«Crimson Peak» Sir Thomas Sharpe, encarnado por Tom Hiddleston, en la impresionante mansión encantada que es la gran protagonista de la nueva película de Guillermo del Toro. eguirle la pista a Guillermo del Toro es muy difícil, porque el cineasta mexicano está siempre lleno de proyectos. Pero entre todos los que pueda tener ahora mismo entre manos, merece la pena destacar “Crimson Peak”. Como él mismo dice, se trata de una historia de fantasmas y romance gótico, algo por lo que sus seguidores venían clamando desde hacía tiempo. Es una muy buena noticia y todo cuanto rodea a la producción promete mucho, pues no hay más que ver las fotos del set de rodaje para darse cuenta de que estamos ante un relato de misterio y casas encantadas en la mejor tradición romántica y decimonónica. No en vano es un título que hay que encuadrarlo dentro de sus creaciones más personales, esas que se suele permitir realizar entre encargo y encargo. La idea de la película se remonta en origen a la época en que rodó “El laberinto del fauno” y nace de sus colaboraciones en la escritura de guiones con el mítico cineasta Matthew Robbins, recordado por su contribución al fantástico de los 80 con “El dragón del lago de fuego” y “Nuestros maravillosos aliados”. Entonces no encontraron productor, pero cuando el mexicano empezó a trabajar para el estudio Legendary Pictures, una vez acabado el rodaje de “Pacific Rim”, le propusieron que hiciera una propuesta de las suyas. Les S 3 8 zazpika presentó, además del guión de “Crimson Peak”, sendas adaptaciones de “En las montañas de la locura”, de H.P. Lovecraft, y “El conde de Montecristo”, de Alexandre Dumas. Y se decidieron, sin ningún género de dudas, por la primera de las tres opciones. Para Guillermo del Toro debe de ser complicado concentrarse en la realización de una película concreta, porque suele andar liado en varias cosas a la vez. Como productor, está metido de lleno en el estreno del largometraje de animación mexicano “El libro de la vida”, dirigido por Jorge R. Gutiérrez y que ilustra una maravillosa historia de amor más allá de la vida localizada en la fiesta del día de los muertitos, con tanto colorido como imaginación. No es su única presentación, ya que en televisión se programa su serie “The Strain”, sobre una pandemia vampírica en el mundo actual, basada en su propia obra literaria “La trilogía de la oscuridad”, compuesta por las novelas y cómics “Nocturna”, “Oscura” y “Eterna”. También sigue con los videojuegos, con “Silent Hill”, además de su trabajo como asesor para las películas animadas de DreamWorks Animation. Y, hablando del género, prepara una versión animada de “Pinocho”, junto con nuevas entregas de “Hellboy” o “Pacific Rim”. En medio de tan agotador ritmo creativo, a nadie le extraña que tuviera que renunciar a dirigir alguna de las entregas de “El hobbit”, habida cuenta de que una superproducción de semejante volumen le habría tenido ocupado durante demasiado tiempo, con lo que su hiperactividad innata no se habría visto satisfecha. Al poder hacer “Crimson Peak”, cumple uno de sus sueños pendientes, a sabiendas de la pasión que siente por el subgénero de casas encantadas. La inspiración cinéfila la ha encontrado especialmente en “The Haunting” (1963), de Robert Wise, y “The Innocents”, de Jack Clayton. Desde un punto de vista más amplio en lo que respecta al cine de terror, Guillermo del Toro ha mencionado “La profecía” (1976), de Richard Donner; “El exorcista” (1973), de William Friedkin, y “El resplandor” (1980), de Stanley Kubrick. “Crimson Peak” se sitúa en una gran y aislada mansión del montañoso condado inglés de Cumbria en el siglo XIX. Una joven escritora romántica (Mia Wasikowska) se casa con el misterioso sir Thomas Sharpe (Tom Hiddleston), sintiéndose amenazada por su hermana Lady Lucille (Jessica Chastain), mientras el doctor que la visita (Charlie Hunnam) se siente atraído por ella. Pero la gran protagonista es la casa, cuyo diseño artístico se convierte en el mayor reclamo de la función.