Los movimientos y la coalición

Del 30 de marzo al 11 de abril de 2006 // Diagonal
GLOBAL // 7
ELECCIONES EN ITALIA
CONTEXTO // LA OPOSICIÓN
“YA NO TE TENEMOS MIEDO”.
Con esta frase un cartel desafiaba
la cercana valla publicitaria de
Silvio Berlusconi.
Los movimientos
y la coalición
Buena parte de la izquierda se presenta unida a
las elecciones. Sin embargo, el rico panorama de
movimientos desborda el programa de la Coalición.
Alessandro Pullara* / Roma
n las sucesivas elecciones de los últimos años
(regionales, provinciales y municipales) se ha
ido imponiendo un cambio en el
escenario político institucional
con las consecutivas victorias alcanzadas por la coalición de
centro-izquierda.
Durante los últimos dos años y
medio se han reunido grandes movimientos sociales para protestar
en masa contra la privatización de
la enseñanza, contra la intervención militar en Iraq, a favor del
pueblo palestino, contra los macroproyectos de devastación del
medio ambiente –puente sobre el
estrecho de Messina, el Tren de
Alta Velocidad (TAV), etc.– o por
la defensa de los derechos de los
inmigrantes.
Bloqueos, huelgas generales nacidas en la base del movimiento de
los trabajadores y una feroz crítica
a los programas, tanto del centroderecha como del centro-izquierda, han caracterizado las proclamas de dichas manifestaciones.
No convendría tampoco olvidar las
luchas en el sur contra las descargas de residuos radioactivos, las
E
PANORAMA // EL IMPERIO ECONÓMICO Y POLÍTICO DEL ‘CAVALIERE’
Silvio Berlusconi y sus
cinco años de ‘ultra-poder’
Empresario multimillonario, dueño del mayor ‘lobby’ mediático de Italia,
denunciado por más de 20 delitos y primer ministro en los últimos cinco años. La
política en manos de Berlusconi: un instrumento para aumentar su propio poder.
como imputado. A pesar de sus declaraciones, los jueces no consiguen
interrogarlo y el proceso queda bloqueado por culpa de sus intereses.
A finales de junio, pocos días antes de la aprobación de la ‘ley de inmunidad’, Berlusconi decide finalmente presentarse ante el tribunal,
Entre los 20 delitos que se
le imputan, el más grave
es el de “concurso en
masacre”, en los atentados
contra Falcone y Borsellino
pero no para responder a las preguntas de los jueces, sino para lanzarles
una “espontánea declaración”, imposibilitando de este modo un proceso en su contra. Nos resultaría útil
recordar que a Berlusconi se le han
imputado más de 20 delitos, entre
los cuales el más grave, y a la vez el
menos conocido, es el de “concurso
en masacre”, por los asesinatos de
los jueces Falcone y Borsellino, junto a la serie de coches bomba de la
primavera y verano de 1993. Tampoco conviene olvidar que antes de
esta legislatura, había sido condenado por delitos en primer grado con
condenas de seis años y cinco meses, de los cuales gracias a revisiones, suspensiones o prescripciones,
no se sabe nada. Después de todo esto no ha sido posible proceder contra él, como bien saben los jueces españoles, que aún esperan la autorización italiana para poderlo juzgar
por el “monopolio” de las acciones
de Tele5.
Todo esto se ha desarrollado bajo
la mirada de los italianos, ¿cómo es
posible? En primer lugar, hay que
recordar que gran parte de los ciudadanos se ha involucrado en el rechazo a las acciones políticas del Gobierno, intentando luchar contra la
sustancia y la imposición autoritaria.
En Italia, especialmente entre 2001 y
2003, ha existido un movimiento social que ha llevado a las calles a millones de personas, en una expresión
popular sin precedentes. En segundo lugar, la actividad económica y
política de Berlusconi –con un especial énfasis en la gestión de las redes
televisivas públicas y privadas, que
conjuntamente suman el 97% de la
información televisiva– ha creado un
importante problema de libertad de
prensa.
Buena parte de sus aliados no parecen apreciarle hoy de la misma
manera que antes: muchos de los
que anteriormente le habían brindado su apoyo le exigen hoy cuentas
por su gestión. Y mientras él intenta
ejercer presión a través de su poder
en la patronal Confindustria, se ve
frenado por el presidente Montezemolo, que tiene su propia parcela
de poder que defender, y a sus aliados como Della Valle, para ejercerlo:
“Quizás defenderían mejor el interés
de la Industria quienes tuvieran menos intereses personales en ella”.
Muchos espacios
sociales mantienen una
posición muy crítica
con la coalición de
centro-izquierda
centrales térmicas... Los movimientos de protesta que han surgido en prácticamente todas las regiones, por la defensa del agua
contra las privatizaciones y la voracidad de las multinacionales, son
una buena prueba de ello.
Con la misma consideración se
han desarrollado en el terreno de
los derechos laborales protestas
contra la precariedad y contra los
contratos basura. Una lucha de los
trabajadores amenazados por las
externalizaciones, por los contratos temporales que todos los componentes productivos de los sindicatos mayoritarios (CGIL-CISLUIL) han suscrito, y contra las em-
* Alessandro Pullara es portavoz
de la Red de Boicot a Coca Cola.
Indymedia Italia
Para comprender qué significa para
los italianos vivir en una continua
campaña electoral es necesario analizar no sólo la política del Gobierno,
sino, y sobre todo, la de su ‘condottiero’. En su recorrido personal, Berlusconi ha logrado construir todo un
imperio empresarial, con el que ha
logrado imponer su poder económico. Más tarde, convertido ya en primer ministro, también ha logrado
hacerse con el poder político. Este
hecho ha producido consecuencias
nefastas en la creación de leyes bajo su mandato: concretamente, significa que ha utilizado leyes y sus
consecuencias económicas en beneficio propio o para debilitar cualquier tipo de oposición.
Lo más desconcertante es el hecho de que todos los procesos judiciales en los que Berlusconi se ha
visto inmerso a lo largo de estos
cinco años de legislatura no hayan
conseguido nada. En la historia de
Italia no sorprende que un político
se vea envuelto en asuntos ‘poco
limpios’. Pero Berlusconi ha dado
un paso más: se ha negado a ir a los
juzgados, después ha decidido él
en vez de los magistrados y finalmente ha hecho borrón y cuenta
nueva con una ley personalizada.
Famosa es, por desgracia, la historia que culmina en la ‘ley sobre inmunidad’ que afecta a los cinco cargos más altos del Estado.
Las dinámicas que han llevado a
la aprobación de esta ley también
son interesantes. Nos situamos en la
primavera de 2003 y Berlusconi tiene que presentar cuentas ante los
jueces, que lo acosan sin tregua. Una
vez tras otra el primer ministro declara que el desarrollo de sus tareas
institucionales está siendo impedido
por los intereses de lo que denomina
“magistratura roja”, que de forma ininterrumpida lo cita en los tribunales
STÉFANO LIBERTINI
Emanuela Bonini
Génova
presas de contratación temporal
convertidas en una verdadera plaga nacional. Del mismo modo se
ha luchado por el derecho a la vivienda con nuevas ocupaciones, y
resistiendo a la presión.
Éste es el escenario político
con el que se llega a las elecciones del 9-10 de abril, y posteriormente a las elecciones municipales de Roma y de otras grandes
ciudades italianas.
Acontecimientos como la crisis
económica, la constante pérdida
de credibilidad, el aumento de los
precios y las tarifas, han consolidado en el llamado cuerpo social
de la izquierda, tanto radical como
más moderada, la creencia de la
necesidad de un cambio en vísperas de las elecciones y un ajuste de
cuentas con la gestión del Gobierno de Berlusconi.
Muchos espacios sociales y en
lucha nacidos en los últimos años
mantienen, sin embargo, una posición muy crítica. Este componente de la Coalición tendrá que
rendir seguramente cuentas con
un Gobierno de centro-izquierda
pre Berlusconi que fue responsable de las más nefastas políticas
de liberalización y aumento de la
precariedad, que hoy aparentemente podrían ser suavizadas,
pero sin modificar su sustancia,
sin capacidad de paliar los efectos devastadores de cinco años
de Gobierno de Berlusconi.
MOVILIZACIONES. El 23 de marzo miles de personas se reunieron en Génova
para protestar contra la presencia de Berlusconi en la ciudad.