Según la Biblia Jesucristo padeció en miércoles y resucitó en sábado Dadas las fechas que se avecinan, quería compartir con ustedes un tema bíblico fundamental, y es lo relativo a los tiempos de los padecimientos, y la resurrección del Señor Jesús. Para los cristianos, en la muerte y resurrección del Señor se basa el evangelio de la salvación eterna, de modo que este es para nosotros un fundamental tema en la fe. En el pasaje de Mateo 12:40 el Señor hace una declaración de carácter profético que dice lo siguiente: “así estará el hijo del hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches”. Y según el concepto bíblico, el día comienza por la tarde, es decir, un día es un período de oscuridad seguido de otro de luz, de manera de ser así veinticuatro horas. El libro del Génesis dice que: “fue tarde y fue mañana: un día” (Gn. 1:5). También está escrito: Marcos 8:31 – “…comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre tenía que pasar por muchos sufrimientos y ser rechazado por los ancianos y los sacerdotes principales y los escribas, y ser muerto, y levantarse tres días después.” En otros pasajes Jesús también declara que resucitaría al tercer día, lo que nos daría a pensar que esta resurrección tendría lugar de 48 a 72 horas de su sepultura, pero el pasaje de Mateo 12:40 es bastante claro sobre la permanencia de tres días completos en el corazón de la tierra, es decir fallecido. Pero… ¿Cómo conciliamos tres días y tres noches con el esquema semanal? Bueno, ante todo aclaremos que Jesús padeció en la pascua judía, pues el mismo declara que no vino a abolir la ley o los profetas, sino a completar, a llevar a pleno. De modo que lo primero que deberíamos hacer es considerar que la celebración que conmemora al Cristo es conforme al calendario lunisolar hebreo, donde la pascua cae el día 14 de Abib (Nisan), no otras fechas instituidas siglos luego del Señor, con el ánimo de separarse de las festividades judías. Tal es, fue el emperador romano Constantino, en el siglo IV, quien hizo oficial este cambio, alterando así los tiempos de la Biblia, los cuales comentamos no fueron jamás quebrantados por Jesús. Las Escrituras dicen que el día que padeció Jesús era el día de la preparación; este es el día 14 de Abib citado, 14 días luego del inicio del año bíblico. El día que comienza esa tarde, es decir, el día 15 de Abib, es un día feriado, y puede caer cualquier día de la semana. De modo que el día que se iniciaba no era el sábado semanal de reposo, sino que era el citado caso de la gran solemnidad de los panes sin levadura, aniversario de la salida de Israel de Egipto. Por su parte, Jesús celebró su última cena al iniciarse ese día 14 de Abib, esto es, según nuestra forma de medir el día, el martes a la noche. Los evangelios nos relatan que pasado el día de reposo, tal como se les llama en la Biblia al sábado semanal, y a los días festivos, las mujeres fueron a comprar especias aromáticas para ungirle (Marcos 16:1). Lucas 23:56 también nos dice que vueltas del sepulcro prepararon las especias y ungüentos, y que reposaron conforme al mandamiento. Es decir, hubo un día hábil entre el reposo del 15 de Abib, y el sábado semanal o shabat (17 de Abib). Este fue, por tanto, el viernes 16. Así, desde el inicio del 15 de Abib, día festivo, y el sábado por la tarde, vísperas del inicio del Domingo (recordemos de nuevo que en la Biblia, y por la época, el día empieza por la tarde), se cumplen perfectamente los tres días y las tres noches profetizadas oportunamente por el Señor, y el gráfico expuesto nos muestra con detalle la organización de los hechos. En otras palabras, el Señor resucita en el preciso instante en que comienza el Domingo, o primer día de la semana, pero teniendo desde ya en cuenta que ese día da inicio por la tarde del sábado. Sus padecimientos se ubican entonces en la jornada del miércoles 14 de Abib, siendo sepultado antes que se iniciara esa misma tarde el día festivo del día 15. Esa era la fecha en que Israel sacrificaba su cordero pascual. Pero… ¿No dice Marcos 16:9 que Jesús resucitó en Domingo? Citaremos dos versiones de la Biblia, y luego una traducción en griego, de modo de analizar que dice el pasaje realmente, siempre teniendo en cuenta que las puntuaciones han sido dadas por los traductores, no por quienes escribieron la Biblia: Reina Valera 1960: “Habiendo, pues, resucitado Jesús por la mañana, el primer día de la semana, apareció primeramente a María Magdalena…” Biblia de Jerusalén: “Jesús resucitó en la madrugada, el primer día de la semana, y se apareció primero a María Magdalena…” Nótese por favor que, como lo dice la Biblia de Jerusalén no dejaría lugar a dudas de la resurrección por la madrugada del Domingo, pero… ¿Está dicho así en griego? El texto griego dice lo siguiente: “Resucitando/habiendo resucitado verdaderamente/pues al amanecer el primero de la semana apareció primero a María la Magdalena…” Que ubicando la coma en el lugar adecuado queda: “Resucitando/habiendo resucitado verdaderamente/pues, al amanecer el primero de la semana apareció primero a María la Magdalena…” De hecho, si en la misma versión Reina Valera 1960 cambiamos de lugar la coma, ubicándola luego de la palabra JESÚS, y quitándola de luego de la palabra MAÑANA, nos cambia totalmente el sentido de lo dicho, fortaleciendo el concepto declarado en la traducción que hemos hecho desde el griego. Es decir, Jesús apreció a María la Magdalena a la mañana del Domingo, pero no resucitó en Domingo a la mañana, pues ya lo había hecho al inicio del mismo, cuando para nosotros es sábado por la tarde. ¿No dice Lucas 24:21, siendo Domingo, que ya era tercer día que todas las cosas con Jesús habían acontecido? En efecto, no tenemos que olvidar que el último suceso relativo a su sepultura tuvo lugar el jueves de gran solemnidad, cuando los sacerdotes y fariseos se reúnen ante Pilato para solicitarle se asegurara la tumba. De modo que el viernes es primer día, el sábado es segundo día, y el Domingo, en efecto, era el tercer día que todas esas cosas habían acontecido. El día domingo de la semana de los panes sin levadura es importante según la Biblia, dado el hecho que es cuando se presentan las primicias de la siega de parte de Israel. Jesús se presenta entonces ante Dios como primicias de los resucitados, cumpliendo, como dijimos, con los tiempos de la ley, y los profetas. Y así entonces es como el Señor nos da la llamada “Señal del Profeta Jonás”, esto es, así como estuvo el profeta en el vientre del gran pez tres días y tres noches, Jesús estuvo en el corazón de la tierra el mismo tiempo, demostrándonos que hemos pasado de la muerte a la vida por sus padecimientos, y resurrección de entre los muertos. Yo acepto ese testimonio… ¿Usted? Leonardo Betetto Exégeta bíblico Mendoza, Argentina [email protected] www.debarim.org