COL ABO RACI ON T ECNICA DE LA CONTRAL ORIA GENERAL DEL EST ADO DE LA REP UBLI CA DEL ECUADO R, P ARA L A REUNI ON P REPARATO RI A DEL SEMI NARIO INT ERNACIO NAL “T RANSP ARENCI A CO NT RA L A CO RRUP CI ON” Introducción: En la República del Ecuador existen varios organismos e instituciones encargados de luchar contra el fenómeno de la corrupción desde distintas ópticas: el Ministerio Público, la Comisión de Control Cívico de la Corrupción y la Contraloría General del Estado. Desde luego que la Función Judicial, la Procuraduría General del Estado y las Superintendencias de Bancos, Compañías y Telecomunicaciones, desempeñan en esta materia un papel complementario preponderante. Todos estos organismos están obligados a orientar su accionar, en pos de “Garantizar la vigencia del sistema democrático y la administración pública libre de corrupción”, como lo dispone el artículo 3 de la Constitución Política de la República del Ecuador. Los deberes y atribuciones de estos organismos están definidos en la Constitución Política y en sus leyes orgánicas. Así tenemos que en el caso de la Contraloría General del Estado, la Carta Fundamental le confiere competencia “para controlar ingresos, gastos, inversión, utilización de recursos, administración y custodia de bienes públicos …” y “potestad exclusiva para determinar responsabilidades administrativas y civiles culposas e indicios de responsabilidad penal…”, sin perjuicio de otras facultades. En cuanto al Ministerio Público, la Constitución Política le confiere la trascendental atribución de coordinar y dirigir “la lucha contra la corrupción, con la colaboración de todas las entidades que, dentro de sus competencias, tengan igual deber”. Además, le faculta para prevenir en el conocimiento de las causas, así como dirigir y promover la investigación preprocesal y procesal penal, y acusar “a los presuntos infractores ante los jueces y tribunales competentes…”, e impulsar “la acusación en la sustanciación del juicio penal…”. Respecto de la denominada Comisión de Control Cívico de la Corrupción, la Constitución Política le confiere atribuciones para promover, en representación de la ciudadanía, “la eliminación de la corrupción”; para receptar “denuncias sobre hechos presuntamente ilícitos cometidos en las instituciones del Estado, para investigarlos y solicitar su juzgamiento y sanción…”. Agrega la norma constitucional que cuando esta Comisión “haya finalizado sus investigaciones y encontrado indicios de responsabilidad, pondrá sus conclusiones en conocimiento del Ministerio Público y de la Contraloría General del Estado”. A nivel legal, la Ley Orgánica de la Contraloría General del Estado, promulgada en el registro oficial No. 595 de 12 de junio de 2002, confiere a este Organismo, entre otras, la facultad para ejercer el control externo, componente del sistema de control, fiscalización y auditoría del Estado, a través de la auditoría gubernamental. Por otra parte la mencionada Ley confiere al Organismo Superior de Control competencia para “Identificar y evaluar los procedimientos internos de prevención CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 1 contra actos de corrupción en las entidades sujetas a su control” y “Actuar coordinadamente con el Ministerio Público para iniciar y proseguir los juicios penales, relacionados con delitos en el manejo de los recursos públicos…”. La Ley de la Comis ión de Control Cívico de la Corrupción otorga a ésta amplias facultades en materia de lucha contra la corrupción en diversas fases , tales como: “Formular programas y dirigir campañas contra la corrupción, así como diseñar un plan nacional de prevención que será puesto en conocimiento de las más altas autoridades de las funciones del Estado…”; “Promover la participación y organización de la ciudadanía en la creación de una cultura de la legalidad y honestidad”; “Conocer e investigar las denuncias de corrupción que hayan sido presentadas y proceder de oficio ante datos suficientes que hagan presumir corrupción”. La Ley Orgánica del Ministerio Público, por su parte, ratifica la atribución constitucional y prevé, entre las facultades de ese Organismo, que se ejercen a través del Ministro Fiscal General, de los Ministros Fiscales de Distrito y de los agentes fiscales, la de “Coordinar y dirigir la lucha contra la corrupción, en colaboración con la Comisión de Control Cívico de la Corrupción y demás entidades relacionadas con el tema, en el ámbito de sus competencias…”. Luego de esta breve alusión al marco normativo ecuatoriano en materia de competencias otorgadas a varios organismos del Estado para enfrentar la corrupción, podemos concluir en primer término que, si bien a nuestra EFS le han sido atribuidas importantes facultades a nivel constitucional y legal para coadyuvar en la denominada “lucha contra la corrupción”, existen otras instituciones del Estado que en ese mismo ámbito tienen también un rol preponderante, lo que nos lleva a la consideración de que para lograr efectividad en esa tarea, es indispensable coordinar adecuadamente los esfuerzos que deben desplegar el Ministerio Público, la Comisión de Control Cívico de la Corrupción y la Contraloría General del Estado, protagonistas principales en esta cruzada, sin olvidar a la Función Judicial, instancia sin cuyo aporte y decisión pueden diluirse todos los esfuerzos realizados por los organismos mencionados. Por tanto, el objetivo básico que debemos alcanzar es complementar los esfuerzos que cada una de las entidades involucradas puede generar en este ámbito, tarea que no es fácil debido a varios factores, entre ellos, la tendencia general de las instituciones y funcionarios públicos, de actuar aisladamente por temor a ceder posiciones o atribuciones y a un mal entendido sentido de preservación de la autonomía administrativa. Con esta aproximación al tema, a continuación trataremos de dar respuesta al cuestionario formulado: 1. ¿Cuáles han sido los principales esfuerzos que su EFS ha realizado en los últimos años para avanzar en la conceptualización del fenómeno de la corrupción? La EFS ecuatoriana no ha efectuado trabajos relacionados con la conceptualización del fenómeno de la corrupción, entendiendo por tales el desarrollo de un marco CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 2 teórico – conceptual en el que se describan elementos que identifiquen actividades o conductas que conlleven la calificación de corruptas . Sin embargo, todas las normas, reglamentos, acuerdos, resoluciones y en general disposiciones expedidas y políticas impartidas por la EFS, se han sustentado, implícitamente, en un marco teórico cuya piedra angular ha sido encaminar el accionar de la institución y sus funcionarios, en contra del fenómeno de la corrupción, entendida como la antítesis de “la exactitud aplicada a la valoración ética de las acciones”, en los términos propuestos por el doctor Rodrigo Borja Cevallos 1, ex Presidente constitucional de la República, de quien transcribimos a continuación algunas de sus ideas sobre ese fenómeno y su lamentable incidencia en la vida pública: “Escribió José Ortega y Gasset (1883-1955) que la moral es una cualidad matemática: es la exactitud aplicada a la valoración ética de las acciones. Ésta es, sin duda, una magnífica definición, como todas las que solía hacer el filósofo español. Aquella exacta valoración ética de las acciones humanas es lo que falta con frecuencia en la vida pública… Si hay una acción humana que, por su trascendencia social, debe estar rigurosamente sometida a la moral, ésa es la política. Todas las acciones humanas deben estarlo. Pero con mayor razón la de conducir los destinos de los pueblos… Para gobernar se requiere una credencial ética, una legitimidad. Sólo así puede nacer en los gobernados la obligación mo ral de la obediencia. Mandar es hacerse creer, tener crédito, suscitar confianza. El poder descansa sobre un sistema de creencias. La corrupción gubernativa –que lamentablemente es un signo de los tiempos- erosiona la autoridad, afecta la credibilidad de los órganos del poder y se convierte en una de las acechanzas más peligrosas contra la gobernabilidad democrática de un pueblo porque corroe los valores ético sociales sobre los que descansa la organización comunitaria. La sociedad, entonces, puede entrar en una suerte de anomia, es decir, de descomposición global, de ausencia de normas éticas y jurídicas e, incluso, de referencias morales para el comportamiento de las personas, de modo que no puedan distinguir lo lícito de lo ilícito, lo bueno de lo malo, lo permitido de lo prohibido. Esta confusión total de valores, a su vez, alimenta una corrupción generalizada y contagiosa, gravemente desestabilizadora del régimen político. La inmoralidad suele expandirse en una forma de metástasis y toma cada vez mayores partes del cuerpo social. No es fácil hablar de la etiología de la corrupción. Puede ser un problema educativo y cultural. La precaria formación ética que ofrece el sistema educacional, el egoísmo exacerbado, el afán por el dinero fácil, la ley del menor esfuerzo, el desconocimiento de que el trabajo deber ser la única fuente del patrimonio, todo esto –en el marco de una sociedad hedonista, en la cual el dinero es la medida de todas las cosas- son seguramente algunas de las causas de la inmoralidad admi nistrativa. Y en la medida en que ésta va tornándose crónica puede convertirse en un problema de idiosincrasia muy grave. A veces los regímenes políticos se convierten en cleptocracias. En ellos la corrupción se institucionaliza. Forma su propia cultura, con sus códigos, sus usos y sus jerarquías, con sus honores y su distinción social. Y la honestidad es vista casi como una extravagancia. En ocasiones la corrupción alcanza también a los partidos políticos, esto es, a las alternativas de gobierno, lo cual acaba con toda esperanza de regeneración, porque si los que están en el poder y los que aspiran a estarlo forman parte de la cultura de la corrupción, entonces las posibilidades de revertir una situación tan negativa se tornan muy escasas. 1 Rodrigo Borja Cevallos, Enciclopedia de la Política, Fondo de Cultura Económica, México, primera reimpresión, 1998, págs. 176, 177. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 3 Es curioso observar que, paralelamente a la corrupción como realidad fáctica de muchos sistemas políticos, ha florecido el gran negocio político de la “denuncia” contra la corrupción real o supuesta. Esta conducta es tan corrompida como cualquier otra. Es el próspero negocio político de la “moralización” con que ciertos pillastres pretenden movilizar en su beneficio voluntades políticas. Hay que estar en guardia contra esta nueva industria que ha surgido al socaire de la corrupción…”. Es indudable que estos razonamientos pueden servir de orientación para el desarrollo de cualquier investigación relacionada con la conceptualización del fenómeno de la corrupción, pues aquellos recogen la esencia misma del problema y la gravedad de su incidencia en la sociedad. 2. ¿Recientemente su EFS ha diseñado políticas, estrategias o instrumentos dirigidos a combatir la corrupción? ¿Cuáles? ¿Cómo valora su eficacia? Explique y documente. A. Marco normativo: Nuestra Entidad Fiscalizadora Superior (EFS), desplegó en su oportunidad múltiples acciones y gestiones de coordinación con varias agrupaciones políticas, organizaciones y asambleístas , en las instancias previas a la expedición de la Constitución Política vigente desde el 10 de agosto de 1998, a efectos de que en la Carta Política se reconozca la plena y total autonomía de la Contraloría General del Estado; que se determine que la acción de control pueda extenderse a las entidades de derecho privado que manejan recursos públicos; y, que se incluya una disposición que declare imprescriptibles la acción y la pena de los delitos que afectan a los recursos públicos , y que los procesos penales puedan iniciarse y sustanciarse aun cuando los acusados se encuentren prófugos . Las gestiones arrojaron un magnífico resultado, con la inclusión en el texto constitucional de los artículos 211 y 121, que en su parte pertinente disponen lo siguiente: “Art. 211.- La Contraloría General del Estado es el organismo técnico superior de control, con autonomía administrativa, presupuestaria y financiera, dirigido y representado por el Contralor General del Estado, quien desempeñará sus funciones durante cuatro años. Tendrá atribuciones para controlar ingresos, gastos, inversión, utilización de recursos, administración y custodia de bienes públicos. Realizará auditorías de gestión… Su acción se extenderá a las entidades de derecho privado, exclusivamente respecto de los bienes, rentas u otras subvenciones de carácter público de que dispongan…”. “Art. 121.- Los dignatarios elegidos por votación popular, los delegados o representantes a los cuerpos colegiados de las instituciones del Estado y los funcionarios y servidores públicos en general, estarán sujetos a las sanciones establecidas por comisión de delitos de peculado, cohecho, concusión y enriquecimiento ilícito. La acción para perseguirlos y las penas correspondientes serán imprescriptibles y, en estos casos, los juicios se iniciarán y continuarán aún en ausencia de los acusados. Estas normas también se aplicarán a quienes participen en estos delitos, aunque no tengan las calidades antes señaladas; ellos serán sancionados de acuerdo con su grado de responsabilidad”. Estas disposiciones constituyen un avance notable en materia legislativa, ya que por un lado, reconocen la independencia y autonomía de nuestra EFS, atributos que garantizan que su accionar pueda ser efectivo y oportuno. Por otra parte, el artículo 121 de la Carta Política, provee al Estado y a los órganos judiciales en general, de CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 4 una magnífica herramienta para la lucha contra la corrupción y la impunidad generada inclusive en los más altos niveles públicos, al punto que, en virtud de su vigencia y aplicación, están sustanciándose algunos juicios penales en contra de ex Presidentes constitucionales de la República, en ausencia de éstos, por la presunta comisión del delito de peculado, cuando en sus respectivos períodos ejercieron la primera magistratura. ¿Cuál podría ser el escenario si no existiese a nivel constitucional esta disposición? Que los ex Presidentes y otros ex funcionarios públicos, se mantendrían temporalmente prófugos de la justicia en distintos países que los acogen a través del asilo político u otros mecanismos , hasta que opere la prescripción de la acción penal y se extinga la facultad del Estado ecuatoriano de enjuiciarlos . Una vez que esto ocurra, podrían retornar tranquilamente al país como que nada hubiese ocurrido. En contraste, actualmente esto no es posible en ningún momento, pues en caso de que los acusados retornasen al país, serían aprehendidos inmediatamente si existiese orden de prisión preventiva -como es usual en estos casos - y continuaría el proceso de juzgamiento o, simplemente se ejecutaría el cumplimiento de la condena impuesta. Complementario con lo anterior, desde el año 2000, la Contraloría General del Estado realizó múltiples gestiones ante el Congreso Nacional y la Presidencia de la República, para hacer realidad la expedición de una ley actualizada en la que se vean reflejadas las nuevas competencias otorgadas a esta EFS por la Constitución Política, en materia de control y auditoría el sector público, y que viabilice la aplicación al sistema de control, fiscalización y auditoría, de los principios de legalidad, responsabilidad financiera, transparencia, economía, eficiencia y eficacia, así como los criterios de equidad y ética y las políticas de descentralización y desconcentración operativas. El nuevo instrumento, denominado Ley Orgánica de la Contraloría General del Estado, fue expedido el 12 de junio de 2002. A pesar de la claridad de las disposiciones de esta Ley, concordantes con el mandato constitucional, en materia de competencia de la EFS para efectuar actividades de control en las entidades y organizaciones de derecho privado, respecto de los recursos públicos de que dispongan, fue necesario promover un proyecto de reformas para ratificar esta facultad, debido a que en forma inexplicable y debido a oscuros intereses, se emitieron pronunciamientos jurídicos que pretendieron desconocer esta atribución, con el objetivo de impedir el ingreso de la EFS a dichas entidades privadas, en franco desconocimiento y violación de preceptos constitucionales y legales. Posteriormente, el 23 de agosto de 2004, luego de una campaña intensa desarrollada por la EFS, se consiguió la expedición de la Ley Orgánica reformatoria, que ratificó y disipó toda duda respecto a la facultad constitucional y legal atribuida a la Contraloría General del Estado, para efectuar el control de las personas jurídicas y entidades de derecho privado, que cuentan con bienes, rentas o subvenciones de índole pública, cualquiera sea su monto. Esta precisión legal ha permitido que nuestra EFS intervenga en varias empresas que tienen a su cargo la prestación de servicios públicos de telecomunicaciones y energía eléctrica, entre otros. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 5 Para efectos de aplicación de la Ley Orgánica de la Contraloría General del Estado, se consideran recursos públicos, “todos los bienes, fondos, títulos, acciones, participaciones, activos, rentas, utilidades, excedentes, subvenciones y todos los derechos que pertenecen al Estado y a sus instituciones, sea cual fuere la fuente de la que procedan, inclusive los provenientes de préstamos, donaciones y entregas que, a cualquier otro título, realicen a favor del Estado o de sus instituciones, personas naturales o jurídicas u organismos nacionales o internacionales”. La mencionada Ley agrega que dichos recursos no pierden la calidad de públicos “al ser administrados por corporaciones, fundaciones, sociedades civiles, compañías mercantiles y otras entidades de derecho privado, cualquiera hubiere sido o fuere su origen, creación o constitución, hasta tanto los títulos, acciones, participaciones o derechos que representen ese patrimonio, sean transferidos a personas naturales o personas jurídicas de derecho privado, de conformidad con la ley”. B. Base de datos de declaraciones patrimoniales juramentadas : En otro ámbito, nuestra EFS desarrolló a partir del mes de agosto del año 2000, una base de datos para ingresar y procesar las declaraciones patrimoniales juramentadas que deben ser presentadas por los dignatarios, funcionarios y servidores públicos determinados en el artículo 122 de la Constitución Política y en la Ley que regula las declaraciones patrimoniales juramentadas (Ley No. 2003-4), tanto al inicio de su gestión como a la finalización de la misma y, en ciertos casos, cada cierto plazo o período intermedio. La referida base de datos cuenta en la actualidad con información detallada de 46.068 dignatarios y funcionarios públicos a nivel nacional, que incluye: el detalle de las cuentas y depósitos en bancos nacionales y extranjeros; descripción y valor de bienes inmuebles; descripción y valor de los muebles, especialmente vehículos, maquinarias y equipos , obras de arte, colecciones, joyas y similares; detalle de inversiones en papeles fiduciarios, títulos valores, acciones y participaciones; créditos por cobrar y obligaciones por pagar; detalle de tarjetas de crédito y los consumos realizados , entre otros rubros. Un punto esencial de la referida Ley es que exige que la declaración contenga información de los bienes de propiedad exclusiva del declarante, así como de los pertenecientes a la sociedad conyugal o a la sociedad de hecho, según el caso y, de los de propiedad de los hijos menores de edad. Con la información constante en esta base de datos, la Contraloría General está en capacidad de examinar las declaraciones patrimoniales juramentadas presentadas en diversos tiempos, y compararlas a fin de investigar posibles casos de enriquecimiento ilícito u otros delitos. Desde luego que la omisión de información o su ocultamiento al rendir la declaración patrimonial juramentada, implica una conducta dolosa tipificada como delito (perjurio), sin perjuicio de la responsabilidad que se derive en caso de enriquecimiento ilícito u otras conductas dolosas . La Ley No. 2003-4 amplió y precisó el espectro de los sujetos obligados a presentar declaración patrimonial juramentada y que son: los ciudadanos elegidos por votación popular, los funcionarios de libre nombramiento y remoción, los funcionarios elegidos o designados para período fijo; los miembros de la Fuerza Pública, a su ingreso a la CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 6 institución, previamente a la obtención de ascensos y a su retiro; terceras personas vinculadas con quien ejerza o haya ejercido una función pública, si existen indicios graves de testaferrismo; los servidores públicos encargados de la recepción, control, custodia e inversión de los fondos públicos, o del manejo de bienes públicos ; los integrantes de cuerpos colegiados que funcionen como órganos directivos de las instituciones del Estado; los integrantes de comités de contrataciones y otros cuerpos colegiados encargados de resolver sobre contratos a ser celebrados por las instituciones del Estado; los directivos y autoridades de los institutos de seguridad social; los directivos y autoridades de entidades y empresas sometidas al derecho privado, que manejen participaciones o fondos públicos en cualquier porcentaje; las autoridades y directivos de las universidades e institutos de educación superior, que se financien en todo o en parte con fondos públicos; los funcionarios de cuerpos colegiados, fundaciones y corporaciones bajo cuya responsabilidad se encuentre la administración y gobierno de instituciones de derecho público y privado, con finalidad social o pública, que se financien en todo o en parte con recursos públicos; los magistrados y jueces de la Función Judicial; las autoridades y directivos de los organismos de control y de las instituciones que ejerzan potestades de regulación; los funcionarios y trabajadores de la Corporación Aduanera Ecuatoriana. La falta de presentación de declaración patrimonial juramentada al finalizar la gestión del obligado, implica la presunción de enriquecimiento ilícito y da lugar a que la Contraloría General inicie un examen especial y emita la resolución pertinente, estableciendo si existen o no indicios de responsabilidad penal, en cuyo caso remitirá la documentación pertinente al Ministerio Público para la iniciación de la instrucción fiscal. La aplicación de esta facultad que le compete a la EFS de la República del Ecuador, ha viabilizado la sustanciación de varias acciones penales e investigaciones en contra de algunos jueces y funcionarios públicos, que se encuentran actualmente en trámite tanto a nivel del Ministerio Público, como de la Función Judicial. C. Sistema integrado de juicios : En otro plano, esta EFS desarrolló un sistema integrado de u j icios , que es un sistema automatizado que utiliza herramientas de última tecnología y permite la integración de toda la información que se genera en unidades jurídicas a nivel nacional, sobre el trámite que siguen los juicios en los que interviene o participa la Contraloría General del Estado. El sistema está instalado y funcionando desde el año 2004 en el Departamento de Patrocinio de la Matriz y en las Direcciones Regionales de Guayas, Azuay, Tungurahua y Loja, integrado mediante la red institucional a la base de datos centralizada y a los sistemas automatizados de control (SISCON) y de responsabilidades (SIRES). El sistema dispone de los siguientes módulos: módulo de creación de expedientes , módulo de avance del proceso y módulo gerencial. Con el primer módulo se abren virtualmente los expedientes para cada uno de los juicios de acuerdo a la materia procesal y Dirección Regional, y se registran los CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 7 datos del antecedente que dan origen al expediente. El módulo de avance procesal permite registrar toda la información histórica de las providencias, las acciones de impulso durante el proceso, el detalle de las acciones procesales que han afectado a cada uno de los implicados en el juicio, los cambios de abogado responsable del control y supervisión del juicio en el Departamento de Patrocinio, cambios de fiscal, de juez, número de expediente en cada instancia del proceso, así como las fases por las que va atravesando el juicio, además de la inclusión de nuevos sujetos en cualquier fase del proceso. Con el módulo gerencial, la información registrada en los otros módulos del sistema, proporciona información para el control y toma de decisiones a los ejecutivos de las unidades jurídicas y a las autoridades de la Contraloría General. Los principales beneficios de este sistema son los siguientes: 1. La información está almacenada en la base de datos institucional, integrada con los datos de los sistemas de control y responsabilidades , lo que permite mediante consultas gerenciales , conocer la información sobre el avance procesal de los juicios que se derivan del proceso de control, en cualquier instante. 2. Las máximas autoridades de la entidad disponen de información detallada e inmediata de cada una de las fases del avance procesal de los juicios atendidos por las unidades jurídicas, sin necesidad de acudir al expediente físico, a las tarjetas individuales de los procesados ni al abogado responsable del expediente y desde cualquier punto de red a nivel nacional, lo cual facilita el mecanismo de toma de decisiones en materia de juicios y de adopción de las estrategias más adecuadas, con base en información veraz y confiable registrada en línea por los usuarios que son fuente de los datos. 3. La EFS cuenta con información estadística inmediata. 4. Se obtiene máxima seguridad en los accesos a la información del sistema e información nacional centralizada en la base de datos institucional, lo que permite a las autoridades el conocimiento de datos sobre los juicios a nivel de la matriz y de las regionales incorporadas al sistema. En la actualidad el sistema integrado de juicios cuenta con información de 5.580 procesos. D. Convenios de cooperación interinstitucional: En lo que se refiere a convenios interinstitucionales relacionados con la lucha contra la corrupción, debemos destacar los siguientes: D.1 Convenio de Cooperación celebrado el 20 de mayo de 2004 entre la Contraloría General del Estado y el proyecto “Sí se puede”, con el objeto de brindar colaboración recíproca para llevar a cabo acciones concretas en apoyo a la lucha contra la corrupción y la impunidad en el país, a través de los siguientes mecanismos: coauspiciar eventos para mejorar las condiciones de prevención e CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 8 investigación de ilícitos, y de capacitación y desarrollo profesional, tales como cursos, seminarios, talleres y conferencias orientados a fortalecer la lucha institucional contra lo corrupción y la impunidad; coauspiciar un “Foro Anticorrupción” mensual orientado a esas mismas finalidades; colaborar con la Presidencia de la República, el Ministerio Público, la Comisión de Control Cívico de la Corrupción, la Procuraduría General del Estado y la Función Judicial, en el análisis de los mecanismos de coordinación interinstitucional vigentes, para proponer medidas de perfeccionamiento; colaborar en el mapeo de las áreas críticas que, entre las competencias asignadas a esta EFS, ofrezcan mayores oportunidades de acción y éxito. El proyecto “Sí Se Puede” es un programa sin fines de lucro auspiciado por las Agencia Internacional para el Desarrollo y su aporte a la Contraloría General del Estado en su empeño de coadyuvar en la lucha contra la corrupción y la impunidad, ha sido de gran importancia y ha arrojado excelentes resultados . En el marco del referido convenio de cooperación, destacaremos a continuación algunas de las principales actividades desarrolladas conjuntamente: 1. Curso Internacional: “El Marco Integrado de Control Interno Latinoamericano – MICIL”, realizado del 11 al 14 de enero de 2005, con el objeto de difundir los criterios definidos en el Marco Integrado de Control Interno Latinoamericano que se fundamenta en el informe COSO y bajo la premisa de que la Contraloría General debe impulsar mecanismos que coadyuven a una eficiente y eficaz gestión de los administradores del Estado, lo que implica un permanente perfeccionamiento de los sistemas componentes del control interno de las entidades y organismos sujetos a vigilancia, para lo cual lidera acciones encaminadas a la modernización de los elementos constitutivos del control interno, toda vez que las mismas contribuyen a desarrollar fortalezas dirigidas a contrarrestar la corrupción. El curso se llevó a cabo bajo la modalidad de teleforo; fue dictado por instructores mexicanos y estuvo dirigido a 17 ciudades de la República del Ecuador. 2. Seminario Taller “Criterios para una gestión seccional y local eficaz y transparente”. El Taller realizado el 9 de marzo de 2005, fue dirigido a 22 prefectos, 219 alcaldes, 91 consejeros y 893 concejales, con la convicción de que el desarrollo de la República del Ecuador se logrará con la participación de todos los sectores, y principalmente de las comunidades que integran los gobiernos seccionales y locales, y que es una verdad sin cuestionamiento que la transparencia de estos gobiernos se obtendrá fundamentalmente con la voluntad política y el compromiso para un manejo correcto de los recursos públicos a ellos encomendados. El Taller se efectuó como una primera fase de capacitación del sector público, en el marco del cumplimiento de la misión de la EFS y en aplicación a sus facultades de asesorar y capacitar a los funcionarios gubernamentales, contando desde luego con el valioso apoyo del Proyecto “Sí se puede” y el respaldo financiero de la USAID, así como con el despliegue tecnológico de la Universidad Técnica Particular de Loja, que permitió difundirlo a nivel nacional. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 9 3. Curso de auditoría forens e, realizado en Quito y Guayaquil, del 20 al 24 de junio de 2005 y del 13 al 17 de los mismos mes y año, respectivamente, dirigido a funcionarios de: la EFS, auditorías internas del sector público y asociación de bancos privados. D.2 Convenio de Cooperación Interinstitucional para la Investigación y/o Examen de Actos de Corrupción, celebrado el 19 de enero de 2001, por las siguientes partes: Ministerio Fiscal General, Contraloría General del Estado, Procuraduría General del Estado, Superintendencia de Bancos, Superintendencia de Telecomunicaciones, Superintendencia de Compañías, Subsecretaría General de la Administración Pública, Secretaría Nacional de Comunicación y Dirección Nacional de la Policía Judicial. El objetivo básico del convenio es planificar y ejecutar en forma conjunta, proyectos específicos de combate a la corrupción y a la impunidad, complementarios a las acciones que les corresponde ejercer a las partes intervinientes, en áreas como las siguientes: obtener y procesar información relativa a las acciones de lucha contra la corrupción y a sus resultados; indagaciones especiales y seguimiento de áreas y procesos críticos dentro de la administración pública; aprobación de un código de ética para los funcionarios de los organismos de control; coordinación con la Función Judicial, para establecer mecanismos de seguimiento de los procesos instaurados por presuntos delitos de corrupción; elaboración y tramitación de proyectos de ley y reglamentos para evitar prácticas de corrupción en la administración pública. Si bien este instrumento ha permitido una mayor interrelación entre las partes en la investigación de determinados casos de trascendencia, los resultados alcanzados con la ejecución del convenio no han sido evaluados en su integridad. E. Código de Ética: En octubre de 2002 se expidió el Código de Ética de los Servidores de la Contraloría General del Estado y del Auditor Gubernamental. Ese instrumento contiene los principios y valores que deben caracterizar a los funcionarios de la institución, con el objeto de contribuir al buen uso de los recursos públicos y al combate a la corrupción y a la impunidad. Si bien este hecho fue importante, más trascendencia tuvo y tiene su difusión a nivel nacional, a través de talleres realizados en el año 2004, dirigidos a todo el personal de la institución, sin distinción jerárquica ni de otra naturaleza, “como un medio para fortalecer las competencias individuales relacionadas con los principios éticos…, para promover los valores morales como sustento del trabajo para que el Código… sea siempre una realidad práctica…”2. F. Planificación estratégica3 El nuevo papel de nuestra EFS para vigilar efectivamente el uso de los recursos públicos en más de 4.500 entidades públicas y aproximadamente en 10.000 2 Informe a la Nación 2004, Contraloría General del Estado, Quito, p. 16-17. Información y texto de este acápite proporcionados por la Dirección de Planificación y Evaluación Institucional de la Contraloría General del Estado. 3 CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 10 privadas, exigido por su Ley Orgánica así como por la competitividad establecida como política del Estado ecuatoriano, le obligan a constituirse, en materia de excelencia organizacional, en el referente dentro del sector público y privado sujeto a su control, tarea difícil, en especial en un país como el nuestro, caracterizado por una estructura socioeconómica desigual, con administradores públicos ineficientes y una creciente, rápida e insostenible ola de corrupción e impunidad. Ante este panorama, nuestra EFS ha determinado que el planeamiento estratégico institucional (PEI), debe constituir una herramienta técnica para mantener una visualización del futuro institucional y determinar los escenarios de trabajo en los que la EFS debe priorizar sus acciones para responder a las competencias que le asigna su marco normativo, así como a las demandas de la población enmarcadas en ese mismo contexto. Este planeamiento estratégico con una orientación hacia la modernización de la Contraloría General del Estado, fue visualizado en cinco sistemas claramente definidos que se pueden ejecutar en forma independiente o en una gradual simultaneidad, a base de proyectos identificados como necesarios para alcanzar los objetivos previstos. La identificación de cada uno de los cinco sistemas y sus correspondientes objetivos estratégicos son los siguientes: Sistema de gestión de calidad: Diseñar e implantar el sistema de gestión basado en las normas ISO 9001 - 2000 Y 14000; lograr la certificación de los procesos claves por una entidad acreditada, para entregar servicios de calidad a las partes interesadas. Sistema de control y asesoría: Actualizar y fortalecer el sistema de control externo e interno de los entes para mejorar la eficiencia, eficacia, calidad y cobertura de las acciones de control, lograr credibilidad institucional y consolidar el sistema de control gubernamental participativo. Sistema de desconcentración: Desconcentrar las competencias hacia las direcciones regionales y delegaciones provinciales, para mejorar la eficiencia y oportunidad en la prestación de los servicios institucionales . Sistema de gestión del talento humano: Diseñar e implementar el sistema de gestión del talento humano, para fortalecer el clima y la cultura organizacional basados en valores; potenciar sus habilidades y competencia a través de una estrategia de capacitación externa e interna permanente, orientando la acción al cumplimiento de la misión institucional. Sistema de tecnología de la información: Dotar a la EFS de la plataforma tecnológica que permita desarrollar y mantener sistemas de información y análisis para atender de una manera ágil, segura y oportuna, los requerimientos de sus usuarios internos y externos. Los sistemas se encuentran debidamente respaldados con los proyectos, cronogramas de actividades y costos . Su implementación definitiva está sujeta a la obtención del financiamiento respectivo en alrededor de US $ 6.000.000. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 11 G. Ejercicio de la acción coactiva: En otro ámbito, la denominada Ley de Racionalización Tributaria que entró en vigencia el 18 de noviembre de 1999, otorgó a la Contraloría General del Estado la facultad para ejercer la acción coactiva a efectos de recaudar las obligaciones derivadas de resoluciones ejecutoriadas emitidas por el Contralor General, a favor del gobierno central y de las instituciones y empresas que no tienen capacidad para ejercer la coactiva, provenientes de responsabilidades civiles culposas, multas y órdenes de reintegro, así como también las obligaciones en general, establecidas a favor de las entidades y organismos sujetos al control de nuestra EFS, que no tengan capacidad legal para ejercer la coactiva, aun cuando aquellas no provengan de resoluciones expedidas por el Contralor General, sino de otros órganos administrativos. Esta facultad fue ratificada por la Ley Orgánica de la Contraloría General del Estado. Para poder ejecutar esta nueva competencia asignada a la EFS, el Contralor General creó en el año 2000, la Dirección de Recaudación y Coactivas (hoy denominada Dirección de Patrocinio, Recaudación y Coactivas) con ámbito nacional, y expidió las normas reglamentarias correspondientes para viabilizar el ejercicio de la acción coactiva. Desde la creación de la Dirección de Recaudación y Coactivas, hasta la presente fecha, a través del ejercicio de la acción coactiva, se ha recaudado la suma de US $ 500.000, en tanto que, cuando el ejercicio de esta acción no estaba en manos de la EFS, el monto de la recaudación anual llegaba solamente a US $ 3.0004. La nueva atribución conferida a nues tra EFS implicó diseñar y desarrollar una serie de mecanismos tendientes a ejecutar el procedimiento administrativo de ejecución, con eficacia y observancia de los preceptos constitucionales y legales , y más allá del monto efectivamente recaudado, consideramos que su principal aporte a la causa pública es haber logrado concienciar a los funcionarios y servidores públicos en general y a los administrados, que la EFS tiene la potestad de ejecutar coactivamente el cobro de las obligaciones no tributarias que se adeuden a las entidades y organismos del sector público, lo cual constituye, sin duda, una herramienta que permite resarcir los perjuicios ocasionados al Estado, derivados de una administración incorrecta de los recursos públicos 5. H. Acciones de control Finalmente, a través de las acciones de control permanentes que realiza la EFS en ejercicio de sus facultades básicas, es evidente que se ha coadyuvado en el proceso de lucha contra la corrupción, a través del establecimiento de responsabilidades administrativas y civiles culposas, así como de indicios de responsabilidad penal, 4 Datos proporcionados por la Jefatura del Departamento de Coactivas de la Dirección de Patrocinio, Recaudación y Coactivas. 5 Para ampliar sobre el tema, se puede consultar: Francisco Guerrero Celi; La Acción Coactiva de la Contraloría General del Estado; Dirección de Comunicación Institucional de la C.G.E., Quito, 2004. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 12 que han derivado en la iniciación de las acciones correspondientes por parte del Ministerio Público6. 3. ¿Su EFS ha efectuado mediciones de la corrupción en su país? ¿Qué metodología ha empleado? ¿Qué resultados ha obtenido? Explique y documente. No existe constancia ni antecedentes de que nuestra EFS haya realizado “mediciones ” de la corrupción, lo que quizá se explica tomando en cuenta que, como se señaló en el acápite introductorio, de conformidad con el marco normativo vigente, el rol preponderante en materia de lucha contra la corrupción, no le corresponde precisamente a la Contraloría General del Estado sino al Ministerio Público y a la Comisión de Control Cívico de la Corrupción. En todo caso, una apreciación general, ampliamente compartida por la ciudadanía y recogida por el editorialista César Montúfar7, es que el modelo imperante en el Ecuador de lucha contra la corrupción, está ya agotado, y que luego de todos estos años, “El resultado no ha sido la disminución de los niveles de corrupción, sino un aumento geométrico de protagonismos inocuos y de la impunidad, pues mientras los escándalos han crecido no ha ocurrido lo mismo con la capacidad del sistema para investigar y sancionar. Más aún, el resultado ha sido la pérdida casi total de la confianza entre los ciudadanos y las autoridades…”. Concluye el editorialista que “…hasta ahora, el único logro cierto de la llamada lucha “anti corrupción” ha sido el haber transform ado la vida pública nacional en una cloaca de destrucción. Por ello, la “anti corrupción” ha de desaparecer para que germine en el Ecuador una práctica renovada y genuina de ética pública”. 4. De acuerdo con su experiencia, ¿cuáles nuevas modalidades de corrupción han surgido de los procesos de internacionalización de las economías? Explique y documente. En la opinión de su EFS, en el proceso de globalización han surgido nuevas facilidades para ocultar y lavar las rentas originadas en actos de corrupción? ¿Cuáles? Explique y documente. Para ubicarnos en el tema propuesto en esta pregunta, conviene partir del concepto de corrupción propuesto por Alí Lozada Prado, según el cual es “…la conducta consistente en la violación limitada de un deber posicional por parte de uno o más decisores con el objeto de obtener un beneficio personal extraposicional y/o beneficiar a un tercero”8. Para una mejor comprensión del concepto, se ha de entender por decisor al sujeto que tiene la potestad y la responsabilidad de tomar decisiones atendiendo al interés común de un colectivo de personas., por ejemplo, el dirigente de una organización 6 Datos estadísticos y montos relativos a determinación de responsabilidades pueden consultarse en la página www.contraloria.gov.ec 7 César Montúfar; Diario “El Comercio”, 14 de septiembre de 2005, p. A4. 8 Alí Lozada Prado; Mecanismos anticorrupción en el sistema constitucional andino, (Monografía presentada para la obtención del Título de Diplomado Superior en Derecho Constitucional), Universidad Andina Simón Bolívar, 2002, p. 8. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 13 gremial o un funcionario público. Por deber posicional se ha de entender la obligación o prohibición impuesta a una persona en cuanto decisor, es decir, es un deber inherente a la posición que ocupa como gestor o garante del interés común de un colectivo de personas. Por beneficio extraposicional se ha de entender el provecho, económico o no, que obtiene el decisor corrupto, obviamente al margen de los beneficios legítimos a los que puede aspirar en razón de su posición de gestor o garante de un interés colectivo. Partiendo de lo anterior y siguiendo a Lozada Prado9, podemos señalar que la “internacionalización de la corrupción” se refleja en los siguientes fenómenos: 1. Internacionalización de la conducta violatoria del deber posicional. El proceso de globalización, que lleva consigo la transnacionalización de las operaciones mercantiles gracias al desarrollo de las nuevas tecnologías de la información, hace posible y cada vez más frecuente que los actos (conducta) de los decisores, tengan un ámbito geográfico bastante más amplio que las estrechas fronteras nacionales. Por ejemplo, si el funcionario competente de un determinado país , a cambio de un soborno, otorga a una compañía extranjera una concesión para explotar el servicio público de telefonía, es fácil suponer que el delito no se habrá ejecutado exclusivamente en ese país , sino internacionalmente. 2. Internacionalización del deber posicional. El deber inherente al funcionario público en razón de la posición de autoridad que ocupa, viene dado, tradicionalmente, por la ley. No obstante, es cada vez mayor el número de funcionarios de organismos supranacionales , que deben acatar los deberes impuestos por éstos, cuya inobservancia está sujeta a la imposición de sanciones. Así, un funcionario de la Comunidad Andina o de la Organización de Estados Americanos (OEA), puede incurrir en actos de corrupción derivados del quebrantamiento de deberes posicionales no impuestos por una ley nacional sino internacional. 3. Internacionalización del beneficio extraposicional. Todo acto de corrupción supone, para el decisor, un beneficio indebido, cuya obtención y disfrute se trata de ocultar tanto como sea posible. Desde antaño, una forma considerada eficaz para el ocultamiento del beneficio extraposicional ha sido mantenerlo fuera de las fronteras nacionales y depositarlos en los llamados “paraísos financieros”, en los que se brinde sigilo respecto de las cuentas; de este modo, el disfrute del beneficio ilícito se ha internacionalizado. La internacionalización de la corrupción es un fenómeno que forma parte de un proceso más amplio de internacionalización del delito, en cuyo contexto, la corrupción, lejos de operar sola, se integra en una dinámica compleja que la vincula a las nuevas formas de criminalidad organizada. La “nueva delincuencia”, al decir de Carlos Castresana Fernández10, presenta las siguientes características: 9 Alí Lozada Prado; Notas de clase (Módulo de combate contra la corrupción en el plano internacional), Diplomado Superior en Estudios en Prevención de la Corrupción, Pontificia Universidad Católica del Ecuador. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 14 1. Al igual que los sistemas económicos estatales, las actividades delictivas han llegado a ser interdependientes (se han internacionalizado). 2. Tales actividades se han profesionalizado, aprendiendo las características de las institucionales financieras, de los instrumentos jurídicos y de los mecanismos de control, lo que les permite optimizar sus beneficios y reducir sus riesgos. 3. Han desarrollado estructuras de carácter empresarial formalizadas en lo aparente y suficientemente organizadas en lo real. debidamente 4. Han irrumpido masivamente en los mercados lícitos, sin que por eso hayan abandonado su actividad ilícita. Así se explica que, en palabras de Castresana Fernández, “…aquellos grupos se han introducido de grado o por la fuerza en los mercados lícitos, incrementando notablemente la cantidad y la gravedad de los actos de corrupción. Entre las actividades “modernas” de la delincuencia organizada, las instituciones internacionales señalan el tráfico de mujeres y de niños, el tráfico y transporte ilegal de emigrantes, la fabricación y tráfico de armas, municiones y explosivos, el tráfico de recursos naturales (flora y fauna, hidrocarburos, minerales, joyas y metales preciosos), el control de las entidades financieras y de crédito, el control de las compañías de seguros, las obras públicas y demás contratos de las Administraciones públicas, el control de las privatizaciones de bienes y servicios públicos”11. La referida problemática se ha manifestado, en ocasiones dolorosamente en la realidad ecuatoriana, aunque no se cuenta con cifras oficiales. Principalmente, las nuevas actividades delictivas que se vinculan peligrosamente con la corrupción se relacionan con el tráfico de personas emigrantes (coyoterismo), el tráfico de menores de edad para fines de adopción o sexuales, el abuso de especies en peligro de extinción (pesca ilegal y tráfico de animales silvestres), el narcotráfico y el lavado de activos. Aunque el país cuenta con legislación punitiva respecto de estas prácticas, cuya operatividad supone la corrupción de funcionarios públicos , los incentivos económicos exceden a los riesgos, por lo que resulta difícil su control. Una nueva modalidad de corrupción que se enmarca en el planteamiento formulado en el cuestionario constituye, sin duda, el denominado lavado de activos, a través de la “conversión o transferencia de capitales de origen ilícito de un país a otro y su reinserción en el sistema económico…”, mecanismos que tienen incidencia directa “en el incremento de la delincuencia organizada transnacional…”, y que producen efectos nefastos “en la economía, en la administración de justicia y la gobernabilidad de los Estados…”, como lo plantea en su parte considerativa el proyecto de ley para reprimir el lavado de activos, que el Congreso Nacional de la República del Ecuador aprobó el 27 de septiembre de 2005, y que se encuentra en 10 Carlos Castreseña Fernández; “Corrupción, globalización y delincuencia organizada”, en La corrupción en un mundo globalizado: análisis interdisciplinar, Ratio Legis, Salamanca, 2004, pp. 214 y 215 (citado por Alí Lozada Prado en documento de análisis y colaboración para el desarrollo de este acápite). 11 Ibídem, p. 215. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 15 consideración del Presidente de la República para su sanción. Dicho proyecto de ley contempla nuevos tipos de delitos , como los que se describen a continuación: 1. Tener, adquirir, transferir, poseer, administrar, utilizar, mantener, resguardar, entregar, transportar, convertir o ser beneficiario, de cualquier manera, de activos de origen ilícito; así como asociarse para ejecutar esas actividades, organizar empresas o sociedades que tengan esos propósitos; gestionar, financiar o asistir técnicamente para hacerlos posibles . 2. Realizar por sí mismo o a través de terceros, operaciones y transacciones financieras o económicas, con el objeto de dar apariencia lícita a actividades de lavado de activos. 3. Ingres ar al país dinero de procedencia ilícita por los distritos aduaneros . 5. En la opinión de su EFS, han sido eficaces los instrumentos internacionales de lucha contra la corrupción (Convenio de Naciones Unidas, Convención Interamericana, OCDE, MERCOSUR, CAN? ¿En qué casos han mostrado su eficacia? ¿Ha recibido su EFS apoyo internacional para combatir la corrupción? Explique y documente. La internacionalización de la corrupción –en el contexto del desarrollo y globalización de la nueva criminalidad organizada- demanda, como es lógico, la internacionalización del combate contra la corrupción, proceso relativamente reciente. Según las Naciones Unidas, “el ambiente político y económico de principios del decenio de 1970, que se caracterizó por la tirantez política y por el antagonismo entre las empresas privadas extranjeras y los países en desarrollo, no era un ambiente propicio para que hubiera un acuerdo internacional sobre una forma común de enfocar el problema de las prácticas corruptas en las transacciones comerciales internacionales”12. La situación no cambió demasiado hasta el segundo lustro de la década de los noventa cuando, decididamente y sin perjuicio de algunos antecedentes, la lucha contra la corrupción fue asumida por la Comunidad Internacional como un tema relevante. En 1996 se aprobó en Caracas la Convención Interamericana contra la Corrupción (CICC), en cuya virtud los Estados Partes asumieron obligaciones de carácter internacional tanto en el nivel de las medidas internas como en el de la asistencia y cooperación interestatales. Algunas de las prescripciones de la CICC resaltan la emergente dimensión internacional del fenómeno de la corrupción: 12 Naciones Unidas, Consejo Económico y Social; Informe de la comisión de empresas transnacionales sobre su 17º período de sesiones, E/1991/31/Add.1;E/C.10/1991/17Add.1 de 4 de julio de 1991, p.2. (Citado por Jorge Malem Seña, La corrupción. Aspectos éticos, económicos, políticos y jurídicos, Gedisa, Barcelona, 2002, p. 186). CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 16 1. En el Preámbulo, se reconoce que, “a menudo, la corrupción es uno de los instrumentos que utiliza la criminalidad organizada con la finalidad de materializar sus propósitos” y que “la corrupción tiene, en algunos casos, trascendencia internacional, lo cual exige una acción coordinada de los Estados para combatirla eficazmente”. 2. Los Estados se comprometen a implementar medidas que impidan el soborno de funcionarios públicos nacionales y extranjeros (Art. III) y a sancionar tales prácticas ilícitas (Art. VIII). 3. Los Estados se obligan a sancionar penalmente la ocultación de bienes provenientes de actos de corrupción (Art. VI). 4. Los Estados Parte convienen en prestarse la más amplia asistencia judicial recíproca para la investigación y juzgamiento de los actos de corrupción (Art. XIV.1), particularmente, en materia de extradición (XIII), medidas sobre bienes (Art. XV) y secreto bancario (Art. XVI). Si bien esta normativa americana luce como un avance, en la práctica no ha arrojado frutos apreciables , por cuanto los mecanismos de asistencia jurídica mutua continúan fuertemente vinculados a la existencia de tratados específicos sobre las distintas materias, como extradición o práctica de diligencias judiciales en el extranjero, lo que limita sustantivamente las posibilidades de actuar con la misma eficacia y “plasticidad globalizada” que las operaciones corruptas . Quizá por ello, el Comité de Expertos del Mecanismo de Seguimiento a la CICC (MESICIC) ha reportado la inexistencia, hasta el momento, de solicitudes de cooperación internacional con fundamento en la mencionada Convención, lo que permite deducir su escas a efectividad práctica. La Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción (CNUCC), aprobada en el año 2003, pretender constituir un instrumento internacional innovador en materia de lucha contra la corrupción, al haber incorporado normas como las siguientes: 1. El Preámbulo, de manera más explícita que la CICC, manifiesta su preocupación “por los vínculos entre la corrupción y otras formas de delincuencia, en particular la delincuencia organizada y la delincuencia económica, incluido el blanqueo de dinero”, al tiempo que se expresa categóricamente la convicción de que “la corrupción ha dejado de ser un problema local para convertirse en un fenómeno transnacional que afecta a todas las sociedades y economías, lo que hace esencial la cooperación internacional para prevenirla y luchar contra ella”. 2. El mismo Preámbulo enuncia uno de los propósitos primordiales que inspiran la CNUCC: “prevenir, detectar y disuadir con mayor eficacia las transferencias internacionales de activos adquiridos ilícitamente y a fortalecer la cooperación internacional para la recuperación de activos”. 3. En congruencia con lo anterior, se determinan deberes relacionados con medidas para prevenir y sancionar el blanqueo de dinero (Art. 14 y 23), soborno de funcionarios públicos extranjeros y de funcionarios de organizaciones internacionales públicas (Art. 16), así como una muy desarrollada y extensa CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 17 normativa sobre cooperación internacional, tanto en materia de cooperación prejudicial y judicial (Capítulo IV) como en lo relativo a la recuperación de activos (Capítulo V) asistencia técnica e intercambio de información (Capítulo VI). 4. En lo relativo a la cooperación prejudicial y judicial, se regulan principalmente materias como la extradición (Art. 44), el traslado de personas condenadas a cumplir una pena (Art. 45), la remisión de actuaciones penales (Art. 47), investigaciones conjuntas (Art. 49) y las técnicas especiales de investigación (Art. 50). 5. Respecto de la recuperación de activos, se contempla prevención y detección de transferencias del producto del delito (Art. 52), medidas para la recuperación directa de bienes (Art.53), mecanismos de recuperación de bienes mediante la cooperación internacional para fines de decomiso (Art. 54), cooperación internacional para fines de decomiso (Art. 55), restitución y disposición de activos (Art. 57). 6. En cuanto a la asistencia técnica e intercambio de información, los Estados de comprometen a compartir métodos y técnicas eficaces para la prevención, detección, juzgamiento y sanción de la corrupción, así como información sobre el fenómeno. Como puede apreciarse, este instrumento desarrolla importantes normas tendientes a combatir la corrupción; sin embargo, su eficacia práctica aun no ha podido ser determinada, pues si bien la República del Ecuador ratificó la CNUCC, está en espera de que entre en vigencia a través de la publicación de su texto íntegro en el registro oficial. Conclusiones: 1. La EFS ecuatoriana tiene un importante papel complementario que cumplir dentro del proceso de lucha contra la corrupción; mas, los organismos a los cuales les compete constitucional y legalmente coordinar ese proceso y ejecutar acciones directas en ese campo, son el Ministerio Público y la Comisión de Control Cívico de la Corrupción. 2. En general, para que las EFS de la región puedan ejercer eficazmente las atribuciones que les compete en materia de lucha contra la corrupción, es indispensable que se fortalezca su independencia y autonomía en todos los ámbitos , a fin de asegurar que su accionar no esté sujeto a influencia alguna. En este ámbito, es conveniente que la designación de los titulares de la EFS se realice a base de un concurso público de oposición y merecimientos y que su período de actuación no coincida con el del Ejecutivo. Además, en cuanto al período para el ejercicio de la titularidad de las EFS, debería regularse para que sea de al menos seis años, a fin de que las políticas y lineamientos de cada administración, puedan ser razonablemente implementados y ejecutados. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 18 3. Siendo como es el fenómeno de la corrupción sumamente complejo, se requiere de una importante coordinación permanente entre las instituciones y organismos encargados de combatirlo, a fin de que no se diluyan los esfuerzos que individualmente pueden realizarse, sino que se consolide un gran esfuerzo nacional e internacional. Para el efecto, es necesario que en el ámbito interno se actualicen los convenios celebrados entre dichas instituciones y organismos, introduciendo en ellos cláusulas más rigurosas para su ejecución y seguimiento; y, en el ámbito internacional, es preciso que los instrumentos ya existentes, sean perfeccionados y aplicados de tal forma que, la implementación de medidas como la extradición, sea más ágil y oportuna y no, como en la actualidad, un proceso legal lleno de incidentes y resultados inciertos y casi siempre nulos . 4. Aun cuando suene retórico, es necesario que el sistema educativo imperante en nuestros países, sea rediseñado y que, como elemento esencial se imparta formación ética en todos los niveles, a fin de que los niños y jóvenes, cuando lleguen a la edad adulta y asuman la conducción del destino de nuestros pueblos, dirijan su accionar en función de los valores éticos y morales y no de intereses personales o de grupo. Por tanto, la lucha contra la corrupción es un proceso de largo plazo, para cuya implementación deben adoptarse medidas ahora, aun cuando sus resultados no puedan ser perceptibles material u objetivamente. 5. Como hemos visto, la corrupción se ha internacionalizado y por tanto, es preciso que la lucha contra ella también se internacionalice, para lo cual los estados tienen que buscar nuevos mecanismos a través de los cuales se logre arrebatar a los corruptos extranjeros los bienes y recursos que han llevado consigo a otras latitudes, y restituirlos a los respectivos países de origen; y, sobre todo, que sea posible juzgar a los ciudadanos acusados de actos de corrupción. En este sentido, es evidente la necesidad de crear un organismo o tribunal jurisdiccional de carácter internacional, que tenga capacidad de llevar a cabo ese juzgamiento. Desde luego que para llegar a concretar esta idea, se debe contar con la voluntad de los gobiernos de los países “grandes”, para desterrar prácticas corruptas que usualmente son ejercidas por empresarios, representantes y agentes de importantes compañías transnacionales, quienes generan en niveles de funcionarios y dignatarios públicos de países “pequeños”, el interés por percibir frutos ilegítimos a cambio de determinadas gestiones, acciones o conductas. Quito, octubre de 2005. CONTRALORIA GENERAL DEL ESTADO DE LA REPUBLICA DEL ECUADOR 19