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Artículo
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Fisioterapia y ocio:
la presencia del
fisioterapeuta en el
llamado turismo saludable
M. Falcón Romero1
A. Luna Maldonado 2
1
Profesor Ayudante del Área
de Medicina Legal y Forense.
Universidad de Murcia. España.
2
Catedrático de Medicina Legal
y Forense. Universidad de
Murcia. España.
Correspondencia:
María Falcón Romero
Facultad de Medicina
Cátedra de Medicina Legal
y Forense
Universidad de Murcia
Campus de Espinard.
30100 Murcia
E-mail: [email protected]
Physiotherapy and leisure:
the presence of physiotherapists
in health tourism
Fecha de recepción: 09/01/06
Aceptado para su publicación: 05/06/06
RESUMEN
ABSTRACT
El problema del intrusismo en las profesiones sanitarias
como es el caso de la fisioterapia es un problema
frecuente que se ve agravado por la importante oferta y
demanda que existe del llamado “turismo saludable”
donde dentro de las ofertas de ocio se encuentran
tratamientos relajantes, antiestrés o antifatiga que
aplican en muchos casos técnicas de masaje,
aquaterapia, fangoterapia etc, tratamientos donde en la
mayoría de los casos no se dispone de los profesionales
necesarios para realizarlos. Hemos analizado las ofertas
de ocio en las que se incluyen técnicas encuadrables
dentro de la capacitación profesional específica del
fisioterapeuta presentes en la red y en cuatro oficinas
de diferentes agencias de viajes para conocer en que
medida estas ofertas terapéuticas están respaldadas por
la actuación de un fisioterapeuta. El numero de
resultados en la búsqueda en la red utilizando la
entrada “Turismo y salud” es de 1.770.000 y si nos
ceñimos exclusivamente a las paginas Web de España el
número de resultados es de 676.000. Hemos realizado
The problem of unqualified people masquerading
as health professionals, such as physiotherapists,
is increasing with the boom in health-oriented
tourism, which frequently includes offers of massages,
aqua-therapy, mud therapy and relaxation, anti-stress
and anti-fatigue treatments, despite the fact that in
most cases the necessary professional staff is simply not
available. We have analysed such offers which
specifically mention treatments which may be
understood to be related with physiotherapy in the
Internet and in several travel agencies to ascertain
the extent to which these offers are actually
include the intervention of a physiotherapist.
The number of results in an Internet search under
“Tourism and Health” was 1,770,000 of which
676,000 corresponded to Spain. Of these Spanish
entries, we made a random analysis of 250 web sites
based on the order in which they appeared. Only
in 24 % was there specific mention of physiotherapy
with the corresponding professional support, while
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M. Falcón Romero
A. Luna Maldonado
Fisioterapia y ocio: la presencia del fisioterapeuta
en el llamado turismo saludable
un muestreo aleatorio utilizando como número de
selección el número de orden, y hemos estudiado
250 páginas Web. Sólo en el 24 % se hace referencia
expresa a la existencia de la fisioterapia como una
realidad sustentada por los profesionales
correspondientes, mientras que en el 96 % se hace
referencia al uso de técnicas como: Cinesiterapia,
Masaje, Electroterapia, Magnetoterapia, Ergoterapia,
Hidroterapia, Balneoterapia, Climatoterapia,
Talasoterapia, Termoterapia, Crioterapia,
Vibroterapia, Fototerapia o Presoterapia.
Cuando hemos comprobado telefónicamente si
existía un fisioterapeuta encargado de realizar estos
tratamientos únicamente hemos encontrado respuestas
positivas en un 45 % de los centros que los ofertaban.
96 % referred to the use of techniques such as
massage and hydrotherapy along with their
therapeutic application. When we telephoned to
ascertain whether or not a physiotherapist was in
charge of providing the treatments, only 45 %
answered positively.
KEY WORDS
Unqualified; Physiotherapy; Tourism.
PALABRAS CLAVE
Intrusismo; Fisioterapia; Turismo.
INTRODUCCIÓN
En el momento actual asistimos a una proliferación de
ofertas de ocio donde la promoción y el cuidado de la salud se sitúan como un elemento más dentro de la oferta.
El conjunto de establecimientos dedicados al turismo
de salud y belleza en España generó un negocio de
606 millones de euros en 2002, un 18,3 % más que en
2001, según un informe de la empresa Análisis Sectorial y Estratégico (DBK). El aumento de la demanda de
este tipo de servicios está haciendo posible la proliferación de centros de talasoterapia y hoteles con centros de
SPA (salud por agua). A finales de 2002 se contabilizaron en España algo más de 90 balnearios, 22 centros de
talasoterapia, 24 de salud y belleza y unos 50 hoteles con
SPA, y las expectativas a corto plazo son de incrementar
el número de centros especializados1. En el caso concreto de los balnearios en los últimos tiempos se está avanzando hacia un nuevo concepto de termalismo que se
caracteriza, por un lado, por conjugar el concepto de
termalismo terapéutico tradicional con otro conjunto de
ofertas de salud no específicamente centradas en las ca-
racterísticas de las aguas mineromedicinales que algunos
autores denominan “Termalismo del Bienestar” 2 y por
otro lado, por asociar termalismo del bienestar con ofertas de ocio complementarias. Es evidente que todo esto
presenta un aspecto indudablemente positivo pero al
mismo tiempo plantea una serie de riesgos que es preciso tener presentes para evitar los conflictos.
Este nuevo turismo “saludable” desborda ampliamente el concepto clásico del balneario o de centro de talasoterapia e introduce una serie de actividades en el marco tradicional del alojamiento turístico. Spas y centros
de belleza dentro de los hoteles y complejos turisticos
ofrecen Saunas, masajes, hidroterapia, fangoterapia, etc.
que aparecen dentro del paquete turístico como los protagonistas de las actividades. Los riesgos se plantean no
sólo en la necesidad de que se realicen dentro de las buenas prácticas en su ejecución, sino también en su indicación. Debemos tener presente en primer lugar a que
tipo de población va dirigida esta oferta. Según Larrubia
y Luque 3 el análisis de la edad media del turista termal
en Andalucía muestra tres perfiles, uno muy importante
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en el llamado turismo saludable
que se corresponde con los mayores de 60 años que buscan descanso y salud y que se ha visto reforzado desde
1989 con los programas de termalismo social del Inserso; un segundo pico de demanda, que puede corresponderse con la clientela tradicional y clásica de los balnearios, que se sitúa en el intervalo entre 45 y 60 años que
acudan por una afección determinada y por último, el
intervalo entre 30 y 40 años que se está dejando notar
en la actualidad, cobrando cada día más importancia
mediante estancias cortas de fines de semana, que demanda descanso, tranquilidad y tratamientos antiestrés-estética-belleza. En el caso de aquellos usuarios que
se someten a estos tratamientos sin el adecuado control
medico puede ocurrir que este padezca algún tipo de patología (hipertensión, alteraciones articulares degenerativas, etc.) que pueden ser desconocidas en algunos casos
por el usuario y que requieren un control adecuado para
evitar las complicaciones derivadas de la aplicación inadecuada de maniobras o de técnicas inocuas para la persona sana, pero no para la persona con una patología
subyacente.
La fisioterapia es una profesión regulada, es decir existe una normativa específica que establece y delimita el
contenido y el alcance de los actos de la misma. Podemos definir un acto profesional como: La ejecución o
realización de una actividad especifica por un profesional
que reúne unos requisitos previos, y para la que se encuentra legalmente capacitado. En esta línea pensamos que la
participación de los fisioterapeutas en la aplicación de de
muchos de los tratamientos ofertados por las instituciones hoteleras dentro de la oferta de turismo y salud: Cinesiterapia, Masaje, Electroterapia, Magnetoterapia, Ergoterapia, Hidroterapia, Balneoterapia, Climatoterapia,
Talasoterapia; Termoterapia, Crioterapia, Vibroterapia,
Fototerapia o Presoterapia, esta respaldada por el marco
legal actual. Esta participación activa del fisioterapeuta
en el proceso es una realidad incontestable no sólo desde la perspectiva legal sino desde el sentido común más
básico.
agencias de viaje con implantación en todo el territorio
nacional aquellas ofertas de ocio en las que podrían incluirse tratamientos con técnicas encuadrables dentro de
la capacitación profesional específica del fisioterapeuta.
Para la búsqueda hemos utilizado el termino “Turismo y
salud”. Posteriormente dentro de las paginas Web españolas hemos realizado un muestreo aleatorio utilizando
como número de selección el número de orden, y hemos estudiado 250 Web, sin que coincidiera ninguna de
estas últimas ya que en la búsqueda la misma Web aparece varias veces como resultados distintos.
Dentro de las 250 paginas Web hemos analizado en
cuantas de ellas aparece el termino fisioterapeuta* y en
cuantas se hace referencia al uso de técnicas como: Cinesiterapia, Masaje, Electroterapia, Magnetoterapia, Ergoterapia, Hidroterapia, Balneoterapia, Climatoterapia,
Talasoterapia, Termoterapia, Crioterapia, Vibroterapia,
Fototerapia o Presoterapia. Posteriormente hemos preguntado telefónicamente si los tratamientos ofertados
eran aplicados por fisioterapeutas.
MATERIAL Y MÉTODO
Se trata de un estudio descriptivo transversal. Hemos
analizado en la red y en cuatro oficinas de diferentes
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RESULTADOS
El numero de resultados en la búsqueda en la red utilizando la entrada “Turismo y salud” es de 1.770.000 si
nos ceñimos exclusivamente a las paginas Web de España el número de resultados es de 676. 000. Hemos realizado un muestreo aleatorio utilizando como número
de selección el número de orden, y hemos estudiado
250 Web, sin que coincidiera ninguna de estas últimas
ya que en la búsqueda la misma Web aparece varias veces como resultados distintos.
De las 250 páginas Web estudiadas sólo en el 24 % se
hace referencia expresa a la existencia de la fisioterapia
como una realidad sustentada por los profesionales y en
el 76 % restante no aparece en la información recogida
en la Web ninguna referencia a la existencia de profesionales de fisioterapia. En el 96 % de las páginas Web
estudiadas se hace referencia al uso de técnicas como:
Cinesiterapia, Masaje, Electroterapia, Magnetoterapia,
Ergoterapia, Hidroterapia, Balneoterapia, Climatoterapia, Talasoterapia, Termoterapia, Crioterapia, Vibroterapia, Fototerapia o Presoterapia y sus aplicaciones terapéuticas.
Documento descargado de http://www.elsevier.es el 01/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato.
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en el llamado turismo saludable
Cuando hemos comprobado telefónicamente si existía
un fisioterapeuta encargado de realizar estos tratamientos únicamente hemos encontrado respuestas positivas
en un 45 %.
clusión determinante de las demás personas”. Entra dentro
de las competencias propias y exclusivas de esa profesión
titulada aunque es evidente que pueden existir actos
compartidos por dos o más profesiones. Sin embargo el
contexto donde se aplica el masaje puede establecer objetivamente la necesidad de la intervención de un profesional titulado; un masaje en medio hospitalario dentro de una prescripción terapéutica exige la presencia de
un profesional titulado.
El incluir el termino salud en una oferta de ocio no
justificaría inicialmente la presencia de fisioterapeutas,
pero si esta oferta se presenta dentro de un marco global donde de forma expresa se incluyen actividades de
promoción y de restauración de la salud orientadas a
personas sanas y enfermas en un contexto amplio, la
necesidad racional de que las prestaciones se realicen
dentro de un marco de capacitación profesional resulta
manifiesta.
En nuestro derecho penal el delito de intrusismo viene regulado en el Título XVIII (de las falsedades), Capítulo V (de la usurpación de funciones públicas y del
intrusismo) artículo 403 5.
El bien jurídico protegido por nuestro ordenamiento
penal en el delito de intrusismo se puede desglosar en
dos valores diferentes 6:
DISCUSIÓN
El concepto de actividad profesional y de profesión es
el resultado de un proceso histórico donde factores
como la formación específica, la autonomía, la capacidad de organización etc., configuran una estructura que
requiere en un momento dado una regulación normativa y un reconocimiento por el propio Estado. Va a ser
este reconocimiento legal por el Estado lo que define y
da cuerpo oficial a una actividad profesional y es el propio Estado el encargado de establecer el ámbito de las
competencias específicas de cada profesión y del reconocimiento de los espacios competenciales compartidos
con otras profesiones. La ley 44/2003 de 21 de noviembre 4 establece en su artículo 7: “corresponde a los Diplomados universitarios en Fisioterapia la prestación de los
cuidados propios de su disciplina, a través de tratamientos
con medios y agentes físicos, dirigidos a la recuperación y rehabilitación de personas con disfunciones o discapacidades
somáticas, así como a la prevención de las mismas”.
La fisioterapia es una profesión en continuo desarrollo
y requiere en el momento actual ser consciente de que
en el proceso continuo que supone la definición, concepto y límites de una profesión es necesario una actitud
activa que no supone en ningún caso caer en la trampa
fácil de una reivindicación continua o de una actitud
de beligerancia irreflexiva, y en esta línea resulta esencial la reflexión crítica de aquellas situaciones que requieren de una respuesta clara por parte de las instituciones que representan a la profesión en aras de
garantizar las competencias Resulta obvio que un gran
porcentaje de los servicios incluidos en las ofertas analizadas, requieren la participación de los profesionales sanitarios y concretamente la de los fisioterapeutas. Es evidente que en el caso de un masaje inicialmente no existe
la necesidad de que sea realizado por un fisioterapeuta,
el concepto de acto propio profesional que recoge nuestra legislación hace referencia a: “aquel que específicamente se atribuye a unos profesionales concretos, con la ex-
a) El derecho de todo ciudadano a alcanzar una profesión y ejercerla bajo la protección del ordenamiento
jurídico frente todos aquellos que quieran turbar su
correcto ejercicio.
b) El derecho de todos los ciudadanos a esperar que el
Estado garantice con el control que legalmente
ejerce sobre los títulos la veracidad y solvencia de
las profesiones cuyo ejercicio se autoriza.
La aplicación de ciertas medidas terapéuticas (masajes,
hidroterapia, etc.) por otras personas dentro de una institución hotelera no podría entenderse en muchos casos
como un delito de intrusismo, pero en otros en función
de la orientación, finalidad y características concretas de
la persona receptora de estas medidas si seria una acción
encuadrable dentro de este tipo penal. De otra parte si
por cualquier motivo se derivara un daño por la aplicación inadecuada de las mismas la situación sería muy diFisioterapia 2006;28(4):190-4
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ferente, ya que el delito de intrusismo es un delito de actividad (realización de un acto propio sin la posesión de
la titulación correspondiente) que se produce y se consuma por el mero desarrollo de una acción sin necesidad de
que sobrevenga resultado alguno, y estaríamos ante un
posible problema de daños por imprudencia, impericia o
negligencia más un delito adicional de intrusismo.
Es cierto que un análisis de la situación actual plantea
la necesidad de una reflexión sobre el contenido no sólo
de la publicidad de ciertas ofertas turísticas sino de lo
que es más importante de las actividades que se realizan.
La intervención de los colegíos profesionales puede ser
un herramienta eficaz para encontrar soluciones viables
y eficaces ante estos problemas.
BIBLIOGRAFÍA
1. Fernández Peón, F. El turismo sostenible en el entorno rural:
una necesidad para el “agro” catalán. (Tesis doctoral). Barcelona:
Universitat Ramon Llull. Facultat d’Economia IQS; 2003.
2. San Pedro Martínez, A. Hacia la definición del producto turístico balneario. Propuesta para su promoción. Actas de las V Jornadas de Geografía del Turismo. Tarragona: Universitat Rovira i
Virgili; 2000.
3. Larrubia R, Luque A. Las estaciones termales en Andalucía: de
la explotación tradicional a la configuración de un nuevo pro-
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ducto turístico integral. Cuadernos de Turismo. 2002;10:
101-22.
4. Ley 44/2003 de 21 de noviembre, de Ordenación de las profesiones sanitarias de salud.
5. Código Penal: Colex, Madrid, 1986.
6. Villanueva E, Gisbert JA. El acto médico. Requisitos para el ejercicio legal de la medicina. Delito de intrusismo. Medicina legal y
toxicología. Barcelona: Masson; 2004.