SEMANARIO FARMACÉUTICO, 105 LAS ADHESIONES LA

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SEMANARIO FARMACÉUTICO,
105
LAS A D H E S I O N E S
LA OPINION DE LA PRENSA POLITICA Y PROFESIONAL'
(Continuación.)
Suscrito por nuestro estimado amigo D . A. Pulido publicó E l
Siglo Médico en su anteúltimo número un artículo del cual copiamos los siguientes párrafos:
«No puede negarse que corren malos tiempos para la clase farmacéutica. Nuestros dignos compañeros en el cultivo y explotación
de las ciencias médicas se lamentan, y con razón sobrada, de su
aciaga suerte, y comienzan á preocuparse con toda seriedad del
triste destino que se les presenta por delante. ¡Extraño es que,
ante perspectivas y presentes tan infaustos, reciban todavía las Facultades de Farmacia esos centenares de alumnos que, tras sacrificios y dispendios respetables, han de encontrarse, borlados y sapientísimos, en lo hondo de una sima de necesidades sin remedio!
Como si el excesivo número de oficinas abiertas, que, en todo
caso, habría de hacer ya difícil su conservación, no bastasen, la intrusión extranjera por medio de los específicos que reducen á una
denigrante mercaduría su venta y á un mezquino producto su ganancia, y la competencia de las droguerías, los ridículos monopolios de algunos sectarios que, como !os de Burggraeve, lanzan
contra ellas los denuestos de falsificadoras si pretenden elaborar de
propia cosecha productos terapéuticos, las aguas milagrosas de los
apóstoles, las panaceas de encrucijadas y plazuelas, las asociaciones cooperativas que requieren económicos los ingredientes medicinales, los médicos portadores de remedios y . . . otras numerosas
y semejantes mermas de su única fuente de vida, ha venido todavía el desgraciado negocio de las expendedurías militares, creadas
por iniciativa del general Salamanca, á quebrantar con golpe firme
su ya ruinosa y,difícil existencia.
La protesta de la clase ha sido, como era de esperar, unánime.
E l alarido de dolor y de indignación se ha dejado escuchar ya
hasta en el mismo despacho de! Ministro de la Gobernación; y aun
cuando de esta queja no es de esperar resultado favorable grande
ni chico, por ser nuestro país muy dado á vigilar sobre todo por
los fueros y contentamientos de la milicia, siquiera sea ésta la rueda social que ménos utilidades, prestigios, ni respetos aporte, prueba al ménos que no se resigna pacientemente con los perjuicios que
injustamente se le causan.
Los que han estudiado este asunto bajo el punto de vista legal,
han protestado de que la ley de Sanidad vigente preceptúa cuándo
y cómo puede abrirse al público una farmacia; pues bien, semejantes disposiciones han sido infringidas con las modernas farmacias
militares, para las cuales se ha prescindido completamente de cuanto las leyes ordenan.
ENERO 4 DE 1885.—AÑO X I I I , NÚM. 14.
14
106
SEMANARIO FARMACEUTICO.
Esta infracción se suma con otras no menos respetables, fundadas en lo que al Estado cuesta por necesidad ese nuevo servicio que
se pretende establecer graciosamente y lleno de ventajas, pero que
periódicos políticos tan avisados en achaques de Administración
pública como E l Globo, han demostrado ser á todas luces onerosos
a los intereses del presupuesto, por la cantidad de personal que se
aplica á su cumplimiento, por la necesidad ineludible de atender
á gastos de instalación y servicio, que no se recompensan cobrando los medicamentos á su coste, y por otros accesorios que no hay
precisión de detallar.
La prueba de que esto es insostenible-—y hó aquí una de las
esperanzas que más deben consolar á la clase farmacéutica—es que
los partidos políticos previsores, atentos á las dificultades que les
pueden acarrear las ligerezas ó adulaciones peligrosas del actual
Gobierno en favor de una clase, lo combaten, presentándolo como
un motivo de alarma y de conflictos para el día de mañana. Como
decía pintorescamente un artículo publicado en el periódico ya
mencionado, debido sin duda á la autorizadísima pluma del señor
Castelar, el asunto de las expendedurías militares es una esfinge
colocada en el camino de Tebas por el partido conservador.
Resulta, pues, que si legalmente esta disposición es arbitraria,
lo es igualmente bajo un recto sentido político, como lo es igualmente bajo ese sentido administrativo imparcial que debe presidir
las resoluciones de los poderes, por cuanto ella demuestra que aquí
hay unas clases privilegiadas y otras desheredadas.
Si procurar por todos los medios posibles que el individuo que
se dice servidor de la patria (como si los demás fuésemos servidores del extranjero) encuentre fácil y económico todo; que se cree
autocráticameute una mesa donde se le sirva con un regalo que
sólo él puede disfrutar, y que se le asegure el porvenir, sin reparar
en el perjuicio que este privilegio ocasiona en otros ramos de la
agrupación social, nos parece poco equitativo por sí, todavía nos
parece mucho menos desde el momento en que se considera el
abuso que inevitablemente se viene encima, y por el cual resulta
cada militar convertido en un núcleo de exigencias que suponen
otros tantos motivos de pérdida para esa desgraciada clase contribuyente que vive angustiada con la pesadilla de sacar lo necesario
para atender á las exigencias del casero y de la contribución. ¿Qué
motivos hay para que estas clases merezcan al Gobierno menos respeto y consideraciones que la clase militar, y la convierta en cabeza de turco, donde todos han de golpear á su gusto? No lo sabemos. ¿Y es á ella á la que se pide humanidad y desprendimiento
cuando una epidemia azota una ciudad? En veraad que esto se
presta á muy amargas reflexiones.
Vamos á terminar nuestro brevísimo artículo manifestando el
dolor con que presenciamos los conflictos de nuestros compañeros,
y el deseo de que sus males encuentren pronto y fácil remedio.»
E l Jurado Médico-Farmacéutico:
«La enérgica protesta y noble actitud del Colegio y clase farmacéutica de Madrid, que debe secundar la de toda España, en
SEMANARIO FARMACÉUTICO.
107
contra de las recientes disposiciones de la Dirección de Sanidad
mi itar instalando farmacias fuera de sus hospitales para el suministro de medicinas á los jefes, oficiales, etc.; esa protesta, esa noble actitud no tienen otro objeto que mantener el respeto de la ley
y defender los derechos de ella emanados; es decir, protestar de lo
que jamás debiera haber motivo para protestar, porque jamás debiera darse el caso de que nadie, y mucho ménos una importante
dependencia del Estado, como la Dirección de Sanidad militar, sea
quien infrinja sus disposiciones y desacate sus preceptos legislativos.
Que la razón y la ley está en contra de lo dispuesto por la D i rección de Sanidad militar es tan evidente, que sólo recurriendo al
sofisma, y sólo truncando el espíritu y letra de la ley de Sanidad, de
las Ordenanzas de Farmacia y de cuantas órdenes y disposiciones
se relacionan con la instalación de farmacias y venta de medicamentos, es como puede intentarse sostener el acuerdo del citado
centro directivo.
Verdad que á nuestro juicio el espíritu, al decir reformista, que
informa ésta y otras disposiciones que salen de la Dirección de
Administración y Sanidad militar, ignora, por lo que á Sanidad m i litar se refiere, mucho de lo que esa misma sanidad necesita y
que prometemos ir apuntando con más espacio; porque cuando
existe un cuerpo médico-farmacéutico tan ilustrado como el que
hoy forma el de Sanidad militar, debe pensar y debe emplear su numen reformista en una organización sólida del servicio de hospitales,
bastante deficiente por cierto en la mayoría de los que hoy existen;
del mismo modo que debe tener empeño en adquirir el material de
campaña que en ocasiones tanto se ha echado de menos. Con dirigir sus esfuerzos á resolver los dos importantes servicios que dejamos apuntados, no sXc&Xízsxéipopulachería, pero obtendría el aplauso del mismo cuerpo de Sanidad militar, porque le daría elementos
para llenar más satisfactoriamente su delicada misión, aplauso al
que iría unido el del país con el de los que hoy tienen que protestar de la pequenez de tan enteco espíritu reformista.»
Asuntos
científicos.
SOBRE LA PREPARACIÓN DEL ÁCIDO CROMICO HIDRATADO,
por M . Moissán.
E l ácido crómico del comercio contiene casi siempre notable
cantidad de ácido sulfúrico. Es posible privarle de éste por el siguiente procedimiento, que permite obtener en breve tiempo cierta
cantidad de gramos casi puro.
Se procede á fundirle en cápsula de platino y á fuego moderado, para evitar una descomposición brusca.
En estas condiciones el agua se desprende desde luego, después
SKMANAaiO FARMACEUTICO.
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se funde la. masa, y como el ácido crómico fundido es más denso
que el sulfúrico, flota sobre éste, moja el platino y se eleva hasta
los bordes de la cápsula.
La mayor parte del ácido sulfúrico se volatiliza (?). Se vierte el
todo sobre porcelana, el ácido sulfúrico se pone el primero en contacto de ésta como más fluido, de seguida lo verifica el crómico. Se separa de lá cápsula á medida que cae el ácido; la solidificación se verifica de seguida y se obtiene así en barritas rojas el ácido crómico. Se
las rompe rápidamente, y eligen los pedazos que el ácido sulfúrico
no ha tocado, y se ponen en frascos secos.
Para obtener cristales de ácido crómico hidratado, se pone un
exceso del anhidro en presencia de una pequeña cantidad de agua;
la mezcla se calienta ligeramente, se somete por algunos instantes
á 100°; se decanta después y enfría el líquido á la temperatura de
la fusión del hielo. Entonces se depositan en las paredes del frasco
pequeños cristales rojos, que se separan de las aguas madres y desecan en el vacío en presencia del ácido sulfúrico. Estos cristales
tienen por fórmula C 03 HO.
{Swp. au Monü. de la Pharm. Diciembre de 1884.)
FORMULARIO
AGUA DE BREA
por
T.
Th. S.
Wiegand
Glieerato de b r e a . . . . . .
Agua
M. s. a.
12 partes.
460
—
H . s. a. Se usa para destruir las verru."
gas, tumores, etc. Con un bisturí se quita l a capa superficial y se recubre del
polvo la parte. Esta operación debe r e petirse todos los d í a s .
C E R V L Z A D E SEDUM ACRE
BOLOS ANTIBLENORRÁGICOS
de Simmonat
T . B á l s a m o de copaiba
25 partes.
Polvos de cubeba
122
—
Cera
12
—
Polvos de raíz de ratania.
9
—
Carbonato de m a g n e s i a . .
6
—
H . s. a. bolos del peso de 0,80; r u é d e n se en carbonato de hierro y recúbranse
después de un barniz de b á l s a m o de Tolú
ó mástic preparado con éter.
BALSAMO
AURICULAR
T . Sedum acre, fresco ó desecado
60 gramos.
Cerveza
500
—
M a l á x e s e con las manos, agítese con
espátula por un cuarto de hora, y a ñ á dase :
Cerveza
1.500 gramos.
Prepárese por d i g e s t i ó n y de modo
igual que el cocimiento. Se emplean dos
horas en su preparación, y resulta un l í quido de olor á cerveza agria y de sabor
acre y picante.
de Rust
T . Alcanfor
3 partes.
Aceite de almendras amargas...
60
—
Alcohol amoniacal con esencia de anís
10
—
M. s. a. Se usa poniendo 3 ó 4 gotas
en el oido.
C A U S T I C O m DOLOROSO
de Esmarch
T. Á c i d o arsenioso
1 parte.
; Sulfato de morfina
1 —
Calomelanos
8 —
Goma arábiga en p o l v o . . . 48 —
COCIMIENTO D E S E D U M A C R E
T.
Sedum acre f r e s c o . . . . . . . 60 gramos.
Cerveza
2 litros.
H i é r v a s e á fuego lento en vaso c e r r a do hasta que quede reducido el líquido á
la mitad. Déjese d e s p u é s en reposo y d e cántese.
Contra l a difteria, s e g ú n el Dr. D u v a l .
COCIMIENTO C O N T R A E L C A T A R R O
INTESTINAL
de Zeissl
T . H e m i a r i a glabra
22 gramos.
Quenopodio ambrosoides. 25
—
SEMANARIO FARMACEUTICO.
.109
M é z c l e s e y d i v í d a s e en 20 papeles iguales. Prepárase m a ñ a n a y larde una i n f u sión durante una hora, poniendo sobre
las hierbas el agua hirviendo.
Se juntan estas sustancias y emulsionan con c. v . de a g u a . Esta e m u l s i ó n se
conserva fácilmente veinticuatro horas.
Debe agitarse al usarla.
COLD-CREAM A L A VASELINA
FÓRMULA P A R A E L USO D E L ACIDO
T. Cera blanca
20 gramos.
Esperma de b a l l e n a . . . .
10
—Vaselina blanca
100
—
Jabón en polvo
18
—
A g u a de rosas
50
—
Esencia de rosas
11 gotas.
Se funde la cera y l a esperma y se
añaden d e s p u é s las d e m á s sustancias, y
se agita bien l a mezcla hasta que se endurezca.
SALICILICO EN EL REUMATISMO
Y LA NEURALGIA REUMÁTICA
E L I X I R D E FÓSFORO
Tintura de fósforo
1,06 litros.
Esencia de anís
16 » gotas.
Glicerina
2,55 l i t r o s .
Jarabe simple
4,45
—
Mézclese á l a tintura l a glicerina y la
esencia, y cuando, bien mezclados, resulta el l í q u i d o diáfano, se añade poco á poco
agitando hasta que l a mezcla resulte l í m pida
Cada cucharada contiene VTVS de gramo
de fósforo.
por el D r . Hughes
T.
Á c i d o salicílico
2
Acetato de potasa
4
Jarabe de l i m ó n
7
Extracto fluido de Tonga. 4
A g u a de m e n t a . .
1
—
dé hinojo
. 3
M. s. a. Dos cucharadas de
hora por cuatro ó cinco dosis,
mayores intervalos.
dracmas.
—
onzas.
—
—
—
café cada
después á
T.
G A R G A R I S M O ANT1DIFTÉHICO
T.
Á c i d o benzóico
15 partes.
Alcohol a m í l i c o
50
—
—
común
1.000
—
M é z c l e s e y añádase:
A g u a de canela
1.000
—
Se usa á la dosis de una cucharada en
dos de agua caliente.
GLICERATO DE BREA
ELIXIR DE PARALDEHIDO
por Th. S. Wiegand.
CONTRA EL INSOMNIO
de Ivon
T.
Paraldehido
10 gramos.
Alcohol á 9 0 ° . .
40
—
Tintura de vainilla
2
—
Agua
30
—
Jarabe simple
860
—
M. s. a. Dosis: á 2 cucharadas de las
de te.
EMPLASTO
ADHESIVO
(VULGO BIGIÓN)
de
A.
Falletti
T . Pez griega
2.000 gramos.
Residuos de velas esteáricas ó de c e r a . .
500
—
Aceite de b e l e ñ o
100
—
— de n u e z , . . . . .
100
—
Se funden estas sustancias á fuego l e n to y pasan por tela clara á un vaso que
contenga agua. Después de frío se reduce á magdaleones de un peso de 50 g r a mos cada uno, que es como los demanda
el p ú b l i c o .
EMULSIÓN D E C A R N E C R U D A
T . Carne cruda
50 gramos.
Almendras dulces mondadas
15
—
Almendras a m a r g a s . . .
1
—
Azúcar blanco
16
—
Srea
fluida...
24 partes.
T . Br
™ c e r i n a | a a
96
Agua
'
Alcohol
98
—
Carbonato de m a g n e s i a . . . 23
—
la
Mézclese la brea con el alcohol
magnesia formando una pasta; añádanse
d e s p u é s la glicerina y el agua mezcladas: la mezcla se repone en un frasco que
esté bien t a p a d o , d e j á n d o l a así un d í a , agit á n d o l a de cuando en cuando. D e s p u é s se
filtra. Este preparado da una s o l u c i ó n límpida en cualquier proporción de a g u a .
INHALACION A L TIMOL
de Hlaselstein.
T.
Timol
0,45 gramos.
Biborato de s o s a . . .
20.00
—
Glicerina
30,00
_
A g u a alcanforada.. 60,00
—
_
de brea
170,00
—
M . s. a. Dosis: una cuchada de las ordinarias cada hora para los n i ñ o s de 2
á cinco a ñ o s .
INYECCION HIPODERMICA
DE RESORCINA.
T. Resorcina
A g u a destilada..
H . s. a.
5 á 20 gramos.
100
—
SEMANARIO FARMACEUTICO.
110
INYECCION SUBCUTANEA
de Billroth.
por Alkinson.
T . loduro potásico
5
gramos.
Iodo
0,10
—
Glicerina pura
50
—
D i s u é l v a s e para fricciones con un p i n cel sobre l a parte afecta. Durante el tratamiento tomará el enfermo aceite de h í gado de bacalao ó medicamentos depurativos ,
T.
Ergolina de Boujean.
7,50 gramos.
Agua
22,40
—
Cloroformo
2,00
M . s. a . Cada centímelro c ú b i c o de
esta s o l u c i ó n contiene treinta centigramos'
de ergotina, c u y a dosis no debe llevarse
más allá.
H a propuesto el autor esta f ó r m u l a ,
s e g ú n lo practicaTompson, porque permite
conservarla por semanas, y a d e m á s porque el cloroformo atenúa el dolor que ocasiona las inyecciones de ergotina disuelta
en el agua ó l a glicerina.
INYECCION VAJINAL O RECTAL
DE RESORCINA.
T . Resorcina
A g u a destilada
M . s. a .
1 ó 2 gramos.
100
—
J A R A B E D E BREA.
por
T.
LINIMENTO CONTRA E L LUPUS
DE ERGOT1NA Y CLOROFORMO
Th.
S.
Wíeyand.
Glicerato de b r e a . , . . . . .
Jarabe simple
.,
M . s. a .
2 parles.
14
—
J A R A B E D E HIERRO Y C A L C I O
CONTRA LA FIEBRE LÁCTEA
de Reeb.
T . Ferrolacto-fosfato de calcio
40 gramos.
Acido cítrico
4
—
Agua destilada
300
—
D i s u é l v a s e , fíltrese y añádase:
A z ú c a r blanco
, . 600
—
H . s. a . A ñ á d a s e por ú l t i m o á la preparación 2 gotas de esencia de l i m ó n d i sueltas en alcohol absoluto,
JARABE DE HIPOFOSFITO DE CAL
FERRUGINOSO
de Randal.
T . Hipofosfito de cal
554 partes.
D i s u é l v a s e en agua c a liente
3.500
—
A g r e g ú e s e , en caliente siempre;
Bicarbonato de sosa. .
95
—
Y por ú l t i m o , aumentando el calor:
Bicarbonato d e c a í . . . .
115 partes.
Completa l a s o l u c i ó n , se filtra y lava el
filtro con agua, de modo que resulten 5.850
del l í q u i d o filtrado. E n 1.200 partes de
ésta s o l u c i ó n se disuelven, á calor lento,
85 partes de citralo de hierro, y en la d i s o l u c i ó n se hacen disolver 450 partes
de azúcar; en el resto de l a s o l u c i ó n se
disuelven 4.050 partes de a z ú c a r . Se filtran las dos preparaciones y l a v a el filtro
para obtener 10.000 partes del líquido filtrado .
LINIMENTO D E R E S O R C I N A .
T , Resorcina
5 á 10 gramos.
Glicerina n e u t r a , . . .
30
—
M . s. a .
LOCIÓN, A P L I C A C I O N L O C A L ,
INHALACIÓN Y PULVERIZACIÓN DE RESORCINA
T . Resorcina
A g u a destilada
D . s. a .
5 gramos.
1.000
—
METODO P A R A A D M I N I S T R A R
LA CARNE CRUDA.
T . Carne cruda
250 gramos.
Almendras dulces m o n dadas
75
—
—
amargas mondadas
,
5
—
A z ú c a r blanco
80
—
Pístese en mortero de m á r m o l hasta
obtener una masa h o m o g é n e a . E l olor
desagradable de l a carne se encubre perfectamente.
MIXTURA
ANTIDIFTÉRICA
de Haselstein
T . Timol
0,45 gramos.
Clorato p o t á s i c o . . . .
4,72
—
Sulfato de q u i n i n a . .
2,85
—
Acido c l o r h í d r i c o . . .
15 » gotas.
Glicerina
48 » gramos.
Alcohol vínico
216 »
—
M . s. a . Dosis: una cucharada d é l a s
ordinarias cada hora á los n i ñ o s de 2 á 5
años.
MIXTURA D E RESORCINA
T , Resorcina.
2 á 4 gramos.
Agua aromática.
100
—.
Jarabe simple
30
—
M . s. a . Para tomar en veinticuatro
horas un adulto; una cucharada cada dos
horas.
PILDORAS PURGANTES
T . Extracto á c u o s o de áloe 6 » gramos.
—
rahamno catártico
5 »
—
Podofilino
0,25
—
Jabón m e d i c i n a l . . . . . . . 6 »
—
M . y h . 200 pildoras. Para tomar todas las m a ñ a n a s antes del desayuno,
SKMANAR10
PILDORAS TONICAS
T- Hierro reducido
1 » gramo.
Extracto de quina
4 »
—
x^-cido arsenioso
0,1
—
Extracto de nuez v ó m i c a 0,2
—
—
de genciana. . c. s.
H . s. a . 15 pildoras. Para tomar una
tres veces al d í a .
PILDORAS DE I0D0F0RMO
CONTRA
LA DIABETES
por
MELL1TA
Moleschott
T . lodoforrno.
4 0 » gramos.
Extracto de lechuga s a tiva
1,0
—
Cumarina
0,1
—
H . s. a. 20 pildoras que se ruedan en
polvo de goma a r á b i g a . P a r a j o m a r de 2
a 4 en veinticuatro horas.
KARMACEÜTICO.
111
POCION C O N T R A L A T E N I A ,
de Dermatsons
T . Esencia de trementina..
50 gramos.
Aceite de ricino
25
Goma a r á b i g a . . . . . . . .
20
A g u a de menta
150
Jarabe de azúcar
45
—
M . s. a . Para tomar en dos veces en
a y u n a s . Para los niños se reduce la c a n tidad de esencia á 30 gramos.
POLVO CONTRA E L SUDOR
DE LAS MANOS Y PIES
T . Acido carbólico
10 gotas.
Acido salicilico
0,56 gramos.
Esencia de l i m ó n
20 gotas.
Alumbre
31 gramos.
Almidón
62
—
Creta de Francia
31
—
Se pulveriza finamente y mezclan. Se
espolvorean con este polvo las manos y
pies en caso de sudor excesivo.
P I L D O R A S D E SANTONINA
POLVO C O N T R A L A H E M I C R A N I A ,
de Hayer
T. Santonina
0,5 partes.
Aceite de ricino
1,5
—
Jabón medicinal
1,2
—
Polvo de raíz de m a l vabisco
1,2
—
H . s. a . 30 pildoras para tomar tres
al d í a .
Puchy las] recubre con el siguiente
barniz:
B á l s a m o de t o l ú
10 partes.
Resina de pino blanca
1
—
Alcohol
10
—
Eter
100
—
T. Sulfato de quinoidina.
1,5 gramos.
Cafeína
i
—
Acido tartárico
1
—
Morfina
0,05
—
Azúcar
10
—
Mézclese y d i v í d a s e en 5 papeles. Para
tomar uno por m a ñ a n a y tarde.
L a dosis de la morfina puede modifificarse oportunamente. Las personas d é biles pueden dividir cada papel en dos
dosis, que tomarán en el período de una
hora. E l mejor v e h í c u l o para tomarlo es
el café.
Noticias varias.
CONGRESO PROFESIONAL.—En uno de sus últimos números propuso nuestro apreciable colega M Camiio Farmacéutico, la celebración de un Congreso Profesional. E L SEMANARIO FARMACÉUTICO,
que, como puede leerse en sus doce volúmenes, siempre fué decidido
campeón de todo cuanto convenir pueda á mejorar científica y moralmente las profesiones médicas, así como á trabajar porque se respeten sus derechos, se asocia sin reserva al propósito que anima á
nuestro citado colega, podiendo contar con nuestra cooperación
para llevarlo á feliz término.
NECROLOGÍA.—El día 20 de Diciembre último falleció en Cáceres nuestro amigo y compañero Dr. D. Florencio Martín y Castro.
Era actualmente Subdelegado de aquella capital, y había desempeñado la cátedra de Física y Química del Instituto de Badajojc, socio corresponsal del Colegio de Farmacéuticos de Madrid y de otras
varias Corporaciones científicas y profesionales. De ilustración nada
112
SEMANARIO FARMACÉUTICO.
común, y por mil conceptos apreciable, es pérdida sensible para la
clase farmacéutica, é irreparable para su apreciable familia. Acompañamos á ésta en su profundo dolor á la par que le mandamos el
más sentido pésame.
ALMANAQUE POPULAR DE LA SALUD para 1885,—Hemos recibido
el que L a Higiene para todos ha publicado con dicho epígrafe, y
que contiene un retrato y un autógrafo de M. Pasteur, la biog-rafía
del Dr. Pulido, por el Dr. J. Vidal Solares, y otros interesantes
trabajos de este mismo conocido publicista, y los Sres. Baró (Teodoro), Dascher, Gelpí, Gelabert (Enrique), Molas y Casas, Pulido, y
Suñé Molits. Por su contenido puede juzgarse del interés que ofrece, el cual nos decide á recomendarlo.
SUPLEMENTO.—Hemos recibido el cuarto suplemento de la segunda serie á La Oficina de í a r m a c i a Española, según üorvault.
Como nuestros lectores pueden informarse por su correspondiente
anuncio, es tan interesante como los que le precedieron. Sus compiladores, Dr. D . Juan R. Gómez. Pamo y D, Antonio Espina y
Capo, han llevado á cabo con el mayor acierto un trabajo útilísimo.
Le recomendamos á nuestros suscritores, á los que puede prestar
muy buenos servicios.
TRATADO DE MATERIA MÉDICA, por el Dr. J. B. Fonssagrives.—
Se ha publicado el cuaderno 7.° de esta importante obra, en el
cual termina su tomo segundo y principia el tercero y último. Cada
cuaderno que aparece aumenta el mérito que desde los primeros
hicimos notar tiene esta obra, por la que reiteramos nuestra recomendación.
PROCESO DE LAS AGUAS VIEJAS DE SANTANDER, Ó sea su comparación con las de La Molina.—Con muchísimo interés hemos leído
el folleto de 32 páginas que nuestro compañero y amigo D. José
María Cagigal ha publicado sobre tan capital asunto para aquella
población. Discretamente escrito y fundadas sus apreciaciones en
interesantes trabajos de laboratorio, acredita la gran mejora llevada á cabo en aquella ciudad, y á la que el autor ha contribuido en
mucho con sus escritos y análisis. Este profesor, y como siempre lo realizan los que son consultados en cuestiones de higiene,
ha demostrado de manera inequívoca su erudición y lo útil que
es la clase farmacéutica. Reciba nuestra sincera felicitación el autor,
y agradeciéndole mucho el ejemplar que se ha servido remitirnos,
nos proponemos publicarle así que los muchos originales que hoy
tenemos acumulados lo permitan.
LA TREMENTINA EN LA CUEACIÓN DE LA DIFTERIA.—El Dr. Delthil
ha dado cuenta á la Academia de Medicina de París de algunas
experiencias que ha practicado para la curación de tan terrible dolencia como la difteria. Según éí, los carburos que se desprenden
de la esencia de la trementina y el alquitrán (brea de la hulla), le
han dado excelentes resultados. Su proceso consiste en poner en vaso apropiado 30 gramos de trementina y 200 de alquitrán; hecha la
mezcla, se coloca al fuego en la habitación del paciente para que
respire la atmósfera que se origina. Repite este tratamiento cada
dos ó tres horas, según la necesidad.
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