LEYENDAS vividas en Roma

JOSÉ MIGUEL BURGUI
Ilustrado por LÓPEZ-ARZA
Dedicatoria
Va para cuantos atrevidos se acerquen
a estos lugares legendarios
y disfruten allí de lo narrado.
2
“Quien hace el primer viaje a Roma
no ve nada,
en el segundo, la conoce
y en el tercero se la lleva en el alma”
Spreekwoorden, siglo XVII
Pasé varios años en Roma viviendo como guía en lengua
castellana en las catacumbas de S.Calixto. Aprendí mucho con los
miles de personas (más de 60.000 en mayo del 2012) que conduje
por los laberintos de las catacumbas. Fui guía de personas de toda
clase, condición y edad, de fuerte y débil cultura, tuve la suerte
de explicarles la gran obra de los cementerios de los primeros
cristianos, las catacumbas.
En mi poco tiempo libre, pude gozar, aprender y disfrutar de
esta bella y eterna ciudad de Roma.
Roma entera es un museo en cada esquina, toda ella está
plagada de leyendas, historias y tesoros bajo tierra.
Siempre me gustaron las historias, las leyendas, también me
encantó quitarles lo mágico y disfrutar narrándolas y recreándolas
en el lugar donde se supone que se dieron.
Nunca eché la moneda en la Fuente de Trevi y viví cuatro años
en Roma y retorné muchas veces a ella. Y las gentes la echan para
volver otra vez.
Nunca metí la mano en la “Bocca della Verità” y sí , cuando
voy le hago una caricia a su rostro con un suave golpecito. No me
gusta repetir gestos que todo el mundo pone y sí vivir cuanto se
hace y narra al respecto pero de modo original.
Quiero reseñar algunas de ellas y de lo vivido.
Puedes ver dónde se encuentra cada una de ellas en la nota que
indico al final de la pequeña reseña que hago y la titulo: ¿Dónde
puedo encontrar cada uno de los lugares de tales leyendas?
Te deseo, querido lector, que disfrutes, como así me ha
sucedió a mí, de estas sabias creaciones de siglos y ya sabes,
si puedes, gózalas en el lugar mágico donde se dice ocurrió tal
hecho.
El autor
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Índice
1 La loba capitolina
2 Quo vadis?
3 Las catacumbas, ¿escondite?
4 La serpiente de la Isola Tiberina
5 Echar la moneda en la Fontana de Trevi
6 La fuente de los enamorados
7 La Bocca de la Veritá
8 Las naranjas amargas
9 Los candados del Puente Milvio
10 Mirar a los ojos de Giordano Bruno
11 Palazzeto dei Mostri
12 ¡Habla!
13 Otras leyendas
14 ¿Dónde puedo encontrar cada uno de
reseñados?
4
los lugares
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La loba capitolina - Rómulo y Remo
La leyenda más conocida es la de los hermanos Rómulo y
Remo que fueron los fundadores de Roma. No existen fuentes
fiables para describir cómo empezó Roma.
La historia fija el origen de la ciudad a finales del Siglo VII a.
C. La leyenda y el mito de los gemelos amamantados por una loba
siempre tendrá validez cultural.
La historia comienza con el rey Alba Longa, ciudad del Lazio,
se llamaba Numitor, le quitó el trono su hermano Amulio. Éste lo
expulsó de la ciudad y mató a todos sus hijos, excepto a su hija
Rea Silvia. Para que ésta no tuviera hijos la obligó a consagrarse
como sacerdotisa de la diosa Vesta, debía permanecer virgen.
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Pero un día, mientras Rea Silvia dormía, el dios de la guerra,
Marte, se deslumbró al verla y la poseyó. Silvia tuvo dos hijos
gemelos a los que llamó Rómulo y Remo, pero por temor al rey
Amulio, los colocó en una cesta y los echó al Tiber. La intención
era que murieran ahogados. La cesta navegó hasta que una loba
los halló y los amamantó. Después fueron recogidos y cuidados
por el pastor Fáustulo y su mujer Aca Larentia.
Cuando los gemelos crecieron, descubrieron su verdadero
origen y el trágico destino de su familia.
Decidieron regresar a Alba Longa, matar a Amulio y devolverle
el trono a su abuelo Numitor. En agradecimiento, éste les concedió
territorios al nordeste del Lazio y en el 753 a. C. los gemelos
fundaron una ciudad en una llanura del río Tiber, donde se había
parado la cesta.
Siguiendo una tradición etrusca, tomaron dos bueyes blancos
y con un arado excavaron un surco, indicando con ello que eso
eran los límites de la ciudad, jurando matar a quien fuera que los
traspasara.
Rómulo y Remo no se pusieron de acuerdo para darle el
nombre a la ciudad y decidieron que lo elegiría aquel que viera
más pájaros volar.
Rómulo vio doce aves, mientras que Remo sólo vio seis
pero alegó que las había visto el primero. Esto les condujo a una
fuerte discusión la cual terminó cuando Rómulo mató a Remo, al
estilo de Caín y Abel. Rómulo comenzó a construir las murallas
en el monte Palatino y denominó a tal ciudad Roma. Como
único soberano, creó el senado y dividió la población en treinta
congregaciones aceptando refugiados, libertos, esclavos, prófugos
y toda clase de gente para así poblar la nueva ciudad de Roma.
La ciudad fue fundada por nómadas.
Desde este momento hasta nuestros días han pasado siglos y
Roma sigue siendo un lugar histórico y mítico.
6
Canto a la gloria pasada
Columna tumbada
con hoja deshojada,
rota y partida,
hablas de memoria pasada.
Columna erguida y orgullosa de siglos,
ruinas hecha trozos,
con muros adosados
e inscripción griega y latina
recompuesta por mano amiga.
Sois reloj parado en el tiempo,
sois parlante mudo,
hecho estatua o muro.
Gloriosa historia
que gritas y cantas
seculares vivencias,
leyendas, miserias y glorias.
Columna tumbada
con hoja deshojada,
rota y partida,
hablas de memoria pasada.
¡Gloria Roma Imperial!
¡Gloria ruina inmortal!
¿Se te ha ocurrido alguna vez escribir Roma al revés?, hazlo
y observa qué lees.
2
Domine, Quo vadis?
Via Appia
La historia que rezuma esta ruta es única en el mundo.
Vio marchar a los legionarios que fueron a conquistar Grecia,
7
Asia y el Oriente, fue el macabro teatro de la crucifixión de seis
mil esclavos tras la derrota de Espartaco y el lugar donde Cristo
se apareció a Pedro cuando se apresuraba a abandonar Roma
acechado por los pretorianos de Nerón. “¿Dónde vas mi Señor?”
“Domine, quo vadis?” La respuesta del Señor Jesús fue: “Puesto
que tú abandonas a mi pueblo, voy a Roma para ser de nuevo
crucificado”.
Ruinas Via Appia
Es bella esta vía, reina de las vías. Todo lo que resta es una
pequeña señal de lo que hubo.
Acueductos quebrados que han dejado pintorescos y bellos
conjuntos de arcos; templos hundidos, tumbas desmoronadas,
Un desierto de decadencia, sombrío y desolado más allá de lo
decible y con historia en cada piedra esparcida por el suelo.
El aspecto de esta gran vía Appia no ha cambiado mucho
desde los días en que por ella pasaban los desfiles triunfales de
los emperadores, trayendo encadenados a príncipes procedentes
de los confines del mundo. No podemos ver las grandes filas
de carros y soldados con armadura cargados con el botín de la
conquista pero podemos imaginar cómo fue esa celebración.
Quo vadis, Domine?
Di Santa María de Chiesa en Palmis, mejor conocida como
Chiesa del Domine Quo Vadis.
Y en la pág. 706 –en el último párrafo de la novela Quo vadis
de Henryk Sienkiewicz dice y termina así:
“Cerca de la antigua Puerta Carpena existe hoy día una
pequeña capilla que lleva esta inscripción algo borrosa por el
tiempo: Quo vadis, Domine? Es la Iglesia de Santa María in Palmis,
conocida como Chiesa del Domice Quo Vadis.
8
En el año 64 después del incendio de Roma por Nerón, S. Pedro
huye hacia Brindisi, tenía miedo a morir ya que se ha desatado una
fuerte persecución contra los cristianos como supuestos autores
de tal incendio.
Esta es la primera persecución, que será la base de las
venideras.
En este punto de la Via Appia le sale al encuentro Jesús.
Pedro, sorprendido le pregunta: “¿A dónde vas Maestro? Quo
vadis, Domine?”
A lo que Jesús le responde: “Puesto que tú abandonas a
mi pueblo, voy a Roma para ser crucificado de nuevo”. Pedro
entonces comprendió lo que Jesús quería decirle y se volvió a
Roma donde fue crucificado cabeza abajo puesto que les dijo a
sus verdugos que no era digno de morir como el Maestro.
Esta Iglesia fue edificada en el S. IX y remodelada en el
barroco por el Cardenal Barberini.
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El edificio actual data de 1637 y los arqueólogos creen además
que el santuario todavía es más antiguo y que los cristianos
hicieron su propia versión de un templo ya existente dedicado a
Rediculum, el dios del retorno. Por él pasaban los viajeros que
estaban próximos a enfrentar un viaje largo y peligroso y querían
regresar sanos y salvos.
Se conserva una piedra, donde pueden verse las huellas
dejadas por los pies de Jesús en este encuentro. Esta sería una
copia ya que la original se halla en la basílica de S. Sebastián,
próxima a esta iglesia.
Todo esto nos lo narra de un modo vibrante y bello, el Premio
Nobel Henryk Sienkiewicz en la novela Quo vadis?
Indico algunos datos de este autor que tiene dentro de esta
iglesia un pequeño monumento.
El autor de la novela Quo Vadis? es Henryk Sienkiewicz (18461916)
Fue hijo de terratenientes polacos, y se formó en la Universidad
de Varsovia. En 1870 comenzó su carrera periodística, que lo llevó
a viajar a Estados unidos como enviado especial. De regreso a su
país, fue designado director del periódico Slowo. Fue entonces
cuando comenzó a escribir la trilogía que aborda la lucha polaca
frente a las invasiones rusas en el siglo XVII, compuesta por A
sangre y fuego, El diluvio y Un héroe polaco.
En 1896 publicó Quo vadis?, su obra más célebre, y en 1905
recibió el Premio Nobel de Literatura.
En la pág. 670 de la novela leemos:
Al rayar el alba del día siguiente, dos personas envueltas en
ropajes oscuros se dirigían por la Vía Appia hacia la llanura de la
Campania.
Se asomó el sol por las colinas y una visión maravillosa se
presentó a los ojos del apóstol. Le pareció que el disco dorado, en
vez de ascender por el firmamento, iba bajando y avanzando hacia
el camino por donde ellos se dirigían.
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Una figura viene hacia nosotros envuelta en los resplandores
del sol.
El báculo de peregrino se había caído de las manos de Pedro
a tierra; sus ojos inmóviles, miraban hacia delante; su boca
estaba abierta, y en su rostro se pintaba el asombro, el gozo y
el arrobamiento. De pronto se arrodilló; extendió los brazos hacia
delante, y de sus labios brotó este grito:
-¡Oh Cristo!...¡Oh Cristo!
Y cayó con el rostro en tierra, como si estuviera besando los
pies de alguien.
Se sucedió un largo silencio; y luego se oyeron estas palabras
del anciano, medio ahogadas entre sollozos:
-Quo vadis, Domine?
-Si tu abandonas a mi pueblo volveré a Roma a ser crucificado
por segunda vez.
El apóstol yacía en el suelo, pegado el rostro a tierra, inmóvil
y mudo.
Por fin se levantó, cogió con temblorosa mano su báculo y
volvió sin decir palabra hacia las siete colinas de la ciudad.
-“Quo vadis, Domine?”
-“A Roma” – dijo el apóstol en voz baja y regresó...
En 1983 Papa Jun Pablo II definió la iglesia como “lugar que
tiene una importancia especial en la historia de Roma y en la
historia de la iglesia”.
Esta pequeña iglesia está en Vía Appia Antica, 51, en frente de
las Catacumbas de S. Calixto.
Pedro-Petrus-Pietra
Hacia el año 67 d C, Nerón decretó la crucifixión de Pedro.
Así nos consta. Se declaró indigno de morir de la misma forma
que el Maestro Jesús y pidió lo crucificaran cabeza abajo. Fue
crucificado en S. Pietro in Montorio, nos lo recuerda Bramante
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con su templete. Luego fue enterrado en el cementerio pagano que
había junto al Circo de Nerón, donde se levanta la actual basílica
del Vaticano.
Pedro, Petrus, Pietra,
“sobre ti edificaré mi Iglesia”
Bravucón siempre,
valiente y cobarde
primero en defenderlo,
primero en negarlo tres veces.
primero en huir de Roma
por miedo y cobardía.
Va a ser el Señor
quien le recrimine,
y él ingenuo pregunte:
“Quo vadis, magíster?”
Cobarde y valiente,
Bueno, muy bueno y malo,
falto de fuerza.
“¿Podrás beber el cáliz?”
“¿Me amas, Pedro?”
Rubricó su honradez
con el martirio.
Bravo y humilde
no será digno en morir como el Señor
y de nuevo, nace su valor:
cabeza abajo.
Valiente al fin, Pedro,
Petrus, cimiento
de la Iglesia pecadora y santa
como tú, fuerte y débil,
humano, pescador
y de Cristo seguidor.
Gloria siempre y honor
Pedro, Petrus, Pietra.
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3
Las catacumbas,
¿eran un buen escondite?
El 99% de los visitantes turistas o peregrinos así lo afirman.
He conducido a más de 60. ooo personas (mayo 2012) Llegan
seguros que en efecto, las catacumbas era el lugar de escondite
de los cristianos cuando había persecuciones, así evitaban que
los matasen.
Son muy pocos quienes afirman que no era escondite y
ninguno de ellos me pudo nunca demostrar la razón por la que
era imposible que se escondieran en los 20 Km de laberinto que
tienen las Catacumbas de S. Calixto.
La respuesta es que no. Era un lugar que servía para enterrar
y rezar a los muertos. Fueron los primeros cementerios cristianos.
Estos cementerios servían como lugar de encuentro y para
celebrar los aniversarios de los difuntos y para conmemorar a los
mártires.
¿Por qué se da esta idea tan equivocada de que eran un lugar
para esconderse?
Una de las razones son las imágenes de las películas, así nos
lo han presentado muchas de ellas y también las novelas. Es un
lugar que se presta a jugar con la fantasía, de ahí que lo utilicen y
nos lleven a la confusión y al engaño.
Hasta un niño de unos tres años y en brazos de su papá,
mirándome a los ojos y dentro de las galerías me habló
señalándome con su pequeño dedo un agujero grande y me dijo
con voz trémula: “Aquí se escondía el dragón”. A grandes y chicos
nos gusta imaginar.
Los romanos conocían muy bien estos lugares de enterramiento
de los cristianos y en tiempo de persecución se podían acercar a
tales sitios y si encontraban a un cristiano, lo podrían matar. No
destruyen el lugar porque respetan más a los muertos que a los
vivos. Los muertos era algo mágico para los romanos.
13
Son cristianos y no “bobos” En tiempos de persecución
no acuden. Es entonces cuando vivían la eucaristía en casas
particulares de cristianos, puesto que todavía no tenían iglesias.
Las catacumbas era el lugar de enterramiento y de oración.
Hoy día, siguen “engañando” a las gentes, muchas guías
publicadas, internet, maestros de escuela, catequistas y otros
medios y es que parece que nos gusta más la mentira que la
verdad.
“Me ha quitado una de las ilusiones que traía” Así me lo
comunicó una señora de cierta edad. Mi respuesta fue rápida: “un
servidor no quiere quitarle ninguna ilusión y menos a su edad,
-.era muy mayor- permanezca en la ignorancia”.
En la lectura del libro “El último Catón” de Matilde Asensi.
Leemos esta cita en la pág. 151:
14
“Contrariamente a lo que se suele afirmar, las catacumbas
no servían de refugio a los cristianos durante la época de las
persecuciones. No era esa su finalidad, ni ellos las construyeron
para ocultarse. A mediados del siglo II, los primeros cristianos
empezaron a adquirir terrenos para enterrar a sus muertos, ya que
eran contrarios a la costumbre pagana de la incineración por creer
en la resurrección de los cuerpos el día del Juicio Final. De hecho,
ellos no llamaban catacumbas a estos cementerios subterráneos,
que es una palabra de origen griego que significa “cavidad” y que
se popularizó en el siglo IX, sino koimeteria, “dormitorios”, de
donde procede cementerio. Creían que dormirían, simplemente,
hasta el día de la resurrección de la carne. Como necesitaban
lugares cada vez más grandes, las galerías de los koimeteria
fueron creciendo hacia abajo y hacia los lados, convirtiéndose en
verdaderos laberintos que podían alcanzar muchos kilómetros de
longitud”.
E Indro Montanelli en su obra Historia de Roma, en el capítulo
XXXV , así nos lo cuenta:
“Las tumbas estaban construidas según la costumbre siríaca
y etrusca, en criptas excavadas en las paredes de largas galerías
subterráneas, las catacumbas.
Esta costumbre duró hasta el S. IX, que es cuando llegan las
oleadas de bárbaros. Fueron meta de peregrinaciones para rezar a
los mártires, al abandonarlas, la tierra las cubrió y fueron olvidadas.
Se descubrieron en 1578 por pura casualidad. El hecho de que sus
ramificaciones fuesen complicadas y retorcidas ha hecho creer
que fueron construidas para escondrijo de las “conspiraciones”. Y
sobre esta hipótesis se han apoyado muchas novelas.”
Las catacumbas no eran escondite, eran cementerios, venían
a enterrar a sus muertos y a rezarles.
¿Se pudo esconder alguien en algún momento?-Sí.
Nos consta que en 1934, en tiempos de la guerra mundial,
los salesianos, encargados en aquel entonces del cuidado de
las catacumbas, escondieron a judíos para que los nazis no los
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mataran y también he podido ver en diversos documentos que
escondieron alimentos, ya que eran tiempos de escasez; pero no
olvidemos que estamos en el Siglo XX, cuando todas las galerías
– los 20 Km. Con sus cuatro pisos estaban unidas.
Pero, insisto ¿era lugar de escondite en los tiempos de la
persecución cristiana de los primeros siglos?-No
¿Nos escondíamos aquí
en estos lóbregos lugares?
Como ésta, portas bellas
y erróneas imágenes.
Aquí, sí orábamos,
dábamos el adiós a los nuestros
y a los mártires muchos besos.
Las fieles lucernas alumbraban
aquellos duros momentos.
Jesús siempre presente
y nosotros, muy contentos.
Ni vivienda
ni escondite,
sí dormitorio,
expectantes
de la gloria venidera,
-silentespor siempre duradera.
Dormitorio,
no ciudad de muertos;
vivos, siempre vivos
con el corazón y pecho abiertos,
al gozo eterno,
alegres, felices, sedientos
de paz, bien a todo viento.
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“Somos así
quienes habitamos aquí,
los que dormimos y esperamos
resucitar por Cristo
con resplandor jamás visto.
Aquí dormimos, sí
en esta koimeteria,
todos en hilera
y a la espera”
Está muy arraigado en el pueblo esta leyenda, así presento
el testimonio de una señora muy mayor que me comunicó
emocionada y casi llorando: “las monjas desde pequeñita me
enseñaron que aquí se escondían los cristianos y Ud. me lo ha
negado” Mi respuesta fue rápida y clara, “veo que es muy mayor”
y sin preguntarle la edad, me la dijo, “tengo ochenta y seis años”
y además me añadió “y soy católica y cristiana”. Rápidamente le
contesté que había llegado el momento de darle gracias al Señor
ya que a los setenta y nueve años había aprendido algo nuevo.
Vi claramente y lo leí en sus vidriosos ojos que no lo aprendió.
Estaba bloqueada, casi llorando y permanecía en sus trece. Una
persona muy adulta y de este modo, bloqueada, es muy difícil que
cambie de opinión y de parecer.
Otra joven me comunicó que le restregaría a su abuela esta
verdad de que no era escondite, puesto que le había insistido que
viniera a las catacumbas ya que aquí se escondían los cristianos
cuando eran perseguidos.
Un servidor le insistió que no se lo restregara y sí que le
diera la razón científica, puesto que ya está estudiado. Cuando
una galería de quince, veinte o los metros que fuera se llenaba de
muertos, la tapiaban e iban haciendo otra galería. No servían para
esconderse en unos pocos metros puesto que ahí sí los matarían.
De este modo, su abuela, sin venir a las catacumbas aprendería
de un modo claro y científico que no era un lugar de escondite.
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4
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La serpiente de la Isola Tiberina
La tradición médica de la isla vende ya desde antiguo. Cuenta
la leyenda que con motivo de una peste en el año 293 a. C., Roma
envió una delegación a Epidauro en Grecia para requerir la ayuda
de Esculapio, el dios griego de la medicina. La embajada volvió a
la Urbe con la serpiente sagrada del dios, pero el barco encalló en
las cercanías de ripa Graeca y la serpiente saltó de la nave para
refugiarse en la isla, lo que les dio a entender que la elegía como
si fuera su propia casa.
Más adelante se le dio a la isla la forma de barco en el tiempo
de Augusto para formar parte de esta historia.
Y la serpiente que lucen las farmacias enroscada en un cáliz
nos recuerda esta bella historia donde llega la salud y salvación
por medio de la serpiente que salta a la isla Tiberina.
5
Echar la moneda en la Fontana de
Trevi
Durante siglos, tanto Emperadores como Papas regalaron
fuentes y agua a la ciudad para mostrar su poder y generosidad.
Roma está llena de bellas, bonitas y buenas fuentes. Y entre todas,
ninguna tan bella como la de Trevi. Ésta es del S.XVIII. La primera
fue hace más de 2.000 años.
La historia está esculpida, a media altura sobre la figura
central– cuando las tropas de Agripa se morían de sed, apareció
una joven que les señaló el manantial; desde entonces se le llamó
“aqua Virgo”. En el relieve de la izquierda se ve al general Agripa
y el arquitecto que le muestra los planos de la fuente. En el Siglo
XVII, Bernini se preocupó del proyecto de la plaza, no de la fuente.
En 1732, el Papa Clemente XII lanzó un concurso para crear aquí
una fuente y fue Nicola Salvi, joven desconocido quien ganó. Su
construcción se prolongó toda su vida, 30 años. No tiene otra
obra. Está en la fachada del Palacio de los ContI, donde debiera
estar la puerta. Crea la unidad y armonía entre palacio y fuente.
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Le dan esa unidad y armonía las elegantes pilastras de capitel
corintio con acantos.
En el centro hay dos grandes columnas formando como un
arco de triunfo: es la victoria del agua que es la vida.
La figura central: es el dios Océano, señor de las aguas, va
montado en un carro de conchas marinas, el torso está girado y
se apoya en la gran concha.
El cetro es símbolo del dominio sobre las aguas. Tiene más de
seis m. de altura, supera al David de Miguel Ángel. Dos caballos
alados lo conducen. Son tritones, el de la caracola anuncia la
llegada del Dios y el otro domina al caballo encabritado. A ambos
lados hay dos figuras femeninas, aluden a dos virtudes del agua:
la abundancia por la cornucopia y la salubridad de esta agua,
por la pureza, la serpiente es el símbolo de Esculapio- dios de la
medicina.
Arriba hay cuatro imágenes: 1cornucopia: abundancia;
2 gavilla de trigo: fertilidad del campo; 3racimo uvas y copa: el
Otoño; y 4 jardines, flores en manos y regazo.
La base: rocas, semejante a la de Navona. Arbustos, plantas
-hay treinta especies- afloran sus rincones. La roca trepa por la
fachada, crea la ilusión de estar dentro de la naturaleza.
El graderío, es como si fuera un anfiteatro para la vista y el
oído que se mezcla con el griterío de visitantes. Gran fuente y
pequeña plaza es de gusto barroco
¡Bebe el agua de Trevi!: a su derecha hay un rinconcito con
agua para beber, es la fuente de los enamorados, de la que
hablamos a continuación.
Encima de esta fuentecilla, un gran cántaro para tapar la visión
de la fuente que le molestaba a un peluquero.
Echar la moneda
Hay varios lugares donde se echan, depositan o dejan
monedas en Roma.
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La más conocida es echar una moneda a la Fontana de Trevi.
Hay otros lugares, así lo he visto, p. e. en una cornisa en el Foro
y lo hacen las gentes desde una balaustrada alta, dicen que si se
queda en la viga que une columnas es señal de suerte. Como es
normal, la mayoría no se posan y caen a tierra.
Otro lugar es en la Basílica de S. Juan de Letrán, en la tumba
del Papa Martín V. En 1420, Martín V –Colonna- entra en Roma,
sólo viven 17.000 personas y se instala en el Vaticano.
Muchos lanzan el óbolo a la tumba de Martín V y esto lo
hacen por la generosidad que él demostró por preservarla del
derrumbamiento. Tras el prolongado abandono debido al exilio de
los Papas en Avignon (1308-1378)
El pavimento es de estilo cosmatesco, en él aparecen
columnas -se refiere a su apellido- Su tumba está en el centro de
la nave. Martín V es el símbolo de un nuevo comienzo. Siempre
hay monedas sobre su tumba.
Se dan otros lugares.
Este gesto tan sencillo, juguetón y popular me recuerda al de
la firma del amor a través de los candados en el Puente Milvio,
del que hablaremos más adelante. Hay muchos lugares en Roma
en los que las parejas dejan candados. Lo he visto en algunas
ventanas, que están a la altura del peatón en la misma Fontana de
Trevi, en el Puente de las Cuatro Cabezas que conduce a la Isola
Tiberina, en el mismo Puente de Sant´Angelo etc…
Gesto humano, sencillo y debido a la lejanía del Puente Milvio
ponen el gesto en lugares más a mano del turista y de este modo
ratifican que en Roma firmaron su amor.
Echar una moneda en Roma, ¿qué significa? ¿Qué presagio
hay en ello? ¿Dónde tirarla?
La más conocida y famosa a nivel mundial es la de lanzar una
moneda en la Fontana de Trevi.
La leyenda viene de muy lejos.
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Todo turista que se acerca a esta bella fuente suele, de
ordinario lanzar una moneda al agua.
El gesto consiste en lo siguiente, puesto de espaldas, con la
mano derecha, sobrepasando el hombro izquierdo es cómo se
lanza la moneda a la Fontana de Trevi. De ordinario se archiva el
gesto en una fotografía. ¿Cuál es el sentido del mismo? ¿Por qué
ponerlo? Dicen que al lanzar la moneda se manifiesta en el interior,
no se dice, pero sí se piensa un deseo de regresar a Roma.
Conforme va pasando el tiempo, las gentes manifiestan decir
diversos deseos y no sólo el de retornar a Roma, no cambia el
lanzar la moneda y sí añaden otros deseos, el de amar a una
persona, el de que uno tenga suerte.
Esto me recuerda, como peregrino que soy a Santiago de
Compostela, el gesto de poner la mano en la columna de ónice
del Pórtico de la Gloria en el hueco que está horadado por tantas
manos que se posaron en ella.
Parece que el inicio en la Edad Media fue el que apoyándose
el peregrino en ella, después del largo camino, reafirmaba en el
fondo de su corazón su fe diciendo: “Creo, señor”
En el siglo XXI he oído otras interpretaciones de otras gentes,
como por ejemplo que allí se manifiestan distintos deseos como
aquello de “salud, dinero y amor” Casi lógico que en un mundo
secularizado haya evolucionado y se haya perdido lo genuino de
aquel “Creo, Señor”
Personalmente me gusta conocer y disfrutar de estas antiguas
leyendas en el propio lugar y no tanto el de repetir el gesto de
modo rutinario.
Nunca lancé la moneda a la Fontana de Trevi y he vivido en
Roma varios años.
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A la de Trevi
Llena de bellas fuentes,
plena de fuentes buenas,
cantarinas, generosas,
así está Roma.
Y cual reina y señora
se eleva la de Trevi monumental.
es entrada a un palacio,
al de los grandes Conti,
con él forma unidad y armonía.
Elegantes pilastras de corinto
la adornan y el arco de triunfo
señala la victoria del agua.
El dios Océano,
Señor de los mares
monta en carro caballos alados,
van sobre las aguas desbocados.
Abundancia y salud
la de esta agua.
Afloran por los rincones,
plantas y flores.
Trepa la roca, cual arbusto
por la fachada.
Se mezcla el líquido cantarín
con mil voces
al sonar el chasquido de la moneda
al caer en la fontana.
Mientras sólo el corazón escucha
el deseo del que la lanza.
¡Todo en oculto misterio!
¡Ay fontana de Trevi!
Belleza, canto, melodía,
conjunto de agua, piedra,
edificio y fantasía.
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Fuente de los enamorados
Roma dedica buen augurio a los enamorados.
Dentro de la fontana de Trevi, bajando las escaleras, en el
rincón de la derecha caen dos chorrillos de agua a una pila.
Esta es la querida y poco conocida fuente de los enamorados,
dice la tradición que quien bebía no debía tener ni celos ni
infidelidades o traiciones en el amor.
Es la misma agua que alimenta la fuente grande de Trevi, es
el agua “Vergine”.
Cada pena en el amor debe apagarla como hace el sol con la
niebla.
Es un buen detalle del autor de la Fontana di Trevi, Nicola Salvi.
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Cuando un joven tenía que abandonar Roma bien por el
servicio militar o por otra causa, la chica, la víspera lo llevaba
al joven a este lugar, llenaba un vaso en el que no había bebido
ninguno y se lo daba a beber para luego a continuación romperlo.
Así rubricaban su amor.
Poniendo este gesto, la chica no debía tener miedo a perder
a ese joven.
Esta era la señal que aquel joven nunca debía olvidarse ni de
Roma ni de la persona que amaba.
Agua de enamorados
Agua bebida en Trevi,
en la fuente enamorados,
hace que respires siempre
amor y fidelidad.
Ni celos ni traiciones,
ni míseros abandonos
caben a quien bebe
de esta pequeña fuente.
Con el agua se cuela
en el alma de la pareja
un amor para siempre.
Agua de enamorados,
agua querida,
Ésta, la de la fontana
de Salvi Nicola,
de todos conocida.
Sin quebrarse
Amor que pasa,
amor que resta.
Bebamos de esta agua
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para que en nosotros
sea por siempre,
sin romperse,
-como el basosin quebrarse.
Cambiante
en estaciones,
será eterno,
mas no perecedero,
sí rubricado
y en el tiempo.
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Bocca della Veritá
La leyenda
Decían que este era el rostro de un dios de los mares o de
los ríos. Este dios terrible devoraba las manos de los mentirosos.
Durante la Edad Media, cuando los jueces estaban convencidos de
la culpabilidad de un reo, le hacían introducir la mano en tal boca
y un verdugo, apostado detrás se la cercenaba con una cuchilla,
va a ser entonces cuando el reo aparecía como mentiroso y por lo
tanto era culpable y merecedor de aquel castigo.
Hoy día para demostrar la veracidad y fidelidad de su amor,
muchas parejas y amantes, sobre todo de jóvenes introducen su
mano con un ligero cosquilleo...
Un servidor nunca lo hago -¿Por mentiroso?- y sí acaricio
la cara y le doy un golpecito en el rostro. Me gusta conocer la
leyenda y ser original.
Esta célebre losa circular está en el pórtico de Santa María in
Cosmedin.
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Algo de historia y qué representa
Es un extraño objeto de aspecto muy antiguo y pagano, parece
y da todas sus pistas de ser una imagen de un dios antiguo.
Fue encontrada esta gran losa en las aguas del Tiber en la
Edad Media, pero parece que su antigüedad se remonta a más de
2.300 años.
Este disco de piedra tiene 20 cm de espesar; 175 cm de
diámetro y pesa más de una tonelada
Su apariencia es la de un rostro barbado con una espesa
cabellera. Sus ojos son enigmáticos y penetran a quien la mira. Su
nariz es recta y regular, tiene una gran fuerza expresiva. La boca
está abierta y amenazante.
En la parte superior se observa como una especie de cuernos.
Este rostro ha sido identificado con el rostro de alguna divinidad
como Fauno, el dios de los bosques, Otros la igualan con alguna
divinidad fluvial o marina, hemos de recordar que muy cerca de
aquí estaba el antiguo puerto del Tiber y junto a él desembocaba
la cloaca Máxima.
Alguien afirma que los cuernos podrían ser pinzas de
cangrejo, además parece que también se vean figuras de delfines
o de otras especies marinas alrededor, de ahí que bien podría ser
y representar a Tritón, hijo de Neptuno o al Océano, el padre de
todos los ríos.
La función de esta losa
No está clara. Los orificios de los ojos, nariz y boca, parecen
indicar que eran a través de los cuales discurría el agua.
Se piensa que pudo ser la cubierta de un pozo, otros hablan
de la frontal de una fuente o incluso muchos dicen si correspondía
a una tapadera de alcantarilla para recoger las aguas de lluvia y así
enviarlas a la cloaca Máxima.
Muchos enamorados meten la mano en la boca y así dan
prueba de la sinceridad de su amor, mientras se dicen “Te quiero”
el uno al otro.
Este medallón de mármol era una tapa de alcantarilla. Sólo
respetaba la mano a los sinceros. Hay quien dice que el verdadero
oráculo no era la boca, sino un verdugo que estaba escondido
detrás de ella y armado con un hacha.
Un episodio que nos lo ilustra fue aquel que un día en que
una hermosa dama fue conducida a ella bajo la acusación de
adulterio. Su vecina aseguraba que un joven entraba en su casa
de noche, en ausencia de su marido. De camino a la boca, un
hombre salió de la multitud que contemplaba el cortejo y la besó
apasionadamente; apresado por los guardias confesó que “no
había podido resistir ante la belleza de la inculpada”. Así la dama
pudo meter la mano tranquilamente en la boca y jurar que nadie
la había tocado jamás salvo su marido y aquel desconocido. Era
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la verdad ya que la vecina aseguró que el impulsivo se parecía
mucho al visitante clandestino.
Esta plaza de la “Bocca de la Verità” es uno de los rincones
más bellos de Roma.
Santa María de Cosmedín- Su torre tiene 34 m de altura. A la
salida está el Templo de Hércules Vencedor y no de Vesta. Es el
segundo edificio en mármol más antiguo de Roma.
Hércules dio muerte al bandido Caco, por haber intentado
robarle un puñado de reses que Hércules guiaba. De ahí el nombre
de Caco a los amigos de lo ajeno.
“Bocca de la Verità”
Todos quieren la verdad,
todos la buscan.
Ponen su mano en tu boca
confiando no fallar.
Sabes de sabores
y también de amores,
muchos y distintos
de manos grandes y chicas,
limpias y con tintas.
Tu boca gusta verdades
y a veces maldades,
mas todos dicen y quieren verdad
¿A cuántos mordiste, a cuántos heriste,
boca, querida “Bocca de la Verità”?
Deja que te sigan acariciando
derechas e izquierdas,
blancas y negras,
pequeñas y grandes,
limpias y sucias,
deja que siga triunfando
la pura y simple verdad,
boca, cara “Bocca de la Verità”
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8
Las naranjas amargas
Conocemos y sabemos bien que cuando una naranja es
amarga al paladar, la razón está en que no fue injertada, a este tipo
de árboles les llamamos borde.
En el monte Aventino de Roma, a la derecha de la Iglesia de
Santa Sabina, está el llamado Jardín o Parque de los Naranjos, se
cree que fue Santo Domingo de Guzmán el primero que los trajo
a Roma.
Este jardín es un maravilloso mirador de una parte de la
ciudad de Roma, se ve el pequeño monte del Gianicolo, pegadito
al Vaticano, el río Tiber a los pies, la Isola Tiberina y al fondo la
imponente cúpula del Vaticano del gran Miguel Ángel.
Poco antes o bien ahora después, podemos gozar de la visión
de la cúpula en miniatura, a través del agujerito de la cerradura de
los Caballeros de Malta. Sin palabras, hay que verlo.
Pues bien, en este jardín de los naranjos dice la leyenda que
cuando un joven o una joven mordía y gustaba del amargor de una
de estas naranjas, ignorando que se trataba de no comestible, era
presagio de un pronto y posible enamoramiento.
Dos jóvenes españoles, en uno de los viajes de estudios
deciden ir a este jardín para ver si se cumplía en ellos tal presagio.
Habían oído algo sobre esta leyenda.
Así fue, mordieron del fruto amargo.
A su vuelta, esperaban el “milagro”; pasaron días y días,
meses y no ocurrió ningún enamoramiento.
Y es que no sabían que esto sucede y así lo narra la leyenda,
que uno no debe conocer tal hecho, simplemente y sin saberlo,
morder y gustar del amargor de estas naranjas para luego gustar
el sabor de enamorarse.
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Naranja amarga
Naranja amarga
del Aventino
que porta amor
como destino.
Eres como la vida
amargura y dulzor,
tristeza y alegría,
soledad y compañía.
Dulce amargor del naranjo,
amargura dulce
de quien se enamora
y comparte vida y don.
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Naranjas amargas
del Aventino,
preñadas del presagio
del amor y del cariño.
9
Los Candados del Puente Milvio
Sobre el Tiber hay muchos puentes, en uno de ellos: Ponte
Milvio se da una reciente costumbre de “encadenar” y reafirmar el
cariño y amor de la pareja poniendo dos candados. Cada uno de
los enamorados guarda la llave del otro.
Algunas parejas tiran las llaves al río indicando con ello que
su amor es para siempre. Este puente lo encontrarás caminando
desde la Piazza Popolo toda la via Flaminia, al final se topa uno con
el río Tiber y este puente.
Dos jóvenes de Alicante de 18 años, en su viaje de estudios
ponen este gesto. El candado es el testigo de tal evento de amor
y cariño.
Este gesto nace a raíz de la novela de Federico Moccia,
Tengo ganas de ti, Editorial Planeta 2009(4ª edición) 494 págs,
Step y Gin ponen “el candado de los enamorados”. “Se
engancha un candado a esta cadena, se cierra y se arroja la llave
al Tiber”. Esto se encuentra en la pág. 329 de dicha obra.
Si te acercas a este puente, el Milvio, verás centenares de
candados.
Aquí se realizó la victoria del Emperador Constantino ante su
opositor Majencio.
“In hoc signo vinces”- con esta señal, vencerás. Esta fue la
visión que tuvo Constantino antes de la batalla y se refería a que
con el signo de la cruz, vencería.
Parece como si hoy, muchos jóvenes creyeran que con el
signo de poner el candado la victoria en el amor está segura.
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Se da hoy día en Roma y sobre diversos puentes sobre el
Tiber este mismo hecho d e poner el cando las parejas, así ocurre
en el Puente de las Tres Cabezas que une la Isla Tiberina y más
todavía en el puente de Sant ´Angelo, donde las parejas colocan
el candado. Es posible que la razón esté en que el Puente Milvio
cae distante y estos dos puentes, sobre el Tiber estén más a mano
del turista.
Con cadena dorada
y candados de plata
queda la alianza sellada.
Una llave es de Aida,
la otra de Andrés
unidos con cariño y amor
en el Ponte Milvio de Roma.
Signos y gestos forman
Los pétalos de tan bella rosa;
besos y caricias lo bordan.
Unidos con otro pétalo de flor
resta así reforzado tal amor.
El deseo es por siempre,
que nadie rompa la cadena
ni abra el cofre del misterio;
no es signo de esclavitud,
sí de libertad y amor.
Puente Milvio, Ponte Milvio
que lejos de Alicante
guardas nuestro secreto.
Antes se rompan tus piedras,
desborden las aguas del Tiber
o se oxide la dura cadena.
Antes que nuestro amor muera,
cadena que no es ni pena ni condena
sino ilusión y vida plena
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Como pequeño homenaje a estas parejas que ponen el
candado, a continuación escribimos en varias lenguas la bella
expresión de “Te amo”:
Latín
AMO TE
Italiano
TI AMO
Castellano
TE AMO
Inglés
I LOVE YOU
Francés
JE T´AIME
Alemán
ICH LIEBE DICH
Catalán
T´ ESTIMO
Euskera
MAITE ZAITUT
Portugués
TE AMO
Gallego
QUÉROTE
Holandés
IK HOU VAN JOU
Polaco
KOCHAM CIEBIE
Croata
VOLIM TE
Coreano
㌂⧧ 䞿┞┺
Sueco
JAG ÄLSKAR DIG
Finlandés
RAKASTAN SINUA
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10
Mirar a los ojos de Giordano Bruno
El Campo di Fiori fue el centro de la ciudad medieval. Las
calles son un encanto, estrechas, algo sucias y deterioradas;
estuvo y está lleno de artesanos. Es muy bella la Via del Pellegrino.
es interesante dar un paseo por el Vicolo del Bollo, Arco di Santa
Margherita, hay rincones bellísimo como el de Arco de Acetari.
Nos impresionará su belleza y también, seguramente su suciedad,
la sensación que uno recibe es de descuido.
El Campo di Fiori, según las horas del día ofrece distintos
rostros, por la mañana alboroto con el mercado; a la tarde
tranquilidad y a la noche, gentes sentadas en los muchos
restaurantes que la circundan.
Aquí estuvo el teatro Pompeio- S. I a. C. es el primer teatro
romano realizado en piedra. También estuvo aquí un templo a
Venus.
El origen del nombre de este lugar proviene que había prados
llenos de flores que descendían hasta las orillas del Tiber.
Todavía está la lápida con el escudo de “Hostaria della
Vacca”, está en la esquina de la Via dei Cappelari, la propietaria
era Catanei, amante esta de Alejandro VI y madre de César Borgia
y de Lucrecia Borgia, en el escudo incluyó la figura del toro como
referencia al escudo de Alejandro VI en el que también estaba.
Preside la plaza la estatua en bronce de Jordano Bruno.
Este hombre, filósofo, matemático, inteligente, sabio,
dominico, desafió con su doctrina panteísta tanto a protestantes
como a católicos, fue excomulgado por su pensar heterodoxo,
anduvo errante fuera de Italia y cuando vuelve tras un proceso de
ocho años lo condenan a la hoguera y lo queman aquí. Después
de oír la sentencia les dijo a los jueces: “Tembláis más vosotros
al anunciar esta sentencia que yo al recibirla”
En sus manos sostiene uno de sus escritos, que en vida
defendió hasta morir, es una de sus obras prohibidas.
El 17 de febrero, las asociaciones de librepensadores italianos
le ofrecen flores y coronas.
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¿Cómo ocurrió su condena y muerte?
Meses después de la muerte de Beatrice Cenci y sus cómplices
en el puente de Sant´Angelo, hubo otro ajusticiamiento, más feroz
y cruel en el Campo de Fiori. Quemaron vivo al filósofo Giordano
Bruno, dominico, no es aceptado por disidente y hereje.
Lo denuncia un noble veneciano Giovanni Mocenigo. El
Tribunal de la Inquisición no le da mucha importancia. Hay siete
sesiones y de rodillas pide perdón ante los jueces. Trasladan a
Bruno de Venecia a Roma para procesarlo de nuevo, llega a finales
de febrero 1593. Serán 22 sesiones, algunas acompañadas de
torturas. Bruno se ha salido de la oficialidad cristiana y lo va a
pagar caro.Trata de demostrar que su filosofía es compatible
con la ortodoxia, Giordano Bruno no se rinde, después de oír su
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sentencia de muerte dice Bruno: “Quizá pronunciáis con más
miedo la sentencia contra mí que el que siento yo al recibirla”
Queman vivo a Bruno por hereje.
Todavía es de noche cuando avanza el cortejo. Lo escoltan
frailes con las caras cubiertas por largas capuchas, túnicas negras
y antorchas. Para confortar al condenado le muestran tablillas
con escenas de martirio de santos. Entonan lúgubres letanías. La
gente asiste en silencio, persignándose a su paso.
Pasan por la C/ Pellegrino, el condenado llega al suplicio,
lo desnudan y lo atan a un poste bajo, han amontonado unos
haces de leña seca. Las llamas se encienden con rapidez. Como
le han puesto mordaza, los gritos desgarrados de la víctima se
transforman en extraños mugidos que el humo y el chisporroteo
del fuego no tardan en ahogar. Todo esto lo vivió sin duda nuestro
amigo Caravaggio, pintor que asistía, como gran multitud de
gentes, a estos ajusticiamientos y luego era capaz de plasmarlo y
expresarlo en sus lienzos.
La estatua preside el centro de la plaza, parece que sigue
observando a todo el que se acerca y por supuesto cada mañana
escucha los regateos y el bullicio de vendedores y compradores
del mercado que allí se monta a diario.
La estatua es de bronce, está representado con el traje de
fraile dominico, porta la cabeza con capucha y mira hacia abajo,
su mirada es de observador desde su pedestal alto para ver cuanto
sucede en la plaza del Campo di Fiori.
¿Qué tendrá esa mirada? ¿Cuál no será su fuerza todavía?
Dicen y así lo he oído a muchos estudiantes que aquella
persona que mira a los ojos de Giordano Bruno no se licenciará
nunca, no será laureado. ¿Por qué? ¿Qué razones aducen?
Sigue teniendo fuerza su mirada pasados siglos y su influencia
no parece sea positva, más bien negativa.
Fue un personaje valeroso, duro y empecinado en su
investigación, teorías y estudio.
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Si pasas por el Campo di Fiori y eres estudiante, no mires los
ojos de Giordano Bruno, baja la mirada o bien obsérvalo en su
pedestal de lado o por la espalda.
Ya sabes, tenlo presente y comunícaselo a tu compañero o
compañera de estudios, si es que lo aprecias.
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Palazzeto dei Mostri
Este palacio está en via Gregoriana, 28, 00186-Roma, muy
cerca de Trinitá dei Monti. Su Tfno es: 06699931
Se trata de un palacio barroco, fue construido por Federico
Zuccari, lo hizo sobre la base de su propia casa y en 1592.
Cuenta con un portal y dos ventanas. El portal es grande y
representa la boca de un gran monstruo, su boca está abierta,
es impresionante y su garganta es la entrada, está dispuesta a
engullir cuanto sea y a quien se acerque. Las ventadas de derecha
e izquierda también tienen aspecto de monstruos.
Se guarda dentro la biblioteca Hertziana, especializada en arte
y artistas.
Se dice y cuenta que muchos papás con niños pequeños los
llevaban delante de esta Palazzeto y señalándoles la puerta les
decían:
“Vedi, se non fai il bravo, questo babbeo viene a casa e ti
mangia” Es decir, “mira si no eres valiente, este monstruo vendrá
a casa y te comerá”
Esto nos recuerda a otras muchas leyendas de este género
para amedrentar a los niños y hacer que sean fuertes y se
comporten.
Por ejemplo, en una de las montañas cercanas a la mítica
ciudad de Delfos había una caverna oscura que servía de refugio
a un monstruo de enormes proporciones y, al que la población
temía porque, según una tétrica leyenda, raptaba a los niños de
los contornos para chuparles la sangre.
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Se trata del hombre del saco, para asustar a los niños. “Mira
que vendrá el hombre del saco y te llevará” o aquél otro que se
da en el pueblo de Monforte del Cid (Alicante) donde hay una
fuente a la que les llevaban los padres a los niños para decirles
que allí dentro había una ballena y que les podía tragar si no se
comportaban bien.
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¡Habla!
Para ordenar las ideas que menciono a continuación me serví
y me he inspirado en la magnífica obra de Corrado Augias,
Los secretos de Roma, Editorial Debate, Barcelona 2007, 435 pp.
S. Pietro in vincoli.
Los “vincoli” de su nombre son las presuntas cadenas que
tuvo Pedro cuando estuvo preso, primero en Jerusalén y luego
en Roma. La Emperatriz Eudoxia, esposa de Valentiniano III donó
los grillos traídos de Tierra Santa al Papa León Magno. Cuando el
Pontífice los acercó a los de la prisión romana del santo, los dos
pedazos se soldaron. Esta cadena se puede ver en el altar mayor.
A cada lado de la nave hay diez columnas, son de las más
hermosas de Roma y quizá del mundo, son dóricas, a cierta altura
de las mismas están deterioradas como si en épocas remotas
hubieran atado a ellas hombres o quizá animales.
La sepultura de Julio II
Miguel Ángel dejó uno de los máximos testimonios de su
genio y de su “tragedia”, hablamos del bloque colosal de piedra
que su maestría volvió humano, muy humano. Esta obra maestra
fue la “tragedia” de su vida.
En 1505 llama al joven (30 años) Miguel Ángel el Papa Giuliano
della Rovere Julio II. Este Papa es “El Terrible” guerrero, hábil
político, hombre de conquista y de dominio, no evoca la virtud
cristiana de la caridad ni del amor. Es un príncipe renacentista.
¿Qué le pide al autor de la Piedad y del David?
Que erija para él la sepultura más grandiosa jamás concebida,
el Papa tiene 62 años, con tal monumento quiere alcanzar la
inmortalidad. “Debe ser la más hermosa del mundo”. Va a ser una
mole cuadrangular gigantesca, no adosada a la pared. 40 estatuas
41
en total, tres pisos, como un templo, para della Rovere dentro del
templo de S. Pedro. Le encarga que elija de las canteras de Carrara
las piezas. Allí permaneció ocho meses entre los peñascos. Se
trajo grandes bloques. La gente iba a verlos.
Pronto M. A. comenzó a trabajarlos, el Papa lo visitaba por un
pasadizo secreto. De las primeras estatuas en acometer fue esta
de Moisés. El ademán altivo del profeta y su airada energía debían
parecerse mucho a las actitudes de Julio II.
La Basílica, que debía sustituir a la Constantiniana se lo
encarga a Bramante.
Debía construir el templo más bello jamás concebido y así
colocar dentro su también desmesurado sepulcro, de este modo
no moriría después de muerto, pasando a la posteridad.
Cambia Julio II de plan y además entre los artistas hay
rivalidades envenenadas por envidias, celos y cizaña.
En 1506 Miguel Ángel, cansado de Julio II, huye de Roma,
¿Quién va a pagar los mármoles que van llegando? El Papa había
suspendido los pagos. Quiere entrevistarse con el Papa, lo echan
y de ahí que se va de Roma. Inmediatamente el Papa lo manda
buscar con cinco jinetes que alcanzan al fugitivo en territorio de
Florencia, no quiere volver y logra que el Papa sepa que dada su
falta de interés por la obra encargada de su sepulcro, quedaba
libre de todo compromiso.
Hacían buena pareja: artista orgulloso y arrogante Papa.
Después de dos años, regresó a Roma y prosiguió su trabajo.
Al final quedó así su obra y el proyecto del Papa Julio II.
La sepultura de Julio II
Tiene siete estatuas. En lo alto está la Virgen con el Niño que
porta un pajarillo con las alas abiertas, dispuesto a volar.
Nivel intermedio: Papa Julio II yacente entre una sibila y un
profeta, en el nivel más bajo: Moisés con dos cautivos a los lados,
Miguel Ángel sustituyó las estatuas de los dos esclavos que en
42
un principio por otras dos que significan la vida activa y la vida
contemplativa. De las siete, son de Miguel Ángel cuatro, Moisés,
las dos vidas y el Papa yacente.
Moisés
Sobre el ademán de Moisés. Un amigo del artista
-desconocemos su nombre- contó que estaban los dos mirando
la estatua y le dijo: “Si esta figura estuviese con la cabeza vuelta
hacia aquí, creo que quizá quedaría mejor” .Miguel Ángel no dijo
nada. Dos días después me dijo: “¿Sabéis? Moisés nos oyó hablar
el otro día y para entender mejor lo que decíamos se volvió” Fui
a ver y me encontré que le había girado la cabeza, no di crédito a
lo que vi”.
Moisés está sentado con la cabeza vuelta hacia la izquierda,
la pierna derecha firmemente plantada en el suelo y la izquierda
encogida en una postura muy dinámica, apoyando solo la punta
del pie. El brazo izquierdo está sobre la cintura y bajo el derecho
43
aprieta las tablas de la Ley que acaba de entregarle Dios en el
monte Sinaí. La mano derecha con el índice extendido, sostiene
un mechón de la barba ondulante.
Moisés, caudillo de un pueblo tenía un temperamento colérico.
Los judíos, cansados de esperar a que bajara del monte han
comenzado a dorar a un becerro de oro. Enfurecido arroja las
tablas. El Moisés de la Biblia no es el de Miguel Ángel. Este Moisés
de piedra no está poseído por un sentimiento irracional como la
ira, al contrario. La ira está en la mirada, pero su calma habla que
el autocontrol ha vencido, no arrojará las tablas.
Pero sí nos dice la leyenda que cuando Miguel Ángel vio
terminada su obra, le dio un golpe con el martillo en la rodilla y
le grito e increpó a la estatua, obra de sus manos: “¡Habla!”. El
pueblo pinta con colores lo bello, lo adorna y aún lo hace más
esplendente.
Un servidor le dice que calle, veamos.
Calla, calla, calla
Calla, calla, calla,
Moisés, el de la mirada
con tu luz y resplandor
en cabeza y cara.
Calla y háblanos,
Moisés esbelto, orgulloso,
noble, con ademán altivo,
para la tumba de Julio,
arrogante Papa,
como el salvado de las aguas.
Bloque de piedra vivo,
humano, muy humano,
mesándose la barba
con gesto solemne y sereno.
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Hablas sentado y callado,
con músculos, manos, y gesto,
¿Quién engendró tal figura?
El genio no igualable,
el artífice del mármol
quien a David y la Piedad cinceló,
creó al musculoso, soberbio
y penetrante Moisés, orgulloso
para el príncipe de la Iglesia,
Julio, el segundo que no en poder,
Político, altivo y ambicioso..
Moisés pieza parlante
por siglos en S. Pietro in Víncoli,
libre y sin cadenas,
es jefe que libera al pueblo
de esclavitud y penas
y le conduce por mares y desiertos.
Hace que de la roca brote agua
y lluevan del cielo aves.
Moisés, el salvador ,
el de las tablas
el ágil y pesado,
el de Miguel Ángel amado.
Manos de Miguel Ángel
Manos que cincelan,
tallan cuerpos
del bloque informe
-como si fuera barrosacan la bella figura,
viva, original del mármol blanco,
las llama Davide,
Pietá, Mosés;
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Brotan de sus manos
con seña y nombre
para la eternidad.
Fuertes manos,
duras, ágiles, blandas,
cariñosas y llenas
de pinturas y polvillo;
manos bravas,
manos del genio
que plasman belleza
y cambian torpeza
recrean figuras
y dejan huella
en lo que tocan.
Manos, manos,
las manos creativas,
prestidigitadoras,
deimiúrgicas;
manos miquelangelinas.
Miguel ángel,
así, sin apellido,
todos le conocemos
como a Leonardo
o a Rafaello.
Grande, valeroso,
no en lo físico,
sí en lo mítico.
Amaba lo bello,
escrutaba lo oculto.
escultor primero,
pintor y arquitecto
en mente, corazón y manos.
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Las manos de Miguel Ángel
dignas de ser esculpidas
por ángeles sin alas.
Son manos de su Adán,
electrizadas por las de Dios
Para recrear “Dávides”, “Pietás”,
“Sixtinas” , juicios
Moisés y finales.
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Manos fuertes
creativas,
de genios, Sibilas,
cielos y mares,
cuerpos musculosos.
Manos que cantan belleza,
tocan hermosuras
crean maravillas.
Manos, Oh manos
las del arte consumado y perfecto.
Manos benditas,
las del gran artista,
las de Miguel Ángel.
13
Otras leyendas
En Roma, en cada esquina hay una hermosa leyenda. Citamos
y recordamos alguna más.
a La mancha de aceite de Santa María del Trastévere.
b La nieve en pleno agosto en Santa María la Mayor.
c La estatua de Marco Aurelio y el fin del mundo.
d La lista de los Papas en S. Pablo Extramuros y el final del
mundo.
Y así una y más hermosas leyendas, llenas de vida y de magia.
Las que hemos descrito son un botón de muestra; así como éstas
que a continuación reseñamos.
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a La mancha de aceite de Santa maría del Trastévere
Cuenta la tradición que en el año 38 a C brotó en este lugar
una fuente de aceite que recorrió el barrio hasta desembocar en el
Tiber. Esto fue entendido como presagio del nacimiento de Cristo,
que habría de extenderse con dulzura y como una mancha de
aceite.
Delante del altar mayor, se puede observar en el pavimento
que hay una mancha de color marrón que es donde señalan e
indican donde manó tal fuente.
b La nieve en pleno mes de agosto en Santa María la
Mayor
Es el primer templo cristiano más antiguo dedicado a la
Virgen, es del S. IV
La leyenda
Hemos de conocer la leyenda de su construcción. En el año
356, la Virgen se apareció en sueños y en la misma noche al
patricio senador Juan y al Papa Liberio, a los dos les dijo lo mismo
que se construyera un templo en su honor, la prueba iba a estar
en que en pleno agosto caería una nevada y así fue. El senador
y Liberio se acercaron al Esquilino y vieron lo increíble. Sobre la
nieve traza el Papa el lugar de la construcción. Era el 5 de agosto,
la Virgen de las Nieves y cada año se rememora esta leyenda
delante de la fachada arrojando miles de pétalos de rosa blanca,
ya que nos recuendan la nevada.
Esta basílica la mandó edificar Sixto III y esta construcción va
unida al Concilio de Éfeso (431) que definió la maternidad divina
de María. Nestorio afirmaba que María era la madre de Jesús
hombre y no de Jesús Dios. Efeso se opuso a Nestorio y sí afirmó
que María era Teotocos, es decir la madre de Dios.
María, Madre, Virgen e Inmaculada, blanca como la nieve y
sin mancha.
49
c La estatua de Marco Aurelio y el fin del mundo
La estatua ecuestre de Marco Aurelio, - 176 d. de C.- es la
única estatua ecuestre de un emperador filósofo.
Durante siglos estuvo en la Plaza de Letrán, se salvó de su
destrucción porque creían que representaba a Constantino, que
fue el primer emperador que dio libertad a los cristianos.
El gesto con la mano extendida es señal de clemencia para
sus enemigos vencidos.
Caballo y jinete estuvieron recubiertos con una capa dorada.
La paloma posada en la cabeza del caballo – no es tal sino las
crines del caballo- y las gentes siempre la confundieron con una
paloma, realmente se asemeja. Y así nació la leyenda y es que
cuando desapareciera el oro de la estatua, la paloma cantaría y
volaría y sería el fin de Roma y luego el fin del mundo.
La estatua original está dentro del Museo Capitolino, ya que
en 1979 hubo un atentado con bomba; está junto con la original
de la Loba Capitolina.
d La lista de los Papas en S. Pablo Extramuros y el
final del mundo.
Hay una leyenda sobre los medallones en los que están
dibujados los rostros de todos los Papas que han existido incluido
el presente. Dice que cuando se terminen de llenarse todos los
medallones, faltan tres, se terminará el fin del mundo.
Las lenguas del pueblo hablan y dicen que el último Papa será
de color negro y se llamará Pedro, será Pedro II y con él llegará el
fin del mundo.
50
14
¿Dónde puedo encontrar cada uno
de los lugares reseñados?
1 La loba Capitolina la encontraremos en la plaza del
Capitolio (Piazza del Campodoglio) Está pegadita a la Plaza
Venecia.
2 Domine, Quo vadis? es una pequeña iglesia, a la entrada
de las catacumbas de S. Calixto, en plena Via Appia Antica.
3 Las Catacumbas se encuentran en la Via Appia Antica las
de S. Calixto y de S. Sebastián y muy cerca, a unos dos Km las
de Domitila.
4 “Isola Tiberina” muy conocida, dentro del río Tiber, cerca
del teatro Marcello y de la plaza Venecia.
5 “Fontana de Trevi” a quienquiera que se le pregunte la
indicará.
6 La Fuente de los enamorados está en la misma Fontana
de Trevi, bajando las escaleras que conducen a la fuente, en el
rincón de la derecha.
7 “Bocca Della Verità” está en la Iglesia de Santa María de
Cosmedín, cerca de la plaza Venecia.
8 Las naranjas amargas desde la Bocca Della Verità,
subiendo el pequeño monte Aventino, en el jardín que se llama de
los naranjos, al lado de la Basílica de Santa Sabina.
9 El Puente Milvio desde la plaza del Popolo, a unos 2,50
km siguiendo toda la Via Flaminia se desemboca en el Tiber, allí
está el Puente Milvio.
10 “Giordano Bruno” la estatua está en mitad de la plaza
del Campo dei Fiori.
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11 “Palazzeo dei Mostri” desde la plaza España, subimos
la preciosa escalinata que nos conduce hasta la Iglesia “Trinità
dei Monti”, a su derecha está la calle Via Gregoriana, donde
encontraremos este palacete llamado “la casa dei Mostri”
12 El Moisés de Miguel Ángel muy cerca del Coliseo, en la
basílica de S. Pietro in Vincoli”
13 Otras leyendas en cada uno de los lugares donde cito
que está tal leyenda. Los lugares son muy conocidos.
a La mancha de aceite de Santa María del Trastévere.
b La nieve en pleno agosto en Santa María la Mayor.
c La estatua de Marco Aurelio y el fin del mundo en la plaza
del Campigdolio
d La lista de los Papas en S. Pablo Extramuros.
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José Miguel Burgui Ongay
www.burgui.net
Licenciado en Ciencias catequéticas por la Universidad
Pontificia de Salamanca.
Entusiasta en todo lo referente al mundo joven y tiempo libre
tiene muchas y variadas publicaciones al respecto, entre otras:
Recursos para el tiempo libre, 1. Recursos para el tiempo libre 3
en la Editorial CCS de Madrid.
Ha impartido muchos cursillos por toda la geografía española
respecto al tiempo libre y campamentos; canciones originales,
talleres creativos; técnicas para dinámicas de grupos etc…
Lleva a la práctica muchas de las imágenes que pasan por
su mente y siempre al servicio - como salesiano que es- de los
jóvenes. Toda su vida la dedicó a la enseñanza.
Durante cuatro años estuvo de guía en lengua castellana, en
las catacumbas de S. Calixto en Roma.
Brotan de su mente y corazón, como de un manantial, bellas
y prácticas composiciones.
En este pequeño y nuevo trabajo podrás observar algo de lo
que afirmamos respecto a su persona.
Ana Victoria Navarro
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José Antonio González LÓPEZ-ARZA
www.lopez-arza.es
Licenciado en Bella Artes por la Universidad de Sevilla en
la especialidad de Escultura, obteniendo en 1984 el Premio del
Ayuntamiento de Sevilla al Mejor Expediente Académico de la
Facultad de Bellas Artes.
Ha expuesto numerosas veces, pintura, escultura y dibujos en
exposiciones colectivas o individuales. Entre sus obras escultóricas
monumentales cabe destacar: Mujer con Paloma (1983), para la
Casa Museo Acemesa de Sevilla; Fuente monumental de Cabeza
del Buey (1986), en esta localidad, así como un monumento al
Siglo XXI (2001); en Ciudad Real, monumentos: a E. Matos (1997),
a la Pandorga (1999), a Poçuelo de Don Gil (2000), a D. Pedro
Pardo (2003) y al torero Reina Rincón (2005); en Almagro (Ciudad
Real) a F. Fdez de Córdova (2002); en Torrelodoes (Madrid) al
pintor “López-Villaseñor” (2006) y en Badajoz a “Luis Zambrano”
(2009).
Obras de temática religiosa para las Iglesias Parroquiales
de San José y San Pedro de Alcántara y San Roque en Badajoz
(1988-1999), y el Crucificado de Arlington en Saint Agnes Catholic
Church de Arlington (Virginia, EE.UU.) (1989).
Fotógrafo e ilustrador de libros, entre otros, para las
Diputaciones Provinciales de Ciudad Real y Toledo, y revistas como
Boca Bilingüe de la Embajada de España en Lisboa (Portugal).
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Agradecimientos
Mi agradecimiento a cuantas personas
me ayudaron a recrear cuanto narro.
De modo especial un fuerte gracias
al ilustrador López-Arza
y al enmaquetador Marcos González.
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Roma es un museo en la calle y hay una leyenda en cada esquina.
Basta abrir los ojos y contemplar.
A diario vamos a poder descubrir cosas y cosas, maravillas,
monumentos y “cosuchas”, todas ellas llenas de encanto.
Mira, observa, contempla, camina y calla, admira como si por
un jardín pasearas y verás colores y diversas tonalidades y
narraciones que evocan el pasado y dan sabor al presente.
Respira el perfume de siglos de tanta belleza y misterio oculto.
Te ofrezco, como botón de muestra alguna leyenda de la milenaria
y eterna Roma, las he ido descubriendo a medida que pasaban
los días. Eso, sí, siempre estuve atento a sonidos, escritos,
escuchas y búsquedas...
Te deseo contemples, admires y goces con estas leyendas
seculares, llenas de misterio y de embrujo.