Psicología evolutiva o del desarrollo humano. Los psicólogos denominan desarrollo al cambio psicológico sistemático que se da a lo largo de la vida. Durante este proceso la persona va accediendo a estados más complejos y "mejores" que los anteriores. Niñez temprana (De 1 a 3 años de edad ) Qué puede anticipar Entre el primer y el segundo cumpleaños, los niños • • • • • • • • • • • Son enérgicos, activos y curiosos; Son un poco egoístas; Les gusta imitar los sonidos y las acciones de otras personas (por ejemplo, al repetir las palabras que sus padres y otras personas dicen y al fingir ayudar en los quehaceres domésticos con los adultos); Quieren ser independientes y hacer las cosas por sí mismos; Tienen una duración de atención muy corta si no están involucrados en una actividad que les interesa; Exploran variaciones con sus destrezas físicas (por ejemplo, intentando caminar hacia atrás); Comienzan a ver en qué son parecidos o diferentes que otros niños; Juegan solos o con otros niños; Incrementan sus vocabularios de 2 o 3 palabras a más o menos 250 y comprenden cada vez más lo que la gente les dice; Piden que sus padres y otras personas les lean en voz alta, pidiendo frecuentemente sus libros o cuentos favoritos; y Fingen leer y escribir de la manera que ven a sus padres y otras personas hacerlo. Entre el segundo y el tercer cumpleaños, los niños • • • • • • • • • • • Son más conscientes de otras personas; Son más conscientes de sus propios sentimientos y pensamientos; Suelen ser tercos y a veces hacen rabietas; Pueden caminar, correr, saltar, brincar, rodar y trepar; Incrementan su vocabulario de 250 a 1,000 palabras en el transcurso del año; Pueden hablar en oraciones cortas de 2, 3 o 4 palabras; Comienzan a escoger sus cuentos y libros favoritos para leer en voz alta; Comienzan a contar; Comienzan a prestar atención a la escritura, como las letras de sus nombres; Comienzan a distinguir entre los dibujos y la escritura; y Comienzan a hacer garabatos, marcando símbolos que parecen letras. Qué necesitan los niños en esta edad Los niños entre 1 y 2 años requieren de • • • • • • • • • • • • • • • • • Oportunidades para tomar sus propias decisiones: "¿Quieres usar la taza roja o la azul?"; Límites claros y razonables; Oportunidades para utilizar los músculos mayores en los brazos y las piernas; Oportunidades para utilizar los músculos menores para manipular objetos pequeños, tales como piezas de rompecabezas y juegos para amontonar; Actividades que les permitan tocar, probar, oler, escuchar y ver cosas nuevas; Oportunidades para aprender sobre las "causas y efectos" -- las cosas que causan que otras cosas sucedan (por ejemplo, los bloques se caen cuando se apilan demasiado alto); Oportunidades para desarrollar y practicar sus destrezas de lenguaje; Oportunidades para jugar con y aprender sobre las letras del abecedario y los números; y Oportunidades para aprender sobre los libros y la escritura. Los niños entre los 2 y 3 años requieren oportunidades para Desarrollar la dexteridad manual (por ejemplo, cómo agarrar los crayones y lápices, cómo armar un rompecabezas o hacer un collar de cuentas: Hacer más cosas por sí mismos, como vestirse solos; Hablar, cantar y desarrollar su lenguaje; Jugar con otros niños y desarrollar sus destrezas sociales; Experimentar con nuevas formas de mover sus cuerpos; Aprender más sobre la escritura y los libros y cómo funcionan; Hacer cosas que les ayuden a incrementar su vocabulario y su conocimiento, y que les ayuden a aprender más sobre el mundo; por ejemplo, salir a caminar y visitar bibliotecas, museos, restaurantes, parques y zoológicos. Evolución desde el nacimiento hasta el primer año 1° MES: Levanta la cabeza al estar sentado o reclinado sobre el vientre. Acostado sobre el vientre, flexiona las piernas y hace movimientos de reptación. Reacciona al ruido de una campanilla. Sigue momentáneamente un anillo desde el costado hasta la posición media. Aprieta fuertemente el dedo que se le pone en la mano. Emite pequeños sonidos guturales. Cesa de llorar cuando nos aproximamos o cuando le hablamos. Anticipa una reacción de succión al instante del amamantamiento. 2°MES: El cuerpo tiene más tono, se mantiene en tensión cuando lo levantan. La deglución está más organizada. Regula mejor la temperatura. Adquirió control ocular; sigue con la vista, observa objetos. Sostiene por poco tiempo un sonajero, lo sacude con un movimiento brusco involuntario. Toma una mamada menos, se anima a la vista de alimento (biberón o pecho). Puede estar despierto 2 horas seguidas. Reacciona con un gesto al aproximar su rostro a la mamá u otra persona. Se vuelve de lado, sobre la espalda. Emite varios vocablos. Se inmoviliza o vuelve la cabeza cuando se le habla. Sonríe a las caras familiares. Mantiene la cabeza bien derecha en posición de sentado. Acostado sobre el vientre, se apoya en los antebrazos. Clava las uñas en las sábanas, la tironea hacia él.. Juega con sus manos, las examina 3°MES: Cubre su cara con las sábanas, juega al escondite. Vocaliza cuando se le habla. Ríe a carcajadas. Vuelve la cabeza para mirar a la persona que lo llama. 4°MES: Se queda sentado, con un ligero sostén. Mantiene la cabeza firme. Rota la cabeza de un lado a otro. Agarra; tiende la mano hacia el objeto que se le ofrece, lo recoge si se le cae. Se destapa con movimientos de pedaleo, toma su pierna o su rodilla. Ríe y vocaliza mientras juega, juega con sus manos, abre los dedos. Sonríe al espejo, está más en conexión con el ambiente. Duerme 12 horas por la noche y 3-4 períodos de día. Evacuación: 1-2 veces por día. 5°MES: Toma objetos que tiene cerca. Puede permanecer largo rato sentado, con ayuda. Se agarra los pies. Distingue entre caras familiares y extrañas. 6°MES: Se mantiene sentado por un momento sin ayuda. Toma un objeto en cada mano. Tiende la mano al espejo y acaricia su imagen. Levanta la taza invertida, utilizando el asa. Pasa sus juguetes de una mano a la otra. Vocaliza muchas sílabas bien definidas. Lleva sus pies a la boca. Puede comer una papilla espesa con la cuchara. 7°MES: Estando de espaldas, se da vuelta y se pone sobre el vientre. Juega a tirar los objetos al suelo, a esconderse: se entretiene jugando solo. Se divierte golpeando dos objetos, uno contra otro. Se lleva los objetos a la boca. Comienza a usar el pulgar. Se sienta firmemente. Tiene gran necesidad de manipular, su interés se centra en los movimientos de su mano. Toca o agarra cuento objeto está a su alcance. Ya puede masticar. Pronuncia sílabas. Lee la expresión facial de quienes le rodean. Sigue tomando el pecho o mamadera una vez por día. Muerde el pezón o la tetilla; se aparta, los mira, los retoma. puede beber de la taza. Disfruta del baño. 8 MESES: Se asusta de los extraños. Se mantiene de pie, hace movimientos de marcha. Dice papá o mamá. Reacciona ante ciertas palabras familiares. Golpea las manos en señal de adiós, bravo, etc. 9 MESES: Se pone de pie solo. Repite un sonido escuchado. Comprende una prohibición. 10 MESES: Se toca los genitales. Rueda sobre su cuerpo. Sabe manejar el índice, explora agujeros, cavidades. Puede arrancar una cuerda, pone dos cosas juntas. Imita los sonidos y los gestos que le enseñan. Acepta el corralito. Comienza a mostrar oposición. A veces se despierta de noche, desvelándose. Da a entender cuándo tiene sueño, chupándose el pulgar, etc. Comienza a organizar los movimientos laterales de masticación. Ya come sentado en la silla. Juega con juguetes: los aferra, palmea, lleva a la boca, los arroja, etc. Evolución del primer año Habilidad motora: Se queda en pie. Camina de la mano, o solo. El gateo va siendo descartado. Gira estando sentado. Trepa - se agacha para recoger el juguete. Lo entrega al recibir una orden en tal sentido. Comida: Levanta los trozos con mono. Sostiene la cuchara. La pasa en el plato. La mete dentro de la taza. Sostiene la taza y bebe de ella. Muestra preferencia por algunos alimentos y rechazo por otros. Juego: Toma, arroja, retoma. Utiliza varios objetos, sin centrarse en uno solo. Puede arrojar una pelota que le es tirada; juega a esconderse. Evacuación: 1-2 veces por día, con preferencia tras el desayuno. Sueño: 12 horas de noche; 2 horas después del almuerzo. Un rato por la mañana o a la última hora de la tarde. Juega con las sábanas, camina o se mueve alrededor de la cuna. Baño: Juega con juguetes, la esponja, etc. Vestirse: Coopera poniendo el brazo en la manga, se saca los zapatos. Reconoce la ropa para cada ocasión: paseo, comida, dormir, etc. Lenguaje: Algunas palabras: papá, mamá. Relaciones sociales: Le gusta tener público, repite los gestos que le son festejados. Expresa afecto: celos, simpatía, ansiedad. Muestra sentido del humor. Imita. Responde al ritmo. 15 meses Habilidad motora: Progresa en la adecuación a la marcha. Los que ya caminan, son capaces de inclinarse y mirar entre sus piernas. Entrega cosas a los adultos. Baila al compás, sube una escalera gateando. Pide señalando con el dedo. Comida: Lleva la cuchara a la boca aunque sin destreza. Puede sostener la taza durante toda la ingestión del líquido. Evacuación: Puede pasar un día sin mover el intestino. Si lo aceptó antes, ahora rechaza el orinal. A veces muestra que se ha ensuciado, agarrándose la ropa o bien señalando el charco en el piso (empieza la noción de evacuación) Sueño: Se despierta de noche llorando. Puede persistir la mamadera nocturna. Noción del tiempo: Asocia las horas y los acontecimientos (paseo, comida). Sociabilidad: Imita ciertas actividades de los adultos. Le gustan los animales. Se muestra menos tímido en presencia de extraños. Juego: Vacía papeleras, cajones. Puede formar torres de 2-3 cubos. Ya no quiere el corralito. Se entretiene bien durante lapsos prolongados (una hora). Hace garabatos. Lenguaje: Papá, mamá y tres palabras, en media lengua. 18 meses: Habilidad motora: Fuerte impulso locomotor: corretea continuamente. Tira, arrastra, descarga, empuje, atrae hacia sí, golpea. Prefiere empujar el coche a andar en él. Cierra las puertas. Pone cosas en su sitio, sabe dónde están (noción de orden). Abre cajones, los vacía, rompe revistas, vuelve las páginas. Juega con los interruptores eléctricos (encenderapagar). Trepa, ya no acepta el corralito. Ayuda en ciertos quehaceres. Maneja la radio. Sostiene el lápiz, haciendo trazos. Empuja la pelota con el pie. Comida: Empiezan los rechazos y preferencias fluctuantes. Utiliza la cuchara. Evacuación: En cuanto a la orina, muchos aceptan el orinal y les gusta; a veces piden, señalan el charco. Para la defección, suelen preferir hacerla de pie, en general avisan con sonidos o gestos que están incómodo y piden que se los cambia. Sueño: Suele llevarse juguetes a la cama para jugar con ellos antes de dormir. Se despierta varias veces por noche, pide agua. Duerme una o dos horas de siesta, y no se moja. Actividad Psíquica: Comienza a sacar conclusiones, como la secuencia de encender y apagar la luz: aún no entiende el futuro. Lenguaje: 6 palabras como mínimo. Responde a directivas verbales simples. Tararea. Canta. Imita sonidos. Nombra una imagen. Relación con otros: los empuja, los trata como objetos manipulables. 21 meses: Actividad motora: Los períodos de juego solitario son más frecuentes y largos. Da puntapiés a la pelota. Construye una torre de 5 cubos. Hace una hilera de cubos a guisa de tren. Comida: Ya puede alimentarse solo. Ha adquirido destreza en el manejo de la cuchara. Evacuación: Similar a los 18 meses. Hay cierto grado de aceptación del orinal. A veces va solo al baño. Baño: Se desviste y le encanta hacerlo. Es clásico el niño que aparece con "la cola al aire". Sueño: Se instalan las dificultades que pueden continuar hasta los 30 meses. Para dormirse reclaman al padre o a la madre. Duermen menos (11 horas) Lenguaje: El lenguaje incluye frases simples. Llama nene a los otros nenes. Sociabilidad: Entiende cuáles son las pertenencias de cada uno. Toma de la mano a los adultos y los lleva a pedirles algo. 2 años: Surge el último diente de leche. Habilidad motora: Todavía no camina bien erguido. Lleva las rodillas, codos y hombros levemente encorvados. Aún no puede inclinarse. Para alzar algo del suelo se agacha. Corre encorvado hacia adelante. Para levantarse, alza primero las nalgas y después la cabeza. No alterna los pies para bajar. Sus rodillas aún están flojas. tienen mejor coordinación manual. Ya alterna una mano con la otra. Puede rotar la muñeca, abrir un picaporte, hacer un círculo. Mueve los ojos con más libertad, es sensible a las zonas marginales. Se lava y seca las manos solo. Lenguaje: Pronuncia su nombre, construye frases de varias palabras. Ya puede adecuar las palabras a la acción y viceversa. Hace soliloquios mientras juega. Su capacidad verbal va desde 12 a 1.000 palabras, según el caso. Comida: Tiene preferencias definidas. Maneja bien la cuchara, aunque suele derramar un poco. Algunos ya comen solos. Evacuación: Los músculos esfinterianos empiezan a estar bajo control voluntario. Diferencia el movimiento vesical del rectal. Quiere quedarse solo en el baño. Se enorgullece cuando evacua en el orinal. Llora cuando se ensucia o moja. Sueño: Empieza a retener a la madre para dormirse. Algunos ya no mojan la cama de noche. Muchos ya no duermen siesta. Sociabilidad: El juego es paralelo al de otros chicos. Todavía no puede compartir. Aferra sus posesiones y pelea por ellas a empujones, tirones de cabello, etc. Gusta observar las actitudes de las personas y a otros niños. Colabora en las tareas domésticas. Tiene más noción de lo que puede tocar o no. Juego: Es más organizado: gusta de las cosas que se mueven y tiran. Juega con arena, piedras, agua, arcilla y plastilina. Le gustan los cuentos y cantos. Maneja el grabador. 30 meses (Dos años y medio): Motricidad: Puede vestirse, pero su habilidad es limitada. Evacuación: Muy pocos se resisten ya a sentarse en el original o inodoro; llama para que lo limpien; pocas veces se ensucia o moja; ya no moja la cama. Carácter: Se ha vuelto rebelde, mandón; insiste en ciertas rutinas y da órdenes para que se realicen en el aseo, comida, paseos, etc. Juego: Habla mientras juega, recomendando escenas vistas; rompe el empapelado, el revoque; pide que le vuelan a contar los cuentos, mira sólo las láminas de los libros. Sociabilidad: Alterna entre la timidez y el acercamiento; ya es capaz de compartir su juego con otros chicos; le interesa observar a los demás en el cuarto de baño; tiene noción de la diferencia de sexos. Lenguaje: Aparece el pronombre de primera persona y el tú o ustedes. 3 AÑOS Carácter: Ahora trata de conformar y agradar a las personas. Le gustan los halagos. Motricidad: Camina ya como un adulto, tiene coordinación fina. Puede dibujar una cruz, copiar un círculo. Se desabrocha la ropa, se viste con ayuda, algunas prendas logra ponerselas solo, le gusta mucho desvestirse. Anda en triciclo o bicicleta con rueditas de apoyo. Control de esfínteres: Ya lo ha adquirido o está en vías de hacerlo. Alterna el control con la incontinencia. Pide que se le cambie. Muchos ya se limpian solos, otros solicitan ayuda. Les gusta lavarse las manos después, de cada evacuación, podrá volverse un hábito muy bueno, si se lo incentiva a hacerlo. Aprendizaje: Sabe contar hasta 3, conoce las tres formas básicas: círculo, cuadrado, triangulo. Realiza construcciones con cubos. Compara objetos, le gusta repetir palabras nuevas. Le gusta mucho que le cuenten su vida pasada o cuando estaba en la panza de mamá. Disfruta de los cuentos cuando los escucho, "lee" solito cuentos que ya le han leido antes Manipula instrumentos musicales, canta canciones enteras. Distingue el día de la noche. El aprendizaje dependerá en gran medida de la estimulación que le demos al niño. Lenguaje: Continúa con articulaciones infantiles. Hace soliloquios y representaciones, combinando las acciones con las palabras Relaciones sociales: Se interesa por las personas, observa sus expresiones faciales. Continúa con el juego solitario. Tolera juegos colectivos. Le gusta colaborar en las tareas. Tiene cada vez más clara la conciencia del yo y del tú; también noción del nosotros. Diferencia entre nena y varón. Comparte sus juguetes, puede jugar con otros niños. Sueño: algunos se despiertan de noche para ir al baño o para ir a dormir con los padres. Baño: le gusta bañarse solo, siempre bajo la vigilancia de un adulto, porque no tienen noción del peligro, y se paran o saltan en la bañera. Le agrada lavarse las manos y cepillarse los dientes. Comida: El apetito es regular. Le gusta la carne, la fruta, la leche y los dulces, va aceptando de a poco los vegetales. Maneja sin dificultad el tenedor y la cuchara, ya puede sostener la taza con una sola mano. Tiene aún la atención muy dispersa, hay que ayudarlo a comer. Juegos: se entretiene mucho con sus juegos, suele inventar cuentos. A esta edad se hace más marcada la diferencia entre los juegos de nena y nene, eligen los materiales de juego. Muestra apego por un compañero, tiene un amigo imaginario. Habla con los muñecos y le atribuye sentimientos, como por ejemplo: dice que el osito está triste, que le prendan el televisor porque quiere ver, etc. Dibujo: Puede trazar formas variadas, dibujar, dar nombre a su creación, utiliza varios colores. Le gusta jugar con plastilina o masas de colores o sin color, con o sin elementos. Paseos: Le gusta observar las cosas que pasan a su alrededor o cuando sale de paseo, le gusta caminar, correr por lugares abiertos. Hay que tener mucho cuidado con la calle al cruzar. Etapas del Desarrollo Infantil Cada niño es una persona única con su propio temperamento, estilo de aprendizaje, familia de origen y patrón y tiempo de crecimiento. Sin embargo, hay secuencias universales y predecibles en el desarrollo que ocurren durante los primeros 9 años de vida. Mientras los niños se desarrollan, necesitan diferentes tipos de estimulación e interacción para ejercitar sus habilidades y para desarrollar otras nuevas. A cada edad, es esencial responder a las necesidades básicas de salud y de nutrición. Edad 0a3 meses Lo que los niños hacen Comienzan a sonreír. Siguen a personas y objetos con los ojos. Prefieren caras y colores brillantes. Alcanzan, descubren sus manos y pies. Lo que necesitan Protección contra daños físicos. Nutrición adecuada. Cuidado de salud adecuado (vacunación, terapia de rehidratación oral, higiene). Levantan y voltean la cabeza en dirección al sonido. Lloran, pero se calman si se les abraza. Estimulación apropiada del lenguaje. Cuidado sensible y atento. 4a6 meses Sonríen frecuentemente. Prefieren a los padres y hermanos mayores. Repiten acciones con resultados interesantes. Escuchan atentamente, responden cuando se les habla. Ríen, murmuran, imitan sonidos. Exploran sus manos y pies. Se ponen objetos en la boca. Se sientan si se les sostiene, dan vueltas, se escabullen, rebotan. Tocan objetos sin usar el dedo pulgar. Protección contra daños físicos. Nutrición adecuada. Cuidado de salud adecuado (vacunación, terapia de rehidratación oral, higiene). Estimulación apropiada del lenguaje. Cuidado sensible y atento. 7 a 12 meses Recuerdan eventos simples. Se identifican a sí mismos, así como las partes del cuerpo, voces familiares. Entienden su propio nombre y otras palabras comunes. Dicen sus primeras palabras significativas. Exploran, arrojan, sacuden objetos. Encuentran objetos escondidos, ponen objetos en contenedores. Se sientan solos. Gatean, se ponen de pie, caminan. Pueden parecer tímidos o molestos con extraños. Todo lo anterior. Protección contra daños físicos. Nutrición adecuada. Cuidado de salud adecuado (vacunación, terapia de rehidratación oral, higiene). Estimulación apropiada del lenguaje. Cuidado sensible y atento. 1 a 2 años Imitan acciones de adultos. Hablan y entienden palabras e ideas. Disfrutan historias y experimentan con objetos. Caminan firmemente, suben escaleras, corren. Afirman su independencia pero prefieren gente que les es familiar. Reconocen la propiedad de objetos. Desarrollan amistades. Resuelven problemas. Muestran orgullo de sus logros. Les gusta ayudar con las tareas. Empiezan a aparentar jugar. Además de lo anterior, apoyo para: Adquirir habilidades motoras, de lenguaje y pensamiento. Desarrollar su independencia. Aprender autocontrol. Oportunidades para jugar y explorar. Jugar con otros niños. El cuidado de salud debe incluir purga. 2 a 3 1/2 años Disfrutan aprender nuevas habilidades. Aprenden rápidamente el idioma. Siempre están activos. Ganan control en las manos y dedos. Se frustran fácilmente. Actúan más independientes pero aún dependientes. Representan escenas familiares. Además de lo anterior, oportunidades para: Tomar decisiones. Participar en juegos teatrales. Leer libros de complejidad creciente. Cantar canciones favoritas. Armar rompecabezas simples. 3 1/2 a 5 años Tienen un lapso de atención más largo. Se comportan tontamente, bulliciosamente, pueden usar lenguaje chocante. Hablan mucho, hacen muchas preguntas. Quieren cosas de adultos, guardan los proyectos de arte. Examinan sus habilidades físicas y su valentía con precaución. Revelan sus sentimientos actuando. Les gusta jugar con amigos, no les gusta perder. Comparten y toman turnos a veces. Además de lo anterior, oportunidades para: Desarrollar habilidades motoras finas. Continuar expandiendo sus habilidades lingüísticas hablando, leyendo y cantando. Aprender a cooperar ayudando y compartiendo. Experimentar con sus habilidades de pre-escritura y pre-lectura. 5 a 8 años Crece su curiosidad acerca de la gente y cómo funciona el mundo. Muestran un creciente interés en números, letras, lectura y escritura. Se interesan más y más en el producto final. Usan palabras para expresar sentimientos y afrontar las cosas. Les gustan las actividades de los adultos. Se vuelven más abiertos, juegan cooperativamente. Además de lo anterior, oportunidades para: Desarrollar habilidades numéricas y de lectura. Participar en la solución de problemas. Practicar el trabajo en equipo. Desarrollar el sentido de autosuficiencia. Cuestionar y observar. Adquirir habilidades básicas en la vida. Asistir a Educación Básica. Niño de tres años Desarrollo físico y mental de un niño de tres años El bebé de tres años, que ahora es un niño, demuestra interés y entusiasmo para tocar instrumentos como la pandereta, el tambor o el acordeón. Su agilidad es tremenda. Puede realizar dos actividades al mismo tiempo. Juega con la pelota mientras corre, toma helado, sube escaleras, come y habla por el teléfono. Algunas investigaciones afirman que esta es una buena edad para iniciarles en el ordenador. El bebé de tres años ahora es un niño Su hijo despierta para la conciencia. Puede que te sorprenda con confidencias en torno a cómo se siente. Y estará más sociable, e incluso hará algún cariño a otros niños. Su manera de jugar estará mas condicionada a otros niños. Los niños pasarán a asociarse para jugar y compartirán sus juguetes con mas facilidad. Al mismo tiempo demuestra más independencia de sus padres. A los tres años, el niño puede hojear libros, y sujetar el lápiz de una forma más correcta. Además de garabatos, el niño hace dibujos con más sentido. Consigue incluso escribir algunas letras y su primer nombre. El niño de tres años descubre sus genitales El interés por las diferencias entre los sexos, es lo que más llama la atención de los niños a esta edad. Ellos intentan reafirmar de qué sexo son, imitando el comportamiento de la madre si es niña, e imitando el del padre si es niño. Se inicia la etapa fálica. Descubrirá sus genitales y aprenderán a proporcionarse placer de manera deliberada. No lo reprendas, es absolutamente normal. Desarrollo físico y mental de un niño de 4 años de edad El niño de 4 años es mucho más independiente. Se siente capaz, y lo es, de controlar su propia fuerza y seguridad. Consigue lavar las manos y el rostro, guardar su propia ropa, arreglar las sábanas de su cama, cepillar los dientes, y recoger sus juguetes en la habitación. Se relaciona muy bien con sus amiguitos y le encanta invitarlos a su casa. El niño de cuatro años pregunta mucho Puede subir y bajar las escaleras con más facilidad, participar de juegos de competición, y siempre se encontrará dispuesto para jugar a lo que sea. Demuestra sus preferencias cuanto a las ropas, el peinado, la comida, y los amigos. Empiezan a hacer preguntas sobre todo, y demostrarán cierto interés sobre su nacimiento y sobre la muerte. Le encanta mirar fotografías y ver videos de cuando eran pequeños. El niño desafía a sus padres A esta edad el niño presenta una inestabilidad en sus emociones. Se ríe y llora sin una razón aparente, y eso provoca a que vuelva, alguna u otra vez, a las rabietas de los dos años. Quiere imponer sus deseos desafiando a sus padres. Es una etapa para la cual se debe tener muchísima paciencia, tacto, y control de la situación. Aparte de eso, comenzará con los por que. Buscará respuestas y conviene responderle siempre con la verdad. Al responder a un niño le estamos enseñando a pensar y le estamos ayudando a formar las bases de su visión del mundo. Desarrollo físico y mental de los niños, a partir de los 5 años de edad Están para todo y para todos. Su agilidad alcanza niveles altísimos pues su coordinación motora está bastante desarrollada. Le encanta jugar a la familia con sus amigos, de profesora con sus muñecos, a cantar, a andar en bicicleta y a todos los juegos que impliquen un desafío. Están preparados y dispuestos a todo. Son más realistas y equilibrados. Y no paran de hacer preguntas y a hablar como un adulto. Las diferencias sexuales quedan a un segundo plan. Su interés ahora es por temas mas diversificados como el universo, los dinosaurios, de donde venimos, y muchos otros. Agilidad Ya puede usar la tijera, dibujar y pintar con más seguridad, ayudar en las tareas domesticas, poniendo la mesa, haciendo la cama, y guardando sus pertenencias en su debido lugar. Niños obedientes Vuelve a ser más respetuosos, obedientes y comprensivos. Eso porque adquieren más confianza en sí mismo y en los demás. Ya son personitas y como tal deben ser respetados. El comportamiento en las etapas del desarrollo humano El desarrollo y, en general, la vida del ser humano se desenvuelve a través de sucesivas etapas que tienen características muy especiales. Cada una de ellas se funde gradualmente en la etapa siguiente. Sin embargo, no hay un acuerdo unánime para determinar cuántas y cuáles son esas etapas. Tampoco se puede decir cuándo comienza exactamente y cuándo termina cada etapa, pues en el desarrollo influyen diversos factores individuales, sociales y culturales. Por eso se dice que cada ser humano tiene su propio ritmo de desarrollo. En general, se considera que las etapas del desarrollo humano son las siguientes: 1. Pre-natal 2. Infancia 3. Niñez 4. Adolescencia 5. Juventud 6. Adultez 7. Ancianidad La etapa pre-natal Se desarrolla en el vientre materno, desde la concepción del nuevo ser hasta su nacimiento. Pasa por tres periodos: • Periodo zigótico: Se inicia en el momento de la concepción, cuando el espermatozoide fecunda al óvulo y se forma el huevo o zigoto. Este comienza entonces a dividirse y subdividirse en células y aumenta de tamaño hasta formar el embrión, que al final de la segunda semana se arraiga en el útero. • Periodo embrionario: Dura unas 6 semanas, en las cuales el embrión se divide en tres capas que se van diferenciando hasta formar el esbozo de los diversos sistemas y aparatos corporales. Periodo fetal: Es la culminación del embrión. El feto ya tiene la definida forma de un ser humano, que • después de desarrollarse aceleradamente durante 7 meses, abandona el claustro materno en el acto del nacimiento. Hoy en día se da mucha importancia a esta etapa, puesto que se ha comprobado que precedentemente al nacimiento hay formas de actividad. La madre, con sus situaciones psicoafectivas troquela en el feto su propia urdiembre. Por medio de ella llegan al niño los primeros mensajes de la vida. Recepta la alegría o la contrariedad del padre, el alborozo o fastidio de sus hermanitos, las angustias y satisfacciones de la madre... Esta etapa es la materia prima de las demás. Se está gestando ya el futuro de su personalidad. Todo lo que pasa dentro y fuera de su fuente vital deja huella en su ser. A partir de los tres meses la personita responde a los estímulos internos y desde los seis meses a los externos. Hay, pues, formas de sensación y actividad. Se puede suponer un psíquico elemental, difuso, con un estado indistinto de sueño, con variaciones afectivas de malestar y bienestar. La Infancia Es la etapa comprendida entre el nacimiento y los seis o siete años. Desarrollo físico y motor: El neonato pesa normalmente entre 2.5 a 3 kgs y tiene una estatura promedio de 0.50 m. Tiene una cabeza desproporcionada en relación con su cuerpo y duerme la mayor parte del tiempo. Pero no es un ser completamente pasivo ya que gradualmente va reaccionando a la variedad e intensidad de los estímulos de su nuevo ambiente. Aparecen los primeros actos reflejos: • i. Succión del pecho materno ii. Contracción pupilar. iii. Reacción ante sonidos fuertes y ante diversos sabores. Realiza movimientos espontáneos e indiferenciados: • i. Agita y retuerce su cuerpo ii. Mueve los brazos y piernas (pedalea) Reacciones emocionales indiscriminadas de agitación y excitación que acompañan a los movimientos • espontáneos y que se producen ante estímulos agradables o desagradables. En el desarrollo motor observamos lo siguiente: • A las 15 semanas: Puede coger un objeto perfectamente. o o o o o o A las 25 semanas: Se sienta solo. A las 45 semanas: Gatea A los 15 meses: Ya camina solo. A los 2 años: Sube las escaleras solo. A los 3 años: Corre de una manera más uniforme, puede lavarse y secarse las manos solo, alimentarse con una cuchara sin ensuciar demasiado, ir al baño, responder a instrucciones. Desarrollo cognoscitivo: Según Piaget, el infante, hasta los 6 o 7 años, pasa por los siguientes periodos de desarrollo de la inteligencia: 1. Periodo de inteligencia senso – motora: El infante se interesa en ejercitar sus órganos sensoriales, sus movimientos y su lenguaje que le van permitiendo el ir afrontando determinados problemas. Así, entre los 5 y 9 meses, el bebé moverá su sonaja para escuchar el ruido. 2. Periodo de la inteligencia concreta: A. Fase del pensamiento simbólico (2 – 4 años) Aquí el niño lleva a cabo sus primeros tentativos relativamente desorganizados e inciertos de tomar contacto con el mundo nuevo y desconocido de los símbolos. Comienza la adquisición sistemática del lenguaje gracias a la aparición de una función simbólica que se manifiesta también en los juegos imaginativos. Por ejemplo, el niño que le regalaron una pelota grande y de colores que está colocada como un adorno. Sus hermanos salen a jugar (sin llevar la pelota de siempre, sucia y pequeña) y le dicen al niño que traiga la pelota; él llevará la que está de adorno porque para él no hay más pelota que la que le regalaron. B. Fase del pensamiento intuitivo (4 – 7 años) Se basa en los datos perceptivos. Así dos vasos llenos de la misma cantidad de bolitas, el niño dirá que hay más en el vaso largo. En este periodo el desarrollo del niño va consiguiendo estabilidad poco a poco, esto lo consigue creando una estructura llamada agrupación. El niño comienza a razonar y a realizar operaciones lógicas de modo concreto y sobre cosas manipulables. Encuentra caminos diversos para llegar al mismo punto (sabe armar rompecabezas). En la infancia se produce el egocentrismo, es decir, todo gira entorno al "yo" del infante y es incapaz de distinguir entre su propio punto de vista y el de los demás. También en este periodo predomina el juego y la fantasía, por lo que el infante gusta de cuentos, fábulas y leyendas. Mediante su exaltada fantasía dota de vida a los objetos y se crea un mundo psicológico especial. Desarrollo afectivo, sexual y social: Se distinguen tres fases: Fase oral: El niño nace preparado a conservar la vida mamando, y mientras se nutre tiene las primeras relaciones con los demás, creando de este modo un nexo entre afecto y nutrición y entre necesidad de los otros y actividad oral. El niño llevará – para experimentar y comunicar con los demás: todo a la boca, (siente placer). La relación oral incluye la comunicación a través del tacto, el olor, la posición del cuerpo, el calor, los nexos visuales, el rostro de la madre, etc. Esta etapa se supera, pero siempre nos quedan rezagos tales como mascar chicle, fumar, llevar objetos a la boca. Hay casos en que no se supera esta etapa, entonces tenemos el carácter oral como el sujeto totalmente dependiente e inseguro. Fase anal: Se denomina así porque el niño ya comienza a controlar sus esfínteres y obtiene un placer reteniendo los movimientos intestinales que estimulaban la mucosa anal. Hay que tener en cuenta que el efectivo control de la defecación se alcanza sólo luego que ha sido posible el control muscular a través de la maduración de los rasgos nerviosos de la médula espinal. Por tanto una educación prematura a la limpieza lleva a fijar a la persona en el carácter anal; por ejemplo: El avaro. El coleccionar objetos es un rezago de analidad. Fase elíptica: El infante desarrolla un intenso amor por el progenitor del sexo opuesto. El niño se apega a la madre y la niña al padre. El niño es posesivo, de aquí que el padre es sentido un intruso y un rival (complejo de edipo). En esta rivalidad frente al padre, el niño teme ser destruido por el padre (complejo de castración). Al mismo tiempo nace una angustia en el niño o por el temor confirmado de poder ser destruido por el padre o por su hostilidad frente a un padre que, pese a todo, lo quiere (sentimiento de culpa). Finalmente el niño descubre que para llegar a poseer a su madre tiene que llegar a ser todo un hombre como su padre (principio de identificación). Aquí es cuando el niño comienza a interiorizar las normas de los padres conformándose el "super yo". Analógicamente se llega a la identificación de la niña con su madre. La mayoría de los problemas en las etapas posteriores tienen su origen en un Edipo no resuelto. Son manifestaciones de una fijación en esta etapa cuando hay falta de identificación con su propio sexo. Concluimos afirmando que, en esta etapa, el niño aprende a ser varón y la niña a ser mujer. La Niñez Se sitúa entre los 6 y 12 años. Corresponde al ingreso del niño a la escuela, acontecimiento que significa la convivencia con seres de su misma edad. Se denomina también "periodo de la latencia", porque está caracterizada por una especie de reposo de los impulsos institucionales para concentrarnos en la conquista de la socialidad. Las socializad que comienza a desarrollar es "egocéntrica": "Todo sale de mí y vuelve a mí", "Te doy para que me des". Sus mejores amigos son los que le hacen jugar, le invitan al cine o un helado". El niño, al entrar en la escuela da pie al desarrollo de sus funciones cognoscitivas, afectivas y sociales. F. Cognoscitivas: El niño desarrolla la percepción, la memoria, razonamiento, etc. F. Afectivas: En cuanto que el niño sale del ambiente familiar donde es el centro del cariño de todos para ir a otro ambiente donde es un número en la masa; donde aprende y desarrolla el sentimiento del deber, respeto al derecho ajeno amor propio, estima de sí, etc. F. Social: La escuela contribuye a extender las relaciones sociales que son más incidentes sobre la personalidad. Características principales en esta etapa: Aprende a no exteriorizar todo, aflora, entonces, la interioridad. • • • • • Son tremendamente imitativos, de aquí que necesiten el buen ejemplo de sus padres. El niño se vuelve más objetivo y es capaz de ver la realidad tal como es. Suma, resta, multiplica y divide cosas, no números. Adquiere un comportamiento más firme sobre sus realidades emocionales. La Adolescencia Es la etapa en que el individuo deja de ser un niño, pero sin haber alcanzado aún la madurez del adulto. Sin embargo, es un tránsito complicado y difícil que normalmente debe superar para llegar a la edad adulta. Se considera que la adolescencia se inicia aproximadamente a los 12 años promedio, en las mujeres y a los 13 años en los varones. Este es el momento en que aparece el periodo de la pubertad, que cambia al individuo con respecto a lo que hasta entonces era su niñez. En la adolescencia se distinguen dos etapas: 1) Pre-adolescencia (fenómeno de la pubertad) 2) Adolescencia propiamente dicha. 1. La Preadolescencia: Desarrollo físico: Se produce una intensa actividad hormonal. Se inicia a los 11 o 12 años en las mujeres y a • los 13 o 14 años en los varones. En las mujeres aparece la primera menstruación y en los varones la primera eyaculación; pero en ambos todavía sin aptitud para la procreación. En ambos sexos aparece el vello púbico. Se da también un rápido aumento de estatura, incremento en el peso, aparición de caracteres sexuales secundarios; en las mujeres: senos, caderas, etc. En los varones: Mayor desarrollo muscular, fuerza física, aumenta el ancho de la espalda, cambio de voz, pilosidad en el rostro, etc. Desarrollo cognoscitivo: • i. No confunde lo real con lo imaginario y por tanto puede imaginar lo que podría ser. ii. Usa con mayor facilidad los procedimientos lógicos: análisis, síntesis… Descubre el juego del pensamiento. iii. Desarrollo su espíritu crítico. iv. Discute para probar su capacidad y la seguridad del adulto. v. En ocasiones es fantasioso, pero con poca frecuencia. Hay una proyección de sí en el porvenir; pero también a veces evade lo real. Desarrollo tendencial: • i. Tiene necesidad de seguridad pero a la vez una necesidad de independencia de sus padres. ii. Esto hace que despierte la necesidad de libertad, de ser independiente y libre; para ello emplea la desobediencia como una necesidad. Desarrollo afectivo: • i. Gran intensidad de emociones y sentimientos. ii. Hay desproporción entre el sentimiento y su expresión. iii. Las manifestaciones externas son poco controladas y se traducen en tics nerviosos, muecas, refunfuños, gestos bruscos, gritos extemporáneos. iv. Pasa con facilidad de la agresividad a la timidez. Desarrollo social: • i. Creciente emancipación de los padres. ii. Busca la independencia pero a la vez busca protección en ellos. iii. Se da mutua falta de comprensión (con sus padres) iv. Tiene necesidad de valorarse, de afirmarse, de afiliación y de sentirse aceptado y reconocido por los de su entorno. v. Su principal interés son las diversiones, el deporte, etc. Desarrollo sexual: • i. Tendencia a la separación entre chicos y chicas. ii. Gran curiosidad por todo lo relacionado con la sexualidad Desarrollo social: • i. Va pasando de la heteronomía a la autonomía. ii. Aquí influye mucho la moral de la familia como testimonio. Así el adolescente será capaz de: • • • Fijar metas y objetivos propios. • Desarrollo religioso: Organizar su actividad en conformidad con sus proyectos. Organizar mejor y eficientemente su tiempo libre. El desarrollo religioso puede ser problemático cuando: • • • • Los padres no dan testimonio, usan la religión como disciplina y no son estables. Cuando el muchacho encuentra serias dificultades en el ramo de la sexualidad. Cuando la religión, en el ambiente social, es considerado como "cosa de mujeres", "pueril". Cuando la catequesis recibida en la infancia ha sido formalista y separada de la vida. De lo contrario el desarrollo religioso es satisfactorio.