TEMA 1: ESPAÑA EN EL MUNDO ACTUAL

TEMA 1: ESPAÑA EN EL MUNDO ACTUAL
España está situada en el extremo del continente europeo, en la franja de las latitudes
templadas de la Tierra. Uno de sus rasgos distintivos es la gran diversidad geográfica de su
territorio.
Tiene una extensión total de 505.990 Km., está poblada aproximadamente por 50 millones de
habitantes y tiene una densidad de unos 90 hab./Km.
Su territorio está compuesto por:
Es sector continental: formado por la Península Ibérica.
Islas Baleares: Mallorca, Menorca, Ibiza, Formentera y Cabrera.
Islas Canarias: Tenerife, La Palma, Gomera, Hierro, Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura.
Las ciudades del norte de África: Ceuta y Melilla.
Clima: a gran parte de la España peninsular y el archipiélago balear le corresponde un clima
mediterráneo con rasgos continentales en el interior. Solo Galicia y la franja cantábrica tienen
un clima oceánico. Por otro lado Canaria tiene un clima subtropical.
Biodiversidad y paisaje: la variedad climática conlleva a una gran biodiversidad. La vegetación y
la fauna son muy variadas que da lugar a paisajes muy diversos.
Recursos hídricos: el predominio del clima mediterráneo con escasas precipitaciones y elevada
evaporación supone un importante condicionante para la sociedad. La escasez de agua y su
desigual distribución espacial es uno de los problemas con que se enfrenta el país.
Litoral: es una país históricamente volcado al mar, de gran tradición pesquera y comercial. Hoy
en día el litoral constituye una de las bases de la actividad económica.
España está situada entre dos continentes y entre dos masas de agua, lo que ha condicionado
su evolución y continua influyendo en sus relaciones internacionales:
España es un país europeo, pero está separado por tan solo 12 Km. del continente africano por
lo que es un puente natural de comunicación.
Es un país mediterráneo, pero también atlántico. Esto explica su pasado ligado al
Mediterráneo, pero también su proyección atlántica, manifestado en la América de habla
española, por lo tanto es también un puente entre América y Europa.
La situación geográfica de España ha propiciado que su territorio haya sido cruce de culturas e
igualmente ha favorecido su proyección exterior. Destacan los siguientes hechos históricos:
En la Antigüedad: se entrecruzaron las influencias de pueblos de procedencia mediterránea y
atlántica (fenicios, griegos, cartaginenses o celtas). En la época romana mantuvo estrechas
relaciones comerciales con otras regiones del Mediterráneo.
Durante la dominación árabe buena parte de la Península quedó integrada culturalmente en el
mundo islámico, mientras que otra parte permaneció volcada hacia Europa.
Con el avance de la Reconquista, la Corona de Aragón comenzó su expansión mediterránea,
mientras que Castilla se orientó hacia el Atlántico. España mantuvo estrechas relaciones
políticas, administrativas y económicas.
La España moderna y contemporánea continuo marcada por su relación con el resto de los
territorios europeos.
España en el mundo actual es un país con estrechas relaciones con el resto de países de la
Unión Europea, pero a la vez con vínculos con el área del Mediterráneo y América Latina.
La construcción de un sistema mundial.
Se alcanza en la actualidad la formación de un sistema mundial integrado. Los movimientos de
mercancías, personas, capitales e información que atraviesan la frontera son cada vez más
intensos. Aumenta también la conciencia sobre problemas que afectan a la humanidad en su
conjunto, como la pobreza o el cambio climático.
La globalización o mundialización es el proceso que caracteriza la época actual y que supone
un movimiento de unificación progresiva entre las diferentes sociedades y territorios, que
tiene múltiples dimensiones.
El proceso de globalización tiene diferentes dimensiones:
La globalización económica supone que el sistema capitalista o economía de mercado ha
alcanzado la hegemonía en todo el mundo y la apertura de fronteras que densifica los flujos
económicos.
La globalización de la información se asocia al desarrollo de los medios de comunicación.
La globalización cultural difunde valores, comportamientos, modas y pautas de consumo que
se estandarizan.
La globalización de los movimientos de población conlleva la intensificación de las migraciones
de trabajadores hacia los países más desarrollados en busca de empleo y mejores condiciones
de vida.
La globalización de los problemas ambientales provoca que el cambio climático, la
deforestación, la contaminación urbana o la generación de residuos se conviertan en
problemas mundiales.
La globalización geopolítica supone un nuevo orden internacional, que exigiría dotar a
Naciones Unidas de mayor capacidad para regular las tensiones y conflictos internacionales.
Crecimiento económico y desigualdad social.
Los movimientos antiglobalización ejercen oposición a este proceso, los principales objetivos
de estos movimientos son la denuncia de las injusticias provocadas por el sistema y los
organismos internacionales.
El proceso ha tenido como consecuencia un crecimiento económico a escala mundial, aunque
no ha conseguido reducir las desigualdades entre las diferentes regiones mundiales.
La globalización alcanza su máximo desarrollo al generalizarse la lógica de funcionamiento
propia del sistema capitalista:
Creciente privatización de la actividad económica y reducción de la intervención del Estado.
Liberalización de los mercados.
Densificación de las redes comerciales y financieras entre países, cuyo máximo exponente es el
mercado de la bolsa.
Concentración del poder económico en grandes empresas con centros de trabajo en varios
países, por lo que se denominan multinacionales.
Mayor división espacial del trabajo con regiones y países emergentes.
Estas tendencias se refuerzan por una serie de factores de impulso:
La mejora de los transportes y la revolución de las tecnologías de información y comunicación
(TIC) que permiten conectarse a grandes distancias.
Las normas liberalizadoras, así como la creación de mercados comunes que eliminan las
fronteras interiores.
Los grandes grupos económicos que apoyan un proceso que les permite ampliar sus mercados
y acceder a una mano de obra casi ilimitada.