C/ JOSE PEDRO CAÑETE PAREDES HOMICIDIO R.U.C. 14 00 95 06 18 - 8 R.I.T. 218 / 2015 Temuco, a seis de marzo de dos mil dieciséis. VISTOS, OIDOS Y CONSIDERANDO: PRIMERO: Tribunal e Intervinientes. Que con fecha 22, 23, 24, 25 y 29 de marzo del presente año, ante los Jueces Oscar Luis Viñuela Aller, quien la presidió, Juan Bladimiro Santana Soto, y Rocío Pinilla Dabbadie, del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco, se llevó a efecto audiencia de juicio en causa Rit 2182015 seguida en contra del acusado JOSÉ PEDRO CAÑETE PAREDES, Chileno, Cédula Nacional de Identidad N° 15.236.521-7, chileno, casado, Octavo Año Básico, 41 años, nacido 5 junio de 1974 en Galvarino, trabajador agrícola, con domicilio en Fundo Nilpe, Galvarino. El Ministerio Público fue representado por los fiscales Pamela Contreras Matus, Luis Arroyo Díaz, y Carlos Bustos Muñoz. Por la parte querellante, representando a los padres de la víctima compareció el abogado Juan Sáez Bertoline y Sebastián Saavedra Díaz. La Defensa del acusado estuvo a cargo de sus abogados Defensores Penales Privados, Juan Javier Jara Müller y Luis Felipe Romero Medina. Todos los letrados reseñados precedentemente, cuentan con domicilio y forma de notificación registrada en el Tribunal. SEGUNDO: Acusación. Que según se lee del Auto de Apertura de fecha 9 de septiembre de 2015, los hechos que fundan la acusación Fiscal, y que fueron sostenidos en el alegato de apertura por el órgano persecutor, son los siguientes: “Con fecha 01 de octubre de 2014 en horas de la mañana, alrededor de las 11:30 horas, la víctima JOSÉ QUINTRIQUEO HUAQUIMIL caminaba, acompañado de los miembros de su comunidad Nilpe 2, por el interior del Fundo Nilpe de Galvarino, específicamente, por el camino que separa una siembra de trigo con un cultivo de papas que existe en dicho fundo. En dicho lugar también se encontraba el imputado, JOSÉ CAÑETE PAREDES, trabajador del Fundo Nilpe, quien se desempeñaba conduciendo un tractor marca Jhon Deere, Placa Patente única DXTK-55 en labores agrícolas que se desarrollaban en dicho predio. En este contexto el imputado Cañete Paredes condujo el referido tractor en dirección hacia la víctima y sus acompañantes, retornando la víctima Quintriqueo Huaiquimil, hacia el sector de la siembra de trigo, en dirección contraria a la que venía caminando, siendo alcanzado por el imputado en dicho lanzándolo al suelo, para tractor, quien lo impactó luego regresar hacia el lugar donde se encontraba ya tendida la víctima, atropellándolo, aplastándolo con las ruedas del tractor, para posteriormente retirarse del lugar. Producto del impacto y el aplastamiento, la víctima resultó con traumatismo encéfalo craneano cerrado, trauma tóraco abdominal grave, fractura de húmero derecho, fractura de columna vertebral y fractura de pelvis, lesiones que necesariamente le causaron la muerte”. Los hechos anteriormente descritos son, a juicio del órgano persecutor, constitutivos del delito de homicidio previsto en el artículo 391 N°2 del Código Penal, en grado de consumado. Refirió que concurre respecto del acusado la atenuante de responsabilidad penal del artículo 11 N° 6 del Código Penal, esto es, su irreprochable conducta anterior. Le atribuyó participación en calidad de autor directo del mismo, conforme a lo dispuesto en el artículo 15 Nº 1 del Código Penal, en relación con lo dispuesto en el artículo 14 Nº 1 del mismo cuerpo legal. Finalmente el Ministerio Público pidió que se imponga al acusado la pena de DIEZ AÑOS Y UN DÍA DE PRESIDIO MAYOR EN SU GRADO MEDIO, más la accesoria del artículo 30 del Código Penal y sin perjuicio de la expresa condena en costas, conforme a lo previsto en el artículo 45 del Código Procesal Penal. Adicionalmente, y de conformidad a lo dispuesto por el artículo 17 de la Ley N° 19.970, que crea el Sistema Nacional de Registro de ADN; solicitó ordenar la toma de la muestra biológica al acusado con la finalidad de determinar la huella genética de éstos; ordenando su inclusión en el registro de condenados que al efecto administra el Servicio de Registro Civil. TERCERO: Alegatos de Apertura. Que en su alegato de apertura el Ministerio Público señaló que la única víctima es don José Quintriqueo Huaquimil, y no el acusado como pretenderá hacerlo ver la Defensa, víctima que resultó muerta, luego de diversos hechos ocasionados y dirigidos de parte del acusado Cañete Paredes. Quintriqueo era un comunero de Nilpe 2 y se disponía, junto a su comunidad, a poder realizar y verificar en terreno como serían las tierras que CONADI iba a comprar a su comunidad, comunidad que la forman unas 20 a 35 personas, y dada la extensión del Fundo Nilpe Conadi negociaba hace varios años con los dueños de este fundo, y así poder comprarlo para dos comunidades. En ese contexto, los comuneros, entre ellos la víctima, ingresaron el día 1 de octubre de 2014 a recorrer el sector. Querían verificar los lugares en que se instalaría la comunidad, lo que se vio abruptamente truncado e interrumpido por el acusado, quien avistando la existencia de este grupo de comuneros compuesto por mujeres, hombres, ancianos y niños; dirigió el tractor directamente hacia el lugar donde se encontraban estos comuneros, aproximadamente a 200 metros, quienes llevaban 2 horas más menos en ese sector, había desayunado ahí, y Cañete, al verlos, cambia el rumbo y dirección en que se dirigía en su tractor y los persigue logrando investir a José Quintriqueo. Luego da un viraje en “U” y pasa sobre el cuerpo de la víctima nuevamente, y lo aplasta con el tractor que conducía. La prueba pericial será coincidente con la testimonial la que acreditará el trayecto del recorrido que hizo Cañete. Las pericias médico legales van a corroborar los dichos de los testigos presenciales; de la manera en la cual la víctima fue primero investida por la espalda, y luego fue además aplastada, situación que en definitiva culmina con la vida del mismo. Finalmente indicó que al final del juicio se adquirirá por el Tribunal absoluta convicción que la acción dolosa de Cañete terminó con la muerte de Quintriqueo Huaiquimil. Por su parte, la querellante, señaló que se logrará acreditar que José Cañete produjo el delito de homicidio contra el hijo de sus representados. La comunidad Nilpe 2 en un proceso de adquisición de tierras y amparado por la CONADI efectuó vistas en el fundo Nilpe para ver cómo se dividirían la propiedad con otra comunidad. El 1 de octubre, el objeto de la visita era ver el tranque que estaba al final del predio. La comunidad es relativamente vecino colindante el fundo Nilpe, son personas todas conocidas, tanto el comunero víctima como el acusado. Incluso en algún momento el dueño permitió la instalación de un Rehue, habiendo confianza entre los comuneros y el dueño del mismo. Ese día 1 de octubre de 2014, en una actitud inhumana e incompresible de Cañete, éste dirigió el tractor hacia los comuneros, lo que fue una acción dolosa, así cobra importancia el recorrido que efectuó el acusado, de aproximadamente 200 metros con el tractor hacia los comuneros. Tuvo la oportunidad de haberse arrepentido de su acción, se dirigió hacia ellos, y la víctima fue José Mauricio, por lo que lograrán acreditar todos los elementos del delito de homicidio. Luego hace una breve descripción de la prueba con las que logrará acreditar los supuestos de la acusación. Añade que la víctima fue golpeada en dos oportunidades, y la segunda vez fue “repasada” por el tractor que conducía Cañete. A su turno, la Defensa señaló que entiende la subjetividad del querellante, pero no entiende al Ministerio Público, haciendo una completa escisión del contexto en que se dieron los hechos, como si ciertas circunstancias fácticas no hubiesen existido, o fueran meras especulaciones. Que si bien el fallo de la Corte de Apelaciones no vincula a este nuevo Tribunal, el mismo fallo critica el hecho que el primer Tribunal obvió el contexto en que se dieron los hechos, que avalaba su versión, y fue uno de los argumentos para su anulación. Discrepa entonces, tanto de la forma en que ocurrieron los hechos y su calificación jurídica de homicidio. Cree que fue un accidente, un caso fortuito calificado por las circunstancias del día de los hechos y como se produjeron. Quedará claro que lo único que hizo el acusado fue arrancar de quienes lo apedrearon sin que él los provocara en forma alguna, solamente para salvar su vida y su integridad física, pues un grupo de personas miembros de la comunidad Nilpe 2 que es muy cercana al sector en que ocurrieron los hechos, irrumpieron ilegalmente, sin autorización alguna a dicho lugar, y en primer lugar atacaron a una faena forestal, con boleadoras, tirando piedras e iniciando focos de fuego, para luego arremeter en forma injustificada en contra de su representado, quebrando el vidrio delantero, lateral izquierdo y trasero del tractor, produciéndole lesiones a su representado. Al acusado lo emboscaron, rodearon, y lo atacaron con piedras, y lamentablemente, en ese ataque él se desesperó. Se pregunta ¿qué haría uno si lo invisten en un vehículo que va a baja velocidad, lo rodean, intentan bajar y atacar con piedras?, lo lógico es huir por su vida. En esta huida lamentablemente un comunero que formaba parte del grupo que apedreaba a José Cañete resultó atropellado, y perdió la vida después, estuvo un momento con signos vitales, luego fue trasladado a una laguna, no se sabe si pudo haber tenido asistencia médica. Sin embargo, su representado no tiene culpa ni dolo, pues no tuvo ninguna intención de atropellar a la persona fallecida, no hubo dolo directo, no hubo intención deliberada de arremeter en contra de esas personas. Siempre tuvo maniobras evasivas, por eso el trayecto sinuoso, la vuelta en U, el perder el control del vehículo, y la visión (sic), así conducir un tractor no es lo mismo que conducir un vehículo normal, por eso los comuneros le dieron alcance. Tampoco hay dolo eventual, siendo apedreado no se podía representar que iba a atropellar a alguien, lo único que quería era escapar. Tampoco existe culpa, se pregunta si ¿se le puede pedir una conducta distinta a quien está siendo apedreada?. Que lo único que hizo fue esquivarlos, irse, y al final de casi unos 15 a 20 minutos, logra huir del lugar. Hace hincapié que la descripción fáctica de la acusación de la Fiscalía no describió el dolo ni la culpa, no describió el elemento subjetivo; por ende, el primer Tribunal, debió incluirla, conculcando el principio de congruencia la palabra deliberadamente e intencionalmente, pues sin esos componentes debía ser absuelto su representado, en eso falla la acusación. Falla también, en la descripción de la dinámica de los hechos, pues, es distinta a la que se podrá observar a través de la prueba de la Ministerio Público, pues se indica en la acusación que el tractor venía en dirección contraria a la que venía la víctima, o sea que se enfrentaban, lo que no se condice con lo que se podría apreciar en la prueba, pues según las pericias, tuvo una lesión por atrás, por alcance, y así no se condice con la acusación. En subsidio de lo anterior, cree que en el evento incierto que el Tribunal estimase que el acusado tuvo culpa en su conducta, esta se encuadra en la eximente de legítima defensa propia, la que por cierto no es indiciaria del dolo, y tampoco se ve excluida en caso de un autor culposo, así Juan Bustos Ramírez pág. 82 y siguientes del libro “Delito Culposo”. En efecto, existió una agresión ilegítima por parte de los comuneros y entre ellos la víctima, Cañete no provocó a los comuneros, se retiró retrocediendo, hacia un punto específico, luego lo llaman por radio, ahí lo acometen y lo comienzan a apedrear. Los comuneros ingresaron sin autorización y atacan primero a un grupo de las obras forestales, también a Carabineros, quienes igualmente debieron huir. Existe el medio racional del medio empleado en la actitud defensiva que es conteste con la actitud de huida, la conducción del tractor era el único medio que tenía para huir del lugar, si se bajaba, lo apedreaban y mataban. Ergo, el único resultado del juicio debe ser la absolución, pues no había intención de matar, ni culpa o negligencia, pues no se le puede exigir un comportamiento diverso. CUARTO: Declaración del Acusado. Que, el acusado fue debida y legalmente informado de sus derechos y de la acusación librada en su contra. Consultado por el Juez Presidente de sala, optó por declarar, y exhortado a decir verdad, indicó que es nacido y criado en una comunidad mapuche, y no es culpable de lo que ocurrió ese día, lamenta mucho esa muerte. El día 1 de octubre salió de su casa con dirección a la bodega a buscar el tractor, se juntó con sus colegas, Edgardo Cortez, otro tractorista que andaba sembrando papas, él andaba con Isidro Henríquez, Ramón Cañete y también vio en la mañana a Juan Gonzáles, que andaba en un cargador frontal. Luego se dirigió a las faenas, precisamente al potrero el Manzano, sector Norte. Con una pizarra y lápiz explicó la forma del potrero el Manzano, primero en forma de círculo explica la forma del potrero, lo divide en dos por el medio y en forma vertical, a su izquierda dibujó una laguna, en la parte inferior un estero, y al lado de la misma un camino, él trabajaba en las papas al lado de la laguna, en la otra mitad había trigo, describe una parte húmeda al lado de las papas, luego había dos colosos y un cargador frontal, y él estaba cerca sembrando papas en su tractor, en la parte Norte, hasta veinte para las 10 de la mañana, cuando termina (9:40 am) lo llama el administrador por radio, Eliseo Gutiérrez, le dice que tiene que hacer la parte sur, es la parte húmeda, atrás de eso está el bosque de pino, él sale por la orilla, pasa por al lado de los otros, el tractor y coloso, y baja al sur, estaba ahí trabajando y como a las 11:00 o 10:40 de la mañana ve que Carabineros llega por el camino principal, cerca de donde él estaba, y arranca, van y vuelven, va y arrancan, del bosque salen unas 15 a 20 personas, encapuchadas que van alzando los brazos como tirando piedras a Carabineros, no ve si apuntan porque él estaba a 50 metros, sale del potrero, se va retrocediendo e intenta llegar donde sus compañeros, le faltan como 40 a 60 metros para llegar a los colosos y ve personas que aparecen por el potrero de trigo, y alzan brazos y le tiran piedra, ahí lo llama otro operador Carlos Rosas, y le dicen que se reitre de ahí porque llegaron los técnico de H Clima, técnico que iba a ver el tractor, el sale de punta, le tiran piedras, anda unos 20 metros, y le quiebran el vidrio trasero del tractor, le pone un cambio alto para agarrar velocidad, anda 15 metros y se para el tractor, el roto fresador se baja, la personas se le van encima, lo hace andar, sigue hacia adelante, anda 20 metros, y ve más personas que aparecen, le rodean por el lado izquierdo, todos tirando piedras y encapuchados, el tractor iba a 2 a 3 km por hora, intenta retroceder, lo rodean y le quiebran el vidrio de delante. Sigue hacia adelante, y frente al bosque, hacia el sur, les va haciendo el quite, eran personas corredoras y jóvenes, él sigue hacia el sur haciéndole el quite a las personas, le dan un piedrazo en la cara lado izquierdo, se marea, el tractor hace un giro, y un vaivén y como que una persona pasa a la pisadera o el tractor pasa por algo, y el tractor hace un giro, y él estaba con los ojos cerrados, mareado, cuando reacciona escucha mucho ruido, no tenía vidrio atrás, ni en el lado izquierdo, y el parabrisas todo quebrado, en ese momento pasa el cargador frontal hacia el lado sur hacia las bodegas, y lo sigue, y ahí había una patrulla de carabineros, el cargador frontal no se detuvo, a él le dicen que pare, porque le dijeron “le quebraron todos los vidrios, salva tu vida, los quieren linchar”, ese Carabineros fue Richard Salazar, lo echaron a la patrulla. Los carabineros, estaban nerviosos. Al llegar la ambulancia, le piden que los espere, y ve otra patrulla de carabineros, se demora el carabineros unos 6 minutos, y al subir le dice atropellaste una personas y acaba de fallecer-. Lo llevan detenido y a constatar lesiones. Preguntado por la Fiscal, señaló que la primera vez que vio a las personas a que alude fue cuando atacan a Carabineros a unos 50 metros, los vio lanzar piedras, alzando los brazos, no sabe si le apuntaron, pero eso ve. La segunda vez que los ve, fue cuando salen del bosque, y después cuando van al potrero de trigo, a cierta distancia y luego encima de él. Lo rodean unas 15 a 20 personas, aproximadamente. Lo atacaron por detrás y se pasaban por delante, y por el lado izquierdo, son 3 partes. Cuando le golpean la cara, lado izquierdo, queda unos 5 o 3 minutos caído de lado, sobre el tractor, en ese momento, el tractor se gira solo, él abandonó la conducción del tractor. Seguía mareado, pero perdido, no sabía donde estaba el Norte y donde estaba el Sur, perdió el sentido de la conducción, después abrió los ojos, y ahí se dirige a las bodegas. En el primer ataque se quebró el vidrio trasero. A las preguntas del querellante, indicó que pertenece a la comunidad Lingue Mallín, a la víctima la conocía de toda una vida, a la comunidad Nilpe 2 también los conoce, recibió una orden por un transmisor, del Administrador del Fundo. En el predio existía una faena forestal al lado sur en que explotaban un bosque, él trabajaba paralelo al bosque, y sí tenía visión a esa faena; en ese grupo no conocía a las mujeres, eran ágiles los que andaban; posiblemente en el bosque andaban mujeres, tampoco vio niños. Recibió una apedreada en la espalda y la otra en la cara en el lado izquierdo. En la cara se le cerraron los ojos y se mareó, y en la espalda sintió dolor y mucho miedo, temió por su vida. Refiere con una seña que la lesión fue en el pómulo izquierdo. No vio si los comuneros agredieron a los forestales. A las preguntas de La Defensa; señaló que ese día el tractor lo ocupaba a dos kilómetros por hora, ya que el roto fresador, es muy pesado, va arando y prensando, pesa 2 mil kilos, y el tractor pesa como 11 mil kilos. El lugar donde trabajaba era un sector con declives, lomeado, el lado Norte es más alto, y el sur más bajo, refiriéndose al Potrero el Manzano. Para llegar a la laguna hay un camino al lado sur, que es lado más corto, (lo dibuja) ese es el trayecto más corto, si alguien quiere llegar ahí, no existe una vía más directa para llegar desde el bosque a la laguna. Habló con Richard Salazar, el Carabinero, él lo llevó a constatar lesiones. Aclarando al Tribunal, señala que sus compañeros estuvieron cerca de los colosos, como estaban más al norte no fueron atacados. Se fueron todos a las bodegas después de su ataque. Hay unos 2 kilómetros aproximadamente entre la bodega y el potrero el Manzano. QUINTO: Convenciones probatorias. Que los intervinientes no acordaron convenciones probatorias. SEXTO: Medios de prueba del Ministerio Público. Que a efectos de sustentar la imputación formulada, el Ministerio Público rindió la siguiente prueba: TESTIMONIAL: 1.-PATRICIO ESTEBAN SALDÍAS CHAVEZ, Funcionario de Carabineros de Chile, Sargento Segundo, 42 años, divorciado, domiciliado en calle León Gallo N° 406, Galvarino, quien bajo juramento señaló que el 1 de octubre de 2014 estaba de servicio en la población, y a las 11 am se les comunicó que en el fundo Nilpe se estaba produciendo una toma por parte de un grupo de comuneros mapuches. Ingresaron al Fundo, que está en la ruta de Galvarino a Chol Chol, se desplazaron por el camino principal, 1 km. más menos, llegan aproximadamente una media hora después, al llegar cerca de las casas hay una laguna, se entrevistó con el Administrador del Fundo, Eliseo Gutiérrez y señaló que por un camino interior hacia al norte hacia un kilómetro y medio más menos, había una faena forestal, un tala de pino, los habían amenazado que se retiraran del lugar y en función de eso, llegaron a verificar. Al llegar al bosque, observaron a unos 100 metros, todavía quedaba parte sin talar, había humo, fuego, y siendo quemados restos de los pinos, desde el interior del bosque salió un grupo de 10 a 15 personas que se dirigieron corriendo del bosque hacia ellos, venían agitando los brazos como para lanzar piedras con boleadoras, y se dieron la vuelta, y regresaron hacia el punto de la laguna, pues venían refuerzos de Lautaro. Salen del sector, llegan a la laguna nuevamente y se encuentran con el Comisario de Lautaro, y le dio cuenta de la situación, éste le indicó que se trasladaran nuevamente al lugar, al descender de los vehículos, se acercó un grupo de 5 personas que indicaron que una persona había sido atropellada por un tractor, que estaba distante a unos 200 metros del lugar donde bajaron de los vehículos policiales, había una persona tendida en el suelo, como a 200 metros del bosque, eso correspondía al interior del Fundo, había una siembra de trigo, estaba en mal estado de salud, se llamó para pedir ambulancia. Se dirigió hacia donde se encontraba el tractor, y se entrevistó con su conductor que era José Cañete, le consultó si había participado en el accidente y dice que sí, que al momento de realizar faenas en el predio había sido atacado por un grupo de personas, le lanzaron piedras, quebraron los vidrios del tractor, y él también las recibió, y al intentar huir del lugar, al parecer había atropellado a una persona. Solo dice eso. Luego, se trasladó a Cañete a la tenencia de Galvarino y al Hospital para constatar lesiones, al momento del traslado estaba nervioso y asustado, se le trasladó en calidad de detenido, cuando el mismo dijo que atropelló a una persona al huir, se le dio a conocer que estaba grave, lo traslada su conductor, y el queda en custodia del tractor, su conductor es Richard Salazar. El administrador le refirió que un grupo de personas había amenazado a los trabajadores que hacían una tala en el bosque, no sabe si fueron atacados, pero el administrador dijo que había sido amenazado, no había nadie en ese momento, por eso no se entrevistó. El tractor estaba a 200 metros del lesionado (víctima) y el tractor estaba en el sector Norte. A él no lo agredieron, ni fueron atacados. Cuando los visualizó como alzar las manos, se fueron para evitar una agresión o daño al vehículo policial. No pudo ver como andaban vestidos ni el sexo, ya que los vio a unos 250 metros de distancia ni podría reconocer rostros. A las preguntas del querellante, señaló que trabaja en Galvarino del año 2014. Las personas que andaban con el lesionado le indicaron quien era el conductor que había atropellado a la víctima, por eso se acercó a él. A las preguntas de la Defensa, señaló que el Fundo Nilpe no tenía medida de protección, cuando él huye con Richard Salazar huye por el lugar donde llegaron, no ingresaron al potrero de trigo, vuelven por el mismo camino que entraron, un camino interior de tierra. No va al sitio del suceso desde el día del procedimiento. No recuerda si le dijo al Sr. Fiscal que el ingreso haya sido violento al momento de entrar a las faenas forestales, solamente que el administrador le dijo que los trabajadores de la faena habían sido amenazados, solo eso. El acusado le dijo que al parecer había atropellado a una persona. Luego, realizando el ejercicio de superar contradicciones el testigo indica y lee”… un grupo de comuneros había atacado de forma violenta a los trabajadores intimidándolos con palos, ondas y boleadoras diciendo que dejaran las faenas y se retiran de lugar…” Aclarando al Tribunal, al momento de dirigirse y encontrarse con el acusado iba circulando en el tractor pero a baja velocidad, y le pidió que se detuviera. El que interactuó con Cañete fue él, no recuerdo si lo hizo Salazar. 2.-MARIO ROLANDO LLANQUILEO QUILALEO, Cédula Nacional de Identidad N° 15.849.087-0, 33 años, nacido en Galvarino, casado, temporero, domiciliado en Comunidad Nilpe, Galvarino, quien bajo promesa refirió que pertenece a la comunidad José Quillaleo 2, queda en Galvarino, a 8 km viniendo hacia Chol Chol. Son 27 personas que la integran, hacen 5 años que está constituida, antes pertenecían a José Quillaleo 1, que es grande y la actual es de puros jóvenes. El Lonco es Domingo Peiñan, y el Werkén es Enrique LLanquileo. El 1 de octubre de 2014, se juntaron a las 09:00 o 10:00 horas para ver el fundo, se juntaron en la comunidad para entrar al Fundo Nilpe, estaban al lado del sur del Fundo Nilpe, entre 09:30 a 10:00 horas decidieron entrar todos juntos al lado sur de fundo, se fueron caminando, iban personas de edad, todos los miembros de la comunidad, mujeres de edad también, y llegaron a una parte que habían pinos, forestal, llegan caminando, entraron y vieron que lo estaban explotando (el bosque), iban a verlo porque tenían conversaciones y negociaciones con la Conadi por la compra del fundo, hace 3 años más menos, así los dirigentes decidieron ir a ver el Fundo, y lo iban a compartir con otra comunidad de Padre Las Casas, por eso decidieron entrar al mismo. Los autoriza a entrar la CONADI, no sabe cuándo, parece que el 23 de septiembre, que la negoción estaba avanzada, y como eran colindantes tenían prioridad ellos, por eso lo fueron a ver, y hay un tranque adentro. De la conversación se encargaron los dirigentes de la comunidad, en la reunión que se hizo decidieron ir a verlo. Llegaron a una parte donde explotaban bosque, esa parte querían ellos, el suelo y subsuelo, así que les dijeron a los que lo explotaban que eran trabajadores que pararan la faena, que se retiraran ellos de ahí, porque tenían ese terreno con los árboles parados. Se fueron ellos del lugar, y se quedaron como una hora, tomaron desayuno, comieron pan, huevos, y decidieron seguir caminando y en ese lugar estaba el tractor que siembra papas, habían dos furgones, y un cargador que carga los sacos, y ahí decidieron pasar por un estero, y siguieron por el camino donde había siembra de papas y trigo. Ese camino llega al tranque, ahí tenían instalado un Rehue, en la entrada del fundo, hace 2 años, iban a ver el traque. De ahí, iban todos de lejitos, vieron de repente que José Cañete habla por radio, y de ahí al minuto hace partir el tractor, y ellos siguen caminando hacia el Norte, lo hace funcionar y se va contra de ellos, y él ve que el tractor no frena, lo acelera más, y cuando ve que está encima se tira para la siembra de papas, y el tractor como que hace un giro y lo empiezan a perseguir, porque eso se desparramaron, empezó a zigzaguear, se tiró a la siembra de trigo, se arrancaron como 12 personas para allá, y ahí el tractor siguió al Lonco, a su hijo Odilio y a Mauricio. Los peñis se arrancaban, cada uno corría por su vida, ya que el tractor empezó a perseguirlos, zigzagueando, iba arrancando Mauricio cuando lo agarra el tractor, por detrás, ahí ve que el tractor lo pasó y de ahí, y Rogelio Castro estaba cerca de él lo fue a socorrer, pide auxilio ambos levantan la mano, y el tractorista hizo así (hace un gesto de doblar la cabeza para mirarlo) y se volvió para atrás a pasarlo de nuevamente. Explicó que el gesto, es que mira hacia atrás, y el tractorista se devuelve y lo vuelve a pasar otra vez. Rogelio fue uno de los primeros que lo fue a ver, a socorrer, lo persigue a Rogelio, y ahí fue cuando le pasó de nuevo a Mauricio, y siguió persiguiendo a más personas hacia arriba, hacia como un cerro, ahí él va a ver a Mauricio y estaba boca abajo, lo da vuelta y tenía sangre en la nariz, estaba echo pipí, y rajado entre medio de las piernas. Trató de levantarlo, pero no podía. Le puso el teléfono, en la nariz y no tenía vida. Llamó a los peñis, quienes seguían arrancando del tractor. Llegó Carabineros, y dijeron que todavía tenía vida. Lo echaron arriba de una camioneta, lo acompañó Rolando y su hermano Enrique, avanzaron 500 metros, se juntaron con la ambulancia, y bajan el cuerpo porque el médico dice que ya estaba sin vida, y lo dejaron en un tranque. Cañete los persiguió unos 150 a 200 metros, veía sentado y manejando el conductor. Cuando ve la primera vez a Cañete sobre el tractor ellos estaban en el sector del bosque, donde explotaban el bosque, como a unos 100 metros, había dos vehículos más, un tractor, y un cargador. Esos vehículos estaban a 150 a 200 metros de Cañete. No sabe que hizo el otro tractor, porque ellos iban arrancando. Él estaba atrás cuando el tractor golpea a Mauricio, a unos 15 metros. Se exhibe al mismo la prueba material constente en un CD, que contenía un video. El testigo señaló que lo tomó el, cuando estaban echando el cuerpo arriba de la patrulla de Carabineros, y la voz es de Patricio Marín, y el lugar corresponde yendo para el Norte, donde había trigo. Mauricio había quedado boca abajo, con las manos arriba, el que estaba en una parte de terreno pelado, donde había un zapato, y el terreno hundido. A las preguntas del querellante, señaló que los dirigentes son Rolando Quintriqueo, y Enrique Llanquileo, ellos sostenían conversaciones con Conadi. Los mayores de edad tienen 60 años a 65 aproximadamente en su comunidad. El Lonco tiene como 60 años, andaban ese día. Vio cuando fue impactado por el tractor. Cuando Mauricio pedía ayuda él estaba a unos 16 metros. En el bosque no hubo un incidente especial. Cuando desayunaban en el bosque, se retiran al ver a carabineros, y Cañete les tocaba la bocina, y les hacia un gesto con la mano como que se les “hacia”. A las preguntas de la Defensa, indicó que el día 1 de octubre fueron la única comunidad que ingresó al predio, en ese grupo iba el fallecido, cuando ingresan al predio no atacan a Carabineros con piedras, no atacan a los trabajadores con piedras y boleadoras, iban a conversar, no recuerda si prendieron focos de fuego en las faenas forestales. Del administrador no tenían autorización para entrar al campo, habían tenido conversación con el dueño del Fundo. Raúl Quintas, con el tenían conversaciones, así pusieron el Rehue que estaba en la entrada, al interior del campo. No vio el tractor de Cañete acerca de cómo quedó, debe haberlo conducido entre 20 a 40 kilómetros. Lo condujo en un tramo marcha atrás, cuando se estacionó. Al Sr Cañete no lo atacó, él iba salvar su vida, cuando iba a socorrer a Mauricio él va y mira para atrás, al tractor, y sigue corriendo para salvarse, si se agachaba para atacar a Cañete, no se habría salvado, no sabe si los otros comunero tiraron piedras. Los demás comuneros no recuerdan bien a cuantos metros estaban. Se le exhibe nuevamente el video y no sabe quien son, no le es posible describirlos. No sabe si eran de la víctima, no sabe quién las retiró del lugar. El camino llega al tranque y salida del potrero, por ahí caminaron, no existe un camino más corto y expedito al tranque que el que ellos siguieron. No recuerda que mano levantó Quintriqueo. Él estaba detrás del tractor. No sabe cuánto mide un tractor, nunca se ha puesto a medir uno. 3.- RAMÓN PALMA MONTENEGRO, Funcionario de Carabineros de Chile, Capitán, Cédula Nacional de Identidad N° 15.949.735-8, 31 años, domiciliado en Balmaceda 1094, Lautaro, quien bajo juramento señaló que el día 1 de octubre del año 2014 se encontraba en la unidad, a las 11:30 aproximadamente lo llama su jefe, el Sr. Mandiola y le dice que se prepare con los elementos de seguridad, que habían ingresado ilegalmente al fundo Nilpe de Galvarino unas personas, sin autorización de su dueño, se los colocan, y se van al Fundo. Llegan, cuando se encuentra el Comisario hablando con unas personas y se baja a la Defensiva, por la experiencia antes estos fenómenos, ve que vienen de una colina dos tractores descendiendo y aparece un grupo de 6 o 7 comuneros hacia ellos que levantaban las manos y pedían auxilio por una persona atropellada. Sindican que uno de los conductores del tractor, Cañete, había atropellado a un comunero, subieron, y encontraron un apersona tendida en el piso, ve su estado de salud, no estaba respirando, pulso muy leve, llegó una camioneta en la que venía el mayor Mandiola, así que lo suben a la camioneta y se entrevistan con los que estaban en el lugar, y manifiestan que habían ingresado al fundo, y que el tractorista los había tratado de atropellar con esa máquina y en modo de defensa les habían lanzado piedras a la maquinaria, y ahí es donde uno de éstos los atropella y había dado vuelta en 360 grados y había pasado nuevamente sobre la persona que había atropellado, eso se lo dijeron en forma textual. Llegó a las 12:15 aproximadamente desde el llamado al Fundo Nilpe. Eran unas 8 personas adultas, masculinas, con ropa de jeans, algunos ponchos, con vestimentas normales y características de la etnia. A unos 80 metros al llegar al lugar estaba la víctima, el tractor a unos 300 metros, ya se veía que venían en sentido contrario. Subieron a su izquierda, y los tractoristas venían por el lado derecho, y ahí se dio la orden de hacerles un control de identidad, orden que da al subcomisario al sargento Saldias, y otros, eran como 15 funcionarios que estaban ahí. Después de entrevistarse con las personas toman dirección para tratar de salir del predio, donde hay una laguna y cuando iban en el trayecto ve que había una persona tapada, con un cubre cadáver y el sargento le dice que en ese punto el samu lo declaró fallecido, por protocolo no se lo pudieran llevar. Por un tema de dignidad lograron trasladarlo a la morgue de Galvarino. Desde que la ve la primera vez y luego fallecida deben haber pasado unos 40 minutos o 30. Al Samu no sabe quién lo llamó. El acusado es trasladado por el sargento Salazar que era el conductor a constatar lesiones y le comunican estar detenidos por las lesiones, y a los minutos se constata que era fallecido. Nunca se entrevistó él con el acusado. Solo participó con la víctima. El grupo de personas que vio no tenían nada en las manos, el no vio ningún encapuchado, ni cubriendo sus rostros, estaban vestidos en forma normal. El área donde encontró a la víctima era complicado para llegar en camioneta, era de tierra, y estaba en una ladera, y estaba plantado con unos 30 a 40 cm de cebada o algo así, y se veía un tipo de aplastamiento, y se veía tendido en el suelo, hacia unos 2 metros del camino. A las preguntas del querellante, los comuneros le indican que era Cañete el conductor cuando les piden auxilio a Carabineros, en ese mismo momento. Ellos no tenían desde ahí la visión de la persona atropellada, caminaron unos 10 minutos, los observó a unos 30 metros, al subir. A las preguntas de la Defensa, refirió que no vio conducir al sr Cañete el tractor, de la distancia que estaba no lo vio, solo le fue sindicado quien era, y que era el autor del atropello. Se colocaron chaleco antibala, casco balístico, y escopeta antidisturbios, y la granada que tira gases, los que se ocupan cuando hay antecedentes de desórdenes públicos, o ingreso a predio, que hay enfrentamientos. El comunicado fue de parte del Comisario, que habían ingresado y que se preparan, no le dijo nada más. Para ser sincero, por el protocolo se preparan para enfrentar el peor de los casos, sí que fuere a ocurrir. No tomó conocimiento de que los comuneros hayan atacado a las faenas forestales, al llegar al lugar las circunstancias cambiaron rotundamente con el atropello de la persona. Eventualmente suceden estas cosas por eso se prepararon. Se enteró en entrevista que el personal de carabineros que concurrió en primera instancia (Saldías y Salazar) vieron un grupo de personas y deciden retirarse (Sargento Saldías) por que se acercaban al carro, y eran más que ellos, y habrían hecho un gesto con boleadoras. Eran de la comunidad Nilpe 2, los que estaban ahí, no está seguro si habían más personas de otras comunidades. Después de que se retiran todos, hacen un rastreo por el lugar, van al bosque y había restos de una fogata, lata de cerveza, papel higiénico, y una boleadora bajo un pino. El vio el tractor de Cañete, pasó por un costado, estaba quebrado, se notaba que había tenido algún impacto de piedra, sobre todo la cabina, impactado por elementos contundentes, y había pedazos de vidrios en el suelo de la cabina. Vio una pequeña laguna, que ocupan como referencia. Aclarando al Tribunal, señaló que Saldías manifestó en la entrevista que los comuneros se acercaron al carro e hicieron el gesto de inercia que se hace con las boleadoras, pero no recibieron ningún impacto ni nada de lo que están acostumbrados. 4.- ROGELIO CASTRO CAYUL, Cédula Nacional de Identidad N° 13.631.216-2, 36 años, casado, temporero, domiciliado en Comunidad Nilpe José Quillaleo 2, Galvarino, quien bajo promesa señaló que la comunidad Nilpe 2 queda en Nilpe, Galvarino, la componen 26 miembros, pertenece a ella hace unos 5 a 6 años, las autoridades son el lonco Peiñan, el Werkén Llanquileo, y el Presidente Rolando Llanquileo. El 1 de octubre de 2014, hubo un acuerdo de los dirigentes de la comunidad y fueron a Temuco a juntarse con la Conadi el 24 de septiembre, y esta los autorizó para ver el Fundo donde ellos querían, y llegaron allá y se iba a comprar el fundo Nilpe por dos comunidades. Una interesada eran ellos, y otra que no recuerda el nombre, como eran colindantes, les dicen que fueran a ver los terrenos. Ese día a las 09:30 entraron al fundo por la parte sur, unos salieron antes, otros después, pero se juntaron en la entrada. Se fueron a la parte Norte, ellos querían que les compraran donde hay un tranque, y fueron hasta allá. Eran 25 personas, alrededor de 6 eran mujeres, caminaron llegando a las 10:30 de la mañana, y se encontraron con una tala de bosque, y fueron a conversar con los trabajadores que parara la tala y de ahí los jefes hicieron caso y se retiraron, y ellos se quedaron ahí, tomando agüita, y siguieron el rumbo, descasaron una media hora, y al frente había un tractor trabajando, y antes que salieran de ahí el tractor se fue al lado norte, unos más adelante otros más atrás iban por el camino que está entre las papas y el camino, iban hacia el tranque, al Rehue que tenían a la entrada del Fundo, dentro del mismo, está desde que llegaron, conversaron con Raúl Quinta y los autorizó a ponerlo hace unos 7 años. Entre las papas y el trigo caminaron hacia el Norte, el tractor estaba en un alto, y unos iban más adelante otros más atrás, y el tipo los sigue por el medio, y los de adelante empezaron a arrancar y gritar porque se les venía encima, y se esparcen, los ataca, y todos se tiran para el lado, de la papas y sembrado, el corrió hacia el lado del trigo. Casi pasan a atacar al Lonco, que tiene 62 años, y la marcha del tractor siguió, se escapó el lonco, sigue y golpe por la espalda al peñi, miró al tractor y al él. Fue porque el péñi que estaba botado levantó la mano, y el tractorista iba mirando hacia atrás a ver qué había pasado con el peñi botado, y él estaba boca abajo cuando lo llega a ver. (se emociona) y va a socorrerlo, cuando lo da vuelta tenía la cara con polvo, lo limpia, le gritan que arranque y lo dejó ahí. Arrancó, en eso el tractor lo sigue a él. Cuando iba corriendo hacia el lado del cerro, sintió un golpe, algo se quebró, en eso el tractor venía encima, y lo alcanzó y se tiró para el lado, el tractor pasa, y se va hacia el bosque. Como que perdió la conciencia (el testigo), al ver como estaba su peñi y arrancaba por su vida, se sentó y lloró. El peñi era Mauricio Quintriqueo, cuando volvió a reaccionar lo mira y venía llegando carabineros, y todos fueron a socorrerlo y todos gritaban que estaba muerto, que le había pasado por encima, que le volvió a pasar, él lo vio, y estaba muerto. El tractor que ve a lo lejos, y al que se refiere al inicio de su declaración era conducido por José Cañete, estaba en la parte Norte, en ese momento estaban parados, no estaban trabajando, estaban a unos 170 metros. Cañete, miró a la persona que pasó a llevar, esa mirada pegó él. Él estaba al lado izquierdo tractor por lado de trigo a unos 7 metros, A las preguntas del Querellante, indicó que conoce a Cañete de niño, porque compartían jugando a la pelota, trabajaron en el mismo fundo, nunca tuvo un problema con él, ese día no sabe que la pasó, le hizo la desconocía o trababan algo, no logró entender. Pide justicia. Raúl Quintas los tenía autorizado para manifestarse ahí. Había un tractor con una sembradora de papas, y la otra era un tractor montacargas. La otra maquinarias, cuando se empezó a mover el tractor, se fueron hacia el lado de la bodega, por otro camino. El trigo estaba a 30 cm de crecimiento, se vio claramente cuando él se cayó. A las preguntas de la Defensa; indicó que es día eran la única comunidad. Nunca atacaron a nadie en las faenas forestales, por eso tenían la confianza de entrar sin problemas, no portaban boleadoras. No vio a carabineros después de interactuar con los forestales. Estaban arando la tierra al costado, cuando se dirigieron al tranque no ingresaron a la siembra de papas, la única caminata que hicieron era hacia el tranque, entre las dos siembras había un camino, por eeo camino iban, no por medio de la siembra. Antes de eso nadie agredió a Cañete, no vio más porque estaba pendiente del peñi cuando iba corriendo. No vio los vidrios del tractor, fue un momento muy rápido, le pega a la mirada a él y al peñi, no estaba pendiente de los vidrios. Alrededor de Mauricio había trigo, donde estaba botado, era una siembra de trigo. Se le exhibe la fotografía N° 27 e indicó que no vio a Mauricio con gorro, tampoco con el morral. Ese morral tiene piedras. El único camino para llegar al Rehue era por donde iban caminando. 5.-DOMINGO PAINEN MARÍN, Cédula Nacional Identidad 16.720.953-K, 28 años, soltero, temporero, domiciliado en sector Nilpe, Galvarino, quien bajo promesa señaló que el día 1 de octubre de 2014 se dirigieron con la comunidad entera al Fundo Nilpe que colinda con la comunidad, como a las 9 y llegaron como a las 10:30 am, había una forestal que estaba explotando bosques, ingresan por la parte sur, se dirigen hacia el Norte, hablaron con ellos y les piden que se retiren, porque tenían conversaciones con CONADI. Ellos podían mirar el predio y elegir donde tenían mejor cabida, se dirigieron mirando el Fundo, y se retiraron los trabajadores. Comenzaron a tomar desayuno, eran unas 20 a 25 personas, hombres y mujeres (6), la mayoría eran hombres. Ese día andaban Domingo Peiñan el Lonco, que es su padre, Fresia Cayul, de 60 años, también mayor de edad, y otras de menor edad. Había una siembra de papas al otro lado canal, ahí en el canal trabajaban. José Cañete en un tractor, les tocaba la bocina en ese momento, era conocido con él, así que ellos le levantaron la mano, estaba a unos 200 a 300 metros, con una máquina que mueve el terreno. Luego como a las 11:30 cruzaron el canal siguieron con la caminata, ahí Cañete se retiró hacia el norte, no recuerda si retrocediendo o no, había mas tractores, uno sembraba y otra máquina cargaba la semilla; él se fue hacia los otros, mientras ellos cruzaban el canal, las mujeres quedaron más atrás de donde estaban los tractores llegaron a unos 60 metras o algo así, y él ve que Cañete habló por radio, hablo, colgó. Se dirigió hacia el grupo donde estaban ellos, que iban juntos por el camino al tranque, y en eso se dirigió directamente hacia ellos, no bajó la velocidad y le tiró a toda máquina, se arrancaron, primero pensaron que les iba a hacer una “asustada” porque era conocido, pero no, se dirigió hacia el grupo, y luego se arrancaron porque les dio miedo, los de edad quedaron ahí, se quedó atrás, empezó a perseguir a su papá, lo vio demasiado cerca, alcanzó a saltar hacia el lado su padre, algo vio ahí, levantó las rodillas, si no lo hace le agarra la rodilla, el pasto era alto. Iba su hermano y el finao, y ellos arrancaron directo. Su hermano no recuerda bien donde arrancó, él estaba preocupado de su hermano, no se pudieron esparcir tan rápido, la siembra de trigo estaba a unos 50 cm de alto, no se podía correr, les fue más fácil a los que fueron hacia a las papas, el arrancó hacia la parte izquierda del trigo, y el finado siguió corriendo derecho y no se percató que lo venían persiguiendo a él, le gritó que se corriera para el lado, y lo atropelló el asesino que está en el juicio. Él estaba a 15 a 20 metros del atropello, estaba más preocupado de su papá que estaba atrás. Le pegó una mirada por el lado izquierdo Cañete al finado, a los 7 metros da una vuelta, y lo vuelve a pasar, esa es la segunda pasada. Ahí sintió golpes de vidrio que le quebraron al tractor y sonaron las latas. Cañete después se dirigió a un altito a mano izquierda y queda enfocado nuevamente vuelto para abajo, él fue a socorrer al finado, y ya estaba fallecido. Le tocó el cuello, era como tocar una bolsa de agua, llegó carabineros, dicen que estaba vivo pero no lo estaba. Lo sacaron en ambulancia, y dijeron que estaba muerto, y lo dejaron cerca del tranque. Luego les avisaron que alguien acompañara al cuerpo, que estaba tapado. El fiscal los amenazó con llevarlos detenidos si no lo ayudaban a subir el cuerpo al furgón de carabineros, al final se negaron y lo hicieron ellos (fiscal). Cuando comienzan a arrancar venía el tractor a unos 50 metros, y los seguía como en zigzag. A Cañete no le pasó nada, dio la vuelta, se quedó mirando al grupo mientras ellos veían el cuerpo. A las preguntas del Querellante, indicó, que cuando levantó la mano la víctima estaba a unos 10 a 15 metros. Que había otras maquinarias, esas unidades se fueron hacia el norte, para llegar a los galpones donde guardan máquinas. Al contra examen de la Defensa; ese día fueron los únicos que ingresaron al predio, hacia el sur se dirigían al Rehue, iban al tranque, y luego dar la vuelta para llegar al Rehue, por otro sector. Ingresó al fundo desde que empezaron con la compra del predio, siempre ingresaban donde estaban los galpones del fundo. Tomaron ese camino, ya que había comuneros que conocían mejor el Fundo. No atacaron en ningún momento a la faena forestal, no tenían morral con piedra y boleadora. Ninguno andaba encapuchado. No vio a carabineros. Antes del atropelló no apedrearon el tractor de Cañete. Después de que lo mató sintió las piedras. Ahí si le quebraron los vidrios. No sabe quiénes las lanzaron. Iba fuerte el tractor, no sabe a qué velocidad, pero fuerte. Ve a Cañete mirar a la izquierda, pero no estaba quebrado el vidrio de Cañete en ese momento, sintió los golpes cuando el volvió. Volvió por la parte izquierda del tractor, y pasó por la misma parte. Cuando corrían y arrancaban sí ingresaron a la siembra de papas y trigo. Desconoce si la víctima portaba un gorro celeste, no lo vio con morral. 6.- MARIBEL ANINAO LLANQUILEO, Cédula Nacional de Identidad N° 17334214-4, 27 Comunidad Nilpe, años, soltera, temporera, Galvarino, quien bajo domiciliada en promesa señaló que pertenece a la comunidad Nilpe José Quilaleo 2, la componen 27 socios, sus dirigente el Presidente es Rolando Quintriuqeo, el vice presidente, el lonco Domingo, y el Werkén Enrique Llanquileo. El día 1 de octubre de 2014, decidieron entrar al fundo Nilpe, porque había una previa reunión con conadi, les indicaron que había opción de compra con otra comunidad más. Querían la parte del tranque por el agua y lo productiva, entraron por el sur, para ver el terreno. A las 08:00 salieron, llegaron a las 10:00, detuvieron la faenas ya que también querían parte de la forestal, y ellos se retiraron en ese momento, tomaron desayuno, y otros quedaron sentados. Luego divisó que sembraban papas del potrero, llegó carabineros al lugar, estado ahí el del tractor empezó a hacer señas y gestos tocándole la bocina, imagina porque llegaron carabineros, y les hacia un gesto con la mano, como de abrir y cerrar los dedos, como que se les hacía, pensaría que se iban a arrancar, pero siempre han sido pacíficos en cierta forma, el dueño lo sabe, muchas veces pasaban por la casa. Ellos siguen con el trayecto hacia el tranque, por un camino entre el trigo y las papas, el continuaba con su labores, primero caminaron los hombres, luego las mujeres, eran unos 25 socios, cruzaron los chiquillos el canal y el del tractor se sale de su rumbo, y se dirige hacia una lomita, y se queda mirándolos, con la trompa del tractor hacia ellos, ellos iban hacia el Norte, se va directo hacia ellos, y los chiquillos seguían caminando, y los empieza a perseguir, a uno al otro, y ellas no continuaron, les gritaban que arrancaran y que corrieran, los perseguía en forma de zigzag. Se abre Audilio Painen y su tío Benedicto, que se abren hacia la izquierda, y más adelante vio que el Lonco se abre hacia la derecha, gritaban lo mató, lo mató, porque cayó, ellas estaban a unos 60 metros, la persona sigue y vio quien impactó a Mauricio, y cae boca abajo, y cuando cae el del tractor se da la media vuelta, y Rogelio recurre a auxiliar a Mauricio y vuelve a arremeter de nuevo, y ahí le gritaron que se abrieran, él se corrió y le vuelve a pasar a José Mauricio. Desde la segunda pasada se abrió hacia el saliente y se queda mirando otra vez a los chiquillos, cruzaron del canal y les dicen pidan ayuda. Corrió con su hermana hacia Carabineros, y les pidieron ayuda porque se les cayó uno. No les creyeron, después de la insistencia fueron a ver. Por otro camino, ven salir al tractor, y lo indicaron como el que había atropellado a una persona. Lo hacen bajar del tractor. Él dijo si me quieren detener tienen que ir a las bodegas, ante la insistencia lo detuvieron. Al contra examen de la Defensa; manifestó que ese día es la única comunidad que ingresan, antes habían ingresado por las casas patronales. No atacan a la faena forestal. Carabineros estaba en otro sector, no sabe si se fueron o estuvieron siempre, o cual patrulla fue a la que le pidieron ayuda. No atacaron a Carabineros. Ningún miembro le tiró piedras al Sr. Cañete antes del accidente. El tractor no sabe cómo quedó, estaba preocupada de la vida de su compañero. El tractor iba fuerte. No sabe a qué velocidad. El camino estaba entre medio de las papas y trigo, por ahí iba, en el momento que los iban persiguiendo se abrieron, hacia los dos lados, todos corrían por su vida. No recuerda si Mauricio portaba un gorro celeste, no recuerda si alguien portaba un morral. Ella se quedó dónde estaba la patrulla, hasta cuando llegó José Cañete. No sabe que distancia había de ahí a donde estaba el lesionado. 7.-PATRICIO JIMENEZ BARROS, Cédula Nacional de Identidad N° 15.261.745-3, 33 años, soltero, Médico cirujano, con domicilio en Mac Iver, Galvarino, quien bajo promesa señaló que trabaja en la comuna de Galvarino desde el año 2010 a la fecha. El día 1 de octubre de 2014, se encontraba de turno en urgencia, en horas de la mañana a las 11 aproximadamente reciben un llamado solicitando una ambulancia por accidente rural Nilpe. Salió la misma a verificar el estado del paciente. Pasó una hora desde que salió y el paramédico le indica que estaba fallecido en el lugar, dio la orden de salida de la ambulancia. A eso de las 13 horas concurre Carabineros con un paciente José Cañete para constatar lesiones por ser el conductor del vehículo del accidente en Nilpe, se determinó que llegó en buen estado general desde el punto de vista psicológico, algo afectado, físicamente presentaba dos lesiones, una en la cara región fácil derecha de 1 cm, de baja energía, y la otra, un aumento de volumen en el hombro, el mecanismo había sido producida por el movimiento del asiento lo que es compatible con la lesión. Se le tomó la alcoholemia. No preguntó por la lesión de la cara ni su causa porque era leve, de baja energía. No alcanza a producir una ruptura de la piel, era solo una erosión. Puede haber sido causada por múltiples elementos, muy variado el mecanismo. Era una erosión que daña el tejido, muy superficial de la piel. Lo vio afectado por los hechos, y relataba que había escapado a su control. Se le exhibe e incorpora la prueba documental consistente en formulario de atención de urgencia N° 517052, de fecha 01 de octubre de 2014, del Hospital de Galvarino, y señaló que correspondía al de José Cañete Paredes, firmada por él, con diagnostico erosión facial y contusión dorsal hombro derecho, se toma la alcoholemia. El horario que consta 13:31 admisión, 13:40 el egreso. No correspondía hacerle más exámenes, dadas las condiciones físicas de Cañete Paredes. Declaró anteriormente ante Fiscalía, no recuerda fecha, y se le efectúa un examen a fin de superar contradicciones, y reconoce el documento de fecha 23 de enero de 2015 a una declaración de él, en la que lee “con respecto a las lesiones puedo señalar que tenía una pequeña erosión que se le había causado con vidrio”. A las contra preguntas de la Defensa; le parece que en el motivo por el cual se trae al paciente, se registró accidente de tránsito. Le parece que al sacar la ropa salieron pedazos muy pequeños de vidrio. Un golpe de baja energía en la cara podría causar un mareo, pero no es lo más probable, el mareo debe ser por una situación de stress, lo más probable es que un golpe de baja energía no genere un mareo. El paciente señaló que se sintió acorralado por personas. No recuerda que le hayan relatado que los vidrios se los quebraron. 8.-ROLANDO QUINTRIQUEO HUAQUIMIL, Cédula Nacional de Identidad N° 13.152.711-k, 39 años, casado, temporero, domiciliado en Comunidad Nilpe 2, comuna Galvarino, quien bajo promesa señaló que pertenece a la comunidad Nilpe 2, es Presidente, el día 1 de octubre de 2014, habían hartas conversas con Raúl Quintas dueño del Fundo Nilpe, siempre hubo diálogo, los autorizó a plantar un Rehue y les dio un espacio para manifestarse pacíficamente. Así podían avanzar ellos con la compra. Hace 7 años plantaron. El 2011, siguieron haciendo trámites en Conadi. El 24 de septiembre de 2014, los manda a buscar el sub Director de CONADI señaló que tenían primera prioridad, que dos comunidades iba a la compra, como ellos solo eran 27 familia la negociación sería con la otra comunidad Rapiman. Les entregó un plano, que tomen decisiones, y les avisen. Así Raúl Quintas no les dio permiso ese día, estaban autorizados por la Conadi, entraron el 1 de octubre, toda la comunidad, unas 27 familias, habían mujeres, y hombres. Salieron a las 8 am, y llegaron a las 10 de la mañana donde tenían que llegar, es un fundo grande. Se encontraron con una faena forestal que estaban explotando el bosque de pino, fueron y les dijeron amablemente que pararan la tala porque había compromiso de compra, había 20 personas, cargadores, conversaron con el jefe y se retiraron y se quedaron ahí, tomando desayuno. Ellos se fueron tranquilamente. Vieron un tractor que trabajaba a unos 80 metros entre la faena forestal y el cultivo de papas y trigo, vieron a José Cañete que trabajaba por el lado sur, al lado de ellos, nunca hubo problemas con él, compartían con él y su hermano Mauricio también. Aparece una patrulla de Carabineros, lo debe haber llamado el de la forestal, se pega la vuelta y se va, en eso Cañete estaba trabajando como a unos 80 metros, y les toca la bocina y les hacía por la ventana un gesto con la mano, “que se les hacía”, que le tenían miedo a los carabineros, no entendieron el porqué de esos gestos, si no había nada contra él, y Carabineros sabía que todo era pacífico. Se retira del lugar en 200 metros hacia el norte, estaba en el lado sur y retira al Norte, se sale del área de trabajo a unos 200 metros y queda en vuelta hacia ellos, sabía que ellos pasarían por ahí porque era el único camino para pasar al tranque, que querían para ellos. El camino queda entre las papas y la siembra de trigo, es largo, extenso, queda en la loma arriba, a unos 200 metros de ellos. Ellos (los comuneros) estaban en el sur. Siguieron caminando y a 60 metros ve que levanta la radio, hace un llamado por teléfono, siguieron confiados caminado, hace andar el tractor y va hacia ellos, no se imaginaron lo que iba hacer, y ya cuando venía cerca empezó a seguirlos, no sabían que estaba pensando, y empieza a perseguir unos con otros, y las mujeres que estaban cerca decían que arrancaran, y jamás pensaron que lo que estaba haciendo, era perseguirlos, empieza a agarrar vuelo el tractor, ellos arrancaban, los persigue, y cada vez la velocidad subía mas, tuvieron que volver para atrás, ya que el tractor no paraba. Ellos iban entre la papa y trigo, tuvieron que volver para atrás, a 100 a 80 metros más menos se percatan que los iba siguiendo. Todos saltaron para el lado, arrancaron, saltaron para el lado, él siguió corriendo derecho, estaba salvando su vida, estaba enfurecido en ese momento, ya no era normal, el tractor se desplazaba en zigzag para el lado, los traía cortos, tenían un susto muy grande. El Lonco saltó para el lado, Domingo Painen, a un metro o 50 centímetros, y pensó que mataron al Lonco, él iba corriendo de lado, para el lado sur, en relación al tractor él venía hacia el sur y el tractor persiguiéndolo. Se sentían gritos, “arranquen”, Cañete estaba enfurecido, quería agarrar a alguien, no paró el tractor en ningún momento. Iba Benedicto Llanquileo, otros saltaban para otros lados, su hermano José Mauricio venía con él, le dijo que arrancara, y como había pendiente el tractor agarraba más vuelo, de repente ve que su hermano cae, todo fue tan rápido, y pasa al medio el tractor, lo agarra por la parte trasera, (hace un gesto indicando por el lado trasero de las piernas), estaba a unos 15 metros del tractor (el testigo) venía corriendo, por el lado derecho del tractor, pasa el tractor y José Cañete mira para atrás, y ve que su hermano está en el suelo, y lo vuelve a pasar. Hace una vuelta al lado derecho, (y gestiona con las manos, vuelve hacia la izquierda). Mientras Rogelio Castro lo auxiliaba, su hermano levanta la mano, Cañete mira hacia atrás, y lo va a arremeter de nuevo. El atropello ocurre en el lugar del trigo, de unos 30 centímetros de alto. Hizo las dos pasadas y sigue persiguiendo a los otros peñis. Cañete no perdió conocimiento, iba sentado en el tractor, le consta porque lo vio en todo momento sentado en el tractor, y en eso le comentan que era su hermano. No entiende porque tuvo que repasarlo. (Llora profundamente). Relata su historia familiar, como los ha afectado la muerte de su hermano. Pide auxilio a Carabineros, estaban como 200 metros más allá, no creían en ellos, los Carabineros estaban por el lado sur, de la siembra de trigo. A su hermano le prestó auxilio Rogelio Castro. Carabineros les dicen que estaba con vida, lo suben a la camioneta, agarran el cuerpo y la mitad del cuerpo cae abajo, agarraba solo partes blandas, no podía estar con vida, no le encontraba signos vitales por ningún lado, lo llevaron a un tranque que está cerca de las casas, en eso llegó la ambulancia, el paramédico lo revisó y dijo que estaba fallecido. Luego de caer su hermano, siguió siguiendo gente, no paró el tractor, cuando se detuvo en la loma, estaba como a 50 metros de su hermano caído. No revisó el tractor, estaba en shock. Al contrainterrogatorio de la Defensa, refirió que fueron la única comunidad que ingresó ese día. Carabineros llegó al lugar porque ellos pararon las faenas. Nunca atacaron a la faenas, tampoco a Carabineros, tampoco a José Cañete, porque con él no había nada, había conversa con él, siempre había buena comunicación. El vidrio de José Cañete estaba quebrado luego de caer su hermano, ese vidrio no sabe quién se lo quebró. El conocía algunos caminos del Fundo Nilpe, el tranque estaba hacia el lado Norte, el camino para llegar era el que estaba entre la papa y el trigo. El objetivo era verificar el tranque y la mejor tierra ya que tenían prioridad por ser colindante. Algunos andaban con mochilas, morral no, llevaban pan y harina, No sabe si alguno andaba con piedras. Su hermano no recuerda que haya andado con mochila o bolso, ni gorro. No recuerda si en Fiscalía se le dijo que había alguna causa de usurpación o daños contra él. Se le realiza el ejercicio de refrescar memoria y lee luego de reconocer la fecha (18 febrero 2015) y firma, lee, “se deja constancia que con la finalidad de evitar cualquiera nulidad se lleva causa por usurpación y daños y s e le indica al testigo que tiene derecho a guardar silencio…” 9.- DOMINGO Identidad N° PAINEN NAHUELHUAL, 7.487-371-5, 61 años, Cédula casado, Nacional de agricultor, en Comunidad Nilpe 2, Galvarino, quien bajo promesa señaló que el día 1 de octubre de 2014, a las 10 am fueron al fundo ya que la comunidad podía ver el lugar que le convenía, según la orden de la Conadi, fundo Nilpe que colinda con su comunidad, se encontraron con la forestal, y pacíficamente les pidieron que se retiraran porque el acuerdo con CONADI era que la compra era con bosque; andaban 25 socios, más hombres que damas. Se retiraron pacíficamente los de la faena forestal, tomaron desayuno en la loma, y ahí ven al frente de un canal que estaban los trabajadores del Fundo un cultivo de papas, había 3 tractores trabajando, y ahí ven a Cañete que empezó a tocar la bocina y hacerle gestos con la mano, y se miraron unos con otro y le dicen sigamos caminando, no sabe que les quiso decir con levantar la mano. Siguieron por el camino entre la siembra de papas y trigo para ir a ver el tranque, y dar la vuelta luego hacia la carretera donde tenían el Rehue, y Cañete a unos 50 metros empieza a hablar por celular o radio, no sabe bien con quien se comunicó, echo andar el tractor, y lo siguió directamente de frente a frente a ellos, y cuando vieron que venía a full , y se empezaron a hacer al lado, y empieza a perseguirlos uno a uno como un perro a una liebre, venia el tractor de Norte a sur. Los otros agricultores siguieron su rumbo, y siguieron trabajando. Fue Cañete el que los seguía y ellos arrancaban, en eso el peñi Benedicto Llanquileo alcanzó a arrancarse para el lado, casi lo atropella, mira hacia atrás y por casi 20 centímetros no lo agarra a él, y venia sus talones, se tiró para el lado como un arquero, se arrodilló, no sabe si quería matarlo a él. Él se tiró hacia el sentido de la papa, y quedo traumado, a los minutos, se le aclaró la mente y Rogelio gritaba “los mataste lo mataste” y ve al peñi Mauricio tirado de boca abajo, y levantaba una mano pidiendo auxilio, y Rogelio y él se allegan, lo dio vuelta y decían los demás gánese un lado porque venía dando el tractor la segunda vuelta, no alcanzó a darlo vuelta bien, ya que venía dando una segunda vuelta para repasarlo, y le dio la segunda pasada. Cuando vuelven a verlo, ya estaba fallecido. El tractor se tiró hacia la izquierda al dar la vuelta. El peñi Rogelio dijo que estaba muerto, lo fueron a ver, vieron la zapatilla al lado, y ya estaba hecho pichí, mojado, pantalón rasgado, y no había vuelta que darle, en eso llegan carabineros, y dicen que estaba vivo, y ellos les dicen que no, que no tenía pulso. Cuando el cae hacia el lado de las papas, el cuerpo de Mauricio estaría a unos 20 a 30 metros. En el segundo momento se tiró como a unos 15 metros para el lado del tractor. Carabineros dice que había que levantarlo, y a los 10 a 15 minutos lo echaron al carro policial. Cañete después del atropello quiso dar la vuelta y quedó como a 40 metros nuevamente en una posición al frente de ellos, como nuevamente otra vez (sic), y de ahí se arrancó, a las bodegas no sabe bien. Había 3 maquinarias, los otros dos tractores siguieron cultivando la papa y se perdieron. No hubo reacción del grupo hacia el tractor, solo gritaban que se fueran hacia el lado. Al contra examen de la Defensa, indicó que fueron la única comunidad que ese día ingresó al fundo. Ese día estaban autorizados para entrar; siempre han tenido conversación con el dueño del Fundo, siempre hacían actividad, plantaron el Rehue, y de acuerdo a la CONADI, los autorizó a ver el Fundo. No amenazaron ni atacaron a la faena forestal. Siempre han sido pacíficos. No sabe si alguien portaba una boleadora, no cree, el trata de aconsejar a la juventud, de andar pacíficamente, habían pasado por las casas del dueño, por entremedio de los trabajadores, nunca con violencia, a nadie, han hecho Palin con la gente del Fundo. Se retiraron los de la faena forestal. Ve una patrulla de carabineros, no se dirigieron hacia ellos, se quedó en su lugar la patrulla, pero no pudo ver los hechos al momento del asesinamiento. No vieron lo que sucedió, porque estaban en un bajo. Siempre estuvieron en el lugar (carabineros). Cañete es mapuche también, es vecino de la comunidad. No cree que alguien le haya tirado una piedra a Cañete, puede ser alguno en el apuro, después del hecho, pero él no vio nada, quedó traumado, como que pisaba en el aire del apuro que estuvo. El tractor venía a alta velocidad. No sabe a cuanto, nunca ha manejado un tractor. Cuando se tiró al suelo quedó sobre la papa y el trigo, el trigo estaría en 40 a 50 centímetros. Cuando se paró del suelo vio a José Mauricio tendido, pero estaba traumado. No vio cuando lo pasó Cañete en la primera vuelta. La segunda vuelta de Cañete la vio. El Rehue estaba a la orilla de la carretera, dentro del Fundo. PERICIAL. 1.- VÍCTOR OLAVARRÍA SEPÚLVEDA, Especialista en Criminalística, 37 años, casado, Mayor de Carabineros, domiciliado en Avenida Pedro de Valdivia N° 0901, Temuco, quien bajo promesa señaló que el día 1 octubre de 2014 en calidad de jefe de operaciones se le requirió por el Ministerio Público para constituirse en sector rural Nilpe, comuna Galvarino, específicamente el fundo Nilpe, para realizar pericia de su especialidad. Todas las diligencias de ese día están plasmadas en Informe 1098-2014. El equipo de servicio ingresa al predio agrícola, lo primero ofrecido es el tractor marca John Deere, que exhibe a través de la fotografía N°1, en la que se advierte el tractor PPU DX TK 55, con ausencia de vidrio en el parabrisas, en la N° 2 se advierte el diseño de los neumáticos del mismo, para luego determinar su ubicación en el predio, en la N° N°3 se observa un acercamiento de la ausencia del parabrisas anterior, la N° 4 se fijan todos los planos del móvil, costado lateral izquierdo, también hay ausencia del vidrio, tanto puerta como venta del costado izquierdo trasero, en la N° 5 ausencia del vidrio, y fragmentos adheridos en la zona de anclaje del mismo, y los sellos de adherencia del móvil hacia el exterior, la N° 6 se fija el plano posterior del móvil donde se incorpora una rastra rotativa, elemento agrícola para ocuparse en maniobra de siembras o rotación de sierras; la N° 7 una imagen general de la rastra y la forma de adherencia al tractor, que el elemento adherido es ajeno al móvil; la N° 8 muestra la adherencia del terreno parcialmente fresco, lo que permite inferir que estaba en maniobras agrícolas al momento hechos; la 9 es una base del cono rotativo de la máquina, y da cuenta de la adherencia pasto, vegetal y tierra; la N° 10 se fija por medición la distancia entre suelo y dientes de la grada, para determinar que estaba en estado de alzamiento sin uso, o sea para desplazarse; la N° 11 se fija el costado lateral derecho del móvil, se destaca la indemnidad de los vidrios, están íntegros, la 12 fija el cilindro de apertura puerta, indemne, sin violencia; la N° 13 se exhibe el interior de la cabina, llamando la atención que hay un elemento en el piso que es ajeno a la estructura móvil; la N° 14 muestra en detalle lo que es, y corresponde a una piedra de menor tamaño y forma ovalada, que no debería estar en el interior según el principio de rareza de la criminalística, y se advierten fragmentos de vidrio, permite inferir que esta la causó (la rotura de la parte vítrea); la N° 15 da cuenta del área general del móvil y se puede ver la diseminación de la estructura vítrea hacia el exterior y los sellos hacia el interior, lo que permite inferir que se ejerció una fuerza externa desde adentro hacia afuera; la N° 16 es de altura y muestra una inclinación de los restos de vidrios y demuestra que la fuerza se ejerció de afuera hacia adentro, no presentaba mas hallazgos el móvil. Luego, el equipo continuó el camino interior hacia el norponiente con la finalidad de acercarse al lugar de los hechos, y se observa al costado sur izquierdo rastrojos, terreno agrícola, con acumulación de madera y área de trabajo reciente, había 3 áreas de rastrojo con emanación de humo; la N° 18 muestra las zonas de acumulación de rastrojo que presentaba la emanación de humo, el ingreso del equipo pericial se realiza desde el oriente al poniente, por esa vía, por lo tanto hacia el sur estaban estas tres aéreas hacia el sur, y la N° 19 muestra con detalles los puntos focales; la N° 20 muestra el detalle de la incineración temporal con emanación de humo. En la N° 21 con círculo rojo, se aplica junto a la fotografía N° 22 se muestra con conos de hallazgos los primeros fragmentos vítreos, en la misma zona se proceden a encontrar 3 elementos principales, que son rotulados. La N° 23 muestra los elementos vítreos, diseminados de manera individual y separada. La N° 24 muestra el primer elemento del sitio del suceso corresponde a un calzado deportivo pie derecho; el que tiene un desgarro en la estructura por tracción, y de aplastamiento, se corresponde con el terreno; la N° 26 mostró un bolso plástico negro marca Avon y un gorro de lana color azul con tramado tejido en la misma zona; en la N° 27, se rotulan los elementos, y se siguen viendo elementos vítreos, además se encuentra entre el gorro y el bolso una hendidura sobre superficie del suelo, y tiene como característica una impronta tejida, y se ve también zona de manchas biológicas de saliva y sangre, rotuladas como M1 y M2. En la 28 se ve el bolso negro marca avon, tipo morral, sintético, en la N° 29 su contenido, y eran seis piedras de tamaño mediano, y ovalada, que tenían las mismas dimensiones y formatos que la que estaba al interior de la cabina; la N° 30 muestra el elemento rotulado como E3 gorro y aplastamiento; la N° 31 se hace un cotejo in situ entre el hallazgo y la estructura; la N° 32 muestra un detalle de la impronta tejida; la N° 33 informó un cotejo visual que verifica como se puede ver el elemento terreo del gorro y si corresponde con el hallado linealmente, y sí existía correspondencia y se infiere que el elemento de aplastamiento se encontraba en esa zona con esa zona; la N° 34, mancha orgánica de saliva y sangre que se produce por expulsión del cuerpo; se procede en la 35 a su levantamiento por papel filtro, la N° 36 el rotulado M1; la N° 37 dio cuenta de la absorción de la muestra M2, la N° 38 el embalaje de la misma. La N° 39 mostró que levantada toda la evidencia, todas en conjunto permiten inferir que, es una zona de violencia y corresponde a la zona primitiva de la ocurrencia de los hechos por los cuales fue requerido el equipo, en la 39 se recalca que llama la tensión diferentes rastros de marcas de hendiduras de diseño de neumáticos sobre la zona, y estando el perito de pie llamó la atención un dibujo en el terreno que es una v invertida que corresponde al paso en sentido contrario de un móvil, o sea de norte a sur, o de izquierda a derecha, en la N° 40 se proceden a incorporar líneas segmentadas por cada una de las área de los neumáticos que trascurren hasta la zona de violencia, traspasando mas allá del punto del hecho; la N° 41 demuestra que la trayectoria del móvil que deja estampada su neumático en el suelo procede a efectuar a lo largo del terreno una circunferencia de retorno que queda demostrada con la línea segmentada para pasar nuevamente por el punto de incidencia para retomar su ruta hacia el Norte. En este punto se mide el punto de violencia entre el punto medio de ambos neumáticos, existen dos metros de distancia, que es el paso del móvil en retorno. Por lógica, al existir fragmentos vítreos se procedió a realizar un análisis de dirección, es decir, de donde proviene la dirección del móvil, por lo tanto se toman elementos de la naturaleza esto es la dirección de los neumáticos y la dirección de aplastamiento vegetal que da la dirección del móvil y los dibujos de los neumáticos, confirman aquello. Por lo tanto se detectó el punto de ingreso y de salida. Para verificar el punto de inicio se hizo un recorrido a pie en sentido contrario al punto de ingreso al área de incidencia, así en la N° 43 en la medida que se realizó el desplazamiento se encontraron los fragmentos vítreos en mayor cantidad; la N° 44 se encontró que a poco más de 100 metros desde el punto de incidencia de violencia (flecha amarilla) siempre retornando en manera contraria al desplazamiento del móvil hay dos acumulaciones de fractura de vidrios donde destacan una asa de sujeción demostrada de norponiente a suroriente; la N° 45 demostró la cantidad de vidrio y el asa de sujeción de ventana o puerta del móvil; la N° 46 se levanta el asa de sujeción y correspondió al tractor peritado; la N° 47 es un asa levantada de la acumulación vítrea del costado, y fijación fotográfica del asa del otro costado, de ambas acumulaciones. Luego, se llega a un área denominada punto de inicio del desplazamiento que es un área donde había dos colosos con elementos para la siembra, fijado en la N° 48, en que se advirtió sobre el suelo preparado para sembrar, se vieron restos recientes de maquinaria agrícola, por lo tanto se definió como el área de desplazamiento al momento de los hechos. La N° 49 muestra la misma zona con visión hacia el sur donde se ve al fondo el área de violencia. La N° 50 un plano general hacia el poniente hacia las maniobras agrícolas que se realizaban ese día en el predio, la N° 51 impresiones particulares de los neumáticos en la zona que demostraron desplazamiento reciente en la zona. Añadió, que en consideración a esos antecedentes, se recorrió el trayecto desde el punto de inicio hacia el área de retirada, por cuanto había un móvil con signos de violencia. La N° 53 se representó su desplazamiento desde un camino de costumbre de norte a sur, que existe entre ambos paños de siembra, uno preparado con terreno removido y otro preparado con anterioridad, se desplaza de norte a sur al llegar a los 173 metros, área donde cambia su dirección, llamó la atención que ahí existía remoción de tierra compatible con la grada rotatoria, acá se bajó la grada rotatoria tomó contacto con el suelo, tiene una distancia de 4 metros 10 de desplazamiento y al finalizar el desplazamiento con el elemento bajo (en contacto) existen las dos áreas de acumulación vítrea. El desplazamiento es irregular si no se está usando la grada, debe ser en su posición alta, se desplazó con la grada en contacto con el suelo. La N° 55 se puede ver el desplazamiento de los 4 metros 10, la dirección que se retoma, y con la flecha amarilla se ve el punto de incidencia del hecho objeto del juicio. La N° 56 se vio la zona donde se levanta la rastra y la acumulación de los dos zonas vítreas por fractura, la 57 detalló otro ángulo, la 58 cuando el móvil levantó la grada continuó su desplazamiento en forma irregular, en forma de curvaturas en el terreno, imagen tomada de norte al sur, y la zona de violencia está en ese punto. La 59, se vio el móvil en su marcha de poniente a oriente, el móvil continua su marcha de norte a sur para pasar por la zona de incidencia, en la N° 60 una vez que pasa por la zona de incidencia retoma y comienza a efectuar un giro hacia la izquierda, respecto al punto anteriormente mencionado, se advierte desplazamiento humano al costado derecho del móvil, desplazamiento de personas que es reciente. La N° 61 muestra con mayor claridad el desplazamiento por aplastamiento de vegetal y neumáticos del móvil. La N° 62 y 63 al efectuar el viraje hacia la izquierda se efectúa el retorno al punto de incidencia, y se advirtió la dirección de retorno sobre el lugar. La 64 es un ángulo opuesto del móvil pasando nuevamente por la zona de incidencia, que la imagen segmentada se encuentra direccionada siempre a la zona media para diseñar los neumáticos. La N° 65 retoma su dirección pero esta vez al norte, es decir, en sentido contrario de donde venía, el trayecto se comienza a hacer irregular; en diferentes sentidos, en la 67 continua hacia el norte pero vuelve hacer un retorno, en la 68 vuelve a retornar hacia el área de incidencia, sin llegar aun, en la N° 69, comienza a efectuar una serie de giros, uno en particular llamó la atención en primera instancia se direccionaba al oriente retorna a mano derecha para dar vuelta, con lo cual bajo el principio de inercia un elemento del móvil sale depositado hacia el exterior lo que indica mayor velocidad, lo que se mostró en la 69. La 70, se apertura, en la 71 mantención de la maquinaria, se adhirió como elemento principio de la misma, en la 72 y a pocos metros del retorno del giro se produce un avance y retroceso en el mismo lugar de la maquinaria, se infirió que corresponde a un desplazamiento irregular, en la N° 73 este móvil luego de efectuar un desplazamiento hacia adelante y retroceder retoma hacia el poniente y luego cambia de dirección para dirigirse irregularmente a una zona de empalme a un camino interior, que ellos usaron como de ingreso, sale del paño agrícola de siembra y toma el camino interior, para quedar en el lugar donde fue hallado y peritado. La 76 mostró el lugar del lugar de hallazgo del móvil, la 77 es extemporánea para el solo efecto gráfico. Se infiere que las fracturas y diseminación vítrea encontrados en el sitio del suceso se correspondían a dicho móvil, por lo tanto, el desplazamiento se infiere a este elemento agrícola. La N° 78, y teniendo ya el desplazamiento del vehículo uno, se trató de dilucidar el desplazamiento de los otros 2 vehículos que estaban en el sitio del suceso. Son dos móviles más que se advirtieron en la N° 78, la maquinaria N° 2 se dirige en una primera instancia en el mismo sentido del vehículo 1 pero cambia de sentido unos metros antes y se desplaza hacia el poniente, la N° 79 demostró que tomó en diagonal hacia el mismo camino de empalme tomado por el N° 1. La N° 80 demostró el desplazamiento al interior del predio, la 81 demostró al móvil 3, que antes de que el móvil 1 y 2 en distancia cambien de dirección el retornó francamente hacia la izquierda, hacia el oriente y toma un camino interior para empalmar a uno que se encontraba que estaba con anterioridad. La N° 82 que se desplaza en hacia el sur en 1 instancia, pero luego cambia retornando francamente hacia el norte, hasta el punto medio y luego hacia el norte para retornar en un camino que existía con anterioridad(N°83). La N° 85 es el abandono del predio. Luego se pide apoyo helicóptero institucional, y en la N° 86, fotográficamente el área desde el aire. En la N° 86 se fijó es el desplazamiento completo del vehículo 1, el desplazamiento inicial hacia los 173 metros, se quiebra la línea, ya que se efectúa un medio giro hacia el oriente, con marca de la rastra y las fracturas de vidrio, luego cambia de dirección hacia el sur oriente, luego comienza con sus movimiento irregulares, hasta tomar el punto de incidencia pasa por sobre ese punto hacia el sur haciendo el primer giro, para pasar nuevamente por el punto de incidencia y retomar hacia el norte, aquí comienza nuevamente la irregularidad de su desplazamiento, porque nuevamente tiende a hacer un giro hasta llegar a una distancia no mayor respecto al punto de inicio para hacer nuevamente un giro y aquí se proyectó la caja de herramientas, para nuevamente direccionarse esta vez hacia el oriente, lugar donde frena, retrocede y toma nuevamente hacia el punto de empalme y posteriormente recién toma el punto de contacto con el camino interior. La 87 mostró el desplazamiento del móvil 2, por lógica iba atrás del otro vehículo, mucho antes del área de incidencia, quiebra el trayecto, tomó un camino interior, y abandonó el paño agrícola. El N° 3 toma un trayecto más sencillo, hacia el sur oriente y empalma directamente hacia la zona exterior. Luego, se realizó un rastreo hasta la zona de bosquecillo donde se encontraron dos elementos, la N° 90 muestra el detalle del área de ubicación. La N° 91 mostró un elemento tejido de lana que se conoce como una onda manual, con receptáculo interior, se rotuló como E4, que sirve para proyectar un elemento por medio de boleo. La N° 92 muestra el levantamiento del elemento que por su limpieza demostraban un depósito reciente, en la N° 93 se encuentra un guante de polar color azul, pues era recientemente depositado, pues no estaba húmedo ni sucio, ni con las características que toma un elemento al tener más tiempo en la intemperie. Luego se constituyen en la zona residencial del fundo, para verificar como se encontraban los otros 2 vehículos involucrados. La N° 95 mostró el segundo tractor Jhon Deere, se fijaron las 4 áreas del móvil; en la 96 parte anterior, en la 97 lateral izquierdo, la parte posterior y se ven elementos de siembra, la N° 99 el costado lateral derecho, se encontraba indemne. La 100, el otro móvil que era un cargador frontal, con su cara anterior indemnes ambas, la 100 otro móvil que es el cargador frontal en su cara anterior indemne, la 101 costado lateral izquierda indemne, la 102 área anterior, la 103 costado lateral derecho, por ende, este móvil tampoco fue objeto de violencia. Teniendo en atención estos antecedentes y hallazgos se pudo inferir los trayectos de cada uno de los móviles, y paralelo a ello un segundo pericial equipo acompañado de la doctora Médico especialista, fue realizó un examen externo del cadáver. Luego, describe su segundo peritaje planímetro, que representa la ubicación por coordenadas de todos los hallazgos del sitio del suceso, se exhibió una imagen digital y satelital, extraída de la web, y permite anclar vía coordenadas, la zona de hallazgo, advirtiendo el camino antiguo entre dos paños, que por razones de siembra, no es usado en la época de los hechos, sino uno de costumbre más a la izquierda. Se advirtió las 3 áreas de la faena forestal con emanación de humo. Señaló los trayectos de los 3 vehículos, con apoyo de imágenes satelitales. A las preguntas del Fiscal; señaló que al interior del tractor sólo encontró 1 piedra. La fotografía 18 eran rastrojo forestal, que correspondían a ramajes de la faena forestal, que son desprendimientos del árbol, al momento de llegar emanaba el humo; no había fuego en el lugar al momento peritaje. La N° 25, cerca de elementos vítreos encontró el zapato. Los elementos vítreos comienzan en el desvío que el móvil hace a los 173 metros de desplazamiento, por ende la fractura se produjo ahí, luego hasta el área de violencia hay diseminaciones menores al punto del conflicto, las que se diseminaron por desplazo. Luego señaló que habida consideración del hallazgo que es el gorro, el morral, y una impronta de aplastamiento sobre la superficie da entender que alguien o algo estuvo en la zona, entendiendo que hay mucosa y sangre da a entender zona craneana estaba en dicho punto con la cabeza de sur a norte. En el punto medio del círculo rojo donde estaba la zona y teniendo en consideración que existir un cuerpo ahí y la zona craneana ahí (punto violencia), por fisonomía el cuerpo debe estar extendido hasta ese punto, por ello se tomó la medida entre ambos neumáticos, para tomar un punto medio que es la zona central y la de incidencia que hay 2 metros de distancia. La fotografía 60 y 61 demostró que el desplazamiento del móvil era por izquierda, retornando, y el desplazamiento humano era por el costado derecho del móvil. Hay una distancia aproximada de 500 metros en línea recta entre la onda que se halló en el bosquecillo y la zona de impacto. En cuanto al orden en que salieron estos 3 vehículos, después de realizar la reconstrucción de un desplazamiento de un móvil que fue objeto de violencia, (que se refiere a que existe alguna alteración dentro de su estructura, en el caso el vidrio), teniendo ese detalle en consideración se reconstruyó la movilización o trayecto del móvil 1 y, con apoyo de declaración de las personas del lugar. En la fotografía N° 86, se quiso demostrar por separado los trayectos de los 3 vehículos para efectos gráficos, pero a través de la líneas sobre el terreno, se pudo ver el desplazamiento del tractor 1 y 2. El tractor 1 es el que sigue la mayor distancia donde ocurre el 1 hecho de violencia sobre la estructura (vidrios) y posteriormente se realiza el desplazamiento de los otros dos, desde el punto de inicio deben haber 5 a 6 metros, entre el que sigue y su antecesor. Desde el punto de inicio deben haber habido unos 100 metros de los otros dos y el punto de violencia, porque el primer punto de violencia del tractor 1 es de 173 metros. La distancia de desplazamiento no es lineal, pero consta en su peritaje las distancias que hay entre el punto de inicio, violencia, y de incidencia, etc, deben haber aproximadamente 600 metros. A la época de los hechos se desempeñaba como jefe de operaciones, en criminalista, de Temuco, desde el 2010, su especialidad es Perito Criminalística, en escena del crimen; en lo que se desempeña hace 11 años, y se dedica a ver escena del crimen, actualmente se encuentra en la academia Ciencias Policiales, cursando un Magister. No recuerda el N° que ha realizado de peritajes en 11 años. Reconoce su peritaje del sitio del suceso N° 1098, de fecha 20 de enero de 2015 y respecto del informe Pericial Planimétrico efectuado en sitio del suceso N° 1101, de fecha 20 de enero de 2015, teniendo por incorporadas las 104 fotografías exhibidas. A las preguntas del Querellante; no encontró ningún giro antes de los 173 metros. Al contra examen de la Defensa, no se hicieron mediciones del tractor, de su estructura. Luego, exhibiendo nuevamente la imagen N° 27 señaló que los indicios encontrados en el sitio del suceso le permiten inferir la ubicación de la zona craneana de la persona, y por los restos orgánicos y su ubicación, y él infiere por lógica que se desplaza el cuerpo de sur a norte. No puede inferir que las especies (gorro, zapatilla) corresponden a la víctima, sí que pertenecían a alguien cercano al lugar. En cuanto a la impronta tejida del gorro es compatible con el gorro. En la fotografía N° 41 precisa que la zona de incidencia es toda la que exhibió, lo que se demarcó en la zona, es un punto en la zona de incidencia, la respuesta es que sí pasó por ese punto. Por el punto que se encuentra a dos metros tomado desde la distancia de las dos ruedas, no. Añadió que en base observación y hallazgos se puede inferir que se ejerció con anterioridad un punto de violencia contra el móvil. No recuerda exactamente la distancia, pero deben ser unos 100 metros más desde el punto de cambio de dirección en el punto de incidencia. Añadió que los primeros restos vítreos fueron hallados en la zona de incidencia. Había otro camino por uso de costumbre laboral, es para transitar entre los dos paños de siembra. El ancho y largo de potrero no se determinó exactamente. Las fracturas vítreas no pudieron ser realizadas con una sola piedra, no solo con la que encontró en el tractor. Desde el punto de inicio al de incidencia no se encontraron rastros de calzados. Había pisadas humanas en el pasto, al costado, no dice que haya habido personas acompañando el tractor. No puede determinar horas de los desplazamientos de los móviles. Lo que verifica es la temporalidad, por las pisadas e impronta de las ruedas, aplastamiento del pasto, pero no horas específicas, puede descartar lo temporáneo o no. Velocidad exacta es imposible, eso es matemático físico, lo que hace es por presión se extrajo un aumento de velocidad en el trayecto. Se extrajo de google, y la data es del año 2003. 2.- PIA SMOK VASQUEZ, Cédula Nacional de Identidad N° 9.393.718-K, soltera, Médico con especialidad en Medicina Legal, domiciliada en calle William Rebolledo N° 1717, Ñuñoa, Santiago, quien bajo promesa señaló que se desempeña como Médico Criminalista de Policía de Investigaciones de Chile, del año 2006 a la fecha. En febrero del año pasado se le solicitó un peritaje remitiéndole copia digitalizada de la carpeta, se le pide que se pronuncie sobre la crimino dinámica de las lesiones del fallecido, origen e intensidad y cotejarlas con las declaraciones que existían sobre la ocurrencia hechos. Trabajó en base a los elementos objetivos, y secundariamente con las declaraciones. Desde la perspectiva médica en los hechos ocurridos el 1 octubre de 2014 el sr. José Cañete se encontraba conduciendo el tractor marca Jhon Deere modelo 6830, verde, cuando un grupo de personas hacen ingreso al predio, y se produce una dinámica entre el que conduce el tractor y estas personas, producto de lo cual una fallece, José Quintriqueo, por un politraumatismo, muere atropellado por el tractor, y el acusado con lesiones constadas el mismo día. Las lesiones de Cañete eran leves, de menor gravedad, se tuvo que complementar con la declaración del médico que las realizó, se obtiene que había una erosión en regional fácil izquierda y una contusión en hombro por golpe costado derecho, nivel del hombro. Luego, el fallecido presenta politraumatismo por atropello, lo interesante y relevante es que existe una dinámica de dos tiempos, es un atropello en dos fases, hay un primer punto de impacto entre el tractor y Quintriqueo que es en la parte posterior de la extremidad inferior izquierda, impacto de baja a media energía, sin fractura asociadas, y hay un impacto que viene desde atrás hacia adelante. El segundo punto de trauma es de alta energía y corresponde al aplastamiento del tronco, en dos bandas horizontales, una abarca las costillas superiores y el esternón, que son aplastadas, y una segunda banda que aplasta la pelvis, que va de derecha a izquierda, dejando indemne una zona, la del ombligo, este último impacto es la causa de muerte. El acusado en sus diversas declaraciones no tiene mayor utilidad para ella, ya que hay diferencia en las mismas, por no recordar la dinámica, en otras si, que siente desnivel, pero no logra precisar. Los terceros que acompañaban a la víctima declaran una dinámica efectivamente concordantes con las lesiones, y así el tractor avanza y la parte anterior impacta la piernas, cae al piso, se aleja, gira, y vuelve a pasar por ese punto atropellándolo con las ruedas izquierdas del tractor. A la pregunta del peritaje, concluyó que existe concordancia entre lo relatado por las personas y el patrón de lesiones del cadáver. El eje de aplastamiento va desde la derecha a la izquierda, en el segundo impacto, no existe una posición corporal para que hayan sido en único impacto, claramente existen dos momentos de impacto. Preguntada por la Fiscalía, energía es lo que se obtiene multiplicando la velocidad del impacto con la masa de lo que se impacta, el tractor de 5 toneladas de peso, como un elefante es lento, la energía está dada por su masa, y no por su velocidad, todo lo opuesto a una moto. El primer conjunto de lesiones, es en las extremidades inferiores, con predominio en la izquierda, hay un hematoma en el hueco poplíteo izquierda, ocurre donde ocurre el impacto, viene del anterior hacia el interior, este no generó traumas óseos, hay erosiones, equimosis y hematomas, a diferencia, de lo que hay en el tronco, (entre cuello e ingle) se vio hay fractura en las costillas, justo encima del esternón, y luego del espacio, la fractura de la pelvis, que es el hueso más resistente del cuerpo fracturado en 4 partes, y esto se debe a un alta energía. Y por ende el patrón, que va de la derecha a la izquierda, es concordante con aplastamiento, absolutamente. Las fracturas costales de que da cuenta la autopsia dan perfectamente cuenta del aplastamiento. Da ejemplo del palo de helado, el punto de tracción y compresión. Señala y exhibe fotografía N° 1, (extraída de la autopsia) que dio cuenta de las lesiones advertidas en la extremidad izquierda, que el sujeto haya estado de pie, que lo impacta desde atrás, eso hace que desplace de atrás hacia adelante, y para obtener la segundo lesión de conducta tiene que estar acostado, de cubito, por el patrón de facturas descritas, supino, el primer impacto de pie y espalda y al tractor, y el segundo acostado y boca arriba. Un erosión en teoría es por fricción, (roce, no es como un combo) ahora, si correlaciona esa teoría con lo declarado y las evidencias encontradas, en la dinámica que hubo respecto de José Cañete el recibe piedrazos en a lo menos dos puntos distintos del trayecto, que fracturaron el vidrio del costado izquierdo, por lo tanto, planteó que la erosión fácil sea producto del impacto de alguno de estos vidrios del tractor. Es bastante poco posible que la erosión de la cara se haya producido con la piedra, ya que es de bastante mayor energía, debería haber algo contuso, moretones, equimosis, etc, roturas de la piel, o fracturas, y solo había una erosión fácil izquierda. La erosión facial del acusado no debiese tener ninguna repercusión en el estado de conciencia de una persona, puede estar nervioso, preocupado, pero no desmayado o inconsciente, no hay correlación. Los piedrazos fueron antes del atropello, no lo registró en el informe. Es Médico Cirujano de la Universidad de Concepción, Médico Legista de la Universidad de Chile, Magister en Docencia de la Universidad de Chile, Magister en Criminalista de la Universidad de Chile, Médico Legista en Policía de investigaciones de Chile del año 2006 a la fecha. Reconoce su firma e informe N° 29, de fecha 17 de marzo de 2015. Al contra examen de La Defensa, señaló que no examinó in situ el tractor, sólo en base a los antecedentes. Tiene la fijación fotográfica del tractor efectuada por LABOCAR, tiene la morfología del tractor y su parte delantera, y esa morfología es concordante en altura, ubicación y tipo con la lesión encontrada en la pierna izquierda de la víctima, no puede ser taxativa 100% pero si puede establecer que hay concordancia de patrón por altura y morfología. Esas lesiones de las extremidades inferiores, eran lesiones de tipo contusas, de compresión y fricción. No tuvo a la vista ningún elemento del sitio del suceso que le pudiera dar o explicar un origen distinto a la lesión. No había descripción de fractura de pie en el fallecido, ni en autopsia ni en Labocar. Se le exhibe el Informe y lee el punto N° 10 y 23. Punto 10 “Estos elementos dan fuerte sustento de lo declarado por los trabajadores del predio del imputado acreditando uso de violencia al tractor, con piedras y boleadoras…” Punto N° 23, 7 “ …existe visibilidad limitada, existe posibilidad que Cañete no se haya percatado del atropello…” Respecto de la intencionalidad del atropello, no tiene elementos para determinarla dado que es criminalística, no es criminóloga. En la lesión primera que se refiere como a baja energía, la máxima velocidad es a 17 km por hora, eso es baja energía. Esta gran masa impacta a baja velocidad para generar lesiones superficiales sin fracturas profundas asociadas. 3.-NUBIA RIQUELME ZORNOW, Cédula Nacional de Identidad N° 7.937.452-0, médico Cirujano, y Tanatóloga en el Servicio Médico Legal de Temuco, hace 18 años, con post Grado en Anatomía Patológica, domiciliada en calle Antonio Varas N° 202, Temuco, quien bajo juramento y exhibiendo fotografías integrantes de su informe de Autopsia, señaló que realizó la autopsia de José Mauricio Quintriqueo Huaquimil; quien pesaba 82, 700 kilogramos, y de 1 metro 65 centímetros de estatura. Ingresa en saco sellado, y desnudo, con el N° 102. Se advirtió la palidez del cuerpo, presentaba escoriaciones pequeñas en tercio inferior de hemi dorso derecho, una pequeña sobre el glúteo derecho; una escoriación pequeña en cara externa del glúteo derecho, en la región supra púbica, y una pequeña en la cara anterior del muslo derecho. Presentaba equimosis en región pre cordial. Luego respecto de sus extremidades superiores, presentaba fractura tercio inferior de humero derecho, gran área escoriativa y erosiva en cara postero externa de codo derecho; en las inferiores presentó escoriación cara externa de muslo derecho escoriación en cara externa de pierna derecha, extensa escoriación hueco poplíteo izquierda y cara interna de la rodilla izquierda, escoriación en cara posterior de pierna izquierda, gran hematoma azulado cara posterior rodilla izquierda, y escoriación en cara interna rodilla izquierda. En el tórax presentó fractura de cuerpo esternal, extensos desgarros musculares en la cara anterior de tórax con gran infiltración sanguínea de músculos y tejido celular sub cutáneo; fractura de la 1 a la 5 costilla derecha por arco medio; fractura de la 1 a 6 costilla derecha para esternales; fractura de la 1 a 7 costilla izquierda para vertebral; fractura de la 1 a 4 costilla izquierda por arco medio. Sin fracturas en las extremidades inferiores, fractura de la 4 vertebra dorsal con sección medular completa, fractura iliaco púbica bilateral, fractura sacro iliaca bilateral. Hubo un movimiento brusco en la masa encefálica que produjo las lesiones en el cerebro, el tórax estaba completamente fracturado. Cada costilla estaba fracturada en dos lados, con desgarros pulmonares. Las muestras de drogas y alcoholemia fueron negativas. Concluyó que la causa de muerte del cadáver de José Mauricio Quintriqueo Huaiquimil fue un politraumatismo consistente en traumatismo encéfalo craneano cerrado; trauma toraco abdominal grave; fractura de humero derecho; fractura de columna y fractura de pelvis en más de dos focos, desgarro de hígado y renal. El mecanismo es compatible con un atropello y arrollo de tractor según antecedentes que se le entregaron. El occiso no presentaba lesiones en la espalda, ni equimosis ni escoriaciones directas. Luego, se le preguntó si era posible que haya sido golpeado por la espalda, y contestó que no habían lesiones en la espalda, solamente unas pequeñas en la parte lateral derecha altura de la cadera, por ende, contestó que de haber sido topado por el tractor tendría que haber sido de baja energía, para hacerlo perder equilibrio y luego aplastado, pero en la pierna izquierda hay una lesión externa extensa, que si es compatible con haber sido golpeado por el móvil, haber caído, y posteriormente haber pasado sobre él. A las preguntas del Fiscal; refirió haber hecho una ampliación sobre si había sido golpeado en la espalda, y de la gravedad lesiones, y señaló que estas eran mortales, de extrema gravedad, ni con socorro oportuno ni eficaz se hubiese salvado. El primer impacto pudo haber sido en la pierna, y haber caído boca abajo al suelo, y ser aplastado, por ser compatibles las lesiones toraco abdominales con aplastamiento. Reconoce su peritaje. Al contraexamen de la Defensa, indicó que en su autopsia coloco “hecho de tránsito”, porque se le indicó que había involucrado un automóvil. No evaluó si era o no accidente. Las erosiones de la pierna son todas coetáneas con todas las otras que presenta el occiso, son una unidad, si las viera sola sin el contexto, pudiera ser causada por otra cosa. No conoce el tractor, pero con los antecedentes vistos compatibilizan las lesiones que ve. Las lesiones de la pierna, son de baja energía, probablemente fue a baja velocidad. Lo deben haber desestabilizado y caído. Las lesiones mortales son las del aplastamiento, no las del topón. Las lesiones que se dan a una velocidad de 50 kilómetros por hora o más, son lesiones mayores, el cuerpo podría volar, y depende de la dinámica de cada accidente, no hay una plantilla para esto, depende del peso de la persona, su altura, el material del suelo, donde fue topado, entre otros. Aclarando al Tribunal, el fallecido estaba boca abajo tras el primer topón por la equimosis grande que tiene precordial y el aplastamiento era de atrás hacia adelante, no había muchas lesiones en el dorso, eran todas internas, él estaba con ropa, y las ruedas son de goma, cuando la ropa es delgada o no hay, se tatúa la rueda en la piel, en esta caso no ocurrido, lo que es sugerente es una lesión del brazo compatible que tiene un ancho, rectangular y es muy pareja, algo pasó rozando. El aplastamiento se produce boca abajo. Dejó muy pocas lesiones externas. Reconoce su Informe de autopsia N° 579 de fecha 20 de octubre de 2014 y sus respectivas ampliaciones, de fecha 24 y 26 de marzo de 2015. 4.- JUAN VEGA NORAMBUENA, Cédula Nacional de Identidad N° 8.698.150-5, 55 años, casado, dibujante de la Policía de Investigaciones de Chile, domiciliado en calle Aldunate N° 620, Temuco, quien bajo juramento y exhibiendo fotografías señaló que el día 4 marzo de 2015, concurrió al fundo Nilpe ubicado km 7 de Chol Chol a Galvarino, o desde Galvarino hacia el sur en 4,5 km, desde la entrada al fundo se recorre un camino sinuosos hacia un potrero donde se miden 2,999 kilómetros, según se advirtió en la fotografía N° 1; en la N° 2 se da cuenta en el punto N° 1 el lugar en que el Subcomisario Vera Muñoz indica una referencia que coincide con ese punto, allí habría habido un tractor que se desplazó hacia el sur, y luego se desvía hasta detenerse en el sector signado como punto 3, en que habría ocurrido un atropello, y había un Rehue como hito. La N° 3 da cuenta de la máquina implicada en el atropello. Se indicó en la máquina de lado una persona como conductor que estaría desde el suelo hacia su punto de vista a 2, 55 metros desde el suelo del conductor en relación a una persona puesta delante de un contrapeso que tendría el vehículo una persona de 1 metro 70 habría un contacto visual mínimo por sobre la parte delantera del motor; que desde la posición que ocupa el conductor hacia la parte delantera es de 3 metros y fracción. Para que el conductor pueda ver a una persona completa de pie se necesitan 6 metros. En oscuro está el sector que no se ve desde el punto de vista del conductor hacia adelante con la obstrucción parte delantera del tractor, y una proyección hasta la distancia que se señala. Luego se advirtió una imagen de frente del tractor, y una persona delante del mismo, en la parte oscura un ángulo de 45 grado, y se ve un poquitito, en un ángulo de 15 grados y acá de 45 grados es el que permanece sin visibilidad. El vehículo mide 2,8 metros desde el bode externo de los neumáticos, y con el ángulo de visión seis metros. A las preguntas del Fiscal, señaló que debía establecer el ángulo de visibilidad del conductor con la persona, se ignora la posición en que estaba la persona fuera del vehículo. En cuanto al vehículo se establecen solamente las referencias que tendría en cuanto a la altura que hay desde el tapabarro al piso, que son de 1, 43 aproximadamente y un ángulo de visibilidad de unos 45 grados que permanece en oculto. Desde la vertical externa del neumático habrían 1, 5 metros en el suelo que no es visible, y entre neumático y neumático en color amarillo se señaló un pequeño espacio que no alcanza a ser un metro en que se alcanza a ver el suelo. Hay una referencia geografía de un informe previo de Carabineros, desde esa posición quiere saber qué distancia hay hasta el punto N°2. Se informa que el vehículo desvía su trayectoria, desconoce si hay alguna otra maniobra, por ende, el punto de detención relevante en el punto 3, y considerando que es un terreno curvado, es decir el 2 esta diferente al número 1. Desde el número 1 no habría visión al 3. Del punto 2 al 3 la visibilidad si había, habiendo una distancia de 113 metros, es aproximadamente una cuadra. La fotografía es de google earth, no recuerda fecha de la misma. Reconoce su peritaje. Al contra examen de la defensa; señaló que la primera fotografía la extrajo de google earth, la data debiera ser del 2015. El peritaje lo hizo en marzo de 2015. Sin ser agrónomo el campo estaba cosechado, al momento de la pericia. La entrada al Fundo está al este del sitio del suceso, según se exhibió en la lámina N° 1. No hizo observaciones sobre si había o no un Rehue. En la segunda imagen, narró que en el 1 punto no se le indicó que hubiera otro tractor, ni en el segundo ni tercer punto. El peritaje lo hizo en función de lo que le dijo el Sr. Melo, tuvo a la vista lo referente a la coordenada de localización de Labocar. Respecto de la tercera imagen señaló que no sabía cuánto media la víctima, la persona representada corresponde a su estatura que es 1,70 metros. Si una persona mide 1,65 y está parada justo frente al tractor, estima que (levantando la cabeza), tenía contacto visual con el ocupante del cabina en ese momento, y la que ocupaba el lugar del conductor, tenía la altura desde sus ojos al piso de 2,55. Se le verían los pies a una persona a los seis metros desde el punto cero que se observa en la lámina N° 3. La magnitud de 6 metros es significativamente menor respecto de la extensión de la curva, en consecuencia del punto 1 al 2, hay una distancia de casi 173 metros y del 2 al 3 hay una distancia de 113 metros, entonces en 6 metros, es significativamente pequeño de acuerdo al contexto. Si el terreno está en declive, siendo una cima, y si hablamos de circunferencia, es un arco muy extendido pero no tanto como para que del punto 1 al 3 haya visión.Aclarando al Tribunal, la diferencia entre la zona negra y lila, señaló que es la visibilidad por sobre el tapabarros de la rueda delantera y la otra es por la rueda trasera. Reconoce el informe pericial planimétrico N° 113, de fecha 31 de marzo de 2015. 5.- RODRIGO GONZÁLEZ ROJAS, Cédula Nacional de Identidad N° 12.417.843-6, 43 años, casado, perito fotógrafo de la Policía de Investigaciones de Chile, domiciliado en calle Aldunate N° 620, Temuco, quien apoyado del informe de inspección ocular del sitio del suceso con fecha 04 de marzo de 2015, bajo juramento señaló, exhibiendo fotografía N° 1 la parte delantera del tractor John Deere PPU DKTX-55, la N° 2 detalles patente; la N° 3 vista lateral izquierda; la N° 4 vista posterior; la N° 5 a una vista lateral derecha del mismo; la N° 6 corresponde a una vista desde el interior cabina hacia la parte anterior mismo vehículo, donde al horizonte letra A estaba una persona; la N° 7 acercamiento digital sonde se aprecia la persona que se fija como letra A, la 8 corresponde a fijación desde interior cabina hacia la ubicación A y se indica con letra B a otra persona ubicada en el horizonte, la 9 acercamiento digital del encuadre anterior y la 10 correspondió a una vista panorámica desde el interior cabina mismo tractor. A las preguntas del Fiscal, señaló que el objeto de su pericia era buscar por orden del Sr. Melo Suboficial a cargo distancias en las cuales el conductor podía ver a las personas. No tomó medidas, solo fijaciones. La lámina N° 10 es panorámica, se desarrolla en base a secuenciales que se unen para lograr efecto más amplio desde la vista de la cabina. Es imposible fijar a través de una fotografía lo que perciba una persona, la vista permite una visión más amplia. En relación a la fotografía 10 es una fotografía con visión limitada, hacia adelante, la parte delantera vehículo y ventanas puertas. El lente que tiene de 35 mm es un lente limitado en ángulo de visión, con uno de más ángulo la fotografía 6 podría haberse captado los bordes del tractor. Reconoce su informe pericial fotográfico N° 111, de fecha 02 de abril de 2015. A las preguntas del Querellante, señaló que las panorámicas se hacen con una serie de imagines consecutivas que se unen, en el programa que se unen, él determina en que parte corta, ya que al unirlas queda una curva, y partes negras, el programa que el usa no le da un ángulo, si bien podría tener grados, o si hubiese tomado en 360 graos desde el asiento sería una línea larga que visualmente no tendría sentido. La fotografía 5 es el costado lateral derecho, y la N° 3 el izquierdo, y la estructura de la puerta es similar a la del otro costado. Contrainterrogado por la Defensa; refirió que él mide 1,85 centímetros. Si el fotógrafo hubiese medido 1 metros 65 centímetros no es lo mismo, iba a haber diferencia entre las distancias, pero mínima, imperceptible, mientras más cerca más variación. Las fotografías las tomó con el tractor detenido, y sus vidrios indemnes. En la N° 8 indicó que si una persona hubiese estado tendida en el suelo con la letra A, él presume que no se podría ver. La N° 10 debe haber ocupado unas 3 fotografías (para hacer la fotografía panorámica). PRUEBA DOCUMENTAL: 1.-Certificado de Defunción de don José Mauricio Quintriqueo Huaiquimil, Run 14.905.632.-7, Circunscripción Temuco 1.370 año 2014, nacido el 9 de abril de 1981, el que da cuenta que con fecha 1 de octubre de 2014, fallece en fundo Nilpe Galvarino a causa de un politraumatismo/ hecho de tránsito. MATERIAL Y OTROS MEDIOS DE PRUEBA 1.- Una fotografía, correspondiente a las extremidades inferiores de la víctima, contenida en la ampliación del informe de autopsia N° 579, de fecha 26 de marzo de 2015. 2.- Tres imágenes, del sitio del suceso y visión del conductor, contenidas en el informe pericial planimétrico N° 113, de fecha 31 de marzo de 2015, del Lacrim de la Policía de Investigaciones. 3.- Diez fotografías de la vista desde el tractor P.P.U DXTK.55 contenidas en informe pericial fotográfico N° 111, de fecha 02 de abril de 2015, del Lacrim de la Policía de Investigaciones. SEPTIMO: Prueba del querellante: La Querellante, rindió la declaración de Enrique Llanquileo Quilaqueo, cesante, domiciliado en Niple 2, Galvarino, quien bajo juramento señaló que el día 1 octubre de 2014, alrededor 8:30 mañana se juntaron en la parte de afuera del Fundo Nilpe por el lado sur, entraron por camino aledaño, la idea era llegar a un tranque, se querían quedar con esa parte, tenían conversaciones con Conadi del año 2009, en esa fecha se iba a comprar el fundo, había un convenio con dos comunidades la de Rapiman de Padre Las Casas. En la última reunión del 24 septiembre que estaba el subdirector, él y dos personas más. El primero les dice que pueden visitar el fundo cuando quieran, que el dueño estaba accesible a vender, y que él estaba en conversaciones con el dueño. Como eran colindantes tenían prioridad según le dijo el subdirector, y que podían elegir quedar con buena parte, por eso querían ver el tranque. Iban 25 personas, entre mujeres y hombres, son en total alrededor de 31. Iba la machi, el Lonco, llegaron donde estaban los forestales, que estaban talando, como estaban negociando y que comprarían el suelo y subsuelo les dijeron a las forestales que se reiteraran, y así lo hicieron, luego, ellos se quedaron tomando desayuno. Alrededor de las 11 querían ir a ver el tranque que era la meta, pues querían hacer algo frutícola, había trigo y papas, en algún momento llego carabineros después de echar a la forestal, pero se fueron a las casas, agarraron el camino entre las papas y trigo, y habían 3 maquinarias, dos tractores y un cargador, uno estaba frontal trabajando en el lado sur, cerca de donde talaban de ahí se fue en dirección hacia arriba, ellos siguieron caminando unos 100 metros y de repente ven a Cañete que enciende el tractor habla por radio y se va en dirección al camino donde ellos iban caminando, cuando ve que la arremete la primera parte contra sus peñis, los que se abren hacia los lados, unos al trigo otros papas, y la segunda empezó a perseguir, los que quedaron atrás sintió que le tiraron piedras, y de ahí empezó a correr no más, trató de salvar su vida, luego se detuvo el tractor, y alcanzó casi a su papá, que es Benedicto Llanquileo, y se detuvo para pasar cambio, y su papá alcanzó a abrirse, luego empezó a perseguir al Lonco Domingo lo llevaba bien cerca, con una vuelta que se dio sea alcanzó a salvar, mas adelante mas cerca iba Quintriqueo, y ahí lo alcanza y había una pendiente en bajada y lo alcanza ,esa parte estaba pelada, no había mucho trigo, y lanzó a Mauricio Quintriqueo, y le pega entre las caderas y la espalda con la trompa de adelante del contrapeso, con el fierro de adelante, pasa por encima de él, no lo atropella, le pega con una rueda pierna izquierda, pasó por encima hace una vuelta en u y vuelve a pasar por encima, y Rogelio la dar vuelta en U lo estaba auxiliando, le gritaron a Rogelio que se arrancara, y ahí paso de nuevo. Él estaba a 20 metros más menos cuando paso la segunda vez, y de ahí intenta a seguir a mas, unos peñis arrancaron, pero ya estaba en subida y no tenía velocidad para alcanzar a más personas, pero nuevamente quedo en corrida como hacia ellos, pero luego llegó a los 10 minutos carabineros, y fue uno de los que les dijo que lo ayudaran. Le dijo que no tenía signos vitales. Carabineros dice que todavía tiene, y dice tratemos de hacer algo, se suben a la camioneta con él y Mauricio, van hacia las casas donde sale el sol y hay un tranque, se juntan con la ambulancia, y el paramédico dice que estaba muerto. Lo tapan con su ropa. Los otros conductores, a la distancia que estaba, no vio bien quienes eran. Nunca habían tenido antes problemas en el Fundo, llamaban al dueño del Fundo para hacer negociación pasaban por ahí sin tener problema. Al conductor lo ve cuando ya iban caminando, ve que era José Cañete, jugaban futbol, sin tener problemas anteriores. Lo reconoce en la sala de juicio. Respecto otras máquinas, una de ellas siguió cultivando, y la otra siguió parada, él fue el único que los siguió en el primer instante. Uno se mantuvo en el lado norte, el otro seguía cultivando. Luego del segundo impacto, lo fue a auxiliar Rogelio Castro. A las preguntas del Ministerio Publico, indicó que se retiró por la loma y siguió apuntando hacia ellos luego de la segunda vez que atropella a Mauricio quiso atropellar a otros, peor ya no tenía tanto. La vuelta en U fue hacia la izquierda, y el estaba a unos 20 metros y se encontraba como al costado al lado de la papa, lo veía de frente. La comunidad está a unos 8 kilómetros, pero son colindantes. El terreno tiene loma y pendientes. Contrainterrogado por la Defensa, indicó que el tractor iba súper fuerte, unos 30 se imagina él, solo corría, si no lo alcanzaba. La gente de su comunidad le tiran piedras, cuando les tira el tractor, se abren, los que iban más atrás ven que los persigue como en zigzag, unos peñis le tiraron algunas piedras, peor no vio quien fue. Fueron la única comunidad que entro ese día. A los de la Forestal les pidieron que se retiraran, no atacaron a nadie, ni le pegaron a nadie. A Carabineros tampoco, ellos se devolvieron por el camino que llegan a las casas, les tocaron los instrumentos que tienen cuando ellos llegaron, eso sí lo hicieron. A lo mejor hubo otro momento en que la tiraran piedras después de lo que relata, eso no lo vio. Llegó cerca de Mauricio, pero no lo tomó, llego a 2 metros, estaban choqueados, los peñis trataban Exhibiéndose la de tocarlo fotografía pero N° 26 no tenía del ninguna peritaje de reacción. Olavarría precisamente se parece al lugar en que quedo la víctima, pero no sabe con precisión si es, no recuerda si los elementos que se advierten son de la víctima o no. OCTAVO: Se oyó a doña Margarita Huaiquimil Hueneque, víctima indirecta, madre de José Quintriqueo Huaquimil, e indicó que quiere justicia, está enferma, siente mucho a su hijo que se fue, el único que quedaba en la casa, y ese hombre se lo mató intencionalmente, su marido también está enfermo, con puro remedios todos los días, llora donde anda por ahí. Todos sufren, los hermanos, piensa que cuando va ahí lo va a ver. El acusado ha estado libre más de un año y su hijo bajo tierra, es un gorrero, lo tiene todo. El anda contento, se rio de su hijo y burla de ellos, se pasea por la calle. Anda en el mismo tractor que mató a su hijo. Es un sinvergüenza. Se pregunta quien le paga todas las enfermedades que tiene su marido, por la muerte de su hijo. NOVENO: Medios de Prueba de la Defensa. Que la Defensa del acusado, a fin de sustentar su teoría del caso, rindió los siguientes elementos de convicción: TESTIMONIAL. 1. RICHARD REINALDO SALAZAR ARIAS, Cédula Nacional de Identidad N° 13.511.618-9, 39 años, casado, funcionario Carabineros de Chile, Sargento Segundo, domiciliado de en calle Balmaceda N° 1044, Lautaro, quien bajo juramento refirió que el 1 octubre de 2014, en Nilpe estaba de patrullaje en Galvarino con su Sargento Segundo Saldía Chávez, a las 11:10 aproximado por radio les comunican que en el fundo había un grupo comuneros al interior, al ingresar había 3 trabajadores. No recuerda que más le dijeron. Se acercaron unos trabajadores a decirles que un grupo los echaron del lugar, no recuerda como los echaron. Verificaron un grupo de personas a gran distancia las cuales empezaron a librarse en distintas direcciones, Saldía dijo que salieron y pidieran cooperación, salieron hacia la laguna, llegó el Comisario con personal, y al descender de los vehículos se acercó un grupo de personas que indicó que uno de sus compañeros había sido atropellado. Se acercaron dos tractores, saliendo de un sector del fundo, una mujer dice “ahí viene el tractor que atropelló a una persona”, era José Cañete, venía con vidrios quebrados, y una lesiones rostro, lo subió al vehículo policial para evitar agresión y lo sacó hacia la laguna del Fundo. Solo es fue el motivo para ingresarlo al vehículo policial. Su mayor concurrió a prestar auxilio, luego llego un “ap” al interior traían a la persona la bajaron y llego el samu, y al bajarlo llego el paramédico quien constató el fallecimiento de la persona. Le ordenaron que lo sacara del tractor del fundo y lo trasladara a la tenencia, los llevó a constatar lesiones, alcoholemia y posteriormente en la unidad lo entregó a personal de Lautaro. Cuando llegó al tranque, y se supo que había fallecido la persona se le intimó su detención, le informó sus derechos, eso fue toda la interacción que tuvo con él. Contrainterrogado por el Fiscal, señaló que llegó al fundo Nilpe con su Oficial Saldías, no se percató si tenían lesiones los de la forestal, no recuerda que lo hayan mencionado tampoco, ni que hayan sufrido algún daño en sus vehículos, nadie, nada, solo se van al verlos disgregarse como en dirección al vehículo, no recibieron ningún tipo de agresión de los comuneros, unos 600 metros. Una “ap” es una camioneta sin cúpula. Al acercarse el grupo venían sin rostro cubierto, sin ningún elemento en sus manos, sólo se acercaron a pedir ayuda por el atropello. Una persona les indicó quien era el conductor. Al interior del predio se le comunica la detención una vez que el paramédico indicó el fallecimiento de la persona. Sólo fue una impresión la que tuvo respecto a que se pudiesen acercar al carro, para evitar problemas, no hubo ningún tipo de agresión. Hizo lo que se hace en todo procedimiento policial. 2.-DIEGO LÓPEZ VIDAL, Cédula Nacional de Identidad N°18.619.887-5, 21 años, soltero, Operador de maquinaria forestal, domiciliado en Carahue, quien bajo juramento indicó que el día 1 de octubre de 2014, estaba trabajando en el bosque forestal, en el fundo Nilpe, cargando camiones. Empezaron a trabajar a las 8 am, el suceso fue a las 10 y algo, no está seguro la hora. Estaban al medio del bosque y había un camino, y al otro lado, otro bosque, aparecieron personas encapuchados, llegaron violentos a atacarlos, le tiraron piedras con boleadoras, el camión se fue, él también se fue en la máquina, manejaba un Bel, uno que carga camiones, clasifica madera, es un trineumático. Se fueron todos del bosque a las casas del fundo, se fueron sus colegas, los motos, y de ahí ya no vieron nada. Solo a él y al camionero los sacaron a piedrazos. No agredieron a nadie más que ellos. Al frente del bosque había siembras. Cuando se va lo hacen por el camino principal, casi camino a la carretera. Contrainterrogado por el Fiscal, señaló que al trineumático se le trizó un vidrio, él no sufrió lesión alguna, tampoco sus compañeros. A las preguntas del Querellante, él estaba a cargo del trineumático, y no hizo denuncia por el daño ocasionado. 3. LUIS ZANETTI MUÑOZ, Cédula Nacional de Identidad N° 8.273.906-8, 56 años, casado, empresario forestal, domiciliado Temuco, quien bajo juramento señaló que el día 1 de octubre de 2014 en el fundo Nilpe tenía una empresa de Servicios Forestales y estaba cosechando bosque de pinos, estaba de temprano con su gente trabajando. Como a las 10 y algo de la mañana entraron unos camiones de ellos a retirar madera y él estaba donde se despachaba la madera y el jefe de faena suyo le dice “mire mire” y desde el bosque salió hacia ellos una cantidad de gente gritando hacia a las faenas de ellos, se acercaron dónde estaban los motoserristas y los operadores de dos maquinarias, y tiraban y tiraban piedras, los gritos se oían de lejos, encapuchados y tirando piedras, no podía identificar si eran hombres o mujeres, estaban con boleadoras y tirando piedras. En ese momento José Luis que estaba al lado de él empezó a firmar y sacaron dos videos y el sacó una foto, advirtiéndole que cuidaran a los motosierristas, que se fueran, les dijo que retiraran y pusieran cuidado hasta que salieran. Él fue el último en salir, se incorpora junto con su declaración la prueba material consiste en un CD que contiene una fotografía y dos archivos de video, indicando que una de ellas muestra un bosque al fondo, y se divisan unas 3 personas, estimó que eran como 15 a 18 personas las que entraron (según su apreciación). Añadió, que se aprecian dos maquinas que pasan por delante del testigo, la gente entró y correteó a los que estaban ahí, escucha que se fueran sino les iban a quemar la camioneta, obligándolos a salir de la faena violentamente.- El segundo video es mas menos lo mismo según el propio testigo.Señaló que sacaron las maquinas , se retiró la gente y unos dos o 3 de ellos los siguieron para que se retirasen más de la zona con piedras, avanzaron ellos, se volvieron a retirar, se fueron más hacia las casas del fundo, y siguen avanzando hasta que ellos caen en un lugar donde ya perdieron la visión sobre lo que pasaba, ya mucho más retirados del lugar perdiendo la visión de lo que pasaba con el resto de la gente. Fueron interrumpidos en su faena y sacados violentamente. Los conductores eran Claudio Riquelme, y el otro Nicolás López, que sigue trabajando con él. Llamó a los dueños del fundo y a Carabineros quienes dicen que iba a gente en camino, se retira del fundo, y decide ingresar nuevamente cuando llega carabineros, ya que vio humo en el lugar, eran dos focos de fuego, que nos sabe quien inició. Contrainterrogado por el Fiscal; indicó que el vehículo que sale de la faenas es una máquina forestal que estaban trabajando, no eran de la faena agrícola, adentro había una camioneta del motosierrista, el vehículo amarillo va al máximo que da la máquina. Él estaba a unos 300 metros donde captó el video, no sostuvo conversación con nadie de los que entraron al lugar. Señaló las capuchas, una vez ampliada la imagen digital ofrecida. Estima que son 5 personas las que ve encapuchadas con color negro. Tuvieron dialogo con los motosierristas, les dijeron “salgan de acá o te vamos” y sus trabajadores le dijeron “también somos mapuches, vivimos de esto, y le dicen “ándate no más, si no también te vamos a romper la camioneta”, cargaron sus cosas y se fueron. Los tuvo primero a 300 metros luego a 100 metros, tirándole piedras a él.Realizando el ejercicio para superar contradicciones, el testigo lee declaración de fecha 22 de enero de 2015, en los siguientes términos “ luego como a eso de las 10:30 me encontraba en el sector de explotación del bosque lugar en que estaban dos trineumatico y 2 camiones cargándose yo me encontraba como a 300 metros de donde estaba la gente, y yo me quede como a 800 metros de la faena, ..” Al contra examen del Querellante, señaló que no podía saber el sexo, la edad tampoco, llevaba un mes en la faena forestal, sin más altercados anteriores. Aclarando al Tribunal, indicó las 5 personas con capucha que a su juico se aprecian, y que figuran al lado izquierdo de la fotografía. 4.-RAUL QUINTAS GARRIDO, Cédula Nacional de Identidad N° 9.339.955-21, 47 años, casado, perito agrícola, con domicilio reservado, quien bajo juramento señaló que el día 1 de octubre de 2014, el Fundo Nilpe fue tomado por comuneros encapuchados, alrededor de 20 personas a las 10:30 horas según le avisó un jefe de la empresa forestal externa que tenía trabajando, de nombre Zanetti, después lo llamó Eliseo Gutiérrez que es el Administrador, muy nervioso y le ratificó lo mismo que había hecho Zanetti, y que además habían levantado unas boleadoras, que le habían hecho volverse a la bodega y que no podía ir al potrero porque estaba tomado, que se volviera sino le iban a quemar el vehículo y a él también, por eso se retiró a la buena, a la bodega no sabe cuánto demoro, no hay señal, coincidió la hora con Zanetti. Fue con el Sr. Cortezi al campo en forma inmediata llegaron a las 11:30 o 11:45 anduvieron 500 metros del campo a la bodega, y carabineros dicen que se retiren porque había conflicto, y que apaciguaran las cosas, que trataban de controlar la toma, y se quedaron esperando ver que sucedía, si las maquinarias de él habían podido o no salir, esperando noticias. Carabineros luego le dijo que había un atropello que la persona estaba muy grave, luego a los 5 minutos le informan que esa persona había fallecido, ahí quedó impactado, nunca se había hecho una toma dentro del predio. No sabía que tenía que hacer, llegaron los comuneros, la prensa se fueron en contra de él, intentaron golpearlo, fuerzas especiales lo cubrió un poco, le golpearon la camioneta, le gritaban asesino, y dejó constancia en carabineros de los golpes que le habían dado y denunciar el hecho. Después, volvió al predio, y le comentaron que un empleado de ellos estaba detenido en Lautaro, fue a verlo, le llevó ropa, y no regresó al campo por lo sucedido. Había maquinaria trabajando en el predio, forestal había un camión cargando, una grúa, y otra al interior del bosque, en la parte de ellos sembraban papas cuando sucedió el hecho, trabajaba un tractor con la sembradora, un equipo que es manipulador forestal cargando la sembrado, y otro tractor preparando la semilla, que era el Sr. Cañete, y ese tractor en esa faena andan alrededor de 2 km por hora, y entierra una roto fresadora, que es muy pesada y otro tractor que va pasando un arado. Los otros operadores se llaman Edgardo Cortez que sembraba, y José Cañete estaba preparando con la roto fresadora, y en el manipulador Juan González, y en el arado ya no recuerda. Era toma porque entraron al predio sin autorización y en forma violenta y capucha, y las toma se hacen de esa manera. Él es arrendatario del predio con opción de compra del 75% del predio, el otro 25% es del socio Carlos Cortezi. Hoy día no tiene ese contrato con opción de compra, solo es gerente de producciones. Se enteró que uno de los tractores cuando iba de viaje vuelve a llamar Eliseo y le dice que a Cañete le quebraron los vidrios, y él le dice “como no se fue de ahí y evitó que le quebraran los vidrios”, y le dice no sabe. Pero le avisó que le están quebrando los vidrios. Al día siguiente con el fiscal Voullieme, fueron a ver el tractor. Al contra examen de Fiscal; le indicó que el propietario en esa época le arrendaba a Bice Vida. Con Monte Redondo S.A él tenía en ese minuto el 75% de la sociedad que era la arrendadora a la compañía de seguro, terminaba ese contrato el año 2030, el gerente general en esa época era él. Lo que sabe fue por lo que le relataron a él, no estuvo presente. Conoce a personas de la comunidad Nilpe 2, a una persona que trabajó con él, en su minuto el año 2009 o 2010 lo llevaron ellos a su junta, una chica que era la secretaria no se acuerda el nombre, estaba el Presidente, fue y habló con rangos de la Comunidad y le preguntaron si existía la posibilidad de que se vendiera para la CONADI. Al contra examen del querellante, refirió que el Fundo Nilpe se arrendó. El 2014 no. Nunca ofertó el terreno, porque no puede ofertarlo. El predio fue solicitado el año 2009 para una comunidad de padre las casas, José Quineo, ahí le dio un valor a la Conadi. Y habló con la gerencia de los propietarios del campo, era mucho el dinero para ser comprado, no se consideró el valor de los bosques, no se llegó a acuerdo. Después, se le pidió si podía otra vez ofrecer el campo para la misma comunidad, lo volvió a ofrecer, a nombre a Darwin Astudillo en esa época gerente, y logró llegar a una negociación que finalmente no prosperó. Recién ahora, el 23 de diciembre se le solicitó el predio para dos comunidades, y entre una de esas dos esta Nilpe 2. No autorizó a que colocará un Rehue, existe uno instalado en la entrada del predio. Otras comunidades, José Quineo han visitado el predio siempre con él, o con Darwin Astudillo o alguien relacionado al predio. 5.- ELISEO GUITIERREZ VERGARA, Cédula Nacional de Identidad N° 12.737.362-0, 40 años, casado, obrero, con domicilio en Fundo Nilpe, quien bajo juramento señaló que partieron trabajando ese día a las 08 am, sembraban papas, salió Cortez en su tractor, y José Cañete también con una roto fresadora, y como a las 09:30 a 10:00 llamó a Cañete por radio y le dice que debe volver del lado Norte y rematar en el sur. Él se fue con un coloso a las 10:30 con una camioneta con papas, y como a 200 metros de llegar al potrero el Manzano venían los camiones de la forestal bajando, que los habían apedreado, le dio la pasada, y siguió, pensó que el problema era con la forestal y no con ellos, había avanzado como 100 metros más, y aparecen 4 encapuchados como a 40 metros a su izquierda, se bajó de la camioneta, y le dicen, tenis un minutos para volverte o te apedreamos, le dice “yo no tengo nada que ver con la forestal”, “voy a la siembra de papas”, y le dicen “aquí se para toda la wea, y date la vuelta y te vai, y vuélvete encima del trigo, no más”. Andaban con boleadoras y encapuchados, y llamó a don Raúl Quintas, le dijo que llamar a Carabineros, los llamó, como una hora y no llegaban, decidió bajar a Galvarino, poco antes se encontró con Carabineros, iba uno de civil y le pidió que lo llevara a Galvarino, y lo fue a dejar a galvarino, bajó de la camioneta, se puso a conversar con un sr., se le quedó el teléfono dentro de la camioneta, pasaron unos 10 minutos tenía llamadas perdidas de Edgardo Cortez, como a las 11:30 o 11:40 y lo llamó no se acuerda si por radio o teléfono, y le informó que apedrearon a Cañete, ahí se vuelve al Fundo, y venía una camioneta con una persona herida, ya estaba la ambulancia ahí, y constataron que estaba fallecida. Que le habían quebrado los vidrios a José Cañete, el otro cargador frontal se arrancó antes que Cañete, y al otro, (Cortes) le dijo que se fuera por el lado Norte, por el lado del Pichi. No le dio esa orden a otras personas, porque el resto ya había bajado. Le dijo que se fuera ahí por prevención. Al otro lado había mucha gente. Ese camino da al Norte. Al contra examen del Fiscal, indicó que se comunicó por radio o teléfono, no se acuerda bien. Él trabaja desde el 2009 en el predio (Cañete) empezó como obrero, y luego empezó a conducir el tractor desde el año 2011. Cuando a él lo interceptan los encapuchados, le dicen que lo van a apedrear, pero no recibió ninguna. A las contrapreguntas del Querellante; del 2008 es Administrador del Fundo, el propietario del 2008 es Raúl Quintas, conoce a gente de la comunidad Nilpe 2, rumores solamente ha oído de la venta. En alguna oportunidad andaba una comunidad. Hay un Rehue a la entrada del Fundo, en el portón, como a 10 metros, lo instaló la comunidad Nilpe 2, no recuerda cuando. Estuvo con Zanetti en fundo Nilpe después de que se arrancó. Lo de las forestales solo vio cuando venían de vuelta. Aclarado al Tribunal, señaló que a los 5 minutos preguntaba Cortez como estaba el camino para bajar, el que había salido antes era Cañete, no sabe si son 10 minutos o menos. 6.- ERWIN 15.874.245-4, GERDING 31 años, VEGA, soltero, Cédula Nacional Ingeniero de Mecánico, Identidad domicilio reservado, quien señaló que el tractor del cliente Raúl Quintas siempre ha sido mantenido por la empresa representante de la marca Salinas y Fabres, es jefe de servicio del área. El cliente al momento de presentar el tractor, estaba en buenas condiciones mecánicas tras el incidente, Solo tenía los vidrios rotos. Recorre desde los 2 km por hora hasta los 30 por hora, como máxima. No se puede llegar desde 0 a 30 en una sola velocidad, tiene cambios y gamas que deben ser seleccionadas de forma cien por ciento detenido, y las velocidades se seleccionan en movimiento. De 0 a 10 km por hora se puede tomar un cambio más alto, en la gama baja, pero en la gama alta que recorre de 0 a 30 por hora se debe partir del cambio 1, y así sucesivamente, de los 1 a 10, de los 10 a los 20, hasta llegar a los 30. La velocidad que alcance el tractor depende el elemento que lleve adosado atrás. La roto fresa manifiesta el fabricante debe ser utilizada a una velocidad de 3 a 5 km por hora. Si se opera a mayor velocidad, hay que ver si el implemento está trabajando, si está trabajando estará enterrado y no va a poder moverlo, si lo lleva en el aire, puede alcanzar más velocidad, pero se puede volver inestable, pero es difícil alcanzar una velocidad más alta con ese elemento, porque es pesado y tiene mucha inercia, necesita cierta distancia para alcanzarla. Puede llegar a alcanzar el tractor en labores agrícolas los 15 km por hora, más aun si está con elemento adosado, y en carretera puede llegar a alcanzar 30 por hora. Al contra examen del Sr. Fiscal; la roto fresadora tiene dos funciones, la altura de trabajo con palanca y botonera, o se configura previamente, y no se requiere expertiz especial. Estaba en buenas condiciones mecánicas. Al contra examen de la querellante, el fabricante de la roto recomienda que sea a la velocidad que señaló. El velocímetro marca 30 por hora que es la máxima. Pudiera haber una variación según el tipo neumático, a lo más de 29 a 31. La velocidad máxima es posible adquirirla según un trayecto, para saber si lo puede hacer en un terreno en bajada y en 113 metros, depende del suelo, si es ideal puede que si en la ruta, en camino de asfalto, lo va a lograr quizá en 15 metros, en el caso le costaría más alcanzar su velocidad final, desconoce si en 130 metros puedo haberlo hecho, en pendiente, en bajada ayuda, en subida dificulta. Tiene 120 hp. El tractor cuando las condiciones de suelo son con poco roce, y se maniobra con el volante no es suficiente para hacer un giro, uno se puede apoyar, giro en el freno derecho o izquierdo, pero el fabricante no lo recomienda, genera daños mecánicos. El giro en ese caso es más cerrado, se necesita expertiz. Si va a 2 km por hora, si lo puede hacer; a 10 km o 20 km. se vuelve más peligrosa la vuelta, se requiere más expertiz. La energía centrifuga puede lanzar objetos hacia afuera con una maniobra así, si están dentro del vehículo. Así aumenta el radio que abarca el tractor. Puede salir una caja así en esas condiciones. El diámetro de giro del tractor se configura, puede ser de 3 a 6 metros, se ve particularmente en la unidad. Si el tractor va sin conductor al volante las ruedas no se van a girar, si hay un montículo o un bache desviará su trayectoria, pero no por las ruedas delanteras que son las que giran. 7.- EDGARDO CORTES PEÑA, Cédula Nacional de Identidad N°, 13.804.135-2, 36 años, casado, tractorista, con domicilio en Santa Adela, camino Chol Chol, quien bajo juramento señaló que el día 1 de octubre de 2014, partieron a las 8 a la pega, llegaron a las bodegas, se juntaron, al lado de su tractor estaba el de José Cañete, le dieron la orden, Cañete estaba pasando la roto fresa, y él sembrando papas en el otro tractor. Se fue delante de él hacia el potrero, él se fue más atrás con Isidro y don Ramón. Llegaron a la pega, Cañete primero estaba al lado Norte del potrero el Manzano, terminó Cañete y 20 para las diez, se fue a la parte sur. Le avisan por radio que habían personas en el bosque, que está al frente por el sur, le avisan por radio, no le tomaron importancia, siguieron trabajando. De repente el jefe Eliseo Gutiérrez, dio aviso a Carabineros, en eso, pasó un rato y llegaron Carabineros al bosque, y en la entrada las personas como que arrancaron hacia un bosque chico que había al lado, y como querían atacar a carabineros, cuando estos se acercaron más. Estaba a unos 200 o 300 metros de carabineros. Se dan la vuelta (los carabineros) y se van hacia el camino de la bodega, siguieron trabajando, y en eso, Cañete se fue en retroceso hacia donde estaban ellos, se fue lento, él siguió trabajando en dirección a la laguna que está bajo del potrero, y mira para el lado, y ve personas que iban hacia donde estaba Cañete, lo llaman por radio para que bajara a las bodegas para recargar aire acondicionado. Lo llamó por radio el operador, se quiso ir Cañete por el camino, se encuentra con las personas y empiezan a atacarlo, quiere arrancar y lo rodean, le tiran piedras con boleadoras, arranca Cañete unos 20 metros, se le cae la roto fresa, no sabe porque, por los nervios, y se detiene un rato, se para el tractor. Ahí unas personas lo alcanzan, lo rodean, y ahí le quiebran un vidrio del tractor, (el de atrás), lo hace partir, levanta la roto fresa y arranca hacia el camino que va a la bodega pero ahí se le pierde de vista porque hay un bajo. En la faena andaban 3 maquinarias, Cañete, la de él, y otro en un cargador frontal que era Juan González. Este último arrancó a lo derecho por el potrero que tenía trigo, y el de Cañete estaba más apegado al bosque, al sur, estaba en el bajito al lado sur, él se dio la vuelta y siguió por el lado de la huella que arrancó González, de ahí, llamó por radio a González si acaso se podía pasar, pasó por donde mismo Gonzales, por donde se fue él y el jefe lo llama y le dice que se vaya por el potrero de los Pichi, porque podía ser atacado por el otro lado, porque hay un puente, y es angosto. Se devolvió y se va por atrás al campo a la entrada principal. No eligió el del Pichi porque es malo, áspero y andaba con máquina y dos personas. Al contra examen del fiscal; señaló que Cañete retrocedió y no alcanzó a llegar hasta los colosos, ahí ve que era atacado. Venían avanzando desde el bosque, que estaba al sur (el grupo de personas). Cañete arrancó hacia el bosque. Su empleador es Raúl Quintas, hace 14 años. Al contra examen del querellante, señaló que no vive en el sector. No conoce gente de la comunidad Nilpe 2. A Cañete lo rodearon unas 15 a 20 personas, a la distancia vio hombres no más, deben haber sido jóvenes porque se movían con rapidez. Por radio llaman a Cañete como a las 11:40, fue minutitos antes de verse acorralado. Lo llaman y él sale hacia la bodega. El camino que tomó él lo llevaba a las bodegas, pero la vuelta es larga y el camino es malo. 8.- SEBASTÍAN HENRÍQUEZ SANHUEZA, Cédula Nacional de Identidad N° 10.791.941-4, 49 años, casado, obrero agrícola, domiciliado en Galvarino, quien bajo juramento señaló que el día 1 de octubre de 2014, en el fundo Nilpe, llegaron en la mañana a trabajar al fundo, 4 personas, Edgardo Cortés, José Cañete, y Ramón Cañete, y el del cargador González, llegaron a sembrar papas al potrero El Manzano, de repente como a las 09:30 a 10:00 vieron unos fuego en el bosque de pino y Cañete trabajaba al lado norte. Terminó y como a las 09:40, de la mañana se fue a trabajar al lado sur, trabajaba tranquilo y empiezan a ver humo, y ahí habían unos camiones cargando maderas, y a esos los corretearon primero, luego iban hacia ellos, pero José Cañete estaba en un bajo a 200 metros de ellos ( en un bajo), no se veía muy bien, luego, se fue retrocediendo hacia donde ellos, y llegó a una distancia de 50 metros, cuando ellos suben arriba, unas 25 personas venían por el trigo, y como a 100 metros empiezan a apedrear al tractor, le quebraron los vidrios traseros, no sabe que maniobra hizo y a Cañete se le paró el tractor y se le cayó la fresadora al suelo, luego como que funcionó, le dieron piedrazos en la cabeza sería no sabe, él arrancó para el lado sur otra vez, luego no pudieron ver nada más porque ellos estaban lejos de José Cañete. Él estaba como a 100 metros cuando ve lo del vidrio y que rompen vidrio trasero del tractor. Cañete iba lento, no entiende mucho de tractor, pero era lento. Cuando ya pierden a Cañete de vista, le dijeron a don Edgardo Galin, chofer del tractor, que se fueran hacia la bodega, había un camino derecho y otro lejos, y él del cargador se frontal se fue por el trigo, y José Cañete salió hacia atrás, y el chofer de ellos, no sabe quién lo llamaría y se fueron por un camino malo, hacia las casas, y ahí se enteran que hay un fallecido. El no vio cuando la persona falleció porque estaba Cañete en un bajo. A carabineros no puede decir si los apedrearon, al único tractor que apedrearon es el de Cañete andaban todos encapuchados, a los otros tractores no, andaban con boleadoras. El que estaba a cargo del cargador frontal era Juan González, y vive dentro de Nilpe. Él tiene temor, por eso no vino a declarar. Contrainterrogado por el Fiscal; pararon al momento que vieron lanzar piedras. Forestales salen primero, Carabineros llega después. Carabineros demoró una hora en llegar, antes de eso los forestales salieron. Sale gente del bosque, e ingresan personas, eso fue rápido, unos 15 a 20. Cuando lanzan piedras se van inmediatamente del lugar, al pedirle que aclare eso, dice que los vieron lanzar piedras al atacar a José Cañete, ahí ellos salen del lugar. No vio que le lanzaran piedras a las faenas Forestales, tampoco a Carabineros, luego le lanzan a Cañete, y deciden salir del lugar. Toman ese camino pensando que el otro estaba tapado por comuneros, y el chofer del tractor les dijo que se fueran por otro lado. Pensaron, pero no había nadie en esa salida, porque salió el cargador frontal por ahí, delante de ellos, y llegó otra patrulla de Carabineros por ahí. Cuando lo atacan el tractor estaba así como hacia al sur pero no tanto tampoco, estaba más hacia el sur, “medio así”. (Titubea) A las preguntas del querellante, él (testigo) estaba al norte de los colosos. Indicó que José Cañete retrocedía en reversa hacia los colosos, nunca se giró. Aclarando al Tribunal, estaban en la siembra de papas las personas cuando lanzan piedras. A los 15 minutos salen los forestales, carabineros llega una hora después, estuvieron unos 15 minutos en la siembra, venían por al medio del bosque prendiendo fuego, entraron por el trigo, en grupo, caminaban, todos caminando, se demoraron 15 minutos en aparecer ya en el sector de la siembra, iban caminando, todos con boleadoras y piedras. 9.- RAMÓN CAÑETE PAREDES, Cédula Nacional de Identidad 15.236.520-9, 43 años, casado, agricultor, domiciliado en comunidad Lingue Mallín, Galvarino, hermano del acusado, quien bajo promesa y voluntariamente declaró pertenecer a la comunidad Linge Mallín, es mapuche. El 1 octubre de 2014, pudo ver que llegaron a trabajar en la mañana y se juntó con todos sus compañeros, Isidro Henríquez, Edgardo Cortés, Juan González y José Cañete. Y al lugar de trabajo llegaron como a las 08:30, trabajaron toda la mañana hasta como las 11:00 o 11:30. Vio el tractor que conducía José Cañete que se llegó a los colosos retrocediendo, y en cosa de segundos llegaron encapuchados tirando piedras al tractor que conducía José. Él estaba a 50 a 60 metros de distancia. Cuando atacaron con piedras el tractor, arranca por el trigo a una velocidad lenta, supone que por el peso máquina, y observó que se quebró el vidrio trasero, sigue arrancado se mete en una pendiente y lo pierden de vista. Juan González arranca por el trigo en el cargador frontal por el trigo, sale el tractor que conducía Cortes en el que él andaba, avanzan 200 metros y el tractor de Edgardo Cortez vuelve hacia el Norte, y se fue por dentro del Fundo. Iban con Sebastián Henríquez, en la sembradora del tractor que manejaba Henríquez, salieron por el trigo, al camino principal, avanzaron 200 a 300 metros, y vuelve Edgardo Cortez hacia el Norte, parece que le avisan, que no tenían comunicación. No observaron nada más, al llegar cerca de las bodegas ve que estaba carabineros, el samu, y pudieron ver un cuerpo que estaba en el camino, decían los compañeros que se había atropellado una persona. Al contraexamen del Ministerio Público; refirió que su hermano iba retrocediendo, el tractor estaba a 50 o 60 metros de donde estaban ellos, en la siembra de papas, a esa distancia de los colosos, ahí le rompen el vidrio trasero. Al contra interrogatorio del Querellante, él (testigo) estaba hacia el Norte, a unos 50 a 60 metros, de los colosos. PERICIAL. 1.- IVAN TORRES BERNAL, Armero Artificiero, Cedula nacional de Identidad N° 12.408.703-1, 42 años, soltero, con domicilio en Avenida Pedro Valdivia 0901 de Temuco, Sargento de Carabineros, quien bajo juramento señaló que en diciembre 2014 por orden de trabajo de Olavarría Sepúlveda Capitán, se le solicitó una pericia de una cadena de custodia, siendo un elemento de su área, dio vida al informe pericial N° 1404 de 2014, peritó un ahonda de fabricación artesanal, de lana ovina, de habitáculo en forma ojival, y un anillado trenzado para manipular el elemento, en primera instancia se utilizó como un arma de caza, luego se utilizó en tácticas militares, el funcionamiento se basa en fuerza centrífuga al color un proyector el en habitáculo al momento de ser girado en forma mecánica toma velocidad suficiente como para lanzar un proyectil al especio, se puede así impactar a una persona o animal daño que puede ser la muerte o lesiones. La onda estaba en buen estado de funcionamiento, hizo el ejercicio en la prueba de campo. Toma gran velocidad. Era un ahonda de fabricación artesanal, de buen estado de conservación, no está regulada ley de armas. Se incorpora a través de su declaración la prueba material consistente en la boleadora de lana, luego rectifica que es una honda con cadena de custodia N° 1808829, que levantó Víctor Olavarría Sepúlveda. La distancia que alcanza depende de la fuerza centrífuga que se utiliza, puede generar desde 60 a 70 km por hora hasta 100, el alcance por condiciones climáticas, algo que obstruya el proyectil, o algo que lo roce, se considera desde el punto de declive de velocidad, que se hace matemáticamente, empieza a declinar entre los 80 y 100 metros. Reconoce su peritaje. A las preguntas del Fiscal, indicó que ser armero es de data antigua, los primeros fueron herreros. Para saber que arma es de caza y cual de destrucción tuvo que hacer un estudio sobre cuáles son las primeras armas. Aclara que es honda, y no boleadora. El lugar físico en que hizo prueba de campo fue un sitio abierto de un particular, procedió a una fonolita en desuso y en todas las pruebas el elemento funciono bien y fracturo la fonolita. Debe haber alcanzado a unos 30 metros unos 80 km por hora, lo hizo con un cronómetro. Metros por segundo por velocidad. A las preguntas del querellante, refirió que no consignó en su informe lo relativo al peso, velocidad, distancia, etc. Tiene entendido que en este juicio alguien murió por la honda. No puede asegurar que el arma haya sido utilizada antes. 2.-CARLOS WOLDARSKI CEA, Cédula Nacional de Identidad N° 7.040.721-3, 57 años, casado, perito Criminalístico de la Defensoría Regional, domiciliado en Portales N° 361, comuna de Temuco, quien bajo juramento y apoyado de fotografías que exhibió y que están insertas en el peritaje, señaló que el día 2 de octubre de 2014 la Defensoría Local de Temuco le pide un peritaje criminalístico, por la investigación de un delito de homicidio contra Cañete Paredes. Se le aportaron los antecedentes básicos, por lo que se trasladó al Fundo Nilpe Galvarino, entrevistó a trabajadores forestales y agrícolas que estaban presentes. Daniel López, que operaba un trineumático el que señaló que el día anterior, inició su jornada junto a 3 personas más, a un costado del Potrero el Manzano como a las 10:00 a 10:30 aparece un grupo de encapuchados que atacan la maquinaria forestal, dos se dieron a la fuga, intentan escapar hacia atrás, pero ve otro grupo, de encapuchados, evade a los sujetos, pasando por el lado, siempre siendo atacado por piedras. Entrevistó también a Edgardo Cortes, que manejaba un tractor que arrastraba una máquina sembradora de papa en la que iban Henríquez y Ramón Cañete, y Juan Gonzáles iba en un cargador frontal. Que el día de los hechos a las 8 de la mañana iniciaron su jornada, que se trasladaron al potrero el Manzano, que lo hacían normalmente, que el imputado arrastraba un roto fresadora y el Sr. Cortez en otro tractor arrastraba una máquina sembradora de papas, en tanto, a las 10:30 horas ven un grupo de sujetos encapuchados que aparecen por el sector del bajo, donde hay un bosque, ven que huyen los trabajadores de la forestal del lugar, empiezan a gritar los encapuchados. Carabineros aparecen, y los encapuchados suben hacia la parte alta del Potrero, y a los pocos minutos empiezan a correr hacia los vehículos carabineros, arrojándole piedra con sus boleadoras. Carabineros se retira y los encapuchados se van al sector bosque, encienden ramas, y se quedan ahí gritando por 15 minutos. Los trabadores continuaron sus faenas, y luego de un rato un grupo de estos comuneros, corren hacia ellos, gritando y arrojando piedras con las boleadoras, y logran dar alcance al tractor del imputado, por estar a más corta distancia del mismo. Señalan los testigos que intenta escapar marcha atrás, hacia arriba donde estaban los otros, tractor y cargador, por un camino que es una huella, que separa siembra de papas y trigo, el tractor iba marcha atrás, lo sigue un grupo de encapuchados, y le rompen el vidrio trasero, el imputado maniobra su maquinaria de tierra siendo bloqueado por los encapuchados, y opta por ingresar a un sembradío de trigo, que tiene un declive de terreno como el “ bajo”, el tractor iba bajando y lo iban siguiendo y atacando, y al ingresar al bajo pierden la visión y no saben que ocurren. Lo ven cuando a los pocos minutos sale del bajo, con todos los vidrios rotos, con excepción del lateral derecho, el imputado trata de huir a la derecha, pero nuevamente es bloqueado, por lo cual gira a la izquierda y se va por un camino por el que venía carabineros, el del segundo tractor, el ver eso, intenta hacer lo mismo, pero se encuentra con distintos grupos de comuneros, siente temor, da giro en u, y por otro camino se dirige a las bodegas, y estaba bloqueado por carabineros y ambulancia, y el cuerpo de una persona en el suelo. José Cañete reconoce a dos en el lugar, que ya estaban sin capucha. Hace una inspección ocular al potrero el manzano, al fondo el sur, un bosque y metros ruma, huellas del neumático del tractor indican el lugar por el cual se introduce al sembradío, y al bajo, las que van acompañados de movimientos erráticos y evasivos, y al ingresar al bajo se pierde la visión del potrero, en la parte baja se aprecian movimiento circulares, como que intentaba salir, del lugar y luego un huella que lo lleva al camino. En el bajo había una mancha rojiza oscura, podría tener lugar donde posiblemente tuvo contacto el tractor y la victima. Se suspendió la inspección por solicitud de Carabineros, por llegar grupo de comuneros. Realizó una inspección a la máquina fresadora de usaba el imputado, no presentaba interés criminalístico, salvo una manilla que pertenecía al tractor. Frente a la máquina había trozos de vidrios, y piedras circulares de 5 centímetros, y las gomas que aseguran los vidrios a la cabina. El día 12 inspeccionó el tractor, el cual presentaba ausencia totalidad vidrios, con excepción del lateral derecho, había vidrios sobre el tablero, piso, y asiento operador. Del análisis de los antecedentes recabados, los hechos habrían ocurrido el 1 de octubre de 2014, las 11:55 horas cuando en circunstancias que un grupo de encapuchados ingresa al fundo y procede atacar a trabajadores forestales y agrícolas. Carabineros debe retirarse a la espera de refuerzos, según el parte, que los encapuchados que ingresaron al predio, atacaron a los forestales en primer lugar, luego a carabineros, inician fogatas con ramas, y posteriormente atacan a los obreros agrícolas y las maquinaria del lugar. Que los hechos narrados están reafirmados por las declaraciones de López, Ramón Cañete, Isidro Henríquez, y Juan Gonzales, y se concluye que la muerte de esta personas se da en el contexto de que formaba parte de un grupo de encapuchados, que en superioridad numérica y haciendo uso elementos contundentes atacan obreros agrícolas y forestales y su maquinaria, entre ellas la operada por imputado, y al verse en una situación de agresividad, y en intento de huir para salvar su integridad física, se ve involucrado involuntariamente en este accidente que causa muerte de la persona. Se le exhibe fotografías que son parte de su informe, N° 1 vista ingreso predio; N° 2 se ve el potrero el manzano, papas a la derecho y a la izquierda trigo, y la huella que separaba ambos campos, al fondo bosque; N° 3 detalles sembradío papas, y huellas neumáticos; N°4 acercamiento huellas, N° 5 el potrero el manzano con maquinaria y obreros; N° 6 se aprecia al fondo el bosque, y el acopio de metro ruma; N° 7 acercamiento camino interior, bloqueado por trozos de tronco; N° 8 a la izquierda se observó el lugar por donde el tractor había ingresado al potrero sembrado de trigo; N° 9 huellas dejada por maquinaria agrícola; N° 10 dio cuenta del lugar donde la fresadora es izada; N° 11 restos de vidrios que acompañan las huellas de neumáticos; N° 12 restos de vidrios a ambos lados de la huella que va dejando desplazamiento tractor, lo que indica que posiblemente hubo detención del vehículo; N° 13 acercamiento vidrios; N° 14 se apreció huellas del tractor erráticas, tratando de evadir algo; N° 15 es la parte del bajo, se aprecian movimiento circulares, huellas erráticas, que salen hacia el camino que está al fondo y costado sembradío; N° 16 mostró que al ingresar maquinaria al bajo (declive)desde el potrero el manzano se pierde la visión de la maquinaria; N° 17 un objeto contundente al lado del tractor, era una rama; N° 18 huellas tractor, y otra rama; N° 19 mancha pardo rojiza; N° 20 acercamiento de la misma que podría corresponder a sangre, o fluido maquinaria, N° 21 la rotro fresadora, y montículos de vidrio que quedaron en el lugar se detuvo el tractor; N° 22, acercamiento marca máquina; N° 23 vista general de la misma; N° 24 manilla correspondiente puerta de vidrio costado derecho tractor; N° 25 rastros de vidrio tractor; N° 26 restos de vidrio y piedras de 5 centímetros retiradas desde el interior cabina tractor; N° 27 gomas que sostenían los vidrios a la cabina tractor; N° 28 lugar donde según testigos samu procedió a examinar cuerpo victima; n° 29 se aprecia vista general tractor, modelo 6830 color verde; N° 30 vista frontal, con ausencia de parabrisas; N° 31 vista lateral derecha; N°32 vista posterior sin vidrio; 33 lateral izquierda, ausencia puerta y vidrio; N° 34 restos de vidrio, Y ausencia manilla puerta; N° 35, acceso cabina tractor, N° 36, restos de vidrio piso tractor, N° 37, restos de vidrio asiento operador; N° 38 restos vidrio piso; N° 39 ángulo visión operador hacia adelante; N° 40, ángulo visón operador hacia atrás. Reconoce su peritaje N° 19-2014. Contrainterrogado por el Sr. Fiscal; indicó que en la N° 7 eran para bloquear camino, ese camino debiese conducir hacia las bodegas, no pudo acercarse al lugar, le pidieron retirarse, estima que no más de 40 metros a las bodegas; en orden a la fotografía 11 y 12 manifestó que señaló no fue posible medir, por falta de tiempo. Respecto a la N° 26, estaba la piedra en el lugar, que había sido bajadas según testigos, fijó dos de las que habían, no sabe cuántas habían, en relación a la 39 y 40, una muestra visión hacia adelante, y la otra al girar sobre sí mismo, desde el asiento al girar el conductor. En el lugar de la mancha pardo rojiza, no había nada más de interés criminalístico. Interrogado por el Querellante; señaló que el peritaje lo hizo el día 2 y 3 de octubre, de ese día son la fotografías. El peritaje solicitaba ir al sitio del suceso y debía ser entregado para la audiencia del día 4 de control de la detención. No se entrevistó al acusado Cañete. Tuvo a la vista un informe preliminar fotográfico de Labocar, no lo plasmó en su informe. Se basa en el parte, declaración de testigos, inspección ocular de lo días mencionados. No hizo más diligencia. Entiende por elementos contundentes todo aquello que se pueda arrojar, piedras, palos, eso encontró él, piedras y ramas de árboles. Su conclusión es que es un hecho accidental. Podría haber complementado con autopsia, sería necesaria tenerla, él no la tuvo a la vista, fue con premura para tenerlo para la audiencia de control de detención, idealmente se debió tener las declaraciones de los testigos de la víctima y protocolo de autopsia. No puede pronunciarse seriamente, pero este es un atropello atípico, es maquinaria agrícola, las lesiones que debiese presentar el cuerpo debiesen guardar correspondencia con el vehículo que las causó, pero no tuvo acceso a dicha información. Cuando el tractor sube por la huella en marcha atrás, y trata de seguir la sinuosidad del camino, cuando se detiene, los testigos señalan que hace movimientos a la derecha, izquierda. Las huellas son erráticas y evasivas. Dentro del potrero de trigo se puede determinar que son erráticas las huellas. El informe que tuvo a la vista fue el parte de Galvarino, y un pre informe fotográfico de labocar. No recuerda lo que dijo labocar. A la pregunta si los 3 vehículos tenían punto de inicio similar al norte del sembradío, refirió que eso no guarda relación con lo dicho por los testigos, que dicen que uno de esos estaba más al sur. El vio rastros de movimiento circulares, en el bajo no hay plantas de trigo, solo tierra, no se visualizaba el movimiento completo. Señala que él no vio la vuelta completa, no lo recordó. Aclarando al Tribunal; se pierde la visón de la maquinaria completa. DOCUMENTAL. 1.- Informe técnico emanado de Salfa Salinas y Fabres, del Departamento de Servicios Agrícola, sobre el tractor involucrado en los hechos, patente DXTK55, marca Jhon Deere, modelo 6830, en buen estado mecánico. Se adosa al mismo, ciertos rangos de velocidad respecto de las distintas marchas. OTROS MEDIOS DE PRUEBA. 1. Un bolso tipo morral de color negro, marca avon, con seis piedras en su interior. 2. Un gorro de lana de color azul, con bordado central. 3. Un CD que contiene una fotografía y dos archivos de video. OCTAVO: Alegatos de clausura. Que en sus alegatos de clausura, el Ministerio Público señaló en lo pertinente las conclusiones lógicas que se desprenden de la prueba rendida, así, refirió evidenciar dos tipos de hechos, los plenamente asentados y aquellos que son objeto de controversia. Los planamente asentados, corresponden a que los hechos se desencadenaron el día 1 de octubre de 2014, alrededor de las 11:30 al interior fundo Nilpe, que esa misma mañana previo a la comisión del delito un grupo aproximado de 25 personas todas de la comunidad Nilpe dos, dentro de dicho grupo estaba la víctima, ingresó al fundo, lo que se realizó por la parte sur en un bosque de pino; un tercer hecho, consistente en que el acusado se encontraba dentro del mismo realizando labores agrícolas conduciendo un tractor marca John Deere PPU DXTK-55 ; un cuarto hecho, que junto al mismo se encontraban otros 2 vehículos, y otros realizando tareas forestales; un quinto hecho, correspondiente a que en esa misma mañana ingresaron al predio unos vehículos policiales alertados de una supuesta toma, quienes pudieron constatar que una persona de la comunidad resultó muerta por un atropello. Y finalmente, que efectivamente Cañete Paredes impactó y atropelló con su tractor a la víctima, quien murió a consecuencia del aplastamiento del móvil. Por su parte, los hechos controvertidos, dicen relación con la motivación que tenían para entrar al predio, sin embargo, los únicos hechos que inciden directamente y jurídicamente son aquellos que conforma la parte fáctica de la acusación, por ende, los motivos del porque ingresaron debe ser ajena al debate, no posee ninguna relevancia procesal. Los hechos objeto de análisis se deben circunscribir sólo a lo necesario para acreditar el delito de homicidio. La controversia, se centra en 5 puntos, en primer lugar, las acciones que ejecutan estas personas, la dirección que toma el grupo y lugar al que se dirigen, en segundo lugar, la conducta que despliega el acusado conduciendo su tractor al momento de avanzar el grupo de personas por el camino, entre dos siembras; en tercer lugar el supuesto ataque o agresión ilegítima, que habría sufrido el acusado, sin provocación alguna, en cuarto lugar, la supuesta pérdida de conciencia, y finalmente las circunstancias del acometimiento del acusado en contra de la víctima. Añadió que la prueba de cargo permite concluir, que el día en cuestión, un grupo de personas ingresó al Fundo, que se dirigió en primer término a un grupo de forestales a quienes les exigieron que se retiraran, ya que en su concepto ese bosque de pino pronto les pertenecería, que no hubo agresión hacia ellos, incluso el testigo Zanetti de la defensa, señaló que no hubo heridos, daños, e incluso confrontado quedo en evidencia que el grupo de personas tuvo un diálogo con los trabajadores, se vio el video donde no había ninguna agresión. Este grupo, luego se detiene cercano a la siembra de papas, y permanecen por una hora, antes de incorporarse este grupo y dirigirse al tranque, llega hasta el lugar un vehículo policial, que según la defensa fuera atacado por el grupo de personas, sin embargo los propios sargentos Saldías y Salazar, uno de los presentados por la misma defensa, ellos mismos son claros al sostener que no hubo lesiones ni daños, solamente se retiraron para esperar más cantidad de efectivos, por protocolo. En este momento de retiro, todos sitúan a Cañete en la parte sur de la siembra, cercano al grupo; es aquí donde empieza a molestar a este grupo, tocando bocina, haciéndoles gestos, en señal de que sentían miedo por la presencia de carabineros, cuando se retira hacia el sector norte, donde están los colosos El grupo decide avanzar y optan por una huella interior, donde está la siembra de papas y trigo. Avanzan una determinada cantidad de metros, todos son contestes en que el acusado se encontraba hacia el sur, y decide acometer contra el lugar, emprende hacia el sur, quedó acreditado con la declaración del perito Olavarría. Aquí viene la respuesta a una de las preguntas que se hizo la Fiscalía, de acuerdo con los testigos habiendo avanzando unos 100 o 200 metros el tractor sale de su ruta e ingresa a la siembra de trigo. La defensa ha querido señala que fue atacado con anterioridad a esto, sin embargo, en el peritaje no existe ninguna evidencia que permita sostener que hubo un ataque en este recorrido que existe en este sector de 173 metros, tampoco existe evidencia de desplazamiento humano por ese sector. Cuando esto ocurre, y quiebra su trayectoria e ingresa a la siembra de trigo, y se le suelta la rastra, se produce un ataque o supuesto ataque con piedras al tractorista, la significación ha sido distinta, para la defesa una agresión hacia el tractorista, sin embargo, conviene precisar que todos los testigos, presenciales y por ende prueba directa, señaló que cuando el tractor se dirige contra ellos se abre el grupo, y efectivamente lanzaron piedras en acción de defensa ante el inminente ataque, y lo cierto es que el trabajo en el sitio del suceso da mayor precisión y credibilidad, pues ahí recién se encuentra evidencia vítrea. No parece lógico, que una persona que dice estar huyendo de un grupo de comuneros se dirija precisamente hacia el lugar donde los están atacando. El tractor huye hacia el sur, o sea, huye hacia el lugar donde lo están atacando, eso no es lógico. Todos los testigos presenciales, señalan que el tractor se dirige sobre ciertas personas, declaró el Lonco, hijo de Domingo Painen, Mario Llanquileo, Rogelio Castro, quienes señalaron que el tractor se dirigía en contra de ellos, e intentaban esquivarlo. En este momento los trabajadores que acompañaban a Cañete se deciden ir, ninguno es presencial del atropello, ellos mismas señalan haber una pendiente en el sector, el mismo perito de la defensa dejo claro que era imposible ver lo que ocurría en el bajo. Los mismos testigos señalaron que el tractor empezó a hacer maniobras en zigzag, enfilando hacia 3 de los comuneros, dos lograron esquivarlos, el Lonco señaló que se hizo hacia un costado como un arquero, sin embargo no corrió la misma suerte la víctima. Esta persona fue alcanzada por el tractor que lo golpeó con la parte delantera, en la parte posterior de la víctima, en sus piernas, lo que debe ser considerado pues la víctima estaba de espaldas, en una posición de huida, no de ataque ni de frente. Esta primera embestida no le quitó la vida, pidió ayuda, levantó la mano, Rogelio Castro lo ayuda y el tractorista plenamente consciente y dominando la acción decide hacer un giro en U y vuelve sobre el punto de violencia, atropellando y aplastando a la víctima, causándole el traumatismo encéfalo craneano cerrada, trauma toraco abdominal grave, fractura de humero derecho, de columna vertebral y de pelvis. Lesiones necesariamente mortales. Añadió, que todos los testigos relataron con detalle, cada uno de ellos dio posición distinta, si bien hay algunas variaciones en ciertas circunstancias de espacio y tiempo, no son contradicciones ya que estaba cada uno en posiciones distintas. Todos vieron al acusado sentado en el volante, y 3 de ellos aseguran haber visto que éste se volteó mientras viraba. Ergo, siempre estuvo vigil y consiente del vehículo. Ahí algunos dicen lanzar piedras. Refrendado con la prueba pericial de Olavarría quien se refirió a las señales encontradas en el sitio del suceso, los restos vítreos, la impronta neumáticos, y el aplastamiento de la siembra del lugar, se pudo determinar que las primeras pedradas al vidrio se producen recién a 173 metros, que coindice con el hecho de salir del camino e ingresar al pasto. También permitió establecer que hubo desplazamiento por el costado derecho del tractor, lado que no resultó con ningún vidrio roto, ni daño. Olavarría junto con su peritaje determinó del punto exacto donde se produce el quiebre de la trayectoria, así las fotografías 86, 87 y 88 del mismo cobran real importancia. En la 86 se pudo apreciar la trayectoria irregular que dirigió el tractor conducido por el acusado, situación distinta a la desplegada por sus compañeros de trabajo, quienes huyen hacia un lugar distinto. Dan cuenta de una irregularidad en el sitio del suceso, movimientos circulares e irregulares, que son más propios de alguien que persigue algo o alguien, que el intenta huir del lugar. Sobre la supuesta pérdida de conciencia, él señaló que lo estuvo por 5 minutos tras recibir una pedrada en su rostro, y que sufre una lesión en su espalda, sin embargo, la prueba pericial y la declaración del médico dan cuenta de situaciones distintas. Que la lesión fue producida a muy bajo impacto, y al médico le relató que fue producto de un vidrio que le saltó a la cara, y la de la espalda le señala que se le causó con el asiento, jamás le dijo haber sentido mareos, ni estar inconsciente, tanto así, que no le recomendó ningún examen posterior. Eso fue confirmado por la perito Pía Smoke, es decir, siempre estuvo consiente. Declaró también por la Defesa Erwin Gerdin Vega, señaló que no existía ninguna posibilidad que el tractor se pudiera conducir solo, ni dar giros si nadie lo conducía. En cuanto a la velocidad del vehículo, nunca ha sostenido la fiscalía que el impacto haya sido a gran velocidad, la mismo perito del Servicio Médico Legal lo dijo. La velocidad alcanzada fue la idónea para lesionar y causa la muerte de la víctima, porque nadie se abalanza sobre una máquina de más de 5 mil kilos. Si la misma defensa sostiene que iba huyendo debió haberlo hecho a una razonable distancia, y en segundo lugar, había una pendiente en el sector y eso acelera la máquina, por ende, iba a una velocidad idónea para producir la muerte al momento del impacto. La visibilidad si bien puede ser objeto de cuestionamiento, al menos quedó en evidencia que era buena y clara, del punto que alguien está alrededor del tractor, y de un vehículo que tiene vidrios por sus cuatros costados. En el punto de violencia solo había tierra, por ende, no estaba pedida en la maleza o siembra de trigo, se veía la persona que levantó la mano. Para terminar, se pregunta, su corrió realmente peligro la vida del acusado, nada existe que permita sostener que en realidad hubo una situación que pusiera en riesgo su vida, nadie se abalanza sobre una máquina de casi 3 metros de altura, y 5 mil kilos, y que zigzagueaba por el lugar. El hecho, de acuerdo a la prueba, consistió en un acción deliberada, y que su resultado fue la muerte, hubo un comportamiento dirigido a causa la muerte, esto es homicidio, y su participación es en calidad de autor del artículo 15 N° 1 del Código penal. A su turno el querellante, refirió la pena que invade a la familia y las consecuencias que les trajo la muerte de la víctima. Informó también sobre el proceso negociación que hacía la comunidad con CONADI. Indicó que se ha vencido la presunción de inocencia. Los testigos fueron contestes en señalar que concurrieron al lugar autorizados por CONADI, para ver qué lugar iban a querer, llegaron al lugar y luego de tomar desayuno comenzaron el avance por el camino que hay entre las papas y trigo. Citó al profesor Echeverry quien señala que “las circunstancias y antecedentes del hecho son de ordinario reveladores de la disposición subjetiva del hechor”, cada uno de los indicios da cuenta que su dolo era homicida, era de un ánimo homicida, tractor que tenía 120 caballos de fuerza, a una velocidad máxima de 30 km por hora. Esa es la envergadura del objeto del delito. Luego, las distancias recorridas que en primer lugar son 173 metros en línea recta, hasta llegar a los primeros restos vítreos, el punto de inicio es al norte de los colosos, a diferencia de la prueba de la defensa. Luego hay 113 metros en bajada hacia el sector del impacto, bajada que es zigzagueante, y que son aptas para que alcance el tractor su mayor velocidad, la dirección del vehículo es directa y constante hacia donde estaba el grupo, no existe evidencia del retroceso hasta los colosos. El huye hacia sus atacantes, lo que no guarda relación con la lógica y máximas de experiencias hubo 3 giros efectuados con gran precisión y velocidad importante, uno capaz de botar un elemento que estaba adentro del tractor. Los indicios en el cadáver de la víctima, herida posterior pierna izquierda, es claro con la huida, es una pierna, porque estaba huyendo, no en las dos, ya que no estaba estática (la víctima), porque huía. Las lesiones del cuerpo dan cuenta de que huía a una de baja intensidad, que bota a la víctima luego otra lesión que aplasta a la víctima, y que explican la causa de muerte, parecía bolsa de agua, da detalle de las lesiones. Señaló que todos esos elementos e indicios son compatibles con los dichos de los testigos presenciales del atropellamiento. Previamente había perseguido a dos personas, es auxiliado por Rogelio Castro quien debe huir del lugar por los gritos de sus acompañantes ya que el acusado viró hacia la derecha. Si su intención era huir del lugar ¿porque gira en 360 grados? y vuelve hacia el Norte, si se equivocó, porque vuelve a girar a la loma hacia el Norte, donde tiene menos posibilidad de maniobrarlos, porque su dolo era homicida. La respuesta que se ha dado es que estaba inconsciente, es inverosímil, la maniobra no duró más que eso, el mismo técnico señaló que el tractor no hace giros si no es conducido, menos en 360 grados con la precisión que se vio en las láminas. En las propias fotografías se advirtió que se podía ver hacia atrás, y Saldías, el Carabinero logró ver el cuerpo a 30 metros. En cuanto a la participación todos los testigos lo reconocieron como el conductor del tractor, y lo conocía desde antes. Con la prueba rendida pide se dicte veredicto condenatorio. Finalmente la defensa, señaló que los como decía el Fiscal hay algunos hechos que están asentados, y otros controvertidos. Lo primero que debe decir es hay una máxima que ilustra que el derecho “es el sentido común puesto por escrito”. Señaló que de los intervinientes fue la defensa la que hizo una propuesta más coherente con la prueba rendida. Ya que la Fiscalía omitió todo el contexto, y lo viene a decir en una operación procesal improcedente en su alegato de cierre. Una cosa es escuchar el alegato de apertura, y lo que viene a decir la Fiscalía a estas alturas del juicio, y el principio de unidad de acción, indica que “no importa que fiscal dijo una cosa, y que sea otro distinto el de la clausura”. El acusado, renunció a su derecho a guardar silencio, indicó que bajó hacia el potrero sur, que le ordenaron hacer una franja, y que luego regresó retrocediendo alrededor de las 11:30, hasta alcanzar a unos 50 metros de los colosos. Vuelve por dos motivos, primero porque fue llamado por un sr. que decía que había llegado a arreglar el aire acondicionado de su tractor, lo que es revelado por Eliseo Gutiérrez, y además el testigo Cortes Peña.- Cuando ingresa y avanza él es abordado y acorralado por los comuneros y se procede a escapar, en esta huida sinuosa por cierto, él, que ya había sido atacado y quebrado los vidrios, en algún momento produjo este atropello, el que carece de absoluta intención, el huye de los que los agredían con piedras, tomó conocimiento con posterioridad, como lo dijo Richard Salazar, el primero que hace es decirle que se baje para cuidar su vida, y posteriormente le informa que pasaba como detenido. La propuesta fáctica de la fiscalía señaló que había una sola víctima, y que había una intencionalidad homicida, no se refirió al contexto y omitió todo eso. En la acusación no se describe la intencionalidad ni el aspecto subjetivo de la acción, y da una dinámica diversa a la que se puede encontrar en los alegatos de clausura del Sr. Fiscal, ahora dice que iba huyendo, pero en la acusación señaló que estaban enfrentados, que Cañete venía por un lado y Quintriqueo enfrentando. Lo que ha quedado acreditado más allá de duda razonable, es que el ingreso de los comuneros fue sin autorización e ilegal, así Quintas, Gutiérrez y el testigo Rolando Quintriqueo, indicaron que no tenían permiso para ingresar al fundo. Otro hecho relevante, es que la entrada fue evidentemente con violencia a la faenas forestales, lo declaró Zanetti, Cortes, y además hubo una actitud agresiva respecto de la patrulla de carabineros que llegó al lugar, quienes se retiraron del lugar, y Saldías refirió claramente que los vieron agitando las manos como que los iban a apedrear con boleadoras, por supuesto no se vieron deñados, Cañete no vio el daño y ellos dicen que no fueron dañados, pero la actitud estaba. Lo anterior, también está refrendado por la perito Pía Smok. El perito Víctor Olavarría al mostrar la foto 27 se encontró un gorro y un morral, con piedras en su interior; se pregunta si se puede aceptar que estos estaban en lugar, que el propio perito infirió que era el lugar donde se depositó la víctima inerte, por ende, eran de José Quintriqueo, porque estaban cera de él. Lo que dice la Fiscalía de que no hubo violencia, es sólo una interpretación, no se aviene a lo visto de los videos y fotografías, que muestran personas encapuchadas, y como huye uno de los trineumáticos. Las fotografías de Olavarría señalan además, que los restos vítreos del tractor, y elementos contundentes. Se evidenció que había y se encontró una honda. La agresión fue mucho antes del atropello, a unos 100 0 200 metros según dijo el perito Olavarría, con el contraexamen de la fotografía 86, se encontraron mucho antes del punto del atropello, es decir, lo estaban agrediendo mucho antes de que iniciara su trayecto sinuoso para ir a las bodegas. Hubo rotura del vidrio trasero, además le causó lesiones en la cara y el hombro en el sector dorsal lo anterior también fue reconocido por la parte querellante. El Dr. Jiménez dice que no hubo pérdida de conciencia, quizás no se supo expresar el acusado, pero lo que dice Jiménez es interesante, que por el estrés de estar siendo apedreado, con alta probabilidad pudo marearse, y eso fue lo sucedido. Todo lo anterior, permite concluir, que Cañete no tuvo intención alguna homicida, y que lo único que hizo es huir, para salvar su vida e integridad física. Lo anterior, debe unirse con la pérdida de visibilidad, pues estaba bajo estrés, con la estructura apedreada. La víctima de 1,65 y la baja estatura de Cañete, inciden en la visibilidad, así Juan Vega refirió puntos ciegos a 6 metros del tractor, pero cerca del tractor son mayores. El perito González señaló que si la persona signada con letra A hubiese estado tendida Cañete no lo hubiera visto, lo anterior, se ve refrendado por la perito Pía Smoke, en el punto 23 indicó que Cañete por la pérdida de la visibilidad posiblemente no se dio cuenta del atropello. Por otra parte, no existe prueba concreta y científica que diga relación con que el tractor de Cañete impactó en dos oportunidades al sr. Quintriqueo, el perito Olavarría en ninguna de sus fotografías señaló dicha cuestión, o que lo atropelló dos veces, por el contrario, en la N° 41 relató un supuesto retorno al punto de incidencia y frente al contra examen, sindicó que el tractor pasó a dos metros del lugar en que estaba depositado el cuerpo de la víctima, lo que se complementó con la N° 60. Que da una dinámica diversa, es difícil que alguien acompañado pase por el mismo lugar, ya que debía esquivar los tiros de piedra, ahí, Pía Smok comete un yerro, al señalar que impacta en dos oportunidades distintas, así, Labocar no evidencia ningún segundo impacto en contra de la víctima, y en segundo lugar, el cuerpo cuando es aplastado está boca abajo como señaló la tanatóloga, y no boca arriba como lo dice Pía Smok, ¿a quién hay que creerle? A quien tiene mayor incidencia científica, a la tanatóloga porque hizo la autopsia, dicho yerro, incide en que la interpretación de la dirección de las huellas del tractor sean inversa a las que dijo la perito Smok. Que hayan lesiones de alta y baja energía no representan dos momentos distintos; era coetánea. La perito Smok, extrajo dicha conclusión de lo de los comuneros. En cuanto a la velocidad el perito ha dicho que iba a baja velocidad, y que en faena agrícola estando con rotro fresadora no se podía andar a más de 2 a 5 km máximo, y con roto arriba, de 10 km, pues, en caso contrario la maniobrabilidad se hacía difícil. La propia perito Smok le dio aval a la velocidad del Sr. Cañete, señaló que los antecedentes del Sr. Cañete se avenían más con los de la Fiscalía. El Dr. Jiménez señaló que tenía vidrios en su ropa, como también lo dijo el Sr. Cañete, y que el estrés le pudo ocasionar un mareo, y por ello el trayecto sinuoso. No puede resultar una versión de los demás testigos de cargo, porque es sesgada, niegan las agresiones a forestales, a carabineros, y a José Cañete, y solo 3 personas dicen que algunos agredieron a Cañete, pero no dicen quienes, como, ni en que momento. En orden a la dinámica misma, la intencionalidad de Cañete, añadió que este no se percató del atropello. La pericia fotográfica no midió distancia, los testigos, Cortez y Henríquez pudieron referirle al Tribunal que esto fue en huida, no tuvo intención de atropellar, el grave riesgo de la vida se vio demostrado por la prueba del armero artificiero, quien explicó la velocidad y alcance de la misma. La dinámica defensiva está demostrada incluso con prueba de la fiscalía. ¿Una persona que tiene irreprochable conducta anterior, y que no tenía ningún problema con la víctima, se va a transformar de un momento a otro en un homicida? Cree que no, desde el punto de vista jurídico no hay dolo ni culpa, pues no hubo intención. Su única intención fue de huir del lugar. En subsidio de lo anterior, si el Tribunal estimase que hubiere, dicha conducta está amparada por la legítima defensa, pues hubo una agresión ilegitima que fue anterior al atropello, hubo falta de provocación, que los bocinazos eran en signo de saludos, eso lo dijo un testigo de cargo. Lo agreden y hay racionalidad del medio empleador, pues era el único que tenía para huir, no podía huir a pie, porque lo agredían con piedras. Frente a una conducta culposa, como lo dice Juan Bustos, se puede desprender que concurre la legítima defensa, no es excluyente, pág. 83. De su libro, que no cita. El resultado da absolución. Replicando el Fiscal; que hay contradicciones en la defensa, dice que Salazar dijo que habría bajado al tractorista de su máquina para proteger su vida, nada de eso se dijo en estrados, lo bajaron para esperar el desenlace de la persona herida. Agregó que la razón de sacarlo del lugar era sólo por protocolo para resguarda cualquier integridad física, pero no había ningún elemento objetivo de que había ataque en contra de esta persona. Lo cierto es que sobre la violencia de las faenas forestales, nada se vio en el video exhibido. En cuanto a lo que dice la defensa, que la víctima estaba agresiva frente al tractor, y que recién hoy se deja en evidencia, no es así, lee la acusación. Lo anterior también queda en evidencia con la declaración del Sr. Palma quien dijo que se había preparado para una toma pero al llegar se encuentra con una situación muy distinta. En cuanto a la honda, jamás quedó claro donde fue encontrada, ni cuánto tiempo llevaba ahí. Respecto de Pía Smok, es sólo una argumentación de la misma, en orden a la visibilidad, que no se condice con el resto de la prueba del juicio. A su turno la querellante replicó, señalando que, el acusado indicó haber vuelto al sur, mientras era atacado por que lo llaman para ir a cargar el aire acondicionado. Eso no es sentido común. En relación a la visón de los puntos ciegos había de 6 metros hacia adelante, pero hacia adelante es perfecta, y persiguió a más de 3 personas. De las lesiones, no explica la defensa, como es que murió entonces esta persona. Ilustró al Tribunal sobre la forma en que se produjeron las lesiones. Una cosa es la velocidad recomendable, y otra es lo que se use el propietario. La Defensa, a su tiempo indicó; Richard Salazar señaló en forma evidente que a Cañete lo bajaron sólo por su seguridad, no estaba detenido, con posterioridad cuando se informa del fallecimiento, ahí se le detiene. De la violencia hay que recordar lo que dijo el testigo Zanetti, Diego López, y su perito Carlos Woldasrky, elementos que hacen presumir con bastante credibilidad que hubo violencia en las faenas forestales; Eliseo Gutiérrez fue parado antes de llegar al potrero El Manzano, fue amedrentado y tuvo que volverse, si no, no se explica que carabineros huyeran del lugar. El testigo Palma fue claro en que llevaban protecciones antidisturbios, si hubiese sido pacifico no se explica eso, ni pedir mas contingente, era por la violencia. Respecto a la acusación necesario es leer el párrafo completo. Cañete se dirigía hacia un lugar y la víctima en sentido contrario, o sea, enfrentándose. Al punto 23 no es restarle credibilidad a la perito, cree que en la 23 no es una mera argumentación. Cañete no vio el atropello porque tenía pérdida de visibilidad. Los vidrios de los tractores se astillaron, y no estaba dispuesto para proteger la visión de Cañete. Respecto al querellante, son momentos distintos, en uno, Cañete baja hacia las bodegas y lo atacan no ocurre todo en un continuo exacto, en cuanto, a la velocidad la propia perito Pía Smoke, dijo que eran como los elefantes, haciéndose el contraste con una motocicleta. NOVENO: Palabradas finales del acusado. Manifestó que lamenta la muerte de la persona, pero los comuneros saben que lo agredieron de un principio, solo intentó escaparse, pues es padre de familia y debe luchar por ellos. DÉCIMO: Veredicto y convicción: Como se dio a conocer en el veredicto dado por el Tribunal el día 1 de marzo del presente, la prueba rendida por el Ministerio Público, concordada, y valorada de conformidad lo ordena el artículo 297 del Código Procesal Penal, fue suficiente para efectos de arribar a una decisión condenatoria, pues, se acreditó más allá de toda duda razonable la existencia de los hechos descritos en la acusación Fiscal, y la consecuente participación del acusado en ella. Para efectos de orden, en los considerados venideros se analizará la prueba rendida y lo que esta generó en el Tribunal, sin perjuicio de ahondar en algunas cuestiones previas para el mejor entendimiento del mismo. DECIMO PRIMERO: Explicaciones previas; delito de Homicidio: Que, el delito de homicidio por el que se dedujo acusación Fiscal por parte del Ministerio Público en contra de José Cañete Paredes es una figura básica que resulta del cotejo de los artículos 390 N° 1 y 394 con el artículo 392 N° 2, todos del Código Penal, y que sanciona al que matare a otro, sin que concurran las circunstancias especiales constitutivas del parricidio, infanticidio, femicidio u homicidio calificado, a la pena de presidio mayor en su grado medio, esto es, de 10 años y 1 día a 15 años. Así, en cuanto figura básica, ha sido definida por Jean Pierre Matus A. y María Cecilia Ramírez G, en Lecciones de Derecho penal Chileno, Tomo I, pág. 10 y siguientes, y como elementos del tipo del ilícito en cuestión, se exige:1) una acción u omisión; 2) un resultado material, para la caso, la muerte; 3) y un nexo causal entre el comportamiento o acción y el resultado (muerte). DECIMO SEGUNDO: Acusación fiscal y Valoración de la prueba. Que, resulta necesario en esta parte del fallo, traer a la memoria los hechos sobre los cuales recae la acusación deducida contra el imputado Cañete Paredes, la que reza a la letra: “Con fecha 01 de octubre de 2014 en horas de la mañana, alrededor de las 11:30 horas, la víctima JOSÉ QUINTRIQUEO HUAQUIMIL caminaba, acompañado de los miembros de su comunidad Nilpe 2, por el interior del Fundo Nilpe de Galvarino, específicamente, por el camino que separa una siembra de trigo con un cultivo de papas que existe en dicho fundo. En dicho lugar también se encontraba el imputado, JOSÉ CAÑETE PAREDES, trabajador del Fundo Nilpe, quien se desempeñaba conduciendo un tractor marca Jhon Deere, Placa Patente única DXTK55 en labores agrícolas que se desarrollaban en dicho predio. En este contexto el imputado Cañete Paredes condujo el referido tractor en dirección hacia la víctima y sus acompañantes, retornando la víctima Quintriqueo Huaiquimil, hacia el sector de la siembra de trigo, en dirección contraria a la que venía caminando, siendo alcanzado por el imputado en dicho lanzándolo al suelo, para tractor, quien lo impactó luego regresar hacia el lugar donde se encontraba ya tendida la víctima, atropellándolo, aplastándolo con las ruedas del tractor, para posteriormente retirarse del lugar. Producto del impacto y el aplastamiento, la víctima resultó con traumatismo encéfalo craneano cerrado, trauma tóraco abdominal grave, fractura de húmero derecho, fractura de columna vertebral y fractura de pelvis, lesiones que necesariamente le causaron la muerte”. DECIMO TERCERO: Apreciación general de la prueba. En la labor de acreditación de los supuestos fácticos señalados en el considerando precedente impresionó en estos sentenciadores con mayor fuerza probatoria aquella rendida por el persecutor. En efecto, y de manera general cabe señalar en este acápite que de la apreciación conjunta de dichas probanzas es posible notar que toda ella resulta conteste en cuanto confluye a un mismo denominador común, cual es, clarificar tanto la dinámica de los hechos descritos, su desarrollo temporal, las características especiales de la conducta como asimismo el resultado que de dichas acciones brota. Que además, de parecer contestes en tal común denominador, a juicio de estos sentenciadores posee la suficiente idoneidad para generar la convicción requerida por el legislador que impone el artículo 340 del Código Procesal Penal, por cuanto de la misma se ha adquirido el convencimiento más allá de toda duda razonable en cuanto a la comisión del hecho punible objeto de la acusación, como de la participación culpable que le ha correspondido al acusado, debidamente sancionada por la ley. Que por el contrario, a modo general, la prueba de descargo, resultó inidónea a efectos de sustentar la teoría del caso propuesta por la misma, con la finalidad de generar en los infrascritos la duda razonable que hubiese permitido la absolución de José Cañete Paredes, por cuanto, los testigos presentados no son presenciales del hecho que constituye el delito perseguido propiamente tal, sea porque no se encontraban derechamente, o se habían retirado del lugar, como por no haber presenciado directamente el atropello y aplastamiento de la víctima. Por otra parte, la pericial y material incorporada nada aporta en sustento de la tesis de la defensa, salvo la declaración del testigo Erwin Gerding Vega, que robusteció la tesis del acusador. DECIMO CUARTO: Valoración de la prueba en particular. Que a continuación, la valoración de los medios de prueba se hará en el orden de redacción propuesto por el Ministerio Público en su acusación detallada en el considerando décimo segundo del presente fallo, para efectos de impedir que quede fuera de la valoración probatoria, alguno de los hechos imputados. 1.- Que con fecha 1 de octubre de 2014 en horas de la mañana alrededor de las 11.30 horas, la víctima José Quintriqueo Huaiquimil caminaba acompañado de los miembros de su comunidad por el interior del fundo Nilpe de Galvarino, específicamente por el camino que separa una siembra de trigo con una siembra de papas que existe en dicho fundo .Que de la prueba rendida consistente en los asertos de Mario Llanquileo Quilaleo, quien en la dinámica de su declaración relata que ingresan al entre las 9:30 a 10.00 horas por lado sur del fundo; que deciden seguir caminando y se encuentran con el tractor… “que este acelera más…empieza a zigzaguear… sigue al Lonco, al hijo del Lonco y a Mauricio ( víctima)”; de aquella formulada en el mismo sentido por Rogelio Castro Cayul, quien refiere igual dinámica de hechos advirtiendo que ingresaron a las 9.30 al fundo, que “todos comienzan a arrancar… golpea en la espalda al Peñi (la víctima)…”; de la prestada en el mismo sentido por Domingo Painen Marín, quien advierte que llegaron a las 9:00, y a las 10:30 se encuentran con una forestal explotando bosques, cuestión concordante con que lo describe Maribel Painen Marín al referir que llegaron a las 10:00 horas a detener la faena; agregando ésta última que “…el finao (víctima) corrió derecho, sin percatarse que lo seguían y lo atropelló…”; destacando asimismo lo aseverado en estrados por Rolando Quintriqueo, en orden a que llegaron a las 10:00 horas, además de que Cañete agarraba vuelo, subía la velocidad, que iban entre la papa y trigo, viendo a Cañete enfurecido y quería agarrar a alguien, viniendo su hermano José Mauricio (la víctima) con él; al igual que Domingo Painen Nahuelhual, en el sentido de que llegaron a las 10:00 al fundo… y refiriéndose a Cañete Paredes, señaló que los perseguía como perro a las liebres, que ve al peñi Mauricio boca abajo pidiendo auxilio; y por último el testigo del querellante Enrique Llanquileo Quilaqueo, quien refiere haberse juntado con los comuneros a las 8:30 fuera del fundo Nilpe, al sur; todos quienes al relatar específicamente determinadas horas relativamente concordantes entre sí, y detallar el hecho del atropello, ubican en tal lugar (Fundo Nilpe) y espacio de tiempo a la víctima (Mauricio Quintiriqueo), asertos que además aparecen corroborados con aquellas declaraciones proferidas por personal policial que llegó acto continuo al lugar (Fundo Nilpe, Galvarino), en especial Saldías Chávez y Palma Montenegro quienes al subir al lugar se percatan de un cuerpo (víctima) tendido, tapado con cubre cadáver, todas declaraciones que siendo contestes entre sí, y relatadas por quienes vivenciaron los hechos de manera personal, sin agregar en este punto cuestiones que impliquen colegir algún animo ganancial, generan convicción positiva en orden a que la víctima se encontraba el día y hora señalado en el libelo acusatorio en el lugar denominado Fundo Nilpe, circunstancia además corroborada por el Certificado de Defunción incorporado como prueba documental por el Ministerio Público, que signa como lugar de la defunción, el mismo fundo antes anotado, documento que no ha sido objeto de controversia por parte de los intervinientes en juicio y que contribuye a refrendar la convicción antes señalada.Que, en cuanto a que “la caminata se efectuaba por el interior del Fundo Nilpe”, específicamente por el camino que separa la siembra de trigo con cultivo de papas, resultan también veraces y pertinentes las declaraciones de los testigos referidos precedentemente, en especial Llanquileo Quilaleo, al referir …“ y siguieron por el camino donde había siembra de papas y trigo que llega al tranque”; declaración que concuerda con lo aseverado por Castro Cayul al referir que “iban por el camino que está entre las papas y el trigo.. hacia el tranque”; en el mismo tenor Domingo Painen Marín, quien refiere “.. que iban juntos por el camino al tranque..”; “que le fue más fácil arrancar a quienes lo hicieron hacia las papas, que a los que se fueron hacia el trigo por el alto del mismo”; de igual modo concurre con igual precisión Maribel Aninao Llanquileo, quien refirió …”siguen por un camino entre el trigo y las papas con trayecto hacia el tranque”…; siguiendo la línea anterior Rolando Quintriqueo Huaiquimil, refiere “…que el camino queda entre las papas y la siembra de trigo.. que es largo y extenso.. que siguieron caminando”.. “…Cañete sabía que pasarían por ahí…”, porque era el único camino para pasar al tranque”; continuando los asertos en tal dirección Domingo Painen Nahuelhual, al señalar que “…siguieron por el camino entre la siembra de papa y trigo para ir a ver el tranque…”; y por último el testigo de la querellante Enrique LLanquileo Quilaqueo, refirió que “…agarraron el camino entre las papas y trigo … que querían ir a ver el tranque que era la meta”.Este conjunto de asertos que al ser evidentemente contestes, sin alteraciones en su discurso, sino por el contrario seguros al deponer, generan convicción en estos sentenciadores sobre el lugar en que se realizaba la caminata por parte de los comuneros y víctima, esto es por el camino que se encontraba entre la siembra de papas y trigo al interior del fundo Nilpe, toda vez, que al declarar sobre estos hechos, dan cuenta de detalles vivenciales, que le otorga credibilidad a los mismos. 2.- Que en dicho lugar también se encontraba el imputado José Cañete Paredes, trabajador del fundo Nilpe, quien se desempeñaba conduciendo un tractor marca John Deere, PPU DXDK-55, en labores agrícolas que se desarrollaban en dicho predio.Que en este punto, destacan los asertos del funcionario de Carabineros de Chile Saldías Chávez; quien refirió que entrevistó al conductor del tractor, el que era José Cañete, quien indica afirmativamente haber participado en el accidente al momento de realizar faenas en el predio, además de que las personas que entrevistó en el lugar indicaron quien era el conductor que había atropellado a la víctima, refirió “..que el acusado iba circulando en el tractor cuando interactúa con él (testigo)…”; mismo sentido en que además declaró Mario Llanquileo Quilaleo, quien advierte ver a José Cañete que hace partir el Tractor y se va contra ellos, que “… lo conducía y se veía sentado manejando…”; asimismo Palma Montenegro, afirma en este punto en estrados que “…las personas que estaban en el lugar sindican que Cañete como conductor del tractor, que había atropellado al comunero…”; a su turno Rogelio Castro Cayul, señala en este mismo orden que había un tractor trabajando en un alto y que los sigue por el medio, que el tractor al que refiere era conducido por José Cañete a quien conoce desde chico, pues jugaban a la pelota…”; reafirmando estas declaraciones las aseveraciones formuladas por Domingo Painen Marín, quien advierte al Tribunal que había una siembra de papas al otro lado del canal, que trabajaba José Cañete en un tractor..”; al igual que Maribel Aninao Llanquileo, quien sostiene en estrados que se quedó con la patrulla cuando llego José Cañete; por último y corroborando los asertos anteriores destacan Patricio Jiménez Barros, quien recibe a las 13 horas al paciente José Cañete para constatar lesiones por ser el conductor del vehículo del accidente en Nilpe; y Rolando Quintriqueo Huaiquimil, quien fue prístino en señalar que Cañete estaba trabajando a unos 80 metros, que les hacía gestos, estaba a 200 metros en el lado sur de ellos, y como a 60 metros de distancia hace andar el tractor y va hacia ellos, empieza a seguirlos, testigo que además conoce a Cañete desde antes; finalizan tales declaraciones contestes en este punto, Domingo Painen Nahuelhual, quien refiere que al frente del canal había trabajadores del fundo en un cultivo de papas, que había tres tractores y Cañete empezó a tocar la bocina, a unos 50 metros hecho a andar el tractor, y empieza a hablar por celular o radio, que los siguió de frente a frente a ellos, como un perro a una liebre..”; y el testigo del querellante Llanquileo Quilaleo, quien vio a Cañete que enciende el tractor, habla por radio, y se va en dirección al camino, donde ellos iban caminando, y arremete contra sus péñis…”.- Tales asertos contestes entre sí, entregados de manera fluida, sin contradicción alguna, como asimismo, con nivel de detalles que poseen quienes vivencian el hecho de manera directa como además de quienes de manera inmediata toman conocimiento de la situación descrita, permiten formar convicción a estos sentenciadores en orden a que Cañete Paredes también se encontraba en el mismo lugar del predio, conduciendo el tractor referido, y desempeñando labores agrícolas, cuestión que a mayor abundamiento, no ha sido discutida por la Defensa del encartado.3.- Que el imputado Cañete Paredes condujo el referido tractor hacia la víctima y sus acompañantes, retornando la víctima Quintriqueo Huaiquimil hacia el sector de la siembra de trigo, en dirección contraria a la que venía caminando, siendo alcanzado por el imputado en dicho tractor, quien lo impactó lanzándolo al suelo, para luego regresar hacia el lugar donde se encontraba ya tendida la víctima atropellándolo, aplastándolo con las ruedas del tractor, para posteriormente retirarse del lugar.Que en cuanto a la “conducción del tractor” huelga realizar mayor estudio que aquellos efectuados en el acápite anterior, de los que se desprende, con el análisis y ponderación efectuada, que el acusado conducía el tractor tantas veces mencionado.Que en lo que respecta a que tal conducción se haya efectuado hacia la víctima y sus acompañantes, resulta decisivo a juicio de estos sentenciadores que en la dinámica de hechos relatados por los testigos de cargo tantas veces mencionados, se encuentran contestes en señalar que efectivamente el tractor se enfrentaba a su camino, en tal sentido Llanquileo Quilaleo afirma, que “vieron a Cañete hablar por radio que hace funcionar el tractor… mientras caminaban hacia el Norte…que se va contra ellos, viendo que no frenaba sino aceleraba más, tirándose a la siembra de papas”; en el mismo sentido Castro Cayul, quien indica que caminaban entre papas y el trigo hacia el norte.. que el tractor estaba en un alto, y que este los sigue por el medio, comenzando a arrancar; Painen Marín también lo hace en el mismo tenor, agregando que a él le parecía que era una broma que les estaba jugando Cañete Paredes pues era conocido de ellos; y de igual forma Maribel Aninao, refiere dirigirse el tractor hacia ellos; destacando todos los testigos referidos detalles tales como el de la comunicación por radio, el zigzagueo, la ubicación tanto del tractor como de los comuneros, entre otros, que generan en este Tribunal el convencimiento que sus declaraciones son vivenciales y que en esta parte carecen de algún ánimo ganancial en el sentido que Cañete Paredes condujo efectivamente el tractor en dirección hacia la víctima y sus acompañantes.Que este acápite aparece corroborado además con la prueba pericial criminalística aportada por el Ministerio Público, en la parte que describe el desplazamiento del móvil 1, (Tractor John Deere conducido por Cañete Paredes) refirió precisamente el perito el desplazamiento de norte a sur del mismo, con las variaciones que se condicen con el zigzagueo que refieren los testigos mencionados, además de advertir el desplazamiento humano reciente al costado derecho del móvil en la zona de incidencia. Tal prueba pericial aparece efectuada por quien posee conocimientos precisos sobre aquello que declara, quien además lo hizo con la seguridad de haber efectuado personalmente tal diligencia, generando convicción positiva en apoyo de la conclusión antes referida, además de encontrarse refrendada su labor no solo con la vasta experiencia que posee, sino además con los estudios que manifestó poseer, los que otorgan al mismo la máxima consideración sobre seriedad e idoneidad del trabajo formulado. En cuanto “al retorno que hace la víctima Quintriqueo Huaiquimil hacia el sector de la siembra de trigo, en dirección contraria a la que venía caminando”, deberá tenerse en especial consideración que según los razonandos anteriores se ha tenido por suficientemente acreditada la presencia de la víctima en el camino en cuestión, que el acusado conducía el tractor en comento, en dirección hacia la víctima y sus acompañantes. Que en cuanto a la dirección de esta última (víctima), según se infiere de la declaración de los testigos pre señalados lo era hacia el norte, en efecto los testigos de cargo señalan su avance hacia el norte, declarando Llanquileo Quilaleo, lo siguiente, “… y ellos siguen caminando hacia el norte…” (refiriéndose al grupo de comuneros); en este orden de cosas además declaró Castro Cayul, quien refiere el ingreso al fundo por el sur, para luego señalar que “…se fueron a la parte norte, ellos querían comprar donde hay un tranque…”, “… el tractor que ve de lejos… era conducido por José Cañete…., estaba en la parte norte…”, mismas circunstancias de ingreso al fundo y dirección que relata Domingo Painen Marín; declaraciones estas últimas que atendida la naturaleza vivencial, según se dijo, que además concuerdan con la conclusión del peritaje criminalístico y planimétrico de Olavarría Sepúlveda en cuanto la dirección de trayecto del tractor lo era desde norte a sur, cuyo mérito ya fue ponderado, y que en lo esencial carecen de contradicciones, han logrado convencer a estos jueces que la dirección en que caminaba la víctima lo era hacia el norte, lugar en que además se encontraba el tractor tantas veces referido.Que respecto “al retorno de la víctima”, resulta de una preponderante importancia lo señalado por el testigo Rogelio Castro Cayul, quien refiere que comienzan a arrancar y que el tractor golpea la al Peñi por espalda, declaración que unida a las conclusiones informadas en estrados por la perito Nubia Riquelme, en cuanto afirmó haber sido topado en primera instancia la víctima para un posterior paso del vehículo aplastándolo, declaraciones del testigo que al ser presencial, y la otra emanada de quien posee la correspondiente expertiz, además derivadas del desarrollo de una labor seria y evidentemente científica, y atendida la concordancia entre testigos y la última mencionada impiden colegir algún animo ganancial o acomodaticio en tal sentido, forman convicción seria en este Tribunal, según así lo indica la lógica, que la víctima, al enfrentarse al tractor en comento, gira huyendo, volviéndose hacia el sur momento en que es impactada, lo anterior, siempre teniendo como base la determinación ya efectuada en orden a que los comuneros, dentro de los que caminaba la víctima lo hacían hacia el norte, y que el tractor conducido por Cañete Paredes estaba ubicado en dicho punto cardinal y que además su trayecto lo emprende hacia el sur.Que respecto al hecho de haber “arrancado hacia la siembra de trigo”, el mismo testigo Castro Cayul, cuyo valor ya fue referido, señaló que la víctima fue pasada a llevar en el trigo; en el mismo sentido lo hace Painen Marín al advertir que “el finao corrió derecho y que el trigo estaba entre 50 a 70 centímetros y que quienes arrancaron hacia las papas no tuvieron mayores problemas”, declaraciones que resultan veraces a estos sentenciadores al ser confrontadas con la pericial criminalística elaborada por Olavarría Sepúlveda, la que da cuenta de que el recorrido efectuado por el tractor en cuestión fue en su gran mayoría por sobre el trigo, y sólo inicialmente sobre el camino que separa ambas siembras de trigo y papas, ubicando la zona de impacto en la siembra de trigo, según indicó en fotografías exhibidas, como asimismo distintas señales que daban cuenta de desplazamiento humano reciente en el lugar. Que tanto la declaración vivencial efectuada sin titubeo o vestigios de algún ánimo acomodaticio efectuada por los mencionados testigos, como asimismo aquella prestada por el perito precedentemente mencionado, quien concluye aquello que declara desde la ciencia que profesa y basado en la evaluación empírica del sitio del suceso, permiten colegir ciertamente que, en efecto, la maniobra de arrancar por parte de la víctima se efectuó por la siembra de trigo.Que respecto de haber “sido alcanzado (la víctima) por el imputado en dicho tractor quien lo impactó lanzándolo al suelo”, deberá tenerse en consideración lo señalado por el testigo Mario LLanquileo Quilaleo, a saber “ iba arrancando Mauricio cuando lo agarra el tractor, ahí vio que el tractor lo pasó..”; en el mismo sentido declaró Rogelio Castro Cayul al señalar que “ comienzan a arrancar …golpea al peñi ( víctima) en la espalda… y el peñi estaba que botado boca abajo levantaba la mano, lo dejó ahí y arrancó..”; siguiendo con la misma dinámica de hechos, afirmó también tal situación Domingo Painen Marín al advertir que “ el finao siguió corriendo derecho…no se percató que lo seguían ( la víctima) y lo atropelló..”; circunstancia también declarada por Maribel Aninao Llanquileo al referir que vio quien impactó a Mauricio, quien cae boca abajo; por su parte y en este mismo hecho, Rolando Quintriqueo Huaiquimil, quien ve que su hermano “cae que pasa al medio del tractor, lo agarra por la parte trasera”, estando (el testigo) a 15 metros; por último el testigo presentado por la querellante Enrique Llanquileo Quilaleo, vio que el tractor lo golpea por la espalda entre las caderas y la espalda, con la parte de adelante, con el fierro, pasa por encima, pegándole con la rueda izquierda en la pierna.- Todas estas declaraciones podrían por si solas evidenciar el haber sido alcanzada la víctima por el tractor y haber sido lanzado al suelo, pues se ha dicho ya en variadas ocasiones que el detalle de las mismas revela una situación vivenciada y conteste, que generan en estos sentenciadores convicción acerca de lo que han depuesto en estrados, sin embargo, y además, aparece tal situación del atropello, o alcance y posterior lanzamiento al suelo de la víctima corroborado por las conclusiones de la perito Nubia Riquelme quien advierte, el haber sido topado ( la víctima), por el tractor, para y luego aclarando al Tribunal señalar que había caído boca abajo, compatibilizando las lesiones con las declaraciones que se le entregan; declaraciones todas contestes, testificales y pericial, que proviniendo de distintos actores en el juicio, léase testigos y perito, carecen a juicio de estos sentenciadores de algún ánimo complaciente con la tesis del persecutor, siendo absolutamente neutral en sus asertos, además de que en el caso de los testigos resultan ser presenciales del hecho referido, generando la convicción de que la víctima fue alcanzada por el tractor y siendo impactada por este, fue lanzado al suelo, conclusión que además se encuentra refrendada con la fotografía incorporada como prueba material por parte del Ministerio Público que da cuenta de una lesión principal en la parte posterior de la pierna izquierda.Que en cuanto “a que el acusado haya regresado luego al lugar donde se encontraba la víctima ya tendida, atropellándolo, aplastándolo posteriormente con las retirarse ruedas del del lugar”, tractor, importa tener para en consideración como prueba preponderante la pericial criminalística evacuada por Olavarría Sepúlveda, quien describe la trayectoria del móvil ( móvil 1) señalando al respecto, “…emprende camino en línea recta por un trayecto de al menos 173 metros, desviándose del camino, haciendo un leve giro hacia la izquierda, para luego, seguir avanzado por otros 4,10 metros momento en el que comienza su trayecto en forma irregular y de curvatura, tras lo cual, pasa por la zona de incidencia, retoma, y comienza a efectuar un giro hacia la izquierda, en esta punto, se advierte desplazamiento humano al costado derecho, luego se aleja nuevamente en dirección hacia el Norte, nuevamente el trayecto es irregular, para luego volver a retornar hacia el área de incidencia, pero sin llegar aun, comienza efectuar giros, llamándole la atención uno de ellos al perito, en el que direcciona hacia la derecha y sale depositado del exterior un elemento consistente en una caja de herramientas del tractor, lo que demuestra la mayor velocidad del tractor, luego se produce un avance y un retroceso en el lugar, luego vuelve a retroceder y retoma saliendo finalmente hacia un camino exterior, que empalma con el camino que dirige hacia las bodegas del Fundo. Además en su declaración y exhibiéndosele la fotografía 86, en que se demuestra en forma gráfica el trayecto completo del vehículo 1 que corresponde al tractor tantas veces mencionado, divisándose en el mismo tres giros; luego en la fotografía 87 da cuenta del desplazamiento del móvil 2, quien quiebra su trayectoria mucho antes del área de incidencia, tomando el camino interior abandonado el paño agrícola, asimismo en la fotografía 88 se avizora un trayecto más sencillo, correspondiente a la máquina 3, hacia el sur oriente, empalmando directamente hacia el exterior del potrero, todas fotografías aéreas que resultan de alguna manera pedagógicas para entender la dinámica del trayecto seguido por los distintos móviles que se encontraban dentro del potrero en que sucedió el hecho por el que se acusó.Que del tal peritaje y apoyo digital incorporado en juicio, por quien, in situ, realiza la pericia explicando de manera lógica como es que reconstruye la ruta del móvil que participa en los hechos, genera convicción en estos sentenciadores en particular en la doble pasada que efectúa Cañete Paredes por la zona de impacto, que además y en cuanto al mérito del perito, cabe destacar su vasta experiencia de 11 años efectuando peritajes en sitio de distintos sucesos, como asimismo que cursa actualmente un magister en la materia, robusteciendo férreamente la tesis del acusador fiscal. Que lo anteriormente señalado unido a las declaraciones de los testigos de cargo Llanquileo Quilaleo, en cuanto señala “…el tractorista se devuelve y lo vuelve a pasar otra vez…persigue a Rogelio y ahí pasó de nuevo a Mauricio siguiendo personas cerro arriba…”; Rogelio Castro Cayul, testigo mencionado por el señalado precedentemente como quien prestó ayuda a la víctima; quien indicó que al socorrer a Mauricio Quintriqueo vio nuevamente el tractor, escapando y “sintiendo que algo se quebraba”; Painen Marín quien de manera condigna señaló que el acusado se voltea hacia atrás y lo vuelve a pasar; Maribel Aninao Llanquileo al advertir correspondientemente con las declaraciones anteriormente referidas la expresión en orden a que “el tractor lo vuelve a pasar”; todas cuyo valor vivencial, rico en detalles y contestes entre sí; además unidas al desarrollo del peritaje criminalístico mencionado, permiten otorgar suficiente sustento a que el acusado Cañete Paredes luego de haber golpeado por primera vez a la víctima, realiza un giro del tractor y vuelve a la zona de impacto, en que se encontraba tendida la víctima, según señala Rogelio Castro, atropellándolo y aplastándolo con las ruedas (lo volvió a pasar), para posteriormente retirarse del lugar según la trayectoria sinuosa que se indica en el peritaje ya mencionado y valorado en su mérito.Que especial mención probatoria merece a estos sentenciadores el testigo de la querellante Enrique Llanquileo Quilaleo, quien siendo claro, desenvuelto y su declaración rica en detalles, y asumiendo incluso hechos que da cuenta de su neutralidad al indicar que tras el arremetimiento de Cañete Paredes hubo peñis que lanzaron piedras, ignorando quienes fueron, advierte respecto del hecho en cuestión, que el tractor pega en la pierna izquierda de la víctima, haciendo una vuelta en U, volviendo a pasar por encima, intentando incluso seguir a mas comuneros perdiendo la velocidad, pues ya iba en subida.Que la misma dinámica de dos etapas del hecho del atropello propiamente tal, da cuenta la perito Riquelme Zornow, advirtiendo primariamente un golpe, para luego dar cuenta del aplastamiento, dinámica condigna con aquella trayectoria descrita por el perito criminalístico, y con los hechos narrados por los testigos mencionados, cuyos méritos e idoneidad han sido reiteradamente descritos. Respecto del peritaje pese a haberse advertido precedentemente todos sus méritos probatorios, huelga señalar que ha impresionado a estos sentenciadores con suficientes conocimientos para afirmar aquello sobre lo que declara, lo que además es propio de la ciencia que profesa, razón por la que tales asertos resultan formar convicción en el mismo sentido señalado en el párrafo anterior, al aparecer estos revestidos de la seriedad e idoneidad para ello.4.- Que producto del impacto y aplastamiento la víctima resultó con traumatismo encéfalo craneano cerrado, trauma toraco abdominal grave, fractura de húmero derecho, fractura de columna vertebral y fractura de pelvis, lesiones que necesariamente le causaron la muerte.- Que por último, y en cuanto a que producto del impacto la víctima resultó con las lesiones descritas en el libelo acusatorio, las que necesariamente Quintriqueo le ocasionaron la muerte a Huaquimil, el Certificado de Defunción incorporado por el Ministerio Público da cuenta que José Quintriqueo Huaiquimil, falleció el día 1 de octubre de 2014, al interior del Fundo Nilpe a causa de un politraumatismo, en hecho de tránsito, dicho documento, no reprochado, merece plena fe al Tribunal, pues es un documento oficial, que emana del organismo que por Ley se encuentra facultado para extenderlos, y porque resulta pertinente al respecto, al constituirse en el documento que per se sustenta frente a terceros el hecho de haberse producido la muerte. De igual modo, la perito Nubia Riquelme Zornow, Tanatóloga del Servicio Médico Legal de Chile, informó al Tribunal que realizada la autopsia al cadáver de Quintriqueo Huaiquimil, éste falleció a causa de un politraumatismo consistente en, traumatismo encéfalo craneano cerrado, trauma toraco abdominal grave; fractura humero derecho, fractura de columna y fractura de pelvis, lesiones que son compatible con un hecho de tránsito. La pericial anterior, resultó aparte de idónea, practicada por quien posee las competencias necesarias para la práctica del mismo, como que y además, sus conclusiones aparecen precisamente afirmadas en el conocimiento que posee de la especialidad en comento, por ello, es que tal pericia generó a estos sentenciadores no sólo convicción acerca del hecho de haberse producido la muerte, sino y además, a causa de qué se produjo aquella. De igual modo, corrobora lo anterior, la declaración del testigo de cargo Médico Patricio Jiménez Barros, quien alrededor de las 13 horas había sido comunicado por el paramédico que concurrió al lugar de los hechos, sobre la muerte de Quintriqueo Huaiquimil, declaración que aparece librada en el juicio por quien posee conocimientos específicos sobre la materia, y en base a la información de quien igualmente poseyendo conocimientos sobre la misma se encontraba en el lugar de los hechos (paramédico), por lo que formó igualmente certeza en estos sentenciadores. DECIMO QUINTO: Calificación Jurídica. Que del análisis efectuado en el considerado previo, es posible tener por acreditada que la conducta desplegada por Cañete Paredes es típica en los términos que la ley señala. Es decir, encuadra en el tipo de homicidio definido por el legislador en el artículo 391 N°2 del Código Penal, pues en efecto, con su acción consistente en conducir el tractor en dirección hacia la víctima la que fue alcanzada por el mencionado Cañete Paredes en dicho tractor, impactándolo y lanzándolo al suelo, para luego regresar hacia el lugar donde se encontraba ya tendida ésta, atropellándolo y aplastándolo con las ruedas del vehículo mencionado, ha ocasionado la lesión al bien jurídico protegido, entiéndase la vida, pues, con tal actuar ha dado muerte a Quintriqueo Huaiquimil. Que en cuanto al elemento subjetivo del mismo, es pertinente citar a los profesores Jean Pierre Matus y María Cecilia Ramírez en su Obra, Lecciones de Derecho Penal Chileno, Partes Especial, página 35, Tercera Edición, en el siguiente sentido, “no obstante, la discusión a este respecto puede considerarse de carácter histórico, atendida la unánime postura actual de los autores y el reconocimiento por parte de nuestra jurisprudencia de la categoría dogmática de dolo directo, y dolo eventual. De este modo, por una parte, al admitirse que también actúa dolosamente (con dolo eventual) quien se representa el resultado mortal, pero realiza su conducta con indiferencia hacia su producción, aparece como innecesaria la apreciación de un supuesto dolo especifico de matar (animus necandi); y por otra, se excluye la noción de dolo genérico, pues ante la prueba que el resultado mortal no era siquiera representable, no cabe atribuir al autor dolo eventual y mucho menos dolo directo”. Que de esta cita es posible colegir entonces que el elemento subjetivo del tipo, comprende tanto el dolo directo, como el eventual, siendo indiferente para efectos de su sanción, si se actúa con uno u otro. Para el caso de marras, a juicio de los infrascritos, y tal como se analizará en extenso a propósito de la participación de Cañete Paredes, este obró con dolo directo. DECIMO SEXTO: Participación.- Que en cuanto a la participación del encartado en los hechos referidos precedentemente, huelga señalar que en el núcleo fáctico debidamente sustentado en la prueba de cargo, según se dijo, se incorporan elementos de la participación del acusado en los hechos que originaron el juicio, no obstante ello, resulta necesario señalar que no sólo Cañete Paredes afirma haber conducido el tractor tantas veces mencionado, sino que y además, la prueba de cargo ha sido completa y concordante en tal sentido.- En efecto, todos los testigos de cargo sea de manera mediata o inmediata al hecho del atropello propiamente tal, señalan como conductor del tractor a José Cañete Paredes, en ese sentido Saldías Chávez, quien advierte haberse dirigido al lugar en que se encontraba el tractor y haberse entrevistado con su conductor, que era José Cañete; en el mismo sentido y en lo pertinente, Mario Llanquileo Quilaleo, señala que “vieron de repente que José Cañete hablar por radio y hace partir su tractor…iba arrancando Mauricio cuando lo agarra el tractor, por detrás, …luego lo pasa de nuevo”; Palma Montenegro, quien refiere que Cañete era el conductor según lo que le habían referido los propios comuneros; Rogelio Castro Cayul, señala que “el tractor golpea por la espalda al peñi, .. el tractorista iba mirando hacia atrás a ver que había pasado con el peñi botado.., que el tractor era conducido por José Cañete, ..a quien conoce desde niño”; Domingo Painen Marín, quien refiere que Cañete habló por radio, bajo al lado del tractor, colgó, dirigiéndose directamente.. a toda máquina.. lo atropelló (a la víctima) quien está en el juicio, agregando que Cañete a unos 7 metros da una vuelta y lo vuelve a pasar” (a la víctima); en el mismo sentido Maribel Aninao Llanquileo; el doctor que atendió a José Cañete, Patricio Jiménez Barros, sostuvo que a eso de las 13 horas Carabineros llegó con un paciente José Cañete, a constatar lesiones por ser el conductor del vehículo del accidente en el fundo Nilpe; Quintriqueo Huaiquimill y Painen Nahuelhual, declaran de igual forma sindicando como quien conducía el tractor al acusado José Cañete Paredes. Que además todos estos testigos dan cuenta de que, quien efectúa el atropello y posterior pasada por encima de la víctima es el tractor conducido por José Cañete Paredes, circunstancias todas que nunca han sido negadas por el acusado, menos aún han sido parte de alguna alegación por parte de la Defensa del acusado, razón por la que necesariamente debe colegirse de tales asertos, tanto porque son presenciales, como porque, y además otorgan detalles tales como la comunicación por radio previa del acusado, y otros, conocer derechamente al acusado, conceden a este Tribunal suficiente convicción para estimar que quien ha desplegado la conducta reprochable ha sido el acusado José Cañete Paredes, quien por lo tanto será considerado según lo dispone el artículo 15 N°1 del Código Penal como autor director del delito de homicidio imputado, desde que tomó parte en la ejecución de los hechos de manera inmediata y directa. Que en esta parte de la sentencia, y determinada ya la existencia del hecho punible y la participación que le cupo al encartado en los hechos investigados, se debe razonar sobre la antijuridicidad de la conducta desplegada, pues en efecto, su acción carece de la autorización legal expresa y deviene además en una conducta socialmente dañosa, es decir, su acción no se encuentra autorizada por la ley. No obstante estos sentenciadores hacerse cargo de todas y cada una de las alegaciones formuladas por la defensa en un acápite aparte, se estima de suyo importante referirse a la culpabilidad (dolo), resultando clarificador tener presente lo señalado por el profesor Bacigalupo, a saber, “culpable es aquel que pudiendo, no se ha motivado ni por el deber impuesto por la norma, ni por la amenaza penal dirigida contra la infracción a ella”. Que de esta definición que otorga el autor mencionado, llevada a los hechos que se han tenido por acreditados, es posible sostener en primer lugar, que Cañete paredes pudo motivarse a cumplir la norma pues, en efecto, la llegada del grupo de 25 personas aproximadas de la comunidad Nilpe 2 al Fundo en que desarrollaba sus labores, era un hecho conocido para él, según él mismo lo declaró, con un espacio de tiempo suficiente para retirarse del lugar, como lógicamente fue efectuado por sus compañeros de labores Cortes Peña, y Ramón Cañete Paredes, según lo refiere la pericial criminalística al describir el trayecto de los otros dos móviles, y cuyo valor acreditativo ya ha sido latamente sustentado, y pudo motivarse el encartado, básicamente por que el grupo de personas siempre estuvieron a la vista del acusado, cuestión reconocida por el mismo en estrados, quién señaló que tenía visión hacia el bosque, y que vio cuando carabineros llegó al lugar, como así también los vio irse. Declaración la que además se condice con los testigos de cargo, Mario Llanquileo Quilaleo, que señala “cuando ve la primera vez a Cañete sobre el tractor ellos estaban en el sector del bosque, como a unos 100 metros”, en el tal sentido. El testigo Castro Cayul, que indicó “ que el tractor que ve a lo lejos … era conducido por José Cañete, estaba en la parte Norte… no estaban trabajando, estaban a unos 170 metros” , en la misma dirección Domingo Painen Marin, quien advirtió al Tribunal “ que había una siembra de papas al otro lado del canal, ahí en el canal trabajaban José Cañete en un tractor…era conocido con él…estaba a unos 200 a 300 metros, con una máquina que mueve terreno” ergo, los testigos tenían la visión de Cañete Paredes al menos a 100 metros, así las cosas, no era un hecho imprevisto la presencia de los comuneros en el lugar, no hubo probanza alguna que se dirigiera a acreditar que los mismos aparecieron subrepticiamente, o que estuviesen escondidos en el lugar, sino muy por el contrario, en horas de la mañana se manejaba la información de su presencia. Esto por un lado. Por otro lado, Cañete Paredes, hizo andar el tractor y no sólo no efectuó una maniobra evasiva, si no por el contrario, dirigió su vehículo de gran tonelaje precisamente hacia el lugar en que se encontraban los comuneros, previendo que podía alcanzar con el mismo a alguno de ellos, poniendo en peligro la vida de los mismos. Que continuando con la dinámica del hecho acreditado, en particular, luego de producirse el primer alcance de la víctima por el tractor, y según se desprende del peritaje criminalístico destinado a determinar la trayectoria de las 3 maquinarias habidas en el lugar, éste realiza un viraje hacia la izquierda, retornando hacia el lugar en donde la víctima habría quedado tendida en el piso, maniobra que una vez más no resulta encuadrarse dentro de la lógica de evadir al grupo de personas que se encontraban al interior del potrero, sino por el contrario, y teniendo en principal consideración los señalado por los testigos Mario Llanquileo Quilaleo, Rogelio Castro Cayul, Rolando Quintriqueo Huaiquimil y Domingo Painen Marín, quienes advierten sobre el hecho de haber volteado su cabeza Cañete Paredes para ver hacia atrás precisamente al lugar donde se encontraba la víctima, indican, a este Tribunal la clara intención del acusado de volver a pasar, esta vez, por sobre la víctima, aplastándolo con el tractor. En efecto, el perito Olavarría Sepúlveda, cuyo mérito ha sido repetidamente señalado en este fallo, se avocó a la tarea de reconstruir el trayecto efectuado por Cañete Paredes junto a sus compañeros de labores, desde el punto inicial pasando por el punto de violencia, y hasta la salida del tractor del lugar de los hechos, trayectoria de la que se advierte prístinamente la maniobra descrita precedente y por el órgano persecutor en su libelo acusatorio, y que da cuenta precisamente de una doble pasada por el lugar en que se encontraba la víctima, como así también, de una serie de maniobras que se encuentran lejanas de ser calificadas como maniobras evasivas, pues a lo menos, en dos oportunidades vuelve a quedar enfrentado al grupo de personas que se encontraban en el lugar. Como consecuencia de lo anterior, y precisamente en el gesto de voltear hacia atrás, y mirar en el lugar en que se encontraba la víctima, y con ese dato dirigirse nuevamente al mismo lugar, permiten sostener que tuvo la visión y por tanto la ubicación del lugar exacto en que se encontraba esta última, lo que implica colegir que Cañete Paredes no se motivó al cumplimiento normativo y menos aún, la eventual sanción penal lo hizo desistir de su conducta, a diferencia de lo que sí realizaron sus compañeros de labores, quienes pese a conducir vehículos de similar naturaleza y tonelaje, se sustraen del lugar de los hechos, a través de maniobras que en el mismo peritaje mencionado, aparecen concordantes con la lógica de una evasión. En suma, todos estos razonamientos permiten colegir la existencia de la intención del acusado de generar la lesión del bien jurídico protegido, lo que configura necesariamente su actuar con dolo directo. Finalmente, en este considerando, pertinente resulta pronunciarse sobre la alegación de la Defensa en orden a que la acusación fiscal carece de la mención respecto a la parte subjetiva, consistente en intencionalidad del acusado, lo que impide al Tribunal dictar sentencia condenatoria. Sobre el punto, estiman estos sentenciadores, por una parte, que la ausencia de una mención expresa en tal sentido no hace a la acusación incompleta, por cuanto, de su descripción fáctica se desprende que la maniobras achacadas a Cañete Paredes tienen o van dirigidas a causar la muerte de Quintriqueo Huaiquimil; por tanto, y por otro lado, si de la descripción fáctica es posible extraer la intencionalidad no resulta necesario mencionar de manera expresa la existencia del dolo por cuanto éste último se encuentra ínsito en la descripción de hechos efectuados, razones todas que implican desoír a la Defensa en esta parte. Finalmente, corresponde luego de haberse ya determinado palmariamente los hechos que contiene la acusación fiscal como asimismo la participación que le cupo al acusado en los mismos, señalar que la declaración de Cañete Paredes efectuada en estrados en aquella parte específica en que ocurre el hecho achacado no resulta clara si no por el contrario bastante confusa, pues no relata una serie de maniobras que si se consideran en el pericial criminalístico y planímetro efectuado por Olavarría Sepúlveda, como asimismo, afirmó haber recibido dos golpes de piedra, uno en la cara lado izquierdo (pómulo) y otro en el hombro derecho, que le habrían generado irse para el lado, perder conciencia y la conducción del tractor entre 5 a 3 minutos, ambas afirmaciones que no poseen sustento en otro medio de prueba distinto, más bien, resulta contradictoria con la declaración del facultativo que lo atiende Jiménez Barros, quien señaló que la lesión de la cara era producto de un vidrio, lesión que a juicio del facultativo era superficial, y la del hombro derecho afirmó haberla recibido con el golpe del mismo asiento del tractor, impresionando en estos sentenciadores como una declaración acomodaticia a la tesis de la Defensa, más que reveladora de como realmente ocurrieron los hechos. Corrobora el razonamiento anterior en orden a desechar la declaración del acusado, la declaración del propio testigo de la defensa Erwin Gerding Vega, quien afirmó en estrados que el tractor de marras no se puede girar si no es maniobrado por un conductor, y aun cuando haya un bache desviaría su trayectoria, pero no por las ruedas delanteras que son las que giran; testigo que atendida la profesión que detenta (Ingeniero Mecánico) como asimismo la precisión en los detalles señalados respecto a las características propias del tractor, generan en este Tribunal convicción sobre la circunstancias de que el tractor no gira mientras no haya alguien al mando del volante del mismo. Lo anterior, implica necesariamente advertir que Cañete Paredes siempre estuvo al mando del móvil, básicamente por la trayectoria descrita en la pericial Planimétrica y Criminalística de Olavarría Sepúlveda, tantas veces mencionada. DECIMO SEPTIMO: Síntesis. Que en consecuencia y ya analizados lo medios de prueba de manera pormenorizada en correspondencia con la propuesta fáctica de la acusación, conviene señalar que el conjunto de asertos emitidos por los testigos de cargo de los que se han extractado las partes pertinentes de su declaración, han sido reflejo material de una situación vivenciada, por cuanto todas aquellas frases extraídas, ubicadas en sus extensas declaraciones concuerdan igualmente en el contexto y desarrollo de la dinámica de los hechos, en efecto, tales asertos permitieron tener por suficientemente acreditado que el día de los hechos un conjunto de comuneros luego de ingresar al Fundo Nilpe transitaban por un camino que corría entre una siembra de papas y trigo, de manera pacífica con el fin de llegar a un tranque ubicado en el interior de tal Fundo, que se encontraba en tratativas con CONADI para ser adquirido para dos comunidades, entre ellas Nilpe 2, que en tal trayecto se encontraba el acusado Cañete Paredes específicamente en el camino referido y al norte de los comuneros, quien luego de hablar por radio, tocar bocina y realizar algunos gestos con manos, enciende su tractor de gran tonelaje y se sus dirige directamente hacia tal grupo de personas, quienes reaccionan ante tal agresión lanzándole a lo menos una piedra ( encontrada en el interior de la cabina del tractor), para luego continuar su trayecto alcanzando a la víctima quien quedó tendida en el suelo, para acto seguido, y habiendo mirado hacia atrás al lugar en que ésta se encontraba, gira su móvil de gran tonelaje nuevamente hacia el sector donde se encontraba Quintriqueo Huaiquimil, asistido en esos momentos por Castro Cayul, para volver a pasar por sobre él, produciéndole la muerte por aplastamiento.Que estas declaraciones aparecen corroboradas con la precisión, idoneidad y seriedad suficiente en los asertos efectuados por los peritos concurrentes, según se dijo, quienes avocaron su trabajo a la reconstrucción de la trayectoria del tractor conducido por el acusado, y compatibilizar las lesiones con la dinámica del atropello y posterior aplastamiento; declaraciones que además estuvieron debidamente apoyadas con la prueba documental y material que formaron la convicción ya señalada en esta sentencia.DECIMO OCTAVO: Alegaciones de la Defensa. Que, en esta parte de la sentencia, resulta necesario hacerse cargo de la alegación de la Defensa en orden a que en parte alguna el perito Olavarría Sepúlveda aseguró que el tractor de marras haya pasado dos veces, y por el mismo punto, del área de incidencia, con lo que a su juicio no se acreditó una de las propuestas fácticas de la acusación. Que a este respecto, debe tenerse en consideración que el perito Olavarría hizo un cálculo de dos metros desde el punto medio de la ruedas traseras del tractor hacia el punto de levantamiento de evidencia, luego, afirmó en estrados que el tractor 1 sí pasó por el área de incidencia nuevamente, y exhibiendo la fotografía N° 71, se advierte que las marcas de las ruedas del tractor bien pudieron pasar por sobre la víctima, lo que unido a lo concluido respecto a la causa de muerte de Quintriqueo Huaiquimil y como fue la dinámica de las lesiones que le causaron la misma, resulta unívoco y lógico concluir, al no existir antecedente de otros vehículos en el punto específico del atropello, que éste se produjo con la segunda pasada del tractor conducido por el acusado por el área de incidencia. Que en segundo término, el Tribunal se hará cargo de la alegación de la Defensa, consistente en la existencia de un defecto de forma en la narración de los hechos por parte de la Fiscalía, pues a su juicio, víctima y acusado se enfrentaban, y no pudo entonces, ser golpeado por la espalda según el tenor del libelo acusatorio. A juicio de los infrascritos, no existe tal defecto en la acusación, pues de su lectura se advierte que esta indica claramente”…que retornando la víctima Quintriqueo Huaiquimil hacia el sector de la siembra de trigo, en dirección contraria a la que venía caminando, siendo alcanzado por el imputado en dicho tractor, quien lo impactó lanzándolo al suelo…”. En efecto, el movimiento descrito en la acusación en orden a que retorna la víctima en dirección contraria a la que venía caminando, necesariamente importa, como ya se dijo, que la víctima en ese momento corría o arrancaba en el mismo sentido del tractor; cuestión que importa la ausencia de la incongruencia anotada por la Defensa. Qué acto continuo, resulta necesario y particularmente por la tesis de la defensa, hacerse cargo de la relevancia que poseen o no, las circunstancias previas a la conducta que configura finalmente el delito perseguido, como asimismo, determinar, cómo es que se produjo el ingreso al Fundo Nilpe por parte de los comuneros, dentro de los que se encontraba la víctima y si este ingreso influye o no en la determinación del tipo, por cuanto así ha sido alegado por la defensa. Dichas alegaciones las hizo en primera instancia en su discurso de apertura, sustentando su teoría del caso en la concurrencia de una causal de exculpación, consistente en aquella contenida en el artículo 10 N° 8 del Código Penal, conocida en doctrina como caso fortuito y en forma subsidiaria, alegó una causal de justificación consistente en la legitima defensa propia, prevista en el artículo 10 N°4 del mencionado Código. En una segunda instancia, a saber, en la audiencia del artículo 343 del Código procesal Penal, arguyó cómo eximente incompleta, la del artículo 10 N° 9, en relación al artículo 11 N° 1 del Código Penal, y la atenuante prevista en el numeral 5 del artículo 11 del mismo cuerpo legal. Que en cuanto a la relevancia de estas circunstancias se sustenta, a juicio de la Defensa, en que precisamente las alegaciones de las eximentes o minorantes de responsabilidad se encuentran fundadas en la violencia e ilegitimidad con que habrían efectuado los comuneros (entre ellos la víctima) el ingreso al Fundo en cuestión y posterior arremetimiento y apedreo ya en el potrero el manzano sobre el encausado, lo que habría provocado que Cañete Paredes desplegara determinadas conductas que harían constituir, a su juicio, las eximentes y minorantes alegadas. Que al respecto, se debe tener en consideración que de la prueba testimonial de cargo rendida, cuyo mérito probatorio tantas veces ha sido plasmado en la presente sentencia , es posible encontrar en la cronología de los hechos, diversas etapas, una de ellas, constituida por el encuentro de los comuneros con las faenas forestales, para luego, y tras tomar desayuno, una a vez que se reanudada la marcha hacia el tranque del Fundo, un tercer momento, consistente en el encuentro con las faenas agrícolas, momento y lugar en donde se produce el hecho por el que se acusó. Que sobre el encuentro con las faenas forestales y la petición de paralización de las mismas, impresionan veraces a este Tribunal las declaraciones de Mario Llanquileo Quilaleo, quien refiere en particular “… que pararan las faenas, que se retiraran de ahí porque querían el terreno con los arboles parados… y ellos se fueron del lugar..”; en el mismo sentido Castro Cayul, quien advierte que conversaron con los trabajadores.. que pararan la tala.. los jefes hicieron caso y se retiraron..”; refrendando lo anterior Domingo Painen Marín, quien declara que “… hablaron con ellos, y les piden que se paren ( explotación de bosques) pues tenían conversaciones con CONADI… y se retiraron…”; a su turno y en el mismo sentido Maribel Aninao Llanquileo, quien sostuvo en estrados que advirtieron a los trabajadores “…que detuvieron las faenas , ya que también querían parte de la forestal y ellos se retiraron en ese momento…”; en el mismo orden de declaraciones aparece además el testimonio de Rolando Quintriqueo Huaquimil, quien refiere que “ amablemente pidieron que pararan la tala, porque había compromiso de compra.. Conversaron con el jefe y se retiraron..”; conjunto de testimonios que aparecen además refrendados por don Domingo Painen Nahuelhual, quien señaló, “que pacíficamente les pidieron que se retiraran por que el acuerdo con CONADI era la compra con bosques.. y que se retiraron pacíficamente los de la faena forestal”; por último confluyen en el mismo sentido los asertos de Enrique Llanquileo Quilaleo, quien refiere que como comprarían el suelo y subsuelo, y estaban talando, le dijeron a los forestales que se retiraran, y así lo hicieron...”.- En efecto, aparte de aparecer veraces sus asertos, según se señaló, por cuanto se trata de un número considerable de testigos que en tal punto en particular no refieren contradicciones, resulta relevante a estos sentenciadores que tal hecho en particular aparece inconexo con aquel por el que finalmente se ha dirigido la acción penal, de tal suerte que tampoco es posible colegir en este punto por parte de los infrascritos algún ánimo ganancial, de forma que por tratarse de un número considerable de testimonios en un mismo sentido, concordantes, y detallado, y además sin la existencia de ánimo ganancial, confieren a este Tribunal a la convicción de que el ingreso y requerimiento de paralización de faenas forestales se efectuó sin la violencia que sustenta la defensa en su tesis. Que el razonamiento anotado precedentemente además aparece corroborado con las declaraciones de tres funcionarios policiales, a saber Saldías Chavez; Palma Montenegro, y Salazar Arias, todos funcionarios de Carabineros, en cuanto expresan el primero de ellos, “ que a él no lo agredieron, ni fueron atacados cuando los visualizó alzar las manos…”; mientras el segundo mencionado refirió en particular “ que vio personas adultas con vestimentas normales.. que no tenían nada en las manos, no había ningún encapuchado, ni cubriendo sus rostros, y vestidos en forma normal… y que no tomó conocimiento de que los comuneros hayan atacado las faenas forestales”, agregando que “…no recibieron ningún impacto, ni de nada a lo que están acostumbrados…”; señalando el último de los mencionados en tal sentido que “ … se acercaron unos trabajadores a decirles que un grupo los echó del lugar...pero no recuerda como los echaron…” ; “ que no se percató si tenían lesiones los de la forestal.. ni que lo hayan mencionado, ni que hayan sufrido algún daño en sus vehículo, nadie, nada, solo se van ( los carabineros) al verlos llegar disgregándose en dirección al vehículo sin recibir agresión alguna de los comuneros…siendo una impresión que tuvo que pudiesen acercarse al carro… finaliza señalando que no hubo ningún tipo de agresión..”; testimonios que al provenir de personas que se encontraban en el lugar de los hechos, y que en su calidad de funcionarios policiales poseen la neutralidad suficiente para efectos de conferirle la credibilidad necesaria a su testimonio, y que por último corroboran la dinámica de hechos referidos por los testigos de cargo mencionado en el acápite anterior, permiten formar convicción, como se dijo en orden a que efectivamente el requerimiento de paralización de faenas existió, sin embargo sin la violencia en que sustenta su tesis la defensa.Que en esta parte se preferirá la declaración de los testigos de cargo, tanto por las razones que se han anotado, como por que los de descargo han referido algunas contradicciones respecto a este punto como que otros simplemente no aportan detalle en tal sentido, en particular Zanetti Muñoz, al referir su ubicación respecto de los hechos en distintas distancia, en efecto señala “ los vi a 300 metros,, luego a 100 tirándome piedras”; y advirtiéndose la contradicción entre lo narrado en juicio y lo declarado el 22 de enero de 2015, y en el ejercicio de superar contradicciones, afirmó encontrarse a 300 metros de donde estaba la gente y a 800 metros de la faena, distancias que por lo demás impresionan a este Tribunal la imposibilidad de oír aquello que afirma.- ( “..Escuchó que se fueran sino les iban a quemar la camioneta…”).- Que por otra parte Quintas Garrido, sólo afirma aquello que escuchó, mas no se trata de un testigo presencial de tal dinámica, pobreza del testimonio que aparece además superada con creces por los de cargo; en tanto Eliseo Gutiérrez Vergara, si bien refiere un encuentro con 4 encapuchados que lo conminan a darse la vuelta y retirarse ; además de que se debía paralizar todo, quienes en los dichos del testigo andaban con boleadoras, sin que haya recibido piedra alguna, y sin que haya visto la dinámica con los obreros forestales, además de agregar que esperó 1 hora la llegada de Carabineros, y que al no llegar se fue a Galvarino, donde sostuvo una conversación con una persona, impide concederle valor probatorio en cuanto a la violencia sustentada por la defensa, pues de la dinámica de hechos narrada por este último, no se advierten conductas condignas con un hecho de violencia grave.- Que por otra parte Henríquez Sanhueza, no advierte lanzamiento de piedras a los forestales ni tampoco a Carabineros, solo en sector de siembra los ve caminando con piedras y boleadoras, cuestión esta última que ningún otro testigo afirma, y que en cuanto a lo primero declarado no da cuenta de acto alguno de violencia.- Que en el caso de López Vidal, único que relata un hecho violento vívido, no resulta suficiente a juicio de estos sentenciadores a efectos de otorgarle valor probatorio, tanto por que los de cargo, mayor en número, resultan contestes entre sí, como que y además constituyéndose Carabineros en el lugar no efectuó denuncia alguna.Luego el testigo Cortes Peña, refiere estar trabajando en el potrero el Manzano, sembrando papas, avisándole por radio que había personas en el bosque, sin tomarle importancia, y que siguieron en su labor, para luego declarar circunstancias propias desarrolladas en el lugar en que se produce el atropello, por lo que nada aporta a los hechos de violencia sustentados por la defensa en el ingreso al Fundo, sino que por el contrario estos no fueron de la intensidad necesaria para calificarlos en tal sentido; por ultimo Ramón Cañete Paredes, solo da cuenta de hechos ocurrido en el potrero el Manzano, mas no en las faenas forestales.Sobre este mismo punto, cabe señalar que la Defensa además alegó la ilegalidad de la entrada de los comuneros al predio, es decir, que esta fue sin consentimiento de su dueño. Sobre, el punto, que desde ya, adelantamos en nada afectaría a la configuración del tipo de homicidio, según se explicará (el que matare a otro), la prueba de cargo es conteste y concordante entre sí, en orden a que la comunidad Nilpe 2 se encontraba en conversaciones con CONADI para comprar parte de dicho Fundo, junto a otra comunidad, y que esta habría “autorizado” el ingreso, agregando uno de los deponentes sobre la entrega de los planos del lugar, para su mejor elección, según así lo declaran los testigos Llanquileo Quilaleo; Castro Cayul, Painen Marin; Aninao Llanquileo; Painen Nahuelhual y de la querellante Enrique Llanquileo Quilaleo; no obstante ello, los documentos, entiéndase planos que eventualmente había entregado la Corporación aludida, no fueron aportados en apoyo a la testifical rendida, razón por la que pese a ser contestes tales asertos encuentran límite en su valor probatorio al ser confrontada con la negativa señalada por otro testigo de cargo don Rolando Quintriqueo Huaiquimil, quien refirió no haber sido autorizado por Raúl Quintas aquel día, de tal suerte que aun teniendo por suficientemente acreditada la existencia de una autorización por parte de la Corporación señalada, ello impide sostener en el presente fallo la existencia de una autorización suficiente para efectos de hacer ingreso al predio en cuestión, pues no existe antecedente que dé cuenta de autorización por parte del propietario del predio, único legitimado en tal sentido.- Razón por la que el ingreso se efectuó sin la autorización debida.Que en cuanto a las conductas desplegadas por los comuneros ya en el potrero el Manzano, lugar en que se produce el atropello, consistentes en arremeter en forma injustificada en contra de Cañete Paredes , quebrando el vidrio delantero, lateral izquierdo y trasero del tractor, produciéndole lesiones, ataque que lo desesperó; se debe señalar que de la prueba rendida, en especial de la dinámica de hechos relatados por el perito Olavarría Sepúlveda, cuyo mérito probatorio ha sido tantas veces descrito, es posible advertir un primer tramo de avance del tractor conducido por el encausado en que no se advierten vestigios de vidrios, encontrándose los primeros sólo una vez que el tractor realiza la primera variación del trayecto a la izquierda, dato incorporado por el perito, que permite presumir que sólo una vez iniciado el trayecto por parte del encausado y ya avanzado un tramo importante hacia el lugar en que se encontraban los comuneros se pudo producir el quiebre de los vidrios del tractor, sin embargo de esta dinámica de hechos, no es posible a estos sentenciadores sustentar la existencia de un arremetimiento por parte de los comuneros hacia Cañete Paredes, sino por el contrario, pudiendo este último efectuar una maniobra de evasión, es él quien se dirige hacia los mismos, generando suficiente provocación para que tal conducta sea repelida , con a lo menos una piedra que fue encontrada al interior de tractor. Que en cuanto a las lesiones causadas a Cañete Paredes y sus consecuencias, estas se acreditaron con la declaración del Médico que lo atendió de manera inmediata al hecho ocurrido, quien en su atestado señaló: “… se determinó que llegó en buen estado general desde el punto de vista psicológico, algo afectado, físicamente presentaba dos lesiones, una en la cara región fácil derecha de 1 cm, de baja energía, y la otra, un aumento de volumen en el hombro, el mecanismo había sido producida por el movimiento del asiento lo que es compatible con la lesión. Se le tomó la alcoholemia. No preguntó por la lesión de la cara ni su causa porque era leve, de baja energía. No alcanza a producir una ruptura de la piel, era solo una erosión.”; la que encuentra además correspondencia con al formulario de atención de urgencia número 5172052, de 1 de octubre de 2014, en que se da cuenta de la pequeña erosión facial izquierda de 1 cm de largo, contusión leve en hombro derecho, región escapular. Declaración rendida por quien posee los conocimientos suficientes para determinar tanto la existencia como la naturaleza de las lesiones padecidas por el encausado, y que en efecto estas fueron de muy baja intensidad, leves, y causando solo una erosión y documento no reprochado de contrario que da cuenta de la efectividad de lo aseverado por el medico deponente, y que genera convicción positiva sobre lo que allí se señala, al ser el documento de normal uso en el que se consignan las apreciaciones del facultativo de turno.- Que inmediato a lo anterior, advierten estos sentenciadores que tal aserto pugna con la declaración del imputado quien señaló al Tribunal que “…le dan un piedrazo en la cara lado izquierdo, se marea el tractor hace un giro, y un vaivén y como que una persona pasa a la pisadera o el tractor pasa por algo, y el tractor vaivén, y hace un giro, y él está con los ojos cerrados, mareado, cuando reacciona escucha mucho ruido, no tenía vidrio …”; por cuanto la entidad de las lesiones ratificadas por el profesional médico, a quien se preferirá en esta parte, tanto por las razones ya esgrimidas, como por que efectivamente se encuentra calificado para concluir aquello sobre lo que declara, distan a juicio de los infrascritos de producir la reacción advertida por el acusado, en efecto, mal pudo una lesión de la entidad señalada, causarle un mareo tal que haga que el tractor efectúe el giro y vaivén que declara, menos aún pudo producir algún tipo de pérdida de conciencia, que permita sostener la alegación de la defensa, lo anterior dado que además este Tribunal ya ha sostenido la acreditación en orden a que el acusado obró con dolo, cuestión contraria a esta tesis defensiva.En cuanto a la eximente del artículo 10 N° 8 del Código Penal: Al respecto esta es comúnmente conocida como como exención de responsabilidad penal por caso fortuito (inculpabilidad), la que doctrinariamente exige los siguientes requisitos para poder invocar la concurrencia de la misma: 1) Ocuparse en un acto lícito; 2) hacerlo con la debida diligencia; 3) causar un mal por mero accidente. Alfredo Etcheverry, en su libro Derecho penal Parte General, Tomo I, en su página 329 y siguientes, III edición, año 1999, Editorial Jurídica de Chile. Así, habiéndose dado por acreditado en el considerando décimo quinto y décimo sexto que la conducta del acusado Cañete Paredes fue dirigida a causar la muerte de la víctima, que su acción dolosa queda palmariamente sustentada en el giro y posterior repaso al cuerpo (tras haberlo topado en primera instancia) que realizó con el tractor, resulta entonces, incompatible que su actuar se encuadre en un caso fortuito, pues en efecto, Cañete Paredes sabía de la presencia de los mismos en el lugar con bastante anticipación, esto es, desde el encuentro de los comuneros con las faenas forestales, hecho que el propio acusado reconoce en su declaración, y sabiendo aquello, comienza a hacer gestos con la manos, tocar bocina (al grupo de comuneros) para luego, de manera directa dirigir su tractor hacia el camino por donde transitaban los comuneros, camino que tuvo una trayectoria de 173 metros, en línea recta, en el que no hay vestigio alguno de pisadas o desplazamiento humano, como tampoco restos vítreos, o boleadoras, por lo que mal pudo “aparecérsele” fortuitamente y de una manera absolutamente imprevisible la persona de Quintriqueo Huaiquimil. Además, en esta parte conviene hacerse cargo de la ausencia de visibilidad por parte del conductor respecto de la víctima sostenida por la defensa, la que si bien podría encontrar sustento en el peritaje evacuado por Juan Vega Norambuena, contraposición con lo tales conclusiones declarado por los se encuentran testigos de en cargo mencionados con anterioridad, en especial con aquellos que indican el gesto de Cañete Paredes de mirar hacia atrás una vez producido el primer golpe de la víctima, debiendo necesariamente preferirse a estos últimos en cuanto se trata de declaraciones vivenciales, a diferencia del perito cuyas conclusiones resultan de un análisis teórico que no comprende todas las variantes del hecho, como por ejemplo, y además del decisivo gesto de mirar hacia atrás que le genera visión panorámica del sector en que se encontraba la víctima, la presencia de Castro Cayul a un costado y auxiliando a Quintriqueo Huaiquimil, luego del primer golpe, presencia que pudo perfectamente otorgar referencia sobre la ubicación de la víctima al encausado. Ante la carencia anotada en la pericial descrita se preferirá la declaración de los testigos Quintriqueo presenciales Huaiquimil, y Llanquileo Quilaleo, Painen Marín, quienes Castro Cayul, advierten la existencia del gesto por parte del conductor de mirar hacia atrás, las que cobran fuerza sobre todo al revisar las declaraciones de Maribel Aninao, Enrique Llanquileo y Painen Nahuelhual, quienes ubican sobre todo a Castro Cayul auxiliando a la víctima.Que un clásico ejemplo de caso fortuito que se enseña en las aulas de Derecho, y que resulta por cierto clarificador, es aquel en que una persona maneja su vehículo a la velocidad permitida por ley, con licencia de conducir, sin estar bajo los efectos del alcohol o en estado de ebriedad, sin infringir norma alguna de tránsito y desplazándose por medio de la carretera un sujeto ebrio resulta muerto, por el atropello del conductor. Conducir en las condiciones señaladas es un acto lícito, hacerlo en las circunstancias descritas da cuenta de la debida diligencia, y causar un mal (la muerte del sujeto ebrio) resulta ser por mero accidente, pues nadie en dicho contexto puede prever que un sujeto ebrio se desplace por medio del camino. En el caso de marras, aquello no sucedió, por las razones ya anotadas, debiendo dejarse en claro que no concurre el requisito base de la causa de exculpación alegada. En cuanto a la eximente del artículo 10 N° 4 del Código Penal: Respecto a la eximente alegada por la Defensa, cabe en primer lugar recordar para efectos de orden, que se entiende por esta y los requisitos para su configuración. Respecto a su concepto como se indica por Alfredo Etcheverry en su libro Derecho Penal Parte General, Tomo I, en su página 249 y siguientes, III edición, año 1999, Editorial Jurídica de Chile, esta es la reacción necesaria contra una agresión injusta, actual y no provocada (Soler). Recogida en nuestro Código Penal la doctrina mayoritaria y actual, no discute la naturaleza de causal de justificación, que torna lícito el acto típico. Así, recogida en el numeral 4 del artículo 10 del Código Penal, se requiere la concurrencia de: 1) existencia de una agresión ilegítima; 2) Necesidad racional de los medios empleados en la defensa; 3) La falta de provocación suficiente. Lecciones de Derecho penal Chileno, Parte General, Sergio Politoff, Jean Pierre Matus y María Cecilia Ramírez, pagina 215 y siguientes. Mismos requisitos que señala Alfredo Etcheverry en su libro Derecho Penal, Parte General, Tomo I, en su página 252 y siguientes. Que al respecto, y conforme se ha venido razonando solo cabe desechar la misma por parte de este Tribunal, pues, en primer lugar, siendo una situación exculpatoria, debió probar adecuadamente la concurrencia de los requisitos fácticos en los que se apoyaba, asumiendo la carga de la prueba, sin lograrlo. En efecto, hemos dado por acreditado que el acusado obró dolosamente, que dirigió su acción hacia un grupo de personas, entre los que estaba la víctima, sin que existiera por parte de estos una agresión provocadora, sino por el contrario, que transitaban de manera pacífica por el camino que separa la siembra de papas y de trigo. Dicho de otro modo, no existió en los hechos el primero de los requisitos que exige la eximente en comento, esto es, la existencia de una agresión ilegítima. En efecto, se tuvo por asentado que quien profirió bocinazos y gestos a los comuneros presentes, fue el propio acusado, quien acto continuo, en lugar de huir de los hechos como lo hizo el resto de sus compañeros, avanzó de manera directa hacia los mismos, en línea recta por 173 metros, para luego, efectuar las numerosos maniobras circulares, y que da cuenta la fotografía área exhibida por el perito Olavarría Sepúlveda, cuyo mérito ya fue razonado, sustentando férreamente la tesis del órgano persecutor. Además, de la dinámica de los hechos referidos por el perito precedentemente mencionado, es posible advertir que en un primer tramo del tránsito del vehículo conducido por Cañete Paredes, no existen vestigios de vidrios quebrados, los que solo aparecen ya avanzado el móvil hacia los comuneros, cuestión que permite a estos sentenciadores presumir de manera precisa que la acción desplegada por el encausado de dirigir su tractor de gran tonelaje hacia el lugar en que precisamente se encontraban los comuneros transitando (pudiendo efectuar otra maniobra evasiva según se analizó), constituyó una agresión suficiente para que estos respondieran con a lo menos un piedrazo, correspondiente a la piedra de menor tamaño encontrada al interior del vehículo, y quebraran los vidrios del mismo, cuestión que revela la imposibilidad de acoger la eximente alegada por la defensa.Que por último y en cuanto a la velocidad del tractor conducido por el encartado, dicha circunstancia no fue suficientemente acreditada en juicio, sin embargo huelga señalar que cualquiera haya sido esta ocasiono de todas formas la muerte de Quintriqueo Huaiquimil.DECIMO NOVENO: Prueba desechada en particular. Que la prueba material incorporada por la Defensa, consistente en un gorro de lana y un bolso negro con seis piedras pequeñas en su interior, no será valorada por el Tribunal, en tanto, durante toda la secuela del juicio no fue posible determinar a quién pertenecían las mismas, de tal suerte que nada aportó al esclarecimiento de los hechos por los que se dedujo acusación. Luego, y en el mismo sentido la declaración de Rodrigo González Rojas, perito fotógrafo de la Policía de Investigaciones de Chile, quien fue presentado para dar cuenta de su informe pericial fotográfico N° 111, de fecha 02 de abril de 2015, toda vez que su trabajo consistió en fijar por inspección ocular el sitio del suceso, y las distancias en las cuales el conductor podía ver a las personas, para lo cual exhibió unas fotografías incorporadas como prueba material, sin embargo, al ser consultado por la Fiscalía señaló que la vista siempre permite una visión más amplia que la fotografía, y además que el lente de 35 mm con los que realizó su pericia poseen un limitado ángulo de visión, por último, refirió que la altura del fotógrafo no es la misma que la del acusado, por lo que las distancias podían variar, de suerte, que no aportó dato alguno, objetivo y serio, que permitiese formar convicción acerca de la real percepción que tenía el encausado al momento de ocurrir los hechos. En igual sentido, la declaración de Juan Vega Norambuena, perito planimétrico, quien apoyado de material fotográfico del sitio del suceso, dirigió su trabajo a establecer el ángulo de visibilidad del conductor, declaración que si bien, ya fue contrastada con la declaración de los testigos de cargo presenciales prefiriéndose a éstos últimos, por sobre aquella, debe necesariamente anotarse que al no contemplar la hipótesis de encontrarse al lado de la víctima el testigo Castro Cayul, según fuese determinado, ya en el presente fallo, no resultó idóneo para cubrir todas las hipótesis del sitio del suceso. Que en cuanto a las imágenes contenidas en un disco compacto incorporados por el Ministerio Público, a través de la declaración de Mario Llanquileo Quilaleo, serán desechadas desde que las imágenes allí contenidas no son completas ni claras para efectos de determinar si en ellas se contiene algún hecho que contribuya a la solución del conflicto jurídico penal sometido a decisión de este Tribunal.Por su parte, la prueba de la defensa consistente en las declaraciones de Zanetti Muñoz, Quintas Garrido, Gutiérrez Vegara, Henríquez Sanhueza, López Vidal, Cortez Peña y Ramón Cañete Paredes, fue analizado su valor probatorio y desechadas en el considerando décimo séptimo del presente fallo. Que además de lo ya señalado y respecto a sus declaraciones, sobre hechos distintos a los considerandos en el razonando décimo séptimo, nada aportan respecto al hecho que constituye el homicidio propiamente tal, pues, en el caso de Quintas Garrido es de oídas, por tanto declaró sobre lo que terceros le explicaron por teléfono acerca de lo acaecido algunas horas antes del hecho preciso que nos ocupa; y en el caso de los restantes testigos no se encontraban en el lugar de los hechos al momento de ocurrencia del atropello y aplastamiento que terminó con la vida de Quintriqueo Huaiquimil. Que si bien se encontraban en el Fundo los testigos Henríquez Sanhueza, Cortez Peña y Ramón Cañete Paredes, todos son contestes en señalar que al bajar el vehículo de marras al declive natural del potrero, perdieron la visión de dicho tractor, y por ende, no advirtieron la dinámica de conducción de y arremetimiento de Cañete Paredes. Que la documental consistente en Informe Técnico emitido por Salinas y Fabres, corre la misma suerte, toda vez que se refirió a las recomendaciones de velocidades máximas y otras circunstancias de desempeño del móvil, cuestiones que a juicio de estos sentenciadores no aportan en lo esencial a la determinación del tipo y participación del encartado, como que tampoco se advierte de su tenor, alguna circunstancias extraíble en apoyo de la tesis de la defensa, a fin de configurar las modificatorias de responsabilidad penal que alegó en su oportunidad, pues sobre la velocidad, solo es posible extraer el mínimo y máximo en que se puede conducir el tractor de marras, mas no la velocidad exacta en que era conducido al momento de suceder los hechos, que en todo caso, produjo la muerte de la víctima. Igual suerte corrieron la pericial de la Defensa consiste en la declaración de Iván Torres Bernal, perito Armero Artificiero, y Carlos Woldarsky Cea, Perito Criminalístico de la Defensoría Penal; el primero de ellos, por cuanto si bien otorga las características de la honda periciada, no puede asegurar con certeza si esta fue o no utilizada recientemente (a los hechos convocados), sobre todo si se tiene en cuenta que según la declaración del perito Olavarría Sepúlveda, esta fue encontrada en un bosque, sin mayores descripciones que den cuenta sobre la data de su uso, y en especial, a quien pertenecía. Para el segundo de ellos, será desechada su pericia, por cuanto, su labor fue desarrollada en corto tiempo, y para efectos de incorporar la misma en la audiencia de control de la detención del acusado, según el mismo perito indicó, agregando el haber encontrado piedras (al menos dos) “retiradas desde el interior del tractor periciado”, lo que no se condice con la única piedra encontrada con el Perito Olavarría Sepúlveda, quien se constituyó en el sitio del suceso el día de los hechos, a diferencia de Woldarsky Cea, quien lo hace al día siguiente, y que el ser “retiradas” y no encontradas y fijadas dentro de la cabina del tractor, restan seriedad e idoneidad bastante para ser valorado en su mérito. Finalmente y además, al ser efectuado en día posterior a los hechos, no otorga suficiente formalidad acerca de su contenido y conclusiones, pues el sitio del suceso pudo ser modificado, tras las horas transcurridas, y porque además, el mismo afirmó no haber podido concluir su inspección ocular, al ser requerido por Carabineros en orden a retirarse del Fundo. Finalmente, su pericial no tuvo en cuenta para su elaboración el análisis de las lesiones provocadas la víctima, como así tampoco, la restante prueba criminalística levantada in situ el día de los hechos. Que en cuanto al CD incorporado por la Defensa, el que contiene una fotografía de las faenas forestales, y dos videos en que se aprecia una maquinaria avanzando por un camino, y al fondo de un bosque un grupo de personas, que fuera exhibido a través de la declaración del testigo Zanetti Muñoz, serán desechado por cuanto el propio testigo los ubica en la faenas forestales, en un lugar distinto al de ocurrencia del hecho por el que se dedujo acusación, y porque además, lo anterior hace de la imagen una inútil probanza a la determinación del hecho punible, como de la tesis del acusado, pues no se advierten los gritos de amenaza, uso de piedras y boleadoras que el testigo y la Defensa afirmaron existir. Que respecto a la perito Pía Smoke Vásquez, pese a ser clara en su relato sobre la criminodinámica de los hechos, refiriendo que la muerte de Quintriqueo Huaiquimil se produjo por un atropello en dos fases, y acreditar conocimientos y estudios en su área, será desechada su declaración, por cuanto, su pericia teórica no fue apoyada con una labor realizada in situ en el sitio del suceso, como tampoco haber participado en la autopsia del cadáver, de manera que resultó más clarificadora, idónea y suficiente a dichos efectos, la pericial de la tanatóloga Nubia Riquelme Zornow. VIGESIMO: Audiencia del artículo 343 del Código Procesal Penal: Que en la oportunidad procesal correspondiente se abrió debate para los efectos contemplados en el inciso final del artículo 343 del Código Procesal Penal, otorgándose la palabra, en primer término, al representante del Ministerio Público, quien se limitó a acompañar el extracto de filiación y antecedentes del acusado, sin anotaciones en el mismo. El querellante, a su turno, se adhirió a lo señalado por el órgano persecutor. Por su parte la Defensa, sostuvo que concurren las siguientes eximentes incompletas, y exógenas al delito. En primer lugar, alega la prevista en el artículo 10 N° 9 en relación al artículo 11 N° 1 del mismo Código Penal, pues Cañete, si bien su miedo no lo asumió como insuperable, tuvo miedo y por eso actuó en la forma que lo hizo, frente a una agresión inminente, anterior y posterior al hecho, decidiendo huir, lamentablemente falleciendo José Mauricio Quintriqueo. Asimismo, alegó la concurrencia de la minorante prevista en el artículo 11 numeral 5 del mismo cuerpo legal, esto es obrar por estímulos tan poderosos que produzcan arrebato u obcecación, arrebato que a juicio de la Defensa “está definido por el estado latente que produce una ofuscación que se desarrolla en diferentes oportunidades en el hecho” (sic), sosteniendo además, que produce una ofuscación, que es exógena al tipo. Alegó así también, que concurre la prevista en el artículo 11 N° 6 y N° 7, ambas del Código Penal, estimando la primera de ellas como muy calificada. Sustentó su alegación, respecto de ambas, en el informe social incorporado, que indica que el acusado es casado hace 19 años, de la relación tiene dos hijos, Jerson de 18 y Edison de 12 años, ambos estudiantes, viven en el fundo Nilpe por razones de seguridad, lo que ha significado cambios en el grupo familiar, principalmente por parte de los menores, que posee un profundo arraigo familiar y social, presentando red de apoyo, viviendo actualmente en Fundo Nilpe, participa en iglesia evangélica, y es socio activo de la comunidad Manuel Marín, reconocida por CONADI. Que el principal ingreso lo recibe el encartado, por una suma de 250 mil pesos, demostrando además, responsabilidad, buen trato, y honradez. Que en relación a la cantidad es más que plausible el depósito y esfuerzo en reparar algo que el estimó, y según las fuerzas de su patrimonio, y además hace presente que no es colocar en caso alguno precio a la vida de una persona. En cuanto a aquella prevista en el artículo 11 N°7 del cuerpo legal ya citado, sostuvo la Defensa que el depósito que su representado hizo de 600 mil pesos en la cuenta corriente del Juzgado de Lautaro, es suficiente para estimar que concurre, toda vez, que supera con más su remuneración mensual, unido ello al tiempo que estuvo privado de libertad, y ser el principal sustento de su familia. Finalmente, alegó que a Cañete Paredes le asiste una legislación especial, el Convenio 169 que acredita con certificado ser miembro de una comunidad mapuche, resultando plenamente aplicable en su artículo 10 que señala que cuando se impongan sanciones penales previstas por la legislación general a miembros de pueblos originarios deberán y tenerse en cuentas sus características económicas, sociales y culturales, debiendo darse preferencia a sanciones de tipo distinto al encarcelamiento. Indicó que el acusado es miembro de una comunidad mapuche, pueblo originario. Cita además en apoyo de su defensa el artículo 18 del Código Penal; el 5 y 19 N° 3 de la Constitución Política de la República, aplicable incluso de oficio, por lo que la pena a aplicar no debiese exceder de presidio menor en su grado máximo. El artículo 67 del Código Penal a su juicio se debe aplicar, pudiéndose rebajar la pena en dos grados la sanción, graduando la pena en aquel rango y siempre con el beneficio de la libertad vigilada.A su turno el Ministerio Público, indicó que no existe fundamento para acoger ninguna de ellas, la del 10 N° 9 en relación 11 N° 1, ambos del Código Penal, obrar por fuerza irresistible, no es exógena a los hechos, es inherente al mismo delito, y debió ser acreditada durante el juicio, si sostiene que actuó motivado por esta fuerza irresistible, debió haberlo acreditado, no rindiendo ninguna prueba al efecto, ni fueron hechos considerados. En cuanto al artículo 11 N° 5 del cuerpo legal citado, considera que igualmente dice relación con la imputación que se formuló y los hechos en si mismos, por la naturaleza misma de la atenuante invocada, debió rendirse prueba, sin que a su juicio existan estímulos externos que lo motivaran a obrar como lo hizo, conforme se acreditó con la prueba de cargo. Él tuvo la posibilidad de tomar una vía distinta, para evitar un encuentro con la víctima, lo que no hizo, los enfrentó, a diferencia de sus compañeros. En cuanto a la prevista en el artículo 11 N° 6 del Código Punitivo, la reconoce pero de calificarla, cree que en un supuesto arraigo familiar y social no da, y tampoco se ha rendido prueba, no se ha acreditado su conducta pretérita, o con otros miembros de la comunidad. En lo que respecta al artículo 11 N° 7 del Código tantas veces referido, la ley es clara en orden a que debe ser celosa, hace bien al señalar que no existe cantidad de dinero que repare, pero aun así la suma, que se ha consignado es insuficiente. Declaró la víctima indirecta indicando que la víctima directa era quien le daba sustento, él que ya no existe. Que en lo que atañe al Convenio 169, y su artículo 110, señala que si bien es normativa aplicable, obviamente se debe ajustar la sanción que se imponga a la ley general, y tiene mayor aplicación en delitos contra la propiedad, pero jamás contra la vida, además de que la víctima también es mapuche. Finalmente la pena que más se ajusta, es la mínima de 10 años y un día. El Querellante a su turno, se opuso a la solicitud artículo 11 N°6 del Código Penal, en cuanto a calificarla. En cuanto a la eximente incompleta, cita un comentario del Código Penal Chileno que señala, que en el autor debe estar alterado en grado tal que deba ser calificado cono anormal o excepcional, y de acuerdo su apreciación no hubo prueba al respecto, no hay anormalidad o excepcionalidad, los informes periciales señalan que avanzó 173 metros hasta el lugar donde estaba la persona, evidentemente sus sentidos estaban normales, lo mismo respecto al artículo 11 N° 5. El resto de los tractoristas evitó el hecho a diferencia del acusado. En cuanto al 11 N° 6 no le parece que sea calificada, no ha asistido a estrados la asistente social sin poder hacer contra examen, y no ha acreditado con ningún otro antecedente la conducta irreprochable calificada, si bien no tiene condena anteriores, ello no es mérito suficiente para calificarla. En orden al artículo 10 N° 7 ha depositado 600 mil pesos, el celo se debe demostrar de un esfuerzo, en orden al enorme mal causado, que es la vida de una persona. Ha estado 1 año y 3 meses en libertad, y ha depositado en todo es tiempo 600 mil pesos, debió ser un monto mayor, debe ser analizado en relación a las condición de libertad en que ha estado, y ser de mayor entidad. Cita un caso de incendio en que no se la otorgó la atenuante al acusado, en circunstancias que consignó 700 mil pesos, estimándose exigua. Añadió que se le reconoce la calidad mapuche del acusado, pero eso no significa una eximente o pena sustitutiva por el solo hecho de serlo, recuerda que la ley actual prohíbe las penas sustitutivas en el delito de homicidio, y habiendo disposición expresa, solicitó la parte menor de la pena, la que es proporcional al delito de homicidio. La Defensa; indicó que las dos primeras atenuantes alegadas, son aplicable en la especie, y que son inherente al delito; “inherente es lo que dice relación con el núcleo del tipo penal, que es matar a otro, y es la disposición subjetiva del agente, lo otro no es inherente, es exógeno” (sic). Del 11 N° 6 calificado, refirió que la alegación de la querellante no es efectiva, no se requiere la presencia del asistente social, es una audiencia de entrega de antecedentes, que el Tribunal valora en su mérito, no de prueba. En orden al 11 N° 7, manifestó que una persona que gana 250 mil pesos, que gastó su escuálido dinero para atestiguar en dos juicios, y que estuvo privado de libertad, juntando de a poco su dinero, es una reparación con celo del mal causado, depositando casi 3 veces la cantidad que percibe por sueldo. En cuanto al Convenio sólo dice que al tener la calidad de originario también le es aplicable el artículo 1 ley 18.216 por ende, es merecedor de la libertad vigilada, ya que el artículo 10 del Convenio 169 señala que deben preferirse las penas que no sean privativas de libertad, y eso lo ha alegado el Sr. Saavedra en múltiples ocasiones. Lo sacaron de sus propias alegaciones. VIGESIMO PRIMERO: Resuelve sobre las circunstancias modificatorias de Responsabilidad Penal: A.- Respecto de la eximente incompleta prevista en el artículo 10 N° 9 en relación al artículo 11 N° 1 del mismo Código Penal, que la defensa sustentó en que Cañete Paredes tuvo miedo y por eso actuó en la forma que lo hizo, frente a una acción inminente, anterior y posterior al hecho, y decidió huir, lamentablemente falleciendo José Mauricio Quintriqueo. Que en primer lugar, cabe señalar que la circunstancia alegada lo ha sido extemporáneamente, pues resulta ser inherente al delito, de manera tal que procede su rechazo. Sin perjuicio de ello, y en cuanto al fondo de la misma, igualmente debe ser descartada, pues huelga señalar lo mismo que se razonó a propósito de la legítima defensa, en orden a que la conducta del acusado fue dolosa, y dirigida por ende, a causar la muerte de la víctima. Sin perjuicio de ello, de vital importancia para desechar la misma, es la circunstancia de no haberse aportado probanza alguna en el juicio, que sustente el miedo que alega la defensa, pues tal miedo no es posible darlo por acreditado por la sola afirmación de su existencia. Además de la pericial criminalística y planimetría rendida por Olavarría Sepúlveda se advierte que la agresión que se refleja en la rotura de cristales de la cabina del tractor es, a diferencia de lo planteado por la defensa, compatible a juicio de estos sentenciadores con una respuesta a una primera conducta agresiva y peligro generado por el propio acusado, según se dijo en el considerando décimo séptimo de la presente sentencia.- Valga señalar finalmente en esta parte, que el miedo requerido por el legislador debe ser caracterizado de manera esencial por la insuperabilidad, característica esta última que desaparece totalmente al colegirse tanto la provocación antes señalada, como la presencia del dolo directo según se dijo, no bastando solo la existencia del miedo por si solo para configurar la eximente incompleta, pues ante la presencia sólo de este último, bien pudo evadir la aglomeración de comuneros y no provocara la misma, como se razonó ya en la presente sentencia.B.- Asimismo, alegó la concurrencia de la minorante prevista en el artículo 11 numeral 5 del mismo cuerpo legal, esto es obrar por estímulos tan poderosos que produzcan arrebato u obcecación, arrebato que a juicio de la Defensa “está definido por el estado latente que se desarrolla en diferentes oportunidades en el hecho” (sic), sosteniendo además, que produce una ofuscación, que es exógena al tipo. Que en primer lugar, cabe señalar que la circunstancia alegada lo ha sido extemporáneamente, pues resulta ser inherente al delito de manera tal que procede su rechazo. Sin perjuicio de ello, y en cuanto al fondo de la misma, igualmente debe ser descartada, pues según invariablemente se trata tanto en doctrina como en la jurisprudencia; (Ej. Rol 974-2006, Ilustrísima Corte Apelaciones de Santiago); esta minorante de responsabilidad descansa sobre la base de que el estímulo externo sea de tal magnitud que produzca un efecto en el estado anímico del acusado, y que lo prive en definitiva del normal estado de reflexión, siendo por cierto carga del acusado acreditar en el juicio la concurrencia de tales elementos. Al respecto, no se advierte de la prueba de descargo antecedente alguno que permita sustentar la concurrencia de la atenuante alegada, pues como ya ha sido latamente descrito, ponderado prueba y razonado, los hechos de violencia que describe la defensa en su alegación no han sido acreditados de tal forma que permitan corroborar que aquel estimulo externo creó en la persona del acusado el estado irreflexivo requerido; por el contrario se ha dicho que la violencia descrita por la defensa en la etapa en que se produce el encuentro con los obreros forestales no existe en los términos graves sustentados en estrados, así lo afirma incluso el propio acusado quien señala haber visto a los comuneros pero siguió trabajando; además y ya en el lugar de los hechos, entiéndase potrero el Manzano, se ha determinado necesariamente que la pedrada recibida por José Cañete fue en primer lugar provocada por su conducción hacia el lugar de los hechos, pudiendo evadirlo (dolo), como además que tal pedrada, atendida la naturaleza de las lesiones no pudo generarle algún tipo de inconciencia. En este último punto destaca en la prueba de cargo la declaración del médico que atendió a Cañete Paredes quien da cuenta de su estado psicológico y de que el propio Cañete Paredes le refiere que se había escapado de control, sin embargo el propio testigo médico advierte que la herida no pudo ser causante de algún mareo, si lo pudo haber sido el stress, sin embargo no existe antecedente médico alguno que permita concluir que alguna situación de stress haya producido el efecto antes señalado, como que y además, la atenuante alegada no puede sustentarse en la existencia de un simple mareo, por cuanto ello no implica necesariamente la conducta irreflexiva requerida por el legislador.C.- En cuanto a la minorante prevista en el artículo 11 N° 6 del Código Penal, esto es, la irreprochable conducta anterior de Cañete Paredes, será acogida por el Tribunal, pues de su extracto aparece prístinamente que éste carece de anotaciones en el mismo. En cuanto a estimarla como muy calificada, no acogerán los infrascritos dicha petición, pues habiéndose reconocido ya dos atenuantes, no procede su calificación al tenor de lo previsto en el artículo 68 bis del Código Penal, que autoriza calificar cuando solo concurre una circunstancia atenuante. Sin perjuicio de lo anterior y además, no se incorporaron antecedentes que den cuenta de su conducta previa a los hechos, que importen una especial posición con la sociedad o con su comunidad, que figuren calificar la misma. En efecto, su irreprochable conducta anterior ha quedada establecida con su extracto de Filiación y Antecedes, y ha sido recogida como minorante de responsabilidad penal, sin embargo, ello no faculta por si solo a calificarla sin más, o fundada meramente en su arraigo social y familiar, pues lo que ha querido el legislador, es dar un trato distinto a quien es merecedor al mismo por su especial conducta previa, es decir, que su conducta anterior a los hechos sea destacada por sobre el promedio de los ciudadanos. Dicho de otro modo, el informe social incorporado por su defensa en la audiencia del artículo 343 del Código Procesal penal no permite en caso alguno concluir que José Cañete Paredes posea un grado superior de virtudes de carácter, que permitan calificar su conducta la misma como excepcional. En cuanto a aquella prevista en el artículo 11 N°7 del cuerpo legal ya citado, el Tribunal estima concurrente la minorante alegada, pues a pesar de la oposición del fiscal y querellante, y sus argumentos para ello, esta debe ser valorada con atención a las propias condiciones de quien efectúa el depósito para el fin que indica, y no debe estarse sólo al monto del importe o consignación. Así las cosas, del documento acompañado, unido al informe social, que no fue objetado por los restantes intervinientes, se tiene que el monto consignado por el acusado supera en más de dos veces su remuneración mensual, y teniendo además en consideración que estuvo privado de libertad, y que no se le han acreditado caudales económicos, se estima concurrente la misma, por haber sido celoso el intento de reparar, al menos, en parte las consecuencias del delito. E.- En cuanto a la solicitud de aplicar el Convenio N° 169 de la OIT en su artículo 10 al momento de determinar la forma de cumplimiento de la pena, cabe señalar que tal norma no resulta perentoria al afecto, pues su redacción señala un preferencia en orden a aplicar respecto de quien posee la calidad allí indicada, sanciones distintas del encarcelamiento, sin embargo ello encuentra su límite, a juicio de estos sentenciadores en el texto expreso de la norma prevista en el artículo 1 inciso 2° de la Ley 18.216, de tal suerte que no existe pena o sanción alguna que pueda otorgar a estos sentenciadores la facultad de elegir preferentemente alguna distinta a aquellas señaladas en el Código Penal; por otra parte debe necesariamente tenerse en consideración que la víctima también poseía en los hechos la calidad de indígena, sus nombres y apellidos así lo indican, además de encontrarse el día de los hechos en actividades propias de la comunidad Nilpe 2, no obstante todo lo anterior, se debe tener en consideración que lo dispuesto en tal norma recibe aplicación siempre y cuando ello sea compatible, con el sistema jurídico nacional, mismo espíritu que posee la norma inmediatamente anterior en orden a la aplicación de medios de represión por delitos cometidos por miembros de alguna comunidad indígena; en tal orden de ideas, debe tenerse en cuenta el artículo 18 inciso primero del Código Penal, en cuanto dispone que ningún delito se castigará con otra pena la que le señale una ley promulgada con anterioridad a su perpetración, para el caso de autos, el artículo 391 N° 2 del Código Penal con su modificación de fecha 17 de septiembre de 2014. Además, y en cuanto a preferir un sistema distinto al encarcelamiento, debe estarse a lo dispuesto en el artículo 1 inciso segundo de la Ley 18.216, que dispone la improcedencia de alguna de dichas pena alternativa para el caso del homicidio. Razón por la que mal pueden estos sentenciadores preferir, algún tipo de pena alternativa a la impuesta por la ley, no obstante las medidas administrativas que pueda adoptar gendarmería de Chile en su oportunidad. VIGESIMO SEGUNDO: Quantum de la pena. Que, el hecho incriminado es constitutivo del delito de homicidio simple, castigado con la pena signada en el numeral 2º del artículo 391 del Código Penal, consistente en presidio mayor en su grado medio, esto es, 10 años y 1 día a 15 años. Teniendo como base dicha plataforma punitiva y obrando a favor del enjuiciado dos atenuantes, sin que le perjudiquen agravantes de responsabilidad, y de conformidad a lo previsto en el artículo 67 del Código Punitivo, la sanción se rebajará en un grado, quedando el Tribunal facultado para recorrer el tramo que va de 5 años y 1 día a 10 años de presidio mayor en su grado mínimo. Además de dichas pautas de mensuración, para graduar la condena se tomará en especial consideración lo dispuesto en el artículo 69 del mismo cuerpo de leyes, a saber, número y entidad de las atenuantes concurrentes, y la extensión del mal producido por el delito, que si bien produjo el término de la vida de una persona no existe prueba, salvo el relato de la víctima indirecta, que dé cuenta de cada una de las consecuencias perniciosas del actuar del acusado. Así las cosas, y concurriendo en su favor dos atenuantes de responsabilidad penal, se aplicará la pena en el mínimo del grado correspondiente según se dijo esto es, en 5 años y 1 día de presidio mayor en su grado mínimo. VIGESIMO TERCERO: Penas sustitutivas. Que, atendida la duración de la sanción a imponer, y en especial, el delito por el que será condenado, no es posible conceder al acusado ninguna de las penas alternativas al cumplimiento de la sanción, contempladas en la Ley N° 18.216. VIGESIMO CUARTO: Huella. Que, se dispondrá la inclusión de la huella genética del imputado en el registro de condenados previsto en la Ley 19.970, por aplicación del precepto imperativo contenido en el artículo 17 de la mencionada ley. VIGESIMO QUINTO: Costas: Que, de acuerdo a la facultad prevista en el artículo 47 inciso final del Código Procesal Penal, considerando los gastos que irroga la defensa de dos juicios consecutivos, la circunstancia de haber estado José Cañete Paredes privado de libertad, y en especial, los caudales económicos del mismo de acuerdo fuere informado en la audiencia del artículo 343 del Código ya citado, a través del informe social respectivo, se le exime del pago de las costas. Por estas consideraciones y visto además lo dispuesto en los artículos 1, 3, 5, 7; artículo 10 N °s 4, 8 y 9; artículo 11 N °s 1, 5, 6 y 7; artículo 15 N° 1; artículos 28, 67, y 391 N° 2 del Código Penal; artículos 1, 4, 47, 297, 340, 341, 342 y siguientes, 339 al 343 del Código Procesal Penal; artículo 1 de la Ley N° 18.216, artículo 10 del Convenio N° 169 de la OIT, este Tribunal de Juicio Oral En Lo Penal de Temuco RESUELVE y DECLARA: I.- Que, se CONDENA, al acusado JOSÉ PEDRO CAÑETE PAREDES, RUN 15.236.521-7, ya individualizado en lo expositivo de esta sentencia, como autor del delito consumado de homicidio, descrito y sancionado en el artículo 391 N° 2 del Código Penal, perpetrado el día 1 de octubre de 2014, al interior del Fundo Nilpe, en la comuna de Galvarino, en la persona de José Mauricio Quintriqueo Huaiquimil, a la pena de cinco años y un día (5 años y 1 día) de presidio mayor en su grado mínimo. II.- Que, se lo condena, asimismo, a las penas accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos e inhabilitación absoluta para cargos u oficios públicos durante el tiempo de la pena principal. III.- Que, la pena privativa de libertad anteriormente impuesta será ejecutada efectivamente, al carecer el condenado de requisitos para gozar de las penas sustitutivas de la Ley 18.216 conforme a lo dispuesto en el artículo 1 de la misma. IV.- Que, sin perjuicio de lo anterior, le servirá de abono para el cómputo de la pena corporal impuesta el tiempo que ha permanecido privado de libertad a consecuencia de esta causa, esto es, en detención desde el día 1 de octubre de 2014 y hasta el día 04 de octubre de 2014, y desde ese día bajo la medida cautelar de prisión preventiva hasta el 8 de Noviembre de 2014, y desde esta última bajo la medida cautelar del artículo 155 del Código Procesal Penal, letra a) de arresto domiciliario total, primero, y desde el 1 de diciembre de 2014 con arresto domiciliario parcial entre las 19:00 y las 07:00 horas hasta el 19 de febrero de 2015, según reza el auto de apertura respectivo, sin perjuicio de lo que sea determinado con mayores antecedentes por el Tribunal de ejecución. V.- Que, de conformidad a lo dispuesto en el artículo 17 de la Ley 19.970 y su Reglamento, si no se hubiere ya efectuado, se ordena la toma de muestra biológica al condenado JOSÉ PEDRO CAÑETE PAREDES, con la finalidad de determinar sus huellas genéticas, y su posterior inclusión en el registro de condenados que al efecto administra el Servicio de Registro Civil e Identificación. VI.- Que no se condena al acusado al pago de las costas, por las razones indicadas en el considerando vigésimo quinto del presente fallo. Devuélvase la prueba documental a los intervinientes. Ejecutoriada que sea esa sentencia, remítase copia autorizada al Tribunal con competencia en Garantía respectivo, para los fines de los artículos 468 del Código Procesal Penal y 113 del Código Orgánico de Tribunales. Remítase formato digital de esta sentencia definitiva por la Unidad de Administración de Causas, a los correos electrónicos que los intervinientes hayan registrado en el Tribunal. Regístrese, y archívese cuando corresponda. Redactada por la Juez Rocío Antonella Pinilla Dabbadie. R.I.T. : 218 / 2015 R.U.C. : 14 00 95 06 18 - 8 CÓDIGO DELITO : 702 Pronunciada por la Sala No Inhabilitada del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco, integrada por los jueces Oscar Luis Viñuela Aller, Juan Bladimiro Santana Soto, y Rocío Antonella Pinilla Dabbadie.