ENTRAMOS CONFIADOS Y DECIDIDOS EN LOS AÑOS SETENTA Documentos sobre la política nacional e internacional de la RDA 1/1970 Entramos confiados y decididos en los años setenta Entramos confiados y decididos en los años setenta Mensaje de Año Nuevo del presidente del Consejo de Estado de la RDA, Walter Ulbricht VERLAG ZEIT IM BILD DRESDEN Editorial Zeit ¡m Bild, RDA — 801 Dresden, Julian-Grimau-Atlee Prlnted in the Germán Democratic Republic by Grafischer Grossbetrieb Vólkerfreundschaft Dresden 0204 - 5 5 Queridas ciudadanas Queridos ciudadanos Queridos camaradas A todos ustedes envío mi amistoso saludo al final de este año de 1969 que tan fructífero ha sido para cada uno de nosotros. Y quiero dar a ustedes las gracias por los magníficos rendimientos que han aportado todos ustedes especialmente en este año, en diligente y creador trabajo, para provecho de todos, para mayor honra de nuestro Estado socialista. Lo hago en nombre del Comité Central del Partido Socialista Unificado de Alemania, en nombre del Consejo de Estado de la República Democrático Alemana y del Consejo de Ministros de la República Democrática Alemana. Un balance grandioso En este año que ahora termina hemos festejado el 20° aniversario de nuestra República Democrática Alemana. Y tenemos buenos motivos para estar satisfechos y orgullosos. Podemos hacer un grandioso balance de estos dos decenios pasados. I Quién como trabajador hubiera tenido la audacia de pensar en entrar en posesión de las empresas de los consorcios capitalistas, y de transformarlos en modernos combinados socialistas, como lo han hecho nuestros trabajadores, nuestros científicos e ingenieros I i Qué trabajador campesino habría soñado entonces en las grandes explotaciones socialistas agrícolas como son la mayoría de nuestras cooperativas de producción agrícola I i Quién hubiera creído entonces, cuando todavía nos ocupábamos en retirar los escombros de las destrucciones causadas por la guerra fascista, que podríamos alguna vez llegar a tener ciudades socialistas tan bellas como lo está siendo nuestra capital Berlín y otras de nuestra República gracias a la obra creadora de nuestros constructores! Y sobre todo: 6 (Quién hubiera creído capaz a sus conciudadanos y aun a sí mismo de tanta iniciativa, de tanto espíritu colectivo, de tanta fuerza creadora como nosotros todos juntos hemos demostrado tener! En este año que ahora termina fue más evidente que nunca cómo el pueblo trabajador ha ganado en audacia, en disposición, en laboriosidad y abnegación en estos dos decenios. Nuestra República Democrática Alemana se ha transformado por el trabajo pacífico colectivo de nuestros ciudadanos en un Estado socialista moderno. Con lo realizado por los trabajadores en la industria y en la agricultura, en la ciencia y la técnica, en la instrucción, en las esferas sociales, culturales y también deportivas, nuestro Estado ha ganado la simpatía y el reconocimiento de todos los pueblos amantes de la paz. Nuestra política de paz y de amistad con los pueblos ha dado buenas pruebas. Nuestros amigos en todo el mundo —y también nuestros enemigosconocen hoy bien las causas del exitoso desarrollo de nuestra República Democrática Alemana. La primera es que hemos extirpado el imperialismo. Hemos suprimido definitivamente las raíces políticas y económicas de la guerra imperialista. La segunda es el sistemas social socialista en el que no existe la explotación del hombre por el hombre. Estamos construyendo el socialismo guiándonos por la teoría del marxismo leninismo y vamos consecuentemente, correspondiendo a las condiciones de nuestro país, a su culminación. La tercera es la democracia socialista. Esta democracia se despliega sobre la buena base de la Constitución que nuestro pueblo ha aprobado, e incorpora cada vez un número mayor de ciudadanos activamente a la planificación y dirección de nuestro desarrollo social. La cuarta es el aseguramiento de nuestra obra de reconstrucción. Contrarrestamos consecuentemente la actividad obstaculizadora del imperialismo germanooccidental y combatimos sin descanso su guerra sicológica. 7 Pero lo más importante y significativo de los 20 años de historia de nuestra República Democrática Alemana es, sin duda, el desarrollo que cada uno de nosotros, todos los ciudadanos de nuestro Estado, hemos adquirido conjuntamente. Me refiero al surgimiento de la personalidad y de las relaciones humanas que caracterizan nuestra época socialista. Esto es también la más hermosa y convincente prueba del profundo humanismo, de la fuerza creadora de humanidad y de la superioridad del orden social socialista. Cuando hemos oído hoy en la noche la apasionante 9a Sinfonía de Beethoven con las palabras de Friedrich Schiller, hemos podido decir con razón: Sí, las esperanzas humanistas y los sueños de muchas generaciones de nuestro pueblo, las que encontraron su expresión en las obras de los clásicos alemanes son, por la fuerza propia del movimiento obrero alemán, una realidad cada vez más definida. Todos los hombres pueden ser hermanos cuando el pueblo trabajador se libera de las cadenas de la explotación y la opresión imperialista y toma en sus propias manos su destino. La obra de todos los ciudadanos El año pasado ha sido rico en impresionantes ejemplos de patriotismo socialista, el patriotismo que hoy anima más y más a los ciudadanos de la República Democrática Alemana y determina su conducta. Bajo la dirección de su partido revolucionario, la clase obrera, en alianza con todos los trabajadores, ha dado buenas pruebas también en este año 1969 de su fuerza histórica. Nuestra planificación económica socialista ha hecho buenos progresos con la calificación de la planificación central y la reforzada observación de la propia responsabilidad de los productores socialistas por el conjunto de su actividad económica. En emulación socialista, los trabajadores realizan verdaderas hazañas. Los trabajadores de la construcción de la Plaza Lenin de 8 Berlín, los campesinos de la Cooperativa de Producción Agrícola «Lenin» en Marzahna, los científicos y estudiantes de la Universidad de Rostock y muchos, muchísimos otros ciudadanos, contribuyen a fortalecer con sus rendimientos en la emulación nuestro Estado socialista. Todos ellos, con su trabajo, crean las premisas para el cumplimiento de nuestros planes, para la estructuración planificada de nuestro sistema social socialista y las condiciones de vida de nuestro pueblo. Nuevas fábricas han sido puestas en marcha en este año pasado y su producción corresponde al más alto nivel mundial. Cada vez mejor logramos hacer valer la naturaleza de nuestro orden socialista para mejor dominar la revolución técnico-científica. Gran parte en los éxitos del año pasado corresponde a las mujeres trabajadoras. Sin ustedes, queridas conciudadanos, no hubiera podido realizarse mucho de lo realizado en los dos decenios de nuestro Estado. Sigue siendo uno de nuestros deberes seguir facilitando su trabajo como trabajadores, como mujeres de su casa y como madres. Las ferias de los Maestros de Mañana y las exposiciones de trabajos de estudiantes y jóvenes científicos dan impresionante testimonio del sentido de responsabilidad, del espíritu investigador y de acción de la joven generación. Ciertamente, no tenemos por qué temer el futuro cuando nuestras muchachas y muchachos se preparan tan consecuentemente para corresponder a las altas exigencias de los próximos decenios. En los veinte año de existencia de la República Democrática Alemana, la cultura y el deporte han venido siendo cada vez más causa de todo el pueblo. Nuestros escritores y artistas han enriquecido con valiosas obras nuestra cultura socialista nacional. Ellos nos han dado impresionantes obras artísticas que nos han ayudado a ir adelante en la solución de nuestras tareas. Nuestros deportistas, con sus rendimientos de primera clase han acrecentado el prestigio del Estado socialista alemán y han animado a muchos ciudadanos a practicar el deporte y a participar en el movimiento de deporte popular. 9 El espíritu ciudadano se muestra también en las grandes iniciativas del Frente Nacional de la Alemania Democrática en el trabajo común por el embellecimiento de nuestras ciudades y aldeas, en la creación de nuevas posibilidades para enriquecer la vida cultural y espiritualmente y para una mejor estructuración de las condiciones de vida en las barriadas. De la concepción de vida socialista da testimonio la preocupación de la colectividad por las familias numerosas, por los ancianos y enfermos. Yo pido a todos que cooperen cordialmente en ello, que den la necesaria ayuda a los ciudadanos que la necesitan. El hermoso llamamiento i Coopera! lo siguen cada vez más ciudadanos de todas las capas del pueblo. Ellos consideran la participación en el movimiento del Frente Nacional, no como una carga adicional, sino como observancia del derecho constitucional a configurar en común la vida común. Todos nosotros hemos trabajado con éxito en este año que termina en la solución de las tareas históricas que teníamos planteadas: erigir por primera vez sobre suelo alemán una nueva colectividad humana, culminar la transición del orden de explotación capitalista al sistema social socialista. Por la grandiosidad de esa tarea es inevitable que aquí y allá surjan deficiencias, que todavía existan problemas por solucionar. Cuando sólo en dos decenios se ha realizado una tan grandiosa transformación social como en la República Democrática Alemana, son inevitables algunas dificultades en el desarrollo. Pero quedan aun entre nosotros reflejos del pasado, restos del viejo modo de pensar y de proceder que obstaculizan la marcha adelante de nuestro desarrollo, que nos perturban y nos incomodan. Precisamente porque en este año 1969 hemos avanzado tan bien en tantos aspectos en la obra común, reaccionamos con impaciencia y criticamos las deficiencias y los retrasos. Ello refuerza nuestra voluntad firme de superarlos. No hay duda de que en esfuerzo común llegaremos a solucionar esos problemas. 10 El socialismo es asunto de todos Queridos conciudadanos Lo nuevo en la vida de nuestro pueblo es el significativo hecho de que en la República Democrática Alemana la gente trabajadora —con ayuda de su partido revolucionario, el partido de la clase obrera y sus organizaciones sociales— determina su destino conscientemente según su propia voluntad. Cuanto más claramente comprende el individuo la significación de su propia acción para el conjunto y con ello también para sí mismo, tanto mejor podrá aportar su contribución para la colectividad, sea cual sea el lugar en que se encuentre. Cuanto más activamente participa el individuo en la deliberación de los problemas sociales, en la realización democrática de las tareas sociales, tanto mejor y más rápidamente marcharemos todos adelante. Por eso nuestro progreso continuo depende ante todo de cómo siga afirmándose la conciencia cívica de todos los ciudadanos y de cómo se despliegue por todas partes en nuestra República la democracia socialista. Reporta gran provecho para la colectividad y para cada individuo que todos colaboren en la estructuración de la sociedad socialista avanzada. Para el continuo mejoramiento y embellecimiento de la vida de nuestro pueblo, lo más importante es la atenta observación y el inteligente aprovechamiento de la ley de la economía del tiempo. Esto no es sólo cuestión de los economistas, de los dirigentes del Estado y de la economía. Esto es asunto primordial de todos los trabajadores, de cada propietario socialista. Si aprovechamos cada minuto de trabajo, cada gramo de material, cada Pfennig de nuestro patrimonio social esto nos ayudará a multiplicar rápidamente nuestra renta nacional. En este año la renta nacional por primera vez en nuestra RDA, ha sobrepasado la cifra de cien mil millones. Esto es un magnífico resultado del trabajo de todos ustedes, queridos amigos y camaradas. i Ese buen camino en la lucha por el aumento de la renta nacional en cada lugar de trabajo queremos proseguirlo en el nuevo a ñ o l 11 Cuanto más rápidamente aumente nuestra renta nacional, tanto más pronto podremos alcanzar los grandes objetivos que nos hemos propuesto para el futuro. Como en el año pasado, también en el próximo será probada la justeza de esta profunda verdad: ¡El socialismo es bueno en la medida en que en su estructuración intervienen todos I Una oportunidad para las fuerzas progresistas en Alemania occidental También en esta vuelta del año, queridas ciudadanas y queridos ciudadanos, pensamos nosotros, en solidaria alianza, en la clase obrera germanooccidental, los campesinos trabajadores, los intelectuales y las fuerzas ciudadanas de espíritu democrático en la República Federal germanooccidental. Muchos de ellos con su voto en las elecciones al Bundestag han hecho caer el gobierno CDU/CSU y han impuesto la formación de un gobierno bajo la dirección socialdemócrata. Ellos han demostrado que están ya hartos de restauración, restablecimientos de las fuerzas militaristas, neonazis y capitalistas monopolistas. La mayoría de los ciudadanos germanooccidentales no quiere dejarse arrastrar por tercera vez en este siglo por causa del insensato armamentismo a una guerra imperialista y a la catástrofe consiguiente. Pero asegurar la paz significa reconocer los resultados del triunfo de la coalición antihitleriana contra el fascismo de Hitler como están fijados en el Acuerdo de Potsdam. Quien no quiera la guerra debe reconocer las fronteras que fueron establecidas como resultado de la segunda guerra mundial. Debe comprender que toda clase de política de revancha puede conducir a grandes conflictos. Por eso, a la población germanooccidental sólo puede beneficiarla que se impida a los militares germanooccidentales llegar a disponer de armas atómicas y que sea impulsado el desarme. Sólo así podrán vivir en paz los ciudadanos germanooccidentales. 12 Muchos ciudadanos de Alemania occidental dicen con razón: Si en 1945 no hubiéramos desaprovechado la oportunidad de emprender un camino democrático antifascista, ahora sería posible una vida en paz y democracia. Ahora los que deciden en gran medida son los millonarios armamentistas y los generales hitlerianos de la Bundeswehr. En la República Democrática Alemana, la clase obrera, en alianza con los campesinos trabajadores, los intelectuales y otras capas de la población trabajadora ha creado el primer Estado alemán pacífico. Este es un bastión firme del progreso en suelo alemán. El pueblo trabajador de la República Democrática Alemana ha demostrado cuán fuerte es el pueblo trabajador y las fuerzas progresistas cuando han sabido extraer las lecciones de la historia y con la unión multiplican sus fuerzas. También las fuerzas democráticas de Alemania occidental pueden y deben marchar por el camino democrático. ¿No es ya tiempo de que se prenda la lucha en Alemania occidental contra los fabricantes de opinión capitalistas, los que con sus mentiras y sus métodos deforman el espíritu del pueblo y lo hacen dócil al interés de los monopolios armamentistas y de los militares? ¿No es ya tiempo de hacer retroceder a las fuerzas conservadoras, militaristas y neonazis en Alemania occidental? i Ojalá las fuerzas progresistas en Alemania occidental orienten su lucha por una política de paz, por impedir que Alemania occidental disponga de armas atómicas, por que se reduzcan en un 50 por ciento los gastos armamentistas, por que se ponga fin a toda propaganda de guerra y de instigación a la revancha, a toda ayuda a la guerra de los EE. UU. contra el pueblo vietnamita y a la guerra de Israel contra los países árabesI i Ha llegado el tiempo de que la clase obrera y las fuerzas progresistas de la República Federal germanooccidental entren en relaciones fraternales con la República Democrática Alemana I 13 Exitos internacionales del socialismo El año 1969 ha sido —como ustedes saben, queridos camaradas y amigos— un año de significativos éxitos internacionales del socialismo. Con motivo del 20° aniversario de la República Democrática Alemana experimentamos, con la participación en nuestras festividades de representantes de los pueblos amantes de la paz, la firme unidad de la comunidad de Estados socialistas, del movimiento comunista internacional y de los pueblos liberados de Asia, Africa y Latinoamérica. La conferencia internacional de 75 partidos comunistas y obreros en Moscú, la capital soviética, contribuyó a dar un poderoso auge a la lucha por la paz, por la democracia y el socialismo. Un grandioso y fructífero trabajo han realizado los Estados socialistas en la preparación de la conferencia por la seguridad europea popuesta por ellos. El reciente encuentro de personalidades dirigentes de los países socialistas hermanos en Moscú ha aportado a ello un importante nueva contribución. La amistad germanosoviética se ha fortificado aun más en este año. La estrecha colaboración en muchos campos importentes —no en último lugar la cooperación en la investigación técnica y científica— ha hecho importantes progresos. También con otros Estados de la comunidad socialista hemos profundizado las relaciones fraternales y la colaboración. Con gran satisfacción puedo afirmar que esa política internacional de la República Democrática Alemana, fundada en el espíritu del internacionalismo socialista, se ha enraizado profundamente en el corazón de nuestros ciudadanos, jóvenes y viejos. Por eso en nuestro pueblo es tan viva la solidaridad con aquellos pueblos que en lucha contra el imperialismo, la estrategia global del imperialismo de los EE. UU. y sus aliados, defienden su libertad y su solidaridad. Nuestra profunda simpatía se dirige al heroico pueblo de Vietnam que ha causado al agresor norteamericano la más grave derrota de su historia. Horrorizados hemos elevado nuestra protesta contra la salvaje 14 matanza perpetrada en las aldeas y ciudades vietnamitas por ese sistema imperialista condenado a desaparecer. En el umbral del nuevo año declaramos una vez más: Exigimos la retirada incondicional de los agresores EE. UU. del suelo de Vietnam. Nuestros amigos vietnamitas pueden estar siempre seguros de nuestra fraternal solidaridad y apoyo. Con la misma firmeza estamos al lado de los pueblos árabes que representan el progreso democrático en el Cercano Oriente y se defienden de la agresión del Israel imperialista aliado de los EE. UU. Exigimos que Israel se retire de los territorios árabes que ocupa y cese en sus acciones de agresión contra los Estados árabes. Tenemos un buen programa Queridas conciudadanos y queridos conciudadanos En la noche de hoy entramos, no sólo en un nuevo año. Entramos también en la década setenta de nuestro siglo. Esta década, la tercera en los años de existencia de nuestra Républica Democrática Alemana, será de gran significación, no sólo para el desarrollo de nuestro Estado socialista, sino también para las fuerzas de la paz y de la democracia y del socialismo en el mundo entero. Nosotros, los ciudadanos de la República Democrática Alemana, marchamos con una idea clara del futuro desarrollo en los años setenta. Conjuntamente con la Unión Soviética socialista, con los otros Estados de la comunidad socialista, con los partidos hermanos en el mundo entero y con los Estados nacionales liberados amistosamente aliados a nosotros, queremos dedicar todas nuestras fuerzas y energías al triunfo en los próximos años de la buena causa de la paz, de la seguridad y de la amistad con los pueblos. Nosotros abogamos por que la conferencia sobre la seguridad europea —en la que la República Democrática Alemana toma parte en igualdad de condiciones con los demás Estados- inaugure al principio 15 de este decenio setenta y del siglo XX una época de coexistencia pacifica, de colaboración en buena vecindad de los pueblos y gobiernos.' Sabemos que esto no es una tarea sencilla. Todavía no han sido derrotadas las fuerzas de la violencia, de la revancha y del neonazismo. Pero las condiciones son favorables para que los pueblo de Europa impongan su razón sobre los enemigos de la paz y de la amistad entre los pueblos. Nosotros deseamos que entre la República Democrática Alemana y la República Federal de Alemania se llegue a un acuerdo de derecho internacional sobre las relaciones entre ambos Estados. Yo estoy seguro de que en el año 1970 se ampliarán las relaciones internacionales de la República Democrática Alemana y que serán establecidas con otros Estados relaciones de derecho internacional. La revanchista doctrina Hallstein sufrirá nuevos fracasos. Nosotros partimos siempre del convencimiento de que el fortalecimiento del Estado pacífico socialista alemán en el centro de Europa es un importante factor para el mantenimiento de la paz. Esto es válido también para los años setenta. Nuestro principal objetivo para el año que viene y para todo el tercer decenio de nuestro Estado sigue siendo que cada uno en su lugar haga lo mejor para nuestra República Democrática Alemana, i Mantengámonos, queridos amigos y camaradas, en nuestra buena tradición de cumplir exactamente nuestros planes y hasta de sobrepasarlos, de seguir desarrollando planificadamente nuestra sociedad y configurando nuestra vida según nuestra propia voluntad I Las altas tareas en la construcción del sistema social socialista y en el dominio de la revolución técnico-científica que nos hemos señalado para los años setenta plantean las más altas exigencias a cada uno de nosotros. Hemos avanzado hasta ahora bien porque hemos procurado aprender siempre. En el decenio que tenemos ante nosotros el continuo aprender de todos gana aun mayor significación. Muchos colectivos se 16 han propuesto, en emulación por el 100° aniversario de Vladimir llich Lenin, aprender la teoría de este gran científico y revolucionario de este siglo y aplicarla consecuentemente; este es justamente un buen camino. Entramos plenos de optimismo, confianza y decisión en los años setenta. Pues el programa del socialismo elaborado por el partido de la clase obrera y el pronóstico social dado por el Vil Congreso nos señalan el camino. El plan de perspectiva determina las principales tareas de nuestra marcha adelante. Este plan nos ayudará a lograr esenciales progresos en la estructuración del sistema social socialista avanzado y de la vida de nuestros ciudadanos. Podemos partir para nuestro trabajo futuro de los éxitos de los dos decenios pasados. Y lo más importante: Todos nosotros, en nuestra lucha y en nuestro trabajo, podemos apoyarnos unos en otros, en nuestra probada colectividad. En este sentido, queridas conciudadanos y queridos conciudadanos, deseo a todos ustedes un buen Año Nuevo. Les deseo éxito en su trabajo y en su estudio. Deseo a ustedes felicidad en la vida personal y buena salud. I Amistad!