Propone universitario vivienda modular con materiales reciclables 'Luz de estrellas lejanas', la autobiografía literaria de George R.R. Martin EN RIESGO, MANANTIAL QUE SURTE AGUA A LA CIUDAD DE MORELIA Nuevo museo del chisme Releyendo a los clásicos: 'La casa de Bernarda Alba', de Federico García Lorca Una retrospectiva de Marcos López en el Recoleta 'Fortunately, The Milk', la nueva obra de Neil Gaiman Esa cosa llamada poesía ‘Lo que la universidad no enseña’ de Íñigo García Ureta EL HOMBRE QUE DETIENE LAS CIUDADES 'Pirofobia' de Jack Lance Campos de Marte ¿A dónde van las cosas cuando desaparecen? El código Asimov La ficción y el malestar de la abundancia “El teorema del patito feo” Encuentros entre la ciencia y los cuentos de hadas De chicas frágiles y corazones rotos Derecho... La musa pintora Horizonte de igualdad Sobrevivir en un mundo conflictivo No soy inválido “Nos reinventamos en otras culturas” La condición anónima El espía que vino del cielo Celebración de la memoria El ruido de cristales rotos no deja de aturdir Mozart: un ilustrado La chica baila, miren con respeto El relato incomprobable cuestiona lo que se exhibe como verdad La desigualdad entre Norte y Sur también divide el mapa editorial Una voz inconfundible Recuerdos de la Inquisición y la tortura 3 5 8 11 20 22 26 28 31 33 37 39 44 45 49 50 52 55 59 62 64 67 70 73 75 78 81 83 85 86 88 91 93 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila 98 102 104 106 110 113 115 120 121 123 124 128 130 135 138 141 144 145 147 149 En busca de la lírica perdida Dictador o súperestrella, Stalin "vive" 60 años después de su muerte La decencia como mínimo Llegó la era del Antropoceno "Toda realidad está fundada en mitos" Larga vida a la tinta electrónica Imaginación exuberante El destino de la Universidad creativa Historia de la desigualdad Otras realidades son posibles Los años del desprecio El Museo del Prado propone un mapa del dibujo español Los secretos de traducir al chino, o dominar el arte de perder Más allá de las porras Nuevas familias globales Gabo ya tiene quien le escriba un cómic El sida lucha aun contra el estigma Las claves del éxito y la fama artística, al descubierto Necesidad natural Fragmentos ampliados de realidad Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 2 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Propone universitario vivienda modular con materiales reciclables • Podría ayudar a solucionar el problema de la demanda y el ordenamiento de nuevos asentamientos en la zona conurbada de la Ciudad de México, señaló Pablo Ojeda Flores, del posgrado de Arquitectura de la UNAM • Tendría un costo 70 por ciento más barato que el de una tradicional, y su promedio de vida sería semejante a la de concreto. En cuanto a su comodidad, el PET funciona como aislante térmico y es poco acústico Un sistema de vivienda modular con material reciclable y cubiertas inspiradas en iglús, podrían ayudar a solucionar problemas como la demanda respectiva y el ordenamiento de nuevos asentamientos en la zona conurbada de la Ciudad de México. Pablo Ojeda Flores, del posgrado de Arquitectura de la UNAM, propone una vivienda que, a partir de un módulo básico, pueda ser construida progresivamente por los propios usuarios, conforme a sus necesidades y posibilidades económicas. “Este proyecto trata básicamente de la cubierta vista como un elemento estructural, dentro del cual es posible que la gente realice sus diferentes actividades hogareñas”, explicó. Ojeda Flores parte de la elipse; al formar un ángulo menos agudo con el suelo (línea horizontal) que otras figuras geométricas, ésta permite una mayor utilización del espacio cerca de los bordos y las esquinas. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 3 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila La construcción sería con botellas de PET (politereftalato de etileno) rellenas de tierra, que se montarían con una argamasa tipo barro. Se haría un armado para el repellado, cuyo acabado podría ser en yeso. “Se usaría el sistema MA+PET (mortero armado más botellas de PET), pero con una geometría diferente, a fin de implementar tanto la parte espacial como la estructural”. Con las medidas mínimas que establecen los reglamentos de construcción, podría crecer en un mismo predio, con espacios intermedios y áreas comunes o privadas. Los módulos pueden ser variados, con cubiertas dinámicas, para una o varias familias, o para un asentamiento urbano completo, con diferentes configuraciones o juegos volumétricos. Los bloques (incluidos los que integran la techumbre o cubierta, así como los entrepisos y la losa para desplantar a nivel del piso) se fabrican con malla electrosoldada, en la que se pone una cara de cartón y el PET, que les da forma y, finalmente, otra capa de cartón. A continuación, se agrega metal desplegado, que puede ser tela de gallinero, para recibir el mortero, que les da la fuerza estructural. “Cada uno es de un metro cúbico y no pesa más de nueve kilos, por lo que dos personas pueden manejarlo fácilmente”, indicó Ojeda Flores. Tendría un costo 70 por ciento más barato que la de una tradicional, por lo demás, su promedio de vida sería semejante al del concreto: 50 años, aproximadamente. En cuanto a su comodidad, el PET funciona como aislante térmico y es poco acústico. “Esta propuesta es viable y económica para quienes intentan tener una casa donde vivir, y beneficiosa para el medio ambiente, pues además de utilizar material reciclable, podría contribuir a alcanzar un crecimiento ordenado y seguro de los asentamientos en la periferia de la Ciudad de México”, concluyó. http://www.dgcs.unam.mx/boletin/bdboletin/2013_153.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 4 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila 'Luz de estrellas lejanas', la autobiografía literaria de George R.R. Martin 03 de marzo de 2013 | 10:36 CET Josep Oliver @cisnenenegro Tengo lectores que nunca habían oído hablar de mí hasta que cogieron ‘Juego de tronos‘ y están convencidos de que nunca he escrito nada que no sea fantasía épica. Y por otro lado está la gente que ha leído todos mis trabajos antiguos y siguen pensando erróneamente que soy un escritor de ciencia-ficción que “se pasó a la fantasía” por motivos infames.” (G.R.R. Martin, ‘Luz de estrellas lejanas’, pg. 351) Una de las cosas que más me gustaban como aspirante a escritor, cuando era adolescente, era leer biografías de escritores. No es que pensara descubrir la fórmula mágica para convertirme en aquello que no osaba confesar a nadie, pero sí encontraba especial placer en comprobar cómo habían llegado a ser lo que eran. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 5 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Y uno de los escritores que más me marcó en la juventud, precisamente por los apuntes autobiográficos que introducía como prólogo a algunos de sus cuentos, fue Isaac Asimov. Uno de los puntales de la ciencia ficción, me conquistó con sus batallitas introductorias en no recuerdo qué antología de cuentos suyos, hablando de cómo se había iniciado en la escritura, y de cómo había luchado por vender cada cuento que escribía a las revistas de SF de la época. En ‘Luz de estrellas lejanas‘, George R.R. Martin (autor de ‘Canción de hielo y fuego’/‘Juego de tronos’), uno de los autores que me tiene fascinado en los últimos años, hace algo parecido. ‘Luz de estrellas lejanas‘ es, como indica el subtítulo de la obra, la primera parte de una “autobiografía literaria“ dividida en tres entregas, pero para que no dé lugar a engaño, hay que aclarar que no se trata simplemente de una autobiografía, sino de una retrospectiva de sus cuentos, compilados, ordenados e introduccidos por una sección en la que el autor habla sobre su vida y las circunstancias que le llevaron a escribirlos. En fin, que se trata de una recopilación de cuentos y a la vez un extenso comentario del autor sobre ellos. George R.R. Martin, como explica él mismo en la cita de arriba, no es sólo el autor de una de las sagas fantásticas más relevantes del panorama actual. Su carrera empezó en los años 70 y ha sido una larga trayectoria de éxitos dentro del mundo de la la literatura de género, especialmente de la ciencia-ficción, pero también en la fantasía e incluso en el terror. El volumen está dividido en cuatro partes. En la primera, ‘Un aficionado a todo color‘, Martin nos explica sus inicios como escritor amateur y sus primeras colaboraciones con fanzines de literatura de género. Los cuentos incluidos aquí son tres (‘Sólo los niños temen a la oscuridad’, ‘La fortaleza’ y ‘La muerte, su legado’) y quizá son los más flojos del volumen, por cuanto aún son obra de un escritor muy joven, que va tanteando Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 6 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila el terreno, recurriendo a la literatura pulp, pero son todos ellos pasos necesarios para descubrir al escritor que tiene dentro. En la segunda parte, ‘El asqueroso profesional‘, encontramos ya un salto cualitativo en los relatos de Martin, como en el de ‘El héroe‘, una crítica a la guerra de Vietnam en clave de ciencia-ficción, o ‘La salida de San Breta‘, una incursión en el género de terror donde las apariciones fantasmales no tienen lugar en castillos góticos, sino en una autopista. En la tercera parte, ‘Luz de estrellas lejanas‘ se incluye la que tal vez es la mejor historia de la antología, ‘Una canción para Lya‘, una novela corta con trasfondo religioso y espiritual sobre el significado del ser y de la felicidad. Sólo por este relato ya valdría la pena todo el volumen, pero hay más. También destacan en esta sección ‘La ciudad de piedra’, un relato con toques de Lovecraft y Kafka donde vemos cómo las distancias abismales del espacio pueden llevar al hombre a la locura, o ‘Hieles de tierra’, un relato de ensueños con Morgana LeFay como coprotagonista. Martin establece un universo propio para sus relatos de ciencia-ficción: en los presentados dentro de esta compilación se comparten las referencias a planetas, mundos y razas espaciales. Además, Martin no es partidario de malgastar buenas ideas, y nos encontramos con fragmentos, retazos o personajes de los que volveremos a sentir ecos en obras futuras. Por ejemplo, un escudo de armas que recuerda a los usados en ‘Canción de heilo y fuego’ o su especial querencia por los dragones o el invierno, un invierno friísimo, duro, “profundo” y siempre presente, recuerdo de los que el autor pasó en Dubuque. Finalmente, en la última sección, destacan cuentos como ‘En las tierras perdidas o ‘El dragón de hielo‘, demostrando que Martin ha sido también cultivador del género fantástico desde el principio de su carrera, y no un arribista. ‘Luz de estrellas lejanas‘, en fin, es la primera parte de esta gran retrospectiva de los trabajos de Martin, que da una buena idea de cuál ha sido su evolución, y cuyos comentarios autobiográficos enriquecen sobremanera la obra, y que muchos lectores (me cuento entre ellos) agradecerán, porque establece un diálogo muy franco con el autor. Un libro muy recomendado si os gusta este escritor. Luz de estrellas lejanas. Autobiografía literaria (I) George R.R. Martin Traducción de Cristina Macía y Raquel Marqués Ed. en rústica. 425 páginas. Editorial Gigamesh. 19 €. En Papel en Blanco | Un nuevo relato de George R.R. Martin contará los orígenes de la saga Targaryen http://www.papelenblanco.com/biografia/luz-de-estrellas-lejanas-la-autobiografia-literaria-de-george-r-rmartin Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 7 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila EN RIESGO, MANANTIAL QUE SURTE AGUA A LA CIUDAD DE MORELIA • Ello, debido a las malas prácticas de manejo, alertó Roberto Lindig Cisneros, del CIEco de la UNAM, con sede en esa ciudad • No sólo está en peligro la calidad, sino la riqueza de especies de flora y fauna • Con base en las investigaciones, los universitarios pueden hacer recomendaciones para un uso adecuado del área • Los resultados de esta investigación han sido publicados en revistas internacionales como Aquatic Botany El manantial de la Mintzita y los humedales asociados a él, fuente que aporta cerca del 40 por ciento del agua que utilizan los habitantes de la ciudad de Morelia, podrían estar en riesgo por malas prácticas de manejo. Pero no sólo está en peligro su calidad, sino la riqueza de especies de flora y fauna, alertó Roberto Lindig Cisneros. El integrante del Centro de Investigaciones en Ecosistemas (CIEco) de la UNAM, con sede en esa ciudad, explicó que ahí existen alrededor de 60 especies de plantas, “muy alto para ese tipo de ecosistemas”, y es el hábitat de al menos seis endémicas de peces. “Antes había más, pero con el paso de los años el manantial y sus humedales han sufrido degradación”. Esa situación es, en parte, consecuencia del crecimiento de la mancha urbana, y del uso agrícola y pecuario que se le da a la cuenca donde está el manantial. La Mintzita se ubica al sur de Morelia, como a seis kilómetros de la zona urbana, en lo que se conoce como el área periurbana porque es intermedia a las dos. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 8 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El manantial no es muy grande; con el sistema de humedales, cubre un área de 57 hectáreas, y eso lo hace aún más vulnerable, pues aunque se dañe una pequeña parte, se afecta una proporción grande del ecosistema. A pesar de su tamaño, su aporte es considerable, de 1.4 metros cúbicos por segundo. Morelia tiene alrededor de un millón de habitantes, es decir, 400 mil podrían depender directamente de esta fuente del recurso. Malas prácticas Con ocho años de labor en el sitio, Lindig explicó que se empiezan a ver los efectos de malas prácticas de manejo. Por ejemplo, en época seca, las quemas de los humedales, para favorecer el crecimiento de pastos para el ganado, o el lavado de ropa en el manantial. En torno al sitio se ubican dos ejidos, una colonia urbana y pequeños propietarios. Es un área socialmente compleja, donde viven no más de tres mil personas en la vecindad inmediata, explicó. El estado de conservación es razonable, “por lo que estamos en un momento en el que se deberían comenzar a tomar medidas drásticas, ahí tratamos de tener cierta influencia en quienes toman las decisiones y las personas que echan mano del recurso de forma directa”. Como parte de sus resultados de investigación básica, publicados en revistas internacionales como Aquatic Botany, el científico y su equipo han encontrado que hay especies que responden mejor que otras a los nutrientes, lo que propicia que se vuelvan invasoras, aunque sean nativas. Eso pasa, por ejemplo, con los tules, plantas del género Typha. También han visto que un carrizo, Phragmites australis, es beneficiado por los incendios. Al respecto, señaló que debido al conocimiento obtenido, es posible hacer recomendaciones para un manejo adecuado del área. “Sabemos que los incendios de baja intensidad y poco frecuentes favorecen la biodiversidad. Al estudiar otros sistemas similares en Pátzcuaro, y el manejo tradicional que hace la gente, se ha visto que los que ocurren cada tres o cuatro años, no necesariamente en las secas, época en que se pueden volver muy severos, permiten la quema de hojas secas, sobre todo de los tules, y el crecimiento de otras especies”. En contraste, los incendios que se repiten año con año, que queman el suelo, son dañinos para algunas nativas y benefician a otras, como el carrizo. Para un uso sustentable, el universitario sugiere que la gente no lave la ropa en el manantial, tratar de reducir los efluentes de aguas agrícolas y otros desechos, el control de incendios y de ganado. De forma adicional, trabaja con la comunidad para generar conciencia sobre la importancia de los manantiales, y hacer un manejo adecuado de ellos y de los humedales que tienen asociados. Filtros naturales Las plantas de humedal son como filtros que limpian el líquido. Absorben nitrógeno y fósforo, fertilizantes que se emplean en los campos. “Nos prestan muchos servicios, y sustituirlos con tecnología es caro; existen las plantas potabilizadoras, pero el proceso es más complejo”. A los ejidatarios y vecinos del sitio se les han impartido talleres; de igual forma, en escuelas primarias se han dado pláticas a niños para tratar la importancia de los manantiales y humedales, y se pone como ejemplo al de la Mintzita. Asimismo, con el apoyo de la fundación inglesa Rufford, se hicieron carteles que se repartieron en toda la ciudad. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 9 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El gobierno estatal ha comenzado a tomar medidas, lo mismo que la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, reconoció; “tal vez las acciones no son tan rápidas como nos gustaría, porque vemos la degradación, pero hay que entender que las autoridades deben lidiar con una realidad más compleja que la meramente ecológica y negociar con distintos actores sociales”. Lo que se haga deberá dar resultados, porque de continuar la tendencia actual “veríamos la extinción de especies, que en el caso de las endémicas significaría su fin, la pérdida de la calidad del agua para consumo humano y la destrucción del ecosistema como tal”, concluyó Roberto Lindig. http://www.dgcs.unam.mx/boletin/bdboletin/2013_152.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 10 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Entre la invención y el documento Nuevo museo del chisme En una versión enriquecida y renovada de la obra que publicó hace algunos años, Edgardo Cozarinsky revela anécdotas humorísticas o dramáticas protagonizadas por personalidades del arte, la política y el espectáculo Texto Edgardo Cozarinsky Ilustraciones Max Aguirre Marthe Lahovary, la legendaria princesa Bibesco que aspiró a la amistad de Proust y fue asidua memorialista, estaba invitada a pasar la Nochebuena de 1937 en casa de su amiga Enid Bagnold, en Rottingdean, Sussex. Al reconocer en un anciano tembloroso y vacilante que se acerca a saludarla al venerable novelista Maurice Baring, le dirige la convencional pregunta: "How are you, my dear friend?". No esperaba recibir una respuesta sincera, informativa, precisa: "Soy un juguete roto. Por más que me den cuerda no pueden hacerme funcionar. Ya no puedo leer, ya no puedo caminar, ya no puedo dormir, ya no puedo escribir. Por lo demás, mi salud general es perfecta.". Fuente: Ghislain de Diesbach, Marthe Bibesco, París, 1987. *** Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 11 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El 27 de septiembre de 1942 se celebró en Roma un almuerzo para festejar el tercer aniversario del Pacto Tripartito entre Alemania, Italia y Japón. El jefe del estado mayor italiano, mariscal Ugo Cavallero, procuró poner de buen humor al embajador japonés anunciándole "buenas noticias" de Stalingrado. En realidad la ciudad había resistido sin ceder al largo asedio de la Wehrmacht, que en ese momento se retiraba marcando el principio del lento repliegue del Tercer Reich hacia la derrota final. Entre el inglés hablado por el italiano y el hablado por el japonés surgió algún equívoco que permitió al japonés acercarse al agregado militar alemán y felicitarlo por "la caída" de Stalingrado. El alemán replicó sucintamente, en italiano: "Non dire palle" ("No diga pelotudeces"). Fuente: Galeazzo Ciano, Diario, Milán, 1946. *** "El papa Inocencio X Pamphili (que ocupó el trono entre 1644 y 1655) fue menos importante por sus hechos que por su nepotismo y por las intrigas que sus parientes desplegaron entre sí y unos contra otros. Su cuñada, la notoria Olimpia Maidalchini, tenía dominado al débil y bondadoso anciano. A la hora de la muerte, este papa que tanto se había desvelado por encumbrar a su insaciable familia, había de recoger el merecido tributo de gratitud por sus desvelos. Después de los tres días durante los cuales su cadáver estuvo expuesto en la basílica de San Pedro, no apareció nadie que se ocupase de darle sepultura. Se llamó a doña Olimpia para que se encargase de suministrar un ataúd, pero contestó que no podía hacerlo, que no era más que una pobre viuda. De los demás parientes y nepotes no se presentó nadie y el cadáver fue a parar a un lugar destinado a depósito de materiales por los albañiles. Uno de estos, movido por la caridad, colocó una vela en la cabecera del catafalco, otro pagó de su bolsillo a un guardián para que velara el cadáver y evitase que se lo comieran las ratas que rondaban por allí". Fuente: Ferdinand Gregorovius, Die Grabdenkmäler der Päpste, 1881. *** Lord Berners (né Gerald Tyrwhitt-Wilson, decimocuarto Baron Berners of Faringdon) no limitó su excentricidad a haber escrito una novela impar -El camello- o a componer música de cine para Nicholas Nickleby, una adaptación de Dickens producida en 1946 por los estudios Ealing y dirigida por Cavalcanti. Para poder viajar solo en el compartimento de primera clase del tren, apenas lo ocupaba solía cubrirse la cabeza con una máscara elástica que reproducía un cráneo humano marfileño, desprovisto de toda carne. Si algún pasajero se animaba a entrar, lo miraba fijamente hasta disuadirlo de su intrepidez. Sin quitársela, retomaba la lectura del libro que lo acompañaría durante todo el viaje. Fuente: oral, Feliks Topolski a E. C., Londres, 1971. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 12 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El 14 de julio de 1925, Jacques Benoist-Méchin, con veinticuatro años de edad, llegó al Vittoriale en visita ritual a Gabriele D'Annunzio. *** No son pocos los cinéfilos que recuerdan a Tilda Thamar (1921- 1989), ilustradora, luego modelo, más tarde actriz que cruzó como un meteoro sensual el pacato cine argentino de los años 40. Incontaminada por candorosas evocaciones patrióticas, Tilda fue una rubia emprendedora, cuya sonrisa declaraba que el sexo existe. Emigrada a Francia en la segunda posguerra mundial, después de que Eva Perón juró que nunca más la dejaría actuar en el país, "la bombe atomique argentine" tuvo una carrera europea de films apenas mediocres. La compensó el éxito mundano: casada con un retratista de los fugaces ídolos de la café society, el pintor español Alejo Vidal-Quadras, la actriz se reencontró con su primera vocación. En sus últimos años, en un triplex parisino de la avenue Hoche, pasaba largas tardes en el piso superior pintando selvas ingenuas y fieras lánguidas, muy apreciadas en los munificentes emiratos del golfo pérsico. En una ocasión recibió la visita de un argentino que la recordaba como protagonista de tantos films prohibidos para menores, de los que en su infancia sólo había podido ver los afiches. Sin desprenderse de sus pinceles, Tilda pidió a un mucamo asiático que subiera un refrigerio al atelier de la azotea. Poco después llegó una bandeja de sabrosísimos trozos de pan baguette frotados con ajo. La diva, tal vez crepuscular pero sumamente chispeante, explicó que se trataba del "banquete del rey Zog", exótica referencia albanesa cuyo misterio espesó al intentar explicarla: primero con un "en la Argentina estuve casada con Ilia, el conde Toptani", luego agregó: "el inventor de la famosa montura Toptani". Fuente: E. C., 1985. *** Rustico da Torcello y Bon da Malamocco son los nombres de los mercaderes venecianos que en el siglo IX idearon la manera de enviar a Venecia los restos de San Marcos. Estaban escondidos en Alejandría, donde el evangelista había fundado, ocho siglos antes, la primera iglesia cristiana. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 13 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila No era fácil. Alejandría se hallaba bajo severa dominación musulmana: el califa Umar (634-644) había autorizado la quema de los libros de la biblioteca clásica de la ciudad porque "si los escritos de los griegos coinciden con el Corán, son superfluos, y si lo contradicen, son nocivos". Con astucia (que los siglos reconocerían como típicamente veneciana), los comerciantes decidieron jugar con la repulsión islámica ante la carne de cerdo, y escondieron los restos del santo en un cargamento de carne porcina destinado a tierra de infieles. Los aduaneros rehusaron mirar, menos aún tocar el contenido de los barriles. Una mañana de 828, desembarcaron en Venecia, donde los esperaba una multitud festiva, triunfal. Al tocar el muelle, de los barriles se desprendió no ya el olor a podredumbre que emitían hasta ese momento sino un perfume a rosas que invadió la plaza. En ella iba a construirse la basílica que hasta hoy lleva el nombre del evangelista. Fuente: tradición oral veneciana. *** El poeta, decadente y mitómano, heraldo de una revolución antiburguesa que ya estaba siendo encarnada por Mussolini, aparecía ante los ojos del juvenil visitante -admirador de Proust y amigo de Adrienne Monnier y de Sylvia Beach- como el héroe de la aventura de Fiume, donde con una fuerza de exaltados patriotas había "reconquistado" para Italia ese puerto de la costa dálmata que los enjuagues diplomáticos de la primera posguerra mundial le habían arrebatado. D'Annunzio condujo al visitante por los distintos jardines, templos y recámaras de la mansión que se había hecho construir, como un faraón en vida, como monumento y mausoleo a su propia gloria inmortal. Antes de despedirse le regaló una daga que presentó como originaria de Fiume, y ante ella le hizo jurar que iba a consagrar su vida "a luchar contra la barbarie norteamericana". En el camino de vuelta, navegando sobre el lago de Garda, el joven admirador desenvainó la daga para admirar la hoja y el filo. Con cierta sorpresa leyó, grabado en el acero: Made in Michigan, USA. (Años más tarde, Benoist-Méchin se convertiría en un entusiasta de Hitler, de quien escribiría: "es un visionario que decidió realizar su sueño con el realismo de un estadista". Figura importante de la colaboración en Francia durante la Segunda Guerra Mundial, fue condenado a muerte en 1947, pena conmutada por trabajos forzados, objeto luego de una amnistía en 1953. Prolífico cronista e historiador, publicó numerosos libros donde trazó la silueta del conductor que en distintos momentos de la historia crea un imperio para lograr la paz y la unidad de los pueblos. El título de la serie fue El sueño más largo de la historia; las figuras evocadas: Cleopatra, Bonaparte en Egipto, el mariscal Lyautey, el emperador Juliano, Alejandro Magno, Federico von Hohenstaufen, Mustafá Kemal, Ibn Seound y el rey Faisal de Arabia Saudita. La prudencia le aconsejó no incluir a Adolf Hitler). Fuente: Jacques Benoist-Méchin, À l'épreuve du temps, tomo I, París, 1989. *** Dorothy Parker no había cumplido con la fecha de entrega de una crónica para The New Yorker. Ross envía un mensajero a Long Island, donde la legendaria "Algonquin wit" está pasando el verano. El chico llama varias veces desde la verja del jardín sin obtener respuesta. Finalmente, se abre una ventana del primer piso y aparece, desgreñada y apenas cubierta por una sábana, la escritora. El mensajero se disculpa por la intrusión e invoca la impaciencia del redactor en jefe ante el atraso. La Parker grita, intraduciblemente: "Tell Mr. Ross I'm too fucking busy. and viceversa!". Fuente: oral, Richard Roud, Nueva York, 1982. Jorge Guinle (1916-2004), vástago de la poderosa familia brasileña que financió la construcción del puerto de Santos y durante nueve décadas guardó su concesión, murió en dorada estrechez. Una vez recuperado el puerto por el estado de São Paulo en 1972, quedó como principal orgullo de la familia el hotel Copacabana Palace que habían edificado en Río de Janeiro, donde fueron anfitriones de Franklin D. Roosevelt y de Nelson Rockefeller. Legendario heredero de ese esplendor, el diminuto Jorginho (un metro sesenta) fue un seductor cuya atención se focalizó en las estrellas de Hollywood: entre otras, aceptaron su asedio Hedy Lamarr, Veronica Lake, Rita Hayworth, Lana Turner, Ava Gardner y la incipiente Marilyn Monroe a los veinte años de edad. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 14 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila En 1962 Jorginho llegó al aeropuerto de Los Ángeles con un conjunto de collar y aros de esmeraldas para la ya entonces consagrada Monroe. Al desembarcar se enteró del aparente suicidio de la estrella. Desconsolado, se refugió en su cuarto de hotel y pasó una noche de duelo y alcohol. A la mañana siguiente consultó su libreta de direcciones y llamó a Jayne Mansfield. Tras haber dilapidado la fortuna heredada, Jorginho vivió sus últimos años en un cuarto que el Copacabana Palace puso sin cargo a su disposición, así como los servicios de bar y restaurant. Imposibilitado de dar un paso fuera del hotel si no mediaba una invitación, declaró al periodista inglés que lo entrevistaba: "El secreto de ser rico es morir sin un centavo. Yo calculé mal: el dinero se agotó antes que la vida" ("The secret of being rich is to die penniless. I miscalculated -money run out before life"). Fuente: oral, Antonio Rodrigues, Lisboa, 2009. *** Hacia 1900, poco después del éxito de escándalo de Les Chansons de Bilitis de Pierre Louÿs, un grupo de señoras que visitaban en el museo del Louvre una sala llamada "de orígenes comparados" manifestaron su curiosidad por conocer el aspecto del personaje. Uno de los conservadores las conduce ante un busto de Bilitis, acuarela de Paul Albert Laurens. Una señora desconfía del parecido. Cuando el experto le explica que el personaje clásico probablemente no haya existido, estalla la ira de la visitante: "¿Cómo que no existió? ¡Pero entonces están engañando al público! ¡Esto no va a quedar aquí! ¡Conozco a un ministro! etc., etc.". Fuente: Pierre Louÿs, carta a Paul Albert Laurens del 12 de julio, 1901. *** En la madrugada del 17 de octubre de 1911, Rudolf Wilhelm Friedrich Ditzen, de dieciocho años de edad, y su amigo Hanns Dietrich von Necker se batieron a duelo con armas de fuego en los alrededores de Rudolstadt, Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 15 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila ciudad de Turingia donde hacían sus estudios. El pretexto era defender el honor de una dama. En realidad se trataba de un pacto de doble suicidio para escapar, sin dejar una huella de deshonor para las familias, al sentimiento amoroso que no se sentían capaces de asumir. Von Necker falló el tiro y solamente hirió a Ditzen, pero le quitó el arma y se mató de un tiro en el pecho. Ditzen sobrevivió y fue acusado del asesinato de su amigo. El tribunal estimó que no estaba en condiciones de ser juzgado. Le impuso la internación en un asilo psiquiátrico, donde permaneció de febrero de 1912 a septiembre de 1913. (Al ser liberado inició simultáneamente su actividad de escritor y el consumo de alcohol y drogas. La familia le pidió que publicara bajo un seudónimo y él eligió el nombre del caballo parlante en un cuento de los Grimm. Como Hans Fallada, iba a publicar más de veinticinco volúmenes. Tres de ellos se destacan: Kleiner Mann, was nun? [¿Y ahora qué, pobre hombre?, 1932], best-seller en la traducción al inglés, llevado al cine en Hollywood, y dos publicados póstumamente: Jeder stirbt für sich allein [Todos los hombres mueren solos o Solo en Berlín, 1947] y Der Trinker [El bebedor, 1950]. Fallada no quiso abandonar Alemania durante el Tercer Reich. Acosado por la Gestapo y los dirigentes culturales, se comprometió con el régimen el mínimo necesario para sobrevivir. Su primera esposa lo acusó de intentar matarla y lo volvió a internar en un asilo psiquiátrico; la segunda lo acompañó en el alcohol y la morfina. En la posguerra, Fallada fue protegido por la ocupación soviética, con la que colaboró hasta su muerte en 1947; no llegó a ver, al año siguiente, la instalación de una república comunista en el este del país). Fuente: varias, divergentes biografías de Fallada. *** En el siglo XVIII, en París, los aficionados al teatro que podían permitírselo alquilaban no ya palcos avantscène sino asientos en el escenario mismo de la Comédie Française. En el estreno de la Sémiramis de Voltaire, en 1748, esos privilegiados eran tan numerosos que el actor que representaba al fantasma del general Ninus tropezó con una silla y estuvo a punto de caer en momentos en que debía hacer una entrada solemne. Imperiosa, la voz del autor retumbó en la sala por encima de las risas: "¡Dejen pasar al fantasma!". Fuente: oral, Alberto Manguel, Mondion, 2009. *** Dmitri Nabokov (1934-2012), hijo de Vladimir, tenía veintiséis años y un robusto sentido del humor cuando estudiaba canto en La Scala de Milán. Eran los meses posteriores al éxito imprevisto de Lolita, la novela del padre cuya notoriedad asoció prestigio y escándalo. Se hablaba ya de una adaptación al cine y a Dmitri se le ocurrió organizar en Milán un concurso de ninfetas para el rol principal. Del evento (cuyo carácter de broma no se ocultó en ningún momento) la prensa people de la época registró fotos del joven Nabokov rodeado en su lecho por un enjambre de adolescentes ansiosas por acceder al estrellato. Esas fotos suscitaron un severo telegrama paterno, que lo intimaba a cesar esas "payasadas pueriles". (En años posteriores, Dmitri se dedicó principalmente a traducir al inglés los primeros libros que su padre había escrito en ruso. En 1960, había hecho su debut en La Scala, junto a Luciano Pavarotti, y desarrolló una carrera profesional, en el registro de basso profundo, hasta retirarse en 1982. En 1962, había iniciado otra actividad: corredor profesional de autos, que solo cultivó durante tres años. Conservó, sin embargo, cinco Ferraris y fue al volante de una de ellas que en 1982, en Suiza, salió vivo de un choque, con quemaduras graves y el cuello roto. A partir de ese momento, se concentró exclusivamente en cuidar la obra literaria del padre, ediciones de su correspondencia, traducciones, adaptaciones. Publicó una memoria muy elogiada sobre su relación con él: On Revisiting Father's Room. Más recientemente, fue muy criticado por autorizar, a instancias del agente Andrew Wylie, la publicación de The Original of Laura, reproducción facsimilar de las ciento treinta y ocho fichas donde el padre había tomado notas para una novela que no llegó a escribir). Fuente: Brian Boyd, Vladimir Nabokov: The American Years, Londres, 1992; diversos obituarios de Dmitri Nabokov. *** En algún momento de los años 50, antes de que las vicisitudes de la vida literaria los distanciasen, Philip Roth y Gore Vidal eran amigos. Roth aspiraba a ser aceptado en un club de Nueva York muy exclusivo, que en aquellos años finales de la discriminación solo aceptaba un número muy limitado de socios judíos. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 16 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila La tarea que encomendó a Vidal fue la de sondear al presidente del club para saber si valía la pena que presentase su solicitud. Vidal cumplió con lo pedido e hizo el elogio del "talentoso joven escritor amigo suyo". El presidente respondió con una pregunta: "Vamos, Gore. Este Roth ¿no es judío?". Vidal no vaciló: "Desde luego, pero es uno de esos que se detestan por ser judíos (a self-hating jew)". Fuente: David Rieff, Buenos Aires, julio de 2012. El escritor albanés Ismaíl Kadaré, invitado a un festival literario en Edimburgo, le confía a un colega con quien comparte la mesa del desayuno y el idioma francés: "No hubiese creído que había tantas prostitutas en esta ciudad". "Yo no me he dado cuenta. ¿Dónde las vio?". "En pleno centro, las veredas están llenas de mujeres que fuman, inmóviles al lado de una puerta.". La prohibición de fumar en un espacio cerrado era algo inconcebible para alguien oriundo de los Balcanes. Fuente: E. C., 2005. *** El 2 de mayo de 1945, el primer ministro de Irlanda (taoiseach) Éamon de Valera visitó la embajada de Alemania en Dublín para presentar sus condolencias por la muerte de Adolf Hitler. Ya sea visto como una admirable demostración de falta de oportunismo en momentos de la derrota definitiva del Tercer Reich, o como una provocación ante los vencedores de la Segunda Guerra Mundial, aun como simple reafirmación de la neutralidad que había elegido para su país en 1939 a pesar de ser parte del Commonwealth, el gesto público del estadista, otrora guerrillero en la rebelión irlandesa de Pascua de 1916 (condenado a muerte en Londres e indultado más tarde), fue materia analizada y discutida por políticos e historiadores durante décadas. Más allá de la voluntad de irritar a Winston Churchill con una extrema demostración de independencia, el Estado libre de Irlanda había mantenido con dificultad su posición neutral durante los años de la guerra. Pagó su opción política con años de medidas aislacionistas impuestas por los Estados Unidos y por Gran Bretaña. La República de Irlanda solo fue admitida en las Naciones Unidas en 1955. "Nido de espías" nazis para la prensa británica, supo negar permiso para la instalación en su territorio de una base de operaciones de inteligencia del Tercer Reich. En la inmediata posguerra, De Valera rehusó recibir como refugiados a criminales de guerra nazis y los orientó hacia la Argentina. (De Valera se retiró en 1959 pero la influencia de la Iglesia católica persistió en todos los aspectos de la vida pública de la República y solo a fines de los años 70 empezó a desmoronarse, a ceder hasta finalmente desaparecer la censura de correspondencia privada, de libros y espectáculos. Más tarde, gradualmente, iban a revelarse los escándalos internos de la Iglesia). Fuente: varios historiadores irlandeses y comentarios del escritor Colm Tóibín. *** Isaac Babel fue arrestado en mayo de 1939. Semanas más tarde, un funcionario de la Lubianka visitó su casa y ordenó a Antonina Nikolaevna Pirozhkhova, la segunda mujer de Babel, que llenase una pequeña maleta con las pertenencias indispensables del escritor. Se le prohibió terminantemente enviarle un mensaje escrito. Desesperada, Antonina Nikolaevna empapó pañuelos, soquetes y ropa interior con su propio perfume, el que su marido prefería, el que reconocería al recibir el envío. Fuente: A. N. Pirozhkova, At His Side, Vermont, 1996. *** Sacha Guitry está acompañado en su lecho de muerte por su quinta esposa, Lana Marconi, una emprendedora y munificente rumana a la que intentó convertir en actriz. Ella le seca la transpiración de la frente afiebrada, le acaricia el pelo. Hombre de teatro hasta el fin, Sacha toma en sus manos las de su esposa y murmura: "Estas manitas, estas manitas. estas manitas que van a hurgar en mis cajones.". Fuente: desconocida, transmitido por Alberto Tabbia, c. 1990. *** Giorgio de Chirico y Carlo Carrà fueron exceptuados del servicio durante la Primera Guerra Mundial con un diagnóstico de "inestabilidad psicológica". Según el cineasta Sandro Franchina -nieto de otro pintor futurista, Gino Severini-, ambos artistas sostenían que lo habían obtenido mostrando sus cuadros a las autoridades militares. Fuente: oral, Sandro Franchina a E. C., París, 1996. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 17 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Años antes de que sus convicciones lo llevaran a militar en las Brigadas Rojas y a morir cuando intentaba colocar una carga de nitroglicerina al pie de un cable de alta tensión en las afueras de Milán, el editor italiano Giangiacomo Feltrinelli conoció su primer éxito con El doctor Zhivago de Pasternak, cuyo original logró hacer salir de la Unión Soviética y promovió con fino sentido literario y político hasta obtenerle el premio Nobel. En Italia ese triunfo quedó adherido a su nombre. Su compañera Inge Schönthal, Feltrinelli en la vida mundana, logró convencer a la madre del editor para que reabriese la mansión familiar del lago de Garda, clausurada desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Mussolini se había instalado en ella durante la efímera "república social" de Saló y la venerable matrona percibía en sus cuartos una indeleble persistencia de tiempos aciagos. El primer día en que la familia reunida tomaba el té a orillas del lago, no pudieron evitar oír el altoparlante del guía turístico de un barco de excursión: "A la derecha, la residencia de Mussolini, hoy ocupada por el doctor Zhivago". Fuente: Gregor von Rezzori, Mir auf der Spur, Múnich, 1997. *** La fama del director de orquesta Eduardo Bianco fue siempre una incógnita para el argentino aficionado al tango. Compositor, chansonnier, editor musical, fue el "embajador del tango argentino en París", animó el dancing de La Coupole hacia 1924 con la orquesta Bianco-Bachicha, dirigida junto a Juan Bachicha Deambroggio y muy pronto formó su propio conjunto. En la Argentina había dedicado sus primeros tangos a amigos como Macoco Álzaga Unzué y Alejandro Menéndez Behety. En Europa tuvo admiradores menos distinguidos pero más poderosos: a principios de la Segunda Guerra Mundial, tocó en el teatro Scala de Berlín ante Goebbels, Hess y, según algunas fuentes, el mismo Führer. Bianco siempre negó que "Plegaria", su tango dedicado a Alfonso XIII, hubiese sido la música que los jefes de los campos de concentración hacían tocar a las orquestas de prisioneros rumbo a las cámaras de gas. Según tradición oral, entre estos el tango era conocido como "Tango de la muerte". En todo caso, ese fue el título, luego cambiado por "Fuga de la muerte" (Todesfüge), del primer poema que Paul Antschel firmó como Paul Celan. Su vuelta a la Argentina una vez terminada la guerra le provocó una gran decepción. Sus versiones bailables para el gusto europeo no pudieron competir con Troilo, Di Sarli y Pugliese. Su vida de músico se apagó con giras por Oriente Medio, apreciado por públicos menos exigentes, el rey Faruk de Egipto entre ellos. De su fama en tierras lejanas hay muchos testimonios. Sadik Nehama Gershon, "maestro Sadik", legendario intérprete sefardí popular en Alejandría, Estambul y Salónica, era llamado "gramófono" porque le bastaba escuchar una pieza una sola vez para repetirla: "en turko, en grego, en ewspanyol i franko / mezmo los tangos de Edwardo Byanko". Fuentes: Enrique Cadícamo, La historia del tango en París, Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 18 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Buenos Aires, 1975; Mark Mazower, Salonica. City of Ghosts, Londres, 2004. *** En Belgrado, en los años 60, solía contarse esta anécdota. Un rey, tuerto y jorobado, encargó su retrato. El primer pintor convocado lo representó con los dos ojos bien abiertos y muy erguido. "Ese no soy yo", dictaminó el monarca e hizo ahorcar al cortesano. El segundo pintor lo retrató tuerto y jorobado. "Ese es un monstruo", exclamó el monarca. El artista sufrió la misma suerte que el anterior. Un tercer pintor sugirió una puesta en escena: "Majestad, me gustaría retratarlo en una de sus cacerías. Apoye un pie sobre esta piedra e incline el torso hacia adelante para sostener el fusil mientras hace puntería cerrando un ojo.". El rey quedó plenamente satisfecho con la obra. El comentario era: "Ese día nació el realismo socialista". Fuente: Dusan Makavejev, París, 1975. *** Harto de escuchar a Olga Khokhlova pidiéndole que opinara si debía cortarse el pelo o no, Picasso tomó unas tijeras y se lo cortó. Esa noche la invitó a la Opéra Comique a escuchar Pagliacci. De vuelta a casa, la desvistió con mucha ternura e hicieron el amor. A la mañana siguiente, un sirviente anunció una visita que deseaba hablar con la señora. Olga alegó que no estaba vestida y le pidió a su marido que la atendiese. "De ninguna manera -replicó él-; preguntó por ti". Diez minutos más tarde, Olga reaparece, muy pálida, con un papel en la mano que el visitante le había entregado: una citación judicial por el procedimiento de divorcio iniciado por Pablo. Encuentra al pintor ante su caballete, absorto en su trabajo, cantando a voz en cuello un aria de Pagliacci. Olga hace sus valijas y se muda con su hijo Paulo al sur de Francia. Fuente: Arthur Gold y Robert Fizdale, Misia, Nueva York, 1979. http://www.lanacion.com.ar/1560798-nuevo-museo-del-chisme Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 19 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Releyendo a los clásicos: 'La casa de Bernarda Alba', de Federico García Lorca 25 de febrero de 2013 | 05:49 CET Josep Oliver @cisnenenegro Mientras mis alumnos están realizando un examen sobre ‘La casa de Bernarda Alba‘, se me ocurre que qué mejor ocasión que la que me brinda Papel en blanco para volver sobre este clásico que seguramente alguno de vosotros habrá leído. Si hay un autor de esos que es universal para los lectores, y que con razón es uno de los más leídos entre los estudiantes de español fuera de nuestras fronteras, ése es Lorca. No sólo porque en su poesía aúna tradición y modernidad, juega con las raíces de la poesía castellana y los experimentos de la vanguardia, sino también porque su teatro plasma con absoluta genialidad el conflicto entre el deseo del invididuo y las normas sociales que le aplastan. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 20 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila En este sentido, una de las obras que mejor expresan esta lucha es ‘La casa de Bernarda Alba’. Como sabéis, la obra narra la historia de Bernarda, cuyo marido acaba de fallecer y en cuya casa se ha decretado duelo, y sus hijas, enfrentadas en secreto por conseguir la atención de Pepe el Romano. La obra tiene lugar en un solo escenario (el del título) y funciona como un espacio metafórico: es la casa familiar pero también es la cárcel en la que se ven las hijas de Bernarda. El duelo hace que Bernarda haga que sus hijas no salgan en ocho años, apelando a la tradición familiar: así sucedió en casa de su abuelo y en casa de su padre. Bernarda es presentada como una madre castradora, más preocupado por lo que digan de su casa que de la felicidad de sus hijas. Así como reza el subtítulo, ‘Drama de mujeres en los pueblos de España’, la obra tiene un marcado acento femenino: no aparece ningún personaje masculino, estos tan sólo son nombrados y sabemos que rondan cerca, pero nunca entran en escena. De la misma manera, Lorca puede hablar de la situación de la mujer y de su rol familiar. Bernarda, por ejemplo, es partidaria de un modelo tradicional (las mujeres en casa y los hombres, en el campo), mientras que Adela sueña con casarse con quien quiera, salir de la casa de su madre y ver mundo. En todo este ambiente opresivo y represor, Adela es quien pone la luz y la ilusión. Ella, la más joven de las hijas de Bernarda, es quien aún no tiene una perspectiva amarga, quien tiene sueños y desea salir de la casa para vivir su vida. El resto de ellas se ha conformado con su situación (Angustias, Amelia, Martirio), conscientes de que el peso de la tradición es demasiado fuerte como para apartarlo. Y de aquí, de este choque entre los deseos de vivir una vida propia, y la tradición ahogadora que representa Bernarda, es donde nace la tragedia (no voy a desvelar el final de la obra por si alguien aún lo ha leído). Y es que los personajes de Lorca son tan vívidos y llegan con tal fuerza que, aunque la realidad que envuelve a los adolescentes de estos tiempos no tiene mucho que ver con la época que retrata la obra, sí que les llega el conflicto, y pueden identificarse fácilmente con Adela. Porque, aunque han pasado muchos años, el tema de la libertad y el individuo les llama la atención, como a la mayoría de los adolescentes. ‘La casa de Bernarda Alba’ es, en definitiva, una obra maestra de nuestra literatura: no sólo por esos personajes tan bien definidos y llenos de fuerza, o por la brillantez con la que Lorca plantea los temas. También por la poesía que éste imprime en los diálogos (mujeres con lagartijas en los pechos), como por la maestría en captar el lenguaje popular, las cancioncillas que se incluyen, o el retrato del campo andaluz… Además, con lo cortita que resulta, ¡no tenéis excusa! En Papel en Blanco | ‘Bodas de sangre’ de Federico García Lorca en la colección ‘Palabra e Imagen’ http://www.papelenblanco.com/teatro/releyendo-a-los-clasicos-la-casa-de-bernarda-alba-de-federicogarcia-lorca Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 21 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Una retrospectiva de Marcos López en el Recoleta EL ARTISTA PLASTICO En las últimas dos décadas, las imágenes de Marcos López pasaron del margen, donde enloquecía a todos los géneros y formatos de la fotografía, al centro de la escena artística. Con un ojo igual de dotado para la composición y el hallazgo, fascinado por los cultos populares y el colorinche plástico, su obra parece condensarse en el nombre que le dio a la serie que empezó en los ’90: Pop latino. Desde entonces, su mirada se ha expandido hasta volverse un modo de mirar el mundo injusto, doloroso y estridente que nos rodea. Debut y despedida (Obras 1978-2012) permite asomarse al modo en que fue encontrando, una y otra vez, una armónica verdad en la confusión chillona que no deja de acompañarnos. Por Claudio Iglesias El amor imperfecto Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 22 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Existe un Marcos López antes y después de las fotos grupales estilizadas que pasaron de empapelar galerías y salas de exhibición a cubrir los diarios y revistas de domingo y convertir a su autor en el único artista argentino vivo en Taringa! Esas fotos tan conocidas de familias o amigos comiendo asado, basadas en composiciones estilo Jeff Wall con una especie de costumbrismo vernáculo de gran tamaño, lo lanzaron simultáneamente a la fama, al trabajo por encargo a destajo y a los proyectos en la vía pública. Pero antes, el nombre de Marcos López iba al frente de un conjunto de imágenes que se movía en los bordes de la fotografía conceptual, el lenguaje de los medios masivos y el discurso asociado con el arte argentino de los ’90, como un comando de hormigas emancipadas que saliera de su carril y comenzara a avanzar a contramano, enloqueciendo al resto de las hormigas o poniéndolas a bailar una coreografía de musical de Broadway bajo el sol bochornoso del Noroeste argentino. Este Marcos López que a mediados de los ’90 recién había probado la fotografía color abundaba en efectos psicotrópicos, confusiones calidoscópicas y signos adulterados, desentendidos del embrollo de la elaboración cuidadosa. Pop latino, su serie de fotografías comenzada entonces es particularmente desequilibrada: consta de un tropel de imágenes tan irregular que el mismo concepto de serie parece quedarle estrecho. Retratos, montajes, juegos de luz, paisajes y distintas formas de la transposición departen a los gritos en imágenes que, si en algunos de sus mecanismos recuerdan a Cindy Sherman, o a Rineke Dijkstra, o a Martin Parr, no tienen el rigor estilístico ni la consistencia serial de los trabajos de ninguno de ellos. Unas largas uñas de mujer de un violeta lechoso, acariciando lascivamente la carne irregular de una hamburguesa; el encuentro fortuito de un chorizo y una antena satelital frente a una casa de adobe; o una reina de la belleza de pueblo, debilitada y apática, salpicada de azul, sosteniendo dos hormas de pan delante de un silo en algo así como la cruza de una imagen de Richard Avedon y otra de los hermanos Becher; un fláccido cactus plástico en una Quebrada de Humahuaca extraviada y fuera de foco. Marcos López, antes de ser un artista reconocible, fue un autor anárquico y vital, un producto incómodo de su generación, capaz de burlarse tanto de la severidad de los fotógrafos de oficio como del purismo visual de algunos de sus compañeros de ruta. Genio del truchaje, amante perdido de las reinas populares y del plástico chino barato que asolaba las calles del Once, cerquita del Centro Cultural Rojas, López construyó una obra sobre la premisa de la confusión máxima de las superficies visuales. Pero aunque todo el tiempo escenifica y desmiente cualquier expectativa de verosimilitud, la fotografía de López tiene en sus orígenes algo de inmediato, como si más que construir sus imágenes, las encontrara en el barullo multicolor de su cerebro. Sus mejores piezas caminan solas: por eso son desprolijas, hijas de la inspiración y la gula más que del método y la tenacidad. Contra lo que pueda parecer a simple vista, lo peor que le podía pasar a Marcos López no era masificarse sino depurarse. Sobre todo en sus mejores momentos, su obra es inclusiva, tanto más directa cuanto más irresuelta. La popularidad, más que un resultado, parece una condición de posibilidad de su trabajo. No puede decirse que Marcos López se haya abandonado a los golpes de efecto sino que inconscientemente fueron estos efectos los que se fueron domesticando hasta convertirse en una respuesta esperable. De tanto forjar un estilo y pulir el hit, con recaídas en tópicos como la última cena y el catch, el último cronista de la locura y la fantasía comenzó a generar imágenes más meticulosas y cargadas de un realismo ficticio que fueron fijando sus temas, alejándolo de lo mejor de él mismo: un amor desbordante por la imperfección. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 23 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila La patria: un exorcismo Por Marcos Lopez En el Sur, en las salvajes pampas donde habito, todavía existen gauchos que cuando tienen hambre, enfilan el caballo hacia alguna vaca particularmente despistada, de esas que se alejan del rebaño distraídas y quedan solas, a diez o quince metros del grupo principal, se bajan a la distancia exacta para que la vaca no se espante, caminan despacito, murmurando, canturreando unas sílabas que justamente repiten la palabra vaca, con las “a” más alargadas, intercalando otras palabras como “quieeeetaaaa”... “aacaaaa”... (diciendo vaca, pero en forma más gutural, sin la v corta). Como si el animal entendiera el idioma. En un momento la vaca deja de pastar y lo mira a los ojos. Piensa. Procesa la situación y confía. Se queda quieta, como hipnotizada. El gaucho le acaricia la parte central de la cabeza con la mano izquierda, se para bien, con las piernas entreabiertas, las rodillas un poco flexionadas, una pierna adelante pisando fuerte y la otra atrás, bien apoyada, y en un mismo movimiento la agarra de la oreja y con la otra mano saca el facón de la cintura, y en un solo movimiento le clava el facón en el cuello. Se lo entierra hasta el mango, y hace un sonido con la voz, sacando la energía de la parte baja del estómago, que suena parecido a un gemido de orgasmo y al sonido que hacen los karatecas cuando rompen maderas o cuando luchan, y se pegan patadas como muñecos tontos. La vaca cae y se desangra. Hace casi lo mismo que el torero, pero con una diferencia sustancial: el gaucho la traiciona. En la situación final, en el desenlace donde se paran frente a frente el toro y el torero, hay un par de segundos donde se miran a los ojos. El gaucho mira sesgado. Disimula. Se aprovecha de la confianza. Luego ata el caballo, haciendo un nudo con la rienda enroscada a un ramillete de pasto. Paja brava. Busca un árbol. Junta ramas. Algún tronco más grueso mientras pega unos gritos de triunfo para avisar a los amigos. Se juntan en círculo (los imagino en cuclillas, de la misma forma que los hombres prehistóricos), hacen un fuego, comen como bestias pedazos de carne chamuscada, medio cruda, y dejan el resto a los caranchos. Mientras comen, toman largos tragos de aguardiente con el bocado a medio masticar. Se hacen buches. Escupen. Se ríen. Se emborrachan. Hablan al pedo. Disfrutan. Hablan de mujeres. De muertos. De fantasmas... Esa es la primera imagen que se encarna en mi cuerpo cuando pienso en la palabra patria. Enseguida, después, viene el olor, la textura, la escena donde descubro el placer erótico, sensual, primario, profundamente bello Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 24 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila que encierra el mestizaje. La América profunda. Casi india: una empleada doméstica, Odolina, que se termina de bañar en el fondo, en un bañito que había en el patio, en la casa de mi primera infancia en Gálvez. Se peinaba, se desenredaba los cabellos lacios negros azabaches, con la cabeza gacha, hacia adelante, con las piernas un poco abiertas y en ojotas. Recuerdo –como si fuera ayer– el olor a champú barato, a campo, a mañana de vacaciones de verano, y me fascina. Luego me conecto con una tarde de mucha humedad, calor de otoño en Santa Fe, más o menos a los dieciséis años, saliendo de un cine de arte que se llamaba Chaplin. El único cine club de Santa Fe. Quedaba al fondo de una galería comercial oscura, deprimente, donde fui a ver Stalker (La zona), de Andrei Tarkovski. Salí del cine como levitando. Seguramente fumando Parisiennes. En esas cuadras, del centro (la calle San Martín) hacia mi casa de la calle Güemes, creo que fue el momento donde tuve la idea, un borbotón desordenado de imágenes borrosas donde seguramente conecté con un estado de conciencia paranormal, diferente al razonamiento cotidiano, y me di cuenta de que quería ser artista. O de que ya era un artista: alguien que tiene la necesidad imperiosa de hablar todo el tiempo de lo que siente. De mí mismo. De mi entorno: esa calle brumosa, el cine pegajoso, la costanera, la laguna... De lo frustrante que resulta constatar día a día la imposibilidad de construir un país más digno, más justo, más solidario. La necesidad de dejar un registro. Exorcizar. Dejar constancia. El mantel de hule Por Marcos Lopez “Desde anoche que no puedo dormir, angustiado, triste, porque tengo necesidad de blanquear un tema con Leonardo Favio. Lo voy a hacer: Leonardo: te robé la frase del mantel de hule. La dije cada vez que me Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 25 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila hicieron una entrevista, o en una conferencia, o una clase... En Europa, en Rafaela, en México DF. Siempre hablo de “la textura del mantel de hule”... Y no siempre dije que esa frase era tuya. De esos restaurantes de ruta, donde los antebrazos se quedan pegados levemente en el mantel, y uno espera un momento, para que no se ofenda, cuando la camarera se da vuelta, camina para otro lado, y le pasa una servilleta de papel, para terminar de limpiar la parte donde se apoyan los brazos. Ese mantel tiene que ver con la patria. Con la memoria. Con la identidad de un país. Es como el Aleph de Borges, el Aracataca de Gabriel García Márquez, el pueblo Serodino de Saer y la costa del río Paraná de Juan L. Ortiz. El mantel de hule es la Argentina. Creo que es una frase de un libro de poemas de Favio. Estoy seguro de que esa sensación la inventó Leonardo Favio. Prefiero quedarme con esa idea y no buscarlo en Google. En esas rosas rojas sobre cuadriculado celeste, gastadas de tanto trapo húmedo, está la dignidad de un país. De un continente. No quiero prender la televisión, ni ver YouTube, no quiero escuchar las canciones para no llorar. Un abrazo, Leonardo. Nunca es tarde cuando la dicha es buena. Más vale tarde que nunca. Mozo, ¡otro Gancia con soda! Quiero decir: no creo que sea tarde para contarle a Leonardo que su mantel de hule es la estructura central de todo mi trabajo desde hace 25 años. Debut y despedida (Obras 1978-2012) Marcos López Centro Cultural Recoleta Sala Cronopios Junín 1930 Martes a viernes de 14 a 21 Sábados, domingos y feriados de 12 a 21 Lunes cerrado Hasta el 31 de marzo Los textos de Marcos López son algunos de los incluidos en el catálogo de la muestra. http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/9-8643-2013-03-08.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 26 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila 'Fortunately, The Milk', la nueva obra de Neil Gaiman 26 de febrero de 2013 | 05:34 CET Josep Oliver @cisnenenegro Los seguidores de Neil Gaiman estáis (o estamos, me consta que Sarah es una gran fan) de enhorabuena: la nueva obra del escritor y guionista británico aparecerá este otoño y será un nuevo libro enfocado a los lectores más jóvenes. El nuevo libro se titula ‘Fortunately, The Milk‘ (‘Afortunadamente, la leche’) y cuenta la historia de un padre que sale a por leche para su hijo, pero por el camino se verá envuelto en una curiosa aventura con un estegosaurio en globo, un policía dinosaurio, y un viaje en el tiempo. Para este libro, Gaiman ha contado con la colaboración de los ilustradores Chris Riddell y Skottie Young. Este último es el autor de la portada, que tenéis aquí arriba. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 27 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El libro aparecerá a la venta en inglés en octubre; esperamos verlo traducido en breve. Parece que Gaiman le ha cogido gusto a esto de los libros juveniles (’Coraline‘, ‘El libro del cementerio‘), así que no estará de más echarle un ojo. Tened por seguro que hablaremos de él en Papel en Blanco. Los que dominés la lengua de Shakespeare tenéis un video a continuación donde Gaiman habla un poquito sobre su libro: Via | Nerd Approved En Papel en Blanco | La nueva obra de Suzanne Collins tras ‘Los juegos del hambre’ será un libro infantil http://www.papelenblanco.com/infantil-juvenil/fortunately-the-milk-la-nueva-obra-de-neil-gaiman Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 28 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Esa cosa llamada poesía Daniel Freidemberg publica una antología personal que reúne y pone el foco en poemas de cuatro de sus libros. POR Ignacio Uranga FREIDEMBERG. Desde 1966 reside en Buenos Aires. Sonidos de una fiesta ajena se titula la reciente publicación de Daniel Freidemberg, junto a la advertencia “antología personal”, acaso porque reúne textos de cuatro de sus libros: Diario en la crisis (1986), Lo espeso real (1996), Cantos en la mañana vil (2001) y En la resaca (2007). Existen dos operaciones, al menos las más visibles, que recorren de forma transversal, tal un bajo continuo, la producción freidembergiana en verso; una, la dificultad –inherente al lenguaje, según esta poética– de nombrar lo real; otra, la reescritura, a momentos en aspecto de repetición, lo que da a pensar una retórica de la repetición. La primera surge a partir de la manifestación de un sujeto a cargo de la escritura cuya mirada, extrañada (de filiación proustiano-saeriana), semejante a la de un niño, percibe, heraclitiano –o más extremo aún: cratiliano– lo real en constante devenir, conforme pareciera des-cubrir incesantemente el mundo y darse a la tarea de inmortalizarlo –según señala Nicolás Rosa en el prólogo– “en sus menudas apariciones”. De este constante devenir de lo real se desprende la manifiesta expresión de negatividad del lenguaje ante las cosas; “cosas”, palabra altamente recurrente en esta escritura, que convoca al Freidemberg poeta una y otra vez: “No hay nada, sólo cosas. / No hay nada, las cosas tampoco.”. Puro significante vaciado del sentido prescripto, denuncia de la reificación, tanto lingüística como de la razón: “Eso que miro, entre palabras, / que no lo alcanzan, sigue ahí.”. Hasta acá, uno de los aspectos elaborados en el plano conceptual, cuyo alcance se erige entrelazado cabalmente a otra operatoria: el tratamiento formal de reescritura. Si lo real (“lo espero real”) es constante devenir, voluble e inefable, el único real posible al que aferrarse será la escritura misma: “El mundo se fue, / eso que, alguna vez, /llamaste `el mundo´ / no está más, se fue: /cosas quedan, palabras, / igual que lo que / deja, al / retirarse, el mar.” Una arquitectura, entonces, cada poema, que pone en crisis la dicotomía forma/contenido para hacer de ella la expresión de una fuerza que recorre la totalidad de la escritura y que nuclea este volumen: incesancia, el brote no controlado de la significación, no de lo dado (signifiè), sino del proceso incesante y expansivo, de la búsqueda, tal lo que puede recogerse en la lectura de estos poemas, del mismo modo en que puede concebirse Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 29 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila leit motiv de esta escritura. Sin embargo, si aceptamos lo propuesto por Rosa en las preliminares, el poeta no puede sino fracasar, pues “lo real no responde” sino mediante “el silencio llano de lo real”. El conjunto de energías sostenidas hace que la obra de Freidemberg, pese al fechaje de ediciones que sugiere “libros”, en plural, sea pasible de ser leída como obra orgánica, continuada. Esto ocurre con Sonidos de una fiesta ajena: la vasta selección que comprende da al lector cuenta de ello, a la vez que la posibilidad de leerla como obra reelaborada, como una nueva obra, una y otra vez. http://www.revistaenie.clarin.com/literatura/resenas/Daniel-Freidemberg-Sonidos-fiestaajena_0_875312486.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 30 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila ‘Lo que la universidad no enseña’ de Íñigo García Ureta 27 de febrero de 2013 | 10:24 CET Sergio Parra @SergioParra_ A estas alturas de mi vida he asumido que soy un poco ciclotímico, al menos en lo que ambición y propósitos se refiere. Hay días en los que me levanto emprendedor y eufórico, me agencio una libreta y apunto las normas y proyectos que habrán de presidir en adelante mi conducta para iniciar una vida nueva y provechosa. Son exhortaciones inequívocamente nobles y hacederas, pero finalmente, ya sea por acumulación de las mismas o por mi carácter voluble, licencio la libreta y me entrego a la abulia, recordándome que carezco del talento o de la convicción suficientes como para llevarlas a cabo. En esos momentos, entonces, es cuando reconozco que necesito libros como Lo que la universidad no enseña, del escritor, traductor y editor Íñigo García Ureta. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 31 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Y es que Ureta ha compuesto un libro de fácil lectura basado en los discursos de personas que, con independencia de su formación académica, resultan poderosamente inspiradores. Estos discursos son los commencement addresses, que están dirigidos a estudiantes o público joven. A juicio de Ureta, estos discursos de apenas un cuarto de hora condensan enseñanzas que difícilmente se imparten en el mundo académico. Lecciones sobre cómo aprender de los fracasos, de por qué no hay que sentirse raro si no sabemos aún qué camino laboral tomar, de cómo relacionarse con la familia o con el jefe, de cómo vivir como si fuera el último día. Y sus ponentes son personajes célebres de la talla de Steve Jobs (que habla de cómo aceptar la certeza de la muerte), J. K. Rowling o Robert Rodríguez (el fracaso y la tenacidad frente al mismo) o Carl Sagan (somos sólo una minúscula mota de polvo en el universo). Pero Lo que la universidad no enseña no trascribe literalmente dichos discursos sino que extrae algunas de sus frases y reflexiona sobre ellas, exprimiendo todo el jugo. El libro, pues, se estructura en diez capítulos que abordan un tema cada vez, una suerte de Diez mandamientos sobre el difícil oficio de vivir que pueden extraerse de aquellos célebres discursos. Las ideas presentadas por Ureta no son nuevas ni tampoco profundiza en ellas más de lo que lo han hecho filósofos y pensadores a lo largo de la historia, pero su manera de aproximarse a ellas es tan inteligible y accesible que permitirá llegar al corazón y el cerebro de cualquier tipo de lector. Y, de añadidura, aprendemos todos un poco más sobre esos personajes que, a pesar de tenerlo todo en contra, salieron victoriosos. Introducir “Steve Jobs” + “Stanford” en Google arroja 31.600.000 resultados. Como tantas otras cosas que tienen que ver con él, su famoso discurso de graduación de 2005 en la Universidad de Stanford se ha convertido en un clásico, seguramente más conocido hoy que el “Tengo un sueño” de Martin Luther King (…) Porque, a decir verdad, las ideas que avanza en él no son especialmente nuevas. Jobs contó tres historias en Stanford. La primera tenía que ver con su fugaz paso por la universidad, y en ella relató cómo, a pesar de haber dejado los estudios, tuvo siempre la oportunidad de aprender lo necesario para llevar a cabo lo que deseaba hacer. La segunda tenía que ver con su carrera profesional, y en ella relató cómo el hecho de que le echaran de la empresa que había creado no fue sino un incentivo para convertirse en un mejor profesional. Y la tercera estaba referida a la enfermedad, pues relató cómo un diagnóstico médico negativo le había cambiado el modo de entender la vida y ayudado a ser consecuente con sus prioridades. http://www.papelenblanco.com/ensayo/lo-que-la-universidad-no-ensena-de-inigo-garcia-ureta Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 32 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila EL HOMBRE QUE DETIENE LAS CIUDADES Desde sus inicios en el fotoperiodismo y hasta ahora, dos décadas más tarde, la pulsión del holandés Martin Roemers para tomar una cámara y disparar es la misma: querer verlo todo. Dos veces ganador del premio Word Press Photo, visitó Buenos Aires para incluirla en su serie Metrópolis, proyecto que refleja la ebullición cotidiana de ciudades superpobladas, y habló con Radar sobre su preferencia por la fotografía analógica, sobre cómo es trabajar con la guerra y con las consecuencias de los conflictos y sobre sus retratos de las grandes urbes y sus habitantes, a quienes considera sobrevivientes. Por Romina Resuche Martin Roemers parece simpático, sencillo, tranquilo; un hombre sin demasiadas vueltas, seguro de sí mismo. Su reciente visita a Buenos Aires estuvo directamente relacionada con su nuevo proyecto: describir fotográficamente el caos citadino, algo que ya hizo con Phnom Penh en Camboya, con el DF mexicano, con Shanghai en China, y con otras urbes (demasiado) llenas de gente, de tráfico vehicular extremo, de movimiento incesante. Nacido en Holanda, estudió fotografía en la Academia de Artes de Enschede, es representado por la agencia Panos Pictures –especializada en fotografía de asuntos sociales– y algunas piezas de su obra son parte de colecciones como la del Rijksmuseum de Amsterdam. Además de reconocimientos, exhibiciones y premios varios, publicó libros de cada uno de sus proyectos: The Eyes of War –impresionantes retratos de hombres y mujeres que quedaron ciegos durante la Segunda Guerra Mundial–, Relics of the Cold War –un trabajo de diez años documentando las construcciones militares fósiles de la Guerra Fría–, Kabul, The Never Ending War –retratos de la guerra en Afganistán tomados con una cámara callejera prestada por un fotógrafo local– y Trabant, The Final Days of Production –documentación del cierre de la fábrica del automóvil insignia de la ex República Democrática Alemana–. Roemers siempre se sintió impresionado por la fotografía documental y dio sus primeros pasos influido por artistas de su tiempo que preferían el blanco y negro. “Quería hacer eso”, confiesa. Su acción en el fotoperiodismo comenzó colaborando con distintos periódicos europeos, pero al mismo tiempo les daba a sus Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 33 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila proyectos personales un espacio fundamental, con la capacidad y las ganas de encarar varios trabajos en paralelo y dedicarles a todos largos períodos de desarrollo, sin apuro, sin perderse. Desde hace cinco años está netamente abocado a sus búsquedas propias. El año pasado dio por concluido su minucioso seguimiento de historias de personas que quedaron ciegas durante la Segunda Guerra Mundial y hoy está completamente sumergido en el proyecto Metrópolis. “Siempre trabajé mucho en relación con los conflictos y sus consecuencias, con aquello que deriva de las guerras, con lo que ocurre después. Pero ahora cambié mi dirección y empecé esta historia, que es bien diferente.” Vive en Delft, una relajada ciudad de menos de cien mil habitantes ubicada entre Rotterdam y La Haya, pero hoy recorre el mundo atraído por las ciudades monstruo que encierran mareas humanas amontonadas, localidades agobiadas por el exceso poblacional y su agite. Los puntos de reflexión de Roemers y su cámara en tierra porteña fueron Retiro, Constitución, Once y la esquina de Lavalle y Florida, que le gustó particularmente por ser un cruce peatonal “igual que cualquier otro, pero un poquito diferente”. CALCUTA, INDIA. Martin Roemers En cada ciudad elige con especial rigor la locación a fotografiar, la considera su teatro. “Las calles son mi escenario y la gente, mis actores”, explica. El método paciente del fotógrafo demuestra sutileza en la construcción de una imagen. Da la idea de un hombre quieto que, sin ansiedad pero con ansias, aguarda la captura perfecta en una pausa del movimiento frenético. “Me concentro en personas específicas, en individuos. Elijo una esquina, veo dónde comienza mi cuadro y dónde termina, y desde ahí miro muy cuidadosamente quién va hacia un lado y quién hacia el otro, quién se detiene; cómo entra y sale el tránsito, y espero el exacto momento en el que todo cae en el lugar correcto... o eso espero”, concluye entre risas. En verdad, nunca está seguro del resultado inmediatamente. El efecto sorpresa que le genera trabajar en analógico aumenta la adrenalina que encuentra al elaborar esas largas exposiciones. Y así describe su manera de hacerlo: “En dos o cuatro segundos puede pasar muchísimo. Sigo a alguien con mis ojos, alguien que parece interesante y espero a que se quede quieto. Si se mueve puede ser una foto perdida, porque cada elemento podría ser el centro de atención. Esa es la parte difícil. Por eso al final termino teniendo dos fotos de cada ciudad, o tres o cuatro como mucho, después de pasar una semana en cada una. Y como trabajo con película, sólo puedo saberlo cuando vuelvo a casa y veo lo que obtuve”. Comenzó esta serie en India, donde la ansiedad citadina se imponía ante sus ojos al visitar Mumbai cada invierno. Se preguntó cómo poner visible para los demás toda esa gravedad, ese desorden, esa energía en una Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 34 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila sola imagen. Plantearse ese desafío resultó en un experimento panorámico del fluir de las megaciudades y los seres que las habitan, como pueden. “El elemento fantasmal de esta serie muestra la energía de la ciudad, la historia es cómo la gente sobrevive en un lugar donde miles de cosas ocurren al mismo tiempo y cómo logran subsistir individualmente en ese ambiente las 24 horas del día”, señala. Para su sorpresa, las estadísticas le contaron que casi la mitad de la población mundial las elige como residencia. Polución y pobreza son referentes de estos espacios de vida humana que incrementarían aún más el número de moradores hacia 2050. En sus palabras: “Metrópolis es un documento de la vida en el comienzo de este siglo, de cómo se ve este modo de vida”. En cada fotografía de Metrópolis pueden encontrarse pequeñas historias adentro. El mismo Roemers reconoce que con esta serie cada vez que ve alguna de las imágenes impresas en gran formato halla nuevas historias, y destaca: “Que estén llenas de detalles es lo que las vuelve más interesantes”. Con una de esas fotos ganó el primer premio en la categoría Vida Cotidiana del Word Press Photo 2011. MUMBAI, INDIA. Martin Roemers Ya en 2005 obtuvo un segundo lugar en el mismo premio, pero en la categoría Retratos, con The Eyes of War. En su intención de hacer visible la ceguera quería ser directo y mostrarlo todo: cada arruga, cada cicatriz (como bien definió un crítico en una reseña de esta obra: la memoria en esos rostros). Para lograr cercanía no sólo fotografió, sino que también tuvo entrevistas con los retratados y conversó ahondando en sus recuerdos, preguntando cuáles fueron las circunstancias en las que perdieron la vista, cómo lidiaron luego con eso y cómo es su vida diaria sin poder ver. Aunque Roemers cree que esta obra pudo ser incómoda para ciertas personas, esas imágenes están lejos de ser perturbadoras. “Creo que a la gente le gusta saber cómo vive otra gente. De hecho, en los diarios hay cada vez más secciones que ponen atención al estilo de vida y hay cada vez menos espacio para las imágenes que perturban”, revela. En su serie anterior (The Never Ending War) se ocupó de aquellos que habían sido parte activa de la guerra, victimarios en muchos casos. Bondad y maldad se desdibujan en las caras de quienes atravesaron hechos dramáticos como un enfrentamiento bélico, y a Roemers le interesa detenerse en lo que cuentan esas almas desde sus facciones. Sin ser un fotógrafo de guerra, sus alrededores y traspiés quedan expuestos en gran parte del material que generó a lo largo de su carrera. Parafraseando un proverbio latino, desliza: “Si se quiere la paz, se debe estar preparado para la guerra”. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 35 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Retratos muy cercanos e intimidad por un lado, y espacios abiertos y paisajes por el otro. Un gran foco en el día después de las guerras desde la visión de un hombre que proviene de uno de los países con mayor tradición pacifista. La obra de Roemers parece estar atravesada por los opuestos. Es capaz de tomarse diez años para buscar las imágenes que compongan un proyecto, viajando para encontrarlas, escuchando remembranzas y datos en varios idiomas. Este método le funciona tan bien como sus guiños técnicos, variables, como el elegido para la serie Kabul, en la que usó una cámara de placa que pidió prestada a un fotógrafo callejero de Afganistán. Con este tipo de decisiones, sin miedo a la imperfección, y dedicando extensas temporadas a cada fragmento de su cuerpo de obra, suma sentido a su hacer fotográfico. “Necesito el tiempo para contar la historia, para pensar cómo contarla y encontrar el modo justo –relata–. Con las fotos de los ciegos, por ejemplo, pensé mucho en cómo hacer retratos que dejaran una gran impresión. Pude hacerlo de cien maneras distintas, pero fue ésa. Siempre pienso el cómo, porque en ello está lo que le da significado.” http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/9-8649-2013-03-08.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 36 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila 'Pirofobia' de Jack Lance 27 de febrero de 2013 | 11:21 CET Fausto Beneroso @FaustoBeneroso El cuerpo me pedía un poquito de terror e intriga. Y en esas que mirando por ahí me topé con Pirofobia de Jack Lance, donde nada menos que se decía que este hombre es el Stephen King holandés. Así que dado lo que buscaba en ese momento, me vino perfecto y no dudé en acercarme e internarme en esta pesadilla rodeada de fuego. He de reconocer que una vez leído me ha dejado una sensación rara. Por una parte, hay alguna que otra cosa cogida demasiado por los pelos, pero por otra, y aún así, el libro no me ha aburrido en ningún momento, más bien todo lo contrario. Por lo que teniendo en cuenta el tipo de lectura que promete, no hay mucho que reprocharle. Pero empecemos por la historia que nos trae ‘Pirofobia’, que no es otra que la de Jason Evans, un hombre con una vida que puede considerarse perfecta: tiene un trabajo que le gusta en una empresa de publicidad, y una mujer que le quiere con locura y a la que él también adora. Pero claro, todo esto suena demasiado bien, así que no tardará en complicarse la cosa. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 37 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila De entrada empieza a recibir unas enigmáticas Polaroid donde aparece la imagen de un cementerio y donde se le asegura que él está muerto, que hace años que murió. Evidentemente, empezará pensando que todo es un absurdo, pero ante la insistencia y la obsesión de quién puede estar espiándole, llega incluso a buscar su propia tumba. Pero esto no es todo, ya que unido a este problemilla, comienza a tener unos horribles sueños en los que el fuego es absoluto protagonista, un fuego que desde pequeño le atemoriza. Así que entre las fotos y los sueños con el fuego empezará a bucear en su pasado para ver si soluciona algo. Como os decía al principio, alguna cosilla que otra parece estar cogida con pinzas, sin ir más lejos la forma de unir esos dos enigmas en los que ahora se ve inmerso. Hay que reconocer que esta es sin duda la parte más floja del libro, porque hay situaciones y conclusiones a las que llega Jason que son poco menos que absurdas y en las que tienes que esforzarte para aceptar ‘barco’ como animal acuático. También es justo reconocer que hacia el final de ‘Pirofobia’ esto mejora bastante. De hecho, el último tercio del libro para mí gana muchos enteros de por sí. Pero ojo, que no quiero que penséis que estamos ante un libro horrible ni nada parecido, ya que nunca debemos olvidar qué buscamos cuando abrimos las páginas de un título como este, que en mi caso suele ser entretenimiento y encontrar una historia que me enganche. Pues bien, es ahí donde ‘Pirofobia’ destaca de manera clara, ya que la palabra aburrimiento desaparece de nuestro diccionario cuando estamos leyendo este libro. Es muy de alabar el hecho de que en ningún momento pierdas el interés y, al fin y al cabo, quieras saber qué ocurre con el final de la historia. Un final que, aún siendo un poco rebuscadillo, nos deja satisfechos y consigue cerrar y explicar bastante bien todo lo que hemos leído. En cuanto a Jack Lance, estaréis pensando que con ese nombre no suena muy holandés el hombre, y es que ese es el pseudónimo que utiliza Ron Puyn, que así se llama en realidad, cuando escribe sus novelas de intriga y misterio. Decir que en Holanda es un auténtico bestseller y que son varias las novelas que han tenido por aquellos lares un gran éxito. Ron comenzó su carrera como periodista y ha colaborado en las revistas más conocidas de su país, sobre todo hablando de fenómenos paranormales, lo que sin duda se deja entrever en ‘Pirofobia’. Así pues, y dicho todo esto, este título es altamente recomendable para todos aquellos seguidores del género o, los que como yo, de vez en cuando nos gusta asomarnos a ese rinconcito oscuro que todos tenemos. La verdad es que si lo que buscas es evadirte, entretenerte y de camino pasar un poquito de miedo, no lamentarás entrar en las páginas de ‘Pirofobia’. Y sí, tiene sus cosillas que ya he comentado, pero se le perdona fácilmente y cumple con su cometido de sobra. Arrugó el entrecejo y, sin levantar la vista, tomó el abrecartas de plata de la taza donde guardaba los utensilios de escritura y abrió a continuación el sobre. Dentro había una instantánea, una Polaroid. No mostraba nada muy sorprendente. Pero la imagen en sí se imponía: una puerta de hierro alta y oxidada, bordeada a ambos lados por sendos robles imponentes. Tras la puerta, las lápidas asomaban torcidas de la tierra. Minotauro Colección: Terror 320 páginas ISBN: 978-84-450-0078-6 Traducción: Miguel Antón 17 euros Más información | Ficha en Minotauro http://www.papelenblanco.com/resenas/pirofobia-de-jack-lance Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 38 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila LA GUERRA Y LOS HOMBRES Campos de Marte Álvaro Ojeda LOS OBSCENOS manejos de la muerte enlutaron al duque de Wellington luego de su victoria sobre Napoleón en la batalla de Waterloo, el 18 de junio de 1815. Al recorrer el escenario de su gloria militar dijo: "Nada, excepto una batalla perdida, puede ser la mitad de triste que una batalla ganada." Estudiar la guerra como una simple sucesión de maniobras militares más o menos brillantes, llevadas a cabo por hombres más o menos heroicos, resulta un acto engañoso. Hay que develar lo que se oculta bajo el canto patriótico, la razón de estado, la gesta justiciera. En el prólogo de Historia de la guerra, un ensayo histórico, sociológico y militar, su editor Geoffrey Parker (Nottingham, Inglaterra, 1943) poseedor de un currículum tan monumental como el volumen que coordina, adelanta algunas reflexiones sobre lo que se considera guerra en Occidente en cuanto a propósitos, metas, procedimientos. Una guerra ejecutada por un pueblo en disputa con otro por territorios que le permitan crecer en población y en producción puede preferir una especie de choque ritual en donde unos pocos elegidos se enfrenten en representación de las comunidades en pugna. Como enseñaba Sun-Tzu, el teórico militar chino del siglo IV a.C., "someter al enemigo sin luchar es el colmo de la destreza", siempre y cuando el enemigo comparta las mismas máximas. El asunto se complica si están en juego excedentes de producción (el grano sería un buen ejemplo) que indicaran cierta prosperidad y sobre todo mayor población lista para tomar las armas. No hay que remontarse a los sumerios o a los babilonios para encontrar una situación semejante. Los hoplitas griegos, soldados ciudadanos y campesinos de las ciudades libres de la antigua Grecia, se enfrentaban entre sí con una violencia Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 39 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila proverbial -LaIlíada proporciona sobrado testimonio- aunque acotada a un número de hombres calificados, en un lugar apropiado, en cierta época del año. Son las Guerras Médicas contra los invasores medos y persas del siglo V a.C., las que generan un salto cualitativo hacia la guerra moderna, transformando el rito violento, sacrificial y aristocrático, en aparato bélico generalizado y siempre disponible. Los persas, generosamente superiores en número a los griegos y dedicados al saqueo metódico del territorio invadido, debieron ser vencidos por una organización militar que aportó dos novedades esenciales para todos los ejércitos posteriores, y que tuvo su origen en la victoria griega de Platea en 479 a.C.: una disciplina táctica eficaz -la falange- y un armamento superior. Respecto a la disciplina Parker señala: "Los propios hoplitas griegos del siglo V, que eran ante todo granjeros y, luego soldados, salían a luchar tan a menudo integrados en falange que alcanzaron un elevado grado de eficacia en combate, pues el componente decisivo de la disciplina es la capacidad de una formación para resistir al enemigo, tanto cuando ataca como cuando es atacada, sin ceder a los impulsos naturales del terror y el pánico." El otro ítem que resolvió Pausanias -vencedor en Platea de un ejército persa tres veces superior al de la liga panhelénica que comandaba- derivó del armamento de los hoplitas. "Cada terrateniente guerrero compraba su propia armadura, cuyo peso en madera y metal podía alcanzar unos abrumadores 35 kilos: grebas (piezas de bronce para proteger las piernas), yelmo, un escudo cóncavo y redondo, coraza, jabalina de punta doble y una espada corta como arma secundaria." Desde Pausanias a Robert McNamara, Occidente ha creído en estos dos preceptos, disciplina y tecnología de punta. Pero hay más. Los militares desde tiempo inmemorial se han liberado de toda traba ideológica y han recogido el legado de los tratadistas de variada procedencia con mente abierta: desde el Compendio de asuntos militares escrito por Vegecio en 390 d.C., copiado y parafraseado por el monje Beda al servicio de los descendientes de Carlomagno en el siglo IX de nuestra era, hasta el general George C. Marshall, estudioso de Tucídides y su Historia de la Guerra del Peloponeso, escrita dos mil años antes de la Segunda Guerra Mundial. Es que en materia militar todo es utilizable. En especial la idea de la victoria definitiva, heredera de Cannas, sirve para mantener otro principio militar: la preservación de un nivel de agresividad que permita la destrucción total del enemigo en un encuentro decisivo. Parker sugiere la falacia de ese horizonte de una vidriosa victoria absoluta: Aníbal fue derrotado y Cartago arrasada. Acaso el aserto más interesante del prólogo radique en sostener que toda esta tarea de destrucción sostenida, es concomitante a la generación del estado moderno -las monarquías nacionales europeas- con su legado de cargas impositivas en dinero, especies o vidas humanas. La guerra y el estado, el estado y la guerra, se retroalimentan como la carroña y el buitre. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 40 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila CASUS BELLI . En cuatro secciones divididas en diecisiete capítulos, más trece páginas de notas necesarias, veintidós páginas de abundante bibliografía, una cronología excelente, un epílogo, un índice onomástico completo, un glosario que constituye un atractivo instrumento para el lector y un plus de veintidós mapas de campañas y de acciones militares concretas, los seis autores del presente ensayo realizan un recorrido profundo y a la vez sintético de todos los conflictos bélicos desde el año 600 a.C. hasta 2006 de nuestra era. Hay, además, lúcidas sorpresas. En el capítulo titulado "La industrialización de la guerra, 1815-1871", a cargo de Williamson A. Murray (entre otros pergaminos es profesor emérito de Historia Militar de la Universidad de Ohio), se practica un análisis de los conflictos post napoleónicos a la luz de la globalización del imperialismo capitalista europeo, origen de algún que otro problema moderno. La potencia de fuego generada en mar y tierra para vencer a Napoleón se vuelca en un escenario mundial. "La resolución en 1815, de veinticinco años de guerra entre las potencias europeas no constituyó una tarea fácil. Pero los vencedores estaban de acuerdo en que tenían ciertos intereses comunes: en particular se proponían controlar las emociones nacionalistas que habían recorrido Europa." De los enfervorizados ejércitos ciudadanos de la Revolución Francesa -con la correspondiente reacción monárquica en el escenario de la Revolución Industrial inglesa- al saqueo de Asia y África, hay un paso. Ese paso se dio entre 1853 y 1856 en la península ucraniana de Crimea. Una insólita alianza compuesta por Inglaterra, Francia, el Reino del Piamonte y Cerdeña y el decadente Imperio Otomano se enfrentó al Imperio Ruso dedicado a instalarse en las orillas del Mar Negro. La Guerra de Crimea fue apenas la guerra por el puerto de Sebastopol y nunca concitó el interés patriótico de nadie. Pero fue la primera guerra en donde la ciencia y su hijastra interesada, la tecnología, aportaron a la masacre entre otras bellezas las balas minié -así llamadas por el apellido del ingeniero que las inventó- que permitían matar con precisión a 300 metros de distancia; los navíos a vapor que lograban trasladar más tropas y en Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 41 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila mejores condiciones a casi cualquier lugar del mundo y el telégrafo que aseguró la dirección de la guerra a distancia permitiendo, además, la cobertura periodística de los enfrentamientos. Este conflicto de causas abstrusas fue una hipótesis de laboratorio con probanza humana. Crimea sentó el precedente de la Guerra de Secesión estadounidense, ultra efectiva, moderna y casi profética porque implicó a la potencia mundial del futuro, la instruyó, la orientó. Señala Murray en referencia a la Guerra de Secesión: "el coste de aquella guerra fue atroz: en ella murieron 625.000 soldados entre ambos bandos, cifra igual al total de las demás guerras norteamericanas incluida una gran parte del conflicto de Vietnam. Si Estados Unidos hubiera sufrido un nivel de bajas comparable en la Primera Guerra Mundial, las vidas perdidas habrían rondado la cifra de 2.1 millones en vez de 115.000." El millón de vietnamitas muertos en los ocho años de intervención estadounidense en Vietnam, revela quién aprendió la lección en la morosa tarea de reciclarse para matar mejor, que no conoce de ideologías, de excesos, de principios. HISTORIA DE LA GUERRA de Geoffrey Parker (editor). Akal, 2010. Madrid, 544 págs. Un ensayo sobre la paz LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL recibe en Historia de la guerra un tratamiento especial. En el capítulo "Occidente en guerra", a cargo de Williamson A. Murray, se brinda la cifra espeluznante de 70 millones de personas movilizadas, nueve millones de ellas muertas en servicio entre los 20 y los 30 años de edad. La letanía fúnebre se compone entre otros, de 700.000 soldados británicos, 250.000 del Common-wealth, 500.000 italianos, 1.1 millones de austríacos, 1.3 millones de franceses y 2 millones de alemanes. Una danza macabra con raíces culturales profundas. El conde Alfred Graf von Schlieffen, Jefe del Estado Mayor del II Reich alemán, elaboró su plan de invasión de Francia en 1914, a partir de sus sólidos conocimientos de los Comentarios de la guerra de las Galias de Julio César. No hubo ni apresuramientos ni ferocidad espontánea, todo estaba calculado para provocar los perversos mecanismos de las pulsiones guerreras y, sobre todo, conquistar a la opinión pública. Por supuesto que hubo ocultamientos y manipulación de la información. Debe suponerse que el relato de un oficial australiano durante la batalla de Passchendael el 13 de setiembre de 1917, donde los ingleses atacaron en un frente de 3.600 metros y dispararon la friolera de 3.500.000 proyectiles, no conoció estado público hasta bien acabado el conflicto. Cuando el Comandante de la Fuerza Expedicionaria Británica, sir Douglas Haig, suspendió casi por aburrimiento la ofensiva, los aliados habían sufrido 400.000 bajas y los alemanes 270.000. Una carnicería que no produjo ninguna consecuencia definitiva en el desarrollo de la guerra. En la película estadounidense de 1930 -doce años después de terminado el conflicto- Sin novedad en el frente, del director Lewis Milestone, basada en la novela del escritor alemán Erich Maria Remarque, se muestra la exaltación militarista que un profesor universitario provoca entre sus alumnos en la Alemania del II Reich. El resultado inmediato de la arenga es el enrolamiento jubiloso de los estudiantes en defensa de la patria amada. Al poco tiempo sólo sigue vivo uno de ellos -Paul Baumer- que morirá en una escena cruelmente poética que ha quedado en la historia del cine: es baleado por un francotirador cuando intenta tomar una mariposa blanca que se ha posado cerca de la trinchera en donde está apostado. En el bando aliado las cosas no fueron mejores. La guerra movilizó lo mejor de cada nación, y dejó un vacío existencial que la literatura recogió en poemas como The Waste Land (La tierra baldía) de T. S. Eliot (18881965), que ya desde su título parece aludir a ese terreno de nadie, batido furiosamente por la artillería antes del salto a la muerte en masa desde el borde de la trinchera. No obstante, en el inicio de la guerra algunos Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 42 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila poetas intentaron dotar de sentido a la hecatombe. En el sector final del capítulo dedicado a la Primera Guerra Mundial son citados, a modo de epílogo reflexivo, algunos versos de Rupert Brooke (1887-1915) un joven poeta amigo de Virginia Woolf, muerto en acción en Francia en el inicio de los combates. Son versos teñidos de un romanticismo algo sosegado por una realidad abrumadora: "Si voy a morir, pensad sólo esto de mí:/ que en un suelo extranjero hay un rincón/ que es Inglaterra para siempre." Todavía resuenan en los versos de Brooke la patria como refugio omnipresente y definitivo, su defensa como causa justa, el sacrificio generoso del cuerpo convertido en patria final. Todos los mecanismos conocidos que la juventud de la época adoptó con ingenua exaltación. A sólo tres años de escritos estos versos, los poetas habían cambiado de parecer. Sieg-fried Sassoon, un oficial británico, también dejó escrito en un poema una visión de la guerra bastante contraria a la de Brooke. Acaso la imagen que asalta al lector al leer este poema se asemeja a la de una noria infinita, tozuda, conocida. Puede sostenerse que la idea de progreso, acunada en Europa durante el Siglo de las Luces y la Revolución Francesa, se extinguió en las trincheras del Frente Occidental entre 1914 y 1918. Finalizada la matanza, el horizonte todavía humeante ocultaba las siluetas apenas esbozadas de Stalin y de Hitler. http://www.elpais.com.uy/suplemento/cultural/campos-de-marte/cultural_700116_130308.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 43 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila ¿A dónde van las cosas cuando desaparecen? “Latin American Ephemera Collection”, así se llama una rara sección del archivo que se ocupa de robarle a la intemperie libros y objetos curiosos, efímeros. Libros como los de la editorial Eloísa Cartonera y otras editoriales independientes de su especie, cuyos volúmenes, cuando no reciben el desdén de los lectores locales, se pueden adquirir en alguna librería de la avenida Corrientes de Buenos Aires por $16. Y que la Universidad de Princeton ha comprado por un precio mucho más cercano al de su valor patrimonial, mucho más elevado y en dólares. Los márgenes de la sección latinoamericana de Princeton son elásticos y se estiran. Entre los objetos de la sección pueden aparecer fotografías. Fotos como una de Pedro Henríquez Ureña tomada por Grete Stern en 1942. También puede encontrarse material de audio y video, como la conferencia de Saer en Princeton. Al archivo de afiches y volantes políticos de América Latina (tópicos como los de la Revolución Cubana y el Golpe de Estado en Chile de 1973 están entre los orígenes del archivo), también se agrega una colección dedicada a temas de salud, entre cuyas carpetas pueden encontrarse cuidadosamente almacenados folletos de prevención de VIH. La Sección de Manuscritos Latinoamericanos de la Universidad de Princeton posee manuscritos de Reinaldo Arenas, Antón Arrufat, Cintio Vitier, Miguel Angel Asturias, Guillermo Cabrera Infante, José Donoso, Arcadio Díaz Quiñones, Juan Villoro, Jorge Edwards, Rosario Ferré, Carlos Fuentes, José Lezama Lima, Elena Garro, Margo Glantz, Augusto Monterroso, Virgilio Piñera, Sergio Pitol, Mario Vargas Llosa, Emir Rodríguez Monegal. Entre los papeles argentinos sobresalen manuscritos de Borges, José Bianco, Manuel Mujica Láinez, Julio Cortázar, Alberto Girri, Silvina Ocampo, María Rosa Oliver, Néstor Perlongher, Álvaro Yunque, Juan José Saer. A los manuscritos de Saer recientemente editados por Seix Barral, con el título de Papeles de trabajo y con prólogo de Julio Premat, se añaden otros papeles que paulatinamente van llegando a la imprenta. Entre ellos, los papeles de Alejandra Pizarnik y la correspondencia de Macedonio Fernández. Entre otras de las cosas que pueden encontrarse en el Archivo figuran: el Archivo de sobrevivientes de los centros clandestinos de detención en Argentina, 1976-1983; Folletos socialistas de Buenos Aires, 1912-1916; Publicaciones del Partido Comunista de la Argentina, 1917-2007; Publicaciones políticas y culturales argentinas, 1900-1986; Socialismo Argentino: Periódicos, revistas, libros, folletos, declaraciones públicas, documentos internos, actas de congresos y volantes (1894-2009). El guardián de la sección es alguien que reúne y separa. Arrastra escombros de un lugar a otro. http://www.revistaenie.clarin.com/literatura/A-donde-van-las-cosas-cuandodesaparecen_0_879512051.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 44 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El código Asimov Por Pablo Capanna LOS ROBOTS DE LA CF TARDARON MUCHO EN ASUMIR EL PAPEL DE MONSTRUOS, Y LES LLEVO OTRO TANTO CONVENCER A LA GENTE DE QUE NO LO ERAN. Hay una historia de dudoso origen que suele reaparecer cada vez que alguien escribe sobre los orígenes de la informática. Se dice que proviene de la Edad Media, pero tiene un inconfundible aroma a romanticismo alemán, y bien podría ser una ficción de Hoffmann o de Novalis. Cuenta la leyenda que allá por el siglo XIII San Alberto Magno, un filósofo interesado en la ciencia y la técnica, había construido un robot que usaba como secretario. El Hombre de Hierro abría la puerta de la celda de Alberto y contestaba las preguntas de los visitantes. A Roger Bacon, que vivió casi en la misma época, también se le atribuía la fabricación de una cabeza parlante. Según la versión hard de la historia, Santo Tomás de Aquino, discípulo de Alberto, la habría emprendido a bastonazos con el robot. Según la light, tan sólo habría mandado a destruir al muñeco en cuanto murió el maestro. Pero en ambos casos el hombre mecánico aparecía como un engendro diabólico más que como un triunfo de la técnica. Pasaría mucho tiempo antes de que empezara a mejorar su imagen. El hombre artificial siempre fue una fantasía que resulta tan atractiva como inquietante. Como ocurre con las fantasías, tarde o temprano a alguien pensó en llevarla a la práctica. Desde los autómatas de Vaucanson y Jacquet-Droz (tan admirados en el Siglo de las Luces) hasta esos vistosos robots humanoides que la televisión sueles usar para darles color en sus noticieros, aún suelen provocar ciertos temores. Una de las primeras cuestiones que plantean los robots consiste en decidir si deben imitar la anatomía y la conducta humanas o es preferible que se limiten a cumplir ciertas funciones específicas. Los robots industriales, los que más presencia tienen en nuestro mundo, hace tiempo se han definido por la funcionalidad, pero el robot diseñado para uso doméstico tiende a remedar la forma humana. La otra cuestión atañe al margen de autonomía o de libertad que vamos a darles a los robots para mantenerlos bajo nuestro control y aventar el peligro de que algún día se les ocurra dominarnos. MAQUINAS DE PAPEL Para cuando empezaron a materializarse como seres reales de acero, silicio y plástico, los robots ya habían pasado por todo un ciclo evolutivo en la ciencia ficción. Contra lo que uno se inclinaría a imaginar, tardaron bastante en asumir el papel de monstruos fríos e inhumanos, pero les llevó otro tanto tiempo convencer a la gente de que no lo eran. Los primeros robots de ficción no fueron esos muñecos mecánicos torpes que suele evocar la palabra “robot”. Fueron bellezas femeninas tan seductoras que lograban engañar a los hombres, como esa Coppelia de Hoffmann que popularizó el ballet. Entre las mujeres sintéticas más Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 45 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila atractivas estaban La Eva futura (1886) del poeta Villers de l’Isle Adam, quien le atribuía su creación nada menos que a Edison, o ese simulacro de sensualidad que engañaba al pueblo en el film Metrópolis (1927) de Fritz Lang. FUTURO | CONTACTO: [email protected] Más allá del obvio papel de esclavos, los robots de ficción cumplían funciones de secretarios, mayordomos, guardaespaldas y hasta niñeras, pero no pocas veces se les asignaba el papel de payasos y mascotas, como ocurría en Los robots no tienen cola de Henry Kuttner (1943) o mucho más tarde con el dúo Arturito/Trespo de Star Wars. Pero sin duda los robots de ficción más integrados a la sociedad humana eran los de Isaac Asimov y los de Clifford Simak. Uno de los primeros textos donde se planteaba la posibilidad de que los robots pudieran volverse peligrosos, precisamente por ser tan serviciales, fue Los humanoides (1947) de Jack Williamson. El autor imaginaba que los robots estarían obligados a llevar impreso el mandato de “hacer todo en beneficio de los humanos”. El problema empezaba cuando ellos interpretaban a su modo el concepto de “beneficio”. En cuanto lograban elevar al tope la calidad de vida de sus creadores y garantizarles la seguridad, se empeñaban en reprogramar sus mentes para que no se dañaran a sí mismos y acababan por esclavizarlos. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 46 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El robot benévolo, incapaz de hacer daño a los humanos, siguió su carrera con Helen O’Loy, de Lester Del Rey (1938) y Adam Link, de Earl y Otto Binder (1939), un antepasado del ciborg Robocop. El libro que ejerció mayor influencia fue el de los hermanos Binder. Su título original era Yo, robot, y fue el que le inspiró a Isaac Asimov su cruzada contra el “complejo de Frankenstein”. LAS TRES LEYES Asimov hizo más que eso; se apropió del título de los Binder y lo usó para la antología de cuentos I, robot (1950), con la cual abrió una veta que seguiría explotando exitosamente por el resto de sus días. Gracias a Asimov la opinión pública comenzó a considerar seriamente la integración del robot “amistoso” en la vida diaria. La paradoja es que ahora que la robótica ha llegado a ser una carrera de ingeniería, existe en Massachusetts una empresa que entre otras cosas fabrica robots de uso militar pero se llama precisamente iRobot Corporation. Asimov, que se pasó la vida vendiendo la idea del robot pacífico, no imaginaría que una docena de años después de su muerte sus robots se volverían malvados, en la película del 2004 que se basó en su libro. Fue otro efecto del clima paranoico post 11 S, que también se ensañó con los extraterrestres de ficción. Asimov hizo dos contribuciones a la idiosincrasia robótica. Una fue la “positrónica”, una suerte de electrónica imaginaria que usa positrones en lugar de electrones. La otra fueron las Tres Leyes, cuyo enunciado le fue prácticamente dictado en 1940 por el legendario editor Joseph W. Campbell. Las tres leyes de la robótica (Asimov fue quien inventó la palabra) eran los axiomas de seguridad que debían presidir el diseño de cualquier robot: no hacer daño a los humanos, tanto por acción como por omisión; ejecutar las órdenes humanas y preservar la propia integridad. Las leyes formaban una axiomática coherente, de manera que el cumplimiento de una de ellas no podía contradecir a las otras dos. No conforme con esto, Asimov les añadió la Ley Cero, que en realidad sólo explicitaba a la primera, y se pasó el resto de sus días pergeñando historias –generalmente acertijos policiales de estilo clásico– cuyo el núcleo era la aparente violación de una ley robótica. MAQUINAS DE SILICIO A todo esto, la electricidad y la electrónica ya permitían pensar en robots con capacidades muy superiores a cualquier marioneta mecánica que se hubiese podido concebir en el pasado. La informática permitiría dotarlos de un sistema nervioso y hasta incorporarles las leyes para cuando llegaran a tomar decisiones. En una feria industrial de Londres de 1932 ya se exhibían algunos robots. En la de Nueva York de 1939 la estrella fue Elektro, de Westinghouse, que era capaz de efectuar 26 movimientos distintos y ejecutar órdenes. Pero el complejo de Frankenstein aún seguía estando presente, como lo prueba una leyenda urbana de la época; se decía que un robot exhibido en la Feria de Chicago había matado a su propio creador. Uno de los primeros robots de uso práctico, bastante anterior a los soldadores y pintores que invadirían la industria automotriz, fue el Mobot de Hughes Aircraft (1960), diseñado para tareas peligrosas o insalubres. Años más tarde, los accidentes laborales que ocurrían cuando algún robot industrial se descontrolaba volvieron a invocar viejos fantasmas y se comenzó a pensar en algo parecido a las tres leyes. Al igual que los electrodomésticos o los autos, los robots debían ajustarse a normas de seguridad. Pero considerando que ahora son capaces de tomar decisiones, las preguntas inevitables parecen ser: ¿Conoce un robot todas las maneras (físicas o psíquicas) en que un ser humano puede ser dañado? ¿Cómo puede entender las órdenes humanas y decidir si ejecutarlas o no conforme a un sistema de normas, si a veces las órdenes resultan confusas para nosotros? El principio asimoviano que impide hacer daño a los humanos fue violado desde el momento en que aparecieron los robots militares, que en su mayoría son máquinas de matar. Philip Dick los había imaginado, y algunos escritores más suspicaces que otros previeron que en algún momento los recaudos de Asimov serían obviados. Uno de ellos fue el escéptico John Sladek, que en Tik Tok (1983) imaginó que los “circuitos asimovianos” que hacían inocuos a los robots podían ser neutralizados para el caso de ser empleados para la guerra. Nadie lo tomó en serio, porque Sladek era el mismo que en La Gran Muralla de Méjico (1973) había Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 47 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila imaginado eso que sus gobiernos harían veinte años después. También se habían reído en los ’50, cuando Kurt Vonnegut hablaba de “veteranos de Afganistán”... MAQUINAS DE GUERRA Peter Warren Singer es hoy considerado el mayor experto en guerra robótica del mundo. Con menos de cuarenta años y un decidido aspecto de nerd, es quien coordina las políticas de defensa de Obama, bajo cuyo gobierno se ha disparado el uso de los robots de guerra. Autor de Wired for War (2009), Singer parece expresar más dudas que convicciones en la conferencia de promoción de su libro, que aún se puede ver por Internet. Estados Unidos, sostiene Singer, es hoy la mayor potencia robótica. Tan sólo en el frente de Irak ha desplegado más de doce mil robots de veinte variedades distintas. Aparte de los drones, de los que hablamos en una nota anterior, Singer nos ofrece un vistazo de los artefactos de tierra, a través de los videos de presentación, que omiten los detalles técnicos pero no dejan de resultar bastante preocupantes. Los robots de tierra más usados en Irak y Afganistán son aquellos que se usan para desactivar o detonar bombas de fabricación casera, conocidos hace tiempo en todo el mundo. Algunos parecen juguetes que se lanzan con la mano, como el planeador Raven y el explorador Crow, usado para el reconocimiento del terreno enemigo. La plataforma Sword, montada sobre orugas, puede ir equipada con ametralladoras o lanzacohetes. Más curiosos son el Crusher y el Bug Dog, que corren velozmente sobre sus cuatro patas, como si fueran perros o caballos. Ante este despliegue de máquinas bélicas, Singer se cree autorizado a anunciar que el monopolio humano de la guerra está terminando. Para aquellos que desearíamos que se acabaran las guerras, nos ofrece una reflexión sobre la innata agresividad humana, que siempre sirve para justificarlas. A continuación, Singer da lugar a las objeciones. Cuenta que un periodista árabe le dijo una vez que los combatientes islámicos veían esas armas como una muestra de cobardía, lo cual en lugar de intimidarlos los enardecía aún más. Reconoce que manejar las acciones bélicas desde una oficina implica un distanciamiento bastante psicopático. Su parecido con los videojuegos crea una suerte de pornografía de la violencia donde nada parece ser real. Un oficial, recuerda Singer, fue juzgado en Irak por haber ametrallado por error a una patrulla aliada. Pero ¿quién se hubiese hecho responsable si el error lo hubiese cometido un dron? Por otra parte, los robots no escapan al destino global, y suelen depender tanto del hardware chino como del software indio. Considerando que también están sometidos a la ley de Moore, que tiende a abaratarlos y multiplicarlos, nada impide que en el mediano plazo estén al alcance de cualquier Unabomber o terrorista aficionado. También pueden fallar, como reza el axioma de TuSam: Singer cuenta que alguna vez un robot se enloqueció durante una demostración y comenzó a disparar balas virtuales como en cualquier película de acción. http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/futuro/13-2816-2013-03-08.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 48 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Final abierto La ficción y el malestar de la abundancia Por Verónica Chiaravalli | LA NACION Un escritor argentino muy popular se lamentaba en privado: "Cada vez que entro en una librería y veo los estantes y las mesas rebosantes de novelas que acaso nadie compre, muchas de ellas seguramente buenas, merecedoras de lectores atentos, me pregunto qué sentido tiene seguir escribiendo y agregar una historia más". El brote melancólico era injustificado en su caso (cada vez que publica un libro, inmediatamente se ubica entre los primeros puestos de las listas de best sellers ). Sin embargo evidencia los síntomas de un agobio que todo amante de la literatura conoce: la abrumadora cantidad de ficción que nutre las librerías sin cesar es inversamente proporcional al tiempo escaso del que se disponer para leer. La semana pasada, en el suplemento Babelia, de El País de Madrid, el escritor británico Ian McEwan planteaba un problema similar pero aún más provocativo porque, como novelista, no se pregunta por qué escribir ficción sino más bien por qué leerla, consciente de que el interrogante no recae sólo sobre sí mismo sino que entra como un proyectil en la desarticulada comunidad de los lectores del mundo. Dice McEwan: "Mi corazón de escéptico flaquea cuando me acerco a la sección de ficción de una librería y veo [...] las frases publicitarias sobre las cubiertas (´Él la quería, pero ¿ella lo iba a escuchar?'), los resúmenes de argumentos en las solapas, con su solemne uso del presente: ´Henry abandona su matrimonio y se embarca en una serie de salvajes...' [...] Tengo 64 años. Con suerte, podrían quedarme aún unos 20 años de lectura. ¡Quiero aprender cosas del mundo! Quiero leer a cosmólogos que me hablen de la creación del tiempo, a los analistas del Holocausto, al filósofo que se ha emparentado con la neurociencia, al matemático capaz de describir la belleza de los números al más zopenco, a los aficionados a la guerra civil inglesa". McEwan reniega de la ficción hasta que, promediando su artículo, descubre buenas razones para regresar como lector al redil de la narrativa. La reconciliación es obra de su relectura de dos relatos breves, uno de Nabokov y otro de Updike, en los que McEwan se conmueve no ya con la tensión dramática o la originalidad anecdótica de los textos, sino con la presencia iluminadora de pequeños detalles, hallazgos en el uso del lenguaje que muestran "el generoso talento de la ficción para anotar la microscópica celosía de la conciencia, la letra pequeña de la subjetividad" . Los corazones díscolos siempre encuentran la manera de volver a su pasión sin sentir que se han traicionado a sí mismos. Poseído de gozoso entusiasmo, el escritor argentino ya trabaja en su nueva novela. Afortunadamente.. http://www.lanacion.com.ar/1560843-la-ficcion-y-el-malestar-de-la-abundancia Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 49 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila “El teorema del patito feo” Encuentros entre la ciencia y los cuentos de hadas En adelanto especial para Futuro, aquí va un fragmento del capítulo “Y vivieron felices para siempre... y sin terapia de pareja (aunque con molestias y síndromes diversos)”, del libro de Luis Javier Plata Rosas, un nuevo volumen de la colección Ciencia que ladra. LA PRINCESA, EL GUISANTE Y EL SINDROME DE FIBROMIALGIA Hans Christian Andersen describe el caso clínico de una paciente, cuya identidad decidió mantener en el anonimato, que aseguraba con vehemencia ser la auténtica hija de un rey. El expediente es conocido en los archivos médicos como “La princesa y el guisante”. De acuerdo con Andersen, el príncipe de cierto reino quería casarse con una verdadera princesa y, dado que en sus dominios no contaba con laboratorios de química sanguínea ni con equipo para pruebas de paternidad genética como las exigidas por sus hechizadas groupies al príncipe del pop, Justin Bieber, la sabia reina madre colocó un guisante debajo de veinte edredones y veinte colchones para ver si la supuesta princesa en realidad lo era, pues es de todos conocido que estas jóvenes tienen una piel “ultramegahipersensible” como consecuencia de su nacimiento entre pañales de seda y por haber sido condenadas de por vida a abstenerse de realizar cualquier tipo de trabajo manual. A la mañana siguiente, la paciente sometida a la reina de las pruebas –o a la prueba de la reina, como prefieran– se quejó de no haber podido pegar ojo en toda la noche y de tener el cuerpo lleno de magulladuras y moretones por la presencia de un objeto duro en su lecho. La medicina moderna ha concluido que la princesa sufría de lo que se conoce como síndrome de fibromialgia, un trastorno no contagioso que afecta a menos del 5 por ciento de la población general (en este porcentaje seguramente estaban las princesas verdaderas), que es más común en mujeres que en hombres, en una proporción de 9 a 1. Puede ser causada o agravada por estrés, sueño deficiente y exposición excesiva a la humedad o el frío (recordemos que Andersen dice que “el agua le chorreaba por el cabello y los vestidos” a la paciente debido a la lluvia de una tormenta), es muchas veces más frecuente entre miembros de la misma familia (la Familia Real de la princesa), se caracteriza por hipersensibilidad en la piel, dolor prolongado en todo el cuerpo, fatiga y pérdida del sueño. Como si esto fuera poco, varios pacientes con fibromialgia experimentan dificultades para concentrarse y pérdida de la memoria a corto plazo (esto explica qué hacía en medio de la noche una princesa sola y perdida Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 50 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila tocando la puerta de una ciudad que no era la suya). Un doctor no habría expuesto mejor los síntomas como lo hizo Andersen, quien, como bien termina su cuento, dice: “Esto sí que es una historia, ¿verdad?”. Pasemos al consultorio con nuestra segunda paciente, toda una consentida en medicina. “CENICIENTOLOGIA”: ¿UNA NUEVA ESPECIALIDAD MEDICA? En el año 2005 Stewart M. Cameron, especialista en medicina familiar, realizó una revisión exhaustiva de todos los artículos médicos publicados en los cincuenta años previos en los que se mencionara a Cenicienta. Descubrió que, como si de bacterias se tratase, los artículos en los que se la mencionaba crecían en número de manera exponencial, duplicando su total cada década, y que podían dividirse en cinco géneros distintos dentro de la cada vez más popular “especialidad médica” de la Cenicientología: 1. Como metáfora de descuido o abandono en programas, especialidades, disciplinas dentro de una especialidad o enfermedades. Así, nos encontramos con títulos como “Una perspectiva optimista: Medicaid como Cenicienta”, “Obstetricia. Cenicienta de la medicina”, “Cuidado monitoreado de anestesia. ¿Una Cenicienta de la anestesiología?” y “Fibromialgia. La Cenicienta del reumatismo”. 2. Asociada a algún rasgo característico de su historia o de su físico, como en “Diálisis peritoneal: Cenicienta o princesa” o “Más Cenicienta que hermanastra fea” (por cierto, sus hermanastras no eran feas en la versión de los Grimm, quienes las describen como “de rostro bello y blanca tez”, pero si no lo recordamos así culpemos nuevamente a Disney, ese Gengis Kan de los cuentos de hadas, como veremos en el capítulo 5). 3. Como metáfora de transformación, al estilo del pasaje “de oruga a mariposa”, en títulos como “Esperanza renovada para pacientes con cáncer avanzado en células renales: Cenicienta llega a la mayoría de edad” (con un título tan largo, sería raro que no envejeciera). 4. Mezclada con otros personajes como el Patito Feo, Aquiles y su tendón, la Abeja Reina y hasta Catalina (la teatral “anti-Cenicienta” protagonista de La fierecilla domada) y la Cordelia del Rey Lear, de Shakespeare, con títulos no tan shakespeareanos como “Neurotoxicología: de Cenicienta al secreto de Cordelia”. 5. Para describir fatiga muscular. Una asociación de ideas nada sorprendente, considerando que Cenicienta pasaba “el día entero ocupada en duros trabajos” (Grimm y Grimm), “fregaba los pisos y la vajilla”, “limpiaba los cuartos de la señora y de las señoritas, sus hijas” y “planchaba la ropa de sus hermanas y plisaba los adornos de sus vestidos” (Perrault). Inspirados en tan esclavizante jornada, en 1991 los investigadores en fisiología humana propusieron la llamada hipótesis de Cenicienta. Para entender la hipótesis de Cenicienta, supongamos que pasamos, tal vez no todo el día, pero sí varias horas realizando una actividad que, aunque no requiera que usemos demasiado nuestros músculos, sí demanda que algunos de ellos trabajen de manera continua y prolongada (un caso típico es trabajar sentados frente a una computadora con la espalda y el cuello encorvados), lo que en términos fisiológicos significa que estos músculos están contraídos por una actividad prolongada de baja intensidad de sus unidades motoras. Nuestras unidades motoras se convierten así en pequeñas Cenicientas –que era la primera en levantarse a trabajar y la última en acostarse–, obligadas a permanecer activas hasta que el músculo se encuentra de nuevo totalmente relajado (en nuestro “caso de la vida real” hasta que, horas después, finalmente dejamos de trabajar frente al monitor). De hecho, a esas unidades motoras también se les conoce como unidades motoras de Cenicienta, que están en riesgo constante de dañarse por la acumulación de iones de calcio, que, junto con los iones de sodio y potasio, son los que regulan la contracción muscular, y de provocarnos los dolores de cuello y espalda conocidos por todos –o casi todos– los afanosos oficinistas. Además de la hipótesis de Cenicienta, existen tres condiciones médicas que llevan el nombre de este personaje: la dermatosis cenicienta o eritema discrómico perstans, que es una hiperpigmentación por exceso de melanina, cuya causa se desconoce y que afecta sobre todo a personas sanas de piel oscura, el síndrome de Cenicienta, en el que mujeres jóvenes se quejan de falsos maltratos físicos y mentales propinados por sus madrastras –y padrastros–, y el efecto Cenicienta, del que hablaremos en el capítulo 3. Por el momento, llegó la hora de hablar con pelos y señales de nuestra tercera paciente. La manzana envenenada de Blancanieves, ¿era sidra adulterada? Más tardó la bella Blancanieves en probar un bocado de la manzana que en desmayarse, quedar más lívida que su nombre y permanecer como muerta hasta que... bueno, todos sabemos el final. De haber vivido en esa época el gran investigador Hércules Poirot –o, en su defecto, la escritora y especialista en venenos Agatha Christie–, ¿quién puede asegurarnos que el cuento de hadas no se habría transformado en una historia de Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 51 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila detectives? Seguramente Poirot habría puesto a trabajar sus “pequeñas células grises” y, basándose en otro misterioso caso con características similares, sospechado que los siete enanos mentían o se engañaban a sí mismos –pues ninguno había sido testigo directo de que Blancanieves mordiera la fruta–. Tal vez su madrastra había sido culpada injustamente –razonaría Poirot– y, en realidad, deprimida por tener que esconderse en una casa en la que era obligada a hacer las faenas domésticas, la señorita Nieves había ingerido sidra adulterada por... ¿ignorancia o intento deliberado de suicidio? Nunca lo sabremos. Lo que sí sabemos es que a principios del siglo XXI un trabajador de 23 años se presentó en un hospital para ser tratado, luego de haber pasado dos días con pensamientos confusos (no sabemos si confundía las diez u once dimensiones de la teoría supersimétrica de cuerdas o si se trataba de otro tipo de confusiones), somnolencia y un arrastre de las palabras al hablar. Sin necesidad de un Poirot, confesó haber consumido, dos días antes de su ingreso al hospital, doce unidades de alcohol (una unidad de alcohol es aproximadamente un vaso pequeño de vino). Como lo recomendable por los médicos es consumir no más de tres unidades por día, no necesitamos ser detectives para deducir que nuestro paciente se había pasado de copas. Una resaca no es por lo general razón suficiente para ser hospitalizado, siempre y cuando el alcohol no esté adulterado. El problema es que, a falta de etanol (alcohol etílico, que es lo que contienen las bebidas alcohólicas; aunque, por supuesto, en concentraciones no mayores al 50 por ciento), nuestro paciente ingirió etilenglicol, un químico de sabor dulce que, entre otros productos, está presente en detergentes, pinturas y cosméticos. Doce días después de haber presentado los primeros síntomas de intoxicación por etilenglicol, el paciente quedó paralizado. Una electroencefalografía mostró que tenía actividad cerebral normal y, por lo tanto, al igual que Blancanieves, seguía vivo. Los hermanos Grimm no nos dicen por cuánto tiempo estuvo como muerta pero, dado que los enanitos la llevaron en un ataúd de cristal a la cima de una montaña y que iban a verla todos los días, podemos suponer que no fue poco el tiempo que pasó en ese estado. Nuestro paciente envenenado con etilenglicol “despertó” de su estado luego de dos meses y, a diferencia de Blancanieves, lo hizo espontáneamente y sin necesidad de un beso. Eso sí, tardó dieciséis meses en recuperarse casi por completo (el “casi” es porque nunca recuperó la audición), aunque dudamos de que un beso –así fuera de Monica Bellucci en su papel de malvada reina en la película Los hermanos Grimm– sirviera para acelerar en algo el proceso. Quien culpe a los reales padres de negligencia o maltrato en cualquiera de los expedientes clínicos aquí examinados no tiene más que dar vuelta a la página para recordar que, para los niños que habitaban en el País de las Hadas, este territorio no era limítrofe con el Edén o que, en todo caso, obtener la visa para entrar a él era bastante difícil si uno no tenía un hada madrina. http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/futuro/13-2817-2013-03-08.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 52 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila De chicas frágiles y corazones rotos La afinidad entre los personajes de dos novelas: "Desayuno en Tiffany’s", de Truman Capote, y "Que el mundo me conozca", de Alfred Hayes. POR SILVANA BOSCHI DESAYUNO EN TIFFANY'S. Audrey Hepburn en la versión cinematográfica de 1961. Es fascinante comprobar cómo algunos escritores muestran en pocos trazos el espíritu de una época. Y más aún cuando dos obras cobran afinidad sin haberse inspirado la una en la otra. Este descubrimiento me sorprendió tras la lectura de Que el mundo me conozca, la novela del inglés criado en Nueva York, Alfred Hayes, publicada aquí hace unos meses por La Bestia Equilátera. La relación entre un guionista y una joven aspirante a actriz, emocionalmente frágil pero obstinada en ser famosa, muestra una historia de corazones rotos donde las fiestas, el alcohol, las chicas hermosas y los hombres exitosos no encuentran una fórmula donde todos salgan ganando (como en la muy vendida trilogía Cincuenta sombras de Grey), sino que se desangran en pequeñas explosiones de almas ambiciosas y frustradas que lamentan haber sido usadas y descartadas por otras almas que ellas mismas pretendieron, de alguna forma, usar. Ambientada en Los Angeles de mitad del siglo XX, la novela de Hayes refleja ese mundo que él tan bien conocía –fue guionista de cineastas famosos– y despliega un personaje femenino y un ambiente que remite a otra criatura frágil y obstinada, la chica de Desayuno en Tiffany’s, la novela de Truman Capote. Este escritor y periodista se consagró con esta novela y con A sangre fría, la non-fiction que sentó las bases del nuevo periodismo norteamericano. Su personaje, Holly, es una joven que escapa a las reglas sociales de Nueva York en los años 40, amante del buen vivir, sin reparos en aceptar dinero de caballeros ni en visitar en la cárcel a un gangster a quien –a conciencia o no– le hace de mensajera. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 53 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Dispuesta a averiguar cuál de los dos personajes femeninos pudo haber inspirado al otro, encontré la afinidad: ambas novelas fueron publicadas en 1958 y sus autores murieron con un año de diferencia: Capote en 1984 y Hayes en 1985. Dos miradas contemporáneas que demuestran la maestría literaria de quienes saben escarbar a fondo en el alma de los personajes. http://www.revistaenie.clarin.com/literatura/chicas-fragiles-corazones-rotos_0_879512045.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 54 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Derecho... Por Mariano Kestelboim * En un escenario de intensa discusión sobre la política económica, grandes medios de comunicación arribaron apresuradamente a un número que llamara la atención sobre un supuesto derroche general provocado por los feriados y desviaron la atención sobre su efecto redistributivo. Difundieron un informe de la consultora Analytica que concluyó que “el costo de cada feriado es equivalente a 4430 millones de pesos”; por lo cual, en 2013, la supuesta merma de producción de bienes y servicios treparía a 84.170 millones de pesos, cifra que representa casi dos veces el gasto público en educación y cultura del Presupuesto nacional 2013. Los cálculos publicados no tuvieron una justificación detallada ni rigurosa y llegaron al absurdo de aplicar una regla de tres simple: dividieron el PBI por 365 y multiplicaron su resultado por la cantidad de feriados. Analytica, que desarrolló un estudio menos simplista y sectorizado, aclaró que, con la metodología lineal, “el costo por día feriado llega a ser de más del doble”. El mensaje fue claro y contundente: a la Nación le sale demasiado cara la política de mayor tiempo de ocio. Esa conclusión está sesgada y es una grosera subestimación de la capacidad analítica de la sociedad en un tema que afecta a todos. Primero, considera que la actividad de todos los sectores cae, excepto la del turismo, que pareciera ser la niña mimada del oficialismo. Segundo, el hecho de que se haya ido extendiendo, en los últimos cuatro años, la cantidad de feriados (de 12 a 19) no implica que las empresas deban contraer su producción. Tercero, su efecto neto en la economía es muy difícil de determinar, dado que depende de múltiples variables imposibles de anticipar y aislar, de impacto simultáneo y, en muchos casos, interdependiente. Cuarto y más importante, la agregación de los feriados provoca una fuerte redistribución del ingreso, tanto por dinamizar el turismo interno y las economías regionales como por mejorar el salario de gran parte de los trabajadores a costa, lógicamente, de las empresas. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 55 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El mito Las compañías programan sus tareas en función de su objetivo de venta. Pueden planificar de muchas formas el recupero del tiempo productivo en caso de que decidan no trabajar un feriado. La manera más económica es a través de la intensificación del trabajo en horarios habituales. Esta variante es común sobre todo en actividades administrativas que, antes o después de los feriados, se recargan. También es importante advertir que la agregación de los feriados fue gradual, no se llegó a un nivel inmanejable y siempre se puede sostener la actividad con horas extras. Como la baja del tiempo laboral por los siete nuevos feriados en relación con el tiempo de trabajo anual es pequeña (entre 2,9 y 3,2 por ciento, según la antigüedad de cada empleado), las firmas en general intensifican tareas, suben horas extras, operan los días feriados o pagan premios por productividad. De ser necesario, a veces pueden optar por sumar turnos o contratar más personal. CASH | CONTACTO: [email protected] Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 56 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Redistribución Los feriados implican, como mínimo, mejores ingresos relativos para todos los empleados con ingresos fijos mensuales (cobran lo mismo por menos días laborales). Por caso, cada nuevo feriado agregado para un empleado administrativo de 1 a 5 años de antigüedad que trabaja de lunes a viernes implica una suba salarial implícita en torno del 0,45 por ciento (varía en función de beneficios específicos de cada rama y no computa los feriados que caen en fines de semana). Así, por este concepto se habrá acumulado, entre 2009 y 2013, una mejora implícita de sus remuneraciones cercana al 2,2 por ciento, en detrimento del margen de ganancia empresarial. Obviamente, el abanico de posibilidades entre las diferentes actividades es amplio y los obreros que reciben pagos por horas extras son los más favorecidos. La Ley de Contrato de Trabajo establece un piso de recargo del 50 por ciento calculado sobre el salario habitual, cuando son de horas extras en días comunes, y del ciento por ciento en sábados después de las 13 horas, domingos y feriados. Hay sindicatos que poseen convenios mejores: los químicos que trabajan en feriados perciben un 300 por ciento de aumento. El encarecimiento de costos laborales, acompañado de records de ventas de casi todos los sectores y un progresivo achicamiento de la rentabilidad (sobre todo de pymes), presiona sobre la necesidad de minimizar costos de intermediación y ganar productividad. La misma puede mejorarse tanto a través de la incorporación de nueva tecnología, como mediante una planificación y reorganización productiva más eficiente y mayores economías de escala. En este punto se requiere un sinceramiento: hay mucho margen en la mayoría de las empresas para ahorrar tiempos operativos y el Estado tiene herramientas de asistencia técnica para reconvertir estructuras de trabajo atrasadas y financiar inversiones. Así, los feriados tendrían el efecto deseado de elevar la calidad de vida como resultado de la reducción de la brecha tecnológica que separa al país de las economías más avanzadas. Este es el principal motivo por el cual los trabajadores de esas naciones, reconocidas por su arraigada cultura del trabajo, poseen 35 días de vacaciones anuales y en Argentina la mayoría sólo goza de una quincena. El mayor costo laboral afecta proporcionalmente más a pymes por tener un uso más intensivo de mano de obra. Por ello, sería relevante la difusión de investigaciones públicas de impacto de las medidas para analizar el fenómeno con mayor rigor técnico. Serían útiles para lo siguiente: determinar el efecto concreto de la incorporación de feriados en cada área, en especial sobre el empleo (según un informe del Ministerio de Turismo, las ramas características del turismo generaban 956.546 puestos de trabajo en 2006); sustentar análisis de políticas públicas que permitan revertir eventuales desigualdades disruptivas del proceso de reindustrialización y brindar un panorama de apoyo al desarrollo de inversiones. Un sesgo llamativo de los análisis publicados fue que, ante una inminente renegociación de paritarias, los referidos aumentos de los costos laborales fueron omitidos, a pesar de su mayor facilidad de cálculo en comparación con los estudios que remarcaron el supuesto recorte en la producción. Beneficios La investigación del impacto de los feriados es muy compleja y costosa. Por lo general, las decisiones de gasto en un contexto de esparcimiento son mayores que en un espacio de trabajo. Los días de descanso, si bien pueden provocar mermas en algunas actividades comerciales dependientes del circuito laboral (viajes en taxis o almuerzos ejecutivos, por ejemplo), la demanda se anticipa o se posterga y el cambio de rutina dispara decisiones imprevistas de consumo y de inversión turística, inmobiliaria y en actividades productivas vinculadas. Además, se genera un reordenamiento geográfico del consumo en localidades no saturadas. Ciudades como Buenos Aires atraviesan un nivel de congestión alarmante, verificado, por ejemplo, en las exponenciales subas de los costos inmobiliarios, que explican gran parte de la creciente dispersión de precios. Un informe del Geenap indica que “el gasto en turismo suele dirigirse hacia sectores con menor nivel de concentración y de ingreso, dadas las características de muchas de las localidades receptoras; llega con más facilidad a los sectores de menores recursos y, por lo tanto, potencia su impacto dinamizador y distributivo sobre la actividad”. No es neutro que millones de turistas transiten las rutas tomando diferentes decisiones de consumo que multiplican la actividad lejos de las grandes ciudades. A la vez, esas escapadas mejoran la calidad de vida de quienes no se van, ya que pueden disfrutar de una ciudad menos congestionada. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 57 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El negocio de los centros turísticos se vuelve menos dependiente de los meses de enero y febrero, lo cual reduce la presión en los precios de temporada, propicia la inversión en infraestructura y genera empleos más estables. Las grandes distancias entre los centros turísticos tradicionales y la Ciudad de Buenos Aires, por caso, incentiva la desconcentración de la oferta a través de la creación de nuevos polos turísticos más cercanos. Si bien aún los trabajadores no terminaron de recuperar la cantidad de días no laborables (vacaciones más feriados), eliminados por la última dictadura y las políticas de flexibilización laboral de los ’90, la nueva modalidad de muchos lapsos cortos de descanso permite una mejor coordinación del tiempo libre de las familias, genera espacios para el desarrollo cultural, impulsa escalas mínimas de actividad en ciertas regiones que no podrían desarrollarse exclusivamente a través del turismo internacional –según la Cámara de Turismo, el 76 por ciento de los turistas movilizados en 2011 fueron residentes locales– y posibilita la preservación de divisas al sustituir turismo interno por externo. Dado el alejamiento de Argentina de los centros económicos mundiales, el mayor costo del transporte requiere diseñar formas no convencionales de promoción del turismo interno. Esto es relevante si se pretende sostener un modelo que, como consecuencia de la recuperación de buena parte del poder adquisitivo de los trabajadores perdido en la convertibilidad y su crisis, provocó tensiones distributivas que contribuyeron a impulsar una apreciación cambiaria que abarata el turismo externo. Detrás de la creencia de que los días feriados implican colosales pérdidas para el país, se halla una visión retrógrada sólo enfocada en el empleado como un haragán. Desgraciadamente, ciertos sectores sociales cuestionan la agregación de días no laborables sin motivos económicos justificados. En una economía global con contradictorias crisis de sobreproducción mezcladas con desesperantes problemas de desempleo, desigualdad y pobreza, la agregación de feriados es una brisa a contramano. Frente al cada vez más hostil mercado laboral en el mundo, es una clara medida a favor del trabajador; en un nivel no exagerado, los feriados permiten una distribución más equitativa sin implicar pérdidas para el conjunto del país como se quiso hacer creer * Coordinador del Departamento de Política Económica de la SID. http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/17-6644-2013-03-08.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 58 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila BIOGRAFÍA DE MARUJA MALLO La musa pintora Pedro da Cruz COMENTANDO LA obra de la artista española Maruja Mallo (1902-1995), Federico García Lorca escribió "…sus cuadros son los que he visto pintados con más imaginación, emoción y sensualidad", mientras que Salvador Dalí -fiel a su genio- caracterizó a la pintora como "Mitad ángel, mitad marisco". Mallo fue una de las artistas españolas más originales y transgresoras, y, a la par de los hombres, una significativa intelectual de la llamada Generación del 27, a la que pertenecieron los mencionados García Lorca y Dalí, así como Ramón Gómez de la Serna, Luis Buñuel, Rafael Alberti y Miguel Hernández. Con estos dos últimos Mallo mantuvo incluso desenfadadas relaciones sentimentales, inauditas para su tiempo, las que serían tormentosas pero muy significantes en el plano artístico. Durante las últimas décadas fueron publicadas varias biografías y catálogos sobre la obra de Mallo. En general se la ha relacionado con el surrealismo, pero han surgido nuevos aspectos de la personalidad y de la evolución de la obra de la artista en estudios recientes, como Maruja Mallo y la vanguardia española, de Shirley Mangini. Esta profesora de la Universidad Estatal de California, Long Beach, es autora de una serie de biografías sobre mujeres destacadas del siglo XX, y estudiosa de la historia de la cultura española contemporánea. Entre otros trabajos ha publicado Rojos y rebeldes. La cultura de la disidencia durante el franquismo (1987) y Las modernas de Madrid. Las intelectuales españolas de la vanguardia (2001). En el prólogo de Maruja Mallo… Mangini destaca el hecho de que su texto es el primero que estudia detenidamente las conexiones entre la vida y la obra de la pintora, así como el importante papel que Mallo tuvo para la evolución de la vanguardia artística española durante los años 20 y 30 del siglo XX. La autora también enumera una serie de aspectos de la carrera de Mallo que considera no han sido analizados con Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 59 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila anterioridad, entre otros, su complicada vida psíquica, la repercusión de la Guerra Civil Española y el exilio en Argentina en la vida y obra de la pintora, y el juzgamiento por su conducta excéntrica luego del regreso a España. LA GENERACIÓN DEL 27. Maruja Mallo nació como Ana María Gómez González, hija de Justo Gómez Mallo y Pilar González Lorenzo, en la localidad gallega de Viveiro, cerca de Lugo. Como muchos otros artistas, por ejemplo Barradas y Picasso, Mallo eligió el segundo apellido paterno como nombre artístico. Como parte de una mistificación de su personalidad -que la artista cultivaría desde joven- cuando le señalaban sus orígenes gallegos Mallo respondía "no soy gallega, soy celta", "soy druida" o "soy internacional". Años más tarde sería reacia a hablar de su vida personal, por lo que siempre afirmaba "mi biografía está en mi pintura". Cuando la familia Gómez González, formada por los padres y catorce hijos, se trasladó a Madrid en 1922 Mallo tenía veinte años. Poco después aprobó el examen de ingreso a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, la principal escuela de arte de España, en la que, según testimonios de la época, las mujeres eran discriminadas por los profesores. El ambiente académico era muy conservador. Se daba preferencia a los temas históricos y religiosos, y no se permitía que los alumnos practicaran "extravagancias pictóricas". Por medio de su hermano Justo, Mallo se relacionó con jóvenes artistas y escritores de la Residencia de Estudiantes de Madrid. Salía frecuentemente con Buñuel, Dalí y García Lorca, y aunque la relación con los hombres era en pie de igualdad, ya que era audaz y desprejuiciada, comenzó a adjudicársele el papel de "musa surrealista" en detrimento de la importancia de su obra pictórica. La autora destaca el hecho de que la artista fue la única mujer que integró la Escuela de Vallecas, fundada en 1927 por el pintor Benjamín Palencia y el escultor Alberto Sánchez. El grupo fue fundamental para el desarrollo del modernismo en España. Ese mismo año, en 1927, Mallo pintó dos de las obras más significativas del comienzo de su carrera pictórica: "La mujer de la cabra" y "La verbena". Mangini también estudia detalladamente la importancia que la relación de Mallo con el poeta Rafael Alberti tuvo para la creación de las obras que integrarían una serie titulada Cloacas y campanarios. Ciertos rasgos fantásticos de los motivos de las obras, aunque también influyó la orientación de los artistas que frecuentaba, fueron la causa de que se asociara a Mallo con el surrealismo, una caracterización que ella nunca aceptó totalmente. Mangini vuelve una y otra vez al papel de musa que le fue adjudicado a Mallo, lo que considera resultado de una sociedad patriarcal, de una época en que los hombres del mundo del arte (profesores, colegas, críticos) consideraban a las mujeres más como inspiradoras que como creadoras. EXILIO Y RETORNO. Durante la Segunda República Española, Mallo se afilió al Sindicato de Artistas Plásticos. Y tras el alzamiento militar de Franco (1936), la artista consiguió escapar a Portugal; llevando consigo una serie de pinturas y dibujos. Luego se embarcó para Argentina, donde llegó en febrero de 1937 y donde se viviría durante casi 30 años. En Buenos Aires se relacionó con un grupo de intelectuales que colaboraban en la revista Sur, entre otros Victoria Ocampo y Oliverio Girondo. Comenzó a pintar la serie La religión del trabajo, y mostró "Sorpresa del trigo" (1936), tal vez su obra más conocida, que muestra una figura de mujer de cuyas manos crecen granos y espigas de trigo. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 60 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Mallo visitó Chile, donde se relacionó con Pablo Neruda, y también estuvo varias veces en Uruguay. En el material gráfico incluido en Maruja Mallo… se ve a la artista en la playa y andando en bicicleta en Punta del Este, donde pasó varios veranos. Durante los años 40 Mallo era un personaje reconocido, tenía una intensa actividad social, y su obra era mostrada y comentada con frecuencia. Pero a principios de los 50 la pintora inició una vida retirada, debido a que, según Mangini, "había dejado de estar de moda", en parte debido a que la intelectualidad bonaerense la etiquetó de frívola. En esa época Mallo comenzó a considerar la posibilidad de retornar a su país, adonde se instaló definitivamente en 1965. Durante una década llevó una vida retraída, pero luego de la muerte de Franco (1975) la obra de Mallo comenzó a ser mostrada en exposiciones colectivas y retrospectivas. En esa época presentó la serie Los moradores del vacío, con motivos relacionados a lo esotérico, la exploración del espacio y la ciencia ficción. Con el paso del tiempo Mallo sería considerada una figura extravagante, un personaje que estuvo a punto de "devorar" a la artista. MARUJA MALLO Y LA VANGUARDIA ESPAÑOLA, de Shirley Mangini. Circe Ediciones, 2012. Barcelona, 414 págs. Distribuye Océano. http://www.elpais.com.uy/suplemento/cultural/la-musa-pintora/cultural_700115_130308.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 61 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Pobreza, indigencia y distribución del ingreso Horizonte de igualdad La llamada cultura del trabajo no se desalienta por políticas de igualdad de derechos, sino por la persistencia de altos índices de desempleo y de desigualdad como los existentes en el período neoliberal. Por Carlos Andujar * “Debemos dejar de culpar a los pobres por su pobreza”, propone Andújar. La lucha por la justicia social, la igualdad y el bien común no es un camino fácil. La construcción de sentidos y significaciones en torno de la pobreza y la desigualdad condicionan y orientan, habilitando unas y descalificando a otras, las políticas públicas que intentan intervenir en tal situación. Existen distintos modos de plantear el problema y su definición no es independiente de las estrategias de intervención. Los primeros sistemas de asistencia a los pobres estaban preocupados por diferenciar a los pobres “merecedores” de la ayuda estatal de los que no lo eran. En Inglaterra, por ejemplo, en el siglo XIX se aplicaba el test de la casa de trabajo, para determinar si los mendigos eran o no indigentes. Las condiciones de trabajo dentro de la casa (picar piedras para los hombres e hilar para las mujeres, incluyendo la prohibición de derecho al voto si en efecto lo tenían) eran menos favorables que las que recibía un trabajador de bajo salario en el mercado. Si el solicitante estaba dispuesto a trabajar bajo tales condiciones podría entonces ser considerado un indigente. El fin que perseguían dichas políticas de bienestar no era sólo “encarcelar” a los indigentes, sino principalmente no afectar al mercado de trabajo y concomitantemente culpabilizar de la pobreza a los mismos pobres. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 62 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Muchas frases en la actualidad que inundan el sentido común responden a dicha lógica. Hay una pobreza “digna” y otra “no digna”, con los planes trabajar se destruye la “cultura del trabajo”, “tienen hijos para cobrar más subsidios”, “no trabajan porque son vagos”, son sólo algunas. En realidad todas ellas esconden a un pobre que es siempre un otro y nunca un nosotros. En este sentido, nos permitimos disentir con algunas de las ideas del artículo “Igualdad y equidad” de Daniel E. Novak publicado en este suplemento en la edición del 12 de febrero pasado. En dicho artículo el autor presenta al concepto de equidad como superador del de igualdad, dado que el primero abre la posibilidad de intervenir en las desigualdades de origen. Sin embargo, la noción de equidad aparece fuertemente ligada, en la década de los noventa, a la de igualdad de oportunidades y juntas fundamentaron las políticas sociales focalizadas. Dichas políticas, si bien reconocían las desigualdades, pretendían solucionarlas con intervenciones dirigidas estrictamente a las poblaciones que, oportunamente, eran definidas como “en riesgo”, sin cuestionar ni modificar las relaciones y los modos de producción capitalistas para las que se recomendaba al mercado como única fuente de eficiencia para la distribución de los recursos. De este modo, mientras el libre juego de la oferta y la demanda (que no es libre ni es un juego) producía las desigualdades, las políticas focalizadas no sólo no las resolvían sino que las profundizaban, naturalizándolas, atribuyendo su fracaso a las características o actitudes de la población afectada, terminando por culpabilizarlas de su propia desgracia: “no quieren trabajar”, “se gastan el dinero en otras cosas”, “no tienen valores”, “tienen muchos hijos...”. Por otro lado, el autor, refiriéndose a los distintos criterios con los que una sociedad puede organizar la distribución de la riqueza y el ingreso en una sociedad, argumenta que si la misma se realiza exclusivamente a partir del criterio de dar a cada uno según sus necesidades con independencia de su contribución, se desalentaría la cultura del trabajo. La llamada cultura del trabajo no se desalienta por la implementación de políticas de igualdad de derechos sino que lo hace a través de la persistencia de altos índices de desempleo y de desigualdad como los presentes en todo el período neoliberal. Lo que destruye la esperanza de construir bienestar a partir del trabajo es ser tercera generación de desempleados y ver cómo día a día se cierran todas, absolutamente todas las puertas; y no los planes sociales, los subsidios o los beneficios que intenten paliar tal situación. No puede construirse ninguna política redistributiva duradera y profunda combinando criterios liberales y los que no lo son. Debemos recuperar nuestro sentimiento de indignación en relación con la existencia de la pobreza y la indigencia, animándonos como sociedad a decir que la igualdad es el único horizonte posible para tratarnos verdaderamente como iguales. Debemos construir políticas públicas de igualdad con los excluidos y no para los excluidos, otorgando la palabra (no sólo como destinatarios pasivos) a los movimientos territoriales, a los y las luchadoras sociales y comunitarias, a los trabajadores, a los pueblos originarios y a todos aquellos que, de un modo u otro, sufren las consecuencias de la desigualdad. Debemos dejar de culpar a los pobres por su pobreza. El problema no son los valores de los grupos excluidos sino los valores de aquellos grupos de personas que han tomado las decisiones políticas y económicas que los excluyeron. Más que estudiar a los pobres, como dice Kozol, debemos estudiar la indiferencia casi patológica de los ricos y sus aliados que impide construir ese nosotros tan imprescindible para continuar andando * Docente UNLZ - FCS. [email protected] http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/40-6657-2013-03-08.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 63 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Sobrevivir en un mundo conflictivo Las relaciones internacionales y el papel de los partidos políticos son el eje de un trabajo de María Cecilia Míguez que explica los vaivenes de la conjunción económica, política y estratégica de la Argentina desde 1983. POR Hector Pavon RAUL ALFONSIN Y DANTE CAPUTO EN 1983. El canciller reivindicaba las banderas del yrigoyenismo. "Uno de los objetivos del libro es poder mirar tres grandes aspectos de la política exterior: el económico, el político diplomático y el estratégico militar para poder sacar una buena conclusión”. El subrayado es de María Cecilia Míguez, doctora en Ciencias Sociales y autora de Los partidos políticos y la política exterior argentina (editado por el sello Ariel). El investigador en Historia económica Mario Rapoport prologó el libro y allí señala: “Como lo plantea María Cecilia Míguez en ese luminoso análisis histórico y teórico de una dura época que no debemos olvidar, vivimos en un mundo multipolar, conflictivo y caracterizado por profundas crisis y asimetrías, donde se impone la necesidad de revalorizar a la Argentina como nación y de forjar un rol autónomo en el escenario internacional, fundamentos imprescindibles para construir relaciones más igualitarias con todos los países y, en especial, con los de nuestra propia región”. Sobre el papel de los gobiernos y los partidos políticos en democracia y su actuación en el plano de las relaciones exteriores se explayó Míguez. -¿Cuál fue el desafío más importante que tuvo Alfonsín y la UCR en su relación con el mundo en el período 1983-1989? -Creo que tuvieron dos desafíos muy grandes en lo que hace a la relación con el sistema internacional, con el mundo y con las potencias, que son Malvinas y la deuda externa. De Malvinas, la propuesta era su reivindicación, de no abandonar el tema. En el caso de la deuda, denunciar la parte ilegítima. En los dos casos se ve el abandono de esos dos postulados originales. Después del intento de armar un club de deudores en Cartagena, se llegan a acuerdos con el FMI a partir del 85 con el plan Austral y de ahí en más se reconoce esa deuda y se estatiza la deuda privada. Y se produce un desencanto respecto de lo que significaban las banderas tradicionales del radicalismo y lo que le va pasando a ese partido a lo largo de los 80 y los 90. Como se van derrotando esas líneas que por ahí sí tenían que ver con un pensamiento más de autodeterminación nacional o Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 64 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila de defensa de la soberanía y se imponen otras de corrientes más liberales. -¿Y qué pasa con el PJ derrotado? ¿Qué papel juega? -El peronismo más progresista es derrotado, es blanco central de la dictadura, con lo cual lo que sucede en muchos casos es que las dirigencias que quedan, sobrevivientes de ese proceso, están en cierta medida en situación de posible cooptación. No es solamente que hayan sido dirigencias cooptadas por los intereses de las potencias extranjeras, sino que hay una connivencia de intereses. Lo que queda es afín a ser sumado a lo que era toda la transformación que ocurre en el plano internacional pero también en el plano local. Esto implica poder entender por qué sectores de las dirigencias políticas de partidos, que tradicionalmente habían defendido determinadas banderas, las van abandonando, se fracturan esos partidos y se produce una especie de acuerdo o consenso entre líneas hegemónicas de ambos partidos. Eso lleva a que tengamos 10 años, desde el 91 hasta el 2001, de hegemonía neoliberal indiscutida con pequeños debates, que no son significativos en términos de proyecto de país. -¿Y la UCR acuerda con las políticas de la Cancillería? -Desde el inicio de la gestión de Alfonsín se abren muchísimos frentes de disputa y de discusión en el radicalismo. Entonces, los ministerios de ese gobierno, también se arman teniendo en cuenta la influencia de distintas líneas. Caputo se maneja desde el principio en buena relación con Alfonsín por supuesto, y desde lo discursivo lleva adelante banderas históricas, tradicionales del yrigoyenismo. Pero, desde el año 84, también tiene muy buenos vínculos con lo que van a ser los capitanes de la industria, que empiezan a tener también cada vez más lugar en la formulación de la política económica. El primer ministro de Economía, que es Grinspun, es reemplazado rápidamente, después del fracaso del Club de deudores, ese primer plan económico. Que en realidad era un plan económico que había sido consensuado con la multipartidaria, donde también estaba el PI. Ese primer plan fue consensuado, pero el segundo es el Plan Austral, que es de Sourrouille, que es un técnico, no un hombre de raigambre radical, eso sí va a provocar un cimbronazo en los sectores más afines a elegir un ministro que fuera del riñón del partido. Sourrouille viene con un plan económico bajo el brazo que fue preacordado con el FMI. -Y en los 90 hay dos actores importantes en el área de relaciones internacionales que son Guido Di Tella y Cavallo... -Cavallo es un hombre cuyo recorrido es muy interesante para entender este consenso neoliberal y esta transformación al neoliberalismo, es un hombre colocado como diputado de Córdoba con una candidatura financiada por la Fundación Mediterránea. En el momento de crisis del gobierno de Alfonsín, él ya hace gestiones en el FMI para evitar que se le siguiera prestando dinero a la Argentina. Es aquel momento en que Pugliese va al fondo y dice, les hablé con el corazón y me respondieron con el bolsillo. Cavallo pasa a ocupar la parte de relaciones exteriores con una excelente relación con los bancos occidentales, con el FMI, con bancos de potencias europeas, con lo cual es el gran artífice de un gran viraje en todas las relaciones internacionales argentinas. Si bien el plan de convertibilidad es posterior, la reforma del Estado del año 89, esas grandes transformaciones se dan apenas asume Menem y Cavallo es quien tiene los primeros gestos de alineamiento automático con los EE.UU. De allí surge: el envío de tropas al Golfo Pérsico, los acuerdos por Malvinas, aplicando la fórmula del paraguas de soberanía que había sido ideada por Lucio García Del Solar que era funcionario del gobierno radical, y la desactivación del misil Cóndor, el retiro de No Alineados de 1991, el cambio de voto en la ONU respecto de Cuba. -¿Y la Alianza logra generar una identidad propia con Rodríguez Giavarini en la Cancillería? -Giavarini en realidad es un economista vinculado a De La Rúa y cuando asume dice basta de relaciones carnales, vamos por las relaciones intensas... La Alianza mantiene una relación igual de estrecha con las grandes potencias. Es cierto que intenta un acercamiento a Brasil, un relanzamiento del Mercosur, que no se traduce en nada finalmente. La relación con el FMI y la política económica es la misma, a pesar de que se pueda ver un cambio en el reclamo de Malvinas, después queda muy diluido. Los ejercicios militares conjuntos con EE.UU., eso siguió igual. Hay una cantidad de elementos que hablan de una gran continuidad. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 65 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila -En el período 2001-2003, ¿qué pasa con los puntos importantes de las relaciones exteriores argentinas? -Los ejercicios militares disminuyen fuertemente por un tema de presupuesto. En el caso de Malvinas, todo continúa sin ningún cambio, en el de la deuda empieza primero el momento que se dice que no se va a pagar, el default y a partir de ahí, con Lavagna, las negociaciones por el canje de deuda, ese pasa a ser el eje. Uno de los grandes debates de la etapa post 2001 es del canje de la deuda externa y la relación con los organismos internacionales de crédito. -A partir de 2003, ¿los cambios son tan importantes cómo los ocurridos en los 90 en las relaciones exteriores? -Ante la declinación de la hegemonía de los EE.UU., lo que se produce es un redireccionamiento de las relaciones internacionales argentinas hacia otros países: América Latina, China. Si bien EE.UU. es un actor ineludible y principal en las relaciones de Argentina con el mundo, se suman nuevas relaciones, se orienta el esfuerzo de política comercial, estratégica, diplomática, hacia otros países. América Latina ha cobrado un protagonismo inusitado respecto de los últimos 30 años. En el marco de lo que es Unasur, la relación con Venezuela, con Bolivia, con Ecuador, eso es un cambio importante. Y aparece un actor clave que es China y luego el Este del mundo. Muchos analistas de las relaciones internacionales, que en su momento promovían el alineamiento automático con EE.UU., ahora sostienen que es una potencia en decadencia y que hay que alinearse con China, la potencia en auge. Lo cual es un error, pensar que uno va a generar mayor grado de autonomía cambiando de potencia hegemónica. -¿Y qué importancia tiene Europa? Alfonsín, Menem viajan allí antes de asumir... -Europa es un actor económico central para las relaciones argentinas, pensemos desde la génesis de la Argentina contemporánea. Las relaciones de Alfonsín con la socialdemocracia europea generan expectativas de tener condiciones para mejorar la deuda por ejemplo, cosa que también fracasó. Porque también Europa vive un proceso de avance del neoliberalismo, aun los países gobernados por la socialdemocracia. Europa hacia fines de los 80 empieza a orientar sus inversiones hacia América Latina y es uno de los principales actores que reclaman la posibilidad de acceso del capital extranjero en condiciones de privilegio, como hacen en los 90, es el continente principal beneficiario del proceso de privatización. Y en el momento actual Europa está viviendo una crisis feroz, entonces las relaciones económicas, en lo que hace al comercio exterior, están orientándose a China. -¿Qué importancia tiene EE.UU. para el gobierno actual? -Es una relación que tiene puntos de tensión y de encuentro, según los distintos momentos. Desde la primera etapa de Cristina ha tenido más acercamiento o más tensión, pero es cierto que algunas medidas políticas que se han tomado muestran determinado nivel de distancia de 2003 para acá respecto de lo dictaminado por EE.UU.. Lo más significativo es el fracaso del ALCA en 2005. -Donde hay una decisión política en bloque... -Pensemos que hoy todo lo que es Unasur, CELAC, se han manifestado a favor del reclamo argentino por la reapertura del diálogo con Gran Bretaña por Malvinas. Lo mismo el Grupo de los 77 más China, eso también es resultado de una política exterior que busca diversificar puntos de apoyo. -¿Y el Mercosur? -En el Mercour hay ahora una alianza estratégica muy importante con Brasil, que se ha visto reforzada por la coincidencia en algunos aspectos entre los primeros mandatarios. Creo que la mejor opción es la de una integración regional más amplia, pensando especialmente en Unasur. -Hay una palabra que aparece al principio y al final del libro, que es autonomía. ¿Cómo ha variado el significado de esa palabra en tre los 80 y el presente? -La búsqueda de la autonomía, podemos decir que es un objetivo de todos los países que buscan autodeterminarse. Pero es un tema fundamental para los países dependientes, que no la tienen de por sí, pensemos que la Argentina fue una colonia, ha tenido que conseguir su independencia, con lo cual la Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 66 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila dependencia es algo previo. Y debe conseguir su autonomía en función de recuperar resortes estratégicos y fundamentales del manejo de su economía, de su política, de los recursos naturales. En los 80, funciona como hegemónico un paradigma discursivo de la autonomía, ese paradigma se expresa en la mayoría de los discursos de Alfonsín por ejemplo, los de Caputo y en esta intención de mantener relaciones maduras con los EE.UU., de reafirmar la soberanía de las Malvinas, revisar la deuda externa. Si bien algunas políticas sí se mantuvieron y siguieron siendo autónomas respecto de los EE.UU., lo cierto es que al asumirse en el plano económico el tránsito a políticas cada vez más afines a las demandas de las potencias, esa autonomía quedó reducida al aspecto de alguna que otra medida política, no por eso menos significativa. Por ejemplo, no ratificar el tratado de proliferación nuclear, que el menemismo ratifica. Ahora, referirse a una inserción internacional autónoma implica tener en cuenta las tres dimensiones de la política exterior que señalé al principio. Se puede tener políticas exteriores autónomas en temas puntuales, pero para que la inserción internacional sea en forma autónoma, se necesita que esos tres aspectos de la política exterior sean tenidos en cuenta y en función de esa autonomía nacional. En el proceso actual hay políticas diplomáticas y estratégicas que van aumentando el margen de autonomía. Hay políticas económicas que refuerzan la autonomía y otras en las que pervive el modelo anterior. Creo que la línea a seguir es la que refuerza la autonomía, como por ejemplo obligar a mineras, petroleras y aseguradoras a liquidar sus divisas en el mercado local, seguir reclamando la soberanía por Malvinas, pero no sólo desde lo diplomático, sino como fue en 2007, anulando los acuerdos del 95 sobre hidrocarburos. La recuperación de la mayoría del paquete accionario de YPF. Son medidas significativas respecto de la autonomía. Faltan otras, como la modificación de la ley de entidades financieras, que es algo pendiente. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Maria-Cecilia-Miguez-Sobrevivir-mundoconflictivo_0_871112894.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 67 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Línea & letra No soy inválido Poesía de la A a la Z interpretada por Pablo Bernasconi No soy inválido. Digamos, aquejado. Ha quejado En esta cama ya no queda espacio. Se fue llenando de libros, papeles manuscritos dibujos fotografías Digamos; no queda espacio para otro No queda (espacio) para otro Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 68 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila De Poemas . 1969-1985, Mondadori Lamborghini Buenos Aires, 1940 - Barcelona, 1985 Tres libros publicados en vida -El fiord, Sebregondi retrocede y el breve Poemas- le bastaron a Osvaldo Lamborghini para ser uno de los escritores más influyentes y radicales de su generación. La edición de su obra póstuma quedó al cuidado de César Aira. http://www.lanacion.com.ar/1560844-no-soy-invalido Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 69 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila “Nos reinventamos en otras culturas” Reencontradas en el tiempo, Aminie Calderón Tapia y Rosa Gutiérrez Silva, dos sobrevivientes de la dictadura de Pinochet, armaron un libro con testimonios de ex compañeras de un Liceo de Valparaíso. POR Maria Lujan Picabea DERECHOS HUMANOS. Marcha frente al Palacio de la Moneda el 11 de septiembre de 2012. En los afiches, rostros de desaparecidos. No nos vencieron. Nos levantamos de la muerte, del exilio. Nos reinventamos en otras culturas, con otras lenguas, con otros sones”, afirman Aminie Calderón Tapia y Rosa Gutiérrez Silva, ambas chilenas y residentes en Europa. Ambas perseguidas y detenidas por la última dictadura militar en Chile, autoras y compiladoras del libro Eramos liceanas en septiembre del 73 (Planeta de Papel Ediciones). El libro, que se presentará este año en la Argentina, ganó en 2012 el Concurso Literario de Escrituras de la Memoria en Chile por su aporte a la memoria colectiva e histórica. En Eramos liceanas…, las autoras reúnen testimonios de estudiantes del Liceo N° 1 de Niñas de Valparaíso, el más antiguo liceo fiscal de Chile, que tras el golpe que derrocó al gobierno de Salvador Allende fueron sacadas de las aulas y de sus hogares, en buena medida con la complicidad de sus propias docentes. “La idea del libro surgió al encontrarnos después de 32 años en París, el 11 de septiembre del año 2005, en la Plaza Salvador Allende. En aquella ocasión constatamos que no se había realizado ningún trabajo sobre la violación a los derechos humanos de los estudiantes secundarios en la región de Valparaíso. Fue así como iniciamos esta maravillosa aventura en pro del rescate de la memoria histórica, sobre el rol de los jóvenes que lucharon y participaron en los mil días del gobierno de la Unidad Popular. Empezamos a recorrer los recovecos de la memoria de aquellos años cuando éramos liceanas vestidas de uniforme azul y blusa blanca llevando maletas cargadas con sueños y esperanzas. En un mundo feliz e inocente, que de la noche a la mañana fue transformado en una pesadilla el fatídico 11 de septiembre de 1973”, contaron las autoras en la presentación del libro en el Museo de la Memoria de Santiago, en diciembre de 2012. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 70 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Testimonios de un puñado de niñas, que ya adultas vuelven la mirada esos días: primero los de escuela, sueños y esperanzas; luego aquellos otros en los que todo se oscureció. Muchas pasaron días y noches en celdas húmedas y sufrieron reiterados interrogatorios, sesiones de tortura y abusos; otras, varias, perdieron a sus familias. Hubo quienes se quedaron y quienes se fueron. Rosa Gutiérrez Silva vive desde hace años en Francia y Aminie Calderón Tapia en Bélgica, fue su encuentro, tras 32 años de ausencia, lo que originó la búsqueda de las ex liceanas detenidas y la creación de este libro que es un documento. -Hizo falta mucho tiempo para poder parir estas historias, estos testimonios… -Sí, hizo falta mucho tiempo y, sobre todo, paciencia. Empezamos a buscar los retazos de memoria de todas las amigas y a animar un blog del Liceo: “Memoria Trunca”, en el cual se hablaba de los momentos liceanos pero siempre se cruzaba el tema político. Empezamos a detectar las posibles intervinientes en el libro y a darnos cuenta de que no sólo estaban las que habían sido detenidas como nosotras sino las testigos y los familiares. -Sobre la creación de “Eramos liceanas...” debieron tomar varias decisiones, ¿cómo resolvieron que se organizara a partir de los testimonios de cada una de las compañeras sin otra intervención? -Sabemos que nuestros dos testimonios son la columna vertebral y en ellos se cruzan todos los otros. Luego está el capítulo de la verdad y el de nuestros padres, ya que ahora que tenemos la edad que entonces tenían ellos, entendemos lo que habrán sufrido. Es vital la primera persona, le da intensidad y sobre todo realismo, además de credibilidad al relato. -Rosa cerrás tu testimonio afirmando que es tiempo de trabajar en la memoria, ¿cuánto de los testimoniado en “Eramos liceanas…” continúa en el orden de lo no dicho, de lo silenciado en Chile? -Es un punto re delicado el que mencionás. Nosotras continuaremos no callando y denunciando la situación, lo que pasó. Pero muchas cosas quedaron en lo no dicho y lo silenciado en Chile. Ha habido amigas y compañeras que no quisieron hablar. Sabemos que Valparaíso es una sociedad bastante conservadora y que hay valores relacionados con la Marina enquistados en el imaginario social y sabemos que jamás, por ejemplo, tendremos un memorial en la Academia de Guerra Naval como el que existe acá, en Buenos Aires, en la ESMA. Entre las cosas no dichas quedan muchas. Hay amigas que mandaron a la basura sus recuerdos liceanos a pesar de haber sido detenida toda su familia... viven en Europa y han rehecho felizmente su vida. Casi todas logramos reinsertarnos socialmente… y eso es muy importante, no deseamos victimizarnos. Hemos sido cuestionadas y juzgadas pero seguiremos adelante trabajando por la memoria, usando los escenarios a los que nos inviten y re-invirtiendo toda nuestra energía en ello. -El libro está poblado de relatos de vida, sueños, luchas. El día a día de un grupo de mujeres de corta edad avasallado por la dictadura. ¿Cómo fue volver a ese presente de niñas? -Ha sido maravilloso volverse a encontrar y reconocerse en canciones, en juegos y maneras de ser. Además de ver cómo cada una creció, asistimos a los momentos gratos de cada una al vernos con familias, con hijas e hijos, y hasta nietos. No nos vencieron. Nos levantamos de la muerte, del exilio. Nos reinventamos en otras culturas, con otras lenguas, con otros sones. Quedarán siempre cosas no dichas aunque la mayor parte de las situaciones se continúa aclarando. Aún las más difíciles. Ya que lo siniestro tocó espacios inimaginables de nuestros jóvenes años. -¿Cómo consideran que sus testimonios pueden prender entre los más jóvenes? -Lo que más esperamos es que este libro esté en cada biblioteca de Chile. Con los jóvenes tenemos una deuda que hoy se magnifica con la lucha por una educación menos elitista y gratuita. -Ambas residen en Europa, ¿qué conciencia existe en los países en los que viven de lo que sucedió en Sudamérica en las últimas dictaduras militares? -La conciencia con respecto a lo que golpeó a las democracias en America Latina en los 70 es increíble, muy clara y la información ha sido abundante. Los chicos lo estudian en la escuela, está en la currícula. Mi hijastro Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 71 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Harald está en cuarto año en Francia y en Derechos Humanos y Educación Cívica estudia la vida, por ejemplo, de Miguel Angel Estrella. Es súper emocionante verlo. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Aminie-Calderon-Tapia-Rosa-Gutierrez-Silva-liceanas73_0_871112898.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 72 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila DOS LECTURAS DE L. J. DAVIS La condición anónima Mercedes Estramil EL PROBLEMA de Lowell Lake, treintañero casado y sin hijos, secretario de redacción de un semanario sobre plomería, es que no tiene una vida plena y acaba de darse cuenta. Así comienza la tercera de las cuatro novelas que el estadounidense L. J. Davis escribió entre 1968 y 1974, antes de dejar la literatura de ficción y dedicarse de lleno al periodismo (en Harper`s, The New York Times, Mother Jones, etc.), y a escribir algunos libros sobre escándalos financieros y magnates de la industria. Una pena, porque su pasta de narrador nato queda de manifiesto sin sombra de duda en cada página de Una vida plena (1971). Lowell Lake es una mezcla aproximada entre el hombre sin atributos de Musil, un Bartleby sin rebeldía y un Holden Caulfield maduro y sin hermanita que proteger. En pocas palabras, un perdedor asumido sin restos para dar combate serio pero jodido por la lucidez. La clase de hombre que estudia literatura porque "siempre había sido su materia favorita y no lo comprometía a hacer nada específico en su vida posterior". O que el día antes de casarse tiene una crisis de pánico -luego de advertir que su novia judía masca chicle ruidosamente- y escapa hacia Nevada, pero a medio camino se arrepiente y regresa al tálamo nupcial para encarar un matrimonio cuyo yugo está definido así: "Habían terminado los días en que podía no pasar por el dormitorio de ella". Pero también la clase de hombre capaz de empecinarse en un sueño hasta convertirlo en pesadilla. Es lo que le ocurre cuando comienza a escribir una novela, y cuando compra una mansión derruida y ocupada que perteneció a un héroe militar y aventurero -impagable la biografía del ficticio Darius Collingwood- con el propósito de restaurar su esplendor. No lo consigue, claro, y el acierto de Davis es gestionar su fracaso con un humor corrosivo y lento y rematarla historia con un golpe de efecto demoledor. Antes, hay una sumatoria de episodios risibles que muestran la nulidad de Lake y su conmovedora (o estúpida) ingenuidad: el malentendido que le permite entrar en la Universidad de Stanford (la misma donde Davis se recibió de historiador); un casual encuentro con su padre en la carretera que deriva en persecución cuando Lake trata de esconderse para no explicar de dónde viene; el peregrinaje hacia una Nueva York decepcionante; la firma de una compraventa complicada hasta extremos absurdos cuando un sencillo trámite de coima preestablecida no es respetado en sus rituales; o cualquiera de los diálogos ácidos que mantiene con su esposa, mujer infinitamente más práctica que él pero igual de obtusa y perdida. Una vida plena no es sólo la novela del extravío de un personaje (en Nueva York, en la vida) sino de una generación y un país. Transcurre a fines de los sesentas, y aunque Davis silencia el marco de guerra (Vietnam), lo resume colateralmente en un panorama social y económico de depresión, intolerancia, Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 73 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila insolidaridad y evasión; los expulsados de la mansión Collingwood dan cuenta de esa "otra América" pobre y loca. Y el crimen que pudo hacer a Lowell Lake visible -y ese es el centro de su drama personal: ser anónimo en la sociedad del éxito- queda de golpe borrado, porque su víctima es tanto o más invisible que él. Así, una salpicadura de sangre parece "mermelada de frambuesa", una tragedia se vuelve estilizada comedia negra. Lawrence James Davis (1940- 2011), igual que Lake, compró, restauró y se fue a vivir a una vieja propiedad en Brooklyn. Todo indica que le fue mejor que a su personaje, y que su anonimato fue (algo) menor. Por lo menos terminó varias novelas y ésta en particular le salió redondita. UNA VIDA PLENA, de L. J. Davis. Ed. La Bestia Equilátera, 2012. Buenos Aires, 254 págs. Distribuye Gussi. Cáustico retratoPedro Peña LOWELL LAKE es la quintaesencia de la mediocridad. Con una licenciatura en letras, trabaja como secretario de redacción en un semanario dedicado a la plomería. Tolera a su esposa y es tolerado por ella. Cierta mañana comienza a preguntarse por qué sus días son tan previsibles. Para explicarlo la novela enfoca los primeros años de Lake. Se narran algunos episodios de una infancia y una juventud insulsas, inertes. Lawrence J. Davis plantea esto con un tono irónico, inteligente. Destacan por su comicidad los amoríos con su futura esposa y el intento de huida del joven Lowell previo al casamiento. La conclusión es clara al promediar la novela: se impone un cambio de vida. Lake no encuentra mejor forma de realizarlo que comprarse una casa enorme y arruinada en la peor calle de Brooklyn. Convence a su mujer de visitar una inmobiliaria y en adelante cada decisión será peor que la anterior. Sin embargo, esta es la primera vez que su vida tiene un propósito. Es la primera vez que toma decisiones. Las energías de Lake se concentran en la remodelación de la casa donde a fines del siglo XIX vivió Darius Collingwood. El contraste entre la vida de éste y la del protagonista es notorio. Collingwood fue un aventurero, estafador y mercenario que perdió su vida en Brasil participando en las guerras de Joao VII. Lake es la expresión más decadente de la clase media. Destacan hacia el final las descripciones de los negros que habitan Brooklyn. Desde la perspectiva de Lake son ante todo una amenaza que no llega a amedrentarlo tanto como a su suegra. No se interesa por ellos pero tampoco los desdeña. Pautan con su presencia el tragicómico final. Esta novela, publicada por primera vez en 1971, reveló a Davis como un observador cáustico de su realidad. Las entusiastas opiniones de Jonathan Lethem (amigo de la infancia de uno de sus hijos) sobre su obra son la razón de su redescubrimiento. http://www.elpais.com.uy/suplemento/cultural/la-condicion-anonima/cultural_700121_130308.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 74 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El espía que vino del cielo Los drones son pequeños aviones que sacan fotos y hasta pueden ser bombarderos. Son utilizados en las guerras modernas. En Tigre los usan para prevención y vigilancia. POR Nicolas Mavrakis LETALES. Desde 2001, los drones ejecutaron a más de 50 miembros de al Qaeda en Oriente Medio. Como casi todos los artefactos que encontrarían en el universo cotidiano una ubicación estelar, los drones nacieron en laboratorios militares perfeccionando las milenarias técnicas para la aniquilación humana. Pero a diferencia del avión, la radio a transistores, el radar o internet, los drones no se limitan a la simple recopilación de datos, ni al traslado de mercancías, ni agotan sus posibilidades en las fronteras del entretenimiento. Los drones combinan esos vectores y muchos más a partir de un elemento clave del siglo XXI: la inteligencia colectiva. Elaborados a través de una red de diseño, operatividad y tecnología en expansión, el resultado es un interrogante donde nuevas formas de la guerra, la ciudadanía y la información expanden el concepto mismo de experiencia humana. Desarrollados como naves aéreas no tripuladas, los drones –palabra que significa “abeja macho” y que alude al diseño de los primeros modelos y a la posibilidad de relegar del trabajo directo a su operador– comenzaron su vida en el extremo opuesto de la astucia. Como blancos móviles aéreos operados de manera remota, servían como objetivos bobos de práctica para los artilleros en tierra. Situación que no tardó mucho en invertirse. Vástago directo de la revolución digital, un drone puede operarse hoy de manera remota a varios continentes de distancia y con herramientas de movilidad, ataque, control y una interfaz audiovisual no muy distintas a las de una consola de PlayStation. En la actualidad, más de 40 países están desarrollando drones y la Fuerza Aérea norteamericana cuenta con más de 7.000. Equipados con bombas y cámaras digitales de última generación, sólo en escenarios bélicos de baja intensidad como Pakistán y Yemen los puños y los ojos omnipresentes de drones han eliminado más de tres mil blancos Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 75 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila humanos, entre los que se incluyen –en el contexto de los llamados daños colaterales– numerosos inocentes. La reputación de los drones, sin embargo, creció al servicio de la campaña antiterrorista del Pentágono. Desde 2001, las naves no tripuladas han ejecutado a más de cincuenta miembros relevantes de al Qaeda en Oriente Medio. Ligeros, pequeños, autónomos, de difícil detección para los radares, casi invisibles en el campo de batalla, inmunes al calor, al agotamiento, al miedo y a los conflictos de una conciencia humana ante la experiencia directa de la muerte, los drones se transformaron en espías más eficientes que James Bond y en soldados más letales que los ejércitos humanoides de Terminator. Así, mientras los estados discuten nuevas legislaciones para proteger su soberanía –asunto que puede seguirse en Twitter a través de @drones– y los mandos militares hablan de una revolución de la experiencia de la guerra –reducida a una fría sesión de joysticks e imágenes en video HD comandadas desde un sillón a miles de kilómetros–, los robots siguen su evolución. Los nano drones, versiones de diez centímetros de longitud con hélice, ya vigilan posiciones enemigas en varios teatros de operaciones. Pero esos no son los únicos campos sobrevolados por drones. Mientras su acción se expande hacia tareas logísticas vinculadas a la agricultura, la ingeniería y la biología – explorando el equilibrio de diversos ecosistemas–, la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos calcula que 30.000 drones de uso civil sobrevolarán el espacio aéreo norteamericano en 2020. Sin embargo, una tecnología capaz de identificar, seguir y reconocer –como puede hacerlo hoy cualquier smartphone– los movimientos y las conductas de cualquier individuo plantea inquietudes alrededor del derecho a la intimidad. Al margen de las categorías que redefinen la privacidad contemporánea —asunto que vuelve a los motores de búsqueda de Google, Facebook y a los drones un asunto menos distinto de lo que parece—, fuerzas policiales en todo el mundo ya han adoptado versiones menos letales pero igual de efectivas para controlar la seguridad ciudadana. La potencia omnipresente de los drones puede palparse incluso en Tigre, provincia de Buenos Aires, cuna de la primera Flota de Cuadricópteros Drones Telecomandados para el Control y la Seguridad Ciudadana. Fabricados en Holanda, con una autonomía de vuelo de 25 minutos, 2.000 metros de altura máxima y recorridos programados por GPS, los primeros drones en la Argentina articulan su trasmisión de datos para prevenir incendios, supervisar emergencias, controlar el tránsito y vigilar zonas de edificación. “A medida que vayamos teniendo más gente capacitada, vamos a ir incorporando más”, dijo el intendente Sergio Massa. Si la masificación de los dispositivos conectados a la web transformaron el tráfico de información digital en un coto de caza abierto a la voluntad de los hackers, la incipiente proliferación de drones civiles amenaza con eliminar los últimos focos de resistencia material en la esfera de los mundos privados. Con un precio de 240 dólares en eBay, el modelo Parrot AR, no más grande que una laptop común, se controla a través del wifi de un teléfono celular y es el drone más popular en el mercado civil. Observado y escuchado a través de los ojos del drone –en un vuelo preciso, estable y abierto a la obscenidad de poder registrarlo todo–, el mundo se transforma también en un nuevo diccionario jurídico. Drone stalking (acecho drone) y drone trespassing (invasión drone) son algunos de los términos candentes relacionados con la reserva de la intimidad y los espacios privados analizados en las cortes civiles y penales de varios países. ¿En qué se convierte la ley ante dispositivos tecnológicos capaces de vulnerar los últimos rincones del mundo analógico libre de intrusos? ¿Cómo se reescriben los bordes de la responsabilidad cuando hasta la práctica del voyeurismo se delega en un drone? Fundadores de una época capaz de terminar con la relevancia de los soldados de carne y hueso en el campo de batalla, lo que se proyecta como un negocio civil de 90 mil millones de dólares se perfila también como factor Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 76 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila clave en la práctica de disciplinas duramente interceptadas por la tecnología, como el periodismo. “No tenemos un drone, no queremos un drone y nunca solicitamos permiso para un drone”, aclaró hace unos días el portal de paparazzis TMZ, uno de los más importantes del mundo, tras el rumor de que utilizaban un drone para cazar imágenes y videos de famosos en Hollywood. Capaz de articular en simultáneo el retrato de eventos con la recopilación directa de información, el periodismo drone gana terreno como práctica para acceder allí donde los viejos periodistas con dos pies y una libreta jamás habrían podido imaginarlo. Enlazados con canales en YouTube, los drones son cronistas más precisos, intrépidos y poderosos en cualquier escenario posible. ¿Es el destino de los periodistas tan delicado como el imperceptible zumbido de los drones allí donde han sido programados para reemplazar la tarea de soldados, policías y demás especialistas en las vicisitudes del mundo sensible? Mientras las preguntas se multiplican, los drones perfeccionan el arte de retratarlas de incógnito y en alta definición. Lo inquietante es que, si se los ordenaran, también podrían destruirlas. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/espia-vino-cielo_0_871112899.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 77 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Crónicas de la selva Celebración de la memoria Una novelista española confiesa el placer que le causa bucear en la historia para escribir sus obras y un fotógrafo argentino combate el olvido con su arte Por Hugo Beccacece | Para LA NACION "Yo hubiera estado encantada con publicar una primera novela de discreta tirada. Las cosas se dieron de otro modo." Esa frase la pronunció la escritora española María Dueñas en la librería El Ateneo Grand Splendid, durante la presentación de su segunda novela Misión Olvido . La primera, El tiempo entre costuras , vendió casi dos millones de ejemplares y fue traducida a más de 25 idiomas. Antes de Dueñas, Gloria Casañas y Jorge Fernández Díaz se refirieron al nuevo libro. El autor de Las mujeres más solas del mundo elogió el modo en que Dueñas teje una trama cuyos protagonistas, seres de ficción, se recortan contra el telón de fondo, real y muy documentado, de la historia. En El tiempo entre costuras , ese telón de fondo era la España inmediatamente anterior a la Guerra Civil y el Marruecos de la época colonial. En Misión Olvido , la relación entre los personajes Blanca Perea y Daniel Carter se desarrolla en un campus universitario de California. Blanca, una profesora que ha sido dejada por su marido, viaja a Estados Unidos para olvidar, y se ocupa de poner en orden el legado de un hispanista que, en sus últimos años de vida, investigó las misiones franciscanas españolas en la Alta California de fines del siglo XVIII y principios del XIX. "Disfruto mucho del período de documentación para mis novelas", dijo Dueñas. "Cuanto menos conocidas son las cosas que descubro, más me interesan. Y eso me ocurrió con el tema de las misiones franciscanas. También quise rendir un homenaje en mi libro a los profesores y escritores exiliados españoles que fueron los padres del hispanismo que ahora florece en las universidades de Estados Unidos." La vida privada y la vida pública, la intimidad y la calle, se alternan de modo conmovedor en la exposición Mala memoria , del fotógrafo Daniel Merle. ¿Por qué "mala memoria" cuando esas imágenes son memorables por su calidad y por lo que documentan? "Siempre tuve mala memoria, las cosas se me escapan, por eso la fotografía me ayudó desde chico para que los momentos importantes, sobre todo los detalles de los momentos importantes, no se me esfumaran", le comentaba Merle a un amigo durante la inauguración de la muestra en la Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 78 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Fotogalería del Teatro San Martín.En las imágenes, aparecen dos niñas: Eulogia y Lucía, las hijas de Daniel, y superado un dilatado arco de tiempo, también se ve a su nieto. Al lado de ese álbum familiar, hay una serie de fotos sobre los que viven en la calle, los mendigos que ya ni siquiera mendigan, abandonados por todos. En esa misma serie, hay una imagen de una desolación profunda y no se trata de un pordiosero: es un anciano, de rasgos nobles, vestido con ropa modesta pero digna, sentado en un vagón de subte, la cabeza apoyada contra la ventana que da a la oscuridad de un túnel, la mirada herida por un dolor que viene de muy lejos y que se proyecta al futuro.El olvido que Merle combatió en esta muestra no sólo es el de su vida privada, sino también el de los argentinos, porque los rostros de ciudadanos que aparecen en las fotos de manifestaciones, en la City, frente a los edificios, son arquetipos, como el de un hombre envuelto en una bandera argentina en la época de la guerra de Malvinas. Presentó en Buenos Aires su segunda novela, Misión Olvido María Dueñas Escritora Hay recepciones que se ven sacudidas de modo imprevisto y hasta dramático por noticias ajenas al motivo de la reunión. Eso ocurrió en el cóctel ofrecido por el embajador de Francia, Jean-Pierre Asvazadourian a Bertrand Delanoë, el intendente de París. Se suponía que el agasajado estaría en el palacio Ortiz Basualdo a las 18.30. Llegó después de las 19.30. Su retraso era la consecuencia de un hecho no infrecuente. Cristina Fernández de Kirchner le había concedido una audiencia a Delanoë antes del festejo en la embajada. La agenda preveía con generosidad el tiempo de la charla entre ambos, pero lo no previsto (aunque previsible) fue la impuntualidad de la presidenta, que le reservó una larga espera a Delanoë. Esa espera fue compartida a la distancia por los numerosos invitados que lo aguardaban en la embajada: entre otros, Marta Minujín, Susana Rinaldi, Alejandro Katz, Claudia Caraballo de Quentin, Marion Eppinger, Edgardo Cozarinsky, Marcial Berro, Susy de Bary, Laura Buccellato, Norberto Frigerio, Roberto Laperche y, naturalmente, Aldo Herleau, el consejero cultural de la embajada, que oficiaba de anfitrión hasta tanto llegara Asvazadourian. Dos muertes producidas hacía apenas unas horas eran el tema de conversación obligada: la de Hugo Chávez (algunos pensaban que ése era el motivo de la impuntualidad presidencial) y la del director teatral francoargentino Jérôme Savary. Uno de los presentes en el agasajo comentaba que unas horas antes Emilio Basaldúa, el régisseur , escenógrafo y ex director del Teatro Colón, lo había llamado para compartir la tristeza por el fallecimiento de Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 79 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Savary. Basaldúa conoció a Savary en 1976, cuando Emilio estaba becado en París. Después lo volvió a ver cuando Savary era director del teatro de Chaillot. Basaldúa le mostró un proyecto para la escenografía de El pato salvaje , de Ibsen, que debía realizarse en esos meses en Buenos Aires. A Savary le gustaron los dibujos y lo felicitó. En 1998, vino a Buenos Aires para poner en escena Macbeth , de Verdi, y le propuso a Emilio que fuera su escenógrafo y vestuarista. Cuando se produjo la crisis de fines de 2001, eran muy pocos los artistas extranjeros que querían venir a la Argentina, Basaldúa, que se desempeñaba como director del Colón, pensó en Savary para que montara Ascenso y caída de la ciudad de Mahagonny , de Kurt Weill, y éste aceptó por una suma casi simbólica. No quería "desatender" la que seguía siendo su patria. Savary, que había nacido en la Argentina, llevado por su madre abandonó el país en la niñez. Sin embargo cuando tenía 20 años, regresó para hacer el servicio militar porque no quería perder la ciudadanía nacional. Le tocó hacerlo en Azul. Mucho tiempo después, en una de sus tres visitas de trabajo al país, Basaldúa lo llevó a Azul para que recordara los viejos tiempos y allí el oficial que comandaba la unidad militar le entregó al emocionado Jérôme un diploma de reconocimiento. La muestra que exhibe en el Teatro San Martín rescata su pasado familiar y detalles de la vida cotidiana Daniel Merle Fotográfo http://www.lanacion.com.ar/1560791-celebracion-de-la-memoria Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 80 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El ruido de cristales rotos no deja de aturdir Imágenes: una filmación de 1938 en Polonia y una fotografía de 1950 en Damasco. Dos historias desgarradoras de la vida cotidiana. POR Patricia Kolesnicov- [email protected] Les debe haber ido muy bien a los Kurtz en Estados Unidos. Habían llegado como inmigrantes polacos hacia 1890 y en 1938 pudieron hacer un viaje a Europa y documentarlo con una de las primeras cámaras Kodachrome, una filmadora a color. Fueron a Holanda, a Bélgica, a Inglaterra, a Francia. Y claro, a Polonia. Era agosto de 1938 –en Alemania ya gobernaba Hitler– cuando entraron a Nasielsk, el pueblo donde había nacido David Kurtz. Ahí llegaron, él y Lena y filmaron en colores. Son tres minutos. Se ven chicos que ríen, que ríen, que se mueven para salir en cámara, que se empujan para que otro no les robe protagonismo. Se ven adultos con barba, en segundo plano. Gente que saluda. Chicas con pañuelo, tímidas. Se ve la vida normal. Era agosto de 1938. En noviembre vendría, en Alemania y en Austria, “La noche de los cristales rotos”, una cadena de pogroms y ataques contra casas, sinagogas, negocios judíos. Y atrás, el Holocausto. Vivían 3.000 judíos en Nasielsk; quedaron 80. Como video de vacaciones, la película habrá aburrido a amigos de los Kurtz un par de veces y cruzó el siglo, después, olvidada en una caja. La sacó de ahí Glenn, el hijo de los Kurtz, profesor de la Universidad de Nueva York. La restauró, la editó, la subió a Internet. Y un día lo llamó una mujer: Marcy Rosen. Había reconocido, entre esos chicos, a su papá, que ahora vivía en Florida. Y que les puso nombres a muchas de las caras. Esta historia la cuenta el diario israelí Haaretz. Un par de clicks más allá, en el mismo diario (leo por Internet), otra historia subleva y desgarra. Ahora la película está quieta, son fotos. En la primera, cuenta la nota, hay un nene agarrado de la mano de su mamá y, al lado están sus hermanos. Es un campo de refugiados, cerca de Damasco. Es el año 1950. Es la familia Abdi, que tuvo que salir disparada de su casa, tomada por la Haganá, una organización militar judía, durante la llamada Guerra de la Independencia de Israel. Se fueron la madre y los chicos; el padre se aferró a su lugar. Tiempo después, después de la foto, el padre –que vendía caballos y vacas– consiguió que su familia fuera autorizada a volver a su tierra, Haifa. Todos menos una hermana, Luftia. Porque se había casado. Todos crecieron y uno de los Abdi, Abed, se volvió artista. Estudió en Alemania. Fue premiado en Haifa. Levantó monumentos y pintó murales en Haifa, Nazareth y Yafo. Vio algunas veces a su hermana; hay una foto de ellos en Jordania. Pero ahora, que ella tiene 84, quiere sacarla de una Siria en guerra y llevarla a casa. Abdi responde como un artista: en mayo inaugurará una muestra: “Homenaje a mi hermana Lutfia, Campo de Refugiados de Yarmouk”. Una de las obras será una foto de Lutfia cubierta por una bolsa de yute: Abdi usa el yute porque su aspecto y su olor le recuerdan los bolsones de comida que les entregaba Naciones Unidas, cuando eran refugiados. “Estoy furioso”, dice ahora. “Y me pregunto: cómo es posible que una mujer que Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 81 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila nació en Haifa, que tiene 84 años, cuyos padre, abuelo y bisabuelo, todos nacieron acá y que no tiene sangre judía en sus manos tenga que soportar este sufrimiento?” Dos historias en el mismo diario de Israel. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/video-chicos-judios-polonia_0_875312467.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 82 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Mozart: un ilustrado Tzvetan Todorov QUÉ ES la Ilustración? En diciembre de 1784 el más famoso filósofo alemán de la época, Immanuel Kant, publica una respuesta a esta pregunta en una revista berlinesa dirigida al gran público cultivado. A grandes rasgos dice que es el paso de ser menor a ser mayor de edad, de la infancia a la edad adulta. La mayor parte del tiempo los seres humanos se dejan dirigir por reglas y preceptos que vienen de fuera, como las tradiciones, las sociedades en las que viven y los poderosos del momento, pero podrían ocuparse de sus asuntos, modificar su destino y elegir por sí mismos las leyes que quieren obedecer. Un hombre ilustrado es aquel que prefiere la libertad de su razón y de su voluntad a la sumisión. Este hombre que por fin es adulto se reconoce en todos los demás habitantes del mundo y coloca en la cima de sus valores la alegría sencillamente humana. En diciembre de 1784, Mozart, que tiene veintiocho años, es admitido en la logia masónica que ha elegido, llamada Zur Wohltatigkeit, "A la Beneficencia". La francmasonería vienesa se siente muy próxima al espíritu de la Ilustración, y defiende la tolerancia entre las religiones y la fraternidad entre los hombres. En esos momentos y en ese lugar ser masón no significa estar en contra de la Iglesia, hasta el punto de que algunos sacerdotes católicos también lo son. Al propio Mozart no le gustan los ateos y dice estar orgulloso de su fe. "Sé que soy tan religioso que nunca podría hacer nada que no pudiera hacerse público ante el mundo entero." Pero se trata de una fe como la practican los ilustrados, que no se preocupan de las particularidades de los ritos y colocan todas las religiones en pie de igualdad. Mozart comparte muchos rasgos con otros defensores de la Ilustración. Como ellos siente que pertenece a todo el espacio europeo, sin prejuicios nacionalistas. Habla cuatro lenguas -alemán, italiano, francés e inglés-, absorbe todas las tradiciones y viaja con frecuencia. Es, como ellos, un cosmopolita pero al mismo tiempo sabe que el camino más corto hacia la universalidad pasa por profundizar en la tradición local, y por ello está empeñado en crear una ópera propiamente alemana, lo que consigue con La flauta mágica. Como ellos, quiere Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 83 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila sintetizar todo lo que lo ha precedido (en su caso, en el ámbito de la música). Y como ellos, cree que el saber contribuye a emancipar a los hombres: "Vivimos en este mundo para aprender cada vez con mayor ardor, para iluminarnos unos a otros mediante el intercambio de ideas y para esforzarnos siempre en hacer progresar todavía más las ciencias y las artes". Mozart hace su gran gesto de autonomía, su acción propiamente adulta, en 1781. Contra el consejo de su padre, decide dejar a su patrono, el poderoso arzobispo de Salzburgo Coloredo, para escapar del humillante trato que reciben los empleados de la casa (donde tratan al compositor como a un lacayo). "Nadie puede exigirme algo que me perjudica", escribe a su padre, y se responsabiliza de ese gesto revolucionario como un individuo libre. "Solo debo escuchar a mi razón y a mi corazón, así que no necesito a una dama o a una persona de calidad para hacer lo que es justo y bueno, lo que no es ni demasiado ni demasiado poco. Lo que ennoblece al hombre es el corazón, y aunque no soy conde, quizá tengo más honor en el cuerpo que muchos condes." Los hombres nacen libres e iguales, y Mozart no quiere avergonzarse por no pertenecer a las clases privilegiadas. "No somos ni nobles ni de alta cuna, ni gentilhombres ni ricos, sino de baja extracción, malvada y pobre." Poco importa: "Nuestra riqueza se agota con nosotros, porque la tenemos en la cabeza". Mozart quiere a los individuos por lo que son, no por lo que representan, y sabe reconocer las cualidades de los humildes y de los marginados. Los criados -y él es uno de ellos- merecen tanto respeto como los señores. "Los mejores amigos, los más fieles, son los pobres. Los ricos nada saben de la amistad." Hay que decir que la amistad y el amor son las experiencias que Mozart más valora en la vida. Celebra el amor en su plenitud, como alegría de los sentidos y placer de los sentimientos. Sus cartas a Constance, su mujer, muestran que los vínculos conyugales y las consideraciones racionales no ponen trabas a la sensualidad y la ternura, y lo mismo sucede con la preocupación por sus hijos, de la que Mozart da también testimonio. El amor, tema de todas sus óperas, es indispensable para la creación: "Ni la gran inteligencia, ni la imaginación, ni las dos juntas convierten a alguien en genio. El alma del genio es amor, amor y amor", escribe. Los personajes de sus óperas buscan la felicidad no en la sumisión al dogma religioso, sino en un amor totalmente terrenal. Aunque la biblioteca de Mozart no es muy grande, contiene varias obras de filosofía, entre ellas el Fedón de Moses Mendelssohn, otro defensor de la Ilustración, amigo de Lessing y compañero de Kant. Quizá ahí es donde Mozart encontró una de las fuentes de la reflexión que dirige un día a su padre para protegerlo del miedo a la muerte. Cree que la muerte es definitiva e irreversible, pero esta creencia no lo desespera, sino que llega a la convicción que hay que vivir aquí y ahora, que debe buscarse la felicidad en la vida terrenal. "Nunca me voy a dormir sin pensar (por joven que sea) que quizá mañana no estaré aquí, y ninguno de mis conocidos puede decir que sea de talante apesadumbrado o triste. Todos los días doy gracias a mi Creador por esta felicidad y se la deseo de todo corazón a mis semejantes." La imagen que se tiene de Mozart es la de un niño caprichoso, prodigio musical a los cinco años y genio sin saberlo. En realidad representa más bien, y de forma destacada, el ideal al que aspira la Ilustración: el adulto totalmente responsable de la vida y de la obra que construye. El autor TZVETAN TODOROV (Bulgaria, 1939) es filósofo y ensayista de larga trayectoria, con numerosa obra publicada. El texto adjunto pertenece a Vivir solos juntos (Galaxia Gutenberg, 2011). http://www.elpais.com.uy/suplemento/cultural/mozart-un-ilustrado/cultural_700117_130308.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 84 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila La chica baila, miren con respeto POR Patricia Kolesnicov LA CHICA QUE QUERIA BAILAR: Una chica baila, da vueltas, quiere ganar el concurso y ser una estrella y salir del pueblito de porquería donde a los quince años ya se acostó con todos. El baile, el concurso, la música disco, el relato de la chica se ven en el Malba. Es la muestra de la artista inglesa Tracey Emin. No hay cómo irse sin un zapatazo en el pecho de esa exposición. Sonó mucho, cuando empezó la muestra, una de sus obras, una película en la que cuenta un aborto. Todo lo que fue llegar a él, cómo la trataron, lo mal que se lo hicieron. Es una crónica del maltrato institucional a las mujeres. Pero miren también la otra, la de la sala de al lado. Se llama Por qué no fui bailarina: hay que tener estómago para sentarse y verla de punta a punta. La chica, que ahora es una mujer, mira la cámara y cuenta: “Nunca me gustó la escuela. Igual, siempre llegaba tarde. La verdad, odiaba la escuela, así que abandoné a los 13. Me la pasaba en los bares tomando café (...), tomando sidra, tirada en la playa”. ¿Qué más? “Estaba el sexo. Era algo que simplemente hacías y era gratis. (...) No importaba que fueras chica, 13, 14. No importaba que fueran hombres de 19, 20, 25, 26”. El sexo como si nada, el sexo como algo que una chica hace en vez de ir a la escuela. Sin rollos. Aunque a veces la dejaran “ahí, donde estaba, medio desnuda”, no había “principios ni reglas. Sólo hacía lo que tenía ganas de hacer”. Pero eso se fue acabando: tenía 15 años, lo dijimos, era un pueblo chico, se había acostado con todos. Y se dedicó a bailar. Y llegó el concurso. Y cuando empezó a moverse, la gente aplaudió. Iba a ganar, iba a salir de ese lugar victoriosa. Hasta que unos tipos empezaron a cantar, cada vez más fuerte: “PU-TITA, PU-TI-TA, PU-TI-TA”. Un amigo pregunta por qué son “arte” esas peliculitas autobiográficas. Por qué, pregunta, están en un museo. Yo creo que para que uno vaya y se siente ahí y las mire. Con respeto. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/flora-fauna-Tracey-Emin_0_874712787.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 85 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El relato incomprobable cuestiona lo que se exhibe como verdad Cozarinsky reivindica su libro como una variedad de la ficción, hecha del roce de texturas diferentes Por Pablo Gianera | LA NACION En el principio estuvo la teoría: un ensayo estricto, "El relato indefendible", acerca de los tráficos, a la luz de la obra de Henry James, entre chisme y novela. Luego vino la anécdota: el museo del chisme propiamente dicho, de los chismes que Edgardo Cozarinsky leyó, oyó o le contaron y que "cuelga" en su libro como los impredecibles cuadros de una exposición. Quien haya conversado alguna vez con Cozarinsky, o quien simplemente lo haya escuchado hablar, sabe que nadie mejor que él podía vestir de estilo esos relatos para que los contornos de su desnudez resultaran aun más escandalosos -con ese escándalo de lo que debía permancer secreto y alguien saca literalmente a la luz- que la propia desnudez. El chisme es aquí elevado a práctica narrativa. La primera de las anécdotas que consignó Cozarinsky, el primer cuadro colgado, fue una cena en la que Paul Valéry, irreprimiblemente, se desgració y deparó al rato, como único comentario, la siguiente observación de la dueña de casa: "A veces hasta a un gran poeta le resulta difícil encontrar una rima". La fuente fue en ese caso José Bianco. A Cozarinsky le llamó entonces la atención algo "a priori incongruente con ese poeta de la inteligencia pura". Es posible que sea justamente la incongruencia, la súbita cercanía de dos elementos lejanos, aquello que justifica el atractivo irresistible de estas anécdotas, que demandan luego ser contadas o leídas a terceros.Los chismes recopilados por Cozarinsky están presididos por un aforismo de Karl Kraus: "Considerar que muchas cosas son insignificantes y que todo significa". ¿Pero cómo se decide o se encuentra esa significación en lo insignificante? "Si lo supiera no escribiría -dice Cozarinsky, terminante y dispuesto en esta ocasión a custodiar un secreto-. Creo que ese 'todo significa' se impone por sí mismo, sin que lo busque ni decida dónde está. Para darte un ejemplo cercano: el conventillo en que se ha convertido el Congreso de la Nación es algo patético en su insignificancia, y sin embargo, significa mucho como síntoma de la agonía de las instituciones republicanas." -Parece que el trabajo sobre el chisme se inscribiera en una preocupación mayor tuya, la del testimonio, la del "relato transmitido", la del "pase del testigo", ¿es así? -Puede ser. Es una de esas cosas que los demás ven mejor que uno mismo. En mis novelas hay tanto de invención como de documento y me parece que es en el frote de esas texturas diferentes donde surge la chispa que yo llamo ficción. -¿Reivindicarías entonces para Museo del chisme un estatuto semejante al de tus novelas? ¿Son también estos chismes una variedad de la ficción? -No reivindicaría el mismo estatuto pero sí el carácter de ficción, porque hay elección: qué incluir, qué dejar afuera, y sobre todo, cómo ordenar los elementos del relato. -¿Por qué el protocolo de consignar la fuente? ¿Es un mera garantía de verosimilitud o una variedad del agradecimiento? -Ni una cosa ni la otra para mí. Es un "ayuda memoria" personal. ¿Dónde estuve? ¿A quién se lo oí? ¿Cuándo? -Con el "nuevo" delante en el título, Museo del chisme es una especie, por decirlo así, de never-ending book, en el sentido de que puede crecer indefinidamente; incluso el texto inicial, "El relato indefendible", fue ahora modificado. ¿Diste por cerrado el libro o pensás volver sobre él? -No pienso volver pero la verdad es que tampoco pensaba volver antes y cedí a la insistencia de Natalia Meta y Luis Chitarroni, mis editores. -¿Hay finalmente en todo chisme una verdad? Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 86 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila -Desde luego. Proust y James son los ejemplos que tomé en mi ensayo, pero se me ocurre que ese atravesar las apariencias que practica el chisme en su ficción, si no conduce a una verdad, al menos instila una duda sobre lo visible, y puede cuestionar lo que se exhibe como verdad. C. http://www.lanacion.com.ar/1561230-el-relato-incomprobable-cuestiona-lo-que-se-exhibe-como-verdad Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 87 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila La desigualdad entre Norte y Sur también divide el mapa editorial En el planisferio de la Unión de Editores, el tamaño de cada país depende del volumen de su mercado editor. Brasil, China e India tienen alto crecimiento, pero en Africa no prospera la cultura del libro. POR Guido Carelli Lynch- [email protected] El planisferio editorial de la Unión Internacional de Editores. ¿Qué pensarán los responsables del Instituto Geográfico Nacional, que meses atrás presentaron un planisferio con la Argentina en el ombligo del mundo (para “destacar nuestra presencia geográfica en el marco de la Unasur”), de un mapamundi en el que nuestro país es poco más que una tirita casi indescifrable? La Unión Internacional de Editores (IPA, por sus siglas en inglés) presentó el mapa de mercados editoriales que elaboró junto a la Universidad de Sheffield, de Gran Bretaña. El tamaño de cada país no refleja su verdadera superficie territorial. Depende, en cambio, del volumen del mercado editorial local. Estados Unidos, Europa occidental y Japón con un tamaño sideral se roban la mayoría del espacio, vale decir, casi toda la superficie global editorial. África es poco más que un punto en el mapa y América latina tiene una proporción escuálida. Argentina, potencia editorial hace cincuenta años, es hoy una tirita raquítica. El estudio utiliza como eje de medición el Producto Bruto Interno, la población y la cantidad de libros vendidos en cada país. “El primer paso fue recopilar datos disponibles para crear una base de datos de registro de tres indicadores principales: las ventas netas totales de los editores en un mercado; el valor del mercado en los precios al consumidor y el número de lanzamientos de nuevos títulos y reediciones”, explica Benjamin Hennig, investigador de la universidad británica a cargo del proyecto. Luego se cruzaron esos valores con los indicadores sociales ya señalados. La IPA distribuyó un listado con las veinte principales potencias editoriales y sus volúmenes de venta. Estados Unidos lidera el ránking, seguido por China, Alemania, Japón, Francia, Gran Bretaña, Italia, España, Brasil, India, Canadá, Corea del Sur, Rusia, Australia, Turquía, Holanda, Polonia, Bélgica, Noruega y Suiza. “El mapa muestra un mundo de desigualdades en el que unos pocos países forman verdaderos centros de poder, luego están aquellos que los economistas llaman “mercados emergentes” Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 88 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila que presentan un tamaño relativamente parecido al real. Sin embargo, la mayoría de los países son difíciles de identificar, están perdidos en la periferia”, señaló el consultor Rüediger Wishenbert, líder del proyecto. Para el editor alemán Jens Bammel, secretario general de la IPA, el flamante planisferio equivale a una fotografía del mercado editorial. “Las novedades son el gran crecimiento de India, China y Brasil y el fracaso de África para desarrollar la cultura del libro”, asegura Bammel vía mail, ante la consulta de Clarín. Su diagnóstico sobre América latina no es nada alentador. “Es otra región donde la cultura del libro tiene serios riesgos de desaparecer. Es un problema de entendimiento y desarrollo político”, sostiene. Para Bammel, el informe sincera las posibilidades reales de desarrollo social y las limitaciones de las políticas públicas sin ninguna coordinación. “La lectura, la educación y el desarrollo social van de la mano. Sin una industria ni librerías locales, la educación por sí sola no prosperará”, afirma. A la hora de explicar qué tipo de políticas pueden favorecer el desarrollo editorial, Bammel se acuerda de la Argentina y de las disposiciones de la Secretaría de Comercio. “Los editores debieran comunicar mejor el valor de las editoriales locales y exigir que se implementen políticas nacionales para el libro –afirma–. La terrible decisión de limitar las importaciones de libros y de exigir pruebas de tinta es absurda y costosa, demuestra que no entienden la cultura del libro, la economía del libro o de la sociedad de la información. Ningún país ha progresado por el cierre de las importaciones de libros”. Los creadores del planisferio señalan que éste es una hoja de ruta para cualquier persona preocupada por la industria editorial. Esperan que sirva como estímulo para las regiones poco representadas. “El objetivo estratégico de cara al futuro es el ajuste de este mapa de manera que el mundo editorial se parezca más al mapa estándar de los geógrafos y demógrafos”, dice Bammel. Argentina (no tan) generosa Editores y consultores de todo el mundo colaboraron con información estadística. Pero más importante fue la tarea de aquellos provenientes de países donde los índices no existen o no son fiables, como, por ejemplo, la Argentina. Fernando Zambra, director ejecutivo de PROMAGE, una consultora que funciona como un exhaustivo y preciso observatorio de la industria editorial local y latinoamericana, aporta un poco de luz entre índices inexistentes. El primer dato salta a la vista, también en el mapa: Hispanoamérica iguala la superficie –es decir, la producción– de Brasil. Para este ingeniero en sistemas que se crió dentro del mundo editorial, el planisferio de la IPA permite medir el consumo de libros por habitante. “Eso es lo que nos pone muy abajo. Las oscilaciones entre alzas y bajas de un diez por ciento son propias de esta industria, pero esa franja en la Argentina está un escalón abajo. En 2011 en la Argentina se vendieron entre 48 y 50 millones de libros, lo que da un promedio de un libro por habitante”, explica Zambra. En Estados Unidos, por poner un ejemplo cruel, cada habitante compra 10 libros al año. La cifra argentina parecería estar en consonancia con la Encuesta Nacional de Lectura que da también un libro por habitante. Los libros comerciales –aquellos que se venden– en la Argentina son nada más que el 45% del total. El resto son ejemplares religiosos, publicaciones de ONGs y académicas, entre otras. En 2012 la venta de libros en la Argentina alcanzó los 3 mil millones de pesos, 300 millones de pesos más que en el año anterior. Las cifras de 2011 –prácticamente iguales a las del año pasado– incluyen las ventas al sector público que representan nada más que un 15% del total, mientras que en Brasil esa cifra alcanza el 40%. Los libros de Educación se quedan con el pedazo más grande de la torta (el 26%), seguido muy de cerca por Ficción (22%). El resto es para No Ficción (14%), Infantiles y Juveniles (13%), Divulgación General (11%), Religiosos (5%) y Profesionales (9%), según PROMAGE. La crisis económica azota a buena parte de la industria editorial europea. El mercado español se redujo un 20% en los últimos tres años, según el Gremio de Editores de Cataluña, y la industria editorial argentina también sufre las consecuencias de la hecatombe financiera. Las ventas al exterior, en el tercer trimestre de 2012 cayeron hasta los 7,7 millones de dólares, el menor volumen desde enero de 2010, según el análisis de Zambra. Las restricciones a las importaciones también inciden: en el tercer trimestre de 2012, cayeron un 43% en comparación con el mismo período del año anterior. Si bien el índice repuntó en comparación con 2011, el saldo comercial acumulaba en el año un déficit de 20 millones de dólares hasta el tercer trimestre. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 89 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Algunas conclusiones están a la vista. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/desigualdad-Norte-Sur-divide-editorial-mapa-editorial-ipaeditoriales_0_875912666.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 90 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila MÁS ARMONÍA SOMERS Una voz inconfundible Daniel Mella CABE PREGUNTARSE qué hace que la obra de un autor lo sobreviva, qué justifica la reimpresión póstuma de sus libros, o qué es lo que convierte a un autor en clásico. El caso de Armonía Somers se brinda para esta clase de reflexión. Es evidente que el afán de lucro está lejos de formar parte de las razones de cualquier editor que se anime a publicarla. La dificultad en Somers no es sintáctica. Tiene que ver más bien con los mundos a los que accede en el papel. No son mundos completamente separados del nuestro, por así decirlo. Se trata de regiones abandonadas de Dios y de lógica de donde son oriundos, para poner por caso, los Macbeth, el monstruo de Frankenstein y Alicia. En Un retrato para Dickens tenemos a una niña precoz cuya realidad no es muy distinta a la de sus sueños e imaginaciones. Está un loro que es testigo de todo, hay fragmentos de un libro de cocina con recetas para bizcochuelo y una narración intercalada de tema y estilo bíblico. Aparte de la violencia, aquello que los une es, para empezar, el hecho de que en cada uno la escritura parece estar siendo utilizada como órgano de percepción. Somers consigue disimular el esfuerzo creativo o imaginativo, y hace que sus frases y sus párrafos evolucionen como el resplandor de una antorcha revelando las paredes interiores de un caos que ya estaba ahí, que no puede ser inventado. Muchas veces, la relación entre los objetos que pueblan el libro (personajes, sucesos) es poco clara. Armonía Somers desdibuja la relación entre las figuras de sus libros, al punto de que, por momentos, uno tiene la sensación de andar transitando por un bosque ya no de símbolos, sino de jeroglíficos, tal como la mayor parte del tiempo ocurre en el así llamado mundo real. Pero hay algo mucho más serio en juego que la verosimilitud. En eso también se parecen a la vida, donde lo que está en juego siempre parece estar más allá o más acá de nuestro concepto y de nuestra necesidad de sentido, y tal vez sea la primera excusa para que su obra siempre tenga su lugar en la biblioteca de cualquier apasionado. Eso, y la evidente intimidad con la que trabaja el lenguaje, que la han vuelto una voz tan inconfundible como la de Onetti, Felisberto, Levrero. Un botón de muestra: "Salí en puntas de pie con el pensamiento fijo en el hombrecito de arriba, siempre maquillado con tizne alrededor de los párpados porque paleaba carbón todo el día. Y me paré un minuto a escuchar algo que me bullía en el pecho como dispuesto a incendiar el mundo. No sabía aún qué tal iba a ser Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 91 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila la cosa en cuanto a su ejecución propiamente dicha. Miraba entonces hacia allá para calcular distancias; cuando lo que vi a la luz de la luna me dejó sin hálito. El carbonero estaba sentado en el pasaje, dormido junto a la poderosa mujer y roncando a su mismo ritmo. No, no era posible resistir el peso del cielo solitario que se me abrió entonces encima dejándome en su centro exacto. Se amaban, qué cosa inexplicable...". UN RETRATO PARA DICKENS, de Armonía Somers. El Cuenco de Plata, 2012. Buenos Aires, 124 págs. Distribuye Gussi. http://www.elpais.com.uy/suplemento/cultural/una-voz-inconfundible/cultural_700120_130308.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 92 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Recuerdos de la Inquisición y la tortura Una muestra, que se vio en Buenos Aires, sobre suplicios usados entre los siglos XIII y XVII reflejó el clima de terror que se generó de la mano de la Iglesia y de su influencia en el mundo. Esteban Ierardo analiza esta exhibición y explica las raíces culturales de una barbarie que nunca se detuvo. POR Esteban Ierardo CRUELDAD INSTITUCIONALIZADA. Los instrumentos de tortura exhibidos dan una muestra del terror. La Inquisición nació en la Edad Media como instrumento de control de las herejías, las desviaciones de la ortodoxia cristiana. Sus orígenes se encuentran en 1184, año en que, mediante la bula del papa Lucio III Ad abolendam, la Inquisición medieval fue establecida para debilitar la herejía cátara. Luego, el papa Inocencio III, considerando insuficiente las pesquisas inquisitoriales organizó una gran cruzada contra los cátaros en el sur de Francia, en ese momento la más importante herejía medieval. Encabezados originalmente por los dominicos, la Inquisición generó una estela de nefastos inquisidores (Tomás de Torquemada, Prior de los Dominicos de Segovia; Juan Pardo de Tabera, Arzobispo de Toledo; Juan Tomás de Rocabert, Arzobispo de Valencia, y muchos otros) que redactaron meticulosos manuales de interrogación bajo tortura. El Malleus Maleficarum (1486), fue el más célebre tratado inquisitorial, aunque vinculado principalmente a la caza de brujas. Además de los herejes, sus otras víctimas (que pertenecían al fin de cuentas también al grupo genérico de lo herético) fueron las brujas y hechiceros, los homosexuales, los blasfemos y los acusados de judaizar en secreto. La Inquisición se propagó a España, Roma, Portugal, o a México, donde se constituyó un Tribunal del Santo Oficio; y también se difundió entre los protestantes. Sin duda que la maquinaria inquisitorial debe ser entendida en su contexto histórico. Frente al peligro de la implosión del cristianismo occidental en una profusión de desviaciones del credo de Nicea avalado por Roma, la Iglesia estimó que era necesario velar por la única verdad cristiana monopolizada por la Santa Sede. I. La uniformidad supuso no sólo una igualación del discurso teológico en torno a la verdad revelada, sino también un conjunto de prácticas de vigilancia y violencia para imponer la comprensión “correcta” de la buena nueva de Jesús. Aunque la Iglesia haya estado atenazada por la amenaza real de una multiplicación de Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 93 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila cultos desobedientes al Papa, eso no aminora la feroz contradicción entre la retórica del amor de Cristo y el odio y destrucción vertidos como hierro caliente sobre quienes entendían el mensaje del Sermón de la Montaña de otras maneras. II. Algunos observan que en realidad el terror difundido por la Inquisición no fue tan vasto como se suele suponer. Las penas de muerte no habrían superado el 1% de las sentencias. La mayoría de las veces los condenados sufrían alguna flagelación o alguna humillación pública, como portar el bonete y una cruz, o peregrinar a Tierra Santa, o sufrir confiscaciones de bienes o cárcel. Se habla de una “leyenda negra de la Inquisición española”, por ejemplo, surgida al compás de la persecución de los protestantes malquistados con Roma. Precisamente, plumas protestantes habrían lanzado especiales estiletazos contra la Inquisición para exagerar su maldad con el fin de desprestigiar al catolicismo romano. Fuentes de estas “leyendas con fines propagandísticos”, serían el inglés John Foxe y su The Book of Martyrs, y más aún, el Sanctae Inquisitionis Hispanicae Artes, firmado con el seudónimo de Reginaldus Gonzalvus Montanus, obra de gran éxito y que vigorosamente contribuyó a cincelar la imagen funesta de la Inquisición en Europa. De todos modos, aunque su acción más letal no haya sido tan extendida, con el tiempo la Inquisición resultó intolerable para el horizonte moderno de los derechos naturales y la libertad de cultos. Aun así en la España archicatólica, las huestes de Torquemada recién se disolvieron en el siglo XIX. La lógica inquisitorial medieval fue una amenaza no sólo para los vivos sino también para los muertos, dado que en ocasiones se ordenaba exhumar y remover los huesos en un camposanto de alguien que con posteridad a su muerte se determinaba que había sido un hereje; o incluso los procesos inquisitoriales podían alcanzar hasta a los animales que eran torturados por algún crimen o agresión al ser humano, y a los que se pretendía arrancar una confesión, aunque ésta nunca ocurriera… Y las confesiones bajo tortura eran parte fundamental del proceso contra el acusado de herejía porque lo confesado bajo violento castigo era convertido inmediatamente en recurso probatorio de la culpa por los tribunales del Santo Oficio. Uno de los casos testigos de la poderosa maquinaria inquisitorial en pos del control y liquidación de la libertad de pensamiento fue, sin duda, el proceso de Galileo Galilei. Galilei se asoció a la tesis heliocéntrica copernicana. El desplazamiento de la Tierra del centro del universo aristotélico-tomista no era sólo una formalidad erudita. Suponía un violento disloque en la cosmovisión y el pensamiento teológico oficial. Si la Iglesia es guardiana de la verdad revelada por Dios, la humanidad cristiana (la humanitas como tal) beneficiada por este hecho debe ocupar el centro del universo material, porque lo que está en el centro es la propia Iglesia que recibe y redistribuye los dones celestes. Galileo fue presionado a reconocer que la proposición heliocéntrica no tenía pruebas irrebatibles. Por lo que Galileo se comprometía a ya no hablar de ella. En 1633 se le abrió un segundo proceso a instancias de la Inquisición en Roma. El año anterior había publicado su Dialogo sopra i due massimi sistemi del mondo tolemaico e copernicano (Diálogo sobre los principales del mundo), con peligrosas afirmaciones sobre la concepción copernicana. En esta ocasión, la Santa Inquisición lo procesó como hereje, y lo condenó a prisión domiciliaria el 22 de junio de 1633. III. Por su especial saña persecutoria, la Inquisición española fue el emblema del celo inquisitorial. Fue fundada en 1478 por los Reyes Católicos. Estaba bajo el directo control de la monarquía. Sólo se abolirá de forma final en 1834, bajo el reinado de Isabel II, aunque antes las liberales cortes de Cádiz, en 1812, por aprobación unánime habían votado su cancelación. El escudo de la Inquisición española mostraba una cruz; una espada como símbolo del trato punitivo aplicado a los herejes; y la rama del olivo como prenda de reconciliación para los arrepentidos. Y todo rodeado por la expresión latina: “Exurge domine et judica causam Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 94 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila tuam, psalm, 73” (“Álzate, oh Dios, a defender tu causa, salmo 73). En teoría, la Inquisición española como tribunal eclesiástico, sólo tenía jurisdicción sobre los cristianos bautizados. Pero en España no existía libertad de cultos, por lo que en la práctica la actividad inquisitorial se derramó hacia todos los súbditos del rey español. En el momento del advenimiento de la Inquisición hispánica, la península Ibérica, en sus grandes ciudades como Sevilla y Valladolid en Castilla, o Barcelona en la Corona de Aragón, alojaba importantes poblaciones de judíos, las llamadas juderías. Junto a los musulmanes, que dominaban aún en el sur, en el reino de Granada, los judíos serían uno de los blancos preferidos de las pesquisas del Santo Oficio. Durante la Edad Media y principalmente el tiempo en que la marca musulmana fue la prevaleciente en España, se produjo la famosa concordia y diálogo entre las culturas cristiana, musulmana y judía. Pero ya en 1391, una furiosa ola de antisemitismo derivó en uno de los progromos que asesinó a cientos de judíos en Sevilla, Córdoba, Valencia y Barcelona. Una de las principales causas del surgimiento de la Inquisición española sería el deseo de unificación religiosa. El vínculo entre política y religión es indisoluble en la historia de los últimos siglos del Imperio Romano o en el extenso milenio de la Edad Media. Ya Constantino, en el siglo III dC., habría decidido apoyar la religión de la cruz porque su fe sólida podría unificar la creencia religiosa dentro del imperio para así actuar como cemento cohesionador del estado. La unidad religiosa como antecedente necesario de un estado fuerte e integrado. Y esa fortaleza del estado era fundamental en el programa político de los Reyes Católicos. Y para cimentar un estado compacto se debe antes derruir obstáculos o resistencias, como la tradición de las autonomías locales o los fueron de ciertas ciudades o regiones; y, también en este sentido, controlar la minoría judeoconversa. La intromisión de la Inquisición era útil para estos propósitos. Y nunca se debe expulsar de las causalidades relevantes las motivaciones económicas... las propiedades de los procesados y condenados por la Inquisición eran confiscadas. Los autos de fe eran las ceremonias de la Inquisición en las que los condenados eran expuestos públicamente, con el fin de graficar de modo solemne su condena como hereje, en la mayoría de los casos. Había autos particulares, y los autos generales. Estos últimos se realizaban en grandes espacios públicos, por lo general en días festivos. En este rango, el auto general de fe era el más arquetípico, y se realizaba con numerosos reos quemados vivos por impenitentes. La pintura, como documento histórico, y no en este caso como vehículo transmisor de belleza, nos legó la estampa de algunos de estos “autos” imponentes. Francisco Ricci pintó en 1683 el Auto de fe, que se exhibe en el Museo del Prado. Pero la pintura documento emblemática en este sentido es un Auto de fe de 1475 pintado por Pedro Burruguete, cuyo título reza: Santo Domingo presidiendo un auto de fe. En el extremo inferior derecho, unos infortunados semidesnudos esperan el encendido de la pira de fuego que los expurgaría de su estigma demoniaco. También es destacable, y muy conocido, el Auto de fe de la Inquisición, de Francisco de Goya. Las fogatas de la quema de hereje no se apagan en los lienzos. IV. La imaginación en su altura positiva es acceso a nuevos mundos. En su rostro más grotesco, es descenso a formas de sufrimiento y de sadismo que flagelan la potencia aun de las más descriptivas palabras. La Inquisición cavó lo suficiente en el horror para ensayar sus descensos infernales. Para esto, afinó un diverso dispositivo de tortura, compuesto de una pléyade de ominosos instrumentos de castigo; cada uno de éstos suponía en sí un método de flagelación específico. La lista de los instrumentos para la vejación es muy vasta. Aquí podríamos recordar sólo, por ejemplo, el aplastador de cabezas (dos barras de hierro que actuaban como una prensa o morsa que se colocaba sobre la cabeza del desdichado para ir aplastándole el cráneo hasta que reventara); el cepo chino (una caja de madera Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 95 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila en la que se colocaban los pies, para presionarlos hasta el dolor indecible); el aplastapulgares (en este caso se buscaba el aplastamiento de uñas, falanges y nudillos); el collar de púas (con pinchos en todos lados, atenazaba y desgarraba el cuello de la víctima); la garrucha (se ataban las manos del reo, y por una polea se lo subía, luego se lo dejaba caer sin que tocara el suelo, lo cual provocaba dolorosas dislocaciones de las extremidades); el desgarrador de senos (una tenaza con cuatro puntas afiladas que, al rojo vivo, se hundían en los senos desgarrándolos); la cuna de judas (una pirámide puntiaguda sobre la que se subía a la víctima para dejarla caer repetidas veces, impactando violentamente en la zona anal o genital). Sin duda, la Inquisición imaginó un infierno real, cuyo patetismo físico contrastaba con el infierno “literario” de la teología medieval, que recoge Dante en la Divina comedia. V. La crueldad brotada a raudales a veces intenta su redención por la literatura. Redención imposible. Pero que, en ocasiones, es fermento para obras artísticas evocadoras de lo siniestro. La novela gótica El monje (1796), de Matthew Lewis, integra el terror y la represión inquisitorial al juego ficcional. Edgar Allan Poe, en El pozo y el péndulo, se inspiró en las torturas de la Inquisición, aunque alejado de la base histórica documental. En Los hermanos Karamázov de Dostoievski, se interpola como intertextualidad la famosa Leyenda del Santo Inquisidor, situada en tiempos de la Inquisición española. Jesús regresa a la tierra para escandir de nuevo en los cálices de la convivencia el dulce líquido de un amor espiritual. Pero el inquisidor le recomienda que se retire y no regrese porque su presencia es una amenaza. Con mucha saña, fuego y sermones, los inquisidores han construido el orden que en el fondo el hombre quiere: la obediencia y su bálsamo de seguridad, y no el difícil ejercicio de la libertad que proponía el hijo del Dios o de un carpintero. Miguel Delibes, en 1998, publicó El hereje, en torno a un grupo protestante en Valladolid, reprimido por la Inquisición. VI. La Inquisición vibra en el lado siniestro de la Edad Media. Lo medieval rezumó sangre y horror por doquier, matanzas, saqueos, violaciones, masacre de las primaveras. Pero no fue sólo lo siniestro. En un ejemplo de la contradicción extrema del espíritu humano, lo más abyecto coincidió con un real deseo de divinidad, de plena justificación y sentido para la vida. Una alta estima de la aventura y lo épico, de lo mágico, lo misterioso, principalmente en la naturaleza del bosque y las montañas, avivó la percepción del mundo del hombre medieval. Junto con su arte de la luz y las catedrales, de la poesía visionaria de Dante y las gestas artúricas y el Cid. Con el paso del tiempo, y ya sin su parafernalia de instrumentos de tortura y sus secuestros e interrogatorios, el celo por la ortodoxia se urde hoy por la Congregación para la Doctrina de la Fe, órgano estratégico del conservadurismo católico. Hoy, la Inquisición medieval es recuerdo que impele a pensar en los peligros que amenazan las libertades individuales y la integridad personal bajo el aborrecible expediente de Dios “así lo quiere”. La actualidad de la Inquisición y sus instrumentos de suplicio conservados y expuestos en museos, son la memoria de las fisuras más oscuras del ser humano. Y son una paradójica demostración de la realidad del infierno que proyectó el catolicismo en valles de fuegos y lamentos. El infierno no fue sólo creencia para atormentar en el otro mundo sino en éste. Los gritos del infierno no eran las lamentaciones en la imaginación literaria de Dante y los nueve círculos infernales, o en las amenazas sacerdotales en los púlpitos. Los gritos infernales eran en realidad los que surgían de las entrañas reventadas, los cuellos sangrantes, los huesos fracturados, los músculos despedazados de las víctimas torturadas por la Inquisición en el fondo de las mazmorras. Ese infierno sólo ha desaparecido en su forma inquisitorial medieval. Pero sobrevive bajo otras formas del terror y control social en la historia moderna. Sólo una escuela cívica de auténtico cultivo de la tolerancia disolverá alguna vez la perversidad de la mentalidad inquisitorial. Sólo la real valoración de universo del otro, Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 96 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila infunde valor y respeto a las muchas interpretaciones del mundo. * Esteban Ierardo es Licenciado en Filosofía por la UBA. Docente y escritor. – Este texto fue elaborado por Ierardo a raíz de la inauguración de la muestra “Inquisición, antiguos instrumentos de tortura” traída de Italia por un grupo de coleccionistas europeos, con el reconocimiento del Ministerio de Patrimonio Cultural. Se exhibió en Buenos Aires a fines de 2012 en un espacio de 500 m2 donde se dispusieron más de 50 piezas originales y restauraciones. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Recuerdos-Inquisicion-tortura_0_875312474.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 97 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Joven narrativa argentina En busca de la lírica perdida Pese a la tendencia al sarcasmo, la parodia y el humor negro que marca el tono de los escritores nacidos después de 1960, algunos de ellos parecen inclinados a rescatar una voz literaria de inflexión poética e intimista Por María Rosa Lojo | Para LA NACION Mariana Docampo. La voz lírica, la mirada lírica están signadas por la apertura y la entrega. Un yo se desnuda ante los ojos y los oídos, expuesto y vulnerable en sus sentimientos más secretos y sutiles. Pero a la vez se viste con el esplendor del lenguaje en estado poético, que es su estado puro, como bien lo señalaron Ernest Cassirer y Gérard Genette. Un "estado de metáfora" en el que yo y mundo se entrelazan, todo se conecta con todo, y el árbol de las correspondencias se ramifica y florece. Desde estas redes metafórico-simbólicas, el sujeto no queda aislado en su dolor o su dicha, las comunica con el universo, en un acto paradójico de religación solitaria y confesión enmascarada. La entonación lírica no es obligatoria en el relato. Sin embargo, puede aparecer como un plus, quizá para recordarnos que en el alfa y el omega de la lengua está la poesía. Así ocurre en muchas obras fundamentales de la literatura universal y de la nuestra en particular: de Marcel Proust a Javier Marías, de Sara Gallardo a Juan José Saer, de Leopoldo Marechal a Silvina Ocampo. Incluir momentos líricos, enfoques líricos, dentro de la narrativa solía contarse entre los desiderata de los escritores argentinos que los sucedimos. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 98 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Martín Kasañetz. Pero en las narraciones de los nacidos después de 1960, la parodia, el sarcasmo, la (auto)ironía, el humor negro marcan habitualmente el tono, sin dejar demasiado margen para la efusión más honda de lo íntimo. ¿A qué atribuir este cambio? Opina Elsa Drucaroff, autora de un libro de referencia (Los prisioneros de la torre, 2011) sobre los nuevos escritores: Para que no predomine ese tono zumbón y autoirónico o sarcástico se precisa que quienes escriben tengan certezas fuertes, confíen que hay discursos que realmente pueden explicar y modificar el mundo. Las generaciones de posdictadura observaron con lucidez que el mundo que los rodeaba era atroz pero no ofrecía ningún camino confiable para mejorarlo. La ironía que se proyecta sobre toda la realidad, empezando por el propio yo, contamina la expresión del sentir con "una cierta mueca burlona." Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 99 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Pablo Melicchio. Aunque la caída de las certezas (y de las esperanzas) es un horizonte que las últimas camadas compartieron, por lo menos en el terreno político, no todos sus exponentes renunciaron al lirismo. Algunos de ellos, consultados como Drucaroff, para esta nota, proponen también otras razones para explicar la posición antilírica (o "alírica") predominante. Claudio Zeiger (1964) la atribuye a "una especie de superyó teórico que se impone a los escritores en general, y que debe intimidar un poco a los más nuevos. Hay que estar todo el tiempo diciendo algo genial, o ingenioso". Y deplora la pérdida de algunos referentes literarios que funcionaban antes: "Sobre todo las voces de un lirismo contenido, las que más me gustan, como Carson McCullers o Juan Carlos Onetti". Martín Kasañetz (1978) culpa a "la liviandad y la velocidad" que definen el ritmo de la vida contemporánea por bloquear la "pausa" y la "cavilación" de la poesía: "Un texto lírico obliga a reflexionar y lentifica la lectura, ya que el lector debe acompañar ese texto con el proceso de interpretación que éste le genera". Mariana Docampo (1973) apunta al "temor de caer en lo sentimental, pero ante todo, en lo irracional", y al "desinterés por la dimensión trascendente, sagrada de las cosas". Pablo Melicchio (1969) relaciona el adelgazamiento de la dimensión metafórica con la caída de la censura en la etapa posdictatorial, pero también con la tentación de la linealidad y el facilismo. Jimena Néspolo (1973) no invoca razones, pero reivindica la posibilidad de integrar la lírica y el sarcasmo, como ocurre en la poesía de grandes clásicos (Góngora y Quevedo); en todo caso, concluye, la literatura es "una aventura vital plena, al modo de los antiguos románticos, si se quiere", "un cielo de entera libertad", más allá de los géneros, las modas, las capillas. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 100 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Jimena Néspolo. ¿Por qué, por otra parte, apelan a la introspección lírica los encuestados? "La voz, en definitiva, es el mediador más auténtico entre el narrador/escritor y el lector. Cada vez estoy más convencido de que se trata de decir la verdad. Esto no significa ser necesariamente autobiográfico sino ser auténtico. Y la perspectiva lírica, en definitiva, es decir la verdad de lo que se siente mientras se escribe" (Zeiger); "Es un valor agregado. El relato se divide en, al menos, dos capas. Por un lado está el mensaje escrito que llega al lector como una primera impresión y, por otro, un metamensaje que se va gestando y que provoca un impacto superior" (Kasañetz); "Busco que la razón deje de ser organizadora del discurso para lograr sentidos más amplios, y por otro lado, me importa la música, inherente a lo lírico, las palabras en su aspecto material, sus ritmos internos, sus combinaciones", (Docampo). "Es una expresión profunda, una voz que brota desde el interior; es un adentrarse, intenso, muchas veces oscuro, en el alma poblada de cielos e infiernos; una salida metafórica, donde el yo es el vehículo que expresa una intimidad", señala Melicchio, que coincide con Kasañetz y con Docampo en destacar la importancia sugestiva de los silencios. Todas parecen buenas razones para seguir trabajando en un registro de escritura poco valorado hoy por el mercado editorial, pero necesario sin duda para quienes han decidido aventurarse en las zonas del ser más densas y profundas, en busca de la máxima intensidad.. http://www.lanacion.com.ar/1560804-en-busca-de-la-lirica-perdida Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 101 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Dictador o súperestrella, Stalin "vive" 60 años después de su muerte Homenajes e indignación se suceden en Rusia al cumplirse el 5 de marzo un nuevo aniversario de su muerte. El presidente Putin encargó se escriba un libro de historia común a todo el país que no contenga contradicciones. STALIN. En una típica pieza de la iconografía oficial soviética. A él estuvieron dirigidos los textos de contrición de Mandelstam o Babel. Retratos en autobuses, en imágenes religiosas o pósters de héroes: 60 años después de la muerte del dictador soviético Josef Stalin, Rusia revive el culto del histórico personaje. Nacido en 1879 como Josef Yugashvili, murió el 5 de marzo de 1953 a los 73 años. Mañana martes, cuando se cumplen 60 años de su desaparición, películas en la televisión estatal y conferencias recordarán al hombre que no sólo controló la Unión Soviética, sino todo el bloque europeo oriental. Pero muchos se preguntan por qué se añora ahora en Rusia a un personaje represor, lo que ha desatado un fuerte debate en le país. "Stalin es celebrado por algunos como si se tratara de una superestrella", dijo el publicista Nikolai Svanidze en declaraciones al diario sensacionalista MK. "Ya no es el sangriento dictador, sino casi Jesucristo", escribe provocador. Svanidze critica que hoy en día se vuelva a "apretar las tuercas" a la población: "El pueblo no cuida la libertad y la democracia (...) y aprueba indiferente todo, está de acuerdo en todo. Y vuelve a odiar a América". Activistas de los derechos humanos e historiadores denuncian desde hace años que tras una fase de apertura y cambio (Glasnost y Perestroika) muchos archivos siguen reservados. El esclarecimiento de los crímenes de Stalin sigue siendo difícil. Y a debate público no salen cuestiones como los campos de la muerte, el fusilamiento de eclesiásticos y otros inocentes, la hambruna de los tiempos soviéticos, o toda esa brutal inhumanidad de la época estaliniana, señalan. La televisión pública presenta comprensivamente a Stalin como un hombre que tuvo que tomar decisiones difíciles en momentos difíciles. Los políticos defienden por ejemplo que la ciudad de Volgogrado vuelva a llamarse Stalingrado, y no sólo para las celebraciones. Opinan que el nombre Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 102 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila retirado en 1961 en el marco de la "desestalinización" podría quizá recordar más duraderamente la victoria contra la Alemania de Hitler. E incluso un grafiti borrado y reescrito en el metro de Moscú vuelve a recordar hoy al dirigente soviético: "Stalin nos inculcó la fidelidad a la nación". Muchos padres están indignados porque en las escuelas se enseñe a sus hijos que Stalin fue un "gestor efectivo" y fundador de una gran potencia mundial. La muerte de millones de personas y las represiones son cuestiones que quedan en un segundo plano. El historiador Alexander Vatlin, de la Universidad Lomonossov de Moscú, ve el peligro de que Stalin gane popularidad entre los jóvenes como "símbolo del valor y autoridad". El presidente ruso, Vladimir Putin, ha encargado la elaboración de un libro de historia unitario en el país que no contenga contradicciones. Y los analistas advierten que la figura de Stalin volverá a utilizarse para dividir a la sociedad y desviar la atención de cuestiones importantes. "Se habla tanto de Stalin porque falta una política real", comentó el escritor Michail Weller en una mesa redonda con motivo del aniversario. Rusia sigue sufriendo hoy en día las consecuencias de la economía estalinista, aseguró el economista Mijail Alexeyev durante un debate en Moscú. El mantenimiento de la propiedad estatal en algunas zonas da quebraderos de cabeza al país. Historiadores y politólogos toman la palabra, pero no hay una postura unitaria. Según las encuestas, cada vez más rusos vuelven a ver al ex dictador de forma positiva. En torno al 48 por ciento de los encuestados considera que su papel fue bueno para la historia, según el instituto de sondeos Levada. Hace 15 años, el 60 por ciento de los rusos lo veían de forma negativa, un porcentaje que se reduce hoy al 22 por ciento. Y sobre todo los comunistas vuelven a poner claveles rojos en la tumba de su héroe en los muros del Kremlin. Fuente: Ulf Mauder / DPA http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/historia/Dictador-o-superestrella-Stalin-vive-60-anos-despuesde-su-muerte_0_876512538.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 103 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila EL REGRESO DE LOS VALORES La decencia como mínimo Agustín Courtoisie VEINTICINCO siglos de reflexiones sobre el bien y el mal no pueden haber pasado en vano. Así lo creen Graciela Vidiella, doctora en Filosofía por la Universidad de Buenos Aires, y Osvaldo Guariglia, Doctor Philosophiae por la Universidad Eberhard-Karl de Tübingen, Alemania. Este Breviario de ética es una propuestadensa pero didáctica, seria pero clara, actualizada para universitarios que no portan meramente su título, empresarios responsables y lectores no especializados pero exigentes. Claro que esto no es un manual de autoayuda. Los autores no se hacen demasiadas ilusiones al explicar los distintos fundamentos de las doctrinas éticas, ya se trate de clásicos como Aristóteles y Kant, o de filósofos más recientes, como Alasdair MacIntyre, John Rawls o Richard Hare. Pero precisamente ese pensar atento a la experiencia y la abrumadora crueldad del mundo es lo que genera más expectativas. Por ejemplo: "El amplio reconocimiento que la necesidad de establecer con claridad normas de conducta para el ejercicio de la actividad profesional ha logrado, no demuestra que se haya progresado en el respeto efectivo de esa reglas, como la reciente crisis financiera y bancaria, producida por inescrupulosos directivos de las más grandes instituciones (...) ha suficientemente demostrado". Si las normas en general son apenas emergentes marginales de relaciones de poder previas, o al contrario, constituyen aspiraciones que una vez formalizadas dan mayores chances al David de la moral, en la lucha con la bestia de Goliath, que todos llevamos dentro, es un problema de varias pipas. El escenario puede plantearse de modo aun más inquietante si se considera que la ética, que tiende a actuar por autoconvicción, es más frágil que el Derecho, que tiene al menos la compañía de la sanción. Y si incluso las normas legales son violadas pese a las penas asociadas a su incumplimiento, parecería que la influencia de la ética es casi nula en el mundo real. Un ejemplo de ello lo configura la prohibición de la tortura. El Artículo 7 del Acuerdo Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos estipula que "nadie será sometido a torturas ni a penas por tratos crueles, inhumanos o degradantes". Es triste pensar que esa norma entró en vigor en 1976, el mismo año en que fueron asesinados los ex parlamentarios uruguayos Héctor Gutiérrez Ruiz y Zelmar Michelini, quienes precisamente luchaban a favor de los Derechos Humanos y habían denunciado "torturas, tratos crueles, inhumanos o degradantes". Contra toda la resignación que podrían destilar los anteriores reparos, el Breviario de Guariglia y Vidiella destina trece capítulos para remontar la tentación de abandonar la pelea. La primera parte del libro señala algunas bases de la disciplina: conceptos, métodos, lenguaje, tipo de argumentos usados para emitir juicios morales, procedimientos de decisión y peculiaridades del conocimiento Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 104 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila moral. La segunda parte se concentra en dos grandes estrategias éticas: las deontológicas y las teleológicas. Por último, la tercera parte aborda algunos ámbitos clásicos o muy en boga de la ética aplicada (la felicidad, el derecho a la salud, globalización y Derechos Humanos). Sería aconsejable para una próxima edición del Breviario la incorporación de las ideas ético-políticas del montevideano Carlos Vaz Ferreira (1872-1958), quien se adelantó varias décadas a la mayoría de los teóricos de la búsqueda de "mínimos" en Sobre la propiedad de la tierra (1918) y Sobre los problemas sociales (1922). Por motivos inefables, parte de la academia es reticente a admitirlo. Más en general, a la cuidadosa exposición, palmo a palmo, minuciosa, de las sutilezas de cada nombre grande de la historia filosofía, el Breviario rega el tono de ese tipo de expositor o profesor que no intenta en absoluto agradar a su auditorio (Tomás Abraham, hombre afortunado que asistió a las clases de Michel Foucault, recordaba de ese modo al pensador francés). Resultar como "políticamente correcto" no parece interesar en absoluto a la dreupla autoral. Por ejemplo, cuando se quejan con una mueca de desagrado: "No todos los desarrollos contemporáneos de la virtud han recreado a Aristóteles. Hay quienes, como la filósofa británica Phillipa Foot, renegando de la idea de razón práctica, optaron por inspirarse en la escuela de los sentimientos morales de Hutcheson y Hume". Es más, no les perturba en lo más mínimo lanzar desde las primeras páginas este uppercut a las modas posmodernas todavía hegemónicas hoy en día: "Por la repetida interacción con estudiantes los autores son conscientes de que tanto el escepticismo como el relativismo moral que se cultiva en general en la cultura filosófica de lengua española y, lamentablemente, también en la enseñanza tanto secundaria como superior, son un duro obstáculo que es necesario superar, si el expositor, sea como docente o como autor, quiere ser atendido y comprendido". Varias décadas de enseñanza en las universidades de La Plata, Buenos Aires y del Litoral avalan esta imperdible, adusta y muy sólida invitación a la ética de los autores, sin "prevenciones ni prejuicios", incluso los de aquellos que se jactan de no tenerlos. BREVIARIO DE ÉTICA, de Osvaldo Guariglia y Graciela Vidiella. Edhasa, 2011. Buenos Aires, 251 págs. Distribuye Gussi. El caso de la salud Osvaldo Guariglia y Graciela Vidiella ALLEN BUCHANAN, filósofo de ascendencia marxista que participó en la confección de Securing Access to Health Care, defiende un decent minimum al cuidado de la salud, pero no como un derecho sino como un deber de beneficencia (o caridad) al que entiende como una obligación colectiva que debe coordinar el Estado. Si bien existe consenso entre los especialistas en defender un derecho a un mínimo decente a la atención de la salud, hay, también, un gran desacuerdo respecto a su contenido. Pese a ello, cualquiera podría admitir que dicha idea involucra estos dos aspectos: el decent minimum es relativo a cada sociedad, es decir, su contenido dependerá de los recursos sociales disponibles, así como también de cierto consenso otorgado por los ciudadanos; en segundo lugar, resulta una idea atractiva porque evita afirmar un derecho igualitario en sentido fuerte, en cuyo caso todas personas, sin discriminación y acorde con sus necesidades, tendrían derecho a usufructuar de todos los servicios disponibles. Reconocer un derecho implica admitir que su infracción justifica sanciones o acciones coactivas a fin de forzar su cumplimiento. De manera que afirmar un derecho al decent minimum es más fuerte que afirmar que todos deberían tener acceso por lo menos a cierto mínimo, y que cualquier sociedad debería proveerlo siempre y cuando no le demandase excesivos sacrificios. Debido a la fuerza moral que posee el concepto de derecho, otorgar ese carácter al decent minimum al cuidado de la salud, requiere una explicitación y delimitación de su contenido, en qué casos resulta lesionado y qué relación guarda con otros derechos. Sólo una teoría general de la justicia, que provea de principios de los cuales derivar derechos y establezca criterios para jerarquizarlos, podría satisfacer los requisitos antedichos. http://www.elpais.com.uy/suplemento/cultural/la-decencia-como-minimo/cultural_700123_130308.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 105 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Llegó la era del Antropoceno Un nuevo capítulo de la historia de la Tierra trajo cambios en la cultura, la política, la vida cotidiana y la relación con la naturaleza. Esos fueron los ejes de un debate internacional realizado en Berlín al que Ñ tuvo acceso. POR Timo Berger* CAPA DE AUTOS. Estos serán los residuos donde los investigadores del futuro leerán nuestro presente. Nadie dudaría que la presencia del ser humano en la Tierra está cambiando el medioambiente. Sólo basta con pensar en el calentamiento global, la extinción masiva de especies y la sobreexplotación de recursos naturales que experimentamos en la actualidad. Para algunos científicos, los efectos de las actividades humanas van mucho más allá: ya se traducen de modo irreversible en hechos geológicos. Los sedimentos que se van a encontrar dentro de miles de años, argumenta, por ejemplo, el historiador Helmuth Trischler –director del Departamento de Investigación del Deutschen Museum en Munich–, estarán contaminados por rastros, vestigios de actividades de origen humano. Allí se podrán encontrar: residuos químicos de la agricultura industrializada, partículas del aire contaminado por el uso de hidrocarburos, restos de materiales plásticos sin biodegradar, entre otras cosas. “En algunas playas la arena está conformada ya en un cuarenta por ciento por granitos de plástico”, sostiene Trichsler. Tanto es el impacto humano que a partir del año 2008 una comisión internacional de científicos de sociedades geológicas inició un debate acerca de nuestro actual período en la historia terrestre, el Holoceno, que significa “la era totalmente reciente”. Sin embargo, para un creciente número de expertos es más que evidente: vivimos en un nuevo período llamado Antropoceno. El interés que despertó este concepto en el mundo académico, pero también en la esfera política, es tan grande que una de las instituciones culturales más influyentes de Berlín, la Haus der Kulturen der Welt (Casa de la Culturas del Mundo), en cooperación con varias sociedades científicas prestigiosas, como la Max-PlanckGesellschaft y el Rachel Carson Center for Environment and Society y apoyado por fondos importantes del gobierno alemán, le dedicará en los próximos dos años una serie de conferencias, exposiciones y performances. “Das Anthropozän-Projekt”, el Proyecto Antropoceno, pretende ser como sugiere el subtítulo Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 106 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila una “investigación básica cultural con los medios del arte y de la ciencia”. ¿Pero qué es exactamente el Antropoceno y por qué una institución dedicada al mundo de la cultura como la HKW analiza un concepto geológico poco conocido fuera del ámbito universitario? Esta es una pregunta que también fue moneda corriente durante los cuatro días de realización del Proyecto Antropoceno a fines de enero que contaron con una asistencia de un público joven (en su mayoría) y sorprendentemente abundante. El término Antropoceno significa “lo nuevo fabricado por el hombre” y es usado por algunos científicos para describir el actual período en la historia terrestre desde que las actividades humanas han tenido un impacto global significativo sobre los ecosistemas terrestres. No hay una fecha precisa sobre su comienzo, pero algunos lo consideran coincidente con el inicio de la Revolución Industrial (a fines del siglo XVIII). Mientras tanto, otros investigadores remontan su inicio al comienzo de la agricultura. El término en sí fue acuñado en analogía con el término Holoceno en el año 2000 por el ganador del Premio Nobel de Química, el meteorólogo holandés Paul Crutzen, quien considera que la influencia del comportamiento humano sobre la Tierra en las recientes centurias ha sido tan significante que constituyó una nueva era geológica. El geólogo Jan Zalasiewicz, que escribió un libro con el sugerente título The Earth After Us: The Legacy That Humans Will Leave In The Rocks (La tierra después de nosotros. El legado que los humanos dejarán en las rocas) explica por qué el público considera este concepto atractivo: “La palabra Antropoceno agrupa muchos fenómenos, sobre los que hemos pensado hasta el momento de modo separado. Nos proporciona también una sensación para la dimensión y la relevancia del cambio global desencadenado por el hombre. Además, la idea del Antropoceno nos permite ver las transformaciones contemporáneas en el contexto de la historia terrestre entera”. Un nuevo paradigma El Antropoceno como marco para entender el mundo actual es también la idea que subyace en el proyecto de la HKW. Para los curadores, el Antropoceno no es nada menos que un nuevo paradigma para entender las relaciones del ser humano con su contorno. En el programa del proyecto Antropoceno, escriben: “Nuestra idea de la naturaleza es anticuada. Es el ser humano quien moldea la naturaleza. Esto es el núcleo de la tesis del Antropoceno, que no sólo anuncia un cambio de paradigma en las ciencias naturales, sino más allá de eso, busca nuevos caminos en la cultura, la política y la vida cotidiana.” Una de las curadoras es Katrin Klingan, la directora de la sección “Literatura, Sociedad, Ciencia” de la HKW. Para ella, el Antropoceno es un instrumento que nos habilita a ver que la vieja oposición entre cultura y naturaleza ya no se puede sostener hoy en día. Nos encontramos en un despacho de la HKW, afuera el Tiergarten –el enorme y bello parque de la capital alemana–, amaneció bajo una capa blanca de nieve. Se pueden ver los trazos de los animales silvestres que habitan la zona boscosa: conejos y zorros. Una impresión pseudorromántica de la supuesta naturaleza silvestre. Entonces resuena el eco de un ejemplo que se mencionó en la noche inaugural del encuentro: existen cien mil gatos domésticos por cada tigre en el mundo. Klingan justifica el porqué de la realización de este encuentro: “Lo que nos interesó fue que la diferencia entre cultura y naturaleza hoy en día ya no se puede hacer de modo riguroso. Sabemos que el hombre siempre formó parte de la naturaleza, pero el paradigma de la era de la modernidad marcó un límite fuerte: por un lado, el hombre y su espíritu; por el otro, los flujos de la naturaleza, en el que claro, intervenimos y lo ‘culturalizamos’. Hoy en día hemos transformado la naturaleza; tanto las capas geológicas como la estratósfera. Una de las consecuencias es que hoy tenemos que poner en tela de juicio la división entre naturaleza y cultura de la modernidad. En las humanidades esa división fue largamente cuestionada, lo que hoy es llamativo es que, sin embargo, ahora los químicos, meteorólogos y geólogos también lo hacen y se vuelven historiadores de nuestra civilización actual.” Klingan es consciente de que lo inusitado de ese pensamiento requiere aun una traducción para que el Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 107 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila concepto del Antropoceno pueda llegar a un público más vasto: “La historia humana y la historia terrestre ya están interconectadas, pero necesitamos otros relatos, otros narrativas para poder, por un lado traducir esos conocimientos científicos; y por el otro, ponerlas en relación con las las humanidades y las artes”. Tres preguntas entonces son claves para abrir el diálogo entre los científicos y artistas invitados al proyecto como resalta el intendente del HKW, Bernd M. Scherer, en su discurso inaugural: Primero, ¿es humano el Antropoceno? Pensar que el hombre es un ser natural y cultural al mismo tiempo nos deja ver que formamos parte de los circuitos naturales y nos lleva a pensar que debemos replantear nuestro modo de ver la naturaleza como mera fuente de recursos. Segundo, ¿es justo el Antropoceno? ¿Quiénes son los protagonistas principales y quiénes son los que sufren mayoritariamente de las consecuencias? Tercero, ¿Es bello el Antropoceno? ¿Cómo la nueva naturaleza se inscribe en nuestros cuerpos, o sea como vivimos un mundo en los centros urbanos que prácticamente desconoce la noche? ¿Cómo experimentamos un mundo en que la mayoría de objetos –y hasta algunos seres vivos– son producidos química o biogenéticamente? Mediantes esos interrogantes, coincide Klingan, se pueden discutir las dimensiones éticas, estéticas, políticas y económicas del Antropoceno: ¿Quién es el producto y quién es el productor en la Tierra? ¿Desde dónde y en qué períodos de tiempo se tiene que pensar la relación conspirativa entre naturaleza y hombre? ¿Tendríamos que replantear economías, atribuir a la economía de la naturaleza otros procesos de intercambio? ¿Dónde termina el “jardín planetario” que creamos? ¿Cuáles son las habilidades técnicas que empleamos? No se trata de ofrecer soluciones en primera instancia, destaca Klingan. Lo que le interesa a ella y a su equipo es facilitar encuentros, conversaciones y situaciones. “Los artistas que invitamos dan a conocer su pensamiento, sus métodos y sus prácticas artísticas, tanto como representantes de las ciencias naturales o humanas sin pedir nada de cambio”. Resalta que no fueron invitados para presentar obras artísticas: “El arte no será sometido a la tesis del Antropoceno, no queremos demostrar que el arte sobre el Antropoceno traerá un cambio”. En primera instancia, quieren yuxtaponer distintos formatos para hacer transparente los métodos y la práctica artística y dar libre acceso al conocimiento generado por los artistas y científicos. Uno de los artistas que compartió con el público sus métodos fue Xavier Leroy, coreógrafo y biólogo molecular. “Hemos pedido a todos los integrantes de los paneles que traigan un objeto como referencia material”, cuenta Klingan, “para indagar a través de él un cierto método artístico. Xavier traerá su cuerpo”. “Lo cual” –insiste– “no quiere decir que nos haga una performance ahí, sino que nos mostrará ciertos movimientos extraídos de distintas piezas de sí mismo. Lo que pone al descubierto entonces es su método artístico desarrollado en los últimos veinte años. Eso nos libera a través de su cuerpo”. Esa importancia de la cultura del “Open Access” se hace visible en la página web del proyecto donde pocos días después del primer encuentro ya se publicaban las notas y las intervenciones de los invitados. El aporte especial de la HKW entonces no es ilustrar la tesis del Antropoceno a través de obras de arte, pero sí buscar posiciones o planteos artísticos que plasmen los interrogantes del Antropoceno. La cocina metabólica Un ejemplo muy llamativo para esos nuevos enfoques artísticos que buscan generar fenómenos actuales transparentes y pensarlos como circuitos fue el de The Metabolic Kitchen (cocina metabólica), que instaló el grupo artístico “raumlaborberlin” en el gran vestíbulo de la HKW. The Metabolic Kitchen está, según los artistas, inspirado en la simultaneidad de distintas culturas alimentarias en la producción de alimentos contemporánea. Por un lado, dicen, tenemos una producción de plantas y animales supermecanizado; por otro lado, están los urban gardeners, jardineros urbanos, que tratan de criar sus propios alimentos, y graneros en la región que producen alimentos orgánicos a mayor escala. En la sala de entrada instalaron tres “módulos de producción” interconectados por cintas donde podían circular los productos en distintos estados de procesamiento. El primer módulo, instalado en el techo de la Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 108 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila HKW, era una sobredimensionada parrilla donde se asaba un buey entero y se lo cortaba en porciones. Seducidos por el aroma que emanaba de la carne asada, los visitantes podían ponerse en fila para recibir en el cuarto módulo el producto final: una hamburguesa muy elogiadaen su formato clásico de carne picada aderezada con kétchup y queso derretido. Para Silvia Fehrmann, directora de prensa de la HKW –y argentina que vive en Berlín–, The Metabolic Kitchen interroga nuestra relación con los alimentos y la comida. Al emular un proceso seudoindustrial de procesar el buey para volverlo hamburguesa al final de la tarde, y darlo de comer a los visitantes, se instala un sistema circular, un metabolismo. Así se puede pensar en un metabolismo social en la medida –argumenta Fehrmann–, en que la comida se vuelve parte importante de un metabolismo del planeta. Para ilustrar ese gran metabolismo social al que alimentamos –y del que formamos parte y que ya no es una mera metáfora de un grupo artístico sino que realmente está plasmando la faz de la Tierra–, basta con recordar algunas cifras: el noventa por ciento del peso de la masa biológica hoy en día en la Tierra corresponden a los animales criados por el hombre, sea ellos ganado o animales domésticos. Noventa por ciento del peso productivo de las plantas en el mundo, es sembrado por el hombre. Los conocimientos particulares que aporta el antropoceno no son nada nuevos, pero su planteo es novedoso, explica Fehrmann. El gran reto consiste en entender los metabolismos sociales, entenderse como ser humano que forma parte de un circuito más amplio, lo que implica que estamos comprometidos con otros animales. A la hora de accionar como seres culturales que tienen –por ejemplo la intención de labrar la tierra–, somos también seres naturales que tienen un impacto no intencionado. Así se producen los famosos “black holes” – puntos ciegos de nuestra visión–, como por ejemplo las zonas del océano donde flotan crecientes montículos de basura. Por eso, Fehrmann está segura de que el Antropoceno nos permite relacionar esos fenómenos sueltos a escala mundial y nos lleva a una nueva manera de pensar y hablar cómo contamos la historia natural desde ahora y cómo repensamos nuestros conceptos de cultura y de naturaleza. Y en eso coincide Klingan, que sin embargo anuncia que será un largo proceso recién iniciado: “Cuando intentamos describir la naturaleza resulta un tropiezo permanente porque hay ciertas observaciones nuevas a las que sólo podemos parafrasear porque no existen conceptos para ellos”. Más allá del comienzo de este vasto intercambio entre instituciones y sociedades de investigación, entre la academia y el arte, los panelistas y el público, el Antropoceno para Silvia Fehrmann no es un invento exclusivo de los científicos occidentales. Los vestigios de esa nueva formar de relacionarse con la naturaleza pueden trazarse ya en las tradiciones indígenas del continente americano. Darles derechos a la naturaleza, como en la nuevas constitución de algunos estados sudamericanos como Ecuador y Bolivia, por ejemplo, son la consecuencia de otra cosmovisión y el intento de traducir ese marco epistemológico que es el Antropoceno también en el campo jurídico. Darle derechos a la naturaleza mundialmente sería un primer paso para replantear nuestro modo muchas veces tan exhaustivo de explotar la naturaleza descuidando mucho de las consecuencias de nuestro accionar. El proyecto del HKW continuó en febrero pero en lugar de enfocarse en cuán “humana” es la naturaleza, se ha indagado en cuánta cultura se encuentra en la naturaleza: uno de los mayores impactos ha sido el de “Unmenschliche Musik”, música inhumana: composiciones de animales, máquinas y hechas por azar. El proyecto promete seguir sembrando nuevos interrogantes, sin duda. *Periodista y poeta alemán. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Llego-Era-Antropoceno-Geologia-social_0_875312473.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 109 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila William Ospina "Toda realidad está fundada en mitos" El narrador colombiano, premio Rómulo Gallegos 2009, habla de Ursúa, la novela que dio inicio a su trilogía sobre la conquista de América, y del sentido profundo de la literatura cuya función, según el autor, consiste en "recoger las preguntas de su tiempo" Por Martín Lojo | LA NACION La obra de Ospina invita a reflexionar sobre la relación del hombre con la naturaleza.. Foto: Diego Spivacow / AFV "Nosotros desaparecemos pero las preguntas y respuestas que alcanzamos a vislumbrar quedan allí, cada quien tiene la posibilidad de formular las cosas que la historia le permitió sentir y pensar." Con la impronta de considerar la literatura como un interrogante intenso y persistente, William Ospina (Padua, Colombia, 1954) le dio forma a una notable obra poética y ensayística que le otorgó un lugar privilegiado en las letras colombianas. Fue también una pregunta lo que lo llevó a emprender su obra narrativa, casi veinte años después de su primer libro de poemas. La curiosidad por descubrir los orígenes de Colombia y su población despertó la necesidad de narrar su propia visión de la historia. Así nació Ursúa (Mondadori), novela en la que cuenta el derrotero de Pedro de Ursúa, un conquistador y adelantado navarro del siglo XVI que fue asesinado en una de las primeras expediciones europeas al Amazonas. La descomunal historia del personaje hizo desbordar el relato, que tuvo que ser continuado en las novelas El país de la canela , ganadora del premio Rómulo Gallegos 2009, y La serpiente sin ojos . No obstante estar basadas en acontecimientos reales del pasado, las novelas escapan al fácil rótulo de "novela histórica". Su prosa parece crecer en la lectura e intentar capturar la vibración de los colores y la violencia de los actos. Un esfuerzo de escritura que, más que aportar una versión original del pasado, se propone la reconstrucción completa de un mundo perdido. "Hace unos veinte años me encontré con la obra de un poeta del siglo XVI, Juan de Castellanos, que escribió un relato muy extenso sobre la conquista de las regiones equinocciales de América y del Caribe", contó a adncultura Ospina, de visita en Buenos Aires. "Hacía mucho tiempo que buscaba respuestas sobre los orígenes de Colombia así que el libro me apasionó. Además era un poema, no un libro de historia ni una crónica seca, sino algo lleno de vida y de detalles. Me puse a escribir Las auroras de sangre , un ensayo sobre Castellanos." -¿Cuál fue su lectura del poema? -La obra, escrita en octavas reales de hace cuatro siglos, tenía fama de ser farragosa y difícil de leer. Al leerla vi que más allá de las dificultades sus temas eran apasionantes y su manera de contar, muy directa, sin Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 110 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila adornos ni demasiados artificios. Castellanos utilizó el verso porque era la manera más duradera de conservar las historias. No correspondía a la poesía de ese entonces, más hiperbólica y afín a los mitos griegos y latinos, como podría ser La araucana de Alonso de Ercilla. Esta obra era más moderna, narraba los hechos en toda su crudeza e intensidad sin intención de embellecerlos, y se animaba al mestizaje lingüístico. Aunque el español de entonces estaba en condiciones de escribir el Quijote , era una lengua que enmudecía ante América, no tenía palabras para nombrar lo que veía. -¿Cómo pasó de la escritura del ensayo a la de Ursúa , la primera novela de su trilogía? -Luego de terminar Las auroras de sangre sentí que había ciertas historias que yo podría contar tal vez con mayor nitidez que otros, porque me había familiarizado durante años con los detalles de la conquista. El relato escolar que nos llega casi siempre se centra en tres o cuatro hechos, pero descarta la intensidad abigarrada de ese mundo. No capta el asombro de los españoles ante un paisaje tan distinto, ni su lucha no sólo con los pueblos indígenas sino también con los climas, los ríos y las montañas. Tampoco recupera el choque que vivieron los indígenas: la crueldad de los conquistadores, los caballos que no conocían, los perros feroces que fueron una de las principales armas, la pólvora y las espadas, el cristianismo. Los españoles decían que los indios eran idólatras porque veneraban unas piedras, o al sol, pero éstos veían que los españoles adoraban a un par de leños cruzados y también los creían bárbaros. -¿Por qué eligió narrar la historia de Pedro de Ursúa? -Cuando tomé la decisión de escribir la novela sabía bien qué escoger de tanta profusión de hechos. Quería contar los primeros viajes europeos al Amazonas, sobre todo comparar el primero, que fue de descubrimiento, con el segundo, que fue de conquista. La primera vez no sabían que existieran la selva ni el río. Iban a buscar canela; no la encontraron pero se toparon con la selva amazónica. Fue un viaje de fuga a través de ella. El segundo viaje, que organizó Pedro de Ursúa veinte años después, fue muy distinto: ya conocían la existencia de la selva y del río y tuvieron la demencia de pensar que podían conquistarlos, cuando ni siquiera en el presente se ha logrado del todo. Es un buen símbolo de la ambiciosa sociedad española de entonces. Pero sus proyectos desmesurados dan un indicio de su grandeza. No se trata sólo de hablar de su codicia y brutalidad, que eran grandes, sino también del valor que se requirió para explorar un mundo extraño, casi un planeta desconocido. -A Ursúa le siguieron El país de la canela y La serpiente sin ojos . ¿Cómo surgieron estas continuaciones? -La información sobre los viajes era tan copiosa que un solo libro no iba a bastar, iban a ser como mil quinientas páginas. Para comprender las diferencias entre el primer viaje y el segundo era necesario reconstruir un mundo entero. También tenía que crear un retrato fiel de Pedro de Ursúa, el centro de esta aventura. Al investigar sobre él descubrí sus años tempranos. Llegó al territorio de lo que hoy es Colombia a los diecisiete años, con su tío, que era un juez de residencia de varios conquistadores. Partió al Amazonas recién a los treinta y tres. Su vida hasta entonces fue una historia de guerras típicamente colombiana, de esas que todavía no acaban. Con hombres armados que irrumpen en las aldeas y arrasan y masacran. Lo de siempre: una guerra eterna por la riqueza, que a veces es real y a veces es quimérica, pero siempre produce sangre. Ursúa libró cinco guerras: contra los panches, contra los chitareros; contra los musos, en la región de las esmeraldas; contra los taironas en las ciudades perdidas de la sierra nevada de Santa Marta, cerca del Caribe, y finalmente contra los cimarrones de Panamá. Cuando terminé el primer libro, todavía no había comenzado a narrar la travesía por el Amazonas. En el segundo libro conté cómo Ursúa se enteró del viaje que había hecho Francisco de Orellana. En el tercero, cuento cómo Ursúa decide emprender su propio viaje y encuentra su final en la selva, a manos de Lope de Aguirre. -¿Cómo caracterizaría hoy a Pedro de Ursúa? -Era un típico conquistador español, en lo que tiene de salvaje y de gallardo príncipe renacentista. Para la escritura fue importante encontrar una mirada y un tono de voz que no reprodujeran la leyenda negra de los conquistadores como monstruos de maldad, ni la leyenda rosa de que fueron civilizadores y portaestandartes de la cultura. La historia no se puede leer con parámetros tan estrechos. Hubo mucho valor y heroísmo, abnegación a veces, y sin duda también mucha barbarie y codicia. Quien me enseñó el tono fue Juan de Castellanos, que, a pesar de ser un poeta español y miembro de los ejércitos, tuvo palabras nobles y generosas para los pueblos indígenas y una curiosidad extraordinaria por sus mitologías. Se quedó setenta años en América luego de haber vivido sólo diecisiete en Europa. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 111 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila -¿Cuál fue la importancia de elegir un narrador mestizo para encontrar ese tono? -Era esencial definir quién iba narrar. El personaje narrador cambia a medida que avanza el relato. Al comienzo está lleno de admiración por su amigo Pedro de Ursúa, hace una biografía de tono europeo clásico. Él mismo en su juventud se siente muy europeo. En el segundo libro ya es un poco más consciente de su condición mestiza. Le ha tocado ya padecer el vértigo de la conquista. Mientras que Ursúa es una biografía, El país de la canela es una autobiografía. En La serpiente sin ojos , yo anhelaba que se pudiera oír la voz indígena. Algo imposible, porque los indígenas de ese entonces fueron exterminados y no pudieron contar su versión. El narrador hace esfuerzos para hablar y sentir como nativo, y a veces en la narración se cruzan voces y frases que yo mismo no sabría bien a quién atribuir. Entraron allí cuando buscaba algo que no fuera la voz del narrador sino la de la selva misma. -Un aspecto clave de la novela es el estilo casi barroco, con un intenso ritmo que embriaga la lectura. -Aunque quería contar una historia del siglo XVI, tenía claro que no iba a utilizar la lengua de la época. Todo lenguaje fatalmente envejecerá, no vale la pena acelerar el proceso. Lo importante era revivir esa historia y tratar de hacer reales esas selvas en nuestro lenguaje actual. Para mí es claro que ningún escritor latinoamericano puede ignorar que escribe después de Neruda, Borges, García Márquez o Rulfo, y que nuestra exploración del mundo parte de la lengua que ellos nos dejaron. Pero también entendía que contar cómo era América hace cinco siglos requería extremar los recursos verbales. Difícilmente podría hacerse con palabras neutras, desapasionadas o incoloras. Es inevitable que se imponga la exuberancia de las selvas, o el choque de dos culturas tan vistosas como la española del Renacimiento y las indígenas con sus adornos de oro, sus ritos y leyendas. Me estaba enfrentando a un relato que exigía una gran demanda de recursos literarios y un lenguaje por lo menos enfático. -La exuberancia americana en sus novelas es, sin embargo, realista. No hay un desborde fantástico, como ocurría con el realismo mágico, sino que el mito aparece como el desconcierto en la mirada del europeo ante un mundo que no comprende. -Toda realidad está fundada en mitos. En la nuestra, aunque no los veamos, están allí: el mito del progreso, el mito científico de la infinita posibilidad de conocer el mundo, el mito tecnológico de la transformación infinita, el mito de la industria que todo lo pone al servicio del hombre y el mito de la supremacía del ser humano sobre el planeta. Esas ideas humanistas, junto con el cristianismo, son los mitos que chocaron en América con las creencias sobre la naturaleza de los nativos: su respeto reverencial por los ríos y las selvas. Si algo diferenciaba a ambos pueblos es que el español se sentía autorizado a ser el amo del mundo. El indígena, en cambio, sabía que con la selva no se debía jugar, que era verdaderamente peligrosa y poderosa, pero que también podía ser dadivosa. Me gustó trabajar ese contraste, ver hasta dónde se podían fusionar y en qué momentos chocaban. En la tercera parte el conflicto se agudizó. A medida que Ursúa avanzaba por la selva, aumentaba la supremacía de la naturaleza y la debilidad humana. Estaba vencido de antemano: la selva no triunfa con una contundencia frontal, sino con pequeños accidentes y desalientos que nos demuestran que no todo lo podemos controlar y que cualquier descuido puede transformarse en un peligro. Aunque traté de ser ecuánime, no puedo evitar que sólo se pueda escribir sobre el pasado desde las preguntas del presente. Estos libros no podrían haberse escrito en el siglo XVI, sino a comienzos del XXI, con nuestras preguntas sobre la naturaleza y el papel que estamos jugando en el planeta, las fuerzas que estamos desatando y los demonios que tentamos. -¿Cómo cambió la escritura su visión de la historia americana? -Diría que el esfuerzo fue menos por crearme una opinión definitiva de la historia que preguntarme por nuestra manera actual de habitar el continente. Quizá no todos podamos militar por la naturaleza, pero al menos podremos preguntarnos qué somos con respecto a ella y si podemos relacionarnos con el mundo de un modo distinto que el puro saqueo. Posiblemente las generaciones a las que pertenecemos no puedan detener la inercia de la sociedad industrial, pero las generaciones que vienen no van a nacer en un mundo tan confortable como el nuestro, y para ellas no va a ser una opción sino un imperativo. Creo que toda literatura es la manera en que la conciencia recoge las preguntas de su tiempo, está siempre en la frontera entre los desafíos del mundo al que pertenecemos y los que comienzan para las generaciones que vienen. La aventura de escribir una novela es un esfuerzo por vivir los hechos, además de pensarlos. Yo quería sentirme lo más cerca posible de lo que ocurrió y que el lector pudiera sentir al menos una sombra de lo que fue esa experiencia vital.. http://www.lanacion.com.ar/1560805-toda-realidad-esta-fundada-en-mitos Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 112 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Larga vida a la tinta electrónica Arantza Larrauri, la directora de una empresa que distribuye libros digitales en todo el mundo, habla del declive del texto impreso y del largo porvenir del e-book. POR Horacio Bilbao FUTURO. La edición virtual sólo puede crecer, dice Larrauri. En tiempos de crisis como la que viene sacudiendo a España durante los últimos años son pocos los rubros económicos que muestran números positivos. El mundo del libro no escapa a esta realidad. Y si a esto le sumamos las dificultades que impone el cambio de paradigma, la transición de los soportes físicos a los digitales, el escenario de los “mercados culturales” se vuelve todavía más complejo. Contra viento y marea, el mundo de los e-books sigue creciendo. El libro digital llegó para quedarse. De manera tibia todavía en el mercado español, pero con un horizonte a la vista (en los Estados Unidos ya son más de 3 de cada 10 las personas que cuentan con un dispositivo de lectura digital y los títulos en inglés superan los 3 millones). Sobre la evolución del mercado español charlamos con Arantza Larrauri, la directora de Libranda, un exitoso emprendimiento, el mayor en castellano, que distribuye y gestiona contenidos y servicios digitales para 45 grupos editoriales. Surfeando la marea de la crisis, la firma que timonea Larrauri, una sociedad constituida por 7 grupos editoriales de España (Planeta, Random House Mondadori, Santillana, Roca Editorial, Grup62, SM y Wolters Kluwer), se ha vuelto una alternativa seductora para aquéllas editoriales que no se deciden o no pueden crear sus propias plataformas digitales. Libranda distribuye actualmente el contenido de los editores en 120 tiendas de todo el mundo; entre ellas Amazon, Barnes&Noble y Google. Larrauri aclara que no nacieron para competir con estos gigantes tecnológicos: “Somos una empresa de servicios, no un canal de venta, por tanto no competimos con las tiendas sino que trabajamos con todas ellas tras el objetivo de que los libros de los editores tengan la mayor presencia, visibilidad y difusión posible y estén al alcance del máximo número de lectores”. Las posibilidades de la autopublicación, la competencia entre tablets y readers, los sistemas de copyright y la política de precios, temas de una entrevista que anticipa la visita de la compañía española a nuestro país. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 113 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila -¿De qué magnitud es la declinación del libro impreso? -La tendencia varía en función del lugar, pero en España, la caída de las ventas del libro impreso en el mercado trade (ficción + no ficción + infantil y juvenil, excluyendo libro de texto) entre 2009 y 2012 ha sido del 23 por ciento. -El porcentaje de catálogos digitalizados sigue siendo muy bajo en el mercado español, ¿qué se necesita para que cambie? -Hasta la fecha, el esfuerzo de la digitalización se ha centrado fundamentalmente en las novedades y podemos decir que, afortunadamente, la gran mayoría de editoriales lanzan al mercado simultáneamente el libro en formato papel y en formato electrónico. Falta, no obstante, digitalizar el fondo editorial. A medida que el número de lectores aumente (actualmente el mercado del libro electrónico en español supone aproximadamente un 2 por ciento del mercado del libro), la inversión de la digitalización del fondo será rentable y se llevará a cabo. El libro electrónico sólo tiene una dirección posible: crecer. Es cuestión de tiempo. -¿Cuál será el lugar de la autopublicación, la posibilidad de que autores, más o menos conocidos, se distancien de las editoriales y encaren su negocio? -Mientras el papel mantenga una cuota importante del mercado no creo que los autores que han consolidado su relación con una editorial se autopubliquen y encaren de forma independiente su propio negocio digital ya que las editoriales están negociando conjuntamente los derechos de autor en todos los formatos. No obstante, sí puede haber algún autor muy importante, un autor que en sí mismo sea una “marca”, que pueda permitirse mantener los derechos digitales y gestionar sin editor la venta de su obra en formato electrónico. En cuanto a las plataformas de autopublicación en formato digital (incluyendo a veces la posibilidad de print on demand) para autores noveles o menos conocidos, creo que son un fenómeno que seguirá creciendo y que en algunos casos puntuales servirá de “cantera” para que las editoriales puedan identificar autores interesantes y originales. Lo curioso es que algunas de estas plataformas de autopublicación se plantean ofrecer a sus autores servicios de asesoramiento, corrección, edición, promoción, marketing, gestión de redes sociales e incluso publicarlos bajo un sello editorial digital. Esto significa que empiezan a ofrecer servicios editoriales, a querer convertirse en editores. Pero no me imagino un futuro del libro basado en la autopublicación. El libro seguirá pasando por las editoriales. El editor aporta valor al autor / creador y también al lector y será siempre necesario. -Hay nuevas experiencias de lectura. Libros multimedia, por entregas... pero en materia de e-books, manda la tinta electrónica, es decir, lo más parecido a la experiencia de lectura en papel. ¿Habrá modificaciones sustanciales en este sentido? -Es difícil preverlo porque en el mundo de la tecnología los cambios se suceden vertiginosamente y pueden surgir nuevos dispositivos con nuevas soluciones de lectura, mejores que las actuales. Sin duda, la tinta electrónica de los readers es fantástica. Es la tecnología que mejor imita al papel. Sin embargo, la lectura en dispositivos como los tablets está creciendo ya que para muchas personas no es inconveniente que la pantalla esté retroiluminada. Vemos ese crecimiento en el aumento de las ventas de algunas tiendas online que únicamente cuentan con apps de lectura para tablets y smartphones. -¿Qué posición personal tiene frente al uso del polémico DRM? (Digital Right Management o Gestión de derechos digitales, es un término que hace referencia a los sistemas de control de derechos de autor que utilizan algunas editoriales para prevenir –o impedir– la duplicación de sus contenidos) -Creo que un sistema de gestión de derechos digitales que sea equilibrado en cuanto a las posibilidades que ofrece a los lectores que adquieren el libro, un sistema que sea imperceptible en el proceso de compra y de lectura del libro y que por tanto permita disfrutar cómodamente del contenido, es legítimo. Sin embargo no creo en los sistemas de DRM excesivamente restrictivos en las posibilidades que ofrecen a los lectores ni en aquellos que se han diseñado de forma que dificultan o entorpecen el proceso de acceso y lectura al contenido. Considero que estos últimos son sistemas que desincentivan al lector, le desaniman y disuaden. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 114 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila -Desde hace un tiempo vienen sumando a su catálogo libros de editoriales y autores latinoamericanos. ¿Cuál es el mercado en España para ellos? -El impacto en ventas todavía no es muy significativo porque lo que se observa en el mercado español es que los libros electrónicos que más se venden son aquellos que también se han vendido más en papel, que han sido a su vez los más promocionados en ambos formatos en el mercado local. No obstante, es una cuestión de tiempo y de esfuerzo promocional que estos autores sumen lectores en España. La oportunidad existe. -La pregunta de siempre. ¿Por qué los e-books siguen siendo tan caros si no hay costos de papel ni de distribución? -Las editoriales buscan un equilibrio entre el precio que los lectores están dispuestos a pagar por un determinado libro y el precio que, a su vez, permita a la editorial seguir con su actividad, arriesgando, descubriendo, seleccionando autores. Cada editorial sabe dónde se encuentra ese equilibrio, según su organización o estructura. En este momento la mayoría de editores están vendiendo las ediciones digitales a precios que son entre un 30%, 50% más bajos que los de la edición en papel. Ciertamente el libro electrónico no tiene costes de impresión pero la realidad es que dichos costes de impresión son bajos porcentualmente si los comparamos con otros tantos costes que se mantienen en la edición digital: los derechos de autor (que tienden al alza en el digital), los costes de edición, promoción, marketing, distribución comercial, etcétera. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Arantza-Larrauri-e-book-futuro_0_875312475.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 115 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Literatura europea Imaginación exuberante En El atlas de las nubes, novela llevada hace poco al cine como Cloud Atlas, el británico David Mitchell engarza numerosos relatos, de mediados del siglo XX a un escenario post-apocalíptico, que se leen como una vasta consideración sobre la condición humana Por Armando Capalbo | Para LA NACION El británico David Mitchell (Southport, 1969), con su título en Literatura Inglesa de la Universidad de Kent y su maestría en Literaturas Comparadas, se ha dedicado a la enseñanza de su lengua en escuelas secundarias de Sicilia y de Hiroshima, para finalmente regresar a su país y convertirse en escritor profesional. Mitchell maneja con talento una multiplicidad de estilos y registros que hace honor al linaje posmodernista. Sus tramas suelen estar teñidas de entusiasmo por los géneros populares pero también de una estentórea visión escéptica sobre el desarrollo de la civilización contemporánea. El atlas de las nubes es un relato frondoso en extensión y notable por sus logros, que se preocupa por exaltar, a través de seis fábulas concatenadas, la búsqueda de una dimensión humana y de una sospecha de trascendencia en la desventura del hombre sobre el mundo. Utilizando la estrategia de las cajas chinas y del efecto boomerang para la arquitectura narrativa, construye una rara continuidad novelística, recrea épocas y espacios, atraviesa varios géneros y, sobre todo, cruza lo Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 116 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila trágico y lo cómico para reflexionar sobre nuestra pequeñez en el apabullante avance del tiempo histórico y cósmico. David Mitchell.. Foto: Colin McPherson / Corbis En 1850, el abogado estadounidense Adam Ewing, mientras escribe su diario minuciosamente fechado, regresa a San Francisco en barco desde las neocelandesas islas Chatham, travesía en la que conoce al patólogo Goose, quien le diagnostica una disfunción neuronal causada por un extraño parásito cerebral. Con dificultades y dudas, es sometido a un inusual tratamiento. En 1931, en Bélgica, un músico sin escrúpulos, Robert Frobisher, utiliza su bisexualidad y su talento epistolar para interferir en la vida precaria y enfermiza de un colega, Vyvyan Ayrs, y sacar provecho. La periodista de temas mundanos y frívolos Luisa Rey, ya en los años setenta en California, investiga temerariamente una conspiración sobre energía atómica aplicada y una cadena de crímenes ocultos por el poder. El editor británico Timothy Cavendish, en la Inglaterra contemporánea, luego de enfrentar los morbosos desatinos de su mejor escritor, es acosado por sus acreedores mientras se inmiscuye en un asilo de ancianos de difícil escapatoria. En un futuro próximo, un país del Lejano Oriente soporta una brutal dictadura donde triunfa el capitalismo salvaje y la anomia. La entidad clonada Sonmi 451, en medio de la hostilidad más cruel y sometida a un rudo interrogatorio, comprende su condición posthumana y se arriesga a una nueva identidad. En el final de los tiempos, en un escenario ahistórico y postapocalíptico que alguna vez fue Hawaii, el viejo Zachry Bailey, líder tribal, confiesa su oscura incertidumbre sobre las causas del derrumbe de la civilización a la vez que confunde ciencia y magia, realidad y sueño. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 117 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El entramado textual, además de un hábil cóctel de géneros, es un conjunto de relatos que se interrumpen en el clímax para ser resueltos en forma descendente más adelante, cuando el efecto boomerang se despliega. De este modo, la estructura interviene en la trama por cuanto las recurrencias que enlazan historia con historia son independientes de los recursos y las estrategias propias de cada una de las secciones: el diario personal, la entrevista, la sucesión epistolar, la evocación, la confidencia, entre otras. A su vez, la variación de registros genéricos imprime una diversidad que favorece el interés del lector e intensifica el compromiso con el texto en su amplia extensión de seiscientas páginas. Reflexión abrumadora sobre el tiempo y el egoísmo humano, la novela también imprime su sello de desencanto en el tema de la inestabilidad del texto literario contemporáneo ante el avance de los sistemas electrónicos e informáticos. Géneros e intertextualidad se dan la mano. La aventura marítima -primera sección- acude al diario de Ewing pero alude a la exploración de una identidad y a la reflexión sobre el paradójico destino del sujeto en tránsito que aspira a una meta, con visibles referencias a Melville y a Conrad. La presencia de la ciencia ficción distópica también ausculta la cuestión identitaria pero a la vez explora la compleja interacción entre individuo y sociedad, como en Frank Herbert o Philip K. Dick. El melodrama epistolar de los dos músicos remite a Henry James y a Somerset Maugham. El thriller sostenido en la temática de la conspiración (con guiños a Eco y a Pynchon) también refleja la búsqueda de un sentido en el áspero cruce entre lo privado y lo social. La comedia negra -oscurísima-, como en la mejor tradición británica de Evelyn Waugh o Tom Sharpe, ridiculiza los mandatos institucionales y las fábulas culturales por las cuales el ciudadano de las grandes urbes queda, sin darse cuenta, atrapado en falacias, burlado por el gobierno y expoliado de sus derechos. El imaginario post-histórico indaga en el encuentro de lo sublime y lo ridículo, a la manera de Harlan Ellison o Richard Matheson. Sin abundar en ningún tipo de desviación mística, El atlas de las nubes propone una explicación más allá de la razón para entender las correspondencias entre las distintas secciones, esto es, la evidente reencarnación de algunos personajes en otros posteriores, que arrastran obsesiones, culpas y propósitos. Si bien la reaparición del alma sobre la faz de la Tierra luego de la muerte es presentada como un misterio e incluso como una sospecha en el borde de lo fantástico, el asunto se entronca con el nudo más importante de la novela, la reflexión desencantada sobre la repetición de nefastos errores e injusticias a lo largo del devenir de la estirpe humana en la historia de la civilización. Es decir, se trata de un elemento que no termina de dirimirse ni en lo fantástico ni en lo místico, pero que triunfa en su reveladora dimensión metafórica. Como amalgama y como disparador semántico, se une también con la repetida referencia al paso de las nubes por el firmamento, sinécdoque de temporalidad y eternidad, signo de enigma y de devenir a la vez. El atlas de las nubes subsume momentos históricos y geografías distantes para finalmente aposentarse en un continuum espacio temporal que, en la mente del lector, resiste el embate de las complejas estructuras de cajas chinas y efecto boomerang . Si la trama, en su promedio, empieza a resolver las historias en forma decreciente es precisamente porque la circularidad de cerrar la novela con la resolución de la primera historia evidencia el entrecruzamiento fatal de la experiencia humana en todos los tiempos. En el mundo y la historia, para bien o para mal, todo está enlazado, tanto como el paradójico vínculo entre personajes y acciones que, en su apariencia, no tienen ni una mínima relación. No obstante, no se trata de un desafío a la competencia o a la memoria del lector, porque el puzle de historias y personajes auspicia un ejercicio inteligente de comprensión y valorización del sustrato profundo de lo que se está narrando. Y aunque los hechos de cada sección sean muy distintos entre sí estamos ante una originalísima variación de una misma sustancia temática: la inclaudicable ruindad (a menudo salvaje) de los seres humanos en su sistema de vínculos y jerarquías. Además de la imaginación exuberante, la larga extensión y el juego estratégico de historias intercaladas, El atlas de las nubes posee otro elemento que, por derecho propio, inscribe a la novela en la recuperación de estrategias posmodernistas, la moralización de un mensaje que va in crescendo a medida que se aproxima el final del relato: aun cuando el amor y la piedad nos enaltecen y redimen, la historia humana es una sucesión de decepciones, atrocidades, bajezas y fracasos. Pero es la capacidad de enfrentar la adversidad y de compadecerse y confraternizar con los semejantes lo único que a lo largo del tiempo ha podido desafiar un destino aciago para el hombre. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 118 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El atlas de las nubes David Mitchell Océano/Duomo Trad.: Víctor V. Úbeda 599 páginas $ 115. http://www.lanacion.com.ar/1560785-imaginacion-exuberante Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 119 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El destino de la Universidad creativa La presidenta de la comisión de expertos nombrada por Wert defiende la necesida de cambio Maria Teresa Miras 18 MAR 2013 - 23:22 CET9 “De comienzo en comienzo, por comienzos que no tienen fin”. Walt Whitman. El día 12 de febrero de 2013 hicimos entrega al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, del documento titulado Propuestas para la reforma y mejora de la calidad y eficiencia del sistema universitario español. Una vez entregado, el informe tiene vida propia y sus autores esperamos que quienes analicen su contenido vean la buena disposición y generoso trabajo de sus firmantes. Todos hemos actuado desde la más absoluta libertad, sin remuneración alguna y teniendo como únicos límites nuestro respeto y lealtad hacia una institución que ha formado a muchas generaciones de españoles, entre ellos, a nosotros mismos. La constatación de que las universidades españolas han mejorado notablemente desde la Transición a la democracia, sobre todo desde la Ley de Reforma Universitaria de 1983, planteaba la gran pregunta sobre la necesidad o no de un cambio en el sistema universitario español. Quizá la cuestión requiere ser planteada desde otra perspectiva: ¿hemos cambiado con ritmo suficiente para igualarnos a la Europa del pensamiento y de la ciencia? Cuando por acuerdo del Consejo de Ministros se crea la Comisión de Expertos el 13 de abril de 2012, los integrantes de la misma, salvo excepciones, no nos conocíamos, pero rápidamente existió, en general, una gran sintonía. Todos nos sentimos halagados por la distinción que nos ofrecía la posibilidad servir a nuestro país, desde la máxima honradez. La idea general de partida era que todas las instituciones que creamos los humanos necesitan siempre un nuevo impulso que las adapte y adecue a la realidad cambiante. Nuestras universidades, que tanto esfuerzo habían realizado en un pasado aún reciente, se habían vuelto en muchos casos más acomodaticias y menos exigentes en este tiempo inmediato. Las siguientes preguntas eran necesarias: ¿qué aspectos necesitaban ser mejorados?, ¿cómo detectarlos?, ¿cómo introducir los cambios sin alterar excesivamente un sistema sensible en tiempos de recesión? Hay una frase esencial en el documento: “Las universidades valen lo que vale su personal docente e investigador”. Todos estábamos de acuerdo, no hay universidad sin el sustrato humano. También somos hijos de una época y en la nuestra la transparencia en todas las actividades, ya sea la gestión de fondos, la evaluación de las propias universidades o el reconocimiento de las titulaciones de nuestros jóvenes estudiantes son factores que deben de ser conocidos por la sociedad que con su esfuerzo nos sustenta. El documento refleja la opinión de los componentes de la comisión aunque, como es lógico, ha habido concesiones por parte de la mayoría de sus miembros, pues cada persona tiene su propia perspectiva personal. Pero la sintonía entre los comisionados, salvo dos excepciones, ha sido extraordinaria. Mi labor como presidenta ha sido muy gratificante y espero que este documento sirva para dar ese empujón necesario para salir de la actual inercia. No olvidemos, parafraseando a don Francisco de Quevedo, que “el tiempo, que ni vuelve ni tropieza”, quizá este sea el tiempo de avanzar. María Teresa Miras Portugal es catedrática de la Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad Complutense y ha presidido la comisión de expertos nombrada por José Ignacio Wert para redactar una propuesta para la reforma universitaria http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/03/18/actualidad/1363645289_590437.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 120 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Historia de la desigualdad Los repartos desparejos han sido una constante desde los orígenes de la humanidad. Según el autor de esta nota, esta inequidad se ha manifestado desde la distribución de tierras hasta la influencia de los sitios web. POR John Naughton DISTRIBUCION. Funciona de acuerdo a la "ley de potencias". En 1906, un ingeniero italiano devenido economista cuyo nombre era Vilfredo Pareto hizo un descubrimiento sorprendente: el 80% de la tierra en Italia estaba en manos del 20% de la población. Pareto estudió los patrones de propiedad de tierras en otros países y encontró que se aplicaba la misma relación. También descubrió que la relación parecía aplicarse en otros contextos: por ejemplo, el 20% de las vainas de arvejas de su jardín producían el 80% de las arvejas. En los años 40, un ingeniero estadounidense llamado Joseph Juran observó que el 80% de los problemas de calidad en los sistemas industriales de producción en serie parecían provenir de 20% de las posibles causas. Se topó entonces con el trabajo de Pareto y bautizó la relación 80/20 con el nombre de Principio de Pareto en su honor. Así nació una de las reglas generales canónicas de la consultoría empresarial. El Principio de Pareto resultó ser, en realidad, un caso especial de un fenómeno más general, concretamente del hecho de que en muchos ámbitos de la vida no existe el caso típico o promedio. Esto perturba porque estamos programados culturalmente para pensar en términos de promedios. Por caso, si hacemos un gráfico de la distribución de las alturas de una cantidad significativa de hombres o mujeres, obtendremos algo que parece una curva de campana, centrada en la altura promedio, con muy pocos enanos y aun menos gente de más de 2,40 m de altura. Tan familiar es este estado de cosas que lo llamamos la distribución “normal”. El problema es que esta distribución normal es extremadamente inusual en muchas áreas de la vida. Las poblaciones de ciudades, las magnitudes de terremotos, los cráteres lunares y las llamaradas solares –por citar apenas cuatro ejemplos – no tienen una distribución normal. Tampoco los tamaños de los archivos informáticos, las frecuencias de las palabras en los libros, la cantidad de trabajos escritos por los científicos, Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 121 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila las visitas a páginas web, los enlaces externos a websites, las ventas de libros y discos o los ingresos anuales de las personas. De hecho, cuanto más se la mira, más infrecuente parece la distribución normal. En su lugar, vemos la distribución de la que el Principio de Pareto es un ejemplo especial: un pequeño número de personas/sitios/palabras/etc. representa la mayor parte de la acción, con una “larga cola” que obtiene muy poco de ella. Así, en lugar de que la mayoría de los sitios web tenga una cantidad “promedio” de enlaces entrantes de otros sitios, un número muy reducido de sitios (los Googles, Facebooks y Amazons de este mundo) cuenta con cantidades descomunales de enlaces, mientras que millones de sitios tienen que arreglárselas con apenas unos pocos. Los matemáticos denominan a esta clase de patrón una distribución “de ley de potencias” –utilizando el término potencia en su sentido matemático–, lo cual resulta deliciosamente irónico dado que una distribución de ley de potencias en realidad describe una situación en la que unos pocos tienen casi todos los “chiches” disponibles mientras que la mayoría no tiene casi ninguno. Una ley de potencias, en otras palabras, en el sentido Mitt Romney del término. En cualquier página de Internet, encontramos leyes de potencias –sí, incluso en los foros de comentarios online de diarios, donde el 20% de los comentarios proviene del 0,0037% de los ciberlectores que tiene un diario mensualmente–. Y, aunque hay millones de blogs en la Web, sólo un número relativamente pequeño de ellos atrae a la mayoría de los lectores. Son varias las explicaciones siniestras que se dieron al respecto, pero, en verdad, sólo se trata de un ejemplo del poder de las distribuciones de ley de potencias. Como dijo Clay Shirky en una ocasión: “En los sistemas en que muchas personas son libres para elegir entre distintas opciones, un pequeño subgrupo del total obtendrá una cantidad desproporcionada de tráfico (o atención o ingreso), aun si no hay miembros del sistema que estén trabajando activamente en pos de ese resultado. Esto no tiene nada que ver con una debilidad moral, una traición u otra explicación psicológica. El acto mismo de elegir, si se extiende lo suficiente y es suficientemente libre, crea una distribución de ley de potencias”. Aquí es donde las interpretaciones políticas y matemáticas de “potencia” se funden en una. Cuando los blogs se volvieron moneda corriente en los 90, fueron muchos los que especularon con que la red expandiría lo que Jürgen Habermas denominó “esfera pública”, es decir “un área de la vida social donde los individuos pueden encontrarse para discutir libremente e identificar problemas sociales, y a través de esa discusión influir sobre la acción política”. Con la consolidación implacable de la propiedad de los medios de comunicación en manos de conglomerados gigantescos, la esfera pública se había reducido ininterrumpidamente en los tiempos de la posguerra, con implicancias preocupantes para la democracia liberal. Parecía una certeza absoluta que una tecnología que permitiese que cualquier persona se convirtiera en un editor mundial sin tener que doblegarse ante los “guardianes” editoriales cambiaría las cosas para mejor. Quince años después, aún hay motivos para el optimismo, pero sólo si podemos encontrar un modo de superar la tiranía de las leyes de potencias. © Guardian News & Media 2013 Traducción: Susana Manghi http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Historia-desigualdad-inequidad_0_875312479.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 122 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Otras realidades son posibles LABoral, centro de arte gijonés, propone una reflexión sobre el efecto de la tecnología en las relaciones humanas Iker Seisdedos Gijón 19 MAR 2013 - 00:53 CET2 'Hand held'(2012), de David Rokeby. Cuando llegaron los adjetivos, la realidad perdió su función para convertirse en virtual, socialista o paralela. Fiscal, aumentada y hasta telerrealidad. Cabría definir la suma de todas ellas como Realidad elástica, concepto que sirve a Benjamin Weil, director de actividades del centro de arte gijonés LABoral, para agrupar como comisario en una exposición inaugurada este fin de semana una decena de obras de jóvenes creadores que hablan de “nuevas interfaces para el arte contemporáneo en Europa”. Como punto de partida puede sonar abstruso, pero la teoría de Weil debería resultar tan familiar a estas alturas como un teléfono inteligente, un rato muerto en Facebook o uno de esos rituales sociales que solíamos llamar comida y que ahora resulta constantemente interrumpido por los whatsapps recibidos por sus participantes. De la suma de todas las capas de la experiencia, de todos los niveles de interacción, de todos los flujos de información que componen nuestras vidas desde la irrupción de Internet, surge el concepto de Weil, sustanciado en la muestra en las obras escogidas entre los 48 proyectos desarrollados en 2012 por los becarios (y mentores) de la prestigiosa escuela francesa Le Fresnoy Studio National del Arts Contemporains. Entre ellos, Weil ha destacado una decena de trabajos. “Fue un proceso distinto al habitual en un comisario. Más que elegir obra para sustentar una teoría, tuve que hallar un marco conceptual para englobar a las piezas existentes”, argumentó el sábado ante la obra que abre la exposición: un trozo de moqueta negra. En la penumbra de la sala parece un agujero cuadrado, un trampantojo de los de toda la vida. Cuando uno se sitúa encima de ella, se descubre el truco: la proyección de una selva de manos entrelazadas se anima al reflejarse sobre la piel del visitante en una metáfora que evoca los distintos planos del contacto carnal en esta era poshumana. La misma sensación de juego revelador propuesta por David Rokeby sobrevuela el resto de las instalaciones. En una de ellas, firmada por Pierre-Yves Boisramé, la maqueta de un teleférico se mueve sin moverse del sitio merced a una escenografía escultórica de tintes cinematográficos. En otra, de Véronique Beland, las señales recogidas por un telescopio interestelar situado en Onsala (Suecia) se traducen en frases inconexas Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 123 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila tableteadas en papel continuo por una vieja impresora. Y si en Horizonte de sucesos #Camuflaje, Maya DaRin burla moviéndose en círculos el control de un GPS en el Jardín Botánico de Gijón, Tutti, de Zahra Poonawala, construye una orquesta con altavoces que reaccionan a la proximidad humana. Tras el recorrido prevalece la idea de que con este mismo conjunto de obras se podrían haber armado muchos discursos, pero pocos con la efectividad del propuesto por Weil, tan preocupado desde su posición en la LABoral por “la presentación al público del proceso creativo más allá del producto artístico”, como por crear vínculos entre la tecnología y el arte y entre las empresas de I+D y la cantera creativa europea. Incluso aunque a diario se dé de bruces con otra realidad: la presupuestaria. El centro, que maneja 1,2 millones de euros, de los cuales la mayor parte se va en mantener la realidad paralela de la vieja universidad franquista que lo alberga, ha visto reducida a la mitad su asignación desde 2011. http://cultura.elpais.com/cultura/2013/03/18/actualidad/1363636485_989136.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 124 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Literatura argentina Los años del desprecio A partir de cinco personajes en los años noventa, El exceso, de Edgardo Scott, explora transformaciones privadas y públicas Mediante el punto de vista de cinco personajes -el ministro, el custodio, el chico, la mujer, el híbrido-, El exceso , primera novela (pero tercer libro) de Edgardo Scott (Lanús, 1978), asume la tarea, reintentada una y otra vez, de narrar lo real. Ambientada en los suburbios de Buenos Aires durante el gobierno neoliberal de Carlos Menem y los años de la Alianza, la trama abarca de 1989 a 2001. Al ministro le corresponden segmentos temporales de unos meses; a su custodio, un solo día (su día franco, que coincide con la llegada de los restos de Rosas al país). Al chico, hijo del ministro Valle, algunos años de adolescencia. Elena, la mujer de la limpieza de la casa de los Valle, protagoniza los primeros dos años del nuevo siglo, cuando su única hija parte a un exilio disfrazado de oportunidad laboral. Al "híbrido" Leguizamón, el novio bisexual de la hija de Valle, un día de agosto de 2001 en el que viaja de la villa al Palacio de Tribunales. El registro de los hechos, similar al de una cámara subjetiva en el cine, agota las posibilidades de percepción y asociación de los personajes: en el caso de Valle, las cortinas en el despacho ministerial durante un cónclave político, el trayecto de Capital hacia la zona sur en auto oficial, los pormenores de una pelea de Tyson Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 125 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila transmitida por televisión. Hermida, el custodio, capta en su monólogo interior la pompa de Estado del acto encabezado por el presidente ante los restos de Rosas, mientras repasa la compra de una nueva pieza para su colección de armas y anticipa el viaje a Navarro, donde tiene una casita, parte de pago por unos de los "trabajos" para el funcionario. Valle hijo ("Lean") está más concentrado en el diseño mental de videojuegos basados en la geografía social imperante (villas miseria, barrios vigilados, centros comerciales ocupados por terroristas,skinheads, paramilitares) que en lo que pasa en su familia, en la escuela o entre amigos, a los que desprecia: "Cada anécdota debía tener a uno de ellos como blanco. El exceso Edgardo Scott Gárgola 270 páginas $ 70 el extranjero Ninguno se salvaba de aquel turno y ninguno debía salvarse. Como si fuera un rito necesario, una distribución prolija del odio y el desprecio, de la intolerancia subterránea, contenida, de todos por todos". Sólo la presencia de Elena en la casa lo hace salir de su encierro voluntario para pedirle más comida (Valle hijo devora como un Pacman) o espiarla mientras se ducha. De fondo, la voladura de la embajada de Israel o el avance de la exclusión social en el paisaje compartido recuerdan el marco referencial, político, de la novela. Hay en El exceso un procedimiento que insiste. Injertos textuales, escritos (¿por quién? Ya no es aquella vozcámara que sigue a los personajes en el curso cotidiano ni una primera persona hiperlúcida) que abordan signos, objetos, "restos diurnos" de la pesadilla menemista, interrumpen el relato en medio de una frase. El cartel del Bingo de la zona sur que retrata a una familia de ludópatas como si fueran hienas, dos tapas de la revista Noticias (la grotesca foto de María Julia Alsogaray cubierta con pieles y la del matrimonio Yabrán en Pinamar que le costó la vida a José Luis Cabezas); el descargo de Maradona cuando lo expulsan del Mundial de Fútbol 1994 y postales de una unidad básica barrial o la Plaza de Mayo vallada sobrevienen como alucinaciones por la eficacia de la descripción e interactúan sordamente con la narración huésped. De manera Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 126 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila similar a lo que Elena intuye sobre el pasado: "De aquello quedaban ahora puras hilachas, piedras o huesos muy gastados, recortes entremezclados y lisos con todo un caudal de cosas irrecuperables e indiferentes, y hasta a veces, irreconocibles". Estos pasajes, además de inquietantes, reencauzan el sentido hacia la violencia, manifiesta (como la paliza de unos skins a un chico contemplada por Leandro, sin emoción, una madrugada) o subyacente, que anida en cualquier proyecto literario vinculado al realismo, incluida la crítica del realismo. Kawabata inédito Informa el diario francés Libération que investigadores encontraron una novela inédita de Yasunari Kawabata cuya escritura se remonta a 1927. Utsukushii! ("¡Magnífico!") apareció por entregas en un diario del oeste de Japón. "Dado que la prensa de tirada nacional había sido devastada en 1923 por el terremoto de Tokio, era común que muchos escritores publicaran en medios locales", explicó Takumi Ishikawa, de la Universidad de Rikkyo. La Fundación Kawabata ya confirmó la autenticidad de la obra.. http://www.lanacion.com.ar/1560786-los-anos-del-desprecio Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 127 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El Museo del Prado propone un mapa del dibujo español La colección del British Museum desvela los tesoros que apuntalan la versión más pura del arte FOTOGALERÍA Los dibujos de la muestra Ángeles García Madrid 19 MAR 2013 - 21:20 CET2 'La expugnación de Rheinfelden'. Vicente Carducho. Pluma y tinta parda, aguadas de tintas azulada y parda, sobre lápiz negro (1634) . / The Trustees of the British Museum Durante mucho tiempo ha sobrevivido la tesis de que los artistas españoles del Renacimiento y comienzos de la Edad Moderna no dibujaban. Se creía que la costumbre general consistía en ejecutar directamente sus pinturas y que el carácter emocional hacía que primara la inmediatez sobre el detalle. Lo cierto es que, a diferencia de las escuelas alemanas e italianas, en España se han conservado pocos dibujos; pero no porque los españoles no fueran amantes del detalle y de esa exquisitez artística que es el dibujo, para muchos la esencia del Arte. El problema era, ya entonces, que el género no interesaba a los coleccionistas españoles y que los propios autores no lo valoraran más que como meros recuerdos. Lo cierto es que aunque se conserven pocas pruebas, los artistas sí dibujaban. Lo hacían a modo de apunte, como trabajo preparatorio o como estudio de detalle. Lo mismo que sus colegas europeos. Así se demuestra en la exposición que hoy se ha presentado en el Museo del Prado bajo el título El trazo español en el British Museum, una relevante selección de 71 obras que por primera vez se pueden ver en España y que viene a completar el conocimiento que se tiene de artistas como Goya, Murillo, Velázquez (una atribución), Vicente Carducho, Francisco Rizi, Alfonso Berruguete o Francisco Pacheco. Comisariada por Mark McDonald, conservador del Gabinete de Dibujos del British y coordinada por José Manuel Matilla, responsable del Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 128 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila departamento de Dibujos y Estampas del Prado. La exposición, patrocinada por la Asociación de Amigos del Museo, ofrece una compleja cartografía de la historia del dibujo español. Miguel Zugaza, director del Prado, considera que por vez primera nos podemos aproximar a la definición de lo que ha sido el trazo en el dibujo español. “Esta exposición desmiente la tendencia generalizada al naturalismo sin el paso previo por el diseño. El catálogo es un trabajo de investigación definitivo y un homenaje al coleccionismo inglés, gracias al cual podemos ver ahora todas estas obras”. La más que notable colección de dibujos del British cuenta con más de 250 obras de artistas españoles. Ya en 1846, el Británico se hace con una importante tanda de piezas en la subasta del vizconde de Castel Ruiz. Por otro lado, el coleccionista John Charles Robinson acumuló una importante colección durante sus numerosos viajes por España. El diplomático y coleccionista los vendió después a un millonario escocés y finalmente fueron adquiridos por el Museo Británico. De los tesoros y lecciones incluidos en la colección habla Matilla. Cuenta que los artistas italianos que vinieron al Escorial para decorar los frescos y las casullas difundieron una forma de trabajar que fue asimilada por los artistas nacionales. Felipe II era siempre partidario de que todos los artistas le presentan el diseño del proyecto para tener controlado el resultado final y para evitar lo que ahora llamaríamos derramas presupuestarias. De manera que italianos, flamencos y españoles realizaron dibujos previos de sus posteriores obras. Pero no hubo una manera única de ejecutar el trazo. El mapa de esta peculiar historia del dibujo así lo demuestra y el montaje divide la exposición en seis áreas bien definidas: Castilla (1550-1600), Madrid (16001700), Andalucía (1550-1700), Valencia (1500-1700), Siglo XVIII y Goya (1746-1828). El recorrido empieza con trabajos de algunos de los artistas extranjeros que trabajaron para la decoración de El Escorial, como Pellegrino Tibaldi del que se expone el estudio para la decoración de la Biblioteca del monasterio, una de las obras cumbre del siglo XVI. Las telas del manto de una virgen dibujada por Alonso Berruguete dan idea de la huella que los extranjeros estaban dejando en los españoles. La ciudad de Madrid, espejo del arte cortesano, cuenta con maestros que viven de muy niños las aportaciones de los italianos. Juan Carreño de Miranda, Francisco Camilo o Francisco de Herrera son algunos de los que se adelantan en la combinación de técnicas dibujísticas y papeles de gran tamaño que luego darán paso a proyectos de escenarios teatrales o proyectos arquitectónicos. Uno de los dibujos más sorprendentes de la zona es El enano Miguelito, realizado por Francisco Rizi. Se trata de una de las decenas de figuras que forman parte del cuadro titulado Auto de fé en la plaza Mayor el 30 de junio de 1680, en el que se da cuenta de los cinco días durante los que el Tribunal de la Inquisición juzgó y condenó a decenas de personas. El dibujo, como algunos otros, va acompañado de una cartela en la que se hace referencia a la pintura y a su ubicación dentro del museo, de manera que la exposición puede tener una continuidad por las diferentes salas del edificio. Andalucía, principal centro comercial del imperio desde comienzos del XVI, tuvo tres sedes artísticas: Sevilla, Granada y Córdoba, tres sedes donde los encargos que recibían los artistas procedían de la Iglesia y de particulares. La cabeza de monje, atribuida a Francisco de Zurbarán, es una de las obras más deslumbrantes de un espacio en el que ocupan un lugar especial seis dibujos realizados por Murillo. En su calidad de haberse formado en la escuela sevillana, se incluyen aquí también obras de Francisco Pacheco, Antonio del Castillo y Velázquez, si bien, el autor de Las Meninas, ha sido incluido con un triple estudio de un caballo que se atribuye sin que conste su autoría definitiva. “Se cree que se conservan menos de cinco dibujos de Velázquez,” asegura el coordinador de la exposición. “No sabemos bien las causas. Se perdieron, no los guardaron....Lo cierto es que apenas existen”. El dibujo en Valencia incluye los trabajos napolitanos de Ribera, uno de los artistas que se entregó al dibujo como una actividad independiente de su pintura. Como característica de la región, se muestran trabajos en los que se hace un alarde del dominio de la aguada realizados por Francisco Ribalta o Pedro de Orrente. El siglo XVIII se adentra en maestros como Luis Paret y su Baile de máscaras en el Teatro del Príncipe o José Camarón y su Mujer oriental bajo un toldo, pero, inevitablemente, el protagonismo lo alcanza Francisco de Goya con toda una sala en la que demuestra el poderío que le convirtió en un referente mundial en la historia del arte. El dibujo preparatorio para la estampa de El agarrotado, una imagen alusiva a los abusos del Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 129 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila poder judicial, o Locos, una de sus últimas obras firmadas en Burdeos, son dos piezas que por si solas justificarían la visita a esta exposición. http://cultura.elpais.com/cultura/2013/03/19/actualidad/1363708639_440584.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 130 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Los secretos de traducir al chino, o dominar el arte de perder Los traductores chinos buscan atrapar el significado, ya sea inventando no palabras nuevas sino directamente ideogramas nuevos o respondiendo a los juegos de palabras del original con juegos de palabras en chino. A continuación, dos anécdotas que indican que la traducción, además de un oficio, puede ser una enfermedad capaz de conducir al delirio. POR MIGUEL PETRECCA- Especial desde Shanghai, China ANOTACIONES. Entre un libro comentado y uno traducido, se completa el significado. Dos de las películas en cartelera actualmente en China son películas sobre viajes. Una de ellas, Perdidos en Tailandia, que ya se convirtió en la película más taquillera de la historia del cine chino, es una comedia de enredos centrada en la competencia entre dos compañeros de trabajo, cada uno con proyectos y éticas contrapuestas pero embarcados en una misma carrera por ganarle de mano al rival. La otra es una mezcla de comedia y cuento de hadas, basada libremente en Viaje hacia el oeste, una de las cuatro grandes novelas clásicas chinas, escrita en el siglo XV, que cuenta las peripecias de un monje, un cerdo y un mono en su peregrinaje por tierras míticas. La novela, a su vez, reformula en forma fantasiosa el viaje del monje budista Xuan Zang a la India, a comienzos del siglo VII, en busca del “pensamiento iluminador de tierras extrañas”. La historia de Xuan Zang es la historia de un viaje y también de un proyecto de traducción que tiene un lugar clave dentro de la historia china. Nacido en Luoyang en 602, en época de la brevísima dinastía Sui, en el marco de una familia de rigurosa tradición confuciana, Xuan Zang se inició desde temprano en el estudio del budismo y ya a los 13 años ingresó en el templo Jingu. En el 618 se produjo el derrumbe de la dinastía Sui y Xuan Zang, con solo 16 años, tuvo que abandonar Jingu. Se dirigió primero a Chang’an, la capital de la flamante dinastía Tang, y de Chang’an a Chengdu, donde terminó de ser ordenado monje. Viajó por diferentes lugares dentro de China, consultando los textos budistas y aprendiendo de diferentes maestros. En el 629, descontento con la calidad de las traducciones que había encontrado en sus viajes, decidió ir a la India en busca de los textos originales. Tardó un año en llegar, a través de desierto y montaña, por las tierras de lo que Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 131 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila son hoy Uzbekistán y Afganistán, y luego pasó 13 años visitando sitios de culto y estudiando en la Universidad de Nalanda. Cuando volvió a China, 16 años después, el emperador Taizong lo recibió en persona y ordenó la construcción de la Pagoda del Ganso Salvaje, para conservar los íconos y escrituras que el monje había traído de su viaje. Xuan Zang estableció un instituto dedicado a la traducción y se pasó el resto de su vida traduciendo y formando traductores. Xuan Zang no fue el primer traductor del sánscrito al chino pero el avance que produjo, tanto por la cantidad como por la calidad, no tenía precedentes. Antes de él, la calidad de los textos traducidos era tan mala como para motivar a Kumarajiva, un monje indio del siglo IV, a comentar que la traducción era como “arroz pre masticado: no sólo pierde su sabor original sino que también da ganas de vomitar." La contribución de Xuan Zang está, además, en la sistematización y en la formulación de una serie de principios para la traducción del sánscrito al chino, el más importante de los cuales era el wuzhong bufan: literalmente, “los cinco tipos de palabras que no se traducen”. Esto es, cinco tipos de palabras que elegía “no traducir”, entre las que se incluían palabras esotéricas, palabras con más de un significado, palabras sin equivalente en China (por ejemplo nombres de plantas), términos ya establecidos y de uso común, y palabras que sonarían menos impresionantes una vez traducidas. Estas palabras, en lugar de traducirse, debían ser transliteradas fonéticamente. El principio opuesto al wuzhong bufan era el geyi, que consistía en la búsqueda de un término equivalente en chino. El problema con este principio es que, en el camino de salvar las diferencias entre las dos lenguas, podía terminar por asimilar y absorber toda diferencia. Es lo que sucedió con una de las primeras versiones de la Biblia en chino, donde la traducción de “El verbo” por el “El Dao”, una palabra de origen taoísta, corría el riesgo de tergiversar completamente el contenido del original. El arte de perder Hace poco en una cena alguien de la mesa me mostró en su celular una foto de una página de la flamante traducción china del Finnegans Wake. Noté que sobre algunas palabras de la traducción aparecía a manera de sobretítulo la palabra original, lo cual me pareció como una confesión de que la traducción no alcanzaba a ser legible por sí sola. Dije, con la suficiencia del apresurado, que la traducción había fracasado, y mi comentario produjo de inmediato una risa que no entendí hasta que me explicaron, un instante después, que uno de los comensales, directamente en diagonal mío, era uno de los editores del libro. Para tranquilizarme, el editor se apresuró a chocarme amablemente el vaso mientras decía: “Yo también creo que fracasamos.” No en Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 132 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila el plano comercial, claro. El libro, me comentó el editor, había agotado la tirada de 10 mil ejemplares, a menos de dos meses de su lanzamiento, y ya estaban pensando en la reedición. La traductora, Dai Congrong, una egresada de la Universidad Fudan de Shanghai especializada en literatura inglesa e irlandesa, dedicó ocho años a la traducción de esta primera parte del Finnegans wake. Antes de comenzar con la traducción en sí misma, pasó dos años buscando las referencias, alusiones y citas del libro, como una plataforma mínima de trabajo. Aunque es fácil imaginar la dificultad que implica la traducción de una obra en la cual casi el 50% de las palabras son palabras inventadas o neologismos, Dai Congrong al menos contaba con un antecedente importante dentro del chino: la traducción que Zhao Yuanren hizo de A través del espejo, de Lewis Carroll. Zhao era un lingüista y musicólogo genial con un talento innato para los idiomas. Antes de los 18 ya había aprendido francés, alemán e inglés, además de varios dialectos chinos. Dominaba los idiomas rápidamente y en forma casi perfecta: unas horas estudiando un dialecto de la boca de un hablante local, en un tren, le alcanzaban para que al llegar lo confundieran por un nativo de esa ciudad. Zhao publicó la traducción de Alicia en el país de las maravillas en 1921 y luego, en 1938, reincidió con una traducción del A través del espejo. Si había alguien con la capacidad para traducir al chino los juegos de palabras y el sin sentido de Lewis Carroll, ese era Zhao. Este optó por aprovechar el potencial de la escritura china, inventando ya no palabras nuevas sino directamente ideogramas nuevos. Para buscar un equivalente en castellano, habría que pensar en palabras compuestas de letras inventadas. El resultado de este experimento fue un texto por momentos ilegible, pero lleno también de juegos gráficos y lingüísticos que a Lewis Carroll y Alicia quizás les hubiera divertido. Dai Congrong estudió el trabajo de Zhao pero su abordaje frente a la traducción de las palabras inventadas es diferente al de Zhao, al menos en el sentido de que no llega a inventar ideogramas nuevos. Por un lado, trata de responder a los juegos de palabras del original con juegos de palabras en chino. Por otro lado, consciente de “que un traductor es incapaz de agotar la cantidad y la riqueza de significados contenido dentro de cada palabra”, se apoya en las notas y en la superposición, en algunos casos, de la palabra original y la traducida. Como si esto fuera a poco, en letra más pequeña, aparecen otras opciones de traducción. Así, donde el original dice “nor avoice”, traduce como “no se escuchaba ningún sonido”, y al lado, en letras más chica “Nora Joyce”, a la vez que explica en la nota correspondiente el doble sentido del original. El resultado es algo que, como ella misma admite en el prólogo, “no es del todo ni una traducción ni un libro anotado”, o el libro de alguien que no ha dominado todavía el arte de perder. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 133 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Dai Congrong contó que un día, cuando ya llevaba varios años trabajando en la traducción, se quedó absorta mirando los pantalones de su hijo, llenos de palabras en inglés mal escrito, que le hicieron pensar en los juegos de palabras de Joyce. También está convencida de Joyce mismo previó que ella traduciría el Finnegans wake y lo dejó registrado en clave en el texto. La prueba está, según ella, en una de las páginas donde aparecen, en forma separada pero no a mucha distancia, las dos sílabas de su nombre: “Cong” y “Rong”. Estas dos anécdotas indican que la traducción, además de un oficio, puede ser una enfermedad capaz de conducir al delirio. Xuan Zang, Zhao Yuanren y Dai Congrong parecen compartir en ese sentido, más allá de la distancia temporal, los mismos síntomas. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/Los_secretos_de_traducir_al_chinoo_dominar_el_arte_de_perder_0_877712450.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 134 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Más allá de las porras Manel Armengol expone sus fotografías sobre España, China y Estados Unidos en los setenta Una de sus imágenes sobre una carga policial en 1976 es uno de los iconos de la Transición José Ángel Montañés Barcelona 18 MAR 2013 - 23:49 CET 'Actuación policial contra manifestantes, la imagen que realizó Armengol en 1976 y que acabó siendo un icono de la Transición. / MANEL ARMENGOL En febrero de 1976 una sentada pacífica en Barcelona acabó de forma violenta. La policía cargó de forma brutal contra los manifestantes que pedían “Libertad y Amnistía” en el paseo de Sant Joan. La escena habría pasado desapercibida sino la hubiera inmortalizado un fotógrafo de forma casi accidental. “Hasta que pasaron unos días no estuve tranquilo, porque la policía me siguió para requisarme los carretes”, recuerda Manel Armengol (Badalona, 1949) de aquella jornada que acabó marcando su trabajo para siempre. Cúmulo de casualidades, conserva los negativos, gracias a que nadie se atrevió a comprarlos. “Fui a Europa Press y pedí por ellos 300 pesetas, pero no los quisieron comprar por miedo a represalias”. De hecho, la imagen no se publicó en España hasta un año después. Más suerte tuvo en la prensa internacional. Armengol envío por correo postal —tras obtener la dirección en un quiosco de las Ramblas— a los principales diarios internacionales, entre ellos Paris-Match, The New York Times y Der Spiegel.“Todos las pagaron, excepto los italianos”, recuerda. La imagen es uno de los iconos de la Transición. Pese a que han pasado varias décadas todo el mundo sigue relacionándolo por esta fotografía. “Es la que me piden siempre”. Pero el fotógrafo es autor de un trabajo mucho más extenso y variado. Fundación Foto Colectania expone esta imagen y otras realizadas entonces “recortes de la vida cotidiana con personajes anónimos de la España de entonces”, junto con otras dos series realizadas en Estados Unidos y China. Manel Armengol. Transiciones, los setenta en España, Estados Unidos y la China se inaugura el próximo viernes en el Centro de Arte Contemporáneo La Sala, de Vilanova i la Geltrú (Joaquim Mir, 12) con 75 imágenes de estos tres países durante unos años de cambios profundos e incertidumbres. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 135 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila 'En la Gran Muralla', obra de Armengol de 1979. / MANEL ARMENGOL Las fotografías de Estados Unidos se realizaron en 1977 durante el año que Armengol vivió en ese país como corresponsal de Interviu, coincidiendo con el final del movimiento hippy y del llamado flower power. Abundan las imágenes de personas que se cruzaron con él por la calle. “Lo que más me impresionó fue el contraste entre la riqueza de algunos y la miseria de otros”. Como en Courtesy…, donde un inmigrante chicano, permanece sentado en un banco público, con la mirada perdida, lo mismo que la mujer del metro neoyorquino de 72 Street, Subway Station. La tercera serie se realizó en China en 1979, con su Leica, de forma paralela a las imágenes en color que hizo para ilustrar un reportaje de Baltasar Porcel para Play Boy sobre la vida cotidiana de ese país, tras la muerte de Mao. “Son como apuntes, más íntimas”, asegura. Viéndolas no hay duda del gran cambio económico y estético —atrás quedaron los uniformes y las gorras comunistas— que ha sufrido el gigante asiático. Con respecto a la fotografía de la carga, Armengol mantiene que “ahora es más difícil hacer este tipo de imágenes, porque el momento es diferente, hay más fotógrafos que nos molestamos unos a otros, la policía actúa de forma diferente y está más preparada”. Sin embargo, el fotógrafo asegura que la actual es otra etapa de transición. “Antes teníamos un enemigo claro y ahora el enemigo es invisible”. Pese a la situación adversa, el fotógrafo anima a sus colegas fotógrafos a seguir disparando con su cámara: “nunca sabes qué trascendencia tendrá el momento que estás viviendo”. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 136 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Desde 1983, tras sufrir un grave accidente de tráfico, Armengol, es autor de series “más íntimas”, como Foc, Elementos, Herbarium o Terrae. Asegura que huye de las nuevas tecnologías y de las postfotografías y trabaja “con un sistema cercano a la primitiva cámara oscura”, como reacción “a la hiperprecisión que dan las cámaras digitales”. La exposición, que ya se pudo ver en Lisboa en 2009, visitará las ciudades de L'Hospitalet de Llobregat, Igualada y Girona dentro del marco del programa de exposiciones itinerantes del Departamento de Cultura de la Generalitat. http://ccaa.elpais.com/ccaa/2013/03/18/catalunya/1363642973_867154.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 137 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Ensayo Nuevas familias globales Ulrich Beck y Elisabeth Beck-Gernsheim, ellos mismos un matrimonio, examinan ?los cambios de la organización familiar y de pareja en la era de la globalización Por Ana María Vara | Para LA NACION ¿Autoayuda para amantes alejados? ¿Sociología de las parejas de Internet? Aunque la cándida ilustración de tapa de Amor a distancia. Nuevas formas de vida en la era globalorienta -o desorienta- en esas direcciones, el último trabajo del matrimonio Beck-Gernsheim es bastante más intenso: trata sobre las nuevas familias globales. Madres que dejan a sus hijos para asegurar su bienestar cuidando a los hijos de otros; familias que destinan sus recursos en formar al hijo elegido para emigrar; casamientos a través de agencias internacionales; búsqueda de óvulos en otras naciones; madres subrogantes; adopciones en países exóticos. Y hasta algo de compra de órganos. La trayectoria de los autores promete una investigación sustantiva: Ulrich Beck, profesor de la London School of Economics y en la Universidad Ludwig Maximilian de Múnich, es hoy uno de los grandes nombres de la intelectualidad alemana; Elisabeth Beck-Gernsheim, profesora de la Universidad Erlangen-Nuremberg, es menos conocida pero no menos respetada. Hay también un antecedente de colaboración en el tema: enEl normal caos del amor(2001), los Beck analizaron la transformación de las formas de pareja en las últimas décadas del siglo XX. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 138 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Dos son los tipos básicos de familias globales: los matrimonios entre personas de distinto origen que comparten la vida en un mismo país y los que se separan geográficamente para aprovechar oportunidades de trabajo. El número, sin embargo, es engañoso: las variantes son infinitas. Desde los ejecutivos de empresas transnacionales que vuelan enbusiness y pueden enviar a sus hijos a colegios de elite hasta los trabajadores golondrina mexicanos que llegan caminando a California para cosechar hortalizas. También, las mujeres que, como el entrañable personaje de Adriana Barraza enBabel, dejan a su familia para ayudar en la constitución de otra allende el muro. No pasa sólo en América Latina. Una de cada once mujeres de Sri Lanka trabaja fuera de su país: de ellas, el 75 por ciento son casadas, y el 90 por ciento tienen hijos. Como consecuencia, entre 6 y 9 millones de chicos crecen sin madre, sin padre o sin ninguno de los dos. Europa del Este es otra región paradigmática. En Rumania, los chicos que sufren la distancia de al menos uno de sus padres son 350.000; en la República de Moldavia, uno de cada tres chicos crece en condiciones de separación. El matrimonio Beck durante ?la presentación de la ?edición alemana del libro.. Foto: Das Blaue Sofa/CC/Flickr Cada traslado supone reacomodaciones: hermanas, tías o abuelas que asumen el papel de madres; también mujeres de países todavía menos favorecidos que emigran para cubrir esas faltas. Las polacas se hacen cargo de los hijos de las alemanas, las ucranianas crían a los chicos polacos. Son las "cadenas asistenciales transnacionales". Si la autonomía femenina conquistada en los países más ricos es uno de los motivos, en la forma de una "revolución social inacabada" en las relaciones de género, también lo es el retiro del Estado de Bienestar: los países con menos inmigrantes de este tipo son los escandinavos, que cuentan con una amplia red de contención. Una problemática similar se abre con el cuidado de los ancianos. Los matrimonios binacionales son el segundo foco del libro. Los Beck escriben en un país donde se sospecha bastante de las -nuevamente- europeas del Este que se casan con alemanes. En Rusia hay unas mil agencias que ofrecen estos servicios, y se estima entre diez y quince mil el número de rusas que abandonan su país en busca de una boda exprés. Los prósperos agricultores de Corea del Sur, por su parte, consiguen esposa en Vietnam, China o India: los casamientos con extranjeros en ese país saltaron de 1,2 a 11 por ciento en las últimas dos décadas. Otros casos interesantes son los matrimonios de emigrantes exitosos con connacionales: mujeres u hombres británicos de origen pakistaní que se casan con pakistaníes, por ejemplo. A veces es por imposición familiar: una manera de devolver un favor a las redes de apoyo. Otra es por elección: afinidad cultural o preocupación por la educación de los hijos. Hasta la búsqueda de autonomía femenina puede jugar un papel: siendo "local" frente a un marido extranjero, una mujer puede sentirse más segura y hacerse valer. La educación para la emigración supone un mayor grado de especialización -y de persistencia de la necesidad. Eso pasa con los jóvenes de Camerún, ex colonia alemana, que son educados con gran esfuerzo para que ganen becas que los llevarán a la metrópoli. Desde donde, más tarde, enviarán dinero o funcionarán como cabeza de playa para los siguientes emigrantes. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 139 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Si a estas alturas el lector se angustia o se indigna, tiene motivos. Vale advertir que no siempre se sentirá acompañado. Los Beck descorren el velo de realidades a las que califican de "radicalmente desigualitarias" pero se mantienen ligeramente distantes. Resulta muy duro en el capítulo sobre "turismo de trasplantes", que trata de "cómo los órganos de los pobres acaban en el cuerpo de los ricos". Aunque no es ésa la mayor debilidad deAmor a distancia. El libro parece, por momentos, unpatchwork donde las consideraciones teóricas desarrolladas por Ulrich para pensar los problemas ambientales -conceptos como "sociedad del riesgo" o "comunidad de destino"- se aplican sin elegancia sobre las preocupaciones del universo afectivo más cercanas a Elisabeth. Otra sorpresa es que trabajen íntegramente con fuentes secundarias, alejados de los sujetos a los que tratan de comprender. Tampoco llegan a conclusiones acabadas. Claro que la exigencia es proporcional a la estatura de los autores.C Amor a distancia Ulrich Beck y Elisabeth Beck-Gernsheim Paidós Trad.: Alicia Valero Marín267 páginas $ 112. http://www.lanacion.com.ar/1560787-nuevas-familias-globales Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 140 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Gabo ya tiene quien le escriba un cómic Una editorial colombiana publica la primera novela gráfica sobre la vida de García Márquez La obra relata las peripecias del escritor hasta su consagración con 'Cien años de soledad' El cómic como espejo de vidas La Biblioteca Nacional se rinde al hechizo del autor de 'La hojarasca' Tereixa Constenla Madrid 18 MAR 2013 - 13:22 CET3 Cómic 'Gabo, memorias de una vida mágica'. Pues no. Gabriel García Márquez no tenía quién le escribiese un cómic. Hasta que John Naranjo, un editor colombiano, se metió en el berenjenal y encargó a un guionista y cuatro dibujantes una novela gráfica sobre la peripecia literaria de uno de los colombianos más prestigiosos de la historia. El resultado, Gabo, memorias de una vida mágica, es, antes que una biografía del escritor, la novela que ilustra la gestación de la novela que le aupó entre los dioses de la literatura universal, Cien años de soledad. Arranca de hecho en una carretera mexicana por la que circulan el autor, su esposa Mercedes Barcha y sus hijos Rodrigo y Gonzalo para descansar unos días en las playas de Acapulco y finaliza con el colombiano vestido de liqui-liqui hablando ante los reyes de un país muy alejado del olor a guayaba. Entre ambas viñetas se condensa la biografía de García Márquez, nacido el 6 de abril de 1927 en Aracataca con el cordón umbilical enrollado al cuello y consagrado con el premio Nobel de Literatura en 1982. Entre ambos accidentes ocurrió de todo. Una infancia de narraciones legendarias en la casa de abuelos que habían participado en la Guerra de los Mil Días y hablaban con los muertos, unos padres ausentes, una bananera explotadora, una hermana que comía tierra, un estudiante que se alimentó de literatura, un periodista tras el telón de acero, un parado que recogió periódicos y botellas en París, un cronista de la llegada del castrismo al poder en Cuba, un contumaz aspirante a escritor... Cuando García Márquez viaja con su familia hacia Acapulco ya ha publicado algunos libros (La hojarasca o Relato de un náufrago) pero sigue siendo un Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 141 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila periodista que sueña con una novela a la que llama La casa y de la que entra y sale sin sentir acomodo. La que luego sería una obra cumbre del siglo XX se reveló en esa carretera mexicana… por alguna razón el escritor encontró al volante el tono que se convertiría en su marca más característica. Luego vendrían las ventas millonarias, la fama, los premios, incluso los ensayos sobre su literatura y las biografías. Sin embargo, hasta ahora no había llegado el cómic. Asombroso. “No solo es sorprendente que no hubiese una novela gráfica sobre Gabo, sino que no exista una sobre Cortázar o Borges”, concede el editor colombiano John Naranjo, muy satisfecho con la repercusión internacional del cómic. Además de vender los derechos para la edición en España a Sins Entido, que lo distribuirá a finales de marzo, Rey Naranjo editores está negociando la difusión en Rusia, Francia, Alemania y varios países nórdicos. Cómic 'Gabo, memorias de una vida mágica'. No hurga este cómic en aspectos controvertidos que siempre rodean al autor de Crónica de una muerte anunciada, como la disputa con Mario Vargas Llosa que acabó en una ruptura entre ambos o su amistad con Fidel Castro. “Esta biografía literaria no elude ni su ideología ni su posición política, simplemente que estos aspectos, como muchos otros de la vida privada de Gabo, no son relevantes a la hora de contar lo que nos interesa contar. Lo que el lector va a encontrar es la epopeya de un chico que nace en un pueblo olvidado por la mente de Dios y que a fuerza de empeño y trabajo se convierte en un mito viviente de la literatura universal”, defiende Naranjo en un correo electrónico. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 142 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Cómic 'Gabo, memorias de una vida mágica'. Los apuros de García Márquez fueron tan literales que, además del episodio de recolector y vendedor de periódicos y vidrios en París, no pudo enviar el manuscrito íntegro de Cien años de soledad por correo porque le faltaba dinero. Además de la literatura del autor de Noticia de un secuestro, Óscar Pantoja se basó en obras de Plinio Apuleyo Mendoza, Gerald Martin y Juan Gustavo Cobo Borda, entre otras, para trenzar el guion. “Se han seguido los trabajos escritos sobre él, pero el propósito ha sido, como en el cine, poner la cámara en otro ángulo, que quizás no ha sido utilizado para volver a interpretar las diversas memorias de Gabo. A este ángulo le interesa presentar el momento exacto de la creación, el instante en que la chispa prendió la luz de Macondo”, cuenta por correo electrónico Pantoja. “Me propuse hacer una obra que girara alrededor de la creación y cómo la creación estaba metida en sus huesos, era su misma vida. Me moví en la escritura sin alejarme de ese ángulo. No me importaban otros aspectos”, añade el autor del guion, que ha sido ilustrado por Miguel Bustos, Felipe Camargo, Tatiana Córdoba y Julián Naranjo. http://cultura.elpais.com/cultura/2013/03/18/actualidad/1363609332_202720.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 143 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El sida lucha aun contra el estigma Zirulnik es médico psiquiatra. Trabaja en la Unidad de Infectología y VIH del Hospital Fernández de Buenos Aires. "Homo viralis. Historia biointelectual del SIDA" (Libros del Zorzal) recoge su visión sobre una enfermedad estigmatizada. POR Jorge Zirulnik -¿Cómo surge esta historia biointelectual...? -El fenómeno VIH-sida ha incidido de modo radical en todos los registros de lo humano desde su irrupción en los años 80. Ha trastocado la sexualidad como nunca antes y ha creado una especie singular en el espectro de la identidades finiseculares: el sujeto VIH positivo u Homo viralis . Al análisis médico-epidemiológico, debe agregarse un registro intelectual, o de las ideas surgidas sobre el sida y su implante en la cultura. El abordaje biointelectual, se propone entonces como una invitación a pensar el fenómeno del VIH desde una perspectiva socio-filosófica o cultural, más que médica. -¿Por eso relee a Foucault, Sontag y Baudrillard? -Muerto por esa enfermedad en 1984, Foucault se mostró reticente a revelar su diagnóstico dando prueba del peso del estigma VIH. Su noción de umbral biopolítico explica el modo en que la medicina actual divide a los pacientes que reciben el tratamiento con fármacos antirretrovirales y los que no –por indolencia, o falta de disponibilidad–. En El SIDA y sus metáforas , Susan Sontag presenta al fenómeno VIH como una epidemia de metaforización, además de catástrofe biológica. Sontag instala al sida en el campo del discurso denunciando velados propósitos de segregación de los sujetos infectados por los poderes de la época reaganiana, representado por la invasión/polución de metáforas militares que impregnaron el decir social en el Período Negro de la epidemia. Baudrillard opone a las ideas sontagianas, la noción del sida como metonimia viral, más que como metáfora discursiva: el sida va más allá de la ideología, para formar parte de una serie de fenómenos extremos/virales, al igual que los flujos financieros, las imágenes satelitales o el terrorismo. http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/sida-lucha-estigma_0_875312478.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 144 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Las claves del éxito y la fama artística, al descubierto Vicenç Furió explica en ‘Arte y reputación’ cómo se mide el prestigio de un artista Roberta Bosco Barcelona 21 MAR 2013 - 00:41 CET Uno de los autorretratos del artista Van Gogh. ¿Cómo se consigue el éxito y quién lo otorga? ¿Cómo evolucionan los criterios y los gustos? ¿Cómo se mide el prestigio y la reputación de un artista? ¿Es el reconocimiento sinónimo de ventas y subida de la cotización? En un momento como el actual, en que se multiplican los formatos y la revolución digital ha trastocado para siempre los conceptos de original, copia y autoría, estas preguntas cobran un nuevo interés y significado. Sin embargo, pese a ocupar un lugar central en los debates del mundo del arte, hasta ahora el tema no ha sido muy estudiado. Intenta paliar este vacío el libro Arte y reputación. Estudios sobre el reconocimiento artístico (Colección Memoria Artium) de Vicenç Furió, docente de Teoría del Arte en la Universidad de Barcelona y especialista en sociología del arte. El ensayo, que hoy recibirá el Premio ACCA de la Asociación Catalana de Críticos de Arte al mejor libro de 2012, ex aequo con Galerismo en Barcelona, 1877-2012,de Jaume Vidal Oliveras, reúne los resultados de una serie de estudios, que se encargan de desmontar tópicos y desvelar las dinámicas del reconocimiento. Furió recuerda que artistas consagrados como Van Gogh, Kandinsky, Mondrian o Duchamp, en vida casi no tuvieron mercado. La tesis central del libro es que “los valores artísticos son variables y relativos, pero no arbitrarios”, por lo que se pueden entender y explicar de forma “razonablemente objetiva”. Esto implica tener en consideración una serie de indicadores, por un lado sus cotizaciones y las publicaciones y exposiciones que se le dedican, por el otro el ámbito geográfico y social del reconocimiento y sus diversas instancias (artistas, expertos, mercado, público, medios). “Raramente las valoraciones son unánimes. Hay artistas, como Botero, valorados por el público, pero no por la crítica y otros muy mediáticos y cotizados como Hirst, Koons o Basquiat, discutidos por los especialistas. En vida Brossa apenas tuvo mercado y público, aquí fue valorado muy tardíamente y su reconocimiento internacional es escaso. En cambio Miró fue apreciado antes en el extranjero que aquí”, explica Furió. Repasando los procesos de reconocimiento a lo largo de la historia del arte se pone de manifiesto que la reputación de los artistas sufre bruscas oscilaciones. Fluctuaciones que padecieron incluso Miguel Ángel, Caravaggio, El Greco o Goya, muy criticado por el sector académico en el siglo XIX. “Los grandes clásicos no siempre lo fueron, ni siquiera el valor de Picasso es incuestionable e inamovible”, asegura Furió, convencido de que mucho depende de la persona o institución que otorga el éxito. Según las estadísticas, en España casi la mitad de la población no visita nunca museos y exposiciones, el público experto es muy minoritario y los visitantes esporádicos constituyen un conjunto muy heterogéneo. “Según muchos autores la única forma fidedigna de valorar el éxito es constatando la repercusión histórica, internacional e intergeneracional, en definitiva analizando la reputación póstuma”, afirma el historiador. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 145 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila El libro trata las dinámicas del éxito desde la antigüedad hasta la mitad del siglo XX. Resulta fácil ver cómo la historia se repite, época tras época. Cambian los agentes —antes nobles, reyes y grandes mecenas y hoy instituciones, comisarios y expertos—, pero las tácticas y los resultados son muy parecidos. Es el caso de la estrategia que favoreció la consagración internacional de Picasso, a la que contribuyeron marchantes como Vollard y Kahnweiler, coleccionistas como los hermanos Stein y representantes institucionales como Alfred Barr, director del MOMA de Nueva York. Una dinámica que recientemente se utilizó para crear el caso de los Young British Artists, el último gran fenómeno del arte contemporáneo, creado por el coleccionista Charles Saatchi, el marchante Jay Jopling, el crítico Simon Ford, el director de la Royal Accademy, Normal Rosenthal y los organizadores del Turner Prize. Quedan para otro estudio los cambios estructurales producidos por la difusión de la informática personal y las nuevas tecnologías, responsables de la transición desde los formatos analógicos a los digitales, que están creando nuevos agentes y estrategias para la construcción del éxito, que pasan por Internet y las redes sociales. http://ccaa.elpais.com/ccaa/2013/03/20/catalunya/1363809597_683785.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 146 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Ensayo Necesidad natural El historiador italiano Paolo Rossi analizó el acto de comer, con su entrecruzamiento entre la naturaleza y la cultura Por Alejandro Patat | LA NACION Foto: LA NACION A lo largo del siglo XX y, en particular, luego de la Segunda Guerra Mundial, el acto de comer trasciende la mera necesidad fisiológica para transformarse en una práctica con múltiples valores político-sociales, psicológicos e incluso éticos. "Comer no es sólo un acto natural o cultural", afirma Paolo Rossi (Urbino, 1923-Florencia, 2012), historiador italiano famoso por su aporte a la historia de la ciencia en la modernidad. Comer es un acto que implica el entrecruzamiento entre lo natural y lo cultural. En primer lugar, se trata de entender qué significan naturaleza y cultura. Lejos de cualquier definición ideológica de raíz ecologista o primitivista que entienda la naturaleza como lo contrario de lo técnico o lo artificial, y aún más lejos de la indignación apocalíptica de aquellos intelectuales que demonizan la ciencia y Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 147 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila postulan de manera utópica un retroceso al pasado, Rossi advierte que el concepto de naturaleza está drásticamente influido por la historia cultural de los hombres. Para definir cultura, entonces, recurre a la antropología, según la cual, la cultura "designa las técnicas de adaptación al ambiente y los modos de vida de cualquier grupo social". En segundo lugar, si comer es efectivamente una necesidad natural, el ayuno, la huelga de hambre, el canibalismo, el vampirismo y las enfermedades típicas de las sociedades ricas, como la obesidad, la anorexia y la bulimia, no son sino manifestaciones culturales derivadas de distintos y complejos procesos históricos. Así, por ejemplo, será difícil escindir la idea de ayuno de las religiones orientales: en sánscrito, ayunar significa etimológicamente ?sentarse a la derecha de Dios'. De la misma manera, será arduo olvidar la huelga de hambre que Mahatma Gandhi condujo en India o la que en 1981 llevó a la muerte por desnutrición a Bobby Sands, activista del IRA, como acto de protesta contra el régimen de detención inglés durante el gobierno de Margaret Thatcher. Un capítulo especial está dedicado a la reflexión en torno a la anorexia. Así como la tuberculosis y la sífilis fueron las enfermedades del siglo XIX, el cáncer y el sida lo han sido en el siglo XX. Ahora bien, para Rossi la anorexia sería la única enfermedad moderna que se ha difundido de manera alarmante a causa de una indecente propaganda internacional a favor de una determinada forma física, fuera del orden natural. Si bien esta tesis no coincide con muchas de las interpretaciones científicas de los últimos años, Rossi, sobre la base de la lectura de documentos psicológicos extraídos de un centro de rehabilitación para anoréxicos en Italia, reclama una intervención de la política contra los mensajes persuasivos del mundo de la moda, que habría transformado el comer y el no comer en un dilema patológico, estrictamente cultural. En fin, Comer. Necesidad, deseo, obsesión es un pequeño volumen que forma parte -al menos conforme advierte el autor- de la historia de las ideas. Las ideas serían aquellos "modos de pensar que generan comportamientos" a través de procesos lineales o complejos, y que inciden sobre la vida de los inidividuos orientando y modificando su destino. Acostumbrados como estábamos a los métodos rigurosos y a la impecable labor de historiador en el campo de la historia de la ciencia, este librito parece más bien un ensayo testamentario en que el octuagenario Rossi se permite digresiones y excursus de distinto alcance. A decir verdad, Rossi logró evitar esa prosa enciclopédica de la vejez erudita y prescindió del lenguaje académico, con la intención de simplificar y reducir a lo esencial un tema extremadamente complejo. Está claro que, por momentos, el libro cede a cierto gusto por la opinión, antes que por el rigor histórico. Por otro lado, en su larga trayectoria a través de las ideas, a Rossi hay que concederle su enorme habilidad para hacer converger sin estridencias distintas disciplinas, desde la religión hasta la psiquiatría, sin las cuales, por otra parte, el acto de comer sería simplemente ininteligible. Comer Paolo Rossi FCE Trad.: María Julia De Ruschi 160 páginas $ 69. http://www.lanacion.com.ar/1560788-necesidad-natural Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 148 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Fragmentos ampliados de realidad La Fundación Thyssen dedica una retrospectiva al Hiperrealismo, el movimiento artístico más popular de todo el siglo XX Ángeles García Madrid 21 MAR 2013 - 16:17 CET Una mujer observa el cuadro del artista francés Bertrand titulado 'The city that never sleeps'. / PEDRO ARMESTRE (AFP) Hubo un tiempo en el que se pensó que la llegada de la fotografía había acabado con todo intento de representación realista por parte de los artistas. Muchos lo siguen creyendo así y consideran un anacronismo intentar reproducir el objeto que tienen delante. Pero en contra de toda previsión, a mediados de los sesenta, un grupo de artistas, estadounidenses en su mayor parte, consideraron que podían ahondar en las imágenes obtenidas con la fotografía y decidieron pintar a partir de instantáneas conseguidas con cámaras. Llevaron al lienzo fragmentos ampliados de realidad poblados por personas, objetos o paisajes. Nacía así el Fotorrealismo, más conocido en Europa como Hiperrealismo, un movimiento que ha convivido con el conceptualismo y que se ha convertido en una de las formas más populares de expresión artística. Más de medio centenar de obras de gran formato realizadas por Richard Estes, John Baeder, Robert Bechtle, Tom Blackwell, Chuck Close, Robert Cottingham o Audrey Flack sirven para mostrar los temas preferidos que ahondan en la mera visión del ojo humano. Bodegones, vehículos, paisajes y retratos de mujer, son los temas básicos en torno a los que Otto Letze, director del Instituto para el Intercambio Cultural de Alemania, ha organizado en colaboración con la Fundación Thyssen la exposición itinerante Hiperrealismo 1967-2012. La iconografía de temas genuinamente americanos sirve a estos artistas para llevar al extremo su experiencia visual. El brillo de los objetos de consumo están en los primeros planos y detalles ampliados de la carrocería de los coches y motos que pueblan las carreteras americanas: salpicaderos, relucientes guarda barros, el sugerente manillar de la Harley, autocaravanas . “Son objetos”, explica Guillermo Solana, director artístico del museo, “que sirven para apelar a la fascinación por el ilusionismo, al trampantojo. Cuando el espectador se enfrenta a uno de estos cuadros, sueña con entrar en ellos o llevarse uno de los objetos que retratados”. Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 149 Sistema de Infotecas Centrales Universidad Autónoma de Coahuila Las puras vistas de las ciudades ocupan la parte central de la exposición. A manera de modernas vedutas venecianas, los panoramas urbanos reproducen calles centrales que recuerdan a Hopper (Main street (1994), de Anthony Brunelli), escaparates hamburgueserías o cabinas telefónicas como la de Richard Estes (Telephone Boots, 1967), propiedad del Thyssen. Los cuerpos femeninos, cubiertos o semidesnudos rematan el recorrido en el que el imaginario con rostro de mujer parece transitar en muchas de las obras expuestas. Curiosamente, entre los pioneros solo se incluye una mujer artista, Audrey Flack, autora de dos sugerentes bodegones de la exposición. Qeen (1976), pintura acrílica sobre lienzo, es según explica la propia Flack, todo un compendio de la esencia de lo femenino: frutas, naipes, y cosméticos dedicados a su madre y con influencias del barroco español, movimiento que conoce en profundidad y que ha inspirado algunas de sus obras más conocidas, unas Macarenas y Dolores que no están en la exposición y que ella volverá a contemplar en la semana Santa de Andalucía. http://cultura.elpais.com/cultura/2013/03/21/actualidad/1363878776_250749.html Boletín Científico y Cultural de la Infoteca No. 369 Abril 2013 150