Apóstol René Betancourt TEMA: VENGA TU REINO Y HAGASE TÚ VOLUNTAD MATEO 6:9-13 Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. 11 El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. 12 Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. 13 Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén. Lea los cuatro evangelios trate de limpiar su mente de todas interpretaciones propia. Léalo como si nunca los hubiera hecho. Jesús lo que siempre hablo fue del Reino de Dios o el Reino de Los Cielos. No habló de religión, ni de creencias o filosofías o estructuras religiosas, sino del Reino de Dios. Siempre menciona: “El Reino de Dios es semejante a…”. “El Reino de Dios es como….”. “El Reino de Dios está entre ustedes”. En el Padre Nuestro nos enseñó a pedir que el Reino de Dios venga a esta tierra. “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto. Isaías 9:6-7. No podemos entender lo que es el Reino si no entendemos los principios que rigen el Reino de Dios sino entendemos lo que implica vivir en un Reino Real. ¿Qué es un principio bíblico? Es una declaración divina que permanece por encima del tiempo, la geografía, la cultura y el espacio. Un principio Bíblico jamás cambia. Permanece inmutable. Lo que funcionó hace 2000 años funciona hoy y lo que funciona en China funciona en América Latina y también aquí en los Estados Unidos. El más grande secreto para vivir efectivamente en la tierra está en entender y aplicar los Principios del Reino. PRINCIPIOS DEL REINO DE DIOS: 1: El propósito de Dios fue extender el Reino de los cielos a la Tierra. Dios creó al hombre para ser el rey extendido y su representante en la tierra. “Los imperativos fueron: Fructificad, Llenad, Multiplicad, Gobernad Dominad”. Satanás entendió el poder de ese Reino y el hombre lo ignoró, por eso perdió el Huerto del Edén y con esa pérdida disipó la posibilidad del Reino. Dios no se rindió y prometió que el Reino vendría a la tierra a través de un segundo Adán (Jesucristo). Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar. Génesis 3:15 2: Dios no hizo el hombre para el cielo sino para tierra. Si lo hubiese hecho para el cielo lo hubiese creado allá, pero la Biblia dice que tomó polvo de la tierra y lo hizo y le dijo que al morir se volverá polvo y regresaría a la tierra de donde fue tomado. Por eso la Biblia dice que el hombre volverá a la tierra. El Cielo es residencia temporal mientras la tierra es hecha de nuevo: La Creación gime dice el Apóstol Pablo esperando su redención. La Biblia dice que Dios hará un cielo nuevo y una nueva tierra y regresaremos a vivir en esta tierra donde el León descansará con el cordero y el niño jugará con la serpiente. Esta tierra no tendrá ni enfermedad, ni pecado, ni contaminación. Será el huerto del Edén restaurado. El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. 10 Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. 11 Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas !cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, 12 esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán! 13 Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. 14 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. 2 Pedro 3:9-14 3: El Hombre no puede gobernar en la nueva tierra a menos que aprenda a gobernar acá y vivir en el Reino. “El reino de los cielos está entre ustedes”. Estamos aquí en la tierra para aplicar los principios del Reino y vivirlo. En otras palabras estamos en pleno entrenamiento. Es por eso que necesitamos aprender a manejar las finanzas, la familia, las emociones y las tentaciones aquí ahora. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. Mateo 6:10 4: El hombre tiene que entender que él no tiene nada. Todo es de Dios. David decía: “Del Señor es la tierra y su plenitud”. Nacimos sin nada y al morir no podemos llevarnos nada. El dueño de todo es Dios. Nosotros solo somos administradores. Eso lo entiende el enemigo del alma. Por eso es que él siempre quiere ponernos límites para que nos preocupemos y no confiemos en Dios. Nos dice que “Nuestra casa” la vamos a perder. Que nuestras “Finanzas” se perdieron. “Nuestros hijos” se descarriaron. Pero al entender este principio del Reino podemos contestarle que nosotros no tenemos nada que vaya a amenazar al dueño de la casa que es Dios, el dueño de los hijos que es Dios, el dueño de la salud que es Dios y de esa manera somos libres de angustias. …………porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén. Mateo 6:13 5: El propósito original de Dios fue establecer Un Reino de Hijos, no de Súbditos. Dios ha querido tener hijos, no esclavos. Es un reino de hijos y recordemos que por ser hijos tenemos privilegios pero también responsabilidades. Vivamos como hijos y trabajemos como herederos. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. Juan 1:12 6: El Intento de Dios fue gobernar lo visible desde lo Invisible. El mundo espiritual invisible es mayor que el visible. El enemigo de nuestra alma siempre nos atormenta mostrándonos lo que nuestros ojos ven y nuestros oídos oyen pero no olvidemos que lo invisible siempre es más grande que lo visible. Por eso es que la Biblia dice que la fe es la sustancia de lo que se espera y la convicción de o que no se ve. Nosotros no nos movemos por lo que se ve sino que nos dejamos mover por lo que no se ve. No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. 2 Corintios 4:18 7: Dios no pensó en llenar la tierra de cristianos sino de ciudadanos del REINO. Nosotros aquí somos extranjeros, advenedizos y peregrinos. Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. 14 Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; 15 pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. 16 Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad. Hebreo 11:13-16 Cuando hablamos de solo ser cristianos podemos limitar este concepto a solo lo que es una religión o una estructura, pero cuando hablamos de ser ciudadanos nos hace levantar la mirada a la eternidad. Somos embajadores del Reino de los cielos y todos tienen que verlo y palparlo. Dios no hará nada sobre la tierra sin tomar en cuenta a aquellos a quienes él puso para administrar la tierra. “Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel”. Éxodo 19:5-6. La prioridad número uno de Dios para la humanidad es que descubramos, entendamos y vivamos en el Reino de Los Cielos. Vivamos con MENTALIDAD DE REINO, cuando llegues a tu casa tu petición debe ser VENGA TU REINO Y HAGASE TU VOLUNTAD, cuando salgas por las calles, cuando estés en el trabajo en tu empresa, adonde quiera que vayas di: VENGA TU REINO Y HAGASE TU VOLUNTAD.