N. Machiavello. 1. Vida. Nace en Florencia en 1449. Los Medicis reinaban la ciudad. Luego pasó a una república popular. En 1512 los Medicis retoman el poder y destituyen a Machiavello. Poco después, los Medicis descubren una conspiración para echarlos del poder y es encarcelado. Ese año se murió el papa y lo sustituyó un cardenal de los Medicis y decretan una amnistía y lo liberan. Se retira de la política y se dedica a leer, escribir etc. En 1521 decidió volver a la política. Los Medicis seguían en el poder asique trato de acercarse a ellos. En 1527 hubo una nueva revuelta y los Medicis pierden el poder. Ese mismo año murió. 2. Fama. 5 años después de su muerte se editan sus obras. En 1539 son puestas en el Indice (según la iglesia todos los libros contrarios a la fe). En los años siguientes la mala fama de Machiavello se incrementa. Es condenado, llamado hereje y se le quema en efigie, se le excomulga. Esto unió a católicos y protestantes 3. Interpretaciones favorables. En los ámbitos académicos tiene buena fama. Durante la ilustración francesa se atreven a reivindicar su obra. En el siglo XIX resurge otra vez y llevan a cabo una lectura nacionalista para unificar a Italia. Se basaba sobre todo en el último capitulo de “El príncipe”. Hay una tercera lectura, la interpretación que llevan a cabo Croce Cassirer. Nos viene a decir que es “el fundador de la ciencia política”. Los anteriores a Machiavello escribían un mundo ideal. Él no decía como debía ser, sino como es. Skinner dice que fue mal interpretado porque todas las lecturas se han centrado en un libro (el príncipe). “Los discursos de la primera década” es más equilibrado, más republicano. 4. Relox de príncipes. Manuales de este tipo hay muchos, pero han sido olvidados la mayoría porque permanecían dentro de la moral cristiana. Machiavello rompe con eso. No menciona en ningún momento la religión, solo da consejos bastante cínicos para mantenerse en el poder. Se diferencia porque no se mantiene en la moral cristiana, que fueran piadosos, que respetaran a la iglesia… para que recuerden que van a morir. Machiavello no aparece ninguna mención a la religión, lo que da son consejos para mantenerse en el poder. Buen uso y mal uso de la crueldad, bien usadas pueden ser las que se hacen una vez y de golpe ya que hacen menos daño. La crueldad es un vicio. El gobernante debe tener virtudes y vicio. No es necesario cumplir tu palabra si te perjudica. Vale más ser impetuoso que precavido. 5. Pesimismo antropológico. Los hombre son malos. No existen ángeles. Envidiosos, crueles, cobardes. Con esa maldad es con lo que tenemos que trabajar. El bien y el mal son relativos pero él no entra a debatir eso. Primamos nuestro bien al bien público y esto es algo universal y parte de nuestra naturaleza. La gente que te rodea es mala. Él dice que es necesario que quien dispone de una república tiene que saber que los que le rodean son malos. Es un punto importante a tener en cuenta. El bien y el mal son relativos pero no analiza eso si no que apoya que los seres humanos miramos por nuestro bien. Un Marxista quiere cambiar el mundo y al ser humano, pero no es cuestión de educación ya que somos egoístas por naturaleza. Siempre que hay un bien para alguien hay un mal para otro. 6. Realismo político → el fin de la política. Entre el mundo y el bien hay un abismo que nunca vamos a poder saltar. Cuando el político trata de ser bueno es que su actitud irresponsable traiga la ruina de su patria. La ley debe defender muchos intereses particulares. Hacer el bien va a traer el mal personal y de la patria. La virtud política exige el mal. El bien es un lujo para los que no tienen responsabilidad política. Nuestra felicidad es gracias a la existencia de un estado, pero un estado malo. 7. La política y lo irracional → pasiones, fortuna y virtud. La realidad no es racional. El que quiera guiar debe jugar con las pasiones de los demás. La fortuna es una diosa que condiciona las circunstancias de una persona. Machiavello en parte está de acuerdo con esto. No controlamos el destino. Mediante la virtud se puede llegar a controlar. Su virtud no es bondad. Ser virtuoso puede ser, en un momento dado, ser cruel. 8. Republicanismo. No queda muy claro en “El príncipe”. Para que la república sea fuerte hay que crear leyes que favorezca los intereses privados de muchos. 9. Política y fuerza armada. El máximo argumento al que se puede apelar en la política es la fuerza. Si la fuerza es el argumento decisivo el núcleo de la actividad del político no es la bondad, es conseguir que su república esté segura. Pensar que el oro puede comprar la seguridad es ridículo. Es cuestión de tiempo que, el que tiene una fuerza militar, domine al que tiene dinero.