EL DÍA, domingo, 14 de junio de 2015 p1 LA FIESTA DE LOS LOCOS, una tradición irreverente que fue común en las iglesias de la Edad Media y aún después. 6/7 del domingo revista semanal de EL DÍA ROSENDO PORLIER Y JOSÉ DARIAS, DOS CANARIOS EN LA ANTÁRTIDA Doscientos años separan a estos dos pioneros en el continente helado Texto: Andrés de Souza Iglesias (miembro del Instituto de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de La Laguna) H an tenido que transcurrir 200 años para que dos personas excepcionales de origen canario hayan cruzado su destino en la Antártida, el primero como brigadier de la Real Armada al mando de la División Naval del Sur que, con destino a Perú, había salido del puerto de Cádiz para sofocar revueltas independentistas, y el segundo como investigador del Centro Superior de Investigaciones Científicas, CSIC, que, continuando sus trabajos en la química de productos naturales marinos, realiza su primera incursión a la Antártida en 1985, invitado a participar por el Instituto Nacional Antártico Chileno (INACH), en un proyecto en el que se requería reunir la condición de científico acreditado en química marina con la de buzo experto. Dos hombres vinculados a la mar que no se arredran ante las dificultades de las gélidas y difíciles aguas del Polo Sur. Lamentablemente, el primero ve truncada su brillante carrera perdiendo la vida al doblar el Cabo de Hornos tras una fuerte tormenta que dispersa los buques de su escuadra. En efecto, por grave avería en el timón y la verga mayor del buque insignia que comandaba, el navío San Telmo, de 76 cañones, se ve arrastrado hasta la latitud 62 grados Sur y en el paso de Drake naufraga con sus 644 tripulantes a bordo. Aquellos náufragos que llegan tan al Sur del Cabo de Hornos son consideradas la primeras personas que alcanzan la zona antártica en las playas del Cabo Shirreff, de la isla Livingston, del archipiélago Shetland del Sur. El destino de José Darias ha sido felizmente más afortunado y ha conseguido coger muestras de organismos marinos de la región Magallánica y de la Antártida y participar en proyectos de investigación internacionales y nacionales durante los últimos 30 años, interviniendo en 27 expediciones científicas, de ellas 18 antárticas, pese a las duras condiciones del buceo en aguas frías, soportando temperaturas en torno a cero grados y sumergiéndose en las mismas a veces con las faculta- des físicas y psíquicas muy mermadas. Cabe resaltar que en el Dr. Darias se probó un sistema ideado por el científico chileno Aurelio San Martín que ha permitido prolongar el tiempo de buceo en aguas gélidas de los 10 minutos normales hasta los 40 e incluso los 55 minutos, al haber resuelto el grave problema del enfriamiento de las manos, cuestión nada trivial en términos de rentabilidad científica y económica. La trayectoria y méritos Rosendo Porlier y Asteguieta, en 1786 y con solo 15 años, sienta plaza de guardiamarina en Cartagena, ascendiendo tres años después al empleo de alférez de fragata, en cuyo destino se integra en la escuadra que por disposición del nuevo rey de España, Carlo IV, se traslada a Nápoles para homenajear a su hermano el rey de las Dos Sicilias y a su hermana, la duquesa de la Toscana. De regreso, destinado en diversos buques corsarios, vive el terrible terremoto de Orán en la noche del 8 al 9 de octubre de 1790 y, continuando sus misiones de corso por el Mediterráneo, recibe los despachos de alférez de navío y teniente de fragata, en cuyo empleo se integra en 1794, en la escuadra del teniente general de la Armada Federico Gravina, interviniendo en la cruenta campaña sobre el cabo de Rosas. Al finalizar ese año asciende a teniente de navío con 23 años; un año después, por méritos de guerra, a capitán de fragata y dos años más tarde, en este empleo, embarca como ayudante del mencio- nado general Gravina en el navío Príncipe de Asturias, integrado en la Escuadra del Océano al mando del general de la Armada José de Mazarredo, con la que participa en la defensa de la Bahía de Cádiz contra la Armada británica, comandada por el almirante Horacio Nelson. Con esta Escuadra del Océano toma parte en las operaciones para sofocar la rebelión de esclavos en la isla de Santo Domingo, Puerto Príncipe, Guarico, recuperación del Fuerte Real y peñón del Diamante, en la isla Martinica, obteniendo el grado de capitán de navío. Participa en el combate de Cabo Finisterre contra la escuadra británica del almirante Calder y de nuevo en el navío Príncipe de Asturias, en la batalla de Trafalgar, como miembro de la plana mayor del general Gravina. Tuvieron especial importancia estratégica las acciones en que intervino durante la Guerra de la Independencia José Darias Jerez, científico marino canario reconocido recientemente por la Universidad chilena de Magallanes contra la invasión napoleónica y defensa de las colonias americanas, periodo en que desempeñó el mando de la fragata Atocha, destacando su valentía en la defensa de la ciudad de Toluca. Su habilidad y valor le valieron el ascenso a brigadier de la Armada el 24 de mayo de 1811, a los 40 años. El 23 de marzo de 1819, el rey Fernando VII le otorga el mando del navío San Telmo y en éste, como buque insignia, comandará la División Naval del Sur que el monarca envía al Callao, en Perú, para sofocar los intentos independentistas de los territorios españoles. Con este buque, la división naval parte de la Bahía de Cádiz el 11 de mayo, formando con el navío de línea Alejandro I, la fragata Prueba y el transporte Primorosa Mariana, si bien el Alejandro I tuvo que regresar a Cádiz al llegar al Trópico de Cáncer por su mal estado e importantes vías de agua. Los tres buques restantes llegan al Paso de Drake a final de agosto y como consecuencia de los fuertes temporales del ya próximo invierno austral se ven obligados a derivar hacia el Sur. El tiempo empeora y los navíos se separan, siendo avistado en deriva Sur el San Telmo por última vez por el transporte Primorosa Mariana, el 2 de septiembre, que anota en su cuaderno de bitácora que el navío no había podido solucionar la grave avería en el timón. Ante la falta de noticias, el buque se da por desaparecido, sin embargo las expediciones inglesas del capitán Robert Fildes, en 1820, y de James Weddell, en 1822, informaron de que los cazadores de focas habían encontrado en la playa Half Moon, de la isla Livingston, restos de un buque español, incluido un cepo de ancla, que podrían pertenecer al San Telmo, lo cual es coherente con la deriva del mismo. Hecho que así ha sido reconocido, erigiéndose un monolito en la costa noroeste de la península de cabo Shirreff para conmemorar tan dramática pérdida de vidas humanas. El 6 de mayo de 1822, el rey dispuso que causaran baja en la Armada el buque y su tripulación. En cuanto a José Darias Jerez, una vez finalizados sus estudios secundarios en La Gomera se desplaza a la Universidad de La Laguna, donde se licencia en Ciencias Químicas y realiza la tesis doctoral bajo la dirección de los profesores Antonio González y Julio Delgado, que le proponen realizarla sobre química en organismos marinos, campo no explorado en este país hasta ese momento. Así lo hace dando lugar a la primera publicación científica (1971) y primera tesis doctoral (1972) en España sobre la materia. Versaba sobre el alga parda (Taonia atomaria), recolectada por el doctorando en aguas subtropicales canarias. Por este trabajo obtuvo la máxima calificación. Tenía entonces 26 años. p2 domingo, 14 de junio de 2015, EL DÍA EN PORTADA José Rosendo Porlier y Asteguieta según el cuadro del Museo Naval de Madrid. Dentro del círculo, SMH-59 Mojón San Telmo, en la Isla Livingston, catalogado como Sitio y Monumento Histórico de la Antártida. En 1973 accede a una beca Fullbright para la Universidad de Harvard, en cuyo Departamento de Química realiza sus estudios posdoctorales con el profesor Elías J. Corey, Premio Nobel de Química en 1990, trabajando en la síntesis de productos naturales complejos y nuevas metodologías sintéticas. Posteriormente, aporta a la literatura científica sus estudios sobre los prostanoides clorados, obtenidos de corales recolectados en el golfo de Chiriqui, en el Pacífico Oriental de Panamá, colaborando con el Instituto Smithsonian. A su regreso a España inicia un periodo de investigación propia abordando metodología y síntesis de productos naturales complejos e imparte clase en la Universidad de La Laguna, hasta que en 1979, con 33 años, ingresa en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas. En 1985, con 39 años y una amplia experiencia investigadora, el Dr. José Darias deja atrás sus trabajos en la química sintética y retorna a sus orígenes en la actividad científica vinculada a la química de los productos marinos al ser invitado por el profesor Aurelio San Martín, de la Universidad de Chile, a participar en un proyecto financiado por el Instituto Antártico Chileno en su Base Científica Escudero, y desde entonces su colaboración con este instituto y dicha universidad ha sido ininterrumpida hasta la fecha. Sus investigaciones y publicaciones en revistas de impacto internacional fueron esenciales para que España fuera aceptada en 1988 como miembro consultivo del Tratado Antártico, hasta el extremo de constituir casi un ter- cio de toda la experiencia en la Antártida aportada por España al postularse. En ese mismo año se decide construir una base en la isla Livingston, en cuyas playas de la península de Cabo Shirreff aparecieron los restos del naufragio del navío San Telmo. Su ingente labor científica en el campo de la química le ha permitido caracterizar la estructura química de centenares de productos nuevos que se encuentran en la naturaleza marina, muchos de ellos con diversas propiedades farmacológicas que incluyen, entre otras, sustancias citotóxicas, antimicrobianas, pesticidas, contra la diabetes, reguladoras de la tensión arterial e incluso aplicaciones cosméticas. En otro ámbito de la actividad biológica realizada por el Dr. Darias, cabe significar la serie de productos extraídos de algas, esponjas y corales poseedores de características de marcador quimiotaxonómico. Entre ellos se encuentran productos de algas rojas y esponjas antárticas. Estas sustancias constituyen una importante herramienta para la difícil clasificación taxonómica, incluso a nivel genético, de las esponjas y octocorales marinos. Este conjunto de investigaciones le han valido el reconocimiento científico internacional en el campo de la química marina. El origen canario Rosendo Porlier y Astegieta nace en Lima el 1 de marzo de 1771 y fallece soltero en 1819. Fue el menor de los cuatro hijos de Antonio Porlier y Sopranis, nacido en La Laguna (Tenerife) el 16 de abril de 1722 y fallecido en Madrid, con 91 años, en 1813, habiendo sido fiscal de lo Civil de la Audiencia de Lima en 1767, cargo en el que cesa en 1775 al ser designado fiscal del Supremo Consejo de Indias y, en consecuencia, tuvo que regresar a Madrid después de 20 años de servicios en América. En 1787, el rey Carlos III lo nombra secretario de Estado y del Despacho Universal de Gracia y Justicia de Indias, y posteriormente Carlos IV le encomienda la Secretaría de Gracia y Justicia del Reino y lo honra con el título de Marqués de Bajamar. Antonio Porlier, padre del brigadier Rosendo Porlier, aunque no regresó a la isla siempre mantuvo sus lazos con Tenerife y de hecho fue el XII director de la Real Sociedad Económica tinerfeña desde 1797 hasta su fallecimiento. José Darias Jerez nació en San Sebastián de La Gomera en 1946. En esta localidad realiza sus primeros estudios y la enseñanza secundaria. En esos años juveniles dos excepcionales profesores, los hermanos José y Domingo Armas, despiertan su vocación por la ciencia. A los 17 años, finalizado el Bachillerato, se desplaza a la Universidad de La Laguna para estudiar Ciencias Químicas, formación que culmina con el doctorado en la misma Universidad en 1972, obteniendo la calificación de sobresaliente cum laude. Desde entonces fija su residencia en Tenerife, con las ausencias propias de sus largas estancias para estudiar organismos marinos en los arrecifes coralinos del Pacífico Oriental de Panamá, península del Sinaí, en el Mar Rojo, regiones subtropicales, Macaronesia e isla de Pascua (seis expediciones) y en las aguas frías de la Región Magallánica y la Antártida. En la Catedral de La Laguna contrae matrimonio con la pro- fesora de Literatura Emilia Rosa Cáceres Gómez. Desde 1979, como investigador del CSIC y responsable del Grupo de Química de Productos Marinos del IPNA, con sede en La Laguna –del que ha sido diez años vicedirector–, ha dirigido más de doce tesis doctorales relacionadas con la química marina. Los reconocimientos El papel trascendental de estos dos pioneros canarios en la Antártida, pese a ser desconocido en el Archipiélago, ha merecido el reconocimiento público con el Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Magallanes con el que fue investido el Dr. José Darias el 5 de mayo pasado, siendo además miembro de número de la American Chemical Society, de la Asociación de Químicos de Harvard y de Honor de la Sociedad Argentina de Química. En cuanto al brigadier Rosendo Porlier, es recordado con una lápida en su honor en el Pabellón de Marinos Ilustres de San Fernando; con su retrato al óleo en el Museo Naval de Madrid –que se expone junto al de su primo hermano, el teniente general de la Armada Domingo de Nava-Grimón y Porlier, nacido en La Laguna e hijo del IV marqués de Villanueva del Prado–, y con el monolito instalado por Chile en la playa Half Moon (Media Luna) en la costa noroeste de la península del Cabo Shirreff, que ha merecido que en la XVI Reunión Consultiva del Tratado Antártico (RCTA), en 1991, haya sido considerado Sitio y Monumento Histórico de la Antártida, SMH-59 Mojón San Telmo. Ninguno de los dos ha sido profeta en su tierra. p3 EL DÍA, domingo, 14 de junio de 2015 EL MACIZO DE ANAGA, RESERVA DE LA BIOSFERA Texto y fotos: José Manuel Ledesma Alonso (de la Tertulia Amigos del 25 de Julio) E l pasado martes, 9 de junio, la Unesco otorgó el título de Reserva de la Biosfera al Macizo de Anaga, 49.000 hectáreas de superficie pertenecientes a los municipios de Santa Cruz de Tenerife (Taganana, Taborno, Afur, Roque Negro, Chamorga, La Cumbrilla, Lomo de las Bodegas, Almáciga, Casas de la Cumbre, Catalanes, Benijo, El Draguillo y Las Palmas), San Cristóbal de La Laguna (Las Carboneras, Los Batanes, Chinamada, Bejía y El Río-Cabeza de Toro), y Tegueste. En el acto, celebrado en París, estuvieron presentes Carlos Alonso, presidente en funciones del Cabildo de Tenerife, Marisa Tejedor, presidenta del Consejo Científico del Programa MaB, y Miguel Ángel González, concejal en funciones del Ayuntamiento de La Laguna. El galardón fue otorgado, aparte de por su incomparable belleza, porque este espacio nos traslada a épocas pasadas, conservando vivas sus costumbres a pesar de vivir en un mundo cada vez más globalizado. A partir de ahora, sus moradores tendrán que comprometerse a cuidarlo y mantenerlo como ejemplo de desarrollo sostenible y limitado, mirando también al futuro, porque las futuras generaciones no deben dar la espalda a la tierra. El Parque Natural de Anaga, el kilómetro cuadrado con más biodiversidad de Europa, reliquia viva de la era terciaria, con más de dos millones y medio de años, es un bosque subtropical de laurisilva, integrado por laureles, viñátigos, barbusanos, tilos, brezos, acebiños, hayas, etc. en los que buscan cobijo y anidan guirres, milanos, pinzones, herrerillos comunes, palomas torcaces, palomas rabiches, etc. El bosque basa su subsistencia en las brumas provenientes de los vientos alisios cargados de humedad –mar de nubes–, en los que las hojas actúan como esponjas –lluvia horizontal–, atrapando el agua que empapa el suelo y recarga los acuíferos (galerías). No ha llovido, pero el resultado final es el mismo. Asegurada el agua, la actividad del monte produce una gran biomasa –mucha energía– logrando que debajo de cada hoja, de cada piedra, de cada tronco podrido exista un mundo oculto en el que la actividad de cada especie es esencial para lograr el equilibrio biológico. Su exuberante vegetación hace difícil que penetren los rayos del Sol, por lo que en el suelo se forman musgos, líquenes, helechos, jibalgeras, etc. Cada lugar del Macizo de Anaga tiene sus características especiales y un ambiente diferente; unos, como brechas abiertas para sorprender los secretos del bosque, la virginidad de la selva; otros, como remansos de paz y de silencio, con sus grutas revesti- Visitantes del macizo en el pasado y una caída de agua dentro del paraje. das de helechos, o sus manantiales ubérrimos, fluyendo entre sombríos túneles de fayal-brezal o altas cascadas. De estos emblemáticos lugares citaremos el Llano de los Viejos, pri- mera zona recreativa de Tenerife; el Lomo Alto o mirador de Jardina, desde donde se observa una bella panorámica de todo el Valle de Las Mercedes; la Cruz del Carmen, situado en un claro de la cumbre, en cuyo centro de visitantes se exponen las características del Parque Rural de Anaga, y el Pico del Inglés, con un mirador que abarca una perspectiva de 360º, permitiendo divisar el grandioso paisaje del Macizo de Anaga, Santa Cruz de Tenerife, La Laguna, la dorsal de la Esperanza y el volcán Teide. Otra característica importante de este lugar son las distintas rutas de senderos, como la denominada “Sendero de los Sentidos”, una extraordinaria obra medioambiental utilizada para personas con discapacidad motora o sensorial. A lo largo de los siglos, el Macizo de Anaga ha sido elogiado por los viajeros ilustres que lo han visitado, por ejemplo, como Sabino Berthelot, naturalista e historiador francés, quien relata su experiencia en su obra “Misceláneas canarias”, en la que hace una perfecta descripción del ambiente, colores y sensaciones que ofrece “el bosque de laurel de Tenerife”. Hasta principios del siglo XX, la madera de los bosques del macizo se utilizaba en la fabricación y reparación de barcos, carretas, carros, corsas y parihuelas; construcción de viviendas; confección de muebles, aperos de labranza, atarjeas para conducir el agua; se obtenían horquetas para apuntalar las piñas de las plataneras, elevar las tomateras y los viñedos, etc. Las necesidades económicas de la posguerra, cuando apenas había combustible para encender los fogones de las casas, daría lugar a los cortes de leña clandestinos y a la producción de carbón; por ello, interminables filas de mujeres y hombres bajaban del monte con haces de leña en la cabeza o en carritos de madera (guatiberas) con ruedas sacadas de los juegos de bolas de los automóviles (rodillos). Esta tala masiva de árboles la realizaban personas amparadas en la oscuridad de la noche y en la lejanía de los caminos y veredas. Los guardas forestales, a sabiendas de los problemas económicos existentes en los hogares tinerfeños, hacían la vista gorda, pero la Guardia Civil, más severa en el cumplimiento de las ordenanzas, realizó muchas detenciones y denuncias. Estos abusos darían lugar a que, en 1992, el Cabildo de Tenerife se hiciera cargo del control y la vigilancia del monte, logrando impedir que la acción humana siguiera mermando y dañando el rico patrimonio forestal y pudieran desaparecer los ejemplares botánicos más notables y las especies más curiosas existentes. p4 domingo, 14 de junio de 2015, EL DÍA INVESTIGACIÓN EN PORTADA TURISMO Manolo Sánchez Acuarelista y dibujante de gran recorrido, Manolo Sánchez lleva a sus espaldas más de 150 exposiciones individuales, tanto en suelo español como en el extranjero y está situado entre los pintores más reputados del Archipiélago desde hace prácticamente medio siglo, cuando en 1966 inició una nueva etapa con la acuarela experimental, trazada a través de una obra espontánea y ágil, sustentada en un dibujo ligeramente acuarelado. Nació el 22 de octubre de 1930 en Santa Cruz de Tenerife. Este afamado pintor es miembro de las Agrupaciones de Acuarelistas de Tenerife, Barcelona y Méjico; de la Academia de Artes y Ciencias de Puerto Rico y Burckhardt, de Roma; del Instituto de Estudios Canarios y de la Sociedad Económica de Amigos del País, entre otros organismos. Además, es secretario y presidente de la Sección de Pintura del Círculo de Bellas Artes, presidente de la Agrupación de Acuarelistas Canarios, invitado de honor de la Agrupación de Acuarelistas de Tarragona y presidente de Honor de la Agrupación de Acuarelistas de Cataluña. Ha realizado más de 150 exposiciones individuales en las Islas, en la Península (Madrid, Barcelona, Valladolid, Castellón, Gerona, El Escorial, Santander y Cádiz), en Italia (Roma, Avelino, Pescopagano, Salerno), en Cuba y en San Juan de Puerto Rico. Le han sido otorgados premios en Tenerife y en Gran Canaria, en Madrid, Barcelona, Huelva y La Coruña; y en Italia: Roma, Monteccatini, Secondigliano, Nápoles y Salerno, en cuya ciudad se le realizó un homenaje. Tiene editados libros de dibujos de Tenerife, La Gomera e Italia (dibujos del terremoto de 1980, Salerno); también carpetas de dibujos de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro, así como carpetas para Granadilla, Güímar, La Laguna y el Consejo Consultivo. Ha ilustrado numerosos libros, carteles y etiquetas, y ha realizado decorados para los teatros Guimerá y Leal y para el Círculo de Bellas Artes. Su obra figura en colecciones particulares del Archipiélago, Europa y América, así como en museos de las Islas y en los de la Diputación de Barcelona y Hermano Pedro de Guatemala. En el año 1966, en el Ateneo de La Laguna, junto al pintor Raúl Tabares realizó la exposición “Acuarela Experimental”, la cual marcó un hito en esta técnica dentro de Canarias por su modernidad. Serie “Pintores canarios”, cuadro nº 19 (técnica mixta sobre papel de acuarela) EL DÍA, domingo, 14 de junio de 2015 p5 p6 domingo, 14 de junio de 2015, EL DÍA CLAVES DEL CAMINO Texto: José Gregorio González Y es que lo profano, en ciertas épocas, cobró vida propia dentro de catedrales e iglesias a través de la celebración de fiestas y rituales indecorosos, burlescos, impropios del entorno de recogimiento que hoy relacionamos con estos edificios. Son historias de otro tiempo, sin duda, pero historias que han sentado las bases de lo que hoy vivimos como presente. En la Edad Media la vida se regía por otros valores y patrones que, fuera de contexto, fácilmente podríamos juzgar equivocadamente. Dentro de esas celebraciones paganas, que espontáneamente no dudaríamos en vincular con el Carnaval y con las Satunarles romanas, aun cuando no siempre lo estén, se encuentra la Fiesta de los Locos o Fête des Fous, cuyo recuerdo persiste en numerosos enclaves, algunos de ellos localizados en España, y que se supone dio origen en diversos países europeos al llamado Día de los Locos, a primeros de abril. Estamos ante una festividad que se desarrollaba entre el día de Navidad y el de la Epifanía, con su punto álgido el 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes, y que por tanto también está vinculada a los ritos paganos del solsticio de invierno. La ceremonia parodiaba la liturgia católica mediante la celebración de una misa burlesca en el interior de los templos, catedrales incluidas, y con el beneplácito, e incluso la participación, obligada o no, del clero. Los personajes interpretan grotescamente el papel del Papa, los obispos y sacerdotes, nombrándose también un príncipe o rey de los locos que parodiaba claramente a la jerarquía eclesiástica, de cuyos niveles más bajos se especula que surgió por vez primera. El pseudoobispo solía pronunciar una homilía irreverente al tiempo que realizaba gestos encaminados a provocar la risa y exaltar a los presentes, muchos de los cuales eran exhibicionistas y destilaban un hálito de denuncia sobre los excesos que cometía el clero. A continuación se iniciaba una hilarante procesión por el exterior del templo en la que los locos –que portaban bastones, cetros y objetos con forma fálica– se insinuaban a las mujeres, mostrándose irreverentes y ofensivos con algunos personajes, al punto de hacer montar al revés en un asno a los maridos que consideraban sumisos, tal y como señala el experto en literatura francesa Jean–Charles Payen. El folklorista Leander Petzoldt recoge en su aportación a la obra colectiva La Fiesta una ilustrativa descripción de la ceremonia profana desarrollada en Alemania en pleno siglo XV: “Los sacerdotes de una iglesia –escribe el cronista medieval– elegían un obispo de los bufones, que acudía a la iglesia con gran pompa y se sentaba allí en el trono episcopal. A partir de ese momento comenzaba la misa cantada, en la que participaban todos los clérigos con las caras PROFANO Y SAGRADO La Fiesta de los Locos: irreverencias en el templo Bajo la mirada de la sociedad moderna puede resultar contradictorio que un templo cristiano muestre en su decoración interior o exterior imágenes de alto contenido sexual, que, lejos de lo caricaturesco o de una aparente función preventiva de comportamientos censurables, llegan a ser en ocasiones un explícito “manual de instrucciones” sobre aquello que, en teoría, se pretende demonizar. La sorpresa puede ser aún mayor sí echamos mano de la historia y rastreamos el desarrollo, en el interior de los propios templos, de ceremonias hilarantes como la Fiesta de los Locos. tiznadas o con máscaras repulsivas o ridículas. Durante la misa, los clérigos, disfrazados de bailarines o mujeres, danzaban en el coro y cantaban allí canciones indecorosas. Los demás comían salchichas sobre los altares, jugaban a las cartas o a los dados en presencia del sacerdote que decía la misa, lo ahumaban con un incensario donde ardían trapos viejos y le hacían respirar ese humo. Acabada la misa cantada se producían nuevas extravagancias e impiedades. Los sacerdotes corrían por la iglesia acompañados de los hombres y mujeres de la ciudad y se azuzaban mutuamente a cometer todo tipo de insensateces y excesos. No había pudor, vergüenza ni impedimento que contuviera la desmesura de excentricidades y pasiones. El lugar sagrado que servía de escenario no infundía ya ningún respeto. En medio del guirigay y del salvaje ruido de blasfemias y canciones indecorosas se veía a unos completamente desnudos y a otros entregados a la lascivia más desvergonzada”. Algunas fuentes señalan incluso que durante esas procesiones o romerías exteriores se llevaba en las carretas diversidad de inmundicias que eran arrojadas al público, señalando también la presencia de individuos que fustigaban a quienes no andaban lo suficientemente ágiles como para ponerse a salvo, algo que sin duda recuerda y mucho a la manera en la que celebramos en Canarias, por ejemplo, la fiesta de los carneros en El Hierro. Estamos, en suma, ante una clara inversión de los roles, del papel que desempeñan los dominadores y los dominados, que hace que La Fiesta de los Locos hunda sus raíces en las Lupercales y las Saturnales romanas, celebraciones durante las cuales los esclavos adquirían unos derechos y privilegios propios de los señores. Tal y como afirma Ramón García Pradas, de la Universidad de Castilla–La Mancha, partidario de una tesis que vincula los orígenes del teatro francés medieval, concretamente del género la “Sottie”, con esta manifestación pseudolitúrgica, “la fiesta expresa el renacer de la tradición pagana y libera el poder de la palabra contra la prohibición de la censura social. Así, la fiesta se convierte en locura en el sentido más metafórico del término: el loco de la Edad Un grabado que representa la Fiesta de los Locos. Media es un hombre que se enmascara y que toma la autoridad de su sinrazón para librarse a un discurso inaccesible a toda posibilidad de represión y donde no impera en ningún momento la constricción de la regla. Lejos de ser un ser marginal, se integra en un sistema que tolera e implica la locura del lenguaje y el sentido. Es más, en plena Edad Media las cofradías de locos llegaron a convertirse en un agente necesario para mantener el equilibrio dentro del seno social. Los “locos” tienen su propio lenguaje, su código de gestos y comportamientos, reivindicando la locura como el estado más cercano a la sabiduría, de tal manera que incluso se crea una corriente hermética que plantea el desarrollo evolutivo a través del Camino del Loco. Fulcanelli, el misterioso autor del que se decía era alquimista, en su habitual lenguaje críptico se refiere a esta fiesta cuya presencia está documentada ya en el siglo XII en El misterio de las catedrales, realizando una descripción rica en matices simbólicos que no nos resistimos a reproducir: “Otras ceremonias, muy del gusto de la multitud, celebrábanse también allí durante el bello período medieval. Una de ellas era la Fiesta de los Locos –o de los sabios–, kermesse hermética procesional, que salía de la iglesia con su papa, sus signatarios, sus devotos y su pueblo –el pueblo de la Edad Media, ruidoso, travieso, bufón, desbordante de vitalidad, de entusiasmo y de ardor–, y recorría la ciudad... Sátira hilarante de un clero ignorante, sometido a la autoridad de la Ciencia disfrazada, aplastado bajo el peso de una indiscutible superioridad. ¡Ah, la Fiesta de los Locos, con su carro del Triunfo de Baco, tirado por un centauro macho y un centauro hembra, desnudos como el propio dios, acompañado del gran Pan; carnaval obsceno que tomaba posesión de las naves ojivales! ¡Ninfas y náyades saliendo del baño; divinidades del Olimpo, sin nubes y sin enaguas: Juno, Diana, Venus y Latona, dándose cita en la catedral para oír misa! ¡Y qué misa! Compuesta por el iniciado Pierre de Corbeil, arzobispo de Sens, según un ritual pagano, y en que las ovejas de 1220 lanzaban el grito de gozo de las bacanales: ¡Evohé! ¡Evohé!, y los hombres del coro respondían, delirantes: “Haec est clara dies clararum clara dierum! Haec est festas dies festarum festa dierum!” (¡Este día es célebre entre los días célebres! ¡Este día es de fiesta entre los días de fiesta!)”. El papa Inocencio III la prohibió por decreto en 1207, aunque la nueva y tajante condena del Concilio de Basilea, en 1431, p7 EL DÍA, domingo, 14 de junio de 2015 CLAVES DEL CAMINO deja bien a las claras que quizá desapareció de los grandes centros de culto, pero siguió viva durante muchos siglos en los más dispares rincones. Una reminiscencia de esta celebración la podemos encontrar en la localidad valenciana de Jalance, donde, coincidiendo con el Día de los Inocentes, se celebra su particular versión de la Fiesta de los Locos. Cada 28 de diciembre se revive esta singular tradición, que según la documentación parroquial existente se remonta al menos hasta el siglo XVII, lo que implica su supervivencia a las prohibiciones. El desarrollo del evento posiblemente ha variado en algunos elementos con respecto a lo que debió suceder hace varios siglos, pero en la esencia es perceptible el toque de irreverencia y sensualidad de la misma. El orden establecido comienza a romperse a primera hora de la mañana cuando se nombra al alcalde de los locos, recibiendo la vara de mando del alcalde real y con él la licencia para trastocarlo todo, llegando a colgar simbólicamente al cura del pueblo. Parrandas de “locos” discurren por las calles haciendo todo tipo de irreverencias y actos atrevidos con los vecinos y todo aquel que se cruza en su camino, desde bailes a veces irreverentes a las travesuras más diversas como cargar a cuestas con alguien o desalojar un bar haciendo que sus clientes bailen en la calle. Muchas veces este pícaro comportamiento responde a los encargos de terceros que pagan a los locos para que ejecuten sus pilladas, un pago que en similar cantidad deberán abonar aquellos que se nieguen a seguir el juego. Los participantes se visten de forma estrafalaria y portan porras con formas fálicas, en una atmósfera de diversión burlesca, sensualidad no disimulada, música y placeres gastronómicos regados generosamente con licores espirituosos. La fiesta del asno y la risa pascual Para muchos autores la Fiestas de los Locos y la Fiesta del Asno o Fête de l’âne son la misma cosa, adoptando la segunda denominación cuando se introducía un asno en el interior de la iglesia. El asunto no está claro aunque hay pistas suficientes para sugerir que se trata de dos festejos rituales que, si bien tienen puntos en común y se ofician en el mismo periodo del año, cuentan con identidad propia. El asno es un animal sagrado, una metáfora de la sabiduría en diferentes culturas. Como apunta el experto en historia y simbología hermética Rafael Alarcón Herrera en La huella de los templarios, “en toda leyenda, el equino maestro, caballo, asno o mula, es una clave simbólica fundamental; su papel ha sido definitivo en la tradición esotérica universal, pues actúa como animal que conduce hacia un lugar planteado como meta trascendente. Es un vehículo, un medio, pero que no actúa pasivamente sino de forma activa en el viaje de búsqueda. No nos lleva, sino que nos conduce”. En la citada obra Alarcón nos recuerda la sacralidad del asno en el antiguo Egipto, consagrado a Seth–Tifón y sometido a sacrificios que implicaba la toma de su sangre y el cubrirse con su piel, mientras que en Grecia su figura desempeña un destacado papel como parte del cortejo de Dioniso, a cuyos lomos cabalgaba y obtenía victorias, al punto de concederle el habla. En los Misterios de Eleusis, los objetos rituales recorrían la vía sagrada colocados a lomos de un asno. No olvidemos que Lucio Apuleyo lo convierte en el protagonista del camino iniciático que debe recorrer el héroe del Asno de oro, convertido en ese animal por culpa de su necedad. El cristianismo también sincretizó la simbología del asno y lo hace desempeñar un papel importante en la vida de Jesús: durante su nacimiento, en la huida a Egipto para evitar a Herodes y en la entrada en Jerusalén como el rey y mesías esperado, en los tres casos a lomos de un asno. Y a ello añadimos otros pasajes de las escrituras, como el asno del adivino Ballam, cuya vida salva y a través del cual habla el mismísimo Dios, o los textos apócrifos y la tradición, que brindan el don de la risa al asno original del pesebre, o la cruz negra de su espinazo por portar al Galileo. Precisamente esa condición de portador de Cristo hizo que en época medieval el asno fuese asimilado a la figura de San Cristóbal, el portador de Cristo. En la celebración que nos ocupa, la Fiesta del Asno, subidos al equino, que viste lujosos ropajes y una corona dorada, entran en la iglesia un hombre y una mujer desnudos. El animal escucha la misa parodiada y recibe los elogios de los oficiantes, mientras el público responde con rebuznos, para salir posteriormente en animada procesión fuera del templo. Al parecer, los templarios conocieron ese significado hermético y lo plasmaron en infinidad de leyendas, en forma de relatos codificados en los que el asno desempeña un papel determinante y muchas veces es capaz de ver la verdad divina antes que los humanos. Algunos de ellos, especialmente los conservados en Puente la Reina, son relatados por Alarcón Herrera en su imprescindible trabajo. La estática piedra también lo reflejó, como asevera este especialista en historia del arte y templarios: “Los constructores medievales tomaron el asno como animal simbólico. Para los artesanos representaba la imagen del maestro que aparenta no saber Grabado de Pieter Van der Heyden sobre fiestas irreverentes. nada, pero es portador del conocimiento y las reliquias del saber pasado. Así lo esculpieron en canecillos y capiteles, siguiendo un esquema sumerio–egipcio de más de dos mil quinientos años de antigüedad: un asno toca el arpa, mientras otro pequeño animal sentado ante él, un cerdo o un mono, lo escucha extasiado apoyando una pata en el instrumento musical”. No olvidemos que el cristianismo primitivo nos ha legado el famoso y controvertido graffiti del Palatino Romano, datado en el siglo III, en el que se representa un crucificado con cabeza de asno que es adorado por un cristiano, con una inscripción en griego que reza “Alexameno adora a su dios”, algo que ha sido interpretado como una burla al nuevo culto pero que a la luz de lo expuesto adquiere una lectura simbólica nada desdeñable. En la tradición alquímica medieval el asno representa lo físico, el cuerpo elemental, de tal manera que montar sobre el mismo es superar esos niveles. Podríamos extendernos ampliamente sobre este asunto de las fiestas populares con elementos irreverentes que entran en las iglesias, y profundizar en los Carnavales que han bebido de todas ellas y sacaban a la calle a dioses mitológicos como Baco, a semidioses con cabeza de animal o los sugerentes cuerpos desnudos de mujeres que adoptaban el papel de ninfas, pero el espacio no da para tanto. Por ello tan solo nos gustaría incluir en este apresurado repaso y a modo de conclusión la llamada Risus Paschalis, o Risa Pascual, una costumbre documentada desde el siglo IX en Reims y vigente resi- RUTA POR EL SANTA CRUZ MÁS MISTERIOSO Todos los pueblos y ciudades de Canarias atesoran rincones, objetos e historias en las que lo misterioso, lo potencialmente inexplicable o lo insólito desempeñan un papel protagonista, con frecuencia relegado a un papel secundario o a una anotación a pie de página en los libros que nos cuenta la historia más convencional. Santa Cruz de Tenerife no es una excepción, y en sus templos encontramos objetos y cuadros que protagonizaron portentos que fueron tomados como milagrosos; edificios y plazas con una explícita carga simbólica que puede ser interpretada desde un punto de vista hermético y heterodoxo; localizaciones vinculadas a la aparición de presuntas almas en pena o extrañas luminarias; museos donde cuelgan cuadros con mensajes encriptados... En torno a todo ello girará la segunda convocatoria de la ruta temática Santa Cruz Insólita, organizada por el colectivo Canarias Territorio del Misterio para el próximo sábado 20 de junio. Las plazas son limitadas y la inscripción debe formalizarse en [email protected] o bien por llamada o whatsapp al 628.368.842 dualmente hasta bien entrado el XIX que acaparó, desde la irreverencia y la obscenidad, la atención de los feligreses con la intervención activa del clero. La fiesta, parodia y oficio religioso, todo a un tiempo, tenía lugar durante la misa de la mañana de Pascua de Resurrección, cuando el sacerdote se las ingeniaba para hacer reír a toda costa a los feligreses con cualquier recurso que tuviera a su alcance. El oficiante, que además de un clérigo podía ser incluso un artista invitado para la ocasión, cantaba, bailaba, contaba chistes e historietas disparatadas, sin escatimar en expresiones subidas de tono y claramente obscenas. El sacerdote gesticulaba como un poseso levantándose los ropajes para mostrar abiertamente sus geniales, fingiendo copulas heterosexuales y homosexuales y simulando masturbarse. Hoy en día, una descripción como ésta nos llena de perplejidad y con toda lógica hace aflorar nuestro más rancio escepticismo a cerca de su verdadera ejecución en el interior de catedrales y templos, pero así era. Ocasionalmente, el oficiante se ayudaba de un feligrés al que encasullaba y ponía a oficiar misa, permaneciendo vigente hasta el año 1911 en Alemania a pesar de las reiteradas prohibiciones y llamadas papales desde el siglo XVII al recatamiento. La explicación convencional aboga por un intento de la curia de expandir la alegría entre los fieles tras el decoro de la Cuaresma, como sostiene el padre jesuita Franciscus Borgia Gözenberger, o bien como expresión externa de alegría desbordada ante una celebración tan importante para el mundo cristiano como la Pascua de Resurrección, el insondable misterio sobre el que se edifica el templo de las creencias. Pero otras interpretaciones, como las apuntadas por la investigadora María Caterina Jacobelli, ven en la Risa Pascual la reminiscencia de otras fiestas paganas primaverales de la antigüedad, entre ellas los ritos mistéricos de la diosa Demeter del siglo VII, en los que las sacerdotisas, bajo los efectos de bebidas espirituosas, bailaban con falos que sostenían en sus manos o colgaban de sus cinturas, hacían parodias junto a todo tipo de obscenidades para finalmente participar en una orgía. Quizá, a la vista de lo expuesto, tome más vigencia que nunca aquella sentencia que atribuye el pecado a los ojos del observador, y no necesariamente al objeto de la observación. p8 domingo, 14 de junio de 2015, EL DÍA www.eldia.es/laprensa Revista semanal de EL DÍA. Segunda época, número 984 Cómo afrontar una SEPARACIÓN DE PAREJA CUANDO HAY HIJOS E l incremento notable de divorcios en nuestra Comunidad Autónoma hace que, inevitablemente, nos planteemos qué pasa con los hijos. No me refiero a los temas legales, cuya competencia es de otros profesionales, sino a cómo afrontar esa separación para que sea lo menos dolorosa y traumática posible. Suele escucharse, como razón para seguir adelante con la relación, que se quiere evitar que los hijos sufran. Es cierto que el ambiente más propicio para los pequeños es que la relación familiar sea estable, tranquila y respetuosa, pero si esto no va a lograrse manteniéndose la pareja, es preferible que se produzca la separación. Los niños necesitan sentirse seguros y cuando presencian discusionesytensiónenlospadres,ocuando el modelo familiar que les transmitimos no es adecuado, estamos dañando su desarrollo afectivo. Cuando en la pareja hay infelicidad es percibida por todos, incluidos los hijos. Aunque no presencien discusiones o conflictos, el estado de ánimo se transmite. No olvidemos que los niños aprenden de nuestros ejemplos, de nuestras acciones, más incluso que de nuestras palabras. ¿Qué recomendaciones podemos dar? Se nos ocurren las siguientes: • Mantener todas las conversaciones y negociaciones necesarias para concretar la separación sin que los hijos lo sepan. Sólo cuando se tenga claro cómo continuará todo se podrá hablar con ellos. La incertidumbre sobre lo que ocurrirá les causa mucha ansiedad, por lo que, cuanto menos se deje al azar, mucho mejor. • Cuando se decidan a hablar con ellos, lo ideal es que ambos padres estén jun- Texto: Carmen García Olid (psicóloga T-01820 www.practis.es iom) tos. De este modo se evita que los niños lo perciban como una situación de dos bandos o unilateral (aunque así fuese, ellos no deben saberlo). • No deben darse más motivos que el hecho de que papá y mamá han decidido que ya no son felices juntos y que por eso van a separarse. Explicarles que no tiene nada que ver con ellos, que ambos los quieren muchísimo y que van a seguir queriéndolos. • Nunca hay que tener discusiones o conversaciones sobre la separación o los trámites legales delante de ellos. Tengan en cuenta que estarán alertas a cualquier señal o palabra por lo que hay que extremar las precauciones y tratar de esos temas cuando ellos no estén. • Es mejor explicarles cómo serán las cosas a partir de ese momento: dónde vivirán, con quién, cuándo verán al otro progenitor... Siempre dejando muy claro que los sentimientos hacia ellos no van a cambiar en absoluto y que tanto papá como mamá seguirán siendo siempre sus padres. • Hay que animarles a que pregunten lo que necesiten saber y que expresen sus pensamientos y sus emociones en relación a la noticia. De este modo evitaremos que su angustia sea mayor y fomentaremos la confianza para hablar acerca de lo que les preocupe. • No se debe hablar mal del otro progenitor ni permitir que nadie (familia o amigos) lo haga delante de los hijos. Recordemos que para ellos ambos son sus padres y los quieren y necesitan a los dos. Si el padre o la madre necesita desahogarse, debe recurrir a otros adultos para ello. • No hay que caer en la tentación de buscar el apoyo en los hijos, como si hubiera que “ganarlos”, ni mucho menos recurrir al chantaje emocional. Cuando se vayan con el otro progenitor, hay que mostrarse bien, sin tristeza o enojo, de forma que los niños no piensen que abandonan al padre/madre que se queda. No tenemos derecho a hacer que se sientan culpables por pasar tiempo con uno de sus padres. Al contrario. Que los niños tengan una buena relación con ambos es necesario para su buen desarrollo emocional. • Fomentar el contacto con el/la ex no es “perder” a los hijos. Los hijos crecen y con el tiempo entenderán cosas que de pequeños sólo guardaron y registraron. Puede volverse en contra nuestra intentar alejarlos de su padre/madre. Ellos tendrán sus propias conclusiones y opiniones y no deben sentir que fueron manipulados. A corto plazo la persona manipuladora se saldrá con la suya, pero es cuestión de tiempo que se vuelva en contra de ella. • Cuando los hijos vuelvan de estar con su padre/madre no hay que interrogarles sino hacer preguntas abiertas del tipo “¿qué tal lo has pasado?”, para que ellos cuenten lo que les parezca. Si se hacen demasiadas preguntas sólo conseguiremos que los niños no respondan y se sientan angustiados. • Si se da el caso de que el padre o la madre incumple sus obligaciones con ellos, hay que evitar el sufrimiento a los hijos. Ellos no necesitan saber si llega o no llega la pensión alimenticia. Si, por ejemplo, se incumple con la visita, es mejor animarlos y salir con ellos, buscando alguna excusa como “tendrá mucho trabajo”. Por supuesto, se deben tomar las medidas oportunas o mantener las conversaciones que se consideren necesarias, pero siempre al margen de los hijos. •Enelcasodeadolescentes,suelehaber cierta tendencia a culpar a uno de los padres. También intentan indagar las razones de la separación. Siempre hay que fomentar que pregunten lo que necesiten pero en relación a los motivos, sólo mantenerse en que ya no son felices, que no quieren seguir juntos y hacerse daño... Los hijos deben juzgar a los progenitores por la conducta que tengan hacia ellos y no por lo que ocurra entre sus padres. • Si se muestran reticentes a estar con el padre o la madre, hay que hablar con ellos para que expliquen sus motivos. Ambos progenitores deben saberlo pues es responsabilidad de ambos el bienestar y la educación de sus hijos. No hay que obligar a esas visitas pero tampoco dejar de hacerlas. Con los adolescentes es mejor negociar. Tal vez no quieran ir con su padre/madre el fin de semana porque tienen planes con sus amigos, por ejemplo. Es mejor, entonces, ver el modo de verse alguna tarde o algún día para almorzar. No olvidemos que los hijos no son de nuestra propiedad, sino que, como decía Saramago, nos son prestados “para hacer un curso intensivo de cómo amar a alguien más que a nosotros mismos, de cómo cambiar nuestros peores defectos para darles los mejores ejemplos”.