la minería - Hemeroteca Digital

MADRÜ): Í B M
OCTÜBRI? M
Precios de sascricion.
Un trimestre, ün año.
Rn España peninsular é islas adyacentes
10 rs.
En el extranjero
14
En iitoamar
,
...18
Un Húmero suelto
I
NUMERO S."
1872.
LA MINERÍA,
Trióieslve. .\íio.
Psra los susarilores á la
REVISTA IIINKHA y socie-
PERIÓDICO INDUSTRIAL Y MERCANTIL COMPLEMENTARIO DE LA
3*
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60
REVIST4IHini
dades que se suscriban
por 5' 6 más ejemplares:
En España peBinMlar é islas adyacentes
7
En el extranjero
II
En ultramar
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24
36
48
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tender rails á las cumcas carboníferas y á los
grandes centros productores? ¿Donde las tarifas de
DOCTRINAL
ferro-carriles son inescrutables, donde las leyes
cambian á cada paso, donde el orden no tiene esta• • INDlSCitECCIONARA.NCELA.RIA.
bilidad,ni asiento el criterio desapasionado?
Esos incesantes descubrimientos, esos crecidos
valores
de nuestra minería, esa gran masa de mi.La pai^tida Z.^ del arancel de exportación dice;
«Galenas, los IQQ Kilogramos 1,25 pesetas,» cuya fra- nerales que se exportan en bruto para enriquecer
.se está causando perjuicios de consideración á la otros países, fomentando sus artes y sus industrias,
¿nada dicen á nuestros gobernantes? Haya en
rainetía.. i!;
La voz fjalem solo se refiere al sulfuro de plotno buen hora libertad para disponer cada cual del
y no podemos creei que la mente al dictar esta par- producto de ^u laboriosidad; ríndase al libre camtida haya sido la de incluir precisamente esta sus- bio el culto que merece; pero hágase algo en obsetani3Ía, excluyendo todos los demás minerales plo- quio del país, prepárese el camino de la industria
mizos. Sólo una clase de galena, la que se conoce en toda su latitud y sobre todo no se perjudiquen
en nuestro país,con el nombre de alcohol de hoja, derechos legítimos estableciendo privilegios ruitiene.aplicación industrial en su natural estaco; nosos.
Al amparo de esta frase .nal estampada, que
todas las demás son minerales de fundición, como
combatimos,
los extranjeros, especialmente los alelas otras clases áe galena, los carbonatos, los fosfamanes
están
llevando á su país lo mas selecto de
tos, etc.
nuestros
minerales
íilomizos, que utilizan en el doParece, pue8> lógico que de considerar libre de
ble
concepto
de
beneficiar
sus minerales pobres,
todo deréóho algAña clase fuese aquella, que no
que
sin
aquellos
no
loconsiguirian;
al paso que
exige manipulaciones, que es cabalmente la de
nps
dejan
exuberancia
de
pobres,
qué
no podrán
^^•^.ifi; y que pagasen el derecho las que, necesitanutilizarse.
do esas manipulaciones para ser útiles, se exporEsto daña no solo á los mineros, sino muy estan paira derramar en el extranjero los beneficios
que 4eb|an dejar en el país que las produce. Es de- pecialmente á los fabricantes, hasta el punto de
ciry que si la intención fué excluir del pago alguna que hoy se halla en muy malas condiciones nuesclase, se tradujo al revés, dejando libre á la que tra meíalürgia del plomo, que era la más impordebia na serlo y grabada á la que menos debia di- tante y la más adelantada entre nosotros; y no
tardará en perjudicar á otros ramos de la indusrigirse esta condición:
tria,
por ejemplo, al beneficio déla plata en las HerMasjüizgandó seriamente, debe creerse qué la
rerías
de Almería y otros puntos, donde cada día
intención fué decir minerales plomizos, en vez de gaes
niayor
la necesidad de minerales plomizos con
lenas, pues no existe circunstancia; alguna que pueeste
objeto.
De suerte que, con el aislamiento de
da separar, en un aráiicel,sustancias de igual í n nuestros
criaderos
carboníferos, con el contrato de
dole, riqueza, jgr.ocedenpia, valor y usos.
azogues
que
ha
cerrado
una puerta á nuestra proSi esta ciífiístíbp no tuviese más resultado que el
ducción
platífera,
y
con
la
espresion galena del arande eximirse del pago algunos sin lastimar á otros,
cel,
que
ha
obstruido
otra,
progresaremos hacia
6 sin'preparar un daño gereral, no la trastaríamos; pero, siendo causa de males públicos y pri- atrás en cuestiones industriales de primer orden.
Rogamos al SP. Ministro de Hacienda que dedivados, no debemos despreciarla.
que
un instante su talento y buena intención haLa palabra galena se interpreta de un modo dicia
este
importante asunto.
ferente en cada aduana: en unas la traducen en su
verdadera acepción, cobrando únicamente de los
sulfupos; ea otras la restringen, aplicándola tan
INDUSTRIAL.
solo al alcohol de hoja; en algunas la ensanchan
hasta los minerales carbonatados; y hay aduana que
INGENIOSO INSTRUMENTO
usa de ella en el sentido de mineral argentífero.
para el trazado de elipses y círculos.
De este caos resiilta, que minerales que se extraen
por un punto no pagan, al paso que se les hace paCon gusto hemos visto el curioso instrumento que á
gar á los mismos exportados por otro. De aquí la
grandes
rasgos procuraremos describir, debido á la inteinequidad y el desequilibrio dentro de la misma
Ugencia y laboriosidad del Maestro de Obras por la escueindustria, estableciéndose sordamente privilegios la superior de Arquitectura, D. José María Sánchez y Roy gravámenes injustos, que favorecen ó perjudi- dríguez.
can, y que introducen gran desigualdad entre inAunque la teoría no es nueva, revela sólidos conocidustriales iguales.
mientos geométricos y una constante laboriosidad, la
' fisto en uttantoá la interpretación viciosa de la aplicación de aquella en un instrumento apropiado al
trase^pero, «un oonsideríoidola bien interpreta- ot^eto.
El modelo construido en madera por el mismo Sr. Sánda,-,se produce un daño al pais permitiendo la lichez,
es una olira de arte y de esmerado gusto.
bre expwtacibn-dé materias'primeras, que llevan
El
trazado elíptico en dicho aparato está producido
sus más p n i ^ e s renüinientog materiales y su bepor
la
combinación del movimiento rectilíneo de dos renéfica influeaeia moral á otras naciones, que pagistros que recorren respectivamente dos cajas perpendigan mal nue-straa generosidades ó'más bien prodi- culares entre sí y cuyas longitudes son las del diámetro
galidades.. Altas lairas morales, sociales, políticas de la base ó peana del aparato que afecta la forma
y.económicas aconsí^an á voces al Gobierno espa- elíptica.
ñol el rápido fomento. <ie nuestra metalurgia; eleUno de estos registros se halla sujeto á uno de los eimentes tenemos más que ningún otro país, para tremos de la regla que sirve para el trazado, y el otro
conseguirlo, y Sin embargo, nuestra incuria y provisto de una piececita con su línea de fé y á favor ue
nuestros desaciertos nos llevan á la fosa, desde- un tornillo recorre á voluntad una ranura practicada en
ñando el camino del trabajo y de la inteligencia, un trozo de la regla que se halla dividido en centímetros
que nos ofrece remedio á nuestros males. Pero ¿qué y milímetros, indicándola lectura déla graduación la di
metalurgia ha de crearse donde los capitales en su férencia de ejes que ha de tener la elipse que haya de
trazarse; el resto de la regla dividido también en centímayor parte se ceban en la miseria pública, y no metros y milímetros é indicando la lectura de su graduaven más adelanto, ni progreso, ni produíeion, que ción, las longitudes de los ejes mayores de las elipses que
la absorción del Erario y de la sangre de los pue- pueden trazarse, contiene también en toda su longitud
blos chupado aquel y ésta por medios crueles y una ranura que es recorrida por un registro con su linea
reprobados? ;,Qué metalurgia, donde se desdeña de fé, provisto de su lápiz y el correspondiente tornillo
de presión para poder fijarle en el punto correspondiente
á la longitud que quiera darse al eje mayor de la elipse
cuyo trazado desee obtenerse; con laya descrita disposición del instrumento pueden obtenerse elipses cuyo límite inferior de eje mayor sea el de la longitud que tiene
el del contorno elíptico que limita la base del aparato, y
fijando al centro de ésta por medio de un tornillo el registro sujeto al extremo de la regla y quitando el otro registro de que ya hemos hecho mención, se puede aprove'
char el aparato para el trazado do circunferencias de círculo cuyo radio tenga la longitud que se desee.
una ligera lüodificaeion del aparato le pone en conaiciones para el trazado de elipses de menores dimensiones; á un árbol con su correspondiente peana atraviesa
por su parte superior una reglita en forma de doble T llevando á uno de los extremos el lápiz para el trazado y
graduada también en centímetros y milímetros, cuya graduación indica las longitudes dé ejes menores de elipses
que pueden trazarse; dicha regla puede correrse á volun lad y detenerse en el punto que convenga por medio de
un tornillo situado en la parte superior del citado árbol,
encontrándosela parte inferior de éste atravesada por e'
extremo de la regla que servia para el trazado en la primera disposición, hallándose ahora invertida la posición
de la plataforma que anteriormente servia de base y sobre cuya superficie se verifica el trazado, resultando de
este modo fija la regla y movible la plataforma, siguiéndose indicando en esta nueva disposición la diferencia de
ejes de la misma manera que anles.
Tal es de una manera general y sin entraren grandes
detalles la descripción del aparato para el trazado de
elipses que el Sr. Sánchez ha tenido la amabilidad de presentarnos consistiendo su mayor ventaja en que por medio de un trazo continuo se obtienen las curvas elípticas
conociendo previamente la diferencia de los ejes.
Felicitamos al Sr. Sánchez por m ingeniosa idea y
creemos que puede tener titiles aplicaciones tanto para
los trabajos de gabinete como para los de replanteo en el
trazado y reconocimiento de las plantillas de elipses cuando sea preciso emplearlas en las obras de constrticéion.
MERCANTIL.
CARBONES.
Francia 8 de Octubre,—Los precios aumentan y
esto no es de estrañar dada la actitud de los obreros, que
cada día piden aunfiento de jornal, con el propósito sin
embargo de trabajar menos.
Hoy en último resultado no son carbones lo que hace
falta, sino obreros y máquinas para verificar la extracción
con la rapidez que el gran consumo reclama.
Bélgica S de Octnlire.—La huága de los obreros de Sars-Longcharaps no ha terminado. Las últimas
noticias dicen que están tranquilos, ocupados en la recolección y poco dispuestos á volver al trabajo.
El movimiento ha sido local y no se ha propagado.
Sin embargo en Lieja tres minas de carbón se han declarado en huelga esperando equilibrar así una pretendida huelga de los patrones que querían mantener y alzar
los precios actuales. Deploramos estos hechos en los momentos angustiosos porque atraviesa la industria.
Hay un verdadero-áesquiciamierUo, cada uno amparándose de teorías diversas se cree en lo mejor.
Las ventas á Inglaterra de que tanto se habla, jio han
sido en nuestra opinión muy considerables y tal vez ésto
ha ayudado á la baja en Inglaterra.
En cuanto álos precios continúan inalterables aunque
no fijas las cotizaciones y el mercado sostiene la animación que hemos dicho en nuestro número anterior,
HIERRO.
Francia S de Octubre.—En este pais se encuentran ya los hierros comunes á S40 fr., los laminados en
madera á 380: el palastro grueso á 470 en Haute-Manve y
los hierros comunes á 330 en el Norte. Con pena vemos
este aumento que nada bueno ha de producir en la metalurgia.
En cuanto á los alambres han escedido mucho al precio de los hierros comunes y á pesar de ésto cad.j día se
produce una nueva alzaSin embargólos pedidos no cesan, los tramvias y caminos de hierro se éstienden y según parece, la Sociedad
del camino de hierro de gran circunvalación está en tra-