Número de registro: 3122 Novena Época Instancia: Tribunales

AMPARO DIRECTO 92/95.
Número de registro: 3122
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: Tomo II, Julio de 1995
Página: 180
AMPARO DIRECTO 92/95. JOSE LUIS ESCALONA ROMO.
CONSIDERANDO:
QUINTO. Suplidos en su deficiencia, como lo ordena la fracción II, del artículo 76 bis, de la
Ley de Amparo, los conceptos de violación transcritos con antelación resultan parcialmente
fundados y, en consecuencia, suficientes para conceder al quejoso el amparo y protección de
la Justicia Federal que solicita, conforme las razones que en seguida se indican.
En primer término, es pertinente señalar que como adecuadamente lo mencionó el Tribunal
Unitario responsable, en el caso, se acreditaron fehacientemente los elementos del tipo penal
del delito contra la salud, en la modalidad de posesión de marihuana y psicotrópicos, así
como la responsabilidad penal en su comisión, con los siguientes medios de convicción que
obran en el proceso penal.
Parte informativo debidamente ratificado por el Oficial Segundo de Barandilla y Policía
Preventivo de Magdalena, Sonora, los CC. Jovino Coen Gómez y Héctor López Denton,
respectivamente, en el que precisaron que el día dos de julio de mil novecientos noventa y
tres, aproximadamente, a las veinte treinta horas, se presentó ante ellos, en el área de
barandilla de la Cárcel Pública Municipal, José Luis Escalona Romo (a) "EL CUMBIAS",
bajo influjos del alcohol, mismo que solicitó el acceso a ese establecimiento y debido a su
insistencia, se le revisó una pequeña caja de galletas que llevaba y en el interior de la misma
se localizó tres envoltorios de plástico conteniendo una hierba verde con las características de
marihuana, así como diecisiete pastillas denominadas Rohypnol, razón por la cual se detuvo a
dicha persona (fojas 4, 18 y 19).
Dictamen químico, suscrito por Idolina Juárez Celaya, quien hizo constar que el vegetal
verde resultó ser cannabis sativa l. (marihuana), considerado como estupefaciente por la Ley
General de Salud y que las diecisiete pastillas denominadas "Rohypnol" (Roche 2), contiene
benzodiasepina comprendida como psicotrópico en el artículo 245 fracción III de la Ley
General de Salud (foja 14).
Diligencia de fe ministerial en la cual la C. agente del Ministerio Público Federal dio fe de
tener ante su vista un envoltorio de polietileno transparente, conteniendo en su interior un
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vegetal verde y seco al parecer marihuana, con un peso bruto aproximado de 21 gramos y
peso neto aproximado de 18 gramos; al igual que 17 pastillas llamadas Rohypnol (foja 17).
Declaración ministerial de José Luis Escalona Romo, quien en lo conducente dijo: "Que el
día de ayer por la noche ya que no recuerda exactamente la hora porque se encontraba
tomado, se encontró con un agente de la Policía Municipal de Magdalena de Kino y quien es
encargado de la barandilla, éste de nombre Adán, cuando caminaba por la calle Allende de
esa ciudad, quien le pidió al compareciente que llevara una caja de galletas a la Cárcel
Pública Municipal, misma que le entregaría a un interno de la misma, de nombre JULIO
PERALTA, accediendo a ello el compareciente, que cuando llegó a la barandilla de la cárcel
pública le entregó al encargado de la misma Jovino Coen Gómez la caja de referencia,
procediendo éste a abrirla y fue cuando sacaron los envoltorios con marihuana y las pastillas;
que el declarante ignoraba que en la caja de galletas hubiera marihuana y pastillas, que
ADAN únicamente le dijo que se la llevara a JULIO PERALTA; que el declarante
acostumbra a fumar marihuana y a tomar pastillas Rohypnol, fumándose de cinco a seis
cigarrillos diarios y que las pastillas las toma cada fin de semana; que el declarante consigue
la marihuana en la estación de ferrocarril de Magdalena de Kino, Sonora y en ocasiones la
trae de Tucson, Arizona con una persona de raza negra que sólo conoce como Jack y que
trabaja en K Mart que se encuentra por la calle Valencia de dicha ciudad y que las pastillas
que usa son de las que le recetan a una tía que se encuentra enferma y le recetan las mismas;
que desde hace veintitrés años el compareciente fuma marihuana y empezó a tomar pastillas
desde hace cuatro años aproximadamente; que el declarante vende ropa y mariscos en
Magdalena de Kino, Sonora, que la media filiación de la persona de nombre ADAN es como
a continuación se detalla de 28 a 32 años de edad, de 1.75 metros de estatura, complexión
gruesa, color de piel moreno, cabello negro, lacio, ojos cafés, nariz mediana, boca grande,
que trabaja de agente de la Policía Municipal de Magdalena de Kino, Sonora y que es
encargado de barandilla, a continuación se pone a la vista del compareciente una calla, se
dice, a continuación se pone a la vista del compareciente una caja de cartón para empaquetar
galletas, conteniendo en su interior ocho galletas que se encuentran en papel celofán y entre
éstas se encuentra un envoltorio de plástico conteniendo en su interior una hierba verde que el
declarante sabe es marihuana, así como 17 pastillas de las llamadas Rohypnol, manifestando
que reconoce lo anterior como la misma caja que le entregó Adán para que entregara en la
barandilla al interno JULIO PERALTA; queriendo agregar que el declarante aceptó llevar la
caja que le entregó Adán a la Cárcel Pública Municipal, porque se le hizo fácil ya que andaba
tomado, ya que a éste lo conoce de vista y que a Julio Peralta lo conoce de vista, y que éste se
encuentra en la cárcel de referencia, por un delito de robo y lo ha visto en dos ocasiones que
ha entrado a dicha cárcel por multas administrativas..." (fojas 20 v. y 21).
Declaración preparatoria de Escalona Romo, quien dijo: "Que ratifica en parte su declaración
ministerial que en este acto se le dio lectura, y manifiesta que el día dos de julio del presente
año por la tarde asistía a un partido de soft ball donde estuve ingiriendo cerveza y una pachita
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de Don Pedro, que como a las ocho de la noche llegué al domicilio de mi amiga Bertha López
Portillo Arvizu, que vive en Magdalena, Sonora, sin recordar exactamente el domicilio, con
quien estuve platicando un momento en la banqueta de su casa y fue en ese rato cuando pasó
el agente de la policía Adán, de quien desconozco sus apellidos, y me pidió de favor que
llevara una caja chica a la comandancia de policía de ese lugar y que se encontraba como a
dos cuadras, de donde estaba con mi amiga Bertha, y esta persona me dijo que la entregara en
barandilla, para que a su vez se la entregara a Julio Peralta, quien se encuentra detenido en
ese lugar, pero que ignoraba que en esa caja se encontraban las pastillas y marihuana que me
recogieron, pues cuando entregué la caja el encargado de barandilla la abrió y al encontrar las
pastillas y marihuana que menciono, me detuvieron, cuando me trasladaron de Magdalena de
Kino a esta ciudad, me tocó ver al agente de la policía que conozco con el nombre de Adán y
le reclamé el hecho de que me haya utilizado para llevar la caja de galletas con la marihuana
y pastillas y éste me dijo que quería `torcer' y de aquí vas para la federal donde quedarás
detenido, que por cuestiones de mi mala tomada he tenido problemas con la Policía
Municipal de Magdalena de Kino y precisamente con ese agente de nombre Adán de quien
desconozco sus apellidos y creo que por ese motivo ese individuo me quiso perjudicar
aclarando que Bertha López Portillo se dio cuenta cuando el agente de la policía de nombre
Adán me entregó el paquete para que lo llevara a barandilla, recordando que ese agente
tripulaba un vehículo Tramsan, o carro deportivo color plomo, que la razón por la cual hice el
favor al policía de llevar la caja de galletas a barandilla, lo fue para no tener problemas con el
policía de nombre Adán, además de que me dirigía a mi domicilio y necesariamente iba a
pasar por el local donde se encuentra la Policía Preventiva de Magdalena, Sonora, y que es
todo lo que tiene que declarar..." (fojas 31 a 32).
Los anteriores elementos de convicción, valorados adecuadamente por la responsable,
resultan suficientes para estimar acreditado el cuerpo del delito contra la salud, en la
modalidad de posesión de marihuana y psicotrópicos, pues con tales probanzas se demostró
que el día dos de julio de mil novecientos noventa y tres, aproximadamente a las 20:30 horas,
se detuvo a José Luis Escalona Romo en el área de barandilla de la Cárcel Pública Municipal
de Magdalena, Sonora, por encontrarle en su poder dentro de una pequeña caja de galletas, 18
gramos de un vegetal verde y 17 pastillas denominadas Rohypnol, las que pericialmente
resultaron ser, la primera marihuana y las últimas psicotrópicos, al contener éstos
benzodiasepina.
Asimismo, con los citados medios de prueba, también se acredita la responsabilidad penal del
quejoso, los que fueron valorados adecuadamente por el tribunal responsable, ya que en su
contra existe el parte informativo, en el que sus aprehensores mencionan las circunstancias
que motivaron la detención del quejoso, especialmente al encontrar en su poder los narcóticos
afectos a la causa, dentro de una caja de cartón que pretendió introducir a la Cárcel Pública
de Magdalena, Sonora, situación que fue admitida por el quejoso, puesto que reconoció que
fue aprehendido cuando sus captores localizaron los enervantes asegurados en el paquete que
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le llevaba al interno Julio Peralta; lo que se corrobora con la fe ministerial y dictamen
químico, al demostrarse la existencia y naturaleza química de la marihuana y psicotrópicos
afectos, elementos de convicción que debido a su enlace lógico y natural, conforman la
prueba circunstancial, con pleno valor probatorio, en términos del artículo 286 del Código
Federal de Procedimientos Penales. Apoya la anterior consideración la Tesis Jurisprudencial
No. 1470, consultable en el Apéndice al Semanario Judicial de la Federación 1917-1988,
Segunda Parte, Salas y Tesis Comunes, página 2339, bajo el rubro "PRUEBA
CIRCUNSTANCIAL, VALORACION DE LA".
Ahora bien, contrario a lo sostenido por la parte quejosa, este Tribunal estima que el criterio
sostenido por la responsable en el sentido de que no se demostró a plenitud la excluyente del
delito, prevista en la fracción VIII, del artículo 15 del Código Penal Federal, es correcto.
En efecto, primeramente debe decirse que Escalona Romo al rendir sus declaraciones, tanto
ministerial como preparatoria sostuvo que ignoraba que en la caja de galletas que tenía en su
poder estuviese la marihuana y psicotrópicos afectos a la causa penal; sin embargo, es cierto
que los hechos negativos no son susceptibles de probar, no obstante ello, el quejoso tiene la
obligación legal de acreditar las circunstancias que alegó en su defensa, en el caso, que la
caja en la que se encontró los narcóticos asegurados le fue entregada por un policía de
nombre Adán para que la llevara a la Cárcel Pública Municipal de Magdalena, Sonora, y la
entregara al interno Julio Peralta.
Para acreditar las circunstancias antes precisadas, el quejoso aportó a juicio, la prueba
testimonial de Bertha López Portillo, que si bien es cierto, esa persona señaló que se
encontraba presente cuando el policía de nombre Adán Navarro le hizo entrega del paquete
antes citado al aquí amparista, también lo es que el referido testimonio es insuficiente para
apoyar la versión defensiva del quejoso, ya que, como acertadamente lo señaló la
responsable, constituye un testigo singular, cuando de las actuaciones del juicio natural se
advierte que para el caso, se ofrecieron dos testimonios (foja 24); aunado a ello debe
considerarse que al rendir su declaración ministerial que es la que debe tomarse en cuenta por
ser más cercana a los hechos el quejoso dijo que caminaba por la calle Allende de
Magdalena, cuando le entregaron la multicitada caja y la testigo dijo que ello ocurrió enfrente
de su casa (calle 16 de Septiembre 109, Norte, de Magdalena).
Por otro lado, la testimonial a cargo de Julio Peralta no beneficia al reo, pues del hecho de no
conocer al quejoso, no puede derivarse consecuencia alguna. Asimismo, el hecho de que se
acreditó que existía un policía de nombre Adán Navarro en la mencionada población, no
demuestra que el propio policía entregara al quejoso la caja de galletas en la que se encontró
la droga afecta.
En esa tesitura, resulta incuestionable, concluir que no se demostró plenamente la causa de
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excluyente del delito, invocada en forma implícita por el amparista.
Ahora bien, resulta infundado el argumento señalado por el quejoso, cuando alega que en el
caso se actualiza la hipótesis normativa prevista en el artículo 195 bis, del Código Penal
Federal; puesto que, aun cuando la cantidad de narcótico asegurado es pequeña, la
circunstancia de que pretendía introducirla en la Cárcel Pública Municipal de Magdalena,
Sonora, como lo estableció acertadamente la responsable, permite estimar que se pretendía
realizar alguna de las conductas tipificadas en el diverso precepto 194 del Código Penal
Federal, lo que imposibilita reclasificar el delito.
Por otro lado, en el capítulo relativo a la individualización de la pena, no se advierte que la
impuesta viole garantías al amparista, puesto que el grado de peligrosidad en el que se le
ubicó fue mínimo y acorde a esa temibilidad se le impuso cinco años de prisión y mil
cuatrocientos veintiséis nuevos pesos de multa.
En cambio, resulta substancialmente fundado que, de conformidad al artículo 70 del Código
Penal Federal, se debe analizar si en el caso procede o no la concesión de alguno de los
beneficios contemplados por el citado precepto, puesto que en la especie se dan las
condiciones mínimas indispensables para que se analice la procedencia del beneficio de
sustitución de la pena de prisión, previsto en la fracción I del propio artículo 70, ya que la
pena impuesta al reo, no excede de cinco años, de prisión, por tanto, procede conceder el
amparo y protección de la justicia federal solicitado, para el único efecto que el tribunal
responsable determine si en el caso procede o no, la sustitutiva de prisión, contemplada en el
dispositivo citado.
Por lo expuesto y con fundamento en los artículos 107, fracciones V, inciso d), y IV, de la
Constitución General de la República, 77, 157 y 184 de la Ley de Amparo y 44, fracción I,
inciso d), de la Ley
Orgánica del Poder Judicial de la Federación, se resuelve:
UNICO. La Justicia de la Unión ampara y protege a JOSE LUIS ESCALONA ROMO,
contra el acto reclamado del Primer Tribunal Unitario del Quinto Circuito, consistente en la
sentencia de tres de octubre de mil novecientos noventa y cuatro, dictada en el toca de
apelación número 684/94. El amparo se concede para los efectos indicados en el
considerando quinto de la presente ejecutoria.
Notifíquese; anótese en el Libro de Gobierno, con testimonio de esta resolución vuelvan los
autos naturales a su lugar de su procedencia y en su oportunidad archívese este toca.
Así, lo resolvió el Primer Tribunal Colegiado del Quinto Circuito, por unanimidad de votos
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de los Magistrados Alfonso Cruz Sánchez, Germán Tena Campero, Faustino Cervantes León,
siendo ponente el primero de los citados.
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