R e v i s t a e n t r e m a e s t r @ s • v e r a n o / o t o ñ o 2 0 0 9, Aprendiendo Geometría con doblado de papel Una experiencia en la secundaria Felipe Ramos Trejo Enciclomedia en la clase de Matemáticas Yolanda Chávez Ruiz ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? upn Notas para un análisis Leticia Iturbe Meza Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria Jesús Leobardo Rendón García Publicación trimestral de la Universidad Pedagógica Nacional, vol. 9, núm. 29/30, verano/otoño 2009 ISSN 1405-8774 Guía para autores entre maestr@s es una publicación trimestral de la Universidad Pedagógica Nacional. Sus autores son fundamentalmente maestras y maestros de educación básica, los acompañan especialistas ocupados en temas que in­volucran los ámbitos de educación preescolar, primaria y secundaria; las producciones de las niñas, los niños y los jóvenes son contribuciones relevantes para las páginas de la revista. Los temas Los temas de los artículos que aquí se presentan tienen la intención de recuperar la complejidad del aula y de la es­­cuela, de problematizarla, de descubrir y dar a conocer acontecimientos relevantes y significativos para las maestras y maestros de educación preescolar, primaria y secundaria, desde su contexto sociocultural. Características de los textos publicables: 1. Las colaboraciones deben ser experiencias inéditas de investigación, innovación o animación pedagógicas desde y/o sobre la práctica docente, reflexiones, análisis, ensayos, etcétera, acerca de la educación básica y la formación de maestros. 2. Los textos han de ser breves, máximo doce cuartillas para las secciones Desde el aula, Para el Consejo Técnico y Hojas de papel que vuelan; para las otras secciones se recibirán máximo cinco cuartillas. En el caso de Para la Biblioteca y Aprendiendo a través del cine serán máximo dos cuartillas 3. Los trabajos deben acompañarse de: a) Portada que indique: título del texto (no mayor de ocho palabras), nombre del autor. b) Datos generales del autor (notas curriculares, cen­tro de adscripción o lugar donde labora, dirección del centro de trabajo y/o particular, teléfono del centro de trabajo y/o particular, correo electrónico). 4. Los originales habrán de presentarse: a) Procesados en computadora. El autor deberá entregar un disquete (en procesador de palabras Word de Microsoft) que indique título, autor y todos los seña­­la­mientos del caso para su lectura, y una copia im­presa del mismo trabajo en altas y bajas (mayúsculas y mi­núsculas). b) Sin cortes de palabras (eliminar los guiones a fin de renglón). c) Cuartilla holandesa: 28 renglones de 60-65 golpes. Justificación izquierda (sin justificación derecha). d) Legibles, sin marcas, añadidos o modifica­ciones al margen. e) Tabla de abreviaturas o siglas al final del texto. f ) En caso de citar repetidamente una obra utilizar las locuciones: idem, ibidem u op. cit., según sea el caso. g) Los criterios para anotar la bibliografía: nombre de los autores (empezando por los apellidos), luego coma, luego el nombre, luego coma (cuando haya más de un autor, el segundo empieza con el nombre y luego los apellidos –separados los autores con y–; cuando haya más de tres, se pone el primero y luego et al.). Si se menciona el capítulo de un libro o artículo de una revista, aparecerá entre comillas, luego irá coma y el término “en”. El título del libro o revista en cursivas (itálicas), luego coma. Número de edición (excepto si es la primera), luego coma (se usará ed.). Lugar de publicación, luego coma. Editorial o institución que lo (la) produjo, luego coma. Año de publicación, lue­go coma. Páginas (se usará por ejemplo p. 386.), luego punto final. h) Las fotografías, gráficas e ilustraciones que acompañen al texto deben ser de alta ca­li­dad y contraste adecuado, con el pie o referencia pertinente, e indicar dentro del texto el lugar donde deben incluirse. Es importante que los autores aporten ilustraciones o fotografías suceptibles de ser utilizadas como complemento informativo. En cualquier caso, es indispensable que el autor informe si las imágenes enviadas requieren recibir algún crédito o si requieren de algún permiso para su publicación. Todas las imágenes utilizadas deberán manejarse en formato EPS, TIF o JPG con una resolución mínima de 300 dpi (deben pesar más de 700 kb). Favor de no insertar imágenes en archivos Word porque se pierde calidad. i) Palabras, frases o señalamientos especiales en cursivas (itálicas). j) En el caso de reseñas o presentación de libros o revistas, acompañar el texto con una fotografía o un archivo digital de calidad de la portada del volumen que se trate. 5. Los autores pueden dirigirse para la entrega de sus trabajos a la siguiente dirección electrónica: [email protected] Indicaciones generales: Una vez aceptado el texto para su publicación no se admitirá modificación alguna al original. Se entregarán al autor tres (3) ejemplares del número de entre maestr@s en que sea publicado su texto. El autor es el único responsable de la veracidad y honestidad de los contenidos de su trabajo. A petición escrita del autor se devuelven por correo los originales de los trabajos no publicados. Los textos incluidos en entre maestr@s pueden ser publicados en otro órgano editorial, previo permiso expreso por escrito y haciendo referencia explícita de la fuente. Aprendiendo a través del cine NI UNO MENOS Un pretexto para descubrir con otra mirada el mundo de las Matemáticas Wei Minzhi, de trece años de edad, tiene que hacerse cargo de una pequeña escuela rural, mientras el maestro titular va a visitar a su madre enferma. La joven Wei tendrá que educar a los alumnos durante un mes y no permitir que ninguno abandone el grupo, pues el número de niños que desertan es muy alto: “ni uno menos”, advierte el maestro Gao a Wei; si logra este objetivo percibirá el salario del maestro. Los problemas de esta adolescente comienzan cuando Zang, un estudiante conflictivo, tiene que dejar la escuela e ir a la ciudad a conseguir dinero para pagar las deudas de su familia. La novel maestra se lanza a la búsqueda de su pequeño alumno que se ha extraviado en la urbe, lo cual la obliga a ella y a sus estudiantes a buscar los medios económicos que les permitan financiar tal viaje, cosa nada fácil ante las condiciones tan precarias en las que se encuentran. Es en esta parte de la historia en la que sugerimos poner particular atención, pues maestra y alumnos se ven obligados a hacer cálculos matemáticos para saber cuánto tiempo tendrían que trabajar en una fábrica de ladrillos para obtener el dinero que necesitan. Los alumnos tienen que utilizar todos sus conocimientos y recursos matemáticos para poder hacer sus cálculos; comparan resultados, discuten la validez de los mismos, proponen, prueban y, finalmente, con base en la actividad matemática desplegada en el salón de clases, toman decisiones. A partir de este extraordinario filme invitamos a los profesores a reflexionar sobre la posibilidad y las condiciones didácticas necesarias para que incluso los problemas de los libros de texto y otras actividades que pudieran caracterizarse como “típicamente escolares”, generen retos interesantes, apasionantes, no sólo para los alumnos, sino para los mismos maestros pues, a final de cuentas, ambos comparten un mismo espacio, ambos dejan marcas que escriben la historia colectiva de un salón de clases. Diana Violeta Solares Pineda Director: Zhang Yimou Año: 1999 País: China Duración:106 min. SECCIONES Ejercer el derecho a la lectura es tan importante como el de tomar un lápiz, un bolígrafo o un teclado para expresar las ideas y las emociones que nos envuelven. Por eso, entre maestr@s abre sus páginas no sólo para que la explores, sino para que te lances también a la aventura de escribir. Las secciones que contiene la revista seguramente te darán pistas para tu participación. Estas secciones están pensadas como espacios para suscitar la reflexión, el análisis, la discusión y el intercambio de experiencias pedagógicas. DESDE EL AULA En esta sección encontrarás artículos escritos por maestras y maestros que abordan temas relacionados con sus experiencias de investigación, innovación y/o animación en la escuela y en sus aulas. DESDE LOS MESABANCOS Esta sección echará un vistazo a las producciones escritas de niñas, niños y los y las jóvenes de educación básica, y que son resultado del trabajo desarrollado en el aula. PARA Y DESDE EL CONSEJO TÉCNICO En esta sección hallarás artículos de fondo, escritos por docentes y/o especialistas. Su propósito es el de suscitar discusiones en torno a temas que están presentes en el ámbito escolar y social. ENCUENTARIO Las aportaciones escritas y gráficas se ubican aquí, su propósito es recrear la vida cotidiana de la escuela y de otros lugares desde una óptica que nos haga reflexionar en el tiempo y espacio histórico: cuentos, poesía, relatos, fotografías, etcétera. HOJAS DE PAPEL QUE VUELAN Aquí se comparten experiencias y análisis pedagógicos de docentes y/o especialistas de otros países que contribuyen a la discusión de temas nacionales. PARA LA BIBLIOTECA Y APRENDIENDO A TRAVÉS DEL CINE En estas secciones se reseñan libros y películas que aportan nuevas perspectivas al trabajo docente, y también se abren al mundo de la novela universal y, en particular, la iberoamericana. REDES Esta sección tiene la intención de dar a conocer diversos proyectos de grupos académicos magisteriales y los niveles de coordinación entre sí que se están logrando. CARTAS DEL LECTOR entre maestr@s abre un espacio más para el intercambio de las palabras de las y los lectores. Esta sección estará dedicada a la publicación de todas las cartas de sus lectores ocupados en la conversación escrita. PARA PRACTICAR Representa un anexo didáctico sugerente, se trata de diversas actividades que maestras o maestros han llevado a cabo en sus salones de clase con objetivos muy específicos y cuyo fin es compartir y enriquecer la enseñanza en el aula. DIRECTORIO UPN Sylvia Ortega Salazar Rectora Aurora Elizondo Huerta Secretaria Académica Manuel Montoya Bencomo Secretario Administrativo Adrián Castelán Cedillo Director de Planeación Mario Villa Mateos Director de Servicios Jurídicos Fernando Velázquez Merlo Director de Biblioteca y Apoyo Académico Adalberto Rangel Ruiz de la Peña Director de Unidades upn Juan Manuel Delgado Reynoso Director de Difusión y Extensión Universitaria Coordinadores de Área Académica María Adelina Castañeda Salgado 1. Política Educativa, Procesos Institucionales y Gestión Alicia Gabriela Ávila Storer 2. Diversidad e Interculturalidad Joaquín Hernández González 3. Aprendizaje y Enseñanza en Ciencias, Humanidades y Artes Verónica Hoyos Aguilar 4. Tecnologías de la Información y Modelos Alternativos Eva Francisca Rautenberg Petersen 5. Teoría Pedagógica y Formación Docente María Guadalupe Correa Soto Marco Esteban Mendoza Rodríguez Olimpia T. González Basurto Alicia Ávila Storer María Luz López Morales (Monclova, Coahuila) Liliana Ochoa (Argentina) Rafael Porlán Ariza (España) José Martín Toscano (España) María del Pilar Unda (Colombia) Martha Cárdenas (Colombia) Ernesto Gómez (España) Josette Jolibert (Francia) Colaboradores Red de Lenguajes por la Transformación de la Escuela y la Comunidad. México Red de maestras y maestros animadores de la lectura y escritura en Iztapalapa, Distrito Federal Jesús R. Anaya Rosique Santos Cortés Castro María de los Ángeles Huerta Alvarado Juan Manuel Rendón E. Diseño gráfico original y portada Margarita Morales Sánchez Formación María Eugenia Hernández Arriola Diseño de encarte y diagramación Margarita Morales Sánchez Traducción Resúmenes: César Makhlouf Akl Lucila Contreras Rodríguez Subdirectora de Fomento Editorial Fotografía Roberto Pulido Ochoa, Elizabeth Camacho González, Rigoberto González Nicolás CONSEJO EDITORIAL Corrección de estilo Armando Ruiz Contreras Director fundador Roberto Pulido Ochoa Director Jorge Alberto Chona Portillo Asistente de dirección Patricia Ruiz Nakazone Diana Violeta Solares Pineda Consejo Editorial Rigoberto González Nicolás Angélica Jiménez Robles Eloísa Gutiérrez Santiago Adán Jiménez Aquino Yolanda de la Garza de Lara Carlos Anaya Rosique Carmen Ruiz Nakasone Tere Garduño Rubio Valentina Cantón Arjona Rosa Isela Barrera Salgado Martha Tlaseca Ponce entre maestr@s es una publicación trimestral de la Universidad Pedagógica Nacional, Carretera al Ajusco núm. 24, col. Héroes de Padierna, CP 14200, Tlalpan, México, DF. Tel. 5630 97 00. www.upn.mx entre maestr@s es una revista indexada en Latindex, folio 14091, desde 2004. Certificado de reserva de derechos al uso exclusivo ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor 04-2006-062110062500-102. Número de certificado de licitud de título 11483. Número de certificado de licitud de contenido 8065. issn 1405-8774. Editor responsable: Juan Manuel Delgado Reynoso. Las opiniones expresadas en los artículos son responsabilidad del autor. Preprensa e impresión: esta publicación se imprimió en El tiraje consta de 3000 ejemplares. DESDE EL AULA La Enseñanza de las Matemáticas y el saber didáctico de los profesores en formación Jesús Manuel Mendoza Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar Iván Alejandro Ixtlahuaca Lidia Rodarte de Robles Ma. Rosa Ana Arechar Ruiz 14 Actividades comunitarias que favorecen el aprendizaje de las Matemáticas del nivel básico de primaria en el estado de Oaxaca Alberto Díaz Acevedo Aprendiendo Geometría con doblado de papel Felipe Ramos Trejo 32 40 DESDE LOS MESABANCOS La matemática de las historias Lourdes Guido 46 PARA Y DESDE EL CONSEJO TÉCNICO Enciclomedia en la clase de Matemáticas Yolanda Chávez Ruiz 48 ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? Leticia Iturbe Meza De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida Silvia García La resolución de problemas matemáticos Víctor Manuel García Montes Fracciones, ¿comparar o fracturar? Araceli Fuentes Figueroa 76 82 58 66 6 Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria Jesús Leobardo Rendón García 90 ENCUENTARIO Poemas matemáticos 98 HOJAS DE PAPEL QUE VUELAN ¿Qué Matemática para la escuela primaria? Horacio Itzcovich 102 PARA LA BIBLIOTECA ¿Por qué algunas personas piensan que son un desastre para las Matemáticas?, ¿cómo abordar esta asignatura? Jorge Alberto Chona Portillo 108 REDES El uso de la nueva tecnología en la Enseñanza de las Matemáticas: “Mi ayudante” Francisco Javier Moreno Torres CARTAS DEL LECTOR Miriam Valderrábano Pérez 116 PARA PRACTICAR La división en tercer año de educación primaria: una experiencia con el uso de Enciclomedia Yolanda Chávez Ruiz 112 EDITORIAL ¿E n qué momento las Matemáticas dejan de ser interesantes? Quizá sea cuando se vuelven sólo operaciones, cuando se deja el aspecto lúdico de lado o cuando solamente se dictan términos a razón de la supuesta abstracción matemática. Entonces, aprender Matemáticas se vuelve algo aburrido, repetitivo y totalmente carente de sentido. Esta forma de enseñar Matemáticas ha dado por resultado que los niños, jóvenes y adultos nos alejemos de ellas. Ante este desolador panorama, ¿por qué se tendrían que exigir resultados favorables en las pruebas que se hacen para evaluar los aprendizajes en educación básica? Lo importante es reflexionar sobre cómo acercar a los niños y a los adolescentes al mundo de las Matemáticas para que descubran sus misterios, sus lenguajes, sus juegos, sus términos y, ¿por qué no?, ayudarlos a desarrollar un pensamiento matemático. El presente número de Entre maestr@s está de­dicado al tema de la enseñanza de las Matemáticas, acerca del cual diversos autores aportan sus particulares miradas. A lo largo de estas páginas se proponen algunos juegos como el doblado de pa­ pel y el plano de signos, para el caso del estudio de la Geometría; se analizan las reformas educativas, sus enfoques, sus aciertos y retrocesos y se reflexiona acerca de la importancia de recuperar los materiales y darles un sentido apropiado para la enseñanza de esta materia; de igual manera, se plantea el enfoque constructivista a través de situaciones didácticas para la resolución de problemas, las cuales implican proce­sos matemáticos que los maestros necesitan apropiarse y obtener de éstos el mayor beneficio para ellos y sus alumnos. Desde esta perspectiva, se sugieren momentos de reflexión acerca del aprendizaje de las Matemáticas en los que se ponga mucha atención sobre cómo responden los alumnos, cuáles son los argumentos con los que validan sus respuestas y conocimientos y, más aún, la importancia de la mediación del maestro para regularizar las actividades de acuerdo con las manifestaciones de los estudiantes, momentos que han sido denominados a-didácticos. Se plantea que los niños no sólo resuelvan los problemas matemáticos, sino también que, a partir de ciertos datos, sean capaces de elaborarlos. Se destaca cómo los niños de comunidades rurales se apropian de algunas concepciones matemáticas a través de acontecimientos cotidianos como cortar palma en el monte, actividad en la que ponen en juego la ubicación geográfica, la clasificación y agrupación en manojos de este material que más tarde usarán para elaborar artesanías y juguetes tales como figuras de animales, “tragadedos”, nidos, bolsas y morrales. Los maestros y sus alumnos juegan con las Matemáticas, resuelven problemas, crean situaciones didácticas y reflexionan sobre sus aprendizajes. Aquí también se presentan poemas matemáticos y se recomiendan libros y películas, así como la página Web Mi Ayudante, para mirar las Matemáticas desde otra perspectiva. Todos y cada uno de los que participamos en este número de Entre maestr@s tenemos el propósito de dar al lector la posibilidad de llenar de sentido y significación el mundo de las Matemáticas. Jorge Alberto Chona Portillo [email protected] 5 Desde el aula entre maestr@s La Enseñanza de las Matemáticas y el saber didáctico de los profesores en formación Jesús Manuel Mendoza* [email protected] C uando un joven ingresa a una escuela normal para estudiar la Licenciatura en Educación Primaria, incursiona a su vez en un oficio que tiene ya una larga historia recorrida, con una carga simbólica y cultural que influye tanto en los significados como en la forma de realizar el trabajo de enseñanza en este nivel educativo. Siempre hay un antecedente de lo que se conoce en quien conoce. Los estudiantes de magisterio aprenden simultáneamente los referentes conceptuales de la profesión a la vez que actualizan los estereotipos y costumbres, los afanes de cambio y la pérdida de sentido que caracterizan al trabajo docente (Ávila, 2006); esto es así, entre otras razones, porque tienen –en tanto alumnos– cuando menos 12 años de convivir con ellos. Estudiar para maestro significa estudiar un oficio, lo que conlleva ingresar en una cultura impregnada tanto de estereotipos como de posibilidades de transformación. Significa también aprender modos de hacer y de ser, descubrir el sentido de las tareas específicas que caracterizan la enseñanza, indagar las técnicas para desarrollar ese hacer, incursionar en las formas de justificar ese hacer y acercarse a las teorías que fundamentan ese hacer. A esta serie de tareas que conllevan una técnica para desarrollarlas, que a su vez tienen un discurso que las justifica y una teoría que les da sentido, es lo que Chevallard (2000) ha definido como praxeologías. Al recortar la mirada para centrarla únicamente sobre el hacer de la Enseñanza de las Matemáticas el problema no se resuelve porque, si bien adquiere especificidad, se añaden ahora los significados que arropan de principio a fin a la enseñanza de esta disciplina. ———————————— * Profesor de la Normal de San Marcos, Loreto, Zacatecas. 6 La Enseñanza de las Matemáticas y el saber didáctico de los profesores Las preguntas que derivan del campo de la formación de profesores para devenir competentes en la enseñanza de una disciplina específica como las Matemáticas podrían sintetizarse en las siguientes: ¿cómo se tendría que pre­ parar a los profesores para estudiar las Matemáticas y para enseñarlas?, ¿qué articulaciones construir entre los conocimientos matemáticos que se estudian en la normal y las Matemáticas escolares que habrán de enseñarse en la primaria?, ¿cuál es el lugar de las herramientas conceptuales que nos aporta la Didáctica de las Matemáticas? ¿qué tipo de formación profesional requieren los nuevos profesores?, ¿cuál sería la articulación entre el trabajo en las escuelas, los aportes teóricos y el análisis de registros de clase considerando el contenido matemático?, ¿cuál es el vínculo entre la formación inicial y la formación continua?, ¿cuáles son los límites de la asesoría en el aula o de la tutoría?, ¿durante cuánto tiempo estudiar Matemáticas?, ¿son suficientes dos semestres? (Even y Ball, 2009: 4-9) La reforma de 1997 para las escuelas normales propone dos cursos sobre la Enseñanza de las Matemáticas que se desarrollan durante el segundo y el tercer semestre. Esto implica una serie de competencias profesionales, intelectuales y didácticas que podrían sintetizarse en el hecho de que los nuevos profesores tendrán que “saber diseñar situaciones de enseñanza y aprendizaje”, así como “saber desarrollar una clase”. En la Normal de San Marcos (Loreto, Zacatecas), desde hace cuatro años los estudiantes se han acercado con mayor sistematicidad al saber didáctico, específicamente a los conceptos y la perspectiva que deriva de la tradición francesa.1 En los trabajos de fin de semestre o en las tesis puede apreciarse que los jóvenes profesores en formación se han beneficiado en grados variables de los textos de Guy Brousseau, Yves Chevallard, Alicia Ávila Storer, Julia Centeno, David Block, Ma. del Carmen Chamorro, Mabel Panizza y algunas traducciones que los profesores 1 Es preciso aclarar que tal perspectiva está presente en los cursos de Matemáticas y su Enseñanza I y II, pero no permite mayor profundización en tanto los conceptos y textos fundamentales se diluyen entre las otras actividades que sugiere el programa. 7 En este artículo se analiza el proceso que se explora en la Normal de San Marcos, Zacatecas, para acercar a los estudian­tes normalistas al saber didáctico necesario para enseñar Matemáticas en el nivel de educación primaria. Se argumenta a favor de la Didáctica de las Matemáticas como la ruta conceptual con mayor solidez y potencial heurístico para fortalecer la formación de los nuevos profesores. El propósito es superar la intuición, las visiones espontáneas y la magnificación de la “experiencia” que caracterizan las representaciones de los profesores en formación sobre el trabajo docente. Palabras clave: praxeologías, momentos a-didácticos, devolución, regulaciones, tiempo didáctico. uuuuu This paper analyzes the process currently explored in the Normal (Teachers’ School) of San Marcos, Zacatecas, in order to bring the teacher-students nearer to the necessary knowledge for teaching mathematics in primary school. It argues in favor of Mathematics Didactics as the strongest conceptual route, with more heuristic potential to strengthen the education of new teachers. The purpose is to overcome intuition, the spontaneous visions and magnification of “experience” which characterize on-training teachers’ ideas about educational practice. entre maestr@s hemos realizado de textos fundamentales de la Didáctica de las Matemáticas. En este contexto se creó, en el ciclo escolar 2007-2008, el Cuerpo Académico Situaciones Didácticas y Praxeologías para la Formación, conformado por un grupo inicialmente reducido de profesores que ha ido incorporando, con grados variables de compromiso, a otros maestros hasta conseguir que el saber didáctico tenga una presencia fundamental tanto en la forma de analizar la labor docente (cursos de observación y práctica) como en la elaboración de los trabajos de titulación (el análisis de experiencias docentes o el “diseño” de situaciones didácticas). Habría que precisar que los estudiantes no diseñan propiamente las situaciones didácticas, sino que hacen adaptaciones o transposiciones de lo señalado en los ficheros, en materiales como Juega y aprende matemáticas (sep, 1995) o en los propios libros de texto. Diseñar una situación didáctica, en el sentido que Brousseau lo concibe, conlleva un proceso distante aún de las posibilidades de la mayoría de los estudiantes en formación y de los propios formadores. En algunos casos se retoman ingenierías ya trabajadas, desde el supuesto que hacer una réplica de ellas le permite a los profesores en formación aprender a prever una relación didáctica, es decir, una interacción entre el alumno y el saber en juego, regulada por las intervenciones del profesor y el medio ideado para que se desarrollen tales interacciones. De tal manera que a los ensayos, artículos o reportes que, como parte de su formación, elaboran los estudiantes, han llegado –para enriquecer el análisis– conceptos como situación didáctica, momentos a-didácticos, devolución, regulaciones, tiempo didáctico, contrato didáctico y otros más que provienen de la Didáctica de las Matemáticas y que se complementan con el resto de conceptos o perspectivas teóricas que 8 estudian los jóvenes cuasiprofesores durante los cuatro años que permanecen en la normal. Esto es así porque el potencial heurístico y la solidez de los conceptos provenientes de los autores antes citados, constituyen la visión más acabada y pertinente para comprender qué es lo que sucede en los salones de clase con la comunicación de un saber. Por eso, no sólo para la Enseñanza de las Matemáticas, sino que apoyados en las ideas de Delia Lerner (2001), Alain Mercier (1999) y otros autores, poco a poco –si bien aún de forma incipiente– los estudiantes de magisterio ponen a prueba la Teoría de las Situaciones Didácticas y la Teoría Antropológica de lo Didáctico para analizar también lo que acontece con la enseñanza de otras disciplinas como Lengua Escrita, Historia o Ciencias Naturales. Aunque el trabajo se centra principalmente en Enseñanza de las Matemáticas. El propósito es superar la intuición, las vi­siones espontáneas y la magnificación de la “ex­periencia” que (pre)dominan en las representaciones de los profesores en formación sobre el trabajo docente: No creemos muy osado afirmar que, hoy día, muy pocas actividades docentes se apoyan de forma generalizada y sistemática en alguna disciplina o ciencia específica. Dicho en otras palabras, la mayoría de “gestos profesorales” que realiza un profesor en el desarrollo del proceso didáctico no son gestos técnicos sustentados por elementos tecnológicos basados a su vez en un cuerpo teórico que los controle y justifique. La actividad docente es, mayoritariamente, una actividad espontánea, que los profesores construyen a lo largo de los años, a partir de su experiencia e intuición (Bosch, Gascón, 2003:82). La trayectoria de los alumnos sufre modificaciones, las cuales podrían caracterizarse sintética- La Enseñanza de las Matemáticas y el saber didáctico de los profesores mente como el recorrido que va de las visiones espontáneas a la profesionalización mediada por grados diferenciados de rigor y sistematicidad en la forma de conceptuar la Enseñanza de las Matemáticas. En un inicio los estudiantes no analizan, sino que evalúan el trabajo de los profesores de grupo (“no lleva material”, “no motiva a los niños”, “las clases son aburridas”, etc.). Y cuando se trata de analizar la propia práctica docente, los significados se diluyen entre la descripción y la generalidad de las afirmaciones. Es común leer en los trabajos de los alumnos, antes que análisis de episodios didácticos, “descripciones” de lo que acontece en el salón de clases, o bien, referirse a lo vivido sin profundizar en los significados. En esto influye el hecho de que los estudiantes no registran los fragmentos textuales de lo que acontece en el salón de clases. De ahí que se es­­pera que los registros en audio o en video se constituyan en herramientas indispensables cuando se trata de analizar con minuciosidad la enseñanza de un contenido matemático. INTERPRETAR LO QUE ACONTECE CON EL SABER MATEMÁTICO EN JUEGO Las dificultades para interpretar qué es lo que pasa en los salones de clase con la Enseñanza de las Matemáticas representa para los jóvenes profesores en formación un dilema mayúsculo. Un acierto –y no el menor– de los conceptos que derivan de la Didáctica de las Matemáticas radica en que, en tanto provienen del salón de clases, permiten profundizar con mayor detalle en los acontecimientos del aula. De ahí que cuando los jóvenes normalistas elaboran sus “planeaciones” y tienen que realizar ajustes y modifi­ caciones durante el desarrollo de la clase debido a que la actividad no evoluciona como lo tenían previsto, encuentran en el concepto de regulación didáctica no sólo una manera de nombrar 9 entre maestr@s las adaptaciones que sufren sus propias planeaciones, sino que han identificado, desde las lecturas –sobre todo en Alicia Ávila (2006)– que la principal regulación recae sobre el tiempo didáctico. Estar atento a la evolución del tiempo didáctico ha llevado a los estudiantes de magisterio a desarrollar su capacidad de observación. En el salón de clases, aquí y allá, se dan momentos en los que los niños pretenden abandonar la tarea que les de­ manda el saber en juego, lo cual hace necesaria la intervención del profesor para cambiar de acti­vidad, para introducir un nuevo saber en juego o para cambiar la interacción entre los niños y el saber. Pero la necesidad de estos cambios es identificada por un profesor que observa y que, por tanto, lleva a cabo las regulaciones didácticas indispensables. Esto permite hablar de profesores que no sólo operan o ejecutan planeaciones “al pie de la letra”, sino que desarrollan clases o, mejor dicho, gestionan un sa­ ber en juego. Las regulaciones son nece­ sarias para mantener el equilibrio didáctico, que se pierde cuando la tarea resulta demasiado complicada, sencilla en exce­so, o bien, se les otorga más tiempo del necesario a los alum­ nos para resolverla. En innumerables ocasiones los jóvenes profesores en formación han podido constatar que la “indisciplina” aparece cuando los niños no han comprendido cabalmente lo que van a hacer 10 En innumerables ocasio­ nes los jóvenes profesores en formación han podido constatar que la “indisciplina” aparece cuando los niños no han comprendido cabalmente lo que van a hacer, de ahí que la devolución tanto de la consigna como del problema o de las reglas del juego (Centeno, 1997) se hayan convertido en un elemento indispensable de la Enseñanza de las Matemáticas, que ya algunos profesores –entre ellos nuestro Cuerpo Académico– denominan como una competencia didáctica ineludible: hacer buenas devoluciones, esto es, realizarlas en el momento adecuado y con el detalle requerido. Acudir a los conceptos ha permitido superar las visiones espontáneas (“ahora los niños venían con más ganas de trabajar”, “este problema lo com­p rendieron fácilmente los niños”, “las estrategias de enseñanza ahora sí me funcionaron”, etc.), de tal forma que los estudiantes normalistas comienzan a identificar que los acontecimientos del salón de clases tienen una “lógica” que es necesario descubrir y que muy pocas cosas suceden por casualidad o debido al azar. Los momentos a-didácticos constituyen un concepto fundamental de la teoría de las situaciones didácticas. La La Enseñanza de las Matemáticas y el saber didáctico de los profesores situación a-didáctica consiste en devolverle la responsabilidad al alumno y no intervenir de una manera directa en las acciones que él toma. En palabras de Berthelot y Salin (1992, citados por Panizza, 2003: 62): El término de situación a-didáctica designa toda situación que, por una parte, no puede ser dominada de manera conveniente sin la puesta en práctica de los conocimientos o del saber que se pretende y que, por la otra, sanciona las decisiones que toma el alumno (buenas o malas) sin intervención del maestro en lo concerniente al saber que se pone en juego. Por otra parte, Block (2001) concibe a la situación a-didáctica como un momento de aprendizaje (y no de enseñanza), en el que los alumnos deben encontrar por sí mismos el vínculo entre sus elecciones y los resultados que obtienen, aquí se advierte la justificación de la “no-intervención” del maestro. Podemos decir que en los momentos a-didácticos es cuando el alumno se enfrenta al saber en juego, cuando recurre a sus conocimientos y cuando puede interactuar con otros alumnos para resolver la tarea que les demanda el profesor. Se trata, entonces, de otro momento en el que funciona la devolución. Para Brousseau (citado por Block, 2001) la devolución podría definirse así: La devolución es el acto por el cual el enseñante hace aceptar al alumno la responsabilidad de una situación de aprendizaje (a-didáctica) o de un problema y acepta él mismo las consecuencias de esta transferencia. Es importante mencionar que durante una situación a-didáctica “no es el silencio del maestro lo que la caracteriza, sino lo que él dice” (Margolinas, 1993: cap. I, citado por Panizza, 2003). Por tanto, el hecho de que el maestro devuelva la responsabilidad al alumno no quiere decir de ninguna manera que él se convierta en un simple espectador, ya que es el maestro quien debe fungir como regulador del tiempo didáctico para que el alumno se apropie del saber en juego. Panizza agrega al respecto: “Las intervenciones estarán pensadas como para instalar y mantener a los alumnos en la tarea.” Una actividad recurrente es solicitarle a los estudiantes que elaboren un informe de las jornadas de prácticas en las que “analicen” lo que vivieron con sus alumnos en el momento de comunicar un saber matemático. Ese que tendría que ser un trabajo principalmente de conceptualización se orienta más a describir y menos a profundizar en la comprensión de lo que acontece en el salón de clases con la Enseñanza de las Matemáticas. Analizar los acontecimientos escolares es una tarea compleja porque implica preguntarse entre otras cosas: ¿cómo dar orden al caos que enfrenta el sujeto cuando tiene que analizar el cúmulo de información recopilada?, ¿cómo construir una mirada analítica que permita dar­le coherencia a los tópicos del aula que nos (pre)ocupan? Una vez transcritos los registros y diseccionada la información, ¿qué es lo que sigue?, ¿cómo se llega al texto analítico?, ¿cómo superar la elaboración de meros resúmenes, valiosos en algún momento, pero insuficientes para profundizar y ampliar sus competencias didácticas? La exploración de los registros es una tarea que significa desbrozar los acontecimientos para descubrir lo que está escondido: los saberes instituidos, la amalgama disímbola de tradiciones pedagógicas que los habitan, las similitudes y las diferencias en las prácticas escolares entre sus compañeros y entre los propios maestros titulares. En cuanto a la dificultad de pensar didácticamente respecto a los conflictos que tuvieron en el desarrollo de sus 11 entre maestr@s DOCUMENTAR LAS TRAYECTORIAS DE FORMACIÓN Además de tener y propiciar acercamientos variables a las teorías y los autores citados, el Cuerpo Académico Situaciones Didácticas y Praxeologías para la Formación desarrolla un proyecto de in­vestigación en el cual se aplican cuestionarios y entrevistas a los estudiantes –antes de asistir a las jornadas de prácticas– durante el segundo semestre de su formación, luego se filman las clases de Matemáticas de algunos estudiantes y cuando regresan elaboran textos analíticos de lo que vivieron para luego ser nuevamente entre­ vistados.3 Una vez por semestre se repite este proceso. Se trata de documentar el trayecto evolutivo que sufren los significados del trabajo docente, cómo se aprende a ser profesor y la forma en que los estudiantes procesan los conflictos que viven en las jornadas de prácticas con la Enseñanza de las Matemáticas. Hasta el presente ciclo escolar se lleva el re­­ gistro de las trayectorias de 11 alumnos de cuar­to semestre y de siete de segundo. La idea es incorporar cada semestre cuando menos seis estudiantes y documentar sus trayectorias durante los cuatro años de normal y hasta el primer año de servicio. En este número de la revista se incluyen varios de los textos que elaboraron los alumnos de tercer semestre al regreso de las jornadas de prácticas. Algunos hicieron una réplica de las situaciones didácticas trabajadas por David Block (1987) para la enseñanza de las fracciones, otros hicieron adaptaciones de fichas o lecciones del libro de texto sobre la enseñanza de la división, la geometría, la proporcionalidad o los pro­blemas de combinatoria. El rasgo distintivo es que re­cu­rren al saber didáctico para analizar lo que sucedió en los salones de clase. Se trata de clases videograbadas, transcritas y lue­go interpretadas con el apoyo de los autores y conceptos antes aludidos. El propósito es superar la incompletud de las praxeologías didácticas que se remiten inicialmente sólo a realizar una tarea y describir una técnica, la praxis; pero no a la justificación (tecnología) y explicación (teoría) de lo que acon­teció en los salones de clase, el logos. Lo que se puede advertir en los textos de los estudiantes de la Normal de San Marcos, son las praxeologías en acto, así como lo que falta por aprender a pro­fesores y estudiantes. 2 3 clases, ¿las relaciones didácticas que propusieron a los niños fueron las esperadas?, ¿las actividades que plantearon a los alumnos funcionaron como lo tenían previsto?, ¿son satisfactorios los resultados que se obtuvieron?, ¿por qué?, ¿qué modificaciones sustanciales realizarían en su próxima jornada de prácticas? El trayecto sugerido podría resumirse así: ir a los registros con la mirada didáctica y tratar de construir argumentos a partir de lo que nos permita “observar” conceptos como contrato didác­tico, devolución, regulaciones, situación didáctica-adidáctica, conocimientos-saberes,2 etc. Y aquí el panorama se ensancha hasta incluir la teoría de las situaciones didácticas. Acotado el rumbo del análisis, lo que resta es buscar una forma de estructurar los argu­ men­­tos, redactarlos, subtitularlos, afinarlos, re-es­cribirlos, leer y releer los registros; tal es la interesante, tanto como abrumadora, tarea de configurar las ideas y construir argumentos plausibles sobre lo que acontece en las jornadas de prácticas con la Enseñanza de las Matemáticas. No es éste el espacio para ampliar el análisis de estos conceptos. Para un estudio detallado de los mismos remitimos al lector a los autores citados. 12 Todos los estudiantes graban en audio o en video algunas de sus clases de Matemáticas, las transcriben y las analizan, pero sólo de algunos casos se lleva un seguimiento. La Enseñanza de las Matemáticas y el saber didáctico de los profesores Lo que aprendemos y hacemos los formadores en el estudio en proceso se inserta en la ruta de la investigación y el sistema a que se refiere Chevallard: Consideremos, hacia 1900, dos médicos, uno “bien formado”, el otro “mal formado” o, di­ gamos, menos bien formado. Pongámosles en la cabecera de un paciente con apendicitis. Nuestros dos médicos no se distinguen. De he­cho, salvo rarísima excepción, el enfermo se muere. Hacia 1900, la apendicitis es casi siempre mortal [...]. Retomemos ahora nuestros dos médicos, pero hacia 1990, y siempre en la cabecera de un paciente con apendicitis. Tampoco aquí se distinguen el uno del otro. Pero esta vez, y casi siempre sin excepción, el enfermo se curará. ¿Qué ha pasado? Todos conocemos la respuesta. La clave de esta “revolución” está, no en el hecho que nuestros dos médicos estarían hoy “mejor formados”, sino en una evolución de una amplitud muy distinta que se resume en dos palabras: la investigación y el sistema (Chevallard, 2000). Como se puede advertir, el dilema, las paradojas, los vacíos por cubrir y lo que resta por hacer no son menores, pero tampoco corresponden al ámbito de los voluntarismos, las simplificaciones o las respuestas fáciles. Otros niveles de co determinación intervienen, lo que no resta relevancia al trabajo del profesor. @ BIBLIOGRAFÍA Block, David (2001). Conceptos preliminares de didáctica, en La noción de razón en las matemáticas de la escuela primaria. Un estudio didáctico. Tesis de Doctorado. México: die-Cinvestav. Bosch, Mariana y Gascón, Joseph (2003). El profesor como director de procesos de estudio: análisis de organizaciones didácticas espontáneas. En: Recherches en Didactique des Mathématiques (vol. 23, núm. 1, pp. 79-136). Genoble: Pensée Sauvage. Centeno, Julia (1997). Relación con el saber: las situaciones didácticas. En: Números Decimales ¿Por qué? ¿Para qué?. Madrid: Síntesis. Chamorro, Ma. del Carmen (2005). Herramientas de análisis en Didáctica de las Matemáticas. En: Didáctica de las Matemáticas para primaria. España: Pearson Prentice-Hall. Chevallard Y. (2000). La recherche en didactique et la formation des professeurs : problématiques, concepts, problèmes. En: Actes de la Xe École d’été de didactique des mathématiques. Houlgate: ARDM et IUFM de Caen. Even, Ruhama y Ball, Deborah (eds.) (2009). The Professional Education and Development of Teachers of Mathematics. The 15th ICMI Study. Nueva York: Springer. Lerner, Delia (2001). Leer y escribir en la escuela. Lo real, lo posible y lo necesario. México: sep-Biblioteca para la Actualización del Maestro. Mercier, Alain, Lemoyne, Gisèle y Rouchier, André (eds.) (2001). Le genie didactique. Usages et mésusages des théories de l’enseignement. Belgique: De Boeck Université. Panizza, Mabel (2003). Conceptos básicos de la teoría de situaciones didácticas. En: Enseñar matemática en el nivel inicial y el primer ciclo. Análisis y propuestas, Buenos Aires: Paidós. Ávila, Alicia (2006). Transformaciones y costumbres en la matemática escolar. México: Paidós. Block, David (1987). Estudio Didáctico sobre la enseñanza y el aprendizaje de la noción de fracción en la escuela primaria. México: die-Cinvestav. 13 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar Reflexiones de estudiantes normalistas sobre sus prácticas de Enseñanza de las Matemáticas ¿Quién enseña a los maestros a hacer regulaciones? Iván Alejandro Ixtlahuaca* ¡PREPAREN, APUNTEN, LEAN! E n el campo de la enseñanza, el término regulación adquiere un significado y un papel profundo y determinante para el buen desarrollo de una clase planeada con anticipación. Por regulación debemos entender los cambios que el profesor hace sobre el curso de la sesión para optimizar el tiempo o la actividad que se está llevando a cabo o que está por iniciarse. Dichas modificaciones o ajustes a las que nosotros llamaremos regulaciones, nos deben ayudar a lograr los propósitos fijados para esa clase y realizar de la mejor manera las actividades del día, de lo contrario, únicamente se estarán haciendo regulaciones de forma abstracta y descontextualizada, y ello sólo trae como consecuencia que las actividades que plantee el profesor carezcan de efectividad, debido a que las regulaciones que hace no van de acuerdo con las necesidades del grupo o de la clase en ese momento. Es aquí precisamente donde me surgen algunas preguntas, ¿quién enseña a los maestros a hacer regulaciones en su grupo de clases?, ¿hacer regulaciones es una competencia didáctica?, ¿qué se necesita para hacer regulaciones acertadas en el momento acertado?, cuando se hace una regulación, ¿se está cambiando de contrato didáctico? Son cuestiones que espero poder responderme en el trayecto de la práctica y con las buenas y malas experiencias dentro del aula. Pero también son interrogantes que te dejo de tarea a ti, amigo normalista, que probablemente estés leyendo este artículo. Las regulaciones se deben llevar a cabo cuando el maestro observa, mediante el desempeño de los niños, que la actividad no se está desarrollando satisfactoriamente y, por lo tanto, no le ————————————— * Alumno de la Normal de San Marcos, Loreto, Zacatecas. 14 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar permitirá cumplir con los propósitos preestablecidos; también es prudente realizar regulaciones cuando el docente observa mediante el ritmo de trabajo de los alumnos que no le alcanzará el tiempo para culminar y concluir de la mejor manera la actividad. MIS PRIMEROS INTENTOS DE REGULACIONES Durante la semana que estuve practicando con el grupo de sexto grado en la comunidad de Palmillas, Ojocaliente (Zacatecas), en el transcurso de las clases de Matemáticas, tuve la necesidad de realizar un gran número de regulaciones didácticas debido a diversos motivos, entre los que destacan los siguientes. • Que los alumnos no trabajaban al rimo que tenía contemplado, sino que lo hacían mucho más lento. • Que los alumnos no poseían algunos conocimientos previos sobre determinados temas que yo había supuesto que sí tenían. • Que el tiempo de la clase no me alcanzaría para llevar a cabo todas las actividades que llevaba pla­neadas para ciertos días. • Que la actividad no resultaba de interés para los alumnos y, por consiguiente, se distraían mucho y entorpecían el buen funcionamiento de la actividad. • Que la actividad que se estaba desarrollando no ponía de manifiesto el saber que se quería poner en juego, debido al poco interés de los niños, la fatiga o aburrimiento o la escasez de conocimientos que tenían al respecto. Éstos fueron los principales motivos que me obliga­ron a realizar regulaciones durante las clases de Matemáticas. A continuación, citaré algunas situaciones en las que hice regulaciones, posteriormente, las comentaré y veremos cuáles fueron las razones que motivaron dicha re­gulación. Veamos el primer ejemplo: 15 Tres experiencias distintas de profesores en formación muestran cómo el buen desarrollo de una clase no se da sólo porque se planee con anticipación. Los alumnos son sujetos activos cuyos saberes son conocidos y reconocidos por sus maestros, quienes realizan regulaciones didácticas. A su vez, los alum­nos comen­ tan sus respuestas y dan a conocer los procedimientos que emplearon para lle­ gar a ellas, lo cual les permite acceder a nuevos conocimientos. Palabras clave: Regulación, situación didáctica, devolución, fase de validación, procedimiento, aprendizaje, institucionalizar. uuuuu The experiences of three different teacher-students show how the good unfolding of a class is not guaranteed by anticipated planning. Their students are active subjects. The would-be teachers recognize and are aware of their students’ knowledge and so they make didactic adaptations. The students talk about their responses to problems and the procedures they used to arrive at them. Through the conditions generated in class­ room, they aloud their students to access new knowledge. entre maestr@s P. (Profesor): a ver, niños, ¿saben cuáles son las fracciones equi­valentes? Niños: no, no. P.: ¿nunca han escuchado hablar de ellas? Lilia: no, nunca. Carolina: de veras, profe. P.: bueno, a continuación me van a escribir estas fracciones [escribiendo en el pizarrón] en su cuaderno, y me van a poner cuál de las dos es mayor o si son iguales también le ponen. P.: bien, ¿y de este otro? Cristina: cuatro. P.: ahora díganme, ¿cuál pedazo es más grande? Lilia: son iguales Daniel: no, no es cierto Otros niños: sí, sí son iguales. Cabe señalar que esta regulación que realicé garantizó el buen desarrollo de las demás actividades de la clase, y no sólo eso, tal vez algunos de los alumnos adquirieron un nuevo conocimiento, lo cual era el objetivo primordial. Ahora veamos otra situación en la que requerí de hacer otro tipo de regulación didáctica. En este caso, las causas que originaron dicha regulación fueron distintas a la anterior y, por consiguiente, también el resultado. La regulación se llevó a cabo en una actividad que en la planeación estaba diseñada de la siguiente forma: Los niños comenzaron a hacer su trabajo y luego me lo llevaron para que lo revisara; cabe señalar que todas las fracciones que les puse eran equivalentes, es decir, que valían lo mismo, y al ver sus respuestas me di cuenta de que ninguno de ellos había puesto ni siquiera una sola fracción como equivalente de otra. Fue precisamente aquí donde me vi en la necesidad de hacer algunas regulaciones al trabajo que llevaba planeado para ese día, ya que en todas las actividades que pretendía desarrollar daba por hecho que los niños ya tenían algunos conocimientos acerca de las fracciones equivalentes y, por lo que observé, me di cuenta de que no era así. Entonces, para poder darle un buen rumbo a la clase y con la intención de que los niños se apropiaran de un nuevo conocimiento, comencé a comprobar en el pizarrón de forma grupal las respuestas de la actividad anterior, lo cual hice de la siguiente manera. P.: Escribiré una cantidad en el pizarrón y le aventaré una pelota a un niño, y le pediré que me diga el antecesor o el sucesor de dicha cantidad y, posteriormente, el niño le aventará la pelota a otro de sus compañeros, y al que le caiga tendrá que decir el antecesor o el sucesor, dependiendo de lo que haya dicho el otro niño, y después pondré otra cantidad y así sucesivamente hasta que todos hayan participado. Así estaba planeada la actividad, pero esto fue lo que sucedió: P.: ahora comprobaremos sus respuestas, a ver, ¿quién me dice qué le puso en 2/4 y 4/8? Lilia: es mayor 4/8. P.: ¿por qué? Daniel: porque es más grande el cuatro que el dos y el ocho que el cuatro. P.: a ver, vamos a ver si es cierto [dibujando unos rectángulos en el pizarrón], estos rectángulos son iguales, éste lo vamos a dividir en cuatro, y este otro en… Niños: en ocho. P.: bien, ahora, ¿cuántos coloreamos de éste? Fernando: dos. P.: a ver, niños, yo le voy a aventar la pelota a uno de ustedes y voy a decir una cantidad, y también voy a decir antecesor o sucesor, y al que le aviente la pelota me tendrá que responder según lo que yo haya dicho. ¿Quedó claro? Niños: sí, sí. P.: a ver si es cierto, ¿qué vamos a hacer, Milagros? Milagros: vamos a decirle el antecesor y el sucesor del número que nos diga. 16 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar P.: no, únicamente uno de los dos, ya sea el antecesor o el sucesor, y luego ustedes le avientan la pelota a otro compañero para que éste diga el otro. [Pusimos un ejemplo para tratar de que les quedara más clara la actividad y después empezamos. Tomé la pelota y se la aventé a Fernando]. P.: 1,528, sucesor. Fernando: mmmm, ¿qué número dijo? P.: 1,528, ¿sucesor? Fernando: sucesor, mmmm, 1,527. Algunos niños: sucesor. Fernando: ah, 1,529. La dinámica continuó con otras tres participaciones por parte de los niños, las cuales carecieron de certeza y claridad, lo que le restó fluidez y eficacia a la actividad. Y al darme cuenta de que ésta no funcionaba porque se estaba interrumpiendo mucho para hacer aclaraciones o correcciones, decidí hacer una regulación al suspender la actividad y realizar otra que abordara el mismo contenido. La actividad nueva fue la siguiente: yo escribí dos filas de ocho cantidades cada una, posteriormente, dividí al grupo en dos equipos, cada equipo tenía que anotarle el antecesor y el sucesor a las cantidades que estaban escritas. Hice la indicación de que todos los integrantes del equipo se formaran y que fueran pasando uno por uno para anotar el antecesor o el sucesor y después le dieran el gis al compañero que seguía y así hasta terminar con todas las cantidades. Resultaría ganador el equipo que ter­minara primero. Pues bien, así sucedió, la actividad motivó tanto a los niños que querían que les pusiera más cantidades para seguir jugando; lo que más me sorprendió fue que Sarahí, quien se había negado a participar en la actividad anterior argumentando que no sabía, en esta ocasión le quitaba el gis a sus compañeros que P.: Ahora tú aviéntala, Fernando, di una cantidad. Fernando: [avienta la pelota a Sarahí] 20,800. P.: ¿sucesor o antecesor? Fernando: sucesor. Sarahí: [se queda pensando como dos minutos] ¿cuál era la cantidad? Fernando: 20,800. Sarahí: mmmm. Carolina: ay, no, está bien fácil, ¿cómo no te la vas a saber? Lilia: sí, es cierto, está bien fácil, sólo súmale uno. P.: dejen que ella sola diga. Sarahí: es que no sé. 17 entre maestr@s se habían equivocado para corregirlos y así ayudar a que su equipo ganara. Desde mi punto de vista, en esta regulación lo que me llevó al éxito fue el plantearle a los niños una actividad a manera de competencia, ya que esto los motivó a realizar un esfuerzo mental extra para colaborar con su equipo y obtener el triunfo. Ahora analizaremos la regulación que hice en el transcurso de la aplicación de una situación didáctica. Ésta consistía en plantear a los niños que: cuatro amigos habían ido a comprar tres chocolates a la tienda y se los habían repartido en partes iguales. También se hacía saber el tamaño de la parte que le tocó a cada uno y se mencionaba que en la tienda sólo vendían chocolates de tres tamaños diferentes. Entonces, los alumnos, organizados en equipos de tres integrantes, tenían que descubrir de qué tamaño eran los chocolates que compraron para que le tocara ese pedazo a cada uno. El material que se le proporcionaría a los equipos para que se les facilitara la resolución del problema era el siguiente (Block, 1987:1-70): Inclusive dicho sobrante de cada tira de cartón provocaba que la consigna se mal interpretara, ya que algunos niños estaban cortando tiras del tamaño del pedazo de chocolate con ese sobrante de cartón, y otros estaban calculando cuántas veces cabían las tiras pequeñas en la tira que sobraba. Lo preocupante del asunto era que le estaban poniendo mayor interés a las tiras sobrantes de cartón que a la propia consigna, que era tratar de encontrar de qué tamaño eran los chocolates que compraron los niños. Con todo esto, pude darme cuenta de que los niños se estaban confundiendo mucho, ya que no sa­ bían cuál de las tiras representaba el tamaño de choco­­ la­te o cuál se refería a los tamaños que se vendían en la tienda. Veamos un fragmento de la fase de formulación en la que sucedió lo anterior. P.: ¿qué están haciendo en este equipo? A ver, explí­ quenme. Sarahí: pues estamos midiendo las tiras de cartón para ver cuántas veces cabe en esta más grande [señala la tira sobrante]. P.: pero, ¿qué les dije yo que tenían que hacer? Ricardo: [se queda pensando un rato], pues eso, que viéramos cuántas veces cabe, ¿no? P.: ¿tiene razón Ricardo, Milagros? Milagros: sí, ¿no? • Cuatro tiras de cartón de 6 cm x 3 cm color café (que representan el pedazo de chocolate que le tocó a cada niño). • Tres tiras de cartón de 8 cm x 3 cm color rojo. • Tres tiras de cartón de 5 cm x 3 cm color azul. • Tres tiras de cartón de 10 cm x 3 cm color amarillo. • Cada tira debe disponer de un sobrante de cartón por si los niños lo necesitan. Les volví a plantear de forma rápida la consigna y pasé a otro equipo para ver lo que estaban haciendo. P.: a ver, Daniel, ¿qué es lo que están haciendo? Daniel: estamos cortando tiras del mismo tamaño de cada color. P.: ¿y eso para qué? O, ¿por qué? Daniel: pues para que se ajusten las cuatro de cada color. P.: ¿y por qué quieren tener cuatro de cada color? Fernando: pues porque son cuatro niños los que compraron los chocolates, ¿no? Fue precisamente en el último punto de la lista del material que surgieron las dificultades, debido a que en lugar de funcionar como un auxiliar o como una referencia, la tira sobrante de cartón estaba jugando el papel de un distractor y provocaba que la actividad perdiera su sentido y que los niños se confundieran más al momento de estar buscando un resultado. 18 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar Les aclaré casi sin ganas la situación y, decepcionado, pase al otro equipo. P.: a ver Cristina, ¿qué es lo que están haciendo? Cristina: pues este es el tamaño del chocolate que les tocó y estamos midiendo a ver en cuál tira caben los cuatro pedazos sin que sobre. P.: ¿y para qué crees que serán los otros tres pedazos que les entregué de cada color? Lilia: pues son los tamaños de los chocolates que vendían. Carolina: entonces, ¿para qué nos dio estas tiras? [señalando a las tiras sobrantes]. clase del día, sino para buscar que el alumno tenga mayor posibilidad de adquirir un conocimiento. La regulación se hace para ajustar el tiempo didáctico, con lo que se busca que el alumno aprenda en todo momento. UNA ÚLTIMA REFLEXIÓN Los anteriores fragmentos de las clases nos sirven como ejemplo para demostrar que un pequeño ajuste, una simple orden o una sola modificación que ponga en práctica el profesor durante el desarrollo de la clase, basta para darle un nuevo giro a la actividad y en muchos de los casos cambia el resultado o desenlace de ésta. La mejor regulación es aquella que se hace en el momento apropiado y en la situación adecuada, porque no en cualquier momento de la clase podemos y debemos hacer regulaciones, ni tampoco bajo cualquier situación; debemos esperar que el propio desempeño de los niños nos lo indique, lo que nos lleva a la idea de que la observación es nuestro mejor instrumento para poner en práctica las regulaciones. Nosotros, como futuros maestros, tenemos que ser cuidadosos en este sentido, porque no todas las regulaciones que haga un profesor tienen efectos positivos, sino que también existe la otra cara de la moneda, y es precisamente esto lo que debemos evitar a toda costa. Y si llegamos a la conclusión de que hacer regulaciones es una competencia que mejora progresivamente, entonces, debemos estar preparados para superar los tropiezos y obstáculos que se nos presenten en el camino de la práctica. @ En ese momento decidí suspender la actividad para realizar una regulación: inmediatamente recogí todo el material que les había dado, y comencé a realizar nuevamente para todo el grupo el planteamiento del problema y, posteriormente, la consigna; de hecho para asegurarme de que sí habían entendido la consigna, puse en práctica la devolución, que es la acción por la que el maestro traspasa la responsabilidad al alumno, que es quien debe querer aprender (Centeno, 1997:113-120). Pero, bueno, es preciso señalar que existen tres tipos de devoluciones, en este caso la que apliqué fue la devolución de la consigna, que se refiere a que las consignas deben ser entendidas por el alumno, lo que significa que los conocimientos que posee el alumno deben ser suficientes para interpretar correctamente las condiciones y las informaciones que definen la situación (Centeno, 1997:117). La regulación tuvo éxito y los niños pudieron entender cuál era el objetivo de esta actividad, la cual desarrollaron satisfactoriamente y así pudieron adquirir un nuevo saber. Con esa regulación que considero hice en el momento apropiado, pude darle un nuevo rumbo a la actividad y conseguí con ello que se cumplieran los propósitos planteados para esa sesión, los cuales eran que los niños tuvieran un acercamiento a las fracciones como medida. Es importante señalar que las regulaciones no sólo se deben hacer para salvar la BIBLIOGRAFÍA Block, David (1987). Estudio didáctico sobre la enseñanza y el aprendizaje de la noción de fracción en la escuela primaria. México: die-Cinvestav. Centeno, Julia (1997). Relación con el saber: las situaciones didácticas. En: Números decimales ¿Por qué? ¿Para qué? Madrid: Síntesis. 19 entre maestr@s La validación: una confrontación como medio de aprendizaje Cinco niños fueron al cine y decidieron comprar caramelos, sólo les alcanzó para dos –los cuales se repartieron en partes iguales, con lo que a cada quien le tocó un pedazo de una determinada medida (la medida era de 4 cm, pero no se las proporcioné a los alumnos sólo entregué cinco trozos de popote que representaban los pedazos de caramelo y un popote completo con el cual tenían que representar la medida de este dulce). El propósito de la situación era que los alumnos se fueran adentrando en el conocimiento de las fracciones como medida. El saber en juego consiste en identificar la fracción como unidad de medida para construir el entero (medida original de un solo caramelo), cosa que algunos equipos lograron hacer, tomaron como medida el pedazo de popote (4 cm) para conformar los dos enteros al momento de unir los cinco pedazos y después partirlo a la mitad y así obtener la medida de un caramelo. Después de la resolución del problema, se presentaron diferentes estrategias y procedimientos que emplearon cada uno de los equipos para llegar a su propio resultado. En el siguiente fragmento de registro, se presenta el momento en el que invito a cada uno de los equipos a presentar a sus compañeros la medida que obtuvieron de un caramelo entero después de haber trabajado con sus compañeros. A cada equipo se le dio la oportunidad de escoger un nombre para ellos, esto me resultó más fácil, tuve la oportunidad de registrar la medida de cada uno de los equipos en el pizarrón y así poder identificarlos más rápidamente. Integré tres equipos que estaban conformados así: el “Americano”: Eduardo, Esmeralda y Sandra; “Mexicano”: Raúl, José, Sonia y Alicia; y el “Estrella”: Fátima, Michell y Miguel. Lidia Rodarte de Robles* E n este artículo me centraré sólo en una de las fases de la situación didáctica: es el momento en que se realiza la confrontación de lo que el alumno ha construido correcta o incorrectamente, ya sea de una forma explícita o implícita, y en la que el profesor prepara un medio de interacción en el cual los alumnos dan a conocer las respuestas y procedimientos utilizados pa­ ra la resolución de un problema, éstos son sometidos a juicio por sus compañeros. Aquí los alumnos tienen la oportunidad de reflexionar sobre sus respuestas y procedimientos y así llegar al resultado correcto, con el objetivo de que el alumno construya su propio conocimiento. Estoy hablando de la Fase de Validación. Situaciones de validación: dos alumnos (o grupo de alumnos) deben enunciar aserciones y ponerse de acuerdo sobre la verdad o falsedad de ellas. Las afirmaciones propuestas por cada grupo son sometidas a la consideración del otro grupo, que debe tener la capacidad de “sancionarlas”, es decir, ser capaz de rechazarlas, pedir pruebas, oponer otras aserciones (Panizza, 2003:67). Considero necesario que para dar sentido a este escrito debo mencionar la situación didáctica que trabajé con niños de cuarto grado de primaria, de la que extraje el momento de la validación. Ésta se llama “construir el entero”:** por equipos los alumnos tenían que descubrir la medida original de un caramelo mediante el planteamiento del siguiente problema: Eduardo: ya acabamos. M. (Maestra): quiero que pongan su caramelo aquí en el centro [los alumnos formaron un círculo grande y pusieron el caramelo en el lugar que dije]. Eduardo: ¿aquí en medio? ————————————— * Alumna de la Normal de San Marcos, Loreto, Zacatecas. ** Se trata de una réplica de una Situación Didáctica trabajada por David Block (1987) en su tesis de maestría. 20 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar M.: sí, tiene que decir cuánto mide su caramelo. A ver, diles a tus compañeros cuánto mide tu caramelo, Eduardo. Eduardo: 11. M.: dice el equipo Americano que su caramelo mide 11 cm [le pedí a los equipos que nombraran un integrante para que pasará a presentar la medida de su caramelo]. M.: el Estrella, a ver, pasa Fátima y pon el caramelo en el centro. Fátima: 11. M.: a ver el Mexicano, ¿ya lo midieron bien? Alicia: sí, 10 y medio. M.: ¿quién creen que tenga la razón? Todos: nosotros. Raúl: el de Fátima está más chiquito que el de Eduardo. Fátima: sí, el de Eduardo es de 12. Eduardo: no es cierto. Fátima: ustedes dijeron que era de 12, mídalos, maestra. M.: a ver, ¿cuál es el de ustedes, Eduar­do? Equipo Americano: éste, el de en me­dio. M.: ¿cuánto mide? [aquí los alumnos toman una regla y nuevamente miden el popote que cortaron]. Alicia: son 12. M.: entonces el equipo Americano dice que 12, ahora tenemos tres medidas diferentes. ¿Quién creen que tenga la razón? En esta parte de la validación, Fátima y Raúl identificaron que un equipo proporcionó una cantidad falsa, dijo que eran 11 cuando en realidad eran 12. El equipo de Fátima (Estrella) dio el resultado que obtuvo antes de tiempo, por lo que el equipo Americano escuchó y decidió cambiar su resultado al suponer que ese era el correcto. Los alumnos suelen dudar de su respuesta y deciden cambiarla por otra que creen que está bien, sin antes llegar a una reflexión que les permita verificar cuál es el resultado correcto, o bien, descubrir si ambos están mal. Para ello, los alumnos tuvieron la capacidad de contradecir una respuesta que no era válida en su opinión y era necesario aclarar para proseguir en la búsqueda del resultado correcto. El rechazar o justificar los juicios propios o de otros equipos es uno de los tantos papeles que le corresponde al alumno en la validación, porque es el receptor de determinada situación y lo que se busca es llegar a la respuesta correcta. Bueno, sin dejar a un lado el papel del profesor, ya que él también puede intervenir en este tipo de situaciones, pero sólo como mediador de ellas, procurando que cualquier acción que al alumno no le parezca se aclare, además de otras funciones que le competen y que enseguida se mencionan. LA ARGUMENTACIÓN ES LA PARTE ESENCIAL DE LA VALIDACIÓN ¡Atentos profesores! Es de suma relevancia mencionar que el maestro debe participar en la validación en tanto busca el proceso de prueba que le permita a los alumnos explicar lo que realizaron y reflexionar sobre tal procedimiento, y no el de indicarles 21 El rechazar o justificar los juicios propios o de otros equipos es uno de los tantos papeles que le corresponde al alumno en la validación, porque es el receptor de determinada situación y lo que se busca es llegar a la respuesta correcta entre maestr@s en qué se equivocaron, ya que lo podrán saber en la confrontación de sus resultados. Para alcanzar este objetivo, el profesor debe provocar la interacción entre alumnos-maestro-saber mediante el planteamiento de preguntas para crear en los estudiantes la necesidad de expresar lo que hicieron, así como el comprobar sus aserciones. Este tipo de interacciones también surgen aunque el profesor no lo indique, ya que el alumno forma parte de la situación y, por tanto, siente la necesidad de expresarse, lo que crea en ambos casos un momento para la argumentación de los procedimientos. decidí que cada equipo siguiera dando a conocer su procedimiento e identificara si otro había tenido la misma dificultad. M.: entonces, el equipo Americano dice que 12, ahora tenemos tres medidas diferentes, ¿quién creen que tenga la razón? Todos: nosotros. M.: ¿por qué creen? Raúl: nosotros. M.: ¿por qué dicen que ustedes, Raúl? ¿Qué es lo que hicieron? ¿Qué hizo tu equipo para sacar la medida de un caramelo? Raúl: lo medimos. M.: pero ¿cómo lo midieron? Raúl: con la regla. M.: muéstranos cómo le hicieron. Raúl: le medimos con la regla y le cortamos. M.: explíquenle a sus compañeros cómo. José: es que hasta aquí le medimos. M.: pero ¿por qué hasta ahí? ¿Por qué juntaron todos los pedacitos? Raúl: para medirle. Sonia: para medirle y cortarle lo que le sobraba. M.: y hasta ahí, ¿cuánto sería? Alicia: dos (se refiere a los dos enteros de caramelo). M.: y luego de ahí, ¿qué hicieron? José: lo medimos a la mitad. M.: ¿y cuánto les dio? Equipo Mexicano: diez y medio. Otras situaciones consisten en probar una declaración acerca del conocimiento, un resultado, una propiedad, una regla […]. La exigencia de hacer explícito es aún mayor, ahora se ponen de manifiesto vínculos con otras nociones, el conocimiento tiende a devenir un objeto explícito de estudio, reconocido, nombrado y definido (Block, 2001:32). Al momento de preguntar a los alumnos, “¿qué es lo que hicieron?”, logré que dieran a conocer a sus compañeros los pasos que siguieron para sacar la medida de su caramelo y así captar las distintas formas de su resolución (los tres equipos utilizaron la regla para sacar la medida del caramelo, estrategia que era válida). Equipo Mexicano: lo que hizo este equipo fue juntar los cinco pedacitos de popote que les entregué, después los midieron contra el popote completo y cortaron lo que sobró; por último cortaron el popote a la mitad, lo cual dio como resultado 10.5 cm. Lo que indujo a esta cantidad es que algunos de los popotes de 4 cm medían 1 mm o 2 mm de más, cuando lo cortaron les dio más de 20 cm, por lo tanto consideraron que la mitad sería 10.5 cm. Este fue un error mío, pues corté algunos popotes con algunos milímetros de más, y fue ahí donde se presentó la confusión, pero a pesar de ello se logró que el equipo reflexionara sobre cómo obtener la medida de un caramelo. Para esto Equipo Estrella: a diferencia del equipo Americano, ellos rápidamente identificaron la solución y mencionaron que eran dos popotes y medio. Juntaron los cinco pedacitos de popote, los midieron contra el popote completo, se fijaron en lo que le sobraba y le cortaron; juntaron tres popotes para así poder cortar dos y medio en dirección al popote que habían cor­ tado, sólo que al cortarlo se pasaron un poco más y al medirlo con la regla les dio 11 cm. Este equipo logró identificar a la primera que eran dos popotes y medio, 22 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar Esmeralda: nosotros primero medimos el popote grande [se refiere al popote completo]. M.: ¿cuánto mide el popote grande, Esmeralda? Esmeralda: 26 (medida real 26.5). M.: dicen que 26. ¿Qué más hicieron, Esmeralda? Esmeralda: juntamos los popotitos, le medimos con éste (muestra el popote completo) y le cortamos lo que sobraba, y luego medimos tres y lo partimos a la mitad. M.: a ver, hazlo ahí para que vean tus compañeros. resultado que era correcto, pero al no cortar bien se presentó el error. No lograron captar que los dos enteros de caramelo tenían que ser del mismo tamaño, ya que ellos tenían uno más grande que el otro. M.: el siguiente equipo, a ver, Fátima, ¿cómo le hicieron?, pongan atención, fíjense en lo que hicieron ellos. Miguel, deja que alcancen a ver todos, vayan explicándonos lo que están haciendo. Miguel: primero pusimos todos los popotitos así (juntaron los cinco pedacitos de popote) y los medimos a ver si daban a la línea. M.: ¿cuántos popotes eran? Fátima: dos y medio. M.: a ver lo que ustedes hicieron fue juntar… Alicia: juntamos tres popotitos. M.: ¿tres? Alicia: sí. Fátima: y luego ya le medimos hasta dónde era el medio. M.: ¿ya se fijaron que ellos hicieron otra cosa diferente? Todos: sí. M.: ¿y cuánto les dio el caramelo? Fátima: dos y medio (popotes). Miguel: pero en la regla nos dio 11. M.: en la regla el caramelo mide 11, pero dicen que son dos popotitos y medio. Algo primordial que dejé pasar en esos momentos, es que no realicé la devolución (el acto por el cual el pro­fesor pasa al alumno la responsabilidad respecto a una situación de aprendizaje, mediante cuestionamientos que le permitan al alumno reflexionar sobre un concepto o explicación dada) cuando Esmeralda me dijo: “y luego medimos tres y lo partimos a la mitad”, lo que evitó que reflexionara acerca de por qué había cortado en dirección a los tres popotes y no en los dos y medio, y así hacer que ella entrara en una situación de aprendizaje (situación a-didáctica), ya que el saber en juego era encontrar la medida original de un solo caramelo. Este tipo de cuestionamientos son algunos de los que debí haber planteado: ¿por qué cortaste en dirección a los tres popotitos?, ¿los dos enteros que tienes son del mismo tamaño?, ¿qué es lo que te pide el problema? Y como dice Chamorro (2005:76): VALIDACIÓN, DEVOLUCIONES, SITUACIÓN A-DIDÁCTICA, APRENDIZAJE Equipo Americano: ellos primero decidieron medir el popote completo, después juntar los cinco pedacitos, midieron tres y hasta ahí le cortaron, lo que dio como resultado 12. Este equipo logró captar que se tenían que juntar los cinco pedacitos de caramelo para formar los dos enteros, pero no establecieron cuál era la mitad de éste, para que los dos enteros quedaran de una misma medida. Para que una situación sea percibida como a-didáctica es necesario que haya una construcción epistemológica cognitiva intencional, el alumno es entonces el responsable de la resolución del problema que le plantea la situación, y a él le corresponde encontrar una solución. Se requiere que el alumno acepte el problema como su problema […]. La acción mediante la cual el profesor busca esta aceptación por parte del alumno recibe el nombre de devolución. De esta cita de Chamorro se desprenden varios con­­ ceptos que van ligados entre sí, primero se crea una situación didáctica que debe estar diseñada para M.: a ver, y ustedes, ¿cómo le hicieron?, pongan atención. 23 entre maestr@s transmitir un saber al alumno (saber en juego), pe­ ro quizás se pregunten, ¿cómo se puede lograr ese aprendizaje? Es aquí donde vienen juntos el concepto de devolución y situación a-didáctica, el maestro hace uso de las devoluciones para que el alumno tome su responsabilidad y entre en una situación llamada a-didáctica, que consiste en el momento en el cual el alumno va construyendo su propio aprendizaje a partir de la reflexión. La situación a-didáctica debe estar planteada de acuerdo con los conocimientos del alumno, debe serle insuficiente lo que ya sabe (de lo contrario no serán conocimientos que progresen porque ya los posee), debe permitirle verificar sus dudas, además de que él debe identificar si la estrategia empleada le permite resolver el problema, ya que la misma situación se lo estará comunicando y así él pueda decidir si es la efectiva y llegar al medio de validación de la estrategia empleada. en la situación; lograrán esto mediante la emisión de juicios que les ayuden a aclarar dudas o confusiones y así llegar a la reflexión que les permita saber cuál es el resultado correcto, de lo contrario solamente se estará dando una información que no conduce a ningún aprendizaje. M.: ¿quién creen que está bien? Equipo Estrella: nosotros. M.: dice Raúl que el de ellos. Miguel: que la maestra califique. M.: no, ustedes van a calificar. Miguel: ninguno. M.:¿por qué? Miguel: si estuviéramos todos bien, todos tuviéramos las mismas medidas y todos estamos mal [esta es una idea que tiene Miguel porque los resultados presentados fueron diferentes y considera que están mal]. M.: ¿ustedes creen eso? Alicia: no. M.: ¿por qué? [no responden nada] LA VALIDACIÓN INTERNA ¿Es cierto que hay validaciones internas? Sí, ésta se da cuando el alumno reflexiona por sí sólo si el procedimiento empleado es suficiente para resolver el problema, pues la situación le informa de su decisión e identifica si tal estrategia lo llevó al resultado correcto o no, sin necesidad de la intervención del profesor. Una vez que todos dieron a conocer su procedimiento, me apoyé en los alumnos para que indicaran paso a paso lo que habían realizado (algunos alumnos y yo íbamos representando estas acciones con los popotes). El alumno sabe, sin necesidad de la sanción del profesor, si el procedimiento usado es correcto o no, ya que la propia situación le informa sobre ello. Hay una validación interna de la estrategia usada (Chamorro, 2005:74). M.: tenemos cinco popotitos ¿verdad?, ¿entonces que tendríamos que hacer? [los alumnos no responden nada], ¿díganme?, ¿qué representan los cinco popotitos? Miguel: el caramelo. M.: ¿qué tendríamos que hacer para saber cuánto es un entero? Miguel: juntarlos todos [aquí con ayuda de los alumnos fui realizando lo que ellos iban diciendo]. M.: ¿y si ya los tenemos juntos todos? Raúl: le íbamos a medir con el popote y le cortamos. Alicia: sí. M.: ¿quién pasa a córtalo hasta ahí?, a ver tú, Eduardo, córtalo. Los alumnos pueden estar acostumbrados a que el maestro les indique en lo que están mal y decirles la respuesta correcta; ésta no es una buena estrategia, pues se evita que el alumno reflexione sobre sus actos, es por ello que el maestro debe provocar un contexto en el que se verifiquen y cuestionen todo tipo de resultados, se identifique qué es correcto o incorrecto 24 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar M.: ¿cuánto sería hasta aquí? [expongo al grupo cómo quedó el popote que cortó Eduardo] Raúl: dos enteros. Todos: dos enteros. La estrategia utilizada por los niños consistió en juntar primero los cinco pedazos de popote, después reflexionaron que de ahí podían formar los dos enteros y para poder indicar cuánto era la medida de un caramelo, utilizaron el popote completo para medir y cortar lo que sobraba; enseguida, lo midieron con la regla (establecieron que la medida era de 20 cm con dos rayitas) y lo cortaron a la mitad lo que dio como resultado una medida de 11 o 10.5 cm. Sólo que no justificaron el porqué de sus resultados. Habían establecido que los dos enteros juntos daban 20 con dos rayitas y que la mitad de esa cantidad no podía ser 11 o 10.5, ya que sobrepasaba la primera cantidad al multiplicarla por dos. Utilizar la regla implica establecer medidas muy exactas para poder llegar a un resultado correcto, por esta ocasión no consideré conveniente tomarlo así, pues no existía una medida precisa para los pedazos de popote (que deberían de ser de 4 cm), además consideraron una cantidad (20 cm con dos rayitas) en la que 11 o 10.5 no es la mitad. Si el alumno da una respuesta tiene la responsabilidad de justificar por qué la obtuvo, pues para ello elabora un procedimiento, el cual es necesario que verifique para justificar sus acciones. Pedazos de caramelo: 4 cm c/u Se juntaron los pedazos de caramelo y se midieron con un popote completo para cortar lo que sobraba. M.: después, ¿qué hicieron para saber cuánto mide un solo caramelo? José: le medimos. M.: ¿cómo le mediste? José: con la regla. M.: ¿quién pasa a medirle? Pásale, Miguel. Miguel: mide 20. M.: 20 con 4 rayitas. Raúl: 20 con 4 rayitas. M.: fíjate bien. Raúl: 20 con 3 rayitas. Eduardo: 20 y medio. Fátima: 20 con 2 rayitas, sí, son 20 con 2 rayitas. M.: quedamos que 20 con 2 rayitas, ¿qué sigue? Alicia: cortarlo. M.: ¿hasta dónde? Pongan atención, ¿qué estás haciendo? Miguel: aquí serían los dos [señala la mitad del popote que cortó Eduardo]. M.: ¿cuánto mide cada uno? Miguel: 11. Raúl: no, son 10 y medio. Eduardo: ya lo cortó mal. Alicia: si es cierto. El alumno debe justificar la pertinencia y validez de la estrategia puesta en marcha, elaborar la verificación o prueba semántica que justifica el uso del modelo para tratar la situación (situación de validación) (Chamorro 2005:74). Considero que los niños en un principio identificaron lo que tenían que hacer para obtener la medida del caramelo, pero era necesario establecer la medida original de éste porque estaba dentro de la consigna. Después de observar que los alumnos tenían la confusión de los milímetros debido a que no corté bien algunos popotes, decidí orillarlos más a la medida, al preguntarles cuánto media cada pedacito de popote, aquí reflexionaron que juntos daban 20, y así dejamos 25 entre maestr@s a un lado la dificultad de los milímetros y se guiaron por la mitad de 20. Como dice Chamorro (2005:74), en una si­tua­ ción de validación el medio está organizado especí­­ fi­ca­­mente de manera que el alumno debe hacer declaraciones que se someterán a juicio de su interlo­ cutor, éste debe protestar, rechazar una justificación que él considera falsa y probar a su vez sus afirmaciones. Esto lo consiguió Miguel: retuvo diversas infor­ maciones, las organizó y empleó en ellas cálculos mentales (sumó cinco veces el cuatro, y de la cantidad que obtuvo sacó la mitad) captó así la falsedad de la respuesta anterior y llegó a la correcta. M.: a ver, ¿éstos cuánto miden? [se muestra el pedazo de popote de cuatro cm] Todos: cuatro. M.: ¿y cuántos tenemos? Todos: cinco. M.: entonces juntos, ¿cuánto sería? Alicia: [dudan al responder y no terminan de completar la palabra] cuat..., vei…, diez… . M.: ¿cuánto sería?, ¿qué dicen ustedes, Raúl y Sonia? Alicia: 20. Raúl: 20. Fátima: maestra, están bien ellos. Miguel: me acabo de dar cuenta que los que están bien son ellos. M.: a ver, pero si dicen que esto mide… [se muestra el pedazo de popote de cuatro cm]. Todos: cuatro. M.: ¿y cuántos tenemos? Todos: cinco. M.: entonces, ¿cuánto sería? Todos: 20. M.: ¿y eso qué nos representa? Eduardo: los caramelos. M.: ¿cuántos? Alicia: 20. M.: los 20 ¿cuántos caramelos nos están representando? Alicia: dos. M.: entonces, ¿cuánto mediría uno? Raúl: 10. Miguel: 10 y medio. M.: a ver ustedes digan, 10 o 10 y medio? Miguel: 10 y medio. Alicia: 10. Raúl: mide 20 y a la mitad son 10. M.: a ver, vamos a dejar claro esto, dice Raúl que son 10 y Miguel 10 y medio, ¿quién creen que tenga la razón? Miguel: son 10 y medio porque tenemos que partir la mitad de uno para que se ajusten los dos caramelos. M.: pero ¿cuánto miden los dos caramelos? Miguel: 10 y medio. M.: ¿los dos caramelos? Miguel: 20. M.: ¿y de ahí qué tiene que hacer? Miguel: partirlo a la mitad. M.: ¿y cuánto sería? Miguel: [silencio] no, si son 10, si son 20 y los partimos a la mitad son 10. M.: entonces, ¿cuánto mide cada caramelo? Todos: son 10. Enfocar la atención de los niños en que juntaran todos los pedacitos de caramelo para que obtuvieran la medida total, fue conveniente porque ya sabían que cada pedazo medía 4 cm, y así sacarían la mitad de esta cantidad; para conseguirlo, tuvieron que hacer un cálculo mental lo que les permitió llegar al resultado correcto. Miguel fue el único que no llegó a esa reflexión, pensó que la respuesta correcta era la de Raúl (10 y medio), no estaba captando el procedimiento que se había seguido. Sin duda la validación es un proceso en el que intervienen varios factores: el alumno, el maestro y el saber que está en juego. Cada uno tiene un papel relevante en la progresión de los conocimientos hasta convertirse en un saber. @ 26 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar BIBLIOGRAFÍA de las Matemáticas para primaria. España: Pearson Prentice-Hall. Panizza, Mabel (2003). Conceptos básicos de la teoría de situaciones didácticas. En: Enseñar matemática en el nivel inicial y el primer ciclo. Análisis y propuestas. Buenos Aires: Paidós. Block, David (1987). Estudio Didáctico sobre la enseñanza y el aprendizaje de la noción de fracción en la escuela primaria. Tesis de Maestría. México: die-Cinvestav. Chamorro, Ma. del Carmen (2005). Herramientas de análisis en didáctica de las Matemáticas. En: Didáctica Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar tré el entero de 10 cm x 3 cm], entonces a cada niño le tocó un pedazo de éste tamaño [mostré el pedazo de 6 cm x 3 cm]. Se requiere saber, ¿cuántos chocolates se repartieron y ¿cuántos niños eran? Alumnos: ¿cómo? M.: van a encontrar, ¿cuántos chocolates compraron? y, ¿cuántos niños eran?, voy a repartirles estas copias en las que viene escrito el problema, para que lo hagan. Alumnos.: ¿una copia nada más? M.: bueno, una para cada uno, pero todos van a trabajar. Roberto, ¿entendiste lo que vas hacer? ¿me puedes decir? Roberto: ah… va a dar una hoja para contestar. M.: ¿de qué trata el problema? Roberto: de repartir chocolates. M.: guarden silencio, ¿de qué chocolates? Roberto: vamos a repartir chocolates a niños. Ma. Rosa Ana Arechar Ruiz* A continuación describiré una situación didáctica de matemáticas que apliqué con 18 alumnos de sexto grado. Al elegir esta situación lo hice pensando en que iba a resultar un reto muy interesante para los alumnos. Tenía todas mis esperanzas en que después de esta clase ellos se independizarían más y no esperarían que el profesor les diera las herramientas o respuestas a todo. Esta situación didáctica consiste en hacer repartos de chocolates, pero no se sabe cuántos chocolates se repartieron ni entre cuántos niños. La solución consiste en descubrir esas dos incógnitas (Block, 1987). Organicé al grupo en cuatro equipos de cuatro personas para dar la consigna, con el propósito de que los alumnos la comprendieran mejor y que a la hora de acomodarse en equipos no se les olvidara. Comencé a repartir el material a cada equipo (tiras de cartón que representan los enteros de chocolate y el pedazo que tocó a cada niño) y les indiqué que ya empezaran a resolver el problema, pues según ellos, ya tenían todo bien claro. Me encuentro en un gran dilema, ya que, por una parte, considero que la situación didáctica hubiera resultado mejor si en lugar de explicar el problema a los alumnos sólo les hubiera entregado la hoja en la que venía impreso dicho problema y hubiera de­ja­ do que ellos lo interpretaran y lo solucionaran como pudieran y, por otra, creo que estuvo bien, pues si no les hubiera explicado se habrían enfrentado a una gran Maestra (M): a ver, pongan atención, van a realizar dos problemas uno primero y enseguida el otro, el primero trata de que algunos niños fueron a la tienda a comprar chocolates, compraron varios y eran de este tamaño [mos­ ————————————— * Alumna de la Normal de San Marcos, Loreto, Zacatecas. 27 entre maestr@s confusión y habrían estado preguntando continuamente qué es lo que harían. Muchas veces el alumno con sus constantes intervenciones en las que pregunta: “maestra, ¿qué vamos hacer?, ¿cómo se le hace?, ¿vamos hacer una multiplicación o división para resolver el problema?”, etc., origina que el profesor se desespere y se produzca el efecto “topaze”, el cual consiste en que: El maestro propone de forma explícita cuestiones al alumno, pero es él quien toma a su cargo, bajo su responsabilidad, lo esencial del trabajo. Si el alumno fracasa, en un afán de ocultar la incapacidad de éste para encontrar la respuesta, el enseñante negocia una respuesta a la baja; para ello, añade sucesivamente informaciones suplementarias reductoras de sentido, indicios que le ayuden a encontrar la respuesta, y así hasta que ésta se produce. El resultado es que la respuesta del alumno, aunque sea correcta, se encuentra desprovista de todo sentido, y ello porque esa negociación del contrato didáctico priva al alumno de las condiciones necesarias e inherentes a la comprensión y aprendizaje de la noción perseguida (Chamorro, 2003:91). Mientras algunos alumnos trataban de me hubieran estado preguntando al mismo tiempo y se hubiera hecho un gran desorden en el salón, por eso es muy importante que antes de que se dé la consigna el profesor se cerciore de que está acaparando la atención de los alumnos. Mientras algunos alumnos trataban de aportar ideas a sus compañeros de equi­ po, yo pasaba por sus lugares para poder entender lo que estaban realizando. En uno de los equipos ponían cuatro tiras de chocolates y arriba de ellas seis tiras de pedazos de chocolates y comentaban “Es que ya no cabe otro pedazo, ¿cómo le ha­ cemos?”, en el equipo de Roberto sólo estaban leyendo el problema y comentaban entre ellos cómo podrían saber cuántos chocolates y niños eran. aportar ideas a sus compañeros de equipo, yo pasaba por sus lugares para poder entender lo que estaban realizando En cuanto a la devolución de la consigna creo que funcionó debido a que cuando la di algunos alumnos no pusieron atención y, mediante la devolución de ésta (M.: Roberto, ¿entendiste lo que vas hacer?), me pude dar cuenta de que Roberto y sus compañeros habían comprendido la tarea a realizar. Estoy segura de que si no hubiera hecho la devolución de la consigna los alumnos no hubieran realizado nada, todos los equipos 28 Equipo de Abel Abel: mire, maestra, el pedazo que le tocó a cada niño era de seis cm y los chocolates de 10 cm, entonces pongo tres tiras de éstas [tiras de 10 cm] y dos de éstas [tiras de 6 cm]. M.: no, yo no sé cuántas vayan a utilizar, ustedes deben de encontrar la solución. Pueden hacer dibujos, operaciones y cuando crean que ya encontraron la respuesta del problema vuelvan a revisarla para que estén completamente seguros. [Abel intentaba resolver el problema po­ niendo tres tiras de los enteros y arriba los pedazos de chocolates que le tocaban a cada niño, Horacio, uno de los integrantes de este equipo decía “sólo pon dos” y Lorena objetaba]. Lorena: no, pero ¿por qué sólo dos? Abel: miren, lo que le va a tocar a cada niño [indica el pedazo de 6 cm]. Horacio: sí, de 6 cm. Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar LOS ARGUMENTOS O PRUEBAS DE LOS ALUMNOS Como me di cuenta de que tres equipos ya habían terminado comencé con la validación y para esto seleccioné a dos alumnos de cada equipo para que pasaran al pizarrón a exponer sus resultados, obviamente, primero pasé a los alumnos del equipo que no resolvió el problema. Y digo obviamente, ya que no iba a pasar primero a los equipos que sí lo­gra­ron obtener el resultado, pues esto hubiera provocado que no se validara bien y que los alumnos del equipo que no pudo resolver el problema no hubieran querido pasar a exponer lo que habían hecho, porque hubieran pensado de inmediato que la respuesta que habían dado sus compañeros era la correcta. Abel: ¡ah, ya sé!, debemos colocar cinco pedazos de 6 cm. Horacio: y ¿por qué cinco? Abel: porque cinco quedan exactas y seis por cinco es igual a 30. M.: ¿ya terminaron? Abel: sí. M.: ¿ya están bien seguros? Aumnos: sí. M.: ¿por qué? Abel: es que éste mide 6 cm y éste 10 cm, entonces, hago una multiplicación de éste [señalando un entero de chocolates] por tres y éste [pedazo que le toco a cada niño] por cinco y dan la misma cantidad, o sea, 30. 10 x 3 = 30 tres chocolates 6 x 5 = 30 cinco niños Lorena: ya estamos seguros que está bien. M.: entonces, esperen un momento mientras terminan los otros equipos. M.: ¿cómo lo resolvieron? Roberto: no pudimos resolverlo. M.:¿qué es lo que hicieron?, represéntelo en el pizarrón. [Intentaron dibujar los enteros de chocolates, pero no sabían cuántos dibujar, Carlos decía: se repartieron cua­tro chocolates a ocho niños]. Equipo de Roberto En este equipo no logré hacer comprender a los alumnos de que debían encontrar la solución al problema, pues están muy acostumbrados a que su profesor les dé el resultado de todo y no los deje trabajar so­los. Desafortunadamente no pudieron resolver el problema, por más que hicieron tanteos con las tiras no lo lograron y en varias ocasiones les comenté que reflexionaran bien, que sí podían. Durante las devoluciones (M.: ¿ya están completamente seguros?, ¿por qué así? Alumnos: ¿estamos bien?), los alumnos analizaron más a fondo su resultado y tres equipos sí lograron el propósito de la situación didáctica, el cual era que mediante sus errores analizaran mejor el problema y llegaran a la solución. Una de las formas como podemos atender las preguntas del alumno es mediante la devolución, haciéndole sentir a éste la responsabilidad de construir su propio conocimiento, dando lugar a la situación a-didáctica, en la que el alumno por sí solo debe bus­ car los medios para lograr obtener un resultado y que se haga responsable de éste para que no caiga en la respuesta que el maestro quiere escuchar. chocolate chocolate chocolate chocolate M.: eso que están dibujando, ¿qué es? Carlos: los chocolates. M.:¿cuántos son? Y entre, ¿cuántos niños se repartieron? Carlos: son cuatro chocolates para ocho niños. M.: ¿por qué los repartieron a la mitad? Roberto y Carlos: ah… no… sabe. M.: a ver, los demás equipos qué opinan, ¿creen que ellos están bien? Alumnos: no. M.:¿por qué? Enedelia: porque no son cuatro chocolates, son tres y se repartieron a cinco niños. Alumnos: sí, así es. M.: de este equipo pasen ustedes dos [equipo de Abel]. 29 entre maestr@s Equipo de Abel Lorena: nosotros decimos que eran tres chocolates para cinco niños. M.: ¿por qué? Horacio: porque en tres tiras de chocolates cupieron cinco tiras de pedazos que le toca a cada niño. Ma.: ¿exactamente? Alumnos: sí. M.: ¡pasen al pizarrón a escribir lo que hicieron en su hoja! [Pusieron tres tiras de 10 cm x 3 cm –enteros de chocolates– y encima de éstos cinco tiras de 6 cm x 3 cm Para el segundo problema repartí a cada equipo cinco tiras de 8 cm x 3 cm (pedazo que le tocó a cada niño) e indiqué que usaran las ocho tiras de 6 cm x 3 cm, éstas serían los enteros de chocolates. Como los alumnos ya tenían la experiencia de cómo resolver el problema ya no tuvieron tanta dificultad esta vez. En el equipo de Abel comenzaron buscando equivalencias entre los chocolates y los niños, mientras que los otros equipos intentaban resolverlo como el primero, por estimación. Como era de suponerse, este problema lo terminaron más rápido que el anterior, pero el equipo que no pudo resolver el primer problema tampoco pudo con éste. Todo se debió a que desde el primer problema no comprendieron bien la consigna y esto provocó que durante la situación didáctica no pudieran hacer nada. Esto es un claro ejemplo de que si los alumnos no comprenden bien la consigna no podrán resolver con éxito la actividad que se les ha puesto. –pedazo que le tocó a cada niño.] M.: ¿cómo supieron que sólo debían utilizar tres tiras de chocolates? Abel: es que primero decidimos multiplicar 10 que era lo que medía un chocolate por dos, dio como resultado 20 y buscamos un número que multiplicado por seis diera 20, no lo encontramos, entonces multiplicamos 10 por tres igual a 30 y buscamos un número que multiplicado por seis diera 30 y encontramos el cinco. Así pensamos que eran tres chocolates para cinco niños y con las tiras vimos que sí estábamos bien. SORPRESA Y DESENCANTO Decidí realizar la validación del segundo problema, pasando a dos alumnos del tan polémico equipo. Como dice Chamorro “la validación tiene como objeto poner de manifiesto las pruebas empíricas o implícitas que han funcionado en el ámbito de la acción o con motivo de la formulación” (Chamorro, 2003:79). Me di cuenta de que sólo el equipo de Abel usó las tiras de cartón para verificar su resultado, ya que ellos razonaron bien el problema, hicieron operaciones y luego verificaron con las tiras. Los otros equipos sólo se limitaron a encontrar la solución por medio de cuántas tiras chicas caben en las grandes (procedimientos empíricos). M.: ¿cuál fue su resultado? Miriam: que eran cuatro barras de chocolates repartidas entre tres niños. [En ese momento yo me quedé sorprendida, porque sí lo habían podido resolver, no lo podía creer, era demasiado bello para ser verdad.] M.: ah, ¿sí?, ¿cómo le hicieron? Carlos: ah… pero sí está bien, ¿verdad? M.: pues díganme ¿cómo le hicieron para sacar ese resultado? Miriam: maestra es que el profe nos dijo que eran cuatro chocolates para tres niños. [Sí, así sucedió, yo no podía creer que el profesor titular piense que es mejor decirles el resultado sin que ellos lo descubran por sí solos, mínimo les hubiera explicado el porqué de ese resultado, yo no supe cómo reaccionar hice lo siguiente.] M.: ahora van a realizar el segundo problema, es parecido al primero, pero con diferentes tamaños de chocolates y pedazos que le tocó a cada niño. 30 Un recuento de lo vivido, mucho que mejorar M.: ah, ¿entonces nada más porque el profe les dio esa respuesta ya está bien? Miriam: pues él es maestro también, ¿no? M.: sí, pero ¿qué tal que sólo quería probar si se equivocaban? Abel: maestra, pero nosotros también tenemos ese mismo resultado. M.: y, ¿están bien seguros que está bien su resultado? Abel: sí, ¿ya paso a explicarlo? M.: bueno, pásale. Lo que hizo Abel: 6 x 4 = 24 compraron cuatro chocolates Miriam: pero ya entendimos cómo era. M.: si todos hubieran hecho operaciones como el equipo de Abel, se les habría hecho más fácil el problema. M.: ¿alguien tiene alguna duda? Alumnos: no. Así fue como terminé de aplicar esta situación didáctica. Los alumnos exploraron otra forma de estudiar las fracciones y resolvieron problemas en momentos a-didácticos. @ BIBLIOGRAFÍA Block, David (1987). Estudio didáctico sobre la enseñanza y el aprendizaje de la noción de fracción en la escuela primaria. México: die-Cinvestav. Brousseau, Guy (1993). Fundamentos y métodos de la didáctica de las Matemáticas. En: Sánchez, E. (edit.). Lecturas en didáctica de las Matemáticas: Escuela francesa. México: die-Cinvestav. Centeno, Julia (1997). Relación con el saber: las situaciones didácticas. En: Números Decimales ¿Por qué? ¿Para qué? Madrid: Síntesis. Chamorro, Ma. del Carmen (coord.) (2003). Didáctica de las Matemáticas. Primaria. Madrid: Pearson, Jacobo, Javier (2008). Importancia de resolver problemas matemáticos y el apoyo de los medios de enseñanza. En: Aprendiendo a enseñar. La construcción del saber matemático en el aula. Lizarde Flores, Eugenio (coord.). México: Normal de San Marcos. 8 x 3 = 24 repartidos en tres niños M.: los demás equipos qué dicen, ¿lo tienen igual? Alumnos: sí. Ya no se hizo necesario pasar a los otros dos equipos debido a que sus respuestas y procedimientos eran los mismos. Entonces decidí institucionalizar, esta fase consiste en que el profesor dice al alumno lo que constituye el saber en juego, es decir, el profesor sintetiza o concluye y verifica que el alumno haya comprendido bien. M.: entonces todos los equipos que tenían como respuesta del primer problema que tres chocolates se repartieron entre cinco niños estuvieron bien. Como se pudieron dar cuenta, el equipo de Abel verificó el resultado repre­ sentándolo en el pizarrón y en el segundo problema, efectivamente, son cuatro barras de chocolates repartidas entre tres niños. Abel: maestra, pregúntele al equipo de Roberto si ya le entendieron. M.: Miriam, bueno todos los del equipo, díganme por qué no pudieron resolver el problema. Carlos: porque nosotros pensamos que se deberían de utilizar todas las tiras. M.: pero desde un principio les expliqué que les repartí cierta cantidad por si necesitaban más tiras, pues no les iba a dar exactamente la cantidad con que se resolvía el problema. 31 Actividades comunitarias que favorecen el aprendizaje de las Matemáticas del nivel básico de primaria en el estado de Oaxaca Alberto Díaz Acevedo* [email protected] CARACTERIZACIÓN DEL ENTORNO L os profesores de educación primaria que laboran en el estado de Oaxaca, desarrollan sus actividades escolares en una entidad pluriétnica, “el total de habitantes es de 3 millones 438 mil 765 habitantes y casi 2 millones son indígenas, lo cual indica que de cada 10 oaxaqueños 6 pertenecen a un grupo indígena; de éstos, la población de hablantes de una lengua indígena mayores de 5 años es de 1 millón 64 mil 857 lo que da una proporción de 30.96 por ciento”.1 En este ambiente de trabajo, el profesor tiene que favorecer en sus alumnos el aprendizaje de los contenidos que el plan de estudios propone, en particular, los conocimientos de Matemáticas, respecto a los cuales tiene que considerar: el contenido matemático a tratar, el cómo llevarlo a cabo, quiénes van a apropiarse de ese contenido y las condiciones del contexto en el que se realiza esta actividad. Los contenidos matemáticos escolares se encuentran distribuidos en los seis grados que conforman la escolaridad del nivel básico de primaria, se agrupan de acuerdo con sus caracte­rísticas en seis ejes temáticos, con grados crecientes de complejidad que se aplican a todos los niños del país. El enfoque metodológico del aprendizaje propone que estos contenidos matemáticos se lleven a cabo a través de situaciones problemáticas propias de las actividades de los niños en su vida cotidiana, con el objeto de que cada situación les permita relacionar diferentes contenidos, ejes temáticos o de otras asignaturas y, así, sean de su interés. Si bien es cierto que interesa que el alumno adquiera los conocimientos de Matemáticas propios de cada grado, importa sobre manera que desarrolle a lo largo de la educación * Maestro en Educación. Asesor en el área de Matemáticas de la Unidad 201 de la upn Oaxaca, Oaxaca. 1 Datos estadísticos proporcionados por Inegi Oaxaca. Abril de 2004. 32 Actividades comunitarias que favorecen el aprendizaje de las Matemáticas básica habilidades intelectuales a través de la resolución de problemas, al llevar a cabo procesos en los que tenga que poner a prueba sus diferentes conocimientos, saberes, procedimientos y estrategias, y contrastarlos con los de sus compañeros, reorganizarlos, y, de esta manera, acceder al conocimiento matemático formal. Por ello, es necesario conocer al sujeto que aprende. Desde esta perspectiva de aprendizaje, el docente debe llevar a cabo su actividad tomando en cuenta las características, intereses y necesidades del niño propias de su edad, la forma en que socializa con sus compañeros de juegos de su comunidad, de su escuela –sin descuidar su lengua materna ni la visión que los padres tienen de esas relaciones entre niños y niñas–, así como éstos se integran a las actividades sociales y económicas que sus padres realizan para convivir en el contexto comunitario de este ambiente. El docente tiene que considerar que las acciones que lleven a cabo los niños les permitirá ir construyendo sus conocimientos, relacionando la forma en que conciben el mundo con la naturaleza, sus creencias, reglas de conducta para la convivencia, trabajo individual y comunitario (tequio) y, en particular con sus juegos, en los términos que el programa escolar propone. LA INTERRELACIÓN DE ESOS SABERES EN LA PRÁCTICA DOCENTE En esta complejidad de haceres y saberes, los docentes de primaria deben poseer los conocimientos matemáticos que, sin ser pretenciosos, cubran de manera elemental y suficiente los contenidos que se contemplan en el plan de estudios para Matemáticas; los conocimientos de algunas teorías y corrientes pedagógicas que hagan factible el enfoque metodológico que subyace en el programa escolar –en la demanda de la construcción del conocimiento–, así como un conocimiento del niño para considerar sus características, intereses y necesidades. Por otra parte, es importante conocer el contexto en el que labora para que se consideren los conocimientos, saberes e ideas matemáticas que están implícitos en las diferentes actividades que los niños realizan en sus quehaceres cotidianos y adecuar sus actividades escolares a éstos. 33 Los profesores de educación primaria en el estado de Oaxaca, desarrollan sus actividades escolares en una entidad pluriétnica. En este ámbito, el profesor tiene que favorecer en sus alumnos el aprendizaje, en este caso, de Matemáticas. De uno de estos contextos se recopilan actividades económicas coincidentes con las actividades universales que, se­gún Bishop, generan conocimientos matemáticos. En este artículo, se hacen las analogías correspondientes proponiendo la correlación y adecuación de ellas a los contenidos curriculares del nivel escolar para que el niño realice ac­ ciones que propicien el conocimiento de esta disciplina. Palabras clave: educación primaria, contenidos matemáticos, resolución de problemas matemáticos, contexto, actividades universales, habilidades, valores, entidad pluriétnica. uuuuu Teachers of primary education in Oaxaca unfold their scholar activities in a pluri-ethnic situation, in which they have to help their students’ learning, in particular of mathematics. From one of these contexts, some economic activities were compiled that coincide with the universal activities expounded by Bishop to generate mathematical knowledge. In this paper the respective analogies are made, propounding their correlation and adaptation with curricular contents for the level, intended for the child to carry out actions which propitiate knowledge in this subject matter. entre maestr@s UN PUNTO DE VISTA PARA ABORDAR ESTA INTERRELACIÓN DE SABERES Al considerar lo que Bishop (1999, cap. 2) plantea, las ideas matemá­ ticas son productos de diversos procesos que nos permiten comprender mejor las raíces del pensamiento matemático, se tiene en cuenta que estas ideas se desarrollan a través de seis actividades universales que son: localizar, medir, contar, jugar, diseñar y explicar. En este escrito se presenta un breve comentario de cada una de estas actividades en el contexto del trabajo que realizó Sofía Gómez2 con los niños de la comunidad de Las Flores, Tilantongo, agencia y municipio de la región mixteca. Estos niños participan en las actividades económicas de sus padres, las cuales se pueden relacionar con la metodología y los contenidos matemáticos del programa escolar de primaria. Localizar Bishop refiere que todas las sociedades han desarrollado métodos más o menos sofisticados para codificar y simbolizar su entorno, desde un espacio físico o espacio de objetos, espacio sociogeográ- Las actividades que los niños de Las Flores realizan al internarse al cerro con sus padres para el corte de palmas (material que comercializan y usan para el diseño de sus diferentes artesanías), les permite elaborar un mapa mental de la forma de su espacio, para lo cual buscan la roca, el árbol, la vereda, que les indiquen el lugar en el que se encuentran 2 Parte de este relato se encuentra en el referente contextual de su propuesta pedagógica que con motivo de titulación llevó a cabo con los niños de la escuela donde laboró, perteneciente a la comunidad de Las Flores, Tilantongo. 34 fico y cosmológico; sin embargo, muchas culturas se refieren al Sol, la Luna o la Tierra destacando los aspectos topográficos del entorno y todas lo hacen mediante los mismos métodos básicos para obtener conocimiento y comprensión; es decir, manipulando la materia, observando, caminando hacia delante, atrás, girando o desarrollando diversas acciones, de acuerdo con sus maneras específicas de representar el mundo. Las actividades que los niños de Las Flores realizan al internarse en el cerro con sus padres para el corte de palmas (material que comercializan y usan para el diseño de sus diferentes artesanías), les permite elaborar un mapa mental de la forma de su espacio, para lo cual buscan la roca, el árbol, la vereda, que les indiquen el lugar en el que se encuentran y desde ahí tomar decisiones respecto a los diferentes problemas que su actividad les demanda, estimando distancias, calculando la hora por la sombra que proyectan los ár­boles, los riscos u otros referentes. Este conocimiento puede servir como recurso para desarrollar algunos de los contenidos de ubicación espacial que se encuentran contemplados en el eje de geometría del programa escolar y que se lo­ca­ lizan en los seis grados de la educación primaria, entre algunos de ellos se encuentran: “ubicación del alumno en relación con su en­ torno”, “recorridos tomando en Actividades comunitarias que favorecen el aprendizaje de las Matemáticas cuen­ta puntos de referencia”, de ahí se deriva la “introducción a la representación de desplazamientos sobre el plano”, “observación y re­presentación de objetos desde diversas perspectivas”, etcétera. Dicha actividad es signifi­ca­ tiva para los niños por ser parte de sus vivencias, además de que se construye en la acción por ser un problema real que el niño enfrenta en sus labores cotidianas, lo cual genera habilidades mentales como la imaginación espacial, el cálculo mental, la estimación de distancias propias de la medición, así, es un conocimiento útil para su vida pre­ sente y futura. De aquí que el profesor, al conocer la forma en que los niños estructuran el espacio, puede partir de esa percepción para diseñar actividades que permitan al alumno ubicarse con su entorno más inmediato como puede ser el de su casa a la escuela, la casa de cualquiera de sus compañeros respecto a la suya u otros referentes; determinar la cercanía o lejanía con esos relativos; construir estructuras visuales geométricas y un razonamiento abstracto. Para ello, el educador modificará sus actividades progresivamente de acuerdo con el grado escolar del educando, apoyándose en el empirismo para arribar a un conocimiento geométrico formal. ideas matemáticas, su objetivo es comparar, ordenar y cuantificar. Aunque en todas las culturas se realiza la medición, no todas uti­ lizan las mismas unidades de me­ dida, por lo que advierte tener cuidado de no dejarnos influenciar por nuestros propios sistemas de medición, pues es posible que en otras culturas no existan unidades similares a las nuestras. Los niños de Tilantongo, separan las palmas en secas y verdes, en claras y obscuras; las comparan de acuerdo con su longitud, esto es, palmas largas, menos largas y cortas, la clasificación que llevan a cabo está en función de su uso y su comercialización. Estas actividades pueden ser de gran utilidad para abordar con­ tenidos matemáticos que se encuen­ tran en el eje de medición de los programas escolares, específica- Medir De acuerdo con Bishop, esta acti­ vidad es útil para el desarrollo de 35 entre maestr@s mente en los dos primeros grados de escolaridad, tales contenidos son: “comparación de longitudes, de forma directa y utilizando un intermediario”, “medición de longitudes utilizando unidades de medidas arbitrarias”, pa­ ra que en un momento posterior se pueda introducir el uso de la regla graduada como instrumento de medida institucionalizado en un contexto más amplio. Estas acciones comunitarias, adecuadas y secuenciadas a los contenidos programáticos a través de la resolución de problemas, generan habilidades del pensamiento como la clasificación y seriación, con lo que se establece la comparación de longitudes, relación de orden entre magnitudes lineales y que son el antecedente al conocimiento de los instrumentos de medida institucionalizados. El profesor, con base en las ac­ ti­vidades de los niños, como es el caso aquí referido, puede favorecer el desplazamiento del alumno de un nivel real al inmediatamente próximo mediante la organización de las actividades de aprendizaje que diseñe, comparando magnitudes lineales a través de una unidad de medida que en un primer momento puede ser arbitraria para llegar a la cuantificación del resultado de la medición. Contar Según Bishop, existe toda una gama de técnicas de conteo y diferentes sis­ temas de numeración que muestran similitudes y diferencias, por ejem­plo, se cuenta con las partes del cuerpo y 36 con otros recursos, con sím­bolos y bases diferentes, como las mixtas que emplean agrupaciones de cinco a 20, con nombres de números compuestos. Es esta una actividad que está estimulada por los procesos cognitivos de clasificar y buscar pautas que varían en función de la necesidad relacionada con el entorno físico y social y con la complejidad creciente de las sociedades, por este hecho, los sistemas numéricos cada vez se vuelven más complejos. Los procesos de conteo que considera Bishop están presentes en las actividades de estos niños al ordenar y comparar sus palmas de mayor a menor; al cuantificarlas si tienen más o menos de unas u otras de acuerdo con su longitud, textura o color; en el con­teo que hacen para hacer agrupamientos en manos, manojos y cargas, esto es, una mano consta de cinco palmas, en este caso pareciera que los agrupamientos se harán de cinco en cinco; sin embargo, al tener 20 manos éstas forman un manojo de 100 palmas, situación que no considera como regularidad del primer agrupamiento de cinco; al reunir 10 manojos forman una carga, la cual contiene 1,000 palmas. Contar es una actividad relacionada con las necesidades del entorno y está estimulada por los procesos de: clasificación, cuantificación, ordenamiento, conteo oral, comparación, seriación, correspondencia, agrupamiento, desagrupamiento y cardinalidad. Procesos de razonamiento que están presentes en la secuenciación de Actividades comunitarias que favorecen el aprendizaje de las Matemáticas los contenidos en el programa escolar de primero a sexto grado en el eje te­ mático de los números sus relaciones y sus operaciones. En nuestro caso, los niños parten de la resolución de problemas concretos de las actividades económicas de su entorno. El diálogo, la interacción y la confrontación de puntos de vista se dan con sus padres que ayudan sin pretenderlo en la construcción del conocimiento. Esas actividades generan habilidades mentales de clasificación, seriación, cálculo mental, estimación y orden, entre otras. Gracias a esto, el profesor, de acuerdo con los contextos áulico y co­munitario, puede fomentar el trabajo consciente e intencional de los alumnos con la ayuda de materiales manejables en el aula que posean el fundamento del desarrollo lógico del número, así como el trabajo en equi­po y con todo el grupo que permita estimular el diálogo, sus interac­ciones, sus diferentes procedimientos y estrategias para la consecución de los propósitos propuestos. Jugar En esta actividad, Bishop refiere que el juego se realiza con interés, por gusto, es libre, no constituye una obligación, los participantes se someten a los roles o reglas del juego de manera voluntaria, por lo cual resulta ser un recurso ideal para hacer que los estudiantes aprendan jugando porque la acción y el significado se pueden separar y dar origen al pensamiento abstracto. El juego en el contexto de referen­ cia es de gran importancia, pues los Los niños, en el juego con sus animales de juguete, imaginan que son dueños de yuntas y que aran sus tierras; utilizando determinados espacios dentro del entorno de su juego surcan la tierra y muchas veces hacen apuestas para ver quién será el que haga los surcos más derechitos 37 entre maestr@s Diseñar Según Bishop, las actividades de diseño se refieren a la tecnología, los artefactos y los objetos manufacturados que todas las culturas crean para su vida doméstica, para el comercio, como adorno, para jugar y con otros fines. El diseño consiste en gran medida en abstraer una forma del entorno natural. Lo que es importante para nosotros en la educación matemática es el plan, la estructura, la forma imaginada, la relación espacial percibida entre objeto y propósito, la forma abstracta y el proceso de abstracción. El diseño de los objetos que los niños de Las Flores elaboran, les ofrece la posibilidad de imaginar formas, cuerpos y figuras del entorno. Cuando las formas se conciben, se realizan y diseñan, se proyectan conocimientos que están en relación con la realidad; para el mismo diseño es importante la distribución y el número de palmas y las figuras con que se muestran ciertas alegorías en ellas. Esta actividad es bastante rica y permite enlazar diferentes ejes temáticos de los programas escolares, como los de: medición, geometría, los números, sus relaciones y operaciones; además, abre la posibilidad de establecer la relación con otras asignaturas, por ejemplo, Español, Ciencias Naturales y Educación Artística, lo que contribuye a que los niños vean todas las cosas de una forma globalizada, una forma propia de su concepción. El profesor, aprovechando las experiencias de los niños, puede guiar el conocimiento informal que les proporciona los animales que elaboran, al considerar las características de los mismos, el tamaño en relación con la realidad y, dependiendo del grado escolar, los conocimientos formales de proporcionalidad, pues los niños están familiarizados con: rombos, triángulos y grecas, lo que ofrece elementos para el descubrimiento de algunas propiedades de estas figuras, entre las que se encuentran el paralelismo, la perpendicularidad, la simetría, los ángulos, etc. El hecho de elaborar sus juguetes no sólo para el juego sino también para el comercio, permite abordar el niños no sólo se dedican a la acción y a los roles pro­ pios de las reglas que la actividad les indique, sino que en ello está presente la recreación del diseño de su objeto de juego, mismo que reproducen en los seres y objetos del entorno como los diferentes “animales”, “panales” y “tragadedos” que los niños de Tilantongo realizan. Los niños en el juego con sus animales de juguete, imaginan que son dueños de yuntas y que aran sus tierras; utilizando determinados espacios dentro del entorno de su juego surcan la tierra y muchas veces hacen apuestas para ver quién será el que haga los surcos más derechitos; con los animales que elaboran, platican tal como sus padres muchas veces lo hacen en sus labores cotidianas; en cuanto a los panales, simulan que éstos son reales y que tienen que quemar ciertos arbustos que producen humo para ahuyentar a las avispas y no puedan comerse la miel que éstos contengan (algunos niños imaginan ser las avispas y pellizcan a los que tratan de destruir su panal); los “tragadedos” los ocupan para hacerse travesuras entre ellos, pues al meter el dedo en el objeto y jalarlo no es tan fácil que puedan zafarse de él. El juego en estos niños contribuye al trabajo colaborativo con sus compañeros, así como al respeto de las reglas, con lo cual se establece un orden; también el juego promueve la imaginación, conduce a ideas de paralelismo, área, conteo, entre las que se promueven habilidades del pensamiento como: estimar, imaginar, y se fomentan valores acerca del cuidado de la naturaleza, entre otras. Por ello, el profesor en los diseños de sus estrategias puede considerar este recurso como el motor que dinamice su práctica docente, ya que los niños lo realizan con entusiasmo y asumen las reglas que las acciones demanden para llevarlo a cabo; sin embargo, el juego por sí mismo no tendría la trascendencia debida en la acción docente si éste no es acorde en sus reglas con el contenido matemático que se pretenda favorecer, el propósito educativo que se persiga y los materiales propios del entorno. 38 Actividades comunitarias que favorecen el aprendizaje de las Matemáticas eje de los números y sus relaciones con contenidos como sumas y restas en actividades de venta. Si se pide que narren o describan lo que hacen para que les compren sus objetos, se podrá favorecer la asignatura de Español cuando tengan la necesidad de explicar en qué consisten sus productos. Educación Artística. En esta actividad, se presenta lo que el programa de Matemáticas en la metodología del aprendizaje propone con el nombre de situación problemática. CONCLUSIÓN En la pluralidad étnica de nuestro estado, las actividades universales que propone Bishop en su estudio también son llevadas a cabo por adultos y niños. En una de las comunidades de nuestro entorno, los niños adquieren de manera informal dichos conocimientos matemáticos debido a las actividades cotidianas que llevan a cabo; no están lejos de los contenidos que el programa escolar propone como son los números, la medición y la geometría, entre otros conocimientos que se adquieren en la acción, a través de errores y rectificaciones, procedimientos diferentes y contrastación de ellos con el experto, que en este caso puede ser el padre o la madre. En todas las actividades utilizan materiales concretos que están íntimamente ligados para la solución de sus problemas, la manipulación, recreaciones y acciones de ellos permite desarrollar actitudes, aptitudes, conocimientos, habilidades y valores, situación que les permite ser competentes en las acciones de su entorno. @ Explicar De acuerdo con Bishop, esta actividad eleva la cognición humana por encima del nivel asociado con la mera experiencia del entorno; centra la atención en las abstracciones y formalizaciones al exponer las rela­ ciones existentes entre los fenómenos, de lo diverso a lo simple, del desorden al orden, en la búsqueda de una teoría explicativa de los fenómenos. La explicación de los fenómenos dinámicos, de los procesos de la vida y del discurrir de los acontecimientos, se da a través del relato, el cual representa la acumulación del conocimiento y la sabiduría de una cultura. Desde el punto de vista de las ideas matemáticas, la explicación nos lleva a la reflexión del porqué de sus conceptos, leyes, axiomas y teoremas. La explicación en nuestra referencia se da cuando los niños relatan a la maestra la forma en que se integran a las actividades que realizan con sus padres; cuando buscan las similitudes de las palmas, en cuanto al porqué de las características de ellas para agruparlas en función de su uso, sea éste para el tejido de sus objetos o para su comercialización; en cuanto a los ju­ guetes que elaboran, tienen que considerar el grosor de los dedos para elaborar los “tragadedos”; en la construcción de sus animales modelizan el prototipo con sus rasgos más distintivos, actividad en la que estará presente la proporcionalidad para poder representar de forma adecuada las partes de cada figura. Esta es la actividad más rica e incluye a las demás, pues implica la consideración del porqué de cada acción. En ella están presentes diferentes ejes temáticos de la asignatura de Matemáticas, así como de otras asignaturas del plan escolar de primaria como: Español, Ciencias Naturales, Historia, Geografía, BIBLIOGRAFÍA Bishop, J. Alan (1999). Enculturación matemática. La educación matemática desde una perspectiva cultural (Tr. Genis Sánchez Barberán). Barcelona: Paidós. Inegi (2004). Datos estadísticos. Oaxaca. Gómez, Sofía (2006). Relato referido que lleva a cabo con los niños de la escuela de la comunidad de Las Flores, Tilantongo. En: La resolución de problemas aditivos para favorecer conocimientos, habilidades y actitudes en los alumnos de tercer grado de educación primara. upn 201, Xoxocotlán, Oaxaca. sep (1993). Plan y Programa de Estudio de Educación Básica, primaria. 39 Aprendiendo Geometría con doblado de papel Una experiencia en la secundaria Felipe Ramos Trejo* [email protected] ¡E l coco de las materias! La Enseñanza de las Matemáticas sigue inquietando a docentes, alumnos y padres, pues sus resultados no han sido los mejores, siguen estando entre los peores. Mientras la autoridad piensa que con reformas impuestas desde las oficinas se resol­verán los problemas de la educación, quienes cotidianamente trabajamos y convivimos en las aulas pensamos que las alternativas se construyen de forma colectiva y mediante un trabajo colaborativo en el que la participación de la comunidad escolar está inmersa ine­ ludiblemente. CONSTRUYENDO ALTERNATIVAS La presente experiencia, que en un principio surge de manera colectiva, busca aplicar la estrategia del doblado de papel conocida también como papiroflexia o papirogeometría en el aprendizaje de la Geometría, aunque puede hacerse extensiva a la Aritmética y al Álgebra. Las razones para la utilización de esta estrategia son varias. Recordemos que en la actualidad, el conocimiento de conceptos y definiciones es sólo una parte del aprendizaje, por lo que se pretenden varios objetivos: a) Desarrollar la imaginación espacial.1 b) Reconstruir los conceptos geométricos. * Profesor de Matemáticas en el nivel de educación secundaria en el DF. 1 Hemos acuñado este término a partir del desarrollo de la imaginación a través de la Geometría al producir figuras e imágenes en composiciones artísticas. 40 Aprendiendo Geometría con doblado de papel c) Ejercitar la habilidad del doblado de papel. d) Promover el trabajo colaborativo. e) La elaboración de un instructivo. Por eso, quienes empleamos esta estrategia, afirmamos que el doblado de papel es una herramienta útil en el aprendizaje y el estudio de la Geometría. NUESTRA EXPERIENCIA La experiencia da inicio hace 10 años en Iztapalapa, cuando decidimos reunirnos profesores de la Zona Escolar No. 11 de Secundarias para intercambiar experiencias y generar propuestas respecto a la Enseñanza de las Matemáticas. Una de esas propuestas fue el uso del doblado de papel en el aprendizaje de la Geometría. Primero consistió en aprender a construir las figuras y cuerpos geométricos, conocer y manejar los dobleces y el armado, fue lo básico, la figura en sí misma. Era muy limitado el aprendizaje. La inquietud ya estaba sembrada y me propuse profundizar más en este terreno. Realicé visitas al Museo Universum, específicamente a la sala de Matemáticas, donde al final del recorrido se ofrecen actividades como la construcción de figuras con do­blado de papel y una exposición permanente de cuerpos geométricos; participé en congresos sobre la Enseñanza de las Matemáticas y búsqué la bibliografía sobre el tema, también cursé un Diplomado de Matemáticas en la Unidad 098 de la upn. Así, esta experiencia se enriquece hasta llegar a plan­ tearnos los cinco incisos anteriores como parte de un de­sarrollo más integral. Finalmente, después de seis años de utilizarla en la asignatura de Matemáticas, esta experiencia se sistematiza en una materia co curricular, Habilidad del Pensamiento, cuyo programa y contenido es realizado por un equipo de profesores en la Secundaria Diurna No. 317, Octavio Paz. En dicha asignatura, a lo largo de los tres grados, en un bloque, se aprenden dobleces, figuras y cuerpos geo­mé­ tricos, al igual que se refuerzan y desarrollan los conceptos correspondientes. 41 El uso de diferentes estrategias para la enseñanza de las Matemáticas sigue siendo una preocupación de los docentes en el aula. El uso del doblado del papel ha resultado ser una herramienta útil en la enseñanza de la Geometría a lo largo de los tres grados en la escuela secundaria. Ésta ha permitido el desarrollo de la imaginación espacial, al descubrir, con el doblado de papel, las diferentes figuras y cuerpos geométricos, así como identificar los conceptos geométricos. También, se complementa con la actitud de un trabajo colaborativo del grupo. Palabras clave: papiroflexia, geometría, imaginación espacial, trabajo colaborativo, figura geométrica. uuuuu The use of different strategies for teaching mathematics is still a concern for teachers in the classroom. The use of paper folding has proved to be a useful tool in Geometry teaching throughout the three grades of secondary school. With paper folding, the discovery of various geometric shapes and figures has enabled the development of spatial imagination, as well as recognition of geometrical concepts. Also it complement with the attitude of a collaborative group work. entre maestr@s ¡MIRE, YA LA TERMINÉ! ¡SÍ SALIÓ! ME QUEDÓ BIEN En los primeros años, trabajamos esta estrategia en Matemáticas y descubrimos que realmente sirve para nuestro propósito. Es interesante ver cómo los alumnos se sorprenden cuando logran hacer las figuras o cuerpos geométricos. Parece que su autoestima se reafirma. Van descubriendo también su habilidad o falta de desarrollo de ésta para realizar dobleces, memorizar los pasos, identificar conceptos, colaborar entre ellos cuando se les olvida un doblez o para el armado de la figura. En una ocasión, cuando iniciamos la aplicación de esta estrategia descubrí cómo un alumno que tenía dificultades en la asignatura se sintió motivado al ser el primero en terminar la figura, incluso sorprendió a sus compañeros, a los cuales ayudó a acabar dicha figura. Comprobé entonces que los alumnos tienen diferentes habilidades y que un trabajo variado permite descubrir esas capacidades. Pero también encontré, en ese mismo grupo, a uno de los mejores alumnos que no asumió con agrado la actividad, me comentó que prefería resolver problemas o ecuaciones. Desde el inicio de este trabajo con los estudiantes, hemos integrado los cinco aspectos mencionados (imaginación espacial, conceptos geométricos, habilidad del doblado de papel, trabajo colaborativo y elaboración de un instructivo). Nos vamos familiarizando con esta estrategia al identificar conceptos, partiendo de un cuadrado de papel, la mayoría de las veces, de color. Pregunto a los alumnos: “¿cuántos conceptos son capaces de identificar en esta figura de papel?”, al principio sólo contestaron algunos, pero en la medida que los interrogo descubren más, con lo que logramos una manera colectiva de reconstruir o recordar sus conocimientos. Entonces los alumnos comienzan expresando: “¡veo un cuadrado! Posteriormente, llueven otros conceptos: los ángulos –en este caso un ángulo recto–; las diferentes líneas: horizontal, vertical, perpendicular, paralela, logran identificar un punto y el vértice. Y las cosas se van haciendo más interesantes: el largo y el ancho, el perímetro, la superficie y su medida, el área. Se siguen con qué es un cuadrilátero, un paralelogramo y la lista crece. Han reconstruido los elementos de una figura geométrica y reconocen a ésta como una creación humana. Esto nos permite, en primer año, trabajar temas que se refieren a la construcción de polígonos, así como el cálculo de sus perímetros y áreas. Permite también reflexionar sobre el tema de medición, pues los alumnos reducen esta acción a las medidas convencionales. En el caso de las superficies, comprenden que pueden medir u obtener el área con cualquier figura, para llegar a concluir que el cuadrado es la forma más adecuada, después de comparar la superficie con otras figuras. Ahora se sorprenden al observar que pueden construir ángulos: de 30, 60, 120, 135 grados, ne­ ce­sarios para construir un polígono regular, esto 42 Aprendiendo Geometría con doblado de papel embona bien en segundo grado, incluso para descubrir patrones, como es la suma de los ángulos interiores de un polígono y concluir con una fórmula: 180º (n-2). Identifican, también, más líneas: media­ triz, bisectriz, altura, diagonal, eje de simetría, la apotema, incluso diferentes figuras: triángulos, rectángulos, pentágonos, hexágonos, paralelogramos, trapecios, trapezoide. Y llegamos, más motivados, a los cuerpos geométricos: Con la los poliedros regulares o platónicos y los imaginación arquimedeanos:2 las caras, la arista, el espacial se volumen. Nuevamente, esta actividad pretende que los apoya los contenidos de segundo grado alumnos, primero, que nos hablan del cálculo de volúmereconozcan nes, a través de las fórmulas. Por fin, líneas, ángulos, esta lluvia de ideas y recuerdos concluye figuras para cuando los chicos elaboran una lista de que después, todos los conceptos identificados y los definen con sus propias palabras. Esto manejando estas bases, puedan último nos permite valorar qué tanto realizar de nos ha ayudado este esfuerzo en la comprensión de esta parte de la Geometría manera ilimitada a través de la definición de conceptos a las formas y sus través de la escritura. De igual forma, combinaciones para redondear lo anterior, se le pide para construir a los alumnos contrastar sus definiciones nuevos cuerpos geométricas con la información que localicé en los libros de texto o diccionarios de Matemáticas. Con la imaginación espacial se pre­tende que los alumnos, primero, reco­ noz­can líneas, ángulos, figuras para que des­pués, manejando estas bases, puedan realizar de manera ilimitada las formas y sus combinaciones para construir nuevos 2 Son aquellos cuerpos geométricos semirregulares que creó Arquímedes al cortar los poliedros regulares. 43 cuerpos. Por eso, se busca desarrollarla con los primeros dobleces, mientras los alumnos van sorprendiéndose de lo que encuentran y construyen: “¡Lo hice, lo hice!”. Van observando cómo de una hoja cuadrada obtenemos un octágono; de una hoja rectangular un ángulo de 60 grados y un triángulo equilátero. Al doblar este último obtenemos medios, tercios, cuartos, sextos, doceavos; también un hexágono y al final una estrella de seis puntas. De una tira de papel, brotan triángulos equiláteros (10) y con éstos construyen un hexágono ¡con movimiento!, del cual hay que encontrar sus tres caras: han construido un hexaflexágono. El tamaño del cuadrado, del rectángulo o del triángulo puede variar, lo que permite, en tercer grado, hablar de semejanza. También, una de las características que pueden adquirir las figuras y cuerpos que elaboremos, no sólo de papel sino también de cartulina y de material de re uso, es el movimiento o la transformación. Ésta es una cualidad que hace más fascinante la construcción de figuras o cuerpos geométricos. El trabajo cooperativo es fundamen­ tal en esta actividad. Los grados de ca­pa­­ cidad y destreza en el doblado de pa­pel crea la necesidad de preguntar o ayudar al otro y se escucha: “¿cómo va el doblez?”, ¡ya me atoré en el armado!”. Esto mismo puede reforzar el lenguaje matemático o geométrico entre iguales. Se va comprendiendo la importancia del trabajo en equipo, pues aquí no se llevan a cabo competencias para ver quién es el mejor, sino que todos, de acuerdo con sus características y destrezas, logran cul­minar satisfactoriamente la actividad, expre­sando contentos: “¡sí se pudo!”. entre maestr@s LA ELABORACIÓN DE UN INSTRUCTIVO Parte complementaria de todo lo anterior es lograr que el alumno pueda elaborar, con sus propias palabras, un instructivo. Con ello podrá sistematizar su experiencia y poder transmitirla a otros compañeros haciendo uso de esta herramienta socializadora. Así, se puede vincular con la materia de Español, pues aquí se tiene que uno de los temas es, precisamente, la elaboración de un instructivo. Al hacer éste, los alumnos demuestran su creatividad al emplear los trazos, el uso de colores y explicar de forma puntual a través de la redacción que es reforzada con elementos gráficos e incluso “de bulto”. Para ello, se ingenian para hacer pequeños cuadrados y sus dobleces para explicar cada paso en el instructivo. Éste es otro de los productos finales de esta estrategia. ALGUNOS RESULTADOS A lo largo de los últimos años, he observado que la estrategia del trabajo con papiroflexia es relevante en la enseñanza de la Geometría. Además de que nos permite reconocer el desarrollo de la psicomotricidad fina en los alumnos. Esta actividad pareciera fácil, 44 Aprendiendo Geometría con doblado de papel MÁS ALLÁ DEL CENTRO ESCOLAR Hemos colectivizado estas experiencias también con los maestros a través del Museo Didáctico de las Matemáticas,3 en algunos cursos cortos en los que brindamos asesorías a los maestros-alumnos y, sobre todo, cada año, desde 2000, participamos en los congresos sobre la Enseñanza de las Matemáticas, impulsados por el Museo y su asociación, la Asociación Nacional de Maestros Misioneros en la Enseñanza Humanista del Español y la Matemática, Distrito Federal. Igualmente, me ha tocado participar en algún congreso nacional o, incluso, en uno internacional. Este es el camino recorrido hasta ahora –con satisfacciones y contratiempos–, que nos ha servido a todos: docentes y estudiantes. Y éste no termina aquí, sigue enriqueciéndose en las aulas, con las aportaciones de los compañeros y de los alumnos. El camino de la enseñanza y el aprendizaje es una aventura emocionante que no termina. @ pero la experiencia nos ha demostrado lo contrario, hay alumnos a los que se les dificulta, por lo que terminan renunciado a este trabajo. De la misma manera, descubrimos lo contrario, alumnos reacios a lo conceptual y lo escrito quedan motivados y logran aprendizajes significativos, con lo que refuerzan su autoestima. La papiroflexia puede también despertar y potenciar la creatividad –la imaginación espacial– pues les abre un nuevo panorama, en ocasiones desconocido, que los invita a continuar esta actividad, ya que con algunos cuadrados o triángulos de hojas de colores se pueden crear un sinnúmero de figuras o cuerpos. El movimiento y el color son otros dos aspectos que hacen atractivo el doblado de papel, pues podemos jugar con los colores primarios, secundarios, etc., y también podemos dar vida a las figuras: un cubo de aristas o un prisma hexagonal de bolsillo, pues se pueden guardar, al hacerlos planos. Ocho cubos pegados o seis tetraedros (se puede usar material reciclable también para estos cuerpos, como pequeñas cajas iguales para el cubo o empaques de tetra pack en lugar de tetraedros) con movimiento ilimitado; un octágono que se convierte en rehilete, etc. Incluso, en ocasiones, los alumnos llevan otras figuras, lo cual enriquece nuestro trabajo. La definición de los conceptos con sus propias palabras y su comparación con las definiciones formales, les demuestra que ellos pueden reconstruir la Geometría, al mismo tiempo que elaboran un listado de todos los conceptos encontrados a lo largo de la elaboración de las diferentes figuras y cuerpos geométricos: 30, 40, quizá 50. Todo depende del esfuerzo que se quiera hacer. Toda esta experiencia queda plasmada en la realización del instructivo, como un ejemplo de que se puede aprender Geometría doblando papel. En ocasiones, se han hecho muestras pedagógicas con el trabajo de los alumnos con la finalidad de dar a conocer a la comunidad escolar los logros con esta estrategia, lo que causa una buena impresión en los asistentes. BIBLIOGRAFÍA Colin, J. (s/f ). Papiroflexia. Origami. (No. 10). Primera colección. Palacios, Vicente (1999). Papiroflexia básica. Barcelona: Editorial Miguel A. Salvatella. Palacios, Vicente (1999). Papiroflexia fácil. Barcelona: Editorial Miguel A. Salvatella. Palacios, Vicente (2002). Papiroflexia colección. Barcelona: Editorial Miguel A. Salvatella. Kasahara, Kunihiko y Takahama, Toshie (2000). Papiroflexia “Origami” para expertos. España: EDAF. 3 Este museo se ubica en la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, México, DF. 45 Desde los mesabancos La matemática de las historias Lourdes Guido* C onté a mis alumnos el cuento “El patito feo”, al finalizar anoté en el pizarrón: Había una vez un muchos Más tarde el el a quien sus hermanos no querían, después de pasar encontró una familia de se vio convertido en un hermoso que lo impresionaron. . La mayoría gritó: “es el cuento del ‘patito feo’ ” –“El patito es el triángulo”. –“Sus hermanos son los círculos”. –“Los cuadrados son los cisnes”. –“¡Qué chistoso!” –“¿Por qué lo escribió así?” –¿Les gustó? –pregunté. –Sí, está bonito. –Es muy divertido. –Cuéntenos otro y nosotros lo adivinamos. Era hora de salir a sus casas. Prometí contarles otro cuento después. @ ———————————— * Profesora de Segundo Grado de la Escuela Primaria ubicada en la colonia Cerro de la Estrella, Iztapalapa, Distrito Federal. 46 La Universidad Pedagógica Nacional invita a la PRESENTACIÓN del 18 2 0 0 9 SEPTIEMBRE 17 horas Auditorio Lauro Aguirre Instituciones participantes: • UNESCO/OREALC • UNESCO/IESALC • Red Kipus • Universidad Pedagógica Nacional (México) • Universidad Pedagógica Nacional (Honduras) • Universidad Pedagógica Libertador (Venezuela) • Universidad Pedagógica (Colombia) • Universidad Tecnológica San Antonio de Machala (Ecuador) • Pontificia Universidad Católica del Perú • Universidad Federal de Minas Gerais • Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (Chile) • Universidad Católica Cardenal Silva Henríquez (Chile) • Universidad del Bío Bío (Chile) • Universidad de la Frontera (Chile) Carretera al Ajusco núm. 24, col. Héroes de Padierna, CP 14200, Tlalpan, México, DF www.upn.mx Para y desde el consejo técnico Enciclomedia en la clase de Matemáticas Yolanda Chávez Ruiz* [email protected] E ste artículo es parte de una investigación realizada en la Universidad Pedagógica Nacional en la Maestría en Desarrollo Educativo, que se llevó a cabo con la modesta intención de constituirse como una aproximación a la práctica docente cotidiana a partir de la incorporación de Enciclomedia en el aula describiendo los procesos de interacción entre el profesor, el alumno y el contenido matemático mediado por esta herramienta. La irrupción de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (tic) en la vida cotidiana crea nuevos paradigmas, nuevas formas de ver, interpretar y conocer el mundo, también nuevas formas de expresarnos y comunicarnos. La escuela, como institución que asegura que las nuevas generaciones adquieran la experiencia social, cultural e histórica acumulada, no es ajena al vertiginoso crecimiento y desarrollo de las tic. Actualmente, a la escuela se le encomienda, por un lado, la capacitación para el uso de las tecnologías y, por otro, la posibilidad de utilizar éstas como recurso para incidir en la enseñanza y el apren­ dizaje. En la escuela primaria en México se ha avanzado con diversos proyectos en estos dos sentidos; entre estos proyectos se encuentra Enciclomedia, que nace como un recurso de apoyo a la labor educativa. El gobierno foxista expresó que Enciclomedia revolucionaría la educación en nuestro país; ésta es una apreciación simplista, ya que sería iluso pensar que el problema educativo de México se puede resolver instalando computadoras en todas las escuelas. Si bien Enciclomedia ————————————— * Profesora normalista. Asesora en Centros de Maestros. Estudiante de posgrado en el Cinvestav. 48 Enciclomedia en la clase de Matemáticas puede influir en el proceso de enseñanza y aprendizaje y contribuir a mejorarlo, es necesario estudiar con cuidado los fenómenos que se producen con la incorporación de este recurso en el aula antes de hacer afirmaciones al respecto. Con tal intención, este artículo aborda los usos que se han dado a Enciclomedia en las clases de Matemáticas. Uno de los propósitos de la investigación fue observar los procesos en la clase de Matemáticas a partir de la introducción de Enciclomedia, con el objeto de cap­tar los diferentes fenómenos que de dicho proceso se desprendían. Al ser la asignatura de Matemáticas una de las prioritarias, tanto a nivel curricular como para la práctica docente cotidiana, conviene poner atención acerca de si este recurso cumple con las expectativas tanto de sus usuarios directos, docentes y alumnos, como de sus creadores y autoridades educativas. El caso de Enciclomedia llama la atención por ser un proyecto que llega de manera directa al aula y se incorpora como “un recurso más” del que el docente dispone en cualquier momento de la clase. Según afirman sus creadores, La integración de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, y su impacto en todos los campos de la actividad humana, impone cambios de paradigmas, nue­ vas formas de repensar la educación y de concebir los pro­ce­sos de enseñanza y aprendizaje, así como recursos y elementos mediadores de la práctica en el aula.1 La particularidad de Enciclomedia al ser un recurso tecnológico de uso colectivo y que llega a la gran mayoría de la aulas de 5° y 6° grado de educación primaria de nuestro país, es que le da posibilidad a los profesores de generar otro tipo de ambiente en el aula, ya que cuentan con un recursos novedosos y diversos. 1 Disponible en http://www.sep.gob.mx/work/appsite/Enciclomedia/documentonciclomedia.pdf. Recuperado el 31 de mayo de 2005. 49 Enciclomedia es un recurso versátil que puede apoyar en diferentes momentos los procesos de enseñanza y aprendizaje. Los usos que los profesores dan a Enciclomedia en la clase de Matemáticas están relacionados con sus concep­cio­ nes de aprendizaje y enseñanza, con el conocimiento y dominio que tienen del contenido matemático que se aborda y con la habilidad para manejar la compu­ tadora. De acuerdo con esto, podemos decir que Enciclomedia no altera las con­­ cepciones de los maestros, sino que se adap­ta a ellas y a las formas de enseñanza que implementan habitualmente. Palabras clave: Enciclomedia, recurso, usos, Matemáticas, profesor, enseñanza. uuuuu Enciclomedia is a versatile resource which, in different moments, can support teaching and learning processes. The uses of Enciclomedia made by teachers in the classroom are related with their concepts about learning and teaching, their knowledge and proficiency of mathe­ matical contents and their ability to run a computer. In accordance with this, we can say that Enciclomedia does not chan­ge teachers’ concepts, but adapts to these and to the teaching ways they usually implement. entre maestr@s LOS RECURSOS PARA LA ENSEÑANZA En Matemáticas, los recursos pa­ra la enseñanza adquieren impor­tan­ cia cuando se asocian a la posibi­ lidad de facilitar al estudiante el acceso al conocimiento matemá­ tico ofreciéndole alternativas para mani­pular, observar, analizar y es­ tablecer relaciones con los objetos matemáticos, lo que a su vez colabo­ ra en los procesos de abstracción y generalización. Los diferentes recursos utiliza­ dos a lo largo del tiempo para la enseñanza de las Matemáticas han respondido a las concepciones edu­ cativas de la época y necesidades específicas de la práctica educativa. Su elaboración y utilidad es­tán ligadas con lo que se define como enseñanza y aprendizaje, en general, y de las Matemáticas, en particular. Ante la llegada de las tic a las escuelas, es válida la siguiente pregunta: ¿El uso de la computadora como recurso para la enseñanza de las Matemáticas facilita el proceso de aprendizaje en los estudiantes? Para dar respuesta habrá que ser cauteloso, ya que la introducción de computadoras en el aula está acompañada de diversas variables que matizan el proceso de enseñanza y aprendizaje. Algunas investigaciones (Moreno y Waldegg, 2004; Rojano, 2006; Ursini, 2006) reportan que el uso de la computadora como recurso para la Enseñanza de las Matemáticas puede hacer ligera y La tecnología no debería utilizarse como sustituto de los conocimientos e intuiciones básicos, sino que puede y debería usarse para potenciarlos 50 sencilla la presentación de los contenidos, permitiendo al estudiante apropiarse de éstos con apoyos de tipo audiovisual e interactivo. Lo anterior porque los recursos que ofrecen las tic permiten la ma­ni­ pulación de información, tanto cualitativa como cuantitativamente, ofreciendo la posibilidad de crear escenarios que representan nociones matemáticas. ¿El uso de la computadora, específicamente el software, dará este sentido matemático por sí mismo? ¿Qué necesita el profesor para hacer de estos recursos computacionales la herramienta que le permita al estudiante construir el saber matemático? Las investigaciones informan de la utilidad de las herramientas informáticas en el desarrollo de no­ ciones matemáticas en los alumnos. En una de estas investigaciones, Mo­ reno y Waldegg (2004) seña­lan que la importancia de las herramientas computacionales pa­ra la edu­ cación matemática está aso­ciada con su capacidad para ofrecernos medios alternativos de expresión matemá­tica y formas innovadoras de manipulación de los objetos ma­temáticos. Por otro lado, el National Coun­cil of Teachers of Mathematics (nctm, 2000) señala el uso de la tecnología como una herramienta fundamental en la enseñanza y el aprendizaje de las Matemáticas, ya que proporciona imágenes visuales de ideas matemáticas, facilita Enciclomedia en la clase de Matemáticas la organización y el análisis de datos y hace cálculos con eficacia y exactitud. Cuando se dispone de herramientas tecnológicas, los alumnos pueden centrar su atención en tomar decisiones, reflexionar, razonar y resolver problemas. La tecnología no debería utilizarse como sustituto de los conocimientos e intuiciones básicos, sino que puede y debería usarse para poten­ ciarlos. En los programas de Enseñanza de las Matemáticas, la tecnología debe utilizarse amplia y responsablemente con el objetivo de enriquecer el aprendizaje. El uso de la computadora co­ mo recurso para la Enseñanza de las Matemáticas está determinado por múltiples factores, entre los que se cuentan la capacitación de los profesores en cuanto a su uso, el manejo que le dan los docentes en el aula y la idea que tengan éstos de enseñanza y aprendizaje de las Matemáticas. USOS DE ENCICLOMEDIA EN LA CLASE DE MATEMÁTICAS Describir las interacciones que se dan entre profesor-saber-alumno no es una tarea simple, porque el aula es un espacio donde convergen actores con cultura e historia personales y saberes que tienen que ser enseñados en una estructura institucional regida por una organización y distribución de tiempo definidos. A este panorama se agre- ga un recurso novedoso tanto para profesores como para alumnos que en principio podría promover otro tipo de interacciones en la clase de Matemáticas. La Didác­tica de las Matemáticas es una aproximación teórica que contribuye a explicar lo que pasa en el aula con la entrada de Enciclomedia, la cual es definida explícitamente por Chevallard, Bosch y Gascon (1997) como […] la ciencia del estudio y de la ayuda al estudio de las matemáticas. Su objetivo es llegar a describir y caracterizar los pro­­ce­sos de estudio –o procesos di­dác­ticos– de cara a proponer explicaciones y respuestas sólidas a las dificultades con que se encuentran todos aque­llos (alumnos, profesores, padres, profesionales, etc.) que se ven llevados a estudiar matemáti51 cas o a ayudar a otros a estudiar matemáticas. Respecto a esto, Brousseau (1988) señala que para que sea po­sible enseñarlo, el conocimiento matemático debe estar inmerso en un contexto. Posteriormente, para que ese conocimiento pueda ser utili­zado, el contexto debe ser eliminado y el co­nocimiento debe hacerse general. Con Enciclomedia, el do­cente puede presentar el saber matemático dentro de contextos que faciliten la relación alumnocontenido, puesto que Enciclomedia le proporciona la posibilidad de contextualizar los contenidos matemáticos en ambientes dinámicos, accesibles y atractivos para los alumnos. Las respuestas que los alumnos ofrecen ante los diferentes plan­tea­ mientos del docente, las actitudes entre maestr@s e) la disposición al trabajo que tengan tanto el maestro como sus alumnos; f ) la información con la que cuente el docente sobre las posibilidades de Enciclomedia para abordar el contenido a trabajar; g) el dominio sobre las herramientas informáticas, entre otras. que manifiesten al interactuar con el saber matemático, la manipulación que realicen de éste, su manera de organizarse ante alguna tarea, las anticipaciones o verificaciones que hagan ante alguna situación, las decisiones que tomen, las estrategias implementadas ante algún planteamiento y las relaciones que establezcan entre sus compañeros o con el profesor para negociar, comunicar o debatir alguna idea matemática, son elementos que nos van a permitir caracterizar la forma de incorporación de Enciclomedia. La escuela es el lugar donde se transmiten los saberes; el encargado de comunicar dichos saberes es el profesor en tanto responsable de la actividad de enseñanza. El docente adapta el saber y lo presenta a sus alumnos bajo diferentes formas. El profesor como ser social, con una historia, una ideología, ciertas creencias y concepciones, mediará el proceso de enseñanza y aprendizaje. Es decir que el docente cuando se encuentra en el aula frente a sus alumnos toma todo tipo de decisiones; las decisiones por las que opte dependerán tanto de su historia personal como de las concepciones que tenga sobre la enseñanza, lo que entienda por aprendizaje y lo que defina como Matemáticas. En efecto, en las sesiones videograbadas en el transcurso de esta investigación se observan diferentes usos que los docentes hacen de Enciclomedia. Cabe la aclaración de que los profesores pueden hacer un cierto uso de Enciclomedia en alguna sesión y mo­ dificarlo en otra. Esto se relaciona no sólo con sus representaciones, sino también con las diferentes variables que intervienen en los procesos de enseñanza y de aprendizaje, tales como: Desde su implementación, Enciclomedia fue muy bien aceptada tanto por alumnos como profesores, quienes vieron en ésta un recurso versátil que podía apoyar en diferentes momentos los procesos de en­ señanza y aprendizaje. A partir de este estudio, implementando una serie de entrevistas, identificamos las ventajas que los docentes ven en dicho recurso: Enciclomedia como medio para la enseñanza. Ya que como programa pedagógico cuenta con diversos recursos como interactivos, animaciones, videos, que los profesores utilizan en diferentes momentos de su clase. Enciclomedia como herramienta para construir otros recursos para la enseñanza. Utilizando el equipo de cómputo los profesores pueden elaborar diferentes materiales, de acuerdo con las necesidades de la clase, por ejemplo, presentaciones en Power Point. Enciclomedia como medio para el estudio. Los profesores la utilizan para buscar información que desconocen o para detallarla o confrontarla antes de tratar el contenido frente al grupo. Al entrevistar también a los alumnos, identificamos que para ellos representa un recurso atractivo e incluso divertido, lo que motiva y llama su atención hacia la clase; además, los alumnos perciben que la fuente de información en el aula ya no es sólo el pro­fesor; Enciclomedia proporciona información de diversa índole y en diversos formatos, lo que la hace atractiva para ellos. La intención de los creadores de Enciclomedia en el área de Matemáticas fue, además de proporcionar recursos al docente para la enseñanza de la asignatura, a) El tipo de contenido que abordará en dichas sesiones; b) el nivel de complejidad de estos contenidos; c) los conocimientos previos que identifique en los estudiantes; d) los elementos, recursos, herramientas para la enseñanza con que cuente; 52 Enciclomedia en la clase de Matemáticas Uso “transmisionista” de Enciclomedia Encontramos un uso “transmisionista” que el profesor da a Enciclomedia cuando el docente utiliza este recurso para presentar los contenidos matemáticos de manera expositiva. Es decir, introduce los conceptos a partir de definiciones, sin haber planteado alguna situación problemática de inicio o alguna experiencia que contextualice y dé significado a la información o definición. Desde su creación, en En­ ciclomedia se incorporó la enciclopedia Encarta, ésta ha sido uno de los recursos que el docente ha utilizado para la transmisión de contenidos, ya que, como en toda enciclopedia, se pueden encontrar en ella definiciones, esquemas, mapas e informaciones de diversa índole. La presentación de información a los alumnos resulta favorable para el aprendizaje, en el sentido que Brousseau da a la institucionalización; sin embargo, si la información sólo se presenta como único medio y fin de la enseñanza de los conceptos o los procedimientos, difícilmente puede favorecerse el aprendizaje. En la enseñanza transmisionista se presenta la información central al inicio de la instrucción y, posteriormente, se presentan ejercicios de aplicación, antecedidos por un ejemplo. En este modelo de enseñanza, el contenido matemático es considerado como un mensaje informativo, el cual hay que transmitir a los alumnos para que éstos sean capaces de reproducirlo de manera fiel. La actividad del alumno es muy limitada. Es en el alumno en quien recae la responsabilidad de aprender los contenidos que el maestro transmitió, memorizando la información recibida para estar en posibilidades de reproducirla verbalmente o aplicarla en la resolución de ejercicios de estructura similar a la que introdujo el profesor. generar a partir del uso de estos recursos una relación de aprendizaje más rica, una mejor interacción con el contenido que llevara a los alumnos a la reflexión, a la confrontación del saber matemático con sus compañeros y a la argumentación. Sin embargo, lo que se observa en la práctica guarda distancia con la forma en que sus creadores la concibieron. En este sentido, se constata lo mismo que ha ocurrido con la incorporación de otros recursos como, por ejemplo. los libros de texto para el alumno o para el maestro; son los profesores los que median las potencialidades de dichos materiales. Pudimos observar que en algunas aulas, la in­ corporación de Enciclomedia sí promovió la reflexión y la interacción, mientras que en otras eso no se percibió. Observamos que la mediación que el profesor hace de este recurso conduce a usos que son muy diferentes. Algunos de los usos observados promueven relaciones didácticas más rígidas o limitadas, mientras que otros generan actividades más interesantes y formativas, en las que la interacción maestro-alumno permite enriquecer la relación alumno-contenido. USOS DE ENCICLOMEDIA En términos más generales podríamos decir que los profesores ajustan Enciclomedia a las formas de enseñanza a las que están habituados. En estudios previos, por ejemplo, el de Ávila (2006), se ha mostrado que los profesores hacen adaptaciones importantes, a veces radicales sobre las propuestas de los libros de texto y que las acciones en la clase llegan a distanciarse por completo de las intenciones planteadas en los materiales. También se mostró en ese estudio que muchos profesores se mantienen “al margen de las reformas”, ya que prefieren continuar enseñando a sus alumnos con base en sus ideas y la experiencia que poco a poco van adquiriendo en la práctica. No es de extrañarnos, pues, que con las propuestas de Enciclomedia haya sucedido algo similar Enciclomedia como “Amplificador” En el uso de Enciclomedia que denominamos “Amplificador”, el profesor se limita a presentar el libro de texto amplificado en la pantalla. Esto aun cuando la 53 entre maestr@s versión de Enciclomedia que utilizaron los docentes participantes en la investigación ofrece recursos que pudieron utilizar para profundizar o completar los saberes matemáticos que comunicaron. Las lecciones de los libros de texto tienen ligas con diversos recursos claramente visibles para el profesor, pero los docentes utilizan Enciclomedia pa­ra amplificar (visualmente) el texto, utilizándolo como un guión a partir del cual desarrollan la clase de Matemáticas. Cuando se utiliza Enciclomedia, el contenido matemático en general se presenta en el formato que ofrece el libro de texto, ya que la mayoría de los usos se basan en una proyección de éste en la pan­talla; ésta es una consecuencia de la estructura de Enciclo­media, pues se articula a partir de la di­ gitalización de los libros de texto. En este sentido, podemos decir que Enciclomedia optimiza el uso del libro de texto, no sólo por la rapidez para visualizar las informaciones, sino por la sola posibilidad de proyectar en colectivo y de hacer públicas tanto dichas informaciones como las respuestas y estrategias utilizadas para resolver los ejercicios y problemas. Enciclomedia como “Andamiaje” En este uso, el apoyo que brinda el profesor resulta determinante; en inicio, su actividad estará centrada en proporcionar a los alumnos puen­ tes que faciliten su acceso al saber puesto en juego para, de manera paulatina, alejarse por completo y que la responsabilidad total recaiga en los alumnos. El “andamiaje” está constitui­ do por elementos que van a facilitar al alumno la adquisición de una noción, en otras palabras, representa un apoyo para que el alumno pueda acceder al aprendizaje. En el ejemplo que se seleccionó para ilustrar esta forma de uso del equipo de Enciclomedia, el docente elabora una presentación en Power Point que utiliza como andamio en varios episodios de la clase. El contenido que indica la lección es: operadores fraccionarios en situaciones sencillas. La noción de fracción como operador –que es la que se aborda en la clase que se des­cribe– es uno de los contenidos curriculares que presentan un grado de complejidad importante. Por este grado de complejidad, resulta lógico que el docente pretenda facilitar al alumno el acercamiento a dicha noción. En esta sesión, el profesor ha­ ce una modificación a la trans­ posición del objeto de enseñanza que se presenta en el libro de texto y en Enciclomedia. Es decir, en el libro –transferido luego a Enciclomedia– se presenta un circuito de automóviles (imagen 1), a partir del cual los alumnos tendrán que calcular la distancia recorrida por los éstos. Para apoyar la comprensión de esta situación, el profesor pre­ senta a los alumnos el circuito –ori­ ginalmente curvo e irregular– en un esquema lineal, puntualizando que el esquema será una ayuda para una mejor comprensión del ejercicio. En este nuevo circuito indica las fracciones correspondientes a los recorridos en relación con la distancia total del circuito. Maestro: a ver, este esquemita que está en el pizarrón les va a ser­vir a los que no le entienden. La carretera ya no está como al principio… Imagen 1 Imagen 2 Imagen 3 54 Enciclomedia en la clase de Matemáticas como ésta (imagen 1), sino la puse en línea recta. Y entonces ahí está (imagen 2). La modificación que el profesor hace a la propuesta original va en dos sentidos: a) el circuito que presenta el libro es irregular y curvo, mientras el esquema elaborado por el docente representa el mismo tramo de forma lineal; b) además, el circuito se divide en cuartos, y bajo éstos ubica un espacio para escribir la medida correspondiente en kilómetros. Esta adecuación del saber que el profesor realiza, como él lo expresa, la considera necesaria para que se comprenda con más facilidad la noción puesta en juego; al respecto Chevallard (et al., 1997) señala que: por lo que esto se ha convertido en un tema recurrente entre quienes se dedican a la investigación en educación matemática. Brousseau destaca que la resolución de problemas es una actividad fundamental, no sólo para el alumno –quien se encargará de encontrar una solución y en ese camino encontrará ganancias en términos de aprendizaje– sino también para el profesor, quien tendrá la responsabilidad de plantear buenos problemas. Gerard Vergnaud (1981) destaca la importancia de la resolución de problemas en la Enseñanza de las Matemáticas y al respecto señala: La resolución de problemas es la fuente y el criterio del saber. Es en la resolución de problemas, o más generalmente en el tratamiento de situaciones problema, que son elaboradas las nociones y son abstraídas las propiedades pertinentes. También es en la resolución de problemas que son puestos a prueba los conocimientos operatorios (p. 158). […] hay que remarcar que esta reconstrucción escolar de las matemáticas es absolutamente imprescindible. De hecho, para que una obra matemática pueda ser estudiada en el seno de una institución didáctica, ésta deberá necesariamente sufrir transformaciones que la volverán apta para ser estudiada por los sujetos de dicha institución. Una de las razones de esta transformación estriba en que, en general, el tipo de cuestiones que están históricamente en el origen de la obra matemática no son siempre las más ade­ cuadas para reconstruirla en el contexto escolar mo­ derno (p. 135). Resolver problemas no sólo es un método para la Enseñanza de las Matemáticas, sino es parte de la ac­tividad humana esencial, ya que en nuestra vida cotidiana nos enfrentamos constantemente a ellos. Definimos el uso de Enciclomedia a partir de la resolución de problemas cuando el docente propone una situación problemática y apoya el planteamiento o el proceso de resolución con dicho recurso. En este episodio, el profesor presenta un problema del libro de texto a los alumnos a partir de Enciclomedia, además el profesor elaboró unas diapositivas en las que se explicitaba la tarea y se pre­sentaban los diferentes momentos del problema. El profesor, de acuerdo con algunas peticiones de los alumnos muestra en la pantalla los diferentes recursos. El profesor incita a los alumnos a resolver el ejercicio que les resultó problemático (cálculo de 75%), lo que se da a partir de una negociación entre dar El profesor adapta este contenido, simplifica la transposición de este saber propuesto por los autores del libro de texto, considerando que el aprendizaje de la noción de fracción presenta algunas dificultades. Uso de Enciclomedia en la resolución de problemas Enseñar Matemáticas a través de la resolución de problemas es una idea actualmente aceptada inter­ nacionalmente. Hay un consenso entre vertientes teóricas de diversas regiones que coinciden en señalar la conveniencia de que la Enseñanza de las Matemáticas se realice a partir de la resolución de problemas, 55 entre maestr@s pistas para resolver el ejercicio que presenta dificultad y bajar las participaciones (puntos). Los alumnos deciden seguir intentándolo solos y el profesor les sugiere que le piensen. Maestro: no, tampoco son adivinanzas, por eso les digo que si les doy la primera pista… Alumnos: ¡no! Maestro: por eso les digo que ya si les doy la primera pista… Alumnos: ¡no! El maestro continúa revisando de manera individual el trabajo de los alumnos y les pide que regresen a su lugar para que corrijan el trabajo. Maestro: por eso les digo ya están adivinando, ya no están razonando, nada más están viendo, si no es Chana es Juana. Si no se dirige la mirada al profesor, Enciclomedia puede ser un artículo decorativo para el aula, En este episodio, el profesor hace hincapié en que resolver el cuadro no es cuestión de azar, por lo que solicita a los alumnos que empleen el razonamiento; dicha petición se realiza a partir de un contrato que parece habitual. En este contrato se observa que el docente intenta no caer en la tentación, en la que sí caen muchos docentes (Ávila, 2004) de ofrecer ayudas a los alumnos para facilitar los problemas planteados en los libros de texto. Siempre bajo la idea de que los alumnos no podrán resolverlos si se conserva la dificultad original de los mismos. En este caso parece que el profesor está consciente de que disminuir la dificultad es disminuir el nivel del aprendizaje y hace a los alumnos corresponsables de esta no simplificación de las tareas. atractivo para los estudiantes, pero muy costoso y que no favorece mejores interacciones y aprendizajes 56 A MANERA DE CONCLUSIÓN A pesar de que las expectativas iniciales, tanto de los maestros como de los alumnos, fueron muy altas en cuanto a que per­cibían una mejor relación de enseñan­za y aprendizaje de las Matemáticas con la incorporación de Enciclomedia, si tomamos como referencia los estudios realizados sobre la práctica docente en Matemáticas en México, podemos decir que no se ven notablemente alterados los contratos didácticos que se establecen habitualmente; es decir, en la clase no se modifican de manera importante ni las interacciones ni los compromisos recíprocos establecidos explícita o implícitamente entre maestro y alumnos. Si bien al parecer los profesores continúan implementando las mismas formas de enseñanza que han utilizado habitualmente, la importancia de Enciclomedia en el aula de Matemáticas consiste en que la presentación del contenido se vuelve más atractiva, ya sea con recursos visualmente llamativos para el alumno o por el simple hecho de que ver el libro en la pantalla capturaba de inmediato la atención de los alumnos, y aunque esta investigación no se centró en el aprendizaje de los alumnos, sí podemos decir que esto es un primer paso para propiciarlo. Una constante en los profesores fue su referencia a la falta de preparación para usar Enciclomedia, no sólo en cuanto a habilidades para manejar el equipo, sino principalmente en metodologías adecuadas para abordar los recursos propuestos para cada una de las asignaturas. Tal vez el mayor reto que tienen las autoridades educativas en relación con Enciclomedia es preparar a los profesores Enciclomedia en la clase de Matemáticas para obtener más provecho del recurso, fortaleciendo la actualización tanto en el aspecto matemático como en el pedagógico, sin dejar de lado el desarrollo de habilidades de cómputo. Si no se dirige la mirada al profesor, Enciclomedia puede ser un artículo decorativo para el aula, atractivo para los estudiantes, pero muy costoso y que no favorece mejores interacciones y aprendizajes. Es lamentable que se insista, en la mayoría de las reformas, en cambios de contenido en el currículo, sus métodos y sus propósitos, cuando el históricamente olvidado es el docente. ¿No debería ser el profesor el foco de atención para cualquier reforma futura? Es posible hacer excelentes diseños curriculares, de­ fi­nir métodos excepcionales, mirar hacia propósitos extraordinarios, poner computadoras en todas las escuelas, pero ¿quién es el encargado directo de concretar dichos planes?, el profesor. Lo que sigue para que la inversión en Enciclomedia rinda frutos es voltear la mirada al profesor, verlo como un profesional de la educación y encaminar todos los esfuerzos en esa ruta, ya que finalmente el valor de Enciclomedia, su valor real, depende del uso que los profesores hagan de ésta. Este uso ubica a Enciclomedia en dos grandes vertientes: como recurso para realizar tareas de enseñanza tradicional de manera tecnificada o como agente de cambio que enriquezca la Enseñanza de las Matemáticas. @ Balacheff N. (2000). “Entornos informáticos para la enseñanza de las matemáticas” (p. 93). En: Matemáticas y educación retos y cambios desde una perspectiva internacional. N. Gorgorió, J. Deulofeu, A. Bishop (coords.). España: Materiales para la innovación educativa núm. 14. Brousseau, G. (2000). “Educación y didáctica de las matemáticas”. En: Educación Matemática (vol. 12, núm.1). México: Editorial Iberoamérica. Brousseau, G. Los diferentes roles del maestro. En: Parra C. y Saiz I. (comps.) (s/f ). Didáctica de las matemáticas: aportes y reflexiones. Chevallard, Y. (1991). La transposición didáctica. Del saber sabio al saber enseñado. Tercera edición (trad. Claudia Gilman). Argentina: AIQUE. Chevallard, Y., Bosch M., Gascon J. (1997). Estudiar Matemáticas. El eslabón perdido entre enseñanza y aprendizaje. (Biblioteca para la actualización del maestro). México: sep. Moreno L. y Waldegg G. (2004). Aprendizaje, Matemáticas y Tecnología. México: Aula XXI Santillana. NCTM (2000). Principios y Estándares para la Educación Matemática. E.U. Fernández M. (Trds.) Parra C. y Saiz (comps.) (1994). Didáctica de las matemáticas: aportes y reflexiones. Peltier, Marie-Lise (1999). 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Estudio sobre los procesos de transmisión y apropiación del saber matemático escolar. Tesis para obtener el grado de Doctor en Pedagogía. México: unam. 57 ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? Notas para un análisis Leticia Iturbe Meza* [email protected] PRESENTACIÓN E n las pasadas décadas, en nuestro país, tras una etapa de expansión del servicio educativo se logró una amplia cobertura del mismo, sobre todo, en lo que respecta a la educación básica. Sin embargo, este crecimiento cuantitativo, bajo un modelo de igual educación para todos (mismos programas de estudio, mismo calendario escolar, mismos exámenes) que no toma en cuenta la desigualdad económica, social y cultural de los diferentes sectores de la población, ha dado origen a una distribución inequitativa de oportunidades reales de recibirla. A pesar del discurso de equidad, hay grandes diferencias de infraestructura escolar, preparación de recursos humanos y disponibilidad de materiales entre las escuelas, diferencias que llegan a ser ofensivas cuando comparamos, sólo por dar un ejemplo, una escuela indígena con una escuela urbana privada del Distrito Federal. Paradójicamente, brindar igual educación, cuando no todos tienen las mismas oportunidades económicas y culturales de apropiarse de ella, ha significado mantener e incluso ahondar las diferencias. El acceso a la educación de los grupos más pobres no garantiza la permanencia ni la calidad de la misma y sí ha dado por resultado: rezago educativo, deserción, retraso académico y bajo aprovechamiento escolar. Una verdadera equidad necesariamente implicaría acciones diferenciadas, como lo serían programas de apoyo para los grupos en desventaja. Necesariamente el proyecto educativo de un país tiene que ir cambiando, transformarse para responder a las necesidades de una sociedad. Una de las formas en que se ha buscado este cambio es a través de las llamadas “reformas educativas”. La última de éstas, que ha marcado mi práctica docente de manera más significativa, principalmente en lo relativo a la enseñanza ———————————— ∗ Profesora de educación primaria (benm). Licenciada en Educación (upn). 58 ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? de las Matemáticas, es la llamada Reforma del 93. De ella y de la manera en que me ha tocado vivirla, desde mi perspectiva de maestra de grupo en escuelas primarias, es de lo que tratan estas líneas. LA REFORMA EDUCATIVA DE 1993 Y LA ENSEÑANZA DE LAS MATEMÁTICAS En la década de 1990, el Estado Mexicano implanta el Proyecto de Modernización Educativa para lograr la transformación del sistema educativo nacional. En educación básica se lleva a cabo una reforma que busca preparar a los estudiantes para que enfrenten los desafíos del mundo moderno y respondan a las demandas del nuevo orden laboral y de consumo. La Reforma Educativa de 1993 se propone transformar la educación básica a partir de la elaboración de una nueva propuesta curricular basada en principios de corte constructivista, con lo que toca así aspectos no­ dales: contenidos de aprendizaje, procesos pedagógicos y estrategias didácticas. Se hace preciso entonces modificar la formación magisterial buscando un nuevo perfil profesional. La Secretaría de Educación Pública (sep) inicia la transformación en educación primaria para después continuar los cambios en preescolar, secundaria y normales. Al ser una reforma básicamente curricular, el documento central de la misma es el Plan y programas de estudio 1993, que plantea como uno de los propósitos generales de la educación primaria: “Desarrollar la capacidad de utilizar las matemáticas como un instrumento para reconocer, plantear y resolver problemas” (sep, 1993:50) y presenta el enfoque de la Enseñanza de las Matemáticas que sustenta los programas de la materia. El enfoque plantea una visión de la enseñanza que pretende superar el formalismo y la concepción predominante que supone que los niños deben aprender primero un algoritmo, después ejercitarlo y, por último, aplicarlo a la resolución de cierto tipo de problemas, y propone que los niños construyan conocimiento matemático a partir de la resolución de tales problemas. Sostiene que al enfrentarse a una situación problemática que necesita ser resuelta, los niños ponen en juego conocimientos 59 En este artículo se analizan algunas características de la Reforma Educativa de 1993 y el proceso de actualización docente en relación con su enfoque de enseñanza de las Matemáticas desde la mirada de una profesora de educación primaria. Se discute la necesidad de una verdadera evaluación de los resultados de esta reforma curricular, que se pretende dejar inconclusa al imponer un nuevo currículo cuando los docentes aún lu­ chan por apropiarse de los principios pe­dagógicos del primero. Finalmente, se argumenta la necesidad de contar con docentes comprometidos con su propia formación. Palabras clave: Reforma del 93, maestros, Matemáticas, actualización. uuuuu In this paper some features of 1993 Educational Reform, and the teachers’ education process in regard with their teaching approach to Mathematics are analyzed from the point of view of a primary education teacher. A discussion is made about the need for a real assessment of the results from this curricular reform, pretended now to be given up unfinished by imposing a new curriculum, when teachers still struggle for appropriating the pedagogical principles of the first one. Finally, an argument is posed for the need of teachers engaged with their own education. entre maestr@s previos y utilizan diversos procedimientos informales e intuitivos a partir de los cuales pueden construir una solución. Sugiere así una nueva manera de entender las Matemáticas e intenta cambiar las prácticas de su en­señanza. La concepción de la resolución de problemas como generadora de aprendizajes matemáticos es reiterada en el Programa Nacional de Educación 2001-2006, en el que se afirma que “especialista en Enseñanza de las Matemáticas”. Yo tenía algunos estudios de Pedagogía; mi inclinación por la lectura me había llevado a participar en cursos y talleres de fomento y promoción de la lectura; tenía conocimientos generales de los planteamientos del constructivismo, pues había sido asesora de la Propuesta para el Aprendizaje de la Lengua Escrita (pale); pero mis conocimientos matemáticos eran casi nulos. Me anoté en el grupo de segundo tomando en cuenta que con ese grado trabajaría en el próximo ciclo escolar, pero también por mi desconocimiento de los contenidos de grados superiores. Además, en ese ciclo escolar 93-94 se aplicarían sólo los nuevos programas para primero, tercero y quinto grado. Para los otros sería una etapa de transición en la que se seguirían utilizando los libros anteriores, además de aplicar el enfoque en el desarrollo de algunos juegos y actividades matemáticas. Ya en el ciclo 94-95 se aplicarían los programas en toda la educación primaria. Así es que aquel taller, de cuatro o cinco días de trabajo intensivo con los expertos, fue mi primer acercamiento a una concepción distinta de Enseñanza de las Matemáticas que buscaba que los aprendizajes de los niños tuviesen un verdadero sentido. Un probado conocimiento no sólo de los contenidos sino del pensamiento matemático de los niños y de la didáctica misma, además del entusiasmo de su discurso, hizo que estos expertos, entre quienes recuerdo a Alicia Carvajal, Hugo Balbuena y David Block, nos convencieran de las bondades del enfoque y así nos convertimos en sus promotores entusiastas. Me correspondió reproducir el taller con maestros de Oaxaca y el Estado de México. En cada uno de estos grupos reflexionamos acerca de la forma en que tradicionalmente habíamos enseñado las Matemáticas y la nueva manera que ahora se nos proponía, basada en los resultados de investigaciones acerca de los procesos de pensamiento del niño y la didáctica de las Matemáticas. El entusiasmo estaba presente en muchos de estos profesores, pero también había inquietud, desconfianza, dudas, miedo. […] una educación bá­sica de buena calidad es aquella que propicia la capacidad de los alumnos de reconocer plantear y resolver problemas; de predecir y generalizar resultados; de desarrollar el pensamiento crítico, la imaginación espacial y el pensamiento deductivo (sep, 2001:123). EL PROCESO DE ACTUALIZACIÓN INICIAL Ahora bien, ¿cómo se cambiarían las prácticas de enseñanza de los profesores en servicio?, ¿cómo formarlos en este nuevo enfoque?, ¿era suficiente actualizarlos en las nuevas ideas o sería necesario romper con nociones y concepciones presentes acerca de las Matemáticas? En ese entonces seguramente se pensó que el esquema de “capacitación en cascada” era la mejor solución. Dicho esquema consistía en que un pequeño grupo de expertos en Enseñanza de las Matemáticas, entre ellos los autores de los nuevos libros de texto, trabajaría directamente, en la modalidad de talleres, con grupos de “especialistas” para cada grado de la educación primaria. El propósito de estos talleres sería el análisis, conocimiento y manejo del enfoque, el plan, los programas y los nuevos libros de texto. Cada uno de estos “especialistas” reproduciría el taller con uno o más grupos de profesores que fungirían como “capacitadores” y éstos a su vez, lo harían con quienes finalmente replicarían el taller con los maestros de grupo. Fue así como en el verano de 1992, en tanto maestra de primaria sin ninguna formación específica en Matemáticas, fui invitada a participar como 60 ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? Finalmente, regresé a mi sector escolar en Iztapalapa en donde se habían reunido todos los profesores de acuerdo con el grado con el que trabajarían en el ciclo escolar que iniciaba. Ahí me tocó participar en la última etapa del proceso de capacitación, ahora en mi papel de maestra de grupo, y pude comprobar que aquello que tanto inquietaba a los participantes de los talleres había sucedido: una buena parte de la información y reflexiones acerca del nuevo enfoque de Enseñanza de las Matemáticas se había deformado, perdido o transformado en el camino y lo que ahora se nos proponía a mis compañeros maestros y a mí distaba mucho de lo que los expertos habían planteado. De esta manera arrancó esa reforma educativa en la que, al igual que muchos profesores, me enfrenté a una nueva concepción de las Matemáticas y de su enseñanza. Concepción que, los profesores intuíamos, le daba sentido a los aprendizajes matemáticos de nuestros alumnos y a nuestra práctica, pero que la mayoría de nosotros escasamente entendía y que nos exigía conocimientos y habilidades diferentes. En nuestras escuelas, los nuevos enfoques, tanto de enseñanza del Español como de las Matemáticas, se volvieron temas de análisis, discusión, acuerdos y desacuerdos en asambleas del Consejo Técnico, reuniones informales y charlas durante el recreo. En adelante fuimos familiarizándonos con el programa, el enfoque y las actividades que se proponían en los ficheros de actividades y en otros libros de apoyo que se nos habían proporcionado. Cada uno de nosotros los llevaba a la práctica de acuerdo con sus posibilidades y a las interpretaciones (¿o malinterpretaciones?) que hacíamos del mismo. Algunos dejábamos de lado aquellas actividades que nos parecían incomprensibles o para las que no nos sentíamos suficientemente hábiles; adaptábamos a las características de nuestros alumnos las que considerábamos adecuadas y realizábamos aquellas que juzgábamos más interesantes o fáciles. Lentamente las prácticas empezaban a cambiar. Sin embargo, algunos pensaban que era exactamente lo mismo pero dicho con otras palabras y continuaban su trabajo sin cambiar nada, ignorando las nuevas propuestas y materiales. LA REFORMA CONTINÚA Cambiar una propuesta curricular y brindar una capacitación inicial a los profesores no implica que las cosas se transformen drásticamente en las aulas. Los cambios en educación tienen sus propios tiempos y no se dan por decreto. Conviene reflexionar acerca de algunas de las características y acciones de esta reforma. • Por su modo de implementación es una re­ forma descendente. Impuesta como parte de la política educativa nacional y, al menos en un primer momento, no hace partícipes a maestros, directores de escuela y sociedad de los cambios propuestos. • Es una reforma básicamente curricular. Centrada en el cambio de contenidos y metodología. Si bien toma en cuenta los aportes de la investigación en educación matemática en cuanto a las características de los contenidos matemáticos y los procesos cognitivos de aprendizaje de los estudiantes, deja de lado las prácticas docentes. • Implicó la participación de investigadores y expertos en educación en la elaboración de libros para los alumnos y materiales bibliográficos para los maestros. • Incluyó, en su fase inicial, un proceso de actualización a maestros en servicio. • A partir de 1996, los Talleres Generales de Actualización, al inicio de cada ciclo escolar, abordan diversas temáticas inherentes a la reforma como: uso de los libros de texto y demás materiales bibliográficos; el enfoque basado en la resolución de problemas; construcción de ambientes de aula favorables para el trabajo matemático; conocimientos previos de los alumnos, etcétera. 61 entre maestr@s • Se diseñó un curso específico para el cono­ ci­miento y manejo de este enfoque: La En­señanza de las Matemáticas en la escuela primaria (Block, D.,1995). A partir de 1996 se convocó a los maestros a estudiarlo de acuer­do con sus posibilidades y a acreditarlo a través de un examen. La participación en este curso (individual, voluntaria, autodidacta o en pequeños grupos) pasó a formar parte del sistema de evaluación docente y promoción horizontal llamado Carrera Magisterial. En los Centros de Maestros se organizaron talleres –fuera del horario laboral de los docentes– en los que se abordaban los contenidos del Curso Nacional de Actualización (cna). • En 1997, la formación inicial de los profe­ sores se hizo corresponder con la nueva pro­ puesta al transformarse el currículum de la Licenciatura en Educación Primaria. Así, la primera generación de profesores formados dentro de los principios pedagógicos de la Reforma del 93 egresó en 2001. Las licenciaturas en Educación Secundaria y Preescolar fueron reformadas hasta 1999. • Mientras estos cambios sucedían, la organización del sistema educativo y, específicamente, de las escuelas permaneció prácticamente inamovible. ya formaban parte de la vida cotidiana del aula. Algunas actividades resultaban bastante bien pero otras eran un verdadero fracaso. Muchas veces me quedaba paralizada al no saber cómo reaccionar ante las inquietudes, dudas y respuestas de mis alumnos. Plantear problemas a los niños antes de enseñarles la operación que los resuelve, idea que en un principio resultaba bastante interesante, en la práctica parecía imposible. Mi insuficiente formación en Matemáticas era más evidente desde esta perspectiva de trabajo, así es que cuando en 1996 se abrió el Curso Nacional de Actualización: La Enseñanza de las Matemáticas en la Escuela Primaria, me inscribí. Como el doble turno no dejaba tiempo libre para asistir a asesorías, el estudio individual en casa fue la única opción. Las características del taller me permitieron no solamente empezar a aprender, sino también a hacer Matemáticas, reflexionar acerca de su enseñanza y conocer los materiales con los que contábamos los maestros. Me llevaba mucho tiempo resolver algunas de las situaciones o problemas que ahí se planteaban, otros incluso se volvían un desafío para la familia. La resolución de problemas se convirtió así en el gusto por enfrentar retos y la satisfacción que entrañaba llegar a la solución. Aunque aprobé el examen en la primera oportunidad, como podía presentarlo hasta en tres ocasiones –con lo cual obtenía puntaje para Carrera Magisterial–, lo presenté dos veces más. La preparación del examen se volvió un excelente pretexto para abordar el taller con un pequeño grupo de colegas, de esta manera nuestra comprensión del enfoque se vio enriquecida por el análisis, confrontación y discusión colectivas. Los profesores luchamos por apropiarnos de nuevos principios pedagógicos y matemáticos y transformar nuestras prácticas, pero ¿qué pasa con nuestros alumnos?, ¿qué dicen las evaluaciones externas? En lo anterior se hacen evidentes fallas u omisiones, pero también avances y aciertos. Hasta el momento no se ha realizado una evaluación global de esta reforma y ya tenemos otra en puerta. LA ACTUALIZACIÓN PERMANENTE Durante los primeros años de la reforma mi clase de Matemáticas, siempre con alumnos de primer ciclo, había cambiado un poco. Los juegos propuestos en el libro Juega y aprende Matemáticas y algunos materiales como los tangramas, dominós, dados y fichas de colores LAS EVALUACIONES EXTERNAS A 16 años de implementación, esta reforma no pa­rece haber cumplido con sus ambiciosos propósitos ni haber logrado los resultados esperados. Las ba­jas puntuaciones 62 ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? alcanzadas en evaluaciones externas –pisa, Excale, Enlace– por alumnos de diferentes niveles educativos son sólo la parte más evidente del problema. El Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (pisa) pretende evaluar y comparar los sistemas educativos de naciones participantes a tra­vés de una evaluación matricial aplicada a una muestra de alumnos escolarizados de 15 años de edad. En 2003, hizo énfasis en las competencias matemáticas definiéndolas como la “capacidad de los alumnos de aplicar sus conocimientos y habilidades en áreas académicas fundamentales y de analizar, razonar y comunicarse eficazmente cuando plantean, resuelven e interpretan problemas relacionados con distintas situaciones” (ocde, 2006). Casi 66% de los estudiantes mexicanos se ubicaron en los niveles más bajos (1 y 0) de competencia, con lo que México quedó entre los países con menor nivel de desempeño matemático. En nuestro país, el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (inee) aplica los Exámenes de la Calidad y el Logro Educativos (Excale). Exámenes estandarizados, criteriales, alineados al currículum y con diseño matricial que brindan in­ formación del logro educativo de los estudiantes. En 2005, casi 70% de estudiantes de sexto grado de primaria en Matemáticas se ubicaron en los niveles Básico y Por debajo del básico. Pero la prueba que parece preocupar más a los profesores es Enlace. Según la sep (http://www. enlace.sep.gob.mx), está diseñada para informar en qué medida se logran los propósitos de los planes y programas de estudio y para reflejar el resultado del trabajo escolar. Los resultados de la primera aplicación de Enlace en 2006 no son una sorpresa para nadie. El nivel alcanzado por ocho de cada 10 estudiantes de primaria y secundaria, en Matemáticas, se ubica en los niveles más bajos de desempeño académico: insuficiente y elemental. Coincidentemente, las escuelas con peores resultados se encuentran en zonas de alta marginación económica, social y educativa. Dos años después, lo reportado por Enlace 2008 en Matemáticas es similar: 77.7% de alumnos con niveles insuficiente y elemental en primaria. Los resultados en secundaria son aún más alarmantes: 94.4% en esos niveles. El uso que se ha hecho de los resultados de Enlace es cuestionable, la difusión de los datos obtenidos, sin un análisis serio de las causas, ha provocado fuertes críticas y ataques de diferentes sectores de la sociedad a la escuela pública y sus docentes, lo que ha producido cierto pesimismo en estudiantes y maestros. Por su parte, la Secretaría de Educación ha dedicado más tiempo a resaltar y premiar los “mejores resultados” obtenidos por alumnos y escuelas que a explicar cómo servirá la información arrojada por esa prueba para mejorar la educación. La tendencia del discurso oficial, apuntalado en gran parte por las grandes televisoras, ha sido, por una parte, culpar a los maestros de la “crisis de la educación” y, por otra, depositar en ellos la responsabilidad de un cambio. En el inicio del ciclo escolar 2008-2009, el Subsecretario de Educación Básica demanda una “rendición de cuentas” a las instituciones formadoras de maestros, “ya que ellos [los maestros] son la clave de la transformación y la solución a la calidad educativa” (www.sep.gob.mx). De esta manera, el discurso oficial contribuye a hacer más profunda la distancia entre el educador ideal y el docente real que responde a las exigencias y compromisos que su trabajo le demanda y al mismo tiempo vive el deterioro constante de sus condiciones económicas, profesionales y laborales. Ahora la sep asegura que: “Materiales educativos, formación de maestros y gestión escolar son los tres grandes componentes de la Reforma Integral de la Educación Básica” (www. sep.gob.mx), disponiéndose para nuevos cambios. UNA VERDADERA EVALUACIÓN Proponer otra reforma educativa –una más– no parece lo más adecuado. Plantearla supondría que se han hecho muchas cosas, entre otras, una de primera im63 entre maestr@s portancia: una evaluación del estado actual que guarda la política educativa vigente. Evaluación que nos estaría mostrando cuáles son los logros alcanzados y lo que falta por lograr, que no sólo nos diría lo que está mal, sino lo que hay que hacer, que nos brindaría datos, información, indicadores que puedan darnos elementos suficientes para tomar decisiones. Una evaluación que pretenda motivar o justificar una nueva reforma tendría que ser suficientemente amplia, en el espacio y en el tiempo. Tendría que ser sistémica y considerar a todos los actores y dimensiones del sistema: alumnos, profesores, directores, padres de familia, infraestructura, materiales, recursos, metodologías, formación y actualización magisterial, prácticas y concepciones docentes, condiciones laborales y sindicales, etc. Asimismo, se requiere saber si lo que falta por lograr es una deficiencia imputable a los planes y programas de estudio o si tiene una naturaleza externa a ellos. Los resultados arrojados por pruebas como pisa y Excale informan de serios problemas en el aprovechamiento académico de nuestros estudiantes, además de reflejar la enorme desigualdad entre regiones del país, modalidades educativas y educación pública y privada (inee, 2006; ocde, 2006). La aplicación de estos exámenes, aun considerándolos instrumentos confiables y válidos que dan cuenta del logro de ciertas competencias, no significa evaluar, aunque ello forme parte de la evaluación. La competencia matemática que pretenden medir de manera unidimensional es un atributo multidimensional mucho más complejo que una lista de habilidades y estrategias. Por ello, vale la pena preguntarse si la interpretación que se hace de sus resultados es suficientemente válida como para justificar otra reforma. Indudablemente se han hecho investigaciones acerca de las prácticas docentes; de la aceptación o rechazo del nuevo enfoque; del uso de los libros de texto y otros materiales; de la organización escolar; de la interpretación y puesta en práctica de los enfoques didácticos; del trabajo colaborativo, etc. Pero… ¿una nueva reforma asegura que la situación educativa cambiaría de forma positiva y radical? ¿OTRA REFORMA? La experiencia mexicana en materia de reformas educativas ha mostrado que no basta con hacer cam­bios curriculares para superar los problemas educativos. Actualmente muchos de los planteamientos curricu­lares de la educación básica y normal están siendo cuestionados por los avances en la investigación educa­tiva, lo cual obliga a una revisión y adecuación constante. Aún así, el análisis de los contenidos curriculares, de la propuesta metodológica, de los libros de texto y de los materiales de actualización nos muestra sus bondades, entonces… ¿qué pasa?, ¿hay que cambiarlos? Una respuesta seria y bien fundamentada no puede darse con facilidad, conviene mejor plantear una serie de cuestiones por resolver que bien podrían ser líneas de investigación: por qué la escuela es como es; por qué los directores no son líderes académicos; por qué la gestión escolar suplanta la gestión pedagógica; por qué lo administrativo está por encima de lo educativo; por qué los maestros trabajan en solitario y las escuelas no asumen metas comunes; qué impide al Consejo Técnico convertirse en un verdadero espacio de trabajo colegiado; por qué las finalidades de la escuela no son conocidas por los padres de familia; por qué no se establecen mecanismos y formas de evaluación más amplios... y otros muchos porqués. Una reforma educativa no sólo es curricular, implica procurar que las condiciones educativas sean cada vez mejores, debe estar precedida de amplios acuerdos sociales, políticos, sindicales y académicos, establecer políticas educativas de Estado en las que se aproveche la experiencia y el potencial de los profesores. Precisamente, uno de los elementos centrales y a la vez más descuidados en la reforma del 93 hemos sido los profesores. Una capacitación de unos cuantos días al año obviamente no ha cambiado el pensamiento de los maestros, a pesar de los esfuerzos individuales. Éste se 64 ¿Una nueva reforma para la Enseñanza de las Matemáticas? manifiesta en concepciones, creencias, prácticas y formas de relacionarse con el conocimiento matemático, con los alumnos, con los colegas y con la propia práctica y es producto de una formación escolar, profesional y laboral de años. La mencionada reforma ha descansado en el hacer de los maestros, suponiendo que si hacen lo que “deben hacer” según la metodología propuesta, se lograrán los cambios. La expectativa parece ser que los docentes, a través de algunos cursos y la familiarización con los nuevos materiales, programas y libros de texto transformarán sus prácticas por el sólo hecho de utilizarlos y que a un cambio de prácticas docentes corresponderá un cambio de pensamiento. Análisis como el realizado por Ávila (2004) suponen una relación entre el cambio de prácticas y el cambio de pensamiento, abordan la manera en que los materiales portadores de la reforma y las actividades propuestas pueden llevar al maestro a romper un contrato didáctico establecido e involucrarse en otras prácticas que pudieran inducirlo a un cambio de pensamiento. Sin embargo este parece ser un proceso demasiado largo. Otra investigación (Carpenter, 2004) da cuenta del importante papel que juegan los docentes en todo intento de reforma y reconoce que para que éstos se involucren en prácticas innovadoras es necesario un largo y complejo proceso. No es suficiente que los maestros entiendan un enfoque o propuesta innovadora para que esto ocurra. De acuerdo con lo anterior, lo que se necesita no es otra reforma, sino evaluar y consolidar la actual a través de un proyecto bien estructurado, sistematizado y sostenido de actualización docente que realmente nos involucre como maestros. rarlo. Sin embargo eso no es responsabilidad exclusiva de los profesores, sino de una política educativa que contemple la mejora de sus condiciones laborales y que genere una estructura de formación, profesionalización y actualización que realmente funcione. Política que al tomar en cuenta sus conocimientos, experiencias y necesidades los haga partícipes del cambio y genere en ellos la necesidad de mejorar su quehacer. Evaluar el trabajo docente seguramente es com­ plejo, pero posible. Crear una necesidad de cambio en los profesores puede incluir mejoras salariales, so­ciales, culturales. El magisterio no es un apostolado, ni un asunto de vocación. Ser maestro es un trabajo, una profesión. Ser mejor maestro debe ser redituable económica, social y culturalmente. @ BIBLIOGRAFÍA Ávila, Alicia (2004). Entre la costumbre y las presiones de la innovación. La enseñanza de los números en primer grado. En: Educación Matemática, vol.16, núm. 2, pp. 21-48. Block, David (coord.) (1995). La enseñanza de las Matemáticas en la escuela primaria. México: Secretaría de Educación Pública. Carpenter, Thomas (director) (2004). Scaling Up Innovative Practices in Mathematics and Science. Wisconsin: NCISLA/Mathematics & Science. Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (2006). El aprendizaje del Español y las Matemáticas en la educación básica en México. México: inee. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (2006). Informe pisa 2003. Aprender para el mundo del mañana. México: Santillana. Secretaría de Educación Pública (1993). Plan y programas de estudio 1993. Educación Primaria. México: sep. Secretaría de Educación Pública (2001). Programa Nacional de Educación 2001-2006. México: sep. UN NUEVO MAESTRO Lo que hace falta a la educación de nuestro país no son tanto administradores e investigadores educativos como maestros involucrados con el cambio, comprometidos con su propia formación. Docentes más preparados que comprendan lo que realmente acontece en el aula y tengan los elementos para proponer formas de mejo- OTRAS FUENTES www.sep.gob.mx boletín 2330808 http://www.enlace.sep.gob.mx 65 De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida Silvia García* [email protected] Al comenzar a escribir estas líneas me asaltó un pensamiento que estuvo a punto de hacerme abandonar la pluma: ¿para qué escribir nada acerca de Geometría, cuando son tan pocas en nuestra República las escuelas en las que esta asignatura es enseñada? Carlos A. Carrillo R esulta sorprendente que las palabras anteriores, que bien podrían describir la situación actual, hayan sido escritas a finales del siglo xix por el pedagogo mexicano Carlos A. Carrillo. En efecto, en comparación con la Aritmética, la Geometría pocas veces es invitada a nuestras aulas escolares y cuando la invitan no la tratan muy bien. A principios y mediados del siglo pasado, la Geometría ocupó un lugar secundario con respecto a la Aritmética. En los años 1970, se presentó de una manera diferente, interesante, pero ajena a los docentes. Es en las reformas de 1993 y en la actual (2009) que la Geometría, al menos en los programas y libros de texto, ha logrado colocarse en un mejor lugar. Se invita al lector a hacer un breve viaje en el tiempo, un recorrido por las reformas educativas del siglo xx que tuvieron lugar en nuestro país. En esta travesía se espera que el maestro conozca algunas de las ideas de cada reforma con respecto a la Geometría, vistas a la luz de los programas y los libros de texto. Como es de esperarse, el destino del viaje corresponde ya al siglo xxi con la reforma que inicia este año escolar (2009-2010). Se espera que la lectura de este texto motive al maestro a voltear su mirada hacia esta rama de las Matemáticas que tanto puede ofrecer a quien la enseña y a quien la aprende. ————————————— * Maestra normalista con estudios de maestría en la upn y en el Cinvestav. Autora de libros de Matemáticas para primaria, secundaria y de materiales de apoyo para maestros. 66 De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida LOS AÑOS 1920. LA ARITMÉTICA POR UN LADO, LA GEOMETRÍA POR OTRO De todos los programas que se presentan en este texto, el de 1922 es el único en el que la Aritmética y la Geometría aparecen como dos asignaturas diferentes. Los contenidos aritméticos se tratan desde primer grado y los de Geometría inician, propiamente, desde tercer grado. En primero y segundo años se darán las nociones geométricas fundamentales que se deriven de las clases de lengua nacional y estudio de la naturaleza. El programa es un listado de contenidos que, de tercero a sexto, no ocupa más de una página. Con frecuencia se menciona que el acercamiento debe ser intuitivo y se sugiere no olvidar las aplicaciones prácticas. En esa época no existían libros de texto gratuitos, pero en los boletines de la sep se presentaba una lista de libros recomendados, entre los que figuraba el libro Las aritméticas de Thorndike. Como su nombre lo indica, esta obra trata básicamente de Aritmética, aunque entre sus páginas hay algunas dedicadas a la Geometría. La figura 1 muestra la manera en que se presenta a los niños el estudio de los cuadriláteros (data de 1926). Figura 1. Lección sobre cuadriláteros, del libro Aritméticas de Thorndike (1926) 67 Esta es una breve historia que muestra cómo, por aproximaciones sucesivas, los materiales de apoyo oficiales han tratado de poner en claro todas las posi­ bi­lidades de aplicación y formativas que ofrece la enseñanza y aprendizaje de la Geometría. Se hace un recorrido en el tiem­po por algunas de las principales ideas que, con respecto a esta rama de las Matemáticas, se han propuesto en los programas y los libros de texto de las reformas educativas de primaria de nuestro país, desde la creación de la sep hasta nuestros días. Palabras clave: Matemáticas, Geometría, reforma, programas, libros. uuuuu This is a brief story about how the official educational resources, through successive approximations, have intended to clarify all the practical and educational possibilities offered by teaching and learning of Geometry. A route is made throughout time over some of the chief ideas which, in regard to this branch of Mathematics, have been propounded in curricula and text books by primary education reforms in Mexico, from SEP’s (Public Education Ministry) creation up to present day. entre maestr@s ¿Qué se observa? Se inicia con la definición de cua­drilátero, después se pide hacer un trazo; enseguida se da la definición de paralelogramo y se ejemplifica con varios dibujos. En la última parte se da la definición de rectángulo. El autor usa la enseñanza ostensiva,1 considera que presentar la definición y una ilustración basta para compren­der, de un solo golpe y en media página, lo que son los cuadriláteros, los paralelogramos y el rectángulo. LOS AÑOS 1940. APLICACIONES PRÁCTICAS Y ÚTILES DE LA GEOMETRÍA En el programa de 1940, Aritmética y Geometría es una sola asignatura. Hay un aumento considerable de contenidos. Por ejemplo, en segundo grado se estudian los ángulos agudos, obtusos y rectos; en cuarto grado los complementarios y suplementarios y en quinto, los ángulos diedros.2 Una constante en estos programas es “la aplicación de lo aprendido”, por ejemplo: • • Figura 2. Lección sobre cuadriláteros, del libro Aritmética y nociones de Geometría, de José E. Rozán (1945) 1 Aplicación de los conocimientos anteriores en el trabajo escolar. Problemas, prácticos, gráficos y numéricos apli-­ cando los conocimientos adquiridos. Esto se reafirma en una parte del programa que recibe el nombre de “Actividades” y que para Geo­metría propone: dibujo, recorte, modelado, construcción, decorados, labores de corte y confección o el trazo de parcelas del huerto y jardín escolar. No había libro de texto gratuito pero entre los que circulaban, y que era muy similar a otros de la época, se encuentra Aritmética y nociones de Geometría de José E. Rozán. La figura 2 muestra una página del libro para quinto y sexto que muestra el inicio de la lección sobre cuadriláteros (data de 1945). La lección completa consta de cuatro páginas similares. El autor presenta diferentes cuadriláteros, sus definiciones y propiedades. Finaliza su exposición con instrucciones para trazar un Con la enseñanza ostensiva se alude a una cierta presentación de los objetos de enseñanza en la que todos los elementos y relaciones constitutivas de la noción prevista son proporcionados de un solo golpe por el profesor o el libro de texto (H. Ratsimbra-Rajohm, citado por A. Ávila, 2006). 2 Los ángulos complementarios son los que suman 90º, los suplementarios suman 180º. Los ángulos diedros son los que están formados por dos planos, por ejemplo, el ángulo que forman dos caras de un cuerpo geométrico. En la actualidad estos tipos de ángulos no forman parte de los contenidos de educación primaria. 68 De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida cuadrado, un rectángulo, un rombo y un cuadrilátero igual a otro ya dado. Después de toda la explicación propone 26 problemas para resolver. ¿Qué se observa? La enseñanza sigue siendo ostensiva, parte de definiciones y explicaciones sobre los objetos geométricos. También está presente la idea de “aprendo-aplico”: primero expone todo un discurso acerca de los diferentes cuadriláteros, sus propiedades y algunas construcciones para después enfrentar al alumno a una serie de problemas en los que aplicará lo que ya “aprendió” del texto. ción”. A manera de ejemplo se presentan los siguientes contenidos de cuarto grado: a) Uso de la regla, escuadra, compás y transportador. b) Conocimiento de ángulos rectos, obtusos, agudos, complementarios y suplementarios. Se recomienda desarrollar habilidades y promover hábitos en los alumnos, por ejemplo: Habilidad: para manejar instrumentos geométricos y para aplicar el trazo geométrico en la construcción de juguetes y objetos útiles. Hábito: de limpieza, orden y cuidado con los instrumentos geométricos y demás útiles. LOS AÑOS 1960. LA GEOMETRÍA COMO UNA COLECCIÓN DE CONCEPTOS Y TRAZOS En la reforma de los años 1960, la asignatura sigue llamándose Aritmética y Geometría y está dividida en varios apartados; el que corresponde a Geometría recibe el nombre de “Prácticas de trazo y construc- Al parecer, estas habilidades se referían a cuestiones motrices. En estos programas la Geometría era con- Figura 3. Lección sobre cuadriláteros, del libro de texto gratuito Mi libro de cuarto grado. Aritmética y Geometría (1960) 69 entre maestr@s cebida como un listado de objetos geométricos que los alumnos tenían que conocer y aprender a trazar con fines prácticos. En esta época aparece por primera vez el libro de texto gratuito. La figura 3 corresponde a dos páginas de la lección completa sobre cuadriláteros en el libro de cuarto de 1960. Es importante mencionar que en esta lección, a diferencia de las dos presentadas con anterioridad, se percibe un esfuerzo del autor por introducir de una manera “más amable” los cuadriláteros. Se presenta como una plática entre dos amigos que observan rectángulos y cuadrados en los vidrios y en los mosaicos de una construcción. La lección termina con definiciones de diferentes cuadriláteros, algunas erróneas, como la del trapezoide, y otras que en la actualidad se conciben de una manera diferente, como la del rombo.3 Podría pensarse que el tratamiento didáctico es diferente al de las lecciones de Thorndike y Rozán. Sin embargo, un análisis más cuidadoso nos lleva a observar que en realidad también es una enseñanza ostensiva disfrazada con una historia “real”. Sigue presentándose la definición y el dibujo de las figuras pensando, erróneamente, que con esto el alumno aprenderá lo que son los cuadriláteros y sus diferentes tipos. LOS AÑOS 1970. UNA IDEA CENTRAL EN LA GEOMETRÍA: LA SIMETRÍA Ninguna de las reformas educativas ha sido tan radical en cuanto a los contenidos como lo fue la de 1972. A partir de este año y hasta la fecha, la asignatura se denomina Matemáticas. En estos programas se introducen nociones sobre lógica matemática, probabilidad y estadística. La estructura de estos programas es sustancialmente diferente a la de los anteriores. Se enuncian objetivos generales (por grado), particulares (por unidad), específicos (por clase) y actividades. Con respecto a la Geometría hay un incipiente tratamiento de la ubicación espacial, se trabaja con las ideas de izquierda-derecha, arriba-abajo, atrás-adelante y aparece, por primera vez, el plano cartesiano. Pero el cambio más fuerte fue el tratamiento que se le da a los objetos geométricos. La idea central que se trabaja es la simetría y, a partir de ella, se construyen otras nociones geométricas. Por ejemplo: Definición tradicional Definición basada en simetría (así aparece en los libros de texto de esa reforma) Rectas perpen­diculares Rectas que forman ángulos de 90°. Dos rectas, cada una simétrica res­­pecto a la otra, se llaman per­ pendiculares. Polígonos regulares Polígonos que tienen lados iguales y ángulos iguales. Polígonos que tienen el mismo número de lados y de ejes de simetrías. 3 Hay cuadriláteros que no tienen lados paralelos y no son trapezoides, por ejemplo, el que coloquialmente se denomina “flecha”. Con respecto al rombo, en la actualidad se concibe como un para­lelogramo con lados iguales sin que sus ángulos sean, necesariamente, agudos y obtusos. 70 De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida LOS AÑOS 1990. NUEVOS ACERCAMIENTOS: UBICACIÓN ESPACIAL Y CLASIFICACIÓN DE FIGURAS En la reforma de 1993, la enseñanza de las Matemáticas gira en torno a la resolución de problemas. El programa está estructurado por ejes, uno de los cuales se llama Geometría e incluye tres apartados: ubicación espacial, figuras geométricas y cuerpos geométricos. Aunque en programas anteriores la ubicación espacial ya aparecía brevemente, es en la reforma de los años 1990 cuando se le da mayor peso y profundidad. El estudio de la Geometría ya no consiste sólo en el trabajo con las figuras geométricas de dos y tres dimensiones, ahora hay un tratamiento específico de la ubicación y orientación espacial de los alumnos como contenido a trabajar en el aula escolar. La figura 4 corresponde al libro de texto de cuarto grado de 1974. Hay un gran avance en cuanto a que se abandona la enseñanza ostensiva y la pasividad del alumno frente a la lección. No se da una explicación del tema, se trata ahora de interactuar con el libro de texto. El alumno tiene que trazar los ejes de simetría y escribir el número de ejes de cada cuadrilátero. Después viene una serie de preguntas sobre la simetría de cada cuadrilátero. Para el trapecio isósceles no se trabaja la definición basada en el paralelismo, en esta lección la definición implícita es: cuadrilátero que tiene sólo un eje de simetría que no pasa por ninguno de sus vértices. Es importante observar que hay un cambio en cuanto a contenido y presentación del mismo con respecto a la manera en que se trabajaban los cuadriláteros en programas y libros anteriores. Figura 4. Lección sobre cuadriláteros, del libro de texto gratuito Matemáticas. Cuarto grado (1974) 71 entre maestr@s La clasificación de figuras de dos y tres dimensiones tiene un lugar muy importante en este programa. Esto no significa que antes no se haya trabajado, pero hay una diferencia. En los programas anteriores, al enunciar clasificación de triángulos se hacía mención a una clasificación ya dada y que el alumno tenía que aprender, por ejemplo, de acuerdo con la medida de sus lados: equiláteros, isósceles y escalenos. La clasificación de figuras era vista como un contenido de estudio. En estos programas la clasificación es vista como un proceso que el alumno tiene que realizar y que implica identificar y abstraer cierta propiedad de un conjunto de figuras. Clasificar es un nivel de pensamiento geométrico más avanzado que identificar la figura, sus propiedades y características. Los criterios de clasificación, en estos programas, no son estáticos, pues varían y avanzan conforme el alumno pasa de un grado a otro: figuras con lados rectos o curvos, número e igualdad de lados, paralelismo, perpendicularidad, simetría, características de las diagonales, etcétera. La figura 5 muestra una de las lecciones acerca de la clasificación de cuadriláteros, es del libro de sexto grado y el criterio de clasificación está dado por las características de las diagonales. Al igual que en la lección de los años 1970, se ha abandonado la enseñanza ostensiva para dar lugar a una lección en la que el alumno juega un papel activo. Si se analiza el tipo de preguntas, se advierte que tienen un mayor nivel cognitivo que la lección de los años 1970. Nótese, por ejemplo, que las tablas de clasificación presentadas son de doble entrada, lo que involucra relacionar dos características a la vez. Una constante en los libros de texto gratuito de los años 1990 es la invitación continua que se hace al alumno a que argumente o explique sus respuestas y las compare y comparta con otros compañeros. En resumen, son lecciones para pensar y reflexionar, en las que los alumnos construyen el contenido matemático en juego y la interacción con otros compañeros desempeña un papel muy importante. Figura 5. Lección sobre cuadriláteros, del libro de texto gratuito Matemáticas. Sexto grado (2001) 72 De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida En la década de los años 1990 hay diferencias cualitativas en cuanto a lo que se entiende por apren­ der Geometría. Es importante aprender los contenidos geométricos porque tienen aplicaciones reales, pero también es importante porque aprender Geometría desarrolla muchas habilidades en los alumnos: imaginar, comunicar, generalizar, estimar, etcétera. En esta reforma son importantes no sólo los contenidos sino también las habilidades que, a diferencia de los programas de los años 1960, van más allá que desarrollar la motricidad para usar el juego de geometría. Después se enuncian los Conocimientos y habilidades que se espera que los alumnos construyan y desarrollen y, para cada uno, se dan Orientaciones didácticas. La figura 6 muestra una de las páginas del programa. La parte de orientaciones didácticas delimita los alcances de lo que se trabaja y ofrece sugerencias de tipo didáctico para el trabajo de los conocimientos en juego. Se espera que los alumnos desarrollen competencias matemáticas: resolver problemas de manera autónoma, comunicar información matemática, validar procedimientos y resultados y manejar técnicas eficientemente. Sin lugar a dudas, este nuevo programa ofrece muchos más elementos y herramientas para los maestros que cualquiera de los anteriores. SIGLO XXI. EL ESTUDIO DE LA FORMA, EL ESPACIO Y LA MEDIDA Este año inicia una reforma que se aplicará de manera escalonada. Para el ciclo escolar 2009-2010 los maestros de primero y sexto grado trabajarán con un nuevo programa en el que los contenidos relacionados con Geometría aparecen, principalmente, en el eje denominado Forma, espacio y medida.4 Cada eje está divido en temas y subtemas: Eje Temas Ubicación espacial Subtemas Representación Sistemas de referencia Líneas (o rectas) y ángulos Forma, espacio y medida Figuras Figuras planas Cuerpos Conceptualización (o nociones) Medida Unidades Figura 6. Página del Plan y Programa de estudio Matemáticas (2009) Estimación y cálculo El enfoque para la Enseñanza de las Matemáticas es el mismo que se propone en la reforma de 1993: la resolución de problemas como propósito y medio de aprender las Matemáticas. La figura 7 muestra una ac­tividad sobre cuadriláteros, es del cuaderno de tra­ ba­jo de sexto grado. 4 El programa de secundaria de 2006 enuncia que la forma, el espacio y la medida son los tres aspectos esenciales alrededor de los cuales gira el estudio de la Geometría y la medición en la educación básica. 73 entre maestr@s Figura 7. Actividad sobre cuadriláteros del cuaderno de trabajo Matemáticas 6 (2009) Figura 8. Fragmento del material de apoyo para el maestro Secuencias didácticas (2009) 74 De la Geometría al estudio de la forma, el espacio y la medida BIBLIOGRAFÍA La figura 8 muestra los 16 cuadriláteros que pue­ den trazarse, esta imagen corresponde al material de apoyo para el docente. En las sugerencias que se dan al maestro para trabajar esta actividad, aparece la idea de que los alumnos compartan y comparen sus hallazgos con otros compañeros y mencionen lo que saben de cada una de las figuras encontradas. También se indica que el maestro (o un compañero) identifique varios de esos cuadriláteros y que los alumnos mencionen qué tienen en común, o bien, que se mencione una característica y que los alumnos encuentren todos los cuadriláteros que tienen dicha característica. Se podrá observar que esta actividad invita al alumno a explorar y construir cuadriláteros para después analizarlos y clasificarlos. Es muy abierta porque la clasificación de cuadriláteros podrá tomar diferentes rumbos, dependiendo de la propiedad o característica que el maestro y los alumnos propongan. Es una actividad que ofrece una gran riqueza y variedad desde el punto de vista didáctico y de contenido. Ávila, Alicia (1988). La enseñanza oficial de las matemáticas elementales en México; su psicopedagogía y transformación. México: Universidad Pedagógica Nacional. Ávila, Alicia, et al. (2006). Transformaciones y costumbres en la matemática escolar. México: Paidós. Ávila, Alicia, y García, Silvia (s/f ). Paradigmas de las matemáticas elementales en México. El siglo xx. Reporte de investigación no publicado. México: Universidad Pedagógica Nacional. Carrillo, Carlos (1964). Artículos Pedagógicos. México: sep. Balbuena, Hugo, et al. (2001). Matemáticas. Sexto grado. México: sep. Balbuena, Hugo (coord.) (2009). Matemáticas 6. Cuaderno de trabajo para el alumno. Sexto grado. México: sep. Balbuena, Hugo (coord.) (2009). Matemáticas 6. Secuencias didácticas. Sexto grado. México: sep. Filloy, Eugenio, et al. (1977). Matemáticas. Cuarto grado. México: sep. Rozán, José (1945). Aritmética y nociones de geometría. Tercer libro. México: Editorial Progreso. Matemáticas. Educación básica. Secundaria. Programas de estudio 2006 (2006). México: sep. Programas de estudio (2009). Sexto grado. Educación Básica. Primaria. Segunda edición. México: sep. Thorndike, Eduardo (1926). Las aritméticas de Thorndike. Libro segundo. Nueva York: Rand McNally y Compañía. Virgen, Hermelinda (1960). Mi libro de cuarto año. Aritmética y Geometría. México: sep. Y PARA TERMINAR… Se espera que para el lector haya resultado evidente la gran diferencia que hay, por un lado, entre la enseñanza ostensiva de la Geometría en la que el alumno juega un papel pasivo y, por otro, un acercamiento en el que él es protagonista de su propio aprendizaje y participa de una manera activa en el mismo. Se invita al maestro a conocer y analizar los nuevos programas y, con una actitud crítica, se acerque a los nuevos materiales y trate de comprender la propuesta sobre la Enseñanza de la Geometría. El beneficio será para el alumno y también para quien decida explorar formas más significativas de enseñar la matemática del espacio. @ 75 La resolución de problemas matemáticos Víctor Manuel García Montes* [email protected] C uando los alumnos ingresan a preescolar, gustan de las Matemáticas como de cualquier otra área, se les permite manipular objetos y resuelven problemas acordes con su edad y con estrategias propias, pero conforme avanzan en su educación esto cambia drásticamente y, al final, llegan a tener una actitud negativa hacia esta materia. El manejo de problemas en el enfoque de la Enseñanza de las Matemáticas es la columna vertebral, si hay una buena planeación al respecto seguramente la actitud de los alumnos será positiva. El siguiente artículo pretende brindar algunas ideas sobre el manejo de problemas, pero es fundamental que se permita al alumno utilizar procedimientos propios, plantear preguntas, trabajar en equipo, formular y validar conjeturas, para propiciar un ambiente agradable y de libertad en la clase y brindar las condiciones para que se desarrolle una actividad autónoma y flexible. EL CONSTRUCTIVISMO Según las tesis constructivistas, el alumno llega a la escuela con una serie de conocimientos previos que son producto tanto de sus años escolares anteriores como de su experiencia en el contexto sociocultural en el que se ha desarrollado. El alumno tiende a usar estos conocimientos en situaciones nuevas, semejantes a aquellas que los produjeron; si los conocimientos previos no son suficientes o adecuados para resolver la nueva situación, el estudiante trata de modificarlos y adaptarlos poniéndose a sí mismo en una situación de aprendizaje. ————————————— * Profesor jubilado de escuela primaria y secundaria especialista en Matemáticas. Labora en la Dirección de Materiales de la Secretaría de Educación Pública. 76 La resolución de problemas matemáticos La investigación educativa actual ha mostrado que las llamadas situaciones problemáticas o situaciones problema, constituidas por problemas no rutinarios, que son capaces de movilizar los conocimientos previos del estudiante y que resultan tan atractivos que éste los considera un reto intelectual, son situaciones privilegiadas para el aprendizaje de las Matemáticas. A partir de ellas, el individuo pone a prueba sus saberes previos, establece sus límites y alcances y elabora modificaciones encami­nadas hacia el saber científico establecido. El aprendizaje de las Matemáticas no debe reducirse a la memorización de fórmulas o teoremas o a la práctica rutinaria de procedimientos aritméticos y algebraicos. Desde un punto de vista tradicional, los problemas son empleados para “aplicar” los conocimientos adquiridos en clase con anterioridad, se trata de problemas rutinarios cuya solución requiere del concepto o de la operación estudiada inmediatamente antes, de tal forma que el alumno no tiene que tomar decisiones sobre la pertinencia del concepto o de la operación requerida para la solución. El principio teórico que subyace a esta perspectiva es que, en primer lugar, se aprende el con­cep­ to o la ope­ración (escuchando al maestro, memorizando la de­finición o el algoritmo y viendo como el profesor resuelve un problema al respecto en el pizarrón) y después se aplica este conocimiento para adquirir cierta habilidad en su uso. Desde el punto de vista constructivista, los problemas son el medio para adquirir los conceptos; a partir de la resolución de éstos, el alumno modifica sus procedimien­ tos y nociones previas, dándoles más generalidad o encon­ trando sus límites de validez. Por esto, los problemas que se manejen en el aula deben tener las siguientes características: 1. Deben presentar un verdadero reto para los alumnos, tienen que provocar una actitud de búsqueda, no tan fáciles que dejen de ser problema ni tan difíciles que sean abandonados sin ser solucionados, la respuesta debe estar a su alcance. 77 El presente artículo tiene varios aparta­ dos, en el primero se ofrece una semblanza sobre el constructivismo; en el segundo, se trata el papel de los errores en la enseñanza; en el tercero, se dan algunas ideas para la planeación y, fi­ nal­mente, en el cuarto se habla sobre el problema de los problemas en el aula. Permita a sus alumnos investigar, resolver, preguntar, defender, discutir, llegar a acuerdos y tendrá gratas sorpresas. Palabras clave: Constructivismo, situaciones problemáticas, errores, enseñanza, planeación. uuuuu This paper has many sections. In the first one a historical sketch is made on constructivism. The second discusses the role of errors in teaching. In third some ideas are given for planning. Finally, the fourth is about problems posed by problem solving in the classroom. Let your students research, solve, inquire, argue, discuss, come to agreement, and you will be gladly surprised. entre maestr@s Una vez que el equipo ha llegado a un posible resultado, el profesor organiza una confrontación colectiva en la que cada equipo argumenta su estrategia de solución 2. Deben permitir a los alumnos uti­lizar conocimientos anteriores, que les ayuden a explorar las relaciones entre nociones conocidas y posibilite avanzar hacia la comprensión y asimilación de nuevos conocimientos. 3. Deben contener su propia vali­ da­ción, es decir, el alumno debe po­der por sí mismo o confron­ tan­do con otros alumnos contro­ lar la so­lución y decidir si su respuesta es válida y desechar los procedimientos y soluciones incorrectos. 4. Deben ser variados en su presentación. Quizá, para el profesor, la parte más im­portante de este enfoque consiste en seleccionar y diseñar cuidadosamente la situación problema. Una vez elegida ésta, el profesor no debe dar explicaciones adicionales que limiten los razonamientos espontáneos de los alumnos, ya que se espera que pongan en juego sus conocimientos previos. El trabajo en equipo es la dinámica privilegiada para estos casos (entendiendo que un equipo no sólo se conforma por la cercanía, sino más bien por la colaboración entre los integrantes, ya que pueden estar juntos, pero tra­bajando individualmente), los alumnos comentan y discuten entre sí el enunciado del problema y las posibles soluciones (no necesariamente convencionales o correctas), hacen hipótesis y estimaciones sobre el resultado. Una vez que el equipo ha llegado a una posible respuesta, el profesor organiza una confrontación colectiva en la que cada equipo argumenta su estrategia de solución y el resultado obtenido, cada equipo escucha los argumentos de los demás equipos y participa apoyando o cuestionando el procedimiento, finalmente el grupo establece las conclusiones del trabajo de los equipos y las estrategias y soluciones correctas, así como los errores superados. Claramente, las características de un salón de clases en el que se usa la estrategia de resolución de problemas no serán las de un aula tradicional en la que los alumnos permanecen callados y en su lugar todo el tiempo. EL PAPEL DE LOS ERRORES Cuando el alumno trata de aplicar sus conocimientos previos a nuevas situaciones, afirmándolos, generalizándolos o modificándolos cuando sea necesario, puede seguir por caminos incorrectos, con lo que llega fácilmente a equivocarse, lo que da por resultado el error. Estos errores servirán para que el alumno verifique sus conocimientos, los rectifique o modifique y elabore nue­vos conceptos; no deben ser considerados fracasos sino oportunidades de aprendizaje. 78 La resolución de problemas matemáticos Difícilmente se podrá exagerar el papel del error en el aprendizaje; si un conocimiento produjera siempre resultados exitosos y si fuera útil para aplicarlo en cualquier situación, no habría necesidad de modificarlo, pero ese tipo de conocimientos no existe. En la historia de la ciencia como en la individual, los conceptos han cambiado, evolucionado, se han relacionado con otros conceptos, lo que da lugar a nuevas interpretaciones, a nuevas explicaciones y a nuevas aplicaciones. Es el momento de confrontarse a situaciones que no se pueden explicar y que, por lo tanto, aparecen como un error, así, un concepto debe sufrir una reestructuración que lo lleve a un nivel superior de conocimiento que resuelva dichas situaciones. No todos los errores de los alumnos son importantes como fuente de aprendizaje, algunos se deben simplemente a un descuido al momento de operar o escribir. Estos errores se corrigen oportunamente, pero no deben ser motivo de confrontación de los equipos. Quitarle al error la connotación negativa (de fraca­so) es una tarea ardua pero necesaria. El alumno no de­be decepcionarse al cometer errores, por el contrario, debe sentirse estimulado para continuar su búsqueda y alcanzar resultados que le convenzan y sean consistentes con el conocimiento establecido. El maestro debe sentirse comprometido con esta tarea.* ————————————— * Es recomendable leer el libro: El error, un medio para enseñar de Jean Pierre Astolfi, perteneciente a la Biblioteca para la Actualización del Maestro. 79 La planeación Para seleccionar un problema y plantearlo en clase, es necesario que el profesor tenga claro el propósito que persigue; que lo resuelva antes de plantearlo a los estudiantes; que haga las adecuaciones que considere convenientes; que prevea el material que se va a utilizar y la forma en la que va a organizar al grupo. No es conveniente que el maestro se enfrente al grupo sin tener un plan de clase, siempre es necesario contar con un plan, aun para docentes con mucha experiencia. Es importante que el profesor considere si las siguientes preguntas le pudieran ayudar en su planeación: • ¿Cuál es el objetivo de la clase? • ¿Qué puedo hacer para propiciar una actividad genuinamente cognitiva a partir de una situación? • ¿Cómo debe estar organizada la clase para ello? • ¿Qué tipo de desviaciones pueden preverse? • ¿Cómo se podrían evitar o aprovechar? • ¿Cuál es la importancia de la exploración que se propone al inicio de la clase? • ¿Qué posibles errores pueden inducir? • ¿Cuál será mi función en esta ac­tividad? • ¿Qué otros comentarios puedo introducir para complementar la discusión de los alumnos? • ¿Hasta qué punto debo insistir en la formalización? entre maestr@s 3. Si se proporcionan datos de más, o se les dejan de dar algunos, a los alumnos, tendrán que analizar si es posible o no resolver el problema y en su caso discriminaran o completaran lo que necesiten. En la escuela secundaria Acamapichtli hay nueve grupos, en los tres de primero hay 50 mujeres más que hombres y en total son 136 alumnos; en los tres de segundo hay solamente un hombre más que el nú­mero de mujeres y en total hay 123 alumnos, y en tercero el resto del alumnado, para completar el total en la escuela que son 364 alumnos. El director trató de repartir el mismo número de alumnos de cada grado en cada salón, ¿lo logró en todos los casos? Explica brevemente. Si comparamos primer grado con segundo grado, ¿en dónde hay más hombres? ¿En toda la escuela hay más alumnas o alumnos? 4. Deje el problema sin pregunta para responder, para que el alumno la invente y lo resuelva. Mi hermano y yo fuimos al zoológico, yo llevaba $20 y mi hermano el doble, compramos un helado cada uno de $5 y pagamos en transporte ida y vuelta $12 cada uno. 5. Siga la estrategia de plantear problemas a los niños y no pedirles la solución, sino que planteen lo que deba hacerse para encontrarla. Esto favorece el análisis y la reflexión a la vez que aprenden a diseñar algoritmos. 6. A partir de eventos relevantes que sucedan en la escuela o en la comunidad, plantee problemas o investigaciones. 7. Plantee problemas con varias respuestas correctas. Pati vive a un kilometro de la escuela y Víctor a dos kilómetros de la escuela, ¿a cuántos kilómetros vive Pati de Víctor? 8. Aprovechar las oportunidades que brindan el aprender algunos juegos, pero hay que estar atentos porque si bien son situaciones divertidas e interesantes para los alumnos, no todos los juegos favorecen la construcción de conocimientos. • ¿Qué otras actividades puedo sugerir? • ¿Qué tan importante es presentar diversos contextos en los que se usen los conceptos involu­ crados? • ¿Cómo voy a evaluar el trabajo de los alumnos? • ¿Cómo puedo evaluar mi forma de enseñar? El problema de los problemas en el aula Las siguientes son solamente algunas recomendaciones generales e ideas que le pueden ayudar al docente a variar la presentación de problemas en el grupo, es necesario tomar en cuenta que al variar el tipo de problema al que los alumnos están acostumbrados puede variar también el grado de dificultad: 1. Mostrar ilustraciones o videos a partir de los cuales se formulen pre­­guntas o inclusive se inventen y solucionen problemas. 2. Se puede cambiar el sentido del problema al permitir que el alumno lo invente a partir de una operación, esto le ayudara a relacionar el tipo de problemas que se resuelven con ese tipo de operación u operaciones. Invente un problema que se re­ suelva con la operación 12 x 5 = 60. Por supuesto, la operación u operaciones que se usen dependerán del nivel del alumno y el grado de dificultad que se desee. 80 La resolución de problemas matemáticos 9. Use la calculadora para comprobar o agilizar los cálculos numéricos, también para plantear algunos juegos o problemas. En una calculadora no científica haga que los alumnos resuelvan una adición con sumandos de nueve o 10 dígitos, la consigna es que usen la calcu­ ladora, no se vale usar papel y lápiz (en estas calcula­ doras, generalmente sólo caben en pantalla ocho dígitos). 10.Use figuras geométricas para que, por equipos, los alumnos elaboren mensajes en los que las describan de tal forma que esos mensajes se intercambien para ser interpretados y reproducidos por otros equipos. Nuestra figura es un triangulo escaleno que tiene un ángulo recto y las medidas de sus lados son: 3 cm, 4 cm y 5 cm. 11.Permita que los alumnos hagan estimaciones de los resultados y en grupo analicen la lógica de las posibles respuestas. Algunos alumnos no se dan cuenta de respuestas que son obviamente ilógicas. 12.Trate de relacionar otras materias con las Matemáticas. El cuerpo de un hombre adulto que pese 70 kg, en condiciones normales, está compuesto aproximadamente por 64% de agua, 20% de proteínas, 10% de grasas, 5% de sales minerales y 1% de hidratos de carbono. ¿Cuántos kilogramos tiene de agua, proteínas, grasas, sales minerales e hidratos de carbono? 13.Si tiene aula de medios utilícela, esto motiva mu­­cho a los alumnos, pero tenga cuidado para que la sesión sea educativa, además de recreativa, algunos alumnos aprovechan la oportunidad sólo para jugar. Finalmente, conviene recordar que cada niño es diferente a los demás, de manera que el profesor contará con las distintas capacidades, motivaciones, ritmos de aprendizaje, etc., de los alumnos. Por lo tanto, en función de las carac81 terísticas del alumnado en esta etapa y de lo que la sociedad demanda de él, habrá que diseñar el proceso de enseñanza y aprendizaje. Recuerde que si usted explica un solo camino para resolver un problema y algunos alumnos no en­tienden, aunque lo vuelva explicar, seguirán sin entender, como decía Bachelard […] los profesores, sobre todo los de ciencias, no comprenden que los alumnos no comprenden. Se imaginan que la mente sigue los mismos pasos que una lección; que los alumnos pueden hacerse con una cierta “cultura” si los profesores les imparten la misma clase una y otra vez; o, que pueden llegar a entender una demostración si se les repite paso a paso (Bachelard, 1985). @ BIBLIOGRAFÍA Tahan, Malba (s/f ). El hombre que calculaba. México: Noriega Editores. La matemática expulsada de la escuela. En: Revista Educación Matemática, vol. 5, núm. 3. Problemas, maestros y solución de problemas. En: Revista Educación Matemática, vol. 5, núm. 3. Astolfi, Jean Pierre (s/f ). El “error”, un medio para enseñar (Biblioteca para la actualización del maestro). Clark, David (s/f ). Evaluación constructiva en Matemáticas. México: Editorial Ibe­ ro­amé­rica. Fracciones, ¿comparar o fracturar? Araceli Fuentes Figueroa* [email protected] INTRODUCCIÓN E l mundo de las Matemáticas es realmente tan extenso como el propio desarrollo de la humanidad. En este mundo de herramientas matemáticas creadas por el hombre para tratar de explicarse su realidad, se hace uso de diferentes campos de números que van desde los números naturales hasta los números complejos, todos ellos con sus propias características, reglas, propiedades y usos. Las fracciones conforman un campo numérico conocido como los números racionales que incluso se define como el conjunto de números cuya representación es a en donde a b es cual­quier número entero y b es un entero diferente de cero. Ya desde la Antigüedad, los egipcios usaban las fracciones unitarias, como se documenta en el Papiro de Rhind, descubierto en el año de 1858, que ahora se sabe fue escrito por un maestro de nombre Ahmes en el año 1650 aC, quien planteaba a sus estudiantes problemas como: una cantidad y una cuarta parte de ella, juntas son 15, ¿cuánto es?, el cual es una muestra del uso de las fracciones desde tiempos remotos. Este artículo proporcionará algunos fundamentos teóricos para la enseñanza de las fracciones en el aula, procurando aportar elementos para que el lector pueda construir o completar su concepto de fracciones. Al tomar en cuenta la Reforma Curricular que desde este ciclo escolar 2009-2010 entrará en vigor para primero y sexto grados de primaria, los fundamentos teóricos constructivistas siguen siendo la base para la enseñanza de las Matemáticas del nivel básico en nuestro país. ————————————— * Docente de la upn 17-A Morelos y asesora de Matemáticas en el Centro de Maestros 5 en Jonacatepec, Morelos. 82 Fracciones, ¿comparar o fracturar? CONTEXTO ESCOLAR En la escuela básica primaria, en el área de Matemáticas se enseñan números naturales, sus propiedades y sus operaciones, fracciones en contextos y, de acuerdo con los planes vigentes (sep, 1993), se trabajan también la suma y resta de fracciones, así como su relación con los números decimales. Las fracciones se enseñan a los estudiantes incluidas en un contexto que presenta una situación problemática para la cual se necesita encontrar solución a través de estos números, pero realmente, ¿qué son las fracciones? De acuerdo con algunos investigadores reconocidos en el campo de las Matemáticas no existe una definición acabada del concepto de fracción, sino que ésta, como otros tantos conceptos matemáticos, se va construyendo durante nuestra vida escolar. En nuestro sistema de educación primaria, al niño se le enseñan estos números contextualizados en problemas, estrategia que se aplica sin tomar en cuen­ta otros recursos o herramientas matemáticas que definitivamente serían de gran ayuda en los procesos mentales de los estudiantes, en especial herramientas tan sencillas como un acercamiento a la necesidad de utilizar fracciones en nuestra vida cotidiana y lograr un aprendizaje significativo. Al respecto, en este artículo se dará al profesor fren­­­te a grupo una serie de sugerencias a considerar en la en­ señanza de estos números. Entonces corresponde a cada uno de los profesores diseñar o adecuar actividades didácticas al nivel de sus estudiantes, que tomen en cuenta los aspectos teóricos aquí mencionados para lograr un verdadero impacto en la enseñanza de las fracciones. En primer lugar, es importante considerar que exis­ ten dos modelos para representar a las fracciones: el modelo continuo y el modelo discreto. El primero de estos modelos es el que comúnmente utiliza el profesor en el aula y que se refiere al uso de figuras geométricas como círculos, cuadrados, rectángulos, triángulos, hexágonos, etc., o de objetos como listones, tela, cartulinas…, cuya principal característica es que se pueden equidividir en partes iguales en áreas. 83 Este es un artículo que recopila la experiencia en el ámbito matemático de profesores frente a grupo, a quienes aún les resulta difícil entender el mundo de las fracciones, sus mecanismos constructivos, sus interpretaciones, sus algoritmos y su uso en la vida diaria. En él se cita el trabajo de especialistas como Kieren, Freud­enthal y Simón Mochón. Palabras clave: fracciones, fractura, com­ paración, interpretación, vida diaria, enten­ dimiento, ámbito matemático, mun­do. u u u u u This paper compiles experiences in the mathematical ambit with classrooms teachers, whom still have difficulty to understand the world of fractions, their constructive mechanisms, their interpretations, algorisms and their uses in daily life. Some quotes are made from the work of specialists like Kieren, Freudenthal and Simon Mochon. entre maestr@s MECANISMOS CONSTRUCTIVOS DE LA FRACCIÓN De acuerdo con Kieren (1983), son tres los mecanismos constructivos, que no son otra cosa más que herramientas mentales para la construcción del concepto de fracción y éstos son la equivalencia, la partición y las unidades divisibles. A continuación, se describen cada unos de estos mecanismos. En primer lugar, hablaremos de la equivalencia, que es la habilidad de comprender aquellos crite­ rios que una “igualdad” entre fracciones implica. Es decir, cuando tenemos un todo (ya sea en mode­lo continuo o discreto) y buscamos una fracción equi­valente a una fracción dada, numéricamente multiplicamos el numerador por un número y el denominador también lo multiplicamos por el mismo número; en otras palabras, multiplicamos la fracción original por una unidad, representada en medios, tercios, cuartos, etc. Por ejemplo, para encontrar una fracción equivalente a un cuarto, se multiplica ésta por cuatro cuartos y entonces 1 ⁄4 x 4⁄4 = 4⁄16 Un ejemplo concreto de modelo continuo es un rectángulo dividido en cuartos. En primer lugar lo equidividimos en cuatro partes iguales y luego consideramos sólo una de estas partes, la cual representa un cuarto (1⁄4) del rectángulo. El segundo modelo está relacionado con conjuntos de objetos iguales, de los cuales se obtiene una parte del total. El modelo discreto se refiere al conjunto de ob­ jetos que conforman un todo, del que consideramos sólo una parte para representar una fracción. Por ejemplo, conjuntos de pelotas, de canicas, de envases, de estudiantes, de salones, de zapatos, de platos, etcétera. De manera concreta si se tienen nueve canicas y se pide un tercio del total: tres de ellas representan un tercio (1⁄3), como se ilustra en la siguiente imagen: se genera una fracción equivalente a la primera que es cuatro dieciseisavos. Pero, geométricamente, ¿qué representa? Representa la misma unidad dividida de otra manera, si la primera unidad se dividía en cuartos y de éstos se tomaba uno, la misma unidad dividida en dieciseisavos toma cuatro de las partes divididas para que ambas fracciones sean equivalentes: Inclusive hay situaciones que involucran ambos tipos de modelos. Al respecto no hay que olvidar que cualquiera que sea el modelo utilizado, la unidad deberá ser la misma para una situación, no podemos cambiarla porque la fracción por sí sola no tiene un valor intrínseco, sino que depende de una unidad como referente para adquirir su valor. Si digo que 1⁄4 es más grande que un ½, tengo que mostrar a qué unidad me refiero, si estoy hablando de un cuarto de queso y un medio del mismo queso por supuesto que estoy en un error; sin embargo, si me refiero a un cuarto de la pieza de queso canasto (que pesa 2 1⁄2 kg, aproximadamente) y un medio de queso ranchero (que pesa 200 g), mi afirmación inicial es verdadera porque estoy hablando de las fracciones de unidades diferentes. 1 ⁄4 4 ⁄16 El segundo mecanismo constructivo es la partición y se define como la habilidad para dividir en partes iguales a un todo. Por ejemplo, en el modelo continuo, si queremos dividir la siguiente figura en cuartos: 84 Fracciones, ¿comparar o fracturar? DIFERENTES INTERPRETACIONES DE LA FRACCIÓN Las fracciones tienen sus particularidades como los mecanismos mencionados en el apartado anterior, pero no es todo lo que un profesor tiene que saber respecto de estos números. En un inicio se planteaba que la fracción es un fracturador cuando parte y reparte o es un comparador cuando compara y mide. Ejemplo de la primera acepción es repartir en forma equitativa seis panes llamados “conchas” entre cuatro niños. Ejemplo de la segunda acepción es que parte de un triángulo equilátero representa el triángulo pequeño, y parte del triángulo equilátero representa el trapecio: Un recurso es cuadricular los espacios para que queden 12 cuadritos y partir, al hacerlo la partición genera fracciones iguales en forma y área o simplemente iguales en área, considerando tres cuadrados para cada cuarto: Es decir, se obtiene una “equidivisión”.1 El tercer mecanismo llamado de unidades divi­ sibles tiene que ver con la habilidad de equidividir una unidad en partes y considerar una de estas nuevas partes como la nueva unidad que se va a fraccionar. Unidad original Estas dos grandes acepciones tienen a su vez diferentes interpretaciones relacionadas con la parte-todo, la medida, el cociente, la razón y el operador. Es decir, en cada una de estas interpretaciones de la fracción se fundamenta el uso y la razón de ser de una fracción. Autores como Freudenthal y Kieren (1988) nos muestran este esquema con los referentes e interpretaciones de la fracción. Nueva unidad Sin duda alguna, a medida que estos mecanismos, habilidades intelectuales, se vayan ejercitando el estudiante mejorará la capacidad para representar fracciones sin importar el modelo en que se trabaje y, además, irá construyendo su concepto de fracción. 1 Así se le llama al proceso de dividir un todo en varias partes cuyas áreas son iguales. 85 entre maestr@s Observen que el diagrama está cargado a la derecha, lo que indica que la fracción aparece más frecuentemente como un comparador. Pero ¿de qué se trata cada subconstructo o interpretación? A continuación se explican. Cabe aclarar que se usan ambos modelos: continuo y discreto de las fracciones. FRACCIÓN FRACTURADOR COMPARADOR Parte-Todo Parte-todo Esta es quizá la interpretación más común que aparece en nuestros libros y se refiere a que un todo se equidivide en partes iguales. Es importante recordar que al comparar dos fracciones hay que tener como referencia una unidad fija. La reversibilidad de pensamiento está presente y a partir de una de las partes se puede reconstruir el total. Ejemplo: “este sector circular representa una sexta parte de un todo continuo, ¿puedes dibujar la unidad completa, de la cual forma parte este sector?”. Medida Cociente Razón-Operador Número racional (Recta numérica) En este esquema observamos que hay diferentes líneas de unión, al respecto podemos mencionar que las rectas continuas designan la categoría que le corresponde a cada uno de los subconstructos2 de acuerdo con la clasificación como fracturador, comparador o ambas; la línea más gruesa sugiere una vinculación más fuerte, mientras que una sola línea continua sugiere una vinculación más débil. Las rectas discontinuas señalan la dependencia de unos subconstuctos con respecto a otros. De manera que el subconstructo de medida se apoya en las ideas de parte-todo. El subconstructo cociente necesita de los conceptos básicos de parte-todo y medida para su desarrollo. Los subconstructos de operador y razón son más complejos, utilizan las nociones de las interpretaciones de medida y cociente. Por último, el nivel más abstracto, la fracción como número racional y la recta numérica (una de sus representaciones) se basa en todas las concepciones de la fracción. 2 Medida Es otra de las interpretaciones de la fracción y se re­fiere a comparar una unidad de medida con respecto a otra unidad. Por ejemplo, si comparamos el tamaño de dos lápices usados y los numeramos, nos preguntamos, ¿qué parte es del lápiz uno, el lápiz dos?, o viceversa. En esta comparación seleccionamos una medida estándar como el metro o una medida arbitraria como la longitud de uno de los dedos de la mano o un pequeño trozo de papel, etc. Por ejemplo, se quiere medir un listón con otro listón más grande que es la unidad de medida, ¿cómo le harías para medirlo?, ¿en cuántos pasos lo realizarías? Así le llama Kieren a las cinco interpretaciones de la fracción. 86 Fracciones, ¿comparar o fracturar? O bien, la escala 2:1 aumenta al doble el dibujo original, cada dos unidades en el dibujo reproducido representa una unidad del dibujo original (en el caso que la figura A sea el original y B sea la repro­ ducción). Unidad de medida Listón que se medirá Cociente Esta interpretación se establece cuando representamos una fracción que tiene un número como numerador y otro número como denominador, este último señala en cuántas partes se divide la unidad, mientras que el primero señala cuántas de estas partes divididas se toman. Es similar a la parte-todo y también se considera en situaciones cuando el numerador puede ser mayor o igual al denominador. El contexto para esta interpretación de la fracción se basa en enfatizar que hay un reparto. Así, si una caja de gomas de borrar tiene 24 unidades y se reparten equitativamente entre seis niños, ¿cuántas gomas le toca a cada uno? B A Operador Por último, el operador es una fracción que adquiere un papel de transformador multiplicativo de una unidad a otra. Se puede presentar en diferentes contextos como, por ejemplo, “de cada 10 habitantes en un país, siete son mujeres”, cuya representación utilizando fracciones es: 24 ⁄6 = 4 7 Pero analicemos la siguiente situación: “si a cada invitado de una fiesta le tocó un sexto de gelatina, ¿cuántos invitados eran?, ¿cuántas gelatinas se repartieron?, ¿cuál(es) son la(s) respuestas(s)? Escríbelas”. ⁄10 Esta expresión vincula dos cantidades referidas a una misma medida, en este caso los habitantes. Pero si se tiene el caso de que en una panadería, por cada 100 pesos de insumos en materia prima se producen tres pasteles, las cantidades dadas se relacionan con medidas diferentes, ¿cuál es el operador? Razón La escala es una de las interpretaciones menos razonadas que tiene la fracción. Cuando solicitamos que el estudiante haga un dibujo al doble o a la mitad de un original, estamos estableciendo una razón.3 La escala de 1:2 (que se lee uno a dos) para disminuir a la mitad el dibujo original y que significa que cada unidad del dibujo reproducido representa la mitad del dibujo original (en el caso que la figura B sea el original y la figura A sea la reproducción). Costo Pasteles 100 ? 900 3 1 ? En general, un operador tiene dos propiedades: la primera es que se aplica sobre un conjunto ya operado y la segunda propiedad es que una vez que se da el operador es posible encontrar otro que sea su inverso. Estas interpretaciones de la fracción se relacionan estrechamente, de modo que en una situación proble- 3 La razón es una relación entre magnitudes, que en Matemáticas formales tienen un campo de estudio muy amplio en el que se establecen sus características y propiedades. 87 entre maestr@s mática puede observarse más de una interpretación, aquí, por cuestiones de estudio, se presentaron en forma aislada. Existen otros aspectos de la fracción que es interesante mencionar, entre ellos están los siguientes. Hay otras cosas que pueden trabajarse en una recta numérica (Castillo, 2008:42) como la longitud del segmento que une a dos fracciones, el punto medio del mismo o cuál es la fracción que lo representa. Sistemas sexagesimales Los sistemas sexagesimales, como la circunferencia y su medida en grados o el reloj analógico y su medida en horas, son otros contextos en los cuales podemos enseñar a nuestros estudiantes las fracciones. Por ejemplo, si pedimos que el estudiante encuentre la sexta parte de una circunferencia o que trace dos sectores circulares que sean séptimos de la misma hará la división y el trazo apoyado en una regla de tres. Lo mismo sucede con un reloj analógico. Sabemos que tiene marcadas 12 horas y cada hora se subdivide con la flecha más grande en minutos, agrupados de cinco en cinco y queremos saber cuánto es una quinta parte de una hora, ¿qué número es un quinto de 60 minutos? Utilizamos una regla de tres: La recta numérica Indiscutiblemente el uso de esta herramienta es poco explotado en la primaria, no así en la secundaria. La recta numérica es una herramienta matemá­ tica que se presta a la equidivisión4 porque es el modelo continuo más completo que existe. Sobre ella se puede identificar cualquier fracción. En primer lugar se marca el origen (cero) y a partir de las necesidades de partición se consideran las distancias entre las unidades, las cuales se subdividen en partes con la misma longitud para representar la fracción. Se comienza a practicar la participación, la equivalencia y la aplicación de unidades divisibles sobre la recta numérica. Por ejemplo, ¿qué fracción está representada en el punto a y cuál en el punto b de la siguiente recta numérica? a 0 1-60 1 ⁄5-x 1 ⁄5 x 60 = 60⁄5 = 12 b 1 2 3 4 Entonces un quinto de una hora son 12 minutos. ¿Sabes por qué se dice “falta un cuarto para las cuatro”?, ¿qué otras fracciones ejemplificarías en el reloj? Incluso, si por razones de comodidad y de espacio la recta numérica no se traza desde el cero, permite la representación de las fracciones sin importar el tamaño de éstas. Por ejemplo, escribe qué fracción representa el punto c y qué fracción representa el punto d, de acuerdo con lo que se observa en la siguiente recta: c LOS ALGORITMOS DE LAS FRACCIONES Sumar, restar, multiplicar y dividir son las operaciones fundamentales que se trabajan en las fracciones tomando en cuenta todo lo que ya se mencionó: mecanismos constructivos, interpretaciones de la fracción, modelos continuos y discretos. En primer lugar, respecto a la suma y resta de fracciones, en ambas operaciones se utiliza el mismo algoritmo. Aquí es necesario que el profesor señale a los estudiantes que cuando se solicita encontrar un común denominador, cuando se tienen denomina- d 7 8 4 En este modelo se comparan distancias y se miden longitudes entre un punto de referencia y otro. 88 Fracciones, ¿comparar o fracturar? El algoritmo indica que puedo multiplicar cruzado, o bien, multiplicar por el inverso del segundo número o aplicar la “ley del sándwich”. En todos los casos me queda una fracción más grande, porque la división de fracciones implica saber cuántas veces cabe la se­ gunda fracción en la primera. Es indudable que hay muchos más temas relacionados con las fracciones, aquí sólo se hizo un recorrido sencillo, tratando de enfatizar aspectos que los propios docentes demandan cuando hemos dado algún curso al respecto. @ dores diferentes, utilizando cualquiera de los métodos como: multiplicar los denominadores y observando si uno de ellos es divisor del otro, o bien, obteniendo el mcm,5 lo que se pretende en realidad es utilizar la misma unidad dividida en partes equivalentes. Por ejemplo: 4 ⁄6 + 2⁄3 - 1⁄4 = 8⁄12 + 8⁄12 - 3⁄12 El mcm es 12 y cada fracción tiene una fracción equivalente con este denominador. Para encontrar el resultado de la suma, los numeradores se suman y se simplifica la fracción, si se puede, o bien, se expresa como una fracción mixta, esto depende de lo que más conviene: 13 ⁄12 = 11⁄12 BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA Castillo Ana G. et al. (2008). Diplomado: La enseñanza de las Matemáticas en la escuela primaria. México: sep-SMM. Chevallard Yves et al. (1998). Estudiar Matemáticas: el eslabón perdido entre enseñanza y aprendizaje. México: sep/Biblioteca para la actualización del maestro. Freudenthal H. (1983). El fenómeno didáctico de la estructura de Matemáticas. eua: Reidel. Kieren T. (1988). Conocimiento y números racionales: de­ sarrollo formal e intuitivo. eua: nctm. Llinares Ciscar, Salvador y Sánchez García, Ma. Victoria (1985). Fracciones. Colección Matemáticas Cultura y Aprendizaje. España: Síntesis. Mochón, Simón (1985). Fracciones: algo más que romper un todo. México: Cinvestav-ipn. Ortón, Antony (1998). Didáctica de las Matemáticas. España: Morata. sep-dgep. Olimpiada del conocimiento infantil. Prueba 2007. Fase previa. México. sep-dgep. Olimpiada del conocimiento infantil. Prueba 2008. Fase previa. México. sep-Pronap. Exámenes nacionales para la actualización de los maestros en servicio. Ciclo escolar 2006-2007. México. sep-Pronap. Exámenes nacionales para la actualización de los maestros en servicio. Ciclo escolar 2007-2008. México. La multiplicación de fracciones tiene características diferentes a una multiplicación con números naturales porque este producto es mayor que sus factores. Pero con las fracciones sucede algo muy diferente: su producto es menor que los factores. Observa: 3 ⁄4 x 2⁄3 = 6⁄12 = 1⁄2 ¿A qué crees que se deba? Simplemente a que un producto de fracciones es una fracción de otra fracción. En el ejemplo se pide encontrar las 3⁄4 de 2⁄3 que es exactamente 1⁄2. El algoritmo señala que se obtenga el producto de numeradores entre el producto de denominadores. La división de fracciones es un poco más complicada, mientras la división con números naturales obtiene un cociente más pequeño que el dividendo o el divisor, en las fracciones el cociente es un número más grande. Por ejemplo, si se divide: 3 5 ⁄8 ÷ 1⁄2 = 6⁄8 = 3⁄4 Mínimo común múltiplo, utilizando factores primos. 89 Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria Jesús Leobardo Rendón García* [email protected] U n insumo importante del Álgebra es el conocimiento de la Aritmética, si este insumo se maneja de forma inadecuada ya tenemos un ingrediente para el fracaso en el aprendizaje del Álgebra. Y es que dentro de la Aritmética tenemos temas que de alguna forma son clave y, a la vez, difíciles de comprender. Algunos de ellos, como la ley de los signos para números enteros y la división de fracciones son presentados a los alumnos como temas que así se deben aprender porque así son. Nunca se les da la oportunidad a los estudiantes de descubrir, reconocer sus propiedades en todo caso. Sólo se da paso a la repetición mecánica y no a la reflexión. En alguna ocasión pregunté a los maestros en un curso que estábamos desarrollando: –¿alguien me puede explicar por qué en la ley de los signos menos por menos da más? Un maestro levanta la mano y me dice: –menos por menos da más, porque si tomamos un número positivo, por ejemplo, el 16, su raíz será √16= ±(4). Por ello, una de las raíces es el (+4) y la otra es (-4), luego si multiplicamos (-4) (-4), es decir, si hacemos (-4)2 eso nos da 16, que es un número positivo. Malévolamente, como luego solemos ser los maestros, reviso su respuesta y veo que me conduce a otra pregunta: –¿por qué las raíces de un número son positivas y negativas? Y eso me llevará a otra respuesta y a nuevas preguntas, y así sucesivamente hasta pretender agotar todo el razonamiento posible. Sin embargo, atacar la respuesta desde el uso de la estructura de la Matemática es necesario, pero se deben buscar las formas adecuadas, de tal manera que descubramos cada vez más sus propiedades y sus usos, sin que caigamos en el aburrimiento. ————————————— * Docente con formación en Matemáticas, labora en la Universidad Pedagógica Nacional. 90 Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria SOBRE LA ENSEÑANZA DEL ÁLGEBRA, EL CASO DE LA LEY DE LOS SIGNOS La pregunta exacta es considerar aquello que nos llevó a pensar el mundo como un símbolo y reconocer cuál fue el proceso que nos permitió lograr la simbolización del lenguaje, del arte y las Matemáticas. Desde nuestro nacimiento vamos desarrollando mecanismos de representación del mundo, esto es, hacemos uso del lenguaje en sus diferentes manifestaciones: visual, escrito, icónico. Cada uno de estos lenguajes se han ramificado y uno de los más exitosos ha sido el lenguaje matemático, que es una variante del lenguaje escrito, en el que algunos símbolos representan expresiones retoricas o verbales. El lenguaje matemático es altamente “abstractivo”. Lo digo así en el sentido connotativo de la palabra. Se dice que la Matemática hace abstracciones que se van acumulando unas sobre otras, el número ya es una abstracción y el Álgebra es una abstracción que se hace sobre la notación de los números. De esta forma, la evolución del pensamiento abstracto relativo al Álgebra, apelando a un sentido didáctico, podemos contemplarlo en los siguientes contenidos: aritmética, teoría de números, variación proporcional, álgebra lineal, funciones y estructuras abstractas. Y, sin embargo, no podemos pensar esta evolución en forma lineal, cada vez que aparece una nueva rama de una disciplina, todo evoluciona, y la estructura tanto de esa disciplina como de la Matemática misma se va transformando y resignificando también. El problema, creo, en la enseñanza del Álgebra, es aceptar que los paradigmas que imperan en las Matemáticas, son dogmas de fe, imposibles de cuestionar y/o modificar. En el caso del ejemplo de la raíz cuadrada, si no se acepta esa afirmación, muchos de los conceptos de la Matemática quedarían sin fundamento, ya que casi toda la estructura podría colapsarse. La raíz cuadrada de un número tiene los dos signos, positivo y negativo, ya que al multiplicar un número por sí mismo siempre da positivo, pero esto es justamente el concepto al que queremos darle explicación; si recurrimos a algo que es una ley 91 Este trabajo propone una idea antigua de un instrumento construido con material reciclable que permite contar con un apoyo didáctico para la enseñanza de las leyes de la multiplicación de los signos. Este tema es importante para el aprendizaje del Álgebra y su utilidad en el aula puede resultar provechosa; la ley de los signos casi siempre parece muy abstracta, pero con este material se tiene un apoyo que puede concretizar sus conceptos y leyes. Palabras clave: proceso resultante, el plano de los signos, inversión del giro, conservación del giro, Álgebra, ley de los signos, constructivismo. u u u u u This paper propounds an already old idea: an instrument build with recyclable stuff which allows having a didactic support for teaching symbol multiplication laws. This topic is important for learning of algebra, and its use in classroom can be advantageous. Symbols law usually seems to be very abstract, but in this material there is a resource for making its concepts and laws concrete. entre maestr@s para explicarlo, estamos incurriendo en un error, que deja al alumno con la sensación de que efectivamente, en las Matemáticas, las explicaciones se dan por dogmas que deben aceptarse. Insisto, no se da la oportunidad al alumno de explorar y descubrir las pro­piedades, las condiciones, las apli­ caciones, y, sobre todo, sus formas de abstracción. Por otro lado, regresando a la explicación de la ley de los signos en ese mismo curso, una maestra usó el siguiente ejemplo: El enfoque constructivista en las Matemáticas establece, por ejemplo, que sean los alumnos quienes se aproximen a los conceptos usando sus propias ideas Cuando pasa el carro de los helados, les pregunto a mis alumnos si no quieren un helado y algunos me responden que no quieren. Lo cual quiere decir ¡que sí quieren helado! Desde luego que den­ tro de los argumentos, éste es debatible de­bido a que cuando repetimos una ne­ gación, por lo general, le media una coma, lo cual quiere decir que se está reafirmando, con respecto a aquello que dijimos. De este modo, el enunciado: ¡no, no quiero! hace referencia a que efec­tivamente no se quiere helado. En el segundo caso el argumento cae dentro del terreno de la retórica y alguien con conocimientos medianos de composición de textos, o de ortografía, podría sin mucha dificultad rebatirlo. Lo importante acá es ver el paradigma de la Matemática como algo acabado e inmutable, a dicho credo le pagamos un alto precio, el de privarnos del placer de pensar por nuestra propia cuenta y de hallar nuestros 92 propios caminos para explicar aquello que se nos pide, en el interminable laberinto de las ideas dentro de las Matemáticas. EL CONSTRUCTIVISMO, UN ENFOQUE PARA DESCUBRIR EL MUNDO DE LAS MATEMÁTICAS El enfoque constructivista en las Ma­ temáticas establece, por ejemplo, que sean los alumnos quienes se aproximen a los conceptos usando sus pro­pias ideas y métodos por inexactos que en un principio parezcan; para ello sugiere el trabajo colectivo y la con­trastación de las ideas, de tal forma que puedan llegar a través del experimento y error a establecer argumentos formales en Matemáticas. Esto, desde mi perspectiva, establece un poderoso nivel de afectividad en el aprendizaje, ya que no es lo mismo para un individuo saber que aquello que está usando fue construido por él mismo. Durante el proceso de construcción de conocimientos, el individuo tiene bien fundamentados muchos de los argumentos que se esgrimen en el proceso de socialización del conocimiento, y le consta que su argumento es cierto, pero además en la socialización observó que esos caminos no son únicos, sino que hay diferentes, todos igual de válidos, aunque distintos. Esto le da confianza y seguridad, le motiva y le invita a pensar y a desarrollar sus propias ideas, lo que se logra con la actitud de respeto y escucha que el docente establece con sus alumnos, y entonces, el maestro descubre también que puede entender las formas de razo- Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria nar de sus alumnos y aprende también a razonar de forma diferente. De aquí la importancia de establecer paradigmas alternativos. De esta forma, mediante el enfoque del constructivismo comprendemos que debemos encontrar formas más creativas de conformar nuestras ideas. Creo que no se puede enseñar a pensar si no lo hacemos nosotros también en el ejercicio de la docencia, por ello, presento a consideración del lector un argumento que creo es más contundente con respecto a la comprensión de la ley de los signos de los números negativos. EL PLANO DE LOS SIGNOS, UNA FORMA DE COMPRENDER LA LEY DE LOS SIGNOS Esta idea surgió después de encontrar que todos los argumentos matemáticos esgrimidos para lograr la validez de la ley de los signos resultaban en antinomias que nos llevaban a ciertas confusiones y nunca quedaba nada en claro, sino en términos de nuevos misterios o dogmas de fe. Desde mi perspectiva, debía existir algo irrefutable, algo que ni el discurso ni la estructura matemática con sus obscuridades pudieran derribar. Al respecto de mi argumentación, quiero citar un pasaje del libro Metafísica de Aristóteles: Una corriente matemática sostiene que debemos lograr los fundamentos de las matemáticas en los pensamientos abstractos, mientras otro grupo, los pitagóricos, sostienen que los argumentos matemáticos deben tener referentes concretos, de lo contrario carecen de sentido, eso debido a que todo en el universo es matemáticas (Aristóteles, 1998). Comparto la posición pitagórica, aunque estoy consciente de que muchos conceptos no son tan fáciles de expresar mediante objetos con- cretos; sin embargo, en este caso el constructo que presento tiene la intención de mostrar que estos conceptos pueden tener referentes que se pueden materializar. Lo mismo ocurre para conceptos como el número, que entre los mayas se tenía ya materializado, indicando así la relación objeto-concepto. Esto lo digo por que los mayas usaban piedras, palillos y caracoles para representar sus números, además usaban un tablero que servía para ordenar los números, de este modo, en las operaciones, manipulaban dichos objetos. Para los mayas, los objetos (que representan números, una piedra denota el uno, un palillo denota el cinco y el caracol denota el cero) ya son conceptos en sí mismos. El instrumento del que voy a hablar lo denomino “plano de los signos”, tiene un parecido con el geoplano, sólo que en vez de tener clavos usamos taparroscas. EL PLANO DE LOS SIGNOS La construcción puede hacerse de la siguiente manera: distribuimos algunas taparroscas de ma­ nera uniforme en una tabla de 40 cm x 40 cm, y las colocamos con tornillos, lo suficientemente holgadas como para que puedan girar. El plano de los signos puede contener desde un par de taparroscas hasta cualquier cantidad que se desee. Primero voy a describir los movimientos elementales que se pueden hacer en el plano implicado. Para ello voy a recurrir al uso de ligas para identificar el movimiento de las taparroscas. a Figura 1 93 b (+) entre maestr@s En esta figura, la taparrosca a gira en el sentido contrario a las manecillas del reloj, y la taparrosca b girará en el mismo sentido, diremos que este giro, al preservarse, tiene signo positivo. (-) c d Figura 2 En la figura 2, la taparrosca c gira en el sentido de las manecillas del reloj y la taparrosca d girará en el sentido contrario a las manecillas del reloj. En este caso, diremos que la resultante del giro invierte la rotación y lo denotamos con un signo negativo. (+) e (-) f (-) g (-) (-) h k Figura 3 Respecto a la figura 3, las fichas e y f giran en el mismo sentido, las fichas f y g giran en sentido contrario. Por tanto, las fichas e y g giran en sentido contrario. Las fichas g y h giran en sentido contrario. De este modo, las fichas h y e van a girar en el mismo sentido. Las fichas h y k giran en sentido contrario. Por tanto, las fichas e y la k girarán en sentido contrario. Así, como resultante diremos que el giro establecido entre e y k será negativo. De aquí podemos concluir que si hay un número impar de inversiones (giros negativos) entonces la resultante será negativa, es decir los giros entre e y k serán en sentido inverso… Como en el caso 2, el símbolo que aparece después de la figura es negativo lo que indica que la resultante de tomar un signo positivo y tres negativos es un número negativo. Observación: los signos que aparecen debajo de las taparroscas indican el sentido en el que se realiza el giro entre las dos taparroscas relacionadas con las bandas de esa sección. (-)(-)(-)(-) i jk lm Figura 4 94 (-) Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria En la figura 4 entre las fichas i y j se da un giro invertido, por tanto, giran en sentido inverso. Las fichas j y k giran en sentido inverso, lo cual implica que las fichas i y k gi­ ran en el mismo sentido. Las fichas k y l giran en sentido inverso, por tanto, i y l girarán en sentido inverso, ya que también i y k giran en el mismo sentido. Finalmente, l y m giran en sentido inverso, por lo tanto las fichas i y m girarán en el mismo sentido. Así, la resultante es positiva, ya que la primera ficha y la última giran en el mismo sentido… de aquí se desprende una nueva ley, un número par de números negativos da como resultante un número positivo. (+) (-) ab (-) (+) c d Figura 5 En la figura 5, por las leyes anteriores, tenemos que el número de inversiones signos negativos, la resultante es negativa… el lector puede verificarlo. Puede verse que a y d giran en sentido contrario. (-)(+)(-)(+) ab cde (+) Figura 6 En la figura 6 se observa que el número de giros negativos es par, por lo tanto, la resultante entre las dichas a y e será positivo. 1. En esta imagen, en la primer pareja marcada con el número 1 tenemos un movimiento simple, las líneas representan una liga que une las dos ruedas; a con b, con esa forma de unir las ruedas tenemos que como gire la rueda a en el mismo sentido girará la otra. Al considerar las flechas que se marcan, vemos que ambas taparroscas, la a y la b giran en sentido contrario a las manecillas del reloj. a (+) b 95 entre maestr@s 2. En la pareja 2, formada por las tapa­ rros­cas c y d, tenemos que una de las ta­ parroscas, la c gira, en el sentido de las manecillas del reloj, mientras que la d gira en el sentido contrario a las manecillas del reloj, con ello tenemos que el cruzamiento en la liga provoca una inversión en el giro de las dos taparroscas. c (-) d De manera que cuando las fichas están unidas mediante una banda simple, los giros se conservan, y cuando la liga tiene un cruzamiento, los giros de las taparroscas se invierten. La imagen de la pri­mer pareja conserva el giro, es decir, la pri­mer taparrosca y la última giran en el mismo sentido. A la imagen de la segunda pareja le diremos que se invierte el giro ya que la primera y la última ficha giran en sentido contrario. Algo pendiente hasta ahora es hacer la analogía entre los giros de las taparroscas y la multiplicación de los números negativos positivos. Multiplicar un número positivo por uno negativo da como resultado un número negativo, algo análogo sucede con las taparroscas, alternando la conservación de un giro y luego invirtiendo da como resultado una inversión de giro entre la primer ficha y la última al continuar esta forma podemos establecer una analogía entre las multiplicaciones de los números con signos y los giros de las taparroscas. De esta manera, apelando a Aristóteles, cuando dice en su libro Metafísica que los pitagóricos consideraban que los 96 objetos ya son símbolos y los símbolos son objetos, tenemos una forma de ver la ley de los signos de una manera concreta, apoyados en un objeto que es manipulable, el plano de los signos. Así, el plano de los signos nos permite establecer leyes que van generalizando las propiedades de los signos, por ejemplo, dada una multiplicación de varios números, vamos a tener que el resultado de esa multiplicación es negativo cuando la cantidad de números negativos incluidos en la multiplicación sea un número impar. En cambio, si en una multiplicación de números enteros la cantidad de números negativos es par, entonces la resultante es positiva, independientemente de la cantidad de los números implicados y de la posición que ocupen los números negativos. Veamos las siguientes afirmaciones y llevémoslas a cabo en una hoja aparte. 1. Dos giros positivos producen una resultante positiva. 2. Un giro positivo y uno negativo producen una resultante nega­ tiva. 3. Un giro negativo seguido de uno positivo produce una resultante negativa. 4. Dos giros negativos producen una resultante positiva. De modo que con el plano de signos po­demos representar muchos casos y comprender las leyes de los signos, de una forma amplia, hasta llegar a entender los posibles resultados de una serie de combinaciones de los signos. Con esto quería mostrar el sentido didáctico de un concepto que la enseñan- Algunas consideraciones para la Enseñanza del Álgebra en secundaria za y la conceptualización de las Matemáticas ha vuelto nebuloso, pero vemos que buscando formas atractivas que muestren cómo y qué es el fenómeno implicado lograremos tener más elementos para lograr mejores aprendizajes. Esta propuesta busca que los colegas profesores puedan contar con mejores formas de lograr sus enseñanzas, porque finalmente los conceptos y las estrategias de enseñanza son tan diversos como cabezas hay en el mundo. En este sentido, comprendo el constructivismo: hacer de los conceptos algo que nos permite llevar a cabo aprendizajes novedosos, buscando el fondo de los conceptos implicados. ALGUNAS REFLEXIONES FINALES La diferencia entre considerar a la Matemática como algo acabado o concebirla como algo que puede ser modificado y que puede ser abordado desde diferentes estrategias y maneras de comprender, nos da la posibilidad de lograr mejores procesos de enseñanza y aprendizaje. El enfoque constructivista dice que cada alumno debe aproximarse a la Matemática desde sus propias estructuras, éstas en un principio pueden ser muy personalizadas, hasta que gradualmente el estudiante logra adquirir los conceptos formalmente establecidos. Además, el valor que da el aproximarse desde un esfuerzo propio, logrando comprender realmente lo que está implicado en una ley, principio o algoritmo matemático, es cualitativamente muy distinto que contemplarlo ya terminado, haciendo tan sólo un uso mecánico del concepto. Bajo esta perspectiva, es fundamental generar las condiciones necesarias para que el alumno se enamore de las Mate­ máticas y que los logros que adquiere con sus aprendizajes le puedan ayudar a resolver retos no sólo matemáticos, sino los que la vida cotidiana le presenta. Lo­ grar esta nueva forma de enfocar el contenido de la Matemática, tanto por parte de los profesores como por parte de los estudiantes, es algo más que necesario, es urgente. @ BIBLIOGRAFÍA Oteyza. E. (2006). Conocimientos fundamentales de Matemáticas: Álgebra. México: unam. Anfossi A. (1943). Curso de Álgebra. México: Progreso. Gómez, A. (1993). Numeración y cálculo. Madrid: Síntesis. Piñeiro. M. et al. (1998). Trigonometría. Madrid: Síntesis. Sierra, M. et al. (1989). Divisibilidad. Madrid: Síntesis. Aristóteles (1998). Metafísica. México: unam. 97 Encuentario Oda a los números Pablo Neruda ¡Qué sed de saber cuánto! !Qué hambre de saber cuántas estrellas tiene el cielo! Nos pasamos la infancia contando piedras, plantas, dedos, arenas, dientes, la juventud contando pétalos, cabelleras. Contamos los colores, los años, las vidas y los besos, en el campo los bueyes, en el mar las olas. Los navíos se hicieron cifras que se fecundaban. Los números parían. Las ciudades eran miles, millones, el trigo centenares de unidades que adentro tenían otros números pequeños, más pequeños que un grano. 98 El tiempo se hizo número. La luz fue numerada y por más que corrió con el sonido fue su velocidad un 37. Nos rodearon los números. Cerrábamos la puerta, de noche, fatigados, llegaba un 800, por debajo, hasta entrar con nosotros en la cama, y en el sueño los 4000 y los 77 picándonos la frente con sus martillos o sus alicates. Los 5 agregándose hasta entrar en el mar o en el delirio, hasta que el sol saluda con su cero y nos vamos corriendo a la oficina, al taller, a la fábrica, a comenzar de nuevo el infinito número 1 de cada día. Tuvimos, hombre, tiempo para que nuestra sed fuera saciándose, el ancestral deseo de enumerar las cosas y sumarlas, de reducirlas hasta hacerlas polvo, arenales de números. Fuimos empapelando el mundo con números y nombres, pero las cosas existían, se fugaban del número, enloquecían en sus cantidades, Poemas matemáticos se evaporaban dejando su olor o su recuerdo y quedaban los números vacíos. Por eso, para ti quiero las cosas. Los números que se vayan a la cárcel, que se muevan en columnas cerradas procreando hasta darnos la suma de la totalidad de infinito. Para ti sólo quiero que aquellos números del camino te defiendan y que tú los defiendas. La cifra semanal de tu salario se desarrolle hasta cubrir tu pecho. Y del número 2 en que se enlazan tu cuerpo y el de la mujer amada salgan los ojos pares de tus hijos a contar otra vez las antiguas estrellas. Z El ángel de los números El ladrón de naranjas Rafael Alberti Escuela del Califa Un ladrón un cesto de naranjas Vírgenes con escuadras del mercado robó y por entre los huertos escapó; al saltar una valla, la mitad más media perdió; perseguido por un perro, la mitad menos media abandonó; tropezó en una cuerda, la mitad más media desparramó; en su guarida, dos docenas guardó. Vosotros, los que buscáis la sabiduría, decídnos: ¿cuántas naranjas robó el ladrón? y compases, velando las celestes pizarras. Y el ángel de los números, pensativo, volando del 1 al 2, del 2 al 3, del 3 al 4. Tizas frías y esponjas rayaban y borraban la luz de los espacios. Ni sol, luna, ni estrellas, ni el repentino verde del rayo y el relámpago, ni el aire. Sólo nieblas. Vírgenes sin escuadras, sin compases, llorando. Y en las muertas pizarras, el ángel de los números, sin vida, amortajado sobre el 1 y el 2, sobre el 3 y el 4... 99 entre maestr@s Escorial II La cinta de Moebius En vez de soñar, contar. Myriam Moscona La fachada del oeste tiene seiscientas doce ventanas. ¿Por qué una curva Por la primavera van en su cielo, hacia el domingo una, dos, tres, cuatro, cinco nubes blancas. Al ir y regresar Vuelve al lugar donde empezó? Toma el lápiz y delinea Ya verás: La cinta tiene sólo un lado. Yo te quiero a ti, y a ti y a ti. A tres os quiero yo. Ahora bien: Los geómetras del cielo Discuten todavía Si el ojo de Dios Nos amasó con shejná ¿Tendrá principio de mujer nuestro saber? A las doce el tiempo da doce campanadas. Y ya no podrá escapárseme en las volandas del sueño la mañana. Haré la raya para ir sumando seiscientas doce, más cinco, más tres, más doce. Unos dicen que así no fuimos dibujados Son rectas las curvas de Moebius. En torcedumbre y doloridos Con esas cintas nos crearon ¡Qué felicidad igual a seiscientas treinta y dos! En abril, al mediodía cuenta clara. 100 Pedro Salinas Poemas matemáticos El número pi Wislawa Szymborska El admirable número Pi tres coma uno cuatro uno. Las cifras que siguen son también preliminares cinco nueve dos porque jamás acaba. No puede abarcarlo seis cinco tres cinco la mirada, ocho nueve ni el cálculo siete nueve ni la imaginación, ni siquiera tres dos tres ocho un chiste, es decir, una comparación cuatro seis con cualquier otra cosa dos seis cuatro tres de este mundo. La serpiente más larga de la tierra suma equis metros y se acaba. Y lo mismo las serpientes míticas aunque tardan más. El séquito de digitos del número Pi llega al final de la página y no se detiene, sigue, recorre la mesa, el aire, una pared, una hoja, un nido de pájaros, las nubes, hasta llegar directo al cielo, perderse en la insondable hinchazón del cielo. ¡Qué breve la cola de un cometa, cual la de un ratón! ¡Qué endeble el rayo de un astro si se curva en la insignificancia del espacio! Mientras aquí dos tres quince trescientos diecinueve mi número de teléfono la talla de tu camisa el año mil novecientos sesenta y tres sexto piso el número de habitantes sesenta y cinco céntimos dos pulgadas de cintura una charada y un mensaje cifrado que dice vuela mi ruiseñor y canta y también se ruega guardar silencio, y se extinguirán cielo y tierra, pero el número Pi no, jamás, seguirá su camino con su nada despreciable cinco con su en absoluto vulgar ocho con su ni por asomo postrero siete, empujando, ¡ay!, empujando a durar a la perezosa eternidad. Y las innumerables espigas que llenarán la tierra transformada. @ 101 Hojas de papel que vuelan ¿Qué Matemática para la escuela primaria? Horacio Itzcovich* [email protected] ¿QUÉ MATEMÁTICA PARA LA ESCUELA PRIMARIA? L os números naturales, las operaciones básicas, las fracciones, la proporcionalidad, las figuras planas y sus propiedades, los cuerpos, las mediciones y los sistemas de medida, son objetos que pueblan la enseñanza elemental desde tiempos remotos y nada hace suponer que en un futuro próximo estos objetos dejarán de estar ligados a la Matemática que se concibe para la escuela primaria. ¿Por qué, entonces, en diferentes periodos, se instala un debate en torno a su enseñanza? ¿Se trata verdaderamente de los mismos objetos a lo largo del tiempo? ¿Se trata de los mismos objetos para los alumnos a lo largo del paso por la escuela? ¿Significarán lo mismo para todas las instituciones educativas? Para comenzar a tratar estas preguntas, quisiera compartir una frase de Bkouche que sostiene lo siguiente: “Los conceptos matemáticos no son un bien cultural transmitido hereditariamente como don, o socialmente como un capital, sino el resultado de un trabajo del pensamiento: el de los matemáticos a través de la historia, el del niño a través de su aprendizaje.” Cuando se define que la Matemática es un producto de la cultura, producto del trabajo de las personas, y se plantea que la democratización de la enseñanza tiene que romper con la idea de que habría algunos dotados para acceder a la Matemática o algunos privilegiados simplemente por el medio al que pertenecen, surge con claridad que lograr que los alumnos ————————————— * Profesor universitario de Matemática. Coordinador del Equipo de Especialistas de Matemática de la Dirección de Currícula y Enseñanza del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Autor de libros de texto para alumnos, libros para docentes, diseños curriculares y documentos curriculares. 102 ¿Qué Matemática para la escuela primaria? accedan al trabajo matemático –y que esto no quede en declaraciones de buenas intenciones o una expresión de deseos– resulta ser un problema de enseñanza. O sea, se transforma en un problema didáctico lograr que los alumnos que van a la escuela accedan no sólo al conocimiento de ciertos títulos, diferentes propiedades, dominen las operaciones, etc., sino al modo de pensar y producir en Matemática, que me parece, es el valor esencial que tiene la presencia de esta asignatura en su escuela. Y en la medida en que se accede a esta forma de pensar y producir conocimiento, que se accede a esta forma de trabajar, se enriquece el pensamiento de los chicos y se brinda una oportunidad de colaborar en su formación intelectual y ética. Es así que la Matemática que se decide enseñar impacta de manera determinante en lo que los alumnos van considerando como cultura, cultura matemática. Por ejemplo, si se enseña a los alumnos que los problemas se resuelven de una única manera, se está colaborando en que interpreten así no sólo la Matemática, sino muchas situaciones de su entorno. Si su relación con la Matemática es meramente mecánica, no podemos exigirles que comprendan los procesos que les proponemos estudiar o analizar. Partimos de la premisa de que hay muchas maneras de conocer un concepto matemático. Las mismas de­ penden de todo lo que una persona haya tenido oportunidad de realizar en relación con ese concepto. Es este un punto de partida fundamental para pensar la enseñanza. Es decir, el conjunto de prácticas que despliega un alumno, a propósito de un concepto matemático, constituirá el sentido de ese concepto para ese alumno. Como la Matemática es una producción elaborada y desarrollada por las personas, probablemente la mejor manera de acceder a este modo de pensar y producir es tra­ bajando al estilo o a la manera de la disciplina y de esas personas que construyeron esta área de conocimiento. De allí que las experiencias que hagamos vivir a los alumnos deberían intentar aproximarse lo más posible al modo de hacer y de pensar de esta disciplina. 103 Este artículo intenta explicitar algunas características de la actividad matemática que resultan pertinentes a la hora de pensar en la enseñanza y que podrían permitir a los alumnos ingresar a un modo particular de hacer y de pensar propio de esta área de conocimiento. Palabras clave: Matemática, problemas, exploración, conjeturas, validación, cul­ tura. uuuuu This paper intends to make explicit some characteristics of mathematical activity which are relevant when thinking about teaching and which would aloud students to think and do in a way particular to this area of knowledge. entre maestr@s Acerca del trabajo matemático y el sentido Ahora bien, ¿cuáles podrían ser algunos de los elementos que configuran ese modo de hacer y de pensar?, ¿cuáles son algunas de las particularidades del trabajo matemático que adoptamos y que podrían constituir una parte de la clase? Una de las cuestiones primordiales que sospecho que todos compartimos, es que para que los alumnos puedan ir construyendo el sentido de un conocimiento se resuelvan problemas. Y este es uno de las principales componentes de la actividad matemática. Con esto es pro­ bable que no se diga nada nuevo. Y tal vez sea conveniente intentar identificar qué es un problema, en términos de la enseñanza. El siguiente ejemplo apunta en esa dirección: fraccionarias, un enunciado como el del ejemplo 1 podría ser un problema en el sentido de un desafío, de un obstáculo a vencer. Cuenta con algunos recursos como para apropiarse del problema e intentar resolverlo. Si quien recibe esta situación es un profesor de Matemática, probablemente no represente un verdadero desafío, pues cuenta con todo un bagaje de conocimientos que hace que esta misma situación sea un sencillo ejercicio. En cambio, para niños de 2º o 3º año que aún no han teni­ do ningún tipo de experiencia con estos números, esto tampoco será un problema, pues la distancia entre sus conocimientos y los que demanda la situación son tan lejanos que no tiene recursos ni siquiera como para empezar a abordarlo. Pero tampoco es suficiente con que se resuelvan problemas. La actividad matemática que potencialmente un problema permitiría desplegar, no está contenida en el enunciado del problema (Sadovsky, P. 2005), sino que depende de todo lo que se proponga hacer a los alumnos con él durante su resolución y con posterioridad a la misma. La mayoría de las veces esta práctica matemática no se evidencia ante los ojos de los niños y queda escondida y opacada por la “desesperación” que pro­ mueve en numerosas oportunidades la obtención del “resultado correcto”. ¿Qué otras cuestiones configuran entonces la práctica matemática? El siguiente ejemplo apunta en esa dirección. Ejemplo 1: Intenten determinar la cantidad de cifras decimales que son necesarias para escribir cada una de las siguientes fracciones: 1 1175 2 8 101000 No es sencillo determinar con claridad qué es un problema, a la hora de pensarlo en función de alumnos que asisten a la escuela a aprender. Una primera conside­ ración tiene que ver con el destinatario de la situación. Según los conocimientos de quien se enfrente al enunciado o la actividad, se podrá decir que representa un problema o no. Es decir, para quien ya domina el concepto de fracción y ha tenido algunas experiencias en el trabajo con expresiones decimales y expresiones Ejemplo 2: a) Buscar una cuenta de dividir en la cual el cociente sea 12 y el resto sea 5. ¿Cuántas hay? 104 ¿Qué Matemática para la escuela primaria? b) Buscar una cuenta de dividir que tenga por cociente 8 y el divisor sea 15. ¿Cuántas hay? Intentemos ahora analizar qué diferentes “tareas” podrían desplegar los alumnos en la resolución de este problema. Una primera cuestión quizá se relaciona con el trabajo exploratorio. Es decir, se espera que los niños ensayen con algunos ejemplos y ciertos números que pueden o no “funcionar”, los cambien y traten de ver qué resultados van apareciendo, etc. Pero también, para avanzar en esta exploración, seguramente será necesario encontrar algún modo de representar matemáticamente las relaciones que el problema “no muestra”. Representar para explorar y “ver” y mientras se “ve” y se explora podrían elaborarse nuevos modos de representación que van configurando un nivel de conocimiento asociado al problema. Se trata, entonces, de generar condi­ ciones que permitan a los alumnos avan­zar en instancias de exploración, haciendo que éstas resulten cada vez más sistemáticas y se produzcan modos de representar matemáticamente el problema que colaboren en dicha exploración, lo que propicia un espacio de búsqueda, de debates y de elaboración de recorridos de resolución. El siguiente problema tiene la intención de mencionar otro aspecto asociado con la actividad matemática. La resolución de un problema demanda ciertos ensayos que abren nuevas interrogantes que probablemente se puedan formular los alumnos, aunque no de manera explícita Ejemplo 3 Intenten construir un paralelogramo de manera tal que un lado mida 7 cm, otro lado mida 4 cm y la diagonal mayor mida 11 cm. ¿Cuántos paralelogramos diferentes se pueden construir? 105 Una vez más, la resolución de un problema demanda ciertos ensayos que abren nuevas interrogantes que probablemente se puedan formular los alumnos, aunque no de manera explícita: ¿convendrá empezar el dibujo por la diagonal?, ¿será suficiente con la regla?, ¿convendrá empezar por los lados?, etc. Muy probablemente, apoyados en ciertos dibujos o bosquejos, los alumnos sospechen que algo ocurre entre los lados y la diagonal: “queda muy largo”, “no se puede dibujar porque no se juntan”, etcétera. La identificación de relaciones entre datos y problema, los aciertos y errores que se pudieran haber cometido, favorecerán el arribo a una solución que seguramente tendrá carácter de “sospecha”. Es decir, la elaboración de alguna conjetura. Y lógicamente, y quizá es la cuestión más compleja en términos didácticos, el mismo problema propone una nueva tarea matemática: el pasaje de la conjetura a la certeza. O sea, la dificultad de estar seguros de si lo que se hizo es correcto o no, si es válido o no lo es. Es decir, estar en condiciones de establecer, por los pro­pios medios y apoyados en conocimientos matemáticos, si lo que hizo es o no consistente. Esto es tal vez el desafío más complejo Esta conjunción entre resolución y validación demanda que los alumnos se vean enfrentados a problemas que les exijan tomar decisiones con respecto a los conocimientos a utilizar para resolverlos, al encontrarse con que esos conocimientos no son totalmente ajustados para resolver la situación planteada y puedan entonces elaborar nuevas relaciones que serán la base para identificar nuevos conceptos. entre maestr@s En este proceso resulta central que el alumno vaya construyendo herramientas para poder saber si su producción es o no correcta, para poder justificar las decisiones que fue tomando y estar seguro de su trabajo, independientemente de las evaluaciones que el docente pueda hacer. Para que esto sea posible, será necesario a su vez que el docente pueda hacer intervenciones que ayuden al alumno a sostener su trabajo sin por ello reemplazarlo en su tarea de producción. El siguiente ejemplo propone seguir pensando sobre el tema de la validación. Ejemplo 4 ¿Cuántas botellas de 1 litro se pueden 4 llenar con una botella de 2 litros y 1 ? En principio, vale la pena destacar que la ventaja de la Matemática, entre otras cosas, reside en que permite anticipar un resultado, más allá de la experiencia empírica 4 Les habrá resultado sencillo determinar que se llenan nueve botellitas. Ahora bien, ¿cómo es posible dar cuenta de la validez de la respuesta desde esta pers­pectiva? Una posibilidad, que vive en algunas aulas y en ciertos libros, propone recurrir a las botellas y hacer el ensayo empírico que corroboraría que son nueve. Otra posibilidad es apelar a recursos que sospecho ha usado el lector: con un litro se llenan cuatro, con otro litro 106 otras cuatro y una más con el cuarto que queda. ¿Cuál es la diferencia entre ambos modos de validación? Ante quien apele a las botellitas, val­ dría la pena preguntarse qué tipo de re­laciones matemáticas ha establecido, ¿cómo puede dar cuenta de la validez, más allá de la experiencia, ya que el resultado obtenido podría ser casualidad?, sobre todo, cuando las medidas son aproximadas, ¿será casualidad que se llenan nueve?, ¿y si se vuelca algo? En tanto, quien apele al otro razonamiento no necesita de la experiencia para estar seguro que el resultado es correcto. Es decir, es el conocimiento quien garantiza que ese es el resultado y que no podría ser otro La pregunta más general podría ser: ¿qué lugar tendría el uso de material concreto en la resolución de este problema? En principio, vale la pena destacar que la ventaja de la Matemática, entre otras cosas, reside en que permite anticipar un resultado, más allá de la experiencia empírica. Es posible anticipar que serán nueve botellitas sin recurrir al agua ni a las botellas. Este mismo tipo de experiencia es la que se pretende hacer vivir a los alumnos. Lógicamente, salvando las ¿Qué Matemática para la escuela primaria? distancias. Es decir, que puedan, desde el inicio, imaginar que es posible conocer un resultado usando la Matemática. Caso contrario, si el problema puede ser resuelto por medios no matemáticos, se corre el riesgo de hacer perder sentido al trabajo con los números y las operaciones. Por otro lado, si es el docente quien favorece el uso de material concreto, se corre el riesgo de que todos los alumnos desplieguen los mismos procedimientos, invalidando de esta manera la producción de diferentes recursos y una posible interacción entre alumnos que avance en la búsqueda de similitudes y diferencias, en la producción de argumentos para defender su resultado, que inicie el recorrido hacia el establecimiento de estrategias más económicas, pues todos los alumnos habrían trabajado de la misma manera. El siguiente problema tiene por finalidad incluir un nuevo aspecto que forma parte del trabajo matemático. Es seguro que hay ciertas características de los trapecios isósceles que permiten reconocer que con algunos es posible que el centro esté en la base mayor y otros en los que esto no ocurre. Se trata en este problema de establecer condiciones de va­lidez de una cierta relación. Cuándo algo se cumple y cuándo no. Este tipo de tarea, bastante poco frecuente, también forma aparte de la actividad matemática: determinar un dominio de validez de las propiedades. Es decir, poder reconocer y comprobar el cumplimiento de ciertas relaciones intentando que las mismas sean lo más generales posibles. Si bien estas particularidades forman parte de la actividad matemática, no son todas, y no es finalidad de este artículo desarrollarlas. Simplemente tienen la intención de colaborar en identificar que ciertas marcas de la actividad matemática podrían formar parte de uno de los posibles criterios de selección de secuencias, de armado de actividades. Es decir, tener presente que vincular a los alumnos con este modo de hacer nos exige como docentes ser cada vez más conscientes de las selecciones que hacemos. @ Ejemplo 5 Dibujen un trapecio isósceles. Tracen una circunferencia que pase por los cuatro vértices. ¿Bajo qué condiciones la circunferencia tiene el centro en la base mayor de dicho trapecio? BIBLIOGRAFÍA Sadovsky, P. (2005). Enseñar Matemática hoy. Miradas, sentido y desafíos. Buenos Aires: El Zorzal. Una vez más, parte del trabajo implica la exploración, pero con cierta sistematicidad. No se trata de una exploración azarosa. Más bien, si el lector ha intentado resolver el ejemplo, seguramente habrá apelado a buscar en el archivo de la memoria cuáles propiedades podrían poner en funcionamiento para responder. Y muy probablemente haya llegado a un punto próximo a la solución o a la solución misma. 107 entre maestr@s Para la biblioteca ¿Por qué algunas personas piensan que son un desastre para las Matemáticas?, ¿cómo abordar esta asignatura? Algunos libros para cambiar de opinión Jorge Alberto Chona Portillo A menudo, cuando por casualidad nos encontramos con las Matemáticas, volteamos la mirada y nos hacemos los disimulados como si no nos hubiésemos dado cuenta. Pero, eso sí, todos y cada uno de nosotros tenemos recuerdos de nuestras experiencias con esta materia. Muchos de los recuerdos nos sobresaltan y nos llenan de escalofrío, sobre todo, aquellos de la escuela primaria, cuando la maestra escribía operaciones en el pizarrón, tomaba la lista de asistencia y, con el dedo índice, recorría los nombres hasta que escogía a uno, en ese lapso de tiempo sentías que tu cuerpo se enfriaba y, si resultabas ser el elegido, te dirigías tambaleante a resolver las operaciones con un signo de interrogación en la cabeza, mientras la maestra manipulaba la regla de madera o la vara verde recién cortada o el borrador, que no precisamente era para borrar. Después de la secundaria, cuando nos hablaban de Álgebra y de ecuaciones se hacía un enorme silencio y simplemente no sabíamos qué decir respecto a estos temas. Y cuando nos preguntaban: “qué carrera vas a estudiar?”, las respuestas casi siempre eran vagas: “no sé, quizá Historia o Sociología… algo que no tenga mucho que ver con Matemáticas”. Por qué pensar en esta materia como un conjunto de operaciones, de ejercicios, de términos y definiciones dictadas, cuando el mundo de las Matemáticas está lleno de historias asombrosas, de aventuras sin igual, de descubrimientos, enigmas, retos, de teoremas que son una invitación a ejercitar el pensamiento lógico. Ahora bien, lo interesante es, ¿cómo hacemos para que los niños, jóvenes y adultos se acerquen a las Matemáticas no para aprenderse reglas de memoria, sino para disfrutarlas y vivirlas? Aquí van tres libros que pueden ayudar a construir una visión diferente sobre las Matemáticas, para adentrarnos a su mundo, entenderlas y aprender a pensar matemáticamente. @ 108 Aventuras de un duende en el mundo de las matemáticas Carlos Prieto de Castro (2009). Aventuras de un duende en el mundo de las matemáticas. Fondo de Cultura Económica (La ciencia para todos). ¿S erá que las Matemáticas son un mundo lleno de misterio que invita a la aventura? Una historia que atrape nuestra curiosidad en un lenguaje narrativo que introduzca las explicaciones matemáticas, es quizá el mejor anzuelo para quienes no somos especialistas en la materia. Y entonces sí, re­conocer que sólo hay cinco poliedros regulares; estar en contacto con la teoría de nudos o la prueba del teorema de Pitágoras; apasionarnos con el número de Euler; admirar la belleza de los fractales a partir de concebirlos como un concepto geométrico y, sobre todo, aprender a elaborarlos o a reconocerlos en el caleidoscopio; asombrarnos al descubrir las formas del universo y las distintas maneras que se tienen de nombrarlo a partir de los lenguajes de las Matemáticas, etc. La idea es conocer cómo se vislumbra el modo matemático de pensar que permite entender temas propios de otras disciplinas, como el análisis de los calendarios o de los sistemas horarios. Esta es la propuesta que Carlos Prieto de Castro presenta en su libro Aventuras de un duende en el mundo de las matemáticas, publicado por el Fondo de Cultura Económica en la colección La ciencia para todos. @ 109 entre maestr@s Las matemáticas explicadas a mi hija Dennis Guedj (2008). Las matemáticas explicadas a mi hija. Barcelona, Paidós. “P ara empezar, en mates, no sé de qué se habla. Y después, nunca sé cómo enfocar la resolución de un problema, y además nunca he comprendido qué es eso de una de-mos-tra-ción…”. No, no es lo que se imagina, no es la incertidumbre y desasosiego que los maestros presentan al principio de la reforma integral en educación básica, se trata de uno de los diálogos del libro: Las matemáticas explicadas a mi hija. Lola y Ray son los personajes de esta obra, en la que dialogan en un contexto de vida cotidiana sobre un amplio conjunto de preguntas matemáticas, lo que da pie a introducir explicaciones a interrogantes como: ¿qué es un razonamiento, una demostración o un teorema?, ¿qué diferencia hay entre una igualdad, una identidad y una ecuación?, ¿qué diferencia entre el Álgebra y la Aritmética? El propósito de este libro es contribuir a pensar las Matemáticas, su enseñanza y su aprendizaje desde una perspectiva dentro de la cual se puede reconocer que sus lenguajes expresan ideas, resultados o razonamientos. De igual manera, se plantea un camino para mostrar que las Matemáticas son divertidas y también que tenemos derecho a que no nos gusten; pero, al conocerlas de una manera agradable podemos valorar su importancia, comprenderlas y aplicarlas en nuestra vida cotidiana. Las matemáticas explicadas a mi hija, de Dennis Guedj (publicado por Paidós en 2009), es una propuesta para construir explicaciones acerca de las Matemáticas y algunos temas en particular: los números, la Geometría, el Álgebra, puntos y relaciones, los problemas y el razonamiento matemático. @ 110 Para la biblioteca ¿Te acuerdas, Golondrina…? Yoon Yeo-Rim (2007). ¿Te acuerdas, Golondrina…? ilustrado por Kim Ji-Yeon. México: Altea. ¿T e acuerdas, Golondrina…?, es la historia de Cuervo, Cuco, Pinzón, Carpin­tero y Ruiseñor, quienes hicieron un libro para regalárselo a Golondrina, quien debido a la llegada del invierno tendrá que emigrar al Sur. En este libro, cada uno de estos personajes describe pasajes que han vivido junto a Golondrina, con la finalidad de que ella, al regresar en primavera, no se olvide de ellos ni de sus experiencias. Así, a lo largo de las páginas describen a la serpiente de franjas rojas que se comió a la rana de manchas negras; la clasificación de las flores por el número de sus pétalos; la preocupación de todas las aves por la llegada del huracán que soplaba en forma de espiral y de otros animales que tienen esta misma forma en su cuerpo: el camaleón y el caracol, por ejemplo; de cuando Cuco se perdió debido a que todos los robles parecen iguales, y en la última hoja del libro, ¡un bello dibujo de color plata: seis puntas de flecha!, o lo que es lo mismo, un copo de nieve. Así transcurre la historia de Golondrina y sus amigos, en la que curiosamente, a partir de las leyes de la naturaleza, los animales muestran patrones o dibujos simétricos, o bien, la secuencia que se forma a partir de contar los pétalos de las flores: 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34; incluso a partir del canto de las aves, la música se ha nutrido de las Matemáticas; también vemos cómo la simetría tiene que ver con lo artístico en la pintura infantil o cómo se da la repetición de las fases de la luna y los periodos de día en que éstos habrán de realizarse: luna llena, cuarto creciente, mitad de la luna; por si fuera poco, además, sabemos cómo es que las golondrinas, en su peregrinar, se ubican mediante la observación del movimiento del Sol y las estrellas y se dan cuenta del tiempo que ha pasado tan sólo con ver la forma de la luna. Así, algunos términos matemáticos se expresan en la naturaleza a través de una sencilla historia. ¿Te acuerdas, Golondrina…?, de Yoon Yeo-Rim, ilustrado por Kim Ji-Yeon y publicado por Altea. @ 111 El uso de la nueva tecnología en la Enseñanza de las Matemáticas: “Mi ayudante” Auxiliar didáctico de Matemáticas para el maestro de primaria” Francisco Javier Moreno Torres* Redes [email protected] E l acelerado desarrollo y expansión de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, así como su impacto en las diversas tareas sociales, representan una oportunidad para la transformación real de las prácticas educativas. En este contexto y en el marco del proyecto de investigación y desarrollo Mejorar la Enseñanza de las Matemáticas en la Escuela Primaria. Propuestas de Modificación al Libro de Texto Gratuito y un Auxiliar Didáctico para el Maestro surge el paquete de cómputo Mi ayudante, auxiliar didáctico de Matemáticas para el maestro de primaria (http://miayudante.upn. mx), con el fin de ofrecer al maestro elementos que le auxilien en la preparación de las clases de esta materia. Este paquete fue diseñado y elaborado en la Unidad Ajusco de la Universidad Pedagógica Nacional en colaboración con la Sociedad Matemática Mexicana. El desarrollo de este paquete tiene como antecedente la investigación Propósitos y contenidos actuales de la Enseñanza de las Matemáticas en México en el nivel primaria, en el que se analizaron los materiales de la sep dirigidos tanto a los niños como a los maestros, con la información obtenida en dicha investigación se construyó la base de datos con la que opera el paquete. Mi ayudante es un material educativo que se pone al alcance de profesores de primaria, estudiantes de escuelas normales, investigadores y padres de familia para contribuir al mejoramiento de la Enseñanza de las Matemáticas y fomentar la cultura del uso de las tecnologías de la información en el ámbito de la educación. ————————————— * Profesor-investigador de la upn. Realiza su trabajo en el Cuerpo Académico Concepciones y Saberes Matemáticos. 112 El uso de la nueva tecnología en la Enseñanza de las Matemáticas Al usar esta nueva herramienta tecnológica, los profesores de primaria pueden planear de manera más ágil su clase de Matemáticas, lograr una mejor cobertura de los temas curriculares, conocer diversos materiales edu­cativos informáticos y consultar múltiples fuentes de información, además de propiciar su actualización en y para el trabajo en el campo de las Matemáticas y en el de su enseñanza en el marco de la propuesta pedagógica vigente desde 1993. El paquete Mi ayudante se ha ido actualizando desde el ciclo escolar 2002-2003, y en su última versión contiene casi en su totalidad la parte correspondiente a Matemáticas de los materiales de distribución gratuita que la Secretaría de Educación Pública emitió para el ciclo escolar 2007-2008: el libro de texto gratuito para los niños, el libro para el maestro, el fichero de actividades didácticas y los programas. Mi ayudante presenta un análisis de estos materiales y sus relaciones. Además, se han agregado juegos, herramientas, actividades y sugerencias, no incluidos en dichos materiales, que pueden ser útiles para el maestro en el desarrollo de su trabajo cotidiano. Uno de los grandes logros de este paquete fue conseguir que la parte técnica (plataforma, manejadores de bases de datos, etc) fuera la más adecuada para satisfacer de manera eficiente las características definidas en el contenido de las consultas, que tenían que ser congruentes con el currículo escolar y, además, permitir la capacitación continua de los maestros a través de un rápido acceso y fácil manejo. Este paquete fue elaborado con tecnología de punta. La versión para Internet de Mi ayudante se desarrolló sobre el sistema operativo Linux y funciona internamente con una base de datos en MySQL y programas en html, php y java script. La base de datos trabaja con 33 tablas relacionadas entre sí que contienen el análisis realizado a los materiales ya mencionados de Matemáticas para la educación primaria, las traducciones de los códigos que se utilizan en éstas y las referencias a documentos, herramientas y actividades que se han elaborado para esta página, para las cuales también se utilizó software libre. 113 En este escrito se presenta la experiencia del uso de la herramienta tecnológica Mi ayudante como un material educativo que busca contribuir en la mejora de la Enseñanza de las Matemáticas en la escuela primaria. Profesores, investigadores y padres de familia encuentran en el sitio Web de esta herramienta contenidos matemáticos, sugerencias didácticas, libros de texto de primaria y otros textos con temas de Matemáticas, juegos y ligas sobre el tema. Se fomenta la cultura del uso de las tecnologías de la información en la educación, además de ser un espacio para la actualización de docentes en zonas rurales del país. Palabras clave: Mi ayudante, material educativo, Matemáticas, enseñanza, docentes, educación primaria. u u u u u This paper presents the experience offered by the technological tool Mi ayudante (My assistant) as an educational material which looks for helping to improve mathematics teaching in primary school. Teachers, researchers and parents can find in this web-site: mathematical content, didactic suggestions, primary text books and other books with mathematical topics, games and links on the subject. It promotes the culture of using computer-science technology in education, as well as being a space for actualizing knowledge to teachers from rural areas of our country. entre maestr@s Herramientas para maestros Para actualizar el sitio Web conformado aproximadamente por 15,000 páginas, se cuenta con un complejo sistema de corrección en línea sobre una copia de la página que permite ver los cambios realizados antes de publicarlos; esto ha permitido su actualización permanente con la incorporación de los materiales que distribuye la sep cada año escolar, la integración al paquete de nuevos juegos y actividades, nuevos documentos de interés y sitios de Internet. Mi ayudante contiene siete consultas por grado más una consulta de juegos y actividades en lengua triqui. En estas consultas por grado se presentan: Ligas a sitios de Internet • Los contenidos matemáticos y las habilidades que se pretenden desarrollan al realizar las ac­tividades del Libro de texto, Fichero de Actividades y Programa. • Sugerencias sobre cómo asociar las lecciones y las fichas. • Textos del libro para el maestro sobre el tratamiento didáctico del eje temático que se aborda. • Actividades, juegos y textos adicionales que apoyan la actualización de los maestros y ligas a sitios de interés en Internet. Documentos que se han seleccionado o construido específicamente para apoyar el trabajo de los maestros. Mi ayudante aporta recursos didácticos para los maestros, por ejemplo: Juegos interactivos 114 El uso de la nueva tecnología en la Enseñanza de las Matemáticas Mi ayudante permite, a partir del programa, ubicar los materiales en los que se abordan los distintos contenidos, lo que facilita la planeación de los cursos. El uso de esta página por parte de los maestros se ha incrementado a través de los años de forma impor­tante, por ejemplo, en 2003 se realizaron 20,071 visitas mientras que en 2006 se hicieron 226,306; de 358,700 páginas vistas en 2003 se registraron 1,430,296 en 2006, y para 2008 tuvimos 5,089,037. Datos anuales 2003 2004 Visitas 20,071 62,589 Visitantes distintos 12,486 Páginas Promedio de páginas 2005 2006 2007 2008 98,834 226,306 499,083 572,434 44,890 75,789 186,703 401,878 430,474 358,700 506,691 1,140,857 1,430,296 3,532,433 5,089,037 983 1,388 3,125 3,973 9,677 13942 por día Se han capacitado directamente a más de 2,500 maestros, particularmente, en zonas rurales de Oaxaca y en zonas marginales de la Ciudad de México. En el contacto con los maestros durante el desarrollo de los talleres y en los comentarios que se envían al sitio, hemos podido corroborar el interés que tienen los docentes en el paquete Mi ayudante, por considerarlo un gran apoyo para su labor en distintos ámbitos, en especial para la atención a los maestros de grupo multigrado, de educación indígena, de niños migrantes y de zonas marginales de las ciudades. En la actualidad, frente a los cambios curriculares propuestos por la sep para la educación básica, estamos a la espera de la concreción de la propuesta y la distribución de los nuevos materiales de Matemáticas para incorporarlos a Mi ayudante y de este modo actualizar los comentarios y materiales pertinentes. @ 115 entre maestr@s Cartas del lector Y o soy una lectora de la revista entre maestr@s. Para mí, esta publicación ha sido un espacio en el que he conocido experiencias de docentes de educación básica, sus temores, sus preocupaciones, sus logros. Me ha gustado la manera sencilla en que dan a conocer sus experiencias didácticas, las cuales han favorecido el desarrollo de estrategias de lectura y escritura en los niños, desde sus diferentes contextos socioculturales. Es interesante leer en cada uno de los artículos cómo los maestros narran la manera de llevar a cabo su práctica docente, de forma que el niño sea el actor principal del proceso educativo. Esta es una revista elaborada para quienes estamos interesados en la educación porque nos proporciona en cada una de estas experiencias elementos para ayudar a los niños a formarse como lectores y productores de textos auténticos en situaciones reales de uso, permitiendo que construyan significados propios. Felicito a los que están a cargo de elaborar esta revista por darnos a conocer los acontecimientos que son significativos y relevantes para cada uno de los maestros, quienes aportan diversas visiones de lo que es la escuela, lo cual es muy rico para quienes en un futuro cercano seremos pedagogas. @ Miriam Valderrábano Pérez Pasante de la Licenciatura de Pedagogía en la upn-Ajusco 116 PROPÓSITOS Intercambiar experiencias docentes de innovación e investigación en el campo de la enseñanza de la lengua escrita en los distintos niveles de formación, a fin de contribuir a la construcción de saberes pedagógicos. Socializar el conocimiento y fortalecer los saberes y las prácticas pedagógicas derivadas de los proyectos y/o experiencias pedagógicas de las redes de profesores y formadores de docentes. Dialogar y avanzar sobre los principios orientadores de las redes participantes de América Latina para la transformación de las prácticas de enseñanza de la lectura y la escritura y la formación docente en lenguaje. PARTICIPANTES Los protagonistas serán los profesores y los formadores de docentes integrantes de las distintas redes, así como otros profesionales vinculados al campo de la enseñanza, la investigación y la promoción de la cultura oral y escrita, cuyos trabajos contribuyan a los procesos de transformación de las prácticas pedagógicas. Para la presentación documental de las experiencias, se puede elegir alguna de las siguientes opciones: • Ponencia y • Relatos escritos en un lenguaje narrativo. RECEPCIÓN Y ENVÍO DE TRABAJOS Y PROPUESTAS DE TALLERES Fecha límite de recepción de trabajos: 15 de octubre de 2009. Enviar los trabajos a las siguientes direcciones electrónicas: Roberto Pulido Ochoa: [email protected] / [email protected] Carmen Ruiz Nakasone: [email protected] / [email protected] TELÉFONO Y FAX (01 55) 5630 9700, ext. 1343 (Lada Nacional) (00 52) (55) 5630 9700, ext. 1343 (Lada Internacional) LUGAR Universidad Pedagógica Nacional Unidad 201, Xoxocotlán, Oaxaca, México. 117 REVISTA ARBITRADA POR SISTEMA DOBLE CIEGO E INDIZADA NACIONAL E INTERNACIONALMENTE NORMAS DE ARBITRAJE • Los artículos para la publicación de la revista entre maestr@s serán sometidos al dictamen de un cuerpo de árbitros. • El Consejo Editor efectuará una preselección de los artículos recibidos, tomando como base los siguientes criterios: vinculación con el eje temático del número de la revista considerada, relevancia del tema, planteamiento claramente expresado de la tesis o del objetivo central, respaldo teórico o de in­vestigación, ajuste a las normas para autores. • Si el Consejo Editor lo considera pertinente hará uso del “juicio de experto”, a fin de estimar el aporte al tema y la novedad del mismo con miras al arbitraje correspondiente. • Después de la preselección, someterá los trabajos enviados para su publicación a la revisión crítica de tres árbitros, para lo cual se utilizará el sistema doble ciego. • El dictamen del arbitraje se basará en la calidad del contenido, su impecable expresión escrita, lo novedo­so del aporte al tema tratado, el cumplimiento de las normas para los autores y la presentación del material. • Los árbitros considerarán para su evaluación: cla­­­­ ridad en el planteamiento de la tesis y objetivo central, ubicación explícita del enfoque en el de­bate correspondiente, relevancia del tema, contribución al área de estudio, fundamentación de los supuestos, nivel de elaboración teórica y/o metodológica, apoyo empírico, bibliográfico y/o de fuentes primarias, consistencia del discurso, manejo del lenguaje, precisión, claridad, concisión de los términos utilizados, adecuación del título al contenido del trabajo, capacidad de síntesis manifiesta en el resumen, aplicabilidad, bibliografía actualizada, entre otros. • Los árbitros deben contar con las calificaciones ade­cuadas en el área temática en cuestión y formar parte del banco de árbitros de la revista según sus respectivas especialidades, el cual ha sido levantado en distintas universidades del país y del exterior. • El informe del arbitraje concluirá con recomendaciones pertinentes a la publicación o no publicación del artículo en cuestión, para ello se valdrá de las siguientes categorías: I)ACEPTADO, cuando según el criterio del ár­bi­tro, el contenido, estilo, redacción, citas, referencias, evidencian relevancia del trabajo y un adecuado manejo por parte del autor, como corresponde a los criterios de excelencia editorial de la revista entre maestr@s. II)DEVUELTO PARA REVISIÓN, cuando a pe­sar de abordar un tema de actualidad e in­terés para la revista y evidenciar adecuado manejo de contenidos por parte del autor(es), se encuentren en el texto deficiencias superables en la redacción y estilo. III)RECHAZADO, cuando según el juicio de los árbitros el texto no se refiera a un tema de interés de la revista entre maestr@s o evidencie serias carencias en el manejo de contenidos por parte del autor, y en la redacción y/o estilo necesarios para optar a la publicación en una revista arbitrada. • En el caso del Consejo Editor, una vez recopilado el dictamen de los árbitros, se comunicará con el autor a fin de que éste haga los ajustes correspondientes. Para ello dispondrá de una semana para el reenvío final. • Una vez que los textos hayan sido aprobados para su publicación, la revista se reserva el derecho de hacer las correcciones de estilo que considere convenientes. Siempre que sea posible, esas correcciones serán consultadas con los autores. 118 Suscríbete a ENTRE MAESTR@S Números publicados: 1 al 28 Revista para maestros de educación básica (Llene este formato y envíelo por fax o correo electrónico. Anexe copia de la ficha de depósito) Nombre_________________________________________________ RFC__________________________________________ Institución _______________________________________________ Departamento__________________________________ Domicilio de entrega _______________________________________ Número exterior__________ Número interior_________ Colonia o barrio __________________________________________ Delegación o Municipio __________________________ Ciudad y Estado __________________________________________ CP ____________________ País __________________ Teléfono _____________________ Fax _______________________ Correo electrónico______________ Suscripción a partir del número:__________ Costo anual por 4 números República Mexicana: 140 pesos (incluye gastos de envío). En el extranjero: 40 usa dlls. (incluye gastos de envío). Depósito bancario a la cuenta 4029395407, sucursal 3016 del Banco hsbc, a nombre de la Universidad Pedagógica Nacional. Informes en: Fomento Editorial. Dirección de Difusión y Extensión Universitaria. Universidad Pedagógica Nacional. Carretera al Ajusco núm. 24, col. Héroes de Padierna, CP 14200, México, DF. Tels. (01 55) 56 30 97 37 directo y fax 56 30 97 00, exts. 1311 y 1780. Correo: [email protected] • [email protected] • [email protected] Suscríbete a ENTRE MAESTR@S Números publicados: 1 al 28 Revista para maestros de educación básica (Llene este formato y envíelo por fax o correo electrónico. Anexe copia de la ficha de depósito) Nombre_________________________________________________ RFC__________________________________________ Institución _______________________________________________ Departamento__________________________________ Domicilio de entrega _______________________________________ Número exterior__________ Número interior_________ Colonia o barrio __________________________________________ Delegación o Municipio __________________________ Ciudad y Estado __________________________________________ C.P. ____________________ País __________________ Teléfono _____________________ Fax _______________________ Correo electrónico______________ Suscripción a partir del número:__________ Costo anual por 4 números República Mexicana: 140 pesos (incluye gastos de envío). En el extranjero: 40 usa dlls. (incluye gastos de envío). Depósito bancario a la cuenta 4029395407, sucursal 3016 del Banco hsbc, a nombre de la Universidad Pedagógica Nacional. 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Anexe copia de la ficha de depósito) Nombre_________________________________________________ RFC__________________________________________ Institución _______________________________________________ Departamento__________________________________ Domicilio de entrega _______________________________________ Número exterior__________ Número interior_________ Colonia o barrio __________________________________________ Delegación o Municipio __________________________ Ciudad y Estado __________________________________________ C.P. ____________________ País __________________ Teléfono _____________________ Fax _______________________ Correo electrónico______________ Suscripción a partir del número:__________ Costo anual por 4 números República Mexicana: 140 pesos (incluye gastos de envío). En el extranjero: 40 usa dlls. (incluye gastos de envío). Depósito bancario a la cuenta 4029395407, sucursal 3016 del Banco hsbc, a nombre de la Universidad Pedagógica Nacional. Informes en: Fomento Editorial. Dirección de Difusión y Extensión Universitaria. Universidad Pedagógica Nacional. Carretera al Ajusco núm. 24, col. Héroes de Padierna, CP 14200, México, DF. Tels. (01 55) 56 30 97 37 directo y fax 56 30 97 00, exts. 1311 y 1780. Correo: [email protected] • [email protected] • [email protected] de educación primaria: una experiencia con el uso de Enciclomedia* Yolanda Chávez Ruiz** [email protected] Enciclomedia surgió como un programa cuyo propósito es proporcionar a maestros y alumnos diferentes recursos para apoyar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Los usos que los profesores dan a Enciclomedia en la clase de Matemáticas es muy variado (Chávez, 2006) y se relacionan con tres cosas: a) sus concepciones de aprendizaje y enseñanza, b) el conocimiento y dominio que tienen del contenido matemático que se aborda y c) la familiaridad y habilidad para manejar la computadora. De acuerdo con esto, podemos decir que Enciclomedia no altera las concepciones de los maestros, sino que se adapta a ellas y a las formas de enseñanza que implementan habitualmente los docentes. A partir de la entrada de Enciclomedia a las aulas de 5° y 6°, en varias escuelas primarias se acordó que los equipos instalados podrían ser utilizados por alumnos y profesores de otros grados como una forma de que todos tuvieran acceso a éstos. Los diversos recursos que tiene Enciclomedia se pueden utilizar para cualquiera de los grados escolares, siempre y cuando el profesor logre una interacción y mediación de este recurso que permita enriquecer las experiencias de aprendizaje de los alumnos. En esta ocasión, se presenta una secuencia sobre el tema de la división para alumnos que están finalizando el tercer año. La secuencia didáctica consta de tres fases: • En la fase inicial se intenta averiguar lo que saben los alumnos acerca del tema, así como los usos que le dan a ciertos conocimientos que son necesarios para el desarrollo de procedimientos que implican dividir. • En la fase de desarrollo de la tarea se les plantea a los niños, organizados por equipos, una situación problemática que implique división. * Se agradece a la profesora Noemí Rodríguez Muratalla y a sus alumnos de tercer grado de la escuela “Tlamatini” por el desarrollo de esta actividad; a Diana Violeta Solares por su contribución para el diseño de esta sección y a Alejandro Maravilla por las aportaciones para la elaboración de la presente secuencia. ** Profesora normalista. Asesora en Centros de Maestros. Estudiante de Posgrado en el Cinvestav. I Para practicar La división en tercer año entre maestr@s • En la fase de cierre se exponen los diversos procedimientos que los equipos llevan a cabo para resolver la problemática planteada y se concluye con el uso de un convencionalismo (el algoritmo de la división). Además de presentar las actividades que conforman cada fase, se intercalan también breves comentarios sobre lo que hicieron algunos alumnos de un grupo de tercer grado en el que se implementó la secuencia; esos comentarios tienen la finalidad de que el maestro pueda anticipar posibles respuestas y errores de sus alumnos en caso de que se anime a llevar a cabo estas actividades. La división en el tercer grado de primaria Cuando somos profesores de educación primaria y terminamos un ciclo escolar con tercer año, muchas veces comentamos con un aire de satisfacción entre nuestros compañeros de grado: “mis niños ya saben dividir”. Esta frase tan contundente puede ser parte de una preocupación legítima, pues si al inicio del ciclo escolar le preguntáramos a un maestro, qué esperaría que sus alumnos aprendieran de Matemáticas durante el tercer grado de primaria, muy probablemente, entre la gama de respuestas que tal maestro podría dar a dicha pregunta, se incluiría el que aprendan a dividir. Lo anterior se justifica en buena parte porque el Plan y Programas de Estudio de 1993 señalan lo siguiente para tercer grado respecto a este tema: • Planteamiento y resolución de diversos problemas de división, con números hasta de tres cifras mediante procedimientos no convencionales. • Algoritmo de la división con números de dos cifras entre una cifra. Fase inicial Indagar sobre lo que los niños saben antes de iniciar una tarea, nos permite adaptar las actividades y dirigir las preguntas que se formulen para ayudarles a consolidar los conceptos matemáticos que se están trabajando. Para el momento en que los alumnos se enfrentan a la división, muy probablemente ya saben resolver problemas de suma, de resta y de multiplicación, así es que si lo que intentamos es acercar a los alumnos al conocimiento de la división y les planteamos un problema que implique dividir, seguramente lo resolverán utilizando algunas de las herramientas que ya poseen (sumas, restas o multiplicaciones) o que han utilizado en algún otro contexto. Se aplicó esta secuencia en un grupo de tercer grado durante los últimos días del mes de junio del ciclo escolar 2008-2009, por lo que los alumnos ya habían resuelto algunos problemas de división y, sobre todo, ya se habían enfrentado al algoritmo de la división resolviendo de manera cotidiana lo que comúnmente llamamos mecanizaciones, como la siguiente: 1 2 8 98 1 8 2 II La división en tercer año de educación primaria: una experiencia con el uso de Enciclomedia El propósito de esta primera fase es averiguar qué conocimientos utilizan los alumnos al participar en el juego interactivo denominado “La pulga y las trampas” que se encuentra en Enciclomedia,1 ya que, cómo se mencionó anteriormente, en el tercer grado los alumnos tienen conocimiento de la suma, resta y multiplicación, por lo que este interactivo nos permitirá indagar sobre el uso que le dan a estos conocimientos. Algunos maestros han aplicado con sus alumnos el juego de “La pulga y las trampas” 2 tiempo atrás utilizando únicamente lápiz y papel; ahora con el uso de las Nuevas Tecnologías de la Comunicación (tic), Enciclomedia ha incorporado este juego en una presentación que incluye sonidos, movimiento y un diseño atractivo para los niños, además de que les ofrece una retroalimentación inmediata. La pulga y las trampas El propósito de este juego es evitar que la pulga caiga en una de las trampas que se colocan de manera automática en este interactivo de Enciclomedia y también tiene la posibilidad de que las trampas sean colocadas por los participantes en algún lugar estratégico. Para evitar que la pulga caiga en las trampas, se tiene que decidir de qué tamaño serán los saltos, estos saltos tendrán que ser del mismo tamaño, por ejemplo, si los niños escogen saltos de 4 la pulga saltará del 0 al 4, 8, 12, 16, 20 y así sucesivamente. Si se elige ser el trampero (el que pone las trampas) entonces se tendrá que ser muy hábil para colocar las trampas en algún lugar donde pueda caer la pulga del equipo contrincante. Se puede jugar en equipos o contra la computadora. Organización del grupo Al iniciar con este juego, el grupo se divide en dos equipos, con la finalidad de que se pongan de acuerdo entre los integrantes de cada uno sobre el tamaño de los saltos de la pulga, a cada niño le corresponde indicar el tamaño de los saltos (introduciendo el tamaño de los saltos con el teclado o directamente en el pizarrón, sí éste es interactivo) y hacer clic en el pizarrón interactivo para que la pulga salte, de esta manera todos los integrantes de los equipos participan de manera activa. 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 En este caso, las trampas están en los números 11 y 16, los niños que saben multiplicar podrán identificar que con la serie del 3 la pulga evade sin problemas las trampas, así que en Enciclomedia se Para acceder al recurso en la página principal de Enciclomedia (sitio del alumno) se hace clic donde está la liga para la ventana de Búsqueda avanzada, una vez en esta sección se escribe en el recuadro Concepto la frase “La pulga y las trampas” y se anota una √ en el cuadro que se encuentra al lado izquierdo del tipo de recurso Actividades y se hace clic en el icono Realizar búsqueda, después de unos momentos aparecerá el nombre del recurso que es también una liga a éste; al hacer doble clic a dicha liga el recurso se abre después de unos segundos. Ya en este interactivo podemos leer las instrucciones e iniciar el juego. 2 Este juego forma parte de las propuestas para divertirse y trabajar en el aula editados por los Libros del Rincón de la se p en 1991: Fuenlabrada, I., D. Block, H. Balbuena, A. Carvajal (1991) Juega y aprende matemáticas, México, se p . 1 III entre maestr@s indica que la pulga dé saltos de 3, aunque también pueden poner otras series para evadir las trampas. Cuando el equipo se encarga de poner las trampas, es decir, cuando les corresponde ser los tramperos los niños eligen números que estén en dos o más series, por lo que con esta estrategia se favorece el desarrollo de las nociones de múltiplo y divisor. Fase de desarrollo de la tarea Propósito Que los alumnos resuelvan una situación problemática en la que pongan en juego la noción de división. Materiales 54 palillos para cada equipo. Organización del grupo Cada grupo está formado por cuatro niños. A cada equipo se le entregan 54 palillos y se da la siguiente consigna: Con los 54 palillos vamos a formar figuras de seis lados, considerando que cada uno de los lados es un palillo, ¿cuántas figuras de 6 lados podemos formar con los 54 palillos? En el grupo en el que se realizó esta secuencia, los niños se dieron a la tarea de construir sus figuras. Algunos equipos, antes de concluir esta tarea, expresaron la siguiente respuesta: con 54 palillos podemos formar 9 figuras de 6 lados cada una. A los equipos se les solicitó que mencionaran el procedimiento que utilizaron: • “Nosotros multiplicamos 9 x 6, nos dio 54. Entonces hicimos 9 figuras”. • “Nosotros hicimos figuras y nos alcanzó para 9”. • “Multiplicamos 6 x 9”. Hasta este momento, a pesar de que los niños ya se habían enfrentado al algoritmo de la división y habían resuelto problemas de reparto, no tuvieron la necesidad de utilizar estos conocimientos, por lo que usaron otras herramientas como el conteo, suma y multiplicación para resolver la tarea planteada. Para “obligarlos” a utilizar otras herramientas, se les planteó la siguiente consigna: Si queremos hacer figuras de 12 palillos cada una, con esos 54 palillos que tenemos en la mesa, ¿cuántas figuras podríamos hacer? IV La división en tercer año de educación primaria: una experiencia con el uso de Enciclomedia En este caso, se les pidió que anotaran en su cuaderno los procedimientos que consideraran que los llevaría a la respuesta correcta, siempre y cuando trabajaran todos los miembros del equipo y estuvieran de acuerdo en la respuesta. En este momento, los equipos utilizaron diferentes procedimientos, ya que aumentó el grado de dificultad de la tarea propuesta: • “Multiplicamos 12 x 54”. • “Agrupando 4 conjuntos de 12 palillos y comprobando con una multiplicación, agregando los faltantes: formamos 4 figuras con 48 palillos y nos sobraron 6”. • “Multiplicamos 4 x 12 y nos dio 48 y nos sobraron 2 palillos”. • “Hicimos figuras, nos salieron 4 y nos sobraron 6 palillos”. Al realizar la operación en su cuaderno anotaron: 3 4 1 2 Este último equipo sí percibe que lo que anotaron como división y las 4 figuras que resultaron con sus 6 sobrantes no corresponde con la operación que realmente realizaron; sin embargo, no pueden expresar la división en los términos correctos. En esta fase se observa que los equipos realizan diferentes procedimientos. Los equipos tratan de resolver la tarea propuesta y se les pide que anoten en el cuaderno el procedimiento utilizado sin cuestionar hasta este momento si son o no correctos los resultados. Fase final o de cierre En la fase final se hicieron públicos los procedimientos y resultados (es decir se anotaron en el notebook del pizarrón interactivo del equipo Enciclomedia) de la tarea realizada por cada uno de los equipos. Cada uno de los equipos explicó el procedimiento utilizado y argumentó su resultado. Al tener todos los procedimientos se lanzó la siguiente pregunta a todo el grupo: Los procedimientos son diferentes y también los resultados, ¿cuál de todos es el resultado correcto? V entre maestr@s Después de varias intervenciones de muchos alumnos, en grupo se concluyó que el equipo que realizó agrupamientos de 12 y obtuvo 6 sobrantes fue el que obtuvo el resultado correcto. Al llegar a esta conclusión se les planteó la siguiente pregunta: Con los argumentos de varios alumnos se llegó a la siguiente conclusión: Cuando de manera grupal expresan una forma de escritura de la división ya familiar para ellos, pueden identificar con mucha claridad lo que cada número representa, ¡la división adquiere significado! Los alumnos expresaron lo siguiente: Al llegar a este tipo de convención como actividad final, los equipos que tuvieron errores en sus procedimientos o resultados los identificaron y corrigieron. Esta conclusión permite que los niños aprueben o descarten sus hipótesis iniciales, identifiquen y corrijan errores, analicen procedimientos correctos; todo esto los conducirá a un aprendizaje con algún significado. En este caso, el significado que los niños dieron a esta operación está totalmente ligado con el problema que se indicó en la tarea. Las diferentes experiencias acumuladas cuando los niños resuelven este tipo de problemas les permite construir o acercarse al conocimiento de la división. Como actividad que permite poner en juego algunos conocimientos utilizados en esta situación didáctica se llevó a cabo el juego Carrera a 20. • “El 54 son todos los palillos que teníamos”. • “El 12 son los palillos que podíamos utilizar en cada figura”. • “El 4 son las figuras que podemos hacer”. • “El 48 son los palillos que utilizamos para hacer las 4 figuras”. • “El 6 son los palillos que nos sobraron”. Carrera a 20 Para ganar en este juego, tienes que llegar al número meta antes que tu contrincante (que puede ser un amigo o la computadora). Para llegar a ese número, los jugadores deben elegir sumar 1 o sumar 2 al resultado que va obteniendo el contrario. En el nivel fácil, la ¿Con qué operación podemos expresar el procedimiento con su resultado correcto? VI La división en tercer año de educación primaria: una experiencia con el uso de Enciclomedia los niños pueden utilizar la resta, la multiplicación, y cuando logran describir la estrategia ganadora, pueden llegar a utilizar la división. meta es el 10 y en los niveles intermedio y difícil, puedes elegir entre jugar a 20 o jugar a 21. Además, en el nivel difícil tienes la opción de sumar 1, 2 o 3. Para acceder al juego a partir de Enciclomedia, una de las opciones puede darse a partir de Búsqueda avanzada, en el espacio de Concepto se escribe “Carrera a 20” y se pone una √ en el cuadro actividades y, por último, se hace clic en Buscar, y después de un momento el recurso se despliega en la pantalla. Tarea para casa Propósito Que los alumnos identifiquen relaciones entre los elementos del algoritmo de la división. Se propusieron 3 divisiones en las que se ocultó el divisor, con la finalidad de que los niños identifiquen algunas propiedades de la división y reflexionen sobre el significado de sus diferentes componentes. Propósito Que los alumnos descubran las estrategias que permiten ganar el juego, al tiempo que sus ideas, las ponen a prueba y las corrigen. Organización del grupo El grupo se organiza en dos equipos y por turnos pasa un integrante de cada equipo que jugará de acuerdo con las estrategias que se comentan en su equipo. Cuando los niños comienzan a jugar, utilizan la suma con los números 1 y 2; cuando se introducen nuevas dificultades (el interactivo tiene niveles de dificultad desde el sencillo (“Carrera a 10” hasta el difícil “Carrera a 30”) 1 2 8 2 4 4 1 3 9 2 0 7 Uso de Enciclomedia Cuando los profesores utilizamos recursos en clase para facilitar la adquisición de los conocimientos puestos en juego, generalmente pensamos en su pertinencia para lograr lo que nos hemos propuesto, es decir, imaginamos “a futuro” distintos escenarios de lo que podría ocurrir al utilizar dicho recurso. VII entre maestr@s Los recursos de Enciclomedia pueden tener diferentes “efectos” si los utilizamos al inicio, durante el desarrollo o para el cierre de una clase, lo importante es tener claro lo que pretendemos lograr y tomar decisiones adecuadas para sacarles el máximo provecho. En esta secuencia didáctica, uno de los recursos de Enciclomedia (“La pulga y las trampas”) permitió en una primera fase identificar los saberes previos de los alumnos considerando estos saberes como los conocimientos que los niños construyen no sólo en la escuela, sino en casa o en diferentes contextos, pero que serán un antecedente útil que le permitirá a los niños construir otros conocimientos. En la fase final, otro recurso de Enciclomedia (“Carrera a 20”) permitió utilizar los conocimientos adquiridos para elaborar estrategias exitosas y lograr ganar el juego. Además se utilizó el Block de notas como un pizarrón para anotar los diferentes procedimientos de los alumnos y llegar a la convención que permitió hacer un cierre de la situación didáctica. Bibliografía Chávez, Y. (2006). Enciclomedia en la clase de matemáticas. Tesis de maestría. México: up n. Fuenlabrada, I.; Block, D.; Balbuena, H. y Carvajal, A. (1991). Juega y aprende matemáticas. México: se p . se p (1993). Plan y programas de Estudio. Educación Primaria. Matemáticas. México: se p . VIII Guía para autores entre maestr@s es una publicación trimestral de la Universidad Pedagógica Nacional. Sus autores son fundamentalmente maestras y maestros de educación básica, los acompañan especialistas ocupados en temas que in­volucran los ámbitos de educación preescolar, primaria y secundaria; las producciones de las niñas, los niños y los jóvenes son contribuciones relevantes para las páginas de la revista. Los temas Los temas de los artículos que aquí se presentan tienen la intención de recuperar la complejidad del aula y de la es­­cuela, de problematizarla, de descubrir y dar a conocer acontecimientos relevantes y significativos para las maestras y maestros de educación preescolar, primaria y secundaria, desde su contexto sociocultural. Características de los textos publicables: 1. Las colaboraciones deben ser experiencias inéditas de investigación, innovación o animación pedagógicas desde y/o sobre la práctica docente, reflexiones, análisis, ensayos, etcétera, acerca de la educación básica y la formación de maestros. 2. Los textos han de ser breves, máximo doce cuartillas para las secciones Desde el aula, Para el Consejo Técnico y Hojas de papel que vuelan; para las otras secciones se recibirán máximo cinco cuartillas. En el caso de Para la Biblioteca y Aprendiendo a través del cine serán máximo dos cuartillas 3. Los trabajos deben acompañarse de: a) Portada que indique: título del texto (no mayor de ocho palabras), nombre del autor. b) Datos generales del autor (notas curriculares, cen­tro de adscripción o lugar donde labora, dirección del centro de trabajo y/o particular, teléfono del centro de trabajo y/o particular, correo electrónico). 4. Los originales habrán de presentarse: a) Procesados en computadora. El autor deberá entregar un disquete (en procesador de palabras Word de Microsoft) que indique título, autor y todos los seña­­la­mientos del caso para su lectura, y una copia im­presa del mismo trabajo en altas y bajas (mayúsculas y mi­núsculas). b) Sin cortes de palabras (eliminar los guiones a fin de renglón). c) Cuartilla holandesa: 28 renglones de 60-65 golpes. Justificación izquierda (sin justificación derecha). d) Legibles, sin marcas, añadidos o modifica­ciones al margen. e) Tabla de abreviaturas o siglas al final del texto. f ) En caso de citar repetidamente una obra utilizar las locuciones: idem, ibidem u op. cit., según sea el caso. g) Los criterios para anotar la bibliografía: nombre de los autores (empezando por los apellidos), luego coma, luego el nombre, luego coma (cuando haya más de un autor, el segundo empieza con el nombre y luego los apellidos –separados los autores con y–; cuando haya más de tres, se pone el primero y luego et al.). Si se menciona el capítulo de un libro o artículo de una revista, aparecerá entre comillas, luego irá coma y el término “en”. El título del libro o revista en cursivas (itálicas), luego coma. Número de edición (excepto si es la primera), luego coma (se usará ed.). Lugar de publicación, luego coma. Editorial o institución que lo (la) produjo, luego coma. Año de publicación, lue­go coma. Páginas (se usará por ejemplo p. 386.), luego punto final. h) Las fotografías, gráficas e ilustraciones que acompañen al texto deben ser de alta ca­li­dad y contraste adecuado, con el pie o referencia pertinente, e indicar dentro del texto el lugar donde deben incluirse. Es importante que los autores aporten ilustraciones o fotografías suceptibles de ser utilizadas como complemento informativo. En cualquier caso, es indispensable que el autor informe si las imágenes enviadas requieren recibir algún crédito o si requieren de algún permiso para su publicación. Todas las imágenes utilizadas deberán manejarse en formato EPS, TIF o JPG con una resolución mínima de 300 dpi (deben pesar más de 700 kb). Favor de no insertar imágenes en archivos Word porque se pierde calidad. i) Palabras, frases o señalamientos especiales en cursivas (itálicas). j) En el caso de reseñas o presentación de libros o revistas, acompañar el texto con una fotografía o un archivo digital de calidad de la portada del volumen que se trate. 5. Los autores pueden dirigirse para la entrega de sus trabajos a la siguiente dirección electrónica: [email protected] Indicaciones generales: Una vez aceptado el texto para su publicación no se admitirá modificación alguna al original. Se entregarán al autor tres (3) ejemplares del número de entre maestr@s en que sea publicado su texto. El autor es el único responsable de la veracidad y honestidad de los contenidos de su trabajo. A petición escrita del autor se devuelven por correo los originales de los trabajos no publicados. Los textos incluidos en entre maestr@s pueden ser publicados en otro órgano editorial, previo permiso expreso por escrito y haciendo referencia explícita de la fuente. Aprendiendo a través del cine NI UNO MENOS Un pretexto para descubrir con otra mirada el mundo de las Matemáticas Wei Minzhi, de trece años de edad, tiene que hacerse cargo de una pequeña escuela rural, mientras el maestro titular va a visitar a su madre enferma. La joven Wei tendrá que educar a los alumnos durante un mes y no permitir que ninguno abandone el grupo, pues el número de niños que desertan es muy alto: “ni uno menos”, advierte el maestro Gao a Wei; si logra este objetivo percibirá el salario del maestro. Los problemas de esta adolescente comienzan cuando Zang, un estudiante conflictivo, tiene que dejar la escuela e ir a la ciudad a conseguir dinero para pagar las deudas de su familia. La novel maestra se lanza a la búsqueda de su pequeño alumno que se ha extraviado en la urbe, lo cual la obliga a ella y a sus estudiantes a buscar los medios económicos que les permitan financiar tal viaje, cosa nada fácil ante las condiciones tan precarias en las que se encuentran. Es en esta parte de la historia en la que sugerimos poner particular atención, pues maestra y alumnos se ven obligados a hacer cálculos matemáticos para saber cuánto tiempo tendrían que trabajar en una fábrica de ladrillos para obtener el dinero que necesitan. Los alumnos tienen que utilizar todos sus conocimientos y recursos matemáticos para poder hacer sus cálculos; comparan resultados, discuten la validez de los mismos, proponen, prueban y, finalmente, con base en la actividad matemática desplegada en el salón de clases, toman decisiones. A partir de este extraordinario filme invitamos a los profesores a reflexionar sobre la posibilidad y las condiciones didácticas necesarias para que incluso los problemas de los libros de texto y otras actividades que pudieran caracterizarse como “típicamente escolares”, generen retos interesantes, apasionantes, no sólo para los alumnos, sino para los mismos maestros pues, a final de cuentas, ambos comparten un mismo espacio, ambos dejan marcas que escriben la historia colectiva de un salón de clases. Diana Violeta Solares Pineda Director: Zhang Yimou Año: 1999 País: China Duración:106 min.