Cristóbal Cano Sirvent: Anarquista y francmasón en

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15 marzo 2009
Cristóbal Cano Sirvent: Anarquista y francmasón en Villaviciosa
Hace unas semanas se estrenaba en “La Villa” así se denomina en Asturias a
Villaviciosa, una obra de teatro, que viene de la mano de un escritor asturianista Lluis
Portal “Oh 36” y que en parte recoge la vida de este anarquista y francmasón
Cristóbal Cano , y que en “La Villa” se le ha tenido por “la bestia parda”.
La obra recoge el periplo de un hombre conservador, monárquico, católico..Carlos de la
Concha García-Ciaño., durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera, De la Concha
formó parte del grupo político creado por éste, la Unión Patriótica. Fue diputado
provincial, y fundador de los ateneos de Villaviciosa y Xixón. Fundó en 1929 -y dirigióel periódico local Orientaciones, En el transcurso del conflicto bélico, el doctor se
escondió en un zulo realizado en su propia casa -el edificio, de tres plantas, aún existe
en la Plaza de Carlos I de Villaviciosa-, perfectamente disimulado, con el fin de
protegerse de la persecución a que le sometió de forma concienzuda, pero infructuosa,
el dirigente anarquista y masón Cristóbal Cano Servet, empleado de la fábrica El
Gaitero, y presidente del Ateneo Obrero de Villaviciosa, hasta su exilio en 1937.
Durante los 15 meses que permaneció escondido en su propio domicilio, el doctor De la
Concha escribió un interesante diario en verso.
Se sabe quien fue Don Carlos de la Concha, proveniente de una familia de rancio
abolengo en La Villa, ¿Pero qué sabemos de Cristóbal Cano?
Cuando hace años aterricé en esta tierra, creo que según me dicen, que aterrorice a los
biempensantes de La Villa la publicar La Masonería en Asturias, Los francmasones de
la Comarca de la Sidra, y en dicho libro relato quien fue en realidad Cristóbal Cano.
Cristóbal Cano , es el que está sentado con las manos en la piernas
Cristóbal Cano Sirvent, Nació en Llano de los Lobos (Almería) el 5 de mayo 1877,
casado y patriarca del clan Cano, pues no sólo es el padre de Emilio y Carlos Cano, sino
padre de una extensa prole y tío por otra parte de Barrera Cano,a alguno de ellos
también masón.
Su profesión de electricista le trae a Villaviciosa en 1904, donde halla trabajo en una
pequeña central eléctrica instalada en Amandi, frente a cuya instalación vivía, ocupando
a su vez los bajos de dicha vivienda con una pequeña barbería. Este polifacético
almeriense pasará a prestar más adelante sus servicios profesionales en la Fábrica del
Gaitero, primero recogiendo las muestras por los lagares de sidra y luego se le encarga
de las cuestiones eléctrico-mecánicas de la fábrica.
Poco a poco va prosperando y se convierte así en un pequeño industrial que se dedica a
múltiples tareas, desde llevarle al Sr. Obdulio Fernández el cobro de sus casas.” (Parece
ser que el susodicho Señor no quería mucho trato con sus inquilinos y los cobros de
rentas, y a sabiendas de las habilidades de Cano para tales menesteres, le propuso
encargase tal tarea sin muchas restricciones en cuanto a la admisión de inquilinos que
dejaba a criterio de Cano, con tal de que entregase puntualmente las rentas de las
denominadas “Casines de D. Obdulio”, amén de los engorros y compromisos. Cristóbal
Cano, simultanea esta labor con la venta y reparación de aparatos de radio, la
confección de sellos de caucho, reparaciones de motores, que le irán reportando más
capital y una cierta notoriedad y trabajo, estas cuestiones mercantiles de menor entidad
conviven con el negocio de un servicio de automóviles. A la muerte de un hijo de
Primitivo García su socio, en un accidente automovilístico, la sociedad se disolverá
quedando Cristóbal Cano con dos vehículos, uno de los cuales conducirá su hijo Emilio.
Automóviles Cano oferta al Ayuntamiento de Villaviciosa, como así lo notifica el
semanario “El Progreso” y las actas del Pleno Municipal [i] una propuesta de alquiler
de sus vehículos para uso municipal, cuyas tarifas se citan en el correspondiente acta del
23- Noviembre de 1937:
Carreteras del Estado y provinciales:
setenta céntimos por Km. 15 pts; por salida inferior a 30 km , se abonaran 3 pts por
cada hora de espera o parada que se exceda de 3 horas.
A juzgar por los escasos cargos en los presupuestos anuales del consistorio maliayés,
por alquiler de automóviles para desplazamientos del alcalde o de los concejales, no
parece que el Ayto. de Villaviciosa o sus ediles viajen mucho o Cristóbal Cano fuera su
mejor cliente.
Cristóbal, por otro lado, está inmerso de lleno en la vida cultural de Villaviciosa
impulsando uno de los proyectos más apetecidos por los francmasones asturianos y que
ya había apuntado su compañero Infiesto en su plancha “la incorporación de la clase
obrera al mundo de la instrucción”, cuya puesta en práctica ya habían puesto en marcha
sus hermanos de logia en Gijón, que colaboran de forma intensa con la puesta a punto
de proyectos como el Ateneo Obrero de Gijón o el Ateneo Obrero de la Calzada que
impulsa Gervasio de la Riera.
Con estos ejemplos como referencia, Cristóbal no duda en aunar voluntades y conjuntar
criterios, poniendo en marcha en Marzo de 1911 un Casino-Ateneo Obrero,
constituyendo parte de su primera Comisión Organizadora; la implicación de Cano en el
proyecto es intensa puesto que forma también parte de su primera Junta Directiva que
visita al Diputado José Mª Rodríguez González en un intento de recabar su padrinazgo y
ayuda para la construcción del edificio social, cuestión que medio consiguen. Acuden a
su vez en varias ocasiones al Consistorio maliayés, que en 1918 les sufraga con 2000
pts. pagaderas en dos años, y les ascienden la subvención de 500 pts. a 1000 pts anuales.
Cristóbal Cano no se conformará con haber puesto la idea en marcha y formar parte de
la primera directiva para echar adelante el proyecto, sino que se le encuentra en algunas
de sus directivas como Presidente de tal entidad en los años 1911; 1916; 1920; y 1928 y
como vocal en 1913.[ii]
El Ateneo Obrero nace con el objetivo de dotar a la clase trabajadora de los posibles
para adquirir la instrucción académica y social, necesaria y para ello se articulan las
docencias de Contabilidad, Cálculo Mercantil, Francés e Inglés, Dibujo y Mecanografía,
a las que asisten un total de 128 alumnos, como complemento pone en marcha la
Biblioteca Circulante que en 1922 ya está consolidada con 1.450 volúmenes, y con una
masa social que ampara dicho proyecto, cifrada en cerca de 500 ateneistas, 45 socios
protectores y 20 socios protectores anuales. El proyecto, no sólo es de Cristóbal Cano,
sino de una serie de personas que junto a él dedican muchas horas a impulsar su
máxima ilusión, buscando activos financieros, diseñando las distintas actividades
educativas y recreativas que esta institución prestará a lo largo de toda su vida; entre
esas personas que ayudan a poner en pie tal utopía, hoy es una realidad constatable con
un esplendoroso edifico en el centro de Villaviciosa, se encuentran varios hermanos de
la fraternidad francmasónica, entre los cuales están Germán Rojo y David Alonso
Fresno, que a su vez, formarán parte de los cuadros directivos del Ateneo Obrero, al
menos hasta 1936.
La proyección social y política de Cano Sirvent, no se queda solo en el ámbito del
Ateneo, sino que formará parte del Consistorio, al menos esto es lo que refleja un acta
del Pleno Municipal del 29 de Enero de 1931, formando parte del Partido Radical
Socialista, (del cuyo partido en Villaviciosa era presidente) y que por efecto de la
doctrina de silencio administrativo, conforme al artículo 14 del Decreto del 15/2/1930,
párrafo segundo del 174, Estatuto Provincial, Cano Sirvent queda posesionado como
Concejal. Aunque en las elecciones del 28 de Abril del mismo año, no saldrá elegido.
Cristóbal Cano, que comienza su vida política en la ideas reformistas, pasará a liderar
por un tiempo el movimiento radical-socialista villaviciosino, para ir derivando a
posiciones más libertarias, dados los problemas y escisiones que se van produciendo
dentro del partido radical socialista.
De hecho su proyección más singular es formar parte del patrimonio de masones
anarquistas, entre los que se encuentran destacados militantes como Eleuterio
Quintanilla, el alcalde González Mallada o Avelino González[iii], Director del
Periódico CNT. Puede parecer sorprendente la presencia de los anarquistas en la
masonería, fenómeno éste que se circunscribe fundamentalmente a Cataluña y Asturias,
lugares donde la presencia ácrata ha sido importante.
La atracción de los anarquistas por la masonería habría que tratarla desde dos puntos de
vista:
1º/ El carácter anticlerical de la masonería, factor en un momento dado aglutinante,
puesto que la jerarquía católica española muy reaccionaria y tramontana, representaba la
mayor opresión y dominación de la clase obrera.
2º/ Por otro lado está la visión secularizada del mesianismo de ambos colectivos que les
lleva a trabar lazos en pro de constituirse como una alternativa totalizadora, puesto que
de alguna forma beben de las mismas fuentes: la intelectualidad anarquista bebe del
optimismo filosófico de los ilustrados, que prepara al hombre, y la masonería es
heredera directa de la Ilustración, que entre otras cuestiones pretende transformar la
sociedad. Esto fue, en esencia, lo que arrojó en manos de la masonería a los más
importantes pensadores anarquistas que generaron dentro de la orden cierta tensión por
su, a veces, radicalismo, pero también es cierto que las tensiones por la doble
pertenencia no se dio tanto en los talleres masónicos como en las propias filas
anarquistas y su aportación podría decirse que ha sido realmente interesante.
Tanto es así que Eleuterio Quintanilla en una reunión del grupo “ORTO” de la FAI, al
que pertenecía en 1937, defiende frente a algunos planteamientos de compañeros, como
Manuel Gómez, Acracio Bartolomé sobre la incompatibilidad de pertenencia a la FAI y
ser masón, - algunos apuntan que hasta “sería bueno estar dentro de ella pues
conoceríamos muchas cosas por ser quien maneja los hilos de la política internacional.
El maestro Quintanilla contesta que él ha sido masón, y que muchos grandes hombres
del anarquismo han sido masones., - y se extiende en explicar lo que representa el orden
internacional y la masonería- finalmente “se acuerda que no procede por el momento
declarar la incompatibilidad de la FAI con las Masonería”[iv]
Como anarquista, Cano Sirvient está presente en el movimiento obrero a través de la
CNT, representando a los afiliados de la Fusión, champaneros de Villaviciosa, que tiene
una delegación en el Pleno Regional de la CNT de Asturias, León y Palencia de 1932
con 150 afiliados, a los que representa Cristóbal Cano. Hay que destacar la fuerza del
anarconsindicalismo en Villaviciosa, puesto que a ese mismo Pleno acude también José
Maximino de la Ballina, que lleva tras su representación 542 votos de la sectorial de
Oficios Varios; lo que da una idea aproximada de la presencia libertaria en Villaviciosa:
un trabajo historiográfico aún sin desarrollar .
La militancia libertaria de Cano, le llevará a colaborar con el movimiento
revolucionario del 34, como representante de la Confederación Nacional del Trabajo
(CNT), aunque esa es su idea, la realidad será mucho más prosaica.
El núcleo del conflicto del 34 lo conforman las Cuencas Mineras y los centros urbanos
industriales como Gijón, donde la CNT tenía una presencia mayoritaria en los sectores
de la construcción y el pesquero, aunque los pequeños núcleos rurales con una
incipiente industrialización no estaban exentos de la presencia anarquista, que en
momentos tan críticos como estos jugaban un papel histórico.
No parece que a Villaviciosa le haya afectado de forma contundente el movimiento
revolucionario, pues apenas si en los documentos municipales es tratado el tema de las
insurrecciones. Hay que tener en cuenta que en la zona hubo un fuerte contingente
armado que imposibilitaba cualquier movimiento de los insurgentes, pero aún en esos
momentos un pequeño grupo de ciudadanos eran conscientes del peligro que corría el
ejercicio de las libertades, ya que algunos síntomas internacionales y nacionales iban
presagiando la tormenta que se avecindaba, como consecuencia de esa sensibilización se
funda la primera agrupación socialista en Villaviciosa y se constituye la alianza obrera
UGT-CNT, a cuyos dirigentes maliayeses tal proyecto les costó, penas de prisión.
Decía antes, que en realidad la participación de Cano en la revolución del 34 fue mucho
menos revolucionaria y más prosaica, como suele a veces ser la realidad, el 6 de
Octubre, estaban reunidos una serie de personajes de la “Villa” en la Ferretería de
Máximo, y entre ellos Cano y su hijo Carlos, y al pasar por allí un Teniente de la
Guardia Civil que denominaban “Cucharón“, se lo llevó detenido y junto a él a su hijo
Carlos por protestar, su causa fue sobreseída, aún así estuvo tres meses encarcelado. El
semanario “El Progreso” de Diciembre de 1934 una vez concluida su prisión se hace
eco de su retorno a Villaviciosa en un suelto que decía: “tanto Cristóbal como su hijo
Carlos se han reintegrado a sus hogares”.
Cristóbal, aún con todo, y tras su despido de la fábrica el Gaitero, opta por alejarse de
Asturias; la tensión política existente en el seno de la sociedad maliayesa todavía es
tensa, sumado a que dentro de los talleres masónicos sucedía lo mismo con los masones
que componían las filas reformistas, tras su pacto con la CEDA, lo que provoca unas
pésimas relaciones entre los sectores republicanos y reformistas, llegando la situación a
las amenazas de irradiación que terminarán sin muchos más paliativos cumpliéndose
nos tardando mucho. En medio de ese tira y afloja, está Cristóbal sufriendo el envite que
recibe la Orden, con el fracaso del movimiento revolucionario en el que se ve implicada
En relación con los sucesos del 34, la masonería pagó parte de los platos rotos, puesto
que por diversas causas se vio implicada como parte activa del movimiento
revolucionario, fundamentalmente a través de los sucesos de Turón. Tras estos sucesos
y el período de prisión por el que tuvo que pasar, Cristóbal pone tierra de por medio,
trasladándose a Madrid y luego a Sevilla donde tiene trabajo, tomándose de este modo,
un cierto tiempo de reflexión y distanciamiento, aunque su temperamento le llevará
pronto a estar “al orden”.
El reflejo de lo que podía estar pasando, lo podemos encontrar en el artículo del
presbítero Juan García Morales que publicó el 14 de Noviembre de 1934 en el
semanario “El Progreso” de Villaviciosa y que decía entre otras cosas
... Quedamos en que el liberalismo era pecado. De ninguna manera se podía pactar con
los liberales. Después quedó todo como una balsa de aceite. Liberales y católicos se
unieron en fraternal abrazo. Los liberales tenían capilla particular en su casa y educaban
a sus hijos en los colegios religiosos. Los liberales de antaño son los católicos de hoy. ¡
Masones! La palabra hiere a pedradas en nuestros oídos. Si solo el nombre de
republicano era un baldón; sí este nombre infundía miedo y pavor en el ánimo; sí hasta
al republicano se le negaba la hombría de bien. ¿Con que ojos se mirarían por aquellas
calendas a los masones? Pues bien hoy ser masón tampoco tiene importancia, católicos
y masones están unidos.... “majora videimus”..
En 1936, nuestro almeriense vuelve a Villaviciosa y se reincorpora de nuevo a la
Fábrica de El Gaitero, de la cual había sido anteriormente despedido.
Pero algunas situaciones y planteamientos van a jugar en su contra pues las malas
lenguas le hacían víctima de todas las atrocidades que había habido en la localidad
antes, ahora y para el futuro; de esa concepción nos queda una nota policial donde se le
denomina como hombre de ideas avanzadísimas y peligroso autor de todos los
asesinatos cometidos por las hordas rojas en esta localidad[v].
Aún así, ocupa la presidencia de la Junta Obrera, a la vez que se engancha de nuevo al
activismo político con el triunfo del Frente Popular que de modo ajustado había
cosechado la victoria de las urnas y donde la Orden tenía unos importantes valedores en
la figura de varios diputados francmasones como José Maldonado, Alvaro de Albornoz
Limiana, Luis Laredo Vega, Mariano Moreno Mateo y hasta alguno en el bloque
derechista como Melquiades Alvarez, y Mariano Merediz[vi].
En Octubre del 36 la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) propone como Gestor
al Ayuntamiento de Villaviciosa a Cristóbal, cuestión que se aprueba en el Pleno del 12
de Octubre, dos meses más tarde se le elige para formar parte de las Comisiones de
Obras Públicas e Instrucción Pública. Su paso por el plenario de la Corporación no
trasluce su actividad real, puesto que sólo tiene dos intervenciones que son recogidas
como tal en las actas del Pleno:
1ª/ Sobre la revocación de unos acuerdos, que se han tomado de espalda al Pleno de la
Corporación
2ª/ Pidiendo que se investiguen ciertos sacrificios de animales al margen de los acuerdos
que se han tomado para evitar el estraperlo. A pesar de las pocas intervenciones está
presente en casi todos los plenos, registrándose su presencia en la último acta
republicana del 13 de Septiembre de 1937, luego ya vendría en Febrero de 1938 ¡El año
triunfal![vii]
De su vida masónica nos ha quedado muy poca información, apenas la que aportan los
distintos cuadros lógicos y poco más. Por ella sabemos que se circunscribe al igual que
sus amigos y convecinos a la logia Jovellanos 1, de forma tardía, puesto que “que ve la
luz “el 19 de Julio de 1925 en cuya ceremonia adopta el simbólico de “Costa” [viii]. Se
le exalta a Compañero (2º) el 27 de Mayo de 1928, pero luego, por falta de cuadros
lógicos, se pierde su curriculum masónico.
No obstante otras fuentes nos indican que el hermano Costa sigue en activo dentro de la
orden, como parece demostrar la carta que dirige con fecha del 27 de Junio de 1932 a
Marcelino Domingo pidiéndole que interceda ante un Consejero del Banco Popular para
que se promueva a un hijo suyo Emilio Cano, también iniciado masón, a la categoría de
Apoderado del banco donde presta sus servicios. [ix] Esta cuestión de acudir a los
hermanos masones que ocupaban altos cargos en la administración de forma profana o
que podían tener una cierta influencia, se recurría a ellos con cierta frecuencia
pidiéndoles determinadas recomendaciones, esto era una cuestión bastante generalizada
que se manifiesta en los contenidos de muchos expedientes masónicos realizados por el
franquismo.
Tras la caída de los últimos bastiones republicanos, se da la orden de ponerse a salvo
aquellos que pudieran temer por su vida, Cano Sirvent termina cogiendo un barco que
acoge a la plana mayor de republicanismo y que llega a Burdeos el 21 de Octubre 1937,
es más según recoge el diario bordolés “La petite Gironde” del 23 de Octubre de 1937
en su diario registro de barcos comenta: “Rubio venant de Villaviciosa, avec refugiés
espagnols”[x]. Aunque según otras manifestaciones [xi] , Cristóbal perdió dicho barco
y se fue a Gijón encontrando a Luis Valdés, un antiguo chófer suyo, que en aquellos
momentos era maquinista de un pequeño barco, con el cual llegarían a Burdeos.
De hecho hay constancia del paso de Cristóbal por las oficinas masónicas de la
AMI,[xii] y por la intendencia que monta la GLRN en los valles de Barcino, donde
satisface sus obligaciones para con su taller como así se comprueba con la matriz de un
resguardo de “capitación” a la GLRN en 1938, tras esa pequeña estancia vuelve a entrar
en tierras francesas, donde entrega al Cónsul español en aquella ciudad las 30.000
pesetas que había tomado de la Caja de La Unión Obrera, para las operaciones de
evacuación.
Fija su residencia en la ciudad francesa de Burdeos, donde muere el 2 de Enero de 1948.
Victor Guerra
[i] Villaviciosa 1934.
Reproducción facsimilar de los periódicos Orientaciones y Progreso, Edc, La Oliva.
Villaviciosa 1996 y Actas del Pleno Municipal de Villaviciosa.
[ii] AHPA Ateneo Obrero de Villaviciosa Caja 20.097.
[iii] Algunos de éstos libertarios estaban insertos en los grupos de la Federación Anarquista Ibérica (FAI): Eleuterio
Quintanilla en el grupo “ORTO”; y el alcalde Mallada en el grupo “Solidaridad”.
[iv] Acta del Grupo “ORTO” del día 28-6-1937. Archivo Histórico Provincial de Oviedo. Rollo 1233.
[v] Diligencia enviada al Sr. Auditor de Guerra por la Comandancia de la Guardia Civil de Villaviciosa. AHNGC/
Expediente 3 Legajo 54
[vi] Estos diputados estaban, o habían estado, dentro de las filas masónicas: Maldonado y Laredo Vega se habían
iniciado en la Logia Argüelles, Mariano Moreno Mateo, (defensor de los represaliados del 34) provenía de una la
logia de Madrid: La Mare Nostrun); Melquiades Alvarez y Mariano Merediz de la logia Jovellanos de Gijón; y
Alvaro de Albornoz era miembro de la Gran Logia Regional del Mediodía.
[vii] Actas del Pleno del Ayuntamiento de Villaviciosa 1936.
[viii] Joaquín Costa (1846-1911)Político y escritor español, preocupado por la modernización de España son de
destacar sus obras “Colectivismo agrario en España” ; “El problema de la Ignorancia del Derecho o el estudio
Oligarquía y caciquismo como la actual forma de gobierno de España”.
El nombre de Costa ha sido tomado por diversas formaciones masónicas a lo largo del siglo XX. Resaltar que en
Turón hubo a la memoria del político que se denominaba Triángulo Costa, al cual se le implicó en el movimiento
revolucionario del 34.
[ix] Carta Manuscrita que se halla en el expediente 3, Legajo 54 del AHNGC.
[x] “Socialistas de Villaviciosa durante la II República”. Cuadernos del Puntal . Villaviciosa Mayo 99
[xi] Según una larga correspondencia que tuvo el historiador local, Senén Rivero con el hijo de Cristóbal: Emilio
Cano, con relación a los temas históricos, algunos de cuyos datos han servido para reconstruir parte de esta
historiografía. Esperemos que en un día se aborde un largo trabajo sobre el anarquismo en Villaviciosa, en la cual
será una figura capital Cristóbal Cano.
[xii] Con la caída de Cataluña, pasaron a Francia los organismos dirigentes de las dos obediencias españolas GOE y
GLE, que crean la Comisión Representativa de la Familia Masónica Española en París en 1939, en ese mismo año en
un informe de la Comisión cifraban en 529 hermanos que se hallaban fuera de los campos de concentración, y dentro
de ellos se estimaba que hubiera otros tantos o más hasta completar unos 1.200 masones que junto a sus familiares
alcanzaban la cifra según el profesor Ferrer e Ignacio Cruz, de unas 3.500 personas. La preocupación por estos
francmasones no solo vino de este organismo, sino también de las logias francesas adyacentes a los campos de
concentración y de las propias obediencias francesas, además de la ayuda recibida de Méjico, dos organismos de
repatriación como el SERE y JARE se encargaban de la selección de exiliados que podían partir para los
Hispanoamérica, y la Comisión antes citada, colaboraba y presionaba para que en esos envíos fueran masones que
tenían o querían ir a ese continente.
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