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ISSN 0001-6002/2009/51/3/155-157
Acta Médica Costarricense, ©2009
Colegio de Médicos y Cirujanos
El Ángulo del Investigador
La búsqueda bibliográfica
Olga Arguedas-Arguedas
Una vez que un investigador ha formulado su pregunta de investigación, el siguiente paso
debe ser, la realización de una adecuada búsqueda bibliográfica del tema en cuestión. La búsqueda
bibliográfica consiste en la localización de las referencias bibliográficas, sobre algún tema
concreto, extraídas de diferentes fuentes de información.
La búsqueda bibliográfica es un elemento esencial para evaluar la importancia de la pregunta
de investigación y la escogencia del tipo de diseño del estudio. También nos ayuda a aprender de
los errores o limitaciones de los estudios previos que, por lo general, son enunciados por sus propios
autores en la sección de discusión, o bien, en la correspondencia que se genera luego de la
publicación de un artículo.
La bibliografía científica publicada respecto de un tema, se constituye en fuente de inspiración
pues, los autores suelen mencionar las líneas de investigación futuras respecto al tema.
En la actualidad, dada la gran cantidad de información disponible es importante que se tengan
las herramientas básicas para discriminar cuál información tiene relevancia científica y merece ser
tomada en cuenta y cuál no. Debemos recordar que las comunicaciones científicas tienen una
clasificación taxonómica que las divide en:
1. Primarias: Comunicaciones originales de resultados acompañados de los fundamentos
conceptuales que sirven a los expertos, para producir otros conocimientos. Ejemplo: artículos
originales de las revistas médicas que muestran resultados de estudios clínicos,
epidemiológicos o de investigación básica.
2. Secundarias: Artículos de revisión en que los autores aportan una reorganización del
material, una jerarquización de los contenidos y una nueva articulación argumental. Todos
los hechos se apoyan en la literatura primaria, desde la cual se realizan interpretaciones y
conclusiones. Ejemplo: los artículos de revisión o “estados del arte” relacionados
específicamente con un tema, se publican en revistas científicas.
3. Terciarias: Libros de texto, tratados, resúmenes didácticos. Hay ausencia de controversias,
son una presentación sistemática de los temas. Pueden ser recopilaciones de lo más nuclear
de una disciplina o área de trabajo. Son muy útiles porque auspician el primer contacto con
un tema no conocido y como fuentes de apoyo didáctico para estudiantes. Sin embargo, no
son fuentes recomendadas para ser citadas en un protocolo de investigación o en un artículo
científico.
4. Cuaternaria: Textos de difusión popular, escritos científicos de divulgación. Los autores
son científicos o periodistas que escriben para público amplio. Aunque estas publicaciones
son relevantes para la población en general, se considera inaceptable la citación de este tipo
de fuentes en un artículo científico.
Miembro del Comité Editorial
AMC, Inmunóloga pediatra,
Universidad de Costa Rica.
Hospital Nacional de Niños
“Dr. Carlos Sáenz Herrera”.
Caja Costarricense de Seguro
Social.
Debemos recordar que no todo lo que está escrito y publicado es necesariamente verídico,
por lo anterior, para garantizar la solidez de un protocolo de investigación y de un artículo
científico es preferible basarse en publicaciones primarias y secundarias.
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La búsqueda bibliográfica puede hacerse en bibliotecas
reales o virtuales, en archivos o en registros. Las fuentes de
información más importantes hoy en día, son las “Bases de
Datos”. Una base de datos consiste en una serie de datos
organizados y relacionados entre sí, los cuales son
recolectados y explotados por los sistemas de información.
La búsqueda se realiza mediante un procedimiento
lógico, que permita obtener los resultados deseados, para
ello se debe: Definir, en una o varias frases cortas, el tema
sobre el que se desea obtener información.
Identificar los conceptos más significativos. Se eliminan
aquellos que tengan un contenido vago o impreciso o que
representen aspectos secundarios y poco impactantes.
Dilucida las diversas formas de expresión de un mismo
concepto como recurso alternativo para efectuar la búsqueda:
sinónimos, variantes gramaticales y otros.
Escoger el tipo de instrumento a utilizar: un catálogo,
boletín de sumarios, base de datos, etc. Elegir el instrumento
de búsqueda, entre aquellos que tengamos a nuestra
disposición.
En el área médica, la mayor parte de las búsquedas
bibliográficas se hacen haciendo uso de los llamados
metabuscadores como PubMed (www.pubMed.gov) o
TripData base (www.tripdatabase.com). Los metabuscadores
son interfases que buscan en múltiples bases de datos, lo que
simplifica y hace más eficiente la búsqueda. PubMed es el
buscador gratuito de Medline.
Deber destacarse la
importancia que tiene en la actualidad ScieELO ( Scientific
Electronic Library ONLINE) (www.scielo.sa.cr), para
acceder a una vasta colección de revistas latinoamericanas
que han cumplido con criterios de selección de calidad.
•
Innovación comunicativa
•
Ruptura de un mito
•
Gran aplicación en práctica clínica
•
Validez externa de los resultados (los resultados
obtenidos en una muestra se pueden extrapolar a grandes
poblaciones, o a la población general)
•
Esclarecimiento sobre áreas de futura investigación
Cuando ya se ha completado la recolección, organización
y lectura del material obtenido en la búsqueda bibliográfica,
debe levantarse el listado de los artículos consultados, para
la confección del protocolo de investigación o del artículo
científico. A este respecto, es importante tener en cuenta las
siguientes recomendaciones:
•
Califique y clasifique cada artículo leído (¿qué se sabía
del tema?, ¿qué de nuevo agrega el artículo?). Esto le
puede resultar útil cuando deba releer el material o para
la escogencia de cuáles referencias merecen ser citadas
en la bibliografía.
•
Cite solamente el material escrito realmente consultado.
No es correcto citar referencias de artículos no leídos.
Tampoco es correcto nombrar referencias que son
citadas en artículos que leemos, pero a las cuales no
hemos tenido acceso. Igualmente, recuerde verificar que
toda referencia citada en el texto, aparezca en la lista, al
final del mismo.
•
Recuerde que el formato de presentación de la
bibliografía puede ser variable según la revista de
publicación. Todas las revistas tienen una sección de
instrucciones para los autores en que se brindan las
guías para este efecto. Por ejemplo, en Acta Médica
Costarricense, las instrucciones para los autores aparecen
en el número 1 de cada año. En general, la mayoría de
las revistas siguen el esquema recomendado para
revistas biomédicas, que usted puede descargar en
(www.ICMJE.org). Tenga en cuenta que los nombres
de las revistas no se citan completos sino que se utiliza
la abreviatura de los mismos citada en Medline. Por
ejemplo, la revista titulada “Journal of Pediatrics” se
abrevia como “J Pediatr”. Es oportuno recordar también
que, los autores se citan hasta un máximo de seis; si son
más, después del sexto se escribe et al.
•
Sea consistente en la organización (use la misma letra,
orden y estilo para todas las referencias)
•
Maneje con cautela el orden de citación, recuerde que
las referencias se citan en la secuencia numérica según
la cual van apareciendo en el texto. Algunas veces, esta
secuencia se ve alterada luego de una revisión al
manuscrito en que se recortan o se mueven párrafos, lo
que obliga a reorganizar el orden de la bibliografía.
Es importante tomar en cuenta las siguientes
recomendaciones para encontrar la información más valiosa,
sólida y actualizada posible:
•
Evite consultar y citar publicaciones de divulgación no
científica
•
Sea altamente selectivo en el uso de las páginas de Internet.
No utilice sitios dirigidos al público en general. Algunas
páginas como las de la Agencia Europea de Medicamentos
(EMEA), Organización Mundial de la Salud (OMS) y
otras similares, son totalmente aceptables. Sin embargo,
aquellas obtenidas como producto del uso de un buscador
general como Google, deben ser valoradas con más
escepticismo.
•
Busque revistas de alto impacto, como suelen ser las
revistas líderes de las diferentes especialidades médicas.
En general, se consideran publicaciones científicas de
alto valor aquellas que reúnen alguna de las siguientes
características:
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Acta méd. costarric. Vol 51 (3), julio-setiembre 2009
•
Mantenga alguna forma de monitoreo de las
publicaciones recientes respecto al tema. Por ejemplo
en algunos buscadores especializados como PubMed,
usted puede circunscribir la búsqueda a las publicaciones
de la última semana o del último mes.
•
Recuerde que el formato de citación varía para artículos,
abstractos, suplementos, afiches, datos no publicados,
libros y otros. Cite siempre las referencias de acuerdo
con las normativa internacional y tome en cuenta, las
recomendaciones particulares de cada revista u órgano
revisor.
La pregunta de los lectores
La Dra. Jessica De La Paz, médica Interna de la Universidad
de Costa Rica, nos pregunta:
¿Cuál es la forma correcta de citar una referencia obtenida
de Internet?
Respuesta: Debe numerarse en forma consecutiva según el
orden en que se menciona por primera vez en el texto.
Recordemos que la forma de citación para material
electrónico es diferente si se trata de una base de datos, un
libro, correo electrónico o foros de discusión, o bien una
página web (homepage). Lo ideal en que en cada caso se
consulte el libro NLM’s Citing medicine (disponible en
www.ncbi.nlm.nih.gov/books/bv.fcgi?rid=citmed.
TOC&depth=2). Para efectos de proveer un ejemplo
presentaremos la forma de citación de una página web:
(Autor, Título, Tipo de Medio, Lugar de Publicación, Ente
que publica, Fecha de publicación, Fecha de Actualización o
Revisión, Fecha de Descarga, Sitio Web en que está
disponible)
Hooper JF. Psychiatry & the Law: Forensic Psychiatric
Resource Page [ Internet]. Tuscaloosa (AL): University of
Alabama, Department of Psychiatry and Neurology; 1 de
enero de 1999 [ actualizado el 8 de Julio del 2006; descargado
el 23 de febrero del 2007]. Disponible en: http://bama.ua.
edu./~jhooper/.
Gracias por su pregunta y esperamos que la información le
resulte útil.
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