ESCUELA DE FORMACION DE LIDERES Carrera de Coaching
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ESCUELA DE FORMACION DE LIDERES Carrera de Coaching TESINA Ser mamá: Una hermosa travesía Como me ayudaron las herramientas de coaching para transitar mi camino a la maternidad Autor: María Laura Marti Coach: Alberto Fernandez Sanjurjo Fecha:2012 Contenido 1. Problemática ............................................................................................................................. 3 2. Aspecto a investigar o a tratar ................................................................................................ 3 3. Marco teórico............................................................................................................................. 3 4. Hipótesis y objetivos ................................................................................................................ 4 5. Desarrollo................................................................................................................................... 4 5.1. Llega la noticia: test de embarazo positivo................................................................... 4 5.2. Escucha de embarazada ................................................................................................. 7 5.3. La batalla hormonal - Emociones a flor de piel............................................................ 7 5.4. La relación con los demás ............................................................................................ 10 5.4.1. La pareja .................................................................................................................. 13 5.4.2. Los abuelos ............................................................................................................. 16 5.4.3. Amigos, conocidos y desconocidos ..................................................................... 17 5.4.4. Profesionales........................................................................................................... 19 5.4.5. Conmigo misma ...................................................................................................... 19 5.5. Que mama quiero ser .................................................................................................... 20 5.6. El momento más esperado: el día del nacimiento .................................................... 23 5.7. De vuelta a casa con la novedad: Ya no estamos solos, el bebé vino para quedarse ...................................................................................................................................... 24 5.7.1. El sueño ................................................................................................................... 26 5.7.2. El llanto..................................................................................................................... 27 5.7.3. Las visitas ................................................................................................................ 27 5.8. La ternura que todo lo puede: Mi hija es la más hermosa del mundo ................... 28 6. Conclusiones ........................................................................................................................... 29 7. Bibliografía ............................................................................................................................... 29 1. Problemática Esta tesina tiene su foco en la utilización de herramientas de coaching ontológico para transitar los nueve meses del embarazo y los primeros meses de vida con un bebé. 2. Aspecto a investigar o a tratar Este trabajo pretende compartir mi experiencia personal sobre como aplicar herramientas de coaching ontológico en el recorrido del camino hacia la maternidad, es decir desde que me enteré que estaba embarazada hasta el parto y los primeros meses de vida con mi bebé. 3. Marco teórico Yo era una madre primeriza, llena de dudas y emociones nuevas que me sorprendían cada día y rodeada de “sabios consejos” de familiares, amigos, profesionales, conocidos y por qué no de algunos desconocidos también. La mayoría de las veces estas sugerencias se contradicen entre si y mas que orientar solo me confundían más y aumentaban la incertidumbre de esta novata madre. En el mundo actual donde, con la ayuda de internet y las redes sociales, el acceso a la información prácticamente no tiene límites, es posible googlear cualquier duda que aparezca. Pero la cantidad de respuestas que encontraba se transformaba en una catarata de información sobre la cual tomar decisiones y eso me abrumaba más que la duda original. 4. Hipótesis y objetivos El objetivo de este trabajo es compartir como utilicé herramientas de coaching para decidir en cada caso como vivir mi maternidad y que hacer en cada situación. Compartiremos conceptos como: Aprendizaje Escalera de inferencias Modelo comunicacional: Pedidos y ofrecimientos Uso de declaraciones fundamentales: Perdón, Gracias, Te amo Manejo de emociones: miedo, culpa, enojo, exigencia 5. Desarrollo 5.1. Llega la noticia: test de embarazo positivo Parecía un día como cualquier otro, pero no lo era. Salí del baño con una tirita de papel en una mano, con dos rayitas de color fucsia que indicaban que estaba embarazada. La primer reacción fue alegría, felicidad extrema, hacía un año que lo buscábamos. Al instante siguiente apareció el terror: ya habíamos perdido un embarazo, ¿y si volvía a pasar?. ¿Como hacer para no sentir ese miedo?. No hay manera. Recordé la frase de Carl Jung “A lo que resistes, persiste”. Pero si reconoces que el miedo está, podes verlo y hacer algo con él. El miedo aparece frente a una situación donde veo lo que puede pasar como una amenaza y considero que no tengo recursos para enfrentarla. Si lo veo así puedo trabajar para bajar el nivel de la amenaza (a veces hasta puedo darme cuenta que no existe) o para conseguir los recursos que me faltan. Me dije a mi misma, no tiene por qué ser como la vez anterior. Inmediatamente me puse a buscar ejemplos de personas que habían perdido un embarazo y hoy tenían hijos maravillosos, eso me generó recursos para enfrentar mi miedo. Si a ellos les pasó, a mi también me puede pasar. Eso me dio paz, tranquilidad y la alegría volvió a reinar. Nos miramos con el padre y con lagrimas de emoción en los ojos dijimos: “Bien, y ahoraF¿que hacemos?” Ni idea!!!! No sabíamos que hacer, así que empecé por declararme aprendiz en el tema de ser madre. Declarar NO SE fue el primer GRAN paso de un nuevo caminoF el de aprender. Para aprender hay que poder: Declarar que no sé como primer paso para abrirme al aprendizaje. Reconocer y superar creencias limitantes que tengo (yo no puedoF, no sirvo para estoF, etc.) Reconocer que otros saben más que yo en algunos temas y declararlos maestros. Entender que el aprendizaje es un proceso (tener información no es saber hacer) y lleva tiempo. Animarme a relacionarme con lo nuevo y no intentar encasillarlo en lo ya conocido, darme tiempo para estar en la incertidumbre, no querer saberlo todo y saberlo YA. Reconocer los errores como nuevas oportunidades y no querer tener razón todo el tiempo, abandonar las certezas y dar lugar a la incertidumbre. Y ser capaz de desaprender algunas cosas ya aprendidas para dar lugar al nuevo conocimiento. Así que haciendo uso de la herramienta de aprendizaje, con el papá buscamos maestros que pudieran enseñarnos, amigos que ya tienen hijos, compañeros de trabajo, nuestros padres, personas a quienes les concedimos la autoridad y la confianza necesaria para ser nuestros guías en el camino. Leímos sobre el tema, siempre con paciencia, sabiendo que hasta que no llegue el momento de experimentar las cosas solo podíamos recoger información. Aceptamos de común acuerdo que íbamos a cometer errores pero nos dijimos que como lo que íbamos a hacer estaría lleno de amor y buenas intenciones, los errores serían una oportunidad para seguir aprendiendo. Y yo trabajé mucho mi ansiedad por querer saber todo ya, faltaban 9 meses para que nazca el bebé y quedaba toda una vida por delante. Además todos tenemos un modelo mental que afecta nuestro accionar. “Los modelos mentales son supuestos profundamente arraigados, generalizaciones, ilustraciones, imágenes o historias que influyen sobre cómo entendemos al mundo y cómo actuamos en él” Peter Senge (La Quinta Disciplina) Esos supuestos o creencias pueden ser culturales, sociales, propios o adquiridos. Están influenciados por la neurología, nuestra educación, el lenguaje y nuestras experiencias de vida. Se forman durante nuestro crecimiento y actúan como filtro a la hora de tomar decisiones o actuar. Las creencias pueden ser habilitantes o limitantes. Lo importante es que son juicios y se pueden modificar e incluso abandonar si ya no son funcionales, o se pueden cambiar por otra que sí lo sea. Por lo que cada tanto es importante revisar para que las mantenemos, cual es la autoridad que las creo, ver como afectan nuestra vida y poder decidir si queremos seguir con ellas o no. Aqui algunas creencias que revisé porque podían ser una piedra en el camino: “Duermo como un tronco, no lo voy a escuchar llorar” “No soy capaz de cambiar un pañal, soy muy torpe” “Soy ansiosa, no seré capaz de transmitirle paz y tranquilidad” “Podre ser una buena madre?” Por ultimo, ambos padres prometimos amarlo y amarnos por sobretodo y esa fue la base que nos dio la seguridad que necesitábamos para empezar a transitar este sendero. 5.2. Escucha de embarazada Confirmado el embarazo con un análisis, aparecieron los síntomas para reafirmarlo, nauseas, sueño, lágrimas por cualquier cosa. Mágicamente cuando quedas embarazada la profecía se cumple, empezás a ver embarazadas por todos lados y a escuchar cosas de embarazos en cada conversación. Esta magia no es tal, lo que sucede es que uno se instala un modo de escuchar llamado escucha previa, asociado al embarazo y por eso empezas a registrar todas las conversaciones y la embarazadas que siempre estuvieron ahí pero que antes simplemente pasaban desapercibidas. La escucha previa es como un filtro que “nos ponemos en cada momento y que nos ayuda a ser consciente de que cosas registramos de lo que escuchamos y cuales dejamos pasar de largo”. Como el lenguaje es generador de realidad porque abre o cierra posibilidades, permite coordinar acciones con otros y crea nuestros modelos, al escuchar interpretamos como lo que se dijo afecta nuestro futuro. Si sabemos que existe la escucha previa podemos elegir que escucha previa queremos tener y así elegir para que vamos a escuchar y generarlo. Si escucho para escuchar posibilidad voy a generar posibilidad, en cambio si escucho para escuchar no posibilidad voy a generar no posibilidad. Algo a destacar es la importancia que adquirió escuchar a mi cuerpo porque era el que me indicaba que cosas podían afectar al bebé positiva o negativamente (cansancio, angustia, alegría, etc). Para escuchar es necesario dejar de hablar. Para escuchar al cuerpo es necesario parar de hacer cosas de vez en cuando, hacer un intervalo y ver como se siente. 5.3. La batalla hormonal - Emociones a flor de piel Mi mamá me dijo que la carga hormonal altera el estado emocional de la embarazada haciendo que esté más sensible. Esto provoca llantos sin motivo alguno, irritabilidad que hace que una se enoje por nimiedades. Por lo tanto es muy importante tener registro de que esto esta sucediendo para no ser controlado por esas emociones y en cambio poder ser consciente de lo que sucede. Las emociones no son algo que uno deba evitar, lo importante es poder entenderlas y elegir como queremos vivirlas, para no quedar atrapados por ellas. Así que hice todo lo posible para tomar las riendas de las mías y ponerle humor a la situación. El recurso del humor fue un gran aliado para sobrellevar todos los momentos difíciles. Culpa La frase que más escuché en estos meses fue “el embarazo es el mejor estado” y cada vez que la escuchaba a mi me daba una especie de brote de urticaria. Que me estaban diciendo? Tenía nauseas, acidez, mis emociones estaban totalmente descontroladas y a flor de piel, mis gustos por la comida y los olores cambiados e irreconocibles, la panza a medida que crecía molestaba cada vez más, no podía dormir, me cansaba cada vez más rápido. Pero como decir que estaba embarazada y no estaba en mi mejor estado, afloraba un sentimiento de culpa cuando se mezclaba la sensación de estar feliz por estar esperando un hijo pero sintiéndome muy mal física y emocionalmente. ¿Qué dejaba ver a los demás de todo esto?¿Qué decir ante la pregunta: “¿Como estás ?”?. Si la norma cultural dice que estar embarazada es lo mejor que te puede pasar como decir que me sentía horrible. Que iban a pensar de mi? La culpa es una emoción que hace aparecer dos fantasmas el culpador (la parte de la conciencia que me dice que estar embarazada es maravilloso) y el culpado (la parte que se siente muy mal por todos los síntomas que trae el embarazo). El culpador juzga al culpado de haber violado una norma que sostiene un conjunto de valores que pueden ser culturales, propios o de otro. Para cambiar esto se puede revisar la norma para ver si tiene sentido sostenerla y es necesario cambiar la forma de actuar porque los valores defendidos son hechos que significan un principio de vida o si son juicios que se pueden modificar de manera que sean funcionales. Al hacer que mis dos aspectos se escuchen mutuamente, pude reconocer que la norma “el embarazo es un estado maravilloso” se puede cambiar por “esperar un hijo es lo más maravilloso que te puede pasar aunque el embarazo te haga sentir pésimo” y este nuevo juicio era funcional para ambas partes y me permitió disfrutar de la espera y sobrellevar los malestares al mismo tiempo. Miedo Otra emoción que apareció con el embarazo como mencioné en el punto anterior fue el miedo. No solo miedo a perderlo, sino miedo a ser capaz de ser buena madre, miedo al parto, miedo a perder mi vida como mujer por ser madre. Lo bueno es que todos se pueden tratar de la misma forma. Busco bajar el nivel de la amenaza que veo o busco mejorar los recursos que tengo para enfrentarla, porque el miedo siempre ser trata de la relación entre esas dos interpretaciones que hacemos de la realidad. Por ejemplo para manejar el miedo a perder mi vida como mujer, empecé a buscar madres conocidas que llevaran adelante su vida como profesionales, mujeres y madres al mismo tiempo y hacerles preguntas sobre como lo habían conseguido. Es decir busqué recursos para enfrentar la situación. En cambio para enfrentar el miedo al parto pensé que si tantas mujeres habían pasado por eso y sobrevivido no había tal amenaza, así que llegue muy relajada a ese momento, al punto que cuando tuve las contracciones coincidía con un día que iba a control al obstetra y cuando salí para el consultorio llevaba el bolso para ir a la clínica si me decía que estaba en trabajo de parto y una bolsa con cosas para una amiga donde iría a tomar mates si era una falsa alarma. Exigencia Para el final del embarazo tuve que lidiar con mi autoexigente que quería seguir haciendo las mismas cosas que hacia siempre, aunque el cuerpo pedía a gritos bajar el nivel de actividad. Así que empecé a escucharlo más y dormía cuando llegaba a casa o trataba de hacer solo lo indispensable. Busqué una persona que me ayude con las cosas de la casa, delegaba tareas en el papá o los abuelos que las hacían encantados porque era una manera de compartir el embarazo. La exigencia es una emoción traicionera para mi, porque bajo la excusa de que querer es poder, pretendía alcanzar la meta sin importar lo que se pierde por el camino. Y fue muy importante no confundir, exigencia con excelencia. La excelencia me ayudaba a hacer las cosas de la mejor manera posible, en cambio la exigencia pretendía hacerlas a cualquier precio, y muchas veces el precio es muy caro porque no nos permite disfrutar el recorrido. Enojo Esta emoción es a la que más cuidado le dediqué ya que sabía que yo estaba particularmente irritable y un brote de enojo descontrolado puede destruir relaciones que uno quiere mucho. El enojo genera energía adicional para resolver el problema que lo provoca por lo que si no se canaliza esa energía puede causar daño. Una vez me llego un mail de esas cadenas que circulan que decía que cuando uno se enoja hiere a sus seres queridos y que por más que luego te disculpes el dolor deja al otro como un papel arrugado que por más que lo estires de nuevo, no vuelve a ser como al principio. Un día que mi marido se fue a ayudar a mi cuñado a mudarse, entré en crisis. A pesar de que estaba acordado que fuera, me dio una especie de ataque de soledad, no quería estar sola y me enojé con él por haberse ido. Me puse a llorar desconsoladamente, al mismo tiempo que me reía a carcajadas por verme a mi misma en esa situación. Era capaz de observarme teniendo un ataque hormonal incontrolable y canalizándolo hacia otra persona. Pero darme cuenta me permitió que el llanto y la risa me ayuden a descargar para no lastimar a mi compañero de ruta más importante y luego contarle lo sucedido como si fuera un cuento y reírnos juntos. En el trabajo me enojaba fácilmente, todo me parecía poco importante frente a la llegada próxima de mi hija o a mi estado de embarazada que, a mi juicio, obviamente, todos debían considerar. Por lo tanto leía 3 veces los mails antes de enviarlos o trataba de no responder en el momento si me sentía enojada, dejaba pasar unas horas porque el tiempo ayuda a relajarnos o subía y bajaba un piso por la escalera hasta otra oficina para bajar el enojo con cada escalón puesto que el ejercicio físico ayuda a vivir la emoción. Yo sabía que el problema no era lo que estaba escrito sino como lo estaba interpretando yo, usando mi filtro emocional del momento. Minimicé las reuniones, solo programaba las que fueran indispensables y delegaba el resto, siempre hay buenos colaboradores con los que se puede contar, solo hay que confiar en ellos y pasarles los temas. 5.4. La relación con los demás Cuando quedé embarazada la relación con el mundo cambió por completo. Todos se preocupaban por mi panza e intentaban cuidarme. Algunas veces eso me hacia sentir mimada pero en otros me atormentaba. Mi cuerpo cambió, todas las semanas aparecía algo nuevo y diferente, aparecieron las nauseas, acidez, gustos distintos (dejaron de gustarme cosas que me encantaban como los chocolates y el cuerpo me pedía otras como el jugo de naranja o las frutas frescas).También aparecieron dolores, sueño, ganas de llorar sin motivo. Pero todos alrededor siguen con su vida igual que antes, los amigos siguen organizando cenas y te invitan, los suegros y padres organizan el asadito de fin de semana y quieren ver la panza, los eventos laborales parece que crecen exponencialmente, justo ahora tenia que ser esta reuniónF Y sí, el que cambia es uno, así que también es uno quien debe hacerse cargo de registrar esos cambios y buscar herramientas que permitan comunicarse con el mundo y hacer algo. El coaching me dio declaraciones fundamentales mágicas como Gracias, Perdón, Te amo, SI y NO y formas de comunicación, pedidos y ofrecimientos, que me permitieron convivir con la panza y el mundo que me rodeaba. Las declaraciones son construcciones lingüísticas que modifican la realidad, la palabra antecede al mundo, luego de decirlo las cosas ya no son como eran. Por ejemplo una declaración de la independencia de un país, cuando un juez declara culpable o inocente a un acusado, etc. Las declaraciones tienen un compromiso asociado que es actuar consistentemente con la nueva realidad y tener la autoridad para hacerla. La autoridad puede ser por poder (por ejemplo al declarar la independencia tuvieron el poder de sostenerlo y hacerlo cumplir) o puede ser otorgada de común acuerdo o culturalmente (a los jueces les damos autoridad para decidir si alguien es culpable o no, a los padres los hijos les piden ciertos permisos, etc). Hay algunas declaraciones fundamentales que las personas tienen el poder de hacer en el ámbito de su vida personal y en cuanto ejercen ese poder asientan su dignidad como persona. Algunas de ellas son: SI y NO, la declaración de ignorancia, de gratitud, de perdón, de amor. Los pedidos y ofrecimientos son actos lingüísticos que tienen un compromiso asociado que genera acción a futuro, el compromiso de cumplir la promesa que se generará si el pedido/ofrecimiento es aceptado. Por lo tanto, como son generadores de acción, se lo conoce como lenguaje generativo. A diferencia de las hechos o interpretaciones que se los considera lenguaje descriptivo, porque describen el pasado pero sin generar cambios. A la hora de comunicarnos otra herramienta que me dio el coaching es la escalera de inferencias. La escalera de inferencias es un modelo que indica como ascendemos desde las observaciones hasta la toma de decisión. Los escalones que recorremos son Percibo datos Selecciono datos Agrego significado (sentido) Hago supuestos Saco conclusiones Adopto creencias Acciono Todo esto con nuestros modelos mentales (creencias) como base. Diferentes personas ante los mismos datos llegan a conclusiones diferentes que cada uno considera obvias, pero como generalmente no se recorre toda la escalera se discute a nivel de la decisión y las relaciones se desgastan e incluso se rompen. Muchas veces este proceso es inconsciente, vemos los datos, tomamos algunos y descartamos otros, los interpretamos, hacemos algunas suposiciones y llegamos a una conclusión. En función de lo que concluimos actuamos y modificamos o no nuestras creencias. Hacer consciente este proceso y compartir nuestra escalera o pedir a los demás que nos compartan la suya, es una herramienta que ayuda para hacer más efectivas nuestras comunicaciones con los demás. También hay un juicio muy importante que influye en todas nuestras relaciones y es la confianza. La confianza esta formada por 4 subjuicios Sinceridad: la coherencia entre el decir y el hacer. Confiabilidad: la capacidad de cumplir promesas. Competencia: la habilidad de saber hacer. Involucramiento: la actitud de estar al 100%. Nosotros hacemos juicios de confianza de los demás y ellos de nosotros, y por ser juicios se pueden modificar, por eso es posible construir o destruir la confianza. Todas estas herramientas permiten generar condiciones necesarias para lograr que las cosas sean como queremos. A continuación comparto como usé algunas de ellas con mis relaciones para crear la realidad que necesitaba para transitar y disfrutar mi embarazo. 5.4.1. La pareja Con el papá se hizo indispensable hablar mucho. Contarle todo el tiempo que me pasaba, como me sentía para que pueda acompañarme en el proceso. Gracias Agradecía a mi pareja por estar ahí, simplemente haciéndome el aguante que no es poco. Muchas veces sentía bronca y me preguntaba por qué a los hombres no les cambia la vida como a nosotras con el embarazo, después de todo la panza la llevamos las chicas y con ellos todos los cambios físicos. Pero a ellos también les cambia la vida, me contó que muchas veces se sentía impotente por no poder hacer nada para que yo me sienta mejor o para poder ser parte físicamente de esto que era lo más importante de su vida y eso me hacia sentir muy querida y contenida. Decirle gracias era reconocerlo por estar ahí, por acompañarme, por ser parte, era hacerle saber que era tan necesario y útil para el embarazo como yo y ayudaba a que esté más presente que para mi era muy importante en ese momento. Perdón Pedía perdón cada vez que me enojaba con él injustamente. Las personas más cercanas se transformaron para mi en la fuente de descarga de todos lo acumulado durante el día, entonces era necesario disculparme para reconstruir el vínculo y hacerme responsable si le había causado dolor aunque fuera sin intención. Te amo Le decía te amo a la mañana al levantarme y a la noche al acostarme, le enviaba mensajes de texto recordándole que lo amaba dos o tres veces por día y él a mi. Muchas veces damos por sentado que esto “ya se sabe”, “¿para que se lo voy a decir? si sabe que lo amo”. Pero es muy lindo cuando te llega el mensajito en medio de una reunión de trabajo o cuando estás tomando mates con amigas. Decirlo tiene su efecto, no pasa por alto, no es lo mismo que el otro “lo sepa”. Y en este momento fortaleció mucho más a la pareja recordarnos todo el tiempo cuanto nos amábamos. SI y NO Ahora más que nunca se hizo indispensable ser muy clara en la utilización de estas dos palabras, simples, que parecen tan comunes pero que es importantísimo usar con mucha claridad y acorde a lo que sentimos. Si cuando es Si y No cuando es No. Cuantas veces decimos una cuando en realidad queremos decir la otra, pero por prejuicios, miedos, culpa, etc. no nos animamos. Es fundamental para la panza ser sinceros con nosotros mismos y transmitir a nuestra pareja nuestras decisiones y deseos. Él debe saber que queremos hacer y que no, cuando tenemos ganas de hacer algo y cuando no, porque todo esfuerzo o disgusto afecta al bebé, a nosotros y a nuestra relación. Pedir y ofrecer Antes de conocer estas dos herramientas muchas veces yo pensaba: pero como puede ser que si mi pareja me conoce no sepa lo que quiero o no se dé cuenta de lo que necesito. La respuesta es: de la misma manera que aunque yo lo conozca, muchas veces no se lo que quiere o necesita, o simplemente no lo registro porque estoy cansada, o simplemente muy ocupada y preocupada con mis cosas. Estas dos herramientas fueron claves para pasarla bien. Hacer pedidos explícitos a mi pareja cada vez que necesitaba su ayuda y ofrecer lo que yo podía dar en cada momento fue fundamental para que no tenga que adivinar que esperaba yo de él o que podía esperar de mí en cada momento. Cada uno se comprometía con lo que podía y acordábamos entre los dos como hacer las cosas. Esto minimizó las discusiones y reclamos. Confianza Confiar en que lo que mi pareja hacia era lo mejor que podía en cada momento y trabajar para fortalecer el vínculo entre ambos fue fundamental para llevar adelante el embarazo. Me permitió delegar tareas cotidianas en él confiando en que las haría lo mejor posible aunque no las hiciera igual que yo. Confiaba en que podía desarrollar sus competencias si yo lo guiaba y así mejoraba cada dia. Charlábamos mucho, compartiendo lo que le pasaba a cada uno con el embarazo: como lo estábamos viviendo, que sentíamos, eso nos ayudaba a comprendernos más y juzgarnos menos y saber que los dos estábamos 100% embarazados, cada uno a su manera. Cumplir las promesas a veces se hacia difícil, estábamos cansados y siempre había cosas para hacer. Tramites nuevos, turnos con el medico, comprar o conseguir cosas desconocidas hasta el momento (cochecito, cunas, saca mocos, saca leche, pañales, etc., etc., etc. , la lista es larguísima) pero lo importante es que si alguno no podía cumplir con su compromiso lo reconocía y pedía disculpas y reprogramábamos la tarea juntos, eso hacia que el otro se sienta tenido en cuenta y evitaba el viejo y conocido “pase de facturas” La sinceridad es fundamental porque como el embarazo aumenta la sensibilidad, las mentiras o decir algo y hacer en contrario duele más. Así que nos decíamos todo lo que pensábamos y hablábamos todo lo necesario para acercar diferencias, sabiendo que lo más importante era que nos amábamos, nosotros y a nuestro bebé, por sobre todas las cosas. 5.4.2. Los abuelos Tanto mis padres como mis suegros no tenían nietos así que estaban enloquecidos con la noticia y más después de haber pasado por la experiencia anterior de que perdimos un embarazo. Se trasformaron en una fuente de alegría cada vez que veíamos su sonrisa al mirar la panza o preguntar por el bebé, pero también de opiniones sobre lo que hacer o dejar de hacer. Pedidos La intención de estas opiniones no hay duda que siempre es ayudar pero muchas veces termina invadiendo o molestando y eso afecta a la relación. Para poder manejarlo fue fundamental tener una charla para decirles claramente que esperábamos de ellos para que nos acompañen en este camino. Otra vez hacer pedidos concretos fue clave para poder cuidar estas relaciones tan importantes para mi y mi pareja. Te amo Les dijimos que los amábamos y queríamos compartir con ellos este momento pero al mismo tiempo les pedimos que respeten nuestra privacidad y nuestra independencia para ser los padres que queríamos ser, para cometer nuestros propios errores y corregirlos y para ser sus hijos amados como hasta este momento, porque no tenemos dudas del amor que sienten por nosotros y escucharlo de nuestra propia boca fue música para sus oídos. Perdón Fue muy importante perdonar a nuestros padres por los errores que cometieron con nosotros y aceptarlos como son. En muchas ocasiones aparecía la intención de pasar facturas del tipo si no supiste hacer esto o aquellos conmigo por que me vas a decir ahora que tengo que hacer. En ese momento distinguía que traer el enojo del pasado solo generaba resentimiento y no construía nada para la relación actual. Así que pensaba en la panza y en cuanto podían regalarme mis papás o mis suegros ahora y conectarme con ese sentimiento me ayudaba a rencaminar las charlas para que disfrutemos juntos cada uno en su nuevo rol de padres y abuelos. 5.4.3. Amigos, conocidos y desconocidos Las relaciones de amistad, laborales e incluso el trato con los desconocidos también se ven afectados por el embarazo. Es sorprendente lo que la panza puede generar en la gente que nos rodea. Desde ofertas de ayuda de un desconocido en la calle para atarte los cordones, hasta lluvia de consejos de dudosa utilidad de tus amigas más queridas. Aquí como usé algunas herramientas para lidiar con esto. SI y NO Como dije antes nuestros amigos siguen con su vida cotidiana aunque nosotros estemos embarazados así que seguimos recibiendo invitaciones a cenas, mateadas y otras reuniones. Es muy importante consultarnos y consultar a la panza si tenemos ganas de asistir y solo hacerlo cuando la respuesta es SI, para evitar arrepentirnos luego al sentirnos mal. Los demás saben comprender y nadie se ofende si decimos que NO a una invitación y si lo hacen podremos utilizar la herramienta a continuación para disculparnos explicando nuestros motivos. Lo mismo sucede con los compromisos laborales, es importante consultar a la panza antes de asumir cualquier compromiso y decir que NO cuando sea necesario (no me puedo quedar después de hora, no puedo asistir a esa reunión, no puedo entregar ese informe en esa fecha preciso más tiempo, etc.). Escalera de inferencias En el trabajo usé esta herramienta haciendo preguntas que me permitieran recorrer la escalera de inferencias de los demás o poniendo mucho foco en explicar la mia para mejorar la comprensión y evitar discusiones, sobretodo porque como explique más arriba estaba muy irritable en este periodo y mis juicios le restaban importancia a muchos temas laborales ya que privilegiaban mi “panza”. Las preguntas que me ayudaron para indagar la escalera de inferencias de los demás o para recorrer la mía propia al exponer algo fueron: ¿Qué datos estás tomando? ¿Qué interpretaste de esos datos o de lo que pasó? ¿Qué supuestos hiciste acerca de lo que pasó? ¿A qué conclusión llegaste? ¿Qué decisión tomaste? Esta herramienta también fue muy útil a la hora de escuchar los “consejos” de los demás, ya que como dije antes el embarazo genera dadores de conejos entre los amigos pero incluso la vendedora de la tienda te dice que hacer. Indagando en su proceso de inferencias podía tener más información sobre la proveniencia del consejo y me daba la posibilidad de decidir si lo tomaba o lo dejaba pasar. Confianza – Pedido de ayuda En el trabajo con mis compañeros y en la vida con mis amigos y conocidos, esta herramienta fue fundamental para delegar tareas y pedir ayuda cuando el cuerpo y la mente empezaron a dar indicios de que se cansaban más que antes. Hay mucha gente con la disposición y las competencias necesarias para hacer nuestro trabajo o darnos una mano con algunos temas, a veces de manera distinta a como lo haríamos pero efectivamente, solo hay que confiar en ellos y pedirles ayuda explicando claramente lo que se espera en cada ocasión. 5.4.4. Profesionales Confianza Para mi la clave en mi relación con mi médico fue confiar en él y sus competencias como profesional. Como dije antes cuando estas embarazada todo el mundo te da consejos que se contradicen y la cantidad de información disponible en la web es tal, que abruma. Por eso ante la menor duda consultaba con mi obstetra y su palabra era la verdad para mi. Eso me tranquilizaba y bajaba mi nivel de ansiedad. Saber que contaba con él me ayudó a transitar este camino con seguridad. Lo mismo pasa ahora con el pediatra que se transformó en la fuente de confianza para saber que hacer con la bebé. Invertir en construir y honrar el vínculo de confianza con los profesionales es una tarea muy saludable para toda la familia. 5.4.5. Conmigo misma La relación con la que más trabajé fue con la persona más importante para transitar y disfrutar este trayecto como todos los de mi vida: YO MISMA. Esta fue la relación más difícil para mi de trabajar y la más importante también, si no podía mejorar mi relación conmigo mucho menos mi relación con otros. Asi que puse manos a la obra. Gracias Agradecía a la vida todos los días por haberme regalado mi familia y por ese día que acababa de terminar. Agradecía las fuerzas para sobrellevar los malestares y agradecía las alegrías vividas (ver el corazoncito latiendo en la eco es impagable y no puede dejar de agradecerse ese momento sublime) Perdón “Perdonarse a si mismo tiene un efecto liberador”, esta frase está escrita en mis apuntes de coaching y fue mágico para mi descubrirla. El perdón nos hace ver que ya no somos como cuando cometimos el error, las personas cambian y pueden ser diferentes a cuando se equivocaron y darme cuenta de eso me permitía liberarme de la culpa y buscar un nuevo observador dentro de mi que vea algo distinto y me permita cambiar para transformarme en una nueva persona que hace cosas diferentes porque es diferente. Te amo Le decía te amo a la panza todo el tiempo y cada mañana me recordaba a mi misma que para poder dar amor, hay que tenerlo. Por eso me amaba a mi misma y prestaba mucha atención a mis necesidades y ponía toda mi energía cada momento en registrar todo lo que me pasaba para actuar en consecuencia. SI y NO Como dije antes registraba lo que quería y actuaba en consecuencia, eso me ayudo a no tener que arrepentirme de mis decisiones ni culpar a otros o a mi misma por ellas. Al respetarme y decir Si o No cuando realmente lo sentía me ayudó a pasar un embarazo muy tranquilo y en paz conmigo misma. 5.5. Que mama quiero ser Una de las cosas más linda y útil que hice fue un trabajo para la carrera donde la propuesta era hacer un plan para un proyecto desafiante. Como yo estaba monotemática, porque al embarazarme todo el foco pasó a estar en mi bebé y todo lo asociaba a eso, decidí que el proyecto más desafiante que tenía era ser mamá. Pero el planteo era que yo quería ser una mamá genial sin dejar de ser una mujer, sin olvidarme de mi. Así que escribí el proyecto para ser quien quería ser a partir de la llegada de mi hija (para este momento ya sabia que era una nena). Como todo proyecto tiene una fase de definición de la visión, la meta a alcanzar, una planificación, una etapa de ejecución y el control de que es lo que va pasando y como se va cumpliendo el plan para ver si es necesario hacer ajustes. El concepto de desafiante está asociado a plantear la realidad ideal sin pensar en su factibilidad, pensando lo que realmente se quiere y para que lo quiero. Visión – Describir la meta Fue fabuloso poner en palabras lo que quiero ser, la experiencia de escribir quien quiero ser me obligo a pensarlo en detalle, a escribir cada pequeña cosa para poder estar segura de que esa era mi visión de la madre/mujer que quería ser a partir de ahora, sin pensar por ahora en como iba a lograrlo. Parece mentira lo diferente que es nuestra visión cuando realmente ponemos foco en describirla y escribirla. Esto no es menor, no es lo mismo pensarlo solamente que volcarlo al papel. Porque nos fuerza a enfocar el lenguaje en la visión y el lenguaje crea, por lo tanto hace que ya empecemos a crear eso que queremos ser. Escribí sobre: La declaración de la meta ¿Cómo me veré cuando sea esa mamá/mujer genial? ¿Qué voy a sentir cuando sea esa mamá/mujer genial? ¿Cómo serán los que me rodean cuando sea esa mamá/mujer genial? ¿Qué valores había en mi visión? ¿Qué beneficios iba a obtener yo y los que me rodean? ¿Qué condiciones iban a indicar que la meta se había cumplido (condiciones de satisfacción)? Le puse nombre a mi proyecto, un nombre motivante que me de energía para llevarlo a adelante. Planificación Esta etapa consiste en armar el plan de acciones y recursos (materiales y humanos) necesarios para llevar adelante el proyecto. Se define una fecha de inicio y metas intermedias con fechas para cumplir, esto es fundamental para que el proyecto no quede en una idea sino que se ejecute y se empiece a hacer realidad, luego si es necesario se puede ir modificando pero hay que arrancar y ya (“No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”). Se define una persona a la que le contaremos del proyecto y nos ayudará a hacer un seguimiento de que los estamos llevando adelante (el acontable), es a quien le “rendimos cuentas”. Definimos que personas nos ayudarán, que recursos necesitamos, cuales tenemos y cuales nos faltan, que nivel de compromiso tenemos con el proyecto, que estamos dispuestos a hacer o dejar de hacer para llevarlo a cabo, que obstáculos pueden aparecer, que relaciones necesitamos fortalecer o construir. Escribí: ¿Qué necesito para llegar? ¿Qué tengo? ¿Qué me falta? ¿Quién me puede ayudar? ¿Qué tengo que aprender? ¿Qué necesito pedir, ofrecer o prometer? ¿Qué creencias debo revisar y cuales potenciar? Puse fecha de inicio Armé un plan de metas intermedias con fechas Identifiqué una persona que sería mi acontable Ejecución Como dijimos en la atapa anterior es importante arrancar cuanto antes, plantear acciones para la primera semana del proyecto de manera de llevarlo a la práctica y que no quede en puro plan. Asi que a la semana siguiente ya había comenzado con las primeras tareas, es sumamente gratificante empezar a ver como se puede hacer lo que uno planifica y como se va cumpliendo. Eso además te carga las pilas para seguir. Mi principal motivación era disfrutar del camino además de recorrerlo y eso hizo que fuera y sea, porque sigo en camino (la primer etapa finaliza en marzo cuando regrese a trabajar siendo mamá), muy llevadero. Control Los puntos de control deben ser periódicos, lo ideal es que no sean muy seguidos como para poder recoger logros que incentivan pero no demasiados alejados como para que nos recordemos seguido donde vamos y poder hacer ajustes si nos estamos desviando. Yo puse controles mensuales y algunos semanales al comienzo para que me ayuden a no distraerme en el arranque, hasta que internalizara quien quería ser y lograra meter en mi mentalidad rutinaria algunas creencias. 5.6. El momento más esperado: el día del nacimiento Por fin llego el dia más esperado, empecé con contracciones, el fantasma desconocido hasta el momento. El dolor era fuerte y el miedo regresó. Si bien yo había trabajado con esta emoción bajando el nivel de amenaza, puesto que si tantas madres lo habían superado la amenaza no podía ser tal, por momentos volvía a dudar. ¿Sería capaz yo de resistir ese dolor? En ese momento me aferré a mi pareja y apretaba fuerte su brazo y eso me daba la contención necesaria para seguir. El amor en este momento fue la única herramienta a la que pude recurrir, el amor por mi bebé que estaba por llegar y el de su papá que me acompañaba en ese momento tan esperado por ambos. También estaba el tema de la familia, todos querían estar, todos habían pedido que les avisemos. Y en medio del dolor de las contracciones y con mi pareja manejando hacia la clínica se hace difícil pensar en los demás. Asi que decidimos escuchar nuestros corazones y estar presentes en ese momento tan maravilloso que estábamos a punto de vivir. Solo llamamos a nuestros padres y hermanos (de sangre y de la vida) y luego nos dedicamos a pleno a vivir la genialidad de dar a luz, de ver nacer a nuestra hija. Tuvimos algunas complicaciones porque la clínica que habíamos elegido originalmente estaba cerrada por un virus y hubo que cambiar a último momento, tardaron en ingresarnos al sanatorio, el anestesista no llegaba y los dolores eran cada vez más fuertes. De nuevo apelamos a la confianza en los profesionales que nos rodeaban, el obstetra y la partera. Sabíamos que hacían lo mejor que podían y de la mano del papá seguíamos trabajando para traer a la beba al mundo. Por fin llegó el anestesista, y en tres pujos Luisina salió de la panza y escuchamos su primer llanto, ese llanto mágico y sanador que hace que al instante te olvides el dolor que acabas de vivir, porque esta lleno de vida y trae consigo la alegría más inmensa que yo me pudiera imaginar. Ya nada importa más que amar a ese ser que acaba de unirse a la familia. Es el recurso más hermoso para que el miedo y el dolor que sentía antes desaparezcan y se transformen en ternura absoluta. Luego a la habitación y a recibir a los abuelos, tíos, y amigos que traen su amor para compartir con nosotros. En esta etapa vuelve a ser muy importante escuchar a nuestro cuerpo para ver que necesita y tratar de escuchar a la beba que acaba de llegar para poder bajar la ansiedad de quienes quieren conocerla y preservar su salud y su bienestar, permitiéndole adaptarse con calma a este nuevo mundo al que eligió venir. 5.7. De vuelta a casa con la novedad: Ya no estamos solos, el bebé vino para quedarse Volvimos a casa luego de cuatro días en la clínica. ¿Y ahora? De nuevo nos aferramos como al quedar embarazados al camino de aprender. Nos declaramos ignorantes en el tema y sabíamos que había que aprender andando. En esta etapa hubo dos herramientas que nos ayudaron: problema vs. quiebre y estados de animo Estados de ánimo En esta etapa es muy importante entender como afecta nuestro estado de ánimo a nuestra vida. Los estados de ánimo afectan a quienes somos en cada momento y actúan como filtro para que veamos posibilidades o no ante diferentes situaciones, de allí la importancia de reconocerlos y trabajar con ellos. Los estados de ánimo son de temporalidad más extensa que las emociones y a diferencias de ellas no tienen un acontecimiento disparador sino que se vean formando por un conjunto de emociones reiteradas. Hay cuatro estados de ánimo básicos: Cuando pasa algo que no puede modificarse y me opongo, genero un estado de ánimo de resentimiento; en cambio si lo acepto, genero un estado de ánimo de aceptación Si pasa algo que puede modificarse y me opongo, genero un estado de ánimo de resignación; en cambio si lo acepto, genero un estado de ánimo de posibilidad. Siempre estamos en un estado de ánimo determinado y los estados de ánimo son contagiosos así que no solo nos afectan a nosotros sino a quienes nos rodean. Pero la buena noticia es que se puede hacer algo para modificarlo. Si genero reiteradamente emociones de algún tipo me generaran un estado de ánimo determinado, es decir que puedo buscar acontecimientos que me generen esas emociones y así modificar mi estado de ánimo. Problema vs. Quiebre Cuando aparece un obstáculo hay dos caminos de acción posibles, poner el foco en le problema (paradigma del problema) o en el observador que ve el problema (paradigma del quiebre). Si nos centramos en el problema la acción posible es buscar una solución, si entendemos que el problema es tal para el observador que somos en ese momento que esta viendo ese problema, podemos intentar modificar el observador y crear uno diferente. En el paradigma del problema reaccionamos contra lo que sucede generalmente juzgando que lo que esta ocurriendo no debería estar ocurriendo y tratamos de encontrar una solución para corregirlo o un culpable. Vemos que el problema esta afuera y surgen emociones de resistencia, queja, querer tener razón, enojo. Las ideas que se nos ocurren para resolverlo son dentro de lo que se ve como posible, no hay lugar para algo extraordinario. En el paradigma del quiebre entendemos que hay algo que se interpone en el camino hacia lo que se quiere lograr entonces declaramos un quiebre. El mismo observador lo declara y se predispone a actuar para generar un cambio. Aceptamos lo que esta ocurriendo y nos comprometemos a accionar para transformarlo más allá de la búsqueda de soluciones. Surgen emociones de entusiasmo, creatividad, curiosidad. Aparecen ideas más allá de lo que se porque estamos abiertos a otras posibilidades, incluso es posible que creemos un nuevo observador que ya no ve el problema o sea que el problema desaparece, deja de ser un problema aunque no se solucione. 5.7.1. El sueño La beba es una santa, solo llora cuando le duele algo o tiene hambre, pero eso sucede muy seguido así que de noche solo dormimos unas dos o tres horitas y el cansancio empieza a afectarnos. Es muy común enojarnos y el estado anímico se ve afectado, estamos más irritables. Decidí declarar un quiebre: Mientras este amamantando no volveré a dormir 6 horas de corrido. Esto es algo que no podía modificar ya que para mi era prioritario darle el pecho a la peque, así que decidí aceptarlo y ver que podía hacer con ello. Le pedi ayuda a mi pareja porque nos afectaba a ambos el tema y empezamos a aplicar el humor para tratar de cambiar la emoción de enojo que genera no poder dormir y transformarla en una emoción de alegría. También nos recordábamos todo el tiempo uno al otro que nuestra hija es hermosa y que por ella todo vale la pena así el enojo se transformaba en amor absoluto. Así tratando de cambiar el enojo por risas y amor lográbamos un estado anímico de aceptación para el momento que vivíamos en lugar del estado de resentimiento que nos generaba enojarnos por no poder dormir, dado que es algo que no podíamos modificar. 5.7.2. El llanto Con el llanto sucede algo similar al sueño, al principio la beba lloraba y no sabíamos que le pasaba. Eso nos generaba ansiedad y desesperación afectando nuestro estado anímico. Empezamos a trabajar en el tema dándonos tiempo para aprender que significaba cada llanto, que nos pedía nuestra hija en cada ocasión y con el correr de los días, poco a poco, nos íbamos dando cuenta (aun estamos en este proceso de aprendizaje). Declaramos un quiebre: la beba lloraba por ser su única forma de comunicarse, y lo tomamos como una oportunidad de aprender. No había que resolver el problema para que no llore, sino que intentábamos entender por qué lloraba y ver si podíamos hacer algo para ayudarla o simplemente acompañarla en ese momento para que supiera que no estaba sola, que su mamá y su papá estaban con ella. 5.7.3. Las visitas Con la vuelta a la casa aparece otro tema que son las visitas para conocer o ver a la beba. Todos quieren conocerla y el teléfono no para de sonar (por suerte los mensajes de celular ayudan a minimizar los llamados) y las consultas de cuando puedo pasar están a la orden del dia. Aquí la herramienta de escuchar las necesidades propias de la familia vuelve a ser indispensable, no siempre la madre, el padre y la beba quieren ver a los demás con la misma intensidad que los demás quieren ver a la beba. Luego de escucharnos podremos usar las herramientas de declaraciones fundamentales y decir SI cuando realmente queremos que vengan y NO cuando no es así, recorriendo la correspondiente escalera de inferencias para explicar nuestros motivos y así cuidar nuestras relaciones que seguramente son valiosas para nosotros aunque ahora se prefiera un poco mas de privacidad. Los pedidos deberán estar a flor de piel, para solicitar que pasen en otro momento o que se respete la intimidad para amamantar o el tiempo para entrar en ritmo que cada uno necesite. Las abuelas no se quieren perder detalle de sus avances así que bajo la excusa de dar una mano pretenden instalarse en tu casa, aquí también es muy útil hacer un pedido para que se respete la intimidad familiar u ofrecer llamarlas para pedir ayuda cuando nosotros lo consideremos necesario. 5.8. La ternura que todo lo puede: Mi hija es la más hermosa del mundo Por ultimo quiero compartir con Uds. la herramienta de diferenciar hechos de interpretaciones La realidad que observamos es la suma de hechos más nuestra interpretación de esos hechos. Los hechos son afirmaciones comprobables, que no podemos cambiar y que son verdaderas o falsas. Son actos lingüísticos donde asumimos el compromiso de aportar evidencia o testigos para demostrar su veracidad. Las interpretaciones dependen del observador que somos, se pueden cambiar y son válidos o inválidos, fundamentados o sin fundamentar. Son actos lingüísticos donde asumimos el compromiso de tener la autoridad para realizar el juicio y fundamentarlo con hechos. La buena noticia es que si la realidad tiene una parte que es una interpretación de los hechos, como esa interpretación se puede cambiar, entonces podemos cambiar la realidad. Para hacerlo solo alcanza con modificar el observador que somos para ver las cosas con otros ojos y otros filtros. Hoy estoy escribiendo esta tesina con mi hija de casi dos meses sentada en su cochecito, mirándome y sonriendo, mientras mueve su chupete en la boca y sólo puedo decir que no hay nada más bello en este mundo que la ternura de su carita, aunque esta sea una interpretación de una madre enamorada de su hija que seguramente toda otra madre puede ayudarme a validar. La llegada de Luisina a mi vida modificó el observador que soy de la mejor manera que me pudiera imaginar, transformando todo lo que me rodea. 6. Conclusiones El camino de la maternidad es el viaje más maravilloso que me regaló la vida y utilizar todas las herramientas a mi alcance para disfrutarlo a pleno fue lo más lindo que yo pude regalarme. «Tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, estás en lo cierto» Henry Ford (1863-1947) 7. Bibliografía La quinta disciplina – Peter Sengue (Capitulo 10 Modelos mentales) Ontología del Lenguaje – Rafael Echeverria (Capitulo 3 Declaraciones fundamentales) La sabiduría de las emociones – Norberto Levy Apuntes carrera de coaching – Escuela de formación de Líderes
