todo eso.
Y el día 4 la represión nos alcanzo aquí en la casa, llegaron los elementos
policiacos que entraron al pueblo y aquí nos agarraron desde temprano.
209
¿En algún momento pensó que por ser mujer se encontraría más
expuesta a situaciones de riesgo o inapropiadas?
Pues creo que la situación de riesgo era igual para todos, incluso para los niños,
hasta mis hijos estuvieron expuestos al peligro, creo que fuimos de las casas
más brutalmente allanadas, inclusive se llevaron a toda mi familia, mis papás
estaban al frente, mi papá es muy mayor, está enfermo y aún así se lo llevaron.
A mi mamá, a mi hermano, es decir, yo doné a esa represión a mis familiares
que fueron cuatro personas que estuvieron encarceladas, entonces creo que
todos estuvimos en el mismo peligro, pero a las compañeras que se llevaron les
fue muy mal, las tomaron como botín de guerra, pero creo que todos estuvimos
expuestos al mismo peligro, ese es mi particular punto de vista.
¿Cómo considera que fue su participación en el movimiento?
Pues el primer año considero prácticamente que fue de resistencia, porque el
hecho de que te quedes nada más con tus hijos y se lleven a todos es difícil de
aceptar, sobre todo las primeras horas, ya después, como a la semana,
empiezan a regresar, primero mi esposo, luego mi hermano, luego mi mamá.
Era algo complicado, el pueblo estaba desolado, como con miedo, estaba
quebrantado y creo más bien que esos primeros tiempos fueron de resistir y de
manera familiar pues tuvimos que estar en las audiencias, luchar incluso con
problemas familiares porque mi papá tardo más de un mes en salir, casi dos
meses y pues lo acusaban como a Nacho de los peores cargos, hasta que
finalmente los abogados zapatistas lo sacan y demuestran que él nada tenía
que ver.
210
De ahí en adelante, cuando psicológicamente uno se recupera vuelve a
participar para entender que en realidad son estrategias de Estado y hay que
colaborar para que en la comunidad todo este bien y los compañeros que no
están regresen.
¿Qué tipo de actividades desempeñaba en el FPDT?
A partir de 2007 volvimos a comenzar, fuimos a la primera marcha el 4 de
mayo y ya de ahí ir poco a poquito integrándonos en otras actividades como a
reuniones, a las movilizaciones y pláticas, fue algo gradual el reintegrarse.
En lo personal, realmente yo combinaba las actividades del hogar con las del
trabajo y con las del FPDT. Es estar involucrados de alguna manera en las
audiencias que duraron mucho tiempo, mi papá terminó, pues, a los 2 meses y
aún así con las apelaciones y de mi familia, de mi esposo, ya a partir de que mi
papá sale, solamente estar al pendiente de las audiencias de mi esposo, el
apoyarlo, el darle ánimos para que saliéramos adelante.
¿Cómo era su vida antes de los acontecimientos de 2001-2002 y 2006?
Creo que el pueblo es un lugar lleno de tradiciones, de cultura milenaria, somos
un pueblo originario.
Mi vida era tranquila, todos convivíamos, a nosotros
siempre nos ha gustado el ambiente de pueblo, no hay una carrera con el
tiempo como en la ciudad y para mí era una vida cotidiana, tranquila, muy
rural, con muchas tradiciones.
211
A raíz de dichos acontecimientos yo diría que sí cambio la forma de vida de los
habitantes del pueblo porque fue el darse cuenta y aceptar que el gobierno
siempre tiene la intención de maltratar al pueblo. Fue un despertar el ver que
un día tienes todo y de repente no tienes nada, entonces de alguna manera
aparte de tu vida cotidiana pues ya tienes que estar al pendiente de qué hace
falta para defender la tierra y tu modo de vida.
¿Cómo cree que se modificó su vida a raíz de estos acontecimientos?
Para mí fue el reencontrarme con mi identidad, con mis raíces y valorar más lo
que tenemos como el pueblo, como mi familia. Por más que hubiera querido
decir no veo, trabajo, me dedicó a mis hijos y a la vida rutinaria, pero ya no es
lo mismo. Quiera uno o no, se está más al pendiente de lo que pasa en la
comunidad y al pendiente de que no haya intromisión de la gente del gobierno o
de las instituciones que son o que pretenden cambiar nuestro ritmo de vida. Y
claro, luchar por el patrimonio de nuestros hijos.
¿Cuál fue su reacción al saber que varios de los integrantes del FPDT
fueron liberados en 2010?
Fue una sensación de satisfacción, de tranquilidad. El hecho de que ellos estén
aquí es gratificante porque ellos no habían hecho nada, más que, como mucha
gente del pueblo, defender lo que es nuestro y su liberación fue eso,
tranquilidad.
Satisfacción de ver que finalmente volvemos a tener razón igual
que en 2001.
212
Días antes era un sube y baja, un día nos decían que sí salían, otro día que a lo
mejor no y así, y pues una noche antes incluso decíamos: si la Suprema Corte
dice que sí o si dice que no, hasta el último momento del veredicto estábamos
entre sí o no y pues eran momentos, la verdad, muy intensos, porque la razón
nos decía que sí salían, sin embargo, las leyes y el sistema los tiene el gobierno
y pues ese día fuimos a la resolución de la Suprema Corte y pues cuando sales a
dar la noticia fue un momento muy grato, muy alegre, una alegría ya esperada
desde hace tiempo. Y de ahí fuimos al Altiplano a esperar a los compañeros
que tardaron dos días en salir, había lluvia, las inclemencias y lo que
pudiéramos haber pasado en la espera, pues valió la pena, podríamos haberlos
esperado otros 2 ó 3 días sabiendo que allí estaban y que iban a salir. Yo
recuerdo cuando sale Naco y pasa por donde yo estaba, me saluda y es algo
inolvidable, algo que se te queda para siempre.
¿Cree usted que la actividad de la mujer ha aumentado?
De alguna manera sí, para algunas compañeras fue el salir de la cocina a
participar en esas actividades políticas y de acciones para contribuir en la
lucha social, pero en términos generales sí cambio, muchas dicen que se
liberaron y cosas así muy feministas, para muchas compañeras yo vi que sí, sin
embargo, para mí cero, yo, lo único que aumento, pues yo trabajaba de maestra
hasta 2003, pues ya no me fue posible, para mí no fue como liberarme ni nada
de esas cosas, en general el que trabajes y salgas de tu hogar te da otra manera
de ver la vida, y claro, yo me considero uno de los matrimonios modernos
porque sí estamos juntos, pero cada uno tenemos nuestras individualidades,
entonces para mí en lo que cambió fue que te vuelves más consciente, ves más
la realidad y políticamente ya no puedes ver sólo lo tuyo sino que deber ver más
allá, porque ahora todo tiene implicaciones en lo que a ti te pase.
213
En términos generales el participar en la lucha social me hizo ser más
consciente, participar en la construcción de la vida que uno quiere.
¿Antes de los acontecimientos, pertenecía a algún partido político o
simpatizaba con él?
No, de hecho mi vida se resumía a mis hijos, mi trabajo, la rutina diaria.
¿Qué opinión tenía de los gobiernos federal, estatal y municipal?
Antes de 2001 no me ponía a pensar en lo político, a nosotros no nos interesaba
la política más que estar bien con mi familia. El trabajar, el convivir esa era
nuestra vida y lo político, pues realmente no nos interesaba, así que quién
quedara de presidente municipal, nacional o estatal pues no, realmente no nos
interesaba.
Sin embargo, cuando se empiezan a meter contigo de alguna manera por lo de
los proyectos, ¿pues qué decir? El presidente municipal realmente no hizo nada
de su trabajo, a pesar de ser un profesor, el profesor Margarito, pues no hizo lo
que tenía que hacer, no cumplió con lo que se comprometió, fue una decepción
ya que no cumplió con su pueblo. Y a nivel estatal y federal creó que te das
cuenta de sus ambiciones, de su modo de proceder del gobierno y es cuando te
concientizas y ves realmente cómo el proceder del gobierno es para tratar de
enriquecerse ya que no le interesa el pueblo. Entonces yo creo que el gobierno
sólo se sirve a sí mismo.
214
¿Considera que su participación en las movilizaciones le hizo cambiar
su opinión para con el gobierno?
No fueron las movilizaciones, más bien fue el hecho de conocer la magnitud del
proyecto y el saber que en una primera etapa eran todos los ejidos y en una
segunda etapa, justo aquí al lado, pasaba una calle y atrás otra. En realidad el
cambio en mí lo generó el saber la magnitud de un proyecto que te arrebataba
tu modo de vida.
¿Participa actualmente con algún movimiento o simpatiza con alguna
causa social?
Pues soy integrante del FPDT y actualmente, y desde hace algunos años, soy la
coordinadora del área de comunicación del FPDT.
¿Si se suscitara otro movimiento social se volvería a adherir a la
lucha?
No creo que se suscite otro movimiento, más bien creo que las intenciones del
gobierno no han cesado, entonces para mí mientras exista la amenaza sobre
nuestras tierras y nuestro territorio, nuestra permanencia en la vida como
comunidad creo yo que seguiré participando en el FPDT, a menos que el FPDT
cambiara de eje rector de lucha social, no continuaría allí, pero mientras siga
luchando por las causas justas creo yo que seguiré allí.
Yo creo que en el FPDT estamos por la defensa de la tierra, los derechos
humanos, educación, trabajo, cultura, salud, pero sobre todo por la defensa de
la tierra y nuestro territorio.
215
Desde mis abuelos, los papás de mi papá eran campesinos, mi abuelo nos sabía
leer, sin embargo trabajaba muy bien la tierra, pero también fue de los
impulsores de la educación, él estuvo cuando se impulsó la secundaria y él
siempre decía que estudiáramos, pero también nos inculcó de alguna manera la
educación y por ende
mi padre también en el amor al campo y a las
tradiciones.
¿Cuál considera que debe de ser el papel de la mujer en la sociedad
mexicana actual?
El papel debe de ser el construir a la par de los hombres el futuro que nosotros
queremos como nación. Es decir, ni adelante ni atrás de los hombres, más bien
debe de ser una equidad de género tanto en participación, en actividades, en
convicción, en oportunidades, esa debe de ser la participación, en equidad, en
compartir todo.
Porque considero que para que esto funcione se necesitan
ambos géneros, tanto del masculino como del femenino.
¿Cómo considera que los hombres del FPDT veían la participación de
las mujeres?
Lo que yo vi es que no importaba si eras hombre o mujer, la situación fue tan
fuerte que al menos yo nunca recibí que nuestros compañeros dijeran –ustedes
en esto. Fue participar en donde hubiera que participar y para mí creo que los
compañeros a lo mejor sí eran machistas o qué sé yo, pero a mí nunca me lo
externaron, si en algún momento lo fueron pues tuvieron que entender que
como mujeres muchas veces tuvimos que salir al frente porque no estaban o
porque ellos estaban en otra cosa, entonces asumimos, creo yo, las mismas
responsabilidades y los mismos roles, más bien yo creo que eso de que los
compañeros se sentían más o no nos dejaban participar estaba en las mentes de
las compañeras que pensaban que por ser mujeres eran menos, yo creo que más
216
bien ahí fue el cómo participar con lo que tú consideres y veas que hace falta.
Yo no vi que los compañeros lo hicieran, claro, yo hablo por mí, pero yo nunca vi
que fuera una cuestión de género o que digamos que como mujeres nos
liberamos, yo no lo considero así, creo que más bien ese muro mental está en
las mujeres y el hasta dónde creen que pueden participar.
¿Qué opinión tenía su familia de su participación?
Con mi esposo lo platicamos, acudimos el día 23 de octubre porque un día
anterior no pudimos asistir. Pero nosotros teníamos conocimiento del proyecto
y sabíamos que era en los límites del ejido, que era poquito lo que se iban a
llevar y dijimos –pues bueno, sí, no afectan a la comunidad.
Pero ya el 23 de octubre en la mañana que fuimos, que vimos la magnitud, pues
primero, sin decir nada, decidimos participar, nuestra participación empezó
yendo y todo eso, y pues ya platicando aquí con mi esposo decidimos que íbamos
a participar y creo que participábamos de maneras iguales, lo que si teníamos
así como una regla no escrita es que si tú vas a una movilización, el otro se
queda porque pensamos en nuestros niños. Mi niño tenía 6 años y la niña
tenía 6 meses, entonces decíamos por si algo pasa, si estábamos conscientes que
estaba muy fuerte el movimiento social, era enfrentarte con el gobierno federal
y con el capital y eso no es cualquier cosa, es un peligro.
Prácticamente, las primera movilizaciones él iba y yo me quedaba, pero el
quedarme era estar aquí, ir al centro, estar informada, por ejemplo en la
primera contingencia del 14 de noviembre de 2001, que es la primera represión,
creo que fui de las pocas personas que estuvieron ahí organizando y todo.
217
Como persona, ¿qué espera del FPDT y que perspectivas tiene hacia
futuro?
Espero que sigamos adelante y en algún momento nos dejen en paz, esas son
nuestros mejores deseos, claro que nos vamos a ir de este planeta y van a
seguir con sus intenciones de quedarse con lo que es nuestro, pero yo espero
que en el FPDT sigamos ahí, al pendiente, para defender lo que corresponde a
nuestras futuras generaciones.
Deseo que sigamos como organización, fieles a lo que nos dio origen, pero para
mí la organización somos todas las comunidades que conforman la región
Atenco - Texcoco y que sigamos sobre todo fieles a la defensa de la tierra.
218
ENTREVISTA A MARÍA DE LOURDES CASTES
Fecha de la entrevista: 15 de junio de 2012
Hora de inicio: 12:20 Pm
Hora de término: 13:07 Pm
Nombre completo: María de Lourdes Castes
Edad: 51 años
Escolaridad: Primaria completa.
Ocupación principal: Ama de casa.
Localidad: Acuexcomac.
Composición de la familia: Dos hijas, cónyuge y ella.
¿Es usted ejidataria o pequeña propietaria?
No, nada más tengo mi casa, o sea no tengo ejido ni nada.
¿Qué le motivó a defender la tierra en los años 2001 – 2002?
Porque yo no sabía nada de esto, y ya salían ellos, ya se estaban reuniendo los
compañeros de aquí de Atenco. Entonces yo por medio de la tele me enteré y
ahora sí que mi suegro, mi cuñada y mi sobrinito fueron a esa marcha y nos
enteramos por la tele de que los había agredido allá en el Distrito, entonces ya
por medio de ello nos integramos aquí al movimiento y pues ahora sí que hasta
que ganamos, hasta que echamos ese decreto para abajo, aquí estuvimos y
estamos en el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT).
Eso fue lo que me motivo en defender la tierra, por mis hijas, porque uno ya
está grande, una ya va para arriba y ellas son las que se quedan, los jóvenes.
219
¿En qué momento se unió al movimiento?
En el momento que lo vi en la televisión, que estaban agrediendo a los
compañeros. Nosotros no íbamos a permitir que nos quitaran nuestra tierra
porque aún siguen con la idea de reubicarnos, nosotros ya dijimos que
solamente muertos nos van a sacar de acá porque no vamos a permitir que
venga el gobierno y que siempre haga de las suyas y que nos saque de nuestro
pueblo de donde son las raíces de toda la gente que son de aquí, que ahora sí
que no nos vamos a dejar para que salgamos del pueblo, vamos a pelearlo y
nunca nos vamos a dejar, siempre lo vamos a defender aunque nos maten,
siempre vamos a estar aquí presentes y vamos a defender nuestras raíces.
¿En qué tipo de actividades participó durante el movimiento?
Pues en la cocina, yendo a donde iban los que querían comprar nuestras
tierras, en la carretera a parar los carros, en ir a comisiones al Distrito, íbamos
a los pueblos a llamar a los compañeros, porque ellos también tienen ejido, en
eso yo participé.
A mí me daba igual participar en lo que fuera, me gustaba todo. Cuando nos
decían en la cocina, nos quedábamos en la cocina, cuando nos decían hay que ir
a una comisión, nos íbamos, o cuando decían váyanse a la carretera, nos
íbamos.
220
¿Participó usted en el movimiento que inició el FPDT en 2006?
Sí, sí participamos. Muchas organizaciones por nuestra lucha nos llamaban
para dar nuestros testimonios y porque echamos ese decreto para abajo,
estábamos aquí en juntas con organizaciones que venían, con los pueblos de
alrededor.
Nos íbamos y agarrábamos nuestra herramienta que es el machete, paliacate y
sombrero. Ya lo agarrábamos, no pues que ya llegó el gobernador Eruviel,
porque en ese entonces estaba Eruviel, pues vamos porque él quiere expropiar,
o sea ¿por qué nos quiere expropiar?, ¿por qué nos quiere expropiar nuestras
tierras, nuestros ejidos?
Había camioneta, nos subíamos y nos íbamos a ver a Eruviel que siempre nos
ponía su armamento, a sus granaderos ahí enfrente y nunca nos dejaban llegar
a donde él estaba, casi al principio los hombres se iban y las mujeres nos
quedábamos.
¿En algún momento pensó que por el hecho de ser mujer estaría
expuesta a situaciones más riesgosas?
Sí, a todo.
Salíamos pero ya no sabíamos sí íbamos a regresar.
estábamos arriesgando nuestra vida.
A eso
Pero nadie nos obligó, fuimos
voluntariamente porque no nos gusta el cómo el gobierno tiene marginado al
pueblo.
221
Con la adrenalina que teníamos las mujeres ya en el momento de la lucha se
nos olvidaba todo, yo al menos en mi lugar como madre me paraba temprano,
dejaba comida, dejaba todo hecho para venirme yo aquí al FPDT, para irnos a
marchas, para preparar comida, cada rato nos íbamos a hacer paro en la
carretera, que ya llegó el de gobernación y pues córrele, y así andábamos.
Yo salía de mi casa pero dejaba a mis hijas. Por ejemplo, mi hija la más chica
participó desde los 11 años. Entonces mi esposo estaba un poco renuente en
eso de que él no quería participar en el Frente, pero como yo ando en esto y
como dicen que “detrás de un hombre hay una mujer” entonces yo lo que hacía
era jalar a mi marido y hasta mi hija decía: mamá tenemos que jalar a mi papá,
porque no vamos a dejar que el gobierno nos quite de donde estamos viviendo.
Nuestro coraje fue que al gobierno no le importó nuestra opinión, un fulano
nada más sentado en la presidencia que llega y dice que va a expropiar aquí, y
pues a nosotras como mujeres si nos dio mucho coraje y salimos a defender,
haya sangre o no la haya, nos maten o no nos maten, siempre vamos a
defenderlo.
En eso fue mi participación como mujer, que yo dejé mi casa para venir a
defender un pedazo de tierra en el que yo vivo. Ahora sí que participamos en
muchas cosas, tanto hombres como mujeres, pero la mujer era la que siempre
estaba al frente para todo. Y los hombres iban al lado de nosotros, claro que si
nos agarraban a nosotros, ellos se enfurecían más.
222
¿Cómo era su vida antes de dichos acontecimientos?
Yo iba a mi mandado, me levantaba temprano, hacía mis quehaceres, iba a
traer mi mandado para hacer la comida. Ya terminaba todo mi quehacer pues
yo me sentaba a coser, a escuchar a mis hijas, ir a las juntas de mis hijas, o sea
todo era tranquilo, yo me dedicaba a eso nada más porque no trabajo y soy ama
de casa. No había nada de esto cuando fue lo del Frente.
¿Cómo siente que se modificó su vida a raíz de los acontecimientos de
2001-2002 y 2006?
Desde que se derogó el decreto expropiatorio fue muy diferente mi vida. Ya no
fue esa tranquilidad porque lo que el gobierno nos quiso hacer nos hizo
despertar más, revelarnos contra el gobierno, eso fue ya un cambio muy fuerte
para todas las amas de casa, principalmente para mí, ya que no fue una
tranquilidad como la que había antes.
En mayo de 2006 nosotros estábamos aquí en la cocina, cuando nos dijeron que
ya habían agarrado a Ignacio del Valle y a los compañeros allá en Texcoco con
los floristas. Entonces fue mucha nuestra rabia que hayan agarrado a nuestros
compañeros y que les pusieron un cuatro para poder agarrar a Ignacio del Valle
y a su gente. Entonces en eso participamos, en ir a gobernación, muchos en
cerrar la carretera. Mi participación fue en ir a gobernación a reclamar a la
libertad de nuestros compañeros.
223
Ese día estábamos en la cocina porque luego llegaban muchas organizaciones
de otras partes y pues los esperábamos con comida para darles porque ellos nos
pedían apoyo, nuestra solidaridad en sus luchas.
En esos momentos que
sucedió eso nos avisan por teléfono a todos los compañeros que nos pusiéramos
a parar carreteras, a todo, a hacer movilizaciones para ver la libertad de los
compañeros porque ya los habían agarrado. Entonces aquí se paró la carretera
y no se abriría hasta que nos dieran a los compañeros. Esa represión la mandó
Peña Nieto aquí a San Salvador Atenco con casi 20 000 granaderos para sacar
y golpear a los compañeros, aquí en la explanada hubo mucha sangre
derramada.
Yo no fui agredida, yo no fui como los otros compañeros que los golpearon, a
unos se los llevaron al penal del Molino de Flores, a otros se los llevaron a
Santiaguito, a otros se los llevaron a la Palma. Nosotros los que andábamos
afuera hicimos muchas movilizaciones para pedir la libertad de nuestros
compañeros, porque ellos fueron inocentes y a los que metieron a la cárcel los
golpearon, los martirizaron, violaron a 42 compañeras, metieron a casi 250
compañeros a la cárcel.
A mí me dio mucho coraje, mucha rabia, mucha indignación y una impotencia
en decir ¿ahora cómo le vamos a hacer?, ¿cómo vamos a sacar a nuestros
compañeros? Pero afortunadamente Dios nuestro señor nos dio la suficiente
inteligencia para poder hacer el que liberaran a nuestros compañeros.
224
En la comunidad de Acuexcomac nos empezamos a organizar y cerramos la
carretera que sale de Lechería. Después aquí en Atenco fue donde empezaron a
agarrar compañeros los granaderos, o sea ellos agarraban parejo, pasaba la
gente, los agarraban, golpeaban y los medios de comunicación televisando todo.
Agarraban a cualquiera, pasaban y sin deberla ni temerla los golpeaban
brutalmente, salvajemente a como están acostumbrados y eso nos dio coraje y
pues nos enfrentamos más.
En el enfrentamiento nos aventaban gas
lacrimógeno, después conforme pasaron las horas se reanudo más el combate
entre los granaderos y nosotros.
Después oímos un disparo, fue cuando
mataron a Javier. Escuchamos el tiro, fuimos corriendo a ver y lo que se pasa
es que éste niño había ubicado a un policía que se había escondido en una
cocina, entonces él lo señaló, dijo: ¡Ahí está!, ¡Ahí está!, y en eso yo creo que le
entró miedo al policía y le disparó y de ahí se echaron a correr los granaderos,
todos se fueron, les faltaron patas para irse.
¿Cuál fue su reacción al saber que varios de sus compañeros fueron
liberados en julio de 2010?
A nosotros nos dio mucho gusto por lograr la liberación de nuestros
compañeros, lloramos de alegría porque ganamos otra lucha más, de sacar a
nuestros compañeros de la cárcel y me dio a mí pues ganas de llorar, gritar la
libertad de nuestros compañeros. En el momento que ellos salieron nosotros
estábamos allí en la Suprema Corte de Justicia, allí nos dijeron que nos los
daban libres y pues de todos nosotros fue una alegría, de gritar las consignas,
de gritar la libertad, nos abrazamos, gritamos ¡libertad, libertad a todos los
presos políticos!
225
¿Considera que a partir de tales acontecimientos la participación de la
mujer ha aumentado?
En definitiva sí, aunque la expropiación sigue latente.
¿Antes de los acontecimientos usted pertenecía o simpatizaba con
algún partido político?
No, con ninguno. Nosotros no creemos en ningún partido político porque todos
son la misma, son la misma porquería, son la misma cochinada. A todo el
pueblo mexicano lo engañan, en todos los Estados engañan al ser humano.
¿Qué opinión tiene usted del gobierno?
Es una porquería, es una cochinada, no cumple lo que dice. Porque dice Peña
Nieto, “lo digo y lo cumplo”, pero es una gran mentira, es un chismoso de
primera y lo que él diga a nosotros nos vale madres.
¿Considera que su participación en el movimiento le hizo cambiar su
opinión acerca del gobierno?
Sí, bastante. Porque antes de que se diera este decreto pues íbamos a votar
nosotros, pero ya aquí en el Frente nos hicieron ver muchas cosas que los
partidos hacen. Entonces desde ese momento dejamos de creer en todos los
partidos.
226
¿Actualmente participa en algún movimiento o simpatiza con alguna
causa social?
Por ahora sólo simpatizo con el “Yo soy 132” porque ellos convocan a las
marchas para echar a Peña Nieto para abajo. Me parece una causa justa para
todos, a nivel internacional o sea es una lucha muy justa que gracias a ellos
todos los jóvenes están viendo la lucha que ellos están haciendo, una lucha
justa para echar ese gobierno para abajo.
A nosotros, aunque el gobierno nos mandó a reprimir, nunca nos hemos
agachado, siempre hemos seguido adelante, por eso yo creo que todos los
jóvenes se dieron cuenta de que la lucha que hizo Atenco, de que aunque nos
mandaron a reprimir seguimos adelante todavía y ellos nos han visto y como
dicen –si ustedes siguen adelante ¿nosotros por qué no?
¿Si en algún momento se suscitara un movimiento similar, usted
estaría dispuesta a adherirse nuevamente a la lucha?
Sí porque nuestro Frente nunca va a estar de rodillas. Siempre va a estar
parado, si vamos a morir vamos a morir parados y no hincados pidiéndole
perdón al gobierno.
Nosotros estamos de frente y siempre vamos a defender
cualquier organización, cualquiera de los jóvenes, a cualquier donde nos llamen
allí siempre vamos a estar nosotros.
227
¿Cómo mujer qué le han traído las movilizaciones sociales?
Yo tenía problemas con mi esposo por esto, pero si yo seguía mi esposo seguía,
mi hija también, aunque a la otra no le gustó esto y siguió en la casa, ella hacía
el quehacer o me decía que hacía la comida y pues seguíamos adelante.
Actualmente mi familia me apoya en mis decisiones y yo sigo viniendo a las
reuniones, a las marchas y nos da gusto que el pueblo y los jóvenes estén
viendo las injusticias que hace el gobierno.
¿Cuál considera que debe ser el papel de la mujer en la sociedad
mexicana?
Ahora sí que pues levantando la voz hacia el gobierno, no dejarnos y gritar la
injusticia que él hace con el pueblo. Esa es la participación de las mujeres hoy,
que ya abrimos los ojos y que nos dimos cuenta que el gobierno es un corrupto,
es un violador, eso es lo que es el gobierno.
Las mujeres que ya no nos dejamos, nos revelamos contra el gobierno, eso fue lo
que nos dejó el gobierno, como mujeres, y yo como mujer que soy ahora sí que
ya no me dejo.
Hay compañeros que están en contra de nosotros, el PRI nos mandó la
represión aquí y no tratamos de pelear, sino de convencer a la gente lo que es el
PRI, lo que es cualquier partido porque todos son lo mismo. Yo defiendo la
tierra porque me siento identificada con ella, la tierra nos da de todo, nos da de
comer de todo, frijolitos, lentejas, acelgas, quelites, maíz, verduras, frutas, todo
nos da la tierra y por ella vamos a dar todo, la vida, toda vamos a dar por la
tierra. Y la vamos a defender a como pueda y a como sea.
228
12.- FUENTES CONSULTADAS
229
BIBLIOGRAFÍA

Arámbula Reyes. A. (2008). Participación política de la Mujer en
América Latina. Cámara de Diputados LX Legislatura. México.

Baró, Ignacio Martín. (1990). La violencia política y la guerra como
causas del trauma psicosocial en El Salvador. En: Psicología social de la
guerra: Trauma y Terapia. UCA EDITORES San Salvador, El Salvador.
Pp.22-26.

Bartra Armando. (1979). La explotación del trabajo campesino por el
capital. Ed. Macehual. México.

Brom, Juan. (1990). Esbozo de Historia de México. Tratados y Manuales
Grijalbo. México. 275 pp.

Camacho, Gúzman D.M. (2006). La historia como arma de lucha. UAM
Xochimilco. México.

Casrells, M. (1997). La era de la información. Vol.2 El poder de la
identidad. Alianza. Madrid.

CEPAL. (1984). Economía campesina y agricultura empresarial. Siglo
XXI Editores. México.

Chayanov, A. (1974). La organización de la unidad económica
campesina. Editorial Nueva Visión. México.

Fernández, Anna. (compiladora). (1995). Participación política.
Las
mujeres en México al final del milenio. Colegio de México (COLMEX).
México.
230

Garza, Livas Rafael. (1970). Psicología Social. Tomo II. Oasis. México.

Germani, Gino. (1962). Política y sociedad en una época de transición.
De la sociedad tradicional a la sociedad de masas. Editorial Paidós.
Buenos Aires, Argentina.

Gohn, Na. G. (da). (1991). Movimientos sociales y lucha por la vivienda.
Loyola. Sao Paolo. Brasil.

Grajales, V.S. Y Robles, R.M. (2010). “Atenco: la construcción de una
estrategia comunitaria en defensa de los recursos naturales y el
territorio”. En Rodríguez C.A. (Coordinador). Defensa comunitaria del
territorio en la zona central de México. (pp. 77-100). Juan Pablos Editor,
S.A. México.

Kottak, Conrad. (1999). Antropología, una exploración a la diversidad
humana. McGRAW HILL. España.

Lefebvre,
Henry.
(1973).
De
lo
rural
a
lo
urbano.
Historia/Ciencia/Sociedad. Ediciones Península. Serie Universitarios,
París. pp.75.

Lofland, J. (1981). “Collective behavior: The elementary forms”. En M.
Rosenberg
y
R.
Turner
(Eds.),
Social
Psychology:
Sociological
perspectives (pp. 411-446). Basic Book. Nueva York.

Marx C, y Engels F. (1973). Fuerbach. Oposición entre las concepciones
materialistas e idealistas. O.E.T.I. Editorial Progreso, Moscú.

Marx C, y Engels F. (1973). Manifiesto del Partido Comunista. O.E.T.I.
Editorial Progreso, Moscú.
231

Morales, J.F. y Moya, M.C. (1994). Psicología Social. MCGRAW HILL.
Madrid, España. pp. 465-491.

Rocha, Martha Eva. (1991). Lucha de las mujeres. Instituto Nacional de
Antropología e Historia. (INAH). México. pp. 213-309.

Sahagún, Fray Bernardino de. (1988). Historia general de las cosas de la
Nueva España. Alianza Editorial. Madrid, España.

Schumukler, B. (1982). “Familia y dominación patriarcal en el
capitalismo”.
En:
Sociedad,
subordinación
y
feminismo.
León,
Magdalena. Editora. Bogotá, Colombia. pp.52.

Touraine, A. (1978). La voix et le regard. Seuil. París, Francia.

Tuñón, Julia C. (1987). Mujeres en México, recordando una historia.
Planeta. México. pp.193.

Turner, R.H. y Killian, L.M. (1987). Collective behavior. Englewood
Cliffs. Prenticne Hall. USA.
HEMEROGRAFÍA

Almeyra Guillermo. (2008). “Los vaivenes de los movimientos sociales en
México”. En: revista Debates- Año IX. N° 24 – Octubre. México.

Cano, Gabriela. (1991). “Las feministas en campaña”. En revista Debate
feminista. Año 2. Vol.4, Septiembre. 269-287 pp.
232

Fernández Moreno S.Y. (2007) “La mujer en los movimientos sociales y
en los movimientos feministas de América Latina”. En: revista Papeles
de Población. N° 13. Enero-marzo. Universidad Autónoma del Estado de
México (UAEM) Toluca, México.

Kuri Pineda E.E. (2006). “Claves para decodificar un actor colectivo: el
caso del movimiento de San Salvador Atenco”. En revista Argumentos.
UAM Xochimilco. México.

La Jornada. “Atentado contra los derechos de la Mujer”. Agosto 7. 2000.

Lau, Anna. (2009). “La Mujer en la Revolución”.
En revista Proceso
Bicentenario. N° 3. Junio, Comunicación e Información, S.A. de C.V.
(CISA). México.

UNAM. (2010). “La lucha de las mujeres de Atenco”. En: Colección
Reflexión y Acción. N° 2. Diciembre de 2010. México.

Velázquez García, Mario Alberto. (2004). “La violencia y los movimientos
sociales en el gobierno de Vicente Fox 2001-2002”. En revista Región y
Sociedad. Vol. XVIII, N°29.

Zendejas, Adelina. (1993). “Ellas y la vida, lucha y conquista de los
derechos femeninos”. En revista Debate feminista. Año 4. Vol. 8.
Septiembre. Pp.401-413.
233
TESIS

Carrillo, Franco B.E. (2010). El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra
(FPDT) y la violencia de género. Tesis de Maestría en Ciencias en
Desarrollo Rural. COLPOS Montecillo. México.

Pineda Torres J.R. (2008) Atenco: Ideología de un pueblo. Tesis de
Licenciatura en Sociología Rural. Universidad Autónoma Chapingo.
(UACh). México.

Rosas Vargas, Rocío. (2002). Reparto agrario en San Salvador Atenco,
Edo. De México, 1910-1940. Tesis de Maestría en Ciencias en Sociología
Rural. Universidad Autónoma Chapingo, Departamento de Sociología
Rural. México. pp.20-21.

Valera Uriostegui, Mónica Heidi, Villagrán García, Verónica. (1996).
Conductas adquiridas de la mujer ejecutiva y empresaria en el ámbito
laboral. Tesis Profesional. Facultad de Psicología. UNAM. México.
pp.206.
DOCUMENTOS

Gobierno del Estado de México. (1997). Indicadores Básicos para la
Planeación Regional. México.

H. Ayuntamiento de San Salvador Atenco. (1997). Plan de Desarrollo
Municipal. 1997-2000.

INEGI. (1997). Anuario Estadístico del Estado de México. México.
234

Sánchez Gómez, Martín Abraham. (1999). Monografía Municipal de San
Salvador Atenco. México.

Secretaría de la Reforma Agraria (SRA). (1992). Ley Agraria.
PÁGINAS ELECTRÓNICAS

Burggraf., JS.F. Sexo y género: “La naturaleza de la personalidad
humana, en el centro de la batalla ideológica”. Nueva revista de política,
cultura y arte.
http://www.nuevarevista.net/2004/diciembre/nr_articulos96_2.html.
(consultado el 16 de septiembre de 2012).

http://www.ciepac.org/neoliberal/esp/politicasajuste.html (consultado el 2
de abril de 2012).

OMS. (2003). “Informe mundial sobre la violencia y la salud”.
http://www.paho.org/spanish/am/pub/violencia_2003.htm. (consultado el
1° de julio de 2012).

ONU.
1995.
“Eliminación
de
la
violencia
contra
la
mujer”.
http://www.unhchr.ch/Huridocda/Huridoca.nsf/TestFrame/a61cb2bb0fd4
472780256869005c4c35?Ope (consultado el 1° de julio de 2012)

Rurbano, Proyecto del Instituto de Economía de la Universidad Estadual
de Campina, Brasil. www.eco.unicamp.br.protetos/rurbano (consultado el
23 de mayo de 2010)
235
LE COSE NON CAMBIANO FINCHÉ NON CAMBI IL MODO DI
GUARDARLE
LAS COSAS NO CAMBIAN HASTA QUE TÚ NO CAMBIAS LA FORMA
EN QUE LAS MIRAS
THINGS WON’T CHANGE AS LONG AS YOU DON’T CHANGE THE
WAY LOOK AT THEM
236
Descargar