14 :::: CMLZ La Revista NOTA / Aguado, el millonario amigo de San Martín Aguado, el millonario amigo de San Martín Hombre de enorme riqueza, había conocido al general en la milicia. Se rencontraron en París, donde sellaron una íntima amistad. En el prolongado tramo de su exilio euro- pasar a las tropas de José Bonaparte. Cuando peo, del que nunca regresaría, San Martín cae Napoleón, es detenido en Burdeos y luego deja Bruselas, a la que había llegado en 1924, trasladado a París. porque la situación política era delicada y por De ahí en más pone sus energías en el el azote de una gran epidemia de cólera en el comercio de aceite de oliva y naranjas entre norte del viejo continente. Al poco tiempo se otras cosas, actividad que más tarde cambia casa su hija Mercedes con Mariano Balcarce; por el mundo de las finanzas. En poco tiem- tenían 16 y 24 años respectivamente. La pa- po se convierte en un hombre de fortuna. reja viaja días después con destino a Buenos San Martín conoce a su familia al otro día cesa y lo nombra intendente de Evry, una Aires. El general que liberó gran parte de Amé- y no puede ocultar su fascinación por el lujo localidad de las afueras de París donde el rica del dominio español se queda solo en la de la residencia de Aguado ubicada en la rue banquero compra un palacio. En ese magnífi- capital francesa. Las semanas se hacen eter- de Grange Bateliere. co lugar el General disfruta del aire libre y el nas. Para ocupar la mente se dedica con descanso, aunque muchas veces se ve bom- empeño a ordenar papeles, su corresponden- San Martín halla en esa familia un lugar para cia como jefe militar y otros documentos mitigar su soledad. Pasa mucho tiempo en valiosos. También asiste a reuniones sociales la casa de Aguado y participa con satisfacción y al teatro, mientras recibe algunas noticias de los encuentros sociales que congregan a alentadoras de Buenos Aires, entre ellas, que va a ser abuelo. Lamenta no poder regresar al Río de la Plata. Una tarde, mientras camina por el centro de la ciudad, una silueta conocida se pone en su camino. Era Alejandro María de Aguado, a quien no veía desde hacía 20 años, antiguo compañero de armas. personalidades de la política y la cultura, entre los que están el escritor Honorato de Balzac y el compositor Joaquín Rossini. Aguado está no sólo bien instalado en la comunidad intelectual y artística parisina. Como hombre potente de negocios, tiene sus relaciones bien Español de Sevilla, Aguado en sus años mozos enlazadas con el poder. El rey de Francia le había desertado del ejército nacional para otorga la Legión de Honor, la ciudadanía fran- bardeado con noticias nada halagüeñas de Buenos Aires. La guerra civil entre unitarios y federales le muele el alma en pedazos. “No hay una sola vez que escriba sobre nuestro país que no sufra una irritación”, le escribe a su amigo Guido sobre la primavera europea. Aguado le comenta en ese momento que hay en venta una petite maison cerca de su palacio y lo entusiasma con la idea de comprarla. San Martín se enamora de la propiedad y paga gustoso los trece mil quinientos francos en que está valuada. Pasa allí el ve- CMLZ La Revista :::: 15 Aguado, el millonario amigo de San Martín / NOTA rano y al llegar el otoño corre un rumor que sus hijas en principio por dos años. Enterado para visitar su casa natal. Invita a su amigo a lo saca de quicio. En el ambiente circula la del bloqueo francés al gobierno de Rosas, acompañarlo, pero San Martín no acepta. versión que San Martín había viajado a San Martín le escribe al hombre fuerte de Quizás le cuesta volver a recorrer los sitios España de incógnito para negociar el reco- Buenos Aires para ponerse a su disposición: de su infancia en Málaga o de Cádiz durante nocimiento de la independencia de las anti- “Tres días después de haber recibido sus su juventud. Lo cierto es que Aguado parte guas colonias, a cambio de que se instala- órdenes me pondré en marcha para servir a en primavera. Pasa por Oviedo y de ahí en- ran monarquías. Enfurecido escribe a Manuel fila hacia Gijón en diligencia por una ruta Moreno, presunto autor del rumor. Las expli- de montaña. Una tormenta de nieve cae por caciones de Moreno no lo convencen pero la zona e interrumpe el avance de los carrua- con los días su indignación va cediendo. jes. Aguado no puede con la espera y hace Reparte los meses del año con estancias el trayecto que falta a pie. Llega a destino prolongadas en su finca de campo, y breves agotado y con los síntomas del intenso frío estadías en su casa de París, principalmente en todo el cuerpo. Mientras cena en un alber- cuando el frío cala los huesos. Al año siguien- gue de la ciudad, un ataque de apoplejía te cambia su residencia parisina. En remate acaba con su vida. La noticia conmueve judicial compra una casa en la rue Neuve tanto en España como en Francia. El cuerpo Saint Georges, próxima a la de Aguado. embalsamado es trasladado a París. En la Iglesia de Nuestra Señora del Loreto se con- Cuando el gobernador Balcarce lo derrocan gregan artistas, políticos, hombres de nego- en Buenos Aires, su yerno es eyectado de cios, empleados… San Martín se ve muy su puesto en el Ministerio de Relaciones afectado por la muerte de su amigo, cuyo Exteriores. La mala noticia trae una ilusión: la patria honradamente, en cualquier clase cuerpo es enterrado en el cementerio de Pere que su hija regrese con él y pueda conocer que se me destine. Concluida la guerra me Lachaise. a su nieta. María Mercedes tiene dos años retiraré a un rincón, esto es si mi país ofrece al llegar a París. Mercedes está embarazada seguridad y orden. De lo contrario regresaré Dos días más tarde, el escribano Huillier otra vez y en meses viene al mundo Josefa, a Europa con el sentimiento de no poder dejar cita a San Martín a su oficina. Le hace saber nombre puesto en honor al abuelo, que está mis huesos en la patria que me vio nacer”. que en su testamento Aguado lo ha designa- feliz a pesar de que hubiera deseado un Rosas agradece el gesto pero le dice que do como tutor de sus hijos y como uno de sus nieto varón. Con su familia cerca, San Martín no es conveniente que sufra los “las incomo- albaceas, con un sueldo de cuatro mil francos activa su vida social y estrecha aún más su didades y peligros de la navegación”. El fede- mensuales. También le lega 30 mil francos amistad con Aguado, con quien comparten ral quiere retribuir la actitud de San Martín y y sus joyas personales. San Martín cumple veladas teatrales y reuniones con mandata- lo nombra embajador ante el gobierno de con la tarea y le lleva unos tres años poner rios y personajes de la política local. El Perú, cargo que éste no acepta porque no en orden todas las cosas necesarias para que General goza de esos momentos y de que se puede “defender los intereses de la Confe- los herederos de su amigo en el destierro lo reconozca por su acción militar en América. deración Argentina ante un Estado a quien soy dispongan sin problemas de una fortuna Sus interlocutores le hacen saber siempre su deudor de favores tan generosos”. que sólo en Francia asciende a los 190 admiración. Aguado ayuda económicamen- billones de francos. te a Mariano Balcarce para que el yerno de Mariano finalmente vuelve con la familia. San Martín pruebe suerte en el comercio de Aguado tiene que visitar unas minas de car- Buenos Aires, por lo que deja a su mujer y bón en Asturias y desea aprovechar el viaje