LA FUNCIÓN DE NUTRICIÓN I: Los seres humanos, como la mayoría de los organismos pluricelulares, necesitan de unos órganos agrupados en aparatos que extraigan los nutrientes de los alimentos, los preparen, los distribuyan a todas sus células y que expulsen los productos de desecho. En el proceso de nutrición del ser humano participan los aparatos digestivo, respiratorio, circulatorio y excretor controlados por los sistemas nervioso y hormonal. APARATO DIGESTIVO Se encarga de transformar los alimentos en sustancias más sencillas (nutrientes), para que puedan ser absorbidos y utilizados por las células. También se encarga de eliminar los restos no digeridos. I. Anatomía del aparato digestivo El aparato digestivo está constituido por el tubo digestivo y las glándulas anejas: A. Tubo digestivo Es un tubo largo (de unos 8 metros) y de forma variable, que comienza en la boca y termina en el ano. 1. Estructura digestivo general del tubo En una sección transversal, desde la luz del tubo, distinguimos: Una capa mucosa cubierta por una sustancia protectora y lubricante llamada mucus. Dos capas musculares (longitudinal y circular) que al contraerse hacen avanzar el alimento. En el estómago hay una tercera capa oblicua. 2. Anatomía del tubo digestivo A lo largo del tubo digestivo se diferencian las siguientes partes: a) Cavidad bucal: Está delimitada por los labios, las mejillas, el paladar (duro y blando) y la lengua. La lengua es una estructura musculosa en la que se encuentran las papilas gustativas. Los dientes: son estructuras duras que se encuentran en la cavidad bucal y contienen compuestos de calcio y flúor. En la estructura de un diente se distinguen tres zonas: Corona: en la que se distingue el esmalte, la dentina y la cavidad pulpar. Cuello: formado por dentina y cavidad pulpar. Raíz mediante la que se fija el diente a la mandíbula gracias al cemento. Existen diferentes tipos de dientes según su función: Incisivos: para cortar los alimentos. Caninos o colmillos: para desgarrar. Premolares y molares: para triturar y desmenuzar. La diferencia entre premolares y molares es el número de raíces (1-2 y varias, respectivamente) y el número de protuberancias en la corona ( 2 y 4) La posición de los dientes en la mandíbula es la más adecuada para llevar a cabo su función. Los primeros dientes que aparecen en la infancia forman la dentición de leche, en la que faltan los molares. Esa dentición es sustituida por la dentición definitiva. La fórmula dentaria está formada por ocho números, cuatro arriba y cuatro abajo, separados por una línea, que representan, de izquierda a derecha, el número de incisivos, caninos, premolares, y molares que hay en la mandíbula inferior y superior respectivamente. 2123 En el adulto humano es: 2123 b) Faringe: Tubo musculoso al que también se llama garganta. Comunica con las fosas nasales, el oído medio, la laringe (un repliegue llamado epiglotis impide que el alimento pase hacia ella) y el esófago. c) Esófago: Conducto que termina en el estómago. d) Estómago: Es un órgano con forma de gaita que posee tres capas musculares. Su pared interna está recubierta por mucus que la protege. Está comunicado con el esófago a través de una válvula llamada cardias (que se halla siempre abierta), y con el intestino delgado mediante el píloro (válvula que normalmente se encentra cerrada. e) Intestino delgado: Es un tubo de 6 o 7 m de longitud que se extiende desde el píloro hasta la válvula ileocecal que lo comunica con el intestino grueso. Se divide en tres tramos: Duodeno: porción corta (25 cm) en forma de herradura. Yeyuno: tramo más largo. Íleon: tramo final. Su pared interna está recubierta por pliegues (vellosidades intestinales) recorridos por microscópicos capilares sanguíneos. Además, para aumentar la superficie, la membrana plasmática de las células que forman esas vellosidades, en su cara hacia la luz, presentan repliegues (microvellosidades). f) Intestino grueso: Es un tubo de mayor diámetro que el intestino delgado, de menor longitud (1 m) y sin vellosidades. En el intestino grueso se distinguen tres tramos: Ciego: porción inicial en forma de bolsa en la que aparece una prolongación estrecha (el apéndice). Colon: subdividido en tres trayectos (ascendente, transverso, descendente). En él se desarrollan las bacterias simbióticas que constituyen la flora intestinal. Recto: porción final que desemboca en el ano. B. Glándulas accesorias o anejas Son órganos que vierten sus secreciones al tubo digestivo. 1. Glándulas salivales Se localizan debajo de la lengua y a ambos lados de la cavidad bucal. Hay tres pares: parótidas, submaxilares y sublinguales. Estas glándulas segregan la saliva. 2. Glándulas gástricas Se encuentran en la pared interna del estómago y segregan el jugo gástrico que contiene: Pepsina: enzima para digerir proteínas. Ácido clorhídrico: sirve para activar la pepsina, facilitar la disgregación de los alimentos y destruir las bacterias que puedan contener. 3. Glándulas intestinales Se encuentran en la mucosa del intestino delgado. Segregan el jugo intestinal compuesto por enzimas capaces de digerir todos los tipos de moléculas presentes en los alimentos (amilasas, maltasas, sacarasas, lipasas, pepsina,...) 4. Hígado Es un órgano grande, de color violáceo, situado en la parte derecha del abdomen y que cubre parcialmente al estómago. Vierte su secreción al duodeno a través de la ampolla de Vater. Produce la bilis (secreción formada por sales biliares, agua, colesterol, y productos de deshecho como bilirrubina y biliverdina) que se acumula en un órgano con forma de bolsa situado cerca del duodeno (la vesícula biliar). Las sales biliares no son enzimas, pero sirven para emulsionar las grasas. El hígado, además de intervenir en los procesos digestivos tiene otras funciones como destructor de toxinas,...) 5. Páncreas Es una glándula alargada que se localiza detrás y debajo del estómago. Produce: Hormonas: que regulan la cantidad de glucosa en el medio interno y su acumulación en el hígado. Jugo pancreático: que se vierte al duodeno a través de la ampolla de Vater. Contiene enzimas para digerir todos los tipos de moléculas presentes en los alimentos, y bicarbonato de sodio que neutraliza la acidez. II. Fisiología del aparato digestivo humano La principal función del aparato digestivo es la digestión que consiste en la transformación química de las sustancias contenidas en los alimentos en otras sustancias más pequeñas asimilables por el cuerpo. Esas transformaciones ocurren gracias a la acción de las enzimas digestivas. A. Preparación del proceso digestivo En la boca, el alimento sufre dos procesos mecánicos y uno químico: 1. Masticación Es un proceso mecánico que consiste en triturar los alimentos en trozos más pequeños para facilitar los procesos digestivos. La realizan los dientes, aunque la lengua participa en el proceso de masticación moviendo el alimento de unos dientes a otros. 2. Insalivación La saliva es un líquido acuoso segregado por las glándulas salivales, que al mezclarse con el alimento triturado por los dientes forma una masa llamada bolo alimenticio. La saliva tiene varias funciones: Contiene una enzima digestiva llamada amilasa. Se inicia la digestión de las moléculas de almidón transformándolas en azúcares más sencillos. Destruye algunas de las bacterias existentes en los alimentos. Facilita el paso del bolo alimenticio hacia la faringe y el esófago. 3. Deglución En la deglución podemos distinguir los siguientes pasos: En un acto voluntario, con ayuda de la lengua, el bolo alimenticio es llevado al fondo de la cavidad bucal. Mediante una serie de actos reflejos, el paladar blando cierra las coanas, la laringe se eleva y la epiglotis, empujada por el bolo alimenticio, cubre la glotis. Mediante otro acto reflejo, el bolo alimenticio pasa al esófago por el que avanza gracias a la contracción de las capas musculares que originan movimientos peristálticos. B. Digestión 1. en el estómago El bolo alimenticio sufre simultáneamente un tratamiento mecánico (provocado por movimientos peristálticos) y otro químico (al mezclarse con el jugo gástrico). El producto de estos tratamientos se llama quimo. El jugo gástrico contiene: Pepsina: enzima que comienza la digestión de proteínas. Ácido clorhídrico que activa a la pepsina, favorece la disgregación de las fibras de alimento y destruye las bacterias que pueda tener. La secreción de jugo gástrico se produce por la percepción de la comida, y por el contacto de los alimentos con las mucosas bucal y gástrica. Cuanto más tiempo permanece el alimento en el estómago, más jugo gástrico se segrega. La mezcla se hace más líquida y ácida hasta que se abre el píloro y el quimo pasa al intestino delgado. Los alimentos que tardan más tiempo en pasar al intestino son las grasas (más de 4 horas) y las proteínas (3 horas), mientras que los glúcidos (1 hora y media) 2. en el intestino delgado En el intestino delgado tienen lugar la mayoría de los procesos digestivos: en el duodeno, el quimo entra en contacto con las secreciones del páncreas (jugo pancreático) y del hígado (bilis). También es sometido a la acción del jugo intestinal. La mezcla del quimo con las secreciones anteriores se denomina quilo. La bilis no realiza digestión química, solamente emulsiona los lípidos. Como resultado de la digestión de los alimentos se originan moléculas más sencillas que sirven de nutrientes a las células (glúcidos sencillos, aminoácidos, ácidos grasos) C. Absorción de los nutrientes Los nutrientes resultantes de la digestión junto con las sales minerales y las vitaminas (que no necesitan ser digeridas) son absorbidas en el intestino delgado y el agua en el intestino grueso, y son recogidos por los capilares sanguíneos. Excepto los productos de la digestión de las grasas que pasan a los capilares linfáticos. D. Egestión o defecación Los restos de alimento no digeridos pasan al intestino grueso a través de la válvula ileocecal. Aquí se realiza la absorción del agua, la absorción de algunas vitaminas producidas por bacterias simbiontes y la compactación de los residuos para formar las heces fecales que avanzan gracias a movimientos peristálticos, atraviesan el recto y se expulsan al exterior a través del ano. Las heces contienen restos alimenticios, células de mucosa intestinal y bacterias. III. Enfermedades del aparato digestivo Caries: enfermedad infecciosa producida por bacterias. Para evitarla debemos reducir el consumo de dulces, cepillar los dientes correctamente después de cada comida y acudir al dentista de forma regular. Estreñimiento: es la dificultad para la egestión debido a la sequedad de las heces a causa del estrés, fármacos o dietas pobres en fibra. Úlceras: heridas en las paredes internas del tubo digestivo por causas variadas. Gastroenteritis: inflamación de las membranas internas del estómago e intestino causada por virus o bacterias. Uno de sus síntomas son heces líquidas. Cirrosis hepática: destrucción progresiva del hígado producida normalmente por un consumo excesivo de alcohol. Apendicitis: inflamación del apéndice, normalmente por una infección bacteriana. APARATO RESPIRATORIO Es el encargado de tomar el oxígeno del aire exterior, llevarlo a la sangre y eliminar, al mismo tiempo, el dióxido de carbono. Está formado por las vías respiratorias y los pulmones I. Anatomía del aparato respiratorio Está formado por las vías respiratorias y los pulmones. A. Las vías respiratorias Son los conductos o cavidades por los que pasa el aire. Desde el exterior hacia el interior nos encontramos: 1. Fosas nasales: Dos cavidades que se abren al exterior por los orificios de la nariz. 2. Faringe: Conducto común al aparato digestivo en el que se encuentra la epiglotis que impide que los alimentos penetren hacia los pulmones. 3. Laringe: Tubo corto en el que se encuentran las cuerdas vocales (repliegues que al vibrar emiten la voz) 4. Tráquea: Tubo que recorre el cuello, protegido por cartílagos en forma de C que impiden que se aplaste. 5. Bronquios y bronquiolos: Los bronquios son dos conductos en los que se divide la tráquea. Cada uno de los cuales penetra en un pulmón y se ramifican en tubos cada vez más finos (los bronquiolos) que se siguen ramificando y terminan en unos sacos de paredes muy finas llamados alvéolos pulmonares. B. Pulmones Son dos órganos esponjosos, cada uno rodeado de una doble membrana (pleura) rellena de un líquido que permite a los pulmones adaptarse al movimiento respiratorio y evita el rozamiento de los pulmones con los órganos contiguos. Están protegidos por la caja torácica y debajo de ellos se encuentra el diafragma (músculo que los separa del abdomen). II. Fisiología del aparato respiratorio A. Ventilación pulmonar Es el proceso por el que el aire entra y sale. Consta de dos procesos: 1. Inspiración El diafragma se contrae y desciende. Los músculos intercostales (que unen las costillas) se contraen, las costillas se elevan, aumenta el volumen de la caja torácica los pulmones se hinchan y entra el aire cargado de oxígeno. El aire entra a través de las fosas nasales donde se calienta, se humedece y, gracias al moco, se limpia de partículas. Continúa por el resto de las vías respiratorias (faringe, laringe, tráquea, bronquios y bronquiolos hasta llegar a los alvéolos pulmonares. 2. Espiración El diafragma se relaja y sube. Los músculos intercostales se relajan también, disminuye el volumen de la caja torácica y sale el aire de los pulmones, cargado de dióxido de carbono. Realizando el recorrido inverso hasta el exterior. B. Intercambio gaseoso Cuando el aire llega a los alvéolos, el oxígeno pasa, por difusión, a la sangre (donde su concentración es menor). El dióxido de carbono pasa desde la sangre hacia los alvéolos. III. Enfermedades del aparato respiratorio Las enfermedades más comunes que afectan al aparato respiratorio suelen estar causadas por infección debida a virus o bacterias. Pero también, por hábitos de vida no saludables, como el consumo de tabaco. Bronquitis: inflamación de los bronquios por infección bacteriana o por causa del tabaco. Sus síntomas son: abundante moco, tos. Cuando se agrava aparece dificultad para respirar, para caminar, etc. Asma: estrechamiento temporal de las vías respiratorias que dificulta la respiración. Puede ser debida a alergias o infecciones respiratorias. Los síntomas son: tos, falta de aliento y silbido al respirar. Tuberculosis: enfermedad contagiosa producida por una bacteria. Se transmite a través del aire y si no se trata puede destruir los pulmones y otros órganos causando la muerte. Resfriado y gripe: enfermedades contagiosas producidas por virus. No se curan con antibióticos. Los síntomas son: cansancio, estornudos, moco, irritación de garganta y, en la gripe, dolores musculares, escalofríos y fiebre.