revisión bibliográfica

Anuncio
 II. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
II.1.
Antecedentes
II.1.1.
Generalidades del plomo
Plomo, de símbolo Pb, deriva de la palabra plumbum. Número atómico 82 y peso
atómico 207.19. Se encuentra en el grupo 14 del sistema periódico. Es un metal
pesado, denso (densidad relativa, o gravedad específica, de 11.4 g/ml 16°C (61°F))
de color azuloso, que se empaña para adquirir un color gris mate. Es flexible,
inelástico, se funde con facilidad a 327.4 °C (621.3 °F) y hierve a 1725 °C (3164 °F),
las valencias químicas normales son 2 y 4. Es relativamente resistente al ataque de
los ácidos sulfúrico y clorhídrico, pero se disuelve con lentitud en ácido nítrico
(Emsley, 2001; Wright, 2003).
Existe naturalmente en la corteza terrestre con una concentración promedio de 10
µg/kg (Cavagnaro, 2004). Es muy común encontrar al plomo en forma de galena
(encontrándose principalmente en forma inorgánica
como sulfuro de plomo) y
combinado con otros elementos formando sustancias metálicas. (Flores y Albert,
2004). La cerusita y la anglesita son sus menas más importantes después de la
galena. También se encuentra el plomo en minerales de uranio y torio.
El hombre ha extraído este metal desde épocas remotas para aprovechar su
maleabilidad y ductibilidad en la fabricación de objetos múltiples. Debido a sus
diversas funciones ha tenido una gran importancia industrial donde se ha empleado
en grandes cantidades en la fabricación de baterías, aditivo en la gasolina,
revestimiento de cables eléctricos, producción de tuberías, cisternas, protección de
materiales expuestos a la intemperie, fabricación de municiones, pigmentos para
pinturas y barnices, fabricación de cristales, esmaltado de cerámica, litargirio,
soldadura de latas, antisépticos, como blindaje contra la radiación. Es conocido
como generador de riqueza económica debido a la gran cantidad de puestos de
4 5 trabajo que implica su extracción en la actividad minera junto con otros metales
como plata, oro y cobre (López, 2008).
Otra de las propiedades que posee el plomo es una alta resistencia a la corrosión,
en donde encuentra un amplio uso en la construcción, en particular en la industria
química, otra de las aplicaciones del plomo es que forma aleaciones con muchos
metales como: estaño, cobre, arsénico, antimonio, bismuto, cadmio y sodio que
tienen importancia a nivel industrial.
Debido a la variedad de aplicaciones que posee el plomo y la gran importancia
industrial que ha tomado este metal en la vida cotidiana, los humanos hemos
presentado una exposición excesiva a los productos del plomo, los cuales se conoce
que son tóxicos para la salud.
Producción
Los yacimientos principales de plomo están en Australia, Canadá, Estados Unidos,
y Unión Soviética. La producción minera mundial es de aproximadamente 3.300.000
ton/año, y sólo durante el año 2006 se produjeron en el mundo 3.3 millones de
toneladas de concentrados de plomo, producto de las operaciones mineras. De
éstas, los cinco países productores más importantes agrupan alrededor de 81% de
toda la producción, siendo el más importante China con alrededor de 1 millón de
toneladas de producción, le siguen Australia, Estados Unidos, Perú y México; en
América Latina se produce el 14% del total, siendo los más importantes productores
Perú (212.600 ton/año) y México (184.261 ton/año) (Informe Quincenal de la
Sociedad nacional de minería petróleo y energía.53.Mayo-II).
El interés que ha surgido en México con respecto al estudio y la prevención de los
efectos adversos para la salud que ocasionan las fuentes potenciales de intoxicación
por plomo, ha dado lugar a numerosos estudios para conocer las concentraciones
de plomo en sangre, esto, aunado a su elevada toxicidad, lo ha convertido en uno de
los principales contaminantes ambientales con potencial patológico al que está
expuesta la población humana, principalmente los niños por ser la población más
vulnerable a la intoxicación por este metal.
6 Estudios realizados recientemente por la Red Internacional para la Eliminación de
los Contaminantes Orgánicos Persistentes (IPEN), 20 pinturas de esmalte que se
comercializan en este país contienen altas concentraciones de plomo, lo que según
la organización representa un elevado riesgo para la salud de la población
principalmente niños. La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos
señaló que el plomo puede llegar a afectar el sistema nervioso en desarrollo de los
infantes, lo que reduce el coeficiente intelectual y provoca trastornos de aprendizaje.
La IPEN analizó 317 muestras de pinturas de esmalte y vinílicas provenientes de
todo el mundo, de las cuales 30 correspondieron a México (20 de esmalte y 10
vinílicas). Las 20 pinturas de esmalte que contempló el estudio de plomo en pinturas
decorativas nuevas, son de las marcas Comex, Pintusayer ICI, Optimus, Sherwin
Williams, Berel, Soriana y Contimex.
Actualmente la norma que rige los contenidos de plomo en las pinturas es la NOM 003-SSA1-1993, y en ésta se define que el nivel máximo para los productos con
plomo será de 600 partes por millón. Datos citados por la IPEN dicen que el plomo
en las pinturas es una fuente significativa de envenenamiento, que afecta
principalmente a niños menores de seis años y a mujeres embarazadas, ya que
"atraviesa la placenta, alcanzando al feto" (El Universal, 2010).
II.1.2.
Fuentes de exposición
El plomo ocurre en forma natural en el ambiente, pero las mayores concentraciones
que son encontradas en el ambiente son el resultado de las actividades humanas.
El riesgo de exposición al plomo es distinto según se está en el ambiente general o
en el ocupacional (Corey, 1989), donde la vía de absorción más importante es la
respiratoria (Corey, 1989 y Dreisbach, 1978). El plomo puede ingresar al organismo
vía alimenticia y/o tracto respiratorio en áreas en donde el aire se encuentra
contaminado, por vía oral al ingerir alimentos (especialmente los enlatados), por el
plomo que pudiera ser liberado en algunas industrias, como la de acumuladores, la
gasolina y las pinturas que lo contengan, las tuberías de agua construidas de
plomo, los recipientes como cazuelas, vasijas y/o la cerámica vidriada fundida a
7 temperaturas no muy altas (García,
2001;
Jimenez,
1993;
Organización
Panamericana de la Salud). Los niños están expuestos al plomo, además, por
algunos hábitos de vida o comportamientos tales como: comer tierra o pintura, jugar
con juguetes elaborados con este metal o cuya pintura esté contaminada, por
chupar o morder lápices de colores o crayolas, por ingerir alimentos sin lavarse las
manos, por algunos remedios caseros que son portadores de plomo y por vía
cutánea (Department of Health Services Arizona, Romieu, 2000; Silbergeld, 1997).
Así las principales fuentes no ocupacionales de este metal son los alimentos (65%),
agua potable (20%) y aire (15%).
Otra de las principales rutas de exposición al plomo es la oral, se ha determinado en
México que gran porcentaje de familias mexicanas cocinan en utensilios de
cerámica vidriada para la preparación de alimentos. Se documentó que la cerámica
vidriada es una de las principales fuentes de intoxicación que se asocia con los
niveles elevados de plomo en sangre y el consumo en ollas de barro vidriado. El
preparar y/o consumir alimentos en ollas de barro vidriado se asoció con un exceso
de 2 µg/dl en las concentraciones de plomo en sangre, esto indica la urgencia de
controlar este metal en la fabricación de piezas de alfarería rustica vidriada a baja
temperatura (Palazuelos y Romieu, 2003).
Otras fuentes de exposición oral es a través de la ingestión de plomo en los
alimentos y del ambiente, causadas por el uso del arseniato de plomo como
fungicida en las cosechas y fuentes industriales. Las cosechas pueden captar
elementos tóxicos a través de sus raíces de suelos contaminados e incluso las
hojas pueden absorber los elementos tóxicos depositados en la superficie de las
mismas. Se sabe que la cantidad del plomo transferida al alimento depende de su
forma química más bien que de su cantidad total en el suelo. Así pues, la
especiación del plomo en suelo es más importante para estimar su disponibilidad
biológica, reactividad fisicoquímica y transporte en el ambiente y dentro de la
cadena alimentaria (Yaman et al., 2000).
En estudios realizados anteriormente se ha determinado que otra de las maneras
más comunes en que los niños presenten envenenamiento de este metal, es por la
8 cantidad de plomo en el polvo de las viviendas antiguas ya que tiene una fuerte
correlación con los niveles de plomo en sangre de los niños (Meyer et al., 2005).
Por otro lado, unas de las razones por lo cual se llevó a cabo la eliminación de
plomo en la gasolina fue que la inhalación a este metal por medio de la gasolina,
contribuía a ser otra de las principales rutas de exposición. Gracias a la eliminación
de este metal en la gasolina se ha mostrado una disminución importante de la
concentración de plomo en sangre en varios países de América Latina.
II.1.3.
Toxicidad del plomo
El plomo es un metal no esencial que puede causar toxicidad en todos los grupos
de edad. El plomo es un catión divalente y se une fuertemente a grupos sulfhidrilo
de las proteínas. Mucho de la toxicidad del plomo puede ser atribuida a la alteración
de enzimas y proteínas estructurales, pero este versátil tóxico tiene muchos más
blancos.
Absorción
Los niños pequeños normalmente exploran su ambiente por la actividad vía mano boca, comportamientos que son probablemente la principal ruta de ingreso para
incrementar la admisión del plomo de un niño que vive en un ambiente con riesgos.
El plomo puede ser inhalado a través del sistema respiratorio o ingerido y absorbido
por el aparato digestivo. Tras su absorción, circula en sangre unido a los glóbulos
rojos y posteriormente se distribuye a los tejidos del hígado, riñón, medula ósea y
sistema nervioso central, finalmente se excreta por la orina, aunque una pequeña
parte se elimina por la bilis, riñones, piel, cabello, uñas, sudor y leche materna. Al
introducirse al cuerpo, los pigmentos de plomo son separados y el cuerpo los
incorpora desplazando al calcio y hierro. Básicamente se distribuye en tres
compartimientos: la sangre, los tejidos blandos (riñón, médula ósea, hígado) y el
sistema nervioso central y periférico y tejidos mineralizados (hueso y dientes). Entre
uno y dos meses, el plomo se difunde a los huesos donde se mantiene inerte y no
tóxico, aunque en ciertas situaciones como inmovilidad, embarazo y la toma de
algunas medicaciones, puede volver a movilizarse desde el hueso (Romanillos, T.
9 2007). La vida media del plomo difiere en los tres compartimientos; en la sangre es
de 35 días, en los tejidos blandos de 40 días y en el hueso varia de 25 a 32 años y
en el riñón es de 7 años (Perroni, 2003). La dosis mortal de plomo absorbido se
calcula en 0.5 g. La acumulación y toxicidad aparecen si se absorben más de 0.5
mg por día (Dreisbach y Robertson, 1995).
Los efectos tóxicos más graves son el resultado de la acción del plomo sobre el
encéfalo y sistema nervioso periférico. Las cifras de Pb en encéfalo e hígado
pueden ser de 5 a 10 veces las cifras sanguíneas. El plomo en estos tejidos se
elimina solamente en forma lenta, por los agentes quelantes del plomo. Ya que
solamente el plomo no combinado se elimina en forma eficaz por los agentes
quelantes, el aumento en la excreción del plomo, producida por dichos agentes, es
solamente temporal. Los agentes quelantes únicamente vuelven a ser eficaces
cuando se libera una nueva cantidad de plomo de su estado en combinación
(Dreisbach y Robertson, 1995).
Bioquímicamente, el mecanismo de su acción tóxica proviene de la fuerte actividad
de los cationes del plomo por el azufre. Así lo grupos “sulfhidrilo”, SH, los cuales
están presentes comúnmente en las enzimas que controlan la velocidad de las
reacciones metabólicas críticas en el cuerpo humano, se enlazan fácilmente a los
cationes metálicos ingeridos o a las moléculas que contiene el metal. Debido a que
el enlace resultante metal- azufre afecta a todas las enzimas, éstas no pueden
actuar normalmente y la salud queda afectada, a veces, de forma fatal (Manahan,
2007. En: López, 2008)
La deshidratasa del ácido δ -aminolevulínico eritrocitaria, una enzima importante en
la síntesis de la hemoglobina, es uno de los indicadores más sensibles de los
efectos del plomo. La concentración de protoporfirina eritrocitaria libre es un
indicador aun más sensible de la intoxicación por plomo. Concentraciones de
protopofirina eritrocitaria libre superiores de 25 a 50 µg/100 ml se consideran
anormales; sin embargo, debido a que se eleva también en la deficiencia de hierro,
no puede usarse diagnóstico único para el envenenamiento por plomo.
10 La fracción promedio de absorción gastrointestinal de plomo es mucho mayor en
infantes y niños jóvenes que en adultos y la absorción se ve incrementada por la
presencia de deficiencias nutricionales de Fe y Ca, que son más comunes en niños
que en adultos, sin embargo en éstos también se presenta en situación de ayunos
prolongados o en personas cuya dieta es deficiente en calcio, hierro, fósforo o zinc.
Distribución
La vía de ingreso, el tamaño de partícula y el tipo de compuesto del plomo,
determinan la concentración y la posibilidad de difusión del plomo hacia el
organismo. La inhalación del plomo se deposita en las vías aéreas. Después de la
deposición del plomo en la nasofaringe, la tráquea, los bronquios y los alvéolos,
parte de las partículas inhaladas asciende por acción de los cilios, pasa al esófago y
se absorbe parcialmente en el tracto gastrointestinal. Las partículas restantes que
llegan hasta los alvéolos, son absorbidas y pasan a la sangre. El tránsito a través de
las vías broncopulmonares depende del tamaño de las partículas y de la solubilidad
del compuesto inhalado.
Se estima que una concentración de 1 µg/m3 de plomo en el aire inhalado
determina una concentración de 1 a 2 µg/100ml de corriente sanguínea. Las
partículas que no son absorbidas, digeridas ni eliminadas en las secreciones, van a
constituir depósitos de plomo en el árbol respiratorio, que es eliminado
posteriormente por acción de cilios y macrófagos. Solo entre 35 a 50% del plomo
que alcanza el tracto respiratorio inferior es absorbido y pasa al torrente sanguíneo.
El plomo absorbido es transportado por la sangre en donde establece un rápido
equilibrio entre eritrocitos y plasma, en una proporción de 16:1 a diversos órganos y
tejidos. La fracción de plasma que se esparce libremente es distribuida
extensamente en todos los tejidos, alcanzando altas concentraciones en hueso,
dientes, hígado, pulmón, riñón, cerebro y bazo. El plomo en la sangre tiene una
estimada vida media de 35 días, en tejido suave de 40 días y en hueso de 20 a 30
años. Con la exposición crónica, la mayoría del plomo absorbido termina en los
huesos.
11 Las rutas que sigue el plomo en el organismo son similares a los movimientos del
calcio y están representadas en la Figura 1. La cinética de la distribución y
acumulación del plomo no se ha definido en el hombre directamente.
Fuente: Adaptado de Perroni, 2010
Figura 1. Vías de absorción, distribución y eliminación del plomo en el organismo
humano.
El plomo tiene una fuerte tendencia a localizarse y acumularse en los huesos, los
cuales reflejan la exposición humana acumulativa a largo plazo. El contenido de
plomo en los huesos representa aproximadamente el 90% del contenido total
corporal del metal, estimado entre 100 a 400 mg por algunos autores. Este
porcentaje de depósito es algo menor en niños debido al intenso recambio
metabólico del tejido óseo en ellos. El plomo se substituye por el calcio en la matriz ósea. Esto no es conocido por causar algún efecto de intoxicación o
envenenamiento sobre el hueso mismo. El almacenaje en el hueso probablemente
actúa como un "depósito," protegiendo otros órganos mientras sigue la acumulación
crónica.
12 El plomo que se acumula en el hueso proporciona en última instancia una fuente
para la re movilización y toxicidad continuada después de que la exposición ha
cesado (Figura 2). El contenido corporal total del plomo se llama la carga de plomo
en el cuerpo; en un estado constante, cerca del 90% de la carga en el cuerpo está
unida al hueso (Stauding, 1998).
El mecanismo tóxico del plomo esta dado por tres modalidades: una es compitiendo
con los metales esenciales, esencialmente el calcio y el zinc en sus sitios de la
inserción; otra es mediante su afinidad por los grupos sulfhidrilos (-SH) de las
proteínas, lo que significa alteración de la forma y de la función de ellas y dado a
que numerosas proteínas, entre ellas diversas enzimas, poseen grupos –SH, las
alteraciones fisiológicas pueden ser muy generalizadas en el organismo; finalmente
también actúa alterando el transporte de iones esenciales.
Excreción
El plomo es excretado por diferentes rutas; el plomo ingerido se hace
principalmente por las heces, como reflejo de la pobre absorción a nivel intestinal.
En cambio la eliminación de plomo absorbido por el organismo se hace
principalmente a través de la orina (75%), por las secreciones gastrointestinales
(16%) y por cabellos, uñas y sudor (8%). El plomo es también excretado a través de
la leche (Arrate et al., 1999).
La vida media del plomo en el organismo es en general larga y variable según los
tejidos; es casi imposible determinar la tasa de eliminación, debido a que no existen
reservorios movilizables del tejido óseo. Se conocen valores de vida media del
plomo en la sangre, tejidos blandos y huesos de aproximadamente 3-4 semanas, 4
semanas y 20-27 años, respectivamente. Cuando la excreción es lenta, la
acumulación en el cuerpo ocurre fácilmente (Stauding, 1998).
Fuente: Salud pública de México, 1998
Figura 2. Modelo biológico del plomo en hueso.
13 14 II.2.
Exposición al plomo en niños de edad preescolar
Las personas adultas son también víctimas de los efectos tóxicos del plomo. Sin
embargo, la población infantil es más susceptible debido a que el metabolismo de
un niño lo absorbe más que el adulto, ya que en los niños, al encontrarse en etapa
de crecimiento, se puede ver alterado gravemente el desarrollo normal de sus
múltiples sistemas. Las investigaciones han demostrado que los huesos y los tejidos
blandos de los niños (cerebro, riñones e hígado), aún en proceso de desarrollo,
absorben un 50% del plomo, mientras que la tasa de absorción en los adultos es de
un 20%, por esa razón es que se toma a los mismos para mostrar los deletéreos
efectos que sobre el organismo humano causa el plomo.
El envenenamiento por plomo afecta múltiples sistemas del organismo humano, en
especial
el
sistema
nervioso,
renal,
endócrino,
óseo,
gastrointestinal
y
cardiovascular. En los niños, las manifestaciones más precoces de afectación por el
plomo se presentan aún con niveles en sangre tan bajos como los 10,0 µg/dl, según
la Organización Mundial de la Salud (OMS) no debe pasar los 10 µg/dl.
El plomo ataca principalmente a los niños pues compite con el calcio y el hierro en
la nutrición infantil. El plomo ocupa el lugar del calcio, y como los niños están en
crecimiento absorben el plomo. Hemos aprendido que la contaminación se ingiere
más que respira, y sobre todo que afecta principalmente el sistema nervioso
reduciendo seriamente la capacidad intelectual, afectando el comportamiento social
y lo que es más grave afectando seriamente, hasta eventualmente la muerte, a las
víctimas.
La mayor tragedia de la intoxicación por plomo, es su comportamiento subclínico y
sus consecuencias son de daño neurológico permanente e irreversible.
En síntesis, la contaminación por plomo causa efectos nocivos en todos los niños.
No es que unos niños "se enfermen" y otros no; sino que algunos pocos tienen
manifestaciones agudas claras de la enfermedad (porque en determinado momento
se ha acumulado demasiado metal en su organismo) y la gran mayoría, sufre
15 igualmente deterioro en su función cerebral y no lo manifiesta con síntomas
específicos.
II.3.
Efectos de la exposición
La intoxicación depende del tipo de compuesto de plomo. La intoxicación crónica se
presenta generalmente por la absorción de óxidos, carbonatos y otros compuestos
solubles en el agua a través del tracto digestivo. La intoxicación aguda es menos
frecuente y suele resultar de la inhalación de partículas de óxido de plomo. La
intoxicación por plomo orgánico generalmente se debe a la inhalación de tetraetilo
de plomo, el cual es altamente volátil y liposoluble. El plomotetraetilo es aún más
venenoso que el ión (Pb+2). En el hígado se convierte en el ión Pb+ (C2H5)4. Como el
grupo de alquilo es no polar, este ión puede atravesar con mayor facilidad las capas
de membranas que los iones plomo no complejos y por lo tanto, puede atacar
enzimas en diversas zonas, tales como el cerebro. De hecho, el daño cerebral es el
síntoma que más suele presentarse en aquellos que han sido afectados por
envenenamiento agudo con plomo, en particular los niños (Amavizca, 2008). El
plomo también afecta el sistema nervioso central y daña las funciones renales. El
síntoma más común de intoxicación aguda y hallazgos patológicos incluyen
inflamación de la mucosa gastrointestinal y degeneración de los túbulos renales. Al
principio existe un estado de anorexia (ausencia de apetito), con síntomas de
dispepsia, estreñimiento y después un ataque de dolor abdominal, edemas
cerebrales y degeneración de los nervios y células musculares. Puede haber
infiltración celular alrededor de los capilares y arterias. El hígado y los riñones
muestran cuerpos de inclusión intranucleares (Dreisbach y Robertson, 1995). (Ver
Tabla 1).
Cualquier niño que presente los menores síntomas de envenenamiento, puede
desarrollar súbitamente encefalopatía aguda si las cifras de plomo en la sangre se
encuentran arriba de 80 µg/100 ml (Figura 3).
16 Tabla 1. Síntomas y signos en el diagnóstico del envenenamiento por plomo
Sugestivos
Apariencia
general
El paciente se siente
inquieto,
irritable, Palidez, línea
fácilmente
excitable, plomo, ictericia
“confuso”
Aparato
digestivo
Sabor
metálico
persistente,
ligera
pérdida del apetito,
estreñimiento leve
Sistema
nervioso
El paciente se muestra
irritable
y
poco
cooperador
Cambios
diversos
Examen de
Orina
Cambios en
la sangre
Intoxicación
incipiente
Ninguno
Excreción urinaria de
plomo mayor de 0.08
mg por día
Policitemia o anemia,
policromatofilia,
aumento en las
plaquetas, el
porcentaje de
reticulocitos es
alrededor del doble
Lineas
de
plomo,
de ictericia,
emaciación,
“envejecimiento
prematuro”, pérdida de
peso, letargia
Sabor
metálico, Náusea y vómito, dolor
intenso,
franca pérdida del abdominal
rígido,
apetito,
dolor abdomen
abdominal
ligero, estreñimiento notable,
sangre en heces
estreñimiento
Cefaleas persistentes,
ataxia,
confusión.
Cefalea
ligera, Cambios marcados en
lo reflejos, temblor,
insomnio,
espasmos
fibrilares,
desvanecimiento
trastornos
ligero palpitaciones, neuritis,
visuales,
encefalitis
irritabilidad
(alucinaciones,
aumentada
convulsiones, coma),
parálisis
Dolor
muscular, Debilidad
general,
fatiga
fácil, dolores
articulares,
hipotensión
hipertensión, aumento
en la densidad ósea
Huellas de proteína, Aumento en la prot. Y
cilindros granulosos cilindros.
escasos
Coproporfirinuria,
hematuria, glucosuria,
aminoaciduria, oliguria
Aumento de los reticulocitos. De 50 a 100
células punteadas por 100,000 eritrocitos. El
plomo en la sangre se encuentra por arriba de
60 µg/100 ml. Disminución de la hemoglobina.
Disminución en la cuenta total de eritrocitos
por debajo de 4 millones. Aumento en todas las
formas de células basófilas. Aumento en el
porcentaje de mononucleares. Anisocitosis y
poiquilocitosis. Eritrocitos nucleados presentes
en la circulación periférica. Disminución de las
plaquetas
Fuente: Dreisbach, R.H. y Robertson W.O., 1995
Saturnismo muy
Avanzado o definitivo
17 Fuente: Tomado de Agency for Toxic Substances and Disease Registry. Case Studies in
Environmental Medicine: Lead Toxicity. US Departament of Health and Human Services, Public
Health Service; 2006
Figura 3. Plumbemia y manifestaciones clínicas
La encefalopatía aguda (por ingestión de compuestos de plomo solubles o
rápidamente absorbidos) debida al plomo es rara en los adultos, pero se ha
informado de numerosos casos de niños intoxicados con pedazos de pinturas de
casas viejas. Las formas más severas de esta encefalopatía se desarrollan de
repente, con pérdida en la estructura corporal y se puede presentar coma y/o paro
cardiorrespiratorio. Algunos niños pueden presentar anemia
y dolor abdominal
antes del primer ataque de encefalopatía aguda. Los síntomas son apatía, vómito,
18 estupor, ataxia (irregularidad en las funciones del sistema nervioso), somnolencia,
hiperactividad y otros síntomas neurológicos.
II.3.1.
Mecanismo de acción
El plomo tiene gran afinidad por los grupos sulfhidrilo, en especial por las enzimas
dependientes de zinc. El mecanismo de acción es complejo; en primer lugar parece
ser que el plomo interfiere con el metabolismo del calcio, sobre todo cuando el
metal está en concentraciones bajas, el plomo altera el calcio de las siguientes
formas:
a) Reemplaza al calcio y se comporta como un segundo mensajero intracelular,
alterando la distribución del calcio en los compartimentos dentro de la célula.
b) Activa la proteinquinasa C, una enzima que depende del calcio y que interviene
en múltiples procesos intracelulares.
c) Se une a la calmodulina más ávidamente que el calcio, ésta es una proteína
reguladora importante.
d) Inhibe la bomba de Na-K-ATPasa, lo que aumenta el calcio intracelular.
Finalmente esta alteración a nivel del calcio traería consecuencias en la
neurotransmisión y en el tono vascular lo que explicaría en parte la hipertensión y la
neurotoxicidad. Por otro lado, el plomo es tóxico para las enzimas dependientes del
zinc, los órganos más sensibles a la toxicidad son el sistema hematopoyético, el
sistema nervioso central y el riñón. Interfiere con la síntesis del hem, ya que se une
a los grupos sulfhidrilos de las metaloenzimas como son la d aminolevulínico
deshidratasa, coproporfirinógeno oxidasa y la ferroquelatasa. Siendo el resultado
final, el aumento de las protoprofirinas como la zinc-protoporfirina(ZPP) y la anemia.
A nivel renal interfiere con la conversión de la vitamina D a su forma activa, hay
inclusiones intranucleares en los túbulos renales, produce una tubulopatía, que en
estadios más avanzados llega a atrofia tubular y fibrosis sin compromiso glomerular,
caracterizándose por una proteinuria selectiva. En niños se puede ver un síndrome
semejante al de Fanconi, con aminoaciduria, glucosuria, e hipofosfatemia, sobre
todo en aquellos con plombemias altas. Varias funciones del sistema nervioso
19 central están comprometidas, principalmente porque el plomo altera en muchos
pasos el metabolismo y función del calcio como explicamos previamente. El plomo
se acumula en el espacio endoneural de los nervios periféricos causando edema,
aumento de la presión en dicho espacio y finalmente daño axonal. El plomo
depositado en el hueso es importante por tres razones:
a) En el hueso se realiza la medición más significativa de exposición acumulada al
plomo. Actualmente en EEUU y México se usan los rayos X fluorescentes que
permiten la medición de plomo en el hueso (tibia), como un indicador de exposición
y acumulación, en muchos casos ayuda más que una plombemia y/o una ZPP, la
concentración de plomo en la tibia correlaciona muy bien con la exposición
acumulativa al plomo, es un método no invasivo e indoloro que por su alto costo
sólo se usa con fines de investigación.
b) El hueso es reservorio del plomo (95% del plomo corporal total está en el tejido
óseo) y puede aumentar en sangre cuando existan procesos fisiológicos ó
patológicos
que
provoquen
resorción
ósea
como
embarazo,
lactancia,
hipertiroidismo, inmovilización, sepsis, etc.
c) También es órgano blanco, ya que el plomo altera el desarrollo óseo.
II.3.2.
Neuro-comportamiento
El plomo es particularmente peligroso en niños debido al significativo retraso que
puede causar en el desarrollo neurocognositivo (Muñoz, 1993). Exposiciones
posnatales en niveles bajos de plomo han sido asociadas con efectos adversos
sobre la integración visual-motora y la destreza motora perfecta durante la niñez.
Varios efectos del plomo fueron observados en las concentraciones más bajas de
10 µg/dl, incluyendo efectos nocivos sobre la electrofisiología, la neuroquímica, el
comportamiento, las funciones cognoscitivas y el desempeño en la escuela.
Las consecuencias negativas de la exposición al plomo debajo de 5 mg/dl se han
observado en el índice de inteligencia, la atención, la integración visual-motora, las
habilidades académicas incluyendo cuentas aritméticas y de la lectura. Sin
embargo, en una publicación reciente, se han reportado asociaciones entre el déficit
neuro-comportamiento y los niveles del plomo tan bajos como 3 µg /dl. Los
20 resultados amplían estas observaciones demostrando que las funciones específicas
neuromotoras son también afectadas en niveles bajos en la exposición al plomo
durante la niñez (Despres et al., 2005).
Incluso los niveles relativamente bajos de la exposición al plomo (tan bajo como
10.0 µg/dL) disminuyen el coeficiente intelectual y la capacidad de aprendizaje. El
envenenamiento por plomo también contribuye a la anemia, disminuye el
crecimiento, y causa deterioro en el oído (NFHS, 2000).
Los niveles de 10 µg/dl deben provocar algunas medidas preventivas a escala
comunitaria. Sin embargo, los efectos de los niveles bajos, que incluyen deterioro
en el desempeño cognoscitivo, cambios en el comportamiento y decremento en el
cociente intelectual (intelligence quotient –IQ, por sus siglas en inglés) se han
observado en niveles inferiores a 10 µg/dl. Este descubrimiento está respaldado por
varios estudios hechos en diversas poblaciones (Romieu, 2003; Tang et al., 2004).
Existen evidencias científicas que indican que los efectos de salud adversos ocurren
en niveles progresivamente más bajos del plomo en la sangre de niños que en los
adultos. Los centros para el control de enfermedad (CDC), por lo tanto, han
recomendado que el objetivo de todas las actividades de prevención de
envenenamiento por plomo deba ser la reducción de niveles de plomo en sangre en
niños al menos de 10 µg/dL, y si varios niños en una comunidad tienen niveles de
plomo en sangre, en o en el exceso de 10 µg/dL, la CDC sugiere que las
actividades a nivel comunitario de la prevención estén consideradas. La
intervención debe ser iniciada, si los niveles de plomo de la sangre en niños es de
15 µg/dL; una evaluación médica completa es necesaria, si un nivel de plomo en
sangre de un niño es mayor que o igual a 20 µg/dL (Khan, 2001). El sistema
nervioso es el sistema más sensible a la exposición al plomo. Quizás no haya para
el plomo un umbral mínimo que indique el inicio de efectos neurológicos adversos
en los niños.
Se han detectado daños neurológicos a niveles de exposición que antes se
consideraba que no causarían daño (<10 µg/dL).
21 Los médicos deberían sospechar de exposición al plomo en niños puesto que en
ocasiones daños asintomáticos han experimentado efectos neurológicos asociados
a la exposición al plomo. En la Tabla 2, se presentan los principales efectos en
niños de exposición a largo plazo.
22 Tabla 2. Principales efectos adversos en niños en condiciones de exposición estable a
largo plazo, según las concentraciones sanguíneas alcanzadas por el metal
Fuente: Anónimo, 2005
23 II.3.3.
Anemia y plomo
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) anemia es la condición en la cual
el contenido de hemoglobina sanguínea está por debajo de los valores
considerados como normales, generalmente como resultado de la deficiencia de
uno o más nutrimentos esenciales, se asocia con alguno elementos (hierro, zinc,
cobre) y metales pesados como el cadmio y el plomo (Ontiveros y col, 2008).
La OMS ha estimado que el 51% de los niños menores de 4 años en países en vías
de desarrollo sufren anemia. La anemia es una de las más grandes pandemias, que
afecta principalmente a los países en desarrollo. Cerca de 3.5 billones de personas
sufren de anemia en estos países. En la mayoría de los casos es causada por
deficiencia de hierro, aunque una proporción menor es causada por deficiencias de
otros micro nutrientes tales como el Folato, o las Vitaminas A y B12 (Ontiveros y col,
2008).
La deficiencia de hierro y calcio en el organismo contribuyen a una mayor absorción
de plomo, aumentando en los niños el riesgo al envenenamiento por plomo,
especialmente en aquellos que viven en casas antiguas. La combinación de la
anemia por deficiencia de hierro y el envenenamiento por plomo puede tener graves
consecuencias en la salud de los niños y ponerlos a riesgo de sufrir de problemas
del aprendizaje y comportamiento. La principal causa nutricional de la deficiencia de
hierro se debe a una dieta que provee muy poco en nutrientes, ya que una dieta rica
en vitamina D o en lípidos pueden favorecer la absorción del plomo.
En
Latinoamérica uno de cada diez niños menores de cuatro años presenta anemia por
deficiencia de hierro.
El hierro cumple una importante labor para la fabricación de hemoglobina en el
cuerpo. Si no se cuenta con suficiente hierro disponible, la producción de
hemoglobina es limitada, lo cual afecta la producción de las células rojas de la
sangre. Una disminución en la cantidad normal de hemoglobina y células rojas en el
torrente sanguíneo se conoce como anemia. Ya que las células rojas de la sangre
son las que se encargan de llevar oxígeno a través del cuerpo, la anemia hace que
las células y los tejidos reciban menos oxígeno, afectando su funcionamiento.
24 El mecanismo de la anemia inducida por el plomo interfiere con una variedad de
enzimas de la biosíntesis del hemo, incluyendo el ácido delta-aminolevulínico (que
actúa en la síntesis del porfobilinógeno), y la ferroquelatasa (utilizada para
incorporar hierro en la protoporfirina).
El hierro tiene varias funciones en el cuerpo que se relacionan con el metabolismo
del oxígeno y especialmente en el transporte de éste por la hemoglobina. Dentro del
cuerpo el hierro existe en dos estados de oxidación: ferroso (Fe2+) o férrico (Fe3+).
Debido a que el hierro tiene una afinidad para los átomos electronegativos como el
oxígeno, nitrógeno y sulfuro, estos átomos se encuentran en los centros de unión
del hierro en las macromoléculas (Figura 4).
Figura 4. Estructura de la molécula de hierro.
El pirrol (izquierda) es un heterociclo de cinco átomos, uno de los cuales es nitrógeno. Si unimos cuatro anillos de pirrol, tal y como se ve a la derecha de la figura, obtenemos una molécula llamada porfina. Las porfirinas son complejos con iones metálicos fuertemente coloreados. Si el átomo metálico es el hierro, la porfirina resultante recibe el nombre de heme que es el compuesto responsable del intenso color rojo de la sangre: El átomo de hierro central aún posee otras dos posibilidades de unión. Así la proteína globina se une al átomo de hierro por encima del plano del anillo formando el complejo llamado hemoglobina. El otro punto de unión, situado por debajo del plano del anillo, es usado para fijar moléculas de oxígeno que son transportadas de esta manera a todo el organismo. El Plomo ocupa el lugar del hierro y se introduce en el cuerpo ya sea como ion
(Pb+2) inorgánico o como plomotetraetilo. El plomo se concentra en la sangre, en los
tejidos y en los huesos. Se sabe que los iones plomo inhiben las enzimas que
catalizan las reacciones de biosíntesis de la hemoglobina, dando lugar a un síntoma
de envenenamiento por plomo que es la anemia (Amavizca, 2008).
25 El hierro aparte de su importancia como un grupo prostético de la hemoglobina y un
grupo pequeño de enzimas, el hem es importante porque un número de
enfermedades genéticas están asociadas a deficiencias de las enzimas utilizadas
en su biosíntesis. Algunos de estos desórdenes pueden ser fácilmente
diagnosticados porque promueven la aparición del ácido δ-aminolevulínico, (ALA) y
otros intermediarios anormales del hem que tienen color y que aparecen en la
circulación, la orina y en otros tejidos tales como los dientes y los huesos.
Metabolismo del Hierro
El hierro está asociado con proteínas a través de su incorporación a la protoporfirina
IX o a través de su unión con otros ligandos. Cuando la forma ferrosa del hierro y la
protoporfirina IX forman un complejo se denomina a esta estructura como hem. Hay
un gran número de proteínas que contienen hem que están involucradas en el
transporte del oxígeno (hemoglobina), almacenamiento de oxígeno (mioglobina) y
catálisis enzimática tales como la sintasa del óxido nítrico (NOS) y la sintasa de
prostaglandinas (ciclooxigenasa).
El hierro que se consume en la dieta se encuentra como hierro libre o hierro hem. El
hierro libre es reducido de hierro férrico (Fe3+) a ferroso (Fe2+) en la superficie
luminal de los enterocitos intestinales y luego es transportado dentro de las células
a través de la acción de un transportador metálico divalente, DMT1. Cuando el
hierro hem es absorbido, el hierro es liberado dentro de los enterocitos. El hierro es
transportado a través de la membrana basolateral de los enterocitos intestinales, a
través de la acción de la proteína de transporte IREG1 (IREG1 = hierro gen
regulado por 1, también llamada ferroportina), la oxidación de la siguiente forma
ferrosa a la forma de hierro catalizada por hefaestina o la relación ceruloplasmina
enzima (ambos de los cuales son de cobre que contienen ferroxidasas). Una vez en
la circulación, el hierro se una a la transferrina y pasa a través de la circulación
portal al hígado. El hígado es el principal sitio de almacenamiento de hierro. El sitio
principal de utilización del hierro es la médula ósea en donde es utilizado en la
síntesis del hem.
26 La ferritina sérica es la principal proteína que indica el almacenamiento intracelular
del hierro en el cuerpo. Es uno de los primeros indicadores de una deficiencia en los
niveles de hierro, especialmente cuando se usa conjuntamente con otras pruebas,
como el recuento completo.
La anemia puede sospecharse clínicamente y se confirma por medio de estudios
de laboratorio (Biometría Hemática) al advertirse disminución del valor de la
hemoglobina, hematocrito o recuento eritrocitario. El recuento también da
información sobre el tamaño de las células rojas de la sangre. Las células rojas con
un nivel bajo de hemoglobina tienden a ser más pequeñas y tener menos color
(Figura 5) (Ontiveros y col, 2008).
Figura 5. Diferentes tipos de sangre con hemoglobina anormal
(a)
(b)
(c)
(d)
a y b.- La anemia falciforme es una enfermedad hereditaria de la sangre
en la cual los glóbulos rojos producen pigmento (hemoglobina) anormal.
La hemoglobina anormal hace que los glóbulos rojos adquieran forma de
media luna.
c.-
La talasanemia menor es un tipo hereditario de anemia hemolítica
menos severo. Este frotis de sangre muestra glóbulos rojos sanguíneos
de varias formas (poiquilocitosis), pálidos (hipocrómicos) y pequeños
(microcíticos), los cuales tienen menor capacidad para transportar el
oxígeno que los glóbulos rojos sanguíneos normales.
27 d.-
La anemia ferropénica es la forma más común de anemia. La
ferropénica implica una disminución del número de glóbulos rojos en la
sangre provocada por la escasez de hierro.
El recuento de reticulocitos indica el número de células rojas inmaduras que se
están produciendo. Esta prueba es útil porque indica la existencia de un problema
antes de que éste se convierta en anemia (Frantz, 2007).
II.4.
Análisis clínicos
II.4.1.
Biometría hemática
También denominada citometría o citología hemática, es uno de los estudios de
elaboración con más frecuencia utilizados para planificar tratamiento y estimar el
pronóstico para contar con un diagnóstico de mayor exactitud. Aunque esto rige
para todas las ramas de la medicina, asume especial importancia en hematología,
esta nos ayuda a establecer alteraciones en la morfología, síntesis y funciones de
las células sanguíneas (Mc Kenzie, 1991).
Las muestras de sangre son utilizadas ampliamente ya que contiene nutrientes
recientemente absorbidos que son transportados hacia los tejidos, y es por ello que
la sangre tiende a reflejar niveles de nutrientes de la ingesta dietaria y así provee un
índice del estado nutricio (Leyva y col, 2005).
La Biometría Hemática trata de un conteo de los diferentes grupos celulares
suspendidos en la sangre así como las características especiales de cada uno de
estos
grupos.
Comprende
en
general
tres
aspectos:
Fórmula
roja:
hematíes/hematocrito e índices eritrocitarios. Fórmula blanca: leucocitos totales y el
conteo diferencial de los glóbulos blancos. Plaquetas: conteo total. Cada una de
estas funciones diferentes entre sí, pero que tienen en común que las produce la
médula ósea. Los valores normales varían con relación al grupo de edad y sexo del
paciente, siendo la hemoglobina para el diagnóstico de anemia entre hombres y
mujeres y el total de leucocitos en niños, los valores con mayor grado de variación
(Ontiveros y col, 2008).
28 El recuento de los leucocitos totales es importante ya que estos luchan contra la
infección y deficiencia del organismo a través de un proceso denominado fagocitos,
en el que el glóbulo blanco encapsula a los microorganismos extraños (Fischbach,
1997). El incremento o decremento en el número total de leucocitos puede causarse
por alteraciones en la concentración de todas las líneas celulares o en forma más
común
por modificación de un tipo de leucocitos. Por esta razón, la cuenta
leucocitaria constituye una guía muy útil sobre la gravedad de la enfermedad
(Henry, 1997).
El frotis de sangre periférica suministra un medio para estudiar la sangre y
determinar las variaciones y anormalidades de estructura forma y tamaño de
eritrocitos; su contenido de hemoglobina y sus propiedades de coloración. Es útil en
el estudio de algunas alteraciones hematológicas y como indicador de la respuesta
y los efectos de diferentes tratamientos, además
que permite observar
agrupaciones de plaquetas y los glóbulos blancos, cada uno con su morfología
característica (Ontiveros y col, 2008).
II.4.2.
Análisis de orina
El análisis rutinario de orina es una medición por métodos físicos y químicos para
medir diferentes parámetros químicos y microscópicos para diagnosticar la
presencia de infecciones del tracto urinario, enfermedades renales
y otras
enfermedades globulares que producen metabolitos en la orina.
Se utiliza también para evaluar la función de los riñones, de las diferentes
hormonas que lo regulan y situaciones de la regulación de líquidos en el cuerpo
humano.
El análisis de orina se realiza como estudio rutinario de un examen médico
general para diagnosticar el estado de salud, para el control de diabetes o
enfermedades renales. También para diagnosticar infecciones crónicas del tracto
urinario. El análisis de orina puede detectar enfermedades, que en ocasiones no
29 presentan signos significativos u otros síntomas evidentes y no han sido
detectadas por el propio paciente.
Existen diferentes métodos para el análisis de orina, uno es utilizando tiras
reactivas. Es una tira de celulosa impregnada de sustancias químicas que sirve
para detectar la presencia de proteínas, glucosa, bacterias u otras sustancias en
la orina. Esta prueba permite obtener los resultados en menos de un minuto.
Según las sustancias que existan en la orina, la tira cambia de color. Los colores
que aparecen sirve para conocer si el paciente tiene o no infecciones o
enfermedades y cuáles son, también sirven para determinar el pH de la orina, la
densidad, si existen proteínas, glucosa, sangre o glóbulos blancos en la orina.
El método es rápido, sencillo y eficaz, consiste en colocar unas gotas de orina del
paciente sobre la tira y se espera a que estas reaccionen con los productos
químicos de la misma.
Análisis de orina en el microscopio
Para realizar un análisis más exhaustivo de orina que el obtenido con la tira
reactiva se utiliza un microscopio. Para realizar esta prueba, se prepara una
muestra de orina del paciente y se coloca en una fina lámina de cristal para
observarla a través del microscopio. Se examina la muestra con el microscopio a
baja potencia para identificar la existencia de sustancias extrañas de mayor
tamaño. Posteriormente, se aumenta la potencia del microscopio para identificar
células extrañas, bacterias, etc.
Para este análisis el paciente deberá tomar una muestra limpia de orina, de
preferencia la primera orina después de levantarse por la mañana, es la más
concentrada y la que tiene mayor probabilidad de mostrar anomalías. Previamente
asearse y recoger la orina en un bote estéril para análisis.
30 Resultados del análisis
El color normal de la orina puede variar de más claro a más oscuro, un color muy
oscuro (amarillo oscuro o rojizo) puede ser por causa de enfermedades del
sistema urinario, el pH de la orina fluctúa entre 4.6 y 8.0, con un promedio de 6.0
que es considerado normal, si se detectan glóbulos rojos en un análisis de orina
se deben realizar otras pruebas para detectar la causa que lo ha provocado.
La presencia de glóbulos blancos en la orina (generalmente relacionada con la
presencia de pus) puede significar que hay alguna infección, algún problema en
los riñones, la vejiga, la uretra o cualquier otra afección del sistema urinario.
II.4.3.
Análisis coproparasitoscópico
Es un estudio prescrito bajo sospecha de presencia parasitaria, larvas, o huevos de
diferentes familias de helmintos, amebas, tenias y protozoos.
Este estudio se lleva a cabo cuando el paciente presenta: diarrea, gases, dolores o
cólicos, etc.
Cuando los parásitos se alojan en el aparato digestivo, una proporción de ellos son
eliminados con las heces. Como la cantidad que se elimina en cada defecación
puede ser variable, y si hay poco número de parásitos en el intestino, también serán
escasos en las muestras que se tome, no siempre que una muestra sale negativa
se puede descartar la infección.
En los niños se recoge una muestra de una sola deposición con un hisopo estéril y
se introduce en un frasco estéril. Una vez recogida la muestra se mantiene a
refrigeración hasta el momento de entregarla al laboratorio.
En el laboratorio se incuba con una solución salina, y se coloca en la centrífuga,
para suspender la muestra se utiliza el reactivo de Faust para ver una gota de la
31 muestra en el microscopio en busca de huevecillos, amebas, cuerpos grasos,
almidón y signos de infecciones (leucocitos) también se busca sangre oculta en las
heces o visible; en estos casos puede deberse a estreñimiento.
II.5.
Espectrofotometría de Absorción Atómica
Espectrofotometría de absorción atómica en llama
La espectrofotometría de absorción atómica (AA), tiene como fundamento la
absorción de radiación de una longitud de onda determinada. Esta radiación es
absorbida selectivamente por átomos que tengan niveles energéticos cuya
diferencia en energía corresponda en valor a la energía de los fotones incidentes.
Los componentes instrumentales de un equipo de espectrofotometría de absorción
atómica son los similares a los de un fotómetro, excepto que en AA se requiere de
una fuente de radiación necesaria para excitar los átomos del analito. Estos
componentes se representan en la figura 6.
Figura 6. Componentes de un Espectrofotómetro de Absorción Atómica
32 Componentes de un espectrofotómetro de absorción atómica
1) Una fuente de radiación que emita una línea específica correspondiente a la
necesaria para efectuar una transición en los átomos del elemento analizado.
(Lámpara)
2) Un nebulizador, que por aspiración de la muestra líquida, forme pequeñas gotas
para una atomización más eficiente.
3) Un quemador, en el cual por efecto de la temperatura alcanzada en la combustión y
por la reacción de la combustión misma, se favorezca la formación de átomos a partir
de los componentes en solución.
4) Un sistema óptico que separe la radiación de longitud de onda de interés, de todas
las demás radiaciones que entran a dicho sistema. (Monocromador y red de difracción)
5) Un detector o transductor, que sea capaz de transformar, en relación proporcional,
las señales de intensidad de radiación electromagnética, en señales eléctricas o de
intensidad de corriente.
6) Un amplificador o sistema electrónico, que como su nombre lo indica amplifica la
señal eléctrica producida, para que en el siguiente paso pueda ser procesada con
circuitos y sistemas electrónicos comunes.
7) Por último, se requiere de un sistema de lectura en el cual la señal de intensidad de
corriente, sea convertida a una señal que el operario pueda interpretar (ejemplo:
absorbancia). Este sistema de lectura, puede ser una escala de aguja, una escala de
dígitos, un graficador, una serie de datos que puedan ser procesados a su vez por una
computadora, etc.
La AA en llama es a la fecha la técnica más ampliamente utilizada para determinar
elementos metálicos y metaloides. Esta técnica tienen grandes convenientes y es de
costo relativamente bajo, pudiéndose aplicar tal técnica a una gran variedad de
muestras.
Acoplado un instrumento de absorción atómica a un horno de grafito o a un generador
de hidruros se alcanzan límites de detección hasta de ppb, lo cual lo hace
33 indispensable en áreas como son: estudios de contaminación ambiental, análisis de
alimentos, análisis de aguas potables y residuales, diagnóstico clínico, etc.
Fundamentos de funcionamiento
La muestra a analizar debe ser previamente tratada para asegurar que todos los iones
a determinar se encuentren libres en solución, en el caso de muestras acuosas este no
es el problema pero en el caso de alimentos u otras matrices sólidas debe realizarse un
tratamiento previo de mineralización.
La solución a analizar se hace pasar a través del mechero, por medio de aspiración en
forma de niebla gracias al sistema de nebulizador. Los iones y átomos son excitados
por la energía recibida en la llama y al ser atravesados por el haz de luz proveniente de
la lámpara absorben parte de la energía necesaria para volver a su estado electrónico
fundamental.
Un monocromador compuesto por una red de difracción selecciona la longitud de onda
específica del elemento.
La diferencia entre la cantidad de energía proveniente de la lámpara que llega al
detector inicialmente y mientras la muestra lo atraviesa es una medida cuantificable al
alcanzar el amplificador y registrador del equipo.
La señal se traduce en unidades de concentración del analito mediante una lectura
previa de una curva de calibración del analito deseado e interpolando los valores
obtenidos. Un esquema general del funcionamiento del equipo de absorción atómica se
observa en la figura 7.
Figura 7. Funcionamiento general del espectrofotómetro de absorción atómica
Descargar