INTRODUCCIÓN Los volcanes son alteraciones de terreno que consisten en una fisura en la corteza terrestre sobre la que se acumula un cono de materia volcánica. En la cima del cono hay una chimenea cóncava llamada cráter. El cono se forma por la deposición de materia fundida y sólida que fluye o es expelida a través de la chimenea desde el interior de la Tierra. El estudio de los volcanes y de los fenómenos volcánicos se llama vulcanología. La mayoría de los volcanes son estructuras compuestas, es decir, formadas en parte por corrientes de lava y materia fragmentada. En erupciones sucesivas, la materia sólida cae alrededor de la chimenea en las laderas del cono, mientras que corrientes de lava salen de la chimenea y de fisuras en el cono. Así, el cono del volcán crece con capas de materia fragmentada y con corrientes de lava, todas inclinadas hacia el exterior de la chimenea. Otro tipo de volcanes, bastante comunes también, son los nacidos debajo del agua, en el fondo marino, algunos de los volcanes emergentes en la actualidad, al principio habían sido volcanes submarinos. La corteza terrestre es la culpable de la formación de volcanes, es la capa superficial de la geosfera, está en contacto con la atmósfera, y que limita con el manto mediante la discontinuidad de Mohorovicic. Presenta una estructura muy compleja derivada de los procesos dinámicos a los que se ve sometida. Junto a la zona superficial del manto forma la litosfera. La corteza terrestre tiene una espesor variable: puede medir 5 km bajo los océanos y hasta 70 km en las cordilleras. Se divide en dos grandes unidades: la corteza continental y la corteza oceánica. La corteza continental se encuentra en las zonas emergidas del planeta, pero también bajo los océanos, cerca de las costas. Es la parte granítica de la corteza, está formada por rocas plutónicas, volcánicas, sedimentarias y metamórficas. Es más gruesa y menos densa que la oceánica. En ella se encuentran las rocas más antiguas, constituidas por granitos y gneises, los gneis son rocas metamórficas en la que los minerales se han separado formando capas paralelas, creando una estructura de láminas. La corteza continental es una zona consolidada desde hace más de dos mil millones de años. La corteza oceánica es delgada y está formada por rocas volcánicas básicas, los basaltos, que se forman en las dorsales oceánicas. Éstas también se denominan bordes constructivos, porque su actividad volcánica permite la formación de corteza nueva. La capa superficial de la corteza oceánica es sedimentaria y su espesor medio es de 300 m, pero cerca de las dorsales no aparece porque no se ha podido formar aún sobre los basaltos recién consolidados. CONTENIDO Estados de actividad volcánica Algunos volcanes son mucho más activos que otros. Se puede decir que algunos se encuentran en estado de erupción permanente, al menos en el presente geológico, algunos volcanes han estado activos desde la antigüedad, otros han permanecido activos desde la primera erupción, y otros volcanes de actividad volcánica constante son los que componen una serie de cordilleras, donde suele haber un gran número de volcanes activos. Muchos otros volcanes, permanecen en un estado de actividad moderada durante períodos más o menos largos y después se quedan en reposo, o dormidos, durante meses o años. La erupción que sucede a un periodo de latencia prolongado suele ser violenta. Los volcanes, después de volverse inactivos, experimentan una reducción progresiva de tamaño debido a la 1 erosión por agua fluyente, glaciares, viento u olas. En ocasiones el volcán desaparece dejando solo un conducto volcánico, esto es, una chimenea llena de lava o de materia fragmentada que se extiende desde la superficie terrestre hasta el antiguo depósito de lava. Pero los volcanes no son solo erupciones aisladas, también provocan alteraciones en el terreno y en el ecosistema, ya que la amenaza para todas las formas de vida que representan los volcanes activos no se reduce a la erupción de roca fundida o a la lluvia de cenizas y brasas. Las corrientes de lodo son también un peligro serio. Las zonas volcánicas suelen ser muy ricas en vegetación, debido a la gran cantidad de materia orgánica. Erupción En una erupción violenta de un volcán la lava está muy cargada de vapor y de otros gases, como dióxido de carbono, hidrógeno, monóxido de carbono y dióxido de azufre, que se escapan de la superficie con explosiones violentas y que ascienden formando una nube turbia. Estas nubes descargan, muchas veces, lluvias copiosas. Porciones grandes y pequeñas de lava son expelidas hacia el exterior, y forman una fuente ardiente de gotas y fragmentos clasificados como bombas, brasas, cenizas, según sus tamaños y formas. Estos objetos o partículas se precipitan sobre las laderas externas del cono o sobre el interior del cráter, de donde vuelven a ser expulsadas una y otra vez. También pueden aparecer relámpagos en las nubes, en especial si están muy cargadas de partículas de polvo. El magma asciende por la chimenea y fluye convertido en lava sobre el borde del cráter, o rezuma, como una masa pastosa, a través de una fisura en la ladera del cono. Esto puede señalar lo que ha sido llamado `crisis' o punto crucial de la erupción; después de la expulsión final de materia fragmentada, el volcán puede volver al estado de latencia.La enorme cantidad de energía liberada durante una erupción explosiva se puede evaluar en función de la altura hasta la que se proyectan las rocas y las cenizas. Las nubes de vapor y polvo así producidas pueden tener efectos atmosféricos y climáticos duraderos. Fase de enfriamiento Durante un largo periodo después de que haya cesado la erupción de lava o de materia fragmentada, un volcán continúa emitiendo gases ácidos y vapor en lo que se llama estado fumarólico. Después de esta fase surgen del volcán manantiales calientes. Con el tiempo, los últimos rastros del calor volcánico desaparecen, y entonces pueden aparecer manantiales de agua fría en el volcán o en las zonas cercanas. Corrientes de lava La lava es la roca fundida que sale a la superficie de la Tierra a través de grietas y de fisuras, en particular durante la erupción de un volcán. La lava se refiere tanto a la roca en estado fundido como en estado sólido tras enfriamiento. Las variedades fundamentales de lava ordinaria son la riolita, el basalto y la obsidiana. La riolita es una roca cristalina formada por lava ácida, el basalto es también una roca cristalina pero formada por lava básica y la obsidiana es una roca vidriosa y no cristalina formada por lava ácida enfriada a gran velocidad. En algunas circunstancias, en lugar de salir por la chimenea central, la lava se derrama por fisuras que pueden extenderse a lo largo de varios kilómetros sobre la superficie de la tierra. Las corrientes de este tipo han creado láminas gruesas de basalto que cubren cientos de kilómetros cuadrados. Los volcanes Geología 2 Marc Morales Romera Nº9 4º E.S.O. C ÍNDICE Portada.....................................................................................Pág 1 Índice.......................................................................................Pág 3 Introducción...........................................................................Pág 4 Contenido.................................................................................Pág 7 Conclusión................................................................................Pág 14 Valoración personal...............................................................Pág 14 Bibliografía.............................................................................Pág 15 Contraportada........................................................................Pág 16 BIBLIOGRAFÍA • Microsoft Encarta 99. Microsoft Corporation.1999. • Nueva Enciclopedia del Mundo. Editorial Salvat. • Geología. C.O.U. año 1998. Chris Bart−Williams, Matthew Upson. 3