sobre las huellas de versalles

.)yy.!w¿>!g'j'i^yg'j¿'^y>;?i;^.^j¿^w,yj'g^
EDICIÓN DE MADRID
En seg^unda plana:
INFORMACIONES DE ME LILLA
Año V.—Núin. 1,355 :: Precio: 15 céatimus «I eferaplar.
DIARIO
EN POMBO
DESDE ANNUAL HASTA HOY
EL
INDEPENDIENTE
AGASAJO
GENERAL CABANELLAS, A ORTEGA Y
GASSET
ÚNICO SUMARIADO
Los caballeros de Pombo se honraron anoche ofreciendo un agasajo a ¿osé Ortega y Gasset. Ese
grupo un poco anáixjuico, en el que
sólo hay fuerte atadero de lazos
cordiales, esa selección de jóvenes
inteligonciaB, quiso que la inteligenda más selecta de España loe
prendiese por una noche y conviviera con ellos un momento de intimidad. El agasajo, la cena de
Pombo, no tuvo carácter de banquete al modo oficial. E r a que la
rosa de los vientos (que es quizás
ésta la imagen que más conviene
al gnxpo pombiano) recogía en un
solo norte todias sus puntas coincidentes unánimes en una indica-'
ción. José Ortega y Gasset sentóse '
entre Azorln y Juan Eamón Jiménez. Con ellos formaron la tertu-
Madrid, sábado 19 de noviembre de 1921
¿PAZ O GUERRA?
(MEDITACIONES EN LA CONFERENCIA DE WASHINGTON)
SOBRE LAS HUELLAS
DE VERSALLES
¿ Quiere "La Correspondencia Militar" al"La C!orp^pciaid^cia Militar" contesta
^''oche al comentario que ayea* hacíamos go más? ¿Desea que, encima, le citemos al*^®íca de la sumaíria que va a instruirse oon- gunos casos semejantes al de la carta del ge«a el general CaJbíaiellas. Todo su afán con- neral Cabanellas? Los generales Weyler, Lus t e €51 sepultamos bajo textos escogidos, que, Tovar y Burgueite, a raíz del desastre,
™8 cuales, ea realidad, bastan a nuestro pro- formularon por escrito o verbalménte acuP^to, porque en ell<« late, aunque no pue- saciones contra el ministro de la Guerra, su^ apresarse entre unas «anulas, el encano prema autoridad del Ejército, que era entonDOS GRANDES POTENCIAS AUSENTES Y CALLADAS
ces el vizconde de Eza. Y aún más: no hace
<ie que ayer hablábamos.
f\
Itejemos, pu^, a un lado esa labor de eru- mucho el general Tuero hizo ciertas declaraflición que, sobre sí mismo, ejercita el colega, ciones que no dejaban bien parado a su sui1
.^tmerosos en k discusión, concedémosle perior, el general Cavalcanti. Ninguino de es4
tos
generales
ha
sido
sometido
a
sumaria.
• cuanto quiera tomar. Pero ello no altera el
Indudablemente, Versalles era trabajo que supone nada menos s3 ha dado a sí mismo sean llama- tados a su tierra a un punto qu4tj
Sólo
está
enjuiciado
el
autor
de
una
carta
dos
a
consulta.
Sería
muy
de
deque
la
estabilización
del
mundo,
y
el lugar menos adecuado del mun«2^0 esesncial, que es la diferencia de protodavía no han conseguido k » £l*<.|
do para la conclusión d« una paz no sólo lo harán sin la ayuda y sear que Washington se elevase tados Unidos. A pesar del mona-]
««aimientos y de rapidez cooi que se enjui- contra las Juntas.
sobre
el
nivel
de
Versalles
hasta
el
mundial en 1919. E r a inevitable el asentimiento de estos dos grantruoso Gobierno zarista, que taE«p«t
cia al general Cabamellas y (xn que no se
"La Correspondencia Militar" cita J«^ arque, vista desde allí, la frontera des pueblos, sino qua ni aun se to- punto de hacer esta invitación sin taba la educación elemental como]
*iUuicia a otix)s militares.
tículos del Código de Justicia Miiita5,;enfque
del Ehin haáiía de aparecer más marán la molestia de consultarlos. más demora. Más pronto o más un crimen contra el Estado, la li-j
vasta que toda Ada, e igualmente
Sin embargo, esto contradice tra-de tendrá que hacerse, si e« q'.ie teratu&'a, la música, la pintara, yi
Concédanos que la carta del general Ca- está incurso ei escrito del general Cabaneinevitable que se dejase al pueblo abiertamente cl principio funda- quieie efectirameate asegurarse ln hasta la ciencia rusa durante lo»:
?*í^las haya constituido un terrible acto de llas. «Son "el 258, el 300 ó el 329". ¡Cuánto
a la puerta esperando el mental de la vida polítiJca, lo mis- paz del mundo.
últimos cien años pueden compa-j
"iifísciplina, que su oficio no consistía en es- celebraríamos nos sacase de nuestra igno- l^'f Ramón G&nCT^de la Sema, Es- alemán
* * *
castigo
vindicativo que Francia mo inglesa que americana, el prinrarse ventajosamente con las d«i;
pinosa.
Chaves,
Salinas,
Augusto,
cribir, sino ein mandar y en vencer. Incluso rancia y nos dijese, con la misma precisión,
los Estados Unidos. Estos rusos,
había de discurrir para él. La paz cipio del gobierno con el con.>cntiLa
ausencia
de
Rusia
de
la
Ccm»
*^acedemos que las Juntas de Defensa se ha- si por acaso existen en ese Código algunos ar- Antonio Espina, (Juadra Salcedo, de Versalles no era un arreglo del miento de ios gobernados, y es en fereiicia de Washington es una f !a- son, en vewiad, uno de los puefoloa'
más grandes, y han sobre\ivido a.|
, y*a limitado al trámite de pasar la carta a ticulen, aunque sólo sea uno, que se refiera Pérez Rubio, Manuel Abril, Vighi, mundo, sino la coronación de la verdad una intención lamentabilí- quüza aún más grave. La gente experiencias
terribles que habríarf
Ciria Escalante, Vando Villar, "révanche" francesa. Y como Ru- sima. De un modo ii otro será pre- pai^oce haber olvidado por compleJíianoB del ministro, absteniéndose de toda a la conducta de los jefes en campaña!
sia había siempre estado por de- ciso asociar est<^ dos grandes pue- to cómo los rusos soportaron ci aciibado con cualquier otra raKa»
Bamés,
Ruiz
Castillo,
Mauricio
,,píesión. Y ahora, ya hechas todas estas con- No es, ciertamente, a nosotros a quien ha
bajo del horizonte de Versalles, blos a cualquier arreglo peinia- embate de los primeros años de la Sin embargo, Washington, a Ic(,
que parece, se propone conoeita£i
'cesiones, es cuajido comienza nuestro argu- de convencer el colega. Vea si, a fuerza de Bacarísse, Pedro Emilio Coll, La- era también insvitable que el pue- nente del mundo, y mucho menos guerra.
Su rápida ofensiva en la paz de Europa, Asia y el P * ^
ra,
Chabás,
Soltura,
Morente,
Garblo
ruso,
que
había
salvado
a
difícil
sería
recabar
su
asentifiíento.
1914 salvó a París y salvó al pecitar el artículo 258, o el 300, ó el 329, logra
í
Vela, Juan de la Encina, doc- Francia de la derrota en 1914, que miento a lo que se conviniera si queño ejército inglés do una reti- cinco sin ellos.
El argumento no es más que un balance, convencer al país de que no se comete par- cía
Ya .sé que hay una ra^ón muy,
había
dado
más
muertos
a
la
gueambos
hubiesen
cooperado
a
ello.
tor Lafora, Almagro, Doménech,
rada
desastrosa
hacia
ei
mar.
La
-''^ siiütético balasnoe o inventaiio, algo así cialidad e injusticia absoluta al corregir una los hermanos Solana, Ángel Ve- r r a que Francia y América jun- No estará demás recordar cier- deuda de gratitud que Inglaterra poiJerosa para excusar a Washington de no enviar una invit.TicióBÍ
. ®oino dos partidas de cuenta que se contra- carta, sin duda extemporánea, con un proce- gue,
tas, y que al fln se había venido a
Tomás Borras, Bartolozzi, tierra, aniquilada por sus inmen- tos hechos elementales respecto a y Fraiwia deben al ".Soldado aes- al actual Gobierno ruso. Kadi«
Alemania
y
Rusia,
y
su
posición,
Pouen en d<^ páginas fronteras.
dimiento judicial, y no exigir responsabilidad Conrado del Campo, Diez Cañedo, sos esfuerzos guerreros, fuese con- hoy, en el mando. Son hechos co- conccido", de J|tisia, ese pobi-e menos dispuesto, que yo a rRduciiÉ
mártir sin honorft, es incalculable.
"' j ^ ^ ^ * dice: él general Cabanellas es autor inmediata por un desastre total; de que es Alfonso
Royes, Bagaría y Pijoan. •íidcrada ya simplemente como el nocidos de lodos; pero olvidados Si no hubieía .sido por Rusia, pro- ias dificultades que opone el Go^
bierno bolchevique a toda t»fi^.
«e xm^, carta contra las Juntas de Defensa; más grave una indisciplina contra las Jun- Lo reducido
de la cripta de Pombo deudor en falta de Francia. Su casi siempre en la discusión de es- bablemento Alemania naoría ga- dación sincera con las potendimi
*1* guiado varias veces las tropas a la victo- tas que la desorganización de un Ejército y hizo imposible
Gobierno
había
contraído
enortnes
ta
Conferencia
de
Washington.
narlo la guerra antes da fines del occidentales; sus teorías marxJats#
que todos los pommuy principalmente
«a.Estás(umariadoo va a estarlo.
Recordemos, primero, alguncs 10. Fueíob la san;;re y <»; suiíi le obligan a no i-econooerlas y ai
un desmoronamiento militar. Ayer lo decía- bianos asistieran j pero los que no obligaciones,
en
la
preparación
de
esa
misma
La otra dice: Setenta ixosiciones abando- mas y hoy !o repetimos: si el general Ca- cabían delegaron en sus compañe- guerra que restaurara a Francia extremos referentes a Alemania. Mitn'.o rít'l pucVo mso los n^<1 haoer gestos de pxeparaaón pax^
El pueblo alemán ocupa la situa- sembraron la victovi.i. para ios derribarlas. Y por si no fuera po-j
nadas, guarniciones que pasan a la zona banellas hubiera sido de los del éxodo, a es- ros.
en su antigua y gloriosa suprema- ción más central en Eui-opa; exce- aliados; sus increíbles soldados lu- co 8u general testarudez teórica^
^Micesa, pactos y rendiciones, ocho millares
cía sobre Alemania. Y he aquí que den en número a todos los desmás charon muchas veces sin c-J apoyo para colmo de males Mi», c^u »a(
horas gozaría de las dilaciones de la in- Ramón Gómez de ^ Sema nom- ahora
un nuevo y malaventurado pueblos europeos, con excepción de de la artillería, sin murúciones, ein ve afligido con un ministro de Jíe-í
«ft soldados muertos, regimientos desorgani- tas
bró, en un discurso muy afortunazaos, almacenes sin vestuario, depósitos sin acabable información del general Picasso; do, rector de la indisciplinada Gobierno ruso declaraba, no sólo los rusos; su nivel cultural ha si- botas ni provisiones de boca, en gocios Extranjeros, Chicherin, piar«f
que no podía pagar, sino que nun- do tanto o más alto que el de cual- condiciones casi inconcebibles pa- ticularmente obstinado, pedantas'^
tiendas de campaña, hos'pitales infectos, mi- pero como ha vencido en África y acusado a grey pombíaná., al toico qué, sien- ca
había tenido la intención de lle- quier otro pueblo del mundo; son, r a el soldado francés e inglés y co, discuüdor y desastroso. Poro la
las
Juntas
va
a
caer
bajo
la
acción
sumaria
• r..fioínies gastados estérilmente. No hay ningún
do tan joven espiritualm«nte como var a cabo este imposible. Eviden- como pueblo, honrados, trabajado- americano que en el frente occi- neceíádad práctica es más fuertflí
de
los
tribunales
militares.
i«VBnariado.
cualquiera de ellos, es, sin embar- temente, no era posible seguir tra- res e inteligentes; de su bienestar dental no carecía de nada. Y sa que todas las teorfas, y el Gobieíií
go, su maestro y su mayor en sabiduría y en arte.
José Ortega y Gasset pronunció
Los soldados de cuota
otro discurso, que es sensible no se
I copiara taquigráánnseRte. Fué un
"Impromptu" j ^ ^ a l en el que, como es sabido en el magnífico escritor, dentro de la hermosura de su
forma, ofrecía alusiones inéditas y
densos pensamientos. En la corta
serie de banquetes pombianos, eJ
: Xota oficiosa facilitada en Guerra
ofrecido a Ortega y Gasset ha que! "Repetidamente ha sido solicitai do del ministro de la Guerra se dado como culminante.
i conceda autorización para que los
I soldados de cuota que están en
! descubierto tóel pago de segundos
• o terceros plazos puedan satisfa•• oerlos. El ministro de la Guerra es
I opuesto siempre a estas concesión
[ nes; pero teniendo en cuenta que
i la casi totalidad de dichoe eoldai dos se hallan en África prestando
i sus servicios, y que, por el buen esSEVILLA 18 (5 t.).—Se han repíritu de que se hallan animados, cibido para la Exposición de trason merecedores de ser atendidos, bajos de la época del Rey Alfonevitándose •iasí los perjuicios que so X el Sabio, que se celebrará con
de la falt-a de pago podrían origi- motive de su séptimo centenario,
nárseles citando Igs corresponda organizada por' el Ay|*ntamiento,
ser licenciados, ha resuelto se dic- interesantes documentos yi^aliossas
te una diisposición para que los in- obras de arte, que aportan al i'.eiteresados o sus padres o tutores tamen la Universidad, la Bibliotefoi-mulen, si ya no lo hubieran he- ca Colombina, la Catedral y el
cho, sus peticiones individuales, a Ayuntamiento.
fm d,e que, examinadas las circunstancias que en cada caso concurran, pueda resolverse.
Se admiten suscripciones a GL
La concesión se hará por una SOL en los quioscos situados fren
sola vez, y por tiempo limitado, te 8 ios aúmeros 30 v 39 de I»
pa^a^lo el cual, toda instancia que calle de Aírala, y en la tibrcria de
se formule quedará sin curso."
San Martín, Puerta dei Sol, «
rtlllÍttttHttt'>I<t**»tt>lU'n«>i'»8{*K«'itI3>>ÍU«t{tiBSU«ótiÍitffl»«jíÍ«ffi}fflt^
CURACIÓN DEL
MONTE UIXAM
Parte oficial de ayer tarde
En el ministerio de la Guerra facilitaron ayer tarde él
S'táente parte oficial:
*E1 comandante general de Melilla, desdi- Segangan, a las
noce de hoy, dice que la columna Sanjurjo ha ocupado la posióón de Monte UiicMn. Sin novedad."
Parte oficial de anoche
«Comaadaote general da Melilla a ministro de üa Guerra,—
El generaJ SanjurJD, canfomie con las órdenes recibidas, dispuso
a las cinco horas de hoy la salida de una pequeña columna al
mando del comandante del Tercio Francisco Franco, llevando
'^?^P'"*5tico del terreno al capitán de Policía indígena Jesús
Jim&íea Ortoheda, apoyada por el batallón Otumba, que quedam en el poblado San Juan de las Minas en espei-a de ordenes
para m.eri'enir si circunstancias así lo exigían.
•1^1 avance de la ookuuna era protegido por fuego del 11 y i *
grupos d- Artillería ligera, así como por baterías empiazatías
en Atlaten y Sebt.
En el campamento de Segangan quedó el resto de la brigada,
*i» vigilancia y dispuesto a acudir donde se le ordmara.
, A las ocho horas, a pesar de las dificultades que para la ascensión ojwne el terreno, y por escasa resistencia, fueron alcan*ados los objetivos señalados, que eran el caserío de Bellavista
y los fortines San Enrique, Nuestra Señona del Carmen, San
Jerónimo, García Gómez y San José de Axara, que quedaron
l^iajEnecidos por fuerzas del batallón de Álava, a excepción del
íortía San Enrique^ que lo es por los del Tercio.
El enemigo, que al darse cuanta de nuestra maniobra acudía
tn crecido número, fué oañomeado por baterías de Atlaten y Sebt,
^P*e le obligaron a huir.
A pesar de las molestias sufridas por ka inclemencia del
, tiempo, las fuerzan ascendieron a Monte Uixam con verdadero
*fdoir, sin, que las sisperezas del terreno y *! fuego enemigo le
^hicieran decaer ni un momento.
^
, ^
' A iaa catorce horas cesó el fuego de las baterías, y continuo
^ fortificación de las posiciones ocupadas, sin ser hostilizadas.
Podrán abonar los
plazos segundo
y tercero
••
1 1 ^
El centenario de
Alfonso el Sabio
POR H. G. WELLS1
tando con un Gobierno semejante.
Ni el pueblo alemán, pues, ni el
pueblo ruso tuvieron voz en Versalles, y el porvenir del mundo
quedó ñjado con el más sugestivo
desprecio por estas potencias caídas y proscritas.
Quedó fijado tan magnífica y
desastrosamente, que ahora la
Conferencia de Washington, por
muchas limitaciones que se iinponga a sí misma, se ve obligada a
revisarlo y, si. es posible, a enmendar o sustituir el estupefaciente convenio. En realidad, el fin de
la Conferencia de Wáshinglon consiste en revis.ir los veredictos de
Versalles, en una atmósfera más
limpia y con una visión más amplia de las cosas.
* * «
No sé hasta qué punto los futuros historiadores dirán que esta
Conferencia de Washington fué
planeada a imitación de la Conferencia de Versalles; poro es indudable que el punto de partida de
una y otra ofrecen una lastimcíu
semejanza. C o m o allí, parece
,,a|'rancarse del supuesto tácito quo
es posible Hogar a un arreglo pormancnte de los negocios mundiales sin que el pueblo alemán ni cl
pueblo riso estén representados en
la Conferencia. Japoneses, italianos, franceses, norteamericanos e
ingleses, asistidos por las míídestas indicaciones de algunos sectores de la humanidad, tan reducidos como la China y la América
latina, se sentarán juntos a uJi
EL CASO CABANELLAS, POR BAGARÍA
Entre Tifasor y el barranco Buhuca
Ba general Neile, desde Yaaanen, participa que en ei día de
ayer ocupó con batallones Burgos y Almansa, Policía indígena
y Jarka amiga posiciones sobre la loma divisoria de aguas entre
Tiiasor y el barranco Buhuca, previa preparación artillera de
a t e r í a s emplazadas en las posiciones Tifasor y Yazanen y g m W> 1.° Montaña.
El enemigo hostilizó débilmente «J despli^ue, haciéndolo mas
^tttensamente en repliegue; a pesar de lo cual se veiñficó, lo
««ismo que «3 avance, sin novedad por nuestra ^ r t e .
Otras noticias
En Atlaten se presentaron soldados perteñ&cientes al regiinieato Infantería Melilla Mariano Eomero y Francisco Valde,
I*»» se hallaban prisioneros del enemigo.
^
Esta noche continuó lloviendo copiosamente.
.
LEOPOLDO NOBLE Y "LA RUBIA"
EN EL REICHSTAG SE HABLA
DE LA EXTRADICIÓN
demanda de extradición formulada
\éBERLÍN 18 (10 n.)
í 4' t> ? ^ ^ sesión celebrada hoy por el por la Embajada de España en
Ifeí * ^ ^ s t a ^ , los comunistas plantea- Beriin.
El Ministerio prusiano se ocupa
pfcí^*» la cuestión de que fueran 11i^^ ?^rtadOB los asesinos d^l presiden- actualmente de estudiar el asunto,
t ^ f t ^ ^ e l Consejo de ministros de Es- y por ahora no puede tratarse, ni
i WÍ?^*»' señor Dato, detenidos en muclio menos, de la cuestión de la
expresada libertad. (Fabra.)
|.|V-«6rb-n.
s ' í ? j ^ ^ consejero, señor Koepker, ttmam«iamtt»;»i«t«ni»a«maa:
' .¿"v^B^ndió en nombre del Gtdñeruo
Se admiten Biíscripciones a EL
• sigilliaate: *E1 G<Aiern©4e! Imffáslttílg mmediat^níe^te al SOL en ta librería de San Martín,
'io d4 Botado p m i l u i o la Puerfa del Sol. 6.
mA^áÜSi-
-Créame usted; ias responsabilidades ^rán 9%ca los que es<;rlt»ti cartas-
social y político, y de su prospe- cuenta de muertos y heridos exridad' económica dependen la pros- cede enormemente la de cualquieperidad de Inglaterra, Escandina- ra de los otros combatientes. En
via, Rusia, Italia, y, en meno¡* 1917 Rusia se desplomó; la sangrado, Francia. Tienen giiand(;s gría había sido excesiva, y en tietradiciones y una gran literatura. rra quedó, a pesar de los diligenE s imposible exterminar a un pue- tes talonaaoe que la propinaron
blo semejante, imposible borrarlo sus aliados para levantarla y que
del mapa; pero sí es posible des- siguiese luchando. El intolerable
trozarlo económica y soci&hnentc. zarismo rasputiniano se vino abajo
Y si Alemania queda arruinada, en el desastre, y después de una
ca.si toda Europa quedará también fase de terrible desorden, en gran
arruinada. Alemania ha sido de- parte debido a la vacilación britárribada en la gran guerra, y a es- nica en sostener el Gobierno de
te efecto convendrá recordar aquí Kerensky con una úimic acción naalgunos hechos elementales res- val en el Báltico, el Gobierno duro,
pecto a esta guerra. Bajo un sis- tiráidco y doctrinario de los boltema imperialista, particularmen- cheviques subió al Poder.
te agresivo y ofensivo, los alemaEste Gobieo-no bolchevique es un
nes se vieron metidos en lucha
con casi todo e] i-esto del mundo Gobierno malo; sus faltas son, es
civilizado. Pero repetidamente de- cierto, de un orden muy distinto;
clararon las ingleses y america- pero, en fin de cuentas, os casi
nos, ya que no los demás comba- tan malo como el anterior G<¿)iertientes, que luchaban, no contra el no zarista que vino a sustituir. Pepueblo alemán, sino contra el im- ro recordemos también algunos
perialismo alemán. La propagan- hechos bastante olvidados sobre «1
da inglesa, muy especialmente, hi- particular. Este Gobierno bolchezo cuanto pudo x>^ra saturar a vique ha permanecido en ei Poder
a Alemania de esta idea, y mante- porque es un Gobierno nacional
ner viva la esperanza de un trato partidario de una Rusia unida e
generoso y una sincera reanuda- indivisa, y el pueblo ruso lo sosción de amistades en cuanto los tiene porque ha defendido Rusia
alemanes renunciasen a .«u milita- contra los salteadores subvencionados de Francia e Inglaterra,
rismo imperialista.
contra los polacos y los estonienAlemania, exhausta y vencida, scs y los japoneses, y contra to<la
se rindió en 1918 confiando en esas intromisión en el país. Al fin y
promesas y otras similares que al cabo prefieren fanáticos a exencerraban los catorce punttK; del tranjeros y bolcheviques a bandopresidente Wilson. Los fines "de- leros. Los franceses y americanos,
clarados" de la guerra quedaban en su caso, probablemente harían
logrados. El Kaiser bajo llave, y lo mismo. La Entente, los jwlacos,
Alemania renegándole pública e toda esa banda de aventureros no
inequívocamtsnto.
hp,n dado respiro a los rasos pai-a
Pero la Conferencia de Versa- ocuparse como es debido de mi
lles trataba estas promesas como propio Gobierno. Y ahora, presa
simple papel mojada La paz im- dd la catástrofe de una sequía sin
puesta" a la recién nacida Repú- precedentes, millones de rusos en
blica alemana era una paz puni- las regiones desorganisadas por
tiva, exactamente como si hubiera Kolt3cha.lt, Denifcin y Wrangd se
seguido habiendo un kaiser en están muriendo de hambre, en tanBerlín; era, en realidad, el rever- to que Canadá y América tienen
so vindicativo del tratado franco- que quemar su tango y su maíz
alemán de 1871, sin un ápice áe sobrantes. Haata en algunas^ palotolerancia ni aceptación de la nue- tes de la misma Rusia hay alimenva Alemania, ya bian castigada. tos con que se podría socorrer a
Se trató a los alemanes como una esstas masas agomaantes; pero no
raza de monstruos moraks, aun- hay ios medios necesarios para
que nadie con un poco de sentido transportarlo sin ayuda de las pocomún crea realmente que son tencias occidentales. Y este msanmuy distintos de los ingleses, do occidental deja morir de hamfranceses o americanos; se hizo bre a estos millones de rusos, a
responsable de la guerra a cada quienes debe la «iotoria, simpledemán, aunque cada Inglés, fran- mente a causa de la terquedad
cés o americano sabe que cuando disputadora del Gobierno de Mos©1 país de uno está en guerra tie- cou, que no se aviene a prometer
ne uno también que estarlo, y que el pago de las deudas rusas—cones c(»npletamento natural luchar traíí¿a en su mayoría para at«ipor él, tenga o no razón; y un der a los preparativos que salvar
ataque sostenido de invasiones, ron a Europa—, deudas cuyo pago
desmembramientos e imposibíes nunca podrá cíectoar Rusia.
exigencias fué emprendido, y aím
* **
dura, contra la quebrantafla civiPero
aun<xue
unos' cuantos milización alemalta, que, sin enüiiar- llones de hombies,
mujetres y ntgo, es tan necesaria al mundo, por ñoa rusos mueran este invierno y
lo menos, como la francesa. La se sumen a la cuenta de los que
Prensa nacionalista inglesa y ya mató la guerra, la guerra que
francesa abiertamente confiesa que salvó a París de Berlín, esto no
no piensan dar a Alenisnia nin- quiere decir quo Rusia muera. Ni
guna posibüidíkd de restableci- esto alterará el hecho de que los
miento. Tres años llevan los alia- rusos son el pue&lo más numerodos «uropoos dando de puntapiés so d« Europa y una nación <Í8 doa este postrado cuerpo de Alema- nes excepcionales y una fenatídad
nia; dentro de poco, cocearán ya sin cumplo. Su magníüoa resiscontra un cadáver; y como están tencia a una intesrvenciáo extranuaidoe por la geografía a su vícti- jera dcede 1917 y su tolei-ajjsa dei
ma, tan intimamente como lo es- Gobierno bolcheíviquie, en momentaban los gemelos siameses, quie- tos en que la divisióB haiMría eklo
re decir que sufrirán laa conse- tan fatal para tílos oomo lo fué
cuencias de esa muerte.
para China «a una prueba d e ea
Ya es hora de que esta bárbara solidaridad e instinít» político. Coodemencia, esta prolongación de la vi«ne pensar que hay tantos rulucha después de la rendición, ce- sos como noorteam«rkanos, y que
sen, y de que los mejores espíritus ocupan un área más grande y muy voluntades de Alemania y el dis- cho más rica en recaraos incxploa-eüsimo Goljieruo republicany qug Udos. Y 6»táa aclsmaU^ifts y adap-..
no bolchevique, aunque procurawi
do salvar las apariencias, se távabt
te ahora extraordinariamente «&«
heloso de ser reconocido y aattai
en negociacionos con los Gobiar<
nos occidentales. Y no alcanzo M
comprender por qué loss GOUÍIKIUW
occidentales, temendo ea cuenta
las necesidades de Rusia, tratan
de superar a los bolcheviques tm
testarudez, peílantería y «niftidadt
en lugar de intentar honradamea*
te entendérselas con este Gobieu;
no "de f a d o " dándole tiempo i
que pueda desenvolverse naturalí
mente en algo distinto. Para eSiDf
desenvolvimiento sólo hace falt^j
una 'pa.z injlistriosa y una iieetaui
ración del comercio. Con o¿to 3¡
una remisión de «eudae iniposi»
bles, Rusia, libre ya para pieniprn
de la negra maldición de! zarismo, no tardará en ser un país da
magníficos cultivos, minas resucir"
ta-ias; ciudades redivivas, un paüí
democrático, ra;is semejante a lo*.
Estados Unidos de 1840, iibresi^
pobres, trabajadores y ác inmen?3
sas esperanzas, que todo cuanto'
pudiéramos hallar en la Historia.'
En tamo Ru>:ia sufra e! Gobiei^"'
no bolchevique, pitcMiso que «41
nuestro deber con Rmúa stifrírio
también; pero quizás con esíta
opinión voy más allá de •iv-¡ posibilidades del caso. Luego, nM- atre*
vo a sugerir que, por lo menos,
Washington debería nombrar algún juriíioonsulto o alguna Cami»
stón bien infoi-mada quo repr»»
sentase el papel de abogado «la
Rusia en la Conferencia. Ya qu9
no se permite a Rusia tomar parte en la decisión de matenaa qua
tan vitalment* la afectan, por lo
menos debería oírse alguna vo«
que hablase por ella.
Considerad lo que el futuro púade guardar para este gran pueblo,
y ob!»ervad la increíble locura y,
crueldad y baja ingratitud de lo«'
insultos y «ilamidades qao tóbzé
él hacinamos. Mirad un atlas o uxw
enciclopedia. Medid lo quí- intcfttainos no tener en cuenta. Dentro
de veinte años Rusia puede ser utt
país renaciente tan vigoroso como
los Estados Unidos en 1&40. Decitro ds un siglo puede ser Ueoí
graiula y poderoso y civilizado
como el Estado qus ¡más io sea.
Que Potencias como Francia y
Gran Bretañsi y Japón se reúnan
a deliberar sobre los dieetiiUM <tet
mundo sin ella, es como fii, en lof
años oscuros de 1863 y 1864, «^
hubiesen reunido a de1il>»rar solun
el porvenir de América deja(n4*
fuera a loa Estados Unidos. Éa
realidad, algo día t ^ o aoont'eeió «ci
aquellos años oscuros: Fiancia envió tropas y municione» a Méjioo,
como redenteñueata las envió %
Polonia y 5» Eosaa meridiona!. Y.
en algún rineán d« la tierra hsjr
una tumba, la tumba de «n pehab"
reaoionaxio, que debía pestauraír"
Méjico a la monarquía y al aist»'^
ma europeo: cl emperador Maxi»!
mfiiano, amigo dal emperador S»^ poleón IIL
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H. fi. WELLS ";
(Reservado» todott fea d í t w * * *
QitMa íeTTOÍHOJttíwewte prohibid,
la rt^oducción.)
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