Efectos de una partida de balonmano sobre el estado de

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doi:10.3900/fpj.6.2.121.s
EISSN 1676-5133
Efectos de una partida de balonmano
sobre el estado de hidratación
en atletas amadores
Artículo Original
1
Universidade do Vale do Sapucaí - MG
Universidade de Formiga - MG
3
Universidade Federal de São João del Rei - MG
Jonathas Silva Coelho1
[email protected]
2
Renato Aparecido de Souza1
[email protected]
Danillo Barbosa2
[email protected]
Alessandro de Oliveira3
[email protected]
Coelho JS, Souza RA, Barbosa D, Oliveira A. Efectos de una partida de balonmano sobre el estado de hidratación
en atletas amadores. Fit Perf J.2007;6(2):121-5
Resumen: El objetivo de este estudio era evaluar los efectos de un fósforo del balonmano en el estado de la hidración de 14
atletas aficionados (± 23 4 años). Los análisis eran plomo por el uso de la prueba del estudiante de t para las muestras dependientes, en la situación anteriormente y después del emparejan, con la medida de la composición corporal [masa corporal total
(Mc), masa gorda (Mg) y el agua corporal total (At)], urinario [volumen urinario (Vu) y gravedad específica (Du)] y relación: Ingestión del Sudar-Agua (r: TS-IA). Después del emparejan del balonmano, las reducciones habían sido verificadas en Mc (- 0.90%), en
(- 0.44%), Mg (- 2.04%; p<0,05), Vu (ml) (anteriormente: 189.29 ± 14.18 contra después: 85.0 ± 12.59; p<0,05) e incremento
del Du (mg/l) (anteriormente: ± 1019 10.65 contra después: ± 1024 8.98). El r: TS-IA, revelado que la hidración durante el
emparejan compensó en el promedio 88.08% la pérdida de agua para sudar (IA: 8.72 ml.min-1 contra TS: 9.90 ml.min-1). Por
otra parte, las relaciones positivas habían sido observadas entre sudar del total y la ingestión del agua (r = 0.9572; p<0,05) y
el sudar total y masa gorda corporal (r = 0.5807; p<0,05). Así, concluimos que la actividad física promovida por las influencias
del emparejan del balonmano negativamente el estado de la hidración y el cuidado referente a la ingestión del agua se debe
aumentar de atletas con mayor porcentaje de la masa gorda.
Palabras clave: Estado de Hidración, sudor, Balonmano.
Dirección para correspondencia:
Renato Aparecido de Souza – Rua João Nunes de Oliveira Jr., 140 – FOCH, CEP 37550-000. Pouso Alegre, MG.
Fecha de Recibimiento: mayo / 2006
Fecha de Aprobación: august / 2006
Copyright© 2007 por Colégio Brasileiro de Atividade Física, Saúde e Esporte
Fit Perf J
Rio de Janeiro
6
2
121-125
mar/abr 2007
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RESUMO
ABSTRACT
Efeitos de uma partida de handebol sobre o estado de hidratação em
atletas amadores
Effects of a handball match on the hydration status of amateur athletes
O objetivo deste estudo foi avaliar os efeitos de uma partida de handebol sobre o
estado de hidratação de 14 atletas amadores (23 ± 4 anos). As análises aconteceram com aplicação do teste t Student para amostras pareadas, em estado pré e
pós-partida, através de aferições de composição corporal: [massa corporal total
(Mc), massa gorda (Mg) e água corporal total (At)]; urinárias: [volume urinário (Vu)
e gravidade específica (Du)]; e relação taxa de sudorese-ingestão de água (r:TSIA). Foram verificadas, após a partida de handebol, reduções na Mc (-0,90%),
At (- 0,44%), Mg (- 2,04%; p<0,05), Vu (ml) (pré: 189,29 ± 14,18 versus pós:
85,0 ± 12,59; p<0,05) e incremento da Du (mg/l) (pré:1019 ± 10,65 versus
pós: 1024 ± 8,98). A r:TS-IA, revelou que a hidratação durante a partida compensou, em média, 88,08% da perda hídrica pela sudorese (IA: 8,72 ml.min-1
versus TS: 9,90 ml.min-1). Além disso, foram observadas relações positivas entre
sudorese total e ingestão de água (r = 0.9572; p<0,05) e entre sudorese total
e massa corporal de gordura (r = 0.5807; p<0,05). Dessa forma, concluiu-se
que a atividade física exigida pela partida de handebol influencia negativamente
o estado de hidratação e que os cuidados quanto à ingestão de água devem ser
reforçados nos atletas com maiores percentuais de tecido adiposo.
The objective of this study was to evaluate the effects of a handball match on
the hydration status of 14 amateur athletes (23 ± 4 years old). The analyses
were lead by application of t Student test for dependent samples, before and
after a match, through the evaluation of corporal composition: [total corporal
mass (Mc), fat mass (Mg) and total corporal water (At)]; urinary features [urinary
volume (Vu) and specific gravity (Du)]; and the relation Sweating-Water ingestion
(r: TS-IA). After the handball match, it was verified reductions on Mc (- 0.90%),
At (- 0.44%), Mg (- 2.04%; p<0,05), Vu (ml) (prior: 189,29 ± 14,18 versus
after: 85,0 ± 12,59; p<0.05) and increment of the Du (mg/l) (prior: 1019 ±
10.65 versus after:1024 ± 8.98). The r: TS-IA revealed that hydration during the
match has compensated a mean of 88.08% the water loss through sweating (IA:
8.72 ml.min-1 versus TS: 9.90 ml.min-1). Moreover, positive relations had been
observed between total sweating and water ingestion (r = 0.9572; p<0.05) and
total sweating and corporal fat mass (r = 0.5807; p<0.05). Thus, we conclude
that the physical activity required by the handball match influences negatively the
hydration status; besides, extra care concerning water ingestion should be taken
with regards to athletes with a greater fat mass percentile.
Palavras-chave: Estado de hidratação, sudorese, handebol.
Keywords: Hydration status, sweating, handball.
INTRODUCCIÓN
Según la Confederación Brasileña de Balonmano (CBH), el
balonmano es uno de los principales deportes de cuadra practicados en Brasil, y en gran evolución profesional en el país.
Existen registrados en Brasil aproximadamente 20.000 atletas
de ambos los sexos y en todas las categorías. Sin embargo, se
cree que el número de practicantes en todo el país sea mucho
mayor, alrededor de 25.000 atletas1.
El balonmano es un deporte colectivo que exige esfuerzos próximos al nivel máximo de intensidad, alternados con esfuerzos
de baja intensidad y momentos de reposo2. El calor producido
en ese tipo de actividad eleva la temperatura corporal, lo que
aumenta la demanda de los mecanismos termoregulatorios para
la traspaso de calor del organismo para el ambiente, en especial
cuando realizadas en ambientes calientes y húmedos3.
De entre los innúmeros mecanismos termoregulatorios, se destaca
la disipación del calor generada por el ejercicio físico a través
de la transpiración, que representa pérdida de líquido corporal,
constituido de cloruro de sodio, urea y en especial agua secretada por las glándulas sudoríparas en piel4. De esa forma, la
homeostasis de los compartimientos hídricos orgánicos puede ser
potencialmente afectada por la imposición de ejercicios físicos
amenazando gravemente el estado de salud5. Caso no haya
una adecuada reposición hídrica, la pérdida líquida a través de
la transpiración ejercicio-inducida puede llevar a un estado de
deshidratación6. En 1944, el estudio pionero de Pitts y colaboradores7, demostró que la deshidratación resulta en dificultad en
la regulación de la temperatura corporal, lo que puede causar
reducción en el desempeño físico.
Para evitar los posibles efectos adversos de la deshidratación
sobre el desempeño deportivo y estado de salud, la ingestión de
agua en cantidades suficientes para reponer la pérdida hídrica
por la transpiración está siendo recomendada en consensos internacionales promovidos en especial por el Colegio Americano
de Medicina Deportiva8,9. Sin embargo, el entendimiento de la
necesidad hídrica impuesta por un determinado ejercicio físico Es
obtenido por la evaluación individualizada del estado de hidrata122
ción4. Hasta lo presente momento desconocemos patronizaciones
y recomendaciones específicas de hidratación bien como estudios
de evaluación del estado de hidratación encaminados para los
practicantes de balonmano brasileños.
La elección del mejor método de evaluación de la hidratación es
todavía un aspecto discutible en la ciencia del equilibrio hídrico10.
De esa forma, la asociación de técnicas parece ser la forma más
sensata de analizar el estado de hidratación del individuo. La
combinación de los análisis de líquido corporal total, a través de
marcaje con isótopos y de la osmolaridad plasmática representa
el “patrón-oro” para evaluación de hidratación5. Sin embargo,
considerando el ambiente real de práctica deportiva del balonmano, el alto coste y el difícil acceso a los marcadores complejos de
hidratación, entendemos que la utilización de marcadores simples
de análisis del estado de hidratación de atletas de balonmano
es una alternativa fiable, de relativa simplicidad de aplicación y
sensible en predecir la real situación hídrica orgánica.
Delante de ese contexto, el propósito de este trabajo fue a evaluar
el estado de hidratación de atletas amadores durante una partida
de balonmano a través de marcadores simples urinarios (volumen y densidad) bien como a través de datos biométricos como
masa corporal, porcentual de gordura y agua. De esa forma, al
relacionar esos creídos con la tasa de transpiración durante la
partida, mejor comprender el fenómeno del estado de hidratación
específico de la modalidad y del atleta de balonmano.
MATERIAL Y MÉTODOS
Muestra
La muestra fue constituida por 14 atletas amadores de balonmano
del sexo masculino con edad media de 23 ± 4 años de la ciudad
de Aterrizaje Alegre/MG. Todos voluntarios incluidos en el estudio
pasaron por una anamnesia y relataron no presentar problemas
crónicos de salud, y/o hacer uso de cualquier tipo de fármaco
regular. Además, firmaron el término de participación consentiFit Perf J, Rio de Janeiro, 6, 2, 122, mar/abr 2007
da, dispuesto en la Resolución Nº 196/96, de 10 de octubre de
1996, del Consejo Nacional de Salud. Antes de la realización
de los experimentos, el estudio fue sometido y aprobado por el
Comité de Ética en Investigación, de la Universidade do Vale do
Sapucaí conforme protocolo número 590/06.
Procedimientos
Para la realización de este estudio, los 14 atletas habían sido
divididos aleatoriamente en dos equipos de 7 integrantes. Esa
división ocurrió para la realización de una partida-entrenamiento
de balonmano con duración de 2 tiempos de 30 minutos con
intervalo de 10 minutos, según preconización oficial de la CBH.
El experimento ocurrió en el gimnasio con dimensiones oficiales
para la práctica de la modalidad deportiva de la Universidade
do Vale do Sapucaí (Aterrizaje Alegre/MG), al final de octubre,
entre el horario de 17:30 y 20:30, cuya temperatura media fue
de 25,3 ± 1,4º C.
Antes y tras de la partida, los individuos habían sido orientados a
vacíen la vejiga en un recipiente con graduación numérica de hasta
750 ml con precisión de 10 ml, en un modo que el volumen urinario inicial (Vui) y final (Vuf) pudiesen ser cuantificados. Además,
tras la mensuración de esos volúmenes, una pequeña muestra (25
µl) del Vui y Vuf fue insertada en un refractómetro (URIDENS®)
para lectura de densidad urinaria (Du) pre y post partida6.
Justo después de las colectas urinarias, los atletas habían sido
pesados vistiendo solamente calzón, utilizándose una balanza
de bioimpedancia digital (G-TECH/FWMETTER-GLICOMED®)
con precisión de 0,1 kg para determinación de la masa corporal
total (MCT: expresado en kg), porcentual de gordura (% Gor:
expresado en kg, por el siguiente cálculo: %Gor x MCT /100) y
porcentual del agua (% H2O: expresado en l, por el siguiente
cálculo: % H2 A x MCT /100) pre y post partida.
Además, los atletas habían sido vigilados cuanto la ingestión de
500 ml del agua dos horas antes de la partida, en un modo que
iniciasen la sesión de entrenamiento yo-hidratados8. Durante el
ejercicio físico promovido por la partida, la hidratación fue ad
libitum, es decir, ingestión del agua la intención.
El volumen de agua ingerido (Vi) durante la partida fue medido de
la siguiente forma: cada atleta poseía una botella con su capacidad máxima de almacenamiento (550 ml) totalmente rellenada
con agua natural e identificada con su respectivo nombre del
atleta. Al final de la partida, fue contrastado lo sobrante del agua
(Vr) de cada botella utilizando una probeta graduada de 250 ml.
De forma que lo Vi = 550 - Vr. Si el atleta ingiriese el volumen
total antes del término de la partida, era anotado en la plantilla
el consumo de 550ml y la botella era nuevamente repostada,
posibilitando que el atleta continuase ingiriendo líquido11. La
cantidad de agua ingerida por cada atleta durante la partida
tuvo como objetivo obtener la de la tasa de transpiración (Ts)
calculada de la siguiente forma: [(MCT inicial + Vi) - (MCT final
+ VUf)] ÷ tiempo total de partida (70 min)11.
El tratamiento estadístico fue conducido a través del software Microcal Origin 6.0®, tras previa selección de los tests y pareamentos
necesarios. Para análisis de los resultados fue aplicado el test t
de Student para muestras pareadas, para verificar las diferencias
encontradas entre las variables estudiadas en estado pre y postpartida. Además, cuando necesario el test t de Student para muestras
independientes y correlación de Pearson habían sido adoptados. Los
resultados fueron expresos como media ± desvío patrón (Comisaría
de Policía) y fue aceptado nivel de acepción de p< 0,05.
RESULTADOS
Composición Corporal
La tabla 1 presenta los resultados referentes la masa y composición corporal determinados por bioimpedancia, antes y
tras la partida de balonmano. Como relatado en esa tabla,
los voluntarios presentaron bajada de masa corporal total correspondiente a 0,7kg (-0,90%), y agua corporal total de 0,19l
(-0,44%) tras la partida, que se revelaron no significativamente
diferentes (p>0,05). Sin embargo, al analicemos los efectos de
la partida de balonmano sobre la masa gorda, observamos un
decrecimiento porcentual (-2,04%) estáticamente significativo
(p<0,05) tras la partida.
Análisis Urinarios
La figura 1 demuestra los valores medianos del volumen urinario (ml) antes (189,3 ± 149,2) y tras (85 ± 129, 6) la partida
de balonmano. Tras la partida fue observada una bajada de
55,02% en el volumen urinario, lo cual se mostró estáticamente
significativa (p<0,05).
Con respecto a la densidad urinaria (mg/l) observamos una
elevación no significativa (p>0,05) de 0,49% tras la partida
de balonmano (pre-partida: 1020 ± 2,65 versus post-partida:
1025 ± 2,97). Además, ambos los valores encontrados son ca-
Figura 1 - Volumen urinario antes y tras partida de balonmano
Resultados expresos como media ± D.P. (n=14). * p<0,05 versus PrePartida (test t Student para muestras pareadas).
Análisis Estadística
Tabla 1 - Composición corporal
Variables Analizadas
Masa Corporal Total (kg)
Masa Gorda (kg)
Agua Corporal Total (litros)
Pre-Partida
77,11 ± 11,06
17,22 ± 7,06
43,72 ± 3,73
Post-Partida
76,41 ± 11,14
16,87 ± 6,95 *
43,53 ± 3,38
Porcentual de Reducción
- 0,90%
- 2,04%
- 0,44%
Resultados expresos como media ± Comisaría de Policía. * indica p<0,05 cuando comparado con situación Pre-Partida (test t Student para muestras
pareadas).
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123
tegorizados prediciendo una condición clínica de yo-hidratación
(figura 2).
Tasa de Transpiración
La figura 3 indica los valores medianos de transpiración total
(ml) e ingestión del agua (ml) durante la partida de balonmano.
Los voluntarios presentaron valores de ingestión (611 ± 100)
inferiores (p>0,05) en relación los valores observados en la
transpiración total (695 ± 130). Además, observamos una tasa de
transpiración media de 9,90 ml.min-1, mientras que la ingestión
hídrica presentó media de 8,72 ml.min-1. Se verifica que esa
diferencia resulta en hipohidratación.
Al observemos individualmente la transpiración total e ingestión
del agua a través del test de correlación de Pearson, encontramos
una asociación positiva estáticamente entre las dos variables
analizadas. La figura 4 describe el hecho de que cuanto mayor
la tasa de transpiración mayor la ingestión de agua. Además,
aunque en menor nivel de correlación, también encontramos
positividad y p<0,05 entre tasa de transpiración y porcentual de
masa corporal de gordura (figura 5).
Con objetivo de mejor analizar esa ultima relación, fue aplicado el
test t Student para muestras independientes que reveló diferencia
(p<0,05) entre la tasa de transpiración de los voluntarios con IMC
clasificado como normal y aquellos con IMC clasificado como
sobrepeso. La tasa media relativa de transpiración fue de 6,33
ml.min-1 en los voluntarios con IMC normal y 13,22 ml.min-1
en los voluntarios clasificados con sobrepeso. Esa diferencia
Figura 2 - Densidad urinaria antes y tras partida de balonmano
Densidad urinaria (mg/l) clínicamente clasificada como condición de
euhidratación (1013 – 1029). Resultados expresos como media ± d.P.
(N=14). P>0,05 pre-partida versus post-partida (test t student para muestras pareadas).
representa una tasa de transpiración superior en 47,88% en los
individuos con sobrepeso (figura 6).
DISCUSIÓN
A pesar de la gran evolución técnico-táctica del balonmano
brasileño, observada en especial por recientes conquistas importantes, no son encontradas con facilidad informaciones científicas
acerca de las alteraciones fisiológicas promovidas por la práctica
de ese deporte. Sin embargo, el desarrollo y evolución ideal de
cualquier modalidad deportiva deben ser fundamentados en
datos clínicos y fisiológicos reales a las características nacionales.
Nuestro estudio demostró que lo estado de hidratación puede ser
fácilmente mensurado a través de técnicas no invasivas y de bajo
coste, de forma la sistematizar el entrenamiento físico y prevenir
estrés orgánico asociado a la deshidratación.
A través del protocolo experimental de evaluación del estado de
hidratación instituido en este estudio fue observado los siguientes
creídos tras la partida de balonmano: (1) reducción del volumen
urinario, (2) disminución del porcentual del agua corporal; (3)
aumento de la densidad urinaria; y (4) tasa de transpiración superior a la ingestión hídrica. así, entendemos que el ejercicio físico
promovido por la partida de balonmano influencia negativamente
el estado de hidratación de atletas amadores y, los cuidados
cuanto a la ingestión del agua deben ser reforzados en especial
en los atletas con mayores porcentuales de tejido adiposo.
Figura 3 - Transpiración total e ingestión del agua absoluta y
relativa.
Resultados expresos como media ± d.P. (N=14). P>0,05 entre grupos
(test t student para muestras pareadas).
Figura 4 - Relación entre transpiración total e ingestión del agua
Figura 5 - Relación entre transpiración total y masa corporal de
gordura.
Correlación de pearson positiva entre transpiración total e ingestión del
agua (r = 0.9572; P<0,05).
Correlación de pearson positiva entre la transpiración total y masa corporal
de gordura (r = 0.5807; P<0,05).
124
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Figura 6 - Tasa de transpiración absoluta y relativa durante la
partida de balonmano
Resultados expresos como media ± D.P. (IMC Normal, n=7; Sobrepeso,
n=7). * p<0,05 entre grupos (test t Student para muestras independientes).
Referente a la composición corporal, como relatado en la tabla
1, los atletas presentaron bajada de masa corporal total, agua
corporal total y, en especial de masa gorda. Esos creídos deben ser
atribuidos al hecho de la partida de balonmano, tener promovido
aumento de las demandas metabólicas, elevando la temperatura
corporal y aumentando la tasa de transpiración. Pequeñas pérdidas
hídricas (entre 1-3% del peso corporal) debido a la deshidratación
tienen pequeño o ningún efecto sobre la producción de fuerza12.
Delante de ese contexto, los atletas observados en este estudio, parecen no tengan tenido reducción importante de su desempeño.
Al observemos la figura 3, constatamos que la ingestión de agua
ad libitum siendo de 8,72 ml.min-1 (611 ± 100 ml), significó
la reposición de 88% de las pérdida hídricas causadas por la
transpiración. Así, los individuos habían terminado la partida
con un porcentual de deshidratación mediano de 0,44%. Esta
variación en porcentual de la masa corporal indica que los atletas
habían terminado la partida abajo de los límites de deshidratación
considerados como prejudiciales para el desempeño9.
La reducción en el peso corporal como índice de la pérdida hídrica
de las atletas es una de las mejores evaluaciones para el estado
de hidratación. Esta no ocurre de manera lineal durante el ejercicio, siendo que la comparación entre el peso inicial (antes de la
actividad física) y final (tras el término de la actividad física) podría
auxiliar en la reposición hídrica durante el periodo de reposo13.
La cantidad de pérdida hídrica corporal a través del sudor es dependiente de la intensidad del ejercicio, duración, propiedades y
cantidad de vestimentas12. Este estudio constituyó de una partida
de balonmano con duración de 2 tiempos de 30 minutos con
intervalo de 10 minutos, en una temperatura media de 25,3oC
± 1,4, utilizando como vestimentas calzón, tenis, camiseta y
chaleco para identificación de los equipos. La pérdida de calor
en actividades mayores que 30 minutos puede resultar en caída
del volumen sanguíneo, lo cual puede llevar el grave compromiso cardiovascular13. Así, durante una actividad física la tasa
de reabsorción del agua por los nefrones aumenta6. Ese hecho
disminuye el volumen urinario y aumenta la densidad de la orina.
Fue observado justamente estos aspectos en ese estudio. Es decir,
tras la partida los atletas orinaron un volumen significativamente
(p<0,05) inferior al colectado antes de la partida y, además, esa
orina estaba más concentrada. Debemos asociar esos resultados
como un intento fisiológico del organismo en preservar el agua
orgánica, ya que la actividad generada por el balonmano promovería suya pierda a través del sudor11.
Es reconocido que individuos obesos tienden, en las mismas
condiciones estandarizadas, la sudar más que individuos con
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menor tejido adiposo. Las diferencias pueden ser acentuadas
debido las diferencias en el entrenamiento y grado de aclimatación14. Llevándose en consideración la tasa de transpiración de
los atletas con sobrepeso (13,22 ml.min-1), al final de la partida,
esos tendrían en media una pérdida hídrica media de 925,4 ml
del agua (figura 6).
La recomendación, según el Colegio Americano de Deporte y
Medicina (ACSM) es la reposición de 1,5 vez el total perdido,
es decir, sería aconsejable la ingestión de 1388,1 ml del agua
tras la partida, en los atletas clasificados como estando en sobrepeso. En cambio, los atletas clasificados con IMC normal,
observamos uno tasa de transpiración de 6,33 ml.min-1, en
un total de 443,1 ml al final de la partida (figura 6). Utilizando
la misma recomendación adoptada por el ACSM, la ingestión
aconsejable sería de 664,65 ml del agua tras la partida, para
los atletas con IMC normal. Al relacionemos esos creídos con
la ingestión media del agua durante la partida (611 ± 100),
observamos que los atletas con sobrepeso presentaron un déficit
mediano de 314 ml y los atletas con IMC normal presentaron
ingestión del agua adecuada.
Por el hecho de ser un estudio de campo, donde se buscó evitar
a máximo cualquier interferencia en los hábitos de los atletas,
no fue posible vigilar los hábitos de los atletas los días y horas
antecedentes la partida, acarreando quizás variación en la hidratación dependiendo de las actividades desempeñadas antes de
la partida. De hecho, consideramos de extrema importancia que
estudios futuros vigilen más precisamente el estado de hidratación
de atletas de balonmano, sin embargo nuestros resultados revelan
significativas informaciones a respeto de ese asunto, lo cual es
mucho poco tratado por la literatura deportiva.
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