Asociación de la Fiesta de los Niños

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CONSEJO DIRECTIVO
Presidente de Honor
Excmo. Sr. D. Fernando Sánchez-Lafuente Caudevilla
Asamblea General del día 19 de Febrero de 2007
Lloctinent General
Excmo. Sr. D. Ignacio Carrau Leonarte
Capella Major
Ilmo. Sr. Rvdo. D. José Castillo Peiró
Camarera Mayor Perpetua
Excma. Sra. Dña. Paloma Torres Vda. de Martí Belda
Camarera
Excma. Sra. Dña. María Teresa Criado de Carrau
Sindic Primer
Ilmo. Sr. D. José Francisco Ballester-Olmos y Anguís
Sindic Segon
Excmo. Sr. D. Guzmán Guía Calvo
Escrivà
Ilmo. Sr. D. Elviro Adán García
Almoiner
Ilmo. Sr. D. Antonio Rossi Val
Racional
Ilmo. Sr. D. Esteban González Concepción
Menestral
Ilmo. Sr. D. José Crespo Iranzo
Conseller primer
Ilmo. Sr. D. Rafael Martínez Mesas
Conseller segon
Ilmo. Sr. D. Pedro Catalán Hurtado
Conseller tercer
Ilmo. Sr. D. Luis Latorre Matute
Conseller cuart
Ilmo. Sr. D. Vicente Martínez Marco
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Honorable Clavariesa de las Fiestas Vicentinas 2009
Ilma. Sra. Dña. Mª Dolores Asensi Marco
A lo largo de este año 2009 he tenido varias ocasiones de
compartir actos muy emotivos, a los que me han invitado o en los
que he coincidido con fieles que pertenecen al Capítulo de Cavallers
Jurats, para mí, uno de los que más guardo en mi corazón fue la
tarde en la que oímos Misa en la celda de san Vicente Ferrer y
tengo que decir que siempre me he sentido arropada por tan ilustres
vicentinos.
Quisiera expresar muchas cosas pero lo resumiré en una sola
palabra “gracias”.
Gracias por vuestra labor, gracias por esos libros que he
tenido el placer de leer, editados en este año 2009, por el Muy
Ilustre, Virtuoso, Magnífico y Leal Capítulo de Caballeros Jurados
de san Vicente Ferrer, como son el “Glosario Vicentino” y el
“Oracional Vicentino”, magnífico trabajo de sus respectivos autores,
ambos libros pequeños, pero extraordinarios y que cumplen con el
fin con el cual se creó esta Asociación y es aumentar la devoción
vicentina.
Gracias y un afectuosísimo reconocimiento a vuestro
Lloctinent General Excmo. Sr. D. Ignacio Carrau Leonarte, creo que
es una de las personas que he conocido, de las que más he
aprendido a crecer como ser humano y cristiana, por su carácter
afable, incansable, por su sabiduría y sobre todo por su tesón en
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difundir, y con su ejemplo de vida así lo hace, los valores cristianos
y el amor a Dios, a la Virgen y a san Vicente Ferrer.
Gracias a todos y cada uno de los que formáis el Capítulo de
Cavallers Jurats de san Vicente Ferrer, realizáis una labor de
difusión magnífica y que san Vicente Ferrer os bendiga, para que
así lo sigáis haciendo por muchos años.
Es un honor que me pidáis unas palabras para vuestro libro y
permitirme que os recuerde unas palabras, que me dedico mi
mantenedora Dña. Paloma Gómez Borrero, que como sabéis en el
día de mi exaltación le pedí que transmitiera al Santo Padre el
deseo de los vicentinos de que se le reconozca para san Vicente
Ferrer el título de Doctor de la Iglesia:
si no puedes curar, aliviar,
si no puedes aliviar, acompañar,
en cualquier caso amar
y yo creo que esto se consigue estando en paz con Dios, con
uno mismo y por ello con todos los demás.
Espero que esto que os acabo de escribir sirva para gloria de
Dios y de san Vicente Ferrer.
Un fuerte abrazo
Mª Dolores
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SAN VICENTE FERRER Y LA
ENCÍCLICA “SALVADOS EN LA ESPERANZA”
HC. D. Ignacio Carrau Leonarte
Lloctinent General
Quienes nos queremos llamar
hijos de san Vicente Ferrer, hemos de
pensar que nuestra actitud no puede
limitarse simplemente a considerarnos
sus herederos y discípulos por la filiación
libremente asumida al integrarnos en
alguna
asociación
o
movimiento
vicentino y venerarlo como Padre
espiritual y orientador de nuestras vidas,
sino que hemos de vivir en plenitud sus
valores y, fortalecidos en su fervor,
aplicarlos en la orientación, no solo de
nuestra particular personalidad sino de la sociedad actual, pues los
valores del pasado, como fundamento de una actitud
evangelizadora, a la que estamos obligados, por nuestra condición
de cristianos en general y de vicentinos en particular, no pueden ser
meramente heredados sino que tienen que ser asumidos y
renovados en su actualización con la plenitud vital de su propia
esencia y de su perenne valor, para que sigan siendo cimientos y
certezas válidas en la actualidad, según nos enseñó el Papa
Benedicto XVI el día 21 de enero de 2008 en su Mensaje a la
Ciudad de Roma.
Por ello hoy, cuando nuestra esperanza se ve acechada
desde muchos sectores y se corre el peligro de que el hombre
quede huérfano de esperanza y de Dios, como ya escribió S. Pablo
(Ef. 2,12), es preciso que recojamos y renovemos la esperanza en
el amor de Dios, predicada por san Vicente Ferrer y actualizada por
Benedicto XVI en su Encíclica “Salvados en la Esperanza”.
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Si como ha escrito Benedicto XVI en su citada Encíclica, el
cristianismo no solo es una buena noticia para las almas y para la
sociedad en su conjunto, sino que es una puerta abierta a la
esperanza que “comporta hechos y cambia la vida”, la predicación
de san Vicente Ferrer y, en realidad, toda su obra tienen plena
vigencia en la actualidad de nuestros días, pues toda ella tiende a
que, no solo quienes en su tiempo lo oyeron, sino también los que
en la actualidad lo leen o lo conocen, comprendan que su mensaje
no es solo informativo sobre las verdades de la Fe, el Amor y la
Esperanza en Cristo sino que en perfecta concordancia con las
palabras del Papa, en su citada Encíclica, es “preformativo”, lo que
supone que comporta hechos formativos, que llevan hacia un futuro
que, por la esperanza, justifica el esfuerzo, pues la vida no acaba en
el vacío sino que se abre a la gran esperanza, que es el encuentro
con el alma de Dios.
Toda la vida y la obra de san Vicente Ferrer no es una obra,
como algunos la han descrito cuajada de fatalismo o tremendismo
sino que, como ya he dicho en otras ocasiones, es una predicación
abierta al camino de esperanza, hacia el gran encuentro con Dios
por el amor, del que también nos habla el Papa en su Encíclica,
pues busca inocular, en el ser, la gran esperanza de la
transformación en el hombre nuevo por su encuentro con Dios, lo
que supone en realidad la vigencia de todo el mensaje de la
constante predicación de san Vicente.
A pesar de los cambios de los tiempos, de la variación de las
costumbres, de la modificación de las actitudes o de los ambientes
en los que se desarrolla la vida, está siempre vigente en la persona
humana su inquietud por la verdad y por el ansia de poseerla para
llegar al conocimiento de Dios, aún cuando el escepticismo y el
relativismo, que hoy todo lo invade, parezcan que puede borrar esa
capacidad del hombre para alcanzarla.
San Vicente Ferrer en su predicación abre al hombre, en su
tiempo y ahora, la gran esperanza, para alcanzar la salvación en
Cristo por el amor y el perdón, convirtiéndolo en el hombre nuevo, y
la Encíclica “Salvados en la Esperanza”, confirma la vigencia y la
necesidad de esa misma evangelización, ya que si en su tiempo san
Vicente Ferrer enseñó a las almas el camino del perdón por el amor
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de Cristo, haciéndoles llegar el mensaje de la gran esperanza, hoy
es más que nunca necesaria la propagación de su predicación pues
se necesitan fundamentos que den firmeza al hombre en el tortuoso
mundo en el que hoy vivimos y esa necesaria solidez solo se
alcanza si esta anclada en el amor de Dios, como san Vicente nos
enseñaba y la Encíclica “Salvados en la Esperanza” nos confirma.
La evangelización de san Vicente Ferrer esta cuajada y
fundamentada en la esperanza, por el amor y el perdón, incluso
cuando habla sobre el Juicio Final o el Temor de Dios, pues pese a
todos los tintes dramáticos, terroríficos o incluso trágicos que
muchos comentaristas o artistas le han dado, san Vicente Ferrer
proyecta siempre su invocación bajo el fulgor, el calor y la luz de la
esperanza en la salvación por el amor, el perdón y la definitiva
justicia y la gracia, siendo muy interesante al respecto la
coincidencia de la verdadera predicación de san Vicente Ferrer con
las alusiones a la comentada Encíclica del Papa Benedicto XVI en
su punto 4L, cuando al referirse al Juicio Final lo invoca ”como
criterio para ordenar la vida presente, como llamada a su conciencia
y al mismo tiempo como esperanza en la justicia de Dios”.
Tanto en san Vicente Ferrer como en Benedicto XVI, el
aspecto amenazador del Juicio Final está sobrepasado por el
esplendor de su sentido de esperanza en la verdadera justicia pues
“el juicio de Dios es esperanza tanto porque es justicia como porque
es gracia” (P. 47).
El mismo “temor de Dios” que predicaba san Vicente Ferrer
es una llamada a la conversión en el tiempo de salvación, es decir
durante la vida en la tierra, para llegar al encuentro definitivo con
Dios, siendo también interesante la coincidencia con “el tiempo
presente” para el cristiano del que nos habla Benedicto XVI en el
punto 41 de su Encíclica a la que me vengo refiriendo.
Benedicto XVI nos dice que “la verdadera, la gran esperanza
del hombre que resiste a pesar de todas las desilusiones, solo
puede ser Dios que nos ha amado y nos sigue amando” y san
Vicente Ferrer en toda su predicación tiene como fundamento el
amor de Dios abriéndonos el camino hacia el encuentro con Dios
por el perdón y la reforma de nuestras vidas.
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Ambas actitudes coinciden en la enseñanza de que, como
dice la “SPE SALVIS”, “la Fe en Cristo nunca ha mirado solo hacia
atrás, ni solo hacia arriba sino siempre hacia delante, hacia la hora
de la justicia que el Señor había pronunciado” y que ha de llevar al
encuentro definitivo con Cristo, y esa es precisamente la misión
evangelizadora por la que san Vicente Ferrer encaminaba y
encamina al hombre por la vía del amor y del perdón, hacia su
transformación para alcanzar la unión con Cristo, que es la gran
esperanza, y que en el mismo sentido y en perfecta concordancia
nos confirma, ratificándola Benedicto XVI al escribir la Encíclica
“Salvados en la Esperanza”, actualizando para el mundo de hoy que
“la gran esperanza del hombre es Dios”, dando pleno vigor y
vigencia a la inquietud evangelizadora de san Vicente Ferrer, que
predica sin descanso que los corazones se abran al Evangelio y así
acojan a Dios.
Para quienes nos consideramos hijos y fieles seguidores de
san Vicente Ferrer nos fortalece está actualización para el mundo
de hoy en el vigor de sus enseñanzas, y ello nos obliga a no
asumirlas únicamente como norma de nuestra propia vida sino que,
como san Vicente Ferrer decía y hacía y el propio Benedicto XVI
nos insista en su Encíclica, hemos de esforzarnos con nuestro
ejemplo y nuestra palabra, en transmitir a la sociedad en la que
vivimos, la gran Esperanza del encuentro con Dios por el amor,
como la luz que necesita el mundo de hoy, pues como nos dice el
Papa: “nuestra esperanza es siempre y esencialmente esperanza
para los otros”, lo que nos lleva indefectiblemente a la obligación de
ser apóstoles en la sociedad, según el propio san Vicente Ferrer
nos trasladaba en su permanente inquietud apostólica cuando decía
“que podemos hacer por los demás”.
La actualización de la predicación de san Vicente Ferrer, que
la lectura de la Encíclica “SPE SALVIS” nos hace patente y nos
confirma que no solo fue para las gentes de su tiempo sino que la
legó, para que en todo tiempo la sigamos y sepamos ser, como El
nos enseñó, “hacedores de la voluntad de Dios poniendo por obra lo
que a los otros queremos persuadir por la palabra”, pues hoy, como
san Vicente Ferrer en su tiempo, no hemos de someternos al
confusionismo que nos rodea sino que hemos de ser
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evangelizadores valientes y orientadores por la fidelidad a la
llamada de Dios.
En resumen, hemos de tener siempre muy presente lo que
nuestro Sr. Arzobispo D. Carlos Osoro nos ha dicho en una de sus
cartas semanales: “lo que el mundo necesita hoy es la esperanza”,
y esa esperanza es la unión con Dios, según el coincidente
magisterio de san Vicente Ferrer y Benedicto XVI y para trasladarla
al mundo hemos de estar unidos con Dios por la oración que, según
nos pedía y enseñaba san Vicente Ferrer, e insiste en ello
Benedicto XVI, haciéndonoslo presente y cercano nuestro Sr.
Arzobispo, no ha de ser sólo oración de petición sino
fundamentalmente de ofrenda y de escucha, pues la oración
supone, para que sea auténtica contemplación y comunicación con
Dios, conocer y hacer siempre su voluntad, teniendo a María como
ejemplo por su aquel “SI” absoluto ante el anuncio del Ángel y como
“Estrella de Esperanza”, que nos guíe en el derrotero de nuestras
vidas, para llegar y llevar las gentes a Dios.
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LOS TAPICES DE SAN VICENTE FERRER
EN VANNES
HC. Rvdo. D. José Castillo Peiró.
Capellá Major
Prenotando histórico
1 – Posesión del cuerpo de san Vicente
Ferrer.
El P. Fages, fraile dominico, dice
en su “Historia de san Vicente Ferrer”, que “el cuerpo del santo
pertenece a la catedral de Vannes. Este es un hecho y un derecho”.
Lo fundamenta en que, según declaración de dos testigos, al
peguntarle ellos al P. Vicente en dónde querría que le enterrasen,
contestó: Donde disponga el obispo de Vannes”. Otro testigo dijo:
Donde dispongan el duque de Bretaña y el obispo de Vannes.
No obstante, la Orden religiosa de los Padres Predicadores
(Dominicos) manifestó su resistencia, porque, al parecer, otro
discípulo dijo también: Si es posible, que se tome parecer del Prior
del convento más próximo. Y esto sirvió de base, para advertir al
obispo de Vannes que no faltaba sus deberes, si consentía que se
llevara el cuerpo de san Vicente bien a Guèrande o a Quimperle, en
donde estaban los conventos más próximos. Para Vannes como
para los Dominicos se trataba de “un tesoro de gran valor”.
Dirimió la disputa de la posesión la Bula del Papa Nicolás V,
expedida el 5 de octubre de 1451: “… Nos queremos y de ciencia
cierta decretamos, declaramos y mandamos que dicho cuerpo aun
después de la canonización, si ésta tiene lugar, permanezca en
dicha Iglesia –de Vannes- a perpetuidad, no obstante cualquier
disposición en contrario y aun cuando el mismo hermano Vicente
Ferrer hubiera pedido que se le enterrase en otro sitio”…
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Sin embargo, después de esta Bula pontificia, los Dominicos
no perdieron sus esperanzas, pues apuntaban que un Papa podía
conceder lo que otro había rehusado.
En efecto, tres años después de la canonización de san
Vicente Ferrer, el Capítulo general de la Orden de Predicadores
dirigió una súplica al nuevo Papa Pío II, en la cual, en resumen,
exponían, entre otras razones, que la canonización se había llevado
a cabo gracias a sus cuidados; además, por derecho, el muerto – el
cuerpo del ya santo fray Vicente Ferrer- debe pertenecer a aquellos
a quienes se había pertenecido en vida.
El Papa, previas consultas a expertos, el 9 de febrero de
1459, publicó una Bula, “previniendo a los Dominicos y a sus
habitantes, no molestar ni inquietar a Vannes en la posesión del
cuerpo de san Vicente Ferrer, bajo ningún título ni pretexto”.
A pesar de estas disensiones, la devoción de la gente a san
Vicente Ferrer siempre permaneció y acudía a la catedral a venerar
el sepulcro del santo.
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2- Valencianos piden para Valencia el cuerpo de san Vicente
Ferrer.
Pasará así el tiempo hasta mediado el siglo XVI. En Francia
estalló una guerra civil religiosa entre católicos y los protestantes
calvinistas, llamados hugonotes. Guerra ésta que se extendería a
Europa, sin excluir a España.
Los calvinistas tomaban iglesias católicas, destruían
imágenes y “era enemigos jurados de las santas reliquias”.
El gobernador de la católica Bretaña levantó la voz de
socorro al rey católico de España, Felipe II, quien remitió varios
Batallones y Regimientos y tocó la guarnición de Vannes a un
Tercio de valencianos.
Éstos vieron
la
ocasión
de
conseguir el cuerpo
de
san
Vicente
Ferrer tan glorioso
compatriota, con el
pretexto de salvarlo
de
la
furia
aniquiladora de los
hugonotes.
Recurrieron,
primero, por medios
diplomáticos, al gobernador de Bretaña Mercoeur, duque de
Penthiévre, el cual exponía, en su carta al Cabildo de la Iglesia
catedral de Vannes, en fecha 6 de enero de 1592, “el deseo de
complacer al rey católico Felipe II en todo aquello que pueda serle
grato, como persona a quien tanto deben los católicos de esta
provincia…Haceros saber la singular devoción en quien tiene el
precioso cuerpo del señor san Vicente Ferrer, que yace en vuestra
iglesia… me encarga os ruegue encarecidamente tengáis a bien
acceder a su petición”.
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Poco después, -Valladolid, 20 de enero de 1592- “Don
Felipe, por la gracia de Dios, rey de España, de las dos Sicilias, de
Jerusalén, etc.” escribió una Real Carta al Deán y Cabildo de
Vannes: “Ha llegado a mi noticia la buena voluntad con que habéis
ofrecido enviarme las reliquias del santo cuerpo de san Vicente
Ferrer…”
Loa canónigos contestaron, por correo, que no estaban en
sus facultades acceder a tal petición real, ya que “hemos hallado en
nuestro Archivo bulas de nuestro Santo Padre, en las que se
prohíbe expresamente a toda persona, cualquiera que sea, trasladar
dichas reliquias fuera de nuestra iglesia, bajo pena de excomunión y
de incurrir en la ira de Dios…”
El Tercio de valencianos, no obstante, persistieron en
llevarse consigo las reliquias de su santo patrono, valiéndose de
una estratagema: Montar en la plaza una comedia y, entreteniendo
al pueblo véneto, entrar en la catedral y llevarse el cuerpo de san
Vicente Ferrer. Llegó esto a oídos del Cabildo catedralicio, el cual,
para salvar cualquiera acción violenta, entregaron el arca con el
cuerpo del santo al canónigo “más antiguo”, para que lo custodiara
en un armario de su casa.
Aunque finalizaron las guerras civiles religiosas, el cofre que
contenía el cuerpo de san Vicente continuaba oculto en casa del
canónigo.
3- La tumba de san Vicente Ferrer, lugar de peregrinaciones.
En el año 1600, ocupa la sede episcopal de Vannes el
obispo Jaime Martín de Belleasire, quien restablece la devoción a
san Vicente Ferrer y vuelve el cuerpo del santo a la catedral,
desaparecido el temor de los hugonotes.
Peregrinos venidos de todas partes acudían a la catedral de
Vannes a visitar y honrar el sepulcro de san Vicente. Una prodigiosa
multitud de milagros venían a beneficiarse aquellos que recurrían a
su intercesión. En vista de lo cual, el citado obispo véneto Jaime
Martín, “para dar mayor lustre al culto del Santo, hizo fabricar unas
hermosas tapicerías, que representaban milagros suyos”. Datan del
año 1615.
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4- El tapiz de Flandes.
En unos de mis visitas a Vannes, un canónigo me dijo que
encontraron los tapices, hechos jirones, en el desván de la catedral.
En conjunto tenían 28 metros de largo por 1´90 de ancho. Estaban
divididas en dos y se colocaban en el interior del coro a cada lado
del Altar, “produciendo un efecto soberbio”. Actualmente, en la
capilla de san Vicente están expuestos siete tapices, que son los
que han quedado en bastante buen estado, en los que se
representan milagros por la intercesión del santo, después de su
muerte. Así, pues, las escenas que están representadas son las
siguientes:
1.- Un loco furioso,
conducido a la tumba del
santo, queda curado de
repente.. Este milagro, a
favor de Perrín Herver,
acaeció en 1425.
2.- Un niño, caído de
un árbol y que creían
muerto, encomendado al
Santo, recobra la vida. En el primer plano se ve al niño acostado en
tierra, a su derecha cuatro monjes, uno de éstos está de rodillas. El
agraciado con este milagro, en 1452, fue Juan Goeahan, sobrino del
Abbé de Lanvaux. Este le consagró a san Vicente Ferrer y obtuvo
su curación inmediata.
3.- Otro, aquejado de
un gran mal, es curado
públicamente, después de
haber sido consagrado. Este
desgraciado epiléptico es
presentado por dos hombres
ante la tumba de san
Vicente, delante del altar.
Este milagro tuvo lugar en
1420 a favor de Jean
Maydo.
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4.- Un niño, aquejado de
peste, encomendado por sus
padres al santo, recobra la salud.
7.- Esta tapicería fue donada
por Monseñor Jaques Martín,
obispo de Vannes, Consejero en el
Consejo de Estado, en 1615. Este
obispo está arrodillado sobre un
reclinatorio blasonado y su cabeza,
en lugar de esta bordada en lana, como las otras, está bordada en
seda.
5- Epílogo.
Entrando en la catedral de Vannes, a la izquierda de la nave
central, contigua al crucero, está la capilla rotonda de san Vicente
Ferrer, de estilo renacentista, de 1537. En principio, fue erigida en
honor de la Eucaristía; por tanto,
la capilla del Santísimo
Sacramento.
En 1956, un año después del V Centenario de la
Canonización de san Vicente Ferrer, el Cabildo de la catedral se la
dedicó al Santo y contiene, por ello, el sepulcro, un cofre relicario y
un busto relicario (con su cráneo) de san Vicente Ferrer,
ornamentada con los siete tapices de Flandes. En la entrada de la
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capilla, el gran cuadro del siglo XVII representa la entrada de san
Vicente en Vannes, el sábado 6 de marzo de 1418, acogido por el
Duque y curando a un paralítico.
Al pie de este cuadro se encuentra el sepulcro de Monseñor
Pierre Auguste BOUSARD, obispo de Vannes (1964-1991),
fallecido en el año 1997. Es Monseñor BOUSARD el obispo que
concedió el hueso radio de la mano derecha de san Vicente Ferrer a
su Colegio Imperial de Niños Huérfanos. Con esta dádiva, san
Vicente Ferrer volvía a su Casa, la cual guarda esta insigne reliquia
en un relicario, digno de tal prenda sagrada.
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SOLEMNIDADES CELEBRADAS EN LA
CATEDRAL DE VALENCIA
EN 1600 EN HONOR A SAN VICENTE FERRER
HC. D. José Fco. Ballester-Olmos y
Anguís
De la Real Academia de Cultura Valenciana
Sindic Segon
Las fiestas en honor de san Vicente
Ferrer celebradas en Valencia en el año
1600, fueron organizadas para conmemorar
la llegada a esta ciudad de una costilla de
san Vicente Ferrer enviada por el Juan del
Águila, mariscal de campo de Felipe II en Bretaña, y que llegó a
Valencia el 7 de abril aquel año. La crónica de las fiestas, que se
celebraron por tal motivo, fue elaborada por el canónigo Tárrega y
publicada con el título “Relación de las fiestas que el arçobispo y
cabildo de Valencia hizieron en la translación de la Reliquia del
glorioso S. Vincente Ferrer a este santo Templo. Sacado a luz por
su devoción y mandamiento por el Doctor y Canónigo Francisco
Tárrega, y dirigida a los illustrissimos y Excellentíssimos señores
Condes de Benavente, que Dios guarde”, impreso en Valencia por
Pedro Patricio Mey en su taller cercano a San Martín y que se puso
a la venta en “casa de Gabriel Hernández librero, en la Corregería
Vieja”.
La ciudad organizó fiestas «para venerar y guardar esta santa
y preciosíssima joya, entre las otras muchas y muy calificadas que
tiene». El rey había ordenado que la reliquia fuera llevada a la
catedral tras su recepción y de este mandato dio noticia el Conde de
Benavente al arzobispo Juan de Ribera, cabildo y jurados, y en sólo
ocho días el arzobispado organizó las fiestas, acordándose que la
reliquia se guardara en la capilla catedralicia de Todos los Santos y
que a tal efecto se renovara el altar de dicha capilla.
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El domingo 16 de julio de 1600, la catedral se hallaba
decorada con flores, luminarias de velas y hachas de cera blanca. A
las seis y media de la tarde el conde de Benavente entregó la
reliquia al arzobispo y, a continuación, se dio comienzo a la
procesión solemne al son de instrumentos musicales. Iban en el
cortejo procesional el bayle general Gaspar Mercader y otras
autoridades civiles, las cofradías, las órdenes religiosas, los cleros
de trece parroquias, y al final el arzobispo bajo palio brocado. Se
recibió la reliquia con salvas de artillería y mosquetes,
correspondidas “desde los terados de la Iglesia al Baluarte de la
Generalidad”. A las nueve se encendieron luminarias, mientras
numerosos músicos, repartidos estratégicamente por los terrados
de la catedral, interpretaban diversas piezas. De las partes altas de
la catedral “salían mil invenciones de fuegos; entregirándolas,
bombas, tramoyas, salvas de morteretes, mosquetería, cohetes de
diversas maneras, que unos subían a las nubes, otros haziendo
ruedas."
El costo de la fiesta de aquel día había costado más de 400
ducados, pero no iba a quedar en eso la manifestación de la
extraordinaria alegría, que la ciudad sentía por la llegada de la
reliquia de san Vicente, tras años de ruegos y peticiones a Vannes.
Al día siguiente, se volvió a decorar toda la iglesia para la misa
mayor, que fue celebrada por el obispo de Marruecos y tuvo como
predicador al arzobispo de Valencia. A la una del mediodía tuvo
lugar un concierto que durante dos horas ofreció, en palabras de
Tárrega, una "diversidad de armonías, que arrebata los sentidos
entrel (sic) silencio de infinita gente” y concluyó con el salmo “cum
invocarem”.
Después comenzaron las justas poéticas, un concurso en el
que según Tárrega, “muchos ingenios naturales y estrangeros que
hazen famosa esta ciudad, leýan versos en alabança del glorioso
Santo". Durante las tardes del octavario, estos poetas recitaron sus
versos, y Francisco Agustín Tárrega hace mención de la edición de
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los poemas «por jornadas" es decir tal y como en realidad fueron
leídos. Y además, intenta disculpar la posible carencia de
inspiración de los poetas: “Ha parecido sacar a luz por jornadas los
que han llegado a mis manos con presupuesto de que todos saben
el poco tiempo que los ingenios tuvieron para prevenirse, y lo
mucho que los desta tierra han hecho y pueden hazer sobre
estudio. Mírense éstas como hechas de un día para otro, y sin
culpable confiança, porque la devoción, y los mandamientos que
huvo de por medio las disculpan".
Publicada la sentencia de los galardones, se nombró, como
ganadores de la justa poética dedicada a San Vicente Ferrer, a
Gaspar Aguilar, Virués, Gaspar Mercader, Vicente Martínez, Miguel
Ribellas, Carlos Boýl, Hierónimo Heredia y Joan Oliver Piñero, que
recibieron los correspondientes premios.
Después se presentaron dos danzas y la ciudad, agradecida a
D. Juan del Águila, correspondió al mismo mandando darle veinte
mil reales castellanos y a su mayordomo, portador de la reliquia
desde Bretaña, cinco mil. Una ápoca de 15 de abril de 1600 así lo
señala: “Los Jurats pagau a Joan Baptiste Matheu, ciutadá, sýndich
de la present ciutat, dos millia trescentes trenta cinch lliures, dihuit
sous, nou diners reals, les quals (...) e són pera donar aquelles a
canvi a Fieramonte Palavezino per lo valor de vint y cinch reals ha
de fer lliurar en Madrid, ço és, vint milia reals a Don Joan del Águila
en senyal de la merced que a fet a esta ciutat en enviar-Ii la sancta
reliquia del gloriós sent Vicent Ferrer, e cinch milia reals a Lamberto
Frinchs, majordom del dit don Joan del Águila, per senyal del molt
contento que la present ciutat rebe quant aquell porta dita santa
reliquia.”
21
DOCTORES ECLESIAE (2)
“Eminens doctrina, insignis viatae santitas, Eclesiae declarato”
HC. D. Elviro Adán García
Escrivà
Las
fuentes
históricas,
que
transmiten el conocimiento de la obra y
pensamiento de Fray Vicente Ferrer, son
abundantes, y los trabajos y manuscritos
de hagiógrafos y escritores sobre la vida
del santo valenciano relevantes. Pero
esta riqueza de estudios históricos han abundado tradicionalmente
en la facultad taumatúrgica del predicador y en su actividad
pacificadora y evangelizadora, restando importancia a otras
cualidades del dominico valenciano, como escritor místico que incita
a la caridad fraterna y a la oración, puestas de manifiesto desde su
“Tratado de la Vida Espiritual” (1407), texto redactado ya en su
madurez como orientación dirigida a los frailes, exhortando a la
práctica de las virtudes destinadas a la perfección espiritual;
humildad, abnegación, estudio y amor a Dios.
La pérdida de documentos en las cancillerías y la destrucción
de archivos en conventos e iglesias durante las sucesivas
contiendas y desórdenes civiles, ha dificultado el conocimiento real
de la historia del Apóstol y
obstaculizado el conocimiento y
datación detallada de su itinerario
evangelizador por parte de Europa y
España como apóstol de la
cristiandad legado “a latere Christi”.
No obstante, lo singular y atractivo
de su personalidad y peregrinaje
incitaron muy pronto las iniciales
investigaciones sobre su vida y
virtudes, convertidas luego en fuente originaria para el estudio
posterior de los manuscritos de sus sermones, que ha servido para
22
que doctores y ensayistas traten de reconstruir, además de los
datos geográficos y cronológicos de su apostolado, su pensamiento,
su obra y su doctrina, y la interpretación del mensaje de sus
predicaciones.
También es necesario para la comprensión de sus palabras
situarse en el momento histórico en el que el Maestro Vicente Ferrer
inició su campaña de cristianización: En plena Edad Media, entre
los siglos XIV y XV, cuando asomaban los primeros signos de
autonomía de la Filosofía, el Arte y la Cultura frente a la tradicional
influencia de la Iglesia Católica sobre la Ciencia; se imponía el
poder Real; acuciaba a las gentes la crisis económica y la peste;
emergía la vida urbana y la inquietud política; surgía el germen de
las clases sociales; y se debilitaban los principios morales,
propiciando el relajamiento de las costumbres.
Vicente Ferrer, tocado por la
mano de Dios, decidió llevar su acción
evangelizadora,
apoyándose
en
nuevos gestos y palabras: gracia y
dulzura en el hablar, afluencia de
sentencias, gravedad religiosa y voz
grave, y con elocuencia adecuada a la
diversa sociedad rural o urbana de
este tiempo de desigualdad, zozobra,
confusión y temor.
Llamado a intervenir en los
problemas socio-políticos de su
tiempo, fue consejero del Papa y de
los Reyes de Aragón, asesor en el
Cisma de Occidente, delegado en el Compromiso de Caspe,
congresista en la Disputa de Tortosa y pacificador de banderías,
demostrando ser, además de gran predicador de la Divina palabra,
un gran hombre de Estado.
Destacó, como anticipo a su época y valedero para todo
tiempo, su reflexión: “Todos los hombres somos hermanos. Es
preciso que haya reyes, es preciso que haya Papas. Pero a los ojos
23
de Dios no hay más que hombres con vocaciones diferentes sin
duda, pero todos iguales en los méritos de Cristo crucificado”.
Los textos y documentos, que recogen el pensamiento del
dominico valenciano, han sido estudiados para mostrar o deducir la
influencia religiosa, social y política que con sus palabras imbuía
entre las gentes de toda condición, que acudían multitudinariamente
a escuchar su predicación, que centraba regularmente en los
temores por el cambio de siglo; el “milenarismo” -anticristo, fin del
mundo y juicio final-; los vicios y errores sociales -renovación y
penitencia-; la confrontación violenta entre bandos y familias -paz y
caridad-; y la conversión universal al cristianismo de moriscos,
judíos, gentiles, herejes o heterodoxos, por la aceptación de las
verdades evangélicas.
Así los Evangelios, la muerte y
resurrección de Cristo, el amor al
prójimo, las razones para confiar en
Dios, el destierro de los pecados
capitales, la penitencia, el acceso a
la gloria y el temor al infierno, la
condena de actitudes inmorales y el
mal uso de la riqueza, entre otros
fines, formaban parte de sus
sermones,
buscando
influir
positivamente en la salud espiritual
de las “buenas gentes”, la concordia
en las familias y entre grupos, la
reforma de los hábitos sociales, y
conseguir con ello una sociedad
más espiritual.
Conocido es que el Maestro Vicente Ferrer no escribió sus
sermones y que no existe un sermonario autógrafo de sus
alocuciones. Que existía un reportador profesional, religioso o lego,
por encargo o para sí o su parroquia, que sin control del predicador,
en principio simultaneaba la escucha de la palabra del Maestro con
la escritura, y que quizás simultáneamente o con posterioridad
tradujera de la lengua vulgar o valenciana, con la que el predicador
24
se dirigía al auditorio, al latín o a la lengua materna del propio
reportador.
El texto oral es irrepetible, existen elementos que no se
pueden captar por escrito, y si de las anotaciones inmediatas un
traductor o relator posterior preparase su edición en latín u otra
lengua, podría presentarse un sermón “totalmente nuevo”, diferente
en el “espíritu” con que fue predicado, y quizás exacerbado en
algunos aspectos de su mensaje espiritual o social.
Además
este
trabajo, puede en algún
caso
dar
pie
a
intercalaciones de citas o
palabras no exactas,
espacios
en
blanco,
adiciones al margen,
apuntes
o
copias
abreviadas.
Tampoco
podría incluirse en el
texto, la articulación de la
palabra con el gesto
interpretativo,
la
literalidad con la intención manifiesta, o el cambio de tono o de ritmo
tan útil y singular en fray Vicente Ferrer, en comparación con otros
predicadores coetáneos.
Fray Vicente Ferrer fue fraile de una Orden religiosa
mendicante, movilizada para la vida contemplativa de oración y para
la vida activa mediante la predicación. Su compleja personalidad:
intelectual, predicador, pacificador, taumaturgo y político, presenta
al Santo valenciano envuelto en una aureola popular, que
ensombrece el conocimiento de su profunda formación teológica, su
pensamiento filosófico, y sus conocimientos científicos, dejando al
descubierto especialmente su santidad de vida y la facilidad de
interpretación y de enseñanza de los textos de las Sagradas
Escrituras, según la normativa teológica de su tiempo.
La rigurosidad en la observación de las Leyes Divinas y de las
reglas de su Orden, la práctica en grado heroico de las virtudes
25
teologales y cardinales, su ortodoxia en la Fe, la fecunda actividad
de apostolado convirtiendo grandes muchedumbres, llevando a la
aflicción a muchos pecadores, curando enfermos o realizando
prodigios, sustentados con el ejemplo de su austeridad de vida y la
severidad en las disciplinas, le dieron las condiciones exigidas para
su canonización, que mediante Bula papal de S.S. Pío II, decisión
infalible que admite la santidad de Vicente Ferrer.
Cumple, pues, san Vicente Ferrer sobradamente las
condiciones de “santidad de vida” y “ortodoxia en la fe”, reconocidas
por el Papa valenciano Calixto III el 29 de junio de 1455.
La fuente de su sapiencia y prudencia, de su conocimiento de
las Biblia, su preparación teológica, su saber en psicología y
oratoria, su sentido de la justicia, y su instrucción en las ciencias y la
cultura, los podremos encontrar hoy en el contenido de sus
sermones, que le hacen digno de su Magisterio, y que han de ser el
fundamento de un nuevo Doctorado.
“Doctor/a de la Iglesia" es un título
que la Iglesia (el Papa o un Concilio
Ecuménico) otorga oficialmente a ciertos
santos, para reconocerlos como eminentes
maestros de la fe para los fieles de todos
los tiempos. El título representa, además
del oficio litúrgico, la recomendación de su
doctrina, sobre todo en orden a la
enseñanza.
Ciertos escritores eclesiásticos han
recibido este título, debido a las grandes
ventajas que la Iglesia ha obtenido de su
doctrina y de entre estos Padres, algunos
adquieren un destacado relieve por haber
iluminado ampliamente todo el campo de
la revelación y abierto nuevos caminos a la
teología de los siglos posteriores.
A los miles de Sermones de san Vicente Ferrer repetidamente
editados, se agregan sus obras, entre otras el Tratado de la Vida
26
espiritual, Tratado consolatorio de la Fe, Tratado del Cisma
Moderno, Contemplación de la vida y de la Pasión de Jesucristo,
Propiedades de la Misa, cuyo conjunto está siendo preceptiva y
rigurosamente examinado, a fin de probar la excelencia de su
doctrina, ya anticipada en la iconografía vicentina representando al
Santo con un libro en la mano izquierda como atributo de Doctor, e
incluyéndolo en el año litúrgico en el llamado “movimiento de los
santos”, como oficio de san Vicente Ferrer, Confesor, calificado
como evangelizador, apaciguador, y perseverante por la unidad de
la Iglesia: La boca del Justo derramará sabiduría, y su lengua
hablará juiciosamente; la Ley de Dios está en su corazón.
Para seguir las reiteradas actividades del nuestro Capítulo de
Caballeros Jurados y de nuestro Lloctinent General en pos del título
“Doctor declarado” de la Iglesia Universal para san Vicente Ferrer,
falta agregar a este reconocimiento secular de san Vicente como
“Doctor reconocido”, un primer impulso realizado por personas
cualificadas en ciencia y teología que, mediante el estudio crítico de
sus Sermonarios, aporten el fundamento de la permanencia en el
tiempo de sus enseñanzas en la Fe, útiles para la formación
espiritual en estos tiempos de crisis moral, inquietud y
desorientación social, como la época que rememoramos, y que en
manos del “Actor”, constituya el Acta de fundación de la “Asociación
Pro Doctorado” y sirva de guión central para que el “Procurador” de
inicio al proceso de promoción correspondiente hacia el Doctorado
de la Iglesia.
Bibliografía básica
Bula de Canonización de san Vicente Ferrer.
Ediciones del Capítulo.
Tratado de la Vida Espiritual.
Edición del Capítulo.
Hacia el Doctorado de san Vicente Ferrer. Vicente Castell Maiques.
Ediciones del Capítulo.
Sermón, sociedad y literatura en la Edad Media.
San Vicente Ferrer en Castilla (1411-1412).
Edición de la Junta de Castilla y León.
Boletín núm. 2 (2005).
Ediciones del Capítulo.
27
NECROLÓGICA
HC D. Benito Sáez y González-Elipe. Título LXXII.
Ingresado en 1979 en este Capítulo de Caballeros
Jurados, mantuvo durante 30 años el reflejo de los ideales que
inspiraron la fundación de nuestra Institución y, desde su
puesto en el Consejo, nos ha dejado el referente de sus
virtudes y disposición para el buen hacer en pos de los fines
vicentinos, que nos congregaron a servir a san Vicente.
Ilma. Sra. Dª. Francisca Laguarda Cubells
Esposa del HC D. Vicente Gil Galán
Fue, desde 1975, ejemplo, con su presencia y
recogimiento, de devoción y constancia, cooperando en los
fines del Capítulo para la exaltación del Santo Patrón
valenciano.
Descansen en Paz
28
ACTIVIDADES DEL CAPÍTULO año 2009
ENERO
Reunido el Consejo Directivo
con fecha 27 del presente mes,
con la salutación del Lloctinent
General, se dio por iniciadas las
actividades del Capítulo en el año
2009.
Como tema prioritario se acordó
iniciar el procedimiento, a fin de
cubrir las cuatro vacantes de
Caballeros, para lo que se dieron
las instrucciones pertinentes al
Escrivà y Menestral para iniciar los
preparativos para la selección de
aspirantes y preparación del Acto
Institucional. A los Sindics 1º y 2º
se les encomendó la preparación
de los opúsculos correspondientes
a las festividades de san Vicente
Ferrer y san Vicente Mártir. El
Racional presentó para su aprobación la Memoria (Boletín nº5)
correspondiente al año 2008 y el Escrivà y Almoiner el Cierre de las
Cuentas y Estado Bancario del anterior ejercicio, y presupuesto
2009.
Se acordó asistir corporativamente al Acto de Exaltación e
Imposición de la Medalla de la Junta Central Vicentina a la
Honorable Clavariesa de las Fiestas Vicentinas de 2009, Ilma Sra.
Dª. María Dolores Asensi Marco de Escudero, y ofrecerle en
nombre del Capítulo de Caballeros Jurados el recuerdo
tradicional.
El Escrivà reservó, en la S.I. Catedral de Valencia y Celda de san
Vicente en Capitanía General, las fechas para la celebración de las
29
Misas mensuales del Capítulo, remitiendo a todos los Caballeros el
correspondiente recordatorio.
Día 21: En el Salón de Cristal del Ayuntamiento de Valencia, el
canónigo de la S.I. Iglesia Catedral D. Jaime Sancho Andreu
presentó el libro “Hagiotoponimia de san Vicente, protomártir de
Valencia”, escrito por D. Santiago Ferrer Baldoví. A dicho acto la
Alcaldesa de Valencia, Dª. Rita Barberá Nolla invitó al Capítulo,
asistiendo en su representación el Lloctinent General.
Día 22: Aceptando la invitación cursada al Capítulo por el Deán
de S.I. Catedral B. Metropolitana de Valencia, para participar en la
Misa Pontifical y Procesión acostumbrada con motivo de la fiesta de
san Vicente Mártir, se cursó la correspondiente convocatoria y un
grupo de Caballeros participaron en dichas celebraciones.
El Capítulo repartió entre los asistentes el opúsculo “san Vicente
Mártir en el Cuarto Centenario del nacimiento del Rey Jaime I de
Aragón”, escrito por D. Daniel Benito Goerlich, de la Universidad de
Valencia.
Día 24: El Altar del Mercat invitó al Capítulo al Acto de
Exaltación e Imposición de la Medalla de la Asociación a la
Clavariesa Mayor Dª. Carmen Espinosa y Torres, ceremonia que se
realizó en el salón de Actos de la Residencia del Corazón de Jesús
con la presencia de una representación del Consejo.
FEBRERO
En representación del Capítulo, su Lloctinent General HC.
Ignacio Carrau Leonarte y el Escrivà HC. Elviro Adán García, por
invitación del Presidente de la Junta Central Vicentina, Ilmo. Sr. D.
Félix Crespo Hellín, y un numeroso grupo de Caballeros por Altares
y Asociaciones Vicentinas, asistieron al acto de la Solemne
Exaltación de la Honorable Clavariesa de las Fiestas Vicentinas
2009, Ilma. Sra. Dª María Dolores Asensi Marco. Por la
representación del Consejo se hizo entrega a la Honorable
Clavariesa de un recuerdo de este Capítulo.
30
El Aula de Predicación de la Comunidad Dominicana de la Casa
Natalicia de san Vicente Ferrer remitió programa de conferencias
sobre la predicación. A la lección inaugural, dada por el Rdo. D.
Alfonso Esponera Cerdán OP., asistieron los HHCC. Elviro Adán
García y Rafael Martínez Mesas, Escrivá y Conseller del Consejo,
respectivamente.
Día 16: El Sindic primer, HC. José Francisco Ballester-Olmos y
Anguís, publicó en la sección de “Opinión” del periódico “Las
provincias” el artículo “Élites y festes de carrer. Mitos, realidad y
falacias”, como respuesta a la prensa valenciana de un supuesto
sello elitista de las fiestas vicentinas, incidiendo en la tradición
popular de estas celebraciones.
Día 27: El Lloctinent General convocó al Consejo Directivo con
carácter ordinario para, entre otros temas menores, de acuerdo al
Artº 30 de los Estatutos, proceder al estudio y valoración de las
solicitudes cursadas para el ingreso de nuevos Caballeros.
Organizada por la Real Orden de Santa María del Puig, con la
colaboración de la Cofradía del Santo Cáliz de la Cena del Señor, el
HC.. José Francisco Ballester-Olmos y Anguís, Sindic primer del
Capítulo y miembro de la Junta Directiva de la Cofradía, expuso en
el Casino Primitivo de Alicante una conferencia sobre “El Santo
Cáliz de la Cena; Historia y Devoción”.
MARZO
Día 10: Como consecuencia de la decisión del Consejo Directivo,
y previa convocatoria de acuerdo a los artículos 47 y 48 de los
Estatutos, se reunió el Capítulo en Asamblea General Ordinaria en
la Capilla de san Vicente Ferrer de la Iglesia Castrense de Santo
Domingo para la aprobación de la Memoria, Estado de Cuentas
2008 y Presupuesto 2009 del Capítulo.
A continuación en Asamblea General Extraordinaria de
acuerdo a los artº 12, 13, 30 y 48, previa determinación del quórum,
se procedió a la presentación de las solicitudes presentadas para
31
nuevo ingresos y la elección por votación secreta por los presentes
y representados.
Así mismo, se dio paso a la autorización por la Asamblea para la
concesión de recompensas.
Resultaron elegidos para ingreso en el Capítulo:
Imo. Sr. D. Fernando De Rosa Torner
Ilmo Sr. D. Antonio Mares Romero
Ilmo. Sr. D. José Leto Melero Crespo
Ilmo. Sr. D. Juan Antonio Barberá Payá
Se aprobó la concesión de la Medalla del Capítulo:
Ilmo. Sr. D. Joaquín Elizalde Urdánoz
Posteriormente, el Lloctinent General comunicó por escrito el
resultado de la Asamblea, anticipando el nombramiento a los
elegidos como Caballero Jurado de san Vicente Ferrer.
Por el reciente fallecimiento del HC. Benito Sáez y GonzálezElipe, el Lloctinent General manifestó en su recuerdo las siguientes
palabras: Modelo de Patriota español y Católico sincero y
consecuentemente en su vida, por convencido, no sólo proclamó de
palabra sino siempre con sus hechos, sus sentimientos, sus ideales
y sus lealtades, siendo por ello ejemplo para quienes las
compartimos con él, y además un referente imprescindible en la
historia del Capítulo de Caballeros Jurados de San Vicente Ferrer,
pues la Cruz sobre su pecho era verdaderamente testimonio de su
constante quehacer en la fidelidad al Juramento prestado. Su
orientación en el ejercicio de los cargos que ostentó en el Capítulo
fue siempre fiel reflejo de los ideales, que inspiraron la fundación de
nuestra Institución
El Presidente de la Asociación Pila Bautismal de san Vicente
Ferrer, el HC. D. Luis Torres Arroyo, invitó al Capítulo al solemne
acto de proclamación de los Clavarios de las Fiestas Vicentinas
2009 de la Asociación, D. Alejandro Vidal Soldevilla y Dª María
Dolores Juan Meseguer de Vidal. Solemne acto en que, tras la
actuación del Grupo Cámara Ciudad de Valencia, intervinieron el
Secretario y Presidente de la Asociación HHCC. Rafael López Díe y
32
Luis Torres Arroyo, como mantenedor el también HC. Fernando De
Rosa Torner, y se impuso las Medallas a los Clavarios y la Medalla
de Honor al Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo Auxiliar D. Enrique
Benavent Vidal. Tras los Himnos Regional y de España, el acto se
cerró con una cena de Hermandad en el Hotel Astoria Palace. A
dicho acto asistió una representación del Consejo, presidida por el
Racional HC. Esteban González Concepción.
ABRIL
Día 1: En la Parroquia de San Juan y San Vicente se celebró la
Bendición del Estandarte del Altar de san Vicente Ferrer del
Mercado de Colón, que preside D. Armando Serra Cortés, y la
Imposición de la Medalla de la Asociación a la Comunidad de los
PP. Dominicos, a la Agrupación de Fallas Gran Vía, y a la
Asociación de Amics del Corpus. Al Acto, al que fue invitado el
Capítulo, asistió una representación del Consejo.
El día 2, reunido el Capítulo en Asamblea Extraordinaria en la
Capilla de san Vicente Ferrer de la Iglesia Castrense de Santo
Domingo, bajo la presidencia del Exmo. Sr. D. Fernando SánchezLafuente Caudevilla, Teniente General del Ejército y Presidente de
Honor del Capítulo, se celebró, con toda solemnidad, el Acto
Institucional del Capítulo de Caballeros Jurados de san Vicente
Ferrer para el ingreso de los cuatro nuevos Caballeros electos y la
imposición de Medalla de Oro concedida. A dicho acto asistieron
autoridades Civiles y Militares y representaciones de Altares y
Asociaciones Vicentinas.
33
Palabras pronunciadas en nombre de los nuevos Caballeros
por el Ilmo. Sr. D. Fernando De Rosa Torner:
Excmo. Sr. General Jefe del Cuartel General de Alta
Disponibilidad y Presidente de Honor del Capítulo de Caballeros
Jurados de San Vicente Ferrer.
Excmo Sr Déan de la Catedral de Valencia
Ilustrísimo Sr. Presidente de la Junta Central Vicentina
Honorable Clavariesa de las Fiestas Vicentinas
Excelentísimo Sr. Lloctinent General y Honorables Caballeros del
Capítulo
Señoras y Señores
Es para mí un alto honor dirigir unas palabras a tan
distinguido auditorio, en este solemne acto de juramento, en
nombre de todos los que hoy hemos ingresado en este
Honorable Capítulo de Caballeros Jurados de San Vicente Ferrer.
Quiero, por tanto, en primer lugar, expresar nuestro más vivo
agradecimiento por la deferencia y atenciones que se ha tenido por
pensar en nosotros para formar parte de esta asociación, así como
dirigirles también sentidas palabras de felicitación y enhorabuena
por todas las iniciativas y actividades que, con tanto interés y
eficacia, llevan a cabo para honrar y mantener viva la figura de san
Vicente Ferrer.
Sentimientos sinceros de gratitud que queremos hacer
extensivos a todos y cada uno sus miembros por darnos la
oportunidad de pertenecer a tan insigne colectivo.
Cuando recibí la noticia, a través de mi gran admirado amigo
Ignacio Carrau, mi sentimiento inicial fue de inmensa alegría y
honor pero, también, de gran compromiso, como estoy seguro que
34
lo sintieron de igual modo los que hoy comparten conmigo este gran
día.
Por ello, agradecemos con sinceridad y humildad este honor,
que nos habéis otorgado y esperamos poder actuar con dignidad.
Tened la más completa seguridad que sobrará entusiasmo y
empeño en las tareas que debamos acometer, para mantener viva
la llama del recuerdo de nuestro querido maestro sant Vicent.
Somos conscientes de que el fin con el que fue constituida
esta asociación no es otro que el conseguir que perviva, a través del
tiempo, la profunda huella que nos dejó nuestro gran dominico, así
como luchar incansablemente por lograr que sea nombrado Doctor
de la Iglesia.
Por ello, a través del juramento de investidura prestado en esta
Ceremonia, queremos resaltar que dedicaremos nuestra actividad
institucional y personal a trabajar por la propagación de la figura y
enseñanzas, que nos dejó este gran Apóstol de la Paz.
Y creo que la forma más gráfica de expresar los sentimientos
que en estos momentos nos embargan es recordar, a través de
unas pequeñas pinceladas, la gran figura de san Vicente Ferrer.
¿Quién fue san Vicente?
Fue un extraordinario embajador de su querida Valencia, en
su dilatado peregrinar por otras tierras.
Fue un enamorado de su tierra, a la que recordó en sus
últimos momentos, dando un mensaje de amor para Valencia y los
valencianos.
Fue mensajero de paz y gran defensor de la no violencia,
predicando la concordia y la unión allá donde se encontraba.
Fue un gran teólogo.
Fue uno de los más prestigiosos políticos y estadistas.
Fue un extraordinario comunicador y orador.
Fue uno de los más grandes predicadores, siendo
reconocido por su pericia jurídica en sus sermonarios y tratados.
Fue un filósofo de destacado prestigio.
Fue un incansable apóstol de la paz y sus intervenciones
fueron siempre acompañadas de una incansable intervención en
los grandes acontecimientos políticos y sociales de la época.
Fue un gran estadista y poseía un sutil conocimiento de la
psicología humana.
En resumen, podemos afirmar con orgullo que sant Vicent
fue una figura apasionante que perdurará para siempre.
35
Quisiera terminar con una oración a san Vicente que dice así:
“¡Amantísimo Padre y Protector mío, san Vicente Ferrer!
Alcánzame una fe viva y sincera para valorar debidamente las
cosas divinas, rectitud y pureza de costumbres como la que tú
predicabas, y caridad ardiente para amar a Dios y al prójimo.
Tú, que nunca dejaste sin consuelo a los que confían en ti,
no me olvides en mis tribulaciones. Dame la salud del alma y la
salud del cuerpo. Remedia todos mis males. Y dame la
perseverancia en el bien, para que pueda acompañarte en la gloria
por toda la eternidad. Amén”
MUCHAS GRACIAS.
El Lloctinent General expresó su satisfacción por el ingreso de
nuevos Caballeros, que traerían nuevo impulso a las labores que
realiza el Capítulo, para alcanzar sus fines vicentinos, y
especialmente para colaborar en los trabajos que realiza el
Capítulo, a fin de obtener la proclamación de la Iglesia del
Doctorado para san Vicente Ferrer.
Tras la intervención del Lloctinent General, cerró la ceremonia
religiosa el Presidente de Honor, felicitando a los Caballeros de
nuevo ingreso y condecorado, agradeciendo la consideración que el
Capítulo viene manifestando tanto a su persona, como a la
Institución que representa, y ensalzando la labor que realiza en
defensa y propagación de la devoción al Santo.
El Acto Institucional del Capítulo finalizó con un cóctel en el salón
del Trono del Antiguo Convento de Dominicos.
36
37
Día 3: Un notable grupo de Caballeros de este Capítulo, con el
Escrivà en representación del Consejo, asistieron en la Reial
Parròquia dels Sant Joans al XIII Pregó Vicentí del Altar del
Mercat. Pregón, que tras los actos previos del recital musical, la
ofrenda floral a san Vicente y la recepción de la Real Señera, recitó
el HC. Fernado De Rosa Torner, y que se cerró con los Himnos de
Valencia y de España.
Día 5: El President de la Assocaició de Sant Vicent Ferrer,
Altar de Russafa, invitó al Lloctinent y Caballeros del Capítulo al
acto de presentación de las Reinas Dª. Sofía Folgado Escudero.
Acto que tuvo lugar en el Teatro Salesianos “Fuente de San Luis”.
Día 7: Como en años anteriores, el Loctinent General,
acompañado del Racional, ofrecieron en la Mesa Petitoria instalada
en Capitanía General, el donativo del Capítulo para el apoyo a la
Asociación Española contra el Cáncer.
Día 8, Invitado el Consejo por el Presidente de Generalidad
Valenciana para asistir a la presentación de la “Obra Completa de
Xavier Casp”, el Escrivà representó al Consejo en el acto celebrado
a tal fin en el Monasterio de San Miguel de los Reyes.
Día 13: El HC. Emilio Lisart Borrás, Presidente de la Cofradía de
San Vicente Ferrer de la Cañada, remitió al Lloctinent General y
Caballeros del Capítulo el programa e invitación a la Misa Solemne
en Honor a san Vicente, concelebrada por el Padre Dominico D.
Vicente Botella y cantada por el Cor Popular de Lo Rat Penat.
38
Día 18. El Lloctinent General representó al Capítulo, en el acto
que se celebró en la S.I. Catedral Metropolitana de Valencia, con
motivo de la toma de posesión del Arzobispo de Valencia, Monseñor
Carlos Osoro.
20 de Abril. Festividad de san Vicente Ferrer
El Capítulo de Caballeros Jurados fue invitado por el Deán de la
S. I. Catedral B. Metropolitana de Valencia a participar en los actos
a celebrar con motivo de la Festividad de nuestro Santo Patrón, san
Vicente, en la Santa Iglesia Catedral de Valencia y Procesión
religiosa acostumbrada. Actos para los que remitió convocatoria y a
los que en diversas Asociaciones y Altares vicentinos, además de
corporativamente con el Capítulo custodiando la imagen, asistieron
numerosos Caballeros.
Durante la Misa se repartió,
según la costumbre, entre las
autoridades, asociaciones y público
asistente, el opúsculo tradicional,
que edita el Capítulo sobre temas
vicentinos: “El Apóstol san Pablo
en la predicación de san Vicente
Ferrer”, escrito por el Rvdo. D.
Vicente Pons Alós, Canónigo
Archivero de la S.I. Catedral y Profesor Titular de la Facultad de
Historia (Universidad de Valencia).
El día 23, La Real Academia de Cultura Valenciana invitó al
Capítulo de Caballeros Jurados a la inauguración, en sus locales de
la calle Avellanas de esta Ciudad, de la exposición vicentina
“Aproximació a la vida y a l‟obra del Patró del Regne de Valéncia”;
acto al que asistieron en representación del Consejo el Sindic
segón, el Escrivà y el Racional, HHCC. Guzmán Guía Calvo, Elviro
Adán García, Esteban González Concepción y en representación
de sus Altares e Instituciones Vicentinas otros Caballeros.
Día 26: D. Jaume Nacher Andrés, Presidente de la Asociación
de Sant Vicent Ferrer del “Mocadoret”, cumplió 25 años como
presidente de la asociación, homenaje al que se sumó el Capítulo,
invitado a las fiestas de la Asociación.
39
La Cofradía de San Vicente Mártir y Amigos de la Vía Augusta
de la Comunidad Valenciana solicitaron la colaboración del Capítulo
para ayuda en la consecución de sus fines, entre los devotos, al
protomártir valenciano.
Día 28: El Lloctinent, Sindic segón y Escrivà asistieron a la
conferencia que, sobre “La Justicia y san Vicente Ferrer en Caspe”,
pronunció el Presidente de la Real Academia de Cultura
Valenciana, y HC. de este Capítulo, D. Vicente Simó Santonja.
MAYO
Con fecha 16, el Consejo remitió a todos los Caballeros del
Capítulo y Altares Vicentinos el libro escrito por el Lloctinen General,
HC.. Ignacio Carrau Leonarte y editado por el Capítulo “Glosario
Vicentino”.
Para completar la nueva Asamblea General de la Junta Central
Vicentina, el Consejo designó vocales en representación del
Capítulo a los HHCC. Esteban González Concepción, Racional, y
Rafael Martínez Mesas, Conseller.
El Consejo, estuvo presente los días 5 y 19 en las conferencias
realizadas en el Salón de Actos de la Real Academia de Cultura
Valenciana sobre los temas “San Vicente Ferrer y los Judíos; La
Disputa de Tortosa”, por D. Francisco A. Roca Traver; y “La Justicia
de san Vicente Ferrer en el Cisma”, expuesta por D. José Climent
Barber.
El día 21, patrocinada por la Real Orden de Caballeros de
Santa María del Puig, en los locales de la Real Academia de
Cultura Valenciana, el HC. Fernando De Rosa Torner disertó sobre
“Justicia y Familia”, conferencia a la que asistió en representación
del Consejo el Sindic segón y Escrivà HHCC. Guzmán Guía Calvo y
Elviro Adán García.
Por invitación del Deán-Presidente de la S. I. Catedral Basílica
Metropolitana de Valencia, el Consejo remitió convocatoria a todos
40
los Caballeros, para participar en la tradicional procesión religiosa
en honor a Nuestra Señora la Virgen de los Desamparados.
Día 27: El Lloctinent General de l‟Insigne Capitul de l’Almoina
de Sant Jordi de Cavallers del Centenar de la Ploma, Ilmo. Sr.
D. Pascual Martín-Villalba y Medina cursó invitación al Lloctinent
General de este Capítulo, para asistir a los actos de Jura e Ingreso
de nuevos Caballeros en la Capilla del santo Cáliz de la S.I.
Catedral M. de Valencia. A este acto asistió, en su representación el
Racional, HC. Esteban González Concepción.
Día 27: La Comisión Diocesana de Espiritualidad del
Arzobispado de Valencia, anunció la la conferencia del curso 08-09
“Madre y Discípula del Señor” (Mirar de nuevo a María), que
pronunció Dª. María Aleixandre en el Salón de Actos de la Vicaría,
Día 28. El Capítulo fue invitado al “Concierto Homenaje a las
Fuerzas Armadas” que se celebró en el salón del Trono del Cuartel
General Terrestre de Alta Disponibilidad (Capitanía General), en
el que destacaron las marchas militares “Las Corsarias” (La
Bandera) y la Orgía Dorada, de F. Alonso y G. Giménez, y se cerró
con los Himnos Regional y Nacional.
El Presidente de la Fiesta de los Niños de la Calle de San
Vicente remitió el programa de actos en honor a san Vicente,
invitando a la participación del Capítulo: Triduo, Misa solemne en
san Agustín, tradicional bautismo en el Pouet, bendición e
imposición de Medallas de la Asociación y Procesión de los Niños.
Actos a los cuales asistió una representación del Consejo.
JUNIO
El día 2: Convocado por el Lloctinent General el Consejo
Directivo, se acordaron, entre otras propuestas, solicitar audiencia
al nuevo Arzobispo de Valencia, Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Carlos
Osoro Sierra y aprobar la edición del “Oracional Vicentino”
Día 3: El Institut d’Estudis Valencians anunció la conferencia
sobre “Guastavino i Valencia” en el Aula de Cultura de la CAM, a
41
cargo de los profesores de UPV Ferran Ribes Blasco y Camila
Mileto.
Día 5: El Honorable Presidente de Lo Rat Penant invitó al
Consejo a participar en el acto de homenaje a En Pere Delmonte i
Hurtado, en su nombramiento como “Prohom”.
Día 13: El Foro de Laicos del Arzobispado de Valencia
comunicó, solicitando la asistencia del Consejo, la asamblea de Fin
de Curso, a fin de consensuar actos y acciones para el próximo
ejercicio.
Día 14: Siguiendo la tradición, el
Capítulo, con su Consejo, estuvo
presente, por invitación del Deán de
la Catedral de Valencia, en la
solemne Procesión General del
Corpus
Christi.
Acto
de
acompañamiento al Santísimo, para
el que se proporcionó a la Caballeros
asistentes del tradicional cirio.
Día 15: La Asociación VIº Centenario de San Vicente Ferrer
en Teulada envió al Capítulo un legado de escritos y publicaciones
conmemorativos sobre la presencia y milagros del santo en
Teulada.
Día 19: El Presidente del Institut d’Estudis Valencians remitió
al Consejo invitación para la conferencia sobre “Blasco Ibáñez,
Personaje total: Político, literato y periodista”.
Atendiendo a la citación de la Junta Central Vicentina, el Capítulo
asistió a la Misa que, en honor y veneración al Santo Cáliz de la
Cena del Señor, ofrecía su Cofradía de la Catedral de Valencia, por
la intención del mundo vicentino valenciano.
El peródico Las Provincias, en su edición del día 23, publicó
una colaboración en la página El Foro, firmada por José María Cruz
Román, alabando la aportación al conocimiento de san Vicente de
42
la obra de Ignacio Carrau, “Glosario Vicentino”, editado por el
Capítulo de Caballeros Jurados de San Vicente Ferrer.
De fecha 25 se recibió notificación del Cuerpo de la Nobleza del
Antiguo Reino de Galicia, comunicando la finalización de su
Capítulo General Extraordinario, manifestando así su consideración
a este Capítulo.
Día 26: El Excmo. Y Rvdmo. Sr. Arzobispo de Valencia D. Carlos
Osoro Sierra recibió en audiencia al Consejo Directivo del Capítulo,
exponiéndole origen y fines desde su fundación y haciéndole
obsequio del facsímil de las Ordenanzas del Colegio Imperial de
San Vicente Ferrer. Como muestra de las actividades realizadas, se
le ofrecieron otras publicaciones editadas por el Consejo.
El Lloctinent General hizo hincapié en las gestiones llevadas a
cabo en pro del Doctorado de san Vicente Ferrer, cuestión a la que
el Arzobispo se mostró muy receptivo, ofreciendo su apoyo para
este fin.
Por invitación del Presidente de la Junta Central Vicentina, Ilmo.
Sr. D. Félix Crespo Hellín, el Lloctinent General, acompañado de
miembros del Consejo, el día 29, asistió, en la Iglesia Castrense de
Santo Domingo, a la Misa y acto de entrega de la Imagen de san
Vicente Ferrer a la Honorable Clavariesa de las Fiestas
Vicentinas 2009, Ilma. Sra. Dª María Dolores Asensi Marco de
Escudero.
JULIO
Los días 3 y 4, se desarrollaron en Teulada los actos
conmemorativos de la llegada de la Reliquia de san Vicente Ferrer,
a los que por haber sido invitado el Capítulo a asistir por el Alcalde
de la Ciudad, Rector de la Parroquia de Santa Caterina Mártir y
Presidente de la Asociación VIº Centenario, asistieron, en
representación del Consejo, los HHCC. José Francisco BallesterOlmos y Anguís, Sindic primer, y Pedro Catalán Hurtado, Conseller.
Dia 5: El Consejo visitó al Obispo de Vannes en su residencia
en Valencia, para presentar los trabajos y gestiones realizadas en
43
pro del Doctorado para san Vicente Ferrer y recibir su apoyo para la
consecución de estos fines, comunes para todo el mundo vicentino,
especialmente también para su diócesis.
SEPTIEMBRE
Reiniciado el curso tras el paréntesis veraniego, el Lloctinent
General remitió carta a todos los Caballeros, con una llamada a la
“acción y a la oración”, y participar así con nuestra actitud en la
evangelización de la sociedad, “hoy confundida ante la ola de
relativismo y ateísmo que la invade”.
Consecuencia de la visita realizada en Alfara del Patriarca al
edificio que fue la casa de Fray Bonifacio Ferrer, por el Sindic primer
HC. José Francisco Ballester-Olmos y Anguís, acompañado de
otros profesores de la Universidad, con devotos de san Vicente
Ferrer y expertos en su vida y obra, y del informe sobre las
posibilidades museísticas, divulgativas o expositivas del edificio, al
Ilmo. Sr. Agustín Grau Alventosa, Director General de Turismo
Interior, con fecha 4 de este mes, el Alcalde de Alfara del Patriarca
remitió comunicación, manifestando haber recibido ayudas
económicas, acciones de conservación y restauración y proyectos
para la rehabilitación del Palau.
OCTUBRE
Día 7: El Círculo Cultural Aparisi y Guijarro cursó invitación al
Consejo para asistir
a los actos conmemorativos del 50º
Aniversario de su fundación.
Día 13: El Foro de Laicos del Arzobispado de Valencia convocó,
con otros Movimientos y Asociaciones, a asistir a la Asamblea de
Comienzo de Curso en la Parroquia de San Vicente Mártir de esta
Capital.
Dìa 19: El fotógrafo D. Manuel Guallart comunicó al Capítulo la
inauguración de la exposición fotográfica “Mi visión del Corpus”,
44
actividad organizada por la Asociación de Amigos del Corpus y la
colaboración del Ayuntamiento de Valencia.
Días 26-30: La Comisión de Espiritualidad del Arzobispado
de Valencia remitió al Consejo invitación al ciclo de conferencias
sobre “La palabra de Dios”, a presentar en el salón de Actos de la
Vicaría de Evangelización.
El General Jefe del Cuartel General Terrestre de Alta
Disponibilidad, remitió al capítulo el programa correspondiente al
XXVII Ciclo de Conciertos 2009-2010, a celebrar en el Salón del
Trono de Capitanía General.
NOVIEMBRE
Día 5: El Presidente de la Fundación Colegio Imperial de
Niños Huérfanos de San Vicente Ferrer remitió invitación al
Capítulo para asistir a la ceremonia de presentación del Documental
“Els Xiquets de san Vicent. 600 años de historia del Colegio Imperial
de Niños Huérfanos”. Asistió al acto una representación del
Consejo.
El mismo día 5, el Racional del Consejo HC. Esteban González
Concepción, en nombre del Lloctinent General del Capítulo efectuó
la entrega del donativo a la Cruz Roja Española en la Fiesta de la
Banderita.
Día 8: En la Parroquia de San Juan y San Vicente de Valencia
se impusieron solemnemente las Medallas a las Clavariesas
Mayores del Altar de San Vicente del Marcado de Colón, Dª:
Conchita Montava Santana y Dª. Inmaculada Ballester Montava.
Acto al que, invitado el Capítulo por su Presidente D. Armando
Serra Cortés, asistió en representación del Consejo el Escrivá HC..
Elviro Adán García.
Día 14: Invitado el Capítulo por el Presidente de la Cofradía de
San Vicente Ferrer de la Cañada Ilmo. Sr. D. Emilio Lisart Borrás
al acto de Proclamación de la Ilma. Sra. Dª. Marta Peña Tallada de
Agustí como Clavariesa Mayor de las Fiestas Vicentinas 2010, una
45
representación del Consejo asistió a la celebración en la Iglesia
Parroquial del Santísimo Cristo de la Fe de la Cañada.
El día 17, convocado el Consejo Directivo, se acordó aceptar la
propuesta del Lloctinent General para la edición de los opúsculos
vicentinos de las festividades de 2010, y presentar el “Oracional
Vicentino” en el Salón de Actos, amablemente cedido por la
institución valencianista Lo Rat Penat, y celebrar la tradicional Cena
Navideña del Capítulo, coincidiendo con la fecha de la última Misa
mensual.
El Excmo. Sr. D. Eduardo-Manrique Tejada Ybáñez, Presidente
de la Sección Reino de Valencia de la Orden de Caballería del
Santo Sepulcro de Jerusalén, invitó al Lloctinent General del
Capítulo de Caballeros Jurados de San Vicente Ferrer a los actos
en honor de Nuestra Señora de Palestina, celebrados con Solemne
Misa en la Capilla del Palacio Arzobispal. En representación asistió
el Menestral, HC. José Crespo Iranzo.
Día 26: En el Salón de Cristal del Ayuntamiento de Valencia,
organizado por la Junta Central Vicentina que preside el Ilmo. Sr.
D. Félix Crespo Hellín, tuvo lugar el Acto de Nombramiento de la
Honorable Clavariesa de las Fiestas Vicentinas de 2010, que recayó
en la Ilma. Sra. Dª María Asunción Palop Grau de De Rosa. A la
recepción asistieron las Honorables Clavariesas de años anteriores,
Presidentes de Altares y de Asociaciones Vicentinas, y una
numerosa representación del Capítulo de Caballeros Jurados de
San Vicente.
Día 28: El President de L’Associació de Sant Vicent Ferrer
Altar del Carme, HC. José Miguel López i Gutiérrez, invitó al
Capítulo de Caballeros Jurados a “l‟acte de nomenament i
impossició de les Medalles acreditatives als Clavaris Majors de l‟any
2010 Na Patricia, N‟Aleixandre i En Vicent Borrego i Meléndez, y als
Clavaris Infantils Carla i Vicent Fuster i Puchol.Al acto, que tuvo
lugar en el Salón Alfonso el Magnánimo del Centro de
Beneficiencia, asistió una representación del Consejo.
Día 28: El Gran Maestre, y en su nombre el Vice Gran Maestre
de la Real Orden de Caballeros de Santa María del Puig, Exmo.
46
Sr. D. Juan Lladró Dolz, cursó invitación al Capítulo para asistir a los
Actos Institucionales de investidura de nuevos Caballeros y Damas
de la Orden. El solemne Acto se celebró en el Monasterio de Santa
María del Puig.
DICIEMBRE
Día 1: El General Jefe del Cuartel General Terrestre de Alta
Disponibilidad, Teniente General del Ejército y representante
institucional de las Fuerzas Armadas en Valencia, Excmo. Sr. D.
Fernando Sánchez-Lafuente Caudevilla, invitó al Lloctinent General
y al Escrivá del Consejo, en representación del Capítulo, a la
Recepción a la Sociedad e Instituciones Valencianas, ofrecida en
Capitanía General.
El miércoles día 9 se finalizó el ciclo anual de Misas mensuales
del Capítulo, celebrándose en la Celda de san Vicente del antiguo
Convento de Dominicos de la
Capital, con asistencia del
Presidente de la Junta Central
Vicentina Ilmo. Sr. D. Félix
Crespo Hellín, de la Honorable
Clavariera, Ilma Sra. Dña. María
Dolores Asensi Marco, y un
numeroso grupo de Caballeros
con sus familias y amigos.
47
A continuación los miembros del
Capítulo, acompañados de familiares y compañeros vicentinos,
presididos por el Sindic Primer, HC. José Francisco Ballester-Olmos
y Anguís, se reunieron en la tradicional Cena de Hermandad, que,
con motivo de las conmemoraciones navideñas, cerraba las
actividades del año con las mejores esperanzas para todos.
Día 17: En el Salón de Actos de la institución valencianista Lo
Rat Penat, el Lloctinent General del Capítulo y su Capellá Major
realizaron la presentación ante el mundo vicentino valenciano de la
edición del “Oracional vicentino”.
Previamente el HC. Rvdo D. José Castillo editó en la Web
“archivalencia.org” una página explicando el contenido y finalidad de
esta publicación como instrumento de oración.
48
EL CAPÍTULO DE CABALLEROS JURADOS
DE SAN VICENTE FERRER PRESENTA EL
“ORACIONAL VICENTINO”.
José Balleste Olmos
En la sede de Lo Rat Penat fue presentado el pasado martes, día
15 de diciembre, el “Oracional Vicentino”, un libro de ayuda a la
oración cotidiana que en formato de bolsillo ha sido preparado por
D. José Vicente Castillo Peiró, ex-director del Colegio Imperial.
El libro, encargado al autor y
editado por el Capítulo de
Caballeros Jurados de San Vicente
Ferrer, entidad de la que el P.
Castillo es Capellán Mayor, recoge
un total de cuarenta y nueve
oraciones de diario. En su primera
parte contiene sugerencias de
oración en forma de ofrecimiento de
obras, de preparación para el
sacramento de la Penitencia, de consagración a la Virgen, el
Ángelus y el Rosario. La segunda parte del oracional, “en honor de
la Santísima Trinidad”, incluye oraciones en honor de Dios Padre,
como el Padrenuestro y la oración por la paz de san Francisco de
Asís; dedicada a Dios Hijo, Jesucristo, así como al Espíritu Santo.
La tercera parte está dedicada a san Vicente Ferrer y ofrece el rezo
de una novena, gozos al santo, letanías y oraciones, triduo e himno.
Finalmente, el volumen dedica una última parte a las oraciones en
49
honor de la santísima Virgen María y otras
varias. En el acto de presentación del
libro, al que asistió un nutrido público
vicentino encabezado por la Honorable
Clavariesa de las Fiesta Vicentinas de
2009 Dña. María Dolores Asensi y los
Vicepresidentes de la Junta Central
Vicentina Sres. López Gutiérrez y Rossi
Val,
intervinieron
con
respectivos
parlamentos D. Ignacio Carrau, Lugarteniente General del Capítulo
de Caballeros Jurados de San Vicente Ferrer; el Prof. José
Ballester-Olmos, Directivo de Lo Rat Penat, en representación del
Hble. Sr. Presidente de la señera institución cultural valenciana, y el
autor de la obra, que firmó ejemplares al término del acto. El
oracional vicentino podrá adquirirse en la librería especializada
“Paulinas” y en la catedral de Valencia.
_________________________
Durante el curso, Caballeros del Capítulo desarrollaron
actividades vicentinas como Presidentes de Altares o Asociaciones,
o formando parte de sus Juntas, y especialmente dentro del
Capítulo. Entre otros se han distinguido por sus artículos,
conferencias o entrevistas televisivas, de carácter cultural,
institucional o profesional, los HHCC. Ignacio Carrau Leonarte,
Presidente de la Cofradía del Santo Cáliz; Vicente-Luis Simó
Santonja, Presidente de la Real Academia de Cultura Valenciana;
José-Francisco Ballester-Olmos y Anguís, Profesor de la
Universidad Politécnica de Valencia, que junto con otros HHCC.,
participando en los círculos intelectuales o profesionales del entorno
valencianista, dan conocimiento y prestigio a esta Institución y a sus
fines vicentinos.
Como en años anteriores el Lloctinent General remitió a las
autoridades religiosas, civiles y vicentinas la Felicitación de
Navidad en nombre del Capítulo por la Buena Nueva del
Nacimiento del Hijo de Dios.
50
EDICIONES DEL CAPÍTULO 2009
51
52
www.cavallersjurats.com
En el año 2006, el Capítulo de Caballeros Jurados inauguró su
página web, con el objetivo, tal y como marcan nuestros estatutos,
de “Contribuir a la propagación del culto a nuestro Santo Patrón san
Vicente Ferrer”, desde un medio de divulgación “obligatorio” en
nuestros días como es internet.
En estos cuatro años, que nos hemos abierto al mundo a
través de internet, hemos dado respuesta a multitud de cuestiones,
que se nos han planteado a través de la web. Ha contactado gente
de muy diversas partes del mundo, interesados en la vida de san
Vicente así como en nuestros fines y actividades. Mantenemos
contacto con personas y asociaciones con fines similares a los
nuestros.
Desde la página web hemos intentado informar puntualmente
de todos los actos que organiza el Capítulo, así como en los que
participamos, dando muestra de nuestra propagación del culto a san
Vicente. No puedo dejar de insistiros a todos para que visitéis el
apartado “Noticias” de la web. Además os invito a que informemos
de cualquier asunto o acto, relacionado con san Vicente Ferrer, que
consideréis de importancia. Para ello podéis poneros en contacto
con
la
siguiente
dirección
de
correo
electrónico:
[email protected]
Hace dos años inauguramos un nuevo apartado en la web: un
sitio de recogida de adhesiones, solicitando la concesión a san
Vicente del Título de Doctor de la Iglesia. Os invito a todos los
Caballeros para que propaguéis, tanto como podáis, la visita a la
web, y en especial al apartado “Doctorado de san Vicente”, donde
podréis adheriros a dicha solicitud.
Estamos pensando en mejorar la página desde el punto de
vista de información y divulgación, por lo que, en poco tiempo,
esperamos tener un apartado de artículos sobre san Vicente Ferrer.
La idea es que cualquier artículo, documento, información, etc. que
53
haga cualquier Caballero, pueda ser incluida en la web, para
consulta pública. En breve, os mantendremos informados sobre
este nuevo apartado de la web.
Me voy a despedir con la misma frase que escribí en el
anterior artículo sobre nuestra página web, que se publicó en otra
memoria del Capítulo: “Para terminar, me gustaría invitaros a todos
a que visitéis “www.cavallersjurats.com” y que cualquier sugerencia
que tengáis, sobre el contenido o diseño de la página, nos lo hagáis
saber.”
HC. D. Guzmán Guía LLobet
54
LA LENGUA VALENCIANA EN TIEMPOS DE
SAN VICENTE FERER
Antoni Canals (1352-1419):
Dominicà naixcut en el regne
de Valencia, que estudià Filosofía
en Barcelona i es contà entre els
alumnes de Vicent Ferrer, nos
deixà un testimoni luminòs en el
prolec de la seua traduccio del
“Valeri Maxim”, autor romà del
segle I d.C:
“… per que yo, a manament
de vostra senyoría, el l`he tret de
latí en nostra vulgada lenga
materna valenciana axi com he
pogut jassetssia que altres l’agen
tret en lenga cathalana…”
En 1390 la Càtreda de
teología de la Seu de Valencia, ocupada per Vicent Ferrer, passà a
ser regentada por Antoni Canals, per concessió d‟en Jaume d‟Aragó
bisbe de Valencia “per vostra altea licenciat en sacra Theología”, el
cual le va a encarregar la traducció de l`obra de Valeri Maxim, els
Dictorum factorumque memorabilium, bisbe a qui apareix dedicada
l‟obra, i a on es consignen fets importans, virtuts i ingeni d‟homens i
dones de l„antiguetat romana. Considerat un tratat de moral en
eixemples, Antoni Canals mostra el seu caracter prehumaniste en
formular el valor educatiu que per ell te dit llibre puix servix por a “fer
l´hom perfecte e acabat”.
Fra Antoni Canals, dominic educat en les millors aules de
l‟Orde Dominicana, notable predicador, bebía en les fonts del
classicisme llatí, i a mes de complir sa missió evangelisadora nos ha
deixat una obra literària excepcionàl que el posa entre els primers
llocs dels iniciadors del renaiximent classic de les lletres
valencianes.
HC. Elviro Adán García
“Crit de la Llengua”
Rvdo. José Alminyana i Vallés
55
EFEMÉRIDES
ABC: 20 DE Abril de 1974
Del archivo del HC Vicente Martínez Marco
56
SOLEMNIDAD DE SAN VICENTE FERRER
APOSTOL DE EUROPA Y VALENCIANO UNIVERSAL
Abril de 2009
Rvdo. D. Jesús Martí Ballester
Sacerdote valenciano
Fundador de las Teresianas
de la Cruz y el Amor
(Instituto Secular)
1."TEMED A DIOS Y DADLE GLORIA". Este texto del
Apocalipsis 14,7, es el lema de san Vicente Ferrer a quien el
Espíritu Santo ha enriquecido con carismas proféticos de
evangelizador abnegado, taumaturgo portentoso, pastor de almas
solícito y constructor de la paz. En Valencia (España) se conoce
bien la historia legendaria de sus abundantes milagros que le
envuelven, incluso antes de nacer, como el saludo de aquella
cieguecita dirigido a su madre embarazada, que cuando le dijo: "Llevas un ángel", recobró la vista. Amenazada de hambre la
ciudad por la sequía dice el niño Vicente: "Si queréis lluvia,
llevadme en procesión”.
2. La grandeza espiritual de san Vicente Ferrer hay que
buscarla en su propia familia, en el hogar de Guillem Ferrer y
Constanza Miquel, de cuyo matrimonio nacieron ocho hijos,
Vicente fue el segundo, en el año 1350, en un siglo en que la
cristiandad tuvo que sufrir momentos tan difíciles como el de los
mártires romanos, la invasión de los bárbaros, el Destierro de
Avignon, el Cisma de Occidente, la guerra de los cien años, el
hundimiento del sacro imperio romano, y la peste negra de1348,
que redujo Europa a la mitad de su población. Europa ansiaba la
paz. Y san Vicente trabajó por la paz despertando, encauzando y
dirigiendo los anhelos espirituales de la época.
3. A los siete años recibió la tonsura clerical. A los once, era
Beneficiado de la parroquia de Santo Tomás. Y a los diecisiete,
postulante dominico, en el convento cercano y vecino de su casa,
en la plaza de Tetuán de Valencia donde recibió el hábito
57
dominicano. Cuando terminó el noviciado sufrió tentaciones de
volver al mundo, a lo que le instaba su madre. Le pidió un día de
tregua, que pasó en oración, y triunfó la gracia.
4. Ha tenido que vencer enemigos poderosos: carne, orgullo,
ambición, conciencia de su valer, impaciencia. Combatía con
ayuno, oración de alabanza, y oración mental. Vuelve a Valencia
cuando tiene 29 años y es ordenado sacerdote. Elegido prior de su
convento, a los pocos meses tuvo que renunciar porque su
comunidad estaba dividida,
como toda la Iglesia, a
causa del Cisma de
Occidente.
Ocupa
la
cátedra de Lector de
Teología en la Catedral.
Durante cuarenta años
luchará por la unidad de la
Iglesia, dividida por el
Cisma
"lamentable
i
dolorós", división que le
hizo sufrir mucho. Fue amigo y confesor de Pedro de Luna,
Benedicto XIII, Papa de Avinyon. Pero al no poder conseguir su
renuncia a la que estaban dispuestos el de Roma, y el de Pisa,
tercero en discordia, se separó de él. Cuando se ha conseguido el
poder supremo, no se depone con facilidad. El poder es una corona
de espinas, que duele más cuando se la quitan.
5. Para formar a un dominico eran necesarios quince años.
Estudió dos años Lógica en Barcelona. Y durante otros dos años, la
enseñó en Lérida. También allí publicó dos libros de filosofía. Y
vuelve a Barcelona, para estudiar cuatro cursos de Teología. Y
después en Toulous, siguió un curso especial de Teología, que le
abrió a las corrientes teológicas del momento.
6. El nuevo Papa, Martín V, quiso que siguiera predicando
como si fuera uno de los Apóstoles: "Id al mundo entero y
proclamad el evangelio a toda la creación". Los discípulos "hablarán
lenguas nuevas" Marcos 16,15. "Me han encargado este oficio".
Intervino en el Compromiso de Caspe y declaró rey de Aragón a
Fernando de Antequera frente al Conde de Urgel, y reconcilió a las
58
familias nobles valencianas, los Centelles y Vilaragut, cuyas luchas
fratricidas habían ensangrentado las calles de la ciudad. Su vida
densa e infatigable mereció el título de Apóstol de Europa. Vivió
en las aulas de Teología, como discípulo y como maestro; en la
Corte, como consejero de reyes y príncipes; como pacificador
entre los bandos rivales; como consejero de Benedicto XIII en el
palacio de Avignon; como Ángel de la Paz en su patria,
solucionando en el compromiso de Caspe, el problema sucesorio
en la Corona de Aragón, y en la Iglesia, contribuyendo muy
eficazmente al fin del Cisma de Occidente, que tenía dividida a la
cristiandad, hasta que el 22 de noviembre de 1399 dejó la Corte
de Avignon para iniciar sus viajes apostólicos, que durarían veinte
años, con un fruto inmenso.
7. En su proceso de canonización se aprecian las
características extraordinarias que configuran la personalidad de
san Vicente Ferrer: "Viaja a pie, apoyado en un bordón rematado
en cruz, a la que mira con frecuencia devotamente. Con los años,
enfermo de una pierna, se valdrá de un jumentillo... Sobre la
modesta cabalgadura con albarda y estribos de madera, llevaba
su ajuar: sus vestidos, una Biblia, un breviario y recado para
escribir. Y un duro colchón para dormir. De cabecera le sirve una
piedra o la Biblia. Mientras va de camino, medita o prepara los
sermones. Y predica en todos los lugares y villas y hasta en las
más pobres aldeas". (Fages: Historia de san Vicente Ferrer). Así
cumplía el mandato de las constituciones de la Orden. Su
testimonio personal atraía a gentes de toda condición social,
nobles y letrados, clérigos y religiosos de todas las órdenes,
hombres y mujeres, unidos por la caridad fraterna y el deseo de
hacer penitencia.
8. Físicamente era de estatura mediana, bien proporcionado,
ancha frente, cabellos rubios y tez clara, en sus últimos años, calvo.
Con el rostro devorado por los ojos grandes, negrísimos, llenos de
viveza y de dulzura, que hablaban cuando miraba. Tenía tanta
calma como ardor. Tanta pasión como razón. Todo dominado por el
amor de Dios. Aparecía enfermo y delicado cuando subía al púlpito
y se transformaba en un joven robusto y lleno de vitalidad mientras
predicaba.
59
9. En su "Tratado de Vida espiritual" se manifiesta como
Maestro de santidad: En él aconseja: Oración, silencio, pureza,
obediencia, humildad, comprensión de los defectos ajenos (que hay
que llevar a la espalda, para no fijarse en ellos). Conocimiento de sí
mismo, valor en la tentaciones, penitencia, dominio de los
pensamientos y de las acciones, paciencia en la pruebas, huída de
las ocasiones, perseverancia en la oración. Santa Teresa estimaba
su libro.
10. Como no podía ser menos, sus virtudes, su ciencia, su
fama, suscitaron la envidia de los hermanos; le crearon muchos
enemigos. La envidia florece siempre entre la mediocridad, como
tributo que paga al genio. Es un tributo que hace sufrir a quien la
tiene activa y al que la tiene que padecer. Es un pecado triste y
amarillo. La envidia es el vicio nacional. Fue su mayor sufrimiento.
El, en cambio, está lleno de compasión por el prójimo, se alegraba
de los bienes de los demás más que de los suyos propios. Y sufría
con sosiego las injurias, los desprecios y las calumnias. A todos
trataba con benignidad y afabilidad; aunque tenía una propensión a
ironizar y ridiculizar la conducta de algunos clérigos y religiosos.
Nunca se acomplejó ni ante el papa, ni ante los reyes. "Me he
hecho débil con los débiles; me he hecho todo a todos, para ganar,
como sea, a algunos". En su vida ajetreada supo sacar tiempo y
serenidad para escribir.
12. Todos los días canta la misa y predica durante dos o tres
horas; y su trabajo es tan intenso y sus desplazamientos tan
continuos, que se ve forzado a preparar los sermones en los viajes,
que no le resulta difícil, porque viajando con medios tan primitivos y
pobres, tiene ocasión de caminar contemplando, para ser fiel a la
consigna de su fundador, Santo Domingo: “Contemplata, aliis
tradere”. Con lo que desmintió la sentencia de Kempis: “Qui multum
peregrinantur, tarde sanctificantur”. No hay regla sin excepción.
Para él predicar es sembrar, derramar la vida, porque la vida se
conserva por la semilla. Es sembrar en las conciencias el grano del
Evangelio: "El hecho de predicar no es para mí motivo de soberbia.
No tengo más remedio y, ¡ay de mí, si no anuncio el evangelio! 1
Corintios 9,16.
60
13. El decía: "El oficio de predicador es el de cocinero:
Toman la buena vianda, la lavan y la cuecen. Las viandas son la
Palabra de Dios. ¿Sabéis cómo lavan las viandas? Quien tiene que
predicar debe estudiar, y no predicar sin estudiar. Después debe
cocerla en el fuego de Jesucristo. También el cocinero debe probar
el cocido de sal. Así el predicador debe probar de sal; o sea, que si
predica de la humildad, debe probar la humildad, si la castidad,
debe ser casto. Sale el predicador como el sembrador evangélico,
de su celda, donde ha perseverado largo tiempo meditando,
reflexionando, seleccionando en los graneros del Señor una buena
simiente: autoridades, figuras, parábolas, comparaciones". Fruto de
este trabajo paciente y escondido eran sus sermones, que llenaban
de entusiasmo a las multitudes, en los que hay claridad,
profundidad, riqueza de imágenes y unción, que comunica calor. En
la forma, como valenciano, se proyecta su alma de artista. Su gusto
por la magnificencia, la música, la pintura, las flores, las misas
bellas y solemnes, es una característica bebida en los jardines de la
tierra de las flores, de la luz y del color, y un eco de la graciosa
arrogancia del Miguelete.
14. Murió en Vannes el 5 de abril 1419. Fue canonizado por
Calixto III, Alfonso Borja, valenciano, a quien se lo había
profetizado: "Serás Papa y me canonizarás". Su ciudad, Valencia,
guarda su recuerdo con cariño y tiene muy viva su devoción.
15. Al honrarle hoy en el Santo Sacrificio del Altar, pidámosle
una bendición especial, una lluvia de rosas que perfume nuestras
vidas y nos haga dignos de celebrar estos santos misterios de la
Pascua, que él vive en el cielo.
16. Jaculatoria que le rezábamos en la Guerra:
Pare san Vicent Ferrer
Fill de Valencia,
naixcut en el carrer del Mar,
Batexat en san Esteve,
Feu que Valencia s´entregue.
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