Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 2 (Negro plancha) Tomás Marco Segismundo [Soñar el sueño] DAVID AZURZA MANUEL GALIANA DIRECTOR: JOSÉ LUIS TEMES Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 4 (Negro plancha) To m á s M a r c o ( * 1 9 4 2 ) Segismundo (Soñar el sueño) (2003) Ópera de bolsillo, e s t r e n a d a e n e l Te a t r o d e l Ta n t í n d e S a n t a n d e r en la noche del 15 de mayo de 2003, con patrocinio de la Obra Social y Cultural de Caja Cantabria. L i b r e t o d e To m á s M a r c o , a partir de La vida es sueño, de Pedro Calderón de la Barca, y otros textos de Platón, René Descartes y Alberto Lista. E s c e n a s e l e c t r ó n i c a s e l a b o r a d a s p o r To m á s M a r c o . S e g i s m u n d o : D AV I D A Z U R Z A , c o n t r a t e n o r Actor A (mito de la caverna): Manuel Galiana Actor B: Helena Dueñas Actor C: Jorge Merino Actor D: Guillermo Amaya Pedro Arriero, sintetizadores Juan Carlos Felipe, clarinete y clarinete bajo Ramón Ramos, violoncello Juan Carlos Pelufo, percusión Director: JOSÉ LUIS TEMES 4 TOMÁS MARCO Segismundo (soñar el sueño) cri ESCENA 1 1 2 3 4 5 Introducción [4.08] Mito de la caverna (I) [1.57] SEGISMUNDO: Nace el ave, y con las galas... [9.27] C - R E Y: S a b i o Ta l e s , d o c t o E u c l i d e s . . . [ 8 . 3 4 ] D - C L O TA L D O : F u e , S e ñ o r, d e s t a m a n e r a . . . [ 4 . 0 9 ] ESCENA 2 6 Mito de la caverna (II) [2.09] 7 SEGISMUNDO: ¡Válgame el cielo, qué veo! [2.32] 8 Intermedio [3.32] 9 C - R E Y: P é s a m e m u c h o q u e , c u a n d o P r í n c i p e . . . [ 2 . 3 2 ] 10 SEGISMUNDO: Pues en eso, ¿qué tengo… [5.27] 1 1 C - R E Y: A q u í l e h a b é i s d e d e j a r. . . [ 2 . 0 0 ] 1 Plant Grupo Dir.: J 2 Pourq Orque Dir.: J 3 Fanta Diego y Mike Joven Dir.: J 4 Canci Grupo 5 Fract Cuart ESCENA 3 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 Mito de la caverna (III) [1.32] SEGISMUNDO: Piadoso Príncipe es... [2.26] D - C L O TA L D O : ¿ To d o e l d í a t e h a s d e e s t a r. . . [ 3 . 0 0 ] S E G I S M U N D O : S u e ñ a e l r e y q u e e s r e y. . . [ 2 . 1 7 ] Intermedio. Guerra [1.35] SEGISMUNDO: ¿Otra vez queréis que vea... [2.42] Coronación de Segismundo [3.31] C - R E Y: D e s c i e n d e a m í , c o n s o l a d o r M o r f e o . . . [ 3 . 2 7 ] B : C o n t o d o , d e b o c o n s i d e r a r. . . [ 2 . 0 0 ] SEGISMUNDO: ¡Hipogrifo violento... [2.03] Todas [univer 5 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 6 (Negro plancha) ESPAÑOL SEGISMUNDO (SOÑAR EL SUEÑO) Por Tomás Marco Desde hace muchos años he pensado que La vida es sueño encerraba un buen libreto musical. También, que éste podría transformar en buena medida el formato de la obra original, podándola de algunos de sus condicionantes como teatro barroco, pero salvando la gran fuerza y sonoridad de unos versos extraordinarios. Pese a que en la acción ocurren revoluciones, batallas, etc., la obra es, sin embargo, un drama intimista en el que, a mi juicio, se entrecruzan tres elementos: en primer lugar, la visión de un mundo donde el sueño y la realidad son difícilmente discernibles y que nos previene de la fiabilidad de los sentidos. En segundo, una manera de ver el mundo como un reflejo lejano de su propia realidad, que nos es inaccesible, conectado, a mi juicio, con el mito platónico de la caverna. En tercero, un claro conflicto edipiano entre un padre temeroso de que el oráculo acierte y sea su hijo quien acabe con él, y un hijo que guarda los agravios. En la obra hay además otros elementos y un enredo amoroso, que sólo sirven para dar variedad y longitud al drama barroco, pero que si se suprimen no se afecta para nada al núcleo de la obra. Mi trabajo no es musicar La vida es sueño, sino hacer una ópera de bolsillo sobre los principales elementos de la obra, a los que he añadido textos de Platón, de Descartes –que también 6 ESPAÑOL especuló con el sueño- y un muy poco conocido poema de Alberto Lista. Hay un personaje principal, Segismundo, que desarrolla un papel enteramente cantado, realzando así su pertenencia a una tierra de nadie entre la realidad y el sueño. La voz escogida es además la de un contratenor, una voz en cierto modo irreal y muy conectada con el estilo musical barroco. Además hay dos actores –eventualmente desdoblados en cuatro, como en esta grabación discográfica-, que no cantan y que encarnan diversos personajes; pero que, en lo que respecta al drama original, dan vida a Clotaldo y al Rey. Y unas propuestas sobre la escenificación, que deben aclarar las direcciones en que la obra se proyecta. La obra está contada musicalmente y desarrollada desde la música por un pequeño conjunto instrumental que envuelve a la voz cantada y que conduce musicalmente la acción cuando aquélla no actúa. He procurado huír de las convenciones de la ópera romántica y sí acercarme a algunas del teatro musical barroco y renacentista, que creo conectan mejor con la música contemporánea. Por supuesto, no he pretendido hacer un pastiche neobarroco sino música mía sugerida por los textos que he escogido, aunque creo que es una música perfectamente accesible dentro del espectáculo para cualquiera que no esté lastrado por pesados juicios antiguos o modernos, para espectadores con algo de curiosidad que no necesitan ser muy conocedores del original, aunque esto tampoco estorbe. A los muy conocedores advierto que mi obra acaba con las palabras con las que se abre la de Calderón. Es un párrafo sobre el control del cuerpo por la mente, en maravillosos pero crípticos versos, que allí declama Rosaura, un personaje que yo no empleo. Puede tomarse como una ambigüedad, una transformación de Segismundo en Rosaura, un bucle tras el que todo puede volver a empezar, o simplemente como un cierre que me parece muy adecuado. LA VERSIÓN DISCOGRÁFICA DE SEGISMUNDO Por José Luis Temes Pocas obras de la música escénica española reciente resultarán tan adecuadas al medio discográfico como este Segismundo (soñar el sueño), de Tomás Marco. El hecho de que el texto dramático se halle envuelto siempre por la electroacústica, la inmediatez que da el pequeño conjunto de cámara, de sonoridad intimista, y la espacialidad que proporciona el libre tratamiento de los sintetizadores -ampliamente desenvuelto en esta grabación- son los factores que contribuyen a la fascinación sonora que la grabación de esta obra nos produce. Fue por esta razón por la que nada más ponernos a ensayar este nuevo trabajo escénico de Marco de cara a su estreno en el Teatro de Caja Cantabria en Santander, tuvimos todos la sensación de que nos encontrábamos ante una obra de excelente resultado discográfico e incluso, yo diría, "radiofónico". Pues cierto tipo de tratamiento de las escenas sólo actorales recuerda a las mejores realizaciones que en otro tiempo se hicieron en todas las radios europeas de música dramática a través del audio, sin el elemento visual como apoyo. Bien es verdad que de cara a la grabación discográfica ha habido que hacer algunas pequeñísimas variantes sobre esta obra, que es eminentemente escénica; siempre, naturalmente, con la plena conformidad del compositor de la música y el texto. Para quien conozca la partitura -o haya visto la obra en su puesta en escena- informamos que las mínimas variaciones que se encontrará ahora son las siguientes: a. La partitura requiere dos actores para la versión teatral, que se desdoblan en varios personajes que revisten imágenes diferentes. Como en la versión discográfica no se dispone, obviamente, del recurso de estas imágenes diferentes para cada intervención, hemos optado por desdoblar en cuatro aquellos dos papeles originales, lo que facilita su comprensión auditiva: así, dos de los actores (Manuel Galiana y Helena Dueñas) aparecen sólo en las escenas del mito de la caverna y en su derivación final a partir de un texto de Descartes; y otros dos (Guillermo Amaya y Ricardo Merino) desarrollan los textos calderonianos (más el bellísimo poema final de Alberto Lista, que Marco encomienda al personaje del Rey). b. En la versión teatral, la escena del mito de la caverna (basada en un fragmento de los 7 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 8 (Negro plancha) ESPAÑOL ESPAÑOL Diálogos, de Platón) aparece tres veces, pero con un imagen diferente en cada una de ellas; y además alargada en su texto cada vez sucesiva. Hemos creído que no tendría sentido en una versión de audio repetir tres veces la misma escena, por lo que las voces de los actores han sido aquí tratadas electroacústicamente de manera diferente en cada una de ellas –y. por supuesto, convenientemente prolongadas en su longitud, según se indica en el original de Marco-, de manera que resultan, en efecto, la misma escena, pero con una imagen sonora diferente. pensablemente visuales- han sido ligeramente abreviados en la duración, pues una vez presentado el material sonoro correspondiente, no tiene sentido en una versión discográfica prolongar ese "paisaje" si el espectador no esta contemplando su correspondencia escénica. c. El tratamiento original del sintetizador está pensado para que pueda ser desarrollado en escena por un solo ejecutante. Pero la libertad que Tomás Marco otorga a esta parte puede desarrollarse más ampliamente cuando no se tiene el condicionante de la intervención en vivo, por lo que algunas registraciones han sido ligeramente superpuestas unas a otras en estudio. De esta manera, además, se vincula acústicamente el mundo sonoro del grupo en vivo al de la música electroacústica. Algo parecido cabe decir de las intervenciones del percusionista, que se han realizado y grabado pensando abiertamente en una versión audio, diferenciada de una representación en escena. DAVID AZURZA d. Por último, algunos pasajes electroacústicos que no llevan texto y que están pensados como "paisaje sonoro" a ciertas acciones teatrales –como, por ejemplo, la pequeña batalla de la segunda parte, o la escena del águila, indis8 Salvo estos mínimos detalles, que consideramos más bien sugeridos por el simple sentido común, el desarrollo de la obra corresponde exactamente a las previsiones de su puesta en escena. Nació en Tolosa (Gipúzcoa) en 1968. Es licenciado en Bellas Artes, en la especialidad de Restauración. Se inicia en el canto como tenor dentro del Coro Hodeiertz, de Tolosa, para pasar después a formarse como contratenor con Isabel Álvarez, en San Sebastián. Terminó también los estudios superiores de Canto en el Real Conservatorio Superior de Madrid, donde obtuvo el Premio de Honor fin de carrera y el Premio Extraordinario Lucrecia Arana. Ha realizado cursos de perfeccionamiento con Richard Levitt y Joseba Carril, y clases de escena con Mª Jesús Uranga, Maite Agirre y Enrique Santiago. Es miembro de los grupos vocales Capilla Peñaflorida y Conductus Ensemble, especializados en música antigua, y Kea, especializado en música contemporánea; con ambos ha par- ticipado en innumerables proyectos y grabaciones de polifonía vocal en ámbitos nacionales e internacionales. También ha colaborado con otros grupos vocales: La Trulla de Bozes, La Compañía Musical, Coral de cámara de Pamplona, Nova Lux ensemble, Capella Compostelana, Música Liberata y Antigua Capilla Hispana. Estrenó la ópera de cámara Zapatos de mujer, de Angel Illarramendi, en el papel del doctor. En 2003 desempeña el papel protagonista en el estreno mundial y grabación de la obra que se contiene en este disco: la ópera de bolsillo Segismundo de Tomás Marco. En 2006 estrena la ópera Dulcinea de Mauricio Sotelo en el Teatro Real de Madrid, representada luego en el Teatro Arriaga de Bilbao y Teatro de la Maestranza de Sevilla. También en 2006 realiza la premiérè escénica de la ópera de cámara Bonhomet y el cisne, de Eduardo Pérez Maseda (Teatro La Abadía, Madrid), con la Orquesta de la Comunidad de Madrid. En 2007 colabora en el estreno absoluto de la ópera El viaje a Simorgh, de José Mª Sánchez Verdú, en el Teatro Real de Madrid. Es director coral en activo y profesor de técnica vocal. Como compositor su actividad se ha centrado específicamente en el ámbito vocal. En Abril de 2004 crea la editorial “Oihu hau Musika Korala” para difundir su obra escrita. JOSE LUIS TEMES Nació en Madrid en 1956. Estudió principalmente con los profesores Labarra, Sopeña, Llácer y Martín Porrás. Titulado por el Conservatorio de su ciudad natal, dirigió entre 1976 y 1980 el Grupo de Percusión de Madrid, y el Grupo Círculo entre 1983 y 1999. Ha estado al frente de la práctica totalidad de las orquestas españolas; también de otras de diversos países: Filarmónica de Londres, Gulbenkian de Lisboa, Filarmónica de Poznan, Radio de Belgrado, etc. En sus veintisiete años como director, Temes ha dirigido el estreno de más de 280 obras, entre ellas cuatro óperas y varios ballets. Ha publicado más de setenta discos, casi siempre con música contemporánea española, y participado en los principales festivales internacionales de música nueva: Nueva York, Londres, París, Roma, Milán, Viena, Zagreb, Lisboa y un largo etcétera. Ha compaginado siempre su trabajo como director de orquesta con una amplia labor como profesor, conferenciante y gestor. Es autor de numerosos libros y ensayos, entre los que destacan: Instrumentos de percusión en la música actual (Digesa, 1979), Apuntes anecdóticos de historia de la música (Línea, 1983), un extenso Tratado de Solfeo Contemporáneo (Línea, 1982-1992), una biografía de Anton Webern (CBA, 1988) y otra sobre José Luis Turina (OFM, 2006) sí como dos volúmenes sobre la historia perdida de El Círculo de Bellas Artes de Madrid (Alianza, 2000/2003). 9 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 10 (Negro plancha) ESPAÑOL ENGLISH SEGISMUNDO (TO DREAM THE DREAM) Tomás Marco I have for many years thought that Life is a Dream contained a good musical libretto. And that it might to a substantial extent transform the format of the original work, pruning some of its conditioning factors as Baroque theatre, but preserving the great force and sonority of some extraordinary verses. Although the action includes revolutions, battles, etc., the work is nonetheless an intimate drama in which, in my judgement, three elements intertwine: in the first place, a vision of a world in which it is hard to discern dream and reality, so warning us about relying on our senses. Secondly, a way of seeing the world as a remote reflection of its reality, inaccessible to us and, to my way of thinking, connected with the Platonic myth of the cavern. In the third place, a clear Oedipal conflict between a father fearful of the wisdom of the oracle and that it will be his son who finishes him off, and a son who nurtures his grievances. There are also other elements in the work, and a tangle of love, which only serve to give the Baroque drama variety and length but which, if removed, in no way affect its essence. It is not my task to set Life is a Dream to music, but to make a pocket opera dealing with the main elements of the work, and to which I have added texts by Plato, Descartes - who also reflected on dreams - and a very little-known poem by Alberto Lista. There is a main charac- 10 ter, Segismundo, whose role is entirely sung, to highlight how he inhabits a no-man’s land between reality and dream. In addition, the chosen voice is that of a countertenor, which is to some degree unreal, and intimately linked to Baroque musical style. Moreover there are two actors - perhaps sometimes playing the role of four as in this recording - who do not sing and who represent a variety of characters but who, in relation to the original drama, give life to Clotaldo and the King. And some proposals for the staging, which must explain the directions in which the piece is projected. The work is recounted musically and developed in terms of the music by a small instrumental ensemble which envelopes the singing voice and leads musically to the action when the voice is not in action. I have sought to escape the conventions of romantic opera and to approach some of those of baroque and renaissance musical theatre, which I believe connect better with contemporary music. I have not of course sought to make a neo-baroque pastiche but rather music of my own, suggested by the texts I have chosen, although I do believe that this music is perfectly accessible as part of the spectacle for anyone not encumbered by weighty ancient or modern judgements, for spectators with a degree of curiosity who need not be very familiar with the original, although that is no impediment either. To those who do know the original well, I warn them that my work ends with the words which open that of 11 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 12 (Negro plancha) ENGLISH Calderón, in a speech about control of the body by the mind, using marvellous but cryptic verses, declaimed there by Rosaura, a character I have not used. This can be seen as an ambiguity, a transformation of Segismundo into Rosaura, a loop beyond which all can begin over again, or simply as an ending that seems to me most adequate. ENGLISH It was however necessary for the recording to make some minute variations in this work which is eminently scenic, always of course with the full approval of the composer of the music and the text. For those familiar with the score, or who have seen the work staged, the following are the minimum variations which will now be noted: Few recent Spanish works of music for the stage prove to be so suited to recording as Tomás Marco’s Segismundo (soñar el sueño). The fact that the dramatic text is at all times cloaked in the electroacoustics, the immediacy provided by the small chamber ensemble, with its intimate sonority, and the spatiality derived from the free treatment of the synthesisers - comprehensively deployed here - are factors contributing to the sonorous fascination which the recording of this work produces in the listener. a. The score requires two actors for the theatre version, who double for several characters bearing different images. Clearly, in a recording, resort to these differing images for each intervention is not available, so it was decided to divide those two original roles in four, facilitating their auditory understanding: thus two of the actors (Manuel Galiana and Helena Dueñas) appear solely in the scenes dealing with the myth of the cavern, and its ultimate outcome, based on a text of Descartes; and two others (Guillermo Amaya and Ricardo Merino) work Calderon’s text (plus the beautiful final poem of Alberto Lista, which Marco assigns to the King). This was why, as soon as rehearsals of this new stage work by Marco began, for its premiere in the Caja Cantabria Theatre in Santander, we all had the feeling that we were dealing with an eminently recordable work and even, I would say, "radiophonic", in the way some approaches to the purely acted scenes recall the finest productions once made by all the European radios of dramatic music through audio, without the support of the visual element. b. In the stage version, the scene of the myth of the cavern (based on a fragment of Plato’s Dialogues) occurs three times, but with three different images, and with the text lengthened for each. It was thought that it would not make sense to repeat the same scene three times in an audio version, so that the actors’ voices are here given a different electroacoustic treatment on each appearance, suitably extended in length of course as indicated in the composer’s THE RECORDED VERSION OF SEGISMUNDO José Luis Temes 12 original, so effectively producing the same scene, but with a differing sonorous image. c. The original treatment of the synthesiser is conceived so that it can be developed on-stage by a single performer. However, the freedom Tomás Marco assigns to this facet can be implemented more fully if the conditioning factor of live intervention is not present, so that some preset elements were lightly superimposed in the studio. This also provides an acoustic link between the sonorous world of the live group and the electroacoustic music. Something similar can be said of the percussionist’ interventions, performed and recorded with an audio version clearly in mind, differentiated from a staged representation. d. Finally, some electroacoustic passages without text and which are conceived as a “sonorous landscape" for some theatrical actions e.g. the small battle in the second part, or the eagle scene, which are essentially visual - have been slightly shortened: once their sonorous materials have been presented, it does not make sense in a recorded version to prolong this "landscape" if the onlooker is not able to see the related scene. Save these minimal details, considered rather the result of pure common sense, the work develops precisely in line with the criteria for its staging. DAVID AZURZA Born in Tolosa (Gipúzcoa) in 1968, David Azurza holds a Degree in Fine Arts, specialising in Restoration. He began singing as a tenor in the Hodeiertz Choir in Tolosa, then trained as a countertenor with Isabel Álvarez in San Sebastián. He also completed his senior Singing studies in the Royal Senior Singing Conservatory of Madrid, winning the Graduation Honours Prize and the Lucrecia Arana Extraordinary Prize. David Azurza has taken finishing courses with Richard Levitt and Joseba Carril, and stage classes with María Jesús Uranga, Maite Agirre and Enrique Santiago. He is a member of the vocal groups Capilla Peñaflorida and the Conductus Ensemble, specialised in early music, and Kea which specialises in contemporary music, having participated with both in innumerable national and international projects and recordings of vocal polyphony. He has also collaborated with other vocal groups: La Trulla de Bozes, La Compañía Musical, the Pamplona chamber choir, Nova Lux ensemble, Capella Compostelana, Música Liberata and Antigua Capilla Hispana. He premiered the chamber opera Zapatos de mujer by Angel Illarramendi, in the role of the doctor. In 2003, he played the lead role in the world premiere performance and recording of the work on this disc: Tomás Marco’s pocket opera Segismundo. In 2006, he premiered the 13 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 14 (Negro plancha) ENGLISH opera Dulcinea by Mauricio Sotelo in the Teatro Real in Madrid, which was then performed in the Arriaga Theatre in Bilbao and the Maestranza Theatre in Seville. Also in 2006, he performed the stage premiere of the chamber ópera Bonhomet y el cisne by Eduardo Pérez Maseda (La Abadía Theatre, Madrid), with the Orchestra of the Community of Madrid. In 2007, he has collaborated in the premiere of the opera El viaje a Simorgh by José María Sánchez Verdú, in the Teatro Real in Madrid. David Azurza works as choral conductor and teaches vocal technique. His composing activity has concentrated specifically in the vocal field. In April 2004, he set up the publishing house “Oihu hau Musika Korala” to make his written work known. JOSÉ LUIS TEMES más de 280 obras, entre ellas cuatro óperas y varios ballets. Ha grabado más de sesenta discos, casi siempre con música contemporánea española, y participado en los principales festivales internacionales de música nueva: Nueva York, Londres, París, Roma, Milán, Viena, Zagreb, Lisboa y un largo etcétera. Ha compaginado siempre su trabajo como director de orquesta con una amplia labor como profesor, conferenciante y gestor. Es autor de numerosos libros y ensayos, entre los que destacan: Instrumentos de percusión en la música actual (Digesa, 1979), Apuntes anecdóticos de historia de la música (Línea, 1983), un extenso Tratado de Solfeo Contemporáneo (Línea, 1982-1992), una biografía de Anton Webern (CBA, 1988) y otra sobre José Luis Turina (OFM, 2006) así como dos volúmenes sobre la historia perdida de El Círculo de Bellas Artes de Madrid (Alianza, 2000/2003). Nació en Madrid en 1956. Estudió principalmente con los profesores Labarra, Sopeña, Llácer y Martín Porrás. Titulado por el Conservatorio de su ciudad natal, dirigió entre 1976 y 1980 el Grupo de Percusión de Madrid, y el Grupo Círculo entre 1983 y 1999. Ha estado al frente de la práctica totalidad de las orquestas españolas; también de otras de diversos países: Filarmónica de Londres, Gulbenkian de Lisboa, Filarmónica de Poznan, Radio de Belgrado, etc. En sus veintisiete años como director, Temes ha dirigido el estreno de 14 15 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 SEGISMUNDO (SOÑAR EL SUEÑO) El papel de Segismundo está realizado por un contratenor. Hay además dos actores que asumen diversos papeles, entre ellos los de El Rey y Clotaldo. No hacen falta más actores pero, si se desea, se pueden incluir figurantes, mimos etc. [Ya quedó dicho que en esta versión discográfica, los papeles dramáticos se han desdoblado en cuatro, sin alterar el texto original]. La música está compuesta para clarinete, violonchelo, percusión (uno o dos intérpretes, con amplio instrumental), tecladosintetizador y medios electrónicos pregrabados, que pueden manejarse desde el sintetizador. Los instrumentistas pueden integrarse en la escena o estar fuera de ella. En algunas representaciones, la parte instrumental podría ir grabada, aunque no es lo más recomendable. En todo caso, el cantante debe actuar en vivo. ESCENA 1 La escena está dividida en tres sectores. A la izquierda, el antro de Segismundo, que debe ser más cueva que torre, para ilustrar mejor el mito de la caverna que se integra en la acción; a la derecha, el palacio. El espacio del centro puede reservarse para ilustrar de alguna manera ciertos aspectos de la acción por medio de proyecciones, marionetas, mimos, o lo que el director de escena invente. Se ilumina discretamente el sector de la mazmorra. Segismundo duerme y canta entre sueños. 16 Página 16 (Negro plancha) Entre tanto, C y D, que pueden ir vestidos con batas de científicos, o con atributos de magos, pululan a su alrededor, lo miden, lo observan con aparatos, etc. Esto empieza antes de que él cante, sigue durante la música introductoria y acaba antes que el canto. su infancia, sólo pueden ver los objetos que tienen enfrente. Detrás de ellos, a cierta distancia y altura, supóngase un fuego cuyo resplandor los alumbra y un camino escarpado entre el fuego y los cautivos, y un muro a lo largo de ese camino. 1 Introducción instrumental Imagina personas que pasan a lo largo de ese muro llevando objetos de todas clases, figuras de hombres y animales, de manera que todo ello aparezca en sombras sobre el muro. De entre los portadores, unos se detienen a conversar y otros pasan sin decir nada. Segismundo: ¡Ay, mísero de mí! ¡Ay, infelice! / Apurar, cielos, pretendo, / ya que me tratáis así, / qué delito cometí / contra vosotros naciendo; / aunque si nací, ya entiendo / vuestra justicia y rigor, / pues el delito mayor / del hombre es haber nacido. B: ¡Extraños prisioneros y cuadro singular! Sólo quisiera saber, / para apurar mis desvelos / -dejando a una parte, cielos, / el delito de nacer-, / qué más os pude ofender / para castigarme más. / ¿No nacieron los demás? / Pues si los demás nacieron, / ¿qué privilegios tuvieron / que yo no gocé jamás? A: Se parecen, sin embargo, a nosotros en todo punto. No pueden ver otra cosa de sí mismos y de los que están al lado que las sombras que producen enfrente de ellos en el fondo de la caverna. Se adormece. En el centro, los actores A y B pasean exponiendo el mito de la caverna. Éste puede ilustrarse con proyecciones, marionetas o mimos; o ser accionado por los propios actores con una luz y unos cartones. Y respecto a los objetos que pasan, ¿pueden ver otra cosa que las sombras de los mismos? 2 [Mito de la caverna, I] A: Imagina un antro subterráneo con una abertura en su longitud que dé paso libre a la luz. En esa caverna, hombres encadenados desde Si los prisioneros pudieran conversar entre ellos ¿no darían a las sombras el nombre de las cosas mismas? Y si en el fondo de su prisión hubiera un eco para repetir las palabras de los transeúntes, ¿no imaginarían oír a las sombras mismas que pasan ante sus ojos? B: ¡No creerían que pudiese existir otra realidad que esas mismas sombras! Se ilumina la mazmorra. A y B se marchan. Segismundo, ya despierto, canta. 3 Segismundo: Nace el ave, y con las galas / que le dan belleza suma, / apenas es flor de pluma, / o ramillete con alas, / cuando las etéreas salas / corta con velocidad, / negándose a la piedad / del nido que deja en calma; / ¿y, teniendo yo más alma, / tengo menos libertad? Nace el bruto, y con la piel / que dibujan manchas bellas, / apenas signo es de estrellas, / gracias al docto pincel-, / cuando, atrevido y cruel, / la humana necesidad / le enseña a tener crueldad, / monstruo de su laberinto; / ¿y yo, con mejor instinto, tengo menos libertad? Nace el pez, que no respira, / aborto de ovas y lamas, / y apenas bajel de escamas / midiendo la inmensidad / de tanta capacidad / como le da el centro frío / ¿y yo, con más albedrío, / tengo menos libertad? Nace el arroyo, culebra / que entre flores se desata, / y apenas sierpe de plata, / entre las flores se quiebra, / cuando, músico, celebra / de los cielos la piedad / que le dan la majestad / del campo abierto a su huída; / ¿y teniendo yo más vida, / tengo menos libertad? 17 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Pequeña pausa instrumental. Van saliendo C y D, ahora como viajeros. En llegando a esa pasión, / un volcán, un Etna hecho, / quisiera sacar del pecho / pedazos del corazón. ¿Qué ley, justicia o razón / negar a los hombre sabe / privilegio tan suave, / excepción tan principal, / que Dios le ha dado a un cristal, / a un pez, a un bruto y a un ave? Queda pensativo. Los actores C y D están frente a la mazmorra; la rodean sin atreverse a entrar. C: Rústico yace, entre desnudas peñas, / un palacio tan breve / que el sol apenas a mirar se atreve; / con tan rudo artificio / la arquitectura está de su edificio, / que parece, a las plantas / de tantas rocas y de peñas tantas / que al sol tocan la lumbre, / peñasco que ha rodado de la cumbre. Segismundo: ¡Ay, mísero de mí! ¡Ay infelice! D: ¿Qué es lo que escucho, cielo? / Inmóvil bulto soy de fuego y hielo. / Qué triste voz escucho. / Con nuevas penas y tormentos lucho. Segismundo: ¿Quién mis voces ha escuchado? C: No es sino un triste, ¡ay de mí!, / que en estas bóvedas frías / oyó tus melancolías. 18 Página 18 (Negro plancha) Segismundo: Pues la muerte te daré, / porque no sepas que sé / que sabes flaquezas mías. / Sólo porque me has oído / entre mis membrudos brazos, / te tengo de hacer pedazos. D: Con asombro de mirarte, / con admiración de oírte, / ni sé qué pueda decirte, / ni qué pueda preguntarte. Huyen. Pequeña pausa instrumental. Segismundo: Cuentan de un sabio que un día / tan pobre y mísero estaba, / que sólo se sustentaba / de unas hierbas que comía. / ¿Habrá otro -se decía- / más pobre y triste que yo? / Y cuando el rostro volvió, / halló la respuesta, viendo / que iba otro sabio cogiendo / las hojas que él arrojó. Oscuro en el lado de Segismundo. Se va iluminando el lado del palacio. El actor C encarnará ahora al Rey, y el actor D a Clotaldo. Pequeño interludio instrumental. Mientras el Rey recita los augurios, en el centro puede proyectarse algo relacionado con astrología, astronomía y espacio en general. También puede hacerse esto con marionetas, sombras chinescas, mimos, etc. O ser representado de algún modo por los dos actores. O una mezcla de todo ello. El recitado que sigue lleva música instrumental, aunque habrá otros muchos que también la lleven. 4 C-Rey: Sabio Tales, docto Euclides, / que entre signos, que entre estrellas / hoy gobiernas, hoy resides, / y sus caminos, sus huellas / describes, tasas y mides, / deja que en humildes lazos, / deja que en tiernos abrazos, / hiedra de este tronco sea, / rendido a tus pies me vea. Ya sabéis que son las ciencias / que más curso y más estimo / matemáticas sutiles, / por quien al tiempo le quito, / por quien a la fama rompo / la jurisdicción y oficio / de enseñar más cada día; / pues, cuando en mis tablas miro, / presentes, las novedades / de los venideros siglos, / le gano al tiempo las gracias / de contar lo que yo he dicho. / Esos círculos de nieve, / esos doseles de vidrio, / que el sol ilumina a rayos, / que parte la luna a giros; / esos orbes de diamantes, / esos globos cristalinos / que las estrellas adornan / y que campean los signos, / son el estudio mayor / de mis años; son los libros, / donde en papel de diamante, / en cuadernos de zafiros / escribe con líneas de oro, / en caracteres distintos, / el cielo nuestros sucesos, / ya adversos o ya benignos. Éstos leo tan veloz, / que con mi espíritu sigo / sus rápidos movimientos / por rumbos y por caminos. / ¡Pluguiera al cielo, primero / que mi ingenio hubiera sido / de sus márgenes cimento y de sus hojas registro; / hubiera sido mi vida / el primero desperdicio / de sus iras, y que en ellas / mi tragedia hubiera visto! / porque de los infelices / aun el mérito es cuchillo; / que a quien le daña el saber, / homicida es de sí mismo. / Dígalo yo, aunque mejor / lo dirán sucesos míos, / para cuya admiración / otra vez silencio os pido. (Pequeña pausa instrumental) En Clorilene, mi esposa, / tuve un infelice hijo / en cuyo parto los cielos / se agotaron de prodigios. / Antes que a la luz hermosa / le diese el sepulcro vivo / de un vientre -porque el nacer / y el morir son parecidos- / su madre infinitas veces, / entre ideas y delirios / del sueño, vió que rompía / sus entrañas, atrevido, / un monstruo en forma de hombre; / y entre sus sangre teñido, / le daba muerte, naciendo, / víbora humana del siglo. Llegó de su parto el día, / y, los presagios cumplidos / -porque tarde o nunca son / mentirosos los impíos-, / nació en horóscopo tal / que el sol, en su sangre tinto, / entraba sañudamente / con la luna en desafío; / y siendo valla la tierra, / los dos faroles divinos / a luz entera luchaban, / ya que no a brazo partido. / El mayor, el más horrendo / eclipse que ha padecido / el sol, después de que con sangre / lloró la muerte de Cristo, / éste fue, porque, anegado / el orbe entre incendios vivos, / presumió que padecía / el último parasismo: / los cielos se oscurecieron, / temblaron los edificios, / llovieron piedras las nubes, / corrieron sangre los ríos. En este mísero, en este / mortal planeta o signo, / nació Segismundo, dando / de su condición indicios, / pues dio la muerte a su 19 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 madre, / con cuya fiereza dijo: / - Hombre soy, pues que ya empiezo / a pagar mal beneficios. / Yo, acudiendo a mis estudios, / en ellos y en todo miro / que Segismundo sería / el hombre más atrevido, / el príncipe más cruel / y el monarca más impío; / por quien su reino vendría / a ser parcial y diviso, / escuela de las traiciones, / y academia de los vicios; / y él, de su furor llevado, / entre asombros y delitos, / había de poner en mí las plantas; y yo, rendido / a sus pies me había de ver / -¡con qué congoja lo digo!- / siendo alfombra de sus plantas / las canas del rostro mío. (Pequeña pausa instrumental) Pues dando crédito yo / a los hados que, adivinos, / me pronosticaban daños / en fatales vaticinios, / determiné de encerrar / la fiera que había nacido, / por ver si el sabio tenía en las estrellas dominio. / Publicóse que el infante / nació muerto y, prevenido, / hice labrar una torre / entre las peñas y riscos desos montes, donde apenas / la luz ha hallado camino / por defenderle la entrada / sus rústicos obeliscos. / Las graves penas y leyes, / que con públicos edictos / declararon que ninguno / entrase a un vedado sitio / del monte, se ocasionaron / de las causas que os he dicho. / Allí vive Segismundo, / mísero, pobre y cautivo, / adonde sólo Clotaldo / le ha hablado, tratado y visto. Yo he de ponerle mañana, / sin que él sepa que es mi hijo, / y rey vuestro, a Segismundo, 20 Página 20 (Negro plancha) / que aqueste su nombre ha sido, / en mi dosel, en mi silla, / y, en fin, en el lugar mío, / donde os gobierne y os mande, / y donde todos, rendidos, / la obediencia le juréis; pues con aquesto consigo / dos cosas con que respondo / a las otras tres que he dicho: Es la primera que, siendo / prudente, cuerdo y benigno, / desmintiendo en todo al hado, / que de él tantas cosas dijo, / gozaréis el natural / príncipe vuestro, que ha sido / cortesano de unos montes / y de sus fieras vecino. Es la segunda que, si él, / soberbio, osado, atrevido / y cruel, con rienda suelta / corre el campo de sus vicios, / habré yo, piadoso, entonces, / con mi obligación cumplido; / y luego en desposeerle, / haré como rey invicto, / siendo el volverle a la cárcel / no crueldad, sino castigo. Esto como Rey os mando; / esto como padre os pido; / esto como sabio os ruego; / esto como anciano os digo. Mientras C-Rey recitaba el texto precedente, DClotaldo ha ido preparando ostensiblemente la copa con la bebida. Al terminar el recitado, hay un intermedio instrumental en el que se apaga el palacio y se enciende la mazamorra. D-Clotaldo mima una conversación con Segismundo y le da de beber de la copa. Señala al cielo y debe proyectarse (o hacerse ver de otra manera) la figura de un águila. Segismundo se duerme. C y D (u otros figurantes) ponen a Segismundo en unas angarillas y lo transportan a la zona del palacio donde lo acuestan. Puede ser una camilla con ruedas o un carricoche fantástico. La escena es muda, salvo la intervención instrumental. Durante el recitado que sigue puede mimarse de nuevo la acción muda que hemos visto, o proyectarse. Puede ser incluso una filmación de la escena que acaba de suceder. 5 D-Clotaldo: Fue, Señor, desta manera: / con la apacible bebida / que, de confecciones llena, / hacer mandaste mezclando / la virtud de algunas hierbas, / cuyo tirano poder / y cuya secreta fuerza / así el humano discurso / priva, roba y enajena, / que deja vivo cadáver / a un hombre, y cuya violencia, / adormecido, le quita / los sentidos y potencias... / Es cierto que de secretos / naturales está llena / la medicina; y no hay / animal, planta ni piedra / que no tenga calidad / determinada; y, si llega / a examinar mil venenos / la humana malicia nuestra / que den la muerte, ¿qué mucho / que, templada su violencia, / pues hay venenos que maten, / haya venenos que aduerman? Dejando aparte el dudar, / si es posible que suceda, / pues que ya queda probado / con razones y evidencias... / con la bebida, en efeto, / que el opio, la adormidera / y el beleño compusieron, / bajé a la cárcel estrecha / de Segismundo; con él / hablé un rato de las letras / humanas que le ha enseñado / la muda naturaleza de los montes y los cielos, / en cuya divina escuela / la retórica aprendió / de las aves y las fieras. / Para levantarle más / el espíritu a la empresa / que solicitas, tomé / por asumpto la presteza / de un águila caudalosa / que, despreciando la esfera del viento, pasaba a ser, / en las regiones supremas / del fuego, rayo de pluma / o desasido cometa. / Encarecí el vuelo altivo, / diciendo: «Al fin eres reina / de las aves, y así, a todas / es justo que te prefieras». Viéndole ya enfurecido / con esto, que ha sido el tema / de su dolor, le brindé / con la pócima, y apenas / pasó desde el vaso al pecho / el licor, cuando las fuerzas / rindió al sueño, discurriendo / por los miembros y las venas / un sudor frío, de modo / que, a no saber yo que era / muerte fingida, dudara / de su vida. En esto llegan / las gentes de quien tú fías / el valor desta experiencia, / y, poniéndole en un coche, / hasta tu cuarto le llevan, / donde prevenida estaba / la majestad y grandeza / que es digna de su persona. / Allí en tu cama le acuestan, / donde, al tiempo que el letargo / haya perdido la fuerza, / como a ti mismo, señor, / le sirvan, que así lo ordenas. Y si haberte obedecido / te obliga a que yo merezca / galardón, sólo te pido / -perdona mi inadvertencia- / que me digas qué es tu intento / trayendo desta manera / a Segismundo a palacio. 21 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 C-Rey: … y así he querido dejar / abierta al daño esta puerta / del decir que fue soñado / cuanto vió. Con esto llegan / a examinarse dos cosas: / su condición, la primera; / pues él despierto procede / en cuanto imagina y piensa; / y el consuelo, la segunda, / pues, aunque agora se vea / obedecido, y después / a sus prisiones se vuelva, / podrá entender que soñó, / y hará bien cuando lo entienda; / porque en el mundo, Clotaldo, / todos los que viven sueñan. Se atenúa la luz, que queda sólo sobre Segismundo, que duerme. Interludio instrumental. ESCENA 2 De nuevo A y B escenifican el mito de la caverna. Puede ser exactamente igual que la primera vez o con variantes notorias, aparte del hecho de que ahora el relato va un paso más allá. Página 22 (Negro plancha) Si tuvieran que mirar al fuego, ¿no apartarían la vista para mirar a las sombras, en las que pueden fijarse sin esfuerzo? ¿no creerían encontrar en ellas más claridad y distinción que en lo que ahora se les muestra? Y cuando afrontaran la luz del sol, deslumbrados sus ojos con tanta claridad, ¿podrían ver alguno de esos objetos que llamamos seres reales? Decir que sueño es engaño: / bien sé que despierto estoy. / ¿Yo Segismundo no soy? / ¡Dadme, cielos, desengaño! / Decidme: ¿qué pudo ser / esto que a mi fantasía / sucedió mientras dormía, / que aquí me he llegado a ver? D-Clotaldo: Con los hombres como yo / no puede hacerse eso Pero sea lo que fuere, / ¿quién me mete a discurrir? / ¡Dejadme, quiero servir, / y venga lo que viniere! Arroja un muñeco por el balcón, rompe otros...; la música traduce su furia. Entra C/Rey. B: ¡Al pronto, no podrían! A: Primero distinguirían las sombras, después las imágenes de hombres y objetos sobre la superficie de las aguas; por último, los objetos mismos. Podrían más fácilmente mirar al cielo por la noche a la luz de la luna y las estrellas. Y, por fin, podrían no sólo ver la imagen del sol sobre las aguas, o donde se reflejara, sino fijarse en él y mirarlo donde se encontrara. (Se van.) C-Rey: ¿Qué ha sido eso? 8 Intermedio orquestal en el que Segismundo va descubriendo los objetos, las armas, y tendrá en sus manos muñecos que representarán hombres. Aparece D-Clotaldo. Segismundo se abalanza sobre él. Segismundo: Traidor fuiste con la ley, / lisonjero con el Rey, / y cruel conmigo fuiste. / Y así el Rey, la ley y yo, / entre desdichas tan fieras, / te condenan a que mueras / a mis manos D-Clotaldo: ¡Señor...! 7 Se ilumina el palacio y Segismundo despierta. 6 [Mito de la caverna, II] A: Imagina un antro subterráneo con una abertura en su longitud que dé paso libre a la luz. (…) Si se desata a los cautivos, se les fuerza levantarse, a volver la cabeza, a mirar del lado de la luz, harán todo ello con un gran esfuerzo; la luz herirá sus ojos, y el alucinamiento que les causará les impedirá distinguir los objetos cuyas sombras veían antes. 22 Segismundo: ¡Válgame el cielo, qué veo! / ¡Válgame el cielo, qué miro!/ ¡Con poco espanto lo admiro! / ¡Con mucha duda lo creo! ¿Yo en palacios suntuosos? / ¿Yo entre telas y brocados? / ¿Yo cercado de criados / tan lucidos y briosos? / ¿Yo despertar de dormir / en lecho tan excelente? / ¿Yo en medio de tanta gente / que me sirva de vestir? Segismundo: ¿No? / ¡Por Dios que lo he de probar! Segismundo: No / me estorbe nadie, que es vana / diligencia; y ¡vive Dios! / que si os ponéis delante vos, / que os eche por la ventana. / A mí todo eso me causa enfado, / nada me parece justo / en siendo contra mi gusto. D-Clotaldo: Pues, Señor, he escuchado / de ti que en lo justo es bien / obedecer y servir. Segismundo: ¿También oíste decir / que por un balcón, a quien / me canse, sabré arrojar? Segismundo: Nada ha sido: / a un hombre que me ha cansado / de ese balcón he arrojado. C-Rey: ¿Tan presto una vida cuesta / tu venida el primer día? Segismundo: Díjome que no podía / hacerse… y gané la apuesta. 9 C-Rey: Pésame mucho que, cuando / príncipe, a verte he venido, / pensando hallarte advertido, / de hados y estrellas triunfando, / con tanto rigor te vea; / y que la primera acción / que has hecho en esta ocasión, / un grave homicidio sea. ¿Con qué amor llegar podré / a darte agora mis brazos, / si de sus soberbios lazos, / que están enseñados sé / a dar muerte? ¿Quién llegó / a ver desnudo el puñal / que dio una herida mortal / que no temiese? ¿Quién vio, / sangriento, el lugar a donde / a otro hombre 23 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 dieron muerte / que no sienta… que el más fuerte / a su natural responde. Yo así, que en tus brazos miro / desta muerte el instrumento, / y miro el lugar sangriento, / a tus brazos me retiro; / y, aunque en amorosos lazos / teñir tu cuello pensé, / sin ellos me volveré, / que tengo miedo a tus brazos. Segismundo: Sin ellos me podré estar / como me he estado hasta aquí; / que un padre en contra de mí / tanto rigor sabe usar, / que con condición ingrata / de su lado me desvía, / como a una fiera me cría, / y como a un monstruo me trata, / y mi muerte solicita, / de poca importancia es / que los brazos no me dé / cuando el ser de hombre me quita. C-Rey: / Al cielo y a Dios pluguiera / que a dártele no llegara; / pues ni tu voz escuchara / ni tu atrevimiento viera. Segismundo: Si no me le hubieras dado, / no me quejara de ti; / pero, una vez dado, sí, / por habérmele quitado. / Que, aunque el dar el acción es / más noble y más singular, / es mayor bajeza el dar, / para quitarlo después. C-Rey: ¡Bien me agradeces el verte / de un humilde y pobre preso, / príncipe ya! 10 Segismundo: Pues en eso, / ¿qué tengo que agradecerte? / Tirano de mi albedrío, / si viejo y caduco estás / muriéndote, ¿qué me das? / 24 Página 24 (Negro plancha) ¿dasme más de lo que es mío? / Mi padre eres y mi Rey; / luego toda esta grandeza / me da la naturaleza / por derechos de su ley. nuevo es trasladado en la litera o carricoche, de vuelta a la mazmorra. Luego, aunque esté en este estado, / obligado no te quedo, / y pedirte cuentas puedo / del tiempo que me has quitado / libertad, vida y honor; / y así, agradéceme a mí / que yo no cobre de ti / pues eres mi deudor. 11 C-Rey: Aquí le habéis de dejar, / pues hoy su soberbia acaba / donde empezó. Como estaba, / la cadena vuelvo a atar. / No acabes de despertar, / Segismundo, para verte / perder, trocada la suerte, / siendo tu gloria fingida / una sombra de la vida / y una llama de la muerte. ¿Que quizá soñando estoy, / aunque despierto me veo? / No sueño, pues toco y creo / lo que he sido y lo que soy. / Y aunque ahora te arrepientas, / poco remedio tendrás; / sé quien soy y no podrás / aunque suspires y sientas, / quitarme el haber nacido / desta corona heredero. / Y si me viste primero / a las prisiones rendido, / fue porque ignoré quién era; / pero ya informado estoy / de quién soy y sé que soy / un compuesto de hombre y fiera. A rabia me provocas, / cuando la luz del desengaño tocas. / Veré, dándote muerte, / si es sueño o es verdad. ¡Qué pocas veces el hado / que dice desdichas, miente; / pues es tan cierto en los males, / cuanto dudoso en los bienes! / ¡Qué buen astrólogo fuera, / si siempre casos crüeles / anunciara; pues no hay duda / que ellos fueran verdad siempre! Música instrumental. D/Clotaldo vuelve a ofrecer una copa a Segismundo. Bebe y se duerme; de Segismundo queda dormido. Los otros se van. Intermedio orquestal, a solo o con proyecciones oníricas. ESCENA 3 De nuevo A y B escenifican el mito de la caverna. En esta ocasión es completo y puede repetirse o variarse el ritual de las dos veces anteriores. 12 [Mito de la caverna, III] A: Imagina un antro subterráneo con una abertura en su longitud que dé paso libre a la luz. (…) Si uno de esos hombres volviera de nuevo a su prisión para ocupar su antiguo puesto, en el tránsito de la plena luz a la oscuridad ¿no se encontraría como ciego? Y si, pasado el tiempo, tuviese que discutir con los otros prisioneros sobre las sombras que ven, ¿no daría lugar a que éstos se rieran de él diciendo que por haber salido de la caverna había perdido la vista? (Se van.) Se va iluminando el lado de Segismundo, que aún está dormido. 13 Segismundo: Piadoso príncipe es / el que castiga tiranos. / ¡Muera Clotaldo a mis manos! / ¡Bese mi padre mis pies! / ¡Salga a la anchurosa plaza / del gran teatro del mundo / este valor sin segundo! / Por que mi venganza cuadre. (Despierta) Mas, ¡ay de mí! ¿Dónde estoy? / ¿Soy yo por ventura? ¿Soy / el que, preso y aherrojado, / llego a verme en tal estado? / ¿No sois mi sepulcro vos, / torre? Sí. ¡Válgame Dios, / qué de cosas he soñado! C-Rey y D-Clotaldo se acercan a la mazmorra, sin entrar. C-Rey: La necia curiosidad / de ver lo que pasa aquí / a Segismundo -¡ay de mí!- / de este modo me ha traído. / Mírale allí, reducido / a su miserable estado. / ¡Ay, príncipe desdichado / y en triste punto nacido! / (a Clotaldo): Llega a despertarle ya, / que fuerza y vigor perdió / ese lotos que bebió. Se marcha C-Rey. D-Clotaldo entra y se acerca a Segismundo. 14 D-Clotaldo: ¿Todo el día te has de estar / durmiendo? Desde que yo / al águila que voló / con tarda vista seguí / y te quedaste tú aquí, / ¿nunca has despertado? (Nueva proyección del águila) 25 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Segismundo: No. / Ni aún agora he despertado; /que según, Clotaldo, entiendo, / todavía estoy durmiendo, / y no estoy muy engañado; / porque si ha sido soñado / lo que vi palpable y cierto, / lo que veo será incierto; / y no es mucho que, rendido, / pues veo, estando dormido, / que sueño estando despierto. (De nuevo, el águila.) D-Clotaldo: Como habíamos hablado / de aquella águila, dormido, / tu sueño imperios han sido; / mas en sueños fuera bien / entonces honrar a quien / te crió en tantos empeños, / Segismundo, que aun en sueños / no se pierde el hacer bien. Segismundo: Es verdad; pues reprimamos / esta fiera condición, / esta furia, esta ambición, / por si alguna vez soñamos. / Y así haremos, pues estamos / en mundo tan singular, / que el vivir sólo es soñar, / y la experiencia me enseña / que el hombre que vive sueña / lo que es, hasta despertar. Se va D/Clotaldo. Pequeño intermedio instrumental. Segismundo reflexiona. 15 Segismundo: Sueña el rey que es rey, y vive / con este engaño mandando, / disponiendo y gobernando; / y este aplauso, que recibe / prestado, en el viento escribe, / y en cenizas le convierte / la muerte, ¡desdicha fuerte! / ¡Que hay quien intente reinar / viendo que ha de despertar / en el sueño de la muerte! 26 Página 26 (Negro plancha) Sueña el rico en su riqueza, / que más cuidados le ofrece; / sueña el pobre que padece / su miseria y su pobreza; / sueña el que a medrar empieza; / sueña el que afana y pretende; / sueña el que agravia y ofende; / y en el mundo, en conclusión, / todos sueñan lo que son, / aunque ninguno lo entiende. / Yo sueño que estoy aquí, / destas prisiones cargado, / y soñé que en otro estado / más lisonjero me vi. hacerse, / bien como el florido almendro / que, por madrugar sus flores, / sin aviso y sin consejo, / al primer soplo se apagan / marchitando y desluciendo / de sus dorados capullos / belleza, luz, y ornamento! / Ya os conozco, ya os conozco, / y sé que os pasa lo mesmo / con cualquiera que se duerme. / Para mí no hay fingimiento, / que, desengañado ya, sé bien que la vida es sueño. ¿Qué es la vida?: un frenesí, / ¿Qué es la vida?: una ilusión, / una sombra, una ficción; / y el mayor bien es pequeño; / que toda la vida es sueño, / y los sueños, sueños son. 18 Salen los soldados. Segismundo queda con la corona y, tras una serie de dudas, se corona a sí mismo mientras se proyectan escenas imperiales. 16 Intermedio instrumental. Guerra. Escenas de revueltas. Pasan los actores con armas; pueden combatir. También, proyecciones bélicas. C y D, esta vez soldados, se acercan a Segismundo con la corona en la mano. 17 Segismundo: ¿Otra vez queréis que vea / entre sombras y bosquejos / la majestad y la pompa / desvanecida del viento? / ¿Otra vez queréis que toque / el desengaño o el riesgo / a que el humano poder / nace humilde y vive atento? / Pues no ha de ser, no ha de ser: / Miradme otra vez sujeto / a mi fortuna. Y pues sé que toda la vida es sueño, / idos, sombras que fingís / hoy a mis sentidos muertos / cuerpo y voz, siendo verdad / que ni tenéis voz ni cuerpo; / que no quiero majestades / fingidas; pompas no quiero, / fantásticas ilusiones / que al soplo menos ligero / del aura han de des- Segismundo: Luego fue verdad, no sueño; / y si fue verdad -que es otra / confusión, y no menor- / ¿cómo mi vida le nombra / sueño? Pues ¿tan parecidas / a los sueños son las glorias, / que las verdaderas son / tenidas por mentirosas / y las fingidas por ciertas? ¿Tan poco hay de unas a otras / que hay cuestión sobre saber / si lo que se ve y se goza / es mentira o es verdad? / ¿Tan semejante es la copia / al original que hay duda / en saber si es ella propia? Pues si es así, y ha de verse / desvanecida entre sombras / la grandeza y el poder, / la majestad y la pompa, / sepamos aprovechar / este rato que nos toca, / pues sólo se goza en ella lo que entre sueños se goza. 19 D-Clotaldo libera a Segismundo, que va al centro de la escena. Luego ata a C-Rey en la mazmorra. Segismundo pasa al palacio, donde queda ensimismado en su poder. D es de nuevo un científico abstracto, que evalúa todo desde el centro. C-Rey: Desciende a mí, consolador Morfeo, / único dios que imploro, / antes que muera el esplendor febeo / sobre las playas del adusto moro. / Si el tiempo del placer para el dichoso / huye en veloz carrera, / une con breve y plácido reposo / las dichas que ha gozado a las que espera. Mas -¡ay!- a un alma del dolor guarida / desciende ya propicio; / cuando me quites de la odiosa vida, / me quitarás de mi inmortal suplicio. ¿De qué me sirve el súbito alborozo / que a la aurora resuena, / si al despertar el mundo para el gozo / sólo despierto yo para la pena? / ¿De qué el ave canora, o la verdura / del prado que florece, / si mis ojos no miran su hermosura / y el universo para mí enmudece? / El ámbar de la vega, el blando ruido / con que el raudal se lanza, / ¿Qué son, ay, para el triste que ha perdido, / último bien del hombre, la esperanza? Corta el hilo de mi acerba desventura, / oh, tú, sueño piadoso; / que aquellas horas que tu imperio dura / se iguala al infeliz con el dichoso. / Ignorada de mí yazga mi mente, / y, muerto mi sentido, / empapa el ramo para 27 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 herir mi frente / en las tranquilas aguas del olvido. Ven, termina la mísera querella / de un pecho acongojado. / ¡Imagen de la muerte! Después de ella, / eres el bien mayor del desgraciado. C-Rey se adormece y se hace oscuro en la mazmorra; B sale de sus meditaciones. 20 B: Con todo, debo considerar que soy un hombre [una persona] y, por tanto, tengo la costumbre de dormir y de representarme en sueños las mismas cosas, y a veces cosas aun menos verosímiles que los mismos locos. Cuántas veces no me habrá ocurrido soñar que estaba aquí por la noche, que estaba aquí mismo, vestido junto al fuego, cuando estaba en realidad desnudo y en la cama. En ese momento, estoy seguro de que yo miro este papel con los ojos de la vigilia, de que esta cabeza que muevo no está soñolienta, de que alargo la mano y la siento voluntariamente, con plena conciencia; lo que acontece en sueños no me resulta tan claro y distinto como todo esto. Pero pensándolo mejor, recuerdo haber sido engañado, mientras dormía, por ilusiones semejantes. Y fijándome en este pensamiento, veo de un modo tan manifiesto que no hay indicios concluyentes ni señales que basten a distinguir con claridad el sueño de la vigilia, que acabo atónito y mi estupor es tal que nadie puede persuadirme de que estoy durmiendo. 28 Página 28 (Negro plancha) Supongamos ahora que estamos dormidos y todas esas particularidades como abrir los ojos, mover la cabeza, alargar las manos, no son sino engañosas ilusiones, y pensemos que acaso ni nuestras manos ni todo nuestro cuerpo son tal como los vemos. 21Se marcha B. Segismundo deja la corona y viene al centro de la escena como si todo recomenzase. Puede quitarse la peluca o casco, o cualquier cosa que establezca su personaje masculino, y aparecer evidentemente como una mujer. Mientras empieza a cantar Segismundo el final, la grabación electrónica reproduce el diálogo del mito de la caverna. Segismundo: Hipogrifo violento, / que corriste parejas con el viento, / ¿dónde, rayo sin llama, / pájaro sin matiz, pez sin escama, / y bruto sin instinto / natural, al confuso laberinto / de esas desnudas peñas, / te desbocas, te arrastras y despeñas? ¡Quédate en este monte, / donde tengan los brutos su Faetonte; / que yo, sin más camino / que el que me dan las leyes del destino, / ciega y desesperada / bajaré la cabeza enmarañada, / deste monte eminente / que arruga el sol el ceño de la frente! Música a tope. Oscuro súbito. Fin de "Segismundo (soñar el sueño)". 29 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 30 (Negro plancha) Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 32 (Negro plancha) Grabación, edición y masterización digitales realizadas en los estudios de CEZANNE PRODUCCIONES (Las Rozas, Madrid) en mayo/junio de 2003*. [cezanneproducciones.com] Ingeniero de sonido: JAVIER MONTEVERDE Auxiliar de estudio: Óscar Díaz (* Excepto locuciones, realizadas en Estudios Sintonía, Madrid) La versión discográfica de las tres escenas de la caverna ha sido realizada a través del programa de tratamiento de sonido "Digital Prodigy". Duración total del disco: 71.04 m (PERCUSIÓN: Timbales cromáticos, platos suspendidos, toms, tambores africanos, gongs, watergongs, temple blocks, cajón flamenco, bongós, tumbadoras, quijada, flexatón, cabassa, palo de lluvia, atabales, etc.) Producción musical y artística: José Luis Temes Nuestro mayor agradecimiento a la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid por su ayuda a la financiación de esta edición discográfica. 32 33 Folleto VRS 2034 para pdf 3/10/07 20:01 Página 34 (Negro plancha) GRABACIÓN / RECORDING Grabación realizada en los Estudios de Cezanne Producciones, Las Rozas (Madrid) en junio de 2003 INGENIERO DE SONIDO / SOUND ENGINEER Javier Monteverde AUXILIAR DE ESTUDIO / STUDIO ASSISTANT Óscar Díaz PRODUCCIÓN MUSICAL Y ARTÍSTICA / MUSIC AND ARTISTIC PRODUCTION José Luis Temes PRODUCCIÓN / PRODUCTION José Miguel Martínez, Pilar de la Vega Edición discográfica realizada con la colaboración de: COMENTARIOS / TEXTS / TEXTES Tomás Marco y José Luis Temes TRADUCCIÓN / TRANSLATION VERSO Gordon Burt DISEÑO GRÁFICO APARTADO DE CORREOS 10265 28080 MADRID - ESPAÑA TEL: + 34 91 446 90 94 FAX: + 34 91 446 19 41 [email protected] www.verso-producciones.com / DESIGN Pilar de la Vega PORTADA / COVER Antonio de Pereda: “El sueño del caballero” (1650) Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) © Y (P) 2007 BANCO DE SONIDO