Este proyecto está financiado por la Unión Europea Material didáctico de CPD para profesores Conclusiones del Proyecto Comenius de Literatura Infantil Utilizando la literatura infantil – enfoques generales a la enseñanza Eligiendo el texto Los datos del proyecto han demostrado que, en cada uno de los países participantes, los niños mostraban preferencia por los libros divertidos. Esto parece indicar cuál podría ser un buen punto de partida para la selección de textos, aunque únicamente un punto de partida – si los niños leen libros de este tipo por elección, entonces como profesores necesitamos pensar en cómo ampliar las posibilidades de elección, incrementar preferencias, y así convertir a los niños en lectores capaces de tomar decisiones bien formadas con respecto a su lectura. El género de preferencia, con la segunda mayor puntuación, ha sido el de libros de aventura, que también sería una buena elección. Los datos también han demostrado que hay una relación entre el número de libros que un niño tiene en casa y el interés y participación que muestra hacia la lectura. Para abordar las posibles diferencias que existen en cuanto al acceso a textos por parte del niño, el aula se convierte en un enfoque crítico para desarrollar oportunidades para que los niños se involucren con la lectura. Más de la mitad de los niños en cada uno de los países participantes consideraron que no era en la escuela donde aprendieron a hacer la selección de libros. A la hora de seleccionar los textos para emplear en clase el profesor/a puede decir de forma explícita por qué ha escogido dicho texto para tratar en clase o incluso animar a los niños, tras haber trabajado con un texto, a pensar en por qué ha sido un buen texto, a pensar en otros textos del mismo autor además de otros que son parecidos o que están conectados de alguna manera, por ejemplo, son de un género similar, tienen un argumento o personajes parecidos, etc. Formas interactivas de trabajar con el texto para desarrollar las destrezas de participación, reacción y comprensión lingüística. Ideas acerca de la introducción al libro Activando el conocimiento previo, prediciendo/planteando una hipótesis: ¿Los niños conocen otros libros escritos por el mismo autor/a? Usa esta información para averiguar de qué puede tratar la historia. 1 Presenta a los niños una caja que contenga multitud de objetos que aparecen en la historia. Pregunta a los niños de qué puede tratar basándose en los objetos que aparecen en la historia. Preguntándose acerca del texto: haz que los niños ‘se pregunten’ acerca de la historia, considerando únicamente la portada del libro y el título. Los niños deben preguntarse: ‘Me pregunto si…’, ‘Me pregunto por qué…’ Anima a los niños a hacer preguntas sobre el texto que refuercen la predicción, la especulación y que también les anime a establecer relaciones entre textos y entre un texto y sus propias experiencias. Proporciona a los niños algunas frases de arranque que puedan servir de ayuda: Me parece que… Tal vez la… Quizás… No estoy seguro/a pero… Esto me recuerda… Me hace pensar en cuando… Si hay ilustraciones que acompañan al texto, haz uso de las ilustraciones en la portada o en las primeras páginas para suscitar preguntas sobre la historia: ¿Qué te interesa en el dibujo? ¿Qué puedes decir sobre el escenario: en qué época está ambientada la historia, dónde está ambientada, en qué tipo de historia podría estar basado el escenario, quiénes serían los personajes en el dibujo? ¿Qué preguntas te gustaría plantear al ilustrador? Juega al bookzips (cremalleras de libros) (Cremin, 2009). Imaginemos que hay una cremallera alrededor del libro para que no se pueda abrir. Basándose en la información que ya tienes, la portada, el título, el autor/a y la reseña de la contraportada, haz una predicción acerca de lo que puede tratar el argumento, de quién puede ser el personaje principal – si es un héroe/heroína o un villano/villana, de cuál podría ser el tema del libro, etc. Tablas CDA – dibuja una tabla encabezada por Conozco; Deseo aprender; Aprendí. Conozco Sé que es/está… el Deseo aprender personaje Quiero el/la… saber Aprendí porque Me enteré de que él estaba enfadado porque… Tablas PRDF: funcionan en la misma manera que las tablas CDA pero requiere que los niños aportan pruebas para sus pensamientos y aprendizaje. Preguntas Respuestas Detalles Fuente Durante la lectura del texto El estudio ha demostrado que los profesores tenían diferentes niveles de confianza a la hora de usar el texto para reforzar la participación, la interacción y la comprensión. La siguiente lista de 2 estrategias está dirigida a áreas en las cuales los profesores de los países europeos participantes tenían menos confianza. Desarrollando la conversación dialógica Es importante ofrecer a los niños múltiples maneras de responder al texto durante el proceso de lectura. Por lo general, los profesores se sentían más seguros cuando hacían preguntas literales sobre el texto. Éstas tienden a generar respuestas orales más cortas y, con frecuencia, respuestas de una o dos palabras. Por lo tanto, ampliando el diálogo a través de preguntas abiertas se permite a los niños desarrollar las competencias clave de comprensión, por ejemplo, prediciendo, resumiendo, clarificando… En vez de hacerles preguntas, dota a los niños con raíces de preguntas para reforzar la reflexión y para animar a otros niños a responder. El objetivo es desarrollar el diálogo con los niños donde justifiquen y respalden sus opiniones refiriéndose al texto, además utilizando como referencia sus propias experiencias, incluyendo sus experiencias con otros textos. Posibles raíces de preguntas: A mí me parece… Me pregunto si… Quizás… No estoy seguro/a pero… Otras ideas para formular preguntas: Juega al sí, no, por qué. Entrega a los niños algunas afirmaciones sobre los personajes, el argumento o el escenario. Incluye algunas afirmaciones que pueden ser temas de debate o discusión. Los niños pueden responder sí o no pero tienen que poder justificar su respuesta dando las explicaciones pertinentes. Se puede jugar teniendo en cuenta el lenguaje del texto también. Raíces de preguntas para reforzar la inferencia y la deducción Describe con tus propias palabras…… ¿Qué crees que sucederá debido a…..? Si fueses tú, ¿cómo reaccionarían tus amigos? ¿Cómo sabemos que…..? Si tú fueras ______, ¿qué harías ahora? Echa un vistazo al texto y busca…… ¿Qué crees…..? ¿Qué estaba pensado_________cuando…..? ¿Cómo lo sabes? Basado en la información que tienes, puedes idear una serie de instrucciones para…… ¿Dónde están los ejemplos que respaldan tu punto de vista? 3 Alternativas a formular preguntas Estas ideas se pueden usar junto con preguntas más formales o usadas como una alternativa a formular preguntas. Apoyan a los niños a la hora de inferir, deducir, sondear, analizar y responder al texto. Alternativas a formular preguntas – Estrategias dramáticas Imágenes congeladas Crear imágenes congeladas implica captar un momento clave del texto y representarlo con los niños. Consiste en imaginar que el momento clave del texto ha sido congelado en el tiempo. Pide a los niños que adopten los roles de los personajes principales involucrados en el momento clave. Para que funcione eficazmente es importante que el profesor/a controle el proceso y lleve las ideas a la práctica. Pide a un niño que sea el protagonista y al mismo tiempo pregunta a la clase acerca de dónde y cómo estaría el personaje: de pie/sentado, hacia dónde estaría mirando, qué estaría haciendo, qué expresión tendría en su rostro, etc. Es importante preguntar a los niños detenidamente acerca de estas cuestiones para asegurarse de que se están remitiendo al texto para respaldar sus ideas y también que están infiriendo y deduciendo lo que el texto revela. Construye la imagen congelada, personaje a personaje, y considera la relación entre los personajes a la hora de preguntar a los niños acerca de dónde estará situado el personaje recién incorporado, hacia dónde estará mirando, qué estará haciendo, etc. Cuando los niños se sientan seguros con el proceso de la imagen congelada, podrán crear su propia imagen congelada con una escena distinta, proporcionando una ‘voz superpuesta’ con las razones que explican cómo han posicionado cada personaje. Como alternativa, una vez que algunos niños hayan creado sus imágenes congeladas, los otros pueden hacer preguntas sobre cada personaje, por ejemplo, ¿Por qué llevas esta expresión en tu rostro? ¿Por qué no estás colocado más cerca de.....? Ampliando las imágenes congeladas Corazones, mentes y voces – a partir de una imagen congelada, pregunta a cada personaje qué hay en su corazón (que sienten), qué hay en su mente (que están pensando) y que podrían estar diciendo en este punto de la escena. Para esta estrategia, elige personajes donde estos elementos sean probablemente diferentes, explorando así las distintas capas de personalidad. Improvisación (predicción) – emplea la imagen congelada como punto de partida y luego da vida a los personajes durante 10 segundos de acción. Se debe extraer la imagen de partida de la última sección del libro que has leído para que los niños puedan predecir lo que quizás va a ocurrir a continuación, basándose en lo que el texto revela. Esto también funciona de forma efectiva congelando la última escena del texto e improvisando lo que sucederá a continuación, o congelando un dilema significativo del texto, sabiendo lo que sucede a continuación pero cambiándolo por las propias ideas de los niños acerca de como resolver dicho dilema. 4 El teatro foro – emplea la imagen congelada como punto de partida y luego personajes pero esta vez pide a los niños que sean los ‘directores’ de la acción. tienen que ordenar a los personajes como quieren que actúen y se comporten. pueden probar alternativas y después llegar a un acuerdo con respecto a como los acontecimientos. da vida a los Los directores Los directores se desarrollan Los niños pueden identificar momentos claves al principio, a la mitad, y al final de la historia, justificando el por qué de la elección de estos momentos concretos. Selecciona un personaje y sigue sus pensamientos a lo largo de tres imágenes congeladas: pregunta al personaje acerca de lo que piensa y siente en cada uno de estos momentos de la historia y sigue cómo el personaje evoluciona y se desarrolla según avanza la historia. Todas las imágenes congeladas se pueden usar como punto de partida para composiciones escritas. Los niños pueden usar las imagenes congeladas para desarrollar sus propias ideas para escribir. El tipo de escritura que fluye naturalmente de una imagen congelada incluye la escritura de roles: entradas de un diario; cartas/emails a otros personajes, narraciones de la historia con otros finales alternativas, etc. Drama – visualizando. Lee partes de la historia y pide a los niños que creen un paisaje musical de la escena, por ejemplo, pensando en todos los sonidos que quizás se escucharían en el escenario en este punto de la historia. Divide la clase para que cada grupo se centre en una parte distinta de la escena. La clase debe hacer los ‘sonidos de escena’ todos juntos, creando así el paisaje musical del escenario. Esto puede suponer una excelente banda sonora para una imagen congelada. Drama: callejón de la conciencia. Identifica una decisión importante que un personaje debe tomar en la historia. Considera todas las razones para dos posibles elecciones que podría tomar el personaje. Divide la clase en dos grupos y da a cada grupo una de las dos lineas de actuación que podría tomar el personaje. Los niños de cada grupo tienen que pensar en todas las razones que respaldan por qué el personaje debe tomar dicha elección. Cuando ambos grupos tengan sus razones, deben formar dos filas una frente a la otra. Un niño se ofrecerá a ser ‘el personaje’ y caminará entre las dos filas compuestas de niños. Mientras pasa el ‘personaje’, los niños a ambos lados comunicarán sus razones por las que el personaje debe actuar de una manera específica. Las filas de niños representan la conciencia del personaje, además de los pensamientos divergentes que tendrá el personaje a la hora de intentar decidir lo que debe hacer. Drama – esto implica que los niños deben considerar los personajes que ‘rodean’ la historia: la familia menos directa del personaje, los vecinos del mismo, etc. Los niños tienen que adoptar uno de estos papeles y participar en ‘cotilleos’ entre ellos acerca del personaje, lo que está pasando en la historia y sus particulares puntos de vista como espectadores. Clarificando la comprensión Una competencia clave de la comprensión es poder clarificar y confirmar significados y entendimientos de forma continua mientras los niños abordan la lectura. Como adultos lo hacemos sin darnos cuenta de ello: mantenemos un diálogo interno con nosotros mismos para comprobar y clarificar significados y que nos empuja a leer algo de nuevo cuando no estamos seguros acerca de algo que hemos leído. Los profesores necesitan llevar este proceso a la 5 práctica. Una manera de conseguirlo es pedir a los niños que lean frase por frase, y luego terminen la frase ‘Creo que esto significa….’ El profesor/a tendrá que modelar este proceso, ampliando así las ideas para demostrar los procesos de pensamiento interno del lector/a. Modelo de Aidan Chambers (1993) Presenta a los niños la tabla a continuación. Lo que les gusta Lo que no les gusta Puzzles Patrones Tras haber leído la primera parte de la historia, o en momentos significativos de la misma, pide a los niños que identifiquen ‘lo que les gusta’ sobre la historia, los personajes, el argumento, el escenario, etc, y ‘lo que no les gusta’. Hay que animar a los niños a aportar razones. Lo importante, sin embargo, de este modelo son los ‘puzzles’ y los ‘patrones’. Los niños necesitan considerar los ‘patrones’ que han hallado en la historia: puede tratarse de conexiones entre otros textos, patrones en el comportamiento de un personaje, relaciones entre un escenario y las actuaciones de un personaje, etc. También los niños pueden tener en cuenta los ‘puzzles’. Son los elementos de la historia que no se entienden aún en el punto en el que uno se encuentra, por ejemplo, quizás no entienden por qué un personaje actúa de la manera en que lo hace, quién es un personaje específico de la historia, la importancia de un punto concreto de la historia o el significado de palabras o frases específicas. Hay que animar a los niños a compartir sus puzzles con los demás y pedir a los niños que aporten posibles ‘soluciones’ a estos puzzles. Elaborando un mapa de la historia Mapas de la historia (story maps) ayudan a los niños a poder narrar una historia verbalmente con el fin de, por un lado, facilitar la narración con sus propias palabras, y por otro, ayudar a los niños a resumir la historia. Mientras los niños escuchan la historia, pueden dibujar un ‘mapa’ o un ‘diagrama de flujo’ de la secuencia de acontecimientos. Puede tratarse de una serie de dibujos que conllevan o no palabras clave. Narrando con sus propias palabras, el teatro de lectores: Selecciona una parte de la historia y empieza a examinar el lenguaje de la misma. Subraya las palabras que son poco comunes y que son descriptivas. Mira los verbos empleados en las frases. Decide cómo las palabras destacadas podrían ser ‘interpretadas’ con acciones, voz, tono, y volumen de la voz. Considera qué partes del texto se pueden repetir para enfatizarlas, y dónde se puede aminorar o acelerar el ritmo de la lectura para reforzar la comprensión textual. Ahora los niños pueden ‘interpretar’ esta parte del texto. Esto refuerza también cómo los niños llegan a interpretar y entender el vocabulario específico. Resumiendo: Da a cada grupo de niños una página o sección de la historia. El grupo tiene que decidir cuáles son las partes más importantes de la historia en dicha página/sección. Debe narrar con sus propias palabras su parte pero únicamente con dos frases. Pide a los niños que escriban estas frases separadas y escritas en papel de gran tamaño. Todos juntos, tienen que volver a montar el resumen de la historia entera y decidir si alguna de las frases puede ser omitida para reducir la nueva narración aún más. 6 Resumiendo: Twittea la historia. ¿Los niños pueden crear un tweet que resume la historia en menos de 140 caracteres? Twittea tu momento favorito de la historia. Twittea tus pensamientos en un momento significativo de la historia. Manda un mensaje de texto sobre el mismo: crea una secuencia de texto entre los personajes. Envía una postal sobre la historia: escribe una postal de un personaje a otro, narrando la historia con sus propias palabras y desde este punto de vista. La postal dispone de poco espacio así que los niños tendrán que resumir la historia. Después de leer la historia Infiriendo, leyendo para conseguir múltiples significados: Confecciona una lista de todos los personajes de la historia y clasifícalos en función de: bondad a mezquindad; del más feliz al más triste; del más dulce al más brusco; del más ingenioso al más tonto, etc. Realiza esta actividad en grupo, aportando razones para su clasificación y llegando a un acuerdo. Resumiendo y cambiando de reparto: Vuelve a escribir la historia pero esta vez usando otro género, por ejemplo, un artículo de un periódico, una viñeta, o una reseña de libro. Resumiendo: Imagina que se ha convertido la historia en película. ¿Cómo sería el cartel que anuncia la película? ¿Qué acontecimientos se adelantarían en el tráiler? Los niños pueden crear un cartel de la película o incluso rodar un tráiler corto. Sintetizando: ¿Qué recuerdo duradero tienes de esta historia? Crea una escultura, utilizando plastilina o arcilla, representando tu visión del mismo. Céntrate en los temas y el posible mensaje de la historia. El modelo necesitará un título y una descripción corta para su exposición en una ‘galería de arte’. Referencias Chambers, A (1993) Tell Me: Children, Reading and Talk Thimble Press Cremin, T (2009) Teaching English Creatively Oxon: Routledge The Power of Reading Project (2011) Centre for Literacy in Primary Education http://www.clpe.co.uk/ 7