LA VANGUARDIA VIVIR MIÉRCOLES, 31 MAYO 2006 4 Una escasa lluvia avería siete semáforos y colapsa el tráfico JORDI BORDAS El PP acusa a Clos de ajudicar a dedo el 89% de los contratos BARCELONA REDACCIÓN l Ayuntamiento de Barcelona niega una relación causa-efecto y lo atribuye a una coincidencia, pero ayer por la mañana, mientras caían cuatro gotas, siete semáforos del área más céntrica de Barcelona dejaron de funcionar. Estaban enclavados en los cruces de Pau Claris con Mallorca; Pau Claris-Consell de Cent; Balmes-Diagonal; Paral·lel-Sepúlveda, rambla Catalunya-Aragó y la calle Calvet, a la altura de Rector Ubach y Marià Cubí. En algunos casos, como ocurrió en la confluencia de las calles Balmes con Diagonal, la avería se prolongó hasta primera hora de la tarde, lo que llevó a un caos circulatorio que, en determinados momentos, se caracterizó por el sálvese quien pueda. Poco antes de las nueve cayó sobre Barcelona un ligero chaparrón. Con las primeras gotas, dos semáforos de la calle Pau Claris, situados en la confluencia con Mallorca y Consell de Cent, quedaron inutilizados. La afluencia de tráfico convirtió ambos cruces en un calvario para mucho conductores. Casi simultáneamente, las anomalías se extendieron al Paral·lel, justo en el cruce con la calle Sepúlveda, a la calle Calvet, a la rambla de Catalunya y a los semáforos que regulan una confluencia tan complicada como la de Balmes con Diagonal. Si en todos estos casos superar la zona conflictiva resultaba complicada, lo que podía verse en BalmesDiagonal superaba con creces todas las realidades. El caos de tráfico llegó a ser considerable. Ni siquiera la presencia de los agentes de la Guardia Urbana en Balmes-Diagonal, que acudieron en dos tandas diferentes, desde las ocho y media hasta las diez y desde E E LLIBERT TEIXIDÓ El caos en Balmes con Diagonal se prolongó ayer después de que la lluvia hubiera desaparecido la una menos veinte a la una y media, lograron imponer orden entre los automovilistas. Y si sus esfuerzos resultaban casi estériles, peor fueron las cosas cuando, al abandonar el cruce, dejaron sobre el asfalto unas señales de Stop poco efectivas. Al hacer el análisis de lo sucedido, los máximos responsables municipales de la regulación semafórica restaron importancia a estas anomalías. Consultados por La Vanguardia, insistieron en que las averías “nada tenían que ver con la lluvia”, Una precipitación mínima n Aunque la media recogida ayer en el conjunto de la ciudad fue de 0,4 litros por metro cuadrado, en muchos barrios ni siquiera llegó a llover. Los datos indican que los pluviómetros de áreas como Canyelles, la plaza Lesseps, Zona Franca, la Sagrera, Vallvidrera o el Turó de la Rovira no registraron precipitación alguna. En las zonas donde los semáforos tuvieron problemas se registraron las siguientes cantidades. En Balmes-Diagonal, 0,2 litros por metro cuadrado. Tanto en Pau Claris como en rambla Catalunya los pluviómetros indicaron que habían caído 0,6 litros por metro cuadrado. En la calle Calvet, 0,9, y en el Paral·lel se superó el litro por metro cuadrado, exactamente 1,1. Donde la lluvia alcanzó su máxima intensidad fue en Sants, con 1,5 litros. aunque, salvo en el caso de Pau Claris-Consell de Cent, no explicaron las causas de las averías. Sólo reiteraron que “la mayor parte de ellas fueron subsanadas en poco tiempo” y que “no se llegó a activar ningún plan de emergencia”. Por su parte, la propia Guardia Urbana informó de que se había enviado a una patrulla al cruce de Pau Claris con Mallorca desde poco antes de las tres de la madrugada hasta cerca de las cinco; en la confluencia con Consell de Cent, la presencia de los agentes duró desde las ocho y media a las nueve; en Sepúlveda, “las patrullas fueron pasando de vez en cuando”. En Calvet, se mantuvo una patrulla en Marià Cubí, mientras que otra acudía de forma intermitente al cruce con Rector Ubach. “Era un día de mucho trabajo, añadieron las mismas fuentes, y debíamos repartirnos para llegar a todo”.c Barcelona como asignatura LA UB DARÁ CURSOS SOBRE LAS ÚLTIMAS TENDENCIAS CULTURALES DE LA CIUDAD ÓSCAR MUÑOZ L BARCELONA BARCELONA o último en fotografía, diseño, literatura, arquitectura, imagen, ilustración, arte, gestión cultural... y Barcelona como motor y escenario de la creación. Éstos son los contenidos del programa IL3Push, que organiza el Institut de Formació Contínua, IL3, de la Universitat de Barcelona (UB) y que consta de diez cursos monográficos que se impartirán, en su primera edición, la primera quincena de julio. Especialistas en cada una de estas materias coordinarán las sesiones, que contarán con la participación de destacados creadores. Ya han confirmado su colaboración el diseñador Peret y el ilustrador Nazario. Los responsables de los cursos ultiman la incorporación al elenco de otras figuras de renombre –novelistas, arquitectos, diseñado- res...–, que han desarrollado su trabajo o centrado su obra en la capital catalana. “Barcelona desempeña un papel central en la creación y difusión de tendencias y se ha convertido en un referente para otras ciudades”, subraya José Antonio Rodríguez, director de marketing de IL3. Los cursos se han ideado partiendo de esta premisa y de que cada vez hay más interesados en formarse en aspectos culturales sin necesidad de que guarden relación con la actividad profesional que desarrollan. No se han pensado para expertos. “Más que adquirir conocimientos, se trata de compartirlos y de experimentarlos en la ciudad”, añade Rodríguez. Por esta razón, además de la teoría, hay una vertiente práctica que se desplega sobre Barcelona, convertida en una gran aula en vivo. La primera se llevará a cabo por las mañanas y la segunda por las tardes. Ésta última cuenta con un bloque en el que los participantes de distintos cursos se relacionan entre sí. Cada curso consta de 40 horas y tiene una duración de una semana. Entre los expertos que coordinan los cur- Las sesiones prácticas contarán con novelistas, arquitectos, o diseñadores de renombre ligados a la capital catalana sos están Anna M. Guasch, profesora de Arte Contemporáneo de la UB; Helena Juncosa, directora de exposiciones del Centro de Arte Contemporáneo de Málaga; Manolo Laguillo, catedrático de Fotografía de la UB; Teresa Buhigas, socia de Facto Estrategia y l concejal Alberto Fernández Díaz, presidente del grupo del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, denunció ayer que el municipio adjudica “a dedo” nueve de cada diez contratos, exactamente el 89% de los contratos. Fernández Díaz criticó la proliferación de contratos menores, 1.519, el 68% del total, “la mayoría al límite” del importe que obliga a sistemas diferentes que la adjudicación directa, como son el de pedir presupuestos o sacar a concurso. “Para nosotros –prosiguió– se hacen trampas, los contratos se fraccionan para fraccionar las cuantías y poder hacer una adjudicación directa”. Fernández Díaz puntualizó que ésta “no es una denuncia de favoritismo” respecto a determinados proveedores porque si hubieran detectado esas condiciones “caminaríamos por otra vía”. El teniente de alcalde Jordi Hereu replicó asegurando que sólo el 4,2% de los contratos se adjudican sin concurso. Según el edil socialista, el PP “utiliza la mentira sistemática para confundir a los ciudadanos con unas cuentas municipales debidamente intervenidas y fiscalizadas”. Hereu precisó que el Ayuntamiento tiene un volumen de contratación que asciende a 257,8 millones de euros en 2005, de los cuales el 62% son negociados (pliegue de condiciones público y concurrencia de tres ofertas); el 33% se hacen por licitaciones por concurso público y el 0,92% son de emergencias, como la del Carmel. El 4,2% son contratos menores, aseguró Hereu, “efectuados con los topes regulados por ley”.c Marketing; Oriol Armengou y Ferran Mitjans, de la agencia de comunicación Toormix; o Luís Alcalá, responsable de marketing de la empresa de inversiones inmobiliarias Rodamco Europe Spain. Otro de los coordinadores, Daniel Córdoba-Mendiola, de la consultora The Hunter, especializada en nuevas tendencias de mercado, destaca que, por lo que a él le consta, IL3Push no tiene equivalente en ninguna otra ciudad. “Hay experiencias similares en Nueva York o en Londres –precisa– pero centradas únicamente en la moda y en el diseño”. Por novedosa, esta propuesta de la UB es arriesgada. Lo saben sus responsables, quienes, a pesar de ello, confían en su éxito. Ya se ha recibido un buen número de peticiones de información, una tercera parte de las cuales de extranjeros. “Los hay que miran cómo aprovechar su estancia o sus vacaciones en Barcelona para participar en una experiencia de este tipo”, añade el director de marketing de IL3. Con todo, si los resultados son buenos, las siguientes ediciones podrían celebrarse en cualquier época del año ya que, insiste José Antonio Rodríguez, “no son cursos de verano”.c