COMENTARIO DE TEXTO DE GALILEO RESUELTO [Contexto histórico] Galileo fue un hombre del Barroco que vivió de lleno la Revolución Científica que él mismo protagonizó. En una época en la que diversas guerras de religión asolaban Europa (sobre todo la Guerra de los 30 años) y en la que tradición (la escolástica) y modernidad (la nueva ciencia) estaban plenamente enfrentadas, Galileo va a representar la figura del científico por excelencia. [Tema/problemática] La problemática en la que podríamos encuadrar este texto es la siempre polémica relación entre ciencia y religión, razón y fe. Tal relación atravesó toda la filosofía medieval, hasta llegar al núcleo de la Revolución Científica en la Edad Moderna, con la figura de Galileo. [Ideas principales] Las ideas principales serían: Galileo defiende el heliocentrismo copernicano; al hacerlo, critica la cosmología aristotélico-ptolemaica; sus observaciones se basan en la observación y la experimentación (método científico); y por último, Galileo establece la diferenciación entre ciencia y religión como dos ámbitos diferentes que no deben interferir el uno en el otro. [Relación de ideas] En cuanto a la relación de ideas, vemos como en el texto Galileo presenta su defensa del copernicanismo que conlleva, necesariamente, la crítica al sistema aristotélico-ptolemaica. Para tal crítica Galileo se basa en observaciones astronómicas. Al final, Galileo establece una diferenciación entre los ámbitos propios de la ciencia y propios de la religión. [Desarrollo] El astrónomo polaco Nicolás Copérnico publicó póstumamente De Revolutionibus Orbium Coelestium (Sobre las revoluciones de las órbitas celestes) en 1543. Era la primera obra en donde se argumentaba de forma convincente a favor del heliocentrismo. Por aquel entonces la Iglesia Católica tenía como doctrina oficial la obra filosófica de Tomás de Aquino, por lo que, a nivel cosmológico defendía el sistema aristotélico-ptolemaico, completamente geocéntrico. Por lo tanto, en 1616 la teoría heliocéntrica se considera herética y contraria a las Sagradas Escrituras. Unos años antes, en 1610, Galileo había publicado su Sidereus Nuncius (el mensajero sideral) en el que mostraba pruebas observaciones a favor del copernicanismo. Con su primitivo telescopio, Galileo había observado las irregularidades de la Luna, las fases de Venus, las manchas solares o varios satélites de Júpiter, pruebas claras para defender el heliocentrismo copernicano y criticar la cosmología aristotélica. Las irregularidades de la luna o las manchas solares mostraban que la diferenciación entre mundo sublunar y supralunar defendida por Aristóteles no tenían sustento: los astros parecen estar hechos del mismo material que los objetos del mundo sublunar. Las fases de Venus constituían la mejor prueba empírica a favor del heliocentrismo: las distintas fases por las que Venus pasa a lo largo de su órbita solo se explican si Venus gira alrededor del Sol y no de la Tierra. Galileo es considerado tradicionalmente como el padre de la ciencia moderna y uno de los pioneros en la utilización del método científico (uso de las matemáticas, planteamiento de hipótesis y experimentación), lo que le llevó a sostener con mucha contundencia el copernicanismo y a poner los cimientos de la física moderna (con sus principios de inercia y de relatividad que, a la postre, serán trasformados por Newton en sus famosas leyes y en la enunciación de su ley de gravitación universal). La Iglesia va a condenar por ello a Galileo en 1633 a arresto domiciliario de por vida. Es por eso que Galileo se muestra tan agresivo con ella en el texto. Y es que Galileo concebía una separación total entre ciencia y religión. Para el pisano ambas se encargan de aspectos diferentes de la realidad y la una no debe inmiscuirse en el campo de la otra. La ciencia no debe hablar de la fe, y en nombre de la fe no se pueden condenar teorías científicas.