sierra de guadarrama - Junta de Castilla y León

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SIERRA DE GUADARRAMA
VOLUMEN III
FAUNA
Inventario. Plan de Ordenación de los Recursos Naturales
“Sierra de Guadarrama”
(Segovia y Ávila)
EQUIPO DE TRABAJO: FAUNA
Dirección y Coordinación del PORN:
CABERO DIÉGUEZ, Valentín
Universidad de Salamanca. Departamento de Geografia
Dirección y Coordinación del equipo de Fauna
LIZANA AVIA, Miguel
Universidad de Salamanca. Departamento de Biología Animal
Autores (por orden alfabético)
CABERO DEL RÍO, Pablo
FERNÁNDEZ BENÉITEZ, María José
LIZANA AVIA, Miguel
SÁNCHEZ CUESTA, Laura
Universidad de Salamanca. Departamento de Biología Animal
Cartografía Temática
IZQUIERDO MISIEGO, José Ignacio
Universidad de Salamanca- Departamento de Geografía
Cartografía STIG (Servicio Transfronterizo de Información Geográfica)
CELAYA IRIGOYEN, Laura
MARTÍN ALFAGEME, Santiago
MARTINS L. SANTOS, Sergio
Maquetación
TREJO JIMÉNEZ, María Celestina
Universidad de Salamanca- Departamento de Geografía
Agradecimientos:
Numerosas personas han contribuido en mayor o menor medida a este apartado,
proporcionando datos inéditos o difíciles de encontrar, revisando los textos, etc. En orden alfabético,
nuestro más sincero agradecimiento a Alejandro del Amo García, José Ángel Arranz, Elena Cacharro,
Jesús Fernández Gutiérrez, Pablo García Díaz, Teófilo Martín Gil, Ignacio Molina, Alberto Saldaña,
Francisco Sánchez Aguado, Elena Hernández Rodríguez y Juan Carlos Velasco Marcos.
ÍNDICE
2.1.8. Fauna
2.1.8.1. Introducción
2.1.8.1.1. Historia de la conservación de la naturaleza y la fauna en Guadarrama
2.1.8.1.2. Introducción a la fauna en la zona de estudio.
La vertiente norte de Guadarrama
2.1.8.1.3. - Zoogeografía de Guadarrama
5
6
2.1.8.2. Catálogo faunístico
2.1.8.2.1. Invertebrados
2.1.8.2.2. Insectos y hábitats de Guadarrama
2.1.8.2.3. Peces
2.1.8.2.4. Anfibios y Reptiles (Herpetofauna)
2.1.8.2.5. Aves
2.1.8.2.6. Mamíferos
13
13
17
18
23
34
60
2.1.8.3. Valoración Faunística
2.1.8.3.1.- Valoración de la importancia y estado de conservación de cada
grupo faunístico
2.1.8.3.1.1.- Invertebrados
2.1.8.3.1.2.- Ictiofauna
2.1.8.3.1.3.- Anfibios
2.1.8.3.1.4.- Reptiles
2.1.8.3.1.5.- Aves
2.1.8.3.1.6.- Mamíferos
72
2.1.8.4. Especies y Enclaves más destacados
2.1.8.4.1.- Hábitats y fauna característica
191
191
2.1.8.5.- BIBLIOGRAFÍA
205
LISTADO DE TABLAS, FIGURAS Y MAPAS
226
10
10
72
74
87
98
111
126
159
“Difícilmente puede precisarse, dentro del inmenso océno
de pinares de Valsaín …, cuál es la parte más bella e
interesante de la más espléndida pinada española para señalar
como Sitio de interés nacional de belleza natural. Condiciones
adecuadas para esta distinción las reune el Pinar de Valsaín en
las inmediaciones del popular sitio de la Boca del Asno, donde
junto a la majestuosidad de los árboles gigantes, pone su nota
alegre el río charlatán; igualmente en el pinar más severo de la
abrupta caída de Dos Hermanas hasta la Venta de los
Mosquitos, ladera bravía en que el bosque, apretado, niega el
paso del hombre por senederos, que los helechos y herbazales
borran pronto con su fuerte vegetación…..
Antonio Victory (1931): El pinar de La Acebeda. En
Guías de los Sitios Naturales de Interés Nacional N° l. La Sierra
de Guadarrama. Ministerio de Fomento. Junta de Parques
Nacionales, Madrid.
“El terreno a que se refiere este estudio abraza una zona
situada en la vertiente Norte de la sierra de Guadarrama,
comprendida entre 1.000 y 2.500 metros sobre el nivel del mar
–altitudes respectivamente de Segovia y Peñalara-, y por lo
tanto, coge toda la vertiente de la sierra, desde su pie, en donde
empieza la llanura de Castilla La Vieja, hasta su divisoría, pero
como las aves tienen por su organización gran facilidad en
trasladarse de unos lugares a otros, no podía ceñirme
estrictamente a estos límites…
Además de los alrededores de este real Sitio, que tantas
veces por obligación he tenido que recorrer, he hecho
principalmente mis observaciones en Palazuelos, Tres Casas,
Torre Caballeros, Sotos Albos y Revenga, pueblecillo del pie de
la Sierra; y de la llanura, en Mozoncillo, Los Otones, Escalona y
algún otro…..
Únicamente el deseo de ser útil, como antes he dicho,
me ha movido a ordenar estos datos, que he recogido por
afición a las ciencias naturales en los ratos que mis
ocupaciones me dejaban libres, y mi pasión por la caza me
llevaba al campo. Los hombres de ciencia serán indulgentes
con los errores que haya podido cometer, en cambio de mi
buena intención.”
Joaquín María de Castellarnau (1877): “Estudio ornitológico
del Real Sitio de San Ildefonso y de sus alrededores”. Anales
de la Sociedad Española de Historia Natural, 6: 155-209.
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2.1.8.1.- INTRODUCCIÓN
En este apartado se aborda el inventario o catálogo de la fauna del espacio natural de la REN
de la Comunidad de Castilla y León “Sierra de Guadarrama”, con especial atención a los Vertebrados,
aunque también se aporta información de algunos grupos de Invertebrados, los más conocidos,
interesantes y/o amenazados.
Los objetivos desarrollados en este apartado son los siguientes:
-
Establecer el catálogo de fauna, especialmente de Vertebrados, del espacio natural en
base fundamentalmente a la bibliografía e informes disponibles, completados con algunos
muestreos de campo puntuales durante los años 2005 y 2006.
-
Definir las comunidades faunísticas presentes en Guadarrama, de acuerdo a los
principales hábitats de la Sierra.
-
Definir las principales amenazas sobre los grupos faunísticos, especies clave y
hábitats más característicos del territorio.
-
Valorar las especies y hábitats del espacio de acuerdo a su valor de conservación
faunístico, destacando las especies clave o significativas de cada hábitat o zona, con el
fin de establecer las recomendaciones de gestión oportunas y las prioridades de
actuación.
El inventario ha tratado de ser lo más exhaustivo posible, pero es difícil sin realizar
muestreos, costosos en esfuerzo y económicamente, durante al menos un par de temporadas de
estudio. Señalamos qué grupos son más deficitarios en datos. Hay que resaltar la dificultad que
entraña establecer un listado de fauna “definitivo”, especialmente considerando la gran superficie de
estudio, lo que obliga a considerar la información aportada como preliminar, dejando abierta la
posibilidad de que puedan incorporarse nuevos taxones, especialmente de Invertebrados, en el
futuro. Otros grupos como las Aves son mucho mejor conocidos. Puede asegurarse sin embargo que
las especies de fauna más relevantes o influyentes en el espacio natural han sido incluidas,
aportándose para cada una de ellas datos básicos sobre su distribución y abundancia.
Aparte del inventario de especies, se ha buscado un enfoque integrador, el de su pertenencia
a las comunidades y ecosistemas, tratando de relacionar cada taxón con las diferentes unidades
ambientales que se pueden reconocer en el espacio natural. A partir de la información de especies y
hábitats, se ha procedido a su valoración, lo que permite establecer las prioridades de conservación
en este espacio natural. Este análisis resulta imprescindible para abordar de manera objetiva la
posible zonificación de este territorio y aportar las directrices de ordenación convenientes desde el
punto de vista de la fauna.
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2.1.8.1.1.- Historia de la conservación de la naturaleza y la fauna en Guadarrama
La primera mención escrita de la Sierra del Guadarrama en cuanto a su fauna, nos habla de
una naturaleza agreste, poco intervenida por el hombre, donde osos, jabalíes y lobos eran
abundantes. El Libro de la Montería de Alfonso XI, del siglo XIV, dice que en la sierra hay abundantes
“osos, puercos, lobos y raposos” para cazar. Alonso de Palencia (1.423-1.492), en su crónica de
Enrique IV, indica la predilección del rey por Guadarrama debida a las "dilatadas selvas de altísimos
pinos, de encinares y robledales que la rodean y de los que nadie se atrevía a cortar la más pequeña
rama, a fin de que los jabalíes, osos, ciervos, cabras monteses y gamos vivieran con la mayor
seguridad”.
La caza ha sido considerada un deporte de caballeros y utilizada como pretexto para la
creación de especies dedicados al real y noble recreo cinegético, lo que en muchas ocasiones ha
permitido la preservación de espacios naturales bien conservados (Lara, 2005). Desde la Edad
Media, los reyes seleccionaron lugares de Madrid y Segovia para la instalación de sus “cotos reales”.
En el ámbito de este estudio, lugares como El Escorial, Valsaín, Riofrío y La Granja de San Ildefonso
fueron los más utilizados dada su cercanía a Madrid y los palacios que albergaban.
El poblamiento creciente de la vertiente segoviana de la Sierra, especialmente tras la
reconquista, supuso una mayor presión sobre los recursos naturales y el grado de conservación
natural debió sufrir altibajos. En el siglo XVI (1.537) se encuentran los primeros documentos sobre
regulación de cortas cíclicas en el monte, concretamente del robledal. Una constante en las
normativas de Guadarrama es la ordenación de los montes y la leña desde el siglo XVII. Existía en
este periodo una fuerte presión sobre madera y leña ejercida por la ciudad de Segovia y por el fuerte
consumo de la fábrica de cristal de La Granja, lo que provocó conflictos con las poblaciones de la
zona, que debían aportar gran parte de la leña. El resultado debió ser la sobreexplotación de los
bosques, en particular los pinares, ya que en 1807 Adrián Marcos indicaba que si las normas se
hubieran respetado habría en el pinar "un número prodigioso de pinos corpulentos útiles (….) los
montes tendrían más valor y se contaría con un recurso para acometer los gastos necesarios para
mantener el monte", indicando además “la mayoría de las matas estaban perdidas y sin posibilidad de
ser repobladas en breve por ser obra de mucho coste y no haber fondos”. Es de suponer el impacto
de estas talas excesivas sobre la fauna forestal, en especial las rapaces.
A finales del siglo XVI se popularizó el uso del arcabuz, que debió tener un impacto notable
en las especies cinegéticas (Vidal et al., 2004; Valverde, 2005). Se estima que ya a mediados del
siglo XVII el oso había desaparecido de la Sierra. No existe constancia de cuando se dictan las
primeras normas sobre la caza en Guadarrama. En los siglos XVII y XVIII y probablemente desde
Felipe II al menos, Valsaín era cazadero real, lo que suponía la imposición de severas penas a los
furtivos de caza y pesca.
Algunos han señalado que estas primeras normas sobre caza, pesca y bosques en
Guadarrama son el antecedente de la idea de conservación y de un espacio natural protegido, pero
no hay que olvidar que, al menos con respecto a la fauna, se consideraba que la mejor manera de
proteger a las especies cinegéticas era eliminar sistemáticamente a las “alimañas” depredadoras de
la caza menor y competidoras de las cinegéticas. Se conservan listados de "alimañas" capturadas en
Valsaín desde el último cuarto del siglo XVIII. Por ejemplo, en solo 2 años, entre 1829 y 1831, se
capturaron tantas Aves y Mamíferos como 363 tordillos, 130 zorras, 38 garduñas, 4 aguiluchos, 9
lobas, 2 lobos, 3 nutrias, 5 tejones, 3 cigüeñas negras, 3 gatos monteses, 1 turón y 2 alcotanes
6
(Valdés, 2002). Es de destacar el número de lobos, pero curiosamente no se declaran linces, quizá
por ser escaso en los bosques de Valsaín, lo que contrasta con los numerosos trofeos del lince
ibérico o gato serbal que se hallan en el palacio de la Granja. La Mayor parte de los trofeos fueron
obtenidos en los encinares de las zonas bajas, donde era abundante el conejo. A lo largo del XIX, las
especies cinegéticas debieron sufrir un rápido declive.
El Lobo fue siempre abundante en las Sierras de Madrid y Segovia, y el gran enemigo de los
pastores. Son muy numerosas las referencias a la abundancia de los Lobos y la lucha de pastores,
ganaderos, monjes, etc que organizaban periódicamente batidas contra ellos (Vías, 2002). En 1846m
por ejemplo, nutridas manadas de lobos de hasta quince individuos bajaban desde las cumbres a las
majadas de la Garganta del Espinar. En 1895, un grupo de Lobos hambrientos atacó la diligencia
entre Segovia y Riaza. Las últimas grandes lobadas o ataques por Lobos se produjeron en 1917 en
La Losa, con la muerte de 60 ovejas. La figura de alimañeros como Antonio Robledo, el tío
“Francachela” ha pasado a la historia por haber eliminado cientos de Lobos en la segunda mitad del
siglo XIX.
Con respecto a los Ungulados, en 1833 se adquirieron 29 Corzos del Bosque de Bolonia
(Paris) para San Ildefonso. En 1877, Castellarnau señalaba que el Gamo y el Ciervo habían
desaparecido por completo del Monte de Valsaín hacía algunos años.
La Cabra montés debió ser común en la mayor parte de las zonas montañosas hasta el siglo
XIX. A finales del XIX y comienzos del XX experimentaron un gran declive en toda su distribución
(como muchas otras especies de Aves y Mamíferos). Entre las causas se citan el impacto humano
por una presión demográfica superior, la mayor presencia humana en las montañas como
consecuencia de un clima más benigno y la popularización de las armas de fuego. La emblemática
cabra montés del Sistema Central (Capra pyrenaica victoriae) se extinguió hace casi dos siglos en
Guadarrama y el último ejemplar lo abatió un cazador en el valle del Lozoya. Es curioso que la Cabra
montés se extinguiera en Guadarrama y no en Gredos, aunque estuvo al borde a comienzos del siglo
XX (1905); la razón podría ser el mayor aislamiento de Gredos respecto a Madrid o el mayor control
que llevaría a la creación del coto real en 1905. Sería necesario un estudio sobre este aspecto.
En el periodo posterior a la guerra civil española, el hambre en las zonas rurales hizo que la
persecución de la caza fuera una cuestión de supervivencia. En las zonas de Segovia quedaba algún
Lobo a las afueras del Escorial y algún Corzo y Jabalí en Guadarrama (Lara, 2005). En unas actas de
caza de El Espinar de comienzos del siglo XX, se señala como anecdótica la caza de un Jabalí
(Alejandro del Amo, com. pers.), lo que confirma que esta especie no era abundante en la Península
hasta que el hombre eliminó a sus depredadores con el Lobo. Realmente, la recuperación de muchas
especies no se produce hasta los años 70 con el cambio de legislación de la caza y los tímidos
intentos de conservación de especies amenazadas de Aves y Mamíferos.
El conocimiento inicial de la fauna de Guadarrama viene asociado a los naturalistas ilustrados
y es inseparable de los conocimientos botánicos y geológicos (Vías, 2002). El comienzo de los
estudios “científicos” podría situarse en 1.755 con la creación por el rey Fernando VI del Jardín
Botánico de Migas Calientes en el que se enseñaba Pío Font-Quer. En 1.711 Carlos III crea el
Gabinete de Historia Natural, origen del actual Museo de Ciencias Naturales de Madrid. Hacia finales
del siglo XVIII comienzan las primeras prospecciones naturalistas conocidas en Guadarrama. El
naturalista irlandés Bowles exploró por primera vez desde un punto de vista científico el Guadarrama.
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El geólogo Casiano de Prado recorrió Gredos y Guadarrama durante décadas. Su libro de 1864
“Descripción física y geológica de la provincia de Madrid” es el resultado de sus trabajos.
Hacia 1.850, los miembros de la Sección Zoológica recorrieron las sierras del Sistema Central
en busca de su fauna. El más destacado es Mariano de la Paz Graells, catedrático de Zoología en el
Museo de Ciencias Naturales en el año 1.837; botánico pero fundamentalmente entomólogo y
descubridor en 1.849 de la celebre Graellsia isabelae. Sus seguidores constituyeron una auténtica
“escuela entomológica de Guadarrama”, muy ligada a la entomofauna forestal. Cada excursión solía
tener como fruto el descubrimiento de nuevas especies de Insectos; Escarabajos como Elophorus
frigidus o Byrrhus depilis o el Saltamonte Pycnogaster jugicola.
En años posteriores, otros zoólogos continuaron la labor de Graells. Su discípulo Laureano
Pérez Arcas, a quien se dedicó labermejuela Rutilus (Chondrostoma) arcasii, catedrático también de
Zoología y uno de los fundadores de la Real Sociedad Española de Historia Natural, una Institución
muy relacionada con los estudios guadarrámicos. Su sucesor, Ignacio Bolívar, entomólogo
especialista en Ortópteros, sería otro de los investigadores pioneros de la Sierra. Guadarrama se
había convertido en un lugar de acción de la Institución Libre de Enseñanza. En 1.911 se funda la
Estación de Biología Alpina del Guadarrama, hoy la estación del Ventorrillo, perteneciente en la
actualidad al Museo de Ciencias Naturales de Madrid y al CSIC.
El ambiente científico de la estación de Biología Alpina era magnífico, con los más
prestigiosos naturalistas españoles de la época trabajando allí. Citando sólo a los zoólogos,
trabajaron en ella Ignacio Bolívar, Dusmet, García Mercet, Ceballos, Lauffer y Cándido Bolívar. La
llegada de la guerra civil y el exilio de un gran número de estos naturalistas supuso el parón de su
actividad, retomada activamente en la década de 1.980.
Otro grupo de científicos relacionados con la Botánica y la Zoología fueron los ingenieros de
Montes. En 1.848 se fundó la primera escuela de Montes en España, en Villaviciosa de Odón, Madrid.
Una gran parte de su trabajo de campo se realizaba en Valsaín y El Espinar. Allí se realizaron las
primeras prácticas de la Ciencia forestal española, con la planificación de los turnos de corta y la
división del monte en cuarteles y rodales para su ordenación. En 1.859 se creaba la Escuela de
prácticas de Ingenieros de Montes en la Dehesa de la Garganta, en el Espinar. En 1.872 se crea la
“Comisión para el Servicio del Pinar de Valsaín”, que formaron los ingenieros Castellarnau, Breñosa y
León del Rivero. Los trabajos de ordenación de los montes continuaron en otros pinares de la Sierra,
En 1.895 en Pinares Llanos; en 1.898 el pinar de Navafría, La Garganta y Aguas vertientes en El
Espinar; y en 1.903 otros pinares de los términos de Cercedilla y Navacerrada.
Una figura fundamental en los estudios faunísticos de Guadarrama es precisamente la del
ingeniero de Montes Joaquín María de Castellarnau. En 1.872 fue designado junto a otros colegas,
para ordenar los Montes de Valsaín. Cinco años más tarde (Castellarnau, 1877) publicó en los Anales
de la Sociedad Española de Historia Natural su "Estudio ornitológico del Real Sitio de San Ildefonso y
su entorno". Visto a la luz de los conocimientos y corrientes científicas de la época, el trabajo de
Castellarnau resultó innovador y es considerado hoy una obra de referencia por su carácter pionero y
su gran originalidad (Casado, 1996, 2003), su concepción “ecológica” o incluso “biogeográfica”.
Castellarnau no hizo un simple catálogo de Aves; ya que según sus propias palabras "mi objeto no es
presentar la lista descarnada de las especies que he observado, sino que quisiera al mismo tiempo
trazar el cuadro de los fenómenos ornítico-periódicos, y hacer ver las relaciones que existen entre 'as
8
diversas agrupaciones de especies y las distintas localidades, caracterizadas por diferencias de
altitud, suelo, vegetación, etc.”
Castellarnau describió los ambientes serranos de los Montes de Valsaín (regiones que,
siguiendo la terminología de la época, denominó zona montana, subalpina y alpina), aportando para
cada una datos geológicos, climatológicos, botánicos y zoológicos. Sus descripciones indican un gran
conocimiento del terreno e interés por los más variados aspectos de la naturaleza. Pero, sobre todo,
puso en relación la distribución de las Aves con determinados factores, dando explicaciones que hoy
llamaríamos ecológicas. Castellarnau definió "agrupaciones de Aves” que ligó a ambientes concretos.
Este enfoque “ecológico” era totalmente novedoso en la época y el trabajo pasó bastante
desapercibido (Sanz Herráiz, 1992, Casado, 1995, 1996). Su afán divulgador e interés por la zona se
plasmaría años más tarde en la "Guía y descripción del Real Sitio de San Ildefonso”, que publicó en
1884 junto con Rafael Breñosa. No se encuentran sin embargo prácticamente otros listados
faunísticos de la época.
En 1.930 se declaran los sitios naturales de interés nacional de La Pedriza de Manzanares, el
pinar de la Acebeda, la Cumbre y las lagunas de Peñalara, y se crea el monumento natural de interés
nacional de la Peña del Arcipreste de Hita. En esa época surgen la Sociedad Deportiva Peñalara y el
Club Alpino Español. Es llamativo que en las descripciones y propuestas de Guadarrama como
espacio protegido (Vidal et al., 2004; Casado, 1996; Muriel, 2000), existen pocas referencias a la
fauna y sus especies más emblemáticas, dándose la mayor importancia a la geología y los paisajes
de la Sierra, y citándose a la fauna sólo en sus aspectos cinegéticos. Ésto, lamentablemente, nos
impide tener datos precisos sobre la evolución de la distribución y abundancia de al menos las
especies emblemáticas. Sería necesaria una revisión de los archivos reales y de la administración
para seguir las capturas de fauna de especies tan emblemáticas como el Lince ibérico, la Cabra
montés o el Lobo a lo largo de la historia. Como dato puntual, se cita que un pastor de la Sierra,
Antonio Robledo, citado por Hernández Pacheco en 1930, presumía de haber matado 219 lobos.
Ya en el siglo XX, la Guerra civil contribuyó a la degradación de algunas zonas,
especialmente las zonas de Guadarrama que constituían la línea del frente. El Lobo, que a finales del
siglo XIX era considerado todavía abundante en la Sierra, se extinguió hacia los años 50, volviendo a
ocupar, aunque esporádicamente, estas sierras hacia los años 90 del siglo XX. La última mitad del
siglo XX marca un punto de inflexión, al tener lugar una considerable disminución de la explotación de
diversos recursos naturales serranos. Así, el declive de la trashumancia redujo fuertemente la presión
ganadera sobre los pastos de altura. Por otra parte, la leña empezó a ser sustituida por otros
combustibles, propiciando una recuperación de las matas de roble. A la recuperación de la cubierta
vegetal, constatable en muchos lugares analizando fotografías tomadas en diversos enclaves en la
primera mitad del siglo XX, se añade la recuperación de algunas especies emblemáticas, como el
Corzo, acaecida en las últimas décadas.
La disminución de la presión cinegética también está propiciando una ampliación del área de
distribución del que fuera su principal predador natural, el Lobo, que se está extendiendo hacia el sur
a partir de sus territorios tradicionales en la meseta castellana (Valladolid). En este momento el lobo
está presente en la Sierra aunque es todavía escaso. Sin embargo otras especies han sufrido un
declive progresivo, como el Desmán de los Pirineos, que ha desaparecido de la mayoría de los
cursos fluviales y arroyos de la Sierra.
9
2.1.8.1.2. Introducción a la fauna en la zona de estudio. La vertiente norte de Guadarrama:
2
Segovia, con aproximadamente 7.000 km de superficie, posee una notable diversidad faunística
e interés biogeográfico. En Segovia se localizan las estribaciones más orientales del Sistema Central.
Son una serie de sierras, Malagón, Guadarrama y Ayllón, que en su conjunto constituyen el límite más
meridional de la provincia y en las cuales nacen los principales ríos que la recorren: Riaza, Duratón,
Cega, Pirón, Eresma, Moros y Voltoya; todos ellos afluentes del Duero (Tornero, 2005).
Hemos considerado como límites para el inventario faunístico el delimitado por el PORN en la
zona de Castilla y León, desde la zona basal de la Sierra, aproximadamente a 1.000 m, hasta las
cumbres de la Sierra (2.430 m). En ocasiones comentaremos la fauna de otras zonas del Sistema
Central como Gredos o Ayllón, por su interés para la comparación.
La vertiente segoviana del Sistema Central, desde la Sierra de Ayllón a Guadarrama, presenta
una riqueza faunística y botánica excepcional. Mientras determinadas especies de Aves (Águila imperial,
Buitre negro y leonado, Cigüeña negra, Águila real, muy diversas rapaces) y Mamíferos (Corzo, Nutria,
Gato montés, etc..) son las más llamativas del área, otros grupos como los Insectos forestales y de
Vertebrados como los Anfibios y Reptiles son mucho menos conocidos, a pesar de su importante papel
en el funcionamiento de los ecosistemas (redes alimenticias) y su papel como bioindicadores, dada la
relación entre la presencia de algunas especies y el grado de conservación de los hábitats naturales de la
Sierra.
El Sistema Central, y el Guadarrama en particular tienen, desde un punto vista biogeográfico, al
menos cinco componentes o aspectos básicos a considerar. En primer lugar las montañas crean
gradientes altitudinales, cuya consecuencia son gradientes térmicos y pluviométricos en función de su
altitud y orientación, y gradientes bioclimáticos y de vegetación basados en los anteriores. En segundo
lugar es una frontera entre ambas mesetas castellanas por la dificultad que implica para el paso de
especies en ambos sentidos. En tercer lugar es un corredor biológico que permite la comunicación entre
las zonas atlánticas del Oeste y las norteñas de la Península a través del Sistema Ibérico. Es también un
refugio para la flora y la fauna, especialmente para los taxones más amenazados, dada la inaccesibilidad
y mayor dificultad de modificación por el hombre de las zonas montañosas. Por último y relacionado con
lo anterior, constituye un refugio para las especies adaptadas a climas más fríos y/o húmedos que los
propios de las Mesetas, siendo en particular un refugio para los llamados relictos o reliquias glaciares,
que tenían una distribución mucho más amplia durante el último periodo glaciar. Generalmente, los
endemismos florísticos y faunísticos del Sistema Central son relictos glaciares.
2.1.8.1.3. Zoogeografía de Guadarrama:
Guadarrama y el Sistema Central forman parte del macizo hespérico, el núcleo de tierra
emergido más antiguo de Iberia, ya desde el Paleozoico. Durante la era Terciaria, el Sistema Central
participó indirectamente de todas las conexiones ibéricas con la fauna exterior, bien desde el norte de
Africa o con la fauna Euroasiática. La conexión con la fauna Euroasiática se produjo a través de los
Pirineos. Además, los periodos glaciares hicieron que la parte más septentrional de la Península Ibérica
se hallara ocupada por el hielo, y su avance empujó a las especies norteñas hacia el Sur. Del mismo
modo el hielo aisló a determinadas poblaciones de una especie de otras poblaciones europeas. La
separación en algunos casos provocó la aparición de nuevas especies o subespecies, que en algunos
casos son endemismos ibéricos. Por todo ello el Sistema Central puede considerarse como una
10
"encrucijada zoogeográfica" (Santos, 1989), que debido a su posición central en la península recoge
fauna de todas las procedencias: iberoatlántica, europea, asiática occidental (del próximo y medio
oriente), norteafricana y mediterránea ibérica.
Hace aproximadamente 100.000 años se formaron numerosos valles y circos glaciares a lo largo
del Sistema Central, siendo los resultados más evidentes los del macizo central de Gredos, con sus
circos y lagunas de origen glaciar (Pedraza y López, 1980). En Guadarrama existen también algunos
ejemplos de glaciarismo como morrenas o lagunas glaciares, pero son mucho más escasos que en
Gredos y se hallan fundamentalmente en la zona madrileña, como las lagunas y circo de Peñalara. El
glaciarismo duró aproximadamente 90.000 años y los hielos se retiraron definitivamente hace
aproximadamente entre 9.000 y 12.000 años, con lo que los valles y circos glaciares quedaron libres de
hielos permanentes y pudieron ser ocupados nuevamente por la fauna.
Una peculiaridad de Guadarrama respecto a otras zonas montañosas ibéricas es que carece
prácticamente de un espacio de transición a la Meseta (Oria, 2003), por lo que se comporta como un
gran “ecotono” con respecto a ambas Mesetas. La diversidad de biotopos existente desde las altas
cumbres de la sierra hasta las zonas basales de ésta, unido a la inaccesibilidad propia de las zonas de
montaña, ha permitido que la sierra y sus estribaciones alberguen una elevada riqueza faunística. En los
distintos pisos de las montañas mediterráneas se reproducen condiciones ambientales de tipo atlántico
(piso supramediterraneo) y norteño (pisos oromediterráneo y crioromediterráneo) (Rivas Martínez, 1981).
Este hecho permite la penetración dentro del mundo mediterráneo de especies animales típicamente
norteñas (Tellería y Sáez Royuela, 1986). El sistema central constituye frecuentemente el área límite o
relicta de diversos Vertebrados norteños. En otras ocasiones Vertebrados con una distribución amplia en
la región mediterránea, alcanzan mayor densidad de población en las zonas serranas por estar
sometidas a una menor presión humana.
La altitud crea heterogeneidad ambiental. El aumento de altitud se manifiesta en un descenso de
la temperatura. Con cada aumento de altitud de 100-150 metros la temperatura desciende un grado,
independientemente de la latitud de las montañas. En invierno la oscilación es de 0.45ºC y en verano de
hasta 0.70 ºC. Por ello las especies más termófilas, por ejemplo de origen africano, sólo van a poder
habitar los pisos basales de las montañas, mientras que las especies norteñas, o los relictos del periodo
glaciar, ocupan las zonas más elevadas de la Sierra.
La disminución de la temperatura con la altitud lleva consigo la disminución del periodo de
actividad de los Vertebrados ectotermos terrestres (Peces, Anfibios y Reptiles). En una zona a 2.000
metros de altitud y dependiendo de la orientación, el periodo de actividad anual de los Anfibios y Reptiles
puede ser sólo de 6-7 meses, mientras que el resto del año deben permanecer inactivos, pues la zona se
halla cubierta de nieve. Las mismas especies tienen una actividad anual de 9-10 meses en los pisos
basales de la vertiente sur. Sólo aquellas especies que posean algunos mecanismos para soportar estos
largos periodos de inactividad podrán colonizar las zonas de alta montaña. Los Reptiles, que necesitan
del calor del sol para iniciar su actividad, pueden tener, especialmente las grandes serpientes, problemas
para termorregularse en zonas de alta montaña. Los Vertebrados endotermos (Aves y Mamíferos) no
poseen una limitación extrema de la actividad por las bajas temperaturas, aunque los micromamíferos
pueden disminuir su actividad durante los periodos mas fríos, y algunas Aves y Mamíferos descienden a
zonas más bajas durante el invierno.
11
El aumento en altitud lleva consigo también una cierta disminución de la humedad. Esta se
relaciona también con la proximidad del mar. Guadarrama presenta muy poca influencia atlántica,
existiendo un gradiente en disminución de suroeste a Noreste. El grado de humedad se relaciona
también con la vegetación, pues los pisos forestales reciben más humedad y lluvia. El aumento de
pendiente con la altitud provoca asimismo un aumento de la erosión, lo que puede provocar la
deforestación. La vegetación arbustiva es un freno natural. El viento asimismo aumenta en las áreas de
mayor altitud.
Con la altitud se producen mayores precipitaciones, tanto de lluvia como de nieve en las zonas
más altas y en las zonas centrales de los macizos. La nieve crea una capa que mantiene la temperatura
en el subsuelo, por ejemplo a 0.6º C en el subsuelo y a -34 º C en el exterior; esta es la causa de que
determinados micromamíferos como los Topillos o los Lemings en el norte de Europa puedan vivir bajo la
nieve. Para que el suelo no se congele se necesitan entre 5 y 20 cm. de nieve. El oxígeno disminuye
también con la altitud, por tanto la luz penetra con mayor facilidad y aumenta la radiación UV, la cantidad
de ozono, la ionización, etc, lo que puede provocar, especialmente en montañas por encima de 4.000
metros, la aparición de coloraciones especiales para la protección contra estas radiaciones y un aumento
de la tasa de mutaciones, lo que podría generar una mayor velocidad de cambios genéticos.
Por tanto la variación altitudinal, la asimetría entre vertientes del Sistema Central, asociada
también a la climatología, la edafología, etc, se encuentra en las montañas una gran diversidad de
hábitats y biotopos para la fauna. En el Sistema Central encontramos la misma diversidad de hábitats
que en una diferencia latitudinal de 2.200 km, encontrando ecosistemas mediterráneos típicos como los
encinares, zonas forestales como robledales, pinares naturales o de repoblación o bosques de galería.
Subiendo en altitud encontraremos zonas de matorral equivalentes a la taiga, y zonas de praderas de
alta montaña, equivalentes a la tundra subártica.
Además de los hábitats que puede llegar a ocupar cada especie, existe también una limitación
en cuanto a los biotopos reproductores que puede utilizar cada especie. Por ejemplo Anfibios y Peces
ven limitada su distribución en altitud no sólo por la climatología sino por la existencia de masas de agua
apropiadas para la reproducción. Guadarrama presenta una gran escasez de este tipo de medios
acuáticos de alta montaña de una cierta entidad. Con la altitud los arroyos presentan una corriente más
rápida y menor vegetación acuática o en sus orillas, que puede impedir la reproducción de algunas
especies de ranas o tritones. Algunas Aves, generalmente rapaces, utilizan árboles altos o bosques
densos para nidificar y no pueden por tanto ocupar zonas desprovistas de arbolado. Otras por el contrario
(buitre leonado, águila real, etc) utilizan cantiles rocosos inaccesibles para hacer sus nidos y sólamente
ocuparán zonas que los posean. Otro grupo de Aves, como por ejemplo muchos insectívoros, nidifican
únicamente en zonas arbustivas o en sotos ribereños.
En general podemos concluir que las zonas bajas y medias de las montañas presentan una
mayor abundancia de hábitats y por tanto una mayor abundancia de especies de Vertebrados,
disminuyendo el número de especies de cada grupo con la altitud. Existe un patrón general que puede
aplicarse a todos los Vertebrados en cuanto a su distribución altitudinal. Así, encontraremos pocas
especies que sólo pueden hallarse en determinadas altitudes (especies estenohipsas), ya sea en las
zonas más bajas (especies muy termófilas) o más altas de la Sierra (especies adaptadas a climas fríos,
relictos glaciares o de origen euroasiático), mientras que la mayor parte de las especies (eurihipsas)
pueden ocupar un amplio gradiente altitudinal.
12
Guadarrama, al igual que otras del área mediterránea, han sufrido notables transformaciones de
su medio natural, tanto debidas a la agricultura y ganadería, como a la silvicultura y la presión cinegética.
Recordemos la desaparición de especies tan significativas como el oso o el lobo, este último
recientemente en el Sistema Central, o de ungulados como el ciervo o el corzo en estado salvaje. A
pesar de este proceso, las montañas, debido a su mayor inaccesibilidad, dificultad de laboreo y menor
utilidad agrícola, constituyen en la actualidad reductos de la fauna y la flora, en especial para los grandes
Mamíferos, constituyendo "islas ecológicas" en medio de las transformaciones provocadas por el hombre
(Tellería y Sáez Royuela, 1986). Un ejemplo típico sería la supervivencia de las cabras monteses en
diversas montañas de la península o incluso del oso pardo en la Cordillera Cantábrica y del Pirineo.
También algunas Aves de interés cinegético sobreviven únicamente en las montañas, como el urogallo,
la perdiz pardilla o la perdiz nival.
2.1.8.2. - CATÁLOGO FAUNÍSTICO:
2.1.8.2.1. Invertebrados
Sin los Invertebrados, los ecosistemas serían incapaces de mantener sus procesos
ecológicos. La conservación de los Invertebrados y la preservación de sus biotopos están
estrechamente ligadas y ambas están integradas en la conservación de la biodiversidad. Conservar
especies es una idea difícil de llevar a la práctica si antes no se tiene un amplio conocimiento de la
biología, ecología, biogeografía, y desde un punto de vista antropocéntrico, del valor económico de
las especies (Verdú y Galante, 2005).
Conservar el hábitat es, a primera vista, la solución al problema que supone conservar una
especie. No obstante, no podremos conservar un hábitat determinado si antes no conocemos
igualmente la biología y ecología de las especies que forman parte de él. Lo más destacable de los
Invertebrados en temas de conservación es que debido a su gran diversidad han conseguido
colonizar la mayoría de los biotopos. Además, su elevada abundancia relativa, la red compleja de
interacciones con otros organismos y sus características de rápida respuesta ante las perturbaciones
hacen de este grupo uno de los mejores bioindicadores del estado y funcionamiento del ecosistema.
Son además excelentes “herramientas” en la gestión de áreas naturales y no debemos olvidar su
valioso papel en el control integrado de plagas, así como su importancia como fuente de alimento y
para la elaboración de productos de consumo humano.
A diferencia de los Vertebrados, en el caso de los Invertebrados no suele existir información
detallada sobre las localidades concretas en que se encuentran las especies, ni en el punto exacto de
su localización, ni en cuadrículas UTM de 10 x 10 Km, como sucede actualmente con los atlas de los
Vertebrados españoles recientemente publicados. Existen por supuesto trabajos científicos y
monografías, especialmente sobre los Artrópodos, y en concreto sobre las especies plaga forestales
del Sistema Central, pero es una bibliografía a veces difícil de reunir por su dispersión.
El conocimiento de la entomología del Guadarrama se asocia a los miembros de la Sección
Zoológica, que recorrieron las sierras del Sistema Central en busca de su fauna hacia 1.850. El más
destacado es Mariano de la Paz Graells, cuyos seguidores constituyeron una auténtica “escuela
entomológica de Guadarrama”, muy ligada también a la entomofauna forestal. Cada excursión solía
tener como fruto el descubrimiento de nuevas especies de Insectos; Escarabajos como Elophorus
13
frigidus o Byrrhus depilis, o el Saltamonte Pycnogaster jugicola. El descubrimiento de Saturnia
(Graellsia) isabelae atrajo la atención de los entomólogos europeos, convirtiéndose en una localidad
de referencia para las Mariposas.
En años sucesivos, otros zoólogos continuaron la labor de Graells; Ignacio Bolívar,
entomólogo especialista en Ortópteros sería otro de los investigadores pioneros de la Sierra. Varios
entomólogos discípulos de Bolívar fueron Ricardo García Mercet, especialista en microhimemópteros
Calcídidos o el alemán Jorge Lauffer (Vías, 2002). El grupo de los Himenópteros, en especial los
parásitos, ha sido bien estudiado en Guadarrama. Muchos de estos estudios se realizaron en la
vertiente madrileña, mucho más accesible desde Madrid, lo que fue facilitado por la creación en 1.911
de la Estación de Biología Alpina del Guadarrama.
Los estudios entomológicos en Guadarrama y la defensa forestal han estado asociados en
gran medida, sobre todo a finales del XIX y comienzos del siglo XX, al colectivo de los ingenieros de
Montes, de los que sobresalen dos figuras relevantes, la de Gonzalo Ceballos y Fernández de
Córdoba (1.895-1.967) en el campo de la Entomología forestal, sobre todo en el caso de los
Himenópteros; y José Benito Martínez en el caso de la Patología forestal, sobre todo por hongos.
Ambos desarrollaron muchos de sus trabajos en la Sierra de Guadarrama.
Existen estudios más recientes sobre grupos de Insectos desarrollados en Guadarrama en
grupos como los Ortópteros; así en los años 70 se desarrolló un proyecto sobre la fauna
entomológica de Guadarrama coordinado por el catedrático de entomología de la Complutense,
Salvador Peris; y otro proyecto sobre Invertebrados de la Sierra, en le que se trabajaron
especialmente grupos como los Himenópteros Cinípedos (J. L. Nieves-Aldrey). Existen además
diversas tesis doctorales y publicaciones sobre Insectos, especialmente sobre los Coléopteros
Carábidos de Guadarrama (Novoa, 1975), así como de las Mariposas de la Sierra, aunque
básicamente de la zona madrileña (Gómez de Aizpurúa, 1999; Gómez de Aizpurúa et al., 1991).
Existen además varios estudios sobre los macroinvertebrados de diversos ríos de Guadarrama
(García de Jalón, 1979). Varios trabajos más se incluyen en la bibliografía faunística.
En la Sierra de Guadarrama (PORN de Guadarrama de la Comunidad de Madrid) se han
citado un mínimo de casi 1.000 especies de Invertebrados, lo que respecto al total de especies
descritas en España (cerca de 60.000 especies), nos muestra el escaso conocimiento de estos
grupos. La excepción a esta crónica falta de datos son algunas especies de Invertebrados que se
recogen en la Directiva de Hábitats y que por tanto poseen un alto valor de conservación (Rosas et
al., 1992; Galante y Verdú, 2000; Ramos et al., 2001). Sólo recientemente se acaba de terminar, el
Libro Rojo de los Invertebrados españoles (Verdú y Galante, 2005).
Datos amablemente proporcionados por J.L. Viejo Montesinos (tabla 1), nos dan una cifra
aproximada de 2.000 Insectos citados en Guadarrama, de grupos relativamente bien conocidos. Con
estas cifras de Guadarrama, puede calcularse el porcentaje que suponen respecto a las del mundo y
la Península Ibérica. Obteniendo la media de los grupos, podemos estimar que en Guadarrama se
encuentra una media del 1,6 % del mundo y un 35.5% de las de la Península. Si aplicamos estos
porcentajes a todos los Órdenes de Insectos españoles, obtenemos una estima de los Insectos en
Guadarrama (tabla 2).
La cifra de alrededor de 1.000 especies de Invertebrados para el Guadarrama segoviano es
solamente orientativa, ya que sólo se conocen relativamente bien sólo algunos grupos de Insectos
como los Leidópteros o los Coleópteros Carábidos. Podríamos suponer una cifra algo menor de
especies en la zona segoviana de Guadarrama respecto a la zona madrileña. Como sucede también
14
con los Vertebrados, la no existencia de una zona más termófila excluiría a las especies propias de
las zonas más bajas de Madrid.
Tabla 1. Número total de especies de Insectos descritos en el mundo, Península Ibérica y Guadarrama, y sus
1
porcentaje relativos .
GRUPO
Apoidea
Cynipidae
Tricópteros
Ropalóceros
Neurópteros
Tisanópteros
Hormigas
Carábidos
Staphylinidae
Chrysomelidae
Curculionoidea
TOTAL
MUNDO
20.000
1.369
7.000
16.000
5.500
4.500
8.800
30.000
30.000
36.500
56.600
PENÍNSULA
IBÉRICA
900
140
316
224
168
249
240
975
2.000
1.036
1.700
GUADARRAMA
298
86
84
124
91
96
102
229
343
165
377
1.995
% mundo
1,49
6,28
1,2
0,78
1,65
2,13
1,16
0,76
1,27
0,55
0,75
1,63%
% ibérico
33,1
61,4
26,6
55,4
54,2
38,6
42,5
23,5
17,5
15,9
22,2
35,53%
Esta cifra de 2.000 Insectos para ambas vertientes del Guadarrama, obviamente no refleja la
realidad y subestima enormemente la riqueza de los grupos de Invertebrados e Insectos de la Sierra.
J.L. Viejo Montesinos (com. pers.) (tabla 2) ha estimado en alrededor de 14.000 especies los Insectos
posibles en Guadarrama. Todos estos datos sirven para apreciar lo poco que conocemos de los
Invertebrados españoles y de Guadarrama. Son necesarios estudios detallados sobre los
Invertebrados, al menos de las zonas más valiosas de la Sierra.
En gran medida, la fauna de Invertebrados de Guadarrama se asemeja a la de la Sierra de
Gredos. Algunos de los trabajos que resumen la fauna de Invertebrados de Gredos, recogen datos de
los Colémbolos (Luciáñez et al.,1988), Coleópteros Curculiónidos (Gurrea et al.,1988) y Escarabéidos
(Mozos et al.,1988). Gil Martín y Pérez Andueza (1999) y Díez et al. (1991) hacen una revisión
general de las especies más comunes de Invertebrados en los diversos pisos bioclimáticos de
Gredos, muchos de ellos comunes a Guadarrama, así como de sus endemismos.
La mayor parte de los endemismos del Sistema Central se encuentran en las zonas altas de
las Sierras. Algunos datos generales es que de los 62 Invertebrados ibéricos protegidos por algún
convenio internacional (de ellos, 51 Artrópodos), encontramos en Guadarrama la mitad de estas
especies. Un grupo que se conoce relativamente bien en el Sistema Central es el de las Mariposas.
En el área del Parque nacional se hallarían más de 45 % de las Mariposas diurnas de la Península
Ibérica. Se hace mención especial a Euphydryas aurinia por hallarse en la Directiva de Hábitats.
Como resumen, podemos destacar que la fauna de Invertebrados es variada y abundante,
como corresponde a una zona de alta diversidad florística y faunística, causadas por la
heterogeneidad de los distintos pisos bioclimáticos de vegetación y altitud proporcionadas por el
Sistema Central y la disimilitud entre ambas vertientes de la Sierra. La mayor parte de las especies de
1
Datos proporcionados por J.L. Viejo.
15
Artrópodos recogidas en la Directiva de hábitats se asocian a medios forestales bien conservados y a
medios acuáticos. Su conservación es por tanto necesaria para la supervivencia de estas especies
2
Tabla 2. Número de especies de Insectos en el mundo .
Órdenes
Collembola
Protura
Diplura
Microcoryphia
Thysanura (Zygentorna)
Ephemeroptera
Odonata
Plecoptera
Blattodea
Isoptera
Mantodea
Grylloblattodea
Dermaptera
Orthoptera
Phasmatodea
Embioptera
Zoraptera
Psocoptera
Anoplura
Mallophaga
Homoptera
Heteroptera
Tysanoptera
Neuroptera (sensu lato) Megaloptera
Raphidioptera
Neuroptera (sensu stricto)
Mecoptera
Coleoptera
Strepsiptera
Siphonaptera
Diptera
Trichoptera
Mundo
6500
500
800
300
500
2000
6000
1900
4000
2200
1900
25
1840
19000
2500
250
30
3000
490
3000
49500
32600
5600
270
175
5000
500
330000
532
1900
124000
7000
Península ibérica
1,6 % Mundo
Guadarrama
500
13
50
61
41
121
78
136
20
2
14
0
20
307
4
4
0
115
29
273
2000
1400
249
4
12
152
4
10000
15
86
12000
316
104
8
12,8
4,8
8
32
96
30,4
64
35,2
30,4
0
29,44
304
40
4
0
48
7,84
48
792
521,6
89,6
4,32
2,8
80
8
5280
8,512
30,4
1984
112
35% Iberia
Guadarrama
175
4,55
17,5
21,35
14,35
42,35
27,3
47,6
7
0,7
4,9
0
7
107,45
1,4
1,4
0
40,25
10,15
95,55
700
490
87,15
1,4
4,2
53,2
1,4
3500
5,25
30,1
4200
110,6
2
Estimación para la Península Ibérica (Ministerio de Medio Ambiente, 2002; Pineda et al., 2002) y para Guadarrama en ambas
vertientes de la Sierra, considerando un 21% y un 35% de las especies Ibéricas, como se ha señalado en algunos grupos. Los
datos han sido proporcionados amablemente por D. José Luis Viejo Montesinos.
16
Órdenes
Lepidoptera
Hymenoptera
TOTAL
Península ibérica
1,6 % Mundo
Guadarrama
165000
115000
4243
9400
2640
1840
1485,05
3290
893812
41669
14.300
14.584
Mundo
35% Iberia
Guadarrama
Los estudios entomológicos de Guadarrama y Segovia son en general antiguos, de
comienzos del siglo XX y se concentran en unas pocas localidades, muchas veces ligadas a la
actividad forestal, entre las que destacan Valsaín y La Granja. Recientemente se ha realizado un
estudio sobre los Coleópteros, en especial los seminíferos endémicos, de la provincia de Segovia
(Sanz-Benito & Gurrea, 1998). En este estudio se realizaron muestreos por toda la provincia de
Segovia, pero muchas de las especies se concentran en la Sierra de Guadarrama y se recogen datos
sobre las especies más interesantes y/o amenazadas.
Respecto a los Coleópteros (Sanz Benito & Gurrea, 1998), Guadarrama cuenta con tres
especies protegidas y ligadas a bosques maduros dado que sus larvas viven en árboles viejos o
muertos y se alimentan de madera. Dos de ellas, Lucanus cervus y Brachyleptura stragulata eran ya
conocidas de la zona, mientras que Nustera distigma fue una cita nueva para la zona proporcionada
por estos autores. El adulto del ciervo volante se alimenta de la savia de los árboles mientras que los
adultos de las otras especies son florícolas. Como detallaremos más adelante, es necesaria una
gestión forestal que permita su supervivencia.
2.1.8.2.2. - Insectos y hábitats de Guadarrama:
J.L. Viejo Montesinos (com. pers.) ha realizado diversos análisis sobre la riqueza y diversidad
de los Insectos, especialmente las Mariposas en la Sierra de Guadarrama, procediendo los datos
generalmente de la provincia de Madrid. Respecto a la riqueza de especies de Mariposas, el hábitat
más rico en Guadarrama es el bosque de roble melojo, seguido de los pinares, fresnedas, encinares y
por último piornales. Por el contrario, en cuanto a la diversidad de especies, es el pinar quien
proporciona los valores más elevados. Sin embargo, en cuanto al número de individuos, es el encinar
quien presenta los valores más altos.
En las zonas de cumbres, los Insectos más llamativos son las Mariposas. La Mariposa apolo
(Parnassius apollo) es exclusiva de la alta montaña y se alimenta de las flores de los cardos
carpetanos (Carduus carpetanus). En las cumbres pueden encontrarse algunas Mariposas
representativas (Aglais urticae, Inachis io, Gonepterix rhamni, Isoria lattonia, etc) libando las flores de
los cervunales (Jurinea humilis, Jasione crispa, etc), pero no son exclusivas de estos matorrales,
pues pueden encontrase también en los claros del pinar y el robledal.
En otros hábitat de gran altitud, como los pastizales de montaña, prados de cumbres,
cervunales y otros pastizales húmedos, existe también una alta riqueza de Invertebrados protegidos.
Estas zonas son fundamentales para la supervivencia de Mariposas y Escarabajos. J.L. Viejo ha
mostrado la necesidad del mantenimiento de una gestión ganadera para el mantenimiento de zonas
de prados, matorral y bosque necesarios para el ciclo vital, a veces complejos de larvas y adultos de
17
Mariposas como Maculinea naisithous, Ocnogyna lareillei, Nebria vuillefroyi y Ocydromus
carpetanum, entre otras.
Otra Mariposa propia de los prados húmedos y los claros de los bosques es la del cinabrio
(Tyria jacobea), de llamativos colores y cuya oruga se alimenta de las hierbas del cinabrio (Senecio
jacobea). Otros Insectos exclusivos de las zonas de cumbres son los Cerambícidos, llamados
Escarabajos pipa (lberodorcadion hispanicum y otros), endémicos además de la Sierra de
Guadarrama y que se ven en verano en los cervunales (Vidal et al., 2004).
En los bosques perennifolios, especialmente los pinares, la diversidad de Insectos es elevada
e incluye especies de gran importancia de conservación como los Escarabajos Carábidos Carabus
ghiliani o Platyderus varians. Entre las Mariposas de los pinares de Guadarrama, quizá la especie
más emblemática sea la mariposa nocturna Graellsia isabelae, cuya oruga se alimenta de las
acículas de los pinos (detallaremos su biología y distribución más adelante). Otro grupo de Insectos
abundante y omnipresente en los pinares son las hormigas, especialmente la Hormiga roja (Formica
rufa). Sus hormigueros forman grandes montículos hechos por acumulación de acículas y alcanzan
hasta medio metro de altura. La Hormiga roja prefiere los pinares más cerrados, compuestos por
árboles gruesos, aunque en las zonas más altas sitúa los hormigueros en los límites del pinar.
En cuanto a los robledales, la especie más emblemática es el Ciervo volador o Ciervo volante
(Lucanus cervus), un escarabajo espectacular de grandes mandíbulas, en el caso de los machos, y
que puede llegar a medir hasta 8 cm. de tamaño corporal. Depende fuertemente del robledal ya que
realiza sus puestas en los tocones de robles en descomposición, durando el desarrollo de las larvas
entre tres y cinco años. Los adultos emergen en el otoño, pero hibernan reapareciendo en la siguiente
primavera.
La conservación y buena gestión de los bosques, especialmente pinares y robledales, es
indispensable para el buen funcionamiento de las poblaciones de muchas especies de Insectos. La
destrucción y fragmentación del hábitat forestal o el uso de plaguicidas de forma indiscriminada
constituyen un grave peligro para la conservación de dichas especies. De la misma manera, se hace
indispensable una gestión adecuada de los pastizales y los ecosistemas de las zonas de cumbre, en
especial en cuanto al pisoteo y ramoneo de un ganado excesivo.
Algunas especies propias de medios acuáticos, en particular arroyos y ríos, son lógicamente
comunes con la zona madrileña de la Sierra y corresponden a Órdenes de Insectos como
Plecópteros, Tricópteros o Efemerópteros, algunos de ellos catalogados en el Catálogo nacional o en
el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de la Comunidad de Madrid, 1992). Destacan
especies como Rhyacophila relicta, Drunella paradinasi, Serratella hispanica, Allogamus laureatus y
Brachyptera arcuata especialmente en zonas altas de las cuencas
2.1.8.2.3. - Peces:
- Aspectos geográficos e hidrológicos relacionados con la ictiofauna
La Sierra de Guadarrama vierte sus aguas en su lado castellano-leonés únicamente a la
cuenca hidrográfica del Duero, mientras que la zona madrileña de Guadarrama forma parte de la
cuenca del Tajo. Las cuatro subcuencas principales de Guadarrama en Segovia son la del río
18
Eresma, que recoge la red fluvial de las cercanías de las localidades de Segovia y La Granja. Al norte
encontramos la subcuenca del río Pirón, en las proximidades de Torrecaballeros, y el río Cega, que
recoge la red de arroyos en las cercanías de Navafría y Turégano. En la zona Norte de Guadarrama
se halla la subcuenca del río Duratón, donde vierten algunos pequeños arroyos y ríos que se
encuentran en el límite norte de la zona propuesta en este PORN, en las zonas cercanas a las
localidades de Prádena y Villarejo. Además de estos arroyos y ríos, debemos destacar los numerosos
embalses situados en estas cuencas, en general con muros bajos, pequeña superficie y situados en
ocasiones a gran altitud pues sirven para acumular agua para abastecimiento de poblaciones o riego
(Sanz & Domínguez, 1999). En estos embalses artificiales, las condiciones permiten la existencia de
diversas especies de Peces propias de tramos más bajos y lentos de estos mismos ríos.
La cuenca del Duero es la más alterada desde un punto de vista ictiológico de las presentes
en Castilla y León, ya que hasta un 50 % de las especies son introducidas. Esto, sin embargo, no
afecta especialmente a la zona de Guadarrama, que presenta una Ictiofauna fundamentalmente
autóctona al encontrarse por encima de los 800 m de altitud, donde las especies introducidas no se
han asentado prácticamente. Este límite altitudinal marca generalmente el nivel de distribución de la
Trucha común, que suele encontrarse por encima de esa altitud en el territorio de Castilla y León
(Velasco et al., 2005). El límite altitudinal del PORN se encuentra, de manera general, por encima de
1.000 m de altitud.
Como obra de referencia general para el inventario de los Peces de Guadarrama se ha
utilizado el “Atlas y Libro Rojo de los Peces Continentales de España” (Doadrio, 2001), revisión
actualizada de la corología de la ictiofauna española. En este trabajo se incluía toda la información
publicada o inédita existente desde 1.990 hasta la fecha de publicación, y comprende tanto datos
publicados como información personal, informes inéditos, resultados de campañas específicas y
revisión de colecciones de museos. Otra de las obras consultadas es el atlas de Vertebrados no Aves
de Castilla y León que actualiza el anterior atlas para la zona (Velasco et al., 2005).
Más específicamente para el área de estudio se han consultado los informes realizados por
Iberinco (Iberdrola Ingeniería Consultora) para la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de
Castilla y León, titulados “Estudio hidrobiológico en la cuenca del río Duratón (Iberinco, 2000)”;
“Estudio hidrobiológico de la cuenca del río Eresma (Iberinco, 2002)” y “Propuesta para el Plan de
gestión de la pesca en la cuenca del río Cega” (Iberinco, 2001). El método de muestreo de estos
estudios hidrobiológicos citados fue fundamentalmente la “pesca eléctrica”. Como información
complementaria se han consultado los partes de captura de los cotos de pesca existentes en la zona,
descritos más adelante en esta memoria.
Antes de detallar los Peces presentes en Guadarrama, debemos recordar los recientes, y a
veces profundos, cambios taxonómicos de la ictiofauna continental española. Utilizaremos en este
inventario la taxonomía más reciente recogida en Doadrio (2001) y los datos más actualizados sobre
la distribución de especies de Castilla y León recogidas en Velasco et al. (2005). Se han citado al
menos 9 especies en las cuencas hidrográficas de la zona estudiada en el PORN: de ellas 6 son
autóctonas y 3 introducidas. Otras 9 especies de Peces se hallan en zonas cercanas al parque, tanto
en Ávila como de Madrid, pero no han sido citadas en el área de estudio y por tanto las consideramos
como dudosas. Este número de especies citadas contrasta con la mayor riqueza de especies
encontrada en el área del PORN correspondiente a la Comunidad de Madrid. Esto se debe
fundamentalmente a que la zona madrileña es de menor altitud y por tanto presenta mayor diversidad
19
de especies, muchas introducidas; mientras que la Ictiofauna de la vertiente norte del Sistema Central
es la propia de zonas de media y alta montaña, menos diversa en especies.
- Catálogo de los Peces:
Orden SALMONIFORMES
Familia SALMONIDAE
Salmo truta (Linnaeus, 1758)
Oncorhynchus mykiis (Walbaum, 1792)
Orden CYPRINIFORMES
Familia CYPRINIDAE
Barbus bocagei Steindachner, 1865
Carassius auratus (Linnaeus, 1758)
Chondrostoma arcasii Steindachner, 1866
Gobio lozanoi Doadrio y Madeira, 2004
Squalius carolitertii (Doadrio, 1987)
Familia COBITIDAE
Cobitis calderoni Bacescu, 1962
Orden PERCIFORMES
Familia CENTRARCHIDAE
Lepomis gibbosus (Linnaeus, 1758)
Trucha común
Trucha arco iris * introducida
Barbo común o de Bocage
Carpín
Bermejuela
Gobio
Bordallo
Lamprehuela
Pez sol * introducida
20
Gobio lozanoi
Figura 1.Especies de Peces
citadas
con seguridad
en de
la Peces
- Mapas
de especies
zonacitados
de estudio
con seguridad en el
área de estudio
21
- Figura 2. Especies de Peces
citados en zonas cercanas al área
de estudio en Ávila, Madrid o
zonas bajas de Guadarrama.
22
2.1.8.2.4. - Anfibios y Reptiles (Herpetofauna):
Como información básica para la catalogación de los Anfibios y Reptiles del área de estudio
se han utilizado la base de datos del Ministerio de Medio Ambiente, la base de datos inédita del “Atlas
de Anfibios y Reptiles de Castilla y León”, fruto del Convenio entre la Asociación Herpetológica
Española (AHE) y la Junta de Castilla y León, así como datos inéditos personales de M. Lizana y
otros colaboradores que los han aportado más recientemente. Se recogen todas las citas publicadas
o inéditas existentes desde mediados de los años ochenta hasta el año 2004. Sólo se han realizado
durante 2005 y 2006 algunos muestreos puntuales para aclarar la situación de algunas especies
dudosas. No se han realizado muestreos exhaustivos, dada la premura de tiempo y la escasez de
medios económicos para desarrollarlos.
En rasgos generales, la fauna de Anfibios y Reptiles de Guadarrama se conoce bien, aunque
muchas especies presentan citas muy escasas. Segovia es la provincia, de las que comparten el
Sistema Central, con un menor número de datos sobre su herpetofauna. En las provincias adyacentes
existen atlas de distribución de los herpetos: Salamanca (Pérez Mellado, 1983), Gredos y Ávila (Gisbert
et al., 1986; Ciudad et al., 1987; San Segundo y Ferreiro, 1987; Lizana et al., 1988, 1991; Jiménez y
Prieto, 1992), Madrid (Guadarrama: García París y Martín, 1987; García París et al., 1989a,b) y Soria
(Ayllón: Arribas, 1983; Meijide et al., 1991).
Los datos disponibles sobre la herpetofauna del área de estudio son generalmente citas aisladas
de especies (Boscá, 1877, 1880, 1916; Pérez Mellado y Galindo, 1986; Múgica, 1984; Salvador, 1984; de
la Riva, 1987 etc), generalmente en relación con la vertiente madrileña del Sistema Central. Sánchez
Vaquero y Pérez Mellado (1983) publicaron un listado de Vertebrados que estarían presentes en
Segovia, aunque sin proporcionar información sobre las localidades donde se observaron los diversos
Anfibios y Reptiles, su distribución altitudinal exacta, los hábitats que ocupan y las amenazas y
problemas de conservación a que se enfrentan en estas áreas. Por otro lado, existen numerosos datos
de especies sobre áreas más prospectadas, como Valsaín o el refugio de rapaces de Montejo de la Vega
(Fernández, 1993). Los únicos trabajos conjuntos sobre la herpetofauna del Sistema central en Segovia
son los de Lizana et al. (1995) y sobre la distribución altitudinal de la herpetofauna en Segovia (Morales
et al., 2002) basado en el anterior trabajo.
- Catálogo de los Anfibios
De acuerdo a los datos existentes, se ha constatado la presencia de 14 especies de Anfibios
en la zona castellano-leonesa de Guadarrama; de ellas 3 son Urodelos y 11 Anuros. Otras 3 especies
son dudosas, o mejor muy poco probables, en la zona de estudio, pues se hallan en zonas más bajas
o adyacentes como Ávila o Madrid, y no se recogen en este listado. Hemos utilizado la taxonomía
más reciente propuesta por la AHE (Asociación Herpetológica Española) en el año 2005, de acuerdo
a los trabajos de García París et al. (2004) y otros.
23
Orden URODELA
Familia SALAMANDRIDAE
Pleurodeles waltl Michaeles, 1830:
Salamandra salamandra (Linnaeus, 1758):
Triturus marmoratus (Latreille, 1800):
Gallipato
Salamandra común
Tritón jaspeado
Orden ANURA
Familia DISCOGLOSSIDAE
Alytes (Alytes) obstetricans (Laurenti, 1768): Sapo partero común
Alytes (Ammoryctis) cisternasii Boscá, 1879: Sapo partero ibérico
Discoglossus galganoi Capula, Nascetti, Lanza, Bullini y Crespo, 1985:
Sapillo pintojo ibérico
Discoglossus jeanneae Busack , 1986:
Sapillo pintojo meridional
Familia PELOBATIDAE
Pelobates cultripes (Cuvier, 1829):
Sapo de espuelas
Familia PELODYTIDAE
Pelodytes punctatus (Daudin, 1802):
Sapillo moteado
Familia BUFONIDAE
Bufo bufo (Linnaeus, 1758):
Bufo calamita Laurenti, 1768:
Sapo común o Escuerzo
Sapo corredor
Familia HYLIDAE
Hyla arborea Linnaeus, 1758:
Familia RANIDAE
Rana iberica Boulenger, 1879:
Rana (Pelophylax) perezi Seoane, 1885:
Ranita de San Antón o de San
Antonio
Rana patilarga
Rana verde común
24
Figura 3: Especies de Anfibios citados en el área de estudio.
25
Figura 3 (cont): Especies de Anfibios citados en el área de estudio.
26
Figura 3 (cont.): Especies de Anfibios citados en el área de estudio.
27
– Catálogo de los Reptiles:
Para ver los datos disponibles y su origen, remitimos al apartado anterior donde se exponen
los trabajos sobre herpetofauna existentes en Guadarrama. Se ha citado con seguridad la presencia
de 22 especies de Reptiles en el área estudiada; una de ellas introducida recientemente, el Galápago
de Florida. Otras son dudosas y se mencionan posteriormente.
Orden CHELONIA
Familia BATAGURIDAE
Mauremys leprosa (Schweiger, 1812)
Familia EMYDIDAE
Trachemys scripta Schoepfff, 1792
Galápago leproso
Galápago de Florida * especie introducida
Orden SQUAMATA
Suborden AMPHISBAENIDA
Familia AMPHISBAENIDAE
Blanus cinereus (Vandelli, 1797)
Culebrilla ciega
Suborden SAURIA
Familia ANGUIDAE
Anguis fragilis Linnaeus, 1758
Lución
Familia SCINCIDAE
Chalcides bedriagai (Boscá, 1880)
Chalcides striatus (Cuvier, 1829)
Eslizón ibérico
Eslizón tridáctilo
Familia GEKKONIDAE
Tarentola mauritanica (Linnaeus, 1758)
Salamanquesa común
Familia LACERTIDAE
Acanthodactylus erythurus (Schinz, 1833)
Iberolacerta cyreni (Müller & Hellmich, 1937)
Lacerta lepida Daudin, 1802
Lacerta schreiberi Bedriaga, 1878
Podarcis hispanica (Steindachner, 1870)
Podarcis muralis (Laurenti, 1768)
Psammodromus algirus (Linnaeus, 1758)
Psammodromus hispanicus Fitzinger, 1826
Lagartija colirroja
Lagartija carpetana
Lagarto ocelado
Lagarto verdinegro
Lagartija ibérica
Lagartija roquera
Lagartija colilarga
Lagartija cenicienta
28
Suborden OPHIDIA
Familia COLUBRIDAE
Coronella austriaca Laurenti, 1768
Coronella girondica (Daudin, 1803)
Rinechis scalaris (Schinz, 1822)
Malpolon monspessulanus (Hermann, 1804)
Natrix maura (Linnaeus, 1758)
Natrix natrix (Linnaeus, 1758)
Culebra lisa europea
Culebra lisa meridional
Culebra de escalera
Culebra bastarda
Culebra viperina
Culebra de collar
Familia VIPERIDAE
Vipera latasti Boscá, 1878
Víbora hocicuda
29
- Figura 4: Especies de Reptiles citados en el área de estudio.
30
Figura 4 (cont.): Especies de Reptiles citados en el área de estudio.
31
Figura 4 (cont.): Especies de Reptiles citados en el área de estudio.
32
- Figura 4 (cont.): Especies de Reptiles citados en el área de estudio.
33
2.1.8.2.5.- Aves:
Las Aves son los Vertebrados más numerosos dentro de los límites del espacio de
Guadarrama objeto de este estudio. Conocida desde antaño, la riqueza ornitológica de la Sierra ha
atraído el interés de sucesivas investigaciones desde el siglo XIX (Castellarnau, 1877; Verner 1909)
hasta la actualidad (Potti, 1985; Potti y Tellería, 1984, 1986; Tellería, 1984; Tellería y Sáez Royuela,
1986, etc.= Para la realización del inventario de especies y su estado de conservación se han
utilizado el atlas de las Aves de España (Purroy, 1997), atlas ornitológico de Castilla y León (Sanz
Zuasti y Velasco, 1999, 2005), el atlas nacional de las Aves nidificantes (Madroño et al., 2004), el libro
Rojo de las Aves de España (Martí y del Moral, 2002); el libro de las ZEPAS de Castilla y León (Sanz
Zuasti et al., 2004) y numerosos trabajos puntuales y monografías o informes sobre especies
concretas que se recogen en el apartado de bibliografía faunística.
El nivel de conocimiento de las Aves en Guadarrama es alto. Por interés general y número de
aficionados y profesionales, las Aves son un grupo muy estudiado en la zona. Existen además
numerosas monografías o informes sobre la mayoría de las especies más interesantes o
amenazadas como rapaces, cigüeña negra, etc. El inventario de Aves de la zona de estudio incluye
176 especies citadas en la zona, entre nidificantes e invernantes. Debemos señalar que este número
es aproximado ya que varias especies son muy raras y/o ocasionales, y depende también del límite
altitudinal incluido en el área de estudio. Si se añaden algunas áreas mediterráneas de piedemonte,
la lista puede aumentar ligeramente.
- Catálogo de Aves nidificantes en la Sierra de Guadarrama
Familia PODICIPITIDAE
Tachybaptus ruficollis: Zampullín chico
Podiceps cristatus: Somormujo lavanco
Familia ARDEIDAE
Ardea cinerea: Garza Real
Familia CICODIINAE
Ciconia ciconia: Cigüeña blanca
Ciconia nigra: Cigüeña negra
Familia ANATIDAE
Anas platyrhynchos: Ánade azulón
Familia ACCIPITRIDAE
Gyps fulvus: Buítre leonado
Aegypius monachus: Buitre Negro
Neophron percnopterus: Alimoche
Accipieter gentilis: Azor común
Accipeter nisus: Gavilán común
Buteo buteo: Busardo Ratonero
Pernis apivorus: Abejero europeo
Circaetus gallicus: Culebrera europea
Aquila chrysaetos: Águila real
Aquila adalberti:Águila Imperial Ibérica
Hieraaetus pennatus: Aguililla calzada
Milvus migrans: Milano Negro
Milvus milvus: Milano Real
Circus cyaneus: Aguilucho pálido
Circus pygargus: Aguilucho cenizo
Familia FALCONIDAE
Falco tinnunculus: Cernícalo vulgar
Falco naumanni: Cernícalo primilla
Falco subbuteo: Alcotán
Falco peregrinus: Halcón peregrino
Familia PHASIANIDAE
Alectoris rufa: Perdiz roja
Coturnix coturnix: Codorniz común
Phasianus colchicus: Faisán vulgar
Familia RALLIDAE
Rallus aquaticus: Rascón europeo
Gallinula chloropus: Gallineta común
Fulica atra: Focha común
Familia OTIDIDAE
Tetrax tetras: Sisón común
Familia CHARADRIIDAE
Charadrius dubius: Chorlitejo chico
Familia SCOLOPACIDAE
Actitis hypoleucos: Andarríos chico
Burhinus oedicnemus: Alcaraván común
34
Gallinago gallinago: Agachadiza común
Familia PTEROCLIDAE
Pterocles orientalis: Ganga ortega
Familia COLUMBIDAE
Columba livia: Paloma bravía
Columba oenas: Paloma zurita
Columba palumbus: Paloma torcaz
Streptopelia decaocto: Tórtola turca
Streptopelia turtur: Tórtola europea
Familia CUCULIDAE
Clamator glandarius: Críalo europeo
Cuculus canorus: Cuco común
Familia TYTONIDAE
Tyto alba: Lechuza común
Familia STRIGIDAE
Otus scops: Autillo europeo
Bubo bubo: Búho real
Athene noctua: Mochuelo europeo
Strix aluco: Cárabo común
Asio otus: Búho chico
Familia CAPRIMULGIDAE
Caprimulgus europaeus: Chotacabras
europeo
Caprimulgus ruficollis: Chotacabras
cuellirrojo
Familia APODIDAE
Apus apus: Vencejo común
Familia MEROPIDAE
Merops apiaster: Abejaruco europeo
Familia CORACIIDAE
Coracias garrulus: Carraca europea
Familia ALCEDINIDAE
Alcedo atthis: Martín pescador común
Upupa epops: Abubilla
Familia PICIDAE
Jynx torquilla: Torcecuello euroasiático
Picus viridis: Pito real
Dendrocopos major: Pico picapinos
Dendrocopos minor:Pico menor
Familia ALAUDIDAE
Chersophilus duponti: Alondra de
Dupont
Melanocorypha calandra: Calandria
Calandrella brachydactyla: Terrera
común
Galerida cristata: Cogujada común
Galerida theklae: Cogujada montesina
Lullula arborea: Totovía
Alauda arvensis: Alondra común
Familia HIRUNDINIDAE
Hirundo rustica: Golondrina común
Hirundo daurica: Golondrina dáurica
Riparia riparia: Avión zapador
Ptyonoprogne rupestris: Avión roquero
Delichon urbica: Avión común
Familia MOTACILLIDAE
Anthus campestris: Bisbita campestre
Anthus trivialis: Bisbita arboreo
Anthus spinoletta: Bisbita alpino
Motacilla flava: Lavandera boyera
Motacilla cinerea: Lavandera cascadeña
Motacilla alba: Lavandera blanca
Familia PRUNELLIDAE
Prunella modularis: Acentor común
Prunella collaris: Acentor alpino
Familia TURDIDAE
Erithacus rubecula: Petirrojo
Luscinia megarhynchos: Ruiseñor
común
Luscinia svecica: Pechiazul
Phoenicurus ochruros: Colirrojo tizón
Phoenicurus phoenicurus: Colirrojo real
Saxicola rubetra: Tarabilla norteña
Saxicola torquita: Tarabilla común
Oenanthe oenanthe: Collalba gris
Oenanthe hispanica: Collalba rubia
Oenanthe leucura: Collalba negra
Monticola saxatilis: Roquero rojo
Monticola solitarius: Roquero solitario
Turdus merula: Mirlo común
Turdus philomelos: Zorzal común
Turdus viscivorus: Zorzal charlo
Cettia cetti: Ruiseñor bastardo
Familia SYLVIIDAE
Cisticola juncidis: Buitrón
Acrocephalus scirpaceus: Carricero
común.
Acrocephalus arundinaceus: Carricero
tordal
Hippolais polyglotta: Zarcero común
Sylvia undata: Curruca rabilarga
Sylvia conspicillata: Curruca tomillera
Sylvia cantillans: Curruca Carrasqueña
Sylvia melanocephala: Curruca
cabecinegra
Sylvia hortensis: Curruca mirlona
35
Sylvia communis: Curruca zarcera
Sylvia borin: Curruca mosquitera
Sylvia atricapilla: Curruca capirotada
Phylloscopus bonelli: Mosquitero
papialbo
Phylloscopus collybita: Mosquitero
común
Phylloscopus ibericus: Mosquitero
ibérico
Regulus regulus: Reyezuelo sencillo
Regulus ignicapilla: Reyezuelo listado
Familia MUSCICAPIDAE
Muscicapa striata: Papamoscas gris
Ficedula hypoleuca: Papamoscas
cerrojillo
Familia TIMALIIDAE
Aegithalos caudatus: Mito
Familia PARIDAE
Parus ater: Carbonero garrapinos
Parus major: Carbonero común
Parus caeruleus: Herrerillo común
Parus cristatus: Herrerillo capuchino
Familia SITTIDAE
Sitta europaea: Trepador azul
Certhia brachydactyla: Agateador común
Cinclus cinclus: Mirlo acuático
Troglodytes troglodytes: Chochín
Familia LANIIDAE
Lanius collurio: Alcaudón dorsirrojo
Lanius meridionalis: Alcaudón real
Lanius senator: Alcaudón común
Familia CORVIDAE
Garrulus glandarius: Arrendajo
Cyanopica cyana: Rabilargo
Pica pica: Urraca
Pyrrhocorax pyrrhocorax: Chova
piquirroja
Corvus monedula: Grajilla
Corvus corone: Corneja
Corvus corax: Cuervo
Familia STURNIDAE
Sturnus unicolor: Estornino Negro
Familia ORIOLIDAE
Oriolus oriolus: Oropéndola
Familia PASERIDAE
Passer domesticus: Gorrión común
Passer hispaniolensis: Gorrión moruno
Passer montanus: Gorrión molinero
Petronia petronia: Gorrión chillón
Familia FRINGILLIDAE
Fringilla coelebs: Pinzón vulgar
Serinus serinus: Verdecillo
Serinus citrinella: Verderón serrano
Carduelis chloris: Verderón común
Carduelis carduelis: Jilguero
Carduelis spinus: Lúgano
Carduelis cannabina: Pardillo
Loxia curvirostra: Piquituerto común
Coccothraustes coccothraustes:
Picogordo
Familia EMBERIZIDAE
Emberiza cirlus: Escribano soteño
Emberiza cia: Escribano montesino
Emberiza hortulana: Escribano hortelano
Miliaria calandra: Triguero
- Catálogo Aves no nidificantes, presentes en la zona
Familia PODICIPEDIDAE
Podiceps nigricollis: Zampullín
cuellinegro
Familia PHALACROCORACIDAE
Phalacrocórax Carbo: Cormorán grande
Familia ANATIDAE
Anser anser: Ansar común
Aix galericulata: Pato mandarín
Anas Penélope: Ánade silbón
Anas strepera: Ánade friso
Anas acuta: Ánade rabudo
Anas clypeata: Pato cuchara
Anas crecca: Cerceta común
Anas querquedula: Cerceta carretota
Aythya ferina: Porrón común
Familia FALCONIDAE
Falco columbarius: Esmerejón
Familia GRUIDAE
Grus grus: Grulla común
Familia RALLIDAE
Recurvirostra aboceta: Avoceta
Familia CHARADRIIDAE
36
Vanellus vanellus: Avefría
Familia SCOLOPACIDAE
Tringa ochropus: Andarrios grande
Tringa totanus: Archibebe común
Tringa erythropus: Archibebe claro
Limosa limosa: Aguja colinegra
Familia TURDIDAE
Turdus torquatus: Mirlo capiblanco
Familia FRINGILLIDAE
Pyrrhula pyrrhula: Camachuelo común
Familia LARIDAE
Larus ridibundus: Gaviota reidora
En la siguiente tabla, incluimos el número de cuadrículas en que se ha citado a la especie dentro
de los límites del área de estudio, considerando las cuadrículas UTM de 10 x 10 km; los biotopos
utilizados principalmente por cada especie y su fenología resumida. Las especies sin número de
cuadrícula indican citas muy ocasionales, datos imprecisos o de asignación incierta o dudosa. Los
biotopos en el caso de las Aves son:
1- Medio humano (MH). Áreas urbanas y semiurbanas
2- Cultivos (C). Cultivos de secano y eriales
3- Pastizales (P). Ballicares, berceales, prados de diente y pastizales basales
4- Prados de montaña (PM). Turberas y cervunales
5- Piornales (Pi)
6- Matorral camefítico (MC). Tomillares y cantuesares
7- Matorral fanerofítico (MF). Bosque bajo de Quercíneas, Genisteas , Rosáceas
espinosas, jarales….
8- Bosques de ribera (BR). Olmedas , choperas, alisedas, saucedas
9- Dehesas de Quercíneas esclerófilas (DQ). Majadales, encinares, quejigares,
10- Dehesas de caducifolios (DC). Melojares y fresnedas
11- Sabinares (S)
12- Pinares (Pin)
13- Roquedos y gleras (R)
14- Zonas húmedas y cursos de agua (ZH)
15- Todos (T)
Tabla 3: Distribución, biotopos y fenología de las Aves en el Guadarrama segoviano
Especie
Cuadriculas
Biotopos
Fenología
Tachybaptus rufficollis
6
14
Permanente
Podiceps nigricollis
14
Ocasional
Podiceps cristatus
4
14
Permanente
Ardea cinerea
3
14, 8
Permanente
Ciconia nigra
8
14, 12, 3
Estival y paso migratorio
Ciconia ciconia
22
14, 1, 3
Estival y paso migratorio
Anas plathyrynchos
22
14
Permanente
Anas strepera
14
Paso migratorio
Anas penelope
14
Paso migratorio e Invernante ocasional
Anas querquedula
14
Paso migratorio
Anas crecca
14
Paso migratorio e invernante ocasional
Anas clypeata
14
Paso migratorio
Anas acuta
14
Paso migratorio
Aix galericulata
14
Invernante ocasional
Aythia ferina
14
Paso migratorio e invernante
Pernis apivorus
10
12, 9, 10
Estival y paso migratorio
37
Especie
Gyps fulvus
Aegypius monachus
Neophrn percnopterus
Milvus migrans
Milvus milvus
Circaetus gallicus
Accipiter gentilis
Accipiter nissus
Buteo buteo
Aquila adalberti
Aquila chrysaetos
Hieraaetus pennatus
Cyrcus cyaneus
Cyrcus pygargus
Falco peregrinus
Falco naumanni
Falco tinnunculus
Falco subbuteo
Falco columbarius
Alectorix rufa
Phasianus colchicus
Coturnix coturnix
Gallinula chloropus
Rallus aquaticus
Fulica atra
Grus grus
Tetrax tetrax
Burhinus oedicnemus
Charandrius dubius
Gallinago gallinago
Actitis hypoleucos
Columba livia
Columba oenas
Columba palumbus
Streptopelia turtur
Clamator glandarius
Cuculus canorus
Tyto alba
Otus scops
Athene noctua
Asio othus
Strix aluco
Bubo bubo
Caprimulgus europaeus
Caprimulgus ruficollis
Apus apus
Alcedo athis
Merops apiaster
Coracias garrulus
Upupa epops
Cuadriculas
Biotopos
Fenología
3
7
2
23
22
20
20
20
24
8
14
24
9
1
11
3
23
17
13, 9
12, 9
13, 9
9, 10, 8
9, 10, 8
9, 10, 12
9, 10, 12
9, 1
12, 9, 10
12, 9, 10
13, 12
9, 10, 12, 8
14, 2, 3
3, 2
13, 1
1, 2
2, 3, 13, 1
9, 10, 12, 8
9, 10, 12, 8
2, 3, 9
2, 3, 8
2, 3
14
14
14
9, 3, 2
2, 3, 6
2, 3, 9, 6
14
14
14
15
15
15
2, 8, 14
9, 10, 3
9, 10, 12
15
9, 10, 12
9, 10, 12
9, 10, 12
9, 10, 12
13, 9, 12
12, 1
5, 12, 7
1
14
2, 3, 9
9, 2
9, 2, 3
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Invernante
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Paso migratorio
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
24
3
23
12
1
5
2
9
3
1
8
8
12
24
23
6
24
21
20
22
17
22
9
18
7
24
7
21
1
24
38
Especie
Picus viridis
Jynx torquilla
Dendrocopos minor
Dendrocopos major
Melanocorypha calandra
Chersophilus duponti
Galerida cristata
Galerida theklae
Calandrella brachydactyla
Alauda arvensis
Lululla arborea
Riparia riparia
Ptyonoprogne rupestris
Hirundo rustica
Hirundo daurica
Delichon urbica
Motacilla cinerea
Motacilla alba
Motacilla flava
Anthus campestris
Anthus trivialis
Anthus spinoletta
Cinclus cinclus
Troglodytes troglodytes
Prunella modularis
Prunella collaris
Erithacus rubecula
Luscinia megarhynchos
Luscinia svecica
Phoenicurus ochruros
Phoenicurus phoenicurus
Saxicola rubetra
Saxicola torcuata
Oenanthe oenanthe
Oenanthe leucura
Oenanthe hispanica
Monticola saxatilis
Monticola solitarius
Turdus merula
Turdus torquatus
Turdus philomelos
Turdus viscivorus
Cettia cetti
Cisticola juncidis
Acrocephalus scirpaceus
Acrocephalus arundinaceus
Hippolais polyglotta
Sylvia conspicillata
Sylvia comunis
Sylvia borin
Cuadriculas
Biotopos
Fenología
24
8
1
24
11
1
19
15
8
24
24
3
21
24
11
24
23
23
21
22
15
6
13
24
17
4
24
24
13
24
1
10
24
24
2
17
16
10
24
9, 10, 8
2, 3, 9
12, 9, 10
8, 9, 10
2, 3, 6
3, 6
2, 3
2, 3
2, 3
2, 3
2, 3, 6
15
13, 8
15
13, 19
15
14
15
3, 14, 2
3, 4
8, 9, 10
4
14
14, 8
1, 8, 7
13, 4
8, 9, 10
8, 14
7, 4, 5
3, 2, 1
9, 1
4, 5
3, 2, 9
3, 2
13, 7, 3
6, 3, 13
13, 4
13
15
12, 4
2, 3, 8
1, 8, 12, 3
3, 14, 8
14, 8
14, 8
14, 8
B, D, M
6, 3
2, 3, 7
7, 10, 8
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente invernante a menores altitudes
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Invernante
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
12
24
21
1
3
1
23
7
23
22
39
Especie
Sylvia hortensis
Sylvia atricapilla
Sylvia melanochephala
Sylvia cantillans
Sylvia undata
Phylloscopus collybita
Phylloscopus ibericus
Phylloscopus bonelli
Regulus ignicapillus
Regulus regulus
Aegithalos caudatus
Parus cristatus
Parus ater
Parus caeruleus
Parus major
Muscicapa striata
Ficedula hypoleuca
Sitta europaea
Certhia brachydactyla
Oriolus oriolus
Lanius meridionalis
Lanius collurio
Lanius senator
Garrulus glandarius
Cyanopica cyana
Pica pica
Pyrrhocorax pyrrhocorax
Corvus monedula
Corvus corone
Corvus corax
Sturnus unicolor
Passer domesticus
Passer hispaniolensis
Passer montanus
Petronia petronia
Fringilla coelebs
Serinus serinus
Serinus citrinella
Carduelis chloris
Carduelis spinus
Carduelis carduelis
Carduelis cannabina
Fringilla montifringilla
Loxia curvirostra
Pyrrhula pyrrhula
Coccothraustes coccothrauestes
Emberiza cirlus
Emberiza cia
Emberiza hortulana
Miliaria calandra
Cuadriculas
Biotopos
Fenología
15
24
10
16
21
14
10, 8, 12
8, 10, 7
7, 8,
24
23
13
24
21
24
24
24
14
16
20
24
23
24
13
23
22
15
23
16
22
24
24
24
24
1
23
23
24
24
13
24
1
24
24
8, 10, 7
8, 10, 7
8, 10, 7
14, 8
12
12
15
15
2, 3, 1, 10
12, 9, 10
10, 9
12, 10, 9
8, 14, 10
7, 10, 9
7, 3, 2
7, 3, 2
12, 10, 9
10, 9, 8
15
13
15
15
12, 13, 10
15
15
2, 3, 7
15
13, 1, 4
10, 8, 7
15
10, 12, 4
2, 7, 8
10, 12, 4
15
2, 7, 3
10, 8, 7
12
10, 9, 8
10, 9, 8
2, 3
2, 3
2, 3
2, 3, 6
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente?
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
Estival y paso migratorio
Estival y paso migratorio
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
Permanente
15
12
23
23
18
24
5, 7, 3
8, 10, 7
Permanente
Invernante
Permanente
Permanente
Permanente
Estival y paso migratorio
Permanente
40
- Figura 5. Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
41
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
42
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
43
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
44
- Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
45
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
46
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
47
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
48
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
49
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
50
Figura .5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
51
Figura.5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
52
Figura.5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
53
- Figura .5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
54
- Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
55
- Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
56
- Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
57
Figura.5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
58
Figura 5 (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio.
59
2.1.8.2.6. - Mamíferos
La elaboración del inventario de Mamíferos de Guadarrama se ha basado principalmente en la
revisión bibliográfica, especialmente de publicaciones y atlas que hacen referencia a cada uno de los
grupos. Así, se han consultado atlas regionales de Vertebrados de Castilla y León como Velasco et
al. (2005), el atlas y libro rojo de los Mamíferos terrestres de España (Palomo y Gisbert, 2002). En el
caso de los Quirópteros se han consultado fundamentalmente los trabajos de Fernández Gutiérrez
(2000, 2001, 2002). Además, se ha consultado una larga serie de publicaciones, monografías e
informes sobre zonas o especies concretas de Mamíferos que se detallan en la bibliografía faunística.
Podemos considerar que el nivel de conocimiento de los Mamíferos en el área de estudio en
Guadarrama es medio y es importante destacar que falta información actualizada datos sobre
especies claves o emblemáticas por su estado de conservación o ser endemismos, entre ellas
podemos citar al Desmán ibérico, Topillo nival, Topillo de Cabrera, Nutria, Lobo, etc…por citar
algunos.
El catálogo de Mamíferos del área incluida en el PORN está integrado por 62 especies (60
autóctonas y dos introducidas recientemente) que incluyen 3 Erinaceomorfos, 5 Soricomorfos, 24
Quirópteros, 10 Carnívoros, 5 Artiodáctilos, 13 Roedores y 2 Lagomorfos. La heterogeneidad
taxonómica que muestra el grupo refleja una importante diversidad de formas de vida, desde el Lobo
a la musaraña enana. Por lo general, se trata de especies de hábitos crepusculares o nocturnos, de
costumbres solitarias, como la mayoría de los Carnívoros, Musarañas, Topos, y Topillos rojos;
coloniales como algunos Quirópteros y Topillos; o formando grupos familiares como sucede con el
Tejón, Jabalí o los Roedores microtinos.
- Catálogo de los Mamíferos:
Orden ERINACEMORFOS
Familia ERINACEIDAE
Erinaceus europaeus: Erizo común
Familia TALPIDAE
Talpa occidentalis: Topo ibérico
Galemys pyrenaicus: Desmán ibérico
Orden SORICOMORFOS
Familia SORICIDAE
Sorex granarius: Musaraña ibérica
Sorex minutus: Musaraña enana
Neomys anomalus: Musgaño de
Cabrera
Crocidura russula: Musaraña común
Suncus etruscus: Musgaño enano
Orden QUIRÓPTEROS
Familia RHINOLOPHIDAE
Rhinolophus ferrumequinum: Murciélago
grande de herradura
Rhinolophus hipposideros: Murciélago
pequeño de herradura
Rhinolophus euryale: Murciélago
mediterráneo de herradura
Rhinolophus mehelyi: Murciélago
mediano de herradura
Familia VESPERTILIONIDAE
Myotis bechsteinii: Murciélago ratonero
forestal
Myotis blythii: Murciélago ratonero
mediano
Myotis daubentoni: Murciélago ratonero
ribereño
Myotis emarginata: Murciélago ratonero
pardo
Myotis myotis: Murciélago ratonero
grande
60
Myotis mystacina: Murciélago ratonero
bigotudo
Myotis nattereri: Murciélago ratero gris o
de Natterer
Myotis capaccinii: Murciélago ratonero
patudo
Pipistrellus kuhlii: Murciélago de borde
claro
Pipistrellus pipistrellus: Murciélago
común
Pipistrellus pygmaeus: Murciélago de
Cabrera
Hypsugo savii: Murciélago montañero
Eptesicus serotinus: Murciélago
hortelano
Barbastella barbastellus: Murciélago de
bosque
Plecotus auritus: Murciélago orejudo
común
Nyctalus leisleri: Nóctulo pequeño
Nyctalys noctula: Nóctulo mediano
Nyctalus lasiopterus: Nóctulo grande
Plecotus auritus: Orejudo dorado
Plecotus austriacus: Orejudo gris
Miniopterus schreibersii: Murciélago de
cueva
Tadarida teniotis: Murciélago rabudo
Orden CARNÍVOROS
Familia CANIDAE
Canis lupus: Lobo
Vulpes vulpes: Zorro rojo
Familia MUSTELIDAE
Mustela nivalis: Comadreja
Mustela putorius: Turón
Mustela vison: Visón americano
* introducida)
Martes foina: Garduña
Meles meles: Tejón
Lutra lutra: Nutria
Familia VIVERRIDAE
Genetta genetta: Gineta
Familia FELIDAE
Felis silvestris: Gato montés
Orden ARTIODÁCTILOS
Familia SUIDAE
Sus scrofa: Jabalí
Familia BOVIDAE
Capra pyrenaica: Cabra montés
Ovis gmelini: Muflón * Introducida
Familia CAPREOLIDAE
Capreolus capreolus: Corzo
Familia CERVIDAE
Dama dama: Gamo
Cervus elaphus: Ciervo
Orden ROEDORES
Familia SCIURIDAE
Sciurus vulgaris: Ardilla
Familia MURIDAE
Arvicola sapidus: Rata de agua
Chionomys nivalis: Topillo nival
Microtus lusitanicus: Topillo lusitánico
Microtus arvalis: Topillo campesino
Microtus duodecimcostatus: Topillo
mediterráneo
Microtus cabrerae: Topillo de Cabrera
Apodemus sylvaticus: Ratón de campo
Mus domesticus: Ratón casero
Mus spretus: Ratón moruno
Rattus rattus: Rata negra
Rattus norvegicus: Rata parda
Familia GLIRIDAE
Eliomys quercinus: Lirón Careto
Orden LAGOMORFOS
Familia LEPORIDAE
Oryctolagus cuniculus: Conejo
Lepus granatensis: Liebre ibérica
- Uso de biotopos y hábitats:
En la siguiente tabla se presentan datos sobre la endemicidad de cada especie de Mamífero
citada en la zona; si son o no introducidas, y su presencia y abundancia relativa. Se han
caracterizado en función de los biotopos ocupados en el área de estudio. Las categorías utilizadas
son:
61
1- bosque denso y alto
2- dehesas o bosque hueco alto
3- matorral fanerofítico o bosque bajo
4- matorral camefítico
5- pastizal
6- sotos altos
7- sotos bajos
8- pedrizas y zonas de roquedo
9- turberas
10- medio antrópico
Tabla 4.: Caracterización geográfica y ecológica de los Mamíferos en el Guadarrama segoviano.
Especie
Biotopo
Abundancia
Presencia
Erinaceus europaeus
Talpa occidentalis
2, 3, 4, 5
2, 3, 4, 5, 6
Media
Media
Galemys pyrenaicus
9
Media
2, 3, 4, 5
2, 3, 4, 5, 9
9
2, 3, 4, 5, 9
2, 3, 4, 5
1, 2, 3, 8, 10
1, 2, 3, 8, 10
1, 2, 3, 8, 10
1, 2
2, 8, 10
2, 3, 4, 5, 8, 10
1, 2, 3, 6, 8
6, 7, 10
1, 2, 3, 6
2, 3, 6, 10
1, 2, 6, 10
6,7
1, 2, 3, 6
8
2, 3,4, 6, 8, 10
1, 2,
1, 2, 10
2, 3, 7, 10
3, 4, 5. 8
1, 2, 6
1, 2, 3, 6
8, 10
1, 2, 3
Todos
Alta
Alta
Media
Media
Baja
Media
Media
Media
Baja
Media
Baja
Media
Media
Baja
Alta
Alta
Baja
Baja
Media
Alta
Media
Media
Media
Media
Baja
Baja
Media
Baja
Baja
Segura
Segura
Dudosa (al
borde de la
extinción en
la zona)
Segura
Segura
Segura
Segura
Probable
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Probable
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Probable
Segura
Segura
Segura
Sorex minutus
Sorex granarius
Neomys anomalus
Crocidura russula
Suncus etruscus
Rhinolophus ferrumequinum
Rhinolophus hipposideros
Rhinolophus euryale
Myotis bechsteinii
Myotis myotis
Myotis blythii
Myotis nattereri
Myotis daubentoni
Myotis emarginata
Pipistrellus pipistrellus
Pipistrellus kuhlii
Pipistrellus pygmaeus
Myotis mystacina
Hypsugo savii
Eptesicus serotinus
Barbastella barbastellus
Plecotus auritus
Plecotus austriacus
Miniopterus schreibersii
Nyctalus lasiopterus
Nyctalus noctula
Tadarida teniotis
Nyctalus leisleri
Canis lupus
Endemismo
Introducido
Ibérico
SI
SI
SI
62
Especie
Vulpes vulpes
Mustela nivalis
Mustela putorius
Meles meles
Lutra lutra
Martes foina
Mustela vison
Genetta genetta
Felis silvestris
Sus scrofa
Capreolus capreolus
Dama dama
Cervus elaphus
Capra pyrenaica
Ovis gmelini
Sciurus vulgaris
Rattus rattus
Rattus norvegicus
Mus domesticus
Mus spretus
Chionomys nivalis
Arvicola sapidus
Microtus lusitanicus
Microtus arvalis
Microtus duodecimcostatus
Apodemus sylvaticus
Eliomys quercinus
Oryctolagus cuniculus
Lepus granatensis
Biotopo
Abundancia
Presencia
Todos
Todos
1, 2, 3, 6, 9
1, 2, 3, 4, 5, 6, 8,
9
9
1, 2, 3, 4, 5, 6, 8,
10
9
1, 2, 3, 6
1, 2, 3, 4, 6, 8
Todos
1, 2, 3, 5
2
2
1,5,8
2, 3, 8
1, 2
9, 1
10
10
10
8
9
2, 3, 4, 5, 6
2, 3, 4, 5, 9
2, 3, 4, 5, 6
15
1, 2, 3, 8
2, 3, 4, 6
2, 3, 4, 5
Media
Baja
Baja
Segura
Segura
Segura
Alta
Segura
Baja
Segura
Baja
Segura
Alta
Baja
Baja
Baja
Media
Baja
Baja
Baja
Baja
Media
Baja
Baja
Alta
Alta
Alta
Baja
Alta
Media
Media
Alta
Media
Media
Media
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Segura
Endemismo
Introducido
Ibérico
SI
SI
Si
Si
SI
SI
SI
SI
SI
63
Figura 6: Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
64
Figura 6 (cont): Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
65
Figura 6 (cont): Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
66
Figura 6 (cont): Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
67
Figura 6 (cont): Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
68
Figura 6 (cont.): Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
69
Figura.6 (cont.): Especies de Mamíferos citados en el área de estudio.
70
71
2.1.8.3. - VALORACIÓN FAUNÍSTICA:
2.1.8.3.1.- Valoración de la importancia y estado de conservación de cada grupo
faunístico:
- Protección legal y administrativa y estado de conservación de la fauna: Detallaremos
brevemente las diversas normativas que se recogen en las tablas del inventario de fauna. Las
normativas aplicables a las Aves, Directiva de Aves y Categorías SPEC se detallan en el
apartado que trata de las mismas.
- CNEA (Catálogo Nacional de Especies Amenazadas): Aunque existe una modificación
reciente al CNEA por el que se crea el CNEAIDE, hemos utilizado las categorías disponibles hasta la
fecha de realización del estudio. El Real Decreto 439/1990 regula el Catálogo Nacional de Especies
Amenazadas. Se han recogido las sucesivas modificaciones al mismo, hasta las últimas del año
2004. En el territorio de Castilla y León se utiliza el Catálogo nacional, pues no se ha desarrollado aún
el Catálogo Regional de fauna amenazada de Castilla y León, que si está disponible en la Comunidad
de Madrid. Esto crea una asimetría a la hora de valorar el estado de amenaza entre ambas vertientes
de Guadarrama, ya que el CNEA nacional no está suficientemente actualizado. En la Catálogo
nacional se utilizaban hasta su reciente modificación las siguientes categorías:
- E:
En Peligro de Extinción
- AH:
Sensible a la alteración de su hábitat
- V:
Vulnerable
- IE:
De interés especial
- Directiva de Hábitats: La Directiva europea 92/43/CEE hace referencia a la conservación
de los hábitats naturales y de la fauna y la flora silvestres en la Unión Europea. Mediante los
diferentes anexos de la Directiva, se clasifican los hábitats y las especies de fauna y flora:
- Anexo II: especies de interés comunitario para cuya conservación es necesario
designar zonas especiales de conservación.
- Anexo IV: especies de interés comunitario que requieren una protección estricta.
- Anexo V: especies cuya recolección en la naturaleza y explotación pueden ser objeto
de medidas de gestión.
- Convenio de Berna: El convenio de Berna, adoptado por el consejo de Europa en 1979,
hace referencia a la conservación de la Vida Silvestre y el Medio Natural en Europa, mediante la
clasificación de los diferentes habitas y especies en sus anexos:
- Anexo II, especies estrictamente protegidas
- Anexo III, especies protegidas cuya explotación se regulará de tal forma que las
poblaciones se mantengan fuera de peligro
- Convenio de Especies Migratorias silvestres, CMS o BONN: Hace referencia a la
conservación de las especies migratorias de animales silvestres, que son incluidas en dos apéndices:
- Anexo I: Especies que los estados miembros se esforzarán por conservar, así como
sus hábitats.
- Anexo II: Especies en beneficio de las que los Estados miembros deben concluir
acuerdos.
72
- Convenio sobre el Tráfico de Especies Amenazadas (CITES o Convenio de Washington):
Convenio relativo a la regulación del comercio de las especies silvestres. Incluye dos anexos:
- Anexo I: especies o taxones en peligro de extinción que son o pueden ser afectadas por el
comercio, estando su comercialización prohibida.
- Anexo II: taxones vulnerables cuyo comercio debe estar reglamentado.
- RD 1095/89: Real Decreto 1095/89, de 8 de septiembre, por el que se declaran las especies
objeto de caza y pesca y se establecen normas para su protección.
- RD 1198/89: Real Decreto 1095/89, por el que se declaran las especies objeto de caza y pesca
comercializables.
- MAM 1783/2004: Orden MAM/1783/2004, de 25 de noviembre, por la que se establece la
Normativa Anual de Pesca de la Comunidad de Castilla y León.
- Categorías de Estado de conservación de la UICN: Las categorías UICN constituyen un
análisis científico del estado de conservación de un taxón. La Unión Internacional de Conservación de
la Naturaleza establece unos criterios lo más objetivos posibles, basados en la distribución, tamaño
de poblaciones, dominios vitales, etc...ara catalogar a cada taxón en una categoría concreta. En las
tablas se han incluido las categorías UICN previas a 1994 (la mayoría correspondientes al Libro Rojo
de 1992), y las nuevas categorías propuestas por la UICN en 1994 y aplicadas en los diferentes
grupos de fauna en España a partir de año 2001. Par ello se han utilizado los atlas y libros rojos
publicados por el Ministerio de Medio Ambiente (2002-2004).
- UICN 1992:
- Extinguido (Ex), taxón no localizado en estado silvestre en los últimos 50 años en el
territorio considerado.
- En peligro de extinción (E), en peligro inminente de extinción si los factores causales
siguen actuando.
- Vulnerable (V), taxones que entrarían en peligro de extinción si los factores causales
siguen actuando.
- Raro (R), taxones con poblaciones pequeñas, con un cierto riesgo, aunque sin
pertenecer a las categorías V o E.
- Indeterminado (I), taxones pertenecientes a las categorías E, V o R, pero de los que no
existe suficiente información para decidir que categoría es la apropiada.
- Insuficientemente conocido (K), taxones que se sospecha pertenecen a alguna de las
categorías precedentes, aunque sin información suficiente.
- No amenazado (NA), taxones sin amenazas evidentes. Esta última categoría se aplica
a todo el área de distribución de un taxón, independientemente de que determinadas
poblaciones puedan presentar amenazas evidentes o una fuerte regresión, por lo que
debe tomarse siempre con reserva.
- UICN 2001 – 2005:
- Taxones no evaluados (NE): Taxón no evaluado en relación a los criterios objetivos
proporcionados por UICN (1994).
- Taxones evaluados:
o Datos insuficientes (DD): la información disponible no es adecuada para
hacer una evaluación del grado de amenaza.
73
Datos adecuados:
Extinto o extinguido (EX): con certeza absoluta de extinción.
Extinto en estado silvestre (EW): solo sobrevive en cautiverio, cultivo o
fuera de su distribución original.
En peligro crítico (CR): con riesgo extremadamente alto de extinción en
estado silvestre en un futuro inmediato.
En peligro (EN): no en peligro crítico, pero enfrentado a un riesgo muy alto
de extinción en estado silvestre en un periodo cercano.
Vulnerable (VU): alto riesgo de extinción en estado silvestre a medio plazo.
Casi amenazado (NT): aunque no satisface el criterio de vulnerable, está
cerca de hacerlo de forma inminente o en el futuro.
Preocupación menor (LC): no cumple ninguno de los criterios de las
categorías anteriores.
* NC: esta expresión se utilizara en el inventario para aquellas especies no
catalogadas por la UICN.
Las categorías VU, EN y CR llevan además los criterios por los que el
taxón es incluido dentro de dicha categoría.
o
2.1.8.3.1.1. - Invertebrados: No existe un inventario completo, ni siquiera aproximado, de los
Invertebrados de Guadarrama, tanto para su vertiente castellano-leonesa como madrileña. En la zona
madrileña de Guadarrama se han citado 997 especies de Invertebrados (PORN de la Comunidad de
Madrid), considerándose ésta una cifra estimativa y no exhaustiva. Si lo comparamos con el número
de Invertebrados citados en España (alrededor de 60.000 especies terrestres), nos muestra el escaso
conocimiento general de estos grupos. La excepción a esta falta de datos son algunos Invertebrados
que se recogen en la Directiva de Hábitats y que por tanto poseen un alto valor para su conservación
(Rosas et al., 1992; Galante & Verdú, 2000; Ramos et al., 2001). Recientemente se ha añadido el
Libro rojo de los Invertebrados españoles (Verdú y Galante, 2005).
Debido a la escasez de información para la parte castellano-leonesa del futuro Parque
Nacional, es aún más difícil hacer una estimación cuantitativa de los Invertebrados presentes en el
área de estudio, aunque calculamos que será ligeramente inferior a la citada para la zona madrileña,
debido, como en el caso de los Vertebrados, a la inexistencia del piso bliclimático Mesomediterráneo.
Datos proporcionados por J.L. Viejo Montesinos (tablas 1 y 2) nos dan una cifra aproximada de 2.000
Insectos citados en ambas vertientes de Guadarrama, sólo de grupos relativamente bien conocidos.
Con estas cifras de Guadarrama, puede calcularse el porcentaje que suponen respecto a las del
mundo y la Península Ibérica. Obteniendo la media de los grupos, puede estimarse que en
Guadarrama se encuentra una media del 1,6 % del mundo y un 35.5% de las de la Península. Si
aplicamos estos porcentajes a todos los Órdenes de Insectos españoles, obtenemos una estima de
los Insectos en Guadarrama de 14.000 Insectos posibles.
En una valoración cualitativa, podemos afirmar que la fauna de Invertebrados de Guadarrama
es rica, variada y abundante, como corresponde a una zona de alta diversidad florística y faunística,
causadas por la heterogeneidad de los distintos pisos bioclimáticos de vegetación y altitud
proporcionadas por el Sistema Central.
Con respecto al estado de conservación de los Invertebrados citados en la zona de estudio;
muy pocas especies se hallan recogidas en el Catálogo nacional. No hay ninguna especie en peligro
de extinción, aunque debamos recordar que el Cangrejo autóctono Austropotamobius pallipes o
italicus) se extinguió en la década de los 70-80. Una especie es Vulnerable, La Mariposa hormiguera
74
oscura (Maculinea nausithous) y dos especies son de interés especial, la Mariposa isabelina
(Graellsia isabelae) y el Ciervo volante (Lucanus cervus).
Como se comentará para varios grupos, no existe una información actualizada en Castilla y
León en cuanto a su fauna amenazada de Invertebrados. En el PORN del Parque nacional de
Guadarrama en la Comunidad de Madrid, se indica que en el Catálogo regional de Invertebrados se
encuentran 3 taxones en peligro de extinción, 22 sensibles a la alteración del hábitat; 4 vulnerables y
4 de Interés especial. Es previsible una situación similar en la zona de Castilla y León.
Tabla 5. Número de especies de Invertebrados en cada categoría del Catálogo Nacional de Especies
3
Amenazadas en la zona de estudio en Castilla-León.
Invertebrados
E
AH
V
IE
Castilla y León (CNEA)
Catálogo Regional
Madrid
0
0
1
2
3
22
4
4
Con respecto a las categorías de la UICN de 1992, de las las especies citadas en la zona de
estudio 3 especies son Vulnerables, 3 Raras, 4 son citadas como No Amenazadas, 2 como
Insuficientemente Conocidas y el resto como indeterminadas.
Tabla 6. Número de especies de Invertebrados en cada categoría de la UICN, 1992, considerando sólo los de
presencia comprobada en Guadarrama
Invertebrados
EX
E
V
R
I
K
NA
0
0
3
3
0
2
4
La mayor parte de las especies de Artrópodos recogidas en la Directiva de hábitats se
asocian a medios forestales bien conservados y a medios acuáticos. Su preservación en un estado
natural es por tanto necesaria para la supervivencia de estas especies. La mayor parte de los
endemismos del Sistema Central se encuentran por otra parte en las zonas altas de la Sierra. De los
62 Invertebrados ibéricos protegidos por algún convenio internacional (de ellos, 51 Artrópodos),
encontramos en Guadarrama la mitad de estas especies. Un grupo que se conoce relativamente bien
en el Sistema Central es el de las Mariposas. En el área de estudio se hallarían aproximadamente el
45 % de las Mariposas diurnas de la Península Ibérica.
Seis especies de Invertebrados aparecen en el Anexo II de la Directiva Hábitats, que recoge
las especies de “Interés Comunitario” para cuya conservación es necesario designar “Zonas
Especiales de Conservación” y 4 especies se encuentran en el Anexo IV, que recoge las especies de
“Interés Comunitario” que requieren una protección estricta. Tres especies aparecen en ambos
anexos y dos en el Anexo V que recoge especies que pueden explotarse de un modo controlado.
3
Se indica para comparación el número de especies del Guadarrama madrieño en cada categoría del
Catálogo regional de Madrid.
75
4
Tabla 7. Número de especies de cada grupo faunístico en cada categoría de la Directiva de Hábitats .
Dir. Hábitat
Invertebrados
II
6
IV
4
II y IV
3
V
2
TOTAL
9
Las especies más representativas de Guadarrama por ser endemismos, estar amenazadas
(CNEA) o categorías UICN, y/o encontrarse en la Directiva de Hábitats son, dentro de los Odonatos el
caballito del diablo Coenagrion mercuriale. En los Coleópteros el Gran longicornio (Cerambyx cerdo),
el Ciervo volador o ciervo volante (Lucanus cervus). En los Lepidópteros, la mariposa Ondas rojas
(Euphydryas aurinia) y la Mariposa isabelina (Graellsia isabelae).
Un caso a mencionar es el del cangrejo de río autóctono, Austropotamobius pallipes, ya que
no existen citas recientes de esta especie en el área de Guadarrama, aunque sí en su cercanía, al
Sur del Sistema Ibérico. Es por tanto una especie clave por su grado de amenaza a nivel español y
que debería ser objeto de un plan de recuperación específico tanto en la zona del futuro Parque
nacional de Guadarrama, como en Castilla y León. Probablemente las mejores zonas serían arroyos
en terrenos calizos, por ejemplo en las zonas altas de Prádena. Dos Cangrejos introducidos, el
Cangrejo americano y el Cangrejo señal se hallan en las zonas bajas de Guadarrama, según datos
propios y de la guardería de medio ambiente.
La conservación y buena gestión de los bosques, especialmente pinares y robledales, es
indispensable para el buen funcionamiento de las poblaciones de muchas especies de Insectos. La
destrucción y fragmentación del hábitat forestal o el uso de plaguicidas de forma indiscriminada
constituyen un grave peligro para la conservación de dichas especies. De la misma manera, se hace
indispensable una gestión adecuada de los pastizales y los ecosistemas de las zonas de cumbre.
4
(ver descripción de las categorías en el Anexo de fauna). No se incluye a las Aves
76
Mapa 1. Invertebrados, Peces, Anfibios y Reptiles significativos en el área de estudio. Elaborado por
Jose Ignacio Izquierdo MIsiego
77
Tabla 8.Algunos Invertebrados significativos y/o amenazados citados en Guadarrama
Grupo
Nombre científico
Nombre común CNEA
Cangrejo de río
autóctono
Cangrejo
americano o rojo
Pacifasciatus leniusculus Cangrejo señal
Hirudo medicinalis
Sanguijuela
Unio sp (crassus ?)
Bivalvos,
Náyades
Potomida littoralis
Bivalvos,
Náyades
Coenagrion
Caballito del
caerulescens
diablo
Coenagrion mercuriale Caballito del
diablo, Señorita
Onychogymphus
Libélula cernícalo
uncatus
Saga pedo
Cigarra o Grillo
depredador
Tettigonia hispanica
Saltamontes
Arcyptera tornosi
Saltamontes de
montaña
Eugryllodes uvarovi
Saltamontes
Chorthippus ariasi
Saltamontes
Dociostaurus hispanicus Saltamontes
Leuctra madritensis
Moscas de las
piedras
Brachyptera arcuata
Austropotamobius
pallipes (italicus)
Crustáceos Decápodos Procambarus clarki
Anélidos Hirudíneos
Moluscos Bivalvos
Insectos Odonatos
Ortópteros
Plecópteros
Tricópteros
Efemerópteros
Coleópteros
5
Allogamus laureatus Frigáneas
Rhyacophila relicta
Serratella hispanica
Efímeras o
cahipollas
Drunella paradinasi
Amara aenea
Badister bipustulatus
Badister bullatus
Brachinus variventris
Calathus vuillefroyi
Carabus ghiliani
Harpalus decipiens
Cárabidos
Leistus constrictus
Harpalus dimidiatus
Metallina lampros
Microlestes minutulus
Nebria vuillefroyi
Ocydromus carpetanum
Ocydromus geniculatus
Oreocarabus
guadarramus
Phylochtus biguttatus
Phylochtus guadarramus
Platyderus varians
D.Há
bitat
V
5
Libro Endemi
rojo
smo
2005 ibérico
Moluscos y
Crustáceos
acuáticos. El
introduci
Cangrejo autóctono
da
extinguido en la
zona. En zonas
bajas se encuentra
crassus
tanto el Cangrejo
VU
americano como el
VU
Señal
VU
V
Rango
altitudinal
Si
VU
II
Arroyos en toda su
longitud, aguas frías
y bien conservadas
VU
VU
IV
VU
Media montaña
1.400-2.000 prados
húmedos
Media montaña
Si
Si
Si
Si
Si
Si
Arroyos en toda su
longitud. aguas frías
y bien conservadas
Supramedterráneo
VU
Si
Si
Oromediterráneo
>1500m. Pinares
Oromediterráneo
Si
Supramediterráneo
Si
Si
Oromediterráneo
Supramediterráneo
SI
SI
Si
Supramediterráneo
Oromediterráneo:
matorral y roquedos
. En negrita las especies más significativas por diversas razones.
78
Grupo
Nombre científico
Nombre común CNEA
Syntomus
obscuroguttatus
Trechus pandellei
Cerambyx cerdo
Iberodorcadion
hispanicum
Ceratophyus martinezi
Cicindela campestris
Lucanus cervus
Polyphylla fullo
Ocnogyna latreillei
Agrodiaetus fabressei
Lepidópteros
Himenópteros
D.Há
bitat
Libro Endemi
rojo
smo
2005 ibérico
Carábidos
Rango
altitudinal
Supramediterráneo
Tréchido
Gran longicornio
Escarabajo pipa
Si
Oromediterráneo
Supramediterráneo
Oromediterráneo:
prados y piornal
Oromediterráneo;
prados de montaña
Si
Media montaña.
Prados y bosques
II, IV
VU
Geotrúpido
Cicindela
Ciervo volante
Escarabeido
Mariposa Árctida
Velludita parda
española
Maculinea nausithous Hormiguera
oscura
Plebicula nivescens
Niña del nácar
Euphydryas aurinia
Ondas rojas,
doncella de ondas
Euphydryas desfontainii Doncella
española
Nymphalis antiopa
Antíope
Parnassius apollo
Apollo
Graellsia isabellae
Mariposa
isabelina
Saturnia pyri
Gran pavón
Formica rufa
Hormiga roja
IE
II
Si
V
II, IV
VU
Si
II
Media montaña.
Prados y bosques
IV
IE
II, V
Todas altitudes
Todas altitudes
Si
Supramediterráneo
En la siguiente tabla indicamos algunas especies relevantes pero que son dudosas en la
vertiente Norte de la Sierra de Guadarrama.
Tabla 9: Algunos Invertebrados significativos y/o amenazados presentes en otras zonas del Sistema Central y
Gredos cuya presencia no es segura en el área de estudio de Guadarrama.
GRUPO INVERTEBRADOS
Odonatos
Ortópteros
Coleópteros
Lepidópteros
Especie
Oxygastra curtisii
Eugryllodes uvarovi
Chorthippus ariasi
Ctenodectitus pupulus
Callicrania miegi
Nustera distigma
Brachyleptura stragulata
Zerynthia rumina
Proserpinus proserpina
Aricia morronensis
Vanessa virginiensis
Zygaena nevadensis
Hyphoraia dejeani
UICN, 1992
E
I
I
Dir.
Hábitat
II, IV
K
O
O
IV
O
R
O
R
79
GRUPO INVERTEBRADOS
Himenópteros
Neurópteros
Especie
Epimyrma ravouxi
Formica lugubris
Formica nigricans
Formica polyctena
Myrmeleon formicarius
UICN, 1992
Dir.
Hábitat
R
V
V
V
V
- Especies de Invertebrados significativas o amenazadas:
En la vertiente madrileña de Guadarrama (PORN de Guadarrama de la Comunidad de
Madrid) se han citado un mínimo de casi 1.000 especies de Invertebrados, lo que respecto al total de
especies descritas en España (cerca de 60.000 especies), nos muestra el escaso conocimiento de
estos grupos. Datos proporcionados por J.L. Viejo Montesinos, nos dan una cifra aproximada de
2.000 Insectos citados, sólo de grupos de Insectos relativamente bien conocidos, en ambas vertientes
de Guadarrama. Una estimación de los Insectos de la Sierra nos llevaría hasta alrededor de 14.000
especies. Dejando aparte estas estimaciones, podemos afirmar que en Valsaín, donde se han
realizado numerosos censos faunísticos a lo largo de los años, se estima que hay 54 especies de
Invertebrados endémicos, destacando Mariposas como Graellsia isabelae, Parnassius apollo,
Heptidia sinapsis y Bolonia silene castellana (Fuente: O.A.P.P.N.N Centro Montes de Valsaín)
Detallaremos brevemente la distribución y biología de las principales especies de
Invertebrados citadas en Guadarrama y que están recogidas en el Catálogo nacional de especies
amenazadas (año 2002), en la Directiva de Hábitats (Galante y Verdú, 2000; Ramos et al., 2001) y en
el reciente Libro rojo de los Invertebrados españoles (Verdú y Galante, 2005). Debemos de destacar
que la Comunidad autónoma de Castilla y León no posee aún un Catálogo regional de especies
amenazadas, a diferencia de la Comunidad de Madrid. Es de suponer una situación similar de
catalogación de los taxones citados en la zona madrileña de Guadarrama (ver PORN de la
Comunidad de Madrid).
En la reciente revisión de las categorías del Libro rojo de los Invertebrados españoles
coordinado por Verdú y Galante (2005) se recogen 10 especies citadas en Guadarrama, todas en la
categoría Vulnerable. Sorprendentemente, algunas de las especies que se consideran emblemáticas
y representativas de Guadarrama como Graellsia isabelae o Lucanus cervus, no se incluyen en el
listado de especies amenazadas. Las especies Vulnerables son:
- Austropotamobius pallipes (italicus)
- Unio sp (crassus ?) Existen dudas sobre la identidad específica en la zona. Unio
crassus se considera Vulnerable, pero todas las Náyades se encuentran
amenazadas en distinto grado.
- Potomida litoralis
- Coenagrion caerulescens
- Coenagrion mercuriale
- Onychogymphus uncatus
- Saga pedo
- Carabus ghiliani
- Ceratophyus martinezi
- Maculinea nausithous
80
- Moluscos Bivalvos: Son escasos los datos precisos sobre los Moluscos bivalvos para la
zona de estudio. Recientemente, Velasco y Romero (2006) han recogido las citas de este grupo en
Castilla y León, indicando que una especie no bien identificada taxonómicamente del género Unio
(probablemente Unio pictorum o U. crassus) ocuparía zonas bajas cercanas al área de estudio en
los ríos Moros, Eresma y Riaza, aunque probablemente no penetren en el la zona de estudio pues
corresponden a zonas por debajo de 1.000 m de altitud. También Potomida littoralis ha sido citada
en los ríos Riaza y Duratón, en principio fuera de la zona del PORN. Estas especies y poblaciones
requieren una protección estricta y están propuestas de catalogación como Sensibles a la alteración
de su hábitat en el futuro Catálogo regional de fauna de Castilla y León.
Ambos Bivalvos habitan en fondos de arena, grava y en ocasiones, cieno, y a veces entre las
raíces de los árboles de ribera. Respecto a Potomida littoralis, su biología es muy poco conocida. Se
desconocen los peces hospedadores de las poblaciones españolas, aunque se sospecha que sean
especies del género Chondrostoma.
Algunas medidas de conservación generales para las Náyades y los bivalvos de agua dulce
son conservar o mejorar los ríos donde se han localizado las poblaciones, impidiendo cualquier
alteración de los mismos y regulando los vertidos que contribuyan a eutrofizar las aguas; impedir los
lavados de suelo provocados por las alteraciones en los bosques, evitando que la materia vegetal se
deposite sobre los cauces. Favorecer el desarrollo de los bosques de ribera y evitar dragados,
embalses y encauzamientos de los ríos. Aumentar las poblaciones de peces nativos que puedan
servir de hospedadores de los gloquidios y evitar la proliferación de especies exóticas, tanto de peces
como de otras especies
- Crustáceos:
Austropotamobius pallipes (Austropotamobius itallicus): Ha sido considerado
habitualmente un endemismo ibérico, pero recientes estudios genéticos sugieren que las poblaciones
ibéricas se corresponden con A. italicus (Trontelj et al., 2005), probablemente como consecuencia de
introducciones en el siglo XIX (Alonso, 2004). Su área de distribución se liga fundamentalmente a la
España caliza (Alonso et al., 2000) y tradicionalmente se ha encontrado bien distribuido en la cuenca
del Duero. Actualmente, tras una fuerte regresión ocurrida entre los años 70 y 80 del siglo XX debido
a la afanomicosis, la especie se encuentra acantonada en las cabeceras de las principales cuencas
fluviales ibéricas, así como en pequeñas cuencas que vierten al Cantábrico y al Mediterráneo.
Se localiza en Iberia en cinco núcleos aislados (Alonso et al., 2.000), que de mayor a menor
extensión son: 1) mitad norte de la cuenca del Duero, Cordillera Cantábrica y Prepirineo, 2) Alto Tajo,
Serranía de Cuenca y sistema Ibérico meridional, 3) sierras Béticas, 4) Pirineos orientales y 5) sierras
Levantinas. Su situación actual en el Sistema Central es incierta debido a la ausencia de
prospecciones actualizadas (Alonso et al., 2000). Se encuentra en una grave situación con peligro de
extinción, a nivel ibérico. No existen citas recientes de esta especie en el área de Guadarrama,
aunque sí en las cercanías, al Sur del Sistema Ibérico. Sería fundamental la recuperación mediante
la reintroducción de esta especie en la zona del futuro Parque nacional de Guadarrama.
Habita cauces fluviales de mediano o pequeño tamaño de aguas calcáreas, estando
tradicionalmente ausente de los grandes ríos. También ocupa lagunas y canales y estanques
artificiales. El rango altitudinal se sitúa entre 400 y 1.550 m., tanto en zonas eurosiberianas como
mediterráneas. En la actualidad, la mayoría de las poblaciones se localizan en pequeños arroyos de
cabecera. La alteración antrópica de los ecosistemas acuáticos en que vive, ha sido una causa
81
tradicional de pérdida de poblaciones. Sin embargo, la importación de cangrejos americanos ha sido
la principal causa del fuerte declive de la especie, con un fuerte descenso de poblaciones a partir de
los años 80. Estas especies han sido el cangrejo señal (Pacifasciatus leniusculus) y el cangrejo rojo
(Procambarus clarkii), ambas portadores del hongo Aphanomyces astaci, agente responsable de la
afanomicosis. Actualmente los cangrejos alóctonos se encuentran ampliamente distribuidos y
constituyen un factor serio de amenaza para la recuperación del autóctono al ser reservorios del
hongo.
Las poblaciones residuales de cangrejo autóctono son muy sensibles a los cambios
ambientales bruscos, como sequías o riadas, incendios forestales o a los usos inadecuados, puesto
que habitan medios marginales a menudo sub-óptimos. Las medidas de conservación incluyen
programas de control continuo de las poblaciones de cangrejo autóctono, velando especialmente por
la conservación de su hábitat y la disminución del furtivismo. Se puede y se debe contemplar la
recuperación de poblaciones extintas, mediante translocaciones previo estudio detallado en zonas
donde no existan especies alóctonas. En nuestra opinión sería urgente intentar recuperar el cangrejo
autóctono en las zonas de cabecera de Guadarrama.
Está catalogada como Vulnerable en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y no
clasificado en Castilla-León. Sólo Navarra y La Rioja han aprobado un Plan de Recuperación. Las
poblaciones ibéricas se adscriben al menos a una “Unidad Operativa de Conservación OCU”, para la
cual las estrategias de conservación deben estar basadas en el conocimiento actual sobre la
afanomicosis. Por tanto, se debe adoptar una estrategia de conservación coherente y común,
coordinada entre las distintas comunidades autonómicas.
Procambarus clarki: Cangrejo americano, rojo o de las marismas
Pacifasciatus leniusculus: Cangrejo señal
En la zona estudiada de Guadarrama existen poblaciones establecidas en las zonas bajas de
Cangrejo americano, y en las zonas de aguas más frías, de Cangrejo señal, según nuestras propias
observaciones y datos de la guardería de Medio Ambiente. Se deben controlar las poblaciones de los
cangrejos exóticos, especialmente en el caso del Cangrejo señal, cuya expansión, uso en la pesca
recreativa y /o comercialización deben prohibirse. Para el Cangrejo rojo debe prohibirse su
comercialización en vivo, así como para cualquier otra especie alóctona. Deben estudiarse medidas
específicas de control de las poblaciones ya establecidas.
82
- Insectos: Coleópteros
Cerambyx cerdo: Escarabajo de gran tamaño (hasta más de 5 centímetros de longitud, sin
contar sus largas antenas, por más de 1 cm de anchura.). En la boca presenta unas fuertes
mandíbulas, así como uñas en las patas, que le ayudan a trepar y a sostenerse sobre la corteza de
los árboles. Presenta una distribución muy extendida en la Península Ibérica y habita en los encinares
y robledales húmedos ibéricos. Las larvas viven en las partes muertas de los troncos y ramas,
principalmente de Quercus y en menos medida de Castanea, Salix, Fraxinus, Ulmus, Juglans, Fagus
y Robina. Sin embargo, la reducción de los bosques de Quercíneas y el uso indiscriminado de
plaguicidas químicos de amplio espectro podrían amenazar seriamente a las poblaciones de esta
especie. Su conservación radica en la conservación de encinares y robledales húmedos y en la
restricción del uso de plaguicidas de amplio espectro.
Se incluye en el Anexo II como “especie estrictamente protegida” del Convenio de Berna y en
los Anexos II de la Directiva Habitat como “especie de interés comunitario para cuya conservación es
necesario designar zonas especiales de conservación” y en el Anexo IV como “especie estrictamente
protegida”. Considerada no amenazada en España, no se recoge actualmente en el Catálogo
Nacional de Especies Amenazadas.
Lucanus cervus: Se considera el escarabajo de mayor tamaño de Europa. El dimorfismo
sexual es notable y da lugar a su nombre común. Los machos son mayores que las hembras y
poseen unas mandíbulas muy desarrolladas. La variación morfológica se extiende también a ciertos
detalles en la forma de las mandíbulas y al número de lamelas de las antenas.
Distribuido por la mitad septentrional de la península, está asociado a los bosques
caducifolios, muchas veces del género Quercus. Parece que existen dos subpoblaciones o núcleos,
uno en la franja cantábrica y otro en el Sistema Central. La subpoblación del Sistema Central se
distribuye a mayor altitud (sobre los 1500 m) y suele aparecer asociada a formaciones boscosas de
diversas especies de Quercíneas como Q. pyrenaica, Q. rotundifolia, Q. suber, etc, aunque
probablemente utilice también otras especies caducifolias. Había sido citado en la provincia de
Segovia sin especificar la localidad (Rosas et al., 1992). Sanz & Gurrea (1998) lo citan en
Guadarrama tanto en zonas de encinares como de roble melojo. También ha sido citado en las
manchas de roble melojo de la vertiente madrileña de Guadarrama.
Se incluye en el Anexo III del Convenio de Berna como “especie protegida”. En el Anexo II de
la Directiva Habitat se incluye como “especie de interés comunitario para cuya conservación es
necesario designar zonas de especial conservación”. A diferencia de la anterior, ha sido recogida en
el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas como de interés especial.
Las principales amenazas para esta especie son tanto la pérdida de hábitat como la excesiva
fragmentación de las manchas boscosas. Se ha señalado también como importante la mortalidad en
las carreteras que atraviesan los hábitats forestales. Para la conservación de esta especie es
imprescindible que la gestión forestal incluya la permanencia de una cantidad de madera muerta
suficiente en el sotobosque para que las larvas puedan alimentarse.
Carabus (Oreocarabus) ghilianii. Esta especie de Carábido podría representar, en cuanto a
su biología y hábitat, a muchas de las especies de Carábidos, varias de ellas endemismos españoles
o locales, que habitan las zonas medias y altas de Guadarrama. Endemismo de las zonas
montañosas del Sistema Central, las poblaciones más estables se hallan en las sierras de
Guadarrama y Ayllón. A veces también se localiza en zonas de piornal, en la proximidad de la línea
83
de bosque. Su distribución es discontinua, porque tiende a desaparecer ante las alteraciones del
hábitat de origen humano. Generalmente se halla en densidades bajas, lo que acentúa el riesgo de
extinción local. Se trata de un buen bioindicador del estado de salud de los medios forestales del
Sistema Central. Amenazas sobre la especie son los tratamientos con insecticidas (procesionaria u
otras plagas) y la captura indiscriminada de ejemplares para su venta entomológica. Sobre el hábitat
son amenazas las talas indiscriminadas, la presión urbanística y turística (pistas de esquí, hoteles de
montaña, etc.). La protección más eficaz se consigue protegiendo las zonas forestales y de alta
montaña de Guadarrama.
Ceratophyus martinezi. Este Escarabajo de la familia Geotrupidae es un endemismo ibérico
muy localizado, con una distribución en dos áreas dijuntas en Iberia: las Sierras de Guadarrama,
Alagón y Gredos, y otra en Galicia. En Segovia se le ha citado La Granja y San Rafael. Esta especie
coprófaga se alimenta preferentemente de excremento de caballo, aunque también puede explotar
los de vaca y oveja. Los factores de amenaza son su distribución extremadamente reducida y
fragmentada. El abandono de las actividades agropecuarias tradicionales como la ganadería
extensiva perjudica directamente el mantenimiento de sus poblaciones. Sobre el hábitat puede ser
negativo un excesivo aclareo forestal. Para su conservación, se recomienda el uso tradicional de
actividades agropecuarias de ganado extensivo, que favorece a una gran cantidad de Invertebrados y
en puntos concretos claves evitar la roturación y la eliminación de la cubierta vegetal.
- Lepidópteros:
Graellsia isabelae: Esta mariposa nocturna de la familia Saturnidae se incluye como “de
interés especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas y en el anexo II de la Directiva
Habitat. No se considera amenazada en el nuevo Libro rojo de los Invertebrados españoles (Verdú y
Galante, 2005). Sin embargo es una especie emblemática en Guadarrama, donde fue descubierta por
Graells. Se distribuye en varias sierras de la mitad oriental de la Península Ibérica donde hay
extensas zonas de pinares. La población de la Sierra de Guadarrama se localiza en las provincias de
Ávila, Guadalajara, Madrid y Segovia. Existen otras poblaciones en la Sierra de Albarracín, Montes
Universales y Serranía de Cuenca, Sierras de Cazorla, Segura y Alcaraz. Existen también varias
poblaciones en los Pirineos.
En España la especie está fuera de peligro aunque se trata de una especie vulnerable debido
principalmente a la regresión de su hábitat a causa de los frecuentes incendios que sufren los pinares
mediterráneos. El hábitat de Graellsia isabelae comprende los pisos montano y montanosubmediterráneo, entre los 100 y los 1.700 m de altitud, siguiendo la distribución de las plantas
nutricias de la oruga: el pino silvestre (Pinus sylvestris) y el pino laricio (Pinus nigra). Los principales
factores de amenaza sobre la especie son el uso de productos fitosanitarios en los pinares y los
incendios y deforestaciones de pinares que eliminan la fuente de alimento y en general el hábitat de
esta especie.
Las medidas de conservación específicas son la conservación y buena gestión de los pinares
de Pinus sylvestris y P. nigra, indispensable para su buen mantenimiento. Es necesario regular las
aplicaciones con Bacillus thuringiensis contra la procesionaria del pino. Estas no afectan a sus
poblaciones cuando se realizan en otoño.
Maculinea nausithous: Endemismo ibérico citado en la Sierra de Guadarrama en Madrid y
en Santander, a altitudes entre 1.000 y 1.400 metros. El hábitat de la especie son praderas húmedas,
usadas para la ganadería extensiva de vacuno o con prados de siega, en claros de fresnedas,
hayedos o melojares y con hierba de entre 30 y 100 cm de altura.
84
Las especies del género Maculinea tienen un ciclo reproductor peculiar, con una fase fitófaga
al principio de su vida larvaria y luego parasitando nidos de distintas especies de hormiga del género
Myrmica. M. nausithous deposita los huevos en las cabezuelas de Sanguisorba officinalis. Después
de varias mudas, las larvas de cuarta edad se dejan caer de la planta y esperan a ser recogidas por
hormigas que estén recolectando alimento, aproximadamente a finales de agosto o primeros de
septiembre, al atardecer, hora en la que la actividad de las hormigas del género Myrmica.
En el hormiguero las orugas comen larvas de hormiga. Las orugas poseen glándulas que
segregan una sustancia que imita el olor de las larvas de hormiga, con lo que las hormigas las
recogen, llevan al hormiguero, cuidan y alimentan, llegando a agotar los recursos del hormiguero
durante el invierno. En el verano siguiente las larvas pupan en el interior del hormiguero y un mes
más tarde emergen los adultos en agosto.
Su estatus ha sido calificado como en peligro de extinción en España y como vulnerable a
nivel europeo, pero utilizando las nuevas categorías de la UICN (1994) debe considerarse vulnerable
debido a que al menos un 20% de sus poblaciones están amenazadas por algún tipo de cambio en el
uso del territorio. Maculinea nausithous es la especie más amenazada del género en la Península
Ibérica. Su presencia en sólo once localidades y su dependencia de ciertos usos agrícolas y
ganaderos, hacen que sea uno de los Llepidópteros españoles más amenazados. En todas las
localidades donde vive es poco abundante. Las praderas en las que habita tienen generalmente la
hierba de una altura considerable, pues sus hormigas hospedadoras requieren unas condiciones
microclimáticas de elevada humedad y temperatura suave. Por ello el hábitat de la especie está
limitado a los márgenes de praderas de siega o a praderas que son segadas con un ciclo de dos o
más años. Si las praderas se abandonan el deterioro de las condiciones idóneas es muy rápido y la
mariposa puede desaparecer en muy pocos años.
Las principales amenazas son por tanto el abandono de la ganadería tradicional y el cambio
de uso del suelo (urbanización, infraestructuras, etc. Se ha propuesta la declaración de reservas para
esta especies en zonas de praderas de media y alta montaña, en las que debe mantenerse una
ganadería extensiva.
Euphydryas aurinia: Esta Mariposa diurna vuela desde finales de primavera y en el verano.
Se trata de una especie con una amplia distribución en la península, especialmente en la mitad norte,
ocupando bosques naturales con un sotobosque bien desarrollado. Prefiere bordes de bosques,
senderos y caminos cerca de los arroyos y con una cierta humedad.
Se recoge en el Anexo II como especie estrictamente protegida en el Convenio de Berna. En
la Directiva Habitat, en el Anexo II como especie de interés comunitario para cuya conservación es
necesario designar zonas especiales de conservación. Considerada como no amenazada en España,
no se incluye en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.
Por sus características se puede considerar como un buen bioindicador del estado y manejo
de las masas boscosas autóctonas. Aunque goza de un buen estado, con densidades poblacionales
importantes, ciertas actuaciones, especialmente los clareos, pueden destruir el sotobosque donde
aparece esta especie. Por tanto, su principal amenaza es la destrucción del hábitat forestal. La
conservación de E. aurinia pasa por la protección de dicho hábitat evitando la eliminación del
sotobosque que constituye su fuente de alimento en la fase larvaria.
85
- Odonatos:
Coenagrion caerulescens y Coenagrion mercuriale: Ambas especies se consideran
Vulerables en el reciente Libro rojo (Verdú y Galante, 2005). Especies de Odonatos sedentarias, los
adultos son muy frecuentes entre la vegetación baja de las orillas o en vuelo a poca altura sobre el
agua.
Coenagrion caerulescens es exclusiva del oeste de la Cuenca mediterránea. La subespecie
nominal vive en la Península Ibérica, costa sur de Francia y franja norte de Marruecos y Argelia. En
España se trata de una especie rara y localizada. En el norte de la Cuenca del Duero y en el valle del
Ebro parece ser un poco menos rara. Habita en aguas corrientes de pequeño tamaño, en general
poco profundas, y con abundante vegetación acuática emergente. Son factores de amenaza la
destrucción o alteración de sus hábitats larvarios y en particular las canalizaciones. Se debe
mantener o restaurar la estructura natural de los cauces, con zonas marginales más o menos
encharcadas, y con pequeños brazos laterales someros, donde esta especie puede reproducirse.
Coenagrion mercuriale tiene una distribución iberomagrebí, aunque las poblaciones más
numerosas se encuentran en España, donde habitan preferentemente en aguas corrientes de
pequeña dimensión, que estén soleadas y que presenten una vegetación emergente bien
desarrollada; por ello, sus medios favoritos son los pequeños riachuelos, arroyos o canal de riego
entre campos de cultivo.
En la Península Ibérica habita preferentemente en aguas corrientes de pequeñas
dimensiones, soleadas y con vegetación emergente bien desarrollada. Riachuelos poco caudalosos,
arroyos o canales de riego entre prados o campos de cultivo, a veces con pequeño caudal, son sus
medios favoritos. Es característico de la especie que estos medios suelen ser poco caudalosos. No
aparece asociada a corrientes de agua rápida, o muy caudalosas. En las dos Mesetas parece no
habitar en aguas estancadas. La especie vive desde el nivel del mar hasta los 1.000-1.400 m de
altitud.
Se recoge en el Anexo II del Convenio de Berna como “Especie Estrictamente Protegida” y en
el Anexo II de la Directiva Habitat, “especie de interés comunitario para cuya conservación es
necesario designar zonas de especial conservación”. El Comité Europeo para la protección de la
naturaleza y de los recursos naturales del Consejo de Europa (1998) la considera como “Especie en
Peligro”; El UICN (1996) la clasifica como “especie vulnerable en probable regresión”. Además ha
sido recogida en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas como especie de “Interés Especial”.
Las mayores amenazas se centran en su hábitat, ya que se halla sometido a la contaminación
rural y urbana y a los cambios de costumbres que se están produciendo en la agricultura; todo ello
favorece una regresión en sus poblaciones. Las medidas de conservación se centran en el
mantenimiento de los cauces y caudales que ocupa, ya sea conservando, restaurando o implantando
dicho tipo de cauces. Además se debe proteger el tramo de aguas arriba de ese punto ya que
determina su alimentación con agua, sedimentos y organismos vivos.
Onychogymphus uncatus: La libélula cernícalo tiene un área de distribución reducida,
limitada al Suroeste de Europa y el norte del Magreb. En la Península Ibérica tiene una distribución
bastante fragmentada excepto en Galicia y Cornisa Cantábrica. No es rara en zonas de cabecera de
los ríos, en aguas frescas y bien oxigenadas. La amenaza viene dada fundamentalmente por la
fragmentación de su distribución ibérica y la destrucción o alteración. Vive en aguas corrientes
soleadas, bien oxigenadas y con un cierto caudal, parece preferir los tramos más rápidos. La medida
fundamental para su conservación es mantener el caudal de los ríos donde habita.
Saga pedo: La cigarra o grillo depredador de matorral se distribuye por una buena parte de
Europa Central, Asia y la Península Ibérica. La mayor parte de las citas de la especie corresponden al
86
Guadarrama meridional (Miraflores de la Sierra) La especie se reproduce por partenogénesis
obligatoria, lo que hace que no se conozcan los machos. Ocupa formaciones herbáceas densas, en
rastrojos de campos cultivados, en matorrales silicícolas de jaras y brezales y zarzales, en
formaciones arbustivas de Juniperus sp. y en matorrales altos, con presencia más o menos
abundante de Cytisus scoparius. Los adultos aparecen preferentemente durante los meses de julio,
agosto y septiembre. Como factores de amenaza, tiene un área de ocupación extremadamente
reducida con un tipo de hábitat muy fragmentado y poblaciones muy pequeñas. Sobre la población
las amenazas son el uso de insecticidas (inexistente en la zona de estudio) y la urbanización del
medio.
2.1.8.3.1.2. - Ictiofauna:
Se han citado nueve especies de Peces con seguridad en la zona estudiada de Guadarrama, 6
autóctonas y 3 introducidas. Otras nueves especies han sido citadas en las zonas más bajas del área
de estudio (como la Boga del Duero), por debajo de 1.000 m de altitud; o en zonas cercanas de Ávila
o Madrid, pero no se ha confirmado su presencia dentro del área de estudio. La elevada altitud media
de la Sierra y el carácter de sus ríos, con aguas en general frías y oxigenadas implican que pocas
especies exóticas colonicen los tramos medios y altos. Por ello, podemos concluir que la Sierra de
Guadarrama presenta fundamentalmente su ictiofauna autóctona original al encontrarse por encima
de los 800 m de altitud, donde éstas especies exóticas no se han asentado. Este límite altitudinal
marca además el nivel habitual de distribución altitudinal de la trucha común.
-
Tabla 10. Riqueza de Peces en la zona de estudio y comparación con otros ámbitos territoriales.
Número de
especies en
Castilla y
León2
Ámbito del
PORN
Madrid3
Comunidad de
Madrid4
España5
Europa6
23,68
38
16
22
68
350
72,01
393
283
438
635
1.544
Grupo
taxonómico
Ámbito del
PORN en
Castilla y
León1
Porcentaje
respecto a
Castilla y
León %
Peces
9
Total
Vertebrados
283
La comparación entre la comunidad íctica de la cuenca del Duero (Ávila y Segovia), con 9
especies confirmadas, y la de la zona madrileña con 16 especies, revela una comunidad menos rica,
pero mejor conservada, pues posee más especies autóctonas y menos introducidas o exóticas. En
los tramos medio-altos y altos (tramos salmonícolas) la especie predominante es la Trucha, muchas
veces asociada al Gobio. En tramos algo más lentos, pero bien conservados, encontramos a la Boga,
el Bordallo y, ocasionalmente, la Lamprehuela. En los tramos medios y medio-bajos de la zona de
estudio se añade el Barbo común y empiezan a aparecer algunas especies exóticas. En la zona
madrileña las comunidades piscícolas aparecen dominadas mayoritariamente por Barbus bocagei
(barbo común), Chondrostoma polylepis (Boga de río) y Chondrostoma arcasii (Bermejuela), que
pueblan ampliamente la red fluvial principal y buena parte de los ambientes acuáticos lénticos.
En la tabla 7 podemos ver la distribución de cada especie en diversos tramos de los ríos en el
área de estudio. La especie más significativa es sin duda, por su interés pesquero y conservacionista,
la Trucha común. Por otra parte, existe una diferencia fundamental entre la zona segoviana y la
87
madrileña de Guadarrama, la presencia de numerosas lagunas de origen glaciar (Laguna de
Peñalara, Pájaros, etc.) en las zonas altas de Madrid, lo que posibilita que en estas sea abundante la
trucha e incluso el introducido Salvelino; este último no existe según nuestros datos en la zona
segoviana.
88
Tabla 11. Caracterización de los tramos de ríos del área de estudio según su Ictiofauna, caudal, vegetación
ribereña y régimen de pesca deportiva
Cuenca
Subcuenca
Duratón
Duratón
Tramo Longitud
Caudal escaso y
temporal, fangoso
Rápidos y pozas
Rápidos y pozas
Trucha
Régimen
Rápidos y pozas
Sin vegetación
Vedado
Trucha, Gobio
Rápido y medio
Sin vegetación
4 Km
Trucho, Gobio,
Perca sol
Rápido y medio
Saucedas y Alisedas
Eresma
0,5 Km
Trucha, Gobio
Batán
2 Km
3 Km en
el Parque
Trucha
3 Km
Trucha
Zona
San
1,5 Km
Ildefonso
Boca del
Boca del Asno
4 Km
Asno
Eresma
Valsaín
Milanillos
Víboras
Moros
Pirón
2 Km
Ceguilla
11 Km
Cega
Navafría
Cega
Cega
2,5 Km
5 Km
Torreval
Cega
5,8 Km
5 Km
Cega
La Velilla 3,5 Km
Cega
4,5 Km
Cega
Trucha
2 Km en
Trucha
el Parque
9 Km Trucha, Carpín
Frío
Cega
Barbo,
Bermejuela
Trucha
Trucha
Vegetación
Enebros y escobas
Sauces
12 Km
4 Km
Eresma
Pirón
Calidad
Libre con
muerte
Vedado
Vedado
Cambrones
Siete Arroyos
Eresma
Especies
Pajares
1,5 Km
en el
Parque
Choperas y saucedas
Alisos, Sauces, Fresnos
y Chopos
Pozas y chorreras
Sin vegetación
Temporal, velocidad Arbustos (Sauces y
media
Zarzas)
Temporal, velocidad Arbustos (Sauces y
media
Zarzas)
Rápido y medio
Sauces
Rápidos y pozas
Fresnos y Sauces
Sauces, Abedules,
Trucha
Rápidos
Álamo temblón, Fresnos
y arbustos
Trucha,
Sauces, Abedules,
Bermejuela,
Rápidos
Álamo temblón, Fresnos
Bordallo
y arbustos
Sauces, Abedules,
Trucha
Rápido-Medio
Álamo temblón, Fresnos
y arbustos
Sauces, Abedules,
Trucha
Rápido-Medio
Álamo temblón, Fresnos
y arbustos
Trucha, Boga,
Sauces, Abedules,
Bordallo,
Velocidad media Álamo temblón, Fresnos
Lamprehuela
y arbustos
Sauces, Abedules,
Trucha, Boga,
Velocidad media
Álamo temblón, Fresnos
Bordallo
con algunos rápidos
y arbustos
Boga, Trucha, Velocidad mediaSauces, Abedules,
Bordallo, Gobio baja con algunos Álamo temblón, Fresnos
y Lamprehuela
rápidos
y arbustos
Boga, Trucha ,
Pequeñas Saucedas
Bordallo,
Velocidad mediacon carrizos, eneas y
Gobio,
baja con algunos
juncales; Choperas
Lamprehuela y
rápidos
artificiales
Barbo
Pequeñas Saucedas
Boga, Trucha, Velocidad mediacon carrizos, eneas y
Bordallo y
baja con algunos
juncales; Choperas
Gobio
rápidos
artificiales
Coto con
muerte
Coto con
muerte
Libre con
muerte
Vedado
Vedado
Vedado
Libre con
muerte
Vedado
Vedado
Vedado
Vedado
Libre con
muerte
Coto sin
muerte
Libre con
muerte
Coto con
muerte
Libre con
muerte
Coto sin
muerte
Fuente: Informes inéditos Consejería de Medio Ambiente. Junta de Castilla y León).
89
Figura 7. Riqueza de especies de Peces por cuadrícula UTM 10x10 km en la zona de estudio.
El mapa de riqueza de especies de Peces por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona de
estudio muestra que el mayor número de especies se encuentran en las altitudes medias y en la
vertiente madrileña, por las razones citadas más arriba. Sin embargo los datos disponibles no son
suficientemente fiables al no tener datos precisos sobre las localidades de captura.
- Estado de conservación:
Respecto al estado de conservación, no existe ningún Pez en el Catálogo nacional de
especies amenazadas. En el Atlas y Libro Rojo de los Peces continentales españoles (Doadrio,
2001), se incluye a todas las autóctonas como Vulnerables en las categorías de la UICN. La Directiva
de Hábitat incluye una especie en el Anexo II (Chondrostoma arcasii) y otra en el Anexo V (Barbus
bocagei).
90
Tabla 12: Especies de Peces citadas en el área de estudio, estado de conservación y normativa que los afecta.
Especie
Cuadríc Endemismo
UICN 2001
ulas
ibérico
RD
1095/89
CNEA
RD1118/89
C. Berna
Dir.
Hábitat
Decr1783/2004
Especies autóctonas
Salmo trutta
20
Barbus bocagei
11
Chondrostoma
arcasii
18
Gobio lozanoi
11
Squalius
carolitertii
6
Cobitis calderoni
10
VU 1cde
Pesca comercializa
deportiva
ble
si
LR/NT
Pesca comercializa
deportiva
ble
si
VU A2ce
SI
III
V
SI
III
II
SI
VU A2ce
SI
si
VU A2ce
SI
si
VU A1ace +
2ce
III
NO
Especies introducidas
Oncorhynchus
mykiis
1
NE
Pesca comercializa
deportiva
ble
Si
Carassius auratus
1
NE
Pesca comercializa
deportiva
ble
SI
Lepomis gibbosus
1
NE
SI
Tabla 13. Número de especies de Peces en cada categoría del Catálogo Nacional de Especies
amenazadas
E
0
Peces
AH
0
V
0
IE
0
Tabla 14. Número de especies de Peces en cada categoría de amenaza según la UICN.
Peces
EX
CR
EN
VU
NT
LC
DD
NE
0
0
0
5
1
0
0
3
Tabla 15. Número de especies de Peces en cada categoría de la Directiva de Hábitats
Peces
II
1
IV
-
II y IV
-
V
1
TOTAL
2
- Especies significativas:
Salmo truta: La Trucha común se halla presente en todas las subcuencas de Guadarrama.
Citada en numerosas cuadrículas de 10 x 10 Km del área de estudio. Es la representante típica de las
zonas medias y altas de la Sierra, en aguas rápidas y frías, tanto lagos de montaña como arroyos y
ríos de zonas rápidas. Su alimentación se basa fundamentalmente en Invertebrados bentónicos,
Insectos y moluscos. Los adultos pueden consumir también Peces y Anfibios.
91
La Trucha se distribuye por la mayor parte de los cursos situados por encima de 800 m, en
la orla montañosa que circunda el territorio de Castilla y León. Presenta una gran heterogeneidad
genética, lo que le confiere una gran plasticidad ecológica. Los ejemplares de Guadarrama
corresponden a la línea genética atlántica (García Marín et al., 1999), de la que a su vez pueden
distinguirse varias unidades evolutivas. En los ríos del Oeste de Segovia, en las subcuencas de los
ríos Cega y Adaja, las truchas pertenecen a la línea Duero-Sur, mientras que las truchas de la zona
Este de Segovia (río Duratón, etc) pertenecerían a la línea Duero-Norte.
Se considera Vulnerable y con una tendencia regresiva en España. La especie está
amenazada por introgresión genética procedente de los ejemplares de repoblación, generalmente
centroeuropeos (informe inédito de la Junta de Castilla y León, 1998; Velasco et al., 2005) . En
general, esta introgresión se calcula entre un 5 y un 10%, siendo aparentemente mayor en los ríos del
centro peninsular. La pesca deportiva en muchas regiones así como la pérdida de hábitat por
infraestructuras hidráulicas, aumento de vertidos de origen industrial, urbano y agrícola son también
un factor importante de amenaza.
Tabla 16. Densidad y biomasa de Trucha común obtenida en las estaciones de muestreo durante dos campañas:
(1) primavera, y (2) otoño
Estación
Cuenca
Subcuenca
Densidad 1 Densidad 2
(ind/m2)
(ind/m2)
0
0,009
0,234
0,219
0,208
0,038
Boca del Asno
0,34
0,155
Boca del Asno
0,623
0,244
Valsaín
0,446
0,236
Valsaín
0,619
0,216
0,503
0,1
0,446
0,295
0,022
0,116
0,032
Tramo
Dlb1
Duratón
Duratón
Cb1
Eresma
Cambrones
Cb2
Eresma
Cambrones
Ba1
Eresma
Eresma
Ba2
Eresma
Eresma
Vs1
Eresma
Eresma
Vs2
Eresma
Eresma
Lv1
Eresma
Eresma
Bt1
Eresma
Batán
Mi1
Eresma
Milanillos
Vb1
Eresma
Viboras
F1
Eresma
Frío
Mo1
Eresma
Moros
0,417
0,116
Mo2
Eresma
Moros
0,326
0,117
Mo3
Eresma
Moros
0,06
0,003
P1
Pirón
Pirón
0,186
P2
Pirón
Pirón
0,379
Cg1
Cega
Ceguilla
0,203
C1
Cega
Cega
0,182
C2
Cega
Cega
Navafría
0,166
C3
Cega
Cega
Navafría
0,27
C4
Cega
Cega
Torreval
0,172
C5
Cega
Cega
Torreval
0,654
C6
Cega
Cega
Torreval
0,144
C7
Cega
Cega
0,147
C8
Cega
Cega
La Velilla
0,092
C9
Cega
Cega
La Velilla
0,072
C10
Cega
Cega
0,05
C11
Cega
Cega
0,09
C12
Cega
Cega
Pajares
0,09
C13
Cega
Cega
Pajares
0,031
Fuente: Iberinco; Informes inéditos Consejería de Medio Ambiente. Junta de Castilla y León).
Biomasa 1
(g/m2)
0
7,86
6,85
15,44
20,82
14,15
30,05
6,12
8,02
3,39
12,76
8,21
3,31
13,17
13,2
8,73
7,58
5,83
6,6
24,74
21,37
9,97
4,55
5,89
10,44
6,4
7,206
13,96
3,73
Biomasa 2
(g/m2)
0,09
4,39
5,41
4,85
5,8
8,72
13,07
7,47
5,82
0,48
0,77
2,64
2,59
0,06
92
Oncorhynchus mykiis: La Trucha arco iris es una especie propia de aguas de montaña
introducida desde Norteamérica a finales del siglo XIX (Ugarte, 1929). Puede hallarse en todas las
cuencas hidrográficas, especialmente en aquellos sitios en los que se sueltan ejemplares con fines de
repoblación .Se cultiva en 25-30 piscifactorías de Castilla y León, apareciendo en sus proximidades
ejemplares procedentes de las mismas. Solamente se conocen dos lugares donde parece que se
reproduce en estado salvaje. En Guadarrama se ha citado en las zonas de cabecera del río Pirón. En
el año 2004 se realizaron sueltas por parte de la Junta de Castilla y León en diversos cotos intensivos
de los ríos Duratón (localidades de Carrascal y Fuentidueña), Acebedas (Revenga) y Eresma (Coca)
(En Velasco et al., 2005).
Barbus bocagei: El Barbo común o de Bocage es un Ciprínido de gran tamaño, alcanzando
80-90 cm. Endemismo ibérico presente en las cuencas del Tajo, Duero y Limia. Habita los tramos
medios y bajos de los ríos. En la cuenca del Duero por debajo de los 1.000 metros de altitud. Citado
en todas las subcuencas de los ríos de Guadarrama, sin alcanzar las zonas de cabecera de sus
afluentes.
No se le considera especialmente amenazado, aunque sí con una tendencia regresiva; sin
embargo, parece el Ciprínido autóctono que mejor encaja el deterioro de los ríos y la introducción de
especies exóticas (Velasco et al., 2005)
Las principales amenazas para estas especies son la realización de diversas infraestructuras
hidráulicas, como canalizaciones, construcción de presas, etc; la contaminación por vertidos
industriales, urbanos y agrícolas; la extracción de agua para fines agrícolas y la extracción de áridos
que destruye los frezaderos.
Chondrostoma arcasii: Las Bermejuelas son peces sedentarios y gregarios, propios de ríos
pequeños, tanto en zonas de montaña como en zonas bajas; también en charcas y fuentes. Citada en
numerosos ríos de Segovia como el Cega, Duratón, Esla, Esgueva, Eresma, Riaza y en numerosos
pequeños afluentes de los mismos, comprendiendo hasta 18 cuadrículas UTM de 10 x 10 Km de la
zona de estudio, si bien no existen datos precisos confirmados en 5 de ellas. Se han detectado
diferencias genéticas entre las poblaciones del Noroeste de Castilla y León con respecto al resto de la
región (En Velasco et al., 2005). También se han encontrado híbridos con Bogas (C. polylepis) y
bogas del Duero (C. duriense) en otras zonas de la región, pero no en Guadarrama (Velasco et al.,
2005).
Quizá alguna de las citas de Bermejuelas pueden ser confusiones con la Boga del Duero,
(Chondrostoma duriense) ya que esta se hallaría en las zonas más bajas de Guadarrama, por debajo
de 1.000 m y por tanto fuera del área de estudio del PORN.
En la zona del Guadarrama segoviano está presente en todas las subcuencas donde vive en
arroyos y ríos de montaña formando una asociación común con Salmo trutta. Poblaciones localmente
abundantes, pero en regresión. Los juveniles se sitúan en zonas de poca corriente y profundidad en
las orillas, sin embargo a final del mes de julio emigran hacia zonas más profundas y con más
corriente. Su alimentación es oportunista, basada fundamentalmente en Invertebrados acuáticos.
Como principales factores de amenaza para la especie en España hay que señalar la
introducción de especies exóticas y las repoblaciones de trucha (Salmo trutta). Son muy vulnerables,
dado su pequeño tamaño, a la depredación por Peces ictiófagos y por tanto escasean en las zonas
bajas de los ríos. Otras amenazas son el aumento de vertidos y la alteración de los cauces por obras
hidráulicas, así como la extracción de gravas, que destruye las zonas de reproducción de la especie.
93
Como medidas de conservación se propone el control exhaustivo de las especies exóticas en
la zona del futuro parque nacional. Las obras hidráulicas que fueran estrictamente necesarias tendrían
que realizarse minimizando el impacto que generan en el hábitat de esta especie. Sería necesaria la
depuración de los vertidos industriales y urbanos.
Gobio lozanoi: El Gobio es un Ciprínido de pequeño tamaño presente en la mayor parte de
Europa. En España sería originario sólo de las cuencas del Ebro y Bidasoa. En el resto de la
Península habría sido introducido artificialmente y habría llegado a la cuenca del Duero en el siglo
XIX, habiendo colonizado diversos ríos de la zona como el Voltoya, Cega, Duratón, Eresma, Esla,
Riaza, Duratón, etc.
Los adultos pueden encontrarse en tramos medios de los ríos, de corriente moderada y
fondos de grava, y también en ambientes más lénticos, siempre que haya lugares cercanos donde
existan las condiciones necesarias para su reproducción. No hay citas en los tramos altos de los ríos
de la Sierra de Guadarrama. Son Peces gregarios y bentónicos, que se alimentan básicamente de
macroinvertebrados bentónicos (larvas de Insectos, crustáceos y moluscos). No soporta bien la
contaminación acuática, por lo que parece ser un indicador relativamente bueno de la calidad del
agua.
Como factores de amenaza cabe destacar la introducción de especies exóticas piscívoras,
la realización de diversas infraestructuras hidráulicas, como canalizaciones, construcción de presas,
etc. y la contaminación por vertidos industriales, urbanos y agrícolas. Así como la extracción de agua
para fines agrícolas y la extracción de áridos que destruye los frezaderos.
Como medidas de conservación se propone el control de los vertidos y depuración de los
mismos. Corregir adecuadamente los impactos derivados de las infraestructuras hidráulicas. No dar
concesiones de riego cuando el agua baje por niveles inferiores a los adecuados para la vida de los
Peces. Corregir el impacto de las extracciones de áridos y sólo dar las concesiones imprescindibles.
Realizar un control de las especies exóticas por parte de las administraciones. Impedir la introducción
de nuevas especies exóticas declarando a las nuevas y a la mayor parte de las existentes ya en
España como no pescables.
Squalius carolitertii: El Bordallo es un Ciprínido de tamaño medio, entre 25 y 30 cm,
endémico de la Península Ibérica. Los adultos son zoófagos, tanto sobre Invertebrados como de
alevines de otros Peces en los adultos. Vive en medios muy diversos, encontrándose generalmente
en tramos medio-altos de los ríos, pero también en tramos bajos de aguas remansadas, incluso en
embalses. Sus poblaciones se encuentran en regresión en la mayor parte de su distribución,
especialmente en los tramos bajos de los ríos de la cuenca del Duero, debido fundamentalmente a la
depredación del lucio. Ha sido citado en diversos ríos de Segovia en la zona de Guadarrama (Cega,
Eresma, Esla, Esgueza, Riaza; Duratón, etc.) especialmente en las subcuencas del Pirón, Cega y
Duratón.
Como factores de amenaza hay que citar la introducción de especies exóticas, la mayoría
piscívoras, en los ríos españoles, la realización de infraestructuras hidráulicas como canalizaciones,
construcción de presas, etc., la contaminación por vertidos industriales, urbanos y agrícolas; la
extracción de agua para fines agrícolas y de áridos que destruye los frezaderos.
94
Las medidas de conservación propuestas incluyen el control de los vertidos y la depuración
de los mismos, así como corregir adecuadamente los impactos derivados de las infraestructuras
hidráulicas. Otras medidas son no dar concesiones de riego cuando el agua baje por niveles inferiores
a los adecuados para la vida de los Peces; corregir el impacto de las extracciones de áridos en los
ríos y sólo dar las concesiones imprescindibles; realizar un control de las especies exóticas por parte
de las administraciones; impedir la introducción de nuevas especies exóticas declarando a las nuevas
y a la mayor parte de las existentes ya en España como no pescables. Por último sería necesario
realizar un seguimiento continuado sobre la evolución de sus poblaciones en el parque nacional.
Cobitis calderoni: La Lamprehuela es un Ciprínido de pequeño tamaño (6-8 cm) endémico
de la Península Ibérica. Habita en tramos medios y medio-altos de los ríos con aguas corrientes,
claras y bien oxigenadas. Es una especie sedentaria, bentónica y crepuscular. Prefiere las orillas
someras con fondos de grava y rocas. Se alimenta principalmente de Invertebrados acuáticos en el
fondo de los ríos.
Se ha citado en las cuencas del Ebro, del Duero y parte del Tajo. En Castilla y León aparece
en la zona Norte y Este y ha sido citado en las zonas medias-altas de todos los ríos segovianos y de
todas las subcuencas de Guadarrama. Sus poblaciones en la zona parecen fragmentadas y en
regresión por la alteración de los cauces, contaminación e introducción de especies exóticas,
habiéndose demostrado la influencia negativa del Lucio en las zonas más bajas. Debe destacarse la
extracción de grava en los ríos, lo que destruye las zonas de freza de la especie, así como las obras
hidráulicas y la contaminación por vertidos agrícolas, urbanos e industriales.
Como medidas de conservación se debe realizar un efectivo plan de control de las especies
exóticas, prohibiendo su pesca deportiva y realizando controles selectivos por parte de la
administración. Es necesaria la protección de determinadas áreas donde vive la especie con el fin de
conservar sus poblaciones.
Carassius auratus: Los Carpines son Peces sedentarios y muy gregarios que pueden
superar los 10 años de vida. Es una especie originaria de Asia Central, China y Japón. Su
introducción en aguas españolas debió coincidir en tiempo con la de la Carpa, hacia el siglo XVII,
distribuyéndose en la actualidad prácticamente por todas las cuencas.
Es una especie típica de aguas tranquilas; prefiere tramos de corriente muy lenta y charcas,
es poco exigente en cuanto a la calidad de las aguas, aguanta bastante bien las temperaturas
elevadas, la escasez de oxígeno e incluso cierto grado de contaminación. Su poca exigencia respecto
a las condiciones del agua, le ha permitido colonizar los tramos donde la corriente es muy lenta, e
incluso, numerosos arroyos temporales que durante el estío apenas quedan reducidos a una sucesión
intermitente de pequeñas pozas de agua estancada. La mayor parte de estos cursos de agua se
sitúan en cotas inferiores a los 800 metros.
Su distribución en Castilla y León es amplia en la cuenca del Duero y puntual en las del Tajo y
el Ebro. Falta en las cuencas del Norte y del Miño. En Segovia y Guadarrama se ha citado en las
cuencas del Eresma y del Moros. También se ha detectado su presencia en muchas pequeñas masas
de agua repartidas por toda la Región, tales como charcas de uso ganadero, depósitos de agua
destinados al riego e incluso en lagunas de antiguas explotaciones mineras.
95
Las poblaciones españolas que viven en aguas libres nunca son muy densas por lo que no
pueden ser consideradas como un grave problema de conservación. Sin embargo, debido a su
carácter exótico, parece aconsejable limitar al menos su expansión, favorecida por el uso que se hace
de este pez como cebo vivo.
Lepomis gibbosus: la Perca sol es una especie introducida desde Norteamérica que está
teniendo una rápida expansión en la última década en España y la Cuenca del Duero, donde parece
haberse introducido por pescadores en 1986. En Segovia se encuentra en el embalse del Pontón
Grande (Velasco et al., 2005) y se ha citado puntualmente en la subcuenca del Voltoya. Se hallaría
por tanto en el límite del espacio estudiado.
Este Perca es muy adaptable y puede habitar aguas cálidas, poco oxigenadas y con
abundante vegetación como las de embalses o charcas de poca profundidad. Debido a sus hábitos
alimenticios es uno de los mayores problemas para las especies autóctonas.
- Especies dudosas en la zona de estudio: Diversas especies no han sido citadas en la
zona de estudio, pero se encuentran en sus proximidades, en zonas bajas de la Sierra o bien en la
zona limítrofe de Ávila o enla vertiente madrileña de Guadarrama. Comentamos aquí su presencia
pues podrían ser citadas en el futuro.
Chondrostoma duriense Coelho, 1985: La Boga del Duero se halla en los ríos de las zonas
más bajas de Guadarrama, por debajo de 1.000 m (Velasco et al., 2005) y por tanto fuera del área de
estudio del PORN. Su biología reproductora y dieta son muy similares a los de la Boga de río, C.
polylepis. Ocupa zonas de corriente y también embalses de media montaña. Es necesario comprobar
su muy probable existencia dentro de la zona de estudio.
Chondrostoma lemmingii (Steindacher, 1866): En Castilla León existen dos núcleos
poblacionales de la Pardilla, uno en la cuenca del Tajo y otro en la del Duero, con diferencias
morfológicas, genéticas y ecológicas tan claras que realmente deben considerarse como especies
distintas. El núcleo poblacional de la cuenca del Tajo, en la provincia de Ávila se circunscribe al río
Tiétar, en Arenas de San Pedro, y a la Garganta de Villarejo, en Ramacastañas. El núcleo poblacional
de la cuenca del Duero se restringe a su zona suroeste.
Chondrostoma polylepis (Steindacher, 1864): La Boga de río se distribuye por la cuenca
del Tajo. Ha sido citada en la zona de Guadarrama correspondiente a la Comunidad de Madrid.
Cobitis paludica (de Buen, 1939): La Colmilleja es dudosa en la zona de estudio. Se
distribuye de forma muy fragmentada por el Sur de Castilla y León, fundamentalmente en el sector
abulense de la cuenca del Tajo (zona del río Alberche y Tiétar) así como en la margen izquierda de la
cuenca del Duero. Velasco et al (1995) lo citan en una zona baja del río Duratón, fuera de la zona de
Guadarrama, probablemente debido a translocaciones recientes. Ha sido citada en la vertiente
madrileña del Guadarrama.
Cyprinus carpio Linnaeus, 1758. La Carpa es una especie ampliamente distribuida; no se
encontraría en la zona de estudio debido fundamentalmente a sus requerimientos biológicos, ya que
prefiere aguas de curso lento o estancadas, con fondos limosos y con una temperatura templada o
96
cálida, entre 13-14ºC. Ha sido citada en la cuadrícula VL11, dentro de la zona de estudio, aunque esta
cita se corresponde con la vertiente meridional de Guadarrama, en Madrid.
Squalius alburnoides (Steindachner, 1866). El Calandino aparece citado en varias
cuadrículas pertenecientes al área estudiada. Su distribución podría estar restringida a la cuenca del
Tajo y por lo tanto fuera de los límites segovianos del parque. Su distribución en la cuenca del Duero
parece centrarse más en su zona occidental.
Squalius pyrenaicus (Günther, 1868). El Cacho ha sido citado en la Cuenca del Tajo.
Existen algunas citas cercanas a la zona de estudio, en el embalse del Voltoya, pero ninguna
confirmada en la Sierra de Guadarrama.
Tinca tinca (Linnaeus, 1758). La Tenca se encontraría en las zonas bajas de todos los ríos
en la zona de estudio. Ha sido citada en los ríos Cega, Voltoya, Eresma y en varios embalses y
lagunas de la zona de pinares. Es propia de aguas lentas o estancadas en general con bastante
vegetación. No parece penetrar en las zonas medias y altas de Guadarrama.
Tabla17. Análisis de las especies claves de la Ictiofauna
ESPECIES
AMENAZAS
CLAVES O
MOTIVOS
PRINCIPALES
SIGNIFICATIVAS
Vulnerables
Salmo truta
- Sobrepesca de la
Chondrostoma
según UICN
trucha
arcasii
salvo el Barbo - Introducción de
Gobio lozanoi
(NT)
especies exóticas
Squalius carolitertii
Todas son
(visón y otros Peces)
Cobitis calderoni
endemismos
- Alteración y
Barbus bocagei
ibéricos
contaminación de
arroyos
- Extracción excesiva
de agua de arroyos y
fuentes
MEDIDAS A
TOMAR
- Gestión de pesca
sostenible
- Protección y
mantenimiento del
caudal ecológico
de arroyos
- Erradicación de
exóticas si llegara
a constituir un
problema
OBSERVACIONES
Todas las especies
nativas son
importantes.
La trucha y el barbo
son además especies
de pesca deportiva de
gran interés
No se han detectado problemas graves para la Ictiofauna de Guadarrama, siempre que se
lleve una gestión cuidadosa de la pesca deportiva, en especial referida a la trucha común. Es
importante evitar la repoblación con Salvelinos en las zonas altas y repoblar cuidadosamente cuando
sea necesario con líneas genéticas de trucha de la zona. Es muy importante como medida básica de
gestión de las aguas del futuro espacio natural protegido, el control de la presencia y la eliminación,
en su caso, de las especies introducidas; así como su declaración como especies no pescables con
el fin de evitar nuevas introducciones. Como se ha demostrado en Peñalara, la presencia de salvelino
causa graves alteraciones en las comunidades faunísticas acuáticas, con depredación sobre larvas
de salamandras y competencia con truchas comunes.
La conservación de los Peces de Guadarrama pasa sobre todos por el mantenimiento de la
calidad de las aguas, los caudales mínimos y los bosques ribereños. En el apartado de diagnosis
revisaremos estos problemasen detalle
y las medidas a tomar. Aunque no existen datos
preocupantes de contaminación acuática en la zona de estudio, el aumento de vertidos de origen
urbano, industrial o agrícola es también un factor importante de amenaza, por lo que se hace
necesario el control de estos vertidos y la depuración de los mismos. La ausencia de poblaciones
97
importantes en zonas altas de la Sierra evita la contaminación de ríos y arroyos. En este sentido es
muy importante el control de futuras urbanizaciones en el área del parque o aledaños, por el consumo
de agua y la posible contaminación de arroyos, ríos o fuentes. Es también importante el control sobre
la extracción abusiva por particulares o por empresas (pozos, agotamiento de mananales o desvío de
caudales para riego de prados, etc).
Es también fundamental evitar la proliferación de minicentrales o pequeños embalses con
fines de producción de energía hidroeléctrica o abastecimiento, limitándolas a obras imprescindibles.
Aunque algunos de los ya realizados o en realización como el embalse de abastecimiento de Navafría
pueden tener incluso efectos positivos locales, este tipo de infraestructuras no deben sin embargo
proliferar en un Parque nacional o espacio natural mínimamente protegido.
2.1.8.3.1.3.- Anfibios:
Los Anfibios son un grupo de Vertebrados relativamente bien conocido en Guadarrama.
Existe un atlas provisional para la zona segoviana (Lizana et al., 1995) y datos recientes actualizados
para la vertiente madrileña (García París et al, 1989; ver revisión en Martínez Solano, 2006). La
comunidad de Anfibios del Guadarrama en Madrid y su estado de conservación, y particularmente la
del Parque natural de Peñalara, se conocen bien por diversos trabajos (García París et al., 1989;
Martínez Solano et al., 2004; Martínez Solano, 2006). De acuerdo a los datos existentes, se ha
constatado la presencia de 14 especies en la zona segoviana, lo que supone el 63,6% de los Anfibios
de Castilla y León (Lizana, 2002). La comunidad de Anfibios de la zona es la habitual en las zonas
montañosas de la vertiente norte del Sistema Central (Lizana et al., 1988; 1995; 1991; Martínez
Solano et al., 2003) constituyendo una zona de transición entre la herpetofauna típica del Sistema
Central occidental como Gredos y la más norteña del Sistema Ibérico, como la Sierra de Ayllón.
La riqueza de especies es menor que la de la zona madrileña al no existir el piso
mesomediterráneo que alberga especies más termófilas como el Tritón pigmeo (Triturus pygmaeus) y
la Ranita meridional (Hyla meridionalis), presentes sólo en la vertiente madrileña de la Sierra. Tres
especies son muy poco probables en la zona de estudio, pues se hallan en zonas más bajas o
adyacentes como Ávila o Madrid, pero no se han citado en Guadarrama y necesitamos un mejor
conocimiento basado en muestreos concretos. Debemos de mencionar también al Tritón alpino
(Triturus alpestris), especie introducida en las lagunas de Peñalara, por su expansión en Madrid, pero
que aún no ha colonizado la zona segoviana. El Tritón ibérico (Lissotriton boscai) tiene una
pequeñísima distribución en la zona abulense y parece no llegar a Guadarrama. Son necesarios
muestreos más concretos para esta especie.
Tabla 18. Riqueza de especies de Anfibios en la zona de estudio y comparación con otros ámbitos territoriales.
Grupo
taxonómico
Anfibios
Total
Vertebrados
Ámbito del
PORN en
Castilla y
León1
Porcentaje
respecto a
Castilla y
León %
Número de
especies en
Castilla y
León2
Ámbito del
PORN
Madrid3
Comunidad de
Madrid4
España5
Europa6
14
283
63,63%
72,01%
22
393
17
283
18
438
31
635
1.544
98
Figura 8: Riqueza de especies de Anfibios por cuadrícula UTM 10x10 km en la zona de estudio.
No hay ningún Anfibio endémico de Guadarrama. Dos subespecies son casi exclusivas del
Sistema Central y zonas adyacentes. Son Bufo bufo gredosicola y Salamandra salamandra
almanzoris, antes considerados exclusivos de la Sierra de Gredos y que hoy sabemos que ocupan
una buena parte de las zonas montañosas del Sistema Central (Martínez Solano et al., 2005).
Los Anfibios presentan, en general, rangos altitudinales más amplios que los Reptiles en el
área de estudio. Las zonas más ricas en especies son las bajas y medias de la Sierra, asociadas a la
abundancia de medios acuáticos, pero las más interesantes en cuanto a especies amenazadas
serían las medio-altas (Lizana et al., 1995; Morales et al., 2002).. De las 14 especies de Anfibios
citadas, cinco (un urodelo y cuatro anuros) alcanzan en Guadarrama los 2.000 m de altitud:
Salamandra salamandra, Rana iberica, Alytes obstetricans, Bufo bufo y B. calamita. Rana perezi se
aproxima a esta cota, siendo 1.980 m la máxima altitud citada en la zona. Tres especies, Bufo bufo,
Alytes obstetricans y Rana perezi, presentan los rangos de distribución altitudinal más amplios, desde
el piedemonte (700 m) hasta 2.000 m. A pesar de alcanzar cota elevadas, todas estas especies
tienen su 50 percentil por debajo de 1.400 m, excepto en S. salamandra que se sitúa en torno a 1.800
m, lo que le convierte en el anfibio que se localiza en general a mayor altitud.
De acuerdo a su distribución altitudinal podríamos establecer tres grupos de especies. Las
especies estenohipsas de zonas bajas tienen su 50 percentil en torno o por debajo de 1.200 m y su
75 percentil no supera los 1.400 m (Morales et al., 2002). Son Pleurodeles waltl, Triturus marmoratus,
99
Alytes cisternasii, Pelobates cultripes y en menor medida Discoglossus galganoi. Otros Anfibios
tienen una distribución altitudinal más amplia y alcanzan la zona media como Rana perezi, Hyla
arborea, Bufo calamita o B. bufo. Otro grupo comprende situadas fundamentalmente entre 1.200 y
1.600 m y que ocupan arroyos de montaña como Rana iberica y Alytes obstetricans. En cuanto a las
especies propias de la media y alta montaña solo incluimos a Salamandra salamandra. Es el único
anfibio que sitúa su 50 percentil por encima de 1.600 m siendo más escasa en las zonas bajas del
área de estudio.
Respecto al Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, ninguna especie se considera
amenazada. Once de las 14 especies citadas se consideran como de Interés especial. Las no
catalogadas son Bufo bufo, Salamandra salamandra y Rana perezi
Tabla19. Número de especies de Anfibios en cada categoría de amenaza del Catálogo Nacional de Especies
Amenazadas
E
0
Anfibios
AH
0
V
0
IE
11
Tabla20. Número de especies de Anfibios en cada categoría de amenaza según las categorías UICN 2001
(Márquez y Lizana, 2002) y la propuesta realizada por la AHE en 2005.
EX
EW
CR
EN
VU
NT
LC
NE
DD
Libro Rojo 2002
0
0
0
0
2
6
6
0
0
Libro Rojo 2005
0
0
0
0
2
6
6
0
0
De acuerdo a las categorías UICN (2001) recogidas en el Libro Rojo (Márquez y Lizana,
2002) y a la actualización de 2005 (AHE, 2005), no existen diferencias entre ambos para los Anfibios
de Guadarrama. No hay ninguna especie considerada en peligro de extinción, y dos especies, las ya
citadas Salamandra común y Rana patilarga, son vulnerables. Seis especies son consideradas como
Casi amenazadas (NT), el Gallipato, Sapo partero ibérico, Sapo partero común, Sapo de espuelas,
Ranita de San Antonio y Sapillo pintojo ibérico. El resto de especies no citadas, seis, se consideran
No amenazadas (LC)
Con respecto a la Directiva de Hábitats, únicamente Discoglossus jeanneae aparece como
especie estrictamente protegida (Anexo II) y 9 especies como protegidas (Anexo IV). La Rana verde
común, Rana perezi, se encuentra en el anexo V que incluye especies explotables. El caso de D.
jeanneae resulta difícil de evaluar; fenotípicamente idéntico a D. galganoi, ambas especies parecen
distribuirse de forma vicariante en las mitades occidental y oriental de la Península sin apenas
solapamiento entre ambas; Guadarrama podría constituir una de las pocas zonas en las que se produce
este solapamiento en la distribución de ambas especies. A falta de datos más concretos acerca de la
presencia y distribución de los dos sapos pintojos en la zona, se deben abordar medidas de conservación
globales para ambas especies.
Tabla 21. Número de especies de Anfibios en cada categoría de la Directiva de Hábitats.
Anfibios
II
1
IV
9
II y IV
1
V
1
TOTAL
10
100
En general, todos los Anfibios se constituyen como excelentes indicadores de la salud ambiental
de los ecosistemas debido a su escasa capacidad migradora y a su marcada filopatría, lo que les lleva a
mantener una relación muy estricta con sus hábitats; sin embargo, algunas especies como B. bufo, B.
calamita o R. perezi son bastante ubiquistas, por lo que los efectos de los cambios puntuales en medios
concretos pueden ser difíciles de detectar en estas especies. Otras especies, por el contrario, utilizan un
menor número de biotopos. Así, especies como T. marmoratus son muy sensibles a la desecación
prolongada de los medios acuáticos, mientras que Hyla arborea se ve muy afectada por la destrucción de
la vegetación y por la contaminación del medio.
Los Anfibios pueden ser utilizados por tanto como especies sensoras de los cambios
ambientales, ya que debido a su posición intermedia en las cadenas tróficas, pueden reflejar con
antelación las alteraciones susceptibles de afectar a la globalidad de un ecosistema. El carácter más o
menos específico de las diferentes especies en lo que a requerimientos ecológicos se refiere unido a la
peculiaridad de su ciclo biológico, en el cual se combinan las fases acuáticas con las terrestres, hace de
los Anfibios unos representantes idóneos de los diferentes biotopos presentes en la Sierra de
Guadarrama.
Tabla 22: Estado de conservación de los Anfibios y otra normativa que los afecta. En negrita las especies más
significativas.
Especie
Cuadrículas
Endemismo
UICN (2001)
ibérico
Libro rojo 2002
UICN 2005
CNEA
C. Berna
IE
III
Decreto
D.
Pesca
Hábitat Castilla
y León
Pleurodeles waltl
Salamandra
salamandra
Triturus
marmoratus
Alytes cisternasii
10
NT
NT
9
VU A2ce + B1ab
VU
7
LC
LC
IE
III
IV
NT
NT
IE
II
IV
Alytes obstetricans
Discoglossus
galganoi
Discoglossus
jeanneae
Pelobates
cultripes
Pelodytes
punctatus
Bufo bufo
13
NT
NT
IE
II
IV
3
si
III
9
si
LC
LC
IE
II
IV
4
si
NT
NT
IE
II
II, IV
13
NT
NT
IE
II
IV
2
LC
LC
IE
III
14
LC
LC
Bufo calamita
19
LC
LC
Hyla arborea
13
Rana iberica
7
Rana perezi
20
si
III
IE
II
IV
NT
NT
IE
II
IV
VU A2ce
VU
IE
II
IV
LC
LC
III
V
si
101
- Especies más significativas:
Los Anfibios más representativos por ser endemismos ibéricos o su estado de conservación
en el Guadarrama de Castilla y León son la Salamandra común (Salamandra salamandra) y la Rana
patilarga (Rana iberica), ambas calificadas como Vulnerables en el reciente Libro rojo (Márquez y
Lizana, 2002; AHE, 2005). Ambas especies ocupan en el área de estudio biotopos muy específicos,
siendo especialmente abundantes en las praderas de alta montaña y en arroyos de los bosques
caducifolios y pinares. Los requerimientos de ambas especies en cuanto a elevada humedad relativa y
buena calidad del hábitat en general, ponen a estos Anfibios en serio riesgo en la zona de estudio.
Guadarrama supone para ambas especies el límite oriental de su distribución en la Península, y en
ambos casos se ha detectado un proceso de regresión (Martínez-Solano, 2004; Martínez-Solano et al.
2003; 2005), lo que obliga a proponer acciones concretas para la conservación de los biotopos ocupados
por las mismas.
Tabla 23. Análisis de las especies claves de los Anfibios de Guadarrama y su estado de conservación.
ESPECIES CLAVES
O SIGNIFICATIVAS
Salamandra
salamandra
Rana iberica
Rana iberica
Lissotriton boscai
Alytes cisternasii
Discoglossus galganoi
Discoglossus
jeanneae
MOTIVOS
Vulnerables
según Libro
rojo UICN 2002
Endemismos
ibéricos
AMENAZAS
PRINCIPALES
MEDIDAS A
TOMAR
- Alteración y
contaminación de
arroyos
- Disminución del
agua superficial por
sequía, cambio
climático,
desecación y
extracción abusiva
de agua de arroyos
- Introducción de
especies exóticas,
especialmente
Visón americano
- Es necesario un
estudio a fondo
de la situación de
los Anfibios en la
zona,
especialmente de
Alytes
obstetricans por
la incidencia de la
Quitridiomicosis
en Peñalara
OBSERVACIONES
- S.salamandra y Rana
iberica en regresión en
la zona
- No se conoce bien la
distribución y situación
de Lissotriton boscai y
Discoglossus jeanneae
en la zona
- La pesca de Rana
perezi no debería ser
autorizada en el ámbito
del Parque nacional
Salamandra salamandra: Se encuentra principalmente en los macizos de media o de alta
montaña de toda la Península y alcanza hasta 2.500 m en el Sistema Central. En Guadarrama se
encuentra en arroyos en zonas umbrías de pinares (Pinus sylvestris o Pinus pinea). A partir de 1.800 m
habita zonas de praderas (cervunales) con charcas o lagunillas, tanto en Segovia como en Madrid,
llegando hasta los 2.280 m en Peñalara. A diferencia de Gredos o el Guadarrama madrileño, donde se
encuentra en las numerosas charcas o lagunillas de alta montaña, en la parte segoviana, la ausencia
generalizada de estos medios acuáticos supone que sea mucho más escasa en la alta montaña. No
existen prácticamente citas por debajo de los 1.000 m de altitud en la provincia de Segovia. Parece haber
desaparecido en los últimos 20 años del Sistema ibérico, quizá por alguna enfermedad epidémica.
La Salamandra común en Guadarrama pertenecería a la subespecie S. salamandra bejarae,
común a la mayor parte de la España Central, si bien estudios recientes (Martínez-Solano et al. 2005)
muestran que en algunas zonas se encuentra también S. salamandra almanzoris, hasta ahora
considerada sólo propia de la alta montaña de Gredos.
102
La distribución de la especie se ve afectada tanto por las sequías prolongadas como por los
incendios y la presión turística en zonas de montaña. La introducción de Peces alóctonos en lagunas y
arroyos afecta particularmente a las larvas, pudiendo provocar muy rápidamente la desaparición de las
poblaciones de salamandras (Cinco Lagunas en el macizo de Gredos y en menor grado, la Laguna
Grande en Peñalara). Otros factores que pueden afectar a su distribución son la aridificación del suelo
y la pérdida de puntos de agua en zonas bajas (arroyos, fuentes) o su deterioro.
Problemas específicos del Guadarrama segoviano son la destrucción o alteración de arroyos,
medios acuáticos y pinares. Especialmente preocupantes son los aterrazamientos y construcción de
embalses de pequeño tamaño en Somosierra, que destruyen los arroyos con una cierta corriente, el
hábitat típico de las salamandras en la Sierra.
En la Comunidad de Madrid, Martínez Solano (2006) ha propuesto a la Salamandra como
Vulnerable debido a estar en regresión en toda su área de distribución en Madrid, que es básicamente la
vertiente sur de Guadarrama. Las poblaciones del Parque Natural de Peñalara parecen estar siendo
afectadas por la epidemia de quitridiomicosis que mantiene al borde de la extinción a la población de
Alytes obstetricans. La lado, la distribución global de S. s. almanzoris es muy restringida (Martínez-Solano
et al., 2005).
Rana iberica: La Rana patilarga es un endemismo Ibérico. En Castilla y León ocupa
irregularmente la zona Cantábrica y áreas montañosas del Sistema Central, desde 1.100 m en la
vertiente segoviana de Guadarrama y 950 m en Madrid, siempre en el piso Supramediterráneo.
Alcanza la alta montaña (2.120 m) en Peñalara y 2.400 m en Gredos. No existen citas en Somosierra.
Las citas antiguas de Soria no se consideran fiables en la actualidad o bien podría haberse extinguido
allí. Esto último sería apoyado por haberse encontrado restos Pleistocénicos de las especie en
Burgos, lo que avalaría la regresión de la especie debido a cambios climáticos y a la acción del
hombre por la perdida de hábitats (Martínez-Solano et al., 2005).
Es una especie muy acuática, habita generalmente en la cercanía (praderas, bosques, etc ) de
aguas frías y rápidas. Se reproduce en los arroyos situados en robledales o pinares, así como en las
charcas y pozas en alta montaña. Necesita hábitats forestales bien conservados y aguas limpias, no
contaminadas.
En el Sistema Central occidental (Béjar y Gredos) parece una especie más abundante, aunque
en los últimos años parece haberse detectado su regresión, pero las poblaciones segovianas y
madrileñas se hallan aisladas y son muy escasas (Esteban & Martínez-Solano, 2002; Martínez-Solano et
al., 2005) Las poblaciones de menor altitud de Guadarrama están siendo severamente afectadas por
el creciente impacto turístico y urbanístico que sufren. Por ello, está siendo progresivamente relegada
a las zonas más altas de los cursos de los ríos y arroyos, donde aún se mantienen condiciones más
favorables para su desarrollo. Esta situación está previsiblemente incrementando el aislamiento entre
grupos de poblaciones y, por consiguiente, el riesgo de que se produzcan extinciones locales
(Martínez-Solano et al., 2005). Entre las amenazas más importantes para la especie se encuentran la
alteración y destrucción directa del hábitat, así como la introducción de especies exóticas,
especialmente salmónidos y algunos Mamíferos como el visón americano.
En la Comunidad de Madrid, Martínez Solano (2006) propone a Rana iberica para el Catálogo
regional como “En Peligro”, debido a sus pequeñas poblaciones limitadas a las áreas de montaña de
103
Guadarrama, en regresión en los últimos años y con una variabilidad genética reducida (Esteban &
Martínez-Solano, 2002; Martínez Solano et al., 2005b; Bosch et al.,2006).
- Otras especies de Anfibios de interés: A continuación, detallaremos la distribución y estado
de conservación del resto de especies de Guadarrama, siguiendo un orden taxonómico.
Pleurodeles waltl: Ocupa los dos tercios de meridionales de la Península Ibérica. En Castilla y
León en general se encuentra por debajo de los 1000 m de altitud, pero puede alcanzar los 1.500 m.
Esta distribución es la que se puede observar en la parte segoviana de Guadarrama, donde se halla
fundamentalmente en áreas bajas, inferiores a 1000 m, pero asciende hasta los 1500 m (piso
supramediterráneo). En el Guadarrama madrileño y la zona abulense se halla desde las zonas más bajas
hasta 1.600 m (pisos meso y supramediterráneos). La presencia de vegetación arbustiva o arbórea en
ambos pisos no parece afectar a su distribución, que sí parece condicionada por medios acuáticos
estables o semipermanentes. Es probable su presencia en todas las zonas bajas de la provincia de
Segovia, si bien no existen citas en la mayor parte de las mismas. En la zona caliza la ausencia de
medios acuáticos duraderos puede hacer que sea más escaso o más concentrado.
Ocupa diversos medios acuáticos como charcas, abrevaderos, albercas, estanques y zonas
lentas de arroyos y ríos. Es poco exigente en cuanto a la limpieza o turbidez del agua, siendo una de las
especies de tritones y salamandras, junto al Tritón jaspeado, más adaptables y ubicuas.
Las amenazas y problemas para su conservación son las mismas que para la mayor parte de
Anfibios; destrucción de medios acuáticos por obras e intensificación de la agricultura, biocidas, etc, si
bien es probablemente el urodelo más resistente a la contaminación y degradación de los medios
acuáticos. Es capturado frecuentemente por pescadores de caña.
Triturus marmoratus: Desde la separación de Triturus marmoratus en dos especies, la
nominal y Triturus pygmaeus, se considera que T.marmoratus ocupa la mitad Norte de la Península
Ibérica y casi toda la región de Castilla y León. El Sistema Central (y quizá el Ibérico) sería la divisoria
entre ambas especies, aunque T. marmoratus sobrepasa el Sistema Central hacia el Sur en algunas
zonas de Segovia, Madrid (Valle del Lozoya) y Oeste del Sistema Central (Sierra de Gata).
Aparece en zonas bajas y de media altitud, en general hasta 1.600 m, pero alcanza 2.100 m
en Peñalara, Madrid. Todas las citas en la zona segoviana se encuentran entre 900 y 1400 m. Es
probable que se distribuya en toda la provincia de Segovia, aunque sería más escaso en las zonas
calizas. Ocupa medios acuáticos de escasa corriente, bien naturales o artificiales, como charcas,
lagunas, arroyos, pilones, fuentes y a veces en zonas remansadas de ríos. Necesitan vegetación
acuática de hojas anchas donde fijar sus huevos. La presencia de cierta cobertura vegetal arbustiva o
arbórea parece importante como hábitat durante su fase terrestre.
Es una especie abundante en la mitad Norte y Occidental de la Península; haciéndose más
raro a medida que nos dirigimos hacia el Este y Sur de la Península. En Castilla y León parece haber
disminuido en las zonas centrales de la región, debido a la falta de medios de agua permanentes y la
progresiva aridificación de estas zonas. Como para la mayor parte de los Anfibios de zonas bajas, la
mayor amenaza se encuentra en la desaparición de las zonas de reproducción por urbanización,
destrucción o contaminación de los medios acuáticos. En Madrid se señala además la introducción de
Peces foráneos (Gambusia, perca sol) que depredan sobre larvas y adultos.
104
Discoglossus galganoi: La distribución de los Sapillos pintojos, D. galganoi y D. jeanneae,
no está aún clara en la Península Ibérica y concretamente en la zona estudiada en Guadarrama.
Ambas especies son crípticas, con morfología y diseño similares, pero con una notable distancia
genética entre ambas. D. galganoi ocuparía la mitad Oeste de Iberia y por tanto gran parte de la
región de Castilla y León, excepto Soria, parte de Segovia y gran parte de Burgos. Existen zonas del
Sistema Central segoviano donde la asignación a D. galganoi y D. jeannae es problemática (Salvador y
García París, 2001; Salvador y García París, 2002).
En Segovia se localiza en áreas bajas y de media montaña de la Sierra hasta 1.600 m en el
Sistema Central, pero en el Guadarrama madrileño alcanza 1.800 m (García París, 1997). No es una
especie abundante y parece más frecuente en el piedemonte de la Sierra.
En la zona de estudio lo encontramos en praderas, zonas arbustivas y forestales (robledales,
encinares, pinares, etc..) próximos a medios acuáticos, en general de pequeño tamaño. Para
reproducirse, utiliza generalmente pequeños medios temporales, a veces simples charcos con
independencia del grado de cobertura vegetal. Parece más dependiente de sustratos graníticos o
metamórficos, aunque también ocupa áreas calcáreas (ver D. jeanneae).
La destrucción y contaminación de los arroyos serranos y la desaparición de medios acuáticos
artificiales como pilones o fuentes serían las mayores amenazas en la zona, aunque también pueden
reproducirse en medios muy temporales.
Discoglossus jeanneae: Se distribuye en la zona oriental de la Península, desde Cádiz a
Huesca, fundamentalmente en sustratos calizos. En Castilla y León y de acuerdo a sus preferencias
respecto al uso de sustratos calizos y a los estudios genéticos en curso, D. jeanneae estaría presente
en las zonas calcáreas de baja altitud de Segovia, Soria, Burgos y Palencia (Salvador & García Paris,
2001; Lizana, 2005). Es necesario realizar muestreos de campo y estudios genéticos sobre las
poblaciones de Castilla y León para clarificar su estatus taxonómico y distribución en la zona.
No existe información precisa sobre esta especie en Castilla y León, Podemos suponer una
historia natural similar a D. galganoi, con excepción quizá del uso de sustratos calizos, con los
problemas de disponibilidad de agua superficial propios de estas zonas. Por esta razón, sería más
dependiente de medios acuáticos artificiales como fuentes o pilones.
Alytes cisternasii: El Sapo partero ibérico es un endemismo Ibérico que se distribuye por el
centro y suroeste de la Península. Ha sido citado en zonas bajas del Sistema Central en ambas
vertientes. En las zonas de montaña en las que se halla en simpatría con A.obstetricans, se halla a
menor altitud que éste. Se encuentra en el área basal de Guadarrama en ambas vertientes de la Sierra
(García Paris & Martínez Solano, 2001; Lizana et al., 1995; Morales et al., 2002)
Hay citas relativas a la vertiente norte abulense y segoviana, en zonas inferiores a 1.000 m de
altitud, y una cita dudosa en Montejo de la Vega. En principio, podría estar presente en todas las zonas
bajas de Segovia, aunque no es abundante en la zona segoviana de Guadarrama. Sólo un mayor
esfuerzo de muestreo podría determinarlo con seguridad.
En Madrid llega hasta 1.100 m de altitud. Como es una especie bastante excavadora, prefiere
suelos blandos y algo arenosos, en la cercanía de medios acuáticos como charcas y arroyos, pero
105
también de pilones y fuentes. Parece más ligado a zonas arenosas que A. Obstetricans. Asociado a
bosque mediterráneo aclarado y zonas más abiertas, pero también en está presente en pinares. En
alguna zona baja podría hallarse en sintropía con A. obstetricans.
Como otros anuros que se reproducen en medios acuáticos temporales o artificiales, la escasez
y desaparición de éstos puede ser una amenaza importante. Las larvas parecen soportar mal la
contaminación de los medios acuáticos y la introducción de Peces y cangrejos es muy perjudicial. En
Madrid, su mayor problema parece la desaparición del bosque mediterráneo y medios acuáticos por
urbanización o alteración del medio, escombreras y contaminación de charcas. No hay datos en Segovia,
aunque las amenazas son probablemente las mismas.
Alytes obstetricans: Se distribuye en la mitad norte de la Península, con penetración hacia
el Sur por el Levante y Portugal. Ha sido citado en toda Castilla y León, aunque con muchos huecos
en el centro de la región y Cordillera Cantábrica. Es una especie más montana que A.cisternasii, no
supera en general los 1.600-1.700m en Gredos, aunque alcanza 2.000 m en las lagunas de
Peñalara, Madrid. Aparece asociado al piedemonte del Sistema Central (y Guadarrama), desde las
zonas basales hasta la alta montaña. Su presencia es dudosa en las zonas más bajas de Segovia,
aunque son necesarios más muestreos en esta zona. Mientras en Gredos no supera en general los 1500
m de altitud, en las zonas madrileñas de Guadarrama (Peñalara) alcanza la alta montaña,
probablemente por la existencia de medios acuáticos apropiados y una orientación más meridional.
Ocupa diversos hábitats, generalmente laderas pedregosas, pinares, robledales, canteras o
praderas de alta montaña, siempre en la cercanía de medios acuáticos. Las puestas pueden hacerse en
arroyos, charcas, pilones, etc, preferentemente en aguas remansadas con vegetación acuática, salvo en
alta montaña donde pone en charcas y lagunillas en cervunales.
Son amenazas para esta especie la degradación y contaminación por biocidas y fertilizantes
de los medios acuáticos y los atropellos en zonas puntuales. Las poblaciones de montaña parecen
estar en mejor estado, salvo cuando se introducen Peces. Se ha observado mortandad masiva por
bacterias como Aeromonas (enfermedad de la pata roja) en el Pirineo u hongos del tipo
Quitridiomicetos en las lagunas de Peñalara, Madrid.
Pelobates cultripes: En Castilla y León existen citas del Sapo de espuelas por toda la región
excepto en la Cordillera Cantábrica, pues no penetra en las zonas altas de los sistemas montañosos.
No supera en general los 1.500 m de altitud. La cita de mayor altitud de la región se encuentra en la
Sierra de Gredos, a 1.770 m. Se encuentra ampliamente distribuido en zonas de baja o media altitud
en Segovia y Madrid (hasta 1.500 m), sin sobrepasar el piso supramediterráneo.
Como especie cavadora, se halla asociada a suelos arenosos o sueltos, en zonas abiertas con
vegetación mediterránea, encinares, quejigares, matorral. Habita también praderas y el borde de zonas
cultivadas, sin preferencias en cuanto a la cobertura vegetal. Puede hallarse en pequeñas charcas
someras o lagunas sin vegetación, turbias, etc.
Se considera una especie no amenazada, pero datos antiguos sobre la abundancia de sus
poblaciones en Castilla y León indicarían una fuerte regresión (Valverde, 1967). Las causas serían el uso
masivo de fitosanitarios y plaguicidas, la muerte por arado profundo ya que se entierran superficialmente
106
y la introducción de Peces en medios acuáticos. A pesar de ello, sigue siendo un sapo presente, aunque
no abundante, en muchas zonas agrícolas.
Pelodytes punctatus: Hay que destacar la reciente separación y descripción del Sapillo
moteado meridional, Pelodytes ibericus (Sánchez Herráiz et al., 2000). Dado que su distribución parece
restringirse a la zona meridional de Iberia, las poblaciones de la zona de estudio corresponderían a P.
punctatus.
En Castilla-León parece asociado a las zonas calizas del Norte y Noreste de la región, como la
mayor parte de Burgos y Soria, y más localmente en Segovia, Palencia, Valladolid y Este de Zamora.
Existen pocas citas en el centro de la región, probablemente por falta de muestreo. Recientemente
Balmori (2000) lo ha citado en nuevos lugares de Valladolid y Palencia. Es muy escaso o ausente en la
mayor parte de Guadarrama (Lizana et al., 1995). Las citas bibliográficas existentes en el centro de
Somosierra parecen dudosas. Se hallaría también en la confluencia con Guadalajara y Soria.
Probablemente ligado a zonas calizas de la provincia ya que las larvas parecen necesitar carbonatos
para su desarrollo, aunque se necesita un muestreo exhaustivo de este área de la provincia. En Madrid
se asocia a las zonas de yesos y calizas donde alcanza hasta 1100 m de altitud.
Se reproduce generalmente en medios acuáticos temporales, pudiendo soportar un alto grado de
salinidad. Se muestra Indiferente a la cobertura vegetal acuática y de las orillas, aunque se halla, en
general, en zonas soleadas y de vegetación mediterránea abierta. También ocupa cuevas, cavidades o
grietas. Parece existir una regresión de la especie debida a la desecación y canalización de arroyos y
pérdida de medios acuáticos artificiales, dada la escasez de agua en las zonas calcáreas donde habita.
Bufo bufo: El Sapo común se distribuye por toda la Península Ibérica y Castilla y León, si
bien en las zonas centrales de la región las citas son más escasas, en parte por falta de prospección,
pero también probablemente por regresión en las últimas décadas. Parece ser abundante todavía en
arroyos, charcas y praderas en las zonas montañosas de toda la región. Hay citas repartidas por toda
la Sierra de Guadarrama. Se halla en todos los pisos bioclimáticos y hábitats, ocupando también las
zonas de alta montaña, hasta los 2110 m en Peñalara (Madrid), y los 2300-2400 m en la Sierra de
Gredos. Sin embargo no está presente en las zonas altas de las sierras segovianas en la abundancia
que muestra en las lagunas glaciares de Gredos o Peñalara.
Las poblaciones de Guadarrama se han considerado habitualmente como pertenecientes a la
subespecie B.bufo spinosus, si bien los últimos análisis genéticos revelan que las poblaciones del
Sistema Central se incluirían en B.bufo gredosicola, considerada antes endémica de la Sierra de Gredos.
Se reproduce en diversos medios acuáticos: charcas, arroyos, estanques y embalses, en aguas
remansadas y generalmente más profundas que en el caso de Bufo calamita. En zonas bajas parece
estar en regresión debido a la destrucción de su hábitat, en especial reproductor, y aplicación masiva de
biocidas. Los atropellos durante sus migraciones parece ser otra importante causa de mortalidad para el
sapo común.
Bufo calamita: El Sapo corredor está presente en toda la Península Ibérica con excepción de la
zona franja costera Cantábrica. En Castilla y León existen citas en toda la región, aunque son muy
escasas en la zona central, probablemente por falta de prospección y quizá también por regresión. Se
distribuye desde las zonas más bajas hasta la alta montaña, hasta 2.400 m de altitud en Gredos y 1.950
107
m en el Sistema Ibérico. Esto se debe en gran parte a la posibilidad de ocupar medios muy temporales,
como charcas de lluvia o deshielo.
Aunque es una especie más ligada a zonas de vegetación mediterránea, puede hallarse en todo
tipo de hábitats: zonas de cultivo, pinares, encinares o praderas de alta montaña. Probablemente se halle
en toda la provincia de Segovia.
Se reproduce en medios acuáticos remansados, con o sin vegetación y en general de poca
profundidad y/o temporales. No suele utilizar medios ocupados por Peces o cangrejos. Es un buen
colonizador que ocupa rápidamente charcas en graveras o canteras abandonadas, pilones, abrevaderos,
etc.
Parece en rápida regresión en las zonas centrales de la Comunidad castellano leonesa y otras
zonas por el uso agrícola intensivo y la rápida disminución del agua superficial disponible. Parece una
especie bastante sensible a la contaminación de los medios acuáticos por fitosanitarios o biocidas. Fuerte
impacto en algunas localidades por atropello.
Hyla arborea: Se encuentra en toda la región castellano-leonesa, si bien existen zonas sin
citas en el centro. Aparece en zonas bajas y medias, alcanzando en general 1.600-1.700 m, aunque
en laderas soleadas alcanza la alta montaña, como 1.980 m en Peña Negra (Ávila) o 2.100 m en el
Guadarrama madrileño. Existen citas en Segovia a todas las altitudes, aunque hay pocos datos en
zonas de alta montaña. Parece más abundante en Guadarrama que en Somosierra; no hay citas en
Ayllón. En Madrid aparece ligada a la zona de Sierra desde el piedemonte hasta 1.950 m de altitud.
Generalmente ocupa medios acuáticos permanentes (charcas, arroyos, ríos, lagunas, etc)
con vegetación en sus orillas, especialmente zarzas, juncos, carrizos, etc dada su capacidad
trepadora; y medios con vegetación acuática sumergida donde camuflarse durante el cortejo y
puesta. Parece bastante sensible a la calidad del agua.
Es una especie en regresión en España debido al aislamiento de poblaciones producido por
la desertificación y desaparición de medios acuáticos, lo que también estaría sucediendo en el centro
de la región castellano-leonesa. Como se ha demostrado en diversas poblaciones europeas, se
extingue con facilidad en pequeñas poblaciones aisladas.
Son amenazas y problemas para su conservación la destrucción de vegetación ribereña de
charcas y ríos, la contaminación de medios acuáticos por biocidas o vertidos de origen agrícola o
ganadero y la urbanización de zonas basales de la Sierra.
Rana perezi: La Rana verde es el Anfibio más abundante y ubicuo en la Península Ibérica.
Posee un amplio rango de distribución altitudinal en Castilla y León, desde las zonas más bajas a la
alta montaña. En Gredos es abundante hasta 1.700 m, aunque alcanza los 2.000 m. Se halla en toda
el área de Guadarrama, ocupando desde las zonas más bajas de la provincia de Segovia hasta la alta
montaña (1.990 m en Peñalara) si bien es más escasa a partir de 1.700 m como también sucede en
Gredos. El cambio climático parece que está elevando su límite altitudinal.
Se reproduce en todo tipo de medios acuáticos: charcas, pilones, estanques, arroyos, pozas, etc;
si bien prefiere aguas permanentes y con vegetación acuática. Es muy resistente a la contaminación y a
las alteraciones del hábitat, es el único anfibio que se encuentra en zonas muy degradadas.
108
Es el único Anfibio sometido a “pesca deportiva” en Castilla y León, si bien no existen datos
rigurosos sobre cuales deberían ser los cupos de captura en las diversas zonas de la región, en
función de su abundancia. Un problema específico es la introducción de ranas verdes alóctonas para
su cría, como la rana toro americana (Rana catesbeiana), que se criaba de forma ilegal en varios
puntos de la región, aunque no hay ninguna evidencia de su presencia en Guadarrama.
- Anfibios dudosos para la zona de estudio: Recogemos en este apartado algunas especies
de Anfibios que no han sido localizadas en la zona de estudio, pero se hallan en áreas cercanas, en la
parte madrileña de Guadarrama o en zonas cercanas de Ávila. En general son especies termófilas, y por
tanto consideramos improbable su presencia en la zona castellano-leonesa. Dada la falta de muestreo
exhaustivo en gran parte del área de estudio, podría haber sorpresas en este sentido.
Triturus alpestris (Laurenti, 1768): El Tritón alpino ocupa en la Península Ibérica la región
Norte, con excepción de Galicia y Pirineos; es decir la mayor parte de la Cordillera Cantábrica, desde
Asturias a Navarra. En Castilla y León ocupa las zonas montañosas de mayor altitud de León,
Palencia y Burgos. La mayor altitud a la que se ha citado es 2.300 m. Existe una población
introducida, parece ser que desde principios del siglo XX, y que está en expansión, en lagunillas
situadas por encima de 2100 y hasta 2300 m, en el Macizo de Peñalara, en Madrid (De Lope y
Cuadrado, 1985; Arano et al., 1991). No hay citas en el lado segoviana de Guadarrama (Lizana et
al., 1995).
No parece probable la colonización de las zonas altas segovianas, salvo por introducción
humana, debido al aislamiento por la zona de cumbres, poco apropiada para el tránsito de Anfibios,
entre las masas de agua de ambas vertientes de la Sierra y la no existencia de lagunillas y charcas
apropiadas en el lado segoviano.
Triturus pygmaeus (Wolstertorff, 1905). El Tritón pigmeo ha sido recientemente descrito
como nueva especie (García París et al., 2001). Se hallaría en la mitad meridional de la Península,
desde el Sistema Central a Andalucía (Salvador & García París, 2001). Los datos moleculares más
recientes (García París & Martínez Solano, com. pers.) indican que T. pygmaeus se halla al menos
en la vertiente sur de la Sierra de Gredos y otras zonas del Sistema Central, pero que no penetra en
la zona segoviana de Guadarrama (Salvador & García París, 2001; Velasco et al., 2005).
Como se ha señalado para Madrid (García París, 1998) T. pygmaeus está desapareciendo
de muchas zonas por la urbanización de los alrededores de medios urbanos y rurales, lo que implica
la destrucción directa de los medios acuáticos, su alteración, contaminación, vertidos, etc. No existen
datos para Castilla y León.
Hyla meridionalis (Boettger, 1874): La Ranita meridional se distribuye por la Península
Ibérica, Sur de Francia y Norte de África. Recientemente se ha descubierto que es una especie
introducida desde el Norte de África (García París, en prensa). Presenta una pequeña distribución en
Castilla y León ya que el Sistema Central constituye el límite Norte de su distribución en el occidente
ibérico. Sólo ha sido citada en el Sur de Ávila (Valle del Tiétar, Gredos) y Sur de Salamanca en las
zonas más bajas, por debajo de 700-800 m.. Diversas citas antiguas de Segovia (Riaza, 1.240 m) y
Soria no son aceptadas actualmente. Las localidades más cercanas se hallan en la vertiente meridional
de Gredos (Lizana et al., 1991) o en Madrid, por lo que dudamos de su presencia en el Guadarrama
109
segoviano. Su distribución parece estar ampliándose hacia el Norte en Castilla y León por la mejora
del clima, como se ha señalado en Salamanca (Merchán et al., 2005).
Es una especie ligada a zonas húmedas permanentes (charcas, arroyos, ríos, lagunas, etc)
en general con vegetación en sus orillas, especialmente zarzas, juncos, carrizos, etc, dada su
capacidad trepadora. La destrucción de la vegetación ribereña y cualquier factor que destruya o
contamine los medios acuáticos es una amenaza para la especie.
110
2.1.8.3.1.4.- Reptiles:
Los Reptiles son un grupo de Vertebrados relativamente bien conocido en Guadarrama.
Existe un atlas provisional de la herpetofauna para la zona segoviana (Lizana et al., 1995) y datos
recientes procedentes del atlas de Madrid (Martínez Solano, 2006). Se han citado 21 especies de
Reptiles en la zona segoviana, lo que supone el 67,74 de los de Castilla y León (Lizana, 2002), a las
que hay que añadir una especie introducida, el Galápago de Florida, aunque su presencia sería
provisional y no permanente, dada la dureza del clima de la zona.
Debemos hacer un comentario concreto sobre una especie de Lagartija descrita para
Guadarrama, Algyroides hidalgoi, el Algiroide de Hidalgo, descrita por Eduardo Boscá en 1916 y
cuya “terra typica” era San Ildefonso, Segovia. Esta lagartija nunca ha sido encontrada en la zona de
Guadarrama. La posterior descripción por J.A. Valverde de Algyroides marchi en la Sierra de Cazorla
lleva a pensar en una equivocación de la localidad de captura en su descripción, aunque la
descripción de ambas especies no coincide plenamente. Nunca sabremos si pudo existir una lagartija
endémica de las zonas más húmedas de Guadarrama que llego a extinguirse en la zona, o se debió a
una equivocación de Boscá o de otro transcriptor de la localidad.
La importancia del Sistema Central para la herpetofauna española, como sucede en el caso
de las ZEPAs para las Aves y las ZIMs para los Mamíferos, que detallaremos más adelante, se ha
señalado en diversas ocasiones (Lizana et al, 1998; Bosch et al., 1998; Mateo, 1997, 2002) tanto por
la riqueza de especies de Anfibios y Reptiles, como por los endemismos propios del Sistema Central
y el contener especies endémicas y amenazadas. El análisis de Mateo revela que tanto Gredos como
Guadarrama tienen una composición similar, con 1 especie en peligro de extinción (UICN), 5
Vulnerables y un número similar de especies de herpetofauna y 14 endemismos ibéricos.
Área
Sierra de Gredos
Guadarrama y Peñalara
CR
0
0
EN
1
1
VU
5
5
nº
37
35
END
15
14
La propuesta de red de Áreas de Interés para la herpetofauna realizada para el Ministerio de
Medio Ambiente (Mateo, 2002) indica que todo el Sistema Central, Gredos y Béjar (Lizana et al.,
1998) y la Sierra de Guadarrama (Bosch et al., 1998), con Peñalara poseen una gran diversidad y
riqueza de especies de herpetos, debida, como se ha indicado en varias ocasiones en el apartado de
fauna, en la heterogeneidad ambiental y climática causada por las montañas, la presencia de un piso
muy cálido en la vertiente sur y ambientes de alta montaña en las zonas de cumbres.
Tabla 24. Riqueza de especies de Reptiles en la zona de estudio y comparación con otros ámbitos territoriales.
Número de
especies en
Castilla y
León2
Ámbito del
PORN
Madrid3
Comunidad de
Madrid4
España5
67,74%
31
24
24
62
71,57%
393
283
438
635
Grupo
taxonómico
Ámbito del
PORN en
Castilla y
León1
Porcentaje
respecto a
Castilla y
León %
Reptiles
22
Total
Vertebrados
282
Europa6
1.544
111
La riqueza de Reptiles del Guadarrama de Castilla y León es menor que la de la zona
madrileña al no existir el piso mesomediterráneo cálido que alberga varias especies más termófilas
como la Lagartija colirroja (Acanthodactylus erythrurus), la Culebra de herradura (Hemorrhois
hippocrepis) y la Culebra de cogulla (Macroprotodon brevis). Estas especies podrían hallarse en las
cercanas sierras de Ávila o en zonas de piedemonte de Guadarrama, siempre en los encinares más
mediterráneos, pero el límite altitudinal de la zona estudiada en el PORN los dejaría fuera del
inventario del área de estudio. El Galápago europeo (Emys orbicularis) ha sido citado en la vertiente
madrileña o sur de Guadarrama pero no en Ávila o Segovia. Paradójicamente sí existen algunas citas
escasas del Galápago común (Mauremys leprosa) en la vertiente norte de Guadarrama, por lo que
quizá pueda encontrarse también allí. Son necesarios muestreos para conocer la situación de ambos
galápagos en la zona de estudio.
En general, la herpetofauna ibérica, y los Reptiles, se encuentra bien representada en el
área de estudio. Las perspectivas para la mayor parte de las especies no son muy positivas si
continúa el progresivo deterioro de los diferentes hábitats de la zona. Tanto los Anfibios como
los Reptiles son muy sensibles a la alteración local de sus biotopos específicos, por lo que se
requiere una acción integral, aunque considerando cada medio independientemente, de
protección del conjunto de los ecosistemas para mantener en buen estado las poblaciones de
nuestros herpetos.
Figura 9. Riqueza de especies de Reptiles por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona de estudio.
112
La riqueza de los Reptiles en las cuadrículas UTM (10x10km) muestra una mayor abundancia
de especies en la vertiente meridional de Guadarrama y en la zona sur del área de estudio, como
consecuencia de que es un territorio más cálido. Por otro lado, muestran el mayor número de citas en
las zonas cercanas a Ávila debido a una mayor intensidad de muestreo y que disminuyen hacia el
Sistema Ibérico. Entre los hábitats terrestres de la Sierra que muestran una mayor riqueza de reptiles
destacan los afloramientos rocosos, y en especial las zonas de media montaña. Formaciones de
matorral, como jarales, piornales y otros matorrales son también importantes para mantener la
riqueza de este grupo. La importancia de las cabeceras fluviales y de los arroyos en general se debe
al ser el hábitat del endémico Lagarto verdinegro, Lución y Galápago común en zonas bajas.
En cuanto a la distribución altitudinal de los Reptiles, sólo para dos especies, Iberolacerta
cyreni y Podarcis muralis, se han recogido citas por encima de 2.000 m en el área de estudio (Lizana
et al., 1995; Morales et al., 2002). Se aproximan a esta cota, superando los 1.800 m, Lacerta
schreiberi y Chalcides bedriagai; y un ofidio: Coronella austriaca. La Lagartija carpetana sitúa su
mediana en torno a 1.900 m y presenta un rango intercuartílico estrecho entre 1.900 y 2.000 m, sin
encontrarse citas por debajo de 1.800 m. La Lagartija roquera (Podarcis. muralis) sitúa su mediana
de altitud a 1.600 m, aunque con un rango intercuartílico amplio entre 1.500 y 1.700 m. Aunque de
forma escasa, está presente en las zonas bajas de la sierra, con citas desde 1.150 m de altitud. El
resto de los Reptiles citados tienen su mediana por debajo de 1.400 m.
Al igual que en los Anfibios, atendiendo al 50 percentil altitudinal podemos establecer tres
grupos de Reptiles. Por debajo de 1.200 m encontramos especies estenohipsas de baja altitud como
Psammodromus algirus, Psammodromus hispanicus, Chalcides striatus o especies con rangos
altitudinales amplios pero que no alcanzan la alta montaña como Lacerta lepida y Podarcis hispanica.
En zonas medio-altas de la sierra encontramos a Lacerta schreiberi y Podarcis muralis. En este
intervalo altitudinal se localizan las escasas citas recogidas para el Lución, Anguis fragilis, el Eslizón
ibérico (Chalcides bedriagai) y la Culebrilla ciega (Blanus cinereus).
No existen citas de Reptiles que alcancen la cota altitudinal de 2.000 m en Guadarrama, si
bien claramente existe un defecto de muestreo de las zonas de cumbres. Sólo la Culebra lisa europea
(Coronella austriaca) y la Víbora (Vipera latasti) alcanzan o se aproximan a 1.800 m. Coronella
austriaca se ha citado siempre por encima de 1.500 m. Vipera latasti parece más abundante en las
zonas de media montaña, entre 1200 y 1300 m. Malpolon monspessulanus y Elaphe scalaris son las
serpientes que localizan su mediana a menor altitud en el área de estudio, situándose ésta por debajo
de 1.000 m. Coronella girondica presenta también un rango altitudinal extrecho situado en las cotas
más bajas del área de estudio. Para las dos especies del genero Natrix no se han recogido citas por
encima de 1.600 m de altitud.
De acuerdo a la distribución altitudinal de los Reptiles localizados en el Sistema Central
segoviano podemos establecer varios grupos. En el primero hallamos especies con rangos
altitudinales estrechos y localizados en zonas bajas, desde la zona basal de la Sierra hasta los 1.300
m aproximadamente. Incluimos en este grupo: A. erythrurus, P. algirus, P. hispanicus, B. cinereus,
Ch. striatus, M. monspessulanus, E. scalaris y C. girondica.
En cuanto a los Reptiles se observa un máximo en la riqueza de especies en el intervalo
altitudinal de 1.100-1.300 m. En este estrecho rango altitudinal se encuentran representadas el 95 %
de las especies de Reptiles citadas en Guadarrama. A medida que ascendemos en altitud disminuye
la riqueza de especies aunque para ls Reptiles la disminución parece ser más acentuada que para
113
los Anfibios; entre 1.600 y 1.800 m se encuentran representados el 44,7% de los Reptiles citados, en
el intervalo altitudinal 1.800-2.000 el 26,3% y la cota de 2.000 m tan sólo la superan el 10 % de las
especies de Reptiles.
Iberolacerta cyreni y Coronella austriaca; estas especies, especialmente C. austriaca, podrían
estar sometidas en la zona a un proceso de regresión consecuencia de una serie de impactos entre los
que destaca el cambio climático, manifestado en la progresiva desertificación del medio y el aumento de
las temperaturas. Algo similar podría estar ocurriendo con Anguis fragilis, especie cuyas observaciones
en Guadarrama se han reducido de manera preocupante en los últimos años (P. Galán, com. pers.). A
estos impactos globales se une el continuo proceso de fragmentación y aislamiento al que las especies
más montanas se ven sometidas a causa de la incesante presión humana, proceso especialmente crítico
en los casos de las especies eurosiberianas que cada vez cuentan con una disponibilidad menor de
hábitats idóneos.
De los Reptiles presentes, tres ocupan hábitats acuáticos, el Galápago Mauremys leprosa y
las culebras acuáticas Natrix maura y Natrix natrix. Se localizan en la Sierra en ambientes húmedos
de baja–media altitud (<1.050 m). Las especies restantes ocupan hábitat terrestres, aunque en algún
caso con gran dependencia del agua como en el Lagarto verdinegro Lacerta schreiberi. Entre los
hábitat terrestres de la Sierra que muestran una mayor riqueza de Reptiles destacan los afloramientos
rocosos, y en especial las zonas medias y altas. Formaciones de matorral, como jarales, piornales y
otros matorrales acidófilos montanos con predominio de leguminosas son también importantes hábitat
para mantener la riqueza de este grupo. La importancia de las cabeceras fluviales de los ríos y
arroyos para la conservación de la herpetofauna en general, está ampliamente apoyada por varios
trabajos e inventarios (Mateo, 1996, 2002).
- Estado de conservación:
Con respecto al Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, no existe ninguna especie
amenazada, mientras que 16 de las 20 citadas se califican como de Interés especial. Las especies no
catalogadas son el Galápago común, Lagarto ocelado, Culebra bastarda y Víbora hocicuda. Debemos
señalar que hemos utilizado para la lagartija carpetana (Iberolacerta cyreni) las categorías del CNEA
aplicables a Lacerta monticola, aunque recientemente se han separado como especies distintas a las
poblaciones del Sistema Central (I.cyreni) de las de la de la cordillera Cantábrica y Galicia
(I.monticola).
Tabla 25. Número de especies de Reptiles en cada categoría del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas
Anfibios
E
AH
V
IE
0
0
0
17
Con respecto a las categorías de la UICN, hemos utilizado tanto las del Libro rojo de 2002
(Márquez y Lizana, 2002; En Pleguezuelos et al., 2002) como las propuestas recientemente por la
AHE (2005). De los 21 Reptiles autóctonos presentes en la zona de estudio, en el Libro rojo de 2002
sólo el Galápago común se consideraba vulnerable. En la revisión de 2005, tres Reptiles han sido
catalogados como vulnerables: Iberolacerta cyreni, Mauremys leprosa y Vipera latasti. Tres especies
se consideran como Casi amenazadas (NT), el Lagarto verdinegro, Culebra lisa europea y Culebra
lisa meridional. En nuestra opinión, varias especies en declive no se incluyen como amenazadas y
deberían ser estudiadas en profundidad; entre ellas, el Lución y las dos especies de Eslizones. Es
114
muy probable que existan poblaciones desconocidas del Galápago europeo en la zona de estudio.
Trece especies se consideran como de preocupación menor (LC). Una especie, el galápago de
Florida o de orejas rojas, no se ha evaluado (NE) por ser una especie exótica introducida.
Tabla 26 Número de especies de Reptiles en cada categoría de amenaza según las categorías UICN-2001
(Márquez y Lizana, 2002) y las propuestas por la AHE (2005).
EX
EW
CR
EN
VU
NT
LC
DD
NE
Libro Rojo 2002
0
0
0
0
1
3
16
0
1
UICN 2005
0
0
0
0
3
3
14
0
1
Respecto a la Directiva de Hábitat, dos especies se encuentran estrictamente protegidas, en
el anexo II, pero también en el IV, el Galápago común o leproso y el endémico Lagarto verdinegro.
Otras 5 especies se hallan en el anexo IV, los dos ya citados, más Anguis fragilis, el Lución, parece
que en declive en la zona de estudio, Podarcis muralis y Coronella austriaca.
Tabla 27. Número de especies de Reptiles en cada categoría de la Directiva de Hábitats.
II
2
Reptiles
IV
5
II y IV
2
V
-
TOTAL
5
Tabla 28. Estado de conservación de los Reptiles y otras normativa que los afecta. En rojo y negrita las
especies más importantes.
Especie
Mauremys leprosa
Blanus cinereus
Anguis fragilis
Chalcides bedriagai
Chalcides striatus
Tarentola mauritanica
Acanthodactylus
erythrurus
Iberolacerta cyreni
Lacerta lepida
Lacerta schreiberi
Podarcis hispanica
Podarcis muralis
Psammodromus algirus
Psammodromus
hispanicus
Coronella austriaca
Coronella girondica
Rinechis scalaris
Malpolon
monspessulanus
Natrix maura
Natrix natrix
Vipera latasti
Trachemys scripta
Cuadrículas
Con citas
3
6
3
1
5
3
Endemismo
ibérico
si
si
1
UICN LR 2002 UICN 2005
VU A2ac + A 3c
LC
LC
NT
LC
LC
CNEA
C. Berna
D. Hábitat
VU
LC
LC
LC
LC
LC
II
III
III
II
III
III
II, IV
IE
IE
IE
IE
IE
LC
LC
IE
III
NT
LC
NT
LC
LC
LC
VU
LC
NT
LC
LC
LC
IE
IE
IE
IE
IE
II
III
II
III
II
III
3
LC
LC
IE
III
8
2
7
LC
LC
LC
NT
NT
LC
IE
IE
IE
II
III
III
8
LC
LC
12
5
9
1
LC
LC
NT
NE
LC
LC
VU
NE
6
14
15
17
15
14
si
si
introducida
IV
IV
II, IV
II, IV
IV
IV
III
IE
IE
III
III
III
115
Tabla 29. Especies clave o significativas de Reptiles en el área de estudio. En negrita las más importantes.
ESPECIES CLAVES
AMENAZAS
OBSERVACIO
MOTIVOS
MEDIDAS A TOMAR
O SIGNIFICATIVAS
PRINCIPALES
NES
Vulnerable
- No se conoce la
- Existen muy
- Los Reptiles de alta
Iberolacerta cyreni
montaña (I.cyreni,
según UICN
distribución real o el
pocos datos
Mauremys leprosa
C.austricaca, o
sobre las
(2002) y UICN
estado de
P.muralis) son
conservación del
serpientes de
(2005)
Guadarrama.
especialmente
Galápago común (y
Casi
Lacerta schreiberi
quizá el Galápago
- Habría que
vulnerables a la
Amenazado
Coronella austriaca
modificación de su
europeo) en Segovia
adecuar algunas
Coronella girondica
(NT) según
y Guadarrama
zonas negras
hábitat. No existen
Vipera latasti
UICN (2002)
(vallados
datos actualizados
- Es urgente
Vulnerable
solucionar los
selectivos y
sobre sus poblaciones
Vipera latasti
UICN (2005)
pasos inferiores)
- Parece existir un
problemas
taxonómicos sobre
en las
fuerte declive del
Blanus cinereus
Iberlacerta cyreni,
carreteras que
Lución en Guadarrama
Iberolacerta cyreni
atraviesan el
- Los Reptiles acuáticos Podarcis hispanica o
Endemismos
Lacerta schreiberi
Parque para
son sensibles, como los incluso P.muralis
ibéricos
(Vipera latasti es
evitar atropellos
para la zona de
Anfibios, a las
prácticamente un
de Reptiles y
amenazas sobre los
estudio
endemismo ibérico)
Anfibios
medios acuáticos
- Especies significativas:
Teniendo en cuenta la distribución, rareza y estado de conservación de los Reptiles, varias
especies pueden ser consideradas como muy significativas e importantes en este grupo. La lagartija
carpetana de Guadarrama (Iberolacerta cyreni cyreni) sería una subespecie endémica de esta Sierra.
Según Arribas (2002, 2005) se diferenciaría de las lagartijas carpetanas del Sistema Central
occidental (Sierras de Béjar y Gredos: Iberolacerta cyreni castiliana). Las amenazas para la Lagartija
carpetana parecen estar en la fragmentación y desaparición (cambio climático) de sus hábitats. Son
muy vulnerables a las infraestructuras en alta montaña, como pistas forestales, pistas de esquí,
remontes, construcciones, como se ha demostrado en la vertiente madrileña.
El caso del Galápago leproso podría asemejarse de los Anfibios por su dependencia de una
buena conservación de los medios acuáticos de zonas bajas. M. leprosa puede considerarse como un
potencial bioindicador de la calidad de los ecosistemas debido fundamentalmente a su estricta
relación con el medio acuático y a sus necesidades de cursos de agua estables y libres de
contaminación.
Además de Iberolacerta cyreni y M. leprosa, en la Directiva de Hábitat se cita a Lacerta
schreiberi como especie estrictamente protegida e íntimamente ligada al medio acuático y ribereño,
propio de arroyos en el bosque caducifolio o pinar y de bosques de galería, siendo éstos los biotopos
que mayor regresión han sufrido en los últimos tiempos en la Sierra. Los bosques galería se hallan
muy fragmentados en al zona de estudio.
Iberolacerta cyreni: La Lagartija serrana o carpetana era considerada hasta hace poco
tiempo como una subespecie de Lacerta (Iberolacerta) monticola. Su elevación a rango específico la
convierte en una especie endémica del Sistema Central español, apareciendo desde la Sierra de Béjar
en Salamanca hasta el puerto de Somosierra en Segovia y Madrid. El estado taxonómico del género
116
Iberolacerta está todavía en un intenso debate, debido a la descripción reciente de varios taxones
subespecíficos y específicos. Arribas (1996, 1999a,b,c, 2000) elevó a rango específico las poblaciones
del Sistema Central como Iberolacerta cyreni, separando ésta en tres subespecies: I.cyreni
martinezricai (posteriomente I.martinezricai) que ocuparía la Peña de Francia en Salamanca y áreas
limítrofes (incluidas Batuecas y Sierra de Gata); I.cyreni castiliana en Béjar y Gredos, y I.cyreni cyreni
en Guadarrama.
En la zona de Guadarrama, la Lagartija carpetana ocupa únicamente zonas de alta montaña, en los
pisos oro y crioromediterráneo (entre 1.760 y 2.430 m en Peñalara), en ambas vertientes de Guadarrama
(desde el Puerto de Cotos) y Somosierra. No se encuentra en Ayllón, donde la lagartija que ocupa las
zonas más altas es Podarcis muralis. En algunas zonas del Guadarrama en torno a 1.700-1,800 m
convive con Podarcis muralis, aunque I.cyreni ocupa generalmente las zonas rocosas y P. muralis el suelo
o los taludes Se la considera un relicto del periodo glacial, por lo que estaría en regresión histórica por
el cambio climático que conlleva la disminución de las áreas climáticas de alta montaña, lo que motiva
que Lagartijas muy competitivas como Podarcis muralis o P. hispanica, estén aumentando su
distribución en altitud, compitiendo o desplazando a la Lagartija carpetana.
Mientras que en Gredos es abundante en hábitats óptimos como las praderas con rocas cerca
de las lagunas glaciares, en otros lugares del Sistema Central como el Guadarrama segoviano, las
poblaciones están mucho más fragmentadas, con bajas densidades y probablemente en regresión.
Algunas amenazas para la especie en la zona de Guadarrama son la urbanización de las zonas de
alta montaña para usos turísticos relacionados, fundamentalmente, con el esquí (pistas,
aparcamientos, construcciones); construcción de parques eólicos, etc.
Mauremys leprosa: El Galápago común o leproso está presente en el Norte de África,
Península Ibérica y Sur de Francia. Se distribuye en la mayor parte de la Península, salvo Galicia,
cornisa Cantábrica y la parte Sureste. En Castilla y León está presente en la mitad Oeste y Sur. No
existen casi citas en el centro de la Meseta, donde las condiciones ambientales actuales sólo
permiten su presencia en pequeños enclaves aislados, por lo que la fragmentación de poblaciones
sería una grave amenaza. Ocupa zonas de baja altitud, que se corresponden con los pisos
bioclimáticos termo y mesomediterráneos, siendo raros los contactos por encima de los 1000 m. No
hay citas estrictamente en el área del parque nacional, considerando ésta por encima de los 1.000 m en
el Sistema Central segoviano. Sin embargo, puede haber alguna población no conocida en arroyos bien
conservados en zonas de menor altitud. Se encuentra en la zona madrileña del Parque y se ha citado en
algunas zonas del centro de la provincia de Segovia como el cañón del Duratón (Lizana et al., 2005). Es
probable su presencia en algún enclave aislado bien conservado de algunos de los ríos del área de
estudio, pero es necesario un muestreo exhaustivo para comprobar su presencia y el estado de
conservación de las poblaciones.
Ocupa medios acuáticos remansados (charcas, lagunas, ríos e incluso embalses) con cierta
independencia de la vegetación ribereña, aunque deben de existir refugios como rocas, troncos, etc, y
suficiente alimento. También se encuentra en ríos o arroyos temporales si persisten pozas en el
verano.
En la mayor parte de Castilla y León estaría en regresión. La desaparición del agua superficial
por sobreexplotación de acuíferos e intensificación de la aridez le estarían afectando muy
negativamente en la zona. Con vistas a su conservación es necesario un control más exhaustivo de la
captura de animales y de la utilización de pesticidas y sustancias químicas en las zonas agrícolas.
117
También sería recomendable la recuperación de terrenos transformados y abandonados,
fundamentalmente graveras, para fijar poblaciones, así como el control y la regulación de la actividad
de pesca del Cangrejo rojo americano que produce capturas accidentales de la especie. Igualmente
deberían realizarse estudios que establecieran las interferencias de las especies introducidas y las
metodologías para su control o eliminación.
Trachemys scripta y otros Galápagos introducidos: Las citas de diversas especies de
Galápagos liberados en la naturaleza son cada vez más abundantes en la Sierra de Guadarrama,
generalmente en la cercanía de poblaciones y embalses como los de La Granja, Moros, etc. (Teófilo
Martín Gil, com. pers.). Desconocemos la abundancia de estas poblaciones aunque suponemos que
no se reproducen en la zona por la dureza del clima. Es necesario el control y recogida de todos los
ejemplares localizados, pues compiten negativamente con los Galápagos autóctonos.
Lacerta schreiberi: El Lagarto verdinegro es un endemismo ibérico que ocupa toda la
franja Cantábrica, Galicia y mitad Norte de Portugal, así como el Sistema Central desde Gata hasta
Ayllón. Existen diversas poblaciones aisladas en el Sur de Portugal, Cáceres y Toledo. En Castilla y
León se encuentra en el Sistema Central, Noroeste de Zamora y Norte de las provincias de León,
Burgos y Palencia. En Segovia ha sido citado desde las zonas basales de la Sierra (> 1.000 m) siendo
más abundante en los arroyos de zonas de media montaña en Guadarrama, Somosierra y Ayllón.
Es una especie muy dependiente de la humedad ambiental, necesita al menos 800 mm de
precipitación anual y temperaturas medias anuales superiores a 4ºC. Su hábitat típico son sotos
fluviales y bosques caducifolios, pero también roquedos, pedregales y pastizales de montaña,
siempre húmedos. En la región aparece ligado a las orillas de arroyos o pequeños ríos en zonas de
montaña, desde las zonas basales del Sistema Central (400 m), generalmente hasta 1.700 m,
mientras que en algunas zonas (como Gredos) puede llegar incluso a 2.100 m en laderas soleadas.
Se encuentra en regresión en la mitad Sur de la Península y en las zonas basales del Sistema
Central por el incremento de la aridez y la disminución del agua superficial y el caudal de los arroyos.
Las amenazas sobre la especie en Guadarrama están relacionadas sobre todo con la alteración de
los arroyos y la vegetación ribereña por la tala, quema, modificación y desvío de cauces o
construcción de pequeñas presas que anegan su hábitat característico. Puede ser una de las especies
riparias más afectadas por el exceso de extracción de agua para embotellamiento como sucede en el río
Cambrones. En Madrid se ha detectado su disminución en zonas con mucha influencia de visitantes en
Cercedilla o Guadarrama. Se ha indicado también que la expansión del Visón americano por los
arroyos del Sistema Central, y especialmente en Guadarrama, podría afectarle por depredación, si
bien sólo hay observaciones puntuales. Se necesitaría un estudio de densidades en base a
transectos en todo Guadarrama y relación con la presencia y dieta del Visón americano
- Distribución y estado de conservación del resto de especies:
Blanus cinereus: La Culebrilla ciega es un endemismo ibérico. Es una especie termófila que
habita en la región bioclimática Mediterránea. En Castilla y León es, por tanto, escasa o desaparece
en el Norte y resulta frecuente en la mitad Sur de la región, especialmente en las zonas montañosas.
Hay pocas citas en el área de estudio de Guadarrama, algunas en Montejo de la Vega. Parece mucho
más frecuente en la zona madrileña, en zonas basales de la Sierra y hasta 1200 m de altitud (Lizana et
118
al., 1995, Morales et al., 2002), especialmente en los encinares del piso mesomediterráneo. Es necesario
un mayor muestreo en la zona de estudio.
Ocupa hábitats mediterráneos, en suelos poco compactados, disgregados y algo húmedos
debido a su modo de vida subterráneo y cavador. Aparece generalmente en zonas pedregosas o
muros de piedras en bosques abiertos o praderas. Es una especie más abundante en zonas bajas,
pero llega hasta los 1.800 m en el Sistema Central.
No se poseen datos concretos sobre amenazas para la especie, aunque probablemente la
roturación y alteración de hábitats forestales pueda condicionar su presencia.
Anguis fragilis: Está presente en la mitad Norte de la Península Ibérica, siendo el Sistema
Central su límite Sur. Es una especie higrófila, por lo que en Castilla y León ocupa sobre todo las
zonas montañosas que circundan la región, en general en bosques caducifolios, praderas y enclaves
húmedos de encinares. Ocupa zonas basales y medias de montaña, pareciendo más escasa hacia el
Este del Sistema Central.
Hay muy pocas citas en la zona segoviana del área de estudio y en Madrid. Necesita una mayor
prospección para conocer su distribución en la zona, aunque como en todo el Sistema Central, parece
una especie escasa. Es más abundante en el Oeste y las zonas montañosas de Castilla y León y muy
escaso o ausente en el centro de la región. Algunas poblaciones podrían haber desaparecido en la
zona de San Rafael (Segovia) Son amenazas el abandono de la agricultura tradicional y silvicultura
en el Sistema Central.
Tarentola mauritanica: En Castilla y León se distribuye en las zonas más termófilas del
Oeste de la región (Arribes salmantinos y zamoranos) y al Sur del Sistema Central. También aparece
en zonas bajas de la cuenca del Duero, especialmente en valles fluviales como el del Tormes o el
Duero.
En la zona de Guadarrama ha sido citada hasta 1.380 m en la zona madrileña y existen
únicamente dos citas en la zona segoviana, en Navafría y una cita dudosa en Montejo de la Vega, por lo
que es necesario un muestreo exhaustivo para corroborar su distribución en la zona. En la región las
citas de mayor altitud llegan a 900 m. Ocupa zonas de influencia mediterránea, generalmente
soleadas y con refugios como paredes de piedra, troncos y zonas rocosas, también es muy frecuente
en construcciones humanas, ya que es una especie muy antropófila.
Chalcides bedriagai: El Eslizón ibérico es un endemismo ibérico presente en la región
Mediterránea. El escaso número de citas podría estar relacionado con la fragmentación de sus
poblaciones, aunque también hay probablemente un defecto de muestreo debido, en gran parte, a
que los individuos pasan bastante desapercibidos en las praderas de hierba alta. En Castilla y León
se ha citado en todas las provincias excepto en León. Sólo hay una cita recogida en la zona de
estudio en Segovia, en el Puerto de Navafría, a 1.850 m de altitud. Sin embargo, es probable su
presencia en la mayor parte del Sistema Central. En Madrid se encuentra en zonas bajas, hasta 1180 m
de altitud en los valles del Tiétar y el Alberche y en la Sierra de Guadarrama. , alcanzando 1.500 m en
Gredos.
Ocupa hábitats muy variados como matorral mediterráneo, zonas arbustivas y boscosas,
praderas, etc, generalmente con piedras o rocas donde refugiarse y situados en zonas de llanura y
119
media montaña. En general es más termófilo que el eslizón tridáctilo, aunque el hallazgo en Segovia a
una elevada altitud cuestiona que se halle sólo en zonas bajas. Es necesario un mayor esfuerzo de
muestreo para este eslizón. En general sus poblaciones son escasas, aisladas y fragmentadas, muy
ligadas a medios forestales aclarados. Las mayores amenazas parecen ser la alteración de los
hábitats forestales y los incendios.
Chalcides striatus: El Eslizón tridáctilo se distribuye por la mayor parte de la Península,
tanto en las zonas Eurosiberiana como Mediterránea. Existen citas por toda la región de Castilla y
León, siendo más abundantes en el Sistema Central y norte de Burgos. Su distribución es más
escasa en la zona central de la Meseta, quizá por falta de muestreo o por incremento de la aridez en
esta zona. Parece escaso en la zona segoviana de Guadarrama, con citas muy puntuales, aunque de
manera general es más abundante que el eslizón ibérico y tiene una distribución altitudinal más amplia.
En Madrid ha sido citado hasta 1.400 m (Rascafría: García París et al., 1989a,b). Sánchez y Pérez
Mellado (1983) lo citaron hasta 1.800 m en la parte segoviana de Guadarrama.
Ocupa ambientes generalmente eurosiberianos o húmedos, también mediterráneos como
pastizales de borde o claros de bosque, prados de siega húmedos o encharcados, borde de bosques
caducifolios, siempre con suficiente refugio. Parece más frecuente en zonas bajas de la Sierra,
ocupando pastizales y zonas marginales de sembrados y huertos. No parece estar amenazado, pero
existe poca información al respecto. Se ve afectado por la agricultura intensiva, pues queda aislado
en poblaciones fragmentadas muy sensibles. El abandono de los prados de siega y cultivos
tradicionales en montaña, con el consiguiente aumento del matorral es desfavorable. El incremento
de la aridez en el centro peninsular parece estar también fragmentando su distribución.
Acanthodactylus erythrurus (Schinz, 1834): La Lagartija colirroja se distribuye por el Norte
de África y zona Mediterránea de la Península Ibérica, en zonas costeras y depresiones del interior
peninsular. En Castilla y León está presente en las zonas más cálidas del Sur y Oeste de la región,
con algunas citas escasas en zonas bajas (dehesas) de Ávila, Salamanca y Zamora. No ha sido
citada en Valladolid, Palencia o Burgos. Existen algunas citas en el Sur de Soria. Posiblemente se
encuentre en más zonas arenosas de la Meseta, pero falta prospección.
Esta presente justo en el límite altitudinal del área de estudio, debido a la altitud considerada en
el PORN, por encima de 1.000 m. En recientes muestreos del verano de 2006 (P. García y M. Lizana,
inédito) lo hemos encontrado en las zonas basales de la vertiente Norte, en zonas arenosas en
encinares. Podemos por tanto incluirlo entre la fauna del área estudiada, si bien es realmente muy
escaso. Ha sido citado en el límite sur del PORN con Ávila, en el río Voltoya (Lizana et al., 1995; Morales
et al., 2002). Podría hallarse también en algunas zonas arenosas y secas del centro de la provincia de
Segovia. Se halla en la vertiente meridional de Guadarrama en Madrid, desde su zona basal hasta
aproximadamente 1.200 m.
Es una especie adaptada a medios abiertos, especialmente encinares, en zonas de escasa
pendiente, preferentemente con sustratos arenosos o sueltos y con matorrales dispersos. Necesita
fuerte insolación, por lo que se halla en zonas de baja altitud, no superando los 1.000 m en Castilla y
León. No parece especialmente amenazada y muchas veces ocupa zonas marginales no cultivadas.
Algunas actividades, como el claramiento de zonas arbustivas, favorecen su expansión.
Lacerta lepida: El Lagarto ocelado es una especie propia del Suroeste de Europa que se
encuentra ampliamente distribuida en la Península Ibérica, con excepción de las zonas costeras
120
cantábricas. En Castilla y León se distribuye desde las zonas bajas hasta la media montaña, no
sobrepasando generalmente los 1750m; se han recogido citas en toda la región, aunque parece más
escaso o ausente en las zonas centrales de la Meseta Norte. La mayor parte de las citas del Parque
nacional de Guadarrama se hallan en zonas de media montaña, lo que puede ser una consecuencia del
mayor esfuerzo de muestreo en estas zonas o de la rarefacción progresiva del lagarto ocelado en las
zonas más bajas debido a diversos factores.
Generalmente ocupa ambientes mediterráneos con arbustos, zonas rocosas o paredes de
piedra donde refugiarse, siendo escaso en ambientes muy húmedos y con escasa insolación. Se
halla en regresión en toda España, especialmente en las zonas más áridas. Las mayores amenazas
son el uso incontrolado de plaguicidas y la agricultura intensiva que conlleva la destrucción de muros,
setos y linderos. También es afectado por el uso ilegal de huevos envenenados en cotos de caza
menor, ya que depreda sobre huevos de Aves de caza. Es también uno de los Reptiles más
atropellados.
Podarcis hispanica: Lo que actualmente llamamos Lagartija ibérica es muy variable en la
Península por ser un taxón parafilético en revisión que agruparía al menos 5 linajes diferentes,
probablemente a nivel específico. En Castilla y León se halla en toda la región. Los estudios
genéticos en curso sugieren la existencia de al menos dos taxones diferentes en Castilla y León,
probablemente a nivel específico. En la zona de Guadarrama se encontraría el mismo taxón que en la
zona noroccidental de la Península.
Hay escasas citas en Segovia, pero ésto no refleja la distribución real de la especie en la provincia,
dónde se hallaría en todos los hábitats y altitudes, desde las zonas basales hasta, ocasionalmente 1.800
m, siendo más abundante en zonas bajas y de media altitud. Otra lagartija, Podarcis bocagei, fue citada
en Guadarrama (Mellado y Olmedo, 1981), aunque se considera que se trató de una confusión con P.
hispanica, dada la variabilidad de esta última especie.
Generalmente habita zonas rocosas con fisuras, muros de piedra, etc aunque también en el
suelo, independientemente del tipo de vegetación y siempre en zonas soleadas. Cuando se encuentra
junto a P. muralis (Alto de los Leones, Guadarrama, Somosierra y Ayllón), P. hispanica ocupa
preferentemente zonas más soleadas y rocosas. A veces también aparece en contacto altitudinal con
Iberolacerta (= Lacerta) monticola. No parece tener problemas de conservación. El mantenimiento de
muros de piedra en zonas rurales la beneficia.
Podarcis muralis: La Lagartija roquera es una especie de amplia distribución europea,
desde la Península Ibérica hasta Turquía. En Castilla y León aparece en la Cordillera Cantábrica
(Norte de León, Palencia y Burgos), Sistema Ibérico (Sierra de Ayllón) y Sistema Central oriental
(Guadarrama). Ocupa las zonas de media y alta montaña (piso oromediterráneo) de Guadarrama,
Somosierra y Ayllón en su parte segoviana. No penetra por el Oeste en Gredos, siendo su límite de
distribución el valle de Enmedio en Ávila. En Segovia la encontramos desde 1.700 hasta 2.090 m en
Peñalara, mientras que en Madrid puede descender hasta 1200 m en la Garganta del Espinar.
En el área segoviana de Guadarrama habita las zonas altas de rebollar, pino silvestre y pedrizas
y roquedos en las zonas más altas. Cuando convive con Podarcis hispanica, la lagartija roquera ocupa
las zonas más húmedas y umbrías, muchas veces en taludes arenosos o disgregados. En las zonas
altas en que convive con Iberolacerta cyreni, ocupa el suelo en zonas de matorral de enebro y piorno.
121
Las poblaciones de montaña del Sistema Central e Ibérico pueden estar puntualmente
amenazadas por la urbanización de zonas de media y alta montaña. En los pinares de repoblación
parece más escasa.
Psammodromus algirus: La Lagartija colilarga se distribuye en el Norte de África, la zona
Mediterránea de la Península Ibérica y el Sur de Francia. Falta por tanto en toda la franja cantábrica
peninsular. En Castilla y León está presente probablemente en toda la región, pero existen huecos en
el centro de la meseta, que pueden deberse a la falta de prospección pero también de vegetación
arbustiva en muchas zonas. Ha sido citada de forma escasa en Segovia, debido probablemente a la
falta de muestreo, pues es común en toda la provincia. Se halla desde el piedemonte hasta 1.600 m en
toda la vertiente meridional del Sistema Central. En la vertiente norte de Guadarrama y Somosierra
probablemente alcance menores altitudes, en torno a 1.500 m.
Es una especie termófila propia de ambientes mediterráneos. Habita zonas abiertas pero con
una cierta cobertura vegetal de matorral, encinar o robledal mediterráneo. Es fundamentalmente una
lagartija de suelo, aunque puede trepar por arbustos o árboles. Es frecuente en laderas erosionadas e
incluso en pinares de repoblación. También se puede observar en rocas, si bien es poco fisurícola.
No presenta problemas de conservación. La desaparición de linderos y setos por la agricultura
intensiva puede haber sido una causa histórica y actual de desaparición en el centro de la Meseta
Norte.
Psammodromus hispanicus: La Lagartija cenicienta se encuentra en la Península Ibérica y
una pequeña zona del Sureste de Francia, siempre en la región bioclimática Mediterránea ibérica.
Está presente en toda Castilla y León excepto el Norte de León, Palencia y Burgos. Existen huecos
en su distribución en el centro de la región que probablemente se deben a falta de muestreo y/o a la
transformación de antiguas zonas de vegetación mediterránea en cerealistas.
Existen pocas citas en el área segoviana de Guadarrama, donde se hallaría en las zonas
basales, penetrando sólo en ocasiones por encima de los 1.000 m y llegando hasta los 1.200 m en
algunas localidades; no es, por tanto, común en la zona. Es más frecuente en las zonas bajas
madrileñas de Guadarrama.
Vive en ambientes mediterráneos abiertos, bien soleados, en general con sustrato suelto, sin
vegetación o con plantas o arbustos de bajo porte, especialmente tomillares, también cantuesos y
jaras. Aparece también en zonas esteparias, taludes o claros de dehesas.
No conocemos con exactitud la abundancia de sus poblaciones, especialmente en las zonas
bajas de Segovia. La roturación de terrenos forestales y el arado de tierras de labor podrían afectar a su
presencia. La agricultura intensiva es negativa para esta especie.
Coronella austriaca: La Culebra lisa europea presenta una amplia distribución en la región
Eurosiberiana del Paleártico. En Castilla y León aparece en zonas montañosas por encima de 1.700
m. En el Sistema Central es una especie montana, que no habita las zonas de llano. En Guadarrama hay
escasas citas por encima de 1.300 m. En Madrid llega hasta 2.200 m (Laguna de los Pájaros).
Está presente en zonas de media y alta montaña hasta las cumbres, siempre que haya
lagartijas, ya que los adultos son fundamentalmente sauriófagos, capturando a P.muralis o
122
Iberolacerta cyreni. Parece existir segregación altitudinal con C. girondica, ocupando ésta las zonas
más bajas hasta 1.600-1.700 m y C. austriaca las superiores, hasta las cumbres, aunque puede
haber una banda donde convivan ambas especies. Habita zonas de matorral, como escobas o
piornos, en la cercanía de roquedos. Parece evitar zonas muy abiertas o bosques.
No parece amenazada en la zona a pesar de su limitada distribución en la media y alta
montaña. Ocasionalmente es encontrada atropellada, aunque la mayor amenaza sea probablemente la
alteración de su hábitat. Algunos individuos son matados al confundirlos con Víboras.
Coronella girondica: La Culebra lisa meridional es una especie de distribución
circunmediterránea occidental. Aparece en toda Iberia, con excepción de zonas costeras del Norte de
Galicia y Asturias y la alta montaña del interior. En Castilla y León existen citas dispersas en todas las
provincias y parece más abundante en las zonas mediterráneas bajas.
Hay pocas citas recogidas en Guadarrama y en el área de Montejo de la Vega y Ayllón. Habita
las zonas bajas y de media montaña del Sistema Central. En Madrid se distribuye desde los 500 hasta
los 1250 m de altitud. Ocupa hábitats mediterráneos bien soleados, en especial encinares y zonas
arbustivas con rocas; también rebollares, pinares e incluso praderas con cierta cobertura de matorral.
En las montañas se halla en zonas de menor altitud que C.austriaca, hasta 1.700 m en el Sistema
Central.
Es más frecuente en zonas de montaña. No es atropellada frecuentemente pero sí matada al
ser confundida con víboras. Los incendios forestales y la proliferación del jabalí parecen ser factores
negativos para esta especie en particular.
Rinechis scalaris (Elaphe scalaris): La Culebra de escalera, hasta recientemente
denominada Elaphe scalaris, ocupa la región bioclimática Mediterránea de Iberia y Castilla y León,
estando ausente en toda la costa Cantábrica y en las zonas medias y altas de la región. Aparece en
zonas bajas del Parque nacional en Segovia y es frecuente en zonas bajas adyacentes de Ávila y
Madrid. Como otros grandes ofidios, no ocupa áreas de alta montaña. En Gredos se halla hasta 1.400
m en la vertiente norte mientras que en Madrid llega 1.100 m. Probablemente se halla en Segovia en
todas las zonas bajas estando su límite altitudinal probable alrededor de 1.500 m.
Junto con la Culebra bastarda sería la serpiente más abundante en ambientes
mediterráneos secos y soleados, preferentemente en zonas de ecotonía entre matorral, cultivos,
praderas, pero también en sotos fluviales. Terrenos pedregosos y soleados, en zonas abiertas o de
matorral con escasa cobertura vegetal. En los bosquetes suele hallarse en los claros. No llega a gran
altitud, en general por debajo de 1.200 m en el Sistema Central.
No se considera especialmente amenazada, pero como casi todos los grandes ofidios se
halla en regresión por la disminución de sus presas habituales, especialmente Mamíferos como el
conejo; el atropello en las carreteras durante el verano y la muerte intencionada de ejemplares. La
agricultura intensiva con la desaparición de linderos, setos, y sotos fluviales, y especialmente los
atropellos de los adultos parecen las mayores amenazas, si bien no hay datos precisos en la zona.
Malpolon monspessulanus: La Culebra bastarda presenta una amplia distribución
circunmediterránea. Es una especie termófila, que aparece sólo en la zona Mediterránea de la
Península Ibérica. Es frecuente en el área de estudio, así como en Ávila y Madrid en la zona de
123
Guadarrama. Probablemente se halle en todas las zonas bajas de la provincia de Segovia. Ha sido
encontrada hasta 1.400-1.500 m de altitud tanto en Gredos como Madrid. No se halla en alta montaña o
zonas umbrías.
Habita muy diversos ambientes, generalmente en bosques mediterráneos o encinares
adehesados, con matorral bajo, campos de cultivo, roquedos, cercanías de casas de campo o muros,
etc. Es junto a la Culebra de escalera, uno de los ofidios más abundantes en las zonas bajas. Es un gran
aliado de los agricultores porque sus presas habituales son ratas, ratones, topillos, etc; a pesar de ello es
muy perseguida por desconocimiento debido a numerosas leyendas. Los atropellos y la disminución
de sus presas son quizá las principales amenazas. Parece estar convirtiéndose en comensal humano
en zonas rurales y urbanas.
Natrix maura: La Culebra viperina o Culebra de agua común ocupa toda la Península Ibérica
con excepción de algunas zonas costeras de Asturias y Norte de Galicia. En Castilla y León existen
pocas citas en el centro de la Meseta, por falta de muestreo y/o escasez de medios acuáticos. Es la
serpiente más común en zonas bajas, o al menos más fácilmente detectable. Aunque existen pocas citas
de Segovia, probablemente se distribuye por todos los medios acuáticos hasta la media montaña. Citada
generalmente hasta 1.700 m en Navacerrada, aunque ocupa zonas mucho más elevadas en Gredos,
hasta 2.000 m, y parece que está aumentando su distribución en altitud por el cambio climático.
Siempre ligada a medios acuáticos naturales o artificiales como ríos, arroyos, embalses,
charcas, pilones o lagunas de montaña. Los subadultos son algo más terrestres. Se alimenta
fundamentalmente de Peces, larvas o adultos de Anfibios e Invertebrados acuáticos. No parece
especialmente amenazada en España o la región, aunque su estado de conservación depende del de
los ecosistemas acuáticos. Muerte ocasional por confusión con víboras.
Natrix natrix: La Culebra de collar o Culebra de agua europea tiene una amplia distribución
en Europa occidental. Existen citas en toda la Península Ibérica, con excepción de las zonas más
áridas. No parece común, salvo en la zona Cantábrica y algunos sistemas montañosos. En Castilla y
León no hay citas en las zonas cerealistas de la Meseta, probablemente por escasez o ausencia de
medios acuáticos de una cierta entidad. Hay muy escasas citas en el Sistema Central segoviano,
siempre en áreas de media montaña, especialmente en Madrid, donde se ha hallado hasta 1.370 m. En
Gredos se la encuentra de modo muy puntual en todas las altitudes hasta 1900 m.
Habita ambientes húmedos y frescos, tanto forestales como abiertos, en la cercanía de
medios acuáticos, aunque es más terrestre que Natrix maura, especialmente los adultos. Más
frecuente en la media montaña, alcanza lagunas de alta montaña en el Sistema Central como las
lagunas de Gredos o el Trampal, hasta 2.100 m en la Sierra de Béjar.
Vipera latasti: La Víbora hocicuda se distribuye en la zona Mediterránea de la Península
Ibérica y Norte de África. En Castilla y León las citas se localizan en los sistemas montañosos y
algunas zonas mediterráneas bajas. Es una especie escasa o ausente en el centro de la región. Es la
única especie de víbora que habita el Sistema Central. Hay muy pocas citas en Segovia, generalmente
en zonas de media montaña hasta 1.700-1.800 m. Hasta 2.230 m en la zona madrileña de Guadarrama
o 2.000 m en Gredos.
Especie termófila propia de ambientes mediterráneos soleados con rocas y matorrales.
Probablemente se halla restringida a la montaña por la persecución histórica de ganaderos y
124
agricultores. Los testimonios populares y topónimos tanto en Madrid como en Gredos parecen indicar
una distribución antigüa más amplia. En las últimas décadas parece haber sufrido un fuerte declive, sin
que las causas sean evidentes ya que ha sufrido desde siempre persecución, que debería haberse
suavizado últimamente por el abandono del campo, pero la agricultura intensiva, con la desaparición
de linderos y muros, puede haber contribuido a su ausencia o rareza en las zonas bajas.
- Reptiles que son dudosos para la zona de estudio:
Emys orbicularis (Linnaeus, 1758): El Galápago europeo tiene en la Península Ibérica una
distribución muy fragmentada, especialmente en la región Mediterránea. En Castilla y León existen
amplias zonas sin datos, quizá por la falta de muestreo pero también por su escasez natural y/o su
regresión. Se distribuye de forma dispersa en la Cuenca del Duero, siendo más frecuente hacia el
Oeste de la región, donde puede ser más abundante, puntualmente, que el otro Galápago ibérico.
Ambas especies ocupan sólo las zonas de menor altitud, hasta 1000 m.
No ha sido hallado en la mayor parte de Segovia ni en Guadarrama. Las únicas citas cercanas a
Guadarrama se hallan en la zona limítrofe con Soria y en zonas bajas de Madrid. Quizá pueda haber
alguna población residual en la zona del área del PORN, aunque es poco probable, y se necesita mayor
muestreo para ambas especies de galápagos.
Hemorrhois hippocrepis (= Coluber hippocrepis) (Linnaeus, 1758): La Culebra de
herradura (cuyo género ha cambiado recientemente) ocupa la zona bioclimática Mediterránea de la
Península Ibérica. Presenta una pequeña distribución en Castilla y León, sólo en zonas cálidas del
piso Mesomediterráneo, es decir en la vertiente Sur del Sistema Central en Salamanca y Ávila y en
los Arribes de Salamanca y Zamora. No ha sido citada en Segovia; se halla sin embargo en la zona
madrileña de Guadarrama, en los encinares basales de la Sierra y en el valle del Alberche, entre 600 y
1.000 m de altitud. Es una especie muy termófila, ocupa sólo ambientes mediterráneos en la región,
zonas secas y soleadas, en especial encinares y zonas arbustivas, casi siempre en la cercanía de
roquedos. Puede estar en la cercanía de pueblos o construcciones humanas.
No se la considera amenazada en España. Los problemas de conservación son los típicos de
las serpientes de gran tamaño, persecución humana, atropellos y alteración de su hábitat.
Macroprotodon brevis (Günther, 1862) (= Macroprotodon cucullatus): La Culebra de
cogulla es una especie circunmediterránea. En Castilla y León sólo está presente en zonas muy
cálidas; Sur del Sistema Central en Ávila y Salamanca y Arribes de Salamanca y Zamora. Se
encuentra ligada a zonas abiertas y claros en ambientes mediterráneos como encinares y sus etapas
de degradación; también en praderas abiertas y algo húmedas, frecuentemente bajo piedras y en
muros; tiene hábitos cavadores por lo que precisa suelos blandos.
No existen citas precisas en la zona de estudio y consideramos improbable su presencia,
aunque desde luego no hay muestreos suficientes en ambientes mediterráneos, fuera del área del
área de estudio. Dado que se ha encontrado otro Reptil muy termófilo como A. erythrurus en los
encinares de zonas bajas, es probable que también se halle la Culebra de cogulla, ya que ha sido
citada en zonas bajas de Madrid de Guadarrama y otras áreas de la vertiente sur del Sistema Central
(Ávila).
125
2.1.8.3.1.5.- Aves:
Las Aves son los Vertebrados más numerosos dentro de los límites del PORN de
Guadarrama objeto de este estudio. Conocida desde antaño, la riqueza ornitológica de la Sierra ha
atraído el interés de sucesivas investigaciones desde el siglo XIX (Castellarnau, 1877; Verner 1909)
hasta la actualidad. El inventario de Aves de la zona de estudio incluye 176 especies citadas en la
zona, incluyendo 154 nidificantes y 22 no nidificantes (tabla 30), si bien al menos 10 especies son
muy raras u ocasionales en la zona. Podríamos poner una banda entre 166 y 176 especies presentes
en la zona de estudio. Debemos señalar nuevamente que esta cifra es aproximada ya que depende
del límite altitudinal utilizado para el área de estudio. Si se añaden algunas áreas mediterráneas de
piedemonte, la lista puede aumentar ligeramente. El número sería ligeramente superior al citado en el
área de estudio del PORN de Madrid.
En el Guadarrama castellano-leonés se encontraría por tanto un 80,73 % de las Aves citadas
en la región y un 48% de las Aves españolas. Esta riqueza es muy elevada y confirma el alto valor
ornitológico de Guadarrama, reconocido señalado en diversas ocasiones y en la declaración de varias
ZEPAS en la zona, de las que la máxima extensión es la ZEPA “Sierra de Guadarrama”.
El componente geográfico que determina las características de esta sierra, situada en el
centro peninsular y la altura de sus cumbres, más de 2.400 m. de altura en Peñalara, le confiere
características ambientales únicas, situándose como el puente natural entre la submeseta norte, de
carácter más atlántico, y la sur, típicamente mediterránea. Nos encontramos así en el límite norteño
de algunas especies, y el sureño de otras, lo que aporta una gran riqueza y variedad de especies.
Debemos añadir a lo anterior el componente paisajístico, la diversidad de hábitats que
conforman la sierra incluyen sabinares, bosques de ribera, tomillares, melojares, roquedos, prados de
alta montaña, etc. Destacando entre todos ellos, los pinares albares, que constituyen la principal
masa forestal de Guadarrama. La Sierra se funde rápidamente con las llanuras cerealistas
castellanas, lo que aporta nuevos ambientes y ecotonos. Estos factores son los que le confieren la
capacidad de albergar tantas y tan diferentes especies, y en los que se basa, además de por acoger
especies significativas o amenazadas, el que haya sido declarada Zona de Especial Protección para
las Aves en su conjunto.
Tabla 30. Riqueza de especies de Aves en la zona de estudio y comparación con otros ámbitos territoriales.
Grupo
taxonómico
Ámbito del
PORN en
Castilla y
León1
Porcentaje
respecto a
Castilla y
León %
Número de
especies en
Castilla y
León2
Ámbito del
PORN
Madrid3
Comunidad de
Madrid4
España5
Europa6
Aves
176
80,73
218
168
310
368
700
Total
Vertebrados
283
72,01
393
283
438
635
1.544
126
Figura 10. Riqueza de especies de Aves por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona de estudio.
La mayor riqueza ornitológica en base a las cuadrículas UTM (10x 10km) se encuentra en la
zona sur del área de estudio, en cuadrículas en las que predominan los pinares y los majadales y que
a su vez contienen diferentes ambientes que favorecen la diversidad de especies. Como en todos los
grupos de Vertebrados en este estudio, la mayor riqueza de las zonas del Sur, en la cercanía de
Ávila, respecto al Norte (Somosierra, Ayllon) se debe a un mayor esfuerzo de muestreo en áreas
habituales de estudio (por ejemplo valsaín o El Espinar), más cercanas a Madrid y con estaciones
biológicas.
En general, la mayor riqueza de Aves se concentran en las zonas forestales o rupícolas,
generalmente ligadas a la nidificación como el Águila Imperial, Buitre negro, Cigüeña negra; Buitre
leonado, Águila real; o a ser zonas de invernada de varias especies como el Esmerejón (Falco
columbarius). Otras especies como la Agachadiza, Sisón, Aguilucho cenizo, Aguilucho pálido y
Cigüeñuela común son propias de altitudes bajas en la zona y son escasas pues estos ambientes no
abundan en la zona de estudio. En otros casos la presencia está muy vinculada a hábitat concretos,
como la Calandria o la Terrera asociadas a pastizales y cultivos también de la zonas bajas.
- Estado de conservación:
Si tenemos en cuenta el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (tabla 31), 2 especies
se consideran En Peligro de Extinción, 2 se califican como Vulnerables y 119 como De Interés
Especial.
127
Tabla 31. Número de especies de Aves en cada categoría del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas
Aves
E
AH
V
IE
2
0
2
119
Si consideramos las categorías UICN contenidas en el Libro Rojo de las Aves Reproductoras
de España (Madroño et al., 2004); de las 176 especies citadas en la zona de estudio, una está extinta
como reproductora; 5 se consideran en peligro; 15 vulnerables; 11 casi amenazadas; 8 de
preocupación menor; 4 con datos insuficientes y 132 aparecen como no evaluadas (Tabla 32).
Tabla 32. Número de especies de Aves en cada categoría de amenaza según las categorías UICN, 2001
(Madroño et al., 2004).
Aves
EX
0
EW
1
CR
0
EN
5
VU
12
NT
10
LC
6
DD
4
NE
125
Consideramos dos normativas que afectan únicamente al grupo de las Aves, la Directiva de
Aves y las categorías SPEC. La Directiva de Aves 79/409/CE hace referencia a la conservación de
las Aves Silvestres, ampliada por la Directiva 91/294/CEE. Incluye tres anexos: I: taxones que deben
ser objeto de medidas de conservación del hábitat; II: taxones de especies cazables; III: taxones de
especies comercializables. Es de destacar (tabla 33) que existen 38 especies que deben ser objeto
de medidas de conservación de su hábitat.
Tabla 33. Número de especies de Aves en cada categoría de la Directiva de Aves.
Directiva Aves
Aves
I
38
II
24
III
11
II y III
10
I, II y III
1
- Categorías SPEC: proceden de Bird Life Internacional y hacen referencia al estado de
conservación de cada ave nidificante de interés conservacionista en Europa. Las categorías son:- 1:
Son aquellas Aves presentes en Europa que son motivo de preocupación a nivel mundial porque
están consideradas como Globalmente Amenazadas y Dependientes de conservación o sin
suficientes datos. - 2: Son aquellas especies presentes principalmente en Europa con una población
mayor al 50% de la población mundial y que tienen un estado de conservación desfavorable porque
su población es pequeña o marginal, está claramente en declive o está muy localizada. - 3: Son
especies cuyas poblaciones no están concentradas en Europa pero tienen un estado de conservación
desfavorable en nuestro continente. - 4: Presentes principalmente en Europa, pero con un estado de
conservación favorable.
Diez especies de Aves (tabla 29) se hallan amenazadas en el ámbito europeo. Doce especies
en la categoría 3 y 22 especies en la categoría IV con un estado de conservación favorable.
Tabla 34. Número de especies de Aves de Guadarrama en cada categoría SPEC.
SPEC
Aves
2
10
3
12
4
22
Total
44
128
Tabla 35. Estado de conservación de las Aves en el área de estudio y normativa que las afecta. Se destacan en
negritas las Aves más amenazadas o emblemáticas en la zona.
Especie
Tachybaptus rufficollis
Podiceps nigricollis
Podiceps cristatus
Ardea cinerea
Ciconia nigra
Ciconia ciconia
Anas plathyrynchos
Anas strepera
Anas penelope
Anas querquedula
Anas crecca
Anas clypeata
Anas acuta
Aix galericulata
Aythya ferina
Pernis apivorus
Gyps fulvus
Aegypius monachus
Neophron percnopterus
Milvus migrans
Milvus milvus
Circaetus gallicus
Accipiter gentilis
Accipiter nisus
Buteo buteo
Aquila adalberti
Aquila chrysaetos
Hieraaetus pennatus
Circus cyaneus
Circus pygargus
Falco peregrinus
Falco naumanni
Falco tinnunculus
Falco subbuteo
Falco columbarius
Alectorix rufa
Phasianus colchicus??
Coturnix coturnix
Gallinula chloropus
Rallus aquaticus
Fulica atra
Grus grus
Tetrax tetrax
Burhinus oedicnemus
Charandrius dubius
Gallinago gallinago
Actitis hypoleucos
Columba livia
Columba oenas
UICN
1992
R
E
V
R
V
V
K
I
K
K
E
R
K
V
V
V
K
K
V
I
K
K
K
K
UICN
2001
NE
NT
NE
NE
VU
NE
NE
LC
NE
VU
VU
NT
VU
NE
LC
NE
VU
EN
NT
EN
LC
NE
NE
NE
EN
NT
NE
NE
VU
NE
VU
NE
NT
NE
DD
NE
DD
NE
NE
NE
RE
VU
NT
NE
EN
NE
NE
DD
CNEA
IE
IE
IE
IE
E
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
E
IE
IE
IE
V
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
D.
Aves
I
I
II,III
II
II,III
II
II,III
II,III
II,III
RD
172/98
I
I
I
I
II,III
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
II,III
II,III
II
II
II
II,III
I
I
I
I
I
I
II,III
IE
II
II
I
C.
Berna
C.
Bonn
II
II
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
II
II
II
II
II
II
II
II
II
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
II
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
I, II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
CITES
SPEC
II
2
3
4
I
I
II
II
II
II
II
II
II
129
Especie
Columba palumbus
Streptopelia turtur
Clamator glandarius
Cuculus canorus
Tyto alba
Otus scops
Athene noctua
Asio otus
Strix aluco
Bubo bubo
Caprimulgus europaeus
Caprimulgus ruficollis
Apus apus
Alcedo atthis
Merops apiaster
Coracias garrulus
Upupa epops
Picus viridis
Jynx torquilla
Dendrocopos minor
Dendrocopos major
Melanocorypha calandra
Chersophilus duponti
Galerida cristata
Galerida theklae
Calandrella brachydactyla
Alauda arvensis
Lullula arborea
Riparia riparia
Ptyonoprogne rupestris
Hirundo rustica
Hirundo daurica
Delichon urbica
Motacilla cinerea
Motacilla alba
Motacilla flava
Anthus campestris
Anthus trivialis
Anthus spinoletta
Cinclus cinclus
Troglodytes troglodytes
Prunella modularis
Prunella collaris
Erithacus rubecula
Luscinia megarhynchos
Luscinia svecica
Phoenicurus ochruros
Phoenicurus phoenicurus
Saxicola rubetra
Saxicola torcuata
Oenanthe oenanthe
UICN
1992
V
K
R
K
K
R
I
R
I
UICN
2001
NE
VU
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NT
NE
VU
NE
NE
DD
NE
NE
EN
NE
NE
VU
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
VU
NE
NE
NE
CNEA
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
V
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
D.
Aves
RD
172/98
I,II,III
II
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
II
I
I
I
C.
Berna
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
C.
Bonn
CITES
SPEC
3
II
II
II
3
2
3
II
4
2
2
II
II
3
3
2
3
3
2
3
II
II
II
II
II
II
II
II
4
3
130
Especie
Oenanthe leucura
Oenanthe hispanica
Monticola saxatilis
Monticola solitarius
Turdus merula
Turdus torquatus
Turdus philomelos
Turdus viscivorus
Cettia cetti
Cisticola juncidis
Acrocephalus scirpaceus
Acrocephalus arundinaceus
Hippolais polyglotta
Sylvia conspicillata
Sylvia communis
Sylvia borin
Sylvia hortensis
Sylvia atricapilla
Sylvia melanochephala
Sylvia cantillans
Sylvia undata
Phylloscopus collybita
Phylloscopus ibericus
Phylloscopus bonelli
Regulus ignicapillus
Regulus regulus
Aegithalos caudatus
Parus cristatus
Parus ater
Parus caeruleus
Parus major
Muscicapa striata
Ficedula hypoleuca
Sitta europaea
Certhia brachydactyla
Oriolus oriolus
Lanius meridionalis
Lanius collurio
Lanius senator
Garrulus glandarius
Cyanopica cyana
Pica pica
Pyrrhocorax phyrrocorax
Corvus monedula
Corvus corone
Corvus corax
Sturnus unicolor
Passer domesticus
Passer hispaniolensis
Passer montanus
Petronia petronia
UICN
1992
UICN
2001
CNEA
LC
NT
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
LC
NE
NE
LC
NE
NE
NE
NE
NE
IE
IE
IE
IE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NT
NE
NT
NE
NE
NE
NT
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
D.
Aves
RD
172/98
I
IE
II
II
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
I
I
C.
Berna
C.
Bonn
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
II
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
II
II
II
CITES
SPEC
2
4
4
4
4
4
4
4
2
4
4
II
II
4
3
2
II
IE
III
II
I
II
II
I
I
IE
III
I
IE
4
III
III
III
III
III
4
4
131
UICN
1992
Especie
Fringilla coelebs
Serinus serinus
Serinus citrinella
Carduelis chloris
Carduelis spinus
Carduelis carduelis
Carduelis cannabina
Fringilla montifringilla
Loxia curvirostra
Pyrrhula pyrrhula
Coccothraustes coccothraustes
Emberiza cirlus
Emberiza cia
Emberiza hortulana
Miliaria calandra
UICN
2001
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
NE
CNEA
D.
Aves
RD
172/98
I
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
IE
I
C.
Berna
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
III
C.
Bonn
CITES
SPEC
4
4
4
4
4
3
2
4
- Aves de Guadarrama, LICs y Zepas
En la siguiente tabla recogemos los Lugares de Interés Comunitario (LICs) declarados en la
zona de estudio o sus alrededores, tanto en la provincia de Segovia como en Ávila. Los cuatro LICs
de Segovia cercanos en la zona de estudio se han destacado en negrita. En rojo el LIC que
comprende la zona de estudio de este PORN y tres LIC cercanos, en azul; los Sabinares de
Somosierra y las ZEPAS Valles del Voltoya y Zorita y Cueva de los Murciélagos, que son contiguos o
muy cercanos, pero quedan fuera el ámbito de estudio del PORN. Por otro lado, en la provincia de
Ávila encontramos el LIC y ZEPA Campo de Azalvaro y Pinares de Peguerinos que detallaremos más
adelante
Tabla 36. LICs de la provincia de Segovia, cercanos, o en la zona de estudio.
CODIGO_EUR
LIC
ES4160043
ES0000115
ES4160104
ES4160106
ES4160063
ES4160084
ES4160058
ES4160019
ES4160109
ES4160122
ES4160111
Cueva de los Murciélagos
Hoces del Río Duratón
Hoces del Río Riaza
Lagunas de Cantalejo
Lagunas de Santa María la Real de Nieva
Riberas del Río Duratón
Sabinares de Somosierra
Sierra de Ayllón
Sierra de Guadarrama
Sierra de Pradales
Valles del Voltoya y el Zorita
SUPERFICIE (ha)
1
4.954,17
5.184,53
10.740,35
637,85
264,54
2.158,77
14.119,29
69.659,53
1.335,24
39.660,80
Fuente: Consejería de Medio Ambiente. Junta de Castilla y León.
132
Mapa 2. Propuesta de Lugares de Importancia Comunitaria (LICs) en la
Comunidad de Castilla y León.
133
Mapa 3. Lugares de Importancia Comunitaria (LICs) en el área de estudio del
PORN.
134
Mapa 4. Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPAs) en el área de
estudio del PORN.
135
Detallaremos a continuación la importancia de las ZEPAs para la Aves en Guadarrama. El
LIC “Cueva de los murciélagos” se describirá en el apartado de Mamíferos. La Sierra de Guadarrama,
tanto en sus vertientes castellano-leonesa como madrileña, constituye un área de gran importancia
para las Aves, como se ha indicado en el inventario ornitológico. En la monografía sobre la red de
ZEPAS de Castilla y León (Sanz-Zuasti et al., 2004) encontramos datos actualizados sobre cada una
de ellas, incluyendo número de especies presentes, nidificantes y especies por las que se han
declarado (ver tabla siguiente). Otras dos ZEPAS segovianas, las Hoces del Duratón y las Lagunas
de Cantalejo, están cercanas a la zona de estudio del PORN pero quedan fuera del ámbito de este
estudio faunístico y por tanto no las trataremos.
Tabla 37: ZEPAS de la provincia de Segovia.
Fuente: Consejería d eMedio Ambiente. Junta de Castilla y León
En el área de estudio del PORN se encuentran dos ZEPAS; la primera ocupa todo el
Guadarrama segoviano y recibe el nombre de ZEPA “Sierra de Guadarrama” (código ES0000010),
con casi 70.000 Has de superficie. Tiene prácticamente los mismos límites que los estudiados en este
PORN en su parte sur y algo más reducidos en la zona norte. Por otro lado, en el límite sur de
Guadarrama, ya en la provincia de Ávila, se encuentra la ZEPA “Campo Azálvaro-Pinares de
Peguerinos”, de la que la parte correspondiente a los pinares se enmarca totalmente en el área del
PORN.
Mapa 5. Ámbito geográfico de la ZEPA de Guadarrama (tomado de
Sanz Zuasti et al., 2004)
136
137
Según la descripción de la ZEPA de Guadarrama (Sanz Zuasti et al., 2004) “ésta abarca el
conjunto de altas sierras del Sistema Central (Quintanar, la Mujer Muerta, Macizo de Peñalara) con
algunas cumbres por encima de los 2.000 m. (Peñalara, 2.430 m.) y sus estribaciones con valles de
relieves mas suaves. En la zona se encuentran importantes vías de comunicación entre Segovia y
Madrid con puertos tan conocidos y transitados como Guadarrama (1.505 m) y Navacerrada (1.860
m.). Hay una gran diversidad de paisajes, desde la alta montaña hasta las cotas más bajas del
piedemonte de las sierras. En las zonas más altas aparecen roquedos, pastizales, matorrales
montanos y pinares naturales de pino silvestre cuya distribución se ha visto ampliada hacia las cotas
basales de la sierra, en sustitución del melojar, que alternan con zonas de matorrales (genistas, jaras,
cantueso ...). En las zonas más bajas existen pastizales con matorral espinoso y matorral bajo, junto
a encinares y sabinares de manera más localizada. En las zonas más húmedas aparecen prados de
siega y fresnedas. Numerosos ríos y arroyos, que tienen su nacimiento en las cumbres de la sierra
(Cega, Eresma, Pirón, Moros ...) atraviesan el área formando en algunos casos, profundos barrancos
y bosques de ribera bien conservados. También se incluyen pequeños embalses (Tejo, Peces,
Revenga ...) con escaso interés para las Aves acuáticas. Destaca el Pinar de Valsaín, como la zona
forestal más extensa del conjunto de las sierras y los jardines de la Granja (San Idelfonso). El espacio
limita al sur con la ZEPA "Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos" y al suroeste con la ZEPA "Valles
del Voltoya y el Zorita".
De acuerdo al libro de las ZEPAS de Castilla y León, el mayor interés ornitológico de la ZEPA
de Guadarrama reside en las comunidades de Aves ligadas al bosque, matorral y pastizales
mediterráneos, destacando especialmente las importantes poblaciones nidificantes de rapaces
(especialmente Buitre Negro y Águila Imperial Ibérica). También tienen interés las especies alpinas
(Acentor Alpino, Bisbita Alpino...) y otras especies con interés biogeográfico (Alcaudón Dorsirrojo,
Tarabilla Norteña ...).
Las especies significativas por las que se declara la ZEPA de Guadarrama son el Buitre Negro,
Águila Imperial Ibérica, Águililla Calzada, Chova Piquirroja y otras especies de interés son la Cigüeña
Negra, Halcón Abejero, Alimoche, Buitre Leonado, Milano Real, Águila Real, Águila Culebrera, Azor,
Halcón Peregrino, Acentor Alpino, Pechiazul y Roquero Rojo. Es de destacar dentro de la ZEPA la
existencia de 4 áreas críticas de Águila Imperial Ibérica, como se detallará más adelante.
Tabla 38. Especies por las que se declara la ZEPA de Guadarrama, población y criterios empleados (Sanz
Zuasti et al., 2004).
138
La ZEPA “Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos” (Código: ES0000189; ver mapa a
continuación) se sitúa en entre la Sierra de Guadarrama y sus estribaciones, en las provincias de
Ávila y Segovia, con una superficie de 28.374. Sólo dos zonas de esta ZEPA se incluyen en el PORN
estudiado: la zona alta de la cuenca del Voltoya forma un amplio valle con una altitud elevada, de
unos 1.250 metros, con orientación nordeste-sudoeste. En sus laderas aparecen bosquetes aislados
de pinos, castaños y robles alternando con zonas de matorral que dominan en los lugares de mayor
altitud. Por otro lado los extensos pinares de los alrededores de Peguerinos, en la cuenca alta del río
Cofio, con cotas que alcanzan los 1.900 metros (Cueva Valiente), con roquedos y pastizales en las
zonas más elevadas. En esa zona limita al noreste con la ZEPA Sierra de Guadarrama. La
ornitofauna en la zona de Peguerinos es muy similar a la de las zonas medias y altas de la ZEPA
Sierra de Guadarrama.
Los hábitats característicos de la ZEPA en su conjunto son pastizales, pinares, humedales, y
matorrales de montaña, de los que los pinares, matorral de montaña y roquedos de cumbre, son los
que se encuentran en la zona de Guadarrama estudiada en este PORN. Las especies por las que se
declara ZEPA en su conjunto son la Cigüeña Negra, Cigüeña Común, Águila Imperial Ibérica y Sisón,
de las que son de especial interés en el PORN de Guadarrama el Águila imperial y la Cigüeña negra
por su nidficación en los pinares. Otras especies de interés en la zona de montaña son el Buitre
Negro, Buitre Leonado, Águila Real, Pechiazul, Alcaudón, Dorsirrojo y Chova Piquirroja. Es de
destacar especialmente que los pinares de Peguerinos son área crítica de Cigüeña Negra y 3 áreas
críticas para Águila Imperial Ibérica (3 áreas). Estas zonas deben ser tenidas en cuenta en la
zonificación de cualquier espacio protegido a declarar en Guadarrama, con una categoría que
preserve adecuadamente su importancia, como detallaremos más adelante.
Especie
Población
Criterios
Cigüeña Negra
Cigüeña Negra
Cigüeña Común
Águila Imperial
Sisón
1 pareja
33 Aves
100 parejas
3 parejas
250 Aves
B2, B1i, C2
B1i, C2
B2
A1, B2, C1, C6
A1, C1
Especies por las que se declara la ZEPA de Campo Azálvaro-Pinares de
Pegurinos, población y criterios empleados (Sanz Zuasti et al., 2004)
La importancia ornitológica de esta ZEPA (Sanz Zuasti et al., 2004) se basa en ser una zona
de alimentación para una rica comunidad de rapaces a lo largo de todo el año, con hasta 20 especies
de rapaces, algunas de las cuales nidifican en los límites del espacio protegido y sus alrededores,
destacando el Águila Imperial Ibérica. Es un área bastante importante para su cría, con entre 2 y 4
parejas reproductoras en los últimos años. La población nidificante tiene importancia regional,
nacional e internacional. Hay presencia habitual de ejemplares inmaduros, en dispersión juvenil y de
adultos de otros territorios cercanos, que utilizan la zona como cazadero a lo largo de todo el año.
Para el Buitre Negro es una importante área de alimentación, aunque no hay nidificación detectada
en la zona. Es un área de reproducción para el Aguilucho Cenizo, con una estimación de 6-8 parejas
en el año 2002.
El cauce del río Voltoya y el embalse de Serones constituyen un área importante para la
alimentación y descanso de la Cigüeña Negra, tanto de las poblaciones reproductoras de los
territorios cercanos (Tierra de Pinares) como de Aves migradoras tanto ibéricas y de ejemplares
139
procedentes de otras latitudes más norteñas. Destacan las concentraciones producidas de manera
habitual durante los pasos migratorios y en el período postnupcial (hasta 33 Aves en el año 1999) con
interés a nivel regional, nacional e internacional.
El Águila Real es especie reproductora en los roquedos de las zonas más altas, con dos
parejas nidificantes en el año 2.000 y registros de ejemplares inmaduros y adultos de territorios
cercanos que visitan la zona para alimentarse. El Halcón Peregrino tiene una zona de nidificación en
los roquedos (al menos una pareja reproductora en 2.002), mientras que los pastizales y el embalse
de Campo Azálvaro son visitados regularmente todo el año tanto por ejemplares residentes e
individuos invernantes y en paso migratorio. También es zona de cría habitual del Cernícalo Primilla
con 17 parejas nidificantes en el año 1999 e importantes concentraciones postnupciales de la especie
(más de 50 ejemplares durante el verano) debido a la abundancia de alimento en esta época.
En la zona del PORN encontramos otras Rapaces presentes de manera habitual, proceden
en su mayoría de áreas cercanas, de cría o en paso. Son el Alimoche, Buitre Leonado (colonia
próxima a 5-10 parejas y concentraciones de hasta 200 ejemplares) y Aguilucho Pálido (invernante y
migrante). Entre las demás rapaces sobresale la presencia reproductora de Halcón Abejero (mínimo
dos parejas), Milano Negro, Milano Real (10 parejas), Águila Culebrera (al menos tres parejas), Águila
Calzada (unas 15 parejas) y Búho Real. En los matorrales de montaña nidifica el Pechiazul (al menos
250 parejas) con interés regional e importante a nivel nacional. La presencia de una reducida
población reproductora de Alcaudón Dorsirrojo tiene interés biogeográfico; nidifican la Collalba Negra
y la Chova Piquirroja (unas 60 parejas reproductoras, con observaciones de grupos superiores a los
300 ejemplares fuera de la época de cría). Otras Aves forestales o de matorral que nidifican en la
zona son el Azor, Gavilán, Alcotán, Roquero Rojo, Verderón Serrano, Curruca Rabilarga o Escribano
Hortelano.
En paso migratorio e invernada se encuentra el Esmerejón y ejemplares aislados y pequeños
grupos de Halcón de Eleonor en paso migratorio prenupcial. Hay registros habituales de Águila
Pescadora en migración. El Sisón y la Cigüeña blanca son abundantes y cría en los pastizales del
Campo Azálvaro), pero esta zona queda fuera del área estudiada en este PORN.
140
Mapa 6. Ámbito geográfico de la ZEPA Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos (tomado de Sanz
Zuasti et al., 2004)
Figura 11: Foto de la ZEPA Campo
Azálvaro-Pinares de Peguerinos
(tomado de Sanz Zuasti et al., 2004)
141
El LIC y ZEPA Valles del Voltoya y el Zorita (ES4160111) es contiguo al LIC Sierra de
Guadarrama, separados por la carretera de Ávila a Segovia. Dado que no se encuentra dentro del
área estudiada en el PORN, pero es un área cercana importante por servir como zonas de
alimentación para las aves nidificantes en Guadarrama, ofreceremos un breve resumen de sus
características.
El espacio incluye casi 50.000 ha al suroeste de la provincia de Segovia, limitando con Ávila.
El área se caracteriza por su relieve llano y altitud media (entre 800 y 1.500 metros) en la que el
paisaje se caracteriza por cultivos agrícolas alternados con pastizales y amplias superficies de pinar y
encinar. Por el espacio discurren los ríos Voltoya, Moros y Zorita, que conservan buenos bosques de
ribera en algunos de sus tramos, con la existencia de cortados y pequeños roquedos. Limita al este
con la ZEPA "Sierra de Guadarrama", al suroeste con la ZEPA "Encinares de los ríos Adaja y Voltoya"
y al sureste con la ZEPA "Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos".
La ZEPA tiene Importancia ornitológica por las comunidades de aves ligadas a las masas
forestales existentes en la zona, entre las que hay que destacar la presencia de Cigüeña Negra y
Águila Imperial Ibérica. También tiene importancia el conjunto de aves acuáticas presentes en las
Graveras del Águila, humedal de interés regional. Las especies por las que se declara ZEPA son
Cigüeña Negra (1 área crítica), Águila Imperial Ibérica (2 áreas críticas), Águila Calzada. Otras
especies de interés son el Milano Real, Águila Real, Halcón Peregrino y Buitre negro.
Especie
Población
Criterios
Cigüeña Negra
Cigüeña Negra
Águila Imperial Ibérica
Águila Calzada
3 parejas
15 aves
2 parejas
37 parejas
B2
B1i, C2
A1, B2, C1
B2, C2
Especies por las que se declara la ZEPA, población y criterios empleados
(Sanz Zuasti et al., 2004)
Mapa 7. Ámbito geográfico de la ZEPA de Valles del Voltoya y el Zorita (tomado de Sanz
Zuasti et al., 2004)
142
- Especies claves o significativas de Aves en el área de estudio:
Teniendo en cuenta estas consideraciones sobre las especies significativas de la ZEPA, pero
también en función de su estado de conservación o de ser representativas de otros hábitats de la
Sierra de Guadarrama, comentaremos la distribución y estado de conservación de varias especies de
Aves que podríamos considerar significativas o representativas para todo el ámbito de Guadarrama y
que crían dentro de los límites del área de estudio. Por supuesto, podrían incluirse un mayor número
de especies, pero analizando éstas y su problemática particular, podemos alcanzar una visión global
del estado de conservación de la casi totalidad de los hábitats de la Sierra de Guadarrama.
Se consideran especies clave o significativas a aquellas representativas de un determinado
hábitat y que además presentan un alto índice de sensibilidad a la alteración del medio; favoreciendo
su protección, se favorece un alto grado de conservación en la totalidad del hábitat, al englobar así a
las demás especies del mismo. Las Aves poseen características que les favorecen para ser
consideradas especies significativas, ya que se detectan con relativa facilidad y existe, en general, un
alto nivel de conocimiento de estas especies. Las Aves que indicamos a continuación podrían
calificarse como las más amenazadas y significativas de los distintos hábitats de Guadarrama:
Aquila adalberti: Águila Imperial Ibérica.
Aegypius monachus: Buitre negro.
Ciconia nigra: Cigüeña Negra.
Neophron percnopterus: Alimoche.
Falco naumanni: Cernícalo primilla.
Milvus milvus: Milano Real.
Circus pygargus: Aguilucho cenizo.
Gallinago gallinago: Agachadiza común.
Chersophilos duponti: Alondra de Dupont.
143
Mapa 8. : Aves significativas en el área de estudio.
Elaborado por Jose Ignacio Izquierdo MIsiego
144
Aquila adalberti: El Águila imperial Ibérica es probablemente el ave más emblemática de
Guadarrama junto al Buitre negro. Es también la rapaz europea mas amenazada actualmente. Es
un endemismo ibérico y sólo se conoce su reproducción en España.
La población de esta especie en Castilla y León se estimaba entre 18 y 21 parejas en el año
2002, lo que suponía un 12% del total de la población mundial (González y Oria, 2002), mientras que
en el año 2006 se censaron 28 parejas reproductoras; 16 en la provincia de Ávila y 12 en la de
Segovia (datos Consejería Medio Ambiente, Junta de castilla y León, 2006). La especie está
aumentando en los últimos años por una buena gestión territorial y los aportes alimenticios y mejoras
del hábitat realizadas por la Junta de Castilla y León. El águila imperial no está sin embargo libre de
graves amenazas como detallaremos más adelante. Casi la mitad de estas parejas puede
considerarse vinculadas territorialmente a la Sierra de Guadarrama, tanto en Ávila ooo en Segovia,
siendo éste el límite norte de la distribución actual de la especie La ZEPA de Guadarrama es un área
de gran interés para la especie con cinco parejas nidificantes en el año 2000 (Sanz Zuasti et al.,
2004) y tiene por tanto importancia a nivel regional, nacional e internacional. Se observan individuos
inmaduros en dispersión y adultos pertenecientes a otros territorios cercanos pueden visitar la zona
para cazar.
Tabla 39. Especies clave o significativas de Aves en el área de estudio. En negrita las más importantes.
AMENAZAS
ESPECIES
MOTIVOS
OBSERVACIONES
SIGNIFICATIVAS
PRINCIPALES
El águila imperial, por ser endemismo
En peligro de extinción
(CNEA)
ibérico, grado de amenaza, escasez y
Aquila adalberti
reproducción en zonas forestales, es una de
En peligro de extinción
- Venenos
(UICN 2001)
las Aves emblemáticas de Guadarrama
- Tendidos
A pesar de ser considerada sólo como
eléctricos y otras
Vulnerable, el Abanto o Buitre negro es otra
infraestructuras
Aegypius monachus
Vulnerable
de las Aves emblemáticas de Guadarrama
- Gestión forestal
(UICN 2001)
por su importante nidificación en zonas
inadecuada
forestales (pinares maduros)
- Pistas abiertas en
zonas cercanas a
- Muy escasa en el área de estudio, ya que la
En peligro de extinción
nidos
zona de reproducción está en el límite del
(CNEA); En peligro de
Ciconia nigra
- Molestias por
PORN de la zona de estudio. Sin embargo
extinción (UICN, 1992);
visitantes,
puede utilizar las vegas como zona de
Vulnerable (UICN 2001)
todoterrenos,
alimentación
quads, etc
- La zona es importante por la nidificación
En peligro de extinción
en árboles altos y las zonas bajas y abiertas
Milvus milvus
(UICN 2001)
para su alimentación
- El aumento de
zonas arbustivas
- La Agachadiza es muy escasa. Nidifica en
Gallinago gallinago
En peligro de extinción
por abandono
zonas húmedas de montaña de Guadarrama,
(UICN 2001)
ganadero puede ser turberas, prados y claros de bosque.
un problema
- Fuerte regresión en Segovia. Muy escaso
(1 pareja reproductora) o ausente en la zona
Neophron
En peligro de extinción
(UICN 2001)
de estudio. No nidifica en las zonas de
percnopterus
montaña
- Muy escasa en la zona de estudio dada la
Chersophilus
En peligro de extinción
pequeña superficie de estos hábitats
(UICN 2001
duponti
esteparios en las zonas bajas de Guadarrama
145
ESPECIES
SIGNIFICATIVAS
Falco naumanni
Circus pygargus
MOTIVOS
AMENAZAS
PRINCIPALES
Vulnerables
(UICN 2001)
OBSERVACIONES
- Escasos en la zona de estudio. Sólo zonas
bajas
Rapaces amenazadas de roquedos y alta montaña
Aquila crhysaetos
Casi amenazada (NT;
UICN, 2001)
Falco peregrinus
Bubo bubo
Preocupación menor
(LC; UICN, 2001)
No se consideran muy
amenazadas, pero son
de interés especial en la
conservación y gestión
de las zonas de alta
montaña
- No es abundante, escasas parejas en la
zona de Guadarrama
Rapaces y otras Aves forestales amenazadas o de interés
Milvus migrans
Falco subbuteo
Hieraaetus pennatus
Circaetus gallicus
Accipiter nissus
Accipiter gentilis
Tetrax tetrax
Casi amenazada (NT;
UICN, 2001)
Preocupación menor
(LC; UICN, 2001)
- Problemas por molestias y
envenenamiento en zonas bajas
Aves amenazadas de zonas abiertas y esteparias:
- El sión es muy escaso en la zona de
Vulnerable (UICN
estudio. Presente en la zona ZEPA del
2001)
Voltoya y del Zorita
Aves acuáticas amenazadas de medios acuáticos lentos
Anas querquedula
Anas crecca
Anas acuta
Vulnerables
(UICN 2001)
- Zonas de embases o bajas del Voltoya.
Poca importancia en la zona de estudio
Otras Aves amenazadas o de interés
Calandrella
brachydactyla
Phoenicurus
phoenicurus
Vulnerables
(UICN 2001)
146
Mapa 9. Áreas de influencia en el plan de recuperación de la Cigüeña negra y el Águila Imperial ibérica
en el área de estudio. Fuente: Consejería de Medio Ambiente. Junta de Castilla y León.
En la Sierra de Guadarrama la especie se distribuye principalmente por el Suroeste de la
misma, ocupando territorios de forma perpendicular a la línea de cumbres. Anida por lo general en
pinares albares de ladera más o menos densos, buscando en ellos los árboles de mejor porte y
aislamiento para realizar su plataforma de nidificación; mientras se desplaza a las zonas de
piedemonte para conseguir su principal presa, el conejo. Esta distribución le lleva ocupar grandes
territorios, indispensables para conseguir tener éxito en la reproducción. Los límites propuestos para
el PORN incluyen las zonas de nidificación, mientras que quedan excluidos gran parte de los
territorios de campeo y de dispersión de jóvenes, cuando en ellos se encuentra la clave para la
conservación y colonización de nuevos territorios para la especie en el futuro.
Las principales áreas de nidificación de la especie se sitúan en pinares maduros de gran
extensión, especialmente los situados al SO del macizo central de Peñalara. Hay que destacar la
presencia de varias parejas en los montes de Valsaín, donde gracias al seguimiento de las mismas y
a la explotación sostenible del pinar han tenido una evolución positiva. Existen parejas que nidifican
en las zonas de pino albar del Espinar y aun más al sur, en los pinares de Peguerinos, que han
presentado dificultades para la nidificación debido al tipo de explotación forestal llevada a cabo en la
zona. La mejora de estos territorios de cría será clave para el futuro del Águila Imperial.
La época de cría varía según las parejas y los territorios que ocupan, pero podemos
considerar que abarca los meses de febrero a septiembre, durante este tiempo es muy sensible a
toda clase de molestias, principalmente durante la época de incubación (Marzo-Mayo). Durante este
147
periodo se deben regular las actividades susceptibles de causar molestias que puedan provocar la
pérdida de la puesta o de los pollos, ya sean estas actividades de ocio, ganaderas, obras públicas o
trabajos forestales.
Al contrario que en otras especies de rapaces, la población de Águila Imperial está
consiguiendo buenos índices reproductores en los últimos años, un 87,5% de las parejas son
reproductoras, consiguiendo 1,38 de productividad y que la totalidad (100%) de los pollos vuelen
(Oria y Fernández, 2004). Las mayores amenazas para la supervivencia de los individuos se
presentan durante su inmadurez y época de dispersión, revelando los últimos estudios que el 87% de
los ejemplares marcados no sobrevive a los tres primeros años de vida. Este alto grado de mortalidad
es fácilmente asociable a la actividad humana. El envenenamiento se sitúa como la primera causa de
mortalidad en este momento (47,7% entre 1995-2000), los tóxicos se corresponden con los utilizados
generalmente en cotos de caza de forma ilegal para el control de predadores y la protección de
cultivos. Esta peligrosa tendencia ha aumentado en el año 2005 (F. Sánchez Aguado com.pers. y se
revelan como la amenaza más grave para la especie. La electrocución es la segunda causa de
mortalidad, pero tiene una escasa incidencia en el área de estudio, seguida por la cada vez más
escasa persecución humana ya sea por disparos o por expolio de nidos. La escasez del conejo, su
presa principal junto con la alteración y mala gestión de su hábitat son el principal factor limitante de
cara al futuro de la especie debido a la fragmentación de las poblaciones que esto supone.
El Águila Imperial cuenta en estos momentos con un plan específico para su recuperación
dentro de la comunidad y es una especie bien conocida, pero presenta una gran dependencia del
manejo y gestión que se realiza por parte de las administraciones. Varias de las actuaciones de
conservación están dando buenos resultados y podrían servir de ejemplo.
Continuar con las medidas para reducir la mortalidad, fomentar la recuperación del conejo,
evitar la alteración de su hábitat y aumentar los territorios protegidos incorporando a estos las
principales zonas de campeo y dispersión son algunas de las líneas principales a seguir.
148
Mapa 10. Áreas de influencia y crítica del Águila Imperial ibérica en el área de estudio.
149
Aegypius monachus: El Buitre negro es una especie de distribución paleártica y posee
en España la mejor población europea. Aunque ha desaparecido prácticamente del resto del
continente, ha logrado mantener en la Península Ibérica efectivos suficientes para el sostenimiento de
la especie.
La población en Castilla y León se estimaba en unas 231 parejas repartidas en diferentes
colonias por el Sur de la comunidad en el año 2.000 (Sánchez Aguado, 2004). El límite norte de la
distribución de la especie en la península aparece precisamente en el piedemonte de la sierra de
Guadarrama con 67 parejas (Soto-Largo y Oria, 2000) repartidas en dos colonias en los pinares de
Guadarrama y Navafría. Al igual que para el Águila Imperial hay que destacar la presencia en los
montes de Valsaín del Buitre Negro donde coinciden ambas especies, ya que el Buitre negro expande
sus colonias hacia el Noreste, donde precisamente presenta mayores dificultades para la nidificación
debido al tipo de explotación forestal llevada a cabo en los pinares de Navafría.
La ZEPA de Guadarrama (Sanz Zuasti et al., 2004) es un enclave muy importante para su
reproducción, siendo la segunda localidad con un mayor número de parejas en Castilla y León. En el
espacio hay tres núcleos de cría que en la actualidad constituyen una misma colonia, y cuyos límites
se continúan por la vertiente madrileña (Alto Lozoya). La población reproductora de la vertiente norte
del Guadarrama ha duplicado sus efectivos en los últimos diez años pasando de 29 parejas
nidificantes en el año 1990 a 66 parejas en el año 2000. Esta población reproductora tiene
importancia a nivel regional, nacional e internacional. También resulta habitual la observación de
Aves inmaduras (existe una población flotante de casi 70 ejemplares que utilizan dormideros en la
zona) o procedentes de otras colonias cercanas.
Su presencia es conocida históricamente (Verner, 1909), es probable que su denominación
popular en estas tierras de “Abanto negro” haya dado nombre a alguno de los enclaves más
característicos de esta Sierra (Alto de Abantos y Pinar de Abantos en Madrid). Al igual que para el
Águila Imperial, el Buitre Negro anida en árboles, aprovechando principalmente pinos de gran porte.
Su tasa de reproducción es muy baja ya que pone un solo huevo al año. La época de cría abarca los
meses de Enero a Agosto; siendo la problemática durante esta época la misma que para el Águila
Imperial. La dieta de la especie incluye diversidad de carroñas pero localiza con mayor facilidad
restos de pequeños animales como el conejo, lo que evita el exceso de competencia con el Buitre
Leonado. Para conseguir su alimento los buitres llevan a cabo grandes desplazamientos
esencialmente hacia las zonas de llanura castellana de campiña y monte adehesado donde localiza
las carroñas con mayor facilidad.
El seguimiento continuado de la especie ha proporcionado un mayor conocimiento de la
especie y una evolución positiva de las colonias con un aumento progresivo de las parejas, 75
parejas (E. Soto-Largo et. al. 2003). Sin embargo, la mayor amenaza actual para el Buitre Negro es
la misma que para el Águila Imperial, el envenenamiento ilegal, seguido de cerca por las molestias
derivadas de la actividad humana. En varios trabajos recientes se resalta que los nidos de Buitre
negro se encuentran siempre a una cierta distancia de las pistas (García Herrera, 2005; Morán et al.,
2006). La disminución de los recursos tróficos a causa de la desaparición de muladares para prevenir
las encefalopatías espongiformes puede tener solución con la nueva reglamentación (Real Decreto
1098/2002) que proporciona cobertura de nuevo a esta práctica que tan beneficiosa es para las
especies necrófagas.
Las medidas adoptadas en los últimos años han dado resultados positivos en líneas
generales aumentando los efectivos de la especie, la persecución del envenenamiento ilegal, la
150
conservación del hábitat y la creación de muladares (evitan el envenenamiento) deben estar entre
estas medidas.
Figura 12: Evolución de la población reproductora de Buitre negro en el área de estudio. Tomado de
Sanz Zuasti et al. (2004)
Neophron percnopterus: El Alimoche es una especie de distribución paleártica que se
encuentra en grave declive en todo el mundo, cuenta en España con una de las poblaciones más
importantes a nivel mundial.
La ZEPA de Guadarrama contaba con una sola pareja reproductora en el año 2000. Es más
frecuente la observación de ejemplares en migración o procedentes de áreas de cría próximas. Sanz
Zuasti et al (2004) no descartaban su desaparición de la especie en la zona en los próximos años.
Su presencia como nidificante en el parque es escasa ya que sus hábitos le llevan a utilizar
paredones de los roquedos, escasos dentro de los límites del PORN, pero existen áreas cercanas
utilizadas frecuentemente por el Alimoche para anidar, lo que le convierte en un visitante habitual
para alimentarse en zonas del futuro parque nacional en Segovia.
En la península, el Alimoche suele aparecer sobre el mes de Abril, proveniente de África,
donde pasa el invierno; el periodo de cría se prolonga desde este mes hasta el de Agosto, tiempo
durante el que es muy sensible a las molestias humanas. Anida generalmente en cavidades de
farallones rocosos y su presencia no es fácil de detectar, lo que conlleva la ausencia de un censo
fiable. Se ha constatado sin embargo una grave tendencia al declive de sus poblaciones (50% en 30
años), lo que le ha llevado a un especial grado de consideración en el último libro rojo (Donázar,
2004). Sólo en algunos enclaves las poblaciones se han mantenido estables pero sin que se pueda
constatar un crecimiento de las mismas.
Las amenazas principales son las mismas que las mencionadas para el Buitre Negro,
incidiendo en el envenenamiento que podría reducirse si se promovieran los comederos controlados
para estas especies. No existen planes específicos para la conservación y recuperación de ésta
151
especie en ninguna Comunidad Autónoma española. Sería bueno desarrollar un plan específico en
Castilla y León tomando ejemplo de las medidas tomas para otros necrófagos como el Buitre Negro
con el fin de detener la tendencia negativa de la población española, lo que un futuro podría servir
parar la recuperación del Alimoche a nivel europeo.
Ciconia nigra: La Cigüeña negra cuenta en la Península con la población situada más al
Sur de Europa. Con tan sólo unas 387 parejas reproductoras, esta población se encuentra aislada del
resto de la población europea. Se distribuye por el centro-oeste peninsular y su difícil seguimiento
probablemente indique que el número de parejas esté subestimado (Cano y Hernández, 2004).
Castilla y León cuenta con una población de alrededor de 47 parejas. En la provincia de Ávila
y Segovia las parejas reproductoras son alrededor de 12 y varias se encuentran vinculadas a los
territorios del PORN en Segovia. Sanz-Zuasti et al. (2004) Indican que la ZEPA de Guadarrama es
área de reproducción reciente con al menos dos parejas en el año 2002. La observación de adultos
resulta cada vez más frecuente por lo que es posible que la población reproductora esté en.
Es una especie migratoria nidificante. Los adultos defienden un territorio espacial definido por
el área de nidificación, donde el nido aparece como el centro de la actividad reproductiva y en su
periferia están las zonas de alimentación que se ubican en el entorno. Ocupa nidos de años
anteriores y ambos sexos construyen un voluminoso nido de ramas con materiales locales, forrado
delicadamente con musgos, hierbas verdes y gramíneas, en alcornoques, robles, pinos y más
frecuentemente en cornisas de acantilados, cerca siempre del agua.
En el Sistema Central se encuentra ligada a los amplios pinares cercanos a las cuencas de
ríos como el Alberche y el Tiétar en la vertiente Sur, y el Voltoya, el Eresma o el Moros en la vertiente
Norte. Al menos dos parejas han criado en los últimos años dentro de los límites del PORN parque
(Soto-Largo et al., 2003). Su difícil localización y timidez hace pensar que el número de parejas del
Sistema Central esté subestimado.
La alteración del hábitat de las áreas de nidificación por obras de infraestructura y la presión
urbanística son su mayor amenaza en algunas zonas. Es especialmente sensible a las molestias
humanas. La regulación de las actividades de gestión forestal, recreativas y de navegación en ríos y
embalses son claves para reducir la perdida de nidadas por estos motivos. La contaminación de las
aguas continentales es problemática en algunas zonas de alimentación.
Tan sólo la comunidad de Castilla y León cuenta con un plan específico para la recuperación
de la especie. Sería necesario realizar un mejor seguimiento de la población existente y conocer los
efectivos reales de la especie, especialmente en el Sistema Central. La valoración adecuada del
impacto de ciertas obras de infraestructura y la protección de los lugares de cría, con restricción del
transito ceca de éstos, se encuentran dentro de las principales medidas que se deben adoptar.
152
Mapa 11. Áreas de influencia y crítica de la Cigüeña negra en el área de estudio.
153
Milvus milvus: El Milano Real era una de las Rapaces menos conocidas hasta hace poco
tiempo. Su distribución de la especie a nivel mundial se restringe al Oeste de los Urales, el 90% de la
población mundial reside entre Alemania, Francia y España. Se calcula que puede haber sufrido una
regresión del 50% en los últimos 10 años, lo que ha llevado a tener en cuenta la gravedad de la
situación para la especie.
La población española se concentra en el centro-oeste peninsular, Navarra y norte de
Aragón. La escasez de estudios y censos específicos para la especie hace difícil cuantificar sus
efectivos con exactitud. En 1994 se estimaban 1.700-2.000 parejas en Castilla y León, lo que
prácticamente suponía el 50% de la población española, estimada en 3.300-4.100 parejas (Viñuela,
1999) y en la actualidad, sólo diez años después, esta cifra puede haber disminuido hasta las 8501.000 parejas. Las poblaciones más notables se observan en las provincias de Salamanca y Zamora,
en las que se presenta de manera abundante en las dehesas de vacuno en régimen extensivo. En
Ávila y Segovia la población se asocia a las zonas de piedemonte y media montaña del Sistema
Central, principalmente en la vertiente norte de las sierras. El Milano Real se puede encontrar
prácticamente en todo el territorio del futuro parque nacional de la Sierra de Guadarrama.
El hábitat más común del Milano Real es un paisaje mixto, que incluya áreas arboladas, no
necesariamente grandes, pero si que contengan árboles de buen porte para la nidificación, y zonas
abiertas de cultivos o pastizal donde alimentarse. Es una rapaz de carácter oportunista, se alimenta
de carroñas y presas fáciles, desde Insectos a conejos jóvenes o enfermos. Presenta
comportamientos gregarios, especialmente en invierno, cuando se acoge a la práctica totalidad de la
población europea que inverna en España preferentemente, reuniéndose entonces las Aves en
grandes dormideros o en torno a las fuentes de alimentación.
Las costumbres oportunistas y asociadas a las actividades humanas (basureros, carreteras,
granjas…) tienen mucho que ver con el declive de la especie, probablemente la rapaz mas afectada
por los envenenamientos en la actualidad ya que su facilidad para encontrar pequeñas carroñas y
presas enfermas le hace ser una de las primeras especies en localizar estos alimentos y cebos
envenenados. Este problema se ve acrecentado por la alta sensibilidad de las especie a todo tipo de
tóxicos, incluidos pesticidas agrícolas y rodenticidas. Si a esto añadimos los comportamientos
gregarios, se pueden producir intoxicaciones masivas. A menudo la aparición de ejemplares muertos
en una zona advierte de la presencia de venenos en la misma, que pueden afectar a posteriori a
especies más llamativas como el Buitre Negro y el Águila Imperial.
A diferencia de otras rapaces, parece no existir conciencia del delicado futuro del Milano
Real, su aparente abundancia no refleja la realidad del estado de salud de la especie. España acoge
en invierno a casi el 90% de la población europea y juega un papel clave en la conservación de la
especie. Dejado de lado por las ONG conservacionistas y las administraciones, hacen falta medidas
urgentes para frenar el declive de la especie. Una adecuada gestión del hábitat, manteniendo los pies
de árboles con nidos de la especie en las talas de bosques de ribera y sobre todo el control
exhaustivo de los venenos en cotos de caza, junto a cambios en las medidas de control de plagas en
basureros y cultivos; son algunas de las principales medidas que se han de tener en cuenta si
queremos conservar una especie emblemática de nuestros montes.
154
Gallinago gallinago: La Agachadiza es un limícola de distribución holártica que aparece en
la península de forma casi testimonia, con sólo unas 50-75 parejas reproductoras crían en España
(Salvadores, Arcos y Hortas 2004). Es sin embargo, un invernante habitual en la Península Ibérica a
donde llega desde el resto de Europa.
Aparece en el sistema Central, con una escasísima presencia dentro del área de estudio,
donde cría en zonas de media-alta montaña (1.500-2.000 m.). Las características silíceas de estas
montañas, en las que las aguas circulan en superficie, le proporcionan zonas adecuadas para la
reproducción. Utiliza prados, juncales, ligados a pequeños cursos de agua y extensiones
higroturbosas, asociadas con el pastoreo extensivo de vacuno.
La inclusión de esta especie como significativa se debe a la rareza de la misma como
nidificante en la península ibérica, y a la alta sensibilidad de la misma a la alteración de las
condiciones del medio, tanto a la calidad de las aguas como al cambio del régimen hídrico que
alimenta estas zonas húmedas (Smith 1983). El drenaje de estas zonas para captación de aguas o su
trasformación en pastizales intensivos de ganado ha afectado directamente al especie en algunas de
las localidades de cría en España.
Realizar un buen seguimiento de la especie y proteger legalmente las zonas húmedas que
ocupa, favorecer el pastoreo tradicional extensivo, evitar la caza en localidades de cría y recuperar
este tipo de humedales favorecería el mantenimiento de la especie y de un hábitat tan particular y
necesario para esta y otras especies. Son tal vez los intereses privados, interesados en explotar
económicamente este tipo de humedales a gran altitud, la mayor amenaza para el mantenimiento de
la Agachadiza común como nidificante en estas zonas.
Chersophilus duponti: La Alondra de Dupont o Ricotí cuenta en España con la única
población europea, y esto juega un papel clave en la conservación de la especie, cuya distribución
mundial está restringida a la Península Ibérica y Norte de África.
Sus poblaciones se encuentran fragmentadas y bastante localizadas, vinculadas a zonas
esteparias muy concretas. El número total de individuos en España se calculó en unos 13.000, pero
es probable que estos datos estén sobrevalorados. Castilla y León cuenta con una buena población
en el este de la comunidad, la mas importante de España con 6.250 individuos (Garza y Suárez,
1990), pero la población vinculada al Guadarrama es pequeña y situada en el límite exterior del
mismo, por lo que no la podemos considerar importante en la gestión del mismo.
El hábitat típico de la especie se corresponde con zonas esteparias de poca pendiente y
cubiertas de matorral camefítico (tomillares, cantuesales, aulagares, etc) de una altura media entre 20
y 40 cm y que se encuentra asociado al pastoreo extensivo de ovino. Evita el matorral excesivamente
alto y cerrado, o demasiado bajo, cultivos y pastos. Es, sin embargo, tolerante respecto a la altitud,
clima o sustrato. Es un ave sedentaria, el periodo de cría es muy amplio (Febrero-Julio) y sufre una
gran predación sobre las nidadas.
La separación y fragmentación de las poblaciones es la primera de las dificultades a la que se
enfrenta la especie (Garza, Suárez y Tella 2004). Es muy sensible a la alteración de su hábitat, muy
dependiente de la actividad humana. La roturación, reforestación y el excesivo o escaso pastoreo
pueden modificar de manera radical estas zonas esteparias y provocar la desaparición de algunas
poblaciones.
155
La Alondra de Dupont necesita en primer lugar el reconocimiento de la gravedad del estado
de la población española y la implantación de programas específicos para la recuperación de la
especie. La protección de su hábitat, tradicionalmente infravalorado, resulta fundamental. La
realización de programas de estudio y seguimiento de la Alondra que proporcionen la información
necesaria para una buena gestión y protección de la especie son claves para el mantenimiento de las
poblaciones. Estas son las medidas más urgentes que habría que tomar.
Falco naumanni: Especie frecuente hasta hace 50 años, ha sufrido una fuerte regresión en
las últimas décadas. De distribución paleártica, en Europa el Cernícalo Primilla es típicamente
mediterráneo y conserva en España sus mejores efectivos con unas 15.000-20.000 parejas, un 80%
menos que a mediados del siglo XX (Atienza y Tella,2004).
El Cernícalo Primilla es probablemente la más emblemática de las pequeñas rapaces que
habitan en Castilla, debido a su alto grado de interacción con las actividades humanas. No se tienen
datos seguros del estado de la población nidificante en Castilla y León, pero puede ser de las más
estables en la Península. La presencia dentro de los límites del parque es escasa y se asocia a
núcleos de población donde las parejas encuentran edificaciones adecuadas para la cría.
Llega a la meseta en primavera para criar, y nidifica con preferencia en edificaciones
humanas, a menudo en ruinas, también utiliza cortados rocosos pero de forma casi testimonial. Suele
formar colonias, pero también crían en solitario. Está muy ligado a las actividades agrarias
tradicionales, se alimenta de Insectos y pequeños Vertebrados que captura en zonas de cultivo y
pastoreo, evitando los cultivos intensivos.
La mayor amenaza para la más pequeña de las rapaces europeas es el drástico cambio de
los usos del suelo que se ha producido en las últimas décadas. El desarrollo urbanístico de los
núcleos de población donde cría lo aleja de las zonas de alimentación, a lo que se añade la
desaparición de gran parte de éstas. Si a esto se une la intensificación de la agricultura y el uso
generalizado de pesticidas, conseguir presas es cada vez mas complicado para el Cernícalo Primilla.
No existen datos de la incidencia de estos tóxicos sobre la especie pero, dada la incidencia que
presentan sobre otras rapaces, se puede pensar que también estén afectando al Cernícalo Primilla.
La perdida de lugares de nidificación por obras de restauración ha llevado a la desaparición de
algunas colonias, este problema puede tener fácil solución si en la ejecución de las mismas se prevé
la adecuación de nuevos lugares, sin que estos interfieran con la conservación del patrimonio
(SEO/Birdlife, 1999); cuando la amenaza no es la rehabilitación puede llegar a serlo la ruina de esos
mismos edificios.
Es necesario desarrollar nuevas prácticas agrarias que eviten el uso indiscriminado de
insecticidas y favorecer desde las administraciones los usos tradicionales del suelo. La sensibilización
de las autoridades responsables de patrimonio con el fin de evitar la pérdida de los lugares de
nidificación en trabajos de restauración y evitar el desarrollo urbanístico masivo son medidas que se
deben contemplar de cara al futuro de esta especie.
Circus pygargus: Al igual que sucede con el Milano Real, no existen demasiados datos que
permitan valorar adecuadamente la evolución del Aguilucho cenizo en la zona en los últimos años. Es
una especie estival y reproductora en España, la mayor parte de la población se sitúa en el centrooeste peninsular. El censo de 1994 estimaba la población en unas 3.647-4.632 parejas (Ferrero,
156
1995), pero no han existido estudios posteriores a nivel nacional que reflejen su evolución en los
últimos años; aunque algunos datos hacen deducir que la tendencia a disminuir de la población
puede llegar a ser grave en ausencia de medidas de conservación (Arroyo et. al., 2002).
Castilla y León alberga la mayor población reproductora, asociada a las estepas cerealistas, y
se estima entre 1.200-1.500 parejas. El Aguilucho Cenizo se presenta en todo el límite Oeste del
futuro parque de Guadarrama, ocupando zonas de cultivo, donde nidifica en el suelo habitualmente
de forma colonial. Su alimentación principal son los micromamíferos y las pequeñas Aves,
dependiendo de su disponibilidad para la cría, y fluctuando intensamente dependiendo sobre todo de
las plagas de topillos.
Al contrario que las especies mencionadas anteriormente, no parece verse muy afectada por
los envenenamientos, la amenaza que mas nos debe preocupar es el cambio de los usos del suelo,
de cereal a regadío o de rústico a urbano, y el solapamiento de la recolección con el periodo de cría,
lo que provoca una disminución de terrenos adecuados para la nidificación y una pérdida de nidadas
que están afectando al mantenimiento de las poblaciones. El uso abusivo de plaguicidas en los
cultivos provoca una perdida de los recursos tróficos básicos para la especie. La persecución humana
es problemática en zonas con especies cinegéticas de caza menor (Arroyo y García, 2004).
El control de nidos para evitar su pérdida durante la recolección es la principal medida que se
está llevando a cabo en diferentes Comunidades Autónomas con resultados positivos; pero son
necesarias medidas complementarias como medidas agroambientales para reducir el uso de
plaguicidas que afectan a las poblaciones presa y retrasar la cosecha en algunas zonas. La
elaboración de un censo a nivel nacional para conocer en detalle el estado de las poblaciones es
básico para aplicar correctamente estas medidas
- Otras Aves significativas de la ZEPA de Guadarrama (Sanz Zuasti et al., 2005):
Una reducida población de Buitre Leonado nidifica en el espacio protegido (cuatro parejas en
el año 1999). La población divagante se incrementa de manera notable durante el verano, formando
dormideros de hasta 200 ejemplares, constituidos por individuos dispersivos desde las colonias
cercanas.
El Águila Real presenta en la zona una interesante población reproductora con cuatro parejas
nidificantes en el año 2000. El Halcón Peregrino se reproduce en la zona de manera habitual (tres
parejas nidificantes en el año 2002), siendo posible observar ejemplares adultos e inmaduros todo el
año. El Aguilucho Cenizo podría nidificar en pequeña cantidad, siendo más frecuente durante los
períodos migratorios, especialmente a finales del verano, cuando pueden observarse pequeños
grupos alimentándose en los pastizales serranos. El Aguilucho Pálido aparece en paso migratorio y
durante la invernada y podría criar ocasionalmente.
La ZEPA de Guadarrama es también un área histórica de nidificación de Águila Perdicera,
Alimoche y Quebrantahuesos con observaciones recientes de individuos divagantes, pero sin
evidencias claras de cría.
Además de las anteriores, otras especies del Anexo I de la directiva de Aves necesitan
especial comentario por su interés (Sanz Zuasti et al., 2004). En especial, tiene importancia la variada
157
comunidad de rapaces forestales entre las que destacan el Águila Calzada (42 parejas en 1999 en el
Pinar de Valsaín con importancia a nivel nacional e internacional), Halcón Abejero (cinco parejas),
Milano Negro, Milano Real (29 parejas en 1999) y Águila Culebrera (15 parejas en 1999).
También la población reproductora de Chova Piquirroja (unas 100 parejas en 1999) tiene
importancia a nivel nacional e internacional. La ZEPA incluye un importante núcleo reproductor de
Pechiazul con interés regional y nacional. Presentan también cierto interés las poblaciones
reproductoras de Cigüeña Común (50 parejas en 1999), Búho Real (al menos tres parejas), Martín
Pescador, Collalba Negra, Alcaudón Dorsirrojo (ésta última con interés biogeográfico). Otras especies
reproductoras son: Calandria, Terrera Común, Totovía, Bisbita Campestre, Curruca Rabilarga y
Escribano Hortelano.
La población nidificante de Azor (unas 34 parejas) tiene importancia en el ámbito regional. Es
Interesante la posible presencia reproductora del Lúgano (quizás sólo ocasional), especie muy
escasa como nidificante tanto en Castilla y León como en el conjunto de España. Reproducción
posible de Pico Menor. Área de invernada de Mirlo Capiblanco y Camachuelo.
Otras especies de interés que nidifican en el espacio protegido son el Gavilán, Alcotán,
Críalo, Golondrina Dáurica, Bisbita Alpino, Acentor Alpino, Mirlo Acuático, Roquero Rojo (con
población no cuantificada, que podría tener importancia a nivel internacional), Roquero Solitario,
Curruca Cabecinegra, Reyezuelo Sencillo y Verderón Serrano.
158
2.1.8.3.1.7.- Mamíferos:
La riqueza de los Mamíferos de Guadarrama en la zona de estudio se hace patente en los
resultados obtenidos en el inventario. Se ha constatado en el Guadarrama segoviano la presencia de
62 especies de las 84 presentes en la Comunidad de Castilla y León. Comprende por tanto el 73,8 %
de los Mamíferos de la región. A nivel nacional equivale aproximadamente al 54 % del total nacional.
Las 62 especies (60 autóctonas y dos introducidas recientemente) incluyen 3 Erinaceomorfos, 5
Soricomorfos, 24 Quirópteros, 10 Carnívoros, 5 Artiodáctilos, 13 Roedores y 2 Lagomorfos. Teniendo
en cuenta la extensión del área de estudio, podemos calificar la representatividad de su fauna de
Mamíferos como sobresaliente. Los Mamíferos de Guadarrama forman una parte importante de la
riqueza faunística tanto en especies como en especies significativas y/o amenazadas.
Tabla 40. Riqueza de especies de Mamíferos en el área de estudio y otros ámbitos territoriales.
Ámbito del
PORN en
Castilla y
León1
Porcentaje
respecto a
Castilla y
León %
Mamíferos
62
73,80%
84
62
63
118
264
Total
Vertebrados
283
72,01%
393
283
438
635
1.544
Grupo
taxonómico
Número de
especies en
Castilla y León2
Ámbito del
PORN
Madrid3
Comunidad
de Madrid4
España5
Europa6
Con respecto a la distribución altitudinal de las especies en la Sierra, la mayoría de los
Mamíferos tienen una distribución uniforme por todo el territorio. Son los Insectívoros los que
presentan la distribución altitudinal más amplia, desde la base de la Sierra a las cumbres como
Crocidura russula y Sorex granarius que alcanzan los 2.000 m, aunque hay excepciones como
Suncus etruscus que se halla sólo en las zonas bajas). El resto de órdenes se encuentran por encima
de los 1000 m, alcanzándose una riqueza elevada de especies en el territorio entre cotas de 1200 y
1800 m. El gato montés es otro de los Mamíferos que se observa de forma ocasional, el número de
individuos no es muy elevada, a una altitud media 1.400 m. Se han detectado individuos
mayoritariamente en la parte Sur de la Sierra. La nutria (Lutra lutra) ha sido citada a altitudes bajas y
medias, al no existir lagunas en zonas de alta montaña, ocupadas ocasionalmente en otras sierras
como Gredos. El Topillo nival o neverón de Gredos, subespecie endémica del Sistema Central, es
una especie emblemática propia de las zonas de praderas de cumbres. La especie parece en
regresión en toda la zona
En datos de la Sierra de Guadarrama anteriores a la década de los 80, se indicaba que el
Desmán ibérico (Galemys pyrenaicus) se distribuiría de Norte a Sur, localizándose principalmente en
altitudes medias de 1.000-1.600 m. Sin embargo, el Desmán Ibérico parece hallarse hoy al borde de
la extinción, esta especie necesita de un urgente estudio que permita conocer su situación actual y un
plan de recuperación de sus poblaciones que incluya la eliminación del visón americano, dentro de
los posible, la garantía de agua permanente en los arroyos serranos y la restauración de los medios
acuáticos.
159
Figura 13. Riqueza de especies de Mamíferos por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona de
estudio.
La riqueza de Mamíferos en cuadrículas UTM (10x10 km) muestra el mismo patrón que en
Aves, estas se concentran en zonas bajas principalmente y en el Sur del área de estudio, aunque
probablemente se debe a la mayor intensidad de muestreo en estas zonas.
- Importancia de los Mamíferos de Guadarrama a nivel nacional
Para algunos grupos de Vertebrados se ha analizado la importancia de diversas áreas
españolas, especialmente espacios naturales protegidos, a nivel nacional. Esta valoración tiene en
cuenta tanto la riqueza (número) de especies como la presencia y abundancia de especies
amenazadas o endémicas a nivel local, regional o nacional. En el caso de las Aves esto ha llevado a
la declaración de las ZEPAs (Zonas de Especial Protección para las Aves) y en el caso de los
herpetos, el análisis de las Áreas importantes para los Anfibios y Reptiles de España (Mateo, 1996,
2002).
En el mismo sentido, recientemente la Sociedad Española para el estudio y la conservación
de los Mamíferos (SECEM) realiza para el Ministerio de Medio Ambiente la catalogación de las ZIM
españolas (Zonas de Interés para los Mamíferos). Aunque este proceso está ahora mismo en
marcha, los datos de la ficha ZIM “Sierra de Guadarrama” realizada en el año 2002 revelan su
importancia a escala nacional. Hay que aclarar sin embargo que esta ZIM no se circunscribe sólo a la
zona segoviana de Guadarrama, sino que incluye zonas de Ávila y Madrid, es decir de la vertiente sur
160
de la Sierra. Por otro lado, las especies presentes significativas no incluyen a los Murciélagos, tan
importantes dentro de la Sierra de Guadarrama, que sin embargo son contemplados y protegidos
específicamente mediante la creación del LIC Cueva de los Murciélagos, que describimos más
adelante. Recogemos aquí de forma sucinta los datos principales de la ficha ZIM:
Nombre: M-1 Sierra de Guadarrama
Criterios: A1, B1, B3, C1, C2, E1, E2, E3, F, G
2
Superficie: 2.015 Km
Provincias: Madrid, Segovia, Ávila
CCAA: Madrid, Castilla y León
Especies por las que cumple criterios: Galemys pyrenaicus, Microtus cabrerae, Felis
silvestris, Arvicola sapidus, Cervus elaphus, Talpa occidentalis, Lepus granatensis, Oryctolagus
cuniculus, Microtus duodecimcostatus, Sorex granarius, Microtus lusitanicus, Sorex minutus
carpetanus.
Especies presentes: Erinaceus europaeus, Talpa occidentalis, Crocidura russula, Vulpes
vulpes, Martes foina, Genetta genetta, Capreolus capreolus, Sciurus vulgaris, Microtus
duodecimcostatus, Apodemus sylvaticus, Rattus norvegicus, Mus domesticus, Mus spretus, Eliomys
quercinus, Lepus granatensis, Oryctolagus cuniculus, Ovis gmelini, Sus scrofa, Felis silvestris,
Mustela nivalis, Lutra lutra, Arvicola sapidus, Meles meles, Suncus etruscus, Cervus elaphus, Dama
dama, Chionomys nivalis, Microtus lusitanicus, Mustela putorius, Microtus cabrerae, Microtus arvalis,
Rattus rattus, Neomys anomalus, Sorex minutus, Sorex granarius, Canis lupus, Galemys pyrenaicus,
Capra pyrenaica (*en esta ficha no se han recogido a los Quirópteros).
La importancia de los Quirópteros en Guadarrama viene señalada tanto por sus refugios en
las cuevas de zonas calcáreas como por las numerosas especies de murciélagos forestales. En el
caso de las cuevas, una contiene poblaciones tan importantes que ha sido declarada LIC de la Red
Natura 2000, el denominado Cueva de los Murciélagos (ES4160043; ver Junta de Castilla y León
y/o DGCN, MIMAM para una información completa). La cueva, situada en el término de Losana de
Pirón (Segovia) (Latitud N 41º5’6’’; Longitud W 4º1’52’’; Altitud 925 m) alberga la colonia de
murciélagos más importante de la provincia de Segovia. Hasta el año 1995 era la segunda en
importancia en Segovia, hasta el declive de la colonia de La Granja, y se considera la segunda
colonia más importante de Castilla y León en cuanto a la reproducción de los murciélagos, detrás de
la cueva de Castañarejo (Ávila) en el Sur de Gredos. En cualquier caso, este LIC no se halla dentro
de la zona considerada en el PORN, por lo que no sería en principio afectada por la declaración del
Parque nacional u otras figuras como parque regional o natural por la Junta de Castilla y León
En la cueva se han identificado 5 especies, de las cuales Myotis myotis, Myotis blythii y
Miniopterus schreibersii constituyen el grueso de la colonia de cría, mientras que Rhinolophus
ferrumequinum y R. hipposideros son mucho más escasos, utilizándola mayoritariamente en los
periodos de apareamiento (otoño) e hibernación. La colonia alberga el mayor número de individuos
en julio y agosto, con la aportación de los jóvenes del año. La vulnerabilidad de esta colonia no es
muy alta pues no tiene interés para la espeleología, pues se trata de una pequeña cavidad horizontal,
aunque resulta atractiva por su facilidad de acceso y la posibilidad de observar una colonia de
murciélagos espectacular. La cavidad es también ocupada por ganado doméstico y ha sido objeto de
excavaciones arqueológicas y/o paleontológicas.
161
- Estado de conservación:
Revisando el Catálogo nacional de especies amenazadas, normativa aplicable en Castilla y
León al no existir un Catálogo faunístico regional, podemos comprobar que no existe ninguna especie
en peligro de extinción en la zona de estudio. El único representante que habría estado presente en
la zona hasta hace probablemente una o dos décadas, es el Lince ibérico, abundante en la zona de la
Granja en tiempos pasados y que hoy se considera extinguido en Segovia y Guadarrama. En la
Comunidad de Madrid el Desmán Ibérico se considera en Peligro de extinción, mientras que en
Castilla y León es de Interés especial. Nuevamente, el CNEA se revela como anticuado a este
respecto y ratifica la necesidad de poseer un Catálogo faunístico regional para Castilla y León. Diez
especies son Vulnerables en el CNEA, todas ellas Murciélagos. De interés especial se incluyen 18
especies, entre ellas el Desmán, 11 Quirópteros, la Nutria, el Gato montés y el Topillo de Cabrera.
Tabla 41. Número de taxones de Mamíferos en cada categoría de amenaza del Catálogo Nacional de Especies
Amenazadas .
Mamíferos
E
AH
V
IE
0
0
10
18
En el atlas de Mamíferos de España de 2002 (Palomo y Gisbert, 2002) se recogen las nuevas
categorías UICN (2001) para todos los grupos, con excepción de los Quirópteros. Encontramos 1 en
peligro de extinción. 10 vulnerables, 9 casi amenazadas, 33 de preocupación menor, 4 con datos
insuficientes y 4 no evaluadas. Comparando las categorías de la UICN del Libro Rojo de 1992 y las
de 2002 vemos una equivalencia entre las categorías a excepción de la calificación del Desmán
ibérico, que ha cambiado su categoría de “vulnerable” a “en peligro”. Los principales factores de
amenaza son los derivados de la degradación y fragmentación de sus hábitats: extracción de agua de
los cauces naturales, creación de embalses, deterioro de bentos y contaminación intensa. Por otra
parte Myotis bechsteinii ha pasado de estar “en peligro de extinción” a un grado de menor amenaza,
vulnerable.
Teniendo en cuenta las categorías UICN es evidente que la especie más amenazada de
extinción es el Desmán ibérico, seguido de diversos Murciélagos y Carnívoros. Las 10 especies
vulnerables son 6 Quirópteros más el Gato montés, el Ciervo, La Cabra montés, el Musgaño de
Cabrera y la Rata de agua. Las 9 especies casi amenazadas se reparten por igual entre todos los
grupos de Mamíferos. Los Quirópteros representan casi un tercio de la fauna de Mamíferos de la
Sierra y constituyen el grupo dominante de Mamíferos protegidos. El declive de sus poblaciones se
debe principalmente a la destrucción de sus refugios o alteración de su hábitat por la actividad
humana, como detallaremos más adelante.
Considerando la Directiva de Hábitat, 13 especies se hallan en el anexo II; 27 en el IV y 13
especies en ambos conjuntamente. Tres especies cinegéticas son explotables (Anexo V).
Tabla 42. Número de especies de Mamíferos en cada categoría de la Directiva de Hábitats.
Mamíferos
II
13
IV
27
II y IV
13
V
3
TOTAL
30
162
De los resultados obtenidos, se puede indicar que la zona presenta una elevada riqueza de
Mamíferos, muchos de ellos amenazados. Se pone de manifiesto una amplia interacción entre los
Mamíferos y las actividades humanas, motivo por el cual se encuentran amenazadas la mayoría de
las especies. Las principales causas de amenaza son alteraciones de hábitats por presiones
antrópicas (desarrollo de actividades de ocio: esquí, caza,…) llegando a representar en algunos
casos una amenaza para la supervivencia de algunas especies.
Hay que tener en cuenta sin embargo que los Mamíferos, en especial los grupos de
Roedores, Insectívoros y Carnívoros, son los Vertebrados peor conocidos de Guadarrama, por lo que
la descripción de su estado de conservación debería tener datos actualizados sobre algunas especies
que están probablemente en fuerte declive. Es necesario un muestreo detallado futuro para estos
grupos.
Tabla 43. Número de especies de Mamíferos en cada categoría UICN, 2001 (Palomo y Gisbert, 2002). Para los
Quirópteros se emplea las propuestas por la SECEMU (2004).
Mamíferos
EX
0
EW
0
CR
0
EN
1
VU
10
NT
9
LC
33
DD
4
NE
5
Con respecto a la Directiva de hábitats, 14 especies se encuentran en el anexo II
(estrictamente protegido; 28 en el anexo II y dos en el anexo V.
Tabla 44. Estado de conservación de los Mamíferos en el Guadarrama segoviano. La columna “Propuesta
SECEMU” indica las categorías UICN propuestas por la Sociedad para la Conservación y el estudio de los
Murciélagos en 2004, ya que no se incluían en el último Libro rojo de los Mamíferos españoles (Palomo y
Gisbert, 2004). Se destacan en rojo aquellas en peligro de extinción y en negrita las más amenazadas.
Especie
Erinaceus europaeus
UICN UICN
1992 2001
NA
DD
Talpa occidentalis
K
DD
Galemys pyrenaicus
R
EN
Propuesta
SECEMU
Quirópteros
CNEA
IE
RD
RD
D.
C.
C.
CITES
1095/89 1118/89 Hábitat Berna Bonn
IV
III
II, IV
II
Sorex minutus
NA
LC
III
Sorex granarius
NA
NT
III
Neomys anomalus
NA
LC
III
Crocidura russula
NA
LC
III
Suncus etruscus
Rhinolophus
ferrumequinum
Rhinolophus
hipposideros
Rhinolophus euryale
NA
LC
III
V
NT
LC
V
II, IV
II
II
V
VU
VU A2c
IE
II, IV
II
II
V
VU
VU A2c
V
II, IV
II
II
Myotis bechsteinii
E
VU
VU A2c
Myotis blythii
V
LC
Myotis daubentonii
NA
LC
Myotis emarginata
I
VU
VU A2c
V
II, IV
II
II
V
II, IV
II
II
IE
IV
II
II
V
II,IV
II
II
163
Especie
UICN UICN
1992 2001
Propuesta
SECEMU
Quirópteros
CNEA
NT
V
RD
D.
C.
C.
RD
CITES
1095/89 1118/89 Hábitat Berna Bonn
Myotis myotis
V
NT
Myotis mystacina
I
LC
V
IV
II
II
Myotis nattereri
I
LC
IE
IV
II
II
Pipistrellus kuhlii
NA
LC
IE
IV
II
II
Pipistrellus pipistrellus
NA
LC
IE
IV
III
II
Pipistrellus pygmaeus
II, IV
II
II
NE
Hypsugo savii
K
LC
IE
IV
II
II
Eptesicus serotinus
Barbastella
barbastellus
Nyctalus leisleri
K
LC
IE
IV
II
II
I
VU
VU A2c
IE
II, IV
II
II
I
NT
NT
IE
IV
II
II
Nyctalus noctula
R
LC
V
IV
II
II
Nyctalus lasiopterus
I
NT
NT
V
IV
II
II
Plecotus auritus
I
LC
IE
IV
II
II
Plecotus austriacus
K
LC
IE
IV
II
II
Miniopterus schreibersii
I
LC
V
II, IV
II
II
Tadarida teniotis
K
LC
IE
II, IV
II
II
Canis lupus
V
NT
II, IV
II
Vulpes vulpes
NA
LC
Mustela nivalis
NA
DD
Mustela putorius
K
NT
Mustela vison
-
NE
Meles meles
Lutra lutra
Martes foina
K
V
NA
LC
NT
LC
Genetta genetta
Felis sIlvestris
Sus scrofa
NA
K
NA
LC
VU
LC
Capreolus capreolus
NA
NT
I
I
III
V
III
IE
II, IV
III
II
III
IE
V
IV
III
II
I
I
LC
I
I
I
II
III
Capra pyrenaica
R
VU
I
I
Ovis gmelini
-
NE
I
I
III
Dama dama
NA
NE
I
I
III
Cervus elaphus
NA
VU
I
I
Sciurus vulgaris
NA
LC
III
Chionomys nivalis
NA
NT
III
Arvicola sapidus
NA
VU
Microtus lusitanicus
NA
LC
V
III
III
164
Especie
Microtus arvalis
UICN UICN
1992 2001
NA
LC
Propuesta
SECEMU
Quirópteros
CNEA
RD
D.
C.
C.
RD
CITES
1095/89 1118/89 Hábitat Berna Bonn
Microtus cabrerae
Microtus
duodecimcostatus
Apodemus sylvaticus
R
VU
NA
LC
NA
LC
Mus domesticus
NA
LC
Mus spretus
NA
LC
Rattus rattus
NA
DD
Rattus norvegicus
NA
NE
Eliomys quercinus
NA
LC
Oryctolagus cuniculus
NA
LC
I
I
Lepus granatensis
NA
LC
I
I
IE
III
III
165
Mapa 12: Mamíferos significativos en el área de estudio Elaborado por Jose Ignacio
Izquierdo MIsiego
166
- Especies más significativas:
Se detallan en este apartado aquellas especies de Mamíferos de especial interés en la zona
del PORN, debido a ser especies amenazadas (Catálogo Nacional de Especies Amenazadas o
categorías UICN); ser endemismos ibéricos o locales o bien especies bandera o representativas de
algunos de los hábitats, biotopos o niveles altitudinales de la Sierra de Guadarrama. Describiremos
primero las especies de mayor interés, en orden de importancia y taxonómico, y también en función
de los hábitats que utilizan.
En la siguiente tabla presentamos en primer lugar un resumen de las especies más
significativas, la causa de esa categorización, las amenazas principales y las posibles medidas a
tomar para una gestión adecuada. Más adelante nos extendemos en aspectos de su distribución y
estado de conservación.
Tabla 45. Especies clave o significativas de Mamíferos. En negrita las más importantes.
ESPECIES
AMENAZAS
MEDIDAS A
CLAVES O
MOTIVOS
OBSERVACIONES
PRINCIPALES
TOMAR
SIGNIFICATIVAS
Galemys pyrenaicus
En peligro de
extinción
(UICN, 2002)
- Introducción del
Visón americano
- Alteración y
contaminación de los
medios acuáticos, en
especial arroyos
- Excesiva extracción
de agua de arroyos y
turberaslos arroyos
- Las pequeñas presas
y minicentrales
destruyen amplias
zonas de hábitat
apropiado
Lynx pardinus
En peligro
crítico.
Extinguido en
la zona en los
años 80-90
Falta de Conejo y de
hábitats apropiados
Felis silvestris
Vulnerable
(UICN, 2002)
Microtus cabrerae
Chionomys nivalis
abulensis
Vulnerable
(UICN, 2002)
Casi
amenazada
(UICN, 2002)
Endemismo
del Sistema
Central
- Alteración forestal
- Atropellos
- Hibridación con
gatos domésticos
- ¿venenos?
- Alteración de prados
húmedos por
desecación de arroyos
y disminución del nivel
freático
- Excesiva presencia
humana en zonas de
alta montaña
- Alteración de
roquedos
(urbanización,
aparcamientos, etc)
- Muy escaso y puntual.
Casi desaparecido de
Guadarrama. Único
Mamífero presente
considerado en Peligro de
extinción
- Cualquier acción para la
recuperación de del
Desmán pasa por el control
del Visón americano y el
mantenimiento del caudal y
calidad del agua de ríos y
arroyos
- Es urgente un
plan de
recuperación o
de manejo en la
zona
- Control del
visón y Peces
introducidos
(salvelinos, etc)
- Extinguido en los años 80-90. Sería
importante preparar el hábitat y la presencia
de Conejo para la futura reintroducción o
recuperación del Lince
- Estudio
específico de
sus poblaciones
en la zona
- Estado de conservación
bastante desconocido
- Estudio
específico de
sus poblaciones
en la zona
- Parece en regresión.
Necesita que las praderas
mantengan el nivel freático
- Estudios
concretos sobre
su estado
taxonómico,
distribución y
estado de
conservación
- No se conoce la situación
del topillo nival; podría
estar en declive, pero no
existen datos actualizados
para el Sistema Central
- La presencia el Visón
americano podría ser un
167
ESPECIES
CLAVES O
SIGNIFICATIVAS
MOTIVOS
AMENAZAS
PRINCIPALES
- ¿Excesiva presión
ganadera?
Arvicola sapidus
Neomys anomalus
Sorex minutus
carpetanus
Vulnerables
(UCIN, 2002
Teóricamente,
endemismo
del Sistema
Central
Lutra lutra
Vulnerable
(UICN, 1992;
Casi
amenazada
(NT, UICN,
2002)
Mustela putorius
Casi
amenazada
(NT, UICN,
2002)
Mustela vison
No evaluado
en el libro
Rojo (UICN,
2002) al ser
especie
introducida
- Alteración
(desecación) y
contaminación de los
medios acuáticos, en
especial arroyos y
prados cercanos
- Introducción del
visón americano
- No hay datos
precisos sobre su
estado de
conservación
- En recuperación en
los últimos años en
toda España y la zona
de estudio.
- Urbanización y
alteración de zonas
cercanas a los medios
acuáticos
- Extracción abusiva
de agua, lo que seca
los arroyos en verano,
impidiendo su uso
temporal como
recurso trófico
estacional
- Competencia y
desplazamiento por el
Visón americano,
aunque no
demostrado
fehacientemente
- las mismas que para
la Nutria, aunque
menos acuática que
ésta
- En todos los medios
acuáticos. Consume
todo tipo de
Vertebrados,
especialmente Peces,
Aves y Mamíferos
MEDIDAS A
TOMAR
- gestión
agroganadera
adecuada de
los pastizales
de alta montaña
- Se necesitan
muestreos
específicos en
los medios
acuáticos,
especialmente
arroyos de
media y alta
montaña
OBSERVACIONES
factor muy negativo en las
zonas de alta montaña
- La Rata de agua y el
Musgaño de Cabrera
parecen hallarse en declive
en la zona, si bien no
existen datos precisos. El
Visón americano es una
amenaza para ambos
En general en zonas con vegetación abundante (matorral y robledal) con
precipitaciones por encima de 700 mm
- Gestión
adecuada de
riberas y
medios
acuáticos
- No
proliferación de
embalses y
minicentrales
- No especialmente
amenazada, pero
emblemática ante la
opinión pública y clave
como depredador tope en
los medios acuáticos
- Eliminación y
control del
Visón
americano
- No existen datos
actualizados sobre su
situación. Parece en
declive en España y
Guadarrama
- Es urgente el
control de sus
poblaciones por
eliminación
física y/o
esterilización
* Especie introducida y
abundante.
Probablemente sea la
causa del declive o incluso
la extinción de varios
Anfibios, Mamíferos como
el Desmán y la Rata de
agua y quizá algún ave
ribereña
168
ESPECIES
CLAVES O
SIGNIFICATIVAS
MOTIVOS
AMENAZAS
PRINCIPALES
MEDIDAS A
TOMAR
OBSERVACIONES
Murciélagos cavernícolas y forestales especialmente amenazados
Rhinolophus
ferrumequinum
Rhinolophus
hipposideros
Rhinolophus euryale
Myotis bechsteinii
Myotis emarginata
Barbastella
barbastellus
Sciurus vulgaris
Vulnerable
(UCIN, 1992)
- Un refugio importante para los
Murciélagos cavernícolas de la zona, el
LIC “Cueva de los Murciélagos” se halla
fuera del ámbito del PORN
- Para los Murciélagos cavernícolas es
necesaria una protección estricta de
cavidades y cavernas. , con cierre de
aquellas aún no protegidas
- Para la conservación de las especies
antropófilas, campaña de educación y
sensibilización ambiental
- Para los Murciélagos forestales una
gestión forestal adecuada (mantenimiento
de árboles viejos, periodo de cortas, etc)
Vulnerable
(UCIN, 2002
Vulnerable
(UCIN, 2002
En peligro de
extinción
(UICN,
1992);
Vulnerable
(UCIN, 2002
Vulnerable
(UCIN, 2002
Vulnerable
(UCIN, 2002
Otras especies amenazadas o de interés:
- No
amenazada,
en expansión
- De interés
por su
expansión y
los problemas
que pueda
plantear a los
ganaderos
- Aunque existe un trabajo
reciente sobre los
Murciélagos de Castilla y
León, existen dudas sobre
la presencia y/o
abundancia de algunas
especies en la zona de
estudio. Por ejemplo de R.
mehelyi
- Especie interesante por su valor de observación, y como representante
de los medios forestales
- Aplicación del Plan de gestión y manejo
de poblaciones aprobado por la Junta de
Castilla y León
- Aplicación del plan de
gestión del lobo en Castilla
y León
Capra pyrenaica
- Extinguida
en
Guadarrama
desde el siglo
XIX; Especie
emblemática
en aumento
- Se ha reintroducido desde el año 1999
hasta 2005 en la zona de caza controlada
de Guadarrama. En la actualidad
alrededor de 60 adultos. En el lado
madrileño alrededor de 600 individuos.
Necesario un plan de reintroducción,
reforzamiento y gestión de las
poblaciones ya existentes
- Un Parque nacional del
Sistema Central debería
contar con una buena
representación de esta
especie emblemática
Capreolus capreolus
- No
amenazada
- En expansión en las zonas forestales
Cervus elaphus
VU
Especie cinegética presente en varias fincas privadas, pero también en
libertad
Canis lupus
169
- Mamíferos acuáticos o semiacuáticos:
Galemys pyrenaicus: El Desmán ibérico o Topo de agua es un casi-endemismo ibérico
presente desde la vertiente francesa de los Pirineos hasta la mitad septentrional de Portugal,
ocupando áreas del interior de la Península, penetrando por el Sistema Ibérico y Central, en el que
altitudinalmente supera los 2.000 m.
Es un curioso "topo" acuático con un largo hocico provisto de pelos especializados que utiliza
como un órgano táctil para detectar a sus presas mientras bucea. Vive en galerías al borde de ríos y
arroyos de fuerte pendiente, siempre en aguas oxigenadas y limpias de corriente constante. Su
presencia está ligada principalmente de la pendiente de los ríos, su profundidad (pequeña o
moderada) y la velocidad de corriente, así como a la abundancia de Invertebrados acuáticos.
Podemos considerar al Desmán una especie clave de los Mamíferos en Guadarrama debido
a su dependencia de una buena conservación de los medios acuáticos y a su rápido declive. Se
considera actualmente En peligro de extinción (UICN-2001; Palomo & Gisbert, 2002). Anteriormente
se consideraba “Vulnerable” en el libro Rojo de 1992. En el Catálogo nacional de especies
amenazadas se califica sin embargo todavía como de Interés especial. Los datos más recientes
(Nores et al., 1992; 1998; Fernández-Salvador et al., 1998 a,b; revelan una situación crítica en el
Sistema Central y especialmente en Gredos, Guadarrama y otras sierras segovianas, de donde
habría prácticamente desaparecido (Gisbert et al., 2001; García Perea y Gisbert, 2001) salvo en
algunas localidades puntuales. Un estudio inédito de 2005 (Regis, Risquez y Nores: “Distribución del
Desmán Ibérico en Segovia”. Proyectos de Investigación de la Caja de Ahorros de Segovia) confirma
esta situación, incluso agravándola por la falta de citas recientes en todos los arroyos muestreados de
la Sierra. Teo Martín Gil nos comunica un avistamiento del año 2.000 en la zona alta del río Acederas
o Riofrío, en la zona de Valsaín. Es necesario un muestreo exhaustivo sobre esta especie y un plan
de acción o manejo para su recuperación, con la eliminación de los factores negativos que actúen
sobre él.
Se han señalado diversos factores que habrían actuado en el rápido declive del Desmán,
entre ellos alteración de los habitáts acuáticos y ribereños, tales como construcción de pequeños
embalses y minicentrales, contaminación orgánica o inorgánica de los cauces, urbanización de
riberas, etc. En cualquier caso, probablemente el máximo responsable de su rarefacción sea la
expansión del visón americano en todo el Sistema Central. Para su supervivencia es necesario
mantener los ríos de la Sierra limpios y sin alterar y erradicar o al menos controlar la presencia del
Visón americano en las zonas medias y altas, especialmente.
Arvicola sapidus: La Rata de agua tiene un gran interés entre los Mamíferos de Guadarrama
debido a su dependencia del buen estado de conservación de los medios acuáticos, así como por
considerarse Vulnerable en el atlas nacional (Palomo & Gisbert, 2002). Estaría presente en todo el
Sistema Central desde las zonas bajas hasta la alta montaña. Ocupa galerías en las orillas de ríos y
arroyos de una cierta entidad y estables, alimentándose de vegetación herbácea. La alteración de los
hábitats acuáticos por dragado, canalización, etc la afectan muy negativamente. La basura en los
medios acuáticos favorece la presencia de la rata gris, que la desplaza. No existen datos precisos
sobre su situación en Guadarrama, aunque se la supone muy sensible a la depredación por el Visón
americano, por lo que estaría en fuerte regresión en todo el Sistema Central.
170
Lutra lutra: La Nutria es un mamífero semiacuático que vive en ríos, arroyos, lagos,
embalses, zonas húmedas y también en la orilla del mar en el norte de Europa. Su hábitat óptimo se
encontraría en los tramos medios y bajos de los ríos en el interior peninsular. Presente en toda
Castilla y León, aunque en la llanura Central sólo ocupa los grandes ríos. En Segovia los datos más
actualizados son de 1998, aunque los muestreos se realizaron en 1995 (Bueno y Bravo, 1990 a;
Bravo et al., 1998; Cortés et al., 1998; Velasco et al., 2005). Se han realizado muestreos en el año
2005, pero están inéditos hasta la fecha. En 1995 la Nutria se encontraba frecuentemente en los ríos
Moros y Voltoya (Diez Frontón, 1998; Bravo et al., 1998), al sur del Parque nacional, mientras que en
el Este provincial se citó en los ríos Riaza y Duratón. Entre ambas zonas, en los ríos Cega, Pirón y
Eresma, no se encontraron excrementos, incluso en zonas de montaña. En muchas de las
localidades se encontraron sin embargo excrementos de Visón americano.
La situación de la Nutria en la provincia de Segovia mejoró desde el primer sondeo nacional
de nutria de 1984 y probablemente se halle en plena recuperación en la fecha actual (Bueno y Bravo,
1990a; Bravo y Bueno, 1997b; Bravo et al. (1998, 1999) señalan también la presencia habitual de
cangrejo americano en los excrementos.
La presencia de la Nutria está condicionada por el caudal de los medios acuáticos y la
disponibilidad de alimento pues se comportan como predadores oportunistas. Las nutrias que viven
en ríos muestran una actividad nocturna, con máximos después de anochecer y antes de amanecer.
Las áreas de campo de las nutrias suelen tener forma lineal y se extienden a lo largo de las orillas de
los ríos, ocupando también los cauces secundarios. Siendo mayores en las zonas de montaña.
Ocupa un espacio, en término medio, de 3 a 5 Km. de río aunque puede llegar hasta 40. Especie
poliestra y polígama, que puede reproducirse durante todo el año en función de la disponibilidad de
recursos del medio. Los únicos datos sobre la dieta de la nutria en Guadarrama o Segovia
corresponden al río Moros (Diez Frontón, 1998), revelando que es también un generalista trófico,
aunque más especializado en la captura de Peces que el visón americano, que consume
fundamentalmente pequeños Mamíferos. Los Peces son la presa fundamental de la nutria mientras
que el resto de presas son accidentales en su dieta.
En simpatría, como el río Moros, la nutria desplazaría al visón hacia un nicho espacial, y en
consecuencia trofico, más terrestre. La competencia trófica entre las dos especies es mayor durante
la estación fría.
La contaminación, la destrucción del hábitat y la sobreutilización de recursos hídricos parecen
haber sido las principales causas de regresión, factores mucho más importante que la muerte directa
intencionada o accidental causada por el hombre. En la actualidad parece estar recuperándose. En
Castilla y León esa mejoría se ha experimentado sobre todo en Ávila y Segovia.
Mustela vison: El Visón americano es una especie clave dentro de la fauna de Guadarrama,
no por ser endémica, estar amenazada o ser de algún interés especial, sino por ser una especie
invasora en expansión que está afectando muy negativamente a otras especies de Vertebrados. Es
una especie norteamericana introducida para su cría por para la industria peletera. Especie
semiacuática, puede encontrarse en las cercanías de cualquier medio ribereño.
Las primeras poblaciones españolas proceden precisamente de una granja del Espinar
(Segovia), la primera instalada en España y de la que escaparon los primeros ejemplares hacia 1958.
Actualmente se halla casi uniformemente distribuido por todo el Sistema Central y su piedemonte en
171
Segovia y la mayor parte de las cuencas del Duero y Tormes (Bueno y Bravo, 1990 a, 1992, 1997;
Bravo y Bueno, 1992, 1997 a,b; Ruiz Olmo et al., 1997; Bravo, 2002; Velasco et al., 2005). En
Segovia, David Diez Frontón realizó un estudio intensivo de las poblaciones de Visón americano del
río Moros en cuanto a su distribución y dieta, así como de la posible competencia con la Nutria en la
zona (Diez Frontón, 1988; Diez Frontón y Lizana, 1999 a,b)
Los resultados básicos de este estudio reflejan que el Visón americano se distribuye de forma
regular y estable en todo el río Moros, mientras que la Nutria se halla de un modo más estable en las
zonas medias del río, realizando estancias esporádicas en los tramos más altos. Se han localizado un
mayor número de excrementos de Visón americano en zonas ribereñas más degradadas mientras
que la Nutria selecciona ecosistemas acuáticos con mayor cobertura vegetal.
Es un depredador oportunista y generalista. Es frecuente encontrarlo activo durante el día,
aunque son predominantemente crepusculares. Existen datos sobre su alimentación en el río Voltoya
(Bueno, 1994). En la zona del río Moros (Diez Frontón, 1998) es generalista en su dieta y parece
consumir las presas más abundantes en cada estación del año. Los Mamíferos son su presa
fundamental, los Peces la secundaria, los Anfibios accesoria y Aves, Reptiles y Cangrejo americano
son presas accidentales.
Es una especie invasora en expansión. Se ha intentado en diversas zonas españolas, con
poco éxito, limitar su abundancia, por sus efectos nocivos sobre el Visón europeo y el Turón
especialmente. El Servicio territorial de Medio Ambiente de Segovia realizó entre los años 1.993 y
1.997 control del visón americano en diversas zonas, especialmente en el río Moros con el fin de
controlar los escapes al medio natural. Como se detallará más adelante, es fundamental su control en
Guadarrama, buscando, si no su imposible erradicación, al menos una disminución que posibilite la
recuperación de otras especies muy amenazadas como el Desmán, Rata de agua y Musgaño,
Cangrejo autóctono, Tritón ibérico y Rana patilarga, etc.
Diez Frontón (1998) señala que el descaste mediante trampeo no es apropiado para el control
y la gestión de la especie, a no ser que sean masivos, con gran cantidad de recursos económicos y
personal y plantea diversos problemas. Bravo (2002) destaca el fracaso de las campañas de
erradicación total. Los controles para reducir al menos la densidad de las poblaciones deben
realizarse siempre utilizando técnicas de trampeo selectivo en vivo, como por ejemplo se han
desarrollado durante los últimos años en el río Tormes en Salamanca (C. Bernabeu y J.C. Velasco,
com. pers.)
Chionomys nivalis abulensis: El Neverón o Topillo nival se considera un endemismo de las
zonas más altas del Sistema Central, habiéndose citado tanto en Gredos como Guadarrama. Este
topillo de gran tamaño vive en las zonas rocosas y praderas en zonas de alta montaña, donde consume
tallos y plantas. Es presa de los mustélidos que viven en la alta montaña, como las Comadrejas o
ocasionalmente los Zorros. Establece sus colonias en zonas de pedrizas estables. Suele ser más
frecuente en zonas situadas por encima de 1.800 m, en hábitats favorables puede aparecer en
altitudes cercanas a 1.000 m. Las poblaciones sufren fluctuaciones anuales de densidad, con
mínimos a final de la primavera y máximos a finales de agosto o principios de septiembre. Las
estaciones de esquí y otras actividades de ocio en la montaña conllevan a una alteración del hábitat
importante constituyendo un problema para la especie. El aislamiento de sus poblaciones en zonas
de alta montaña puede hacerle especialmente vulnerable al cambio climático.
172
Sorex minutus carpetanus: La Musaraña enana es la otra subespecie de Mamífero descrita
como endemismo del Sistema Central (Rey, 1971). Las poblaciones del Sistema Central se hallan
aisladas del resto de la distribución peninsular. Habita zonas de vegetación eurosiberiana, principalmente
robledales y matorrales de sustitución en las zonas medias y altas de la Sierra de Guadarrama, entre
1.200 y 2.000 metros. En general en zonas con vegetación abundante con precipitaciones por encima de
700 mm. No parece estar especialmente amenazada en el Sistema Central.
Microtus cabrerae: El Topillo de Cabrera es interesante dentro de los Mamíferos de
Guadarrama debido a que es un endemismo ibérico y a su estado de amenaza, ya que es
considerado Vulnerable por las categorías UICN (Palomo & Gisbert, 2002). Este topillo tiene una
distribución discontinua en Castilla y León, con una zona occidental (Arribes del Duero y Oeste de
Zamora) y otra a lo largo del Sistema Central occidental, desde la Sierra de Gata en Salamanca a la
mitad de Guadarrama.
Habita zonas mediterráneas con vegetación herbácea abundante y verde a lo largo de todo el
año, condicionada por tanto a zonas húmedas de montaña o de suelos húmedos, en prados cerca de
arroyos, junqueras, etc. En Guadarrama ocuparía las zonas bajas de la Sierra. Es necesario un
muestreo detallado de esta especie en la zona.
- Carnívoros:
Lynx pardinus: El Lince ibérico es una especie en peligro crítico de extinción (UICN). Se da
por extinguido en la zona de estudio y Segovia (Rodríguez y Delibes, 1992; Guzmán et al., 2004),
probablemente durante los años 80 o 90, como consecuencia fundamental de las enfermedades del
Conejo de monte, que es ahora muy escaso en las zonas bajas de Guadarrama. Como especie en
peligro crítico y endemismo ibérico, es importante recuperar su hábitat y especialmente las
poblaciones de Conejos con el fin de plantear la reintroducción futura en la zona y todo el Sistema
Central, si los programas de recuperación y cría en cautividad actuales dan resultado.
Felis silvestris: El Gato montés es una especie vulnerable y estrictamente protegida, con
una distribución generalizada en la Península. Está presente en todas las provincias de Castilla y
León, aunque es más abundante en la orla montañosa que en las llanuras centrales ya que ocupa
fundamentalmente masas forestales, aunque también en sotos fluviales y hábitats más o menos
esteparios. Históricamente se le ha perseguido por causar daño a especies cinegéticas. Actualmente,
debido a su confusión con gatos cimarrones y a la presunción generalizada de la hibridación de
ambos, probablemente se está contribuyendo a su exterminio a través de actividades autorizadas de
control de depredadores.
Mustela putorius: El Turón parece una especie en regresión. Generalista en cuanto al
hábitat, vive en ambientes tan diversos como bosques caducifolios, de coníferas, espesuras de
matorral, zonas cultivadas. La especie está presente, aunque de un modo muy disperso, en toda la
comunidad autónoma. Se ha constatado su presencia en los cauces fluviales y monte mediterráneo
en la cercanía de los ríos Adaja y Voltoya (Ávila–Segovia) en la zona del PORN. No se poseen sin
embargo datos sobre la densidad poblacional en España y su amplia distribución en Europa hace que
se considere amenazada a escala global. Sus poblaciones se ven disminuidas por la persecución,
destrucción del hábitat y disminución de las poblaciones de conejos.
173
El Turón podría ser afectado negativamente por la competencia causada por el Visón
americano, especialmente en las zonas cercanas a ríos y arroyos de Guadarrama. También la
enfermedad Aleutiana, transmitida por el Visón, podría estar afectando a varios Canívoros. Es
importante realizar estudios específicos en este sentido.
Canis lupus: Recogemos también al Lobo Ibérico como especie emblemática en España y
que además está ampliando su distribución en la zona Norte de la Sierra de Guadarrama (Blanco et
al., 1990; Blanco, 2003, 2004; Blanco y Cortés, 2002 a,b; Barrientos et al., 2003). Extensamente
distribuido por el mundo (es el Mamífero con mayor área de distribución natural), en Castilla y León
se le encuentra sobre todo en zonas montañosas del noroeste. La actitud por parte del hombre es al
menos tan importante para su presencia como la cobertura vegetal o el alimento. Las campañas de
exterminio para evitar daños al ganado relegaron al lobo en el pasado a regiones remotas y
deshabitadas, pero la especie es enormemente adaptable y -en ausencia de una severa persecuciónpuede vivir en áreas densamente pobladas alimentándose de carroñas de animales domésticos.
Cuanto mayor sea la tolerancia por parte del hombre, menos requerimientos ecológicos precisarán
los lobos para vivir (Blanco, 2001).
Desde su máximo declive en la década de 1960-70, el Lobo se está recuperando. En las
últimas décadas ha recolonizado áreas muy humanizadas e incluso zonas agrícolas deforestadas. En
la actualidad se estima su población de Castilla y León en alrededor de 1.500 individuos (Llaneza y
Blanco, 2002. En términos generales, las zonas óptimas en Castilla y León se encuentran en una
amplia zona castellana con vegetación de robledal (Quercus pyrenaica) que se extiende al sur de la
Cordillera Cantábrica, desde el sur de Orense y Zamora hasta Burgos, incluyendo amplias zonas de
León y Palencia. En 1988, se estimaron en esta zona densidades de 3,0- 4,2 lobos/ 100 km2, con
2
máximos de hasta 5-7 lobos/ 100 km en la Reserva de la Sierra de la Culebra y sus alrededores
(Zamora). Las densidades medias en España oscilan entre 1,5 y 2 lobos/ 100 km2 (Blanco et al.,
1990).
El incremento más destacado en España se produce en el sur de su Castilla y León, donde el
área de distribución ha aumentado un 35% entre 1988 y 2001. La densidades se mantienen en el
norte y el oeste de la Comunidad y aumentan de forma notable en la llanura cerealista, que
representa el 34% del área de distribución en 1988. El lobo atraviesa el Duero en varios puntos, y a
finales de los 90 los lobos afianzan su presencia en el sur de Zamora y Valladolid y en el norte de
Salamanca. En 1998 se detecta reproducción por primera vez en Segovia, y a partir de 2000, en
Guadalajara y Ávila. La población reproductora se extiende al menos por la mitad occidental de Soria,
y en 2001 se detectan 149 manadas en Castilla y León. No obstante, entre 2002 y 2003 se aprecia
cierta regresión en el extremo suroriental del área de distribución, que se hace manifiesta con la
desaparición de las manadas reproductoras de la provincia de Guadalajara (Estrategia para la
Conservación del lobo en España, CNPN, 2004).
El Lobo fue siempre abundante en las Sierras de Madrid y Segovia, y el gran enemigo de los
pastores. Son muy numerosas las referencias a la abundancia de los Lobos y la lucha de pastores,
ganaderos, monjes, etc que organizaban periódicamente batidas contra ellos (Vías, 2002). En 1.846 ,
por ejemplo, nutridas manadas de lobos de hasta quince individuos bajaban desde las últimas
grandes lobadas o ataques por Lobos se produjeron en 1917 en La Losa, con la muerte de 60 ovejas.
La figura de alimañeros como Antonio Robledo, el tío “Francachela” ha pasado a la historia por haber
eliminado cientos de lobos en la segunda mitad del siglo XIX. Hacia 1960 los lobos se consideraban
extinguidos en Guadarrama.
174
En España se le considera Casi Amenazado (NT). Los daños al ganado y la consiguiente
hostilidad del público rural constituyen su principal problema de conservación en España. Como es
previsible, su aumento en la zona de Guadarrama causará en el futuro mayores problemas a la
ganadería, por lo que es necesario anticiparse a los problemas, gestionando diversas medidas como
ayudas para la protección de rebaños por mastines, rápida compensación de los daños, etc. La
escasa población que se encuentra en la Sierra necesita planes de gestión y medidas generales de
conservación del hábitat, control de la especie y regulación de su caza. La Consejería de Medio
Ambiente de la Junta de Castilla y León ha realizado unas jornadas de estudio de su problemática en
España y Segovia (Blanco, 2003; Saénz de Buruaga et al., 2005) proponiendo diversas medidas
entre las que se incluye la caza controlada de un pequeño número de ejemplares en la zona. Por otro
lado, habrá que cumplir con los requerimientos de la Estrategia para la conservación y la gestión del
lobo en España, aprobada por la Comisión nacional de conservación de la naturaleza en 2004.
Capra pyrenaica: La Cabra montés es emblemática tanto desde el punto de vista de fauna
salvaje propia de las montañas ibéricas, como de especie de enorme valor cinegético. Por su
predecible aumento en el futuro, su gestión tendrá una enorme importancia en cualquier tipo de
espacio natural protegido que se declare en Guadarrama, tanto como Parque nacional o cualquier
otra figura que se adopte.
La Cabra montés se extinguió en las zonas altas de Guadarrama a comienzos del siglo XX
por la persecución humana, como casi sucedió en la Sierra de Gredos. La reintroducción de la cabra
montés en la Sierra de Guadarrama se produjo primero en la zona madrileña, comenzando hacia el
año 1986 o 1987. En las zonas altas de Segovia las reintroducciones con individuos procedentes de
Batuecas, de la subespecie Capra pyrenaica victoriae, propia del Sistema Central, comenzaron en el
año 1999 hasta el 2005, bajo la dirección del entonces responsable de la zona de caza controlada
(José Lara). Los datos proporcionado por la Sección de caza y pesca del Servicio territorial de
Segovia (E. Cacharro, com. pers.) indican que desde 1999 a 2005 se han introducido 57 individuos
adultos y que la población se halla en las zonas altas de la Sierra, en montes de utilidad pública
propiedad de la Junta de Castilla y León con una extensión de alrededor de 10.000 Ha
aproximadamente. La población es estable, se reproduce normalmente y parece no entrar en
contacto con la población madrileña. Hasta la fecha no se ha cazado ningún ejemplar.
La zona de Caza Controlada de Segovia recibe el nombre de “Estribaciones de Guadarrama”
y se sitúa en el término municipal de Ortigosa y 6 municipios más, con una extensión de 10.181 Ha.
Es de esperar que la población de Cabra montés siga incrementándose con rapidez en Guadarrama,
como sucedió en Gredos tras su casi extinción y la declaración de la reserva nacional de caza. La
población actual se sitúa en las zonas más altas de Guadarrama, las que se incluirían con seguridad
en el Parque nacional. Es necesario por tanto diseñar adecuadamente el tamaño deseado y densidad
de las poblaciones futuras y los métodos de control sobre un excesivo número de ejemplares, aunque
este problema es obviamente lejano. La caza de la Cabra montés podría ser un recurso económico
importante para la zona, como sucede en Gredos, pero la figura de Parque nacional probablemente
limite o impida su caza, por lo que debe planificarse con cuidado cual debe ser su futuro.
Capreolus capreolus: El Corzo es una especie cinegética distribuida principalmente por la
orla montañosa de Castilla y León, penetrando hacia la meseta siguiendo el curso de los principales
ríos. Eminentemente forestal, prefiere los bosques con matorral diverso y zonas de pastizal cercanas
(puede llegar a explotar medios agrícolas). Su densidad de población fluctúa en densidades próximas
175
2
a los 20 individuos /Km . Sufrió un drástico descenso en sus poblaciones en la primera mitad del siglo
XX y su recuperación se vio facilitada por el despoblamiento rural y regularización de la especie
(Tellería y Virgós, 1997). En toda la zona de Guadarrama está en expansión en ambas vertientes. La
población de Corzo de Guadarrama presenta algunas peculiaridades. La especie ha estado presente
en la zona al menos desde el Pleistoceno medio, actuando como refugio de poblaciones europeas
durante el último periodo glacial, como revela su variabilidad genética. Es al mismo tiempo un
corredor natural que permite la dispersión de individuos y recolonización de zonas bajas.
Las poblaciones del Parque natural de Peñalara y su entorno, situado en la comunidad de
Madrid, son buenas, con densidad alta, proporción equilibrada de sexos y alta variablidad genética
(Horcajada, 2005). Las densidades en el Guadarrama madrileño son de 4,1 individuos por cada 100
Ha en robledales de melojo y 2,7 en pinares de repoblación, confirmando la importancia de los
robledales. Es escaso en las zonas de cumbres, zonas supraforestales de matorral y en los fondos de
valle. La razón de sexos en Peñalara es de 1,14 hembras por macho (Horcajada, 2005).
El Corzo se ha revalorizado como trofeo de caza dado el aumento de sus poblaciones
(Fandos y Horcajada, 1998, 1999). Es presa habitual del Lobo en las zonas donde conviven. Aunque
no es una especie amenazada, el traslado incontrolado de ejemplares para efectuar repoblaciones,
puede provocar la pérdida de características genéticas y ecológicas propias de las poblaciones
autóctonas. En la zona de caza controlada de Guadarrama (datos Junta de Castilla y León), el plan
de caza del año 2004 incluyó 14 ejemplares de corzo presentados, mientras que en 2.005 recoge un
total de 15 individuos. En la zona se autorizan también batidas de jabalí.
176
Fuente: Consejería de Medio Ambiente. Junta de Castilla y León
Ovis gmelini: EL Muflón es un Ungulado introducido En España. En la zona de Guadarrama
se encuentra únicamente en algunas fincas privadas cercadas. No presenta ningún problema o
interés especial para el espacio protegido.
Cervus elaphus: El Venado o Ciervo rojo no presenta buenas poblaciones en Guadarrama.
Se halla en algunas fincas privadas en el sur del PORN, aunque hemos detectado algunos
ejemplares en libertad (García y Lizana, inédito). Es una especie en expansión en toda la orla
montañosa de Castilla y León y el Sistema Central.
Sorex granarius: La Musaraña ibérica presenta un cierto interés en Guadarrama por ser
endémica de la Península Ibérica, estar ligada a las zonas montañosas del Sistema Central y
considerarse como Casi Amenazada (NT) en el último atlas nacional (Palomo & Gisbert, 2002). En
general vive en zonas con temperaturas medias entre 3-15ºC, precipitaciones medias anuales
superiores a los 600 mm, en terrenos con cierto grado de humedad, con arbustos, formaciones de
matorral, zonas de bosque húmedo, riberas de los ríos, praderías con larga hierba, etc. Ocupa
preferentemente biotopos forestales y supraforestales, ocupando pedrizas graníticas por encima del
límite del bosque. Altitudinalmente está citada en Castilla y León desde 500 m hasta 2.000 m.
Sciurus vulgaris: Aunque la Ardilla roja no se considera amenazada en España, la incluimos
como especie representativa por la especificidad de su hábitat forestal, junto al Lirón careto, dentro de
los Mamíferos forestales no voladores (Murciélagos) de Guadarrama. Presente en todo el Sistema
Central oriental y en expansión En Guadarrama ocupa principalmente pinares de Pinus vulgaris,
177
aunque también robledales, generalmente necesitando árboles grandes y viejos. Su alimentación se
basa sobre todo en semillas de coníferas.
Eliomys quercinus: El Lirón careto es la única especie de la familia Gliridae en el Sistema
Central. Ocupa una gran variedad de hábitats, generalmente en áreas pedregosas, pero también en
zonas forestales o arbustivas, o incluso en zonas humanizadas. En Guadarrama se le ha citado en
zonas forestales, tanto encinares como robledales y pinares, donde ocasionalmente ocupa las cajas
nido para Aves.
- Quirópteros: Podemos considerar a este grupo como uno de los principales a la hora de
garantizar su conservación en el futuro espacio natural protegido de Guadarrama. Se han citado 24
especies de murciélagos en la Sierra de Guadarrama (Fernández Gutiérrez, 2002; Velasco et al.,
2005). Castilla y León presenta por tanto una de las comunidades de Quirópteros de mayor riqueza
en Europa. Los Quirópteros tienen un papel beneficioso en el control de poblaciones de Insectos
considerados perjudiciales para la agricultura o la salud. Son vitales para el equilibrio natural y
buenos bioindicadores de la calidad del hábitat.
Las zonas de mayor diversidad son los dominios de media montaña o de relieve acusado, por
debajo de los 1.500 m, especialmente las que se encuentran en zonas de transición entre pisos, así
como en áreas forestales o cuencas fluviales. Las minas subterráneas abandonadas, los puentes con
fisuras, las cuevas y los edificios históricos son algunos de sus refugios más frecuentes. Se ha
constatado le desaparición de un elevado número de refugios y transformación de su medio e indicios
de que se está produciendo una significativa disminución del tamaño de la población de la mayoría de
las especies.
Diez especies son consideradas Vulnerables según el CNEA y tienen por tanto especial
interés par su conservación. Cinco especies de Murciélagos son calificadas como Vulnerables según
la propuesta de la SECEMU (2005). Hay especies tanto cavernícolas como forestales, por lo que es
fundamental una protección eficaz y adecuada de sus refugios en Guadarrama y una adecuada
gestión forestal de las masas más viejas (Fernández Gutiérrez, 2002, 2003). La importancia de los
Quirópteros en Guadarrama viene señalada tanto por las poblaciones existentes en cuevas en zonas
calizas como por las numerosas especies de murciélagos forestales. Más adelante, detallamos la
importancia del LIC Cueva de los Murciélagos (ES4160043).
Rhinolophus hipposideros: Es el menor de los murciélagos de herradura europeos. Especie
frecuente en España con una distribución amplia pero irregular por toda la Península. En Castilla y
León es más raro en planicies más desarboladas de la zona centro. Es más común en áreas de
cubierta vegetal arbustiva y arbórea con presencia de aguas superficiales (bosques caducifolios,
valles, zonas premontanas y agrestes).También en áreas de cultivos tradicionales con abundancia de
setos y arbolado disperso Su carácter cavernícola queda patente por su predilección por las
cavidades naturales, aunque también se localiza con frecuencia en cavidades subterráneas
artificiales y en edificaciones.
La mayor parte de sus refugios se sitúan entre 900 y 1.200 m. La población estimada en
Castilla y León estaría comprendida entre 7.000-12.000 individuos. Es una especie sedentaria, los
movimientos entre los refugios de invierno y verano no superan generalmente los 30 Km. El área de
campeo suele estar entre 5 y 10 Km. El vuelo de caza es lento y baja altura (no superior a 5 m). Es
cavernícola, se asienta igualmente en refugios subterráneos (cuevas, simas, bodegas, minas o
178
túneles) que en construcciones humanas. Selecciona lugares subterráneos para hibernar con una
temperatura comprendida entre los 6-9ºC y una alta humedad relativa. Caza en bosques, parques
despejados y en los matorrales.
Fácilmente detectable, la especie ha experimentado una fuerte y generalizada regresión
debido a su elección de refugios antropizados para criar, lo que la hace muy vulnerable a
remodelaciones, derribos, restauraciones y todo tipo de molestias directas. Además los tratamientos
químicos contra Insectos xilófagos en desvanes pude resultarles muy perjudiciales.
Rhinolophus euryale: Ampliamente distribuido en la Península Ibérica, aunque no es una
especie abundante, falta únicamente en las zonas de media y alta montaña, en zonas áridas y en el
extremo suroccidental. En Castilla y León es escaso en la mayor parte del centro de la región,
apareciendo con más frecuencia en áreas periféricas, con mayor cobertura arbórea y relieve más
acusado y heterogéneo. Murciélago de preferencias mediterráneas selecciona refugios y cazaderos
situados en zonas con abundante vegetación arbustiva y arbórea generalmente cerca de cursos
fluviales. Especie termófila, más escasa en climas continentales y atlánticos, en los que ocupa
preferentemente fondos de valle. Es predominantemente cavernícola tanto para la cría como para la
hibernación, requiriendo cuevas con condiciones microclimáticas estables. Su hábitat de campeo está
ligado a zonas con cobertura vegetal boscosa o arbustiva en paisajes muy fragmentados.
La mayoría de los refugios encontrados en Castilla y León se sitúan entre 500 y 1.000 m,
estimándose la población de Castilla y León entre 2.000-6.000 individuos. Se considera una especie
sedentaria; sus movimientos entre refugios estivales y de invierno no superan unas pocas decenas de
kilómetros. La mayoría de sus refugios son de naturaleza subterránea (cuevas, simas, bodegas,
minas o túneles). Para hibernar seleccionan cuevas y minas bastantes cálidas (a menudo por encima
10ºC).
Fácilmente detectable, se piensa que existen importantes agrupaciones no localizadas
todavía debido al bajo número de refugios encontrados. Ha experimentado una regresión acusada y
generalizada en la mayor parte de su área de distribución, debido a pesticidas y turismo de
espeleología, ya que es muy sensible a las molestias.
Myotis bechsteinii: Está considerada como una de las especies más raras y escasas entre
los murciélagos europeos. La mayoría de las observaciones hechas en España corresponden a
ejemplares aislados, no conociendo colonias que superen los 20 ejemplares. En Castilla y León se
tienen datos de algunos ejemplares aislados en media docena de enclaves situados en áreas
boscosas de los Sistemas Central e Ibérico, dentro del área del PORN estudiada.
Habita en masas forestales de los sistemas montañosos (bosques húmedos caducifolios,
masas forestales de coníferas). La mayor parte de las citas se recogieron en áreas boscosas con
abundante arbolado, localizándose en la Sierra de Guadarrama el refugio que alberga la mayor
población, a 1.406 m. Se estima que su población no supera los 500 individuos. Se trata de una
especie sedentaria con un desplazamiento máximo conocido de 35 km. Tiene una excelente
maniobrabilidad de vuelo, lo que le permite la captura de presas posadas sobre el suelo, hojas o
tronco de los árboles. Las principales causas de desaparición son molestias en el refugio, y la
escasez de árboles viejos o secos en nuestros bosques. No se han contemplado medidas de gestión
para la Península Ibérica. Sería necesaria una gestión forestal apropiada en el Parque nacional.
179
Myotis emarginata: Especie de costumbres cavernícolas presente en toda la Península
Ibérica. En Castilla y León aparece en el cinturón perimontañoso. No es abundante y parece más
escaso en zonas más continentales. Puede vivir en ambientes variados aunque prefiere un cierto
grado de humedad por lo que tiende a ocupar las cercanías de la sierra y terrenos con orografía
accidentada y mayor abundancia de arbolado, aunque evitando los bosques muy cerrados. La
mayoría de los refugios parecen encontrarse entre 700 y 1.100 m de altitud aunque la colonia de cría
hallada a mayor altitud se encontró en la Sierra de Guadarrama a 1.400m. La población global para
Castilla y León puede estar comprendida entre los 3000 y los 5000 individuos.
Esta especie tiende al gregarismo por lo que un alto porcentaje de la población depende de
un reducido número de refugios (dato importante para la planificación de su conservación). Es una
especie poco móvil. Sus desplazamientos entre los refugios de cría y los inviernos apenas superan
unas decenas de kilómetros. Originariamente la especie que se pasaba la mayor parte de su ciclo
anual en cavidades naturales, pero se ha adaptado a reproducirse en desvanes y partes no habitadas
de edificios. Los individuos no reproductores pueden encontrarse en una amplia variedad de refugios,
pero la especie prefiere cuevas y otros lugares subterráneos para hibernar a una temperatura de
alrededor de 9ºC. Desaparece durante el invierno y excepto algún ejemplar aislado no vuelven a ser
vistos en refugios hasta primavera. Tanto su población como su interés económico y relación con el
hombre es desconocida en la zona de estudio.
Ampliamente citada en Europa, en España experimenta una tendencia regresiva, ya que han
desaparecido numerosas colonias importantes a causa de una alteración o pérdida de refugios. El
hecho de que la mayor parte de la población dependa de unos pocos refugios estivales, hace que el
conjunto de población sea muy vulnerable a las molestias y alteraciones de los lugares donde se
refugia o reproduce.
Barbastella barbastellus: Presente en los enclaves forestales de los dos tercios
septentrionales de la península. Se presenta principalmente en la Cordillera Cantábrica, en la
Cordillera Ibérica, en el Sistema Central y en algunos puntos de las sierras occidentales. En Castilla y
León es una especie poco frecuente. Tiene una amplia distribución altitudinal. En Castilla y León
desde 550 hasta 2680 m (Pinar de pino silvestre en Navafría, en la Sierra de Guadarrama). Se estima
que su población en Castilla y León podría estar alrededor 10.000 individuos. Hábitos sedentarios,
sus desplazamientos no suelen superar unas pocas decenas de kilómetros. Vuelo es rápido y ágil,
capaz de desenvolverse en la vegetación cerrada.
Se trata de una especie típicamente forestal. Vive en zona de bosques o abundante arbolado,
generalmente en montaña, aunque también es frecuente encontrarlos en lugares habitados de
entornos forestales. En invierno se comporta como una especie fisurícola que ocupa túneles, minas y
entradas a cuevas y es capaz de resistir temperaturas próximas al punto de congelación. Durante la
época de actividad se refugia en agujeros de árbol, edificios, espacios de las cortezas desprendidas
de los troncos.
Es uno de los murciélagos peor conocidos en toda su área de distribución. Es
extremadamente sensible a las molestias en sus colonias de reproducción Es muy vulnerable a la
pérdida de superficie forestal (pérdida de refugios forestales y hábitats de alimentación). Son también
susceptibles a los insecticidas agroforestales. Se distribuye por la mitad septentrional de la península.
Tiene una acusada dependencia del medio forestal, por lo general de orografía accidentada, aunque
se haya capturado en zonas de matorral mediterráneo sin cobertura arbórea. Esto hace que su
180
distribución geográfica se manifieste discontinua y casi siempre ligada a sistemas montañosos. Se
trata de una especie con una dieta altamente especializada. Soporta bien las temperaturas bajas. En
España no hay información sobre tamaños de poblaciones y colonias amenazadas.
Rhinolophus mehelyi: Presencia en la zona sin confirmar. Esta especie esta propuesta
como en peligro y en la actualidad, en el CNEA es vulnerable. Distribución circunmediterránea, es
una especie troglófila estricta, que habita en cuevas y minas. En la Península Ibérica se encuentra en
las zonas más cálidas, en su mitad meridional. Es una especie con una marcada termofilia. Ocupa
refugios cálidos y húmedos, situándose dentro de éstos en los techos de temperatura más elevada,
buscando refugios más fríos para la hibernación. El paisaje circundante a los refugios es típicamente
mediterráneo con matorrales encinares o alcornocales adehesados y proximidades de cursos de
agua. Esta especie es muy escasa en España, ya que sólo se conocen 9 colonias de cría y 16 de
hibernación, en los dos tercios meridionales de la Península.
- Otras especies de interés:
Talpa occidentalis: El Topo ciego es una especie endémica de la Península. No se conoce
bien su distribución geográfica en la región, pero se la considera presente en toda Castilla y León
habiendo sido constatada su presencia en la Sierra de Guadarrama. Altitudinalmente se localiza
hasta los 1.800 m en la Sierra de Gredos. Sus requerimientos en cuanto al hábitat son: suelos aptos
para ser excavados y abundancia de presas. Ocupa sobre todo prados, cultivos y en general áreas de
suelo desarrollado. No se han citado amenazas graves sobre la especie, pero su población se ve
negativamente afectada por persecución de agricultores y ganaderos, alteración en pastizales y
agroquímicos.
- Quirópteros: Todas las especies descritas aquí
especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas
están catalogadas como “de interés
Rhinolophus ferrumequinum: Es el mayor de los murciélagos de herradura de Europa. Se
distribuye por casi toda la superficie de la Península Ibérica., en Castilla y León tan sólo parece faltar
en las planicies más desarboladas de la zona centro, donde no hallan hábitats adecuados, así como
refugios subterráneos necesarios para su subsistencia (geomorfología del terreno). Especie ubiquista
se localiza en cualquier medio, con preferencia en zonas arboladas o arbustivas con espacios
abiertos especialmente si están cerca de masas de agua. En el norte suele vivir en casas y en el sur
en cuevas. También se refugia en construcciones humanas, pudiendo formar parideras. La mayor
parte de los refugios localizados hasta el momento se han encontrado entre los 900 y los 1.200 m,
aunque se han registrado individuos o pequeños grupos a 1.680 m en la Sierra de Guadarrama (a
1.400 m se ha encontrado una colonia de 150 hembras reproductoras). En Castilla y León se estima
una población comprendida entre los 12.000 y 18.000 murciélagos.
Considerado como sedentario, su área de campeo máxima no supera los 16 kilómetros de
radio, estando la media en torno a 2 ó 3 kilómetros. Caza en grandes círculos a baja altura en zonas
arboladas o arbustivas, especialmente en bordes de bosques y setos, alimentándose especialmente
de coleópteros y lepidópteros de gran tamaño. No suele acudir para cazar en zonas iluminadas de
pueblos y carreteras. Especie propia de cuevas especialmente subterráneas (cuevas, simas,
bodegas, túneles). Los refugios de verano suelen ser cuevas y galerías de minas abandonadas.
Durante la hibernación ocupa cuevas y galerías subterráneas con ambiente fresco (temperatura entre
181
5-12ºC) y de humedad próxima al punto de saturación). En cambio en la época de reproducción sin
embargo buscan partes oscuras donde las temperaturas sean más altas y bajo grado de humedad.
Es una especie que manifiesta una alta detectabilidad. Sin embargo hay constancia de un alto
índice de regresión. Este declive está provocado por molestias en los refugios, baja tasa de natalidad,
tratamientos químicos contra Insectos xilófagos, pesticidas, destrucción de su hábitat.
Myotis myotis: La delimitación del área de distribución del Ratonero grande es difícil, debido
a la frecuente confusión con el Ratonero mediano. En España parece una especie relativamente
frecuente. Sin embargo, su tendencia a concentrarse en colonias muy numerosas para la
reproducción la hace muy sensible a la alteración de los refugios.
Se le considera como un murciélago forestal, aunque está presente en una amplia variedad
de ambientes, desde áreas boscosas a zonas fuertemente antropizadas y con grandes zonas de
cultivos despejadas. Es más común en zonas abiertas, con importante cobertura de matorral o
arbustiva. Presenta afinidad por los cursos de agua. La mayoría de los refugios se han encontrado a
una altitud variable entre los 650 m y los 1.000m de altitud (hasta 1.680 m en la Sierra de
Guadarrama). La estimación de su población en Castilla y León podría superar los 40.000 individuos
pero no es probable que sobrepase los 70.000. Se reparten por todas las provincias de la comunidad
autónoma pero es más abundante en la mitad meridional.
Esta especie es muy gregaria (el 95% de la población se concentra en 22 refugios con mas
de 50 individuos). Se comporta como una especie sedentaria o migradora ocasional. Sus
desplazamientos migratorios no sobrepasan los 50-100 Km. Aunque utiliza cavernas naturales, sin
embargo se refugia también en minas y túneles abandonados o incluso sótanos o desvanes oscuros
y tranquilos. Se ha registrado un amplio rango de temperaturas en los refugios de hibernación entre
6-10ºC. Para la alimentación realiza cortos desplazamientos desde el refugio principal al área de
caza, donde vuela a baja altura realizando rápidos picados para capturar coleópteros y otros Insectos
de la superficie del suelo.
Ha experimentado una regresión acusada y generalizada en la mayor parte de su área de
distribución. Su elevado gregarismo lo hace especialmente vulnerable a posibles sucesos
catastróficos en los refugios. La pérdida de un refugio colonial importante puede suponer el declive de
la población de toda una comarca. Así mismo otros factores como: molestias, perturbaciones
reiteradas, vandalismo y alteración de su refugio de cría pueden incidir negativamente en el futuro de
la especie.
Myotis blythii: No se conoce muy bien su distribución geográfica. Es probable que abarque
la totalidad de la Península ibérica, si bien parece más abundante en las regiones más templadas de
la mitad meridional, donde se desarrolla una vegetación más termófila. Su distribución parece estar
ligada a ambientes cálidos o semiáridos. Es una especie típica de estepas y praderas que se ha
extendido usando de forma secundaria los prados de siega y pastizales artificiales, mostrando en
consonancia con ello una diferente estrategia de alimentación que se basa, no tanto en el consumo
de coleópteros, como en el de especies más ligadas a las praderas: grillos y saltamontes.
Es una especie migradora ocasional, aunque en la Península ibérica sus mayores
desplazamientos no superan los 50-100 km. La tipología de refugios que utiliza es muy variada:
cavidades subterráneas y, en menor medida, desvanes de edificios, aljibes y otras cavidades. Son
182
gregarios y comparten refugio con el murciélago ratonero grande. La disponibilidad de refugios
subterráneos debe ser un factor limitante que ha de influir en su distribución ya que es una especie
de marcadas tendencias cavernícolas. Los refugios no se sitúan en un rango latitudinal concreto, se
distribuyen sin diferencias significativas entre los 435-1.250 m encontrándose la colonia de
reproducción más alta a 1052 m en la Sierra de Guadarrama con una concentración máxima de 150
individuos. Se estima que la población real podría estar comprendida entre los 3.000-5.000
individuos.
En España la especie está en regresión. En Castilla y León los refugios se ven afectados en
época de cría por la afluencia de visitantes. Su gregarismo lo hace vulnerable a las agresiones
directas o a la destrucción de refugios que en un breve espacio de tiempo pueden provocar un
sensible deterioro de sus demografías.
Myotis nattereri: Distribución amplia en la Península Ibérica ocupándola probablemente en
casi toda su extensión. En Castilla y León las citas son dispersas. Está ligado a ambientes forestales
y a sotos ribereños. Con densa vegetación. También está presente en algunas grandes áreas
agrícolas del centro de la región donde los árboles escasean o faltan en grandes superficies. La
mayoría e los refugios se han encontrado entre los 700 m y los 1.000 m. La población es difícil de
estimar debido a su marcado carácter fisurícola de la especie unido a la posibilidad de ubicación de
las colonias en árboles y cajas nido. Se estima en Castilla y León comprendida entre 5000 y 10.000
individuos aunque no se descarta que sea superior.
Especie de carácter sedentario (sus desplazamientos no superan la decena de kilómetros).
Posee una alta maniobrabilidad de vuelo que le permite la caza en cercanía de arbolado así como en
una intricada vegetación. Puede tener áreas de campeo con una fisionomía más abierta como prado
y cultivos. Presenta una gran valencia ecológica y concretamente en la Meseta Norte se han citado
refugios en áreas de cultivos cerealistas, a más de 3 Km de cualquier zona arbolada. Utiliza todo tipo
de refugios, tanto cuevas como fisuras, huecos de árboles y cajas nido e incluso edificios, aunque los
de hibernación han resultado ser casi todos subterráneos. En época estival muestra preferencia por
ríos y riberas. Caza principalmente especies diurnas en reposo. Muchos de los refugios en los que se
han localizado colonias en España han desaparecido.
Las citas de esta especie son escasas, se considera un murciélago raro en gran parte de su
área potencial de distribución. Las principales causas de su regresión están relacionadas con sus
refugios (destrucción, molestias reiteradas por cierres inadecuados o restauraciones y derribos de
edificios abandonados.). La transformación del hábitat es otro factor negativo. .
Myotis daubentonii: Se encuentra ampliamente distribuido en España. Es uno de los
murciélagos más frecuentes en Castilla y León. Vive en todo tipo de hábitats como bosques, espacios
abiertos, cultivos, áreas antropizadas, etc. Siempre que dispongan de láminas de agua permanentes,
ligados a zonas húmedas Habitualmente las zonas de caza están en estos lugares o zonas próximas.
El rango altitudinal de presencia de la especie en nuestra Comunidad Autónoma abarca desde 240 m
a los 1.390 m.
Se estima que la población de esta especie en Castilla y León supere ampliamente los 15.000
o 20.000 individuos. Utiliza generalmente fisuras en gran variedad de refugios tanto invernales como
estivales: huecos de árboles, grietas en diversos tipos de construcciones o en rocas, túneles o
cavidades. Hibernan en solitario. Los hibernáculos están por debajo de 8ºC pudiendo bajar la
183
temperatura hasta 3ºC o menos. Realiza desplazamientos de poca entidad (100 km). No se dispone
de información en España referente a sus factores de amenaza. Es uno de los murciélagos más
abundantes y frecuentes en Castilla y León, sin embargo se ha constatado la pérdida de algunos
refugios por remodelación de puente, restauración o derribo de edificios abandonados, extracción de
agua de ríos con acusado estiaje puede provocar la desaparición de las escasas charcas donde se
alimentan y dificultar la continuidad de las colonias de la zona.
Myotis mystacina: Es uno de los murciélagos más pequeños la fauna española y
eminentemente forestal. Se ha localizado en zonas montañosas densamente forestadas. De hábitos
alimentarios, población, organización social, comportamiento y depredación desconocidos en
España.
Pipistrellus kuhlii: Presente en toda la Península Ibérica. Se han obtenido registros en casi
todas las provincias de Castilla y León, donde han encontrado poblaciones dispersas y localmente
abundantes. Preferencias por ocupar ambientes templados o cálidos (más abundante en pisos termo
mediterráneo y mesomediterráneo). Muestra una clara tendencia a asociarse a los asentamientos
humanos, pero han aparecido en ambientes muy variados, aunque los hábitats más típicos de la
especie se encuentran en las Penillanuras occidentales, en sus dehesas y montes con arbolado
disperso (predominando la encina y el melojo), en los valles pies de montes resguardados de
sistemas montañosos. Está presente en un amplio rango altitudinal que abarca desde los 355 m a los
1.500m (a 1.360 m en la Sierra de Guadarrama), en esta misma Sierra se ha encontrado la colonia de
reproducción con mayor altitud 1280 m). Su población en Castilla y León no debe ser inferior a 25.000
individuos pero creemos poco probable que se doble esta cifra.
Se considera una especie sedentaria. Suele cazar Insectos atraído por la luz de las farolas en
calles pero sus áreas de campeo también pueden estar alejadas de los asentamientos humanos. Se
trata de una especie fisurícola y altamente sinantrópica, suele hibernar en grietas y sótanos. Especie
termófila y sedentaria, considerada muy abundante e incluso en expansión en alguna áreas del
continente. Especie ampliamente distribuida y común en toda su área de distribución, en Castilla y
León aparentemente falta en áreas de mayor continentalidad pero es abundante en los enclaves más
favorables. A pesar de todo se han constatado pérdidas de grandes refugios por lo que se hace
necesaria una mayor toma de conciencia
Pipistrellus pipistrellus: Es el murciélago más pequeño de Europa. En España es
considerado abundante es toda su geografía. Es la especie más común en Castilla y León donde se
distribuye de forma casi continua. Es de carácter ubiquista, capaz de vivir en una amplísima variedad
de ambientes, pero muestran una clara tendencia a ocupar medios urbanos y áreas agrícolas
fuertemente transformadas. Ocupa áreas de matorral, pastizales, campos agrícolas y núcleos
urbanos. Tiene preferencia por ambientes acuáticos. Está presente en un amplio rango altitudinal que
abarca desde los 240 m hasta 2.100m. Es el murciélago más cosmopolita y abundante, en Castilla y
León supera los 100.000 individuos. Es una especie que muestra hábitos sedentarios. Los
desplazamientos son de tipo dispersivo y no suelen superar los 50 Km.
Es una especie fisurícola, se refugia todo el año en grietas y oquedades, cámaras de aire,
cajoneras de persianas, árboles y construcciones humanas y ocasionalmente cuevas durante la
hibernación. Caza en todo tipo de hábitats, incluso los más humanizados, donde depredan sobre los
Insectos concentrados en torno al alumbrado humano. Es claramente antropófilo y los edificios
184
constituyen su refugio preferido. Abundante en España. Recientemente esta especie ha sido divida
en dos diferentes.
Es un murciélago común y de amplia distribución pero ha demostrado una cierta regresión.
Las principales causas de este declive es el uso de productos tóxicos para el tratamiento de madera
de edificios y la acumulación de uso agrícola y forestal, al igual que las molestias intencionadas,
remodelación, rechazo a los murciélagos,…
Pipistrellus pygmaeus: Esta especie ha sido recientemente descrita, separándose de P.
pipistrellus. El Murciélago de Cabrera parece ser más termófilo y menos antropófilo que el Murciélago
enano. Parecen existir también algunas diferencias en el uso de los hábitats. Existen poblaciones
reproductoras en la vertiente sur de Gredos, en la provincia de Ávila, así como una cita de ocho
individuos, a 1.200 m cerca de la Sierra de Guadarrama en un área límite del PORN (Fernández
Gutiérrez, 2001, 2002; Velasco et al., 2005). La especie es por tanto dudosa para la zona de estudio y
será necesario concretar su distribución en otras zonas de la Sierra de Guadarrama.
Hypsugo savii: Presente en la mayor parte de Castilla y León. Puede faltar o ser muy escasa
en amplios territorios mientras que parece localmente abundante en los más favorables. Considerado
a menudo característico de zonas rocosas y montañosas, ocupa sin embargo una mayor variedad de
hábitats: valles amplios y sin roquedos, acantilados costeros o de montaña, medios rurales con
pequeños núcleos habitados y un paisaje en mosaico de arbolado, cultivos y pastos, parques y
ciudades. Es abundante en relieves abruptos de la región mediterránea. Es un murciélago de
marcado carácter fisurícola, que manifiesta predilección por las grietas y pequeñas oquedades en
rocas y grandes muros. Ocupa unos rangos altitudinales muy amplios, está presente desde el nivel
del mar hasta los 2.600 m (en Castilla y León de 280 a 1.310) Se estima que su población en la
región alcance los 5.000 individuos. Se considera una especie sedentaria. Prefiere cazar en áreas
abiertas como campos agrícolas o pastizales, laderas boscosas, pastos de montaña o embalses.
Hibernan prácticamente en solitario.
El carácter fisurícola, el discreto tamaño de las colonias y su dispersión hacen que sus
poblaciones sean poco vulnerables a las molestias o las amenazas directas. En España no existen
estudios específicos de sus hábitos alimentarios, de población, interés económico y la información
disponible sobre su reproducción es escasa
Eptesicus serotinus: Se distribuye por casi toda la Península Ibérica, principalmente por la
periferia. Es uno de los murciélagos más abundantes en las zonas más termófilas. En Castilla y León
es una especie frecuente y de amplia distribución con abundancia de refugios potenciales. Especie
fuertemente antropófila, es frecuente en las periferias de ciudades y pueblos, así como en los
grandes parques; no obstante es más abundante en las proximidades de los ríos y en las penillanuras
con melojares y encinares (mayor densidad de presas). Además se ha encontrado en campos
agrícolas, áreas de matorral y pastizales. En Castilla y León está presente en un rango altitudinal
amplio (420–1.500 m).Se estima que su población en Castilla y León podría rondar los 15.000–20.000
individuos.
No se considera un murciélago migratorio, generalmente realiza movimientos de tipo
dispersivo o estacional de pocas decenas de kilómetros. La mayoría de sus refugios se sitúan en
edificios y construcciones humanas, pero también ocupan refugios de otra naturaleza. Ocupa
asiduamente las juntas de dilatación de los edificios y las cámaras de aire de sus muros externos. En
185
invierno busca refugios subterráneos con bajos valores de humedad relativa como entradas de
cuevas, minas y bodegas.
La población parece estable, pero se han encontrado evidencias de regresión en la mayor
parte de Europa y se han constatado la pérdida de varias colonias en Castilla y León. Este declive es
debido a la disminución de la cabaña ganadera extensiva, la transformación de los pastizales, el uso
de productos desparasitantes en el ganado, y a las consecuencias de la actividad humana a la que
está expuesta (derribos, restauraciones, sellados de grietas, atropellos… ).
Nyctalus leisleri: En Castilla y León presenta una distribución amplia pero discontinua, su
población aparece fragmentada y asociada a masas boscosas de cierta entidad, preferiblemente en
ambientes montañosos o perimontañosos que bordean la comunidad. Encuentra su óptimo en climas
templado– húmedos. Existen citas desde casi el nivel del mar a 2.100m en España. Dado su acusado
carácter migratorio, es difícil estimar su población. Se considera una especie rara en Castilla y León,
sin embargo localmente, en los enclaves más propicios, puede ser una especie relativamente
abundante. Muestra una marcada filopatría, es decir, tendencia a ocupar las mismas zonas en años
sucesivos y en la misma época.
Es un cazador aéreo que caza sus presas por encima de las copas de los árboles. Sus áreas
de campeo son muy variadas aunque prefieren áreas abiertas. Se le considera estrictamente forestal,
caza en bosque y se refugia en árboles, pero muestra una cierta antropofília. Hiberna principalmente
en huecos de árboles y grietas, muy ocasionalmente en cuevas. La reducción de superficie forestal
por derribo de árboles viejos o secos y el empleo de productos fitosanitarios podrían poner en peligro
la conservación de la especie.
Nyctalus noctula: El Nóctulo mediano es uno de los Murciélagos mas raros y desconocidos
en España y Castilla y León. Especie de hábitos forestales que se refugia en huecos de árboles y
nidos de pájaros carpinteros. En Invierno sin embargo utiliza cavidades subterráneas. La población
encontrada en Castilla y León consta de sólo 4 machos, uno de ellos en Guadarrama y otro en
Valladolid. (Fernández Gutiérrez, 2002). Dada la importancia de las masas forestales de Guadarrama,
es probable que tenga una distribución mucho más amplia, aunque seguramente de carácter
estacional, irregular y dependiente de movimientos migratorios, aunque no se descarta la existencia
de alguna colonia de reproducción. Es necesario un estudio detallado de las poblaciones de
murciélagos forestales, así como una gestión forestal adecuada, especialmente en lo que respecta al
mantenimiento de árboles viejos, tocones, etc.
Nyctalus lasiopterus: El Nóctulo grande es el Murciélago más grande de Europa. En Castilla
y León ha sido citado en todo el Sistema Central, desde Béjar a Ayllón. Existen citas a lo largo de
todo Guadarrama en Segovia, aunque las poblaciones son pequeñas, ya que no superan el centenar
de individuos (Fernández Gutiérrez, 2002). Todas las citas de la región se encuentran por encima de
950 m. Sus hábitos forestales le ligan sobre todo a bosques de frondosas, bosques mixtos con
coníferas o sotos ribereños siempre con árboles viejos. Se refugia principalmente en huecos de
árboles o viejos nidos de pájaros carpinteros.
Plecotus auritus: La presencia del Orejudo dorado en España se limita a sistemas
montañosos de la mitad septentrional (Cordillera Cantábrica, Sistema ibérico, Pirineos y Sistema
central). En Castilla y León se localiza en zonas forestales de montaña y bosques húmedos de hoja
caduca como en los perennifolios más secos. La población de Castilla y León no supera los 6.000
186
individuos. Se han encontrado individuos a altitudes que abarcan desde los 730 m hasta los 1.700 m
en un pinar de Navafría (Sierra de Guadarrama). En esta zona habita en bosques de melojares,
quejigares y viejas manchas de pino silvestre, aunque las colonias suelen estar en edificios. La
colonia de reproducción encontrada a mayor altitud confirmada está a 1.400 m en la Sierra de
Guadarrama.. Se estima que la población en Castilla y León podría comprenderse entre los 3.000 y
los 6.000 individuos.
Especie propia de climas fríos. En Castilla y León se le ha encontrado en biotopos altos de
clima casi continentalizado, frío y húmedo tanto en bosques caducifolios como de coníferas. La
disponibilidad del refugio limita su distribución y abundancia. Durante el invierno es más común en
cavidades y túneles. En la época de actividad se localiza en huecos de árboles, desvanes o
edificaciones para guardar el ganado. Se considera una especie sedentaria. El área de campeo está
dentro de un radio de uno o dos kilómetros alrededor de su refugio. El vuelo de crucero es bastante
lento pero son hábiles para volar entre la vegetación o en pequeños espacios. Pueden cazar Insectos
en vuelo. Sometido a un claro declive poblacional. En Castilla y León hay constancia de colonias
desaparecidas.
Plecotus austriacus: El Orejudo gris se ha citado en todas las provincias de la comunidad
autónoma. Especie relativamente termófila. Es uno de los escasos Murciélagos presentes en las
extensas áreas agrícolas y fuertemente antropizadas del centro de la región, aunque también aparece
en zonas arboladas y en las proximidades de las sierras. Se correlaciona positivamente con la
proximidad de grandes ríos. Está ligado al medio humano, utilizando áreas de cultivo como cazadero
y edificaciones como refugio. Se encuentra en un rango altitudinal de 320 m a 1.600 m en la Sierra de
Guadarrama. Su población se presenta a menudo muy dispersa, en colonias pequeñas o incluso en
individuos aislados. La población reproductora está muy asociada a edificios humanos. En Castilla y
León se estima una población de 15.000 a 20.000 individuos.
Especie esencialmente sedentaria, los mayores movimientos registrados no superan los 62
Km. Los desplazamientos en sentido altitudinal son corriente en los desplazamientos entre los
refugios de invierno y verano. Tienen un vuelo lento y maniobrable. Especie forestal, ubiquista y
antropófila. Prefiere desvanes y habitaciones de viejos edificios abandonados, aunque también se
encuentran en puentes cuevas, minas y túneles. Los refugios de invierno mantienen altos porcentajes
de humedad relativa.
En Castilla y León, su dispersión, reducido tamaño de las colonias y frecuencia de aparición
no revelan un peligro inminente, sin embargo parece existir una lenta regresión generalizada. La
causa más probable puede estar en su condición de especie antropófila, que se refugia en lugares
visibles y expuestos donde son muy vulnerables a las actuaciones humanas.
Myotis emarginata: Se distribuye por toda la Península aunque es poco frecuente. Aparece
en el cinturón perimontañoso de la región. Vive en todo tipo de hábitat, parece preferir un grado de
humedad por lo que tiende a ocupar las cercanías de la sierra y los terrenos con orografía
accidentada con mayor abundancia de arbolados, aunque parece evitar los bosques muy cerrados.
Esta relacionado con los cursos estables de agua donde existe una buena representación de la
vegetación de ribera. Presente en un amplio rango altitudinal desde 410 m hasta 1.400m de la Sierra
de Guadarrama (colonia de crís). En Castilla y León se estima una población entre los 3.000–5.000
individuos.
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Es una especie poco móvil que tiende al gregarismo. Sus desplazamientos apenas superan
unas decenas de kilómetros. Su vuelo es muy preciso y maniobrable lo que le permite buscar a baja
velocidad entre la vegetación y edificaciones en busca de presas. Los individuos pueden encontrarse
en una amplia variedad de refugios, pero la especie prefiere cuevas y otros lugares subterráneos para
hibernar. Tiene una tendencia claramente regresiva, habiéndose registrado la desaparición de
numerosas colonias importantes a causa de la alteración o la pérdida de sus refugios.
Miniopterus schreibersii: El Murciélago de cueva ocupa la totalidad de la Península Ibérica,
aunque es más abundante en la franja mediterránea y en la mitad sur peninsular, especialmente
donde la disponibilidad de refugios subterráneos es mayor. Es la especie más troglófila de los
Quirópteros ibéricos. Típicamente cavernícola, prefiere paisajes kársticos. Puede encontrarse tanto
en las llanuras como en terrenos montañosos, normalmente por debajo de 1.000 m. A menudo sus
refugios se encuentran próximos a cursos de agua. Característico de los enclaves situados al pie de
la sierra de Guadarrama, en áreas arboladas abiertas o de matorral y en zonas de afloramientos
calizos. Tiende a ocupar cotas medias o bajas pero puede abarcar un amplio rango altitudinal (en
Castilla y León desde 140 m a 1.340 m). La población estimada en Castilla y León está comprendida
entre 65.000 y los 85.000 individuos.
Especie migratoria, es capaz de realizar desplazamientos estacionales entre los refugios de
cría y los de hibernación, que con frecuencia superan centenares de kilómetros. Vuelo rápido, potente
y directo, 55 Km/h. Casi estrictamente cavernícola, se refugia en cavidades naturales, minas y
túneles. Los refugios se encuentran en áreas montañosas o llanas, con o sin cobertura vegetal. Es la
especie más dominante en cuevas y la segunda en minas subterráneas. Es una especie gregaria que
forma colonias de cientos o miles de individuos durante todo el año. En Castilla y León se ha
comprobado la desaparición de numerosos refugios. Su gregarismo le hace especialmente vulnerable
a sucesos catastróficos como el vandalismo, las epidemias o el desplome. Es una de las especies
que más sufre las consecuencias de comportamientos incívicos. Los insecticidas también inciden
negativamente en sus poblaciones.
Tadarida teniotis: El Murciélago rabudo se ha citado por toda la comunidad de Castilla y
León. Es una especie generalista con requerimientos ecológicos poco estrictos. Prefiere zonas
abiertas si hay refugios, ya que suele utilizar las construcciones humanas rurales, pueblos o incluso
ciudades. Se halla principalmente en áreas bajas, perimontanas en la cercanía de los grandes ríos de
Castilla y León. También en zonas kársticas.
- Carnívoros:
Martes foina: La Garduña ocupa gran diversidad de hábitats (desde bosques a
construcciones humanas) siendo característica su tolerancia y adaptación a lugares habitados por el
hombre. Presente en todas las provincias de Castilla y León, es más común en la zona montañosa
que en las llanuras centrales cultivadas. Es una especie territorial, como la mayor parte de los
carnívoros. Vive en solitario y el territorio de las parejas reproductoras tan solo coincide parcialmente
durante la época de celo. Su piel carece en la actualidad de interés comercial, por lo que su caza
directa es escasa. Especie no amenazada, ya que las poblaciones existentes parecen abundantes.
- Artiodáctilos:
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Sus scrofa: El Jabalí es una especie cinegética que se distribuye en la totalidad del territorio
de Castilla y León. Ocupa hábitats forestales, marismas, agrosistemas, periferias urbanas. Prefiere el
estrato arbustivo más desarrollado. En la actualidad es posible encontrarlo en ambientes agrícolas.
Es un animal omnívoro con dieta de predominio vegetal.
En las últimas décadas ha experimentado un fuerte incremento demográfico atribuible a
cambios socioeconómicos que han comportado el progresivo despoblamiento rural y el abandono de
actividades tradicionales que han provocado un importante aumento de la superficie de bosque y
matorral y el incremento de la agricultura intensiva. Se trata de una especie cinegética cuya caza está
fuertemente arraigada en muchas zonas rurales. La expansión de su población genera conflictos
económicos y sociales (daños en cultivos, colisiones de vehículos…). No requiere actualmente
medidas de conservación, sino más bien de técnicas de control poblacional.
- Roedores:
Microtus lusitanicus: Endemismo ibérico que tiene su área principal de distribución en el
noroeste peninsular. Se le puede encontrar en la práctica totalidad de Castilla y León, salvo gran
parte de la provincia de Soria. Existe una variación de coloración según la altitud y humedad. Aparece
en hábitats tanto naturales como agrícolas condicionado por la existencia de suelos blandos y
húmedos y una densa cobertura vegetal. Es una especie herbívora con preferencia hacia una dieta
basada en neófitos. Ocasionalmente puede constituir plagas para la agricultura al cortar y comer
semillas y raíces. No es una especie amenazada, siendo habitual su presencia en toda el área de
distribución regional.
Microtus duodecimcostatus: Especie endémica de espacios abiertos con influencia
mediterránea, tanto naturales como agrícolas. Se distribuye por las zonas mediterráneas de Castilla y
León. Es muy común en los terrenos arenosos de los pinares de llanura de Segovia. Su presencia
está condicionada por la existencia de suelos estables, húmedos, fáciles de excavar y con abundante
cobertura herbácea. Es una especie abundante en todo su área de distribución. No es una especie
amenazada siendo común en su área de distribución.
- Lagomorfos:
Oryctolagus cuniculus: El conejo de monte es un endemismo ibérico, aunque con
distribución mundial en la actualidad dada su caza y dispersión por el hombre desde épocas remotas.
Suele ser más habitual en zonas mediterráneas, con coberturas de matorral cercanas al 40%, y
zonas de pastizales o cultivo herbáceo próximos. Se distribuye prácticamente por la totalidad de
Castilla y León. Altitudinalmente es raro encontrarlo por encima de los 1.500 m. Evita las zonas con
fuertes pendientes, prefiriendo superficies levemente onduladas. su abundancia, además de su
capacidad reproductora, se basa en su condición de fitófago con doble digestión. Se considera que
Castilla y León presenta una densidad relativa baja con respecto a otras comunidades autónomas. Es
un recurso cinegético muy valorado que debería ser potenciado mediante la creación de majanos,
etc, en el futuro Parque Nacional de Guadarrama pues su recuperación y buen estado serán la base
de la abundancia de diversas rapaces, en especial el Águila imperial y la posible recuperación de las
poblaciones de Lince ibérico.
Lepus granatensis: Endemismo ibérico, se distribuye la mayor parte del territorio de Castilla
y León. Altitudinalmente se encuentra hasta 1.800 m de cota máxima. Ocupa una gran variedad de
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medios aunque tiene preferencia por los espacios abiertos, destacando los agrosistemas, así como
zonas de matorral ralo. Es un habitante característico de las grandes extensiones cerealistas de la
meseta. Tiene hábitos alimenticios nocturnos. Su densidad es muy variable, dependiendo de factores
como presión cinegética, climatología. Es una especie de caza menor muy apreciada.
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2.1.8.4. ESPECIES Y ENCLAVES MÁS DESTACADOS
2.1.8.4.1.- Hábitats y su fauna característica
Existen diversos modos de caracterizar áreas de similitud faunística en Guadarrama, bien por
rangos altitudinales, pisos bioclimáticos, paisajes, ecosistemas o hábitats, entendiéndolos como
ambientes fácilmente reconocibles, por ejemplo zonas forestales, praderas, etc. Por supuesto, estos
hábitats pueden dividirse en subhábitats, mesohábitats o biotopos concretos, pero esto complicaría
excesivamente la labor de detección de patrones faunísticos. Es por ello que no utilizamos
estrictamente los “hábitats” de la Directiva Hábitat (Ministerio de Medio Ambiente, 2003) ya que no
son útiles para la caracterización faunística y utilizaremos sin embargo la clasificación de
“comunidades vegetales”, más amplias que los “hábitats” y que se han empleado en este mismo
estudio (ver apartado de flora y vegetación).
Agrupamos por tanto a las especies o grupos animales combinando pisos bioclimáticos y
paisajes o ambientes (Díez y Soler, 2005), destacando los taxones de fauna más significativos de
cada zona, considerando especialmente su endemicidad y grado de amenaza. Para un modelo
similar, ver Oria Martín (2003) y Oria Rueda (2003). Ver también la fauna descrita en Tornero (2005).
Es destacable que las agrupaciones faunísticas realizadas por Castellarnau (1877) en su “Estudio
Ornitológico del Real Sitio de San Ildefonso y sus alrededores” sobre la fauna del Monte de Valsaín,
un modelo pre-ecológico, podrían seguirse considerando perfectamente válidas en la actualidad, ya
que no habido prácticamente cambios significativos en la distribución de muchas especies.
En Guadarrama podemos distinguir dos tipos de hábitat principales, supraforestal y forestal.
En la zona supraforestal, por encima del nivel del bosque, encontramos ecosistemas bien definidos
como los cervunales, pastizales húmedos de alta montaña en torno a los 2.000 metros de altitud; los
canchales o roquedos de alta montaña; los piornales, formaciones de matorrales por debajo del
cervunal; las lagunas y lagunillas glaciares y las turberas, generalmente asociadas a ellas.
- 1) ALTA MONTAÑA: se corresponde con los pisos oromediterráneo superior y
crioromediterráneo. Dependiendo de la orientación, los encontramos a altitudes superiores a 1.700 1.750 m. El crioromediterráneo o de montaña superior se enmarca entre 2.000 y 2.400 m. En la alta
montaña se encuentran tres tipos de hábitats fundamentales, al menos en relación a la fauna
asociada: cervunales, turberas y gleras o roquedos.
1a) Cervunales de alta montaña: incluye los pastizales de cumbres o cervunales (pastizales
húmedos de Nardus stricta y otras gramíneas como el jorar, Festuca indigesta). El cervunal orocriorosubmediterráneo guadarrámico es un hábitat de la Directiva Hábitat, pero no prioritario. Se
hallan bien representados en la vertiente norte de Guadarrama. Las principales amenazas son el
sobrepastoreo, fuego y repoblaciones por aterrazamiento. Su valor pastoral es bajo, pero tienen un
alto valor florístico, paisajístico y recreativo. Ocupa todas las lomas peladas de la Sierra, los cordales
y las zonas de cumbres de los submacizos más altos de Guadarrama.
A pesar de que hay diferencias entre los tipos de prados de alta montaña en función de su
humedad, no presentan diferencias faunísticas. En la zona de cumbres hemos señalado ya algunas
especies de fauna características, entre las que destaca el Neverón o Topillo nival (Chyonomis
nivalis), capaz de invernar bajo la nieve en las pedreras. Otros Mamíferos de tamaño medio y grande
ocupan ocasionalmente la alta montaña, con desplazamientos estacionales durante la primavera y el
191
verano. Por ejemplo el Corzo y Jabalí entre los Ungulados y el zorro o la Garduña entre los
Carnívoros.
1b) Turberas de alta montaña: Existen dos tipos de turberas en la zona según la Directiva
Hábita. Son las oro-crioromediterráneas carpetanas de mayor altitud, y las supramediterráneas
carpetanas en zonas más bajas. Ambas se encuentran en topografías de cubeta, depresiones o
vaguadas y comprenden vegetación higroturbosa como cárices y esfagnos además de otras
comunidades higrófilas como los cervunales o los prados más húmedos o juncales. En la zona
reciben el nombre de tollas o aguazales y destacan las de fondo de valle en Lozoya, Madrid. El mayor
problema de estos ambientes es el sobrepastoreo y quizá la desecación debida al cambio climático o
la extracción excesiva de agua para canalización, abastecimiento o embotellamiento. Las turberas de
alta montaña se asocian generalmente a los cervunales oromediterráneos. Las turberas
supramediterráneas lo hacen junto a los cervunales supramediterráneos, pero no existen diferencias
faunísticas apreciables entre ambos tipos.
Las turberas son muy sensibles a las modificaciones del régimen hidrológico y por tanto
deben ser protegidas estrictamente de las actuaciones que afecten a la hidrología superficial o
subterránea, incluso a cierta distancia como la extracción, desvío o canalización de fuentes. El
sobrepastoreo y el pisoteo del ganado en las turberas destruyen las capas de turba y alteran la
composición florística, provocando a veces la formación de pequeñas charcas que sin embargo
favorecen la puesta de algunos Anfibios. Sería necesario inventariar con precisión estas turberas y su
grado de afección para conocer su valor de conservación y su fauna asociada, hasta la fecha muy
poco estudiada en la zona.
1c) Roquedos, gleras y canchales: Existen diferencias entre los tipos de roquedos en
función de su litología; así los roquedos calcáreos supramediterráneos tienen escasa representación
mientras que los roquedos silíceos supramediterráneos son más importantes por su extensión. Los
roquedos silíceos crioromediterráneos, propios de la alta montaña, tienen una gran extensión en
Guadarrama ya que ocupan la mayor parte de las cumbres, generalmente en espolones rocosos
causados por la erosión glaciar y periglaciar y por las fracturas tectónicas. Las comunidades
vegetales incluyen consueldas (Saxifraga willkommiana), claveles y dedaleras, comunidades
glerícolas, enebros rastreros, pero también entre las rocas algunos piornos serranos, etc. Estos
ambientes están bien desarrollados en ambas vertientes de Peñalara y en la carta norte de la Mujer
Muerta.
El hábitat de roquedos y canchales es importante sobre todo para los Artrópodos,
fundamentalmente Coleópteros, y para algunos Reptiles y Aves propios de la alta montaña, que
destacamos más adelante. Algunas medidas a tener para la conservación de las zonas de rocas son
la limitación de la escalada (aunque no es importante en la zona castellano-leonesa por la falta de
relieve apropiado) y en el caso de los canchales la construcción o ampliación de pistas forestales que
puedan movilizarlos causando desprendimientos.
En las zonas de cumbres, los Insectos más llamativos son las Mariposas. La Mariposa apolo
(Parnassius apollo) es exclusiva de la alta montaña y se alimenta de las flores de los cardos
carpetanos (Carduus carpetanus). En las cumbres pueden encontrarse algunas Mariposas
representativas como Aglais urticae, Inachis io, Gonepterix rhamni, Isoria lattonia, etc, libando las
flores de los cervunales (Jurinea humilis, Jasione crispa, etc), pero no son exclusivas de estos
matorrales, pues pueden encontrase también en los claros del pinar y el robledal.
192
En otros hábitat de altitud, como los pastizales de montaña (por encima de 1.100 m), prados
de las cumbres, cervunales y otros pastizales húmedos, existe también una alta riqueza de
Invertebrados protegidos. Estas zonas son fundamentales para la supervivencia de Mariposas y
Escarabajos. J.L. Viejo ha mostrado la necesidad del mantenimiento de una ganadería extensiva para
el mantenimiento de zonas de prados, matorral y bosque necesarios para el ciclo vital, a veces
complejos de larvas y adultos de especies como Maculinea nausithous, Ocnogyna lareillei, Nebria
vuillefroyi y Ocydromus carpetanum, entre otras.
El único Pez relativamente abundante en los arroyos o incluso lagunillas a estas altitudes es
la Trucha común. En los tramos medio-altos y altos (tramos salmonícolas) la especie predominante
es la trucha, muchas veces asociada al Gobio. Varias especies de Anfibios alcanzan las zonas de alta
montaña y se reproducen en los arroyos, charcas y pozas de los cervunales y turberas. Rana iberica
y Salamandra salamandra son más propias de arroyos. No existe sin embargo una adecuada
prospección de las zonas más altas de la Sierra por lo que se necesita más trabajo de campo en ellas
(Lizana et al., 1995). Las zonas más altas poseen unos rezumaderos de agua, llamados “tollas” u
“ojos”. Son encharcamientos permanentes donde no crecen los árboles y existen plantas
especialistas como esfagnos, musgos, violetas paluestres, etc. Estos lugares son muy delicados y
sensibles a cualquier alteración como su desecación, canalización o pisoteo por ganado excesivo.
Merecerían especial conservación, manteniendo fuentes permanentes.
Ocasionalmente podemos encontrar en las zonas más altas al Sapo corredor, Sapo común y
Sapillo pintojo. En el límite de este piso también al Sapo partero común. En la zona segoviana no se
ha citado a Triturus alpestris, el Tritón alpino, que ocupa la zonas de la laguna de Peñalara y sus
alrededores en Madrid, donde fue introducido y está en expansión. Es probable que en un tiempo no
muy lejano el Tritón alpino pase a la vertiente segoviana de la Sierra.
Para los Reptiles, dos especies son clave en las zonas de alta montaña, la Lagartija serrana y
la Culebra lisa europea. La Lagartija serrana Iberolacerta cyreni cyreni (antes Lacerta monticola
cyreni), recientemente denominada Lagartija carpetana, ocupa zonas de roquedos, gleras, canchales
o pedreras, generalmente en la cercanía de prados, generalmente desde 1.700-1800 metros hasta
las zonas de cumbres. Este endemismo ibérico estaría probablemente perdiendo hábitat por el
cambio climático que estaría empujando a otras lagartijas hacia las partes más altas. Recientemente
se ha indicado su vulnerabilidad ante las pistas de esquí (Amo et al., 2006). Coronella austriaca es
una pequeña serpiente que ocupa los mismos hábitats y se alimenta casi en exclusiva de las
lagartijas carpetanas. También entre las serpientes puede hallarse ocasionalmente en las cumbres a
la víbora hocicuda (Vipera latasti). La lagartija roquera, Podarcis muralis, ocupa generalmente la zona
altitudinal entre Podarcis hispanica e Iberolacerta cyreni, ocupando taludes y zonas rocosas.
La comunidad de Aves ligadas a la alta montaña de Guadarrama presenta especies únicas en
el centro peninsular como el Bisbita Alpino, Pechiazul, Acentor alpino y Roquero rojo. Algunas son
casi exclusivas de este piso, mientras que otras acuden durante el verano. Propias de los roquedos y
cervunales encontramos al Acentor alpino (Prunella collaris) mientras que entre los piornos son
frecuentes el Acentor común (Prunella modularis) y el Pechiazul (Luscinia svecica). Frecuentes
durante el verano en los cervunales cerca de los medios acuáticos, se halla al Bisbita ribereño alpino
o Bisbita alpino (Anthus spinoletta) y la Alondra (Alauda arvensis).
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En los roquedos más verticales y aislados crían el Halcón peregrino, Búho real, Buitre
leonado o Collaba negra. Habituales de las peñas son también el Roquero solitario (Monticola
solitarius), Roquero rojo (Monticola saxatilis) y Colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros). Diversos
Córvidos son frecuentemente avistados en las cumbres, el Cuervo (Corvus corax) tanto solitario en
parejas, y bandos de la Chova piquirroja (Phyrrocorax phyrrocorax). Muy diversas Rapaces son
avistadas en la zona de cumbres en sus desplazamientos, en especial el Águila real (Aquila
crysaetos).
En los Mamíferos que ocupan la alta montaña la especie más característica es el Neverón o
Topillo nival (Chionomys nivalis), habitante de praderas en la cercanía de roquedos. Este gran topillo
está plenamente adaptado a la vida en alta montaña, pudiendo pasar más de 6 meses inactivo en
zonas cubiertas por la nieve. La subespecie C. nivalis abulensis sería endémica del Sistema Central
español. Se considera que el Topillo de montaña (Pitymis lusitanicus depressus) ocuparía zonas
húmedas en el piso superior. Se supone que la rata de agua Arvicola sapidus podría vivir también en
los arroyos de las zonas más altas de la Sierra siempre que mantengan agua todo el año. Esta
especie estaría probablemente en franca regresión.
2) MATORRAL DE MONTAÑA: El piso
oromediterráneo o de montaña se sitúa
generalmente entre 1.550 y 2.200 m, dependiendo de la vertiente y orientación. Se le conoce como el
piso del piornal (Cytisus purgans), con jabinos o enebros rastreros (Juniperus communis alpina, a
veces denominado nana). Se incluye en su totalidad en el horizonte superior del piso
oromediterráneo, en la zona de transición entre el bosque y el cervunal propio de la alta montaña. No
es un piso extenso en Guadarrama, ya que el piso forestal, especialmente de pino albar, llega en
muchas zonas hasta 1.800 metros, por lo que contacta con las zonas de alta montaña. En zonas más
bajas encontramos jarales de Cistus laurifolius, que ocupan grandes extensiones en la zona basal y
media, en ambientes de encinares o robledales.
Este ambiente no se encuentra en peligro, sino en expansión por abandono de las labores
agrícolas y ganaderas en la Sierra, lo que aumenta la extensión de los matorrales en las zonas altas
de la Sierra. Localmente, el piornal es quemado para lograr pastos: Estas actividades deben ser
controladas para evaluar su afección ambiental. Los piornales se encuentran como un anillo alrededor
de las zonas de cumbres de la Sierra. Los de mayor extensión y mejor conservados se encuentran en
los alrededores del Puerto del Reventón y de Malagosto.
Insectos exclusivos de las zonas de cumbres son los Cerambícidos, llamados Escarabajos
pipa (lberodorcadion hispanicum y otros), endémicos además de la Sierra de Guadarrama y que se
ven en verano en los cervunales (Vidal et al., 2004).
La fauna de Peces y Anfibios es la misma que podemos encontrar tanto en las zonas de alta
montaña como en los pisos superiores del bosque ya que dependen de la existencia de arroyos,
charcas, pero también pilones, fuentes o abrevaderos. En los claros podemos encontrar especies de
reptiles propias de la media e incluso alta montaña como la Víbora hocicuda (Vipera latasti) o la
Culebra lisa europea (Coronella austriaca). Algunas Aves son especialmente características de este
ambiente y nidifican allí, por ejemplo el Pechiazul, la Totovía o el Acentor común. Otras Aves rapaces
la utilizan como zona de alimentación como el Águila imperial y real, Buitres negro y leonado, Águila
culebrera, Aguililla calzada o Halcón peregrino.
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En las faldas de la sierra, donde se transforma la masa forestal en grandes zonas de matorral
camefítico, aparecen especies típicamente esteparias como el Aguilucho cenizo, Sisón común,
Alcaraván común y la escasísima (en peligro de extinción) Alondra de Dupont o Ricotí (Chersophilus
duponti) que anida en estos medios de matorral abierto.
Entre los Mamíferos de la zona de piornal y transición al cervunal podemos citar a la Liebre
de piornal (Lepus granatensis), topillo de montaña (Pitymis lusitanicus), Musaraña de bosque (Sorex
granarius) o Musaraña enana (Sorex minutus).
- 3) PINARES DE PINO ALBAR, PINARES DE REPOBLACIÓN Y OTRAS CONÍFERAS: se
sitúan generalmente en la zona inferior del piso oromediterráneo, ocupado en Guadarrama
generalmente por grandes masas maduras de pino albar o silvestre (Pinus sylvestris) e incluso llega
ocasionalmente al crioromediterráneo, La altitud aproximada de este piso oscila en la vertiente Norte
entre 1.500 y 1.750 m. Existen muy diversas evidencias de que el pino albar es autóctono en
Guadarrama y por tanto constituye la vegetación potencial natural del horizonte inferior del piso
oromediterráneo. Ocupa zonas más altas o norteñas que el robledal, que en la vertiente segoviana
crece entre 1.300 y 1.700 metros. En muchos casos se comunican por las zonas altas de la sierra con
los pinares de la vertiente madrileña.
Los pinares albares tienen un altísimo valor de conservación como paisaje, por su extensión y
su carácter de vegetación potencial, así como por la fauna que albergan, en especial Aves
nidificantes. Presentan un buen estado de salud ya que no hay problemas serios de plagas como en
otros macizos montañosos. Las mejores masas de pinar del Guadarrama segoviano se encuentran
en La Acebeda (Valsaín-La Granja); San Rafael-Gudillos-El Espinar, río Moros, y Peguerinos. La
mayor parte de estas zonas se incluyen en ZEPAs por su importancia ornitológica. El piso del pinar
está ocupado por helechos y en zonas más abiertas se encuentran robles melojos (Quercus
pyrenaica) y diversas escobas y retamas como Genista florida o G. cinerea. Este tipo de hábitat es
probablemente el más valioso de la Sierra, desde un punto de vista ornitológico y entomológico, al
albergar la nidificación de las Aves rapaces más amenazadas, como el Águila imperial o el Buitre
negro o Abanto y unas pocas parejas de Cigüeña negra.
El principal problema de conservación de este ambiente está en evitar molestias excesivas a
la nidificación y mantener una explotación forestal sostenible, con un bosque maduro en el que se
mantengan los árboles más viejos y los troncos caídos, evitando también la fragmentación de la masa
forestal por exceso de pistas que además permiten una mayor penetrabilidad en el medio. La solución
es la aplicación de los instrumentos redactados por la Junta de Castilla y León para una utilización
sostenible del medio forestal así como la no apertura de pistas innecesarias y el control de los
visitantes al menos en épocas claves.
Diversas especies son características de este piso, aunque en general no exclusivas. Entre
ellas destacan Aves y Mamíferos forestales y varias especies de Insectos como Mariposas y
Escarabajos forestales, citados en el apartado del inventario faunístico. En los pinares la riqueza de
Insectos es elevada e incluye especies de gran valor de conservación como los Escarabajos
Carábidos Carabus ghiliani o Platyderus varians. Entre las Mariposas de los pinares de Guadarrama,
la especie más emblemática es la mariposa nocturna Graellsia isabelae, cuya oruga se alimenta de
las acículas de los pinos (detallaremos su biología y distribución más adelante). Otro grupo de
Insectos abundante y omnipresente en los pinares son las hormigas, especialmente la hormiga roja
195
(Formica rufa). Sus hormigueros forman grandes montículos hechos por acumulación de acículas y
alcanzan hasta medio metro de altura. La hormiga roja prefiere los pinares más cerrados, compuestos
por árboles gruesos, aunque en las zonas más altas sitúa los hormigueros en los límites del pinar.
Los únicos Peces se hallan en los arroyos, generalmente de cierta pendiente y bien
oxigenados, por tanto claramente salmonícolas. Las especies presentes son fundamentalmente la
Trucha común y el Gobio. Los pinares no son muy apropiados para los Anfibios, pues los medios
acuáticos se limitan en general a los arroyos y las escasas charcas del bosque. Las especies serían
las mismas citadas en las zonas de cumbres, con predominancia de la Salamandra y la Rana
patilarga, pero aumentan su presencia y abundancia el Sapillo pintojo (Discoglossus galganoi) y el
Sapo partero (Alytes obstetricans). Entre los Reptiles de esta zona son destacables en los arroyos el
endemismo ibérico Lagarto verdinegro (Lacerta schreiberi), y la Lagartija roquera (Podarcis muralis)
en los pedregales y taludes. El Eslizón tridáctilo ibérico (Chalcides striatus) se encuentra en praderas
cercanas a los roquedos.
La diversidad de la comunidad de Aves se encuentra ligada principalmente a las zonas
forestales, especialmente a los pinares que forman los bosques más extensos del área estudiada en
este PORN. Aquí es donde nidifican algunas de las especies con más valor de la sierra. Destacan
las rapaces diurnas con 19 especies nidificantes, entre las que destaca por su relevancia como
endemismo ibérico y niveles de amenaza, el Águila imperial Ibérica (Aquila adalberti) y las colonias de
Buitre Negro (Aegypius monachus). También cabe nombrar, por su interés, la comunidad de
pequeñas Aves ligadas a estas masas arbóreas, entre ellas cabe resaltar la presencia del Lúgano
como reproductor, escasísimo en la península Ibérica, y de otras especies como el Piquituerto,
Trepador Azul, Herrerillo capuchino, Carbonero garrapinos, Pico picapinos, etc.
Numerosas Aves forestales nidifican en los altos pinos u ocupan huecos en sus troncos. La
lista es numerosa, entre las Rapaces más emblemáticas y amenazadas, están el Águila imperial
ibérica y el Buitre negro que crían en amplias plataformas en los altos pinos albares. El Abanto o
Buitre negro cría en colonias que tienen el interés de ser las más septentrionales de Europa. También
crían en el pinar el Águila culebrera, Halcón abejero, Aguililla calzada y alguna ocasional Cigüeña
negra en la Sierra. Azores y Gavilanes crían y se alimentan tanto en los pinares albares como en los
de repoblación cuando alcanzan una cierta altura. Ratoneros, Cornejas, Milanos reales y negros,
Azores, Búhos chico o Cárabos pueden criar también en los pinos. El Buitre leonado utiliza los
grandes pinos como zona de descanso. Entre otros paseriformes forestales destacan el Pito real y el
Pico picapinos, el Piquituerto o Cascapiñones y otros paseriformes propios de pinares como el
Reyezuelo sencillo, Arrendajo, Agateador común, Verderón serrano, Carboneros garrapinos y
capuchino, Verderón serrano, etc.
Entre los Mamíferos destacan por lo conspicuo y como emblema del bosque de pinos
destacan la Ardilla roja (Sciurus vulgaris) que ha recuperado una notable presencia y abundancia en
todos los pinares de Guadarrama, y el Lirón careto (Elyomis quercinus). Diversos Quirópteros propios
del bosque y amenazados tienen aquí poblaciones significativas, especialmente Barbastella
barbastellus y los murciélagos ratoneros Myotis bechsteinii y Myotis emarginata. Entre los Ungulados
son de destacar el Corzo, que está ampliando su distribución por toda la zona forestal de la sierra, y
el Jabalí. Entre los Carnívoros de los pinares destaquemos a la Garduña (Martes foina), Gato montés
(Felis silvestris) y la Comadreja (Mustela nivalis), aunque ocupan todos los pisos bioclimáticos.
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Entre los pinos albares se encuentran ocasionalmente en el Sistema Central e Ibérico tejos
aislados o tejedas (Taxus baccata), generalmente en manchas poco densas. El tejo tiene
predilección por las zonas umbrías y vive mejor en los terrenos calizos, aunque se adapta a los
silíceos. Aunque es una planta tóxica, salvo el arilo de los frutos, muchos animales como los Ciervos
y Corzos comen sus hojas. Numerosas Aves paseriformes comen y dispersan sus semillas tales
como los Picogordos, Verderones, Estorninos, Zorzales comunes y charlos, Petirrojos, Currucas
capirotadas o Arrendajos. Entre los Mamíferos que consumen los arilos está el tejón, así como el
zorro y la garduña. Un Reptil es encontrado frecuentemente en los troncos y ramas del tejo, la
Lagartija colilarga (Psammodromus algirus), bastante trepadora. Diversos Insectos son plagas
características del tejo, entre ellos dos mosquitos de las agallas (Taxomya taxi) y Cecidomya taxi que
comen sus yemas y la mariposa Liparis monacha, otra plaga forestal, sus hojas.
4) ROBLEDALES Y OTROS BOSQUES DE FRONDOSAS: El piso supramediterráneo
superior está ocupado principalmente por bosques densos de roble melojo, rebollo, mantiego o
marojo (Quercus pyrenaica) o al menos por manchas en las zonas donde el pinar, autóctono o
repoblado, lo permite. Los melojares de Guadarrama se consideran subhúmedos, más continentales
y menos húmedos que los del Sistema Ibérico, lo que supone algunas diferencias florísticas. En
Guadarrama encontramos una disposición en dientes de sierra en relación a los pinares, con el
melojo subiendo por las vaguadas y torrentes, y descendiendo el pino por aristas y contrafuertes.
Estas zonas tienen gran valor faunístico por su carácter de ecotono.
El melojar guadarrámico es una comunidad vegetal básica en la sierra, aunque no prioritaria
en cuanto a su conservación por la Directiva de Hábitats. Constituye la vegetación potencial del piso
supramediterráneo, papel que alterna con el pinar albar en el horizonte superior del piso, y con los
encinares en las áreas más secas del horizonte inferior.
En Segovia el roble melojo abunda por toda la sierra, destacando los montes de Riaza,
Prádena, La Granja, Sepúlveda. La zona de estudio comprende extensas representaciones de
melojares, pero variablemente fragmentadas y conservadas. Algunas de las mejores manchas de
roble melojo, llamadas “Matas” en la Sierra debido a que proceden de rebrotes jóvenes de raíz
(Blanco, 2003), son la Mata la Saúca en la Granja de San Ildefonso y la Mata de Pirón cerca de
Collado Hermoso. En Ávila en la zona del Caloco, cerca de El Espinar.
Casi todos los melojares han sido tradicionalmente explotados para leña o carbón y también
destaca la carga ganadera que soportan, sobre todo de vacuno en libertad. Una adecuada
conservación requiere medidas que mejoren la calidad estructural de las masas y la evaluación del
impacto ganadero que puede ser excesivo en algunas zonas, lo que aconsejaría la exclusión parcial o
temporal del ganado en algunos rodales. En la actualidad el principal problema de conservación de
este hábitat no es la explotación forestal, que es cada vez menos intensa, sino la fragmentación y
molestias causada por nuevas pistas, que afectan seriamente a la avifauna más rara y tímida.
En el piso del robledal se encuentran también otros árboles como acebos, avellanos, fresnos
o sauces en las zonas más húmedas, especialmente en las riberas. En el sotobosque suele
predominar el helecho Pteridium aquilinum, arbustos como Genista florida y G. cinerea o espinos
como Crataegus monogyna o Prunus spinosa. Dependiendo de la densidad del robledal y de la
existencia de claros o praderas encontramos comunidades variadas, especialmente de Aves. Un
atractivo botánico es la acebeda de Prádena, situada a media ladera y que presenta el interés
faunístico de albergar dormideros de estorninos, tordos y otras Aves.
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Algunos Insectos característicos del robledal son diversas Mariposas diurnas y nocturnas,
pero probablemente el insecto más emblemática es el Ciervo volante (Lucanus cervus), asociado a
robles maduros y viejos. Depende fuertemente del robledal maduro ya que realiza sus puestas en los
tocones de robles en descomposición, durando el desarrollo de las larvas entre tres y cinco años. Los
adultos emergen en el otoño, pero hibernan reapareciendo en la siguiente primavera. Los robles
producen numerosos tumores denominados agallas o cecidios, como respuesta específica a la
puesta de huevos de avispas Cinípedos. En el género Andricus se han citado más de 30 especies
ibéricas, entre ellas destacan para el roble melojo Andricus kollari y Andricus quercus-calicis.
La conservación y buena gestión de los bosques, especialmente pinares y robledales, es
indispensable para el buen funcionamiento de las poblaciones de muchas especies de Insectos. La
destrucción y fragmentación del hábitat forestal o el uso de plaguicidas de forma indiscriminada
constituyen un grave peligro para la conservación de dichas especies.
Los Anfibios son básicamente los mismos que en el pinar, ya que los medios acuáticos son
los mismos: arroyos, encharcamientos y charcas, pilones y fuentes. Triturus marmoratus es un
urodelo común, mientras que Lissotriton boscai (Triturus boscai) es muy escaso y solo estaría
presente en la zona occidental de la Sierra, en el límite con Ávila. En los arroyos del robledal cabe
destacar a la Salamandra, Rana patilarga y el Lagarto verdinegro.
En las zonas más elevadas del robledal y en los roquedos se encuentran Podarcis muralis,
mientras que Podarcis hispanica ocupa los roquedos a todas las altitudes hasta aproximadamente
1.700 metros. El lagarto ocelado (Lacerta lepida) aparece muy ligado a rocas o muros de piedra de
este piso, siempre con zonas abiertas cercanas, mientras que la Lagartija colilarga Psammodromus
algirus es abundante en claros del robledal y pinar. En estas zonas puede hallarse a la Culebra lisa
meridional, Coronella girondica, en zonas soleadas.
Muchas de las Aves que se encuentran en los pinares ocupan también los robledales de
melojo. La lista de Aves es muy numerosa. Entre las características del robledal está el Arrendajo que
entierra sus bellotas constribuyendo a su dispersión. Varias Rapaces anidan en los robles más altos,
entre ellas el Busardo ratonero, Halcón abejero, Azor y Gavilán. Otras Aves típicas serían el Pinzón
común, Herrerillo capuchino, Agateador común, Trepador azul, Corneja, Mirlo, Petirrojo, etc. Los años
de gran producción de bellotas alimentan a las palomas torcaces. El jabalí es abundante en el
robledal, consumiendo bellotas y ha prosperado debido a la densificación del robledal por la
disminución del uso para leña. También los ratones de campo acumulan bellotas en sus madrigueras.
Aunque el roble melojo predomina en todo Guadarrama, existen ejemplares aislados y
algunas pequeñas manchas de roble albar (Quercus petraea) en los montes y pinares de El Espinar
y Navafría; así como en los robledales de melojo de Riaza (Ermita de Hontanares), Riofrío de Riaza,
etc. Dada su escasez, no presentan diferencias faunísticas con el roble melojo. El haya (Fagus
sylvatica) no puede ser considerada como un hábitat en este estudio, ya que el hayedo de Montejo,
en la Sierra de Ayllón, queda fuera del ámbito de estudio del PORN Sierra de Guadarrama.
Podemos incluir junto a los robles melojos a las acebedas (Ilex aquifolium). Esto se debe a
que ocupan las mismas zonas y puede considerarse al acebo como una etapa de sustitución del
bosque caducifolio. El acebo es una planta de hoja perenne, arbustiva o arbórea, que puede alcanzar
hasta 20 m de altura y 2 m de diámetro en algunos ejemplares de Burgos. Es un arbusto de zonas de
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páramos o montaña presente en todo el Sistema Ibérico y Central. Las escasas acebedas de
Guadarrama, generalmente adehesadas, se sitúan en la zona de Prádena y Matabuena, prosperando
sobre suelos silíceos del piso supramediterráneo y generalmente junto a robles melojos y otros
arbustos espinosos de dispersión ornitócora como majuelos (Crataegus monogyna), escaramujos
(Rosa canina, etc), zarzamoras (Rubus sp), etc.
La existencia de los acebos está muy condicionada por la acción de la fauna, tanto silvestre
como doméstica (ganado) debido a la influencia antrópica en el origen, mantenimiento y conservación
del acebo. Es interesante el manejo que desde tiempos inmemoriales se hace en España de esta
especie (Oria de Rueda, 2003). De hecho, las acebedas se recuperan en la zona debido al abandono
agrícola y a la protección del plan de recuperación existente en Castilla y León. En la dispersión del
acebo por medio de sus frutos tienen una enorme importancia las Aves y Mamíferos. El Zorzal alirrojo
(Turdus pilaris) y otras Aves comedoras de semillas ocupan las acebedas durante el otoño e invierno
consumiendo sus frutos por miles
Dado que no se detectan diferencias faunísticas claras entre estas comunidades vegetales,
hemos asimilado sus comunidades faunísticas a las de los robledales de melojo.
5) MATORRALES DE ZONAS BAJAS: este tipo de matorral se halla en zonas más bajas, en
claros de pinares o robledales o en el borde de los pastizales. Es un matorral heterogéneo en
especies de arbustos como los escobonales (agrupaciones de Genisteas), Cytisus, Adenocarpus o
Rosáceas espinosas. Incluso podemos incluir aquí a los brezales o gayubares, escasos en
Guadarrama. Muchas veces estas zonas arbustivas han sustituido al bosque por la acción del fuego,
tala, roturación o cultivo. En la zona norte de Guadarrama es abundante el codeso o cambrón
(Adenocarpus hispanicus hispanicus), un endemismo del Sistema Central al que acompaña a veces
la rascavieja (Adenocarpus complicatus).
Este ambiente arbustivo no se encuentra en peligro, sino en expansión por abandono de las
labores agrícolas y ganaderas en la Sierra, lo que aumenta la extensión de los matorrales en las
zonas medias y altas de la Sierra. Ocasional y localmente el matorral es destruido o alterado por
desbroces y quemas realizadas para lograr pastos o por arranques para repoblaciones de pinar. El
matorral camefítico ocupa las zonas más bajas y continentales y los suelos más secos del dominio
del roble melojo, encinas o sabinas.
Estas zonas tienen como especies más características dentro de los Reptiles a la Lagartija
colilarga (Psammodromus algirus) o la Culebra lisa meridional (Coronella girondica). Muchas Aves
son propias de los matorrales donde nidifican como el Chotacabras pardo o la Cojugada montesina.
Además de la presencia ocasional de Pechiazul, Acentor común o Totovía, podemos señalar a la
Curruca rabilarga, Alcaudón dorsirrojo, Escribano hortelano, etc. Utilizan estas zonas para su
alimentación numerosas Rapaces, ya citadas en el matorral propio de montaña, como águilas de
diverso tipo, pero también el Halcón peregrino, Búho real o Azor.
6) ENCINARES: los encinares y carrascales ocupan una muy pequeña parte de las zonas
bajas de la zona de estudio, en el horizonte inferior del piso supramediterráneo, en el piedemonte de
la Sierra de Guadarrama. Podemos apreciar dos tipos de encinares desde el punto de vista de las
comunidades vegetales que contienen, los encinares castellanos supramediterráneos basófilos y los
encinares guadarrámicos propios de sustratos silíceos. Los encinares desarrollados sobre sustratos
199
calcáreos son escasos en la vertiente norte de la sierra y suelen alternarse con enebrales o sus
etapas seriales como espinales, salviares, etc. Los encinares propios de sustratos silíceos son la
vegetación potencial natural del supramediterráneo inferior de la sierra. Suelen aparecer bastante
aclarados y mezclados con enebros, jarales, tomillares, majadales, etc.
La escasa extensión de los encinares en la zona estudiada en el PORN y la intensidad de
presencia humana reducen notablemente su valor natural pues las especies más raras, ariscas y
amenazadas (especialmente de Aves) rehuyen estas zonas para nidificar. El pastoreo y la
extracciones de leña o madera pueden disminuir su riqueza faunística.
Los escasos encinares acogen a la fauna más mediterránea y termófila de la vertiente norte.
Así por ejemplo podemos citar entre los Anfibios al Gallipato (Pleurodeles waltl) e Hyla arborea en
algunos sotos ribereños y arroyos con abundante vegetación riparia, especialmente de zarzales que
les proporcionan refugio. En los Reptiles, la Lagartija ibérica (Podarcis hispanica), Lagartijas colilarga
o cenicienta (Psammodromus algirus o P. hipanicus) y a la muy escasa Lagartija colirroja
(Acanthodactylus erythrurus), presente en zonas arenosas. También son abundantes serpientes
como Coronella girondica, Malpolon mospessulanus o Elaphe scalaris. En las zonas abiertas junto a
matorrales o muros de piedra se encuentra el Lagarto ocelado (Lacerta lepida) y en los claros el
Eslizón ibérico (Chalcides bedriagai).
Las encinas ofrecen una gran cantidad de soportes y huecos para la fauna que sirven para la
nidificación. Los encinares son utilizados como zona de nidificación y alimentación para los Milanos
real y negro, Aguililla calzada, Búho real, Azor, Alcotán, Totovía, etc. Son importantes para la
alimentación de Águila imperial, Águila culebrera, etc. En los encinares son también comunes el
Cuco, Urraca, Zorzal charlo, Perdíz roja, Mirlo común, Carbonero común, Herrerillo capuchino. Entre
los Mamíferos cabe destacar algunas especies típicas. En los claros del encinar se encuentra el
escaso Conejo y la abundante Gineta
Incluimos junto a los encinares al quejigo o roble carrasqueño (Quercus faginea). En
Guadarrama sólo existen pequeñas manchas de quejigos en la zona de Sepúlveda, Fuentidueña, etc.
El quejigo se asocia frecuentemente a la encina, mezclado con pinos y enebros en los afloramientos
calcáreos y en zonas con una cierta humedad como vaguadas, umbrías, etc. En la vertiente
segoviana de Guadarrama se encuentra un extenso quejigar en La Losa, acompañando de Arces.
Asociado a zonas bajas del piso supramediterráneo, generalmente en compañía de encinas
más que de robles o pino albar, se encuentran los enebros, también llamados sabinas albares
(Juniperus thurifera) que alcanzan estructura arbórea. Es un bosque abierto o claro, propio de
terrenos secos y de climas continentales. Pueden encontrarse tanto en sustratos calizos como
silíceos, constituyendo ”habitats” fitosociológicos diferentes y de interés prioritario en la directiva de
Hábitats. Son los enebrales silíceos los más extensos conocidos en este sustrato y por ello son una
originalidad forestal en la Sierra de Guadarrama.
En la provincia de Segovia existen unas 8.000 ha con enebrales, algunas de los mejores
bosquecillos se encuentran en las zonas bajas de Guadarrama, en Casla, Arcones o Prádena, en
zonas calizas de la Meseta y ocasionalmente mezclados con quejigos. Su importancia es tal, que se
ha protegido con la figura del LIC ES4160058 “Sabinares de Somosierra” con 2.158 ha. Como
indica la ficha del LIC, este sabinar albar se halla en expansión en superficie y densidad por el
abandono agrícola y la reducción de la presión ganadera de la zona. Entre sus factores de
200
vulnerabilidad están las concentraciones parcelarias, roturaciones, el sobrepastoreo y la construcción
de infraestructuras. En la Sierra de Guadarrama el enebro ha tenido un uso histórico para producción
de “incienso de enebro”, aceites, madera para tallar, etc. Es muy vulnerable al fuego puesto que no
se regeneran por rebrote, pero su estructura abierta no favorece la dispersión del fuego.
La fauna de los enebrales es básicamente la misma que podemos encontrar en las zonas
mediterráneas del piso supramediterráneo, y por tanto de los encinares. Se han descrito numerosas
especies de Insectos que atacan al enebro (Oria de Rueda, 2003), hasta 18 especies de Mariposas
nocturnas cuyas orugas se alimentan de sus hojas y Mariposas diurnas que atacan las bayas.
También son abundantes Escarabajos Escolítidos que hacen galerías en troncos y ramas.
Son numerosas las Aves que se alimentan en invierno de las bayas de los enebros (llamadas
agayufas en Segovia; Oria de Rueda, 2003) como varios Zorzales, Pinzón común, Herrerillo
capuchino, Arrendajo y algún Rabilargo. Algunas Aves rapaces crían en los altos enebros como el
Busardo, Alcotán, Cernícalo común e incluso Azor. Entre los Mamíferos el Conejo de monte utiliza las
raíces y los pastos alrededor de los enebros. El Conejo, Ratón de campo, Tejón, Zorro y Garduña
comen los gálbulos caídos en el suelo sin destruir las semillas por lo que actúan como dispersadotes.
También el enebral alberga cada vez mayores poblaciones de Corzos, si bien estos medran y se
ocultan en los pinares densos
7) PRADERAS Y PASTIZALES DE ZONAS BAJAS: podemos diferenciar claramente la
fauna de las praderas de altura del piso crioromediterráneo (Nardus stricta) y los pastizales de zonas
bajas y medias causados sobre todo por la acción humana, especialmente agroganadera. Los de
zonas bajas son muy variados en cuanto a especies y comunidades vegetales presentes, recibiendo
diversos nombres como ballicares o vallicares, verséales, majadales, prados higrófilos, prados de
siega etc (ver informe botánico de este estudio) dependiendo de la altitud, sustrato, litología. En
general suelen estar en las laderas o fondo de valle.
No haremos distinciones entre ellos pues no existen prácticamente diferencias faunísticas
entre ellos, quizá con la excepción del topillo de Cabrera (Microtus cabrerae) o el eslizón tridáctilo
(Chalcides striatus) propios de los prados más húmedos.
Una formación de pastizal típica de las zonas supramediterráneas, o incluso
oromediterráneas de Guadarrama, es el majadal. Formado por prados de Poa bulbosa, ricos en
terófitos postrados o amacollados. Generalmente es una etapa serial de series de vegetación de
encinares, melojares o pinares albares. Desde un punto de vista botánico es un hábitat prioritario. Su
único problema de conservación parece ser el abandono ganadero que conlleva la expansión de los
arbustos. Ya hemos manifestado la importancia del mantenimiento de prados abiertos para la
supervivencia de Artrópodos como las Mariposas. Una mariposa propia de los prados húmedos y los
claros de los bosques es la mariposa del cinabrio (Tyria jacobea), de llamativos colores y cuya oruga
se alimenta de las hierbas del cinabrio (Senecio jacobea). Otros
En las praderas de zonas bajas y medias debemos destacar a las dos especies de eslizones
(Chalcides striatus y Chalcides bedriagai). Entre las Aves son características el Bisbita campestre en
las zonas altas, Alcaraván, la Cojugada, el escaso Sisón en el piedemonte y el Aguilucho cenizo.
Estas zonas de praderías sirven para la alimentación de diversas rapaces. Los prados más húmedos
son zonas importantes de alimentación para las Cigüeñas blanca y negra.
201
.
Numerosas Aves utilizan los ecotonos entre las praderas y los bosques caducifolios.
Podemos citar en esta zona a paseriformes como la Alondra común, Cogujadas común y montesina.
Totovia, Tarabilla común, Abubilla, Triguero, etc. Se encuentran también Perdices rojas. Entre los
Mamíferos el Tejón, Gineta o Gato montés. El Conejo de monte es muy escaso en la zona, lo que sin
duda contribuyó a la desaparición del Lince ibérico.
- 8) BOSQUES Y SOTOS RIBEREÑOS: incluimos aquí diversas formaciones forestales
lineales asociadas a ríos y arroyos como las saucedas, fresnedas, choperas, alamedas, etc.
Constituyen en su conjunto vegetación edafófila o edafohigrófila muy exigente en humedad. En un
bosque ribereño teórico encontramos en la banda más cercana al agua a los sauces y alisos, más
lejanos los chopos autóctonos y álamos. El único bosque ribereño que es muy escaso en Segovia es
la aliseda (Alnus glutinosa) ligados a suelos permanentemente embebidos en agua y de cierta altitud.
Tampoco los tarajales o tamarix (Tamarix gallica) forman grupos importantes en Guadarrama.
Los bosques ribereños en encuentran gravemente amenazados por diversos factores como la
desecación de cauces, dragados, canalización, tala abusiva, quema, ocupaciones ilegales, etc (Oria
de Rueda, 2003). En la zona de estudio, su principal problema es la fragmentación. Son un indicador
de la calidad de la red fluvial y actúan como importantísimos corredores ecológicos para la flora y la
fauna así como fijadores de suelos, etc. Por todo ello se han declarado una serie de riberas
catalogadas en Castilla y León que forman parte de la Red Natura 2000. En la zona estudiada en el
PORN de Guadarrama no se ha declarado ninguna ribera catalogada.
Las saucedas atrocenicientas y salvifolias (Salix atrocinerea, Salix alba, S.salvifolia, S.
purpurea, etc) constituyen comunidades vegetales bien representadas en la vertiente norte de
Guadarrama, a lo largo de los arroyos excavados en las laderas. Son plenamente riparias y pueden
constituir el único bosque de galería existente en los arroyos y torrentes de montaña. Son
fundamentales para evitar la erosión de las laderas y soportan relativamente bien las perturbaciones
periódicas de las avenidas. En las zonas más alejadas del cauce suelen acompañarse por fresnos o
bosques mixtos de fresnos y robles melojos.
Las fresnedas (Fraxinus angustifolia) o los bosques mixtos de fresnos y robles melojos se
consideran como los bosques riparios potenciales sobres sustratos silíceos. Los bosques de fresnos
ocupan terrenos frescos y profundos. Han sido muy utilizados por el hombre y los pastores, muchas
veces adehesándolos para pastos y producción de ramón por desmoche y como setos vivos al lado
de los muros de piedra para proporcionar sombra y refugio contra el viento. Estos setos de fresnos y
roble melojo son abundantes en la zona sur de Segovia. La extensión en las fresnedas es amplia en
el piedemonte de la Sierra Guadarrama, en los valles fluviales y han sido extensivamente
transformadas en prados húmedos adehesados como los de Riofrío, conservando a lo largo de las
cercas ganaderas arbustos como zarzales o espinares caducifolios.
Las fresnedas adehesadas contienen numerosos árboles viejos, desmochados o huecos que
proporcionan nidificación, refugio y alimentación para la fauna; murciélagos forestales o Aves como
pitos reales, mochuelos, cárabos o Aves insectívoras que consumen Insectos. Una plaga exclusiva
del fresno es la mariposa Abraxas pantaria (Oria de Rueda, 2003). Diversos Carnívoros como la
Gineta, Garduñas, Turón, etc utilizan los huecos para refugiarse o tener sus crías. Varios herbívoros
como el Corzo o el Lirón careto consumen las hojas, ramas y sámaras, así como las Aves comedoras
de semillas como los picogordos, verderones, verdecillos, etc.
202
Aunque no pueden asimilarse en extensión a los anteriores, existe una escasa representación
de olmedas (Ulmus minor), medianamente conservadas, en las vegas fértiles de los ríos y grandes
arroyos que atraviesan los afloramientos calcáreos de la vertiente Norte. Algunas han sido diezmadas
por la grafiosis.
También podemos citar las choperas y alamedas (Populus nigra y Populus alba), sauces
blancos (Salix alba), etc extendidos al borde de los cauces fluviales y muchas veces plantados por el
hombre. El chopo autóctono (Populus nigra) se encuentra sobre todo en tramos medios y altos,
mientras que las alamedas (Populus alba) se desarrollan en tramos bajos y medios en sustratos más
calcáreos o arcillosos. Pequeños rodales de álamo temblón (Populus tremula) crecen en los valles
fluviales de la Sierra en Somosierra, Pinares de Valsaín, Navafría, etc.
Por último, citaremos a los abedulares (Betula celtiberica). Aunque podríamos haberlos
citado junto a los bosques caducifolios de frondosas, en la zona de estudio muchas veces se asocian
a vegas fluviales. En Segovia se encuentran abedules en la zona de Riaza y Riofrío de Riaza, Santo
Tomé del Puerto, Navafría y la cuenca del río Cega en los alrededores de Cuellar. Sólo en Riofrío de
Riaza se desarrolla un verdadero abedular. Su escasa entidad en la zona estudiada de la Sierra de
Guadarrama hace que no les demos más importancia. Tampoco presentan diferencias faunísticas
con otras manchas de bosque de ribera.
Los bosques ribereños de sauces, fresnos y olmos, pero también los de especies más
vanales o introducidas como chopos o álamos, poseen una gran importancia faunística,
especialmente para la nidificación y alimentación de Aves paseriformes. De hecho, las fresnedas
contienen abundantes arbustos ornitócoros de frutos carnosos que hacen que sean un hábitat
importante para las Aves y los Mamíferos en el otoño. Proporcionan además refugio para una gran
cantidad de Invertebrados y Vertebrados como Anfibios, Reptiles y Mamíferos de pequeño tamaño.
Estas zonas sombreadas y húmedas son tan importantes para la supervivencia y alimentación de los
Anfibios durante el verano como los medios acuáticos cercanos donde depositan sus puestas. Por
todo ello deben de tener un manejo conservacionista favoreciendo la formación de sotos densos y
continuos. Son Murciélagos riparios totalmente o en parte Myotis daubentonii, Myotis nattereri y
Pipistrellus pygmaeus.
9) MEDIOS ACUÁTICOS: los medios acuáticos naturales de la sierra son tremendamente
variados, tales como ríos, arroyos, lagunillas o charcas. Debemos sin embargo diferenciar los de alta
montaña y las turberas porque contienen comunidades faunísticas bien diferenciadas a las de zonas
bajas, como ya se ha indicado más arriba.
Algunas especies propias de medios acuáticos, en particular arroyos y ríos, son lógicamente
comunes con la zona madrileña de la Sierra y corresponden a Órdenes de Insectos como
Plecópteros, Tricópteros o Efemerópteros, algunos de ellos catalogados en el Catálogo nacional o en
Catálogo Regional de Especies Amenazadas de la Comunidad de Madrid, 1992). Destacan especies
como Rhyacophila relicta, Drunella paradinasi, Serratella hispanica, Allogamus laureatus y
Brachyptera arcuata especialmente en zonas altas de las cuencas
En tramos más lentos de arroyos bien conservados, de media montaña encontramos entre los
Peces a la Boga, el Bordallo y, ocasionalmente, la Lamprehuela. En los tramos medios y medio-bajos
203
de la zona de estudio se añade el Barbo común y empiezan a aparecer algunas especies exóticas.
Todos los Anfibios se asocian a los medios acuáticos de diversos tipo ya que la mayor parte de las
especies se encuentran en todos los niveles altitudinales de la Sierra. Entre los Reptiles debemos
destacar al Lagarto verdinegro presente a lo largo de los arroyos desde las zonas bajas hasta la alta
montaña, y el Galápago leproso, presente ocasionalmente en las vegas fluviales del piedemonte de la
Sierra. Entre las Aves ligadas a los medios acuáticos son frecuentes aquellas asociadas con sotos,
vegetación ribereña y cursos de agua como el Martín pescador, el escaso Mirlo acuático, Oropéndola.
Debemos destacar la presencia para su alimentación en las zonas bajas, de la Cigüeña negra
(Ciconia nigra), escasa, pero indicadora de la calidad y conservación de estos parajes; y la
Agachadiza común (Gallinago gallinago) que ligada a espacios húmedos de montaña como
tremedales y cervunales, cuenta en Guadarrama con alguno de los pocos puntos de nidificación en la
península ibérica. Dentro de los Mamíferos, las más representativas son por supuesto las especies
semiacuáticas o acuáticas, destacando el escasísimo Desmán Ibérico, Nutria, Turón, Rata de agua,
Musgaño de Cabrera y por su gravísimo efecto negativo, el Visón americano.
204
2.1.8.5.- BIBLIOGRAFÍA
Se incluyen en este apartado las referencias citadas en los diversos apartados de este
estudio de fauna. En general sólo se citan las referencias más relevantes sobre la fauna en
Guadarrama y/o zonas adyacentes del Sistema Central. En el caso de los atlas de Vertebrados y
libros rojos de Invertebrados y Vertebrados españoles publicados o en prensa del Ministerio de Medio
Ambiente, se cita únicamente a los coordinadores del mismo y a los autores de una especie concreta
sólo cuando es relevante para este informe.
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225
LISTADO DE TABLAS, FIGURAS Y MAPAS
TABLAS
Tabla 1. Número total de especies de Insectos descritos en el mundo, Península Ibérica
15
6
y Guadarrama, y su porcentaje relativos .
7
Tabla 2. Número de especies de Insectos en el mundo .
16
Tabla 3. Distribución, biotopos y fenología de las Aves en el Guadarrama segoviano
37
Tabla 4. Caracterización geográfica y ecológica de los Mamíferos en el Guadarrama segoviano
62
Tabla 5. Número de especies de Invertebrados en cada categoría del Catálogo
75
Nacional de Especies Amenazadas en la zona de estudio en Castilla-León.
8
Tabla 6. Número de especies de Invertebrados en cada categoría de la UICN, 1992,
75
considerando sólo los de presencia comprobada en Guadarrama
9
Tabla 7. Número de especies de cada grupo faunístico en cada categoría de la Directiva de Hábitats .
10
76
Tabla 8.Algunos Invertebrados significativos y/o amenazados citados en Guadarrama
78
Tabla 9: Algunos Invertebrados significativos y/o amenazados presentes en otras zonas
79
del Sistema Central y Gredos cuya presencia no es segura en el área de estudio de Guadarrama
Tabla 10. Riqueza de Peces en la zona de estudio y comparación con otros ámbitos territoriales.
87
Tabla 11. Caracterización de los tramos de ríos del área de estudio según su Ictiofauna, caudal,
89
vegetación ribereña y régimen de pesca deportiva
Tabla 12: Especies de Peces citadas en el área de estudio, estado de conservación y normativa
91
que los afecta.
Tabla 13. Número de especies de Peces en cada categoría del Catálogo Nacional
91
de Especies amenazadas
Tabla 14. Número de especies de Peces en cada categoría de amenaza según la UICN
91
Tabla 15. Número de especies de Peces en cada categoría de la Directiva de Hábitats
91
Tabla 16. Densidad y biomasa de Trucha común obtenida en las estaciones de muestreo
92
durante dos campañas: (1) primavera, y (2) otoño
Tabla17. Análisis de las especies claves de la Ictiofauna
97
Tabla 18. Riqueza de especies de Anfibios en la zona de estudio y comparación
98
con otros ámbitos territoriales.
Tabla19. Número de especies de Anfibios en cada categoría de amenaza del
100
Catálogo Nacional de Especies Amenazadas
6
Datos proporcionados por J.L. Viejo.
Estimación para la Península Ibérica (Ministerio de Medio Ambiente, 2002; Pineda et al., 2002) y para Guadarrama en ambas
vertientes de la Sierra, considerando un 21% y un 35% de las especies Ibéricas, como se ha señalado en algunos grupos. Los
datos han sido proporcionados amablemente por D. José Luis Viejo Montesinos.
8
Se indica para comparación el número de especies del Guadarrama madrieño en cada categoría del Catálogo
regional de Madrid.
9
(ver descripción de las categorías en el Anexo de fauna). No se incluye a las Aves
10
. En negrita las especies más significativas por diversas razones.
7
226
Tabla 20. Número de especies de Anfibios en cada categoría de amenaza
según las categorías UICN 2001 (Márquez y Lizana, 2002) y la propuesta
realizada por la AHE en 2005.
100
Tabla 21. Número de especies de Anfibios en cada categoría de la Directiva de Hábitats
100
Tabla 22. Estado de conservación de los Anfibios y otra normativa que los afecta.
101
Tabla 23. Análisis de las especies claves de los Anfibios de Guadarrama y su estado de conservación
102
Tabla 24. Riqueza de especies de Reptiles en la zona de estudio y comparación
con otros ámbitos territoriales.
111
Tabla 25. Número de especies de Reptiles en cada categoría del Catálogo Nacional
de Especies Amenazadas
114
Tabla 26 Número de especies de Reptiles en cada categoría de amenaza según
115
las categorías UICN-2001 (Márquez y Lizana, 2002) y las propuestas por la AHE (2005).
Tabla 27. Número de especies de Reptiles en cada categoría de la Directiva de Hábitats
115
Tabla 28. Estado de conservación de los Reptiles y otras normativa que los afecta
115
Tabla 29. Especies clave o significativas de Reptiles en el área de estudio.
116
Tabla 30. Riqueza de especies de Aves en la zona de estudio y comparación
con otros ámbitos territoriales.
126
Tabla 31. Número de especies de Aves en cada categoría del Catálogo Nacional
128
de Especies Amenazadas
Tabla 32. Número de especies de Aves en cada categoría de amenaza según las
categorías UICN, 2001 (Madroño et al., 2004).
128
Tabla 33. Número de especies de Aves en cada categoría de la Directiva de Aves
128
Tabla 34. Número de especies de Aves de Guadarrama en cada categoría SPEC.
128
Tabla 35. Estado de conservación de las Aves en el área de estudio y normativa que las afecta.
129
Se destacan en negritas las Aves más amenazadas o emblemáticas en la zona.
Tabla 36. LICs de la provincia de Segovia, cercanos, o en la zona de estudio.
132
Tabla 37: ZEPAS de la provincia de Segovia.
136
Tabla 38. Especies por las que se declara la ZEPA de Guadarrama, población
y criterios empleados (Sanz Zuasti et al., 2004)
137
144
Tabla 39. Especies clave o significativas de Aves en el área de estudio
Tabla 40. Riqueza de especies de Mamíferos en el área de estudio y otros ámbitos territoriales
158
Tabla 41. Número de taxones de Mamíferos en cada categoría de amenaza del
Catálogo Nacional de Especies Amenazadas .
161
Tabla 42. Número de especies de Mamíferos en cada categoría de la Directiva de Hábitats.
161
Tabla 43. Número de especies de Mamíferos en cada categoría UICN, 2001
162
(Palomo y Gisbert, 2002). Para los Quirópteros se emplea las propuestas por la SECEMU (2004).
Tabla 44. Estado de conservación de los Mamíferos en el Guadarrama segoviano
La columna “Propuesta SECEMU” indica las categorías UICN propuestas por la
Sociedad para la Conservación y el estudio de los Murciélagos en 2004, ya que no se incluían
en el último Libro rojo de los Mamíferos españoles (Palomo y Gisbert, 2004).
162
227
Tabla 45. Especies clave o significativas de Mamíferos.
166
FIGURAS
Figura 1.Especies de Peces citadas con seguridad en la zona de estudio
21
Figura 2. Especies de Peces citados en zonas cercanas al área de estudio en Ávila,
22
Madrid o zonas bajas de Guadarrama.
Figura 3 Especies de Anfibios citados en el área de estudio
25
Figura 4. Especies de Reptiles citados en el área de estudio
30
Figura 5. (cont.): Especies de Aves nidificantes en el área de estudio
41
Figura 6. Especies de Mamíferos citados en el área de estudio
64
Figura 7. Riqueza de especies de Peces por cuadrícula UTM 10x10 km en la zona de estudio
90
Figura 8. Riqueza de especies de Anfibios por cuadrícula UTM 10x10 km en la zona de estudio
99
Figura 9. Riqueza de especies de Reptiles por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona de estudio
112
Figura 10. Riqueza de especies de Aves por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona de estudio
127
Figura 11: Foto de la ZEPA Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos (tomado
140
de Sanz Zuasti et al., 2004)
Figura 12: Evolución de la población reproductora de Buitre negro en el área de estudio.
150
Tomado de Sanz Zuasti et al. (2004)
Figura 13. Riqueza de especies de Mamíferos por cuadrícula UTM 10x10 km de la zona
159
de estudio
228
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