• • • , , , , ,, • • , • , , " , , , • • - • , " , • , • • ,• , , • , , " ,, , .' , ., • • ,, , , • • • • • , • , , , , • • • • , • , • , • , • • • , JOSE CORNEJO FRANCO DE LI1 INDEPENDENCII1 11 LI1 REFORMA EDICIONES DEL GOBIERNO DEL ESTADO DE JALISCO Guadalajara. 12 de Septiembre de 1959. N·T ~o 7-5~ 1- _ 7f-3 -31 DE LA INDEPENDENCIA A LA REFORMA • JOSE CORNEJO FRANCO DE LA INDEPENDENCIA A LA REFORMA EDlOONES DEL GOBIERNO DEL ESTADO DE JALISCO Guadalajara, 12 de Septiembre de 1959. • • • ACERCA del Grupo juvenil liberal reformista. conviene recordar la importancia que le reconoce Don Francisco Bulnes. afirmando que "el grupo · liberal reformista radical de Jalisco era formidable por el gran talento de sus miembros. su decisión por la lucha, su entusiasmo por perecer con tal de dejar asegurada la cosecha para el · día siguiente. En este grupo se encontraban inteligencias y energías privilegiadas". (1) Y nuestro Pérez Verdía pondera la significación que el Estado alcanzó en la Guerra de · Tres Años: "En Jalisco fue donde por primera . vez se habían co.n signado algunos de sus principios. (reformistas) como el de la desamortización en 1833; pero eran tan avanzados para ·el esta- o do que guardaba la sociedad no sólo entonces sino aún en 1857, que fue preciso una revolución para plantearlos y durante ella Jalisco fue el Estado ·que más luchó por su triunfo y . el que·' más 7 servicios prestó a su causa. De las treinta batallas importantes que tuvieron lugar en todo el período de campaña, quince libró en primer término o exclusivamente la División de Jalisco, de las cuales doce se verificaron en el suelo del Es, tado. Cinco veces se resistió el ejército de Miramón". (2) Esquemáticamente trazaremos el ambieJlte y qué causas motivaron la formación de UM clase tan homogénea, tan radical, tan tenaz, ti n persistente en su propósito de constituir utta Nación con sentido progresista, como se llamaban a sí mismos, ' desde su origen, los impulsores del movimiento reformista. En la región, buena parte de 10 que fueron la Nueva Galicia o la Intendencia de Guadalajara, es sensible el predominio del elemento .crio110 y el. de un lJlestizaj,e bastante diluí do, c;o~o . . . se tipifica, sobre todo, en la región de los Altos. La población regional. a falta de un florecim.iento minero, de industrias .d e consideración, o de propietarios de en.ormes latifundios, se constitu• yó por núcleos de burgueses dedicados a la ~gricultura y a la ganadería; al comercio, gir.a ndo capitales. apenas más que modestos, y pora~.te­ sanos encariñados a su obraje. Gente empT~4.e-: 8 t,eson~a. do¡::a., orgullosa. impulsiva. decidida a to~o. ip.dividualista e igualitaria. hereoera del genjo y carácter hispanos, mas detestando al gar;hupín y sintiendo mayor, afinidad con 'el in, dio. tan producto, como ella. de la misma tierra. y a ~bemos que este resentimiento se manifestó desde el siglo XVI. que se generalizó en todo el virreynato y se acentuó. entre burlas y veras. cada vez más. forjando una conciencia colectiva , en América toda; basta con recordar al jesuita Peruano Juan , Pablo Vizcardo que en su Carta habla como español americano en contra de los eSPiJ,ñ oles europeos, Y la frase tajante de nues. tro, Morelos: "Que dejen el bastón del mando, a los criollos y quedaremos en paz". (3) , ' , " A pesar de la disciplina y de los votos. en el clero. tanto secular como regular. se manifestó ,el mismo resquemor criollo. con frecuencia agresivo y , violento. , Esta condición burguesa favoreció la formadón cultural de nuestra gente. gracias a los Colegios de Santo Tomás ·1586. ' y de San Juan -1696. . regenteados por los padres de la Compañia de Jesús, hasta su expulsión en 1767. y al Seminario Conciliar de Señor San José fundado en 1700. (4) 9 De acontecimiento trascendental para la i1us~ tración de los criollos califica el padre Decorme la fundación de todos los colegi06 jesuíticos. quien también apunta la "repulsión ante el espa~ ñol déspota. rapaz y ambicioso". y la simpatía por los tipos criollos. que se advierte dentro de la Compañía. (5) De paso direm06 que en sus Colegios era característica la formación huma~ nística y el estudio de los clásicos paganos. pese a cierta oposición que hubo y que agitó antes. en nuestro país. lo que en el siglo pasado se llamó el gomismo. por los ataques del Abate Gaume. quien consideraba perjudicial ponerlos como mo~ delos a la juventud. Don Lucas Alamán seña~ ló en 1854 cómo decayeron. con el latín. los estu~ dios clásicos desde la expulsión de los jesuitas. (6) El mismo Decorme reconoce que en el siglo XVIII había una crisis de carencia literaria. no obstante el empeño de atacar tanto al gelundia~ nismo en boga. como al anquilosamiento del pe~ ripatetismo. dialéctico y verbalista. cuando ya la entonces llamada filosofía moderna corría con fortuna en Europa. Entre nosotros se fue introduciendo con ti~ midez: en los tres años del curso de Artes se leía 10 Lógica, Metafísica y Física; ésta comprendía la CosmoJogía y las Ciencias Naturales y aquí encontraron algunos jesuítas la hendidura para iniciar la renovación de los estudios filosóficos, contribuyendo a la reforma la difusión de las lenguas modernas, la venida de jesuítas europeos. no españoles, que traían las novedades, y la infiltración de libros con las nuevas ideas. Los jesuítas se empeñaron en airear el ambiente, y del método de sentar tesis basadas en el testimonio humano, aristotélico, tomista o escotista, y .del sistema ergotista empleado, y de la disputa silogística, se pasó a objetivar las cuestiones con es'píritu racionalista, procurando explicaciones comprobables gracias a los medios científicos de investigación de que se disponía. (7) En franca rebeldía, se rechazó el argumento de .autoridad; se imponía el racionalismo y los filósofos y economistas europeos empezaron a circular, hasta en traducciones españolas, que ya las había, caudal que tenía la restricción de su costo. Nuestro Dr. Maldonado se queja de ello: "Por otra parte, el crecido y alto precio a que actualmente se venden entre nosotros las obras de los publicistas de más reputación, es demaSiado exorbitante para que puedan sufrirlo 11 nue~tros . .. literatos. . .. . por la mayor parte . . pobres y de muy escasas facultades. El librero más equitativo. de esta capital está pidiendo cinqüentape. . sos fuertes por la traducción castellana del es·. . . . . . píritu de las leyes. y lo mismo sucede a propocción con las demás obras de igual clase cuyo valor· ·sube siempre en razón del ahinco con que · ~ e . . las busca y solicita". (8) ' . , .' • • • ' • • •• . · Para facilitar su docencia crearon los jesuítasi complementarias al curso general. unas Academias donde con mayor amplitud se exponían las ideas. Como un jalón que abunde en la formación intelectu~1 de los jóvenes de entonces. Íijamo$ la · . ' , estancia en nuestros Colegios del padre Francisco Javier Clavijero. El. como lo dice BeriSÚ'in. se. había "arrojado a desmontar la intrincada maleza del peripatetismo. dictando a sus. discipulos una Filosofía escolástica más racional". (9) Al tiempo de la expulsión. de aquí salió para el destierro. pero ya la simiente estaba en el surco. en campo fértil . abonado. .. " . El enciclopedismo inquietaba y empujaba: y oltaire y las comedias de Alfieri. El Contrato Social y la Riqueza. de las Naciones. el. auge. del · . Derecho Natural. toda la . abundante literatura . . ,. . . 12 , europea. así como las ideas de los ilustrados españoles. , , fueron la levadura que había de fermentar donde se conservaba un sedimento favorable. desde las ideas igualitarias entre los hombres pregonadas por Las Casas. en defensa de los in, dios. y Solórzano Pereyra abogando por los Criollos. desde el igualitarismo de las Naciones entre .sí y de los miembros d~ la sociedad política. conEorme a las tesis de Vito~ia y de Mafiana. lo mismo que la afirmación ,de Suárez que fundamenta la. existencia del Estado en el . .consenti. ' miento de los hombres y hasta en esa idea ig'u aIitaria que fue el pensamiento de Isabel la CatÓlica. '(10) tan bien arraigada en el individuali'S'n'i'o español. y con tanta arrogancia. como saltá en 'el terreno literario de nuestros clásicos y romántiCos. 10 mismo en el teatro que en la no've'la 'o 'en la poesía. en los historiadores y cronistas. y aun en los ' místicos. textos bien conocidos • pdr' 'lós letrados ' mexicanos. " 'tos sucesos ' de Francia y la independen~¡a de lóS ,Estados Unidos fueron sensibles Atii.€rica. ' Abundan "datos reveladores: solamente por 10 qJ~ reflejan cómo influencia de los mismos ' Jesuíta~; r~Petímos el nombre de Vizcardó que ' :t acha ' lÓS criollos de indolentes por no 'iniitar' a , las colonias inglesas que conqúistaroÍl ' su libero " • , , o ' • • , • , ' en :. a • '13 tad; aquí. en Guadalajara. el Vicerr~tor y ~e­ geIlte de Academias en el Colegio d~ Sa!1 Juan Bautista. Juan Antonio Montenegro. fue procesado porque manifestó proyectos de -alzalI\iento. de constitución de una República libre. con _doce pr.ovincias. cada una con su diputado, y por expresar que ni los reyes españoles tenían justo título para poseer estas tierras. ni era válido el juramento de fidelidad hecho por el Alférez Real. Añadimos que este Montenegro fue colega. en San Juan. del Dr. José Angel de la Sierra.colaborador de Hidalgo y coeditor de El Despertador Americano en 1811. (11) - - Estos y algunos datos más nos explican la formación de un ideario revolucionario. radical. afirmando que nuestras escuelas ·ya desde 1792 funcionaba la Universidad. - fueron clima propicio para la formación de personalidades que -desta<larían en el país. como los Doctores Coso Maldonado y Verdía. Don Carlos María Bustamanteo Ramos Arizpe. Gómez Parías. Garcia SaJinas. De la Rosa. Otero y los Cañedo. para no _-citar más. subrayando que no solo de la burguesía-. _sino también de las clases privilegiadas salieron quienes. pese a su condición social. se ~n­ virtíeron en rectores del pensamiento y de la ac~ión reformadora. (12) - 14 Cruz Aedo, en 1852, atacó al Seminario por su enseñanza anticuada; (13) sin embargo. tenemos. entre otros. el testimonio de que Don Francisco Severo Maldonado tradujo para sus alumnos el Tratado de las Sensac~:mes de Condillac, que circuló manuscrito; poseemos dos ejemplares coetáneos y tal vez no llegó a imprimirse. Por otra parte. no es explicable que las generaciones precursoras de la Reforma, y los mismos reformistas proliferaran en un medio antañón. hostil y anodino. habiéndose instruído en sus aulas, y menos sería posible la formación de un clero prepatado. donde hubo tantos liberales . ·quienes más. quienes menos ... y que. además, fue tan levantisco y bronco. que todavía a principios de este siglo daba quebraderos de cabeza a sus Prelados. . Cuando apenas proclamó Negrete la independencia de la Nueva Galicia. y se organizaba el nuevo gobierno, a 22 de septiembre de 1821. se instaló en el Palacio de Gobierno la Junta Patriótica de Nueva Galicia "destinada a promover. dice Pérez Verdía siguiendo a la Gaceta del Gobierno de Guadalajara. el adelanto de la ilustración. de las artes. de la agricultura y de la moral pública. Instalola el Jefe Político y a continuación el Sr. Obispo Cabañas pronunció un dis- 15 curso encomiando la educación de )a juventud como basé de todo progreso socia); la necesidad dél fomento de la agricultura y del comercio "'t omo fue'n tes de la riqueza 'p ública y cultivo dé las artes en las sociedades organizadas . • Era la primera vez que se escuchaban . en Guadalajara palabras de estímulo, que abrían nuevos horizontes al pensamiento, a la imaginación y a la actividad. La Junta se componía de nueve • Secciones: de enseñanza pública, de agricultura, de industria y 'a rte, de literatura y bellas artes, dé benefieencia pública, de política y derecho público, de estadística y .geografía, de historia natural y de ·go,bierno y economía social.: , . Formáronla más de cien personas de las 'más distinguidas por sus conocimientos y llegaron a 'presentarse muy interesantes estudios sobre problemas .importantísimos, entre ellos uno sobre canalización del Río Grande por las Haciendas de Atequi·z a, Buenavista, Cedros y Santa . Cruz". (14) . , • . , Esta Junta fue similar a las agrüpaciones 'que funcionaban en España planteando -Jos ' 'problemas nacionales y la~ soluciones 'conv~riientes'; ' y así como surgieron en la Península 'publicaciories 16 destinadas a tal objeto. aquí. entre nosotros. el pro Maldonado editó El Fanal del Imperio Me~ xicano. Gran influencia tuvieron las ideas ex~ puestas en su Pacto Social y en su Contrato de Asociación para la República de los Estados Uni~ dos del Anáhuac. ideas que repercutirían pos~ • teriormente. como la de limitar la autoridad ecle~ siástica y la de impedir la acumulación de la ri~ queza. (15) Antes de un año· el 28 de julio de 1822. ' apareció la Sociedad Guada.lajarés (sic) de Ami~ gos deseosos de la Ilustración. que se expresa~ ha en La Estrella Polar. siendo sus redactores el mismo Maldonado y Don Manuel Rioseco: fue su Presidente Don Gil Martínez y el Secre~ tario• Don José María Vallarta. Tanto la Socie~ dad ~omo la publicación fueron recibidas y vis~ tas 'con malos ojos; polares los bautizaron los tra~ dicionalistas y rehacios. Ya en su primer núme~ ro se quejan de sus adversarios. y aun luego jus~ tifican su existencia publicando la autorización que el Gobierno les concede para actuar. Su in~ f1\1.r~cia fue evidente y clarísima en los primeros hiti5ttos reformistas aquí. en Zacatecas y con ~~ez Farías en México. (16) 17 Agréguese que la aparición de las socieda~ des masónicas fueron el escape natural · para los que se sentían atraídos por los movimientos po~ líticos. en su empeño de organizar al país. en~ frentándose. bajo distintas denominaciones. du~ rante un cuarto de siglo. los progresistas que to~ do lo querían transformar. y los que no admi~ tían cambios que alteraran la posición usufruc~ tuada por tanto tiempo. Con los yorquinos identificamos a los re~ publicanos. a los federalistas. a lós progresistas. y a los liberales puros. distinguidos de los mode~ rados. tan liberales y federalistas como los pu~ ros. pero menos extremistas. Con la Federación . "pura Federación y nada de cola" proclamaba uno de sus voceros. y de aquí el sobrenombr~ de puros. se pretendían reformas sociales inaplaza~ bIes. soberanía popular. como expresión demo~ crática. y supremacía del poder civil. eco. éste. d·e aquel lejano galicanismo parlamentario que desde fines del siglo XII apareció en Francia y reapareció en el siglo XVIII. (17) • La postura liberal de los puros. intransigen~ te. combativa. revolucionaria. llegó a frailes i Clé~ rigos. como son ejemplo Fr. Francisco FreJtts\ los canónigos Don Toribio González que, ·hie 18 Secretario del Obispo Cabañas, Don José Luis Ver día , Don Juan José Caserta de quien cuentan que aceptaba, gustoso, ir a la pri~ión para "que se imponga el pueblo a ver moraditos (canónigos) en la cárcel" y que aconsejó a Comonfort "verbo áspero", sin faltar curas libera Iones como Jos Huerta, tíos y sobrino, o pintorescos como Don Andrés López de Nava. Creo que de ellos arranca el clero levantisco a que me referí. ( 18) .Ccn este motivo, "la sociedad, dice Pérez Verdía, estaba dividida profundamente ¡m sus opiniones y en sus sentimientos dominando una exaltación hasta entonces desconocida. En todas partes, lo mismo en los salones que en las calles, se hablaba de política, de religión o de filosofía no siempre con acierto, pero invariablemente con pasión; había centros de reunión liberales, como el que a diario tenía lugar en la librería y botica de Ocampo, (calle de Morelos frente al portal) y conservadores como el de la tienda de Berrueco (Avenida Colón frente al portal Matamoros). Se hacía alarde de liberalismo y D. Refugio 1. González, llegaba hasta decapitar las imágenes del Carmen cual nuevo iconoclasta. Las señoras mismas tomaban participación en las discusienes políticas y algunas se presentaban en 19 bailes y tertulias con calzado rojo para denotar que pisaban el emblema de la libertad, mientras que las de opiniones contrarias, calzaban de ver~ de, adornando sus pechos las unas con pequeñas cruces y las otras con hachitas de oro". (19) Se refiere también que las mujeres se ter~ ciaban bandas con sus colores distintivos y con inscripciones que manifestaban su posición. A Maura Ogazón, hermana del general y Goberna~ dor, le dedicaron una polka, La Ba,n da Roja, en gracia. de que se presentó a un baile adornada con banda de tal color, (20) y Don Victoriano Salado Alvarez cuenta estas anécdotas de lo ocu~ rrido en su Teocaltiche natal y que reflejan có~ mo andaban los ánimos aun en las poblaciones pequeñas: "En-Otra parte he referido el caso de la chi~ ca vestida de zagalejo rojo y con zapatos de sue~ las color verde a quien le arrojaron por befarla una docena de puros (recuérdese que los libera~ les se llamaban puros) y que tras de romper unos y tirarlos al suelo se echó otros al seno diciendo: "Puros puros a mi seno; puros mochos a mis pies". Asimismo pasó en el pueblo el caso que ha~ ce más de treinta años referí. Mi narración di~ ce así en parte, aunque omitiendo los nombres, 20 por más que se trata de gentes que hace muchos años pasaron a mejor vida. Un domingo. al salir de la misa mayor. se toparon en el atrio las dos Antonias. a quienes se llamaba las Toñas. con familiaridad propia de lugar en que todos se conocen desde que nacen. Toña Ceballos. alta. esbelta. garrida y airosa; Toña García. menudita. linda. delicada y fina. atravesaron la doble fila de varones que se formaba en el atrio para ver pasar el mujerío. La niña del mayordomo de Oblatos. con su traje verde. parecía una ninfa de los bosques. una dríada leve y aérea . cuya vida durará sólo lo que la corteza del tronco a que estaba unida; la del masonete semejaba una dia.blesa arrogante que caminara hollando la hierba de un prado de esmeralda. Pero aquel día la de Ceballos había añadido un detalle a su indumentaria: traía unido al zapa tito. tomando parte de la suela y del corte. un retrato del invictísimo general D. Miguel Miramón. ídolo de los reaccionarios y pluma de vomitar de los puros. -Miren' la colorada indecente . ·dijo la García-. Trae pisando el retrato del señor ge- 21 neral; pero es para que les ayude a correr a los suyos tras de las zurribandas que les aplica. . Sí. como las que nos dio en Calpulalpan y en Silao. . No, como las que le puso en Atenquique, en Ahualulco, en la Albarrada y en la Estancia de las Vacas. . Pues a fe que le valieron esas contra nuestro González Ortega. -·Hachera. - · ·Mocha. · .Masona. · ·Mula de Juan Chávez. · ·Manceba de Rojas. Fue la última palabra de la disputa; la Cebailo s marchó directamente contra su enemiga, la cogió por los cabellos, la zarandeó sin compasión, la alzó en vilo y levantándole las faldas dejó al descubierto dos .. columnas de mármol fundadas sobre basas de oro fino", que diría Salomón, y dos hemisferios redondos, blancos y duros como bolas de marfil en que aplicó tres golpes sonoros que resonaron hasta el interior de la iglesia. 22 Todo fue tan rápido. tan impensado. tan nuevo. que la gente que se aglomeró a toda pri- ' sa no pudo impedir ni aun comentar el caso. A Toña García la llevaron a su casa. donde cayó con fiebre de horas que la puso ' a dos dedos del sepulcro. Toña Ceballos fue separada del sitio por sus amigos y deudos. hecha una leona y gritando que quería acabar con aquella perdida." . (21) R,ubén M. Campos en El Folklore Literario de México ha recogido el siguiente sucedido: "Durante la guerra de Reforma las pasiones políticas estaban tan exaltadas. que las mujeres de Guadalajara tomaban parte en conspiraciones. propagandas y manifestaciones. llevando por distintivo el color rojo de los china.cos o el color verde de los conservadores. Una de las más entusiastas partidarias de los liberales era la poetisa doña Esther Tapia de Castellanos. la cual cierta vez no pudo eludir una invitaci6n a un banquete dado por los conservadores. A los postres fue suplicada y obligada a hablar. y entonces la ingeniosa poetisa tom6 una revancha sangrienta. pues recitó un soneto que era una in- 23 vectiva tremenda. aunque aparentemente un elo~ gio al bando conservador; pero hecho con mu~ cha habilidad. como podrá juzgarse por el te"rce~ to final. único del soneto que ha llegado a no~ sotros. en el que ingeniosamente aparecen ape~ lIidos de los preclaros prohombres liberales don Manuel Doblado. don Santos Deg/Jllado y don Esteban Coronado. como adjetivos calificativos: "jQue viva Miramón. muera Doblado! 1Viva Márquez. y muera Degollado! ¡ Muera Juárez. y muera Coronado!" (22) Conocidos son los nombres de Agustina Ra~ mírez de Rodríguez. originaria de Tequila. que ofrendó toda su familia a la causa liberal (23) Y el de la inquieta Ignacia Reachi tan impulsiva y revoltosa como el chinaco Rojas. guerrillero al~ teño. desorbitado. sin escrúpulos ni mesura. tor~ bellino de las revoluciones. como lo fue en nues~ tros días Francisco Villa; fuerzas incontenibles. que representan la explosión desbordante de los de abajo. (24) o Familias enteras se afiliaron en los dos ban~ deis. como la °de los Montenegro en la causa. ... Ii~ . bera!. De los hijos del General Don Guadalu~ pe Montenegro. murieron en la lucha José Ma~ o o . ; 24 " ría, a los 27 años, Diego a los 16, con su primo Matras, y Lauro a los 20, después de"haberse distinguido en la Campaña de Oriente, y libertado por Porey a cuenta de su juventud; ya mutilado, combatiendo siempre, lo fusiló Luciano Hernández, Da la noticia a su padre en esta forma la• • cOnlca y serena: Sor. D. J. Guadalupe Montenegro Techaluta Enero 14 de 1865 Apreciable Papa " Me alegrare que al recibir esta 'te alles sin novedad en union de toda la familia yo en este momento boya ser pasado por las armas despues de una sorpresa que me dieron Tu hijo L. Montenegro (25) En el grupo juvenil reformista, además de soldados afortunados como Ramón Corona en el Ejército de Occidente, o escritores que propagan las ideas que los alientan, vemos también a los estudiantes fogosos, que aparte de ideólogos y jacobinos, se en listan y tienen brillante ejecutoria militar; como Antonio Molina, Antonio Rosales, Miguel Cruz Aedo e Ireneo Paz, que pe_o 25 roran y gritan y combaten y arriesgan la vida, hasta perderla algunos de ellos, como Rosales, Contreras Medellín o Cruz Aedo; éste quizá el más radical y vehemente, el más atrevido, el más jacobino, como lo comprueban sus discursos que hemos conocido y sus artículos periodísticos en La Revolución editado en compañía de Vigil. VaHarta y Robles Gil. (26) Coincidía el momento revolucionario con el apogeo del romanticismo, estado sentimental. pleno de rebeldía, descendiente de la Revolución Francesa y que significó insurrecciÓn contra la regencia de la sistematización extricta del intelectualismo, predominando la espontaneidad, el sentimiento y la intuición. Poseído de un profundo escepticismo, el romántico se caracterizó por su pugna franca con las doctrinas tradicionales, por la duda religiosa, por la exaltación individualista, por su afan de originalidad y de evasión del estado presente, por su lirismo y la viveza de los colores, por su elocuencia de gran efecto. Ejemplares de nuestro primer romanticismo, literario y político a la vez, significativos en las letras y en la acción, son Don Juan de Dios Cañedo y Don Fernando Calderón, ambos de ideas 26 liberales pese a su familia, como años después Aurelio L. Gallardo. Se destacan en la primera mitad del siglo, Cañedo como político, diplomá~ tico y orador brillantísimo, como lo fue también Otero; Calderón, típicamente romántico, se alis~ tó en el ejército, sufrió persecuciones, y es el "representativo de la sensibilidad de su época" en el teatro y en la lírica. Sus poemas El sueño del tirano y El soldado de la libertad han pasa~ do a las antologías. (27) De mediados del siglo en adelante el am~ biente era propicio para la exaltación y el impul~ sivismo agresivo; caldeado el temperamento por las ideas políticas, con gusto se recibían las ma~ nifestaciones artísticas europeas. "El establecimiento del Padre Fr. Manuel de San Juan Crisóstomo Nájera como Prior dei Carmen en 1834, dice Don Luis Pérez Venus. fue la señal de la restauración de los estudios literarios en Guadalajara. pues aquel gran literato se dedicó bien pronto a ilustrar a la juventud. enseñando las bellas letras. el griego, el hebreo y otros ramos del saber humano. Bien pronto el convento del Carmen, donde había una magniH~ ca biblioteca, fue una verdadera Academia y po~ cos 'a ños después se iniciaba en Jalisco un mar~ 27 cado progreso. fundándose en 1850 las ras 'sociedades literarias". (28) • prlme~ . Herederos de esta tradición fueron los jóve~ nes a que se refiere Bulnes. en nuestra cita ini~ cial: Ignacio L. Vallarta. Emeterio Robles Gil. Antonio Molina. los Camarena. Juan Hijar y Haro. José Ma. Vigilo Antonio Pérez Verdía. Aurelio L. Gallardo. Justo V. Tagle. Lauro Guz~ mán. Epitacio J. de los Ríos. Urbano GÓmez. An~ tonio Rosales y Miguel Cruz Aedo. radicales lle'; nos de fuego todos. pero este último "el más ro~ jo y sin ser ateo. ni deísta. era un 'completo an~ ticlerical. Señalaba con pasión y vehemencia los abusos del clero y decía: • .. Es ésta la religión santa del Crucificado? Es ésa la Iglesia depOSitaria de los dogmas re~ generadores del Evangelio? .. En 1810 era el legítimo dominio del Rey de Espa·ñ a el que se defendía contra los herejes independientes: en 18,34 eran los fueros de derecho divino. contra los • herejes federalistas:• en 1853 era la dignidad na~ cional. el orden y la moral contra los herejes li~ beral.es y en 1857. es la religión contra los here~ jesdemócratas". (Discurso del 15 de septiem~ brede 1857). • 28 . Era en 1852 cuando empezó a distinguirse por un discurso que pronunció como presidente de la "Falange de Estudio". como de veinticinco años y estaba dotado de tanta imaginación como talento; cursaba Jurisprudencia y sostuvo en un acto público la tesis de la igualdad de los hijos naturales y los legítimos para la sucesión hereditaria". ( 29 ) Testigo presencial y actor en el grupo. Don José Ma. Vigil nos informa del movimiento intelectual de su tiempo: . "A principios de 1849. varios jóvenes. impulsados por una inspiración espontánea. sin maestros que seguir. sin ejemplos que imitar. se reunieron y fundaron bajo el bello y significativo nombre de la Esperanza. una sociedad literaria. que por varios años duró siendo un modelo de perseverancia. hasta que acabaron con ella sucesos puestos enteramente fuera de su voluntad. Esa asociación compuesta de jóvenes que acabában de entrar en la carrera de la vida. con el alma llena de las más hermosas ilusiones. sin más pretensión que la de aprender. sin más deseo que el de conquistar una gloria para poder ofrecer a su patria. presentaba el tierno espectáculo de una reunión de amigos. de hermanos 29 mejor dicho. en que no había lugar a ninguna pasión innoble. en que el triunfo de uno era el triunfo de todos. porque en la ardiente y generosa emulación que los impelía. cada uno se consideraba con justicia. teniendo una parte en los adelantos de sus compañeros. La Esperanza debía ser fecunda. y lo fue en efecto. pues ella puede considerarse como el punto de partida en que la juventud jalisciense combinó sus esfuerzos para marchar por la senda que le abrían los estudios literarios. deplorablemente abandonados antes ' de esa época. • .. Casi al mismo tiempo. con poca diferencia . se ' establecía bajo el título de Falange de Estudios. otra sociedad literaria. consagrada como la primera al cultivo de las bellas letras. si bien tomando desde sus principios un carácter de publiCidad a que le era lícito aspirar por la calidad de las' personas que la componían en su mayor part~ ;· formadas ya. con una carrera profesional. y habiéndose dado a conocer por trabajos individuales que les daban un puesto distinguido en nuestra naciente literatura . • . • . Guadalajara pudo contemplar entonces por primera vez. funciones literarias a que ~sistfa lo . más selecto de nuestra sociedad. oyend9.. de- 30 sarrollar en prosa y en verso ideas luminosas, es~ peranzas ardientes que ensanchaban el horizon~ te del porvenir, y hacían presagiar las más ri~ cas producciones de una juventud estudiosa y entusiasta. Tras las sociedades mencionadas vinieron sucesivamente el Liceo Dramático, el Porvenir, el Ensayo Literario, la Sociedad jalisciense de Be~ Has Artes, que aun subsiste; tras la Aurora Poé~ ticavinieron la Mariposa, el Pensamiento, el En~ sayo Literario, y hoy la· Floresta, cuya publica~ ción se proyecta; tras los esfuerzos líricos vinie~ ron los dramáticos, no interrumpiéndose desde principios de 1851 la representación de produc~ ciones nacionales en nuestros teatros, en que se conservaban como un recuerdo lejano las obras del inmortal poeta jalisciense D. Fernando Cal~ serón, y los trabajos posteriores, importantes pe~ ro aislados del malogrado Serán; tras el cultivo más o menos extenso de la literatura, vinieron las exposiciones de bellas artes y los conciertos de la Sociedad de Santa Cecilia, a demostrar que la Pintura, la Escultura, el Grabado, la Arqui~ tectura y la Música, contaban en Guadalajara con ardientes y aventajados alumnos; y por últi~ mo, tras de Villaseñor, Ríos, Cruz Aedo, Aca!. Rosales, Delgado, Alatorre y tantos otros jóve~ 31 • nes en quienes una muerte prematura secó el g.ér~ men de las más gloriosas esperanzas. una nueva falange de inteligencias escogidas continúa mar~ chando por la senda abierta bajk> tan felices aus~ picios. contribuyendo con todas sus fuerzas al porvenir y a la gloria de su patria". (30) Como La Esperanza fue el vocero de la mis~ ma sociedad. El Ensayo Literario fue el del gru~ po de La Falange de Estudios. subvencionado por el Lic. Jesús López Portillo. Gobernador del Estado. Solamente queremos citar. de las publicacio~ nes periódicas combativas. El Cantarito. y El Panderito. editados por Antonio Rosales. La Re~ volución. que a más de propagar el Plan de Ayu~ tIa. quería "herir con golpe mortal al partido je; suítico. hacer caer en pedazos los misteriosos ído; los que había adorado y para exhortar al pueblo a encadenar para siempre a la clase eclesiástica. por ser un contrasentido a la civilización". El País. periódico oficial del gobierno liberal. y el Sancho Panza y El Payaso editados por Don Ire~ neo Paz en contra del Imperio y los intervencio~ nistas. El mismo editor refiere que Maximilia~ no. por conducto del Comisario Imperial. sohci~ tó una colección. (31) • • 32 De entre estos jóvenes . debe hacerse un aparte especial. de Cruz Aedo. "joven alto . .mo~ reno. de ojos negros y vivos. de gran . int.eligen.cia y de vasta instrucción. que se había distingui~ do en Guadalajara por sus escritos en favor de la reforma"; (32) discípulo del Padre N&jera y estudiante de Jurisprudencia al incorporarse a la revolución. Salado refiere cómo los jóvenes Iibe~ rales "colocaron en un baluarte un muñeco ves~ tido de obispo. abrazando a una muñeca cori tra~ je de china poblana y con sendos letreros que 'de~ cían: ¡Muera Espinosa! . ¡Muera I~ Religión f'", (33) Y de otro lugar citamos este pasaje: • "Decir los malos días 'que dio a los beatos el famoso Miguel Cruz Aedo. sería materia de nun. ca acabar. El. en unión de Contreras MedeIlín.• González Castro. Gómez y Vigil. dirigían pláti~ cas al pueblo. hablando de cosas que hasta en~ ton ces no se habían escuchado: de abusos del .. clero. de la necesidad de . reformar lo .existente • y de poner en cintura a los que explot¡lban la credulidad del vulgo. • • • El obispo enderezó una pastoral . con mot¡~ vo de aquellas prédicas. y entonces seis mucha~ chos faltos de experiencia. pero llenos de osadía, Cruz Aedo .. Epitacio ,Ríos •. Ignacio . Vallarta. Jo~ 33 sé María Vigilo Urbano Gómez y Jesús Leandro Camarena. le dirigieron una carta que puso los pelos de punta a todos los timoratos. "Hemos colocado . -decían esos estudiantes· el dedo en la llaga; hemos tocado la fibra sensible, porque nada ama el avaro tanto como sus tesoros; en consecuencia. el monstruo herido se rebullía y pondrá en juego todas las tenebrosas maquinaciones que acostumbra. Pero ya es tarde. ilustrísimo señor; estamos en medio del siglo XIX. en que el pensamiento se transmite, con la velocidad del rayo. del uno al otro extremo de la tierra; millones de cabezas pensadoras se ocupan sin descanso del porvenir del mundo. y escarnecerán y harán añicos al embaucador que pretenda engañar al pueblo con intereses disfra.. za dos ... Se llamaba también a la pastoral documento farisaico. toque de alarma con que los conservadores pretenden preparar una reacción. mugidos de la bestia apocalíptica y otras lindezas". (3-+) Vallarta fue alumno del Seminario y del Instituto. Diputado Constituyente. Secretario de Gobierno, Gobernador. Secretario de Relaciones v Presidente de la Suprema Corte. Orador y articulista en la campaña; radical. igual a todos 34 aquellos "de cáscara amarga", como se decía, fue más atemperado, y en su profesión prestigió a las administraciones cuando se consolidaron en el poder. Vigil estudió humanidades y se formó con mayor seriedad. Su buen gusto y su cultura fueron evidentes; no abandonó nunca sus aficiones de humanista y de historiador. Durante la azarosa vida de la Reforma y de la Intervención su pluma fue infatigable; se expatrió, como Vallarta y como Gallardo, sin dejar de escribir en favor de su causa. Aurelio Luis Gallardo .. fue un romántico impenitente", que chocó con su familia por su liberalismo; como poeta nos recuerda a Espronceda y tiene, para nosotros, el interés localista que ya en otra ocasión hice resaltar. (35) Gallardo fue el autor del drama Los Mártires de Tacubaya. que enfurecía a los espectadores al grado de ocultarse el actor que la hacia de Márquez, apenas terminada la representación. Esta obra teatral ocasionó su quema en la Plaza de Armas y el destierro a su autor, que desde Manzanillo fue a dar hasta San Francisco, California. donde fundó El Republicano, en oposición al Partido Demócrata, tomando en cuenta 35 la simpatía y el apoyo que los Republicanos dieron al gobierno liberal de Juárez. Adviértase, que para los entusiastas ' del bando liberal, toda ocasión era aprovechable, ya procurándose el proselitismo, o combatiendo en todos los frentes: el periodismo, el panfleto, la literatura toda, poesía, oratoria o teatro, era buena para defender su causa o atacar la contraria. (36) . Juan José Castaños escribió y publicó Lá ¡ntervención en México, comedia en cuatro actos representada en el Teatro Principal, en marzo de 1863, a beneficio de los Hospitales de Sangre del Ejército de Oriente por una Compañía de aficionados, en la que figuraron Emeterio Robles Gil, Antonio Pérez Verdía, Joaq.u ín y José María Castaños, Salvador Brihuega y Benito Gómez Farías, entre otros. Es una alegoría, que ahora nos parecería ingenua o ñoña, pero que en tales circunstancias produjo entusiasmo contra la agresión extranjera, agresión extranjera que provocó la protesta del Cabildo EclesiástiCo de Guadalajara, en mayo del mismo año de 1862. (37) • En enero de 1863 se representó, también a beneficio de los Hospitales de Sangre del Ejército de Oriente, Un pedante como hay muchos 36 del Dr. José María Delgado, quien ya antes, en 1857, había publicado Modas del día, comedia en tres actos, donde no faltan los alfilerazos Ii~ berales. (38) Que las ocasiones no faltaban lo refiere Don Ireneo Paz a fines de 1866: "Sin embargo, en lo general sentíamos que la prudencia se empeñaba en querer abandonarnos a medida que éramos más tiranizados, y una oportunidad se nos presentó para confirmarlo con la llegada de nuestra querida compatriota la ilustre cantatriz Angela Peralta. Nos figurábamos que en ella estaba representada la República y consagramos para ella el más ferviente culto, en cada uno de nuestros corazones. Cada noche de función en el Teatro era una fiesta para todos nosotros . . La autoridad encontró que aquel entusiasmo sobrepasaba los límites y prohibió que se cantara la ópera de Los Puritanos para que no oyéramos el duo de las banderas . . En una noche fue sacado del teatro D. José M. Castaños y algunas otras personas por haber levantado demasiado las manos para aplaudir. 37 Un joven de 15 años. hijo de D. Lázaro rez persona muy respetable en Guadalajara. llevado a la cárcel por haber saludado a la ralta con mayor grado de entusiasmo que el era permitido. Péfue Peque Llegó la noche en que el Ruiseñor Mexicano cantaba por la última vez en nuestro gran Teatro de Alarcón improvisado casi para que ella lo estrenara. y el público en masa concurrió a oír por última vez a su prima donna favorita. Se cantaban diversos actos de óperas: concluyendo con el último de Un aallo in Maschera en que ella hacía el papel de paje. El joven esposo de la Peralta. que había sido mi compañero de colegio y a quien no conocíamos en Guadalajara. como Castera. sino como Eugenio Nicol por haberse educado en la casa del viejo Nicol. me comprometió delante de ella. con quienes también cultivé amistad intima. a que le dijera algo aquella noche. ¿Qué había de hacer? El talento de aquella gran artista me tenía extasiado; además: hubo otras circunstancias que no pude desatender y a riesgo de todo me presenté en pleno teatro al ser .llamada a la escena por la centésima vez y tuvequiell sabe .si el valor o la insensatez de recitarle una poe- 3& sía compuesta por mí para aquella noche. con sus alusiones indispensables . • Una de mis estrofas decía: ¡Ah! de tantas alegrías, Nos quedará la memoria! . . . Hoy las penas son impías .. . Tal vez en mejores días Amaremos más tu gloria. No se necesita agregar que mi composición fue aplaudida con frenesí. Estábamos dominados por la ley del sable y divisábamos en el porvenir una perspectiva de libertad. ¿cómo no habíamos de dar espansiones a nuestro aprisionado entusiasmo? Angela Peralta conmovida, quizás electrizada por la solemnidad del momento. se precipitó en mis brazos. significando así que estrechaba en su seno a todos los buenos mexicanos; el público se puso entonces d.elirante. El escenario se inundó materialmente de flores. y cuando ya no había flores que arrojar. llovieron sombreras. capas. abrigos de señora y cuanto se encontraba que pudiera significar una manifestación de simpatía. .. • 39 La orquesta por sí sola, sin ser impulsada por nadie, tocó ruidosas y alegres dianas. Como por encanto se llenó el teatro de cirios encendidos para sacar en procesión a la querida artista mexicana. ' Alguno dijo en medio del tumulto que era necesaria esta ovación, y fue hecho todo lo que se requería con la prontitud de un relámpago. Los gritos de entusiasmo, continuaron mientras Angela Peralta cambiaba de traje y yo pude escabullirme huyendo en parte de las consecuencias,, ' ·bien que éstas me importaban ya poco a la altura en que nos encontrábamos. Mi casa estaba cerca del teatro, la procesión pasó por allí y algunos de los que iban en ella me nombraron. empezando a pedirme a voces. Salí al balcón y saludé; pero se manifestaba gran empeño en que dijera alguna cosa. El momento se presentaba .comprometido porque el Alcalde Mayor en ·persona había dado el brazo a la Peralta para· responder mejor de la tranquilidad pública. Toda la comitiva ·estaba detenida delante de mis balcones: tuve entonces que revestirme de resolución" y pronuncié estas breves palabras: . , " ¡Saludo ' al genio! i Saludo a los que lo comprenden y lo admiran! En ese instante', en 40 que se presenta a nosotros como el símbolo de la' libertad, desearía que todas esas hachas se ~on";' virtieran en fusiles y que todos esos corazones mexicanos palpitantes de entusiasmo, fueran otros tantos cañones que pudieran volverse contra aquellos a quienes puede considerarse hoy como enemigos de la patria. Yo callé y el Alcalde Mayor hizo impulso para que la comitiva pasara adelante; pero como la multitud insistía en que yo continuara hablando, victoreé al pueblo y a la artista mexicana. saludé y me metí". (39) Pero tal vez la muestra mejor del jacobismo literario la tenemos en cierto Ramillete de Divinas Flores. Colección de composiciones amenas que dedican a la reacción varios devotos suyos. Edición de "El País", que ya dijimos era el periódico oficial, impresa en 1861. este Ramillete es antología 'de lo propio y lo ajeno, de aquí y de otras partes. con tal de que atacaran. más que despiadadamente. desbozaladamente a los clericales, conservadores y reaccionarios. (40) Termino no sin advertir que , este trabajo es incompleto. que apenas se roturó el campo. tan pródigo. en donde mucho hay que ahondar. Faltan títulos y nombres de personas; se omiten por 41 no prentender ni un catálogo bibliográfico ni un santoral chinaco. De otras culpas. Dlea culpa . • • • • I • • NOTAS l.-Francisco Bulnes: Juárez y las Revoluciones de Ayada y de Reforma. México. 1905. Pág. 333. 2.-Luis Pérez Verdia: Historia particular del Eatado de Jalisco. Guadalajara. 1911. Tomo III. Pág. 126. 3.- Véase el número de Homenaje a 'ue_ Pablo Viv··do y de la Revista de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa. Pero. Año XX Ne. 27. Abril-Junio de 1948. editado con motívo del segundo centenario del nacimiento del jesuita. En las páginas 9 a 31 se publica la Carta a los p.¡,añoles editada en Filadelfia en 1799 y reproducida en la Gaceta de Edimburgo. Probablemente Miranda no fue ajeno a la publicación y difuSión de 'la Carta; Carlos Pereyra considera este docUmento como ' "el Acta de Independencia de la, América Es"aIIola". ,, 4.-F...nciaco Javier Alegre. S. J.: Hisk>ria' de la Compafiía de Jesús en Nueva España. México. .1,M I . 43 Juan B. Iguíniz: El Colegío de San Juan Bautista de: Guadalajara. México. 1912. Gerard DecOime. S. J.: La obra de los Jesuítas Mexicanos durante la Epoca Colonial. Tomo 1. México. 1941. Luis Medioa Ascencio: El Seminario de Guadalajara de 1570. Incluido en: IV Centenario del Obispado de Guadalajara, Págs. 191-205. Guadalajara. 1948. 5.-Decorme. Págs. 363 y 376. 6.-LuC4s Alamán y Francisco Lerdo de Tejada: . . . Noticia de la vida y escritos del reverendo . padre Fray Manuel de San Juan Crisóstomo Nájera. Méjico: 1854. Pág. 11. - Alamán escribió hasta la Pág. 19 . . 7, - Marcelino Menéndez Pelayo: Historia de laS Ideas Estéticas en España. Madrid. 1920. Véase el capitulo VIII que no tiene desperdicio., por venir de, quien viene. insospechable. Aun cuando se refiere , a los .escolásticos de los siglos XVI y XVII. sus afirmaciones son más valederas para el siglo XVIII. , acentuada la decadencia. Las siguientes son palabras apodícticas: "No estaba el defecto de la escolástiaa en lo, que enseflaba mal. sino en lo que dejaba , de ensefiar; no en sus doctrinas propias. sino en poner cotos al , pensamiento. para que nunca sospe~hase que podía haber nada más allá; no en llevar al error. sino en matar el gémlen de la curiosidad. y con él muchos errores y muchas verdades. No concebían estos escolásticos degenerados la cientia como labor que debe empeflar individualmente ' las' fuerzas de cada • , , 44 • hombre en mejorarla y rectificarla cada dia. gozándose tanto por lo menos en el ejercicio racional por sí como en el resultado de la investigación. sino que la miraban como algo definitivo y perfecto. ya adqUirido por el esfuerzo de nuestros mayores. o más bien como un campo cerrado. dentro del cual podian entregar. se a juegos pueriles. Y mientras Se tapiaba así la escuela. estableciéndose por primera vez el .funesto di'vorcio entre la especulación y la acción. el mundo • experimentaba la crisis más decisiva. completábase la noción del planeta. el arte renacia. las ciencias naturales levantaban la cabeza. la critica encendia su antorcha. y voces confusas y tumultosa. arreciaban a las puertas de la antigua Sorbona". - Tomo 111. Págs. 172-173. • 8.-Francisco Severo Maldonado: El Fanal del Imperio MexlGMo. México. 1822. Tomo 1. Pág. 1. 9.-José Mariano Beristáin de Souza: Biblioteca Hispano Americana. México. 1816. Tomo l. articulo Oavijero. Pág. 353. ,. IO.-Historia de América publicada bajo la dirección ge'neral de Ricardo Levene. Bue'n os Aires. 1940. TOIIIO V. Págs. 12 a 21. II.-Publicaciones del Archivo General de la Nación. XIII. La' Vida Colonial. Los precursores ideológicos , . Tomo 1: .México. , Preliminar de Nicolás Rangel. Págs. XXXVII de la Guerra de Independencia. 1929. - a XLVII. • • 45 En el mismo volumen. Pág. 99. se sospecha del Marqués de Pánuco y de su hijo el Dr. Vizcarra. 12.- José Cornejo Franco: Documentos referentes a la fundación. extinción y restablecimiento de la Univ~rsidad de Guadalajara. Guadalajara. 19'12. Juan B. Iguiniz: La Antigua Universidad de Guada¡ajara. En Memorias de la Academia Mexicana de la Historia. Correspondiente de la Real de Madrid. Tomo m. No. 3. Págs. 332-379. México. 1914 . . • t3.-Luis Pérez Verdia: Historia de J alisco. Tomo Págs. 124 y 125. m. • H.-Luis Pérez Verdia: Historia de Págs. 187-188. Jalisco. Tomo n. 15.-Francisco Severo Maldonaclo: El Fanal del Imperio Mexicano. México. 1822. 2 Vols. En d 20. aparecen: Contrato de asociación para la Repáblica de los Estados Unidos de Anáhuac. COR pie de Imprenta de Guadalaxara. 1823. En la Pág. 180 una nota aclaratoria dice qué pliegos Se imprimieron en México y cuales en Guadalax.ara. - Con nueva numeración. el Nuevo Pacto Social prepuesto 11 111 Nación EspaDola pera su di,""i;;" en 1", próCortes de 1822 y 1823. El cuaderno No. 4 ya se denomina El Pacto Social de 108 Mexicaoes. - A continuación. el Dictamen imparcial sobre d modo de atajar proatamente la comb"stiÓD de la patria. con nueva paginación (1 a 15) fechado en 1823. 46 16..:....EI primer número de La Estrella Polar apareQió el 11 de agosto de 1822. En un Suplemento al No. 1 justifican los polares su existencia y el último que conocemos corresponde al No. 5. de fecha lo. de Diciembre de 1822. - Agradecemos a Ricardo Delgado el habemos facilitado su ejemplar. 17.- Victoriano Salado Alvarez: De Santa Anna a la RefOllna. México. 1903. Tomo n. Pág. 426. en una nota. informa de los motes aplicados a liberales y conservadores: "Los motes de hachero. tagarno. chinaco. colorado. impio. demagogo y otros. se daban a los liberales. los de mochos. cangrejos. reaccionarios y retrógrados. a los conservadores. Hacheros. según parece. se apellidó a los liberales porque en uno de los sitios de GiJadalajara. la· plebe que se unió a los asaltantes rompió puertas con hachas y cometió robos y desmanes. China ca y colorado deben de haber tenido por origen el uso de las blusas rojas característi..... al principio de los guerrilleros del Norte y después de lodo el ejército liberal. semejantes a' los trajes de la. chinas poblanas. Mochos. según parece. se llamó a los conservadores reclutados en México en 1858. que no teniendo chacós usaban sombreros de palma con el ala cortada y con una tira bla'nca que decía: "Viva la religión". Lo de cangrejos tuvo origen en la lamosa canción de Guillermo Prieto. Tagarnos se llamó a los rifleros neolonenses que trajo Vidaurri. según Se cree por una bolsa en que portaban tabaco d~ péSima clase (tagarnina) ". 47 Luis M. Rivera: Origen y significación ,frases. locuciones. refranes. adagios y usados en la República Mexicana o en giones de ella. Guadalajara. 1922. Pág. de algunas proverblos algunas re199: "Es un chinaco. Se designa así en nuestro país. desde que principiaron en el segundo tercio del siglo inmeiliato anterior las contiendas entre reformistas y conservadores. a los liberales. demócratas.• radicales y hasta jacobinos. Parece que el vocablo se deriva del az,teca xinácatl. que significa desnudo. y lo aplicaron los conservadores a sus enemigos. como sinónimo de desarrapados. sansculotes. . , Es un mocho. Locución que tuvo origen en la fronte... Norte del país en el segundo tercio del siglo próximo pasa.do. para designar a los soldados del Ejército de línea. con motivo de llevar el tocado (chacó o kepí) incompleto (mocho) de la falda,. pues que sólo tenía visera al frente. Ahora bien. como ese ejército. por defender sus 'fueros y privilegios atacados por el liberalismo. hizo causa común con los conservadores y con el Clero que también veía peligrar los suyos. se llamó por extensión mochos a todos los afiliados en el partido Conservador o Reaccionario". . ' Francisco J. Santamaria: Diccionario General de Americanismos. Méjico. 1942. "CHINACA. (Del azt. xinaca. desnudo. ~nd.) f. "Diose este nombre por desprecio a las guerrillas li- 48 berales o gavillas de gente de toda broza. no uniformada. que tanto figuraron en la última revolución". lcazb. (Propiamente. los revolucionarios de la guerra de Reforma). MOCHO. CHA. - 2. adj. fam. Apodo que en Méjico se da al religioso en general. principalmente al católico y. por extensi60. al conservador. retrógado. reaccionario. U. t. c. s. - 2. Originariamente. en el siglo pasado. signiFicaba hipócrita. solapado. falso devoto. amigo de conveniencias. - (En el "Periquillo Samiento" se hallan estas frases que lo demuestran. Dice Juan Largo: "-Estás muy mocho .•. y a la verdad esa no es virtud sino miedo. ¿Cómo escrupulizas tanto para hacer una droga. para arrastrar un muerto. ni hacerte con una parada. que ya lo haces mejor que yo? Y ¿cómo no escrupulizaste para entregar los cien pesos del payo? Pues bien: sabe que todos esos son robos con distintos nombres. Robar por roba~. todo sale a1lá. y ladrón por ladron. lo misOlO da el que roba en coche que el que roba a pie: y tan dalioso o más es el asaltador en las ciudades que el salteador de caminos. No me arrugues las cejas ni comiences a escandalizarte con tus mochetias". Cap. IV. 2a. pte.)" • 18.-Agustin Rivera: Anales Mexicanos. La Refolllla i el Segundo ImperiO. 3a. ediciÓD. Guadala¡ara. 1897. Pág. 205. Del canónÍl!o lletos: Ca~rta veanse. para muestra. estos fo- Pascuas al Canónigo ramacho. Guadalajara. 1860. y Difamadones Místicas o 8Cgunda de las Pascua'. Guadalajara. 1861. 19.-Luis Pérez Verdía: Hístoria de Jalisco. Tomo 1lI. Pág. 129. 20.-EI 6 de abril de 1861 tuvo lugar el baile l"n el patio de la Universidad en honor del Gral. Ogazón por su campaila en contra de Lozada. Pére~ Verdía: Historia de Jalisco. Tomo 111. Pág. 179. ' Maura Ogazón nació en Guadalajara en 184\. Pue la belle:la que enloqueció a los románticos y dejó este'la de leyendas: el poeta Castro y los pintores Suáret y Pamplona. Este. su primer marido. De su segundo matrimonio. con Eduardo Santos Herrera. fue su hija Alba Herrera y Ogazón. Pue magnifica amazona. cargaba pistola y acompailó a su hermano en las campañas. ' 2\.-Victoriano Salado Alvarez: Memorias. México. 1946, TolUo 1. Págs. 61-62. El mismo suceso lo refiere en su cuento. Las Nalgadas. De Autos (Cuentos y Sucedidos) Guadalajara, 1901, Pág. 153. Aquí. en una nota. alude al Dr. Agu. tín Rivera: viaje a las ruinas del Fuerte del Sombrero, San Juan de los Lagos, 1875. En la Pág. 16 cuenta Rivera. refiriéndose a la pugna entre iDsurgentes y realistas: "Estos son los realistas e independientes en 1814. que he podido averiguar. ' De ellos. unos lo fueron de acción y otros solamente de opinión. Por la lista RII- 50 terlor se echa de ver que estaban divididos en opIniones no solo los hermanos. sino también padres e hijos. Sin duda que no solo los varones sino también las señoras laguense$ estaban divididas en opiniones políticas. porque además de que con su talento se lormaban una opinión. participaban naturalmente de las de sus esposos. padres o hermanos. Oí contar a unas tias mias el caso siguiente: Da. Isabel Moreno. Sra. similatua. conocida con el sobrenombre de la Pimpinela. mui alecta a la causa de la Independencia, y Da. Ana Jaso. Sra. mui gorda y mui realista. tuvieron una cuestion por diversidad de opiniones. Pasado algún tiempo. al subir Da. Ana por las gradas del atrio de la iglesia parroquial. Da. Isabel con mucha destreza y prontitud. le levantó el túnico y las enaguas interiores, y le pegó con la palma de la mano en las nalgas". 22.-Rubén M. Campos: El Folklore Literario de México. 1929. Pág. 590. 23.-V éanse biografias de Agustina Ramirez en: Enrique M. de los Rios y otros: Liberales Ilustres Mexicanos. México 1890. Laureana Wrlght de Klelnhans: Mujeres notables mexicanas. México. 1910.. Carlos Hernández: Mujeres célebres de México. San Antonio. Texas. 1918. 24.-Antonio Rojas nació en el Rancho del Buey, Cerrogordo. curato de Tepatitlán. en 1818. Guerrillero infatigable. corren de él anécdotas pintorescas y ac- . 51 • clones de crueldad extrema; murió. perseguido por Berthelin. "disparando su rifle contra los invasores". Véase Ireneo Paz: Algunas campañas. México. 1884 y Leyendas Históricas. Segunda Serie. Leyenda primera Aatoaio Rojas. Segunda edición. México; 1895• • 25._ Tengo a la vista. autógrafo. el dommento transcrito. En El Pais. del jueves 31 de octubre de 1867 · Tomo VII. No. 134 se publica la relación que Dn. J. Guadalupe Montenegro hizo "a la junta encargada de recoger los datos relativos a los crimenes cometidos durante la intervención y el imperio". En ella se refieren los servicios prestados por la familia Montenegro. bajo el título de Apuntes para la Historia. 26.-Acerca de los periódicos. tanto conservadores como liberales. que circularon en este tiempo .asi como sus redactores. es imprescindible el estudio de Juan B. Iguiniz; El Periodismo en Guadalajara. 1809-1915. que apareció en los Anales del Museo Nacional. México. 1932. Tomo VII. y reimpreso en Guadalajara. en 1955 en 2 volúmenes. A nuestro intento. solamente el tomo 1. 27.-Carlos Gonzélez Pef",,: Historia de la !-iteratura Mexicana. Quinta edición. México. 1954. Pág. 234. 28.-Luis Pérez Verdia: Historia de Jalisco. Tomo III. Pág. 540. Alamán y Lerdo de Tejada. citados en la nota 6. 29.-Luis Pérez Verdía: Historia de Jalisco. Tomo III. Págs. 127-129. 52 Este discurso de Cruz Aedo lo refutó d ministro de la Parroquia de Encamación. Juan de Dios de la Te>rre. en su folleto impreso en San Juan de los Lagos. 1857. fechado a 10 de octubre del mismo año. , " En el discurso leido en el Instituto. ello. de mayo de 1852. en el segundo aniversario de la Falange de Estudios. censuró Cruz Aedo la enseñanza que impartia el Seminario de Guadalajara (Págs. ti a 17). - El Rector del Seminario. Dr. Francisco Espinosa. en el Informe anual fechado el 4 de noviembre de 1855. dice textualmente. en cIara referencia a las críticas de Cruz Aedo: "Cuando voy a informar el estado que guarda el Seminario Conciliar de Guadalajara con respecto a la educación que el mismo proporciona a los jóvenes JIIue de todas partes vienen ansiosos de saber. quiero se tenga presente que a ninguno se obliga a recibir lecciones en esta casa. que a ella todos se acercan por su voluntad. y aun frecuentemente multiplican sus empellos para ser admitidos en la misma. y por esto nadie tiene derecho a quejarse del establecimiento. ni a censurar el método de su ensellanza. que si bien se procura su conformidad a las exigencias de la época. siempre ha de estar muy distante de las exageracion~: quiero entiendan todos. que la base de la educación en este establecimlcn~" es la Religion y la Moral no acomodada a las ideas de cada uno. que pretenda sujetar los dogmas sacrosantos. los preceptos inmaculados. las divinas Escrituras. las venerables tradiciones y las doctrinas celestiales a sus caprichos: sino segun nos la enseña la Iglesia Ca- 53 tólica fundada por Nuestro Seí'ior Jesucristo. a cuya autoridad infalible deben someterse todas las inteligencias. porque el que no escucha a la Iglesia. dice al eterna verlad. debe ser tenido como infiel y publicano: quiero. por último. asentar con toda la seguridad que infunde la convicción mas profunda. que el verdadero progreso no consiste en reproducir los errores abortados por el abismo que mas há de diez y ocho siglos combaten las santas verdades. ni los delirios e infamias del último siglo. que de todas maneras atacaron el culto católico. que colocaron la razón en las aras consagradas al rey inmortal de los siglos. que adoraron la prostitucion mas infame. que corrompieron las costumbres públicas y privadas. que destruyeron desde sus hondos cimientos las sociedades mejor establecidas. que entronizaron el robo y el asesinato. y que inundaron. por último. de sangre los pueblos y ciudades". El 17 de septiembre de 1855 .. aniversario de las víctimas de la Patria" pronunció Cruz Aedo otro discurso. en el Instituto. que fue refutado por Miguel Espaí'ia. y en México. en la Imprenta de Vicente Segura. se publicó otro folleto. sarcástico: Intervalo lúcido de Miguel Cruz Aedo, en forma de diáiogo y supuestllmeúte suscrito por Cruz Aedo el 25 de septiembre de 1855. Que este muestrario quede como pequeña referencia al tono polémico de aquella época. tan prolifera en literatura panfletaria y de la cual ya se ocupa el Lic. Alberto Rosas Benítez. 54 30._ José María Vigil: Flores de Anáhua~. CómJlOSldones en verso. Guadalajara. 1866. Ver la InlroducciÓd. Págs. 4 a 7. 31.-lreneo Paz: Algunas CamJlailas. Primera Parte. Segunda Edición. México. 1884. Págs. 165 a 171. 32._ Niceto de Zamacois: Historia de Méjico. Barcelona. MéjicO. 1880. Tomo 15. Pág. 357 . • 33._ Victoriano Salado Alvarez: De Santa Anna a la Re• forma. México. 1903. Tomo 11. Pág. 526. 304.-Salado Alvarez: De Santa Anna a la Reforma. IlI. Págs. 402 a 404. 35.-Aurelio Luis Gallardo: Leyendas y Romances. San Francisco. Calif. 1868. Segunda Edición. Guadalajara. 1952. con una nota introductoria de José Cornejo Franco. 36.-Salado Alvare%: De Santa Anna a la Reforma. Págs. 401-402: • "Porque aquellos tiempos eran de alegria. de buen humor. de francas y sinceras carcajadas. Se hadan chiste. en las situaciones más comprometldaa. se lanzaba un epigrama lo mismo al arzobispo que al último cura rural. y sobre todo habia fibra. entusiasmo. afán de triunfar. no por tener una pitanza más o menos pingüe. sino por implantar lo que se creia bueno y justo. Los jóvenes de hoy. miopes. de ademanes mesurados. de voz apagada y sin brío. no tíenen idea de lo que fueron aquellos simpáticos tarambanas que ~ • 55 .. llamaron Leando del Valle. Miguel Cruz Aedo. Ignacio Vallarta. Pancho Vélez. Francisco Buchelli. MI· guel Miramón y otros cien que no sabian una pala· bra de la evolución. del origen de las especies. ni de otras muchas cosaS con que se llenan la boca los chl· cos de ahora; pero que si sabian realizar los dos actos mas trascendentales: morir con la sonrisa en los labias. y matar cuando era menester ... " 37.-Juan José Castaños: La Intervención en México. Camedia en cuatro actos y en prosa. Guadalajara. 1863. 38.- José Maria Delgado: Un pedante como hay muchos. Comedia original escrita en tres actos y en verso. GuadalaJara. 1863. • Modas del dia. Comedia original escrita en tres actos y en prosa. México. 1857. 39._lreneo Paz: Algunas Campañas. ya citado. Págs. 191 a 194. 4O._Volumen de 537 páginas. en prosa y en verso. 56 • , , • .:¡ • • • • • ,, • , • .'• , • •• , • • , • , '. o.' • .' t O' ••• . 10 f ... *I < ct", , ·• , ," -, • • '. .~ • • • ',A , ... • •, • • " ~ , • • • • " • • • • , " .• • • • • • • • • ••••••• •• .~. • • •• ., • • • • • • • • • • • • • .. • ., , • • ' • . • • • , CORN~JO FRANCO, De la Independencia a 1 vol. 56 P~9S., Pasta Rdstica. Guadalajara, 12 de Septiembre de 1959. Ediciones del Gobierno del Estado de Jalisco. la Reforma. JOSE