Lo elección de senadores

MADRID-- lauaes 14 de Mayo de 1923
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, Numero del día, 10 eintimoi.—Atiaaado, II.
lia correspondencia de-/Administración dirijaM ^
administrador áe LA ¿ P O C A D
laifodÓD, MnáidikK^B j Talerfs: Sis IcrurdSc %,
mo S I ©if-VÜELVEN LOS ORIGINALI»
No podemos dejar pasar sin un comentario
las declaraciones formuladas por el señor presidente del Consejo en relación con la reforma
del Senado, siquiera nos parezca en cierto modo
el acento de energía que en ellas h a puesto el
marqués de Alhucemas, un homenaje de consuelo á los candidatos, que obliga á desairar la
escasez de disponibilidades.
Reconoce el presidente del Consejo que no
h a y gran desproporción entre liberales y conservadores por lo que se refiere á senadores
nombrad'js por la Corona, y no duda de obtener mayoría entre los electiyos; pero le descompone sus cálculos y le pone en peligro de
(^uedar/j8 sin votos suficientes p a r a gobernar
la parte permanente üe la ("amara. «\\'o es lógico qiíe porque los títulos de Castilla cuenten
con cuatro mil duros de renta, tengan derecho
á obiener la senaduría por derecho propio,
mientras no tienen la citada representación inlinf Jad de Cámaras de Comercio y Asociacioneíj obreras, agrícolas é industriales; el Gobiernf/ está dispuesto incluso á que consigan puesto
pií la Alta Cámara los socialistas.»
Por lo pronto, no es posible que el marqués
de Alhucemas h a y a dicho eso que se le atribuye de ios títulos de Castilla; pues sabe perfectamente, mejor que nadie, que el derecho propio no es de éstos, sino de los Grandes de España, y que l a renta necesaria p a r a ejercer ese
derecho, según la ley, no es la de veinte mil,
sino la de sesenta mil pesetas.
Si se está dispuesto á elevar las condiciones
de renta p a r a las tres categorías de ésta que
se requieren p a r a ser senador,, podría aquilatarse si bastan hoy sesenta mil pesetas p a r a
afirmaren lo económico la Grandeza; pero á
excluir ésta de la representación permanente
de la Alta Cámara, ¿cómo se podrá a l l a n a r
quien se h a g a cargo de lo que es la sociedad española y de lo que en su historia y tradición
representa la Grandeza?
Los socialistas no tienen impedimento alguno
legal ni constitucional p a r a conseguir puesto
. en el Senado. Con que obtengan ser elegidos
por una provincia ó por u n a Universidad, lo
tendrían. No podemos creer que el marqués de
Alhucemas pretenda darles cabida en la parte
permanente de la Alta Cámara.
Si se quiere aumentar la representación corporativa, bien elevando el número de electivos, bien reduciendo el de permanentes en la
p a r t e que se completa por vía de Real decreto,
que no ea más que un medio subsidiario de proveer a los huecos que deje el ejercicio del dereciio propio que se g a n a por lá sangre ó por
la jerarquía en la Iglesia ó en el Estado, no v e mos inconveniente si se procede con el consiguiente estudio y la .debida seriedad, y ésta
impediría abrir por ese lado la puerta á ios socialistas.
Porque las de éstos, no son más que organizaciones políticas, y á ésas. no se las abre en
ninguna parte las puertas de Cámaras equivalentes á nuestro Senado. Corporaciones económicas ó culturales de positivo peso específico
social, bien. Artificios de la vanidad ó de la política, no.
Por lo demás, ninguna reforma radical h a
fracasado en España por resistencias del Senado. Si S3 quiere que éste se preste también á
los caprichos improvisados, eso sería otra cosa;
pero no de peso bastante á justificar u n a refornxa de uno de los elementos fundamentales de
nuestro régimen constitucional.
X.A COIIF£REirOIA DE IiAÜSANA
El asesinato delielegaaoraso
El oadáver 4 Berlia.
12.-EI cadáver del delegado ruso, señor Vorowcki, será conducido mafianaá Berlín.
Hoy se espera que llegue su esposa.
En la población suiza no ha cesado un momento
la normalidad. Ucicamente el partido comunista
ha pretendido celebrar esta tarde una manifestación pública, pero el Gobierno cantenat lo ha prohibido.
Una personalidad suiza, que ha residido largo
tiempo en Petrogrado, afirma que, en efecto, faé
Vorowski quien hiz3 ejecutar á los padres de Conradl.
El Gobierno suizo ha decretado la expulsión del
señor Ahrens, agregado & la Delegación sovietista.
Tan pronto como lo consienta el estado de sus
heridas, será conducido á la frontera.
Como había decidido, el Gobierno cantonal ha
prohibido la manifestación comunista anunciada
para esta noche.
—Se ha confirmado la existencia de un complot,
tramado en París por un grupo de armenios, para
atentar contra la vida del jefe de la Delegación
turca, señor Ismet Bajá.
LAUSAKA
LA POLÍTICA
El dlfoario de la Ooroa».
El*mioÍBtro de la Guerra ha entregado al jefe del
Gobierno la parte política del discurso de la Corona.
Aparte la acostumbrada y necesaria alusión á
nuestras relaciones internacionales, en dicho documento se trata del propósito del Gobierno en orden á Marruecos, de la situación actual de la Ha cienda pública y del problema de las responsabilidades.
Según parece, el Gobierno da su opinión, la cual
somete al juicio del Parlamento.
Trata, además, el discurso de la reforma de la
Constitución en las tres cuestiones que se han indicado: garantías, fecha obligada de la reunión de
Cortes y reforma de la Alta Cámara, sin tocar al
artíoulo 11.
La labor legislativa tendrá una enumeración de
Proyectos de los Ministerios de Fomento, Guerra y
Trabajo, especialmente.
Rumorea a l a r m l a t » .
» Los regionalistas vienen cultivando las últimos
semanas el tema de los rumores alarmantes.
La Veu de Catalunya publicó el sábado dos notas,
Una de las cuales es como sigue:
«Sabemos que uno de los días de la semana próxima se celebrará una importantísima reunión de
parlamentarios nacionalistas, cuyos acuerdos sei'án de mucha trascendencia »
La otra nota dice lo siguiente:
.«Hemcs oído decir á personas que están en reíac u n con militares, qu» entre estos elementos hay
a;'.tua;mente cierta agitación, debido á haberse
u.Hdo un término á una alta personalidad política,
« fln de que determine su actitud y la de sus comt>it|lero8 da Gobierno, respecto á las responsabili-
DLUMOS ULEGRAMS ¥ M O A S Di LA lARDl
dades de f-aráiter ra'litar y administrativas, y con
objeso tamoién de que aáopte disposiciones concretan para poner término al teríorismo que padece Bíirce'ona.
Añaden las citadas pe'sonas que el térmico fijado acaba mañana, domingo.'»
Enterado de esas nota?, el jefe del Gobierno dijo
en Ja noche del sábado que carecen en absoluto de
fundamento dichos rumores, y que la estancia en
Madrid del capitán general de Cataluña, marqués
de Eatella, obedecía únicamente á la necesidad de
preparar su elección como senador.
Añadió el marqués de Alhucemas que el general
Primo de Rivera le había manifestado que no ocurría la menor novedad en ia guarnición de Barcelona, y que por ello podía marchar muy tranquilo
á Cádiz si su elección lo requería.
X.a oolaboraoióa aoolallata.
K\ ministro de Estado, hablando de sus impresiones de viaje durante la estancia de los Reyes en
Bélgica, ha dicho que ha podido apreciar, coto viva
satisfacción—porque considera útilísima la colaboración socialista ea la gobernación del Estado—,
la coQvi vencía del partido socialista belga con las
instituciones monárquicas de aquel país.
«Claro es—agregó—que el socialismo, más que
un partido de carácter político, lo es de reivindi
caciones económicas y de normas de trabajo, lo
que le ha permitido esta aproximación á una Mo
narquía, porque para los socialistas belgas la forma de gobierno es accidental, y perfectamente
compatible con sus doctrinas el reinado del Rey
Alberto.»
Confía el ministro en que este ejemplo no dejará
de i»ílair en la conducta délos directores dei socialismo español.
CRÓNICAS MADRILEiÍAS
Una comida diplomática
El distinguido diplomático chileno, señor Alvarez de la Rivera, y su amable esposa, dieron el sábado una de las comidas con que suelen obsequiar
á sus colegas extranjeros y á sus amigos de Madrid.
Con los dueños de la casa y su bella hermana, la
señorita de Smidt, se sentaron á la mesa el embajador de Inglaterra y lady Isa bella Howard, con su
prima; el ministro del Brasil v la señora de Lima é
Silva; el de Polonia, conde Orlowsky, y la duquesa y el duque de Vistahermosa.
La reunión se prolongó en grata sobremesa, sosteniéndose animada y amena conversación.
Los embajadores de Inglaterra referían sus impresiones de Ja gratísima visita que habían hecho
al Monasterio de Guadalupe, de cuya situación y
tesoro artístico habían quedado encantados.
Desde allí, invitados por los marqueses de la Romana, fueron á tomar coa éstos el té, en Ja finca
que poseen no lejos del Monasterio.
Como es obligado, las señoras tuvieron que hacer
el viaja en muías, con jamugas, las cuales les fueron enviadas por los marqueses de la Romana.
El ministro del Brasil, que de no existir en su
país la prohibición de usar títulos nobiliarios, llevaría el de duque, que le corresponde por ser nieto
de un ilustre almirante que lo poseía, daba noticia
de estarse instalando en la casa de los señores de
Benjumea, en la Castellana, cerca del Hipódromo,
una de las fincas de pisos más elegantes que se han
construido en Madrid últimamente.
En cambio, el ministro de Polonia quejábase con
gran donaire de su odisea por Madrid para encoa
trar casa donde instalar su residencia. Hasta ahora,
BUS trabajos no han logrado éxito.
La interesante reunión pareció breve á cuantos
asistieron á ella, por la amabilidad de los señores
de Alvarez de la Rivera.
Sabido es que se trata de una de las residencias
diplomáticas más hospitalarias.
Mientras dichos señores obsequian á sus amigos con comidas, su encantadora hermana, la señorita de Smidt, organiza bailes íntimos por la tarde
para agasajar á la juventud.
Lo elección de senadores
E n Madrid
Por la provincia.
En la Diputación provincial se celebró ayer la
elección de senadores por Madrid.
A las diez de la mañana se constituyó la Mesa,
presidida por el vicepresidente de la Diputación,
señor Arizmendi, y de la que formaban parte los
escrutadores señores Salinas, de Alcalá de llenares; Yepes, de Arganda; Valladares, de El Molar, y
Darán, de Leganés.
Inmediatamente se procedida la elección, votando primero los diputados provinciales, y después,
los compromisarios.
Durante la elección sólo se registró un pequeño
incidente, promovido por el candidato señor Mon
toya, qjiien protestó de que en el mismo salón se
coaccÍLuase la voluntad de los electores, entregándoles papeletas para que votasen.
Terminada la elección, á las once de la mañana,
se procedió al escrutinio, que duró aproximadamente una hora.
Eo la elección tomaron parte 2il electores, siendo, por consiguiente, 122 la mayoría absoluta.
El resultado del escrutinio fué el siguiente:
Don p]duardo Yáflez Carvallés, 236 votos; don
Luis de Ussía, conde de los Gaitanes, 229; don Arturo Soria Hernández, 224; don Vicente Bnendía,
222; el señor Montoya, 28; varios, 2; en blanco, 1.
En conformidad con el resultado, el presidente
do la Mesa proclamó senadores por Madrid á los
cuatro primeros.
Ea 1» Uaivsraldad Castra! y por las Aoademlaa.
Universidad. —La elección dio el siguiente resultado:
Don .losé Ortega Gasset, 121 votos; don Luis Ortega Morejóüi 286; otros votos y papeletas en blanco. 7; abstenidos, 21fi.
Total del censo, 580.
Fué proclamada senador, por mayoría absoluta,
don Luis OrteeraMorejón.
Española.—Don Emilio Cotarelo, maurista.
Historia. —Marqués de Laurencia, independiente.
Ciencias Morales. — Señor conde de Lizarraga,
conservador.
Ciencias Exactas. — Don Daniel de Cortázar,
adicto.
Bellas Artes -Don José Joaquín Herrero, adicto.
Medicina.— Don Fsancisco Huertas, independiente.
Sociedad Económica Matritense de Amigos del
Paíí.—Vizíonde de San Alberto, ciervista.
E a provincias
Sevilla.
18.—En las elecciones de senadores resultaron elegidos por la provincia el marqués de
Torrenuava, conservador; el conde de Bulnes y
don Eduardo Sánchez Pizjaáu, demócratas.
Por la Universidad, el liberal independiente don
Francisco Pagés y Belloc, y por el Arzobispado, el
obispo de Badajoz.
•
En cuanto á la elección por la Real Sociedad Eco Dómica de Amigos del País, la disidencia de los liberales albistas, que se viene significando desde
hace algún tiempo, se ha exteriorizado nuevamente, motivando ello que haya resultado triunfante el
republicano señor Gómez Chaix, y derrotado el albista don Antonio López Plata.
Salamaaoa.
SALAMANCA 13.—En la elección de un senador por
la Universidad, ha resultado triunfante, por siete
votos de mayoría, el conde de Romanones, sobre el
catedrático señor Maldonado.
Paleaola.
PALKMCIA 13.—Han triunfado, por gran mayoría,
don Luis Calderón y don Emilio Portilla, conser
vadores, y conde de Abasólo, romanonista, apoyado por los anifgos del señor Calderón, resultando
derrotados el albista señor Redondo y el agrario
señor Polanco.—Jíentíía.
Vtzoaya.
BILBAO 14.—En Ja elección de senadores han
triunfado los de la Liga monárquica, don Luis Salazar, conservador; don Constantino Careaga, romanonista, y don Manuel Lezama Leguizamón,
Ea la PrealdesoU.
tradicionalista, siendo derrotada la candidatura
El jefe del Gobierno, después de dar á conocer á republicano nacionalista-jaimista.—jlf(;uc/ie¿a.
los petiodi&tas los resultados de la elección de se
Oviedo.
nadores, mcstrándose satisfecho de ellos, manifestó
Oviicijo 14—Se celebraron, sin incidentes, las
que había recibido un despacho de Roma, comuni- elecciones á senadores, resultando triunfantes don
cando que el viernes, 25 del actual, se celebrará
Benito Castro, conservador, y don Adolfo Posada
Consistorio, en el -jue se impondrá el capelo carde- y doD Indalecio Cornjedo, reformistas.
nalicio al doctor Reig, arzobispo de Toledo.
La Universidad eligió á don Fermín Canellas.
Añadió que mañana, martes, á las diez, llegarán
Don Benito Castro obsequió con un banquete á
de Valencia Sus Majestades en tren especial.
los compromisarios y diputados provinciales conEl miércoles, á las doce, presentará sus cartas
servadores.
credenciales el nuevo embajador de los Estados
A los postres, el señor Castro habló á petición de
Unidos, Mr. Moore.
los comensales. Agradeció los votos á sus amigos é
Ese mismo día—añadió—á las cinco de la tarde
hizo breve historia de las vicisitudes por que viene
tendremos Consejo de ministros.
atravesando el partido conservador local, lamentando que los egoísmos personales le hayan coloEn Estado,
cado en situación de inferioridad con respecto á
El embajador de Bélgica, barón Borohgrave, que
otras agrupaciones políticas, no obstante ser la
regresó anoche de su país, al que faé con motivo
provincia notoriamente conservadora.
del viaje de los Reyes de España, ha visitado hoy
Dijo que él no había querido pactar con los real ministro de Ejtado.
formistas, y que tiene por norma servir á su partiEs de suponer que en la entrevista se hablase del
do con toda lealtad y luchar á cara descubierta
Tratado comercial hispanobelga.
frente á los adversarios, á quienes, por otra parte,
respeta.
Hizo votos por el pronto resurgimiento potente
del partido conservador asturiano, bajo la dirección del señor Sánchez Guerra, y alentó á sus amigos á luchar sin desmayos en pro de tal fin. Fué
ovacionado.—Vülanueva.
ZAKZTJELA: Estreno de la opereta en tres actos, de don
Antonio Paso y don Ricardo G. del Toro, música de
D a t o s oficiales
Pablo Luna, titulada Beaunor.
Bien sabe el lector que es el maestro Luna uno de
En el Ministerio de la Gobernación se facilitaron
los contados músicos capaces de renovar los pres- esta mañana los siguientes datos oficiales:
tigios históricos de nuestra zarzuela. Una partitura
Álava.—Don Ricardo Echevarría Francés, adicto;
del autor celebradísimo de El asombro de Damasco, don Carlos Ajuria, independiente, y don José Masuele ser un buen regalo para nuestros oídos. Luna ría González de Echavarri, católico.
posee, como pocos, ei secreto de las melodías fáciAlbacete.-Don Fabián Sabino Lorenzo Flores,
les, en las que la dulzura y agilidad, suple lo que adicto; don Pío Suárez Inclán, adicto, y don Gusta
vo Ruiz de Grijalba, conservador.
pueda faltarle de pasión y firmeza. Mas hay en
Alicante.—Don Alvaro Valero de Palma, adÍ3to;
Luna a'go que contribuye a darle una singular
simpatía: su afán de mejorar, su celo por el mante- don Vicente Alvarez Rodríguez Villamil, adicto, y
^nimíento de su fuero artístico, popular siempre, don José Villalba Riquelme, conservador.
:4Imería.—Don Juan Melgar, adicto; don Miguel
pero nunca plebeyo; antes al contrario, entonado
Salvador Carreras, adicto, y don Augusto Gal vez
y brillante.
Cañero, conservador
La partitura con que ha enriquecido el endeble
Avila.—Don César Jiménez Arenas, conservador;
libreto de Benamor, signiflca una evidente ascensión en la ruta lírica del maestro. No se nos oculta don Pascual Amat, conservador, y don Cesáreo
que, en algún momento, la realización queda por Nieto, adicto.
Badajoz —Don Pedro Gallardo Calzadilla, adicto;
debajo del propósito. Pero, en general, la musa del
maestro Luna, que noblemente aftoata las dificul- don José Márquez de Prado, adicto, y don Miguel
tades técnicas, iio pierde sus cualidades distintivas López de Saa, adicto.
üaZeares.—Don Ramiro Alonso Castrillo, adicto;
de lozanía y ligereza. Gran parte de los números,
don Antonio Pou y Reus, adicto, y don Luis Pas
casi todos, merecieron ei honor de la repetición.
Gustaron muchísimo los cuplés de Abedul, la en- cual Bauza, adicto.
Barcelona.—Don Agustín Riera y Pau, regionatrada de los pretendientes á la mano de Benamor,
ia Cinciún española, un terceio, un quinteto bellí- lisi»; don Luis Darán y Vencosa, regionalista; doír
simo del begundo acto, que se hará popular, La Ricardo Ramos Corlero, regionalista; don José Estalella, repnbficano.
dama del fuego, et sic de caeteris.
Burgos.—Dan José Martínez de Velasco, adicto;
Esperanza Iris, Enrique Ramos, Mimí Derba, Galeno, y los demás, hasta la totalidad de ios intér- don Rafael Bermejo, conservador, y don Ramón de
pretes, cumplieron ventajosamente sus respectivos la Cuesta, conservador.
Cdceres —Don Juan Bautista Aznar, adicto; don
cometidos, y al felicísimo éxito logrado contribuyó
Mariano Delgado, conservador; don Andrés Sanmucho el boato y buen gusto con que la Empresa
chfiz de IA Rosa, adicto.
ha servido la esceaa.
Cádiz.—Don Juan A. Gómez Aramburu, adicto;
^ ^ don Manuel Samprún, adicto; don Luis Gómez
Aramburu, conservador.
fias oflolnas deredaooióa y admlalstraolóa ds
Canana»—Don Antonio Izquierdo Vélez, adicto;
EiA EPOOA estáa estableoldas ea la oalls ds 8 a a
don
Pedro del Castillo Oiivares, adicto; don Tomás
• • r a a r d » , aAm. 78.—Telér«a» 1.111 (Jvrdáa) *
Salazar Cologán, conservador. (No son datos defi% Btm (4»r«&a)—A»Arta«a ém Ckimas l a i .
nitivos.)
EL DÍA POLÍTICO
VELADAS TEATRALES
SEVILLA
Castellón. -Don Bernardo Gómez Igual, adicto; don
Luis García de la Rasilla, adicto; don Antonio
Mompeón Motos, adicto.
Ciudad neal.—Don Miguel Pérez Molina, adicto;
don Antonio Criado Carrión, adicto; don Emilio
González Llana, ciervista.
C'óítiío&a.—Marqués de Cabra,'adicto; den Andrés
Peralbo, adicto; don í^'lorentino Sotomayor, conEervador.
Coruña—Don José María Ozoros. adicto; don Joaquín Chapaprieta, adicto; marqués de Vülanueva
de la Sagra, adicto.
Cuenca.—Don Fernando Muñoz Balsalobre, con.^crvador; don Dalmacip García Izcara, adicto; don
,Io3ó María López Cobo, adicto.
G'firoria.-Don Carlos de Camps, regionalista; don
Luís Fdrrer y Vidal, regionalista, y don Bartolomé
Trías, tradicionalista.
Granada-Don
Francisco Almendros, adicto;
don Eduardo Estelat, conservador; y don Vicente
Gimeno, adicto.
Gnadalajara—Conde de Romanones, adicto; don
Jof.é Antonio llbierna, adicto, y don Daniel López
y López, adicto.
Guipúzcoa.—Den Rafael Picavea, adicto; don
José Llósegui, maurista, y don José Joaquín Ampuero, tradicionalista.
7/7íeZua.—Señor marqués viudo de Mondéjar,
adicto; don JOEIÍ María Jiménez Molina, conservador, y don José Valero llervás, conservador.
Huesca.—Don José Ahunzara, adicto; don Juan
Urrutia, adicto, y don Andrés Martínez Vargas,
adicto.
Jaén.—Señor marqués de la ilermida, adicto;
don Manuel Sáenz de Qaejana, conservador, y don
Ramón Melgares, adicio.
León.—Don Antonio Gullón del Río, adicto; don
Mariano Alonso Vázquez, adicto, y don Tomás
Elorrieta adicto.
Lérida.—Don José Lláví, adicto; don José Agelet, adicto, y don Eduardo Aunós, adicto.
Lofifí-ofio.—Don Víctor del Valle, adicto; don Santiago García Vaquero, adicto, y don Perfecto García Jalón, adicto.
Lugo —D:in Pejarto Pardo Balmonte, adicto; don
Francisco Javier Vázquez Qaeipo, adicto, .y don
Mariano Martín Fernández, adicto.
ilíocírtd.—Don Pedro Vicente Baendía, adicto;
don Antonio Soria, adicto; conde de los Gaitanes,
adicto, y don Eduardo Yáñez, conservador.
Málaga.—Don Manuel Egea, adicto; don Ricardo
Burguete, liberal independiente, y don José Caffarena, conservador.
Murcia.—Don Diego González Conde, don Juan
Antonio Pérez y don José Alvarez Arranz, ciervistas los tres.
iVamíTo.—Don Valentín Gayarre, adicto; conde
de Rodezno, jaimista, y don José María Gastón,
adicto.
Orense —Don Manuel Martín Salazar, adicto; don
Fdderico Carlos Bas y don José Sabucedo Morales,
consfiíT^ftdorfiS
Oviedo. — Don Indalecio Corujedo, adicto; don
Adolfo González Fosadas, adicto, y don Benito Castro, conservador.
PaZencta.—Don Luis Calderón, conservador; don
Ignacio de la Portilla, conservador, y conde de
Abasólo, adicto.
Poníe«e<ím.—Marqués de Santa Maris, adieto;
don Eladio de Lema, conservador, y don Fernando
Weyler, adicto.
/SoZomanca.-Don Enrique Esperaba, adicto; don
Isidro Pérez Oliva, adicto, y don Fernando García
Sánchez, independiente.
iSantander.—Don Luis Hoyos Sainz adicto; señor
Eguiüor, adicto, y señor Aznar, conservador.
Segovia—Don Francisco Zoriiila, adicto,Mon Rufino Cano de Rueda, conseivador, y don Mariano
González Bartolomé, adicto.
íievilla.-SdñOT conde de Bulnes, adicto; marqués
de Torrenueva, conservador, y don Eduardo Sánchez Pizjoán, adicto.
Soria.—Don Mateo Azpeitia, adicto; don Faustino
Archilla, conservador, y don Tomás Allende,
adicto.
íbrroí/ona.—Don Joaquín Paya, adicto; don José Elias de Molius, consurvador, y don J u a n Fich
y Pou,,republicano.
íerweZ.-Don Justino Bernad, conservador; don
Antonio Royo ViUanova, adicto, y don Francisca
Ferrán Zapatero, ciervista.
Toledo.—Señor conde de Romanones, adicto; don
Arturo Taramona, adicto, y conde de Casal, conservador.
ValenGia.—Don Eduardo Berengner, adicto; don
José Juan Dómine, adicto; don José Manteca, adió
to, y don Juan Bautista Valldecabres, conservador.
FoíZaíüoHrf.-Don Enrique Gavilán, adicto; don
Julio Guillen, adicto, y don Manuel Núfiez de Ar
ce, adicto.
Fí2coí/a.—Don Luis Salazar y Zubia, Liga monárquica; don Manuel Lezama, de ia Liga monárquica, y don Constantino Careaga, adicto.
Zamora.- Don Antonio Rodríguez Cid, don Felipe González Gómez y don Isidoro Rubio, adictos.
Zaragoza.-Don Luis Pérez Cistuó, conservador;
don José Guillen Sol y don Sixto Calorrio, adictos.
DaiversidadM,
Barcelona.—Don José Daurella, conservador.
Gmnacio.—Don José Martes de la Fuente, adicto.
Madrid.—Don Luis Ortega Morejón, adicto.
Oviedo.-Don Fermín Canella, adicto.
SfviUa —Do«i Francisco Pagos, adicto.
Valencia —Don Rafael Altamlra, adicto.
VaUadoUd.—Don Felipe Clemente de Diego, conservador.
Zaragoza.—Don Ricardo Royo ViUanova, conservador.
/Saníta.(7o. — Don Miguel Gil Casares, independiente.
MZamanca.—Señor conde de Romanones, adicto.
Sociedades eooaóBiloas.
JíafceZona.—Don Juan Garriga Massó, regíona
lista.
Lecín.—Don Federico de Echevarría, adicto.
Madrid.—Sañor vizconde de San Alberto, ciervistst.
Sevilla.—Don José Gómez Chaix, republicano.
Faíenda.—Don Elias Tormo, maurista.
Anoblspades.
Burgos.—Señor obispo de<$-itoria.
Gronoda.-Señor arzobispo de ídem.
Sevilla.—Señor obispo de Badajoz.
Jomifiona.—Señor obispa de Sohona.
Toledo.-Señor obispo de Sígüsnza.
Valencia. Señor obispo de Madrid.
Valladolid.- Señor obispo de Segovia.
Zamííom.—Señor obispo de Jaca,
¿üníta.90.—Señor obispo de Mondoñedo.
Maairoataoloaaa del Proetdsate.—Beaanea de
la eleoolóa.
Cuando el marqués de Alhucemas recibió i los
periodistas y éstos le felicitaron por el triunfo
obtenido por el Gobierno en la elección de senadores, contestó con tonos risueños:
—Recibo con gusto la felicitación. Los resultados
dd la lucaa son los siguientes:
Adictos
106
Conservadores
37
Manristas
3
Ciervistas
6
Republicanos
3
Regionalistas
6
Tradicion&ltstas y jaimistas
3
Independientes.
•''
180
arzobispados,
los.
Liga Marítimasuman
de Bilbao
2
elegibles.
Católicos
1
que con los
-_ 1' de los
f OB k» sfiEiipielsG liihrsrSM ás MstiM f iravliisteeb '.
Paato.'^MMai««n IEOTTMI ¡SÍ ObarSUat, 5«9 i e
lian^iie, 33.
IiOBdrai,—1. O, A. jf. BOMÍ, 11, Q M M Tiatai^
tSftreet.
AaOBClCB oopafiolu, & 46 eéntimai IJBw.
24an • s t r a a j a r o i f rMUasos, á pneiot « W H ^
stenalM.
Oeda aaoneio satisfará 10 ointimos da Impvagte.
ItifMSién Salairifiaa: ¿POCA.—Mairld.
mmm\ mimt i mi AOHIIIITUIIUI mmm s. mm
m>
Se da la coincidencia de que hemos obtenido el
mhino número 105 de los adictos que tuvo el Gobierno de Canalejas.
No ha habido ningún incidente, y la gran ma
yoría de las actas vienen sin protesta.
Ya ven ustedes-terminódlciendo—cómo se van
cumpliendo todas las etapas.felizmente.
Los resultados de la elección de senadores
efectuada ayer h a n venido á demostrar que el
jeff del Gobierno se precipitó un poco al curarse
en salud hablando de una posible falta de mayoría en la Alta Cámara y al amenazar voladamente con u n a reforma constitucional.
De l-SO senadores elegidos corresponden KJ,".
á candidatos que figuran bajo el epígrafe de
adictos y sólo :'.v á los de filiación conservadora.
La diferencia es grande y bastará, según
creemos, p a r a que el Gobierno se tranquilice y
pierda todo recelo, injustificado siempre tratándose de la Alta Cániara, pero ahora más que
nunca, por u n a falta de lealtad en la oposición
más autorizada de orden parlamentario.
No debe nunca perderse de vista que entre
los miembros del Senado, tanto en los de derecho propio y los vitalicios como entre los mismos electivos, existen muchos que no admiten
una definida clasificación política y otros que
votan con los Gobiernos.
Son, en todos sus aspectos, netamente independientes, y se suman por costumbre y temperamento á las personas que ocupan el Poder,
cuando se sienten bien gobernados. Su voto en
contra nunca significa partidismo, sino censura
razonada.
Por nuestra parte, si bien lamentamos de
todo corazón la derrota de algunos conservadores beneméritos, reconocemos que la n u e v a
constitución de la Cámara facilita la acción de
gobierno.
Preferimos un Gobierno que tenga l a piona
responsabilidad de sus mayorías á otro que se
sienta inclinado á tomar pretextos'en u n a constitución demasiado fuerte de las oposiciones.
Y celebraremos muy sinceramente que l a
nutrida falange de adictos obtenida ayer, a u n
á trueque de haber apretado los tornillos m á s
de la cuenta, funcione sin demasiadas distinciones de fulanismos, siempre peligrosas, y que
parecen pesar cual maldición sobre los liberales españoles.
LA ESTANCIA DE LOS REYES EN VAUBNCIA
LflS FIESTAS DEIIH eORONAeiON
DE Lfl_VIR6EH
D e s p u é s de la Coronación
Sflt»Ue« del «oto de la eoroBaotda,--üa cliabaí
00.—Almuerzo Reglo.—Uaa frase del Boy,—La
{gratitud á Valeaola.
VALEKCIA 12 El momento de la coronación de
la Virgen de los Desamparados perdurará en el recnerdo ue cuantos la presenciaron.
Cuando el cardenal Reig colocó la corona sobre
las sienes de la imagen, ios coros del Seminario
Conciliar, con la Banda nvunicipal, cantaron el
Himno de la Coronación. Fué un instante de una
emoción indescriptible.
El cardenal ordenó luego que la imagen de la
Virgen fuera puesta dando frente á la tribuna
Regia.
Los Soberanos, el ministro de Fomento y todo el
séquito arrodilláronse, orando durante breves momentos.
El cardenal vitoreó entonces á la Virgen y á los
Reyes.
La multitud respondió con ovaciones delirantes.
El Rey llamó al alcalde, y le dijo:
<Te felicito, alcalde, y felicita muy efusivamente al cardenal, besando su anillo en mi nombre.»
Después, durante la procesión para llevar de
nuevo la imagen á la catedral, el entusiasmo popular alcanzó proporciones extraordinarias.
Fué tal la cantidad de fiores arrojadas al paso de
la imagen, que en algunas calles quedó una alfombra de un palmo de espesor.
En la catedral se cauto una salve, el himno y un
Te Deum.
Inmediatamente después que entró la Virgen en
la catedral, descargó una tormenta que duró unos
veinte minutos, transcurridos los cuales volvió á
lucir un sol espléndido.
Los Reyes almorzaron en Capitanía general. Al
almuerzo, que fué íntimo, asistió, como jefe de parada, el coronel del regimiento de Caballería de
Victoria Eugenia.
La conversación versó, casi únicamente, sobre el
acto de la coronación.
Don Alfonso exclamó:
«Es de lo más grandioso que he presenciado en
mi vida.»
Su Majestad rogó luego al marqués de Cáceres
que dijese ^ los periodistas, que se halla verdaderamente encantado por las constantes demostraciones de cariño que, tanto él como la Reina están
recibiendo de Valencia.
Añadió que, aunque conoce de antiguo la generosa hospitalidad de esta reglón, no podía imaginar la exquisita amabilidad con que ahora les ha
recibido.
£¡1 B e y en el campamento de
Paterna,
E a el trayecto.—laanararaolda de ana f u e n t e . Revista da tropas ea eloampameato.—Bl nnovo
oaartol de ArttUerla.
VALBMOIA 12.—A las tres y media de la tarde
Aiarchó el Rey al campamento de Paterna en tren
especial, con el capitán general, el señor Milans
del Bosch y sus ayudantes.
En el apeadero militar de Paterna esperaban al
Soberano el Ayuntamiento, el diputado á Cortes
por el distrito, don Juan Izquierdo; el comandante
jefe del campamento y el vecindario en masa.
Daspnés de los saludos de rúbrica, Don Alfonso
inauguró la fuente que lleva el nombre del teniente
Cortina, muerto en África.
Frente al nuevo cuartel de Artillería, en una tribuna levantada al efecto, varias señoritas, vestidas
de huertanas, arrojaron fiores al paso del Rey.
Desde el cuartel, Su Majestad se dirigió al campamento, donde estaban formadas las fuerzas de la
guarnición, á las que pasó revista el Soberano, pre
senciando luego el desfile de las mismas desde un
montículo.
, ,
£1 Monarca visitó después la galería de tiro y la
estación radiotelegráfica, desde la cual regresó al
cuartel de Artilleiía.
La construcción del edificio ha durado dos años,
costando las obras 1 300.000 pesetas. Hoy se realizó
el acto de la entrega.
En la puerta esperaban al Soberano el general de
Artillería y ¡os jefes y oficiales del regimiento.
Después de los saludos, el Rey pasó al cuarto de
los estandartes, donde el coronel, señor Rodríguez
Carril, pronunció un breVe discurso.
«Ya Sttbemos-dijo -que dt< todas las virtudes militares, la que Vuestra Majestad prefiere es la déla
¡ obediencia, qua es la esencia de la disciplina.» Y
añadió:
«El amof y la obediencia al Ray es el lema del