Mundo más caliente podrá significar menos peces Nuevo informe del PNUMA – ‘En aguas muertas’ – afirma que calentamiento global sumado a la contaminación y la explotación excesiva impactarán las principales pesquerías del mundo Mónaco/Nairobi, 22 de febrero de 2008 - el cambio climático se está convirtiendo en la más reciente amenaza de las menguantes existencias de peces del mundo, sugiere un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). El informe sugiere que al menos tres cuartas partes de las zonas de pesca clave del mundo podrían verse seriamente impactadas por los cambios en la circulación, como resultado del debilitamiento y colapso de los sistemas de bombeo natural del océano. Estas bombas naturales, ubicadas en diferentes sitios a lo largo del mundo incluyendo el Ártico y el Mediterráneo, traen nutrientes a las pesquerías y las mantienen saludables desechando los desperdicios y contaminantes. Es improbable que los impactos del aumento de las emisiones marinas terminen aquí. El aumento de la temperatura de la superficie del mar en las próximas décadas amenaza con blanquear y matar hasta el 80% de los arrecifes coralinos del mundo, uno de los principales lugares de interés turístico, defensa natural contra el mar y los criaderos de peces. Mientras tanto, existe la preocupación creciente de que las emisiones de dióxido de carbono incrementarán la acidez de mares y océanos. Esto a su vez podrá repercutir en la formación del calcio en conchas marinas y corales, pero también en los pequeños organismos planctónicos, la base de la cadena alimenticia. Los hallazgos aparecen en un nuevo informe de respuesta rápida titulado “In Dead Water” (“En aguas muertas”), que contiene por primera vez el mapa de los múltiples impactos que la contaminación, las plagas exóticas, la sobreexplotación pesquera y el cambio climático producen en los mares y océanos. “Pero lo peor es la concentración en el 10 al 15% de los océanos de los impactos acumulativos del cambio climático con las presiones existentes de sobrecosecha, pesca de arrastre con redes, plagas de especies invasoras, desarrollo costero y contaminación”, indica el informe. Este porcentaje de los océanos es mucho mayor de lo que antes se suponía y “coincide con las zonas pesqueras más importantes”, inclusive casi el 7.5% que se estima son las zonas de pesca con más valor económico del mundo, agrega. El informe es el resultado del trabajo de científicos del PNUMA en conjunto con universidades e institutos en Europa y los Estados Unidos, y fue lanzado hoy durante el Consejo de Administración del PNUMA/Foro Ambiental Mundial a Nivel Ministerial que se celebra en Mónaco. Éste ha sido el mayor encuentro de ministros de medio ambiente desde la Convención Marco sobre Cambio Climático en la Conferencia en Indonesia, escasamente hace dos meses, en la cual los gobiernos acordaron el Plan de Acción de Bali, que está dirigido a lograr una profunda y decisiva reforma en el régimen climático para después del 2012. De acuerdo con Achim Steiner, subsecretario general de las Naciones Unidas y director ejecutivo del PNUMA: “El tema del Consejo de Administración es “Movilización de Fondos para el Cambio Climático” de billones de dólares, los cuales pueden destinarse a energías y tecnologías que cuidan y protegen el ambiente si los gobiernos pueden proporcionar el tipo correcto de mecanismo de mercado e incentivos fiscales que faciliten esto”. “Algunas veces es importante recordarnos a nosotros mismos por qué necesitamos acelerar estas transformaciones hacia una Económica Ecológica. El Informe In Dead Water presenta en forma única el impacto de varias presiones que son perjudiciales y que persisten en las pesquerías. También pone de manifiesto los impactos probables del cambio climático, producto de las alternaciones dramáticas en la circulación del océano, lo cual afecta tal vez la tres cuarta partes de las principales zonas pesqueras hasta la preocupación por la acidificación de Ios océanos”, indicó el señor Steiner. “El cambio climático pone en peligro la infraestructura costera, la alimentación, el abastecimiento de agua y la salud de las personas en todo el mundo. Claramente se desprende de este informe y de otros, que el cambio climático se sumará significativamente a las presiones sobre las poblaciones de peces. Esto no solamente es una cuestión económica y de desarrollo, sino también ambiental. Millones de personas, entre ellos muchos de los países en vías de desarrollo, obtienen su sustento de la pesca, mientras que unas 2,600 millones de personas obtienen sus proteínas de los frutos del mar”, señaló. El informe llega a raíz de los hallazgos emitidos la semana pasada por un equipo dirigido por el Centro Nacional de Análisis y Síntesis Ecológicos, que calcula que más del 40% de los océanos del mundo han sido fuertemente dañados por los seres humanos y que sólo el 4% permanecen relativamente vírgenes. También se da en medio de preocupación por el hecho de que polluelos de aves marinas en el mar del Norte se han estado atorando luego de haber ingerido el Entereulus Aequoreus (snake pipefish), una especie con muchos huesos. En una reunión de la Sociedad Zoológica en Londres celebrada la semana pasada, se informó que en los últimos cinco años, las cifras de este pez han aumentado considerablemente. Los expertos sugieren que una de las razones que explica este aumento brusco se debe a los cambios en las corrientes del océano que llevan a los peces hacia las aguas del mar del Norte. El nuevo informe del PNUMA ha sido compilado por investigadores, entre ellos algunos del Centro GRID-Arendal del PNUMA; el Centro Mundial de Vigilancia de la Conservación del PNUMA y la División de Evaluación y Alerta Temprana del PNUMA. Este informe se basa en una amplia gama de información científica nueva y emergente que incluye el último informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático – el panel de más de 2,000 científicos que estableció el PNUMA y la Organización Meteorológica Mundial. Otras contribuciones provienen de organizaciones e instituciones como la Universidad de Plymouth; el Instituto Noruego de Investigación para la Naturaleza; la Universidad de British Columbia; el Instituto de Zoología; la Universidad de Princeton; la Universidad de Barcelona y el Instituto de Investigación de Desarrollo Sostenible de Europa. Hallazgos principales de In Dead Water • • • • • • • • • • • La mitad de la pesca del mundo se da a lo largo de las plataformas continentales en un área inferior al 7.5% de los mares y océanos del mundo. Un área de 10 al 15% de los mares y océanos del mundo cubren la mayoría de las zonas de pesca comercial. Para el 2080, del 80 al 100% de los arrecifes coralinos del mundo podrán sufrir situaciones de blanqueado anual bajo situaciones de calentamiento global. Aquellas áreas bajo riesgo particular se encuentran en el Pacífico occidental; el océano Índico; el golfo Pérsico; el Medio Oriente y el Caribe. Más del 90% de las costas templadas y tropicales del mundo estarán fuertemente impactadas para el 2050. Más del 80% de la contaminación marina proviene de la tierra. Las áreas marinas que corren el riesgo particular de un aumento en la contaminación son el sudeste Asiático y el este Asiático. Es probable que el aumento de las concentraciones del CO2 en la atmósfera se vea reflejado en una creciente acidificación del ambiente marino. El aumento de la acidificación puede reducir la disponibilidad de carbonatos cálcicos en el agua marina, como lo es la aragonita, usada por una variedad de organismos para metabolizar sus conchas. Los corales de aguas frías y de aguas profundas pudieran ser afectados por la acidificación para el 2050, así como los organismos que tienen concha en todo el mar del Sur y hacia el océano Pacífico subárctico para el 2100. El cambio climático puede disminuir la circulación termohalina de los océanos y, por consiguiente, los mecanismos de “reflujo y limpieza” natural de la plataforma continental, conocidos como reciclaje de agua profunda continental, durante los próximos 100 años. Estos procesos son cruciales para la calidad del agua y el ciclo de nutrientes y producción de agua profunda en al menos 75% de las principales zonas de pesca del mundo. Las zonas muertas, regiones con hipoxia (falta de oxígeno), están aumentando como resultado de la contaminación de las áreas urbanas y agrícolas. Existen aproximadamente 200 “zonas muertas” temporales o permanentes, con respecto a alrededor de 150 en el 2003. Hasta el 80% de las especies de pesca primaria del mundo son explotadas más allá o cerca de su capacidad de captura. Los adelantos tecnológicos, junto a los subsidios, significan que la capacidad de pesca del mundo es 2.5 veces mayor que la que se necesita para capturar en las pesquerías de forma sostenible. • • La pesca de arrastre con redes es una de las prácticas de pesca más dañinas e insostenibles en la escala en que a menudo se ve hoy en la actualidad. Cada vez más, las especies invasoras, que pueden superar y desplazar a las nativas, están vinculadas a las zonas de pesca contaminadas, de sobrepesca y arruinadas. El informe muestra que la concentración de “especies invasoras” se equipara con alguna precisión con las principales rutas marítimas del mundo. Christian Nellemann, quien encabezó el equipo de respuesta rápida que compiló el informe, afirmó: “Ya estamos viendo pruebas en una serie de estudios que el aumento en las temperaturas del mar está produciendo cambios en la distribución de la vida marina”. Algunos de estos cambios se encuentran en la encuesta Continuous Plankton Recorder del Atlántico noreste. Las especies copépodas o crustáceos de agua más caliente se han movido casi 1,000 kilómetros hacia el norte durante la última mitad del siglo XX, y los mismos patrones se mantienen en el siglo XXI. “Más pruebas de esta señal de calentamiento se ven en la aparición de una planta planctónicas del Pacífico en el Atlántico noroeste por primera vez en 800,000 años por transferencia por la parte norte de Canadá debido al rápido deshielo del Ártico en 1998”, señaló el Dr. Nellemann. “Estamos viendo señales cada vez más alarmantes de cambios dramáticos en los océanos. Es como virar un inmenso buque cisterna. Nuestra capacidad para cambiar el rumbo y reducir las emisiones en el futuro próximo será fundamental para alcanzar el éxito”. Solamente ahora se está evidenciando en diferentes maneras la relación entre las zonas de pesca saludables y productivas y la circulación del océano o el “reciclaje del agua profunda continental”. Tres años atrás, la Investigación de los Ecosistemas Hotspot en las riberas de los mares europeos, de la cual hace parte el PNUMA, documentó tal fenómeno en el golfo de Leones en el noroeste del Mediterráneo. Una cantidad de agua equivalente a dos años de descarga del río de todos los ríos que fluyen hacia el Mediterráneo en cuatro meses, es transportada del golfo de Leones hacia el oeste profundo del Mediterráneo por el cañón Cap de Creyus. Esto tiene un impacto crucial en la población del camarón de aguas profundas de captura intensiva, el Aristeus antennatus (la gamba roja), al traer nutrientes que a su vez desencadena un brusco aumento en los camarones jóvenes que resultan en capturas abundantes por tres a cinco años luego del evento “cascada”. “Imaginen lo que sucederá si el cambio climático desacelera o detiene estos transportes de comida natural y efectos de “reciclaje” en aguas que a menudo ya están contaminadas, en las cuales se pesca mucho y están dañadas debido a las fuertes presiones”, afirmó el Dr. Nellemann. “Estamos apostando con nuestra cadena alimenticia”. Stefan Hain, del Centro de Vigilancia para la Conservación Mundial del PNUMA, afirmó que era crucial que las presiones existentes también fuesen tratadas, a fin de conservar las existencias de peces y los arrecifes coralinos en un mundo restringido por el clima. El Dr. Hain señaló que existían pruebas crecientes de que los arrecifes coralinos se recuperan del blanqueo mejor en aguas más limpias y menos contaminadas. El científico citó la vigilancia de los corales alrededor de la principal isla de Mahé de Seychelles, que son algunos de los corales en todo el mundo que sufrieron de las altas temperaturas de la superficie del mar a finales de la década de 1990. Aquí las tasas de recuperación de los arrecifes de coral han variado entre el 5 y el 70%. “Normalmente los arrecifes de coral que se recuperan más rápido son aquellos que viven en Áreas Marinas Protegidas y aguas costeras donde los niveles de contaminación, dragado y otros tipos de perturbación inducida por los seres humanos se consideran bajos”, señaló. Notas a los redactores Se puede acceder al informe “In dead Water: Merging of climate change with pollution, over-harvest, and infestations in the world’s fishing grounds” en www.grida.no o en www.unep.org o www.globio.info Se puede acceder a los mapas de alta resolución y gráficas del informe para uso gratuito en publicaciones en: http://www.unep.org/newscentre/Graphics/DeadWater La Décima Sesión Especial del Consejo de Administración del PNUMA /Foro Ambiental Mundial a Nivel Ministerial se llevará a cabo entre el 20 y 22 de febrero en Mónaco. http://www.unep.org/gc/gcss-x/ El tema es Globalización y Medio Ambiente: movilización de fondos para enfrentar el cambio climático. Sitio del país anfitrión del Principado de Mónaco http://www.unep2008.gouv.mc/pnue/wwwnew.nsf/HomeGb Para obtener mayor información sírvase comunicarse con: Nick Nuttall, vocero y jefe de medios del PNUMA al +41 79 596 57 37; correo electrónico: [email protected] y Robert Bisset, y Robert Bisset, vocero del PNUMA para Europa, al tel: +33 6 2272 5842 o por correo electrónico a [email protected] Sr. François Chantrait, Director, Centro de Prensa 10 Quai Antoine 1er, 98000 – MONACO, teléfono: + 377 98 98 22 08 correo electrónico: [email protected] Comunicado de noticias del PNUMA 2008/06