SOMOS FAMILIA La revista de la Parroquia de San Eduardo C/ General Margallo nº 6. 28020 Madrid - Telf 91 570 27 00 http://www.saneduardo.archimadrid.es/ Nº 4 Junio 2013 Entrevista a D. Javier Rojas Javier Rojas nació en Formosa, Argentina, en 1973. Ingresó en los jesuitas en 1993 y estudió Filosofía y Teología entre Argentina, Chile y México. Llegó a Madrid en agosto de 2011 para realizar una licenciatura en espiritualidad ignaciana y un master en psicoterapia. Colabora en la parroquia celebrando la misa de 11:00 de los domingos y organizando el grupo de matrimonios. P: ¿Puedes contarnos cómo te sentiste llamado al sacerdocio? R: Todo comenzó con una enfermedad muy grave que padeció mi madre y que cambió a la familia. Mi madre pudo recuperarse y empezamos a ir a misa los domingos. Sentía mucha paz y alegría participando de la misa y leyendo libros de espiritualidad. También participaba en un grupo de oración y otro misionero y todo ello fue contribuyendo a tomar la decisión. El proceso vocacional es igual a cualquier experiencia de amor de un hombre con una mujer…de repente te das cuenta que estás enamorado y quieres pasar tiempo en esa persona. Yo estaba de novio por entonces y, aunque parezca mentira, creo que ello también contribuyó a que tomara cada vez más conciencia de la llamada de Dios. P: ¿Por qué elegiste entrar en la orden de los jesuitas? R: Un sacerdote del clero me dijo “Javier, tú no eres para una diócesis, tu eres para ir de un lado a otro”. Después, en la universidad tomé contacto con la orden. El jesuita que me recibió me dijo “Primero vamos a conocer lo que Dios quiere y luego dónde…”. Y así fue, lo primero que hice fue 8 días de ejercicios en silencio y sólo. Fue una experiencia increíble. Poco a poco Dios fue hablando con más claridad hasta que decidí pedir ingresar a la orden. P: ¿Puedes contarnos cómo llegaste a la parroquia? R: Un amigo, Germán Guidi s.j. , cuando se enteró que venía a Madrid me dijo “no vayas a ningún otro lugar que no sea la parroquia San Eduardo”. Fue simple, conocí a Jesús un domingo en su despacho, hablamos y sentí enseguida que estaba en el lugar correcto. P: Celebras la misa de 11:00 de los domingos. Tus homilías son claras y directas, llegan a la gente. ¿Cómo las preparas? R: En la iglesia hay dones del Espíritu Santo, y no lo hago por presumir de tenerlo, sino que reconozco a veces que hay palabras que fluyen simplemente. Me doy cuenta porque escribo las homilías y es muy diferente a veces lo que digo de lo que escribo. Cuando estoy delante de la gente puedo intuir lo que están pensando y dejo que esa intuición se exprese. Estoy convencido de que es Dios. Aunque también he tenido muy buenos maestros. En particular un profesor de literatura que siempre nos decía “una buena homilía debe tener una idea, un pensamiento o imagen, y un sentimiento” y agregaba “lo que no puedes decir en 7 minutos, no intentes decirlo en 15 minutos”. En esto no soy muy obediente… (risas). P: ¿Cuáles es el objetivo del grupo de matrimonios? Tengo un blog y el nombre que le puse fue “El Evangelio en Casa” y lo hice pensando en los matrimonios. En el seno de una familia y, sobre todo, entre los esposos, hay mucha más vida de Dios que en cualquier otro lugar. Con frecuencia, como en muchos otros tipos de relaciones, se cae en la monotonía y si no nos damos cuenta, las expresiones de afecto y amor se secan o pasan al último lugar de las cosas importantes. Creo que un matrimonio debe aprender a leer, en lo que vive, la palabra de Dios; descubrir el paso de Dios por esa familia y por la relación entre los esposos ¿Qué nos está pidiendo Dios? ¿Qué nos está ofreciendo? En el grupo he querido ofrecer un espacio para escuchar la palabra inagotable de Dios en las Sagradas Escrituras y la palabra de Dios que se expresa en los gestos y acontecimientos que día a día se viven en una familia y para reflexionar sobre ella. Este es el gran desafío: descubrir al Dios que vive en las cosas que vivimos. P: En julio finalizas tus estudios en Madrid. ¿Cuáles son tus próximos proyectos? R: Mi formación es en espiritualidad y psicología y deseo trabajar en este ámbito y también continuar dando Ejercicios Espirituales. Además, mi provincial me destinó a Argentina a trabajar en el MEJ, que es un movimiento juvenil a nivel mundial en la Compañía de Jesús. Estoy contento, porque hay mucho espacio para la formación de monitores, y creo que aquí es donde más podré dar mi granito de arena. P: Finalmente, no podemos dejar de preguntarte por el nuevo Papa Francisco, cuéntanos algo sobre él. R: ¡El Padre Jorge! Así es como le gustaba que le llamaran… ni monseñor ni su excelencia, ni nada de eso. La primera vez que estuve con él fue en una entrevista que me concedió en el arzobispado de Buenos Aires. Me sorprendió y me impactó mucho al verlo la pobreza de su ropa y la serenidad y paz de su rostro. Es un hombre que te presta su atención de manera completa. Esto es algo maravilloso. Te hace sentir cuando estás con él, que lo mejor que le puede estar pasando es estar contigo. Esto no es fácil de conseguir…es una actitud que viene de muy adentro. P: Por último, ¿puedes recomendarnos algo que nos ayude a mejorar nuestra experiencia de Dios? R: Personalmente me ha ayudado mucho comprender que Dios lo dispone todo para nuestro bien. La espiritualidad ignaciana es esto; aprender a descubrir a Dios en lo que vivo. Y cuando puedes hacer presente a Dios en los que vives, simplemente vives feliz… porque no hay nada, nada que temer. Él siempre ha estado, está y estará ahí. Javier, muchas gracias por tu tiempo y mucha suerte con la finalización de tus estudios y con tus nuevos proyectos. ¡Nos vemos por la parroquia! LAS VACACIONES Debido a la actividad tan frenética que todos llevamos en nuestro día a día, resulta difícil encontrar tiempo para pararse a reflexionar sobre Dios, familia, amistades, etc. Por esta razón podemos aprovechar los períodos de vacaciones para cultivar con más cariño lo que no cuidamos suficientemente a lo largo del año. Vivir como cristianos implica crear un clima en nuestras relaciones con los demás en el que llevemos a la práctica la caridad, huyendo de los estilos de vida que nos llevan al egoísmo y a alejarnos del prójimo y por tanto también de Dios, porque no podemos amar a Dios si no amamos al prójimo. En la práctica de la caridad se condensan las enseñanzas de Jesús: “Amaos los unos a los otros como yo os he amado”. Amar es ayudar, tender una mano a quién la necesite. No existe un manual para aprender a practicar la caridad, solamente debemos tener voluntad para ello, saber ponernos en el lugar del otro para ser sensibles a sus necesidades que muchas veces no son económicas. Puede ser simplemente un buen consejo o el apoyo en circunstancias difíciles. También las vacaciones son un tiempo excelente para cultivar la amistad. Está claro que no pode- mos sobrevivir en la soledad o en el aislamiento. No solo necesitamos a alguien con quien contar o a quien acudir en situaciones difíciles, incluso en los buenos momentos necesitamos a alguien con quien compartirlos. La amistad significa cariño, comprensión, servicio afectuoso y desinteresado, generosidad y lealtad. Ser amigo de verdad no es fácil, pero vale la pena el esfuerzo. Y si estamos dispuestos a realizar ese esfuerzo tratando de ofrecer nuestra ayuda y nuestro apoyo a todos los demás y en particular a los amigos, con mayor motivo es lógico que lo hagamos hacia nuestros familiares, esas personas con las que, pese a la proximidad, no profundizamos quizás suficientemente en la convivencia por la rutina y las prisas diarias. Qué buena oportunidad las vacaciones para dedicarles más tiempo, compartir sus inquietudes, escucharles y poder manifestarles todo el amor que les tenemos. Si intentamos disfrutar así de nuestras vacaciones es seguro que nos resultarán mucho más gratificantes de lo que quizás hayan sido en otras ocasiones. Esperanza Lago (grupo de Cáritas) SE ACERCAN LOS EXÁMENES Ese último tema que provoca que te pelees con el libro y los apuntes hasta las tantas o ese problema de matemáticas que no acabas de entender el método enseñado en clase y los nervios, la desesperación afloran, las dudas comienzan a aparecer y finalmente después de pelearte con la calculadora o simplemente con el entendimiento, apagas el flexo y te vas a la cama sin conseguir tu objetivo. Puede que sea una situación que te haya pasado alguna vez o puede que no, de todas formas si estas en la famosa “ÉPOCA DE EXÁMENES” donde puedes perder los nervios ya que te queda poco tiempo y aun así no consigues sacar ese problema adelante, suelta el bolígrafo, respira hondo, levántate, ve a por un vaso de agua, vuelve a sentarte e intenta enfocarlo de una manera diferente a la anterior, a veces al estar horas y horas centrado en conseguir ese objetivo de encontrar la solución o intentar que el último tema de historia se te quede y parezca misión imposible porque tu cerebro no da para más, provocas la sensación de presión y puedes seguir horas y horas que no vas a dar con la solución, lo mismo pasa con la vida misma, cualquier situación de desesperación puede cegar la vista darnos esa sensación de no caminar hacia delante y simplemente estancarnos e impedir que nosotros mismos sigamos hacia delante. Ánimo en esta época de exámenes para todos los estudiantes donde los nervios están a flor de piel, mucha suerte y recordad un pequeño descanso de vez en cuando sienta bien. Porque la vida es un continuo aprendizaje. Escrito por un estudiante, como lo puede ser cualquiera 2 Buscar Momentos De Intimidad Con El Señor La oración es la manera más bella y gratificante de propiciar ese encuentro con Dios, del que todos en esta frenética vida que llevamos estamos tan necesitados. Es necesario “parar”, abrir nuestro corazón a Aquel que nos ama sin reservas, tal y como somos y por medio de esa relación interpersonal profundizar y ver como estamos respondiendo ante aquello que Dios espera de nosotros. La oración, sea individual o colectiva, siempre es de gran valor, hace que nuestra fe se vea cada vez más asentada y gradualmente progresemos en nuestra espiritualidad. Ambas cosas son muy necesarias para nuestra forma de actuar. Por medio de la oración podemos alcanzar tres objetivos: alabar a Dios, darle gracias y pedirle toda clase de bienes. Los frutos de la oración siempre los veremos a corto o largo plazo, no en vano Cristo nos dice: “Pedid y recibiréis, llamad y se os abrirá, porque el que pide recibe y al que llama se le abre”. Nosotros por suerte en nuestra parroquia tenemos tres momentos puntuales en los que podemos vivir esa experiencia de una mayor intimidad con Dios: • Las meditaciones que tenemos los lunes, es uno de los momentos de silencio e interiorización del evangelio del domingo siguiente. Así cada uno, en contacto profundo con Dios, deja que le sugiera el evangelio según su propia experiencia o su momento concreto. En esta meditación la riqueza no es sólo la variedad de visiones sino también el compartir los mensajes que a cada uno nos dice. • Las exposiciones del santísimo los primeros jueves de cada mes, de cinco a siete (en turnos de vela de treinta minutos) sin que esto suponga que haya personas que por diversas razones no se sujeten a horario, y accedan a la capilla según el tiempo de que dispongan. Son un tiempo de silencio total, de profundo encuentro con Dios, el fin inmediato es la adoración, pero también el del encuentro con ese amigo fiel que nos ama sin límites y está ansioso de compartir un tiempo con nosotros. Aquí podemos abrir nuestro corazón sin reservas y hacerle partícipe de todo cuanto le queremos y necesitamos, a la vez que nos ponemos en sus manos, presentándole nuestra vida tal cual es para que Él dirija nuestros pasos. • Los retiros del tercer miércoles de cada mes, de cinco y media a siete, previamente anunciados en ambas puertas del templo y con el tiempo suficiente, son a criterio del ponente, y normalmente según los tiempos litúrgicos: Adviento, Cuaresma, Pascua o tiempo ordinario. Él selecciona los textos. Los comenta y explica, y deja diferentes tiempos de reflexión para que hagamos un paralelismo entre éstos y nuestra actitud frente a ellos en nuestra vida diaria. Todo tiempo de oración necesita silencio y recogimiento, por ello debemos ser tremendamente respetuosos en el templo. Somos unos privilegiados, tenemos la parroquia abierta a nuestra disposición para visitar al Señor. No seamos perezosos, Él nos está esperando. Pensemos en lugares del mundo que por asistir a una eucaristía o escuchar la Palabra de Dios se debe recorrer grandes distancias. La oración en definitiva es el alimento de nuestra vida cristiana. Rocío Mata CELEBRACIÓN PARROQUIAL El día de la semana favorito de mis hijos es el sábado, “porque no hay que ir a misa”. A mí, en cambio, me gusta el domingo porque me permite el encuentro con Dios, con mis hermanos y, un poco también, conmigo mismo. Con los años, y, después de una crisis en la adolescenciajuventud, la misa dominical se ha convertido en alimento para mi espíritu, de una forma natural, sin aspavientos. Doy gracias a Dios por este regalo, del que procuro ser consciente para saborearlo de forma adecuada. Este curso, hemos celebrado varios encuentros parroquiales, con el objetivo de que nos conozcamos mejor, y así crear comunidad. Por ello, nos reunimos el día de nuestro patrón, San Eduardo, el 13 de octubre y también lo hicimos en el mes de enero, para rezar por la unión de las iglesias cristianas. En el mes de abril, hemos celebrado un encuentro entre los distintos grupos y colaboradores de la actividad parroquial, para celebrar la Pascua de Resurrección. Siempre consisten en la celebración de la Santa Misa, y luego compartimos unos refrescos y los alimentos que todos aportamos, en algunos casos, con gran éxito de crítica (y rápida consumición). Cuando celebramos estos encuentros, la vivencia de la eucaristía toma un sentido mucho más profundo: curiosamente, del encuentro cercano con los hermanos, surge una mayor comunión con Nuestro Señor. La liturgia, la palabra, las oraciones, las preces, los cantos, la comunión, todo se vive con otra luz, con otro color, muy intenso, muy vivo. Nunca me gustaron las reuniones de muchas personas. Me siento más cómodo en los pequeños grupos, quizá por timidez, pero en estos encuentros parroquiales me siento realmente miembro de un todo, de nuestra iglesia local, de nuestra parroquia. La tortilla siempre triunfa, cualquier empanada o sándwich es apetecible, siempre tomo vino (nunca lo hago en casa), y es que disfruto de todos los amigos con los que compartimos la mesa. No me siento solo, aislado, distinto; la expresión correcta es que me siento “en casa”, “en familia”. Entonces me acuerdo del libro de los Hechos de los Apóstoles, de cómo eran las primeras comunidades cristianas, cómo se reunían para compartir la palabra, la comunión, y ponían en común los bienes, y siento que estos encuentros tienen sentido pleno, que seguir a Jesús es un camino en comunidad, y que amar a Dios y a los hermanos, no son dos realidades distintas, sino un mandamiento indivisible. Luis Miguel Hernández (Miembro de grupo de matrimonios de San Eduardo) 3 FIESTA DEL CORPUS CHRISTI La fiesta del Corpus Christi, se remonta al siglo XIII. Esta fiesta surgió en la Edad Media cuando en 1208 la religiosa Juliana de Cornillon promueve la idea de celebrar una festividad en honor al cuerpo y la sangre de Cristo presente en la Eucaristía. Así, se celebra por primera vez en 1246 en la Diócesis de Lieja (Bélgica). Fue instituida el 8 de septiembre de 1264 por el papa Urbano IV, celebrándose así, por todo el mundo. Es bueno hacer un poco de memoria, porque así te darás cuenta de la importancia y significado de esta fiesta, que desde muy pronto se comenzó a celebrar en la Iglesia, como necesidad de los cristianos, de adorar la presencia de Cristo en la Eucaristía. Estoy segura que podrías encontrar una reflexión más teológica y profunda en muchos documentos y escritos que hacen referencia a esta fiesta, y que a lo largo de tanto tiempo se han ido escribiendo, pero lo que aquí vas a leer, es, sencillamente una experiencia de encuentro y entrega. Dijo el Papa Benedicto en su encíclica DEUS CARITAS EST que “se comienza a ser cristiano por el encuentro con un acontecimiento, con una persona...” Y esto es lo que acontece en el Misterio de la Eucaristía, te encuentras con un acontecimiento que ha cambiado tu vida, un acontecimiento que ha sanado tu enfermedad, ha limpiado tu culpa, por puro amor a ti. Un acontecimiento que reclama de lo más profundo de tu corazón, gratitud, acción de gracias, amor, aceptación, docilidad.... sigue poniendo nombre a lo que el Señor suscita en ti, en cada Celebración Eucarística. Celebración que es memoria de la vida misma de Cristo, de su Pasión, muerte y Resurrección, Misterio de Amor y entrega, por amor a ti. Celebración que te espabila el oído para oír su Palabra, y salir de ti mismo, que te pone en movimiento para que seas portador de su Paz, para con tus hermanos, que te hace mensajero de aquello que has visto y oído. ¿Y qué es lo que has visto? Ves a Cristo mismo que se hace presente, “...yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del 4 mundo” (Mt 28,20). Es Él quién viene a ti, es a Él a quien encuentras en el Pan y el Vino: “Tomad esto es mi cuerpo...esta es mi sangre que se derrama por todos...” (Mc 14,22.24). Esto no es algo que haya salido de nosotros mismos, algo que nos hayamos inventado nosotros, esto es cumplimiento de sus Palabras. Por eso abre el corazón para acoger con confianza y amor este misterio que tienes muy cerca de ti, ahí, en el Sagrario, misterio que te necesita, sí, necesita que te abandones en él, necesita de tu presencia, para adorarle, que no es otra cosa que amarle hasta el extremo; venerarle, que es recordarle, reconocerle y admirarle con el máximo respeto. Por eso te invito a ponerte ante él, como el niño pequeño, delante de su Padre, con confianza, con serenidad, con alegría, con la certeza de que el Señor te mira con ternura. Misterio que también habita en ti, sí, participas de la Eucaristía, extiendes con respeto tus manos para acoger a la Vida misma, el Señor descansa en tu pequeñez de criatura, te convierte en Sagrario. Él se convierte en alimento, para ser por ti digerido, convirtiéndose así, en parte de ti, transformándote desde lo más profundo de ti mismo, haciéndote al mismo tiempo uno con Él. No te acostumbres nunca a vivir la Eucaristía como un mero cumplimiento, o como mera rutina, vívelo con la alegría y la novedad que surge del encuentro con el Resucitado. ¿Te das cuenta ahora, de la importancia de este Misterio, que es el Corpus Christi? Lo que haces en esta fiesta, es lo mismo que debes hacer cada día, cada domingo. Contempla con devoción a aquel que por ti, extendió sus brazos en la cruz, adora a aquel que por ti, fue traspasado por la lanza, venera a aquel que te devolvió la vida con su Resurrección. Por eso el día del Corpus Christi, la alegría lo envuelve todo, todo se engalana y embellece. Engalana tu vida con los dones que el Señor ha puesto en ti, embellece tu vida, con la fe, la esperanza y el amor, y que la alegría de haber sido encontrado por tu Dios y Señor, te haga abrazar con amor y ternura este Misterio del Cuerpo y Sangre del Señor. PRI MERAS COMUNIONES Semana tras semana, durante los dos años de preparación para recibir la Primera Comunión, los niños van a la catequesis con la ilusión de aprender y prepararse para el gran paso que van a dar, que no es sólo comulgar, sino recibir a Dios en sus corazones. Trabajar con los niños, acompañarles en este camino es una bendición. Con sus preguntas, me enseñan a mí y sobre todo me acercan más al amor incondicional que es Dios. El 11 de mayo de 2013, dieciocho niños recibieron la Comunión por primera vez en esta parroquia. Verlos entrar en la iglesia, tan guapos, contentos, nerviosos, y emocionados, con esa cara de ángeles caminando en silencio fue para nosotros, los catequistas, igual de emocionante. Como ellos mismos me confesaron estaban pensando para sus adentros: “Dios Padre, yo te quiero porque eres mis padre del cielo. Dios Hijo, yo te quiero porque eres Jesús, el Jesús que nació en Belén. Dios Espíritu Santo, yo te quiero porque has querido venir a vivir dentro de mí como un amigo invisible.” Al terminar la celebración, los niños también nos dijeron que se sentían tan contentos y felices que no podían explicarlo. Ahora empieza otra etapa de formación que les conducirá hasta la confirmación. Y los catequistas de San Eduardo estaremos aquí para ayudarles. Todo esto es posible porque nos sentimos arropados por la parroquia en pleno, encabezada por nuestro párroco y sobre todo por la confianza que depositan en nosotros los padres al poner en nuestras manos su mayor tesoro. ¡A todos desde aquí muchas, muchas gracias! Candelas (Catequista) 5 El verdadero poder es el servicio Extracto de la homilía de Francisco I, con la que inicia el ministerio petrino. «José hizo lo que el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer» (Mt 1,24). En estas palabras se encierra ya la misión que Dios confía a José, la de ser custos, custodio. Custodio ¿de quién? De María y Jesús; pero es una custodia que se alarga luego a la Iglesia, como ha señalado el beato Juan Pablo II ¿Cómo ejerce José esta custodia? Con discreción, con humildad, en silencio, pero con una presencia constante y una fidelidad total, aun cuando no comprende. Está junto a María, su esposa, tanto en los momentos serenos de la vida como en los difíciles, ¿Cómo vive José su vocación como custodio de María, de Jesús, de la Iglesia? Con la atención constante a Dios, abierto a sus signos, disponible a su proyecto, y no tanto al propio; Dios no quiere una casa construida por el hombre, sino la fidelidad a su palabra, a su designio; y es Dios mismo quien construye la casa, pero de piedras vivas marcadas por su Espíritu. Y José es «custodio» porque sabe escuchar a Dios, se deja guiar por su voluntad, y precisamente por eso es más sensible aún a las personas que se le han confiado, sabe cómo leer con realismo los acontecimientos, está atento a lo que le rodea, y sabe tomar las decisiones más sensatas. En él, queridos amigos, vemos cómo se responde a la llamada de Dios, con disponibilidad, con prontitud; pero vemos también cuál es el centro de la vocación cristiana: Cristo. Guardemos a Cristo en nuestra vida, para guardar a los demás, para salvaguardar la creación. antecede y que es simplemente humana, corresponde a todos. Es custodiar a la gente, el preocuparse por todos, por cada uno, con amor, especialmente por los niños, los ancianos, quienes son más frágiles y que a menudo se quedan en la periferia de nuestro corazón. Es preocuparse uno del otro en la familia: los cónyuges se guardan recíprocamente y luego, como padres, cuidan de los hijos, y con el tiempo, también los hijos se convertirán en cuidadores de sus padres. Es vivir con sinceridad las amistades, que son un recíproco protegerse en la confianza, en el respeto y en el bien. En el fondo, todo está confiado a la custodia del hombre, y es una responsabilidad que nos afecta a todos. Sed custodios de los dones de Dios. Y cuando el hombre falla en esta responsabilidad, cuando no nos preocupamos por la creación y por los hermanos, entonces gana terreno la destrucción y el corazón se queda árido. Ciertamente, Jesucristo ha dado un poder a Pedro, pero ¿de qué poder se trata? Nunca olvidemos que el verdadero poder es el servicio, y que también el Papa, para ejercer el poder, debe entrar cada vez más en ese servicio que tiene su culmen luminoso en la cruz; debe poner los brazos para custodiar a todo el Pueblo de Dios y acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente a los más pobres, los más débiles, los más pequeños; Sólo el que sirve con amor sabe custodiar. “a todos vosotros os digo: Rezad por mí” La vocación de custodiar no sólo nos atañe a nosotros, los cristianos, sino que tiene una dimensión que 6 Imploro la intercesión de la Virgen María, de san José, de los Apóstoles san Pedro y san Pablo, de san Francisco, para que el Espíritu Santo acompañe mi ministerio, y a todos vosotros os digo: Rezad por mí. Amén. VIRGEN DE LAS VICTORIAS Quisiera hablarte de ella como si fuese la primera vez para ti y para mí. María cuando un día estaba rezando se le apareció el arcángel Gabriel y le dijo: “Dios te salve, llena de gracia, el Señor es contigo, bendita eres entre las mujeres. No temas María, has hallado gracia delante de Dios y concebirás en tu seno y darás a luz un hijo”. Y te preguntas ¿qué hizo María?. Pues con toda humildad dijo que sí al ángel con estas palabras:”he aquí la esclava del Señor hágase en mí según tu palabra” ¡Qué grande y qué hermoso fue este momento para la humanidad! Dios que todo lo puede respetó la libertad de María, preguntándole si quería ser madre de Jesucristo. Y María no se detuvo a pensar si iba a ser muy difícil o si le traería mucho sufrimiento, sólo dijo un sí generoso a Dios. Así deberíamos nosotros responder a Dios cuando sentimos que nos pide algo, en vez de darle tantas excusas y tantas vueltas. A María aunque le tocó renunciar, en el fondo de su corazón confiaba que cualquier entrega le llevaría a la VICTORIA y bajo esa advocación se nos presenta como patrona de este barrio donde yo he nacido y vivo, Tetuán de las Victorias. He rezado mucho y sigo rezando y encomendándome a Ntra. Señora de la Victorias cuya imagen se venera de en la calle Azucenas. Debido a la gran devoción que mis padres sienten por nuestra patrona, estoy ofrecida a ella desde mi nacimiento y pertenezco a su congregación desde siempre. Su festividad es el primer domingo de julio y dicho día se saca en procesión para que visite a todos y cada uno de sus hijos. Las calles del barrio se pintan de colores para verla pasar sabiendo que en ella se cumple el ideal de la Iglesia que es Cristo. A su vuelta por la calle Bravo Murillo los vecinos de Tetuán la saludan entre vítores y requiebros. Nosotros bajo su amparo y por la Gracia podemos ser miembro de la Iglesia para la fermentación y la nueva evangelización del mundo. ¡Viva la Virgen de las Victorias! Ángeles Galán (Grupo de liturgia) DON ÁNGEL: HOMBRE DE REFLEXIÓN SERENA Y HUMANIDAD Caminaba erguido, con paso lento pero firme. Su porte guardaba cierta elegancia que no había borrado el paso de los años. Una cruel enfermedad le tendería la emboscada que acabaría con su vida cuando frisaba los 75 años. Evocamos la memoria de Dn. Ángel Simón Martín, párroco de San Eduardo durante 37 años, y de quien se cumplen en este mes de junio tres años de su fallecimiento. Con retazos aún fijos en nuestra memoria, queremos recordar su entera dedicación al servicio de la parcela eclesial que le fue confiada. Toda la comunidad parroquial guarda un sincero reconocimiento del sacerdote cuyo celo apostólico se destacó siempre por su dedicación plena, comprensión humanitaria, entereza y solicitud pastorales. Don Ángel sabía pisar la tierra con la mirada puesta en los problemas acuciantes de los hombres con mayores necesidades: parados, emigrantes, ancianos, familias con problemas y otros muchos cuyas penurias no se atrevían a manifestar, aislados en su propio dolor. Para todos ellos brillaba en gestos humanitarios. Hombre de reflexión serena y de intensa vida interior, nutría su fuerza espiritual con la lectura de textos sagrados y la oración, a las que dedicaba varias horas del día. Aunque aparentemente grave en su talante, se explayaba con cualquier parroquiano para hablar de lo divino y de lo humano. No tenía teléfono móvil ni ordenador, lo cual no significaba que careciera de dotes comunicativas, pues las tenía, y se emocionaba hablando de su querido Real Madrid, a cuyo estadio solía concurrir cuando se lo permitían sus obligaciones pastorales. Su mayor logro fue, sin duda, la construcción de este templo, proyecto iniciado por su antecesor y que él culminó con éxito el 27 de noviembre de 1979. Obra suya es también la construcción de la nueva capilla del Santísimo, a la que se vio obligada la parroquia debido al proyecto urbanístico de la calle Sor Ángela de la Cruz. El antiguo párroco nos ha dejado el inestimable ejemplo de su prudencia y ponderación, que practicaba antes de tomar decisiones precipitadas que pudieran perjudicar la buena marcha de la comunidad mientras velaba con sumo celo por la integridad del recinto sacro y de su riqueza artística. Hoy, ante la presencia callada de nuestro recordado Dn. Ángel, le deseamos que en su nueva dimensión se encuentre unido al resto de criaturas celestiales en estallido de gozo eterno. Eleuterio J. Romero Fonseca (Secretario del Consejo Parroquial) 7 Agradecimiento: Somos Familia agradece a todos las personas que con su colaboración desinteresada participan de la vida parroquial y en especial a los colaboradores de este número. 26 1 28 24 2 35 3 31 4 5 37 33 22 6 8 7 9 30 10 29 11 32 12 36 25 14 13 34 15 16 27 17 23 20 Horizontal: 1. Artículo masculino singular. 2. Sentimiento de afecto a alguien. 3. 3ª Persona singular de ser. 4. Uno, artículo indeterminado. 5. Producto de las plantas que protege la semilla. 6. Abreviado en msm K. 7. Ref. a fruta que se encuentra en su punto optimo para consumo. 8. Dentro de, sobre. 9. En plural, contrario a ninguna. 10. Escrito al reves, nombre común del cloruro sódico. 11. Los 4 periodos en los que se divide un año. 12. Penúltima letra del abecedario. 18 21 19 Al final podrás leer una frase de Teresa de Calcuta 13. Interrogativo, indaga la cantidad, intensidad, etc... de algo. 14. Forma de dativo y acusativo de 3.ª persona singular o plural y masculino o femenino. 15. El halla lo que busca. 16. Símbolo químico del aluminio. 17. Distancia a la que llega una acción. 18. Preposición que denota posesión o pertenencia. 19. Completas, integras, absolutas. 20. En plural, sexta nota musical. 21. Extremidades del cuerpo que van desde las muñecas hasta la punta de los dedos. Vertical: 22. En futbol finta, amago, esquive. 23. Honrado, fiel, honesto. 24. Arte de actuar con gesto y movimientos corporales. 25. Continente. 26. Sierra del Sistema Central al sur de Ávila. 27. Relación escrita de lo sucedido. 28. Más que malo. 29. Burro. 30. Duda, vacilación. 31 Impar. 32. No nacido de parto natural, sino por cesaria. 33. Retratos, imágenes. 34 Tejido de malla para pescar. 35. El por que de una coso “El …. de la cuestión”. 36. Ahora mismo. 37. Bolsa de mano pequeña, de cuero o tela, usada especialmente por las mujeres. Webs de interés ONG Construyendo futuro http://www.ongconstruyendofuturo.org/ Parroquia San Eduardo http://www.saneduardo.archimadrid.es/ HORARIOS DE VERANO Del 1 de Julio al 15 de septiembre LUNES A VIERNES para estas vacaciones: Mañanas:11h. • “Sobre el Cielo y la Tierra” Cardenal Bergoglio (Papa Francisco) y Abraham Skorka (Rabino) SÁBADOS Y VÍSPERAS • La Madre Teresa de Calcuta: Un retrato personal de Leo Maasburg Tardes: 20h. • Cinco panes y dos peces de Cardenal Fco. Xavier Nguyen Van Thuan. Tardes: 20h. Mañanas:11h. DOMINGOS Y FESTIVOS Mañanas: 10h. y 12h. Tardes: 20h. 8 Libros recomendados