UNIVERSIDAD DE GRANADA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA FACULTAD DE ODONTOLOGÍA DEPARTAMENTO DE ESTOMATOLOGÍA RELACIÓN ENTRE LA LONGITUD DEL LABIO SUPERIOR Y LOS DIENTES ANTERIORES EN UN GRUPO DE ADOLESCENTES MEXICANOS DE TIJUANA, BAJA CALIFORNIA (MÉXICO) Tesis Doctoral IRMA ALICIA VERDUGO VALENZUELA Granada, 2009 Editor: Editorial de la Universidad de Granada Autor: Irma Alicia Verdugo Valenzuela D.L.: GR 3501-2009 ISBN: 978-84-692-6391-4 Irma Alicia Verdugo Valenzuela es autora y presenta el trabajo de tesis doctoral titulado “Relación entre la longitud del labio superior y los dientes anteriores en un grupo de adolescentes mexicanos de Tijuana, Baja California (México)“ bajo la dirección del profesor Alberto Rodríguez Archilla para optar al Grado de Doctor por la Universidad de Granada. Fdo.: Irma Alicia Verdugo Valenzuela Universidad de Granada Facultad de Odontología Alberto Rodríguez Archilla, Profesor Titular de Medicina Bucal de la Universidad de Granada, Director de la Tesis Doctoral titulada: “Relación entre la longitud del labio superior y los dientes anteriores en un grupo de adolescentes mexicanos de Tijuana, Baja California (México)“ de la que es autora Dña. Irma Alicia Verdugo Valenzuela, realizada dentro del Programa de Doctorado “Investigación Odontológica en el Tercer Milenio” desarrollado por el Departamento de Estomatología de la Universidad de Granada. AUTORIZA la presentación de la referida Tesis para su defensa y mantenimiento de acuerdo con lo previsto en el Real Decreto 56/2005, de 21 de enero, emitiendo el siguiente informe: Los trabajos efectuados en la elaboración de esta memoria han sido realizados bajo mi supervisión y dirección, reuniendo las condiciones académicas necesarias para optar al Grado de Doctor. Y para que conste y surta sus efectos en el expediente correspondiente, expido la presente en Granada a catorce de enero de dos mil nueve. Fdo.: Alberto Rodríguez Archilla AGRADECIMIENTOS Y DEDICATORIA En la realización de este trabajo han participado muchas personas a quienes estoy profundamente agradecida: Reconozco en primer lugar la asesoría y dirección del profesor Dr. D. Alberto Rodríguez Archilla, a quien respeto y admiro. Aprecio sobremanera el apoyo del profesor Dr. D. Alejandro Ceballos Salobreña: sin su ayuda se me habría dificultado lograr la meta en el tiempo que me había trazado. Invaluable me resulta la cooperación de los adolescentes de la ciudad de Tijuana, México, quienes son los sujetos de esta investigación. Por último a la Universidad de Baja California y a la Universidad de Granada. La primera por posibilitarme el acceso a este programa de doctorado, y la segunda por ayudarme en convertirlo en una realidad. DEDICATORIA Una vez el gran filósofo español Carlos Díaz Hernández nos dijo a mis hermanos y a mí “estos hijos tienen que estar muy orgullosos de estos padres”. Y efectivamente: el ejemplo de mi vida son mis padres, Don Anastacio Verdugo y Doña María Elena de Verdugo. Su alto sentido del honor y de la responsabilidad, su entrega y dedicación a la familia y sobre todo, su amor. He tratado con mi vida de corresponder a ello. Con profundo respeto observo que estas enseñanzas se extienden como manto protector y sabia rica a la vida de mis hermanos Librado, Lupita y Leticia y sus familias, que son la mía. Doy gracias a la vida por permitirme ser testigo de cómo esta semilla renace en mis sobrinos y ahora en sus propios hijos. ¡La vida es un milagro! ÍNDICE INTRODUCCIÓN 1. Estética y morfología facial. 1.1 Exploración facial 1.2 Perfil facial 1.3 Vista frontal 1.3.1 Frente 1.3.2 Nariz 1.3.3 Mentón 1.3.4 Labios 1.3.4.1 Crecimiento y desarrollo del labio 1.3.4.2 Posición de los labios 1.3.4.3 Color y textura de los labios 1.3.4.4 Musculatura labial 1.3.4.5 Función de los labios 1.3.4.6 Configuración de los labios 6 7 10 13 17 21 22 23 25 27 30 30 30 32 34 2. Incisivos 2.1 Desarrollo y erupción dental 2.2 Incisivos centrales superiores 2.3 Incisivos laterales superiores 36 38 40 42 3. Relación del labio superior y los dientes anteriores superiores 43 JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS 56 MATERIALES Y MÉTODOS 1. Descripción de la muestra 2. Procedimiento 3. Protocolo de recogida de datos 3.1. Datos de filiación 3.2 Medidas longitudinales 4. Método estadístico 61 62 64 66 66 66 67 RESULTADOS 68 DISCUSIÓN 74 CONCLUSIONES 83 BIBLIOGRAFÍA ORDENADA 86 INTRODUCCIÓN INTRODUCCIÓN 9 1. Estética y morfología facial La percepción de la belleza facial es multifactorial fundamentada en la genética, medio ambiente y principios culturales. La belleza puede ser definida como una combinación de cualidades que dan placer a los sentidos o a la mente. La estética es el estudio de la belleza1. La valoración estética es una parte importante de la exploración clínica que depende mucho del punto de vista del clínico que las realiza, por lo que es más conveniente realizar la valoración de las proporciones faciales que únicamente revisar las cualidades estéticas2. Se considera que lo antiestético es desproporcionado por lo que los rasgos faciales desproporcionados y asimétricos contribuyen notablemente a los problemas estéticos faciales. Como en otras disciplinas de la odontología y la medicina, para el diagnóstico ortodóncico se requiere obtener una serie de datos pertinentes acerca del paciente y extraer, a partir de esa base, una lista completa y clara de los problemas con una valoración totalmente objetiva de la situación del paciente3. Por lo tanto la base de datos a obtener del paciente debe provenir de una fuente elemental que es la exploración clínica con el propósito de valorar la morfología facial. La estética es un conjunto de características que permite el equilibrio facial y no una forma elegida por cualquier criterio4, por lo que los pacientes que requieren alteraciones en su apariencia facial significan un importante reto clínico5. 1 Naini FB, Moss JP. Three-dimensional assessment of the relative contribution of genetics and environment to various facial parameters with the twin method. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2004;126:655-9. 2 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields HW a Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4 ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 3 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 4 Capelozza Filho L. Normas para el diagnóstico. En: Diagnóstico en Ortodoncia. Ed Dental Press;2005.p.5178. 5 Naini FB, Moss JP, Gill DS. The enigma of facial beauty: Esthetics, proportions, deformity, and controversy. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2006;130:277-82. INTRODUCCIÓN 10 Durante mucho tiempo se han propuesto varias normas, reglas y estándares para describir las proporciones ideales de la cara humana, lo que ha originado que se suponga que las proporciones doradas sean evidentes en la cara humana ideal. La proporción dorada o divina fue probablemente ya conocida desde el antiguo Egipto desde el tercer milenio antes de Cristo (a.c.) ya que se reconoce a este cociente en la Gran Pirámide. También en el arte Griego y en la arquitectura. Fue descrita geométricamente por Euclides (siglos IV-III a.c.), matemático alejandrino cuyo gran valor reside en el uso riguroso del método deductivo6, describiéndola como la división única de una línea AB en dos partes AC y CB de tal manera que AB:AC= AC:CB7,8. Un acercamiento matemático mas exacto fue el de Fibonnacci en el siglo XII, nombrada como phi (φ) = 1.618, como símbolo de armonía, balance y belleza. Es asociada a la estética en muchos campos tales como la arquitectura, escultura, música, poesía, flora, fauna y el rostro humano9. Ricketts10 fue el primero en señalar que el análisis de una cara físicamente hermosa debe tener una aproximación matemática, definiendo, con los resultados de su investigación, varias proporciones doradas para el rostro humano. A pesar de algunas objeciones con respecto al diseño de su investigación, las publicaciones de Ricketts11,12 parecen ser clave para la estética facial en ortodoncia y cirugía oral13. 6 Océano Uno, diccionario enciclopédico ilustrado, ed, Barcelona: Grupo editorial Océano;1991. 7 Kiekens RMA, Kuijipers-Jagtman AM, van ´t Hof MA, van ´t Hof BE, Maltha JC. Putative golden proportions as predictors of facial esthetics in adolescents. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:480-3. 8 Ferring V, Pancherz H. Divine proportions in the growing face. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:472-9. 9 Markowsky G. Misconceptions about the golden ratio. Coll Mathematics J 1992;23:2-19. 10 Sinclair PM The divine proportion. Am J Orthod 1982;82:166-7. 11 Ricketts RM The biologic significance of the divine proportion and Fibonacci series. Am J Orthod 1982;81:351-70. 12 Ricketts RM Divine proportion in facial esthetics. Clin Plast Surg 1982;9:401-22. 13 Kiekens RMA, Kuijipers-Jagtman AM, van ´t Hof MA, van ´t Hof BE, Maltha JC. Putative golden proportions as predictors of facial esthetics in adolescents. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:480-3. 11 INTRODUCCIÓN Estudios recientes no han establecido una correlación significativa entre los cambios en las proporciones doradas y en el porcentaje estético después del tratamiento de cirugía ortognática14,15 ya que concluyen que el logro de la proporción dorada tuvo poco o nada de influencia en la estética global. Conclusión a la que anteriormente ya había obtenido Moss, utilizando técnicas de escáner óptico tridimensional para analizar los rasgos faciales en modelos masculinos y femeninos. Así mismo, Kiekens y cols.16 afirman que pocas proporciones doradas tienen una relación significativa con la estética facial en los adolescentes y que son demasiado pequeñas para ser clínicamente significativas. Además Ferring y Pancherz17 señalan que en comparación con los valores divinos, las proporciones faciales de hombres y mujeres permanecen constantes durante el crecimiento. Los aspectos morfologicos de la cara para el diagnóstico deben ser analizados directamente en el paciente18, porque es importante que se comprenda la importancia esencial de la forma, debido a que las personas con maloclusiones que buscan atención odontológica, lo hacen basados principalmente en preocupaciones por el aspecto morfológico19. Ackerman y cols.20 señalan la importancia de la evaluación del tejido blando en el diagnóstico y plan de tratamiento. Indican su utilización apoyados en 14 Baker BW, Woods MG. The role of the divine proportion in the esthetic improvement of patients undergoing combined orthodontic/orthognatic surgical treatment. Int J Adult Orthod Orthognath Sug 2001;16:108-20. 15 Shell TL, Woods MG. Facial aesthetics and the divine proportion: a comparison of surgical and non-surgical Class II treatment. Aust Orthod J 2004;20:51-63. 16 Kiekens RMA, Kuijipers-Jagtman AM, van ´t Hof MA, van ´t Hof BE, Maltha JC. Putative golden proportions as predictors of facial esthetics in adolescents. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:480-3. 17 Ferring V, Pancherz H. Divine proportions in the growing face. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:472-9. 18 Capelozza Filho L. Normas para el diagnóstico. En: Diagnóstico en Ortodoncia. Ed Dental Press;2005.p.5178. 19 Proffit WR, White Jr RP. Who needs surgical-orthodontics treatment. Int J Adult Orthod Orthognath Surg. 1990;5:81-9. 20 Ackerman JL, Proffit WR, Sarver DM. The emerging soft tissue paradigms in orthodontic diagnosis and planning. Clin Orthod Res,1999;2:49-52. INTRODUCCIÓN 12 que las limitaciones del tratamiento ortodóncico están basadas en el modelo genético del paciente, cuya expresión morfológica puede ser mejor evaluada y comprendida por el análisis del tejido blando de la cara, valorando la forma por medio de un análisis cualitativo y dimensional. 1.1. Exploración facial La antropometría clínica resurgió debido a los datos aportados por los estudios realizados por Farkas y cols.21,22 donde muestran que algunas de las mediciones no pueden realizarse en las radiografías cefalométricas, por lo que las proporciones faciales es mejor realizarlas clínicamente, ya que las distancias entre los tejidos blandos son tan significativos como las de los tejidos duros23, obteniendo datos que no pueden reproducirse en las radiografías24 ni obtenerse de los modelos de estudios o por requerir equipo especial como los métodos de imagen en tres dimensiones25. La evaluación de la cara del paciente constituye un parte importante del diagnóstico inicial y de la fase de planificación terapéutica ortodóncica, por lo que se ha considerado en el diagnóstico desde los primordios de la ortodoncia. Angle creyó que el clínico podía ser capaz de clasificar la maloclusión por medio de la evaluación facial. Eligió como el ideal de belleza la cara de Apolo de Belvedere en 1889, como un modelo comparativo y un conjunto de objetivos hacia donde conducir los tratamientos ortodóncicos, tornándose una filosofía. 21 Farkas LG, Tompson BT, Katic MJ, Forrest CR. Differences between direct (anthropometric and indirect (cephalometric) measurements of the skull. J Craniofacial Surg 2002;13:105-08. 22 Budai M, Farkas LG, Tompson B, Katic M, Forrest CR. Relation between anthropometric and cephalometric measurements and proportion of the face of healthy young white adult men and women. J Craniofacial Surg 2003;14:154-61. 23 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 24 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA, Jr. A comparative study of two methods of quantifying the soft tissue profile. Angle Orthod 2000;70:200-7. 25 Ghoddousi H, Edler R, Haers P, Wertheim D, Greenhill D. Comparison of three methods of facial measurement. Int J Oral Maxillofacial Surg. 2007;6:250-58. INTRODUCCIÓN 13 Actualmente la evaluación de la cara se realiza con la utilización de los promedios poblacionales, que son obtenidos en investigaciones, con base en la evidencia de la amplia variabilidad permitida a los individuos aceptables. Establecer los límites de esa variabilidad y hacer la correcta evaluación de la cara, con subjetividad y fundamentado en conceptos técnicos, es más complejo y debe estar apoyado por conocimientos adquiridos a través de investigaciones conceptuales y por la práctica26. Cuando se detectan desviaciones de la forma facial normal, se deben efectuar las variaciones necesarias en las distintas modalidades terapéuticas para alcanzar una armonía facial, el objetivo terapéutico principal es, en todo caso, la obtención del mejor resultado funcional y estético posible27 El estudio de las partes blandas extraorales se realiza midiendo la altura de la frente, nariz, labios y mentón. La configuración de ellas depende, según Rakosi28 de factor genético, étnico y varia en relación con la edad y el sexo. Las características faciales presentan diferencias entre adultos y niños. La cara presenta cambios específicos a medida que aumenta la edad. La primera línea en aparecer es el pliegue nasolabial. Todos los aspectos topográficos regionales combinados hacen que la cara femenina tenga un aspecto más plano, con apariencia proporcionalmente amplia y delicada. Estas diferencias son determinadas por el crecimiento diferente de la nariz ya que el tamaño corporal relativo y el tamaño de los pulmones masculinos, integran un factor esencial en la forma de la cabeza y la cara29. 26 Capelozza Filho L. Normas para el diagnóstico. En: Diagnóstico en Ortodoncia. Ed Dental Press;2005.p.5178. 27 Graber TM, Vanarsdall RL. Diagnóstico y plan de tratamiento. En: Ortodoncia principios generales y técnicas. 2ª ed. Buenos Aires: Médica Panamericana;1997.p.3-90. 28 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica especial. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed MassonSalvat Odontología;1992.p.97-22. 29 Padrós E. Introducción y bases teóricas. En: Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL2006.p.152-05. INTRODUCCIÓN 14 Se considera que si la constitución de la cara en los adultos es armónica, la altura de la frente (medida desde la línea de inserción del cabello hasta la glabela) representa una tercera parte de la longitud de la cara y por lo tanto, es equivalente al tercio medio (distancia glabelo-subnasal) e inferior de la cara (distancia subnasal-mentoniana). Es necesario que el examen facial sea sistemático, para asegurar una evaluación detallada y completa de la información pertinente. El examen de la cara forma parte de la evaluación completa, además de describir las relaciones esqueléticas y dentales en tres planos espaciales, anteroposterior, vertical y transverso. Para Graber30 en primer lugar se valora el perfil facial en el plano anteroposterior, ya que suele considerarse que el perfil de tejido blando refleja la relación esquelética subyacente. Al estudiar la proporcionalidad de los tercios faciales podemos apreciar que con el crecimiento se incrementa las dimensiones verticales lineales. Sin embargo, la proporcionalidad de una cara bien equilibrada continúa siendo básicamente igual31. El examen clínico, las fotografías y las radiografías cefalométricas deben ser tomadas con la cabeza mantenida en posición natural. En la literatura antropológica y ortodóncica la posición natural de la cabeza NHP (por sus siglas en ingles) ha sido propuesta como una base postural para el análisis de la morfología craneofacial32,33. 30 Graber TM, Vanarsdall RL. Diagnóstico y plan de tratamiento. En: Ortodoncia principios generales y técnicas. 2ª ed. Buenos Aires: Médica Panamericana;1997.p.3-90. 31 Pinkham, Casamassimo, Fields, McTigue, Novak. Dinámica de cambios. En: Odontología pediátrica. 3a ed México: Mac Graw Hill, Nueva Editorial Interamericana;1991.p.199-06. 32 Leitao P, Nanda RS. Relationship of natural head position to craneofacial morphology. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2000;117:406-17. 33 Barbera AL, Sampson WJ, Townsend GC. An evaluation of head position and craniofacial reference line variation. HOMO. J Comp Hum Biol 2008, doi:10.1016/j.jchb.2008.05.003. 15 INTRODUCCIÓN Por lo tanto el examen clínico de las proporciones faciales debe realizarse con el paciente en posición de pie o sentado en una silla recta, relajado, no reclinado en el sillón dental; la postura erguida permite que la cabeza asuma su posición natural (que está determinada fisiológicamente, no anatómicamente). Una persona que mira al frente, un objeto34 adopta una posición cefálica que mantiene el nivel del eje visual. Esta posición es característica de cada individuo y es el modo en que la cabeza está orientada normalmente. 1.2. Perfil facial El examen cuidadoso del perfil facial proporciona una información mas detallada que el análisis de las radiografías cefalométricas laterales35 o que el análisis fotográfico que se utiliza ampliamente para la identificación de la estética ideal del perfil facial36,37debido a la preocupación concerniente a la radioprotección que las asociaciones de ortodoncia de países desarrollados reglamentan38. Esta exploración incluye muchas de las consideraciones de la vista frontal. La cara se divide en tercios. En primer lugar se comparan las alturas verticales faciales y la relación anteroposterior de los tercios faciales. Las relaciones verticales son las mismas en la vista de perfil que en la frontal. El perfil del tercio facial superior establece la relación entre la frente y el reborde orbitario superior, por lo que, cuanto más adelantado éste último, menos 34 Cooke MS, Wei SHY. The reproducibility of natural head posture: a methodological study. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1988;93:280-8. 35 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 36 Rodríguez EE, Casasa R. Diagnóstico y tratamiento. En: Ortodoncia contemporánea. Ed Actualidades Médico Odontológicas Latinoamericanas CA;2005.p.3-15. 37 Dimaggio FR, Ciusa V, Sforza C, Ferrario VF. Photographic soft-tissue profile análisis in children al 6 years of age. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007;132:475-80. 38 Turpin DL. British Orthodontic Society revises guidelines for clinical radiography. Am J. Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:597-8. INTRODUCCIÓN 16 aceptable es el resultado estético. También se valora el globo ocular y su relación con el reborde orbitario superior, que normalmente sobresale de 8 a 16 mm por delante del globo ocular39. La evaluación del tercio facial medio considera las relaciones entre los globos oculares, los rebordes orbitarios inferiores, los pómulos, la nariz y el labio superior, por lo que queda el puente nasal por delante del globo ocular. Una línea de referencia trazada desde la parte más anterior del globo ocular y perpendicular al plano horizontal de Frankfurt (FH), debe pasar por el tejido blando de la mejilla o ligeramente por detrás del mismo. Existe una correlación entre la forma nasal y la relación esquelética40. El contorno de la nariz puede ser recto o con el dorso convexo y el tamaño debe representar una tercera parte de la altura total facial, desde la inserción del cabello hasta el punto gnation. La relación entre la longitud vertical y horizontal de la nariz de perfil es de 2:1. Es considerada nariz tipo microrrino cuando la raíz esta elevada, el dorso nasal es corto y la punta esta dirigida hacia arriba. Por el contrario, es nariz prominente cuando la raíz nasal esta profunda, el dorso nasal es largo y la punta nasal esta dirigida hacia delante41. Al año de edad, en la población caucásica, la protusión de la punta de la nariz muestra 51.0% de desarrollo, incrementando su desarrollo hasta el 66.5% a la edad de cinco años42. La maduración de la protusión nasal ocurre a los 16 años 39 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica especial. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed MassonSalvat Odontología;1992.p.97-22. 40 Robison JM, Rinchuse DJ, Zullo TG. Relationship of skeletal pattern and nasal form. Am J. Orthod 1986;89:499-06. 41 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica especial. En:Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed MassonSalvat Odontología;1992.p.97-22. 42 Farkas LG, Hreczko TM, Katic MJ. Forrest CR. Proportion indices in the craniofacial region of 284 healthy North American white children between 1 and 5 years of age. J Cranifacial Surg. 2003;14:13-28. INTRODUCCIÓN 17 en los varones y a los 14 en la mujer. Presentando un 97.6% y del 96.4% respectivamente de crecimiento total a los 18 años de edad43. La relación entre la nariz y el labio superior se establece en el ángulo nasolabial, su valor antropométrico, en adultos jóvenes blancos es de 99º ± 8.0 para los hombres y 99º±8.7 para las mujeres44. Medidas cefalométricas45 muestran un rango de 91.40º a 138.97º, con promedio de 112±9.86 para los hombres y 109.71±7.60 en las mujeres46. En el análisis del tercio inferior del perfil facial el nasion de tejido blando, los labios y la barbilla deben estar en la proximidad de la línea recta, que pasa por el tejido blando del nasion, perpendicular al plano horizontal de Frankfurt (FH). El perfil puede estar cóncavo o convexo de acuerdo a la prominencia de la nariz, boca y mentón47. El estudio del perfil facial se realiza con los siguientes propósitos48: establecer si los maxilares están equilibrados en el plano anteroposterior, valorar las proporciones faciales verticales y el ángulo del plano mandibular y valorar la postura de los labios y la prominencia de los incisivos. Durante la evaluación del perfil del tercio facial inferior es cuando se pueden detectar discrepancias anteroposteriores entre el maxilar y la mandíbula (es decir, prognatismo y retrognatismo)49. Existe una leve convexidad que disminuye durante la pubertad debido al desplazamiento anatómico mayor de la 43 Farkas LG, Posnick JC, Hreczko TM, Pron GE. Growth patterns of the nasolabial region: a morphometric study. Cleft Palate-Craniofacial J. 1992;29:318-24. 44 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4a ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 45 Fitzgerald JP, Nanda RS, Currier GF. An evaluation of the nasolabial angle and the relative inclinations of the nose and upper lip. Am J Orthod Dentofac Orthop 1992;102:328-34. 46 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and EuropeanAmerican adults with normal occlusions and well-Balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 47 Rodríguez EE, Casasa R. Diagnóstico y tratamiento. En:Ortodoncia contemporánea. Ed Actualidades Médico Odontológicas CA;2005.p.3-15. 48 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 49 Simons ME, Joondeph DR. Change in overbite: A ten-year postretention study. Am J Orthod 1973;64:34967. INTRODUCCIÓN 18 mandíbula comparada con el maxilar50,51. También se considera la posición del labio inferior, la forma y el tamaño de la barbilla, en algunos casos, un aparente retrognatismo mandibular corresponde en realidad a una barbilla plana o deficiente (microgenia). Por el contrario, la prominencia excesiva de la barbilla puede ser estéticamente inaceptable. Los pacientes con deficiencia maxilar habitualmente tienen un perfil cóncavo, que se manifiesta por un aplanamiento en el borde infraorbitario y la zona adyacente a la nariz. Cubriendo el labio superior y el inferior se evalúa la posición del mentón con respecto a la nariz y la frente. Se puede observar el mentón retraído o protruido, no debe estar por adelante de una línea vertical trazada hacia abajo a partir de los tejidos blandos de la glabela. De la misma manera se evalúa el macizo facial. Debe haber convexidad con respecto a una línea imaginaria trazada de la base de las alas de la nariz y hacia abajo hasta el ángulo de la boca. Un contorno recto o cóncavo de los tejidos indica una deficiencia del macizo facial. Al analizar el perfil, también se evalúan las proporciones faciales verticales. La proporcionalidad se estima dividiendo la cara en tercios: línea pelo-puente nasal; puente nasal-base de labio superior y base de labio superior–porción inferior del mentón. Los tercios a menudo son iguales52. Dado que los problemas verticales tienden a manifestarse en el tercio inferior de la cara es interesante valorar la altura facial en relación con el borde inferior mandibular. La tangente al borde inferior de la mandíbula con una línea horizontal de referencia (plano de Frankfurt) forma un ángulo de unos 25°. Puede observarse fácilmente colocando el mango de un espejo bucal a lo largo del borde inferior de 50 Capelozza Filho L. Normas para el diagnóstico. En:Diagnóstico en Ortodoncia. Ed Dental Press;2005.p.5178. 51 Halazonetis D. Morphometric evaluation of soft-tissue profile shape. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007; 131:481-9. 52 Rakosi T, Jonas I. Estudio fotográfico. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.173-78. INTRODUCCIÓN 19 la mandíbula. La persona con cara corta tiende a presentar un tercio facial inferior que en proporción es más pequeño a los demás y presenta un ángulo mandibular también menor; al contrario sucede en individuos de cara larga53. Hay una interacción entre dimensiones anteroposterior y vertical. La dimensión vertical corta provoca una apariencia más cóncava ya que la mandíbula gira hacia arriba y hacia delante. Lo contrario ocurre en casos de porción inferior facial larga que dan apariencia de perfil recto o un poco convexo al rotar la mandíbula hacia abajo y atrás. Otro aspecto importante en la evaluación de perfil es estudiar la relación anteroposterior de labios y dientes54. La ubicación de los incisivos se refleja en el contorno y la postura de los labios. La posición labial se evalúa con una línea desde la punta de la nariz hasta el tejido blando del mentón. Los labios se localizan un poco por detrás de esta línea. 1.3. Vista frontal En la perspectiva frontal se analiza la simetría bilateral de la cara, mostrando la mayoría de las personas una ligerísima asimetría facial, debida a una diferencia pequeña del tamaño entre ambos lados55. El tipo facial global depende del índice facial o sea la relación proporcional entre la altura y la anchura de la cara. 53 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 54 Fitzgerald JP, Nanda RS, Currier GF. An evaluation of the nasolabial angle and the relative inclinations of the nose and upper lip. Am J Orthod Dentofac Orthop 1992;102:328-34. 55 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4a ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 20 INTRODUCCIÓN En los adultos jóvenes de la población Norteamericana blanca56, se considera que el índice facial fisiognómico total de triquion a menton (línea de inserción del cabello a parte mas inferior del mentón) es en los varones 187.5±8.1 mm. y 172.5±7.5 mm. en las mujeres. Farkas y cols.57 reportaron en el 2005 que un alto porcentaje (76.9%), en los grupos étnicos de cinco regiones del mundo (Europa, Este Medio, Asia, África y Norte América) estudiados, presentan un valor promedio similar. En la evaluación frontal se analiza el equilibrio entre los tercios superior, medio e inferior de la cara. El tercio superior esta limitado por la línea de implantación del cabello (triquion) y por la glabela. En los adultos Norteamericanos58 jóvenes de 18 a 25 años de edad tiene un promedio de 67.1±7.5 mm. en los varones y de 63.0±6.0 mm. en las mujeres. Esta zona aporta poca información y no es en esta área en donde se llevan a cabo las medidas correctoras ortodónticas u ortopédicas. Se hace más hincapié en las proporciones y grado de simetría del tercio medio (desde la glabela a la región subnasal) y del inferior (desde la región subnasal hasta el mentón). Los parámetros a analizar del tercio medio e inferior facial en la vista frontal son: el paralelismo de la línea interpupilar con la líneas de las orbitas, de las comisuras en reposo, de las comisuras al sonreír, del plano oclusal máximo de los bordes de los incisivos centrales al sonreír y la línea de las cúspides de los caninos derecho e izquierdo; la línea media facial; el arco de la sonrisa59 y la dimensión vertical de oclusión60. 56 Farkas LG, Katic MJ, Forrest CR. Comparison of craniofacial measurements of young adult AfricanAmerican and North American white males and females. Ann Plast Surg 2007;59:692-98. 57 Farkas LG, Katic MJ, Forrest CR. International Anthropometric study of facial morphology in various ethnic groups/races. J Craniofacial Surg 2005;16:615-46. 58 Farkas, LG, Katic MJ, Forrest CR. Comparison of craniofacial measurements of young adult AfricanAmerican and American White Males and Females. Ann Plast Surg. 2007;59:692-98. 59 Owens EG, Goodacre CJ, Loh PL, Hanke G, Okamura M, Jo KH, Muñoz CA, Naylor WP. A multicenter interracial study of facial appearance. Part 1: A comparison of extraoral parameters. Int J Prosthodont, 2002; 5:273-82. 60 Mack MR. Vertical dimension: A dynamic concept based on facial form and oropharyngeal function. J Prosthet Dent 1991;66:478-85. INTRODUCCIÓN 21 En el tercio medio de la cara se observa las medidas orbitales61 mientras el paciente permanece mirando hacia adelante: la esclerótica del ojo que no es superior ni inferior a la pupila, la altura de la apertura del ojo, el ancho intercantal (entre los ángulos internos del ojo derecho e izquierdo), ancho biocular medido del ángulo externo de un ojo al otro y longitud de la apertura del ojo (del ángulo externo al interno de cada ojo). En general los ojos de los varones parecen más hundidos porque la frente y la nariz son más protuidas. Las mujeres tienen los ojos más cerca del punto frontal de la cara62. También en el tercio medio facial se debe observar el ancho del puente nasal, anchura facial y la anchura de la base de la nariz63. La distancia entre los pliegues semilunares en la zona intercantal debe ser similar a la anchura de la base de la nariz. Las desviaciones de estas medidas básicas pueden indicar la presencia de algún tipo de deformidad en el tercio facial medio. En el tercio inferior se observa el labio superior y sus relaciones con los dientes mientras está en reposo y cuando el paciente sonríe la distancia entre los limbos mediales de los ojos debe ser igual a la anchura de la boca en relajación. La longitud de descanso de los músculos masticatorios proporciona la dimensión vertical de oclusión VDO (por sus siglas en ingles), corresponde al tercio inferior facial e incrementa inmediatamente después de que ocurre un simple contacto oclusal, por lo que debe ser evaluada en posición clínica de descanso64. Así mismo se realiza la evaluación de la simetría facial65. La cara se divide en dos mitades mediante una línea que pasa por la glabela, la punta nasal, el 61 Cosan G. Garden of Orthodontics. Esthetics: the orthodontist´s interpretation. Quintessence Publishing Co, Inc. Carol Stream Illinois;2000.p.15-49. 62 Padrós E.. En: Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL 2006.p.152-05. 63 Farkas LG, Katic MJ, Forrest CR. Comparison of craniofacial measurements of young adult AfricanAmerican and North American white males and females. Ann Plast Surg 2007;59:692-98. 64 Mack MR. Vertical dimension: A dynamic concept based on facial form and oropharyngeal function. J Prosthet Dent 1991;66:478-85. 65 Rakosi T, Jonas I. Estudio fotográfico. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. Masson-Salvat Odontología; 1992.p.173-78. INTRODUCCIÓN 22 labio superior y la barbilla, también se puede dividir en quintas partes verticales de tamaño similar66. Se evalúan las características de proporcionalidad entre los diferentes tercios faciales, la simetría entre las dos mitades faciales y las dimensiones transversas. La proporción facial vertical y transversal cambian ligeramente de la niñez a la edad adulta67. Las asimetrías faciales por lo general se manifiestan en el tercio facial inferior. La desviación de la mandíbula es raro que presente una asimetría verdadera, por lo general indica desviación funcional mandibular y mordida cruzada posterior. Cuando existe desviación del tabique nasal la técnica de colocar un hilo dental vertical a través de la línea media facial para relacionarla con la dental no es eficiente, es mas recomendable la utilización del método de evaluación de la relación entre el arco de Cupido (punta inferior o base del filtrum labial) y la línea media dental68,69. Para localizar la línea media facial se marca un punto en nasion, otro en el arco de cupido, una línea entre estos dos puntos no solo localiza la posición de la línea media facial sino también su dirección70. La exploración frontal se realiza observando las siguientes regiones: 1.3.1. Frente La altura de la frente se mide desde la línea de inserción del cabello hasta la glabela, sin embargo, algunos investigadores como Farkas y 66 Nanda R. Diagnóstico ortodóntico especializado. En: Biomecánicas y estética. Estrategias en ortodoncia clínica. 1ª ed Colombia: Actualidades Médico Odontológicas Latinoamerica,CA;2007.p.39-51. 67 Ferring V, Pancherz H. Divine proportions in the growing face. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:472-9. 68 Morley J, Eubank J. Macroesthetic elements of smile design. JADA 2001;132:39-5. 69 Zachrisson BU. Estética en exposición dental y diseño de sonrisa. En: Nanda R. Biomecánicas y estética. Estrategias en ortodoncia clínica.1ª ed Colombia:Actualidades Médico Odontológicas Latinoamerica, CA; 2007.p.110-27. 70 Morley J, Eubank J. Macroesthetic elements of smile design. JADA 2001;132:39-5. 23 INTRODUCCIÓN colaboradores realizan esta medida hasta nasion. Reportaron que los valores promedio de la altura de la frente, para los adultos jóvenes blancos Norteamericanos, es en los varones 70.1±6.4 mm. y de 63.3±6.3 mm. en las mujeres, con valores similares (hasta en el 100%) a los grupos estudiados, con excepción de los varones croatas y en los iraníes de ambos géneros, quienes mostraron una altura de la frente significativamente menor71. La forma de la frente y de la nariz define la morfología facial, por lo que modifica el pronóstico del tratamiento ortopédico maxilar desde el punto de vista estético. La altura de la frente representa una tercera parte de toda la longitud de la cara y es equivalente al tercio medio e inferior de la cara72. La configuración de la frente depende, como se comentó anteriormente, de factores genéticos, étnicos y varía en relación con la edad y el género73. Para establecer si la frente es ancha o estrecha se compara en un plano frontal con la anchura del arco zigomático. El contorno lateral de la frente es plano, prominente u oblicuo y contribuye a la estética del perfil facial. Los resultados del estudio de Farkas y cols.74 muestran que la anchura de la frente en los adultos jóvenes Norteamericanos mide en los varones 115.9±5.2 mm. y 111.5±4.4 mm. en las mujeres. 71 Farkas LG, Katic MJ, Forrest CR. International Anthropometric study of facial morphology in various ethnic groups/races. J Craniofacial Surg 2005;16:615-46. 72 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 73 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica . En:Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. Masson-Salvat Odontología; 1992.p.97-22 74 Farkas LG, Katic MJ, Forrest CR. Comparison of craniofacial measurements of young adult AfricanAmerican and North American white males and females. Ann Plast Surg 2007;59:692-98. INTRODUCCIÓN 24 Al ser más protuberante la nariz de los sujetos masculinos, la frente también se remodela a una posición mayormente protusiva. La frente de los varones es más inclinada, la femenina es bulbosa y recta75. 1.3.2. Nariz La valoración de la nariz adquiere importancia en el tratamiento ortodóncico y ortopédico maxilar debido a que la valoración estética de la cara depende fundamentalmente del tamaño, morfología y posición de la nariz, aún cuando el tratamiento no mejora el perfil nasal. Algunas formas nasales están asociadas a características esqueletales específicas. Robison y cols.76 encontraron esta correlación: la nariz recta tiende a presentarse en perfiles rectos, la forma convexa debida a una joroba dorsal en perfiles convexos y la nariz cóncava debida a una deficiencia de tejido en el dorso nasal en perfiles cóncavos. La forma de la nariz no solo esta condicionada por factores hereditarios y étnicos, sino también por posibles traumatismos sufridos en la infancia. Es necesario valorar el trayecto del dorso y de la punta de la nariz, el tamaño y la forma de los conductos nasales y la posición del tabique nasal77. La longitud vertical de la nariz representa una tercera parte de la altura de la cara desde la inserción del cabello hasta el punto gnation. El tamaño de la nariz en los adultos jóvenes de la población Norteamericana 75 Padrós E. Introducción y bases teóricas En: Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL2006.p.152-05. 76 Robison JM, Rinchuse DJ, Zullo TG. Relationship of skeletal pattern and nasal form. Am J. Orthod 1986;89:499-06. 77 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22. INTRODUCCIÓN 25 blanca78 tiene un promedio de 54.8±3.3 mm en los varones y de 50.6±3.1 mm en las mujeres. Los hombres y las mujeres presentan diferencias en el tamaño y configuración de su nariz. La femenina es menor que la masculina, como resultado del tamaño mayor de los pulmones que generalmente tienen los varones por el mayor tamaño corporal, lo que produce diferencias colaterales en otras estructuras faciales por ser la vía aérea nasofaríngea sitio clave del desarrollo79. El contorno de la nariz puede indicar una nariz recta, nariz de dorso convexo o nariz irregular por un traumatismo. La anchura nasal constituye aproximadamente el 70% de su longitud medida desde el punto nasion de tejidos blandos y la punta de la nariz, suelen ser los orificios nasales ovalados y mostrar una simetría bilateral80. 1.3.3. Mentón Al nacimiento la protuberancia mentoniana es pequeña y poco notable. Toda la mandíbula se encuentra retrasada en el crecimiento diferenciado. La dirección posterior del crecimiento óseo de la región alveolar arriba del mentón así como la combinación de crecimiento de hueso nuevo determina que poco a poco el mentón sea más prominente tomando forma año tras año. El aumento progresivo de la protuberancia mentoniana es el resultado del proceso de remodelado por la reabsorción perióstica en la cara labial de la cortical mandibular, aposición de la corteza lingual y 78 Farkas, LG, Katic MJ, Forrest CR. Comparison of craniofacial measurements of young adult AfricanAmerican and American White Males and Females. Ann Plast Surg. 2007;59:692-98. 79 Padrós E. Introducción y bases teóricas. En: Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL2006.p.152-05. 80 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992. p.97-22. INTRODUCCIÓN 26 aposición en la cara lingual de la corteza lingual, al mismo tiempo se añade hueso progresivamente en la superficie del hueso basal. El hombre es una de las dos únicas especies con mentón, que es el resultado filogenético de la rotación de la cara a la posición vertical, disminución del prognatismo y desarrollo de la sobremordida81. La altura del mentón es la distancia entre el surco mentolabial y el mentón. Tiene una gran importancia en ortopedia maxilar en conjunto con su anchura debido a que el desarrollo exagerado de la altura del mentón modifica la posición del labio inferior y altera el sellado labial. El mayor crecimiento del mentón se produce cuando el crecimiento de la mandíbula es mas acentuado, entre la erupción de los primeros y segundos molares permanentes82. El mentón prominente provoca un surco mentolabial pronunciado y un perfil labial retraído, por el contrario una falta de desarrollo del mentón produce ausencia del surco mentolabial83. El pliegue mentolabial poco profundo es característico de la función adecuada del músculo mentoniano que permite el desarrollo sagital de la apófisis alveolar anterior de la mandíbula. Se relaciona el contorno del mentón con la posición del labio inferior y el trayecto del pliegue mentolabial debido a que dependen, principalmente, de la posición de las partes blandas del mentón84. La configuración del mentón de tejido blando obedece a la estructura ósea mentoniana, del grosor de las partes blandas y del tono del músculo mentoniano. La morfología y la constitución craneofacial de la mandíbula 81 Enlow DH, Moyers RE, Merow WW. Proceso de crecimiento facial parte segunda. En: Manual sobre crecimiento facial. 1ª ed Buenos Aires: Inter-médica;1982.p.76-46. 82 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Crecimiento y desarrollo. En: Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. En:. 4ª ed Barcelona: Labor,SA;1983.p.1-57. 83 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En:Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22. 84 Yogosawa F. Predicting soft tissue profile changes concurrent with orthodontic treatment. Angle Orthod 1990;60:199-06. 27 INTRODUCCIÓN son otros factores determinantes. La forma del mentón es hereditaria de acuerdo a las leyes de Mendel. No existe relación entre la altura y el espesor del mentón con la estatura, tamaño de los dientes y anchura del arco dentario85. Al mentón se le revisa el tamaño, forma y simetría86. En caso de asimetría mentoniana, es necesario examinar el centro de la mandíbula, que mostrará una rotación a la izquierda o a la derecha, dentro del contexto de una laterognatia mandibular, y un desplazamiento de la línea media de la mandíbula al mismo lado durante la oclusión, observándose asimetría de forma y posición de la articulación temporomandibular, mostrando el espacio articular en la tomografía, una diferencia de desarrollo87. 1.3.4. Labios Las regiones labial, geniana o bucal, mentoniana, maseterina, parotidomaseterina, pterigomandibular o infratemporal, zigomática, infraorbitaria, palatina retrofaríngea, laterofaríngea y el piso de la boca corresponden a la zona inferior de la cara, que se encuentra situada debajo de la parte anterior del cráneo. La región labial o de los labios regio oralis pertenece a los dos repliegues músculomembranosos que forman la pared anterior de la cavidad oral y rodean el orificio bucal88. El labio superior e inferior enmarca la zona de exposición de la sonrisa, bordeando la dentición, la estructura gingival y el espacio de la cavidad oral89. 85 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Crecimiento y desarrollo. En: Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. 4ª ed Barcelona: Labor,SA;1983.p.1-57. 86 Cosan G. Garden of Orthodontics. Esthetics: the orthodontist’s interpretation. ed Carol Stream Illinois: Quintessence Publishing Co, Inc;2000.p.15-49. 87 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica especial. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico.. ed MassonSalvat Odontología;1992.p.97-22. 88 Velayos JL, Díaz-Santana H. Anatomía topográfica. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.361-87. 89 McNamara L, McNamara Jr JA, Ackerman MB, Baccetti T. Hard- and soft-tissue contributions to the esthetics of the posed smile in growing patients seeking orthodontic treatment. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008; 133:491-9. INTRODUCCIÓN 28 La mucosa labial tiene un color rosa o rosado con aspecto mamelonado debido a que se encuentran debajo las glándulas salivales labiales y las ramas superior e inferior de las arterias labiales, a 7 u 8 mm del borde libre del labio90. El labio superior orienta sobre la posición de los incisivos superiores. En reposo, los labios se encuentran uno con otro en una relación no forzada a nivel del plano oclusal. Es importante palpar los labios para asegurarse si tienen igual tono y desarrollo muscular91. Se mide la distancia interlabial con los labios en reposo. Se considera aceptable una distancia interlabial de hasta 3.5mm. La altura del labio superior desde la región subnasal hasta la comisura labial debe representar la tercera parte del tercio facial inferior. La longitud normal del labio superior en los adultos presenta variación en la literatura, se considera que debe ser 22±2 mm en los varones y de 20±2 mm en las mujeres. También el borde labial con los incisivos presenta variaciones, es considerada como ideal la longitud de 1 a 3mm con los labios en relajación. Una cifra superior puede indicar el desarrollo vertical excesivo del maxilar. Los patrones de la sonrisa varían en cada persona pero, desde el punto de vista estético, al sonreír, el borde rojo del labio superior debe quedar en la proximidad del borde cervicogingival de los incisivos, dejando sólo 1 o 2 mm de encía expuesta. En los pacientes con retrusión mandibular se observa la eversión excesiva de labio inferior, el músculo mentoniano puede presentar hiperactividad durante el cierre forzado del 90 Velayos JL, Díaz-Santana H. Anatomía topográfica. Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.361-87. 91 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. INTRODUCCIÓN 29 labio inferior, lo que se observa con frecuencia en los pacientes con retrognatismo mandibular, mordida abierta e incompetencia labial92. 1.3.4.1. Crecimiento y desarrollo del labio La cara en la quinta semana del periodo embrionario tiene aproximadamente el espesor de una hoja de papel, toda la cara tiene más o menos solo 1.5 mm de ancho. En esta época, la fosa bucal esta limitada por la zona frontal y abajo por el arco mandibular que aparecen en forma de pala. Se nota un surco en la línea media que desaparece durante la sexta semana. En esta época, surgen dos pequeñas zonas elevadas, ovales, justo por encima de las partes laterales de la futura boca. En las 48 horas siguientes, los centros de estas zonas elevadas se convierten en depresiones a medida que los tejidos que las rodean continúan creciendo hacia delante. Las depresiones se profundizan en fosas que serán las futuras ventanas de la nariz y las masas que las rodean serán el puente y los lados externos de la nariz93. El tejido entre las fosas nasales se denomina proceso nasal medio y los que están al costado de las fosas son llamados procesos nasales laterales94. Estos tejidos se originan a partir de los tejidos conectivo y epitelial superficiales de la zona frontal a medida que todos crecen juntos hacia abajo y adelante. Antes que se produzca la fusión de estos procesos, las fosas nasales sufren una mayor elongación. Los rebordes anteriores elevados de estas fosas adoptan la forma de diminutas herraduras, son los lados abiertos abajo95. 92 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 93 Moyers RE, Manual de Ortodoncia, 4a ed Buenos Aires: Médica Panamericana;1992.p.18-36. 94 Velayos JL, Díaz-Santana H. Planteamiento embriológico. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico.. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.1-25. 95 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Crecimiento y desarrollo. En: Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. 4ª ed Barcelona:Labor,SA;1983.p.1-57. INTRODUCCIÓN 30 A medida que crecen hacia delante, los extremos inferiores de las herraduras se ponen en contacto entre ellos. La distancia entre estas dos fosas nasales no aumenta durante este importante periodo del desarrollo, aunque las fosas mismas aumentan en altura y longitud. Como el tejido subyacente a cada ventana de la nariz representa la primera separación de la cavidad nasal de la cavidad bucal, ha sido designado por algunos autores como paladar primario96. El modo de formación de estas fosas es importante, porque una falla en cualquiera de los pasos en su desarrollo puede resultar en un labio hendido97. El primer paso puede ser definido como el contacto entre el epitelio que cubre el borde mediano del proceso maxilar y el borde lateral del proceso nasal medio. Estos procesos cubiertos de epitelio juntos forman una lámina denominada la aleta nasal. Tan pronto se produce el contacto y adhesión de las dos hojas epiteliales, se fusionan en una sola hoja que luego degenera resultando en la penetración de tejido conectivo a través de la hoja. Esta zona de penetración se expande rápidamente y la aleta nasal es eliminada excepto en sus límites anteriores y posteriores. De esta manera el labio se unifica y se impide la separación del piso de las fosas en forma de una hendidura. El tejido por debajo y entre las dos fosas nasales se denomina el paladar primario, que separa la cavidad nasal primitiva de la cavidad bucal. En los límites posteriores de la aleta epitelial, las mismas dos hojas epiteliales se separan, produciendo una abertura entre las fosas nasales y el techo de la cavidad bucal. Esta abertura posterior de la fosa nasal se denomina narina interna y es el límite posterior del paladar primario. Más tarde, las cavidades nasales se ensanchan atrás para formar un espacio que cubre toda la cavidad bucal. 96 Moyers RE, Manual de Ortodoncia, 4ª ed Buenos Aires: Médica Panamericana;1992.p.172-75. 97 Velayos JL, Díaz-Santana H. Planteamiento embriológico. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.1-25. INTRODUCCIÓN 31 Las cavidades bucal y nasal son entonces separadas por las prolongaciones palatinas secundarias98. La medida de la parte central del labio superior, del filtrum, es mas baja en la niñez, muy arriba durante y después de la adolescencia. Como consecuencia, la separación del labio en reposo es común en los niños, por lo que muchos de ellos tendrán incompetencia del labio durante su preadolescencia. Lo que pueda parecer un labio corto en la niñez o al empezar la adolescencia puede deberse a una incompleta maduración de tejidos blandos99. Desde los seis años a la edad adulta los tejidos blandos faciales incrementan su volumen más del 40%, con diferencias en los patrones de crecimiento en los varones y las mujeres100. Los labios crecen más pronto en las niñas que en los niños. De los 8 a los 18 años de edad en los varones el crecimiento promedio es de 3.8 mm, con incremento del 21.43% de los 10 a los 16 años; en las mujeres el promedio de crecimiento es de 2.04 mm, con incremento del 12.11% de los 10 a los 14 años de edad101. A los 14 años alcanza su maduración el labio superior en las niñas, mientras que el labio inferior es a la edad de 16 años. En los varones, ambos labios, superior e inferior, continúa hasta terminar la adolescencia madurando más el labio inferior102. Los cambios en los tejidos blandos en los adultos jóvenes, por el incremento de la edad, producen una secuencia en los tejidos blandos, afectando nariz, labios, mentón y otras estructuras faciales. Los labios se adelgazan, parecen más rellenos y mas alargados con respecto a la 98 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Crecimiento y desarrollo. En: Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. 4ª ed Barcelona: Labor,SA;1983.p.1-57. 99 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4a ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 100 Ferrario VF, Sforza C, Poggio CE, Schmitz JH. Facial volume changes during normal human growth and development. Anat Rec 1998;250:480-487. 101 102 Bergman RT. Cephalometric soft tissue facial analysis. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:373-89 Farkas LG, Posnick JC, Hreczko TM, Pron GE. Growth patterns of the nasolabial region: a morphometric study. Cleft Palate-Craniofacial J. 1992; 29:318-24. 32 INTRODUCCIÓN medida vertical del bermellón; La línea interlabial típica, que esta sobre la línea incisal en las caras jóvenes, desciende; el número de fibras musculares verticales en el labio superior disminuye y de perfil, el labio superior parece aplanado. Existen diferencias de género en la manera que estos cambios se manifiestan. En los masculinos el perfil se endereza y los labios se vuelven más retraídos, la nariz incrementa de tamaño en todas las dimensiones y se engruesan los tejidos blandos. En los femeninos el perfil no se endereza y los labios no están muy retraídos, la nariz aumenta de tamaño pero no tanto como en los hombres y sus tejidos blandos se vuelven finos103. 1.3.4.2. Posición de los labios La postura de los labios se estudia mejor durante la posición normal104 de la cabeza y la mandíbula. Normalmente, los labios se encuentran uno con otro en una relación no forzada a nivel del plano oclusal. Para valorar la postura de los labios el examen se realiza con los labios relajados, en reposo, ligeramente tocándose. La adecuada relación entre el labio superior y la cantidad de exposición de dientes superiores es un factor clave en la construcción estética moderna105. 103 Moyers RE, Manual de Ortodoncia, 4ª ed Buenos Aires: Médica Panamericana;1992.p.201-3. 104 Leitao P, Nanda RS. Relationship of natural head position to craneofacial morphology. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2000;117:406-17. 105 Nanda R. Diagnóstico ortodóntico especializado. En: Biomecánicas y estética. Estrategias en ortodoncia clínica. 1ª ed Colombia: Actualidades Médico Odontológicas Latinoamericanas,CA;2007.p.39-51. 33 INTRODUCCIÓN 1.3.4.3. Color y textura de los labios Cuando un labio es de color o textura diferente del otro hay una razón. Si, por ejemplo, el labio inferior descansa debajo de los incisivos superiores durante una deglución, suele ser más rojo, más grueso y probablemente más húmedo y liso. Cuanto menos activo el labio superior, más frecuentemente presentará fisuras y de color más claro.106 1.3.4.4. Musculatura labial El músculo principal es el orbicular de los labios, al cual llegan un conjunto de músculos peribucales, en la comisura y en las zonas superior e inferior, que son el elevador del labio superior y del ala de la nariz, elevador del labio superior, elevador del ángulo del boca, zigomáticos mayor y menor, risorio, depresor del ángulo de la boca depresor del labio inferior, mental y buccinador. El músculo orbicular de los labios o de la boca107, m. orbicularis oris, ocupa el grosor de los labios y está formado por fibras musculares dispuestas concéntricamente alrededor de la abertura bucal, recibiendo fascículos de otros músculos. Se extiende verticalmente desde el tabique nasal hasta un punto entre el mentón y el borde libre del labio inferior. Recibe fascículos de otros músculos como el orbicular externo que constituyen las fibras más periféricas, procedentes de músculos dilatadores, terminando en la cara profunda de la piel de los labios, de las fibras inferiores del músculo buccinador que llegan hasta el labio superior, y las fibras superiores en el labio inferior. 106 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En:Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992. p.97-22. 107 Velayos JL, Díaz-Santana H.Sistema neuromuscular del nervio facial. En:Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.169-86. INTRODUCCIÓN 34 Está constituido por fibras intrínsecas del propio músculo que forman los llamados músculos incisivos: dos superiores y dos inferiores. Los dos superiores llegan hasta la fosita mirtiforme y los inferiores al relieve alveolar del canino inferior correspondiente. A lo largo del borde libre de ambos labios las fibras más concéntricas se sitúan y en el espesor del mismo, sin insertarse en ninguna estructura ósea. Las fibras musculares, en la zona superior, prácticamente no se entrecruzan en el labio superior, lo que permite la existencia de una fosita sinusal, que recuerda su procedencia del mamelón nasal. En la comisura o ángulo de la boca el entrelazamiento de las fibras profundas y de las superficiales forma un nódulo fácilmente observable que se denomina modiolo108. En las personas adultas jóvenes, con relación molar Clase I y relación frontal fisiológica, Lapatki y cols.109 reportaron que la distribución de la presión de los labios sobre los incisivos centrales superiores, en posición de descanso, es positiva con magnitud de +1.34 cN/cm2 en el área cervical mientras que en el borde incisal es negativa con magnitud de -1.25 cN/cm2. Los ejecutores de la sonrisa son principalmente los músculos zigomáticos mayores, que se insertan en los modiolos de los orbiculares de los labios en cada comisura de la boca. Levantan las esquinas de los labios hacia arriba y hacia fuera, curvando los labios mostrando la sonrisa110. La piel es gruesa y adherida a los músculos subyacentes. La red linfática es muy desarrollada drenando en los ganglios submandibulares, 108 Velayos JL, Díaz-Santana H. Anatomía topográfica. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.361-66. 109 Lapatki BG, Mager AS, Schulte-Möenting J, Jonas IE. The importance of level of the lip line and resting lip pressure in class II, division 2 malocclusion. J Dent Res 2002;81:323-28. 110 Hulsey Ch. An esthetic evaluation of lip-teeth relationships present in the smile. Am J Orthodont 1970;57:132-44. INTRODUCCIÓN 35 submentonianos y parotideos. Se encuentra en la cara anterior del labio superior el surco subnasal, perteneciendo su extremidad inferior al tubérculo del labio superior111. La porción muscular central corresponde a músculo estriado voluntario, recubierto por su parte externa por piel, constituida por epidermis, dermis e hipodermis y por su parte interna por una mucosa, constituida por un epitelio de revestimiento, una lámina propia y una submucosa. El labio es un repliegue musculocutáneo membranoso. Para diferenciar en un corte histológico la piel de la mucosa se deben visualizar los folículos pilosos. Además el epitelio de la mucosa es más alto. 1.3.4.5. Función de los labios El cierre de la boca esta determinado por la contracción del músculo orbicular. Los labios impiden la entrada de cuerpos extraños y evitan la salida del alimento. Durante la deglución los labios superior e inferior se encuentran en contacto pero sin ninguna acción112. La potente contracción del músculo orbicular favorece a la succión y participa en la masticación113, deglución114, habla115,116 y en la respiración117. 111 Velayos JL, Díaz-Santana H. Anatomía topográfica. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.361-66. 112 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Fisiología dentomaxilofacial. En:Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. 4ª ed Barcelona: Labor,SA;1983.p.87-08. 113 Feine JS, Maskawi K, de Grandmont P et al : Within-subject comparisons of implant-supported mandibular prostheses: evaluation of masticatory function. J Dent Res. 1995;73:1646-56. 114 Carvajal R, Miralles R, Cauvi B, Berger B, Carvajal A, Bull R. Superior orbicularis oris muscle activity in children with and without cleft lip and palate. Cleft Palate- Craniofacial J1992;29:32-37. 115 Van der Geld PA, Oosterveld P, van Waas MA, Kuijpers-Jagtman AM. Digital videographic measurement of tooth display and lip position in smiling and speech: reliability and clinical application. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007;131:301.e1-301.e8. 116 Ackerman MB, Brensinger C, Landis R. An evaluation of dynamic lip-tooth characteristics during speech and smile in adolescents. Angle Orthod 2004;74:43-50. 117 Graber TM. Fisiología del sistema estomatognático. En: Ortodoncia teoría y practica. 3ª ed México: Nueva editorial Interamericana;1974;122-68. INTRODUCCIÓN 36 Si se contrae la porción central del músculo da a la cara un gesto mordaz y amargo. A la contracción únicamente de la porción periférica se forma una boca en forma de trompetilla. La hipotonía o atonía del músculo hace que cuelgue el labio inferior lo que da a la cara un aspecto atontado, por lo tanto la función muscular labial tiene gran influencia sobre la aceptación social y el bienestar psicológico del individuo, señalado hace 50 años por Burstone118. La forma del labio, estilo de la sonrisa, el índice de sonrisa, exposición incisogingival, proporción dorada, arco de la sonrisa y amplitud del corredor bucal han sido asociados con sonrisas estéticas en estudios recientes119,120,121,122,123. La sonrisa es una de las funciones de los labios por medio de la cual las personas muestran sus emociones. Es importante evaluar la sonrisa desde una vista frontal más que de perfil, señalado varios años antes por Hulsey124. A veces los labios son de tamaño adecuado pero no funcionan correctamente como en la maloclusión extrema de Clase II, División I que el labio inferior es hiperactivo, forma el cierre bucal con las caras linguales de los incisivos superiores, mientras el labio superior escasamente funciona del todo. Después de la retracción y ubicación correcta de los 118 Burstone CJ. The integumental profile. Am J Orthod. 1958;44:1-25. 119 Parekh SM, Fields HW, Beck M, Resenstiel S. Attractiveness of Variations in the smile arc and buccal corridor space as judged by orthodontist and laymen. Angle Orthod 2006;76:557-63. 120 Moore T, Southard KA, Casko JS, Qian F, Southard TE. Buccal corridors and smile esthetics. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2005;127:208-13. 121 Yang IIH, Nahm DS, Baek SH. Which hard and soft tissue factors relate with the amount of buccal corridor space during smiling. Angle Orthod 2008;78:5-11. 122 Krishnan V, Daniel ST, Lazar D, Asok A. Characterization of posed smile by using visual analog scale, smile arc, buccal corridor measures, and modified smile index. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;133:515-23. 123 Van der Geld PA, Oosterveld P, van Waas MA, Kuijpers-Jagtman AM. Digital videographic measurement of tooth display and lip position in smiling and speech: reliability and clinical application. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007;131:301.e1-301.e8. 124 44. Hulsey Ch. An esthetic evaluation of lip-teeth relationships present in the smile. Am J Orthod 1970;57:132- INTRODUCCIÓN 37 incisivos, habitualmente se produce espontáneamente la función normal del labio, requiriéndose en ocasiones la prescripción de un régimen de ejercicios labiales. Una de las funciones anormales mas frecuentes de los labios esta asociada con la deglución con empuje lingual, donde el músculo mentoniano frecuentemente presente alteraciones en su tonicidad, así como el orbicular del labio inferior125. 1.3.4.6. Configuración de los labios Los criterios con los que se debe valorar la configuración de los labios son: longitud, anchura y prominencia. Dependen del grosor del tejido blando, a la tonicidad del músculo orbicular de los labios, la posición de los dientes anteriores, las estructuras óseas subyacentes y de forma importante al grupo étnico126,127. La longitud del labio superior, distancia entre el punto subnasal y el punto estomion, representa una tercera parte de la altura inferior de la cara, en tanto que la longitud del labio inferior y del mentón, distancia entre el punto estomion y el mentón, ocupa, si existe armonía facial, las dos terceras partes restantes128. La longitud del labio superior se debe relacionar, además, con la posición del borde incisal superior. La zona de transición labial a nivel del tabique nasal, comisura nasolabial, y del pliegue mentolabial permiten valorar el grado de distensión 125 Graber DA, Salama MA. The aesthetic smile: Diagnosis and treatment. Periodontology 1996;11:18-28. 126 Hasanreisoglu U, Berksun S, Aras K, Aíslan I. An analysis of maxillary anterior teeth: facial and dental proportions. J Prosthet Dent 2005;94:530-8. 127 Lapatki BG, Mager AS, Schulte-Möenting J, Jonas IE. The importance of level of the lip line and resting lip pressure in class II, division 2 malocclusion. J Dent Res 2002;81(5):323-328. 128 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. INTRODUCCIÓN 38 de los labios. Además de las consideraciones étnicas, la protrusión labial depende del grosor de las partes blandas y del tono del músculo orbicular de los labios, la posición de los dientes anteriores y la configuración de las estructuras óseas subyacentes. El labio superior de los pacientes con discinesias del labio inferior suele ser pálido y seco, mientras que el labio superior tiene mejor color y más húmedo. En algunos casos, se observa una impresión del borde del incisivo superior. Es considerado por algunos autores que los labios son competentes cuando están en contacto suave con la musculatura relajada y labios incompetentes cuando son anatómicamente cortos y el sellado labial se produce por contracción activa del músculo orbicular de los labios129. A la relación entre la curvatura de los bordes incisales de los incisivos superiores y la curvatura del borde superior del labio inferior es lo que se conoce como arco de la sonrisa y al ser paralelas es considerada como una sonrisa armónica130, presente en el 74% de los sujetos estudiados por Owens sin diferencia entre género y raza131. 129 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22. 130 Krishnan V, Daniel ST, Lazar D, Asok A. Characterization of posed smile by using visual analog scale, smile arc, buccal corridor measures, and modified smile index. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;133:515-23. 131 Owens EG, Goodacre CJ, Loh PL, Hanke G, Okamura M, Jo KH, Muñoz CA, Naylor WP. A multicenter interracial study of facial appearance. Part 1: A comparison of extraoral parameters. Int J Prosthodont, 2002; 5:273-82. 39 INTRODUCCIÓN 2. Incisivos Los dientes son órganos de estructura dura, de colores blanquecinos e implantados en el borde alveolar de maxilar y mandíbula. Cada órgano consta de tres partes: la raíz, la corona y el cuello. La dentición permanente consta de incisivos, caninos, premolares y molares132. Los incisivos tienen una función cortante debido a que su borde es biselado, existiendo en algunas ocasiones tres minúsculos tubérculos o mamelones, dos laterales y uno medio. Tienen también una importante función fonética y estética. En el arco dental maxilar y mandibular se encuentra, a cada lado de la línea media, un incisivo central y otro lateral. Las coronas son más anchas en sentido mesiodistal que labiolingual. El porcentaje de la medida largo-ancho de las coronas varía de 73-78%133 al 8788%134, para los incisivos centrales y laterales, dentro de lo aceptado como ideal. Existe correlación entre algunas medidas faciales como la anchura de los ojos y la intercantal, distancia interpupilar, distancia intercomisural y la medida mesiodistal de los dientes anteriores maxilares135. Los incisivos superiores e inferiores presentan una relación de sobremordida (traslape) horizontal y vertical de aproximadamente 2±2 mm. Resultados del estudio de Zupančič y cols.136 muestran un valor promedio de la sobremordida horizontal en sujetos con relación Clase I molar, de 3.8±2.0mm, indican que puede existir un rango de variabilidad de 1.8 a 5.8 mm en las personas con estas características. 132 Velayos JL, Díaz-Santana H. Dientes. En:Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.87-11. 133 Magne P, Gallucci G, Belser UC. Anatomic crown width/length ratios of unworn and worn maxillary teeth in white subjects. J Prosthet Dent 2003;89:453-61. 134 Konikoff BM, Johnson DC, Schenkein HA, Kwatra N, Waldrop TC.17 Clinical crown length of the maxillary anterior teeth preorthodontics and postorthodontics. J Periodontol 2007;78:645-653. 135 Gomes VL, Gonçalves LC, Prado CJ, Lopes I, Lucas B. Correlation between facial measurements and the mesiodistal width of the maxillary anterior teeth. J Esthet Restor Dent 2006;18:196-205. 136 Zupančič S, Pohar M, Farčnik F, Ovsenik M. Overjet as a predictor of sagital skeletal relationships. Eur J Orthod 2008;30:269-73. INTRODUCCIÓN 40 El incisivo superior debe estar adelante del inferior y en proporción con el tamaño de los arcos dentales, por lo que debe existir espacio suficiente para su alineación137. Estas características incisales son consideradas, con la relación molar de Clase I, como oclusión ideal138,139 y existe una tendencia hacia una particular morfología facial y patrón dental en personas con esta oclusión140. Algunos investigadores han encontrado oclusión normal en muy baja proporción en las poblaciones estudiadas: Platou141 en 1983 encontró 5.3%, Canut142 en 1987 el 5.23% y Hwang143 en 2002 en solo el 2%. Los dientes superiores están inervados por el nervio maxilar e irrigados por la arteria maxilar. Son inervados por plexos nerviosos colaterales procedentes en su mayoría de la segunda rama del nervio trigémino. Es difícil distinguir la inervación de cada diente por la mezcla de las fibras de los tres plexos alveolares superiores144. La secuencia, como el tiempo de erupción dental, esta determinada genéticamente, muestra variaciones étnicas, es poco modificada por los trastornos endocrinológicos y se adelanta en las niñas145. La etiología genética de 137 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4a ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 138 Scavone H Jr, Zahn-Silva W, Do Valle-Corotti KM, Nahás ACR. Soft Tissue Profile in White Brazilian adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod. 2008;78:58-63. 139 Arnett GW, Jelic JS, Kim J, Cummings DR, Beress A, Worley M Jr, Cheng B, Bergman R. Soft Tissue cephalometric analysis: Diagnosis and treatment planning of dentofacial deformity. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:239-53. 140 Casko J, Shepherd WB. Dental and skeletal variation within the range of normal. The Angle Orthodontics. 1984;54:5-17. 141 Platou C, Zachrisson B. Incisor position in Scandinavian children with ideal oclusion. Am J Orthod. 1983;83: 341-52. 142 Canut J Miñana P, Plasencia E. Facial differences between Northern and Southern European children. Angle Orthod 1987;63-69. 143 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and European-American adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 144 Velayos JL, Díaz-Santana H. Dientes. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid:Médica Panamericana;1998.p.87-11. 145 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22 INTRODUCCIÓN 41 la ausencia congénita de dientes es compleja, mostrando tendencias familiares. Los dientes supernumerarios se presentan con frecuencia en el maxilar superior principalmente en la línea media146. Los dientes jóvenes en comparación con los dientes de las personas mayores tienen mayor textura, más brillo, baja saturación del color, margen gingival en la proximidad de la unión amelocementaria, bordes incisales que dan la apariencia de que los laterales son más cortos que los centrales o los caninos, además presentan ligera caracterización con líneas o puntos hipoplásicos blancos147. 2.1. Desarrollo dentario y erupción dental La odontogénesis inicia entre la quinta y sexta semana del periodo embrionario, con el engrosamiento del estomodeo que se invagina y origina la lámina dental. El mesenquima condensado de la cresta neural y los cambios que sufre la lámina dental forman los gérmenes de los dientes de la primera y segunda dentición148. Las fases del desarrollo dentario son: proliferación, histodiferenciación, morfodiferenciación y calcificación dental. Es un proceso íntimamente coordinado con el crecimiento de los maxilares149. El proceso de odontogénesis es complejo y muy vulnerable, las manifestaciones de la alteración tardarán mucho tiempo en hacerse evidentes. Las interferencias en estas fases modificarán el número, tamaño, forma y estructura dental. 146 Moyers RE, Manual de Ortodoncia, 4a ed Buenos Aires: Médica Panamericana;1992.p.102-50. 147 Singer B. Fundamentals of esthetics. In: Aschheim KW, Dale BG. Esthetic Dentistry. A clinical approach to techniques and materials. In: 2d ed St. Louis Missouri: Mosby; 2001.p.27-37. 148 Barberia E. Erupción dentaria. Anomalías. En: Atlas de odontología infantil para pediatras y odontólogos. 1ª ed Madrid: Ripano SA;2005.p.33-48. 149 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Desarrollo de los dientes y de la oclusión. En: Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. 4ª ed Barcelona: Labor,SA;1983. p.59-86. 42 INTRODUCCIÓN El proceso de formación embriológica es simultáneo en los dientes de la primera y segunda dentición, cada órgano dental tiene su propio ritmo y cronología lo que forma un conjunto armónico que se valora de manera integral. Al nacimiento los huesos maxilares tienen la apariencia de unas conchas que rodean los folículos de los dientes en desarrollo. En este momento ya se encuentran calcificadas las coronas de los incisivos centrales en su mitad incisal, un poco menos la de los incisivos laterales, ya ha comenzado la calcificación de la corona del primer molar permanente y puede observarse las criptas de los incisivos centrales superiores permanentes. Aun cuando son procesos diferentes la erupción dentaria esta relacionada con la odontogénesis. Es definida como el conjunto de movimientos que realiza cada órgano dentario para ocupar el espacio que le corresponde en el arco dental para realizar sus funciones. El proceso no esta completamente explicado, se cree que es regido por un control endocrino y es el resultado de la acción simultanea de la reabsorción de raíces de los temporales, la calcificación de las raíces, proliferación celular y aposición ósea alveolar150. Cada uno de los órganos dentarios tiene un proceso eruptivo cronológicamente diferente siguiendo las siguientes fases:151 • Fase preeruptiva. En esta fase se forma la corona dental, que en conjunto con el crecimiento del maxilar que lo alberga, se mueve dentro de él, sin desplazarse en relación con el reborde óseo. • Fase eruptiva prefuncional. Inicia con la formación de la raíz dentaria, emerge y termina cuando tiene contacto con su antagonista. 150 Mayoral J, Mayoral G, Mayoral P. Desarrollo de los dientes y de la oclusión. En: Ortodoncia Principios fundamentales y práctica. 4ª ed Barcelona:Labor,SA;1983. p.59-86. 151 Barberia E. Erupción dentaria. Anomalías. En: Atlas de odontología infantil para pediatras y odontólogos. 1ª ed Madrid: Ripano SA;2005.p.33-48. INTRODUCCIÓN • 43 Fase eruptiva funcional. Cuando tiene contacto con su antagonista y se mantiene esta fase toda la vida del órgano dental lo que permite el contacto continuo para compensar los movimientos verticales y sagitales que realiza por efecto de su función. La erupción dental es un largo proceso que no termina al momento de emerger el diente rompiendo la mucosa. Todavía no ha terminado su formación, para este momento solo tiene formada la mitad o dos terceras partes de su raíz, requiere para su total formación de dos a tres años. 2.2. Incisivos centrales superiores El incisivo central tiene un papel muy importante en la estética dental del individuo. Tiene una corona trapezoidal, posee una raíz única con una dimensión vestíbulo lingual mayor que la mesiodistal. Es el incisivo mas grande de todos y su longitud inciso cervical de la corona es la mayor de toda la dentición humana. Su función en la masticación es fundamental por su función cortante. Al unirse el borde incisal con las cara proximales forma dos ángulos, uno mesioincisal, en un plano más inferior, con un vértice marcado (ángulo de 90°) y el otro distoincisal, en un plano más superior y redondeado. Inician su calcificación entre los 3 y 4 meses después del nacimiento, termina la formación del esmalte a los 4 o 5 años, erupcionan a los 7 u 8 años y termina la formación de la raíz a los 10 años de edad152. La corona del incisivo central superior presenta longitud coronal de 9.9 mm y la raíz mide 12.4 mm. Presentan una variación de tamaño de 2.98mm en promedio153. Magne y cols.154 midieron dientes extraídos de sujetos blancos, sus 152 Proffit WR, Fields HW Jr, Ackerman JL, Bailey LJ, Tulloch JF. Diagnóstico ortodóncico: establecimiento de un listado de problemas. En: Proffit WR, Fields HW Jr, Ortodoncia Contemporánea. 3ª ed Madrid: Mosby Harcourt; 2001.p.148-95. 153 Velayos JL, Díaz-Santana H. Dientes. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.87-11. INTRODUCCIÓN 44 promedios de la corona anatómica del central superior sin desgastes mide de largo 11.69mm y de ancho 9.10mm con un 78% de la relación ancho/largo. Por otro lado Sterrett y cols.155 comunicaron que los masculinos presentan promedio de longitud 10.19±0.94 mm y ancho 8.59±0.47 mm; los femeninos 9.39±0.86 mm y 8.06±0.66 mm de longitud y anchura respectivamente. Los incisivos centrales deben mantenerse simétricos dentro de los límites razonables. Se permiten pequeñas asimetrías, ya que se ha visto que la asimetría bilateral entre los incisivos centrales superiores no excede de 0.3 a 0.4 mm en anchura mesiodistal156. El incisivo central actúa como piedra angular, sus medidas han de estar en proporción con la anchura de la cara, la anchura del arco dental, la distancia interpupilar, el volumen de los labios y, por lo tanto, de la cara en su conjunto157. 2.3. Incisivos laterales superiores Los incisivos laterales superiores muestran más variaciones de la forma que los incisivos centrales y a menudo son asimétricos bilateralmente en la misma boca. La medida promedio es de 8.6 mm de altura coronal y de 12.9 mm de longitud radicular158. Magne y cols.159 establecen que la longitud coronal sin desgastes de sujetos blancos es de 9.75mm y la anchura es de 7.07mm y 73% la relación ancho/largo. Sterrett y cols.160 indicaron que los masculinos presentan promedio de longitud de 8.70±0.78 mm y de ancho 6.59±0.45 mm; los femeninos 154 Magne P, Gallucci G, Belser UC. Anatomic crown width/length ratios of unworn and worn maxillary teeth in white subjects. J Prosthet Dent 2003;89:453-61. 155 Sterrett JD, Oliver T, Robinson F, Fortson W, Knnak B, Russell CM. Width/length ratios of normal clinical crowns of the maxillary anterior dentition in man. J Clin Peridontol 1999;26:153-57. 156 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 157 Graber D, Salama M. The aesthetic smile: Diagnosis and treatment. Periodontology 2000.1996;11:18-28. 158 Velayos JL, Díaz-Santana H. Dientes. En: Anatomía de la cabeza con enfoque odontoestomatológico. 2ª ed Madrid: Médica Panamericana;1998.p.87-11. 159 Magne P, Gallucci G, Belser UC. Anatomic crown width/length ratios of unworn and worn maxillary teeth in white subjects. J Prosthet Dent 2003;89:453-61. 160 Sterrett JD, Oliver T, Robinson F, Fortson W, Knnak B, Russell CM. Width/length ratios of normal clinical crowns of the maxillary anterior dentition in man. J Clin Peridontol 1999;26:153-57. INTRODUCCIÓN 45 de 7.79±0.99 mm y 6.13±0.59 mm de longitud y anchura respectivamente. Con frecuencia es de menor tamaño161 y con amplias variaciones del diámetro mesiodistal de hasta 3.98 mm y de mayor magnitud que las de los incisivos centrales. Esto explica porque se observan con frecuencia, en un mismo arco dental, variaciones extremas de la forma. Además, los márgenes gingivales de los incisivos laterales no se alinean ni se exhiben de forma regular en la sonrisa. Así pues, la diversidad de la reconstrucción dentaria debe basarse en la asimetría de los incisivos laterales162. Inician su calcificación entre los 10 y 12 meses después del nacimiento, termina la formación del esmalte a los 4 o 5 años, erupcionan a los 8 o 9 años y termina la formación de la raíz a los 11 años de edad163. Después de los terceros molares y los segundos premolares inferiores, la ausencia congénita del lateral superior es la más frecuente. 161 Zachrisson BU. Estética en exposición dental y diseño de sonrisa. En: Nanda R. Biomecánicas y estética. Estrategias en ortodoncia clínica.1ª ed Colombia:Actualidades Médico Odontológicas Latinoamerica, CA; 2007.p.110-27. 162 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. En:Proffit WR, Fields a HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4 ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 163 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. 1ª ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22. INTRODUCCIÓN 46 3. Relación del labio superior y los dientes anteriores superiores Es importante evaluar la relación de la dentición con la cara. Se inicia con el examen de la simetría de la línea media facial con la dental. También se examina la relación vertical de los dientes con los labios en descanso y en la sonrisa164. La relación entre la presión de los labios y la lengua sobre los dientes ha demostrado que los labios, mas que la lengua, son determinantes ambientales en la posición de los dientes, por lo que la discusión sobre su equilibrio esta relacionada íntimamente con la etiología de algunas maloclusiones165. Algunos clínicos han sugerido que la retroclinación de los incisivos superiores es el resultado de la presión no fisiológica del labio superior, causada por una línea alta del labio superior en reposo166. Por lo que la relación poco armónica entre la longitud del labio superior y el borde incisal de los incisivos superiores produce que la encía y la mucosa de las apófisis alveolares queden visibles167 comprometiendo fuertemente los resultados estéticos del tratamiento odontológico. La relación del labio superior con los incisivos superiores es importante por las siguientes razones168: • La influencia de la fuerza muscular de los labios sobre la estabilidad y la alineación de los dientes. 164 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields a HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4 ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 165 Rakosi T, Jonas I. Etiología de las anomalías. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. 1ª ed MassonSalvat Odontología;1992.p.57-90. 166 Lapatki BG, Mager AS, Schulte-Möenting J, Jonas IE. The importance of level of the lip line and resting lip pressure in class II, division 2 malocclusion. J Dent Res 2002;81(5):323-28. 167 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. 1ª ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22. 168 Hulsey Ch. An esthetic evaluation of lip-teeth relationships present in the smile. Am J Orthodont 1970; 57:132-44. INTRODUCCIÓN • 47 El labio inferior coloca los pedazos de alimento entre los incisivos, por lo tanto, es necesario que los bordes incisales hagan contacto adecuado para que el labio realice su función. • El contacto del labio superior e inferior debe ser fácil y agradable, sellando la cavidad oral. La habilidad con la que los labios trabajan con los incisivos y la armonía con la que los dientes descansan sobre ellos, facilita este sellado y revela la buena forma y posición del arco dental. La posición ideal del labio superior en el momento de sonreír dependerá del nivel del margen gingival del grupo incisivo superior, actuando como uno de los principales factores que determinan el atractivo de una persona169. La curvatura del labio superior va de una comisura bucal a la otra y será más o menos acentuada según la participación de los músculos faciales en la sonrisa. La mayor o menor protrusión del labio superior esta determinada por la posición de los incisivos centrales y laterales superiores; es decir, el principal soporte del labio es la zona correspondiente a los 2/3 gingivales de estos dientes. La cantidad de diente visible, tanto en posición de reposo muscular como durante la función, estará determinada por la longitud y curvatura de los labios. Unos labios que adopten una forma cóncava provocarán una mayor visibilidad de los dientes anteriores. La cantidad de diente visible depende también del género170. Unos labios superiores cortos llegan a mostrar más los incisivos superiores, hasta 3.92 mm de estructura dental, mientras que los labios amplios y generosos cubren gran parte de los incisivos superiores y sólo dejan visible unos 0.25 mm, mostrando más los dientes inferiores. Krishnan V, Daniel ST, Lazar D, Asok A. Characterization of posed smile by using visual analog scale, smile arc, buccal corridor measures, and modified smile index. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;133:515-23. 169 170 Vig RG, Brundo GC. The kinetics of anterior tooth display. J Prosthet Dent. 1978;39:502-4 48 INTRODUCCIÓN Cuando es valorada la línea del labio superior, se utiliza para determinar la longitud de los incisivos superiores, tanto en la posición de reposo como en la sonrisa, también para conocer la situación vertical del margen gingival superior en el momento de sonreír171. La línea labial inferior permite saber la curvatura que debe tener el plano incisoclusal, que va de los dientes anterosuperiores a los posterosuperiores. La línea que representa el límite interno del bermellón del labio inferior servirá para conocer, mediante pruebas fonéticas, la posición en sentido buco lingual del borde incisal de los incisivos superiores172. La longitud y la curvatura de los labios influyen de forma significativa en el grado de exposición dentaria en reposo y durante la función. Por ejemplo, los labios cóncavos se asocian a menudo con una exposición prominente de los dientes superiores. Desde el punto de vista cultural, una sonrisa llamativa con dientes brillantes es sinónimo de juventud y dinamismo. El clínico debe tomar conciencia de que muchos pacientes de mediana y tercera edad prefieren, de manera consciente o no, los beneficios de un aspecto juvenil, con exposición prominente de los dientes. La línea labial superior sirve para evaluar la longitud del incisivo superior expuesta en reposo y durante la sonrisa así como sonrisa 173,174,175 la posición vertical de los márgenes gingivales durante la . 171 Yang IIH, Nahm DS, Baek SH. Which hard and soft tissue factors relate with the amount of buccal corridor space during smiling. Angle Orthod 2008;78:5-11. 172 Morley J, Eubank J. Macroesthetic elements of smile design. JADA 2001;132:39-5 173 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 174 Sabri R. The eight components of a balanced smile. JCO 2005;39:155-67. 175 Lapatki BG, Baustert D, Schulte-Mönting J, Frucht S, Jonas IE. Lip-to-incisor relationship and postorthodontic long-term stability of cover-bite treatment. Angle Orthod 2006;76:942-49. INTRODUCCIÓN 49 La cantidad de diente visible depende también de la edad176. Los pacientes mas jóvenes de hasta 29 años, de poblaciones específicas, muestran mayor estructura de los dientes superiores (3.37 mm) que los pacientes de mediana edad de 30 a 50 años (1.26 mm)177. A medida que el individuo va envejeciendo, disminuye la visibilidad de los dientes superiores y aumenta la de los inferiores178,179. El soporte labial superior es controlado hasta cierto punto por la posición de los dientes superiores. La posición dentaria afecta de forma más significativa los labios finos y protruidos que los labios gruesos, retraídos o verticales. El soporte labial constituye una guía de posición dentaria mejor que la posición del borde incisal. Son los dos tercios gingivales y no el tercio incisal de los incisivos centrales superiores los que constituyen el principal soporte del labio. La relación de los bordes incisales superiores con el labio inferior constituye una guía para la valoración general de la posición y la longitud del borde incisal180. La forma, longitud y volumen de los labios, tanto activos como en posición de descanso, desempeña también un papel importante en la valoración de la forma y la disposición espacial de los dientes. Si la oclusión lo permite es necesario alargar considerablemente la corona clínica, de manera que puedan verse los dientes. Debe establecerse un equilibrio entre la longitud de la línea labial cuando se sonríe y cuando se está en reposo, lo cual puede significar una alteración fundamental de las proporciones181. 176 Vig RG, Brundo GC. The kinetics of anterior tooth display. J Prosthet Dent. 1978;39:502-4. 177 Konikoff BM, Johnson DC, Schenkein HA, Kwatra N, Waldrop TC.17 Clinical crown length of the maxillary anterior teeth preorthodontics and postorthodontics. J Periodontol 2007;78:645-53. 178 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 179 Van der Geld PA, Oosterveld P, van Waas MA, Kuijpers-Jagtman AM. Age-related changes of the dental aesthetic zone at rest and during spontaneous smiling and speech. European J Orthod 2008;30:366-73 180 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 181 Rakosi T, Jonas I. Exploración clínica. En: Atlas de Ortopedia maxilar: diagnóstico. ed Masson-Salvat Odontología;1992.p.97-22. INTRODUCCIÓN 50 La relación de los incisivos superiores con el labio superior es importante, por lo tanto, en la estética facial ya que hay que correlacionar varios factores, longitud del labio superior, tamaño dentario, grado de intrusión-extrusión de los incisivos y desarrollo vertical del maxilar superior. Diversos estudios han sido publicados desde Riedel en 1957182, quien fue uno de los primeros en investigar la relación de la morfología de los labios y las estructuras dentales. Los estudios más actuales muestra diferentes resultados sobre el tema, su análisis es el siguiente: Al Wazzan183 estudió 473 adultos con un rango de edad de 20 a 60 años, de Riyadh, Arabia Saudita. Los pacientes incluidos eran predominantemente de origen árabe, negros africanos y del este asiático. El trabajo se realizó con el objetivo de determinar el grado de visibilidad de los dientes anteriores maxilares y mandibulares con los labios en reposo. El promedio de la porción visible del incisivo central con longitud labial de 10 a 15 mm fue de 2.86±1.52 mm y 1.51±1.48 mm del incisivo lateral. La porción visible de los centrales no mostró diferencia significativa entre hombres y mujeres, con promedio de 2.91±1.89 mm las mujeres y los masculinos 2.66±1.50 mm. Los sujetos masculinos mostraron más porción visible de laterales 1.89±1.35 mm y caninos maxilares así como de los incisivos inferiores, que los sujetos femeninos que tuvieron promedio de porción visible de incisivo lateral de 1.35±1.41 mm, diferencia que fue significativa (p<0.01). En relación a la longitud del labio superior no encontró diferencia significativa con el central y el lateral. Concluyó que con el incremento de la edad, la cantidad visible de los dientes anteriores maxilares disminuye y aumenta la de los inferiores. Los incisivos centrales maxilares fueron significativamente mas afectados por la edad. No encontraron diferencias significativas entre el origen diferente de los sujetos de estudio. 182 Riedel RA. An analysis of dento-facial relationships. Am J Orthod 1957;43:103-19. 183 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. INTRODUCCIÓN 51 Lapatki y cols.184 realizaron un estudio cefalométrico con el objetivo de determinar la estabilidad, a largo plazo, de la corrección de los incisivos centrales maxilares retroclinados, en pacientes con mordida profunda y para evaluar los posibles factores recidivantes. Fueron seleccionados 31 pacientes con mordida profunda antes del tratamiento y el rango de edad pretratamiento fue de 7.0 a 33.9 años. Tomaron medidas pretratamiento, postratamiento y al examen de seguimiento. Los resultados mostraron un promedio de 2.75mm con mínima de 0 y máxima de 4.50 postratamiento (no muestra los parámetros pretratamiento) de la medida cefalométrica de la porción del incisivo superior que sobresale del borde del labio superior. En su trabajo, Bergman185 analizó cefalométricamente los tejidos blandos. La distancia del borde inferior del labio superior al borde incisal del incisivo maxilar tiene un rango normal de 1 a 5 mm. La longitud del labio superior en reposo es de 20.1±1.9 mm en las mujeres y 23.9±1.5 mm en los varones. Lapatki y cols.186 analizaron 83 pacientes alemanes con un rango de edad de 6.7 a 31.4 años, con el fin de identificar cefalométricamente que parámetro esqueletal, dentoalveolar o de tejido blando determina la severidad con que se manifiesta la retroclinación del incisivo central superior. Los resultados del análisis de varianza múltiple muestran significativa relación de los tejidos blandos con los parámetros esqueletales y dentales, principalmente los asociados con labio superior corto. El coeficiente de correlación de Pearson mostró una relación significativa entre la longitud del labio superior corto con la retroclinación del incisivo central maxilar (p<0.05). 184 Lapatki BG, Baustert D, Schulte-Mönting J, Frucht S, Jonas IE. Lip-to-incisor relationship and postorthodontic long-term stability of cover-bite treatment. Angle Orthod 2006;76:942-49. 185 186 Bergman RT. Cephalometric soft tissue facial analysis. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:373-89 Lapatki BG, Klatt A, Schulte-Mönting J, Jonas IE. Dentofacial Parameters explaining variability in retroclination of the maxillary central incisors. J Orofac Orthop 2007;68:109-23. INTRODUCCIÓN 52 Lapatki y cols.187 también realizaron un estudio comparativo de sujetos con maloclusión Clase II division 2 y un grupo control de 21 sujetos con promedio de edad de 24.9 años, con oclusión dentaria de clase I y relación fisiológica de incisivos. Se determinó clínicamente la línea del labio sobre el incisivo. El valor promedio fue de 2.7±1.1 mm de la porción visible del incisivo en los sujetos del grupo control según los resultados del estudio. Concluyen que una línea alta del labio superior aumenta la magnitud de la presión con redistribución sobre el área cervical del incisivo. Misch188 evaluó la relación entre la posición vertical del borde del incisivo central maxilar y del canino con la línea del labio superior en reposo en caucásicos de 30 a 59 años de edad con relación molar Clase I. En el grupo femenino el promedio de exposición dental del incisivo central fue de 3.8 mm con un amplio rango de -1 a +8 mm y en el grupo masculino el promedio fue de 2.5 mm rango de -3 a +7 mm. Concluye que debido al amplio rango de variabilidad de exposición que presentó el incisivo, en este estudio piloto, no debe ser utilizado para establecer la posición del borde incisal cuando se rehabilita pacientes edéntulos. Peck189 en un grupo de pacientes norteamericanos con un promedio de edad de 14.2 años, analizó las variaciones posturales del labio superior, seleccionados al azar con diferentes características dentales. La longitud promedio del labio superior en posición de descanso fue de 21.2±2.4 mm. en las chicas y 23.4±2.5 mm en los chicos con diferencia estadísticamente significativas (p<0.001). Del incisivo central superior izquierdo tuvo un promedio en milímetros de 5.3±1.8 mm en las mujeres y 4.7±2.0 mm en los varones, sin existir en este caso, diferencias estadísticamente significativas. 187 Lapatki BG, Mager AS, Schulte-Möenting J, Jonas IE. The importance of level of the lip line and resting lip pressure in class II, division 2 malocclusion. J Dent Res 2002;81:323-28. 188 Misch CE. Guidelines for maxillary incisal edge position- A pilot study: The key is the canine. J Prosthodont 2008;17:130-4. 189 Peck S, Peck L, Kataja M. Some vertical lineaments of lip position. Am J Orthod Dentofac Orthop 1992;101:519-24. INTRODUCCIÓN 53 Yang y cols.190 estudian el área del corredor bucal durante la sonrisa posada en 92 pacientes adultos con promedio de edad de 23.5 años, previamente tratados con aparatología de ortodoncia fija, con y sin extracciones de primeros premolares, terminados con oclusión Clase I molar y canina. Sus resultados muestran que la exposición del incisivo superior tuvo un promedio de 3.16 con desviación estándar de 1.62. La longitud del labio superior de 25.16 mm con 2.20 de desviación estándar. Sabri191 describió los ocho componentes de una sonrisa balanceada. Menciona que la línea labial es la cantidad de exposición vertical del diente durante la sonrisa, dicha línea es óptima cuando el labio superior alcanza el margen gingival. El promedio del labio, cuando esta en reposo, medida desde el área subnasal a la porción inferior del labio superior en la línea media, es cerca de 23 mm en los hombres y 20 mm en las mujeres. Brock y cols.192, en un estudio retrospectivo realizado en 2 grupos de mujeres (44 blancas y 44 afroamericanas), observan las medidas de las cefalografías pretratamiento de las mujeres antes de los 14 años de edad. Encontraron diferencias en la longitud del labio, debido a que el labio en las afroamericanas es más largo que las mujeres blancas. La longitud del labio superior de las afroamericanas fue de 22.2±0.29 mm y de las blancas de 20.2±0.37 mm, existiendo diferencias muy significativas (p<0.001). Visón y Grobbelaar193 realizaron un estudio basado en fotografías de modelos de revistas y como grupo control no modelos, con labios relajados, sin sonreír, sin aumento de tamaño. El grupo control, con un rango de edad de 18 a 190 Yang IIH, Nahm DS, Baek SH. Wich hard and soft tissue factors relate with the amount of buccal corridor space during smiling. Angle Orthod 2008;78:5-11 191 Sabri R. The eight components of a balanced smile. JCO 2005;39:155-67. 192 Brock RA II, Taylor RW, Buschang PH, Behrents RG. Ethnic differences in upper lip response to incisor retraction. American J Orthod Dentofacial Orthop 2005;127:683-91. 193 Bisson M, Grobbelaar A. The esthetic properties of lips: a comparison of models and nonmodels. Angle Orthod 2004;74:162-66. INTRODUCCIÓN 54 35 años de origen caucásico, mostró una longitud del labio superior de 15.9 mm con desviación estándar de 1.92 mm medido solo hasta la punta inferior del filtrum labial sobre la línea media, sin llegar hasta el bermellón. Arnett194 presenta un análisis cefalométrico de tejidos blandos como auxiliar en el diagnóstico y plan de tratamiento realizado en 60 adultos blancos con oclusión de Clase I y balance facial. Encuentra un valor promedio de 21.0±1.9 mm en las mujeres y de 24.4±2.5 mm en los hombres en cuanto a la longitud del labio superior. Zlatarić y cols.195 llevaron a cabo un estudio con el propósito de examinar la relación de medidas faciales y las proporciones de los incisivos maxilares en sujetos caucásicos con promedio de 23 años de edad. Los resultados indican que la longitud del labio superior fue de 20.22±0.19 mm en los varones y de 20.03±0.19 mm en las mujeres. Pecora y cols.196 evaluaron mediante un estudio longitudinal los cambios craneofaciales y de los tejidos blandos. El promedio de edad inicial fue de 17.4±0.7 años en los varones y de 17.2±0.8 años en las mujeres, seleccionados de un estudio previo de crecimiento de la Universidad de Michigan. Los resultados estadísticos de las variables cefalométricas iniciales muestran a la longitud del labio superior, medida desde la espina nasal anterior ANS hasta el borde inferior del labio con promedio de 27.7±2.8 mm en los sujetos de sexo masculino y 26.1±3.3 mm en los sujetos de sexo femenino. 194 Arnett GW, Jelic JS, Kim J, Cummings DR, Beress A, Worley M Jr, Cheng B, Bergman R. Soft Tissue cephalometric analysis: Diagnosis and treatment planning of dentofacial deformity. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:239-53. 195 Zlatarić DK, Kristek E, Celebić A. Analysis of width/length ratios of normal clinical crowns of the maxillary anterior dentition: correlation between dental proportions and facial measurements. Int J Prosthodont 2007;20:313-15. 196 Pecora NG, Baccetti T, McNamara JA Jr. The aging craniofacial complex: A longitudinal cephalometric study from late adolescence to late adulthood. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:496-05. INTRODUCCIÓN 55 En la literatura consultada, no se encontraron referencias ni estudios mexicanos que definan estas características, por lo que se planteó el problema de investigar la posible relación entre la longitud del labio superior y la porción visible de los dientes anteriores de un grupo de adolescentes mexicanos de Tijuana, Baja California (México). JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS 57 JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS El esqueleto facial refleja el contorno de la cara y las desproporciones esqueletales inevitablemente afectan a los tejidos blandos faciales, por lo que la morfología facial es uno de los criterios a valorar en la exploración clínica para el diagnóstico de las alteraciones dentofaciales, facilitando establecer el plan de tratamiento y cualquier cambio producido por el crecimiento o por el mismo tratamiento. La exploración facial clínica se realiza de manera sistemática en tres etapas: la cara en los tres planos (macro-estética), la sonrisa (mini-estética) y los dientes (mini-estética). La evaluación de las proporciones de los tejidos blandos faciales debe basarse en el examen frontal de las proporciones faciales en los planos vertical y transversal, en la evaluación del perfil y en las relaciones labios-dientes393 debido a que la principal razón para el tratamiento ortopédico y ortodóncico es resolver las dificultades psicosociales, relacionadas con la apariencia facial y dental, aumentando con él la calidad de vida. La longitud del labio superior debe ser relacionada con la posición de los incisivos superiores ya que juegan un rol importante en la estética facial por lo que cualquier tratamiento odontológico que los involucre es considerado bastante crítico. La cantidad de estructura visible de los dientes anteriores esta determinada por la posición muscular que varía de una persona a otra, lo que es un factor a determinar para la planeación de tratamientos ortopédicos, ortodóncicos, prostodónticos, en implantología, en la odontología restauradora y en cirugía ortognática394. El profesional de la odontología reconoce que todos los datos, con respecto a prevalencia, son de gran ayuda ya que le permiten conocer la frecuencia con la que se observa una condición dada y pueden ser utilizados 393 Proffit WR, White RP, Sarver DM, Contemporary Treatment of Dentofacial Deformity. 1a Ed St. Louis Missouri: Mosby Inc;2003.p.92-25. 394 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 58 JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS para reevaluar sus métodos de diagnóstico. Las investigaciones son necesarias para definir las características de normalidad para diferentes grupos raciales o étnicos395. La información existente de prevalencia respecto a la estética dental es todavía limitada396. Esto es debido ampliamente al hecho de que un campo subjetivo como es la estética es arduamente estudiado como campo objetivo. Investigaciones pasadas han indicado que la estética no es totalmente un campo subjetivo. Graber y Salama han sugerido que los dientes, la estructura labial y el contorno gingival determinan la apariencia estética de la sonrisa397. Dentro de la literatura existen valores y reglas que están dentro de algunos rangos observados y pueden ser considerados como “ideal,” estos permiten la comparación con datos recogidos de nuevos estudios de estos valores y hacen posible que el investigador determine que tan frecuentemente se presentan variaciones, de manera que puedan ser utilizados adecuadamente los números relativos para llevar a cabo planes de tratamiento sin olvidar prestar atención a la variabilidad individual. En una sociedad multicultural las diferencias étnicas son consideradas altamente importantes. Las áreas metropolitanas tienen una población diversa con la necesidad de reconocer que un estándar de estética facial basado en caucásicos o de otras poblaciones puede no ser apropiada o no ser interpretadas adecuadamente cuando se realizan diagnósticos y planes de tratamiento para pacientes de diferente grupo étnico, ya que las diferencias no son solo un problema de colores y tipo de piel, también las proporciones faciales, las características morfológicas, los rasgos cutáneos y los mensajes 395 Capelozza Filho L. Diagnóstico en Ortodoncia. Editorial Dental Press; 2005.p.51-78 396 Padrós E. Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL 2006.p.152-05. 397 28. Graber D, Salama M. The aesthetic smile: Diagnosis and treatment. Periodontology 2000,1996;11:18- 59 JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS no verbales398 son factores importantes al aplicar la evaluación estética en la clínica. Algunas poblaciones demostraron no tener correlación entre la longitud del labio superior y la porción visible de los incisivos centrales superiores en adultos399. Estos hallazgos indican la necesidad de evaluar diferentes grupos de poblaciones o raciales, con el conocimiento de que los valores promedio raciales pueden ayudar ha establecer las modificaciones específicas en el plan de tratamiento, que se acomoden a los múltiples grupos étnicos entre las sociedades modernas. Diferencias raciales y de género han sido reportadas400,401,402,403,404 pero los resultados se consideran validados solamente para poblaciones específicas. Los estándares de estética facial han comenzado a cambiar mundialmente y el clínico necesita tener conocimiento de las características faciales, esquelétales y dentales específicas de la población con la que trabaja. Esta valiosa información apoya importantemente el tratamiento odontológico. No se han encontrado publicaciones de resultados de investigaciones y sus aplicaciones clínicas, que muestren evidencias científicas sobre la relación del labio superior con los incisivos superiores en mexicanos. 398 Mejia-Maidl M. Evans CA, Viana G, Anderson NK, Giddon DB. Preferences for facial profiles between Mexican Americans and Caucasians. Angle Orthod 2005;75:953-58. 399 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 400 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 401 Owens EG, Goodacre CJ, Loh PL, Hanke G, Okamura M, Jo KH, Muñoz CA, Naylor WP. A multicenter interracial study of facial appearance. Part 1: A comparison of extraoral parameters. Int J Prosthodont 2002; 5:273-82. 402 Mejia-Maidl M. Evans CA, Viana G, Anderson NK, Giddon DB. Preferences for facial profiles between Mexican Americans and Caucasians. Angle Orthod 2005;75:953-58. 403 Hyeon-Shik H, Wang-Sik K, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and European-American adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 404 Brock RA II, Taylor RW, Buschang PH, Behrents RG. Ethnic differences in upper lip response to incisor retraction. American J Orthod Dentofacial Orthop 2005;127:683-91. JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS 60 Los objetivos planteados en el presente estudio fueron: • Determinar la longitud media del labio superior y la distancia promedio de la porción visible de los incisivos central y lateral superiores desde el bermellón hasta el borde incisal de los mismos, en un grupo de adolescentes mexicanos de Baja California, México y su relación con el sexo y la edad. • Establecer las posibles relaciones de dependencia entre todos estos parámetros. MATERIAL Y MÉTODOS MATERIAL Y MÉTODOS 62 1. Descripción de la muestra La población sujeto de estudio de esta investigación estuvo constituida por la población adolescente de la ciudad de Tijuana Baja California, estado situado al noroeste de la Republica Mexicana. Tiene una población de 1,476,586 habitantes, la población con rango de 10 a 19 años de edad es de 150,308 habitantes (CONEPO 2007). Es una ciudad fronteriza con el estado de California USA, que vive principalmente del sector terciario (servicios). Este grupo de edad representa el 19.73% del total de la población de Tijuana. (Datos obtenidos del Consejo Estatal de Población CONEPO 2007)405. Un total de 1258 adolescentes mexicanos fueron revisados en centros escolares de secundaria y preparatoria de la ciudad de Tijuana, previo permiso de las autoridades escolares para la participación de los/as alumnos/as, a los/as que se les informó en que consistía el estudio, dejando en claro que no se pondría en riesgo su salud y que estaban en libre decisión de aceptar o rechazar su colaboración. Se les ofrecieron charlas sobre cuidados de salud oral. Aquellos adolescentes que presentaron maloclusión dentaria, alguna patología bucal y desproporción facial se les informó que podían asistir a la Clínica de especialidades odontológicas del Centro Universitario de Posgrado e Investigación en Salud de la Facultad de Odontología de la Universidad Autónoma de Baja California, para evaluar su posible tratamiento. Criterios de inclusión Los criterios aplicados para poder ser incluidos en el estudio fueron los siguientes: • Adolescentes, hombres y mujeres de 12 a 18 años. • Presenten los cuatro incisivos superiores sin anomalías dentales. 405 Consejo Estatal de Población. Baja California. 2008. [acceso 19 de octubre de 2008]. Disponible en: http://www.bajacalifornia.gob.mx/conepo/ MATERIAL Y MÉTODOS • 63 Parámetros de oclusión dental normal406,407,408,409 de Clase I molar, relación incisal superior e inferior con sobremordida horizontal (overjet) y vertical (overbite) de 2±2 mm410, sin discrepancia dentoalveolar (mínimas rotaciones dentales) y mordida cruzada anterior411,412. • Con proporciones faciales balanceadas413, 414. • Adolescentes sin tratamientos previos de ortodoncia y ortopedia. • Labio superior sin anomalías congénitas o cirugías. • Nacidos en México, con padres y abuelos mexicanos. De los 1258 adolescentes mexicanos entre 12 y 18 de edad examinados, 111 (el 8%) entraron a formar parte del estudio al cumplir los criterios de inclusión previamente establecidos. A todos estos pacientes se les proporcionó la información necesaria acerca del propósito del estudio para obtener su consentimiento, tomar medidas faciales y dentales no invasivas y realizar el análisis de la relación existente entre la longitud del labio superior con los incisivos centrales y laterales. No recibieron remuneración económica 406 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and European-American adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 407 Andrade de Freitas LM, Pinzan A, Janson G, Freitas KMS, de Freitas MR, Castanha JF. Facial height comparison in young white and black Brazilian subjects with normal occlusion. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007; 131:706.e1-706.e6. 408 Baik HS, Jeon JM, Lee HJ. Facial soft-tissue analysis of Korean adults with normal occlusion using a 3-dimensional laser scanner. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007;131:759-66.0 409 Platou C, Zachrisson B. Incisor position in Scandinavian children with ideal oclusion. Am J Orthod. 1983;83: 341-352. 410 Proffit WR, White RP, Sarver DM, Contemporary Treatment of Dentofacial Deformity. Ed. Mosby Inc, St. Louis Missouri, 1a edición, 2003, capítulo 4: 92-125. 411 Proffit WR, White RP, Sarver DM, Contemporary Treatment of Dentofacial Deformity. Ed. Mosby Inc, a St. Louis Missouri, 1 edición, 2003, capítulo 4: 92-125. 412 Andrade de Freitas LM, Pinzan A, Janson G, Freitas KMS, de Freitas MR, Castanha JF. Facial height comparison in young white and black Brazilian subjects with normal occlusion. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007; 131:706.e1-706.e6. 413 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and European-American adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 414 Andrade de Freitas LM, Pinzan A, Janson G, Freitas KMS, de Freitas MR, Castanha JF. Facial height comparison in young white and black Brazilian subjects with normal occlusion. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007; 131:706.e1-706.e6. MATERIAL Y MÉTODOS 64 por su participación y la identidad de los participantes fue confidencial. Algunos adolescentes permitieron se les tomara fotografías faciales. Se consideraron estos procedimientos para garantizar todos los aspectos éticos en las investigaciones con sujetos humanos. 2. Procedimiento Para estimar directamente las proporciones faciales balanceadas415 se utilizó un vernier digital (Digital Electronic Caliper). Se colocó a los adolescentes con la cabeza mantenida en posición natural NHP416,417. El examen clínico de las proporciones faciales se realizó con el adolescente sentado en una silla recta, relajado, la cabeza asumiendo su posición natural. Se le pidió que mirara al frente un objeto418. Esta posición cefálica mantiene el nivel del eje visual, con la cabeza orientada normalmente. Los puntos faciales utilizados fueron señalados con un marcador de tinta borrable marca “Sharpie” negro de punto fino, sobre la línea media facial, en posición labial de reposo. Fueron los siguientes: • Triquion. Nacimiento del cabello. • Glabela. Eminencia ósea a nivel de los arcos supraorbitarios. • Subnasal. Situado en la base de la espina nasal anterior de tejidos blandos, también llamado espinal. • Mentón. Punto más inferior en el tejido blando, en la mitad del hueso mentoniano. 415 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and European-American adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 416 Leitao P, Nanda RS. Relationship of natural head position to craneofacial morphology. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2000;117:406-17. 417 Barbera AL, Sampson WJ, Townsend GC. An evaluation of head position and craniofacial reference line variation. HOMO. J Comp Hum Biol 2008, doi:10.1016/j.jchb.2008.05.003. 418 Cooke MS, Wei SHY. The reproducibility of natural head posture: a methodological study. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1988;93:280-8. 65 MATERIAL Y MÉTODOS Los parámetros para determinar las proporciones faciales fueron evaluados en la vista frontal. Se analizó el equilibrio entre los tercios superior, medio e inferior de la cara de siguiente manera: • Tercio superior. De la línea de implantación del cabello (triquion) a la glabela. • Tercio medio. De la glabela al punto subnasal. • Tercio inferior. Del punto subnasal al mentón de tejidos blandos. A los adolescentes que presentaron balance facial, por tener sus tercios faciales en equilibro, la investigadora responsable del presente estudio los evaluó clínicamente, utilizando guantes, cubrebocas y abatelenguas para determinar los parámetros de oclusión dental normal419,420,421 de Clase I molar, relación incisal superior e inferior con sobremordida horizontal (overjet) y vertical (overbite) de 2±2 mm, sin discrepancia dentoalveolar (mínimas rotaciones dentales)422 y sin mordida cruzada anterior423,424; los cuatro incisivos superiores presentes sin anomalías dentales, sin tratamientos previos de ortodoncia u ortopedia y labio superior sin anomalías congénitas o cirugías. 419 Andrade de Freitas LM, Pinzan A, Janson G, Freitas KMS, de Freitas MR, Castanha JF. Facial height comparison in young white and black Brazilian subjects with normal occlusion. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007;131:706.e1-706.e6. 420 Baik HS, Jeon JM, Lee HJ. Facial soft-tissue analysis of Korean adults with normal occlusion using a 3-dimensional laser scanner. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007;131:759-66.0 421 Platou C, Zachrisson B. Incisor position in Scandinavian children with ideal oclusion. Am J Orthod. 1983;83: 341-352. 422 Casko J, Shepherd WB. Dental and skeletal variation within the range of normal. The Angle Orthodont.1984; 54:5-17. 423 Proffit WR, Ackerman JL Orthodontic diagnosis: the development of a problem list. In: Proffit WR, Fields HW Jr, Sarver DM. Contemporary Orthodontics. 4a ed St. Louis Missouri: Mosby Elsevier;2007.p.167-33. 424 Andrade de Freitas LM, Pinzan A, Janson G, Freitas KMS, de Freitas MR, Castanha JF. Facial height comparison in young white and black Brazilian subjects with normal occlusion. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2007; 131:706.e1-706.e6. MATERIAL Y MÉTODOS 66 Se utilizó un marcador borrable marca “Sharpie” de punto fino color negro para señalar los siguientes puntos: • Subnasal. Situado en la base de la espina nasal anterior de tejidos blandos. • Borde inferior del labio superior en el incisivo central. • Borde inferior del labio superior en el incisivo lateral. 3. Protocolo de recogida de datos A cada adolescente se le registró en un protocolo en el que se recogieron los siguientes datos: 3.1. Datos de filiación • Nombre del centro escolar. • Numero de control. • Filiación completa del sujeto, edad, fecha de nacimiento, grado escolar y género. 3.2. Medidas longitudinales • Longitud del labio superior: medida milimétrica del punto subnasal al estomion. • Porción visible del incisivo central superior: medida milimétrica del estomion al borde incisal del incisivo central izquierdo. • Porción visible del incisivo lateral superior: medida milimétrica del estomion al borde incisal del incisivo lateral izquierdo. Las medidas se obtuvieron con un vernier digital (Digital Electronic Caliper) señalando con un marcador de tinta borrable marca “Sharpie” el punto subnasal, en el incisivo central y lateral el límite de estomion como se comentó anteriormente. MATERIAL Y MÉTODOS 67 4. Método estadístico En este estudio se realizó: • Una estadística descriptiva (Media aritmética, desviación estándar, máximos y mínimos, porcentajes). • Una estadística analítica. Para la comparación de variables cuantitativas se utilizó el test de Student (t-Student) para la comparación de dos medias y la prueba de correlación de Pearson. Se consideró como nivel mínimo de significación un valor de p<0.05. Los datos fueron procesados con el programa estadístico SPSS versión 15.0.1 para Windows (Statistical Package for the Social Sciences; SPSS Inc. Chicago, Illinois, USA). RESULTADOS 69 RESULTADOS De los 111 adolescentes analizados en el estudio, 64 (el 57,7%) eran mujeres y 47 (un 42,3%) varones, con edades comprendidas entre los 12 y los 18 años, y una media de edad de 15,05±1,99 años (Figura 1). Figura 1.- Distribución de la muestra según su sexo 64 (57,7%) 47 (42,3%) Varones Mujeres No existen diferencias estadísticamente significativas entre los grupos de población en cuanto a la edad y el sexo (p=0.57). En la tabla 1 se muestra los valores promedio de la longitud del labio superior determinada en los 111 adolescentes estudiados. El labio superior mostró una longitud media de 20.61±1.13 mm. con un rango que oscila entre 17.77 mm. como longitud mínima y 23.09 mm. como valor máximo. Tabla 1.- Valores medios de longitud del labio superior Parámetro Media ± DE Rango Longitud labio superior 20.61±1.13 mm. 17.77 – 23.09 mm. DE: Desviación estándar Al estudiar la porción visible de incisivo central se observa un valor medio de 2.87±0.43 mm. de porción visible con un rango que se sitúa entre 1.94 y 4.08 mm. (tabla 2). 70 RESULTADOS Tabla 2.- Valores medios de porción visible del incisivo central Parámetro Media ± DE Rango Porción visible incisivo central 2.87±0.43 mm. 1.94 – 4.08 mm. DE: Desviación estándar Los valores medios de porción visible del incisivo lateral encontrados se presentan en la tabla 3. Se encontró un valor medio de 2.65±0.53 mm. (rango: 1.50 – 4.07 mm.). Tabla 3.- Valores medios de porción visible del incisivo lateral Parámetro Media ± DE Rango Porción visible incisivo lateral 2.65±0.53 mm. 1.50 – 4.07 mm. DE: Desviación estándar Al analizar la longitud media del labio atendiendo al sexo (figura 2), se aprecia una longitud media superior en los varones (20.97±1.13 mm.) con respecto a la longitud media encontrada en las mujeres (20.35±1.06 mm.). 20.97±1.13 mm. Varón 20.35±1.06 mm. Mujer Longitud media del labio superior (mm.) Figura 2.- Valores medios de longitud del labio superior (mm.) según el sexo. 71 RESULTADOS En el análisis estadístico, se encontró relación muy significativa (p=0.004) entre la longitud media del labio y el sexo. En este estudio, los chicos tenían mayor longitud media del labio superior que las chicas. En la figura 3 se muestra los valores medios (en mm.) de la porción visible del incisivo central superior en función del sexo. En este caso, las mujeres presentan una porción media visible del incisivo central ligeramente superior (2.91±0.43 mm.) a la encontrada en los varones (2.82±0.44 mm.). 2.82±0.44 mm. Varón 2.91±0.43 mm. Mujer Porción visible del incisivo central (mm.) Figura 3.- Valores medios de porción visible del incisivo central (mm.) de acuerdo con el sexo. No obstante, no se hallaron diferencias estadísticamente significativas (p=0.28) entre la porción media visible del incisivo central y el sexo. Los incisivos centrales se ven más en las mujeres que en los hombres. Cuando se estudia la porción visible del incisivo lateral superior de acuerdo con el sexo (figura 4), se observa una porción media visible del incisivo lateral ligeramente superior en los mujeres (2.70±0.53 mm.) en 72 RESULTADOS contraposición con la porción media visible observada en los varones (2.58±0.53 mm.). 2.58±0.53 mm. Varón 2.70±0.53 mm. Mujer Porción visible del incisivo lateral (mm.) Figura 4.- Valores medios de porción visible del incisivo lateral (mm.) considerando el sexo. Sin embargo, en el análisis estadístico, no se halló asociación significativa (p=0.22) entre ambos parámetros. Al igual que en el caso de los incisivos centrales, los laterales se ven más en las mujeres que en los hombres. También se estudió la influencia entre sí de las distintas variables de este trabajo: edad, longitud del labio superior, porción visible del incisivo central y porción visible del incisivo lateral. Para ello, se realizó un análisis de correlación mediante el coeficiente de correlación de Pearson (r). Todas estas correlaciones se muestran en las tablas 4, 5 y 6. La tabla 4 representa la correlación de la edad con el resto de variables del estudio. La longitud del labio superior no se ve influenciada por la edad (r=0.097, p=0.31). Por el contrario, con el resto de variables existe una relación inversa. Así, conforme aumenta la edad, disminuye tanto la porción visible del incisivo central (r=-0.309, p=0.001) como la porción visible de incisivo lateral (r=-0.349, p<0.001). 73 RESULTADOS Tabla 4.- Relación entre la variable edad y el resto de variables según el coeficiente de correlación de Pearson. Variable – Variable r Probabilidad Influencia Edad – Longitud labio superior 0.097 p>0.05 Sin influencia Edad – Porción visible incisivo central -0.309 p<0.01 Inversa Edad – Porción visible incisivo central -0.349 p<0.001 Inversa r: Coeficiente de correlación de Pearson Al relacionar la variable longitud del labio superior con el resto de variables de acuerdo al análisis de correlación de Pearson (tabla 5) se observa que ninguna de las variables analizadas -porciones visibles del incisivo central (r=-0.117, p=0.22) y lateral (r=-0.161, p=0.09)- tiene influencia sobre la longitud del labio superior. Tabla 5.- Relación entre la variable longitud del labio superior y el resto de variables según el coeficiente de correlación de Pearson. Variable – Variable r Probabilidad Influencia Longitud labio superior – Porción -0.117 p>0.05 Sin influencia visible incisivo central Longitud labio superior – Porción -0.161 p>0.05 Sin influencia visible incisivo lateral r: Coeficiente de correlación de Pearson La correlación entre la porción visible del incisivo central y lateral se muestra en la tabla 6. En este caso hay una relación directa entre ambas variables, conforme aumenta una, aumenta la otra (r=0.865, p<0.001). Si se incrementa la porción visible del incisivo central se incrementa la porción visible del incisivo lateral. Tabla 6.- Relación entre la porción visible del incisivo lateral y el resto de variables según el coeficiente de correlación de Pearson. Variable – Variable r Probabilidad Influencia Porción visible incisivo central 0.865 p<0.001 Directa Porción visible incisivo lateral r: Coeficiente de correlación de Pearson DISCUSIÓN DISCUSIÓN 75 Debido a que se utilizan estándares obtenidos de diferentes poblaciones para realizar las valoraciones diagnósticas de la morfología facial de adolescentes mexicanos, es necesaria una base de datos obtenida de sujetos de la misma población a diagnosticar, con proporciones balanceada faciales y dentales, con el propósito de establecer planes de tratamiento más adecuados. En el presente estudio el número de sujetos examinados no puede ser comparado a otros estudios transversales y longitudinales realizados en sujetos seleccionados al azar, debido a que en este estudio el porcentaje de adolescentes que cumplieron los criterios de balance facial y oclusión normal fue bajo (8%), sin embargo es similar a estudios anteriores que han mostrado también porcentajes bajos, de sujetos que cumplen estos criterios de selección en una población, porque existe una tendencia hacia una particular morfología facial y patrón dental en personas con oclusión normal425. Como el porcentaje de 5.3% reportado por Platou426, el 5.23% por Canut427 y el 2% Hwang428. En el presente estudio la longitud promedio del labio superior del grupo de adolescentes mexicanos de Baja California, México fue de 20.615 ±1.1318, menor que el reportado por Yang y cols429 de 25.16±2.20, diferencia ocasionada por tratarse de un parámetro obtenido de la cefalografía, además la selección fue realizada con sujetos con maloclusiones que previamente fueron tratadas con ortodoncia, con extracciones de primeros premolares y sin parámetros faciales y dentales similares. 425 Casko J, Shepherd WB. Dental and skeletal variation within the range of normal. The Angle Orthod 1984;54:5-17. 426 Platou C, Zachrisson B. Incisor position in Scandinavian children with ideal occlusion. Am J Orthod. 1983;83:341-52. 427 Canut J Miñana P, Plasencia E. Facial differences between Northern and Southern European children. Angle Orthod1987;63-69. 428 Hwang HS, Kim WS, McNamara JA Jr. Ethnic differences in the soft tissue profile of Korean and European-American adults with normal occlusions and well-balanced faces. Angle Orthod 2002;72:72-80. 429 Yang IIH, Nahm DS, Baek SH. Which hard and soft tissue factors relate with the amount of buccal corridor space during smiling. Angle Orthod 2008;78:5-11. DISCUSIÓN 76 Contrariamente a lo reportado por Bisson y Grobbelaar430 en su estudio con sujetos de 18 a 35 años de edad, quienes encontraron una longitud promedio del labio superior de 15.9±1.92, cantidad mucho menor que del presente estudio, debido que la longitud fue tomada solo hasta la punta inferior del filtrum labial sobre la línea media, también puede ser a que el método utilizado es diferente ya que se trata de un estudio fotográfico. En las diferencias entre géneros con respecto a la longitud del labio superior, los varones estudiados presentaron mayor longitud a la de las mujeres, resultado que reafirma los conocimientos actuales de que existen diferencias de género en las características faciales431, producidas en general, por el mayor tamaño corporal y tamaño pulmonar masculino que determina las características morfológicas nasales, por ser las vías aéreas un punto clave del crecimiento facial y que lleva a diferencias colaterales en otras estructuras topográficas de la cara. En los varones el perfil se endereza y los labios se vuelven más retraídos, la nariz incrementa de tamaño en todas las dimensiones y se engruesan los tejidos blandos. En los femeninos el perfil no se endereza y los labios no están muy retraídos, la nariz aumenta de tamaño pero no tanto como en los hombres y sus tejidos blandos se vuelven finos432. Las mujeres adolescentes mexicanas presentaron el promedio de 20.3508±1.06026mm, resultados similares fueron reportados por Sabr433 en el grupo de mujeres estudiadas, con promedio de 20mm a pesar de ser adultas mayores de 20 años; por Brock y cols.434 en el grupo de mujeres blancas 430 Bisson M, Grobbelaar A. The esthetic properties of lips: a comparison of models and nonmodels. Angle Orthod 2004;74:162-663. 431 Padrós E. Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL2006.p.152-05. 432 Moyers RE, “Manual de Ortodoncia”, 4ª ed Buenos Aires: Médica Panamericana;1992.p.201-3. 433 Sabri R. The eight components of a balanced smile. JCO 2005;39:155-67. 434 Brock RA II, Taylor RW, Buschang PH, Behrents RG. Ethnic differences in upper lip response to incisor retraction. American J Orthod Dentofacial Orthop 2005;127:683-91. DISCUSIÓN 77 menores de 14 años que tuvieron un promedio de 20.2mm; en el grupo mujeres del estudio de Bergman435, que tuvieron promedio de 20.1±1.9mm; por Zlatarić y cols.436 en el que las mujeres tuvieron el promedio de 20.03±0.192mm y un promedio ligeramente mayor en el estudio de Arnett437 de 21.0±1.9mm. Esta similitud, a pesar de la diferencia de edad, es tal vez a que, en las mujeres, el labio superior alcanza su madurez a los 14 años de edad438. El estudio de Pecora y cols.439 muestra la longitud del labio superior de 26.1±3.3mm, que no puede ser comparado al presente estudio, debido a que en su estudio cefalométrico miden la longitud labial de manera diferente, ya que utilizan la distancia de la espina nasal anterior del tejido duro al borde inferior del labio superior. Tampoco con el de Brock y cols.440 en su grupo de afroamericanas que tuvieron promedio de 22.2±0.29mm, que aun cuando su rango de edad es menor (<14 años de edad) que el del presente estudio, es probable que la mayor longitud labial se deba a las características propias de su raza. En los varones adolescentes del presente estudio el promedio de la longitud del labio superior fue de 20.9747±1.3772, solamente similar al 435 Bergman RT. Cephalometric soft tissue facial analysis. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:373-89 436 Zlatarić DK, Kristek E, Celebić A. Analysis of width/length ratios of normal clinical crowns of the maxillary anterior dentition: correlation between dental proportions and facial measurements. Int J Prosthodont 2007;20:313-15. 437 Arnett GW, Jelic JS, Kim J, Cummings DR, Beress A, Worley M Jr, Cheng B, Bergman R. Soft Tissue cephalometric analysis: Diagnosis and treatment planning of dentofacial deformity. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:239-53. 438 Farkas LG, Posnick JC, Hreczko TM, Pron GE. Growth patterns of the nasolabial region: a morphometric study. Cleft Palate-Craniofacial J. 1992;29:318-24. 439 Pecora NG, Baccetti T, McNamara JA Jr. The aging craniofacial complex: A longitudinal cephalometric study from late adolescence to late adulthood. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:496-05. 440 Brock RA II, Taylor RW, Buschang PH, Behrents RG. Ethnic differences in upper lip response to incisor retraction. American J Orthod Dentofacial Orthop 2005;127:683-91. 78 DISCUSIÓN promedio de 20.22±0.193 de Zlatarić y cols.441 Medidas obtenidas también directamente de los sujetos, con promedio de edad de 23 años. Similitud, que al igual que en los femeninos, puede ser debido a que en los varones el labio superior alcanza su desarrollo máximo a los 16 años de edad442. Los varones adolescentes mexicanos mostraron promedio menor a Sabri443 quien reportó una mayor longitud (23mm) sin embargo esta medida es similar a la de otros investigadores como Bregman444 que sus sujetos masculinos tuvieron un promedio de 23.9±1.5 y de Arnett y cols.445 que tuvieron 24.4±2.5 de longitud labial. Mayor longitud reportaron Pecora y cols.446(27.7±2.8) en los sujetos masculinos que como ya se comentó es debido al método utilizado para medir la longitud labial superior. La longitud promedio de la porción visible de los incisivos centrales fue de 2.875 ±0.4380 medida dentro del rango señalado por Bergman447 de 1 a 5 mm. Similar promedio fue el reportado por Al Wazzan448, en su estudio en adultos, de 2.86±1.52mm y mayor a la reportada en el 2006 por Lapatki y cols.449 de 2.75mm y en su anterior estudio del 2002 de 2.7±1.1mm en adultos 441 Zlatarić DK, Kristek E, Celebić A. Analysis of width/length ratios of normal clinical crowns of the maxillary anterior dentition: correlation between dental proportions and facial measurements. Int J Prosthodont 2007;20:313-15. 442 Farkas LG, Posnick JC, Hreczko TM, Pron GE. Growth patterns of the nasolabial region: a morphometric study. Cleft Palate-Craniofacial J. 1992;29:318-24. 443 Sabri R. The eight components of a balanced smile. JCO 2005;39:155-67. 444 Bergman RT. Cephalometric soft tissue facial analysis. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:373-89 445 Arnett GW, Jelic JS, Kim J, Cummings DR, Beress A, Worley M Jr, Cheng B, Bergman R. Soft Tissue cephalometric analysis: Diagnosis and treatment planning of dentofacial deformity. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:239-53. 446 Pecora NG, Baccetti T, McNamara JA Jr. The aging craniofacial complex: A longitudinal cephalometric study from late adolescence to late adulthood. Am J Orthod Dentofacial Orthop 2008;134:496-05. 447 Bergman RT. Cephalometric soft tissue facial analysis. Am J Orthod Dentofacial Orthop 1999;116:373-89 448 449 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5;1-7. Lapatki BG, Baustert D, Schulte-Mönting J, Frucht S, Jonas IE. Lip-to-incisor relationship and postorthodontic long-term stability of cover-bite treatment. Angle Orthod 2006;76:942-49. DISCUSIÓN 79 jóvenes, ambos estudios con parámetros oclusales similares al presente estudio de adolescentes mexicanos. Los estudios de Lapatki450 fueron cefalométricos por lo que podría ser la causa de la diferencia. Con menor promedio aún el reportado por Vig y Bundo451 de 1.91mm en adultos de 29 a 60 años de edad, quienes explican que la cantidad de diente visible depende también de la edad, que a mayor edad menor cantidad de diente visible y son apoyados también por Konikoff y cols.452 que los pacientes de mediana edad de 30 a 50años llegan a tener promedio de 1.26mm. La mayor diferencia es con Yang y cols.453 quienes reportan un promedio de 3.16±1.62 en adultos con promedio de edad de 23.5 años, tal vez porque los sujetos de estudio fueron pacientes previamente tratados con aparatología fija de ortodoncia e incluso con primeros premolares extraídos. De los estudios analizados solo se encontró que Al Wazzan454 midió la longitud de la porción visible de los incisivos laterales que tuvo un promedio de 1.51±1.46, menor a la de los adolescentes mexicanos de 2.653±0.5387, diferencia esperada por la disminución de la porción visible de los incisivos al aumentar la edad, ya que el estudio fue en sujetos adultos de hasta 60 años de edad, lo que podría indicar que el incisivo lateral se ve mas afectado por la edad que el incisivo central. Las diferencias entre género mostraron que en las medidas promedio de la porción visible del incisivo central no existió diferencia significativa entre 450 Lapatki BG, Klatt A, Schulte-Mönting J, Jonas IE. Dentofacial Parameters explaining variability in retroclination of the maxillary central incisors. J Orofac Orthop 2007;68:109-23. 451 Vig RG, Brundo GC. The kinetics of anterior tooth display. J Prosthet Dent. 1978;39:502-4. 452 Konikoff BM, Johnson DC, Schenkein HA, Kwatra N, Waldrop TC.17 Clinical crown length of the maxillary anterior teeth preorthodontics and postorthodontics. J Periodontol 2007;78:645-53. 453 Yang IIH, Nahm DS, Baek SH. Wich hard and soft tissue factors relate with the amount of buccal corridor space during smiling. Angle Orthod 2008;78:5-11 454 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. DISCUSIÓN 80 femeninos y masculinos, resultados similares a otros estudios455,456. En el estudio de Al Wazzan457 los incisivos mostraron, en el grupo de mujeres, un promedio de 2.91±1.89mm de porción visible. Muy similar al de las mujeres adolescentes mexicanas de 2.9134±0.43030mm, a pesar de tratarse de adultas mayores de 20 años; los varones si tuvieron promedios diferentes, fue menor 2.66±1.50mm, al del presente estudio de 2.8226±0.44761mm. Mostrando en ambos estudios, mayor porción visible las mujeres que los hombres sin existir, como se comentó, diferencia estadística significativa, similar al de Peck y cols.458 quienes midieron, al igual que el presente estudio, adolescentes y el incisivo central superior izquierdo, que presentó un promedio en los varones de 4.7±2.0 y 5.3±1.8 en las mujeres. Promedios mayores por ser sujetos seleccionados al azar sin parámetros de balance facial y relaciones dentales de oclusión normal. El estudio de Misch459, de sujetos caucásicos adultos con relación de Clase I molar, presentó un promedio de porción visible del incisivo central superior de 3.8 en el grupo de mujeres y en el grupo masculino el promedio fue de 2.5mm, con amplio rango de variabilidad de exposición, probablemente ocasionada porque no se tomaron en cuenta otros parámetros faciales y dentales para la selección de la muestra. En todos los reportes de investigaciones analizados se coincidió en que las mujeres, adolescentes como en las adultas, presentaron mayor porción visible de incisivos, sin ser la diferencia estadísticamente significativa, que los hombres, debido tal vez a que éstos presentan mayor longitud labial con 455 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 456 Peck S, Peck L, Kataja M. Some vertical lineaments of lip position. Am J Orthod Dentofac Orthop 1992;101:519-24. 457 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 458 Peck S, Peck L, Kataja M. Some vertical lineaments of lip position. Am J Orthod Dentofac Orthop 1992;101:519-24. 459 Misch CE. Guidelines for maxillary incisal edge position- A pilot study: The key is the canine. J Prosthodont 2008;17:130-4. DISCUSIÓN 81 diferencia estadísticamente significativa a pesar de tener en general mayor tamaño de la corona anatómica. Investigaciones adicionales futuras son recomendadas para revisar esta observación clínica. La porción visible de los incisivos laterales tampoco mostraron diferencia significativa entre mujeres y hombres. El promedio fue de 2.7067±0.53844 para los adolescentes femeninos y 2.5817±0.53636 los masculinos, a diferencia del estudio de Al Wazzan460 que encontró diferencia significativa entre mujeres y hombres con promedio de 1.35±1.41 y 1.89±1.35 respectivamente. Promedio menor que el de los adolescentes mexicanos por tratarse de adultos de 20 a 60 años de edad. Como se comentó anteriormente, la porción visible de los incisivos disminuye con la edad y al parecer afecta mayormente al incisivo lateral que al central, debido tal vez a que la primera línea en aparecer con el aumento de la edad es el pliegue nasolabial461 lo que ocasiona que el borde inferior del labio se encuentre mas bajo en los adultos, mostrando menor longitud de porción visible del incisivo lateral. En cuanto al género, la comparación entre los adolescentes del presente estudio y los adultos, parece ser que el factor edad se manifiesta mayormente en las mujeres. Con respecto a la relación de los parámetros longitud del labio superior y porción visible de los dientes anteriores superiores los resultados muestran que no existe relación estadísticamente significativa entre ellos en el grupo de adolescentes mexicanos analizados, no coincidiendo con los resultados de Lapatki BG y cols.462 que reportaron que la longitud menor del labio superior esta asociada a una mayor retroclinación del incisivo central superior. Esta 460 Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 461 Padrós E. Bases diagnósticas, terapéuticas y posturales del funcionamiento craneofacial. 1ª ed Madrid: Ripano SA, DL2006.p.152-05. 462 Lapatki BG, Klatt A, Schulte-Mönting J, Jonas IE. Dentofacial Parameters explaining variability in retroclination of the maxillary central incisors. J Orofac Orthop 2007;68:109-23. DISCUSIÓN 82 diferencia puede ser por la metodología utilizada por los investigadores que analizaron sujetos con maloclusión dental clase II división 2 para relacionar al labio superior con los incisivos. En el presente estudio la prueba de correlación de Pearson mostró que existe correlación estadísticamente significativa entre la porción visible del incisivo central y la porción visible del incisivo lateral, no se encontró otro estudio que analizara la relación entre los incisivos y mostrara resultados similares. CONCLUSIONES CONCLUSIONES 84 Las conclusiones de este estudio son: • Los varones presentan una mayor longitud media del labio superior que las mujeres, encontrándose diferencias muy significativas (p<0.01). • En cuanto a la porción visible del incisivo central superior, las mujeres tienen una porción visible mayor que la de los varones, aunque no se halló relación estadísticamente significativa (p>0.05). • De igual forma, en el incisivo lateral superior, la porción visible es mayor en las mujeres que en los hombres, si bien tampoco existió asociación significativa (p>0.05). • En este estudio, la edad no tiene influencia sobre la longitud de labio superior. En cambio, tiene una relación inversa con la porción visible tanto del incisivo central (p<0.01) como del incisivo lateral (p<0.001); esto es, conforme aumenta la edad, disminuye la porción visible incisal. • La longitud del labio inferior no tiene ninguna influencia sobre la porción visible del incisivo central y lateral. • Finalmente, existe una relación directa entre la porción visible de incisivo central y la del incisivo lateral, es decir, al aumentar una, aumenta la otra. Existen diferencias altamente significativas (p<0.001) entre ambos parámetros. BIBLIOGRAFÍA ORDENADA 86 BIBLIOGRAFÍA ORDENADA Ackerman JL, Proffit WR, Sarver DM. The emerging soft tissue paradigms in orthodontic diagnosis and planning. Clin Orthod Res 1999;2:49-52. Ackerman MB, Brensinger C, Landis R. An evaluation of dynamic lip-tooth characteristics during speech and smile in adolescents. Angle Orthod 2004;74:43-50. Al Wazzan KA. The visible portion of anterior teeth at rest. J Contemp Dent Pract 2004;5:1-7. 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