Vida de los organismos acuáticos chilenos

Anuncio
Estrategias de sobrevivencia por inanición en organismos acuáticos.
Se define inanición como trastorno caracterizado por debilidad notable, pérdida extrema de peso y
disminución del metabolismo, todo ello resultante de insuficiencia alimenticia prolongada.
Los peces exhiben grandes diferencias morfológicas, que se reflejan en su comportamiento, fisiología,
requerimientos ambientales y resistencia a la inanición de tal manera de responder de la mejor manera a las
fluctuaciones de alimento (Internet).
La glucosa es el principal compuesto de la degradación catabólica para la obtención de energía en las células.
Cuando existe una cantidad suficiente de éste en la sangre el organismo lo almacena en forma de glicógeno.
Durante periodos prolongados de ayuno o de subnutrición es necesario que las vías metabólicas se alejen de la
glucosa y acerquen más al uso de grasas para la producción de energía con el fin de preservar las proteínas.
Los vertebrados, en general, poseen una notable capacidad de sobrevivir a muy largos periodos de ayuno, la
que se ve compensada por que aprovechan primero el glicógeno y las grasas que tienen almacenados antes de
recurrir a las proteínas (Lagler, 1990). Los ácidos grasos son la principal fuente de almacenamiento energético
en los organismos, pero no pueden ser convertidos en glucosa, de manera que, bajo circunstancias usuales, no
pueden contribuir al aporte energético del sistema nervioso central, sin embargo, si pueden convertirse a
cuerpos cetónicos. Estos son metabolitos derivados de las grasas que sirven como sustitutos de la glucosa,
pueden pasar la barrera hematoencefálica y durante la privación prolongada de energía en la dieta proveer una
gran parte del aporte energético en el sistema nervioso central (Cunningham, 1999).
A las proteínas les corresponde entre los nutrientes máxima importancia, como componente en membranas
celulares y formación de enzimas (Wernner, 1987). La utilización del índice ARN/ADN, como indicador del
grado de actividad metabólica de la célula esta dado por ser la concentración de ARNr función del grado de
síntesis de proteínas y por ende el grado de metabolismo, encontrándose un decrecimiento lineal con la
duración del periodo de inanición (Ramírez), lo que conlleva a un debilitamiento y disminución del grado de
crecimiento, lo que hace a estos individuos vulnerables a los predadores (Wernner, 1987). La pérdida de masa
corporal se ha descrito para juveniles de Pleuronectes americanus, (Wall K, 1999), larvas de Paralichthys
olivaceus, (Gwak, 1999).
En organismo acuáticos encontramos una variedad de técnicas o estrategias de sobrevivencia (las de moluscos
podrán ser similares a las de crustáceos y distintas a los peces), sin embargo, cualquiera sea, vienen dadas por
lo que sucede a nivel de metabolismo y una reducción de éste.
En peces las actividades diarias son disminuidas para tener un gasto energético menor, dentro de éstas
podemos señalar el nado, en donde el individuo tiende a irse al fondo del estanque, permaneciendo tranquilo,
disminuyendo su consumo de oxígeno, y en ambiente natural se puede observar que el individuo nada a favor
de la corriente.
Existe además, una notable pérdida de peso del hígado, en anguilas al cabo de 15 días sin alimento hay una
reducción del peso relativo del 50% (Werner, 1987), debido a que son las primeras reservas las que se utilizan
(glucógeno).
El movimiento y/o la velocidad de nado de los individuos en inanición como Japanese flounder (Miyazaki,
2000 y Gwak,1999) también se ve influenciada, con el fin de ocupar la energía disponible de la mejor manera.
Respecto al cuadro hemático , existe una pérdida de agua inicial lo que trae consigo un aumento de los
1
glóbulos rojos, del nivel de hemoglobina y del número de hematocrito, pero conforme aumenta el tiempo sin
ingerir alimentos estos niveles decaen continuadamente (Werner, 1987).
Con respecto a los niveles de hormonas; la inanición de corto plazo (7 días) en ciprinidos, provoca una
disminución de hormonas tiroideas circulantes (T3 y T4) por aumentar el metabolismo basal y estimular el
consumo de oxigeno, sin embargo, se encontró un aumento de noradrenalina y dopamina como consecuencia
del stress que provoca este estado (Pedro N, 2003).
Se ve afectado mayoritariamente el crecimiento alcanzando niveles bajos, ya que toda las reservas se centran
solamente en sus actividades diarias, por lo que el individuo mantiene un metabolismo basal.
Con esto es notoria la baja de peso ya que el organismo ocupa sus reservas de grasa, y una vez que estas son
utilizadas y el tiempo de inanición es mas prolongado, comienza a utilizar sus proteínas, con lo que el
organismo puede llegar a la muerte si sus reservas se agotan (en TAI de 24g se observó una mortalidad del
50% al cabo de 12 semanas; en cambio en TAI de dos años (246g) esto se produjo en 22 semanas
(Werner,1987)).
En crustáceos la principal fuente de energía se presenta en forma de carbohidratos y un mínimo de grasas,
alojados en el hepatopancreas. El grado de resistencia a la inanición conviene analizarlo asociándolo con el
ciclo de la muda, ya que la alimentación condiciona este aspecto fisiológico ( Paschke K, 2002 ).
Y en moluscos estudios dan indicios que larvas de C. gigas en condiciones de inanición utilizan fuentes
alternativas de energía como el carbono orgánico disuelto el cual podría mantener el metabolismo durante
estos periodos (A. L. Moran, 2004).
Bibliografía.
• L. Moran, D. T. Manan. 2004. Physiological recovery from prolonged `starvation' in larvae of the
Pacific oyster Crassostrea gigas. Journal of Experimental Marine Biology and Ecology. Pages 17−36.
• Cunningham. 1994. Fisiología veterinaria. Edit. Mc Graw Hill Interamericana, México. p 425−430
• Gwak WooSeok, 1999. Evaluation of starvation status of laboratory−reared Japanese flounder
Paralichthys olivaceus larvae and juveniles based on morphological and histological characteristics.
Fisheries Science. p.339−346.
• Kurt Paschke, Paulina Gebaur, 2002. Klaus Anger. Resistencia a la inanición en larvas de crustáceos
decápodos. XXII Congreso de ciencias del mar. p 150.
• Letcher, B. H, 1996. Size−dependent effects of continuous and intermittent feeding on starvation time
and mass loss in starving yellow perch larvae and juveniles. Transactions of the American Fisheries
Society. p.14−26.
• Montgomery; Conway; Spector; Chappel. 1998. Bioquimica: Casos y Texto. Edit. Harcourt Brace.
España. p 284−285.
• Pedro, N. 2003. Changes in glucose, glycogen, thyroid activity and hypothalamic catecholamines in
tench by starvation and refeeding. Journal of Comparative Physiology. p.475−481.
• Ramìrez T. Relación DNA:RNA, un indicador de crecimiento y condición nutricional de larvas
en peces marinos. http://www.encuentros.uma.es/encuentros35/rna35.html
2
• Werner Steffens. 1987. Principios fundamentales de la alimentación de los peces. Edit. Acribia
S.A. España. p 13−16.
• Zheng, Huaiping; Ke, Caihuan; Zhou, Shiqiang; Li, Fuxue. 2005. Effects of starvation on larval
growth, survival and metamorphosis of Ivory shell Babylonia formosae habei Altena et al., 1981
(Neogastropoda: Buccinidae). Aquaculture, Vol. 243 Issue 1−4, p357−366, 10p.
• Kristen L. Wall and Joseph Crivello. 1999. Effects of starvation on liver microsomal P450 activity in
juvenile Pleuronectes americanus . Comparative Biochemistry and Physiology Part C: Pharmacology,
Toxicology and Endocrinology. p 273−277.
Internet:
http://usuario.cicese.mx/~sherzka/larvas
3
Descargar