Vicente Kindelan Luttrell 06/08/2013 Manuel Kindelan Segura Vicente Kindelan fue bautizado el 13 de abril de 1710 en Castle-Rickard, condado de Meath (en (2) aparece como Vicente Kindelan Loterell-Loterelton nacido en Backmahon). Era hijo del mui noble Señor Miguel O’Kindelan y de la mui noble Señora Cecilia Lutrell (1). Fue su padrino Thomas Warren, escudero (squire ?), natural de Corduff, y Doña Margarita Fitzgerald, natural de Surlochstown. Estos datos aparecían en el libro de bautismos de la parroquia de Castle-Rickard en la diócesis de Meath, según se certifica en una traducción presentada por su hijo Juan Kindelan y O’Regan como parte de las pruebas para obtener el hábito de Santiago, y que estaba firmada el 6-9-1788 por Patricio Joseph Plunket, Obispo de Meath y por Miguel Fleming, cura párroco de Castle-Rickard el 4-8-1788 (1). El padrino, debía ser un tío o tío abuelo del bautizado ya que su abuelo por parte de madre era Don Juan Warren de Corduff. Sobre los abuelos de Vicente también tenemos información por las pruebas para la Orden de Santiago de sus hijos Juan y Sebastian. En efecto, para probar la legitimidad y nobleza de sus familias, éstos presentaron un documento firmado por los 3 arzobispos de Irlanda, Ricardo O’Reilly, Arzobispo de Armach, Primado y Metropolitano de toda Irlanda, Bernardo Egan, Arzobispo de Toara y Metropolitano de la provincia de Connaugt, y Francisco Juan Thomas Troy, Arzobispo de Dublin Primado y Metropolitano de Irlanda, con fecha 14-11-1788 y legalizado por el consul de España en Irlanda que decía lo siguiente (1): Nosotros los infraescritos certificamos a todos los que corresponde o pudiere corresponder que el Escudero D. Vicente O’Kindelan, que falleció poco hace siendo Brigadier de los Exercitos de su Magestad Católica y Gobernador politico y militar de la Ciudad de Zamora en el Reino de España, fué hijo legitimo de D. Miguel O’Kindelan de Ballinakill en el condado de Mith, y de Doña Cecilia Lutrell, de Lutrellstown, en el condado de Dublin; y que por parte de Padre fue nieto de D. Eduardo O’Kindelan, de Ballinakill, y de la mui noble señora Doña Maria Barnewal, hija del muy noble Señor Barnewall Señor de Chrectown (Crickstown ?); y por parte de madre lo fue del mui noble Señor D. Thomas Lutrell, Escudero de Lutrellstown, y de la mui noble Señora Doña Adelaida Warren, hija del mui noble Señor Don Juan Warren, de Corduff, en el condado de Dublin. Asi mismo, certificamos, que el sobredicho D. Eduardo O’Kindelan perdió sus grandes Estados, tierras y posesiones en defensa de su legítimo Rey contra el famoso usurpador de Inglaterra Oliverio Cromwel. Asi mismo certificamos, que la antiquisima familia de Kindelan de muchos siglos a esta parte es mui conocida en este Pais: tiene parentesco, y ha hecho enlaces con las mas ilustres familias del Reino, y desciende de Nial, Rey que fue del propio Reino, según mas clara y extensamente consta por las Historias de Irlanda ... En el “Civil Survey” realizado durante los años 1654-1656 aparece Edward Kindelan, Irish Papist, como propietario de 216 acres de tierra en Ballinikill (3). Probablemente éste es el mismo Eduardo O’Kindelan abuelo de Vicente. El Civil Survey se realizó para establecer las posesiones de los propietarios de tierra en Irlanda con objeto de poder recompensar a los soldados y oficiales ingleses con las tierras confiscadas a los irlandeses. También se indicaba que las tierras de Edward Kindelan comprendían 100 acres arable, 100 acres past, 6 acres mead y 10 acres bogg, y se encontraban situadas en la parroquia de Rathcoore, lindando al este con Rathcoore, al sur con Conellstowne, al oeste con Clonguffin y Ballinderry, y al norte con las tierras de Culindra (3). Sus vecinos propietarios eran Sir Richard Barnwall, de Crickstowne, con 108 acres en Conellstowne y 100 acres en Kilcorny, y Thomas Aylmer de Lune, con 82 1 acres en Ballicaran. Ambos eran Irish Papist y sus apellidos están unidos a los de Kindelan por varios matrimonios. Es interesante observar que el lugar de nacimiento de los Kindelan es Ballinakill hasta el nacimiento de Vicente, en 1710, que se produce en Castle-Rickard. Entre 1656 y 1710 se produce la confiscación de las tierras de la familia Kindelan, pero estos continuarán residiendo, hasta su exilio, en las inmediaciones. Vicente era el quinto hermano de un total de 7. Los otros eran Tomás (1704), Patrick, Juan (1707), Ultano (1709, Balemahen), Edward (1718) y Francis que permaneció en Irlanda. Como veremos, Vicente dedica toda su vida al ejército y es impresionante ver la gran cantidad de batallas, sitios, y otras acciones militares en las que participa. Su biografía es un recorrido por las principales acciones militares del siglo XVIII. Veamos la localización de todos estos lugares en los que parecen estar las raíces de los Kindelan a finales del siglo XVII. Castlerickard se encuentra en el extremo sur del condado de Meath, a 10 Km al sudoeste de Trim, y en la frontera con el condado de Kildare. Las aldeas más cercanas son Enfield (1.800 habitantes) y Longwood y está a orillas del rio Blackwater, afluente del Boyne, y muy rico en pesca. En Castlerickard tenían sus tierras la familia Nugent. Existe una casa fortificada de 2 pisos, denominada Castlerickard house, y que en la actualidad se está restaurando. Corduff, se encuentra al este de Castlerickard, en el sur del condado de Fingal, y un poco más al sur de Corduff está Castleknock, donde se levanta el castillo de Luttrellstown. En la actualidad este castillo ha sido transformado en un hotel de lujo con un magnifico campo de golf. Castillo de Luttrellstown Rathcore es una parroquia situada en la Baronía de Moyfenrath, a la que pertenece, entre otras, la aldea de Enfield. En Rathcore está ubicada la iglesia de San Ultano, de la que muchos Kindelan han heredado el nombre. Ballymahon, está situada unos pocos kilómetros al oeste de Castlerickard. Hablaremos mas extensamente de estos lugares en el Capítulo dedicado a los Kindelan en Irlanda. Mapa de Meath Zona del Royal Canal 2 Nada conozco de la infancia de Vicente, aunque supongo debió ser muy dura ya que acababan de confiscar las tierras de su familia y eso obligó a muchos miembros de la misma a tomar las armas y emprender el exilio como tantos otros irlandeses. Dos tíos de Vicente, Ultano y Conrado habían seguido al Rey Jacobo II a su exilio en Francia tras las batallas del Boyne (1-7-1690) y de Limerick (3-10-1691) que acabaron con las esperanzas de los católicos irlandeses. El 3-10-1691 el general Sarsfield, comandante en jefe del ejército jacobita firma el tratado de Limerick. Por parte inglesa lo firmó el general Ginkle. A los oficiales y soldados se les daba la opción de jurar obediencia a Guillermo y volver a sus casas, alistarse en el ejército inglés o embarcar para Francia. 11.000 hombres partieron para Francia, 2.000 volvieron a sus casas y 1.000 se alistaron con Ginkle. Esos miles de hombres que partieron para el exilio son conocidos como los wild geese (ocas salvajes) y representaban el total de la aristocracia irlandesa, las fuerzas armadas y las esperanzas de todo una nación (23). ... El 8-121691 partió el último barco desde Cork hacia Francia con los restos del ejército de Jacobo II. Como gradualmente se desvanecía la esperanza de la restauración de Jacobo al trono de Inglaterra, los regimientos pasaron definitivamente al servicio de Luis XIV en el año 1698 y fueron reducidos a 5 bajo el mando de los coroneles Dorrington, Burke, Albemarle, Berwick y Galmoy (12). Desconozco la fecha en la que Vicente pasa a España, pero pienso que debió de ser en 1721 o 1722 y probablemente vendría junto a sus hermanos Tomás y Ultano. Así, vemos que su hermano Tomás ingresa de subteniente en el Regimiento de Hibernia el 29-1-1721 (4), a los 17 años de edad, Ultano ingresa de cadete en el regimiento de Limerick en el mes de mayo de 1722 (5), o según otras hojas de servicios el 1-10-1721 (6) o el 1-2-1722 (7), aproximadamente a los 20 años, y Vicente ingresa como cadete en el regimiento de dragones de Numancia el 25-12-1721 (8) o el 1-2-1722 (9) según otras hojas de servicio, cuando aún no ha cumplido los 12 años. Esta precocidad en el ingreso en el ejército era bastante habitual en esa época. La proximidad en las fechas de ingreso hace suponer que los 3 hermanos vendrían a España juntos durante 1721. En cuanto a las edades de los 3 hermanos hay que mirarlas con un cierto recelo (excepto la de Vicente del que se conoce la fecha de bautismo), pues parecería que en las hojas de servicio hay muy poco rigor en cuanto a la edad, como si dicha edad se pusiera a ojo, y las edades que aparecen en sucesivas hojas de servicio del mismo oficial son inconsistentes, en general se quitan años a medida que se hacen mayores. En estas primeras hojas de servicio de los hermanos Kindelan, aparecen con calidad cavallero. De Vicente se dice que es bueno para oficial y de Ultano que tiene buena fisonomía y es aproposito para oficial. Vicente está poco tiempo en el regimiento de dragones de Numancia, en el que su tío Conrado era capitán de granaderos, y en seguida pasa al regimiento de Limerick en el que su tío Ultano era capitán y en el que coincide con su hermano Ultano. Este Ultano tío de Vicente, debió nacer hacia 1668 y participó, por tanto, junto al rey Jacobo II en la guerra contra los ingleses; ha servido en Irlanda 2 años de teniente en el Regimiento del Gran Prior, en Francia ha servido 3 años con el mismo grado, en el Regimiento de Limerick hasta que se reformó otro Regimiento, y entonces pasó con el mismo empleo al Regimiento de Galmoy el qual ha proseguido a servir 12 años, en el de 1710 fué hecho capitan reformado en el Regimiento de Castelar y en 1711 fue provisto de una Compañia en otro Regimiento con la qual siguio hasta el año de 1716 que se reformó el segundo Vatallon y entonces paso a una Compañia en el 3 Regimiento de Bandoma (Vandome) aora Limerick (10). Participó en las batallas del Boyne, Aughrim, Santa Victoria, Chiari, Luzzara, Cassano, Calzinazo, Turín, Malplaquet, Zaragoza y Villaviciosa, y sitios de Limerick y Barcelona. En la batalla de Malplaquet le rompieron el pie derecho. En (11) aparece una lista de los oficiales del ejército jacobita en octubre de 1689 que había sido obtenida a partir de la obra A Light to the Blind escrita por un oficial francés. En ella aparece un Kindelan, como capitán de una compañía del regimiento del coronel Grand Prieur de la que el abanderado era otro Kindelan, probablemente Ultano. El regimiento de Limerick tuvo su origen en uno de los regimientos de Jacobo II que pasó al servicio de Luis XIV. El 20-7-1709 pasa a España desde Francia con el nombre de su coronel, el duque de Berwick, hijo ilegítimo de Jacobo II . En 1714 aparece con el nombre de Vendome y el 19-2-1718 recibió el nombre fijo de Limerick (12). En 1712, el Duque de Berwick seguía siendo coronel del regimiento de irlandeses de Limerick que participó en el sitio de Gerona. Entre 1712 y 1714 asciende a coronel Hugh O’Kelly, mozo travieso y aprovechado. En 1718 era coronel Cornelio O’Driscol, teniente coronel Alejandro MacDonnell, sargento mayor Juan O’Donnell y ayudante mayor Marcos McGrath. En 1724 el coronel es Raymundo Burke, de 37 años de edad y 25 de servicio, teniente coronel estaba vacante (antes lo ocupaba Raymundo Burke), sargento mayor Juan O’Dea, de 40 años y 15 de servicio, ayudante mayor Roberto Linch, de 37 años y 16 de servicio. En 1727 pasa al regimiento de infantería de Irlanda, todavía como cadete, y también este traslado lo hace junto a su hermano Ultano. Veamos la historia de este glorioso regimiento hasta ese año de 1727 en el que se incorporan los hermanos Kindelan. Regimiento de Infantería de Irlanda Este cuerpo entró en el servicio de España en 1715 pero por real licencia gozaba de más antigüedad que los otros regimientos irlandeses. La razón de esto debió radicar en que vino como cuerpo entero ya formado y organizado, y con una fama admirable. Dando testimonio de su historia tenemos nada menos que el caballero de San Jorge, Jacobo III, el Pretendiente, hijo del desgraciado Rey de Inglaterra Jacobo II. Nos asegura haberse declarado y atestado que el regimiento que se hallaba en España con el nombre de Irlanda se levantó por el difunto Rey su padre después de la invasión de aquellos reinos por el Príncipe de Orange en el año 1688, llamándose entonces regimiento de la Reina, y que se trasladó a Francia en el año 1691, y se mantuvo allí en servicio y a las ordenes del Rey hasta la paz de Ryswick, que pasó al servicio de Francia en el año 1698, en el que continuó hasta la de Utrecht, después de la cual pasó al servicio de España hasta ahora presente (13). Pero aunque la paz de Utrecht se firmó el 11-4-1713; el regimiento, por medio de su coronel, no empezó a negociar su paso al servicio de España hasta después del tratado de Ratadt el 6-3-1714. Walter Bourke, que ganó fama en la defensa del castillo de Anghrim en Irlanda, siguió a Jacobo II a Francia, donde siendo coronel de su regimiento, recibió de Luis XIV el título de Mariscal de Campo. Cuando estalló la guerra de Sucesión en España, Luis XIV envió entre otros el regimiento de Bourke, llamado de la Reina, a ayudar a su nieto Felipe V. El regimiento tomó parte en la batalla de Chiari pero el primer encuentro en que se distinguió fue la defensa de Cremona. Las tropas del Príncipe Eugenio, jefe de los imperiales, entraron secretamente en la plaza la noche del 31-1 y con el mayor silencio aprisionan al mariscal de Valleroy en su alojamiento y sorprenden del mismo modo a los tenientes 4 generales Cregnan y Montgon. Casi todos los puestos de la plaza estaban ocupados por los imperiales cuando las tropas franco-españolas se aperciben; toman medio desnudos las armas y salen a combatir. El choque fue terrible y las calles, teatro de la sangrienta pugna, se cubrieron en pocos minutos de cadáveres y moribundos. El coronel Raimundo Burck (debe ser Walter o Gualterio: Raymundo Burke era sargento mayor del regimiento) peleaba como un león al frente de su brigada irlandesa auxiliado por el coronel Francisco Wachop y consiguió humillar la osadía de los austriacos, lanzándolos a la bayoneta en la madrugada del 1-2. El regimiento mereció la munificencia de Luis XIV que a todas las clases desde capitán inclusive hasta la tropa se les aumentase el sueldo y el haber (13). Pasó el cuerpo al sitio de Castiglioni y combatió en acciones de Santa Vittoria y Luzzara (en todas estas batallas participó Ultano Kindelan, tío de Vicente). Cruza el Po el 18-6 y recibe orden de marchar sobre Luzara por disposición del Rey Felipe V. El 15-8 se presenta el Príncipe Eugenio con el ejército imperial y forma nuestro regimiento para recibirle en el ala izquierda de la línea de batalla del franco-español. Desde el primer momento el Príncipe lanza su ala derecha al mando del general Commerci contra la extrema izquierda que regía el Conde de Tesse; los irlandeses esperan el ataque con el arma al brazo y en la actitud más imponente hasta que el enemigo se coloca a medio tiro de pistola. Entonces fulmina un fuego tan nutrido y mortífero que las columnas austríacas se ven obligadas a retroceder; rehácense éstas, sin embargo, y recobran la ofensiva, pero también son repelidas; por tercera y cuarta vez se renueva el empeño y otras tantas el aguila imperial tiene que humillarse ante las lises de Francia y el león de Castilla (13). El regimiento luchó en la toma y pérdida de Carantollo, sitio y capitulación de Guastala y Vercelli, la sorpresa de una división imperial en el Placentino, la reconquista de Vercelli, asedio y rendición de Ivrea, Verrua, la Mirandola y Chivas, y la batalla de Cassano. El 16-8-1705 en los campos de Cassano el Príncipe Eugenio y el Duque de Vandome entraron en batalla. El regimiento de la Reina peleaba heroicamente en el ala izquierda de la primera línea, y se hallaba tan maltratado que indefectiblemente hubiera perecido todo si no hubiese acudido en su auxilio una brigada de dragones, los cuales cargando de revés a los austriacos les obligaron a ceder el terreno. El regimiento fue aplaudido en esta jornada por su ejemplar constancia y aquileo denuedo (13). Más tarde peleó en el campo atrincherado de Calcinato y en la desgraciada batalla de Turín del 7-9-1706. Después, el regimiento debilitado hasta lo sumo, volvió a Francia a reorganizarse. El año siguiente se halló en Languedoc en la acción de Nacher, donde fue herido el sargento mayor Mateo O’Kennedy. En los Paises Bajos entre los años 1708 y 1713 combatió en la batallas de Oudernade y Malplaquet, la defensa y capitulación de Saint Venant, el asalto de Denain, el asedio y capitulación de Marchienne, el ataque y toma del fuerte de Scarpe, el sitio y rendición de Douai y Quesnoy, el ataque y toma de las posiciones del puente de Mahuheim, el sitio y rendición de Landau, el ataque de la línea de Homberg, y el sitio y rendición de Friburg. En 1714 el regimiento fue elegido para formar parte de los batallones que al mando del mariscal Berwick envió el Rey de Francia para pacificar el principado de Cataluña después de la retirada de las tropas austríacas. El ejército auxiliar francés unido al español sitió Barcelona. El regimiento de la Reina tomó parte en el asalto de Barcelona el 11-9 y se quedó allí de guarnición. 5 Fue entonces cuando este regimiento, conocido con el nombre de su coronel Burke, pidió y obtuvo permiso de Luis XIV para ingresar en el ejército español. Las negociaciones duraron mucho tiempo y el coronel Burke murió antes de alcanzar su objetivo (12). El teniente coronel Francisco Wauchop siguió negociando con el ministro Patiño. El 18-5-1714 escribió Wauchop a Miguel Fernández Durán pidiendo se le respondiera a la mayor brevedad. El 27-6-1715 España aprueba las capitulaciones y el regimiento pasa a España. Las condiciones van precedidas de una exposición: Como de tiempo inmemorial los han reconocido los Irlandeses por sus descendientes y como a tales los dieron la alternazion de naturales, los oficiales del Regimiento de Burke puestos a los R.P. de V.M. Catholica suplican se digne confirmar los privilegios de su nación consolidando por un R. Decreto su derecho de naturalización, declarando a todos y cada uno de los Catholicos Irlandeses capases de poser y gozar en España qualquier beneficio, empleo o dignidad que deva y pueda gozar qualquier español en el eclesiastico, civil o militar. El regimiento de Burke tenía más de 100 años de antiguedad, antes de la ultima Revolución de Inglaterra en seguimiento de su rey lexitimo; es notorio que es y ha sido siempre compuesto de buena nobleza y de hombres de valor; se ha distinguido en las funciones principales de esta guerra en Italia y particularmente en Cremona; el aplauso que en esta su obrar merecio de amigos y enemigos parece un titulo bien fundado a la proteccion de S.M.C. y de toda la nación española. Luego siguen las condiciones pidiendo: 1) que no se den directores o inspectores que no sean españoles o irlandeses que estima la misma nacion. (concedido) 2) que este regimiento se mantendra siempre en pie asi en tiempo de guerra como de paz, sin reforma, desminucion de sueldo, oficiales ni gente. (concedido) 3) que sean puntualmente pagados de su sueldo y prest cada mes, etc. (concedido) 4) que las compañias sean compuestas de capitan vivo, teniente, subteniente, etc. (concedido) 5) que para suplir la falta de irlandeses podran tomar para soldados de qualquiera nacion estrangera en el interim que se reclutan de la suya. (concedido) 6) que no tengan coronel que no sea de la nacion irlandesa; que S.M. tendra presente los justos motivos que asisten a este regimiento para que el coronel sea de su nacion. (concedido) 7) se refiere a la plana mayor y un intérprete con grado de capitán. 8) se refiere a pensiones de oficiales 9) que en atención a que los cuerpos irlandeses sacan de Irlanda la mayor calidad que pueden de la gente mosa de la noblesa asi para sacarla de el peligro de caer en la heregia como para formarla a la guerra, aya en la compañia coronela 24 cadetes con doble sueldo de soldado. (no concedido). 10) Hace provisión de una cantina y carneceria franca. 11) que al entrar al servicio de S.M. se libraran a los oficiales 2 pagas que no entraran en quenta como se ha concedido a los regimientos de MacAulif y Castelar. (concedido) 12) se refiere al vestuario de los soldados. 13) que este batallón se compondra de 13 compañias de a 50 hombres cada una, etc. 14) Que mediante estas condiciones se entregara el regimiento completo al Real servicio de S.M.C. sometiendose en todo y por todo a las obligaciones de vasallos y prometiendo servir a V.M. y a la Monarquia con todo celo, amor y lealtad como lo han ejecutado hasta aqui. 6 15) que en consideración a la antiguedad de este regimiento se le conceda el honor de ser nombrado regimiento del Principe de Asturias y que este regimiento debera gozar de la antiguedad que tenia en Francia. (cocedido) 16) que se guarden los articulos, firmados por el Rey, en el Archivo de su secretaria de guerra y se entregue al regimiento copia autorizada por el Secretario del despacho universal de la guerra (14). Estas condiciones fueron firmadas por Francisco Wauchop, coronel, y Raymundo de Burke, sargento mayor, en Barcelona el 18-5-1715. Luego hay una nota de Patiño firmada en Barcelona el 18-5-1715 en que dice que con las condiciones y limitaciones arriba indicadas será admitido el regimiento de infantería irlandesa que antes era de Burck y ahora de Wachop al servicio de S.M. El 27-6-1715 pasa definitivamente el regimiento al servicio de España. Aunque oficialmente recibió el título de Príncipe de Asturias, fue llamado el regimiento de Wauchop siguiendo la costumbre de la época. Como los otros dos regimientos de la Brigada Irlandesa, Hibernia y Ultonia, veneraba por patrón a San Patricio; ostentaba por armas un arpa de oro en campo azul y llevaba escrito en sus banderas el versículo 4 del salmo 18: “In omnem terram exivit sonus eorum”. Llevaba casaca encarnada con divisa azul. El primer libro de inspección es de 1715 y está firmado por Charny. La plana mayor estaba compuesta por; • • • • Coronel Francisco Wauchop, brigadier de las armadas de Su Magestad, escozes, 49 años y 35 de servicio, estuvo en muchas batallas y sitios de Irlanda, Francia, Italia y España. Brigadier desde 26-5-1711, coronel del regimiento desde 20-31715. Teniente coronel Pedro Baker, 57 años y 43 de servicio, ascendió a capitán en el regimiento de Wauchope el 5-2-1692. Sargento mayor Raymund Burke, 33 años de edad y 16 de servicio, sobrino del antiguo coronel Walter Burke. Ayudante mayor Pedro Power, 42 años y 27 de servicio (27). Es curioso que el coronel Wauchop fuera el primer coronel de este regimiento al recordar la séptima condición de la capitulación. La explicación puede encontrarse en la descripción que de él hace D’Alton (John D’Alton: Illustrations. Historical and Genealogical of King James’s Irish Army List. Dublin 1860): a Scottish gentleman, a descendant, it might seem, of James Wauchop of Ballygraphen, naturalized by James I on the plantation of Ulster. Así Wauchop, aunque de sangre escocesa, nació en Irlanda como sus padres y recibió allí su formación. La primera campaña del regimiento como parte del ejército español tuvo por objeto la reconquista de la Isla de Cerdeña. Se embarca el 21-7-1717, y llega a Cabo Pulla, 7 desembarcando en la aldea de Coarte y acampando en el Santuario de Nuestra Señora de Lluc. El 13-9 asiste al sitio de Cagliari que se rinde el 30-9. El 10-10 pasa a Algieri donde llega el 22 y la obliga a capitular el día 26. Después ataca el Castillo Aragonés y lo toma el día 30. Por Real Orden de 10-2-1718 recibió el nombre de Regimiento de Irlanda. Resulta extraño este cambio puesto que la orden estaba dirigida a regimientos que no tenían nombres fijos. Quizás fuera necesario para éste también porque a pesar de tener el título oficial de Príncipe de Asturias era llamado regimiento de Wauchop. El mismo año vuelve a Italia a la reconquista de Sicilia. Dice MacSwiney; ... the Irish Brigade was most actively employed by the Marquis de Lede in the operations which, in less than a fortnight’s time, made the Spaniards masters of the city and castles of Palermo, and of a great part of the island. The losses sustained by the Irish regiments during that campaign must have been severe indeed; but the successes achieved were duly acknowledged by the supreme command (15). Tomó parte en el sitio y rendición de Messina y sitio y batalla de Melazzo el 15-10 bajo las ordenes del general Solís. Los austriacos eran unos 8.000 hombres, pero las tropas españolas, con los regimientos de Irlanda, Hibernia y Ultonia, lograron una de las más sangrientas pero gloriosas victorias en la que combatieron a la bayoneta. Fueron heridos en esta batalla el teniente coronel Raimundo Burke y los tenientes David O’Shaughnessy, Diego Bourke y Ricardo Burke; murieron el capitán Jorge Plunket, el teniente Edmundo Kavanaugh y el subteniente Dionisio Brady. El 27 de mayo el regimiento de Irlanda se retiró de Melazzo y pasó a Francavilla, donde entabló batalla el 20-6-1719. Los granaderos irlandeses sostienen varios choques, distinguiéndose principalmente en los empeñados a la vista del castillo de San Miguel y obteniendo por su bella conducta los aplausos del general en jefe (15). No hubo un claro vencedor. En 1720 los españoles se retiran a Palermo. Poco después e firma el armisticio, en que se estipula evacuación de Sicilia, y el Regimiento de Irlanda se reembarca para Barcelona en el mes de junio. El 3-7-1719 Su Majestad confirió el mando del cuerpo al coronel Reynaldo MacDonnell. In the late promotion of general officers the King of Spain made me a Brigadier, and gave me Wauchop’s regiment by his promotion to Marechal de Camp. Poor Wauchop did not enjoy it long, for he died some few days after he heard of his promotion (Reynaldo MacDonnell al Duque de Mar, Messina, 4-8-1718, en referencia 16). La inspección de 1721 fue hecha por el Marqués de Lede, Capitan General de los Exercitos y Director General de toda la Infanteria el día 12-12 en la plaza de Peñiscola: • • Coronel; el brigadier Reynaldo MacDonnell, nieto del Marqués de Antrim, de 42 años y 32 de servicio. Había sido subteniente en Irlanda en 1688, teniente en 1689 y capitán en Francia de una compañía en 1703. Más tarde fue teniente coronel en España en 1709, tuvo patente de grado de Coronel en 1710, fue hecho coronel del regimiento de Irlanda en 1718 y Brigadier en el mismo año (17). Había creado el regimiento de Hibernia y había sido su coronel. Teniente coronel; D. Raymundo Burke, 36 años y 22 de servicio. Cadete en 1699, capitán teniente en 1701, capitan de compañía en 1703, sargento mayor en octubre de 1704, teniente coronel en 1718. Fue herido 4 veces. Entre sus funciones la batalla de Melazzo en donde se le rompió la pierna de un fusilazo mandando el regimiento por ser destacado el Coronel. 8 • • Sargento mayor; Bernardo O’Rourke, 65 años y 38 de servicio, en este regimiento desde 1688. Ayudante mayor Mauricio Knavin de 37 años y 28 de servicio, en este regimiento desde 1711 (17). La inspección de 20-7-1723 fue hecha en Cádiz por el brigadier Vicaria. Tiene la misma plana mayor. Del coronel MacDonnell dice este ofizial es digno de quantas honras que Su Magestad fuere servido dispensarle (17). En 1726 el regimiento de Irlanda se traslada a Valencia En 1727 Vicente y Ultano Kindelan se incorporan al Regimiento de Infantería de Irlanda, que venía de labrarse una merecida fama por su valor y entrega en las más difíciles batallas de la guerra de Italia. Por esas fechas, su hermano Tomás asciende a subteniente de granaderos del regimiento de Hibernia. En agosto de 1731 el regimiento se encuentra en Valencia y allí se realizó una nueva inspección a cargo de Pedro de Vargas Maldonado; • • • • Coronel: Reynaldo MacDonnel del que hizo los siguientes comentarios; Este Brigadier es capaz, aplicado, bueno para las operaciones; quiere ser absoluto en el regimiento; es gastador pero hasta aora no se toma lo que no sea suyo. Siempre le considero aproposito para seguir su ascenso. Teniente coronel: Juan O’Gara de 38 años de edad y 21 de servicio, 7 años como teniente coronel. Sargento mayor: Juan Coghlan, 58 años y 41 de servicio, 4 como sargento mayor. Ayudante mayor: Geraldo Elliot, de 35 años y 18 de servicio, 2 de ayudante mayor Ultano y Vicente siguen siendo cadetes, ninguno de los dos se había hallado en función y ambos eran considerados buenos para oficial. Conquista de Orán El 27-5-1732 es nombrado coronel del Regimiento de Irlanda el conde de Bearhaven, y el 15-6-1732 parte de Alicante rumbo a Orán una poderosa escuadra dirigida por el general Francisco Cornejo y que transporta 28.000 hombres (13) bajo el mando del Conde de Montemar, D. Jose Castillo de Albornoz (1671,26-6-1747). El objetivo era la conquista de Orán que se había perdido en 1708. El embarque de las tropas se hizo en Alicante desde 3 al 13 de junio de 1732. En la expedición participaban 23 generales, 19 brigadieres, 123 jefes y oficiales. 32 batallones de infantería (uno de artillería) de los regimientos de Guardias Españolas, Guardias Walonas, España, Soria, Cantabria, Asturias, Vitoria, Irlanda (1 batallón y 733 soldados (37)), Ultonia (1 batallón y 733 soldados (37)), Aragón, Flandes, segundo de Namur, Hainaut, Amberes, 1 y 3 de suizos de Nidriz. En total 23.000 soldados (36) y 24 escuadrones de caballería para un total de 1600 hombres. La escuadra salió el 15 de junio y el día 28 doblaron el cabo Falcón y fondearon frente a la playa de las Aguadas, a menos de legua y media de Mazalquivir. Empezaron los preparativos del desembarco a partir de media noche, y al alba empezaron a desembarcar. Una vez rechazados los tiradores enemigos y tomada una pequeña altura, pasaron la noche del 29 sin novedad. El día 30 empezaron las expediciones para conseguir un fuerte que dominara la playa. Los enemigos al mando del Bey Mustafá opusieron dura resistencia, pero al fin lograron apoderarse de la montaña del Santo que domina a Mazalquivir. 9 Estos hechos también se encuentran descritos en (37); Después de conquistar la pequeña altura donde había una fuente, Montemar mandó construir a la izquierda un fortín para asegurar la comunicación con la marina. Una compañía de fusileros protegía a los trabajadores que se veían fustigados por los moros. La obligada retirada de estos por falta de municiones animó a los moros que avanzaron con audacia. Montemar se vió obligado a enviar 4 compañías de granaderos de Guardias Walonas y 12 Compañías más, todas de regimientos extranjeros, al mando del Mariscal Alejandro de la Motte, y 4 piquetes de dragones que atacasen a los moros que se habían adelantado. Las 4 compañías de granaderos se empeñaron de tal forma que el general tuvo que ordenar el avance acelerado de la brigada de Guardias Walonas para sostener a los granaderos que eran atacados por los moros con singular valor. Al verse protegidos, se lanzaron sobre el enemigo obligandoles a retirarse hasta otra montaña más lejana. Entre turcos, moros y árabes había 20 o 22.000 hombres. No paró Alejandro de la Motte hasta llegar a tiro de fusil de Mazalquivir. Al día siguiente, cuando iban a empezar a traer la artillería se enteraron que el Bey de Occidente, al saber la fuerza de la expedición, decidió abandonar Orán con todo lo que pudo llevar consigo (36). El día 2 capituló Mazalquivir, con lo que se completaba la reconquista de Orán. El regimiento de Irlanda pronto destaca por su valor; En el combate trabado con los moros, cuyo desenlace fue arrojar al enemigo de los Galapagos, brilla el regimiento por aquel género de valor, ora impasible, ora ardiente e impetuoso, que constituía el fondo de su carácter militar (13). Vicente Kindelan participa activamente en estas acciones como queda reflejado en sus hojas de servicios (39, 41). Al cabo de un mes se fue Montemar dejando la plaza al mando del Marqués de Santa Cruz de Mercenado con 10 batallones. Entre las tropas que permanecieron de guarnición se encontraba el Regimiento de Irlanda. Estas tropas eran hostigadas continuamente por los infieles y, aunque los esfuerzos de los sitiadores resultaron inútiles, el gobierno decidió enviar un refuerzo de 5.000 hombres, ya que se había formado un ejército de 50.000 hombres bajo el mando del bajá Alí-Ben-Mojh que amenazaba Orán. Al saber de la inminente llegada de estos refuerzos, Santa Cruz decidió, el día 21 de noviembre de 1732, hacer una salida con 8.000 hombres para alejar al enemigo de las cercanías. Hubo un feroz combate en el que los españoles fueron derrotados y en el que murió el Marqués de Santa Cruz de Mercenado y hecho prisionero el Marqués de Valdecañas y otros oficiales. En este combate participó de forma destacada Vicente Kindelan y así puede leerse en su hoja de servicios (21); Se halló en la Expedicion Conquista y Defensa de Oran, Batalla de Montefalcony y fue de los que abanzaron a Piquete contra los moros, en las Batallas del 21 de noviembre 1732 y 6 de febrero de 1733 en el mesmo terreno. Mientras esto sucedía comenzaba el desembarco de los refuerzos entre los que se encontraban 6 compañías y la plana mayor del Regimiento de Nobles Irlandeses de Ultonia con su coronel Don Guillermo Lazy (37). Con estos refuerzos se logra derrotar completamente al enemigo. Al marqués de Santa Cruz le sucedió provisionalmente el mariscal Don Bartolomé Ladrón, por ser el más antiguo (según (12) le sucedió D. José Vallejo). En 1733 fue nombrado comandante general el Marqués de Villadarias (37). Las tropas españolas hicieron varias incursiones para alejar a los moros que fueron favorables. Destacó la victoria lograda el 6 de febrero contra un ataque de los árabes en la que el regimiento de Irlanda tuvo, otra vez, un papel destacado. En marzo de 1733 el regimiento de Irlanda orlado de laureles (12) se embarcó para Mallorca. A mediados de junio, poco después de su marcha las tropas españolas hicieron otra salida en la 10 que fueron derrotados, perdiendo muchos hombres. Poco después el Marques de Villadarias era sustituido. Existe un libro muy curioso escrito por D. Antonio García y Vergel (38) en el que se relata en forma de verso esta conquista de Orán. En ella habla de todos los regimientos que participaron, habla del Cabo Falcón, y dedica versos a muchos de los oficiales al mando de los distintos regimientos; Villadarias, Marsellach, el belga Suebeguem, Santa Cruz, Gracia Real, Sandrasky, Monreal, Carbajal, Mota, Lalayn, Mazeda, Ladrón, Degages, Magdonel, Zizil, Garma, Mina, Mariani, Patiño, Abarca. Los versos dedicados a De Gages, que veremos más adelante como Mariscal de Campo en Italia, y a MacDonnell, coronel del regimiento de Irlanda, son los siguientes, Un Belgico Degages, que suave, Apacible, severo, y silencioso, Igual en todo, los caminos sabe De lo audaz, lo prudente, y decoroso: Un Magdonel Hibernico, que Grave Acredita al Marcial, al Religioso Caracter de Nacion, que desterrada Se construye su Reyno de su Espada. El libro de inspección de mayo de 1733 está hecho en Palma, y en él aparece Daniel O’Sullivan, conde de Bearhaven, como coronel, por ascenso de Reynaldo MacDonnell a mariscal de campo el 13-10-1733 (18). Una nota del libro dice que el coronel actual de este regimiento es el Brigadier Diego Bourke. La hoja del coronel está en blanco y dice: El coronel está ausente del regimiento y se llevó las libretas de las Inspecciones antecedentes por cuya razon no se saben sus servicios ni de los demas oficiales ausentes (19). Es curioso que en 1731 Diego Borcke era tan solo teniente. Vicente Kindelan ascendió a subteniente de la compañía del capitán Carlos Wogan el día 28-1-1732. En su hoja de servicios de 1733 encontramos la siguiente anotación; Este oficial está en Elche cuydando de los enfermos y queda esta oja en blanco por esta y las demas razones que las de los ausentes referidos (20). Ultano, por su parte, había ascendido a subteniente el 12-10-1731 y a subteniente de granaderos el 23-71732, y Tomás ascendió a teniente del regimiento de Hibernia el 21-2-1728 y a capitán el 9-11-1733. En 1734 la inspección fue hecha por De Was: • • • • Coronel: Eduardo Burke de 36 años y 20 de servicio. Es oficial de elevadas cualidades y desde su arrivo al regimiento ha restablecido en él la buena disciplina de que tenía necesidad; con sus talentos y buena conducta se ha consiliado los afectos de los oficiales. Teniente coronel: Juan O’Gara. Ayudante mayor: Geraldo Eliot. Sargento mayor Juan O’Donnell de 70 años y 46 de servicio (antes en los regimientos de Castelar y Limerick) (19). Aquel año el regimiento aumentó sus efectivos por la refundición del regimiento de Waterford el 15 de marzo. Parte del regimiento de Waterford formó el segundo batallón del de Irlanda. El primer comandante era Pedro Aylward, teniente coronel de 11 Waterford, y el ayudante mayor Phelipe Hackett, que ocupaba el mismo puesto en el regimiento extinguido (19). En la hoja de servicios de Vicente se considera buena su capacidad, valor, conducta y aplicación. Se indica su participación en la expedición, conquista y defensa de Orán y se comenta que es un buen oficial con esperanzas paramas empleo (9). Su hermano Ultano ascendió a teniente el 18-3-1734 y también participó en la expedición a Orán. Campaña de Italia El regimiento se trasladó de Palma a Barcelona para emprender viaje a Italia. El objetivo de la expedición era conquistar Nápoles y Sicilia. La expedición partió de Barcelona y llegó a Porto Spezia el 20-11-1733. Estaba formada por 18.000 hombres de infantería y 5.000 caballos y a su mando estaba el conde de Montemar. Entre las tropas de Montemar se encuentra el regimiento de infantería de Irlanda que tomó parte en la ocupación de Lunegiana (debe ser Lunigiana en Toscana), Venza y Mazza (debe ser Massa en Toscana). Después pasó a a la Apulla (13). En 1734 el infante D. Carlos decide emprender la reconquista del reino de Nápoles. El 27-3 emprende la marcha hacia el sur, y el 23-4 se produce el ataque y rendición del castillo de Baya (debe ser Baia). El 26-4 se rinde el castillo de San Telmo (debe ser Sant’Elmo en Certosa de San Martino cerca de Nápoles), el 3-5 el de Ovo (en Nápoles) y el de Castel Nuovo (en Nápoles). El 12-5 entran en Nápoles donde el Infante D. Carlos es proclamado Rey de las Dos Sicilias. Castel dell’Ovo Castel Nuovo Castello di Baia Castell Sant’Elmo 12 El 25-5 el regimiento de Irlanda participa en la batalla de Bitonto, en la que los españoles al mando del General Montemar infligen una derrota decisiva a los austriacos. El 26-5 se produce la toma de Bari. Más tarde participan en el sitio y capitulación de Gaeta (desde el 6-6-1834 hasta el 6-7-1734) y Pescara (20-8-1734). El 29-8-1734, el regimiento de Irlanda se embarca con la expedición que marcha a Sicilia. Desembarcan en cala de Solanto y el 1-9 se somete Palermo. El 4-9 se pone sitio a Siracusa que resistió hasta el 15 de junio de 1735. Poco después, y una vez logrado el objetivo de la expedición, el Regimiento de Irlanda se embarca rumbo a Alicante y desde allí pasa a reforzar el cuerpo de observación que estaba establecido en Extremadura quedando acantonado en la frontera. En 1737 el Regimiento de Irlanda se traslada a Fuentes de Cantos. La inspección de 1737 fue hecha por Guillermo Lacy y tiene la misma plana mayor con la excepción del sargento mayor que es Tadeo O’Connor de 38 años y 30 de servicio, antes en el regimiento de Ultonia, y el ayudante mayor del segundo batallón que pasa a serlo Vicente Kindelan de 29 años y 15 de servicio, oficial que según Lacy será con el tiempo aproposito para cualquier empleo. Vicente había ascendido a teniente el 1-21735 y a ayudante mayor el 3 del 11 de ese mismo año. En su hoja de servicios aparece con buena capacidad, aplicación y conducta y mucho valor. Se halló en la Expedicion Conquista y Defensa de Oran, Batalla de Montefalcony y fue de los que abanzaron a Piquete contra los moros, en las Batallas del 21 de noviembre 1732 y 6 de febrero de 1733 en el mesmo terreno, en la Expedicion de Italia en calidad de ayudante de campo al Mariscal de Campo Don Reynaldo MacDonnell, Conquista de los Reinos de Napoles y Sicilia, Sitios de Bahia, Castelnovo, Castel del obo y Pescara, Batalla de Bitonto, Sitio de Castelamar, bloqueo y Reduccion de Mezina y Ziracusa (21). Aunque todos estos nombres solo ocupan unas pocas líneas de su hoja de servicio, es impresionante pensar lo que significaría cada una de esas batallas y todas hechas en un corto espacio de tiempo. El 1 de mayo de 1736 su hermano pequeño, Eduardo Kindelan, ingresa como cadete en el regimiento de Hibernia a los 18 años de edad (22). En este regimiento servía su hermano mayor Tomás, quien en agosto de 1737 seguía siendo capitán, y había participado en el sitio de Gibraltar y en la campaña de Orán en la función de 21-111732; Este oficial es digno de qualquier empleo que S.M. se sirva concederle, y mui aproposito para sargento mayor: está actualmente encargado de los intereses del Cuerpo y administra con equidad los caudales (4). Sin embargo, veremos más adelante como estas buenas expectativas para su carrera militar se verían trágicamente truncadas en la campaña de Italia. Boda en Fraga En 1737 el Regimiento de Irlanda se traslada a Fuente de Cantos (13). En 1739 Vicente fue empleado por el Conde de Ytre y el Marqués de Croix para formar los tres batallones que a la orden de D. Sebastian de Eslava fueron enviados a Cartagena de Indias. Éste fue nombrado Virrey de Nueva Granada en agosto de 1739 y llegó a Cartagena en abril de 1740. En 1740 el Regimiento de Irlanda vuelve a Cataluña y se aloja en los pueblos inmediatos a Barcelona, preparándose para una nueva expedición a Italia. Vicente conoció por entonces a María Francisca O’Regan, natural de Barcelona e hija de Mauricio O’Regan y de Rosa MacManus. Mauricio O’Regan fue Capitán del Ejército del Rey Jacobo, y después de la capitulación de Limerick siguió la suerte de dicho Rey 13 en Francia, siendo capitán del Regimiento de Imburg. Rosa MacManus había nacido el 23-11-1701 en San German de Laye, donde se encontraban las tropas del rey Jacobo II tras la derrota de Limerick. Era hija de Carlos MacManus, oficial jacobita. Rosa y Mauricio se casaron en la Iglesia de Santa María del Mar en Barcelona el 20-71723, y el 17-7-1725 nacía María Francisca. Sebastián de Eslava (1684-1759), Carlos Francisco de Croix (1699-1786), Teniente General y Virrey del Nuevo Marqués de Croix y Virrey de Nueva Reino de Granada en agosto de 1739 España. La boda se celebra en Fraga el 15-4-1741 y es oficiada por Phelipe Phelan, capellán del primer batallón del regimiento de Irlanda. Vicente era Ayudante mayor del regimiento y acababa de cumplir los 30 años. María Francisca tenía solamente 15 años. Por entonces, Mauricio O’Regan ya había fallecido y Rosa MacManus había vuelto a casarse con Juan Macsuini, también oficial de origen irlandés. La boda se celebró en la casa de Juan Macsuini y Rosa MacManus. He escrito Macsuini en la forma que aparece en documentos posteriores. Sin embargo, en el certificado matrimonial de Vicente aparece como Macsweni, lo que indica que con toda probabilidad su apellido original era Macswiney. También me resulta curioso que en dicho certificado aparece Kildare como lugar de nacimiento de Vicente Kindelan. Batalla de Campo Santo El 3-9-1741, el Regimiento de Irlanda se embarca en Barcelona rumbo a Italia, bajo el mando del Conde de Montemar. El objetivo de la expedición es conquistar los ducados de Parma, Plasencia y Toscana para el Infante D. Felipe, segundo hijo de Felipe V e Isabel de Farnesio, o adquirir el Milanesado. Sin embargo, Montemar se ve detenido por circunstancias que no esperaba y el Rey le sustituyó por D. Juan de Gages. La expedición desembarca el día 13-9-1741 en Porto Stefano (probablemente Porto Santo Stefano) y rápidamente ocupa la Toscana (13). El 17-12-1741, con 30 años, Vicente Kindelan asciende a capitán. El día 3-9 del año siguiente, el Regimiento de Irlanda se acantona en Spoleto, desde donde se adelanta 14 para reforzar la plaza de la Mirandola. El regimiento de Irlanda luchó en la célebre batalla de Campo Santo el 8-2-1743, y en ella realizó uno de los episodios más heroicos de la historia del ejército español. En dicha batalla se enfrentaron las fuerzas austro-sardas al mando del Mariscal Traun contra las fuerzas españolas al mando del Teniente General Juan de Gages en las cercanías de la pequeña aldea de Campo Santo, a orillas del río Panaro, en el Piemonte italiano. En (24) se encuentra una descripción detallada de la batalla. Las fuerzas españolas se desplegaron según el esquema adjunto; Teniente General Juan de Gages Primera Línea Tenientes Generales: MacDonnell Jaime de Silva Conde Mariani Melchor de Abbarcas Mariscales de Campo: De Lessy De Carbajal Conde de Jauche Duque de Atrisco Marqués de Croix Brigadieres: Bernardo Romero MacDonnell Antonio de Silva Conde de Grosberg C C C Caballería de la Reina AAAAAA Guardas Valonas AA AA AA Fland Lomb Cas Tilla es ar dia AA AA AA Guardias Españolas Segunda Línea Tenientes Generales: Conde de Beaufort C C C C Caballería del Rey Conde de Sena Mariscales de Campo: Duque de Marqués de la Torre Villadarias Marqués de Valdecanas Marqués de Gramina Marqués de Creuecoeur Brigadieres: De Beesler De Castro C C C Dragones de Sagunto AA Par ma De Bourck D. Juan de Pacheco AA AA AA AA AA AA Wir Ths Beesl er Hiber nia Flan Des Gua dalaja ra Coro na Duque de Arcos AA Reina C C C Dragones de la Reina Las fuerzas austro-sardas eran muy superiores en número a las españolas. Al empezar el avance de los austriacos sobre el ala derecha de la infantería española (las guardias españolas), el teniente general MacDonnell se percata de la acción y decide avanzar desde la segunda línea. Esta acción, en la que nada tuvo que ver el Comandante en jefe de Gages, parece que resultó decisiva para el desarrollo de la batalla. La caballería española atacó y pronto puso en fuga al regimiento sardo de Coraceros de Savoia. La batalla comenzó, por tanto, con una inesperada victoria española en la que tuvieron un papel destacado los Dragones de Sagunto liderados por el Mariscal de la Torre, que fue promovido a teniente general y creado Marqués de Camposanto (24). Sin embargo, el mariscal Traun exhortaba a sus tropas diciendo; vosotros, valerosos compañeros seguidme. En Italia no vence la Caballería sino la 15 Infantería. La infantería austríaca pasó al ataque, y contó con la inesperada ventaja de que la caballería española no volvió a atacar. También esto parece responsabilidad de Gages que no supo trasmitir las ordenes oportunas. De nuevo destacó el general MacDonnell que supo organizar un ordenado repliegue de sus fuerzas. La batalla terminó al anochecer sin dejar un claro vencedor. Los austro-sardos tuvieron 520 muertos, 962 heridos y 269 desaparecidos; en total 1751 bajas (el 14% de sus efectivos). Entre los españoles hubo 700 muertos, 1386 heridos, 754 prisioneros (el batallón Guadalajra) y 324 desaparecidos; en total 3164 bajas (el 26% de sus fuerzas). Murieron los mariscales Mayorga y Conde de Jauche, y fueron gravemente heridos los mariscales Marqués de Villadarias, Orcasitas y Carbajal. También fue herido el comandante de los dragones de la reina, brigadier Duque de Arcos, que fallecía por las heridas pocos días después. También fue herido el teniente general MacDonnell quien además vió morir a uno de sus hijos (24) En la batalla participaron el regimiento de Irlanda y el de Hibernia. Este último había pasado de nuevo a Italia en 1743: A las órdenes del general conde de Gages sale de Bolonia el 2 de febrero para Campo Santo en donde tiene lugar la encarnizada batalla del 8 que cubrió de luto a millares de familias y en la que el regimiento de Hibernia se distinguió por su valor y firmeza contra los simultáneos ataques de los austriacos cual lo demuestra la enorme pérdida de 18 oficiales y 279 soldados muertos y 23 oficiales heridos. Entre ellos que rindieron la vida tan heroicamente son: el coronel Tomás Picke, el comandante Rodrigo Magenis, los capitanes Carlos McDonald, Terencio O’Neill, Roberto Eustace, Baltasar Burke, Tomás Eustace, Tobias Dyllon, el ayudante mayor Antonio O’Dwyer, los tenientes Sheridan, O’Connor, Burke; los subtenientes Commins, Kindelan y McMahon” (13). El subteniente Kindelan era Eduardo, hermano pequeño de Vicente, que moría a los 27 años. También fueron elevadas las pérdidas en el regimiento de Irlanda, pues murieron 6 oficiales y 186 soldados y hubo 25 heridos entre oficiales y subalternos (13). Tras esta batalla, el Regimiento de Irlanda se retira a Savignano con el resto del ejército y participa activamente en las maniobras que precedieron a la retirada del Panaro. Es de reseñar la muerte en la batalla de Madonna dell’Olmo (30-9-1744) de Juan Kindelan, hermano de Vicente, y capitán del regimiento de infantería de Ultonia. Esta batalla se produjo tras el sitio de la ciudad de Cuneo en el Piemonte entre el 13-9 y el 21-10 del 1744. El comandante supremo de las tropas españolas era el infante Don Felipe de Borbón y las tropas españolas eran dirigidas por el marqués de Las Minas. A pesar de la victoria en la batalla del 30-9, las tropas franco-españolas tienen que retirarse al otro lado de los Alpes haciendo una marcha muy dura por el hielo, la nieve y los ataques a los que eran sometidas. Batalla de Velletri El año 1744 es el más glorioso en los anales de la Brigada Irlandesa, por lo ocurrido en Velletri (localidad situada en los colli romani). El regimiento de Irlanda, a pesar de sus pérdidas en Campo Santo siguió luchando y marchó a Velletri. El ejército hispanonapolitano lo mandaba en persona D. Carlos rey de las Dos Sicilias, y en Velletri fue atacado por los imperiales el 17 de julio pero éstos fueron rechazados. Durante la batalla, el general francés Conde de Beaufort, ordena al regimiento de Irlanda que atacaran a la bayoneta a los austriacos en varios puntos, principalmente en las cumbres de la Fayola (13). El combate fue encarnizado y de nuevo mostraron los irlandeses su gran valor. 16 Sin embargo, los austriacos volvieron el 10-8 a recobrar lo perdido valiéndose para ello del efecto sorpresa. El regimiento de Irlanda ocupaba el frente de la puerta de Nápoles con el resto de su Brigada. El general Lobkowitz avanza resueltamente sobre nuestro flanco izquierdo, lo arrolla y atropellando los fugitivos a la brigada de guardias walonas, la obligan a desglosarse de la de Irlanda y a entrar en la plaza: el terror hace cerrar la puerta de Nápoles, dejando a los irlandeses rendidos a la ira de los imperiales. Los tres regimientos diezmados en la batalla de Campo Santo apenas habían podido reponer sus quebrantadas fuerzas, pero el honor y la lealtad los llamaba a morir con honra. Cébase el enemigo con el grueso de sus tropas sobre este puñado de proscritos; pelean heroicamente las legiones de Irlanda, Hibernia y Ultonia sin perder una pulgada de terreno y perecen en su mayor parte jefes, oficiales y soldados (13). Es decir, que al haber entrado el regimiento de guardias walonas para la defensa personal del Rey, se cierran las avenidas de la población, dejando fuera a los irlandeses. Esta legión se ve atacada por fuerzas inmensamente superiores y envuelta en una nube de fuego que arrebata la vida al mayor número. Por parte del regimiento de Irlanda, mueren en esta lucha el teniente coronel Daniel MacDonald, 11 capitanes y muchos subalternos, todos los cuales perecieron con el rostro vuelto al enemigo y dando pruebas de la mayor intrepidez. Pocos oficiales consiguieron salvarse y casi ninguno sin recibir honrosas heridas. Aunque el regimiento de Irlanda estaba reducido a menos de la mitas de su fuerza, los imperiales no adelantaron un paso más y nuestro ejército consigue rechazarlos por completo (13). El historiador italiano Castruccio Buonamici también habla de la actuación de la brigada irlandesa. La Brigada de Irlanda se apostó en Veletri cerca de la puerta llamada de Nápoles, la qual cerraron inconsideradamente los que allí montaban la guardia. Al mismo tiempo 4 batallones de Reales Guardias Walonas, apostados en las primeras líneas de nuestro flanco izquierdo, atropellados por el desorden, y confusa retirada de nuestra caballería, y embarazados con las muchas vueltas de aquellos intricados senderos, no pudieron socorrer a los de la Brigada de Irlanda; y entrando en la ciudad por algunos portillos de los muros casi arruinados, se dirigieron hacia aquella parte, en que no lejos de la casa de Ayuntamiento, esta, como ya se dixo, el Convento de los Franciscanos. Quedó, pues, la Brigada de Irlanda, destituida de todo socorro, sin poder entrar en la ciudad, por estar la puerta cerrada, ni retirarse por algún lado, hallándose por todas partes cercada, y oprimida de multitud de enemigos, y así pereció casi toda, peleando valerosamente hasta el último aliento. Murieron en este combate el coronel MacDonell comandante de la Brigada, 11 capitanes y muchos oficiales subalternos; que con los muchos años de servicio, y con muerte tan generosa dieron el último esmalte a la memoria de su fama, y al honor, que se adquirieron en la batalla de Campo Santo (Castruccio Buonamici, Comentarios o Memorias de la Sorpresa de Veletri, escritos en latin y traducidos al castellano por P. Bernardo Ariño de San Pablo, Madrid 1788). Según (15), el autor comete un error muy común de confundir MacDonald por MacDonnell, ya que no fue Daniel MacDonald sino MacDonnell, hijo del antiguo coronel Reynaldo MacDonnell, y no fue teniente coronel sino coronel. Don Daniel MacDonnell, who, on the 11th of August, 1744, fell, sword in hand, at the head of his regiment, and that of Hibernia, in a supreme effort to prevent General Count Browne’s forces from penetrating into the town of Velletri, where the King of Naples and the Spanish Commander-in-Chief had their headquarters. Although Castruccio Bonamici, himself an officer in the Neapolitan army, and present at the action, correctly describes him in his book as Magdonelius, all the italian authors who have written since about that battle, using Bonamici’s account of it very largely, insist on calling him MacDonald. 17 Este error también se comete en (24). Que Daniel MacDonnell fue coronel consta en una carta: Daniel, el primogénito fue nombrado coronel del Regimiento de Irlanda el 25-10-1741. Murió en la sorpresa de Velletri, función del día 11 de agosto de 1744 a la cabeza de su regimiento (Ricardo MacDonnell (hijo) a Don Ricardo Wall, Cataluña 2510-1760, (25)). El Rey no podía desentenderse de un sacrificio que está fuera de todo cálculo humano, y después de recompensar pródigamente a los que quedaron y a las familias de los que sucumbieron en su defensa, concedió a las banderas de los 3 regimientos el honor de estampar el Psalmo 18, versículo 4: “In omnem terram exivit sonus eorum” (13). Porta Napoletana, Velletri Entre los miembros del regimiento de Hibernia que murieron en Veletri están los capitanes Alejandro MacLean, Felipe McLaughlin, Juan McKire, Tomás Kindelan y Nicolas McCarty Reagh, el ayudante mayor Guillermo O’Dea, y los subtenientes O’Neill y Dringauld. Muchos años más tarde, Vicente Kindelan escribía al entonces rey Carlos III para solicitar su ascenso a Mariscal de Campo, y entre sus méritos destacaba la defensa que hizo de su Real persona cuando siendo Rey de las Dos Sicilias estuvo a punto de ser hecho prisionero en Velletri (ver Apéndice B). Tras la batalla de Velletri el regimiento de Irlanda se retira por la via de Roma a Sorpello, donde llega el 27-11 y poco después, el 26-12, se traslada a Montefalcone. En marzo de 1745 sale de Montefalcone hacia Bolonia. Campaña de Italia En 1745 el valiente regimiento irlandés marcha al territorio genovés donde siguió luchando; el 8 de mayo de 1745 cruza el río Magra por Sarzana, entre el 14-8 y el 3-9 de 1745 participó en el sitio y rendición de Tortona. En 1746 se establece en las márgenes del Po, frente a Cremona, donde permanece 6 meses dedicado a la defensa de la línea del Po. Más tarde refuerza la guarnición de Plasencia (Piacenza), que fue bombardeada por los austriacos, y participa en la batalla de Piacenza (16-6-1746), el ataque de Meretto y en la batalla del río Tidone (9-8-1746). En octubre de 1746 el Regimiento de Irlanda se retira a Niza y se acantona en Levenzo. El 22-1-1747 parte para Palma donde llega el 18-3 y es destinado a la guarnición de Mallorca. En la inspección de julio de 1747 Vicente Kindelan aparece como 18 comandante del segundo batallón (había ascendido el 12-6). Su edad 42 años (sólo tenía 37), capacidad buena, valor conocido, aplicación buena, conducta buena. Las funciones en que se allado; expedición, conquista y defensa de Orán, Montaña de monteFalone, fue uno de los del piquete que habanzo contra los moros de la derecha, vatallas del 21-11 de 1732 y 6-2 de 1733. en la guerra de Italia años 1733 y 1734 en calidad de Ayudante de Campo del Mariscal de Campo Don Reynaldo MacDonell. Conquista de los reynos de Nápoles y Sicilia, sitios de Baya, bloqueo y rendición de Mezina, bloqueo de Siracusa, en esta ultima guerra de Italia. Vatalla de campo santo, funcion y defensa de Veletry. el paso del rio magro, sitio y toma de Tortona, bombardeo y defensa de Plazencia, reduzion de la Lombardia, y en diferentes otras funciones que se ofrecieron xxxx que se omite por ser notorias. Según esta hoja de servicios, las acciones en las que participa Vicente en esta segunda Guerra de Italia son la batalla de Campo Santo (8-2-1743), Velletri (17-6-1744 y 10-8-1744), paso de río Magra (6-5-1745), sitio de Tortona (14-8 al 3-9 de 1745), batalla de Piacenza (16-61746) y rendición de Lombardía, aunque probablemente participara en muchos otros episodios menos importantes de dicha guerra. Campo Santo se encuentra a orillas del río Panaro cercano a Bologna, Velletri está al lado de Roma, el río Magra atraviesa la región Lunigiana y desemboca en La Spezia, Tortona está entre Genova y Piacenza y esta última se encuentra al sur de Milan. El 9-7-1746 muere Felipe V y sube al trono su hijo Fernando VI que dispuso una política pacífica nombrando jefe del ejército de Italia al Marqués de Mina y ordenándole que terminara la campaña de Italia. Como consecuencia de este cambio de política el regimiento irlandés regresa a España. Batalla de Culloden Al final de 1746 Vicente ha perdido tres hermanos (Tomás, Juan y Edurdo), y se ha distinguido por su valor en las principales batallas en las que participó el ejército español y en las que actuó como ayudante de campo del mariscal Reynaldo MacDonnell. Sin embargo, hay algunos datos contradictorios que conviene resaltar, pues en las cartas de Vicente Kindelan, y más tarde en las de su hijo Sebastián, sólo habla de 2 hermanos muertos en la guerra de Italia (ver apéndice A). Uno de ellos en la batalla de Madonna del Olmo sobre el sitio de Coñi (Cuneo) que parece ser su hermano mayor Tomás, Ayudante Mayor del Infante Don Felipe. Sin embargo, en (13) Tomás Kindelan aparece como una de las víctimas de Velletri. Una posibilidad sería que el Tomás muerto en Velletri no fuera hermano de Vicente y que su hermano Tomás muriera en Madonna dell’Olmo, pero esto es muy improbable pues en el Archivo de Simancas no existe documentación sobre ningún otro oficial Tomás Kindelan. La otra posibilidad es que la información de (13) fuera errónea y no hubiera ningún Tomás Kindelan muerto en Velletri. Esta posibilidad dejaría sin explicar la desaparición de Juan Kindelan, que aparece como teniente de Ultonia en 1737 y no vuelve a aparecer en ninguna otra inspección. Podría ser que hubiera muerto de muerte natural y por ello no aparece en las cartas de Vicente. En cuanto a su hermano Ultano, había permanecido de guarnición en Orán desde el 26-5-1739 hasta noviembre de 1745 (26). Durante este período pasó del regimiento de Irlanda al de Ultonia, ya que aquel dejó Oran en 1733 para pasar a Mallorca y más tarde a África. Mientras él estaba en Orán, su mujer, Justa Apeztegui, falleció en Murcia en 1742. Al regresar de Orán estuvo en Barcelona, donde contrajo matrimonio el 4-6-1745 con María Barnewall y Burck, viuda de Don Thomas Burck, teniente del regimiento de Hibernia muerto en la batalla de Campo Santo. María era hija de Miguel 19 Barnewall, capitán de granaderos del regimiento de infantería de Hibernia y de Doña Anna Barnewall y Colí. En su hoja de servicio de 1751 aparece como capitán de dicho regimiento de Ultonia, habiendo ascendido el 2-1-1739 (26). Entre las funciones en las que se había hallado se indica; fué a la expedición de Escocia con el Príncipe Eduardo, en donde fue hecho prisionero de guerra por los ingleses.y se quedó allí hasta el regreso del regimiento a España en febrero de 1749, una vez concluida la campaña de Italia (26). El príncipe Eduardo allí citado, no puede ser otro que el príncipe Carlos Eduardo Estuardo, Bonnie Prince Charlie para los ingleses, hijo del pretendiente al trono de Inglaterra, Jacobo III. Este fue el protagonista del último intento de los Estuardo por recuperar el trono de Inglaterra y en su ayuda acudieron muchos irlandeses exiliados. De los irlandeses al servicio de España fueron pocos los que tuvieron la oportunidad de acudir a la llamada del príncipe Carlos. Entre ellos se encontraron Ultano Kindelan, John MacDonald y Felix O’Neill, quien en 1737 era ayudante mayor del segundo batallón del regimiento de Hibernia (12). En 1745, tenía 30 años y pidió consentimiento al rey Fernando VI para pasar a servir a Carlos Estuardo que le recibió con cariño y aprecio, dándole el encargo de mayor general. En la triste batalla de Culloden libertó a su rey pero él mismo se quedó prisionero. Fue condenado a la pena de muerte y se le negó el consuelo de que le asistiese un confesor católico. Después de 15 meses en el castillo de Edimburgo se le puso en libertad a repetidas instancias y reclamaciones de los reyes católico y cristianísimo (12). De vuelta en España sería uno de los irlandeses al servicio de España que más alto relieve alcanzaría ocupando entre otros muchos puestos los de gobernador político y militar de Tuy, gobernador político y militar de Gerona (1780), gobernador político y militar de Barcelona (1782), comandancia general del Principado de Cataluña (1783) y capitán general de Aragón. Pero antes de describir este curioso episodio vamos a recordar algunos datos sobre la batalla de Culloden, la última que ha tenido lugar sobre territorio inglés. Jacobo II murió en 1701 y le sucedió su hijo Jacobo III, de 13 años, que reanimó a las tropas irlandesas en Francia creando 5 regimientos irlandeses que lucharon y se distinguieron en la campaña de Austria de 1701-1702. En 1715 Jacobo III hizo un llamamiento a sus tropas desde Escocia para intentar recuperar su trono, pero para entonces éstas estaban al servicio de Francia y no pudieron acudir a su llamada. Tras este fracaso, Jacobo III abandonó Francia para instalarse en Roma. Batalla de Culloden, Mark Churms 20 Desde entonces, hubo varios intentos a cargo de las veteranas y muy respetadas tropas irlandesas al servicio de España y Francia para volver a su patria y reclamar su nación. Pero estos intentos nunca llegaban a cuajar. El príncipe Carlos decidió desbloquear la situación y habiendo perdido la esperanza de conseguir ayuda efectiva por parte de Francia, organizó una pequeña expedición a Escocia con 2 barcos que le proporcionaron 2 comerciantes irlandeses. Los preparativos se llevaron con el mayor sigilo y ni siquiera su padre fue informado, pues Carlos pensaba que desaprobaría la expedición. Se embarcó el 5-7-1745, con 100 marineros, unos 2.000 mosquetes, y 500 o 600 espadas. Las personas que le acompañaron fueron el Marqués de Tullibardine (Duque de Athole para los Jacobitas), hermano mayor de Jacobo; Sir Thomas Sheridan, tutor de Carlos; Sir John Macdonald, oficial al servicio de España; Francis Strickland, caballero inglés; George Kelly, sacerdote; AEneas or Angus Macdonald, banquero de Paris, hermano de Kinlochmoidart; y O'Sullivan, oficial al servicio de Francia. Estos fueron conocidos como los "Siete Hombres de Moidart". El 9-7 tuvieron un combate con un buque inglés que les causó muchas bajas y uno de los 2 barcos tuvo que regresar a Francia. Por fín, el 23-7 desembarcaron en Eriska, una isla del oeste de Escocia. Desde aquí contacta con los jefes de varios clanes escoceses que en principio se niegan a ayudarle, pues contaban con que hubiera traído tropas, ya que sin ellas la aventura parecía desesperada. Poco a poco logra convencer a algunos jefes y les convoca para el 19-8 en Glenalladale, donde se le unirían los primeros clanes; Cameron, MacDonald, MacLeod y pronto reúne una fuerza de 1.200 hombres y una semana más tarde ya eran 2.000. Hacia el 5-9 el príncipe y sus hombres entran triunfalmente en Perth. Aquí se les unen otros caballeros como el Duque de Perth, Oliphant de Gask y, sobre todo, Lord George Murray, hermano menor del Duque de Athole, que tenía una larga experiencia al servicio del Rey de Cerdeña, y al que el príncipe Carlos nombró Teniente General de su ejército. En Perth se aprovecha para dar instrucción militar a los highlander escoceses. Estos hombres de las tierras altas, aunque eran totalmente fieles al príncipe Carlos, no tenían la más mínima noción de disciplina militar, y así era frecuente que se ausentaran sobre todo cuando necesitaban comida que la intendencia no les proporcionaba. El día 11 parten para Edimburgo y el día 16 entra en la capital de Escocia gracias a un plan que logra sorprender a sus defensores. Mientras tanto el General Cope al mando de su ejército de unos 2.100 hombres se aproxima a Edimburgo. El día 20 se produce la batalla de Preston que es el primer encuentro entre las tropas del Príncipe Carlos y los ingleses y que se salda con una aplastante victoria de aquellos. Las tropas jacobitas eran superiores en número (2.800 ya que en Edimburgo se unieron 800 nuevos highlanders) pero las de Cope tenían la ventaja de ser un ejército experimentado y disciplinado. Los jacobitas hicieron 1.600 prisioneros, entre ellos 70 oficiales, y sólo unos 170 soldados de infantería lograron huir. Por su parte solo murieron 4 oficiales y 40 soldados. Esta victoria llenó de entusiasmo al Príncipe Carlos que veía acercarse su sueño. Para ello necesitaba aumentar sus tropas y para ello empezó una nueva campaña enviando cartas y emisarios a todos los sitios donde podía encontrar ayuda. He encontrado en la Biblioteca Nacional un curioso libro que contiene una traducción de la carta que envió el Coronel escocés Caballero Olimphant al capitán del regimiento de Irlanda y Escocés de Dillon que se halla oy en Flandes (28). La larga carta está escrita en Perth el 21-9-1745, es decir justo después de la batalla de Preston. Se ve una gran euforia y seguridad en la victoria, y en ella se anima al capitan a unirse cuanto antes a las tropas del Príncipe. Por su interés, voy a reproducir algunos párrafos curiosos: Muy señor mio: ya podeis restituiros a vuestra patria nuestros reyes 21 legitimos han buelto a su trono... A continuación escribe una serie de elogios de Jacobo III y sigue: Discurrid si con estas disposiciones y nuestros valerosos Montañeses tenemos que temer de parte de las tropas Mercenarias del Elector de Hannover: el General Cope a quien hemos derrotado con su pequeña tropa de ingleses, conoce su valor. Nuestros diversos cuerpos de Ejercito se aumentan todos los dias con los voluntarios y los que sientan plaza. Los Salvajes de las Islas Hebudas y Orcadas, aquellos montañeses olvidados casi de la nacionalidad, bajan en Tropas de sus Montañas y Cuevas con sus mujeres e hijos para ver y reconocer al Hijo de sus Reyes legitimos... Más de 4.000 dellos han venido de el Poniente y de el Norte con sus armas mandados por sus Jefes. En Perth he visto parte de esta Milicia; componese de hombres muy bien hechos, pero de semblante cruel y feroz: acostumbrados al frio, no tienen mas ropa que una casaca de pieles que les llega a las rodillas, usan unas alpargatas de cortezas trenzadas a la Romana por encima de los tobillos, su comida es una mala harina de Avena, que deslíen con agua, pescado seco y caza; si estos hombres extraordinario son por su semblante solo terribles a los que son sus amigos, discurrid lo que serán contra aquellos con quienes han de pelear. El Principe los contuvo con su presencia, dandoles la mano con aquel semblante de benignidad que experimentamos todos los dias; su Jefe se acercó a su Alteza, diciendo con la mano en el pecho varias palabras en su lenguaje (irlandes antiguo), que el Ministro Glamorock explicó en estos terminos: Todos juramos morir por ti ... Se han incorporado muchos Oficiales, para procurar que marchen y hagan el ejercicio juntos, y sacar de ellos por este medio el mayor beneficio que sea posible; tiran muy bien y manejan el sable con la mayor destreza; nunca mostraron tanto celo y brio las Tropas irregulares de Alemania ... Para que estos hombres intrépidos, en quienes confiamos mucho no puedan retroceder, marcharan delante para romper los Batallones, y nosotros los sostendremos con nuestro Ejercito que vamos disciplinando con suceso: Comprende por aora 15.000 hombres (que optimismo) y 600 caballos. De todas las partes de Europa nos llegan todos los dias Paysanos Escoceses e Irlandeses de suerte, que con la asistencia de Dios, nos lisongeamos, que tendremos dentro de poco tiempo un Ejercito considerable y superior al de los Enemigos ... Venid pues a participar con nosotros de la gloria que grangeamos restableciendo a nuestros Reyes legitimos en el Trono de Escocia, no vengais el último a ofrecer vuestros servicios, nuestro Príncipe conoce a vuestra Casa, la estima y protege... (28). Como resultado de estos esfuerzos logró reunir al final de octubre una fuerza de 6.000 hombres con los que emprendió la marcha hacia Inglaterra después de pedir de nuevo ayuda a Francia. La razón para esta precipitación era el temor a deserciones si se prolongaba la inactividad y a que se agotaran sus escasos recursos económicos si se prolongaba la campaña. El 15 de noviembre entraron en Carlisle, el 29 en Manchester, y el 4 de diciembre en Derby. En pocos meses la expedición del Príncipe Carlos había logrado llegar a 127 millas de Londres. Sin embargo, los ingleses habían logrado levantar 3 ejércitos; el del Mariscal Wade con unos 10.000 hombres, el del duque de Cumberland, con 7.000-8.000 hombres, y otro ejército de unos 8.000 hombres formado en los alrededores de Londres. Por su parte, el ejército jacobita se había reducido a 4500 hombres, y aunque el Príncipe Carlos era partidario de seguir hacia Londres y enfrentarse al ejército de Cumberland, sus consejeros logran convencerle de retirarse hacia el norte y esperar la ayuda francesa. Francia, impresionada por las acciones de los jacobitas decide enviar ayuda fundamentalmente a partir de los regimientos irlandeses en Francia. A mediados de noviembre partió de Dunquerque una expedición de 1.000 hombres al mando de Lord Drummond. El 6 de diciembre comienza la retirada de los jacobitas hacia Escocia y detrás de ellos marchaban las 22 tropas del duque de Cumberland. El día de Navidad llegaron a Glasgow y el 4-1 llegaron a Stirling donde pocos días después se reunieron con las tropas de Lord Drummond llegando a ser un ejército de 9.000 hombres. El día 17 se produjo la batalla de Flakirk en la que los jacobitas, a pesar de su inferioridad numérica y su falta de profesionalidad, lograron una importante victoria sobre el ejército del General Hawley. Sin embargo, esta sería la última victoria de los jacobitas. El Duque de Cumberland, hijo del rey Jorge II, acudió a hacerse cargo del ejército que había sido derrotado por la ineptitud de Hawley. Por otra parte, muchos de los highlanders se habían marchado a sus tierras, dejando reducidas a 5.000 las tropas del Príncipe Carlos, y ello obligó a emprender la retirada hacia el norte de Escocia. Las tropas jacobitas se reunieron en Inverness seguidas de cerca por el ejército del Duque de Cumberland que llegó a Nairn, en las inmediaciones de Inverness, el día 154. La batalla era inminente y el Príncipe Carlos quería atacar para tener la iniciativa. Sin embargo, sus generales le convencieron del peligro de dicha acción por el estado de debilidad en que se encontraban sus hombres. Por la incompetencia de los responsables de la intendencia, sus tropas llevaban varios días sin prácticamente nada que comer. Muchos abandonaron el campamento para ir a pueblos vecinos a buscar algo que comer (se calcula que 2.000 hombres) y los que se quedaron estaban en un estado de gran debilidad. Ante esta situación decidieron que la única posibilidad era intentar un ataque sorpresa por la noche. Partieron al anochecer en columna de un hombre encabezados por Lord George Murray con la intención de llegar hacia las 2 de la mañana y encontrar a los soldados dormidos ya que estarían cansados por haber celebrado el cumpleaños del duque de Cumberland. Sin embargo, el cansancio y la dificultad del terreno les impedía seguir la marcha de Lord Murray y de los primeros regimientos. Tuvieron que ralentizar la marcha muchas veces para no descolgar a los retrasados y eso hizo que a las 2 se encontraran aún lejos de Nairn. Decidieron que en esas condiciones sería suicida intentar un ataque cuando ya hubiera amanecido por lo que emprendieron el regreso a Inverness. Llegaron exhaustos a las 5 de la mañana y recibieron órdenes de 23 desplegarse en formación en las proximidades de Culloden House donde habían decidido hacer frente a las tropas del Duque de Cumberland. Muchos se quedaron dormidos por agotamiento, otros se fueron a Inverness a intentar conseguir algo de comer y, entretanto, las tropas inglesas habían partido de Nairn hacia las 5 y a las 8 de la mañana llegaron a Culloden y comenzaron a desplegarse en el campo de batalla. A las 13 horas comenzó la lucha, y aunque los highlanders demostraron una vez más su fuerza y valor, su esfuerzo resultó inútil ante un ejército muy superior en cuanto a número de hombres, armamento y fortaleza. Hubo un gran número de muertos y los supervivientes intentaron retirarse hacia Inverness. Los soldados ingleses y su jefe el duque de Cumberland demostraron un odio y una crueldad inusual, persiguiendo a los que se retiraban y acabando con la vida de los que habían quedado heridos en el campo de batalla. Un comportamiento éste totalmente distinto al demostrado por los jacobitas tras sus triunfos. Las tropas inglesas tuvieron 50 muertos, entre ellos 4 oficiales, y 259 heridos, entre ellos 18 oficiales. No se conoce con exactitud el número de víctimas entre los jacobitas. Según estimaciones de la época hubo 2.000 bajas, y aunque esta cifra pueda ser exagerada, es seguro que murieron al menos 1200 hombres. Algunos regimientos y clanes perdieron más de un tercio de sus hombres y, por ejemplo, en el clan Mackintosh que fue el primero en atacar, perdieron la vida todos los oficiales menos 3. Las brutalidades de los ingleses continuaron varios días pues recibieron la orden de buscar en los campos y casas de las cercanías de Inverness highlanders heridos o escondidos y matarlos. El Príncipe Carlos decidió disolver su ejército y regresar a Francia. Sin embargo, la represión siguió por toda Escocia con una crueldad inusitada. El Duque de Cumberland ordenó buscar por toda Escocia highlanders y otros soldados del ejército jacobita y matarlos en el acto. El objetivo principal era, naturalmente, intentar localizar y ejecutar al Príncipe Carlos. Los destacamentos quemaron las casas y castillos de los jefes de los principales clanes y también quemaron multitud de casas de simples campesinos. El Príncipe Carlos consiguió llegar a las islas del oeste de Escocia y allí pasó varios días en que él y sus acompañantes permanecieron escondidos o de incógnito, viajando continuamente de un lugar a otro, y sufriendo todo tipo de necesidades. A finales de mayo se encontraba en South Uist pero había tantos destacamentos de tropas buscándole que resultaba demasiado peligroso permanecer allí. Con él solo permanecían Felix O’Neill, Burke, O’Sullivan y MacLeod, y a finales de junio tuvieron que separarse permaneciendo solamente en compañía de O’Neill. Este encontró a Flora MacDonald que era una ferviente servidora de los jacobitas, y le propuso que la única forma para salvar al Príncipe era disfrazarlo como si fuera su camarera y que de esa forma lo llevara a la ista de Skye. Así fue como Felix O’Neill salvó la vida del Príncipe Carlos que se despidió de él con tristeza pues sabía que su vida corría peligro. Así, a los pocos días de la marcha de Carlos cayó prisionero y iba a ser torturado por el capitán inglés que le había detenido para que confesara lo que sabía del paradero del Príncipe. Un teniente escocés al servicio de los ingleses sacó su espada y amenazó con matar al capitán si sometía a un oficial enemigo a un tratamiento tan inhumano, y de este modo pudo salvar su vida. Después de muchas otras aventuras el Príncipe Carlos consiguió llegar a Francia el 19-9-1746. Ultano Kindelan también fue hecho prisionero tras la batalla de Culloden, y permaneció en prisión hasta 1749. Es interesante leer la trilogía de Diana Gabaldón (29) sobre la batalla de Culloden, pues aunque es un relato novelado de los acontecimientos, refleja muy bien las circunstancias que rodearon a esa batalla y lo extremadamente duro que 24 era el tratamiento de los presos. Ultano logró sobrevivir y regresar a España, incorporandose como capitán al regimiento de infantería de Ultonia. Lo último que sé de él, es que en septiembre de 1754 está en Santiago a donde había llegado desde el Ferrol, y escribe una carta en inglés al Reverendo John O’Brien, rector del colegio irlandés de Salamanca. En ella habla de su mujer, que está recuperándose del nacimiento de un hijo, y de su hermana (de la que no sé nada). Guarnición en Ceuta A la vuelta de Italia, el Regimiento de Irlanda es destinado a Mallorca y en agosto de 1748 se embarca para Barcelona. Aquí permanece varios años realizando labores de guarnición por distintos puntos de Cataluña. Por esta época nacen los primeros hijos de Vicente y María Francisca; María Josefa, María Concepción (Badajoz, 1750), Tomás (1751), Bárbara (Badajoz 1752), Juan (Pontevedra, 7-12-1755) y Sebastián (Ceuta, 29-12-1757). Estos nacimientos nos indican los continuos desplazamientos del Regimiento de Irlanda y como María Francisca seguía a Vicente a todas partes sin que el matrimonio llegara a establecerse en ningún lugar. Según el libro de inspección de 1752 era coronel del regimiento de Irlanda el brigadier Reynaldo MacDonnell (segundo hijo del antiguo coronel Reynaldo MacDonnell y hermano de Daniel, los 3 coroneles del regimiento de Irlanda), de 41 años y 28 de servicio, 5 como brigadier y 2 como coronel. El teniente coronel era Joseph Comerford, de 33 años y 28 de servicio (empezó a servir con 5 años) que había sido nombrado teniente coronel en 1747. El sargento mayor con grado de coronel era Joseph O’Gara de 44 años y 28 de servicio, 2 como sargento mayor. El ayudante mayor era Daniel Slattery de 32 años y 15 de servicio, uno de ayudante mayor del primer batallón. El comandante del segundo batallón era Vicente Kindelan y su ayudante mayor, Eugenio O’Hara, de 34 años y 11 de servicio, 2 meses como ayudante mayor (30). En 1754 el Regimiento de Irlanda es destinado a Galicia, donde nacería su hijo Juan. En 1756 se embarca en Algeciras a bordo de los jebeques reales y marcha a reforzar la guarnición de Ceuta. En julio de 1757 los árabes ponen sitio a Ceuta y de esa forma permanecieron hasta el 11 de noviembre de 1759, en que al ver que no conseguían doblegar a los sitiados, decidieron retirarse. Tras este triunfo, el Regimiento de Irlanda es relevado y pasa a Barcelona (13). El día 22-7-1760, el teniente coronel Comerford recibió el mando del regimiento por ascenso del brigadier MacDonnell a mariscal de campo. Vicente Kindelan pasó a Ceuta el 10-6-1757 y allí permaneció 28 meses. A los 6 meses de su llegada nacía su hijo menor Sebastián. Invasión de Portugal La inspección de agosto de 1761 muestra los siguientes cambios (12): el antiguo teniente coronel Comerford fue elevado a coronel, el antiguo sargento mayor O’Gara a teniente coronel y comandante del segundo batallón. El antiguo ayudante mayor O’Hara a sargento mayor. El ayudante del primer batallón era Juan MacKenna de 34 años de edad y 21 de servicio. El Ayudante del segundo batallón era Juan Ryan de 42 años y 24 de servicio, 6 como ayudante mayor de este regimiento (30). La hoja de servicios de Vicente Kindelan muestra que había ascendido a teniente coronel graduado el 2-7-1760 con 50 años. Otros datos que aparecen en dicha hoja son (32); edad 54 años (en realidad tenía 51), estado casado, salud robusta, capacidad mucha, valor conocido, aplicación mucha, conducta muy buena. 25 Regimientos donde ha servido: de cadete en el de Dragones de Numancia, en el de Waterford, y después en este donde fue preferido a los empleos que arriba expresa. Ocasiones en que se ha hallado y justifica: Expedición Conquista y Defensa de Orán durante los diez primeros meses de su rendición, ataque de la montaña de Montefalcony xxx la Plaia de las Aguadas contra los Infieles, Batalla del dia 21 de Noviembre de 1732, y funcion del dia 6 de febrero de 1733 contra los mismos; conquista de Reyno de Nápoles en cuya guerra sirvio de voluntario y edecan de Don Reynaldo Macdonell, entonces Mariscal de Campo, y en ella se ha hallado en el sitio y toma de Baya, sitio del Castelnovo, Batalla de Vitonto, reduccion de la Plaza de Bary; bloqueo y sitio de Pescara, bloqueo y rendicion de la Ciudadela de Mesina y bloqueo de Siracusa, en toda la ultima Guerra de Italia en la Batalla de Campo Santo, funcion de Veletry del dia 11 de Agosto de 1744, en otra que huvo al paso del Rio Magra, sitio de la Plaza y castillo de Tortona, bombardeo y Defensa de Plasencia. en 10 de Junio de 1757 passo al socorro de Ceuta donde se ha mantenido 28 meses. Al final de la hoja se encuentra una nota que dice: Este capitan uso del quatrimestre en primeros de Septiembre de 1760 y se restituyo en tiempo habil. Tras la firma del pacto de familia entre Carlos III y Luis XV (15-8-1761) y la declaración de guerra contra Inglaterra (10-12-1761), un ejército español bajo el mando del Marqués de Sarriá avanza para invadir Portugal (1-5-1762). Al mando del brigadier Alejandro O’Reilly el regimiento de Irlanda formó parte de ese ejército por lo que ya en marzo de 1762 pasó a Castilla la Vieja. El 17-4 entró en Zamora (13), y el 5-5 cruzó la frontera con Portugal por Brandilanes y ocupó Constantim, apostándose en Ifanhes para cortar la retirada a la guarnición de Miranda. Antes de formalizar el sitio, se vuela accidentalmente el almacén de pólvora (9-5) lo que aprovecha el regimiento de Irlanda junto al de Ultonia para entrar por la brecha abierta por la explosión. Ese mismo día se rinde Miranda. El marqués de Sarriá estableció su cuartel general en Dos Hermanas y su falta de actividad hizo que se nombrara al conde de Aranda para dirigir las tropas. El regimiento de Irlanda también participó en la ocupación de Braganza, que se realizó el día 2 de agosto, el día 15 marcharon a Ciudad Rodrigo, y el día 20 a Galegos para comenzar el sitio de Almeida, que comenzó el 6 de julio y concluyó el 25-8 de agosto en que se rindió a los españoles. El 9-9 el Regimiento de Irlanda marchó a Cerveyra, y el 4-10 fue destinado a defender Castelho-Branco, donde permaneció hasta el 14-11 en que se acantona en la Zarza. El 26 de noviembre se firma el armisticio y el regimiento de Irlanda se traslada a Castilla la Vieja. Por la paz de Paris España devolvería lo conquistado en Portugal, cedería Pensacola y Florida a Inglaterra pero recuperaría la Habana, Manila y la Louisiana. El libro de inspección de 1765 (12) muestra la misma plana mayor con la excepción del ayudante mayor del primer batallón que es Nicolás O’Neill de 32 años y 13 de servicio, 2 como ayudante mayor. En 1763 el coronel Comerford fue nombrado brigadier. En la hoja de servicios de Vicente Kindelan aparece como Coronel Graduado, grado al que había ascendido el 25-4-1762, y se recogen los siguientes datos (33); Hedad 61 años (en realidad tenía 55), Pais Irlanda, Calidad Caballero, salud Robusta, estado Soltero (probablemente un error), Capacidad Mucha, Valor Distinguido, Aplicación Mucha, Conducta Muy Buena. Sirvió de cadete en el de Dragones de Numancia, en el de Waterford y lo que arriba expressa en este. Al margen aparece el informe del inspector: Para tener presente si vacare algun Regimiento Irlandes por razon del Grado de Coronel que tiene y sus servicios. En su historial militar se recogen los siguientes hechos: Expedicion, conquista y defensa de Oran durante los diez primeros meses de su rendicion, funcion de la Montaña de 26 Monte falcon, Batalla de 21 de Noviembre de 1732 y funcion de 6 de febrero de 1733. en la guerra y conquista del Reyno de Napoles año 1733 y 1734 en calidad de Aide de Camp del Mariscal de Campo Don Reynaldo Macdonnell, sitio y toma de Baya, sitio de Castel novo, Batalla de Bitonto, reduccion de la Plaza de Barry, sitio de Pescara, bloqueo, y rendicion de la ciudadela de Messina y bloqueo de Siracusa; en toda la ultima Guerra de Italia, Batalla de Campo Santo, funcion de Veletry dia once de Agosto de 1741. en otra que huvo al passo del rio Magra, sitio de la Plaza y Castillo de Tortona, bombardeo y defensa de Plasencia. estuvo al socorro de Ceuta donde se mantuvo 28 meses, campaña de Portugal y sitio de Almeida. En 1766 el Regimiento de Irlanda marcha a Guipúzcoa donde es destinado de guarnición a San Sebastián. La inspección de 1766 fue hecha por O’Reilly en San Sebastian el 31 de diciembre (12). Seguían en sus puestos el coronel brigadier Comerford, el sargento mayor Eugenio O’Hara y el ayudante mayor Nicolás O’Neill. El teniente coronel era Vicente Kindelan y su ayudante mayor Agustin Pierce de 33 años, 21 de servicio, y 5 meses como ayudante. Todos los datos de la hoja de servicios de Vicente Kindelan (34,35) son idénticos a los de la inspección del año anterior excepto su estado, que esta vez aparece como casado, y el informe del Inspector que dice; Para su reemplazo en la Coronela xxx tenerse presente quando vaque Regimiento de su Nacion por proporcionado su Grado de Coronel y merito, y para empleo de Plaza pues para todo tiene proporcion. Insurrección en Guipúzcoa Poco antes de esta inspección el regimiento de Irlanda y su Coronel, Vicente Kindelan, tuvieron un papel destacado en la pacificación de una insurrección acaecida en varios pueblos de Guipúzcoa y que amenazaba con extenderse a San Sebastián. Como veremos más adelante, estos sucesos aparecen relatados por primera vez en su hoja de servicios de 1772 (39), en la que se dice que Vicente Kindelan había sido empleado por el Capitan General de Guipúzcoa el Conde de Flegnies quien dispuso saliese de la plaza de San Sebastián en el añp de 1766 con el mando de 6 piquetes de tropa del mismo Regimiento de Irlanda y 900 Paisanos armados para contener Lapleve que con sediciosos, tumultos cometieron excesos contra la Justicia, Nobleza y Clero haviendo estado 11 meses empleado en esta comossion hasta que toda la provincia quedo quieta y apaciguada. En esa época el regimiento de Irlanda se encontraba en Pamplona de donde fue llamado por el Conde de Flegnies. He podido comprobar la veracidad de este episodio en una curiosa historia de San Sebastián escrita por Joaquín Antonio del Camino y Orella (1754-1819), presbítero y rector de la Universidad de Oñate, cuya primera edición data de 1870 aunque ha sido reeditado varias veces (40). En él se relatan los acontecimientos que dieron lugar a esa insurrección y el papel destacado que tuvo Vicente Kindelan y su regimiento en la pacificación de la provincia. Voy a reproducir aquí parte del relato de los acontecimientos protagonizados por esos precursores de Euskal Herritarrok que ya por entonces, mucho antes del nacimiento del nacionalismo vasco e incluso del carlismo, parece que ya habían inventado la kale borroka y ya contaban con una posición ambigua de la iglesia vasca. Los hechos se producen cuando acababa de morir Fernando VI y Carlos III había sido proclamado Rey: Nada basta muchas veces un acertado gobierno para precaver la ciega prevaricación del vulgo alucinado con el fanatismo. Así comprobó una triste experiencia en el reinado de Carlos III, que, aunque tan próvido, sufrió el año 1766 algunas conmociones populares, suscitadas por unos hombres de ínfima ralea. Madrid mismo 27 y Zaragoza se vieron consternados por aquel tiempo a causa de una peligrosa fermentación, cuyo fuego había encendido en ambas capitales la furia del populacho temerario y arrojado. Referir aquí los excesos cometidos por una infame turba en la metrópoli de Aragón, los robos, los incendios y otras ejecuciones trágicas, sería ajeno de nuestro intento; sólo sí diremos que la nobílisima y fiel provincia de Guipúzcoa vio por aquella época levantarse en su distrito algunos movimientos sediciosos que amenazaban a la pública tranquilidad, suscitados por la gente más baja a resultas de la escasez de granos y arreglo de medidas. Este peligroso tumulto, que si no se hubiese tirado a atajar desde los principios, ahogándole en su cuna misma, hubiera, sin duda, perturbado la quietud de las repúblicas, tuvo su fatal principio a 14 de abril de 1766 en la insolencia de algunos herreros de Azcoitia, que amotinados entre sí ejecutaron mil injustas extorsiones en aquella ilustre villa, obligando de viva fuerza a sus constituyentes a que bajasen el precio a los granos, y alterasen las medidas que se hallaban empadronadas a la de Avila. Propagose repentinamente el fuego de la disensión a la villa de Azpeitia, a donde pasaron los insurgentes de Azcoitia a media noche, obligando indignamente y con violencia a un caballero principal y tres sacerdotes a que les precediesen con hachas encendidas y una bandera, que llevaba uno de dichos sacerdotes. En aquella primera república fueron juntándose hasta 1.500 o 2.000 sediciosos de diferentes pueblos comarcanos, cometiendo los mayores atropellamientos, efecto de su obstinación, sin que bastasen las fervorosas amonestaciones de personas las más caracterizadas, y calificadas con el sacerdocio, entre ellas el cura de la parroquia, D. Ignacio Amotegui, a extinguir la llama abrasadora de estos levantamientos, que se fueron difundiendo con rápido progreso por otros lugares de la provincia. Arrebatados del espíritu de furor, y fuera de sí, hicieron terribles amenazas de que se meterían en número de 7.000 hombres en la villa de Vergara para matar algunos caballeros, y que darían fuego a las Reales Fábricas de Placencia. Rompieron a palos todas las medidas de granos que amontonaron en la plaza de Azpeitia, y hecha esta hazaña y la violencia de penetrar en algunas casas principales de aquella villa subiendo por los balcones, quebrantando ventanas y vidrieras con ánimo de ensangrentar su cólera y quitar la vida a sus dueños, quisieron interesar a la religión misma en los criminales desahogos de su furia, clamando se dirigiese una procesión solemne con la imagen de San Ignacio a su gran Santuario de Loyola. ¡Extrañas inconsecuencias de un vulgo desbocado y pertinaz: querer santificar unos excesos tan enormes con el falso pretexto de piedad y devoción, pero no las primeras oídas en el mundo! La ciudad de San Sebastian, sin embargo de que nunca podía temer mucho, por su presidio y fortaleza, a un tropel confuso de rebeldes indisciplinados, sin guía, sin concierto, y sin dirección alguna en sus operaciones, recelose no obstante con fundamento que habiéndose acercado ciertas partidas de vagos insurgentes a los pueblos inmediatos que la rodean, como Zarauz, Usúrbil y Urnieta, podría acaso fomentarse dentro de sus muros algún principio de descontento e inquietud popular por el mal ejemplo y comunicación de aquéllos, pues nada es más fácil que tomar cada día mayores incrementos el monstruo de la rebelión, mientras no procure una cuidadosa vigilancia la entera extirpación de esta cruel hidra destructora de los vínculos de la sociedad civil. Deseosa, pues, la ciudad de la tranquilidad común, determinó una expedición militar a las villas de Azpeitia, Azcoitia y otros parajes, donde amenazaban más las fatales resultas de la insurrección, y eran Elgóibar, Eibar, Placencia, Motrico, Deva, Beasain, Idiazábal, con otros pueblos interiores de la provincia, formando repentinamente hasta seis compañías de sus vecinos y moradores, las cuales salieron en número de 300 y más hombres el 22 de abril, 28 comandadas por el Alcalde D. Manuel Antonio de Arriola y Corral, y agregándose a ella otras partidas de gente de Oyarzun, Rentería, Urnieta y Hernani, llegó a juntarse un cuerpo de 1200 hombres. Para emprender esta jornada fue menester que primero fuese requerida la provincia y diese su consentimiento, como lo ejecutó, y para mayor abundamiento mereció esta empresa particular la aprobación del Consejo, a quien hizo presente la ciudad, como también la provincia misma, por medio de representaciones dirigidas a su presidente el Conde de Aranda, cuanto se había obrado sobre el particular. Habiendo, pues, partido de San Sebastián y sus alrededores las tropas de paisanos en buen orden de disciplina, y destacándose además otros 300 hombres arreglados del Regimiento de Irlanda, que por entonces guarnecía esta plaza, bajo el comando de su Coronel D. Vicente Kindelan, los cuales había franqueado gustoso el Conde de Flegnies, Capitán General de las Armas de Guipúzcoa, vinieron a juntarse en la villa de Hernani, y continuando su derrota por la de Andoain, Asteasu y la venta de Iturrioz, llegaron el día 24 a Azpeitia y Azcoitia, principal teatro del motín, donde después de habérsele agregado nuevos refuerzos de gente lúcida, sin exceptuar los caballeros y títulos de la nobleza, entre ellos los Marqueses de San Millán y de Narros, el Conde de Peñaflorida y otros condecorados sujetos, quienes voluntariamente se ofrecieron en línea de meros soldados rasos a vindicar con su conducta el honor y crédito Guipúzcoano contra el bárbaro atentado de los insurgentes, fueron prendiendo desde el mismo instante a 75 de los reos en Azpeitia, y en Azcoitia otros 25 principales jefes de la rebelión. Continúa el relato de los sucesos que paso a resumir; el día 24 la Diputación nombró a Manuel Antonio de Arriola Comandante de las compañías de paisanos alistados para perseguir a los perturbadores del público sosiego. Por esa época en Elgóibar, Deva y Motrico unos 800 hombres armados con fusiles hicieron enormes excesos. Obligaron al Ayuntamiento de Motrico y al cabildo eclesiástico a bajar el precio de los granos, reducir las medidas, a que los eclesiásticos no llevarán derechos por la administarción de sacramentos, ...Fueron obligados con amenazas de muerte. También fueron a Ondarroa, Berriatúa y Marquina en Vizcaya e hicieron las mismas cosas. Ya por entonces algunos de estos delincuentes se refugiaban en las Iglesias y así, con fecha 28 de abril escribió Arriola al Alcalde de San Sebastian para consultar si debía valer la inmunidad eclesiástica a 50 reos que se habían acogido al taller del Santuario de Loyola. El 5 de mayo fueron conducidos a Tolosa 50 prisioneros y al día siguiente entraron en San Sebastian. El 16 de mayo se resolvió que se retirara la compañía de paisanos alojada en Azpeitia y Azcoitia ya que un batallón del regimieto de Ibernia se había esparcido por varios pueblos de esa provincia y en las villas de Azpeitia y Azcoitia habían de permanecer 3 piquetes del de Irlanda (40). Por estas fechas se produce el ingreso de sus hijos como cadetes del regimiento de Irlanda; Juan ingresa el 29-6-1764 y Sebastián el 18-11-1768. Asimismo, su sobrino Patricio era cadete desde el 2-12-1763. El 27-7-1768 Vicente Kindelan es nombrado Coronel del Regimiento de Irlanda, cargo en el que reemplaza al Brigadier Jose Comerford. Expedición a la Habana En 1771 el regimiento de Irlanda se encuentra en la Habana aunque desconozco su fecha de llegada y su tiempo de permanencia. Es probable que su llegada estuviera relacionada con la expedición del General Alejandro O’Reilly, al que en 1769 Carlos III había encargado ponerse al mando de las tropas que debían pacificar la revuelta de los franceses de la Louisiana y devolver el control de esos territorios a la corona 29 española. O’Reilly salió de Cádiz a finales de abril, llegó a la Habana el 24 de junio y el 6 de julio estaba preparado para partir con un ejército de 2.000 hombres. El 17 de agosto desembarcaron en Nueva Orleáns y al día siguiente se rindieron los franceses, asumiendo O’Reilly el cargo de Gobernador y Capitán General de la Louisiana. No hay ninguna referencia a estos hechos en las hojas de servicio de Vicente Kindelan por lo que o bien no participó en ellos y permaneciera de guarnición en la Habana, o no los consideró de importancia para incluirlos en su ya muy extensa hoja de servicios. Sí sabemos por la carta que escribió en abril de 1772 para solicitar su ascenso a Brigadier (ver Apéndice A) que la expedición fue una experiencia muy dura para el regimiento ya que perecieron del intemperio del Pais diez y ocho Oficiales del mismo cuerpo, y todos los demas estubieron gravemente enfermos. A estas bajas hay que añadir la de su hija, María de la Concepción, casada con Felipe O’Sullivan, Conde de Bearhaven, que fallecía el 2 de agosto de 1771 y era enterrada en la Catedral de la Habana. Estando en la Habana sus hijos Juan y Sebastián, se concede permiso de 1 año con fecha 22-6-1771 para que Juan Kindelan, teniente del Regimiento de Irlanda, destinado en La Habana, pueda concluir sus estudios en el Colegio de Nobles de la de Villa Madrid. Cádiz, Mayo de 1772 Cádiz, Abril de 1772 En abril de 1772 el regimiento de Irlanda se encuentra en Cádiz tras su regreso de Cuba. En la inspección de mayo de 1772 aparece como coronel del Regimiento de Irlanda Vicente Kindelan, “inteligente, aplicado, celoso”. El Teniente coronel era Carlos O’Donnell, 56 años y 38 de servicio, y el Sargento mayor Joseph O’Donnell, 50 años y 33 de servicio (12). En la hoja de servicios de Vicente Kindelan bajo Campañas, y acciones de Guerra en que se ha hallado se recogen los siguientes datos: En Oran, al tiempo de su conquista desde junio de 1732 hasta marzo de 1733. en la primera Guerra de Italia desde el año de 1733 hasta el de 1736, en la ultima Guerra de Italia desde el año de 1742 hasta el de 1746, en Ceuta al tiempo que la plaza estava atacada por los infieles desde junio de 1757 hasta noviembre 1759. Y en toda la ultima Guerra de Portugal, Batallas, a la de 21 de noviembre de 1732. Y en la de 6 de febrero de 1733 contra los infieles a la immediacion de Oran, Campo Santo, y Tidone, Sitios, Baya, Castelnovo, Casteldelobo, Santelmo, Pescara, Siracusa Tortona y Almeida, funciones, abanse del monte delos Galápagos y rechazo de los moros de el, el dia después del desembarco en la playa de Las aguadas, junto a Masalquibir, reduccion y toma de la plaza de Barry Bloqueo de la Ciudadela de Messina y su rendicion, Beletry los dias 16 de Junio y 11 de agosto de 1744. passo del Rio Magra en el genovesado, defensa y Bombardeo de Plasencia y las 2 que huvo en las Boquetas junto a Genova (39). 30 También aparece bajo Comission que del Real Servicio se Fiaron a Su Cargo los siguientes datos; A sido empleado por el Conde de Ytre y por el marques de Croix en el año de 1739 para formar los tres Batallones que ala orden de Dn Sebastián de eslava passaron a Cartagena de Indias; en Italia por el Inspector DnNicolas de Carvajal para la revission y examen de cuentas del Regimiento de Castilla, por el Capitan General de Guipúzcoa el Conde de Flegnies quien dispuso saliese de la plaza de San Sebastián en el año de 1766 con el mando de 6 piquetes de tropa del mismo Regimiento de Irlanda y 900 Paisanos armados para contener Lapleve que con sediciosos, tumultos cometieron excesos contra la Justicia, Nobleza y Clero haviendo estado 11 meses empleado en esta comossion hasta que toda la provincia quedo quieta y apaciguada: por el Inspector General DnAlejandro O’Reilly la Subinspeccion del Regimiento de Voluntarios estrangeros quando se formava en zaragoza. También aparece una nota del Inspector que dice; Inteligente, aplicado y zeloso y digno de las gracias de S.M. por sus muchos y buenos servicios. Al año siguiente, el 16-1-1774 Vicente Kindelan ascendía a Brigadier por decreto del Rey Carlos III dado en el Pardo y firmado por D. Ambrosio Funes de Villapando, Conde de Ricla (42). Este grado lo había solicitado en abril de 1772 (apéndice A). En 1774 el sargento mayor Joseph O’Donnell ascendió a teniente coronel y el antiguo ayudante mayor Juan McKenna, que era sargento mayor del regimiento de Hibernia, pasó al mismo puesto en este de Irlanda (12). En la hoja de servicios de Vicente Kindelan (41) aparecen los mismos datos que en la de 1772. Gobierno de Navarra Otra vez bajo las ordenes de O’Reilly, el regimiento de Irlanda formó parte en 1775 de la desgraciada expedición a Argel, que se había convertido en el principal centro de las operaciones corsarias. Parece, sin embargo, que a Argel solo fueron las 2 compañías de granaderos, mientras que el resto del Regimiento pasó a Andalucía (13). No aparece ninguna referencia a este hecho en las hojas de servicio de Vicente Kindelan. Probablemente la razón para esta omisión se deba a que Vicente no participó en la citada expedición ni permaneció en Andalucía, ya que en esa época ocupó el puesto de Gobernador de Navarra. Esto lo encontramos referido en su hoja de servicios de 1785 (42), donde dice que estuvo 14 meses ocupando ese puesto, y en la Enciclopedia General del País Vasco (43), donde dice que durante 1775 fue comandante militar interino del Reino de Navarra. Gobierno de Zamora En la hoja de servicios de la inspección de diciembre de 1776, y bajo el apartado, Campañas, y acciones de Guerra en que se ha hallado, aparecen los siguientes datos (44); En Oran, al tiempo de su conquista desde junio de 1732 hasta marzo de 1733. En la primera Guerra de Italia desde el año de 1733. En la ultima Guerra de Italia desde el año de 1742 hasta el de 1746. En Ceuta al tiempo que la plaza estaba atacada por los Infieles desde junio de 1757 hasta noviembre de 1759: Y en toda la ultima Guerra de Portugal, Batallas, a la de 21 de noviembre de 1732. Y en la de 6 de febrero de 1733 contra los infieles en la inmediacion de Oran; A la de Vitonto, Campo Santo, y Tidone, Sitios, Baya, Castel nobo, Castel del Obo, Santelmo, Pescara, Siracusa Tortona y Almeida. Funciones, Abanze del Monte de los Galápagos, y rechazo de los Moros de él, el dia después del Desembarco en la playa de Las Aguadas, junto a Masalquibir, reducción, y toma de la Plaza de Barry Bloqueo de la 31 Ciud. de Mesina, y su rendicion, Beletry los dias 16 de Junio y 11 de agosto de 1744. Paso del Rio Magra en el Genobessado. Defensa, y Bombardeo de Plasencia, y las 2 que huvo en las Boquetas junto a Genova. Bajo el apartado Comisiones que del Real Servicio se fiaron a su cargo aparecen los siguientes datos(44); Ha sido empleado por el Conde de Ytre y Marques de Croix en el año de 1739 para formar los tres Batallones que a la orden de Dn Sebastián de Eslaba pasaron a Cartagena de Indias. En Italia por el Inspector DnNicolas de Carbajal para la revision y examen de cuentas del Regimiento de Castilla. Por el Capitan General de Guipúzcoa el Conde de Flegnies, quien dispuso saliese de la Plaza de San Sebastián en el añp de 1766 con el mando de 6 Piquetes de tropa del mismo Regimiento de Irlanda, y 900 Paisanos armados para contener la Pleve que con sediciosos, tumultos cometieron excesos contra la Justicia, Nobleza y Clero, habiendo estado 11 meses empleado en esta Comosion, hasta que toda la Provincia quedo quieta, y apaciguada. Por el Inspector General Dn Juan Alexandro O’Reilly la subinspeccion del Regimiento de Voluntarios Extranjeros, quando se formaba en Zaragoza. Está firmado por Juan Mackenna. Hay también una nota escrita por Vicente Kindelan, que es muy difícil de leer por lo mucho que le tiembla el pulso, y que dice algo así; estoy conforme con los informes de mi Inspector General y mis demas Generales dieron de mi valor, aplicación, capacidad y conducta (44). También hay una nota a mano añadida posteriormente que dice; Este Coronel obtubo el Gobierno de Zamora. En efecto, en 1777 Vicente Kindelan es nombrado Gobernador Político y Militar de Zamora. Joseph O’Donnel asciende a coronel y le sustituye en el mando del Regimiento de Irlanda; Este coronel es muy activo, celoso y exacto; está lleno de funciones y meritos de guerra; tiene el regimiento en sobresaliente estado de disciplina e interior gobierno, y por su aplicacion, talentos y experiencias es acrehedor a que S.M. atienda a este recomendable oficial. El teniente coronel era el antiguo sargento mayor Juan McKenna. Ayudante mayor del primer batallón Juan Naughton, 33 años y 14 de servicio, “exerciendo funcciones de sargento mayor”. Patricio Kindelan de 31 años y 13 de servicio era ayudante mayor del segundo batallón. Vicente permanecería en Zamora hasta su muerte en 1786, siendo esta la primera vez en su vida que se establece en un mismo lugar por un periodo largo. No tengo mucha información de su actividad en estos años en Zamora. Zamora, Julio de 1779 El 24-7-1779 escribe una carta al Rey solicitando 2 meses de permiso para acudir a San Ildefonso a resolver asuntos propios (ver Apéndice C). La carta va acompañada de otra del Marqués de Monreal, que está dirigida al Conde de Ricla, y en la que apoya la solicitud de Kindelan. Con fecha 14 de agosto se concede la licencia solicitada. Sin embargo, hay otra carta del Conde de Ricla relacionada con esta solicitud, pero de difícil interpretación; El Rey ha oido con satisfaccion la solicitud de V.S. de ser empleado en las presentes ocurrencias de Guerra reconociendo en esta 32 demostración el zelo, y amor que le merecen su persona, y servicio; pero como S.M. tiene determinado no destinar a oficial alguno de cualquiera graduacion que sea en la clase de suelto, o voluntario; y por otra parte se hace cargo que todos sirven con utilidad en sus respectivos destinos, no ha tenido por conveniente acceder a los deseos de V.S., a quien lo comunico de su Rl. Orden, para su inteligencia. Dios gue a V.S. ms. as. Sn Ildefonso, 12 de Agosto de 1779. = Ricla = Sor Dn Vicente Kindelán A pié de página hay una nota añadida que dice; Corresponde con la Carta original que se me exivió, y debolvi al Cavallero Governador de esta Plaza, de que certifico como Comisario de Guerra de los Rs. Exercitos, y Tente Coronel de Infanta. Zamora, 16 de Agosto de 1785. Esta contestación no parece tener ninguna relación, al menos directa, con la solicitud de licencia de Vicente Kindelan. Quizás sea la contestación a otra carta que no se encuentra en su expediente personal, o quizás esté relacionado con el motivo de su pretendido viaje a San Ildefonso donde se encontraba el Rey. Lo que parece desprenderse es que a sus 69 años, Vicente no está acostumbrado a la vida sedentaria y quiere participar y contribuir a una cierta acción de guerra. Podría tratarse del sitio de Gibraltar, que comenzó el 12 de julio, o quizás de la frustrada invasión de Inglaterra por parte de fuerzas franco-españolas, y que justamente en esos días (14-81779) el mal tiempo había obligado a la escuadra hispano-francesa a refugiarse en Brest. Por su historia y la de su familia esta acción sí que le haría abandonar su descanso en Zamora y le devolvería la ilusión de poder volver a su tierra. El 5-7-1781 nacía en Zamora su nieta Felipa Cagigal y Kindelan, hija de Fernando Cagigal y Martínez, Marqués de Casa Cagigal, y de su hija Barbara. Probablemente Barbara viviría con sus padres en Zamora o vendría allí a dar a luz. Esta era su segunda nieta, pues antes había nacido Vicenta Cagigal Kindelan. Años más tarde, Felipa Cagigal se casaría en segundas nupcias con su tío Juan Kindelan O’Regan. Zamora, Agosto de 1783 En agosto de 1785, tras 62 años y 6 meses de servicio, Vicente Kindelan solicita al Rey Carlos III el ascenso a Mariscal de Campo. No llegaría a lograr este último ascenso pues en abril de 1786 fallecía en Zamora tras una larga vida dedicada al servicio de España, en la que recorrió España e Italia, estuvo en América y participó en las principales batallas de su tiempo. En su testamento de fecha 26-4-1786 nombra herederos a sus hijos Juan, Sebastián y Barbara. 33 Referencias 1- Archivo Histórico Nacional, Ordenes Militares, Santiago. Pruebas de Caballero de Sebastián O’Kindelan y O’Regan, Caja 1102, Expte. 5803 (1789). 2- Historia de Familias Cubanas, Francisco Xavier de Santa Cruz y Mallen, Conde de San Juan de Jaruco y de Santa Cruz de Momox, La Habana, editorial Hércules (1940). 3- The Civil Survey 1654-1656, Ed. R.C. Simington, Published by the Stationary Office, Dublin (1940). 4- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Hibernia (Thomas Kindelan), legajo 2591, c-4 f-9, 1737. 5- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Limerick (Ultano Kindelan), legajo 2564, c-7 f-68, 1724. 6- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Ultano Kindelan), legajo 2598, c-2 f-86, 1731. 7- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Ultano Kindelan), legajo 2598, c-4 f-27, 1733. 8- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2598, c-2 f-87, 1731. 9- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2598, c-6 f-28, 1734. 10- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Ultano Kindelan), legajo 2564, c-6 f-24, 1718. 11- The Boyne and Anghrim, John Kinross. 12- Los Irlandeses al servicio de España 1700-1818, Tesis de Sister Marie Christine Fitzgerald, Director de Tesis Cayetano Alcazar, Filosofía y Letras, Universidad de Madrid, 30-4-1954. 13- Historia orgánica de las armas de infantería y caballería españolas, Serafin María de Sotto, Conde de Clonard, 16 tomos, Madrid 1851. 14- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Guerra Moderna, legajo 1815. 15- Notes on some Irish Regiments in the service of Spain and of Naples in the eighteen century, the Marquis MacSwiney of Mashanaglass, Proceedings of the Royal Irish Academy, Vol. 37, N. 9, 1927. 16- Calendar of the Stuart Papers, Vol. 7, p. 110, London, 1923. 17- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Guerra Moderna, legajo 2562. 18- Conquista de Nápoles y Sicilia, Duque de Berwick, Madrid 1890. 19- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Guerra Moderna, legajo 2598. 20- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2598, c-4 f-28, 1733. 21- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2598, c-10 f-39, 1737. 22- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Hibernia (Eduardo Kindelan), legajo 2591, c-4 f-78, 1737. 23- A history of Ireland, Curtis, London, 1936 24- La Batalla de Campo Santo, 1743, Maximilian Ritter von Hoen, Dragona, N-3, 3137, septiembre 1993. 25- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Guerra Moderna, legajo 6032. 26- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Ultonia (Vicente Kindelan), legajo 2669, c-2 f-3, 1751. 27- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Guerra Moderna, legajo 2568. 28- Carta del Cavallero Olimphant, Coronel Escocés a Capitan del Regimiento Irlandés y Escocés de Dillon, que se halla oy en Flandes, su fecha en Perth a 21-9-1745 en que se refieren las prendas del Principe Real, el numero de sus tropas y la proclamación de Jacobo III, Rey de Escocia e Irlanda. Traducida por el Doctor D. 34 Juan de Lacy, Calificador del Santo Oficio y Capellán Mayor de la Real Iglesia y Casa de San Antonio de los Alemanes de la Corte de Madrid. 29- Forastera, Viajera, Atrapada en el tiempo, Diana Gabaldón, EMECÉ, 1992. 30- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Guerra Moderna, legajo 2599. 31- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra, Expedientes Personales, legajo 28. 32- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2599, c-4 f-8, 1761. 33- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2599, c-6 f-4-6, 1765. 34- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2599, c-7 f-5, 1766. 35- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2599, c-8 f-2, 1766. 36- Oran y Mazalquivir, Federico Obanos Alcalá del Olmo, Cartagena, 1912. 37- Presencia de España en Orán 1509-1792, Gregorio Sanchez Doncel, Toledo 1991. 38- Rasgo Épico de la Conquista de Orán que a la diversion de los Oficiales de los Regimientos de Guardias Españolas y Uvalonas dedica la ociosidad de un compañero suyo, Antonio García y Vergel, En Madrid, en la imprenta de Geronimo Roxo: y se hallará en la Librería de D. Juan de Oliveras, frente de San Felipe el Real, 20-10-1732. 39- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2600, c-1, f-1, 1772. 40- Historia Civil-Diplomática-Eclesiástica Anciana y Moderna de San Sebastián, Joaquín Antonio del Camino y Orella (Presbítero), Valverde 1963. 41- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2600, c-2, f-1, 1774. 42- Archivo de Simancas. Expedientes Personales, legajo 28, 1774. 43- Enciclopedia General del País Vasco, Diccionario Enciclopédico Vasco, Vol. 21, Editorial Auñamendi, 1986. 44- Archivo de Simancas. Secretaría de Guerra. Regimiento de Infantería de Irlanda (Vicente Kindelan), legajo 2600, c-3 f-8, 1776. 35 APÉNDICE A Carta de Vicente Kindelan, enviada desde Cádiz y con fecha 3-4-1772 en la que solicita ascenso a Brigadier (31). En el margen aparece Excelentísimo Conde de Ricla, que sería quien despacharía la carta. El Conde de Ricla era Don Ambrosio Funes Villapando. Señor. El notable atraso q. padezco en mis regulares ascensos, durante el espacio de cincuenta años, q. tengo el honor de servir sin intermicion de tpo. a S.M. (que Dios gue.) en las clases de Cadete, Subtheniente, Theniente, Ayudante Mayor, Capitán, Comandante de 2º Batallón, theniente Coronel, y Coronel, me motiva recurrir al amparo de V.E. suplicándole rendidamente se digne interponer sus poderosos influjos para mejorar la poca fortuna q. he tenido en mi desgraciada carrera; siendo q. en las dos ultimas promociones de Brigadieres, algunos demis modernos me han sido preferidos a esta clase; y aunque son sujetos de mucho merito; presumo q. no he tenido menor en el concepto demis superiores, y que por los Libros de servicios, cónstael aplauso general conque mis otros superiores me favorecieron, y manifestaron el amor y zelo conque siempre he servido al Rey, en las diferentes Campañas, Batallas, citios de Plazas, y funciones particulares enque me he hallado; como tambien demi cumplimiento en las Comissiones q. del Real servicio se fiaron a mi cargo. En la ultima Guerra de Portugal, he tenido el honor de ser Coronel del Destacamento que V.E. mandava, haciendo la retaguardia del exercito desde dos Iglesias hasta Zamora y me persuado q. V.E. abra tenido informes demi amor, y Zelo al Real servicio, y del sacrificio padecido por mi familia en la ultima Guerra de Italia en q. he perdido dos hermanos Oficiales de muchíssima esperanza; uno de ellos en la Batalla de Nuestra Señora del Olmo, sobre el citio de Coñi; y el otro en la de Campo Santo, como tambien otro en una funcion contra los Infieles de Orán; a quienes la intempestiva muerte, cortó el proceso de sus fortunas, evidenciado ya por los aplausos de sus meritos; y creo q. tubieron el honor de ser conocidos de V.E. especialmente el mayor de ellos Don Thomas Kindelán que sirvió de Ayudante Mayor General del exercito q. mandava S.A. Real el Señor Infante Don Phelipe. Pero no obstante todo lo qual; creo soy el solo Coronel ala Infantería delos q. se hallaron en la Guerra de Portugal q. no haia sido promobido a Brigadier; aunque dudo haia enel exercito otro q. tenga tantos servicios, ni funciones de Guerra q. yo, por haverme hallado en la conquista de la Plaza de Oran, en las dos Guerras de Italia, y en la ultima de Portugal; a cuios meritos semepermitira añadir el q. últimamente he contraido en la Plaza de la Havana, donde perecieron del intemperio del Pais diez y ocho Oficiales del mismo cuerpo, y todos los demas estubieron gravemente enfermos; sirbiendome tambien de mucha mortificacion el verme excluido delas gracias últimamente concedidas por S.M. en la distincion delas pequeñas cruzes q. concedió a diferentes del exercito. En concideracion de todo lo qual; confio q. la bondad de V.E. tan conocida para proteger a los q. caresen de proteccion tendrá presente mi atraso para quando ocasión se ofresca a subsanarle, siendo que; nadie mejor q. V.E. conoze lo sencible q. es a qualquier Oficial de honor, (y q. contra su conducta no se puede imputar tacha alguna) el verse pospuesto por sus modernos, y no compreendido en las frecuentes gracias concedidas por el gloriocissimo Soberano; aunque todavía no pierdo las esperanzas de q. por intersección de V.E. conciga dela Real clemencia el Grado de Brigadier y la distinción de que se me conceda la gracia de una de las pequeñas cruzes de nueba creaccion. Suplica a V.E. de disimular este importunio a vista delos motivos q. le produzen; y resiba benignamente las beras conque ruego a Dios que prospere, y guarde en su mayor grandeza la importante vida de V.E. los muchos y felizes años que deseo. Cadiz 3 de Abril de 1772 Excelentisimo Señor Blm de Va su mas atento obsequioso servidor Vicente Kindelan 36 APÉNDICE B Carta de Vicente Kindelan, enviada desde Zamora y con fecha 16-8-1785 en la que solicita ascenso a Mariscal de Campo (31). Está dirigida al Rey Carlos III. Señor, Don Vicente Kindelán Brigadier de los Reales Exercitos, Governador Militar y Politico de la Plaza de Zamora A L.R.P. de V.M. con el mayor rendimiento expone que sin intermisión de tiempo sirve a V.M. el largo espacio de 62 años y 6 meses, en los varios empleos y funciones de Guerra que manifiesta la adjunta relacion de sus servicios, de los quales estubo 32 años y 3 meses en los empleos de Comandante, Teniente Coronel, Coronel, y Brigadier del Regimiento de Irlanda en que ha contrahido su merito, hasta que se le conferio el Govierno de esta Plaza, en cuyo desempeño ha merecido siempre la aprobación de sus Generales, y de quantos le han mandado, asi en las ocurrencias generales del Real servicio, como en los encargos particulares que de él en repetidas ocasiones fiaron a su conducta señaladamente en la primera Guerra de Italia en que sirvio el suplicante de Ayudante de Campo del Teniente General Don Reynaldo MacDonell, estando S.M. a la caveza del Exercito, quando conquistó los Reynos de Nápoles y de Sicilia; y en la ultima guerra de Italia se halló a la gloriosa defensa de la Real Persona de V.M. quando el dia 11 de Agosto de 1744 intentaron los enemigos de sorprender el Quartel Real de Beletry: Estos meritos contrahidos en 62 años y 6 meses de servicios, produce a V.M. los de quatro hermanos y dos tios carnales; tres de los primeros fallecieron en el glorioso campo de Batalla, todos oficiales bien conceptuados en el Exercito: En cuya atencion, y en la de padecer el suplicante mucho atraso en sus ascensos Suplica rendidamente a V.M. que en remuneración de los dilatados servicios del suplicante y del esmero con que desea continuarlos hasta su ultimo aliento; sea de su Real agrado de conferirle el grado de Mariscal de Campo, cuyo ascenso aunque no aumenta el sueldo que actualmente goza, ni causará gasto alguno al Real Herario, premiará el merito que ha contrahido en el Real servicio, y le indemnizará del atraso que padece: es gracia que espera de la Real Piedad de V.M. Zamora, 16 de Agosto de 1785, Vicente Kindelan 37 APÉNDICE C Carta de Vicente Kindelan, enviada desde Zamora y con fecha 24-7-1779 en la que solicita 2 meses de licencia (31). Señor, Dn Vicente Kindelán Brigadier de los Reales Exercitos, Gobernador Militar y Político, de la Plaza de Zamora puesto con el maior rendimiento A.L.R.P. de V.M. expone, que le precisa algunas diligencias propias, pasar a Sn Ildefonso, para ebacuarlas, por lo queSuplica rendidamente sea del R. Agrado de V.M. de concederle dos meses de licencia para otro fin. Gracia que espera de la Rl. Piedad de V.M. Zamora, 24 de Julio de 1779 Vicente Kindelan. 38